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En principio, toda finalidad que se atribuya al Estado, en una forma u otra, directa
o indirecta, viene a afectar los intereses de los particulares, como dos círculos
concéntricos que guardan una relación de necesidad. El problema más grave de la
sociedad moderna es la determinación de la situación del hombre frente al Estado,
materia que preocupó a Spencer en el siglo pasado
La actividad del Estado, es decir, lo que el Estado debe hacer, se, define por el
conjunto de normas que crean árganos, fijan su funcionamiento y los fines que
deben alcanzar. La exigencia lógica del Estado se precisa por los fines o
propósitos que una sociedad organizada le ha venido señalando de acuerdo con
su propia naturaleza.
El Estado no debe tener otros fines que los de la sociedad, aunque ciertos fines
forman tareas u operaciones técnicas de su actividad para facilitar o preparar el
cumplimiento de los fines que se llevan a cabo en forma exclusiva o de facultades
concurrentes con los particulares. No nos referimos a todos los fines sociales, sino
a los fines objetivos del Estado. La sociedad conserva un campo extenso de
actividades bajo la vigilancia y estímulo del Estado. Esa inmensa actividad
privada, se puede resumir diciendo que el individuo) dentro del orden jurídico)
puede hacer todo) con excepción de lo que la Ley le prohíbe. Su capacidad
generales la regla, la prohibición, el límite de su acción.
Para esta finalidad indebida han surgido doctrinas políticas como el fascismo, el
nacional socialismo, que tienen a la libertad como enemigo y pervierten y disfrazan
las tradiciones más hondas de un pueblo. Una actitud que cae en el campo de la
patología política que por lo regular aparece en los momentos de transición y
desconcierto de los pueblos!" La teoría de los fines domina totalmente la vida del
Estado, porque el engranaje jurídico que lo caracteriza tiene una finalidad "que
explica la razón de ser de la norma misma y que va más allá del simple hecho de
la positividad" los fines del Estado están 'contenidos en el cuadro del orden
jurídico de un país, en principio en la estructura constitucional y en la legislación
ordinaria y reglamentaria.
Las funciones no se diversifican entre sí por el hecho de que cada una de ellas
tenga contenido diferente, pues todas pueden servir para realizar una misma
atribución. Será fácil apreciar la relación que guardan las atribuciones con las
funciones legislativa, administrativa y judicial, estudiando el papel que juega cada
una de las últimas en la realización de las primeras.
Sin embargo, pueden señalarse varios casos en que es notable esa intervención:
a) En primer término y tratándose de relaciones familiares, es por medio de
funciones administrativas que se presta el servicio del registro civil que da validez,
publicidad y certidumbre a esas relaciones.
Por último, todos estos actos pueden dar lugar a conflictos y para ese caso la
función jurisdiccional, resolviendo esos conflictos constituye otro de los medios de
que el Estado se vale para realizar esta segunda categoría de atribuciones.
Por último, como también pueden surgir conflictos con motivo del ejercicio de
estas actividades, la función jurisdiccional está llamada igualmente a intervenir. El
estudio de la teoría de las funciones del Estado requiere como antecedente
indispensable el conocimiento, aunque sea en forma sumaria, de la teoría de la
división de Poderes que es de donde aquélla deriva. La división de Poderes,
expuesta como una teoría política necesaria para combatir el absolutismo y
establecer un gobierno de garantías, se ha convertido en el principio básico de la
organización de los Estados constitucionales modernos.
Las funciones del Estado, consideradas con independencia del órgano que las
realiza, se exteriorizan por medio de actos de distinta naturaleza: unos que
producen consecuencias jurídicas y otros que sólo producen consecuencias de
hecho. En efecto, el Estado al expedir leyes, dictar sentencias, dar órdenes
administrativas, afecta el orden jurídico existente. Cuando construye carreteras,
moviliza la fuerza pública, planifica, transporta mercancías y correspondencia,
imparte enseñanza o servicios de asistencia, está realizando simples actos
materiales. Por lo mismo, para poder apreciar la naturaleza intrínseca de los
diversos actos que el Estado realiza, es indispensable partir del estudio de la
teoría que se ha venido elaborando en la doctrina, de los actos jurídicos y de los
actos materiales. . El acto jurídico se ha definido como un acto de voluntad cuyo
objeto es producir un efecto de derecho, es decir, crear o modificar el orden
jurídico. El acto jurídico se distingue del hecho jurídico y del acto material. El
hecho jurídico está constituido, bien por un acontecimiento natural al que la ley
vincula ciertos efectos de derecho, como el nacimiento, la muerte, etc., o bien por
un hecho en el que la voluntad humana interviene y en el que el orden jurídico
entra en movimiento, pero con la diferencia respecto del acto jurídico de que ese
efecto de derecho no constituye el objeto de la voluntad. Así, por ejemplo, en el
delito hay un hecho voluntario, pero la voluntad no persigue la creación de una
situación jurídica, a pesar de lo cual ésta se origina al convertir a su autor en
delincuente sujeto a la ley penal.
Con las Siete Leyes Constitucionales de 1836, que convirtió a México en una
república centralista, instauró como órgano supremo en el ejercicio político y
administrativo del país al Supremo Poder Conservador un órgano colegiado
integrado por cinco personas, que tenía superioridad jerárquica sobre los tres
poderes, incluso del ejecutivo, el cual, permanecía a cargo de un presidente. Se
ratificó el mismo número de secretarías, pero se les llamó "ministerios" y se
modificaron sus denominaciones y funciones, ya que lo relativo a los asuntos de
justicia y negocios eclesiásticos se integró a las funciones del ministro del interior y
las funciones de relaciones exteriores se separaron para formar un solo ministerio,
quedando así los cuatro ministerios: del Interior; de Relaciones Exteriores; de
Hacienda; y de Guerra y Marina. Posteriormente, en 1841 los ministerio de exterior
y del interior se reintegrarían en el "Ministerio de Relaciones Interiores y
Exteriores" y el espacio vacío fue ocupado por uno nuevo denominado "Ministerio
de Instrucción Pública e Industria", que sería el antecedentes de futuros
ministerios y secretarías de educación.
Integración
Presidencia de la República
Secretarías de estado
Departamentos administrativos
La dirección es una actividad que está revestida de tres grandes variables que
atienden integralmente: - Gestión de la incertidumbre - Estructura compleja de la
empresa - Variabilidad de las condiciones del entreno de las empresas
Organismos descentralizados
La Teoría del Servicio Público desde sus orígenes en Francia en la segunda mitad
del siglo XIX hasta nuestros días, ha tenido una importante influencia en Colombia
y en el mundo occidental. Se analizan sus orígenes, su naturaleza, evolución y
vigencia, sus tendencias y sus contradicciones actuales, su práctica en el contexto
internacional de las transformaciones ideológicas, políticas y económicas de las
últimas tres décadas y su aplicación actual en las telecomunicaciones. Los
elementos democráticos de la teoría del Servicio Público recobran vigencia para el
rescate de lo público, de la prestación directa delos servicios públicos esenciales
por parte del Estado, la utilización del derecho administrativo y la jurisdicción
contencioso administrativa para resolver sus conflictos y como alternativa a las
concepciones privatistas y mercantilistas predominantes. En la parte
correspondiente de la investigación realizada, se integraron los métodos histórico
y lógico, el análisis y la síntesis; se utilizaron las fuentes primarias y las
secundarias y se hizo análisis documental.
Los servicios públicos, por estar destinados a la satisfacción de necesidades de
carácter general, vienen a ser actividades también muy importantes, mismas que,
tratándose de servicios públicos propiamente dichos, están atribuidas a la
administración pública, quien las puede realizar directamente, o de manera
indirecta por medio de particulares, bajo un régimen jurídico especial exorbitante
del derecho privado.
a) Teoría propuesta por León Duguit, que considera al servicio público como toda
actividad que deba ser asegurada, reglada y controlada por los gobernantes.
b) Teoría formulada por Gastón Jaze, conforme a la cual el servicio público viene a
ser toda actividad de la administración pública.
c) Teoría promovida por Maurice Hauriou, que entiende al servicio público como
una parte de la actividad de la administración pública.
Existe una fuerte discrepancia doctrinal acerca del criterio para determinar el
carácter público de un servicio: para unos, el acento público lo pone el órgano a
cuyo cargo corre su prestación, pues, a su juicio, solo los órganos públicos pueden
gestionar tal servicio: criterio orgánico; para otros, el calificativo público lo aporta el
régimen jurídico exorbitante del derecho privado a que se somete el procedimiento
de su organización y funcionamiento: criterio jurídico; no son pocos los que
rechazan ambos criterios definitorios del carácter público del servicio, porque, en
su opinión, tal rasgo lo habrá de imprimir el objeto del mismo: criterio funcional; o,
en fin, su reconocimiento por la ley: criterio legal.
En rigor, para que un servicio público lo sea, debe estar investido de ciertos
caracteres jurídicos esenciales, sin los cuales queda desnaturalizado, por cuya
razón el Estado tiene la obligación de asegurar que dicho servicio resista tales
rasgos distintivos o caracteres esenciales, con el fin de garantizar la idónea
satisfacción de la necesidad de carácter general que trata de satisfacer, en
cualquier caso en que esta se individualice, pues como apunta Marcel Waline: "El
servicio público es el ms enérgico de los procedimientos de intervención
administrativa, ultima ratio del Estado para asegurar la satisfacción de una
necesidad colectiva cuando la iniciativa privada, por una razón cualquiera, no es
suficiente para asegurarla".
En la legislación
Por lo general, la legislación es poco dada a incluir definiciones en sus textos, por
ello llama la atención la definición de servicio público contenida en la Ley del
Régimen Patrimonial y del Servicio Público, expedida por la Asamblea de
Representantes del Distrito Federal, publicada en el Diario Oficial de la
Federación, de 23 de diciembre de 1996, cuyo tenor, inspirado en la definición del
profesor Manuel Mara Diez, es el siguiente:
Artículo 128. Para efectos de esta ley, se entiende por servicio público la actividad
organizada que se realice conforme a las leyes vigentes en el Distrito Federal, con
el fin de satisfacer necesidades de interés general en forma obligatoria, regula y
continua, uniforme y en igualdad de condiciones.
Forma parte del Poder Ejecutivo, y a diferencia del Poder Legislativo y Judicial, es
un poder activo por excelencia ya que no se limita a dictar normas jurídicas, sino
que también aprueba normas generales (reglamentos) y puede resolver conflictos
o controversias aplicando el Derecho o mediante el arbitraje, ya que cuenta con
una potestad sancionadora muy extensa, sin perjuicio de la que ejercen los Jueces
y Tribunales penales y con subordinación a la Justicia en todo caso.
No obstante, no siempre los poderes públicos cumplen sus fines y realizan sus
funciones sirviéndose de organizaciones administrativas dotadas de
personalidades jurídicas públicas y reguladas por normas de Derecho
administrativo. Algunas funciones y los recursos públicos necesarios para
prestarlas a entidades con forma jurídica privada, sociedades o fundaciones, o
formas privadas de organización para realizar actividades no mercantiles o
industriales, sino tradicionalmente administrativas (ej.: cooperación internacional) y
sufragadas íntegramente o en su mayor parte con fondos públicos. Además,
utilizan a veces el Derecho Privado en sus relaciones jurídicas ya que contratan
parte de su personal con sujeción al Derecho laboral en vez de funcionarios en
régimen de Derecho Administrativo o contratos con terceros regidos por las leyes
civiles o mercantiles.
Pero en las últimas décadas se observa una tendencia más acusada a valores del
Derecho privado, como régimen jurídico de muchas actividades administrativas
junto a la utilización de formas privadas de personificación que permiten hablar de
huida del derecho administrativo.
También las instituciones, los conceptos, las técnicas jurídicas del Derecho
administrativo varían más que los respectivos sistemas de Derecho privado. Existe
una relación directa entre el sistema de Derecho administrativo y la Constitución
de cada Estado, de ahí que no en todos los Estados europeos exista una
Jurisdicción Contencioso-Administrativa.
Por todo ello, las cualidades definitorias de nuestro Derecho administrativo, sus
rasgos esenciales, incluso la razón por la que existe como rama diferenciada del
ordenamiento jurídico, debe buscarse en la historia reciente.
Los precedentes
Principios y realidades
Concepto: Son muchos los autores que se han esforzado en dar un concepto de
Derecho administrativo, dando lugar a diferentes posiciones doctrinales.
Así, para ZANOBINI “El Derecho administrativo es aquella parte del Derecho
público que tiene por objeto la organización, los medios y las formas de la
actividad de las Administraciones Públicas y las consiguientes relaciones jurídicas
entre aquéllas y otros sujetos”.
a) Derecho público: Es la parte del Derecho relativa al Poder público en cuanto tal
y se contrapone el Derecho privado que se ocupa de la ordenación jurídica común
a las personas físicas en sus relaciones recíprocas.
Fuentes: Las fuentes (formales) del Derecho, y por consiguiente también del
Derecho administrativo, hacen referencia a los distintos tipos normativos en que
vienen expresadas las reglas que integran el Derecho, en nuestro caso, el
administrativo (Constitución, Leyes orgánicas, Leyes ordinarias, Decretos
Legislativos, Decretos-Leyes, Reales Decretos, Decretos, Órdenes, etc.).
Las fuentes reales son las Leyes Materiales que son normas que tienen
obligatoriedad y generalidad provengan de donde provengan, inclusive del un
Gobierno de Hecho.
Las fuentes formales son las leyes que originadas a través del Procedimiento
Legislativo.
FUENTES DIRECTAS
LA CONSTITUCIÓN
LA LEY
La ley. Norma jurídica sancionada por el Órgano Legislativo establecida como
manifestación de voluntad soberana del Estado mandando o prohibiendo una
cosa.
Es una rama del derecho público compuesto por normas jurídicas que regulan la
actividad administrativa del Poder ejecutivo y la actividad materialmente
administrativa del Poder Ejecutivo, el Poder Legislativo y de los entes públicos no
estatales.
Maurice Hauriou dice que el derecho administrativo es la rama del derecho público
que regula:
2) Los poderes y los derechos que poseen estas personas administrativas para
manejar los servicios públicos
Como ha habido quien piense que en países que tienen una organización como la
nuestra, el derecho administrativo carece de autonomía, debiendo regirse todas
las relaciones en las que el Estado interviene bien por normas de derecho
constitucional o en su defecto del derecho civil, se hace indispensable precisar las
diferencias y al mismo tiempo las relaciones que existen entre el derecho
administrativo, por una parte, y el derecho constitucional y el derecho civil, por la
otra.
Como es bien sabido, el derecho constitucional encierra todas las normas que se
refieren a la estructura misma del Estado, a la organización y relaciones de los
Poderes públicos y a los derechos fundamentales de los individuos en tanto que
constituyen una limitación o una obligación positiva para el mismo Estado. El
derecho constitucional de los estados modernos, admitiéndose el principio de
separación de poderes, se instituyen el poder legislativo, el poder ejecutivo y el
poder judicial, como los órganos fundamentales por medio de los que la Nación
ejerce su soberanía; pero mientras que tratándose del Poder Legislativo, como su
actividad se refiere al establecimiento de normas abstractas e impersonales, no
existen relaciones con los particulares, el funcionamiento de los Poderes Ejecutivo
y Judicial si implica la necesidad de regular las relaciones con los individuos nacen
a consecuencia de su actuación. Tratándose de estos dos últimos poderes, la
constitución solamente establece las bases principales de su organización, pero
no llegan al detalle de la misma, aunque se supone que los titulares de ellos no
van a desarrollar, personal y directamente, todas las actividades que la propia
constitución les encomienda. Tanto el Poder Ejecutivo como el Poder Judicial,
requieren para su funcionamiento una multiplicidad de órganos secundarios, entre
los que necesariamente deben existir las relaciones indispensables para conservar
la unidad de Poder que forman parte.
Por esas razones se han derivado del derecho constitucional dos ramas: la del
derecho administrativo y la del derecho procesal, reguladora cada una de ellas de
la organización y funcionamiento de los podres Ejecutivo y Judicial
respectivamente.
Las relaciones que guarda el derecho administrativo con las otras ramas del
Derecho, se exponen de esta manera:
Con el derecho penal se relaciona, tanto porque las normas de este último se
encuentran garantizadas en cuanto a su cumplimiento por sanciones penales,
como porque la función administrativa es indispensable para que puedan ser
llevadas a cabo las penas que el Poder Judicial impone, como lo demuestra entre
otros el servicio penitenciario que dependen del Poder Administrativo.
En cuanto a las relaciones que guarda con el derecho internacional, es fácil darse
cuenta de ellas, porque la administración realiza en el interior de cada país una
gran parte de las obligaciones que el derecho internacional impone a los Estados
soberanos, al mismo tiempo que el desbordamiento de los intereses colectivos
fuera de las fronteras de cada Estado, ha ido haciendo surgir en la actualidad
instituciones internacionales de orden administrativo.
Por último, el derecho administrativo se relaciona con todas aquellas ciencias que
proporcionan a la administración los elementos necesarios para organizar y
encaminar su actividad en las diversas tareas que el Estado se encuentra
encomendados.
La Constitución.
Los Tratados Internacionales.
Las Leyes formales (orgánicas u ordinarias).
Las normas del Poder ejecutivo con rango de Ley (Decretos Legislativos y
Decretos-Leyes).
El Derecho comunitario europeo.
Los Reglamentos.
b) La costumbre.
c) Los principios generales del Derecho.
A) La Constitución:
La Constitución es la primera de las fuentes del Derecho administrativo que
prevalece y se impone a todas las demás
Las leyes federales mexicanas, en materia fiscal, han seguido siempre el sistema
casuístico, sin establecer interdependencia, llevando cada una, según la ideología
de la tributación, disposiciones generales y reglamentarias especiales, ya sea
respecto a la imposición, manera de fijarla y recaudarla, ya sobre los
procedimientos de contención u oposición; lo que claramente se explica por la
diversidad de fuentes de tributación, como ocurre con las leyes del timbre,
herencias, legados y donaciones, sobre la renta, aduanales, alcoholes, etcétera,
las que no establecen entre sí relación de dependencia ni de complemento o
suplencia, pues cada una de ellas constituye un sistema completo; por lo que para
que puedan ser aplicados los artículos 14 constitucional y 338 del Código Federal
de Procedimientos Civiles, que establecen que cuando no puede decidirse una
controversia judicial, ni por el texto ni por el sentido natural o espíritu de la ley, se
decidirá por los principios generales de derecho, es requisito esencial que exista
una relación jurídica de causa, o sea, originadora del derecho, ya que es lógico
que faltando ésta, no habría controversia por decidir, y ese nexo falta cuando no
se demuestra que el fisco hubiere contraído con una persona, determinada
obligación, o sea, que por el hecho de haberle denunciado alguien una omisión,
necesariamente hubiere quedado obligada la Hacienda Pública a determinada
prestación, para que se pudiera, por la omisión de la fijación de la cuantía,
determinarse ésta, atendiendo a principios de equidad. Distinto sería el caso si la
ley respectiva otorgase la facultad a los particulares, de denunciar las infracciones
de los tributarios y fuese omisa en acordarles el derecho a ser retribuidos, o
acordándolo, no fijase su cuantía; pero cuando la ley no da esa intervención a los
particulares, ya que al constituir a ciertos funcionarios en auxiliares de las oficinas
receptoras, para lograr la efectividad del pago del impuesto, significa su claro
propósito de eliminar tal intervención, atenta la naturaleza del gravamen y las
condiciones reservativas a que obligan las actividades sujetas al mismo; así es
que no existe omisión alguna de la ley que pueda dar lugar a aplicar, para la
decisión de una controversia sobre un derecho inexistente, los principios
generales de derecho, ya que no basta que la ley calle, para dar origen al derecho,
sino que es indispensable que éste exista o lo cree, para dar lugar a la aplicación
de las normas generales del derecho, con objeto de fijar la extensión del no
reglamentado.
Desde el punto de vista jurídico, son las normas de derecho las que le dan a una
persona la atribución de llevar a cabo actos válidos que producen efectos
jurídicos, previamente regulados. De ahí que dicha facultad lleva implícita la
capacidad para actuar legalmente, lo cual se traduce en un poder hacer. Mediante
la facultad que se otorga a una persona o institución se le dan atribuciones para
realizar determinados actos derivados de poderes específicos establecidos por el
orden normativo.
Reglamento deriva de la palabra reglar (del latín regulare), que entre otras
acepciones significa: sujetar a reglas una cosa; de ahí que reglamento es la
"colección ordenada de reglas o preceptos que por autoridad competente se da
para la ejecución de una ley o para el régimen de una corporación, una
dependencia o un servicio". Vid. infra, reglamento parlamentario.
TRATADO.
En sentido amplio se entiende por tratado todo acuerdo celebrado entre miembros
de la comunidad internacional, cuales quiera sea la forma que revista y la
importancia de los compromisos que contenga. En el sentido restringido, se
entiende por tratado un acuerdo internación al revestido de un carácter solemne y
que tiene por objeto, sea un conjunto de problemas complejos, sea problemas
especiales y determinados, de una importancia considerable
DECRETOS-LEYES
Son Decretos-leyes, los actos emanados del Poder Ejecutivo o quien los sustituya,
mediante los cuales se establecen reglas de derecho sobre materias propias de la
ley formal. En otras palabras, son decisiones con fuerza de ley, adoptadas por el
Poder Ejecutivo o quien haga sus veces. Los Decretos-leyes son una
manifestación de anomalía en la vida pública. Se dictan siempre en situaciones de
urgencia y emergencia, de mayor o menor gravedad, ya que en períodos de
absoluta normalidad, el ejercicio de la función legislativa corresponde a la
asamblea Nacional.
REGLAMENTOS
LA COSTUMBRE
JURISPRUDENCIA
DOCTRINA
La Doctrina Jurídica está constituida por la exposición científica hecha por los
jurisconsultos, contentiva de la presentación de los problemas del derecho y de las
soluciones propuestas, la sistematización de las normas y la interpretación de las
mismas. La doctrina no tiene fuerza de ley. La opinión de cada jurista vale por la
autoridad científica alcanzada por el autor, y no en virtud de ninguna consagración
oficial. NO están los jueces obligados a acoger en sus fallos la opinión de
determinado autor, por dilatada que sea su fama. Se estima sin embargo, que la
doctrina, al igual que la jurisprudencia, constituye una fuente indirecta del derecho.
Los estudios de los juristas llegan a ser frecuentemente los antecedentes de las
reformas legislativas, y de las variaciones observadas en la jurisprudencia, es
decir, las opiniones doctrinarias ejercen influencia en el legislador y en el juez
Para abordar el tema sobre los actos administrativos hay que tener claro el concepto
de su legitimidad, por lo que es necesario primeramente abordar los elementos
esenciales que lo conforman. Los elementos del acto administrativo son los
siguientes:
Competencia.
La competencia puede definirse como las facultades atribuidas a un órgano, las
cuales puede ejercer de forma legítima. Puede hacer referencia al grado, la materia, y
el territorio
El sujeto.
El sujeto del acto administrativo es el órgano que, en representación del Estado
formula la declaración de voluntad: Dicho órgano cuenta con una competencia, la cual
constituye el conjunto de facultades del mismo. La competencia es la cantidad de
poder público que tiene el órgano para dictar un acto. No es una cualidad, sino una
cantidad; por ello se considera como la medida de poder que pertenece a cada
órgano.
La voluntad.
La voluntad es un impulso psíquico, un querer, una intención. Concurren en la
voluntad administrativa elementos subjetivos y objetivos. La voluntad del acto
Administrativo está compuesta por la voluntad subjetiva (voluntad referente al acto
mismo) del funcionario y la voluntad objetiva del legislador (voluntad sin conocer las
circunstancias particulares de cada caso).
El objeto.
El objeto debe ser cierto y física y jurídicamente posible; debe decidir todas las
peticiones formuladas, pero puede involucrar otras no propuestas, previa audiencia
del interesado y siempre que ello no afecte derechos adquiridos.
El motivo.
La motivación responde al por que justificativo. la causa responde al ¿por qué? la
motivación aparece cuando en el acto existe la posibilidad de la discrecionalidad por
parte del funcionario público. si un acto es discrecional debe motivarse. si un acto es
totalmente reglado no sería necesaria la motivación.
El mérito.
Al mérito se le ha considerado como elemento del acto administrativo, entendido
como la adecuación necesaria de medios para lograr los fines públicos específicos
que el acto administrativo de que se trate tiende a lograr.
La forma.
Es la materialización del acto administrativo, del acto administrativo, el modo de
expresión de la declaración ya formada. Por la forma del acto administrativo se
convierte en físico y objetivo. Es su visibilidad. Asegura su prueba y permite conocer
su contenido. La forma equivale a la formación externa del acto.
Sobre los principios en general En primer lugar, debemos aclarar que “El derecho
se compone tanto de realidad como de valores y normas”. Los principios o valores
representan proposiciones jurídicas o directivas, pero no tienen un desarrollo
normativo; es decir, el principio es más bien un criterio fundamental en sí mismo,
que marca, de alguna manera, el sentido de justicia de las normas jurídicas.
Hay que distinguir también los principios fundamentales, que son la base del
ordenamiento, que se ubican en la Constitución y ahora también en fuentes
supranacionales; de aquellos principios institucionales, derivados de una
determinada institución a partir de su idea organizativa. En el procedimiento
administrativo, se reconocen una serie de principios que prevén que tanto el
particular como la administración tengan un conocimiento total y acabado de la
cuestión planteada.
El acto administrativo puede ejecutarse, agotándose de una solo vez (multa). Sin
embargo hay ocasiones en que no se agota en una sola vez, sino que tiene un
tiempo determinado de ejecución; ejemplo, un permiso. Todavía más, hay
ocasiones en que el acto administrativo es permanente, indefinido, como en el
caso de un privilegio de impuesto durante la vida de una empresa.
Una consecuencia de la ejecutoriedad de los actos administrativos es la regla del
solve et repete, que consiste en asegurar el interés fiscal para que la acción
judicial se inicie.
El acto administrativo puede ejecutarse, agotándose de una solo vez (multa). Sin
embargo hay ocasiones en que no se agota en una sola vez, sino que tiene un
tiempo determinado de ejecución; ejemplo, un permiso. Todavía más, hay
ocasiones en que el acto administrativo es permanente, indefinido, como en el
caso de un privilegio de impuesto durante la vida de una empresa.
Los requisitos que debe contener es que sea licito, cierto, posible y determinado.
• Presunción de legitimidad:
• Alcance:
Efectos:
No necesita declaración
La anulación solo es a petición de partes
Necesidad de alegar la ilegitimidad
Necesidad de probar la ilegitimidad
Ejecutoriedad administrativa
Instrumentalizad publica administrativa
Ejecutividad:
Requisitos: el acto para tener ejecutividad debe ser regular y esta notificado.
Clases:
Suspensión de la ejecutoriedad:
Clases:
Estabilidad:
Impugnabilidad:
Las leyes retroactivas, o las dicta el legislador común o las expide el Constituyente
al establecer los preceptos del Código Político. En el primer caso, no se les podrá
dar efecto retroactivo, en perjuicio de alguien, porque lo prohíbe la Constitución;
en el segundo, deberán aplicarse retroactivamente, a pesar del artículo 14
constitucional, y sin que ello importe violación de garantía individual alguna. En la
aplicación de los preceptos constitucionales hay que procurar armonizarlos, y si
resultan unos en oposición con otros, hay que considerar los especiales como
excepción de aquellos que establecen principios o reglas generales. El legislador
constituyente, en uso de sus facultades amplísimas, pudo, por altas razones
políticas, sociales o de interés general, establecer casos de excepción al principio
de no retroactividad, y cuando así haya procedido, tales preceptos deberán
aplicarse retroactivamente. Para que una ley sea retroactiva, se requiere que obre
sobre el pasado y que lesione derechos adquiridos bajo el amparo de leyes
anteriores, y esta última circunstancia es esencial.
1. - Revocación administrativa
2. - Rescisión
3. - Prescripción
4. - Caducidad
5. - Término y condición.
6. - Renuncia de derechos.
El acto que se revoca puede tener vicios de forma o de fondo y por tal motivo es
ilegal. En las concesiones puede verse la revocación de ese acto por razón de
interés social cuando el estado ya no pretende concesionar la prestación de un
servicio público o la explotación de bienes de propiedad pública o simplemente
cuando el concesionario no ha cumplido con la ley que regula la concesión. La
rescisión administrativa como forma de extinción de los actos administrativos, es
oportuno verla en los contratos o convenios administrativos y consiste en la
facultad que tienen las partes en ese acto jurídico bilateral en resolver o dar por
terminadas sus obligaciones, en caso de incumplimiento de una de ellas, esta
medida debe quedar plenamente señalada en una de las cláusulas que se
contienen en el citado documento jurídico.
Concepto
Modalidades
Es indudable que cualquier vicio que pueda afectar al acto administrativo resulta,
precisamente, de la infracción al ordenamiento jurídico que lo regula. En el ámbito
del derecho administrativo, como con- secuencia de la aplicación del principio de
la seguridad jurídica, la regla general en materia de vicios es la anulabilidad,
aplicándose sólo excepcionalmente y con criterio restrictivo, la nulidad absoluta
para de- terminadas causas tasadas. Por otra parte, existirán los vicios
intrascendentes o irrelevantes que no darán lugar a la invalidez. Tal es el caso del
derecho positivo, donde la regla general consiste en que los vicios del acto
administrativo dan lugar a la anulabilidad del mismo (art. 20, LOPA) con dos
excepciones:
i) Los supuestos de vicios de nulidad absoluta (art. 19, LOPA); y ii) los
supuestos de vicios intrascendentes que no dan lugar a la invalidez, y que
analizaremos más adelante.
Por revocación del acto administrativo debe entenderse la retirada del acto por
parte de la Administración sin que se haya interpuesto recurso por parte del
interesado.
2.1 Cosa juzgada formal. Habrá dicho caso, cuando el particular afectado ya no
pudiere impugnar el acto administrativo por haberse agotado los recursos.
Según Fritz Fleiner, un prestigioso doctrinario alemán del siglo XX, “…un acto
administrativo contra el interés público es insubsistente…” (Fleiner, Fritz:
“Instituciones de Derecho administrativo”. Barcelona: Labor, 8ª ed.).
En esto último, “la contraposición es más aparente que real, al punto que pudiera
consistir simplemente en que lo que para unos es la regla, para otros es la
excepción…” (Villagra Maffiodo, Salvador: “Principios de Derecho administrativo”.
Asunción: Llamas).
4.1 La prevalencia del interés público sobre el interés particular, y así mismo lo
establece la Carta Magna vigente (art. 128º, C.N.).
Los efectos de los actos reglamentarios, una vez expedidos como actos
administrativos, son revocables por derogación reglamentaria (si fuera total) o por
abrogación (si fuese parcial).
Los actos individuales reglados pueden ser de dos clases: los de ejecución única y
los de ejecución sucesiva.
7.1 Actos individuales reglados de ejecución única. Por ser de esta naturaleza,
deben ser irrevocables, debido a la invariabilidad del supuesto de hecho y el
carácter definitivo de la decisión administrativa, exactamente como en la “res
iudicata” del derecho común. El doctor Villagra, menciona como ejemplo, la
liquidación de un impuesto determinado, que pagada, agota todos sus efectos.
7.2 Actos individuales reglados de ejecución sucesiva. Se menciona que los
mismos, deben ser irrevocables, porque, habiéndose pronunciado la autoridad
sobre la procedencia del supuesto de hecho, la seguridad jurídica exige que no se
la pueda cambiar posteriormente, por ejemplo, por un cambio de criterio o de
interpretación sobre aquello que ya se hallaba resuelto. El profesor Villagra, brinda
un ejemplo claro: el caso de la jubilación otorgada, precisamente, por el
cumplimiento de los requisitos exigidos legalmente de la misma.
Los actos individuales discrecionales son los que el administrador efectúa por
facultaciones legales específicas, en ciertos ámbitos y circunstancias, en las que
no se puede prever los casos y efectos en la gestión administrativa, siempre y
cuando se responsabilice a aquel actor.
Los actos individuales discrecionales, son: los de ejecución única para situaciones
invariable, los de ejecución sucesiva para situaciones invariables y los actos
discrecionales para circunstancias variables.
10. CADUCIDAD.
Puede tener normalmente efecto ex nunc, pero puede ser ex tunc (como en la
declaración de nulidad, si la ley, en vista de la gravedad de la trasgresión, ha
querido darle, ex profeso, ese efecto).
El gobierno federal es “el poder público que emana del pueblo, por el cual ejerce
su soberanía nacional y representa jurídicamente a la nación”. El gobierno está
constituido por los Poderes de la Unión, para el ejercicio del poder público:
-Poder legislativo: integrado por la Cámara de Diputados, la Cámara de
Senadores y la Comisión Permanente del Congreso de la Unión.
El art. 136 constitucional establece que las legislaturas de los estados también
forman parte del poder legislativo federal. Exluyendo de manera tajante al distrito
federal.
Ser ciudadano mexicano por nacimiento y estar en pleno goce y ejercicio de sus
derechos civiles y políticos.
IV-B. SE DEROGA.
V. SECRETARÍA DE INFRAESTRUCTURA.
X. SECRETARÍA DE TURISMO.
Un municipio es una entidad administrativa que puede agrupar una sola localidad
o varias, que puede hacer referencia a una ciudad, pueblo o aldea.
Un síndico cuando el municipio tenga una población menor de 500 mil habitantes,
y dos síndicos cuando tenga una población de más de 500 mil habitantes.
Diez regidores, cuando se trate de municipios que tengan una población de menos
de 150 mil habitantes (seis electos por planilla según el principio de mayoría
relativa
Trece regidores, cuando se trate de municipios que tengan una población de más
de 150 mil y menos de 500 mil habitantes
2.-La L.O.A.P.F. a sido creada con los propósitos de una reforma administrativa
que pretende básicamente, programar la actividad de la Administración pública,
jerarquizar sus objetivos y aprovechar óptimamente sus recursos.
3.-En México el Poder Ejecutivo Federal del gobierno es ejercido por el Presidente
de la República cuya denominación oficial es Presidente Constitucional de los
Estados Unidos Mexicanos.
4.-La Administración Pública Federal será centralizada y paraestatal conforme a la
Ley Orgánica que expida el Congreso, que distribuirá los negocios del orden
administrativo de la Federación que estarán a cargo de las Secretarías de Estado
Teoría Civilista
La Función pública es una relación de derecho civil, por cuanto la misma exige
capacidad, consentimiento entre las partes y existen prestaciones recíprocas,
pues el empleado proporciona sus servicios y a cambio recibe del Estado la
correspondiente remuneración.
Ley 4ª de 1913
Bajo esta ley se rige el Código de Régimen Político y Municipal, en el Titulo VIII se
refiere a la Administración pública y establece las normas que le atañen en cuanto
a la forma de acceso al empleo público, las sanciones, licencias, renuncias, faltas;
y en general todo lo relacionado con el régimen laboral del empleado público.
Ley 10 de 1934:
Esta ley distingue entre los empleados particulares y aquellos cuyo empleador o
contratante es el estado.
Ley 6 de 1945:
Igualdad de Oportunidades
Merito
Moralidad
Eficacia
Imparcialidad
Publicidad
2. El monto de sus percepciones salariales debe ser acorde con las funciones
desempeñadas;
5. Los que gozan de dicha prerrogativa únicamente pueden ser cesados por causa
justificada prevista legalmente; y,
6. En los casos de supresión de plazas, los afectados tienen derecho a que se les
otorgue otra equivalente a la suprimida o a la indemnización de ley.
Empresas:
I. La jornada diaria máxima de trabajo diurno y nocturno será de ocho y siete horas
respectivamente. Las que excedan serán extraordinarias y se pagarán con un
ciento por ciento más de la remuneración fijada para el servicio ordinario. En
ningún caso el trabajo extraordinario podrá exceder de tres horas diarias ni de tres
veces consecutivas;
II. Por cada seis días de trabajo, disfrutará el trabajador de un día de descanso,
cuando menos, con goce de salario íntegro;
III. Los trabajadores gozarán de vacaciones que nunca serán menores de veinte
días al año;
IV. Los salarios serán fijados en los presupuestos respectivos sin que su cuantía
pueda ser disminuida durante la vigencia de éstos, sujetándose a lo dispuesto en
el artículo 127 de esta Constitución y en la ley. En ningún caso los salarios podrán
ser inferiores al mínimo para los trabajadores en general en las entidades
federativas.
VII. La designación del personal se hará mediante sistemas que permitan apreciar
los conocimientos y aptitudes de los aspirantes. El Estado organizará escuelas de
Administración Pública;
VIII. Los trabajadores gozarán de derechos de escalafón a fin de que los ascensos
se otorguen en función de los conocimientos, aptitudes y antigüedad. En igualdad
de condiciones, tendrá prioridad quien represente la única fuente de ingreso en su
familia;
XI (sic 05-12-1960). Los trabajadores sólo podrán ser suspendidos o cesados por
causa justificada, en los términos que fije la ley. En caso de separación
injustificada tendrá derecho a optar por la reinstalación en su trabajo o por la
indemnización correspondiente, previo el procedimiento legal. En los casos de
supresión de plazas, los trabajadores afectados tendrán derecho a que se les
otorgue otra equivalente a la suprimida o a la indemnización de ley;
Desde esa perspectiva cobra interés este libro; sólo conociendo el régimen jurídico
de los funcionarios públicos, el conjunto de derechos y obligaciones que integran y
definen su estatuto, puede entenderse hasta qué punto es o no precisa una
reforma del mismo, y con qué alcance. Nos encontramos ante una obra que trata
de priorizar el enfoque práctico de la problemática funcionarial, procurando ofrecer
respuestas a las cuestiones y problemas que con mayor frecuencia derivan de la
relación de prestación de servicios, y lo hace tanto desde la perspectiva doctrinal,
como primordialmente desde la que proporcionan las decisiones, no siempre
coincidentes, que se han ido emitiendo por los distintos Tribunales de justicia; y
así, se aborda el régimen jurídico del funcionario, desde el momento en el que se
produce su ingreso en la Administración, hasta la pérdida de su condición de tal,
habitualmente a través de la jubilación, pero sin olvidar otras causas como la
renuncia, la inhabilitación, etc. Ya en el mismo momento del ingreso en la función
pública se manifiesta la conflictualidad de la relación de servicio, a través de los
mecanismos de selección del personal, las oposiciones y sus requisitos, la
publicidad de las convocatorias, la posibilidad de subsanación de las solicitudes,
los concursos -con la frecuente discusión en torno a los méritos y su baremación-,
la composición de los órganos de selección, o los recursos contra sus decisiones;
todo ello sin olvidar la selección del personal interino o las bolsas de trabajo y los
criterios de su formación. Una vez ingresado el funcionario, surge su carrera
administrativa, a través de la cual va a ir consolidando sus logros y ascendiendo
progresivamente a través de los sucesivos grupos o escalas, a puestos de mayor
cualificación profesional; instrumentos como la promoción interna, o la superación
de cursos de perfeccionamiento generan asimismo no pocos problemas. Como
también los produce la movilidad y el uso, cada vez más frecuente, de la libre
designación por parte de las diferentes Administraciones públicas, para premiar no
tanto la confianza profesional como la fidelidad política del afectado, así como el, a
veces abusivo, empleo de mecanismos de desempeño temporal de los puestos de
trabajo, tales como las comisiones de servicio o las adscripciones provisionales.
En la necesidad de coordinar las necesidades personales del funcionario y las de
la Administración, está asimismo el origen de las diferentes situaciones
administrativas, tales como los servicios especiales, la expectativa de destino, la
excedencia forzosa, o las distintas modalidades de excedencias voluntarias por
interés particular, por cuidado de familiares o hijos, por prestación de servicios en
el sector público, por violencia de género, etc., debiendo conocerse con la
necesaria precisión –y a ello tiende la presente obra- los supuestos en que
procede pasar a cada una de tales situaciones, así como los efectos que de la
misma derivan para el funcionario, no sólo retributivos, sino en materia de
antigüedad o derechos pasivos, entre otros.
También, por supuesto, se tratan de forma individualizada los deberes que pesan
sobre el funcionario público, entre los que pueden destacarse su sometimiento a
jornada y horario, en sus diferentes modalidades, el deber de residencia, de
neutralidad política, responsabilidad, conocimiento de la lengua autonómica,
subordinación a los superiores, lealtad, así como los vinculados a su capacidad y
actitud profesional. Y, obviamente, mereciendo un tratamiento especial, los
derivados del régimen de incompatibilidades a los que está sujeto el servidor
público, tanto respecto a sus actividades públicas como privadas. Vinculado a este
apartado, se estudia la responsabilidad del funcionario, primordialmente la de
índole disciplinario, las distintas faltas en que puede incurrir, las sanciones que
proceden, órgano al que corresponde su imposición, procedimiento a observar,
con sus trámites –pliego de cargos, actividad probatoria, plazo para resolver,..- y
las imprescindibles garantías que todo Estado de Derecho impone al ejercicio de
la potestad sancionadora por parte de los poderes públicos.
Como se puede evidenciar, los trabajadores firman un contrato laboral con sus
empleadores y por lo tanto se someten a lo estipulado en dicho acuerdo de
carácter legal, pero los contratantes puede violentar con facilidad los derechos de
los trabajadores al obligarles o presionarles a laboral horas extras, prestar sus
servicios de domingo a domingo, para las horas nocturnas y dominicales al precio
que anhelen, etc. Entre otros tantos sucesos que acontecen, por ello, los
trabajadores no encuentran más respaldo jurídico después haber agotado el uso
de instancias legales, que acudir a su derecho constitucional de asociación y
huelga.
Por otra parte, existen leyes nacionales que respaldan el derecho de asociación y
huelga, a saber: Ley 584 de 2000, Amplia los criterios de la libertad sindical y
procuró adecuar las normas sobre libertad sindical a los principios y preceptos de
la Constitución de 1991 y a los Convenios 87 y 98 de la OIT. Decreto 2813 de
2000, Reglamenta el artículo 13 de la Ley 584 en lo relativo a los permisos
sindicales en el Sector Público. Ley 581 de 2001. Por medio de la cual se busca
combatir la discriminación en materia de empleo y ocupación reglamentando "la
adecuada y efectiva participación de la mujer en los niveles decisorios de las
diferentes ramas y órganos del poder público, etc. Leyes que respaldan el derecho
en mención.
3. Como ya se vio, debe existir un nexo lógico entre los motivos (la falta) y el
contenido de la medida que se adopte así como la adecuación de esta al fin
debido de interés público, clara expresión del principio de razonabilidad, y , por
cierto, con ajuste a los de buena fe e igualdad. No hay allí discrecionalidad si bien
puede hablarse de límites internos de esta. Existen otros externos ya que se exige
la competencia, el procedimiento correspondiente, la forma y la configuración de
los presupuestos de hecho.
4. ¿No hay falta (disciplinaria, en la función pública) sin ley? En cuanto al principio
Nullum crimen sine lege, corresponde atender, en primer lugar, un aspecto formal
ya que varios Estatutos de funcionarios se aprueban por acto reglamentario en
virtud de mandato constitucional (arts. 63, 107, 204); podremos hablar, entonces,
de regla de derecho pero no necesariamente de ley (formal)