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darwin

y la Alianza de CIVILIZACIONEs Vigencia y actualidad de la teoría de la evolución

José Adolfo de Azcárraga

N
ada tiene sentido en biología al variaciones accidentales que se producen el huerto de su convento con cerca de
margen de la evolución, afirmó ha- en los seres vivos, durante muchas genera- treinta mil plantas de guisantes (Pisum sa-
ce más de medio siglo Theodosius ciones y largos períodos de tiempo, y que tivum), lo que le llevaría a formular sus
Dobzhanski, una de las figuras –junto con genera las distintas especies. Nunca una famosas leyes sobre la herencia. Hoy se
Julian Huxley (The modern synthesis, 1942) idea tan simple ha tenido un poder expli- sabe que un organismo no es exactamen-
y otros– de la teoría sintética o síntesis mo- cativo tan grande; superior, incluso, a la ley te una mezcla de sus progenitores, sino la
derna de la evolución, que conciliaba las newtoniana de la gravitación que rige el suma de multitud de caracteres indivi-
ideas originales de Darwin con los progre- sistema solar. La selección natural, la idea duales, heredados de sus antepasados, que
sos de la genética. Pero en 2009, cuando central de Darwin y de Alfred Russel se manifiestan de acuerdo con las leyes de
se celebra –sobre todo en Occidente– el Wallace (1823–1913), ambos inspirados la herencia genética. Pero Mendel publicó
bicentenario del nacimiento de Charles por la lectura del Ensayo sobre la población sus hallazgos sobre los híbridos (Versuche
Darwin (1809–82) y el sesquicentenario (1798) del gran economista Thomas Ro- über Pflanzenhybriden, 1866) en la revista
de The Origin of Species by Means of Natu- bert Malthus (1776–1834), hace la evolu- de la Sociedad de Historia Natural de
ral Selection, or the Preservation of favoured ción inevitable, aleatoria y no finalista, Brünn (hoy Brno, en Chequia), de escasí-
Races in the Struggle for Life, cabe pregun- aunque esto no significa que cualquier po- sima difusión, y no fueron conocidos
tarse por la relevancia de una teoría de orí- sibilidad esté abierta a la vida: la altura de hasta el cambio de siglo. Se ha discutido
genes tan remotos así como por qué, tan- los árboles –por ejemplo– está limitada por mucho si Darwin llegó a tener noticia de
tos años después, la evolución sigue des- el hecho de que la savia no puede ascender ese trabajo, pero todo indica que no: cier-
pertando recelo e incluso rechazo. Pues, si indefinidamente. Las leyes de la física y de tamente no estaba suscrito a esa revista,
bien muchas organizaciones científicas y la química condicionan las posibilidades prácticamente desconocida, y una minu-
culturales están celebrando 2009 como el accesibles a los seres vivos, cuyas funciones ciosa búsqueda entre todos sus documen-
‘año de Darwin’, no se ha producido nin- vitales, formas y tamaños no pueden ser tos ha dado resultados negativos. No es
guna declaración internacional al respecto. completamente arbitrarios. Por ello no ca- extraño: sólo se han encontrado once ci-
Esta omisión resulta especialmente notoria be sorprenderse ante la aparición de abun- tas a Mendel en publicaciones anteriores
puesto que 2005, centenario del annus mi- dantes fenómenos de convergencia: los a 1900, año en el que fue redescubierto
rabilis de Einstein, fue declarado Año ojos, por ejemplo, aparecen en muchas y por varios científicos, entre otros por el
Mundial de la Física por la UNESCO; en diferentes cadenas evolutivas. biólogo británico W. Bateson
España los físicos celebramos, incluso, una Es instructivo recordar cómo se re- (1861–1926). Éste difundió las ideas de
sesión conmemorativa en el Congreso de solvieron dos serias dificultades que pre- Mendel en el libro Los principios de la he-
los Diputados. Todo parece indicar que, sentaba la teoría de la evolución en tiem- rencia de Mendel: una defensa (1902) e in-
en esta ocasión, el mundo oficial ha prefe- pos de Darwin. La primera, que una lige- trodujo, además, buena parte de la termi-
rido pasar de puntillas sobre la efeméride ra variación en algún rasgo de una especie nología del campo, incluyendo el nombre
del hallazgo de uno de los más grandes quedaría diluida y desaparecería en pocas de ‘genética’ (de γεννώ, dar vida).
científicos de la historia: la explicación del generaciones; se le recordaba a Darwin, La segunda dificultad se refería al
origen y la diversidad de las especies que por ejemplo, que el cruce entre blancos y tiempo necesario para que la evolución
pueblan el planeta. negros daba lugar a mulatos, no a hijos de pudiera tener lugar: uno de los críticos
uno y otro color. Darwin no podía imagi- de Darwin, W.J. Thompson (Lord Kel-
La teoría de la evolución nar, mientras escribía El Origen (“nuestra vin, 1824-1907), estimaba que el Sol,
No cabe dudar de la validez de las ideas ignorancia de las leyes de la variación es que imaginaba como una inmensa cal-
centrales de la teoría de la evolución y, en profunda”, decía), que en Moravia el dera de carbón ardiente, no podía tener
particular, del proceso de selección natural, agustino Gregor Mendel (1822–1884) más de 25 millones de años. Y aunque
que de forma acumulativa selecciona las estaba experimentando pacientemente en esta cifra daba más margen que otras

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estimaciones1, veinticinco millones cursor de la evolución de las especies al Lamarck”. Después, en el ‘esbozo histórico’
eran muy insuficientes para la evolución margen del mecanismo darwiniano de la que Darwin escribió para dar cuenta de los
de las especies. Darwin no podía resolver selección natural. Lamarck –a quien se de- antecedentes de su teoría, volvió a criticar
ninguna de estas dificultades, hoy fuera de be el término biología– había defendido en las ideas lamarquistas (que curiosamente
lugar dado el carácter discontinuo de las su Philosophie Zoologique (de 1809, el año había anticipado su propio abuelo, el Dr.
mutaciones genéticas y el origen termonu- del nacimiento de Darwin) la importancia Erasmus Darwin), según las cuales las jira-
clear de la energía solar. Claro que, invir- del uso y desuso en la evolución y la idea fas tendrían el cuello largo para poder al-
tiendo el razonamiento, Darwin podía ha- de que la necesidad acababa creando el ór- canzar las ramas de los árboles y como
ber respondido que la validez de la teoría gano requerido. En su vejez, Darwin llegó consecuencia de estirarlo con ese fin du-
de la evolución invalidaba el ingenuo mo- incluso a pensar en la herencia ocasional rante muchas generaciones. Darwin, por
delo solar de Lord Kelvin y preveía unas de las mutilaciones sistemáticas; no obs- supuesto, estaba en lo cierto al criticar la
leyes de la herencia que debían preservar la tante, Darwin mantuvo en conjunto su errónea visión de Lamarck: los toros, por
individualidad de los distintos caracteres, oposición a la herencia de los caracteres ejemplo, no tienen cuernos para embestir,
anticipando así las bases de la genética adquiridos. sino que embisten porque tienen cuernos;
mendel–morganiana. Por supuesto no fue Darwin ya había manifestado su ex- la evolución no es finalista. De hecho, en
así; de hecho, debido a esas y otras críticas, plícito rechazo al lamarquismo antes del una ocasión le preguntaron a Darwin, ya
Darwin dio en sucesivas ediciones del Ori- Origen. Por ejemplo, en una carta de 1844 anciano, si había leído a Lucrecio. Darwin
gen algo más de peso a las ideas de Jean– a su amigo el botánico J. D. Hooker, respondió que no; pero es seguro que se
Baptiste Lamarck (1744–1829), un pre- Darwin juzgaba el libro de Lamarck como hubiera deleitado con los versos (nos.
veritable rubbish (auténtica basura). Cabe 822–857) contra las causas finales que Lu-
recordar también, ya en el Origen, el deci- crecio escribió en De rerum natura, adelan-
1 En 1658 el arzobispo James Ussher había deter-
sivo ejemplo de las hormigas que describe tándose a la evolución darwiniana y pulve-
minado, Biblia en mano, que la Trinidad había creado
el hombre el 23 de Octubre de 4004 a.d.J.; Kepler y al final del capítulo VII dedicado al instin- rizando avant la lettre la visión de Lamarck,
Newton dieron a la Tierra una antigüedad parecida. to “en contra de la conocida doctrina de casi dos mil años antes del Origen.

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Aunque la teoría de la evolución no do del de los familiares de Charles Doolitt- cionó en África hace algo más de 1’8 Ma,
ha sido contrastada, por ejemplo, en el le Walcott, el americano que descubrió ese y es el primer emigrante intercontinental
sentido y con el increíble grado de preci- yacimiento en 1909 y extrajo de él, hasta entre nuestros ancestros. El europeo más
sión que confirma la teoría de la relatividad 1924, unos 65.000 fósiles; Shinderhannes antiguo conocido, de hace 780.000 años,
en la física, no cabe duda de que está fir- procede del nombre de un bandido de la es el Homo antecessor de Atapuerca (Bur-
memente establecida2. Cada día se en- zona de Hunsrück del siglo xviii. Pero, gos), quizá el último antepasado común
cuentran más ‘eslabones perdidos’ en las oportunidad de los nombres aparte, el nú- del hombre de Neardenthal y de nosotros
cadenas evolutivas. El Tiktaalit (‘pez gran- mero de fósiles intermedios crece constan- mismos. Así pues, y por lo que nos con-
de de agua dulce’ en inuktitut, la forma de temente, y todos encajan en las distintas cierne a los seres humanos, hace tiempo
la lengua inuit en Canadá), descubierto en cadenas evolutivas. El propio Darwin afir- que se encontró el famoso ‘eslabón perdi-
el ártico canadiense en 2004 y que vivió mó en el Cap. VI del Origen (‘dificultades do’. Y no uno, sino cientos de ellos.
hace 375 millones de años, era un pez de de la teoría’): “si se pudiera demostrar que Pero, actualmente, la evolución no só-
unos 2 metros de largo; sus cuatro aletas ha existido un organismo complejo, que no lo se apoya en el registro fósil. La embrio-
–que tenían huesos– le permitían nadar y se haya podido formar por numerosas, lige- logía comparada, hoy evo–devo (por evolu-
quizá elevarse sobre ellas, por lo que es el ras y sucesivas modificaciones, entonces la tion and development) y las modernas téc-
antepasado de los actuales tetrápodos te- teoría se quebraría (would break down). Pe- nicas de la biología molecular han hecho
rrestres, entre los que nos podríamos in- ro no puedo encontrar tal caso”. Y es que posible reconstruir el ‘árbol de la vida’. Los
cluir. Los ingredientes necesarios para pro- Darwin ya se planteaba lo que después se estudios moleculares de la evolución tie-
ducir patas estaban ya en las aletas del llamaría la refutabilidad de las teorías cien- nen, además, una gran ventaja respecto de
Tiktaalit, auténtico eslabón entre peces y tíficas: como estableció Karl Popper los antiguos árboles evolutivos basados en
animales terrestres. Este mismo 2009 se ha (1902-94), una teoría científica debe ser la anatomía comparada: permiten cuantifi-
estudiado el Shinderhannes bartelsi, un fósil refutable para merecer ese calificativo. Y la car las diferencias. Se han cumplido, al
encontrado en Hunsrück (Alemania). Este evolución presentaba, aparentemente, una menos en parte, las expectativas del padre
fósil está emparentado con los anomalocá- dificultad: si la teoría se basa en la supervi- de la genética moderna y premio Nobel
ridos (‘cangrejos extraños’) que aparecieron vencia del más adaptado y el lógico criterio (1933) Thomas H. Morgan (1866–1945),
en los esquistos de Burgess en Canadá y para medir esa adaptación es la superviven- quien en 1919 afirmaba que “el hecho de
que vivieron en los mares del Cámbrico, cia, parece generarse un círculo vicioso que que los aspectos fundamentales de la he-
tras el Big Bang de la evolución. Esta ex- haría de la evolución una teoría no refuta- rencia hayan resultado tan extraordinaria-
plosión de vida tuvo lugar hace más de ble y, por tanto, no científica en el sentido mente sencillos apoya nuestra esperanza de
quinientos millones de años (500Ma), de Popper. Pero no es así: como dijo el que, después de todo, la Naturaleza pueda
cuando el Burgess shale ‘canadiense’ se en- gran defensor –el bulldog– de Darwin, ser abordable por completo... Esto es alen-
contraba, debido al movimiento de las pla- Thomas H. Huxley (1825–95), para com- tador, ya que si el mundo en que vivimos
cas tectónicas, cerca del ecuador. El Shin- probar la falsedad de la teoría de la evolu- fuera tan complicado como algunos nos
derhannes extiende el período de existencia ción hubiera bastado “encontrar el fósil de pretenden hacer creer, podríamos muy
de esos curiosos antepasados de los actuales un conejo junto al de un dinosaurio”. La bien perder la esperanza de que la biología
artrópodos en 100Ma, hasta el período mencionada afirmación de Darwin sigue pudiera convertirse en una ciencia exacta”.
Devónico. siendo cierta hoy, ciento cincuenta años Con frecuencia la prensa refleja lo muchí-
Los paleontólogos, por cierto, parecen después. simo que compartimos de nuestros cerca
tener un peculiar sentido del humor: es di- Los primeros indicios de vida sobre la de 30.000 genes con los chimpancés… y
fícil adivinar las características de algunos Tierra aparecieron hace unos 3800 Ma. con otros seres vivos menos ‘elevados’; no
fósiles a partir del nombre que reciben. Los primeros vertebrados, animales con es- parece haber, además, ningún gen específi-
Aunque no es el caso del Anomalocaris ya pina dorsal, surgieron hace más de 400Ma, camente humano.
citado, algunos de los extravagantes seres y su –nuestro– antepasado más remoto es Así pues, si tan firmemente está esta-
del Burgess shale tienen un nombre deriva- Pikaia gracilens, el primer cordado, que blecida la evolución, ¿por qué suscita aún
apareció en la explosión de vida del Cám- tanta controversia? ¿Cuál es la razón para
brico. Los mamíferos surgieron hace unos que la teoría de Darwin originara una au-
2 De hecho, cuando se habla de ‘teoría de la 200 Ma, y los primeros homínidos como téntica revolución ideológica que no pro-
evolución’, la palabra ‘teoría’ no tiene ahí el sentido de Lucy, la famosa adolescente de Australopi- dujo, por ejemplo, la física nuclear o el
‘hipótesis’ o ‘especulación’; por el contrario, la evolu-
ción constituye un cuerpo de doctrina bien establecido
thecus afarensis, hace algo más de 3 Ma. descubrimiento de la doble hélice? La ra-
y comprobado en sus aspectos esenciales. Hay, por Mucho antes, hace 5–7 Ma, se había sepa- zón es sencilla: las ideas de Darwin cam-
supuesto, discusión sobre algunas cuestiones como, rado la rama de los chimpancés de la del biaron el lugar del hombre en el universo.
por ejemplo, si la evolución es gradualista à la Darwin
o si, como sostienen S. J. Gould y N. Eldredge en su
linaje humano; somos pues primos, no La teoría de la evolución es un golpe más
controvertida teoría del ‘equilibrio puntuado’ (1972), nietos, de los actuales primates. El Homo al antropocentrismo tan querido a los seres
la especiación se produce en breves períodos de tiempo erectus, ya con una capacidad craneana en humanos, que puede ser –pero no necesa-
que son seguidos de una paralización evolutiva o stasis.
torno a 1000cm³ (el peso de nuestro cere- riamente– de origen religioso en la medida
No obstante, estas cuestiones no afectan al cuerpo
principal. bro oscila alrededor de los 1400grs) evolu- en la que el hombre se considere creado a

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imagen y semejanza de Dios. Cada vez que nación’– por Stalin de los genetistas men- de la herencia (el genotipo) y el ambiente
el pedestal sobre el que nos gustaría imagi- del–morganianos4. Incluso algunos ilustres –nature vs. nurture– como factores deter-
narnos pierde altura aparece una reacción biólogos evolutivos parecen resistirse a minantes de lo que somos, la evolución
contra la causa que lo rebaja. Ya se produjo aceptar la evolución en todas sus conse- pone de manifiesto el enorme peso de la
cuando la caída del geocentrismo, cuyo cuencias cuando –aunque sea de una for- herencia sobre el entorno, suponiendo,
momento más representativo es el juicio a ma inconsciente– ésta choca con ideas que claro está, ambientes no demasiado dispa-
Galileo, y de nuevo apareció tras la difu- les son queridas, una cuestión sobre la que res.
sión de las ideas de Darwin. George Ber- volveré después. Podría parecer que la adopción de
nard Shaw (1856–1950) reflejó muy bien una u otra visión sobre la naturaleza hu-
el origen de esa reacción: “al principio uno La ‘tabula rasa’ y el buen salvaje mana es una cuestión relativamente me-
no se da cuenta de lo que implica [la evo- ¿Qué (pre–)concepciones existen de la na- nor, sin grandes consecuencias prácticas.
lución]. Pero cuando se empieza a com- turaleza humana? Asumiendo el inevitable Pero no es así. Por ejemplo, los padres que
prender todo su significado, el corazón se riesgo de simplificar en una cuestión tan estén convencidos de que la mente del ni-
hunde en un montón de arena. Hay un te- importante como delicada cabría decir ño es una tabula rasa se culparán si sus hi-
rrible fatalismo en todo ello, una reduc- que, a lo largo de la historia, se han dado jos no alcanzan las metas propuestas, pues
ción atroz y detestable de la belleza y de la tres visiones distintas, no del todo exclu- ello probaría que han sido incapaces de
inteligencia, de la fuerza y del propósito, yentes entre sí. La primera supone que, al educarlos debidamente (lo que tampoco se
del honor y de sus aspiraciones”. Resulta nacer, la mente de los seres humanos es puede excluir). Toda una escuela de psico-
difícil no reconocer un punto de verdad en una tabula rasa, una pizarra en blanco, so- logía muy influyente en el segundo tercio
esa reflexión y no contemplar con simpatía bre la que en sus primeros años se puede del siglo xx, la conductista (de behaviour,
los sentimientos del autor de historias tan escribir todo lo que determinará su vida conducta), y especialmente la versión más
deliciosas como Lluvia aunque, si bien adulta. Esta visión se remonta a los estoi- radical del psicólogo de Harvard B. F.
Shaw contemplaba con ternura la condi- cos griegos y a S. Tomás de Aquino Skinner –quien consideraba que el hombre
ción humana, no se hacía muchas ilusiones (1225-1274); John Locke (1632-1704) la no tiene comportamientos innatos sino só-
sobre ella. Por su parte, el premio Nobel utilizó para criticar a la aristocracia, que no lo en función del entorno– se halla tras la
Steven Weinberg, probablemente el físico podría justificar privilegios innatos si las tabula rasa. Los lectores de cierta edad re-
más ilustre vivo, llegó a afirmar en otro mentes de nobles y plebeyos comenzasen cordarán un libro muy popular en los años
contexto: “cuanto más sabemos del mun- igualmente vacías. La segunda, la del buen cincuenta y sesenta del Dr. B. Spock, The
do, menos sentido parece tener”, aunque salvaje, se debe a Jean–Jaques Rousseau common sense book of baby and child care
luego trató de suavizar el contenido de sus (1712–78): los seres humanos son natural- (1946), Tu hijo a secas en versión española,
palabras. Pero el núcleo del rechazo que a mente buenos (justos y benéficos, como que recordaba a las madres que “sabían
veces produce la teoría de Darwin es éste: exigía serlo a los españoles el art. 6 de la más de lo que pensaban” sobre cómo tratar
la evolución nos habla de nosotros mis- constitución de 1812) hasta que la socie- adecuadamente a sus pequeños. El Dr.
mos, de nuestra naturaleza, y establece que dad los corrompe. La tercera visión se basa Spock, que vendió 50 millones de ejem-
tiene una elevada componente biológica en la separación entre alma y cuerpo, de an- plares de su libro en todo el mundo, de-
que se encuentra al margen de nuestros tigua tradición religiosa y formulada espe- fendía el sentido común frente a los exce-
deseos, ilusiones… y de nuestro control. cialmente por René Descar tes sos conductistas entonces en boga, sobre
Nos dice mucho de lo que somos –con in- (1596–1650). Según ésta, el alma gobierna todo en Estados Unidos.
dependencia de lo que nos gustaría ser– y el cuerpo y toma decisiones con indepen- La hipótesis de la tabula rasa tiene
de cómo hemos llegado a serlo. Por eso, dencia de los procesos biológicos que lo ri- también implicaciones políticas, y ha resul-
precisamente, la evolución ha chocado con gen. Frente a todas estas concepciones la tado muy útil a todos los regímenes totali-
dogmas religiosos y políticos, especialmen- evolución nos muestra que, biológicamen- tarios: no es casualidad que la genética
te en la medida en la que éstos han tratado te hablando, existe una naturaleza humana mendeliana estuviera prohibida y persegui-
de imaginar al hombre a su gusto para, en parte determinada genéticamente. En la da durante el estalinismo5, y tanto el dicho
después, moldearlo a su conveniencia. Bas- vieja polémica sobre la importancia relativa
ta recordar el rechazo inicial de las Iglesias
5 Ésta es una cuestión que ha sido soslayada
cristianas a la evolución, la actitud del Is-
en Occidente durante décadas, cuando no censurada
lam3, o la persecución –cuando no ‘elimi- ciado que Bilim ve Teknik dedicará un próximo número y ocultada, por sectores que consideraban impropio
a la teoría de la evolución. Pero, con independencia de criticar el comunismo de la URSS (o ‘socialismo real’
la posible rectificación, el hecho de que la revista de un en newspeak), por lo que merece un comentario. In-
3 Incluso en la supuestamente secular Turquía órgano científico pueda sufrir semejante censura mues- cluso cuando se menciona hoy, no siempre se hace en
una alta institución gubernamental (el Consejo de tra que la visión secular que Atatürk impuso en Turquía sus justos términos. Hace un año, por ejemplo, un
Investigación Científica y Tecnológica, TÜBİTAK) está en claro retroceso. conocido biólogo evolucionista de habla hispana se
suprimió a principios de año un artículo sobre Darwin 4 Persecución que produjo en la URSS un retraso refería en una conferencia al affaire Lyssenko como
en su revista oficial, Bilim ve Teknik (Ciencia y Tecno- de décadas en esa rama de la ciencia. El polo opuesto de un lamentable ejemplo de ‘politización de la ciencia’
logía), cesando a su directora por oponerse a ello. Tras ese totalitarismo, el nazismo, es un caso distinto: el de cuando, en realidad, fue una demostración de texto de
el consiguiente escándalo de la comunidad científica, una ideología que deformó las ideas evolutivas para sus ‘cientifización –valga la palabreja– de la política’, es
la directora recuperó su puesto, y TÜBİTAK ha anun- siniestros fines. decir, de sancionar la política como ciencia, lo que es

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de Mao “los mejores poemas se escriben su curso. En una escuela de tipo Summer- defensores de cualquiera de las tres creen-
en un libro en blanco” como las alusiones hill no debe haber exámenes, notas ni pro- cias citadas y, ocasionalmente, responsables
al ‘hombre nuevo’ del nazismo tienen todo gramas de estudio; los niños son libres de también de sus excesos, quedarían sin jus-
tipo de connotaciones siniestras. Por su ir a clase o no. Sin embargo, ésta y otras vi- tificación si aceptaran lo sesgado de sus
parte, los partidarios del noble salvaje ten- siones optimistas de la pedagogía (como la creencias. Por eso los descubrimientos so-
derán a responsabilizar a la sociedad de to- de la LOGSE de 1990) prefieren soslayar bre la naturaleza humana son a menudo
da conducta delictiva: ‘todos somos culpa- una obviedad: que la educación tiene por recibidos con recelo: se piensa que atacan
bles’ es la frase políticamente correcta de objeto proporcionar al cerebro los conoci- ideales de progreso (tal como lo entienden,
ese grupo. Acusando a la sociedad, que por mientos que necesita y que no posee ins- claro está, quienes no aceptan los aspectos
no poseer personalidad jurídica no respon- tintiva, es decir, inicialmente. La evolución biológicos de nuestra naturaleza) o, tam-
de ante ningún tribunal, se elimina toda ha grabado en nuestra mente recursos que bién, que nos roban parte de nuestro ser
responsabilidad personal sin que nadie la nos indican, sin necesidad de estudio, más íntimo. Así Dostoyevski, en la que
adquiera en su lugar. Esto facilita que, a cuándo debemos comer o protegernos del quizá es la mejor novela que se ha escrito
veces, los criminales parezcan tener más frío e, incluso, que nos permiten aprender desde El Quijote, ya hacía afirmar a Dmitri
derechos que sus víctimas, a las que la ley a hablar con rapidez pues, muy probable- Karamazov (¡en 1880!) que “siente perder
no contempla suficientemente cuando aún mente, el lenguaje es un instinto: un niño a Dios” cuando concluye que sus pensa-
no lo son y no puede proteger ya cuando nace con la capacidad de aprender a hablar mientos son simple resultado de la activi-
han pasado a serlo. Hasta la intencionali- rápidamente –y la estructura de todas las dad nerviosa de su cerebro. O, como afir-
dad de las penas puede tener un carácter gramáticas es universal– pero necesita más mó Kasparov con desmesurada hipérbole
distinto según la visión que la ley tenga del tiempo para saber atarse los zapatos. Pero tras perder al ajedrez frente al Big Blue de
propio delincuente. Así, el derecho anglo- sin aprendizaje previo no podemos escribir IBM, en 1997: “esto es el fin de la huma-
sajón, menos optimista o más pragmático y, menos aún, llegar a ser médicos o aboga- nidad”. Sin embargo, lo único que experi-
que el nuestro, confiere a las penas una das. El estudio está, precisamente, para mentalmente demostró su derrota –que
mayor componente de castigo que el espa- compensar las carencias de nuestro cerebro había sido precedida por una victoria– fue
ñol que, se diría, es de inspiración rous- ante situaciones para las que no está evolu- lo erróneo de los interesantes razonamien-
seauniana. tivamente preparado. Así pues, toda peda- tos de Edgar Allan Poe en El jugador de
La tesis del buen salvaje tiene también gogía debería estar destinada a resolver este ajedrez de Maelzel (1835). Poe, que nació
importantes y nocivas consecuencias para déficit de la forma más eficaz y equilibra- en 1809 como Darwin, argumentaba
la educación, al suponer que un niño pro- da; ignorar esta realidad puede resultar po- equivocadamente que todo autómata que
gresará por sí mismo si no se le desvía de pular (‘los exámenes son traumas innecesa- ganara una sola vez al ajedrez debería ganar
rios’, etc.), pero es tan demagógico como siempre, concluyendo –con acierto, pese a
perjudicial para niños y jóvenes. A veces la falsa premisa- que, como El Turco no era
mucho peor (como señaló el historiador Alan Bullock, pienso que el Origen (y un buen curso de imbatible, dentro de ese autómata se debía
hay muchos paralelismos plutarquianos en las vidas etología, a la que luego me referiré) debería ocultar una persona.
de los dos grandes tiranos del pasado siglo, Hitler y ser lectura obligada de toda autoridad edu-
Stalin). Y es que, al margen del evidente trasfondo de
lucha por el poder que tuvo el famoso affaire, había cativa o legislativa, al igual que las mate- Naturaleza biológica
una razón de peso para que a Stalin le desagradara la máticas lo son para los ingenieros. Malo es La realidad, por su parte, es tozuda. Por
genética convencional. En un panfleto de 1906 escrito tener preconcepciones sin fundamento; ejemplo, los famosos estudios (1928) de la
en georgiano, ¿Anarquía o socialismo?, Stalin ya había
mostrado su simpatía por las ideas de Lamarck. Ese pero peor es pretender que la naturaleza se antropóloga Margaret Mead sobre los abo-
artículo reapareció en una recopilación de escritos de ajuste a ellas. rígenes de Nueva Guinea y Samoa, otrora
Stalin, ya en ruso, dos años antes de la explosión del Por su parte, el dualismo del alma y el pilares de la tesis del noble salvaje, han te-
affaire Lyssenko en el verano de 1948. Iurii Zhdanov,
jefe del departamento científico del Comité Central, cuerpo confiere a los seres humanos –por- nido que ser sustancialmente revisados; la
yerno de Stalin y conocedor de su inclinación por el tadores de alma– una posición exagerada- mente no es el white paper de Locke, sino
neo–lamarquismo, explicó entonces en una conferencia mente privilegiada en la naturaleza, que un producto de la evolución sobre el que
el por qué de esa afinidad (curiosamente, tratando de
nadar entre dos aguas, pues Zhdanov era contrario a
justifica cualquier abuso contra ésta. Así con demasiada frecuencia se puede escribir
Lyssenko): “los comunistas están necesariamente obli- pues, el empirismo de la tabula rasa, el ro- bien poco, etc. La resistencia a reconocer la
gados a contemplar con mayor simpatía una doctrina manticismo del noble salvaje y el dualismo realidad de una naturaleza humana biológi-
que establezca la posibilidad de una reconstrucción [pe-
redelka] y reorganización o remodelación [perestroika]
cartesiano tienen serias implicaciones de ca, innata, recuerda la oposición de algunos
del mundo orgánico, sin tener que esperar a cambios todo tipo. Por ello, muchos de sus adhe- filósofos postmodernos a la ciencia. En am-
repentinos, accidentales e incomprensibles de un mis- rentes han sido y son críticos con los estu- bos casos hay un intento de reservar parce-
terioso plasma hereditario”. Así pues, y aunque Stalin
no debía apreciar en exceso a Lyssenko, el lamarquismo
dios científicos que insisten en la impor- las protegidas, sobre las que la ciencia no
resultaba más propicio al dogma estalinista que la ge- tancia de la componente evolutiva, bioló- debe investigar y, si lo hace, no debe extraer
nética y la evolución darwiniana. Pero, en contra de lo gica, de la naturaleza humana, y muy espe- conclusiones. En el caso que nos ocupa ha
que creía Stalin, los caracteres adquiridos no se heredan, cialmente en la medida en la que pueda habido también algún científico evolucio-
y moldear a los seres humanos de forma interesada y
perenne requería también reeducar a la propia naturale- contradecir sus propios credos. Es mucho nista que ha adoptado una posición doctri-
za, un empeño afortunadamente imposible. lo que está en juego: las actitudes de los naria. Stephen Jay Gould (1941–2002),

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probablemente mejor divulgador que pa- que otras disciplinas podrían tener éxito se aplican al hombre en su conjunto, per-
leontólogo, y el ilustre genetista y precursor allí donde la ciencia ha fracasado? No es miten analizar algunas consecuencias de la
de la biología molecular Richard Lewontin sorprendente que Gould acuñara el acró- evolución para el comportamiento de los
(1929– ), ambos de orientación marxista, nimo NOMA (non–overlapping magiste- seres humanos y su posible repercusión en
han sido extraordinariamente críticos con ria) para separar el dominio de actuación las sociedades modernas. La etología, la
Richard Dawkins (1941– ) y con la socio- de la ciencia del de otros magisterios, de ciencia del comportamiento animal, fue
biología de Edward O. Wilson (1929- ), un forma que éstos no pudieran ser afectados oficialmente consagrada con la concesión
intento serio, aunque no sea definitivo ni el por aquélla. Gould se refería explícitamente del Nobel de Fisiología o Medicina de
primero, de estudiar las bases biológicas del a la religión en su ameno artículo de 1997 1973 a sus tres fundadores, los vieneses
comportamiento social. Gould y Lewontin en Natural History, pero quizá pensara tam- Konrad Zacharias Lorenz (1903–1989) y
parecen pensar que la mente y la psicología bién en otras religiones. De hecho, la insis- Karl von Frisch (1886–1982) y el holandés
humanas no han evolucionado como el tencia de Gould en la absoluta contingen- Nikolaas Tinbergen (1907–88). Lorenz
resto del organismo y que deben obedecer, cia de la evolución al margen de todo fenó- observó que en los primeros momentos de
por así decirlo, a una epistemología más meno de convergencia evolutiva, en que su vida, los animales se fijan a su entorno
elevada. Sin embargo –y por poner un solo hay características fenotípicas que la evolu- inmediato, generalmente a su madre, aun-
ejemplo–, algunos aspectos de la psicología ción no explica7, así como su crítica visceral que no sólo hay fijación filial; la hay tam-
evolucionista, al contrario que el psicoaná- a la sociobiología, hacen de él un darwinis- bién de otros tipos. Son famosos los expe-
lisis freudiano, son refutables en el sentido ta malgré soi, un calificativo cuya validez rimentos en los que Lorenz consiguió que
de Popper y por tanto contrastables cientí- me confirmó Richard Dawkins hace poco gansos recién nacidos le siguieran ciega-
ficamente. Y es que e.g., resulta difícil com- en el curso de una interesante conversa- mente, creyéndolo su madre, porque había
probar cuantitativamente la validez del ción. Pero como sostiene Wilson en Consi- logrado que se fijaran a él poniéndose jun-
complejo de Edipo, pero es muy sencillo lience, un libro que trata de superar la dico- to a huevos de ganso al eclosionar. Puede
confirmar que los rostros simétricos resul- tomía de las ‘dos culturas’, la unidad del resultar reconfortante pensar que los seres
tan sexualmente más atractivos que los que conocimiento –a la que alude el antiguo humanos estamos muy por encima de los
no lo son. vocablo inglés del título– no admite fronte- procesos de impronta (imprinting) que
Lo sospechoso de Gould y Lewontin, ras. En cualquier caso, aquellos que, en el condicionan el comportamiento de los
dos pesos pesados en su campo, es el ca- fondo, quieren poner a los seres humanos gansos, pero no hay razón para ello: los
rácter personal y apriorístico de sus ata- en una categoría especial, off–limits para la mecanismos de fijación o apego no están
ques, que trasluce una componente dog- ciencia en alguno de sus aspectos, deberían limitados a las aves. Se puede decir que
mático–religiosa más que razones científi- recordar la críptica frase que el propio esos mecanismos moldean o ‘troquelan’
cas. Hay un intento, quizá inconsciente, Darwin dejó plantada en el Origen, como –de acuerdo con el término original de
de ‘matar al padre’ en la medida en la que bandera sobre la cumbre de su propio li- Lorenz (pragung, 1935)– a muchos seres
la teoría de Darwin pudiera ir en contra bro, para advertir que él ya era consciente vivos: Lorenz dejó su impronta y ‘troqueló’
de esas creencias, tan íntimas como in- de que “por medio de [su] obra se aclararía el a sus gansitos de forma que lo identificaran
cuestionables. Pero, parafraseando a Mark origen del hombre y su historia”. con su madre para siempre. Lorenz lo con-
Twain cuando ironizaba sobre las noticias siguió en minutos; otros casos pueden re-
publicadas sobre su muerte, las limitacio- Etología: impronta vs. aprendizaje querir espacios de tiempo más largos, y ni
nes de la ciencia han sido muy exagera- Todas estas consideraciones, que se pueden siquiera la fijación tiene que ser a algo vivo.
das6. Incluso si se considerase que hay resumir en que las ideas evolutivas también En cualquier caso, las raíces del comporta-
problemas que la ciencia no puede resol- miento animal son claramente evolutivas
ver, ¿qué misteriosa razón hace suponer y, aunque en su día se criticó a Lorenz por
7 En su artículo The spandrels of San Marco and extender algunas de sus conclusiones al
the Panglossian paradigm: a critique of the adaptationist comportamiento humano, no hay ningu-
6 Otra cosa muy distinta son nuestras propias
programme (Las pechinas de S. Marcos y el paradigma na razón –salvo, una vez más, el antropo-
limitaciones. Es bien posible que, de la misma forma panglosiano: una crítica del programa adaptativo, 1979),
que no cabe enseñar química orgánica a un chimpancé Gould y Lewontin dieron a ‘spandrels’ el significado de
centrismo– para situarnos en una categoría
por inteligente que sea, las limitaciones de nuestro pechinas, utilizando, por tanto, una inadecuada metáfo- completamente distinta.
cerebro acaben poniendo un límite al avance del co- ra arquitectónica. Pues las pechinas son, precisamente, La impronta no debe ser confundida
nocimiento, incluso con la ayuda de los ordenadores. la solución (introducida por primera vez en la iglesia de
Podría suceder en el futuro con nuestro cerebro lo que
con el aprendizaje: éste es cosa del indivi-
Santa Sofía de Constantinopla, no en la de San Marcos
se puede observar hoy con los récords olímpicos, cuya de Venecia) que permite la transición o adaptación de duo y lo aprendido se puede olvidar, mien-
mejora es ya asintótica. La velocidad de un corredor, una planta cuadrada a la cúpula semiesférica que está tras que la fijación, por estar determinada
por ejemplo, depende de su capacidad de quemar calo- sobre ella, y no un capricho que la evolución –arqui-
rías con rapidez para obtener la energía que consume al
por el instinto, afecta a la especie, se pro-
tectónica en este caso– no podría justificar (como quizá
correr. Esa capacidad está limitada biológicamente, por sería el caso de las enjutas). Gould y Lewontin aludían duce en un período crítico, generalmente
lo que ya no cabe esperar que velocistas y otros atletas en el título de su trabajo al preceptor del joven Cán- al comienzo de la vida, y produce fuertes
mejoren mucho más sus marcas, que se decidirán por dido, el Dr. Pangloss, para quien todo en la naturaleza vínculos que son en gran parte irreversi-
fracciones de segundo cada vez más minúsculas: los tenía una buena razón de ser (Voltaire, a su vez, había
juegos olímpicos resultarán, en este aspecto, cada vez satirizado en el Cándido el optimismo de Leibniz, para bles. En el caso de los seres humanos hay
menos interesantes. quien este mundo era el mejor de los posibles). ejemplos de apego incuestionables, como

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da rwin y l a a lia nz a de c iv iliz ac ione s

el que se da en los mamíferos entre padres tesis de Huntington –que no parece haber dad importante: su condición de seres
–sobre todo madres– y descendientes, cu- apreciado las raíces biológicas del proble- humanos.
yo origen evolutivo es indudable: de no ma que señala– parece más que razonable. “La mayor fuente de conflictos poten-
existir esa fijación filial, los recién nacidos El carácter casi irreversible de toda fija- ciales en el mundo contemporáneo es la
tendrían nulas posibilidades de sobrevivir y ción, en este caso al entorno cultural, es la presunción de que las personas pueden ser
de transmitir a su progenie la ausencia de razón por la que los conflictos entre dis- clasificadas atendiendo sólo a su religión o
esa fijación. Pero también hay otros mo- tintas culturas –o incluso dentro de un su cultura” afirma Sen. Como Hunting-
mentos para ella, como la pubertad. Los mismo credo religioso, como entre sunitas ton, Sen no menciona el mecanismo evo-
seres humanos tienen, además, inevitables y chiitas– tienen difícil solución, que no lutivo que está detrás de la fijación a una
fijaciones al entorno cultural, que se esta- cabe buscar en cándidos voluntarismos o civilización determinada. Pero advierte: “la
blecen en la primera parte de su vida. “Los en una tan ingenua como vacía ‘alianza de imposición de una única identidad es a
historiadores tendrán que aceptar el hecho civilizaciones’, sino en una educación li- menudo una componente esencial de la
de que la selección natural determinó la beral que eleve a los seres humanos por confrontación sectaria”. Por ello, resulta
evolución de las culturas de la misma for- encima de su –literalmente– primitivismo evidente el camino a seguir para evitar ese
ma que lo hizo con las especies” afirmó congénito. Se trata de compensar la inevi- choque de civilizaciones: no hay que hacer
Lorenz en su libro Sobre la agresión (1963). table fijación a uno de los grandes bloques énfasis –por muy bienintencionado que
culturales con el aprendizaje que produce sea– en la adscripción mono–dimensional
Evolución y civilizaciones la educación liberal, para suavizar así la ri- a una civilización, puesto que la acentúa,
Puesto que las grandes culturas determinan gidez de ese troquelado. Desgraciadamen- sino en las muchas y variadas identidades
las grandes civilizaciones, no es sorpren- te, la impronta es automática, inevitable y que poseen los seres humanos y que dilui-
dente que en un sentido amplio la Historia prácticamente irreversible: por eso chinos, rían la impronta cultural, rebajando así el
sea la historia –la evolución, cabría decir– hindúes o europeos lo son –y al cabo de riesgo de conflicto. Pues “la estrechez de
de las civilizaciones, como ya señaló en su pocos años– para el resto de sus vidas. El todo pensamiento centrado en las civiliza-
día Arnold J. Toynbee (1889–1975) en su aprendizaje, por el contrario, requiere ciones puede ser tan traicionera para pro-
monumental Estudio sobre la Historia. La considerable esfuerzo. gramas de ‘diálogo entre civilizaciones’ (al-
cuestión ha vuelto a la actualidad hace al- Por supuesto, las ideas de Hunting- go que parece estar muy en boga en estos
gunos años tras el influyente ensayo del ton han recibido críticas, sobre todo de tiempos), como lo es para teorías de ‘cho-
profesor de Harvard Samuel P. Hunting- aficionados al wishful thinking; demasia- que de civilizaciones’… [Los] intentos de
ton (1927–2008), The Clash of Civiliza- das, cabría decir, como para no haber lograr una paz global pueden tener conse-
tions? (1993), publicado en la revista Fo- acertado en lo esencial. Sin embargo, sólo cuencias muy contraproducentes si se ba-
reign Affairs y después convertido en libro el bengalí Amartya Sen (1933– ), premio san en una comprensión básicamente ilu-
(1996). La tesis de Huntington8, según la Nobel de economía (1998) y antiguo soria de los seres humanos”. De otra for-
cual los futuros conflictos serán resultado Master del Trinity College de Cambridge, ma, diría yo: cuando se ignora la compo-
de choques entre fronteras culturales más ha ido al fondo de la cuestión: cómo evi- nente biológica de nuestra naturaleza. Más
que nacionales es, pues, consecuencia de la tar lo que, para Huntington, es difícil im- Darwin, pues, y menos Rousseau: el infier-
especial fijación de los seres humanos al pedir que suceda. En su libro Identidad y no está empedrado de buenas intenciones
entorno de los primeros años de su vida, violencia, el espejismo del destino (2006), y optimismos sin fundamento9.
que prácticamente determina la civiliza- Sen señala que la adscripción a una única Así pues, los mecanismos de fijación
ción a la que pertenecerán. identidad cultural es un ingrediente fun- producen vinculaciones culturales en la
No es fácil saber, en ausencia de un damental de la confrontación sectaria, en primera parte de la vida que son difíciles
Darwin de las civilizaciones, por qué hay lo que concuerda con Huntington. Pero, de revertir una vez producidas. Esto es algo
seis u ocho (occidental, islámica, china y precisamente por ello, la insistencia en la natural, y en sí no constituye un problema.
japonesa, hindú, africana y quizá otras) y ‘alianza de civilizaciones’ como medio pa- Lo que es preciso reconocer es que, dado
no veinte, por ejemplo. Pero dada la ínti- ra lograr buenas relaciones entre los su origen biológico, esas improntas son el
ma vinculación de la inmensa mayoría de miembros de diferentes culturas constitu- resultado de lo más primitivo –por tanto,
los seres humanos a su propia cultura, la ye un erróneo espejismo porque refuerza, más irracional– de nuestro ser. Este hecho
precisamente, el carácter unidimensional
8 La reproduzco aquí textuamente, sin traducir: de esa afiliación, que es lo que se debe evi-
It is my hypothesis that the fundamental source of conflict tar. De esa forma dificulta el diseño de 9 Es oportuno recordar aquí la fábula de la rana y

in this new world will not be primarily ideological or pri- políticas de coexistencia en lugar de facili- el escorpión. Éste quiere persuadir a la rana para que le
marily economic. The great divisions among humankind transporte sobre su espalda al otro lado de una charca;
tarlo. Por eso conviene recordar que, al para ello le asegura que no le picará pues, si lo hiciera,
and the dominating source of conflict will be cultural. Na-
tion states will remain the most powerful actors in world margen de la vinculación a su correspon- el escorpión también moriría ahogándose. A mitad de
affairs, but the principal conflicts of global politics will diente cultura, los seres humanos tienen camino, no obstante, el escorpión pica a la rana que,
occur between nations and groups of different civilizations. asombrada, le pregunta antes de hundirse con él: “¿por
múltiples identidades: nacionalidad, resi-
The clash of civilizations will dominate global politics. The qué lo has hecho? Ahora moriremos los dos”. A lo que
fault lines between civilizations will be the battle lines of dencia, sexo, lengua, ideas políticas, pro- el escorpión responde, como única y obvia explicación
the future. fesión, aficiones y otras. Y sólo una identi- de su comportamiento: “es que así es mi naturaleza”.

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José Adolfo de Azcárraga

debe prevenirnos contra los peligros de do, y la evolución cultural, cuyo desarrollo llo, las sociedades humanas tal como las
aceptar esas vinculaciones –sean culturales es increíblemente veloz. De hecho, estric- conocemos hoy podrían, literalmente,
o de otro tipo– como universales, simple- tamente hablando, nuestra evolución casi ‘morir de éxito’, arrastrando en su caída a
mente por ser las nuestras, admisión que ha dejado de ser darwiniana para ser fun- un elevado porcentaje de otras especies y
inevitablemente nos condenaría a chocar damentalmente cultural, y los avances de ecosistemas. En la tercera gran extinción
con grupos con otras improntas no menos la medicina y de la técnica han producido (al final del Pérmico, hace 250Ma), se esti-
universales. La adscripción a nacionalismos –pese a las guerras– un rápido y enorme ma que desapareció el 95% de las especies.
excluyentes o la pertenencia a grupos vio- crecimiento de la población. Sin embargo, La sexta, de origen humano, no sería tan
lentos de equipos de fútbol, por poner dos nuestra naturaleza biológica es la misma devastadora para la vida, pero sí terrible
ejemplos, sólo son, en realidad, muestras que la de nuestros antepasados de hace para nuestra especie. ¿Serán capaces los go-
de primitivismo biológico e irracionalidad: muchos miles de años, cuyos instintos, en- biernos de plantear las reformas necesarias
la inevitable fijación no ha sido compensa- tonces más adaptados a sus necesidades y a y de convencer a sus ciudadanos para que
da por el oportuno (y liberal) aprendiza- su entorno, continúan siendo los nuestros las acepten? Conocer y plantear un proble-
je10. Las improntas pueden ser diferentes, hoy, pese a que ya no son tan adecuados ma no implica, desgraciadamente, que
pero el mecanismo que las produce –la fi- para las complejas sociedades actuales. “El tenga solución cómoda o aceptable, y los
jación biológica a un determinado entor- hombre lleva todavía en su estructura cor- gobernantes suelen pensar en las próximas
no– refleja la base irracional de todas ellas. poral el sello indeleble de su bajo origen”, elecciones, no en las futuras generaciones.
De ahí la importancia de la educación escribió Darwin en The Expression of Emo- Y saben instintivamente que es mucho
abierta, del imprescindible aprendizaje que tions in Man and Animals (1872). Y, como más rentable apelar al corazón que a la ca-
ensancha nuestros horizontes y nos permi- dijo Lorenz, “nosotros somos el eslabón beza; quizá por ello, y de una forma tan
te apreciar otras identidades o puntos de perdido, tanto tiempo buscado, entre el curiosa como inconsciente, se suele llamar
vista11 e, incluso, cambiar el nuestro: el animal y el hombre auténticamente huma- animales políticos a quienes llegan con es-
primitivismo biológico de nuestra natura- no”. Pero ese ser verdaderamente humano, pecial facilidad al electorado. Nuestros ins-
leza no es tolerante, pero la educación libe- para quien finalmente dejaría de ser cierto tintos ancestrales no nos han preparado
ral puede enseñarnos a serlo. La razón crí- que le coeur a ses raisons que la raison ne para la actual encrucijada; sólo la educa-
tica es la única alternativa a toda posible connaît pas, no llegará como resultado de ción podría indicar el camino. Pero ésta no
violencia; la razón debe primar sobre la la evolución biológica de los actuales hom- es fácil y, dado nuestro natural y biológico
identidad. bres y mujeres –ni queda tiempo para es- egoísmo –mayor que nuestra capacidad de
perarlo– sino por medio del aprendizaje y cooperación– no es obvio que encontre-
Las sociedades y el futuro la educación liberal. Por eso ésta es tan im- mos la salida a tiempo.
El problema esencial de las sociedades mo- portante: su coste es despreciable frente al Conócete a ti mismo, ordenaba a los
dernas es el enorme desfase que existe entre de la ignorancia. mortales la inscripción del templo de Apo-
la evolución genética, de lentísimo trans- La especie humana se enfrenta hoy a lo en Delfos. La única forma de superar la
currir y cuyos mecanismos no han cambia- un reto gigantesco al que habrá de dar so- tiranía de nuestra naturaleza es reconocerla:
lución en una o dos generaciones: la po- todo ser humano que se precie debería ser
blación sobre la Tierra ronda ya los 6800 consciente de sus propias limitaciones. Por
10 En España, la transferencia de la educación
millones de personas (era menos de la ello, hoy no puede haber ninguna visión
a las autonomías y su consiguiente utilización para
construir identidades nacionales o autonómicas, más o
cuarta parte en 1900). Estamos tan acos- global de las sociedades modernas, ni cabe
menos reales o simplemente imaginadas, ha producido tumbrados –en Occidente– a contemplar Weltanschauung alguna que sirva de punto
considerables recelos entre ellas, tan perjudiciales como la historia desde el fin de la segunda guerra de partida para tratar de resolver algunos
antes inexistentes. Por otra parte, algunas políticas lin-
güísticas de las autonomías presentan aspectos que, por
mundial como un ‘progreso’ constante, de sus problemas, al margen de lo que nos
conculcar libertades individuales, recuerdan a las del que no advertimos que una ‘sexta extin- enseña la teoría de la evolución y sus con-
franquismo, como sabe cualquiera que tenga edad su- ción’ de especies –que seguiría a las cinco secuencias. Pues, parafraseando a Do-
ficiente para haberlo sufrido. La situación actual, conse- grandes extinciones de la historia de la vi- bzhanski y extendiendo su afirmación a los
cuencia de fomentar durante muchos años en la escuela
autonómica una excesiva -en tanto que excluyente y no da– se cierne sobre el planeta. Las necesi- seres humanos –si es que él no los incluía
liberal- impronta nacionalista, era perfectamente pre- dades de una población tan desmesurada ya– no puede entenderse el mundo de los seres
decible: los niños y jóvenes, convenientemente ‘troque- –que alcanzará los 9000 millones en sólo vivos, hombres y mujeres incluidos, al margen
lados’ (‘normalizados’) en sus escuelas, hace ya tiempo
que se convirtieron en adultos. Y como ya vimos esa
treinta años– son tales que ya no es posible de la evolución. Evolución que, por tanto,
impronta, una vez producida en los primeros años de ignorar las limitaciones de los recursos es aún más relevante hoy que cuando
la vida, será ya irreversible para muchos de ellos si no existentes, el desastroso impacto de la acti- Darwin la estableció hace ya ciento cin-
amplían horizontes: es lo que algunos nacionalistas
vidad del hombre sobre el planeta ni, in- cuenta años. n
denominan ‘hacer país’.
11 Esto no implica que haya que adoptar un com- cluso, la finitud de la propia Tierra; tam-
pleto relativismo cultural: las culturas primitivas no son poco cabe mantener a los miles de millo-
equivalentes a la de la Grecia de Pericles. Pero el hecho nes de desfavorecidos en su actual régimen
de que un único mecanismo biológico –la impronta–
pueda producir resultados muy distintos debería ser la de supervivencia. Por tanto, si no se pro- José A. de Azcárraga es catedrático de Física Teó-
base racional del respeto a todas las culturas. duce un cambio en el modelo de desarro- rica de la Universidad de Valencia.

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