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Con el objetivo de adaptarse al entorno y dar respuesta a todas las exigencias diarias de

éste , las personas contamos con una serie de capacidades cognitivas, funcionales,
motoras, emocionales y psicosociales.

En el caso concreto de las capacidades cognitivas, éstas nos permiten llevar a cabo
actividades tales como percibir, pensar, aprender, recordar, hablar, comprender lo que
nos dicen, lo que se escribe o se lee, emitir juicios o conceptos, analizar y razonar,
identificar y reconocer objetos o personas, etc…

Como todas la capacidades humanas, éstas han de entrenarse y usarse de manera


continuada para que continúen su desarrollo y no pierdan eficacia; cosa que ocurre
conforme nos vamos haciendo mayores. Es por ello que una buena estimulación
cognitiva, formada por prácticas y actividades concretas, podrá ayudar a las personas
mayores a enfrentarse a situaciones novedosas que representen un reto y aprendizaje,
además de brindar estrategias para compensar los cambios que se producen en el
funcionamiento del cerebro.

La estimulación cognitiva es, en definitiva, una forma de gimnasia mental estructurada


y sistematizada que tiene por objetivo ejercitar las distintas capacidades cognitivas y sus
componentes, combinando técnicas de rehabilitación, métodos de aprendizaje y
actividades pedagógicas, entre otras.

Técnicas de estimulación cognitiva para el entrenamiento de la percepción


En personas sanas, la percepción permanece intacta por tanto sólo hay que mantenerla a
través del despertar de los sentidos. Con personas con demencia que ya han desarrollado
algún tipo de agnosia (dificultad o incapacidad para reconocer objetos, lugares o
personas), el trabajo es más elaborado. Se trata en estos casos de facilitar, a través del
uso de material didáctico y cotidiano sencillo, que mantengan lo que aún son capaces de
reconocer.

Técnicas de estimulación cognitiva para el entrenamiento de la atención


Con personas sin graves deterioros se utilizan mucho las técnicas de meditación ya que
además de generar equilibrio mental y paz interior a la persona que la practica,
desarrolla la capacidad de atención voluntaria y la concentración.

Técnicas de estimulación cognitiva para el entrenamiento de la memoria


En el caso de personas mayores con envejecimiento normal se trabajarán todos los tipos
de memoria, aunque poniendo más énfasis en la capacidad de almacenar información
nueva, puesto que es la función que más claramente se deteriora y que más
preocupaciones les ocasiona

Por su parte, con personas con demencia avanzada que ya han perdido la capacidad de
retener información nueva, se enfocará en estimular la memoria inmediata, que todavía
preservan y, sobre todo, la memoria remota. La técnica básica para trabajar la memoria
con estos casos es la reminiscencia.

Técnicas de estimulación cognitiva para el entrenamiento de la orientación


En el caso de la orientación, se emplea normalmente la técnica de orientación a la
realidad. A nivel práctico consiste en, a través de preguntas, llevar al anciano al aquí y
ahora real estimulando con esta intervención la orientación temporal (qué día es),
espacial (dónde estamos) y personal (quién eres).

Técnicas de estimulación cognitiva para el entrenamiento del lenguaje


Al ser una capacidad tan compleja, las propuestas de entrenamiento son muy variadas y
se trabaja tanto en la generación del lenguaje, como en la comprensión, y tanto el
lenguaje verbal como el escrito.

Técnicas de estimulación cognitiva para el entrenamiento de las funciones ejecutivas


Se trata de actividades mentales de alto nivel encargadas de coordinar entre sí a las otras
funciones para que las personas podamos tomar decisiones, planificar acciones, llevarlas
a cabo, evaluarlas, generar modificaciones, etc. Las actividades que se utilizan para
entrenar estas funciones son todas aquellas que implican ordenar algo, planificar,
secuenciar, razonar, etc.

Técnicas de estimulación cognitiva para el entrenamiento del razonamiento


Los ejercicios de razonamiento van desde los más sencillos como las analogías
(encontrar las características comunes de dos objetos) hasta los más complejos (como
las series lógicas que se utilizan en los test de inteligencia o en los psicotécnicos para la
selección de personal).

Técnicas de estimulación cognitiva para el entrenamiento de la imaginación


Esta capacidad suele trabajarse junto a la creatividad ya que podemos hacer ejercicios
donde se busque la creación de algo nuevo o ejercicios basados en la visualización y la
fantasía.
Técnicas de estimulación cognitiva para el entrenamiento de las praxias
La apraxia es un trastorno que aparece en la enfermedad de Alzheimer y otras
demencias que conlleva la dificultad para realizar movimientos de forma fina y
coordinada, para ejecutar acciones intencionales previamente aprendidas. En estos casos
es conveniente realizar actividades físicas como la gerontogimnasia, el yoga, el taichí,
actividades manuales o artísticas.

Técnicas de estimulación cognitiva para el entrenamiento de la capacidad numérica


Como su nombre indica consiste en entrenar aquellas capacidades relacionadas con los
números. Para ello podremos emplear infinidad de ejercicios; desde contar elementos
hasta un bingo de cálculos o sudokus.

Es fundamental conocer y aprender las técnicas y ejercicios correspondientes del área


cognitiva que deseemos tratar; pero además de esa base teórica, el profesional deberá
poseer y aplicar una serie de actitudes positivas al trabajar con personas mayores tales
como la empatía, la compasión, el respeto, la paciencia, el sentido del humor, etc…
porque de la suma de los dos factores dependerá el éxito con nuestros pacientes.
Diván Digital
ROCÍO MAYORAL

11 estrategias para
prevenir el deterioro
cerebral, sobre todo
si tienes más de 40
Puede que escenas como estas le resulten familiares: “Fue a su
cuarto y no recuerda qué quería hacer allí”; “lleva un buen rato
intentando recordar dónde

AUTOR

ROCÍO MAYORAL

Puede que escenas como estas le resulten familiares: “Fue a su


cuarto y no recuerda qué quería hacer allí”; “lleva un buen rato
intentando recordar dónde puso las llaves”; “no le viene a la
cabeza un nombre”…
Si cada vez con más frecuencia vive situaciones de este tipo, tal
vez sea porque esté llevando un ritmo de vida demasiado
acelerado o tal vez sea víctima de un estrés excesivo. Pero si
tiene más de 45 años es probable que sus despistes tengan otra
causa. Un reciente estudio realizado por el Centro de Salud
Pública de Francia y la Universidad de Londres acaba de
demostrar que el deterioro cerebral comienza mucho antes de
lo que se pensaba: a los 45 años. Por tanto, si ya ha pasado de
esa edad debe saber que aunque se sienta joven, su cerebro ya
ha comenzado a envejecer y poco a poco podría empezar a
mostrar signos de deterioro cognitivo leve que a la larga, podría
desembocar incluso en algún tipo de demencia.
Estos resultados son relevantes porque hasta hace poco sólo se
estudiaba a mayores de 60 años. Pero en esta ocasión se siguió
durante 10 años a más de 7.000 personas entre 45 y 70 años.
Así se ha podido demostrar que desde mitad de la cuarentena el
cerebro inicia un proceso de deterioro que afecta a capacidades
como la memoria, comprensión, la escritura o razonamiento.
En este estudio, los menores de 50 años empeoraron un 3,6%
esta capacidad. Los que tenían 65 y 70 años empeoraron hasta
un 9,6%.Hay que potenciar los hábitos que favorezcan no sólo el
bienestar del organismo sino también del cerebro
Poco a poco empezamos a conocer cómo evolucionan las
funciones cognitivas con la edad. Esta investigación demuestra
que el deterioro aumenta con los años y que este proceso se
inicia mucho antes de lo que se pensaba. Estos resultados son
esenciales para la prevención ya que sugieren que laspruebas
para detectar deterioro cognitivo debieran hacerse desde los
45 años. Además, constatan la importancia de potenciar ya
desde esa edad hábitos que favorezcan no sólo el bienestar del
organismo sino también el del cerebro. Pero, ¿cómo hacerlo?
Cómo prevenir el deterioro cognitivo
Cada vez vivimos más, pero nuestro cerebro no tenía previsto
una vida tan larga. Hoy aún desconocemos cómo evitar la
demencia. Pero sabemos algo crucial: es posible retrasar el
deterioro y los síntomas de la enfermedad; pero hay que trabajar
en ello incluso cuando aún faltan décadas para que el deterioro
nos condicione la vida. Tal vez le interese cómo hacerlo. A
continuación, exponemos algunas de las recomendaciones más
avaladas por la investigación.
Trate de mantener el cerebro activo. La investigación lo ha
dejado claro. Para evitar el deterioro cognitivo lo mejor que
podemos hacer es no quedarnos sentados. Es conveniente tratar
de salir y movernos; es fundamental enfrentarse a novedades y
retos; intentar aprender cosas nuevas: idiomas, bricolaje… Está
ampliamente demostrado que este tipo de actividades favorece
la creación de nuevas conexiones neuronales y las mantiene
activas. Así que:
1. Evite la rutina y hacer siempre lo mismo. Aunque esté
cansado para pensar, evite repetir las mismas formas de pasar el
tiempo libre. Cambie; esfuércese por ser imaginativo. Sugiera
actividades novedosas. Así evitará que el exceso de trabajo le
convierta en un aburrido que solo busque descansar el fin de
semana. Sus amigos se lo agradecerán; también su cerebro.
2. Aunque esté muy cansado evite actividades pasivas,
principalmente ver la tele. Algunos estudios sugieren que “la tele
mata lentamente al cerebro”; sobre todo, porque es un ocio fácil y
conduce a la pasividad mental. No es lo mejor para las neuronas.
Su uso debe ser moderado y controlado.
3. Relaciónese con amigos. Hay evidencias sobradas sobre que
las relaciones sociales estimulan enormemente la actividad
cerebral. Así que aunque esté cansado tras el trabajo, esfuércese
por quedar con amigos y no rechace planes; esfuércese por
hablar. No piense en si le apetece; solo en que ya tiene edad de
cuidar su cerebro. Esto le ayudará.
4. Nunca deje de leer. Muchísimos estudios, como los realizados
por Esteve yGil Collado han demostrado que el hábito lector es
un importante factor protector de deterioro cognitivo. Lea todo lo
que pueda, aunque la casa, los niños y el trabajo no le dejen
tiempo. Trate de sacar un rato. La lectura se ha demostrado clave
en el mantenimiento de las funciones cognitivas.
5. Haga pasatiempos y a los juegos de estrategia. No importa
su edad. Aunque lea prensa digital y ya no haga el sudoku del
periódico, juegue en el móvil, pero recuerde: cambie los juegos.
6. Juegue a videojuegos. Chie-Ming y D. Paterson de la
Universidad de Singapur comprobaron que son de gran ayuda
para desarrollar funciones cognitivas. Juegue con sus hijos y
nietos; además de para su cerebro pueden mejorar su vida social.
7. Trate de huir del estrés y la ansiedad
prolongada: Vivir situaciones de estrés es algo usual a los 40 o
los 50. Es un periodo marcado por la intensidad laboral, familiar,
la falta de tiempo,… pero hemos de cuidarnos. R.S Wilson del
Rush University Medical Center de Chicago, y otros muchos, han
demostrado que la ansiedad continuada altera el funcionamiento
cognitivo y acelera el riesgo de demencia. Así que debemos
cuidar ese aspecto. ¿Cómo hacerlo? Estudios con ancianos
mostraron mejor funcionamiento cognitivo en aquellos con más
habilidades para gestionar estrés o en quienes practicaban
regularmente meditación, relajación o yoga.
8. Cuide sus hábitos de consumo: evite drogas, alcohol y
tabaco. Varios estudios concluyen que afectan al adecuado
funcionamiento cognitivo e influye en el deterioro cognitivo.
9. Esfuércese también por seguir una alimentación
equilibrada. Son beneficiosos los nutrientes básicos como los del
aceite de oliva y otros alimentos ricos en grasas vegetales, las
vitaminas, sales minerales y antioxidantes. Son buenas las
anchoas, uvas, pasas y frutos secos.
¿Y qué pasa con el té verde y el café?: Una investigación del
Centro Nacional de Japón para la prevención del daño cerebral y
vascular sugería que tomar regularmente té y café reduce un
20%- 30% el riesgo de hemorragia cerebral. Sin embargo un
estudio publicado en la revista Neurology acaba de poner esto en
duda. Se debe seguir investigando.La lectura se ha demostrado
clave para el mantenimiento de las funciones cognitivas
10. Las artes estimulan el cerebro: Otro estudio reciente del
Instituto Nacional sobre Envejecimiento de EE.UU. demuestra
que el baile estimula la actividad cerebral y evita el deterioro.
Además fomenta la creatividad, igual que la pintura. La práctica
artística está demostrando muchos beneficios tanto en
prevención como en la intervención.
11. ¿Y qué pasa con el ejercicio físico y las actividades
manuales? Estudios como el de la Universidad de Uppsala de
Suecia han demostrado que la actividad física mejora la atención,
memoria, fluidez verbal, el estado cognitivo global y la velocidad
de procesamiento. Además ayuda a mantener la sustancia
blanca y gris, sobre todo del lóbulo parietal, en un área muy
afectada en el alzhéimer: el precuneus. Según parece, el ejercicio
físico es muy recomendable, tanto en adultos con demencia
como en personas sanas. Así que potencie el ejercicio. Es muy
necesario en nuestra estresada vida.
Son muchos los argumentos que avalan la importancia de
mantener el cerebro activo. En estos días han diagnosticado
Alzheimer a un compañero que se había jubilado hace poco.
Alguien me dijo: “No sé tú, pero yo no quiero que mi vida
transcurra mientras planeo como disfrutarla”. Situaciones como
las de mi compañero no son infrecuentes. Así que por si acaso,
cuide su mente, aunque se sienta joven. Y sobre todo, no aplace
a oportunidad de disfrutar; porque puede que cuando decida
hacerlo, para su cerebro sea demasiado tarde.
Estimulación Cognitiva: 10
Ejercicios para Adultos y
Niños
Por

Marcel Gratacós

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La estimulación cognitiva tiene su base en el hecho de que nuestro


cerebro no es una estructura rígida, sino todo lo contrario, es elástico y
moldeable.

¿Las actividades cognitivas te cuestan más que antes? ¿Estás menos ágil
mentalmente, tienes pérdida de memoria o dificultades para mantener la
atención durante un tiempo prolongado?
Distintos músculos de nuestro cuerpo los podemos trabajar a través de
la actividad física, el ejercicio físico o el deporte. Pues bien, el trabajo
cerebral se realiza mediante lo que hoy en día conocemos
como estimulación cognitiva.

Los años no pasan en vano para nuestro cerebro, ya que del mismo
modo que nuestro cuerpo, se va envejeciendo. Nuestras estructuras
cerebrales se van deteriorando, la pérdida neuronal avanza, la
producción de neurotransmisores disminuye…

Todas estas acciones son variables importantes que, evidentemente,


dejan ver sus consecuencias en el funcionamiento general de nuestra
mente.

Sin embargo, tenemos una buena noticia. El cerebro humano, al igual


que cualquier otro músculo de nuestra anatomía, se puede trabajar, con
el objetivo de potenciar sus capacidades cognitivas.
Si lees este artículo con atención aprenderás qué es la estimulación
cognitiva, cuáles son sus beneficios y cómo se puede trabajar.

¿Qué es exactamente la estimulación


cognitiva?
El término “Plasticidad del sistema nervioso” hace referencia a este
potencial que tiene nuestro cerebro para modificar, adaptar y potenciar
sus estructuras y su funcionamiento.

Así pues, la estimulación cognitiva es el nombre que se le da a las


técnicas y estrategias que pretenden optimizar la eficacia del
funcionamiento cerebral a través de las distintas capacidades cognitivas
que posee el ser humano:

 Percepción.
 Atención.
 Razonamiento.
 Abstracción.
 Memoria.
 Lenguaje.
 Procesos de Orientación.
 Praxais.
Todas estas funciones cognitivas las realizamos y las entrenamos los
seres humanos prácticamente a diario. Cuando leemos un libro
trabajamos nuestro lenguaje y la memoria, cuando conducimos por una
calle desconocida la orientación, cuando atendemos a las instrucciones
laborales de nuestro jefe la atención, etc.

Ahora bien: ¿Realizamos suficiente trabajo cognitivo a lo largo del día?


Probablemente una persona que esté estudiando, lea con frecuencia, o
tenga un trabajo que requiera de mucha actividad cerebral sí que lo
haga.

Sin embargo, podría ser que trabajáramos mucho algunas funciones


cognitivas, pero al mismo tiempo otras las fuéramos dejando de lado…
Pues bien, es exactamente esto lo que pretende la estimulación
cognitiva: asegurar un trabajo íntegro de todas nuestras funciones
cognitivas.

¿Quién se puede beneficiar de la


estimulación cognitiva?
La respuesta es sencilla. La estimulación cognitiva puede ser aplicada a
cualquier persona, ya que, como seguramente coincidirás conmigo,
cualquiera de nosotros podemos mejorar nuestras habilidades mentales.

La estimulación cognitiva plantea dos objetivos principales:

1. Aumentar el desarrollo de las capacidades mentales.

2. Mejorar y optimizar el funcionamiento de dichas capacidades.

Este tipo de intervención suele presenciarse en los programas de


intervención temprana en la infancia, el entrenamiento en atención o
concentración en deportistas, la potenciación de habilidades
profesionales en distintos trabajos, etc.

Sin embargo, no hace falta que estés en ninguna de esas situaciones


para trabajarlo, ya que el rendimiento que puedes sacar de la
estimulación cognitiva no es específico de ningún ámbito vital, ya que
quién se beneficiará serán tus funciones cognitivas, será tu cerebro,
¡serás tú!
Es decir: cuando realizas trabajo cognitivo, activas, estimulas y entrenas
distintas capacidades cognitivas y sus componentes de una forma
sistemática, con el objetivo de transformarlas en una habilidad o
destreza.

Ahora bien, después de remarcar que la estimulación cognitiva es


beneficiosa para cualquier ser humano del planeta, debemos reseñar
su papel terapéutico, el cual abarca prácticamente la función de esta
técnica en su totalidad.

Y es que cuando hablamos del papel terapéutico de la estimulación


cognitiva, lo estamos haciendo sobre el deterioro cognitivo, el déficit
cognoscitivo o la demencia.

Esto nos deja una cosa clara: si no tienes ningún déficit cognitivo puedes
beneficiarte de la estimulación cognitiva para mejorar tus habilidades y
prolongar el envejecimiento del cerebro, pero si desafortuanadamente
ya presentas algún síntoma de deterioro, ¡la estimulación cognitiva debe
pasar a ser parte de tu vida sí o sí!.

Hoy en día, la estimulación cognitiva es el tratamiento de primera


elección para el deterioro cognitivo y los distintos tipos de demencia, de
los cuales el más frecuente es el Alzheimer.

Estas patologías son, en la actualidad, irreversibles e incurables, pero


esto no significa que no se pueda enlentecer la evolución de la
enfermedad.

Aquí es donde entra en juego la estimulación cognitiva, ya que del


mismo que es beneficioso para mejorar las habilidades cuando no
tenemos ninguna patología, también lo es y mucho para preservar
aquellas que todavía tenemos cuando se nos presenta algún déficit
cognitivo.
Así pues, aunque actualmente existan algunos fármacos destinados a la
potenciación cognitiva como son los inhibidores de la
acetilcolinesterasa (tacrina, donepecilo, rivastigmina y galantamina),
realizar estimulación cognitiva se estima como indispensable para el
tratamiento de la demencia y el deterior cognitivo.

Beneficios de la estimulación cognitiva

Vayamos pues a ver cuáles son los beneficios de la estimulación


cognitiva.

Para hacerlo dividiremos las ventajas en dos grupos distintos. Por un


lado las ventajas de la estimulación cognitiva para el individuo sin
deterioro cognitivo, ya sea niño, adolescente, adulto o de tercera edad, y
por otro lado, los beneficios para el individuo que presenta algún tipo de
déficit cognitivo o demencia.

Si no tienes ningún déficit cognitivo, la estimulación cognitiva te será


muy útil para:
 Mejorar tu plasticidad neuronal: el cerebro humano es
elástico y moldeable, por lo que cuanto más lo estimules, más
plástico será y evitarás la rigidez cerebral.

 Aumentar tu funcionamiento cerebral: si estimulas tu


cerebro también aumentarás el funcionamiento de sus
neurotransmisores. Cada función cognitiva la realiza una región
cerebral y un grupo de neurotransmisores distintos, por lo que
con cada técnica de psicoestimulación beneficiarás una parte
concreta de tu cerebro.

 Aumentarás tu potencial: cuanto más trabajes, más hábil


serás. Cada potencial o destreza cerebral se puede trabajar e
incrementar. Cuanto más lo trabajes mejores habilidades
tendrás, cuanto menos lo trabajes menos habilidades irás
teniendo…

 Prevenir el avance de déficits cognitivos: el cerebro


humano, del mismo modo que el resto del cuerpo se va
envejeciendo. Si lo trabajas y lo estimulas lo mantendrás en
una mejor forma.

Si tienes algún déficit cognitivo o síndrome demencial, la estimulación


cognitiva te será indispensable para:

 Mejorar tu plasticidad neuronal: El Alzheimer y otras


enfermedades demenciales afectan gravemente al cerebro,
incrementando rápidamente la muerte neuronal. Pero eso no
significa que tu cerebro deje de ser plástico. Aunque menos, tu
cerebro sigue teniendo plasticidad. Si estimulas tu cerebro
tendrás más, y mientras la enfermedad destruya neuronas, tú
podrás responder creando algunas.

 Mantener las funciones cognitivas que preservas: con el


deterioro cognitivo, la funciones van disminuyendo de forma
gradual. Sin embargo, si realizas estimulación cognitiva podrás
ir manteniendo esas funciones que todavía eres capaz de
realizar.

 Retrasar la evolución de la enfermedad: la mayoría de


síndromes demenciales avanzan de una forma progresiva y son
irreversibles. No obstante, si realizas estimulación cognitiva se
lo pondrás difícil a la enfermedad, y tu cerebro se mantendrá
funcional durante más tiempo.

 Mejorar tu calidad de vida: Cuanta más estimulación


cognitiva realices, menor será tu deterioro, preservarás un
mayor número de habilidades cognitivas, preservarás tu
funcionalidad y tu calidad de vida se verá beneficiada.

10 actividades de estimulación cognitiva

Una vez vistos los beneficios que aporta la estimulación cognitiva,


vayamos a ver cómo funciona, y qué tipo de ejercicios podemos hacer.
Para realizarlo, propondré 10 ejercicios distintos. Estos ejercicios suelen
conformar lo que se conoce como programas de psicoestimulación
global.

Este programa contiene:

 Una terapia de reminiscencia.


 Una terapia de orientación a la realidad.
 8 ejercicios para trabajar las distintas funciones cognitivas:
atención, cálculo, funciones ejecutivas, lenguaje, memoria,
praxias, gnosias y orientación.

Según en nivel de funcionalidad (o deterioro) de la persona a quien se le


aplique la estimulación, los ejercicios serán de una mayor o menor
dificultad.

A modo de ejemplo, los ejercicios propuestos se adaptarían a una


persona que sufriera un síndrome demencial inicial o leve.

1. Terapia de Orientación a la realidad

Se trata de una sesión de entre 30 y 60 minutos de duración, donde se


trabaja en pequeños grupos de pacientes.

Las sesiones tienen un enfoque cognitivo, comenzando habitualmente


por la orientación temporal, espacial y siguiendo por la discusión de
eventos, generalmente del entorno próximo de los pacientes.

Como instrumentos de trabajo se utilizan el clásico Tablero de


Orientación que típicamente presenta información como el día, la fecha,
la estación del año, el nombre del lugar y otras informaciones
adicionales.

El objetivo de esta terapia es mantener al paciente en contacto con la


realidad, trabajando simultáneamente distintas habilidades cognitivas
como atención, concentración, orientación o memoria.
2. Terapia de Reminiscencia

Es un proceso de evocación narrativa del contenido de la memoria


remota. Consiste en narrar historias recordadas por la persona.

La memoria remota contiene información almacenada a lo largo de toda


la vida y es retenida de forma más o menos perfilada. Así pues, aunque
hay algún tipo de déficit, esta terapia permite retener la memoria a largo
plazo y no olvidar los aspectos más importantes que han conformado la
vida del paciente.

Así pues, la reminiscencia es una manera de volver a vivir experiencias y


sucesos del pasado. Con esta técnica, los individuos reintegran el pasado
desde el punto de vista del presente, por lo que le permite realizar 3
procesos distintos: recordar, evaluar y síntesis.

3. Actividad de tención

Un ejercicio típico para trabajar la atención es la típica “sopa de letras”.


Este ejercicio permite trabajar de forma eficaz los procesos atencionales
así como la concentración del individuo.

 Encuentre y pinte las vocales de la sopa de letras.


 Encuentre y pinte los números 6 de la sopa de letras.
 Encuentre y pinte los números 2 de la sopa de letras.
4. Actividad de cálculo

Una de las actividades más típicas y mayormente utilizadas son las


operaciones matemáticas. En función del nivel de funcionamiento y/o de
deterioro serán más o menos complejas.

Continúe las series numéricas:

 4, 8, 12…………………………………………….
 22-28-34…………………………………………..
 28-26-24…………………………………………..

5. Actividad para mejorar las funciones ejecutivas

Las funciones ejecutivas nos permiten programar actividades. Así pues,


un ejercicio útil consiste en planificar actividades de la vida cotidiana.

Ordene les siguientes frases de forma que tengan sentido:

-Esperar que se caliente el aceite. 1- …………………………………


-Encender el fuego. 2- …………………………………

-Poner aceite en la sartén. 3- …………………………………

-Poner el huevo en la sartén. 4- ………………………………….

6. Actividad de lenguaje

El principal síntoma de deterior del lenguaje es la anomia. La anomia se


produce cuando nos cuesta recordar el nombre de las cosas, hecho que
interrumpe nuestro discurso y nos dificulta la expresión.

Una actividad adecuada para estimular esta función sería la nominación


de cantidades de objetos según categorías. De esta manera se trabaja la
memoria y el lenguaje de forma simultánea.

Escribe 8 nombres de:

 Profesiones.
 Deportes.
 Presidentes políticos.

7. Actividad de memoria

La memoria se puede trabajar en función de sus distintas modalidades:


memoria de Trabajo, memoria a corto plazo, memoria a largo plazo, etc.

Relacione mediante flecha las siguientes comidas con la región española


de la que son características.

 Bocadillo de Calamares Asturias


 Paella Comunidad de
Madrid
 Mojo Picón Galicia
 Fabada Islas canarias
 Pulpo Comunidad
Valenciana

8. Actividades para las praxias

La praxia es la habilidad que nos permite llevar a cabo movimientos de


propósito.
Por ello, una forma eficaz de estimular esta función cognitiva es dibujar
distintos objetos como:

Dibuje los siguientes objetos:

 Una mano.
 Una casa.
 Un pez.

9. Estimulación cognitiva: Gnosias

La gnosia es la habilidad que nos permite reconocer estímulos


previamente conocidos. Un ejercicio para trabajar esta función consiste
en ser capaz de situar distintas regiones en un mapa.

10. Actividad de orientación

Para trabajar la orientación conviene preguntar y/o recordar a la


persona los distintos aspectos que le permitan mantener la orientación
espacial (donde está, en que calle, barrio, etc.) en persona (como se
llama, en qué año nació, como se llaman su hijos, etc.) y temporal (que
día es hoy, mes, semana, etc.).

Conclusiones

En definitiva, cuidar nuestro cerebro debería ser una obligación para


cualquiera de nosotros, y la estimulación cognitiva un recurso más que
eficaz que nos permita incrementar nuestra capacidades mentales.

¿Qué ejercicios estás practicando para tu estimulación cognitiva?

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