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Especular nunca hace daño, de hecho, puede resultar bastante beneficioso, cuando aquella

especulación resulta ser un remolino de ideas y aquel remolino se convierte en lo que Sócrates
llamaba universalidad. Sin embargo, no pretendo aquello, sino que con un remolino me basta.
Iniciando con esta pequeña especulación. Me apetece empezar refiriéndome a la economía
boliviana, de la cual como dice orgullosamente nuestro querido despilfarrador Evo morales,
fue la economía número 1 en cuanto crecimiento se refiere en la región, por ello, quizás sea
una buena economía un reflejo de la sociedad, así como lo planteaba Marx en su concepción
de sociedad, siendo la cultura y sociedad, la súper estructura; y la economía la infraestructura.
Con esta concepción se me hace algo quizás obvio llegar a la conclusión, que con una
economía de vacas gordas, esta tenga una consecuencia en su sociedad volviéndola, como no,
muchas más consumistas paradójicamente en vez de “Descolonizar” como tanto anhelan los
del poder, terminen creando una sociedad burguesa.

Sera la clase media con gran potencial, aunque un poco débil, no solo porque muchos apenas
sobreviven con 700bs al mes, sino por la posible dependencia exagerada que aquella clase
media puede llegar tener del estado, y a un devenir en el que se siente olor de una
“capitalización” y como sabemos, una capitalización es una reducción de estado. Por
consecuencia a eso, pueda que mucha gente pierda su trabajo y aquella clase media, termine
peor, aunque claro ese es otro tema. La clase media boliviana, y la plore que esta engendra, ha
de suponer un cambio de mentalidad en cuanto a estos últimos. Como no, unos chicos (Desde
niños, hasta adolecentes) viviendo, la que posiblemente sea la mejor época en Bolivia, donde
se regala bonos y subsidios a todos y a quien sea. Quizás aquella plore termine siendo afectada
como sociedad por las vacas gordas que afecta al país, en el sentido de que se puede ver un
vacío existencial, llegando a ser el objeto consumido el reflejo de la misma personalidad del
adolecente (Como si se tratase de primer mundo) pues yo he podido ver a una juventud
corrompida, obsesionadas por el consumo, a pesar de que este país no es de primer mundo.
Pues, veo desde chicos que parecen provenir de familia quizás un tanto humildes. Sin
embargo, estos adolescentes terminan rompiendo con los estándares de familia “humilde” y
ellos son todos unos derrocadores de dinero, un experimento de cholo y maluma. No
obstante, quizás aquellas actitudes sean reflejos de un vacío existencial, donde lo único que
importa es el consumo y como te vez reflejado en este, y el placer sensorial. Es entonces, en
este punto donde se puede apreciar un nihilismo en cuanto todo objeto de relación humana.
Se puede ver una deshumanización, más que todo en familias de clase media-alta, donde las
relaciones amorosas, no son más que algo pasajero y momentáneo, todo para satisfacer los
deseos carnales de ambos bandos. Quizás Bolivia empiece a experimentar de aquí a unos años
(Si la economía sigue pujante) una deshumanización donde se vive para trabajar, y el dinero es
el fin último y el más respetable de todos. Y a todo esto, se añade, que en estos inicios de auge
económico se dan cuando en el poder está un gobierno de corte “socialista siglo 21” lo que
quiere decir, que aparte de una desvalorización, se podrá ver una radicalización de la dialéctica
hegeliana, donde se aplicará esta, a toda minoría política y engendrar un repugnante
populismo (Como ya se ha estado haciendo). Como bien sabemos en las gloriosas revoluciones
liberales con Rene Descartes se puso al hombre en la centralidad de la historia, era, entonces,
el hombre el único capaz de poder controlar su devenir, todos sabemos las maravillosas
ventajas que trajo consigo la modernidad y la acción humana para el hombre. Europa tuvo un
gran auge económico y la natalidad era cada vez mayor, comercializar era fácil, y la clase media
tenia las mismas cosas que antiguamente poseían los privilegiados. Sin embargo, no todo tiene
aroma a rosa y esencia veraniega, todos sabemos que de un hermoso verano le sigue épocas
frías. La época fría de la modernidad llegara con la posmodernidad y quizás la globalización,
una época en la que se perdió la esperanza. La ilustración fue una antítesis a la esperanza de la
llegada de cristo, era un cansancio de esperar la salvación, era un reaccionar de la humanidad,
un decir “Yo soy el único que puede salvarse con mi acción. Soy el único capaz de darme
bienestar”. El hombre puso manos a la obra con la ciencia y la matemática, olvidándose de que
alguna vez deberían ser salvados espiritualmente, era el auge de la razón humana, se crearon
nuevas esperanzas de un mundo, en el que la salvación terrenal era posible, un mundo donde
todos podíamos con el desarrollo tecnológicos ser casi dioses, el marxismo, nos planteaba una
salvación del hombre mediante la tecnología, pero todos sabemos cómo acabo aquellos
delirios. Aquel optimismo había sido derrumbando, dando lugar a un pesimismo radical, y con
ello un vacío existencial. Ya no era Dios el salvado, ni tampoco la ciencia. ¿Quién era entonces
el que acabaría con la miseria de la humanidad? Se empezó con una irracionalidad existencial,
precisamente con filosofías como el existencialismo y filósofos como Sartre, Nietzche. Todo lo
anteriormente dicho, nace por la angustia del hombre en su vacío existencial, causado por el
capitalismo. El liberalismo no se encarga de los problemas espirituales, ni tampoco de la
felicidad del hombre, simplemente trata de dar a su disposición todos los bienes materiales,
para que este pueda profundizar en su espiritualidad, en su felicidad… Sin embargo, es muy
difícil ver que alguien se sienta verdaderamente feliz, encontramos gente en servidumbre de
entretenimiento barato, que solo sirve para consumir (Esto trae la consecuencia de que el arte
pierda su esencia, y solo sea un producto más) hay una desencializacion cultural en todo lo que
viene, ya que el comercio hace que culturas choquen, el comercio trae la paz a los pueblos y
hace que la cultura se junte. No obstante, creo que el hombre de ahora al menos el de primer
mundo anda perdido en su existencia, consumiendo y dejando atrás un desarrollo filosófico.
Tomando a la ciencia como una herramienta para abastecer sus necesidades materiales, y
olvidarse de aquellas necesidades existenciales que atemorizan al hombre. En Bolivia cambia
un poco las cosas. Hay que recordar que para épocas de la ilustración nosotros estábamos
siendo colonizados, américa había sido colonizada y consumida por Europa, proporcionando
recursos para el mundo desarrollado europeo

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