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INFORME

El concilio de Trento fue el más largo de la historia y el que proclamó más


dogmas, principios doctrinales y de práctica.
El Concilio Vaticano II ilumina el camino que nosotros como católicos debemos
seguir,
Es un concilio (asamblea) ecuménico (mundo habitado), asamblea que presenta
a todos los obispos del mundo habitado.
El Concilio Vaticano I fue el primero en realizarse netamente en el Vaticano, fue
muy breve, a pesar de ello se declarada el dogma de la inefabilidad de Papa.
El último dogma fue el de la Asunción de María a los cielos, en 1950 por el Papa
Pío XII.
Juan XXIII, “El Papa bueno”, el sucesor de Pío XII, fue quien convoca el Concilio
Vaticano II, anunciado en enero de 1959, pero que comenzó 3 años después, en
octubre. El Papa dijo que nunca tuvo la intención de proclamar un nuevo dogma.
En el Concilio Vaticano II, los obispos del tercer mundo superan en número a los
europeos, cosa nunca antes vista.
Juan XXIII fallece poco tiempo después de concluir la primera de las cuatro
sesiones, el que lo sucede es el Papa Pío VI, quien lleva al Concilio hasta su
final, en 1965.
Participaron más de 2000 sacerdotes, entre ellos el obispo más anciano, de 101
años, italiano y el más joven, Monseñor Alcides Mendoza Castro, peruano, de
Abancay, de apenas 34 años.
Objetivos del Concilio:
 Promover el desarrollo de la fe católica.
 Lograr una renovación moral en la vida cristiana de los fieles.
 Adaptar la disciplina eclesiástica a las necesidades y métodos a nuestro
tiempo.
 Lograr una mejor interrelación con el mundo y las demás religiones.
Los documentos que dejó el Concilio Vaticano II se dividen en tres tipos:
 Las constituciones: - Dei Verbum, sobre la divina revelación.
- Lumen Gentium, sobre la Iglesia.
- Sacrosanctum Concilium, sobre la Sagrada liturgia.
- Gaudium et Spes, sobre la Iglesia en el mundo
actual.
 Declaraciones conciliares: - Gravissimum Educationis, sobre la educación
cristiana.
- Nostra Aetate, sobre las relaciones de la
Iglesia con las religiones no cristianas.
- Dignitatis Humanae, sobre la libertad religiosa.
 Decretos conciliares: - Ad Gentes, sobre la actividad misionera de la
Iglesia.
- Presbyterorum Ordinis, sobre el misterio y vida de
los presbíteros.
- Apostolicam Actuositatem, sobre el apostolado de
los laicos.
- Optatam Totius, sobre la formación sacerdotal.
- Perfectae Caritatis, de la adecuada renovación de la
vida religiosa.

El Concilio Vaticano II es un manual, aunque muchos lo interpretaron mal,


inclusive sacerdotes. El Catecismo de la Iglesia Católica es uno de los frutos
más maduros y maravillosos del Concilio Vaticano II.

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