Академический Документы
Профессиональный Документы
Культура Документы
Muchos padres se preguntan cuál es la edad adecuada para que sus hijos aprendan
a leer y escribir. Sin embargo, más allá de pensar en la edad adecuada,
actualmente, en nuestro medio existe cierta presión por parte de los padres para
que sus pequeños retoños estén más “adelantados” que sus compañeros e ingresen
a primero de primaria sabiendo leer y escribir, como si ello les garantizaría el éxito
académico. Sin embargo, el asunto no es tan simple, existen ciertas nociones
básicas con las que deben contar los niños para poder aprender el proceso de la
lectoescritura.
También suele suceder que en el afán de ayudar a sus hijos, los papás caen en el
error de sobre estimularlos, incluso desde la cuna, esperando que esto ayude a
desarrollar más rápidamente sus capacidades. Para ello recurren a juegos
didácticos en exageración, se empeñan en enseñarles a leer y escribir antes de los
cuatro años, todo con el fin de “potenciar su talento" y de mostrar que su hijo está
mucho más adelantado para su edad. Pero cuidado, porque la estimulación bien
llevada por supuesto que tiene frutos positivos pero la sobre estimulación puede,
por el contario, tener efectos contraproducentes que a la larga se traducen en
problemas de atención, falta de concentración, hiperactividad, etc.
Sin embargo, con relación a este tema, se debe tomar en cuenta también la cultura
y las exigencias que tiene la escuela, por ejemplo.
“Las habilidades y nociones básicas llevan a los niños a que alcancen un adecuado
desarrollo espacial, y así podrán ubicarse fácilmente cuando la maestra indique que
tienen que dibujar el sol arriba de las montañas, los animalitos en el corral que está
al lado de la casa y pintar el río que pasa por debajo del puente. La consolidación
de las nociones arriba, al lado, abajo, detrás, delante son necesarias adquirirlas
primeramente en el propio cuerpo para posteriormente recién poder ser
proyectadas hacia el mundo exterior, por ejemplo en una hoja de papel”, explica la
especialista.
La psicóloga asegura que entre algunos criterios generales, se puede decir que un
niño está preparado para aprender a leer y escribir cuando existe un equilibrio
maduracional entre factores orgánicos, constituidos por la estructura anátomo
funcional (sistema neurológico, sensorial, motor, etc.), los factores mentales (un
adecuado nivel de madurez) y la motivación, es decir el interés que despierta en el
niño aprender nuevas tareas.
Por otro lado, están las nociones básicas para llevar adelante este proceso.
Coordinación Visomotriz
Esquema Corporal
Lenguaje
Discriminación visual
Discriminación Auditiva
Pre cálculo
Pre escritura
“Ahora bien, cada niño tiene su propio ritmo de aprendizaje. Debemos respetarlo,
eso no significa bajar los brazos por explotar todas las potencialidades que tenga.
La Psicología ha demostrado que un niño con la ayuda de un adulto, puede lograr
cosas que por sí sólo quizás no las lograría o tardaría mucho más tiempo en
alcanzarlas; debemos estimularlo mentalmente priorizando ante todo un adecuado
desarrollo afectivo”, asevera Morales.
Recuerde que esta información sólo sirve de apoyo, cualquier duda consulte con un
experto.
ETAPAS DE LECTOESCRITURA
Todos conocemos la importancia de la interacción de los chicos con los materiales escritos
en el aprendizaje de la lectoescritura. En este proceso, el niño formula hipótesis, las pone a
prueba y las acepta y rechaza según los resultados que va obteniendo. Pero, además, es
preciso el acompañamiento y guía por parte del docente. Por ello, además de brindarles
diversas actividades, es indispensable recordar bien los pasos que siguen en su evolución,
para ayudarlos a avanzar, encontrando el momento y la manera adecuados para provocar
"conflictos" de conocimiento que los lleven a buscar nuevas respuestas por sí mismos.
Hipótesis pre-silábica:
Nivel 1:
Diferencia letras y números de otro tipo de dibujos.
Reproduce los rasgos imitando los trazos de manuscrita o imprenta.
ÁRBOL
Nivel 2:
Posteriormente, comienza a organizar las grafías una a continuación de la
otra.
Nivel 3:
El tamaño de las palabras es proporcional al tamaño del objeto.
HORMIGA
VACA
Nivel 4:
A- Hipótesis de cantidad: no se puede leer algo si no hay un mínimo de
cantidad de letras (por lo menos tres).
B- Hipótesis de variedad: las grafías son diferentes entre sí ("letras iguales
no sirven").
- Algunas letras mantienen el valor silábico- sonoro, mientras que otras no.
APRENDIZAJE DE LA LECTOESCRITURA
El lenguaje surge en el ser humano como medio de comunicación, pero luego se convierte
en un medio para adquirir conocimiento. El lenguaje posibilita la construcción del
pensamiento y su estructuración, de manera que dominarlo es fundamental para construir el
aprendizaje.
Cuando los pequeños llegan a la escuela los maestros que los recibimos debemos averiguar
los conocimientos que han ido adquiriendo sobre el lenguaje, sus conocimientos previos,
¿qué saben los niños y las niñas sobre lenguaje?
Los alumnos llegan a la escuela con un amplio bagaje de conocimientos sobre la lengua y
los hechos lingüísticos aunque no conozcan los significados convencionales de estos
conceptos. En su competencia verbal queda patente como se construye sucesivamente el
conocimiento sobre las palabras, las sílabas y las letras muchas veces sin que se produzca
una enseñanza explícita de estos aspectos y siempre vinculando al significado y al uso de
los niños hace en distintas situaciones comunicativas. Es a partir de estos conocimientos
que empezaremos a construir el aprendizaje y adquisición del proceso de la lectoescritura.
Pero antes averiguaremos en qué nivel o etapa se encuentra cada uno de nuestros alumnos.
En la evolución de la lectoescritura nos encontramos con una serie de etapas que debemos
conocer para saber dónde se encuentra cada escolar y así poder planificar basándonos en su
nivel inicial de conocimientos, planteando actividades que permite confrontar aquello que
saben con el nuevo contenido.
El lenguaje surge en el ser humano como medio de comunicación, pero luego se convierte
en un medio para adquirir conocimiento. El lenguaje posibilita la construcción del
pensamiento y su estructuración, de manera que dominarlo es fundamental para construir el
aprendizaje.
1ª) Etapa de escritura indiferenciada: los niños no distinguen las grafías de los dibujos.
(Harán el mismo garabato para dibujar algo que para escribirlo)
2ª) Etapa de escritura diferenciada: imitan las letras que ven, copiando de un modelo, pero
sin tener conciencia real de lo que escriben.
3ª) Etapa silábica: comienzan a establecer relaciones entre el sonido de las palabras y su
grafismo. Identifican la sílaba, pero suelen representarla con una sola letra (normalmente
vocales, que para ellos tienen mayor sonoridad)
5ª) Etapa alfabética: reconocen una correspondencia alfabética a cada sonido de la palabra,
tanto consonantes como vocales, aunque deberán aprender todavía la ortografía correcta.
Para poder conocer el momento en que se encuentra cada niño y poder adecuar los
instrumentos de trabajo de los maestros y maestros a las necesidades de su alumnado
aconsejamos pasar una prueba cada trimestre, que nos puede servir de evaluación inicial,
formativa y sumativa.
Es necesario no olvidar que la pauta que presentamos permite establecer el nivel de cada
niño el conocimiento del sistema alfabético y su relación con el oral.
Una vez que ha acabado de escribirlas, le pedimos que las lea guiándose con el dedo si es
necesario. A continuación recogeremos los resultados en una plantilla en la que estarán
reflejados los nombres de los niños en la columna vertical y las etapas de la adquisición del
proceso de la lectoescritura en la horizontal. Estas etapas se concretarán de la siguiente
manera en la plantilla:
Conocer el momento del proceso en el que estén nuestros alumnos nos ayudará a planificar
y preparar actividades adecuadas que sean motivadoras y les hagan avanzar en este proceso
de manera significativa y eficaz.