Вы находитесь на странице: 1из 36

UNIVERSIDAD ALAS PERUANAS

FACULTAD DE CIENCIAS EMPRESARIALES


ESCUELA PROFESIONAL DE ADMINISTRACIÓN Y NEGOCIOS
INTERNACIONALES

CURSO: MACROECONOMIA
TRABAJO PRESENTADO POR:

- HUANCA CHIPANA LIZBETH


- MALDONADO NINA STEPHANIE
- MENDIZABAL HUILCA KELLY
- QUISPE PEÑAFIEL MELISA MELANE.

DOCENTE:

Prof.: ECO. CHAVEZ MORALES, JOSE UBERTO.

ILO - PERU

2015
DEDICATORIA:

“Les dedicamos este modelo de


investigación a nuestros padres que
siempre nos han apoyado y a todos
nuestros amigos que nos ayudaron a
realizar este proyecto”

2
AGRADECIMIENTO:

“Nuestra gratitud, principalmente esta


dirigía al Dios Todopoderoso por
habernos dado la existencia, también
a nuestra casa de estudios por
habernos dado la oportunidad de
ingresar a la escuela profesional de
Administración y Negocios
Internacionales, a todas y todos
quienes de una u otra forma han
colocado un granito de arena para el
logro de este trabajo, agradezco de
forma sincera su valiosa
colaboración.”

3
INDICE

I. POLITICA FISCAL ................................................................................... 6

OBJETIVOS FINALES DE LA POLÍTICA FISCAL ............................................. 6

PROCESO DE ACTUACIÓN DE LA POLÍTICA FISCAL ................................... 6

TIPOS DE POLÍTICA FISCAL............................................................................ 7

LAS POSTURAS DE LA POLÍTICA FISCAL...................................................... 8

LOS MÉTODOS DE FINANCIACIÓN ................................................................ 9

PRÉSTAMOS..................................................................................................... 9

RESERVAS FISCALES ..................................................................................... 9

POLÍTICA FISCAL Y EMPLEO .......................................................................... 9

LOS EFECTOS ECONÓMICOS DE LA POLÍTICA FISCAL ............................ 10

CRITICAS A LA POLITICA FISCAL ................................................................. 12

 EFECTO EXPULSIÓN ........................................................................ 12


 PROVOCA DÉFICIT COMERCIAL ..................................................... 12
 RETRASOS ........................................................................................ 12
II. POLITICA MONETARIA Y SU EFECTO EN EL CRECIMIENTO Y
DESARROLLO DE LA ECONOMIA ................................................................. 12

POLÍTICA MONETARIA .................................................................................. 13

OBJETIVOS ÚLTIMOS DE LA POLÍTICA MONETARIA ................................. 14

MECANISMOS................................................................................................. 14

 Variación del tipo de interés ................................................................ 14


 Variación del coeficiente de caja ......................................................... 14
 Compra/venta de deuda publica ......................................................... 15
TIPOS DE POLÍTICA MONETARIA ................................................................. 15

Política monetaria expansiva ..................................................................... 15


Política monetaria restrictiva ...................................................................... 16
III.aplicacion de politicas para la estabilizacion y crecimiento economico …….20

4
IV. EL MODELO MUNDELL – FLEMING ......................................................... 30

LA ESTRUCTURA FINANCIERA QUE SUPONE EL MODELO MUNDELL –


FLEMING. ........................................................................................................ 30

EL MODELO MUNDELL - FLEMING CON TIPO DE CAMBIO FIJO. .............. 32

1.- EL MERCADO DE BIENES .................................................................. 32


 Equilibrio en el mercado de bienes: La curva IS. ................................ 33
 Equilibrio en el mercado monetario: La curva LM. .............................. 34
2. LA POLÍTICA FISCAL, LA POLÍTICA CAMBIARIA Y EL CONTEXTO
INTERNACIONAL. .................................................................................... 35
3. EXTENSIÓN DEL MODELO: CONTROL A LA SALIDA DE CAPITALES.
36

5
 POLITICA FISCAL
¿Qué es la política fiscal?

La política fiscal es el uso del gasto gubernamental y la recaudación de impuestos para


influenciar en la economía.

La política fiscal puede ser contrastada con el otro tipo principal de política
macroeconómica, la política monetaria, que intenta estabilizar la economía mediante el
control de los tipos de interés y la oferta monetaria. Los dos principales instrumentos de
la política fiscal son los gastos e impuestos del gobierno. Los cambios en el nivel y la
composición de los impuestos y el gasto público pueden tener un impacto en las
siguientes variables de la economía:

 La demanda agregada y el nivel de actividad económica;


 El patrón de asignación de recursos;
 La distribución del ingreso.

La política fiscal se refiere al uso del presupuesto del gobierno para influir en el primero
de ellos: la actividad económica.

OBJETIVOS FINALES DE LA POLÍTICA FISCAL


Como se ha expuesto anteriormente, los objetivos principales de toda política fiscal son:

 Acelerar el crecimiento económico.


 Plena ocupación de todos los recursos productivos de la sociedad, tanto humanos,
como materiales y capitales.
 Plena estabilidad de los precios, entendida como los índices generales de precios
para que no sufran elevaciones o disminuciones importantes.

 Política fiscal expansiva: Se presenta cuando se toman medidas que generen


aumento en el gasto público o reducción de los impuestos
 Política fiscal contractiva: Se presenta cuando se toman decisiones que buscan
un gasto público reducido, aumento de impuestos, o una combinación de ambos.

PROCESO DE ACTUACIÓN DE LA POLÍTICA FISCAL


El proceso se resume en este gráfico, que marca una inversión fija y unos impuestos
proporcionales a la producción:
6
Leyenda:

 T: tributos (impuestos, tasas,


contribuciones especiales,etc), dinero
que se recauda los ciudadanos

 G: gasto público, dinero que gasta


el Estado para obras, etc.

 Eje de ordenadas (vertical): mide dinero


(recibido o gastado)

 Eje de abscisas (horizontal): producto nacional (PNB); producción

 P1: equilibrio fiscal; T=G

 Zona en rojo, P2: zona de déficit, porque el gasto es mayor que los ingresos

 Zona en verde, P3: zona de superávit, porque se ingresan más de lo que se


gasta, mediante los impuestos

Hay que aclarar que el déficit (déficit fiscal, ya que se trata de un gobierno) no es
necesariamente algo malo que hay que evitar. Los partidarios de la política fiscal creen
que, en vez de intentar estar en el punto de equilibrio (P1 en la gráfica), va bien aumentar
el gasto público para incentivar la economía; por tanto G>T y hay déficit.

TIPOS DE POLÍTICA FISCAL


1. Política fiscal expansiva: cuando el objetivo es estimular la demanda
agregada, especialmente cuando la economía está atravesando un período de
recesión y necesita un impulso para expandirse. Como resultado se tiende
al déficit o incluso puede provocar inflación.

 Política fiscal restrictiva: cuando el objetivo es frenar la demanda agregada,


por ejemplo cuando la economía está en un período de excesiva expansión y
tiene necesidad de frenarse por la excesiva inflación que está creando. Como
resultado se tiende al superávit.

Política fiscal expansiva

Los mecanismos a usar son:

 Aumentar el gasto público, para aumentar la producción y reducir el desempleo.

7
 Bajar los impuestos, para aumentar la renta disponible de las personas físicas,
lo que provocará un mayor consumo y una mayor inversión de las empresas, en
conclusión, un desplazamiento de la demanda agregada en sentido expansivo.
De esta forma, al haber mayor gasto público, y menores impuestos, el
presupuesto del Estado, genera el déficit. Después se puede decir que favorece
el gasto fiscal en el impuesto presupuestario.

Política fiscal contractiva

Es la que hace disminuir la demanda agregada, a fin de generar un exceso de oferta


agregada de bienes, lo que finalmente hará reducir el nivel de ingreso.

Política fiscal restrictiva Los mecanismos son los contrarios que en la expansiva:

 Reducir el gasto público, para bajar la demanda agregada y por tanto la


producción.

 Subir los impuestos, para que los ciudadanos tengan una renta menor y en
consecuencia disminuyan su consumo y así la demanda agregada se desplaza
hacia la izquierda.

De esta forma, al disminuir el gasto público, y aumentar los impuestos, el presupuesto


del Estado, tiende a generar un superávit o disminuir el déficit.

LAS POSTURAS DE LA POLÍTICA FISCAL


Las tres posturas posibles de la política fiscal es neutral, expansiva y contractiva. La
más simple definición de estas posturas son las siguientes:

Una postura neutral de la política fiscal implica una economía equilibrada. Esto se
traduce en un ingreso fiscal general. El gasto del gobierno está totalmente financiado
por los ingresos fiscales y en general el resultado del presupuesto tiene un efecto neutro
en el nivel de actividad económica.

Una orientación expansiva de la política fiscal consiste en un gasto gubernamental


superior a los ingresos fiscales.

Una política fiscal contractiva ocurre cuando el gasto público es menor que los ingresos
fiscales.

Sin embargo, estas definiciones pueden ser engañosas, ya que, incluso cuando no hay
cambios en el gasto o las leyes fiscales, las fluctuaciones cíclicas de la economía
causan fluctuaciones cíclicas de los ingresos fiscales y de algunos tipos de gasto
8
público, alterando la situación de déficit, los cuales no se consideran cambios en la
política fiscal. Por lo tanto, a efectos de las definiciones anteriores, "el gasto público" y
"los ingresos fiscales" normalmente se sustituye por "el gasto público ajustado por el
ciclo" y "los ingresos fiscales ajustados cíclicamente". Así, por ejemplo, un presupuesto
público equilibrado a lo largo de un ciclo económico se considera que representa una
postura neutral en la política fiscal.

LOS MÉTODOS DE FINANCIACIÓN


Los gobiernos gastan el dinero con amplia variedad de propósitos, desde fuerzas
armadas y la policía a servicios como educación y salud, así como pagos prestaciones
sociales, obras públicas, y un largo etcétera. Este gasto puede ser financiado de
maneras diferentes:

 Impuestos
 Señoreaje (beneficio obtenido de impresión de dinero por los Bancos Centrales
u otros organismos emisores).
 El préstamo de dinero de la población o al extranjero
 Consumo de las reservas fiscales.
 Venta de activos fijos (por ejemplo, tierra).

Todos ellos, salvo los impuestos son las formas de financiamiento del déficit fiscal.

PRÉSTAMOS
Un déficit fiscal es a menudo financiado por la emisión de bonos, como letras del tesoro.
Estos ofrecen intereses al inversor, ya sea por un tiempo determinado o por tiempo
indefinido. Si los intereses y amortizaciones de capital son muy grandes, un país puede
pagar su deuda, por lo general a los acreedores extranjeros.

RESERVAS FISCALES
Un superávit fiscal se suele guardar para su uso futuro como reservas, y puede ser
invertido en instrumentos financieros locales (misma moneda) hasta que ese dinero se
necesite. Cuando los ingresos de los impuestos u otras fuentes sufran caídas, por
ejemplo durante una recesión económica, las reservas permiten continuar al mismo
ritmo, sin incurrir en deuda adicional

POLÍTICA FISCAL Y EMPLEO


La forma en que la política fiscal afecta al empleo es un tema complejo, por lo que es
necesario sopesar cuidadosamente los efectos de incentivo y desincentivo que conlleva
la intervención del sector público. Por ejemplo, un sistema de prestaciones por
9
desempleo bien diseñado no solo brinda una importante red de protección a la
población, sino que, además, permite a los trabajadores dedicar más tiempo a la
búsqueda del empleo más productivo. Sin embargo puede al mismo tiempo, prolongar
la duración del desempleo, lo que tendría efectos secundarios sobre el potencial de
producción de la economía, porque los trabajadores que se encuentran en una situación
de desempleo de larga duración experimentan una depreciación de su capital humano.

Las posibles desventajas de las prestaciones sociales se observan con más claridad en
sus efectos sobre la oferta de factor trabajo. Con frecuencia se menciona el pago
incondicional o ilimitado de prestaciones por desempleo como uno de los principales
factores que desincentivan la búsqueda de empleo. Este tipo de prestaciones puede,
asimismo, reducir las presiones para reformar un mercado de trabajo ineficiente con
altas tasas de paro porque los desempleados disfrutan de esos beneficios. También los
sistemas públicos de pensiones tienen efectos significativos sobre la oferta de
trabajadores. La escasa penalización de la jubilación anticipada, o incluso su promoción
activa, han reducido dicha oferta. Por otra parte, la perspectiva de jubilación anticipada
constituye un desincentivo para que los trabajadores mantengan sus conocimientos
profesionales y participen en un proceso de aprendizaje continuo. Además, los
incentivos a la jubilación anticipada facilitan la eliminación de mano de obra incluso en
circunstancias en que el despido es muy difícil. Como resultado, las empresas que
necesiten reducir su plantilla la recortarían en los segmentos de mayor edad, dándose
el caso de que estos trabajadores pueden ser precisamente los que más experiencia
tengan y no los menos productivos.

Las políticas orientadas al mercado de trabajo, si se diseñan y ponen en práctica


adecuadamente, pueden estimular la oferta y la demanda de factor trabajo y, por
consiguiente, la tasa de ocupación. Los programas de formación pueden ayudar a
mantener y mejorar los conocimientos profesionales, reduciendo los desajustes entre
oferta y demanda y el deterioro del capital humano entre los desempleados de larga
duración. Otro desafío que se plantea es la reintegración de los grupos difíciles de
emplear, como los trabajadores poco cualificados, los parados de larga duración o los
trabajadores de más edad.

LOS EFECTOS ECONÓMICOS DE LA POLÍTICA FISCAL


Los gobiernos utilizan la política fiscal para influir en el nivel de demanda agregada en
la economía, en un esfuerzo para lograr los objetivos económicos de estabilidad de
precios, empleo y crecimiento económico. La teoría de economía keynesiana sugiere
que el aumento el gasto público y la disminución de impuestos son las mejores maneras

10
de estimular la demanda agregada. Esto puede ser usado en tiempos de recesión o de
baja actividad económica como una herramienta esencial para construir el marco para
un fuerte crecimiento económico. En teoría, el déficit fiscal resultante sería pagado por
el crecimiento económico que le sigue a la recesión.

Los gobiernos pueden utilizar un excedente presupuestario para hacer dos cosas:
reducir el ritmo de fuerte crecimiento económico, y para estabilizar los precios cuando
la inflación es demasiado alta. La teoría keynesiana postula que la eliminación de los
gastos reduce los niveles de la demanda agregada de la economía, por lo que se
estabilizan los precios y se mantiene la inflación.

Los economistas debaten la eficacia del estímulo fiscal como herramienta de estímulo
de la actividad económica. El argumento se centra mayormente en el desplazamiento,
un fenómeno donde el endeudamiento del gobierno conduce a mayores tipos de interés
que contrarrestn el impulso derivado del aumento del gasto público. Cuando el gobierno
tiene un déficit presupuestario, los fondos para el gasto gubernamental provienen del
endeudamiento público (finaciado a través de la emisión de bonos del gobierno),
préstamos en el extranjero, o la monetización de la deuda. Cuando los gobiernos
financian su déficit con la emisión de bonos, las tipos de interés pueden aumentar en
todo el mercado, ya que los préstamos del gobierno crea una mayor demanda de crédito
en los mercados financieros. Esto provoca una menor demanda agregada de bienes y
servicios, en contra del objetivo de un estímulo fiscal. Los economistas neoclásicos
generalmente hacen énfasis en el desplazamiento, mientras que los keynesianos
argumentan que la política de estímulo fiscal aún puede ser eficaz.

En la visión clásica, las políticas de estímulo fiscal también disminuyen las exportaciones
netas, lo que tiene un efecto atenuante sobre la producción nacional y los ingresos.

Otros posibles problemas con los estímulos fiscales incluyen el tiempo que transcurre
entre la aplicación de la política y los efectos detectables en la economía, y los efectos
sobre inflación impulsada por el aumento de la demanda. En teoría, el estímulo fiscal no
causa la inflación cuando se utilizan recursos que de otro modo no hubiesen sido
utilizados. Por ejemplo, si un estímulo fiscal emplea a un trabajador que de otra manera
hubiese quedado desempleado, no hay un efecto inflacionario, sin embargo, si el
estímulo emplea a un trabajador que hubiese tenido de todas formas un un empleo, el
estímulo aumenta la demanda laboral, mientras que la oferta de trabajo se mantiene fija,
lo que conduce a la inflación en los salarios y, por lo tanto, la inflación en los precios.

11
CRITICAS A LA POLITICA FISCAL
La política fiscal dejó de ser efectiva en los años 70, porque no pudo resolver la situación
conocida ahora como estanflación, que consiste en la coexistencia simultánea de una
fuerte inflación y a la vez una alta tasa de desempleo, motivada por la crisis del petróleo
de 1973.

Otras críticas que recibe la política fiscal son:

 EFECTO EXPULSIÓN

En caso de recesión se aplica una política expansiva: se aumenta el gasto público o se


bajan los impuestos. Para poder financiarse, el Estado necesita dinero, y lo encuentra
en el mercado privado: vendiendo títulos de deuda pública. Al vender tantos, el precio
de los títulos baja, y la gente compra más ya que parecen rentables. Al final, la gente
está invirtiendo mucho en el Estado, pero no en el mercado privado, que era lo que se
pretendía.

En resumen, puede bajar la demanda de inversión cuando lo que se esperaba era que
aumentara.

 PROVOCA DÉFICIT COMERCIAL

En el caso anterior (se emite Deuda pública para financiarse), si los títulos los compran
los extranjeros, la moneda propia subirá de valor. Eso hará que bajen las exportaciones
(porque a los de fuera les sale más caro comprar), y no es bueno que pase eso en una
fase de recesión.

 RETRASOS

Para que funcione bien la política fiscal, hay que tener muy en cuenta el ciclo económico,
ya que si se aplica una política restrictiva durante un período de recesión, será un
fracaso. Este tipo de recomendaciones son de carácter heterodoxo, y se basan en la
idea de que aplicar políticas restrictivas en la parte descendente del ciclo económico, no
hará más que acentuarlo.

II. POLITICA MONETARIA Y SU EFECTO EN EL CRECIMIENTO Y


DESARROLLO DE LA ECONOMIA
El objetivo principal del Gobierno cuando trata de actuar sobre la economía es mantener
una tasa de crecimiento estable en el largo plazo.

12
Históricamente se ha demostrado que lo más eficaz para una economía es mantener un
ritmo de crecimiento estable, sostenible en el tiempo, sin que provoque fuertes
desajustes.

¿No es peor que la economía no crezca a que lo haga de forma descontrolada?


Tan malo resulta que la economía crezca poco, a que lo haga de una manera
descontrolada, ya que esto origina serios desajustes y ocasione importantes
perturbaciones a lo largo del tiempo (un problema muy conocido por todos es
la inflación, si la economía no crece a un ritmo estable en primer lugar se origina la
inflación que puede llegar a provocar una recesión).
Las medidas que se puede adoptar, como ya hemos visto, son diversas: por el lado de
la demanda (es decir, aquellas dirigidas a tratar de desplazar la curva de demanda
agregada) podemos señalar la política fiscal y la política monetaria.

Se ha ido demostrando que lo más eficaz para una economía es mantener un ritmo de
crecimiento estable, sostenido en el tiempo, y no un ritmo característico de fuertes
desajustes y desequilibrios.
El gobierno central debe utilizar una política monetaria o una política fiscal.

POLÍTICA MONETARIA
La política monetaria o política financiera es una rama de la política económica que usa
la cantidad de dinero como variable para controlar y mantener la estabilidad económica.
La política monetaria comprende las decisiones de las autoridades monetarias referidas
al mercado de dinero, que modifican la cantidad de dinero o el tipo de interés. Cuando
se aplica para aumentar la cantidad de dinero, se le denomina política
monetaria expansiva, y cuando se aplica para reducirla, política monetaria restrictiva.

Los economistas ortodoxos, en su mayor parte, consideran que la política monetaria es


relativamente ineficaz. Según esta corriente de pensamiento, la economía funciona
normalmente en las cercanías del pleno empleo (una condición claramente no aplicable
a la mayor parte de los países en desarrollo), de modo que todo aumento en la demanda
agregada no puede aumentar la producción, sino que solamente puede tirar de los
precios. Por su parte, los keynesianos estiman que la política monetaria es una
herramienta importante en la gestión macroeconómica.

La política monetaria es el proceso por el cual el gobierno, el banco central o la


autoridad monetaria de un país controlan.

 La oferta monetaria.- Cantidad de dinero en circulación

13
 Los tipos de interés o coste de dinero.- Tipo de interés que fija el banco central
o autoridad monetaria a muy corto plazo

OBJETIVOS ÚLTIMOS DE LA POLÍTICA MONETARIA


Es común para las autoridades monetarias declarar cuatro objetivos básicos de la
política monetaria, que pueden ser enunciados de diferentes formas:

 Estabilidad del valor del dinero (contención de los precios, prevención de


la inflación);
 Tasas más elevada de crecimiento económico;
 Plena ocupación o pleno empleo (mayor nivel de empleo posible);
 Evitar desequilibrios permanentes en la balanza de pagos y mantenimiento de un
tipo de cambio estable y protección de la posición de reservas internacionales.

MECANISMOS
El banco central puede modificar la cantidad de dinero directamente, pero hay otras
formas de cambiar la cantidad de dinero en circulación, estas son:

 Variación del tipo de interés


· Indica cuánto hay que pagar por el dinero que nos presta un banco.
Por eso, si el tipo de interés es muy alto, no todos los inversores podrán
permitírselo, y no pedirán muchos préstamos. El dinero se quedará en el banco.
En cambio, una bajada de los tipos de interés incentiva la inversión y la actividad
económica, ya que los empresarios dispondrán fácilmente de dinero para invertirlo
en sus proyectos.

Por tanto, los cambios en la tasa de interés están relacionados directamente con
la cantidad de dinero que circula en el mercado.

 Variación del coeficiente de caja


El coeficiente de caja (o encaje bancario o coeficiente legal de reservas) indica
qué porcentaje del dinero de un banco ha de mantener en reservas líquidas, o
sea, guardado sin poder usarlo para dejarlo prestado. Se hace para evitar riesgos.
Si el banco central decide reducir este coeficiente (guardar menos dinero en el
banco y prestar más), eso incentiva a la economía y aumenta la cantidad de dinero
en circulación, ya que se pueden conceder aún más préstamos. Si el coeficiente

14
aumenta, el banco se reserva más dinero, y no puede conceder tantos préstamos.
La cantidad de dinero baja.
De esta forma, el banco puede aportar o quitar dinero del mercado sin tener que
fabricar más moneda.

 Compra/venta de deuda publica


La deuda pública consiste en títulos emitidos por el Estado, y pueden
ser letras, bonos y obligaciones. Básicamente, son papeles que se le compran
por un precio, y que al cabo de un tiempo nos comprarán por otro,
probablemente mayor.
Si el Estado pone de golpe a la venta muchos títulos, y la gente los compra, el
Estado está recibiendo dinero de la gente, y por tanto la gente dispone de menos
dinero. De esta forma está reduciendo la cantidad de dinero disponible en el
mercado. En cambio, si el Estado decide comprar títulos (recibir los papeles y
dar dinero a cambio), está inyectando dinero en el mercado, ya que la gente
dispondrá de dinero que antes estaba guardado.
Éste es el objetivo de la deuda pública, pero, como su nombre indica, el dinero
retenido debe ser devuelto en el futuro.

TIPOS DE POLÍTICA MONETARIA


Tanto las políticas monetarias contractivas y expansivas son herramientas disponibles
para un banco central de un país, cuyo objetivo es reducir o aumentar la oferta de dinero
y, finalmente, el gasto en bienes y servicios.

Política monetaria expansiva


Si hay una situación en la cual la economía se encuentra en recesión o enfrentamos
peligros de deflación lo que podría ejecutar el banco central a través de los instrumentos
de política monetaria será una política monetaria expansiva.
Es una política en la cual se reducen los tipos de interés y se aumentan los flujos
monetarios o los flujos de dinero hacia la economía real.

Si la economía se está desacelerando, la política monetaria expansiva se utilizara para


prevenir las consecuencias adversas de la desaleresacion de la economía y el peor
efecto de una desaleresacion económica será la inflación y la inflación será la
consecuencia de la desaleresacion.

15
Cuando en el mercado hay poco dinero en circulación, se puede aplicar una política
monetaria expansiva para aumentar la cantidad de dinero. Ésta consistiría en usar
alguno de los siguientes mecanismos:
 Reducir la tasa de interés, para hacer más atractivos los préstamos bancarios.
 Reducir el coeficiente de caja, para poder prestar más dinero.
 Comprar deuda pública, para aportar dinero al mercado.

La política monetaria expansiva tiene como objetivo aumentar la oferta de dinero y por
lo tanto estimular la actividad económica.

Política monetaria restrictiva


Cuando el banco central que es la autoridad monetaria detecta o calcula que la
economía se está recalentando, el banco central lo que hace es utilizar una política
monetaria restrictiva.
La política monetaria restrictiva es aquella en la cual se aumenten los tipos de interés y
se reduzca la oferta monetaria.
Lo que se busca a través de una política monetaria restrictiva será que subiendo los
tipos de interés y reduciendo el flujo de dinero a la economía, se enfríe la economía, es
decir el crecimiento económico se desacelere.
Si el banco central detecta que la economía está creciendo demasiado rápido y que esto
es consecuencia de la especulación de los mercados financieros ellos pueden utilizar
las herramientas de la política monetaria para enfriar la economía subiendo los tipos de
interés o reduciendo los flujos monetarios.

Cuando en el mercado hay mucho dinero en circulación, interesa reducir la cantidad de


dinero, y para ello se puede aplicar una política monetaria restrictiva. Consiste en lo
contrario que la expansiva:
 Aumentar la tasa de interés, para que pedir un préstamo sea más caro.
 Aumentar el coeficiente de caja, para dejar más dinero en el banco y menos en
circulación.
 Vender deuda pública, para quitar dinero del mercado cambiándolo por títulos.

El objetivo de una política restrictiva es reducir la oferta de dinero en la economía,


frenando así la inflación

16
Políticas contractivas se aplican cuando es necesario reducir la oferta de dinero y reducir
el gasto en un país. Cuando el gasto y disponibilidad de dinero son altos, los precios
empiezan a subir, lo que se conoce como inflación. Un banco nacional puede reducir la
oferta de dinero, elevando la tasa de interés básica, lo que hace que los préstamos sean
más costosos. También puede decirle a los bancos que mantengan más dinero en las
reservas obligatorias, lo que reduce la cantidad que los bancos pueden prestar a los
clientes.

¿Cómo actúa el gobierno de un país sobre la economía?

Si la economía está creciendo a un ritmo excesivamente elevado, con riesgo de que se


dispare la inflación, el Gobierno adoptará políticas fiscales o monetarias restrictivas:

 Aumento de los impuestos


 Reducción del gasto público
 Reducción de la base monetaria
Si la economía está estancada, el Gobierno tratará de relanzarla con políticas fiscales o
monetarias expansivas:

 Disminución de los impuestos


 Aumento del gasto público
 Aumento de la base monetaria

¿Cómo afecta la política monetaria a la economía?


El Estado utiliza las políticas monetarias y fiscales para solucionar conflictos puntuales
que pueden surgir a lo largo del ciclo económico de un país. Por esta razón, el Estado
interviene en la economía mediante estas políticas.
Cuando el Estado decide actuar sobre la economía del país fija como objetivo
principal el mantener una tasa de crecimiento estable en el largo plazo.
Las políticas económicas son una parte fundamental de la gestión del Estado; por eso,
todos los gobiernos deben decidir una, que finalmente repercute sobre la vida de
los ciudadanos del país. Las decisiones tomadas afectan a diversas variables tales
como el desempleo, los préstamos, la inflación y el consumo.

Cuando el Banco de la República modifica la tasa de interés de las operaciones REPO


(conocida también como la tasa de intervención) pone en marcha una serie de fuerzas
que con cierto rezago afectan las tasas de interés de mercado, la tasa de cambio y las
expectativas de inflación, variables que a su turno influyen sobre:
 El costo del crédito
17
 Las decisiones de gasto, producción y empleo de los agentes.
 El precio de los activos
 La tasa de inflación.

Este proceso a través del cual las decisiones de política monetaria afectan las distintas
variables económicas recibe el nombre de Mecanismo de Transmisión, el cual
finalmente debe conducir a un cierto resultado de crecimiento e inflación. Las
autoridades monetarias vigilan la operación de este mecanismo para que actúe con la
efectividad y dirección deseadas, y se mantienen atentas a introducir los cambios
necesarios, de manera que se logren alcanzar las metas propuestas.
Las decisiones sobre las políticas monetarias afectan al desarrollo de las economías de
una forma general y afecta al crecimiento de las mismas a través de una larga cadena
de causas y efectos que vinculan de forma directa a las decisiones de política monetaria
y a los niveles de los precios.

Partiendo del importante papel del Banco Central por ser el único emisor de billetes y
proveedor de reservas bancarias, la cadena de causas y efectos comienza con la
distribución de liquidez y el control de los tipos de interés por parte del banco central. La
cadena seguiría, sigue los siguientes pasos:

1.- En primer lugar se produce la variación de los tipos de interés oficiales por parte del
Banco Central, esto afecta a los tipos de interés bancarios y de mercado ya que, los
bancos demandan dinero para cumplir las nuevas exigencias de reservas bancarias que
por consecuencia de los cambios de tipo de interés oficiales también se han visto
afectados. Además de forma indirecta, como he indicado, los tipos del mercado se ven
afectados pues los bancos trasladan su afectación a los clientes, modificando tanto la
remuneración de los depósitos como el coste de los créditos.

Todos estos efectos, impactan sobre las expectativas de futuro de la política monetaria,
afectando con ello a los tipos de interés a largo plazo y con ello a la inflación.

2.- Al afectar a la inflación los precios de los activos financieros y sus rendimientos
sufren variaciones en sus expectativas (acciones, deuda pública, deuda privada). Y
estas variaciones en el precio de los activos afectan, a su vez, a las decisiones de
ahorro, gasto e inversión de los hogares y empresas y, en última instancia, a la demanda
de bienes y servicios que se producen en la economía y por ende en sus agentes
económicos. De manera que, unos tipos de interés bajos favorecen, el consumo ya que

18
la rentabilidad esperada para los ahorros es menor, y también favorecen a la inversión
dado que el rendimiento puede ser superior al coste efectivo de la inversión realizada.

3.-Por consiguiente, la oferta de crédito también se ve afectada, pues el coste del crédito
y su disponibilidad son dos importantes factores que determinan la inversión
empresarial, las decisiones del gasto de consumo de los hogares y, en consecuencia,
las condiciones generales de la demanda.

4.-En consecuencia, los tipos de cambio de la moneda se ven afectados, pues los tipos
de cambios a través de los flujos de capitales internacionales sufren variaciones y se
pueden apreciar o depreciar el valor de la moneda. El grado de impacto dependerá del
grado de apertura de la economía al comercio internacional, ya que el tipo de cambio
incide tanto sobre el precio de los bienes importados como sobre la competitividad de
los precios de los bienes nacionales, lo que puede afectar a los precios de los bienes
finales y a la demanda externa.

5.- Siguiendo, esto provoca incidencias en la fijación de salarios y de los precios, pues
si la política monetaria logra su objetivo, la estabilidad de precios, las expectativas de
inflación se mantendrán bajas y la fijación de los salarios y los precios se mantendrán
en consonancia.

Como consecuencia de toda esta cadena de sucesos y efectos, podemos concluir que
las medidas de política monetaria tardan bastante en influir en los precios y que la
intensidad y grado en el que inciden varían según el estado de la economía dónde nos
encontramos la dificultad así del cálculo del impacto de las medida de políticas
económicas en las diferentes economías.

Por todo ello, el gobierno central utiliza estas políticas con el objetivo de obtener
determinados resultados en la economía. De ahí que exista una estrecha relación
entre ambas políticas. Podemos concluir afirmando que son dos de los principales
instrumentos a través de los cuales el gobierno busca generar un impacto sobre la
economía.

19
III. Aplicación de políticas para la estabilización y crecimiento económico

Objetivos macroeconómicos

Comenzamos nuestra exposición centrándonos en los objetivos de la formulación de


políticas macroeconómicas. Al nivel más general, el objetivo de la política económica
consiste en maximizar el bienestar social duradero de manera equitativa y sostenible.
Gran parte del debate sobre política económica se ha centrado en las variables
intermedias, tales como estabilidad de los precios o la balanza de pagos. Las variables
intermedias, sin embargo, no son importantes por sí mismas, sino que su importancia
deriva en gran parte de su papel como posibles indicadores del funcionamiento
económico en términos de variables verdaderamente significativas, tales como el
crecimiento, el desarrollo y la equidad. Por ejemplo, la estabilidad de los precios debería
entenderse como una herramienta para lograr objetivos duraderos importantes, entre
otros una mayor eficiencia y un crecimiento a largo plazo. El centro de atención en la
formulación de políticas macroeconómicas debería ser la macroeconomía real y la
utilización de la capacidad productiva –el empleo del capital y el trabajo a su más alto
nivel potencial— y las mejoras de dicha productividad.

 Estabilización y crecimiento

Lo que realmente preocupa al público es la estabilidad y el crecimiento de su renta real.


El porqué de la importancia del crecimiento debería ser obvio: incluso pequeños
cambios en el índice de crecimiento, por ejemplo, pasar de 2,5% a 3%, producen en un
cierto plazo crecimientos perceptibles a causa del efecto acumulativo. Con una tasa de
crecimiento de 2,5% la renta se duplica cada 28 años, con una tasa de crecimiento de
3% se duplica cada 23 años.

Es la estabilidad global de la producción y la economía real, y no solamente la


estabilidad de los precios, lo que tienen en cuenta las empresas a la hora de tomar
decisiones de inversión. Una alta inestabilidad genera un ambiente macroeconómico
hostil a escala nacional, lo que parece ser un factor crucial en la explicación de bajos
índices de formación de capital: las empresas tienen menos incentivos para invertir y el
crecimiento es más bajo. Del mismo modo, las políticas económicas que favorecen una
utilización más completa de los recursos actuales pueden también llevar a más altas
rentas en el futuro. Esto implica que la relación entre crecimiento y estabilidad puede
ser menor de lo que la economía ortodoxa sugiere.

Asuntos como la estabilización y el crecimiento no pueden separarse. Generalmente, la


aplicación de una política de estabilización a corto plazo tiene también efectos a largo
plazo. Si se reduce hoy la producción económica en un 10%, el mejor cálculo posible es
que el ritmo de la producción dentro de diez años sea un 10% más bajo de lo que habría
sido en otras condiciones. Eso significa que los descensos tienen efectos duraderos.
Incluso Malasia y la República de Corea, dos países que los economistas consideran
que están recuperándose satisfactoriamente de la crisis asiática, están registrando un
ritmo inferior en unos 10 puntos a la tendencia establecida en las décadas anteriores a
la crisis.

Hay varios vínculos entre la estabilización (y cómo se lleva a cabo) y el crecimiento.


20
La confianza en medidas alternativas destinadas a estabilizar la economía (como la de
recurrir al gasto público, como hicieron Malasia y la República de Corea durante la crisis
asiática, o la regulación de las entradas de capital decretada por Chile y Malasia durante
los períodos de auge de los años 90) puede tener menos efectos nocivos sobre el
crecimiento a largo plazo que el recurso exclusivo a la modificación de los tipos de
interés. Centrarse exclusiva o incluso excesivamente en la estabilidad de los precios
puede tener un impacto negativo en el crecimiento.

Gran parte de la importancia que se da en la actualidad a la lucha contra la inflación en


los países en desarrollo proviene de los antecedentes históricos, es decir de la
hiperinflación registrada en varios países latinoamericanos en los años 80. Hubo
también episodios de muy elevada inflación en algunas economías en transición de
Europa central y oriental a principios de los años 90. Pero los países asiáticos raramente
han experimentado la hiperinflación, y las experiencias africanas han sido muy
diferentes de las experiencias latinoamericanas. Se está de acuerdo, en general, en que
la hiperinflación genera altos costos económicos y en que derrotarla debería ser una
prioridad absoluta. La hiperinflación, e incluso una inflación alta e incierta, crea una
enorme incertidumbre sobre los cambios en los precios relativos, lo que pueden resultar
devastador para la calidad de la información de los precios y para la eficiencia en la
utilización de los recursos. El comportamiento se distorsiona a medida que empresas y
particulares hacen lo posible por gastar rápidamente el dinero, antes de que disminuya
su valor. En algunos países, se han gastado cantidades enormes para alcanzar
acuerdos institucionales destinados a proteger a los particulares contra los efectos de la
inflación. Con unos niveles de inflación más moderados (pongamos, entre el 15% y el
20%), estos costos hubieran sido mucho más bajos.

 Inflación

Aunque la corriente económica dominante se haya centrado en la estabilidad de los


precios como uno de los objetivos principales de sus políticas, hay una considerable
confusión en cuanto a su función. Se dice que una alta inflación indica que el gobierno
(las autoridades fiscales y monetarias) no está haciendo bien su trabajo. La inflación
sería pues una variable no preocupante por sí misma, sino más bien un indicador de un
deficiente cumplimiento económico. Sin embargo, este análisis plantea dos problemas.
En primer lugar, muchos han empezado a considerar el indicador como el objetivo
mismo de las políticas; en segundo lugar, los vínculos entre la inflación y las variables
reales pueden ser más débiles de lo que generalmente se piensa.

Todas las políticas económicas implican algún tipo de equilibrio; de lo que aquí se trata
es de saber si los beneficios que produce una mayor reducción de la inflación
compensan sus costos. Desde 1991, la mayoría de los países desarrollados y los países
en desarrollo han experimentado una inflación baja o moderada, y muchos de ellos
tuvieron una tasa de inflación relativamente baja. Cuando la inflación es baja o
moderada, los esfuerzos por reducirla aún más pueden rendir unos beneficios bajos y
unos costos cada vez mayores, especialmente cuando la política tradicional de
limitación de la masa monetaria sea el único instrumento utilizado para conseguir el

21
objetivo. Como indicaremos más abajo, esto puede tener un efecto perjudicial a corto
plazo sobre el empleo y a largo plazo sobre el crecimiento.

Gran parte de la importancia que se da en la actualidad a la lucha contra la inflación en


los países en desarrollo proviene de los antecedentes históricos, es decir de la
hiperinflación registrada en varios países latinoamericanos en los años 80. Hubo
también episodios de muy elevada inflación en algunas economías en transición de
Europa central y oriental a principios de los años 90. Pero los países asiáticos raramente
han experimentado la hiperinflación, y las experiencias africanas han sido
muy diferentes de las experiencias latinoamericanas.

Se está de acuerdo, en general, en que la hiperinflación genera altos costos económicos


y en que derrotarla debería ser una prioridad absoluta. La hiperinflación, e incluso una
inflación alta e incierta, crea una enorme incertidumbre sobre los cambios en los precios
relativos, lo que pueden resultar devastador para la calidad de la información de los
precios y para la eficiencia en la utilización de los recursos. El comportamiento se
distorsiona a medida que empresas y particulares hacen lo posible por gastar
rápidamente el dinero, antes de que disminuya su valor. En algunos países, se han
gastado cantidades enormes para alcanzar acuerdos institucionales destinados a
proteger a los particulares contra los efectos de la inflación. Con unos niveles de
inflación más moderados (pongamos, entre el 15% y el 20%), estos costos hubieran
sido mucho más bajos.

Las repercusiones de la inflación sobre el crecimiento

Hay pocas pruebas de que una inflación moderada tenga una repercusión negativa
perceptible sobre el crecimiento. Las tasas de crecimiento reales en períodos de
inflación bastante alta han sido a veces impresionantes, llegando a ser mucho mayores
que las tasas de crecimiento de países aparentemente similares que han reducido la
inflación. En la tabla 1 se analiza el crecimiento en varios países que han vivido
episodios de alta inflación e hiperinflación, así como de baja y moderada inflación. La
inflación muy elevada y la hiperinflación se han asociado generalmente a un crecimiento
bajo o una recesión económica declarada, aunque hay excepciones a la regla, como
Israel en el periodo 1979-1985.
Las tasas de inflación moderadas han ido acompañadas muy a menudo por un
crecimiento económico rápido, como en Argentina en 1965-1974, Brasil en 1965- 1980,
Chile en 1986-1996, y Polonia en 1992-1998. La opinión de que la inflación baja facilita
el crecimiento económico no es válida como premisa general. Para varios de estos
países, los períodos de inflación baja de estos últimos años han coincidido con los
índices más bajos de crecimiento económico, como Argentina en 1994-2001, Brasil en
1996-2003, e Israel estos últimos años1 .

Los estudios del país sobre las crisis de inflación y los programas de
estabilización pueden encontrarse en Bruno et al. (eds.) (1988 y 1991). Para un
análisis más general véase Bruno (1995).

22
La pregunta de más difícil respuesta es, por supuesto, porqué las experiencias de estos
países difieren tan sensiblemente. Las técnicas estadísticas comúnmente utilizadas
permiten, en teoría, mostrar si la inflación ha ido acompañada de un crecimiento más
bajo o de más desigualdad, a la vez que permiten controlar las restantes variables. Estas
regresiones transnacionales 2 , aunque imperfectas3 , sugieren que la inflación no está
estrechamente relacionada con el crecimiento, siempre y cuando aquélla no sea
demasiado elevada, es decir, siempre que esté por debajo de un umbral de en torno al
20%4 .
2 Levine y Renelt (1992), Levine y Zervos (1993), Bruno y Easterly (1996 y 1998),
Stanley Fischer (1996). 3 Uno de los problemas con los modelos simples regresivos
discutidos arriba es que raramente explican completamente las importantes diferencias
en las estructuras económicas de diversos países, como se analiza en esta parte del

23
presente documento. 4 Muchos de los estudios no muestran ninguna relación
estadísticamente significativa cuando la inflación está por debajo de cierto umbral. Esto
implica que no se puede rechazar la hipótesis de que no

La inflación inesperada o volátil ha sido más problemática. La alta variabilidad de los


tipos de interés asociada con una inflación volátil puede causar graves problemas a las
economías en las que las empresas hayan recurrido a un endeudamiento generalizado,
como era evidente durante la crisis asiática. La subida de tipos de interés llevó a
quiebras generalizadas porque las empresas arrastraban altos niveles de deuda a corto
plazo que hubo que refinanciar a tipos sumamente altos. Por supuesto, si hubiera habido
una historia de la alta volatilidad de tipos de interés antes de la crisis, probablemente las
empresas no habrían incurrido en coeficientes de endeudamiento a corto plazo tan altos,
en primer lugar, y la volatilidad en la inflación habría tenido mucho menos impacto. Si
las empresas comparten la creencia de que habrá episodios periódicos de altos tipos de
interés, limitarán sus préstamos. Pero, como se explica más abajo, esto puede también
tener un efecto nocivo importante sobre el crecimiento.

Otro problema que plantea la interpretación de los datos proviene de que los choques
que tienen incidencia en el sistema económico a menudo conducen a la inflación, pero
ésta no es necesariamente la causa del problema, sino sólo un síntoma del choque
exterior. La inflación misma es una variable endógena que debe explicarse en el marco
del modelo. Por ejemplo, el aumento del precio del petróleo en los años 70 condujo en
gran parte del mundo a la inflación, un crecimiento reducido y un aumento de la pobreza.
La causa subyacente del problema no era la tasa de inflación, sino el precio del petróleo.
Dado que era preciso gastar más recursos en petróleo, había menos recursos
disponibles para el crecimiento. Las repercusiones que el choque del precio del petróleo
tuvo en los países América Latina son particularmente reveladoras. Durante la década
de 1970, los países latinoamericanos se habían endeudado mucho para mantener el
crecimiento, pero los costos a largo plazo de esta estrategia resultaron ser enormes.
Cuando los Estados Unidos aumentaron sus tipos de interés a niveles sumamente altos,
muchos países dejaron de reembolsar sus préstamos, lo que abrió el camino a la década
perdida de los años 805

Es evidente que los responsables políticos deben implementar políticas que atenúen los
efectos y faciliten un ajuste amplio en caso de ‘choque’. Cuando los gobiernos
responden a la inflación restringiendo su política macroeconómica, haciendo al mismo
tiempo poco para facilitar el ajuste más amplio, es probable que el país empeore,
especialmente cuando el ‘choque’ haya producido ya una desaceleración económica.
En conjunto, parece evidente que el umbral de inflación difiere de un país a otro. Sin
embargo, podemos afirmar, en general, que el umbral es sensiblemente más alto que
haya ninguna relación por debajo de cierto nivel de inflación. Barro (1997) muestra que
no hay ninguna relación estadísticamente significativa (o solamente una débil) entre el
crecimiento económico y la inflación cuando la inflación está por debajo de 20%.
Ocampo (2004 b) estima que este umbral es de 40% para América Latina desde
mediados de los años 70. Otros muestran una relación pequeña pero significativa, es
decir, que un aumento de la inflación de 3 a 5% podía tener una relación estadística —
estadísticamente distinta de cero— pero tan pequeña que siempre que la inflación no

24
cambie mucho, la repercusión en el crecimiento es apenas perceptible. 5 Hay un vivo
debate sobre las causas de la década perdida. Véase Ocampo (de próxima aparición).
Stiglitz (2003 a) sostiene que no se fue que la estrategia de competencia con las
importaciones llegase a un callejón sin salida. Más bien parece que el problema residió
en los altos niveles, totalmente inesperados y sin precedentes, alcanzados por los tipos
de interés internacionales que siguieron a las políticas de la Reserva Federal de los
primeros años 80.
los niveles sumamente bajos que recomendaban la mayor parte de los esquemas de
objetivos de inflación de finales de los años 90 y principios del presente siglo. Una
inflación moderadamente baja no parece particularmente nociva para el crecimiento, y
una inflación demasiado baja (dirigida a conseguir la estabilidad de los precios) puede
ser en realidad mala para el crecimiento.

Cuadro 1: Las repercusiones de la inflación sobre la desigualdad Entre los lugares comunes
relativos a la inflación hay el que afirma que “la inflación es el más cruel de los impuestos” y que
golpea sobre todo a los pobres. Hay casos en que los efectos distributivos de la inflación son
claramente perjudiciales. Por ejemplo, la hiperinflación en Argentina, a finales de los 80, perjudicó
grandemente a los pobres y la estabilización de precios tuvo un efecto positivo. Sin embargo, en
términos más amplios, las pruebas en cuanto a quién perjudica más la inflación –a los pobres o a
los ricos—son realmente ambiguas. La repercusión de la inflación en la desigualdad depende de
las instituciones sociales y de mercado, así como del nivel de indización en la economía. Los
acreedores y los titulares de instrumentos financieros nominales, como bonos y préstamos, resultan
claramente perjudicados por las alzas inesperadas de la tasa de inflación. Los más adinerados
tienden a poseer activos financieros (activos de distribución menos igualitaria que los salarios), por
lo que la inflación tiene una repercusión negativa en los ricos. En la mayor parte de los países
industrializados avanzados, la seguridad social está indizada, de modo que los jubilados pobres,
que dependen de la seguridad social, están totalmente protegidos. En contraste con las sociedades
industrializadas, en muchos países en desarrollo la seguridad social es limitada o inexistente. En
estos países, la inflación puede tener consecuencias más graves en los pobres de mayor edad, si
bien la existencia de vínculos familiares más fuertes y de redes informales puede atenuar un tanto
el impacto. Los efectos de la inflación sobre los trabajadores depende de si sus salarios están
sujetos a ajuste. En los lugares en que la inflación ha sido un problema, los contratos a largo plazo
incluyen a menudo cláusulas de ajuste con arreglo al costo de la vida. Sin embargo, en los países
en desarrollo, muchos trabajadores no están organizados. Para estos países, así como para los que
no tienen antecedentes inflacionistas, la indización no es la norma en lo que respecta a un
porcentaje significativo de la mano de obra. En estos casos, la intensidad de los efectos de la
inflación sobre los trabajadores depende de si las empresas están obligadas a aumentar los salarios
debido a la competencia en el mercado laboral, o si pueden mantener la productividad del trabajador
como indica la teoría de los ‘salarios de eficiencia’ . El modo en que la inflación afecta a los distintos
grupos sociales está también determinado por los sectores de la economía afectados. Si la inflación
es más fuerte en los artículos de alimentación y de primera necesidad, puede tener una mayor
repercusión en los pobres urbanos, suponiendo que sus ingresos no estén sujetos a ajuste. Por otra
parte, unos precios más altos de los productos alimentarios pueden ayudar a los trabajadores
agrícolas y a los pobres rurales. Asimismo, si la inflación incide sobre todo en los productos
importados de lujo, las consecuencias para los pobres serán escasas

En conjunto, aunque depende de las instituciones del mercado, parece que la inflación, siempre y
cuando no tenga efectos nocivos graves en la economía, perjudica más a los poseedores de títulos
de renta fija que a la mayor parte restante de la sociedad. Esta conclusión se ajusta a la ‘economía
política’ vigente: los mercados financieros parecen sumamente preocupados por la lucha contra la
inflación, mucho más que la mayor parte de las otras ramas de la economía, las sociedades o los
trabajadores

25
 Los costos de la lucha contra la inflación

Es preciso contrastar los beneficios de mantener la inflación baja con los costos que
esto conlleva. Los costos de la inflación dependen, por supuesto, de cómo se luche
contra ella. Pero, independientemente de las herramientas específicas empleadas, la
lucha contra la inflación generalmente conduce a un más alto desempleo, por lo menos
a corto plazo, y al riesgo de un crecimiento más bajo a mediano plazo.

Uno de los argumentos contra una inflación excesiva es que empeora la eficiencia de la
economía; sin embargo, la utilización de políticas monetarias restrictivas para combatirla
puede ser igualmente dañina. En Rusia, el dinero excesivamente caro de los años 1993
a 1998 –política presentada en su momento como necesaria para combatir la inflación—
tuvo efectos sumamente perjudiciales sobre la eficiencia, al punto de que entre el 60%
y el 80% de todas las transacciones se llevaban a cabo por
medio del trueque. Los altos tipos de interés utilizados para luchar contra la inflación
pueden también causar quiebras generalizadas, especialmente cuando una economía
se caracterizada por un coeficiente de endeudamiento significativo, como sucedió en
Asia oriental.

Una dependencia acentuada de la política monetaria para estabilizar la economía puede


también conducir a unos tipos de interés altamente variables. A su vez, unos tipos de
interés altos y excesivamente variables encarecen el dinero. En los países en desarrollo,
los mercados de valores funcionan deficientemente y la mayor parte de la financiación
del exterior se produce en forma de deuda. Si las empresas son reacias al
endeudamiento, tendrán que recurrir a la autofinanciación y les resultará difícil cubrir
sus necesidades de capital de explotación. Así pues, los tipos de interés altos y variables
empeoran la eficiencia de los mercados de capital, con lo que reducen aún más los
índices de crecimiento.

En ocasiones, los gobiernos abordan un problema, como la inflación, a costa de


exacerbar otros. Una manera de enfrentar la inflación es permitir que la moneda se
aprecie. Con ello se reduce la demanda agregada y las presiones sobre los precios en
el mercado interior, a la vez que disminuyen los precios de importación en moneda local.
Aun cuando los gobiernos no se centren deliberadamente en la moneda, el tipo de
cambio suele reforzarse cuando el gobierno lucha contra la inflación mediante el
aumento de los tipos de interés. Si bien esto puede reducir la inflación, puede también
tener otros costos. Una moneda fuerte puede perjudicar las exportaciones, los sectores
que compiten con las importaciones y la generación de empleo. El déficit comercial
resultante puede producir un futuro problema de equilibrio de la balanza externa peor
incluso que los problemas que de otro modo hubiera producido la inflación.

 Balanza externa

26
Como la inflación, la balanza externa es una variable intermedia, menos importante por
sí misma y más importante por su repercusión sobre otras variables más preocupantes,
como la estabilidad y el crecimiento. No es siempre fácil evaluar los vínculos entre la
balanza externa y los objetivos más fundamentales (al igual que es difícil evaluar los
vínculos entre la inflación y los objetivos fundamentales). Los países intentan
generalmente mantener un saldo exterior aproximadamente
equilibrado, aunque el significado de este concepto no esté muy claro. Algunos países,
como los Estados Unidos, han mantenido durante mucho tiempo grandes déficits
comerciales, sin graves problemas. Otros ya parecen experimentar problemas tras sólo
un corto período de déficit comercial relativamente moderado.

En el mundo de tipos de cambio fijos que prevaleció hasta comienzos de los años 70,
un país que comprara en el exterior más de lo que vendía tenía medios para restituir la
diferencia: por la vía del préstamo en el exterior o la de la venta de sus reservas
internacionales. Eventualme nte, las reservas del país se acababan y con ellas la
voluntad de sus acreedores de realizar nuevos préstamos, lo que conducía a una crisis.
Con los tipos de cambio flexibles, la secuencia es ligeramente diferente, pero el
resultado no lo es tanto. Si un país parece endeudarse excesivamente, los prestatarios
y otros inversores pueden perder repentinamente su confianza en él y exigir el regreso
de su dinero. Y a medida que los inversores intentan sacar su dinero del país, los tipos
de cambio se derrumban, haciendo aún más difícil el reembolso de la deuda a corto
plazo denominada en dólares.

Pedir prestado en el exterior tiene a la vez consecuencias a corto plazo y a largo plazo,
pero la naturaleza de éstas dependerá de lo que dé lugar al endeudamiento. Si un país
pide prestado para financiar inversiones productivas que generen ingresos superiores
al tipo de interés soportado, con ello potencia su crecimiento. Los inversores son
conscientes de la fuerza cada vez mayor de la economía y tienen más confianza en ella.
Pero, al endeudarse en el exterior, el país está tomando el riesgo de la moneda
extranjera, de modo que una devaluación de la moneda local aumentará la cantidad de
deuda exterior en relación con el PIB. Por otra parte, los inversores a corto plazo a
menudo sólo tienen en cuenta una parte de la balanza del país: el tamaño de los déficits
fiscal y comercial. A menudo no toman en consideración lo que da lugar a estos déficits.
Así pues, aun cuando se utilicen las entradas de capital para financiar inversiones
productivas, aquéllas podrían provocar inestabilidad en la medida en que los inversores
a corto plazo tomen en consideración unos déficits crecientes.

Frecuentemente, sin embargo, las entradas de capital (especialmente de capital a corto


plazo) van a financiar un consumo creciente. En esas circunstancias, los inversores
extranjeros pueden estar justificadamente preocupados por la capacidad del país para
reembolsar sus deudas. Una falta de equilibrio en las cuentas externas podría entonces
anunciar una crisis de costos muy altos para la sociedad. Por ejemplo, Argentina, en
1996-1997 experimentó una inflación cero y una recuperación alimentada por un fuerte
consumo inducido por las entradas de capital. El crecimiento del PIB fue en promedio
de 6,7% por año. Sin embargo, el déficit por cuenta corriente como porcentaje del PIB
casi se duplicó y el desempleo siguió siendo alto. La recuperación fue seguida entonces

27
por una recesión de cuatro años (1999-2002), durante la cual el PIB cayó un 18% y el
desempleo creció.

 Desempleo y pobreza

Un objetivo fundamental de la política macroeconómica debería ser el de mantener la


economía tan cerca como sea posible del pleno empleo o de la total utilización de la
fuerza de trabajo. Los economistas consideran necesario un cierto porcentaje de
desempleo, puesto que la movilidad laboral toma tiempo, pero estiman que una falta de
aprovechamiento significativa de la capacidad de un país representa obviamente una
gran pérdida de recursos. Un problema que enfrentan los responsables políticos es
decidir a qué nivel comienza a ser preocupante el desempleo. Como veremos más
abajo, hay generalmente un equilibrio entre el desempleo y la inflación. La cuestiónque
los economistas generalmente se plantean es hasta qué nivel puede descender la tasa
de desempleo sin provocar presiones inflacionistas. (Una pregunta similar podría
posiblemente plantearse respecto al subempleo en los países en desarrollo, pero este
aspecto no ha sido objeto de una investigación sistemática).

Muchos economistas definen el pleno empleo como el nivel de desempleo por debajo
del cual la inflación aumentaría. El problema es que este índice (que en ocasiones se
define como una tasa de desempleo sin efecto acelerador de la inflación
(nonaccelerating inflation rate of unemployment - NAIRU)) es huidizo y variable. En
1993, la sabiduría convencional en los Estados Unidos lo fijaba en torno al 6,0-6,2%.
Cuando el desempleo cayó muy por debajo de este porcentaje sin que la inflación se
incrementase, se puso de manifiesto que la economía era capaz de funcionar a un nivel
de desempleo mucho más bajo del que los ‘halcones de la inflación’ habían supuesto.
Hay equilibrios importantes que los responsables políticos deben considerar: la
reducción del desempleo puede aumentar la inflación y, quizás más importante aún, la
lucha contra la inflación puede producir un más alto desempleo y una mayor pobreza.

El desempleo y el subempleo son dos de las fuentes más importantes de pobreza y


desigualdad; sin un trabajo, los individuos de la mayor parte de los países en desarrollo
están condenados a llevar una vida de pobreza y exclusión. El desempleo también
debilita la posición negociadora de los trabajadores, lo que reduce los salarios y genera
una injusticia cada vez mayor. Por supuesto, el desempleo tiene también costos sociales
enormes. Pero hay otras razones por las que el desempleo puede tener unas
consecuencias particularmente importantes en la pobreza y la desigualdad. En primer
lugar, un alto desempleo perjudica generalmente a las personas menos capacitadas.
Hay una ‘escala del empleo’ en la que, en tiempos de escasez de trabajo, los más
capacitados toman los empleos de los menos capacitados. Por ello, los menos
capacitados son quienes más probabilidades tienen de experimentar periodos de
desempleo. En segundo lugar, el alto desempleo reduce los salarios, con lo que
aumenta aún más la desigualdad. En tercer lugar, en muchos países, especialmente los
países en desarrollo, el seguro de desempleo es inexistente o de una insuficiencia
deplorable, y la mayor parte de los trabajadores dispone solamente de un pequeño
‘paraguas’ de ahorro. Por consiguiente, después de un período largo de desempleo, se

28
consumen los ahorros y los individuos pierden generalmente todo activo que hayan
utilizado como garantía de préstamo.

Es evidente que dos de los objetivos clave –el mantenimiento de un desempleo y un


subempleo bajos y la reducción de la pobreza — por lo general se complementan. Por
la misma razón, algunas políticas que promueven el crecimiento también contribuyen a
reducir la pobreza. Sin embargo, otras políticas podían promover el crecimiento sin
reducir la pobreza o promover la estabilidad sin estimular el crecimiento. Hay equilibrios
importantes, especialmente cuando los responsables políticos se centran en las
variables intermedias. En el siguiente capítulo estudiaremos las herramientas
principales de política macroeconómica, los equilibrios a ellas asociados, y su uso en la
realización de objetivos económicos a largo y corto plazo.

29
IV. EL MODELO MUNDELL – FLEMING

Tiene su origen en los trabajos que Robert Mundell y Marcus Fleming desarrollaron en
los años sesenta. Mundell destacó por su análisis sobre la política monetaria y la política
fiscal bajo diferentes esquemas de tipo de cambio. Si bien sus principales contribuciones
se remontan a por lo menos tres décadas atrás, estas siguen siendo sobresalientes y
constituyen el núcleo de la enseñanza en macroeconomía internacional.

LA ESTRUCTURA FINANCIERA QUE SUPONE EL MODELO MUNDELL –


FLEMING.

La estructura financiera que supone el modelo Mundell - Fleming puede describirse


mediante la siguiente hoja de balance, de la cual se destacan las siguientes
características:

a) La riqueza del sector privado puede mantenerse bajo la forma de bonos en


moneda nacional, bonos en moneda extranjera o dinero en efectivo.

b) No existe sistema bancario. El corazón del sistema financiero es la bolsa de


valores: el mercado de bonos. El gobierno puede financiar sus gastos emitiendo
bonos, el Banco Central puede hacer sus operaciones de mercado abierto
comprando y vendiendo bonos, y las empresas pueden financiar sus inversiones
vendiendo acciones.

c) No existe dolarización. El activo nacional está denominado en moneda nacional


y el activo extranjero está denominado en moneda extranjera. El dinero nacional
cumple con sus funciones de medio de cambio, unidad de cuenta y depósito de
valor. El dinero y los bonos son mantenidos sólo por los residentes.
d) La autoridad monetaria puede alterar la cantidad de dinero comprando o
vendiendo bonos en moneda nacional (Bb) y comprando o vendiendo dólares o
bonos en moneda extranjera, (B*bcr). Por ejemplo, si el Banco Central compra
bonos en moneda nacional al gobierno, incrementa su tenencia de bonos y a la
vez, incrementa la cantidad de dinero en la economía.

e) El Banco Central no otorga préstamos al gobierno.

30
Donde:

B*bcr : Bonos extranjeros en poder del BCR.


Bb : Bonos públicos en poder del BCR.
H : Base monetaria.

Bsp : Bonos públicos en poder del sector privado.


Bonos extranjeros en poder del sector
B*sp : privado.
Qsp : Riqueza del sector privado.
B : Total de bonos públicos (B = Bb + Bsp).

31
B* : Total de bonos extranjeros (B* = B *bcr + B*sp).

EL MODELO MUNDELL - FLEMING CON TIPO DE CAMBIO FIJO.

El modelo Mundell-Fleming que se presenta a continuación refleja el marco institucional


representado por la estructura financiera mostrada en la sección anterior. El modelo
supone, además, la existencia de perfecta movilidad de capitales y un régimen de tipo
de cambio fijo. Tal como se mencionó anteriormente, el modelo supone la existencia de
cuatro mercados: el mercado de bienes, el mercado de dinero, el mercado de bonos
nacionales y el mercado de bonos extranjeros. Por la ley de Walras, prescindimos del
mercado de bonos extranjeros.

El mercado de bienes es keynesiano, es decir, el ajuste hacia el equilibrio se consigue


a través de la variación de las cantidades producidas, mientras que los precios se
suponen constantes. En el mercado monetario, el Banco Central de Reserva (BCR) fija
el tipo de cambio y acepta que el mercado determine la oferta monetaria a través de la
compra-venta de dólares; por lo tanto, la cantidad de dinero en la economía es
endógena. En el mercado de bonos, toda ampliación de la brecha entre el rendimiento
de los bonos en moneda nacional y el rendimiento de los bonos en moneda extranjera
ajustado por la devaluación esperada y el riesgo país, se limpia, vía variaciones en la
tasa de interés doméstica. La conexión entre el mercado financiero y el mercado de
bienes se establece a través de la tasa de interés y el tipo de cambio, los cuales afectan
al gasto privado (consumo e inversión) y a las exportaciones netas, respectivamente.

1.- EL MERCADO DE BIENES


La demanda agregada de una economía abierta se compone de la demanda de
consumo, la demanda de inversión, el gasto del gobierno y las exportaciones netas (las
cuales se definen como las exportaciones menos las importaciones).

D+C+I+G+X-M

 El consumo (C), es el componente más importante de la demanda agregada y


representa la demanda de bienes y servicios de las familias, de bienes
nacionales o importados.

 La inversión (I), considera la compra de nuevos bienes de capital y también el


incremento en los inventarios de las firmas. La primera, es conocida como

32
inversión fija, y tiene dos grandes componentes: inversión no residencial, la cual
está referida a la compra de maquinarias, plantas y equipo, etc. y la inversión
residencial que se refiere a la construcción de nuevas casas y departamentos.

El principal determinante de la inversión fija es la tasa de interés real. Esto se


explica porque los empresarios que compran maquinaria o invierten en
construcción de viviendas tienen como objetivo obtener un determinado
rendimiento del dinero invertido.

 El gasto del gobierno (G), representa la demanda de bienes y servicios


realizada por el gobierno en general. Considera el presupuesto de un país
incluyendo por ejemplo, la demanda de uniformes escolares comprados a un
productor nacional, hasta los aviones para las fuerzas armadas comprados en
el exterior. Por lo tanto, incluye tanto la demanda del gobierno por bienes y
servicios producidos en el país como en el resto del mundo.

 Las exportaciones (X), constituyen la demanda de bienes y servicios del resto


del mundo por bienes producidos en la economía doméstica.

La demanda por las exportaciones de un país está determinada por el ingreso


del resto del mundo, ya que los países del resto del mundo son los demandantes
potenciales de los bienes domésticos que exporta un país. Asimismo, está
determinada por el precio relativo del bien, que se representa a través del tipo
de cambio real.

 Las importaciones (M), son los bienes y servicios finales que un país adquiere
del resto del mundo. Estos bienes importados son sustitutos respecto a los
bienes producidos por las empresas nacionales, no son bienes complementarios
como es el caso de los insumos importados. Cabe destacar que suponemos que
no existen insumos importados en esta economía.

 Equilibrio en el mercado de bienes: La curva IS.


El equilibrio en el mercado de bienes se obtiene cuando la producción se iguala con
la demanda agregada de la economía. Esta igualdad, como mencionamos
anteriormente, se consigue por variaciones de la producción, no de los precios. Los
precios son fijos independientes de la demanda

33
 Equilibrio en el mercado monetario: La curva LM.

El mercado monetario está en equilibrio cuando la cantidad de dinero demandada


es igual a la cantidad de dinero ofrecida. Considerando nuestro supuesto de que los
precios domésticos son iguales a la unidad, la demanda nominal de dinero es igual
a la demanda real.

34
2. LA POLÍTICA FISCAL, LA POLÍTICA CAMBIARIA Y EL CONTEXTO
INTERNACIONAL.

 Política fiscal expansiva: aumento del gasto público.

El incremento del gasto público eleva la demanda de bienes nacionales, generando


un exceso de demanda en el mercado de bienes, lo que induce a un incremento del
nivel de producción. En el mercado monetario, este incremento del producto genera
una elevación de la demanda de dinero, lo que provoca un exceso de demanda en
el mercado monetario.

 Política cambiaria: una devaluación.


Una devaluación afecta simultáneamente al mercado de bienes y al mercado de
bonos. En el mercado de bienes, una devaluación, dada la condición Marshall –
Lerner, mejora la balanza comercial e incrementa la demanda agregada de la
economía. Esto genera un exceso de demanda de bienes e induce a un aumento
del nivel de actividad. Este incremento de la producción, a su vez, eleva la demanda
de dinero, genera un exceso de demanda y obliga al Banco Central a comprar
dólares, lo que produce un incremento en las reservas internacionales y de esta
manera se inyectan soles en la economía.

 Contexto internacional: elevación de la tasa de interés externa.


El incremento de la tasa de interés externa eleva la rentabilidad de los bonos en
moneda extranjera, desplaza la demanda de bonos nacionales, y por tanto, eleva el
rendimiento de los mismos (eleva la tasa de interés doméstica, i). Al incrementarse
la tasa de interés doméstica, por un lado, se reduce el consumo y la inversión,
generando un exceso de oferta en el mercado de bienes, lo que hace caer el nivel
de actividad o producción, en dicho mercado. Por otro lado, el incremento de la tasa
de interés doméstica, reduce la demanda nominal de dinero y la cantidad de
reservas internacionales en la economía.

35
3. EXTENSIÓN DEL MODELO: CONTROL A LA SALIDA DE CAPITALES.

En la sección previa vimos que en un régimen de tipo de cambio fijo, un incremento


en la tasa de interés externa origina una caída de la producción y de las reservas
internacionales, y a la vez eleva la tasa de interés doméstica. Una vez producido
este shock exógeno externo adverso, el Banco Central, para evitar la pérdida de una
mayor cantidad de reservas internacionales, puede implementar un control a la
salida de capitales.

El Modelo Mundell - Fleming presentado es útil para analizar los efectos de una
implementación de un control a la salida de capitales, en la producción, las reservas
internacionales y en la tasa de interés doméstica. El control a la salida de capitales
se modela disminuyendo el rendimiento en moneda nacional del activo extranjero,
con un impuesto.

36

Вам также может понравиться