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Efecto de la solarización e inoculación con Trichoderma sp.

en las condiciones biológicas


y físicas en un suelo de la Sabana de Bogotá.  
 
Effect of solarization and inoculation with Trichoderma sp. in the biological and physical
conditions in a soil of the Sabana de Bogotá.  
 
Andrea Prieto, Olfer Vera, Mateo Cardenas, Ana Isabel Salcedo, Stefany Rojas y Juan
Navarro 1  
 
Resumen: El uso irracional de productos para Abstract: The irrational use of products to
el control de problemas fitosanitarios en el suelo control plant problems on the ground led
ha logrado la creación de nuevas alternativas no to the creation of new chemical alternatives
química para su control, como producto de esta for control, as a result of this research it is
investigación se creó la solarización. La created the solarization. The solarization is
solarización es un proceso hidrotérmico en a hydrothermal process where the
donde el aumento de la temperatura llega a temperature rise reaches lethal levels for
niveles letales para las plagas del suelo. Para soil pests. To test the effect of soil
comprobar el efecto de la solarización en un solarization on the Sabana de Bogotá The
suelo de la Sabana de Bogotá se realizó el experiment was conducted at the
experimento en el Centro Agropecuario Agricultural Center Marengo (CAM),
Marengo (CAM), en donde se aplicó además de which was applied in addition to the
este tratamiento una inoculación en el terreno de treatment field inoculation of Trichoderma
Trichoderma nativo del suelo, con el fin de native soil, to flora of the soil increases,
aumentar la flora del suelo, mejorando de esta thus improving the biological and
manera la condiciones biológicas y físicas del physical conditions of the ground. To this
suelo. Para esto se hizo un aislamiento nativo de was done a native isolate of
Trichoderma, el cual se llevó a laboratorio y se Trichoderma, which took laboratory and
realizó la inoculación correspondiente al lote inoculation was performed for lot weeks
semanas después de la aplicación en terreno del after application field solarization
tratamiento de solarización, al cual se le mide treatment, which is half the temperature
constantemente la temperatura. En este estudio constantly. In this study the incorporation
la incorporación de Trichoderma presentó los of Trichoderma higher values presented in
valores más altos en acumulación de biomasa dry biomass accumulation to the radish,
seca para el rábano, interpretando esto como un interpreting it as a treatment with
tratamiento que junto con la solarización solarization can improve the performance
pueden mejorar el rendimiento de varios tipos of various crops  
de cultivos.    
  Keywords: solarization, Trichoderma
Palabras claves: Solarización, Trichoderma, inoculation.  
Inoculación.    
 
                                                                                                               
1  Estudiantes  Manejo  Integrado  de  Enfermedades.  Ingeniería  Agronómica.  Universidad  Nacional  de  
Colombia  
INTRODUCCIÓN  
 
Los problemas asociados a plagas del suelo son más importantes en zonas tropicales que en
zonas templadas, debido a que en estas zonas se encuentran las condiciones ambientales
favorables para el crecimiento y multiplicación de dichas plagas (Díaz et al., 2007).  
 
Entre los pesticidas químicos utilizados para controlar plagas en el suelo esta el bromuro de
metilo, que causa un impacto muy negativo en el ambiente, sin embargo estos químicos
continúan siendo el método más usado en la agricultura para combatir plagas. Existen
alternativas no-químicas que han probado ser efectivas para el control de patógenos del suelo,
entre las cuales se encuentra la solarización (Díaz et al., 2007).  
 
La solarización es un proceso hidrotérmico en el cual el calor solar al pasar a través de
plastico transparente incrementa la temperatura en la capa superior del suelo o sustrato
húmedo a niveles letales para las plagas entre 40-55 º C. Esta técnica ha probado ser efectiva
en el control de patógenos del suelo, insectos y malas hierbas. Además, algunos estudios
realizados demuestran que también está asociada a un incremento en los niveles de nutrientes
solubles y cambios en la biota del suelo, que favorecen la colonización de microorganismos
benéficos (Díaz et al., 2007 ; Baruch et al., 2007).  
 
Se demostró que si el suelo esta cubierto con láminas de polietileno transparente durante 4-6
semanas durante el verano, se encontraban efectos en la disminución de patógenos (Tjamos y
Antoniou, 2000). la solarización fue muy eficaz en la limitación del desarrollo de síntomas de
las enfermedades y aumento de los rendimientos con una drástica reducción en la densidad de
propágulos fúngicos (Tjamos et al., 1989).  
 
La solarización puede mejorarse de varias maneras. Un enfoque muy prometedor es su
combinación con otros métodos de manejo de plagas, tales como enmiendas orgánicas que
producen compuestos volátiles que se acumulan debajo de las cubiertas de plástico. Por otra
parte, los aspectos biológicos de la solarización, sobre la supervivencia y el aumento de
naturales termo-tolerantes antagonistas se pronuncia en suelos solarizados. La explotación de
los antagonistas seleccionados que sobrevive a la solarización podría ser un campo de
investigación de especial interés, en particular para la aplicación posterior a la solarización de
los agentes de control biológico (Tjamos y Antoniou, 2000).  
 
El uso de Trichoderma en cultivos de fresa ha sido estudiado junto con la solarización del
suelo por Porras et al., (2007), estudio que ha demostrado el aumento de las poblaciones de
Trichoderma del suelo, la colonización radicular, aumento de peso y rendimiento de la fresa
en 84,9% para el año 2 y el 17,6% en el año 3 de los 3 años de estudio. También se encontró
correlaciones positivas entre las poblaciones de Trichoderma del suelo y el rendimiento de la
fresa, y entre las poblaciones de Trichoderma del suelo y la colonización de las raíces por
Trichoderma. Sin embargo en este estudio se ha demostrado también que aunque se aumentó
la población de Trichoderma del suelo durante los tres años consecutivos que duró el
experimento. En parcelas solarizadas y no solarizadas, no se observaron diferencias en las
poblaciones de Trichoderma del suelo en el mismo sitio. Además, la colonización de las
raíces por Trichoderma incremento durante los tres años consecutivos en parcelas solarizadas,
y no se observaron diferencias entre las parcelas con solarización y no solarización durante
todos los años.  
 
Efectividad y Uso  
 
Gasoni et al., (2008) demostraron en general, que los agentes de biocontrol y/o solarización
puede reducir pérdidas y aumentar el peso en fresco. Sin embargo, los tratamientos
combinados mostraron una mejora adicional en relación con los controles con un único
tratamiento (biocontrol o solarización). Métodos combinados tienen el potencial de mejorar el
control de plagas, pero necesita ser optimizado. De acuerdo con los resultados del
experimento, las mejores combinaciones aumentaron la población de plantas en un 156% y el
peso fresco en un 394% sobre el testigo sin tratar.  
 
 
Las temperaturas del suelo a 5, 10 y 20 cm se deben medir diariamente en parcelas
individuales y solarizadas a diferentes horas del día, usando termómetros de suelo, para
estimar el potencial de la inactivación térmica de la solarización y su eficiencia de uso en
campo (Porras et al., 2007).  
 
La solarización del suelo se utiliza para la desinfección como se realizó en un estudio en
Croacia en el cual la solarización redujo drásticamente la población de nemátodos parásitos de
plantas (Meloidogyne, Pratylenchus, Paratylenchus, Tylenchus, Tylenchorhynchus spp.) En
aproximadamente 97-100% a una profundidad de 10 cm y 92-97% a una profundidad de 20
cm en el campo, mientras que en el invernadero, la población de nemátodos parásitos de
plantas se redujo en aproximadamente 89-100% a una profundidad de 10 cm y 98-100% a una
profundidad de 20cm. (Oštrec y Grubišič, 2003).  
 
Un estudio desarrollado en el Centro Experimental y Demostrativo de Horticultura (CEDEH)
de Honduras se evaluó el efecto de la solarización sobre la incidencia de enfermedades del
suelo en semilleros de tomate y cebolla. Dos tratamientos; capa sencilla y capa doble de
plástico transparente de 2 milésimas de pulgada de grosor por ocho semanas. (Díaz et al.,
2007).  
 
La temperatura máxima absoluta en el suelo fue de 46 °C, la cual se obtuvo con el tratamiento
con doble capa de plástico a una profundidad de 10 cm. Los dos tratamientos con cubiertas de
plástico determinaron temperaturas significativamente superiores a la temperatura ambiente
del suelo sin cubierta en ambas profundidades (Díaz et al., 2007).  
 
En los semilleros sometidos a solarización con capa sencilla de plástico se registró la mayor
sobrevivencia (92.5%) de plantas de tomate, seguido con doble capa de plástico (83.3%). La
menor sobrevivencia de plantas (66.5%) fue registrada en el Testigo absoluto. En el caso de la
cebolla, la mayor sobrevivencia de plantas fue superior en los semilleros solarizados con
plástico doble (Díaz et al., 2007).  
 
las plántulas de tomate desarrolladas sobre suelo solarizado con doble capa de plástico median
en promedio 1.8 cm más que las desarrolladas en suelo solarizado con una capa de plástico y
5 cm mas que las desarrolladas en suelo no tratado (Díaz et al., 2007).  
 
Limitaciones de la solarización.  
 
La aplicación de la solarización, está seriamente limitada por el inconveniente con respecto a
la eliminación de los materiales plásticos utilizados. Una posible solución a este problema es
el uso de plásticos biodegradables aunque hay necesidad de mejorar las propiedades
tecnológicas (transparencia y resistencia a la degradación) de estos materiales con el fin de
obtener resultados comparables a los de otras técnicas de gestión de plagas como las que
utilizan plásticos de polietileno (Bonanomi et al., 2008).  
 
Efectos de la utilización de (Trichoderma sp.)  
 
En un estudio sobre el “Efecto sobre la sarna polvosa de cuatro aislamientos del hongo
Trichoderma asperellum en tres tipos de suelo” (Gilchrist et al., 2009). Los suelos usados
fueron un andisol, un entisol y un inceptisol, en los cuáles se sembraron 24 tubérculos
certificados de Solanum tuberosum variedad Diacol Capiro en cada suelo, previamente al
inicio de los tratamientos las parcelas fueron inoculadas con cantidades iguales de quistosoros
de S. subterranea que se extrajeron de raíces infectadas, con el fin de investigar los efectos de
Trichoderma asperellum se utilizaron cuatro aislamientos T25, T46, T84 y T109. Para realizar
el efecto de S. subterranea en cada tipo de suelo se estableció calculando el porcentaje
promedio de reducción del crecimiento y la producción. En cuanto a los resultados no se
obtuvieron diferencias significativas entre las plantas tratadas y no tratadas con T. asperellum.
De igual forma la superficie de raíz ocupada por agallas no obtuvo diferencias entre los
diferentes tipos de suelos  
 
Otro estudio acerca de “Evaluación de Trichoderma asperellum como biorregulador de
Spongospora subterranea f. sp. Subterránea” (Hoyos et al., 2008). Para ello se evaluaron
Trichoderma asperellum T-84 y T-109 en S. subterranea bajo condiciones de invernadero en
dos experimentos, uno evaluado a las novena semana y otro hasta la doceava semana,
midiendo variables de peso fresco, seco y número de nódulos producidos por el patógeno. En
el experimento obtuvieron un aumento en peso fresco y peso seco así como la reducción en el
número de nódulos de S. subterranea en raíces de papa, actuando mejor en aplicaciones
individuales que en mezcla.  
 
El tratamiento de solarización y Trichoderma es de gran importancia porque demuestra el
efecto de esto en las condiciones biológicas y químicas del suelo, mediante la medición de
temperaturas a lo largo del período de solarización e inoculación de Trichoderma de cepas
nativas del suelo a tratar, el porcentaje de germinación de planta de Rábano son uno de los
indicadores a contar en el éxito del tratamiento.  
 
 
MATERIALES Y MÉTODOS  
 
El experimento se realizó en el centro agropecuario marengo (CAM) en el departamento de
Cundinamarca municipio de Mosquera a 4°40´54´´N, 72°12´47´´W, a 2516 m de altitud con
14°C de temperatura promedio, en el segundo semestre del año 2012. Se realizó un inventario
de la flora existente en un lote de 40m2 se tomaron muestras de suelo antes y después de
realizado el proceso de solarización, a las cuales se les hizo análisis microbiológico, químico
y físico. En el laboratorio de microbiología de la facultad de agronomía de la Universidad
Nacional de Colombia, se aisló y cultivó una cepa de Trichoderma sp. nativo asociado a la
rizófora de la vegetación de la zona.  
 
 
El experimento se inició al cubrir el suelo en condiciones totalmente herméticas, previamente
descompactado con azadones, con un canal central para el ingreso del riego y finalmente
llevado a capacidad de campo, con un plástico de polipropileno reciclado, se instaló un
termómetro en el suelo y se tomó registro de la temperatura semanalmente. El cultivo de
Trichoderma sp. se realizó en un medio de arroz y agua destilada en relación 1:1 (50 g de
arroz, 50 ml de agua) en botellas de 350 ml de capacidad las cuales se pasaron por autoclave
durante un tiempo de dos horas, luego se hizo la inoculación, con la cepa previamente aislada
en un medio cultivo; la cepa aislada se puso a crecer en cámara de crecimiento, 18 días
después se realizó una disolución del hongo en agua destilada, la cual se aplicó al suelo el día
siguiente en una concentración de 266 681 esporas*ml-1 según cálculos realizados por conteo
en cámara de Neubauer; la aplicación se realizó en 8 puntos distribuidos en el lote; después
de este procedimiento se selló nuevamente el plástico herméticamente.  
 
Ocho días después de la inoculación del suelo con Trichoderma sp. se quitó la cobertura
plástica del suelo y se sembró seis surcos con plántulas de rábano (Raphanus sativus)
sembradas en el laboratorio de microbiología y crecidas en el invernadero de propagación de
la Universidad Nacional de Colombia.  
 
En la misma zona se realizaron otros cinco tratamientos en un área de 40m2 cada uno, en los
que se aplicó diferentes tratamientos acompañando al proceso de solarización dispuestos así:
T1: tratamiento control sin solarización en el cual se sembró la planta testigo (Raphanus
sativus) el día de inicio del experimento, T2: tratamiento con solarización, se aplicó un
tratamiento con solo solarización, T3: incorporación de plantas del género Brassica +
solarización, T4: aplicación de porcinaza fresca + solarización, T5: aplicación de
Trichoderma sp + solarización y T6: aplicación de brassicas, porcinaza fresca, Trichoderma
sp + solarización; al término de la solarización se sembró plántulas de Raphanus sativus en
todos los lotes excepto el control.  
 
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
 

 
T1: Control sin solarización  
T2: Solarización  
T3: Incorporación de Brassicas + Solarización  
T4: Solarización + aplicación de porcinaza  
T5: Solarización + aplicación de Trichoderma  
T6: Incorporación de Brassicas, Trichoderma + Porcinaza  
 

 
Figura 1. Temperatura a medio día * (los valores del 1 al 11 representan cada una de las fechas de
medición del 4 de septiembre al 9 de octubre respectivamente, mostradas en la tabla 1)  
 
La temperatura tiene valores muy fluctuantes para los diferentes tratamientos (Figura 1), sin
embargo es importante destacar el efecto de la solarización en los diferentes tratamientos con
respecto al control, teniendo temperaturas máximas de 37ºC en T2 y mínimas de 22ºC en T6
con respecto al control con temperaturas máximas de 29ºC y mínimas de 15ºC (Tabla 1). Con
un valor máximo de 6ºC más alto en los tratamientos solarizados con respecto al control.  
 
En tratamientos de solarización para lograr una disminución importante de Fusarium sp. se
requiere que la temperatura promedio diaria en los suelos solarizados sean mayores a 6°C en
comparación con suelos no solarizados, o que el promedio de horas diarias con temperaturas
fue de a 27°C siempre fuera mayor en suelos solarizados en comparación con los no
solarizados por un tiempo mínimo de 4 semanas consecutivas (Sánchez et al., 2002), esto se
puede observar en los resultados de la Tabla 1, apoyado de la Figura 1, donde se demuestra
que las temperaturas no tuvieron un rango diferente al mostrado por el autor, por lo que al
estar en condiciones indicadas Fusarium sp. incrementa su población.  
 
TABLA 2. Análisis microbiológicos de diferentes tratamientos de solarización: Hongos

 
T1: Control sin solarización  
T2: Solarización  
T3: Incorporación de Brassicas + Solarización  
T4: Solarización + aplicación de porcinaza  
T5: Solarización + aplicación de Trichoderma  
T6: Incorporación de Brassicas, Trichoderma + Porcinaza  
 
La presencia de Trichoderma spp. en los tratamientos con incorporación de Brassicas, permiten
asociar esta especie vegetal como un coadyuvante para la colonización de este hongo, siendo muy
importante en el proceso de descomposición de la materia vegetal.  
 
Stapleton (2000) dice que no hay que olvidar que la técnica de solarización realiza cambios
biológicos como la destrucción de organismos mesófilos creando un “vacío biológico" parcial,
en donde el suelo queda disponible al terminar el tratamiento para una recolonización,
muchos parásitos de las plantas no son capaces de competir contra otros microorganismos que
están adaptados al suelo, incluyendo antagonistas de algunos patógenos del suelo que
sobreviven a solarización y pueden recolonizar con mayor facilidad como lo son Bacillus y
Pseudomonas spp., hongos como Trichoderma y algunos nematodos.Según la FAO (1995), la
mayoría de fitopatógenos no pueden sobrevivir temperaturas por encima de 30-33 ºC, sin
embargo pueden haber excepciones con algunas especies de los géneros aspergillus, fusarium,
Phytium, entre otros; de igual manera antagonistas como Trichoderma sp., Talaromyces sp.
y Aspergillus sp. sobreviven e incluso pueden aumentar. Como se observa en la gráfica
anterior, los tratamientos T2 y T5 son los únicos que presentan Aspegillus sp., dado que en
los demás tratamientos las condiciones del ambiente como la disminución del pH por las
Brassicas afectan directamente el crecimiento y supervivencia del hongo.  
 
Se observa en los resultados que las poblaciones de Fusarium sp. aumentaron en los distintos
tratamientos respecto a la muestra previa. Sánchez et al., (2002) demuestran que para un
adecuado control de Fusarium sp. se debe realizar en un sistema de solarización que cuente
con un sistema de riego por goteo, esto lo explica Yoshida 1975, citado por (Sánchez et al.,
2002) debido a que las condiciones de agua produce metabolitos como ácidos grasos, aminas,
mercaptanos, los cuales pueden lograr tóxicos bajo estas condiciones a hongos fitopatógenos.  
 
Barbosa y Suárez (2009) muestran que hacer aislamientos nativos de Trichoderma sp logran
una alta probabilidad para que se logre un adecuado control de Fusarium sp. en especial de F.
oxysporum de forma preventiva a nivel de campo, siendo aplicado antes y en el momento de
la siembra de la planta, puesto esto estimula el crecimiento del hongo y de esta manera
detiene el crecimiento del patógeno. Se podría decir que en este tipo de enfermedades el
tratamiento es preventivo y no curativo. Por lo cual al realizarse sólo una inoculación no fue
suficiente para el control del patógeno.  
 
En cuanto a Mucor sp. Katan (1981) explica que para que se realice un correcto control de
patógenos como Mucor sp. el cubrimiento del terreno debe hacerse en tiempo climático de
altas temperaturas e intensa radiación solar, este autor indica que en el momento de cubrir el
suelo, este debe permanecer húmedo para poder incrementar la sensibilidad térmica de las
estructuras de resistencia de los patógenos, así como la importancia de que el terreno cubierto
sea de manera uniforme y con un la misma tira de material, ya que al emplear tiras de plástico
algunas zonas de suelo pueden quedar sin proteger, lo que conlleva a la presencia de
patógenos y por ello a la reinfección en poco tiempo de estos. Referente al mecanismo de
inactivación térmica de los patógenos, este mismo autor indica que cuando los organismos
están sometidos a calor húmedo, su viabilidad se ve reducida. Esto logra explicar el aumento
de las poblaciones de Mucor sp. de los tratamientos T2, T3, T4, T5, T6 de la muestra previa a
las muestras tomadas después de los tratamientos, debido a huecos que se presentaban sin
cubrir el suelo, y a las bajas temperaturas que se obtuvieron en los distintos tratamientos
Katan (1980).  
 
Los datos de poblaciones de hongos muestran que Cladosporium sp. se redujo a cero en los
tratamientos que recibieron procesos de solarización, ya que solo hay presencias de u.f.c*g-1
de sustrato, en el análisis previo y en T1. Dwivedi (1998) confirma lo anterior mostrando una
reducción a cero en tratamientos con solarización en comparación con testigos a los cuales no
se les aplicó solarización y mostraron altos porcentajes de Cladosporium herbarum en suelo.

Como se muestra en la Tabla 3, las poblaciones de Erwinia sp. aumentaron


considerablemente en los tratamientos T3, T4 y T5 con respecto al testigo y al análisis previo,
por otro lado en los tratamientos T2 y T5 disminuyó drásticamente al arrojar valores de cero
unidades formadoras de colonia por gramos de suelo. en el tratamiento T6 es posible que se
haya producido una inhibición del crecimiento en de la bacteria por parte de las poblaciones
de Trichoderma aplicada y encontrada en los análisis, ya que Trichoderma tiene efectos
inhibitorios del crecimiento de Erwinia sp.  
 
TABLA 3. Análisis microbiológicos de diferentes tratamientos de solarización: Bacterias  

 
T1: Control sin solarización  
T2: Solarización  
T3: Incorporación de Brassicas + Solarización  
T4: Solarización + aplicación de porcinaza  
T5: Solarización + aplicación de Trichoderma  
T6: Incorporación de Brassicas, Trichoderma + Porcinaza  
 
Microorganismos benéficos existentes en los suelos como lo es Bacillus spp. tienen la
capacidad de sobrevivir a tratamiento de solarización, como lo podemos ver en la tabla 3,
donde en los tratamientos de solarización los valores fueron altos, sin embargo en el
tratamiento con Trichoderma spp. estos valores fueron bajos, esto se puede deber a un
desplazamiento por parte de Trichoderma spp. a Bacillus spp. (Zanon, 2009).  
 
TABLA 4. Análisis microbiológicos de diferentes tratamientos de solarización: Nemátodos  
 

 
 
T1: Control sin solarización  
T2: Solarización  
T3: Incorporación de Brassicas + Solarización  
T4: Solarización + aplicación de porcinaza  
T5: Solarización + aplicación de Trichoderma  
T6: Incorporación de Brassicas, Trichoderma + Porcinaza  
 
El número menor de nematodos totales que se encontraron en los tratamientos con solo
solarización y el tratamiento con incorporación de porquinaza fue menor a los demás (Tabla
4), aunque varían las cantidades de patógenos y no patógenos. Los resultados están
relacionados con los de Alcoser et al. (2006) y Gamliel y Stapleton (1993) donde reportan que
la incorporación de compost, la solarización o la mezcla de ambas, reducen las poblaciones de
nematodos ya que se incrementa la degradación de la materia orgánica por el aumento de la
temperatura y humedad del suelo, además de causar acumulacion de gases tóxicos en el aire
del suelo; los efectos causados sobre los nematodos, por la incorporación de compost varían
según la especie del organismo, tipo de compost, duración y tiempo después de la aplicación y
subproductos del proceso.  
 
TABLA 5. Pesos secos promedio de los rábanos obtenidos para cada uno de los tratamientos  
 

 
 
En la tabla 5, se muestran los pesos secos promedios para cada uno de los tratamientos, los
valores más altos se encuentran en los tratamientos con incorporación de Trichoderma spp y
Brassicas, teniendo las mayor acumulación de biomasa seca del rábano.  
 
TABLA 6. Análisis de correlación en los pesos secos de los rábanos para los diferentes tratamientos de
solarización.  

 
 
Se puede observar que todos los tratamientos presentan una diferencia significativa frente al
control (Tabla 6), es decir, cada uno de los diferentes tratamientos utilizados en el
experimento tuvo un efecto en el desarrollo de las plantas de rábano sembradas después de la
aplicación de estos. sin embargo se puede ver que la aplicación de Trichoderma tuvo un
mayor efecto en el desarrollo de las plantas respecto a los demás tratamientos, presentando
estas el mayor peso seco.  
 
Prueba de Kruskal-Wallis  
 
Es una prueba no paramétrica que utiliza la suma de rangos para probar la hipótesis de que
más de dos muestras aleatorias independientes tienen medias idénticas (H0), contra la
hipótesis que no todas las poblaciones tienen medias iguales (H1); fue utilizada debido al bajo
número de muestras y a la falta de normalidad de las mismas.  
 
Tabla 7. Rangos de pesos secos del rábano en los diferentes tratamientos.

 
 
Tabla 8. Estadísticos de contraste a,b (Prueba de Kruskal-Wallis)  

 
 
Planteamiento de Hipótesis  
 
Ho: Las medias de los tratamientos son estadísticamente iguales  
H1: Las medias de los tratamientos NO son estadísticamente iguales  
Como el P-Valor de la prueba de Kruskal-Wallis es menor al nivel de significancia 0.05,
entonces se rechaza la hipótesis nula de igualdad de medias, es decir hay diferencia entre éstas.
Para saber entre cuáles tratamientos hay diferencia se utilizará la prueba de Dunn.  
 
Prueba de Dunn: “comparaciones por pares usando rangos”. Esta prueba admite muestras
desiguales, los valores críticos se calculan con base en la distribución normal; mantiene
constante la rata de error experimental, por lo que resulta muy conservadora, por tanto
mantiene alto grado de protección cuando Ho es verdadera, por el contrario si es falsa detecta
con mucha frecuencia la significancia entre las diferencias de los tratamientos.
TABLA 9. Prueba de Dunn, para determinación de diferencias en las medidas medias de pesos secos
del rábano para los diferentes tratamientos.  
 

 
* N representa el número de unidades muestrales para la prueba en cada tratamiento.  
 
Como se observa en los resultados de significancias en la prueba de Dunn, los tratamientos
con mayores pesos secos finales de los rábanos fueron los de Trichoderma sp., Brassicas y
porquinaza, por tanto estos tratamientos tienen mayor efecto en el control de microorganismos
patógenos y como consecuencia en la producción del rábano, sin embargo la porquinaza no
presenta diferencias con los tratamientos T+B+P y el de solarización, aunque con el
tratamiento control si presenta, esto porque aunque éstos tratamientos ejercen una reducción
sobre los patógenos del suelo, no es tan eficiente como los que presentaron mayor peso final
(letra ‘c’).  
 
CONCLUSIONES  
 
El tratamiento con incorporación de Trichoderma presentó los valores más altos en
acumulación de biomasa seca para el rábano, interpretando esto como un tratamiento que
junto con la solarización pueden mejorar el rendimiento de varios tipos de cultivos
susceptibles a patógenos del suelo como por ejemplo Spongospora subterranea en papa.  
 
La solarización efectuada en este estudio no alcanzó los valores adecuados de aumento de
temperatura (mayor a 6ºC de diferencia) entre los diferentes tratamientos y el control, que
permitan una disminución importante de Fusarium sp. u otros patógenos que resisten a altas
temperaturas.  
 
El incremento de la temperatura en los tratamientos de solarización aunque no fue
suficientemente alto; el tiempo en el que permanecen a estas temperaturas y su variación a lo
largo del día, crean condiciones apropiadas que causan la germinación de los
microorganismos, los cuales mueren debido a las condiciones ambientales generadas.  
 
 
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