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TEÓRICOS

Sobre el mecanismo psíquico de los fenómenos histéricos (1893)


Charcot: Dedicó su atención a la histeria, consiguió demostrar una regularidad y una ley donde la observación
clínica deficiente o desatenta de otros sólo había visto simulación. Enseñó a comprender las parálisis traumáticas,
histeria traumática: Un individuo sano es sorprendido por un trauma q debe ser grave (se conecta con la
representación de un peligro mortal, pero no hay una lesión real grave) y debe tener relación particular con una parte del
cuerpo. Charcot producía la parálisis artificialmente por medio de la hipnosis y el recurso de sugestión. El trauma sería
en todo punto equiparable a la sugestión verbal. El afectado no se encontraba bajo hipnosis cuando se produjo la
parálisis original, pero podemos suponer q durante el trauma estaba en un particular estado mental, q Charcot equipara
al hipnótico artificialmente provocado. La génesis del trauma está determinada de manera unívoca por las
circunstancias del trauma.

Breuer: Caso de Anna O. Histeria común, no traumática, existe una analogía total con la parálisis
traumática, la única diferencia es q allí intervino un gran trauma, mientras q aquí rara vez se comprueba un solo suceso,
sino q hay una historia de padecimiento. El trauma es psíquico, el afecto de terror. A menudo un ocasionamiento solo
no alcanza p fijar un síntoma, pero si este se presenta varias veces con un cierto afecto luego se fija y permanece.
Síntomas frecuentes: anorexia, vómito, insomnio, perturbación del lenguaje. No en todos los casos es tan transparente la
determinación del síntoma por el trauma psíquico, a menudo es una referencia simbólica. Existe un propósito de
expresar el estado psíquico en uno corporal p lo q el uso lingüístico ofrece puentes. El intento de averiguar el
ocasionamiento de un síntoma es al mismo tiempo una maniobra terapéutica. Se puede suponer q el trauma
psíquico llega a su término tan pronto como el paciente se ha declarado sobre él.

Si un ser humano experimenta una impresión psíquica en su sistema nervioso se acrecienta algo q por el
momento llamaremos “suma de excitación”, en todo individuo existe el afán de volver a empequeñecer esa suma de
excitación (principio de constancia). Se acrecienta por vías sensoriales y empequeñece por vías motoras. La reacción
adecuada es siempre la acción, si esta es interceptada el recuerdo conserva el afecto q tuvo en su origen y está dada la
posibilidad de q el suceso en cuestión se convierta en un trauma psíquico. El histérico padece de unos traumas
psíquicos incompletamente abreaccionados (incompletamente tramitados).

Dos grupos de condiciones bajo los q ciertos recuerdos devienen patógenos:


 Si el trauma fue demasiado grande y no hubo posibilidad de tramitarlo, representaciones frente a las cuales
razones sociales imposibilitan la reacción y por último, es posible q la persona no quiera reaccionar frente a un
trauma.
 En otro grupo de casos el motivo no reside en el contenido del trauma, muchas veces descubrimos como
contenido y causa de fenómenos histéricos vivencias q en sí y por sí son del todo ínfimas, pero han cobrado una
alta significatividad por sobrevenir en momentos particularmente importantes de una predisposición patológica
acrecentada. Doble cc, estados anormales de cc llamados hipnoides.
Principal divergencia entre Breuer y F, F rechazaba la hipótesis de los estados hipnoides.

Psicoterapia de la histeria (1895)


Dos dificultades al aplicar el método de Breuer: No todas las personas eran hipnotizables, F debió tomar posición
frente al problema de saber q caracterizaba a la histeria y la deslindaba de las otras neurosis.
Causación de las neurosis, estas eran adquiridas (en oposición a Janet, que hablaba de una histeria hereditaria,
innata), la etiología debía buscarse en factores sexuales (factores sexuales diferentes producían cuadros diversos de
neurosis). Separación de la neurastenia y la neurosis de angustia (no hay mecanismo psíquico por lo q no pueden
ser tratadas por el método catártico) de la neurosis obsesiva y la histeria. Algunas neurosis corrientes se pueden
considerar mixtas (combinación histeria o neurosis obsesiva con neurosis de angustia)

Método catártico: Su eficacia dependerá de q los componentes histéricos tengan relevancia comparados con los
neuróticos, además, no influye sobre las condiciones causales de la histeria y por lo tanto no puede impedir q en lugar de
los síntomas eliminados se generen otros nuevos. Es desaconsejable aplicarlo fuera del marco de una terapia de las
neurosis. F no sostiene haber eliminado todos los síntomas histéricos a los q se aplicó el método, pero opina q los
obstáculos residían en circunstancias personales de esos casos. El método no pierde valor por ser sintomático y no
causal. Cuando ya pasó el ataque histérico agudo el método es satisfactorio y alcanza éxitos plenos y duraderos. En la
histeria aguda modificará poco en la impresión y trayectoria del caso clínico. Es en la trata de histerias de trayectoria
crónica cuando uno lamenta la falta de una terapia de eficacia causal. No todos los síntomas son psicógenos pero todos
pueden ser eliminados mediante un tratamiento psicoterapéutico.

El procedimiento es trabajoso, insume mucho tiempo, supone gran interés por los hechos psicológicos y una
simpatía personal hacia los enfermos, q deben poseer un cierto nivel de inteligencia y confiar plenamente.
No sería hipnotizable quien tuviera un reparo psíquico contra la hipnosis, lo exteriorizara o no como un no querer.
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En la primera entrevista preguntaba al paciente q recordaba de la ocasión primera de su síntoma, les ordenaba
acostarse y cerrar los ojos p concentrarse, sin mediar hipnosis afloraban nuevos y remotos recuerdos. Mediante el
trabajo psíquico F tenía q superar en el paciente una fuerza q contrariaba el recordar de las representaciones patógenas,
esa podría ser la misma fuerza psíquica q cooperó en la génesis del síntoma (idea de defensa). La tarea del terapeuta
consistía en superar esa resistencia de asociación mediante un trabajo psíquico.
Presión sobre la frente: Podría utilizar cualquier otra señal, lo q hace es disociar la atención del enfermo de su busca
y meditación cc. Le aseguraba q mientras durase la presión vería un recuerdo en forma de imagen o un pensamiento
como ocurrencia q debía comunicarle, fuere cual fuere. No siempre aflora un recuerdo olvidado, los recuerdos patógenos
no están tan en la superficie, emerge una representación q es un eslabón de la cadena de asociación hacia la buscada.
En otros casos aparece un recuerdo sabido p el enfermo, pero q causa asombro pq se olvidó su vínculo con la
representación de partida. Este procedimiento no es más q un ardid p sorprender por un momento al yo q se place en la
defensa, en todos los casos serios este vuelve a sus propósitos y prosigue la resistencia. Al recuerdo patógeno se lo
discierne por el hecho de q los enfermos lo tildan de inesencial y lo enuncian sólo con resistencia.

Histeria de defensa: se genera por la represión desde la fuerza motriz de la defensa de una representación
inconciliable. La representación reprimida se vuelve una huella mnémica debilitada, y el afecto inerva una zona del
cuerpo (conversión de la excitación). En virtud de la represión la representación se vuelve patógena.

Breuer hablaba de histeria hipnoide y Charcot de histeria de retención, pero F dice no haber visto nunca estos casos
(siempre actúa la defensa)

El material psíquico de una histeria (ordenamiento del material patógeno) se figura como un ordenamiento
multidimensional de triple estratificación, hay un núcleo de recuerdo en los cuales ha culminado el momento
traumático.
 Ordenamiento lineal cronológico: Tiene lugar dentro de cada tema singular. Afloran cada vez en un orden
cronológico y tienen la peculiaridad de invertir en la reproducción, la secuencia de su génesis.
 Estratificación de manera concéntrica en torno del núcleo patógeno: Son estratos de resistencia, creciente
esta última hacia el núcleo. Y con ello zonas de igual alteración de cc dentro de las cuales se extienden los
temas singulares. (Tiene una etiología sexual q F aún no puede conceptualizar)
 Ordenamiento según el contenido de pensamiento: Es según el contenido de pensamiento, el enlace por los
hilos lógicos llega hasta el núcleo, carácter dinámico, determinismo múltiple (sobredeterminación del síntoma),
camino irregular y de múltiples vueltas. Posee un carácter dinámico, por oposición al morfológico de las otras
estratificaciones. Red con puntos nodales, sobreterminación del síntoma.

Es infructuoso avanzar en forma directa hasta el núcleo de la organización patógena. La terapia consiste en
disolver la resistencia y así facilitar a la circulación el camino por un ámbito antes bloqueado.

Resistencia:
 De asociación: Una fuerza que contraría el devenir consciente de las representaciones patógenas. Es la misma
fuerza que cooperó en la génesis del síntoma.
 Radial: Articulada al núcleo patógeno. Núcleo patógeno: núcleo de recuerdos en los cuales ha culminado el
momento traumático En torno al núcleo hallamos material mnémico de diversa índole en el análisis que es
preciso relaborar.

El estrechamiento de cc se lleva a cabo por el intento de reprimir un recuerdo el cual le genera resistencias al
enfermo. La relaboración tropieza con dificultades, y el paso a la conciencia se obstruye. Este material patógeno se
filtrará y alcanzará la cc como descompuesta en fragmentos. La terapia tiene que recomponer la organización
conjeturada. Avanzar directamente hacia el núcleo es infructuoso. Primero hay que mantenerse en la periferia del
producto psíquico patógeno, superando leves resistencias mediante el método de la presión, para avanzar un breve
trecho; luego el enfermo empieza a colaborar por sí solo, siguiendo este camino, y aportando material que será
importante más adelante, aunque ahora se presente inconexo (ensanchamiento periférico). Para adentrarse más hay que
adueñarse de un tramo del hilo lógico. Los relatos del enfermo poseen lagunas y enlaces falsos, el nexo está roto, y por
detrás de estos puntos débiles se puede acceder a los estratos más hondos, facilitado por el procedimiento de la presión.

Fenómeno de la intromisión: El síntoma reaparece, surge con intensidad reforzada tan pronto como uno ha entrado en
la región de la organización patógena q contiene su etología. Esta oscilación de la intensidad del síntoma se repite cada
vez q uno ataca un recuerdo nuevo.

Respecto al fracaso del procedimiento de la presión puede ser que no haya nada para recoger, que haya una
resistencia, o que el nexo entre el paciente y el analista esté perturbado. Éste obstáculo sobreviene en tres casos:

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 Enajenación personal: paciente se siente menospreciada o desconfía del médico o el tratamiento; se resuelve
por esclarecimiento
 Miedo al acostumbramiento: dependencia
 Enlace falso: transferencia de las representaciones penosas al médico. Primero aflora en la cc el contenido del
deseo sin los recuerdos colaterales (contextuales), y en virtud a la compulsión de asociar, se toma al analista
como sujeto del deseo; despierta el mismo afecto que en su momento ese deseo. Éste es un síntoma
neoproducido y hay que tratarlo como un síntoma antiguo. Para la paciente el trabajo sigue siendo superar el
afecto penoso por tal representación, y es indiferente si el tema es el pasado o el reciente

Estudios sobre la Histeria (1895) – Elizabeth Von R y Cäcilie M


Elizabeth:
Dolores en las piernas, de naturaleza imprecisa e intensidad variable y problemas al caminar. Había muerto su
padre, luego su madre debió operarse los ojos y después murió su hermana.
Apego al padre enfermo, q quería un hijo varón, descontento con su condición de mujer. El comienzo de la
afección se entramó con el período de cuidado del enfermo.
Tras un año de luto la hermana mayor se casó y se fue a vivir lejos, aumentando la soledad de la madre. Luego
de la operación ocular las familias se encontraron en una residencia veraniega, allí fue el estallido de los dolores de E.
Murió la hermana menor embarazada, el cuñado se alejó de la familia.
Bajo presión en la frente confesó q había pasado una tarde con un joven, cuando volvió se enteró q el estado del
padre había empeorado. Conflicto, la representación erótica de la asociación y el afecto a ella adherido fue aplicado p
elevar o reanimar un dolor corporal presente en forma simultánea (conversión con el fin de la defensa).
Otras vivencias del tiempo de cuidado del enfermo, piernas doloridas, apoyaba la pierna del padre en la suya p
cambiarle las vendas. Agrupó las escenas conectadas dolorosas según en ellas hubiera estado sentada o de pie
(stehen).
Pregunta por las circunstancias y causas de la primera emergencia de los dolores -> residencia veraniega
charlas con el cuñado. Representación inconciliable (frente a la muerte de la hermana “él está de nuevo libre y puedo
convertirme en su esposa”), actuó la defensa.

El círculo de representaciones de sus deberes hacia el padre enfermo entró en conflicto con el contenido
q tenía su ansiar erótico. Ella desalojó la representación erótica de su cc y trasmudó su magnitud de afecto a
una sensación de dolor somático. Un conflicto similar sucedió años después y condujo a un aumento de esos
mismos dolores.
Los dolores histéricos se generaron al mismo tiempo q se formó aquel grupo psíquico separado. E oponía gran
resistencia al intento de establecer la asociación entre el grupo separado y sus restantes contenidos de cc, y cuando esa
reunión se consumó sintió un gran dolor psíquico.
El motivo de la escisión de la cc era la defensa, y el mecanismo era la conversión. Ganancia de E q se
había sustraído de un estado psíquico insoportable a costo de una anomalía psíquica (la escisión de cc
consentida) y un padecer corporal. Determinismo del síntoma (¿por q dolores en las piernas?) base orgánica del
primer ataque, q estuvo presente en la cc de manera simultánea a aquellas excitaciones, y porque se enlazaba de
múltiples modos con el contenido de representación de aquella época.

Cäcilie M:
Toda una serie de sensaciones corporales en ella eran de origen psíquico o provistas de interpretación
psíquica. El dolor aflojaba cuando se resolvía el problema respectivo. Simbolización. Neuralgia facial, observación del
marido, grave afrenta “fue como una bofetada”. La neuralgia había pasado a ser por el camino de la conversión, el signo
distintivo de una determinada excitación psíquica, pero en lo sucesivo pudo ser despertada por eco asociativo desde la
vida de los pensamientos por conversión simbolizadora. Dolor en el talón derecho, miedo a no “andar derecha” en una
reunión. Dolor de cabeza, mirada penetrante de la abuela. Anudamiento entre dolor y afecto psíquico, donde el lenguaje
funciona como puente.

SEMINARIOS
Etiología de la histeria (1896)
Para que una escena traumática pueda llevar a un síntoma histérico (eficacia traumática) hay dos condiciones:
que posea idoneidad determinadora y fuerza traumática. Hallamos q a veces tras una primera escena traumática q
no explica nada se esconde una segunda. Ningún síntoma histérico puede surgir de una vivencia real sola, sino q
todas las veces el recuerdo de vivencias anteriores, despertado por vía asociativa, coopera con la causación del
síntoma. Desde una escena se alcanzan al mismo tiempo dos o más recuerdos, una escena singular puede ser evocada
varias veces dentro de la misma cadena. Una vivencia q pertenece a dos cadenas asociativas es un punto nodal.

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Infaliblemente se terminar por llegar al ámbito del vivenciar sexual. Vivencias traumáticas que tienen en
común sexualidad y período de la pubertad, pero son muy heterogéneas y de valor dispar. Mientras q algunas se
pueden reconocer como traumas graves, en otros casos son de asombrosa nimiedad, no son propicias p entender la
causación de los síntomas. Además, estas vivencias pueden carecer de idoneidad determinadora.
Uno debe buscar el determinismo de estos síntomas en otras vivencias q se remonten todavía más atrás. En la
base de todo caso de histeria se encuentran una o varias vivencias de experiencias sexuales prematuras y
pertenecientes a la tempranísima niñez. Estas vivencias infantiles son de contenido sexual uniforme, y son
experiencias sexuales en el cuerpo propio, de un comercio sexual. Antes del análisis los enfermos nada saben de estas
escenas. Hay casos en q se obtiene un éxito terapéutico total o parcial sin q se haya debido descender hasta ellas, pero
no se está a salvo de recidivas. El fundamento para la neurosis sería establecido por los adultos, seducción previa de
los niños por un adulto. Es cierto q muchas personas no se han vuelto histéricas pese a esas vivencias, hay otros
factores como la constitución heredada y personal, la sustantividad interior de las vivencias sexuales infantiles, su
frecuencia, etc. Para q la enfermedad devenga manifiesta es preciso q sean rebalsados ciertos valores de umbral.
La defensa alcanza este propósito suyo de esforzar fuera de la cc la representación inconciliable cuando en la
persona en cuestión, hasta ese momento sana, están presentes unas escenas sexuales infantiles como recuerdos Icc y
cuando la representación q se ha de reprimir puede entrar en un nexo lógico o asociativo con una de tales vivencias
infantiles.
Los síntomas histéricos son retoños de unos recuerdos de eficiencia Icc. No importa la sola existencia de
las vivencias sexuales infantiles sino q estas tienen q estar presentes como recuerdos Icc.
Si alguien no tiene unas vivencias sexuales más tempranas, a partir de ese momento ya no puede quedar
predispuesto a la histeria.
Mecanismo de la formación del síntoma histérico, los síntomas histéricos son sobredeterminados. La
reacción de los histéricos es exagerada sólo en apariencia, tiene q aparecérsenos así porque nosotros sólo tenemos
noticia de una pequeña parte de los motivos por los cuales brota.
El papel etiológico de las vivencias sexuales infantiles no se limita al campo de la histeria, sino q rige de
igual manera p la neurosis de las representaciones obsesivas, y aun quizá p las formas de paranoia crónica y otras
psicosis funcionales.

Psicopatología de la vida cotidiana: Recuerdos de infancia y recuerdos encubridores (1901)


Naturaleza tendenciosa del recordar, la memoria no reproduce lo correcto, sino algo diverso como
substituto. Los recuerdos indiferentes de la infancia deben su existencia a un proceso de desplazamiento son el
sustituto, en la reproducción mnémica, de otras impresiones de efectiva sustantividad cuyo recuerdo se puede desarrollar
a partir de ellos por medio de un análisis psíquico. Deben su conservación no a su contenido propio sino a un
vínculo asociativo de su contenido con otro, reprimido.
Particularidad temporal entre el recuerdo encubridor y el encubierto.
 Atrasador o retrocedente: El contenido del recuerdo encubridor pertenecía a uno de los primeros años de
infancia mientras q las vivencias de lo pensado q él remplazaba de la memoria y q habían permanecido casi Icc
correspondían a años posteriores.
 Adelantadores o avanzados: Se consolida en la memoria como recuerdo encubridor una impresión indiferente
reciente, q sólo debe ese privilegio a su enlace con una vivencia anterior, cuya reproducción directa es estorbada
por resistencias. Aquí la memoria se sitúa en el orden del tiempo detrás del recuerdo encubridor.
 Simultáneos o contiguos: El recuerdo encubridor no se enlaza con la impresión encubierta sólo por su
contenido sino también por su contigüidad en el tiempo.

De esos recuerdos de infancia q se llaman los más tempranos no poseemos la huella mnémica real y efectiva,
sino una elaboración posterior de ella. Por lo tanto los recuerdos de infancia son universalmente recuerdos encubridores.

Sobre la justificación de separar de la neurastenia un determinado síndrome en calidad de


“neurosis de angustia” (1895) - 1º TEORIA DE LA ANGUSTIA

Neurosis de angustia, complejo de síntomas relacionados con la angustia. Se observa en forma aislada o en
combinación con otras neurosis (neurosis mixta). Sintomatología: Irritabilidad general, expectativa angustiada, ataques
de angustia, terrores nocturnos, vértigo, perturbaciones digestivas, parestesias, etc.
Una representación se vuelve compulsiva por el enlace con un afecto disponible. Este afecto es monótono
(siempre el de la angustia), no proviene de una representación reprimida, sino q al análisis psicológico se revela no
susceptible de ulterior reducción, así como no es atacable mediante psicoterapia.
Hay razones para considerar adquirida la neurosis, factores de eficiencia etiológica serie de nocividades e influjos
q parten de la vida sexual. La noxa sexual descubierta constituye verdaderamente el factor etiológico de la
neurosis.

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La angustia q está en la base de los fenómenos de esta neurosis no admite ninguna derivación psíquica. Se
trata de una acumulación de excitación de origen somático y naturaleza sexual. El mecanismo de la neurosis de
angustia ha de buscarse en ser desviada de lo psíquico la excitación sexual somática y recibir, a causa de ellos, un
empleo anormal.
Neurosis actuales: Se genera neurastenia toda vez q el aligeramiento adecuado es sustituido por uno menos
adecuado. La neurosis de angustia se produce cuando la excitación sexual somática desviada de la psique se gasta
subcorticalmente, en reacciones de ningún modo adecuadas.

PRÁCTICOS
Las neuropsicosis de defensa (1894)
Charcot, histeria de retención. Janet la escisión de cc es un rasgo primario de la alteración histérica, de forma
innata. En oposición, Breuer habla de estados de cc particularmente oníricos, con una limitada aptitud p la asociación
(estados hipnoides). La escisión de cc es secundaria, adquirida, se produce en virtud de q las representaciones q afloran
en estados hipnoides quedan segregadas del comercio asociativo de la cc.
F, la escisión del contenido de cc es consecuencia de un acto voluntario del enfermo (es secundaria, no
primaria). No se propone la escisión, sino q su meta es otra pero no la alcanza y se genera la escisión de cc. Histeria
de defensa (separada de histeria hipnoide e histeria de retención), histeria adquirida. Sobrevino un caso de
inconciabilidad en su vida de representaciones q despertó un afecto tan penoso q la persona decidió olvidarla.
(Ahuyentar la cosa, sofocarla, no pensar en ella). Ese olvido no se logró, sino q llevó a diversas reacciones patológicas q
provocaron una histeria, una representación obsesiva o una psicosis alucinatoria. Una vez q la huella mnémica y el
afecto adherido a la representación están ahí ya no se pueden extirpar, una solución aproximada es convertir esa
representación intensa en una débil, arrancarle el afecto.

Supuesto compartido por todas las teorías: los síntomas histéricos se deben a una escisión de la conciencia con
grupos psíquicos separados. El síntoma es una representación sustitutiva de la representación disociada en la cc.
Su presencia es un testimonio del conflicto psíquico a raíz del cual operó la defensa.

Histeria: el modo de volver inocua la representación es trasponer a lo corporal la suma de excitación


(conversión). La conversión puede ser total o parcial, el yo ha quedado así exento de contradicción; la huella mnémica
de la representación reprimida no ha sido sepultada sino q forma en lo sucesivo el núcleo de un grupo psíquico
segundo (antecedente conceptual del Icc).
El efecto del método catártico de Breuer consiste en volver a guiar la excitación, con cc de la meta de lo corporal
a lo psíquico, y descargar la excitación por medio del habla. La hipnosis ensancha la cc y vuelve asequible el grupo
psíquico escindido.
No discernimos el factor característico de la histeria en la escisión de cc sino en la aptitud p la conversión, esta
capacidad solo lleva a la histeria en caso de una inconciabilidad psíquica o de un almacenamiento de excitación.

Neurosis obsesiva: Si en una persona predispuesta a la neurosis no está la capacidad convertidora la fuerza del
afecto permanece en el ámbito psíquico, este afecto liberado se adhiere a otras representaciones, en si no
inconciliables, q en virtud de este “enlace falso” devienen representaciones obsesivas. En todos los casos analizados
era la vida sexual la q había proporcionado un afecto penoso de la misma índole q el afecto endosado a la
representación obsesiva. El afecto de la representación obsesiva aparece como dislocado, trasportado. La ventaja
obtenida por el yo tras este transporte es mucha menor q en el caso de la conversión.

Otras formas de defensa: Existe una modalidad defensiva más enérgica y exitosa q consiste en q el yo desestima la
representación insoportable junto con su afecto y se comporta como si la representación nunca hubiera comparecido.
Solo q en el momento en q ha conseguido esto la persona se encuentra en una psicosis, confusión alucinatoria.

Hipótesis auxiliar: En las funciones psíquicas cabe distinguir algo (monto de afecto, suma de excitación) q tiene todas
las propiedades de una cantidad, algo q es susceptible de aumento, disminución, desplazamiento y descarga, y se
difunde por las huellas mnémicas de las representaciones como lo haría una carga eléctrica por la superficie de los
cuerpos.

La proton pseudos histérica – Emma (1895)


(Proton pseudos: premisa mayor falsa que da una conclusión falsa)

La compulsión histérica es un proceso primario, y la fuerza que mueve este proceso es la defensa del Yo.
Sucede en el ámbito sexual.

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Emma salió de una tienda presa de un afecto de terror, al pensar que se reían de su vestido, y un empleado le
gustó sexualmente. Sin embargo, los recuerdos despertados no explican ni la compulsión ni el determinismo del síntoma.
Hay un segundo recuerdo, que tuvo en el momento de la Escena I. Siendo una niña fue dos veces a una
pastelería y el encargado le pellizcó los genitales. Se reprochó haber ido una segunda vez. La escena I se entiende por
la escena II. La conexión asociativa entre ambas es la risa, que en la escena I le recordaba Icc a la del pastelero de la
escena II. El recuerdo despierta un desprendimiento sexual, que se traspone en angustia, y en miedo a que repitan el
atentado. Devienen cc el desprendimiento sexual (el empleado le ha gustado), el vestido y la risa. Los enlaces falsos son
q se ríen de su vestido, y que un empleado le ha gustado. El material que ha devenido cc es el vestido, la risa, los
empleados y el placer sexual. El atentado y el pastelero quedan Icc. No ingresa en la cc el eslabón de interés, sino un
símbolo de éste, el vestido. El desprendimiento se anuda al recuerdo del atentado, sin embargo, no surgió en la vivencia.
El recuerdo despierta un afecto que la vivencia no despierta, porque la alteración de la pubertad posibilita otra
comprensión de lo recordado. El recuerdo solo con efecto retardado ha devenido trauma.

Manuscrito K (1896)
Existe una tendencia defensiva normal. Es inocua toda vez q se trate de representaciones q en su tiempo
estuvieron enlazadas con displacer, pero son incapaces de cobrar un displacer actual y puede ser superada por interés
psíquico. La inclinación de la defensa se vuelve nociva cuando se dirige contra representaciones q pueden
desprender un displacer nuevo también siendo recuerdos, como es el caso de las representaciones sexuales.
Inquirir de donde proviene el displacer q una estimulación sexual prematura está destinada a desprender y sin el
cual no se explicaría una represión. Dentro de la vida sexual tiene q existir una fuente independiente de desprendimiento
de displacer.
La trayectoria de la enfermedad en las neurosis de representación es en general la misma (fórmula canónica):
1. La vivencia sexual prematura traumática q ha de reprimirse.
2. Su represión a raíz de una ocasión posterior despierta un recuerdo y lleva a la formación de un síntoma primario.
3. Un estadio de defensa lograda, q se asemeja a la salud salvo por la existencia del síntoma primario.
4. El estadio en q las representaciones reprimidas retornas y en la lucha entre estas y el yo se forman síntomas
nuevos. Las principales diferencias entre las neurosis se muestran en el modo en q las representaciones
retornan.

Neurosis obsesiva: la vivencia primaria estuvo dotada de placer, y al recordarse después produce un reproche cc.
Ambos (recuerdo y reproche) son reprimidos y a cambio se forma en la cc un síntoma contrario, algún matiz de
escrupulosidad de la cc moral. La posterior conjugación de esta vivencia pasiva con la vivencia placentera es lo q agrega
el displacer al recuerdo de placer y posibilita la represión (displacer – placer – represión). En el estadio del retorno de
lo reprimido se verifica q el reproche retorna inalterado pero las más veces entra en conexión con un contenido q está
doblemente desfigurado en tiempo y contenido. La curación se obtiene deshaciendo las sustituciones y mudaciones del
afecto halladas, hasta q el reproche primario y su vivencia queden despejados y puedan serles planteados al yo a fin de
q los aprecie de nuevo.

Histeria: Presupone una vivencia displacentera primaria, de naturaleza pasiva (por eso se da más en las mujeres).
Esta vivencia no debe caer en época demasiado temprana cuando el desprendimiento de displacer es todavía muy
pequeño y cuando de manera autónoma pueden seguirle todavía sucesos placenteros, de otro modo sólo se llega a
representaciones obsesivas. La represión no acontece por formación de una representación contraria hiperintensa sino
por esfuerzo de una representación frontera (por una parte pertenece al yo cc y por otra constituye un fragmento no
desfigurado del recuerdo traumático) q desde entonces remplaza al recuerdo reprimido dentro del curso del pensar.

Nuevas puntualizaciones sobre las neuropsicosis de defensa (1896)


Las neuropsicosis de defensa surgían mediante el mecanismo psíquico de la defensa, a raíz del intento de
reprimir una representación inconciliable q había entrado en penosa oposición con el yo del enfermo.
Para la causación de la histeria es preciso q los traumas sexuales correspondan a la niñez temprana y su
contenido tiene q consistir en una efectiva irritación de los genitales. No son las vivencias mismas las q producen
efecto traumático sino sólo su reanimación como recuerdo, después q el individuo ha ingresado en la madurez
sexual.
Todas las vivencias y excitaciones q preparan u ocasionan el estallido de la histeria sólo ejercen su
efecto por despertar la huella mnémica de esos traumas de infancia, huella q no deviene entonces cc, sino q
conduce al desprendimiento del afecto y la represión. Sólo consiguen reprimir el recuerdo de una vivencia sexual
penosa de la edad madura aquellas personas en quienes esa vivencia es capaz de poner en vigor la huella mnémica de
un trauma infantil.

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Neurosis obsesiva:
Las representaciones obsesivas son siempre reproches mudados q retornan de la represión y están
referidos a una acción sexual de la infancia realizada con placer. En el período de la enfermedad se produce el
retorno de los recuerdos reprimidos, por el fracaso de la defensa, de manera casual y espontánea o a consecuencia de
unas perturbaciones sexuales actuales.
Existen dos formas de la neurosis obsesiva según q se conquiste el ingreso a la cc sólo el contenido mnémico de
la acción-reproche, o también el afecto-reproche a ella anudado. Hay formaciones de compromiso entre las
representaciones reprimidas y represoras. Toda vez q una obsesión neurótica aparece en lo psíquico, ella proviene
de una represión. El reproche deviene en vergüenza, hipocondría, angustia social, etc.
Junto a estos síntomas de compromiso la neurosis forma una serie de otros síntomas de origen diverso, defensa
secundaria. La defensa secundaria frente a los afectos obsesivos da por resultado una serie todavía mayor de
medidas protectoras q son susceptibles de mudarse en acciones obsesivas. Medias expiatorias, preventivas,
fobias, etc.
Comparación con la paranoia: En la neurosis obsesiva el reproche inicial ha sido reprimido por la formación del
síntoma defensivo primario: Desconfianza de sí mismo. En la paranoia el reproche es reprimido por proyección, se erige
el síntoma defensivo de Desconfianza hacia otros.

La técnica del chiste (1905)


El chiste es una formación del Icc. Es un modo de decir aquello que no alcanza a ser dicho de otra manera.
El carácter chistoso no está en el pensamiento, sino que hay q buscarlo en la expresión verbal.

Famillonarmente: “Me trató por entero de forma famillonar”. Se ha producido una abreviación, la palabra no chistosa
“familiarmente” ha sido trasmudada en “famillonarmente” en el chiste, y es en ese producto léxico q surge el efecto
risueño.
La técnica del chiste fue en este caso una condensación con formación sustitutiva consistente en producir una
palabra mixta.

Becerro de oro: “Vea como el siglo XIX adora al becerro de oro” “Este ya no es tan joven” Lo q hace reír es q no toma
metafóricamente el becerro de oro.
Baño: “¿Has tomado un baño?” “¿Acaso falta alguno?”
El chiste no reside en la pregunta sino en la respuesta. La técnica consiste en el desvío de la respuesta respecto del
sentido del reproche, desplazamiento. Desvío de la ilación de pensamiento, desplazamiento del acento psíquico a un
tema diverso del comenzado. Es en alto grado dependiente de la expresión literal, no depende de las palabras sino de la
ilación del pensamiento.

Psicopatología de la vida cotidiana: El olvido de nombres propios (1901)


No sólo se produce el olvido sino también un recuerdo falso. Acuden a la cc otros nombres sustitutivos, el
proceso destinado a reproducir el nombre q se busca se ha desplazado (descentrado). Los nombres sustitutivos
mantienen un nexo con el nombre buscado (sobredeterminación). Junto al olvido simple de nombres propios se
presenta también un olvido q está motivado por represión (el olvido es una formación del Icc).

Signorelli: Habían estado hablando de costumbres de los turcos q vivían en Bosnia y Herzegovina. Ante una
enfermedad mortal ellos dicen “Herr (señor), no hay nada más que decir”. Había sacado la atención de otra anécdota
referida a la sexualidad. Estos pensamientos, a su vez, habrían llevado al recuerdo de una noticia que había recibido en
su residencia en Trafoi, de la muerte de un paciente. La reminiscencia de esto se procuró una acción eficiente, al
escabullirse el nombre Trafoi en uno de los sustitutos “Boltraffio”. Había reprimido estos recuerdos, pero lograron ponerse
en conexión asociativa con el nombre Signorelli, de suerte que erró la meta, olvidándolo contra su voluntad, cuando
hubiera querido olvidar lo otro adrede. Los nombres sustitutivos remiten tanto a lo que quería olvidar como a lo que
quería recordar, a modo de compromiso. Los temas reprimidos (muerte y sexualidad) están ligados con Bosnia,
Herzegovina y Trafoi. Elli (un fragmento del nombre) retorna inmodificado en Boticelli. El otro, que se encadena a Her
(señor) y Herzegovina, es reprimido. Su sustituto se produjo por desplazamiento a lo largo de la conexión de nombres.
Los nombres recibieron trato similar a los jeroglíficos (rebus). Las Huellas mnémicas son predisposiciones que
crearon la posibilidad de que el elemento reprimido se apodere vía asociativa del nombre buscado y lo arrastre a
la represión. El elemento sofocado (Signorelli) busca prevalecer en alguna otra parte. En el tiempo q el nombre del
pintor era inasequible para Freud, tuvo hipernítido el recuerdo visual de sus frescos.

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Condiciones p el olvido de un nombre con recordar fallido:
 Cierta predisposición p su olvido
 Un proceso de sofocación transcurrido poco antes
 La posibilidad de establecer una asociación extrínseca entre el nombre en cuestión y el elemento antes
sofocado.

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