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INDICACIONES
CONTRAINDICACIONES
RELATIVAS:
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ABSOLUTAS:
EFECTOS:
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Los mecanismos por los que puede producirse el aumento del flujo
SOBRE EL MÚSCULO
anterior ha permitido que el masaje sea una de las técnicas más utilizadas
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EFECTOS PSICOLÓGICOS DEL MASAJE
estrés.
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ansiedad, la depresión y estrés. Los anteriores efectos han sido
PATOLOGIA
EL DOLOR DE ESPALDA
¿Quién no ha sufrido alguna vez un dolor de espalda? Todos alguna vez hemos
escuchado algún conocido quejarse por eso. El dolor de espalda, se ha convertido en un
síntoma de gran frecuencia y trascendencia en nuestra sociedad.
Aunque los padecimientos de la espalda han sido objeto de preocupación y estudio por
su frecuencia desde la antigüedad, los cambios en nuestros estilos de Viva en los últimos 50
años han contribuido a un progresivo aumento de estos padecimientos. El dolor de espalda
es une de los males más frecuentes en nuestros días por su incidencia en La sociedad; ¿Quién
no sufre o ha sufrido alguna vez de dolencias de espalda?, es fácil comprobar como no pasa
ni un solo día sin que incluso fuera de las consultas médicas, nos encontremos a alguien que
se queje de esta dolencia. (Teresa E. 2006 p.49)
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Sin duda la incapacidad laboral por dolor de espalda es un hecho del siglo XX, en los
siglos precedentes este dolor era considerado de tipo reumático. Desde el conocimiento de
que el disco intervertebral puede ser la fuente de los síntomas en muchos casos, surge la
creencia de que el dolor proviene de un traumatismo laboral, y por tanto, compensable
económicamente. La incapacidad por lumbalgia ha crecido espectacularmente, de forma
desproporcionada con respecto a otras patologías. (Teresa E. 2006 p.49)
La inmensa mayoría de las personas adultas han padecido a lo largo de su vida algún
episodio de dolor de espalda en general y de lumbalgia en particular, se estima que un 80-
85% de los adultos en nuestra sociedad padece de dolores de espalda. La localización más
frecuente es la lumbar. La mayoría de los casos (90%) son lumbalgias mecánicas de carácter
benigno, pero con importantes consecuencias económicas, laborales y sociales; el 10% de
las lumbalgias se deben a procesos de tipo inflamatorio o patología no vertebral. (Teresa E.
2006 p.50)
En 1976 Nacherson refería que la lumbalgia es la dolencia que más dinero cuesta a la
sociedad. En Europa 3,5 de cada 10 pacientes por baja laboral son debidas a patología
vertebral. En Asistencia Sanitaria Primaria, más del 22% de los pacientes presentan dolor de
espalda. (Teresa E. 2006. p.50)
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En las consultas de Rehabilitación de nuestros centros sanitarios, los enfermos de
patología vertebral dolorosa representan más del 40-45% de las consultas externas.
Todos estos datos arrojan la enorme carga asistencial que encierra la valoración y el
tratamiento de las algias vertebrales. Pero el dolor de espalda no sólo es un problema
sanitario, sino que tiene sus repercusiones laborales, implicaciones psicológicas, familiares,
legales y en definitiva son de gran importancia y trascendencia en la sociedad actual. (Teresa
E. 2006 p.50)
Los dolores cervicales y lumbares son los más frecuentes, Westerling y Jomsson
encontraron un 18% de prevalencia, en un estudio realizado en Asturias se encuentra una
frecuencia del 24,1% de la población general, con predominio significativo en el sexo
femenino (32,7% en mujeres, 13,2% en varones). Existe una clara relación del dolor cervical
con la profesión. Las profesiones sedentarias como los oficinistas, parecen tener menor
incidencia que las físicamente duras. Particularmente desfavorables son los trabajos en los
que se llevan pesos en la cabeza o que obliguen a posturas cervicales forzadas, durante largo
tiempo. (Teresa E. 2006 p.51)
Las prevalencias de las lumbalgias oscilan entre el 14 y el 45% de las personas adultas,
aumentando con la edad, alcanzando el 50% en personas mayores de 60 años. En un estudio
de prevalencia en Asturias se encontró que la lumbalgia con un 28,2%, era la localización
más frecuentemente dolorosa del aparato locomotor. La media de días de baja laboral por
lumbalgia aguda es según algunos estudios de 41 días. Mientras que para algunos autores la
lumbalgia es más frecuente en hombres, según un estudio realizado en Asturias en 1990,
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hombres y mujeres están afectados por igual, predominando entre los 30-60 años. (Teresa
E. 2006 p.52)
Los episodios suelen comenzar de los 20-30 años y recurren en los años posteriores,
con lo que su impacto fundamental aparece durante las épocas laborales. El 90-95% de las
lumbalgias mejoran en menos de un mes, solo el 5-7% de los pacientes sigue presentando
dolor después de 6 meses, siendo este grupo de pacientes el que ocasiona el 90% de los
gastos económicos imputables a las lumbalgias. (Teresa E. 2006 p.50)
El dolor puede ser de muchos tipos: Agudo (dura menos de 6 semanas) subagudo (dura
entre 6 semanas y 3 meses) y crónico (dura más de 3 meses), Se puede presentar en forma
de dolorimiento, fuerte, permanente o paroxístico, como quemazón o pinchazos, localizado
o irradiado, etc.
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suele haber dolor nocturno y suele ser debido a sobrecargas o esfuerzos físicos con o sin
alteraciones estructurales (vertebrales, musculares o ligamentosas).
Dolor inflamatorio: Este dolor aumenta con el reposo y despierta al enfermo
por la noche. Ante un dolor de estas características hemos de pensar en procesos infecciosos,
tumorales, reumáticos. En las enfermedades reumáticas, hay afectación orgánica y cualquier
movimiento desencadena dolor. este aparece de golpe, suele estar presente por las mañanas
al despertar, a veces mejora con el movimiento, es lo que se conoce como desoxidado
matinal.
Dolor local: Es el causado por cualquier proceso que irrita las terminaciones
nerviosas sensitivas de los tejidos mesodérmicos: Periostio, ligamentos, cápsula fibrosa
articular, tendones, fascia, músculos. Muchas veces es el resultado de una distensión
muscular o espasmo de la musculatura.
Dolor radicular: Es un dolor agudo que irradia desde una posición central
paraespinal a cualquier zona de las extremidades. Está causado por la compresión e irritación
de las raíces nerviosas. El dolor irradiado sigue un trayecto bien conocido, sirva de ejemplo
la ciática, con dolor, parestesias e incluso atrofia a lo largo del nervio ciático (muslo y pierna)
determinado por una afección vertebral.
Dolor proyectado o referido: El dolor originado en una víscera abdominal o
pelviana puede percibirse en el raquis. El dolor de las enfermedades pelvianas se localiza en
la región sacra, el de las enfermedades del bajo abdomen en la región lumbar, centrado
generalmente de L2 a L4, y el de las enfermedades abdominales altas en. la columna
dorsolumbar D8-L2.
FACTORES PREDISPONENTES
A pesar de que el dolor de espalda puede estar producido por multitud de causas, sin
embargo, en nueve de cada diez casos de dolor agudo no se encuentra causa orgánica
subyacente. A veces 10 que sí se encuentran son unos factores predisponentes, destacando
entre ellos:
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-Hábitos posturales inadecuados.
-Exceso de peso.
-Sedentarismo y aptitud física global insuficiente
-Hábíto tabáquico.
-Mujeres multíparas.
-Talla alta.
-Flexo-extensión repetidas o sostenidas, hiperextensión y torsión o rotaciones
excesivas o con cargas de la columna.
-Fracaso de la fusión de los elementos. posteriores del arco neural (lo cual permite la
salida de las meninges y contenido medular).
-Fusión incompleta del tubo neural primitivo.
-Alteraciones en el desarrollo de la notocorda.
-Separación inadecuada de los derivados del endodermo que dan lugar al tracto
alimentario y del tejido ectodérmico dedicado a los elementos neurales.
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Los factores estimables como responsables son:
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acondroplasía, meningocele...; también puede evidenciar alteraciones de la piel sugerentes
de malformaciones subyacentes (pigmentaciones cutáneas. lipomas, depresiones de la piel,
etc.) en la columna vertebral.
Al detectarse una malformación de la columna hay que buscar otras lesiones asociadas
para que no ocurra el fracaso del tratamiento por la interferencia de otra lesión importante
(lesiones nerviosas por el daño personal y social que comportan). En el tratamiento, se
incluirán medidas ortopédicas y quirúrgicas, para evitar muchas lesiones que, por el carácter
evolutivo, pueden conducir a daños mayores (por ejemplo, las cifosis de la acondroplastia o
de la mucopolisacaridosis pueden producir paraplejías si no se tratan ortopédicamente; la
patología craneovertebral puede producir lesiones neurológicas irreparables si no se
estabilizan, etc.). Hay que mantener informada a la familia en todo momento, para que se
arbitren con tiempo posibilidades de trabajo o función cuando el niño crezca, con el fin de
no crear frustraciones, evitando que se elijan actividades que no se van a poder cumplir con
eficacia.
Platibasia
Es una base del cráneo ancha, aplanada y extensa. Para su estimación se emplea el
ángulo basal del cráneo, que se mide trazando una línea que une el punto más superior del
agujero magno al centro de la silla turca y otra va desde aquí a la raíz de la nariz. En
condiciones normales este ángulo vale de 115 a 150º, cuando existe platibasia se aproxima
a los 80º.
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Impresión basilar
Consiste en una deformidad de la base del cráneo debida a una muesca o penetración
de los segmentos cervicales superiores, como si el peso del cráneo determinara un
hundimiento de su base contra la columna cervical rígida. Esta penetración de la columna
hacia arriba hace que la base del cráneo tenga una convexidad por encima. Esta anormalidad
congénita, se describe como forma primaria para diferenciarla de la forma secundaria
(invaginación basilar), en la que la deformidad o penetración de la columna en la base del
cráneo se debe a un reblandecimiento óseo de la misma, secundario a patologías como
osteomalacia, hiperparatiroidismo, Puget, osteodistrofia renal, etc.
Es la malformación que con más frecuencia afecta al atlas y al axis, siendo resultado
de una ausencia o debilidad de las estructuras destinadas a mantener estas vértebras unidas
(ligamento cruzado), Como consecuencia, el atlas se desplaza anteriormente y la médula
espinal queda comprometida por la apófisis odontoides y el margen posterior del agujero
occipital, ocasionando síntomas de compresión medular de intensidad variable. Los pares
craneales inferiores también pueden afectarse. A veces estos síntomas aparecen de manera
súbita al realizar el paciente un movimiento brusco con el cuello o después de un
traumatismo cervical ligero. Si hay signos neurológicos de inestabilidad o las alteraciones
neurológicas son progresivas, se debe hacer una fusión occipitoaxoidea, con reducción
preoperatoria mediante tracción.
Fusión atlantooccipital
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anterior. En esta anomalía, existen canales para las arterias vertebrales en las apófisis
transversas.
Fusión atlantoaxial
Puede aparecer una unión del atlas y el axis en el período postnatal por un trastorno en
la segmentación de los centros de osificación, generalmente uno en cada masa del atlas y
uno o dos en el arco con un núcleo de osificación en el cuerpo del axis y dos en su arco. La
fusión puede ser completa e incompleta con variaciones en las vértebras afectadas. Suele ser
asintomática y no requiere tratamiento.
Síndrome de Klippel-Feil
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Si existe síntomas neurológicos, deben atribuirse a malformaciones neurológicas
asociadas (siringomielia, Arnold-Chiari). Surge con poca frecuencia y suele acompañarse de
elevación de una 0 ambas escápulas, el llamado, hombro de Sprengel, cuadro en el que el
omoplato esta mas alto y de menor tamaño que lo normal y muestra también rotación en
aducción. Puede haber una barra ligamentosa y ósea que conecte el borde súperointerno, a
la columna cervical (barra omovertebral), a veces es importante extirparla para que mejore
en cierta forma el aspecto de la zona. La deformidad se descubre ya en los primeros meses
de la vida, asociándose en ocasiones a pterigium colli y más frecuentemente a tortícolis del
lado afecto., La mayoría de los enfermos tienen una inteligencia normal y practican sus
actividades normalmente, con limitaciones o síntomas mínimos incluso sin ellos.
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acabará dando lugar a una asimetría facial con hipocrecimiento de la hemicara del lado
afecto.
La ausencia parcial o total del arco posterior del atlas, es una anomalía congénita de la
columna cervical poco frecuente. Esta entidad puede presentar problemas diagnósticos
cuando se asocie a un traumatismo, por lo que su identificación como anomalía no traumática
es de gran importancia clínica y médico-legal.
Las anomalías congénitas del arco posterior del atlas tienen una prevalencia del cuatro
por ciento en la población normal y su presentación puede variar desde defectos moderados
(hendiduras medio, uní o bilaterales) a ausencia completa del mismo. En los pocos casos
descritos, con anatomía patológica, se ha observado tejido fibroso en las zonas con ausencia
de osificación. Este hecho apunta como causa de esta entidad la ausencia de premolde
cartilaginoso del arco y no la falta de osificación per se. El atlas se forma a partir de tres
núcleos de osificación primarios: dos laterales para las masas laterales y el arco posterior y
otro medial para el arco anterior. La osificación del arco posterior parte de los núcleos de
osificación laterales, progresando dorsalmente durante el segundo mes de vida intrauterina.
La aplasia total se explica por la falta de desarrollo posterior de los núcleos laterales, no
existiendo núcleos secundarios posteriores que puedan compensar la falta de desarrollo de
los núcleos principales.
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Malformación de Arnold-Chiari
Se caracteriza por una elongación del vermis cerebeloso inferior en el interior del canal
cervical, junto con un desplazamiento hacia esta región del bulbo raquídeo y del cuarto
ventrículo (malformación tipo II). Con frecuencia el acueducto queda estrechado y el bulbo
y el cerebelo, que ocupan el foramen magnum, aparecen rodeados de membranas
aracnoideas fibrosas. Estos factores contribuyen a la hidrocefalia, que, de manera constante,
acompaña a la malformación. Muchos casos se asocian a meningomielocele (malformación
tipo II). También se encuentran con frecuencia anomalías óseas, como una fosa posterior
pequeña e impresión basilar.
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En el 90% de los pacientes el Arnold-Chiari tipo 11 se presenta como un problema de
meningomielocele con hidrocefalia progresiva que se inicia a lor pocos meses del
nacimiento.
Disrafia espinal
Malformación debida a una falta de fusión del tubo neural en la región dorsal. Se
acompañan de malformaciones de las estructuras esqueléticas que normalmente recubren al
sistema nervioso y se asocian con frecuencia a otras malformaciones del mismo, a tumores
congénitos, hidrocefalia y a malformaciones corporales diversas. Se han observado grados
diversos de este problema:
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bífida oculta. Suele presentarse aproximadamente en el 20-25% de los nacimientos. Se
observa con mayor frecuencia en la región lumbar (L5 y S1) y es asintomática. La forma
más frecuente es la unión incompleta de un proceso espinoso en un solo segmento.
El meningocele oculto, es una dilatación del canal dural en el punto más inferior del
mismo que deforma la terminación cónica habitual y reproduce una esfera dentro del sacro.
No suele dar clínica alguna.
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trastornos de la micción o defecación, alteraciones de la sensibilidad y úlceras tróficas. Otras
alteraciones importantes son la hidrocefalia y la meningitis. La hidrocefalia se da en un 75%
de los casos y generalmente es secundaria a una malformación de Arnold-Chiari.
Escoliosis congénitas
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alguno. La escoliosis del escolar y adolescente, así como la escoliosis funcional será tratada
en otro capítulo.
Clasificación
-Defectos mixtos.
CIFOSIS CONGENITA
Las cifosis congénitas al igual que la escoliosis se pueden clasificar en cifosis por
defectos de formación, por defecto de segmentación y mixtas. Los defectos de formación
pueden ser anteriores y anterolaterales (cifoescoliosis). Las formas graves se producen por
la ausencia total de más de un cuerpo vertebral. Las lesiones cifóticas congénitas son
evolutivas con el crecimiento, por ello graves, y pueden llegar a producir paraplejía. La
localización más frecuente es la dorsolumbar, le sigue la dorsal inferior, dorsal superior y
lumbar. La clínica está caracterizada por la deformidad y por los defectos neurológicos. Las
parálisis se dan con más frecuencia cuando la cifosis está en la columna dorsal, nivel en el
cual el canal raquídeo es más estrecho y la vascularización de la médula más precaria
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En las cifosis por defecto de segmentación, los defectos anteriores son mucho menos
frecuentes que los laterales; son menos graves que las deformidades de formación, y por
tanto no es común encontrar paraplejías, la clínica consiste solamente en la cifosis. En cuanto
al tratamiento, debido a que las cifosis congénitas son progresivas deben someterse a
tratamiento activo, siendo la fusión precoz la clave del tratamiento.
LORDOSIS CONGENITA
Los defectos de formación posteriores son muy raros. Los defectos de segmentación
posteriores, cuando son bilaterales, producen lordosis puras, esta deformidad congénita es
muy rara y suele tener afectación respiratoria grave. Los bloques no segmentados se
localizan con mayor frecuencia en la columna dorsal, son posterolaterales y ocasionan
lordosis además de escoliosis grave. El tratamiento consiste en realizar un diagnóstico lo
más precoz posible y realizar una artrodesis anterior precoz para prevenir la deformidad
progresiva, la insuficiencia respiratoria y la muerte.
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Quistes neuroentéricos
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de los cuerpos vertebrales, los pedículos están acortados y el canal vertebral está borrado en
todos los planos.
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CIFOSIS Y LORDOSIS
A) Clasificación
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espacios intervertebrales y de alteraciones en las plataformas vertebrales con irregularidades
en forma de nódulos de Schmorl.
descompresión medular.
B) Clínica
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C) Exploración física
-Método de las flechas sagitales: consiste en la colocación de un hilo con una plomada
para medir las distancias en milímetros desde el hilo a la apófisis espinosa de C7 (flecha
cervical), máxima convexidad de la columna dorsal (flecha torácica con valor cero), máxima
incurvación de la concavidad lumbar (flecha lumbar) y finalmente comienzo de pliegue
interglúteo.
-Índice cifótico: se calcula dividiendo por dos el total de las flechas (valores normales
comprendidos entre 30-55, valores por encima de 55 se consideran cifosis). Índice lordótico:
que se halla restando a 121 flecha lumbar la mitad de la sacra (se consideran valores
normales entre 20 y 40).
D) Exploración radiológica
E) Tratamiento
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desviaciones estructuradas o cuando no se corrigen las posturas con la higiene postural, es
conveniente derivar al especialista para tratamiento ortopédico.
ESCOLIOSIS
A) Clasificación
-Posturales: se relacionan con el hábito postural mantenido como por ejemplo en niños
el transporte de una cartera.
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-Antiálgicas: debidas a la contractura muscular que se origina como mecanismo de
defensa en las hernias discales y que tiene como objetivo abrir los espacios vertebrales donde
se localiza la lesión.
Idiopáticas, son las que se observan más frecuentemente y no guardan relación con
factores etiológicos conocidos. Tienen carácter hereditario y se clasifican en:
-Infantiles, que aparecen desde el primer año a los 3-4 años de edad. En un 50% se
resuelven de forma espontánea antes de los cinco años y el resto puede evolucionar a formas
progresivas. Cuando se presentan en el lactante existe un signo llamativo y es el
aplanamiento del cráneo por el apoyo siempre hacia el mismo lado.
-Del adolescente, cuya aparición es a los 10-11 años. Es la forma de presentación más
frecuente con mayor afectación al sexo femenino. A esta edad existe una intensa actividad
de los cartílagos de crecimiento por lo que es frecuente que la deformidad pueda
incrementarse.
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Según la localización la escoliosis idiopática se clasifica en:
-Lumbar: en este caso se localiza la curva estructural en la región lumbar y tiene buen
pronóstico por causar escasa deformidad, aunque puede originar lumbalgias de repetición.
La convexidad es más frecuente hacia la izquierda.
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