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GUATEMALA
Año Quiché
2008 769
2009 1,302
2010 1,622
2011 1,676
2012 1,180
2013 741
Año Total 0 a 4 5 a 9 10 a 14 15 a 19
2008 23,721 21 58 178 2,21
2009 31,497 29 43 221 2,74
2010 32,017 36 54 224 2,97
2011 33,484 38 48 223 3,07
2012 36,107 21 78 242 3,37
2013 36,170 26 50 280 3,42
De ello podemos deducir: ¿Qué resultado tenemos hoy del matrimonio de un niño
de 15 años y una niña de 13 años? Ninguno de ellos es efectivo actualmente
posiblemente en aquel tiempo si lo era pero al presente ya no lo son, definitivamente
ya no; de algunos índices mencionados anteriormente podemos concluir que era
necesario regular la edad de matrimonio en menores de edad porque realmente
ellos no se encuentran capacitados para asumir una responsabilidad de tal magnitud
y de igual forma se atenta contra la indemnidad sexual de los menores así como
contra sus derechos fundamentales, un ejemplo de ello puede ser el cortometraje
de Ana cumple 14 puesto que la Constitución Política de la República de Guatemala
establece primero el principio de igualdad de mujeres y hombres y segundo, que
ninguna persona puede ser sometida a servidumbre u otra condición que
menoscabe su dignidad, integridad personal y libertad, valores y principios
que son inviolables y superiores a la legislación ordinaria por lo cual el Estado
de Guatemala adoptará todas las medidas necesarias; entre ellas las de carácter
legislativo, para garantizar la vigencia de los derechos humanos, las libertades
fundamentales de las personas y la seguridad jurídica, frente a cualquier
procedimiento inhumano, degradante o que implique violencia física,
psicológica, sexual o coacción moral.
Como vemos el matrimonio entre personas que no cuentan con la mayoría de edad,
principalmente en niñas y adolescentes, han violado sus derechos fundamentales,
exponiéndolas a mayor vulnerabilidad tanto física, psicológica y legal, así como a la
explotación comercial, servidumbre, esclavitud, explotación infantil, matrimonios
forzados, violaciones, embarazos por violación, entre otros, que contravienen no
sólo la dignidad de las personas sino su bienestar y desarrollo, produciéndoles
consecuencias graves a mujeres, niñas o adolescentes.
La aptitud para contraer matrimonio era que el varón fuese mayor de 16 años
y la mujer mayor de 14.
La autorización para poderse celebrar tal matrimonio debía otorgarla el padre
conjuntamente con la madre o quien ejerciese la patria potestad de los
menores; a falta de los ya mencionados la autorización la daba el tutor.
Si por ausencia, enfermedad u otro motivo no podía obtenerse la autorización
por los anteriores bastaba con la autorización judicial.
Si por alguna circunstancia existía un desacuerdo entre los padres sobre el
matrimonio el juez podía concederla cuando los motivos en que se funde la
negativa no fueren razonables.
Los alcaldes o notarios no podían aceptar una unión de hecho de menores
de edad sin el consentimiento del papá o del tutor o, en su caso la
autorización del juez.
Ahora con las reformas al Código Civil en cuanto al matrimonio en menores de edad,
se pretende fundamentalmente el pleno goce de los derechos del niño; con el
Decreto 8-2015:
Del impacto que ha tenido ésta reforma en la sociedad aún no podemos emitir un
juicio porque se está en la espera de lograr los cambios que se pretendieron con
ella; debido a que el periodo de implementación ha sido muy corto para poder
formular conclusiones, puesto que solamente han transcurrido seis meses y con el
acuerdo emitido por la Corte Suprema de Justicia el pasado 29 de junio del 2016
solo veintidós días. Departamentalmente hablando en Quiché sólo se han
registrado seis procesos para la autorización del matrimonio en menores de edad
en el Juzgado de Primera Instancia de Trabajo y Previsión Social y de Familia del
Departamento del Quiché, cuatro de ellos se han tramitado por la vía incidental: