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CELEBRACIÓN MARIANA Dios pone en ti –se puede nombrar a cada hermana de la comunidad-

los ojos. Ábrele la puerta de tu vida. Siempre que Dios llama y


alguien le abre, se produce una Anunciación.
INTRODUCCIÓN (Rezamos o cantamos el Ángelus)

Como concepcionistas vivimos la mediación mariana en la EL ÁNGEL DEL SEÑOR ANUNCIÓ A MARÍA
espiritualidad y comunitaria. Y CONCIBIÓ POR OBRA Y GRACIA DEL ESPÍRITU SANTO.
En María se manifiesta la ternura entrañable de Nuestro Padre Ave María (Cantada)
Dios, se dibuja la humanidad nueva inaugurada por Jesús y se HE AQUÍ LA ESCALVA DEL SEÑOR
estrena cada día el canto nuevo del Espíritu. ¡HÁGASE EN MI SEGÚN TU PALABRA!
Ella acoge el dolor y el gozo de nuestro mundo, alienta todas las Ave María (Cantada)
esperanzas. En María, por su maternidad, su historia es la nuestra, su Y EL VERBO SE HIZO CARNE
camino el nuestro, su pascua la nuestra. Y HABITÓ ENTRE NOSOTROS
Ave María (Cantada)
MONICIÓN INICIAL
CAMINOS QUE RECORRE MARIA
Dios pone los ojos en Nazaret, una aldea de Galilea, de poco María se levanta y nosotros con ella.
prestigio, en una mujer, María. Una mujer de su tiempo y de su Lleva en su vida una Presencia, en su vientre un fruto, en sus labios
pueblo. Su corazón acaricia esperanzas de salvación para la una canción.
humanidad. Una mujer que como todas las mujeres de la época sufre La experiencia de Dios la ha hecho libre y capaz de liberar.
la marginación por la sociedad, la religión y la ley. A su alrededor se extiende el gozo. ¡La Nueva Arca de la Alianza va
de camino!
Una mujer que forma parte de los pobres de Yahvé, que vive
abierta a los planes de Dios y es pura transparencia. MONITORA: Acompañamos a María en el camino y avanzamos
como peregrinas de la fe, en busca de la luz.
Y es que Dios busca un corazón abierto de mujer para derramar su Respondemos: RUEGA POR NOSOTRAS
amor. María, Mujer de fe, que viviste siempre abierta a Dios. Ruega por
Busca unas manos vacías de mujer para ser acogido. nosotras
Busca unos oídos atentos de mujer para poner en ellos su Palabra María, peregrina de la fe a lo largo de toda tu vida. Ruega por
Busca unos ojos limpios de mujer para mostrarse a ellos. nosotras.
Madre a quien podemos acudir con toda confianza. Ruega por
SILENCIO ORANTE nosotras.
MONITORA: Con María recorremos el camino de la esperanza que Mujer, déjame, todavía no ha llegado mi hora.
alegra el corazón. ¡Ahí tienes a tu Hijo!
María, que esperaste confiada el Reino de tu Hijo. Ruega por
nosotras María es el gran Modelo de actitud orante (cf CC 44) Ella nos invita
María, Madre del tiempo nuevo, danos esperanza. Ruega por abrir los ojos, a mirar la situación de la humanidad e invocar, con
nosotras. Ella, al Espíritu.
María, fuente y vida nuestra, llévanos a Jesús. Ruega por nosotras. Por eso, en estos momentos, presentamos al Señor, por intercesión
de María, las necesidades del mundo, le alabamos por sus maravillas
MONITORA: Con María recorremos el camino del amor que se hace y le damos gracias por la nueva vida que nos ofrece en Jesús.
encuentro, cercanía, solidaridad.
María, servidora de Dios y de los hombres. Ruega por nosotras Después de presentar al Señor todo aquello que llevamos en nuestro
María, Madre de la humanidad nueva, enséñanos a amar. Ruega por corazón nos unimos a María, en su canto del Magníficat, Ella con su
nosotras. canto se hace profeta de la belleza y del amor, nosotras confiamos
Madre de los pobres, que ofreces tu ternura a los más débiles. Ruega ser Presencia suya en nuestra realidad concreta.
por nosotras.
CANTO: MAGNIFICAT
NOS ASOMAMOS AL CORAZON DE MARÍA
¡Al ir junto a ella brota la intimidad! Es hora de mirarla de cerca, de Oración final:
preguntarle qué es lo que lleva dentro, qué es lo que guarda en su Hemos caminado con María, nuestra relación con Ella enciende en
corazón. Su belleza puede despertar la nuestra, tan dormida. nuestro interior una Luz y una Presencia.
Su gracia puede recrearnos. A Ella que camina con nosotras en la monotonía diaria, le pedimos
nos acompañe en esta hora de la historia. Ella que es la Mujer
Recordamos algunas palabras dirigidas a María en diversas creyente que comenzó el tiempo nuevo, que esperó confiada el
circunstancias y oramos en silencio: proyecto del nuevo Reino nos ayude a ser testigos de comunión,
profetas de esperanza y servidoras del amor. AMÉN.
¡Alégrate María!
¡Llena de gracia!
¡El Señor está contigo!
Bendita tú entre todas las mujeres y bendito el fruto de tu
vientre.
Feliz la que ha creído que se cumplirán las cosas que le fueron
dichas de parte de Señor.
Una espada te atravesará el alma.
¿Por qué me buscabais?

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