Академический Документы
Профессиональный Документы
Культура Документы
Los elementos representativos son conocidos así porque el número de grupos representa
la cantidad de electrones en su capa de valencia o sea el último nivel, y la cantidad de
electrones en esa capa nos indica la valencia máxima que el elemento puede presentar.
Características
Se caracterizan por presentar configuraciones electrónicas "externas" en su estado
fundamental que van desde ns1 hasta ns2np6, a diferencia de los elementos de transición
y de los elementos de transición interna. Los elementos representativos son los elementos
de los grupos 1 y 2 (bloque s), y de los grupos de 13 a 18 (bloque p).2 Hasta hace unos
años, estos grupos se identificaban con números romanos del I al VII con la letra A.3 Los
elementos del grupo 12 son generalmente considerados como metales de transición, sin
embargo, el zinc (Zn), el cadmio (Cd), y el mercurio (Hg) comparten algunas propiedades
de ambos grupos, y algunos científicos creen que deben ser incluidos como elementos
representativos o elementos de los grupos principales.
Los elementos representativos (con algunos de los metales de transición más ligeros) son
los elementos más abundantes en la tierra, en el sistema solar, y en el universo.
Elementos Metales
La mayor parte de los elementos metálicos exhibe el lustre brillante que asociamos a los
metales. Los metales conducen el calor y la electricidad, son maleables (se pueden
golpear para formar láminas delgadas) y dúctiles (se pueden estirar para formar
alambres). Todos son sólidos a temperatura ambiente con excepción del mercurio (punto
de fusión =-39 ºC), que es un líquido. Dos metales se funden ligeramente arriba de la
temperatura ambiente: el cesio a 28.4 ºC y el galio a 29.8 ºC. En el otro extremo, muchos
metales se funden a temperaturas muy altas. Por ejemplo, el cromo se funde a 1900 ºC.
Los metales tienden a tener energías de ionización bajas y por tanto se oxidan (pierden
electrones) cuando sufren reacciones químicas. Los metales comunes tienen una relativa
facilidad de oxidación.
Propiedades de los metales
Los metales poseen ciertas propiedades físicas características, entre ellas
son conductores de la electricidad. La mayoría de ellos son de color grisáceo, pero
algunos presentan colores distintos; el bismuto (Bi) es rosáceo, el cobre (Cu) rojizo y el
oro (Au) amarillo.
Otras propiedades serían:
Maleabilidad: capacidad de los metales de hacerse láminas al ser sometidos a
esfuerzos de compresión.
Ductilidad: propiedad de los metales a moldearse en alambre e hilos al ser
sometidos a esfuerzos de tracción.
Tenacidad: resistencia que presentan los metales al romperse o al recibir fuerzas
bruscas (golpes, etc.)
Resistencia mecánica: capacidad para resistir esfuerzo de tracción, compresión,
torsión y flexión sin deformarse ni romperse.
Suelen ser opacos o de brillo metálico, tienen alta densidad, son dúctiles y maleables,
tienen un punto de fusión alto, son duros, y son buenos conductores (calor y electricidad).
La ciencia de materiales define un metal como un material en el que existe un traslape
entre la banda de valencia y la banda de conducción en su estructura electrónica (enlace
metálico).
Elementos No Metales
Se denomina no metales, a los elementos químicos opuestos a los metales pues sus
características son totalmente diferentes. Los no metales, excepto el hidrógeno, están
situados en la tabla periódica de los elementos en el bloque p. Los elementos de este
bloque son no-metales, excepto los metaloides (B, Si, Ge, As, Sb, Te), todos los gases
nobles (He, Ne, Ar, Kr, Xe, Rn),y algunos metales (Al, Ga, In, Tl, Sn, Pb).
Son no metales los siguientes elementos:
Hidrógeno (H).
Carbono (C).
Nitrógeno (N).
Oxígeno (O).
Flúor (F).
Fósforo (P).
Azufre (S).
Cloro (Cl).
Bromo (Br).
Yodo (I).
Astato (At).
Selenio (Se).
Los no metales varían mucho en su apariencia no son lustrosos y por lo general son malos
conductores del calor y la electricidad. Sus puntos de fusión son más bajos que los de los
metales (aunque el diamante, una forma de carbono, se funde a 3570 ºC). Varios no
metales existen en condiciones ordinarias como moléculas diatómicas. En esta lista están
incluidos cinco gases (H2, N2, 02, F2 y C12), un líquido (Br2) y un sólido volátil (I2). El
resto de los no metales son sólidos que pueden ser duros como el diamante o blandos
como el azufre.
Características
Tienden a formar aniones u oxianiones en solución acuosa, y forma óxidos ácidos con los
metales, ganando electrones, o enlaces covalentes , con otros no metales, compartiendo
electrones.
Elementos de Transición
Los elementos de transición son aquellos elementos químicos que están situados en la
parte central del sistema periódico, en el bloque d, cuya principal característica es la
inclusión en su configuración electrónica del orbital d, parcialmente lleno de electrones.
Esta definición se puede ampliar considerando como elementos de transición a aquellos
que poseen electrones alojados en el orbital d, esto incluiría a zinc, cadmio, y mercurio.
La IUPAC define un metal de transición como "un elemento cuyo átomo tiene una
subcapa d ( subnivel de energía )incompleta o que puede dar lugar a cationes".
Son metales de transición, ya que tienen una configuración d10. Solo se forman unas
pocas especies transitorias de estos elementos que dan lugar a iones con una
subcapa d parcialmente completa. Por ejemplo, mercurio (I) solo se encuentra como
Hg22+, el cual no forma un ion aislado con una subcapa parcialmente llena, por lo que los
tres elementos son inconsistentes con la definición anterior.2 Estos forman iones con
estado de oxidación 2+, pero conservan la configuración 4d10. El elemento 112 podría
también ser excluido, aunque sus propiedades de oxidación no son observadas debido a
su naturaleza radioactiva. Esta definición corresponde a los grupos 3 a 11 de la tabla
periódica.
Propiedades
Casi todos los elementos son metales típicos, de elevada dureza, con puntos de
fusión y ebullición altos, buenos conductores tanto del calor como de la electricidad.
Muchas de las propiedades de los metales de transición se deben a la capacidad de los
electrones del orbital d de localizarse dentro de la red metálica. En metales, cuantos más
electrones compartan un núcleo, más fuerte es el metal. Poseen una gran versatilidad
de estados de oxidación, pudiendo alcanzar una carga positiva tan alta como la de su
grupo, e incluso en ocasiones negativa (Como en algunos complejos de coordinación).
Sus combinaciones son fuertemente coloreadas y paramagnéticas
Sus potenciales normales suelen ser menos negativos que los de los metales
representativos, estando entre ellos los llamados metales nobles.
Pueden formar aleaciones entre ellos.
Son en general buenos catalizadores.
Son sólidos a temperatura ambiente (excepto el mercurio)
Forman complejos iónicos.
Elementos de Transición Interna
Los elementos de transición interna o elementos del bloque f (por tener sus electrones de
valencia en el orbital f) son dos series, una comenzando a partir del elemento lantano y la
otra a partir del actinio, y por eso a los elementos de estas series se les
llama lantánidos y actínidos. Aunque en la tabla periódica de los elementos tendrían que
estar después de esos dos elementos, se suelen representar separados del resto.
También se conocen los Lantánidos como tierras raras.
Tienen dos electrones s en sus niveles energéticos más externos (n) y electrones f en
niveles más interiores (n-2). Algunos también tienen electrones d en niveles intermedios
(n-1). Véase configuración electrónica.
Enlaces Químicos
Un enlace químico es la interacción física responsable de las interacciones
entre átomos, moléculas e iones, que tiene una estabilidad en los compuestos
diatómicos y poliatómico.
Los químicos suelen apoyarse en la fisicoquímica o en descripciones cualitativas.
En general, el enlace químico fuerte está asociado a la transferencia de electrones de
valencia entre los átomos participantes. Las moléculas, cristales, y gases diatómicos (que
forman la mayor parte del ambiente físico que nos rodea) está unido por enlaces químicos,
que determinan las propiedades físicas y químicas de la materia.
Las cargas opuestas se atraen, porque, al estar unidas, adquieren una situación más
estable que cuando estaban separados. Esta situación de mayor estabilidad suele darse
cuando el número de electrones que poseen los átomos en su último nivel es igual a ocho,
estructura que coincide con la de los gases nobles ya que los electrones que orbitan el
núcleo están cargados negativamente, y que los protones en el núcleo lo están
positivamente, la configuración más estable del núcleo y los electrones es una en la que
los electrones pasan la mayor parte del tiempo entre los núcleos, que en otro lugar del
espacio. Estos electrones hacen que los núcleos se atraigan mutuamente.
Teoría del Enlace Químico
En la visión simplificada del denominado enlace covalente, uno o más electrones
(frecuentemente un par de electrones) son llevados al espacio entre los dos núcleos
atómicos. Ahí, los electrones negativamente cargados son atraídos a las cargas positivas
de ambos núcleos, en vez de sólo su propio núcleo. Esto vence a la repulsión entre los
dos núcleos positivamente cargados de los dos átomos, y esta atracción tan grande
mantiene a los dos núcleos en una configuración de equilibrio relativamente fija, aunque
aún vibrarán en la posición de equilibrio. En resumen, el enlace covalente involucra la
compartición de electrones en los que los núcleos positivamente cargados de dos o más
átomos atraen simultáneamente a los electrones negativamente cargados que están
siendo compartidos. En un enlace covalente polar, uno o más electrones son compartidos
inequitativamente entre dos núcleos.
Enlace Iónico
En Química, un enlace iónico o electrovalente es la unión de átomos que resulta de la
presencia de atracción electrostáticaentre los iones de distinto signo, es decir, uno
fuertemente electropositivo (baja energía de ionización) y otro
fuertemente electronegativo (alta afinidad electrónica). Eso se da cuando en el enlace,
uno de los átomos capta electrones del otro. La atracción electrostática entre los iones de
carga opuesta causa que se unan y formen un compuesto químico simple, aquí no se
fusionan; sino que uno da y otro recibe. Para que un enlace iónico se genere es necesario
que la diferencia (delta) de electronegatividades sea más que 1, 7 (Escala de Pauling).
Cabe resaltar que ningún enlace es totalmente iónico, siempre habrá una contribución en
el enlace que se le pueda atribuir a la compartición de los electrones en el mismo enlace
(covalencia). El modelo del enlace iónico es una exageración que resulta conveniente ya
que muchos datos termodinámicos se pueden obtener con muy buena precisión si se
piensa que los átomos son iones y no hay compartición de electrones.
Características
Algunas características de este tipo de enlace son:
Sus enlaces son muy fuertes (depende fuertemente de la naturaleza de los iones).
Son sólidos a temperatura ambiente y poseen una estructura cristalina en
el sistema cúbico.
Altos puntos de fusión (entre 300 °C y 1000 °C) y ebullición (Si el enlace tiene un
carácter covalente alto, puede ser que estos valores disminuyan abruptamente)
Son enlaces resultantes de la interacción entre los metales de los grupos I y II y los
no metales de los grupos VI y VII.
Son solubles en agua y otras disoluciones acuosas debido al dipolo eléctrico que
presentan las moléculas de agua; capaces de solvatar a los iones, compensando
así la energía de red cristalina.
Una vez en disolución acuosa son excelentes conductores de electricidad, ya que
entonces los iones quedan libres.
En estado sólido no conducen la electricidad, ya que los iones ocupan posiciones
muy fijas en la red.
Enlace Covalente
Un enlace covalente entre dos átomos se produce cuando estos átomos se unen, para
alcanzar el octeto estable, compartiendo electrones del último nivel1 (excepto
el Hidrógeno que alcanza la estabilidad cuando tiene 2 electrones). La diferencia de
electronegatividad entre los átomos no es lo suficientemente grande como para que se
produzca una unión de tipo iónica. Para que un enlace covalente se genere es necesario
que la diferencia de electronegatividad entre átomos sea menor a 1,7.
De esta forma, los dos átomos comparten uno o más pares electrónicos en un nuevo tipo
de orbital, denominado orbital molecular. Los enlaces covalentes se producen entre
átomos de un mismo elemento no metal y entre distintos elementos no metales.
Cuando átomos distintos de no metales se unen una forma covalente, uno de ellos
resultará más electronegativo que el otro, por lo que tenderá a atraer la nube
electrónica del enlace hacia su núcleo, generando un dipolo eléctrico. Esta polarización
permite que las moléculas del mismo compuesto se atraigan entre sí por fuerzas
electrostáticas de distinta intensidad.
Por el contrario, cuando átomos de un mismo elemento no metálico se unen
covalentemente, su diferencia de electronegatividad es cero y no se crean dipolos. Las
moléculas entre sí poseen prácticamente una atracción nula.
En síntesis, en un enlace iónico, se produce la transferencia de electrones de un átomo a
otro y en el enlace covalente, los electrones de enlace son compartidos por ambos
átomos. En el enlace covalente, los dos átomos no metálicos comparten uno o más
electrones, es decir, se unen a través de sus electrones en el último orbital, el cual
depende del atómico en cuestión. Entre los dos átomos pueden compartirse uno, dos o
tres pares de electrones, lo cual dará lugar a la formación de un enlace simple, doble o
triple respectivamente. En la estructura de Lewis, estos enlaces pueden representarse por
una pequeña línea entre los átomos.
Enlace Metálico
Un enlace metálico es un enlace químico que mantiene unidos los átomos (unión entre
núcleos atómicos y los electrones de valencia, que se juntan alrededor de éstos como una
nube) de los metales entre sí.
Estos átomos se agrupan de forma muy cercana unos a otros, lo que produce estructuras
muy compactas. Se trata de líneas tridimensionales que adquieren estructuras tales
como: la típica de empaquetamiento compacto de esferas (hexagonal compacta), cúbica
centrada en las caras o la cúbica centrada en el cuerpo.
En este tipo de estructura cada átomo metálico está dividido por otros doce átomos (seis
en el mismo plano, tres por encima y tres por debajo). Además, debido a la
baja electronegatividad que poseen los metales, los electrones de valencia son extraídos
de sus orbitales. Este enlace sólo puede estar en sustancias en estado sólido.1
Los metales poseen algunas propiedades características que los diferencian de los demás
materiales. Suelen ser sólidos a temperatura ambiente, excepto el mercurio, y tienen
un punto de fusión alto.
El enlace metálico es característico de los elementos metálicos. Es un enlace fuerte,
primario, que se forma entre elementos de la misma especie. Al estar los átomos tan
cercanos unos de otros, interaccionan sus núcleos junto con sus nubes electrónicas,
empaquetándose en las tres dimensiones, por lo que quedan los núcleos rodeados de
tales nubes. Estos electrones libres son los responsables de que los metales presenten
una elevada conductividad eléctrica y térmica, ya que estos se pueden mover con
facilidad si se ponen en contacto con una fuente eléctrica. Los metales generalmente
presentan brillo y son maleables. Los elementos con un enlace metálico están
compartiendo un gran número de electrones de valencia, formando un mar de electrones
rodeando un enrejado gigante de cationes. Muchos de los metales tienen puntos de fusión
más altos que otros elementos no metálicos, por lo que se puede inferir que hay enlaces
más fuertes entre los distintos átomos que los componen.
Compuestos Orgánicos
Compuesto orgánico o molécula orgánica es un compuesto químico más conocido
como micro-molécula o estitula que contiene carbono, formando enlaces carbono-
carbono y carbono-hidrógeno. En muchos casos
contienen oxígeno, nitrógeno, azufre, fósforo, boro, halógenos y otros elementos menos
frecuentes en su estado natural. Estos compuestos se denominan moléculas orgánicas.
Algunos compuestos del carbono, carburos, los carbonatos y los óxidos de carbono, no
son moléculas orgánicas. La principal característica de estas sustancias es que arden y
pueden ser quemadas (son compuestos combustibles). La mayoría de los compuestos
orgánicos se producen de forma artificial mediante síntesis química aunque algunos
todavía se extraen de fuentes naturales.
Las moléculas orgánicas pueden ser de dos tipos:
Moléculas orgánicas naturales: son las sintetizadas por los seres vivos, y se
llaman biomoléculas, las cuales son estudiadas por la bioquímica y las derivadas
del petróleo como los hidrocarburos.
Moléculas orgánicas artificiales: son sustancias que no existen en la naturaleza
y han sido fabricadas o sintetizadas por el hombre, por ejemplo los plásticos.
La línea que divide las moléculas orgánicas de las inorgánicas ha originado polémicas e
históricamente ha sido arbitraria, pero generalmente, los compuestos orgánicos tienen
carbono con enlaces de hidrógeno, y los compuestos inorgánicos, no. Así el ácido
carbónico es inorgánico, mientras que el ácido fórmico, el primer ácido carboxílico, es
orgánico. El anhídrido carbónico y el monóxido de carbono, son compuestos inorgánicos.
Por lo tanto, todas las moléculas orgánicas contienen carbono, pero no todas las
moléculas que contienen carbono son moléculas orgánicas.
Compuesto Inorgánico
Se denomina compuesto químico inorgánico a aquellos compuestos que están formados
por distintos elementos, pero en los que su componente principal no siempre es
el carbono, siendo el agua el más abundante. En los compuestos inorgánicos se podría
decir que participan casi la totalidad de elementos conocidos.
Mientras que un compuesto orgánico se forma de manera natural tanto en animales como
en vegetales, uno inorgánico se forma de manera ordinaria por la acción de varios
fenómenos físicos y químicos: electrólisis, fusión, etc. También podrían considerarse
agentes de la creación de estas sustancias a la energía solar, el agua, el oxígeno.
Los enlaces que forman los compuestos inorgánicos suelen ser iónicos o covalentes.
Ejemplos de compuestos inorgánicos:
Cada molécula de cloruro de sodio (NaCl) está compuesta por
un átomo de sodio y otro de cloro.
Cada molécula de agua (H2O) está compuesta por dos átomos de hidrógeno y uno
de oxígeno.
Cada molécula de amoníaco (NH3) está compuesta por un átomo de nitrógeno y
tres de hidrógeno.
El anhídrido carbónico se encuentra en la atmósfera en estado gaseoso y los
seres vivos aerobios lo liberan hacia ella al realizar la respiración. Su fórmula
química, CO2, indica que cada molécula de este compuesto está formada por un
átomo de carbono y dos de oxígeno. El CO2 es utilizado por algunos seres
vivos autótrofoscomo las plantas en el proceso de fotosíntesis para
fabricar glucosa. Aunque el CO2 contiene carbono, no se considera como un
compuesto orgánico porque no contiene hidrógeno.
Energía Química
La energía química es una forma de energía potencial. En la definición más estricta, la
energía química es la energía involucrada en el lazo formado entre dos átomos. Cada
átomo dentro de un compuesto químico involucra diferentes cantidades de energía.
Cuando uno de estos lazos se rompe, ocurre una reacción química y es cuando se usa
energía química. El lazo es liberado y es reusado ya sea en forma de nuevos lazos con
otros átomos o se libera en forma de calor.
Uno no puede ver ro tocar la energía química, pero puedes ver cuándo es liberada a la
hora que ocurre la reacción. Un gran ejemplo de energía química es cuando un tubo de
dinamita explota. La molécula de TNT es convertida en agua, dióxido de carbono y
monóxido de carbono. Muchos lazos de rompen, y la energía que mantenía estos lazos
unidos provee la energía necesaria para crear los nuevos lazos. Toda la energía que sobra
es lo que vemos en forma de explosión.
Tipos de Reacciones Químicas
Algunas reacciones químicas liberan calor cuando ocurren y otras necesitan calor para
que ocurran. Las reacciones que liberan el calor son llamadas exotérmicas. La explosión
de la dinamita es un ejemplo de esto.
Las reacciones que requieren de calor son llamadas endotérmicas. Un ejemplo de este
tipo de reacciones es un paquete de hielo químico. Cuando rompemos el empaque y los
químicos dentro de él se liberan, la reacción le quita calor a lo que lo rodea y por lo tanto
sientes frío.
Energía Nuclear
La energía nuclear o energía atómica es la energía que se libera espontánea o
artificialmente en las reacciones nucleares. Sin embargo, este término engloba otro
significado, el aprovechamiento de dicha energía para otros fines, tales como la obtención
de energía eléctrica, energía térmica y energía mecánica a partir de reacciones atómicas,
y su aplicación, bien sea con fines pacíficos o bélicos. Así, es común referirse a la energía
nuclear no solo como el resultado de una reacción sino como un concepto más amplio
que incluye los conocimientos y técnicas que permiten la utilización de esta energía por
parte del ser humano.
Estas reacciones se dan en los núcleos atómicos de algunos isótopos de
ciertos elementos químicos (radioisótopos), siendo la más conocida la fisión del uranio-
235 (235U), con la que funcionan los reactores nucleares, y la más habitual en la
naturaleza, en el interior de las estrellas, la fusión del par deuterio-tritio (2H-3H). Sin
embargo, para producir este tipo de energía aprovechando reacciones nucleares pueden
ser utilizados muchos otros isótopos de varios elementos químicos, como el torio-232,
el plutonio-239, el estroncio-90 o el polonio-210 (232Th, 239Pu, 90Sr, 210Po;
respectivamente). Existen varias disciplinas y/o técnicas que usan de base la energía
nuclear y van desde la generación de energía eléctrica en las centrales nucleares hasta
las técnicas de análisis de datación arqueológica (arqueometría nuclear), la medicina
nuclear usada en los hospitales, etc.
Los sistemas más investigados y trabajados para la obtención de energía aprovechable a
partir de la energía nuclear de forma masiva son la fisión nuclear y la fusión nuclear. La
energía nuclear puede transformarse de forma descontrolada, dando lugar al armamento
nuclear; o controlada en reactores nucleares en los que se produce energía eléctrica,
energía mecánica o energía térmica. Tanto los materiales usados como el diseño de las
instalaciones son completamente diferentes en cada caso.
Otra técnica, empleada principalmente en pilas de mucha duración para sistemas que
requieren poco consumo eléctrico, es la utilización de generadores termoeléctricos de
radioisótopos (GTR, o RTG en inglés), en los que se aprovechan los distintos modos
de desintegración para generar electricidad en sistemas de termopares a partir del calor
transferido por una fuente radiactiva.
Energía Eléctrica
Se denomina energía eléctrica a la forma de energía que resulta de la existencia de
una diferencia de potencial entre dos puntos, lo que permite establecer una corriente
eléctrica entre ambos cuando se los pone en contacto por medio de un conductor
eléctrico. La energía eléctrica puede transformarse en muchas otras formas de energía,
tales como la energía lumínica o luz, la energía mecánica y la energía térmica.
Corriente Eléctrica
La energía eléctrica se manifiesta como corriente eléctrica, es decir, como el movimiento
de cargas eléctricas negativas, o electrones, a través de un cable conductor metálico
como consecuencia de la diferencia de potencial que un generador esté aplicando en sus
extremos.
Cada vez que se acciona un interruptor, se cierra un circuito eléctrico y se genera el
movimiento de electrones a través del cable conductor. Las cargas que se desplazan
forman parte de los átomos de la sustancia del cable, que suele ser metálica, ya que
los metales —al disponer de mayor cantidad de electrones libres que otras sustancias—
son los mejores conductores de la electricidad. La mayor parte de la energía eléctrica que
se consume en la vida diaria proviene de la red eléctrica a través de las tomas llamadas
enchufes, a través de los que llega la energía suministrada por las compañías eléctricas
a los distintos aparatos eléctricos —lavadora, radio, televisor, etc.
Fuentes de Energía Eléctrica
La energía eléctrica existe libre en la naturaleza de manera aprovechable. El ejemplo más
relevante y habitual de esta manifestación son las tormentas eléctricas. La electricidad
tampoco tiene una utilidad biológica directa para el ser humano, salvo en aplicaciones
muy singulares, como pudiera ser el uso de corrientes en medicina(terapia
electroconvulsiva), resultando en cambio normalmente desagradable e incluso peligrosa,
según las circunstancias.