LA FORMA REDONDA DE LA TIERRA ES VITAL PARA LOS SERES

HUMANOS

El planeta tierra es el lugar donde vivimos y habitamos; en la mayoría de

imágenes captadas por satélites, se observa que tiene un aspecto de esfera y es
por esto que se afirma que es redonda. Sin embargo alguna vez nos hemos
preguntado ¿Por qué la forma redonda de la Tierra es vital para los seres
humanos?, pues existen varias razones que argumentan esta premisa.

Al ser la Tierra redonda está formada por dos hemisferios. Los rayos solares
llegan a cada hemisferio con diferente inclinación axial de acuerdo al momento del
año, esta inclinación del eje de rotación terrestre genera la sucesión de los
cambios estacionarios (Cabrerizo, 2010), siendo éstos importantes para el
mantenimiento de la vida en el planeta, permitiéndole al hombre, a la fauna y a la
flora que experimenten cambios de clima para su desarrollo.

Otro hecho que favorece a la proliferación de la vida es el movimiento de rotación

que realiza la Tierra al girar sobre su propio eje por ser redonda (Comellas, 2008),
quien es el responsable de la alternancia del día y de la noche, si no existiera este
movimiento no habría cambios de temperatura.

Además, la Luna es el satélite natural que gira alrededor de la Tierra y es atraída

por la fuerza de gravedad. Según (During, 2005, pág. 573) “en los cambios de
forma mensuales la Luna adopta divisiones diversas, pero en los eclipses la línea
que limita siempre es convexa”. Las fases lunares son responsables de la luz que
existe en la noche, pudiendo ser esta mayor o menor dependiendo la fase que se
encuentre.

Gracias a que la Tierra es redonda, ésta tiene un centro de gravedad, el cual atrae
con igual intensidad de todas las direcciones hacia adentro. Nuestro planeta tiene
una fuerza de gravedad que atrae al sol y hace que el sistema solar se
conserve. Asimismo, la gravedad permite que los seres vivientes evolucionen de
manera adecuada y que se encuentren en la superficie sin flotar por el espacio.
Según (Botello) “Los cuerpos que se proyectan directamente hacia arriba caen
hacia abajo al punto del cual partieron, por tanto, la Tierra ni está en movimiento ni
está en ningún sitio que no sea el centro”.

También la forma de la Tierra permite que existan los meridianos que son los
círculos máximos que van del Polo Norte al Polo Sur. Y las intersecciones entre
los planos paralelos al Ecuador y perpendiculares al eje de la Tierra,
denominados paralelos (Barros). Con estos elementos, se puede establecer el
sistema de coordenadas geográficas, que se compone de dos ángulos que
determinan, de forma única, la posición de cualquier punto sobre la Tierra.
En conclusión si alguien pensara en todo lo que contiene nuestro planeta, en la
cantidad de especies que conviven, en las gigantes obras que el hombre ha
construido a través del tiempo, podríamos darnos cuenta que la Tierra es inmensa
con un equilibrio perfecto en todos sus aspectos y que por distintas razones su
forma redonda permite al ser humano desarrollarse en un ambiente que le ofrece
los recursos necesarios para evolucionar.

Referencias bibliográficas

Barros, P. (s.f.). La formación de la Tierra. Obtenido de Salvat, Libros

Maravillosos:
http://www.librosmaravillosos.com/laformaciondelatierra/pdf/La%20Formaci
on%20de%20la%20Tierra%20-%20Biblioteca%20Salvat.pdf

Botello, G. (s.f.). Historia de la Astronomía. Obtenido de

http://thales.cica.es/rd/Recursos/rd98/Astronomia/03/mast_gr-arist.html

Cabrerizo, D. (2010). Cultura científica. Madrid: EDITEX.

Comellas, J. (2008). La Tierra un planeta diferente. Madrid: RIALP.

During, I. (2005). Aristóteles, Exposición e interpretación de su pensamiento.

México.