UNIVERSIDAD

TÉCNICA
Ingeniería en Geología y Minas
PARTICULAR DE
LOJA

DEPARTAMENTO DE
GEOLOGIA, MINAS E
INGENIERÍA CIVIL

TRABAJO EXTRACLASE Nº1

COMPONENTE: LEGISLACIÓN MINERA.

Estudiante: Diego A. Ramón C.

Profesor: Diósgrafo Chamba Villavicencio PhD

Fecha entrega: 16 de junio del 2018
1 OBJETIVO

Realizar un análisis comparativo de la ley de minería 126 y la ley minera vigente, donde

consten los siguientes puntos:

 Concesión minera.

 Plazos de la concesión.

 Tributación minera.

2 DESARROLLO

2.1 Ensayo

La ley minera de 1991 o conocida también como ley minera 126, al igual que la ley vigente,

declara a la concesión minera como un derecho, un acto que puede ser transferible. Aunque la

transferencia de derechos mineros era libre, sujeta a la obligación de notarizar los contratos e

inscribirlos en el Registro de la propiedad con la correspondiente notificación a la

administración minera del Estado., en la actualidad esta debe ser previamente calificada y

aprobada por el Ministerio Sectorial. Por otra parte una de las semejanzas más importantes de

estas dos leyes es que la concesión minera confiere a su titular o concesionario el derecho real

y exclusivo a prospectar, explorar, explotar, beneficiar, fundir, refinar y comercializar todas

las sustancias minerales que puedan existir y obtenerse en el área, también se consideran

inmuebles accesorios a la concesión las construcciones, instalaciones y demás objetos

afectados permanentemente a su operación. Al igual que en la ley 126 el Estado otorgará

concesiones mineras a favor de personas naturales o jurídicas, nacionales o extranjeras, y solo

se otorgaran 5.000 hectáreas mineras máximas de concesión.

Otro punto a destacar son los plazos de las concesiones. La concesión minera tendrá un plazo

de duración de hasta veinte y cinco años (ley minera vigente) y esta es de 30 años para la ley
126, que podrá ser renovada en ambos casos por períodos iguales de su duración. En la ley

vigente se dan 10 años de plazo para realizar todas las etapas mineras, desde la etapa inicial

hasta la evaluación económica del yacimiento, mientras que en la ley 126 no se da este tipo de

plazo. Otra similitud es que la concesión minera y los permisos se extinguirán por la

expiración de los plazos otorgados o el incumplimiento de pagos o lo que dicte la ley. En

casos de impedimentos para ejecutar normalmente sus labores mineras podrá pedir un plazo o

suspensión de actividades a la Dirección Nacional de Minería (ley 126) y al Ministerio

sectorial (ley vigente).

Como último punto, respecto a la tributación minera, en la ley anterior no exige mucho pago

de impuestos, por ejemplo: el pago de derecho por tramites de concesión será de 100 dólares

(ley minera 126), y cinco remuneraciones básicas unificadas en la ley vigente. Aunque si se

asemejan en cuanto para; la obtención de concesiones se pagara en concepto de derechos por

cada trámite de solicitud por una sola vez, sí no se pagan las patentes de conservación de la

concesión, ésta se da en extinción. Respecto a pagos de regalías estas serán destinadas al

Estado y al lugar donde se desarrolla la minería (ley actual), en la ley 126 estas son

distribuidas a los trabajadores. Estas dos leyes tienen muchas diferencias y semejanzas, que

pueden afectar tanto positiva y negativamente al desarrollo de la minería en nuestro País.

3 CONCLUSIONES

 Se analizó que la ley minera 126 es más ventajosa, en cuanto a el otorgamiento de

concesiones ya que no presenta muchos impedimentos respecto a los requisitos que se

deben cumplir, además consta de una tributación de impuestos muchísimo más baja

que la ley minera actual. En si se identificó que la ley actual presenta muchos

impedimentos para la realización de minería ya que, ésta se centra en una visión de

mayor responsabilidad ambiental, y aunque esto es positivo también repercute

negativamente, esto en algunas leyes que presentan trabas para la inversión minera en

el País.

4 RECOMENDACIONES

 Sería recomendable, quitar e incluir algunas de las políticas de la ley minera actual, ya que

algunas la hacen menos atractiva para la inversión en este sector; y crear o retomar algunas

políticas, donde se podrían incluir algunas de la ley minera 126, siempre y cuando contribuya

a un mayor desarrollo o impulso minero.