Universidad Veracruzana

Facultad de Psicología
E.E.: Dispositivos Grupales en la Intervención Clínica
Reporte de lectura: Psicología de las redes y análisis del yo
Autora: David C. Flores
Asunto o tema: Relación de las redes sociales y el análisis del yo
Resumen del contenido:
Idea principal

David Flores enuncia que las llamadas redes sociales (Facebook, Twiter, Instagram, etc.) en realidad
no son redes sociales y expresa los porque no considera que estos medios virtuales no cumplen con
esa categoría y mas bien son solo mecanismos de comunicación donde los individuos pueden
expresarse libremente, sin la represión de las instancias o grupos de poder que someten al pueblo
en una sociedad. Sin embargo, esa libertad muchas veces se ejerce de manera irresponsable, puesto
que en esas redes sociales generalmente circulan chismes, ofensas, violencia de todo tipo y
comentarios que lastiman a otros, además estas supuestas redes sociales se utilizan como un escape
a la realidad, pero lo que ocasionan es una falsa salida de los problemas individuales y sociales, en
ellas buscamos conformarnos como individuos a través de la aceptación de otros con relación a las
cosas que publicamos como memes, comentarios o frases, imágenes y videos, pensando que somos
personas que piensan y toman decisiones, pero que en realidad solo reaccionamos a las ideas,
acciones y percepciones de otros en las redes sociales, nos volvemos seguidores de otros y
esperamos que alguien mas nos siga, para encontrar significado a nuestra vida, pero en realidad esa
relación virtual nunca llegará a ser una red social si no es llevada a la realidad.

Resumen

El texto nos muestra la mirada de David Flores sobre la relación que existe entre las personas, en
esta era de las redes sociales que en su opinión, dominan el pensamiento del ser humano y lo
enganchan en una actividad poco productiva, el autor expresa porque considera que no existe
sociedad en las redes sociales, porque la relación que sucede en ellas, no es una relación social en
un sentido amplio y en su consideración sólo es comunicación, chisme, noticias, comentarios, pero
no existe la estructura que se requiere para conformar ese sistema como una sociedad en sí, mejor
dicho considera que en las redes sociales hay individuos atomizados que se creen con derechos de
ejercer su opinión únicamente porque pueden hacerlo, algunos en total impunidad y amparados
por el anonimato, donde además cualquiera tiene el poder de expresarse atropellando derechos,
con violencia, con justificación o sin ella, según la voluntad individual o sea la ley de la selva.

No se trata de decir que las redes sociales no existen en la sociedad, o que no existan bajo
condiciones sociales o que no provoquen efectos en la sociedad, lo que señala el autor es que, en
las redes sociales virtuales, no hay grupos de poder instituidos y estables que controlen a la sociedad
como sucede en la realidad física, donde el Estado (gobierno) y las otras instituciones, mediante las
creencias religiosas, la clase social, económica, política, etc. imponen leyes que someten al pueblo
a un determinado régimen.

En opinión de David Flores en las redes sociales la influencia de cada quien es volátil y efímera, por
eso para el autor las redes sociales no son sociales, son espacios de comunicación entre individuos,
aclara que esa relación no implica que tenga un estricto sentido social. Menciona, además que en
la actualidad las personas parecemos más incivilizadas, egocéntricas y de rudimentario
 Universidad Veracruzana
Facultad de Psicología
E.E.: Dispositivos Grupales en la Intervención Clínica
Reporte de lectura: Psicología de las redes y análisis del yo
Autora: David C. Flores
Asunto o tema: Relación de las redes sociales y el análisis del yo
Resumen del contenido:
entendimiento como un producto de la eficaz educación moderna, el argumento general de que lo
malo esta en el uso y no en el instrumento, esto en su opinión equivale a decir que una mentira deja
de serlo cuando todos mienten, hace la comparación del celular con un arma de fuego, diciendo que
ambos son instrumentos de violencia y de infamia, en mi opinión tiene razón porque el primero te
daña o mata de forma psicológica y el segundo de forma biológica, siendo que ambos daños se ven
reflejados en la sociedad.

Podría considerarse que este movimiento del sujeto de un mundo real a uno virtual, es producto
del rechazo voluntario de un mundo real que esta podrido, saturado de violencia, fraudes, engaños,
hipocresías y otros sucesos de los que deseamos escapar, o por lo menos olvidarlos por un
momento, pero debemos reflexionar si ese escape a nuestra intimidad virtual nos conduce a un
refugio o una prisión, consecuentemente analizar si esto es un triunfo o un fracaso, porque ¿vivir
en un mundo virtual es realmente vivir o tener una vida propia?.

Cabe señalar que debemos considerar que ese mundo virtual en muchas circunstancias esta lleno
de basura (chismes) y otras cosas negativas que constituyen también el mundo real, todo eso afecta
de igual forma al mundo real, en este mundo virtual también imperan nuestros prejuicios sobre lo
bueno y lo malo, la burla por la desgracia ajena, la humillación para algunos y el enaltecimiento para
otros, en mi opinión considero que también esta plagado de mercadotecnia y como lo menciona el
Autor de vanidad y corrupción individual y colectiva, además considero que en el supuesto mundo
de las redes sociales buscamos alcanzar aquello que no tenemos en el mundo real, como el
reconocimiento de los demás, fortalecer nuestra identidad y autoestima, que a muchos les es difícil
de conseguir y expresar en la vida real.

En opinión del autor los millones de usuarios que comparten la desgracia ajena carecen de un “yo”
propio (desde el enfoque psicoanalítico), y están buscando su yo no en las personas, sino en las
pantallas donde se reconocen o busca hacerlo cuando otros le otorgan sus “likes” a cada chiste,
comentarios o imagen con la intención de obtener el reconocimiento a su ingenio o forma de
pensar, incluso hay quienes buscan amor donde es más difícil encontrarlo, estamos tan deseosos de
ser objeto del deseo del otro, que cuando no lo conseguimos en la realidad buscamos hacerlo en
otros mundos, es tanta nuestra necesidad de sentirnos importantes como para que otros nos sigan
en “twiter” que mientras más seguidores tengamos nos sentimos valorados y completos, o “twiter”
es simplemente el opio del pueblo, pero ¿se fragmenta nuestro “yo” al pasar del mundo virtual a
real y viceversa? ¿qué sucederá cuando volvemos a la realidad y los seguidores se quedaron en el
mundo virtual?

Opinión personal

Coincido con la apreciación del autor en la mayoría de sus aseveraciones, no soy un activo usuario
de las redes sociales, considero que el contacto físico y la comunicación de persona a persona, son
la mejor manera de crear redes sociales, para mí las redes sociales son una herramienta de
 Universidad Veracruzana
Facultad de Psicología
E.E.: Dispositivos Grupales en la Intervención Clínica
Reporte de lectura: Psicología de las redes y análisis del yo
Autora: David C. Flores
Asunto o tema: Relación de las redes sociales y el análisis del yo
Resumen del contenido:
comunicación valiosa cuando la distancia física resulta una limitante del proceso de comunicación,
pero no estoy de acuerdo que se vuelvan la base de la sociedad, porque considero que
despersonalizan al ser humano, lo insensibilizan, lo vuelven incivilizado, lo enferman de adicción y
le crean necesidades no importantes en realidad, solo en muy pocas ocasiones una relación en las
redes sociales virtuales colabora para mejorar una relación física en la realidad y muchas veces
considero que suelen ser relaciones de hipocresía, porque al unir físicamente a dos individuos que
se consideran muy cercanos en las redes sociales, las mismas redes sociales los tiene tan atrapados
que no les permiten realizar una interacción física adecuada.

Conclusión

Considero muy valiosa la aportación de David Flores en la comprensión del fenómeno de las redes
sociales, particularmente debemos reflexionar que son las redes sociales y estar conscientes que
son un arma de doble filo, donde si bien no existen leyes que regulen en su totalidad su uso y como
resultado tenemos que los usuarios de estas pueden ejercer “su derecho” a expresar lo que piensan
o creen sin limitaciones, esto con mucha regularidad genera situaciones en las que se ofende a otros,
violentando sus derechos, burlándose de la desgracia ajena, creando chismes y popularizando
banalidades, podemos decir que son situaciones que también suceden en las relaciones sociales
físicas, y tal vez por eso se les ha denominado con ese título, sin embargo las verdaderas sociedades
están conformadas por grupos de distintas clases económicas, políticas, ideológicas y culturales, que
utilizan determinados criterios hechos leyes para normar la sociedad. Pero en estas redes sociales
todos los integrantes se conforman como individuos, no como grupos sociales en realidad, aun
cuando se integren de manera colectiva.

Finalmente propongo 3 preguntas para la reflexión

¿Quiénes esperamos ser, si la mayor parte del tiempo la pasamos educándonos mediante los
ingeniosos “memes”?

¿A dónde se dirige la sociedad física con este tipo de educación? y

¿Podemos considerar esto como un hecho normal?

Filemón Córdova Jiménez

Referencias
Flores, D. (2017). Psicología de las redes y análisis del yo. Pp. 41-53