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UNIVERSIDAD CENTRAL DEL ECUADOR

Facultad de Comunicación Social

Pensamiento Económico

Integrantes: Curso: 6to “D” Fecha: 20/06/2018

Evelyn Chaquinga

Edison Pánchez

Erika Pilliza

Escuela Neoclásica

“Principios de economía política” Alfred Marshall

Alfred Marshall es considerado el padre de la teoría microeconómica neoclásica que tomo


como base las obras de Smith, Ricardo y J. S. Mill logró estructurar un marco analítico
de la teoría económica. Su formación académica empezó en la iglesia anglicana y sus
estudios superiores en la Universidad de Cambridge, lugar donde sus aptitudes para las
matemáticas salieron a la luz. Por lo que decidió quedarse como profesor de matemática
e inmiscuirse en temas como la metafísica, ética y economía. Marshall forjó los principios
del análisis de oferta y demanda.

Las creencias de religiosas de Marshall hicieron que su lado humanista sobresalga y se


preocupe por los pobres, pensaba que haciendo un estudio sobre la economía se podría
mejorar el bienestar de toda la sociedad. Trato de juntar sus conocimientos de historia con
su formación matemática para edificar una máquina de investigación que fuera adaptable
a los cambios de los tiempos.
Objeto:

Marshall en uno de sus libros Principles of Economics utiliza dos términos diferentes que
son: economía política y economía. El primero hace referencia a que tanto la política
como la economía están relacionados y el segundo a la economía que pertenece a las
ciencias sociales y relacionada a los juicios normativos. En otro de sus textos Principles
of Economic descarta el término economía política del término economía, pero en lo que
más se enfoco fue en la teoría aplicada y no en la ciencia pura de la economía. Lo que
buscaba Marshall era separar la economía de las demás ciencias sociales.

La metodología de Marshall fue muy meditada debido a que comprende la teoría


microeconómica y tenía aptitudes para las matemáticas. Para él, la economía había
realizado mayores avances que las otras ramas de las ciencias sociales. También sugirió
que los economistas dan una definición a la economía de acuerdo con sus convicciones.

Otra de las cuestiones que analizo fue la relación entre deseos de la sociedad y su actividad
económica, para él los deseos son una variable que se determina de forma independiente
y de las actividades económicas subsidiarias. Tomo en consideración la demanda (deseos)
y la oferta (actividades) en un contexto mucho mas amplio. Decía que los deseos no son
independientes de nuestras actividades, sino que surgen como producto directo de las
mismas. Marshall aconsejo que los economistas empiecen por un estudio preliminar de
la demanda, revisaran las actividades y la oferta y de ahí regresaran a la demanda. Y de
esta manera se lograría comprender las complejas conexiones entre el deseo y la demanda.
En el análisis económico dio importancia a las actividades que ayudaría a reafirmar su
afinidad con la economía clásica que hacía énfasis en la oferta a diferencia de Jevons y
Menger, que hacían énfasis a la demanda.

Marshal se caracterizaba por sus preocupaciones humanitarias y decía que la erradicación


de la pobreza es la principal función de la economía. Las teorías de los economistas y los
hechos son el principal problema, por lo que es necesario resolverlos y de esta manera
descubrir las cusas de la pobreza para así poder eliminarla.

Marshall se propone analizar la oferta, pero para esto debe abordar el tema de los costes
es así que se plantea “Si la oferta depende de los costes normales de una empresa, ¿qué
empresa debe considerarse normal?” es por ello por lo que para lograr esto se debe
estudiar los gastos de un productor representativo de ese volumen agregado. Mas bien se
puso a examinar empresas que todavía no ingresaran a la industria, empresas que los
costes revelaran que tiene un acceso normal a la tecnología existente.

Uno de los problemas que analiza es relacionado al tiempo, este último término para
Marshall no tiene que ver con el tiempo cronológico medido por horas sino más bien un
recurso analítico y para distinguir los periodos se definen desde el punto de vista de la
economía de la empresa y de la oferta.

Una variación del precio no afecta en absoluto a la cantidad ofrecida, ya que el periodo es demasiado corto para que las

empresas puedan responder a ella. El corto plazo es un periodo en el que la empresa puede alterar la producción y la oferta,

pero no puede cambiar el tamaño de la planta. En este caso, una subida de los precios sí provoca un aumento de la cantidad

ofrecida y la curva de oferta tiene pendiente positiva. A corto plazo, los costes totales de la empresa pueden dividirse en dos

componentes: los costes que varían con la producción, que Marshall denominó costes especiales, directos o principales y que

los textos modernos llaman costes variables; y los costes que no varían con la producción, que Marshall denominó costes

suplementarios y que los textos modernos suelen llamar costes fijos.

Estos costos variables y fijos a corto plazo vendrían a participar en el mundo de la


empresa y de igual manera se convertirían en un instrumento analítico para analizar
las actividades de las empresas. Es así como a largo plazo se puede modificar el tamaño
de la planta y todos los costos se vuelvan variables. Dice que la curva de oferta se
vuelve más elástica a largo plazo puesto que las empresas pueden acoplarse a los
cambios de los precios y modificar el tamaño de la planta.

Marshall consideraba que cuando se comprenda de manera correcta la influencia del


tiempo y se tomara conciencia de la interdependencia de las variables económicas, se
podría resolver que es lo determinante del precio si por un lado era el coste de
producción o la utilidad.

También decía que los economistas habían utilizado incorrectamente el análisis


marginal, puesto que tomaban al valor marginal para determinar el valor del todo. Para
Marshall este análisis marginal dice que “debemos ir al margen para estudiar la acción
de las fuerzas que rigen el valor del todo”. Tanto la utilidad y el coste marginal no
determina el precio, debido a que todos estos valores son determinados por valores que
actúan al margen. Pero no hay que olvidar que la demanda, oferta y el precio
interactúan en el margen y determinan mutuamente sus valores.
Marshall hablo de la demanda y su aportación más grande a la teoría de la demanda
fue su formulación del concepto elasticidad-precio de la demanda. Tanto el precio
como la demanda están relacionados inversamente, las curvas de demanda tienen
pendientes negativas. Esta formulación indica el grado el grado de relación entre la
variación del precio y la variación de la cantidad demandada.

De igual manera formulo por primera vez la ley general de la demanda: “la cantidad
demandada aumenta cuando baja el precio y disminuye cuando sube el precio”. Otra de
las cosas que estudio fue la utilidad marginal del dinero y dijo que era constante en primer
lugar porque carecía de los instrumentos teóricos para distinguir claramente entre el
efecto-sustitución y el efecto-renta y segundo lugar decía que el efecto-renta de las
pequeñas diferenciaciones del precio de un bien era tan pequeño que no pasaba nada por
dejarlo de lado.

La creencia de Marshall de que la utilidad marginal del dinero era constante cuando las
variaciones de los precios eran pequeñas permitió sacar ciertas conclusiones para lo que
hoy llamamos economía del bienestar.

Utilizando la ecuación (11.2), UMA = PA ⋅ UMM y suponiendo que la utilidad marginal del dinero es constante, el precio
del bien A y la utilidad marginal del bien A están relacionados directamente. Marshall llegó a la conclusión de que el precio
del bien A es una medida de la utilidad marginal del bien A para un consumidor. Las curvas de demanda tienen pendiente
negativa y hacia la derecha debido a la utilidad marginal decreciente. Su pendiente negativa indica que los consumidores
están dispuestos a pagar más por las unidades consumidas anteriormente de una mercancía que por las unidades consumidas
después. Sin embargo, en el mercado los consumidores pueden comprar todas las unidades que consumen a un solo precio.
Como éste mide la utilidad marginal de la última unidad consumida, los consumidores obtienen las unidades anteriores, las
unidades intramarginales, a un precio más bajo que el que estarían dispuestos a pagar.

Marshall trabajo con curvas de demanda del mercado, no con curvas de demanda
individual. La utilización de los precios por parte de Marshall para medir dos supuestos:
el primero dice que hay una función de utilidad auditiva que no toma en cuenta las
relaciones de sustitución y de complementariedad; y el segundo es que el efecto-renta
producido por una pequeña variación del precio es inapreciable, dicho en otras palabras,
la marginalidad del dinero es constante. Cuando las variaciones de los precios son
pequeñas el supuesto de la utilidad marginal constante del dinero, se lo puede
considerarse realista y más si los gastos en la mercancía en cuestión solo representan una
pequeña parte del gasto total del consumo.
MÉTODO.

La escuela neoclásica se clasifica por la matematización del método de análisis, además


Marshal trata de dar un enfoque histórico. Los neoclásicos reconocen al humano como
sujeto racional cuyo consumo tiene fines utilitaristas o de beneficios, a partir de ahí
aparece una contraposición en la relación consumidor-productor, en este sentido analizar
el valor es crucial en la escuela neoclásica, su desarrollo se da en una suerte de
correspondencia entre las variables, los neoclásicos reconocen que el tiempo es un factor
importante en el análisis económico a razón de que las causas tardan en dejar sentir sus
efectos Marshal clasifica al tiempo en dos periodos a lo largo de su desarrollo teórico
mismos que responde a corto plazo y largo plazo.

El uso de Marshall de la técnica del ceteris paribus corresponde a su método para afrontar
el problema del tiempo, esta técnica es un análisis marginal, esto quiere decir que se
realiza un estudio al margen para estudiar la acción de las fuerzas que rigen el valor del
todo.

TEORIA DEL VALOR

Los neoclásicos se enfrentaron con el problema del valor en un contexto de incertidumbre


por saber si era la utilidad o el coste de producción lo que determina el precio. Marshall
para explicar las fuerzas que determinan los precios y la asignación de los recursos
conjugó lo mejor del análisis clásico con los nuevos instrumentos de los marginalitas
desarrollando una técnica básica para ilustrar con gráficos el análisis de oferta y demanda
concluyendo de esto que el valor esta determinado por un punto de equilibrio entre la
demanda y la oferta, además que la demanda, la oferta y el precio interactúan en el
margen y determinan mutuamente sus valores respectivos (Landreth & Colander, 2006)

Para su desarrollo es necesario entender algunos conceptos: la demanda es cantidad de un


bien o servicio que un individuo está dispuesto a adquirir un precio determinado, la Ley
de la demanda responde que a mayor precio menores serán las cantidades demandadas.
Por otro lado, la oferta es la cantidad que un productor está dispuesto a ofrecer a un precio
determinado, su ley indica que mientras mayor es el precio mayor serán las cantidades
producidas ofrecidas.
Donde se intersecan la curva de la oferta y la curva de la demanda se denomina punto de
equilibrio y este nos ayudara a determinar el precio de mercado para el bien o servicio y
la cantidad de producción de dicho bien o servicio. Marshall presenta un punto de
equilibrio donde la cantidad es la variable independiente, sin embargo, el punto de
equilibrio podría cambiar de posición debido a diferentes variables entre ellas el factor
tiempo.

Punto de equilibrio

Marshall sostiene que en el corto plazo el precio está determinado por la intersección de
las curvas de oferta y demanda. La demanda depende de la utilidad y tiene pendiente
negativa; y la curva de oferta está regida por el costo. En el corto plazo la curva de oferta
es de pendiente positiva porque cuando aumenta la demanda, la oferta responde, pero a
costos crecientes los precios.

Sin embargo, en el largo plazo Marshall sostiene que el valor de la mercancía tenderá a
oscilar hacia su costo de producción. En particular, éste sería el caso de las mercancías
producidas conforme a la ley de los rendimientos constantes. Si la demanda aumenta, el
precio de mercado aumentará por un tiempo, pero luego se expande la producción y el
precio vuelve al costo de producción. Entonces, se puede ignorar el efecto de la demanda
en el largo plazo y el precio normal es el que se iguala a los costos de producción. En el
corto plazo habría mayor influencia de la demanda sobre el valor, pero en el largo plazo
habría mayor influencia de los costos de producción.
TEORIA DEL CONSUMO

La escuela neoclásica considera al sujeto autónomo en el mercado con capacidad de


elección para satisfacer sus necesidades o aumentar su bienestar, es decir el consumidor
tiene el control absoluto de las decisiones de consumo. La participación en el mercado
cumple con un objetivo en concreto, la obtención de utilidad.

La teoría de la utilidad marginal a partir de la cual se construye la teoría del


comportamiento del consumidor pone a conocimiento que “el individuo a partir de la
información disponible sobre productos y precios escoge el mejor conjunto de bienes
entre los que puede adquirir con su restricción presupuestaria” (GUILLÉN, 2003, pág.
100). El mejor conjunto de bienes será el que maximice su bienestar ya que el consumidor
es racional. La segunda tiene que ver con la utilidad marginalidad, el valor subjetivo que
el consumidor le otorga a un bien o producto consumido. Es decir, el valor que se deriva
del grado de utilidad de ese bien en función de sus expectativas.

Se considera que la actividad económica de los individuos es una economía de bienestar,


la economía del bienestar presenta el concepto de excedente de consumo, donde el precio
es una medida de utilidad marginal del bien para un consumidor. Es la cantidad que
los compradores están dispuestos a pagar menos la cantidad que realmente pagan, el
excedente de consumo mide el beneficio que los compradores reciben de un bien en
términos en que ellos lo perciben. (Landreth & Colander, 2006)

Excedente del consumidor.

La demanda y el precio están en relación inversamente proporcional, es decir la cantidad


demandada aumenta cuando baja el precio y disminuye cuando el precio sube. Según
Marshal, los individuos desean mercancías por la utilidad que obtienen consumiéndolas
(Landreth & Colander, 2006). Es decir, en función de la utilidad, su formula corresponde
a la suma de las utilidades que se obtiene consumiendo cada bien, ante esto aclara que la
utilidad de un bien X depende únicamente de la cantidad que se consuma de X, no de la
cantidad de otros bienes.

La utilización de los precios para medir la utilidad depende de dos supuestos: 1. Existe
una función de utilidad activa que no tiene en cuenta las relaciones de sustitución y de
complementariedad; y 2. El efecto-renta efecto de una pequeña variación del precio es
inapreciable, o sea la utilidad marginal del dinero es constante.

TEORIA DE LA PRODUCCIÓN

La teoría de la producción hace alusión exclusivamente al desarrollo productivo


microeconómico de las empresas o industrias, en este proceso intervienen los factores de
producción llámese la renta, los salarios, los beneficios y los intereses; y su objetivo es
maximizar sus ganancias, o sea lograr la máxima diferencia positiva entre el ingreso total
y el costo total.

La demanda de un factor de producción es dependiente del producto marginal del factor.


Marshall midió los productos marginales calculando lo que denomino producto neto del
trabajo, la productividad marginal solo mide la demanda de un factor y los precios de los
factores son determinados por la interacción de la demanda, la oferta y el precio en el
margen. Es decir, para estimar el producto neto se debe considerar todos los gastos de
producción de la mercancía en la que trabaja menos el salario. Para Marshal los factores
de producción se combinan en proporción de los productos marginales y el precio

El pago a un factor de producción es determinante del precio o determinado por el precio


dependiendo del periodo de tiempo. Los pagos de los factores de producción de la escuela
neoclásica reconocen la ambivalencia de la renta de la tierra como un coste de producción
dependiente del contexto, es decir se puede como no pagar dependiendo de la ubicación
y la situación social del lugar, de toda forma fuera cualquiera el caso (no pago o pago de
la renta de la tierra) la renta es determinante del precio desde la perspectiva de la
economía. Por otra parte, los salarios, beneficios e intereses presentan alguna de las
características de la renta, los salarios son determinantes del precio si la demanda aumenta
los salarios suben a largo plazo los salarios son determinantes del precio, pero a corto
plazo son determinados por el precio y, por tanto, se parecen a las rentas

Los beneficios a largo plazo en una empresa competitiva obtienen una tasa normal de
beneficios, los beneficios normales son un coste d producción y deben ser pagados para
retener el cápita, es decir un coste de producción necesario, por el contrario, a corto plazo
el rendimiento-beneficio puede ser considerado una cuasi-renta y por lo tanto es
determinado por el precio. “Con su concepto de cuasi-renta, Marshall arrojó luz en la
controversia sobre si los pagos a los factores eran determinantes del precio o determinados
por el precio. Todo depende del periodo de tiempo”. (Landreth & Colander, 2006, pág.
295)

Marshall plantea que suponiendo que hay una industria con rendimientos decrecientes,
un impuesto provoca un aumento del bienestar, el aumento del excedente de los
consumidores es mayor que el coste de la subvención.

La oferta por periodo de tiempo en el mercado se clasifica en: 1. Corto plazo, la oferta de
las empresas y la industria depende del principio de los rendimientos decrecientes ,
Marshall divide los costes de la empresa a corto plazo en costes fijos y costes variables,
esta distribución muestra que la empresa continua abierta a corto plazo aunque
experimente perdidas, mientras cubra sus costes variables totales de esta forma minimiza
las perdidas si continua abierta , por otro lado las perdidas en caso de continuar abierta
son menores a los costes totales fijos si el ingreso total fuera mayor de los costos variables
totales; y 2. Largo plazo, a medida que aumenta el tamaño de la empresa, las economías
internas a largo plazo los costes son decrecientes mientras que las deseconomías internas
son decrecientes. La oferta a largo plazo tiene pendiente negativa, es decir se ofrecen
cantidades mayores a precios más bajos.
DEFINCIENCIAS
Analisis económico, el problema del tiempo.

Una de las principales dificultades del análisis económico es que las causas tardan en
dejar sentir sus efectos. El analisis que presenta Marshall da las pautas para poder explicar
los fenómenos que se experimentan en la economía en corto plazo, de tal forma que
intentar explicar a través de este analisis consecuencias a futuro puede generar respuestas
o conclusiones obsoletas a largo plazo.

Existe otro punto dentro de toda la teoría del valor y distribución desarrollada por
Marshall que no toma en cuenta y es el dinero. La ausencia de este elemento podría
suponer que no prestaba ningún papel importante dentro de este analisis, pues se entendía
al dinero con su funcionalidad para evitar molestias del “trueque” en una sociedad con
una división del trabajo especializada y compleja a la vez. El ámbito de lo monetario no
vendría a ser una variable que condicione o altere las relaciones de los precios o la
distribución del ingreso.

Se considera al dinero entonces como una unidad de cuenta, una mercancía sin
particularidades pues su poder adquisitivo permanece constante y que su valor se llega a
determinar por el valor de la emisión del papel-moneda.

Otro aspecto clave dentro de esta escaza importancia que se le da al dinero dentro del
funcionamiento de la economía se deriva en que las variaciones de cantidad solo
afectarían los precios, pero no el proceso o la actividad económica.
Bibliografía
GUILLÉN, M. (1 de Abril de 2003). Hacia una revisión crítica del análisis neoclásico del
consumo. Revista de Economía Crítica(1), 95-111.

Landreth, H., & Colander, D. C. (2006). Historia del pensamiento económico. España: ProQuest
Ebook Central.

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