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ESCUELA SUPERIOR POLITÉCNICA DE CHIMBORAZO

FACULTAD DE CIENCIAS
CARRERA DE INGENIERÍA EN BIOTECNOLOGÍA AMBIENTAL
TRABAJO EN CLASE
MINERÍA EN EL ECUADOR

CASO REAL:

“ El Comité de Operaciones de Emergencia (COE) de Ponce Enríquez, ubicado al


oeste del Azuay, debate la posibilidad de solicitar al Gobierno Nacional que
declare una alerta de emergencia para este cantón.
El análisis de dicha petición contempla además que esta acción de alarma no solo
sea para esta jurisdicción sino que se extienda a la parroquia Tenguel, que
pertenece a la provincia del Guayas.
Con esta medida el COE pretende mitigar los daños ambientales y prevenir
enfermedades tras un accidente minero ocurrido hace nueve días en la mina
Barranco Colorado, en el recinto Shumiral.
Patricio Sánchez, alcalde de Ponce Enríquez, explicó que la tarde del martes 13
de agosto, una de las tres piscinas, conocidas como relaveras, que hay en esta
área minera, colapsó.
Esto provocó que aproximadamente 20.000 metros cúbicos (m3) de rocas,
minerales, agua, y otras sustancias que están por determinarse, caigan al río
Chico, que se conecta al Gala. Ambos resultaron contaminados.
Sánchez indicó que también investigan a otra minera: Paz-Borja, que está en La
Fortuna, más arriba que la Barranco Colorado, pues horas después del incidente,
desde ésta también se evacuaron aguas, supuestamente, mezcladas con cianuro.
Agregó que los desechos de ambas compañías mineras recorrieron
aproximadamente 30 kilómetros (km) a lo largo de los afluentes y llegaron hasta el
mar. A su paso dejaron una capa espesa de fango de color gris.
Técnicos de los ministerios del Ambiente (MAE) y Salud Pública (MSP), y de la
Agencia de Regulación y Control Minero (ARCOM), municipio de Ponce Enríquez
y junta parroquial de Tenguel inspeccionaron la zona de desastre.
El MSP y ARCOM suspendieron a la mina Barranco Colorado mientras se
analizan las muestras que fueron recogidas del río y la relavera para determinar
los productos que provocaron la contaminación.
Estas dos concesiones ya tienen procesos legales anteriores por indicios de
impactos ambientales, pero a decir de Sánchez “siempre hay esta contaminación y
nunca se sabe realmente si les sancionan o no…”.
El burgomaestre señaló que la relavera que se rompió tenía su vida útil cumplida y
advirtió que junto al río Siete, otro de los cinco que pasan por este cantón, también
hay diques de este tipo, que están en peligro de colapsar.
Maritza Cuenca, de la Unidad de Gestión Ambiental (UGA) de la municipalidad de
Ponce Enríquez, detalló que la minera Barranco Colorado, si bien utiliza químicos
en sus tratamientos estos no son altamente contaminantes.
Pero aclaró que si se ha detectado metales pesados como sulfuro de cobre, que
se usa en el proceso de flotación para la separación del oro del resto del material
que se extrae de los pozos mineros.
Añadió que la UGR no tiene el equipamiento técnico para hacer los análisis del
agua, por lo que esperan un informe máximo en un mes por parte de la Secretaría
Nacional del Agua (Senagua).
Acotó que en Ponce Enríquez hay 51 concesiones mineras autorizadas por el
Estado y 20 plantas de beneficio, es decir, instalaciones de procesamiento en las
que están construidas relaveras.
De acuerdo a datos de la UGR, la mayor parte de estos embalses, que acumulan
los subproductos de los procesos mineros, ya han cumplido su vida útil y deben
ser cerrados de forma técnica.
Mineros artesanales
Patricia Salazar, minera artesanal que trabaja en el río Chico, a pocos metros de
Barranco Colorado, relató que el día del desastre escuchó un estruendo, lo que la
alertó para salir del afluente.
“Solo vimos que vino una avalancha de lodo de color plomo y ya no alcanzamos a
sacar nuestras herramientas y todo se fue en el río… Ahora nos faltan nuestros
materiales para trabajar…”, expresó.
Gonzalo Carpio, otro minero artesanal que labora en esta zona, pidió que la
concesionaria responsable del siniestro limpie el fango debido a que desde que
ocurrió la desgracia no han podido volver a trabajar.
Carpio se dedica a esta actividad desde hace 15 años y obtiene unos 100 dólares
por semana. Esta es su única fuente de ingresos reveló, por lo que a pesar de la
contaminación seguirá sacando material del río para extraer oro.
Informes
José Alexander Bemposta, representante legal de la minera Barranco Colorado,
de la compañía Portugalia S.A., explicó que el colapso de la relavera fue
aparentemente provocado como un acto de represalia.
Indicó que por la baja en el precio del oro, casi en un 32%, tuvieron que despedir a
unos 150 de sus 800 empleados, lo que generó inconformidad que derivó en una
serie de amenazas.
Detalló que al parecer alguien desconectó un tubo, de tres pulgadas, que conecta
a la mina con el embalse, lo que provocó una erosión en la tierra e hizo que el
dique se rompa. El hecho está en investigación.
Siete retroexcavadoras han iniciado el retiro del fango del río Chico. Esto es parte
de los trabajos de remediación ambiental. Bemposta aclaró que en la mina no
utilizan cianuro ni mercurio y que la separación del oro lo hacen por flotación.
Una de las zonas más afectadas es la población de Tenguel. Allí se dañaron los
cultivos de banano y cacao por el agua contaminada. Según Julio Símbala,
presidente de la junta parroquial, el derrame provocó que miles de peces
murieran.
Detalles
En Ponce Enríquez hay cinco ríos: Tenguel, Siete, Balao, Jagua, Chico y Gala.
Según un estudio del Municipio de este cantón, solamente el último de estos
afluentes tiene vida.
En 2011 el Municipio de Ponce Enríquez presentó un proyecto para la
construcción de un Parque Industrial Minero para acoger a todas las plantas de las
empresas mineras.
A lo largo de 13 hectáreas se evidencia el lodo que arrasó con todo a su paso tras
el colapso de la relavera de la minera Barranco Colorado, explotada por la
empresa Portugalia S.A.
El Ministerio del Ambiente (MAE) emitió un informe técnico tras una inspección a
la zona de desastre. Confirma afectación a los ríos Chico y Gala. Tomó muestra
del agua.
Ayer se reunió parte del Comité de Operaciones de Emergencia (COE) de Ponce
Enríquez con técnicos de la Secretaría Nacional de Gestión de Riesgos (SNGR)
para informar lo ocurrido.” (Diario el Mercurio. 2013)

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