Rita es una adolescente de 16 años; que estudia en el colegio
Túpac Amaru. En clases, es una chica que no presta atención a la profesora cuando expone, ya que se distrae con frecuencia. Cada vez que su profesora le hace preguntas, ella empieza a sudar frio y a sacudirse todo el cuerpo, y se queda callada, aveces pide que le repitan algunas cosas, pero igual no comprende, se confunde o tiene dificultades para hablar; cuando suena el timbre para salir a recreo, Rita sale corriendo por encima de las mesas. La profesora al ver la reacción que presenta Rita, inmediatamente informa a sus padres. Al llegar a casa Rita empieza a gritar sin entender lo que dice, nunca obedece y no toma importancia cuando sus padres le aconsejan. Sus padres acuden a un centro de salud más cercano, donde fueron atendidos por una enfermera, conllevando a saber que Sara venía sufriendo esto desde los 5 años; es en esta etapa donde sus padres se dieron cuenta del problema que está pasando su hija. Entonces la enfermera realiza las siguientes intervenciones: consejería sobre cómo controlar su actitud ante una situación crítica para ella y realizar actividades físicas como el yoga, ayudando así a estar más relajada, también se le brinda charlas educativas sobre cómo controlar sus impulsos, gracias a esto Sara empieza a tener una mejor comunicación en el aula y a ser un poco más participativa en clases. Cada vez que el profesor le vuelve a preguntar, Sara empieza a responderle a pesar de las reacciones que su cuerpo ejerce y se dice así misma ¡yo puedo! Y si puede superar esto.