Академический Документы
Профессиональный Документы
Культура Документы
I. ASPECTOS ANÁTOMO-FISIOLÓGICOS
1
superior de la vulva.
2. Vagina: es una abertura tubular que comunica los genitales externos con el útero.
3. Útero: es un órgano muscular en el que se desarrolla y crece el feto.
4. Trompa de Falopio: son dos, ubicadas en las esquinas superiores del útero, comunicándolo con los
ovarios.
5. Ovario: contiene los folículos, y es allí donde madurarán los óvulos. Sus partes son:
a) Estroma ovárico: constituye el cuerpo principal del óvulo, dentro del estroma maduran los
óvulos y las células femeninas secretoras de hormonas.
b) Folículos ováricos: cada folículo contiene un óvulo, a través de etapas progresivas de
desarrollo maduran uno por cada período.
c) Cuerpo lúteo: los folículos que liberan un óvulo maduro se convierten en cuerpo lúteo.
Después de dos semanas de vida secretoria (progesterona), si no hay fecundación,
degenerará y quedará invadido por tejido fibroso.
Ciclos femeninos
Cabe por tanto, hablar de dos ciclos que se producen simultáneamente:
1. El ciclo ovárico que consiste en la maduración de un folículo y expulsión de un ovocito
2. el ciclo menstrual (o ciclo endometrial) que consiste en la preparación de un lecho apto para recibir
al ovocito o, si este no esta fertilizado, en la eliminación del mismo.
Ciclo Ovárico
1. Cuando se inicia la menstruación la hipófisis anterior empieza a secretar HFE y HL, estas hormonas
hacen que crezcan varios folículos en los ovarios y que se secreten estrógenos en cantidades
importantes.
2. Los estrógenos producen inhibición de la secreción de la HFE y HL, disminuyendo su secreción casi a
cero alrededor del décimo día del ciclo. Inmediatamente la hipófisis anterior comienza a secretar HFE y
HL, produciéndose un desarrollo final violento de uno de los folículos ováricos, haciendo que se ovule
en 3 ó 4 días.
3. El proceso de ovulación produce a continuación la formación del cuerpo lúteo, éste secreta grandes
cantidades de progesterona, así como también se siguen secretando cantidades importantes de
estrógenos.
4. Los estrógenos y progesterona secretados por el cuerpo lúteo inhiben a la hipófisis anterior una vez más
(haciendo que disminuyan HFE y HL), en ausencia de estas hormonas el cuerpo lúteo entra en
involución con la consiguiente disminución de estrógenos y progesterona.
5. Esta última disminución hace que la hipófisis anterior comience a secretar HFE y HL, con lo que se
inicia el siguiente ciclo.
Ciclo Endometrial
1. Fase proliferativa: los estrógenos hacen que el endometrio aumente de espesor, además se
incrementan mucho la profundidad y la tortuosidad de las glándulas endometriales. Esta fase dura
casi once días después de terminada la menstruación.
2. Fase secretoria: Casi a la mitad del ciclo menstrual, el cuerpo lúteo empieza a secretar
2
progesterona, que a continuación produce un engrosamiento ulterior del endometrio a la vez que
produce: a) más glándulas endometriales empiezan a secretar un líquido nutriente que puede
emplear el óvulo fecundado antes de implantarse; b) se depositan en las células endometriales
numerosas sustancias grasas y glucógeno; y c) se incrementa el caudal sanguíneo del endometrio.
Resumiendo con ello la función principal de la progesterona es poner a disposición del embrión
una cantidad suficientes de nutrientes para que se desarrolle, si se implanta en el endometrio.
3. Menstruación: si el óvulo se fecunda y empieza a dividirse, se libera una hormona especial llamada
gonadotropina coriónica, desde la masa de células embrionarias en desarrollo. Esta hormona
estimula al cuerpo lúteo cara que siga produciendo estrógenos y progesterona, se ha iniciado el
embarazo. Si por el contrario, no se produce fecundación, no aparece la hormona gonadotropina
coriónica, con lo que involuciona el cuerpo lúteo —disminuyendo la cantidad de estrógenos y
progesterona— la falta de estas hormonas hace que los vasos sanguíneos endometriales se vuelvan
espásticos, interrumpiéndose el flujo de sangre hacia las capas superficiales del endometrio.
Resultando que gran parte del tejido endometrial muera y se desprenda hacia la cavidad uterina. La
misma pared endometrial rezuma cantidades pequeñas de sangre (50 mL), juntos, tejido
endometrial descamado, sangre y exudados serosos abundantes provenientes de la superficie
uterina denudada, es lo que se llama menstruo, expulsándose gradualmente mediante contracciones
uterinas intermitentes en tres a cinco días. Este proceso se llama menstruación. Si las
contracciones ocurren con mucha fuerza e intensidad pueden producir dolor de tipo cólico.
Después de la menstruación empieza a crecer nuevo epitelio para cubrir la superficie de los hoyuelos
uterinos en el plazo de tres a cinco días. A continuación, bajo la influencia de la producción renovada de
estrógenos por los ovarios, se inicia de nuevo el ciclo endometrial.
El deseo sexual, que está influido por una serie de elementos, que pueden ser orgánicos, psicológicos,
cognitivos y ambientales. La motivación juega un rol nada despreciable, ya que no es simplemente la
necesidad de satisfacer una necesidad biológica, sino que debe existir una conexión con el otro, de sentirse
amado, seguro, acompañado, siendo estos una serie de elementos que llevan al individuo a sentir deseo
sexual por su pareja y la no presencia de este deseo debe entenderse bajo la óptica de que existen múltiples
elementos que lo condicionan. Hombre y mujer tienen diferentes formas de aparición, estímulos inductores,
duración, latencia y satisfacción del deseo.
La excitación sexual, se puede desencadenar por un sinnúmero de mecanismos que estimulen cualquiera de
nuestros sentidos y van en directa relación con las experiencias vividas. Esto desencadena una respuesta
fisiológica tanto en el hombre como en la mujer. En el hombre se produce la señal más visible y que es la
erección del pene, y ésta se produce fundamentalmente por un cambio en la circulación arterial y venosa, en
respuesta a un estimulo. Otros cambios ha mencionar son: la contracción sostenida del dartos en el escroto,
que se traduce en el ascenso testicular, el aumento del ritmo cardiaco, de la presión arterial y del tono
neuromuscular en general.
En las mujeres, el elemento que se podría emular con la erección peneana es la lubricación vaginal, que es el
resultado directo del incremento de flujo sanguíneo a nivel pélvico, que producen una vasodilatación en las
paredes de la vagina y mayor lubricación vaginal. En los genitales externos se hinchan los labios mayores y
menores. En el clítoris se produce una erección progresiva. En relación a los cambios que se producen en las
mamas, sería el aumento de tamaño y erección de los pezones. También hay aumento del ritmo cardiaco, de
la presión arterial y del tono neuromuscular en general.
En la fase de meseta la característica para ambos sexos es la presencia de un nivel alto y sostenido de tensión
3
sexual, el que además es de corta duración. En el hombre aumenta la rigidez peneana y se produce un
incremento en el tamaño del glande, los testículos alcanzan su ascenso máximo y se produce la eliminación
de un fluido preevaculatorio, el cual provendría de las glándulas de Cowper. Con el propósito de aumentar
los niveles de excitación se puede proceder a realizar contracciones de la musculatura pelviana, lo que por
añadidura acelerará el momento de la eyaculación.
En las mujeres, se produce lo que se conoce como plataforma orgásmica, lo que en definitiva es un aumento
de volumen del tercio exterior de la vagina, secundario a la vasodilatación de esa zona. Esto produce una
disminución del lumen vaginal y mayor contacto entre los genitales, lo que desmitifica el grosor del pene, ya
que el lumen se adaptada al grosor peneano. En relación a la lubricación vaginal esta aumenta, aunque si el
estimulo es demasiado prolongado, la lubricación podría disminuir en forma considerable e incluso
detenerse. El fondo vaginal aumenta su ancho y profundidad; además existen menos terminaciones
nerviosas, por lo que la profundidad de la penetración no aumenta la sensación placentera y además
desmitifica el hecho que un pene largo podría entregar mas placer sexual. Aumentan de volumen el clítoris y
los labios mayores y menores y glándulas mamarias.
Orgasmo: Si la estimulación sexual aumenta, se alcanzan niveles de tensión sexual elevados, los que llevan
al umbral del orgasmo, desencadenando posteriormente una serie de reflejos, que en su conjunto constituyen
las sensaciones orgásmicas, que se definen como una sensación placentera intensa, En el hombre, el
orgasmo se divide en dos etapas: la primera es la emisión de semen a nivel de la uretra prostática, entre el
esfínter estriado y liso; esto se produce por contracciones rítmicas cada 0.8 seg., de la glándula prostática y
vesículas seminales, lo que produce aumento de la presión de la uretra prostática, manifestándose la
sensación de eyaculación inminente, que no se puede detener, ya que los mecanismos reflejos ya fueron
desencadenados. Secundariamente se produce la eyaculación propiamente tal, que es la contracción rítmica
de la musculatura de la uretra bulbar, de la glándula prostática, vesículas seminales y de músculos de la base
del pene, además de una serie de sensaciones neurovegetativas que comprometen todo el cuerpo.
En las mujeres no existe una sensación que emule el punto de eyaculación inminente, lo que se ha
encontrado es un repentino estallido de calor y placer a nivel clitorídeo y de la plataforma orgásmica y que
luego se propaga por todo el cuerpo; además se desencadenan una serie de contracciones involuntarias de la
musculatura en distintas partes del cuerpo, pero con mayor intensidad. a nivel de la plataforma orgásmica y
del útero; incluso se ha descrito la pérdida de los sentidos por escasos segundos. Algunas mujeres, luego de
la primera sensación orgásmica, pueden repetirla en varias ocasiones, si los estímulos sexuales persisten, lo
que se conoce como multiorgásmos. La ausencia o presencia de este hecho no constituye una anormalidad.
El período de resolución consiste en que los cambios generados por la excitación sexual vuelven a su estado
previo. En el hombre la parte inicial de esta fase es el periodo refractario absoluto, que es muy corto en la
juventud y aumenta progresivamente con los años. También se ha encontrado que este tiende a alargarse con
el mayor número de eyaculaciones al día.
4
descenso de los testículos hasta el escroto. Es importante aclara que es la testosterona y no los cromosomas
sexuales lo que dispara el desarrollo de los conductos de Wolf. En esta diferenciación no intervienen las
hormonas ováricas. Los ovarios están casi por completo inactivos durante el desarrollo fetal. El desarrollo
del sistema de Müller tendrá lugar en cualquier sexo no expuesto a testosterona durante el periodo fetal
crítico.
Todo feto desarrolla por separado precursores para las gónadas masculina (médula) y femenina (corteza) y
dos sistemas de conductos reproductores (Wolf y Müller). Pero los genitales masculino y femenino (órganos
reproductores externos) se desarrollan a partir del mismo precursor. En el transcurso del segundo mes de
gestación, el precursor bipotencial de los órganos reproductores externos consta de cuatro pares: glande,
pliegues uretrales, cuerpos laterales y abultamientos labioescrotales. El glande se transformará en la cabeza
del pene o el clítoris; los pliegues uretrales se cierran en el varón o se convienen en los labios menores; los
cuerpos laterales forman el tallo del pene o la caperuza del clítoris; y los abultamientos labioescrotales
forman el escroto o los labios mayores.
5
Comportamiento femenino, reproducción y hormonas gonadales
La estrecha relación entre el ciclo de liberación hormonal y el ciclo del estro (hembra fértil, receptiva,
proceptiva y atractiva) en la mayoría de los animales, sugiere que el comportamiento sexual femenino está
bajo control hormonal. Los efectos de la ovariectomía confirman esta conclusión.
En las mujeres ni la motivación sexual ni el comportamiento sexual están inextricablemente ligados a sus
ciclos menstruales, inclusive la ovariectomía tienen poco efecto sobre ambos comportamientos. La principal
consecuencia de la ovariectomía, además de la esterilidad., es un descenso de la lubricación vaginal.
El uso de esteroides anabolizantes es usado con fines competitivos y cosméticos, pero aún no se ha podido
demostrar experimentalmente tales efectos en los atletas. Son muchos los entrenadores que sostienen que no
se puede competir en la actualidad sin aporte de esteroides anabolizantes. En relación al sexo sus efectos
serían los siguientes: en hombres, presentan reducción de gonadotropinas, produciendo disminución de la
actividad testicular, pudiendo conducir a la atrofia testicular y esterilidad. También se puede producir
ginecomastia, debido a la aromatización de los esteroides en estrógenos. En las mujeres, provocan
amenorrea, esterilidad, hirsutismo, crecimiento del clítoris, desarrollo de un cuerpo de aspecto masculino,
calvicie, disminución del tamaño de los pechos y aumento de la aspereza y gravedad de la voz. Por
desgracia, muchos de los efectos en las mujeres son irreversibles.
Tanto hombres como mujeres pueden sufrir espasmos musculares, dolor muscular, sangre en la orina, acné,
inflamación debida a la retención de líquidos, hemorragias en la lengua, náuseas, vómitos y una variedad de
comportamientos psicóticos (depresión e ira). Los esteroides anabolizantes orales producen tumores
cancerosos del hígado.
V.ORIENTACIÓN SEXUAL
Se define a orientación sexual como la dirección de los sentimientos o conductas sexuales hacia individuos
del sexo opuesto o del mismo sexo o de alguna combinación de ambos. Los términos “heterosexual”,
“homosexual” y “bisexual” no proveen una descripción completa de la sexualidad.
Considerar una fundamentación biológica para explicar la orientación sexual no es lo mismo que afirmar que
la orientación sexual es innata o está genéticamente determinada.
A inicios del siglo XX, Havelock Ellis y Magnus Hirschfield comienzan un estudio objetivo de la orientación
sexual, concluyen que tanto la homosexualidad corno la heterosexualidad son aspectos igualmente normales
de la naturaleza humana. Aún más, propusieron que ambos aspectos se establecían por mecanismos
intrínsecos durante etapas tempranas del desarrollo del individuo. Estas aseveraciones se vieron opacadas por
las interpretaciones de Freud.
Fue por Freud que la homosexualidad fue vista como una enfermedad, esto fue un avance, comparado con
perversión, crimen o pecado. Pero la visión médica de la enfermedad implica tratamiento y cura, por lo que
miles de sujetos han sido expuestos al psicoanálisis, psicoterapias, terapia conductual, castración,
transplantes testiculares, tratamientos hormonales, terapias de choque eléctrico e incluso cirugías cerebrales.
Una vez adultos, los individuos heterosexuales y homosexuales difieren en otras características, además de
con quién desean tener relaciones sexuales. Algunas de estas diferencias sugieren la idea de que los cerebros
de los individuos homosexuales se desarrollan de manera atípica. Es de conocimiento general que los
hombres heterosexuales tienen mejor puntaje en pruebas de habilidad espacial y menor puntaje en pruebas
verbales, comparados con mujeres heterosexuales. Varios estudios revelan que los hombres homosexuales
tienden a mostrar los mismos promedios de resultados en las pruebas de orientación espacial que los de
mujeres heterosexuales, también presentan habilidades verbales cercanas a aquellas que muestran las
mujeres.
Respecto al uso de la mano izquierda sobre la derecha. Hombre y mujeres heterosexuales presentan uso
preferencial de la mano diestra, y si se tienen que emplear ambas manos, la izquierda desempeña la tarea más
simple. McCorrnick (1991) informa que los homosexuales hombre y mujeres son menos consistentemente
diestros. En esta población existe una alta incidencia de sujetos zurdos y una mayor de ambidiestros. La idea
de que los individuos homosexuales usen indistintamente las manos sugeriría que su funcionamiento cerebral
sería menos lateralizado. Lindsay (1987) encontró que las funciones cerebrales de los homosexuales se
encuentran distribuidas más simétricamente entre ambos hemisferios cerebrales, en comparación con los
individuos heterosexuales.
También en el área laboral existen diferencias, las homosexuales prefieren labores .que requieran trabajo
físico importante; los homosexuales prefieren trabajos que requieran actividad creativa como diseño,
actuación, danza, etc. Las presiones que reciben los homosexuales, comenzando desde su propia familia,
6
hacen que no confíen en personas que sean figuras de autoridad, aunada a una inusual habilidad para
despertar simpatía en otros individuos.
Aspectos genéticos
Varias investigaciones han demostrado que las diferencias en la orientación sexual tienen una base genética.
Dean Hamer (1993) mencionó haber encontrado un gen del cromosoma X que tenía una poderosa influencia
sobre la orientación sexual, inclusive los medios de comunicación lo bautizaron enseguida como el “gen
gay”, por estos tiempos estaba en boga la idea de demostrar que la homosexualidad era “biológica” y no
consecuencia de la presión cultural o la opción consciente. Una causa genética disminuiría el prejuicio contra
un estilo de vida que no era una “opción” deliberada, también haría que la homosexualidad apareciera como
menos amenazadora para los padres (ya que tales modelos no influirían en sus hijos, a menos que tuvieran tal
“inclinación”). Este gen está ligado a los extremos del cromosoma X (Xq28). El 75 % de los homosexuales
estudiados compartían la misma versión de este marcador.
Muy posiblemente esta secuencia sea sólo una de las varias causas biológicas que subyazcan a la preferencia
homosexual. Otros factores, incluidos los ambientales, podrían afectar la expresión de esta secuencia
genética.
Una de las hipótesis más interesantes relacionadas con la homosexualidad es el orden de nacimiento. Un
hombre con uno o más hermanos mayores tiene más probabilidades de ser homosexual que uno que no tenga
hermanos, que solo tenga hermanos menores o que tenga una o más hermanas mayores. Esto no tiene nada
de idea “freudiana”. Una pista importante que queda por explicar es que en las lesbianas no se da el efecto
del orden de nacimiento.
Sabemos que el antígeno H-Y (ver más arriba), es el que provoca la atrofia de los conductos de Müller
(femeninos) y masculiniza al feto; se denomina antígeno porque se sabe provoca una reacción inmunitaria de
la madre. Como consecuencia la reacción inmune es probablemente más intensa en los sucesivos embarazos
de varones. Blanchard y Klassen (1997), sostiene que una de las funciones de los antígenos H-Y es activar
otros genes en determinados tejidos, concretamente en el cerebro. Es importante no aceptar a rajatabla tales
resultados. Los seres humanos estamos muy lejos de las ratas y moscas, pero es posible que en cierto periodo
sensible, precoz y crucial faltara una hormona y esto afecte de forma permanente determinadas funciones,
incluida la orientación sexual.
VI. REFERENCIAS
1. DE LA FUENTE, R., ALVAREZ, F. Biología de la mente. Fondo de Cultura Económica. México DF.
1998.
2. GUYTON, A., Tratado de fisiología médica. Interamericana Mcgraw-Hill.MéxicoDF 1992
3. PINEL, J.P. Biospicología. Pearson educación, SA. Madrid , 2001
4. ROSENZWEIG, M., LEIMAN, A. Psicología fisiológica. McGraw-Hill / Interamericana de España.
Madrid 1992