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La Escuela Dominical:
Cumple la misión del Reino La Gran Comisión es la fuerza impulsora para el crecimiento del Reino de Dios y la salud
de Su iglesia. El objetivo es la transformación espiritual o conversión. La Escuela Dominical es una manera de guiar
personas a cumplir la misión del reino, no una misión institucional.
La Escuela Dominical encara asuntos de la vida que sobrepasan las limitaciones culturales comunes en los individuos,
iglesias, tribus y naciones sin considerar identidad geográfica, étnica o el idioma. El ministerio del reino realizado por
la estrategia de la Escuela Dominical es uno que merita la inversión de tiempo, energía y recursos.
Jesús, muy claramente, intentó que su pueblo invirtiera la vida en otros de forma tal que transformaran sus mentes,
emociones y voluntad: cómo piensan, sienten y actúan (Ro 12.1-2).
El pueblo está buscando dichas oportunidades. Tal vez nunca se animen a preservar
el statu quo, ayudar al pastor o aparentar hacer la «obra de la iglesia», pero responderán al poderoso llamado de Dios
para unirse a Él y su pueblo en el ministerio del reino.
La Escuela Dominical es uno de los brazos vitales de enseñanza de la iglesia. Es primero que nada una agencia de
enseñanza. La estructura organizacional es tal que tiene como meta la enseñanza efectiva de la Palabra de Dios.
Envueltos en este propósito de enseñanza están estas áreas de responsabilidad:
1) Evangelismo
2) Edificación
3) Discipulado
4) Interpretación exacta de la Biblia
Enseñar con el propósito de ganar quiere decir enseñar para ganar personas que se convierten
—para ser individuos viniendo a Cristo para el perdón de sus pecados. Es aquí según se enseña la Palabra que
vemos las almas estudiando y luego aplicando la Palabra de Dios a sus vidas de tal forma que aceptan el reclamo de
Cristo en sus vidas.
Enseñando para desarrollar implica dirigir a los creyentes a una vida espiritual más llena y más rica a través del
ministerio de la enseñanza de la Palabra de Dios. La Escuela Dominical, a través de la enseñanza, es estratégica en
cuanto al potencial que tiene para equipar a los hombres y a las mujeres espiritualmente para llevar el mensaje del
amor de Dios y demostrarlo en sus experiencias diarias.
La Escuela Dominical se proyecta como un ente formador de carácter
Cristiano que enseña, corrige, instruye y siembra la preciosa semilla de la
Palabra de Dios en los corazones de los niños, niñas y adolescentes, para
fortalecer las familias mejorando su calidad de vida y así formar una
sociedad impactada por el poder de Dios.
Siendo la Escuela Bíblica Dominical, el corazón de la iglesia, le ha placido a Dios
instruir Maestros Bíblicamente capacitados con el propósito de apoyar la visión
de la Iglesia de Dios de la Profecía, para la formación de niños-as y
adolescentes con principios y valores cristianos.
ORGANIZACIÓN BÁSICA
Todo trabajo en el que esté envuelto un número considerable de gente debe tener alguna forma de organización para
poder obtener los resultados deseados. Las muchas manos confunden el trabajo a menos que las manos estén unidas
y correctamente dirigidas; es entonces que las muchas manos hacen que el trabajo sea efectivo. La organización es
un sistema; la falta de organización trae confusión. Una diferencia entre una muchedumbre y un ejército entrenado lo
es la “organización”. La organización asegura resultados de forma rápida y efectiva, evitando que se pierda tiempo y
energía.
Aunque cualquier iglesia sufriría al carecer de una Escuela Dominical, no es necesario esperar la organización de una
iglesia para comenzar una Escuela Dominical. De hecho, una Escuela Dominical puede ser organizada en una
comunidad donde no tengamos una iglesia organizada. En muchas ocasiones ésta será un brazo o una extensión de
una iglesia ya organizada y que consta con una Escuela Dominical fuerte.
Al principio será necesario seleccionar los oficiales necesarios para operar efectivamente la Escuela Dominical. Cada
escuela necesitará un superintendente y un superintendente asistente nombrados por el pastor de la iglesia, o en un
campo nuevo, por el líder que haya sido designado para el campo nuevo. El superintendente nombrará entonces a
todos los otros miembros del personal de la Escuela Dominical. Éstos generalmente incluyen al secretario-tesorero, a
los maestros, directores de música y supervisores de todos los otros departamentos (ejemplo: del departamento de
extensión o de la matrícula infantil) los cuales son directamente responsables ante el superintendente de la Escuela
Dominical. El nombramiento del personal de la Escuela Dominical debe ser hecho en consulta con el pastor, o con el
líder que haya sido nombrado para el nuevo campo.
Su Escuela Dominical deberá estar dividida en clases y a cada clase deberá suplírsele un maestro calificado. Estos
maestros serán nombrados por el superintendente.
Se deberán proveer fondos para la literatura y otros gastos. (El editor de la Escuela Dominical ofrece un currículo
completo.)
La reorganización periódica es beneficiosa en que provee la oportunidad para una mayor evaluación del programa
total de la Escuela Dominical. Se recomienda que esto sea hecho por lo menos una vez al año en la misma forma en
que se lleva a cabo la reorganización pastoral del liderazgo de la iglesia. (Recuerde, cuando esté buscando el mejor
plan de reorganización, los objetivos totales de su Escuela Dominical deberán ser el único criterio para la toma de
decisión.)
El superintendente deberá asegurarse de que cada día contenga algún tiempo para el enriquecimiento personal.
Recuerde, muchos ojos lo están mirando a él y la imagen que proyecta influenciará a muchas personas. Estas
personas no sólo merecen recibir un buen ejemplo de vida cristiana, sino que también necesitan sus oraciones
intercesoras. Prepárese en la Palabra. “Procura con diligencia presentarte a Dios aprobado, como obrero que no tiene
de qué avergonzarse”, (2 Timoteo 2:15). Esto es tan vital para el superintendente como para cada maestro.
La tarea del superintendente es edificar una Escuela Dominical que provea un programa de instrucción de la Palabra
que prepare a los discípulos para el servicio y que los ayude a convertirse, a través de Cristo, en lo que Dios quiere
que sean.
El ministerio del superintendente es uno de supervisión y por necesidad requiere una persona con una “gran visión”.
Si el superintendente espera desarrollar a los obreros, él/ella deberá hacer un verdadero estudio de la Escuela
Dominical en su totalidad, buscando tener una buena evaluación de crecimiento y planificación por adelantado. Él/ella
deberá siempre estar alerta en lo que respecta a áreas que necesiten mejora, para poder alcanzar las metas que han
sido colocadas. Él/ella deberá concentrarse en prestarle atención a las áreas más significativas de la Escuela
Dominical. Esto significará delegarles la responsabilidad de tareas a otros.
El superintendente tratará de conseguir un personal de enseñanza efectivo cuyo deseo sea acercar a los estudiantes
a Dios y ayudarlos a conocer y a hacer Su voluntad. La efectividad de nuestros maestros determinará, a un grado, la
fortaleza o debilidad de nuestras escuelas. El pastor y el superintendente deberán tratar de tener un curso de
entrenamiento para los maestros a ser conducido en su escuela por lo menos una vez al año durante el transcurso del
año. En adición a esto, cada conferencia de obreros deberá ser planeada con la idea de proveer entrenamiento
adicional.
Para que una escuela funcione bien requerirá que se tengan responsabilidades bien definidas para los miembros del
personal. Cada miembro del personal deberá conocer las tareas que le han sido asignadas, y para evitar la
superposición, todas las descripciones de trabajo deberán ser redefinidas periódicamente. El prestarle atención
personal a cada miembro del personal y a cada departamento es una excelente forma de reconocer las necesidades
en las descripciones de trabajo. Las necesidades son vistas según aparecen y de esa forma se puede llegar más
rápidamente a las soluciones, lo cual ayuda en el cumplimiento del propósito de la Escuela Dominical.
El superintendente también deberá prestarle atención a las facilidades en las que la escuela ha de ser llevada a cabo.
En muchas ocasiones los salones feos o desorganizados pueden ser cambiados en unos atractivos y organizados con
un poco de trabajo. Los alrededores bonitos y alegres crean una atmósfera conducente al aprendizaje. También se
deberá prestar atención al equipo y a los materiales disponibles. Sin embargo, el dejarle saber simplemente a los
maestros que usted está ahí, siempre listo para ayudar a proveer salones atractivos y equipo adicional, los animará a
que consideren seriamente la situación de sus salones. Si el maestro puede ser motivado a retar a la clase a hacer
algo en lo que respecta a su salón y equipo, esto le ahorrará dinero a la escuela y será un grande estímulo tanto para
el maestro como para la clase.
La tarea del superintendente es una grande. Su responsabilidad se extiende a cada departamento de la Escuela
Dominical. Su misión es llevar a cabo el propósito que le ha sido asignado a la Escuela Dominical —ayudar a sus
miembros a conocer y a hacer la voluntad de Dios. ¿Quién podría pedir un llamado o un reto mayor que la tarea de
guiar una Escuela Dominical?
SUPERINTENDENTE ASISTENTE
La persona que sirve en esta capacidad deberá ayudar al superintendente y trabajar en armonía con él/ella en todo
momento. Esta persona está en una posición de gran importancia en la escuela. Deberá ser su práctica diaria buscar
a Dios en pro de cada uno de los maestros y de todos los otros obreros de la Escuela Dominical. Esta posición puede
ser también un buen terreno de entrenamiento para futuros superintendentes.
Algunos parecen pensar que la única tarea del asistente es presidir durante la ausencia del superintendente. Eso no
es cierto. El/la Superintendente Asistente es muy necesario durante cada momento de cada sesión de la escuela y
ayudará al superintendente en la planificación de todas las actividades. Existen casos especiales causados por la
ausencia de otros obreros para los cuales se tendrán que efectuar provisiones y en algunos casos problemas y
emergencias que necesitarán atención. En muchas ocasiones hay más alumnos nuevos a ser dirigidos a las clases
correctas que ujieres para dirigirlos. El superintendente asistente puede especializarse en responsabilidades
importantes como el alcance, el entrenamiento de maestros y el desarrollo del currículo. Estas son áreas que
requerirán la supervisión del superintendente asistente.
SECRETARIO(A) Y TESORERO(A)
Debido a que estas dos posiciones generalmente son llenadas por la misma persona, vamos a considerarlas juntas.
La persona que llena esta posición, debe ser diligente en los negocios y debe poder llevar registros exactos. Este
obrero deberá estar presente antes de que la escuela comience para ayudar en cualquier forma que sea necesario y
para ser un ejemplo de puntualidad ante los demás oficiales de la escuela. Cuando la escuela comience, el
secretario-tesorero recibirá un registro de la asistencia y de las ofrendas por clase. Esta información deberá ser
compilada y hecha disponible al superintendente. Si esta información le es hecha disponible a toda la escuela de
forma visual, el secretario-tesorero también será responsable de hacer esto.
El secretario-tesorero está a cargo de todo el dinero de la Escuela Dominical (esto no incluye el dinero de actividades
de la clase) y lo desembolsa en la forma en que es instruido por la(s) persona(s) responsable(s). Un registro
cuidadoso deberá ser mantenido, en el cual se muestren todos los recibos y desembolsos. Toda la información
necesaria para el reporte del superintendente a la conferencia deberá ser preparada y entregada al superintendente
antes de la conferencia. Si el superintendente desea recibir información de los secretarios de los varios departamentos
o clases de la Escuela Dominical, esto le puede ser entregado al secretario(a) de la Escuela Dominical para ser
compilado.
UJIERES
Erróneamente, esta posición ha sido considerada por algunos como una no muy importante. Sin embargo el ujier es la
primera persona que un extraño ve al entrar a la iglesia. El ujier debe ser amistoso, y tener un interés genuino en la
gente. Esta persona deberá estar en la iglesia por lo menos veinte minutos antes del comienzo de la Escuela
Dominical, listo para darle una cordial bienvenida a todo el mundo con una sonrisa. Es importante que los visitantes
reciban una afectuosa bienvenida. La primera impresión es a menudo una permanente. Es el privilegio de esta
persona aliviar la tensión del recién llegado que pueda sentirse un poco fuera de lugar y hacerlo sentir
verdaderamente bienvenido en la Escuela Dominical. Esta persona deberá estar alerta y dirigir a los recién llegados a
sus salones de clases. Esto requerirá conocer la localización de cada salón de clases según las edades, la división de
grado escolar y cualquiera otra división. La palabra que describe a cada ujier de la Escuela Dominical es alerta.
IDEAS ACERCA DE LA ESTRUCTURA ORGANIZACIONAL DIVISIONES DE CLASE
La siguiente división de clases es sólo uno de los muchos acercamientos que puede ser considerado para su escuela.
Según la escuela crece más, se hace necesario la provisión de clases adicionales.
Recuerde que estas son solamente divisiones sugeridas. Cada Escuela Dominical deberá estudiar su situación
particular y lidiar con las divisiones de clases respectivamente. En muchas ocasiones sería bueno dividir a los niños
según el grado escolar en el que están. Sin embargo, recuerde siempre que debemos ser flexibles para poder
alcanzar a la gente de forma efectiva.
Desarrollo Intelectual
Los niños de 6 y 7 años:
Presentan un pensamiento Pre-operatorio. Se maneja desde el plano intuitivo, siendo capaz de fijar su atención
sobre una limitada cantidad de información, y siempre desde un punto de vista egocéntrico; donde el punto de vista
solo es el suyo; creyendo que todo el mundo ve lo mismo que él. No comprenden lo abstracto. Ellos pueden expresar
conceptos teológicos sin comprender lo que están diciendo. Comienzan a internalizar normas, patrones de conducta y
comunicación. Manifiestan necesidad de apoyo, dependencia.
Entre los 7 y los 11 años:
El pensamiento es Operativo Concreto, los niños están ligados todavía a sus experiencias concretas, necesitando
manipular objetos para ayudar a su proceso de entendimiento; se interesan en la clasificación de objetos. Pueden
resolver problemas, pero únicamente con conocimientos que han adquirido. Se debe conducir al niño a que piense, de
lo contrario nuestras palabras serán sólo palabras vacías de significado.
Anexo: Descripción de la etapa Pre- Adolescencia
"Conocerlos nos permite saber que canales usar para llevarles el agua de vida que calme su sed espiritual"
Pre- Adolescencia: periodo vital entre los 12 y 14 años aproximadamente.
Muchos autores no estudian esta etapa de manera aislada sino como parte de la misma adolescencia, sin embargo
existen otros estudiosos que marcan un periodo de transición entre la latencia y la adolescencia que va desde los 11 a
los 14 años y la denominan así.
Características físicas
Comienza en esta etapa el cambio de su cuerpo infantil, el cual varia su inicio e intensidad en cada chico y en cada
chica. Con este cambio del esquema corporal infantil nos referimos al de la voz, que se hace más notorio en los
varones, al cambio de tamaño de las caderas en las chicas y del tamaño de las espaldas en los varones, el grosor del
cuerpo y la altura, se acentúa el
acné y hay una revolución en cuanto a los caracteres sexuales tanto de los genitales como del vello haciéndose
evidente en las mujercitas con la primera menstruación y en los varones con la eyaculación. En este tiempo comienza
la tan renombrada revolución de hormonas que genera todo un desorden en los chicos y en las chicas que no saben
cómo dominar.
En cuanto a sus capacidades cognitivas en esta etapa los chicos pueden hacer análisis lógicos, tienen un
pensamiento hipotético deductivo y pueden realizar operaciones formales. Por lo cual es la etapa más alta en el
desarrollo cognitivo según Piaget que involucra todas las capacidades anteriores.
Características psicológicas
Tanto chicas como chicos a esta edad comienzan a pasar cambios fundamentales que dan lugar a lo que
habitualmente llamamos "crecimiento". En estos cambios no solo está el cambio de su cuerpo sino que también hay
un gran cambio en su identidad y en su relación con sus padres.
El cambio relacionado con la identidad refiere a que el preadolescentes adolescente comienza a dejar de lado su
identidad de niño para recorrer el camino que lo convertirá en un adulto. Así empieza una crisis de identidad en donde
buscara modelos que copiar.
En cuanto a sus papas éstos dejan de ser los súper héroes para pasara a ser los controladores, aquellos que no
entienden nada y la relación comienza a ser más distante y conflictiva.
Estos cambios se complementan con el nuevo rol que empiezan a ocupar los amigos, es el tiempo de la pandilla en
donde el chico sale de la familia y se empieza a relacionar fuertemente con el afuera. Asimismo la sociedad surge
como un ente regulador que dicta sus reglas y sus prototipos y los chicos en medio de ese taladro intentan adaptarse
y configurar una identidad aceptada.
Dentro de este marco psicológico de cambios surgen los fanatismos e idealizaciones tanto de los famosos como de
los adultos cercanos que no sean sus papas pero que generen confianza con los chicos. Es en este tiempo que
comienzan los peligros de las adicciones, alcohol, cigarrillo, drogas, como resurgimiento de la etapa oral.
También esta etapa presenta cambios permanentes de humor y de apego, por lo cual puede ser que varíen mucho en
sus estados anímicos y sus gustos y preferencias tanto en relación a objetos como a personas.
Las chicas suelen dividirse en dos bandos están quienes son las damitas por excelencia o quienes son unas
verdaderas marimachos. Tienen las pulsiones muy a flor de piel e intentan acercarse a los varones de cualquier forma,
aunque se sienten superiores a ellos. En este tiempo suelen tener un tiempo de muchas diferencias con las mamas
por competencia o celos pero que mas adelante se va solucionando y se complementan convirtiéndose en súper
amigas.
Los chicos en este tiempo todavía se mantienen al margen del sexo opuesto, sienten un rechazo por las chicas,
aunque no se extenderá por mucho tiempo y varia como todo en cada chico y su estimulación. Es característico de los
varones en este periodo una fijación en la etapa anal, en donde hay un valor agregado a los olores, a los ruidos al
lenguaje sucio, a no higienizarse, etc.
Necesidades de la edad
Al ser tan característico de esta etapa la conformación de la pandilla podemos decir que necesitan de amigos y
también de tiempos recreativos. Asimismo dada la lejanía que sienten de sus padres necesitan contención adulta,
necesita que se les dedique tiempo y se les preste atención. Al estar en la configuración de su identidad necesitan
modelos para copiar. Necesitan sentir más libertad que antes, por ejemplo salir sin los papas, tener responsabilidades
más importantes que en su infancia porque necesitan también que desde el afuera los vean y los hagan sentir que son
más grandes y que son capaces de crecer. Necesitan sentir que son útiles que pueden ayudar y colaborar en cosas
importantes, por ejemplo las chicas que pueden no solo en ayudar en tareas domesticas como lavar los platos sino
que puede cuidar a su hermanita toda la tarde.
Oportunidades y ventajas que presenta la edad
- En este tiempo los chicos son súper activos y tienen ganas de hacer por lo cual se pueden organizar muchas
actividades recreativas mientras estas sean diversas para no agotar todos los recursos y lograr que no aburran,
porque suelen cansarse fácilmente.
Debido a que tienen más capacidad cognitiva dentro del armado de las clases para ellos se puede preparar temas con
motivaciones o desarrollos más elaboradas, cuestionarios más complejos, juego de preguntas y respuestas,
motivaciones o actividades con juegos de ingenio. Además tienen muchas inquietudes y las clases comienzan a ser
un tiempo en el cual bíblicamente e se les puede orientar en sus dudas.
- Tienen como característica idealizar a algunas personas adultas que generen su confianza y eso es una ventaja para
los lideres dado que pueden llegar a ser muy determinantes en las vidas de los chicos si logran que ellos los admiren.
Esto también puede ser un arma de doble filo pero estamos hablando de potenciar sus características para poder
bendecirlos y guiarlos en el Señor y no para manipularlos para provecho personal.
- Al estar en la etapa de la pandilla se mueven en bloque por lo cual sabemos que si logramos que el líder de ese
grupo asista o sea motivado el resto lo seguirá plácidamente.
Enseñanzas apropiadas para la edad
En este período se puede aprovechar para dejar en claro los puntos básicos de la vida cristiana e intercalando con
clases temáticas propias de las necesidades o inquietudes que los mismos chicos vallan expresando o el maestro -
líder valla reconociendo importante hablar.
Dentro de los posibles temas que se podrían dictar, siendo pensados y preparados para esta edad, estarían:
_ El bautismo
_ Escatología
_ La oración
_ La vida devocional
_ La Iglesia como familia de Dios
_ La cena del Señor
_ El espíritu Santo
_ La conversión
_ La alabanza y la adoración
_ La sexualidad ante la luz bíblica
_ La amistad
Dentro de las enseñanzas apropiadas en este tiempo se puede estimular la vida devocional de los chicos con estudios
en conjunto de libros bíblicos, guiados por los líderes. La preparación de grillas de lectura diaria.
La Escuela Dominical:
Cumple la misión del Reino La Gran Comisión es la fuerza impulsora para el crecimiento del Reino de Dios y la salud
de Su iglesia. El objetivo es la transformación espiritual o conversión. La Escuela Dominical es una manera de guiar
personas a cumplir la misión del reino, no una misión institucional.
La Escuela Dominical encara asuntos de la vida que sobrepasan las limitaciones culturales comunes en los individuos,
iglesias, tribus y naciones sin considerar identidad geográfica, étnica o el idioma. El ministerio del reino realizado por
la estrategia de la Escuela Dominical es uno que merita la inversión de tiempo, energía y recursos.
Jesús, muy claramente, intentó que su pueblo invirtiera la vida en otros de forma tal que transformaran sus mentes,
emociones y voluntad: cómo piensan, sienten y actúan (Ro 12.1-2).
El pueblo está buscando dichas oportunidades. Tal vez nunca se animen a preservar
el statu quo, ayudar al pastor o aparentar hacer la «obra de la iglesia», pero responderán al poderoso llamado de Dios
para unirse a Él y su pueblo en el ministerio del reino.