Los comienzos de la civilización

Miles de años de explorar el medioambiente permitieron a las sociedades humanas el manejo de variados
recursos. A partir de la invención de la agricultura y de la domesticación de animales el dominio sobre el
hábitat aumentó notablemente, pues, aunque los hombres seguían sujetos a las condiciones de clima,
vegetación y fauna, se multiplicó su capacidad de control sobre los alimentos disponibles.
La agricultura y la sedentarización contribuyeron al crecimiento demográfico, que hizo necesario producir
más comida pero aportó más brazos para trabajar y más mentes para buscar soluciones. Las nuevas
condiciones propiciaron cambios fundamentales que dieron origen a la civilización.

Civilización y ciudades

La palabra civilización viene del latín civitas, que quiere decir, ciudad. Por eso, aunque son muchos los
aspectos que caracterizan una civilización, la mayoría de los historiadores está de acuerdo en que la
presencia de ciudades es el más importante.
Es difícil definir el momento en que aparecieron las primeras ciudades en el mundo. Lo que podemos afirmar
es que fue entre el milenio VI y el IV a. C., gracias a la combinación de condiciones naturales y nuevas técnicas
y estrategias de trabajo.
En cuanto al lugar, sí se sabe que surgieron en las cuencas de los grandes ríos Éufrates, Tigris y Nilo, en la
llamada “media luna fértil”.
Los arqueólogos han localizado estas ciudades porque eran más grandes y estaban más densamente
pobladas que las aldeas neolíticas, pero además, porque el territorio en que se asentaban mostraba señales
de una sociedad más compleja. Había espacios de uso común, probablemente mercados, templos y
residencia de autoridades, junto a caseríos y talleres de artesanos. A todos lados se llegaba a través de
calles y callejuelas, porque pese a la diversidad de ocupaciones, la ciudad funcionaba como un todo.
Generalmente estaban protegidas por murallas y abrazadas por un cinturón de campos labrados.

1. Ubica en el mapa:
a. Océanos y continentes
b. Las zonas donde surgen las primeras civilizaciones
 “Entre los años 6000 y 3000 a. C. el hombre aprendió a aprovechar la fuerza del toro y la del viento:
inventó el arado, el carro de ruedas y el bote a vela; descubrió los procesos químicos necesarios para
beneficiar los minerales de cobre y las propiedades físicas de los metales y empezó a elaborar un
calendario solar preciso. De este modo se encontraba habilitado para la vida urbana y el camino
allanado hacia la civilización”
V. Gordon Childe: Los orígenes de la civilización, 1967

2. Según Gordon Childe, ¿qué cambios e innovaciones permitieron allanar el camino hacia la
civilización?
Las obras de regadío y el nacimiento del Estado

Las innovaciones no se limitaron a las técnicas y al uso de nuevas materias primas; tanto o más importante
fueron los cambios en la organización del trabajo colectivo. En las cuencas de los ríos de la media luna, los
ríos se desbordaban periódicamente; las aguas depositaban un limo que servía como abono, pero también
encharcaban el suelo y solo irrigaban los campos próximos a la orilla.
Para aprovechar mejor las crecidas naturales, los hombres construyeron embalses, diques y canales, que
evitaban el exceso de agua en una parte y la hacían llegar a más tierras. Esto era una tarea imposible para
un solo campesino, e incluso para un grupo de ellos. La crecida se producía a lo largo de miles de kilómetros
y la construcción de canales y diques debía planificarse en toda la extensión del río. Por ello, la agricultura
de regadió exigió organización y disciplina, además de un gran número de trabajadores. Hombres con
capacidad de planificar y dirigir se pusieron seguramente al frente de la tarea y lograron hacer cuplir sus
órdenes a los demás; aparecieron así formas de autoridad más complejas que las que habían conocido las
tribus paleolíticas o las aldeas neolíticas. Había nacido el Estado como forma de organización política.

3. ¿Por qué la aparición de la agricultura de regadío tiene relación con el surgimiento del Estado?

Una sociedad con diferencias de poder y riqueza

¿Cómo lograron estos hombres que sus órdenes fueran obedecidas por miles de trabajadores?
Mucho se debió a su don de mando y otro tanto a su capacidad para predecir, basados en observaciones
astronómicas, el momento en que debían empezar los trabajos, antes que llegara la inundación. Hombres
que estudiaban el movimiento de los astros y observaban los ritmos de la naturaleza fueron considerados
seres capaces de conocer los secretos de los dioses. Así, quienes cumplieron las funciones de planificación
y dirección se convirtieron en reyes y sacerdotes. Desde esa posición se adueñaron del producto generado
por todos, decidiendo qué pare volvería a los campesinos como alimento, cuánto debía reservarse para la
nueva siembra y cuánto se destinaría a comerciar. El resto de la cosecha se disponía a su gusto para costear
obras monumentales, campañas guerreras o bienes lujosos que adornarían sus personas y sus palacios y
templos.

De este modo, el excedente producido por la agricultura de regadío fue acumulado por un grupo minoritario
de la sociedad, generando en su seno diferencias de riqueza y poderío.

4. ¿Qué relación puedes establecer entre lo que explica el texto y el dicho “el conocimiento es
poder”?