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Comprensión de textos académicos

Javier Núñez

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Universidad Nacional del Altiplano
FACULTAD DE CIENCIAS SOCIALES
Departamento Académico de Humanidades

Comprensión de Textos Académicos

© Javier Núñez
dorianjavier23@hotmail.com
javiernc.jimdo.com

© 2016, de esta edición, LETRAJOVEN EDITORES

Estudio preliminar
Publicación no oficial

Puno / Perú

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CONTENIDO

Capítulo I
FUNDAMENTOS TEÓRICOS
1. Acto comunicativo
2. La pragmática de la comunicación
2.1. La pragmática
2.2. Componentes pragmáticos de la comunicación
2.2.1. Emisor
2.2.2. Destinatario
2.2.3. Contexto
2.2.4. Actos de habla
2.2.5. Referente
2.2.6. Conocimiento del mundo
2.3. Las máximas de Grice
2.4. Las implicaturas
2.4.1. Ejemplos de implicaturas
3. Teoría de la enunciación
3.1. La enunciación
3.2. Deixis
3.3. La modalidad
3.4. La polifonía de Ducrot
4. Texto y discurso
4.1. El texto
4.2. Texto y discurso: una diferencia
4.3. Propiedades textuales
4.3.1. Cohesión
4.3.1.1. Mecanismos de cohesión
4.3.2. Coherencia
4.3.2.1. Clases de coherencia
4.3.3. Adecuación
4.4. Unidades textuales
4.4.1. Enunciado
4.4.2. Párrafo
4.4.2.1. Estructura del párrafo
4.4.2.2. Clases de párrafos

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4.4.3. Texto
4.5. Categorías textuales

Capítulo II
MODOS DE ORGANIZACIÓN DISCURSIVA
1. Modalidades discursivas
1.1. Narración.
1.2. Argumentación.
1.3. Descripción.
1.4. Diálogo.
1.5. Instrucción.
2. Discurso expositivo
2.1. Definición
2.2. Características
2.3. Estructura
2.4. Tipos
3. Discurso argumentativo
3.1. Definición
3.2. Componentes de la argumentación
3.3. Convencer y persuadir
3.4. Características
3.5. Estructura
3.6. Tipos de argumentos
3.7. Tipos de discursos argumentativos

BIBLIOGRAFÍA

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Capítulo I

FUNDAMENTOS TEÓRICOS

1. Acto comunicativo

El acto comunicativo es un proceso social donde interactúan


dos o más sujetos a través del lenguaje. El emisor persigue alguna
intención (propósito) al tomar la palabra: informar, dar a conocer,
prometer, etc. Si no tuviera ningún propósito, es seguro que no har-
ía uso de la palabra. Por otro lado, el mensaje del emisor produce
ciertos efectos en el destinatario, quien resulta como una persona
informada, instruida, motivada, convencida, etc. Tanto el emisor
como el destinatario interactúan (se comunican) a través del texto o
discurso, cuyo tema central alude a una parte de la realidad (refe-
rente), es decir, de algo conversan los interlocutores; ese algo viene
a llamarse referente. Al llevar a cabo la comunicación, el emisor y el
destinatario activan sus conocimientos, ideologías, visiones del
mundo, actitudes, los cuales están estructurados en modelos menta-
les (almacenados en la memoria a largo plazo de los interlocutores).
La comunicación se lleva a cabo en un contexto determinado (cir-
cunstancias, condiciones en que interactúan los interlocutores, in-
fluidos por factores externos). Todos estos temas se ampliarán en
los siguientes apartados. Ahora veamos el acto comunicativo es-
quematizado.

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Esquema de acto comunicativo

2. La pragmática de la comunicación

2.1. La pragmática

La pragmática tiene sus orígenes en la filosofía del lenguaje.


Austin y Searle son quienes la desarrollan a plenitud, cuando for-
mulan la famosa teoría de los actos de habla. En términos sencillos,
la pragmática es una disciplina que estudia la lengua en uso. Toma
en cuenta cómo cada hablante usa la lengua según las intenciones
que tiene y los contextos donde se encuentra.
Como se sabe, la semántica estudia los significados que se alo-
jan en el diccionario. En cambio, la pragmática estudia los significa-
dos que los enunciados o textos adquieren gracias al contexto. Por
eso se dice que la pragmática explica los significados no convencio-
nales, lo que la semántica deja de lado. Para interpretar un texto no
bastan los significados que están en el diccionario, sino hace falta
también los significados que se infieren del contexto donde se reali-
za el texto.

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2.2. Componentes pragmáticos de la comunicación

2.2.1. Emisor

Es el sujeto que produce de manera intencionada una expre-


sión lingüística. Dicho emisor, por ser un sujeto real, posee conoci-
mientos, creencias, valores, intereses, ideologías, actitudes y visión
del mundo, y es capaz de establecer toda una red de relaciones con
su entorno. El emisor posee la fuente, organiza el mensaje y lo envía
a un destinatario. Posee un conjunto de características según el rol
que asume en cada marco comunicativo.

2.2.2. Destinatario

Es la persona (o personas) a la que el emisor dirige su discur-


so, dicho de otro modo, es la persona a quien está dirigido el mensa-
je y el mensaje está específicamente construido para él. La natura-
leza del destinatario determina en gran medida la forma del mensa-
je. Cuando un escritor no tiene enfrente a destinatarios concretos,
construye un modelo de destinatario ideal (a quien le gustaría diri-
gir su obra), es decir, crea su lector.
El destinatario recibe el mensaje, descifra el contenido, lo
evalúa y lo acepta o lo rechaza. En el marco comunicativo, el desti-
natario cumple un rol importante: activa sus creencias para con-
frontar sus puntos de vista con los del texto.

2.2.3. Contexto

El estudio del contexto es crucial en el Análisis del Discurso,


ya que cuando se usa la lengua, los significados se construyen en
función del contexto donde se produce el evento comunicativo. Al-
gunos señalan que el contexto es el soporte físico de la comunica-
ción.
Por contexto se entiende el conjunto de factores que condi-
cionan la producción e interpretación del discurso (espacio y tiem-

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po en los se produce la comunicación, características, expectativas,
intenciones y conocimientos de los interlocutores). En tal sentido, el
contexto incluye factores sociales, culturales y cognitivos relaciona-
dos con los interlocutores.
En el análisis del discurso, el contexto se estudia en cuatro ni-
veles:

a) Contexto espacio-temporal: Comprende el entorno, las


coordenadas espaciales y temporales en las que se pro-
duce un enunciado. Esta información tiene una especial
relevancia para interpretar elementos deícticos, como los
adverbios de lugar (aquí, allí) o de tiempo (ahora, hoy),
las personas del discurso (yo, tú, él) o los tiempos verba-
les.

b) Contexto situacional: comprende tanto las circunstancias


que perciben los interlocutores mientras hablan como el
mismo discurso que van produciendo, que construye un
contexto al que los emisores se pueden referir. En este
sentido, en la producción y comprensión del discurso no
sólo influye lo que los hablantes dicen, sino también lo
que hacen, lo que ocurre mientras hablan y el hecho
mismo de que lo hagan.

c) Contexto sociocultural: Comprende las características so-


ciales de los interlocutores, por ejemplo, el empleo de
fórmulas de cortesía.

d) Contexto cognitivo: Comprende el conocimiento del mun-


do que poseen y comparten los hablantes, así como las
intenciones que tienen o que presuponen en su interlo-
cutor.

En el contexto cognitivo entran a detallar los famosos


modelos mentales, las cuales son estructuras de conoci-
mientos, experiencias vividas, actitudes, ideologías, que
están almacenados en nuestra memoria a largo plazo. Es-

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tos modelos mentales entran en juego cuando produci-
mos o comprendemos un texto. Por poner un ejemplo,
los modelos mentales del cura y del ateo son distintos
(incluso opuestos), decimos esto porque ambos ven el
mundo, interpretan discursos, actúan, etc. de diferentes
formas.

2.2.4. Actos de habla

Al enunciar realizamos un acto, una acción, por ejemplo: una


promesa, una amenaza, una orden, etc. Una parte de la pragmática
se ocupa del estudio de la acción del decir, o en todo caso, del len-
guaje como acción. Esa acción tiene que ver necesariamente con la
intención del hablante (prometer, amenazar, ordenar, etc.). En tal
sentido, el estudio de los actos de habla permite analizar y deducir
las intenciones del hablante.
Veamos el siguiente ejemplo:
El cura, frente a los novios, pronuncia: Los declaro marido y
mujeres.
El cura no solo transmite un mensaje, sino realiza la acción de
casar. Por lo tanto, de esa acción se desprende la intención del cura
que es casar a los novios. Como se puede observar, cuando habla-
mos no solo transmitimos mensajes, sino llevamos a cabo ciertas
acciones.
Searle propone los siguientes actos de habla:

• Ilocutivos: Es la intención que tiene el emisor al tomar la


palabra: dar a conocer, informar, persuadir, amenazar,
prometer, rogar, ordenar, advertir, etc.

• Locutivos: Son portadores de significado, es decir, es el


mensaje que transmite el emisor.

• Perlocutivos: Son efectos (impactos) que las palabras del


emisor producen en el destinatario: instruido, convencido,
motivado, intimidado, ofendido, obligado, prevenido, etc.

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2.2.5. Referente

En una comunicación, los interlocutores hacen alusiones al


mundo externo en sus discursos. Esa parte aludida de la realidad se
conoce como referente. La comprensión cabal de un texto exige la
identificación de los referentes. Si no logramos identificarlos, no
captaremos el sentido del texto.
Los deícticos (que desarrollaremos más adelante) nos ayudan
a identificar los referentes.

2.2.6. Conocimiento del mundo

Es la información que una persona tiene almacenada en su


memoria en forma de modelos mentales a partir de lo que ha expe-
rimentado, vivido o leído. Este concepto ha sido tomado en
el Análisis del Discurso para dar cuenta de cómo se lleva a cabo
la interpretación de los discursos. Los interlocutores deben com-
partir cierto conocimiento del mundo para poder interpretar un
discurso como coherente. En ocasiones, un discurso puede resultar
incoherente para un destinatario porque carece del conocimiento
del mundo necesario para comprender acertadamente dicho men-
saje.
El conocimiento del mundo, almacenado en marcos de cono-
cimiento, permite no sólo predecir interpretaciones, sino también
actuar apropiadamente en una situación comunicativa determina-
da.
El conocimiento del mundo compartido por una cultura no
tiene por qué coincidir con el de otra. Es lo que ocurre, por ejemplo,
con los distintos comportamientos que en culturas distintas supone
ir invitado a comer a una casa. Asimismo, y debido también al dife-
rente conocimiento del mundo compartido por una cultura, un tex-
to escrito en una lengua extranjera puede requerir un conocimiento
del mundo distinto al que tiene el lector.

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¿Cómo conocemos el mundo?, ¿cómo interactuamos con el
mundo, con la realidad?

Conocemos el mundo e interactuamos con él a través del len-


guaje, dicho de otro modo, el sujeto interactúa con el mundo me-
diado por el lenguaje. Esa interacción no es directa. Entonces, el
lenguaje construye el mundo, la realidad. Todo lo que nos rodea, lo
que existe en mundo, está codificado, es decir, tiene un nombre
para designarlos y así podemos hablar de ellos. El mundo externo
está estructurado en palabras dentro de nuestra mente (memoria),
o sea, representamos la realidad a través del lenguaje.

2.3. Las máximas de Grice

Paul Grice propuso una teoría sobre la comunicación deno-


minada Principios de cooperación. Estos principios regulan el acto
comunicativo. Grice nos dice que en una conversación todos coope-
ran para que la comunicación tenga éxito, es decir, el emisor hace
todos los esfuerzos para dejarse entender; el receptor, por su parte,
también hace todo lo posible para entender lo que dice el emisor.
Por lo tanto, el emisor y el destinatario cooperan en el acto comuni-
cativo.
Tales principios se manifiestan como máximas, que en el
marco de la pragmática se conocen como las máximas de Grice. Son
cuatro:

a) Máxima de cantidad

• Que su contribución sea todo lo informativa que re-


quiera el propósito de la conversación.
• Que su contribución no sea más informativa de lo re-
querido.

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b) Máxima de calidad: Que su contribución sea verdadera.

• No diga nada que crea falso.


• No diga nada de cuya verdad no tenga pruebas.

c) Máxima de relación

• Sea relevante ['relevante , significa 'pertinente', 'que


viene al caso'].

Debemos hablar siguiendo un tema, sin saltar de tema


en tema. En otras palabras, hablar de lo que viene a
cuento

d) Máxima de manera: Sea claro.

• Evite la oscuridad de expresión.


• Evite la ambigüedad.
• Sea breve (evite la prolijidad innecesaria).
• Sea ordenado.

2.4. Las implicaturas

Grice señala que las expresiones que transmitimos tienen dos


niveles de significados:

• Lo dicho: Significado literal. Es lo que realmente deci-


mos.
• Lo comunicado: Significado implícito. Es un significado
que se infiere; lo deduce el receptor. No lo decimos lite-
ralmente. A este tipo de significado, Grice lo llama impli-
catura.

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Cuando hablamos no siempre decimos toda la información
prevista, ya que suponemos que nuestro interlocutor ya la conoce.
En ese caso, la información no dicha pero inferida, viene a llamarse
implicatura. Entonces, la implicatura es una información que el
emisor trata de hacer manifiesta sin expresarla explícitamente.
El filósofo americano Paul Grice habló por primera vez sobre
las implicaturas, cuando formuló su famoso modelo pragmático de
la comunicación. Grice distingue dos clases de implicaturas:

• Implicaturas convencionales. Son aquellas que derivan di-


rectamente de los significados de las palabras, y no de fac-
tores contextuales o situacionales.

• Implicaturas conversacionales. Son aquellas que se generan


por la intervención de principios cooperación. Este tipo de
implicaturas resultan en las situaciones en que se viola o
transgrede una máxima del principio de cooperación, pero
no por ello se deja de cooperar. Quien transgrede la máxi-
ma lo hace con el ánimo de que quien lo escucha lo descu-
bra e inicie un proceso inferencial que le lleve a desvelar la
información implícita (una implicatura).

2.4.1. Ejemplos de implicaturas

a) Obediencia a las máximas

Los casos de implicatura por obediencia a las máximas son los


que requieren menos cálculo por parte del oyente. Ejemplo:

Supóngase que me doy cuenta, ya en la clase, de que me había


olvidado de traer mi cuaderno de apuntes, y digo: Me olvidé mi cua-
derno de apuntes; ahora cómo anoto la lección del docente. Mi com-
pañero de al lado me escucha y dice:

Yo tengo unas hojas sueltas en mi mochila.

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Entiendo que mi compañero me los está ofreciendo, pues no
sería cooperativo, ni racional, mencionar esas palabras para no
ofrecérmelos.

b) Violación aparente

Ejemplo:

El profesor de Filosofía escribe una carta de recomendación


para su alumno que aspira a ingresar en un programa doctoral. La
carta dice, en síntesis, algo así:

El señor Pedro asiste siempre a clase, hace puntualmente todos


sus trabajos, y se expresa con propiedad

La carta da menos información de la esperada, ya que no indi-


ca si el alumno tiene talento para la filosofía. El destinatario sacará
la implicatura de que el señor Pedro no tiene ningún talento filosó-
fico.

c) Choques entre máximas

A veces no podemos dar una información sin mentir porque


no la sabemos, y por lo tanto damos información aproximada, vio-
lando la máxima de cantidad para no violar la de calidad. Ejemplo:

Si me preguntan dónde queda la Biblioteca Central y no lo sé


con exactitud, diré algo como:

Queda más al sur, pasando el parque.

El oyente, al recibir esta información insuficiente, puede pen-


sar que no quiero cooperar, o, más probablemente, puede sacar la
implicatura de que eso es todo lo que sé sobre el asunto.

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d) Violación ostentosa

Podemos calcular implicaturas si advertimos que el interlocu-


tor está violando las máximas con deliberación (intencionalmente).
Ejemplo:

N I Ñ O (por décima vez): ¿Cuándo comemos, mamá?


MADRE: Cuando esta señora que ahora está escribiendo termi-
ne de hacer su trabajo y se levante de esta silla y vaya a la coci-
na y ponga a calentar la cena

La prolijidad de la respuesta (en abierta violación de una de


las submáximas de manera) tiene por misión que el niño infiera la
actitud de la madre ante su insistencia.

3. Teoría de la enunciación

3.1. La enunciación

El estudio de la enunciación tiene su origen en Jakobson y


Benveniste. Para ambos el punto de partida es el fenómeno lingüís-
tico de la deixis. Benveniste concibe la enunciación como una ins-
tancia de mediación entre la lengua y el habla. Es decir, la enuncia-
ción es la apropiación de la lengua por parte del sujeto. Por otra
parte, la enunciación tiene que ver no sólo con el proceso de apro-
piación de la lengua, sino también con el contexto donde se mate-
rializa dicho proceso.
La Teoría de la Enunciación estudia a los sujetos del discurso
(¿quién habla, para quién?). En un texto encontramos varias voces
(o puntos de vista) que se activan en el proceso de la lectura. En
consecuencia, en un texto se analizan las huellas que deja el emisor.
La lingüística de la enunciación tiene como finalidad (Ker-
brat-Orecchioni, 1980: 30) describir las relaciones entre el enun-
ciado (discurso) y los diferentes elementos constitutivos del marco
enunciativo, tales como: a) los protagonistas del discurso (emisor y
receptor(s)); la situación de comunicación (circunstancias espacio-

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temporales, condiciones de producción y recepción del mensaje,
contexto sociohistórico, universo de discurso, etc.). (ÁLVAREZ AN-
GULO, Teodoro; 1998: 277)

3.2. Deixis

Es el elemento textual que relaciona el texto con el contexto.


Los deícticos pueden ser los pronombres y los adverbios que indi-
can referentes reales del discurso: Personal (yo, nosotros, tú, voso-
tros), espacial (aquí, allí, ahí), temporal (ahora, hoy, antes, después).
Ejemplo:

Aquí nos quedamos.

La palabra aquí hace referencia a un lugar específico y con-


creto (con coordenadas identificables). Ese lugar corresponde al
punto espacial al cual se ha referido (o señalado) el emisor al mo-
mento de la enunciación. Entonces, nuestra oración (Aquí nos que-
damos) tendrá sentido sólo si logramos identificar el lugar aludido
por el emisor.

Hoy es el cumpleaños de mi primo.

Del mismo modo, la palabra hoy señala un día específico del


año. Corresponde al día en que el emisor pronunció dicha oración
(enunciación). Más ejemplos:

Ahora es el momento de actuar.

Tú no me simpatizas.

3.3. La modalidad

La modalidad es un concepto frecuentemente estudiado en la


teoría de la enunciación. Está asociada al concepto del sujeto como
entidad discursiva, y que tiene que ver con la actitud que opta el

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sujeto enunciador con respecto a lo que enuncia. Entonces, es posi-
ble rastrear las huellas que dejan los productores del discurso en
sus enunciados. Benveniste señala dos modalidades de la enuncia-
ción:

• Subjetiva, aquella que explicita las marcas del sujeto


que dice hablar.
• No-subjetiva, aquella en donde se borran las marcas de
dicho sujeto.

En tal sentido, cuando leemos un texto debemos preguntar-


nos: ¿Qué imagen tiene el autor de sí mismo?, ¿qué imagen tiene el
autor de su destinatario? Todo eso podemos detectar en el texto. El
emisor (autor, orador, etc.) proyecta en lo que dice o escribe sus
prejuicios, ideologías, frustraciones, etc. Todo ello es posible inferir-
lo en los discursos (orales o escritos).

3.4. La polifonía de Ducrot

En un discurso no sólo encontramos una sola voz, sino varias.


Un sujeto real puede producir un discurso desde una perspectiva
distinta a su identidad real. Ahí habría dos voces en juego. Por
ejemplo, cuando una persona natural (sujeto empírico) escribe un
documento como representante de una organización (sujeto tex-
tual).
Ducrot (1984) advierte que en el discurso se activan varias
voces; a las cuales se les conoce con el nombre de polifonía. Estas
voces son las siguientes:

a) El emisor o sujeto empírico: es quien efectivamente pro-


duce el discurso; es el autor de la obra.

b) El locutor o sujeto de la enunciación (sujeto textual): Es


la voz que toma el enunciado bajo su responsabilidad;
puede ser el desdoblamiento del autor.

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c) El enunciador o sujeto del enunciado. Son otras voces o
puntos de vista ajenos al autor que aparecen en el dis-
curso.

Ejemplo:

Supongamos que Pedro Méndez es presidente de APAFA en


un colegio X. Cuando Pedro interactúa con su esposa, hijos y fami-
liares en la casa, habla como persona natural, es decir, se activa la
voz del emisor (sujeto empírico). Cuando Pedro dirige la reunión de
padres de familia, habla como presidente de APAFA (no como per-
sona natural), entonces se activa la voz de locutor (sujeto textual),
es decir, Pedro finge una voz que no le corresponde.

4. Texto y discurso

4.1. El texto

Desde la perspectiva etimológica, la palabra texto está rela-


cionada con los términos tejer y textura.
Texto. Proviene del latín textus.
Tejer (proviene del latín t x re) significa formar en el telar la
tela con la trama y la urdimbre.
Textura (proviene del latín text ra) significa disposición y or-
den de los hilos en una tela.
En consecuencia, el texto no es solamente una secuencia de
oraciones, sino que, a partir de un conjunto de operaciones de di-
verso orden trama y urdimbre se constituye en una unidad
semántico-pragmática (Calsamiglia y Tusón, 1999); es decir, el
texto es como un tejido de palabras, de oraciones, etc.
Una primera definición sería: El texto es la unidad gramatical
más amplia y de carácter comunicativo más completa. Siempre apa-
rece enmarcado en un contexto determinado, con una finalidad es-
pecífica, y con un sentido unitario.
El texto es la unidad máxima de comunicación de un hablan-
te a un oyente ( ). Tiene una apertura y un cierre, un tópico textual,

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y la unidad de sus miembros asegurada por la cohesión y la co-
herencia (C. Fuentes.)
El texto puede ser escrito u oral. De igual modo, puede ser de
variada extensión, es decir, desde una palabra (¡Socorro!) hasta un
libro completo (Cien años de soledad de García Márquez).
Para que una palabra sea considerada texto debe reunir va-
rios requisitos, como por ejemplo: Comunicar algo, producir efectos
en el receptor, tener una intencionalidad comunicativa, tener uni-
dad (tratar de un solo tema), tener coherencia, etc. Verbigracia: La
palabra ¡socorro! comunica todo un mensaje: alguien está en peligro
y necesita ayuda. En cambio, la palabra bailando no comunica nada,
o sea, no entendemos qué es lo nos quieren decir. Por lo tanto, esta
palabra (bailando) no es texto.
Vale señalar que el texto puede ser: una interjección (¡ay!),
una palabra, una oración, un párrafo, varios párrafos, un libro com-
pleto, siempre y cuando comunique algo y tenga un punto de inicio
y cierre.
En suma, el texto es una unidad lingüística coherente que tie-
ne una intencionalidad comunicativa.
Por otra parte, las características esenciales del texto, según
Enrique Bernárdez, son (citado en Pérez, Mónica y otros, 2001):

 Carácter comunicativo: El texto es una acción que tiene


finalidad comunicativa.
 Carácter pragmático: Su significado depende fundamen-
talmente del contexto.
 Carácter estructural: Presenta una organización interna
basada en reglas gramaticales y de textualización.

4.2. Texto y discurso: una diferencia

Texto y discurso son dos perspectivas distintas de ver el


mismo fenómeno. Algunos lingüistas consideran que los términos
texto y discurso son equivalentes, sin embargo, hay otros que los
diferencian. Por ejemplo, Edmondson (1981) hace la siguiente dife-
renciación: Texto es una secuencia estructurada de expresiones lin-

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güísticas que conforman un todo unitario. Discurso es un evento co-
municativo-social realizado mediante el empleo de elementos lingüís-
ticos e, incluso, paralingïísticos.

Texto + contexto = discurso

Un texto sin el contexto es simplemente texto. Por ejemplo:


un libro guardado en el estante es texto, porque no está en contacto
con el emisor ni con el receptor. Cuando empezamos a leerlo, ese
libro es discurso, porque ya está contextualizado.
Se llama contexto a las circunstancias, condiciones en que se
produce la comunicación. Está formado por el medio físico, es decir,
el lugar, el tiempo donde interactúan los interlocutores (emisor y
destinatario).

4.3. Propiedades textuales

Las propiedades más esenciales del texto son: cohesión, co-


herencia y adecuación.

4.3.1. Cohesión

Es la propiedad sintáctica que relaciona (o conecta) los dife-


rentes elementos del texto: cláusulas, enunciados, oraciones y
párrafos. Por lo tanto, la cohesión resuelve problemas relacionados
con la conexión de frases, oraciones y párrafos en el texto. A nivel
de la estructura superficial, las oraciones se unen a través de ele-
mentos textuales llamados mecanismos de cohesión.

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Sin las formas de cohesión, el texto sería una lista inconexa de
frases y la comunicación tendría grandes posibilidades de fracasar,
puesto que la ausencia de cohesión en la estructura superficial se
traduciría en incoherencia en la estructura profunda.

4.3.1.1. Mecanismos de cohesión

a) Anáfora

Es la referencia que se hace de un elemento (palabra, oración,


párrafo) antes mencionado en el texto. La anáfora remite hacia
atrás, al contexto anterior, para reproducir una información ya di-
cha. Ejemplo:

Ernesto está de viaje. Él es de Lima.

En la segunda oración, la palabra él hace referencia a Ernes-


to. Entonces decimos que la palabra él es una anáfora. Más ejem-
plos:

Economía, que es una Ciencia Social, me agrada.

¿Dónde estará Pamela? La quiero ver.

Pedro está muy triste. Su novia se fue con otro.

No se sabe cuántas botellas hay. Habrá que contarlas.

Importante: Las palabras que con mayor frecuencia funcio-


nan como términos anafóricos son los pronombres personales, al-
gunos demostrativos (éste, ésta, aquél) y posesivos (su), los relati-
vos (que)

b) Catáfora

Es la referencia que se hace de un elemento aún no mencio-

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nado. La catáfora nos remite hacia adelante, al contexto que sigue;
es decir, anticipa una información que se aclarará más adelante.
Ejemplo:

Sólo les pude conseguir esto, en todo el día: diez míseros soles
para mis hermanos.

les = para mis hermanos


esto = diez míseros soles

La reconocí en el acto. Era Susan.

La palabra la anticipa una información que se completará en


la segunda oración. En efecto, al leer la segunda oración nos damos
cuenta de que la persona reconocida es Susan.

No lo puedo creer: Valeria me engañaba con Mario.

c) Paráfrasis

Consiste en repetir el mismo contenido con otra frase o grupo


de palabras. Ejemplo:

El señor García no toma en cuenta a los pobres. Es una pena


que las personas de escasos recursos económicos no sean consi-
deradas dentro de las políticas del gobierno.

d) Sustitución

Consiste en sustituir una construcción textual en forma re-


sumida con las palabras hacer, así, eso. Ejemplo:

¿Ya escribiste la carta o aún no lo hiciste?

Te sugiero que no te cases nunca. Si lo haces, te arrepentirás.

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e) Elipsis

Consiste en omitir un elemento textual (palabra) en casos que


ya se tiene por sobrentendido. Ejemplo:

Isabel está de viaje. Ayer partió en el primer carro.

Nota: En la segunda oración se omite la palabra Isabel.

f) Cohesión léxica

• Repetición. Consiste en repetir el mismo elemento textual


(palabra o frase) en distintas partes del texto. Ejemplo:

A Karina la conocí en una fiesta. Me presentó a sus amigas


Carla y Susan. Pero la más bonita de todas era Karina. Por eso la
busco y no la encuentro. ¿Dónde estará Karina?

• Sinonimia. Consiste en utilizar sinónimos o palabras que


tengan la misma referencia que la que les antecede.
Ejemplo:

El Presidente viajó a Chile, a firmar un convenio. El Perú


será beneficiado con este tratado , subrayó el mandatario.

g) Conectores textuales / marcadores del discurso

Son elementos o frases que relacionan las distintas partes del


texto, y son medios que organizan la información en el texto. Estos
conectores ordenan la cadena discursiva para que la información
entregada a través del texto sea clara y coherente (Pérez, Mónica y
otros).
Los conectores son palabras o frases que vinculan unas pro-
posiciones con otras a nivel de oraciones o párrafos. Expresan rela-
ciones lógico semánticas que se involucran dentro de la coherencia
local y global del texto (Pérez Grajales, Héctor).

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Clasificación de conectores textuales

Según los planteamientos de B. Pottier (1993), los conectores


textuales se clasifican en tres grandes grupos:

 Conectores con visión de apertura: Regulan el inicio


de un acto discursivo . Tenemos: A propósito de, a este
respecto, con respecto a, en cuanto a, en lo concerniente a,
en lo que atañe a, en relación con, por lo que se refiere a,
en lo que respecta a, respecto de, etc.

Ejemplo:

Con respecto a las clases, debo decirte que los docentes


están en huelga indefinida.

 Conectores con una visión de seguimiento: Indican la


progresión del acto comunicativo . Se subdividen en:

• Adición: además, todavía más, asimismo, encima,


más aún, incluso, igualmente, ante todo, más que na-
da, de igual forma, en realidad, etc.

• Continuidad: Bueno, claro, también, por supuesto,


por otra parte, en otro caso, desde luego, etc.

• Orden: (Distribución espacial y temporal): Primero,


segundo, tercero , en primer lugar , luego, después,
a continuación, finalmente, por último, etc.

• Conformidad: Presuponen una relación de:

o Equivalencia: Es decir, esto es, a saber, o sea, vale


decir, etc.
o Inclusión: así, por ejemplo, etc.
o Causalidad: Pues, entonces, por lo tanto, por con-

26
siguiente, etc.

• Disconformidad: (Contenidos contrapuestos). Pre-


suponen una relación de:

o Oposición: Por el contrario, en cambio, con todo,


no obstante, sin embargo, al contrario, aun así,
en todo caso, la verdad es que, etc.

 Conectores con una visión de cierre. Ponen fin a lo que


precede. Tenemos a los siguiente conectores: En resu-
men, en suma, en definitiva, para resumir, en conclusión,
para concluir, en síntesis, en fin, por fin, al fin y al cabo, por
último, para terminar, etc.

Ejemplo:

Se ha cumplido con la totalidad de las tareas presupuestadas;


sin embargo, la calidad del producto no es del todo buena. En con-
secuencia, debemos poner en marcha un plan de contingencia. Asi-
mismo, es necesario que consigamos apoyo de autoridades y organi-
zaciones. En primer lugar, es fundamental que consigamos los datos
de contacto. En segundo término, debemos enviar las cartas. Por
último, tendremos que estar atentos a las respuestas que puedan
llegar.

4.3.2. Coherencia

La coherencia es la propiedad semántica del texto que rela-


ciona la información dando unidad al sistema discursivo, y organiza
las ideas mediante una estructura comunicativa de manera lógica y
comprensible.
La coherencia tiene que ver con el significado del texto. Es
asignada por el productor del discurso y aceptada como tal por el
receptor. Entre las características de un texto coherente tenemos:

27
Compatibilidad de ideas, relación de significados, validez de la in-
formación, relación de conceptos. Decimos que hay coherencia
cuando el significado de un texto no contradice el conocimiento del
mundo que tienen los interlocutores.
Para que haya coherencia, el texto debe tener relación temáti-
ca, pertinencia (acorde con el contexto y con la intención del texto),
no contradicción (compatibilidad entre ideas).
Al decir de Beaugrande y Dressler, en todo texto hay distintos
conceptos (estructuración de conocimientos). La coherencia hace
que haya relación entre estos conceptos.
Todo texto recoge un conjunto de ideas que giran alrededor
de un tema. Esas ideas deben se expresarse en un orden determi-
nado, de modo que el receptor pueda advertir las relaciones entre
unas ideas y otras, y pueda ir avanzando desde la información co-
nocida a la información nueva. Sólo así percibirá el texto como un
conjunto coherente y podrá comprender fácilmente la información
(La enciclopedia del estudiante).
En virtud de la coherencia, una construcción verbal se san-
ciona como texto. Es decir, la coherencia dota de sentido al texto.
Por otro lado, la coherencia varía de receptor a receptor. Un texto
puede ser coherente para uno y no serlo para el otro. De ahí que la
coherencia adquiere una característica pragmática.

4.3.2.1. Clases de coherencia

a) Coherencia de contenido (lingüística)

Este tipo de coherencia es de carácter semántico. Se presenta


a nivel interno del texto. Hace referencia a la relación de significa-
dos, y la caracterización del texto como una totalidad (una sola uni-
dad). Se clasifican en:

• Coherencia local o lineal: Es la conexión entre oraciones a


través de distintos tipos de relaciones semánticas: causal, de
contraste, secuencial, etc. Ejemplo:

Juana no asistió a clases. Está enferma.

28
La relación entre las dos oraciones anteriores es de tipo
causalidad. La causa de que Juana no asistió a clases es por-
que está enferma.

• Coherencia global: Es la caracterización del texto como una


totalidad, y se define a través de la formulación de la macro-
estructura. Es decir, un texto tiene coherencia global cuando
todos sus párrafos hablan sobre un solo tema.

b) Coherencia pragmática

Es la adecuación permanentemente entre texto y contexto.


Este tipo de coherencia tiene que ver con la competencia comunica-
tiva del emisor y el receptor. Dicho de otro modo, los interlocutores
son responsables de asignarle coherencia a un texto. Para dicha
operación es necesario tomar en cuenta el contexto. Algunos textos,
por poner un ejemplo, sólo son coherentes en contextos determina-
dos. Se debe señalar también que el contexto juega un papel muy
importante en la comprensión de un texto, ya que permite determi-
nar los significados implícitos.
Si en una clase digo Un par más , no se entenderá, porque no
se sabe a qué me refiero. Pero si lo digo en una bar, tendrá sentido.
El camarero entenderá que se trata de dos botellas de cerveza. Co-
mo se ve, los contextos le dan sentido al texto.

4.3.3. Adecuación

Es la propiedad pragmática del texto que determina la selec-


ción de elementos o palabras de acuerdo al contexto. Es decir, el
texto debe adecuarse al contexto en que se produce. Por ejemplo, si
estamos en la dirección del colegio, debemos usar las palabras
apropiadas para comunicarnos con la señora directora.
La adecuación determina la variedad y registro que se debe
emplear según la situación comunicativa. Por ejemplo: En Argentina
se habla en términos argentinos.

29
Cada situación exige un registro particular: tema, tipo de dis-
curso, canal, propósito, relación entre los interlocutores.
La adecuación también exige si se utilizará un lenguaje colo-
quial o especializado, según el contexto.
Para la adecuación del texto debemos tener en cuenta: Desti-
natario (¿quién nos escucha?), situación (¿en qué contexto se reali-
za nuestra comunicación?), medio (¿qué medio estamos utilizando
para nuestra comunicación?).

4.4. Unidades textuales

• Unidad mínima de enunciación: enunciado


• Unidad intermedia formante de textos: párrafo
• Unidad superior de comunicación: texto

4.4.1. Enunciado

Toda oración es un enunciado, pero no todo enunciado es


oración. O sea, para que haya oración se requiere un verbo conju-
gado (Julio llora desconsoladamente), pero para que haya un enun-
ciado no se requiere un verbo conjugado, sino basta con que la frase
esté contextualizada. Ejemplo: La frase A Tacna no es oración por-
que no hay verbo conjugado. Pero puede ser enunciado si la contex-
tualizamos: ¿A dónde viajaste? A Tacna.
El enunciado, unidad mínima de comunicación, es la secuen-
cia de signos emitida por el hablante que queda delimitada entre el
silencio previo a la elocución y el que sigue a su cese, y va acompa-
ñada por un determinado contorno melódico: la curva de entona-
ción. Dicho con otras palabras: el enunciado está compuesto por
uno o más signos que emite el hablante y capta el oyente; posee
sentido completo y concreto dentro de la situación en que se pro-
duce (Alfonso Sancho Rodríguez).
Para Maingueneau, el enunciado es la unidad comunicativa
elemental, una secuencia verbal dotada de sentido y sintácticamen-
te completa .

30
Para Catalina Fuentes, el enunciado es la unidad de comuni-
cación de un hablante e unas circunstancias enunciativas. Tiene
unos límites entonativos y pausas, una modalidad, establecidos por
el hablante y percibidos por el oyente. Constituye un solo acto de
decir, un acto de enunciación, que es recibido por el oyente. Grama-
ticalmente puede estar formado por una o varias oraciones (caso
más frecuente), una interjección, un sintagma, incluso una palabra .
En el siguiente párrafo, los enunciados aparecen separados
por el punto y seguido:

La Física Cuántica es la ciencia que estudia los fenómenos des-


de el punto de vista de la totalidad de las posibilidades. Esta disciplina
contempla aquello que no se ve y explica los fenómenos desde lo no
visible y lo no medible. En ese campo de lo no medible estamos noso-
tros los seres humanos. El átomo es una realidad científica que dio
paso a la Teoría de la Relatividad y luego ésta a la Física cuántica.
Los espacios entre las partículas de los átomos se los considera vacío.

4.4.2. Párrafo

Es un conjunto de oraciones relacionadas semánticamente


por un núcleo temático y se constituye en una unidad textual supe-
rior a la oración, y tienen un mensaje autosuficiente e inteligible.
El párrafo, generalmente, desarrolla una idea principal, rela-
cionándola con la macroestructura del texto. O sea: un texto desa-
rrolla un tema central. Este tema central es abordado por varias
ideas principales. Cada una de estas ideas principales se convierte
en párrafos.
Se le llama también parágrafo.

4.4.2.1. Estructura del párrafo

El párrafo en su estructura comprende dos elementos: tópico


(la idea principal) y comentario (las ideas secundarias).
La idea principal generalmente es una oración del párrafo, y
las ideas secundarias son varias oraciones, que amplían, aclaran,
ejemplifican, sustentan la idea principal.

31
4.4.2.2. Clases de párrafos

a) Según su función: Pueden ser:

• Introductorio: Presentan el tema.


• Informativos (o de desarrollo): Desarrollan el tema.
• De conclusión: Sintetizan (concluyen) el tema.
• De enlace: Son párrafos breves, sirven para unir o rela-
cionar dos párrafos.

b) Según su intención: Pueden ser: Expositivos, argumentativos,


narrativos, descriptivos

Ejemplos:

Párrafo narrativo

El presidente de la Nación llegó ayer a los Estados Unidos de


América para reunirse allí con su par. El objetivo del encuentro es
firmar una serie de contratos que incrementarán los intercambios
económicos entre ambas partes. De esta forma, productos textiles y
comestibles serán exportados al país norteamericano. La Argentina,
en cambio, importará, productos tecnológicos y automotrices de pri-
mera mano.

Párrafo descriptivo

La nueva biblioteca de Ana era enorme, ocupaba prácticamen-


te toda la pared de su habitación. Era de madera y contaba con nu-
merosos estantes dispuestos a distintas distancias. Por supuesto que
estaba muy ordenada y prolija, como todo lo que era de ella. No fal-
taban sus libros de medicina ni las revistas de psicología, que cada
mes compraba religiosamente.

32
Párrafo argumentativo

Desde mi punto de vista, la democracia debería implicar una


mayor participación por parte de los ciudadanos que lo que conoce-
mos en este momento. Tal y como están las cosas actualmente, la de-
mocracia se limita a emitir un voto cada un par de años. El gobierno
nacional debería modificar esta situación promoviendo consultas
populares sobre aquellos temas que realmente son estructurales para
la sociedad. Además, la participación en las comunas tampoco deber-
ía ser dejada de lado sino que tendría que priorizarse. Resulta esen-
cial la participación de los ciudadanos para que nuestros gobernantes
cumplan con aquello que nosotros, los ciudadanos, necesitamos y no
que los gobernantes actúen por interese propios.

Párrafo expositivo

Las Islas Británicas están compuestas por dos islas: Gran Bre-
taña e Irlanda. Dentro de ellas encontramos por un lado lo que se
conoce bajo el nombre de Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del
Norte, que se ubica en la isla llamada Gran Bretaña y en una porción
de Irlanda. El resto de esta última está ocupada por el país que lleva
su mismo nombre. Dentro de la isla Gran Bretaña existen tres nacio-
nes: la inglesa, la galesa y la escocesa.

c) Según su estructura: Pueden ser: Analizante (llevan la idea


principal en la primera oración), sintetizante (llevan la idea princi-
pal en la última oración), encuadrado (las ideas principales van en
la primera oración y en la última), paralelo (todas las oraciones son
importantes) y analizante-sintetizante (la idea principal está en el
medio del párrafo).

Ejemplos:

33
Párrafo analizante

La tuberculosis es una infección bacteriana contagiosa que


compromete principalmente los pulmones. Puede propagarse tam-
bién a otros órganos. La especie de bacterias más importante y repre-
sentativa causante de tuberculosis es Mycobacterium tuberculosis o
bacilo de Koch. La TBC es posiblemente la enfermedad infecciosa más
prevalente en el mundo.

Párrafo encuadrado

Los edificios hoy cubren las necesidades de vivienda de los seres


humanos. Estos albergan espacios designados para habitaciones,
baños, cocinas, lavanderías, comedores y salas. Muchos de ellos están
construidos con sistema antisísmico. Vivir en ellos es práctico y con-
veniente.

Párrafo paralelo

Las bibliotecas públicas albergan material bibliográfico en to-


das las disciplinas. Las bibliotecas universitarias cuentan con mate-
rial bibliográfica especializada. Las bibliotecas escolares sólo permi-
ten el material bibliográfico necesario para estudiantes de ciclo bási-
co a secundaria.

Parrado sintetizante

Evitar los excesos de sal en nuestra alimentación. Comer salu-


dable. Realizar 30 minutos de ejercicios diarios. Para ello, debemos
controlar nuestra presión arterial de manera periódica, en caso nece-
sario medicarnos. Mantener los valores normales de la presión alta y
baja es deber de todos nosotros. La hipertensión es una enfermedad
crónica que puede ser controlada con buenos hábitos.

34
Párrafo analizante-sintetizante

La información que se maneja en las comunicaciones se trans-


fiere gracias a la naturaleza del mensaje, portador de dicha informa-
ción. El mensaje parte de una fuente o emisor, y a través de un medio
o canal llega a un destinatario o receptor. Dicho mensaje transporta
la información respectiva con ayuda de unos signos, organizados
según unas reglas.

4.4.3. Texto

Es la unidad lingüística más amplia de comunicación que tie-


ne unidad e intencionalidad. Generalmente aparece constituido por
un conjunto de párrafos.

4.5. Categorías textuales

Llamadas también estructuras abstractas. Tenemos la macro-


estructura, microestructura y la superestructura.

a) Macroestructura. En términos sencillos, la macroestructura


es la síntesis, el resumen, el tema central de un texto. Es lo más
esencial de un texto.
Es la estructura global del significado de un texto (Van Dijk),
esto es, la información más importante que uno recuerda de la con-
versación, de un artículo leído. Se formula básicamente a través de
una macroproposición, o frase temática, o resumen.

b) Superestructura. Es un esquema abstracto que se compone


de una serie de categorías, cuyas posibilidades de combinación se
basan en reglas convencionales (Van Dijk); es decir, la superestruc-
tura determina el plan que se sigue para la aparición de las partes
(categorías) de un texto. Por ejemplo, la superestructura del relato
está constituida por las siguientes categorías: marco, complicación,
resolución y evaluación.

35
La superestructura estudia la distribución de las partes del
texto (introducción, desarrollo, conclusión).

c) Microestructura. La microestructura estudia la relación de


significados entre dos oraciones, y la estructura de una oración.
La microestructura es la estructura de las oraciones y secuen-
cias de discurso de carácter local, es decir, la relación semántica
entre oraciones. Teun van Dijk y Kintsch (1983), Calsamiglia y
Tusón (1999), Aguillón y Palencia (2004) y Marín y Morales (2004)
definen la microestructura como los elementos locales y superficia-
les que hacen que un texto sea cohesivo y coherente.

36
Capítulo II

MODOS DE ORGANIZACIÓN DISCURSIVA

1. Modalidades discursivas

Las modalidades discursivas son formas o modos en que se


organizan la información de los discursos. Tenemos:

1.1. Narración. Es un discurso que relata hechos, sucesos, acon-


tecimientos ocurridos en un tiempo y espacio determinados. La
información se organiza en forma secuencial y causal. Responde a
las preguntas: ¿Qué sucedió?, ¿qué sucede?, ¿qué sucederá?

1.2. Exposición. Es un discurso que explica un tema en forma


académica y científica. La información se organiza en forma acumu-
lativa. Responde a las preguntas: ¿Qué es?, ¿en qué consiste?, ¿por
qué?, etc.

1.3. Argumentación. Es un discurso que defiende una opinión o


postura sobre un tema. Responde a las preguntas: ¿Qué opino?,
¿qué pienso?, ¿qué me parece?, etc.

1.4. Descripción. Es un discurso que da conocer las cualidades,


rasgos y características de una persona, animal, objeto, fenómeno,
hecho, acción, etc.

37
1.5. Diálogo. Es un discurso que reproduce un intercambio o al-
ternancia verbal entre dos o más personas (conversación). Respon-
de a la pregunta: ¿Qué dicen?

1.6. Instrucción. Es un discurso que brinda un conjunto de indi-


caciones para realizar una acción o cumplir una tarea. Su intención
es enseñar y ordenar. Responde a las preguntas: ¿Cómo se realiza
una acción determinada?, ¿qué hay que hacer?

2. Discurso expositivo

2.1. Definición

Es aquel discurso que expone, explica un tema y transmite da-


tos con un alto grado de organización y jerarquización. Su finalidad
es hacer entender por qué tal elemento o proceso se define e identi-
fica de una manera determinada. Dicho de otro modo, el discurso
expositivo aporta elementos necesarios para facilitar la compren-
sión de un tema difícil y complejo.
Al decir de Miriam Álvarez, la exposición es un tipo de dis-
curso cuyo objetivo es el de ofrecer un tema cualquiera al receptor
de forma clara y ordenada .
Son de carácter directo y objetivo.
En suma, el propósito del discurso expositivo es dar a conocer
y hacer comprender un tema.

2.2. Características

• Brinda al receptor una información abstracta que pueda


resultarle útil o necesaria.
• Tiene la misión de dar una información objetiva de cual-
quier tema en forma acumulativa.
• La información que brinda debe ser clara y ordenada.
• Su formulación debe ser razonada (idea central, hipótesis,
demostración), por lo que se requiere conocimiento del

38
tema que se explica y un desarrollo progresivo y articula-
do de sus ideas.

2.3. Estructura

Los discursos expositivos tienen la siguiente estructura:

a) Planteamiento. Es la fase inicial del texto. Responde a la


pregunta: ¿de qué va a tratar el texto? Se presentan las ca-
racterísticas del tema y los métodos que se han empleado
para abordar el problema en mención.

b) Desarrollo. Es la parte medular del texto. Aquí se presen-


ta la información relevante a partir de una idea matriz. Se
debe tener en cuenta el esquema del contenido, el orden
de las ideas y conexión entre párrafos.

c) Conclusión. Es la fase final del texto. Aquí se condensan


los datos, es decir, se sintetizan. Debe ser breve y conciso.

2.4. Tipos

Orales: conferencia, simposio, foro, etc.


Escritos: ensayo, monografía, artículo científico, informe
científico, texto académico, reseña, etc.

3. Discurso argumentativo

3.1. Definición

Es aquel discurso que plantea una tesis y la defiende con ar-


gumentos convincentes. La finalidad de este discurso es persuadir o
convencer al receptor, de hacerle cambiar su ideología, su compor-
tamiento.

39
El discurso argumentativo defiende una opinión, postura,
punto de vista sobre un tema.
La tesis es una opinión (o postura) en contra o a favor sobre
un tema. Algunos autores definen la tesis como una afirmación ca-
tegórica. Por otra parte, el argumento es una razón que justifica (o
fundamenta) la tesis. Ejemplo:
Tesis: Yo opino que el alcoholismo es perjudicial para la salud.
Argumento: Porque, según los estudios realizados, las perso-
nas que consumen alcohol con mucha frecuencia sufren de cirrosis al
hígado y su coeficiente intelectual disminuye

3.2. Componentes de la argumentación

Premisa (argumento): Cada una de las proposiciones del ar-


gumento de donde se infiere una conclusión.
Conclusión (tesis): Proposición que se pretende probar y que
se deduce de las premisas
Ejemplo:

Deja de fumar cigarrillos; te arruinarás los pulmones.

Premisa 1: El cigarrillo contiene tabaco.


Premisa 2: El tabaco arruina los pulmones.
Conclusión: No debes fumar cigarrillos

¿Qué es argumentar?
Argumentar es hacer que el auditorio o destinatario admita
nuestra conclusión (tesis) como verdadera. Para llegar a una con-
clusión presentamos una o más premisas (argumentos). El destina-
tario aceptará la conclusión si es que nuestras premisas son irrefu-
tables, indiscutibles.

3.3. Convencer y persuadir

Los términos convencer y persuadir buscan inducir, incitar,


mover con razones a alguien a hacer algo o a creer en algo. Se dife-

40
rencian en cuanto a la manera en que intentan lograr la adhesión de
una tesis o conclusión: Convencer usa premisas irrefutables, indis-
cutibles, inobjetables (conocimientos universales) para probar la
conclusión. Persuadir generalmente implica el uso de premisas
discutibles, objetables, refutables (conocimientos válidos para cier-
tos sectores) para probar la conclusión.
Ejemplo:

El ejemplo anterior sobre no fumar cigarrillos corresponde al


plano de convencer, porque las premisas que usa (El cigarrillo con-
tiene tabaco, el tabaco arruina los pulmones) son irrefutables, de
conocimiento universal, o sea, nadie afirmaría que el tabaco es sa-
ludable.

3.4. Características

• Un tema de discusión.
• Un sujeto argumentador y un interlocutor que debe ser
convencido.
• Un razonamiento para convencer.
• Una opinión y uno o más argumentos.
• La elección de los argumentos en función de los interlocu-
tores.
• Las fases intermedias en las que las opiniones cambian o
se consolidan.
• Una (eventual) conclusión.

3.5. Estructura

a) Presentación o introducción

Tiene la finalidad de presentar el tema sobre el que se


argumenta, captar la atención del destinatario, despertar
en él el interés y una actitud favorable.

41
-Exposición de la tesis. La tesis se presenta en forma
explícita (es decir, aparece escrita) La tesis (afirmación
categórica) es la postura que se opta sobre un tema. Pue-
de aparecer al principio o al final del texto. Una tesis
puede ser una opinión subjetiva, en el caso de la argu-
mentación informal, que se defiende con una serie de ra-
zonamientos; en cambio, si se trata de un trabajo
académico de investigación, la tesis tiene que ser una
hipótesis científica.

Cabe destacar que una tesis que no se apoye en argumen-


tos racionales no constituye una argumentación acadé-
mica. Solamente los datos objetivos o las afirmaciones
demostrables científicamente constituyen argumentos
validos en un texto científico-técnico.

-Descripción de la controversia. La tesis se presenta en


forma implícita (es decir, no está escrita, hay que dedu-
cirla). Dicho de otro modo, la tesis se presenta como un
problema o conflicto que el emisor irá resolviendo en ba-
se a una tesis implícita.

b) Cuerpo demostrativo o proceso argumentativo (blo-


que argumentativo)

Una vez expuesta la tesis, empieza la argumentación


propiamente dicha. Se trata de justificar la tesis con la
presentación de pruebas y argumentos variados (argu-
mentación positiva). Refutar la tesis contraria, o admitir
algún argumento contrario (concesión) para contra ar-
gumentar.

Con el objetivo de lograr persuadir al destinatario, el


emisor puede desplegar una serie de estrategias argu-
mentativas. Puede recurrir a las citas de autoridad, a la
ejemplificación, a la analogía, a la exposición de las cau-
sas, a las consecuencias que comporta la adopción de sus

42
ideas, al refuerzo de su opinión mediante datos objetivos
(como por ejemplo, resultados estadísticos o sondeos), a
la discusión y desestimación de posibles objeciones a la
tesis adoptada.

Según Miriam Álvarez, argumentar consiste en aportar


razones para defender una opinión. Argumentar es con-
vencer a un receptor para que piense de una determina-
da forma . Dicho de otro modo, argumentar es persuadir
al receptor para que acepte la tesis como verdadera. Para
ello, el autor se apoya en principios, razones, argumentos
de autoridad, opiniones sociales, refutación de ideas aje-
nas, inferencias, ejemplificaciones, etc.

Al defender una opinión suele adoptarse una de estas


tres posturas argumentativas:

Postura Positiva: El emisor-argumentador aporta argu-


mentos que apoyan su tesis (argumentación positiva o de
prueba).

Postura Negativa: Se ofrecen razones que refutan o re-


chazan argumentos contrarios al propio punto de vista
(argumentación negativa o de refutación).

Postura Ecléctica: Se aceptan algunas razones ajenas


(concesiones) y se aportan argumentos propios.

c) Conclusión o significación

Se recuerda al interlocutor la tesis, las partes más rele-


vantes de lo expuesto y se insiste en la posición argu-
mentativa adoptada.

43
3.6. Tipos de argumentos

a) Por analogía. Son argumentos que establecen paralelismos


entre lo argumentado y otro hecho, una forma de aclaración que
facilita su comprensión por parte de los destinatarios. Este tipo de
argumento se basa en la relación de semejanza entre dos hechos. Se
deduce que lo que es válido para uno es válido para el otro. Ejem-
plo:

Se han tomado medidas muy estrictas contra la contaminación


atmosférica, porque afecta la calidad de vida de las personas. Lo
mismo debería hacerse con la contaminación acústica, porque afecta
gravemente la calidad de nuestra vida. (C. López, 1996:102)

b) Por ejemplificación. Son argumentos que presentan ejem-


plos convincentes para ratificar la tesis, es decir, presentan casos
particulares como anécdotas, cuentos, metáforas, citas literarias,
etc. Se ofrece uno o más ejemplos específicos en apoyo de una gene-
ralización. Ejemplo:

Hágase millonario, compre su raspe, cientos de personas han


ganado.

c) Por causalidad. Son argumentos que explican las causas que


conducen a un efecto y por qué sucede tal efecto. Ejemplo:

El exceso de harinas produce obesidad, por lo tanto, si Ud. des-


ea bajar de peso, debe evitarlas.

d) Por autoridad. Son argumentos que se apoyan en las opinio-


nes de personajes de prestigio social o intelectual. Ejemplo:

El universo no es estático, como creía Newton, sino se expande


continuamente, es lo que afirma el físico y matemático Hubble.

44
e) Por deducción. Son argumentos en los cuales la verdad de
las afirmaciones garantiza la verdad de las conclusiones . (Pérez,
Mónica y otro). Ejemplo:
Si los optimistas tienen más posibilidades de éxito que lo pesi-
mistas, entonces, usted debería ser un optimista.

A partir de unas premisas se llega a una conclusión. Ejemplo:

Premisa 1: Todos los hombres son mortales.


Premisa 2: Jesucristo es un hombre.
Conclusión: Por lo tanto, Jesucristo es mortal.

f) Por inducción. De premisas particulares llegamos a una


premisa general. Ejemplo:

Premisas: Roberto se preparó en la academia XZ e ingresó en


la universidad, Matías se preparó en la academia XZ e ingresó en la
universidad, Anacleto se preparó en la academia XZ e ingresó en la
universidad, Fabricio se preparó en la academia XZ e ingresó en la
universidad
Conclusión: Todos los que se preparan en la academia XZ in-
gresan en la universidad.

3.7. Tipos de discursos argumentativos

Orales: Debates, foros de opinión, discusiones, deliberacio-


nes, mesas redondas, paneles, discursos políticos, etc.
Escritos: Textos psicológicos, filosóficos, teológicos, legales
(sentencia, recurso o apelación, etc.), ensayos, editorial de periódi-
cos, columnas de opinión, propagandas comerciales y políticas

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BIBLIOGRAFÍA

Bassols, M. y Torrent, A. (2003). Modelos textuales. Teoría y práctica. (2ª


ed.). España: Eumo Octaedro.
Beaugrande, R. y Dressler, W. (1997). Introducción a la lingüística del texto.
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Van Dijk, T. (1996). Estructuras y funciones del discurso. México: Siglo Vein-
tiuno Editores.
(1983). La ciencia del texto. Un enfoque multidisciplinario.
Barcelona: Paidos.
(1995). Texto y contexto. Madrid: Ediciones Cátedra.

46
Javier Núñez

Es licenciado en Lengua y Literatura (UNA-Puno) y bachiller en


Ciencias Contables (UNA-Puno). Concluyó estudios de maestría en Lingüís-
tica Aplicada (UNSA-Arequipa) y maestría en Investigación científica y
Docencia Universitaria (UNPRG-Chiclayo). Actualmente cursa estudios de
doctorado en Economía y Políticas públicas (UNA-Puno). Es autor de Espe-
jos de bronce (2005), Salomé y otros cuentos (2009), Asesinas (2010),
Vírgenes y herejes (2011) y Laberinto (2012). En el 2008 fue finalista con el
cuento Clara Luz en el V Premio Regional de Cultura, auspiciado por el
I.N.C. de Cusco. En el 2009 fue Segunda Mención Honrosa con el cuento El
profesor Arias en el Premio Nacional Víctor Humareda Gallegos . En el
2011 obtuvo el I Premio Nacional de Novela Ciudad Incontrastable , con
Vírgenes y herejes.

INFORMES

dorianjavier23@hotmail.com

javiernc.jimdo.com

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