MINISTERIO DE SANIDAD Y RESTAURACIÓN “LA ROCA”

Ministerio Juvenil “Roca Joven”

Enseñanza: “Sujeto”

Texto Base: 1 Pedro 5.5-7

“Igualmente, jóvenes, estad sujetos a los ancianos; y todos, sumisos unos a otros, revestíos de humildad;
porque: Dios resiste a los soberbios, y da gracia a los humildes.”

(1 Pedro 5.5)

“Del mismo modo ustedes, los jóvenes, deben obedecer (aceptar) la autoridad (consejo y ejemplo) de los
líderes de la iglesia. Todos deben tratarse con humildad, pues la Biblia dice: «Dios se opone a los
orgullosos(los que no aceptan las recomendaciones y advertencias), pero brinda su ayuda a los humildes
(los que han aprendido a escuchar y reconocer la voz de Dios a través de sus siervos).»”

BLS

Objetivo. Reflexionar en la enseñanza bíblica respecto a la sujeción humilde a los pastores de la iglesia a
través del estudio de los principios expresados en 1 Pedro 5.5-7, para preparar a los jóvenes a una vida de
obediencia a Dios y sus mandamientos.

I. Introducción.

¿Cuántas veces nos hemos tratado de explicar las cosas que nos acontecen? ¿Cuántas veces hemos
tratado de mirar un poco más allá de nuestro presente? En muchas ocasiones las cosas que parecen
complicadas (que nos quiebran la cabeza) sencillamente comienzan a solucionarse con una sencilla
decisión y actitud nuestra: la Obediencia. En la vida hay situaciones por demás complejas pero, algo
debemos saber: Dios desea tomar el control.

II. La importancia de la experiencia

En tiempos de Jesús y los primeros cristianos las personas de mayor edad o llamados también ancianos
eran de las más respetadas y reverenciadas. En ellos se reconocía la experiencia (que no tenía que ver con
haber sufrido o errados para aprender), la sabiduría práctica que habían alcanzado, sobre todo por su
obediencia a Dios y sus mandamientos. Bajo esta realidad debemos entender recibir la enseñanza del
Nuevo Testamento.

Alguna vez se dijo lo siguiente:

“La experiencia es una buena escuela, pero la matrícula es muy cara.”

Nuevamente, en el criterio de muchos no importa si fracasamos una y otra vez o nos lanzamos a hacer
algo, lo importante es ganar experiencia (dicen), pero en el contexto bíblico, la experiencia (el saber y el
saber hacer) se obtiene por oír y practicar las enseñanzas de Dios. Entonces los ancianos (aunque ahora
no es precisamente las personas de mayor edad) son aquellos que habiendo aprendido a escuchar a Dios,
han llevado a la práctica en obediencia el consejo divino, experimentando que sí funcionan.
III. Lo que debemos evitar y superar para una correcta obediencia

Según la Escritura, la obediencia ideal (la que Dios exige) es aquella que primero reconoce la autoridad y
experiencia de los pastores o líderes y entonces hace lo que se le ha aconsejado. Existen dos enemigos
internos que pueden impedir nuestra correcta obediencia.

 La soberbia. Esta es el orgullo, la persona soberbia es la arrogante y altanera que cree que sus
conocimientos son suficientes, no admite consejos. No sólo es cuestión de mostrar altanería sino
sencillamente en no querer escuchar.
 La ansiedad. Es el estado de ánimo que nos lleva a afanarnos, es la fatiga y el apuro. Representa
el peligro de apresurarnos a tomar una decisión o a hacer algo para alcanzar algo de forma
inmediata.

La acción de los pastores en muchas ocasiones significa detener, impedir a los jóvenes tomar
determinaciones apresuradas y no bien pensadas.