Вы находитесь на странице: 1из 14

1

pun~ ? e vi~ta teórico siempre hay alguien presente, alguien


en ultima instancia e inconscientemente equiparado a la
~adr~, la persona que en los primeros días y semanas se LA TEORIA DE LA RELACION
identificó con su infante y no se interesó en nada más que en ENTRE PROGENITORES-INFANTE 1
cuidarlo.
(1960)

Es posible que el tema principal de este escrito pueda


exponerse del mejor modo mediante una comparación del
estudio de la infancia con el estudio de la transferencia
psicoanalítica.2 Nunca podrá subrayarse lo bastante que lo
que digo se refiere a la infancia, y no primordialmente al
psicoanálisis. La razón por la cual es indispensable compren-
derlo toca las raíces de la cuestión. Si este escrito no realiza un
aporte constructivo, no hará más que sumarse a la confusión
existente acerca de la importancia relativa de las influencias
personales y ambientales en el desarrollo del individuo.
:, .;; En el psicoanálisis tal como lo conocemos no hay ningún
\'>·~~{i~.__0 trauma al margen de la omnipotencia del individuo. To_go cª-e
15
«.'-1.~t finalmef!te bajo el control del yo, y por lo tanto queda rela-
cionado con los procesos secundarios. Al paciente no lo ayuda
que el analista diga "sú madre no fue lo bastante buena", "en
realidad su padre la sedujo", o "su tía la abandonó". En un
análisis se producen cambios cuando los factores traumáticos
entran en el material psicoanalítico- a la manera a el pacie_nte,
y en el seno de la omnipotencia d~l pacrente. Las interpreta-

1
Este trabajo, junto con uno de la doctora Phyllis Greenacre
sobre el mismo tema, fue sometido a discusión en el 22° Congreso
Internacional Psicoanalítico, realizado en Edimburgo en 1961. Se
publicó por primera vez en el Int. J . Psycho-Anal., 41, págs. 585-95.
2
He examinado esta cuestión desde un punto de vista clínico más
detallado en Primitiue Emotional Development (1945).

46 47

1

1 r , ,,-- ~" ( "'\ ,,. '1


. .
~
(o más importante que las interpretac10nes), porque el pacien-
1 ciones que producen cambios son las que pueden realizarse en
~érminos de proyección. Lo mismo se aplica a los factores te no \a experimentó en el cuidado materno de la infancia, y
~ benéficos, los factores qu~ conducen a la satisfac~ión. T~do es para poder hacer uso de ella necesitará encontrarla por vez
..._ interpretado en los térmmos del amor y la ambivalencia del primera en la conducta del analista. Esta parece ser la base
individuo. El a nalista está preparado para aguardar hasta de la investigación sobre el problema de lo que puede hacer un \
encon trarse en condiciones de hacer exactamente este tipo de psicoanalista en el tratamiento de la esquizofrenia y las otras
trabajo. psicosis. \
Pero al infante le ocurren cosas buenas y malas que están En los casos fronterizos no siempre esperamos e n vano; con 1
totalmente fuera de su alcance. De hecho, la infancia es.el el transcurso del tiempo, el paciente llega a ser capaz de u sar
período en el cual todavía está en proceso de formación la como proyecciones la interpretación psicoanalítica de los
capacidad para recoger \os factores externos en e\ ámbito de traumas originales. Puede incluso suceder que esté en con-
\a omnipotencia de\ infante. El yo auxilia r del cuidado materno diciones de aceptar lo que es bueno en el ambiente como una
le permite vivir y desarrollarse a pesar de no ser aún capaz de proyección de los elementos simples y estables de1 "seguir
controlar o de sentirse r esponsable por \o bueno y malo de\ s.. siendo", derivados de su propio potencial hereditario.
ambiente. - ~ La paradoja está en que lo bueno y lo malo del ambiente del
De \os acontecimientos de esas primer as etapas no puede infante no son en realidad proyecciones pero, a pesar de esto,
pensa rse que se pierden en virtud de \o que ahora conocemos "" para que el infante se desarrolle sanamente es necesario que
como mecanismos de represión, y por lo tanto los analistas no t' todo le parezc~ una proyección. Aquí encontramos operando
pueden esperar que a par ezcan como resultado de\ trabajo que la omnipotencia y el principio de placer, como sin duda lo
atenúa las fuerzas de \a represión. Es posible que Freud hacen en \a más temprana infancia, y a esta observación
pensa ra en esos problemas cuando empleó la expresión "re- podemos añadir que el reconocimiento de un "no-yo" verdadero
presión primaria" , pero esto está abierto a la discusión. Lo es una cuestión de intelecto; pertenece al refinamiento ex-
seguro es que lo que estamos examinando aquí ha sido dado tremo y a la madurez del individuo.
3
por sentado en gran parte de la literatura psicoanalític~.
H e dicho que el analista está preparado para_afil!.fil:Q.!l:!:_ En los escritos de Freud, \a mayor parte de 1as formulaciones
h asta que el paciente sea capaz de presenta r los factore$_ - concernientes a la infancia derivan del estudio de los adultos
ambientales en té rminos que permitan su iñterpretacÍón en an álisis. Hay algunas observaciones directas (el material
c"omo proyec~io~~s. En un caso bien escogido, estE: resu1~ do de 1920 sobre el carretel), y está el análisis de J u anito ( 1909).
surge de \a capacidad del paciente para confia r, que es A primera vista, parecería que g_ra_!l parte de la teoría
redescubierta en la confiabilidad ~~_analista y en el_encuadre psicoanalítica trafa sobre la niñez temprana y la infancia
11c.Ófesional. A veces e\ analista tiene_q_u~ espe~ar mucho, Yen pero en cierto sentido puede decirse que Freud ha desatendid~
el caso mal_elegido para e\ psicoanahs1s clásico es probabl~ a la infancia como estado. Lo pone dé relieve una nota al pie
que \a confi~bilidad del a na lista_sea el factor más importa nte de "Fonnulaciones sobre los dos principios del acaecer psíquico"
(1911, pág. 220 de la edición inglesa), en la cual se ve que
reconoce que está dando por sentadas las mismas ideas que
sometemos a discusión en este artículo. En el texto Freud
s He comunicado ( 1954) algunos aspectos de este problema, _ t~l rastrea el desarrollo desde el principio de placer hasta el
como los encontré en una paciente mientras ella estaba en regres1on
principio de realidad, siguiendo su curso usual de reconstruc-
profunda.
"
-u...~t__'.)'\ '°~
. \.:,
~\l'l} 49
48

,t ~
f'f\~í ·j ~·- - ..ll"· Wf>rv.Ofl:: l..o ~ ~ ~{ '.P~ ~ -
\ t\ "l' c.:i" ~~ .
ción de la infancia de sus pacientes adultos. La nota dice lo
siguiente: de la relación progenitorrs-infante, efl neC<'!\ario tomnr una
deci11i6n sohre estas cueRtioneA, que conciernrn al Rign1ficAdo
real de la palnhra dependencia. No hal'la con rPConocer que PI
Se me objetará con todo derecho que una organización que
era esclava del principio de placer y desatendía la realidad del amhiente l'S importante. En una discusión de IR teona de la
mundo externo no podía mantenerse viva ni un tiempo relación progenitores-infante, sP fonnan do!I grupos antagó-
mínimo, de modo que no podría haber llegado o existir en nicos Ri hay quienes no admiten que en las primeras etapas el
!lbsoluto. No obstante, el empleo de una ficción como é&ta se infa~te y e~ cuidr1do mRterno se pertenecen recíprocamente y
justifica cuando uno considera que el infante -siempre y 110n inextricables. Estas dos co!\as, el infante y el cuidAdo
cuando se incluya con él el cuidado que recibe de su madre- n:iat~rno, se deslindan y disocian en la salud, y la salud, que
casi realiza un sistema füico de este tipo.
- &
,..
.,., ,. ip '
..
.. ,
f,
significa tantas cosas, en alguna medida significa desenredar
el cuida?º ~~terno en al,go que entonces llamamos el infante
' 1 '
Freud rinde tributo a la función del cuidado materno, y - , J J il
..- () o los pnnc1p1os de un mño en crecimiento. Esta idea queda
debe suponerse que abandona el tema porque no está pre parado cubierta por las palabras de Freud en el final de la nota al pie·
para discutir todo lo que implica. La nota continúa: "et dominio del principio de placn sólo puede llegar realmente
a su fin cuando el niño ha logrado un desligamiento fisico
Probablemente el niño alucina la satisfacción de sus co~pleto rcRpecto de sus progenitores". (Más adelante exa-
necesidades internas;revela su displacer cu~ndo s~ produce minaremos la parte central de la nota al pie, en una sección t-n
un incremento del estimulo y una ausencia de satisfacción
la que propondremos que estas palabras de Freud son inade-
mediante la descarga motriz del llanto y agitando brazos y
piernas; entonces experimenta la satisfacción que ha cuadas y en cierto sentido desorientan , si se considera que se
refieren a la primera etapa.)
alucinad~ Más tarde, como niño mayor, aprende a empl':~_T
intencionalmente esas manifestaciones de descarga como
métodos para expresar sus sentimientos. Puesto que él c~i~-
du ulterior de los niños sigue el rrt~délo del cuidado de los LA PALABRA "INFANTE~
in,.fantes, el dominio dei prindpio de placer sólo puede llegar
; eitlmeñte a su fin cuáñlo el niilona logrado un desligamiehto ~~ este escrito entendemos que la palabra infante de11ign11
p~quico completo r especto deºsus progenitores. al nmo muy pequeno. Es necesario decirlo, porque en las obras
de Fre ud esta palabra parece incluir al niño hasta la edad de
Las palabras "siempre y cuando se incluya CO,!l él ~J_cuidado la superación del complejo de Edipo. En realidad, "infante"
que recibe de su madre" tienen una gran importancia en el implica('~ue no habla" (infans), y no resulta inútil pensar en
contexto de este estudio. El infante y el cuidado materno, la mfanc1a como la fase anterior a la aparición de la palabra
juntos, forman una unidad~ Sin duda, si se estudia la teoría Y al empleo de símbolos verbales. Se infiere que Freud está
refiriéndose a una fase en la cual el infante depende de un
• En una oportunidad dije que "no hay nada que sea un infante", cuidado materno basado más en el empatía de la madre qut>
en el sentido de que, por supuesto, siempre que encontramos un en lo que es o puede ser expresado verbalmente.
infante encontramos también el cuidado materno, y sin cuidado ~ E ste es e~Jo esenci~ período de desarrollo del yo, y la
materno no habría infante. (Discusión en un Encuentro Científico de integración es el rasgo principal de ese desarrollo. Las fuerza
la British Psycho-Analytical Society, circa 1940.) ¿Acaso fui influido del_ ello reclaman atención. Al I!rincipio son externas al
sin saberlo por esta nota al pie de Freud? · infante. En la salud , el ello se récoge al servicio del yo, y el yo
50 51
.. Loe mN"ani1mo1 dt' deft-nu df-1 yo fu«-run fonn\&IA
lo domrna, de modo qu~ laa 1denllflcawme1 1lel ello puan a
fortalecer al yo No obstante, éale ''" un 1ogl"o de1 duarrollo cradu lftlflnt,, • ~ •upU90 qlM' ~ mN"aniam.•
1,nno, y en la 1nfanc1a hay murhaa v1trut11tf'11 qur dt"penden del •ncwrt•
ben"" n-lftáón ron la Mnvada et-- la i..-n&k'ln,
fraca.w, re lativo dP f't1lt- prcx-eeo En la mala ulud loa l<>lfO' odt la ~rd1d1 df-1 oh. to t:11ta part• df. la u-ona ps, nahl1ea \
mfontilt! dt! t'sle l1po blllo han auto alranz.adot1 rn un ¡Tado prf'1UpolW' un11 lif'parllt1v1dad df'I wlf y un" trut'turac1tm d«-\
mtntmo, o quizá tlt' alcanrnrun y perdieron En l11 paK'o1111 yo, qu1ua un HqUf'ma rorporal pPnonal F.n la pnrrwra part.
infanlil (o eS4JUtzofrema) el d io 11gue aten,io rt'I tiv" o t.otal· d,- ~t,, f'tl('nto t.ocb v11 no pod moa dar por •nt.ado Nt• MlAdo
mente "externo" al yo, KUH 1mt11facc1onea • •lluf'n llf'ndo n11 - df' coaa1 La di«u11ión ~ <'rnlra ~1umentr f'n t'l Nt.b~
caa, y ttent·n el efecto dt• amen aza r ltt u lruclura di'\ yo, hH- rim1f'nt.o df' Ntfo Ht.ado ~ C'08H, '"" df'<U, de la Htructuranc\n
ta 4ue se orgitmzan defen11as de ca11d11d r,1cóllra.1 '). df'I yo q\J4' hac• poe1h\e la Anl(U11t11 a partir d• la trrunón
Estoy t->mitemendo qui> la razón pnnctµal por la cuul rn el mat.muva o d• 111 p4'rd1d11 df'I ohieto •:n f"•tA f'tapa trmprana
desa rrollo rnÍA nt1l el Infu nte por lo romun llell 1\ at-r ce pu d.- la anjf\l'll1a no"" anlfU!ltie d,. cutración. ni d• uparac-,on; ~
dommar ul ello, y el yo capuz dt rnchurlo, t•lf el hecho J,.\ r•luaona ron ali') totalmf"nle d111t1nto, 7 dt- hecho mnatituye
cu1dacfo m 1-tlerno, mumtnu¡ t>I yo materno \l\lflrument.a el yo ª"IU"ll• d. aniqu,lactón (rf la a(áni111 df" Jon l
dd mfant.e y dt- <'Me modo IP dtt podt>r y estahtlidud Hfthn\ que J-:n la teona ptnroanalft1ca. loe mf!('amamoe d• df'Íf"tlH d•I
exam1mu romo lie produce elllt' proce110, y t.umb1~n rómo e l yo yo "" ¡ran mNl,da ,mpon~n la ,dea d• un ntflo qu«" ti•IW'
d~l infante llega finalm enle a hl>crnn1e del yo auxiliar de 1& md.J)f'nd•ncta, uM or1an11ac1ón d,,t'•na,va venbderament...
madre, de mo<lo tal que el nu'lo iw desliga mentalmente de ella, pt'rtonal En e11ta tran11ct6n df'l dHArrnlln. laa invf'ltlpcio-
consiguiendo d1ferenc1arse en un 1,elf personal separado. ntta de KJ.,in M' 11um11n a la t.eorta freudiana. danru:ando .,,
Para examinar la relación proge mtore1Hnfanteet1 nt>Cesano 1n~r1uego dt' loa mttanitmOI de d•íenu con lu anl(Uat1aa
en prinwr lugar intentar una breve exposición de la tM>na de l pnm1hvH El traba,J<> dr Klein t1•ne que nr cnn la mia
desarrollo emononal del tnfonte. tf'mpnrna 1níanc1a, y llnma la a~netón aobr" la ,mportanc,a
de lo. ,mpulsoa agrea1voa y deatructivoa, mH profundameni.
&rrlllgndoe que loa reactivoa a la fruatraaón y n-laC1onadoa
HIS'I'ORIA con el odio y la rabia: f'lta autnn tamb,,n rf'1thxa una
d1aecctón de las deíenau ~mprana1 '-"Ontn \u an¡u11tiu
En el desarrollo de la teoría psicoanRlítica, las primeras
hipótesis tenían que ver con el ello y con los mecanismos de
defensa del yo. Se entend1a que el ello entraba en escena muy • Laa mveall¡aoonea IIOb" loe mecanumua d• deffflU ullfflo,_
tempranamente; el descubnmiento y la descripción por Freud a El yo y loa m«Oll&1nw1 ch d.{*IUO ( 19361 de Anna F~ucl ~ d u
de lRsexuahdad pregen1ta l, sobre la base de sus observacio- un canuno diferente llepron a una reevaluaaón d.t' P•JK-1 d.l
quehacer materno en el cuidado y el duarrol\o temprano del LÑan&e
ne8 de los elementos regres1vois hallados en la fantasía gemtal
Anna Freud (1953) ha rec~rado na• id.a aobn la aant.14n.
y en el juego y lossueñ_os, constituyen rasgos principales de la W1\11 HofTer ( 19551 t.amb1~n realiió --L.._n'ac.JQ(M~ .J_
p icología clínica. ptn 'ododeldesarrollo Peroaquf h.acemo.L:_._..
- acerca .,. Nt.
,_
. .J_ n.l,-..- •n .. 1mput1,an-
CU\ ue comprender el P3pd del a.mhientc pattnl.a) ~rang el
• He tratado de demostrar la aplicación de esta hipótesi a una y
de~rrollo del mían~. en el modo como Hto adqwen ""1;r~
compren 1ón de la psicosis en mi artículo "Psychoses and Child chn1ea paro º °9?lros en nUNtru mant',10 de auto tipo d~ CUOI *'
Care" (Winnicott , 1952). · t.rut.ornos af«tiv0& y de car6cwr.

52 53
pnm1tivaa, prop1a1 de l u pnmeru f'tap1t11 ~ la '>rgan aución A F.l ISPA,
mental (f'ec11i6n , proyección f' i nlroy.-cción l
Lo que~ deacrihe "º lA obr A d ,- M ,-1,miP KJ,.m P - ~ En Ht. pa d•I Ntud . la palabn clani •• d,,~d,,. .1
clftramPnte a In Vldn de\ mfonte "º '"" pn m f'r aa fa11-Pa y Al Lna infantH no ~ Pmp.-r•r • , amo •n ~rtA• N>nd1
periodo de dependenc1a quf' n~ ocupa rn .-ate articulo M"'""'.. non.-11 l.a• f'!'tud111mo• mA• ad•lant•. p.ro (nrm•n v-rt., d• la
Klem deJa en claro quf' rl\a r .-con ocf' qur ,., 11m hu•nt.. ,.. p , i , ~ ~I mí,mi- l.os mf•nlfotl llf-tran • .,, d. modo d,
,mportante Pn ~ Af' periodo, y d ~ d,venM m od0& f'n todas laa f.-rmt... 9f'tr\Jn lA• rondk'kmH ~•n f11YMaMNa o ~ (•vorat,lN
etapas ' No ohAtante , yo aoe~~o que "' lrah.Jo dP H\.a Al murmo t..-mpo. ""'• rondtc"tnnH no d. rm111an ..1 pnt#n
eatudw1'a y de 11u11 ro\aborado N"a de)R ah,f'rt.o para ,m11 ron- c,al d. la cn•tur• ~Al.t' ... hf-rfldado y ,..ulta 1-,r,tnno ...tu•
sideraaón ullf'nor el lema de\ d c.-aarrollo de la d e¡,.ndenc,11 diario romo un t.-m• .-parado.""'"~ .Y ru,1"'10 ,er (J("'f'ltl, q"

t
completa, que aparttt' t-n 1ft frue d e Fre ud • "'' infan t e, ri pot1M1nl lt,rwlndo por"" &n/nnt, "º p l"flft1•rl1r9« ' "
aiempre y cuando'"' mc\uys con"' f'\ cu1d11do que recibe de •u ,ra. u,{nnt, n ,,,,,.o• yu, ,.,, t•11t<"t,Útá4l .-.~ ,l c-u"'4J.., "'ª''"""'
madre ...". No h&y nada f'n la ohra de Klem qur conlr d i¡a la f:I pounc,al hrrf'fiado lf\("IU..,.. 111 ~ncwnc-, • •• c-n,nn,.-.ntn
idea de una de~ndencu, nb80\ut.a, ~ro mf' parN:f' quf' lam· y dNarrollo A toda11 la• Plape• d~I cn,cmu.-nll, •mot'tonal
poco hay rcfen-nc,a ea~tfica a la etap f'n que <-1 mfanl# tólo pu.-df'n a aan6nwol.,. í.-c:haa •pn,•1madu t:• p, ...um,hlf' qtw
e-x1ste gracin.s a\ cu1dRdo mot.emo, con el cual forma un.a todaa la• Ptapa• d.l df.aarmUo t ...M"n •u ÍHha .-11~1al ..n
unidad. t"adtt n,t\o md1V1dual No obltant.., no - trata tlñlo .t.- qm• r•••
Lo que aquí estoy formu\nndo para t1u con11derac16n ea \a ff'Chaa vartan df' nit\o " n11'\o, a,no tamhi•n ft,. ,¡11•, nu11qu, ,,,,
diferenc1a entre \a aceptac16n por"' annh~t.ft df' 1 r~nhded df' ÚU C'OIWC'&, r n di an t,'"4"° " " •I ca11o, d .. un n1t\o fiado no
\o dcpendenc1a y P.U trabajo con ella en \a tranafert'ncte • podrtan ut1hzarw. p,tr11 pndecir "' detiannllo r••l ,t,. ,....,. n~t'k,,
Parecen a que el estudio de \ns defen~as d('\ yo retrotrae a\ a ca waa dt"I otro íact.or , • I cuidado mat.rno A lo • 11 mf1 , aó1c,
\ \ investig dor ft \as m~nift'stacfones p.regen1ta\es de\ ello, pu~f'n t.fo~r al1un valoc- pred,ct1vo •• ..- da por wntario ,,n
mientras que el eatud\O de ln ps1co\og1a del yo \o \lev a la cuidado mat..rno adt-cuado Pn l o e • • ~ importan fOb-
dependencia, a \a unidad cuidado IJUlterno-mfante V\amenr.., f'Sto no ei,rnarLCa •ad«u•d(> -6lo "º PI Nnhdo n1,n,
Una mitad de \a teoría de \a relación progenitores-infante máa adelante H a m mamo. el •a«mftcAdode la ad«uanón y 1~
tiene que ver con e\ mfante: es la teodo de\ r~rr~d?_del madecuación t"n Ht.fo con t..a to >
mfante desde el principlo de p\ncer hasta el pnnc1p10 de
realidad, y desde el autoerotismo l!astn las relaciones objetalee.
La otra mitad de la teorta de Tarelación prog-enitores-infant.e
se refiere al cuidado materno, es decir, a \as cualidades y los
cambios de \a madre 1 que satisfacen las necesidad~s es~í- En este punto t"S n«~no mt.ntar n bu b,...,e,swnt.
ficas y e\ desarrollo del nii\o hacia e\ que ella se onenfi. loqueau.c:edeconelpownaaltwr.dadocuando"'9t• -mnTWort..
en un infante, y m áa \.ard ~ ~n un nu\o. un nil"M> qu,,, .,. on"1t.11
, He uphcado det.a\\adamente mi enfoque del trab&JO de Melame haaa la existe na a an<J..pendi.nw . A caWN1 dio lu cvmp&ejtdacl,N
Klem en este campo, en da. articu\os(Winmcott, 19Mb, y el capitulo del tema. es prttl80 baur eeta deec:n~ • n •I aupuf09to cw
1 de este m,smo libro). Vbse Klem ( 1946. pág. 297). un cuidado materno aaueíadorio. qu. •n ,...ladad --.n•tka
• V~afle un ejemplo c\imco en mi artículo "W1thdrawal and cuidado paN>ntal El cwdado pa.-.ntal aabsfactono ~
Regreatnon· 09f>4) dividirse nproximad~nt..~n t,...._etapu 4u• w •uP""Pºº"'

54
... Cl)
C1l ...
t! e: .
o Q
o.. E.
E n: .
-- -
a) Sostén.
el proceso primario,.
b) La madre y el niño viven juntos. El infante no conoce la la identificación primaria,.
- función del padre {ocuparse del ambiente para la madre). el autoerotismo,
c) Padre, madre e infante viven juntos. /) el narcisismo primario.
Empleamos el término "sostén" para denotar no sólo el El yo pasa de un estado no integrado~ una integraci~n
sostén físico del infante, sino- también toda la provis!9n estructurada, con lo cual el infante adquiere la capaciqad. de
ambiental anterior al concepto de vivir con. En otras pala- experimentar la angustia asociada con la desintegración. La
bras se refiere a una r elación tridimensional o espacial, a la palabra "desintegración" comienza a tener u--;-sentido ~e no
que ~radualrnente va añadiéndose el tiempo. El sostén, a_un- tenía antes de que la integración del yo fuera un hecho. Si el
que comienza antes, después se superpone. con las exper~en- desarrollo es sano-;-en esta.- etapa ei infante conserva la
cias instintivas que con el transcurso del tiempo dete:rn1~a- capacidad de reexperimentar estados no integrados, pero esto
rán las relaciones objeta les. Incluye el manejo de exper_1enc1as d~pende de la continuación de un cuidado materno co~fiable,
intrínsecas de la existencia tales como el completamiento (y o de la constitución en el infante de recuerdos del cuidaao
por lo tanto el no-completamiento) de los procesos, _Pr?c~sos materno, que gradualrrient~empi_e~a a ser p~r~iJ?ido e.amo tal.
éstos que desde fuera pueden parecer p~ramente fis10logicos, El resultado de un progreso sano en el desarrollo del infante
pero que son propios de la psicología del mfa~te y se producen , ) e.D esta etapa efa-que se fogralo que pooriamo!!_l!amar~~tao.o
en un campo psicológico complejo, determmado por _la con- de unidad". El,infante se convierte en una persona, en un
ciencia y la empatía de la madre. (Más adelante examinamos 1 in ividuo por derecho J>ropio. ----
detall adamente el concepto de sostén.) . . 1 Con este logro está asociada la existencia _p~c_?somática
L expresión "vivir con" implica relaciones obJetales, y que del infante, que co!_Ilienza a adoptaruna pautJl ~rs2n~l; me
el in~ante emerge de su estado de fusió,y C.Q!l la madre, o_SJl he referido a esto como a la psique que habita o reside en el
cepción de l os objetos como externos al ser.
perEn este estudio nos interesa especial~e.nte la etapla . e
d \ soma.9 La base de esta residencia es la vinculacióñ de las
experiencias motric~sJ_sensori~~Y funcionalescon el nuevo
. d t no los acontec1m1entos comp eJos estado del infante COJ}!O per13ona. Como continuación del
"sostén" del cwda o ma er y
-
I - ---r- .- -. 1 . conesa
. 1•· . del infante relac1onauos desarrollo aparece lo que podría denominarse "memb_i_:~na
del desarrollo pSico ogico d ' . -0, n entre fase v fase es \imitadora", que en alguna medida (y en la salud ) equivale a
arse que 1a 1v1s1 ___ , - -
fase . Pero d e b e record - · · á para llegar a Ja superficie de la piel, y que ocupa una posición íntermfdia
.... .fi ·al y -sólo se la adopta por con_venienc1 ,.
ar " 1 1c1 , entre el "yo" y el "no-yo" del infante. De modo que éste empieza
una definición más clara. a tener un interior y un exterior, y un esquema corporal.
Adquieren senti~o_las fu~i_?nes de in~orporaciól}~JC.P.ill-~;
además va justificándose caoavez ~as_p9~~~l~r ~na re_alidad
el in1rante durante la fase de sostén 10
El elesarro llo d ' psíquica personal o interior del inf~n~.
s dicho pueden enumerarse algunas Durante la fase de sostén s~ inician ot_:9-s procesos; el más
A la luz de lo que hem~ 11 del infante durante esta fase .
.-.sticas del desa1 ro o
carac te •• . · s· 9 u a anterior exposición mía sobre esta cuestión es mi artículo
En ella son realidades viva .
"Mind:nd its Relation to the Psyche-Soma" (1949c).
1
57
56

1
impo rta n te es e l alborear de la in teligencia y el comie nzo de D~prndencia
l a m e n te como a lgo dis tinto de la ps ique. Allí se inicia Ta
historia d e los procesos secundarios y de l funcion a miE>n- En 111 (111«" dP Mllltl-n f'l 1nfant.P "" f'ncu.-ntr11 ,.n una
to s imbólico a s í como de la organización d e un con ten ido drpend.-nria máxima . Le dP~ndf'nc111 pu.-dt> cl11111f1r11rM-romn
psíquico pe rson a l , q u e d a base al soñar y a las r e laciones de 111gue
vidQ.
Al mis mo t iem po e mpiezan a converger e n el infante dos (1 )Df'p~nd~nr·,a ab1wlutn En P"W P11t.Ado el infont.P no lif'nf'
r aíces d e la con du cta impulsiva . El té rmino "fus ión" d eHll(nn modo nlguno de ronocf"r f'l c-u1d,ulo materno, 4uP f'n KT"n
el proceso positivo en virlud del cual los ele m e ntos difusos mrd1da tirnf' quf' ver con In profilnxi11 Ln criftl11rH no lif'nf' PI
propios d e l m ovimient o y d el erotiAmo muscular se fusionan control dr lo qur r11tá h1t-n y In quf' r111lÁ mnl hf'cho, 11e\lo puf'd.-
(en la salud ) con el fun cionam ien to orgi á s ti co d e las zonnA 8acn r partido o ~ufrir la pf'rturbación
er ógen a s. Con es te concepto eslnmos m á11 familiarizados en el
(1i) D~p,nd~nc1n rrlatu·n El infsrnt.P IIP dA c-ucntJt d.- la
proceso inve rso d e desfu sión, que es un o d efen sa complicada
nccPsidad qur t ,rne de loA dfl't.11llrR <lf'l cui<lAdo rnnlt-rno y Pn
e n la cua l la agresión qued a sepa..rada de la ex pe rie ncia e rótica
m~di d a crecit>nte loR relRcionn ron ""'' 1mpul11oe pPrA011al,.11,
al cabo d e un pe r íodo e n el cua l se había logrado un cierto
m á11 ta r de, e n un tratamirnto p111conn11ht1co, puPdr rf'produ
grad o de fusión . Todos estos d esarrollos cor res ponden a la
cirlos en la tranRft>rPncia
condición a mbie n tal d el sostén, y s in un sosté n s uficien te-
m e nte bueno esta s etapas no se a lca nzan , o sise alcanzan no (ii1 ) fiaría la inck¡wrukncia. El infnntf' deMrrolla mf'<lulf'
quedan esta blecidas. pnra pasa r Ri n cuidado real. Lo logra graci8" a la arumu) ción
El paso siguie nte e n el d esarrollo es la capacidad pa r a las de recundoR dP cuidado, a lA proy~ción df" 11111 nf:'<'Pllid,uJH
r elaciones obje tales . El infante pasa d e una relación con un persona leR y a la introyecc:ión de det.AllPR dP cu1d11do con f'I
objeto concebido subjetivame nte a una r elación con un objeto desarrollodeconfianzarn el amb1ent.P. ~hea1'ad1rl'!ef"IP.lf"ml"nto

l percibido objetivamente. Es te cambio est á estrech a me n te


liga do con l a evolución d el infante, que deja de estar fusiona do
con la madre y se separa de ell a, o ser elaciona con ell a com o
de la comprens ión in telectual. con RWI Pnonnf'" consecuencuu,

a lgo sepa r a do y · ~o-yo". Si bie n este avance no est á específi - El aislamiento del individuo
camente rela cionado con el sostén, sí se vincula con la fase de
" vivir con" ... Otro fenóme no de esta fase que eR n~esa n o con•1derar ""
la ocultación d el núcleo de la personalidnd. Ex,imin.-mo.11 t>I .. 't
)
concepto d e un self central o ver dadero. Purd e d~~ que.,.¡
self cen tral es el potencia l he red do q ue f"Xpenm.-nta una
con t inu idad del ser y a dquie re a s u p ropio m odo y n RU propia
velocid ad una realida d psíquica y w, esquema corpor I Vftí·
sona les. 11 Parece necesario int roducir el con~pto d.-1 a,~la-

10 En este punto resulta aplicable y apropiado el trabajo sobre la 11 E n el capítulo 2 he mt.ent.adoexam inar otro u¡>f'do de e11ta fa~

fantasía primitiva, con cuya riqueza y complejidad nos hemos evolut.1vn, tal como aparece en la salud de l adulto CT GrHnaCT?
familiarizado a través de las enseñanzas de Melnnie Klein . (1958).

58 59
~

" ' , , f""' ' ' (


... \ ' \

"" - t''°' ' r


.. '- ' ..!. •
'/
1 miento de ese self ce ntral como una caracter ística de la salud. La aniquilación 13
1 Cualquier amenaza a ese aisla miento del self verdadero en
esta etapa temprana genera u na angustia importante, y las En estas primeras et a pas de l a re lación pro_genitores-
defensas de la tempran a infa ncia aparecen en relación con el infa nte, la angustia está relac_i9n ag!l con 1~ a~~naza de
fracaso de la madre (o del cuidado materno) en prevenir las {lilfq_uilación , y~_nece.aariQ.ex.E.!ica~ qué en ten demos por este
int rusiones capaces de perturbar ese aislamiento. ~~o. . . .
La organi zación del yo puede salir al paso y aborda r esas E n un lugar caracterizado por la ex1s t ~n c1a esencia ~ un
intrusiones, que quedarán recogidas en la omnipotencia del a mbien te que sostien e, el "potencial h e reda do" se convier te en
in fa nte y serán sentidas como proyecciones.1'l Por otra parte, una "continuidad de ser". L a alternativa a ser_e_s reaccionar,
a veces irru mpen a t ravés de esta defensa, a pesar del yo ye) reaccionar interrumpe e l ser y a niquila. Set_:_y a n iqu ilación
auxiliar que proporciona el cuidado mat erno. Entonces se ve son las dos a lterna t ivas. Po r fo tanto, la función principa l de l
afectado el núcleo cent ral del yo, y en esto consist e la natura- a mbiente sostenedor es la r e ducción a un m ín im o de las
leza mis ma de la angustia psicótica.lEn la salud, el individuo intru siones a las que el infarite -deb e- reaccíona r , ~ a
pronto se vuelve invulnerable en este sentido, y si hay intrusión cqnsiguiente aniqu ilaciOO -del se"r persOn a l. En condiciones
de facto res externos sólo resulta un n,uevo grado y una nueva fa vor ables, el infan te estaolece una continuida d d e existen-
calidad de la ocultación del self central. En este caso la mejor cia, y a continuación empie za a desarrollar los r ecu rsos m ás
defensa es la organi zación de un self fal so. Las satisfacciones sutiles que hacen posible recoger las-intrus ione~ en e l á~b ito
instintivas y las relaciones objeta les en s í constituyen u na de la omnipotencia~E n esta et apa la pa la bra mue rte no t iene
amenaza al "seguir siendo" personal del individuo. Por ejem- ninguna aplicación posible, por lo cual la expresión "ins t into
plo, un bebé toma el pecho y obtiene sat isfacción. El hecho en de muerte" es inaceptable pa ra describir la raíz de la des-
sí no indica si tiene una experiencia yo-sintónica del ello o, por tructividad. La muerte n o t iene ningún sentido h ast a la
el con tr a ri o, pa dece el tra uma de una seducción, una amenaza aparición del odio y el conce pto de la p er son a humana tota l.
a la continuidad del yo personal, la af!lenaza de una experiencia Cuando se ¡:-uede odiar y cuando s e alca n za el concepto de
del ello q Üe no esyo-sintónica y pa ra t-;:ata r· coñ la cual el yo p~rsona humana total, la muerte tiene significa do, y a est o le
no está dotad o. -- -- s ig ue de cerca lo que puede de nomin a r se "mutilación "· la
E n la salud , las relaciones objetales pueden desarrolla rse persona total odiada y am a da se m a ntiene viva gracias a ~ u e
sobr e la base de una transacción q ue compromet e al indivi<!uo se la castra o mutila de alg ún otr o modo, en lugar de m a tarla .
e n lo que más tarde se denom ina ría engaño y de~honestidad, Est as ideas son propias de una fase ulterior a la ca r act eriza d a
mie nt ras que la l'el·acióñáírecta-solo e~_p_QsibTe sobre ]a base por la dependencia respect o del a mbiente sostenedor .
de la regr esión a un esta do de fu sión con la ma dre.

La nota al p ie de Freud, reexaminada

17 Empleo el término "proyecciones" en su sentido dinámico y En este punto debem os volver a con siderar la afirm ación
descriptivo, y no con su significación metapsicológica completa. La
función de los mecanismos psíquicos primitivos t~les como la 1
~ En un esc'.ito anterior (1949b) he descripLo las varieda des
introyección, la proyección y la escisión va más 11llá del alcance de cl_ín~cas de este tipo de angustia, enfocando un aspecto liger amente
este escrito. distinto.
\
60 61
l
11
1
1

de Freud citada anteriormente. Freud escribe: "Probable- 1


En esta etapa el infante necesita, y de hecho habitualmen-
mente (e l bebé) alucin a la satisfacción de s us n ecesida des
te obtiene, una provisión ambiental con ciertas característi-
internas; reve la su m a lestar por e l incre m e n to d e la ·
cas:
estim u lación y la dem or a de la satisfacción a través de la
descarga motriz del lla nto y la lucha, y ~n tonces experimenta Satisface sus necesidadPs fisiológicas; la fisiología y la
la satisfacción a lucinada". La teoría expuest a e n esta parte psicología aún no son distintas o están en proceso de diferen-
d el en u n ciado no se a plica a la fase m ás te mprana. Con estas ciación; y
pala b ras ya se h ace r eferencia a las relacion es objetales, y la Y es confiable, pero no mecánicamente confiable; E'B confiable
va lide z de esta parte de l e nunciado de Freud depende de que de un modo que indica empatía de la madre.
da por sentados los aspectos a n teriores del cúida do m a terno,
q ue a quí d escribimos como propios de la fase de sostén. Por E l sostén:
otra p a r te, esta oración de Fre ud se ajus ta exactame nte a la
fase sig uiente, caracter izada por una r elación e ntre el in fante protege de la agresión fisiológica;
y la madre eñ la cua l domina n las relaciones obje t ales y las toma en cuenta la sensibilidad dérmica del infante -<!l
sa t isfacciones ins tintivas o de la s zonas erógenas, es decir, tacto, la temperatura, la sensibilidad auditiva, la sensibili-
cu a n do el desarrollo continúa bien . dad visual, la sensibilidad a la caída (a la acción de la
gravedad)- y su desconocimiento de fa existencia de nada
que no sea el self; -
incluye la fota1idad de la rutina del cuidado a lo largo del
B. LA FUNCION DEL CUIDADO MATERNO día y la noche, que no es la misma para dos infantes cuales-
quiera, porque forma parte del infante, y no hay ningún par
de infantes que sea n iguales;
A con t inuación tratar é de describir a lgun os aspectos de l t ambién sigue los minúsculo& cambios cotidianos, tanto
cuida do m aterno, especia lmen te el sostén . En este es t udio el físicos como psicológicos, propios del crecimiento y desarrollo
con cepto de sostén es importante, y necesitamos desar rolla r del infante.
m ás es t a idea. Utilizam os la pa la bra para in trocfücír ·un
desarrollo comple t o d el tem a conten id~_!ii f~ase !i~fr_e ud De be obser var se que la s madr es que espon táneamente
" ...cu a ndo uno conside r a que el infan te - siempre y cuando pro_por~ionan u ~ cuida do s uficjen tem~f!t~ bl!eno--1.- p ueden
incluya con é l el cuida d o que recibe de s u m a d re- casi rea liza meJora rlo s i e llas m ismas s2n cu idadas de u n modo que
un sistem a psíquico de· este t ipo". Me re fier o a l es tado real reconozca 1a ñ a turáTeúi eseñcial de su tar ea. Las mad res que
inicia l d e la r elación in fante-madre, cuando el p rimero aún n o no propor cioñañ-ü n ctiída do sÜficieñtem ente bueno de modo
h a sepa rado un s elf d e( cuida do -m a terno, r especto d el cu a l espontá n eo, no estará n en condicion es d e hacerlo comocon-
est á e n u n a de pe nden ~ia a bsolu ta en e l sentido psicológico. 1• secu encia d e la m e ra ins trucción . -
E l sostén incluye especialme nte sostener fis icamente al
infante, lo q u e es u na forma de amar, quizá la única con la que
14 Recorda torio: pa ra estar seguro de separar esto de las relacio-

nes objetales y de la gra tificación instintiva, debo limitar artifi-


cialmente mi atención a las necesidades corporale~e tipo genera l.
la interpretación correcta en el momento opor tuno es una buena
Un pacien te me dijo: "Una buena hora ana lítica en la que se recibe comida".
62
63
lll madre puede demostrarl e su am-,r HI runo H oy quienes de 111 cuHt1ón, y la rtton11trucc1ón dt-111mbit-ntl" Y •u f111lu u
pueden sm,tcner a un infante y qu1enea no puedf'n Eata11 111 clllve de 111 otra putt" EslA otra parte no put°dt' aparr<"N f"n
ultimas gt•rwran rápida mente P11 la cnaturR una Ken"lanón de 111 tran~feren<'tA, porquf' ,-J pac1t-ntf' no conoce ni IOt1 a • ~
in11egundad y llanto anguKttado buen~ ni lew1 aspttloe insufic1t'ntea df'I cu1dndo nu1lf'rno, tal
Todo esto conduce al cstahlec1m1e nto de la11 pnmera"I como i~tt' ~ dio f'O t"I f'M't"nRrlO infantil onganttl
relaciúnes ohJctales y las primeras 1•xpPrtf>1U'1a~ de grnufico -
ción m s tinttva y tamh1en lo mcluye y coi•xtRlt• con él. 11
Seria en-óneo 11nte poner la KTHtífi<.adón lll!il1nliva lahn1t•n · Examen d, "" d,tal/, ch/ cmdado materno
tac1ón , etcétera l o las relaciont's obJetales ( rt-lectón Mn el pecho)
a la cuel:lttón d e la organi1ac1611 rlel yo (t·s decir, al yo del mfante Daré un t"Jemplo para 1lu~trar un ftS~to •u tal df'I cuidado
reforzado por el yo m 11t.(.>rno) La ha&! de la sat111fncc1ón mst1nt1va del 1nf11nu- Mientras el inf11nte t"stA futuonado cun la m.sdrt',
y de las rdacwnes ohjelalcs 1•s la ma mpul ac1ón, el mancJo y l•I lo mrJor e11 quf' t9'la romprt-nda 1111'1 nt>ct"s1dadea dt" la cn,1tun1

cuidadngener ales del infantt- que, cuando todo marcha bien, 1W con la mayor f'xact1tud posible No ob~tantA", con el final de la
dan por sentados con mucha fac1 hdod fu 11ion 'lf' produce un c11mb10, y f'"'<' final no u nece~an,,mt>ntA"
La salud nwnlal del ind1v1d uo (en el 1wnt1do de estar hhre gradual. En cuanto la madrr y t-1 infante quedan 11e-parado1
d e psicosis), o el riesgo de psicosi8 (esquizofrenia ) tie ne n como desde el punto d,- vista df'l 1nf1rntf', !\e observará qut> la muJt-r
base est e cu idado materno, que cua ndo e:3 el correcto a penm; tiende a c1tmbiar df' actitud Todo ocurTt- como 11i ella l'upie-
se advierte y constiluye una prolongación de la provisión ra que el bebé ya ne, es~ra que com_prenda aua ncc("1ududt•11 de
fi s iológica característica d el est ad o prenatal. Esta provis ión un modo casi mÁgfro La madre partt" s her quf' ~u nino ha
a mbiental es tamb1e n una prolongación de la vivac.id.ad tis u- adqutndo una nut"va capac1dAd, la de em1t1 r unu ~cnal pnrn
lar y la salud fun cional que proporciona n un silencioso pero guiarla hacia la ~at1sfacc16n de su11 nece111dadea Podría decirtiie
vitalmente importante r espaldo al yo del mfante. De este que si la madTe conoce tan bien lo quf necet\fta et infanu•, sólo
modo, la esquizofre nia, la psicosis infantil o el riesgo d e puede ser poT magia y no constituye ninguna baae para uno
psicosis a m as edad están rel acionados con una falla de la relaci~n objetal. Ahora llegamos a las palabra. de Freud •g¡
provisión ambient al. Pero esto no significa que los ~rectos [el infante ) probablemente alucina la aat.1sfacc1on de 110111
negativos de esa falla no puedan d es~ribirse en los tér ~os necesidades internas; revela su dl.8placer, cuando hay un
de un a dis tors ión del yo y de_las defen§..a_s c_Qn~r_ii la~_~ngustias incr emento del estímulo y una ausencia de 11at111facc16n,
Qrimitivas -est o es, en los términos d ~l individuo-.S eVér á mediante la descarga motriz del llanto y la a¡itac1on de brawa
que el trabajo de Klein sobre los mecanis mos de defensa de la y piernas, y entonces experimenta la sat1.1facc1ón que ha
escisión, y sobre las proyecciones, intro_yeccion~s, etcé~ra, alucinado". En otras palabras, al final de la fusión cuando el
intenta e xponer los efectos de la f~lla de la provis16n_amb1en- niño se ha sepa r ad o del ambiente, un rasgo unpo~nte l!S que
tal en los términos del individuo. Ese trabajo acerca cfel.os tiene que dar una señal. 1• Este hecho sutil aparece clara-
mecanismos primitivos propo~cíona la clave de sólo una parte mente en la transferencia, en el curso de nuestro trabaJO
a_n alítico. Es muy importante, salvo cuando el paclente ha
sido n evado a una regresión a la más ~mprana mfancia y a
u Véase en mi artículo 4'rans itional Objects and Trans itional 11
Phenomena" ( 1951 ) una discusión más detallada de este aspecto de La ulterior teoría freudiana (1926) de la anguaua como aeral
para el yo.
los procesos del desarrollo. ·

64 65
un estado de fusión , que el analista no conozca las resE_uestas , regresión o fusión con la madre..JLbierr u n rechazo total de la
excepto el} lª me-9ida en que eCp-aciente __j l as clam El m a dre, incluso de la ma áre -;-pa rent&mente b_uena. --
analista recoge las claves y hace las interpret ac1on - ;_ a Vemos por lo tan to que en la infanci? Y en el manejo de los
menudo ocurre-que los pacientes no dan claves, ~ r lo cual y infan tes hay una distinción muy sutil entre la comprensión
sin duda el analista no puede hacer nada. Esta lim(tación de l por la madre de las necesidades del infante basada en la
poder del analista es importante para el paciente. así como lo empatfa y su ulterior comprensión basada en algo del infan te
es el poder del analista, representado por ll!,..in.terpretación o niño pequeño que indica la necesidad Este pasaje les resulta
correcta r~alizadá eri el momento ~port ~m _ o, y bas~da- en las particularmente difícil a las madres debido a que los niños
claves yTa coo_¡:>eración inconscien!_e del E~ iente, quien pro- vacilan entre un estado y otro; en un momento están fus iona-
porciona el material que respalda y justifica la interpretación. dos con sus madres y necesitan empatía, al siguiente están
Por ello es posi"ble-que el analista en formación realice ~ veces separados, y si la madre conoce sus necesidades de antemano
un análisis mejor que los que hará al cab9 de unos _años, es peligrosa, una bruja. Sorprende que a lgunas ma dres que
c~ando sepa más. Después de haber tenido unos cuantos carecen por completo de instrucción se adap ten m uy bien a
pacientes, empezará a resulta_rle ~~diosoE~Dzar CQ!"l 1~ len- esos cambios de s~~ in_~antes e n de~arroíl~ sin tener n ingún
titud de cada paciente, y empeza_rá a ÍOz:!Ilu~rpretac1ones conocimiento de la teoría. Este det alle se re produce en el
no basadas en el material aportado por el ..P..ª-Ciente en esa trabajo psicoañalítico con p!J.cientes fronte.rizos, y en todos los
sesión, sino en su propio conocimie~to ~~umulado, o ~n, s~ ca~os ·en ciertos morñeñtos de gran importancia, cuando la
dependencia en la transferencia es máxima . - --- ··-- -
adhesión momentánea a cie.,:_to grupo _d~ a ~----~~t(! ~s mut1l
para el pacíente. El analista p~ed~ parecer m~y_mt~hgenj.e_y
. - ------
quizás el paciente exprese adm:1,:ac1ón, ~ro en ultim~ msta~c1a
la interpretación correcta es_~ traum~ que el pac1~nte tien~ El cuidado materno satisfactorio, no advertido
que rechazar, porque esa interpr_etac1~n no es la suy?. Se
queja de que el analista intente h1pnotizarl~: de que ahente En esta cuestión del cuidado materno del tipo del sost_én, es
una regresión severa a la depend~ncia, e~puJandolo de nuevo axiomático que cuando todo va bien el infante_nQpuede dar_se
a una fusión, esa vez con el prop10 anahst~. . cuenta de lo que se le está proveyendQ.ni.rle lo que se le e.Yita
Lo mismo puede observarse en ~~~a9-res_d~ mfan~s; la sufrir. Por otra parte, cuando las cosas no marchan bien el
madre de varios hijos empieza a tener un dommiu-"tal de- la infante toma conciencia no del fracaso del cuidado materno
técnica del quehacer mater_:no que tiende -~ ha~ec_todo lo sino de los resultados, sean cua les fueren, de ese fracaSC>, es
correcto en los momentos oportunos, y entonces al 11:1fante gl!e decir q-ue toma -econcieñcia de qué teacc1ona a alguna in tru-
ha comenzado a separarse de ella ~o le resU:_lt~o~b!e }~g!~!- sión. Comor esultado deT éxito del cuidado materno én el
- nt 1 d-e- las cosas buenas que est:i n sucedie'!-9-º· Faltan infan.te se establece una continuidad de ser que constituye la
e l co ro -- . -- - t d l
or completo el gesto creativo, el Tianto,__l~ ro~sta, o o~ os base de la_fuerza_gel yo, mientras que el resultado de cada
pe ueños signos q~es e sup_.2.!!fill sus~it~n l~_que 1~.m?dre fracaso del cuidado mate.!:!!.9_consiste e_I_! que la cont inuidad de
p q la madre se adelanta a satisfacer cada necesTcfad ser se ve inte!}'U!_Ilpida por reacciones a las consecuencias de
hace, p~rql~et'.ante ;stuviera todavía fusiona o con e la, y ella es~ fracaso, con un consiguiente debílí miento del yo. 17 Tales
como s1 e 1n1, - -- d
el infante. De este modo, la madre, por ser una _ma re
con t b erla hace algo peor nue s..a strar. Al infante 17
En los trastornos del carácter, lo que se presenta para la
are ntemen e u , - - _'l,;.'. - d
ap - _.. d · - atérnativas: un estado permanente e atención inmediata es este debilitamiento del yo y los diversos
sólo le queuan os a ·-
66 67
interrupciones constituyen el aniquilamiento y están eviden- preocuparse por los cambios que tienen lugar dentro de ella.
temente asociadas coñ un sufrimiento de calidad e intensidad De diversos modos su propio cuerpo la alienta a interesarse en
psicóticas. En el caso extremo, el infante s lo existe sobre la ella misma.18 La madre desvía hacia el bebé que crece dentro
base de un a continuidad de r eacciones a la instrucción 'i de de ella una parte de su sentido del sel f. Lo importante ~s ~ue
recuperaciones despuésctel:al es feaccíon-es:Esto preseñt a un aquí se origina un estado de cosas que merece la descnpc1ón
gran contraste con la éontinuidad de ser-que es mi concepción y cuya teoría es necesario elaborar .
de la fu erza del yo. -- El analista que satisface las necesidades de_un paciente
que en la transferencia revive esas etapas muy tempranas,
padece cambios similares de orientación, pero el analista, a
C. LOS CAMBIOS DE LA MADRE diferencia de la madre, tiene que tomar conciencia de la
sensibilidad que se desarrolla en él como r espuesta a la
inmadurez y dependencia del paciente. Esto puede pensarse
En este contexto es importante examinar los cambios que como una ampliación de la descripción de ~r~ud1 que ~ al
se producen en las mujeres cuando están por tener un bebé o analista en un estado voluntario de atención.
acaban de tenerlo. Estos cambios son al principio casi fisio- Una descripción detallada de los cambios de orientación de
lógicos, y se inician con el sostén físico del b~bé el} la matriz. una mujer que va a convertirse en madre o acaba de serlo
No obstante, algo faltaría en la descripción si empleáramos la estaría aquí fuera de lugar; en otra parte he hablado de esos
frase "instinto materno". El hecho es que, en la salud, las cambios en un, lenguaje popular o no técnico (Winnicott,
mujeres cambian de orientación respecto de ellas mismas y el 1949a).
mundo; ahora bien, por más profundamente arraigados en la Hay una psicopatología de esos cambios de orientación, y
fisiología que estén tales cambios, la mala oalud mental de la los extremos de anormalidad son la preocupación de quienes
mujer a veces los distorsiona . Es necesario pensar esos c_an:i- estudian la psicología de la locura puerperal;..$ ·n .dudl!_e~i§ten
bios en términos psicológicos, a pesar de que pueden existir muchas variaciones cualitativas í¡ue no c.9nstij:.':!Y_en anor-
factores endocrinológicos susceptibles de modificarse por medio m.i3-lidades. La anormalidad surge del grado de di§t9rsión.
de medicación. En genera1, as madres se identifican ele Ün modo u otro con
No hay duda de que los cambios fisiol ógicos sensibilizan a el bebé que crece dentro de ellas, y así llegan a tener una
la mujer a los más sutiles cambios psicológicosqueseproduceo sensación muy intensa de las necesidades de la criatura. Se
a continuación. tratl!_ de una identificación proyectiva. Esta identificación
Poco después de la concepción, o cuando se conoce su dura un cierto tíemp-~ aespu_él!_ del parto, y a continuación va
posibilidad, la mujer co!11ienza a modificar su orientación, Ya perdiendo gradualmente importancía·.
- En los casos corrientes,. esta especial orientación de la
madre hacia el i~ante va más allá <!_aj_~r~so del parto. La
madre sin...distorsiol)~_e~st~ ~specto está ET~paradá para
intentos del individuo para encararlo; no obstante, sólo una concep- abandonar su identificación con el infante cuandoés-teñece-
ción verdadera de la etiología pem,ite la recomposición d~l aspecto - .. -- -- - -------
defensivo de este síntoma presentado, a partir de su ongen en el
fracaso ambiental. Me he referido a un aspecto específico de esta
cuestión en el diagnóstico de la tendencia anti_social e~~.º el problema
18
Véase una exposición más detallada de este punto en "Primary
básico que está detrás del "síndrome de delincuencia (19). Maternal Preoccupation" (1956).

68 69
sitB se pa r a 1:5c . Es posible proporcion a r un buen cuidado pe r sonalida d se est a blece sobr e la base de rea cciones a la
imcial,-pero no completa r e l proceso por la incapacida d para intruajón a mbienta l.
d ej a r q ue llegu e a s u fin , d e m odo q ue la m a dre t ie nde a segu_ir Todo esto t ie ne s ignifi cación pa ra el analista. Sin duda
fusiona da con s u in fante y a de morar la separ ación de éste pa r a logra r un a visión cla r a de lo q ue sucede en la infancía e~
r espe cto de ella. E n tod o caso, es <l:ifícil pa r a la m a dre sepa- s í, el mejor métod o n o es la observación directa de infantes
rar se de s u infan te a la velocida d con la q ue ~l tnfante necesífa sino el estudio de la tran sfere ncia en el e ncuadre analítico'
s e para rse d e ell a. 19 E s t e tra bajo sobre la d e pe nde ncia infantil deriva del estudi~
1
A mi j u icio, lo im porta n te es que a trav~ ~-ª-u .identifica- de los fenóme nos de la t ra nsfer encia y la contratransfer encia
I
1 ció n con el infa nte la m a dre se a cóm o se siente la cria tura, Y prop ios de l compromiso de l psicoanalista con los casos fron -
1 pue d a proporcion a rle cas i exactame nte lo que -n ecesita e n e l t eri~os. En mi opinión , este comprom iso es una extensión
1 m od o d e sos tén y, e n gen e r ~l, e n la provisión de un a mbie n e. legít im a del ps icoan á lis is; e n ell a la única modificación real es
S in esa ide ntificación , e nt ieñcio ~~ e1.i_~fante no obtien e lo el diagnós t ico d e la e n ferm edad del pacien te , cuya etiología es
q u e n ecesita-a l prínc ipío-, que es_u:ia aq_qptq.ci6r;_!litJ~ us a n terior a l com plejo de Edipo, y e nvue lve u na distorsión en la
necesid ades . Lo prin ci pa l es el sostén físico, que c_ons_ti!l:!yeJa época d e la d e pende ncia absoluta-:-
b ase de todos los a sp ectos- 01á s- compl ejos aél sos té n Y de la Freud pudo descubrir de un nuevo m odo la sexu alidad
provis ión a mbie ntal e n ge ne r al - - - --- - infantil porque la reconstruyó a p a rtir de su t rabajo a n alítico
E s cierto qu e una m aoré pued e ten ~v.ui.hebémuy difei:_ente con pacien tes psicone uróticos. AJ ampli a r s u trab ajo para
d ~ la , que la lleve a.:::_c o~ct ~:r: e rrores d~ cálculo. Quizá s e l a ba r car el t r aq:¡ mie nto del paciente psicót ico fronterizo nos
b e bé sea m á s r á pido o m ás len to q ue la m a dre, etcétera . r esulta pos ible a nosotr os recons truir la dinámica de la
Enton ces puede n producir se momen tos e n l.9s ~e lo que la infancia y de la d e_pend ~n <:_ia infantil, y el cuidado materno
muje r s ie n te como necesida d es d el bebé n ~ ~e_a~ las r eales. qlJ.~ sati.s(a~ _~s_a_<kl>...ern;;l~_nci_~ _::-- -- - --
Pe ro p a rece ser común que las m a dres no éf1s to!"s!9n ~das_por
la m a la salud o la te n sió n a mbi en ~ _Q_el p_í~ ti_el}Qan e n
ge ne ra l a con ocer~coñ bast a nte ~xac tit~d lo qu e O~C~~ita .fillS RESUMEN
infantes, y a d e m ás les gus t a satisfacer esa s necesida des. E s t a
es la -esen cia del cwaa o m a - r n o.
Con "el cuidado que r ecibe de s u m a dre" _cad a infan te está_ (i) Se r ealiza un exam e n d e la i nfancia; esto no es lo m is mo
en co ndiciones d e tener un a exis te ncia ~ r s~n a l, y así em pezar que _~m exa m e n de los m ecanism os men t a les primi t ivos.
a es ta blecer lo que pod ríaaeno m}§!l_ : un--ª- con tu ~ d e (11) ~I rasgo principa l de la in fan cia es la de pe nde n cia ; se
&er". S obr e la b ase de esta conffnuidad de ser_se_desjirro la la con side ra e n los términos del a m bie n te que proporcion a

1 gradua lmen te~ ) e9te~ _cia l he red a doJ1asta con~t!t~f_r al l!]fante


individua l. Si el cuidado m a te rn o no es o s uficientem e nte
bueno, el infante e nrealida d no llega a entrª rJl..n Jft~ xi sten cia,
sosté n .
(iii) Todo es tudio de la infancia d e be d ividirse e n d os
pa rtes:
~ p~ ~o que n o hay cont inuidad de se_!"; ~n_ luga r de_ e o, a (a )el desarrollo d el infa n te facilitado por un cuida do
m a t e rno s uficie nte m e nte bue no; y
(b)el desarrollo del infante dis torsion ado por u.n cui-
1s En un artículo an terior (1948) presenta mos casos clínicos pa ra . da do m a te rno que no es lo suficie n teme n te b ueno.
ilust rar un tipo de problema relacionado con este grupo de ideas. (iv) Se puede d eci r que el yo de l infante es d é bil, pero e n
70 71
I , \¡
1 ' 1
1 '
1
1
realidad es fuerte gracias al yo auxiliar del cuidado materno. 4
1
Cuando el cuidado materno falla, la debilidad del yo del
infante se pone de manifiesto.
(v) En la salud, los procesos que tienen lugar en la madre LA INTEGRACION DEL YO
(y en el padre) generan un estado especial en el cual el EN EL DESARROLLO DEL NIÑO
progenitor se orienta hacia el infante y de este modo está en (1962)
condición de satisfacer su dependencia. Hay una patología de
estos procesos.
(vi) Se llama la atención acerca de los diversos modos como
estas condiciones intrínsecas de lo que aqu í denominamos
ambiente sostenedor20 pueden o no aparecer en la transfe-
rencia si en una etapa ulterior el infante debe entrar en
iinálisis. El término yo puede utilizarse para describir la parte de la
personalidad humana en crecimiento que en condiciones
adecuadas tiende a integrarse en una unidad.
En el cuerpo de un infante anencefálico pueden producirse
hechos funcionales e incluso localizaciones instintivas; esos
hechos podrían denominarse experiencias de la función del
ello si hubiera un cerebro. Podría decirse que, de haber habido
un cerebro normal, se habría producido una organización de
esas funciones, y a esa organización podría habérsele asigna-
do el rótulo de "yo". Pero sin ningún aparato electrónico no
puede haber ninguna experiencia, y por lo tanto ningún yo.
Ahora bien, normalmente el funcionamiento del ello no se
pierde; todos sus aspectos se reúnen y se convierten en
experiencia del yo. De modo que no tiene sentido utilizar la
palabra "ello" para designar fenómenos que no son abarcados,
catalogados, experimentados y finalmente interpretados por
el funcionamiento del yo.
De modo que en las etapas muy tempranas del desarrol1o 1
1

del niño, el funcionamiento del yo debe considerarse un


concepto inseparable del de la existencia del infante como
persona. La vida instintiva que exista al margen del funcio-
namiento del yo puede ignorarse, porque el infante no es
todavía una entidad que tenga experiencias. No hay ningún
20 Sobre el concepto de "sostén" en la asistencia social indi- ello antes del yo. Sólo a partir de esta premisa se justifica el
vidualizada véase Winnicott, Ciare (1954), y la pág. 298 de este estudio del yo.
libro. ·
1 Se verá que el yo se ofrece para su estudio mucho antes de
72 73

Вам также может понравиться