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Introducción

El modelado fluvial es el que llevan a cabo los cursos de agua continentales, como los ríos, estos son
corrientes naturales de agua que fluyen con continuidad. Todo río posee una facultad de erosión de
las rocas por las cuales discurre, así como una facultad de transportar, en mayor o menor grado,
los materiales erosionados. El río tiende a erosionar en algunos puntos, colmatando otros y generando,
de un modo continuado y cambiante, todo un conjunto de formas de relieve, las cuales tienen todas las
características comunes que les hacen ser reconocidas como de origen fluvial. A continuación se
analizará más acerca del modelado fluvial, erosión, transporte y deposición.

Modelado Fluvial
Modelado fluvial, forma de paisaje originado por la acción fluvial, esto es, de las aguas de los cauces de
la red de drenaje de una cuenca fluvial, que erosionan, transportan y depositan sedimentos El término que
se emplea como convención en este artículo, pero hay que recordar que el modelado fluvial afecta a
todos los canales de drenaje, cualquiera que sea su tamaño, desde los más pequeños arroyuelos hasta
los ríos más caudalosos del mundo. De hecho, aunque los efectos sobre el paisaje de las cuencas de los
grandes ríos tienden a ser los más espectaculares, gran parte del conocimiento de cómo se produce el
modelado fluvial deriva del estudio detallado de los pequeños riachuelos.
Todos los ríos constan de una corriente tanto de agua como de sedimentos materiales procedentes de
rocas y productos orgánicos cuyo tamaño puede variar. De este modo, el relieve que genera un
río concreto depende no sólo de las características de la corriente, en especial de su caudal de
su distribución en el tiempo y de la energía, sino también de la cantidad y tamaño de los sedimentos que
arrastre. El tercer elemento que contribuye en el modelado es la geología de la cuenca, que determina el
tipo y cantidad de sedimentos y que afecta también a la acción erosiva del río, ya que algunas rocas son
más duras que otras.

Ø Acción Fluvial
Los principales factores responsables de la formación y evolución de los ríos y su modelado son la
erosión, el acarreo de sedimentos y la deposición. Los ríos pueden modificar el paisaje, puesto que la
energía potencial del agua se transforma, en su recorrido descendente, en energía cinética responsable
de la erosión, el transporte y la deposición. La cantidad de energía potencial que dispone un río es
proporcional a su altitud inicial sobre el nivel del mar. Con el fin de minimizar la conversión de energía
potencial en energía térmica (o calor) como consecuencia de la fricción y, por tanto, aumentar la energía
cinética, el río sigue el curso que menos resistencia presente. Incluso así, se estima que el 95% de la
energía potencial de un río se usa para salvar la fricción, que tiene lugar, de forma especial, en el lecho y
en los márgenes del cauce, aunque también es importante la fricción interna del agua y la resistencia
del aire sobre la superficie.
Hay dos tipos principales de flujos: laminar y turbulento. El primero es un movimiento horizontal, en el que
las aguas fluyen en capas muy definidas sobre los sedimentos del lecho, sin arrastrarlos. Se considera
que la corriente laminar es más teórica que real en los ríos. El flujo turbulento, que es predominante,
consiste en una serie de erráticos remolinos verticales y horizontales que se desplazan río abajo. Las
turbulencias varían en relación directa con la velocidad de la corriente, que, a su vez, depende de la
cantidad de energía cinética existente. Cuanto mayor sea la energía cinética, mayor será la velocidad (y
viceversa) y la turbulencia de la corriente.
En el tramo superior, el río es torrencial. La capacidad erosiva es máxima y por eso se encaja linealmente
en su propio cauce.
En el tramo medio, la velocidad de las aguas es menor pero mayor el caudal. La capacidad erosiva es
menor, sin potencia para encajarse linealmente; eso sí, el río ensancha su cauce por erosión en las
márgenes. Predomina el transporte.
En el tramo inferior, la pendiente es máxima; el río carece de potencia erosiva y de capacidad de arrastre.
Predomina la sedimentación.

Ø Erosión
La erosión es el proceso por el cual los ríos ensanchan y alargan su cauce.
La acción hidráulica se produce cuando la energía del flujo de agua que choca con los márgenes y el
lecho del río es suficiente para separar fragmentos rocosos. Esta fuerza hidráulica desintegradora tiene su
origen al introducirse el agua en las grietas de lecho rocoso. El aire que hay en ellas se comprime y
aumenta la presión. Con el tiempo, se debilita la roca y se van desprendiendo fragmentos. Una forma
extrema de acción hidráulica asociada a las cascadas y a los rápidos es la cavitación. Es consecuencia
del estallido de las burbujas de aire. Las olas que se producen golpean y erosionan los márgenes del
canal y, con el paso del tiempo, acaban por desmoronarlos. La acción hidráulica se mide en términos de
la relación entre la fuerza de fractura por unidad de superficie, denominada presión desintegradora sobre
los márgenes. Además de actuar sobre el lecho rocoso del río, las aguas pueden erosionar elementos
previamente desgajados que se depositan en la base de las laderas fluviales después de ser arrancadas
de la rocas ‚ acumulaciones denominadas canchales o coluviones‚ mediante procesos de meteorización
como la gelivación, la cristalización de la sal o la acción de plantas y animales. Este proceso se denomina
aporte de sedimentos.
La efectividad de la corriente como agente erosivo queda aumentada por el efecto del choque de los
sedimentos disueltos en el agua contra el lecho rocoso del canal, fenómeno denominado corrosión. Éste
es responsable en gran parte de la entalladura que crea y ahonda el cauce y es muy importante en
épocas de inundaciones. Las marmitas de gigante, una peculiar forma geomorfológica, son una cavidad
en el lecho del río producida por la acción de torbellinos de agua que arrastran cantos rodados y otros
sedimentos ahondando la depresión. Pero este proceso no sólo erosiona el cauce; los materiales que
acarrea la corriente también sufren un desgaste al colisionar las partículas entre sí y con las márgenes del
canal. Este fenómeno, denominado en ocasiones atrición, reduce el tamaño de los sedimentos y origina la
típica forma redondeada de los cantos de río. Muchas rocas resultan erosionadas mediante la corrosión o
solución, por el cual el agua las va disolviendo. Las calizas y las cretas son especialmente susceptibles a
la corrosión, aunque hay numerosos componentes químicos solubles, sobre todo si se hallan a la
intemperie, por lo que existe un amplio abanico de rocas vulnerables a este proceso.

Ø Transporte
La corriente transporta el material erosionado río abajo, acompañado de los sedimentos arrastrados al
cauce por las escorrentías‚ el flujo que surca la superficie, cuando el suelo ya no puede absorber más el
agua de las precipitaciones. Todo este material recibe el nombre de carga fluvial. Se puede clasificar esta
carga fluvial en tres categorías, según su origen. Los productos disueltos son los sedimentos derivados de
la corrosión y de la meteorización química. Las partículas arrastradas por las escorrentías constituyen el
sedimento lavado, mucho más fino que el del lecho del cauce. El último tipo de carga lo forma el material
erosionado de los márgenes del cauce, de tamaño similar al sedimento del lecho.
La mecánica y velocidad del desplazamiento de la totalidad de sedimentos y materiales transportados
varía según el tamaño de las partículas. El movimiento de los sedimentos disueltos, transportados en
suspensión, corresponde al de la corriente. Esta carga y las partículas más finas procedentes del lecho se
mezclan en el agua gracias a la serie de remolinos que se producen al chocar el agua con los márgenes
del cauce. Tales remolinos transportan en suspensión, a grandes distancias, partículas de limo y de
arena, por encima del fondo del río. Sin embargo, los materiales de mayor tamaño (como grava, guijarros
y cantos rodados) son demasiado pesados para ser levantados por dichos remolinos, por lo que se
deslizan, ruedan o dan pequeños saltos por el fondo del cauce. Los cantos más pesados sólo pueden ser
arrastrados durante periodos de arroyadas. El porcentaje de sedimentos acarreados por estos diversos
mecanismos varía enormemente según los ríos y puede cambiar incluso en un mismo río según las
épocas. No obstante, como norma general, la carga en suspensión se sitúa entre el 70% y el 85% del
total de la carga.
Existe una estrecha relación entre la velocidad de la corriente, la presión de desgaste sobre los márgenes
y el tamaño de las partículas erosionadas, transportadas o depositadas. A comienzos de la década de
1930, el científico sueco Filip Hjulström llevó a cabo experimentos para establecer la velocidad necesaria
para iniciar el proceso de erosión, transporte y deposición de sedimentos de diverso tamaño. Presentó
sus resultados en 1935 mediante un gráfico en el que se mostraba la relación entre la velocidad (eje Y) y
el diámetro de los sedimentos (eje X) a través de dos curvas; la primera trazaba la velocidad crítica de
erosión, es decir, la velocidad a la que las partículas de un tamaño determinado pueden ser erosionadas
de un lecho de sedimentos sueltos, y, por tanto, el inicio del transporte; la segunda mostraba la velocidad
crítica de caída o de deposición, esto es, la velocidad a la que se inicia ésta. Entre ambas curvas tiene
lugar el transporte del material. Hjulström descubrió que no se requiere que las partículas, una vez en
movimiento, tengan una elevada velocidad para continuar su desplazamiento. La velocidad de erosión es
más baja para las partículas de arena. Sin embargo, se necesita una velocidad más elevada para
arrastrar otros tipos de sedimentos. Las partículas más finas, como arcilla o limo, necesitan una mayor
velocidad para su erosión, dada su cohesión. La elevada velocidad crítica de los sedimentos más
gruesos, como cantos, grava y guijarros, es mera consecuencia de su mayor peso.
El tamaño máximo de las partículas que puede transportar un río se denomina competencia y está en
relación con la velocidad y la presión de desgaste. El incremento máximo de las partículas es
directamente proporcional al de la presión sobre las márgenes. No obstante, la relación entre el aumento
de la velocidad de erosión y el tamaño de las partículas está regida por la llamada ley de la sexta
potencia. Según ésta, el incremento de la masa de las partículas será equivalente al de la velocidad
elevada a la sexta potencia. Por ejemplo, si la velocidad se incrementa en cuatro, la masa de la partícula
mayor que puede ser arrastrada, aumentará en 4 elevado a la sexta, es decir, 4.096 veces. Esta relación
proporcional se emplea para determinar la competencia de un río, para cualquier velocidad crítica de
erosión.

Ø Deposición
Cuando la velocidad de la corriente y la erosión disminuyen, el río ya no posee capacidad para seguir
arrastrando su carga, por lo que comienza a depositarla. La deposición de los materiales se produce por
varias causas: algunas están en relación con alteraciones del cauce; otras son resultado de específicas
condiciones locales. El ensanchamiento del cauce, por lo general en su curso medio e inferior, es un
ejemplo del primer caso. La causa de este hecho reside en que al aumentar el caudal (suponiendo que
éste se mantenga constante) que entra en contacto con las márgenes, la fricción aumenta y reduce la
velocidad hasta llegar al umbral de la velocidad crítica de deposición de algunas partículas. La velocidad
también se reduce en los meandros, en las zonas de menor profundidad o cuando el río desemboca en el
mar o en un lago.
Otras causas de las deposiciones pueden estar motivadas por un brusco desnivel de la vertiente, como
cascadas, o por un repentino aumento de carga, a causa de un corrimiento de tierras. La curva de
deposición de Hjulström indica la velocidad a partir de la cual las partículas de diferente tamaño empiezan
a depositarse. Los materiales en hacerlo primero son los más pesados. Éstos recorren pequeñas
distancias, excepto en el caso de importantes inundaciones. Ésta es la razón por la que los cauces de
arroyos montañosos están a menudo bloqueados por cantos. Los materiales más pequeños arrastrados
del lecho del cauce y los sedimentos más vastos se depositan en zonas próximas y forman pequeñas
barras en el fondo del cauce. Éstas son una especie de cordillera a pequeña escala, de mayor longitud
que las rizaduras. Adoptan diversas formas y se clasifican de diversos modos. A veces se produce cierta
confusión, ya que el mismo tipo recibe diversos nombres. Existen tres criterios principales para su
ordenación, atendiendo a su forma, a la orientación respecto a la corriente y a su posición en el cauce.
Tres ejemplos de estos tres tipos son: barras en forma de luna creciente, barras transversales y
longitudinales y, por último, barras medianeras y laterales. Uno de los tipos de barras más conocido,
debido a que suele encontrarse emergida y no sumergida, es el depósito en punta de flecha, que se forma
en la margen interior de un meandro. Dada su similitud con determinados modelados eólicos, las grandes
formas sumergidas reciben el nombre de dunas. Los sedimentos más finos se desplazan a grandes
distancias y, por lo general, se depositan en brazos estancados y en los bordes interiores del cauce
donde forman ondulaciones (ripples) y estrechos rebordes (bermas). La deposición de la carga de
sedimentos fluviales se denomina aluvión.
La clasificación hidráulica de las partículas en razón de su tamaño, río abajo, es posible por el hecho de
que los sedimentos más finos se desplazan más lejos y con mayor rapidez que los materiales pesados.
La mayor parte de los ríos muestran una separación de los materiales del lecho, según su tamaño: en el
curso superior aparecen cantos rodados, en el curso medio gravilla y en el inferior se deposita arena. Un
caso especial de esta ordenación da origen a la denominada capa blindada (o capa de cantos), de
superficie tosca, en fondos de grava, que se produce tras la remoción de los elementos más ligeros de un
lecho de partículas de diversos tamaños. Como Hjulström demostró, la velocidad de suspensión que se
requiere para mantener a las partículas más finas (limos y arcillas), una vez en movimiento, es
prácticamente nula. Así pues, para que se depositen finos limos y granos arcillosos es necesario que las
partículas se compacten para formar conjuntos más grandes denominados flocs. Este proceso de
agregación, llamado floculación, tiene lugar en el estuario, donde las aguas fluviales, con sus
correspondientes sedimentos, se mezclan con el agua salina del mar y donde la velocidad es mínima.
Ésta es la razón que explica por qué los estuarios se caracterizan por la existencia de elevados
montículos de barro y de marismas de limo y arcilla.

Ø Formas del modelado fluvial causadas por la


erosión
a) Gargantas, hoces o desfiladeros: Como resultado del encajamiento de la corriente fluvial debido a su
gran capacidad erosiva. Son características del tramo superior.
b) Cataratas y cascadas: Cuando la corriente fluvial pasa por materiales de distinta dureza, se dan
cambios en el fondo del valle y es más fácil la erosión de los materiales blandos. Se producen saltos de
agua (cataratas, cascadas) que evolucionan erosionando poco a poco el escalón y produciendo con el
tiempo "rápidos" en la corriente. Donde más se dan estas formas es en el tramo superior.
c) Meandros: Son curvaturas del curso fluvial que se dan en el tramo medio.
La línea de flujo de la corriente choca contra el extremo cóncavo del cauce provocando su paulatina
erosión, mientras que en el extremo convexo se tiene la sedimentación. El meandro acentúa
progresivamente la curvatura, llega a estrangularse y origina un meandro abandonado. Así, el curso fluvial
evoluciona y se rectifica. Donde más se da este proceso es en las fases de madurez de los ríos. De ello
resulta una ampliación del curso del río. Finalmente, si, por causas de orden interno o externo, la red
fluvial sufre un rejuvenecimiento y recupera su capacidad erosiva, se originan los meandros encajados.

Ø Formas del modelado fluvial causadas por la


sedimentación
a) Terrazas: Son depósitos aluviales en forma escalonada a ambos lados del curso de un río, originadas
al encajarse el cauce fluvial en la llanura de aluvión formada por el río en etapas anteriores. Causas: el
rejuvenecimiento de la red fluvial. Son características del tramo medio e inferior.
b) Llanuras aluviales: Son el resultado de extensos depósitos de materiales detríticos finos que el río deja
a lado y lado de su cauce debido a su pérdida de capacidad de transporte en el tramo inferior.
En agricultura se llaman vegas y son tierras muy fértiles.
c) Deltas: Son formaciones sedimentarias de arcillas y limos depositados por los ríos en su
desembocadura, encontrándose ésta en un área de poca profundidad situada una zona marina tranquila
donde no hay corrientes ni fuerte oleaje. El río va depositando sus materiales mar adentro, sobre la
plataforma, ganándole terreno al mar y adquiriendo la forma de la letra griega ?.
d) Estuarios. Desembocadura abierta en forma de embudo que se origina cuando el río descarga sus
materiales en un mar abierto con fuertes oleajes y mareas que esparcen dichos materiales e impiden su
acumulación

Leer más: http://www.monografias.com/trabajos-pdf5/modelo-fluvial/modelo-fluvial.shtml#ixzz4N6cXuI00

Llanura aluvial

Dibujo de la llanura aluvial de la rambla del Poyo, Valencia (España).

Una llanura aluvial, vega, llanura de inundación, o valle de inundación, es la parte


orográfica que contiene un cauce y que puede ser inundada ante una eventual crecida de
las aguas de éste.
Muchas veces la topografía de las llanuras costaneras de los ríos está en forma de conos,
llamado cono de deyección, lo que significa que el lecho del río podría desplazarse con
bastante facilidad, inundando zonas alejadas del lecho principal actual. Dichas zonas
constituyen zonas interesantes para el desarrollo del riego, debido a la topografía favorable
como para desviar agua del río hacia cualquier punto de su zona aluvial. Se trata entonces
de zonas vulnerables.
Los ríos están generalmente encauzados, protegiendo así las zonas agrícolas tal como las
zonas urbanas. Además, para tener acceso más fácil al agua, las ciudades fueron, muchas
veces, construidas muy cerca de los ríos, lo que las torna más vulnerables. Para reducir
los riesgos de cambio importante de lecho durante crecidas fuertes, se debe tomar en
cuenta la dinámica fluvial de los ríos asociada con el transporte de sedimentos,
controlando la evolución de los cauces y evitando errores graves tales como puntos de
reducción excesivos de la sección del río (con presas derivadoras, bocatomas, puentes,
etc.).
Se debe prever puntos de desborde de los ríos claramente identificados, con la realización
de vertederos permitiendo reducir los riesgos de rotura incontrolada de diques, a fin de
manejar en vez de sufrir las consecuencias de eventos excepcionales.
En el sur de Sudamérica, bajo el término «vega» se hace especial alusión a las áreas, más
bien pequeñas y de suelos blandos y fértiles, que en zonas áridas contornean arroyos —o
sólo se muestran en algunos de sus recodos—. Pueden ser en manantiales de montaña
(como en los Andes) o en sectores desérticos de baja altitud (como en la Patagonia
esteparia), los cuales, al estar siempre bien regados, generalmente son las únicas áreas
de la región que disponen de pastos tiernos; por ello son fundamentales para la
biodiversidad y la ganadería.

Depósitos de planicie de inundación[editar]


Los fondos de la mayoría de las planicies de inundación están cubiertos por dos y algunas
veces tres tipos diferentes de depósito. El material más grueso es depositado directamente
por la corriente a lo largo de su cauce. Durante los períodos de inundación se esparcen a
través de la planicie de inundación, a los lados de las riberas, arena fina, limo y arcilla;
además, cantidades relativamente pequeñas de escombros de varios tipos y tamaños se
mueven de las laderas del valle, bajo la influencia de la escorrentía y de los movimientos
en masa y se distribuyen a lo largo de los lados del fondo del valle. La distribución de los
depósitos del cauce y de los de inundación a través de la planicie de inundación depende
de la velocidad a la que la corriente construye el fondo de su valle.
Una corriente divagante está cambiando continuamente su cauce y en un rango de tiempo
dado, puede haber ocupado toda posición posible de uno a otro lado de la planicie. Una
sección transversal a través de la planicie de inundación desarrollada por una corriente
como éstas, mostraría una cubierta de grava coronada por sedimentos de grano fino
depositados cuando el flujo rebasa los bancos. Esta forma de sedimentación es típica de
las planicies de inundación erosionales y de las de inundación de agradamiento muy lento.
Pero una corriente divagante que construya su planicie de inundación con rapidez tiene
menos oportunidad de ocupar cada lugar a través de la extensión del fondo de su valle. En
consecuencia, esta planicie de inundación estará cubierta en su mayor parte por
sedimentos finos, depositados durante las épocas de creciente. Una sección transversal a
través de éstas, indicaría una banda irregular de material grueso que señala las posiciones
sucesivas del cauce. Las planicies de inundación de agradamiento rápido muestran este
tipo de depósito.1

Algunos ejemplos de llanuras aluviales[editar]


Algunas civilizaciones importantes, en la antigüedad se han desarrollado en llanuras
aluviales, como por ejemplo:

 Mesopotamia;
 En el delta del Nilo;
 Río Amarillo (Huang-ho)

LLANURAS
En términos generales puede definirse a una llanura como un ámbito de escaso relieve, o sea
con desniveles poco marcados, en contraposición a las áreas montañosas o serranas, en las
que las diferencias de altura son mucho más acentuadas.

Pese a su relativa chatura, las llanuras nunca son totalmente planas, presentando altos
denominados lomas o divisorias de agua y bajos, conocidos como depresiones, donde se
emplazan los cuerpos de agua (ríos, lagos, lagunas, bañados, esteros, etc).

Las llanuras se pueden identificar de diferentes maneras, según sea el evento generador o las
formas que las caractericen.

Así, desde el punto de vista genético, se las puede clasificar en: aluviales cuando derivan
fundamentalmente de la acción fluvial; eólicas cuando el agente constructor principal es el
viento; marinas cuando deben su formación a la actividad del mar y glaciales cuando el hielo se
constituye en el principal agente de formación.
Normalmente, debido a la amplitud del tiempo que insume la evolución de las llanuras
(millones de años), interviene más de un proceso en su modelación. Por ello se las denomina
fluvioeólica, glacifluvial, glacimarina, etc.

LLANURAS ALUVIALES Son superficies más o menos planas generadas por la acción de los ríos.
Las llanuras aluviales son formas de acumulación o sedimentación fluvial a diferencia de las
peneplanicies que constituyen formas de degradación o erosión fluvial.

Para comprender los procesos geomórficos fluviales, es necesario definir previamente algunos
parámetros y elementos propios o vinculados a los ríos.

- Caudal, es el volumen de agua que pasa por una sección del cauce en la unidad de tiempo.

-Capacidad de carga o de transporte, es la carga sólida máxima que puede llevar un curso de
agua para una determinada velocidad. Si el volumen sólido trasportado supera a la capacidad
de carga, el excedente se deposita. Por el contrario, si el volumen sólido es menor que la
capacidad de carga el rió erosiona (degrada) su propio cauce.

- Nivel de base, es el nivel por debajo del cual los ríos no pueden erosionar su lecho. El nivel de
base general de todos los ríos es el nivel del mar y su prolongación por debajo de los
continentes

Niveles de base locales pueden situarse por encima o por debajo del nivel del mar. Así, un río
que desagüe en un lago o laguna más altos que el nivel del mar, tendrá a ese lago o laguna
como nivel de base local (figura 4). Depresiones cerradas de alturas menores que el nivel del
mar, si bien bastante menos frecuentes, también constituyen niveles de base locales.
- Perfil de equilibrio, es la forma que tiende adoptar el lecho de un río en su perfil longitudinal,
según la cual, a lo largo de su recorrido, no debería producirse erosión ni sedimentación. Esta
situación rara vez se da en la naturaleza, aunque ciertos ríos tienen perfiles relativamente
cercanos al equilibrio. Esquemáticamente el perfil de equilibrio es una curva cóncava hacia
arriba, más empinada hacia las nacientes y tangente a la horizontal hacia la desembocadura

- La erosión producida por un río se inicia en las partes bajas de su cauce para luego
remontarlo (la erosión es retrocedente); siendo la actividad erosiva mayor cuanto mayor es la
pendiente topográfica. - Todo río posee un límite por encima del cual erosiona y por debajo
del que deposita sus acarreos. Dicho límite se denomina línea neutra
- La acumulación fluvial se produce cuando el peso material trasportado supera la capacidad
de carga del río. La capacidad de carga o de transporte de una corriente, está directamente
relacionada con la energía cinética de la misma (Ec = ½ m.v2 ) o sea aumenta linealmente con
el incremento de la masa de agua en movimiento y en relación cuadrática respecto de la
velocidad. Por ello, cuando un río de montaña ingresa en le piedemonte vecino reduce
bruscamente su velocidad debido a la disminución de la pendiente topográfica, originado
depósitos característicos de grava y arena denominado abanico aluvial

Ya dentro de la llanura aluvial, y a medida que aumenta la distancia al cuerpo montañoso, la


capacidad de trasporte de los cursos de agua disminuye, dando lugar a una reducción en el
tamaño de sus depósitos. ( figura piedemonte)
Por lo tanto, a medida que nos alejamos del ámbito montañoso, los depósitos gruesos (grava)
se transforman en medianos (arena) para dominar finalmente los finos (limo y arcilla). Sobre
una misma posición vertical, sin embargo, es frecuente encontrar alternancia de materiales de
diferentes tamaños debido a las variaciones en la capacidad de carga de los ríos

http://tierra.rediris.es/hidrored/ebooks/miguel/HidrogeoLlanuras.pdf

PROCESOS ALUVIALES EN ZONAS DE LLANURA

https://books.google.com.pe/books?id=4i1_97TIlyoC&pg=PA102&lpg=PA102&dq=depositos+d
e+la+faja+del+meandro&source=bl&ots=g7lYpPIbc_&sig=CR-
gVCZc3SrhA_uusVoR9dMt6IU&hl=es&sa=X&ved=0ahUKEwjdnv-PwtvPAhVFXh4KHaX-
AzcQ6AEIMjAF#v=onepage&q=depositos%20de%20la%20faja%20del%20meandro&f=false

DEPOSITOS DE LA FAJA DEL MEANDRO

https://es.wikipedia.org/wiki/Meandro#Dep.C3.B3sitos

DELTA DE OS RIOS

http://www.ehowenespanol.com/delta-rio-sobre_379596/

https://es.wikipedia.org/wiki/Delta_fluvial

http://geografia.laguia2000.com/general/delta-fluvial

LOS CONOS O ABANICOS ALUVIALES Y LAS BAJADAS

http://tierra.rediris.es/CuaternarioyGeomorfologia/images/vol10_2/cuaternario10(3-
4)_06_.pdf

http://www.geociencias.unam.mx/~rmolina/documents/alluvialfanslecture.pdf

file:///C:/Users/ntg/Downloads/1667745658.GSN4_10.pdf (APARTADO 5)

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