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Nos inclinamos por la definición del aborto como “la muerte inferida al
producto de la concepción antes del nacimiento”, en primer lugar porque
dicho concepto es acorde con el bien jurídico protegido a través de la figura
del aborto ( vida incipiente), ya que si lo que se protege es la vida del
nasciturus, no puede ser la expulsión o extracción del feto lo característico
del delito de aborto, sino que la muerte del feto. Al ponerse el énfasis en la
expulsión, se dé o no la muerte al feto, parece que más bien lo que se está
resguardando es el proceso de gestación y no la vida del nasciturus, pues su
destrucción dentro del vientre materno quedaría impune, vale decir, hace
ilusoria su protección.
En segundo lugar, delimita el campo de tutela del delito de aborto con el del
homicidio, pues al decir “antes del nacimiento”, quiere decir que se refiere a
la muerte inferida al producto de la concepción, que es una vida dependiente
y el delito de homicidio es contra una vida dependiente. Asimismo delimita la
esfera de protección del infanticidio, por la misma razón que en el caso del
homicidio, porque el sujeto pasivo en el infanticidio es el hijo o descendiente
desde el momento dela parto (nacido), hasta las cuarenta y ocho horas de
ocurrido el alumbramiento.
- Art. 343.
Este artículo castiga, con una pena menor a la del aborto malicioso,
sin violencia y con consentimiento de la mujer, al que “con violencia
ocasionare un aborto, aún cuando no haya tenido propósito de causarlo con
tal que el estado de embarazo de la mujer sea notorio o le constare al
hechor”.
Existe acuerdo respecto a que la expresión “aún cuando” debe ser
interpretada como siempre que, puesto que otro significado hace ininteligible
la figura
El tipo legal del Art.343 no difiere del Art. 242 Nº 1, ya que en el plano
objetivo, será necesario que se de muerte al feto para que el delito esté
perfeccionado y que el aborto sea producido con violencia por un extraño.
Pero la diferencia radica en el plano subjetivo.
Para algunos autores se trata de un delito de aborto preterintencional,
en que habría dolo en cuanto a la violencia que se ejerce sobre la mujer
embarazada y un aborto que se pudo prever como consecuencia de la acción
desplegada.
Según Enrique Cury se trata de una figura especial de cuasidelito de
aborto. Impugna la interpretación de Novoa. Sobre la base del esquema
básico de las figuras preterintencionales ( mezcla de dolo y culpa), lo que
reclamaría un tipo base querido y un resultado previsible no querido, sostiene
Cury que en la hipótesis del Art. 343 no puede hablarse de un tipo básico, ya
que en nuestra ley no existe el tipo de causar violencia. Es más, si se
identificara a la violencia con las lesiones, se llegaría al absurdo de que las
lesiones gravísimas, las simplemente graves y las mutilaciones llevarían
consigo una pena menor que la prevista para tales resultados en el capítulo
de las lesiones corporales, solamente porque se siguió un aborto como un
segundo resultado. Termina diciendo que ni siquiera es requerida la
intencionalidad respecto de la violencia y basta que el agente haya realizado
actos cuya consecuencia causal es dicha violencia, pudiendo o debiendo
preverla.
Etcheverry, piensa que el Art. 343 abarca casos que pueden ser de
aborto preterintencional y pueden no serlo. De hecho como este autor
concluye que el Nº 1 del Art. 342 castiga el aborto violento con dolo directo, si
bien no así los otros numerados en el mismo artículo, que también podrían
cometerse con dolo eventual, el aborto violento en que hay dolo eventual
estaría castigado por el Art. 343.
En ese caso la figura no sería preterintencional, ya que el dolo se
extiende al resultado. En cambio, si se trataría de aborto preterintencional en
el caso de que el dolo cubra las violencias y no el resultado, previsible pero
no previsto, respecto del cual el agente se hallaría en culpa con y sin
representación. Esta interpretación ha tenido muchas críticas por la doctrina
mayoritaria,. Entre ellas, la desproporción de las penas a que conduce: el
aborto con dolo eventual sin violencia tendría mayor pena que el aborto con
dolo eventual con violencia.
2º Autoaborto.
A esta materia se refiere el Art. 344 que dispone: “La mujer que
causare su aborto o consintiere que otra se lo cause, será castigada con
presidio menor en su grado máximo”
Hipótesis
- Aborto causado por la propia mujer embarazada
- Caso en que la mujer consiente en que otro le cause el
aborto.
- Aborto Honoris Causa.
a) Aborto causado por la propia mujer embarazada.
En relación a este punto, Politoff, Grisolía y Bustos, señalan que “en el
sistema chileno, el autoaborto es juzgado en forma más reprochable del que
causa un extraño, seguramente por atribuir a la mujer, además de la lesión al
bien jurídico (vida del feto), una infracción al deber personal frente a la
protección del hijo futuro”. Alfredo Etcheverry señala que “el aborto
provocado por la propia mujer embarazada es una figura calificada en razón
del sujeto activo”44
En definitiva, nos encontramos frente a una figura agravada en
relación al aborto causado por extraños, ya que la ley considera más grave el
hecho que la mujer ocasione su propio aborto, debido a que considera que la
madre tendría un especial deber de velar por la vida del feto, lo que no
estaría presente en los casos del aborto causado por terceros.
Esta primera hipótesis de autoaborto que señala el Art. 344 se refiere
al caso de la mujer que causa su propio aborto, por lo que no representa
mayor dificultad en el plano objetivo. Como en esta figura no se hace
referencia especial al aspecto subjetivo, a la “malicia”, autores como Politoff,
Grisolía y Bustos, opinan que en principio en el aspecto subjetivo esta
hipótesis se satisface con el mero dolo eventual. En esta misma línea Alfredo
Etcheverry señala que subjetivamente esta hipótesis puede realizarse con
dolo eventual o con dolo directo, pese a que la figura cuasidelictual no sería
punible, debido a que no existe una disposición específica que así lo
establezca y, además, porque el aborto no es un delito contra las personas.
b) Caso en que la mujer consiente en que otro le cause el
aborto.
Se refiere a la segunda hipótesis del Art. 344 y no basta el solo
consentimiento, se requiere además del comportamiento material del extraño,
sin cuyo inicio, el consentimiento de la mujer, sería irrelevante. El tercero es
sancionado según el Art. 342 Nº 3, vale decir, con pena inferior a la del
artículo 344, con la que es sancionada la mujer. En este caso la mujer sería
sancionada a título de coautora de la figura del 342 Nº3, de no existir el Art.
344, ya que se sostiene que su comportamiento sería solo de complicidad y
que, por lo tanto, se estaría elevando a la categoría de hecho principal un
comportamiento de complicidad.
En relación al consentimiento, es opinión mayoritaria que la mujer
tiene que haber exteriorizado su voluntad en forma activa. No basta el
consentimiento presunto o tácito o el no impedimento, tolerancia o
aquiescencia, vale decir, no bastan los requisitos del consentimiento de la
hipótesis del Art. 342.
Alfredo Etcheverry, señala que en el aborto causado por un tercero
con el consentimiento de la mujer, se requiere que éste sea prestado por ella
libre y validamente (en su sano juicio, teniendo edad suficiente y sin
coacciones), con conocimiento de la naturaleza y consecuencias del acto que
consiente.
Esta segunda hipótesis en el aspecto subjetivo, requiere de dolo
directo, puesto que necesita el consentimiento de la madre para el aborto
practicado por el extraño, por lo tanto, no cabe el dolo eventual.
- Aborto Honoris Causa.
Se encuentra contemplado en el Art. 344 inciso II “Si lo hiciere por
ocultar su deshonra, incurrirá en la pena de presidio menor en su grado
medio”.
Es una figura privilegiada en relación a los otros tipos de aborto
contenidos en el Código Penal, se trata de un aborto con un motivo
específico, cual es ocultar la deshonra.
Señalan Politoff, Grisolía y Bustos que la idea de “la idea de la honra
debe ser entendida en relación al concepto tradicional de las buenas
costumbres en materia sexual.
En un sentido diferente, Hirsch señala que el asunto del honor debe
ser abordado en relación con la propia dignidad del ser humano y la
posibilidad de atribuirle inmerecidamente un quebrantamiento de sus deberes
éticos. Argumenta que lo que puede suceder, es que una mujer que no ha
realizado nada deshonroso en el sentido de su dignidad humana, esté
expuesta a sufrir molestias de un medio que piense diferente, y ese
sentimiento de la mujer de eludir la sanción social lo que fundamentaría la
atenuación.
Este privilegio, es de carácter personal e incomunicable, es decir, solo
beneficia a la mujer que causa su propio aborto o consiente en que otro se lo
cause y, por lo tanto, no se extiende a los partícipes en el autoaborto, los que
responderán según lo establecido en el Art. 342 Nº 3.
- Aborto causado por un facultativo.
El Art. 345 sanciona al facultativo que abusando de su oficio, causare
un aborto o cooperare en él, con las penas señaladas en el Art. 342
aumentadas en un grado.
Según Quintano, la agravación se refiere a tercerías de tipo
profesional y, por lo tanto, se excluye el caso de la mujer profesional que
causa su propio aborto. Esto es muy claro en nuestra ley por vla referencia
que hace el Art. 342.
La idea de la expresión “facultativos”, no estuvo restringida, en
concepto de los comisionados, solamente a los médicos, se advierte con
claridad del acta de la sesión 159, en que se decidió excluir la hipótesis
especial contenida en el modelo español, relativa al droguista que vende un
abortivo sin receta. Se estimó que solo se justifica la incriminación cuando a
ciencia cierta ha cooperado al aborto, y en tal caso, caería bajo la previsión
de este artículo.
La doctrina nacional coincide en que la agravación se aplica a los
profesionales que han hecho estudios universitarios y ejercen el arte de
curar, de tal modo que su oficio los ponga en situación de causar un aborto o
cooperar en él.
En lo que respecta a esta figura agravada, puede ser referida a las
tres hipótesis del Art. 342, sin descartar el caso improbable, pero posible del
facultativo que emplea violencia para vencer la resistencia de la mujer.
IV. Sujetos en el delito de aborto.