Luis y Jaqueline se encontraban jugando en la hora de
recreo de repente observan a Raúl que está sentado en una esquina, callado y triste se le acercan y le preguntan: ¿Qué te pasa? ¿Por qué no juegas si a ti te gusta jugar? Raúl les contesta: la verdad es que estoy triste porque han despedido a mi papá del trabajo y no sabemos qué hacer y mi mamá me ha dicho que voy a tener que vender caramelos. Jacqueline le dice, que es muy triste lo que le está pasando, y le avisan a la profesora para que converse con Raúl