Академический Документы
Профессиональный Документы
Культура Документы
Libertad de los ciudadanos de acudir a este procedimiento. Las personas tienen la opción
de acudir o no a la conciliación, en base al derecho de libertad que tiene cada uno y al ejercicio
de la autonomía de la voluntad.
La Figura del conciliador. Este procedimiento cuenta con un tercero imparcial, denominado
Conciliador, quien está encargado de ayudar a las partes a llegar a un arreglo amistoso. Como
ya se explicó anteriormente puede formular propuestas para una transacción de la
controversia. Su trabajo requiere que haya obtenido ciertas habilidades.
Es un procedimiento extrajudicial, no un proceso. Principalmente porque el tercero que
es el conciliador no tiene poder de imperio como lo tiene el Juez, no existe intervención
jurisdiccional en el sentido de decisión.
Cuando se habla de proceso es imprescindible tomar en consideración la estructura y los
nexos que median entre los actos, los sujetos, principios procesales, cargas procesales y
derechos.
El proceso es exclusivo de la actuación jurisdiccional.
Es una función autocompositiva. A diferencia del juez o del árbitro, el conciliador actúa para
aproximar a las partes, quienes son las que con la intervención del conciliador llegan a una
solución, por eso se dice que es autocompositiva.
Posible acuerdo definitivo. El artículo 33 de lay 708 señala que el acta de conciliación desde
su suscripción es vinculante a las partes y su exigibilidad inmediata adquiriendo la calidad de
cosa juzgada. La norma aclara que en caso de incumplimiento de lo acordado, procede la
ejecución forzosa del acta de conciliación, conforme el procedimiento de ejecución de
sentencia
4.3. Ventajas de la conciliación.
La Libertad. No solo es una característica de la conciliación, también es una ventaja. Las
personas acuden a la conciliación en ejercicio de su derecho de libertad de elección y de
autonomía de la voluntad.
Acuerdo Pacífico. En la conciliación los principales actores son las partes, acuerdan para
llegar a una resolución del conflicto. Lo que es distinto si las partes acuden a la vía
jurisdiccional donde la resolución es impuesta.
Confidencialidad. El conciliador debe guardar confidencialidad de este procedimiento, así
como de los documentos que se hayan presentado. El artículo 8 de la Ley 708 señala:
I. Toda información conocida y producida por los particulares en un procedimiento
de conciliación o de arbitraje, es confidencial. En conciliación además no tiene ningún
valor probatorio.
II. Excepcionalmente, la confidencialidad se levantará cuando:
Estén comprometidos los intereses del Estado, caso en el cual, la información será
entregada a la Procuraduría General del Estado.
Existan indicios de comisión delictiva, caso en el cual, la información será entregada
mediante requerimiento fiscal u orden judicial.
De igual forma el Código Procesal Civil señala:
I. La confidencialidad que debe guardar el conciliador incluye el contenido de los
papeles o cualquier otro material de trabajo que las partes hayan presentado,
confeccionado o evalúen a los fines de la conciliación.
II. La confidencialidad no requiere acuerdo expreso de las partes.
III. La confidencialidad cesa en los siguientes casos:
a) Por disposición expresa y fundamentada de la autoridad judicial o
autorización expresa de las partes que intervinieron.
b) Para evitar la comisión de un delito o, si éste se está cometiendo, impedir que
continúe cometiéndose.
IV. El cese de la confidencialidad debe ser interpretado con carácter restrictivo y los
supuestos de excepción surgir de manera evidente.
La igualdad. La verdadera igualad entre las partes en el procedimiento conciliatorio es una
gran ventaja, ya que en igualdad de condiciones se puede llegar al acuerdo conciliatorio.
No hay ganadores y perdedores. Cuando el procedimiento conciliatorio acaba, existe una
sensación de paz, ya que el acuerdo al que se llega es dado por ambas partes. Ambas partes
ceden para ganar.
Económica.
Tiempo.
Flexibilidad y menos formalidad.