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Miami International Seminary

Doctrina del Pecado en el Pensamiento de Juan


Calvino

Un estudio de la doctrina del pecado según lo concibió el reformador


Juan Calvino.

Lester Luis Leyva Pupo

Máster en Estudios Teológicos

Las Tunas Cuba

2016
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

Contenido

Prefacio 3

Introducción 4

Lección I La vida y obra de Juan Calvino 8

Lección II La doctrina del pecado en el pensamiento de Agustín de


Hipona
34

Lección III La doctrina del pecado en Juan Calvino. Pecado Original I 51

Lección IV La doctrina del pecado en Juan Calvino. Pecado Original II 64

Lección V La doctrina del pecado en Juan Calvino. Definición, Tipos y


Causas
72

Lección VI La doctrina del pecado en Juan Calvino. Consecuencias 81

Lección VII La doctrina del pecado en Juan Calvino. Solución 92

Lección VIII La doctrina del pecado en Juan Calvino. Repercusión en


años posteriores
104

Bibliografía 117

Manual del Profesor 122

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Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

Prefacio

La caída del hombre, su consecuente estado pecaminoso y la depravación de su


naturaleza, constituye el hecho más triste para la creación perfecta de Dios. Cuando tuvo
lugar el pecado de Adán fue un día de luto espiritual para toda la raza humana. Sin
embargo al analizarlo como doctrina resulta muy interesante y llamativo. Y mirándolo
desde la óptica de Calvino es aún más atractivo. Por lo que escribir 100 páginas de este
tema no es un sacrificio, sino más bien un estudio grato, donde siempre se aprenden cosas
nuevas e interesantes, hasta después de leer libros modernos del mismo tema.

Es triste que por una mala interpretación del calvinismo o por orgullo en creencias
denominacionales, muchas personas rechacen los escritos de Calvino. Creo que su legado
escritural debe apreciarse y leerse sin reservas en este tiempo en todas las Iglesias e
instituciones cristianas. Y esa precisamente es la principal intención de este estudio: hacer
notar cuan útil puede ser el estudio del pensamiento de Calvino para este tiempo que no
ha tocado vivir como Iglesia de Jesucristo.

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Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

Introducción

Propósito del curso

Este libro aborda la temática de la doctrina del Pecado, pero no desarrollada


completamente sino, en el pensamiento de uno de los más grandes teólogos de nuestra
historia: Juan Calvino. Este reformador del siglo XVI trató varios temas doctrinales en sus
estudios y la doctrina del pecado fue uno de los más interesantes. Quisiera además que la
obra de Juan Calvino, sobre todo la Institución de la Religión Cristiana traspasara las
fronteras reformadas y calvinistas y pudiera leerse libremente y sin prejuicios en cualquier
contexto cristiano.

Resumen del contenido del curso

Este curso está dividido en ocho lecciones. La lección I trata la persona de Juan Calvino,
su biografía, su historia, su nacimiento, familia, formación, obras fundamentales,
doctrinas fundamentales, etc. La Lección II se titula: La doctrina del pecado en el
pensamiento de Agustín de Hipona. Como Calvino tomó mucho de Agustín, es necesario
dedicar parte de este estudio a lo que escribió acerca de este tema este escritor. De la
lección III a la VII se trata el pecado según lo concibió en su mente y lo plasmó en sus
escritos, nuestro reformador Juan Calvino. Aquí estaremos tocando los temas del pecado
original, la condenación del hombre por el pecado, las causas, los tipos de pecados en que
él los clasificó, la solución para el pecado, etc. Y la Lección VIII trata la repercusión de
esta doctrina en años posteriores.

Materiales para el curso

El manual del estudiante: La Doctrina del Pecado en el Pensamiento de Juan Calvino.


También debe utilizarse algún Comentario a la carta a los Romanos, Libro de Historia del
Cristianismo, Libro de Historia de la Reforma, Libro de La Institución de la religión
Cristiana de Juan Calvino, Libro de Historia del Pensamiento Cristiano, entre otros.

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Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

Objetivos del curso

Existen por lo menos cinco objetivos generales de los cursos de MINTS respecto a los
estudiantes: participación del alumno en un grupo de aprendizaje; comprensión del
material didáctico del curso; familiarización bibliografía en la interpretación bíblica;
desarrollo de habilidades y herramientas para la interpretación bíblica; retención de la
enseñanza y practica en un ministerio real. Estos objetivos serán evaluados.

Metodología del curso

El maestro explicará los métodos de enseñanza que se usarán en el curso en la orientación.

Estructura del curso

15 horas de clases, 15 horas de asignaciones y preparación para el examen, 30 horas para


un proyecto especial y 20 horas de lectura fuera de la clase.

Requisitos del curso

1. Asistencia a 15 horas de clases.

2. Cumplimiento de asignaciones estipuladas en el manual del estudiante

3. Familiarización con las lecturas relacionadas con el tema.

4. Participación en un proyecto especial.

5. Ejecución del examen final.

Evaluación del curso

Es importante evaluar cada aspecto del curso. A continuación se describirán las


sugerencias en el sistema de evaluación.

1. Estimulación al alumno, Por su participación: por cada hora que el alumno asista
se le dará un punto (15 puntos).

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Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

2. Asignaciones: Por cada asignación realizada en las diferentes lecciones del curso,
se le puede dar al estudiante dos puntos por tareas cumplidas para la clase (15 puntos).

3. Lecturas obligatorias: Los alumnos del programa de licenciatura leerán 300


páginas, y deberán entregar un informe de lectura de 3 páginas. Los alumnos del programa
de maestría leerán 600 páginas, y deben entregar un informe de lectura de 5 páginas (20
puntos).

4. Proyecto especial del alumno: El estudiante tendrá que preparar un ensayo acerca
de un tema que guarde relación con la temática tratada. (30 puntos). Tendrá una extensión
de 2500 palabras para los estudiantes de licenciatura y 3750 palabras para los estudiantes
de maestría. Dentro de estos temas se pueden incluir los siguientes:

a. La doctrina del pecado en el pensamiento de Martin Lutero y Zuinglio. Bajo este


tema puede analizar las diferencias y las similitudes que presentaban. También otras
doctrinas que afectaban su posición doctrinal en cuanto al pecado y repercusión
posterior.

b. Doctrina del pecado en el medioevo. Bajo este tema puede evaluar históricamente
esta doctrina dentro de este marco, analizar los principales expositores, evaluar
también como recibieron más tarde los reformadores la doctrina del pecado
planteada en la Edad Media.

c. Doctrina del pecado en el pensamiento de Tomas de Aquino. Aquí puede explicar


lo que planteaba este teólogo en su libro la Suma Teología en cuanto al pecado y
compararla con lo que dice Calvino más tarde.

d. Doctrina del pecado en sectas y religiones modernas. Analizando aquí sus puntos
de vista y cómo afecta a sus demás creencias heréticas. Puede tocar el catolicismo,
el adventismo, los testigos de Jehová, el mormonismo, el islamismo, el hinduismo,
nueva era, entre otros.

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Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

5. Examen final: El alumno demostrará su conocimiento de los conceptos y


contenidos de los materiales del curso (20 puntos). El facilitador escogerá 10 preguntas
de las preguntas que están al final de cada lección.

Nombre Nivel Asistencia Tareas Lecturas Proyecto Examen Nota


de (15%) (15%) (20%) (30%) (20%) final
estudio

Beneficios del curso

El estudiante tendrá la oportunidad de adentrarse en el estudio de una interesante doctrina,


como lo es el pecado. Podrá apreciar diferentes puntos de vista de diferentes teólogos
desde la antigüedad hasta nuestros días. Tendrá la oportunidad de viajar en la historia
notando la evolución de esta doctrina. Podrá analizar el contenido teológico que encierra
esta maravillosa doctrina en la historia de la Iglesia. Tendrá en sus manos todo lo referente
a la doctrina del pecado expuesta por el más grande teólogo de la reforma protestante.

Observaciones finales

El curso puede ser usado para consultas de carácter teológico e histórico, predicaciones;
estudios bíblicos; devocionales y para cualquiera forma de propagación del mensaje
bíblico.

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Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

Lección I
Vida y obra de Juan Calvino

Introducción

La vida y la obra de Juan Calvino constituyen, sin duda alguna, una fuente
de inspiración para cualquier persona. Con cada cosa que hizo o escribió nos
dejó un ejemplo. Muchos por ataduras doctrinales y conceptuales no simpatizan
con la figura de Calvino. Otros han intentado manchar su imagen con hechos
malinterpretados de su vida. Pero si nos acercamos sinceramente a su obra
podremos descubrir grandes y profundas enseñanzas.

Antes de adentrarnos en el tema específico que se aborda en este estudio,


y antes de descifrar todo lo que Juan Calvino a escrito sobre la doctrina del
pecado, es importante conocer la vida y obra de este teólogo prominente de la
Reforma protestante. En este capítulo se resumen varios aspectos importantes
de la vida de este reformador. Se analiza una primera etapa que va desde su
nacimiento hasta la edad de 27 años, cuando escribe su obra más difundida: La
Institución de la Religión Cristiana. Se resume su estancia en Ginebra, donde se
desempeña completamente como reformador. También se incluyen algunas de
las cualidades que lo hacían un hombre digno de imitar. Y por último, un pequeño
acercamiento a sus obras más importantes.

Debido al gran número de historiadores y biógrafos que se han encargado


de escribir sobre su vida, como Emile Doumergue, Williston Walker, Tholuck,
Guizot, Toplady, A. Krauss, Harold Dekker, T.H.L. Parker, Leroy Nixon, Jules
Bonnet, Rilliet, Kampschulte, Irwin, Halsema Gaspar Olevian, entre muchos
otros. Y la cantidad tan elevada de volúmenes que se han dedicado a él como

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Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

persona y a su obra. Por otro lado, las pocas páginas que se pueden dedicar en
este estudio para este fin, se hace imposible abarcar todos los detalles de su
peregrinar. Por lo que solo se presenta un pequeño resumen para ubicarnos y
poder entender mejor el personaje que se trata.

I. Desde su nacimiento hasta sus 27 años

En este primer punto se abordan diferentes temas relacionados con los


primeros años de Calvino. Primero, brevemente se bosqueja el contexto cultural,
social, político y religioso en tiempos de Calvino. Luego, su nacimiento, familia y
preparación intelectual hasta el año 1536. Y también como dio sus primeros
pasos en el protestantismo.

A. Contexto Histórico y Cultural en la época de su nacimiento

Es importante mencionar algunos detalles de los acontecimientos de la


época de transición en que le toca nacer a Juan Calvino. Por ejemplo, se habían
puesto en práctica muchos descubrimientos científico – técnicos de gran
importancia para la humanidad. Dentro de estos podemos mencionar el
astrolabio para medir las distancias guiándose por los astros, la carabela un
nuevo tipo de embarcación más rápida y segura que las fabricadas hasta ese
entonces, la brújula para orientarse en alta mar con su aguja imantada que
siempre apunta al norte, aparecieron también los mapas ofreciendo mayor
información a los marinos. Estos adelantos le permitieron desarrollar a los
europeos largos viajes por mar, llegando a realizar el descubrimiento de América
con Cristóbal Colón en 1492. También se desarrolló la pólvora y con ella el
poderío bélico. Gutenberg descubrió la Imprenta en Alemania y fue introducida
en Inglaterra en 1476 por William Caxton, trayendo al mundo un nuevo despertar
cultural. Todos estos acontecimientos y otros no mencionados en el mundo de
las artes y la ciencia, ponen punto final a la edad medieval y dan comienzo a la
era moderna.

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Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

Desde el punto de vista político habían ocurrido grandes transformaciones.


Había caído el Imperio Bizantino, la ciudad de Constantinopla había sido tomada
por los turcos en el año 1453 por Mahoma II. Las ciudades europeas del
occidente de Europa, como Venecia, Florencia, Génova perdían paulatinamente
su poder político. Y las naciones del oriente de Europa, como Francia, Inglaterra
y España, se habían convertido en grandes potencias económicas y políticas.

Pero además en el mundo cristiano de la época se llevaban a cabo


diferentes ataques contra el poder y los abusos de la Iglesia Católica. Por solo
mencionar algunos de los más destacados, citaremos a Wycliffe en Inglaterra,
Juan Hus, que fue quemado vivo como hereje y tiradas sus cenizas al Rin y
Jerónimo Savonarola un eminente predicador en Florencia que fue ahorcado y
quemado en 1498. En Francia el protestantismo era predicado, por Jaime
Lefèvre, este anciano publicó en latín un Comentario a las Epístolas de Pablo en
1512.

Y para tener una idea todavía más clara de la problemática imperante en


Europa en cuanto a la situación de la Iglesia en la época en que Calvino era
apenas un adolecente, mencionaremos dos acontecimientos ocurridos en los
primeros años del siglo XVI. El primero se trata de las 95 tesis clavadas en la
puerta de la Iglesia del Castillo de Wittenberg por Martin Lutero en el año 1517.
El segundo acontecimiento es la publicación del Nuevo Testamento traducida al
inglés por William Tyndale.

B. Nacimiento y primeros estudios

Gerardo Calvino, después de mudarse a Noyon, provincia francesa de


Picardia, fue notario apostólico, procurador fiscal del condado, escribano del
tribunal eclesiástico, abogado de la Iglesia y secretario del obispo. Era
consejero del clero y de la nobleza. Al formar parte de la burguesía se casó en
el año 1497 con Jeanne le Franc, hija de un burgués de la ciudad. En el

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Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

seno de esta familia burguesa y de posición acomodada, nace Juan Calvino el


10 de julio de 1509, en la misma ciudad de Noyon en Francia.1 Fue el segundo
de dos hermanos varones. Y cuando apenas tenía tres años murió su madre por
la peste.

Con solo doce años, a través de la influencia de su padre, comenzó a oficiar


como capellán. Realizó sus primeros estudios con la familia Montmor, una de las
más influyentes y aristocráticas de la época. En 1523 entró en el Colegio de la
Marché en París, bajo la influencia del fundador de la pedagogía moderna
Mathurin Cordier, que además tenía profundas convicciones evangélicas. De
este centro de estudios pasó al Colegio Montaigu. En 1528 fue a la universidad
de Orleans, donde estudió leyes y conoció a uno de sus amigos de toda la vida,
François Daniel. En 1531 a la muerte de su padre regresó a Paris donde continuó
con sus estudios de literatura. En el Colegio de Fortet estudió hebreo y griego.

C. Sus inicios en el protestantismo

Podemos formularnos una pregunta interesante: ¿De dónde recibió Calvino


sus profundas ideas de reformador ardiente? Halsema responde a esta pregunta
comentando:

Calvino, venía conociéndolas… por los escritos de Lefévre y más


tarde de Lutero y Zuinglio. Las había escuchado también de boca de
su primo Olivetan,… y también de su profesor de griego, Wolmar,…
Finalmente las había escuchado con amargura de corazón de su hermano
Carlos,… Pero sobre todo Calvino había encortado personalmente el
fundamento de estas ideas, cuando estudió hebreo y griego y pudo leer
la Biblia en sus lenguas vernáculas. Recientemente había visto las ideas
en acción con el fuego de los martirios, y en casa del piadoso posadero

1
Irwin, G. H. Juan Calvino su Vida y su Obra, Pág. 10.

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Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

de la Forge, cuyo hogar era refugio secreto para todos los creyentes
de cualquiera procedencia.2

A medida que pasaba el tiempo, Calvino maduraba en sus convicciones


evangélicas. Un ejemplo lo tenemos a partir de lo acontecido el 19 de noviembre
de 1533. Ese día, su amigo Nicolás Cop, rector de la Universidad de París,
presentó un discurso en la Iglesia de los Mathurinos escrito por Calvino. Este
sermón contenía tantas ideas protestantes como las bienaventuranzas y la
salvación por gracia, que Cop y Calvino tuvieron que huir bajo la persecución del
Parlamento.

Nos cuenta Irwin que a finales del año 1534, Calvino fue a Poitiers. Allí se
encontró con varios protestantes y tuvo con ellos reuniones en una caverna o
gruta. Junto a ellos tuvo la oportunidad de celebrar la Cena del Señor.3

Y en el año 1536 editó su libro la Institución de la Religión Cristiana, que fue


impreso por Platter. Escrito, según algunos críticos e historiadores como Jules
Bonnet, Rilliet, Kampschulte, Doumergue y Williston Walker, originalmente en
latín y traducida más tarde al francés y al inglés por Thomas Norton. Este libro
tenía, según el mismo Calvino, un propósito bien definido. Los protestantes
estaban siendo calumniados, perseguidos y hasta quemados vivos por su fe. A
través de la Institución Calvino quería responder a las acusaciones contra sus
hermanos y defenderlos en medio de la persecución del rey Francés Francisco I.
En la dedicatoria del libro Calvino le escribe al Rey el propósito por el cual él
escribe este libro.

2
Van Halsema, Thea. Así Fue Calvino, Pág. 45.
3
Irwin, óp. cit., Pág. 17.

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Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

II. Calvino en Ginebra

Siendo todavía muy joven, tal vez muy letrado producto a sus estudios de
la Biblia y de los idiomas originales, pero con poca experiencia en el campo de la
predicación, llega a Ginebra donde se desempeña como pastor, conferencista
bíblico y maestro. Y todo este trabajo desde una perspectiva bien reformista. Se
enfrenta a un mundo lleno de oposición, de tradiciones, de pecado y de
incomprensión. Por eso es tan difícil el papel de Reformador. Pero es en esta
ciudad y en este contexto que se desarrolla completamente como un luchador
incansable por cambiar el mundo que le rodea.

En esta lección se describen algunos pasos en este proceso que enfrenta


Calvino en Ginebra. Se puede ver parte del contexto en el que irrumpe Calvino a
su llegada a aquella ciudad de 13 mil habitantes. Algunos elementos de lo que
está sucediendo en el mundo secular y religioso de la ciudad. Algunas cosas que
pone en práctica a su llegada para organizar la Iglesia y disminuir la actitud
depravada e inmoral del pueblo. El destierro que tiene que enfrentar por 3 años.
Y finalmente su regreso nuevamente a Ginebra para seguir la tarea hasta los días
de su muerte.

A. Situación imperante en Ginebra

Existía una gran depravación en la ciudad. La inmoralidad era algo cotidiano


dentro de las personas del pueblo. Los obispos no tenían la suficiente moralidad
y honestidad para ocupar sus cargos. Y también el clero estaba corrompido.

El protestantismo en Ginebra había ganado mucho terreno. Lambert de


Avignon, fue el primero en predicar las doctrinas protestantes en la ciudad en el
año 1522. Hombres como Baudichon, Perrin, Viret, Froment, Canus y Farel
luchaban incansablemente contra las tradiciones de los católicos romanos,
alrededor del año 1534. El Consejo de Ginebra se inclinaba al protestantismo.

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Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

Muchos sacerdotes, frailes y monjas abandonaron la Iglesia Católica. Algunos de


ellos contrajeron matrimonio y tuvieran sus legítimos maridos y mujeres. El 8 de
agosto de 1535, en la catedral se san Pedro y en diferentes Iglesias como la de
San Gervasio, la de los dominicos y la de los agustinos, el pueblo derribó las
imágenes. La misa dirigida por los sacerdotes fue abolida por el Consejo. Hasta
que el 21 de mayo de 1536 el pueblo a través de un Concilio general, adoptó
oficialmente la Reforma.4

B. Llegada a Ginebra

Rumbo a Estrasburgo, en julio de 1536, Calvino llega a Ginebra. Allí fue


invitado por Farel a organizar aquella Iglesia que recientemente se iniciaba en la
doctrina protestante. Y a pesar de que primeramente se resistió, terminó
aceptando el desafío por la insistencia de Farel.

Desempeñó una labor eclesiástica, moral y educacional muy profunda en aquella


ciudad. Comenzó predicando y enseñando la Palabra de Dios en la catedral de
San Pedro. Emprendió la organización eclesial a través de los escritos titulados:
Artículos, el Catecismo y la Confesión de fe. Trabajó en la vida moral y social de
los habitantes de la ciudad buscando eliminar la depravación y los vicios
imperantes y, por supuesto, estas reformas no tardaron en encontrar oposición.
Hizo énfasis en la celebración de la Santa Cena y la disciplina eclesiástica.
Realizó un arduo trabajo de consejería y visitación pastoral. Estableció una
liturgia para el culto público donde incluía la música, la confesión de pecados, las
oraciones improvisadas y prescritas y el canto o recitación del Decálogo y del
Credo Apostólico.

4
Ibíd. Pág. 30.

14
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

C. Destierro en Estrasburgo

En 1538 el consejo dictó dos leyes, con relación a la Santa Cena, que iban
en contra de las reformas de Calvino. La primera fue que no se prohibiera a nadie
la Comunión. Y la segunda decía que esta Santa Cena debía de ser administrada
igual a como la había adoptado el Consejo de Berna. Estas medidas iban en
contra de la disciplina eclesiástica y de la libertad espiritual. Para Calvino no era
necesario imponer leyes al respecto, solo era preciso, para administrar la Cena,
que no se violaran principios fundamentales. Calvino se rehusó a aceptar la
decisión del Consejo, alegando que no se debían imponer cuestiones que no
traían beneficio alguno, y que Dios dejó a la libertad del hombre para su mayor
edificación. Además, tanto Calvino como Farel, sostenían que el Consejo de una
ciudad no debía intervenir, ni tomar decisiones en cuanto a los asuntos internos
de la Iglesia. Este desacuerdo trajo como consecuencia que fue condenado al
destierro. El 23 de abril de 1538, junto con Farel, fue obligado a salir de la ciudad.

Pocos días después fue invitado por Martín Bucero a oficiar como pastor en
Estrasburgo a una pequeña colonia francesa de protestantes refugiados, que
había empezado a reunirse por el año 1524. En septiembre de 1538 comenzó
a predicar allí. Permaneció en aquella ciudad hasta el año 1541. En aquella
pequeña ciudad Calvino tuvo una vida en familia breve. Se casó con Idelette de
Bure, natural de Lieja y viuda de Juan Stordeur. Tuvieron un hijo que no
sobrevivió muchos días y la madre también murió en 1549.

D. Regreso a Ginebra

El 1ro de mayo de 1541, el Consejo de Ginebra revocó la sentencia de


destierro dictada en 1538 contra Calvino. En varias ocasiones fue invitado a
regresar. Y después de un tiempo de reflexión consigo mismo y con sus amigos,
resolvió que era un llamado de Dios volver a Ginebra. Por lo que el 13 de

15
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

septiembre de 1541 regresó a la ciudad donde trabajaría como reformador hasta


los días de su muerte.

En todo el tiempo que este gran reformador estuvo en Ginebra, esta ciudad
recibió grandes cambios y reformas en diferentes áreas. Calvino influenció a los
Consejeros para que promulgaran leyes de sanidad y seguridad pública. Una
de las obras más sobresalientes por parte del liderazgo de Calvino entre los
ginebrinos, fue la edificación de una Universidad que digirió Teodoro Beza desde
1558. Halsema dice al respecto de la inauguración de esta Academia:

Con admiración para el resto de Europa la escuela fue un éxito desde


el principio. Pronto hubo novecientos jóvenes estudiantes: lo que era
formidable para aquellos tiempos. Vinieron de toda Europa; muchos de
ellos de Francia. Después de terminar una especie de bachillerato algunos
se quedaban para estudiar Teología, Medicina y Leyes. Los estudiantes
salían de la Academia perfectamente instruidos. "Los muchachos de la
Academia de Ginebra pueden hablar como doctores de la Sorbona",
tal era su reputación. Pero más que eruditos, eran eruditos cristianos,
graduados de la primera Universidad Protestante del mundo. 5

Aunque tuvo mucho éxito en la reforma de aquella ciudad e iglesia de


Ginebra, Calvino también recibió muchas calumnias a lo largo de toda su carrera
en Ginebra. Se esparcieron falsos rumores de que era un hombre rico, cuando
vivía humildemente en una estrecha calle de la ciudad. También uno de sus
enemigos más reacios, llamado Sebastián Castellio, por venganza publicó un
libro donde denunciaba el proceso de muerte de Miguel Servet. Se divulgó mucho
que Servet había sido quemado por Juan Calvino. Pero la historia real dice que
Servet fue sentenciado a la hoguera primeramente por la Iglesia Católica en
Roma. De esta prisión logró escapar antes de que se ejecutara la sentencia
refugiándose por varios años en Ginebra. Luego fue tenido como una amenaza

5
Van Halsema, Thea óp. cit. Pág. 241.

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Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

para la integridad de la Iglesia Reformada por las doctrinas que difundía con sus
escritos. Sostenía la doctrina de que Jesús no era eterno y el Espíritu Santo era
solo el espíritu de Dios obrando en el mundo. De manera que para él no existía
tal concepto de trinidad. La trinidad para él era decir que Dios era un monstruo
de tres cabezas. Y varios Consejos de ciudades cercanas a la de Ginebra, como
el de Berna aconsejaron al pequeño Consejo de Ginebra que fuera quemado.
Calvino tenía poca influencia en este consejo pero pidió que fuera muerto por
decapitación y no quemado, a fin de que tuviera una muerte más misericordiosa,
pero no le aceptaron la petición. Halsema narra con muchos detalles esta historia,
de la cual presentamos un pequeño fragmento:

Con su libro atado a su mano, y su cuerpo encadenado a la


estaca, Servet murió… Calvino fue la única persona que luchó contra
semejante muerte. La decisión de matar a Servet no fue de Calvino;…
fue el veredicto del Pequeño Consejo de Ginebra… Calvino… pidió a los
Consejeros su arresto; fue quien redactó los cargos contra él; entro en
debate con él ante el Pequeño Consejo para probar que sus herejías
amenazaban la Iglesia de Cristo, y… lo aprobó, si bien no quería que
fuese por fuego. Calvino lo llamó “el hereje que se condenó a sí mismo".
Incluso escribiría un pequeño libro defendiendo la sentencia de muerte
contra él. 6

Hasta los últimos días de su vida, a pesar de su visible problema de salud,


el gran predicador de la Reforma estuvo activo en su labor. Subía con
determinación y gozo al púlpito de la Iglesia de San Pedro. Continuó sus estudios
bíblicos en el auditorio al lado de la iglesia. Iba como de costumbre a sus aulas
de la Academia. Enviaba misioneros, enviaba sus consejos a las iglesias, escribía
cartas con diferentes fines y nuevos libros y comentarios salían de la imprenta.
Hasta que la tuberculosis avanzada mal diagnosticada cuatro años atrás debido

6
Ibíd. Pág. 231.

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Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

a los pocos avances de la época fue restándole vitalidad a su cuerpo hasta


llevarlo a la tumba.

En el cementerio Plain Palais ubicado en esta ciudad está su lápida con sus
iniciales, aunque otros sostienen que se desconoce el lugar exacto de la tumba,
debido a su propio mandato de enterrarle con sencillez. Calvino murió el 27 de
mayo de 1564. Con solo cincuenta y cuatro años de edad, pero dejando un
profundo legado de conocimiento, enseñanza y vida dedicada a la causa de
Cristo.

III. Cualidades de Calvino

Al estudiar de cerca la vida de Calvino, nos damos cuenta de que tuvo


numerosos amigos a lo largo de toda su vida con los que mantenía
correspondencia. Además la gente le seguía en su liderazgo. Toda su vida fue
agitada porque constantemente las personas demandaban de su esfuerzo. Y hoy
en día, después de más de cuatro siglos de su muerte física, todavía tiene un
pueblo que lo admira. Esto solo lo puede lograr una persona con cualidades
positivas sobresalientes, y sin duda Calvino las tenía.

A. Comentarista

Este hombre, considerado el teólogo más prominente de la reforma


protestante en la Europa del siglo XVI, fue un excelente comentarista. Escribió
comentarios a varios libros del Antiguo y Nuevo Testamento y en ellos supo
darles un correcto sentido gramatical, histórico, profético y poético. Esto lo
podemos notar en la excelencia de cada una de sus obras y porque varios
eruditos y estudiosos dan crédito de su erudición y destreza en este campo.

Tholuck, hace un análisis del Comentario de Calvino al Nuevo Testamento


donde admira sus cualidades excepcionales como comentarista. Destaca su

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Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

estilo como sencillo y al mismo tiempo elegante. Dice que manifiesta libertad
dogmática pero mucho tacto para tratar asuntos diversos. Deja notar su erudición
pero también demuestra un carácter cristiano profundo. También manifiesta que
usa bien la dicción y la selección de palabras. Y concluye que una de las mejores
cualidades de Calvino como comentador es el empeño que pone en no caer en
digresiones.

Calvino sabe mantener en sus comentarios un equilibrio entre la


profundidad de la interpretación y la forma clara de comunicar el pensamiento.
Puede usar un lenguaje sencillo a la hora de explicar la verdad bíblica y al mismo
tiempo no ser superficial en el significado y el sentido del texto.

El Profesor de Teología Histórica Guillermo Childs Robinson, en la


Introducción al Comentario de I y II de Timoteo y Filemón de Juan Calvino nos
hace un comentario interesante diciendo:

Desde su época de estudiante hasta el fin de su vida, Juan Calvino


fue un hombre de letras. Los cincuenta volúmenes en cuarto de sus obras
lo señalan como "pronto y sincero" en esta obra del Señor. En sus
comentarios, Calvino analiza los diferentes sentidos de la Escritura y
pone de manifiesto su sentido histórico-gramatical y su aplicación
religiosa. La vigencia de esta obra se hace evidente por la acogida que se
ha dado a esta nueva edición. 7

B. Predicador

En la predicación detrás del púlpito fue donde más Calvino se destacó y


sirvió a Dios. En nuestro tiempo al oír hablar de Calvino, pensamos rápidamente
en un teólogo, en una persona escribiendo detrás de un escritorio varias horas al
día. Raras veces lo asociamos con un predicador ardiente de la Palabra de Dios

7
Calvino, Juan. El Comentario de I y II a Timoteo. Introducción por Guillermo Childs Robinson.

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Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

en un gran auditorio. Sin embargo, para muchos historiadores de su persona, se


destacó más como predicador que como cualquier otra cosa y consideran que a
través de sus sermones Calvino ofrece la mayor expresión de su pensamiento.
Además, la intención de Calvino fue dejar su mayor contribución a través de sus
sermones y como predicador.

En sus sermones abarcó varios libros completos de la Biblia. Usaba como


método fundamental predicar de manera consecutiva a lo largo de varios libros
de las Escrituras. Se han descubierto de él 200 sermones sobre Deuteronomio,
159 sobre Job, 343 sobre Isaías, 43 sobre Amos, 189 sobre Hechos y 48 sobre
Tito.

Los sermones de Calvino, predicados originalmente en francés, gozaron de


una buena acogida por parte de su auditorio más cercano. Pero también tuvieron
una amplia distribución en su país y en gran parte de Europa. Las predicaciones
de Calvino eran taquigrafiadas por Denir Raguenier, luego se imprimían y se
distribuían ampliamente. También llegaron a traducirse a otros idiomas,
mayormente al inglés y al alemán, teniendo también una extraordinaria demanda.
Sus sermones llegaron a ser muy conocidos en todos los países donde llegó la
Reforma. Llegaron incluso a leerse desde los púlpitos de muchas iglesias. Y a
través de ellos se difundió rápidamente el calvinismo en Inglaterra. Esto nos
indica la calidad de Calvino como predicador y nos muestra que sus mensajes
contenían una palabra divina y contextualizada.

Emile Doumergue dijo el 2 de julio de 1909 en una celebración por los 400
años del nacimiento de Calvino: "Este es el que a mi parecer, es el verdadero
y auténtico Calvino, el que arroja luz sobre todos los demás: Calvino el predicador
de Ginebra, moldeando con su palabra a los reformados del siglo XVI".8

8
Calvino, Juan. Sermones Sobre Job. En la Introducción por Harold Dekker.

20
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

Algo muy importante en la predicación de Calvino era que daba lugar al


Espíritu Santo. Él sostenía que la predicación era completamente eficaz
únicamente cuando el predicador y los oyentes eran usados por el Espíritu
Santo. También el sermón depende de la Palabra escrita y se convierte en un
medio de gracia cuando opera el Espíritu Santo. Por tanto para él cada predicador
debía dejarse usar por el Espíritu. Se quejaba contra aquellos predicadores que
escribían retóricamente sus sermones palabra por palabra y luego no hacían otra
cosa que leer desde el púlpito. Según él, el mensaje no debía ser mecánico,
recitado o leído, sino proclamado como la Palabra viviente de Dios, porque era
una manifestación doctrinal. Se dice que Calvino subía al púlpito solo con las
Escrituras, no llevaba notas ni manuscritos. El bosquejo y la estructura de sus
sermones las extraía del texto. Su preparación consistía en leer comentarios de
otros autores, hacer su propia exégesis basándose en sus conocimientos y luego
pensar cómo llevar una aplicación de aquel pasaje a su auditorio. No estaba de
acuerdo tampoco con la predicación sin preparación, para él esto era arrogancia.

También Calvino como buen predicador, se preocupaba en que su auditorio


lo entendiera. Muchos otros predicadores se preocupan por su elocuencia y
erudición, pero para Calvino era importante que todos lo entendieran. Para esto
presentaba sermones de corta duración, se cree que no sobrepasaban los
cuarenta minutos. No usaba sermones con excesiva complejidad. Además eran
más expositivos que temáticos. También, estaban basados en el contexto y en
las necesidades espirituales de las personas que escuchaban. Se cabe que
Calvino tenía una erudición elevada, y podía presentar a la hora de predicar en
cualquier texto bíblico un tratado teológico y dogmático, sin embargo, prefería
sacrificar la retórica, la elocuencia y el estilo brillante, por presentar un mensaje
sencillo, sin una introducción rimbombante y sin palabras que apelaran al
diccionario. Conociendo las artes del sermón escolástico y pudiendo ser muy
refinado en el arte de la oratoria desde el púlpito, prefería usar el estilo sencillo
de la homilía. Y esto no puede ser otra cosa que deseo de que todas las personas

21
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

lo entendieran y aprendieran verdades simples del evangelio con las cuales


pudieran edificar sus vidas.

C. Su Carácter

En el carácter de Calvino había muchas cosas que lo identificaban como un


hombre de Dios. Una de estas cualidades era su profundo interés por la unidad
de todos los reformadores, aunque existieran diferencias doctrinales que los
dividían. Por ejemplo, en cuanto a la Santa Cena, Calvino, Lutero y Zuinglio,
tenían opiniones diferentes. El punto de vista calvinista estaba en el medio entre
el luterano y el zwingliano, lo que le dio esperanza a Calvino para lograr el
entendimiento en cuanto a las diferencias de opinión. Y aunque este
entendimiento nunca se concretó, Calvino siempre trató a los demás
reformadores como hermanos en Cristo.

Calvino era además, un hombre muy honrado, sencillo y humilde incluso en


la grandeza. Exhibió estas cualidades viviendo una vida de pobreza en una casa
pequeña sin criados, ni lujos y con un mínimo salario a pesar de ser tan famoso
y reconocido en todos sus alrededores. El propio cardenal Sadolet, a quien
Calvino le escribió la respuesta a aquella carta en la que pretendía con falacia
hacer volver a los ginebrinos a la Iglesia Católica, fue a visitarlo un día de
incógnito y esperando encontrar una casa grande, llena de sirvientes y de lujo,
se asombró cuando solo vio una casa pequeña con pocas personas y el mismo
Calvino abrió la puerta.

Fue también muy fiel a Cristo y al ministerio que Dios le había


encomendado. Esto lo demostró trabajando incansablemente para Él. Trabajaba
cuando estaba sano pero también en medio de sus frecuentes enfermedades.
También en medio del dolor y el sufrimiento por la pérdida de sus hijos y más
tarde de su esposa, seguía trabajando y predicando. Y sin importar la oposición,
los reveses y las calumnias, continuaba en su campo de batalla.

22
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

Tenía un buen sentido del humor, hacía bromas con sus amigos. No exhibía
las faltas de los demás. No pasaba por alto el pecado voluntario. Estas y muchas
otras cualidades las podemos encontrar en la persona de Juan Calvino, el más
eminente teólogo de la Reforma Protestante del siglo XVI.

IV. Obras escritas por Calvino

Juan Calvino fue un predicador excepcional, se ocupó de la consejería,


realizó un arduo trabajo pastoral, atender la correspondencia le ocupaba
bastante tiempo, además tenía que encargarse de muchas ocupaciones cívicas
en la ciudad y todo esto enfrentarlo con una escasa salud física. No obstante
siempre encontró un espacio para escribir sus Comentarios y sus libros. Se dice
que dejó noventa y seis libros escritos. Dentro de sus obras podemos encontrar
las siguientes: Comentario a la Epístola a los Romanos, Comentario a la Epístola
a los Hebreos, Comentario a las epístolas pastorales de San Pablo (I y II de
Timoteo y Tito), Comentario a la Primera Epístola a los Tesalonicenses (1550),
Un ensayo sobre el filósofo romano Séneca (1532), Comentario a los Salmos,
Comentario al Evangelio de San Juan (1553), Sermones sobre Job, Sermones
sobre la obra salvadora de Cristo, Sermones sobre Pentecostés, Sermones sobre
La Ascensión, Institución de la Religión Cristiana, 2 vols., Breve Confesión o
Breve Instrucción Cristiana, Respuesta al cardenal Sadoleto, Sumario de la
Institución de la Religión Cristiana, Oro de la Verdadera Vida Cristiana,
Comentario sobre Daniel, Comentario al Nuevo Testamento, Comentario sobre
Isaías, Comentario sobre las Epístolas Universales, Comentario al Salmo
Ochenta y siete, entre otros.

Para el presente estudio es de mucha importancia elaborar un resumen de


las obras de Calvino que en las lecciones posteriores se van a tratar para extraer
el pensamiento de su autor en cuanto al tema del pecado. Por lo que a
continuación vemos el resumen de las obras siguientes:

23
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

A. Institución de la Religión Cristiana

Este es sin duda, el libro más completo de sus obras. En el expresa una
profunda teología y un conocimiento amplio de las Escrituras en sus idiomas
originales. Calvino expresa el propósito con el que escribe este libro de la
Institución de la Religión Cristiana y se la da a conocer al Rey Francés Francisco
I en la dedicatoria. Le dice que solo quiere enseñar algunos principios acerca del
celo de la religión. También para instruir acerca de la verdadera doctrina a
aquellos que tengan pasión por la religión, debido a falsas doctrinas enseñadas
por hombres impíos.9

B. Breve Instrucción Cristiana o Breve Confesión

Este libro fue escrito en el año 1537, mientras Calvino se encontraba en


Ginebra. Como su propósito en aquella ciudad era organizar la Iglesia, escribió
este libro con las ideas doctrinales que él consideraba esenciales para este fin.
Consta de seis partes donde trata diferentes temas, tales como: El conocimiento
de Dios y de nosotros mismos, la ley del Señor, la fe, la oración, los sacramentos
y el orden en la Iglesia y en la sociedad.

La primera parte aborda el tema del conocimiento de Dios y del hombre. El


hombre ha sido creado para conocer a Dios tal como Él es y como se ha
manifestado y honrarle con amor y reverencia, recibiendo entonces de Él la vida
eterna. Dios ha manifestado su justicia, su majestad y su poder, mientras que el
hombre solo exhibe inclinación al pecado del cual se constituye esclavo y por lo
que está bajo el juicio divino. Pero si el hombre se da cuenta de su miseria, tal
reconocimiento le dará fácil acceso al verdadero conocimiento de Dios. Donde
podrá encontrar la herencia de la vida celestial, saliendo de las tinieblas a la luz,
del error al recto camino, de la ruina a la salvación.

9
Calvino, Juan. Institución de la religión cristiana. Dedicatoria Pág. XXVI.

24
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

La segunda parte describe la temática de la ley del Señor. Calvino describe


en esta parte su interpretación de cada uno de los Diez Mandamientos. Insiste
además en que si el hombre la obedece recibe bendiciones en esta vida presente
y también la recompensa de la vida eterna. Por el contrario el que con sus
acciones la incumpla recibirá la muerte eterna. También deja claro este autor,
que todo hombre es transgresor de esta ley, por lo que a través de ella recibe el
conocimiento de la justicia divina y el de la injusticia del pecador. Y que solo en
Cristo hay gracia para el pecador indigno.

En la tercera parte habla acerca de la fe. Esta fe es necesaria para tener a


Cristo, siendo el mismo Cristo el objeto principal de ella. Y constituye una firme
y sólida confianza del corazón del hombre, a través de la cual puede descansar
con seguridad en su misericordia. Es, además una iluminación del Espíritu Santo
que fortalece el corazón, ilumina la inteligencia del hombre, le reviste de la justicia
de Cristo y le santifica. Muchos por incredulidad rechazan la gracia de Cristo. Por
lo cual, concluye Calvino, que la Palabra solo fructifica en aquellos que el Señor
en su eterna elección ha predestinado a ser sus hijos y herederos del reino
celestial. Y para los demás que han sido desaprobados antes de la fundación del
mundo, la predicación del evangelio conduce a la muerte. Pero la razón por la
cual unos reciben misericordia y otros el juicio, Dios la ha ocultado por su justicia
y por la dureza del hombre.

El tema de la oración es tratado en la cuarta parte del libro. Acerca de ella,


Calvino dice, que es una especie de comunicación entre Dios y el hombre, donde
el elemento fundamental debe ser el conocimiento por parte del hombre de su
miseria. También la oración debe estar motivada por dos cosas fundamentales:
el mandamiento de Dios a hacerlo y la promesa que asegura que se recibirá lo
pedido. También, en este libro Calvino explica seis fracciones del Padre Nuestro
y termina con una exhortación a perseverar en la oración donde la voluntad del
hombre se someta a la de Dios.

25
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

Los sacramentos fueron un tema muy polémico en tiempos de la Reforma


protestante porque la Iglesia católica tradicionalmente los había administrado de
manera distinta y también porque cada reformador tenía una idea diferente
acerca de ellos. Calvino toca este polémico tema en la quinta parte de este libro.
Comienza diciendo que los sacramentos ejercitan la fe ante Dios y ante los
hombres. Y que estos no son más que un signo externo por medio del cual el
Señor representa y testifica su buena voluntad para con el creyente. En resumen
“es un testimonio de la gracia de Dios que se manifiesta por medio de un signo
exterior”, los cuales son bautismo y Santa Cena. El bautismo es una manera de
demostrar fe en Dios y de confesión delante de los hombres y representa la
purificación por la sangre de Cristo y la muerte del viejo hombre. En la Santa
Cena el cuerpo y la sangre de Cristo están representados por el pan y el vino.

Y para la sexta parte del libro dejó el orden en la Iglesia y en la sociedad.


Dentro de la Iglesia el orden debe comenzar por los pastores, que están para
enseñar doctrina, administrar los sacramentos y dar buen ejemplo de vida.
Además, no existirá un orden total si no se obedece la Palabra de Dios por seguir
tradiciones humanas. Para los que pecan deliberadamente y no se enmiendan
después de ser amonestados, aplica la excomunión, que no es más que
separarlo de la compañía de los santos. El orden en la sociedad se impone por
los magistrados, que han sido establecidos por Dios. Estos deben resistir a los
malos, reprimir la violencia y castigar, los crímenes. Mientras que los
subordinados deben respetar sus leyes, orar por ellos, someterse a su autoridad
y no rehusar las cargas que se les impongan. Pero recordar que se está sometido
a los superiores en Dios. Por tanto, si ordenan algo en contra de ese Dios, es
necesario tener en cuenta que la Biblia dice que Tenemos que obedecer antes a
Dios que a los hombres.

26
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

C. Libro de Oro de la Verdadera Vida Cristiana

Este libro fue publicado en 1550 en latín y francés, con el título De Vita
Hominis Christianiti. Ha sido traducido a varios idiomas a través de la historia y
es considerado uno de los clásicos devocionales de la literatura protestante.
Presenta además, un enfoque práctico al cristianismo.

Calvino, con este libro, hace un llamado a la obediencia humilde y sencilla


que debe expresar a través de la conducta diaria cada cristiano. Para esta
obediencia recalca la autoridad y supremacía de la Palabra de Dios. La santidad
como requisito principal para tener comunión personal con Dios y como sinónimo
de obediencia. Por tanto, no se debe vivir un cristianismo solo externamente sino
ir creciendo espiritualmente.

También presenta la idea de que cada cristiano debe negarse a sí mismo.


La “auto negación” se traduce en darle la gloria a Dios, en sobriedad, justicia y
devoción. También en buscar el bien tanto de amigos como de enemigos y no
buscar el enriquecimiento o los honores.

En el libro también hace énfasis en la cruz de Cristo. Exhorta a que debemos


llevarla día a día como lo mandó Jesús. Y ella convertirá a cada hijo de Dios en
personas humildes, esperanzados, obedientes, sumisos, disciplinados, con
arrepentimiento y finalmente salvos. No pasa por alto las persecuciones que
enfrenta el cristiano a diario. Pero en medio de estas persecuciones se puede
disfrutar del favor de Dios, del gozo espiritual, y de la corona.

Calvino también compara la tierra con el cielo. A fin de que sus lectores
valoraran las riquezas celestiales, no temieran a la muerte, y permanecieran
esperanzados en la segunda venida de Cristo. Y finalmente exhorta a evitar los
extremismos, no cometer abusos sino más bien vivir con moderación, sin excesos
y tener paciencia en medio de las privaciones y escaseces.

27
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

D. Comentario Bíblico a I, II de Timoteo y Tito

Este comentario fue escrito por Calvino en Ginebra y terminado el 25 de


julio año 1556. Para el texto Bíblico usó su propia traducción, y comentan los
expertos que es una de las mejores traducciones bíblicas. Calvino dirige este
escrito al príncipe Eduardo duque de Somerset con el objetivo de que ayudara a
la restauración de la Iglesia de Inglaterra la cual había sido afectada por el
papado. La carta a Tito, por su parte, fue escrita a Guillermo Farel y Pedro Viret.

Calvino defiende la idea de que el Apóstol Pablo fue quien escribió las cartas
a Timoteo. En ese tiempo muchos rechazaban esta tesis. Rechaza la idea de que
Pablo escribiera desde la ciudad de Laodicea como algunos creían, aunque no
era una cuestión de mucha importancia para él. Expone que en estas carta el
Apóstol Pablo ataca a algunos ambiciosos que solo discuten cosas necias. Según
él se refiere a los judíos que contendía cuestiones del evangelio. Pero aplica esta
enseñanza a sus días, diciendo que el papado está jugando ese mismo papel de
“disputas frívolas”. Ataca la teología escolástica de presentar especulaciones
inútiles en cuanto a la Palabra de Dios.

También, comenta acerca de las oraciones públicas por todos los hombres
y por los príncipes y magistrados, confirmándole que el gobierno civil guiado por
la voluntad de Dios manifestada en la Palabra, puede traer ventaja al mundo.
Hace énfasis también en que la salvación no es por obras de justicia como
proclamaba la Iglesia Católica, sino a través de la gracia de Dios manifestada al
hombre en su misericordia. Desde el principio hasta la consumación la salvación
estaba basada en la gracia de Dios, pero esto no quería decir que el hombre no
tuviera también su responsabilidad que cumplir delante del Dios que le regala la
salvación.

También hizo énfasis en las cualidades que deben tener los obispos. El
papel de la mujer dentro de la Iglesia. La precaución doctrinal y teológica ante

28
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

sectas heréticas, etc. Y concluimos este punto con una porción del comentario
que hace Guillermo Childs Robinson de estas cartas pastorales:

Este comentario demuestra que la Reforma fue un redescubrimiento


de nuestro Señor Jesucristo en su gracia y en su gloria, en su importancia
fundamental y en su toda suficiencia. El espacio sólo nos permite citar una
pocas de las oraciones y frases en las que Calvino proclama que "nadie
puede poner otro fundamento fuera del ya puesto, que es Jesucristo" (I Cor.
3:11, Bover - Cantera). En este comentario leemos: "El punto fundamental y
básico de toda la doctrina celestial es aquel que se refiere al Hijo de Dios
manifestado en carne." "En la doctrina de la religión, ciertamente, el punto
principal es venir a Cristo, para que estando perdidos en nosotros mismos,
podamos obtener la salvación de Él." 10

E. Comentario a la Epístola a los Romanos

Este comentario, Calvino lo dedica a Simón Grinee, en Strasbourgo el 18


de octubre de 1539. Comienza citando algunos autores antiguos y
contemporáneos que escribieron acerca de la misma epístola como M. Felipe
Melanchton, que fue teólogo y erudito, colaborador de Lutero, autor de varias
obras y Comentarios, entre los que sobresalen sus “Loci Comunes”, uno de los
manuales luteranos de mayor fuerza. También cita a Bullinger quien fue sucesor
del Reformador Zuinglio. Y a Bucer, hombre famoso en la Historia de las
Reformas alemana, suiza e inglesa. Y aunque no pretende superarlos si presenta
sus particularidades que pueden traer ventajas al lector. Escribe consciente de
que existirán diferencias a la hora de interpretar, pero aclara que las diferencias
no deben ser tomadas tan en serio.

En sentido general creemos que es un trabajo muy serio en cuanto a la


traducción del texto, el estilo e incluso la sencillez y brevedad que usa. Además

10
Calvino, Juan. Comentario a las Epístolas Pastorales de San Pablo. Introducción.

29
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

para su tiempo estaba bien adelantado en su pensamiento si tomamos en cuenta


la densa oscuridad que había dejado la escolástica. Uno de los traductores al
español de este comentario llamado Claudio Gutiérrez Marín, califica de magistral
su redacción y profundo su significado. Y hace notar que la traducción al texto
bíblico de Calvino supera la de Valera en estilo y en interpretación. 11

F. Respuesta de Calvino al Cardenal Sadoleto

En cuanto el cardenal Sadoleto, representante de los intereses de la Iglesia


Católica en Roma, se enteró de los acontecimientos en Ginebra con el caso de
Calvino, envió una carta con mucha elocuencia a aquella ciudad. Este cardenal
pensó que al estar Calvino desterrado y fuera de la ciudad de ginebra, sería una
buena oportunidad para que Roma recuperara el terreno que había perdido con
la Reforma Protestante en Ginebra. Por eso haciendo uso de su erudición,
escribió a Ginebra para persuadirlos de que regresaran a la Iglesia que él
representaba. Las personas en ginebra se quedaron sin saber cómo responder y
le pidieron ayuda a Calvino que ese encontraba en Estrasburgo en ese entonces.
Calvino no se negó a ofrecerles su ayuda y en septiembre de 1539, la historia
recoge que empleó seis días redactando la carta con la que el cardenal Sadoleto
recibe la respuesta a su aprovechada invitación. Halsema nos comenta lo
siguiente:

…Ahora que vosotros, ginebrinos, habéis triunfado arrojando a


estos ministros turbulentos fuera de la ciudad, queremos invitaros, con
amor: ¿No querréis volver a los brazos de la Santa Madre Iglesia,…?
Nadie en Ginebra había sido capaz de responder a la impresionante carta
de Sadolet. Algunos amigos de Calvino le enviaron una copia,
sugiriéndole contestar a la seductora invitación… Calvino respondió al
cardenal: "Cuando Dios me dio el encargo de esta Iglesia me pidió
ser fiel para siempre a mi deber, así que cuando veo a las peores

11
Calvino, Juan. Comentario a los Romanos. Nota del traductor.

30
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

trampas puestas ante estas personas que el Señor puso a mi


cuidado…” Con esta convicción Calvino escribió sus 15.000 palabras al
Cardenal. Y el que quedó en silencio fue Sadolet.12

En esta respuesta a Sadolet, Calvino escribe de varios temas importantes


en cuanto a los principios de la fe protestante.

12
Van Halsema, Thea óp. cit., Pág. 148.

31
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

Conclusiones

Hoy en día existen muchas posturas doctrinales que no concuerdan con el


pensamiento de Calvino plasmado en estos libros y comentarios. Pero si
analizamos el contexto histórico en los tiempos que vivió Calvino, donde la guerra
con la Iglesia Católica era incesante, donde la Palabra de Dios era torcida por la
teología escolástica para defender al poderoso y esclavizar al pobre, donde los
mandamientos del Señor eran utilizados para fines lucrativos de una minoría y
donde se había sembrado el pánico a través de la violencia en nombre de la
Iglesia de Jesucristo. Entonces no tenemos más que reconocer que la teología
de Calvino le daba lugar hasta al más menesteroso, le daba la oportunidad de
entrar a la clase más pobre y presentaba a un Dios de amor interesado por
establecer su Reino entre su creación. Puede que tuviera muchos errores pero
se acercó a la verdad mucho más de lo que cualquiera de nosotros lo hubiera
hecho en su tiempo y en iguales circunstancias.

32
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

Cuestionario de la Lección 1

1. ¿Qué historiadores menciona el material que han escrito de


Calvino?

2. ¿Con qué propósito fue escrito el libro de la Institución?

3. Mencione los hombres que predicaron el protestantismo en Ginebra


antes que Calvino llegara.

4. Mencione alguna de las cualidades que describe el material en la


persona de Calvino.

5. Mencione algunos de sus escritos.

6. Escriba el año de los siguientes sucesos en la vida de Calvino:

a. _______Nacimiento.

b. _______Muerte.

c. _______Llegada a Ginebra.

d. _______Destierro a Estrasburgo.

e. _______Regreso a Ginebra.

f. _______Edición de la Institución.

g. _______Inauguración de la Universidad.

33
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

Lección II

La Doctrina del Pecado en el


pensamiento de Agustín de Hipona

Introducción

Juan Calvino, el teólogo de la Reforma que ocupa gran parte del presente
estudio en su doctrina del pecado, estudió mucho acerca de este gran padre de
la Iglesia que fue Agustín de Hipona. Y se considera además, que gran parte de
su teología se la debe al estudio de Agustín. Por esta razón, se hace necesario,
antes de adentrarnos en los libros de Calvino, presentar un enfoque a la obra de
Agustín de Hipona, quien fuera uno de los que con su pluma inspirara la de
Calvino.

I. Breve Reseña histórica de Agustín de Hipona

Aurelio Agustín obispo de Hipona, en el norte de África, es considerado por


la mayoría de los biógrafos e historiadores como el más grande de los padres de
la Iglesia. Nació el 13 de noviembre del año 354 d.C. en la ciudad de Tagaste,
Numidia, actual Souk – Ahras en Argelia. Su padre Patricio se convirtió del
paganismo al cristianismo y su madre Mónica fue una fiel cristiana toda su vida.
A los dieciocho años tuvo un hijo llamado Adeodatus, que significa en latín, regalo
de Dios.

Estudió retórica en la ciudad donde nació y también en Madaura y Cartago.


Vivió una vida con bajas normas morales, antes de volverse al cristianismo.
Experimentó diferentes corrientes filosóficas de moda en el Imperio Romano

34
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

occidental como el maniqueísmo, el escepticismo y en la ciudad de Milán el


neoplatonismo. En aquella ciudad conoció a su obispo, Ambrosio de Milán, otro
de los grandes eruditos de la Iglesia en aquellos tiempos. Fue así como Agustín
se sintió atraído por el cristianismo.

Un día leyó el pasaje de las Escrituras de Romanos 13. 13 – 14 y decidió


entregarse a la fe cristiana, bautizándose junto a su hijo con Ambrosio en el año
387 d.C. En el norte de África fue ordenado y consagrado como obispo de
Hipona, actual Annaba en Argelia, en el año 395 d.C. Permaneció en esta
responsabilidad hasta su muerte en el año 430 d.C.

Agustín demostró ser un gran siervo de Dios y fiel a la causa de Jesucristo.


En ese tiempo existía una gran inestabilidad política porque el imperio romano se
veía amenazado caca vez más por los barbaros. Por otro lado las herejías y los
conflictos teológicos amenazaban la unidad e integridad de la iglesia. En esta
última área Agustín supo dar su aporte decisivo como un apologeta destacado.

Se enfrentó a varias corrientes heréticas que desafiaban la fe cristiana en


su tiempo como el donatismo, el maniqueísmo y el pelagianismo. En esta batalla
teológica el obispo de Hipona desarrolló la teología cristiana exponiendo las
doctrinas del pecado original, gracia divina, soberanía divina, predestinación,
trinidad, inmortalidad del alma, el libre albedrío, el mal, el tiempo, la creación,
entre otras. En su apologética contra el maniqueísmo, doctrina que él practicó
por muchos años, escribió obras en las que trataba sobre las Escrituras y su
autoridad, el libre albedrío y el origen del mal. En contra de los donatistas, escribió
que los sacramentos no dependen de la condición de la persona que los
administra. Abundó acerca de la guerra justa. Dijo que una guerra es justa cuando
el propósito de esta es también justo, que sólo las autoridades tienen derecho a
llevar a cabo una guerra justa y que en medio de la lucha, el motivo de amor debe
perdurar. Contra los pelagianos Agustín escribió sus más importantes obras
teológicas. Resaltando el tema del pecado original, enfatizando sobre la

35
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

necesidad de la gracia salvadora de Cristo como único camino para vencer el


pecado y alcanzar la salvación.13

Murió en Hipona el 28 de agosto del año 430 d.C. dejando un profundo


legado a través de su vida y obra, no solo para toda la Iglesia Cristiana sino
también para el mundo entero. Su teología y sus principios han sido muy
difundidos y aplicados por la Iglesia a través de los siglos. Muchos teólogos
posteriores encontraron en sus escritos una teología madura que les sirvió de
apoyo y enriquecimiento doctrinal. La Reforma Protestante y sus teólogos más
importantes como Calvino y Lutero, encontraron en las páginas agustinianas una
fuente extraordinaria de verdades bíblicas.

II. Doctrina del Pecado en el pensamiento de Agustín de Hipona

A. El Pecado Original. (Peccato Originali)

Esta doctrina del Pecado Original fue desarrollada por Agustín a causa de
la controversia con un monje Ingles llamado Pelagio. Es importante entonces
conocer primeramente que planteaba el pelagianismo.

Pelagio afirmaba que no existía el pecado original. El pecado que Adán


cometió lo dañó solamente a él sin afectar su descendencia. El pecado no nace
junto con el hombre, sino que aparece más tarde cuando el mismo hombre lo
ejecuta. No existe trasmisión de culpa y por tanto cada persona nace en el mismo
estado de inocencia en el cual Adán y Eva fueron creados. El delito en el hombre
no es por naturaleza, sino por la voluntad. Y no se recibe por nacimiento sino por
imitación.14 Afirmó además, que los niños deben bautizarse para recibir el reino
de los cielos pero no para borrar el pecado original. Y que debe administrarse a
los niños con las mismas palabras del sacramento con que se debe también

13
González, Justo L. Historia del Cristianismo. En dos tomos. Pág. 376.
14
Agustín, Tratado sobre la Gracia, Pág. 395.

36
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

administrar a los adultos. 15 Para Pelagio, si el pecado de Adán había afectado a


su descendencia aunque esta no hubiera pecado, entonces la justicia de Cristo
favorece a todos los pecadores aunque estos no ejerzan fe en Él. 16 Agustín
citando a Pelagio dice:

Porque Pelagio, estableciendo y distinguiendo tres cosas,… la


posibilidad, la voluntad y la acción; la posibilidad, por la que el hombre puede
ser justo; la voluntad, por la que quiere serlo, y la acción, por la que lo es;
confiesa que la primera, a saber, la posibilidad, nos es concedida por el
Creador de la naturaleza y que no está en nuestro poder,… más las otras
dos, esto es, la voluntad y la acción, afirma que nos pertenecen y de tal
modo nos las atribuye, que asegura rotundamente que no dependen sino de
nosotros mismos… la divina gracia no auxilia a estas dos,… las cuales
quiere que sean exclusivamente nuestras, sino a aquella que tenemos de
Dios, a saber, a la posibilidad;…17

De esta manera Pelagio estaba asegurando que el hombre no necesita de


la gracia y el poder de Dios para vivir en santidad. Para él es posible que una
persona pueda vivir una vida de obediencia a Dios y de perfección moral, sin
ninguna ayuda de Jesús como redentor ni de la gracia de Dios. La gracia solo
posibilita la justicia, pero el resultado total le pertenece al hombre en su esfuerzo
personal. La gracia de Dios solo es un complemento para el hombre para
ayudarle a escoger el camino que debe seguir, es útil nada más que para indicar
la opción que el hombre ha de encontrar, pero no funciona dando salvación,
redención y sostén ante las tentaciones y ofrecimiento del pecado. De manera,
que es el hombre el que obra bien y no la gracia de Dios en él, porque tiene la

15
Ibíd. Pág. 413.
16
Ibíd. Pág. 419.
17
Ibíd. Pág. 321.
37
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

posibilidad dada por Dios de inclinarse al bien y lograrlo o irse hacia el mal y
corromperse en los vicios.18

El Pelagianismo fue condenado en el Concilio de Orange, en el Concilio de


Florencia, en el Concilio de Cartago, en Roma por los sínodos episcopales y
hasta en el Concilio de Trento once siglos después según los Cánones de la
Sexta Sesión.

En la teología del pecado original de Agustín, el hombre está por naturaleza


infectado por el pecado hasta la raíz de su ser. Tanto así que no hay ser humano
que tenga el poder moral para hacer el bien y cooperar con la gracia de Dios. La
voluntad humana, no tiene el poder de escoger sino que está a merced de los
malos deseos. La condición de la humanidad caída es tal que Agustín podía
describirla como incapacidad para no pecar.

El error de Pelagio, según Agustín, iba en contra de la base misma del


cristianismo y de la regla de fe más primaria para la salvación. 19 Porque si el ser
humano no ha sido contaminado con la enfermedad del pecado original en Adán,
entonces no está bajo la ira o la condenación de Dios. Por tanto, tampoco se
necesita de la gracia salvadora de Jesucristo. El sacrificio de Cristo en la cruz
resulta insuficiente e innecesario para que el hombre pueda tener relación con
Dios y gozar de Sus promesas de vida eterna.

Para Agustín, el pecado original es una herencia que toda la humanidad ha


recibido de Adán. Esta conclusión la logró a través del texto Rom. 5. 12 ss. Antes
de la caída, el hombre tenía el libre albedrío como don de Dios. Esto le daba la
capacidad de pecar “posse peccare” y de no pecar “posse non peccare”. Y el
pecado de Adán consistió en tomar del fruto prohibido arrastrado por su
incredulidad y soberbia. Así perdió la posibilidad de vivir eternamente y su libertad

18
Ibíd. Pág. 327 y 343.
19
Ibíd. Pág. 435.

38
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

de no pecar. A partir de ahora sería libre solo para pecar, por cuanto perdió el
don de la gracia que le permitía perseverar en el bien. Este pecado original tanto
en su culpa como en sus consecuencias, pasa a sus descendientes por herencia,
porque en aquel primer hombre que pecó estábamos todos representados.

También, este prominente obispo declara el origen de la muerte física en el


hombre. Esta muerte no es producto de la naturaleza humana, porque Dios no
creó a Adán en estas condiciones, sino que entró en el primer hombre como un
castigo, una consecuencia y una pena imputada por el pecado. Dios dijo a Adán,
donde estaba toda la humanidad comprendida: “tierra eres y a la tierra volverás”
y esta frase no es otra cosa, para Agustín, que una sentencia de muerte que
hasta ese momento el hombre no había escuchado, como un castigo por haber
hecho uso de su voluntad para el pecado.

En el pensamiento agustiniano la corrupción del cuerpo no es la causa del


pecado. Sino más bien, el primer pecado surge primero y trae como
consecuencia la corrupción del cuerpo. Además, no es la carne quien convierte
al alma en pecadora, sino el alma quien hace que el cuerpo y la carne estén en
una condición de pecado o bajo la pena del pecado. Entonces, la causa del
pecado proviene del alma convirtiendo al cuerpo en pecador y a la carne
corruptible.20

Tampoco el pecado era causa ni creación de Dios, como planteaban los


maniqueos, sino que surge a través de la soberbia y voluntad del mismo hombre.
Aunque Dios creó todas las cosas, no debe entenderse el pecado como creación
divina. Debemos entender que Dios creó todas las cosas que naturalmente
existen. Y el pecado corrompe la naturaleza, por tanto, el pecado no surge en el
alma por estar ligada a la carne y no es creado por Dios sino que es consecuencia
del libre albedrío. Si el pecado no fuera voluntario no existiría condenación alguna

20
Agustín. La Ciudad de Dios. Pág. 363.

39
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

sobre el hombre, porque este no sería directamente responsable. De la misma


manera, el pecado no es consecuencia de una naturaleza mala en el hombre sino
abandono de una mejor y más perfecta.

B. El Pecado Original y el bautismo en agua para los niños

En el pensamiento agustiniano el Pecado Original, era propio de cada ser


humano y aún de los niños, por cuanto todos eran descendientes de Adán y tenía
que ser eliminado a través de un rito externo. Este rito era para el cristianismo el
bautismo en agua. Por tanto, los niños debían ser bautizados a fin de eliminar de
ellos el Pecado Original y su efecto condenatorio.

Para llegar a esta conclusión Agustín se basaba en la circuncisión


practicada a partir de Abraham. Él observaba que antes de Abraham se
desconocía bíblicamente si existía para los hombres temerosos de Dios algún
“sacramento corporal y visible”. No obstante a Abraham se le dio por parte de
Dios el rito externo de la circuncisión como una señal de su justicia por la fe.
También se le mandó circuncidar a todos los niños al octavo día de nacidos. De
esta forma, aunque los pequeños no tenían la capacidad para creer, recibían “el
signo de la justicia por la fe”. Además, si no eran circuncidados recibirían un
fuerte castigo. Y el castigo, según Agustín, no era solamente la muerte física,
sino la exclusión del alma del pueblo. “Dios anunció que sería excluida de su
pueblo el alma de aquel que no hubiese sido circuncidado al octavo día.” 21 De
manera que un niño sin cometer voluntariamente ningún pecado, por no ser
circuncidado por sus tutores, recibe la condenación. Esto indica que el niño
desde que nace está infestado con el Pecado Original y pertenece al grupo de
los condenados para perdición. Pero la circuncisión elimina de él el pecado. “En
efecto, el día octavo es, en la sucesión de las semanas, el día del Señor en el
cual Él resucitó; y la piedra era Cristo; de ahí que el cuchillo de la circuncisión era

21
Agustín. Tratado sobre la Gracia. Pág. 437.

40
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

de piedra, y la carne del prepucio, el cuerpo del pecado.” 22 Además Agustín


argumenta:

…los sacramentos mismos de la Iglesia, digo, declaran


suficientemente que los niños, aun los acabados de nacer, son rescatados
de la servidumbre del diablo por la gracia de Cristo. Pues además de ser
bautizados en remisión de los pecados no con simulado, sino verdadero
sacramento, ya antes se exorciza en ellos y se lanza con el ritual soplo la
potestad del diablo; y por las palabras de aquellos por quienes son llevados
responden que renuncian al demonio.23

Para Agustín la gracia de Dios en Jesucristo es necesaria pero también


suficiente para librar a los niños de la muerte segunda.

Y cuando los niños se libran de esta sujeción del pecado por la gracia,
de Jesucristo, nuestro mediador y redentor; sólo pueden padecer la muerte
que aparta y divide al alma del cuerpo, pero no pasan a aquella segunda de
las penas eternas, porque están ya libres de la obligación del pecado. 24

Entonces Agustín concluye que después de la primera venida de Cristo


como Mediador y Salvador del hombre, el sacramento de la circuncisión ha sido
cambiado o sustituido por el del bautismo en agua. De manera, que cada persona
y aún los niños que no han cometido pecados voluntarios, deben ser bautizados
para eliminar el Pecado de sus cuerpos que los lleva a la condenación. Ahora
bien, este bautismo no tiene un efecto purificador instantáneo sobre este pecado,
sino que se necesita llegar a la salvación eterna, a la resurrección o a la “otra
vida” para que entonces allí este bautismo haga completamente la purificación o
la regeneración. Agustín explica que esto se puede ver porque en los hijos de los
regenerados permanece la obligación a la pena correspondiente al pecado o

22
Ibíd. Pág. 439.
23
Ibíd. Pág. 453.
24
Agustín. La Ciudad de Dios. Pág. 340.
41
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

reato, del latín reātus, hasta que ellos también efectúan su propio bautismo o
baño de la regeneración. “Pues el que ha sido regenerado no regenera a los
hijos de la carne, sino que los engendra; y por eso no transmite a ellos el hecho
de haber sido regenerado, sino el de haber sido engendrado”.25

C. El Pecado y su remedio

En los escritos del obispo de Hipona, menciona que la ley entregada a


Moisés en el Sinaí tenía un objetivo específico. Este era mostrarle al hombre su
condición de pecador y la necesidad de un redentor. Pero no podía hacer libre de
culpa al hombre. No podía vivificar al pecador ni sacarlo de bajo el dominio de la
muerte. Por tanto, no es la ley el remedio para el pecado del hombre.

En la época de Agustín se difundía la doctrina pelagiana de que cada


hombre nacía en el mismo estado de inocencia de Adán. Y cada hombre decidía
si viviría en pecado o en obediencia. Por tanto, no era necesario el sacrificio de
Cristo. Jesús sería entonces solamente un ejemplo de conducta a imitar y no un
redentor. Agustín defiende el punto de que en Adán fuimos vendidos al pecado,
pero en Jesucristo fuimos rescatados del mismo. Somos salvos y libres de todo
pecado en la resurrección de Jesús.26 De manera que es solo Cristo la solución
para el pecado.

Para este teólogo de la antigüedad solo la gracia salvadora de Cristo puede


renovar al ser humano. Cualquier hombre puede exhibir en un momento
determinado buenas obras, pero estas no tienen ningún valor ante el juicio
divino.27 Basado en Romanos 5. 12, concluye que “sin duda, toda la masa de
perdición ha llegado a ser posesión del seductor. Por tanto, ninguno,

25
Agustín. Tratado sobre la Gracia. Pág. 451.
26
Ibíd. Pág. 425.
27
Ibíd. Pág. 425.
42
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

absolutamente ninguno, se ha librado, se libra o se librará de allí más que por la


gracia del Redentor”.28

Es interesante notar como Agustín elabora una tesis práctica para que cada
individuo tenga herramientas para enfrentar y eliminar las prácticas pecaminosas.
Él creía que el hombre aunque permanecía en la carne y por consiguiente en una
condición propensa al pecado, podía dejar de pecar. Para Agustín, las fuerzas
para combatir el pecado en cada uno de nosotros, viene de tener siempre
presente que hemos sido perdonados a través de la gracia de Dios manifestada
en Jesucristo encarnado, “… fortalecidos no por la comunicación de alguna virtud
extraña, sino por las fuerzas de la voluntad propia, que recuerda en cada uno de
los actos lo que se le concedió por el perdón de los pecados”.29

Para Agustín de Hipona el bautismo era necesario para la regeneración.


Pero también entendía que confesar a Cristo era mucho más importante y
salvífico. Y si alguien moría por confesar a Jesucristo aún sin ser bautizado en
agua, tenía acceso a la salvación. Esto se entiende bien a través de una porción
de su libro La Ciudad de Dios:

De la muerte que padecen por la confesión de Jesucristo los que no


están bautizados Todos aquellos que, sin haber recibido el agua de la
regeneración mueren por la confesión de Jesucristo, les vale ésta tanto para
obtener la remisión de sus pecados, como si se lavasen en la fuente santa
del bautismo; pues si dijo Jesucristo: “que el que no renaciere con el agua y
con el Espíritu Santo, no entrará en el reino de los cielos”, en otro lugar le
eximió, cuando con expresiones no menos generales dijo: “al que me
confesare delante de los hombres le confesaré Yo también delante de mi

28
Ibíd. Pág. 437.
29
Ibíd. Pág. 317.

43
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

Padre, que está en los cielos; y en otra parte: “el que perdiere por mí su vida,
ése la hallará”.30

D. Pecado y libre albedrío

Agustín aclara que el pecado del hombre está ligado a su libre albedrío. Por
la libertad que goza el ser humano tiene la capacidad de recibir de parte de Dios,
sus leyes para cumplirlas o ignorarlas. Si el hombre no tuviera libertad no recibiría
de Dios el mandamiento. Por tanto, el pecado es responsabilidad del hombre
mismo y no de Dios. Y nadie puede decir que no puede mantenerse puro porque
la pasión lo domine. En uno de sus tratados Agustín dice:

Es decir, que cuando en los mandatos divinos “No hagas esto o


aquello” o se exige la obra de la voluntad para hacer u omitir algo, bien se
prueba la existencia del libre albedrío. Nadie, por consiguiente, haga a Dios
responsable cuando peca, sino cúlpese a sí mismo. Ni tampoco, cuando
bien obra, juzgue el obrar ajeno a su propia voluntad, porque si libremente
obra, entonces existe la obra buena, entonces hay que esperar el premio…
Y, ciertamente, a quien se dice no seas vencido, se le supone, sin duda, el
árbitro de su voluntad. El querer y no querer, cosa es de propia voluntad.31

Agustín también hablaba de una gracia divina que ayuda al hombre en su


debilidad. Esta gracia fortalece el libre albedrio para enfrentarse al pecado y darle
la victoria. Él la llamó gracia auxiliadora y se recibía a través de la oración.

Pelagio tenía una opinión muy particular de lo que era la gracia divina, y
Agustín la rebatió con firmeza. Rechazó la opinión pelagiana de que la gracia de
Dios es sinónimo de los mandamientos y son los que le dan la capacidad al
hombre para no pecar. Él prefería pensar que el pecado recibe fuerzas de la ley
y que incluso la ley llega a causar la muerte espiritual al hombre. Porque el que

30
Agustín. La Ciudad de Dios. Pág. 342.
31
Ibíd. Cap. II y III.

44
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

depende de la ley y no de la gracia de Dios no es contado como hijo del Altísimo.


También Pelagio decía que la gracia de Dios era la naturaleza humana y en ella
estaba la capacidad de no pecar. A esto Agustín alegaba que el hombre por sí
solo no puede dejar de pecar. Además, hace alusión a la oración del Padre
nuestro, donde se pide no caer en tentación. Si realmente el hombre en su
naturaleza encontrara la fuerza de vivir sin pecado no habría necesidad de pedir
a Dios ser salvados de las tentaciones. Comparaba, además, Pelagio la gracia
de Dios con la remisión de los pecados pasados pero que no evitaba los futuros.
Agustín se le opuso diciendo que el ser humano debe fortalecerse en Dios para
tener la capacidad de no pecar estando ya en el camino de salvación.32

III. Otras doctrinas agustinianas

A. El Mal

En este punto del mal, Agustín de Hipona se opone al pensamiento de los


maniqueos. Para ellos existía un dualismo absoluto entre el bien y el mal. La luz
y las tinieblas luchaban constantemente entre sí. Esta doctrina contradice la
posición monoteísta de Agustín y del cristianismo en general. Para Agustín todo
lo que existe procede de Dios. El mal no es una naturaleza sino la corrupción de
la naturaleza. No es una ficción del intelecto sino una realidad. No puede
considerarse una criatura, no existe como sustancia pero si como pérdida de la
bondad. El mal es sencillamente una privación del bien o una corrupción del
bien.33

B. Libre Albedrío

El libre albedrío no es más que un don dado por Dios al hombre. A través
de él Adán tenía la capacidad para no pecar y para pecar. El hombre después de

32
Agustín. Tratado sobre la Gracia. Cap. XII.
33
González, Justo L. Historia del Pensamiento Cristiano. Tomo II. Pág. 42.

45
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

la caída sigue siendo libre, pero debido a su naturaleza corrompida por el pecado
las opciones donde puede hacer uso de su libertad son todas pecaminosas.

Con su doctrina de libre albedrío, Agustín rechaza la posición maniquea del


predeterminismo. Esta posición plantea que la parte de bien que hay en el
hombre siempre obrará el bien y el principio del mal se le opondrá.

El mal surge, precisamente por el libre albedrío con que fue dotado el
hombre y los ángeles que Dios creó. Pero el mal no es creado por Dios, ni
podemos atribuírselo a Dios, porque dentro del libre albedrío estaba la posibilidad
del pecado pero también la capacidad para permanecer sin pecado. Es el libre
albedrío entonces un bien que puede volverse al mal.

C. La gracia

El ser humano en su estado natural, no puede avanzar por sí solo a la


redención. No tiene la capacidad de hacer el bien. Adán podía hacer el bien antes
de la caída porque contaba con la gracia auxiliadora de Dios. El hombre después
de la caída solo puede hacer el bien si antes recibe la gracia de Dios para
fortalecerlo. La naturaleza del hombre está tan corrompida que solo puede usar
su libertad para pecar. Por lo que necesitamos la gracia de Dios para llegar a la
salvación. Y después de ser salvos necesitamos la gracia para poder hacer
buenas obras. Sin la gracia nadie quiere ni puede acercarse a Dios para la
redención.

La gracia no se opone al libre albedrío ni lo anula. Pero la gracia opera en


la voluntad de manera que la mueve a acercarse a Dios. La voluntad no puede
oponerse a la gracia, de manera que sin neutralizar el libre albedrio y sin que la
persona sea salva en contra de su voluntad, la gracia es irresistible. Una vez que
la persona es salva porque su voluntad coincide con la gracia, se necesita
permanecer en la salvación hasta el final. Y esta perseverancia también es un

46
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

trabajo de la gracia de Dios en el hombre sin la cual no llega a la meta final. Por
tanto ni la salvación ni la perseverancia en ella dependen de méritos humanos.

D. La Predestinación

Si para la salvación es imprescindible la gracia de Dios y se excluye toda


actividad humana, entonces esto da paso a la doctrina de la predestinación. En
ella la soberanía de Dios decide quién ha de recibir este don inmerecido. Para
este teólogo hiponense la predestinación es en base a la primacía de Dios en la
salvación del hombre y no en base a la omnisciencia de Dios. Según la
predestinación de Agustín el número de los salvos es fijo. Por más que crezca la
iglesia el número de escogidos es el mismo. Los escogidos salen de todo el grupo
de personas que están en la perdición y los que se pierden son los que se
mantienen en ese grupo. De manera que no existe una predestinación para
perdición.

En este punto de la predestinación la diferencia que presenta Agustín de


Hipona con la doctrina que desarrollaría siglos más tarde el teólogo de la reforma
protestante Juan Calvino. Agustín presenta una predestinación sencilla. Es decir,
la humanidad completa está perdida y Dios predestina un grupo para salvación y
el resto sencillamente se mantiene en su camino de perdición. Esta es una
predestinación infralapsaria. Por otro lado, Calvino plantea una predestinación
doble. O sea, que Dios escoge un grupo para salvación y escoge otro grupo para
perdición. Esta es la predestinación supralapsaria.

IV. Doctrina del Pecado en el pensamiento de Ambrosio de Milán

Se considera importante en este estudio mencionar la figura y el


pensamiento de la doctrina del pecado en la persona de Ambrosio de Milán. En
primer lugar, porque fue un gran hombre de Dios. También porque es elogiado
por Pelagio, el hereje a quién las doctrinas de Agustín corrigen. Además fue el

47
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

hombre que bautizó e instruyó en sus primeros pasos a Agustín. Es además, un


teólogo que se desarrolla en la época de Agustín y su pluma se destaca en la
apologética contra los novacianos.

Ambrosio consideraba que cuando Adán pecó, fue arrojado del huerto y
condenado a muerte, allí estaba él y toda la humanidad representada. Creía que
todo hombre nacía infestado por el pecado de Adán. Todo hombre desde que
nace es pecador y está viciado por el mal. También escribió que la sangre y el
sacrificio de Cristo, el único justo, eran necesarios y al mismo tiempo suficientes
para librar al hombre de la condenación por medio de la justificación del pecado.
Jesús fue el único justo nacido de mujer porque el Espíritu Santo lo engendró en
una virgen. Este es también el punto de vista agustiniano.

48
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

Conclusiones

La vida de este obispo del norte de África representa a un verdadero


apologeta que hizo su teología en el campo de batalla y no escondido en el
escritorio de una polvorienta biblioteca. Es un ejemplo de sacrificio, carácter,
abnegación y amor hacia la verdad que había creído y recibido de su Dios. Se
enfrentó doctrinal y bíblicamente a diferentes corrientes heréticas de su época
sin perder su perspectiva pastoral. Quiere esto decir que su duelo con la herejía
no era para exaltarse humanamente, ni para desmentir un grupo de engañados,
sino para que muchos tuvieran en sus manos la verdad y con ella una correcta
relación con Dios y a través de Él la salvación. Hoy en día muchos dicen tener la
verdad, pero es solamente con la meta de algún bien personal. En muchos
contextos de nuestros tiempos no se defiende la verdad por lo que es, por lo que
representa o por el beneficio que puede traer a otros, sino por el provecho
material que se puede sacar personalmente.

En cada comentario de Agustín de Hipona podemos notar su apego


ferviente a la Palabra de Dios. Cada una de las diferentes ideas que desarrolla
tiene su origen en las Escrituras. A diferencia de nuestros días que tantos sacan
teología, doctrinas, enseñanzas y posiciones litúrgicas basados solamente en
experiencias personales. Incluso son capaces de colocar sus experiencias
religiosas por encima de lo que la Biblia dice. Resaltan sus supuestas
revelaciones y argumentaciones sin importar que contradigan las Escrituras,
porque para estos líderes religiosos esta ya no es toda la verdad. Por eso el
ejemplo de Agustín en su apego a la Palabra, es hoy más que nunca una luz que
alumbra el cristianismo moderno y postmoderno.

49
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

Cuestionario de la Lección 2

1. Mencione el pasaje bíblico que llevó a Agustín a la conversión.

2. ¿Cómo se llama actualmente la ciudad donde Agustín ejerció como


obispo por 35 años? ¿En qué país se encuentra? ¿En qué año comenzó?

3. Diga cuales fueron las herejías que enfrentó Agustín.

4. ¿Qué doctrinas desarrolló Agustín contra esas herejías?

5. ¿Qué planteaba el pelagianismo?

6. ¿Qué plantea Agustín en cuanto al pecado original?

7. ¿Por qué la posición pelagiana del pecado original era tan nociva para la
fe?

8. ¿Qué relación existe entre el pecado y el libre albedrío, según Agustín?

9. Haga un resumen de las 4 doctrinas agustinianas que se mencionan en


el material.

10. ¿Qué ejemplo nos deja Agustín en cuanto a su apologética y su apego


a las Escrituras?

50
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

Lección III

La Doctrina del Pecado en el


Pensamiento de Juan Calvino
Pecado Original I

Introducción

En esta lección tendremos la oportunidad de adentrarnos en el pensamiento


de Juan Calvino, en cuanto a su postura del pecado original. Por ser una doctrina
tan extensa y rica en contenido teológico, solamente se estudiará la definición del
pecado original, las causas que provocaron este descenso espiritual en el hombre
y la manera en que se transmite este mal a toda la raza humana. Dejamos para
la próxima lección otros aspectos también importantes de esta atractiva doctrina
como las consecuencias y la solución para este pecado. Toda esta doctrina está
plasmada fundamentalmente en sus libros de la Institución a la Religión Cristiana,
Breve instrucción Cristiana y en su Comentario a los Romanos.

En cuanto a la definición del pecado original, Calvino habla de donde


procede, el efecto que causa en la humanidad y en que consiste realmente,
según su razonamiento de las Escrituras. Al analizar las causas, de este pecado,
Calvino solo hace referencia a las primeras personas creadas, porque fue en ellas
donde se originó y quienes originalmente lo efectuaron. Por otro lado, para
estudiar la manera en que se transmite el pecado de generación en generación,
de padres a hijos y de Adán a sus descendientes, estudiaremos diferentes

51
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

doctrinas pre calvinistas que sirven de base para la manera de interpretar esta
transmisión del pecado original y que sin duda Calvino enfoca en su obra.

I. Definición del pecado original

En la escolástica se hacía distinción entre el pecado de Adán y el pecado


original en la descendencia de Adán. Para ellos, ambos eran denominados
pecado original, pero añadían otra palabra que distinguiera ambos conceptos.
Por un lado, estaba el pecado original originante (peccatum originale originans),
que viene siendo el acto concreto de desobediencia cometido por Adán y Eva, y
por otro, el pecado original originado (peccatum originale originatum) que serían
entonces las consecuencias que vienen sobre la raza humana del primer pecado.

La definición que hace Calvino del pecado original es la siguiente:

Digo, pues, que el pecado original es una corrupción y perversión


hereditarias de nuestra naturaleza, difundidas en todas las partes del alma;
lo cual primeramente nos hace culpables de la ira de Dios, y, además,
produce en nosotros lo que la Escritura denomina "obras de la carne". Y esto
es precisamente lo que san Pablo tantas veces llama "pecado". Las obras
que de él proceden, como son los adulterios, fornicaciones, hurtos, odios,
muertes, glotonerías (Gál. 5, 19), las llama por esta razón frutos de pecado;
aunque todas estas obras son comúnmente llamadas pecado en toda la
Escritura, como en el mismo san Pablo.34

En otro de sus libros nos da una definición bien parecida, donde trata de
abarcar un concepto más amplio pero con más brevedad. Este versa de esta
manera:

34
Calvino, Juan. Institución de la Religión Cristiana. Libro 2. Cap. I. 8.

52
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

El pecado, según la Escritura, es tanto esta perversidad de la


naturaleza humana que es la fuente de todo vicio, como los malos deseos
que nacen de ella, y los injustos crímenes que éstos originan: homicidios,
hurtos, adulterios y otros parecidos. Así, pues, todos nosotros, pecadores
desde el vientre materno, nacemos sometidos a la cólera y a la venganza
de Dios.35

En su comentario a los Romanos, Calvino enfoca nuevamente el tema del


pecado original. En el texto de Romanos 5. 12 que dice: “… como el pecado entró
en el mundo por un hombre, y por el pecado la muerte, así la muerte pasó a todos
los hombres…”, él explica que la palabra “pecar” significa que toda la raza
humana está infectada por el pecado. Aquí él nombra esta corrupción “perversión
natural”, que posee el hombre desde el nacimiento. Aunque esta perversión no
haya producido frutos o actos pecaminosos, es constituido pecado a los ojos de
Dios y por tanto se está expuesto al castigo. Y añade:

…pues así como Adán, en su primera creación recibió los dones de


Dios, tanto para sí como para sus descendientes, así también al apartarse
de Dios por su caída corrompió y perdió nuestra naturaleza. Todos, pues,
hemos pecado, porque todos somos alimentados de corrupción natural y
por consiguiente somos inicuos y perversos… Por supuesto, es fácil de
comprender que esta idea de San Pablo no se refiere al pecado actual;
¿por qué deduciría él la comparación entre Adán y Cristo si cada uno
atrajera sobre sí la condenación por causa del tiempo? Concluimos, por
tanto, que el Apóstol habla aquí de la maldad engendrada en nosotros.36

35
Calvino, Juan. Breve Instrucción Cristiana. Pág. 8 P. 1.
36
Calvino, Juan. Comentario a los Romanos.

53
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

II. Causa del Pecado original

Como es sabido a través del Génesis, Dios le había dicho a Adán que no
podía tomar del fruto del árbol del conocimiento del bien y del mal. Esta limitante
para el hombre no estaba basada en un capricho, sino que tomar de aquel árbol
significaría la perdida de la integridad de su estado y la aparición en aquella
creación de situaciones detestables a los ojos de Dios y dañinas para el propio
hombre, tales como el pecado y la muerte.

A través de esta limitante divina Dios quería mantener su creación bajo


perfección. Pero además, Dios tiene el derecho de probar la obediencia del
hombre. Quería comprobar que su creación más especial se sometía a su
voluntad de buena gana. Que no estuviera impulsado por malos deseos a un
desordenado apetito, sino más bien permaneciera contento con su estado y
condición. Además probar y ejercitar la fe del hombre, a través de su confianza
en lo que Dios le había prometido.37 Pero vayamos entonces con Calvino al
motivo que llevó a Adán a desobedecer.

En primer lugar, Calvino rechaza la idea de que la causa fuera la “gula”.


Porque no tenía sentido que todo lo que Dios había dicho descansara solo en
abstenerse de un fruto común. No sabemos si este término era manejado en su
tiempo como una causa del pecado de Adán, lo cierto es que lo menciona y lo
desmiente. Para esto dice que Adán tenía a su disposición todo tipo de manjares,
toda clase de abundancia y gran diversidad de opciones, por lo cual, no hubiera
sido un problema grave para él dejar de lado un fruto ajeno.

La opinión más difundida y más fácil de ver en el relato bíblico de Génesis,


en cuanto a la causa del Pecado de Adán, es que este se originó por la
desobediencia del primer hombre. Incluso, para algunos, la desobediencia y el

37
Calvino, Juan. Institución de la Religión Cristiana. Libro 2. Cap. I. 4.

54
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

primer pecado son sinónimos. En el pensamiento de Calvino, la desobediencia


es también una causa pero no la única y ni siquiera la más importante. Él fundaba
su teoría en que este pecado tiene varias causas: la desobediencia o la soberbia
y la incredulidad. La incredulidad o infidelidad, como también la nombra, no es
más que escuchar la voz de la serpiente en lugar de ser fiel y creer
completamente a lo que Dios le había dicho. Es precisamente a esta tesis que
Calvino atribuye la caída de Adán y Eva. Pero veamos este tema más de cerca.

Calvino, escribe acerca de la causa del primer pecado partiendo de la


observación y valoración del castigo divino que recibe Adán cuando peca contra
la soberanía de Dios. Él se da cuenta de que si el castigo por el pecado cometido
en el huerto es severo, entonces el pecado efectuado fue grave a los ojos de
Dios y por tanto, la causa que desencadenó este pecado también tuvo que ser
considerable. El castigo es considerado horrendo y riguroso porque no solo se
quedan las consecuencias en Adán y su esposa, sino que se extienden a toda
su descendencia y a todo género humano después de ellos. También puede
notarse lo horrendo del castigo porque Adán y Eva pierden la relación física que
tenían con Dios, pierden la posibilidad de permanecer en el paraíso, pierden el
derecho de participar del árbol de la vida, son castigados a través de cambios
físicos negativos, las condiciones de supervivencia son alteradas y aún el resto
de la creación que les rodea ya no será la misma para con ellos. Un castigo
ligero hubiese sido alguno que no traspasara los límites del huerto del Edén.
Pero un castigo de este tipo hubiese sido en contra de un delito que no
contradijera la soberanía de Dios, ni afectara la integridad del hombre, sí es que
se puede cometer algún delito sin atentar contra alguna de estas dos cosas.

Calvino, recuerda a Agustín y se pone de acuerdo con él, expresando que


“la soberbia ha sido el principio de todos los males”. Plantea que la ambición lo

55
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

llevó a perder el estado al que pertenecía. Pero continúa a una definición más
propia y perfecta según él.38

Calvino citando a Moisés y a Pablo en Romanos 5. 19, expresa que la mujer


se apartó de la fidelidad a la Palabra de Dios. Este razonamiento lo lleva a pensar
que la desobediencia es el principio para la caída. Pero continúa diciendo que es
la infidelidad también causa de esta desastrosa caída en el Edén. En la Institución
dice:

Además de esto hay que notar que el primer hombre se apartó de la


obediencia de Dios, no solamente por haber sido engañado con los
embaucamientos de Satanás, sino porque despreciando la verdad siguió la
mentira. De hecho, cuando no se tiene en cuenta la palabra de Dios se
pierde todo el temor que se le debe. Pues no es posible que su majestad
subsista entre nosotros, ni puede permanecer su culto en su perfección si
no estamos pendientes de su palabra y somos regidos por ella.
Concluyamos, pues, diciendo que la infidelidad fue la causa de esta caída.39

De esta incredulidad nacen una serie de sentimientos negativos que


envuelven todo el escenario de Génesis 3. Entre estos sentimientos Calvino
destaca la soberbia, la ambición, la contumacia, el orgullo, la obstinación. La
ingratitud para codiciar más de lo que se le había concedido. Menosprecio de
todo lo que Dios en su liberalidad le había dado. Impiedad al no estar contento
con ser hecho imagen del Creador y pretender aún ser igual a Dios. Además,
esta apostasía adámica va más allá de eso cuando cae también en injurias contra
Dios, porque acepta todas las insinuaciones de satanás en contra del Creador,
que engañosamente describían a un Dios mentiroso, envidioso, mezquino y
malvado.

38
Ibíd. Libro 2. Cap. I. 4.
39
Ibíd. Libro 2. Cap. I. 4.

56
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

III. Transmisión del Pecado Original

El pecado original y más específicamente el pecado de Adán, afectó a Adán


y a Eva. Pero también afecta a cada ser humano a través de la historia y seguirá
afectando a cada persona que nazca en el mundo. Es decir, que toda la
humanidad sufre las consecuencias de la caída de Adán. Pero existe una
posición doctrinal que plantea que este pecado no se transmite. Entonces, nos
preguntamos si realmente se transmite el pecado de generación en generación,
de padres a hijos y de Adán a toda la raza humana. A esta interrogante Calvino
también presenta una respuesta y la analizamos a continuación.

A. El pecado original no se transmite

Para Pelagio, como vimos en el capítulo II, el pecado original es solo el


pecado de Adán en el huerto y que no tiene consecuencias sobre el resto de la
humanidad. Este pecado original pelagiano para nada se transmite al resto de la
raza humana. Y cuando se transmite es solo por imitación. Esta es una postura
que rebatió Agustín de Hipona en su tiempo y también Calvino le hace frente.

B. El pecado original se transmite

Para Calvino es un hecho de que el pecado original se ha propagado a toda


la raza humana. De manera, que todos los hombres están contaminados desde
el mismo comienzo de su existencia. Adán pecó pero su pecado lo comunicó al
resto de su descendencia. Calvino establece las bases para definir que se
transmite el pecado original y sus consecuencias y que llega de Adán a cada ser
humano. Comienza expresando que Adán es “el progenitor del linaje humano” y
su “raíz”. En el comentario a los romanos dice:

…porque nuestro primer padre, pecando, nos hizo a todos deudores.


Pero San Pablo dice categóricamente que el pecado continuó y se extendió
a todos, quienes por esa causa sufren el castigo. Insiste aún más al dar

57
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

poco después la razón por la que toda la posteridad de Adán está sujeta al
imperio de la muerte, diciendo: Porque todos pecaron.40

Calvino enfrenta el pensamiento herético de Pelagio haciendo uso de las


palabras del Apóstol Pablo en Romanos 5. 12 – 18. Allí él interpreta que el pecado
de Adán se extendió a todos los hombres y que el pecado y la muerte han sido
engendrados en nosotros por Adán. Calvino concluye diciendo que el pecado
original se transmite. Y presentamos un fragmento tomado de la Institución:

Al decir que todos nosotros hemos muerto en Adán, claramente da a


entender que estamos manchados con el contagio del pecado, pues la
condenación, no alcanzaría a los que no estuviesen tocados del pecado…
"nosotros hemos muerto en Adán" sino diciendo que él, al pecar, no
solamente se buscó a sí mismo la ruina y la perdición, sino que arrastró
consigo a todo el linaje humano al mismo despeñadero; pues con su caída
infectó a toda su descendencia.41

C. Posiciones pre calvinistas de la transmisión del pecado


original

Antes de Calvino existían diferentes maneras de interpretar la transmisión


del pecado original. Y para poder entender mejor la posición calvinista se hace
necesario hacer un pequeño resumen de estas posturas doctrinales. Estaremos
viendo el traducionismo, el creacionismo y el realismo, que son doctrinas sobre
las cuales se interpreta la transmisión del pecado original.

40
Calvino, Juan. Comentario a los Romanos.
41
Calvino, Juan. Institución de la Religión Cristiana. Libro 2. Cap. I. 6.

58
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

1. Traducionismo

El traducionismo es una doctrina de Tertuliano (160 – 220 d. C.), que plantea


que tanto Dios como el alma son seres corporales. También decía que cada alma
surgía de las almas de los padres, de la misma manera que el cuerpo surge de
los cuerpos de los padres. Agustín basándose en esta tesis, afirma que el pecado
original tanto en su culpa como en sus consecuencias, pasa a todos los hombres
como una herencia. Esta manera de interpretar la transmisión del pecado original
subsistió a lo largo de toda la edad media porque se puede ver como una herencia
que se traspasa de padres a hijos, juntamente con el cuerpo.

Pero es necesario aclarar que la doctrina traducionista fue rechazada por la


mayoría de los teólogos de la edad media y rechazada posteriormente en varios
sínodos eclesiales y no aceptada por la Fórmula de Concordia (1577), como
veremos en otros capítulos más adelante. La razón por la que es rechazada es
por acercarse demasiado al materialismo estoico, que es sinónimo de un
materialismo excesivo.

2. Creacionismo

Agustín, más bien, se inclinaba al creacionismo, la doctrina según la cual


Dios involucraba directamente un alma para cada individuo en el momento del
nacimiento o la concepción. Pero esta no era una manera buena de interpretar la
transmisión del pecado original. Por eso regresaba a la transmisión del alma y
también del pecado de una manera semejante a la transmisión de las
características corporales de padres a hijos.

3. Realismo

Odón de Tournai en el siglo XII defendiendo el realismo extremo, da otra


interpretación de la transmisión del pecado original. Según su postura ni el

59
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

traducionismo ni el creacionismo ofrecen una correcta interpretación de esta


doctrina. Para él la humanidad es una sola y cada ser humano individual no es
más que un conjunto de accidentes que existen en la esencia universal de la
humanidad. Puesto que en Adán estaba presente esa esencia en su totalidad,
toda ella sufrió la caída. Literalmente “en Adán todos pecamos”.42

D. Transmisión del pecado orinal por propagación

El pecado original según Calvino se transmite por propagación, pero ¿qué


quiere decir esto exactamente? A continuación estaremos analizando el concepto
calvinista de la propagación como transmisión del pecado original.

Calvino comienza su doctrina exponiendo que “en el alma reside la


corrupción original”.43 Continua diciendo que cuando Adán, por su pecado, perdió
los dones que Dios le había dado, no los perdió él solamente, sino toda la
humanidad después de él se vio desprovista de estas gracias, por cuanto estos
dones y gracias estaban destinados por Dios desde el principio no solamente
para Adán sino para el hombre en general. Y esta infección de pecado le llega a
cada hombre después de Adán, comunicando la infección de padres a hijos
pasando de generación en generación, de la misma manera que una raíz podrida
comunica su podredumbre a las ramas y estas a los vástagos. En la Institución
podemos leer estas palabras textuales de Calvino:

Quiero con ello decir que Adán fue el principio de la corrupción que
perpetuamente se comunica de unas a otras generaciones. Pues este
contagio no tiene su causa y fundamento en la sustancia de la carne o del
alma, sino que procede de una ordenación divina, según la cual los dones

42
Justo L, González. Historia del Pensamiento Cristiano. Tomo II. Pág. 186.
43
Calvino, Juan. Institución de la Religión Cristiana. Libro 2. Cap. I. 7.

60
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

que concedió al primer hombre le eran comunes a él y a sus


descendientes, tanto para conservarlos como para perderlos.44

Por otro lado, Calvino apunta al hecho de que padres regenerados y fieles
no traen al mundo hijos regenerados porque “los hijos no proceden de
regeneración espiritual, sino de la generación carnal”.45 Con esto rebate a los
pelagianos cuando dicen que los hijos de padres fieles no nacen afectados con
la corrupción original, pues deben quedar purificados a través de su pureza.
Porque la santidad de los padres “no impide que la primera maldición se
propague universalmente al género humano; porque tal condenación viene de la
naturaleza, y el que sean santificados proviene de la gracia sobrenatural”.46

Con esta conclusión de Calvino no solo está dando su opinión personal sino
también desmintiendo, como ya dijimos, a Pelagio. Pero además se separa del
pensamiento agustiniano, el cual se confunde entre el traducionismo y el
creacionismo. Para este teólogo de la reforma, el pecado original no se transmite
por imitación, no es tampoco una corrupción del cuerpo que pasa de padres a
hijos igual que sus rasgos físicos, tampoco la recibe cada hombre como si hubiera
estado en Adán el día que este pecó, sino una corrupción hereditaria de la
naturaleza humana que se propaga de generación en generación. Se le
comunica al hombre desde Adán provocando los deseos pecaminosos en cada
ser humano, pero se le comunica también la culpa de manera que nadie es
inocente del pecado cometido por Adán. Incluso los niños al nacer ya son
culpables de su propio pecado porque aunque no han cometido ningún acto
pecaminoso, pero ya su naturaleza ha sido contaminada por la semilla del
pecado.

44
Ibíd. Libro 2. Cap. I. 7.
45
Ibíd., Libro 2. Cap. I. 7.
46
Ibíd., Libro 2. Cap. I. 7.
61
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

Conclusiones

Si pensamos en el pecado original solo como el pecado de Adán y sus


consecuencias sobre la raza humana, nos quedamos cortos en nuestra teología.
Sin duda, que esta doctrina es mucho más que eso. Y vemos como a lo largo de
la historia los teólogos han tratado de definirla lo mejor posible. Pero es este
teólogo de la reforma protestante quien ha podido explicarla más ampliamente y
con mayor efectividad. Por supuesto, que tuvo como base el pensamiento de los
grandes teólogos que le precedieron. Pero él supo estudiarlos, comprenderlos y
llegar a mejores conclusiones.

62
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

Cuestionario de la Lección 3

1. Resuma la definición que ofrece Calvino del pecado original.

2. Establezca similitudes y diferencias entre la definición del pecado original


de Calvino en su obra Institución de la Religión Cristiana y el libro de Breve
Instrucción Cristiana.

3. ¿Cuál es la causa fundamental, para Calvino de la caída del hombre?

4. ¿Qué sentimientos negativos nacen de la incredulidad según Calvino en


el relato de Génesis 3?

5. Explique cómo se transmite de padres a hijos el pecado original según


Pelagio.

6. Mencione las diferentes doctrinas precalvinistas que han sido utilizadas


para explicar la transmisión del pecado original.

7. Explique en qué consiste el traducionismo y diga porqué fue rechazado.

8. Explique en qué consiste el creacionismo.

9. ¿Cómo se transmite el pecado original para Calvino? Y ¿En qué consiste


esta doctrina?

63
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

Lección IV

La Doctrina del Pecado en el


Pensamiento de Juan Calvino
Pecado Original II

Introducción

El tema del pecado original, según Calvino, puede definirse doctrinalmente,


se pueden analizar las causas que le dieron origen en el Huerto del Edén y puede
estudiarse como se propaga. Pero también, es muy importante que podamos ver
sus consecuencias negativas que trajo para la raza humana y la solución que solo
Dios le puede dar, a la luz de cómo lo concibió el gran teólogo de la reforma
protestante.

I. Consecuencia del pecado original

Dentro de las consecuencias del pecado original vistas por el prisma de


Juan Calvino, se pueden mencionar la condición de desorden espiritual y
carencia de propósito y significado en el hombre, condenación eterna, corrupción
del alma e incluso su propagación o transmisión son una consecuencia negativa
para el ser humano.

64
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

A. Desorden espiritual y falta de propósito

El hombre cuando se examina personalmente a la luz de la ley de Dios, se


da cuenta que por más que se afane, no encuentra nada en sí mismo para darle
orden a su existencia. Y al pensar en sus dones o la carencia que tiene de ellos,
pude considerar cuál es su deber delante de Dios y si cuenta con las fuerzas
suficientes para llevar a cabo ese deber. Tampoco puede encontrar nada en sí
mismo que sea motivo de enorgullecerse al mirar a su origen, propósito y todo lo
que perdió en Adán. Y la razón por la cual el hombre se encuentra en esta
condición es por el pecado heredado de Adán.

B. Condenación eterna

Para Calvino el pecado original trae condenación. Otros intérpretes dicen


que el pecado original no condena al hombre hasta que este comete sus propios
pecados haciéndose culpable personalmente. Calvino observaba que en todas
partes del mundo se podía ver la ruina y la desolación que enfrentaba la
humanidad. Todo esto se lo atribuía al pecado de Adán. También, dentro de esta
condenación se incluyen los niños o los “pequeñitos”, como él los llama, porque
aunque no son culpables delante de Dios por algún pecado presente, lo son por
el pecado original. De manera que la condenación no es solamente el resultado
de pecados personales cometidos a lo largo de la vida adulta del hombre, sino
también viene producto del pecado original.

El ser humano desde que nace está bajo la ira y la cólera de Dios. En la
medida que este avanza hacia la adultez y se aproxima el día de su muerte física,
experimenta la acumulación del juicio divino. Para Calvino esta cólera divina
hacia el hombre, está justificada por su justicia y acreditada por tanta maldad en
el corazón de cada descendiente de Adán. Por tanto, no se puede esperar otra
cosa que Su justo castigo.

65
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

También, este reformador aclara, en su comentario a los romanos, que


existe una diferencia entre Adán y sus descendientes. Adán por su parte recibió
un mandamiento claro y preciso por parte de Dios de no comer del árbol del
conocimiento del bien y del mal. Por su parte, los descendientes de Adán no
estaban bajo este mandamiento y muchos bajo ningún otro, solo tenían sus
conciencias. Pero aún esta diferencia no detenía la condenación para este
segundo grupo.

C. Esclaviza al hombre a actos pecaminosos

También como consecuencia de este pecado, está la corrupción del mundo


y la perversión del linaje humano. Calvino opina que el pecado original convierte
al hombre en esclavo de la maldad. Según él, el hombre es indiferente a la justicia
de Dios y por tanto, todo lo que desea es lo malo y todo lo que puede producir
son frutos del pecado.47

Por el pecado de Adán el hombre fue privado de toda integridad y


perfección. Ha sido borrada de él la imagen celestial, degradándolo a un estado
de miseria espiritual. Esta condición elimina toda vanagloria humana y lo sumerge
en la vergüenza, el sometimiento y la humillación. Por el contrario, de haber
permanecido en obediencia a Dios, sin incurrir en el pecado “cuán grande sería
la excelencia de nuestra naturaleza, si aún permaneciera en su integridad y
perfección,…” 48

D. Transmisión

Ya vimos en el capítulo anterior que se transmite el pecado original y la


manera en que lo hace. En esta lección solo se pretende dejar claro que esta
transmisión del pecado es una consecuencia negativa sobre la raza humana.

47
Calvino, Juan. Breve Instrucción Cristiana. Primera Parte, Pág. 7.
48
Calvino, Juan. Institución a la religión cristiana. Tomo 2. Pág. 3.

66
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

Según la interpretación bíblica de Calvino toda la raza humana está sujeta


a la maldición por la caída de Adán y Eva, desde el Génesis, degenerando de su
estado original. Dentro de las consecuencias de la caída, menciona el hecho de
que toda la posteridad quedó afectada con las consecuencias de la mala decisión
de Adán. Es decir, que esta desobediencia e incredulidad no afectaron solamente
a Adán y a Eva sino que tanto la corrupción como las consecuencias de su
descuido e incredulidad la reciben las generaciones posteriores sin excepción y
esto es contado como una consecuencia de ese primer pecado cometido por
Adán. En el libro de la Institución dice:

Y no hemos de maravillamos de que con su alejamiento de Dios haya


arruinado a toda su posteridad,… Así, pues, si la maldición de Dios lo llenó
todo de arriba abajo y se derramó por todas las partes del mundo a causa
del pecado de Adán, no hay por qué extrañarse de que se haya propagado
también a su posteridad. Por ello, al borrarse en él la imagen celestial, no ha
sufrido él solo este castigo, consistente en que a la sabiduría, poder,
santidad, verdad y justicia de que estaba revestido y dotado hayan sucedido
la ceguera, la debilidad, la inmundicia, la vanidad y la injusticia, sino que
toda su posteridad se ha visto envuelta y encenagada en estas mismas
miserias.49

Cada ser humano desde que nace está contaminado por el pecado de
Adán, tanto en su estado como en sus consecuencias. Por tanto, la corrupción
en el hombre no surge por “imitación” de malos ejemplos en otros, sino que se
nace del vientre con la maldad innata. Y no solo es visto como que se hereda el
pecado, al ser Adán el que pecó, sino que todos los hombres pecamos en Adán.

49
Ibíd. Pág. 6.

67
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

E. Posee todas las partes del alma

Calvino comenta que después de la caída de Adán, no debe restringirse la


corrupción o depravación adquirida a un área de pecado solamente, sino que
debe verse a todo el ser completamente contaminado con el pecado.

…después de que Adán se apartó de la fuente de la justicia, todas


las partes del hombre se encuentran poseídas por el pecado... todo el
hombre, de los pies a la cabeza, está como anegado en un diluvio, de modo
que no hay en él parte alguna exenta o libre de pecado, y, por tanto, cuanto
de él procede se le imputa como pecado…50

II. Solución para el pecado original

Es importante que si se habla de las consecuencias del pecado original, se


hable también de su cura o su solución. Porque a pesar de que sin duda Adán
trajo grandes calamidades a la raza humana, también Cristo trajo grandes
bendiciones. Veamos entonces que funciona y que no funciona para quitar el
pecado original.

A. El Bautismo no es la solución

Según los escritos apologéticos y doctrinales de Calvino podemos notar que


existía una corriente de pensamiento que exaltaba el bautismo en agua. Para
ellos, el bautismo era necesario para eliminar el pecado original y restaurar al
hombre a la misma naturaleza justa de Adán con que fue creado antes de la
caída. Pero Calvino se separa de esta manera de pensar y de este punto de
vista agustiniano, para decir que el bautismo no elimina el pecado original y que

50
Ibíd. Pág. 9.

68
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

de ninguna manera el bautismo puede restaurar al hombre a su estado y justicia


originales.51

Para Calvino el bautismo era algo muy importante, incluso defendía que
debía ser administrado a los niños, pero le ofrecía más crédito a la obra redentora
de Cristo para la salvación de hombre.

…los signos o sacramentos que el Señor ha dejado e instituido en


su Iglesia, no consiste solamente en lo exterior ni en las ceremonias
visibles, sino que principalmente depende de las promesas y misterios
espirituales que el Señor ha querido representar con tales ceremonias…
La Escritura nos enseña que la remisión y purificación de los pecados,
que alcanzamos por la efusión de la sangre de Cristo, nos es
representada en el Bautismo en primer lugar; y luego, la mortificación de
nuestra carne, que conseguimos comunicando con su muerte, para
resucitar a una vida nueva…52

B. Jesucristo es la solución

Para el teólogo de la reforma solo Jesucristo justifica al hombre de este


pecado. Basado en Romanos 5 concluye que así como por Adán entró el pecado
“de la misma manera por la gracia de Cristo, la justicia y la vida nos son
restituidas”.53 De manera que Cristo le comunica su justicia al ser humano que
manifiesta obediencia en Él. Y le da vida al hombre porque es el único que tiene
el poder de abolir la muerte y el pecado. Tomando como base estas afirmaciones,
queda completamente claro que Jesucristo no vino a la tierra solo para darnos un
ejemplo a imitar sino que su primera venida fue el medio que traería justificación,
vida y redención al hombre enfermo y contaminado por la plaga del pecado
original.

51
Irwin, G. H. Juan Calvino su Vida y su Obra. Pág. 105.
52
Calvino, Juan. Institución a la religión Cristiana. Libro 4. Cap. XVI. 2.
53
Ibíd. Libro 2. cap. I. 6.
69
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

Conclusiones

Sin lugar a dudas la historia relatada en Génesis capitulo tres es la más triste
para la raza humana. Podemos darnos cuenta de esta realidad al estudiar con
Calvino las consecuencias del pecado original o depravación, como también él lo
llamaba. Dentro de estas consecuencias vimos la condenación eterna, prometida a
Adán como advertencia para que no tomara del fruto del árbol del conocimiento del
bien y del mal. También vimos como este pecado se propaga a toda la raza
humana, a cada descendiente y a todas las partes del alma hasta contaminar al
hombre totalmente. Y además de traer desorden espiritual nos convierte en
pecadores por naturaleza, en esclavos del vicio y la maldad. Pero para los
predestinados a salvación, la sangre de Cristo nos lava y nos purifica. Y en esto
último podemos ver la infinita misericordia del Señor puesta a disposición del
hombre. Porque de la misma manera que Dios no puede dejar al pecador sin
castigo por su justicia divina, tampoco abandona su creación especial producto
de su amor, sino que le presenta gratuitamente una vía de salvación.

70
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

Cuestionario de la Lección 4

1. ¿Cuáles son algunas consecuencias del pecado original según Calvino?


2. ¿Cuál es la diferencia que existe entre Adán y sus descendientes?
3. ¿En qué sentido la transmisión del pecado de Adán es una consecuencia
para el hombre?
4. Explique cuáles son los dos puntos de vista que se mencionan en este
estudio en cuanto al bautismo y el pecado original.
5. ¿Cuál es el alcance del pecado original en cuanto a la condenación
eterna?
6. ¿Por qué cree usted que Calvino tiene que aclarar que el pecado original
contamina todas las partes del alma?
7. ¿Explique con sus palabras por qué el bautismo no elimina el pecado
original?
8. ¿Cuál es la única solución para el pecado original?

71
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

Lección V

La Doctrina del Pecado en el


pensamiento de Juan Calvino.
Definición, tipos y causas

Introducción

Irwin comenta que Beza, tuvo muchas oportunidades de conocer a fondo el


carácter de Calvino y basado en eso dejó varios comentarios acerca de él. Un
fragmento de uno de ellos dice:

Aunque la naturaleza había dotado a Calvino con cierta seriedad digna,


tanto de modales como de carácter, nadie era más agradable que él en la
conversación ordinaria. Podía soportar de una manera admirable las faltas de
otros, cuando procedían de mera flaqueza; así, nunca avergonzó a nadie por
inoportunas represiones, ni desalentó a ningún hermano flaco; pero, por otro
lado, nunca pasó por alto ni trató con lenidad el pecado voluntario...54

Este valioso comentario de Beza nos dice mucho de la manera en que


Calvino advierte la doctrina del pecado en su propia vida y en relación con
los demás. Al tener este equilibrio nos hace pensar que la clasificación y los
conceptos que pueda concluir tienen una fuerte base en el sentido común,

54
Irwin, G. H. Juan Calvino su Vida y su Obra. Pág. 52.

72
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

la teología profunda y un carácter cristiano bien forjado. Y por supuesto a la


hora de sacar nuestras propias conclusiones del tema, siempre tendremos
en cuenta que estudiamos una fuente sólida y firme.

Calvino no solo disertó del pecado original, sino también de otros tipos de
pecado. En este capítulo se estará tratando la definición del pecado ya en sentido
general, los diferentes tipos de pecado en que los clasificó, la causa específica
que da origen a los pecados en el hombre y por último, se define que el hombre
es el responsable del pecado en el mundo.

I. Definición de pecado

Calvino en toda la Institución no trata de dar un concepto amplio del pecado,


más bien se limita a presentar una sentencia breve de este tema, pero que al
mismo tiempo lo define correctamente. Dice que el pecado y cualquiera que este
sea, es constituido rebeldía contra la voluntad de Dios y prevaricación de la ley.
Lo que provoca necesariamente Su ira y la pronunciación de sentencia de
muerte.55 También, en otro de sus libros nos dice que “es tanto esta perversidad
de la naturaleza humana que es la fuente de todo vicio, como los malos deseos
que nacen de ella, y los injustos crímenes que éstos originan: homicidios, hurtos,
adulterios y otros parecidos”.56

II. Diferentes tipos de pecado

A. Ocultos y públicos, ligeros y horrendos

Calvino explica que existen diferentes clases de pecado. Dentro de ellos


menciona los pecados ocultos o vicios secretos y los pecados públicos o notorios.

55
Calvino, Juan. Institución a la religión Cristiana. Libro 2. Cap. VII. 59.
56
Calvino, Juan. Breve Instrucción Cristiana. Pág. 8.

73
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

Otra división está dada por los pecados ligeros y crímenes patentes o vicios
horrendos. Esta distinción la establece para fundamentar los diferentes grados
de disciplina dentro de la Iglesia. Es decir, los pecados ocultos se deben
reprender en privado, los pecados visibles a los ojos de todos, se reprenden en
público y cuando se trata de un vicio horrendo es necesario, en muchos casos,
llegar a la excomunión.57

B. Voluntarios y por ignorancia

También hace alusión a los pecados voluntarios y pecados por ignorancia.


Y como la palabra lo indica, los pecados voluntarios son los que se cometen con
toda conciencia de lo que se está haciendo. Un ejemplo bíblico es el caso de
David. Él sabía que el adulterio es pecado, sin embrago cometió adulterio con
Betsabé. Por otro lado, el pecado por ignorancia es cuando se incurre en alguna
falta sin saber que Dios lo desaprueba. Calvino enfatiza en que ambos tipos de
pecado tienen perdón en Cristo.58

C. Por debilidad

También en la Institución se mencionan los pecados por debilidad. Esta


clase de pecado es cometida con frecuencia producto a debilidades y flaquezas
de la carne. Dentro de ellos menciona juramentos innecesarios, injurias
impulsadas por la ira e infidelidades que no constituían escándalos dentro de la
Iglesia. Estos pecados son tratados desde tiempos antiguos como faltas ligeras,
pero no por menospreciar estos pecados cotidianos en los feligreses como si
fueran más pequeños delante de Dios, sino para evitar que la disciplina
eclesiástica trajera más tristeza que provecho a los fieles del Señor.59

57
Calvino, Juan. Institución a la religión Cristiana. Libro 4 Cap. XII. 3. b.
58
Ibíd. Libro 4 Cap. I. 28.
59
Ibíd. Libro 4 Cap. I. 29.

74
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

D. Mortales y veniales

Existe además otra clasificación para los pecados pero dentro de la doctrina
católica, que son los denomina pecados mortales y veniales. Los veniales son
malos deseos, pero sin consentimiento deliberado. Este pecado puede encontrar
un fácil perdón en la confesión y no conducen a la muerte eterna, porque el
pecador está fuera de la ley pero no en contra de ella. Por su parte, los pecados
mortales, son mucho más graves. El Catecismo del Padre Astete afirma que el
pecado mortal es cuando se hace, se dice, se piensa o se omite algo contra la
ley de Dios o la ley humana en materia grave, con plena advertencia y pleno
consentimiento.

Con relación a este tema solo se quiere puntualizar que Calvino los rechazó
completamente. En cuanto a los veniales, dijo que todos los pecados van en
contra de la ley de Dios y separan al hombre de Su amor, por tanto, no se puede
decir que existan pecados que no conlleven a la ira de Dios y a la muerte.
Mirándolo desde este punto de vista todos los pecados son mortales. Miremos lo
que escribió Calvino literalmente: “Ahora bien, donde quiera que hay transgresión
de la Ley, está preparada la maldición de Dios. No hay, pues, fundamento para
excluir de la sentencia de muerte a los deseos, por pequeños que sean”. 60

Atendiendo a los pecados mortales, Calvino tampoco estuvo de acuerdo


con los católicos romanos. Él entendía en su concepto de pecado, que cada
transgresión por grave fuera, siempre encontraría en la gracia de Dios el oportuno
socorro. Porque la misericordia de Dios es infinita. En la Institución él lo expresa
de esta manera: “En cuanto a los pecados que cometen los santos y los fieles,
sepan que son veniales, no por su naturaleza, sino porque por la misericordia de
Dios son perdonados”.61

60
Ibíd. Libro 2 Cap. VII. 58.
61
Ibíd. Libro 2 Cap. VII. 59.

75
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

III. Dios no es la causa del pecado

Al parecer en tiempos de Calvino, ya existía la tendencia de culpar a Dios


por el pecado del hombre. Para ellos Dios mismo era la causa del pecado, por
cuanto pudo haber provisto un mejor camino de salvación al prevenir la caída de
Adán. Además, la causa del pecado era la naturaleza con que Adán fue creado
y de esta forma también le atribuían a Dios el origen de este mal.

Al referirse, Calvino, a la creación del ser humano, expresa que es “la más
excelente de las obras de Dios”. Porque es en el hombre donde Dios muestra
Su justicia, Su sabiduría, Su bondad. Este planteamiento viene siendo una
defensa al carácter santo de Dios y una acusación al pecado del hombre. Porque
al conocer el estado de integridad con que fuimos creados originalmente,
debemos descartar el pretexto de algunos impíos de que el mal que habita en
sus naturalezas les viene del mismo Dios. De manera que ningún vicio en la
naturaleza del hombre se le puede imputar o reprochar a Dios, porque el hombre
no fue creado en maldad sino en santidad y perfección.62

IV. La corrupción de la naturaleza

Insiste Calvino en que Dios ha mostrado su sabiduría desde la creación.


Nada de lo que Dios ha creado es malo en su propia naturaleza. Entonces lo
malo, tanto en el ser humano, como en el diablo, no procede de la naturaleza con
que fueron creados. Tampoco el pecado que se desprende de la perversidad de
ellos, tiene su origen en la naturaleza. ¿De dónde procede entonces? Para este
pensador procede de la “corrupción de la naturaleza”.63 De manera que el hombre
transgredió los límites de Dios y corrompió la naturaleza justa con que había sido
creado y de ella procede el pecado. Y en este punto Calvino aclara que el hombre
posee una “perversidad o corrupción natural”, y es natural porque el hombre la

62
Ibíd. Libro 1 Cap. XV. 1.
63
Ibíd. Libro 1 Cap. XIV. 3.

76
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

tiene desde que nace y no viene como algo impuesto o aprendido más tarde,
pero a la vez se trata de “una cualidad adventicia con una procedencia extraña,
que no una propiedad sustancial innata”. 64

V. El hombre es responsable por su pecado

Para demostrar este punto, Calvino hace alusión a la mitología griega,


donde los humanos culpan a sus dioses por sus pecados, faltas y errores
cometidos. También inculpan a una fuerza desconocida que obra
irresistiblemente sobre los dioses, los hombres y los sucesos. Pero en ambos
casos el ser humano no es responsable delante de Dios. A lo que Calvino
responde diciendo que “la providencia no destruye la responsabilidad del
hombre” Es decir, independientemente de la soberanía de Dios obrando también
en la salvación del ser humano, sobre el hombre recae todo el peso de la
responsabilidad del pecado.65

Sigue diciendo que los hombres que insisten en cometer pecados


supuestamente ordenados por Dios, enfatizan que no pueden ser castigados.
Porque si Dios es el autor de los pecados entonces el castigo sobre el hombre
sería impuesto injustamente. A lo que Calvino objeta que aunque Dios use al
pecador, este sigue teniendo responsabilidad por su propio pecado.
Argumentando sobre este tema dice que “…los ladrones, homicidas y demás
malhechores son instrumentos de la providencia de Dios, de los cuales se sirve
el Señor para ejecutar los designios que en sí mismo determinó; pero niego que
por ello puedan tener excusa… porque en sí mismos hallan todo el mal”.66

De manera que, aunque Dios use al pecado como instrumento para ejecutar
su voluntad, el hombre no puede tapar su pecado con la justicia del Señor.

64
Ibíd. Libro 2 Cap. I. 11.
65
Ibíd. Libro 1 Cap. XVII. 3.
66
Ibíd. Libro 1 Cap. XVII. 5.
77
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

Porque también la propia perversidad y maldad en el corazón humano lo


arrastran hacia la oscuridad, para convertir en inexcusable su mal proceder. Al
mismo tiempo, Dios no se contamina con el pecado, aunque lo utilice y conserva
la capacidad de juzgarlo con justo juicio.

78
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

Conclusiones

Queda claro que Dios no es la causa del pecado del hombre y por tanto es
el mismo hombre el responsable de su maldad. Porque Dios creó al hombre,
según Su justicia, en completa perfección. Toda la soberanía divina no elude al
hombre de su responsabilidad.

La obra perfecta de Dios no debe buscarse en la naturaleza ya caída, sino


en la perfección con que se creó el primer hombre. El pecado no es un problema
de origen en el hombre, sino algo que surge después de ser creado este. Viene
producto al abandono de la condición de perfección con que fue creado Adán.
Además, el hombre fue creado con rectitud por la bondad de Dios por tanto, el
hombre recibe la responsabilidad de su caída dramática.

79
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

Cuestionario de la Lección 5

1. Exponga la definición de pecado que presenta Calvino en este estudio.


2. ¿En cuántos tipos Calvino los clasifica?
3. Mencione el motivo por el cual Calvino prefiere clasificar los pecados.
4. ¿Cuál debe ser el trato hacia los pecados por ignorancia y por qué?
5. ¿Qué dice Calvino de los pecados mortales y veniales de la iglesia
católica?
6. ¿Qué argumentos usaban algunos para justificar que Dios era la causa
del pecado?
7. ¿Por qué Dios no puede ser la causa del pecado?
8. ¿Cuál es la causa del pecado?
9. ¿Qué argumento emplea Calvino para responsabilizar al hombre por su
pecado?

80
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

Lección VI

La Doctrina del Pecado en el


pensamiento de Juan Calvino.
Consecuencias

Introducción

Dice la Biblia que Dios creó al hombre a su imagen y semejanza. Y este


Creador tan sabio pudo sacar del polvo de la tierra una criatura especial. Pero
Dios le advirtió que si dejaba entrar el pecado tendría consecuencias negativas.
Donde esta es la temática que aborda esta Lección: Las consecuencias del
pecado en el hombre.

Ya en lecciones anteriores tratamos las consecuencias de pecado original,


ahora estaremos viendo las consecuencias del pecado dentro de la naturaleza
humana, según lo analizara el teólogo de la reforma protestante. Es decir, ¿El
ser humano enfrenta alguna consecuencia por haberse transmitido el pecado
hasta nuestros días? ¿Cómo afecta al hombre su condición de pecador? ¿Qué
hace Dios cuando nos ve hundidos en la maldad? Es evidente que el pecado
hace desaparecer la justicia con que había sido creado, corrompe la imagen de
Dios en la raza humana, impide el conocimiento del Creador, desvanece el libre
albedrío y la voluntad, corrompe los dones, deja al hombre desprovisto de todo
bien, sujeto al mal y proscrito al juicio y castigo del Gran Juez.

81
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

También estaremos tocando brevemente lo que Calvino dijo en cuanto a las


consecuencias para el pecador dentro de la iglesia. Es decir, la iglesia debe
disciplinar a toda persona dentro de sus muros que no cumple con el mensaje
que es predicado. Y para ello tiene diferentes opciones de disciplina que puede
aplicar según las exigencias del evangelio.

I. Consecuencias del Pecado

Podemos hacernos la siguiente pregunta: ¿el hombre realmente merece


enfrentar las consecuencias del pecado? O esta otra ¿tiene Dios el derecho de
emitir un juicio contra su creación por estar hundida en un pecado del que no
pude salir? Ya vimos en la lección pasada las causas del pecado. Cada una de
esas causas hace al hombre responsable por su desobediencia. Pero además,
Calvino argumenta que el hombre peca por necesidad pero también
voluntariamente.

El teólogo que nos ocupa en este estudio, establece una diferencia entre
necesidad y voluntariedad para referirse al pecado en el hombre. En el caso del
pecado por necesidad, establece que el ser humano peca porque está bajo la
necesidad de pecar. Esto se debe a su naturaleza tan corrompida y malvada que
constantemente lo arrastra y encadena al mal. Por otro lado, el pecado voluntario
establece que se comete porque se posee la libertad para elegir. Sin embargo,
para evitar el error de concluir que el hombre tiene la capacidad de evitar el
pecado por cuanto es libre de cometerlo, Calvino dice que el hombre peca
voluntariamente pero también por necesidad:

…¿quién osará decir que el hombre no peca voluntariamente porque


se ve forzado a pecar? …el hombre, después de su corrupción por su caída,
peca voluntariamente, no forzado ni violentado; en virtud de una inclinación
muy acentuada a pecar, y no por fuerza; por un movimiento de su misma
concupiscencia, no porque otro le impulse a ello; y, sin embargo, que su
naturaleza es tan perversa que no puede ser inducido ni encaminado más

82
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

que al mal. Si esto es verdad, evidentemente está sometido a la necesidad


de pecar.67

Para justificar esta afirmación utiliza los ejemplos de la bondad de Dios y la


maldad del Diablo. En el primer caso afirma que la bondad de Dios está
intrínsecamente unida a su divinidad. Por tanto, Dios es bueno por necesidad y
al mismo tiempo es libre en su voluntad para obrar el bien. Igualmente en el
ejemplo del Diablo nos dice que este peca debido a que después de su caída
quedó completamente alejado del bien, de tal manera que no puede hacer otra
cosa que el mal. Entonces no es capaz de hacer solo lo malo, pero al mismo
tiempo peca voluntariamente.

De todo lo anteriormente expuesto se concluye que el hombre es


responsable por su pecado. En ninguna medida puede insinuar que Dios es la
causa. Por tanto, Dios no es injusto cuando somete al hombre a castigo por su
maldad. Y inevitablemente el hombre tiene que encarar las consecuencias por
sus faltas, de las cuales algunas son mencionadas a continuación.

A. Impide el conocimiento de Dios

Según el reformador que estamos estudiando, por inspiración de Dios todos


los hombres tienen sembrada la semilla de la religión. Es decir, cada ser humano
posee la posibilidad en su ser de conocer a Dios. Pero apenas uno de cada cien,
aprovecha esta oportunidad para acercarse a su Creador. La mayoría
conscientemente se aparta de Dios y no buscan un verdadero conocimiento de
Aquel que los creó a su imagen y semejanza. Pero, ¿cuál es la causa de que no
se busque a Dios de la manera que Él se da a conocer? La respuesta de Calvino
a esta pregunta es: el pecado en el corazón del hombre. Y las diferentes caras
del pecado que impiden que la semilla del conocimiento de Dios germine son, en

67
Calvino, Juan. Institución a la religión Cristiana. Libro 2 Cap. III. 4.

83
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

este caso, la superstición, la presunción, el orgullo, la vanidad, la soberbia, la


perversidad y la arrogancia.

B. Tanto el cuerpo como el alma se contaminan con el pecado

Apelando a diferentes pasajes del Nuevo Testamento, Calvino demuestra


que el cuerpo y el alma son esencias diferentes. Donde el alma es la parte
principal en el ser humano. Pero distingue el alma del cuerpo, también para
enfatizar que en ambas reside la contaminación del pecado. Es decir, tanto el
cuerpo como el alma, están corrompidos por el pecado. Igualmente en el cuerpo
y en el alma, textualmente de Calvino, “residen las manchas del pecado”. Esta
última conclusión sale, sobre todo, de la exhortación de Pablo a los creyentes a
que se limpien “de toda contaminación de carne y de espíritu” (2da Cor. 7. 1). En
muchos de sus escritos habla abiertamente de la perversidad de la carne que
solo produce muerte, pero también dice que: “…la tiranía del pecado, después
de someter al primer hombre, no solamente consiguió el dominio sobre todo el
género humano, sino que domina totalmente en el alma de cada hombre en
particular,…” 68

C. Somete al libre albedrío

Calvino se pone de acuerdo con Agustín en cuanto a sus ideas acerca del
pecado y el libre albedrío. Confirma que el ser humano cuando fue creado recibió
libre albedrío, pero al pecar perdió esta fuerza para escoger entre el bien y el mal,
limitándose solamente a escoger el mal y el pecado. Y solo puede buscar el bien
cuando opera la gracia de Dios en él, porque la voluntad propia se somete más
bien al pecado. Continúa diciendo que no tiene sentido que el impío se vanaglorie
de tener libre albedrío, cuando él mismo y su libre albedrío son esclavos del
pecado.

68
Ibíd. Libro 2 Cap. II. 1.

84
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

Dice además que el término libre albedrío solo se usa para hacer una
aclaración: que el hombre no pueda excusarse de cometer pecado. Que no
pueda usar la idea de que no existe libre albedrío para expresar que peca por
necesidad y por tanto no puede ser juzgado por el mal cometido. Pero en realidad
aconseja que es un término que no debiera ser usado por nadie e incluso que
traería provecho a la iglesia si lo olvida. Para establecer de esta manera una total
dependencia de Dios y atribuirle solo al Espíritu Santo el mérito de las buenas
obras. Por tanto, Calvino concluye que: “…es cosa indiscutible que el hombre
carece de libre albedrío para obrar bien si no le ayuda la gracia de Dios”.69

D. Corrupción de los dones naturales

Dentro de estos dones Calvino enumera la razón para juzgar y distinguir lo


bueno y lo malo, la integridad del entendimiento, la rectitud del corazón, la
voluntad. Y con relación a ellos, concluye que no se pierden por completo pero si
se debilitan, se dañan y se oscurecen. Por ejemplo, el hombre puede tener algo
de entendimiento, pero no puede concluirse que este entendimiento sea perfecto,
sino que está distorsionado por el pecado. Con esto se opone a lo que exponen
los filósofos antiguos cuando dicen que el hombre está corrompido solo en su
naturaleza sensual, pero que su razón es perfecta, y que conserva la libertad de
la voluntad.

E. Pérdida de los dones sobrenaturales

Explica Calvino que los dones sobrenaturales se perdieron totalmente como


consecuencia del pecado. Ahora bien estos dones le fueron otorgados por Dios
al hombre con el objetivo de que a través de ellos alcanzase la vida eterna. De
manera que los dones sobrenaturales no son más que la fe, la justicia, el deseo
de vivir en santidad, el amor a Dios y al prójimo, con los cuales se alcanza

69
Ibíd. Libro 2 Cap. II. 6.

85
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

salvación. Pero que se pierden totalmente producto del pecado y solo pueden
recuperarse con la regeneración.70

F. Privado de la voluntad

La definición que Calvino presenta de voluntad es que es la encargada de


elegir. En ella reside la libertad del albedrío. Y dice que el hombre no tiene la
capacidad natural de seguir lo que es bueno para él, por cuanto la voluntad es
prisionera del pecado y se encuentra desprovista de su libertad. También
contradice los escolásticos cuando explican que existe una débil facultad en el
alma para hacer uso de la voluntad y escoger el bien, aunque esta no lo lleve a
realizar un esfuerzo consciente y decisivo. Concluye entonces que producto del
pecado en el hombre, su voluntad también está sometida al pecado, por tanto se
inclina solamente al mal, por tanto toda inclinación al bien no es producto de la
voluntad, sino de la obra del Espíritu Santo en la vida del hombre. En sus propias
palabras dice que: “Todos somos por nuestra naturaleza pecadores;… Y si todo
hombre está sometido a pecado, por necesidad su voluntad, sede principal del
pecado, tiene que estar estrechamente ligada”.71

G. Sometido a la necesidad de pecar

Otra consecuencia que nos describe Calvino en el hombre producto del


pecado es la de pecar por necesidad. Es decir, que cada ser humano se ve
obligado a pecar porque su naturaleza corrompida está inclinada constantemente
al mal y su concupiscencia lo encadena cada día a lo malo. De tal manera que el
hombre no puede hacer otra cosa que el mal. De esta forma no tiene la capacidad
por sí mismo de evitarlo. Sin embargo, no quiere esto decir que pueda excusarse

70
Ibíd. Libro 2 Cap. II. 12.
71
Ibíd. Libro 2 Cap. II. 27

86
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

delante de Dios del mal que hace, porque al mismo tiempo es libre para pecar
voluntariamente, lo que lo lleva ante el juicio de Dios.

H. Desprovisto del bien

Calvino haciendo alusión a la carta de Pablo a los Romanos, reafirma la


condición tan baja en la que el hombre se ha degradado, buscando de continuo
el mal y quedando desprovisto su corazón de todo bien. Destaca que el pecado
no se limita a épocas diferente, sino que en todos los tiempos la naturaleza
humana permanece en corrupción. Todo ser humano, producto del pecado,
carece de esperanza, justicia, integridad, pureza, temor de Dios y salvación.
También hace notar que pierde la inteligencia, porque si fuera sabio no se
apartaría de su Creador. No puede hacer bien alguno contaminando su cuerpo
con toda clase de abominaciones. Todo esto aparece en el hombre por
perversión natural y no sobre la base de un solo pecado en específico. Hace
también la salvedad de que no en todos los hombres se exhiben todas estas
faltas, pero si se puede concluir que en cada corazón humano existe la maldad y
que “…el alma, hundida en este cieno mortal, no solamente está cargada de
vicios, sino además vacía de todo bien”.72

I. Castigo sobre el alma

En la Institución, Calvino dedica unos párrafos a probar la existencia del


alma como una esencia diferente del cuerpo. Que está latente mientras el cuerpo
vive, pero mantiene su existencia una vez que el cuerpo muere. Y esta alma
puede ser hallada culpable por su pecado y consecuentemente castigada. Pero
no todas reciben el mismo trato, es decir, unas gozarán de la presencia de Dios
y otras serán sometidas a tormentos en el infierno. Para estas afirmaciones

72
Ibíd. Libro 2 Cap. III. 2.

87
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

Calvino presenta base bíblica fundamentalmente, en las palabras de Jesús en


Mt. 10,28, Lc. 12,5 y el relato del rico y Lázaro en Lc. 16.

II. La disciplina en la Iglesia para corregir el pecado

Dentro de la congregación, a fin de mantener el buen orden, es necesaria la


disciplina. También es importante destacar que existen diferentes grados de
disciplina establecidos por el Señor en las Escrituras, desde una amonestación en
privado hasta la excomunión. Esto dependerá de la gravedad del pecado cometido.
Y existe la disciplina común que se aplica al pueblo en general, pero al clero se le
debe aplicar encima de la común otra particular. Pero todo esto se estará ampliando
en los próximos párrafos de la manera que Calvino lo plasmó en sus escritos.

A. Amonestaciones privadas

Como su nombre lo indica este grado de disciplina consiste en una reprensión


a la persona en su casa y en privado. Esta tiene lugar cuando esa persona no
cumple con su deber de manera voluntaria o no está viviendo con honestidad. Se
realiza en cumplimiento del ejemplo de Pablo de Hechos 20, donde dice que el
apóstol no cesaba de amonestar a cada uno de día y de noche. También dice que
esta disciplina debe ser administrada por los hermanos de la iglesia, pero
mayormente por los pastores y presbíteros, los cuales después de impartir la
doctrina en público, deben preocuparse por amonestar y exhortar en las casas a
los que manifiestan negligencia en el cumplimiento de las enseñanzas.

B. Amonestaciones públicas

Siguiendo el orden que Cristo estableció en la Palabra, si la persona no


obedece a la primera amonestación, continuando con su mal comportamiento, se
ha de proseguir con la segunda. Esta tiene dos fases, la primera consiste en una
nueva amonestación delante de testigos y la segunda es otra amonestación pero

88
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

delante de toda la iglesia, con el objetivo de que respete la iglesia, se someta y se


enmiende.73

C. Excomunión

Esta se lleva a cabo cuando la persona no obedece a las amonestaciones que


se le hacen, persistiendo en su pecado. Además de que Dios puede ver cada
pecado en el hombre y en consecuencia castigarlo, también el mismo hombre, en
este caso los pastores, haciendo buen uso de la Palabra de Dios, pueden tomar
medidas en contra del pecado. Y consiste en separarlo de la compañía de los fieles.
A través de la excomunión se condena la práctica pecaminosa de la persona, se le
advierte que si no se enmienda será condenado por la eternidad. Se persigue que
el excomulgado repare su falta y regrese a la comunión con los demás hermanos,
para que no se menosprecie el juicio de la Iglesia, que otros miembros en santidad
no sean corrompidos con el mismo pecado y que se mantenga limpio y sin tacha el
Cuerpo de Cristo.74

73
Ibíd. Libro 4 Cap. XII. 2
74
Calvino, Juan. Breve Instrucción. Pág. 60.

89
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

Conclusiones

Dios manifiesta profundamente su carácter sabio en la creación del hombre


al darle un acabado con mayor excelencia que al resto de su obra. Pero el hombre
corrompió su naturaleza con el pecado, de esta manera las consecuencias y la
culpa recaen en el mismo hombre. Además, aunque el ser humano peca por
necesidad, también lo hace voluntariamente y ni siquiera la ignorancia le excusa
de su pecado. Sin olvidar que Dios está airado con el pecador. Y por estas
razones Dios castiga justamente al pecador por su pecado.

90
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

Cuestionario de la Lección 6

1. ¿El hombre debe enfrentar las consecuencias por el pecado? ¿por qué?
2. Menciones las consecuencias del pecado abordadas por Calvino.
3. Explique la consecuencia: Tanto el cuerpo como el alma se contaminan
con el pecado.
4. Explique la consecuencia: Somete al libre albedrío.
5. Explique la consecuencia: Privado de la voluntad.
6. Explique la consecuencia: Sometido a la necesidad de pecar
7. Explique la consecuencia: Desprovisto del bien
8. ¿Qué tipo de disciplinas debe aplicar en la Iglesia para corregir el pecado
según Calvino?
9. ¿En qué consiste la excomunión?
10. ¿Se debería aplicar en nuestros días? ¿Por qué?

91
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

Lección VII

La Doctrina del Pecado en el


Pensamiento de Juan Calvino.
Solución

Introducción

Hoy en día permanece la Iglesia católica con todas sus enseñanzas y


doctrinas. Pero, también libremente la Iglesia de Cristo establece lo que la Biblia
dice. Por otro lado, están las diferentes doctrinas de sectas falsas, ateísmo,
humanismo, etc. por lo que el hombre moderno puede ver diferentes versiones del
evangelio y otras corrientes. Puede escuchar al mismo tiempo distintas teorías en
cuanto a cualquier tema de religión o bíblico y luego sacar sus propias conclusiones.
Por lo que resulta asombroso ver como en el siglo XVI solo se predicaba y exigía la
doctrina Católica. Y aun así los reformadores sacaron a la luz la Palabra de Dios.
Ellos tuvieron la valentía de exponer criterios bíblicos distintos a los que el
catolicismo enseñaba. A precio de sus propias vidas reinterpretaron las Escrituras
con el Espíritu Santo y luego la compartieron con el mundo. El clero presentaba su
interpretación de las Escrituras donde ellos eran los herederos y administradores
únicos del Reino de Dios. Mientras que los reformadores presentaban una
reinterpretación donde daban libre acceso a cualquier persona a entrar por si solo
a la presencia de Dios y ser aceptado para recibir la salvación total. Precisamente
el tema de la redención del pecado que se trata en esta lección, era uno de mucha
discusión e incluso entre los reformadores no existía un consenso.

92
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

I. Redención del pecado

Dios en su providencia tiene misericordia del pecador. Reconoce Calvino


que el hombre no acepta su pecado delante de Dios para proceder con
arrepentimiento. Aun cuando llegan las adversidades no se acuerda de su
pecado y evita la penitencia. Pero Dios, presentando sentido a su providencia, no
ejecuta el castigo que cada pecador merece, sino que juntamente con el castigo
merecido, se conduce con misericordia y hace que su gloria resplandezca para
que los ojos del pecador sean iluminados. Por tanto, en la redención del pecador
todo el crédito es del Señor. Calvino define la remisión de los pecados como la
justicia que el ser humano recibe por gracia cuando todos sus pecados son
perdonados por Dios y hecho así puro y libre del pecado.

A. Solo a través de Jesucristo

Dios tiene todo el poder basado en misericordia para librar al hombre del yugo
del pecado. Aunque lo que merece el pecador es el rechazo de Dios. “Pues por
esta misma bondad con la que antes sacó al pueblo judío de la servidumbre de
Egipto, libra también a todos sus servidores del eterno Egipto, es decir, del poder
del pecado”.75

Jesucristo el Hijo de Dios se constituye el único salvador, pues solo Él está


libre de toda mancha y contaminación. Solo Él puede salvarnos, porque como Rey
tiene autoridad sobre el pecado, el diablo, la muerte y el infierno. En la crucifixión
llevo la maldición que merecía el pecado de la descendencia de Adán. Porque se
dice que la cruz es maldición y Jesús al ser crucificado se sometió a la maldición,
de esa forma la maldición que estaba reservada para el hombre, fue transferida a
Él. También de la misma manera que Cristo fue sepultado, el hombre es sepultado

75
Calvino, Juan. Breve Instrucción. Pág. 11.

93
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

con su pecado y librado así del poder del Diablo y de la muerte. Donde además, la
sangre que derramó en la cruz, trae la purificación de todo pecado.76

Pero en el hombre existe un proceso para llegar a la remisión por Cristo. En


primer lugar, Calvino hace notar que el perdón de los pecados y la redención que
viene como resultado de ese perdón, no solo es algo bueno y grandioso para el
hombre sino también necesario. Él observa que la purificación del pecado en
Jesucristo, la limpieza de toda contaminación es una necesidad para entrar en el
Reino de Dios por su justicia. Una vez que el hombre entiende que es una
necesidad ser redimido está listo para humillarse ante su Creador. La remisión del
pecado es algo muy importante porque constituye la base sobre la que reposa la
salvación, es la puerta que lleva a Dios y mantiene al hombre en Su Reino.

Pero a fin de ser redimidos eficazmente se debe tener conocimiento del


pecado por la Ley. El hombre debe estar consciente de su ruina espiritual, pobreza
y miseria. No debe albergar ninguna esperanza en sí mismo, ni confianza en sus
propias fuerzas y debe estar desprovisto de la justificación personal. Y aunque
traiga miedo y desesperación debe conocer acerca de su pecado, porque esto
conducirá al arrepentimiento verdadero y genuino. Por tanto, según Calvino, otro
paso importante en la redención del pecado es el conocimiento acerca de este. Y
Calvino también declara cual es el medio para que el hombre tenga conocimiento
de su pecado. Dice que Dios en su bondad y misericordia se revela al hombre con
Su Ley. Así que la transgresión de cada descendiente de Adán está demostrada a
través de la Ley, pero no con el objetivo de traer desesperación sino
arrepentimiento.77

Luego el arrepentimiento trae la conversión de la maldad del mundo al camino


de Dios. Además este arrepentimiento depende del nuevo nacimiento e incluye
básicamente tanto la aflicción de la carne como la vivificación espiritual. Sin pasar

76
Calvino, Juan. Institución a la religión cristiana. Libro 2. Cap. XVI. 6.
77
Calvino, Juan. Breve Instrucción. Pág. 20.

94
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

por alto que se ha de mantener la preocupación del arrepentimiento hasta el día de


la muerte, porque el renacimiento se consuma al dejar el cuerpo físico.78

Y como último paso dice que la fe juega un papel fundamental en la redención


y justificación del pecado comentando:

Pues se dice que somos justificados por la fe, no porque


recibamos en nuestro interior alguna justicia, sino porque nos es
atribuida la justicia de Cristo, como si fuese nuestra, mientras que
no nos es imputada nuestra propia injusticia. De tal manera que es
posible, resumiendo en una palabra, llamar a esta justicia la remisión de
los pecados. Esto es lo que el Apóstol declara expresamente
comparando con frecuencia la justicia de las obras con la justicia de la fe
y enseñando que una destruye a la otra.79

B. El papel de la iglesia en la remisión de los pecados

Aclara Calvino que no puede existir la Iglesia sin que primero exista la
remisión del pecado en el hombre. Pero para él, se alcanza el perdón una vez
que se es ciudadano y miembro de la iglesia. Porque la promesa divina de su
misericordia y perdón es presentada a los santos en comunión. “Así que la
remisión de los pecados es nuestra primera entrada en la Iglesia y reino de Dios,
sin lo cual no es posible ni pacto ni amistad con Dios”.80

Comenta Calvino también que esta remisión de los pecados no es una sola
vez, sino algo que el Señor realiza diariamente. Porque la misericordia de Dios
sería sin efecto de ejecutarse en una única ocasión. Y también, el ser humano se
siente cargado por el pecado toda la vida, por lo que continuamente necesita la
gracia divina para limpiar las faltas. Donde esta gracia divina para el perdón esta

78
Ibíd. Pág. 28.
79
Ibíd. Pág. 26.
80
Calvino, Juan. Institución a la Religión Cristiana. Libro 4. Cap. I. 20. a.
95
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

siempre dispuesta. Teniendo en cuenta estos elementos él llega a la conclusión


de “que por la misericordia de Dios, por los méritos de Cristo y por la santificación
del Espíritu Santo han sido perdonados nuestros pecados, y que se nos perdonan
diariamente mientras estamos incorporados al cuerpo de la Iglesia”.81

Estas conclusiones de Calvino están basadas en el siguiente pasaje: “Todo


lo que ligareis en la tierra, será ligado en el cielo; y todo lo que desatareis en
la tierra, será desatado en el cielo" (Mat. 18. 18). Según algunas interpretaciones,
en este texto Dios les delega a algunos hombres, perdonar o retener los pecados.
Esto hacia que estos hombres con autoridad, como el clero, mantuvieran en
servidumbre a los demás. Según el teólogo de la Reforma, los pastores tienen
autoridad sobre su grey pero conforme a lo que les es dado en la Palabra de Dios
y no fuera de ella. Porque la autoridad dada por Dios está sobre la Palabra y no
sobre los hombres. Y los hombres son servidores de esta Palabra. En este sentido
los pastores tienen autoridad de atar y desatar, bajo la promesa de la Palabra que
lo que “ates en la tierra será atado en el cielo…” Donde atar es sinónimo de retener
los pecados y esto se hace a través de la corrección y amonestación de cualquier
desobediencia. Y desatar es remitir los pecados. Pero se perdonan estos pecados
con la predicación del evangelio que es “poder de Dios para salvación a todo aquel
que cree”. De manera que no son los hombres los que pueden perdonar o retener
los pecados a las personas, sino que esta autoridad privilegiada está encerrada en
la Palabra de Dios y los hombres solo pueden y deben hacer buen uso de ella.82 El
Señor ha dado las llaves a la Iglesia para que ejercite constantemente este
ministerio, dispensando la gracia de tal manera que cada persona pueda
participar de ella. Donde la iglesia tiene el poder de perdonar pecados pero no
solo a los que se convierten a Jesucristo sino continuamente a todos los
feligreses. Y esto es necesario porque a pesar de que un hijo de Dios exprese al
máximo su santidad, no dejará de ser un pecador y por tanto, necesita cada día
la remisión de sus pecados para estar en la presencia de Dios. “…se nos

81
Ibíd. Libro 4. Cap. I. 21. b.
82
Calvino, Juan. Breve Instrucción. Pág. 57.

96
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

perdonan los pecados continuamente por el ministerio de la Iglesia, cuando los


presbíteros, o los obispos, a quienes se encomendó este oficio,…certificando que
Dios quiere hacerles misericordia y perdonarles”.83

C. Perdonar para recibir perdón

“…perdónanos nuestras deudas, como también nosotros perdonamos a


nuestros deudores…” (Mat. 6. 12). Este texto bíblico específico guarda mucha
relación con la doctrina del pecado. En el existe un criterio diferente entre la Iglesia
Católica imperante en la época y Calvino como representante de la teología de la
Iglesia Reformada, saliendo de la esclavitud de la religión. El catolicismo interpreta
tratando de imponer sus dogmas para sacar provecho y Calvino, para glorificar a
Dios.

En la opinión de la Iglesia católica no existe una relación personal entre el


hombre y Dios, sino que es necesaria la presencia de un mediador o sacerdote
humano, al que hay que confesarle los pecados. En la interpretación de Calvino de
estas palabras de Jesús, se expone que cada ser humano debe pedir perdón y
remisión de manera personal por sus pecados. Esta remisión es sobre la base de
la necesidad de perdón que existe en cada persona, bajo el conocimiento de que
es a Dios a quien debemos la pena, conscientes de que no existe otra manera de
redimirse y con la seguridad de que este perdón es gratuito de parte de la
misericordia de Dios.

Además el hombre debe pedir perdón por sus pecados de la misma forma que
es capaz de darlo a aquellas personas que lo hieren, lo injurian y lo ofenden. Sin
que esto llegue a convertirse en una condición donde se merece el perdón por
haberlo dado antes a otros. Sino más bien que constituye una manera de que el
hombre esté seguro y confiado de que ha recibido el perdón por cuanto, el mismo

83
Calvino, Juan. Institución a la religión cristiana. Libro 4. Cap. I. 22.

97
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

es capaz de haber tenido misericordia con otros extendiéndoles su perdón. Es decir,


si has sabido perdonar, puedes tener la confianza absoluta que Dios te ha sabido
perdonar también a ti. A lo que añade Calvino: “Por el contrario, por esta prueba o
señal, Dios borra del número de sus hijos a aquellos que, dejándose llevar de la
venganza y rehusando perdonar, mantienen sus enemistades arraigadas en su
corazón…” 84

II. Los medios externos no son efectivos para la redención del pecado

También se tratará en este estudio aspectos externos como el bautismo, las


buenas obras y las indulgencias. En tiempos de Calvino muchos eran engañados
creyendo que a través de estos recibían el perdón de los pecados. Pero el teólogo
de la reforma aclara desde la perspectiva bíblica, que es solamente a través de
la sangre de Cristo el perdón del pecado, que las indulgencias no tienen esta
capacidad suficiente y que el bautismo y las buenas obras tienen su lugar dentro
de la iglesia, pero no pueden suplantar la obra que solo Cristo puede lograr en
beneficio de la humanidad. Por tanto, los medios humanos para la redención no
son efectivos en la lucha contra el pecado.

A. El bautismo

En el pensamiento de este teólogo del siglo XVI, a través del bautismo el


hombre conoce y confiesa que ha muerto al pecado. Él establece que la limpieza
del pecado y el sometimiento de la carne a la voluntad de Dios, solo pueden lograrse
a través de la sangre y muerte de Cristo. Pero el bautismo realiza una
representación de estas dádivas. De manera que cuando las Escrituras invitan a
realizar el bautismo en agua, para la remisión de los pecados y para vida nueva, no
quiere decir que este bautismo sea la causa o el instrumento de esta regeneración,

84
Calvino, Juan. Breve Instrucción. Pág. 49.

98
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

sino que se recibe el conocimiento y la seguridad de que Cristo restaura la vida del
creyente.85

B. Las buenas obras

Uno de los puntos más atacados por el protestantismo lo constituye la


salvación por obras. La bandera de la sola fe es izada en cada baluarte reformador.
Pero Calvino sabe conjugar el tema del perdón del pecado con las obras. Parte
diciendo que ninguna obra califica delante de Dios y aunque Él quisiera extender la
justificación al hombre a través de una de sus obras, no encontraría ninguna digna
para hacerlo, porque ninguna obra humana tiene la perfección requerida, más bien
cada una de ellas contiene alguna mancha del pecado. Por tanto, la justificación del
pecado solo puede establecerse con la imputación de la justicia divina sobre el ser
humano. Y una vez que el hombre es declarado justo y limpio, sobre la base del
sacrificio expiatorio de Cristo, también las obras adquieren la categoría de justas y
reciben la aprobación y la recompensa de Dios. Con sus propias palabras
encontramos esta explicación en uno de sus libros para la iglesia:

…tenemos necesidad de Cristo para que su perfección cubra


nuestra imperfección, …lave nuestras manchas, …sin consideración
alguna a nuestras obras, cuyo valor no puede subsistir ante el juicio
de Dios. Pero cuando nuestras manchas, que de otro modo contaminan
nuestras obras ante Dios, son cubiertas de este modo, el Señor no ve en
nuestras obras más que una absoluta pureza y santidad. Por eso las
honra con grandes títulos y alabanzas. Las llama justas y las tiene por tales
…tenemos que concluir que la comunión con Cristo tiene tal valor que
precisamente por ella, no sólo somos justificados gratuitamente, sino que,
además, nuestras obras son tenidas por justas y recompensadas con una
remuneración eterna.86

85
Ibíd. Pág. 54.
86
Ibíd. Pág. 30.

99
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

C. Las indulgencias

En tiempos de Calvino, el pago de las indulgencias ya estaba perdiendo


fuerza porque la reforma protestante en Europa había atacado doctrinalmente
esta estafa. Pero por muchos años los pobres habían sido afligidos y engañados
con ella. Y a pesar de que no tenía ningún argumento bíblico para demostrarla y
que sus precursores no tenían una vida piadosa acorde a las enseñanzas del
Evangelio, subsistió por varios siglos. Tratamos acerca de ellas en este punto
porque Calvino demuestra que no eran el medio eficaz para el perdón de los
pecados.

La iglesia católica afirmaba que estas indulgencias eran el tesoro de la


Iglesia, una dispensación de los méritos de Cristo, de los apóstoles y mártires Y
que el Papa había recibido la autoridad de otorgar en las bulas. Tenían validez
de forma plenaria, en ocasiones por cien años y para algunos duraban solo cien
o cuarenta días. Demostrando con estos vanos argumentos que se trata solo de
una cuestión de hombres que nada tienen que ver con el verdadero Evangelio
del Señor Jesucristo. Calvino hace énfasis en que la Biblia enseña que la sangre
de Cristo es suficiente para el perdón de los pecados y por tanto para recibir la
salvación. Y denuncia que esta falsedad de Satanás profana la sangre de Cristo
y aparta del verdadero camino al pueblo, porque hace notar que lo que Cristo
hizo no es suficiente para que el hombre sea completamente perdonado y limpio
de pecado.87

D. La misa

Para Calvino los elementos son signos que representan el mantenimiento


espiritual que recibe el creyente del cuerpo y sangre de Cristo. Por eso se opone
radicalmente a los que enseñan que la misa es una ofrenda y un sacrificio por la

87
Calvino, Juan. Institución a la religión cristiana. Libro 3. Cap. V. 2.

100
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

cual se alcanza la remisión de los pecados. Él dice que erróneamente se ha


convertido en “una especie de expiación para satisfacer a Dios por los pecados,
así de los vivos como de los muertos”.88

88
Ibíd. Libro 4. Cap. XVIII. 1.

101
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

Conclusiones

Martín Lutero también habla acerca de la solución del pecado. Dice que los
pecados no pueden ser borrados a través de las indulgencias. Su tesis número
setenta y seis, versa de esta manera: “Decimos por el contrario, que las
indulgencias papales no pueden borrar el más leve de los pecados veniales…”.89
Para este teólogo de la reforma protestante el bautismo y la santa cena, eran de
mucha importancia. Interpretando las palabras de Jesús en Marcos 16. 16, dice
que el bautismo tiene como fin hacer salvo al creyente. Y ser salvo significa, entre
otras cosas, ser librado del pecado. Por tanto, el pecado era eliminado por la
administración del bautismo. En su catecismo mayor expresa: “que cosa tan
elevada y excelente es el bautismo que nos arranca del pescuezo del diablo, nos
da en propiedad a Dios, amortigua y nos quita el pecado”.90 E interpretando la
frase de Jesús “…esto es mi sangre… que por muchos es derramada para la
remisión de los pecados” de Mateo 26. 28, dice lo siguiente: “Esto quiere decir,
en pocas palabras que nos acercamos al sacramento para recibir un tesoro, por
el cual y en el cual obtenemos la remisión de nuestros pecados”. 91 Demuestra lo
anterior que Calvino tenía una teología más acabada que su contemporáneo en
cuanto la remisión de los pecados. Ambos estaban de acuerdo en cuanto a las
indulgencias pero con relación a las ordenanzas, Calvino llegaba a conclusiones
más certeras. Además veía el reconocimiento del pecado en el ser humano como
el agente que lo acerca a Dios. De manera que el arrepentimiento y la fe juegan
un papel muy importante en la remisión del pecado. Pero nada podía estar por
encima de la gracia de Dios obrando en el corazón del hombre, para que este se
incline hacia la salvación. Y era imposible que sacramentos externos, rituales y
sacrificios humanos, compitieran con lo que Cristo hizo en la cruz.

89
Lutero, Martín. Las 95 tesis. Tesis 76.
90
Lutero, Martín. El Catecismo Mayor. Cuarta Parte, Pág. 61.
91
Ibíd. Pág. 68.
102
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

Cuestionario de la Lección 7

1. Explique el papel del arrepentimiento en la remisión del pecado.


2. Explique el papel de la fe en la remisión de los pecados.
3. Haga una comparación entre la opinión de Calvino y otros
teólogos, en cuanto al papel de la iglesia en la remisión de los
pecados.
4. Explique Mat. 6. 12 a la luz de este estudio.
5. ¿Por qué el bautismo no limpia de pecado?
6. ¿Por qué las buenas obras no salvan?
7. Diga el significado de las indulgencias para el catolicismo.
8. ¿Cree usted que las indulgencias afectaban la relación del
hombre con Dios? ¿Por qué?

103
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

Lección VIII

La Doctrina del Pecado en el


Pensamiento de Juan Calvino.
Repercusión en épocas posteriores

Introducción

Sin lugar a dudas, las enseñanzas de Calvino ejercieron una gran influencia
sobre la teología posterior. Muchas de sus doctrinas fueron muy acogidas,
desarrolladas y sistematizadas por teólogos como Martin Bucer, Heinrich
Bullinger, Pietro Martire Vermigli, Ulrico Zuinglio, Teodoro de Beza, Francisco
Gomaro y Guillaume Farel. Influyeron también a reformadores británicos como
Thomas Cranmer y el escocés John Knox.

Pero también algunas de sus doctrinas fueron atacadas. Dentro de las más
criticadas se destacan la doctrina de la reprobación o elección para condenación
y la doctrina de la predestinación, la cual con diferentes puntos de vista fue plato
fuerte en la mesa de dialogo de los teólogos posteriores.

Pero es de destacar que estas no fueron doctrinas sobresalientes en la


teología de Calvino. Los rasgos sobresalientes de la enseñanza de Calvino lo
ocupa la doctrina de la soberanía de Dios y la providencia divina, pero para
enfocar a sus lectores en una adoración correcta hacia su Dios, librarlos de los
temores de la superstición y los peligros circundantes y proveer ánimo y
esperanza duradera.

104
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

En esta lección se toca la doctrina del pecado en épocas posteriores a la


reforma protestante en Ginebra y en pensadores que hicieron su teología
después de Calvino. Pero que en gran medida se hace notar la influencia del
reformador ginebrino en ella. No pretendo tratar toda la doctrina del pecado
influenciada por Calvino, por cuanto es muy extensa. Tampoco es mi intención
decir que trataré solo los aspectos más importantes. Solo pretendo presentar
algunos ejemplos de enfoques hacia la hamartología que han surgido a través de
la historia y que tuvieron su base en los estudios de Calvino. Se verá por ejemplo
la posición que surge de la controversia sinergista, la conclusión de los cánones
de Dort, el catecismo menor de Westminster y la Confesión de fe bautista de
1689.

I. La Fórmula de Concordia

No podemos dejar de mencionar la controversia sinergista que surge en el


luteranismo, por cuanto tiene mucha influencia del pensamiento calvinista y da
también una definición de pecado original. Esta controversia comienza con la
cuestión de la voluntad en el proceso de conversión. Estaban tratando de definir
si la voluntad del hombre participaba o no en su conversión. Esto los traslada al
campo del pecado original, porque este daña el libre albedrío. Surgen a raíz de
esto dos teorías. La primera posición defendida por Flacio, plantea que el pecado
original es la sustancia misma de hombre, la naturaleza de cada ser humano, su
esencia misma y no un accidente. Adán, antes de la caída tenía su justicia original
y por tanto podía colaborar con la gracia de Dios. Pero en la caída perdió su libre
voluntad, su imagen de Dios y su capacidad de volverse a Dios. Después de la
caída el hombre exhibe la imagen de satanás y su sustancia es el pecado.
Entonces en la conversión ocurre una lucha entre la imagen de Dios y la de
satanás o entre la sustancia de la nueva creación y la sustancia de la vieja. La
segunda posición que se plantea y que da paso a la controversia, es que el
hombre después de la caída, tiene el pecado original que pertenece a su
naturaleza pecaminosa y que al mismo tiempo corrompe esta naturaleza pero no

105
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

llega a ser una misma cosa de modo que se confundan. Es decir que entre el
pecado original por un lado y la sustancia, la naturaleza, esencia, cuerpo y alma
del hombre por otro, existe una distinción.

La Fórmula de concordia de 1577, condena la primera posición mencionada


como un error que se acerca peligrosamente al maniqueísmo. Y establece la
segunda postura diciendo que hay una distinción entre la naturaleza humana y el
pecado original. Y esta distinción no solo se establece en el hombre antes de la
caída sino también después de ella. Porque aunque el hombre haya caído sigue
siendo su creación.92

II. Los cánones de Dort

Un documento que no se puede dejar de mencionar porque surge


precisamente para defender la doctrina de Calvino, lo constituye los cánones de
Dort. Este documento se emitió en el Sínodo de Dort, que fue un evento
desarrollado en los años 1618 y 1619 en la ciudad de Dordrecht. El objetivo
fundamental fue solucionar la controversia con los arminianos.

En este canon se rechaza la posición de que todos los hombres están libres
de la culpa del pecado original y que nadie está bajo condenación producto de
este pecado.93 Basándose en Romanos 5 y 6, expresaban su desacuerdo con la
idea de que el pecado original no es suficiente para condenar al hombre.
Tampoco aprueban que el ser humano sin Cristo no esté muerto completamente
en el pecado ni falto de fuerza para buscar el bien y la justicia.94 Declaran
entonces, que todos los hombres han pecado en Adán y por tanto, son culpables
de condenación eterna.95 Donde además, la ley no tiene la capacidad para
reparar la culpa, ni da fuerza para salir del pecado, solo trae convencimiento al

92
González, Justo L. Historia del Pensamiento Cristiano. Tomo III. Pág. 128.
93
Los cánones de Dort. pág. 11.
94
Ibíd. Pág. 16.
95
Ibíd. Pág. 2.
106
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

hombre de su culpa.96 Se concluye que el sacrificio de Cristo es la única ofrenda


suficiente para la expiación del pecado.97

III. El Catecismo menor de Westminster

El Catecismo Menor Explicado de Westminster, para muchos sistematiza la


doctrina del puritanismo. Es un breve resumen teológico apologético del credo
cristiano protestante calvinista promulgado en 1646. Este Catecismo presenta
algunas ideas en cuanto a la doctrina del pecado. Comenta que el primer hombre
fue creado a imagen y semejanza de Dios, pero haciendo uso de su libre albedrío
cometió el primer pecado. Adán y Eva se constituyeron la cabeza, la raíz y los
representantes legales de la raza humana, por lo que toda la humanidad pecó en
Adán, atrayendo sobre si las consecuencias del pecado. Donde la caída redujo
al hombre a una condición de pecado y de miseria. Por cuanto pierde su justicia
original y entra en un estado de depravación de toda su naturaleza, lo cual recibe
el nombre de pecado original y que provoca que el hombre viole la ley de Dios en
pensamientos, palabra u obra. Esta desobediencia cambió su carácter moral y
afectó también toda la descendencia. Por lo que el hombre queda expuesto a la
ira y maldición de Dios, a las enfermedades, las aflicciones, la muerte y el infierno
eterno. Pudo haber escogido permanecer en comunión con Dios y gozar de los
privilegios que le eran concedidos, pero decidió seguir las instrucciones de
Satanás y apartarse del mandato de su Creador comiendo del fruto prohibido.98

Considera además, que el pecado es real y el hombre lo puede comprobar


a través de la experiencia personal, aunque no logre entender completamente su
alcance. Define el pecado en dos aspectos fundamentales: El primero se ve como
la inconformidad con los mandamientos de Dios. Es decir, Dios ha dado con
claridad leyes para el hombre y cuando este nos las obedece incurre en pecado.

96
Ibíd. Pág. 13.
97
Ibíd. Pág. 9.
98
Lango Umalla, Ezequiel. Catecismo Menor Explicado de Westminster. Pág. 24.
107
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

También, se le denomina pecado de comisión. El segundo aspecto es el pecado


de omisión. En este caso Dios ha dado leyes para que sean guardadas y si el
hombre deja de hacerlo también se le cuenta como pecado. Explica además este
Catecismo que tanto el pecado de omisión como el de comisión tienen igual
gravedad para los ojos de Dios. Y que cuando se comete algún acto pecaminoso
como matar o adorar imágenes, se están llevando a cabo los dos aspectos del
pecado, tanto el de omisión como el de comisión.99

En cuando al origen del pecado, este Catecismo, indica que no está en Dios
por cuanto Él es Santo y tampoco está en el hombre porque fue creado a imagen
y semejanza de Dios. Entonces es Satanás el autor del pecado y todo el que
peca le pertenece. También asegura que el único remedio tanto para el pecado
como para sus consecuencias que acarrea es Jesucristo.100

El hombre merece la condenación eterna por su pecado, pero en Su infinita


misericordia, Dios salva al hombre. Pero para ser salvos: “Dios exige a nosotros
la fe en Jesucristo, el arrepentimiento para vida, y el empleo diligente de todos
los medios externos, por los cuales Cristo nos comunica los beneficios de la
redención”.101

IV. Confesión de fe bautista

Este documento emitido en 1689, con base en la confesión de fe de


Westminster, es, como dijo Spurgeon, un resumen que sirve de ayuda en la
controversia, una confirmación en la fe y un medio de edificación en la justicia. Y
en cuanto a la doctrina que nos ocupa presenta varios aspectos que se resumen
a continuación.

99
Ibíd. Pág. 25.
100
Ibíd. Pág. 27.
101
Ibíd. Pág. 92.
108
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

En primer lugar defienden el punto de que el ser humano fue creado por
Dios en completa perfección. Aquella primera pareja escogió libremente
apartarse del mandamiento y Dios permitió el pecado con el propósito de darle
solución para su gloria. Pero este pecado trajo como consecuencia que los
primeros padres cayeron de su justicia original. Y por cuanto Adán era la raíz de
la raza humana, la culpa de este pecado fue imputada a su posteridad y la
naturaleza corrompida se transmitió a su descendencia. La muerte pasó a todos
los hombres y quedaron totalmente corrompidos en todas las facultades y partes
del alma y del cuerpo. Quedando bajo la ira de Dios, contados como esclavos del
pecado y sujetos a miserias espirituales. También como consecuencia del
pecado de Adán, esta confesión de fe dice que:

…esta corrupción original, por la cual carecemos de disposición y


aptitud para todo bien y estamos opuestos a este bien, así como
enteramente inclinados a todo mal, dimanan todas nuestras transgresiones
actuales. Esta corrupción de naturaleza dura toda esta vida aun en aquellos
que son regenerados y aun cuando sea perdonada y amortiguada por medio
de la fe en Cristo, sin embargo, ella, y todos los efectos de ella son verdadera
y propiamente pecado.102

Otra consecuencia de este estado de pecado es que el hombre pierde


completamente la capacidad para desear algún bien espiritual que acompañe a
la salvación. Por tanto, no puede por su propia fuerza convertirse, ni siquiera
prepararse para la conversión. De manera que el libre albedrío será
completamente perfecto para escoger el bien cuando el hombre alcance su
estado de gloria.103

Pero además de las consecuencias se habla también de la solución al


pecado. En esta confesión queda claro que el perdón de pecados no se merece

102
Confesión de fe bautista de 1689. Cap. 6.
103
Ibíd. Cap. 9.

109
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

por las buenas obras. La justificación del pecado en el hombre descansa


solamente en los méritos de Cristo. No se le acredita a la fe, que es dada por
Dios, ni al acto de creer, sino solo a la obediencia de Cristo en la cruz. Y el
convertido es puesto entonces en un estado de gracia donde es libre de la
esclavitud del pecado y capacitado para buscar el bien espiritual.104

V. Teólogos modernos

También en este trabajo se presentan comentarios breves de la doctrina del


pecado en teólogos modernos como Luis Berkhof, Charles Hodge y J. Oliver
Buswell. El objetivo de este punto es que podamos darnos cuenta que aún en
estos tiempos los grandes teólogos se han nutrido de la teología de Calvino. Y
aunque pase el tiempo el legado doctrinal de Calvino, no solo en cuanto a la
doctrina del pecado sino en cada doctrina desarrollada, seguirá teniendo
importancia y vigencia.

A. Luis Berkhof

Berkhof expone en su libro de teología que el hombre fue creado con toda
excelencia como la más elevada de las criaturas a imagen y semejanza de Dios.
Y esta relación con Dios estaba determinada por un pacto, denominado el pacto
de obras. Hasta que llega el pecado a la raza humana, considerado un mal moral
y una transgresión de la ley de Dios. Pero a pesar de que el decreto de Dios hizo
que el pecado entrara en el mundo, no obstante no es Dios la causa del pecado.
Esta causa se remonta más bien al mundo angelical, donde el orgullo llevó al
diablo a pecar. Y en cuanto a la raza humana, el pecado comenzó en la
transgresión voluntaria de Adán al comer del fruto prohibido. Este primer pecado
convirtió al hombre en esclavo del pecado, afectando también a toda su
descendencia. Concluye también que Adán peco como cabeza representativa de
la raza humana, por lo que cada ser humano es alcanzado por la culpa y el

104
Ibíd. Cap. 9, 11 y 16.

110
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

castigo de la muerte. También dentro de la naturaleza del primer pecado Berkhof


destaca su carácter formal y esencial, así como el material.105

Dentro de los resultados del pecado, Berkhof menciona varios aspectos que
se relacionan con el pensamiento de Calvino. Dice que el pecado trae la
corrupción de toda la naturaleza humana. Seguido de la pérdida de la comunión
con Dios y cosechando una condición de muerte espiritual y física. También su
conocimiento fue alcanzado por la depravación, evidenciándose por la vergüenza
y la culpa. Y fue sacado del huerto para evitar que se acercara al árbol de la
vida.106

Este teólogo también rechaza varios conceptos o teorías equivocadas del


pecado desarrolladas por Spinoza, Leibnitz, Schleiermacher, Ritschl, Mueller,
Strong y Tennant. Dentro de estas se menciona la teoría de que el pecado es
únicamente privación, una ilusión, falta de conocimiento de Dios debida a la
naturaleza sensible del hombre, falta de confianza en Dios y oposición a su reino
debido a la ignorancia y la teoría de que el pecado es egoísmo u oposición de las
bajas tendencias de la naturaleza humana a un desarrollo gradual del
conocimiento moral. También está en contra de la idea pelagiana del pecado y
del concepto católico romano.107

En cuanto al pecado original, Berkhof expresa que este pecado se llama


así, “porque se deriva del tronco original de la raza humana, está presente en la
vida de cada individuo desde el momento de su nacimiento… y es la raíz interna
de todos los pecados actuales que manchan la vida del hombre”.108 En cuanto a
la transmisión de este pecado, Berkhof coincide con Calvino en cuanto a que
tanto la culpa como la corrupción de la naturaleza, se imputan a la descendencia.
Para probar este planteamiento esta teólogo defiende la teoría realista. Que

105
Berkhof, Luis. Teología Sistemática. Pág. 271.
106
Ibíd. Pág. 276.
107
Ibíd. Pág. 281.
108
Ibíd. Pág. 301.
111
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

sostiene que la naturaleza humana es una unidad genérica y numérica y todos


los hombres pecaron en Adán antes de que la individualización de la naturaleza
humana comenzara. También defiende el pacto de obras en el cual “Adán guardó
una doble relación con sus descendientes, es decir, la de ser cabeza natural de
toda la humanidad y la de ser cabeza representativa de toda la raza humana”. Y
tampoco está de acuerdo con las posturas pelagianas, semipelagianas,
socinianas, arminianas primitivas y otras más recientes como la teoría de la
nueva escuela y la teología de crisis.109

B. Charles Hodge

Este teólogo analiza la doctrina del pecado dividiéndolo en dos aspectos


fundamentales. Primero atendiendo a su naturaleza metafísica o filosófica y
segundo a su naturaleza moral o religiosa. Bajo este mismo prisma analiza
también la posición teológica de otros pensadores a lo largo de la historia como
Agustín de Hipona. También en toda su obra se apega a la Confesión de fe.

Se une al pensamiento de Calvino y considera el concepto de pecado


original como culpa del primer pecado de Adán, la ausencia de rectitud original,
y la corrupción de toda su naturaleza.110

Y en cuanto a la propagación de este pecado, Hodge descarta varias teorías


que no considera acorde con la idea real de la caída y sus consecuencias para
la raza humana. Dentro de estas menciona la corrupción hereditaria bajo la ley
general de la propagación, donde en realidad no hay una idea clara de imputación
del pecado de Adán a su posteridad. Tampoco comparte la teoría realista, donde
el pecado de Adán es imputado a toda la humanidad como suyo propio, porque
en el primer hombre existía total y enteramente la humanidad genérica. También
está en desacuerdo con la imputación mediata. Esta plantea que de Adán se

109
Ibíd. Pág. 296.
110
Hodge, Charles. Teología Sistemática. Volumen II. Pág. 607.

112
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

hereda una naturaleza corrompida pero que esta corrupción no es una infracción
penal por el pecado y tampoco existe imputación a los descendientes de Adán.
Donde la imputación es solo de su propia depravación inherente y hereditaria.
Dice además que es falso negar la “…relación causal, sea lógica o natural, sea
judicial o física, entre el pecado de Adán y la pecaminosidad de su raza. Algunos
que asumen esta postura dicen que fue una constitución divina que si Adán
pecaba, todos los hombres deberían pecar”.111

Entonces para este teólogo solo hay una postura que explica correctamente
la relación entre Adán y su posteridad. Y lo constituye la imputación inmediata.
Esta teoría “en virtud de la unión, federal y natural, entre Adán y su posteridad,
su pecado, aunque no el acto de ellos, les es imputado de tal manera que es la
base judicial de que la pena de que fue amenazado cayera también sobre
ellos”.112 Es decir, que el pecado de Adán, por cuanto él es la cabeza federal, su
pecado constituye la base judicial de la condenación del resto de la humanidad.

C. Oliver Buswell

La teología de Buswell es bien amplia y se nota que tuvo en cuenta varios


escritos de Calvino como la Institución, el Comentario a los Romanos entre otros.
También consulta la Confesión de fe de Westminster y la explicación de esta
hecha por Hodge, que ya vimos tiene una base fuerte en la teología de Calvino.
Enfatiza acerca de la historicidad del relato de la caída en contra de la neo
ortodoxia y el liberalismo. Y apunta a que al deteriorar el concepto de pecado
original se destruye también la doctrina de la expiación a través de Cristo como
un hecho cumplido en la cruz.

Buswell hace una disertación detallada del pecado original y el principio de


la representación del pecado de Adán. Para él este pecado incluye la corrupción

111
Ibíd. Pág. 609.
112
Ibíd. Pág. 608.

113
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

de la naturaleza humana como una consecuencia y un castigo por la culpa de


Adán. Porque la culpa del pecado del primer hombre es imputada judicialmente
a todo ser humano por el principio representativo. Entonces el pecado no es solo
lo que el hombre hace sino también lo que el hombre es. Por tanto “el pecado de
Adán fue una acción representativa que incluyó a todos sus descendientes
naturales”.113

Hasta este punto Buswell concuerda con Calvino, pero también establece
una pequeña diferencia. Él no incluye la corrupción de la naturaleza y
transgresiones de hecho, dentro del concepto de pecado original. Declarando lo
siguiente: “Me inclino a considerar juntas la corrupción de nuestra naturaleza y
nuestras transgresiones de hecho, bajo un encabezamiento, y a no incluir estos
factores bajo la definición de pecado original”.114

Rechaza las opiniones sustantivas y argumenta acerca del principio


representativo para el pecado original. Está de acuerdo con la imputación
inmediata de Hodge y no acepta la imputación mediata. También afirma que
existe una “relación de pacto entre Dios y Adán para toda la posteridad como la
base lógica de todo lo que ha ocurrido”.115

113
Buswell, Oliver. Teología Sistemática. Tomo II. Pág. 77.
114
Ibíd. Pág. 71.
115
Ibíd. Pág. 98.
114
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

Conclusiones

Varios movimientos protestantes en diferentes partes de Europa


establecieron y defendieron sus doctrinas a través de confesiones, cánones y
catecismos. Y estos documentos partían visiblemente de las obras de Juan
Calvino. Dentro de ellos están los ya mencionados cánones de Dort, el catecismo
menor y mayor de Westminster, la confesión de Westminster y la confesión de fe
bautista de 1689. También podemos mencionar la Segunda confesión helvética,
escrita por Bullinger que constituyó un puente entre Calvino y la ortodoxia
calvinista que se desarrolló más tarde. El Catecismo de Heidelberg de 1563,
escrito por Ursina y Gaspar Oleviano. Esta se convirtió más tarde en la confesión
de fe de la Iglesia reformada alemana. La Confesión de la Rochelle, escrita en
1571 etc. Estos escritos nos dan una idea del amplio legado que dejó este escritor
ginebrino.

El reformador Juan Calvino es uno de los teólogos más sobresalientes no


solo de la reforma protestante, sino de todos los tiempos. Tanto sus doctrinas
pastorales como su apologética son extraordinarias. Edifica la Iglesia de
Jesucristo con su teología pero también con su vida. Por tanto, es necesario para
hacer teología hoy, en cualquier círculo, leer a Calvino. Descubrir en sus páginas
notas pastorales y con un profundo deseo de elevar la Iglesia a una mejor relación
con Dios. Pero si se le interpreta solo a través de generaciones calvinistas que le
siguieron. Si pensamos que convirtió la reforma protestante solo en doctrina
sistemática. Y mantenemos un enfoque crítico hacia sus errores sin discernir el
tiempo que le tocó vivir. Entonces, perdemos de vista el gran legado que dejó a
cada pastor y teólogo cristiano de este tiempo.

115
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

Cuestionario de la Lección 8

1. ¿Cuáles fueron las dos posiciones que dieron lugar a la controversia


sinergista?
2. ¿Cuál de las dos posiciones aprobó como verdadera la fórmula de
concordia? Y ¿Por qué?
3. ¿Por qué se desarrolla el Sínodo de Dort?
4. Explique los dos aspectos fundamentales en que define el pecado
el catecismo menor de Westminster.
5. ¿Qué dice el Catecismo menor de Westminster en cuanto al origen
del pecado?
6. De la confesión de fe bautista, mencione las consecuencias del
pecado que esta describe.
7. Diga que era el pecado original para Berkhof y como se transmite.
8. Mencione las dos naturalezas en las que Ch. Hodge divide el
pecado.
9. Para Hodge cuál era la posición teológica que mejor explica la
relación de Adán con su posteridad.
10. ¿Qué sucede si se deteriora el concepto de pecado original según
Buswell?

116
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

Bibliografía
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121
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

MANUAL DEL PROFESOR


La Doctrina del Pecado en el Pensamiento de Juan Calvino

Lester Luis Leyva Pupo


El modelo de educación a distancia presentado aquí consiste en que el
profesor supervisor hace una presentación de 8 horas, el facilitador local dirige
las próximas 8 horas. La presentación del profesor se denomina SESIÓN DE
ORIENTACIÓN mientras que el trabajo del facilitador se dividirá en 4 clases.
A. SESIÓN DE ORIENTACIÓN, dictada por el profesor (8 horas)
Las 8 horas de clases se dividirán en 8 secciones. Cada sección tiene 50
minutos, con un tiempo de receso de 10 minutos. Los minutos de recreo se
pueden acumular y ser usados en un solo bloque.
1. Sesión de apertura (los estudiantes y el profesor se presentan)
1.1 Bienvenida, oración (10 minutos)
1.2. Registrar asistencia (10 minutos)
1.3. Los alumnos se presentan (10 minutos)
1.4. El profesor se presenta (5 minutos)
1.5. Hacer que los alumnos reflexionen acerca de una situación en su vida
en que tuvieron que aplicar el tema que enseña el curso.
2. Segunda sesión (introducción del curso)
2.1. Revisión de la introducción del curso, explicación y requisitos (25
min.)
2.2. Revisión de la bibliografía disponible (25 min.)
3. Tercera sesión (el profesor desarrolla el tema del curso de las lecciones
1-3)
3.1. El profesor presenta el tema (40 min.)
3.2. Preguntas de los alumnos (10 min.)
4. Cuarta sesión (el profesor desarrolla el tema del curso de las lecciones
4- 6)
4.1. El profesor presenta el tema (40 min.)
4.2. Preguntas de los alumnos (10 min.)

122
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

5. Quinta sesión (el profesor desarrolla el tema del curso de las lecciones
7- 8)
5.1. El profesor presenta el tema (40 min.)
5.2. Preguntas de los alumnos (10 min.)
6. Sexta sesión (presentación del proyecto especial)
6.1. Trabajo en grupos.
7. Séptima sesión (se presenta la lectura obligatoria)
7.1. Se orienta a los alumnos acerca de las lecturas obligatorias (35
min.)
7.2. Organizar la manera en que los alumnos darán su informe o reporte
oral durante las clases siguientes (15 min.)
8. Octava sesión (planificación de las cuatro clases siguientes)
8.1. Planifique cuando se reunirá la clase. Elijan horario y lugar (15
min.)
8.2. Planifique cómo los alumnos accederán al material que necesitan
(15 min.)
8.3. Revise el plan para las clases, asegúrese de que los estudiantes vengan
preparados con sus tareas hechas para la primera clase (15 min.). Algunos
darán su informe oral, todos necesitan hacer sus tareas para las lecciones 1-
2.
B. PLANIFICACIÓN DE LAS CUATRO CLASES PARA EL FACILITADOR (8
horas)
Clase 1 (2 horas)
1. Bienvenida, oración (5 min.)
2. Registre la asistencia. Un punto por cada hora de clase presente. Si
falta deberá entregar en la clase siguiente un informe de una página por cada
hora de ausencia (5 min.)
3. Revise que hayan completado las tareas de las lecciones 1-2. Se dará
2 puntos por lecciones completadas. Pierde un punto por presentar la tarea
atrasada (10 min.)
4. Diálogo acerca de las preguntas y respuestas para las lecciones 1-2 (30
min.)

123
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

5. Escuche el informe oral de lecturas extras del 33% de la clase. 5


minutos cada alumno (30 min.)
6. Trabajo en grupos para preparar el proyecto especial (30 min.)
7. Prepare la clase siguiente: recuerde a los alumnos qué lección
corresponde y a quiénes les corresponde dar un informe oral (5 min.)
8. Termine con oración (5 min.).
Clase 2 (2 horas)
1. Bienvenida, oración (5 min.)
2. Registre la asistencia. Un punto por cada hora de clase presente. Si
falta deberá entregar en la clase siguiente un informe de una página por cada
hora de ausencia (5 min.)
3. Revise que hayan completado las tareas de las lecciones 3-4. Se dará
2 puntos por lecciones completadas. Pierde un punto por presentar la tarea
atrasada (10 min.)
4. Diálogo acerca de las preguntas y respuestas para las lecciones 3-4 (30
min.)
5. Escuche el informe oral de lecturas extras del 33% de la clase. 5
minutos cada alumno (30 min.)
6. Trabajo en grupos para preparar el proyecto especial (30 min.)
7. Prepare la clase siguiente: recuerde a los alumnos qué lección
corresponde y a quiénes les corresponde dar un informe oral (5 min.)
8. Termine con oración (5 min.).
Clase 3 (2 horas)
1. Bienvenida, oración (5 min.)
2. Registre la asistencia. Un punto por cada hora de clase presente. Si
falta deberá entregar en la clase siguiente un informe de una página por cada
hora de ausencia (5 min.)
3. Revise que hayan completado las tareas de las lecciones 5-6. Se dará
2 puntos por lecciones completadas. Pierde un punto por presentar la tarea
atrasada (10 min.)
4. Diálogo acerca de las preguntas y respuestas para las lecciones 5-6 (30
min.)

124
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

5. Escuche el informe oral de lecturas extras del 33% de la clase. 5


minutos cada alumno (30 min.)
6. Trabajo en grupos para preparar el proyecto especial (30 min.)
7. Prepare la clase siguiente: recuerde a los alumnos qué lección
corresponde y a quiénes les corresponde dar un informe oral (5 min.)
8. Termine con oración (5 min.).
Clase 4 (2 horas)
1. Bienvenida, oración (5 min.)
2. Registre la asistencia. Un punto por cada hora de clase presente. Si
falta deberá entregar en la clase siguiente un informe de una página por cada
hora de ausencia (5 min.)
3. Revise que hayan completado las tareas de las lecciones 7-8. Se dará
2 puntos por lecciones completadas. Pierde un punto por presentar la tarea
atrasada (10 min.)
4. Diálogo acerca de las preguntas y respuestas para las lecciones 7-8 (30
min.)
5. Examen final (1 hora).
6. Termine con oración (5 min.)
C. ORGANIZACIÓN DEL TRABAJO DEL ALUMNO
1. El facilitador debe enviar al profesor supervisor lo siguiente:
1.1. Registro de asistencia y calificaciones
1.2. Notas de tareas
1.3. Los informes de 3 o 5 páginas de reportes de lecturas
1.4. Proyecto especial
1.5. Exámenes
1.6. Evaluación del profesor y de los alumnos.

125
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

Respuesta a los Cuestionarios de las lecciones

Respuesta al Cuestionario. Lección 1

1. ¿Qué historiadores menciona el material que han escrito de Calvino?

R: Emile Doumergue, Williston Walker, Tholuck, Guizot, Toplady, A. Krauss,


Harold Dekker, T.H.L. Parker, Leroy Nixon, Jules Bonnet, Rilliet, Kampschulte,
Irwin, Halsema Gaspar Olevian,

2. ¿Con qué propósito fue escrito el libro de la Institución?

R: A través de la Institución Calvino quería responder a las acusaciones


contra sus hermanos y defenderlos en medio de la persecución del rey Francés
Francisco I.

3. Mencione los hombres que predicaron el protestantismo en Ginebra antes


que Calvino llegara.

R: Lambert de Avignon, fue el primero en predicar las doctrinas protestantes


en la ciudad en el año 1522. Hombres como Baudichon, Perrin, Viret, Froment,
Canus y Farel luchaban incansablemente contra las tradiciones de los católicos
romanos, alrededor del año 1534.

4. Mencione alguna de las cualidades que describe el material en la persona


de Calvino.

R: Buen comentarista, buen predicador, en su carácter notamos que era


muy honrado, sencillo y humilde incluso en la grandeza. Fiel a Cristo y al
ministerio que Dios le había encomendado. Tenía un buen sentido del humor,
hacía bromas con sus amigos. No exhibía las faltas de los demás. No pasaba por
alto el pecado voluntario.

126
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

5. Mencione algunos de sus escritos.

R: Dentro de sus obras podemos encontrar las siguientes: Comentario a la


Epístola a los Romanos, Comentario a la Epístola a los Hebreos, Comentario a
las epístolas pastorales de San Pablo (I y II de Timoteo y Tito), Comentario a la
Primera Epístola a los Tesalonicenses (1550), Un ensayo sobre el filósofo
romano Séneca (1532), Comentario a los Salmos, Comentario al Evangelio de
San Juan (1553), Sermones sobre Job, Sermones sobre la obra salvadora de
Cristo, Sermones sobre Pentecostés, Sermones sobre La Ascensión, Institución
de la Religión Cristiana, 2 vols., Breve Confesión o Breve Instrucción Cristiana,
Respuesta al cardenal Sadoleto, Sumario de la Institución de la Religión
Cristiana, Oro de la Verdadera Vida Cristiana, Comentario sobre Daniel,
Comentario al Nuevo Testamento, Comentario sobre Isaías, Comentario sobre
las Epístolas Universales, Comentario al Salmo Ochenta y siete, entre otros.

6. Escriba el año de los siguientes sucesos en la vida de Calvino:

a. _______Nacimiento.

b. _______Muerte.

c. _______Llegada a Ginebra.

d. _______Destierro a Estrasburgo.

e. _______Regreso a Ginebra.

f. _______Edición de la Institución.

g. _______Inauguración de la Universidad.

a. 1509 b. 1564 c. 1536 d. 1538 e. 1541 f. 1536 g. 1558.

127
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

Respuesta al Cuestionario. Lección 2

1. Mencione el pasaje bíblico que llevó a Agustín a la conversión.

R: Romanos 13. 13 – 14

2. ¿Cómo se llama actualmente la ciudad donde Agustín ejerció como


obispo por 35 años? ¿En qué país se encuentra? ¿En qué año comenzó?

R: Annaba en Argelia, África, en el año 395 d.C.

3. Diga cuales fueron las herejías que enfrentó Agustín.

R: El donatismo, el maniqueísmo y el pelagianismo

4. ¿Qué doctrinas desarrolló Agustín contra esas herejías?

R: Desarrolló las doctrinas del pecado original, gracia divina, soberanía


divina, predestinación, trinidad, inmortalidad del alma, el libre albedrío, el mal, el
tiempo, la creación, las Escrituras y su autoridad, los sacramentos, entre otras.

5. ¿Qué planteaba el pelagianismo?

R: Pelagio afirmaba que no existía el pecado original. El pecado que Adán


cometió lo dañó solamente a él sin afectar su descendencia. El pecado no nace
junto con el hombre, sino que aparece más tarde cuando el mismo hombre lo
ejecuta. No existe trasmisión de culpa y por tanto cada persona nace en el mismo
estado de inocencia en el cual Adán y Eva fueron creados. El delito en el hombre
no es por naturaleza, sino por la voluntad. Y no se recibe por nacimiento sino por
imitación. Afirmó que los niños deben bautizarse para recibir el reino de los cielos
pero no para borrar el pecado original. Y que debe administrarse a los niños con
las mismas palabras del sacramento con que se debe también administrar a los

128
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

adultos. Para Pelagio, si el pecado de Adán había afectado a su descendencia


aunque esta no hubiera pecado, entonces la justicia de Cristo favorece a todos
los pecadores aunque estos no ejerzan fe en Él.

6. ¿Qué plantea Agustín en cuanto al pecado original?

R: En la teología del pecado original de Agustín, el hombre está por


naturaleza infectado por el pecado hasta la raíz de su ser. La voluntad humana,
no tiene el poder de escoger sino que está a merced de los malos deseos. Para
Agustín el pecado original es una herencia que toda la humanidad ha recibido de
Adán. Y el pecado de Adán consistió en tomar del fruto prohibido arrastrado por
su incredulidad y soberbia. Así perdió la posibilidad de vivir eternamente y su
libertad de no pecar. A partir de ahora sería libre solo para pecar, por cuanto
perdió el don de la gracia que le permitía perseverar en el bien. Este pecado
original tanto en su culpa como en sus consecuencias, pasa a sus descendientes
por herencia, porque en aquel primer hombre que pecó estábamos todos
representados.

7. ¿Por qué la posición pelagiana del pecado original era tan nociva para la
fe?

R: El error de Pelagio, según Agustín, iba en contra de la base misma del


cristianismo y de la regla de fe más primaria para la salvación. Porque si el ser
humano no ha sido contaminado con la enfermedad del pecado original en Adán,
entonces no está bajo la ira o la condenación de Dios. Por tanto, tampoco se
necesita de la gracia salvadora de Jesucristo. El sacrificio de Cristo en la cruz
resulta insuficiente e innecesario para que el hombre pueda tener relación con
Dios y gozar de Sus promesas de vida eterna.

8. ¿Qué relación existe entre el pecado y el libre albedrío, según Agustín?

129
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

R: Agustín aclara que el pecado del hombre está ligado a su libre albedrío.
Por la libertad que goza el ser humano tiene la capacidad de recibir de parte de
Dios, sus leyes para cumplirlas o ignorarlas. Si el hombre no tuviera libertad no
recibiría de Dios el mandamiento. Por tanto, el pecado es responsabilidad del
hombre mismo en su libre albedrío y no de Dios. Y nadie puede decir que no
puede mantenerse puro porque la pasión lo domine.

9. Haga un resumen de las 4 doctrinas agustinianas que se mencionan en


el material.

R: 9. 1. El Mal.

El mal no es una naturaleza sino la corrupción de la naturaleza. No es una


ficción del intelecto sino una realidad. No puede considerarse una criatura, no
existe como sustancia pero si como pérdida de la bondad. El mal es
sencillamente una privación del bien o una corrupción del bien. El mal surge,
precisamente por el libre albedrío con que fue dotado el hombre y los ángeles
que Dios creó. Pero el mal no es creado por Dios, ni podemos atribuírselo a Dios.

9. 2. Libre Albedrío.

El libre albedrío no es más que un don dado por Dios al hombre. A través
de él Adán tenía la capacidad para no pecar y para pecar. El hombre después de
la caída sigue siendo libre, pero debido a su naturaleza corrompida por el pecado
las opciones donde puede hacer uso de su libertad son todas pecaminosas. Con
su doctrina de libre albedrío, Agustín rechaza la posición maniquea del
predeterminismo. Es el libre albedrío entonces un bien que puede volverse al mal.

130
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

9. 3. La gracia.

El ser humano en su estado natural, no puede avanzar por sí solo a la


redención. No tiene la capacidad de hacer el bien. Adán podía hacer el bien antes
de la caída porque contaba con la gracia auxiliadora de Dios. El hombre después
de la caída solo puede hacer el bien si antes recibe la gracia de Dios para
fortalecerlo. Necesitamos la gracia de Dios para llegar a la salvación. Y después
de ser salvos necesitamos la gracia para poder hacer buenas obras. Sin la gracia
nadie quiere ni puede acercarse a Dios para la redención. La gracia no se opone
al libre albedrío ni lo anula. Pero la gracia opera en la voluntad de manera que la
mueve a acercarse a Dios. La gracia es irresistible. Una vez que la persona es
salva porque su voluntad coincide con la gracia, se necesita permanecer en la
salvación hasta el final. Y esta perseverancia también es un trabajo de la gracia
de Dios en el hombre sin la cual no llega a la meta final.

9.4. La Predestinación.

Si para la salvación es imprescindible la gracia de Dios y se excluye toda


actividad humana, entonces esto da paso a la doctrina de la predestinación. En
ella la soberanía de Dios decide quién ha de recibir este don inmerecido. Para
este teólogo hiponense la predestinación es en base a la primacía de Dios en la
salvación del hombre y no en base a la omnisciencia de Dios. Los escogidos
salen de todo el grupo de personas que están en la perdición y los que se pierden
son los que se mantienen en ese grupo. De manera que no existe una
predestinación para perdición.

10. ¿Qué ejemplo nos deja Agustín en cuanto a su apologética y su apego


a las Escrituras?

R: La vida de este obispo del norte de África representa a un verdadero


apologeta que hizo su teología en el campo de batalla y no escondido en el

131
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

escritorio de una polvorienta biblioteca. Es un ejemplo de sacrificio, carácter,


abnegación y amor hacia la verdad que había creído y recibido de su Dios. Su
duelo con la herejía no era para exaltarse humanamente, ni para desmentir un
grupo de engañados, sino para que muchos tuvieran en sus manos la verdad y
con ella una correcta relación con Dios y a través de Él la salvación. En cada
comentario de Agustín de Hipona podemos notar su apego ferviente a la Palabra
de Dios. Cada una de las diferentes ideas que desarrolla tiene su origen en las
Escrituras. Por eso el ejemplo de Agustín en su apego a la Palabra, es hoy más
que nunca una luz que alumbra el cristianismo moderno y postmoderno.

Respuesta al Cuestionario Lección 3

1. Resuma la definición que ofrece Calvino del pecado original.

R: El pecado original es una corrupción y perversión hereditarias de nuestra


naturaleza, difundidas en todas las partes del alma; lo cual primeramente nos
hace culpables de la ira de Dios, y, además, produce en nosotros lo que la
Escritura denomina "obras de la carne. El pecado, según la Escritura, es tanto
esta perversidad de la naturaleza humana que es la fuente de todo vicio, como
los malos deseos que nacen de ella, y los injustos crímenes que éstos originan:
homicidios, hurtos, adulterios y otros parecidos. Así, pues, todos nosotros,
pecadores desde el vientre materno, nacemos sometidos a la cólera y a la
venganza de Dios.

2. Establezca similitudes y diferencias entre la definición del pecado original


de Calvino en su obra Institución de la Religión Cristiana y el libro de Breve
Instrucción Cristiana.

R: En ambos libros dice que es una corrupción o perversidad de la


naturaleza humana, que es objeto de la ira de Dios sobre el hombre y que es la

132
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

causa de los actos pecaminosos de cada ser humano. Como diferencias dice en
la Institución que está difundido en todas las partes del alma.

3. ¿Cuál es la causa fundamental, para Calvino de la caída del hombre?

R: La incredulidad o infidelidad

4. ¿Qué sentimientos negativos nacen de la incredulidad según Calvino en


el relato de Génesis 3?

R: Entre estos sentimientos Calvino destaca la soberbia, la ambición, la


contumacia, el orgullo, la obstinación. La ingratitud para codiciar más de lo que
se le había concedido. Menosprecio de todo lo que Dios en su liberalidad le había
dado. Impiedad al no estar contento con ser hecho imagen del Creador y
pretender aún ser igual a Dios. Además, esta apostasía adámica va más allá de
eso cuando cae también en injurias contra Dios, porque acepta todas las
insinuaciones de satanás en contra del Creador, que engañosamente describían
a un Dios mentiroso, envidioso, mezquino y malvado.

5. Explique cómo se transmite de padres a hijos el pecado original según


Pelagio.

R: Este pecado original según Pelagio no se transmite al resto de la raza


humana. O se transmite solo por imitación.

6. Mencione las diferentes doctrinas precalvinistas que han sido utilizadas


para explicar la transmisión del pecado original.

R: El traducionismo, el creacionismo y el realismo.

7. Explique en qué consiste el traducionismo y diga porqué fue rechazado.

133
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

R: El traducionismo plantea que tanto Dios como el alma son seres


corporales. También decía que cada alma surgía de las almas de los padres, de
la misma manera que el cuerpo surge de los cuerpos de los padres. Agustín
basándose en esta tesis, afirma que el pecado original pasa a todos los hombres
como una herencia. Fue rechazada por acercarse demasiado al materialismo
estoico, que es sinónimo de un materialismo excesivo.

8. Explique el creacionismo.

R: Agustín, más bien, se inclinaba al creacionismo, la doctrina según la cual


Dios involucraba directamente un alma para cada individuo en el momento del
nacimiento.

9. ¿Cómo se transmite el pecado original para Calvino? Y ¿En qué consiste


esta doctrina?

R: El pecado original según Calvino se transmite por propagación. Esta


infección de pecado le llega a cada hombre después de Adán, comunicando la
infección de padres a hijos pasando de generación en generación, de la misma
manera que una raíz podrida comunica su podredumbre a las ramas y estas a
los vástagos. “Quiero con ello decir, dice Calvino, que Adán fue el principio de la
corrupción que perpetuamente se comunica de unas a otras generaciones. Pues
este contagio no tiene su causa y fundamento en la sustancia de la carne o del
alma, sino que procede de una ordenación divina, según la cual los dones que
concedió al primer hombre le eran comunes a él y a sus descendientes, tanto
para conservarlos como para perderlos.

Respuesta al Cuestionario Lección 4

1. ¿Cuáles son algunas consecuencias del pecado original según Calvino?

134
Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

R: La condición de desorden espiritual y carencia de propósito y significado


en el hombre, condenación eterna, corrupción del alma e incluso su propagación
o transmisión son una consecuencia negativa para el ser humano.

2. ¿Cuál es la diferencia que existe entre Adán y sus descendientes?

R: Adán por su parte, recibió un mandamiento claro y preciso por parte de


Dios de no comer del árbol del conocimiento del bien y del mal. Por otro lado, los
descendientes de Adán no estaban bajo este mandamiento y muchos bajo ningún
otro, solo tenían sus conciencias. Pero aún esta diferencia no detenía la
condenación para este segundo grupo.

3. ¿En qué sentido la transmisión del pecado de Adán es una


consecuencia para el hombre?

R: Dentro de las consecuencias de la caída, Calvino menciona el hecho de


que toda la “posteridad” quedó afectada con las consecuencias de la mala
decisión de Adán. Es decir, que esta desobediencia e incredulidad no afectaron
solamente a Adán y a Eva sino que tanto la corrupción como las consecuencias
de su descuido e incredulidad la reciben las generaciones posteriores sin
excepción y esto es contado como una consecuencia de ese primer pecado
cometido por Adán.

4. Explique cuáles son los dos puntos de vista que se mencionan en


este estudio en cuanto al bautismo y el pecado original.

R: El primero sostenido por Agustín, dice que el bautismo era necesario


para eliminar el pecado original y restaurar al hombre a la misma naturaleza justa
de Adán con que fue creado antes de la caída. El segundo sostenido por Calvino,
dice que el bautismo no elimina el pecado original y que de ninguna manera el
bautismo puede restaurar al hombre a su estado y justicia originales.

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Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

5. ¿Cuál es el alcance del pecado original en cuanto a la condenación


eterna?

R: Alcanza a todos los hombres. No solo a los que han cometido pecados
personales.

6. ¿Por qué cree usted que Calvino tiene que aclarar que el pecado
original contamina todas las partes del alma?
R: Interpretación personal.
7. ¿Explique con sus palabras por qué el bautismo no elimina el
pecado original?
R: Interpretación personal.
8. ¿Cuál es la única solución para el pecado original?
R: Jesucristo es el único que justifica y trae vida. Y como entró la muerte
por Adán en Cristo la vida es restituida.

Respuesta al Cuestionario Lección 5

1. Exponga la definición de pecado que presenta Calvino en este estudio.

R: Dice que el pecado es constituido rebeldía contra la voluntad de Dios y


prevaricación de la ley. Lo que provoca necesariamente Su ira y la pronunciación
de sentencia de muerte.

2. ¿En cuántos tipos Calvino los clasifica?

R: La clasificación hecha por Calvino es la siguiente: ocultos, públicos,


ligeros, horrendos, voluntarios, por ignorancia y por debilidad

3. Mencione el motivo por el cual Calvino prefiere clasificar los pecados.

R: Esta distinción la establece para fundamentar los diferentes grados de

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Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

disciplina dentro de la Iglesia. Es decir, los pecados ocultos se deben reprender


en privado, los pecados visibles a los ojos de todos, se reprenden en público y
cuando se trata de un vicio horrendo es necesario, en muchos casos, llegar a la
excomunión.

4. ¿Cuál debe ser el trato hacia los pecados por ignorancia y por qué?

R: Estos pecados son tratados desde tiempos antiguos como faltas ligeras,
pero no por menospreciar estos pecados cotidianos en los feligreses como si
fueran más pequeños delante de Dios, sino para evitar que la disciplina
eclesiástica trajera más tristeza que provecho a los fieles del Señor

5. ¿Qué dice Calvino de los pecados mortales y veniales de la iglesia


católica?

R: En cuanto a los veniales, dijo que todos los pecados van en contra de la
ley de Dios y separan al hombre de Su amor, por tanto, no se puede decir que
existan pecados que no conlleven a la ira de Dios y a la muerte. Atendiendo a los
pecados mortales, él entendía que cada transgresión por grave fuera, siempre
encontraría en la gracia de Dios el oportuno socorro. Porque la misericordia de
Dios es infinita.

6. ¿Qué argumentos usaban algunos para justificar que Dios era la


causa del pecado?

R: Se plantean 2 argumentos fundamentales: (1) Por cuanto Dios pudo


haber provisto un mejor camino de salvación al prevenir la caída de Adán. (2) La
causa del pecado era la naturaleza con que Adán fue creado y de esta forma
también le atribuían a Dios el origen de este mal.

7. ¿Por qué Dios no puede ser la causa del pecado?

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Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

R: Porque Dios muestra Su justicia, Su sabiduría, Su bondad en la creación


del ser humano, porque no lo creó en maldad sino en santidad y perfección. Por
tanto, ningún pecado en la naturaleza del hombre se le puede imputar o reprochar
a Dios.

8. ¿Cuál es la causa del pecado?

R: La corrupción de la naturaleza.

9. Defina la corrupción de la naturaleza.

R: Nada de lo que Dios ha creado es malo en su propia naturaleza. Pero


con el pecado original el hombre pervirtió la naturaleza justa con que fue creado.

10. ¿Qué argumento emplea Calvino para responsabilizar al hombre por


su pecado?

R: Aunque Dios use al pecado como instrumento para ejecutar su voluntad,


el hombre no puede tapar su pecado con la justicia del Señor. Porque también
la propia perversidad y maldad en el corazón humano lo arrastran hacia la
oscuridad, para convertir en inexcusable su mal proceder.

Respuesta al Cuestionario Lección 6

1. ¿El hombre debe enfrentar las consecuencias por el pecado? ¿por


qué?

R: Si debe enfrentarlas. Porque cada una de las causas del pecado


explicadas en lecciones anteriores hace al hombre responsable por su
desobediencia. Pero además, Calvino argumenta que el hombre peca por
necesidad pero también voluntariamente.

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Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

2. Menciones las consecuencias del pecado abordadas por Calvino.

R: Dentro de estas consecuencias se mencionan las siguientes:

Impide el conocimiento de Dios. Tanto el cuerpo como el alma se


contaminan con el pecado. Somete al libre albedrío. Corrupción de los dones
naturales. Pérdida de los dones sobrenaturales. Privado de la voluntad. Sometido
a la necesidad de pecar. Desprovisto del bien. Castigo sobre el alma.

3. Explique la consecuencia: Tanto el cuerpo como el alma se


contaminan con el pecado.

R: Tanto el cuerpo como el alma, están corrompidos por el pecado.


Igualmente en el cuerpo y en el alma, residen las manchas del pecado.

4. Explique la consecuencia: Somete al libre albedrío.

R: El ser humano cuando fue creado recibió libre albedrío, pero al pecar
perdió esta fuerza para escoger entre el bien y el mal, limitándose solamente a
escoger el mal y el pecado. Y solo puede buscar el bien cuando opera la gracia
de Dios en él, porque la voluntad propia se somete más bien al pecado.

5. Explique la consecuencia: Privado de la voluntad.

R: El hombre no tiene la capacidad natural de seguir lo que es bueno para


él, por cuanto la voluntad es prisionera del pecado y se encuentra desprovista de
su libertad. Producto al pecado en el hombre, su voluntad también está sometida
al pecado, por tanto se inclina solamente al mal, por tanto toda inclinación al bien
no es producto de la voluntad, sino de la obra del Espíritu Santo en la vida del
hombre.

6. Explique la consecuencia: Sometido a la necesidad de pecar

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Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

R: El hombre peca por necesidad. Es decir, que cada ser humano se ve


obligado a pecar porque su naturaleza corrompida está inclinada constantemente
al mal y su concupiscencia lo encadena cada día a lo malo. De tal manera que el
hombre no puede hacer otra cosa que el mal.

7. Explique la consecuencia: Desprovisto del bien

R: El hombre permanece buscando de continuo el mal y quedando


desprovisto su corazón de todo bien. Destaca que el pecado no se limita a épocas
diferente, sino que en todos los tiempos la naturaleza humana permanece en
corrupción. Todo ser humano, producto del pecado, carece de esperanza,
justicia, integridad, pureza, temor de Dios y salvación. También hace notar que
pierde la inteligencia, porque si fuera sabio no se apartaría de su Creador. No
puede hacer bien alguno contaminando su cuerpo con toda clase de
abominaciones.

8. ¿Qué tipo de disciplinas debe aplicar en la Iglesia para corregir el


pecado según Calvino?

R: Las amonestaciones privadas, las amonestaciones públicas y la


excomunión.

9. ¿En qué consiste la excomunión?

R: Esta se lleva a cabo cuando la persona no obedece a las amonestaciones


que se le hacen, persistiendo en su pecado. Consiste en separarlo de la compañía
de los fieles. A través de la excomunión se condena la práctica pecaminosa de la
persona, se le advierte que si no se enmienda será condenado por la eternidad.

10. ¿Se debería aplicar en nuestros días? ¿Por qué?

R: Interpretación personal.

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Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

Cuestionario de la Lección 7

1. Explique el papel del arrepentimiento en la remisión del pecado.

R: Luego el arrepentimiento trae la conversión de la maldad del mundo al


camino de Dios. Además este arrepentimiento depende del nuevo nacimiento e
incluye básicamente tanto la aflicción de la carne como la vivificación espiritual. Sin
pasar por alto que se ha de mantener la preocupación del arrepentimiento hasta el
día de la muerte, porque el renacimiento se consuma al dejar el cuerpo físico.

2. Explique el papel de la fe en la remisión de los pecados.

R: Se dice que somos justificados por la fe, no porque recibamos en


nuestro interior alguna justicia, sino porque nos es atribuida la justicia de Cristo,
como si fuese nuestra, mientras que no nos es imputada nuestra propia injusticia.

3. Haga una comparación entre la opinión de Calvino y otros teólogos,


en cuanto al papel de la iglesia en la remisión de los pecados.

R: Investigación personal.

4. Explique Mat. 6. 12 a la luz de este estudio.

R: Además el hombre debe pedir perdón por sus pecados de la misma forma
que es capaz de darlo a aquellas personas que lo hieren, lo injurian y lo ofenden.
Sin que esto llegue a convertirse en una condición donde se merece el perdón por
haberlo dado antes a otros. Sino más bien que constituye una manera de que el
hombre esté seguro y confiado de que ha recibido el perdón por cuanto, el mismo
es capaz de haber tenido misericordia con otros extendiéndoles su perdón. Es decir,
si has sabido perdonar, puedes tener la confianza absoluta que Dios te ha sabido
perdonar también a ti.

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Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

5. ¿Por qué el bautismo no limpia de pecado?

R: A través del bautismo el hombre conoce y confiesa que ha muerto al


pecado. Él establece que la limpieza del pecado y el sometimiento de la carne a la
voluntad de Dios, solo pueden lograrse a través de la sangre y muerte de Cristo.

6. ¿Por qué las buenas obras no salvan?

R: Ninguna obra califica delante de Dios y aunque Él quisiera extender la


justificación al hombre a través de una de sus obras, no encontraría ninguna digna
para hacerlo, porque ninguna obra humana tiene la perfección requerida, más bien
cada una de ellas contiene alguna mancha del pecado.

7. Diga el significado de las indulgencias para el catolicismo.

R: La iglesia católica afirmaba que estas indulgencias eran el tesoro de la


Iglesia, una dispensación de los méritos de Cristo, de los apóstoles y mártires Y
que el Papa había recibido la autoridad de otorgar en las bulas.

8. ¿Cree usted que las indulgencias afectaban la relación del hombre


con Dios? ¿Por qué?
R: Investigación personal.

Cuestionario de la Lección 8

1. ¿Cuáles fueron las dos posiciones que dieron lugar a la controversia


sinergista?

R: La primera posición plantea que el pecado original es la sustancia misma


de hombre, la naturaleza de cada ser humano, su esencia misma y no un
accidente. Adán, antes de la caída tenía su justicia original y por tanto podía

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Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

colaborar con la gracia de Dios. Pero en la caída perdió su libre voluntad, su


imagen de Dios y su capacidad de volverse a Dios. Después de la caída el
hombre exhibe la imagen de satanás y su sustancia es el pecado. Entonces en
la conversión ocurre una lucha entre la imagen de Dios y la de satanás o entre la
sustancia de la nueva creación y la sustancia de la vieja. La segunda posición
que se plantea y que da paso a la controversia, es que el hombre después de la
caída, tiene el pecado original que pertenece a su naturaleza pecaminosa y que
al mismo tiempo corrompe esta naturaleza pero no llega a ser una misma cosa
de modo que se confundan. Es decir que entre el pecado original por un lado y
la sustancia, la naturaleza, esencia, cuerpo y alma del hombre por otro, existe
una distinción.

2. ¿Cuál de las dos posiciones aprobó como verdadera la fórmula de


concordia? Y ¿Por qué?

R: La Fórmula de concordia condena la primera posición mencionada como


un error que se acerca peligrosamente al maniqueísmo. Y establece la segunda
postura diciendo que hay una distinción entre la naturaleza humana y el pecado
original.

3. ¿Por qué se desarrolla el Sínodo de Dort?

R: El Sínodo de Dort se desarrolla con el objetivo fundamental de solucionar


la controversia con los arminianos y defender la doctrina calvinista.

4. Explique los dos aspectos fundamentales en que define el pecado el


catecismo menor de Westminster.
R: Define el pecado en dos aspectos fundamentales: El primero se ve como
la inconformidad con los mandamientos de Dios. Es decir, Dios ha dado con
claridad leyes para el hombre y cuando este nos las obedece incurre en pecado.
También, se le denomina pecado de comisión. El segundo aspecto es el pecado

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Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

de omisión. En este caso Dios ha dado leyes para que sean guardadas y si el
hombre deja de hacerlo también se le cuenta como pecado. Explica además este
Catecismo que tanto el pecado de omisión como el de comisión tienen igual
gravedad para los ojos de Dios.
5. ¿Qué dice el Catecismo menor de Westminster en cuanto al origen del
pecado?

R: En cuando al origen del pecado, este Catecismo, indica que no está en


Dios por cuanto Él es Santo y tampoco está en el hombre porque fue creado a
imagen y semejanza de Dios. Entonces es Satanás el autor del pecado y todo el
que peca le pertenece.

6. De la confesión de fe bautista, mencione las consecuencias del


pecado que esta describe.

R: Pero este pecado trajo como consecuencia que los primeros padres
cayeron de su justicia original. Y por cuanto Adán era la raíz de la raza humana,
la culpa de este pecado fue imputada a su posteridad y la naturaleza corrompida
se transmitió a su descendencia. La muerte pasó a todos los hombres y quedaron
totalmente corrompidos en todas las facultades y partes del alma y del cuerpo.
Quedando bajo la ira de Dios, contados como esclavos del pecado y sujetos a
miserias espirituales. Además el hombre pierde completamente la capacidad
para desear algún bien espiritual que acompañe a la salvación. Por tanto, no
puede por su propia fuerza convertirse, ni siquiera prepararse para la conversión.

7. Diga que era el pecado original para Berkhof y como se transmite.

R: En cuanto al pecado original, Berkhof expresa que este pecado se llama


así, porque se deriva del tronco original de la raza humana, está presente en la
vida de cada individuo desde el momento de su nacimiento y es la raíz interna de
todos los pecados actuales que manchan la vida del hombre. En cuanto a la

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Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

transmisión de este pecado, Berkhof coincide con Calvino en cuanto a que tanto
la culpa como la corrupción de la naturaleza, se imputan a la descendencia.

8. Mencione las dos naturalezas en las que Ch. Hodge divide el pecado.

R: Este teólogo analiza la doctrina del pecado dividiéndolo en dos aspectos


fundamentales. Primero atendiendo a su naturaleza metafísica o filosófica y
segundo a su naturaleza moral o religiosa.

9. Para Hodge cuál era la posición teológica que mejor explica la


relación de Adán con su posteridad.

R: Para este teólogo solo hay una postura que explica correctamente la
relación entre Adán y su posteridad. Y lo constituye la imputación inmediata. Esta
teoría en virtud de la unión, federal y natural, entre Adán y su posteridad, su
pecado, aunque no el acto de ellos, les es imputado de tal manera que es la base
judicial de que la pena de que fue amenazado cayera también sobre ellos.

10. ¿Qué sucede si se deteriora el concepto de pecado original según


Buswell?

R: al deteriorar el concepto de pecado original se destruye también la


doctrina de la expiación a través de Cristo como un hecho cumplido en la cruz.

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Doctrina del Pecado en el pensamiento de Juan Calvino

Biografía del Autor

Nombre (s) y Apellidos: Lester Luis Leyva Pupo

Fecha de nacimiento: 17 de noviembre de 1977

Lugar de nacimiento: Sagua de Tánamo, Holguín, Cuba

No. Permanente de identidad: 77111721067

Teléfono móvil: 58345498

Correo electrónico: lester1977@nauta.cu

Estado civil: Casado

Profesión: Pastor

Fecha de profesión de fe: marzo 1998

Fecha de bautismo: enero 2000

Comencé a trabajar en misiones de la localidad a tiempo parcial, hasta que Dios hizo
bien real su llamado y me dediqué a tiempo completo para su obra. Dios fue hablando a
mi corazón a través de mi relación con Él y a través de su Palabra y fue haciéndome
entender que me quería trabajando todo el tiempo en el ministerio. Actualmente soy
Pastor en la XIII Iglesia Bautista de las Tunas. Iglesia de la Convención Bautista de Cuba
Oriental (CBCOr)

Dentro de los estudios realizados están: Ingeniero Eléctrico (2001), Professional


Chaplain International (2009), Licenciado en Estudios Bíblicos, (FLET 2010), Licenciado
en Estudios Teológicos y Bíblicos (2011), Maestría en Estudios Teológicos (MINTS
2012), Licenciado en Teología (Seminario Bautista de Cuba Oriental)

Mi deseo es cumplir cabalmente con el propósito que Dios tiene para mí. Seguir
creciendo cada día en mi relación y conocimiento de Dios. Agradezco a Dios por su
fidelidad demostrada a través de su presencia en mi vida en toda circunstancia. A
Jesucristo su Hijo que me ha limpiado y transformado. A su Espíritu Santo que me ha
sellado para el día de la redención.

Gloria a Dios

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