Flores Ríos Arisai B. Hernández Oviedo Juan Antonio Juárez Escobedo Ana Sofía Tesillos Francisco Ezequiel GRUPO: 2422
NIVELES DE PREVENCIÓN EN LA ENFERMEDAD PERIODONTAL
La salud oral y la dieta interaccionan de muchas maneras; por ejemplo, la nutrición
influye en el desarrollo craneofacial y de la mucosa oral, tiene decisiva influencia sobre la aparición de enfermedades dentales y periodontales y se relaciona con un tercio de los casos de carcinogénesis de la mucosa oral Por otro lado, las enfermedades orales tienen un fuerte impacto sobre la capacidad de los individuos de alimentarse correctamente, instaurando un círculo vicioso que lleva a un progresivo estado de decaimiento orgánico Así pues, la salud oral y la nutrición son sinérgicos: tanto las infecciones orales, como las afecciones sistémicas agudas, crónicas o terminales, afectan a las habilidades funcionales masticatorias y por ende el régimen alimentario y el estado nutricional. Asimismo, la nutrición y la dieta influyen en la integridad de la cavidad oral y contribuyen a la progresión de las enfermedades orales; Finalmente la pérdida de dientes, causando dolor, ansiedad y depresión, tiene un impacto negativo sobre las capacidades sociales La enfermedad de las encías, o enfermedad periodontal, comprende muchos tipos de enfermedades dentro de los que se incluye la gingivitis. La gingivitis en una infección bacteriana crónica que puede conducir a la pérdida de los dientes si no es tratada adecuadamente, según la Academia Americana de Periodoncia (AAP). Si bien existen varios tratamientos, quirúrgicos y no quirúrgicos para la enfermedad periodontal, la nutrición cumple un papel importante en la salud de las encías. La reabsorción ósea es un denominador común para la enfermedad periodontal y la osteoporosis; una importante parte de la literatura científica se ha ocupado de la relación entre una escasa absorción de calcio y vitamina D y el aumento del riesgo de periodontitis. Sin embargo, aparte de la deficiencia severa de vitamina C, que puede conducir a periodontitis asociada al escorbuto por defectos en las membranas basales, en el colágeno del epitelio oral y en el hueso alveolar aún no existen evidencias fuertes y unívocas de las relaciones entre la dieta y la enfermedad periodontal
Consumo de pescados grasos como el salmón y el atún. Estos pescados
contienen ácidos omega-3 como el EPA y DHA, este último ha sido asociado con la reducción de la aparición de enfermedad periodontal, según un estudio en la revista Nutrition.
Consuma productos lácteos. Un estudio publicado en la Revista de
Periodontología del 2008, encontró que los participantes que consumieron mayor cantidad de productos lácteos como leche, queso y comidas con ácido láctico como el yogurt, tuvieron un menor nivel de gravedad en la enfermedad periodontal.
Consuma alimentos altos en Vitamina C, uno de las viaminas antioxidantes que
ayudan a proteger las células del daño causado por los radicales libres. La vitamina C promueve la salud de sus encías y reduce el riesgo de desarrollar gingivitis. Entre algunas fuentes que contienen esta vitamina están: naranjas, chile dulce verde, brócoli, tomates, fresas y jugo de naranja fortificado.
Agregue alimentos ricos en ácido fólico a su dieta. Según el Centro Médico de la
Universidad de Maryland, una deficiencia en esta vitamina puede causar gingivitis. Entre los alimentos que contienen ácido fólico están: espinacas, verduras de hojas verdes, remolachas, la soja, granos enteros, gérmenes de trigo, jugo de naranja y leche.