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Psicoanálisis
Revista Propiedad de la
Asociación Psicoanalítica de Buenos Aires
Vol. XXXIV - Nº 3 - 2012, Diciembre de 2012
Buenos Aires, Argentinaa
Psicoanálisis
3 números anuales
ISSN 0325-819X
ISSN (en línea) 1853-8428
Registro de la propiedad intelectual: 523.412
Objetivo
Indización
Directora de la Revista
Lic. Ana Cristina Bisson de Moguillansky
PUBLICACIONES
Comité Editorial
Secretaria
Dra. Anamaría Cravenna de Melazzini
Vocales
Dr.Ezequiel Achilli
Lic. S. María Blum de Rein
Lic. Daniel Duek
Lic. Jessica Guisasola
Lic.Marta Lewin
Lic. Marta Martínez Román Palópoli
Lic. Marta Osuna de Perel
Lic. Alicia Werba de Siniavsky
Lic. Paulina Zukerman
Colaboradora
Lic. Dora Nuesch
Corresponsales
Dr. Newton Aronis Maltchik (Brasil)
Lic. Mirta Berman de Oelsner (U.S.A.)
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Dra. Ana R. Chait de Trachtenberg (Brasil)
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Dra. Yolanda Gampel (Israel)
Dr. Héctor Fernando Maffi (España)
Dr. Rogelio Sosnik (U.S.A.)
Comité de Arbitraje
Dr. Enrique Alba
Dra. Claudia Amburgo
Dr. Horacio Barredo
Dra. Susana Bidolsky
Dra. Julia Braun
Dr. Angel Costantino
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Dr. José Fischbein
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Dr. Luis Kancyper
Dr. Jorge Lebas
Dr. Raúl Levin
Dr. Eduardo Mandet
Dra. Mabel Marcinavicius
Dr. Carlos Moguillansky
Dr. Rodolfo Moguillansky
Dr. Julio Moreno
Dr. Leonardo Peskin
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Dr. Rogelio Rimoldi
Dra. Ana Rozenbaum
Lic. Juana San Román
Dra. Alicia Sirota
Lic. Oscar Sotolano
Dra. Amalia Theodoro de Zirlinger
Dra. Delia Torres de Aryan
Dra. Graciela Ventrici
Lic. Susana Vinocur de Fischbein
Dra. Adriana Yankelevich
Indice
Panel Transferencia
Panelistas: Ricardo Avenburg, Gerardo Pasqualini
y Janine Puget
Mesa Redonda: Transmisión escrita del psicoanálisis.
Dinámica de la transferencia cien años después 429
Trabajos Arbitrados
Asbed Aryan
Nuevos Encuadres. Reconsideración de la
transferencia-contratansferencia 461
Valeria Corbella
El jugar con adultos: entre la acción y la
simbolización en el proceso terapéutico 485
Carlos Moguillansky
La clandestinidad. Su relación con
la represión y la desmentida 511
Delia Torres de Aryan y Marcello Cossu Giri
Dibujo y no dibujo de un niño de 8 años
en Tiempos de Catástrofe Social 527
Pioneros Rioplatenses
Gladys Silka Santoro
Algunas reflexiones sobre la teoría de
David Liberman 549
Reseñas
Sergio C. Staude
Prólogo II,
Lo obsceno en psicoanálisis de pareja 573
1
Mesa redonda presentada por la Comisión de Publicaciones de APdeBA realizada en la
sede de la Asociación Psicoanalítica Argentina el 30 de agosto de 2012.
Platón donde está Sócrates, por lo tanto ahí nos interroga: ¿dónde
escribió?, ¿en los sesos?, ¿dónde se escribe? Y esto nos remite
directamente a Freud, a la escritura en Freud, a la memoria, que me
parece que son dos puntos muy vigentes que nos deben interrogar.
De “Dinámica de la transferencia” me interesaba plantear dos
cuestiones. Primero lo de tiempo que hay en la lectura, porque la
lectura siempre es en presente, cien años después el texto es en
presente, quiere decir que la vigencia del texto está en su lectura, en el
lector que lo puede actualizar y puede cosechar algo que puede
encontrar ahí, en el texto. Y de lo que se trata es de hacer vivir algo del
orden del lenguaje, por eso volvemos a la historia, Freud tiene sus
analizandos, sus supervisados pero también tiene sus escritos, sus
textos; también está la biografía de Freud de Jones –por ejemplo– y la
transmisión o lo que puede haber transmitido Freud que aparece en los
escritos de sus discípulos, donde está todo el orden de la transmisión
pero por escrito.
Yo creo que hay muchas puntas en “Dinámica de la transferencia”
para pensar la idea de escrito, una que yo había marcado –para marcar
también ahí– la cuestión de la causa, pero ya que estamos en la
escritura voy a empezar por: en “Dinámica de la transferencia” Freud
habla del cliché, ¿qué se re-inscribe?, Ricardo: tenemos el texto
alemán…
palabras. Pero con imago como rasgos yo creo que se puede pensar
algo con relación a la identificación y no a la identidad, si imago es
imagen va más para la línea de la inventiva, estaríamos más en la línea
de la propuesta jungiana de los arquetipos, de la posibilidad de que hay
signos que se repiten y ahí hay un concepto de simbólico. Si lo
tomamos en la línea del rasgo ya es una marca y la marca es más difícil
que haga signos, va en la línea de la escritura, la marca es aquello que
impide que una imagen se constituya.
Y dice Freud:
Público: Yo creía que habían escrito un trabajo los tres juntos y que
teníamos que hacer preguntas… Pero por de pronto se me ocurrió jugar
un poquito con lo que escuché, me gustó la cuestión de la relación entre
causalidad y lo referido a azar y más que azaroso en términos de lo
creo que parte del pensamiento de Freud, Hegel, Kant, etc., es como
que se ha perdido, no encontramos ese nivel de profundización de
pensamiento, de desarrollo de pensamiento, de retomar Freud lo
mismo que dijo –a lo mejor las cosas más comunes– ¿para qué lo
vuelve a repetir si ya lo dijo veinte veces?, pero repite con una cierta
diferencia conceptos, contradicciones que a uno lo pone incómodo y
de repente de esas contradicciones surge algo nuevo. Ese tipo de
pensamiento no está de moda, pero yo creo que más allá de la
necesidad del pensamiento práctico, en el pensamiento creativo tam-
bién es importante recuperar un poco de todo eso; y en el análisis, por
supuesto.
Gerardo Pasqualini: Por eso hay que ver qué se dice cuando se dice
sujeto. Si se desliza a persona –dos sujetos– esa es una historia.
Por eso puede ser molesto, pero –digo– es importante contextuar
los términos.
persona, a medida que pasan los años estos conceptos fueron tomando
cuerpo en distintos cuerpos teóricos. A mí me parece bárbaro que lo
haya usado y que uno lo encuentre, pero mi fidelidad a Freud no es ver
dónde la usó sino mi fidelidad a Freud es tratar de cuestionar perma-
nentemente los conceptos y hacer algo con lo que se va produciendo.
Como bien dijo Pasqualini, el block maravilloso nunca repite tal cual.
Pero una cosa es trabajar con el block maravilloso que son las marcas
que van produciendo en distintos textos distintos relatos, y otra con
textos no escritos.
Las generaciones actuales y todo lo que se ha escrito y lo que se ha
pensado, los obstáculos, los fracasos que tuvimos como psicoanalistas
–todos los tuvimos, estoy segura– tomar conciencia de los límites del
psicoanálisis, de ciertas maneras de acercarnos a los pacientes… todo
eso hace pensar que tenemos que aprender de lo que va sucediendo
hoy, de lo que las generaciones actuales nos enseñan, y que no está en
el block maravilloso, no tiene inscripción, sino que son maneras de
producir subjetividad, maneras de pensar. Ricardo dice que el pensa-
miento de la tecnología es otro tipo de pensamiento. Sí, es otro tipo de
pensamiento pero es pensamiento al cual nosotros no accedemos o
tenemos que aprender de ellos.
Entonces mi intento es decir que vienen pasando, vienen sucedien-
do hechos, fenómenos, maneras de relacionarse, producciones que en
la época de Freud no existían y no tenían por qué existir. Hoy tenemos
que hacer con lo que existe y lo que existe son nuevas producciones
que producen sus marcas pero no se valen de las marcas que ya están.
Cuando hablamos y decimos: “lo que hacen los jóvenes”, lo que
hacen los jóvenes es enseñarnos que existen otras maneras de relacio-
narnos que no es reproducción del pasado sino que es algo que no
conocemos, no entendemos y que muchas personas tienen tendencia
a despreciar un poco: “¿cómo hacen?”. Yo estoy admirada de que
puedan hacer varias cosas a la vez de esa manera y producir un tipo de
pensamiento que no es el mismo que yo aprendí, es otro.
Entonces mi intención es poder hacer algo con esto que se produce
y que no lo tengo en el block maravilloso, y Freud no lo tenía, no tenía
por qué tenerlo porque tenía otras cosas que estaban pasando.
Ricardo Avenburg: ¿Y quién soy yo?, por supuesto que cada uno lo
lee a su manera y a Freud también. Son de una riqueza increíble Freud,
Platón, Kant, Hegel… no hay una teoría freudiana, yo creo que cada
uno toma lo que quiere, esos autores son autores en movimiento
permanente por lo tanto yo no quiero ser fiel a Freud …
Asbed Aryan
1
Este trabajo ha sido parcialmente presentado en Chicago (2009), Bogotá (2010),
Montevideo (2010) y México (2011). Ésta es una versión, reelaborada y reformulada de
la versión del 2003, con bibliografía actualizada.
Consideraciones generales
sepa, nunca cambió de objetivo, hasta incluir a los colegas que querían
ser psicoanalistas. El análisis de Ferenczi es un ejemplo contundente.
Mi planteo es mantener las prioridades y no establecerlas como
funciones independientes y mucho menos, excluyentes. Es necesario
que permanentemente nos actualicemos con cada paciente cuando
cuidamos el método, y tratemos de distinguir los dolores inevitables
de los innecesarios para él. No se me escapa el aspecto subjetivo de
este planteo, pero ya hemos comprendido que la neutralidad analítica
debe operar en cuanto a la búsqueda de satisfacción de los deseos
propios del analista y no tratar de materializar la utopía de ser una
pantalla en blanco. No olvidemos que fue en el contexto de psicoterapias
silvestres cuando Freud recomendó en “Consejos al médico” la
neutralidad, tan taxativamente como lo hizo, buscando la metáfora de
una pantalla en blanco.
No quiero extenderme en estas consideraciones generales acerca de
la actitud analítica, si bien representan la columna vertebral que
sostiene mi actitud, sea en el contexto que sea y el canal de comuni-
cación que necesite adoptar: jugar en el suelo (y no sentado en mi sillón
de analista y él acostado en el diván) con un niño al juego que
proponga, sea armar torres, hacer pelear soldaditos o animales feroces
o enchastrarnos con plastilina; juegos de mesa con un púber o
adolescente o juegos de computadora con la notebook que trae él
mismo, etc., etc. (Aryan, A. 1985, 2007, 2010).
En esta oportunidad me ocuparé del teléfono y la teleconferencia
sea por skype o equivalente. Expongo aquí ideas que fui tejiendo en el
trabajo con el paciente que presentaré y luego a lo largo de diez años,
con 16 pacientes en total (en este momento 5, de los cuales uno está en
análisis de formación). Fue él, mi primer paciente a distancia, quien
me sugirió adoptar e incluir este canal de comunicación para nuestros
encuentros. Yo no tenía experiencia y accedí ensayar con él ante su
sugerencia y pedido, no sin vacilaciones. Pienso que nos es necesario
considerar la edad emocional de un paciente, pero en este caso al
tratarse de alguien de edad real de más de 40 años, viviendo una
adolescencia prolongada, no me resultó previsible ni indiferente su
pedido. Me preguntaba si se trataba de un acting out, la evitación del
La práctica
Paciente/analista en transferencia
paciente y cambia la visión del analista. Si el analista cree que con este
cambio puede ayudar analíticamente a un paciente, pensamos que es
ético y legítimo habilitar un setting específico aunque esté por fuera de
lo clásicamente consensuado. De acuerdo a cómo evoluciona la
experiencia, se irá evaluando si se está instalando un proceso analítico
y si la conducción de la transferencia resulta viable con la nueva
manera de implementar el encuadre. Sostener la situación analítica
siempre favorecerá la emergencia de las fantasías inconscientes.
Material clínico 2
2
Este material clínico ha aparecido en forma reducida en “Psicoanálisis a distancia” de
Ricardo Carlino como el Analista B, en la pág. 210.
aunque con recelo. Que él tiene organizada su vida para que no sólo le
pase con su novia, sino con los lugares, pertenencias, etc., pero que es
probable que en este momento, más allá de todas sus interrupciones y
sus viajes, la relación conmigo lo estuviese reconciliando con poder
estar más tiempo en un lugar.
Mi preocupación habitual era respetar la distancia prudencial que
él necesitaba. Si me sentía distante, se sentía solo, abandonado y
angustiado; si le resultaba muy próximo, aparecía la claustrofobia y se
incrementaban sus diálogos con la voz, aunque se viese atrapado en
una relación sado-masoquista. De todos modos, su relación conmigo
iba consolidándose.
Un lunes dijo “me estoy encariñando con este Dr. Aryan!” porque
había postergado el vuelo del miércoles a Chile para poder tener la
sesión “y no sé, si esto de encariñarme con el analista no va a traer
problemas para el tratamiento. Porque al analista hay que tomarlo
como analista”. Y con preocupación agregó que quería entender esto
de sobrecargarse con los sentimientos, porque no le permitía pensar y
eso lo fastidiaba. Acongojándose cada vez más, relató que la noche
anterior había ido con su familia y la novia al teatro. Todos muy a gusto
entre sí. Mientras que él se preguntaba “¿yo qué mierda quiero de la
vida que no estoy conforme con esta vida que llevo?”. Se reprochaba
y al mismo tiempo pensaba que “todo esto me gusta, pero no puedo
estar acá”. Estaba incómodo y no lo disfrutaba porque a medida que
se estrechaba la relación con la novia, aumentaba su rechazo sexual y
se sentía culpable y responsable de no procurarle el bienestar mereci-
do. Le parecía absolutamente injusto y loco, porque la novia era “una
mujer divina, aparte de ser hermosa”. Que esa mañana se abrazó a ella
y lloró diciendo que no sabía qué le pasaba. Y en sesión continuó
contándome todo llorando. A modo de síntesis agregó: “este estado no
lo soporto más”.
Entonces le dije que por un lado sentía un montón de cosas
considerándose ahora auténtico consigo mismo, pero sentir tanto, lo
hacía despreciable. Que no estaba bien sentir tanto porque tal vez no
es de hombre y que era una especie de paradoja que él debiese estar
sufriendo.
Comentarios
en cuenta hechos sin dar por sentado que estaban determinados por un
pasado. Entonces ahora transfiere eso a su manera de pensar sus
vínculos actuales, a lo cual después resulta posible incluir la historia.
Lo creado conmigo lo transfiere como modalidad de pensamiento, de
entender o de detectar, de captar su realidad y también comprometerse,
en lugar de comprometerse según elucubraciones pseudofilosóficas
previas a la realidad. Antes, él no averiguaba quién era la persona, sino
que la voz le decía cómo había que hacer las cosas. Y eso era un poco
la transferencia de él, de su historia directamente aplicada a la realidad
actual. Mientras que actualmente es como si hubiera constituido o
captado la dimensión de “ir haciendo con otro” que es diferente a hacer
solo. Entonces siente la necesidad del otro como otro, no como una
repetición de sus modelos infantiles.
Sin concluir
Bibliografía
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ANDERSON, G. (2009) “Telephone analysis”. Panel at 46th IPA Congress, Chicago, IL.
ARGENTIERI, S., & AMATI MEHLER, J. (2003) “Telephone ‘analysis’: Hello, who’s
Valeria Corbella
Departamento de Investigación IUSAM
Introducción
Viñetas clínicas
Se ha escrito mucho acerca del jugar con niños pero ¿qué sucede
con el jugar con adultos? La práctica contemporánea me ha llevado a
confrontar situaciones clínicas en las cuales diversos pacientes propu-
sieron “juegos” que no estaban contemplados en el manual de técnica
psicoanalítica para adultos. No así en la técnica de niños. Frente a la
sorpresa de algunas propuestas, me dejé llevar por la invitación
–confieso que no sin temor– y representé algún personaje que el
paciente estaba sugiriéndome. A modo de viñetas, traigo algunos
ejemplos como para situar al lector en el contexto referido.
Viñeta 1
Sesión tras sesión, un paciente fue atiborrando un cajón de mi
biblioteca con mails impresos, cigarrillos, encendedores, fotos, dibu-
jos, chocolates y dinero. Cada objeto tenía una razón de ser dejado. Los
mails que compulsivamente enviaba a una ex novia y fotos de ella le
generaban un “enrosque mental”, palabras del paciente para explicar
un proceso mental de ideas persecutorias y celos que no cesaban hasta
que generaba un encuentro con ella. Los cigarrillos y encendedor le
resultaban extremadamente dañinos (aunque fumaba solo unos po-
cos). Lo mismo con los chocolates. Realizó algunos dibujos que
necesitó dejarlos porque eran de “rostros que daban miedo por la
noche” y no quería tenerlos en su cuarto. El dinero, junto con una
tarjeta de crédito los dejó luego de contraer una deuda por la cual tuvo
que pedir un préstamo en el banco para pagar los gastos adeudados con
la tarjeta de crédito. El dinero tenía el sentido de ser una reserva para
pagar el tratamiento en caso de quedarse sin plata. Yo los iba
almacenando y el paciente no obtuvo un rechazo por mi parte para
alojar cada cosa que él traía. Refería la necesidad de dejarlas en mi
Viñeta 2
Una paciente sorprendía por la cantidad de ropaje con el que venía
a sesión. Llegaba y se sacaba capa tras capa de ropa, como si fuera una
cebolla. Llegué a contar dos camperas, tres sweaters de lana y dos
remeras. Luego se sentía el olor a suciedad y transpiración. La
temperatura externa no coincidía con el frío polar que parecía sentir
esta persona. Cuatro meses transcurrieron con el mismo ritual. Al final
de una sesión me dice: “Me prestás una bufanda tuya, así no me
enfermo”. El pedido, inédito en mi experiencia clínica, me tomó por
sorpresa. La falta de tiempo y la ausencia de alguna ocurrencia que
evitara cualquier cliché, me llevó a buscarle una bufanda. Cuando
regreso al consultorio (está ubicado en mi casa) me vuelve a sorpren-
der: “¿Me la regalás?”. “No te la regalo pero te la presto” le dije sin
pensar demasiado. A la sesión siguiente me dice riéndose: “Te robé la
bufanda”. Con un tono casi de juego le dije: “Mirá que te la presté, no
te la regalé. A falta de abrigo, ¿necesitarás robarlo?”. La paciente
responde fríamente: “La vez que viene te la traigo, no te la voy a robar”.
Pasada la sesión, en momentos en donde los analistas pensamos acerca
de lo sucedido en la sesión, se evidenciaron dos momentos de la
intervención. El primero permanece atrapado en la concretud de la
escena y refiere a una respuesta defensiva por parte de la analista:
aclarar que la bufanda es de ella y que fue en préstamo. Cabe
Viñeta 3
“¿Me hacés un té con galletitas?” refiere una paciente ni bien entra
al consultorio. No terminaba de sorprenderme el pedido cuando le
pregunto si quiere galletitas dulces o saladas. Imaginé que diría dulces
porque se me representó el pedido de un niño, que usualmente optan
por las dulces. Así sucedió y le digo: “¿Chocolinas, está bien?”. “¡Me
1
Lo frío apareció meses después refiriendo acerca de su cuerpo que lo sentía tan frío que
a veces sentía que estaba muerta.
2
Ambos términos, agieren e enactment, serán referidos sin traducción ya que las mismas
implican deslices hacia otros sentidos abrigados por diferentes escuelas psicoanalíticas.
3
Los destacados son del autor. La obra citada de André Green es en el contexto de una
entrevista que Fernando Uribarri le realizara sobre la temática “La representación y lo
irrepresentable” (Revista de Psicoanálisis; Nro 6, 1998-1999).
4
El uso del término demanda, en todo el trabajo, es desde su etimología y no desde un
marco teórico lacaniano.
5
Idea que se enraíza en los desarrollos bionianos.
6
“En el lenguaje corriente y según la definición del diccionario, la palabra enactment
sugiere una acción cuyo propósito, fuerza e intención están elevadas a una alta intensidad.
Dicha intensidad brinda concretud y realidad al impacto sobre la otra persona implicada
en el campo de acción. Es entonces un acto, con la intención de persuadir o forzar al otro
en una acción recíproca” (la traducción es de la autora)..
7
Si el símbolo representa aquello que no está presente, diría que “cajón-inodoro, mamá-
heladera, canción para tomar el té” estarían representando, en un nivel simbólico, conteni-
dos escindidos susceptibles de transformaciones a través de la palabra y no ya en acto.
8
Cabe aclarar que la alimentación es la que claramente considera Freud como pulsión de
autoconservación básica. Por otro lado la necesidad de abrigo, es considerada en este
trabajo como el holding y handling winnicottianos y en este sentido se incluyen como
necesidades del Yo, también básicas, para las cuales se depende de un objeto externo real.
Por último, la posibilidad de que el aparato psíquico pueda albergar sus propios
contenidos mentales, refiere a las nociones bionianas de transformación de elementos con
la consecuente capacidad de rêverie materna.
partida del deseo. Por un lado un sujeto que desee alimentarse y por
otro alguien que desee alimentar. Al tiempo que se instala esta
dinámica vincular, aparece el deseo de jugar. Luego de la presentación
del alimento por parte del analista es que la paciente se pone a cantar
–tomo la canción y el canto como un fenómeno complejo en donde la
paciente comienza un proceso de elaboración y simbolización de
experiencias traumáticas en el vínculo con su madre–.9
Esta sucesión de hechos me recuerda a lo que Donald Winnicott
(1979) nos dijo acerca de la psicoterapia: “la psicoterapia se realiza en
la superposición de las dos zonas de juego, la del paciente y la del
terapeuta. Si este último no sabe jugar, no está capacitado para la tarea.
Si el que no sabe jugar es el paciente, hay que hacer algo para que pueda
lograrlo, después de lo cual comienza la psicoterapia” (p. 80). Cuando
este autor nos habla de juego, no lo deja en el terreno exclusivo de la
infancia sino más bien lo refiere como actividad creadora de toda
persona. Sus palabras resultan contundentes: el analista que no sabe
jugar está incapacitado para realizar su tarea.
El psicoanálisis se forjó desde la talking cure como método
terapéutico en donde la palabra hablada tenía un valor primordial pero
también los actos han sido motivo de investigación en Freud (1905,
1914) desde los inicios. La palabra ha tenido su rol central en cualquier
análisis de adultos. Y lo sigue teniendo. Tan sólo que el analista
confronta con situaciones que se extrapolan más allá de la palabra y
son precisamente aquellas que serán conducidas nuevamente al orden
del lenguaje. Para lograrlo, surgen espacios de transición entre el acto
y la palabra. En esa interfase, se encuentra el jugar.
Hay momentos en donde no cabe la posibilidad de representación
a través de símbolos, incluida la palabra que simboliza la cosa ausente.
Se demanda una presencia concreta con una acción específica. No hay
9
Menciono esta viñeta quizás porque es en la que claramente aparece el placer por el canto
posterior a la aparición del alimento. No deja de ser muy diferente a cuando los niños
pequeños sienten extremo placer cuando su madre o sustituto les preparan la comida y la
misma alimentación pasa a ser casi como un juego. Recordemos situaciones concretas
cuando la mamá juega a que el tenedor y la comida son un avioncito que entra en la boca
del niño.
Jugar
crear algo con otro que funciona como compañero de juego. El analista
es aquel que acompaña de la manera en que ese otro necesita.
La acción específica resulta necesaria en momentos de extrema
indefensión y dependencia del ser humano. Podríamos pensar que
tomar el té con una paciente en extrema dependencia y vulnerabilidad
física y psíquica, es parte de una acción específica. Acción específica
que conduce a la misma paciente, meses más tarde, a comenzar a
alimentarse por ella misma y ganar peso. Acción específica del
terapeuta que permite la instalación de una corriente desiderativa que
se liga a Eros y al deseo de comer, al deseo de vivir. Deseo que surge
a partir de otro deseante y quizás con ello se favorezcan nuevas
identificaciones y posibles integraciones en un Yo desnutrido.
Si repasamos las viñetas, tanto la bufanda como el cajón del
terapeuta pueden funcionar del mismo modo. Son acciones específi-
cas de contención, de abrigo o alimentación que corresponde a
necesidades muy primarias en momentos en donde el lenguaje aún no
figuraba. Cajón inodoro, mamá heladera y la Canción para tomar el té,
tienen su importancia en tanto son creaciones simbólicas de cada
paciente. La palabra del analista permanece muda hasta que el paciente
autoriza el juego de palabras e interpretaciones. Antes de ese momen-
to, la suspensión de las hipótesis teóricas en el analista permite, al
paciente, desarrollar su propio juego y con ello, sus propias construc-
ciones simbólicas. Puesta en escena de experiencias pasadas que no
han encontrado el acceso simbolizante del lenguaje. Allí, técnicamen-
te, sería una exigencia inapropiada del analista exigir palabras donde
no las hubo, donde no las hay.
Bibliografía
Carlos Moguillansky
Introducción
1
Foucault, M. Histoire de la sexualité I, II et III. Paris, Gallimard, 1984 y 1986.
2
Foucault, M. Maladie mental et psychologie. Paris, PUF, 1954 y 1997.
3
Foucault, M. Histoire de la folie à l’âge classique. Paris, Gallimard, 1999.
4
Foucault, M. Le pouvoir psychiatrique. Curso 1973-4. Paris, Gallimard, 2003.
5
Maleval, J. C. Locuras histéricas y psicosis disociativas. Buenos Aires, Paidós, 1987.
6
Mozart, W. A. (1787) Don Giovanni, ópera en dos actos con libreto de Lorenzo da Ponte.
Discusión
7
Green, A. (1972) De locuras privadas. Amorrortu. Bs. As. 1996.
8
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9
Freud, S. (1927) “Fetichismus”. Internationale Zeitschrift für Psychoanalyse.
10
Freud, S. (1940) Die Ichspaltung im Abwehrvorgang. Internationale Zeitschrift für
Psychoanalyse.
11
Moguillansky, C. (2011) Observación de la negación y la desmentida en el relato clínico.
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12
Literalmente, el disoluto castigado, en italiano.
13
Orwell, G. (1949) 1984. http://www.hacer.org/pdf/1984.pdf
14
Liberman, D. (1959) “Psicoanálisis del alcoholismo”. Acta Neuropsiquiátrica Argenti-
na, 5:161.
17
Freud, S. (1909). “Analyse der Phobie eines fünfjährigen Knaben”. Int. Zeitschrift für
Psychoanalyse.
18
Mannoni, O. Ya lo sé, pero aún así. La otra escena. Claves de lo imaginario. Bs. As.
Amorrortu, 1979.
La creencia debe ser distinguida de la suposición y la opinión, debido a su cualidad dual
característica, que sostiene una idea y la contraria, separadas por una escisión del tipo: “si,
pero aun así”.
19
Freud, S. (1915/7) Metapsichologysche Ergänzung zur Traumlehre. Int. Zeitschrift für
Psychoanalyse.
20
Freud, S. (1916/7) Trauer und melacholie. Internationale Zeitschrift für Psychoanalyse.
21
Klein, M. (1938) El duelo y su relación con los estados maníaco-depresivos. XV IPA
Congress, Paris. Int. J. of Psycho-Analysis,1940.
22
Ibíd. Obra citada.
26
Freud, S. (1908) Hysteriche Phantasien und ihre Besiehung zur Bisexualität. Int.
Zeitschrift für Psych.
27
Freud, S. (1908) Über infantile Sexualtheorien. Int. Zeitschrift für Psychoanalyse.
31
Freud, S. (1915) Triebe und Triebschiksale. Int. Zeitschrift für Psychoanalyse.
32
Moguillansky, C. Constelaciones frecuentes de la transferencia en las adicciones.
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33
Ibid. Obra citada: 365.
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Maladie mental et psychologie. Paris, PUF, 1954 y 1997.
Histoire de la folie à l’âge classique. Paris, Gallimard, 1999.
Le pouvoir psychiatrique. Curso 1973-4. Paris, Gallimard, 2003.
GREEN, A. (1972) De locuras privadas. Amorrortu. Bs. As. 1996.
MALEVAL, J. C. Locuras histéricas y psicosis disociativas. Buenos Aires, Paidós,
1987.
MANNONI, O. Ya lo sé, pero aún así. La otra escena. Claves de lo imaginario. Bs. As.
Amorrortu, 1979.
MOGUILLANSKY, C. (2010) “La ética de y con la transferencia”. Conferencia dada en
el Departamento Niñez y Adolescencia, APdeBA, abril de 2010.
(2010) Constelaciones frecuentes de la transferencia en las adicciones.
1
Cossu L´Abbate, Marcello (1995) L´Immagine e L´Immaginario (1942-1946). Seat.
Torino. p 42.3.
2
La Marcha sobre Roma fue el acto por el cual Mussolini tomó el poder en Italia en 1922.
La marcha marcó el principio del régimen fascista y el final del régimen parlamentario.
No fue una marcha violenta. Civiles partidarios del fascismo salieron desde distintas
ciudades italianas con rumbo a Roma y presentaron un ultimátum al gobierno pidiendo
que Mussolini asumiera el poder. El 29 de octubre el rey pidió a Mussolini que fuera
primer ministro y formara gabinete, el 30 de octubre Mussolini formó gobierno en Roma.
Cerca de 25.000 camisas negras hicieron un desfile triunfal el 31 de octubre. La dictadura
entró en vigencia más adelante tras la prohibición de los partidos de la oposición. La
ideología Fascista antepone el sentimiento a la razón. El hombre perfecto es el militar por
su obediencia y disciplina. La mujer está subordinada al hombre. Los disegni comenzaron
20 años más tarde.
3
Ibídem Patrioti .taliani Irrompo No In Un Garacc. p 40.
a. Idea General
“... la memoria, esa forma del olvido,
que retiene el formato, no el sentido...”.
Jorge Luis Borges: “El ciego”
b. Catástrofe Social
sible e inasible porque se pierden las reglas que rigen acerca de la vida
y la muerte y definen el delito y su correspondiente penalización.5 No
queda lugar para la diversidad, la discrepancia, la verdad no toda.
El niño deposita en la sociedad una expectativa de orden y protec-
ción, continuación de las figuras parentales que es una prolongación
del Yo-ideal que se desarticula en los contextos de violencia social
dando lugar a crisis identificatorias ligadas a la desorganización
social. De esta desarticulación nos dice U. Eco de mayo de 1945: “La
paz me dio una sensación curiosa. Me habían dicho que la guerra
permanente era la condición normal para un joven italiano”. “En 1942
había ganado el primer premio para jóvenes fascistas sobre el tema
¿Debemos morir por la gloria de Mussolini y el destino inmortal de
Italia? y comenta: mi respuesta había sido afirmativa. Era un chico
listo”.6
Pensamos que el dibujo “Choque en via Po” expresa la dimensión
traumática de la guerra que puede ser dibujada usando el sostén
imaginario que ofrece el invasor alemán, mientras que el dibujo que
pudo pensarse pero no llevarse a cabo, se debe a que nace en relación
a amenazas de muerte que provienen del semejante, en este caso los
otros romanos fascistas que detentan el poder del estado, “castigan al
padre” obstruyendo su carrera como profesor, amenazan con encarce-
lar a la madre, lo ponen a él, como niño en el lugar de “salvar a la
madre”, subvirtiendo los lugares que en situaciones normales ofrece
el Estado a los soportes identificatorios sociales. La violencia ejercida
por el Estado es paradigma de la violencia social.
U. Eco llama “Ur-Fascismo” en un sentido amplio a cualquier
situación en que todo desacuerdo es entendido como traición. Dice: el
Fascismo es una “denominación pars pro toto para movimientos
totalitarios diferentes”.7
El Ur-Fascismo habla una “neolengua”, crea su propio registro, su
propio léxico, su propio juego de lenguaje, y cambia las palabras, los
5
Puget J., Kaës R. (1988) Violencia de Estado y Psicoanálisis. Lumen (2006) p. 33.
6
Eco, U. (1997) Cinco escritos morales. El Fascismo Eterno. Editorial Lumen. Bompiani,
p. 33.
7
Ibídem. p. 42.
c. Circunstancia Histórica
8
Ibidem. p. 53.
9
Aulagnier, P. (1980). Los destinos del placer, alienación, amor, pasión. Barcelona,
Argot. p. 35.
10
Agamben, G. (1999). Lo que queda de Auschwitz, el archivo y el testigo. Valencia, Pre-
textos (2002), p. 149.
11
Castoriadis, C. (1996). El Avance de la Insignificancia, Eudeba (1997), p. 155-172.
12
Viñar, M. “Violencia Social y realidad en psicoanálisis”, en Janine Puget, Rene Kaës
(1988) Violencia de Estado y Psicoanálisis. Lumen (2006), p. 62.
d. Testimonio y Testigo
“La hermenéutica permite comprender
a un autor mejor de lo que el propio autor
se entendía a sí mismo y a una época
histórica mejor de lo que pudieron com-
prenderla quienes vivieron en ella.”
José Ferrater Mora
14
Freud, S. (1937) Moisés y el Monoteísmo. Buenos Aires. AE. Tomo XXIII, p. 124.
15
Puget, J. (2012) “Comentario Revista de Apdeba”, nro. 1, p. 16.
16
Puget, J. (2002) Jornadas Piera Aulagnier. Asociación Psicoanalítica de Bs. As. p. 93.
e. Dibujando
17
Benjamin, W. (1926) “Panorama del libro infantil”. En Escritos. Nueva Visión. Buenos
Aires (1989).
f. Mirando el Dibujo
Bibliografía
18
El tema del pintor con la escalera se repite en muchos dibujos, (Fascistas y Comunistas,
Un pizzardone, Cuando se fue el fascismo y otros). Pensamos que alude tanto al niño
dibujante-pintor como a Hitler omnipresente al que le decían “pintor”.
AULAGNIER, P. (1980) Los destinos del placer, alienación, amor, pasión. Barcelona,
Argot.
BENJAMIN, W. (1926) “Panorama del libro infantil”. En Escritos. Buenos Aires.
Nueva Visión (1989).
CASTORIADIS, C. (1996) El Avance de la Insignificancia. Eudeba (1997).
COSSU L´ABBATE, M. (1995) L´Immagine e L´Immaginario. Roma (1942-1946).
Torino. Seat.
ECO, U. (1997) Cinco escritos morales. El Fascismo Eterno. Editorial Lumen.
Bompiani.
FREUD, S. (1937) Moisés y el Monoteísmo. Buenos Aires. AE. Tomo XXIII.
(1919) Lo ominoso. Buenos Aires, A.E. Tomo XVII.
PUGET, J. (2002) Jornadas Piera Aulagnier. Asociación Psicoanalítica de Bs. As.
(2012) “Comentario Revista de Apdeba” nro. 1.
PUGET, J.; KAËS, R. (1988) Violencia de Estado y Psicoanálisis. Lumen (2006).
VIÑAR, M. (1988) “Violencia Social y realidad en psicoanálisis”. En Janine Puget,
Rene Kaës Violencia de Estado y Psicoanálisis. Lumen (2006).
Estilos
Ideas generales
Con esto ¿qué quiere decir Liberman?, que todos los pacientes
tienen un Superyó sádico y un Yo masoquista, pero esto es un lugar
común por que lo importante es preguntarnos ¿qué clase de Superyó
somos para ese paciente?
Nosotros provocamos efectos, entonces, el paciente no tiene sólo
una teoría sobre nosotros sino también sobre la terapia analítica y en
ese sentido el paciente tiene también una teoría sobre su historia, una
historia que generalmente va cambiando a medida que en el curso del
tratamiento va descubriendo su verdadera historia.
Dice Liberman en Comunicación en terapéutica psicoanalítica:
“La historia no es solo repetida, recordada sino que también es
elaborada y por lo tanto en cierta medida creada.” Es decir, entonces
que el paciente también tiene una fantasía de curación.
Liberman decía que le interesaba ver qué pasó entre la primera y la
segunda entrevista, y en general pedía un sueño y en función de eso se
podían tener indicadores de pronóstico porque si uno ve que el
Paciente Terapeuta
Paciente reflexivo Estilo dramático
Incógnitas y no crea suspenso
Paciente lírico Narrativo
(Estilo depresivo) Utilización instrumental
de frases con categorías
lógicas donde aparece
rescatada la identidad del
analista
Paciente épico Estilo narrativo-lógico
(de acción) Frases con categorías
lógicas en relación con
el encuadre.
Poner orden en el caos
Paciente narrativo Instrumentación de
técnicas de acción
Paciente dramático que Instrumentación de la
crea suspenso (fobias) esquizoidía
Paciente dramático que Instrumentación de la
crea impacto estético esquizoidía
2
Klein, M.: Envidia y gratitud, p. 26.
zas dejó como legado la idea de trabajar sin ideas preconcebidas y sin
prejuicios.
Cada sesión, con cada paciente es un fenómeno único e irrepetible.
David Liberman fue uno de los investigadores y de los clínicos más
importantes dentro del Psicoanálisis de la Argentina, por eso voy a
terminar mi trabajo con las mismas palabras que dije en otro momento:
“por sus ideas y por todo lo que nos enseñó de alguna manera está con
nosotros.”
Bibliografía
Sergio C. Staude
Un prólogo
1
José Luis Marzo. La memoria administrada. Ed. Katz.
2
Román Gubern. La imagen pornográfica y otras perversiones ópticas, Ed. Anagrama.
3
Corine Maier. Lo obsceno. Ed. Claves.
4
Roland Barthes. La cámara lúcida. Ed. Paidós. Buenos Aires, 1989, pág. 153.
5
Juan B.Ritvo. Rev. Agenda N° 120, p. 28/9.
RICARDO AVENBURG
GERARDO PASQUALINI
JANINE PUGET
ASBED ARYAN
VALERIA CORBELLA
CARLOS MOGUILLANSKY
SERGIO C. STAUDE
RESÚMENES Y DESCRIPTORES
RESUMEN: Los desafíos que la clínica contemporánea presenta son diversos. Es por ello
que la propuesta en este trabajo es pensar acerca del juego como recurso técnico
sumamente complejo y creativo. Comenzando por una selección de viñetas clínicas, el
artículo nos conduce, desde el inicio, a tomar un intenso contacto frente a diversos hechos
clínicos. Hechos en donde la acción antecede al diálogo analítico. Haciendo un recorrido
por los conceptos de agieren y enactment, se intentará demostrar que dichos conceptos
se emparentan entre sí y dan cuenta de las puestas en acto que se figuran a partir de las
viñetas. Acto, representación dramática que irrumpe en un escenario mudo. La antepo-
sición del acto a la palabra lleva al analista a preguntarse acerca de su técnica y acerca
del valor de dichos actos. Allí, la propuesta es pensar al acto terapéutico como un juego
que permite la significación de experiencias. Se asocian, entonces, los conceptos de
agieren y enactment con el jugar para luego deslizarse hacia las nociones de simboliza-
ción e historización, haciendo una parada en la noción freudiana de acción específica.
Es así que la acción terapéutica será pensada como una forma posible de acción
específica en tanto permita el surgimiento de movimientos desiderativos. La creatividad,
relacionada intrínsecamente con el jugar, recorre desde el inicio el presente trabajo y
constituye uno de los ejes centrales. La reflexión surge alrededor de patologías en las
cuales las fracturas en el narcisismo horadan profundo en el entramado psíquico dejando
allí sus marcas silenciosas. El jugar del analista, como posicionamiento teórico y técnico,
estimula a pensar y repensar la tarea del analista contemporáneo.
RESUMEN: Dibujar es una forma de relato de lo cotidiano. A través del dibujo el niño
interpreta y configura su propia historia se constituye subjetivamente, forma parte
de un imaginario social histórico, de una memoria colectiva que marca la pertenen-
cia y el reconocimiento para los sujetos de una cultura.
Los autores estudian el dibujo de un niño de 8 años durante la invasión alemana
de Roma. Es un choque de vehículos alemanes en la esquina de la casa familiar.
La catástrofe social de la guerra es elaborada dibujando la modificación de la
cartografía de la ciudad antes y después del choque.
Los alemanes, son otros claramente diferenciables y esta diferencia favorece la
elaboración psíquica.
El terrorismo de estado, en cambio, en tanto amenaza que proviene de un
semejante, italianos fascistas, inhibe la posibilidad de dibujar una situación que
recuerda como traumática: estando con su madre, ella fue amenazada con ser
encarcelada porque expresó su disconformidad con la imposición de celebrar un
aniversario fascista y pidió a Marcello Cossu L'Abbate que no cuente lo sucedido.
Los autores plantean que la Catástrofe social porque proviene de un extraño se
pudo elaborar dibujando. El terrorismo de estado, en cambio, porque proviene de lo
más familiar, produjo una ocultación defensiva de un dibujo que se manifiesta como
relato 50 años después. La ocultación está al servicio de la vida.
Summary
SUMMARY: The Panel on Dynamics of Transference; 100 years later was issued in
The Psychoanalytic Book Fair APA –Argentine Psychoanalytic Association– on
behalf the Press Committee of APDEBA– Buenos Aires Psychoanalytic Associa-
tion– and the Review Psicoanálisis. The panelists were Ricardo Avenburg, Gerardo
Pasqualini and Janine Puget. They discussed the current ideas of Transference and
Psychoanalytic Training, both in oral as in written communication. The notion of
Interference was introduced. It was discussed the importance of all these issues in
current psychoanalytic clinic.
and their desire to work together: the person who has solicited the consultation truly
wants to undergo analysis and an analyst that has confidence in the practice of his
method and its potentialities.
After a short description of his analytic attitude mentioning specially the
neutrality and the none symmetric positions of the couple, the author describes
through a clinic material the beginning of his acceptance of this new way of
communication that suggests to him his patient during an analytic process. He
describes the treatment in its first three years considering particularly the
transferencial/countertransferencial aspects of the process being his principle
preoccupation as it was a new setting.
He concludes that not every patient is analyzable by this medium, nor every
analyst is competent to function. The author considers that the Liberman and
Meltzer contributions are central about the personal characteristics of the analyst for
the development of the transfer.
VALERIA CORBELLA– PLAYING WITH ADULTS: BETWEEN ACTION AND SYMBOLIZATION IN THE
PSYCHOANALYTIC PROCESS
SUMMARY: The challenges faced by contemporary clinical are diverse. That is why
the proposal in this paper is to argue about the play as a highly complex technical
and creative resource. Starting with a selection of clinical vignettes, the article takes
us from the start, to take a close contact against various clinical facts. Acts where
action precedes the analytic dialogue. By walking through the concepts of enact-
ment and agieren will attempt to demonstrate that they are related to each other and
realize that enactments are listed from the vignettes. Act, dramatic performance that
breaks into a dumb stage. The precedence of the act to the word takes the analyst to
wonder about his technique and about the value of such acts. There, the proposal is
to think of the therapeutical act as a play that allows the significance of experiences.
The concepts then of agieren and enactment with play to then slide into notions of
symbolization and historicization; making a stop at the Freudian notion of specific
action. Thus, the therapeutic action will be thought of as a possible way of specific
action whilst allowing the emergence of wishful movements. Creativity, intrinsi-
cally linked to the play, runs from the beginning of this work and is one of the central
themes. Reflection arises around pathologies in which the fractures in narcissism
burrow deeper into the psychic framework leaving their marks silent. The analyst
play, as theoretical and technical positioning, stimulates thinking and rethinking the
contemporary analyst’s task.
SUMMARY: A best approach to the role of the manic defenses in sexual polymor-
phisms and in the addiction’s development gives us a clue to the importance of
splitting and disavowal in the neurotic structure. That evidence showed the inad-
equacy of using these defenses to establish a difference between neurosis and
perversion. Disavowal closes the fantasy in a definitive text and excludes whatso-
ever that contradicts it. Therefore, its role explains the lack of reality of the beliefs.
Disavowal builds a perceptive judicative splitting. This splitting is present in
fetishism, in sexual polymorphisms and in the neurotic symptoms.
SUMMARY: Drawing is a form of relating daily life. Through drawing, the child
interprets and configures his own history, he is formed subjectively. Through this,
he forms part of a historical social imaginarium, of a collective memory which
marks his belonging and recognition of subjects of a culture.
We studied the drawing of an 8 year old boy during the German invasion of
Rome. It depicts a crash of German vehicles on the corner of the family home.
The social catastrophe of the war is developed drawing the change in the map of
the city before and after the crash. The Germans are clearly decipherable ones and
this difference favours psychic development. The terrorism of the state, instead can
be seen as a threat which comes from a “similar”, Fascists Italian. The terrorism of
the state inhibits the possibility of drawing a situation which Marcello remember as
traumatic: when he was with his mother she was threatened with incarceration,
having expressed her disconformity with the imposition of celebrating a Fascist
anniversary and asked Marcello no to tell what had happened.
We suppose that the social catastrophe, because it came from something foreign,
could be developed through drawing. The terrorism of state, instead, because it came
from something more familiar, produced a defensive concealment of a drawing
which is only commented upon 50 years later. This concealment favoured his
survival.
SUMMARY: This work is based on the author’s experience, as she attended the
conferences that Liberman gave in Rosario in 1973, 1977 and 1978.
She expanded the essential ideas from his theory, the way he linked together the
Psychoanalysis with the Communication Theory, Semiotics and Linguistics. In fact,
Noam Chomsky is an author who Liberman appealed to, as he appealed to Klein, E.
Pichon Rivière, Reusch, Abraham, Morris, Jakobson, and of course to Freud, among
others.
She also referred to the styles of the patient, complementary styles of the analyst,
and the “plastic ego” that Liberman postulates since, at this moment in his theory,
he conceptualizes an original idea about what is for him “to repair”.
She described the different styles, namely: I) Reflexive, II) Lyric, II) Organ-
neurotic (psychosomatic ill), III) Epic, IV) Narrative style, V) Dramatic looking for
unknowns and creating failures, and VI) Demonstrative person with an aesthetic
impact.
Paraphrasing Freud in his “Advices to the Doctor”, she included in her work
some applications from him that she considered very important: the patient not only
has a theory about analysts, but also about analytic therapy and so, he also has a
theory about his history.
Moreover, she distinguished Liberman’s ideas about countertransference, and
his essential contributions.
Résumé
RÉSUMÉ: Table ronde présentée par le Comité de Publications d’Apdeba dans APA,
à l’occasion de la foire du livre psychanalytique du 30 août 2012. Participants:
Ricardo Avenburg, Gerardo Pasqualini y Janine Puget.
Cette table ronde traite de l’actualisation du concept du transfert et de la
transmission écrite et orale de la psychanalyse, introduisant aussi le concept
d’interférence. On discute l’usage de ces concepts à la clinique psychanalytique
actuelle.
RÉSUMÉ: Les défis présentés de nos jours par la clinique contemporaine sont bien
divers. Voilà pourquoi le but de ce travail est de réfléchir à propos du jeu en tant que
ressource technique extrêmement complexe et créatrice. Prenant comme point de
départ une sélection de vignettes cliniques, le texte nous conduit, dès le début, à
prendre un contact intense avec des faits cliniques divers. Des faits dans lesquels
l’action précède le dialogue analytique. Tout en faisant un parcours par les concepts
de agieren et enactment, nous allons essayer de démontrer que ces concepts sont liés
entre eux et rendent compte des mises en acte qui se figurent à partir des vignettes.
Acte, représentation dramatique qui fait irruption sur une scène muette. Cette place
prioritaire de l’acte avant la parole conduit l’analyste à s’interroger à l’égard de sa
technique et à l’égard de la valeur de ces actes. Là, ce que l’on propose est de penser
l’acte thérapeutique comme un jeu permettant la signification d’expériences. On
associe donc les concepts de agieren et de enactment à l’action de jouer, pour glisser
après vers les notions de symbolisation et d’historicisme, en faisant une halte dans
la notion freudienne d’action spécifique. C’est ainsi que l’action thérapeutique sera
pensée comme une forme possible d’action spécifique tant qu’elle permettra
l’apparition de mouvements désidératifs. La créativité, liée intrinsèquement à
l’action de jouer, parcourt ce travail dès le début et en constitue l’un des axez
centraux. La réflexion surgit autour des pathologies dans lesquelles les fractures
dans le narcissisme percent profondément dans le tissu psychique où elles laissent
leurs marques silencieuses. Le jeu de l’analyste, en tant que prise de position
théorique et technique, mène à penser et repenser la tâche de l’analyste contempo-
rain.
DELIA TORRES DE ARYAN Y MARCELLO COSSU GIRI – DESSIN ET NON DESSIN D’UN ENFANT
À HUIT ANS AU TEMPS DE CATASTROPHE SOCIALE
RÉSUMÉ: Dessiner c’est une forme de récit du quotidien. À travers le dessin l’enfant
interprète et configure son propre histoire, il se constitue subjectivement et fait partie
d’imaginaire sociale historique, d’une mémoire collective qui détermine l’apparte-
nance et la reconnaissance pour les sujets d’une culture. Les auteurs étudient le
dessin d’un enfant à huit ans durant l’invasion allemande à Rome. On y voit une
collision de véhicules allemands au coin de la maison familiale.
La catastrophe sociale de la guerre est élaborée à l’aide de la modification de la
cartographie de la cité avant et après la collision.
Les allemands y sont des autres clairement différentes et cette différence
favorise l’élaboration psychique.
Le terrorisme d’État, à l’inverse, en tant que menace provenant d’un semblable,
des fascistes de l’Italie, dessaisit la possibilité de dessiner une situation qu’il rappelle
comme traumatique : quand il était avec sa mère, elle fut menacée d’être emprison-
née parce qu’elle avait exprimé son désaccord avec l’imposition de célébrer
l’anniversaire fasciste et elle avait dit à Marcello Cossu L'Abbate de ne parler pas
de cet affaire.
Les auteurs proposent qu’on a pu élaborer à travers le dessin la catastrophe
sociale, parce qu’elle venait d’un étranger. Le terrorisme d’État, pour dériver de ce
qui est le plus familiale, a produit une occultation défensive d’un dessin qui se
manifeste comme récit 50 ans après. L’occultation est au service de la vie.
RÉSUMÉ: Ce travail se base sur l’expérience de l’auteur acquise lors des Séminaires
que Liberman a impartis dans la ville de Rosario au cours des années 1973, 1977 et
1978.