Вы находитесь на странице: 1из 128

Nº 4.

Febrero 2018

Ruth Morales
Cambio de Realidad
Por Ruth Morales
Nº 4. Febrero 2018. España

© Ruth Morales
contacto@cambioderealidad.com

Esta revista está preparada para ser imprimida,


por si te es más fácil su lectura en papel.

Esta obra está registrada bajo una licencia de Creative Commons


Reconocimiento-NoComercial-SinObraDerivada 4.0 Internacional.

Puedes compartirla sin modificar su contenido y siempre atribuyendo su autoría.


No está permitido el uso de esta obra para fines comerciales.
Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

Ruth Morales es la creadora de Cambio


de Realidad, una forma singular, rompe-
dora y visionaria de ver la vida, desde una
perspectiva sin igual.
Desde 2011 transmite esta percepción de la
realidad por medio de múltiple y variado
material en el que trata temas del dinero,
de la no pareja, de la realidad misma sin
dejar ningún ingrediente en el tintero y lo
Ruth Morales
www.cambioderealidad.com
que la diferencia, sin duda alguna, su com-
prensión de nuestra realidad por encima
del paradigma científico, conocida como
“Percepción y No Tiempo”, que merece un trato aparte.
Ha participado en eventos varios, invitada siempre por su “particular en-
foque, más allá de lo que todos conocemos como normal y corriente”.
También ha sido entrevistada en la radio, en televisión y en otros medios
de comunicación.
Ruth Morales ha escrito 8 libros y ha llegado a todos por medio de semina-
rios y conferencias tanto presenciales como online.
Su bagaje amplio y diverso más su experiencia personal, la llevan a ser una
gran comunicadora, tanto en la comunicación oral como en la escrita y esa
es la razón por la que nace esta revista, con el fin de llegar a todas las per-
sonas de todas partes del mundo.
Te presentamos, por tanto, C~instinto. ¡Disfruta de su lectura!

El equipo de C~instinto

3 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

CONTENIDO
(Haz clic en el título de cada artículo para ir directamente a este)

Qué voy a hacer y dónde encontrarme ........................................................ 6


Espacio C~instinto ...................................................................................... 7

Dinero
El proceso de convertirte en millonario .................................................... 10
¿Con cuánto dinero te sentirías a gusto? ................................................... 16
Entrevista para la revista “Uno Mismo” .................................................... 20
Todo es posible .......................................................................................... 27

La Era de los Idiotas


Los niños se expresan libremente en esta era ........................................... 32
Los nuevos regalos en la Era de los Idiotas ............................................... 35

Tendencias
¿Tomar o no al bebé en brazos? ................................................................ 41
Dar el pecho a demanda ............................................................................ 44
Los nuevos analfabetos ............................................................................. 45
El nuevo lenguaje no es ni la escritura ni la lectura sino lo digital ........... 47
La clínica resort ......................................................................................... 49
La tendencia a que la excepción sea la regla ............................................. 52
En otro lugar de Europa. La historia del desamor .................................... 57

Comunicación desde el instinto


El error de seguir el ciclo de la naturaleza ................................................ 73
El hombre-padre del siglo XXI ................................................................. 75
La mujer del siglo XXI .............................................................................. 76
El alfabeto a gritos ..................................................................................... 79

4 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

Excelencia
Aplicando lo que se aprende ..................................................................... 93
Comunicación escrita ................................................................................ 94

Alicia y su libreta de conflictos


Aprender chino ........................................................................................ 104

De lo bueno, lo mejor
El candidato ideal .................................................................................... 108
¿Qué hacer con la gente pesada? ............................................................. 110

Historias
El rincón de Ariel .................................................................................... 114

5 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

Qué voy a hacer y dónde encontrarme


Cada vez se suman más personas a esta revista y al material que voy
creando. Desde el año 2011 llevo publicado diverso material audiovisual y
escrito en mi página www.cambioderealidad.com.

En estos momentos, dicha página se está actualizando con el fin de ade-


cuarnos a los cambios que ya están aquí pero invisibles y que prometen
entrar con fuerza desde ya para satisfacer a todo el que en ella entre.

Se trata de la creación del Espacio C~instinto, en el cual recogeré todo lo


que he venido haciendo hasta ahora en formatos de audio (emisiones de
radio) y videoconferencia, en un solo lugar. Tienes más información en la
siguiente página de esta revista.

Pero quiero dirigirme al lector nuevo para comunicarle que mi presencia


siempre está y ha estado en el Facebook, donde publico con asiduidad y
que uso como panel de anuncios a tiempo real y actualizado. Es la única
red social de la que hago uso, movida por recoger todo en un solo sitio.

Si quieres seguirme desde mi perfil de Facebook Ruth Morales solo tienes


que solicitar mi “amistad”. Al mismo tiempo, puedes seguirme por medio
de la página de Facebook de Cambio de Realidad, a la que solo tienes que
dar un “me gusta” para que te lleguen mis publicaciones.

Gracias por leer esta revista, la cual se convierte en un placer hecho


realidad al que puedo dar rienda suelta mientras recibo más placer al
compartirlo con ustedes.
Ruth Morales, febrero 2018.

Queda un mes para que la siguiente revista esté lista.


Lee esta a tu ritmo, disfrutando de su lectura.

6 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Comunicación desde el instinto
En este mes de febrero se inaugura el Espacio C~instinto. No es nada nuevo
para mí y para quienes me siguen hace tiempo. Es un lugar desde donde poder
transmitir cualquier tema de la realidad misma a partir de esa mirada que no
está ni por arriba ni por debajo del mundo, sino más bien que siempre estuvo
en su sitio: desde el sentido común.
Desde el año 2011, llevo transmitiendo temas variados de la vida misma: dine-
ro, la no pareja, el miedo, vivir más allá de la ciencia, el disfrute, excelencia,
formación, el mundo de la empresa y soy consciente de que el mensaje se dis-
torsiona desde el momento en el que llega a todo el mundo, como si este fuera
destinado a todos, sin darme cuenta de que solo está destinado a quienes den
valor a lo que transmito. Por eso creé esta revista, con el placer de poder escri-
bir para todos.
Sin embargo, desde ese Espacio que inauguro el 20 de febrero, quiero reunir-
me solamente con aquellas personas que encuentren un sentido diferente a mis
palabras, desde dónde las digo y para qué las digo.
Es como poner voz a sensaciones, pensamientos, gustos, emociones que llevan
siglos queriendo expresarse pero que, el día a día más la herencia en forma de
experiencia, ha ido sepultando en el silencio.
Me refiero a vivir y pensar de una manera que es correcta o incorrecta pero
que no es lógica. Me refiero a vivir y hacer cosas de una manera correcta o
incorrecta pero que atenta contra la naturaleza humana, la tuya.
De eso hablo yo, de lo más simple, de poder hacer uso de un sentido instintivo
más allá de la inteligencia o del conocimiento, sentido que se equivoca menos
que Dios y que te acompañará toda la vida, haciendo bien a quienes tienes al
lado y sobre todo a ti y, por ende, al mundo.
Al mundo no le hace falta más experiencia, pues ya está todo experimentado.
Lo que nos hace falta al mundo es que nos paremos para retomar una comu-
nicación que no es nueva sino que es la única que vale, pues es universal y, por
tanto, la única con la que nos podemos comunicar sin conflictos.
Gracias siempre.

Inscríbete aquí
7 © 2018 Ruth Morales
www.cambioderealidad.com
COMPARTE ESTA REVISTA
Copia este enlace y envíalo a aquellas
personas que consideres que disfrutarán
también de esta lectura:

http://eepurl.com/c7jB71

ESTÁ TODO PENSADO


Aquellas personas que se den de alta en cualquier mo-
mento en la suscripción de la Revista C~instinto, recibi-
rán los números ya publicados en el correo de confir-
mación de su suscripción.

Es esta la razón por la que debes enviar el enlace de suscripción


que te proporcionamos y no la revista en sí. Asimismo y si
quieres ser más preciso, transmite esta información a quien
vas a enviar dicho enlace para que esté enterado de que, al sus-
cribirse, estará al día de todas las publicaciones.

8 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Dinero

9 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Dinero

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

PP

EL PROCESO DE CONVERTIRTE EN MILLONARIO

"Después de que usted se convierta en millonario, puede donar


todo su dinero, porque lo importante no es el millón de dólares
(euros) que consiguió, sino la persona en la que usted se convir-
tió en el proceso de ser millonario".

© 2018 Ruth Morales


10 www.cambioderealidad.com
Dinero

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

Esta frase es recogida de un autor, al cual leí hace tiem-


po. No importa quién diga una frase o por qué la enun-
ció.
Lo que importa es lo que el receptor entienda o reciba de
esa frase, como, por ejemplo, una pauta importante para
su vida.

A las personas nos encanta aprendernos de memoria las frases de céle-


bres autores. Sin embargo, no sabemos si fueron ellos mismos quienes las
crearon ya que, acaso, pudieron tomarlas de otros autores y estos de otros.

Por lo tanto, en este artículo quiero que prestemos atención a la esencia de


la frase misma y dejar de dar importancia a quien fue etiquetado como su
autor. Ese no es el propósito de este artículo.

En los últimos años estamos viviendo una avalancha de información acerca


de “hacerse rico/millonario”. Todo comenzó quizá en la 2ª parte del siglo
anterior, el XX, en el que el desarrollo/crecimiento personal, avalados por
la ciencia (psicología y demás disciplinas en esa línea), fue tomando fuerza
y poder.

Es decir, que para un individuo normal, con una vida normal y corriente,
(tal cual comprendamos cada uno lo que es normal y corriente), la llamada
de atención sobre “hacerse rico/millonario” en forma de libros sobre la
abundancia y crecimiento personal, eventos motivadores con el objetivo de
cambiar tu mente para hacerte rico o millonario y películas cuyos protago-
nistas, tras pasar todo tipo de desdichas, se convierten en millonarios, le
hace saltar de la silla de manera abrupta para acometer un cambio en su
vida.

© 2018 Ruth Morales


11 www.cambioderealidad.com
Dinero

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

De repente este individuo normal y corriente se dice a sí mismo:

¿Qué he estado haciendo hasta ahora con mi vida?


He perdido el tiempo. No conocía el mundo del dinero. Lo he
mal invertido comprando una casa en lugar de alquilarla. He
gastado mucho dinero en tonterías que no necesitaba. Y aho-
ra soy un ser corriente más, movido por los hilos del consumo
y totalmente desprotegido, pues he perdido el poder de mi di-
nero. Soy una persona corriente que paga altos impuestos al
Estado mientras que los ricos pagan menos porque conocen lo
que hay que hacer.
También existen personas que invierten su dinero en acciones
y en otros mercados financieros, arriesgándose a perder pero
apostando por ganar. Y yo solo he ahorrado para comprarme
un coche bastante caro, hecho garrafal para mi economía.

Estos son los pensamientos que rondan por la cabeza del recién abducido,
pues, teniendo en cuenta la realidad que todos compartimos, ¿quién no se
ha sentido motivado o entusiasmado en algún momento por estos objeti-
vos? Podría ser pero es el caso más escaso.

Lo normal es que dicha abducción/entusiasmo te haga vivir en más males-


tares que los que la propia vida ya te tiene preparados.

¿Es el entusiasmo crónico una


abducción? ¿Te lleva esa abduc-
ción a tu objetivo?

© 2018 Ruth Morales


12 www.cambioderealidad.com
Dinero

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

Es como practicar surf. No eres un experto pero sí te defiendes bien. Resul-


ta que estás disfrutando muchísimo de tu experiencia con el surf, a pesar
de las caídas o de los malos tragos (nunca mejor dicho) a los que te somete
este deporte. E incluso, a pesar de momentos en los que sientes que tu vida
corre peligro.

Sin embargo, deslizarte encima de una tabla por el mar se convierte en un


placer extremo, haciendo uso de un instinto que hace que mantengas el
equilibrio y que sortees los movimientos del mar, posicionándote en un
poder que solo el que tiene amor al placer y disfrute es capaz de expresar.

De repente, te sales de tu mar y movido por


otros, te adentras en mares más bravos cuyas
olas jamás has vivido, que te envuelven,

exigiendo de ti otra maestría.

Es en este instante cuando esta actividad comienza a darte disgustos y ma-


lestares, no solo físicos sino emocionales. Ese estado de frustración hace
que continúes, pues tú puedes.

Además, tienes que desplazarte de tu mar cercano a ese mar de grandes


oleajes, pues esa es la meta de todo surfista que se precie.

Eso es lo que oirás decir a los otros, mientras los altibajos se suceden cada
vez más frecuentes así como más intensos.

© 2018 Ruth Morales


13 www.cambioderealidad.com
Dinero

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

¿Lograrás manejarte en ese ámbito con tu tabla de surf? Tal vez sí pero,
¿cuánto te costó? ¿Eres de los que piensas que hay que arriesgarlo todo?

Y si no lo lograste, ¿volviste a tu mar con la misma autoestima que cuando


saliste de él? A lo mejor piensas que esos altibajos te enseñaron algo y que
valió la pena. Eso está muy bien.

Sin embargo, yo me dirijo con este artículo a las personas que siguen inten-
tando hacerse ricas o millonarias como objetivo de vida, con ese punto en
el horizonte fijo, pase lo que pase. Y nunca lo consiguen.

Y, si lo consiguen, ya es demasiado tarde como para disfrutar de lo que ese


estado millonario les prometió. No importa, lo heredarán otros.

Volvamos a la frase del principio.

"Después de que usted se convierta en millonario, puede donar


todo su dinero, porque lo importante no es el millón de dólares
(euros) que consiguió, sino la persona en la que usted se con-
virtió en el proceso de ser millonario".

Buscar el dinero como objetivo único es un error para muchos pero no para
todos. Hay personas que nacieron para “hacer dinero”, así como otros na-
cieron para “batir un récord” o para “salvar el mundo”.

Pero la mayoría no tiene un propósito tan firme. Son quienes justamente


quieren entrar en el propósito de otros. Lo hacen y trabajan duro, se con-
vierten en otras personas para que, al final, el otro consiga su propósito.

© 2018 Ruth Morales


14 www.cambioderealidad.com
Dinero

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

Por lo tanto, el dinero no es nunca un objetivo


Nadie consigue sino un medio. Y esa frase es la mejor frase o su-
nada a solas. gerencia que jamás haya visto yo en torno al di-
nero, la cual se puede trasladar a otros ámbitos
de la vida.

Es una frase profunda y con una fuerte comunicación pero, como ocurre
con todo lo que está por encima de la realidad corriente, el mensaje se nos
desliza por los dedos como un papel fino que se lleva el viento.

Fuimos conocedores por un instante de un gran mensaje que nos hizo vi-
brar por unos segundos, para luego continuar con nuestra tarea diaria.

Y si no, pensemos en los cuentos con moraleja o las fábulas.

Si las enseñanzas de dichos cuentos hubiesen sido entendidas, aplicadas


y/o integradas, ¿existirían cuentos, libros de autoayuda, eventos motivado-
res, psicólogos o terapias?

Esta es la continuación de mi artículo del mismo nombre en el blog de Cambio de


Realidad, escrito en 2016. Pincha AQUÍ si quieres leerlo.

© 2018 Ruth Morales


15 www.cambioderealidad.com
Dinero

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

¿Con cuánto dinero te sentirías a gusto?

Parece una pregunta tonta pero es la gran pregunta que nadie se pregunta.
Resulta que parece que todos tenemos que ganar más dinero para llegar a
final de mes. Esto es un hecho para muchas personas de este mundo capi-
talista, en el que viven los lectores de esta revista.

Sin embargo y a pesar de todos los obstáculos que podamos tener a modo
de tiempo libre, del tiempo que dedicamos al trabajo, del dinero que tene-
mos, del que generamos y del que gastamos, nos debemos parar a pregun-
tarnos esta pregunta.

© 2018 Ruth Morales


16 www.cambioderealidad.com
Dinero

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

¿Con cuánto dinero estaría a gusto ahora mismo?

El caso es que nunca existe el “ahora mismo” porque, desde el momento


en el que nos estemos preguntando dicha pregunta, surge un deseo. Enton-
ces, ya no podemos contestar a dicha pregunta de manera precisa.

Luego surgen los pensamientos tipo tradición-compromiso: la cena de Na-


vidad, el cumpleaños de mis padres, el de mi pareja, la fiesta de cumplea-
ños de nuestros hijos, la comunión, la boda de alguien a quien tienes que
regalar algo, el bautizo y/o comunión de los hijos de otros. ¿Sigo?

Conozco casos de personas que tienen di-


nero para vivir bien, según su disfrute y
no lo hacen porque siempre hay un com- Compromiso supe-
rior significa apego,
promiso superior.
significa “si esto no
lo hago, otros se en-
Entonces, después de analizar esto, vuel- fadarán, es lo que
vo a formular la pregunta. tengo que hacer, lo
hago por educación,
¿Con cuánto dinero estarías a gusto? Re- lo hago por mi fami-
lia, por mi pareja”.
cuerda incluir en esa lista todos esos
compromisos, pues forman parte de tu
vida.

Voy a hacer uso otra vez del recurso de las frases de otros.

Tu dinero crece hasta donde creces tú.

¿Qué querrá decir? ¿Qué significado tenía el concepto de crecimiento para


quien pronunció esta frase?

A continuación, yo voy a exponer el mío.

© 2018 Ruth Morales


17 www.cambioderealidad.com
Dinero

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

Si una persona está dando importancia a los compromisos familia-


res y sociales antes que a un disfrute propio, dígase unas mini vaca-
ciones con su pareja e hijos, dígase comer fuera en un buen restau-
rante lejos de lo cotidiano de los restaurantes corrientes, dígase ha-
cerse dar un buen masaje relajante o establecer en su hogar ciertas
comodidades como pueden ser calefacción, aire acondicionado (si
esto se requiere), aislamiento acústico, etc. Dígase probar alguna
exquisitez que, de cara, no estaría a nuestro alcance de nuestra vida
cotidiana o comprarnos una prenda que nos encanta pero que se sa-
le del presupuesto que tenemos para ello.

O dígase de otros disfrutes que no he nombrado aquí porque, quizá,


no haya reparado en ellos, entonces, la frase antes mencionada que-
rrá decir lo siguiente que escribo.

Querrá decir que tu dinero estará siempre disponible para esos


compromisos familiares o sociales y por tanto, tendrás más
compromisos de esa índole que los de tu disfrute, por ejemplo.

Esto es lo que yo interpreto de esa frase, porque el concepto de crecimiento


no existe con respecto al dinero.

Uno se puede hacer rico siendo miserable pero, ¿es eso crecimiento? ¿Ser
escaso, tacaño y miserable es crecer? Para mí no. Para mi es decrecer, pues
mi concepto de vivir va ligado al concepto de mejora.

No venimos a vivir para desmejorar sino para cada día, disfrutar más de la
vida. Y disfrutar de la vida requiere de dinero, sea poco o mucho, pero sin
dinero no se puede disfrutar de la vida.

© 2018 Ruth Morales


18 www.cambioderealidad.com
Dinero

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

Aunque parezca mentira, una persona de 80 puede disfrutar más de la vida


que una persona de 20 años, precisamente por su concepto de vida como
mejora y disfrute y no por su experiencia. Si fuera por la experiencia, quizá
la persona de 80 años no estaría disfrutando tanto como la de 20.

La experiencia no la podemos evitar, pero sí podemos aprender a cambiar


el concepto de lo que es la vida.

Desde el momento en el que asociemos la vida con mejorar, nos vendrá el


dinero para que esa mejora tenga lugar. Entonces, esa frase tendrá sentido
para nosotros.

Ahora bien, ¿cuál es tu concepto de mejora?

© 2018 Ruth Morales


19 www.cambioderealidad.com
Dinero

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

ENTREVISTA PARA LA REVISTA “UNO MISMO”

En la primavera del año 2013, después de haber escrito mi primer libro


“Cambio de Realidad. Cómo se manifestó mi propósito” más dos libros a
los que llamé “cuadernos”, “¿Con qué crees que te encontrarás tras la
muerte?” y “¿Por qué no funcionan las parejas?”, me levanté una mañana
con una determinación clara y fuerte: escribir un libro sobre el “dinero”.
Lo hice en menos de dos días, inspirada por lo vivido y por algo más que
está más allá de las palabras o de la experiencia.
Titulé ese libro “El dinero emocional”, pues todo en esta vida es estricta-
mente emocional.
Dos meses después, una periodista argentina quiso entrevistarme para la
revista para la que trabajaba, “Uno mismo”. Yo accedí.
En la página siguiente, tienes dicha entrevista, hecha hace 4 años y medio
pero cuya esencia sigue vigente.
Gracias por estar aquí.

Ruth Morales

© 2018 Ruth Morales


20 www.cambioderealidad.com
Dinero

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

© 2018 Ruth Morales


21 www.cambioderealidad.com
Dinero

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

© 2018 Ruth Morales


22 www.cambioderealidad.com
Dinero

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

© 2018 Ruth Morales


23 www.cambioderealidad.com
Dinero

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

© 2018 Ruth Morales


24 www.cambioderealidad.com
Dinero

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

© 2018 Ruth Morales


25 www.cambioderealidad.com
Dinero

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

© 2018 Ruth Morales


26 www.cambioderealidad.com
Dinero

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

TODO ES POSIBLE

La mayoría de los autores de libros tienen que presentar estos a editoriales


para que sus libros sean publicados y distribuidos por ellas. Esto es una
tarea más bien imposible, dado que la mayoría de las editoriales ni siquie-
ra recogen libros, es decir, ni siquiera te dan la opción de que tu libro sea
leído.

¡Cuántos buenos libros yacerán en mesas de noches de amigos de sus au-


tores y no en las librerías!

Dos años después de haber escrito “El dinero emocional”, mi libro fue re-
cogido por una editorial española, la que se encarga de publicarlo y distri-
buirlo desde entonces. Yo nunca me había puesto en contacto con ellos.
Fue al revés. Fueron ellos quienes se pusieron en contacto conmigo.

Todo es posible aunque todo sea al revés.

Hoy este libro lo encuentras en las librerías españolas y sobre todo, en las
grandes librerías, como La Casa del libro, FNAC, El Corte Inglés y en todos
los sitios webs, incluido el de la propia editorial.

Fuera de España solo es posible adquirirlo en formato electrónico.

Gracias a todos.

Ruth Morales

© 2018 Ruth Morales


27 www.cambioderealidad.com
Dinero

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

© 2018 Ruth Morales


28 www.cambioderealidad.com
¿Quieres anunciar tu negocio en esta revista?
Haz clic aquí

packemprendedorinmobiliario.es

29 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
La Era de los Idiotas

30 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
La Era de los Idiotas

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

LA ERA DE LOS IDIOTAS

Zweistein ya se presentó. A partir de


ahora, este apartado será llevado por
él pues es la máxima autoridad en esta
era. Tenemos el privilegio de que cola-
bore con nuestra revista y, mientras le
sea posible, dada su agitada agenda,
nos ha prometido que no nos dejará.

Gracias Zweistein desde el equipo de la


revista C~instinto.

“Para mí es un honor ostentar este reconocimiento pero, al mismo tiempo, es muy


duro, dado que mi padre trabajó mucho toda su vida intentando comprender el
universo y su origen. Y yo no hice nada, solo me dejé llevar y, aplicando el senti-
do común, he logrado comprender más allá de lo que él hubiera podido entender a
través de los números. Hoy dedico mi trabajo sobre el descubrimiento de la Era de
los Idiotas a mi padre, como si hubiese sido él quien lo hubiese descubierto, a pe-
sar de que nunca lo podría haber hecho desde su posición y conocimiento”.

Zweistein.
Premio Nobel al Sentido Común.

31

© 2018 Ruth Morales


31 www.cambioderealidad.com
La Era de los Idiotas

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

El mundo en la Era de los Idiotas,


según Zweistein.

Los niños se expresan


libremente en esta era.

Según la observación de Zweistein, los niños de la Era de los Idiotas se


expresan libremente, en el sentido de que “pueden hacer todo aquello que
les plazca, donde les plazca y cuando lo deseen”.

Esto es consecuencia de una época de represión en la que el individuo no


podía ni hacer ni decir lo que deseaba. Sin embargo, según Zweistein, es-
tamos entrando en una época oscura, en la que los padres son los protago-
nistas, es decir, más idiotas que sus hijos, hasta que estos crezcan.

Nacer en el siglo XXI y hacerlo en una gran ciudad del mundo capitalista,
superpoblada, es hoy un privilegio de todo niño cuyo padre esté sintoni-
zando con esta era, pues no habrá normas ni límites, por lo que el ser hu-
mano niño nos recordará a nuestros orígenes, sin necesidad de estudios
antropológicos ni de ningún tipo. De hecho, Zweistein defiende que esta

32

© 2018 Ruth Morales


32 www.cambioderealidad.com
La Era de los Idiotas

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

era supondrá el final de la ciencia. Muchos visionarios se adentran a estu-


diar qué estudios o investigaciones sustituirán a la ciencia mientras Zweis-
tein nos regala una de sus sonrisas irónicas, pronunciando una de sus me-
jores declaraciones:

“No busquemos nada. No hay solución para esto. Nos encontramos


en un momento en el que la ciencia ya tocó fondo o techo, según se
mire y ya no hay nada que la pueda sustituir sino una inteligencia
superior: el sentido común. Esta inteligencia jamás podrá ser expe-
rimentada en este planeta y por tanto, en nuestra realidad”
“Disfrutemos de nuestros menores y de una foto que un influencer
subió a Instagram cuya repercusión ha sido viral en cuestión de se-
gundos y que todos disfrutamos hasta el punto de sacarnos alguna
que otra lágrima mientras recordamos el futuro”, nos dijo un sen-
sible Zweistein.

33

© 2018 Ruth Morales


33 www.cambioderealidad.com
La Era de los Idiotas

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

@Ruth Morales www.cambioderealidad.com

Foto del influencer Nadio Comoyoyo

34

© 2018 Ruth Morales


34 www.cambioderealidad.com
La Era de los Idiotas

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

Zweistein nos adelanta


que los regalos de la
nueva Era son
susceptibles de no ser de
buen gusto.

Dado que el ciudadano de esta nueva era, la de los idiotas, sabe mucho, el
mundo le corresponde en relación a esa sabiduría, lo que todos conocemos
como conocimiento del medio o estar en la actualidad.

En esta nueva era, el ser humano deja de disfrutar de su ignorancia, a veces


tan deseada, para adentrarse en un mundo en el que cree conocer los
pormenores de los perjuicios que nos acechan y por tanto, el nuevo idiota,
o, el nuevo ser humano, se protege.

Nace, por tanto, una nueva forma de vivir. Esto significa que nace el nuevo
regalo.

¡Dejemos atrás el dinero, la ropa o un ramo de flores como regalos!

35

© 2018 Ruth Morales


35 www.cambioderealidad.com
La Era de los Idiotas

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

Veamos este ejemplo vivido por un ciudadano más ,


como cualquiera de nosotros, en el dia del padre.

@Ruth Morales www.cambioderealidad.com

Tratamos de entrevistar a este ciudadano anónimo pero, a


pesar de habernos enseñado su culo, no quiso hacer
declaraciones. Nosotros respetamos siempre la intimidad del
fotografiado.

36

© 2018 Ruth Morales


36 www.cambioderealidad.com
La Era de los Idiotas

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

Declaraciones EXCLUSIVAS de Zweistein tras su éxito en el


evento multitudinario “SÉ TÚ MISMO” en la publicación nº 5
de la revista.
¡No te la pierdas!

Instantánea hecha por un espontáneo que reconoció al genio mientras salía del
domicilio de su secretaria y que nos vendió por una cifra desorbitada de bitcoins.

37

© 2018 Ruth Morales


37 www.cambioderealidad.com
La Era de los Idiotas

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

Zweistein se encuentra de descanso dado su éxito tan


veloz como inesperado. Está un poco desorientado y
cansado y se ha retirado al mar, al cual adora, para
descansar de los focos de las cámaras de los móviles de
sus seguidores. Pronto nos hablará sobre su
experiencia en el evento “¡Sé tú mismo!”, el cual tuvo
más aforo que un concierto entre Julio Iglesias y el ya
desaparecido Michael Jackson.
¡Por favor, respeten su descanso e intimidad!

Declaraciones de la secretaria y mano derecha de nuestro genio,


Zweistein.

38

© 2018 Ruth Morales


38 www.cambioderealidad.com
El Secreto a Voces
La Simpleza del ser humano es lo que mueve el mundo
Por Ruth Morales

«Todo es al revés de lo que crees porque el


mundo nunca se ha movido por la inteligen-
cia sino por la simpleza humana. Este libro
rompe con todo lo conocido hasta ahora so-
bre la realidad cotidiana, desde los descubri-
mientos científicos hasta la historia de la
Humanidad, pasando por temas como el de
la salud, dinero, conceptos de Dios, del amor,
de la conciencia, del crecimiento personal, de
la situación global del mundo, etc. pues no se
basa en ningún conocimiento sino en la lógi-
ca.

¿Nunca has pensado el por qué no se cumple


lo que quieres? ¿Por qué a veces los malvados obtienen resultados buenos y
a las buenas personas les pasan cosas malas? ¿Crees realmente que tú creas
tu realidad?

Este libro te dará esas respuestas desde una lógica sencillez y por tanto, va
dirigido a todos los públicos. »

Ruth Morales.

Disponible en www.cambioderealidad.com en los formatos físico y


digital.

HAZ CLIC AQUÍ

39 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Tendencias

40 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Tendencias

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

Recuerdo, en algún momento de mi niñez, oír decir que a


los bebés había que dejarlos llorar y llorar para que no
se acostumbraran a los brazos.

41 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Tendencias

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

Eran momentos diferentes a los nuestros. Nuestros padres solían tener


más de dos hijos y aunque lo normal en España era que la mujer no
trabajara fuera de casa, las tareas diarias del hogar y cuidado de hijos y de
su marido, se les hacían cuesta arriba. Es más, este trabajo no tenía tiempo
libre ni era remunerado.

Estoy hablando del entorno de España, que pongo como ejemplo de otros
países y, aunque también en otras culturas de Occidente hubiera otras
costumbres, creo que todos podemos entendernos con lo que estoy
queriendo transmitir.

Solo hace falta tener ganas de recibir el mensaje.

Entonces, era “normal” que la ciencia (en este caso, la Pediatría y


Puericultura, etc.) aconsejara que el bebé no debía acostumbrarse a los
brazos pues no había tiempo ni fuerzas para tener a ese bebé en brazos
mientras la mujer tenía tantas cosas que atender.

La vida era diferente.

Luego, tan solo unos años más tarde, todo se dio la vuelta.

Aquí entró otra rama de la ciencia, quizá la de


la Psicología, por no extenderme, que identificó
En ese
ciertos trastornos de evolución y desarrollo del
momento, la
niño y del adolescente por carencia de afecto y
ciencia
amén de otras razones y/o estudios basados en
indicaba que
el conocimiento empírico de la ciencia,
no se dejara
arropados por las estadísticas (encuestas),
llorar al
enunció entonces que esto se podría evitar
bebé, que
dando protección al bebé tomándolo en brazos.
había que
Entonces, esos bebés pudieron gozar de ser cogerlo en
arropados. Hoy, esos bebés son adultos, no brazos.
muy mayores, pero adultos.

42 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Tendencias

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

Luego, creo que se convino sugerir el adoptar las dos conductas ya


descritas:

Ni dejar que el niño llore hasta cansarse ni coger en brazos al


niño nada más estalle a llorar.

Es decir y resumiendo, que se aconsejaba dejar llorar un poquito al bebé


para luego arroparlo otro poquito. Y luego, otra vez colocarlo en su
dispositivo, fuera cuna o sillita propias del bebé. Y así repetir el proceso
tantas veces como se requiriera.

Esta resolución se adapta mejor a nuestros tiempos, dado que ahora la


mayoría de madres trabaja en casa y fuera de ella, con lo que es una
invitación a ser flexibles con la vida misma.

El caso es que, atendiendo al sentido común o al instinto, habrá momentos


en los que tengamos que dejar que el bebé llore un rato, pues ya hemos
detectado que está comprendiendo el efecto que produce su llanto y habrá
otros momentos en los que lo tengamos que tener en brazos aunque no
llore, sea el tiempo que sea, para nuestro disfrute, pues no hay mayor
disfrute que tener a esa personita con forma cóncava pegada a nuestro
cuerpo, con ese calor que nos proporciona y ese placer compartido entre
los dos, al que podemos llamar seguridad y la seguridad es confianza y esta
es amor a la vida.

43 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Tendencias

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

DAR EL PECHO A DEMANDA

Después de lo dicho, quiero hablar sobre el tema tendencia, que ya casi


no lo es, pues es una inclinación hacia abajo y sin freno, una imposición
fuera de todo sentido común o de adaptación al medio.

Una mujer de hoy de este mundo occidental, en la mayoría de los casos, no


puede dar el pecho a demanda de su hijo. Si bien esto habría sido lo ideal
en la época del cromañón, hoy no lo es y el instinto te dice que hay que
darle de mamar no solo cuando tenga hambre sino cuando la madre pueda.

Es en ese equilibrio en donde surge el placer del instinto y de ser


tan flexible como el agua.

44 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Tendencias

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

LOS NUEVOS
ANALFABETOS

En algún lugar del mundo, hoy existen


personas que no saben leer ni escribir pero
no por eso les es imposible vivir. Hoy nos
resulta extraño pero esos lugares exixten y
esas personas también. Son los que
conocemos como analfabetos, lo que quiere
decir que no saben leer ni escribir.

45 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Tendencias

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

Si nos trasladamos a otra época y haciendo uso de la imaginación de un


lugar remoto, quizá en Europa de hace siglos, nos encontraríamos con
que la mayoría de la población era analfabeta. No nos sorprendemos,
puesto que, al estudiar historia, entendemos las causas y el entorno que
acompañan a cualquier hecho histórico y lo damos por comprendido.

¿Les haría falta a esos analfabetos saber leer y escribir? Pues la


respuesta más correcta es que no, puesto que lo que hace falta se
convierte luego en una necesidad. Es decir, no necesitaban leer ni
escribir.

Sin embargo, había una minoría muy pequeña que sí que sabía leer y
escribir y por tanto, ostentaban un poder superior en la sociedad
aunque este no fuera remunerado. Se podría definir como que estas
personas se colocaban en un estatus superior al analfabeto y eso
suponía muchos beneficios para el que sabía leer y escribir.

¿Se daban cuenta los analfabetos de ese estatus superior? Acaso no,
porque su entorno no se lo dejaba ver o no se les permitía juntarse con
dichas personas o quizá porque ni siquiera se lo plantearon. ¿Para qué
iban a aprender a leer y escribir si ya otros lo hacían por ellos?

Si trasladamos esta situación al siglo XXI, vuelve a ocurrir lo mismo.

La historia siempre se repite, como si quisiera verse una vez más con
ella misma de puro narcicismo.

Hoy, la mayoría de los ciudadanos del mundo son analfabetos pero no lo


saben. Solo saben que no tienen ciertas competencias pero piensan que
no les hacen falta, como antaño pensaron los campesinos u obreros de
las fábricas.

El nuevo analfabeto es el que no conoce el mundo digital y no hace falta


hacer una encuesta: es la mayoría, incluidos adolescentes que manejan
la tecnología.

46 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Tendencias

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

El nuevo lenguaje no es ni la escritura ni la


lectura sino lo digital

A esto se le añade que este mundo o lenguaje cambia a diario, se


actualiza y parece violar las normas que lo crearon, por lo que aprenderlo
significa una carrera de obstáculos o, tal vez, una invitación a un modo de
vida.

Si me gano la vida así, puedo generar mucho dinero pero, ¿qué pasa para
quién no se gana la vida así? Que es un analfabeto y llegará un momento en
el que ciertos servicios, por no decir todos, tendrán que ser contratados,
tales como el envío y la recepción de un correo electrónico o los distintos
formatos en los que enviar un archivo, cómo firmar de manera digital,
cómo asegurarte de que nadie te está plagiando o de que te están
engañando, operar con tu dinero por medio de unas claves o unos gráficos
en un dispositivo, cambiar el concepto de contraseña (habrá otra forma de
seguridad) y por supuesto, los nuevos timos.

47 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Tendencias

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

¡Ven, nosotros
cuidamos de ti!

LA TENDENCIA EN BOGA
#QUENOSCUIDENOTROS

48 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Tendencias

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

La clínica resort
Hoy podemos dar las gracias a la vida por tener hospitales en donde te
puedan tratar bien, con higiene y con todos los lujos a los que un lugar
como un hospital pueda alcanzar.

Es cierto que hay hospitales y hospitales, hay países y países, pero yo me


estoy refiriendo a la tendencia actual en la medicina preventiva, cuyo lema
es “Cuidamos de su salud”.

No estoy hablando Antiguamente, la gente adinerada y con


de personas que cierto nivel sociocultural se autoingresaban
están ingresadas en en clínicas para hacerse un chequeo mientras
un hospital, me el pueblo llano trabajaba y no podía
estoy refiriendo a permitirse tener siquiera una enfermedad.
las clínicas Esto quiere decir que la medicina preventiva
preventivas que ya estaba lejos de poder ser una realidad para el
funcionan como un pueblo.
hotel resort.

Hoy, este lujo se ha convertido en un deseo y este, en una necesidad, por lo


que ahora es normal y corriente que todos en el mundo occidental
poseamos seguros privados de enfermedad como seres visionarios de lo
que vamos a sufrir como patología el día de mañana.

Y la realidad nos da la razón, pues siempre nos la da, en este caso.

Sin embargo, ya no hay que esperar a mañana. Hoy las clínicas resort
cuidan de nosotros instándonos a hacernos chequeos médicos para evitar o
bien, predecir una futura posible enfermedad, a la que estamos expuestos
por el mero hecho de vivir, de comer, beber y de respirar.

49 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Tendencias

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

Y, al final, como las estadísticas tienen que


cuadrar, todo cuadra, pues la vida está basada
en las matemáticas.

Hay casos de personas que hacen uso de estos seguros médicos “ya que los
están pagando”, como para convencerse de que el dinero que depositan en
esa causa está justificado.

Otras personas, presas de la soledad y falta de calor humano de las grandes


y medianas ciudades del primer mundo, se acercan a dichas clínicas a ser
cuidadas o al fin y al cabo, atendidas. Esto es más real de lo que nos
imaginamos.

Ya no solo son las peluquerías los lugares donde cubrir tu soledad sino que
ahora existen estos resorts, para quien haya pagado de antemano su seguro
privado o para quien pueda permitírselo en el momento presente.

50 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Tendencias

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

Las mujeres y los hombres somos seres humanos


complementarios, por lo tanto, diferentes.

51 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Tendencias

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

LA TENDENCIA A QUE LA EXCEPCIÓN


SEA LA REGLA.
El comienzo de un nuevo orden mundial.

La vida y el estudio de la vida (ciencia en todas sus


vertientes) trata de ramificarse. El ser humano y
cuanto menos, el ser humano del siglo XXI,
aceptaría una premisa en donde se anunciara que
todo es más simple de lo que hemos imaginado y
que una actitud “fuera de lo normal” no debe ser
etiquetada, sino más bien observada desde arriba.

Digamos que si fuéramos a definir lo que es normal, hoy no podríamos


hacerlo, pues lo normal ahora recoge tantas conductas que antes estaban
fuera de toda norma, que lo que antes era normal, resulta ser ahora un caso
excepcional.

El caso es que se está creando la tendencia a VER lo que se sale de lo


corriente/normal como si eso necesitara de un respeto mayor que lo
corriente/normal.

El lector avispado o curioso se preguntará:

52 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Tendencias

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

¿Y qué es lo normal o corriente? (Ya hice algún comentario al respecto en el nº 3


de la revista).

Yo intento responder que, por culpa de preguntarnos esta pregunta, lo


normal o corriente tiende a ser anormal o no corriente, dando paso a que lo
normal sea lo que siempre hayamos tachado de “fuera de lo corriente”.

No es un juicio en contra de la tendencia actual, aunque podría serlo. Más


bien es una explicación por respeto al lector para llegar a un acuerdo entre
lo que quiero decir y lo que el lector opine al respecto.

“Supongamos que somos de una raza que tiene la piel más bien
amarillenta, ni blanca ni tampoco morena. Nuestras
características físicas serían, además de la piel, ojos grandes,
oscuros y pelo más bien rizado u ondulado, oscuro también,
desde el castaño hasta el negro. Y así ha sido durante siglos,
viendo nacer niños iguales dentro de ese margen de
características físicas, unos más oscuros que otros, otros más
altos que algunos.

De repente, nace un niño rubio de piel extremadamente blanca


y ojos claros.

Este niño sería objeto de análisis como algo anormal o no


corriente con respecto al grupo o sociedad en la que nació”.

¿Vale este ejemplo?

53 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Tendencias

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

Quizá algunos lectores estén pensando ahora mismo que “eso no tiene
porqué ser malo” y yo le invito a que se pregunte el porqué ha pensado eso,
dado que las palabras “anormal o fuera de lo normal y no corriente” no
significan nada malo sino que significan justo lo que significan: que no son
iguales que el resto.

Y desde este punto de referencia, quiero seguir escribiendo este artículo.

La vida, tal cual la hemos conocido hasta ahora, se basa en una jerarquía
natural que aporte el equilibrio para que la vida siga adelante.

La tendencia hoy es romper esta jerarquía natural de la vida.

A todos los que amamos la


naturaleza, pregunto:

“¿Nos gustaría que un árbol


como el ciprés, que crece allá en
lo alto y con esa elegancia
escultural, de repente
“decidiera” por tendencia a no
crecer más de un metro de
altura?”

“¿Les gustaría que un león perdiera su


instinto de cazar como depredador,
dado que el ser humano se ha metido
en su hábitat y le proporcione comida
para que no se coma a la cebra que
tanta ternura nos da?”

54 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Tendencias

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

“¿Les gustaría que ese precioso delfín, tan amigo del ser
humano, fuera sacado de su hábitat para que nos
atienda y no quedara ningún delfín en el mar sino todos
en delfinarios para servir a nuestro placer de mirarlos
y a fines terapéuticos”?

Todo esto es posible si el ser humano interrumpe o se mete a “pensar” qué


es lo mejor o qué es lo que está en tendencia. Esto lo podemos hacer
nosotros, dado que tenemos “ese poder” frente al resto de seres vivos de
este planeta.

Por la misma razón y siguiendo la línea de pensamiento que estoy


mostrando, con la intención y deseo de evolucionar, vemos en nuestra
conducta y actos que se alejan de lo “corriente”, algo digno de admiración.

Si eso se quedara ahí, sería genial porque lo admirarían solamente aquellos


a quienes el objeto de admiración fuera de su agrado.

El problema es cuando el ser humano, mediante el


poder que ostentan algunos, es llevado por la corriente
de que “eso que se sale de lo común”, sea más digno de
respeto y admiración que lo que no se sale de lo común,
creando con esto un desequilibrio que se traduce en
injusticia en nuestras vidas.

55 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Tendencias

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

¡Observemos el siguiente ejemplo!


Si fuéramos una población de 100.000 personas y 2.000 fueran
delincuentes, ¿por qué el resto (el 98% de la población) tiene que ser
tratado como posible delincuente y “pague” con un recorte de su libertad y
acatando normas, cuando el grupo de delincuentes no sobrepasa el 2 %?

¿Es esto natural, normal, corriente o lógico?

56 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Tendencias

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

Historia del
desamor

En otro lugar de Europa


El señor joven escritor llegó al aeropuerto de su ciudad. Estaba
emocionado porque, dos horas más tarde, llegaría a la ciudad donde había
conocido a esa mujer, en el evento celebrado en esa ciudad al que fue
invitado por su propia empresa.

Pensó que se había enamorado de ella y fue en ese instante, que duró tres
días, más sus vivencias pasadas con el amor, lo que le impulsó a escribir su
primera novela, la que no estaba teniendo éxito, la que hablaba del amor.

Pero hoy, el joven escritor no estaba solo emocionado por volver a


encontrarse con ella, sino por la inspiración tan fuerte así como

57 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Tendencias

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

complicidad que estaba teniendo con su segundo libro, “La historia del
desamor”.

No obstante, el pensamiento de ese reencuentro, avivado por largas


conversaciones por skype, por whatsApp y por sus largas horas de
imaginación que le crearon escenarios que creyó haber vivido de verdad,
hacían que su excitación creciese, apoderándose de su cuerpo de hombre
que galopaba ya hacia ese máximo placer que el ser humano pueda
experimentar.

Una vez en el aeropuerto, no tuvo que dirigirse a los mostradores de


facturación, ya que no necesitaba facturar maleta, pues llevaba la correcta
de viaje en cabina de pasajeros y porque ya había facturado previamente
online, por lo que se dirigió directamente a las salas de embarque,
portando su eurobulto más su ordenador portátil.

Estaba alegre, excitado, bien trajeado, limpio y sonriente. Una fuerza


enorme lo empujaba a vivir más y más y sobre todo, de manera intensa. Se
encontraba en uno de los mejores momentos de su vida.

Tuvo que esperar en una cola durante veinte minutos para pasar por el
control de seguridad, por si portaba líquidos que hicieran estallar el avión,
o acaso un cuchillo o tijeras con los que podía sembrar el pánico al resto de
pasajeros una vez el avión estuviera en vuelo o tal vez, por si portara
realmente una metralleta para cometer un asesinato en masa.

Cuando le tocó pasar a él por el detector de metales, descalzo, sin cinturón


ni reloj, requerimientos obligatorios para que dicho detector no pitara, le
hicieron sacar el ordenador de su habitáculo, abrirlo y mostrarlo al agente
de seguridad, que seguramente estaba haciendo su trabajo con la seguridad
de hacerlo bien.

¡Menos mal que no le pitó nada y pudo recoger sus enseres para volver a
vestirse unos metros más allá para no entorpecer el paso de los ya
entorpecidos pasajeros!

58 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Tendencias

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

Mientras se ajustaba el cinturón, pudo ver cómo le pasaban el detector


manual de metales a una mujer que, seguramente por las prisas, olvidara
quitarse el anillo de su dedo mientras le deslizaban el aparato por su
vagina, lugar misterioso donde se puede esconder una bomba. ¡Quien sabe!

El escritor se excitó de puro entusiasmo, no por la escena en sí, sino porque


ya tenía otro tema del que escribir en este su segundo libro, el del desamor.

Se dirigió, sin mostrar su alegría por su extricta educación, hacia la puerta


de embarque, a la que llegó después de veinticinco minutos caminando a
un ritmo rápido. Le habría gustado tomar un café, el que no tomó en casa
con el fin de hacerlo tranquilamente en las cafeterías del aeropuerto
mientras viera pasar a la gente, pero no calculó tantos obstáculos, por lo
que se tuvo que poner en la otra cola, la del acceso al avión.

Desde ahí pudo observar con alivio que el


avión que tomaría estaba aparcado en la
terminal, al que accederían mediante la Tanta realidad tan real
pasarela y así se evitaba tomar el autobús lo excitaba
repleto de personas que se encargaba de sobremanera, de esa
trasladar a los pasajeros a los aviones, manera en la que se
cuando estos estaban aparcados en pista, excita quien tiene el
alejados de la terminal. arte y la habilidad de la
Una vez pasó el control de las tarjetas de expresión en palabras o
embarque, tuvo que hacer otra larga en actos, como la
espera en la congelada pasarela, pues pintura o el teatro o
corría el mes de febrero, a que la cola de quizá la música, de
personas se moviera. algo que, para otros, es
“Seguramente hay atasco puesto que los simple cotidiano.
pasajeros suelen llevar equipaje de
mano mayor que el que se pueda

59 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Tendencias

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

introducir en la cabina y eso hace que se les tenga que retirar el equipaje,
ponerle una etiqueta y darle una copia de dicha etiqueta al pasajero”.
Pensó nuestro protagonista.

Esto ocurre en el mejor de los casos porque otras veces ingresan en el avión
llenos de bultos, entorpeciendo, en tan reducido espacio, el ritmo de
ingreso de pasajeros a la aeronave.

“Lo que es un milagro es que los aviones salgan en hora”, pensaba para sí
mismo nuestro señor joven escritor, movido por un deseo enorme de estar
sentado ya en su asiento y sacar el ordenador para escribir todo lo que
estaba viviendo.

Una vez dentro del estrecho pasillo del avión y esperando a que la pareja
que estaba delante de él se acomodara en sus asientos, se dio cuenta de que
le había tocado un asiento central, en medio de los otros dos.

Se sintió un poco mal, llamándose la atención a sí mismo por no haberse


dado cuenta antes para poder arreglarlo y haber pedido un cambio de
asiento, previo pago por solicitarlo.

Sin embargo, enseguida se consoló a sí mismo al venirle a la memoria que


el día anterior, en el que facturó vía online, había sido un día ajetreado, de
mucho trabajo en la oficina, de salvar ciertos errores que había cometido su
compañero de trabajo, respuestas a clientes y perdones, llamadas de
teléfono, esperas y correos electrónicos que nadie responde haber recibido
mientras adelantaba su tarea, porque al día siguiente, hoy, tenía esa cita en
esa ciudad donde lo esperaba esa mujer que lo hacía sentirse como el
hombre más afortunado del globo terráqueo.

Al salir del trabajo tuvo que pasar rápidamente por el hospital donde
estaba ingresada su madre, recien operada y cuidada por su hermana, a la
que le llevó un ramo de flores que acababa de comprar sin saber si el color
de esas flores era el adecuado para la ocasión, así como una caja de

60 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Tendencias

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

cosméticos de línea aromática de esencias para su querida hermana, quien


siempre se sacrificaba por todos y a quien él le agradecía enormemente que
atendiera a su madre mientras él se iba de viaje a encontrarse con la mujer
que le hacía vibrar todo el cuerpo.

Ya de vuelta a casa, se encontró con que su conexión de internet se había


caído y a él aún le quedaban asuntos por arreglar, como era facturar vía
online, pasar presupuestos a clientes que se le quedaron pendientes y
descargarse unos archivos importantes que el lunes siguiente tenía que
haber tenido trabajados.

Tuvo que llamar a la compañía proveedora de internet y, a pesar de ser un


cliente considerado VIP, pasó diez minutos al teléfono hablando con una
máquina para luego redirigirlo a una operadora que no entendió ni a la
primera ni a la cuarta vez el problema de conexión que el señor joven
escritor le estaba comunicando, por lo que transfirió esa llamada a un
compañero suyo que debía estar muy lejos, pues se le oía como en un eco
además de tampoco entender lo que el señor escritor le comunicaba, dado
que estaba más pendiente de recitar el guion que le habían determinado
como protocolo obligatorio para responder a los clientes que de escuchar a
estos, con lo que otros diez minutos se le fueron al escritor, no solo de
tiempo sino de un poco de paciencia también.

Una vez pudo expresar el problema que estaba sufriendo su conexión,


treinta minutos más tarde de haber llamado, los tan amables interlocutores
le instaron a hacer una serie de pruebas con el aparato de conexión, lo cual
acabó por destrozar el iniciado percance, pasando este al Servicio Técnico
que lo visitaría en su domicilio la semana siguiente, mientras una
grabación con voz femenina le recordaba que si el incidente había sido
provocado por un mal uso del aparato, le costaría el transporte y mano de
obra de los técnicos, para luego transferirlo a otra grabadora que le pedía
unos segundos de colaboración y solidaridad para contestar a unas
preguntas sobre el trato obtenido.

61 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Tendencias

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

Con lo que el joven escritor tuvo que facturar desde su móvil, lo cual hizo
sin ningún tipo de inconveniente, preparar luego la maleta e irse a dormir
mientras la conexión a internet sería resuelta quizá, la semana siguiente.

Fueron estas, quizá, las razones que hicieron que no se percatara del
asiento que le habían dado, el del medio.

Aún así, se había despertado con un ánimo desmesurado, pues el episodio


telefónico le había dado, de manera gratis y real, un tema más del que
hablar en su libro, el cual ya sentía como el éxito de todos los éxitos.

Como no pudo sacar ni siquiera el ordenador de su maletín, dado el poco


espacio que tenía para los movimientos que requería ese acto, decidió
cerrar los ojos y descansar, con los brazos apretados a sus costados, con tal
de no molestar a sus vecinos de asiento.

Cuando parecía que el sueño estaba cerca, un graznido atroz le sacó de ese
túnel de placer en el que uno se sumerge para vivir una de las experiencias
más fabulosas de la vida: dormir.

Dio un salto, asustado y dándose cuenta de que estaba en el avión y que, a


su derecha, se sentaba una señora mayor y a su izquierda, un señor con
cara de receloso, quien fue el que, con sus ronquidos, le sacó del túnel del
sueño de poder dormir.

No contento con ello, el joven señor escritor pudo comprobar que su vecino
roncador también se había descalzado, compartiendo su propio olor
corporal con el resto de pasajeros.

“Esto debo escribirlo. Espero no olvidarme cuando llegue al hotel”, se dijo


a sí mismo, contento de no tener que pensar nunca más en un tema para su
novela porque estos le sobraban en la cotidianidad.

62 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Tendencias

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

Una vez llegó al gran hotel que había reservado para ese encuentro, el
mismo hotel donde se había alojado cuando visitó esta ciudad tan hermosa
y magnífica de ese país tan elegante durante el evento al que fue invitado y
tras haber estado media hora en la cola de espera de un taxi, se sorprendió
al comprobar que lo atendieron inmediatamente. No había cola ni nada
que esperar.

Un botones le recogía su maleta mientras esperaba a que le dieran su


habitación.

Ya en el taxi, había anotado en su móvil todo lo vivido en clave de


taquígrafo con el fin de no olvidar ningún detalle para su libro.

Cuando subió a la habitación, precedido por el botones, comprobó que esta


estaba acondicionada para minusválidos.

El botones le dijo que había sido un error en un casi perfecto inglés, lengua
en la que se comunicaban, pues el escritor no hablaba la lengua natural de
ese país. El botones se ofreció a ser él mismo quien reportara el incidente
para que el escritor cliente no tuviera que volver a recepción. Se disculpó
varias veces, inclinándose ante él como si hubiese sido su propio error.

—No —exclamó él—. Esta habitación me gusta. Si no hay ningún cliente


que la necesite durante estas dos noches, prefiero quedarme aquí y así
compruebo cómo se vive en un hotel desde una minusvalía física. Y se
quedó admirando la estancia, mientras el botones le insistía que podía ser
cambiado de habitación.

“Qué bien habla inglés”. Se dijo el escritor para sus adentros. “Con ese
nivel, podría estar haciendo otro trabajo que no fuera este”, pensó.

Pero luego recordó que el mundo había cambiado, que todo iba demasiado
rápido, así como la población mundial y que hoy, hablar inglés de manera
casi perfecta, no era un don ni una cualidad sino casi una obligación
natural, como andar para un bebé que se hace niño.

63 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Tendencias

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

El botones no creyó lo que oía pero bajó y lo comentó en recepción. Estos le


hicieron una llamada pidiéndole disculpas pero aceptando su propuesta de
que permaneciera en dicha habitación, ya que disponían de muchas más
habitaciones para minusválidos, además de añadir que no esperaban a
ningún cliente en esas condiciones.

Se paseó por la amplia habitación, mirando todo detalle hasta llegar al


baño para comprobar cómo una persona con movilidad reducida tenía que
ducharse. Lo que no le gustó tanto fue el lavabo, pues se dio cuenta de que
tendría que afeitarse de rodillas. Pero él, entusiasmado por su libro y por lo
que quizá aconteciera esa misma noche en esa misma habitación, sonrió
para sus adentros, abriéndosele el tórax con tan solo imaginarlo.

La vida le estaba mostrando pequeñeces que él engrandecería en su libro


del desamor.

Cuando bajó a recepción a encontrarse con ella, a las 18,00 de la tarde,


dado que en esa ciudad esa era ya una hora más cerca de ser tarde para
cenar que temprano, vio a la mujer tan deseada, vestida con un vestido de
volantes y tan ancho que no dejaba entrever sus curvas ni su cuerpo, algo
que, en lugar de disgustar al escritor ya desesperado, hizo que se imaginara
el cuerpo dentro de esa cápsula en forma de bombilla que era ese vestido.

Ella se encontraba de pie, sonriendo con su grande boca y esos ojos que
enamoraron al escritor a primera vista, y ambos se besaron en las mejillas,
luego se abrazaron. Habían sido meses de complicidad y el flechazo de la
primera vez aún se sentía en ambas almas.

Ella le tomó de la mano y lo condujo a la calle, donde hacía más frío que en
Siberia en invierno. El escritor comprobó que su vestido era de lana gorda
y pensó que seguramente llevaría ropa interior térmica, lo cual, lejos de
alejarlo de la lujuria sexual, le inspiró ternura.

64 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Tendencias

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

Ella ya se había puesto un abrigo, más ancho que su vestido, con lo que
ahora sí que parecía una mesa camilla andante o tal vez, se trataba de un
disfraz de barril con el que venía de animar una fiesta infantil.

Él se colocaba su abrigo y su bufanda, tiritando para sus adentros para no


demostrar que el frío le había tomado tan de sorpresa como el hábito de su
deseada.

Se adentraron en un cálido restaurante y, dirigidos por una señora con


aires montañeses, llegaron a su mesa reservada, allí en el rincón, como a él
le gustaba estar desde donde vislumbrar lo que pasaba a su alrededor
aunque esta vez su intención y deseo era mirar a la persona que lo
acompañaba.

Una vez sentados, comprobó que algo se movía en la mesa de una pareja
que había a su lado. El señor joven escritor dio un respingo del susto que le
proporcionó ver un hocico negro de un enorme perro salir de debajo de la
mesa, lamiendose después de haber cenado.

La mujer recogió el plato y se lo dio al camarero.

—Aquí puedes salir a cenar con tu perro. Está permitido en casi todos los
restaurantes —comentó ella al joven escritor, sacándolo de su sorpresa—.
Ya sé que no estás acostumbrado a esto.

—No, qué va. Me parece extraordinario —exclamó él sonriendo


tímidamente mientras se posaba la servilleta en sus piernas—. Solo que me
he asustado al ver moverse el mantel y luego ver el hocico del perro.

—Y el plato. ¿Es de los dueños o pertenece al restaurante? —preguntó él


más tímido aún.

—Jaja. El plato es del restaurante, jaja. —rio ella—. ¿Te imaginas tener que
llevar el plato de tu perro por todos los lados?

—Ya, jaja, ¡qué pregunta más tonta! —contestó—. No lo pensé.

65 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Tendencias

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

Ella lo miró con ternura, un tanto también excitada y él sintió esa misma
vibración y ese sentimiento se le hizo corporal, de manera que ya sintió los
primeros síntomas de una excitación hormonal.

Pensó que el episodio del perro había sido una tontería y que no era tema
para ser escrito en su libro del desamor. Sin embargo, decidió no pensar en
su libro mientras durara esa velada para poder saborearla hasta el final y
volver a su país con el aroma del recuerdo intenso que le duraría mucho
tiempo. Sin embargo, ella lo sacó de ese ensueño.

—Nos tenemos que ir a otro restaurante —dijo mientras se levantaba.

—Esta es una de las razas de perros que me produce más alergia y no


puedo estar cerca de ellos —anunció ella, ya alejándose de la mesa.

Él se incorporó, agachándose un segundo después para recoger la servilleta


que él mismo había posado en sus piernas unos segundos antes. Cuando
alcanzó a su deseada mujer, que ya estaba cerca de la puerta del
restaurante, le dijo:

—Pero, ¿no será mejor que se vayan ellos? Quiero decir, la pareja y el
perro.

—Eso no se puede hacer, es una falta de educación. ¡Imagínate! Echar a


alguien de un restaurante porque otra persona, que ha llegado después,
tiene alergia de su perro.

El joven señor escritor sonrió, asintiendo a todo lo que ella decía.

—Es cierto —respondió—. No se me había ocurrido. ¡Vayamos a otro


restaurante!

Enunció esto mientras para sus adentros pensaba en escribir sobre las
intolerancias y alergias tan corrientes en nuestros días. Eso sí que era un
gran tema para su libro, “Historia del desamor”.

66 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Tendencias

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

Ya acomodados en otro restaurante, tan cálido como el primero, nuestro


escritor quiso envolver la velada con una botella del mejor vino que el
restaurante ofreciera pero ella declinó la oferta pues alegó no beber ni gota
de alcohol. Entonces, él, por educación, pidió agua para compartirla con
ella.

Estuvieron hablando de todo un poco y la calidez del lugar, las voces bajas
de los comensales, casi susurrando y la embriaguez de la comida fría con
agua, le hicieron sentir todavía más especial, pues todo lo que había
envuelto esa relación era diferente, virginal o incluso brutal.

Trajeron la cuenta y, al hacer ademán de sacar la cartera para pagar, ella le


paró bruscamente la mano y le dijo que no, que ella no podía dejarse
invitar, puesto que ambos eran iguales.

Nuestro joven señor escritor no entendió bien lo que ella quiso decir a
través de esas palabras pero creyó intuir que ella querría invitar, quizá
embriagado por tanta agua y tanto silencio. Su intención jamás fue el
herirla o menospreciarla.

“Ella quiere invitarme. No sé qué hacer. Quizá sea esta su costumbre, con
lo que me adaptaré. ¿Por qué no?”. Pensó él rápidamente y con la
educación que lo acompañaba siempre, la cual no le permitía enfadarse con
el mundo.

—Tú pagas lo tuyo y yo lo mío —declaró ella sonriendo, como dando una
lección a un alumno hambriento de aprender.

—Yo no soy inferior a ti y tú no tienes la responsabilidad de pagar —añadió,


para no dejar lugar a dudas.

67 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Tendencias

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

Al llegar al hotel, el ya no tan joven escritor, pues el tiempo pasa también a


modo emocional, sugirió a la mujer deseada que tomaran algo en el salón
antes de subir a la habitación, lo cual era lo esperado.

Ella declinó la oferta y lo condujo hasta el ascensor.

Una vez en la habitación y sin mediar palabra alguna, ella lo empujó en la


cama y, descalzándose, se colocó encima de él, momento en el que él
acarició sus piernas por primera vez, debajo de ese atuendo carnavalezco y
comprobando que sus medias le llegaban hasta la rodilla.

Él respiró profundamente para atreverse a subir las manos hacia la parte


más deseada mientras ella lo miraba fijamente, encima de él.

Cuando tocó sus muslos desnudos debajo de la falda campana, el joven


señor escritor dio un salto. Enseguida le vino a la memoria las refriegas que
le daba a su padre por las piernas, quien había padecido durante muchos
años de artritis reumatoide y cuyas piernas tenían que ser masajeadas para
que estas no se anquilosaran durante el tiempo.

Ese recuerdo lo paralizó, cambiando su semblante de golpe. Ella se


incorporó, mostrando una cara que más se parecía al vecino del avión que
a ella misma, a ese ángel de diez meses atrás, cuando la conoció en el
evento al que fue invitado.

—¿Sabes? —alzó ella la voz sin llegar a ser un grito, mientras se levantaba
de la cama y se calzaba de nuevo—. No me depilo porque así nací y porque
vosotros, los hombres, tampoco os depiláis. Ya está bien de tanto sufrir.

—Vienes de una cultura inferior en donde el hombre es un machista


todavía —añadió—. Te queda mucho por aprender.

Y se fue dando un casi portazo.

El ya más joven escritor se levantó rápidamente de la cama. Abrió el


ordenador y se dispuso a escribir. Sus emociones iban más rápido que sus

68 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Tendencias

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

dedos. Acababa de sentir una inspiración sin igual que lo hicieron sentir el
hombre más afortunado del mundo.

Escribía, escribía sin parar mientras un placer indescriptible le subía por el


cuerpo. Quien ha estado inspirado, sabe lo que es.

En ese momento se dio cuenta de que si ese libro no era un éxito, este ya lo
poseía a él. El éxito se había apoderado de él mismo.

Ese momento fue tan placentero como el orgasmo que no tuvo esa noche.

Luego, se acostó en la cama, deseando que fuera el día siguiente para


seguir escribiendo.

Él habría hecho el amor con ella, pasando por encima sus esquemas
culturales de que la mujer debe estar depilada, pues a él lo movía el amor
del sexo, de la complicidad de dar y de obtener placer con una persona que
te ha hecho cambiar la química del cuerpo. Para él, eso era amor.

Sin embargo, fue ella la que le dio el desamor, defendiendo lo que


consideraba por encima de toda cuestión.

Esta es la historia del desamor, para quien pueda entenderlo y para quien
lo haya vivido.

69 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
¿Quieres anunciar tu negocio en esta revista?
Haz clic aquí

www.carminaabad.com/te-acompano/

70 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Comunicación
desde el instinto

71 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Comunicación desde el instinto

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

“Lo que no sabes por sentido común o por medio del


instinto, te lo dice la ciencia”.
Ruth Morales, febrero 2018

Comunicación desde el instinto. La nueva respuesta

72 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Comunicación desde el instinto. Nuevos códigos de vivir

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

EL ERROR DE SEGUIR EL CICLO DE LA NATURALEZA


Si la naturaleza tiene su ciclo (algo incuestionable) y si nosotros
tuviéramos que seguir dicho ciclo, la luz no se habría inventado y nos
habríamos muerto de frío o tal vez, nuestra piel no sería como la que
tenemos sino como la de una foca o animal marino de agua congelada.

En cambio, hemos nacido como seres humanos y como tales, nuestro ciclo
es diferente al de la naturaleza, que no contrario sino diferente.

La naturaleza está ahí para servirnos y no al revés.

Es en este error de partida, donde surgen todos los errores.

Por un lado, aplaudimos la evolución humana que viene dada por el


conocimiento y la investigación y por otro lado, estamos negando dicha
evolución al creer que debemos vivir según el ciclo de la naturaleza.

Entonces, ¡mojémonos cuando llueva! ¡Que nos parta un rayo al


exponernos cuando truene!

¡Pongámonos cerca de un acantilado cuando haya olas cual maremoto!

Y, sigamos el curso del terremoto pues este es natural sin osar protegernos,
como lo es la lluvia, el león hambriento, el calor de 60 grados centígrados
del desierto y el mundo de las bacterias o virus que nos matan.

Por lo tanto, teniendo en cuenta el artículo “Dar el pecho a demanda”, hoy


no es natural hacer eso pues iría en contra de nuestro ciclo, el de una
persona en un mundo occidental (desarrollado) en el siglo XXI.

Lo que pasa es que la tendencia de hoy es ir en contra de lo que nos ha


traído hasta aquí, es decir, de los siglos anteriores. Estemos tranquilos,
porque aquellas personas pensaron lo mismo que nosotros.

Hoy se está creando una forma de pensar en LO NATURAL, como si


fuéramos a ser capaces de hacerlo en nuestros días. Construiremos un

73 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Comunicación desde el instinto. Nuevos códigos de vivir

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

mundo artificial para que podamos vivir en lo natural creyendo que eso nos
ahuyentará de los males que nos aquejan, cuando los males que tenemos
vienen dados precisamente por creer que no estamos viviendo según
tenemos que vivir.

¿Y cómo tenemos que vivir?

Como personas del siglo XXI. Si vivo en un edificio con vecinos, no podré
gritar porque me lo haya indicado mi psicoanalista, lo tendré que hacer
cuando esté solo o irme tal vez a un sitio desierto. Tampoco puedo poner la
música a un alto volumen, pues molesto a los vecinos.

¿Es natural gritar cuadno lo necesito? Quizá sí pero no es correcto hacerlo


hoy en un edificio donde quizá haya personas que descansan o que estén
enfermas o sencillamente, que no quieran oir tus gritos.

Si vivimos entre vacas y cerdos, nos tendremos que adecuar a ese entorno.
Quizá no podamos calzar tacones de aguja para ordeñar las vacas, más que
nada porque nos arriesgamos a hundirnos en la mierda de estas.

Por la misma razón, en una ciudad mediana o grande, tendremos que


comportarnos y comunicarnos como ciudadanos que comparten un
espacio, el cual es de todos y de nadie al mismo tiempo.

Para ello no basta con la educación solamente, sino con el desarrollo del
sentido común o instinto, el cual nos da la inteligencia que hace falta en
estos tiempos: el siglo XXI.

74 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Comunicación desde el instinto. El hombre

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

EL HOMBRE-PADRE DEL SIGLO XXI

@Ruth Morales www.cambioderealidad.com

Ser hombre-padre hoy es un reto para muchos. Para otros no, pues se en-
cuentran en su papel idóneo, ya que este nuevo orden mundial así lo re-
quiere. ¡Eso está muy bien! Pero, ¿qué pasa con esos hombres que no lo-
gran adecuarse al nuevo papel que se les exige?

El de hombre-padre del siglo XXI.

¡Hablaremos sobre ello!

En el Espacio C~instinto que se inaugurará el 20 de febrero, tendremos también nuestro


espacio para hombres. Más información al respecto en la página 7 de esta revista.

75 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Comunicación desde el instinto. Mujer

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

@Ruth Morales www.cambioderealidad.com

Del placer natural se pasa al deseo y de este a la necesidad. Esta se


convierte en apego y este apego se transforma en objetivo vital.

Al final, de un placer recogemos una obligación llena de dogmas y de


rigores que distorsionan la realidad y que están lejos del placer del que
partimos.

Ruth Morales

76 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Comunicación desde el instinto. Mujer

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

El siglo XXI podría ser el momento más dulce y fértil para aquellas mujeres
que quieran volver al instinto.

Sin embargo, también es el momento más fértil para aquellas que no saben
qué hacer o más bien, aquellas a las que les faltan puntos de referencia
pues los actuales y los venideros, no las representan.

@Ruth Morales www.cambioderealidad.com

77 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Comunicación desde el instinto

Si quieres saber cómo aplicar el INSTINTO desde donde estás, co-


mo mujer, como hombre, como empresario o incluso, si quieres
que esta comunicación sea dada en tu colectivo, el que sea, ponte
en contacto con nosotros.

Para las personas individuales, pincha AQUÍ

Para colectivos, escribe a contacto@cambioderealidad.com

78 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Comunicación desde el instinto. Mujer

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

El alfabeto a gritos. El libro


Redacción. Maquiavelo García. Redacción. Equipo Revista C~instinto

Llevábamos unos días de hastío, sin ninguna noticia interesante que cubrir
y haciendo nuestro trabajo en la redacción sin demasiado ímpetu. Nuestro
jefe, Salvador Bueno, nos echó la bronca cuando nos pilló más ociosos que
trabajadores.

Eustaquio hablaba por el móvil y no se le ocurrió sino posar sus piernas


sobre la mesa, como si estuviera en su casa. Solo le faltaba la jarra de cerve-
za a su lado para completar el cuadro.

Eulalia, como ya había acabado su trabajo, pensó que lo mejor era matar
el tiempo pintándose las uñas, ya que ella es muy apañada y nunca dejaba
para mañana lo que pudiera hacer hoy, dejándonos un olor de laca potente
tan fuerte, que hasta Maquiavelo, que todo lo aguanta, se puso a estornudar
desenfrenadamente, con lo que tuvo que salir afuera a coger aire.

El resto, o bien tomaban un café o bien buscaban ofertas en internet. In-


cluso Manuel fue sorprendido viendo fotografías de desnudos un tanto hor-
teras en una página que no solo abre el apetito al hambriento sexual sino
que es la puerta que deja entrar muchos virus informáticos.

Así nos pilló Salvador.

—¿Qué es esto? —gritó—. ¡A trabajar todos! Luego viene final de mes y


todos queréis cobrar.

Se hizo un silencio absoluto, que rompimos para ponernos todos en nues-


tro sitio y continuar con cualquier tarea que se pareciera a trabajar.

Eustaquio, como siempre y para romper el hielo, preguntó.

79 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Comunicación desde el instinto. Mujer

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

—Don Salvador. ¿Qué le pasa a María del Carmen? Ayer no vino y hoy
tampoco.

—¿Y a ti qué te importa? ¡A trabajar tú también! —le graznó nuestro jefe.

Eustaquio se puso enseguida manos a la obra mientras que en ese mo-


mento, se acercaba a su mesa un rojo e hinchado Maquiavelo de tanto es-
tornudo en la fría puerta de la redacción.

—¿Y tú? —le inquirió el jefe—. ¿Dónde estabas?

—¡Achiiiiis! —estornudó Maquiavelo mientras se sacaba un pañuelo cien


veces usado de su bolsillo—. Lo siento Don Salvador, es que… ¡Achiis!

Y se sonó.

—Así no hay quien salga adelante —gritó Salvador Bueno—. La competen-


cia es mediocre pero nosotros lo somos más. Con esta panda de inútiles, ¿a
dónde nos dirigimos?

Se volvió hacia Maquiavelo.

—¿Y esa cara que tienes? ¿No irás a entrevistar a nadie así? Ni se te ocu-
rra —le dijo levantando el dedo índice en actitud amenazadora.

Y se fue, dejándonos a todos el eco de su voz durante más de una hora,


como si siguiera ahí, viva, porque nadie osó siquiera emitir ningún sonido, a
excepción de Maquiavelo, que no paró de estornudar y de Eulalia, que a ca-
da estornudo, le respondía.

—¡Jesús, María y José!

80 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Comunicación desde el instinto. Mujer

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

81 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Comunicación desde el instinto. Mujer

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

EL ALFABETO A GRITOS
Por la Doctora Licenciada Doña Alegría Descomunal García

La C representa la gran letra para el alfabeto sexual femenino, por mucho


que hablen del punto G o de los Gritos de algunas mujeres cuando experi-
mentan el orgasmo. La C es regia y tiene la clave de la sexualidad femenina.
La C es la letra de la Caricia, acción fundamental y básica para la sexuali-
dad, tanto del hombre como de la mujer. Todo el Cuerpo puede ser acaricia-
do y debe serlo, si a una le gusta. No hay ninguna parte que deba quedar
fuera de la caricia, porque esta se inventó para ese fin.
Demos especial importancia a la caricia en los pechos, dado que la P aún
nos queda lejos y para no dejar a nadie en ascuas, adelanto que algunas mu-
jeres tienen orgasmos sencillamente con ser acariciadas en los pechos.
Sin embargo, no son todas porque todas significaría la mayoría y esta ma-
yoría de mujeres no sabe ni siquiera el placer que una caricia o masaje en los
pechos puede darles. Es curioso observar cómo podemos tener una parte
tan importante en el cuerpo, dadora de placer y que haya tantas mujeres
que no sean capaces de decir a su amante (quien la está amando) cómo de-
be tocar, acariciar u ofrecer un masaje en sus propios pechos.
A decir verdad, quienes producen las películas con escenas eróticas o por-
nográficas, poco saben del tema. Yo me pregunto, ¿por qué habrá tantas
personas ignorantes al respecto? Lo contestaré luego.
Estas películas se han encargado de enseñarnos la parte más grotesca y
menos deseada de la sexualidad femenina, de ahí que existan tantas mujeres
con una sexualidad distorsionada o también, con diagnóstico de anorgasmia.

82 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Comunicación desde el instinto. Mujer

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

¿Le gusta a alguna mujer que le masajeen los pechos tal cual se ve en las
películas? Seguramente habrá alguna, porque la excepción confirma la regla.
Sin embargo, a casi ninguna le gusta que se los toquen como lo hacen mu-
chos hombres (según nuestra encuesta), como si estuvieran amasando piz-
zas y como si eso les diera placer a sus pobres víctimas. Algunos se atreven a
succionar el pezón, mostrando, una vez más, en la fase en la que se encuen-
tran del desarrollo humano, la de la lactancia.
¿Quién les habrá dicho que succionar el pezón da gusto? ¿Quién les habrá
dicho que masajear el pecho como se ve en las películas, da placer a las mu-
jeres?
El caso es que este libro no tiene como objeto criticar a los hombres, más
bien criticar a aquellas mujeres que no son capaces de decir que eso no les
gusta y que así no se hace. Y aquí viene una cuestión importante, digna de
ser estudiada.
Muchas mujeres sienten que no están a la altura sexual que se requiere de
ellas (como si esa altura existiera) y entonces, se dejan hacer lo que sea,
aunque les produzca dolor, en lugar de expresarse y decir no.
Muchas mujeres piensan que no saben hacer el amor o se sienten insegu-
ras en la cama con su amante, como si estuvieran pasando un examen. Esto
está en el ADN heredado de la mujer, desde antaño, lo que significa que
nunca se dijo nada o que, tal vez, nadie enseñó a nadie y parece que lo que
prima es un “¡fastídiate, que ahora te toca a ti!” antes que un consejo o una
comunicación sana y clara entre mujeres.
La Comunicación es sexual también y se escribe con C. Aquí tendría que
decir que la comunicación es anterior a hacer el acto sexual, ya que, en el
mismo acto, quizá sea demasiado tarde, en algunos casos. Se trata de hablar
con amigas o amigos, de informarte, de tocarte a ti misma (eso es comunica-
ción también) para que no te quedes en el desconocimiento en el que se
quedaron tu madre, tu abuela, tu bisabuela y así hasta Eva, la de Adán.

83 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Comunicación desde el instinto. Mujer

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

La comunicación produce Complicidad, un estado superior de comunica-


ción que hace incluso que llegues al éxtasis sin ser tocada. La complicidad es
importante y si alguien la tiene con un desconocido, algo extraño pero no
por ello imposible, pues adelante. Sin embargo, la complicidad de la expe-
riencia hablada, de la comunicación verbal erótica, de las posturas y un saber
qué ocurrirá, el poder transmitir lo que te gusta y lo que quieres probar, eso
no tiene precio, aunque algunas personas paguen un alto precio por preci-
samente no tener complicidad ni comunicación con nadie a quien desean.
Hay una complicidad silenciosa cuando nos hemos comunicado bien.
La caricia es importante, es sensual y erótica y si se hace lentamente, to-
davía más. Cada momento sexual tiene su ritmo. En el momento del orgas-
mo, lo lento se convierte en una causa para matar a quien te está produ-
ciendo el orgasmo. En ese momento, se requiere de cierto ritmo y diligencia,
pero eso es otro tema.
La caricia puede darse con la mano, con aceite o con la lengua. Hay muje-
res que no soportan la lengua, entonces, hay que comunicarlo. Al igual que
hay que escuchar lo que el amante comunica, también.
Hablaremos de cómo acariciar los pechos cuando llegue la P, algo que se
me antoja lejano pero, todo lo bueno, siempre será bueno aunque se haga
esperar.
El Consolador me parece una palabra cutre y además, ya no de nuestros
tiempos. Hace alusión a la sustitución de algún instrumento por falta del pe-
ne masculino, como si eso fuera consolarse. Muchas veces es al revés. Lo
que hace el consolador no es consolarnos sino ver a Dios y, cuando has visto
a Dios, quizá no quieras tener trato con ningún ser humano. Así que, todo en
su sitio.
Compartir sexualidad con otra persona no se puede comparar con culti-
varte a ti misma porque, aunque la intensidad de los orgasmos o del placer
varíe, el morbo* que te pueda dar el supuesto amante nunca puede ser sus-
tituido por un consolador marca Premium, no por grande sino por magnífico.

84 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Comunicación desde el instinto. Mujer

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

Hay consoladores vaginales de todos los tamaños y grosor, los más pe-
queños suelen usarse para el punto G. También hay consoladores anales.
La mujer que no haya experimentado un orgasmo vaginal, que se prepare,
porque verá no solo a Dios sino a todo el elenco de dioses de todas las mito-
logías de la historia del mundo. Pero ya hablaremos de la práctica y de cómo
hacerlo o cómo combinarlos, para no liar a quienes estén sumidas en la teo-
ría.
Estos consoladores pueden vibrar pero lo dejaremos para la V, si bien está
bien lejos aunque su vibración nos llegue desde ya.
Y me falta hablar de la gran C del Clítoris, el mejor amigo de la mujer. Será
pequeño y estará medio oculto pero es el botón mágico, el que hace que to-
do funcione.
Para ello animo a todas las mujeres sin deseo sexual o que no hayan expe-
rimentado un orgasmo en toda regla, que se lo toquen, que lo acaricien, por
un lado, por el otro y sobre todo, por encima de él. Hay vibradores de clítoris
que, de inaguantables, se hacen adictivos del placer que proporcionan.
El clítoris tiene que ser conquistado con mucha elegancia y con mucho
cuidado. Hay que tocarlo suavemente y eso hay que decirlo a nuestro aman-
te, no vaya a ser que haya visto alguna película barata y cometa el error de
abalanzarse sobre el clítoris sin ton ni son. Aunque sea un pequeño montícu-
lo, todo su alrededor es extremadamente excitable. Es más, se puede llegar a
un orgasmo sin tocar el clítoris directamente, solamente con tocar sus alre-
dedores. ¿Entendemos ahora lo de la conquista?
La mujer puede tener varios orgasmos de igual o de mayor intensidad ca-
da vez en el clítoris, si bien todo tiene su tiempo y su rigor y un clítoris dema-
siado usado puede resultar doloroso. Habrá que esperar. Una ducha fría pe-
ro suave enfocada hacia el clítoris es la mejor pomada para ese fin.
Si a la estimulación o caricia del clítoris, la acompañas (a veces es de vital
urgencia hacerlo) con una penetración a su ritmo o consolador o vibrador

85 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Comunicación desde el instinto. Mujer

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

vaginal, el orgasmo puede durar más segundos de lo aguantable. Algunas


mujeres incluso, habiendo conocido el placer de otros lugares de su cuerpo,
como el orificio anal, se introducen otro consolador en esa parte, aunque
esto parezca más una prueba médica con aparatos de electrodos de pies a
cabeza que un placer buscado. No obstante, el resultado bien vale la pena.
Pero esto no es necesario, pues muchas mujeres niegan su parte trasera
como objetivo sexual y estas palabras pueden proporcionarles rechazo. Sin
embargo, para las más aventuradas, por ahí es y, para quienes lo hayan pro-
bado, no hay más palabras que decirles, porque ya lo saben todo.
Lo bueno de estas encuestas hechas por todos mis alumnos, más lo que yo
copié por internet es que, algunas serán mentiras pero esas mentiras se ha-
brán apoyado en alguna premisa y las que son verdaderas nos proporcionan
una enseñanza sin igual y este libro quiere transmitir que ninguna mujer
puede irse de este planeta sin haber probado el orgasmo en todas sus expre-
siones.
Tristemente y aunque suena a irreal, hay más mujeres de las que nos ima-
ginamos que sufren (por no decir que gozan) de Calambres, a los que llaman
orgasmos.
Sigamos leyendo, hasta llegar a la Z y con ella, la práctica.
Toda mujer que lea este libro tendrá sus orgasmos como Dios manda.
Amén.

Esa noche, la del día de la bronca, María del Carmen estaba en su cama,
acabando el libro, el cual tenía que devolver al día siguiente en la redacción.
Lo dejó en su mesilla de noche, al lado de una figura de Santa Rita, regalo
de su tía abuela, la de un pueblo de Castilla La Mancha, a la que no veía des-
de el día en el que cumplió 15 años.

86 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Comunicación desde el instinto. Mujer

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

Se estiró en la cama, como lo hacen los bebés al despertarse, y fue en ese


momento en el que sintió un calor intenso bajo su camisón.
Se lo subió un poco con la mano izquierda mientras los dedos de su mano
derecha buscaban su clítoris. Lo encontró y lo acarició amable y tímidamente
por encima de sus bragas antigripales.
Como estas le molestaban, se las quitó, sintiendo que estaba cometiendo
un delito grave. Apagó la luz para que su madre creyera que ya estaba dur-
miendo. Los ojos de Santa Rita brillaban y le sirvieron de puntos de luz como
referencia de dónde estaba la mesa de noche.
Después de un rato acariciando su clítoris, se sintió mojada y un calor le
subió hasta la cabeza. Pensó en que todos estarían pensando en ella, todos
los de la redacción y eso le dio morbo*, haciendo que se mojara aún más.
En ese momento se culpó a sí misma por carecer de un objeto que la ayu-
dara a continuar en ese estado de éxtasis.
Se retorció pensando en sus compañeros y en el chico que le gustaba y se
dio cuenta de que tanto placer debía ser compartido, pues ella había sido
educada en la compasión y en la entrega.
¿Cómo he podido ser tan egoísta hasta ahora?
Y sintió al coro de ángeles cantándole la Dolce vita.

*Nota: la palabra “morbo” se usa popularmente en España en el sentido de


una gran, intensa y profunda atracción sexual, con tintes de algo prohibido y
misterioso, que una persona puede sentir por otra persona o por una situa-
ción o imaginación en concreto.

87 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Comunicación desde el instinto. Mujer

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

La Caricia Cómplice

Tú contigo misma

88 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Comunicación desde el instinto. Mujer

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

Con otra persona

89 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Comunicación desde el instinto. Mujer

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

Continuará con la D, la E y…..

90 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Excelencia

91 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Excelencia

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

La comunicación empieza por la palabra.


La excelencia es comunicación también.

92 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Excelencia

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

Si vamos a clase de Pilates para corregir nuestra


postura y así evitar dolores o contracturas muscu-
Aplicando lares, ¿por qué no aplicamos lo que aprendemos
en dichas clases para la vida diaria? Si lo hiciéra-
lo que se mos, tal vez luego no fuéramos más a clases de Pi-
aprende lates.
Cuando asistía a la universidad, en clase de Len-
gua española y Lingüística comparada, aprendí
mucho, mucho más de lo que ahora sé al respecto,
dado que había asuntos que no son aplicables en la vida diaria, ya que per-
tenecen a otros mundos y me olvidé de ello. Sin embargo, todo aquello que
podía corregir, lo llevé a cabo. Y cambié mi manera de hablar, en el sentido
de que corregí aquello que sabía que estaba diciendo de manera incorrecta
aunque el resto de personas no se diera cuenta de ello, pues, cuando ha-
blamos mal es porque nuestro entorno también lo hace.
Pero algo que sí aprendí es que las personas no aplicamos a la vida dia-
ria aquello que aprendemos fuera de nuestra vida cotidiana y lo pude com-
probar con mis propios compañeros, quienes estudiaron lo mismo que yo.

¿Por qué las personas no


aplicamos a la vida diaria
lo que nos puede dar un
incremento de vida?

93 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Excelencia

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

“Escuchar” y “oír” no significan lo mismo

Siempre me ha llamado mucho la atención la confusión que hacemos entre


estos dos verbos: escuchar y oír.

Veamos con un ejemplo si podemos aclarar su diferencia en cuanto a signi-


ficado o semántica y, por tanto, saber cuándo usar uno y cuándo el otro.

 OÍR significa percibir un sonido.


 ESCUCHAR significa prestar atención a lo que se oye.

Ejemplo

“Puedo estar oyendo una conversación entre unas personas sen-


tadas a mi lado. En cambio, no la estoy escuchando”.

Esto significa que estoy oyendo palabras, sonidos y sus voces pero no sé de
qué están hablando pues no estoy prestando atención.

¿Se puede ver la diferencia?

Si lo hemos entendido, entonces nos sonará mal lo que tanto se oye por to-
dos los lugares y por boca de todos, incluso en boca de personas que se nos
presentan como referentes lingüísticos.

94 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Excelencia

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

¿SE ME ESCUCHA?

¡SÍ, SE LE ESCUCHA MUY BIEN!

¡ASÍ NO SE DICE!
Se debe decir:
¿Se me oye?
¡Sí, se le oye muy bien!

95 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Excelencia

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

La palabra GUION se considera de


una sola sílaba, por lo tanto, se
escribe sin TILDE.

¡Atención con los medios de comunicación!

Se supone que los medios de comunicación, como la televisión pública de


un país, tendrían que tener la exigencia de ser autoridad lingüística, en lo
que a programas o series propias se refiere, claro está. Pues no lo son.

El otro día comprobé con mis propios ojos cómo Televisión española sigue
escribiendo los meses del año en mayúsculas (10 de Febrero del 2018, por
ejemplo) y la palabra “guion”, con tilde. No es un error garrafal pero sí una
falta de excelencia y respeto hacia lo que predican: la comunicación.

En los periódicos de tirada nacional pasa lo mismo. Así que, ni unos ni los
otros son referentes lingüísticos, a pesar de poseer los medios para serlo.

Ver referencia en:


http://www.rae.es/consultas/palabras-como-guion-truhan-fie-liais-etc-se-escriben-sin-tilde

96 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Excelencia

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

Recuerda, el conocimiento
del uso de la lengua te da
poder y seguridad.

97 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Excelencia

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

Para poder entrar en un lugar,


hay que dejar salir primero.

Parece básico pero no lo es. Cuando queremos entrar en un lugar público,


en el metro, en el autobús, en un ascensor, primero hay que apartarse para
dejar salir a quien esté dentro.
Esta educación es gratis y siempre tienes ocasión de impartirla a tus hijos.
No te hace falta contratar a nadie para enseñarlos, porque lo podemos ha-
cer nosotros mismos.

La mejor herencia que puedes legar a tus hijos no solo es


la educación sino la educación en la excelencia.

98 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Excelencia

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

Todos los problemas surgen por la comunicación. No sé si lo has


pensado antes. Si no lo has hecho, reflexiona sobre ello.
No estoy hablando de la comunicación hablada o escrita sino de
comunicarnos.
¿Cómo te comunicas con el mundo? ¿Y contigo mismo?
¿Intentas hacer todo lo mejor posible?
Entonces, ¿cómo pretendemos ver excelencia en los otros?

Desde la excelencia o desde el instinto, las personas nos


juntamos por niveles de comunicación.

Por ello, es importante relacionarte con personas que es-


tén en tu mismo nivel de comunicación.

La vida te dará ocasiones para tener que relacionarte con


quienes no estén en tu mismo nivel de comunicación, por
lo tanto, no lo fuerces y te irá mejor.

99 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
www.silenceartelectronics.com

100 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Alicia
y
su libreta de conflictos

101 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Alicia y su libreta de conflictos

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

Hola, he estado con muchos exámenes y


sobre todo, con trabajos que había que pre-
sentar a finales de enero y eso que acabamos
de comenzar el máster.
Por lo tanto, lo único que he hecho es estudiar
y estudiar, buscar en internet recursos de los
que valerme para lo que me pedían e intentar dejarme ayudar por otros
compañeros, pues veo que no se me está dando bien esta historia del
“Business Management”.
Pero mis padres ya han pagado una parte y no quiero defraudarles.
Así que me toca estudiar y hacer como que estoy contenta, a ver si saco
algo en claro de todo esto.
Es por eso que la vida se me aparece como conflictiva y entonces, ¿para
qué escribir en mi libreta si todo es un conflicto?
Quiero decir que no he escrito nada desde la última vez, que fue cuan-
do tuve mi primer encuentro con esta Escuela de Negocios. Y ya ha pa-
sado un mes y unos días.
Compartiré con vosotros lo escrito por mí en junio del 2013. Me ha gus-
tado volver a leerlo y ahora, como siempre, todo cobra mayor sentido
para mí.
Gracias por leerme.

Alicia, la coherente.

© 2018 Ruth Morales


102 www.cambioderealidad.com
Alicia y su libreta de conflictos

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

© 2018 Ruth Morales


103 www.cambioderealidad.com
Alicia y su libreta de conflictos

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

Aprender chino

Ayer, al volver a casa después de haber ido de compras, mi madre


se quedó hablando con la vecina, la que tiene unos mellizos regor-
detes de tres años. Después de saludarla, mi hermano Miguel y yo
entramos en casa, ya que nos encontrábamos muy cansados tras
tantas horas de tienda con nuestra madre.

A la hora de cenar nos reunimos todos, excepto mi hermana Carlo-


ta, pues había salido con unas amigas a tomar algo.

—¿Sabes que Marina ha conseguido plaza para sus niños en el co-


legio ese en el que todo es en inglés y chino? —comentó mi madre
a mi padre mientras sacaba unas patatas del horno—. Me la he en-
contrado al llegar y está contentísima pues parece ser que es uno de
los mejores colegios que hay ahora.

—¿Ah, sí? —contestó sorprendido mi padre—. No lo sabía. Lo que


he oído es que es muy caro y que es muy difícil conseguir plaza.

—Es que tiene muy buena pinta —añadió mi madre—. Que se


preocupen en enseñar a los niños chino desde los 3 años, lo dice
todo.

—¿Para qué quieren los vecinos enseñar chino a sus hijos con la
cantidad de chinos que hay en el mundo? —preguntó mi hermano
Miguel extrañado.

© 2018 Ruth Morales


104 www.cambioderealidad.com
Alicia y su libreta de conflictos

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

—No seas impertinente, Miguelón —le respondió mamá—. El


idioma chino es el idioma del futuro. Si ese colegio hubiera existido
cuando tú tenías 3 años, habría hecho lo posible porque asistieras a
él.

—¡Pues menos mal que no había! —respondió Miguel— Menudo


tostón el chino ahora. No me entero ni con la lengua española ..

—Bueno —interrumpió mi padre—. La gente quiere dar lo mejor a


sus hijos pero habría que saber si eso es lo mejor. También es una
cuestión de moda.

—No creas —contestó mi madre ya sentándose a la mesa—. Dicen


que todo se va para allá, la economía, todo.

—¿Para dónde? —preguntó mi hermano haciendo una mueca.

—Calla —le replicó mi madre—. Mira que eres impertinente. Es-


tamos hablando tu padre y yo.

Mi hermano se dispuso a comer, al igual que todos, sin importarle


para nada ese colegio ni su enseñanza del chino.

Cuando subí a mi habitación, tomé mi libreta de conflictos. Me


acordé de una película que había visto no hacía mucho en la que se
narraba un caso real en el que el protagonista, sin saber casi ni leer,
llegó a crear un imperio que lo llevó a convertirse en multimillona-
rio. Lo que había oído en la cena en cuanto a mi vecina Marina y su
alegría porque sus hijos fueran admitidos en ese colegio tan exclu-
sivo, en el que enseñaban inglés y chino, fue lo que hizo que me

© 2018 Ruth Morales


105 www.cambioderealidad.com
Alicia y su libreta de conflictos

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

viniera a la memoria esta película. Algo tenía en común con la con-


versación de mis padres en la cena.

Reflexioné y después de un rato, escribí:

“Las personas nos preparamos, estudiamos mucho, aprendemos


chino para no quedarnos atrás con el fin de poder acceder a un em-
pleo en el futuro próximo y, al final, lo que hacemos es prepararnos
para trabajar para aquel que no estudió, que no se preparó, que no
aprendió chino pero que desarrolló una intuición por encima de toda
eso, lo que le permitió tener una visión superior y poder crear una
empresa que irá creciendo y expandiéndose para poder dar trabajo a
todos aquellos que se prepararon, que no quisieron quedarse atrás y
que aprendieron chino, por ejemplo.

Y, lo mejor de todo esto es que, aquellos que estudiaron mucho, lu-


charán y competirán para trabajar para su empresa. Y convierten al
que no estudió en héroe .”

¡Eureka!

Alicia, 12 de junio del 2013

© 2018 Ruth Morales


106 www.cambioderealidad.com
De lo Bueno, lo Mejor

107 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
De lo bueno, lo mejor

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

“De lo Bueno, lo Mejor” en la práctica.


El candidato ideal

Hace tiempo se oía decir que en ciertas entrevistas personales de trabajo,


al entrar en la estancia en donde esta daría lugar, después de saludarte, te
decían: “¡Siéntese, por favor!”
La persona que iba a ser entrevistada se encontraba con dos aposentos, un
cómodo sillón-silla y una silla recta, tipo monja en un retiro de ejercicios
espirituales de antaño.
¿En cuál de los dos aposentos se sentaba el entrevistado?

El caso es que, por naturaleza heredada, el ser humano tiende a elegir lo


corriente y lo humilde, pues siempre se ha elevado dicha actitud hacia una
gracia divina, amparada dicha creencia en que será después, al fallecer,
cuando tengamos los placeres que aquí no podemos probar y por ello, lo
correcto era sentarte en la silla tiesa, en la incómoda, para demostrar que
estás dispuesto a todo, a dar tu esfuerzo, tiempo y alma al puesto de trabajo
por el que luchas conseguir.
La Psicología se ha encargado de poner nombre a cada conducta humana y
de esa manera, proporcionar, al que lo necesite, de esa herramienta para
saber a quién elegir para un puesto de trabajo.
Esto está muy bien pues, no solamente ha creado puestos de trabajo sino
que ha hecho que el estudio sobre la sociedad humana, la empresa y la
conducta humana se desarrolle y nos proporcione soluciones varias ante
situaciones que no sepamos afrontar. También ha agilizado trámites, tales
como elegir al candidato ideal para un puesto de trabajo, cuando no hay
tiempo de estar pensando quién es el idóneo.
Esto está bien pero, por otro lado, todo lo que está bien tiene su parte no
tan buena. Desde C~instinto, la mirada que brindo ante este caso, es que la

108 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
De lo bueno, lo mejor

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

evolución humana ha ido en detrimento del sentido común o del olfato pa-
ra elegir al candidato ideal.
Porque ese olfato es el ojo clínico que antes tenían los médicos de pueblo,
sustituidos ahora por médicos burócratas que deben seguir unas pautas de
protocolo dentro de su profesión, apagando cualquier sexto sentido que
podría detectar o bien descartar cualquier síntoma de enfermedad.
Lo que quiero decir es que el ser corriente habría elegido sentarse en la si-
lla menos cómoda y más humilde pero quizá, para ese puesto de trabajo se
buscaba a alguien con arrojo y ambición y el desdichado que se sentó en la
silla tiesa, perdió su oportunidad.

Lo que quiero transmitir es que si una cosa es válida para un hecho, eso no
significa que sea válido para todos los hechos.
Entonces, ¿qué hacer? ¿Cómo saber en qué silla sentarnos?
La respuesta está en “De lo bueno, lo mejor” porque esto trae consigo un
modo de vida que hace que desarrolles el olfato de merecimiento, alejándo-
te de la experiencia o sabiduría de escasez, con lo que quizá, ni siquiera
seas preguntado dónde sentarte pues, lo mismo, ya te indican que te sien-
tes en el sillón cómodo, pues no has dejado lugar a dudas al entrar en la
estancia donde ibas a ser entrevistado.
Las personas solo podemos ver lo que estamos preparadas para ver y si tú
te comes el mundo, eso es lo que verán los otros, sean expertos o no en el
tema. Al final, todos somos seres humanos y nos movemos en el mismo es-
pacio temporal.

109 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
De lo bueno, lo mejor

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

¿Qué hacer con la gente pesada?


(Aplicando de lo Bueno, lo Mejor)

Soy consciente de que cada uno de nosotros tiene un concepto de lo que es


ser pesado o no, está claro. De hecho, si no fuera así, todos seríamos igua-
les y todos nos relacionaríamos entre nosotros.
Cuando hablo de que las personas “debemos juntarnos por niveles de co-
municación” significa que debo estar con aquellas personas junto a las que
yo puedo ser yo misma, si es que este concepto también existe tal cual.
Cuando surgen los conflictos, es cuando nos mezclamos con personas, am-
parados en que “nos han hecho un favor” o “son buenas personas”, etc. y
no nos comunicamos bien. Tarde o temprano las consecuencias se ven.
El caso es que la vida misma está hecha de eso, de conflictos entre las per-
sonas, parejas que no se entienden, compañeros de trabajo y amigos, ade-
más de las relaciones familiares.
Por eso, hay que ser excelente para poder elegir.
Mi concepto de “ser pesado” quizá sea demasiado estricto aunque lo com-
parto con las personas con las que me comunico, pues no quieren tener a
su lado a las mismas personas que yo considero pesadas.
¿Qué hacer?
Suelen ser personas que se amparan en su educación para invadir tu espa-
cio, ya que, haciendo uso de la estructura que yo hago como punto de refe-
rencia sobre la comunicación, un domesticado pesado ni siquiera intenta-
ría disimularlo. Se mostraría tal cual es.
Hay muchas personas pesadas que no se dan cuenta de que lo son. Un
ejemplo gráfico podría ser el siguiente.
Una persona no suele crear conversaciones por whatsApp pero, por educa-
ción, responde siempre que recibe un mensaje. Otra persona no para de

110 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
De lo bueno, lo mejor

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

enviarle mensajes, sin tomar en cuenta, siquiera, que la primera persona,


la receptora de los mensajes, no hace lo mismo con ella.
Esto es un prototipo de personas que viven de ti.
Otros hacen algo parecido para luego alejarse un tiempo con el fin de des-
pistar y volver con más ganas a invadirte.
Y el receptor de todo esto, por no ser maleducado, se aguanta y no dice na-
da.
Aquí hay que apelar a la excelencia. Si se ha practicado con antelación,
tendremos recursos para quitarnos a esas personas de encima.
Otra cosa es que te guste “de lo malo, lo peor”, pues no hay cosa peor que te
invadan sin prestar atención a tu estado, a si te gusta o no y además, por-
que esas personas son demasiado corrientes como para ser “de lo bueno, lo
mejor”.
Nos han educado en el falso civismo o falsa bondad de que lo que acabas de
leer no es bueno. Si esto lo lee una persona con pocas miras, es aún más
grave.
Con este apartado, quiero llegar a personas que “ya están por encima de
esas mentiras hechas bolas y bolas que nos acompañan de por vida” y que
quieren oír algo diferente al respecto. Por eso, quizá este apartado sea el
menos popular, por lógica pura.
Yo he conocido personas pesadas, abundan mucho y sigo conociendo pero
las detecto enseguida. Suelo ser amable al principio, algunas personas se
dan cuenta, otras no se dan cuenta, pues ser pesado responde a una nece-
sidad vital de ser reconocido y de aprobación, con lo que es una distorsión
bastante común y, por ende, corriente.
A veces, las personas no se dan cuenta de las palabras que les dirijo para
parar esa pesadez y es cuando hay que hacer uso de la excelencia, el instin-
to más primario o el sentido común: cortar por lo sano.
Es cuando sientes que estás haciendo las cosas mal, que no deberías haber
actuado así, cuando te sientes culpable o arrepentido.
Si te ocurre eso, tranquilo, el otro está bien pues tiene a su entorno como
futura presa y víctima y no le pasa nada.

111 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
De lo bueno, lo mejor

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

No hay que tener ningún tipo de miramiento cuando hemos llegado a un


punto en el que no podemos más. Dejar que ese punto se extienda es fal-
tarnos el respeto a nosotros mismos y eso no lo tenemos que hacer nunca.
Por lo tanto, actuar con contundencia, incluso haciendo uso de artes que
nunca usarías en condiciones normales, es la única respuesta excelente que
se requiere y que, seguramente, tendrá sus frutos.
O bien se le dice algo a esta persona, alegando una excusa irónica e increí-
ble o bien, no se le contesta. Eso es excelencia también.
Hay personas que tienen el don de sacar lo peor de ti. Sin embargo, desde
la excelencia, es una gran oportunidad de hacer uso de nuestros recursos
naturales que nos hacen comprender la vida mejor y disfrutarla.
A todo esto, yo tengo mi concepto propio de lo que es ser pesado y por eso,
sé lo que no quiero de los demás.
Tú debes tener tu concepto de lo que te molesta y actuar en consecuencia.
Recordemos que las personas pesadas siguen siéndolo porque lo permiti-
mos.
La excelencia es cortar esa cadena.
“De lo bueno, lo mejor” es no elegir a esa persona para comunicarte con
ella.
Eso es incrementar tu vida hacia lo mejor siempre y la vida te recompensa-
rá.

112 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Historias
El niño que preguntó

113 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Historias. El niño que preguntó

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

El niño que preguntó


El rincón de Ariel

Ariel se sumergió en el lago transparente justo donde caían las aguas que
emanaban desde unas rocas enormes. Se dirigió a lo que él hizo llamar “la
ducha”. Se había introducido en el agua totalmente desnudo, aprovechan-
do que en ese momento la mujer estaba dentro de lo que llamaba la casa.
Se situó en un rincón donde el agua caía con menor presión y, al meterse
debajo de ella, sintió que realmente se estaba duchando. Era como si esa
agua tuviera jabón, pero sin tenerlo. Se alegró por este motivo, ya que
siempre odió los jabones y el champú para la cabeza y sobre todo ahora,
desde que vivían en el campo, en donde se enjabonaba con un jabón pasti-
lla que parecía un ladrillo y que olía fatal. Su madre siempre decía que ese
era el mejor jabón, el adecuado a nuestra piel porque no la alteraba.
“Casi prefería los jabones en forma de gel que saben y huelen a olores ri-
cos y no ese ladrillo que huele a sucio”. Pensó en ese momento con los ojos
cerrados bajo esa agua que ni estaba fría ni caliente, disfrutando de un pla-
cer que jamás había disfrutado antes, ni siquiera en el mar o en la piscina o
jugando a la PlayStation.
“¿Cómo podría contar esto a alguien? No sé explicarlo”. Se dijo a sí mismo
mientras se mantenía bajo el agua, ni fría ni caliente y en el flujo adecuado
como para que no sintiera ahogo en ningún momento. Era el paraíso, tal
vez.
Al abrir los ojos, vio que la mujer se acercaba al lago.
“¿Cómo estás? ¿A que te gusta mucho?”. Le preguntó al acercarse al rincón
de Ariel.
“Muchísimo. Más que el mar o la piscina”. Gritó Ariel como si no fuese a
ser oído desde donde estaba. “Además, no tengo ni frío ni calor. Esto es
muy raro”. Exclamó Ariel entusiasmado.
La mujer se sentó en el borde del lago, cerca del rincón de Ariel, en donde

114 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Historias. El niño que preguntó

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

el sonido del caer del agua sonaba a música lejana pero cierta, armoniosa,
ni buena ni mala, ni alta ni baja, solo algo que acompañaba al escenario
mismo en su totalidad.
La mujer no contestó, solo le sonrió. Ariel entonces se dio cuenta de que
llevaba un vestido hasta la rodilla, ni blanco ni beige, un blanco oscuro,
quizá y que era como los que llevaba su madre y las amigas de su madre a
la playa o a la piscina. Ella solo se mojaba los pies en el lago.
“¿No te metes en el agua? Yo no miro. Si quieres, me doy la vuelta y te me-
tes”. Dijo Ariel presa de una gran alegría mientras se reía.
“Jaja. No, no me voy a bañar ahora. Prefiero quedarme aquí”. Contestó
ella riéndose también.
Entonces, el niño se alejó un poco del rincón donde el agua le caía en la ca-
beza, para situarse en el centro del lago y mirar a la mujer o estar más cerca
de ella. Después de unos minutos en que ambos se mantuvieron en silen-
cio, Ariel dijo.
“¿Es verdad que tienes las respuestas a todas las preguntas?”. Le pregun-
tó sin haber reflexionado antes.
“Eso depende de lo que tú quieras saber”. Contestó ella.
“¿Cómo? No entiendo”. Respondió un Ariel comenzándose a alterar.
La mujer sonrió mientras movía sus pies bajo el agua cristalina.
“Quiero decir que si tú das por buena las respuestas que te dé a tus pre-
guntas, entonces sí que tengo las respuestas a todas tus preguntas”.
“¿Y qué es dar por buena?”
“Significa que tú la tomes como la respuesta que responde a tu pregunta”.
Ariel se quedó pensativo. Y luego dijo:
“¿Sabes? Estoy desnudo, jaja. Por eso me voy a quedar aquí hasta que tú
te vayas”.
“Si quieres salir del agua y vestirte, yo puedo entrar en la casa”. Contestó
ella.

115 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Historias. El niño que preguntó

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

Ariel volvió la mirada hacia lo que ella llamaba la casa. Era como una for-
ma natural de la naturaleza, digamos como si estuviera hecha dentro de un
montículo de rocas y al mismo tiempo, de madera o tierra. Pero, eso sí, era
firme, tan firme como el edificio donde él había vivido con sus padres y
donde ahora vivía su padre.
“No. Prefiero quedarme aquí. Además, el agua no me cubre, con lo que
puedo quedarme de pie”. Contestó.
Ella asintió, mientras seguía mirando sus pies bajo el agua.
Ariel comenzó a mover los brazos en el agua, como para comprobar el mo-
vimiento que estos hacían en ella. Y, después de un corto silencio, comenzó
a preguntar.
“¿Por qué vives aquí y por qué lo sabes todo?”.
“Esa pregunta no me la quieres preguntar. No es tu primera pregunta.
Dejémosla para el final”. Contestó ella segura.
“Además, al final, cuando te haya respondido a tus propias preguntas, las
que en realidad deseas, sabrás que el por qué vivo aquí y por qué lo sé to-
do no era una pregunta porque ya habrá sido contestada o porque ya no
te importa saberlo porque ya lo sabes”. Respondió la señora sonriendo.
Ariel no refunfuñó. Más bien se quedó asombrado porque, de alguna ma-
nera, le fue dada una información que ya sabía y él no soportaba que lo to-
maran por tonto. Él se parecía a la familia de su padre y ellos eran muy lis-
tos además de fuertes e importantes. Por eso estaba asombrado, porque no
le había molestado la respuesta tan evidente.
Miró a la mujer, quien lo observaba esperando la primera pregunta.
“¿Tiene que haber un orden? Quiero decir, ¿tengo que preguntar las pre-
guntas después de pensarlas o puedo preguntarlas según las vaya pen-
sando?”. Escupió rápidamente un Ariel desesperado o entusiasmado, se-
gún se mirara.
“Haz las preguntas como quieras Ariel. Eres libre”. Contestó ella.
Ariel se sonrió para sus adentros cuando sintió esa libertad, era como una
fuerza enorme que habitaba dentro de él.

116 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Historias. El niño que preguntó

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

“¿Por qué las personas se casan?” Se atrevió a preguntar un poco tímida-


mente. Sin embargo, observó que a ella no la había tomado por sorpresa.
“Porque todos lo hacen”. Respondió ella.
“Esa respuesta no me vale. La podía haber respondido yo solo”. Replicó
Ariel.
“Si la podías haber respondido tú solo, ¿por qué no me lo preguntaste?
¿Por qué no preguntaste el por qué las personas hacen lo mismo casándo-
se? Eso habría sido más correcto”.
“Es que esa no es la respuesta a esa pregunta”. Dijo Ariel alzando un poco
el tono de voz creyendo haber entendido las palabras de la mujer.
“¡Ah! Entonces, ¿quieres que descartemos la primera respuesta que te lle-
va a la verdadera respuesta?”. Le inquirió ella irónicamente.
Ariel se quedó pensativo, mirando los surcos que el movimiento de sus
manos hacía en el agua limpia y cristalina.
“Fíjate que te he respondido algo evidente. Evidente significa que está a la
vista y tú has negado esa respuesta porque precisamente es evidente.”.
Ariel la miró a los ojos, todavía pensativo.
“¿Qué quieres enseñarme?”. Preguntó haciéndose el mayor.
La mujer se rio pero no mucho, para no molestarlo.
“Te estoy mostrando que la primera respuesta es a la que no prestamos
atención, pues no sabemos que esa es una respuesta”. Y siguió diciendo.
“Mira, te lo explico de otra manera. ¿Crees que si una minoría de perso-
nas en el mundo se casara o se uniera en pareja, tú habrías negado esa
respuesta? Yo creo que no porque te darías cuenta de que esas pocas per-
sonas lo hacen porque otros lo han hecho también”.
“En cambio, como se trata de la mayoría de las personas, piensas que de-
be haber una respuesta o una causa mayor para ello y la simple imitación
no te vale”. La mujer calló sin quitarle los ojos de encima.
“Es que me ha parecido una respuesta tonta”. Respondió aún reflexionan-
do sobre las palabras de la mujer.

117 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Historias. El niño que preguntó

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

Se hizo otro silencio en el que Ariel paró de hacer movimientos en el agua.


“Bueno, imagínate que haya entendido tu respuesta. Entonces, ¿por qué
imitan?”
“Porque las personas, cuando nos enamoramos o cuando queremos a al-
guien, asociamos ese estado con un acto que puede ser casarse o vivir con
la otra persona pero sin casarse. Asociamos las dos cosas porque es lo que
hemos visto en nuestros padres y en los demás. Y nuestros padres lo vie-
ron en los suyos y así siempre.” Explicó la mujer pausadamente.
Se hizo otro silencio.
“Es muy lógico lo que dices”. Respondió un tanto aturdido. “Creía que ha-
bría una respuesta más…”
“Más sabia, más científica o de estas respuestas que te llevan atrás en la
historia, creándote un interés apasionado, que te envuelven hasta el pun-
to de acaparar el conocimiento entero, como si siempre lo hubieras sabido
e incluso como si lo hubieses vivido o como si ya fueses muy importante
pues ya sabes algo más”. Recitó la mujer ante el comentario del niño para
añadir seguidamente.
“Sin embargo, las respuestas son mucho más sencillas y más fáciles”.
Ariel estalló en risas. “Pareces una profesora, jaja”.
Ella rio con él pero no pronunció palabra.
Ariel se alejó nadando un poco, deslizándose sobre las aguas. Luego paró
en seco y se volvió hacia ella.
“Ahora entiendo lo que has dicho”.
“Esperaba una respuesta importante y grande y no me di cuenta de que lo
que me has dicho era la respuesta verdadera, la primera, la de la imita-
ción”. Se calló por unos segundos. “Pero nadie podría creer eso o a nadie
se le ocurriría esa respuesta”.
Ella sonrió.
“Esa es la historia de la humanidad. Nadie ve lo evidente y sufrimos bus-
cando respuestas a preguntas porque creemos que esas respuestas no nos

118 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Historias. El niño que preguntó

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

las merecemos o que jamás podrían ser contestadas y rechazamos lo que


tenemos delante como cierto”.
“Entonces, ¿las personas se casan por imitación pero no porque se quie-
ran?” Preguntó un confundido Ariel.
“Esa no fuera tu primera pregunta. Has querido saber la razón por la que
las personas se casan”.
“Casarse no significa que se quieran pero el que se quieran, suele acabar
en unión por imitación. ¿Ves la diferencia?“.
“¡Ahora lo he pillado!”. Exclamó Ariel contento. “Entonces, mis padres se
casaron por imitación pero también se querían. Podrían no haberse que-
rido pero ellos se querían”. Aseguró.
La mujer no dijo nada.
“¿Sabes tú si se querían?”.
“¿Por qué quieres saber eso? ¿Lo consideras importante?”. Le interrogó la
mujer mientras cambiaba su postura al borde del lago.
“Es que me gustaría saberlo porque yo los quiero a los dos”.
“Eso no tiene nada que ver con que ellos se quisieran o no”. Añadió ella.
“Sí tiene que ver porque yo quiero que se quieran, aunque estén separa-
dos. Además, si se querían, ¿por qué se separaron?”
La mujer volvió a adoptar otra postura sobre el borde del agua.
“Te contestaría lo mismo que con tu primera pregunta, que las personas
se separan por imitación también pero no sé si lo entenderías”.
“Ya eso me resulta difícil”. Dijo Ariel en un tono que hizo reír a la mujer.
“¿Se pueden separar dos personas cuando se quieren?”
“Sí, al igual que se pueden casar sin quererse”. Respondió ella.
“Pero, si se quieren, ¿por qué se separan?” Volvió a preguntar Ariel.
“Porque se pueden querer estando separados también. De repente quieren
hacer vidas diferentes porque piensan de manera diferente sobre la vida,

119 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Historias. El niño que preguntó

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

pero se pueden seguir queriendo”. La mujer hizo una pausa.


“O quizá uno ha decepcionado al otro, le ha hecho daño y eso lleva a la
separación pero no los lleva a dejar de quererse”.
“Entiendo”. Dijo Ariel, quien había estado escuchando muy atento.
Ella volvió a preguntarle, entonces.
“Lo que no me has respondido a mí es por qué te importa tanto si tus pa-
dres se querían cuando se casaron”.
“Porque yo los quiero mucho y me gustaría que ellos se hubiesen querido
cuando se casaron”. Contestó lentamente.
La mujer se levantó y se volvió a mirar hacia algún lado, como al horizonte,
como si este estuviera allí donde ella enfocaba la vista.
“Ellos se separaron porque creo que se odiaban”. Agregó.
La mujer se volvió hacia él, aún de pie.
“A veces las personas odiamos mucho porque nos sentimos heridas por el
otro, en este caso, la pareja”. Entonces, se agachó para ponerse a la altura
del niño. “Pero la causa de esa herida es una ilusión, es decir, en realidad
no existe. Surge porque nos sorprenden los actos del otro ya que desea-
mos o esperamos otros actos. Y entonces, nos creemos que nos están ha-
ciendo daño cuando no somos tan importantes como para convertirnos
en el objetivo de víctima del otro. ¿Me explico?”.
Ariel tardó en responder.
“Pero he visto en la televisión que hay parejas que se pegan. Hombres que
pegan a sus mujeres o mujeres que denuncian a los hombres diciendo que
les han pegado. ¿No es eso hacer algo malo de verdad?”
La mujer sonrió.
“Sí, era lo que estaba a punto de decirte. Hay que saber diferenciar lo que
realmente es un acto de delincuencia o violencia en el que te pegan o te
atacan de manera verbal, insultándote o en el que haces falsas denuncias
para herir a tu pareja y lo que yo he dicho. Hay una franja muy ancha,
divisoria entre una cosa y la otra”.

120 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Historias. El niño que preguntó

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

“¿Y quién dicta esa franja?” Preguntó Ariel un tanto triste.


“Hay una inteligencia superior que está por encima de lo que uno mismo
sea o piense, de si tienes una carrera universitaria o si eres analfabeto, y
es una esencia del ser humano que algunos llaman empatía, otros compa-
sión, otros amor y yo, para que tú me entiendas, la llamo inteligencia co-
mún, la lógica o sentido común. ¿Me he explicado?”.
“Creo que sí. Cada vez te entiendo mejor”. Contestó Ariel como un adulto.
La mujer se levantó y avanzó unos pasos hacia la entrada de la casa.
“Voy a prepararte algo para comer. Creo que tienes hambre”. Y se alejó.

Ariel se acercó a su rincón de ducha y se mantuvo un rato bajo el agua caer.


Ahí se sentía protegido y a gusto y sobre todo, se sentía poderoso. Cerró los
ojos y permaneció no sabemos cuánto tiempo bajo la ducha de agua limpia,
que limpiaba no solo su pelo sino sus ojos, cara y resto del cuerpo.
Cuando abrió los ojos, tuvo la certeza de haber comprendido todo lo que le
había dicho la señora aunque, de una extraña manera, no podía explicarlo
ni siquiera a él mismo.
Sintió hambre. Y salió del lago.

Cuando ya se había secado y se había vestido, se dirigió a la estancia que


hacía de cocina. Un olor a pan recién hecho invadió todos sus sentidos.
Entró y vio que la mujer había hecho pan. Estaba caliente.
“Umm… Me encanta”. Y fue a tomar un trozo.
“¿Con qué lo quieres? ¿Te hago un bocadillo?” Preguntó ella.
Ariel miró a ambos lados. “¿Es que tienes embutido o algo para meter den-
tro?”
La mujer rio.
“Pues claro. Yo también hago la compra. Tengo queso. ¿Quieres?”

121 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Historias. El niño que preguntó

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

A Ariel le encantaba el queso. Los ojos se le iluminaron antes de exhalar un


grito de placer.
“Pero, ¿tú tienes dinero?”
“No, pero las personas me dan lo que tienen. Mira este vestido, también
me lo ofrecieron”.
“¿Y tú qué les das?”. Quiso saber Ariel con ya un trozo de pan con queso en
la boca.
“Depende. A veces no les doy nada y en otras ocasiones, les respondo a
sus preguntas”.
Contestó.
Ariel siguió comiendo y cuando se hubo saciado, se dirigió a su dormitorio,
esa estancia que parecía tenerlo todo y no tenía casi nada.
De repente, se sintió mal.
“He comido demasiado”. Se dijo para sus adentros.
Se tumbó en la cama y se acurrucó. Una tristeza profunda lo invadió y vol-
vió a sentir que algo lo abandonaba, como cuando se adentró en la monta-
ña. Era como una fuerza que lo habitaba y que, cuando se iba, lo hacía sen-
tir triste o desamparado.
Se dio cuenta de que, al desaparecer la fuerza, todo se hacía más real y en-
tonces pensó en lo que había hecho, en su madre y en su padre. Empezó a
llorar.
La mujer se sentó a su lado.
“¿Qué te pasa Ariel?”
A Ariel le dio vergüenza pero se incorporó en el camastro para responderle.
“Me encuentro mal. Estoy pensando en que mi madre estará desesperada,
creyendo que me han secuestrado o que me he muerto y yo estoy aquí sin
pensar en nadie, comiendo un pan con queso y bañándome en el mejor
lago del mundo”. Dijo sollozando.
La mujer le acarició la cabeza.

122 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Historias. El niño que preguntó

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

“No te preocupes. Eso tiene fácil arreglo. Puedes regresar ahora mismo.
Tu madre lo entenderá cuando se lo expliques”.
Ariel se encontraba desolado.
“Y seguro que mi padre también está muy preocupado y a lo mejor le ha-
brá echado la culpa a mi madre porque ella me dejó solo en casa”. Contes-
tó sin haber escuchado las últimas palabras de la mujer.
Se hizo un silencio entre los dos. La mujer lo miraba de manera cálida. Él
se secó las lágrimas y ya repuesto, dijo:
“No quiero irme aún. Tengo más preguntas”.

“¡Ariel, levántate! Son ya las doce!


Ariel se desperezó en la cama. Se había acostado muy tarde pues había sa-
lido con sus amigos y había llegado más tarde que de costumbre. Se encon-
traba pesado y dolorido aun sin poder abrir los ojos.
Miró el techo de su habitación, la de siempre, la de la ciudad a la que aca-
baban de cambiar los muebles. Había quedado muy chula.
Su madre entró en la habitación. Se acercó sonriendo ante él y se sentó a su
lado.
“¡Felicidades, cariño! ¡Dieciocho años! Ya tengo un hombre en casa”. Y lo
besó fuertemente agachándose hacia él.
“Estás un poco caliente, ¿no tendrás fiebre? Has llegado muy tarde hoy,
de madrugada.” Le dijo su madre.
Era verdad. Ariel se sentía con fiebre y con dolor en el cuerpo. Se incorporó
en la cama para devolver el beso a su madre. La abrazó fuertemente.
“Gracias mamá. Sí, me encuentro raro. Quizá tenga unas décimas de fie-
bre, no sé. Pero no te preocupes por nada”.
Su madre se levantó y se dirigió a la puerta de la habitación.

123 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Historias. El niño que preguntó

Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

“Voy a ponerte el termómetro”. Dijo.


“Seguro que son anginas, como siempre. Ya sabemos que te dan mucha
fiebre, cariño”.

124 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
¿Quieres anunciar tu
negocio en esta revista?
Si estás interesado en anunciar tu negocio, marca, etc. en
los próximos números de la revista, escríbenos un correo a
la dirección editorial@cambioderealidad.com y te
enviaremos toda la información necesaria.

Actualmente, la revista se distribuye en todos los países


de habla hispana, llegando a miles de suscriptores.

125 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
COMPARTE ESTA REVISTA
Copia este enlace y envíalo a aquellas personas
que consideres que disfrutarán también de esta
lectura:

http://eepurl.com/c7jB71

ESTÁ TODO PENSADO


Aquellas personas que se den de alta en cualquier mo-
mento en la suscripción de la Revista C~instinto, recibi-
rán los números ya publicados en el correo de confir-
mación de su suscripción.

Es esta la razón por la que debes enviar el enlace de suscripción


que te proporcionamos y no la revista en sí. Asimismo y si
quieres ser más preciso, transmite esta información a quien
vas a enviar dicho enlace para que esté enterado de que, al sus-
cribirse, estará al día de todas las publicaciones.

126 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Ruth Morales
www.cambioderealidad.com

MUCHAS GRACIAS
Ruth Morales

www.cambioderealidad.com
© Ruth Morales

Esta obra está registrada bajo una licencia de Creative Commons


Reconocimiento-NoComercial-SinObraDerivada 4.0 Internacional.

Puedes compartirla sin modificar su contenido y siempre atribuyendo su autoría.


No está permitido el uso de esta obra para fines comerciales.

127 © 2018 Ruth Morales


www.cambioderealidad.com
Ruth Morales

Вам также может понравиться