Domingo 13 de Mayo. OJUEM (Orquesta Juvenil Universitaria Eduardo Mata de la
UNAM), el niño y la música. El renacuajo paseador de Silvestre Revueltas y el flautista de Hamelin de Eduardo Angulo.
El renacuajo paseador es una interpretación breve, musical-teatral infantil. La sonoridad
se torna densa en instantes incluyendo disonancias que se vuelven a dirigir a la tonalidad principal, tiene ritmos de música folclórica mexicana, alientos madera y metal, cuerdas, percusiones, shakers y piano, forman capas de sonoridad unas caóticas otras bien definidas, narran la fábula en verso y prosa de una reunión de animales que al final son devorados cómicamente por sus depredadores naturales.
El flautista de Hamelin inspirada en el cuento de los hermanos Grimm, cada
movimiento es una escena del cuento, y la instrumentación representan los lugares, incidentes y los personajes. Muy compleja de describir musicalmente pues sus dinámicas son variantes a cada momento. Los instrumentos van desde toda la sección de cuerdas, metales, maderas, y en las percusiones xilófono, campanas ademas del triángulo, las melodías son virtuosas y cortas, los motivos difíciles de detectar, puedo decir que cada movimiento musicalmente es acorde a la parte teatral, encontramos escenas casuales, alegres, tensas, tristes, apacibles, irónicas y cada una enlazada con las ejecuciones orquestales, desde la plaga de ratas hasta el secuestro de los niños para finalizar con el clímax sonoro con stop times.