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Es una publicación

Versión en español de la edición de la obra en inglés


Surgical Management of Obesity
Copyright © MMVII, Saunders, an Elsevier Imprint

Revisión científica:
J. L. Balibrea, M.D., PhD
F. A. C. S. (Hon) F. A. S. A. (Hon)
Catedrático de Cirugía
Universidad Complutense de Madrid

© 2009 Elsevier España, S.L.


Travessera de Gràcia, 17-21
08021 Barcelona, España

Fotocopiar es un delito (Art. 270 C.P.)


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Este libro está legalmente protegido por los derechos de propiedad intelectual.
Cualquier uso fuera de los límites establecidos por la legislación vigente,
sin el consentimiento del editor, es ilegal. Esto se aplica en particular
a la reproducción, fotocopia, traducción, grabación o cualquier otro sistema
de recuperación de almacenaje de información.

ISBN edición original: 978-1-4160-0089-1


ISBN edición española: 978-84-8086-428-2

Depósito legal: B. 5.763 - 2009


Traducción y producción editorial:
Impreso en España por Grafos, S.A. Arte sobre papel

Advertencia

La medicina es un área en constante evolución. Aunque deben seguirse unas precauciones de seguridad están-
dar, a medida que aumenten nuestros conocimientos gracias a la investigación básica y clínica habrá que introdu-
cir cambios en los tratamientos y en los fármacos. En consecuencia, se recomienda a los lectores que analicen los
últimos datos aportados por los fabricantes sobre cada fármaco para comprobar la dosis recomendada, la vía y
duración de la administración y las contraindicaciones. Es responsabilidad ineludible del médico determinar
las dosis y el tratamiento más indicados para cada paciente, en función de su experiencia y del conocimiento de
cada caso concreto. Ni los editores ni los directores asumen responsabilidad alguna por los daños que pudieran
generarse a personas o propiedades como consecuencia del contenido de esta obra.

El editor
A mi compañera durante toda la vida, mi esposa, Emilie D. Buchwald.
Como ella es escritora y editora, ha tratado de enseñarme a tener gracia,
además de transmitir información, a la hora de escribir. Mi carrera no
habría sido posible sin su ayuda y tampoco habría podido obtener placer a
través de mi carrera profesional, de mis hijos y de mis nietos.
HB

Anne Cowan, mi mujer y mi mejor amiga, personifica el amor


incondicional que, cuando se consigue aprender, es una alegría inmensa
que se puede compartir, como ella me ha enseñado a hacer con mis
pacientes y muchas otras personas durante los más de cuarenta años de
convivencia. Este libro está dedicado a ella como prueba de mi gratitud
inmensa por esto y por mucho más.
GSMC

A Mary Ann Rose (Pories), profesora, enfermera, monitora de karate,


horticultora profesional, música, panadera, madre, esposa y amiga
constante, sin la cual toda mi carrera habría resultado imposible.
WJP
Colaboradores

Subhi Abu-Abeid, M.D. George A. Bray, M.D.


Deputy Chair of General Surgery and Consultant, Chronic Disease Prevention, Pennington Biomedical
Tel Aviv University Sourasky Medical Center; Research Center, Baton Rouge, Louisiana
Consultant, Tel Aviv, Israel Capítulo 10, Tratamiento farmacológico de la obesidad
Capítulo 44, Resolución de las patologías comórbidas
bariátricas: apnea del sueño Stacy A. Brethauer, M.D.
Fellow, Advanced Laparoscopic and Bariatric Surgery,
Peter Ako, M.D. Cleveland Clinical Foundation, Cleveland, Ohio
Center for Surgical Treatment of Obesity, Tri-City Capítulo 23, Situación actual de la derivación gástrica
Regional Medical Center, Hawaiian Gardens, California laparoscópica
Capítulo 27, Derivación gástrica con banda
Robert E. Brolin, M.D.
John C. Alverdy, M.D. Adjunct Professor of Surgery, University of Pittsburgh
Professor of Surgery, University of Chicago: Medical Center, Pittsburgh, Pennsylvania; Director
The Pritzker School of Medicine, Chicago, Illinois of Bariatric Surgery, University Medical Center at
Capítulo 12, Selección de pacientes para cirugía bariátrica Princeton, Princeton; Director, Bariatric Surgery
Program, Saint Peter’s University Hospital,
New Brunswick, New Jersey
Mitiku Belachew, M.D.
Head, Surgical Department and University Service, Capítulo 28, Derivación gástrica en Y de Roux con asa larga
Centre Hospitalier Hutois, Huy, Belgium
Henry Buchwald, M.D., Ph.D.
Capítulo 19, Banda gástrica ajustable laparoscópica
Professor of Surgery and Biomedical Engineering,
Owen H. and Sarah Davidson Wangensteen Chair in
Kumar G. Belani, M.B.B.S., M.S. Experimental Surgery, Emeritus, Department of Surgery,
Professor of Anesthesiology, Medicine and Pediatrics; University of Minnesota Medical School,
Professor, Division of Environmental Sciences, Schollos Minneapolis, Minnesota
of Medicine and Public Health, University of Minnesota,
Minneapolis; Consultant Anesthesiologist, Fairview Capítulo 5, Patologías asociadas a la obesidad;
University Medical Center, University Children's Capítulo 18, Evolución de las intervenciones bariátricas
Hospital, Fairview, Minnesota y algoritmo de selección
Capítulo 14, Consideraciones sobre anestesia en la obesidad
Marie-Claire Buckley, M.D.
Peter N. Benotti, M.D., F.A.C.S. Assistant Professor, Division of Plastic and
Director of General Surgery, Department of Surgery, Reconstructive Surgery, University of Minnesota
Geisinger Health System, Danville, Pennsylvania Medical School, Minneapolis, Minnesota
Capítulo 13, Preparación preoperatoria del paciente Capítulo 38, Contorno corporal tras una pérdida
de cirugía bariátrica masiva o generalizada de peso

Jeanne D. Blankenship, M.S., R.D. Giovanni Camerini, M.D.


Department of Surgery, University of California, Assistant Professor of Surgery, Università di Genova,
Davis Medical Center, Sacramento, California Ospedale San Martino, Genoa, Italy
Capítulo 9, Tratamiento dietético de la obesidad Capítulo 29, Derivación biliopancreática

Claude Bouchard, Ph.D.


Executive Director, Pennington Biomedical Research
Center, Baton Rouge, Louisiana
Capítulo 3, Etiología de la obesidad

VII
VIII Colaboradores

J.K. Champion, M.D., F.A.C.S. Mervyn Deitel, M.D., F.I.C.S., C.R.C.S.C.,


Clinical Professor of Surgery, Mercer University School F.A.C.N., D.A.B.S.
of Medicine, Macon, Georgia; Director of Bariatric Editor in Chief, Obesity Surgery
Surgery, Emory-Dunwoody Medical Center, Atlanta, Formerly, Professor of Surgery and Nutritional Sciences,
Georgia University of Toronto, Toronto, Ontario, Canada
Capítulo 21, Gastroplastia vertical con banda Capítulo 56, Normas para la bibliografía médica:
laparoscópica publicación de resultados de cirugía bariátrica

Paul T. Cirangle, M.D., F.A.C.S. Joseph D. DiRocco, M.D.


Laparoscopic Associates of San Francisco, Resident, General Surgery, State University of New York
San Francisco, California Upstate Medical University, Syracuse, New York
Capítulo 31, Procedimientos laparoscópicos de cruce Capítulo 16, Asistencia postoperatoria al paciente sometido
duodenal y gastrectomía tubular a cirugía bariátrica

G. Wesley Clark, M.D. John B. Dixon, M.B.B.S., Ph.D., F.R.A.C.G.P.


Alvarado Center for Surgical Weight Loss, Head, Clinical Research, Center of Obesity Research
San Diego, California and Education, Monash University, Alfred Hospital,
Capítulo 25, Derivación gástrica laparoscópica Melbourne, Victoria, Australia
con endograpadora circular Capítulo 41, Resultados nutricionales de la cirugía
bariátrica;
Matthew M. Clark, Ph.D. Capítulo 45, Alteraciones ortopédicas y obesidad; cambios
Professor of Psychology, Mayo Clinic College of con la pérdida de peso
Medicine; Health Psychologist, Department of
Psychiatry and Psychology, Mayo Clinic, Rochester, Basil Felahy, M.D.
Minnesota
Center for Surgical Treatment of Obesity, Tri-City
Capítulo 51, Equipo multidisciplinar en un programa Regional Medical Center, Hawaiian Gardens, California
de cirugía bariátrica
Capítulo 27, Derivación gástrica con banda
Maria L. Collazo-Clavell, M.D. John J. Feng, M.D., F.A.C.S.
Assistant Professor, Department of Internal Medicine,
Laparoscopic Associates of San Francisco,
Mayo Clinic College of Medicine; Consultant, Division
San Francisco, California
of Endocrinology, Diabetes, Metabolism and Nutrition,
Mayo Clinic, Rochester, Minnesota Capítulo 31, Procedimientos laparoscópicos de cruce
duodenal y gastrectomía tubular
Capítulo 51, Equipo multidisciplinar en un programa
de cirugía bariátrica
Latham Flanagan, Jr., M.D., F.A.C.S.
George S.M. Cowan, Jr., M.D. The Oregon Center for Bariatric Surgery,
Eugene, Oregon
Professor Emeritus, Department of Surgery,
University of Tennessee Health Sciences Center, Capítulo 48, Formación práctica de los cirujanos
College of Medicine, Memphis, Tennessee bariátricos
Capítulo 11, Métodos no quirúrgicos de pérdida de peso;
Louis Flancbaum, M.D., F.A.C.S., F.C.C.M., F.C.C.P.
Capítulo 34, Principios de la cirugía bariátrica de revisión
Chair, Department of Surgery; Director, Bariatric
Services, North Shore University Hospital at Glen
Paul R.G. Cunningham, M.D. Cove, Glen Cove, New York
Professor of Surgery, State University of New York
Capítulo 46, Resultados metabólicos de la cirugía bariátrica
Upstate Medical University; Chair, Department of
Surgery, University Hospital, Syracuse, New York
M.A.L. Fobi, M.D.
Capítulo 16, Asistencia postoperatoria al paciente sometido
Medical Director, Surgeon, Center for Surgical
a cirugía bariátrica
Treatment of Obesity, Tri-City Regional Medical Center,
Hawaiian Gardens, California
Capítulo 27, Derivación gástrica con banda
Colaboradores IX

Nicole N. Fobi, M.D. Emanuel Hell, M.D.


Center for Surgical Treatment of Obesity, Tri-City Professor of Surgery, Krankenhaus Hallein, Hallein, Austria
Regional Medical Center, Hawaiian Gardens, California Capítulo 7, Implicaciones sociales de la obesidad
Capítulo 27, Derivación gástrica con banda
Douglas S. Hess, M.D.
Katherine Mary Fox, R.N., M.P.H. Clinical Assistant Professor, Department of Surgery,
CEO, Surgical Weight Loss Clinic, Tacoma, Medical College of Ohio, Toledo; Wood County
Washington; CEO, Surgical Weight Loss Clinic of Hospital, Bowling Green, Ohio
Eastern Washington, Richland, Washington; Director Capítulo 30, Derivación biliopancreática con cruce
of Education, Fill Centers USA, Snowflake, Arizona duodenal
Capítulo 49, Asistencia de enfermería al paciente
sometido a cirugía bariátrica Kelvin D. Higa, M.D.
Valley Surgical Specialists, Fresno, California
S. Ross Fox, M.D.
Capítulo 26, Derivación gástrica en Y de Roux laparoscópica:
St. Francis Community Hospital, Federal Way, técnica con sutura manual de la gastroyeyunostomía
Washington
Capítulo 36, Fugas y alteración gástrica en cirugía Neil E. Hutcher, M.D., F.A.C.S.
bariátrica Clinical Associate Professor of Surgery, Medical College
of Virginia; Medical Director, Bariatric Program,
Victor F. Garcia, M.D. BonSecours St. Mary’s Hospital, Richmond, Virginia
Professor of Surgery, Pediatrics, University of Cincinnati Capítulo 2, Incidencia, prevalencia y demografía
School of Medicine; Pediatric Surgeon, Cincinnati de la obesidad
Children’s Hospital Medical Center, Cincinnati, Ohio
Capítulo 37, Cirugía bariátrica en el adolescente Sayeed Ikramuddin, M.D.
Associate Professor of Surgery, Co-Director of
John J. Gleysteen, M.D. Minimally Invasive Surgery, University of Minnesota
Professor of Surgery, University of Alabama in Medical School, Minneapolis, Minnesota
Birmingham; Chief, Surgical Service, Birmingham VA Capítulo 4, Metabolismo energético y bioquímica
Medical Center, Birmingham, Alabama de la obesidad;
Capítulo 53, Instalaciones necesarias para la práctica Capítulo 24, Derivación gástrica en Y de Roux
de la cirugía bariátrica laparoscópica: técnica lineal

Jeanne E. Grant, R.D. Andrew C. Jamieson, M.D.


Clinical Dietician, Mayo Clinic, Rochester, Minnesota Honorary Senior Lecturer, Department of Surgery,
Capítulo 51, Equipo multidisciplinar en un programa Monash University Medical School, Melbourne; Head
de cirugía bariátrica of Surgical Unit, Box Hill Hospital, Victoria, Australia
Capítulo 20, Gastroplastia vertical con banda
Robert J. Greenstein, M.D., F.A.C.S., F.R.C.S.
Department of Surgery, Veterans Affairs Gregg H. Jossart, M.D., F.A.C.S.
Medical Center, Bronx, New York Laparoscopic Associates, San Francisco, California
Capítulo 17, Cirugía en el paciente con obesidad mórbida Capítulo 31, Procedimientos laparoscópicos de cruce
duodenal y gastrectomía tubular
Ward O. Griffen, Jr., M.D., Ph.D.
Professor of Surgery (Retired), University of Kentucky Daniel Kaufman, M.D.
College of Medicine, Lexington, Kentucky Department of Surgery, State University of New York
Capítulo 22, Derivación gástrica en Y de Roux mediante Downstate Medical Center, Brooklyn, New York
cirugía abierta Capítulo 47, Formación académica de los cirujanos bariátricos

John D. Halverson, M.D. Michael L. Kendrick, M.D.


Professor of Surgery, State University of New York Assistant Professor of Surgery, Mayo Clinic College
Upstate Medical University, Syracuse, New York; of Medicine; Senior Associate Consultant, Division of
Director, Surgical Bariatric Center, Syracuse, Gastroenterologic and General Surgery, Mayo Clinic,
New York Rochester, Minnesota
Capítulo 16, Asistencia postoperatoria al paciente sometido Capítulo 51, Equipo multidisciplinar en un programa
a cirugía bariátrica de cirugía bariátrica
X Colaboradores

Joseph Klausner, M.D. Tracy Martinez, R.N., B.S.N.


Professor and Head of Surgery, Tel Aviv Sourasky Program Director, Wittgrove Bariatric Center, Scripps
Medical Center, Tel Aviv, Israel Memorial Hospital, La Jolla, California
Capítulo 44, Resolución de las patologías comórbidas Capítulo 50, Grupos de apoyo al paciente sometido a
bariátricas: apnea del sueño cirugía bariátrica

John G, Kral, M.D., Ph.D. Edward E. Mason, M.D., Ph.D., F.A.C.S.


Professor of Surgery and Medicine, State University Emeritus Professor, University of Iowa College
of New York Downstate Medical Center, Brooklyn, of Medicine, Iowa City, Iowa
New York
Capítulo 1, Perspectivas históricas
Capítulo 47, Formación académica de los cirujanos
bariátricos Samer G. Mattar M.D., F.A.C.S.
Associate Professor, Indiana University School of
Hanna-Maaria Lakka, M.D., Ph.D.
Medicine, Indianapolis; Medical Director, Clarian
Assistant Professor of Public Health, Kuopio University, Bariatric Center, Clarian North Medical Center,
Kuopio, Finland; Pennington Biomedical Research Carmel, Indiana
Center, Baton Rouge, Louisiana
Capítulo 23, Situación actual de la derivación gástrica
Capítulo 3, Etiología de la obesidad laparoscópica
Crystine M. Lee, M.D.
W. Scott Melvin, M.D.
Laparoscopic Associates of San Francisco,
Professor of Surgery; Chief, Division of General Surgery;
San Francisco, California
Director, Center for Minimally Invasive Surgery;
Capítulo 31, Procedimientos laparoscópicos de cruce Ohio State University College of Medicine and Public
duodenal y gastrectomía tubular Health, Columbus, Ohio
Capítulo 54, Áreas de laparoscopia y robótica en cirugía
Hoil Lee, M.D. bariátrica
Center for Surgical Treatment of Obesity,
Tri-City Regional Medical Center,
Karl A. Miller, M.D.
Hawaiian Gardens, California
Professor of Surgery, Krankenhaus Hallein,
Capítulo 27, Derivación gástrica con banda Hallein, Austria
Kenneth G. MacDonald, Jr., M.D. Capítulo 7, Implicaciones sociales de la obesidad
Professor of Surgery; Chief, Gastrointestinal Surgery and
Surgical Endoscopy; Director, Surgical Obesity Program; Ido Nachmany, M.D.
Brody School of Medicine at East Carolina University, Resident, Tel Aviv University Sourasky
Greenville, North Carolina Medical Center, Tel Aviv, Israel
Capítulo 43, Resolución de las patologías comórbidas Capítulo 44, Resolución de las patologías comórbidas
bariátricas: hipertensión bariátricas: apnea del sueño

Jane L. Mai, R.N. Erik Näslund, M.D., Ph.D.


Physician Extender, Mayo Medical Center, Professor, Department of Clinical Sciences, Karolinska
Rochester, Minnesota Institutet, Danderyd Hospital, Stockholm, Sweden
Capítulo 51, Equipo multidisciplinar en un programa Capítulo 6, Longevidad y obesidad
de cirugía bariátrica
Michelle A. Neseth
Giuseppe M. Marinari, M.D. Secretary to Obesity Program Director, Department
Assistant Professor of Surgery, Università di Genova, of Surgery, Mayo Medical Center, Rochester, Minnesota
Ospedale San Martino, Genoa, Italy
Capítulo 51, Equipo multidisciplinar en un programa
Capítulo 29, Derivación biliopancreática de cirugía bariátrica

Louis F. Martin, M.D., F.A.C.S., F.C.C.M. Matthew E. Newlin, M.D.


Professor of Surgery, Department of Surgery, Clinical Instructor, Center for Minimally Invasive
Louisiana State University Health Sciences Center, Surgery, Ohio State University Medical School,
New Orleans, Louisiana Columbus, Ohio
Capítulo 8, Implicaciones económicas de la obesidad; Capítulo 54, Áreas de laparoscopia y robótica en cirugía
Capítulo 15, Tratamiento perioperatorio del paciente bariátrica
sometido a cirugía bariátrica
Colaboradores XI

Ninh T. Nguyen, M.D. Jessica Planer, R.D., C.D.N.


Associate Professor of Surgery, University of California Dietician, Surgical Bariatric Center, State University
Irvine School of Medicine, Irvine; Chief, Division of of New York Upstate Medical University Hospital,
Gastrointestinal Surgery, University of California Irvine Syracuse, New York
Medical Center, Orange, California Capítulo 16, Asistencia postoperatoria del paciente sometido
Capítulo 33, Cirugía bariátrica abierta frente a cirugía bariátrica
a laparoscópica
Walter J. Pories, M.D., F.A.C.S.
Paul E. O’Brien, M.D., F.R.A.C.S. Professor of Surgery and Biochemistry, Department
Director, Center for Obesity Research and Education, of Surgery, East Carolina University
Monash University Medical School, Alfred Hospital, School of Medicine, Greenville, North Carolina
Melbourne, Victoria, Australia Capítulo 42, Resolución de las patologías comórbidas
Capítulo 41, Resultados nutricionales de la cirugía bariátricas: diabetes
bariátrica;
Capítulo 45, Alteraciones ortopédicas y obesidad; cambios Vivek N. Prachand, M.D.
con la pérdida de peso Assistant Professor of Surgery, University of Chicago
Hospitals and Health System, Chicago, Illinois
J. Patrick O’Leary, M.D. Capítulo 12, Selección de pacientes para cirugía bariátrica
Professor of Surgery; Chair, Department of Surgery,
Louisiana State University School of Medicine, Lipi Ramchandani, M.B.B.S.
New Orleans, Louisiana Visiting Research Scholar, Department of Anesthesiology,
Capítulo 15, Tratamiento perioperatorio del paciente Medical School of the University of Minnesota,
sometido a cirugía bariátrica Minneapolis, Minnesota
Capítulo 14, Consideraciones sobre anestesia en la obesidad
Horacio E. Oria, M.D., F.A.C.S.
Private Practice, Department of Surgery, Spring Branch Stewart E. Rendon, M.D.
Medical Center, Houston, Texas Formerly, Department of Surgery, East Carolina
Capítulo 40, Seguimiento a largo plazo y valoración University School of Medicine, Greenville,
de resultados en cirugía bariátrica North Carolina
Capítulo 42, Resolución de las patologías comórbidas
John T. Paige, M.D. bariátricas: diabetes
Assistant Professor of Clinical Surgery,
Louisiana State University School of Medicine, Hector Rodriguez, M.D.
New Orleans, Louisiana Department of Anesthesia, Valley Hospital,
Capítulo 15, Tratamiento perioperatorio del paciente Ridgewood, New Jersey
sometido a cirugía bariátrica Capítulo 13, Preparación preoperatoria del paciente de
cirugía bariátrica
Francesco Papadia, M.D.
Assistant Professor of Surgery, Università di Genova, Tomasz Rogula, M.D., Ph.D.
Ospedale San Marino, Genoa, Italy Clinical Instructor of Surgery, Department of Surgery,
Capítulo 29, Derivación biliopancreática Minimally Invasive Surgery Center, University of
Pittsburgh Medical Center, Pittsburgh, Pennsylvania
John R. Pender, IV, M.D. Capítulo 23, Situación actual de la derivación gástrica
Clinical Assistant Professor of Surgery, Brody School of laparoscópica
Medicine at East Carolina University; Attending
Surgeon, Pitt County Memorial Hospital, Greenville, Martin Sanguinette, M.D.
North Carolina Center for Surgical Treatment of Obesity, Tri-City
Capítulo 43, Resolución de las patologías comórbidas Regional Medical Center, Hawaiian Gardens, California
bariátricas: hipertensión Capítulo 27, Derivación gástrica con banda

Athanassios Petrotos, M.D. Heena Santry, M.D.


Attending Surgeon, Greenwich Hospital, Greenwich, Resident, General Surgery, University of Chicago:
Connecticut The Pritzker School of Medicine, Chicago, Illinois
Capítulo 46, Resultados metabólicos de la cirugía Capítulo 12, Selección de pacientes para cirugía bariátrica
bariátrica
XII Colaboradores

Michael G. Sarr, M.D. Janos Taller, M.D.


Professor of Surgery, Mayo College of Medicine; Laparoscopic Associates of San Francisco,
Consultant and Surgeon, Director, Obesity Surgery San Francisco, California
Program, Mayo Medical Center, Rochester, Capítulo 31, Procedimientos laparoscópicos de cruce
Minnesota duodenal y gastrectomía tubular
Capítulo 51, Equipo multidisciplinar en un programa
de cirugía bariátrica Paul A. Thodiyil, M.D., F.R.C.S.
Assistant Professor of Surgery, University of Pittsburgh
Philip R. Schauer, M.D. School of Medicine; Attending Staff, Assistant Professor,
Professor of Surgery, Director, Advanced Laparoscopic University of Pittsburgh Medical Center, Magee
and Bariatric Surgery, The Cleveland Clinic Foundation, Women’s Hospital, Pittsburgh, Pennsylvania
Cleveland, Ohio Capítulo 23, Situación actual de la derivación gástrica
Capítulo 23, Situación actual de la derivación gástrica laparoscópica
laparoscópica
Jarl S. Torgerson, M.D., Ph.D.
Bruce David Schirmer, M.D. Associate Professor, Goteborg University,
Stephen H. Watts Professor of Surgery, Vice-Chair, Göteborg, Sweden; Head, Department of Medicine,
Program Director, Department of Surgery, University Northern Alvsborg Hospital, Trollhattan, Sweden
of Virginia Health System, Charlottesville, Virginia Capítulo 6, Longevidad y obesidad
Capítulo 35, Estenosis y úlceras marginales en cirugía
bariátrica Mary Lou Walen
Bariatric Program Director, Lenox Hill Hospital,
Nicola Scopinaro, M.D. New York, New York
Professor of Surgery, Università di Genova, Capítulo 52, Equipo de ciencias afines
Ospedale San Martino, Genoa, Italy en cirugía bariátrica
Capítulo 29, Derivación biliopancreática
Marguerite Walser, F.N.P.
Scott A. Shikora, M.D. Clinical Coordinator, State University of New York
Professor of Surgery, Tufts University School of Upstate Medical University, Surgical Bariatric Center,
Medicine, Tufts-New England Medical Center, Syracuse, New York
Boston, Massachusetts Capítulo 16, Asistencia postoperatoria al paciente sometido
Capítulo 32, Estimulación gástrica implantable a cirugía bariátrica
para el tratamiento de la obesidad mórbida
Otto L. Willbanks, M.D., F.A.C.S.
Myur S. Srikanth, M.D. Clinical Professor, University of Texas Health Science
St. Francis Community Hospital, Federal Way, Center at Dallas: Baylor University Medical Center,
Washington Dallas, Texas
Capítulo 36, Fugas y alteración gástrica en cirugía bariátrica Capítulo 55, Cuestiones de responsabilidad legal en la
cirugía bariátrica
Thomas A. Stellato, M.D., M.B.A.
Professor of Surgery, Charles A. Hubay Professor of Michael Williams, M.D.
Surgery, Case University School of Medicine; Director, Staff Surgeon, Emory-Dunwoody Medical Center,
Division of General Surgery, University Hospitals of Atlanta, Georgia
Cleveland, Cleveland, Ohio Capítulo 21, Gastroplastia vertical con banda laparoscópica
Capítulo 39, Procedimientos complementarios en la cirugía
bariátrica Bruce M. Wolfe, M.D.
Professor of Surgery; Chief, Division of Gastrointestinal
Amir Szold, M.D. and Laparoscopic Surgery, University of California,
Senior Staff, Department of Surgery, Tel Aviv Sourasky Davis, Medical Center, Sacramento, California
Medical Center; Sacular School of Medicine, Tel Aviv Capítulo 9, Tratamiento dietético de la obesidad;
University, Tel Aviv, Israel
Capítulo 33, Cirugía bariátrica abierta frente
Capítulo 44, Resolución de las patologías comórbidas a laparoscópica
bariátricas: apnea del sueño
Prefacio

En esta primera década del siglo XXI hay tres datos indu- ción completa dedicada a las reintervenciones en cirugía
dables acerca de la obesidad: 1) existe una epidemia glo- bariátrica y sus posibles complicaciones.
bal de obesidad y, en concreto, de obesidad mórbida; Los resultados de la cirugía bariátrica en aspectos
2) las disciplinas de modificación de la conducta, control como la nutrición, la diabetes, la hipertensión, la apnea del
de la dieta, ejercicio y tratamiento farmacológico no han sueño, los trastornos ortopédicos o el metabolismo se reco-
conseguido, ni solas ni combinadas, resolver esta epide- gen con gran detalle. La creciente incidencia de la obesidad
mia a largo plazo –la cirugía (bariátrica) es el único tra- infantil se pone de relieve en un capítulo centrado en los
tamiento que en este momento tiene una eficacia a largo pacientes adolescentes sometidos a cirugía bariátrica. Dado
plazo demostrada–, y 3) la cirugía bariátrica, desde su que la cirugía bariátrica se ha convertido en una especiali-
aparición hace unos cincuenta años, se encuentra en un dad multidisciplinar, ofrecemos una orientación sobre la
estado de evolución constante. formación práctica y académica de los cirujanos bariátricos,
Dado que existen múltiples abordajes fisiológicos y los grupos de apoyo para los pacientes, la importancia del
posiblemente bioquímicos, hormonales y neurogénicos, trabajo en equipo, la asistencia dirigida, la ayuda de profe-
dentro del arsenal quirúrgico, y dado que las técnicas para sionales sanitarios afines, la importancia de las áreas de
conseguir el abordaje quirúrgico elegido son múltiples, no laparoscopia y la robótica, los aspectos relacionados con la
existe una cirugía de referencia. Por tanto, este libro responsabilidad legal, etc. Este libro permitirá al lector
–Tratamiento quirúrgico de la obesidad– es, en parte, una obtener los conocimientos esenciales para comprender el
obra de historia que trata de dar al lector una idea de lo que campo de la cirugía bariátrica y poder ofrecer a sus pacien-
sucede en este momento; en parte, una introducción al tes los mejores resultados posibles.
campo actual de la cirugía bariátrica y sus relaciones con la ¿Por qué es el momento adecuado para publicar este
sociedad; en parte, una guía sobre cómo se realizan las libro? La cirugía bariátrica, aunque es una especialidad con
intervenciones quirúrgicas más habituales, y de forma entidad demostrada, encuentra resistencias, limitaciones y,
general, se basa en cómo abordar el cuidado del paciente en este momento, se utiliza relativamente poco. Las
para conseguir resultados seguros y excelentes, con huma- 200.000 intervenciones bariátricas que se realizan cada año
nidad y conocimientos en evolución. en EE. UU. pueden parecer muchas. Sin embargo, si se pien-
Este texto realiza una cobertura exhaustiva de la ciru- sa que existen aproximadamente 20 millones de pacientes
gía bariátrica, contando con el trabajo de más de noventa susceptibles de recibir este tipo de intervención según los
expertos internacionales. El contenido de sus capítulos criterios actuales de selección que consisten en presentar un
refleja sus ideas personales, que no se corresponden de for- índice de masa corporal (IMC) superior a 40 kg/m2 o supe-
ma necesaria con los conceptos o las prácticas de otros rior a 35 kg/m2 en presencia de patologías asociadas impor-
expertos en este campo. Por ejemplo, los criterios para la tantes, esta cifra de 200.000 intervenciones sólo corresponde
selección de los pacientes (capítulo 12) funcionan adecua- al 2% de la población susceptible de tratamiento. En otros
damente para estos autores y se pueden considerar una muchos países, incluso un 2% es un valor elevado y, en algu-
recomendación útil; otros grupos pueden seguir unas pau- nos, el porcentaje de pacientes con indicación de tratamiento
tas distintas que también resultan eficaces. Los 56 capítu- quirúrgico que pueden ser atendidos de este modo dentro
los de esta obra se dividen en las siguientes secciones: del sistema sanitario local es cero. ¿Se podría permitir cual-
«Introducción», «Consecuencias», «Tratamiento no qui- quier sistema sanitario, el estadounidense o el de cualquier
rúrgico», «Asistencia preoperatoria, perioperatoria y posto- otra nación desarrollada, tratar sólo a un 2% o menos de sus
peratoria», «Intervenciones», «Reintervenciones y compli- pacientes diabéticos, oncológicos o con una cardiopatía coro-
caciones», «Consideraciones especiales», «Resultados» y naria con repercusión clínica? Se suele criticar a EE. UU.
«Educación, práctica y comunicación». por no contar con una política para el tratamiento del sida en
Tratamiento quirúrgico de la obesidad comienza con un todo el mundo, pero su política para la cirugía bariátrica sólo
análisis exhaustivo de la historia, la incidencia, la demo- es criticada por un puñado de individuos que argumentan la
grafía, la etiología, la biología, las patologías asociadas, la falta de política nacional para una cobertura de cirugía bariá-
longevidad y las implicaciones sociales y económicas de trica que alcance a todos los pacientes con su indicación y que
la obesidad. Posteriormente se analizan aspectos preope- soliciten el tratamiento.
ratorios, perioperatorios y postoperatorios importantes, Aunque la mortalidad quirúrgica y perioperatoria (en
antes de describir en detalle cómo se realizan todos los treinta días) por cirugía bariátrica es extremadamente baja,
procedimientos bariátricos. El comentario sobre la evolu- incluso inferior a la mortalidad en los treinta primeros días
ción de las diversas intervenciones bariátricas sigue en tras otras intervenciones abdominales mayores, las muertes
capítulos concretos en los que se analizan las intervencio- y las complicaciones importantes asociadas a ella suelen cen-
nes laparoscópicas para colocación de bandas gástricas trar la atención de los medios de comunicación y se produce
ajustables, la gastroplastia vertical en banda, la derivación una condena injusta de este campo como un procedimiento
gástrica, la derivación biliopancreática y el cruce duode- peligroso, en lugar de considerarlo un proceso que salva y
nal, entre otras opciones quirúrgicas. Se incluye una sec- mejora la vida de los pacientes.
XIII
XIV Prefacio

Es frecuente que los pacientes con obesidad mórbida a hacerlo. Mientras que las adicciones a sustancias o los estilos
muestren trastornos patológicos asociados, como diabetes de vida que ocasionan enfermedades se consideran enferme-
tipo 2, hiperlipidemia, hipertensión y apnea obstructiva del dades, se tratan como tales y están libres del estigma de ser
sueño. El tratamiento no quirúrgico de elección en la actua- consideradas como una falta de personalidad que resulta con-
lidad para estos pacientes consistiría en dietas para la obesi- denable, el individuo con una predisposición genética a la
dad (en general, ineficaces), hipoglucemiantes orales o insu- obesidad por un consumo excesivo de alimento, aspecto fun-
lina para la diabetes (paliativo), estatinas para la hiperlipidemia damental para la supervivencia de todas las personas, sigue
(paliativo), fármacos antihipertensivos (paliativo) y dispositi- estando condenado al desprecio, el ostracismo y la ocultación.
vos que administran presión positiva continua en la vía aérea Es cierto que ridiculizar a los obesos es el último prejuicio
(CPAP) para la apnea obstructiva del sueño (paliativo). Con permitido a nivel legal y público, e incluso fomentado en
el tiempo, el coste generado por estos tratamientos múltiples algunas ocasiones, que persiste en las sociedades occidentales.
llegaría a ser desorbitado y posiblemente prohibitivo, y los De momento, no vivimos en comunidades que acepten que la
pacientes con obesidad mórbida, diabetes, hiperlipidemia, obesidad es una enfermedad.
hipertensión y apnea obstructiva del sueño seguirían evolu- La única opción para liberarse de la ignorancia y los pre-
cionando hasta morir de forma precoz. La cirugía bariátrica juicios es el conocimiento. Esperamos que, de un modo
ofrece esta misma resolución individual y posiblemente la modesto, este exhaustivo libro aporte conocimientos a un
curación de estos cinco trastornos en una sola intervención campo en lucha, que está saliendo de su infancia con un gran
sin necesidad de realizar tratamientos paliativos durante toda potencial para actuar bien y permitir el progreso. Si
la vida. Tratamiento quirúrgico de la obesidad permite avanzar en el
No sólo la cirugía bariátrica sigue luchando por conse- reconocimiento de la obesidad como una enfermedad y de la
guir su reconocimiento, sino que incluso la propia obesidad, cirugía bariátrica como su solución, habremos hecho nuestro
y más en concreto la obesidad mórbida, está luchando para ser trabajo y servido a la comunidad médica.
reconocida como una enfermedad. Se llama enfermedad a la
adicción a drogas, el alcoholismo, el juego compulsivo y el
tabaquismo. Sin embargo, hace poco que las agencias sanita- Henry Buchwald, M.D., Ph.D.
rias nacionales han empezado a considerar la obesidad como George S.M. Cowan, Jr., M.D.
una enfermedad, encontrando incluso una reticencia notable Walter J. Pories, M.D.
Agradecimientos

En primer lugar y ante todo, los directores deseamos dar las de cada capítulo y su correspondiente edición. No podría-
gracias a los autores de los capítulos, que son pioneros y líde- mos haber hecho el libro sin ella.
res de la cirugía bariátrica en todo el mundo. Su aportación Deseamos también expresar nuestro agradecimiento a
incluye conocimientos actualizados sobre sus respectivos Stewart E. Rendon, M.D., y John R. Pender, M.D., quienes
temas, perspectivas históricas, técnicas detalladas, comenta- fueron de gran ayuda en la edición de la obra.
rios acerca de los pacientes y los aspectos sociales, económi- Necesitamos la orientación y capacidad organizativa de
cos y académicos de los temas incluidos en Tratamiento qui- la Sra. Danette Oien, secretaria del Dr. Buchwald y una
rúrgico de la obesidad. Hemos evitado la uniformidad de fuente inagotable de eficiencia y capacidad comunicativa, y
estilo y lenguaje en esta obra y hemos permitido a los auto- le estamos agradecidos por ello.
res expresarse a su modo en sus capítulos, para dar al lector Ha sido un placer trabajar con el personal de Elsevier.
una idea de las personalidades únicas de estos individuos y Deseamos dar las gracias de forma especial a Joe Rusko por
de la elaboración de su proceso de pensamiento. adquirir los derechos de esta obra para Elsevier; a Janine
Sin embargo, para que el libro se pueda leer resulta fun- Kusza por conseguir que casi cumpliéramos los plazos; a
damental la edición y, por tanto, tenemos que expresar nues- Mary Anne Folcher por convertir todas las partes en una
tro agradecimiento a Jane N. Buchwald de MEDWRITE unidad, y sobre todo, a Judy Fletcher por su profesionalidad,
Communications, Inc., por la laboriosa y detenida lectura apoyo, asesoramiento y capacidad de adaptación.

XV
1
Perspectivas históricas
Edward E. Mason, M.D., Ph.D., F.A.C.S.

El tratamiento quirúrgico de la obesidad comenzó a desarro- Las primeras operaciones utilizadas en el tratamiento de
llarse a partir de la idea de que restringiendo la ingesta, indu- la obesidad no eran totalmente nuevas. Estaban fundadas en la
ciendo malabsorción, o por ambos medios, era posible reducir experiencia, siguiendo la tradición de la Introduction to
el peso corporal y mantener esa reducción. La primera inter- Experimental Medicine, elaborada por Claude Bernard en 1865.
vención fue la derivación intestinal, que hizo uso del «síndro- Conocíamos muchas de las complicaciones que debían ser
me de intestino corto», resultado de una resección intestinal prevenidas, diagnosticadas o tratadas. El componente de deri-
amplia por cáncer o por pérdida de la perfusión sanguínea vación era nuevo y condujo a nuevos problemas, principal-
intestinal. Debido a que el intestino fue derivado en vez de mente sobrecrecimiento bacteriano en el intestino derivado,
extirpado, la intervención resultó ser reversible, lo que supuso lo que contribuía al desarrollo de insuficiencia hepática, cirro-
una referencia importante para todas las intervenciones poste- sis, enfermedad renal, enfermedad autoinmune y otras com-
riores realizadas para controlar el peso corporal. plicaciones propias de la derivación intestinal. Esta cuestión
En 1954, cuando la utilización de la derivación intesti- dio lugar a la sustitución casi completa de la derivación intes-
nal fue mencionada por primera vez en una reunión de la tinal por las operaciones de estómago.
American Surgical Association, la obesidad no era reconocida La creación de alteraciones de la ingestión, digestión y
como enfermedad.1 La idea de que la obesidad era una absorción de nutrientes esenciales con la derivación del intestino
patología susceptible de ser tratada con éxito mediante (1954) o del tracto digestivo superior (1966) presentaba poten-
cirugía fue aceptada inicialmente sólo para los obesos graves. ciales complicaciones, como malnutrición proteica, desequili-
Ellos acogieron favorablemente el alivio de su morbilidad, de brio de líquidos y eletrólitos, enfermedad metabólica ósea y
sus repetidos fracasos con las dietas y de la falta de respeto daños neurológicos (síndrome de Wernicke-Korsakoff). Los
que la sociedad les demostraba. La profesión médica aceptó cirujanos, por consiguiente, estaban obligados a convertirse en
gradualmente la cirugía de la obesidad, una vez establecido expertos en la prevención, reconocimiento y tratamiento tanto
el hecho de que suponía una solución para las complicaciones de la malnutrición como de la obesidad. Los pacientes necesita-
y la morbilidad que necesitaban tratamiento, solución que ban información sobre los riesgos y beneficios de las operacio-
hasta entonces no había sido posible. nes que les eran recomendadas. La acumulación de datos sobre
En diciembre de 1994, enviamos cuestionarios a todos resultados de la experiencia de cada cirujano aumentó en impor-
los catedráticos de departamentos universitarios de cirugía tancia. Una reunión anual de cirujanos comprometidos con el
de EE. UU. Sus respuestas indicaban que la cirugía de la cuidado de los obesos graves culminó, en 1983, con la constitu-
obesidad era aceptada por un 74% de los que respondieron ción de la American Society for Bariatric Surgery. En 1986 se fun-
(también un 74%).2 Este porcentaje era muy inferior al que dó el National Bariatric Surgery Registry (posteriormente,
se refería a la obligatoriedad de tratamiento quirúrgico para International Bariatric Surgery Registry) para ayudar a los ciruja-
el cáncer o para otros numerosos estados patológicos y nos en la obtención, análisis y comparación de los resultados. En
enfermedades letales. Sin embargo, en muchos hospitales se la actualidad son muchas las sociedades nacionales de la cirugía
realizan actualmente más intervenciones de estómago desti- de la obesidad, existe una International Federation for Surgery of
nadas a tratar la obesidad que centradas en cualquier otra Obesity, y hay dos revistas sobre cirugía de la obesidad (Obesity
patología; probablemente, el porcentaje notificado en 19962 Surgery and Surgery of Obesity and Related Diseases).
habrá aumentado de forma notable desde entonces.
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

Según el National Health and Nutrition Examen Sur-


vey (NHANES), la prevalencia de un índice de masa corpo- Z DERIVACIÓN INTESTINAL
ral (IMC) de 30 kg/m2 o superior entre 1960 y 1980 era
aproximadamente del 15% de la población en EE. UU. La En 1954, Kremen y cols. expusieron los resultados de un estu-
prevalencia comenzó a aumentar después de 1980 y en torno dio realizado en perros, que comparaba la derivación de yeyu-
a 1999-2000 había llegado al 30,5% de la población.3 Flegal y no con la derivación de íleon, con y sin la válvula ileocecal.1
Troiano observaron que el aumento de peso estaba en el extre- Kremen mencionó que un paciente había sido tratado de obe-
mo cuantioso de la distribución.4 Ello sugería la combinación sidad con derivación intestinal. El autor estaba preocupado
de una serie de importantes condicionantes ambientales pro- por los efectos de la extensa pérdida de función del intestino
fundos y de una población altamente susceptible. Por otra delgado, pero el resultado final del estudio fue el tratamiento
parte, los pacientes operados son de mayor peso cada año.5 quirúrgico de la obesidad. El mentor de Kremen en la
3
4 Sección I • INTRODUCCIÓN

Universidad de Minnesota, donde se realizó este estudio, fue péptica. Una de las complicaciones que causó que los cirujanos
Richard L. Varco. Owen H. Wangensteen había solicitado la dejaran de utilizar el BII para el tratamiento de las úlceras era la
ayuda de Varco para el tratamiento de la malnutrición subsi- excesiva pérdida de peso, debida a carencias en la ingesta. El
guiente a la amplia resección de intestino necesaria en el tra- síndrome de vaciamiento gástrico rápido, resultante de la pérdi-
tamiento del cáncer y de otras enfermedades. El proyecto da del control pilórico del tránsito de los alimentos al intestino
experimental de Kremen hizo posible establecer comparacio- delgado, era parte de la explicación de las citadas carencias. Otra
nes en un mismo animal y no entre animales distintos, ya que era la pérdida de la capacidad gástrica. La rotura del muñón
la derivación del yeyuno (o íleon) se mantenía como una fís- duodenal fue una de las complicaciones del postoperatorio
tula de Thiry-Vella, que podía ser intercambiada por la otra inmediato de la gastrectomía BII para la úlcera péptica. La deri-
mitad. John Linner, uno de cuyos pacientes fue intervenido vación del duodeno en la gastrectomía BII dio lugar a complica-
de obesidad, ayudó a Kremen en el trabajo de laboratorio y ciones tardías por anemia ferropénica y enfermedad metabólica
más tarde se convirtió en uno de los más destacados exponen- ósea. El asa de la gastroentorostomía causaba gastritis debida a
tes del tratamiento quirúrgico de la obesidad. Según Buchwald, la bilis y al jugo pancreático alcalino que entraba en el reservo-
un paciente de Varco fue realmente el primero en someterse rio. Sin embargo, la pauta era utilizar un «asa corta», una gas-
a derivación intestinal.6 troenterostomía retrocólica para proporcionar la amortiguación
Payne y cols. generalizaron la derivación intestinal del ácido en el lugar de entrada de ácido al yeyuno.
como tratamiento para la obesidad. Al principio derivaron la La primera derivación gástrica para el tratamiento de la
mayor parte del intestino delgado y parte del colon median- obesidad era una copia de la intervención utilizada por
te anastomosis de yeyuno a colon transverso.7 El plan inicial Wangensteen para el tratamiento de la úlcera péptica, salvo
era restablecer la continuidad intestinal después de que el por el hecho de que el estómago era derivado en lugar de extir-
paciente alcanzase un peso normal. La recuperación rápida pado.11 Diez años después de la primera derivación gástrica,
de peso causó pronto un cambio en favor de la utilización de Hornberger se refirió a un «procedimiento técnicamente difícil
una derivación yeyunoileal permanente. Payne mencionó a y tedioso hecho en el ático de la cavidad peritoneal». Él llegó a
V. Henrickson, cirujano de la ciudad sueca de Gotemburgo, la conclusión de que «con una cuidadosa atención al detalle en
que resecó «una cantidad adecuada de intestino delgado» a el pre-, intra- y postoperatorio, es razonablemente seguro, eficaz
causa de la obesidad y la pérdida de peso inducida, pero que y relativamente libre de complicaciones intratables».12 Durante
constató una situación de difícil equilibrio nutricional. los primeros años de este tipo de intevenciones, el estómago se
Payne y muchos otros cirujanos estudiaron modificar las dividía y se invertía por encima y por debajo de la separación con
longitudes de yeyuno e íleon funcionales. Finalmente, las dos filas de suturas interrumpidas. La introducción de grapado-
longitudes más habituales se establecieron en 35 cm para el ras lineales fue un gran avance. Alden simplificó aún más la
yeyuno y en 10 cm para el íleon. intervención mediante la realización de una gastroenterostomía
La bibliografía fue cambiando gradualmente, pasando de alta como primer paso de la intervención, seguida por el grapa-
los estudios sobre diseño óptimo y resultados preliminares al do del estómago en continuidad inmediatamente por debajo de
desarrollo de informes sobre complicaciones. No hubo ningu- la anastomosis.13 El grapado en continuidad redujo los riesgos
na combinación de longitudes que proporcionase la deseada operatorios ya que, si se producía una ruptura de la línea de
reducción de peso sin que se registraran excesivas complica- grapas, el resultado sería una fístula entre el reservorio y el estó-
ciones. La digestión y absorción de grasas estaban deteriora- mago, y no una peritonitis. Sin embargo, era importante conse-
das, en la medida en que se formaban jabones de calcio; ello guir una separación más segura. Harris y cols. observaron que
favorecía que el oxalato (que normalmente precipita con calcio cuatro hileras de grapas con 2 mm de espacio entre ellas propor-
y se excreta en las heces) se absorbiera y fuera excretado a cionaba la división más segura.14 Ello fue posible gracias a la
través de los riñones, en los que se combinaba con calcio en el producción comercial de una grapadora dotada de un cartucho
tejido renal y formaba cálculos en el sistema urinario. Una que contenía cuatro hileras de grapas, diseñada específicamente
enfermedad autoinmune (causada por la absorción productos para su utilización en la cirugía de la obesidad.
de degradación de bacterias y proteínas en el intestino) tam- Terry comenzó midiendo el reservorio.15 Durante toda la
bién dañaba los riñones, y algunos pacientes requirieron por historia de la gastrectomía nunca se había abordado la medición
ella diálisis y trasplante renal. En este contexto se desarrollaba del volumen del reservorio, factor ciertamente esencial para el
una malnutrición proteica, que contribuía al desarrollo de tratamiento de la obesidad. Con reservorios no medidos, los
lesión hepática debida a la acumulación de grasa. Hubo daños pacientes perdían peso durante meses o un año, y luego comen-
inducidos por los productos del sobrecrecimiento bacteriano zaban a recuperarlo. Al realizar una revisión, el reservorio
que llegaban al sistema sanguíneo portal y causaban cirrosis podría presentar cifras sorprendentes de capacidad como
y, ocasionalmente, necesidad de trasplante hepático. La 800 mL o más. El reservorio se redujo entonces a una medida
anastomosis de la vesícula biliar al extremo superior de la de 60 mL y a una presión de 70 cm de agua, y el peso disminu-
derivación intestinal disminuyó la diarrea y redujo el sobre- yó de nuevo. Aprendimos que los reservorios no sólo tenían que
crecimiento bacteriano.8, 9 Cleator cerró el extremo superior medirse, sino que tenían que ser pequeños. Estas observaciones
del intestino derivado pero anastomosó el extremo inferior al requirieron varios años, incluyendo la experiencia con la deri-
estómago para disminuir el retrolavado de bacterias.10 Los vación gástrica y la gastroplastia, antes de que llegásemos a un
cálculos de oxalato se mantuvieron como complicación en la reservorio de 30 mL o menos, para la derivación gástrica, y de
derivación yeyunoileal e ileogastrostomía de Cleator. 20 mL o menos, para la gastroplastia. En este contexto se redes-
cubrió la importancia de la aplicación mecánica de la ley de
Laplace (la tensión de la pared [T] es proporcional al producto
Z DERIVACIÓN GÁSTRICA de la presión intraventricular [P] por el radio ventricular [r]:
T ~ P ⫻ r). Wangensteen demostró que la razón por la que el
La gastrectomía Billroth II (BII) fue el precedente de la deriva- ciego es el lugar de perforación en la obstrucción de colon era
ción gástrica y ha generado más de 50 años de bibliografía refe- que la tensión de la pared que causaba la rotura estaba relacio-
rida a su utilización en el tratamiento del cáncer y de la úlcera nada con el radio. Para la cirugía de la obesidad, cuanto más
Capítulo 1 • Perspectivas históricas 5

amplio era el reservorio, más se dilataba, precisamente por esta Z PERFECCIONAMIENTO DE LA DERIVACIÓN
relación de la tensión con el radio. La única forma segura de GÁSTRICA
mantener un reservorio de dimensiones reducidas era hacerlo
pequeño desde el principio. Cummings destacó la importancia Las primeras intervenciones de derivación gástrica se basaban
de la localización de la potente hormona orexigénica (del ham- en lo que yo había aprendido como interno de cirugía en rela-
bre), la grelina, en la construcción del reservorio.16 En teoría, el ción con la gastrectomía para la úlcera, tal como la realizaba
fundus debería ser excluido del reservorio con el fin de reducir Wangensteen en 1945, salvo por el hecho de que el estómago
la secreción de grelina a un valor tan bajo como fuera posible. distal se dejaba en su lugar y la pérdida de peso se convertía en
La grelina presenta su mayor concentración en el fundus. Tanto una ventaja en vez de en una complicación. La reconstrucción
un reservorio muy pequeño como un reservorio más largo ver- se realizaba utilizando un asa aferente corta, con gastroyeyu-
tical a lo largo de la curvatura menor del estómago deberían nostomía terminolateral retrocólica, practicada entre el extre-
excluir el fundus. mo de la curvatura mayor del reservorio del estómago secciona-
do y la zona de yeyuno superpuesta en el lugar donde el
Úlceras del estoma resultantes de la exclusión ligamento de Treitz había sido seccionado. El estómago se sec-
cionaba y el extremo distal se cerraba con una doble hilera de
Antes de que pudiera utilizarse la derivación gástrica para el suturas interrumpidas. El mesocolon se suturaba al reservorio
tratamiento de la obesidad, era necesario determinar su efec- gástrico por encima de la gastroenterostomía. Se cerraban todos
to sobre la secreción de ácido y sobre la ulceración del estoma. los lugares de posibles hernias internas. El primer informe refe-
Eiselberg, un alumno y colaborador de Billroth, comenzó en rido a experiencias de derivación gástrica procedentes de lugares
1895 a dividir el estómago por encima del antro en pacientes distintos de la ciudad de Iowa lo realizó Hornberger en 1976,
con cánceres inoperables. Cerró el antro y anastomosó la par- sobre la base de la experiencia acumulada en su práctica privada
te superior del estómago con un asa yeyunal. También utilizó en Waterville, Maine.12 Varios documentos elaborados por
esta intervención para el tratamiento de la úlcera péptica en otros cirujanos comenzaron a aparecer en 1977, y uno de ellos
dos pacientes. Wangensteen examinó los antecedentes de la fue una comparación, efectuada por Griffen y cols., entre
producción de úlceras del estoma por operaciones de exclu- DGYR y derivación intestinal.21 Griffen prefería la reconstruc-
sión, incluyendo una serie de estudios realizados en la ción en Y de Roux al asa de gastroyeyunostomía, ya que impedía
Universidad de Minnesota que demostraban que la vagotomía que la bilis y el jugo pancreático, entrasen en el reservorio del
no prevenía el desarrollo de tales úlceras.17 estómago. Si se producía una fuga en el reservorio, era más fácil
La úlcera estomal era frecuente cuando se utilizaba la gas- de manejar si no presentaba bilis y jugo pancreático, drenando
troenterostomía para el tratamiento de la úlcera duodenal. la zona. Buckwalter publicó otra comparación entre derivación
Después de una derivación gástrica, en caso de que se desarro- intestinal y derivación gástrica.22 Ambos estudios llevaron a una
llara una comunicación entre el reservorio del estómago y la preferencia inicial por la derivación gástrica y la derivación
porción distal del estómago, la incidencia de úlcera del estoma yeyunoileal. Los pacientes con derivación gástrica se sentían
era tan alta que se recomendaba el cierre de la fístula, incluso más fuertes y podían comer una dieta adecuada en un plazo más
antes de que se desarrollase una úlcera.18 Ello justifica la divi- breve. La diarrea era poco habitual después de la derivación gás-
sión del estómago y la interposición de la rama alimentaria trica, mientras que era frecuente tras derivación intestinal.
entre el reservorio y la parte distal del estómago cuando se
realiza una derivación gástrica en Y de Roux (DGYR).19 Derivación gástrica en Y de Roux laparoscópica
Supresión de gastrina Wittgrove introdujo la DGYR laparoscópica en 1994. 23
Había habido un aumento inicial de la utilización de la
Un primer experimento en laboratorio, desarrollado en la DGYR, motivado por la búsqueda de una mayor pérdida de
Universidad de Iowa, fue diseñado para estudiar la secreción peso de la que podía obtenerse mediante intervenciones
ácida estimulada por una comida estándar, antes y después puramente restrictivas. No hay razón para creer que los
de la derivación gástrica. Se crearon reservorios de Pavlov y efectos a largo plazo de la intervención puedan ser diferentes
se determinó la secreción de ácido después de una comida. cuando se realiza por laparoscopia si se exceptúan: 1) el
Una serie de operaciones hicieron posible el establecimiento hecho de que se evitan las hernias incisionales extensas, y
de comparaciones en un mismo animal en vez de entre ani- 2) la disminución de la formación de adherencias. La expo-
males distintos. Los reservorios de Pavlov secretaban muy sición suele ser excelente y no agota a los cirujanos.
poco ácido después de una derivación gástrica de los dos ter-
cios distales, que incluía una parte considerable de la muco- Complicaciones de la derivación gástrica
sa de células parietales (secretoras de ácido) en el segmento
excluido. El tejido constituido por células parietales fue lue- Las complicaciones resultantes de la gastrectomía BII, la
go eliminado, dejando sólo el antro, lo que determinó una intervención antecedente a la derivación gástrica, fueron
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

secreción ácida después de una comida acorde al tipo de fase la razón para que se desarrollara la gastroplastia, iniciada en
intestinal. El antro fue a continuación extirpado, lo que creó 1971. El duodeno es normalmente el principal lugar de absor-
una resección gástrica BII y abolió la respuesta secretora de ción de hierro, por lo que la derivación suele traducirse en una
ácido a una comida. Posteriormente se obtuvo la prueba de- disminución del hierro corporal total y de la hemoglobina. El
finitiva de que la derivación gástrica mantenía suficiente se- hierro por vía oral se precisa comúnmente en el tratamiento
creción de ácido en el estómago distal para suprimir la secre- y, en ocasiones, son necesarios hierro parenteral y transfusio-
ción de gastrina, una vez que se dispuso del análisis de gastrina. nes de sangre. Algunos pacientes requieren el restablecimien-
Nosotros observamos que, antes de la derivación gástrica, la to del tránsito duodenal del alimento. Debido a que la úlcera
gastrina plasmática aumentaba después de una comida, duodenal es una posible causa de anemia ferropénica, tiene
mientras que se veía significativamente menos estimulada interés el acceso al duodeno para proceder a endoscopia y
por una comida después de dicha derivación.20 estudio radiológico. Puede pasarse de forma retrógrada hacia
6 Sección I • INTRODUCCIÓN

la zona un endoscopio largo pediátrico. Algunos cirujanos torio animal. La diferencia es que Scopinaro extirpaba gran
colocan un marcador radiopaco en la zona de una gastrosto- parte del estómago distal y evacuaba el pequeño reservorio
mía distal provisional para utilizarlo en inyección percutánea gástrico restante en el intestino delgado distal, mientras que el
de contraste o incluso para el paso de un gastroscopio.24 Las procedimiento de Mann y Williamson optaba por el vaciado
hemorragias graves pueden requerir una intervención urgen- del estómago completo en el intestino delgado distal. La seme-
te con un diagnóstico de presunción de úlcera duodenal. janza entre ambos procedimientos era la amplia separación de
Normalmente, el calcio también es absorbido con la máxi- las zonas en las que los jugos digestivos ácidos y alcalinos dre-
ma eficacia en el duodeno. Como resultado de ello, la derivación nan y pueden mezclarse en el intestino delgado. Normalmente,
gástrica aumenta el riesgo de enfermedad metabólica ósea.25 el píloro permite que pequeñas cantidades de contenido gás-
A diferencia de la anemia, la depleción de los huesos puede cur- trico entren en el duodeno, donde se mezclan con la bilis y el
sar sin síntomas hasta que aparecen fracturas patológicas en jugo pancreático. El ácido es neutralizado y se vuelve inocuo.
costillas, columna vertebral o caderas. El hiperparatiroidismo En el tratamiento de la úlcera péptica, Wangensteen hizo hin-
secundario se cita en diversos informes de casos, por lo que capié en el asa corta de la gastroenterostomía retrocólica de
debería detectarse durante el seguimiento, para que pudiera ser modo que las secreciones duodenales estuvieran cerca y dispo-
tratado antes de que ocurran cambios óseos graves.26 El pacien- nibles para amortiguar el ácido en el estoma. La DBP colocaba
te informado es a menudo el único que puede garantizar el esta- la mayor parte de intestino delgado entre las zonas de drenaje
blecimiento de una monitorización permanente. Durante la de los jugos ácidos y alcalinos. Scopinaro observó las úlceras
pérdida de peso precoz, los huesos proporcionan calcio debido a estomales tras la DBP y descubrió que respondían a tratamien-
la disminución de la masa ósea. Más tarde, después de que el to médico, rara vez requerían una intervención y disminuían
peso está estable, la ingesta y la absorción inadecuadas de calcio en frecuencia a lo largo del tiempo.
y vitamina D pueden dar lugar a una pérdida ósea continuada. La DBP requiere un minucioso cumplimiento de las indi-
La osteoporosis y la osteomalacia deben ser diagnosticadas y caciones sobre el tamaño recomendado para el reservorio y las
tratadas antes de que se produzcan cambios irreversibles y antes longitudes de la rama desarrollados por Scopinaro. El reservo-
de que los pacientes empiecen a padecer dolor óseo y fracturas rio gástrico es de entre 200 y 500 mL, dependiendo de algunas
patológicas de costillas, columna vertebral o caderas. Cuanto características de los pacientes. El reservorio es mayor que en
más eficaz es la intervención en la reducción del peso, mayor otras intervenciones, porque el paciente debe ingerir 150 g de
riesgo hay de desarrollar enfermedad metabólica ósea. proteína al día para prevenir la malnutrición proteica. La pre-
Existen complicaciones específicas de las intervenciones vención de la enfermedad ósea requiere que el paciente tome
de derivación gástrica, como las úlceras sangrantes en el estoma grandes cantidades de calcio y vitamina D. Scopinaro destaca
y el duodeno, que son poco frecuentes pero pueden ser letales a la importancia de contar con un amplio equipo médico para
corto plazo a menos que se diagnostiquen y operen de forma atender al cuidado de estos pacientes y los riesgos que compor-
urgente. La dilatación gástrica distal, después de derivación ta la variación de la intervención. Se dispone de más informa-
gástrica, ocupó el lugar de la ruptura del muñón duodenal que ción de los efectos a largo plazo de DBP que sobre cualquier
complicaba la gastrectomía BII durante los primeros días del otra intervención para el control de la obesidad. La conversión
postoperatorio. La dilatación gástrica distal se produce en de una intervención con un pequeño reservorio y una rama
aproximadamente uno de cada mil pacientes durante el primer común larga en una operación con reservorio pequeño y
mes después de la intervención, pero sigue constituyendo un rama común corta aumenta el riesgo de malnutrición proteica.
riesgo siempre que la operación permanezca en su lugar. La Fobi y cols. informaron una indicencia del 23% para valores de
obstrucción de la rama biliopancreática crea un segmento albúmina inferiores a 3 g después de que se realizaron tales
cerrado y distensión rápida por jugo gástrico, bilis y jugo pan- cambios para aumentar la pérdida de peso.28 Este efecto puede
creático. La necrosis por presión de las paredes de estas estruc- prevenirse o tratarse, ya sea aumentando el tamaño del reser-
turas puede conducir a la perforación y la muerte en un día si vorio gástrico o prolongando la rama común. La variabilidad
no se reconoce y se descomprimen las paredes. El diagnóstico en la respuesta del paciente a tales cambios en el tamaño del
correcto es más probable si aquellos que atienden al paciente reservorio y en la longitud de la rama común denota que pue-
son conscientes de su posibilidad y hacen todo lo necesario para de necesitarse cirugía ulterior.
descartar la dilatación gástrica distal. El conocimiento de los
pacientes de las bases anatómicas de una obstrucción cerrada Derivación biliopancreática con cruce duodenal
del segmento derivado, así como de la necesidad de detección
precoz y tratamiento operatorio rápido, puede significar la dife- Esta modificación de la DBP mantiene la secuencia normal de
rencia entre la vida y la muerte.27 El paciente debería ser cons- la curvatura menor del estómago, el ancho total de antro, el
ciente de estos signos y síntomas; sin embargo, es mucho espe- músculo del píloro y el duodeno justo por encima de la entrada
rar que esté pendiente de ellos durante toda su vida. de los conductos biliar y pancreático. En este punto, el duodeno
se divide y se hace una anastomosis terminoterminal entre el
Derivación biliopancreática segmento corto de duodeno y los últimos 250 cm de íleon.
El duodeno se cierra justo por encima de la ampolla de Vater,
La derivación biliopancreática (DBP) fue presentada por y el extremo largo de la derivación biliopancreática se anasto-
Scopinaro en Génova en 1976.27 Es una combinación de gas- mosa terminolateralmente al íleon a unos 100 cm del ciego.
trectomía BII y derivación intestinal, y proporciona la mayor Tales pautas se aproximarían a las de la intervención experi-
reducción de peso y el mejor mantenimiento de la disminución mental de Mann y Williamson para la producción de úlcera
de peso, pero requiere la máxima atención durante toda la péptica crónica, si no fuera por la extirpación de la mayor parte
vida, tanto por parte de los pacientes como de los médicos. del estómago que secreta ácido. Para reducir el riesgo de úlcera
Scopinaro visitó la ciudad de Iowa durante la fase inicial de su péptica, se lleva a cabo una resección tubular, extirpando la
aplicación de la DBP. Él y yo hablamos de la similitud entre su zona de la curvatura mayor desde el esófago al antro. Se crea
intervención y una utilizada por Mann y Williamson en 1923 un tubo alargado en la curvatura menor, de forma similar a la
para la producción experimental de úlceras crónicas en labora- gastroplastia para la obesidad de Tretbar, aunque el volumen es
Capítulo 1 • Perspectivas históricas 7

de 250 mL y no debe haber ninguna restricción del tránsito de condujo a una hilera de grapas lineal que era casi vertical,
los alimentos por el largo reservorio. Al igual que la DBP aunque él no utilizó la palabra vertical y no mencionó el
de Scopinaro, la resección parcial gástrica no es reversible. Sin ángulo de His. Para la estabilización del orificio de salida, se
embargo, el control del vaciamiento por el músculo del píloro utilizó un tubo de elastómero de silicona de 2,2 mm de diá-
se conserva. No se sabe aún si el pequeño segmento de duodeno metro externo y 42 mm de longitud. La tunelización fue
que se deja en el flujo del alimento mejora más la absorción de ensartada dos veces con una sutura de polipropileno, que se
hierro y calcio que en la DBP o la DGYR. Hess29 presentó la pasó por el extremo inferior de la hilera de grapas.35 Esta fue
DBP con cruce duodenal y Marceau y cols. han acumulado una afianzada por encima de una sonda 32F.
considerable expernecia utilizándola.30 Laws no indicó nada sobre la tensión aplicada al anudar la
Existe, varios riesgos inherentes a la DBP con cruce sutura. Informó de sus resultados preliminares en nuestra
duodenal y resección gástrica tubular. La disección de los reunión de junio 1982 en la ciudad de Iowa. En aquel momen-
conductos pancreáticos y del duodeno cerca del colédoco to estaba sometiendo a seguimiento a 117 pacientes, en 101 de
supone riesgo de lesión de estas estructuras. La longitud los cuales la gastroplastia anillada con elastómero de silicona
total de estómago e intestino seccionados y grapados aumen- fue la intervención inicial para tratar la obesidad. Los pacien-
ta el riesgo de fugas, peritonitis, abscesos y fístulas. tes permanecían en en el hospital durante un promedio de
6,7 días, lo que permitió disponer de algún tiempo para impar-
tir las correspondientes instrucciones mientras comenzaban a
Z GASTROPLASTIA ingerir fluidos y alimentos en puré. Del total, 20 pacientes
requirieron tratamiento intravenoso por vómitos excesivos.
A principios de 1971, en los comienzos de la gastroplastia en la Hubo erosión de la luz por la anilla en cinco pacientes y dehis-
Universidad de Iowa, la técnica se planteaba como medio para cencia de la línea de grapas en tres. En algunos casos no quedó
minimizar las complicaciones de la derivación gástrica.31 claro si se había producido primero la erosión o la dehiscencia
A finales de ese año, era ya evidente que los pacientes no esta- de la línea de grapas. A lo largo de los 15 meses de observa-
ban perdiendo suficiente peso, por lo que volvimos a realizar ción de estos pacientes, la pérdida de peso fue comparable a la
derivaciones gástricas. Más tarde Gomez recuperó la gastro- obtenida con los DGYR. En retrospectiva, el orificio de salida
plastia horizontal.32 El reservorio era medido y menor que en fue probablemente demasiado pequeño en muchos de estos
1971; se colocó una banda de malla alrededor del orificio de pacientes. Fue posible obtener una pérdida de peso igual a la
salida y se suturó al extremo de la línea de grapas. Se produjo obtenida con DGYR, pero con riesgo de obstrucción.
una obstrucción, por lo que Gomez llegó a la conclusión de Laws aceptó la indicación de Woodward en relación con
que la malla estimulaba en exceso al tejido cicatrizal, que era la la idea de que el tamaño final del orificio de salida dependía
causa de la obstrucción. Así, sustituyó la malla por una sutura de la tensión de la ligadura de la sutura circundante que
seromuscular continua, no absorbible. Una sonda de 32F fue mantenía la tunelización en su lugar.36 Laws también confió
colocada en la luz para proporcionar la calibración mientras se en Daniel Fabito para cambiar de gastroplastia horizontal a
formaba el estoma. En ocasiones, la sutura dio lugar a un ori- vertical. Fabito, que había trabajado con Gomez, observó
ficio de salida demasiado tirante pero, con el tiempo, la sutura que la curvatura menor era más gruesa y estaba mejor posi-
podría migrar hacia dentro de la luz y el orificio de sali- cionada para un reservorio limitado de alimento. Utilizó
da podría llegar a ser demasiado grande. una sutura de polipropileno de 2-0 para estabilizar del orifi-
La experiencia no publicada de John Kroyer, de Long cio de salida y ningún tubular para cubrir la sutura. Laws
Beach, California, me llevó a la utilización de malla de polipro- visitó a Gomez y Fabito en febrero de 1980 y quedó impre-
pileno para la anilla de gastroplastia, aunque sin ningún tipo de sionado por la sencillez de la técnica. Él procedió a desarro-
dispositivo suturado al estómago. Más tarde, supe que Grace llar su propia gastroplastia vertical, con tubos de elastóme-
había utilizado la misma técnica que Kroyer con la gastroplastia ros de silicona añadidos con el fin de retener la sutura de la
horizontal.33 En última instancia, se abandonaron todas las gas- migración a través de la pared del estómago hacia la luz.
troplastias horizontales, ya que era difícil visualizar y dilatar el
orificio de salida endoscópicamente. Se necesitaba un reservorio
que no necesitase dos virajes en ángulo recto del gastroscopio. Z GASTROPLASTIA DE LONG
En la Universidad de Iowa, la razón para abandonar la utiliza-
ción de la gastroplastia horizontal en 1971, después de 1 año, y Michael Long, de Victoria, Australia, desplazó el orificio de
nuevamente en 1980, después de 3 años de utilización, fue una salida de la curvatura mayor a la menor en 1977 y, de forma
tasa de reintervenciones que llegó a ser del 15% al año. gradual, fue cambiando de una línea de grapas horizontal a
una vertical, alcanzando el ángulo de His en 1980, y utili-
Gastroplastia vertical zando dos suturas desnudas a través de la línea de grapas,
circunvalando el orificio de salida al extremo inferior.37
En 1979, Tretbar intentó reducir la capacidad del estómago Jamieson, que era un residente de cirugía que trabajaba con
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envolviendo la curvatura mayor alrededor de la curvatura Long, asumió la intervención en su propia práctica y añadió
menor, como en una funduplicatura de Nissen larga deslizada. una tercera sutura, que amplió el orificio de salida a 22 mm.
El estómago se desenvolvía, pero la idea de un reservorio largo Cuanto más larga era la salida, más mejoraba la pérdida de
y vertical se había implantado en el pensamiento de Tretbar, y peso. Durante los siguientes 20 años Jamieson continuó rea-
comenzó a usar una línea de grapas de 18 cm que se prolongaba lizando la intervención y sometió a seguimiento a más de
desde el ángulo de His y paralela a la curvatura menor.34 No 3000 de estos pacientes, considerando que los resultados
había ninguna anilla de estabilización. Retrospectivamente, eran altamente satisfactorios.38 La intervención no se ha
esta intervención debería ser considerada como un orificio de adaptado a la cirugía laparoscópica, lo que será necesario si
salida de 18 cm sin reservorio. se quiere aumentar la aceptación del procedimiento entre
Laws presentó una gastroplastia con reservorio de pacientes y cirujanos. La evolución de la técnica de Jamienson
50 mL y orificio de salida sobre la curvatura menor. Ello debe seguirse con atención, especialmente en relación con la
8 Sección I • INTRODUCCIÓN

calibración del orificio de salida. La colocación de una sonda Z BANDA GÁSTRICA


de calibre 36F a 38F en el oficio de salida cuando se ligan las
tres suturas impide la obstrucción del orificio de salida. Poco después de que la gastroplastia vertical comenzara a
practicarse, Knolle, Bo y Stadias del Hospital Ulleval de
Gastroplastia vertical con banda Oslo comenzaron a realizar anillado gástrico.42 En él se
pasaba una sonda a través de la boca, con un balón adjunto
Long presentó sus resultados en Génova, en una reunión a fin de que pudiera calibrarse el reservorio a 50 mL de
organizada por Scopinaro en el otoño de 1980. Yo comencé la volumen con un orificio de salida de 9 mm de diámetro.
gastroplastia vertical con banda (GVB), después de dicha Una banda bloqueable de nailon circundada por una próte-
reunión. Decidí utilizar un orificio circular con grapas en el sis vascular de dacrón se envolvía alrededor de la parte
estómago, cerca de la curvatura menor para la colocación de la superior del estómago y se fijaba. La intervención no reque-
grapadora lineal y una anilla de malla de polipropileno que no ría ningún corte o grapado del estómago. Kuzmak desarro-
se suturaría a la pared del estómago.39 Las primeras anillas lló una banda ajustable y un manómetro que se insertaba a
tenían 5 cm de circunferencia. Algunos pacientes fueron rein- través de la boca en el estómago para controlar la tensión y,
gresados a causa de vómitos. La anilla fue aumentada entonces por tanto, el diámetro del orificio de salida cuando la banda
a 5,5 cm y se adoptaron medidas para instruir a los pacientes se apretaba y se bloqueaba en su lugar.43 El orificio de salida
sobre el modo de empezar a comer porciones de alimento más fue de 12,5 mm de diámetro. La banda ajustable se constru-
pequeñas; para ello se utilizó un vaso de medicamentos para yó con una vejiga inflable en la superficie interna que se
medir el alimento. Los pacientes permanecían en el el hospital conectó por tunelizaciones a un puerto de inyección bajo la
durante 6 días después de la intervención, por lo que tenían piel de la parte superior de la pared abdominal. La banda en
tiempo para asimilar su nuevo patrón de alimentación y prote- tira son las dos bandas que se han utilizado con mayor fre-
ger el pequeño reservorio mediante la masticación de todos los cuencia en Europa. En EE. UU. la utilización de la banda
alimentos hasta que quedaran líquidos antes de tragar. En en solapa quedó regulada por un estricto protocolo hasta
1981 se volvió a utilizar la anilla de 5 cm, que fue bien tolerada. junio de 2001. Fue entonces cuando la Food and Drug
Se decidió entonces utilizar una anilla de 4,5 cm para supero- Administration autorizó la banda en solapa a raíz de un estu-
besos (225% del peso ideal o mayor). Con la anilla de 4,5 cm, dio multicéntrico.
estos pacientes se quejaban de su incapacidad para comer ali- Puesto que no hay adherencia de la banda ajustable a la
mentos fibrosos o porque sentían que se les forzaba a comer pared del estómago, ha habido un problema de deslizamien-
unos alimentos que consideraban comida basura. La anilla más to de la pared del estómago dentro del reservorio y de la
pequeña aumentó la necesidad de reintervención debido a la inclinación de la banda, produciendo obstrucción del orifi-
desestabilización de la línea de grapas. Independientemente de cio de salida. Ello ha sido superado ampliamente por la colo-
su peso, la anilla de 5 cm fue asignada a todos los pacientes. cación de la banda por encima de la reflexión peritoneal
MacLean comenzó su estudio de la cirugía de la obesidad detrás del estómago y por el uso de suturas imbricadas colo-
con el objetivo de conseguir que todos los pacientes no supe- cadas para cubrir anteriormente la banda a la pared del estó-
raran el peso ideal en más del 50% o presentaran un IMC de mago. También se ha informado de la migración de la banda
menos de 35 kg/m2. Para lograr ese objetivo con la GVB, uti- hacia dentro de la luz. Uno de los principales atractivos del
lizó dos capas de malla medidas a menos de 5 cm de longitud. procedimiento para los pacientes es la colocación por abor-
El resultado fue una tasa de reintervención que superaba con daje laparoscópico; la facilidad de remoción para la inversión
creces la de cualquier otro informe.40 Este documento final de por abordaje laparoscópico es también notable.
la serie describe un ensayo aleatorizado en el que se compara
la GVB con la DGYR y explica que, en su experiencia, la GVB
ha sido insatisfactoria, principalmente como resultado de Z RECAPITULACIÓN Y EXPLORACIÓN
dehiscencia de la línea de grapas vertical. Ningún otro ciruja-
no ha realizado GVB con dos capas de malla en la anilla, por En 1977, durante una reunión sobre derivación gástrica en
lo que los resultados de MacLean no pueden generalizarse. Iowa, George Blackburn planteó la siguiente pregunta:
Los resultados del ensayo aleatorizado eran de esperar, al plan- «¿Está fuera de lugar pedir al Dr. Drenick que nos presente
tearse un objetivo de pérdida de peso que excedía los límites de cuál es nuestra obligación en el tratamiento de estas perso-
lo realista y al definirse como fracaso cualquier resultado que nas masivamente obesas? Él probablemente ha hecho tanto
no cumpliera dicho objetivo. como cualquiera en este campo». E. J. Drenick, un internis-
El objetivo de la pérdida de peso es sólo una variable a la ta dedicado al estudio de la obesidad, acudía regularmente
hora de definir una intervención como satisfactoria. Antes de a este tipo de reuniones anuales. En aquella se estableció un
establecer un objetivo de pérdida de peso, debemos obtener diálogo cordial, demasiado largo para incluirlo aquí, pero
más información referida a las complicaciones a largo plazo de hacia el final Blackburn preguntó:
las intervenciones de derivación gástrica y de las puramente «¿Aleatorizarías ahora a estos pacientes?». Drenick
restrictivas. La gastroplastia vertical parece ser tan eficaz como respondió: «Creo que debemos separar muy, muy clara-
la banda gástrica por laparoscopia y utiliza mucho menos mate- mente lo que son nuestros deseos y lo que son los deseos del
rial procedente del exterior. Hoy en día, se dispone de métodos paciente. Son perspectivas totalmente diferentes. Tu obje-
de GVB por vía laparoscópica. Los pacientes necesitan dispo- tivo es proporcionar información y criterios objetivos y
ner de una opción que consista en una intervención restrictiva científicos. El paciente no está interesado en eso. Él sólo
simple, si desean evitar las complicaciones de la intervención de sabe que no puede conseguir un trabajo, que ha estado des-
derivación gástrica. Para los cirujanos que deseen evitar el mar- empleado durante los últimos 10 años, y que quiere final-
co y la malla de la GVB, la intervención de Long como la rea- mente vivir».
lizaba Jamieson es atractiva, pero es necesaria la adaptación al En EE. UU., en la primera década del siglo XXI, los ciru-
abordaje laparoscópico. La historia y el futuro de la gastroplas- janos, la profesión médica, los servicios de seguro médico y
tia se han examinado con mayor detalle.41 nuestra sociedad se enfrentan a al menos ocho millones de posi-
Capítulo 1 • Perspectivas históricas 9

bles candidatos a tratamiento quirúrgico. Con no poca fre- 11. Mason EE, Ito C: Gastric bypass in obesity. Surg Clin North Am
cuencia se plantean interrogantes sobre cuáles son las opciones 1967;47:1345-1351.
12. Hornberger HR: Gastric bypass. Am J Surg 1976;131:415-418.
referidas al tratamiento, aleatorización y a todo lo que afecta la 13. Alden JF: Gastric and jejunoileal bypass. A comparison in the
mejora de los resultados. Sin duda, necesitamos centros de treatment of morbid obesity. Arch Surg 1977;112:799-806.
estudio intensivo y desarrollo continuo de técnicas de mejora y 14. Harris P, Freedman BE, Bland KI, et al: Collagen content, histology,
cuidado del paciente. También debemos seguir salvando vidas and tensile strength: determinants of wound repair in various
stapling devices in a canine gastric partition model. J Surg Res 1987;
y mejorando su calidad, mediante la utilización de las interven- 42:411-417.
ciones restrictivas simples y de derivación gástrica, que se han 15. Alder RL, Terry BE: Measurement and standardization of the gastric
venido empleando desde hace 30 años. pouch in gastric bypass. Surg Gynecol Obstet 1977;144:762-763.
En 1977, se dieron a conocer las cifras del primer año de un 16. Cummings DE, Shannon MH: Roles for ghrelin in the regulation of
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un sistema de recogida de datos centralizado. Ese año hubo Empiric Craft to Scientific Discipline, pp. 157-159. Minneapolis, MN,
ocho prácticas quirúrgicas y conjuntos de datos de 108 pacien- University of Minnesota Press, 1978.
tes. Había habido tres muertes precoces. Ahora, en el International 18. Jordan JH, Hocking MP, Rout WR, et al: Marginal ulcer following
Bariátric Surgery Registry, que distribuía la entrada de datos, gastric bypass for morbid obesity. Am Surg 1991;57:286-288.
19. MacLean LD, Rhode BM, Nohr C, et al: Stomal ulcer after gastric
tenemos 111 cirujanos de 76 centros quirúrgicos y datos referi- bypass. J Am Coll Surg 1997;185:1-7.
dos a 30.000 pacientes acumulados a lo largo de 17 años. La 20. Mason EE, Munns JR, Kealey GP, et al: Effect of gastric bypass on
mortalidad operatoria a los 30 días es de 0,4%. El alcance de la gastric secretion. Am J Surg 1976;131:162-168.
cirugía va en continuo aumento. Las intervenciones restrictivas 21. Griffen WO, Young VL, Stevenson CC: A prospective comparison of
gastric and jejunoileal bypass procedures for morbid obesity. Ann
simples han dejado paso a intervenciones de derivación gástrica, Surg 1977;186:500-509.
que producen pérdidas de peso más rápidas. Estas derivaciones 22. Buckwalter JA: A prospective comparison of the jejunoileal and gastric
conllevan riesgos que se mantienen durante toda la vida y que bypass operations for morbid obesity. World J Surg 1977;1:757-768.
requieren un mayor seguimiento y tratamiento. 23. Wittgrove AC, Clark GW, Tremblay LJ: Laparascopic gastric bypass,
Roux en-Y: preliminary report of five cases. Obes Surg 1994;4:353-357.
La primera obligación del cirujano es servir al paciente, 24. Fobi MAL, Chicola K, Lee H: Access to the bypassed stomach after
como estableció Drenick. El paciente es responsable de la elec- gastric bypass. Obes Surg 1998; 8: 289-295.
ción del tratamiento. Con el fin de asesorar a los enfermos, el 25. Shaker JL, Norton AJ, Woods MF, et al: Secondary hyperparathy-
cirujano debe conocer los efectos permanentes de la interven- roidism and osteopenia in women following gastric exclusion surgery
ción recomendada, tal como indicó Blackburn. Ello requiere for obesity. Osteoporos Int 1991;1:177-181.
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un seguimiento a lo largo de toda la vida del paciente, gestión bone disease as a long-term complication of obesity surgery. Obes
y análisis de datos, e instrucción de los enfermos en relación Surg 2002;12:685-692.
con los resultados de la cirugía cuando toman una decisión 27. Scopinaro N, Gianetta E, Civalleri D, et al: Bilio-pancreatic by-pass
informada al respecto. El tratamiento quirúrgico es incom- for obesity: II. Initial experience in man. Br J Surg 1979;66:619-620.
28. Fobi MA, Lee H, Igwe D Jr, et al: Revision of failed gastric bypass to
pleto si no incluye la monitorización, la prevención y el trata- distal Roux-en-Y gastric bypass: a review of 65 cases. Obes Surg
miento permanente subsiguientes. El cumplimiento de tales 2001;11:190-195.
condiciones puede requerir cambios adicionales en nuestro sis- 29. Hess DS: Biliopancreatic diversion with a duodenal switch procedure.
tema de atención médica, que sin duda constituirán una impor- Obes Surg 1994;4:106 (abstract).
30. Marceau P, Biron S, Bourque RA, et al: Biliopancreatic diversion with
tante contribución a la historia de la cirugía de la obesidad. a new type of gastrectomy. Obes Surg 1993;3:29-35.
La cirugía convirtió a la obesidad en una enfermedad. 31. Printen KJ, Mason EE: Gastric surgery for the relief of morbid obes-
Del mismo modo, puede cambiar el sistema de atención ity. Arch Surg 1973;106:428-431.
médica a fin de que el tratamiento de esta enfermedad, que 32. Gomez CA: Gastroplasty in the surgical treatment of morbid obesity.
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dura toda la vida, sirva para mejorarla. 33. Grace DM: The demise of horizontal gastroplasty. In Mason EE,
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2
Incidencia, prevalencia
y demografía de la obesidad
Neil E. Hutcher, M.D., F.A.C.S.

El 13 de diciembre de 2001 el United States Surgeon General, Aunque el porcentaje de sobrepeso es mayor en EE. UU.,
David Satcher, lanzó una señal de alarma en uno de sus el 61%, esta crisis representa un problema a nivel mundial. La
llamamientos. Los problemas de salud relacionados con la Organización Mundial de la Salud empezó dar la voz de alar-
obesidad podrían anular muchos de los logros sanitarios en ma en los años 90.8 El término globesity se acuñó para advertir
salud alcanzados en EE. UU. en décadas recientes.1 El de que entre 1995 y 2000, el número de adultos obesos se
sobrepeso y la obesidad han aumentado, mientras que la había incrementado en una cifra situada entre los 200 y los
amenaza mundial de la enfermedad ateroesclerótica, por 300 millones de personas en todo el mundo.3 Se estimó que al
ejemplo, ha disminuido, gracias a las mejoras en el trata- menos 115 millones de adultos sufren problemas relacionados
miento, prevención y modificaciones de los factores de ries- con la obesidad, especialmente diabetes tipo 2, enfermedad
go, incluyendo hipertensión e hiperlipidemia. La tendencia cardíaca y tumores relacionados con la obesidad.
descendente de la enfermedad aterosclerótica se vio favore-
cida por la difusión de las campañas informativas y por los
esfuerzos realizados en diversos ámbitos.2 Sin embargo, la Z DEFINICIÓN DE OBESIDAD
ignorancia sobre los factores de riesgo de la obesidad ha
llevado a un marcado aumento en su incidencia y prevalen- El parámetro vigente para presentar estadísticas relacionadas
cia en todo el mundo. La epidemia de obesidad supera en la con el peso es el IMC, que fue descrito inicialmente como el
actualidad a la amenaza que suponen las patologías ateros- índice de Quetelet,9 después de que Adolphe Quetelet, un
cleróticas en muchas partes del mundo y se está extendien- matemático belga, combinara las disciplinas de matemáticas
do rápidamente.3
El Dr. Satcher identificó 15 actividades como priorida-
des nacionales que requerían una actuación inmediata.
Tabla 2-1 POSIBLES CONSECUENCIAS
Indicó claramente que la obesidad es un estado de crisis que
PARA LA SALUD DE UN IMC ⱖ25
concierne a la salud, no a la apariencia física. Esta crisis se
refleja tanto en sus consecuencias santarias como en las con- • Elevada presión sanguínea, hipertensión
siguientes pérdidas económicas.1 Se estima que el coste glo- • Elevado colesterol sanguíneo, dislipidemia
bal en vidas es del orden de las 300.000, con costes económi- • Diabetes tipo 2 (no insulino-dependiente)
cos que exceden los 117.000 millones de dólares al año.1 • Resistencia a la insulina, intolerancia a la glucosa
Otros han estimado el coste en 700 dólares por persona para • Hiperinsulinemia
toda la población de EE. UU.4 Quesenberry y cols. observa- • Enfermedad coronaria
• Angina de pecho
ron que, en una organización en la que se controla estrecha- • Insuficiencia cardíaca congestiva
mente el mantenimiento de la salud, un individuo con un • Accidente cerebrovascular
índice de masa corporal (IMC; kg/m 2) de entre 30 y 34,9 • Cálculos biliares
tenía un coste anual un 25% mayor que uno con un IMC de • Colecistitis y colelitiasis
entre 20 y 24,9. Cuando el IMC era de 35, el coste se incre- • Gota
mentaba en un 44% más por año, en relación con los niveles • Artrosis
de los individuos con peso normal.5 • Apnea obstructiva del sueño, problemas respiratorios y asma
• Algunos tipos de cáncer (como los de endometrio, pulmón,
Los costes para la salud y la esperanza de vida en años próstata y colon)
son alarmantes. La tabla 2-1 enumera las enfermedades que • Complicaciones en el embarazo
se relacionan con la obesidad.6 Fontaine y cols. comunicaron • Mala salud reproductiva en la mujer (como irregularidades
que la esperanza de vida en personas de 20 años con IMC de menstruales, infertilidad, ovulación irregular)
45 es 13 años menor para los varones de raza blanca y 20 años • Problemas en el control vesical (como incontinencia de estrés)
menor para los afroamericanos, comparados con los varones • Nefrolitiasis ácida úrica
de peso normal. Estos efectos eran algo menores para las • Alteraciones psicológicas (como depresión, alteraciones
alimentarias, imagen corporal distorsionada y baja autoestima)
mujeres blancas (8 años) y afroamericanas (5 años).7
10
Capítulo 2 • Incidencia, prevalencia y demografía de la obesidad 11

y sociología para estudiar los problemas poblacionales en la


década de 1830. El IMC es un cociente de peso, ajustado a Tabla 2-2 IMC Y NIVELES DE RIESGO ASOCIADOS
la altura, expresado como peso en kilogramos dividido por la
altura en metros cuadrados. Son varios los problemas inhe- IMC RIESGO PARA COMORBILIDAD
rentes al uso del IMC ya que, por ejemplo, no permite ajustes Normal 18,5-24,9 Medio
para el porcentaje de grasa corporal o la edad. Sobrepeso:
La tabla 2-2 enumera las Guidelines on the Identification, Preobeso 25,0-29,9 Incrementado
Evaluation, and Treatment of Overweight and Obesity in Adults Obesidad clase I 30,0-34,9 Moderado
Obesidad clase II 35,0-39,9 Grave
de los National Institutes of Health de 1998, en clase I (IMC
Obesidad clase III 40 Muy grave
30 kg/m2 hasta 34,9 kg/m2), clase II (35 kg/m2 hasta 39,9 kg/m2)
y clase III (IMC ⫽ 40 kg/m2), con valores para peso normal,
sobrepeso, obesidad y obesidad grave.10 Es importante usar
los términos apropiadamente porque cada uno tiene sus pro- Los cambios en la dieta y en el nivel de actividad son los
pias implicaciones. En los niños en particular, es importante factores principales en este incremento de la obesidad infan-
anotar las diferencias de género y edad. El IMC para cada til. Anderson y cols. han demostrado una correlación entre el
edad se traza en gráficas específicas para cada sexo y se indi- tiempo dedicado a ver la televisión y el incremento de peso.15
ca en forma de percentil. La figura 2-1 es un ejemplo de Este sólo es uno de los factores contribuyentes, que incluyen,
dichas gráficas.10 aunque no son los únicos, el uso de ordenadores y videojue-
También es importante tener conocimiento de la com- gos, la menor importancia de la educación física en la escuela
posición de la grasa corporal. Puede parecer que un depor- primaria y la popularidad de la comida rápida, sobre todo en
tista de constitución atlética tiene un elevado IMC, dándose las cafeterías de los colegios.16 Las implicaciones negativas de
el caso de que está en una excelente condición física, por el la obesidad infantil son múltiples. Estos niños han demostra-
incremento de su masa muscular. Es útil distinguir la dife- do tener un riesgo aumentado de resistencia a la insulina,
rencia entre sobrepeso y los grados de obesidad, términos hipertensión, dificultades respiratorias, afecciones artríticas
que a menudo se confunden, pero que tienen implicaciones y dislipidemia. Dos o más de estos factores de riesgo se dan
radicalmente diferentes. El sobrepeso (IMC entre 25 y 29,9) en el 58% de los niños obesos. Estos niños se hicieron fisio-
normalmente es un paso intermedio en la progresión hacia la lógicamente mayores para su edad, adquiriendo prematura-
obesidad, pero tiene múltiples implicaciones para la salud por mente problemas de salud propios de la mediana edad y de la
sí mismo. El impacto de la obesidad (IMC entre 30 y 34,9) y edad avanzada. Además, los niños obesos tienen mayores
la obesidad grave o mórbida (IMC ⫽ 35) se ha expresado de dificultades en lo que respecta a las relaciones interpersona-
múltiples maneras. No importa el modo de expresión, la les y los resultados académicos. Estos y otros problemas psi-
implicación está clara: la obesidad tiene efectos adversos cológicos suelen persistir en la edad adulta.17,18
determinantes en términos de salud y costes económicos. La tabla 2-4 muestra las estadísticas del estudio Behavioral
Los Centers for Disease Control and Prevention estiman Risk Factor Surveillance System (BRFSS) (1991-2001).19 Este
que 47 millones de estadounidenses sufren el llamado «sín- estudio indica la magnitud del problema en adultos, mostran-
drome metabólico», que se caracteriza por obesidad, resis- do que en una sola década ha habido un asombroso crecimien-
tencia a la insulina, incremento de la grasa abdominal (obe- to del 61% en la prevalencia de la obesidad. Este incremento
sidad central), azúcar elevado en sangre, lípidos séricos fue similar en varones y en mujeres y abarcó todos los grupos
elevados e hipertensión.11 Esta constelación de obesidad y de edad. La obesidad se ha constituido en un problema de
comorbilidades acelera el descenso de la esperanza de vida. alcance aún mayor para la población afroamericana no hispa-
Está claro, por tanto, que la actual epidemia de obesidad y su na en relación con el resto de los grupos raciales. Aun cuando
continuo y rápido crecimiento tienen implicaciones catas- el porcentaje total de obesidad en asiáticos fue significativa-
tróficas para la salud global. mente menor que en otras razas, llegó a duplicarse durante esa
década y ello se reflejaba en el incremento de la comorbilidad,
Obesidad en EE. UU. sobre todo en lo que se refiere a la diabetes tipo 2. Los que
accedían a educación de nivel universitario, parcial o comple-
Mucha de la información utilizada por los investigadores y ta, mostraron una menor tasa global de obesidad que, sin
planificadores de cuidados de salud procede de series de estu- embargo, también se duplicó a lo largo de dicha década.19
dios del National Health and Nutrition Examination Survey Mokdak y cols. mostraron en una serie de publicaciones
(NHANES)10, así como de los datos notificados por Flegal y el aumento de peso en EE. UU. por estados y por regio-
Mokdad y cols.12,13 Entre 1960 y 1994, en EE. UU., la preva- nes.20,21 Como se representa en la figura 2-2, en 1990, nin-
lencia de la obesidad creció en progresión geométrica, desde gún estado tenía un cociente de obesidad mayor o igual al
el 12,8% en 1962, hasta el 22,5% en 1994 en la población 20%. El sudeste, el sudoeste y el medioeste tenían la mayor
ajustada por edad entre los 20 y los 74 años,10 ascendiendo al incidencia, con cocientes de obesidad comprendidos entre el
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

27% en el más reciente estudio (2002) NHANES IV de 15% y el 19%. Como muestra la figura 2-3, en el año 2000,
1999.14 El número de individuos obesos en EE. UU. se ha 20 estados tenían cocientes de obesidad del 20%. Colorado
doblado prácticamente en los últimos 20 años.14 era el único con una incidencia de menos del 15%. Carolina
La obesidad infantil comienza cuando un niño excede el del Sur se situaba a la cabeza, con un incremento del 101,8%.
percentil 85 para su edad, pero está por debajo del percentil Nuevo México era el siguiente, con un incremento del
95. Un niño es obeso cuando excede el percentil 95. La 89,3%. Maryland, Florida y Virginia estaban muy cerca, con
tabla 2-3 muestra que entre 1963 y 2000 ha habido un incre- incrementos superiores al 70%. Regionalmente, las áreas del
mento de casi el 400% (del 4% al 15%) en el sobrepeso el Atlántico sur (67,2%) y el Pacífico (66,8%) presentaban las
infantil de entre 6 y 11 años de edad. En adolescentes de mayores tasas de aumento. Estas tendencias son alarmantes,
entre 12 y 19 años, este incremento ha sido del 300% (de 5% sobre todo porque no hay indicios de tendencia a la reduc-
al 15 %).15 ción en las tasas de incidencia y prevalencia de la obesidad.
12 Sección I • INTRODUCCIÓN

Desde el nacimiento hasta los 36 meses: varones NOMBRE _____________________________________


Percentiles de altura y peso para la edad HISTORIA CLÍNICA # __________________________

Nacimiento
Pu cm cm Pu
EDAD (MESES)
A
L
T
U
R
A

A
L
T
U
R
A

P
E
S
O

EDAD (MESES)
kg Ib

Estatura materna Edad gestacional:


Estatura paterna Edad: Semanas Comentario
P
Fecha Edad Peso Altura Perím. craneal
E Nacim.
S
O

Ib kg
Nacimiento
Publicado el 30 de mayo de 2000 (modificado 20/04/2001).
Fuente: desarrollado por el National Center por Health Statistics, en colaboración con el National Center
for Chronic Disease Prevention and Health Promotion (2000).
http:www.cdc.gov/growthcharts

Figura 2-1 Gráfica de crecimiento del índice de masa corporal específico por género. Nacim., nacimiento; Perím., perímetro. (Tomado de
National Health and Nutrition Examination: Centers for Disease Control and Prevention Growth Charts for the United States, 2000. cdc.gov/
growthchart. Con autorización.)
Capítulo 2 • Incidencia, prevalencia y demografía de la obesidad 13

Tabla 2-3 SOBREPESO INFANTIL

1963-1965
EDAD (años) 1966-1970 1971-1974 1976-1980 1988-1994 1999-2000
6-11 4 4 7 11 15
12-19 5 6 5 11 15

Datos tomados de Hammer.15

Tabla 2-4 PORCENTAJES DE OBESIDAD

CARACTERÍSTICAS PORCENTAJES DE OBESOS


1991 1995 1998 1999 2000 2001
Total 12,0 15,3 17,9 18,9 19,8 20,9
Sexo
Varones 11,7 15,6 17,7 19,1 20,2 21,0
Mujeres 12,2 15,0 18,1 18,6 19,4 20,8
Grupos de edad
18-29 7,1 10,1 12,1 12,1 13,5 14,0
30-39 11,3 14,4 16,9 18,6 20,2 20,5
40-49 15,8 17,9 21,2 22,4 22,9 24,7
50-59 16,1 21,6 23,8 24,2 25,6 26,1
60-69 14,7 19,4 21,3 22,3 22,9 25,3
⬎70 11,4 12,1 14,6 16,1 15,5 17,1
Raza, etnia
Blanco, no hispano 11,3 14,5 16,6 17,7 18,5 19,6
Negro, no hispano 19,3 22,6 26,9 27,3 29,3 31,1
Hispano 11,6 16,8 20,8 21,5 23,4 23,7
Otro 7,3 9,6 11,9 12,4 12,0 15,7
Nivel cultural
Menor que bachillerato 16,5 20,1 24,1 25,3 26,1 27,4
Bachillerato 13,3 16,7 19,4 20,6 21,7 23,2
Estudios universitarios 10,7 15,1 17,8 18,1 19,5 21,0
incompletos
Título universitario o superior 8,0 11,0 13,1 14,3 15,2 15,7
Condición de fumador
Nunca ha fumado 12,0 15,2 17,9 19,0 19,9 20,9
Ex fumador 14,0 17,9 20,9 21,5 22,7 23,9
Fumador habitual 9,9 12,3 14,8 15,7 16,3 17,8
Datos tomados del Behavioral Risk Factor Surveillance System (1991-2001). cdc.gov/needphp/dnpa/obesity/trend/prev-chart.htm.

Figura 2-2 Tendencias de la obesidad en adultos en


EE. UU.: Behavioral Risk Factor Surveillance System
(BRFSS), 1990, datos autoadministrados. Los IMC son
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

mayores o iguales a 30, o de aproximadamente 15 kg de


sobrepeso para una mujer de 1,60 m de altura. (Tomado
de Mokdak AH, Bowman BA, Ford ES et al: The conti-
nuing epidemias of obesity and diabetes in the United
States. JAMA 2001; 286:1195-1200. Con autorización.)

Sin datos
14 Sección I • INTRODUCCIÓN

Figura 2-3 Tendencias de la obesidad en adultos en


EE. UU.: Behavioral Risk Factor Surveillance System
(BRFSS), 2000, datos autoadministrados. Los IMC
son mayores o iguales a 30, o de aproximadamente
15 kg de sobrepeso para una mujer de 1,60 m de altura.
(Tomado de Mokdak AH, Bowman BA, Ford ES et al:
The continuing epidemias of obesity and diabetes in
the United States. JAMA 2001; 286:1195-1200. Con
autorización.)

Sin datos

El porcentaje global de minorías en la población general mente obeso. Usando datos del United States Census del año
ha crecido. La obesidad ha aumentado más rápidamente en 2000, Monteforte y Torkelson estimaron que 50 millones
dichas minorías, sobre todo en mujeres. La tasa y la gravedad de adultos estadounidenses son obesos.22 De ellos, más de
de las enfermedades cardíacas, la diabetes y la hipertensión 15 millones tienen un IMC de 35 kg/m2, y entre 5 y 6 millo-
relacionadas con la diabetes se han convertido en una verda- nes presentan uno de 40 kg/m2.
dera emergencia sanitaria nacional.
Entre 1960 y 1999 la prevalencia de aquellos que pre-
sentaban IMC de 30 se duplicó.22 Ello ilustra de forma evi- Z TENDENCIA MUNDIAL DE LA OBESIDAD
dente el brusco aumento de la incidencia de obesidad docu-
mentado en los últimos 30 años. Entre 1962 y 1980, la La obesidad en otros países, tanto desarrollados como en
incidencia de obesidad aumento sólo del 12,8% al 14,5%. El vías de desarrollo, tiende también al alza. Sólo en áreas
período de 20 años comprendido entre 1980 y 1999 mostró como el África subsahariana y Asia se registran tasas de
un aumento del 14,5% al 27%. Ello significa que en el seg- obesidad bajas y estables. 23 En Latinoamérica, Europa,
mento poblacional de entre 20 y 74 años, la incidencia de África del Norte y Oriente Medio, el cociente de obesidad
obesidad se duplicó; uno de cada cuatro individuos es actual- es elevado. La figura 2-4 muestra el porcentaje de pobla-

PREVALENCIA
THE DE OF
PREVALENCE LA OBESIDAD
OBESITY
40
ⱖ30BMI ≥30

30
Varones
Men
Mujeres
Women
con IMCwith

Figura 2-4 Prevalencia de la obesidad


20 en las poblaciones estadounidense y euro-
% Population

pea de personas con un IMC de 30, des-


pués de 1991. (Tomado de Grummer-Straw
L, Hughes M, Kahn LK et al: Obesity in
% de población

10 women from developing countries. Eur


J Clin Nutr 2000; 54:247-252. Con auto-
rización.)

0
ia a a s s s á li a
do FA ec DA usi
ex es

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N

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W

E U E
C
U

R E .
EE
Fo

All data are from 1991 or later.


Todos los datos son de 1991 o posteriores.
Capítulo 2 • Incidencia, prevalencia y demografía de la obesidad 15

ción con IMC mayor de 30 kg/m 2 por país y sexo y, en estadounidenses sienten que no tienen éxito en mantener el
EE. UU., por raza. 23 peso deseado. Este estudio presenta la particularidad de tra-
La tabla 2-5 muestra los cocientes correlativos de sobre- tar las importantes cuestiones de la actividad física y la
peso y obesidad infantil en EE. UU. y en algunos países ingesta calórica.24
seleccionados. Los datos sobre niños son menos completos y La figura 2-7 proyecta las tendencias para el año 2030
más difíciles de conseguir que los referidos a adultos. La en algunos países.25 Estas tendencias no dan razones para el
figura 2-5 muestra las tendencias de sobrepeso en niños optimismo hasta que pueda controlarse en el futuro la epi-
estadounidenses por edad y sexo. La tabla 2-6 desglosa en demia de obesidad. Los análisis estadísticos sobre inciden-
mayor medida las tendencias para la edad, sexo y etnia.10 cia, prevalencia y demografía de la obesidad muestran clara-
Estas tendencias probablemente sean similares a nivel mun- mente que este problema se ha convertido en un hecho de
dial. La figura 2-6 ilustra un estudio que indica por qué los dimensiones globales e innegables.

Tabla 2-5 PORCENTAJE DE OBESIDAD EN ALGUNOS PAÍSES

EE. UU. CHINA RUSIA SUDÁFRICA BRASIL


1988-91 1993 1994-95 1994 1989
Niños 24,2 12,2 17,8 20,3 10,5
Niñas 21,3 14,1 25,6 25,0 12,8

1963-67
1963–67 1971-74
1971–74 1976-80
1976–80 1988-94
1988–94
15

Figura 2-5 Tendencias al sobrepeso


(%)
Prevalence (%)

en niños estadounidenses con un IMC


en el percentil 95. (Tomado de Centers 10
Prevalencia

for Disease Control and Prevention,


National Center for Health Statistics
NHANES IV Report. www.cdg.gov/
nchs/procuct/pubs/pubd/hestats/obes/ 5
obese99.htm2002. Con autorización.)

0
Boys6-11
Niños 6–11 y
años Girls6-11
Niñas 6–11 y
años Boys12-19
Niños 12–19 y
años Girls12-19
Niñas 12–19años
y

Tabla 2-6 PORCENTAJE DE SOBREPESO EN NIÑOS Y ADOLESCENTES POR SEXO


Y GRUPO RACIAL-ÉTNICO, EE. UU., 1988-1994
SEXO Y GRUPO RACIAL-ÉTNICO 6-11 AÑOS 12-19 AÑOS
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

Niños
Total 11,8 11,3
Blancos no hispanos 10,9 11,6
Negros no hispanos 12,3 10,7
Descendientes de mexicanos 17,7 14,1

Niñas
Total 11,0 9,7
Blancos no hispanos 9,8 8,9
Negros no hispanos 17,1 16,3
Descendientes de mexicanos 15,3 13,5
16 Sección I • INTRODUCCIÓN

¿Por qué fracasamos?


Razones por las que los estadounidenses no consiguen
perder el peso deseado
(% de adultos estadounidenses que necesitan perder peso los cuales…)

No hacen bastante ejercicio 60%

Sienten que su metabolismo


se hace más lento 59%

Cometen con frecuencia excesos


45%
tomando sus alimentos preferidos
Figura 2-6 Fracaso en el mante-
No tienen suficiente nimiento del peso ideal documentado
autodisciplina 44%
en EE. UU. 2000. (Tomado de Calorie
Comen demasiado entre horas 41%
Control Council National Survey,
2004. Reasons Why Americans Are
A menudo comen Not Successful at Maintaing Their
demasiado en las comidas 33% Desired Weight. www.caloriecontrol.
org/reasonswhy.htlm.)
A menudo comen por
motivos emocionales 31%

Comen alimentos
demasiado grasos 30%

Tienen dificultad para comer


28%
adecuadamente en los restaurantes
Sólo se preocupan por las
grasas, no por las calorías 19%

Sólo se preocupan por las


14%
calorías, no por la grasa

0% 10% 20% 30% 40% 50% 60% 70%

Fuente: Calorie Control Council National Consumer Survey, 2004.

EE. UU.

Australia

Inglaterra
Porcentaje de población
50 con un IMC ⱖ30 kg/m2 Isla Mauricio
45

40

35

30 Brasil
Figura 2-7 Proyección de la tendencia
25 de la obesidad para el año 2025. (Tomado
de The Global Challenge of Obesity and
20 the International Obesity Task Force.
www.iuns.org/features/obesity/tabfig.
15 html.)

10
2030
5 2025
2020
0 2015
2010
2005
2000
1995
1990
1985
1980
1975
1970
1965
1960
Capítulo 2 • Incidencia, prevalencia y demografía de la obesidad 17

Z BIBLIOGRAFÍA 14. Centers for Disease Control and Prevention: The National Center for
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© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.
3
Etiología de la obesidad
Hanna-Maaria Lakka, M.D., Ph.D., y Claude Bouchard, Ph.D.

La obesidad es una enfermedad crónica que causa sufrimiento Se mantiene la hipótesis de que la obesidad abdominal
a los individuos afectados e importantes costes a los sistemas afecta de forma negativa el metabolismo lipídico y de los
públicos de salud y a la sociedad. Sólo en EE. UU., más de carbohidratos, a través del incremento de la actividad lipolítica
100 millones de personas presentan sobrepeso (es decir, un de los adipocitos epiploicos, un depósito que drena directamen-
índice de masa corporal [IMC]  25 kg/m2) o son obesos (IMC te en el sistema venoso portal. Se cree que la liberación de áci-
 30 kg/m2), y la prevalencia de la obesidad sigue aumentando. dos grasos libres en la vena porta provoca alteraciones en la
Según una reciente encuesta realizada entre adultos estadouni- función hepática, especialmente en el aclaramiento de insu-
denses, la prevalencia de la obesidad (IMC  30 kg/m2) era del lina y en la producción de glucosa hepática y de lipoproteína
20,9% en 2001 en contraste con el 19,8% en 2000, con un de muy baja densidad. Se ha sugerido que estas alteraciones
aumento del 5,6%.1 Según ciertas estimaciones, la obesidad y provocan resistencia a la insulina en el hígado y en el músculo
otros trastornos relacionados son en la actualidad responsables esquelético. De acuerdo con esta «hipótesis portal», la grasa
de la muerte de 300.000 personas al año sólo en EE. UU. En visceral, a diferencia de la grasa periférica, está más directa-
todo el mundo, el coste de la obesidad varía del 2% al 10% de mente relacionada con la resistencia a la insulina y los tras-
los costes totales de asistencia sanitaria.2,3 tornos metabólicos asociados.4
La obesidad es el resultado de un desequilibrio a largo pla- Desde que la hipótesis portal fue propuesta, se ha reuni-
zo entre el aporte de energía y su consumo, que favorece un do una serie de estudios observacionales que respaldan el
balance energético positivo. Si el aporte de energía excede de concepto según el cual una masa adiposa visceral aumentada
forma crónica su consumo, el desequilibrio resultante provoca se asocia a un mayor riesgo de desarrollar desajustes meta-
la expansión de los depósitos de lípidos del tejido adiposo y favo- bólicos, diabetes y enfermedad cardiovascular.5 Sin embar-
rece la adipogenia, es decir, el incremento del número de adipo- go, no se dispone de pruebas experimentales que avalen esta
citos. La etiología de la obesidad es compleja y de naturaleza idea en seres humanos. Además, varios estudios han demos-
multifactorial, y numerosos factores biológicos y de comporta- trado que el tejido adiposo subcutáneo abdominal también
miento pueden afectar la ecuación del balance energético. contribuye de forma importante al desarrollo de estas alte-
En la última década se ha producido un incremento con- raciones metabólicas.6,7 Por lo tanto, queda por esclarecer
siderable en nuestro conocimiento de los mecanismos mole- por completo el significado fisiopatológico de esas subdivi-
culares que regulan la homeostasis energética, de los media- siones del depósito de grasa abdominal.
dores moleculares en el cerebro y en el sistema periférico, y de
la genética de la obesidad. Sin embargo, dado el grado Depósito ectópico de grasa
de extensión de la epidemia de obesidad, alcanzado en un
período de tiempo breve, es evidente que los factores ambien- Dados los evidentes problemas de la hipótesis portal, se han
tales y el estilo de vida desempeñan un papel importante. sugerido otras alternativas.7 Además del depósito de lípidos en
el tejido adiposo, su acumulación en el músculo esquelético,
en el hígado y en otros órganos, ha demostrado ser un impor-
Z ADIPOSIDAD Y RIESGO DE ENFERMEDAD tante determinante de la sensibilidad a la insulina.8,9 Cuando
se sobrepasa la capacidad de los adipocitos periféricos de alma-
Obesidad abdominal cenar grasa, las células grasas se vuelven insulinorresistentes,
lo que lleva a incremento de la lipólisis, liberación de ácidos
El sobrepeso y la obesidad no son fenotipos homogéneos, ya grasos en el torrente sanguíneo y disminución de su recapta-
que los individuos difieren en la distribución regional del ción. Se cree que este fenómeno favorece el depósito de lípidos
exceso de peso o de la grasa. Una serie de datos sostiene la idea en el hígado, músculo esquelético, páncreas, corazón y proba-
de que la grasa localizada en el abdomen está asociada a un blemente en otros tejidos. Este excedente de lípidos ha sido
mayor riesgo de consecuencias negativas para la salud que la referido como origen de enfermedades lipotóxicas.10
grasa en otros depósitos. La grasa abdominal se diferencia Existen pruebas que sostienen la hipótesis de que cuando
en grasa subcutánea y grasa intraabdominal. El tejido adiposo el tejido adiposo es incapaz de proliferar y expandirse para asu-
intraabdominal está compuesto por la grasa intraperiotneal o mir un exceso de calorías, se producen depósitos de grasa ectó-
visceral, que se compone fundamentalmente de la grasa epi- picos, insulinorresistencia y, en última instancia, diabetes
ploica y mesentérica y de la grasa retroperitoneal. tipo 2.10,11 Varias líneas de investigación apoyan esta teoría. La
18
Capítulo 3 • Etiología de la obesidad 19

falta o la depleción grave de tejido adiposo en ratones o seres Ingesta Distribución


humanos (p. ej., lipodistrofia) produce una resistencia a la de energía Obesidad
de energía
insulina grave y diabetes, muy probablemente debidas al alma- que favorece
el depósito
cenamiento ectópico de lípidos en el hígado, músculo esquelé- de grasa
tico y en las células  pancreáticas secretoras de insulina. En
los pacientes infectados por VIH que presentan lipodistrofia Predisposición
Sobrepeso
genética
asociada a la terapia antirretroviral, la gravedad del síndrome
de resistencia insulínica está relacionada con la extensión de
los depósitos de grasa en el hígado, más que con los de la región Adipogenia
intraabdominal. La acumulación de grasa en el hígado puede, Gasto
por tanto, ser un factor etiológico del desarrollo de la resisten- energético
cia insulínica en estos pacientes.12 Varios estudios han demos-
trado que el contenido lipídico intramiocelular y el grado del Figura 3-1 Diagrama de los factores determinantes del balance ener-
infiltración lipídica en el hígado, medido por espectroscopia gético positivo y del depósito de grasa, indicando los pasos donde actúa
la predisposición genética. (Tomado de Buochard C, Perusse L, Rice
de resonancia magnética nuclear, son importantes factores T, et al: Genetics of human obesity. In Bray GA, Bouchard C (eds):
determinantes de la resistencia insulínica en seres humanos, Handbook of Obesity, ed 2, New York, M. Dekker, en prensa. Con
independientemente de la obesidad.8,9 Por último, el aumento autorización.)
de tamaño de los adipocitos está asociado a la resistencia insu-
línica y al desarrollo de diabetes.13 Los adipocitos aumentados Ingesta de energía
de tamaño pueden representar el fracaso del tejido adiposo a la
hora de expandir su masa para acomodarse a una demanda La ingesta de energía total es toda la energía consumida en
creciente de almacenamiento de lípidos. alimentos o bebidas que puede ser metabolizada en el organis-
mo. La grasa aporta la mayor cantidad de energía por unidad
Secreciones del tejido adiposo de peso (9 kcal/g), y los carbohidratos (4 kcal/g) y proteínas
(4 kcal/g) aportan la menor. La fibra es degradada por las bac-
La hipótesis endocrina es otra alternativa. El tejido adiposo no terias en el intestino grueso para producir ácidos grasos que
es un órgano pasivo de almacenamiento de grasas; actualmen- son absorbidos y utilizados como energía (1,5 kcal/g). El alco-
te es considerado un órgano endocrino que segrega una amplia hol ingerido puede ser un contribuidor principal en el balance
variedad de hormonas y sustancias metabolitamente activas. energético en algunos individuos (7 kcal/g).
Una característica destacada de la hipótesis endocrina es que a
medida que el órgano adiposo aumenta de tamaño, se produce Gasto energético
un cambio en las concentraciones circulantes de varias señales
endocrinas. Numerosas hormonas, citoquinas y polipéptidos El gasto total de energía puede ser definido según los tres
segregados por el tejido adiposo, han sido identificadas y rela- componentes siguientes: metabolismo basal y en reposo, efec-
cionadas con componentes del síndrome metabólico. Estas to térmico de la comida (termogenia inducida por la dieta) y
incluyen leptina, resistina, adiponectina, factor de necrosis actividad física (actividad física espontánea y otras actividades
tumoral , angiotensina, interleucina-6 e inhibidor del activa- de la vida diaria). En adultos sedentarios, las tasas metabólica
dor del plasminógeno-1. Como confirmación de la hipótesis basal y de reposo representan aproximadamente del 60% al
endocrina, los seres humanos obesos presentan niveles de lep- 70% del gasto total de energía; la termogenia inducida por la
tina aumentados en suero; por otra parte, los niveles de leptina dieta alrededor del 10%, y la actividad física, el restante 20%
e insulina circulantes están relacionados entre ellos. al 30%. En aquellos que desempeñan un trabajo manual
intenso o un entrenamiento físico exigente, el gasto energéti-
co atribuido a la actividad física puede incrementarse hasta el
Z FACTORES DETERMINANTES DEL BALANCE 50% del gasto diario de energía.
ENERGÉTICO
Distribución de los nutrientes
El balance energético humano en períodos prolongados está
determinado por la ingesta de energía, su gasto, la distribución Un desequilibrio entre la ingesta de energía y el gasto no
de los nutrientes y la adipogenia. Se produce un balance energé- explica por completo el cambio en el aumento del peso cor-
tico positivo cuando la ingesta de energía es mayor que el gasto, poral. La distribución de los nutrientes o de la energía se está
originándose un aumento de los depósitos de grasa en el cuerpo. constituyendo como un importante condicionante del balan-
Un balance energético negativo se registra, en cambio, cuando ce energético a largo plazo. En condiciones de balance ener-
la ingesta es menor que el gasto, promoviendo una disminución gético positivo, los individuos más propensos a ganar peso
de los depósitos de energía. En circunstancias normales, el reconducen más energía para su almacenamiento en el tejido
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balance energético oscila entre comida y comida, entre día y día, adiposo, mientras que los que ganan poco peso redistribu-
y entre semana y semana, sin grandes cambios en los depósitos yen relativamente más para la oxidación en el músculo
del organismo o en el peso. Múltiples mecanismos fisiológicos esquelético y otros tejidos. Estos fenotipos se reflejan en las
actúan para combinar la ingesta de energía global con el gasto diferencias en el cociente respiratorio y la actividad de la
de energía global y para mantener un peso corporal estable a lipoproteína lipasa del músculo esquelético.
largo plazo. De este modo, sólo cuando el balance energético
positivo prevalece por un período de tiempo considerable es pro- Adipogenia
bable desarrollar obesidad. La figura 3-1 muestra un modelo
integrador de diferentes factores determinantes del balance La diferenciación del adipocito o adipogenia es un proceso
energético positivo y las rutas que conducen a la obesidad, indi- regulado. Las variaciones en la masa grasa son el resultado
cando los pasos donde actúa la predisposición genética. de los cambios en el tamaño del adipocito, su número o
20 Sección I • INTRODUCCIÓN

ambos. Una variación en el número de adipocitos es conse- período de tiempo caracterizado por la ausencia de hambre
cuencia de la interacción compleja entre la proliferación y la entre las comidas, y 3) el control a largo plazo de la ingesta
diferenciación de los preadipocitos. El balance entre las de alimentos, que se desarrolla a partir de señales hormona-
señales a las cuales los preadipocitos están expuestos parece les, como la leptina.18 Algunas de las hormonas clave y neu-
determinar si estas células sufren la adipogenia. Además del ropéptidos que contribuyen a la regulación de la homeostasis
sistema endocrino, estas señales con origen en el propio energética han sido identificados.
preadipocito actúan como parte de los ciclos de retroalimen-
tación que afectan a los adipocitos maduros. En general, los
factores que regulan la adipogenia pueden participar en Moléculas periféricas
ambos procesos.14,15
LEPTINA
La leptina es una hormona segregada por los adipocitos;
Z REGULACIÓN FISIOLÓGICA sus niveles circulantes son proporcionales a la masa de teji-
DEL PESO CORPORAL do adiposo y reduce la ingesta de alimentos a través de la
regulación positiva de neuropétidos anorexígenos (reduc-
Un órgano esencial para la regulación de la homeostasis ener- tores del apetito), tales como la hormona estimulante de los
gética es el cerebro, aunque múltiples sistemas orgánicos par- melanocitos  (-MSH), y a través de las regulación negativa
ticipan en el proceso.16,17 Las moléculas de señalización produ- de factores orexígenos (estimulantes del apetito), fundamen-
cidas en la periferia circulan por el torrente sanguíneo y talmente neuropéptido Y (NPY). La leptina ofrece un vínculo
aportan retroalimentación al cerebro. Las señales periféricas funcional entre el tejido adiposo y el cerebro, donde participa
clave, como leptina, insulina y grelina, han sido relacionadas en los procesos de regulación del balance energético, espe-
con neuronas hipotalámicas productoras de neuropéptidos, y cialmente contra los depósitos de grasa en el organismo.19
se han empezado a dilucidar las redes anatómicas y funcionales
que integran estas neuronas (v. figura 3-2), La regulación del INSULINA
peso corporal a largo plazo es mejor entendida en términos de La insulina es una hormona segregada por las células  pan-
ciclos regulatorios con tres pasos definidos: 1) un sensor que creáticas. Regula la homeostasis de la glucosa a través de su
ofrece información sobre la masa del tejido adiposo y el alma- capacidad de estimular su ingesta, la síntesis de glucógeno y
cenamiento de energía; 2) unos centros hipotalámicos que otras vías de almacenamiento de energía en tejidos periféri-
reciben e integran las señales desde la periferia, especialmente cos. La insulina también sirve como indicador periférico del
desde el tejido adiposo, y 3) unos sistemas efectores que influ- estado energético y se une a receptores en el núcleo arquea-
yen sobre la ingesta de energía y su gasto.18 do del hipotálamo. La insulina inhibe la ingesta a través de
El control inadecuado de la ingesta de alimentos desem- su acción en el cerebro, pero la aumenta al disminuir los
peña un papel etiológico destacado en la obesidad. Cuando niveles sanguíneos de glucosa.19
se evalúa el control de la ingesta de alimentos, se asume que
es necesario tener en cuenta tres marcadores caracterizados COLECISTOCININA
por distintas escalas de tiempo: 1) plenitud, la supresión del La colecistocinina (CCC) se libera en el torrente sanguíneo
hambre que induce el final de la comida; 2) saciedad, el desde las células endocrinas intestinales en respuesta a una

Anabólico
GHR
IR
AgRP
LEPR
Y1R NPY
Núcleo Grelina

Neuronas MC3R arqueado


eferentes GHR
MC4R IR
YIR LEPR Figura 3-2 Vías centrales que par-
ticipan en la regulación de la ingesta
de energía y el gasto energético.
Catabólico

Insulina
Leptina

´
Adipocitos
Balance
energético
Capítulo 3 • Etiología de la obesidad 21

comida. Se une a receptores del nervio vago aferente y ayuda Es comúnmente aceptado que la cantidad de energía consu-
a poner fin a la ingesta. La CCC es también producida en el mida en relación con la actividad física y la calidad de la
cerebro, donde funciona como un neuropéptido participan- comida son factores determinantes de enfermedades cróni-
do en la regulación del comportamiento.19 cas relacionadas con la alimentación, como la obesidad.2,24
En los párrafos siguientes se definen brevemente los factores
GRELINA dietéticos y las costumbres que se han propuesto como cau-
La grelina es una hormona segregada fundamentalmente en santes de la obesidad.
el estómago y en el intestino delgado proximal. Los niveles
circulantes de grelina aumentan antes de las comidas, con- ALIMENTOS RICOS EN ENERGÍA Y POBRES EN NUTRIENTES
tribuyendo al inicio de la ingesta, y disminuyen posprandial- Los alimentos ricos en energía suelen tener un alto conteni-
mente, contribuyendo a la saciedad.20 Los receptores de gre- do en grasas (p. ej., mantequilla, aceites, fritos), azúcares o
lina se expresan en el hipotálamo, donde su activación almidón, mientras que los alimentos de escaso aporte ener-
estimula la ingesta de alimentos. Además de ser una señal gético presentan un alto contenido en agua (p. ej., frutas y
orexígena, la grelina puede también tener efectos a largo verduras).24 Una ingesta elevada de alimentos ricos en ener-
plazo en la regulación de la adiposidad del organismo. Los gía favorece el aumento de peso. En los países de rentas altas
niveles plasmáticos de grelina aumentan después de una pér- (aunque también, de manera creciente, en los que están en
dida de peso inducida por dieta,21 apoyando la hipótesis de vías de desarrollo), los alimentos ricos en energía no están
que desempeña alguna función en la regulación a largo pla- sólo muy procesados (bajo contenido en polisacáridos no
zo del peso corporal. Un estudio reciente demostró que en almidonados y fibra), sino que también son pobres en micro-
personas con obesidad mórbida que perdieron peso después nutrientes, disminuyendo más aún su valor nutricional.
de una cirugía de derivación gástrica, los niveles séricos de
grelina estaban considerablemente reducidos y eran inferio- BEBIDAS AZUCARADAS
res a los de los individuos con peso normal y obesos que Las dietas bajas en grasas son generalmente más altas en carbo-
habían perdido peso a través de una dieta convencional.21 hidratos (incluyendo cantidades variables de azúcar) y se aso-
Este estudio sugirió que la disminución de los niveles séricos cian con frecuencia a precaución contra el aumento de peso. Sin
de grelina podría relacionarse con el mecanismo que induce embargo, se piensa que una ingesta elevada de azúcares libres
la pérdida de peso después de la cirugía de derivación gástri- en las bebidas favorece la ganancia de peso.24 El consumo cre-
ca, probablemente afectando el apetito y el inicio de las ciente de bebidas azucaradas en niños preocupa seriamente,
comidas.21 dado el papel que estas desempeñan en el desarrollo de la obe-
sidad infantil.25 Los efectos fisiológicos de la ingesta de energía
NEUROPÉPTIDOS en la plenitud y la saciedad parecen ser muy diferentes en los
El número creciente de neuropéptidos que supuestamente alimentos sólidos que en los líquidos. Esto puede ser debido a
regulan el apetito incluye péptidos orexígenos y anorexíge- varios factores, tales como una distensión gástrica menor y un
nos. Los principales neuropétidos orexígenos son el NPY, la tránsito más rápido en el caso de los líquidos.
hormona concentradora de melanina (MCH), orexinas A y B
(también conocidas como hipocretinas 1 y 2), dinorfina, TAMAÑO DE LAS PORCIONES
endorfina , galanina y el péptido relacionado con la proteína Tradicionalmente se ha pensado que las porciones de gran
agouti (AgRP). Por otra parte, muchos péptidos anorécticos tamaño contribuyen en el aumento de peso.26 El marketing
han sido descubiertos, incluidos HEM-, la hormona libera- de las «superporciones», en especial en los establecimien-
dora de corticotropina (CRH), CCC, transcrito regulado por tos de comida rápida, es hoy una práctica común en muchos
cocaína y anfetaminas (CART), neurotensina, péptido simi- países. Del mismo modo, el tamaño de las porciones de los
lar al glucagón tipo 1 (PSG-1), urocortina, neuromedina U, alimentos consumidos en los hogares también está aumen-
calcitonina, amilina, enteroestatina y bombesina.22,23 tando; una evolución que indica cambios relevantes en las
En resumen, en el hipotálamo, el núcleo arqueado, las conductas alimentarias en general.26
neuronas productoras de AgRP/NPY y propriomelanocor-
tina (POMC) y CART actúan como lugares principales de PALATABILIDAD
recepción de señales humorales, que reflejan los depósitos de En la regulación a corto plazo de la ingesta de energía, el
grasa corporal. Traducen entonces estas señales en respues- estímulo positivo para comer surge de la vista, olfato y pala-
tas metabólicas y conductuales que promueven el manteni- tabilidad de la comida. La palatabilidad de la comida, o el
miento de los depósitos de grasa del organismo a unos nive- placer de su degustación, tiene una importante influencia en
les constantes (v. figura 3-2). la conducta y se asocia positivamente con la ingesta energé-
tica de una única comida.27 La presencia de grasa en la comi-
da es particularmente agradable y se asocia a una sensación
Z FACTORES DIETÉTICOS Y PATRONES placentera en la boca. El dulzor es también uno de los sabo-
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DE ACTIVIDAD FÍSICA res más placenteros. Los alimentos azucarados con un con-
tenido alto en grasas tienen alta probabilidad de inducir a un
Factores dietéticos exceso de consumo porque, ya que la palatabilidad se realza
tanto por el dulzor como por la sensación placentera de la
Los factores dietéticos (es decir, la ingesta calórica y de los boca, además de que la grasa sólo tiene un pequeño efecto
macronutrientes que componen la dieta) y los patrones ali- supresor del apetito y de la ingesta de comida.27
mentarios (tales como la pauta de comidas diarias y los tras-
tornos de la conducta alimentaria) pueden influir en el FIBRA
balance energético. El consumo de alimentos ricos en ener- La ingesta elevada de polisacáridos no almidonados (fibra de
gía (exceso de calorías) y bajos en nutrientes esenciales favo- la dieta) puede estar relacionada con la regulación del peso
rece un balance energético positivo, sobrepeso y obesidad. corporal a través de mecanismos que participan en el control
22 Sección I • INTRODUCCIÓN

del hambre, la plenitud, la saciedad y la ingesta de energía. Trastorno alimentario por atracones de comida
Dos revisiones recientes de ensayos clínicos, aleatorios y El trastorno alimentario por atracones de comida (TAA)
controlados, han concluido que la mayoría de los estudios es una nueva categoría de trastornos de la conducta alimen-
demuestran que una ingesta elevada de fibra en la dieta favo- taria propuesta en la cuarta edición de Diagnostic and
rece la pérdida de peso, y que las dietas ricas en fibra que Statistical Manual of Mental Disorders. Las personas con sín-
contengan verduras y hortalizas sin almidón, frutas, cereales drome de TAA se dan atracones de comida, igual que los
integrales, legumbres y frutos secos, pueden ser eficaces en sujetos con bulimia nerviosa pero, a diferencia de estos, no
la prevención del tratamiento de la obesidad, aunque el efec- realizan actividades compensatorias (p. ej., vómitos autoin-
to sea probablemente moderado.28,29 ducidos o abuso de laxantes y diuréticos). El TAA parece ser
más prevalente en sujetos que buscan un tratamiento de pér-
ÍNDICES GLUCÉMICOS ALTO Y BAJO dida de peso (un rango del 1,3% al 30,1%).35 Según cuatro
El índice glúcémico (IG) se define como el incremento del área informes, las tasas de TAA en pacientes sometidos a cirugía
bajo la curva de la glucosa, en respuesta al consumo de una bariática fueron del 27%, 38%, 43% y 47%.36
cantidad estándar de carbohidratos de un alimento de prueba
(pan blanco o glucosa). El IG de la dieta media en el mundo Síndrome del comedor nocturno
occidental ha aumentado en los últimos años debido al incre- El síndrome del comedor nocturno (SCN) es un tras-
mento de la ingesta de carbohidratos y los cambios en la tecno- torno de estrés, de la conducta alimentaria, del sueño y del
logía del procesado de los alimentos. Se ha sugerido que unas ánimo, que se asocia a una función neuroendocrina altera-
concentraciones disminuidas de combustibles metabólicos cir- da.36 Sigue un patrón circadiano característico y responde a
culantes en el período posprandial medio tras una comida con un agente que aumenta la función de la serotonina. El SCN
un alto IG, tendría, como resultado el aumento del hambre y de es poco frecuente en la población general (1,5%). Está pre-
la ingesta de alimentos como un intento del organismo de res- sente en individuos no obesos, aunque es más prevalente en los
tablecer la homeostasis energética.30 Algunos estudios, aunque que sí lo son. La prevalencia del SCN en tres estudios en pa-
no todos, sugieren que los alimentos con un bajo IG pueden cientes clínicamente obesos fue del 8,9%, 15% y 43 %, y del
proteger contra el aumento de peso.31 Sin embargo, no existen 10%, 27% y 42% en estudios en pacientes obesos evaluados
ensayos clínicos a largo plazo que examinen los efectos del IG para tratamiento quirúrgico.36
de la dieta en la regulación del peso corporal.24,30,31
Actividad física
L ACTANCIA MATERNA La actividad física representa una parte importante del
Varios informes han indicado la posibilidad de que la lactan- gasto energético diario total. La disminución del gasto de
cia materna prevenga la obesidad infantil, aunque también energía debido a una actividad física menor está considerada,
se han publicado resultados negativos al respecto.32 de forma general, como uno de los factores que de manera
Probablemente son numerosos los factores de confusión, por más importante contribuyen a la epidemia global de sobre-
lo que los mecanismos mediante los cuales la lactancia peso y obesidad.
materna podría proteger contra el sobrepeso y la obesidad Existen pruebas de que una actividad física regular prote-
permanecen inciertos. ge contra el aumento de peso, mientras que los estilos de vida
sedentarios (trabajos sedentarios y actividades de ocio inacti-
PATRONES ALIMENTARIOS vas, como la televisión, el uso del ordenador o los videojuegos)
En un estudio, el patrón alimentario definido como flexible favorecen el aumento de peso. La mayoría de los estudios que
restringido fue asociado con un riesgo menor de aumento de incluyen datos sobre la actividad física recogidos en la fase de
peso, mientras que el patrón restringido rígido/con desinhibición seguimiento ha registrado una relación inversa entre la activi-
periódica se asoció a un riesgo mayor.24 Un estudio reciente dad física y el aumento de peso a largo plazo.37 Los resultados
demostró que un patrón alimentario sano (definido como el de estudios prospectivos en los cuales la actividad física se
consumo de una dieta rica en frutas, verduras, lácteos desgra- mide desde el inicio y de aquellos realizados sobre intervencio-
sados y cereales integrales, y pobre en carnes rojas y sometidas nes aleatorias para la reducción de peso son poco coherentes,
a procesado, platos preparados, comida rápida y bebidas probablemente debido al bajo cumplimiento durante períodos
gaseosas) se asoció con aumentos menores del IMC y del perí- prolongados.37 Por tanto, los niveles de actividad física habi-
metro abdominal, en comparación con otros cuatro patrones tuales son los que parecen ofrecer cierta protección frente a un
alimentarios (pan blanco, alcohol, dulces, carne y patatas).33 aumento de peso perjudicial para la salud, más que la actividad
Dado que los alimentos no se consumen aisladamente, la física previa o la adscripción a un programa de ejercicios.
investigación sobre patrones alimentarios basada en la obser- La actividad física influye en la composición corporal
vación en los escenarios naturales de las comidas puede ser –cantidad de grasa, de músculo y tejido óseo–. Una revisión
útil para la comprensión de las causas dietéticas de la obesidad reciente evaluó si la pérdida de peso inducida por el ejercicio
y ayudar a cada persona en el control de su peso.33 estaba asociada o no con la correspondiente reducción de la
adiposidad total y de la grasa visceral y abdominal, siguiendo
Trastornos de la conducta alimentaria un patrón dosis-respuesta.38 En ensayos con un incremento
Los trastornos de la conducta alimentaria se dividen en de la actividad física, expresada como la energía consumida
tres categorías diagnósticas: anorexia nerviosa, bulimia ner- por semana, bien controlados y a corto plazo, las reducciones
viosa, y trastornos alimentarios atípicos o trastornos no de la adiposidad total tuvieron lugar según dicho patrón. Sin
especificados de otro modo.34 Se han observado en personas embargo, a pesar de que la actividad física se asoció con la
obesas trastornos de la conducta alimentaria que tienen reducción de la grasa abdominal y visceral, no se obtuvieron
como resultado un consumo excesivo de energía en relación pruebas suficientes pruebas para evaluar la existencia de una
con sus requerimientos. Sin embargo, no queda claro si la relación dosis-respuesta.38
obesidad es un resultado o una causa subyacente de dichos ¿Cuánta actividad física es suficiente para prevenir un
trastornos. aumento de peso perjudicial? La recomendación actual para los
Capítulo 3 • Etiología de la obesidad 23

adultos de 30 minutos diarios de realización de una actividad interacciones entre ellos. Leído de izquierda a derecha, el
física de intensidad moderada, preferiblemente todos lo días de modelo identifica los factores multisectoriales que, admitidos
la semana, tiene como objetivo limitar el riesgo de desarrollar o no, son influencias latentes de la ingesta y el consumo de
varias enfermedades crónicas, incluyendo patologías coronarias energía de un individuo. El rectángulo sombreado tras la pri-
y diabetes.39 Sin embargo, en nuestro entorno actual, esta pau- mera columna simboliza el filtro cultural, que representa las
ta parece insuficiente para prevenir el aumento de peso o su influencias de las costumbres y prácticas tradicionales hasta
recuperación, tal y como estipuló el panel de expertos reunidos las de los medios de comunicación y la publicidad.
por la International Association for the Study of Obesity.40 Existen Muchas intervenciones estratégicas pueden potencial-
pruebas de que la prevención de la recuperación de peso en mente influir sobre los entornos físicos, económicos, políti-
individuos anteriormente obesos puede requerir entre 60 y cos o socioculturales, pero las pruebas para dar fundamento
90 minutos de actividad física de intensidad moderada al día. a estas intervenciones son escasas.41-43 Serán necesarias
A pesar de que no existen datos definitivos, parece probable que estrategias de salud pública multisectoriales, sólidas y con
para prevenir la transición de sobrepeso a obesidad se requieran los recursos necesarios, para parar y en un futuro revertir las
de 45 a 60 minutos de actividad física moderada diaria, o el tendencias actuales de aumento de la prevalencia de la obe-
equivalente a un nivel de actividad física (NAF) de 1,7. En sidad. El apoyo político, la colaboración intersectorial y la
el caso de los niños, se recomienda más tiempo. 40 participación comunitaria resultarán esenciales para alcan-
zar el éxito. Los escenarios clave para la puesta en marcha de
las intervenciones son las escuelas, los hogares, los centros
Z FACTORES CULTURALES Y SOCIALES de trabajo, los colectivos vecinales y comunitarios, y los ser-
vicios de salud de asistencia primaria. Los sectores clave para
Influencias culturales la intervención incluyen el transporte y la infraestructura
urbana, los medios de comunicación, el sector alimentario y
La cultura es un sistema aprendido de categorías, reglas y los servicios de asistencia sanitaria.
esquemas que las personas utilizan para guiar su comporta- Entre las respectivas conclusiones de la segunda y la ter-
miento. La cultura de una persona impregna cada aspecto de cera encuestas National Health and Nutrition Examination
su vida, incluidos los pensamientos sobre la gordura y la del- Surveys (NHANES II y NHANES III) en 1980 y 1994, el
gadez, las conductas alimentarias y los patrones de actividad número de niños y adolescentes considerados con sobrepeso
física. Los valores y las normas culturales sobre el peso cor- aumentó en un 100% en EE. UU. A pesar de la importancia
poral varían considerablemente. Pocos análisis transcultura- evidente del papel de los padres y del ambiente doméstico en
les han analizado las percepciones sobre el peso corporal. los hábitos alimenticios, y la de actividad física de los niños,
Sin embargo, los que se han realizado han deducido que la hay muy pocas pruebas disponibles que apoyen este punto de
mayoría de las culturas del mundo valora más la gordura vista.24,44 Parece que el comsumo frecuente y variado de frutas
moderada que la delgadez extrema. El ideal de cuerpo mas- y verduras en la propia casa desde la primera infancia es impor-
culino se relaciona frecuentemente con «lo grande» (estruc- tante para el desarrollo de preferencias por estos alimentos. El
tura y musculatura grandes), pero no necesariamente con la conocimiento, actitudes y comportamientos de los padres en
gordura. En las mujeres, un mayor peso corporal y unas cir- relación con una dieta sana y con la actividad física parecen
cunferencias aumentadas han sido considerados como signos también desempeñar un papel significativo, a pesar de que las
de condición sana, salud reproductiva y prosperidad. Este evidencias al respecto son en la actualidad incompletas. Existen
sigue siendo el caso en numerosos entornos culturales. En más datos disponibles sobre el impacto del entorno escolar en
cambio, en muchos países industrializados, la delgadez en las la nutrición, los patrones de alimentación y la actividad física
mujeres ha venido a simbolizar aptitud, éxito, control y en la escuela, y el comportamiento sedentario en casa.44
atractivo sexual, mientras que la obesidad representa pereza, Algunos estudios han llegado a concretar el efecto de las inter-
autoindulgencia y falta de fuerza de voluntad. venciones en las escuelas en la prevención de la obesidad.44
Las personas que viven en sociedades económicamente La mejoría de las condiciones socioeconómicas generales
desarrolladas tienen más probabilidades de ser obesos que en las poblaciones desfavorecidas, marginales o pobres, es
sus homólogos de las sociedades en desarrollo. Sin embargo, también una estrategia esencial para la prevención de la obe-
los habitantes de los países en vías de desarrollo están ahora sidad. Tradicionalmente, el patrón de la progresión de la
engordando también. En general, hay más personas obesas obesidad en una población solía iniciarse en las mujeres de
en las clases socioeconómicas altas de los países pobres y en mediana edad en grupos con renta alta, pero a medida que la
las bajas de los países ricos. La migración entre países es otro epidemia progresa, la obesidad se generaliza (especialmente
factor importante, ya que sitúa a las personas en nuevos con- en mujeres) en los grupos de menor nivel socioeconómico. La
textos alimentarios, económicos y sociales. La principal relación puede incluso ser bidireccional, estableciendo un
corriente migratoria se produce de las economías menos círculo vicioso (p. ej., un nivel socioeconómico bajo promueve
evolucionadas a las más desarrolladas. La migración y la la obesidad y las personas obesas tienen más probabilidades de
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aculturación están asociadas a incrementos en el peso cor- acabar formado parte de grupos con un nivel socioeconómico
poral relacionado con la estatura. bajo). Los mecanismos a través de los cuales el nivel socioeco-
nómico influye en las comidas y en los patrones de actividad
Factores sociales son probablemente múltiples, y su especificación es cierta-
mente necesaria. Sin embargo, las personas de nivel socioeco-
En su empeño por desarrollar un modelo que defina a grandes nómico bajo pueden estar más a merced de un ambiente obe-
rasgos las causas de la obesidad, la International Obesity Task sogénico, debido a que sus comidas y sus patrones de actividad
Force ha realizado un diagrama de red causal que integra los son probablemente seleccionados por defecto. En varios estu-
muchos factores sociales que contribuyen a la obesidad dios longitudinales intersectoriales,24 se han obtenido eviden-
(v. figura 3-3).41 Las numerosas flechas definen los factores cias sólidas sobre los efectos del nivel socioeconómico bajo
que se relacionan con la conducta individual y el gran número sobre la prevalencia de la obesidad (en países de renta alta).
24 Sección I • INTRODUCCIÓN

Factores Nacional/ Nivel comunitario Lugar Población individual


internacionales regional y local de trabajo/
escuela/hogar

Instalaciones
Transporte para actividades
público de ocio
Mercados Transporte
globales
Gasto
Urbanización Seguridad pública energético

Trabajo
Salud Condiciones
de salubridad
Infecciones
Servicios
Desarrollo Seguridad sanitarios
social Prevalencia
Comida de obesidad
y actividad
en el lugar y desnutrición
Medios de
de trabajo
comunicación Alimentos
y cultura manufacturados
e importados Familia
Educación y hogar
Ingesta
Publicidad de alimentos:
Alimentos Comida
y medios de densidad
y nutrición Agricultura/ y actividad
comunicación en la de los
jardines/
escuela nutrientes
mercados locales

Figura 3-3 Políticas sociales y procesos con influencias directas e indirectas en la prevalencia de la obesidad y la desnutrición.

Predisposición individual y biológica rino retardado puede aumentar el riesgo de obesidad.45


Además, el rebote en la adiposidad alrededor de los 5 a 7 años
PREDISPOSICIÓN BIOLÓGICA puede ser asociado a un riesgo aumentado de sobrepeso en los
años siguientes. En la adolescencia, el aumento de la autono-
Sexo mía puede conllevar cambios en el estilo de vida que, combi-
Varios procesos fisiológicos contribuyen al aumento del nados con otros cambios fisiológicos, promueven el aumento
depósito de grasa en las mujeres. Se cree que dichos depósi- del depósito de grasa, especialmente en mujeres. El primer
tos son necesarios para asegurar la capacidad reproductiva. período de la edad adulta suele estar caracterizado por una
Las diferencias en la prevalencia de la obesidad por sexo marcada disminución de la actividad física, lo que puede cau-
varían entre poblaciones y grupos étnicos. sar aumento de peso. El aumento medio de peso después del
embarazo es de casi 1 kg, aunque el margen a este respecto es
Etnia amplio. En muchos países desarrollados, los embarazos con-
En muchos países industrializados, los grupos étnicos secutivos en cortos períodos de tiempo suelen dar lugar a pér-
minoritarios parecen especialmente susceptibles para el de- didas de peso más que a aumentos. Por su parte, las mujeres
sarrollo de obesidad.2 Ello puede deberse a una predisposición menopáusicas son propensas a un aumento rápido de peso.
genética a la obesidad que sólo se hace patente cuando dichos
grupos se ven expuestos a estilos de vida más acomodados, o
por sus circunstancias socioeconómicas más deprimidas, tal y Otros factores individuales que favorecen
como se señaló anteriormente. Como ejemplos de esta ten- el aumento de peso
dencia están los indios pima de Arizona, los aborígenes aus-
ABANDONO DEL CONSUMO DE TABACO
tralianos, los sudasiáticos (bangladeshíes, indios y paquista-
níes) que viven en el extranjero, así como los afroamericanos Las consecuencias perjudiciales para la salud del consumo de
y estadounidenses de origen mexicano en los EE. UU.2 tabaco están ciertamente confirmadas. Uno de los muchos
factores que animan a fumar, a pesar de los riesgos para la
Períodos críticos para el aumento de peso salud, es la influencia que tiene el tabaco en el peso corporal.
A pesar de que en ocasiones las pruebas son contradicto- Los adultos fumadores pesan menos que los no fumadores
rias, algunos estudios sugieren que un crecimiento intraute- (3 kg de media) después de fumar muchos años. Sin embar-
Capítulo 3 • Etiología de la obesidad 25

go, entre los adolescentes y los adultos jóvenes, las diferen- genética ha sido de utilidad para la definición de la magnitud
cias de peso son pequeñas o inexistentes, y la iniciación al de la contribución genética a la obesidad, desde una perspec-
hábito no se asocia con la pérdida de peso. No obstante, se tiva poblacional. El nivel de heredabilidad, que ha sido consi-
documenta con frecuencia el hecho de fumar para controlar derado en un importante número de estudios en gemelos,
el peso, especialmente en mujeres jóvenes. Como media, el hijos adoptados y familias, es la fracción de la variación de un
abandono del tabaco aumenta el peso de una persona en los rasgo en la población (p. ej.,el IMC) que puede ser explicado
mismos niveles que se esperarían en un no fumador. por la transmisión genética. Las estimaciones del nivel de
heredabilidad dependen de cómo hayan sido diseñados los
CONSUMO EXCESIVO DE ALCOHOL estudios y del tipo de parentesco en el que se hayan basado.
En muchos países desarrollados, el consumo de alcohol Por ejemplo, los estudios llevados a cabo en gemelos homoci-
alcanza tasas de 10 a 30 g por día o del 3% al 9% de la inges- góticos y heterocigóticos, o en gemelos homocigóticos educa-
ta diaria total de energía. Los consumidores moderados de dos por separado, han arrojado los niveles más altos de here-
alcohol habitualmente lo añaden a su ingesta diaria de ener- dabilidad, con valores agrupados en torno al 70%. Por el
gía más que consumirlo como sustitutivo de la comida. Sin contrario, los estudios en hijos adoptados han generado los
embargo, la relación entre el consumo de alcohol y el valores de estimación de heredabilidad más bajos, alrededor
aumento de peso o el riesgo de obesidad no es concluyente. del 10% al 30%. En los estudios en familias se han encontra-
Indudablemente, existen muchos factores de confusión que do, de forma general, niveles de heredabilidad intermedios
influyen en la asociación. En un estudio prospectivo recien- entre los de los gemelos y los de los hijos adoptados.
te en varones de mediana edad, el consumo importante de Encuestas recientes llevadas a cabo con la colaboración
alcohol (30 g/día) fue asociado a un aumento en la ganancia de personas con obesidad grave y con obesidad mórbida,
de peso.46 Los hallazgos apoyan el concepto de que un mayor añadidas a la información obtenida sobre sus padres, herma-
consumo de alcohol contribuye directamente al aumento de nos y esposos, indican que la contribución genética a la obe-
peso y la obesidad.46 sidad puede ser responsable de entre el 25% al 40% de las
diferencias individuales del IMC. A partir del reciente y
T RATAMIENTO FARMACOLÓGICO brusco incremento de la prevalencia de la obesidad, han sur-
El aumento de peso es un efecto secundario común, aunque gido serias dudas sobre la heredabilidad de valores de peso
en ocasiones pasado por alto, de muchos fármacos de uso en relación a la talla, tales como el IMC.
extendido, tales como los corticoesteroides y algunos anti-
depresivos, antipsicóticos, anticonvulsivantes y antidiabéti- Riesgo familiar de obesidad
cos.47 El aumento de peso puede tener un impacto importan-
te en el cumplimiento terapéutico que, de no ser así, no El riesgo de padecer obesidad cuando un familiar de primer
impediría los beneficios del tratamiento. grado presenta sobrepeso u obesidad puede ser cuantificado uti-
lizando un método estadístico llamado coeficiente lambda (),
ESTADOS DE ENFERMEDAD que se define como la relación entre el riesgo de ser obeso
Algunas enfermedades endocrinológicas tales como el hipo- cuando un familiar biológico lo es y el riesgo de obesidad en la
tiroidismo, el síndrome de Cushing y los tumores hipotalá- población general, es decir, la prevalencia de obesidad. Los
micos, pueden provocar aumento de peso. Sin embargo, se valores estimativos de  para la obesidad basados en datos
trata de causas poco frecuentes, que representan una muy sobre el IMC han sido convenientemente documentados. Los
pequeña proporción de la obesidad en la población. cocientes de los riesgos estandarizados por edad y género obte-
nidos a partir de 2349 familiares de primer grado de 840 indi-
DISMINUCIÓN IMPORTANTE DE LA ACTIVIDAD viduos obesos considerados como casos índice, y de 5851 partici-
En algunos individuos, una disminución importante y con pantes del Nacional Health and Nutrition Examination Survey III,
frecuencia súbita de la actividad, sin una disminución com- revelaron que la prevalencia de la obesidad es el doble en los
pensatoria de la ingesta de energía, puede ser la causa princi- familiares de individuos obesos que en la población general.48
pal del incremento de la adiposidad. Ejemplos de este fenóme- Además, el riesgo aumenta con la gravedad de la obesidad de
no son el abandono del deporte o las lesiones, la retirada de la los casos índice. De este modo, el riesgo de obesidad extrema
competición activa de un deportista de élite y el desarrollo de (IMC  45 kg/m2) es aproximadamente ocho veces mayor en
enfermedades físicamente limitantes, como la artritis. las familias que cuentan con un individuo muy obeso.48 Los
resultados de un estudio en una población canadiense fueron
CAMBIOS EN LAS CIRCUNSTANCIAS PERSONALES, SOCIALES coherentes a este respecto en relación con los sujetos con obe-
Y DEL ENTORNO sidad extrema o mórbida, estimados por los límites de los
El matrimonio, el nacimiento de un hijo, la aceptación de un intervalos del IMC.49 Sin embargo, las estimaciones de  fue-
nuevo trabajo o la pérdida de un empleo pueden llevar a ron también significativas cuando los análisis se realizaron con
cambios en los patrones alimentarios y al aumento de peso. parejas de esposos y fueron en realidad más altos para la grasa
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subcutánea que en familiares de primer grado. Ello sugiere


que es preciso ser precavido a la hora de interpretar los valores
Predisposición genética de  que se basen únicamente en familiares biológicos, ya que
el riesgo familiar no sólo depende de factores genéticos.49
EPIDEMIOLOGÍA GENÉTICA Y NIVELES DE HEREDABILIDAD
El interés por la genética de la obesidad ha aumentado consi-
derablemente en los últimos tiempos. Existe una significativa Formas de obesidad monogénica
agregación familiar de muchos fenotipos de obesidad, inclu-
yendo el exceso de masa corporal o porcentaje de grasa cor- T RASTORNOS MENDELIANOS
poral, el exceso abdominal total, las grasas subcutánea y vis- Desde octubre de 2002, 37 síndromes mendelianos con impor-
ceral y el exceso de grasa glúteofemoral. La epidemiología tancia para la obesidad en seres humanos han sido asignados a
26 Sección I • INTRODUCCIÓN

una región genómica, y se han identificado los genes causantes ESTUDIOS DE VÍNCULOS
o firmes candidatos a serlo de 23 de estos síndromes.50 Tales
síndromes incluyen el de Prader-Willi, los síndromes de Otra estrategia utilizada para identificar genes y mutaciones
Bardet-Biedl, la lipodistrofia congénita de Berardinelli-Seip responsables de la predisposición a la obesidad ha sido la
tipo 1 y la osteodistrofia hereditaria de Albright. realización de mapeos genómicos masivos con el fin de iden-
tificar regiones cromosómicas de interés. Estos estudios se
OTRAS MUTACIONES HUMANAS GENÉTICAS SIMPLES han realizado generalmente en parejas de hermanos y, en
Se han identificado varias mutaciones en genes de seres ocasiones, en familias nucleares enteras o pedigríes, y se han
humanos que presentan una homología con genes causantes basado en alrededor de 300 o más marcadores de microsaté-
de obesidad en ratones y con genes que participan en las lites. En el Human Obesity Gene Map,50 se han hallado un
mismas rutas metabólicas. En estos casos, la obesidad es la total de 68 LRC relacionados con fenotipos de obesidad en
característica dominante y es considerablemente indepen- mapeos del genoma humano. Por otra parte, en estudios
diente de factores ambientales. A pesar de que estos casos dirigidos a vínculos específicos, se han identificado picos de
son infrecuentes, han permitido una mejor comprensión de vínculo entre genes candidatos y otros marcadores polimór-
la fisiología de los mecanismos reguladores del apetito y ficos. Los loci que supuestamente afectan a los fenotipos
de la homeostasis de la energía. El hecho de hallar que las relacionados con la obesidad pueden ser localizados en todos
mutaciones de un gen provocan fenotipos similares en rato- los cromosomas, excepto en el cromosoma Y.
nes y en seres humanos subraya la importante y bien conser-
vada naturaleza del mecanismo que regula el balance ener-
gético. Los genes en los cuales estas mutaciones han sido Interacciones entre el genotipo y el ambiente
documentadas incluyen los de la leptina (LEP), el receptor
de leptina (RLEP), la propiomelanocortina (POMC), la PREDISPOSICIÓN GENÉTICA E INTERACCIONES
coarboxipeptidasa E (Cpe), la prohormona convertasa-1 CON EL ENTORNO
(PHC1) y el receptor de melanocortina-4 (RMC4). La interacción entre el genotipo y el entorno (G  E) surge
cuando la respuesta de un fenotipo a cambios ambientales es
Formas de obesidad poligénicas y comunes determinada por el genotipo de un individuo. A pesar de que
es bien sabido que existen diferencias interindividuales en las
Los individuos afectados por síndromes de obesidad men- respuestas a distintas intervenciones dietéticas, son escasos los
delianos o por alteraciones de un solo gen representan sólo intentos realizados para probar si son dependientes del geno-
una pequeña fracción de la población obesa y no pueden tipo, en particular en los fenotipos relacionados con la obesi-
explicar la magnitud del problema de la obesidad que las dad. Los resultados de experimentos llevados a cabo en geme-
sociedades industrializadas afrontan hoy en día. Los estu- los homocigóticos han revelado que la respuesta a un balance
dios en seres humanos que identifican los genes específicos energético positivo o negativo es muy heterogénea entre las
involucrados en la obesidad común están marcados en la parejas de gemelos, y muy homogénea, en cambio, en los
actualidad por tres estrategias. Una de ellas es la del gen miembros de la misma pareja.51,52
candidato, que se apoya en el conocimiento actual de la La obesidad es un trastorno claramente genético en
fisiopatología de la obesidad. Los genes candidatos son algunos casos poco frecuentes. Cuando la obesidad es cau-
seleccionados según su función en los mecanismos bioquí- sada por un gen inactivado que tiene como resultado la falta
micos relacionados con la regulación del balance energéti- de competencia de una proteína que afecta al mecanismo de
co o con la biología del tejido adiposo. Una segunda estra- regulación del balance energético, entonces se puede decir la
tegia es la realización de mapeos genómicos masivos, con obesidad es una alteración de origen genético. Es estos casos,
el fin de identificar regiones cromosómicas de interés, el entorno sólo tiene un papel permisivo en la gravedad del
conocidas como loci de rasgos cuantitativos (LRC) y, en fenotipo. Es difícil llegar a una conclusión firme sobre el
última instancia, finalmente, los genes allí localizados. La número de casos de obesidad genética, ya que queda por
tercera estrategia se basa en esbozar la expresión de genes evaluar un gran número de genes en este aspecto. Sobre la base
específicos de un tejido, para compararla entre individuos de los datos acumulados hasta la fecha, parece que la obesidad
delgados y obesos, y con individuos de otras muestras genética podría relacionarse con hasta el 5% de los casos de
informativas. obesidad y con un porcentaje importante de los casos de obesi-
dad muy grave.53
ESTUDIOS DE ASOCIACIÓN Hemos propuesto dividir las formas más comunes de
Las pruebas de asociación entre genes candidatos y los feno- obesidad en las padecidas por aquellos con predisposición
tipos relacionados con la obesidad se resumen en la versión genética importante y las de los de escasa susceptibili-
más reciente del Human Obesity Gene Map.50 Un total de dad genética. En contraste con la primera categoría (obesidad
222 estudios que analizan 71 genes candidatos han docu- genética), los que presentan fuerte predisposición genética
mentado asociaciones significativas. Sin embargo, en gene- no están claramente caracterizados por una biología defec-
ral, los resultados de estos estudios han resultado en cierto tuosa que se pueda reducir a un gen y a una mutación, o a
modo decepcionantes, siendo los problemas más comunes en otras anomalías. La predisposición es el resultado de la
ellos unas dimensiones muestrales reducidas, un pequeño existencia de alelos de susceptibilidad en un determinado
tamaño del efecto y la falta de estudios de replicación, o bien número de loci. En un entorno que no favoreciese la obesi-
su fracaso. Para ciertos genes candidatos, los hallazgos posi- dad, estos individuos probablemente padecerían sobrepeso.
tivos se han replicado en estudios independientes incluyen- Se vuelven obesos y, potencialmente, obesos graves en un
do los genes de la proteína no acoplada (PNA1, PNA2, entorno obesogénico. Un tercer grupo se define de forma
PNA3), del adrenoreceptor (2-AR, 3-AR, 2-AR) y del arbitraria como aquel que ha heredado una débil predis-
peroxisoma del receptor  activado por proliferador posición a la obesidad. En un entrono restrictivo, pueden
(PRAP), LEP y RLEP. permanecer con peso normal o sobrepeso leve. Un entorno
Capítulo 3 • Etiología de la obesidad 27

obesogénico hará que gran parte de ellos se vuelvan obesos. 4. Bjorntorp P. “Portal” adipose tissue as a generator of risk factors for
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IMC

Fuerte predisposición
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Débil predisposición 10. Ravussin E, Smith SR: Increased fat intake, impaired fat oxidation,
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Figura 3-4 Cuatro niveles de susceptibilidad genética para desarro- 13. Weyer C, Foley JE, Bogardus C, et al: Enlarged subcutaneous abdom-
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obesidad, alcanzados en un corto tiempo, queda claro que 2002;346:1623-1630.
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sidad continuarán creciendo. En este contexto, un conjun- Organization, 2003.
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28 Sección I • INTRODUCCIÓN

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4
Metabolismo energético
y bioquímica de la obesidad
Sayeed Ikramuddin, M.D.

En el año 2001 los Centers for Disease Control and Prevention de autocontrol. Todavía hoy, algunos informes manifiestan
contactaron con el Center for Medicare and Medicaid Services esta simplificación de la noción de obesidad.
(CMMS) para pedir que modificara la terminología en el La enfermedad afecta a todos los grupos de edad, a
National Coverage Document, de modo que se viera reflejada la ambos sexos y a todas las razas, y se está propagando rápida-
dimensión de la amenaza que constituía la obesidad.1 El 15 de mente por todo el mundo.4 La obesidad ha demostrado por sí
julio de 2005, el Secretary of Health, Tommy Thompson, indi- misma ser sorprendentemente recalcitrante al tratamiento.
có que el CMMS debería borrar el enunciado «la obesidad no Los cambios en el estilo de vida, las modificaciones conduc-
es una enfermedad» en el manual CMMS.2 Este es quizá el tuales y las dietas, solas o combinadas, son en su mayor parte
primer reconocimiento gubernamental en la historia de nues- ineficaces. Los resultados del tratamiento farmacológico de
tra sociedad de que la epidemia de obesidad no es sólo un la obesidad mórbida han sido en general limitados. La com-
fenómeno cultural sino, más bien, una epidemia derivada de binación de anfetaminas fentermina y fenfluramina suprime
mecanismos de supervivencia ciertamente inadecuados. el apetito; sin embargo, estos fármacos fueron retirados del
La supervivencia humana ha dependido siempre de la mercado por la Food and Drug Administration de EE. UU. por
capacidad de superar el hambre. La escasez de alimento y el su asociación a complicaciones cardíacas y pulmonares signi-
hambre dan lugar a migraciones, creando la base para un ficativas. En contraste, la cirugía de la obesidad ha logrado
estilo de vida de cazador-recolector. En este tipo de ambien- resultados positivos en el control a largo plazo de la obesidad,
te, prevalecen los individuos con capacidad para almacenar aunque no sin puntuales fracasos, como la derivación yeyu-
eficazmente el alimento en forma de grasa. En períodos de noileal.5 A partir de la evolución de los tratamientos y de la
escasez, el almacenamiento eficaz de calorías en forma de gra- valoración de los fracasos, se ha hecho patente la necesidad de
sa genera especímenes «adecuados», en el sentido darwinia- comprender los mecanismos de la obesidad. El conocimiento
no. Sin embargo, en el actual ámbito dietético occidental, de sus causas facilitará en último término la consecución de
muchos de estos individuos padecen obesidad mórbida. El tratamientos satisfactorios.
individuo que puede «comer cualquier cosa» y no gana peso Es interesante que algunos estudios indiquen que las
se adapta mejor al entorno actual, excedente de abundantes patologías asociadas mejoran o incluso remiten mucho antes
calorías, y al estilo moderno de vida, en gran parte sedenta- de que se haya alcanzado la pérdida de peso fijada. Los datos
rio. La predisposición genética, los factores evolutivos y las muestran que ciertas mejoras en pacientes diabéticos pueden
influencias ambientales, combinados con las interacciones no deberse simplemente a la restricción alimentaria, sino rela-
moleculares, suponen ingentes dificultades para el obeso en cionarse con la desviación de las trayectorias intestinales,
su búsqueda de pérdida de peso.3 como sucede después de una derivación gástrica.6 Es probable
El intenso esfuerzo científico realizado en los últimos que las elevaciones de la hormona de señalización péptido 1
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20 años nos ha permitido vislumbrar todos estos procesos. similar a glucagón después de la cirugía sean las responsables
Actualmente, tenemos una perspectiva razonable de las cau- de esto. El péptido 1 similar a glucagón es una hormona ano-
sas de muchas enfermedades, y nuestro conocimiento de la rexígena que aumenta la sensibilidad a la glucosa y contribuye
biología de la enfermedad nos permite dirigir múltiples al efecto posprandial de las incretinas en pacientes sanos.7,8 La
aspectos de su proceso evolutivo y confeccionar tratamientos compresión de los motivos por los cuales la cirugía bariátrica
adecuados. Tal es el caso del cáncer de colon y el melanoma. funciona nos permitirá saber por qué ocurre la obesidad mór-
En cambio, nuestra comprensión de la obesidad está todavía bida. El balance metabólico de la ingesta alimentaria y el gasto
en su fase inicial. Uno de los problemas para poner solución energético facilitan la homeostasis de peso en los individuos no
a ello es la falta de atención general que se le presta. Incluso obesos, mientras que la regulación inadecuada o el fallo en las
en la comunidad médica, muchos círculos no reconocen la hormonas clave (p. ej., leptina, resistina, colecistocinina, gre-
obesidad como algo más que el resultado de una simple falta lina) inhiben la apropiada selección del tipo y la cantidad de
29
30 Sección I • INTRODUCCIÓN

alimento en los obesos y afectan sus esfuerzos para dedicarse Los individuos de peso normal metabolizan la energía de
a una actividad con gasto energético. Los procedimientos de la siguiente manera: del 40% al 44% del alimento se destina a la
la cirugía bariátrica suministran un excelente modelo de estu- producción de adenosintrifosfato (ATP) a través de procesos
dio de la pérdida de peso extrema, ya que usa una gama de oxidativos; el porcentaje restante (del 56% al 60%) se usa para
reajustes anatómicos que va desde la simple restricción a la producir calor. El metabolismo corporal total se puede expre-
derivación intestinal para procesos malabsortivos. sar como gasto energético total (GET). El GET es equivalen-
te a la tasa de metabolismo basal (TMB), más la actividad, más
el efecto térmico del alimento (ETA), más la termogenia
Z METABOLISMO ENERGÉTICO adaptativa (TA) (GET  TMB  ETA  TEA). La TMB es
el mínimo nivel de energía necesario para mantener la vida,
Parece que la regulación energética está controlada por un en tanto que la actividad representa la necesidad adicional de
sistema homeostático que incluye el cerebro y los nervios energía necesaria para las actividades diarias. El ETA es el
periféricos. El componente del sistema nervioso central en calor corporal producido; la TA es la fluctuación en el ETA
este sistema es el hipotálamo, que es modulado por péptidos por la temperatura ambiental y la humedad.13
centrales y periféricos para inducir cambios en el comporta- Leibel y cols. documentaron el efecto en el GET en
miento. Existe un balance entre los péptidos anabólicos pacientes que eran alimentados para aumentar su peso corporal
(orexígenos), que estimulan la conducta alimentaria, y los en un 20%.14 En esos pacientes, el organismo se volvió «inefi-
péptidos catabólicos (anorexígenos), que atenúan la ingesta caz», usando más calorías de las que se ingerían, en compara-
alimentaria. El equilibrio entre estos neuropéptidos es diná- ción con el gasto energético basal. Cuando estos pacientes ayu-
mico por naturaleza, cambiando a lo largo del ciclo día-noche naban posteriormente, se observaba el cambio: se consumía
y de día en día, y también en respuesta a los cambios dietéti- menos energía respecto a la ingesta. En los individuos obesos,
cos y las reservas energéticas periféricas. Estos cambios los mecanismos homeostáticos normales están desajustados y
ocurren en estrecha relación con los niveles de las hormonas hay un descenso del ETA y, por tanto, un descenso del GET.
leptina, insulina, grelina y corticosterona, y también con los Irónicamente, los estudios metabólicos de los pacientes
nutrientes glucosa y lípidos. Estos factores circulantes junto obesos indican que el gasto de energía aumenta en los obesos
con los procesos neurales son señales primarias que transmi- con peso estable, en comparación con los individuos no obe-
ten información sobre la disponibilidad de alimentos nece- sos. Este incremento se relaciona seguramente con un
sarios para los requerimientos celulares habituales, además aumento de la masa libre de grasa (masa corporal magra). Si
de información sobre el nivel de alimento almacenado para se normaliza el gasto de energía, en función de la masa libre
el uso a largo plazo. Juntas, estas señales ejercen una profun- de grasa, no hay diferencia entre el gasto de energía de los
da influencia en la expresión y producción de neuropétidos obesos y el de los no obesos. Es posible que la masa adipoci-
que, sucesivamente, inician la respuesta anabólica o catabó- taria sea la mediadora del denominado «punto de ajuste» del
lica para restaurar el equilibrio.9,10 peso. La energía se obtiene de la ingesta alimentaria. Cuando
Hay más de 250 asociaciones genéticas con la obesidad la comida se consume, la energía se gasta y el ATP es captu-
mórbida. En algunos casos poco frecuentes se dan causas de rado a expensas del calor corporal. Este es un proceso ter-
obesidad relacionadas con un solo gen, o monogénicas. Estas modinámicamente favorable, que va desde un estado alta-
incluyen mutaciones en los genes de la leptina y del receptor mente energético a un estado de baja energía.
de la leptina, ambos implicados en la producción de la mela- Los procesos termodinámicos están estrechamente rela-
nocortina, y el gen SIM 1, implicado en la formación del cionados con el trasporte de electrones. Por cada molécula de
núcleo paraventricular. Todos son importantes reguladores ATP consumida o producida, se registra un flujo de electrones
del comportamiento alimentario y el metabolismo.11 dentro y fuera de la mitocondria. En estudios realizados sobre
Es importante darse cuenta de que la célula grasa no tejido adiposo pardo en roedores obesos, estos procesos meta-
actúa como simple observador en la patogenia de la obesidad. bólicos sufren un desacople, con una alteración del flujo de
En la actualidad se sabe que el número de adipocitos puede electrones. El resultado es una producción desproporcionada
aumentar con un incremento de peso y decrecer con una pér- de calor con respecto a la actividad metabólica. El aumento de
dida.12 Ello resulta significativo, en tanto que los adipocitos energía gastada puede correlacionarse con un descenso de la
generan citocinas y otras hormonas (p. ej., factor de necrosis conservación de la energía. Este desacople entre los electrones
tumoral , proteína -c, resistina y leptina) que actúan en el y la producción de energía está seguramente regulado por pro-
hipotálamo influyendo en la conducta alimentaria. Los trigli- teínas desacopladas que existen en la membrana mitocondrial.
céridos almacenados en los adipocitos acumulan la mayoría de Cuando un individuo se convierte en obeso parece instaurarse
las reservas de calorías del cuerpo. La duración de la supervi- un estado de conservación o disfunción energética. Una vez
vencia sin alimento depende de la cantidad de tejido adiposo alcanzado cierto peso, el consumo de energía se normaliza y,
corporal. Se sabe que las personas obesas pueden sobrevivir cuando se excede este peso, aumenta el gasto energético. Estas
mucho más tiempo que las no obesas, si reciben una ingesta fluctuaciones en la energía gastada son la base del concepto de
apropiada de agua, vitaminas y minerales.11 punto de ajuste del peso y del principio en función del cual los
De manera específica, la obesidad es una enfermedad obesos lo son porque así lo determina un conjunto de fuerzas
metabólica o, mejor, del balance energético. En la obesidad, metabólicas contrapuestas y puestas en funcionamiento sobre
el total de energía consumida es menor que el total de ener- todo por las fluctuaciones en su peso.13
gía gastada. La regulación de estas dos fuerzas opuestas y, La naturaleza del metabolismo después de la cirugía de
por tanto, del balance energético, se complica debido al la obesidad no es bien conocida. Flancbaum y cols. identifi-
extendido y erróneo planteamiento según el cual el gasto caron un GET variable en pacientes seleccionados para deri-
energético total depende del peso. vación gástrica.15 Compararon el GET en reposo, usando un
Capítulo 4 • Metabolismo energético y bioquímica de la obesidad 31

calorímetro indirecto, con el calculado por la ecuación de La hormona del crecimiento liberada desde el ARC se proyec-
Harris-Benedict. Identificaron asimismo a algunos pacientes ta hacia el área media preóptica y el núcleo supraquiasmático
que tenían un GET preoperatorio menor a lo esperado. En para controlar la ingesta proteica. Todas estas áreas se ven
ellos, el IMC preoperatorio no fue diferente al de los pacien- influidas por diversas hormonas intestinales, por hormonas
tes cuyo GET residual medido equivalía al GET calculado. derivadas del hipotálamo y por otros péptidos.10
Los pacientes que tenían un GET normal preoperatorio no En el ARC cerebral hay dos tipos de neuronas cuyos
experimentaron cambios en el GET postoperatorio. efectos son opuestos. Son las neuronas productoras de
Sin embargo, los pacientes que estaban hipometabólicos AgRP/NPY y las neuronas productoras de propiomelano-
antes de operarse experimentaron una normalización del cortina (POMC), y de transcrito regulado por cocaína y
GET después de la intervención. Este estudio indica que, anfetaminas (CART). La activación de las primeras produce
después de una derivación gástrica, en algunos pacientes hay un aumento del metabolismo y del apetito, mientras que la
una menor conservación de energía, un hallazgo que no se activación de las segundas produce lo opuesto. Estas neuro-
encuentra en los pacientes con obesidad mórbida que toman nas se proyectan hacia neuronas de segundo orden que,
dieta. En un estudio reciente, Bobbioni-Harsch y cols. mues- sucesivamente, emiten señales hacia el núcleo del tracto soli-
tran que el grado en el cual se preserva la economía energé- tario, el centro de la saciedad. Algunas de estas hormonas
tica se correlaciona negativamente con la cantidad de pérdi- ejercen una acción directa sobre el núcleo del tracto solita-
da de peso después de la derivación gástrica.16 rio, que también recibe señales aferentes del nervio vago.9
Das y cols. documentaron el efecto de la cirugía bariátrica
en el metabolismo.17 Los objetivos del estudio fueron determi-
nar los cambios en el gasto energético y la composición corpo- Z BIOQUÍMICA
ral por la pérdida de peso inducida por la derivación gástrica
quirúrgica e identificar los factores predictivos prequirúrgicos Esta sección proporciona una breve revisión de los elemen-
de pérdida de peso. Un total de 30 varones y mujeres extrema- tos clave actualmente conocidos sobre la bioquímica de la
damente obesos con una media de edad de 39 años ( DE) obesidad.
( 9,6 años) y un IMC de 50,1 (9,3) (en kg/m2) se estudiaron
longitudinalmente en condiciones de peso estable, antes de la Leptina
cirugía, y después de la pérdida de peso y la estabilización
(14  2 meses). Se midieron el gasto energético en reposo Nuestra noción de la función de los tejidos adiposos en la
(GER), el GET, la composición corporal y la leptina en ayu- regulación de los procesos metabólicos ha experimentado un
nas. Los sujetos perdieron 53,2 (22,2) kg de peso y experimen- notable cambio. Durante muchas décadas se pensó que el
taron una disminución significativa del GER (2400  1000 RJ/d adipocito era sólo un almacén de grasa. Datos recientes, sin
P  0,001) y GET (3,6  2,5 MJ/d; P  0,001). Los cambios embargo, muestran que la grasa puede funcionar también
en el GER se predijeron en función de los cambios en la masa como tejido endocrino. El descubrimiento de la leptina en
magra y la masa grasa. El nivel de actividad física media (GET/ 1994 fue significativo en varios aspectos y estableció la pri-
GER) fue de 1,61 basal y en el seguimiento (p  0,98). La mera conexión entre el adipocito y el sistema nervioso cen-
pérdida de peso se predijo en función de la masa grasa de base tral como vía de regulación del peso.
y el IMC, aunque no considerando ninguna variable de gasto La leptina deriva de la palabra griega leptos, que significa
energético o relacionada con la leptina. El GER medido en el delgado. La leptina es una hormona proteica cuya función es la
seguimiento no fue significativamente diferente al GER pre- regulación metabólica del peso corporal. El mensaje genético
dicho. GET y GER disminuyeron en el 25% de media después para esta proteína se codifica en el genoma de ratón, que se ha
de la pérdida masiva de peso inducida por el derivación gástri- aislado por clonación genética de ratones obesos. La mutación
ca quirúrgica. Los cambios en el GER se predijeron en virtud bien del gen de la obesidad en sí mismo (ob/ob) o su receptor
de la pérdida de tejido corporal; por tanto, no hubo diferencias (db/db) puede causar que los ratones sean muy obesos. La lep-
significativas a largo plazo en la eficacia energética que pudie- tina se expresa sobre todo en los adipocitos, pero también pue-
ran dar lugar de forma independiente a un aumento de peso, de expresarse en el estómago y la placenta. La leptina afecta al
como se ve en la pérdida de peso a corto plazo. hipotálamo, donde contrarresta el efecto del neuropéptido Y y
de la hormona estimulante de los melanocitos .9,11
Estas observaciones se derivan de la experimentación
Z VÍAS NEURALES animal y no se han ratificado en estudios humanos. Las muta-
ciones humanas en el gen ob/ob son extremadamente raras;
Muchas áreas cerebrales están implicadas en la regulación de la sin embargo, en la mayoría de los pacientes obesos, los niveles
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alimentación, aunque el hipotálamo parece ser el centro esen- de leptina están elevados. En la obesidad mórbida, dichos
cial para la obesidad. El hipotálamo medial merece una aten- niveles parecen correlacionarse con la capacidad de conserva-
ción particular. Se compone de varias áreas que actúan en las ción de la energía. Se sabe que, después de una derivación
otras a través de una regulación hormonal y por neuropéptidos. gástrica, los niveles de leptina bajan. Ahora se cree que la lep-
Las células que contienen galanina llegan al área preóptica tina puede desempeñar un papel destacado en la adaptación
medial hacia el núcleo paraventricular y, de aquí, siguen hacia energética durante el balance negativo de nitrógeno.18,19
la eminencia media. Esta vía está implicada en el consumo y la
oxidación de grasas. La neuronas que sintetizan el neuropépti- Resistina
do Y se proyectan desde el núcleo arqueado (ARC), otro centro
del hipotálamo medial, hacía el núcleo paraventricular. Este La relación entre obesidad y diabetes tipo 2 es bien conoci-
circuito regula la ingesta y el metabolismo de los carbohidratos. da. Hasta el 80% de los pacientes con diabetes tipo 2 presen-
32 Sección I • INTRODUCCIÓN

tan sobrepeso u obesidad. Sabemos que la resistencia a la roglucagón, que se origina a partir de un gen común para la
insulina se correlaciona con el IMC, a partir de 30 kg/m 2. producción del proglucagón de 160 aminoácidos. El entero-
La resistina, una hormona peptídica recientemente descrita, glucagón se compone de 78 a 107 aminoácidos. Entre sus
puede ser la clave en esta relación. Derivada prácticamente efectos se cuentan la inhibición pancreática del glucagón,
en exclusiva del tejido adiposo blanco está implicada en la inhibición de la secreción de insulina, disminución de la
regulación de la resistencia a la insulina y la obesidad indu- resistencia a esta hormona, retraso del vaciamiento gástrico
cida por dieta. Aunque algunos de los datos registrados en y disminución de la motilidad intestinal.7,8,23
humanos son controvertidos, el incremento del IMC parece
relacionarse con niveles elevados de resistina; a saber, el Colecistocinina
índice cintura-cadera parece estar inversamente relacionado
con los niveles de resistina.20 Muchas de las hormonas derivadas del tejido no adiposo
Desafortunadamente, el rol preciso de la resistina ha merecen atención en el análisis de la obesidad. De hecho, el
sido difícil de definir en los humanos y resulta complejo de descubrimiento y la tipificación de las hormonas del tubo
estudiar en modelos animales. El número de isoformas de la digestivo han llevado a muchos a considerar el intestino ante-
resistina identificadas en roedores y en seres humanos difie- rior como un órgano endocrino. La colecistocinina es un pép-
re. Las fuentes celulares de resistina también son significa- tido saciante bien conocido. Puede actuar como hormona
tivamente distintas en roedores y humanos. paracrina y como neurotransmisor. En su función hormonal,
Algunas evidencias indican que la obesidad es un estado retrasa el vaciamiento gástrico y, a nivel central, inhibe la res-
inflamatorio. La familia molecular de la resistina se identificó puesta alimentaria a los incentivos alimentarios.24
primero en modelos inflamatorios como el asma. Este péptido
puede, de hecho, constituir una nueva clase de citocinas. Se Grelina
han demostrado elevaciones de la proteína c-reactiva y la inter-
leucina-6 en los pacientes obesos. La elevación de la proteína La grelina, hormona recientemente descrita, se encuentra
c-reactiva también se ha asociado con el número de patologías en el fundus gástrico y en el duodeno proximal. Se ha identi-
asociadas a obesidad que un paciente obeso presenta. ficado también en otras áreas corporales, como el páncreas.
Actúa sobre todo para aumentar la secreción de la hormona
Proteína estimuladora de la acilación del crecimiento por la hipófisis. En personas de peso nor-
mal, los niveles de grelina disminuyen por la ingesta de glu-
El tejido adiposo sintetiza y secreta una serie de hormonas cosa y aumentan con el ayuno. La pérdida de peso inducida
citocinas relacionadas con la regulación de la homeostasis por dieta aumenta por su parte los niveles séricos de grelina.
energética. La proteína estimuladora de acilación es una cito- Los resultados tras derivación gástrica son mixtos. A corto
cina lipogénica que se relaciona con la patogenia de la obesi- plazo, parece haber una profunda caída en los niveles séri-
dad. Su principal efecto en la patogenia de la obesidad consis- cos; sin embargo, los datos de un reciente estudio, con segui-
te en aumentar la síntesis de triglicéridos y su miento de 15 meses, no muestran cambios o, si acaso, indi-
almacenamiento en el adipocito. Ello incrementa la absorción can leves aumentos de dichos niveles.
de la glucosa insulinodependiente y la esterificación áci- Múltiples vías opuestas en el hipotálamo regulan el
do-grasa. La proteína estimuladora de la acilación está aumen- comportamiento alimentario y la saciedad. Estos centros se
tada en la obesidad, la diabetes tipo 2 y la enfermedad corona- ven influidos por la interrelación entre hormonas como la
ria arterial. La pérdida de peso, con dieta o cirugía, baja los grelina y la leptina. Datos recientes muestran que la cirugía
niveles de la proteína estimuladora de la acilación.18,22 de la obesidad, sobre todo la derivación gástrica, puede
generar cambios profundos en los niveles de estas hormonas.
Adiponectina Dentro del ARC cerebral hay dos receptores separados que
median en la saciedad. Estas neuronas tienen efectos recí-
La adiponectina es un factor común secretado por el tejido procos; una serie de ellas contiene receptores para sustancias
adiposo. Los niveles bajos de adiponectina se asocian con que aumentan el apetito y las otras presentan tienen recep-
descenso de la capacidad de fosforilación de la tirosina por el tores para hormonas de efecto contrario.25-28
receptor de la insulina. En la obesidad mórbida, los niveles
de adiponectina están reducidos, en tanto que los nive- Insulina
les preoperatorios son posibles indicadores del alcance de la
pérdida de peso tras una derivación gástrica.18 La insulina, secretada por las células  de los islotes pancreá-
ticos, es quizá la hormona que mejor se conoce. Los recep-
Enteroglucagón tores de insulina se localizan en todo el cerebro. La insulina
funciona a través del mecanismo del neuropéptido Y para
Sabemos que los mecanismos de la obesidad se relacionan suprimir el apetito. Mientras que la sensibilidad a la insulina
con alteración del eje cerebrointestinal. En estudios realiza- sea apropiada, un incremento en los niveles centrales de
dos en ratas, se ha demostrado que la obesidad es inducida insulina da lugar a reducción del apetito y pérdida de peso.
por una lesión en el hipotálamo ventromedial. Mediante la
trasposición de un segmento de íleon terminal al duodeno,
se observa una pérdida de peso similar. En estas operacio- Z CONCLUSIÓN
nes, así como en pacientes con una derivación yeyunoileal,
se ha observado una reducción de la ingesta alimentaria sos- El sobrepeso (índice de masa corporal [IMC]  25 kg/m2) se
tenida. También se produce un gran incremento en el ente- relaciona con diversos problemas sanitarios, y la obesidad
Capítulo 4 • Metabolismo energético y bioquímica de la obesidad 33

(IMC  30 kg/m2) es un manifiesto menoscabo de la salud. 7. Greenway SE, Greenway FL III, Klein S: Effects of obesity surgery
Aunque son muchos los que aún la interpretan como un pro- on non-insulin-dependent diabetes mellitus. Arch Surg
2002;137:1109-1117.
blema conductual de falta de autocontrol, la obesidad se 8. Chelikani PK, Haver AC, Reidelberger RD: Intravenous infusion
caracteriza por generar anomalías en el metabolismo ener- of ghrelin increases meal frequency and attenuates anorexigenic
gético y es responsable de numerosas patologías asociadas. responses to peptide YY (3-36), glucagons-like peptides, and CCK in
rats. SSIB 2005;(abstract).
Al igual que la aterosclerosis, la obesidad mórbida (IMC  9. Marx J: Cellular warriors at the battle of the bulge. Science
40 kg/m 2 o IMC  35 kg/m 2 en presencia de patologías 2003;299:846-849.
comórbidas, es una enfermedad perniciosa, que acorta la 10. Leibowitz SF, Wortley KE: Hypothalamic control of energy balance:
vida y se relaciona con numerosos orígenes multifactoriales, different peptides, different functions. Peptides 2004;25:473-504.
11. Klein S, Romijn JA: Obesity. In Larsen PR, Kronenberg HM,
que pueden ser identificados y tratados independientemente. Melmed S, et al (eds): Williams Textbook of Endocrinology, ed 10, pp.
Hoy en día la obesidad es una epidemia que afecta a todos los 1619-1641. Philadelphia, W.B. Saunders, 2002.
grupos de edad, ambos sexos y todas las razas, en todo el 12. Hoffstedt J, Näslund E, Arner P: Calpain-10 gene polymorphism is
associated with reduced 3-adrenoceptor function in human fat cells.
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Se trata de una enfermedad cuyos mecanismos surgen 13. Wildman R, Center for Nutrition, Metabolism & Performance,
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Todas estas áreas se ven influidas por numerosas hormonas 16. Bobbioni-Harsch E, Morel P, Huber O et al: Energy economy
hampers body weight loss after gastric bypass. J Clin Endocrinol
intestinales, por hormonas derivadas del hipotálamo y por Metab 2000;85:4695-4700.
otros péptidos. 17. Das SK, Roberts SB, McCrory MA, et al: Long-term changes
Es posible demostrar que el mediador central en el com- in energy expenditure and body composition after massive weight loss
plejo mecanismo del peso es la grasa, a la que se puede con- induced by gastric bypass surgery. Am J Clin Nutr 2003;78:
22-30.
siderar un órgano endocrino en sí mismo. Numerosas hor- 18. Faraj M, Havel PJ, Phelis S, et al: Plasma acylation-stimulating
monas secretadas por los adipocitos alteran claramente el protein, adiponectin, leptin, and ghrelin before and after weight loss
metabolismo energético en varios tejidos, lo que puede induced by gastric bypass surgery in morbidly obese subjects. J Clin
Endocrinol Metab 2003;88:1594-1602.
explicar las diferencias aparentes en las formas en las que los 19. Rubino F, Michel G, Gentileschi P, et al: The early effect of the Roux-
individuos obesos y no obesos ganan, mantienen y pierden en-Y gastric bypass on hormones involved in body weight regulation
peso. Las nuevas investigaciones sobre los tipos y las funcio- and glucose metabolism. Ann Surg 2004;240:236-242.
20. Steppan CM, Bailey ST, Bhat S, et al: The hormone resistin links
nes metabólicas del tejido adiposo en sujetos obesos y no obesity to diabetes. Nature 2001;409:307-312.
obesos, junto con el estudio en curso de los resultados obte- 21. Holcomb IN, Kabakoff RC, Chan B, et al: FIZZ1, a novel cysteine-
nidos por la cirugía bariátrica, contribuirán sin duda a rich secreted protein associated with pulmonary inflammation,
aumentar nuestro conocimiento del metabolismo energético defines a new gene family. EMBO J 2000;19:4046-4055.
22. Brun RP, Spiegelman BM: Obesity and the adipocyte: PPAR and
y de la bioquímica de la obesidad. the molecular control of adipogenesis. J Endocrinol 1997;155:
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5
Patologías asociadas a la obesidad
Henry Buchwald, M.D., Ph.D.

El sobrepeso (índice de masa corporal [IMC] 25 kg/m2) pue- nosticados. Cerca del 75% de todos los casos de hipertensión
de no ser saludable; la obesidad (IMC 30 kg/m2) es claramen- esencial pueden atribuirse a la obesidad.3,4 Incluso indivi-
te perjudicial para la salud, y la obesidad mórbida (IMC duos con un peso sólo un 20% por encima del ideal tienen
40 kg/m2 o IMC 35 kg/m2 en presencia de patologías con- un riesgo ocho veces superior al de la población general de
comitantes asociadas a la obesidad) es una enfermedad en toda padecer hipertensión. Ya en los años sesenta, el estudio
regla.1,2 Evidentemente, el origen de la obesidad mórbida es Framingham demostró que una elevación del 15% en el peso
multifactorial, pero una vez alcanzados los valores de IMC que corporal producía un incremento del 18% de la presión arte-
definen la obesidad mórbida, nos hallamos ante una enferme- rial sistólica.9 La obesidad es, con diferencia, el mejor factor
dad que acorta la vida y es incapacitante y perniciosa.3-6 Sin de predicción de presión arterial alta, tanto en varones como
embargo, para la sociedad, e incluso para la comunidad médi- en mujeres, a todas las edades y en todas las razas.3,4 La
ca, es en ocasiones más fácil aceptar la obesidad mórbida como hipertensión, junto con la dislipidemia y el tabaquismo, son
causante de ciertas patologías asociadas que definirla como una los tres principales factores de riesgo de la enfermedad car-
enfermedad en sí misma. Después de todo, la cardiopatía coro- diovascular aterosclerótica.10
naria y la enfermedad arterial oclusiva periférica se identifica-
ron como entidades clínicas durante décadas, antes de que el Dislipidemia
mecanismo que las causa, la aterosclerosis, fuera considerado
una enfermedad. Sin embargo, la aterosclerosis es en sí mis- En un porcentaje comprendido entre el 40% y el 50% de los
ma una enfermedad de origen multifactorial que puede identi- individuos con un IMC de 30 kg/m2 o más, la obesidad se
ficarse y tratarse de manera independiente. asocia a algún tipo de dislipidemia.3,4 El estudio Framingham
Las patologías asociadas a la obesidad mórbida afectan en determinó que por cada 10% de incremento en el peso corpo-
esencia todos los sistemas orgánicos:7,8 cardiovascular (hiper- ral, las concentraciones de colesterol aumentan aproximada-
tensión, enfermedades aterosclerótica cardíaca y vascular mente 12 mg/dL.9 La dislipidemia de la obesidad se caracteri-
periférica con infartos de miocardio y accidentes cerebro- za por hipercolesterolemia, elevación del colesterol de
vasculares, insuficiencia venosa periférica), respiratorio (asma, lipoproteínas de baja densidad (LDL), reducción del coleste-
apnea obstructiva del sueño, síndrome de obesidad-hipoven- rol de lipoproteínas de alta densidad (HDL) e hipertrigliceri-
tilación), metabólico (diabetes tipo 2, intolerancia a la glucosa, demia. El índice HDH-LDL se reduce y la relación colesterol
dislipidemia), musculoesquelético (esguince vertebral, enfer- total-HDL se eleva. Este perfil lipídico es marcadamente ate-
medades de los discos, artrosis por sobrecarga en caderas, rogénico y, ciertamente, es un factor de riesgo destacado de
rodillas, tobillos y pies), digestivo (colelitiasis, enfermedad por enfermedad cardiovascular aterosclerótica.10,11
reflujo gastroesofágico, transformación grasa del hígado
[esteatohepatitis], cirrosis hepática, hepatocarcinoma, carci- Diabetes e intolerancia a la glucosa
noma colorectal), urinario (incontinencia urinaria de esfuer-
zo), endocrino y reproductivo (síndrome de ovario poliquísti- La prevalencia de diabetes en cualquier población es función
co, mayor riesgo de patologías durante el embarazo y para el de la prevalencia de obesidad. De hecho, la obesidad es el
feto, hipogonadismo masculino y cánceres de endometrio, factor de riesgo primario para la diabetes tipo 2: el 90% de
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mama, ovario, próstata y páncreas), dermatológico (dermatitis todos los diabéticos tipo 2 son obesos.3,4 Los datos del
intertriginosa), neurológico (seudotumor cerebral, síndrome National Health and Nutrition Examination Survey III
del túnel carpiano) y psicológico (depresión). de EE. UU. (1988-1994) mostraron que el riesgo relativo de
diabetes química para un IMC de 30 kg/m 2 o más es del
orden de 50% y, para un IMC de 40 kg/m2 o más, es de más
Z PATOLOGÍAS ASOCIADAS INDIVIDUALES del 90%.12 El Nurses Health Study, realizado en 84.941 muje-
res (1980-1996), demostró que el riesgo relativo de diabetes
Hipertensión se multiplicaba casi por cuatro cuando el IMC pasaba de
23 kg/m 2 a más de 35 kg/m 2.13,14 Virtualmente todos los
Aproximadamente el 50% de los adultos obesos (IMC adultos con obesidad mórbida presentan un cierto nivel sus-
30 kg/m2) son hipertensos, en muchas ocasiones no diag- ceptible de medición de intolerancia a la glucosa.15 Un 36%
37
38 Sección II • CONSECUENCIAS

de los individuos con intolerancia a la glucosa progresarán a Insuficiencia venosa periférica


diabetes tipo 2 en el plazo de 10 años.
Los grandes depósitos viscerales de grasa producen una Como la insuficiencia venosa periférica no suele ser una ame-
rápida producción de ácidos grasos libres y de glucosa, llevan- naza para la vida, no ha generado tanta información como
do a un bloqueo de la fijación de insulina en el hígado, gluco- muchas de las otras enfermedades asociadas a la obesidad. Sin
neogenia y resistencia a la insulina funcional. Ello conduce al embargo, para los profesionales que atienden a personas obe-
desarrollo de una hiperinsulinemia e hiperglucemia simultá- sas, la prevalencia de varices superficiales y dolor en bipedes-
neas. Los pacientes obesos presentan una mayor prevalencia tación son muy evidentes. Además, los pacientes obesos tienen
de disfunción en el control de la glucosa, concentraciones ele- con frecuencia dermatitis y úlceras de estasis. Las úlceras
vadas de insulina en ayuno, niveles elevados de glucosa en abiertas, que nunca cicatrizan y tienen un olor desagradable,
ayuno, supresión de las tasas de aclaramiento metabólico de localizadas en las piernas por debajo de las rodillas, dominan
glucosa e insensibilidad a las concentraciones de insulina. la vida de algunos pacientes. Por otra parte, los obesos pueden
La diabetes constituye el cuarto factor de riesgo inde- tener una mayor incidencia de tromboflebitis venosa profun-
pendiente más importante para la aterosclerosis. La hiper- da y embolias pulmonares, especialmente después de trauma-
tensión, la hipercolesterolemia, el tabaquismo y la diabetes tismos, cirugía o inmovilización.
son los cuatro factores de riesgo cardinales de la enfermedad
aterosclerótica cardíaca y la enfermedad vascular periférica, Asma
el infarto de miocardio y los accidentes cerebrovasculares.16
En comparación con los que no lo son, los diabéticos tienen El asma se caracteriza por la presencia de disnea paroxística,
una prevalencia cuatro veces superior de enfermedad coro- tos sibilante y sensación de opresión torácica. Se debe a una
naria y dos veces superior de accidentes cerebrovasculares. constricción bronquial espasmódica, que se atribuye a
Además, la diabetes se asocia a ceguera, insuficiencia renal, una irritación generalmente asociada a un alergeno. El asma
neuropatía, gastroenteropatía y amputaciones de las extre- también es con frecuencia una enfermedad concomitante a
midades inferiores. la obesidad.20 Se plantea la hipótesis de que la disminución
En un estudio con voluntarios sin antecedentes de dia- del volumen de los pulmones producida por el incremento del
betes, cardiopatía coronaria ni hipertensión, se estudió la perímetro abdominal sensibiliza el tracto respiratorio al
resistencia a la insulina mediante la determinación de la con- fenómeno asmático. La apnea del sueño y la estasis respirato-
centración de glucosa plasmática constante durante los últi- ria, así como el reflujo gastroesofágico y la broncoaspiración,
mos 30 minutos de una infusión de 180 minutos de octreó- pueden ser factores contribuyentes. Independientemente del
tido, glucosa e insulina.17 En este estudio, el IMC y la mecanismo específico, los niños obesos tienen una probabi-
glucemia plasmática mantuvieron una correlación significa- lidad tres veces superior de padecer asma a los de la población
tiva (r  0,465, P  0,001). El IMC y la glucemia plasmática infantil general, con una incidencia de cerca del 30%; los
se asociaron de manera independiente con nueve factores de adultos obesos tienen el doble de prevalencia, con una inci-
riesgo de cardiopatía coronaria: edad, presión arterial sistó- dencia de cerca del 25%.3,4
lica, presión arterial diastólica, colesterol total, triglicéridos,
colesterol HDL, colesterol LDL y respuestas de glucosa e Apnea del sueño
insulina a una carga de 75 g de glucosa oral. En el análisis de
regresión múltiple, la glucemia plasmática aumentó la capa- Hasta el 50% de los obesos mórbidos sufren apnea del sueño,
cidad del IMC de predecir cinco de estos factores de riesgo con una incidencia 10 veces superior a la habitual, de 2% a
coronario de una forma entre moderada y sustancial. Por 4%.3,4 La apnea del sueño precoz con ronquidos fuertes pue-
tanto, es evidente que, incluso en la etapa preclínica, el peso de progresar a apnea grave, con períodos apnéicos frecuen-
corporal y, por supuesto, la obesidad se asocian estrecha- tes y prolongados que requieren el uso de aparatos de presión
mente con la diabetes, y que la obesidad y la diabetes combi- positiva continua en la vía aérea. El perímetro abdominal es
nadas predicen consecuencias de salud letales. el factor de riesgo más significativo para el desarrollo de
apnea del sueño.21,22 Debido a que el aumento del perímetro
Enfermedad cardíaca y enfermedad vascular periférica abdominal, u obesidad central, es más prevalente en varones
que en mujeres, la apnea del sueño es más frecuente en hom-
La obesidad es un factor de riesgo primario independiente, bres obesos que en mujeres obesas. La apnea nocturna se ha
así como un factor de riesgo secundario para la aterosclero- asociado con casos de muerte. Sin embargo, los efectos de la
sis cardíaca y la enfermedad vascular periférica.16-19 La apnea nocturna episódica se manifiestan con mayor fre-
influencia secundaria está mediada por la hipertensión y la cuencia durante el día, con somnolencia, falta de atención,
dislipidemia inducidas por la obesidad. Este resumen no alteraciones en el rendimiento laboral y disfunciones cogni-
puede intentar abarcar ni siquiera una somera revisión de los tivas. La incidencia de accidentes automovilísticos es varias
estragos de la cardiopatía coronaria, los accidentes cerebro- veces superior en individuos con apnea que en la población
vasculares, la enfermedad carotídea oclusiva, el síndrome de general.23
robo de la subclavia, los aneurismas, la enfermedad arterial La apnea del sueño se clasifica como central, orofarín-
periférica oclusiva, la angina visceral y la enfermedad oclu- gea obstructiva o combinada. Los procedimientos para
siva. Estos problemas afectan a arterias relativamente gran- mejorar la apnea orofaríngea obstructiva, como la uvulecto-
des. A estas manifestaciones del diabético obeso hay que mía, han tenido resultados entre mínimos y moderados en
agregarles los efectos independientes y sinérgicos de la pacientes obesos.24 Se han llevado a cabo traqueotomías para
enfermedad arterial de pequeños vasos asociada a la diabe- mejorar la ventilación nocturna, nuevamente con una relati-
tes. Como resultado de todos estos factores de riesgo acu- va tasa de resultados satisfactorios. La cirugía bariátrica con
mulativos, en los individuos obesos la enfermedad cardíaca pérdida de peso importante en obesos mórbidos ha sido efi-
y la vascular periférica ocurren a una menor edad y con fre- caz casi en el 100% de los casos del tratamiento de la apnea
cuencia de forma más grave que en la población no obesa. del sueño.
Capítulo 5 • Patologías asociadas a la obesidad 39

Síndrome de obesidad-hipoventilación Enfermedad por reflujo gastroesofágico


El síndrome de obesidad-hipoventilación es menos común, La enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE), habi-
pero más patogénico, que la apnea del sueño. El obeso pre- tualmente asociada a hernia hiatal, es un problema común; la
senta una disminución del volumen pulmonar debida al incidencia estimada en población general es del 20%.27 Cerca
aumento de la presión intraabdominal y a la elevación del del 7% de las personas padecen un grado de la enfermedad lo
diafragma, así como un aumento del volumen sanguíneo suficientemente grave como para requerir medicación, habi-
pulmonar y del gasto cardíaco. La disminución del volu- tualmente con un bloqueador de la bomba de protones. La
men pulmonar produce disnea crónica, disminución del ERGE es precursora de la esofagitis de Barrett, que conlleva
volumen de reserva espiratoria, aumento de las tasas de con- una mayor probabilidad de desarrollar un carcinoma de esó-
sumo de oxígeno e incremento del dióxido de carbono cir- fago. La frecuencia de ERGE en obesos puede elevarse hasta
culante. Los efectos acumulativos a largo plazo de estos cerca del 50% y la mitad de estos pacientes puede requerir
cambios respiratorios pueden producir hipertensión pulmo- medicación.3,4,28,29 La monitorización del pH durante 24 horas
nar, insuficiencia cardíaca derecha y muerte. y la manometría esofágica corroboran estos datos clínicos. Es
más que probable que el aumento de la presión intraabdomi-
Enfermedad de los discos y la columna vertebral nal en los obesos sea un factor etiológico fundamental en el
desarrollo de la ERGE asociada a obesidad.6
Los problemas ortopédicos producidos por la obesidad son
evidentes. Los de mayor prevalencia son el dolor de espalda Transformación grasa, cirrosis y hepatocarcinoma
crónico y la enfermedad de los discos lumbosacros. Al
aumentar la edad, los problemas de espalda en los obesos La transformación grasa del hígado, o esteatohepatitis no
alcanzan una incidencia del 100%. Con niveles de IMC alcohólica, se encuentra en casi el 100% de los obesos mór-
superiores a 25 kg/m 2 la artrosis se acelera.3,4 Por lo tanto, bidos, como se confirma en las biopsias hepáticas intraope-
el obeso mórbido no sólo presenta esguince vertebral, sino ratorias obtenidas durante la cirugía bariátrica.30,31 Su gra-
también espolones artrósicos, dolor del nervio ciático y vedad parece aumentar de manera lineal en relación con el
colapso de los discos y vértebras. No es raro que los obesos incremento del IMC. Con el tiempo, la transformación gra-
mórbidos usen bastones, andadores o sillas de ruedas para sa puede progresar a fibrosis pericentral, fibrosis con forma-
movilizarse. ción de puentes y, por último, cirrosis. A su vez, la cirrosis
da origen al hepatocarcinoma.
Artrosis periférica
Seudotumor cerebral y síndrome del túnel carpiano
La artrosis por sobrecarga de caderas, rodillas, tobillos y
pies se acelera en los obesos, y con frecuencia implica otras El aumento de la presión intraabdominal en obesos puede
anomalías óseas congénitas o traumáticas de los miembros producir incremento del líquido cefalorraquídeo y, en con-
inferiores.25 El dolor de pies, especialmente la enfermedad secuencia, hipertensión intracraneal.6 Este cuadro, que se
de Sever, que se caracteriza por dolor del talón, está clara- conoce como seudotumor cerebral, produce cefaleas graves,
mente asociado a la obesidad. Como mínimo, la artrosis acufenos pulsátiles y alteraciones visuales.32
periférica limita la deambulación y capacidad de hacer ejer- Se sabe que los obesos presentan un riesgo cuatro veces
cicio y quemar calorías del obeso. La mayoría de los trauma- más elevado que los no obesos de padecer neuritis periférica
tólogos prefiere retrasar la cirugía de reemplazo de rodilla o del nervio mediano o síndrome del túnel carpiano.33 De
cadera en pacientes con obesidad mórbida y remitirlos antes hecho, la obesidad es un factor de riesgo más importante
para cirugía bariátrica previa.26 para el síndrome de túnel carpiano que las tareas ocupacio-
nales repetitivas que involucran los tendones que pasan por
Colelitiasis el túnel del carpo.

La obesidad, con su mayor prevalencia de dislipidemia, es un Dermatitis intertriginosa


factor de predicción de colelitiasis. En EE. UU., forma par-
te de la regla nemotécnica clásica de las facultades de medi- Aunque no constituyen una amenaza para la vida, las mani-
cina, llamada de las «cinco efes»: fat, fair, female, fertile y festaciones cutáneas de la obesidad producen inhibiciones
forty (gorda, rubia, mujer, fértil y cuarentona). Para ser más sociales y sexuales y son, cuando menos, desagradables. Los
precisos, a este recurso sólo faltaría agregarle la caracterís- obesos mórbidos suelen presentar diversas formas de derma-
tica de ser indígena nativa estadounidense. Los obesos tie- titis intertriginosa, incluyendo infecciones micóticas cróni-
nen tres veces más probabilidades de padecer colelitiasis que cas, forúnculos y lesiones maceradas, exudativas y fétidas.
los no obesos, tanto en varones como en mujeres.3,4 La apa- Estas manifestaciones cutáneas suelen localizarse funda-
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rición de colelitiasis en los obesos después de cirugía bariá- mentalmente bajo los pliegues abdominal, mamario, ingui-
trica ha hecho que algunos cirujanos bariátricos realicen nal y axilar.
una colecistectomía de rutina en el momento de la interven-
ción quirúrgica. Algunos cirujanos realizan rutinariamente Incontinencia urinaria de esfuerzo
una ecografía de vías biliares previa a la cirugía bariátrica,
para seleccionar aquellos pacientes a quienes harán también El aumento de la presión intraabdominal en el obeso produ-
una colecistectomía. Ciertamente, debe practicarse una pal- ce presión sobre el suelo pélvico y alteraciones neuromuscu-
pación cuidadosa de la vesícula durante la cirugía bariátrica lares del tracto urinario, que pueden conducir a incontinen-
abierta y realizarse una colecistectomía en presencia de cole- cia urinaria de esfuerzo. La incontinencia asociada a obesidad
litiasis. La cirugía laparoscópica dificulta el diagnóstico es más frecuente en mujeres que en varones y se acentúa
intraoperatorio de la colelitiasis. durante el embarazo y el período puerperal.
40 Sección II • CONSECUENCIAS

Trastornos endocrinos y reproductivos en la mujer Z SÍNDROME METABÓLICO


Los estrógenos son producidos por las células grasas, por lo Algunas de las patologías individuales comórbidas de la obe-
que los obesos presentan concentraciones aumentadas de sidad han sido englobadas y caracterizadas como síndrome
estrógenos circulantes. Este incremento de los estrógenos es metabólico de la obesidad (síndrome X). Este síndrome inclu-
continuo en las mujeres obesas, en lugar de mostrar el patrón ye hipertensión esencial, dislipidemia, resistencia periférica a
cíclico fisiológico del ciclo de secreción de estrógenos-pro- la insulina, hiperinsulinemia, diabetes tipo 2 y una mayor
gestágenos normal de la época premenopáusica. Además, la incidencia de episodios cardiovasculares.37 El síndrome se
producción de globulina transportadora de hormonas sexua- asocia al síndrome de ovarios poliquísticos y la esteatohepati-
les está suprimida en los obesos, lo que aumenta aún más las tis no alcohólica, con todas sus manifestaciones y complica-
concentraciones de estrógenos séricos y andrógenos circu- ciones, siendo probablemente su causa. El síndrome metabó-
lantes. lico se registra con mayor frecuencia en pacientes con obesidad
Estas alteraciones hormonales pueden producir mens- central que en los afectados por obesidad periférica.
truaciones erráticas, amenorrea, hemorragia uterina disfun-
cional, menopausia precoz e infertilidad. Por otra parte, el
síndrome de ovarios poliquísticos es tres veces más preva- Z PATOLOGÍAS ASOCIADAS A LA OBESIDAD
lente en las mujeres obesas que en las delgadas.34 Durante el DESPUÉS DE LA CIRUGÍA BARIÁTRICA
embarazo, las mujeres obesas presentan una mayor preva-
lencia de preeclampsia, infecciones de vías urinarias, diabe- La cirugía bariátrica se lleva a cabo para mejorar la calidad
tes gestacional, hipertensión, parto postérmino, trabajo de de vida de las personas con obesidad mórbida y para mejorar
parto prolongado, hemorragia intraparto y cesárea. El cre- su aspecto físico y, en consecuencia, sus oportunidades
cimiento fetal también puede estar alterado y son más fre- sociales y económicas. Sin embargo, el objetivo fundamen-
cuentes los defectos del tubo neural en el recién nacido. tal de la cirugía bariátrica se centra en mejorar las múltiples
En las mujeres con marcado incremento de las concen- patologías asociadas a la obesidad y la salud general, y en
traciones de andrógenos pueden presentarse hirsutismo y prolongar la esperanza de vida. Uno de los escasos metaaná-
otras manifestaciones masculinizantes. Son mucho más pro- lisis realizados en el campo de la cirugía bariátrica analiza
pensas a sufrir enfermedad cardiovascular aterosclerótica los resultados en cuanto al peso, la mortalidad a 30 días y la
que las mujeres con morfología corporal de tipo pera. resolución o mejoría de la diabetes tipo 2, la hiperlipidemia,
Las anomalías hormonales continuas de la obesidad, en la hipertensión y la apnea obstructiva del sueño.38 Este estu-
particular el bombardeo estrogénico constante de los órga- dio demostró: 1) que la pérdida de peso, estimada como por-
nos reproductivos, aumentan la incidencia de carcinoma centaje de pérdida del peso excesivo, variaba en función del
endometrial (de tres a cuatro veces), ovárico (de tres a cuatro procedimiento realizado, desde un 47,5% en pacientes que
veces) y de mama (al menos dos veces).35 Las mujeres obesas se sometieron a la implantación laparoscópica de anillas
que desarrollan un carcinoma de mama antes de la meno- gástricas ajustables, al 61,6% para la derivación gástrica,
pausia tienen menor probabilidad de supervivencia que los 68,2% para la gastroplastia y 70,1% para la derivación bilio-
controles de peso normal. pancreática/cruce duodenal, con una media de pérdida de
peso del 61,2%; 2) que la mortalidad operatoria a 30 días era
Trastornos endocrinos y reproductivos en el varón del 0,1% para las cirugías restrictivas (anilla gástrica lapa-
roscópica ajustable y gastroplastia), del 0,5% para la deriva-
Los hombres obesos también presentan un incremento del ción gástrica con Y de Roux, y del 1,1% para las cirugías
bombardeo estrogénico y, al contrario que muchas mujeres principalmente hipoabsortivas de derivación biliopancreá-
obesas con aumento en los niveles de andrógenos, presentan tica/cruce duodenal, y 3) que se registraba una marcada
una disminución en la producción de testosterona. Estos remisión o una mejoría de las cuatro patologías asociadas
cambios hormonales se pueden manifestar clínicamente analizadas. Específicamente, la diabetes remitió por com-
como infertilidad, impotencia, hipogonadismo y disminu- pleto en el 76,8% de los pacientes y parcialmente o mejoró
ción de la libido. Los hombres obesos presentan, además, en el 86% de ellos; la hiperlipidemia mejoró en el 70% o
una mayor prevalencia de cáncer de próstata. más de los pacientes; la hipertensión se resolvió en el 61,7%
de los pacientes y mejoró en el 78,5%, y la apnea obstructi-
Otros carcinomas va del sueño se resolvió en el 85,7% de los pacientes y mejo-
ró en el 83,6% de los casos (cohorte separada).
La obesidad conlleva un mayor riesgo estadístico de neopla- Los resultados de la cirugía bariátrica en relación con
sias malignas diferentes a las de los sistemas endocrino y nutrición, diabetes, hipertensión, apnea obstructiva del sue-
reproductivo de hombres y mujeres, incluyendo las de colon ño y problemas ortopédicos son de un alcance tan significa-
y recto, vesícula, esófago, estómago y páncreas.36 tivo que se les ha dedicado capítulos específicos en este libro.
Los efectos de la cirugía bariátrica sobre algunas de las otras
Depresión patologías asociadas a la obesidad mórbida se revisan breve-
mente en este capítulo.
Además de las implicaciones sociales y económicas de la
obesidad, y de la evidente carga psicosocial diaria que sopor- Dislipidemia
tan los obesos, la prevalencia de depresión clínica es alta, en
especial entre las mujeres obesas (v. capítulos 7 y 8).3,4 Las La época en que se buscaba probar la hipótesis de la relación
adolescentes y las mujeres jóvenes son particularmente sen- de los lípidos con aterosclerosis llegó a su fin en la última
sibles a padecer depresión grave. Más del 50% de las mujeres década del siglo XX. En los años noventa, después de décadas
que solicitan cirugía bariátrica han recibido antidepresivos de estudios médicos sugerentes pero negativos, un ensayo clí-
con anterioridad. nico quirúrgico aleatorizado y controlado –el estudio Program
Capítulo 5 • Patologías asociadas a la obesidad 41

on the Surgical Control of the Hyperlipidemias (POSCH)– fue el sión de la enfermedad aterosclerótica de una tercera parte en
primero que demostró de manera estadísticamente significati- el grupo quirúrgico en comparación con el grupo control,
va que reducciones marcadas del colesterol total (23%) y del incluyendo disminución de la masa ventricular izquierda,
colesterol LDL (38%), en asociación con un incremento disminución del volumen sistólico del ventrículo izquierdo y
del colesterol HDL (4%), producían un efecto beneficioso del gasto cardíaco, y disminución de la presión telediastóli-
sobre la evolución cardiovascular.39-41 Estos resultados incluían ca del ventrículo izquierdo.48,49
reducciones de la mortalidad global (P  0,05), de la mortali-
dad debida a cardiopatía coronaria aterosclerótica (P  0,03), Insuficiencia venosa periférica
de la mortalidad debida a cardiopatía coronaria aterosclerótica
más infarto de miocardio no mortal confirmado (P  0,001), No se dispone de mucha bibliografía sobre la mejora de la
del infarto de miocardio no mortal confirmado (P  0,001), de insuficiencia venosa periférica tras la pérdida de peso por
la incidencia de revascularización coronaria o angioplastia cirugía bariátrica. Sin embargo, dicha mejora es observada
coronaria transluminal percutánea (P  0,001) y del inicio de con frecuencia por los cirujanos bariátricos y se trata de un
la enfermedad vascular periférica clínica (P  0,02). En el hecho muy apreciado por los pacientes sometidos a cirugía
estudio POSCH, los resultados clínicos se confirmaron bariátrica. Después de una cirugía bariátrica satisfactoria
mediante angiografías coronarias secuenciales al inicio y a los mejoran las varices, el dolor en bipedestación, la dermatitis
3, 5, 7 y 10 años de seguimiento. Las arteriografías demostra- y las úlceras por estasis, así como la incidencia de trombofle-
ron disminución en la progresión (P  0,001) y aumento en la bitis venosa profunda y embolias pulmonares.
regresión (P  0,02) de las lesiones en placa. El tipo de inter-
vención en el POSCH era una derivación ileal parcial, que Asma
derivaba los 200 cm distales del intestino delgado, lo que pro-
ducía una pérdida de peso mínima pero una malabsorción Los niños obesos tienen una incidencia del 30% de asma y
demostrable de colesterol y ácidos biliares. los adultos, del 25%. Al menos ocho estudios bariátricos han
La bibliografía sobre cirugía no bariátrica ofrece múlti- demostrado que las tasas de resolución postoperatoria del
ples evidencias de que los lípidos plasmáticos se normalizan asma oscilan entre el 25 y el 83%.20
después de la pérdida de peso. Como norma, por cada kg de
peso perdido, se consigue una disminución del 1% del coles- Colelitiasis
terol total, un incremento del 1% del colesterol HDL, una
disminución del 3% de la relación colesterol total/colesterol Evidentemente, si antes de la cirugía bariátrica o durante la
HDL y una disminución de cerca del 1% de los triglicéridos. misma se realiza una colecistectomía, se evita el problema de
La bibliografía sobre cirugía bariátrica confirma de la colelitiasis en el postoperatorio. Sin embargo, muchos
manera significativa estos hallazgos. Al menos 30 estudios cirujanos prefieren no extirpar una vesícula asintomática y
describen cambios favorables en los lípidos plasmáticos des- libre de cálculos en la ecografía o la palpación en el momen-
pués de cirugía bariátrica.11,38,42-44 Estos cambios son inde- to de la cirugía bariátrica. ¿Cuál es el resultado de esta deci-
pendientes del procedimiento o la técnica utilizados. El fac- sión? Por supuesto, el paciente sigue estando expuesto a la
tor que determina el grado de normalización de los lípidos incidencia normal de colelitiasis, que puede estar incremen-
plasmáticos es la magnitud de la pérdida de peso alcanzada. tada por el factor de riesgo de la obesidad, incluso después
Los cambios favorables después de una cirugía bariátrica, de una cirugía bariátrica satisfactoria. También existen
tras cerca de 12 meses de seguimiento incluyen una dismi- abundantes evidencias del incremento en la incidencia de
nución de más del 20% del colesterol total, una disminución colelitiasis después de la pérdida de peso per se, e incluso más
de hasta el 70% del colesterol LDL, una disminución de cer- después de la marcada pérdida de peso debida a cirugía
ca del 40% en los triglicéridos y un incremento variable del bariátrica.50,51 Este incremento del riesgo se ha asociado a
colesterol HDL. una incidencia de más del 35% en algunas series a los
Recientemente se ha prestado una considerable atención 12 meses de la cirugía, con una reducción a partir de ese
al estudio Swedish Obese Subjects (SOS), en el que 2010 sujetos momento. Para disminuir la colelitiasis inducida por la ciru-
se sometieron a cirugía bariátrica (derivación gástrica, gas- gía bariátrica, algunos cirujanos prescriben rutinariamente
troplastia o anillado gástrico) y 2037 controles pareados ácido ursodesoxicólico a sus pacientes.52
recibieron tratamiento convencional no quirúrgico.10
Después de 2 años, la incidencia de hiperlipidemia era Enfermedad por reflujo gastroesofágico
10 veces menor en el grupo que perdió peso tras la cirugía
que en el grupo control. La mejoría de la ERGE después de cirugía bariátrica es uno
de los resultados más gratificantes en este campo. Este efec-
Enfermedad cardíaca y enfermedad vascular periférica to depende del procedimiento quirúrgico más que ningún
otro de los resultados favorables. La derivación gástrica de
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Numerosos estudios, incluyendo el estudio POSCH, han Roux o la derivación gástrica de Roux con asa larga, «curan»
demostrado ya los beneficios de la modificación de los facto- la ERGE.53 Tras estos procedimientos se produce muy poco
res de riesgo en la prevención, detención e incluso mejora de ácido en el fondo de saco superior del estómago y la bilis
la enfermedad vascular aterosclerótica cardíaca y periféri- normalmente no puede ascender por un asa de Roux de sufi-
ca.39-41 La cirugía bariátrica ha demostrado específicamente ciente longitud (unos 75 cm o más). No hay ácido, no hay
sus beneficios sobre la salud cardiovascular. Schauer y cols. bilis y, por tanto, no hay reflujo. Después de una derivación
demostraron una resolución del 25% y una disminución del gástrica de Roux bien realizada, los pacientes reciben el alta
75% de los síntomas de cardiopatía coronaria, así como una hospitalaria libres de síntomas de ERGE y no vuelven a
mejora en el 67% de los pacientes con insuficiencia cardíaca necesitar elevación de la cama para dormir ni tomar medica-
coronaria.45 Otros estudios han demostrado resultados simi- ción para la ERGE, como los inhibidores de la bomba de
lares.46,47 El estudio SOS demostró una velocidad de progre- protones. Si no es para inducir pérdida de peso, el procedi-
42 Sección II • CONSECUENCIAS

miento de elección para tratar la ERGE y la hernia hiatal en Trastornos endocrinos y reproductivos en la mujer
pacientes con peso normal es la derivación gástrica con
cierre de los pilares esofágicos.54 La dismenorrea y el síndrome de ovarios poliquísticos habi-
Estas expectativas favorables con respecto a la ERGE tualmente desaparecen tras la cirugía bariátrica, recuperán-
no son aplicables en cambio a la gastroplastia vertical anilla- dose el ciclo menstrual normal.34 La cirugía bariátrica satis-
da ni de la anilla gástrica ajustable laparoscópica que, en factoria reduce los riesgos durante el embarazo, tanto para
ciertos pacientes, aumentan incluso la incidencia de sinto- la madre como para el niño. Con su aplicación se reducen los
matología por ERGE en el postoperatorio.55 La persistencia riesgos de preeclampsia, diabetes gestacional e hipertensión
o la aparición de ERGE tras la derivación biliopancreática y gestacional, y se normaliza el peso del recién nacido. La fer-
cruce duodenal no parecen relacionarse con estos procedi- tilidad puede mejorar tras la cirugía.
mientos. La incidencia de carcinomas endometrial, ovárico y
de mama es mayor en pacientes con obesidad mórbida.
Transformación grasa, cirrosis y carcinoma hepático Actualmente no existen datos prospectivos que demues-
tren que la cirugía bariátrica reduce la incidencia de estos
En algunos pacientes, la obesidad mórbida no tratada se procesos.
asocia a una progresión de la transformación grasa del
hígado a cirrosis y posiblemente a hepatocarcinoma. En el Trastornos endocrinos y reproductivos en el varón
obeso mórbido, la incidencia de transformación grasa es de
cerca del 100%; la incidencia de cirrosis y hepatocarcinoma En la actualidad no se dispone de series que demuestren
es bastante baja, aunque superior a la de la población gene- cambios positivos sobre la infertilidad, la impotencia, el
ral.30 Varios estudios han demostrado una regresión, o al hipogonadismo, la disminución de la libido o la incidencia
menos una disminución, de la transformación grasa tras de cáncer de próstata tras la cirugía bariátrica en hombres.
cirugía bariátrica. Aunque no existen datos referidos a Sin embargo, existen datos que demuestran que es necesario
series controladas que apoyen esta premisa, es razonable alcanzar un peso casi normal para que se normalice el nivel
pensar que la incidencia de cirrosis y hepatocarcinoma de globulina transportadora de hormonas sexuales en varo-
también se reduce después de una cirugía bariátrica de nes muy obesos.59
resultado satisfactorio.
Otros carcinomas
Seudotumor cerebral
Actualmente no hay series que demuestren que tras la ciru-
La hipertensión intracraneal idiopática, o seudotumor cere- gía bariátrica disminuya la incidencia de carcinomas de
bral, mejora sustancialmente tras cirugía bariátrica.32 Este colon, recto, vesícula, esófago, estómago o páncreas, elevada
hallazgo ha sido demostrado en varios estudios y resulta par- en todos los casos en asociación a obesidad mórbida.
ticularmente gratificante para los pacientes jóvenes opera-
dos.56 Se ha demostrado que el alivio sintomático se asocia a Depresión
disminución de la presión del líquido cefalorraquídeo des-
pués de la cirugía. La impresión de los cirujanos bariátricos es que cuando la
cirugía da lugar a una pérdida de peso significativa, la gran
Síndrome del túnel carpiano mayoría de los pacientes se encuentran más satisfechos tras
la intervención.60,61 Este cambio se manifiesta tanto en varo-
Es difícil encontrar referencias específicas a la mejoría del nes como en mujeres. La evaluación prospectiva de la depre-
síndrome del túnel carpiano tras la cirugía bariátrica. Sin sión clínica es un área fructífera en el ámbito de la investi-
embargo, la mayoría de los cirujanos bariátricos ha observa- gación a cargo de los equipos multidisciplinarios que se
do este resultado favorable. dedican a la cirugía bariátrica.62
Más allá de la depresión clínica, debe considerarse la
Dermatitis intertriginosa calidad de vida del paciente, tema sobre el cual abundan las
evidencias de resultados positivos.63-66 Los índices generales
La dermatitis intertriginosa, que se asocia con frecuencia a la de bienestar tienden a duplicarse o a mejorar en un 100%
obesidad mórbida, tampoco suele mencionarse en la evalua- después de la cirugía. La misma tendencia se observa en la
ción de los resultados de cirugía bariátrica. No obstante, si valoración de la función social, incluyendo la propia imagen
se interroga cuidadosamente a los pacientes tras la interven- corporal, la confianza en uno mismo, la capacidad para inte-
ción, es posible constatar el alivio del proceso. La mejoría de ractuar con otras personas y el tiempo que se dedica a acti-
esta patología cutánea tal vez suponga un beneficio relativa- vidades recreativas. La actividad sexual suele aumentar y ser
mente secundario en lo que respecta al estado de salud, pero más satisfactoria. Estos cambios, así como otras percepcio-
con frecuencia comporta una importante mejora en la cali- nes de la identidad de las personas obesas, pueden ser positi-
dad de vida del paciente. vos o negativos para los matrimonios. La cirugía bariátrica
mejora el funcionamiento físico global, incluyendo la movi-
Incontinencia urinaria de esfuerzo lidad, la energía y la vitalidad; así, se dedica más tiempo al
ejercicio y a participar en actividades físicas. Además, mejo-
La cirugía bariátrica es más eficaz para el tratamiento de la ran la productividad y las oportunidades económicas, inclu-
incontinencia urinaria de esfuerzo que la mayoría de las res- yendo la posibilidad de acceso a un nuevo empleo y a una
tantes intervenciones quirúrgicas.57 Al revertirse el incre- mejor remuneración.
mento de la presión intraabdominal previo a la cirugía, se Tradicionalmente, la perspectiva del médico y su concep-
disminuye la presión sobre el suelo pélvico y las alteraciones to de resultado positivo se basaban en la pérdida de peso y,
neuromusculares de la vejiga.58 más recientemente, en la mejora de las patologías asociadas a
Capítulo 5 • Patologías asociadas a la obesidad 43

la obesidad. Sin embargo, la perspectiva del paciente y su 15. Burstein R, Epstein Y, Charuzi I, et al: Glucose utilization in morbidly
noción de resultado satisfactorio casi siempre se centraban, y obese subjects before and after weight loss by gastric bypass operation.
Int J Obes Relat Metab Disord 1995;19:558-561.
siguen haciéndolo, en la mejora de la calidad de vida y la dis- 16. Hollander P: Confronting obesity: toward prevention of diabetes and
minución de la discriminación.67 Por ello, el instrumento de cardiovascular disease. Cardiol Rev 2000;17:41-48.
evaluación Bariatric Analysis and Reporting Outcome System 17. Abbasi F, Brown BW Jr, Lamendola C, et al: Relationship between
(BAROS), diseñado por Oria y Moorehead, está ganando obesity, insulin resistance, and coronary heart disease risk. J Am Coll
popularidad.68 Esta herramienta incluye una evaluación de la Cardiol 2002;40:937-943.
18. Alpert MA: Obesity cardiomyopathy: pathophysiology and evolution
calidad de vida, que se determina en asociación con la canti- of the clinical syndrome. Am J Med Sci 2001;321:225-236.
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La obesidad, y en particular la obesidad mórbida, se asocian a 3018-3023.
patologías clínicas que afectan en esencia todos los sistemas 24. Li KK, Powell NB, Riley RW, et al: Morbidly obese patients with
severe obstructive sleep apnea: is airway reconstructive surgery a
orgánicos y, por tanto, la longevidad (v. capítulo 6), así como viable treatment option? Laryngoscope 2000;110:982-987.
a problemas sociales y económicos (v. capítulos 7 y 8). En este 25. Deitel M: Commentary: joint pains after various intestinal bypasses
capítulo se ha presentado una exposición de las patologías clí- and secondary to obesity. Obes Surg 1998;8:265.
nicas concomitantes a la obesidad y su respuesta a la cirugía 26. Parzivi J, Trousdale RT, Sarr MG: Total joint arthroplasty in patients
bariátrica. De ella se deduce que la cirugía bariátrica como surgically treated for morbid obesity. J Arthroplasty
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tratamiento único no sólo mejora el proceso patológico pri- 27. Kahrilas PJ: Gastroesophageal reflux disease. JAMA 1996;276:983-988.
mario, sino que simultáneamente ejerce un efecto favorable 28. Lundell L, Ruth M, Sandberg N, et al: Does massive obesity promote
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44 Sección II • CONSECUENCIAS

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6
Longevidad y obesidad
Jarl S. Torgerson, M.D., Ph.D., y Erik Näslund, M.D., Ph.D.

El problema de la mortalidad es tan primordial en el campo cols. utilizaron datos de seis estudios estadounidenses y esti-
de la obesidad, que la clasificación de la Organización Mun- maron que aproximadamente 280.000 muertes al año de
dial de la Salud del índice de masa corporal (IMC) se basa adultos en su país estaban relacionadas con el sobrepeso o la
precisamente en la asociación entre obesidad y mortalidad.1 obesidad. Más del 80% de las muertes atribuibles a la obesi-
Ello no implica, sin embargo, que no existan controversias en dad fueron observadas en individuos con IMC de 30 kg/m 2
relación con la mortalidad y que no queden problemas cientí- o más.7 Recientemente se ha estimado que cada año al menos
ficos por resolver. En el presente capítulo se discuten las cau- 1 de cada 13 muertes en la Unión Europea parece estar rela-
sas de mortalidad total y específica en obesos, así como los cionada con la obesidad.8
efectos, en ocasiones ambiguos, de la pérdida de peso sobre la A pesar de que la relación entre sobrepeso y obesidad y
mortalidad relacionada con la obesidad. el aumento de las tasas de mortalidad es inequívoca, la natu-
raleza de la asociación en los segmentos de IMC bajos ha
sido muy debatida. La cuestión se centra en establecer si la
Z MORTALIDAD EN OBESOS relación global entre IMC y mortalidad tiene forma de J
(como en la figura 6-1), de U, o es lineal. En resumen, ¿se
Ya Hipócrates señaló que los obesos presentaban un mayor asocia un IMC bajo a un incremento o a un descenso monó-
riesgo de muerte súbita que los delgados. En la medicina tono de las tasas de mortalidad? Varios investigadores han
contemporánea, las estadísticas de las compañías asegurado- evaluado esta cuestión y han discutido a fondo los aspectos
ras y los datos actuariales fueron los primeros en indicar que metodológicos y los posibles factores de confusión.
la obesidad se asociaba a un mayor nivel de mortalidad pre- Elementos importantes en tamaño muestral son la duración
coz.2 Varios grandes estudios epidemiológicos confirmaron del período de seguimiento, la exclusión o no de la mortali-
esta hipótesis y han demostrado repetidamente un incre- dad precoz, el control del consumo de tabaco, el control
mento en la tasa de mortalidad precoz en los individuos obe- inadecuado de factores de riesgo intermedios (p. ej., hiper-
sos, así como un mayor número de muertes por diabetes, tensión y diabetes), así como la importancia de la distribu-
enfermedad cardiovascular y cáncer.1-3 Es característico el ción de la grasa corporal. La discusión detallada de estos
hecho de que un IMC de 35 kg/m2 se asocia a una duplica- aspectos va más allá del ámbito de este capítulo; se remite al
ción de la mortalidad por todas las causas, razón que fue lector interesado a investigaciones más detalladas al respec-
ilustrada con los datos de la American Cancer Society sobre to.2,9-11 Sin embargo, una reciente recopilación de los datos
750.000 hombres y mujeres (v. figura 6-1). La enfermedad disponibles a este respecto concluyó que la gran mayoría de
coronaria fue la principal causa de muerte en individuos con los estudios mostraban una relación en J o en U entre el
sobrepeso y obesos. La mortalidad debida a cáncer y a diabe- IMC y la mortalidad.11
tes también fue significativamente más común.4,5 Se ha demostrado que la edad ejerce cierto efecto sobre
Otra manera de cuantificar los efectos de la obesidad las tasas de exceso de mortalidad en los individuos obesos.
sobre la mortalidad consiste en calcular los años potenciales En general, la relativamente alta mortalidad observada en
de vida perdidos (APVP). Los APVP reflejan la diferencia IMC aumentados se atenúa con el incremento de la edad.6,11,12
entre el número de años de vida que cabría esperar que viviese Se ha demostrado que en personas de raza distinta a la blan-
un individuo no obeso y el previsible número de años que ca se ve modificada la relación general entre obesidad y mor-
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

viviría si lo fuera. La figura 6-2 muestra los APVP en hom- talidad. Parece, por ejemplo, que un incremento en el IMC
bres y mujeres de raza blanca para varios IMC y distintos gru- resulta menos perjudicial en afroamericanos que en estado-
pos de edad, en comparación con aquellos que presentaban unidenses de origen europeo.11 La figura 6-2 muestra los
IMC de 24 kg/m2. En ambos sexos se aprecia un crecimiento APVP en individuos de raza blanca. El patrón hallado en
gradual de los APVP en función del incremento del IMC. En estadounidenses de raza negra fue algo diferente; la esperan-
varones parece haber una variabilidad sustancial relacionada za de vida no se redujo hasta que el IMC no excedió los
con la edad (p. ej., los hombres jóvenes tienen más APVP que 37 kg/m2 en mujeres y 32 kg/m2 en hombres. No se sabe si
los más mayores en el mismo intervalo de IMC). Ello resulta esta distinción étnica está relacionada con distintos efectos
más evidente entre los gravemente obesos.6 del IMC sobre la mortalidad o con otros factores relaciona-
El número de muertes atribuibles al sobrepeso y a la dos con ella, tales como la salud general o el nivel socioeco-
obesidad también se pueden estimar a nivel social. Allison y nómico.6
45
46 Sección II • CONSECUENCIAS

2,5
Enfermedad Cardiovascular
digestiva Vesícula biliar
y pulmonar Diabetes

2,0
ÍNDICE DE MORTALIDAD

VARONES
MUJERES
Figura 6-1 Relaciones de mortalidad en varo-
1,5 nes y mujeres en función de distintos niveles de
IMC. (Tomado de Lew EA, Garfinkel L:
Variations in mortality by weight among 750,000
men and women. J Chron Dis 1979;32:563-576).

1,0

Mínimo Muy Bajo Moderado Alto Muy


bajo alto
0
20 25 30 35 40
ÍNDICE DE MASA CORPORAL (kg/m2)

En datos actuariales de finales del siglo XIX se observó como factor predictivo de mortalidad en varones y mujeres
una elevación de la tasa de mortalidad en varones con obesi- de mediana edad. Utilizando como referencia los grupos «en
dad abdominal.13 Estudios sobre la población sueca han buena forma y no gordos», los coeficientes de riesgo ajusta-
demostrado desde entonces que el aumento del índice cintu- dos a todas las causas de mortalidad fueron más altos en los
ra-cadera se asocia a un incremento de las tasas de mortali- grupos «en mala condición física y gordos» (1,57 y 1,49 en
dad total, así como a un aumento del riesgo de enfermedad varones y mujeres, respectivamente). Las cifras correspon-
cardiovascular, tanto en varones como en mujeres.14,15 Los dientes fueron 1,32 y 1,44 en los grupos en buen estado físi-
datos del Iowa Women’s Health Study también han demostra- co pero gordos y 1,30 y 1,25 en que estaban en mala forma
do una asociación positiva entre el índice cintura-cadera y física pero no gordos, respectivamente. Es interesante resal-
las tasas de mortalidad total.16 tar que las mujeres gordas en buena forma física parecían
Un reciente análisis de datos del Lipid Research Clinics presentar un riesgo de mortalidad igual a las que estaban en
Study estudió la relación entre condición física y gordura mala forma pero no gordas.17

Edad, años Hombres de raza blanca


12
Años de vida perdidos

10
20 30 40 50 60 70
8

0
25 26 27 28 29 30 31 32 33 34 35 36 37 38 39 40 41 42 43 44 ⱖ45

Mujeres de raza blanca


12
Años de vida perdidos

10

0
25 26 27 28 29 30 31 32 33 34 35 36 37 38 39 40 41 42 43 44 ⱖ45
Índice de masa corporal
Figura 6-2 Años de vida perdidos en varones y mujeres de raza blanca en EE. UU. (Reproducido con autorización de Fontaine KR, Redden DT,
Wang C, et al: Years of life lost due to obesity. JAMA 2003;289:187-193.)
Capítulo 6 • Longevidad y obesidad 47

Pérdida de peso y mortalidad dad menor en sujetos que perdían peso intencionadamente,
que en sujetos con peso estable que no intentaban perderlo.
No sólo la obesidad sino también el aumento de peso durante Además, la pérdida de peso no intencionada fue asociada a un
la edad adulta se relacionan con un aumento de las tasas de sustancial incremento del riesgo de mortalidad.30
mortalidad. Los datos del Nurses’ Health Study mostraron que Otra explicación para la paradoja podría ser que los
las mujeres que experimentaban un aumento de peso de 10 a efectos beneficiosos de la pérdida de peso en los factores de
20 kg presentaban un riesgo relativo (ajustado por edad e IMC riesgo cardiovascular son generalmente documentados en
inicial) de desarrollar enfermedad coronaria (mortal y no ensayos clínicos a corto plazo (menos de 2 años), mientras
mortal) de 1,7, en comparación con mujeres que aumentaron que el estudio de los efectos sobre las tasas de mortalidad y
menos de 3 kg. El riesgo relativo correspondiente a las muje- otras variables significativas requieren períodos observacio-
res que aumentaron de 20 a 35 kg fue 2,5.18 Más sorprendente nales mucho más largos. Ello resulta de importancia esen-
resulta el hecho de que varios estudios epidemiológicos indi- cial, ya que algunos factores de riesgo y alteraciones relacio-
quen que la pérdida de peso también se asocia con incremen- nados con la obesidad tienden a decaer a lo largo del tiempo,
to del riesgo de mortalidad.19 Los datos de la primera National a pesar del mantenimiento de la pérdida de peso. Datos del
Health and Nutrition Examination Survey (NHANES I) demos- estudio Swedish Obese Subjects (SOS) mostraron unas reduc-
traron un aumento de la tasa de mortalidad tras la pérdida de ciones muy significativas de la incidencia de diabetes, 2 y
peso, especialmente en mujeres y también en sujetos que pade- 8 años después de la cirugía bariátrica, aunque la reducción
cían sobrepeso o eran obesos al inicio del estudio.20,21 a los 2 años de la hipertensión no se mantuvo después de
Desde la perspectiva de la mortalidad, existen datos en 8 años, a pesar de una pérdida de peso sostenida de 16,5%
la bibliografía que indican que la obesidad, el aumento de (20 ⫾ 16 kg).31 Puede también ocurrir que la pérdida de
peso y también su pérdida se asocian a riesgo aumentado peso, o pérdida de masa magra del cuerpo, se relacione con
de mortalidad. Esto resulta paradójico, ya que es bien sabido un incremento del riesgo de mortalidad, mientras que la pér-
que la pérdida de peso disminuye los factores de riesgo de dida de grasa corporal lo reduzca.32 Existen también infor-
enfermedad cardiovascular (p. ej., presión arterial, glucemia mes que indican que una ingesta inadecuada de nutrientes
y niveles de lípidos). Además, una reducción en la ingesta de durante el proceso de reducción de peso podría transfor-
energía, que es la piedra angular del tratamiento de la obe- marse en un factor de riesgo cardiovascular.33
sidad, aumenta la esperanza de vida en todas las especies Con la voluntad de arrojar luz sobre la enigmática rela-
estudiadas.22 Existen, sin embargo, algunos ensayos clínicos ción entre pérdida de peso y mortalidad, el estudio SOS se
que indican que el cambio en la dieta y la pérdida de peso inició en 1987. SOS consta de un estudio de registro de
pueden reducir los factores de riesgo cardiovascular y dismi- 6328 casos y un estudio de intervención sobre 4047 indivi-
nuir la mortalidad tras un infarto de miocardio.23 duos. El estudio de registro recoge esencialmente un examen
Se han aportado varias explicaciones para la paradoja de salud de corte transversal centrado en el historial médico,
sobre la obesidad, el cambio de peso y la mortalidad. La mayo- los factores de riesgo cardiovasculares, la antropometría, la
ría de los estudios observacionales no han prestado atención dieta, la calidad de vida relacionada con la salud, la economía
al hecho de que la pérdida de peso observada fuera intencio- de la salud y la genética. El estudio de registro también sirve
nada o no. Ello resulta problemático, ya que la pérdida de peso como base para intervenciones posteriores. En el estudio de
intencionada y la no intencionada ocurrieron con una fre- intervención, 2010 pacientes obesos fueron operados (ban-
cuencia similar y porque esta última se relaciona con factores das gástricas, gastroplastia vertical con banda o derivación
de riesgo conocidos tales como edad, mal estado de salud y gástrica), y 2037 sujetos recibieron tratamiento convencional
tabaquismo.24,25 La relación entre mortalidad y pérdida de no quirúrgico en la atención primaria de salud. Todos los
peso intencionada y no intencionada ha sido analizada por pacientes serían seguidos durante 20 años. La principal
separado en algunos estudios. Los datos del Iowa Women’s cuestión planteada en el estudio de intervención consistía en
Health Study demostraron que la pérdida de peso no intencio- establecer si la pérdida intencionada de peso reduciría las
nada aumentaba mortalidad total y la cardiovascular, espe- tasas de mortalidad total. Un objetivo secundario incluía la
cialmente en mujeres con enfermedad preexistente. Por otra determinación de los efectos de la pérdida de peso en las
parte, la pérdida de peso intencionada no afectó de forma tasas de morbilidad y mortalidad específicas, en los factores
negativa al riesgo de mortalidad.26 Los resultados del Cancer de riesgo cardiovascular, en la calidad de vida relacionada
Prevention Study I pusieron de manifiesto reducción de la con la salud y la economía sanitaria. Los detalles y los resul-
mortalidad (total, cardiovascular y por diabetes) tras pérdida tados de SOS han sido convenientemente resumidos.34,35
de peso intencionada en mujeres con trastornos relacionados
con la obesidad, mientras que los resultados en mujeres sin Enfermedad cardiovascular y mortalidad
enfermedad preexistente fueron más equívocos.27 Los datos
correspondientes en varones mostraron que la pérdida de La obesidad es un importante factor de contribución a la
peso intencionada en hombres sanos generalmente no afecta prevalencia global de la enfermedad cardiovascular. En tér-
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a la mortalidad. En hombres con enfermedad no diabética minos de años de vida ajustados según discapacidad, se cree
preexistente, la pérdida de peso intencionada no afectó a la que la cardiopatía isquémica será la principal causa global de
mortalidad total o cardiovascular, mientras que la mortalidad enfermedad en 2020.36
relacionada con la diabetes se redujo sustancialmente.28 Un seguimiento a lo largo de 26 años de los participan-
Datos sobre individuos diabéticos con sobrepeso y obe- tes del Framingham Heart Study demostró que la obesidad es
sos han demostrado que la pérdida de peso intencionada redu- un significativo factor de predicción de la enfermedad car-
ce la mortalidad total hasta un 25%. Una reducción intencio- diovascular, independientemente de la edad, de los niveles
nada de peso de 10 a 15 kg fue asociada con la mayor reducción séricos de colesterol, de la intolerancia a la glucosa, de la
de mortalidad (33%).29 Datos recientes de la National Health presión arterial sistólica, del tabaquismo y de la hipertrofia
Interview Survey de EE. UU. obtenidos en 6391 individuos ventricular izquierda.37 La obesidad –no así el sobrepeso– se
con IMC de 25 kg/m2 o más, mostraron una tasa de mortali- asocia de forma significativa a infarto de miocardio y a epi-
48 Sección II • CONSECUENCIAS

sodios coronarios fatales. Los individuos obesos tienen tam-


bién más probabilidades de desarrollar factores de riesgo Tabla 6-1 COCIENTES DE RIESGO
adicionales tales como hipertensión, hipercolesterolemia, PARA MORTALIDAD TOTAL,
diabetes tipo 2 e hipertrofia ventricular izquierda, en espe- MORTALIDAD POR ENFERMEDAD
cial si son fumadores. CIRCULATORIA Y POR DIABETES,
La obesidad está, pues, relacionada con un grupo de fac- SEGÚN EL IMC EN EE. UU.
tores de riesgo que influyen sobre la morbilidad y la mortali-
MORTALIDAD
dad cardiovasculares.38 Son abundantes las pruebas que indi-
MORTALIDAD POR ENFERMEDAD MORTALIDAD
can que la obesidad central es un factor de predicción TOTAL CIRCULATORIA POR DIABETES
independiente de la enfermedad cardiovascular, ya que estos
pacientes presentan alteraciones en la insulina y en la homeos- IMC ⱖ40 1,77* 2,37* 8,97*
tasis de la glucosa, niveles elevados de triglicéridos y el coles- IMC 35,0 - ⱕ40 1,34* 1,78* 4,70*
terol HDL bajo. Este perfil de factores de riesgo también se
asocia a un estado inflamatorio protrombótico. Así, el pacien- IMC 30,0 - ⱕ35 1,01 1,27* 2,82*
te con obesidad abdominal se caracteriza por un perfil atero-
IMC 25 - ⱕ30 0,87* 0,99 1,65*
génico, protrombótico e inflamatorio que incrementa el ries-
go de síndrome coronario agudo y de muerte.39 La obesidad IMC 18,5 - ⱕ25 Referencia Referencia Referencia
se asocia con frecuencia a aterosclerosis avanzada. Las autop-
sias de las arterias coronarias de individuos de 15 a 34 años de IMC ⱕ18,5 1,91* 1,57* 1,02
edad que fallecieron de forma accidental, por suicidio o por (Basado en Rogers RC, Hummer RA, Krueger PM: The effect of diabetes
homicidio, mostraron que el grado de aterosclerosis en la arte- on overall circulatory disease and diabetes-specific mortality. J Biosoc Sci
ria coronaria derecha estaba asociada o obesidad, especialmen- 2003;35:107-129. Con autorización.)
*P ⱕ 0,01; n ⫽ 647.015; mortalidad total, n ⫽ 47.271; mortalidad por
te en los casos con grasa de distribución central.40 De hecho, en enfermedad circulatoria, n ⫽ 19.929; mortalidad por diabetes, n ⫽ 1209.
una unidad de cateterismo cardíaco, el número de pacientes
obesos aumentó del 20% al 33% en un período de 10 años.41
Recientemente, se han utilizado datos del National un peor desempeño de las tareas que requieren una atención
Health Interview Survey para estudiar la relación entre la dividida, así como en la función cognitiva. El incremento en
obesidad y la mortalidad general, así como para estudiar la la gravedad de la AOS tiene como resultado el aumento de la
mortalidad resultante de enfermedades circulatorias y dia- presión arterial, independientemente de la edad o de la obe-
betes en los adultos en EE. UU.42 El estudio incluyó sidad. Además, la AOS se asocia a una reducción de la dismi-
647.015 individuos que fueron seguidos durante 8 años. Se nución de la presión arterial nocturna, a su vez relacionada
encontró una relación en forma de U más pronunciada entre con ictus e hipertrofia ventricular izquierda, independiente-
la mortalidad general y la obesidad, mientras que se observó mente de la presión arterial durante el día.45 La AOS conlle-
una relación en forma de J entre mortalidad debida a enfer- va un aumento del riesgo de enfermedad cardiovascular y un
medades circulatorias y obesidad, con un incremento del incremento del riesgo de mortalidad.46
riesgo de enfermedad circulatoria fatal para todas las cate-
gorías de IMC superior a 30 kg/m2 (v. tabla 6-1). Cáncer y mortalidad
Diabetes y mortalidad Existe una relación confirmada entre obesidad y cáncer. Los
datos de 1979 de la American Cancer Society sobre 750.000 indi-
Los pacientes con diabetes de tipo 2 presentan un mayor viduos seguidos durante 12 años, revelaron que los varones
riesgo de morbilidad cardiovascular, insuficiencia renal, y mujeres que padecían un sobrepeso de al menos un 40%
ceguera y muerte. Existe un aumento de dos a cinco veces tenían, respectivamente, un 33% y un 55% más probabilida-
del riesgo de enfermedad coronaria e ictus. En EE. UU. la des de morir de cáncer que sus homólogos delgados.4 De for-
diabetes es la séptima causa de muerte.43 ma similar, el Nurses’ Health Study demostró que la mortali-
El riesgo de desarrollar diabetes de tipo 2 aumenta con el dad debida a cáncer aumentó con el incremento del IMC. La
incremento del IMC, y el 90% de los pacientes con diabetes tasa de mortalidad por cáncer en mujeres10 con IMC de al
de tipo 2 padecen sobrepeso o son obesos. La prevalencia glo- menos 32 kg/m2 fue el doble que la de mujeres con IMC menores
bal de diabetes entre los adultos fue de 143 millones en 1997. de 19 kg/m 2. Un reciente estudio prospectivo realizado
Se estima que el número de afectados ascendió a 154 millones sobre más de 900.000 adultos estadounidenses ha aporta-
en 2000 y se prevé un aumento de hasta 300 millones en 2025.36 do más pruebas sobre la asociación entre la obesidad y la
En una reciente encuesta telefónica realizada en EE. UU. se mortalidad por cáncer. En esta cohorte, los individuos con
observó que la prevalencia de la obesidad había aumentado un IMC mayores de 40 kg/m2 presentaron tasas de mortalidad
5.6% entre 2000 y 2001. El aumento correspondiente de la para todos los cánceres combinados un 52% y un 62% más
prevalencia de diabetes fue de 8,2%.44 En función de ello cabe altas en varones y en mujeres, respectivamente, comparados
esperar un incremento del número de muertes relacionadas con hombres y mujeres de peso normal. Tanto en varones
con la diabetes. Una publicación reciente de Rogers y cols., como en mujeres, el IMC se asoció de forma significativa a
demostró que un paciente con un IMC de 40 kg/m2 tenía casi un incremento en las tasas de mortalidad, debido a cáncer de
nueve veces más riesgo de morir por diabetes que un paciente colon, recto, hígado, vesícula, pulmón, páncreas y riñón. En
con peso normal (v. tabla 6-1).42 varones se observó un aumento del riesgo de muerte por
cáncer de estómago y de próstata, mientras que en mujeres
Apnea obstructiva del sueño y mortalidad el incremento se documentó en cánceres de mama, útero,
cuello uterino y ovario (v. tabla 6-2). Basándose en estos
La apnea obstructiva del sueño (AOS) es una alteración poco datos y en los precedentes, se estima que la obesidad es res-
reconocida en los obesos. Los pacientes con AOS presentan ponsable en EE. UU. del 14% y del 20% de todas las muertes
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

Tabla 6-2 RIESGOS RELATIVOS DE MORTALIDAD POR FORMAS ESPECÍFICAS DE CÁNCER SEGÚN EL IMC EN HOMBRES Y MUJERES
EN EL CANCER PREVENTION STUDY II, 1982-1998
VARONES VALOR DE P MUJERES VALOR DE P
IMC 18,5-24,9 25-29,9 30-34,9 35-39,9 ⱖ40 18,5-24,9 25-29,9 30-34,9 35-29,9 ⱖ40
TIPO DE CÁNCER
Todos 1,00 0,97 1,09 1,20 1,52 0,001 1,00 1,08 1,23 1,32 1,62 ⬍0,001
(0,94-0,99) (1,05-1,14) (1,08-1,34) (1,13-2,05) (1,05-1,11) (1,18-1,29) (1,20-1,44) (1,40-1,87)
Esófago 1,00 1,15 1,28 1,63 0,008 1,00 1,20 1,39 0,13
(0,99-1,32) (1,00-1,63) (0,95-2,80) (0,86-1,66) (0,86-2,25)
Estómago 1,00 1,01 1,20 1,94 0,03 1,00 0,89 1,30 1,08 0,46
(0,88-1,16 ) (0,94-1,52) (1,21-3,13) (0,72-1,09) (0,97-1,74) (0,61-1,89)
Colorrectal 1,00 1,20 1,47 1,84 ⬍0,001 1,00 1,10 1,33 1,36 1,46 ⬍0,001
(1,12-1,30) (1,30-1,66) (1,39-2,41) (1,01-1,19) (1,17-1,51) (1,06-1,74) (0,95-2-24)
Hígado 1,00 1,13 1,90 4,52 ⬍0,001 1,00 1,02 1,40 1,68 0,04
(0,94-1,34) (1,46-2,47) (2,94-6,94) (0,80-1,31) (0,97-1,20) (0,93-3,05)
Vesícula biliar 1,00 1,34 1,76 0,02 1,00 1,12 2,13 ⬍0,001
(0,97-1,84) (1,06-2,94) (0,86-1,47) (1,56-2,90)
Pancreático 1,00 1,13 1,41 1,49 ⬍0,001 1,00 1,11 1,28 1,41 2,76 ⬍0,001
(1,03-1,25) (1,19-1,66) (0,99-2,22) (1,00-1,24) (1,07-1,52) (1,01-1,99) (1,74-4,36)
Pulmón 1,00 0,78 0,79 0,67 ⬍0,001 1,00 0,88 0,82 0,66 0,81 ⬍0,001
(0,75-0,82) (0,73-0,86) (0,54-0,84) (0,83-0,94) (0,72-0,92) (0,50-0,86) (0,52-1,28)
Riñón 1,00 1,18 1,36 1,70 0,002 1,00 1,33 1,66 1,70 4,75 ⬍0,001
(1,02-1,37) (1,06-1,74) (0,99-2,92) (1,08-1,63) (1,23-2,24) (0,94-3,05) (2,50-9,04)
Próstata 1,00 1,08 1,20 1,34 ⬍0,001
(1,01-1,15) (1,06-1,36) (0,98-1,83)
Mama 1,00 1,34 1,63 1,70 2,12 ⬍0,001
(1,23-1,46) (1,44-1,85) (1,33-2,17) (1,41-3,19)
Útero 1,00 1,50 2,53 2,77 6,25 ⬍0,001
(1,26-1,78) (2,02-3,18) (1,83-4,18) (3,75-10,42)
Cuello de útero 1,00 1,38 1,23 3,20 0,001
(0,97-1,96) (0,71-2,13) (1,77-5,78)
Ovárico 1,00 1,15 1,16 1,51 0,001
(1,02-1,29) (0,96-1,40) (1,12-2,02)
(Basado en datos de Calle EE, Rodriguez C, Walter-Thurmond K, et al: Overweight, obesity and mortality from cancer in a prospectively studied cohort of U.S. adults. N Engl J Med
2003;348:1625-1638.)
Riesgo relativo (IC al 95%).
50 Sección II • CONSECUENCIAS

en varones y mujeres, respectivamente. Ello indica que más 11. Allison DB, Heo M, Fontaine KR, et al: Body weight, body composi-
de 90.000 muertes al año por cáncer podrían haberse evita- tion and longevity. In Björntorp P (ed): International Textbook of
Obesity, pp. 31-48. Chichester, UK, John Wiley, 2001.
do si cada individuo de la población adulta hubiese mante- 12. Bender R, Jöckel KH, Trautner C, et al: Effect of age on excess
nido un IMC por debajo de los 25 kg/m 2 a lo largo de su mortality in obesity. JAMA 1999;281:1498-1504.
vida.47 13. Kahn HS, Williamson DF: Abdominal obesity and mortality risk
among men in nineteenth-century North America. Int J Obes
1994;18:686-691.
Mortalidad y obesidad en jóvenes 14. Lapidus L, Bengtsson C, Larsson B, et al: Distribution of adipose
tissue and risk of cardiovascular disease and death: a 12-year follow-up
En las últimas décadas el número de niños con sobrepeso ha of participants in the population study of women in Gothenburg,
aumentado rápidamente en EE. UU. En 1983, el 18,6% de Sweden. BMJ 1984;289:1257-1261.
los niños en edad preescolar tenían sobrepeso, y el 8,5% 15. Larsson B, Svärdsudd K, Welin L, et al: Abdominal adipose tissue
distribution, obesity, and risk of cardiovascular disease and death:
eran obesos; mientras que en el año 2000 el sobrepeso afec- 13 year follow up of participants in the study of men born 1913. BMJ
taba al 22% de los preescolares y la obesidad al 10%.48 En 1984;288:1401-1404.
consonancia con este incremento de la obesidad infantil, los 16. Folsom AR, Kaye SA, Sellers TA, et al: Body fat distribution and
trastornos relacionados con ella, tales como la diabetes de 5-year risk of death in older women. JAMA 1993;269:483-487.
17. Stevens J, Cai J, Evenson KR, et al: Fitness and fatness as predictors
tipo 2 y la hipertensión, están también aumentando en los of mortality from all causes and from cardiovascular disease in men
jóvenes. Se ha estimado que los costes hospitalarios anuales and women in the Lipid Research Clinics Study. Am J Epidemiol
relacionados con la obesidad en los niños entre 6 y 17 años 2002;156:832-841.
han alcanzado los 127 millones de dólares por año.49 18. Manson JE, Colditz GA, Stampfer MJ, et al: A prospective study of
obesity and risk of coronary disease in women. N Engl J Med
Pocos estudios han examinado el efecto de la obesidad 1990;322:882-889.
infantil sobre la mortalidad. Un estudio realizado en 508 19. Khaodhiar L, Blackburn GL: Health benefits and risks of weight loss.
adolescentes delgados o con sobrepeso (de 13 a 18 años de In Björntorp P (ed): International Textbook of Obesity, pp. 413-439.
edad) seguidos durante 55 años, mostró que el sobrepeso Chichester, UK, John Wiley, 2001.
durante la adolescencia estaba asociado a un incremento del 20. Pamuk ER, Williamson DF, Madans J, et al: Weight loss and mortal-
ity in a national cohort of adults 1971-1987. Am J Epidemiol
riesgo de mortalidad por todas las causas, así como por 1992;136:686-697.
enfermedad específica en varones, aunque no en mujeres. El 21. Pamuk ER, Williamson DF, Serdula MK, et al: Weight loss and
riesgo relativo de muerte fue de 1,8 (IC = 1,2-2,7; p = 0,004) subsequent death in a cohort of U.S. adults. Ann Intern Med 1993;119:
para la mortalidad por todas las causas y de 2,3 (IC = 1,4-4,1, 744-748.
22. Walford RL, Harris SB, Weindruch R: Dietary restriction and aging:
p = 0,002) para la mortalidad por enfermedad coronaria en historical phases, mechanisms and current directions. J Nutr
varones. No se encontró ninguna correlación comparable 1987;117:1650-1654.
en las mujeres.50 Además, parece que incluso un incremento 23. Singh RB, Rastogi SS, Verma R, et al: Randomised controlled trail of
moderado del peso corporal durante la adolescencia se aso- cardioprotective diet in patients with recent myocardial infarction:
results of one year follow up. BMJ 1992;304:1015-1019.
cia a una mayor tasa de mortalidad en la edad adulta. Los 24. Meltzer AA, Everhart JE: Unintentional weight loss in the United
varones de 18 años con IMC de más de 25 kg/m 2, que fue- States. Am J Epidemiol 1995;142:1039-1046.
ron seguidos durante 32 años, tuvieron unas tasas de mor- 25. Williamson DF: Intentional weight loss: patterns in the general popu-
talidad por todas las causas y por enfermedad coronaria lation and its association with morbidity and mortality. Int J Obes
1997;21 (suppl 1):S14-S19.
aumentadas.51 En un estudio sueco sobre 504 niños obesos, 26. French SA, Folsom AR, Jeffery RW, et al: Prospective study of inten-
un seguimiento de 40 años puso de manifiesto tasas de mor- tionality of weight loss and mortality in older women: the Iowa
bilidad y de mortalidad más altas que en los sujetos de refe- women’s health study. Am J Epidemiol 1999;149:504-514.
rencia. La edad media de los 55 sujetos que murieron era de 27. Williamson DF, Pamuk ER, Thun M, et al: Prospective study of inten-
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7
Implicaciones sociales de la obesidad
Emanuel Hell, M.D., y Karl A. Miller, M.D.

La corpulencia ha sido considerada desde diferentes perspec- enfrentan habitualmente a estos prejuicios, cuyas implica-
tivas a lo largo del pasado milenio. Se ha considerado una ciones sociales son múltiples. Para entender mejor estas inte-
expresión de prosperidad y un símbolo de fertilidad en la racciones es importante estar familiarizado con las circuns-
mujer. En algunas culturas esta interpretación se ha manteni- tancias sociales que rodean a la obesidad.
do vigente hasta la actualidad. No obstante, hasta mediados
del pasado siglo, sólo un reducido número de personas podía
consumir una dieta hipercalórica a largo plazo. Durante las Z CARACTERÍSTICAS AUTOPERCIBIDAS
dos últimas generaciones, amplios sectores de la población POR INDIVIDUOS CON OBESIDAD MÓRBIDA
han podido acceder a fuentes asequibles de alimentos. El
resultado de ello ha sido un aumento de peso considerable –en Percepción del cuerpo en la obesidad mórbida
ocasiones, extremo– en numerosas poblaciones, no sólo de los
países industrializados sino también de los países en desarro- Entrevistamos y exploramos a 410 personas (338 mujeres,
llo (p. ej., en Latinoamérica, Asia y África). Por tanto, la obe- 72 varones) con unos valores de índice de masa corporal
sidad se ha convertido en un problema global con implicacio- (IMC) comprendidos entre 19 y 40 kg/m2. Les formulamos
nes sociales y económicas relacionadas con la salud.1,2 las preguntas siguientes: ¿Qué percepción tiene de sí mis-
Estamos viviendo una época en la que que el modelo mo? ¿Cómo le gustaría ser? ¿Cómo cree que le miran los
anoréxico se ha aceptado como ideal de belleza, que necesa- demás? ¿Qué tipo de personas cree que tienen una mejor
riamente excluye la obesidad de la aceptación pública. imagen de sí mismos? Las personas analizadas consignaron
Paradójicamente, la industria alimentaria hace verdaderos sus impresiones generales en una escala de percepción cor-
esfuerzos para promover el consumo de alimentos, un señue- poral, mostrando figuras de diferentes niveles de obesidad.7
lo al que los niños son en apariencia más sensibles. La inci- Se apreció que, con referencia a las preguntas ¿Qué percep-
dencia de obesidad entre los niños estadounidenses ha ción tiene de sí mismo? y ¿Cómo cree que le miran los
aumentado en más del doble a lo largo de los últimos 25 años; demás?, el tamaño de las figuras corpulentas estaba relacio-
actualmente el 20% de los niños son obesos en EE. UU.3-6 nado de forma significativa con el IMC. En otras palabras,
Además, los videojuegos, el excesivo tiempo de perma- el valor del IMC objetivo es percibido de una forma muy
nencia ante el ordenador y una decreciente práctica de la edu- realista por los individuos obesos. La diferencia percibida
cación física y los deportes en numerosos colegios han hecho entre peso normal y sobrepeso, relativamente grande, era
que el nivel de ejercicio infantil se haya reducido de forma considerable. Este dato refleja el ideal social de delgadez.
notable. Los niños cada vez se desplazan más en automóvil de En respuesta a la pregunta ¿Qué tipo de personas cree
un lugar a otro. Los adolescentes y los adultos están expuestos que tienen una mejor imagen de sí mismos? no hubo correla-
a una amplia oferta de alimentos con alto contenido en grasa ción con el IMC. En cambio, se observaron diferencias signi-
y carbohidratos y poca cantidad de nutrientes, de restaurantes ficativas en la distribución del IMC en los cincos grupos de
de comida rápida y de porciones de gran tamaño. Así pues, las peso normal, sobrepeso y obesidad de grado 1 a grado 3. Este
omnipresentes tentaciones son los principales elementos que dato resulta de interés práctico. Sería incorrecto suponer que
contribuyen al desarrollo de esta nueva enfermedad. Los fac- las personas con problemas de obesidad albergan deseos y
tores genéticos son importantes, pero el rápido crecimiento de expectativas de mantener sus figuras actuales, o que compar-
la obesidad se ha producido en un tiempo demasiado reducido ten los planteamientos de las personas de peso normal o per-
para ser atribuido a un cambio genético significativo. siguen un ideal homogéneo. Las respuestas a la pregunta
Numerosos médicos consideran hoy en día la obesidad ¿Cómo le gustaría ser? no revelaron diferencias significativas.
como una enfermedad causada exclusivamente por el propio Hubo acuerdo uniforme entre las personas de todas las cate-
paciente, derivada de un exceso de autoindulgencia. Este gorías de peso con respecto al ideal de delgadez.
planteamiento falto de respeto, inexacto e insostenible hace
que los esfuerzos realizados en el tratamiento de la patología Estigmatización
carezcan muchas veces de sentido. Los médicos son también
producto de nuestra cultura, y comparten la responsabilidad Durante la entrevista se cuestionaron el tipo y la intensidad
de mantener un modelo de obesidad. Las personas obesas se de la estigmatización percibida. Además, se solicitó a las per-
52
Capítulo 7 • Implicaciones sociales de la obesidad 53

sonas analizadas que clasificaran en una escala de tres pun- tan mucha más autoconfianza que otros. Un cocinero, un pro-
tos el grado de discriminación del que se sentían víctimas. pietario de restaurante, una madre y ama de casa o un atleta
Dicho grado reveló una previsible y significativa asociación dedicado a un deporte en el que se requiere corpulencia noti-
con el IMC, después de que las personas fueran distribuidas ficaron datos de una vida más satisfactoria que los aporta-
en cinco grupos, tal como se indicaba en los referentes a la dos por una secretaria, un peluquero o un agente comercial,
percepción corporal. Los resultados individuales confirman cuyos jefes requerían de ellos un aspecto externo específico.
estudios previos de prejuicio. Las únicas diferencias signifi- Ello nos hace plantear el problema de qué grado de calidad de
cativas se observaron entre personas de peso normal y el vida está asociado al peso en las diferentes áreas de la vida.
resto de los grupos. Al aumentar el peso no se percibieron
diferencias cuantitativas importantes. Calidad de vida
En este estudio también observamos que el grado de
estigmatización se correlacionaba con la aparición de depre- En un estudio actualmente en curso, se evaluaron más de
sión. Puede suponerse que en este caso se produce un proce- 1000 individuos obesos utilizando el cuestionario de calidad
so de amplificación recíproca: cuanto mayor es el peso, de vida de Moorehead-Ardelt.10 Este interrogatorio consta de
mayores son la depresión y la estigmatización. Basándonos una sola página. Utiliza dibujos como ayuda visual y una esca-
en la bibliografía8 y en nuestro propio estudio, realizado en la de categorías para las posibles respuestas. Las preguntas
EE. UU. en unas 100 personas que se habían sometido a abarcan cinco áreas de calidad de vida: bienestar, actividad
cirugía, observamos que la estigmatización se genera tanto física, vida social, condiciones laborales y actividad sexual. En
en el entorno habitual del individuo como también, en buena general se descubrió que la calidad de vida estaba relacionada
medida, en el propio personal sanitario. de forma lineal e inversamente proporcional con el IMC. El
estudio demostró que, una vez que la persona con obesidad
Autoconfianza mórbida consigue una reducción adecuada del peso, el bien-
estar general subjetivo puede mejorarse en aproximadamente
Se investigó la autoconfianza en las áreas laboral, de relación el 90% de los casos., Ello supone una reducción de al menos
social durante el tiempo libre, y de relaciones personales la mitad del exceso de peso de la persona. De modo simultá-
íntimas y familiares.7 En todos los campos, la autoconfianza neo, el bienestar psicológico y físico del individuo puede
guardaba correlación con el IMC. En el trabajo la asociación mejorarse en el 80% de los casos, y el contacto social y el
era moderada, pero en el resto de las áreas era considerable- placer en el trabajo llegar a mejorar de forma significativa en
mente elevada. Los tres primeros grupos de IMC no experi- más del 60% de los casos. Diversos estudios de este tipo se
mentaron problemas importantes en el trabajo. Las dificul- están realizando actualmente en todo el mundo. Todos ellos
tades comenzaban a partir de un IMC de 35 kg/m 2. ponen de manifiesto una espectacular mejora de la calidad de
Traspasado ese límite, la movilidad y la capacidad física del vida subjetiva después de la reducción de peso.
individuo se reducen y ello repercute en la vida profesional
de la persona. Personalidad
En las áreas de relaciones sociales durante el tiempo
libre y de relaciones personales íntimas, la evolución es casi La relación de los problemas de obesidad con personalidades
continua. El punto de inflexión para el límite de sobrepeso características que se desvían de las de la población general
se correlaciona con las premisas de nuestra sociedad actual, fue negada en la bibliografía científica así como en los estu-
estresante y orientada al ocio. Ello puede confirmarse con dios que nosotros hemos realizado hasta ahora. Los datos
facilidad a partir de las extensas narraciones de episodios de referidos a las 410 personas analizadas que se han menciona-
sufrimiento registradas en las entrevistas. do previamente tampoco demostraron relaciones significa-
Un análisis de contenido cualitativo desarrollado por tivas entre las escalas de la prueba de Giessen y el IMC. Se
Mayring diferenció cinco categorías principales en la seleccionó la prueba de Giessen debido a que contiene sub-
siguiente secuencia de sentimiento de estigmatización9: escalas que miden la depresión y el área social. Estas dos
áreas presentan la máxima probabilidad teórica de causar
1. Ejercicio (deportes en compañía, especialmente nata- cambios en la estructura de la personalidad, que se derivan
ción). de la estigmatización y el deterioro consiguiente en la auto-
2. Paseos (ir caminando al restaurante, etc.). confianza. La valoración de la propia popularidad es un fac-
3. Ir de compras, especialmente de ropa. tor que diferencia a las personas de peso normal, e incluso a
4. Invitaciones de amistades (incluidas observaciones y las que tienen sobrepeso, de aquellas cuyo IMC es superior
comentarios sobre conducta alimentaria de la persona a 30 kg/m2. La capacidad y la voluntad de mantener una acti-
obesa). tud abierta hacia los demás están, en principio, caracteriza-
5. Visita al médico. das por la misma tendencia, aunque en ocasiones los indivi-
duos con obesidad mórbida no se diferencian de las personas
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Algunas mujeres han llegado a no visitar al ginecólogo en de peso normal en lo que se refiere a su carácter abierto.
15 años debido a comentarios impertinentes como «parece Los resultados complementan de forma concluyente los
que va usted a romper la silla» o por su propia vergüenza por datos sobre la estigmatización percibida y autoconfianza en
aparecer como una «masa de grasa». No es necesario explicar el área de «relaciones sociales durante el tiempo libre». Ello
los riesgos que el hecho de no realizar exploraciones preventi- puede interpretarse como indicio de que la autoconfianza
vas conlleva; las mujeres conocen estos riesgos. Los resultados comienza a disminuir en rango de sobrepeso. Al aumentar el
ilustran con claridad que el aspecto psicológico de la obesidad peso, además de la difamación y la burla en situaciones socia-
está relacionado con los problemas de un entorno que alimen- les específicas, a la larga se alteran los valores de personali-
ta un ideal específico de belleza. Es interesante observar que dad en el área social. El obeso mórbido posiblemente se
personas dedicadas a profesiones en las que el sobrepeso puede reconcilie con su situación y al menos es capaz de volver a
considerarse en cierto modo inherente a esa actividad presen- una forma de tratar a los demás más abierta.
54 Sección II • CONSECUENCIAS

Conducta alimentaria fuimos capaces de demostrar que estos datos son también
ciertos para individuos que han sufrido cirugía bariátrica.16
Los resultados obtrenidos mediante un cuestionario centrado La reducción de peso puede optimizarse mediante pro-
en la conducta alimentaria, que se presentó a las 410 personas gramas desarrollados basándose en la investigación mencio-
sometidas a la prueba mencionada previamente, se correspon- nada previamente, que modifican el control, la susceptibili-
den con los datos notificados por Pudel y Westenhöfer.11 Se dad y las punzadas de hambre por medio de técnicas de
observó que el control de los individuos a este respecto se terapia conductual. Tales programas resultan en ocasiones
colapsa más o menos a partir de un IMC de 40 kg/m2; por eficaces en los niveles requeridos por las normas internacio-
tanto no se reduce de modo coherente. No obstante, la «sus- nales, es decir, alcanzando una reducción de peso de más de
ceptibilidad» de los individuos comienza a desaparecer a partir 5 kg a lo largo de un período de más de 48 meses. Se trata
del límite del sobrepeso; lo mismo es aplicable a las punzadas de de una magnitud de reducción excelente en el intervalo del
hambre. Estas últimas muestran una elevación más significati- sobrepeso, especialmente si se considera el hecho de que la
va en valores de IMC de 40 kg/m2 en adelante. En la práctica, obesidad es una enfermedad progresiva. No obstante, los
ello significaría que el entrenamiento del individuo para supe- datos estadísticos satisfactorios demuestran que la pérdida
rar las «tentaciones» externas, así como la forma de controlar de peso promedio habitualmente no supera 5 kg.17 La pre-
las punzadas de hambre, deberían comenzar mucho antes de lo gunta que se plantea es, pues, qué tratamiento debe ofrecer-
que se hace habitualmente. De acuerdo con estos resultados, en se a los obesos y, especialmente, a los obesos mórbidos.
el rango de sobrepeso, con un IMC de 25 kg/m2 en adelante, La cirugía de la obesidad ha conseguido avances muy
hay un número de individuos significativamente mayor en ries- notables desde que comenzó a utilizarse a mediados del siglo
go que deberían conocer mejor el control de los estímulos pasado. Es el único tratamiento que ha demostrado conseguir
internos y externos. Consideramos que estos resultados subra- una reducción sostenida de peso y, al mismo tiempo, apor-
yan la inmensa importancia de la prevención. En el plano psi- ta una mejoría excepcional en el bienestar físico y psicológico
cológico también se plantea la cuestión de si es adecuado con- del paciente con respecto al estado basal preoperatorio.
siderar un IMC de 35 o 40 kg/m2 como valor rígido para la Para valorar los resultados del tratamiento quirúrgico de
consideración de la cirugía bariátrica. la obesidad grado 3 utilizamos el procedimiento desarrollado
por H. E. Oria y M. Moorehead (análisis de la obesidad y
presentación de los resultados del tratamiento de la obesi-
Z AUTOPERCEPCIÓN DE LOS INDIVIDUOS dad),18 que consiguió resultados similares a los obtenidos por
OBESOS DESPUÉS DE LA CIRUGÍA otros investigadores,19 es decir, que los pacientes que sufrie-
ron cirugía vieron reducidas aproximadamente en un 80% sus
La cirugía para la reducción de peso suele ser objeto de contro- patologías comórbidas después de 10 años, y el 90% de los
versia en el entorno público. Es generalizado el criterio de que pacientes consiguieron una mejoría, en ocasiones importante,
puede conseguirse una reducción de peso sin «el riesgo de una en su calidad de vida (bienestar general, actividad física, rela-
operación». Uno de los elementos del amplio espectro de pre- ciones sociales, actividad laboral y sexualidad). En otras pala-
juicios en contra de los individuos obesos12,13 es la consideración bras, las 200.000 operaciones que se realizan anualmente en
de que son de voluntad débil. Se tiende a pensar que podrían todo el mundo en la actualidad constituyen una contribución
reducir su peso en caso de que realmente lo desearan, si «sen- significativa para reducir los efectos sociales negativos de la
cillamente comieran menos» o «hicieran un poco más de ejer- discriminación contra el individuo obeso.
cicio».12,13 Lamentablemente estos prejuicios también son acep-
tados por los individuos obesos que a continuación se desprecian
a sí mismos por su supuesta debilidad, niegan la esperanza de Z OBESIDAD Y DIAGNÓSTICO DE ADICCIÓN
perder de vista sus cuerpos, voluminosos y socialmente inacep-
tados, y acaban por asumir su supuesta «incapacidad». La adicción se ha mencionado con cautela en los análisis
La ilusión de «simplicidad» y «facilidad» de la pérdida de referidos a obesidad. En la bibliografía sobre obesidad se
peso es ofrecida en numerosas ofertas irresponsables y costo- niega su existencia o se aportan ocasionales referencias poco
sas, realizadas por numerosas personas y estamentos. Incluso significativas. El mejor ejemplo de ello es la siguiente decla-
quienes trabajan en funciones de asesoramiento, tales como ración hecha por Ellis: «la obesidad es considerada errónea-
psicólogos y psicoterapeutas, consideran con frecuencia que mente como una prueba de adicción y enfermedad mental».19
sólo se ha de alcanzar «la raíz del problema», el lugar donde Por el contrario, están las declaraciones hechas por los mis-
«la coraza protectora se ha construido» y «trabajar» sobre mos individuos obesos:20
esta armadura para conseguir la reducción de peso. No obs-
tante, las evaluaciones de tratamiento disponibles contradicen «Tener sobrepeso me hace sentir despreciable, infrahu-
este punto de vista.14 De acuerdo con los conocimientos mano, pero no puedo controlar la cantidad de alimento que
actuales deben identificarse las denominadas raíces (es decir, como».
los viejos hábitos) y trabajar sobre ellas, pero dicho trabajo «No puedo soportar la frustración y el dolor, pero tam-
debe ser seguido necesariamente por un detallado proceso de poco puedo resistir la privación de alimento».
adquisición y práctica de nuevas conductas. «Necesito satisfacer el hambre de inmediato».
Basándose en una serie de minuciosos estudios, ciertos «La vida es demasiado aburrida sin dulces. Debo tener-
grupos de investigación han identificado variables en los los».
hábitos alimentarios que pueden ser elementos pronósticos «Sólo con pensar en dejar de comer me encuentro mal;
para la reducción y aumento de peso. El «control» cognitivo tengo que comer más».
muy rígido o muy escaso, junto con la «susceptibilidad» (a «Siento punzadas de hambre, nerviosismo e irritabilidad
estímulos como olor o aspecto de los alimentos) y las punza- y depresión debido a la privación de alimentos».
das de hambre intensas son significativamente más frecuen- «Si participo en una celebración debo comer para dis-
tes en individuos con sobrepeso.15 En un antiguo estudio frutar plenamente de ella».
Capítulo 7 • Implicaciones sociales de la obesidad 55

«Es demasiado duro controlar mi ingesta. No puedo embargo, el hecho de que la necesidad de una gratificación
combatir el ansia por comer». sustitutiva diferencie a los obesos de las personas de peso nor-
mal necesita aún ser investigado a fondo. Posiblemente todos
Cada una de estas frases expresa una urgencia, una los individuos admiten una gratificación sustitutiva en un
ansiedad, una incapacidad de control. «El hambre insacia- grado similar, pero con consecuencias menos graves. La obe-
ble» es considerada como un rasgo característico de los indi- sidad no puede explicarse sólo en virtud de problemas psico-
viduos más dependientes.21 lógicos. Sólo un pequeño número de individuos obesos utili-
La bibliografía referida a la dependencia recoge también zan los alimentos como gratificación sustitutiva.25,31
los puntos mencionados en las declaraciones citadas previa- Por tanto, el simple descubrimiento del sentimiento
mente. Cabe citar entre esas referencias las de urgencia por subyacente no puede ser la solución. Es probable que nos
comer o hambre insaciable; la experimentación de impulsos, la encontremos ante una enfermedad multifactorial y no
asunción de una postura irracional en relación con la ingestión homogénea cuyos factores individuales se potencian entre sí.
de una sustancia específica (un deseo excepcionalmente fuer- Aliabadi y Daub31 fueron capaces de demostrar que la obesi-
te de relajación o de experimentar el máximo placer posible), las dad y la estigmatización asociada a ella inducen a la persona
técnicas de control inadecuadas; el hábito controlado de consu- a la adicción. Desgraciadamente, no hemos encontrado estu-
mir una sustancia específica; una relación desequilibrada entre dios empíricos y minuciosos que enfoquen las asociaciones
el control y la urgencia; y una predisposición genética que es entre adicción y obesidad.
potenciada frecuentemente por la acción del entorno.22-24 Las entrevistas y los contactos con individuos que sufren
Resulta ciertamente problemático introducir el concep- problemas de obesidad durante el tratamiento nos conduje-
to de adicción en un contexto referido a individuos obesos, ron a examinar el grado en el que los individuos obesos
que son víctimas de una fuerte discriminación. No obstante, ponen de manifiesto sus rasgos adictivos.7 A partir de otros
la adicción ofrece un perfil particularmente nítido del pro- cuestionarios sobre adicción existentes, elaboramos uno
blema. No podemos abstenernos de comer o del azúcar, que destinado a determinar la urgencia específica relacionada
libera endorfinas; no podemos abstenernos de tomar grasas, con la dependencia, es decir, el ansia incontrolable de un
no podemos abstenernos del alimento. El individuo obe- exceso de alimento. Además, adaptamos el cuestionario de
so no es más capaz de resistir la oferta incontenible del exceso incapacidad de Breitkopf 32 para situaciones en las que un
de alimento que el individuo dependiente de la nicotina o el individuo es expuesto a una oferta tentadora de alimento.22
alcohol es capaz de hacerlo a los objetos de su adicción. Lo Aunque el 20% de los individuos de peso normal acep-
mismo se aplica a los aspectos sociales de la ingesta de ali- tan el concepto de urgencia de comer, el porcentaje asciende
mento; es difícil abstenerse de la bebida o refrenar el hábito al 45% en personas con sobrepeso y al 60% en obesos mór-
de fumar en ciertas ocasiones. Por otra parte, el hecho de bidos. En el intervalo de la escala que determina el uso de
rechazar la comida que le ofrecen a uno puede interpretarse alimento como sustituto (en situaciones de frustración o
como una grave falta de educación. similares.), las correlaciones son parecidas. No obstante, los
Más que cualquier otra sustancia en el mundo, el ali- valores porcentuales son muy inferiores, comenzando en
mento se relaciona con las emociones. Los aspectos fisioló- aproximadamente un 5% para personas de peso normal y
gicos y psicológicos del alimento no pueden separarse estric- ascendiendo hasta el 35% en obesos mórbidos. Este último
tamente entre sí. Las primeras relaciones establecidas por los porcentaje es muy similar al 30% registrado en casos de pro-
seres humanos están todas asociadas al alimento. blemas con el alcohol que aparecen en la bibliografía.23,24
Creemos que resulta válido considerar el fenómeno de En este contexto, son destacables otros aspectos. Si nos
la adicción, ya que disponemos de diversas terapias adictivas fijamos, por ejemplo, en el porcentaje de distribución de res-
probadas científicamente, que enriquecen la gama actual de puestas para la frase «comer es mejor que cualquier otra cosa»,
posibles tratamientos. los resultados se invierten: el 30% de los individuos de peso
A primera vista parece absurdo hablar de dependencia de normal aceptan la afirmación, mientras que ello sólo sucede en
los alimentos; no se puede permanecer al margen en lo que a los el 5% de los casos de los afectados de sobrepeso y en ninguno
alimentos se refiere, debido a que los requieren todos los orga- de los aquejados de obesidad mórbida. Estos últimos perciben
nismos vivos para mantenerse como tales. Sin embargo, la la comida como un problema, no como un placer.
dependencia de alimentos es relativa. Los estudios publicados Estos resultados proporcionan una observación intere-
hasta el momento se han centrado sobre todo en los trastornos sante. De acuerdo con los datos que hemos obtenido hasta
de los hábitos alimentarios,25 y mucho menos en los aspectos de ahora, la urgencia no es algo que experimenten en la misma
la obesidad relacionados con la adicción. Además, es destacable medida todas las personas con problemas de obesidad. El
el hecho de que existe poca bibliografía que haga referencia a factor de adicción de la urgencia está muy correlacionado
un hecho conocido desde hace más de diez años, es decir, que con la susceptibilidad y el hambre, pero difiere en gran
un porcentaje sustancial de individuos obesos sufren ataques de medida entre las diversas categorías de IMC.
lo que se denomina atracones. Las cifras citadas son variables, Puede afirmarse que el hambre insaciable citada en la
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pero la mayoría informan de que estos se dan en aproximada- bibliografía, así como las restantes variables de adicción,
mente del 25% de los casos.26,27 Varios estudios han demos- presentan diferencias entre los individuos con IMC corres-
trado que el número de episodios de atracones aumenta signi- pondientes a diversas categorías de sobrepeso, y también los
ficativamente con el grado de obesidad.28 diferencian de los individuos de peso normal.
Los atracones, o ataques de alimentación compulsiva, son
un fenómeno de adicción. Cuando se analizan asociaciones
psicológicas entre los problemas de obesidad y la adicción, Z RESUMEN
habitualmente se hace de una forma generalizada, con razo-
namientos tales como «el alimento es una forma de tratar los La obesidad, la obesidad mórbida o, con mayor precisión,
sentimientos de rechazo o de eludir los problemas y conflic- una proporción excesiva de grasa en el cuerpo, y el conjunto
tos»29,30. Estos enfoques están ciertamente justificados. Sin de riesgos asociados, han sido considerados causantes de la
56 Sección II • CONSECUENCIAS

epidemia del tercer milenio por la Organización Mundial de Los efectos sociales de la obesidad son múltiples. A la
la Salud (OMS). Los hábitos de vida alterados son responsa- larga conducen a un grado de discriminación sin parangón
bles de esta epidemia global. La desproporción entre el en ninguna otra minoría. Necesitamos introducir, pues,
menor consumo de energía derivado de la actividad física cambios eficaces en la actitud social de rechazo referida a la
reducida y el creciente aporte de la misma por la ingestión obesidad.
de alimentos con alto contenido de grasa, azúcares y energía,
ha dado lugar al problema actual. El estilo de vida occidental
excedentario, y la preferencia por la comida rápida, los ten- Z BIBLIOGRAFÍA
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enfermo y que puede evitarse con facilidad genera una tensión scopic adjustable silicone gastric banding. Obes Surg
significativa y una injusta discriminación. 2000;10:214-219.
17. Hell E, Miller K: Morbide Adipositas. Chirurgische Behandlung der
Para superar estos planteamientos, la opinión pública Morbiden Adipositas. Ergebnisse 2000;237-267.
debe asumir que la obesidad es una enfermedad inducida 18. Oria HE: Reporting results in obesity surgery: evaluation of a limited
genéticamente, que se manifiesta cuando una persona suscep- survey. Obes Surg 1996;6:361-368.
tible se enfrenta a los factores ambientales que la favorecen. 19. Ellis A, Abrams M, Dengelegi L: Rational Eating. New York:
Aunque la OMS ha presentado un nuevo informe acerca Barricade Books, 1992.
20. Sa␤ H, Wittchen H, Zaudig M, et al: Diagnostische Kriterien DSM
de la obesidad de acuerdo con el cual 1.100 millones de perso- IV, pp. 79-81. Göttingen, Hogrefe, 1998.
nas quedan encuadrados en la categoría de sobrepeso u obesi- 21. Birch L, Fisher J: Development of eating behaviors among children
dad, las reacciones en términos de estrategia destinada a con- and adolescents. Pediatrics 1997;539-546.
trarrestar esta situación son escasas. La mayoría de los 22. Feuerlein W: Kognitive Therapie der Sucht, pp. 231-232. Weinheim:
Psychologie Verlags Union, 1997.
gobiernos del mundo han ignorado el problema de la obesi- 23. Klicpera C, Gasteiger-Klicpera B: Klinische Psychologie. Wien,
dad. Es muy difícil influir en la industria alimentaria, que WUV, 1996.
debería aprender a formar parte de la solución en lugar de ser 24. Schaef A: Im Zeitalter der Sucht. Munich, DTB, 1991.
parte del problema. Junto con el desarrollo de las pertinentes 25. Fairburn C: Overcoming Binge Eating, pp. 74-76. New York,
Guilford, 1995.
instalaciones terapéuticas, las estrategias de prevención a lar- 26. Marcu M: Binge eating and obesity. In Brownell K, Fairburn C (eds):
go plazo deben ser la base de la lucha contra la obesidad. Está Eating Disorders and Obesity, pp. 441-444. New York, Guilford,
claro que medidas aisladas, como puede ser la eliminación de 1995.
máquinas expendedoras de bebidas de los centros escolares, 27. Telch C, Agras W, Rossiter H: Binge eating increases with increasing
adiposity. Int J Eat Disord 1998;7:115-119.
no son suficientes. En su lugar debemos desarrollar estrate- 28. Ardelt-Gattinger E, Lechner H: Psychological aspects of bariatric
gias nacionales que sean adoptadas por instituciones políticas surgery. Zentralbl Chir. 2002;127(12):1057-1063.
asociadas a centros educativos, organizaciones empresariales 29. Bruch H: Essstörungen, pp. 21–22. Frankfurt, Fischer, 1991.
y medios de comunicación. Los programas de prevención 30. Gross W: Was ist das Süchtige an der Sucht? pp. 51-55. Guesthacht,
deberán comenzar en los jardines de infancia, donde se puede Neuland, 1993.
31. Aliabadi C, Daub M: Der unstill-bare Hunger. In C. Merfert – Diete,
enseñar a los niños a concebir la alimentación con propiedad R. Soltau (Hrsg): Frauen und Sucht, S 171-178. Hamburg. Rowohlt,
y responsabilidad, y en los que puede comenzar a fomentarse 1984.
la práctica regular de ejercicio. 32. Breitkopf L: Die Hilflosigkeitsskala. Diagnostica 1985;31:221-233.
8
Implicaciones económicas de la obesidad
Louis F. Martin, M.D., F.A.C.S., F.C.C.M.

La prevalencia de obesidad en la población de EE. UU. y la El Dr. George Bray, endocrinólogo de Los Angeles School
mayoría de los países desarrollados ha aumentado hasta el pun- of Medicine de la Universidad de California, ha dedicado toda
to de llegar a ser considerada una enfermedad. Las autoridades su carrera al estudio de la obesidad. Contribuyó a que los
sanitarias, los National Institutes of Health (NIH) y la NIH se plantearan el estudio de la obesidad como un pro-
Organización Mundial de la Salud (OMS), han reconocido que blema de salud pública a partir de los años setenta. La deci-
existe una epidemia de obesidad, que los intentos por prevenir- sión consensuada a la que llegaron los primeros análisis de
la y tratarla no son adecuados y que el cuadro es uno de los los NIH y los equipos de expertos fue que no existía una
problemas de salud pública más importantes de este siglo.1-4 relación explícita de causa-efecto entre obesidad y «enfer-
En capítulos anteriores de este libro se han esbozado medad».5,6 Sin embargo, estos foros públicos atrajeron la
evidencias que demuestran que la obesidad acorta la espe- atención de una nueva generación de investigadores, que
ranza de vida, se asocia a una serie de patologías asociadas comenzaron a documentar los vínculos entre la obesidad y
importantes y empeora la calidad de vida. Tales datos han otras enfermedades.
llevado a las autoridades sanitarias a la conclusión inevitable En 1985, cuando los NIH celebraron su siguiente con-
de que la asistencia sanitaria, la seguridad social y ciertos ferencia de consenso sobre las repercusiones de la obesidad
seguros sanitarios acumularán en los próximos 20 años cos- sobre la salud, se había completado un nutrido bloque de
tes médicos directos y costes sociales indirectos relacionados investigaciones, y ello permitió a este equipo identificar la
con la obesidad más sustanciales que los ocasionados por obesidad como un peligro cierto para la salud, así como
cualquier otra enfermedad primaria. Dado que esta realidad reconocer la importancia de su prevención y tratamiento.7
se extiende a los ámbitos de la política, los negocios y los Los NIH otorgaron varias subvenciones a los investigadores
medios de comunicación, la patología provocará diversas (p. ej., a los de Policy Analysis, Inc., de la Universidad de
respuestas descoordinadas, que gradualmente reformarán Harvard) para que desarrollasen las primeras estimaciones
las normas públicas en esta generación. El presente capítulo del impacto que producía la obesidad sobre los costes direc-
estudia la evidencia y las especulaciones que han estimulado tos de los seguros de salud en EE. UU. En 1992, Colditz8
el interés por controlar este importante problema de salud argumentó que el coste total de todos los tratamientos médi-
pública y somete a consideración la respuesta de la sociedad cos en el país podría reducirse en un 5,5% si se eliminase la
desde una perspectiva económica. obesidad (objetivo obviamente imposible, tanto entonces
como ahora). Los gobiernos de los países desarrollados lle-
garon a conclusiones similares usando datos de sus sistemas
Z EVOLUCIÓN DE LA OBESIDAD de salud, en los que dichos sistemas estaban socializados, que
COMO UNA ENFERMEDAD poseían una información más centralizada. Las estimaciones
de Francia, los Países Bajos, Australia y Canadá, donde la obe-
En los capítulos previos se ha documentado ampliamente el sidad no es tan prevalente como lo era en EE. UU. en los años
modo en el cual los crecientes niveles de obesidad se relacio- ochenta y principios de los años noventa, también sugerían
nan de forma directa con mayores tasas de mortalidad pre- que entre el 2% y el 4% de los costes médicos directos de estos
matura; con el desarrollo de importantes patologías comór- países se eliminarían si desapareciera la obesidad.9-12 Ello
bidas, entre las que se cuentan hipertensión, diabetes, atrajo la atención de las autoridades sanitarias y los responsa-
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hiperlipidemia, aterosclerosis, artrosis y enfermedades respi- bles políticos de todo el mundo. En la actualidad, estas esti-
ratorias, como la apnea del sueño y el síndrome de hipoven- maciones continúan actualizándose y han ganado en credibi-
tilación por obesidad, y de una mayor probabilidad de que lidad, ya que las cifras y las premisas que subyacen tras ellas se
los individuos obesos sean víctimas de discriminación, lo han mantenido estables a lo largo del tiempo.13
que limita sus oportunidades en enseñanza, empleo y rela- Al mismo tiempo, los expertos en salud pública docu-
ciones sociales, e incrementa la incidencia de depresión y mentaron un aumento de la prevalencia de obesidad en todos
otros síntomas asociados a peor calidad de vida. Aunque pue- los grupos étnicos y de edad, e intentaron validar el número
de parecer obvio para la mayoría de los médicos y para la de muertes prematuras atribuibles a la enfermedad.
opinión pública general la existencia de esta asociación entre Utilizando datos de encuestas en poblaciones en las que la
la obesidad y ciertos problemas vitales importantes, su docu- mortalidad estaba documentada, McGinnis y Foege conclu-
mentación es relativamente reciente. yeron en 1993 que en EE. UU. un total de entre 300.000 y
57
58 Sección II • CONSECUENCIAS

500.000 muertes anuales eran evitables o prematuras, debi- carga económica para la sociedad, aunque su virulencia no
do a «una dieta inadecuada y falta de actividad».14 El ex ciru- sea excesiva (p. ej., la artrosis).
jano Dr. C. Everett Koop y algunos otros comenzaron a Es igualmente importante determinar qué proporción de
advertir a la población general que 300.000 muertes anuales la población es sensible a la enfermedad. A menos que una
en EE. UU. se debían a la obesidad.1 Allison y un equipo de enfermedad afecte a un número lo bastante grande de perso-
expertos en obesidad publicaron un informe en 1997 elabo- nas como para justificar la asignación de fondos para investi-
rado con una metodología sólida que confirmó que gación por parte del gobierno y las industrias, la probabilidad
300.000 muertes prematuras anuales se debían a la obesidad, de determinar los mecanismos de acción de la enfermedad y
lo que convierte a este trastorno en la segunda causa de los productos o tratamientos que pueden usarse para contro-
muerte prematura tras las enfermedades asociadas al taba- larla o prevenirla está reducida. Además, si una enfermedad
quismo.15 La obesidad había confirmado su condición pato- afecta a una parte significativa de la población (p. ej., obesidad
lógica y se constituía en una verdadera amenaza para la salud u obesidad mórbida) y los tratamientos resultan costosos
pública. (cirugía) o ineficaces (dieta, modificación de conducta, ejerci-
cio, medicaciones), la sociedad puede intentar restringir el
acceso a los tratamientos o permitir el reembolso tan sólo de
Z COSTES ASOCIADOS CON LA FALTA los tratamientos más eficaces, desarrollando un sistema que
DE TRATAMIENTO DE LA OBESIDAD evalúe los resultados. Si la frecuencia y la gravedad de una
enfermedad están aumentando, y no se han destinado los
Los costes asociados a una enfermedad incluyen los gastos recursos adecuados para prevenirla, controlarla o curarla, al
directos de atención sanitaria para tratar los síntomas, com- final la sociedad tiene que admitir que ignorar el problema no
plicaciones y comorbilidad asociada con la enfermedad, y los es la solución y debe reconocer que una enfermedad que no se
gastos indirectos, con frecuencia más elevados, que repercu- trata puede dar lugar a la quiebra del sistema sanitario si no se
ten en el producto nacional bruto debido a los días de baja le pone freno. La obesidad ha llegado a este nivel y los gobier-
por enfermedad, jubilaciones anticipadas y pagos por disca- nos luchan denodadamente por encontrar soluciones a los
pacidad, y a la pérdida de productividad por la menor efi- problemas médicos y sociales que plantea antes de que ponga
ciencia en el trabajo. Los individuos y la sociedad padecen en riesgo su sistema.
enfermedades de un modo similar. La obesidad se asocia a Además de todos los estudios que documentan que un
unos ingresos domésticos inferiores a la media y, lo que es índice de masa corporal (IMC) elevado se asocia a una mayor
más importante, con la pérdida de oportunidades. incidencia de hipertensión, diabetes, artrosis y otras enfer-
Cuando una sociedad decide no tratar o no asignar recur- medades, en los años ochenta empezaron a aparecer estu-
sos a la prevención del desarrollo de una determinada enfer- dios que indicaban que el tratamiento de los obesos, espe-
medad, como la obesidad, el sida, las enfermedades mentales cialmente de los que padecían obesidad mórbida, costaba
o el cáncer, establece un juicio de valor que puede dar lugar a significativamente más al Sistema Nacional de Salud, aun-
una injusticia social. A veces, el perfil socioeconómico, la cla- que los tratamientos que podían mejorar o curar la obesi-
se social, la raza, las actividades de ocio y otras características dad se denegaran. Por ejemplo, Epstein y cols. comunica-
de la población que desarrolla una enfermedad son tales que ron que los pacientes con obesidad mórbida presentaban
estos individuos pueden unirse y formar un grupo de acción tiempos de hospitalización significativamente más largos
social para luchar eficazmente por sus derechos y por la parte tras una cirugía de reconstrucción articular, lo cual hacía
correspondiente de los fondos destinados a la sanidad pública. que el coste medio de la cirugía fuera un 35% mayor que en
Por ejemplo, la tercera edad, que tiene más tiempo libre que pacientes con peso normal.20
los padres de niños de corta edad, presionan eficazmente para Quesenberry, Caan y Jacobson estudiaron los costes
conseguir dinero con el que tratar enfermedades que afectan asociados con el tratamiento de pacientes divididos en tres
a su grupo (p. ej., cáncer, aterosclerosis, enfermedad de grupos según sus pesos (más de 17.000 personas) en una
Alzheimer). En cambio, los obesos no han sido capaces de organización de mantenimiento de la salud del norte del
constituir un grupo con influencia política y, por tanto, sufren estado de California.21 Concluyeron que los obesos mórbi-
unos niveles de discriminación que la mayoría de los otros dos (IMC  35 kg/m2) tenían gastos médicos un 44% más
grupos no toleraría.16 No sólo la población general se siente altos que los participantes comprendidos en el rango de peso
libre de discriminarlos, sino que también los estamentos polí- normal (IMC  25 kg/m 2). Los obesos mórbidos tenían
ticos,17 la prensa18 e incluso miembros de otros grupos que unos costes generales y de laboratorio significativamente
padecen intolerancia social19 se permiten atacar a la enferme- mayores que los participantes de peso normal. La mayoría
dad de la obesidad como si no fuera merecedora de estudios de estos costes más altos se relacionaba con los gastos añadi-
serios o recursos sociales. dos de tratar las tres enfermedades más caras asociadas a la
Dentro de la comunidad sanitaria, sin embargo, se tie- obesidad: diabetes, hipertensión y enfermedad coronaria.
ne la sensación de que es necesario aportar valoraciones No existen estudios que comparen la frecuencia con la
objetivas sobre la importancia relativa de varias enferme- que los miembros de la sociedad de mayor peso (los obesos
dades para el gasto general de recursos sanitarios y seguri- mórbidos) de países desarrollados reciben jubilación antici-
dad social. Los estudios que se refieren a costes de la enfer- pada o pensiones por incapacidad y la de los que sólo pade-
medad8-13 proporcionan una información limitada y que no cen sobrepeso u obesidad moderada. No obstante, sí se dis-
refiere a la disponibilidad de tratamientos o medidas pre- pone de datos, procedentes de Finlandia y Suecia, que
ventivas, sus costes o la eficacia de estas opciones. Una comparan las cifras referidas a ciudadanos de peso relativa-
enfermedad puede tener un alto coste simplemente porque mente normal con otros con sobrepeso u obesos.22 Por des-
no existen tratamientos eficaces, incluso aunque la presión gracia, estos estudios no son equiparables directamente, ya
social haga que una enfermedad se trate de forma agresiva que las definiciones de sobrepeso, obesidad y obesidad mór-
(p. ej., el cáncer incurable). Por otra parte, la cronicidad de bida han cambiado a lo largo de los años. En 1985, la confe-
una patología puede hacer que se convierta en una onerosa rencia de consenso de los NIH recomendó usar el IMC para
Capítulo 8 • Implicaciones económicas de la obesidad 59

evaluar a los pacientes obesos, en vez de usar tablas destina- los precios de 1994 y a los niveles salariales, incluidos los
das a determinar el peso ideal.7 El equipo de expertos defi- gastos de estructura de los servicios sociales.
nió la obesidad mórbida de manera distinta en hombres y La investigación mostró que las mujeres obesas se toma-
mujeres: designó como obesos leves a los que presentaban un ban menos días de baja por enfermedad a corto plazo (de 1 a
IMC de 28 kg/m2, como obesos a aquellos cuyo IMC era de 5 días al año) que el resto de la población (16,5% para las
30 y como obesos graves a los de IMC de 35. La obesidad mujeres obesas comparado con 22,1% para las mujeres no
mórbida evolucionó a partir de un término de los seguros obesas, P  0,001). Ello podría explicarse en virtud de la
médicos usado por cirujanos bariátricos al principio de los discriminación que sienten las mujeres obesas en puestos en
años setenta para describir a los pacientes que se creía que los que tienen que trabajar más para recibir niveles similares
podían morir prematuramente debido a su obesidad extrema de reconocimiento por su trabajo. Sin embargo, al comparar
si no recibían tratamiento quirúrgico. El término fue valida- bajas a largo plazo (de 6 meses a 1 año de baja), las obesas
do para su inclusión en la novena revisión de la Clasificación sobrepasaban el doble de la tasa de baja por enfermedad
Internacional de Enfermedades (CIE-9) en 1994.22 (10% frente a 4%, P  0,0001). Uniendo todos los días de
En un principio la obesidad mórbida se definió como un incapacidad, a largo y a corto plazo, las mujeres obesas pre-
valor equivalente al 200% del peso ideal, usando las tablas sentaban un número de días de baja por enfermedad 1,9 veces
actuariales de la Metropolitan Life Insurance. Durante un mayor que las mujeres sin sobrepeso de la población general.
panel de consenso de los NIH en 1991 sobre la indicación de El índice aumentaba para cada década de vida; las obesas con
la cirugía gastrointestinal para la obesidad grave, la defini- edades entre 30 y 39 años presentaban un promedio de
ción de obesidad mórbida o grave se amplió para incluir un 40 días de baja por enfermedad al año en comparación con
IMC de 40 kg/m 2 sin patologías asociadas o un IMC de los 26 días de las mujeres sin sobrepeso; las obesas de 40 a
35 kg/m2 con comorbilidad.23 49 años tenían un promedio de 52 días y las obesas de
Los NIH evitaron el uso del término mórbido, pues se 50 a 9 años tenían un promedio de 70 días de baja por enfer-
consideraba políticamente incorrecto. No se trata de una medad al año, también en comparación con los 26 días de las
postura afortunada, ya que es siempre necesario promover el mujeres sin sobrepeso.24
uso de definiciones incluidas en el sistema de codificación De forma semejante, el porcentaje de la población que
del CIE-9 para que los médicos las usen en vez de ir inven- recibía una pensión por incapacidad tras jubilarse era mayor
tando nuevas definiciones que no pueden ser asimiladas en en las mujeres obesas en todos los rangos de edad y en todos
terminología codificada durante décadas. La OMS contaba los niveles de IMC. Entre las mujeres de 50 a 59 años con
con distintas definiciones para el sobrepeso; esta diversidad IMC de 40 kg/m 2, el 22% estaban incapacitadas, lo que
se resolvió en parte con una ordenación modificada de las correspondía a una tasa 3,9 veces mayor que la de la pobla-
definiciones incluidas en las guías publicadas en 1998 por los ción sueca global. Los autores calcularon que aproximada-
NIH3 y la propia OMS.4 Obesidad extrema, en contraposi- mente un 10% del coste total de la pérdida de productividad
ción a obesidad grave, es otro de los términos usados por los debida a los días de trabajo perdidos era el resultado de la
NIH en los años ochenta y noventa, y tiene un significado obesidad y las enfermedades asociadas a ella entre las suecas.
distinto en la literatura quirúrgica, donde la obesidad grave Usando las cifras de salario medio anual de las mujeres, el
se refiere a un IMC de 50, 55 o 60 kg/m2, dependiendo del coste asciende a 300 millones de dólares (en su cotización de
autor y del texto. 1994) en pérdida de sueldo por millón de mujeres adultas y
La OMS es titular de los derechos de autor del sistema por año; en este contexto la obesidad se convierte en una
CIE-922 y necesita controlar la proliferación de definiciones, enfermedad extremadamente costosa para la sociedad.
y animar a los médicos a codificar con precisión la obesi- Un estudio posterior, que comparaba a 369 ciudadanos
dad y la obesidad mórbida, y a usar nuevos códigos en relación suecos con obesidad mórbida que se habían sometido a ciru-
con la obesidad, con el fin de permitir un seguimiento de los gía bariátrica entre 1987 y 1990 con un grupo emparejado de
gastos generados por las enfermedades asociadas a la obesidad 371 obesos mórbidos de la misma nacionalidad que no qui-
usando el código de peso adecuado, de modo que esta infor- sieron recibir tratamiento quirúrgico, concluyó que el trata-
mación de índole financiera esté disponible para los progra- miento quirúrgico causaba una reducción de las bajas por
mas de seguros Medicare y Medicaid de EE. UU. enfermedad y pensiones por incapacidad en los 4 años
En 1996 se publicó en Suecia un extenso estudio sobre siguientes a la cirugía o al principio del seguimiento, sobre
la asociación entre obesidad y discapacidad, incluyendo las todo en sujetos entre 47 y 60 años.25 Este estudio, sin embar-
bajas por enfermedad, basándose en los datos iniciales reco- go, no se ajusta con precisión al estado actual de la cirugía
gidos de pacientes que se incluyeron en el registro del estu- bariátrica en EE. UU., ya que ninguna de las intervenciones
dio Swedish Obese Subjects (conocido por sus siglas inglesas, del estudio sueco se realizó mediante laparoscopia (la forma
SOS), para el cual se requería que los pacientes tuvieran un más común de las cirugías bariátricas en EE. UU.), y, ade-
IMC de 38 kg/m2 para ser incluidos; se complementó con los más, las leyes suecas referidas a los días de baja por enferme-
datos recogidos en un centro de consultas externas de obe- dad permitidos son mucho más indulgentes. Seguramente
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sidad en el Sahlgrenska Hospital, en el que los pacientes debían un estudio realizado en EE. UU. mostraría diferencias
tener un IMC de 28 kg/m 2 para ser incluidos.24 El estudio mayores que las encontradas en el trabajo sueco.
comparaba datos referidos a 1298 mujeres obesas, de edades Un estudio que valoraba la relación entre obesidad y
comprendidas entre los 30 y los 59 años (media de 46 años), discapacidad en Finlandia encontró asociaciones significati-
con un IMC de entre 28 y 68 kg/m2 (media de 39 kg/m2), con vas similares, e insistía en la importancia de la artrosis de
datos de todas las mujeres suecas en este rango de edad, rodilla causada por la obesidad como componente principal
obteniendo los datos del Swedish National Insurance Board. El de la morbilidad asociada a la jubilación anticipada. 26 El
estudio calculaba los costes indirectos de la pérdida de pro- estudio conocido a nivel internacional como Mini-Finland
ductividad debida al absentismo laboral usando los ingresos Health Survey sometió a seguimiento a 5625 varones y muje-
anuales medios de las mujeres suecas de entre 30 y 59 años res de edades comprendidas entre los 30 y los 64 años en la
dividido por el número de días laborales del año, ajustado a entrevista inicial, entre 1978 y 1980. La investigación se pro-
60 Sección II • CONSECUENCIAS

longó durante 15 años, hasta 1995. La discapacidad se defi- se subrayan en la tabla 8-1, aunque es necesario consultar el
nió como la obtención de una incapacidad laboral durante el libro completo para explicar los elementos que se pueden
período de seguimiento antes de los 65 años de edad. Este situar en el numerador de la ecuación (los costes para la socie-
estudio utilizó las definiciones más actuales de sobrepeso dad, que incluyen costes directos de atención sanitaria y cos-
(un IMC superior a 25 kg/m 2 e inferior a 30 kg/m 2) y obesi- tes sociales indirectos) y qué unidades deberían usarse para
dad (un IMC de 30 kg/m2). considerar los beneficios de un resultado. El Public Health
Más de la mitad de los varones y mujeres tenían sobre- Service y el Center for Medicare and Medicaid Services (CMMS)
peso o eran obesos al principio del estudio: el 44,9% de los abogan por la valoración de beneficios médicos de un trata-
varones presentaban sobrepeso y el 11,3% eran obesos; de las miento a distintas edades y por los generados por distintos
mujeres, el 32,5% tenían sobrepeso y el 16,4% eran obesas. tratamientos.20,30 Cuando ello no es posible por falta de datos,
En conjunto, el 3% de los varones y el 10% de las mujeres se suele utilizar una media de los años de vida ajustados por
sufrían artrosis de rodilla, las tasas más altas de todas las calidad (QALY, por sus siglas inglesas).22,30 La magnitud se
articulaciones que se estudiaron, incluyendo el dolor de obtiene pidiendo a un grupo de ciudadanos que valoren sub-
espalda. Tanto la obesidad como la artrosis se relacionaban jetivamente la calidad de vida y la cantidad de tiempo que les
de manera independiente y significativa con pensiones por gustaría tener, respondiendo a esta pregunta: Teniendo en
jubilación anticipada. Cuando el paciente presentaba tanto cuenta su edad, su dolor y sufrimiento, su inmovilidad y pér-
obesidad como artrosis, el riesgo relativo de desarrollar una didas gananciales, ¿qué parte de un año estaría dispuesto a
incapacidad laboral que necesitara jubilación anticipada perder a cambio de estar completamente sano durante la frac-
durante los 15 años de seguimiento era del 2,4 (IC al 95%, ción de año restante, en lugar de mantener su estado actual de
1,3-4,3). Comparados con los individuos de peso normal sin salud durante un año completo?31
artrosis, estos individuos tenían 7,9 veces más probabilidad Esta pregunta puede ser difícil de responder y conduce
de tener dificultades para realizar actividades de la vida dia- a resultados muy distintos si se comparan las diferencias en
ria (un índice de calidad de vida). Estos datos complementan años de vida con los QALY. La extirpación de cataratas bila-
a los de la National Health Survey que documentan que el terales con implante de cristalinos artificiales puede mejorar
aumento de peso se relaciona directamente con un mayor sustancialmente los QALY (poder ver en lugar de estar cie-
número de días perdidos por estar enfermo o en cama.27 go), pero no tiene impacto en la esperanza de vida. La elec-
ción entre someterse a una angioplastia o a una derivación
coronaria con injerto para tratar una obstrucción coronaria
Z EVIDENCIA DE QUE EL TRATAMIENTO que produce insuficiencia cardíaca congestiva conlleva el
QUIRÚRGICO ES RENTABLE doble de riesgo de muerte inmediata en el postoperatorio,
pero apenas produce dolor, lo cual puede ser un factor signi-
Ha sido difícil documentar las circunstancias que pueden pre- ficativo en la puntuación de los QALY. En este contexto se
venir estos ingentes costes indirectos de los programas de han identificado varios instrumentos para medir estas varia-
servicios sociales gubernamentales. Ningún programa desti- bles de calidad de vida, que han sido validados para poder
nado a prevenir la obesidad ha demostrado ser eficaz en nin- obtener una puntuación en QALY.22
gún lugar del mundo. Sólo algunos planes aislados de pérdida A pesar de estas limitaciones, las cuatro situaciones bási-
de peso han alcanzado ciertas repercusiones económicas. cas que pueden darse cuando se comparan dos tratamientos
La evaluación más directa de un tratamiento (la deriva- para el mismo problema con un AR son obvias y se destacan
ción gástrica para la obesidad mórbida) se completó en la pro- en la tabla 8-1. Si un tratamiento nuevo cuesta menos que el
vincia de Quebec, en Canadá.28 En un estudio desarrollado a tratamiento habitual actual y produce una mejor calidad de
lo largo de 4 años, usando cifras del gobierno sobre gastos vida (o una prolongación de esta), es obvio que debería adop-
sanitarios, se compararon 1035 obesos mórbidos sometidos a tarse. Por el contrario, cuando un tratamiento nuevo cuesta
derivación gástrica abierta mediante técnica convencional y más que el usado habitualmente y produce una peor calidad
5746 obesos mórbidos que no tuvieron tratamiento quirúrgi- de vida o un acortamiento de la vida, debe dejar de utilizarse.
co en la misma provincia. La población contaba con un 65% Las otras dos situaciones se ven mucho más influenciadas por
de mujeres y la edad media era 46 años; los pacientes tratados el precio. Si un tratamiento nuevo cuesta más que el actual
perdieron una media de 45 kilogramos, lo cual era una media pero produce una mejor calidad de vida, la sociedad debe
del 74% de su exceso de peso. Los pacientes que recibieron estudiar qué cantidad está dispuesta a «pagar» por esta mejo-
tratamiento quirúrgico tuvieron un 28% menos de estancias
hospitalarias (2,5 frente a 3,2), un número significativamente
menor de días de ingreso hospitalario (21,1 frente a 36,6 días Tabla 8-1 EVALUACIÓN DEL COSTE
de ingreso) y menos visitas médicas (9,6 frente a 17,1 visitas), DE UN TRATAMIENTO NUEVO
lo que se tradujo en una reducción significativa de los costes FRENTE A LA AUSENCIA
medios en 4 años en los pacientes tratados quirúrgicamente, DE TRATAMIENTO O AL TRATAMIENTO
con el coste de la cirugía incluido en el total. PREVIO
Otro método para calibrar si un tratamiento es rentable
fue desarrollado por las autoridades sanitarias y estandarizado MAYOR COSTE MENOR COSTE
por una comisión financiada por el Public Health Service de Mejor calidad Demasiado caro El mejor tratamiento
EE. UU. El método tenía como finalidad la consecución de vida (raras veces
de una normativa consensuada. Dos revisiones recientes han (línea de intención se consigue)
de pago)
definido el proceso que se ha desarrollado en las últimas tres Tratamient adecuado
décadas para elaborar análisis de rentabilidad (AR) para tomar
decisiones en sanidad.22-29 Los criterios establecidos por la Peor calidad Elección fácilmente La sociedad ahorra
de vida eliminable dinero a expensas
comisión se publicaron en 1996 en el libro Co-Effectiveness in
del individuo
Health and Medicine.30 Los cuatro resultados básicos de un AR
Capítulo 8 • Implicaciones económicas de la obesidad 61

ra. Por ejemplo, si un tratamiento nuevo para el cáncer cues- ta,34-36 son más costosos para la sociedad, ya que los esfuer-
ta un millón de dólares, pero sólo alarga la vida 1 mes o sólo zos realizados en estos contextos generan pérdidas de peso
alivia el dolor en una medida en virtud de la cual a la mayoría relativamente pequeñas (1,9-5,5 kg) y cambios en los QALY
de la gente no le compensaría ese mes más de vida, dicho poco significativos.29 Aun cuando estos tratamientos causa-
tratamiento sería demasiado costoso y no merecería la pena ban un aumento en los costes con una mejora mínima en la
que reemplazara a un tratamiento estándar, más económico. calidad de vida, Zhang y cols. observaron que los valores de
Sin embargo, es posible que un paciente con cáncer espere su AR estaban dentro de los mismos rangos de rentabilidad
que la sociedad invierta una mayor cantidad de recursos para de muchos tratamientos para enfermedades que cubren
prolongar su vida, en comparación, por ejemplo, con lo que habitualmente los seguros de salud.29 Los autores no enten-
una persona no afectada de cáncer consideraría un precio jus- dían por qué las compañías aseguradoras a menudo se nega-
to por la obtención de ese mismo tiempo de aumento de la ban a pagar los tratamientos para la obesidad, pero sí paga-
esperanza de vida. ban otros tratamientos con el mismo nivel de rentabilidad.
Al usar un AR para estudiar la magnitud de las ventajas Sugirieron que era sólo la falta de investigaciones a largo
asociadas a un tratamiento dado, la cirugía bariátrica pare- plazo (más de los 2 a 3 años en estos estudios) lo que influía
cer resultar un recurso ciertamente barato. El único estudio en las empresas aseguradoras a la hora de rechazar el pago
publicado hasta la fecha que reúne la mayoría de los criterios de tratamientos médicos para la obesidad. Sin embargo,
para un AR válido se realizó en Dinamarca. Incluía 21 pacien- parece altamente improbable que las compañías asegurado-
tes que se sometieron a una operación, la gastroplastia ver- ras cambien su política, a menos que se las fuerce a hacerlo.
tical con banda, que está perdiendo popularidad en favor de Otro método de determinar la importancia de los trata-
otra operación restrictiva, la banda gástrica ajustable.32,33 mientos para la obesidad es preguntar a los pacientes obesos
Zhang y cols. de los Centers for Disease Control and Prevention cuánto estarían dispuestos a pagar por un tratamiento satis-
de EE. UU. reconocieron no obstante el mérito del estudio factorio contra la obesidad. Narbro y Sjostrom recibieron
y lo compararon con los otros dos únicos estudios que apor- respuestas de 3579 pacientes incluidos en el estudio SOS,
taban análisis de rentabilidad fiables sobre el tratamiento de con una edad media de 47 años y un IMC medio de
la obesidad en la bibliografía publicada hasta julio de 2002.29 40 kg/m 2.38 Obtuvieron un amplio espectro de respuestas,
El Diabetes Prevention Program (DPP) era un ensayo clínico que iba desde nada hasta importantes sumas de dinero. La
multicéntrico realizado entre 3234 estadounidenses con un mayoría de la gente estaba dispuesta a pagar el doble de su
IMC de más de 25 kg/m2 y con alteración en la tolerancia a sueldo mensual que, en esta población, era de aproximada-
la glucosa. En él se estudiaba si un programa individualizado mente 3280 dólares en 2000. Las personas con IMC más
de orientación para la modificación conductual, la enseñan- altos y aquellas que tenían una peor percepción de su estado
za de una dieta baja en calorías y grasas, y la actividad física de salud estaban dispuestas a pagar más, y consideraban la
de intensidad moderada (caminar deprisa) durante más de posibilidad de pedir un préstamo para pagar dicho trata-
150 minutos a la semana en un período de 3 años, podrían miento. Los obesos, e incluso los no obesos, ya gastan cien-
mejorar la pérdida de peso e impedir el desarrollo de diabe- tos de dólares al año de su propio dinero en productos die-
tes tipo 2. El grupo de control se sometió a una intervención téticos y tratamientos médicos;39 sin embargo, esta es la
placebo que incluía un manual de estudio, visitas anuales a primera vez que en una población se ha registrado un precio
un orientador y administración de metformina (850 mg dos concreto para el tratamiento médico.
veces al día).43,35 El otro AR estudiaba una intervención de
2 años que comparaba el tratamiento con sibutramina
(120 mg tres veces al día) más una dieta hipocalórica y el Z PREDICCIONES SOBRE LA FUTURA
consistente exclusivamente en dieta hipocalórica.36 FINANCIACIÓN DE TRATAMIENTOS
El AR sobre cirugía bariátrica, elaborado por un equipo PARA LA OBESIDAD
de economistas de la administración, sugirió que la gastro-
plastia vertical con banda mejoraba la calidad de vida y aba- Las compañías de seguros médicos han impedido que la
rataba los costes a lo largo de los 2 años del estudio; fue el mayoría de los grupos pequeños de consumidores (constitui-
mejor de los tratamientos revisados, y tuvo unos resultados dos por menos de algunos miles de personas) interesados en
de un nivel que raramente se alcanza.29 El mecanismo prin- contratar seguros obtenga cobertura para tratamiento qui-
cipal por el cual el tratamiento quirúrgico ahorraba dinero rúrgico en EE. UU.33 Dado que se va acumulando informa-
era el aumento en la productividad. El porcentaje de los ción sobre las ventajas relativas de los tratamientos quirúr-
21 pacientes que trabajaban aumentó desde un 19% (4 pacien- gicos para la obesidad y sobre las consecuencias de la
tes) a un 48% (10 pacientes). Estos resultados eran similares obesidad mórbida, este nivel de discriminación se convertirá
a los publicados por un grupo del Pennsylvania State College en un problema para las compañías aseguradoras médicas y
of Medicine: más del 42% de los 40 pacientes con obesidad las empresas que negocian con ellas. Los legisladores esta-
mórbida que dependían de las prestaciones sociales porque tales, el Tribunal de Apelación y el Tribunal Supremo de
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no conseguían un empleo (n  26), o que estaban discapaci- EE. UU. ya se han mostrado contrarios a las leyes sobre
tados antes de los 65 años de edad (n  14), pudieron conse- seguros que protegen tanto a las compañías aseguradoras
guir un trabajo, ya fuera a tiempo completo (n  9) o a tiem- como a las empresas que las contratan, para que puedan
po parcial (n  8) tras la derivación gástrica, disminuyendo proporcionar «cuidados benéficos» o cuidados «que sal-
así sus niveles de dependencia de la asistencia pública.37 Tres van vidas» según su criterio.40 En febrero de 2003, el
personas discapacitadas volvieron a tener un trabajo a tiem- segundo Tribunal de Apelación dictaminó que los planes
po completo y a cotizar a la seguridad social en lugar de de seguros podrían ser demandados por no ofrecer la
absorber recursos de la misma, lo cual constituye un doble cobertura asistencial requerida. Puede que se tarden años
beneficio desde el punto de vista social. o décadas en determinar lo que significa asistencia «reque-
Los tratamientos de modificación de conductas y los rida» y en establecer en qué medida puede ello afectar a las
tratamientos médicos, con o sin modificación de la conduc- compañías de seguros.
62 Sección II • CONSECUENCIAS

En el estado de Luisiana, la principal compañía asegura- dinero. En lugar de enseñar a los niños los métodos para
dora que proporciona asistencia médica a los funcionarios del conseguir una nutrición adecuada y desarrollar capacidades
estado, la Office of Groups Benefits, consideró que en 2004 ten- físicas que puedan usar para mantenerse sanos a lo largo de
dría que cubrir la cirugía bariátrica. El problema al que se su vida y proporcionarles comidas adecuadas basadas en la
enfrenta la compañía es que más de 1000 de los 240.000 miem- pirámide alimentaria, lo que muchas escuelas aportan no es
bros que reúnen requisitos para someterse a la cirugía bariá- otra cosa que los fundamentos de la obesidad infantil.42 Un
trica contestaron a una encuesta en diciembre de 2002 para informe de 1997 documentó que sólo el 1% de los niños
solicitar el tratamiento quirúrgico. A lo largo de los 10 años estadounidenses mantenían una dieta ajustada a lo estipula-
anteriores no se había podido acceder a este tratamiento.Al do en la pirámide alimentaria, mientras que un 45% de los
determinar cómo conseguir cirujanos cualificados que rea- niños no cumplían ninguna de las recomendaciones.43 Es
lizaran un número tan elevado de intervenciones quirúrgi- más, los niños tomaban dietas en las que al menos el 50% de
cas y cómo organizarlos a la hora de distribuir los gastos las calorías provenían de las grasas (35%) o azúcares (15%)
necesarios para satisfacer a todos los pacientes que querían en forma de refrescos y aperitivos.
operarse, intentando evitar que el plan terminara en ruina Entre 2001 y 2002, en el 60% de los institutos de ense-
financiera, surgieron problemas a los que ahora es necesario ñanza secundaria se vendían refrescos en máquinas expen-
hacer frente. La aseguradora está intentando establecer los dedoras y más de 240 distritos escolares de EE. UU. tenían
requisitos que deberían reunir los cirujanos (número de contratos de exclusividad con compañías de refrescos y se
cirugías bariátricas realizadas por año, tasas de mortalidad y financiaban dependiendo del número de bebidas vendidas y
morbilidad en estos procedimientos, niveles comunes de de la publicidad permitida (anuncios en vestíbulos, porta-
asistencia hospitalaria, etc.) antes de darles la autorización das de los libros, auditorios, gimnasios y pistas de atletismo
para realizar la cirugía bariátrica a sus asegurados. Cómo se del centro).44 Esta publicidad agresiva ha tenido una reac-
harán cumplir estos criterios y en qué medida es legal este ción violenta entre las asociaciones de padres, que han obli-
tipo de restricción, son preguntas que aún quedan sin res- gado a los distritos escolares a acabar con este tipo de con-
puesta. tratos, planteando en ocasiones litigios legales para denunciar
Por otra parte, la atención de los medios de comunica- prácticas publicitarias ilegales por parte de las compañías
ción se ha centrado en el número de niños obesos y en el implicadas.44,45 Asimismo se ha solicitado la convocatoria de
modo en que los centros escolares públicos y su financiación referéndums municipales y estatales para eliminar las máqui-
están contribuyendo al desarrollo «pasivo» de la obesidad nas expendedoras de las escuelas y para exigir comida más
(un término que se inspira en la noción de consumo «pasi- sana en ellas.
vo» de tabaco), debido a los planteamientos publicitarios de La respuesta del consumidor también ha hecho que
los productos alimentarios y al consiguiente consumo algunas grandes compañías alimentarias revalúen sus pro-
de comida y bebida altamente calóricos en las escuelas. En la ductos y actividades. Kraft Foods, Inc., el mayor productor
llamada de atención que el Surgeon General 2 realizó en 2001 de alimentos preparados de EE. UU. ha prometido estudiar
para prevenir y disminuir el sobrepeso y la obesidad, una sus productos (entre ellos las galletas Oreo y los macarrones
parte importante del mensaje se centró en el alarmante con queso Kraft, ambos de gran consumo) e intentar dismi-
aumento de la prevalencia de obesidad entre los niños y en nuir su contenido en grasa y azúcares.46,47 La solución más
las graves repercusiones que ello tendría en los costes sani- sencilla sería reducir el tamaño de las porciones, pero tam-
tarios cuando los niños obesos alcanzasen la edad adulta. bién están estudiando cómo conservar el sabor usando sus-
Un estudio en el que se analizaban los acuerdos en vir- titutivos de la grasa y el azúcar. Igualmente, este fabricante
tud de los cuales escuelas primarias y secundarias se asocian ha prometido retirar la publicidad en los centros escolares y
con compañías distribuidoras de comida y bebida para con- está considerando la eliminación de algunos productos de
seguir nuevas fuentes de ingresos se presentó por primera sus máquinas expendedoras. Los más escépticos argumen-
vez en el libro de la Dra. Marion Nestlé titulado Food tan que esta estrategia tiene su origen en el temor a las posi-
Politics.41 Los cambios en la financiación de las escuelas bles demandas, más que en una política realmente altruis-
públicas han hecho aparecer muchas formas de conseguir ta.46,47 Sea como fuere, este planteamiento es digno de elogio
dinero libre de impuestos para financiar la adquisición de y probablemente forzará a otras grandes corporaciones a
libros, equipos y personal. Nestlé mantiene que negociar seguir su ejemplo.
con las compañías de refrescos (bebidas carbonatadas y edul- Los estamentos públicos y gubernamentales se están
coradas) para obtener financiación a cambio de permitir involucrando en el problema del desarrollo pasivo de la obe-
colocar anuncios y máquinas expendedoras es algo inacepta- sidad infantil en EE. UU. y en otros países desarrollados. En
ble. Es algo parecido a lo que sucede con las empresas que el curso de las sesiones del 107 Congreso de EE. UU., se
facilitan televisores y ordenadores a las escuelas a cambio de presentó en el Senado un proyecto de ley llamado Improved
exponer a los niños a la visualización de anuncios durante Nutrition and Physical Activity Act (IMPACT). El proyecto
varios minutos al día durante las clases. Ambos son mecanis- no contó con el apoyo necesario para adquirir rango de ley
mos que legitiman este tipo de propaganda y convierten a los en 2003, pero su mera presentación es ya un indicio del inte-
niños en fáciles blancos comerciales para inculcarles la fide- rés de ciertos sectores políticos por encontrar formas de pre-
lidad a determinadas marcas desde una edad temprana. venir y tratar la obesidad infantil, algo que no existía apenas
Los administradores de las escuelas a menudo descui- 2 o 3 años antes. La mayor parte de los 280 millones de
dan su responsabilidad en lo que respecta a proporcionar dólares previstos como financiación en el proyecto de ley se
una buena nutrición, delegando en programas subvenciona- asignaba al desarrollo de una campaña mediática orientada
dos de alimentación escolar altamente calórica y de bajo cos- a los jóvenes para prevenir la obesidad, y a explicar los pro-
te, o permitiendo que las cadenas de comida rápida interven- yectos de prevención o tratamiento de la patología a través
gan en la alimentación escolar. Además, muchos distritos de programas patrocinados por la comunidad o por las pro-
escolares con pocos recursos han eliminado o reducido la pias escuelas. Además, cuando la compañía aseguradora
educación física y las actividades deportivas para ahorrar Aetna tuvo que pagar por una demanda interpuesta por
Capítulo 8 • Implicaciones económicas de la obesidad 63

médicos que alegaban prácticas de pago injustas en 2003, se de gimnasio a los empleados. En el conjunto de la encuesta,
creó un fondo para investigación de 300 millones que sólo el aumento oscilaba entre el 1% y el 10% de las empresas (del
podría usarse para tres asuntos relacionados con la salud 10% al 30% de las compañías que proporcionaban cada uno
pública, uno de los cuales era la obesidad infantil. de estos incentivos). No obstante, eran ya numerosas las
Después de años de falta de atención por parte de los empresas específicas, habían empezado a dar muestras de
medios de comunicación, o de hecho, con una actitud desfa- conocimiento de las expectativas de sus empleados al respec-
vorable por parte de dichos medios, 2003 fue el año en que to. Por ejemplo, casi el 50% de las compañías de seguros
la industria televisiva pareció descubrir la obesidad, la obe- proporcionaban a sus empleados programas de pérdida de peso
sidad mórbida, la cirugía bariátrica y la obesidad infantil. en el lugar de trabajo; casi el 55% de las empresas de servicios
Los periódicos y las revistas, en especial las dirigidas al educativos contaban con gimnasio en el lugar de trabajo; y el
público femenino, aumentaron su seguimiento de los pro- 50% de las compañías de alta tecnología subvencionaban las
blemas relacionados con la obesidad en distintos grados de cuotas de gimnasio de sus empleados.50 Algunas empresas
magnitud. Parece, pues, que la respuesta de la sociedad a están analizando sus propios índices de pérdida de días de
esta epidemia está evolucionando.48 trabajo y bajas por discapacidad y están intentando aplicar
El Dr. Kelly Brownell, psicólogo de la Universidad de programas de ejercicio monitorizado y dieta que les permi-
Yale, es un prestigioso científico que investiga sobre la baria- tan, conseguir contratos más favorables con las aseguradoras
tría e intenta dar forma a esta respuesta social, aportando sanitarias.
sugerencias sobre la manera de abordar la epidemia de obe- Un cambio, probablemente más significativo, es que dos
sidad en el libro Food Fight: The Inside Story of the Food recientes publicaciones del ámbito empresarial intentan pre-
Industry, Americaís Obesity Crisis, and What We Can Do about cisar los gastos que generan sus empleados obesos a las
It,49 dirigido al público en general y publicado en agosto de empresas (IMC  30 kg/m 2) usando una serie de técnicas
2003. En la obra se tratan muchos de los temas planteados en desarrolladas por Colditz8,13 (en las que los datos de fuentes
este texto, haciendo hincapié en el hecho de que las compa- secundarias se utilizan para estimar los costes).51,52 En una
ñías de comida rápida, refrescos, golosinas y cereales azuca- publicación de Policy Analysis, Inc., los costes empresariales
rados han creado un «ambiente de comida tóxico» para los derivados de las bajas por enfermedad, así como de seguros
niños por medio de 10.000 anuncios al año sobre comida que de vida y discapacidad de empleados obesos, se estimaron en
como media ve un niño en programas televisivos infantiles. 2400 millones, 1800 millones y 800 millones de dólares, res-
El autor propone que en EE. UU. se limite este tipo de pectivamente.50 La otra publicación es de los Centers for
publicidad, de modo similar al que por ley está establecido Disease Control and Prevention y en ella participa uno de los
en Bélgica, Grecia, Noruega y Suecia. El objetivo es impedir coautores del AR sobre los tratamientos para la obesidad.29
que los niños sean inducidos a preferir determinados pro- En ella se usaron datos del Medical Expenditure Panel Survey
ductos y a reconocer sus marcas cuando van a hacer la com- de 1998 y de las National Health Interview Surveys de 1996 y
pra con sus padres. El Dr Brownell también es un firme 1997, para calcular que el gasto total de salud destinado al
defensor de gravar con impuestos los alimentos que tienen sobrepeso (IMC  25 kg/m2) y a la obesidad (IMC  30 kg/m2)
escaso o nulo valor nutricional y que contienen abundantes fue de 92.600millones de dólares (en su valor de 2002).51 Los
azúcares, grasas o ambos.49 Sus singulares citas, su determi- autores de este informe dividieron estos costes entre los
nación para luchar contra la industria alimentaria y su proxi- seguros privados y los programas Medicare y Medicaid.52
midad a los medios de difusión de la ciudad de Nueva York Las suposiciones usadas en estos estudios tuvieron que ser
han servido para que este investigador se erija en portavoz confirmadas con datos retrospectivos, pero, en cualquier
de los expertos en obesidad y de las autoridades sanitarias, caso, los datos resultan ciertamente inquietantes para el
que trabajan para frenar el continuo avance de la prevalencia mundo empresarial y el CMMS.
de obesidad infantil. El coste inherente a cualquier respuesta que se dé al pro-
En la comunidad empresarial parece estarse gestando blema será un elemento esencial para la evolución real del
un claro movimiento a favor del reconocimiento de las con- mismo. La prevención de la obesidad es, obviamente, una de
secuencias económicas de la obesidad. En junio de 2003, las las metas a largo plazo más importantes a nivel social. Sin
175 compañías del Washington Business Group on Health (que embargo, hasta que se desarrollen estrategias preventivas que
facilitan cobertura sanitaria a más de 40 millones de ciuda- tengan éxito, tendremos que evaluar si es más barato tratar la
danos estadounidenses) crearon un nuevo grupo de exper- obesidad o las numerosas enfermedades asociadas a ella. Hasta
tos, el Institute on the Costs and Health Effects of Obesity.50 Hay la fecha, solamente la cirugía bariátrica ha demostrado tratar
que destacar que 19 de las empresas que aparecían en el cualquier forma de obesidad de modo verdaderamente renta-
Fortune 500, incluyendo a Ford, IBM, Pepsi, Aetna y ble. Los dos primeros estudios fiables que analizan los gastos
Honeywell, se habían unido a la junta directiva de este esta- que supone sugieren que los procedimientos bariátricos dis-
mento. El instituto recomienda a las compañías las estrate- minuyen los costes del tratamiento de la obesidad mórbida a
gias a seguir para que sus empleados aumenten el tiempo de corto plazo (5 años o menos), a la vez que mejoran la calidad
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ejercicio físico, escojan opciones alimentarias más nutriti- de vida.28,32 Obviamente, son necesarios nuevos estudios a lar-
vas, accedan a programas de ejercicio en el propio centro de go plazo que demuestren las consecuencias económicas inhe-
trabajo y mejoren el contenido nutricional de la comida que rentes al tratamiento de la obesidad.
se ofrece en las cafeterías de las empresas y las máquinas
expendedoras.
La encuesta de 2003 realizada por la Society for Human Z BIBLIOGRAFÍA
Resource Management a varios cientos de directores de recur-
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64 Sección II • CONSECUENCIAS

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9
Tratamiento dietético de la obesidad
Jeanne D. Blankenship, M.S., R.D., y Bruce M. Wolfe, M.D.

La eficacia de la pérdida de peso, sostenida a largo plazo mentos al mismo tiempo que se maximiza la actividad física,
continúa sin ser precisada con exactitud por los investigado- creando así un balance energético negativo. Este concepto
res y los médicos. La duda razonable sobre esa eficacia ha es simple en teoría, aunque menos en práctica. La idea de
llevado a muchos a cuestionarse la provisión del servicio de que la distribución de los macronutrientes (como la restric-
tratamiento del peso en un contexto general de terapéutica ción de los carbohidratos del 10% al 15% de las calorías)
clínica. Es importante, sin embargo, distinguir entre la ver- promueve la pérdida de peso más que la ingesta de energía
dadera práctica basada en pruebas y los regímenes no proba- merece un análisis específico y es discutida más adelante.
dos, difundidos a nivel popular o derivados de estudios clí-
nicos mal diseñados o mal interpretados. La complejidad del
tratamiento del peso hace que la evaluación de las interven- Z TRATAMIENTO DIETÉTICO
ciones sea difícil, a pesar del gran número de estudios, ya que
pocos han sido aleatorizados y la mayoría presentan múlti- La ingesta de energía ha sido descrita por algunos como el
ples factores de confusión, que hacen que las interpretacio- componente más importante en el tratamiento de la obesi-
nes sean poco definidas. Este capítulo revisa la investigación dad.2 Irónicamente, un estudio demostró que las dos terce-
actual referida al tratamiento dietético de la obesidad y a los ras partes de los sujetos que estaban intentando perder peso
resultados esperados de él. expresaron su falta de intención de restringir la ingesta de
alimentos y de energía, y principalmente se centraban en
reducir la grasa, los azúcares, los tentempiés entre horas y la
Z BALANCE ENERGÉTICO cantidad de alimento en cada comida.3 El cumplimiento con
las dietas prescritas puede ser complicado. Por tanto, es
En el contexto más simple, el aumento de peso y la probable imperativa la individualización del programa dietético para
futura obesidad son el resultado de un balance energético su ajuste a cada estilo de vida específico. Además, el éxito del
neto positivo. Incluso cambios mínimos en la ingesta de tratamiento depende en gran parte de la adecuación del nivel
energía y en la actividad física pueden tener un impacto de información y de los objetivos del tratamiento al nivel de
notable en la prevalencia de la obesidad. Hill y cols. indica- cambio al que se haya asignado a cada individuo. Por último,
ron que una reducción neta de 100 kcal/día en el consumo de a la hora de individualizar los planes de tratamiento, el uso
energía detendría el aumento de peso en la población estado- de planes de comida estructurados, incluyendo los alimentos
unidense.1 A pesar de que este pequeño cambio teóricamen- envasados y los sustitutivos alimentarios, deben ser conside-
te prevendría un aumento de peso adicional, no se ha proba- rados junto con la variación en la distribución de los macro-
do que facilite la pérdida de peso a largo plazo o la reducción nutrientes y la densidad de energía.
de la comorbilidad. Extrapolando datos de la National Health
and Nutrition Examination Survey y asumiendo una tasa de Contenido energético
aumento de peso lineal, Hill propuso que un adulto medio
aumenta aproximadamente 1 kg de peso al año al exceder la Los requerimientos de energía se pueden estimar utilizando
ingesta de energía los requerimientos de la misma. Si este el ecuaciones predictivas de la tasa metabólica de reposo
aumento de peso es habitual, también deberían serlo su eva- (TMR), tales como la fórmula de Harris Benedict o la fór-
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luación y, cuando fuera posible, su detención mediante ajus- mula de Mifflin-St. Jeor. La ecuación de Harris Benedict
te de la ecuación energética. tiende a sobreestimar la TMR tanto en varones como en
Los requerimientos de energía se ven influidos por fac- mujeres. En sujetos obesos, ajustando por peso, la ecuación
tores controlables y no controlables. Aquellos que se pueden de Harris Benedict subestima la TMR y esta subestima-
controlar incluyen la actividad física y la ingesta. Los segun- ción es más importante a medida que se utilizan valores
dos incluyen la genética (sexo, hábitos), la edad y la presencia mayores de peso corporal. Estudios recientes que comparan
de ciertas enfermedades. En última instancia, la pérdida de la validez de estas ecuaciones con los valores derivados del
peso ocurre cuando la ingesta de energía es menor que la uso de la calorimetría indirecta sugieren que la ecuación de
energía gastada. Un mayor déficit de energía produce una Mifflin-St. Jeor representa de forma más precisa los reque-
mayor pérdida de peso. De este modo, el objetivo principal rimientos de energía de los sujetos obesos.4 Las ecuaciones
del tratamiento dietético es el control de la ingesta de ali- utilizadas habitualmente para estimar los requerimientos de
67
68 Sección III • TRATAMIENTO NO QUIRÚRGICO

energía en función del sexo, la edad, la estatura y el peso


están recogidas en el cuadro 9-1. CUADRO 9-1 • ECUACIONES PREDICTIVAS
Se puede realizar una medida alternativa de las necesi- DEL GASTO ENERGÉTICO
dades de energía a través del uso del dispositivo MedGem
aprobado por la Food and Drug Administration. Este disposi- 1. Harris Benedict (gasto energético basal, GEB)
tivo médico no invasivo y de buen rendimiento mide el con- Mujeres
sumo de oxígeno y la tasa metabólica con más precisión que GEB ⫽ 65,5 ⫹ 9,56 (peso en kg) ⫹ 1,85 (altura en cm) ⫺ 4,68
las ecuaciones predictivas.5 (edad)

DIETAS BAJAS EN CALORÍAS Varones


GEB ⫽ 66,5 ⫹ 13,75 (peso en kg) ⫹ 5 (altura en cm) ⫺ 6,78
En los obesos que presentan un IMC de 35 kg/m2, una res- (edad)
tricción de energía de 500 a 1000 calorías/día provocará una
pérdida de peso semanal de ½ a 1 kg, siempre y cuando cum- GEB × factor de actividad (FA) ⫽ (gasto energético total, GET)
plan con la dieta. Con el fin de establecer la ingesta energéti- Factores de actividad:
ca habitual de un sujeto, un dietista puede evaluar registros de 1.2: encamado
24 horas o registros periódicos sobre la dieta realizados por el 1.3: ambulatorio
propio individuo. Dado que la ingesta real de cada persona 1.5: persona con actividad normal
está con frecuencia subestimada de un 30% a un 50% y que la 2.0: persona extremadamente activa
actividad diaria suele tender a la sobreestimación, el uso de Si IMC ⬍40, utilizar el peso real
dietas preestablecidas de restricción energética es útil hasta Si IMC ⬎40, utilizar el peso corporal ideal
que el individuo esté familiarizado con lectura de las etiquetas 2. Mifflin-St. Jeor (gasto energético en reposo, GER)
de los alimentos, la medición de las porciones y en el registro Mujeres:
y la planificación de la ingesta.6 En la práctica, a los individuos GER ⫽ 10 (peso en kg) ⫹ 6,25 (altura en cm) ⫺ 5 (edad) ⫺ 161
obesos sin intentos previos fallidos de pérdida de peso, se les Varones:
debe prescribir una restricción calórica diaria de 1000 a GER ⫽ 10 (peso en kg) ⫹ 6,25 (altura en cm) ⫺ 5 (edad) ⫹ 5
1600 calorías. La guía de la National Heart, Lung and Blood
GER ⫻ factor de actividad (FA) ⫽ (gasto energético total, GET)
Institute/North American Association for the Study of Obesity
recomienda de 1000 a 1200 kcal/día para la mayoría de las 3. Panel de macronutrientes del Institute of Medicine (GET)
mujeres con sobrepeso y de 1200 a 1600 kcal/día para los varo- Varones ⬎19 años:
nes con sobrepeso.7 A las mujeres que no realizan ejercicio GET ⫽ 864⫺9,72 ⫻ edad (a) ⫹ AF ⫻ [14,2 ⫻ peso (kg)
físico con regularidad o a aquellas con un peso superior a los ⫹ 503 ⫻ altura (m)]
75 kg se les debe prescribir una restricción energética mayor. Mujeres ⱖ19 años:
El adecuado mantenimiento de una dieta baja en calo- GET ⫽ 387−7,31 ⫻ edad (a) ⫹ AF ⫻ [10,9 ⫻ peso (kg)
rías (DBC) produce una pérdida aproximada del 8% del peso ⫹ 660,7 ⫻ altura (m)]
corporal después de entre 4 y 6 meses de tratamiento.7 Con AF ⫽ cocientes de actividad física
Durante las primeras 2 semanas de dieta se produce el mayor Sedentario (⬎1,0 a ⬍1,4)
cambio de peso semanal. En este tiempo, el paciente pierde Baja actividad (⬎1,4 a ⬍1,6)
agua debido a la disminución del consumo de sodio y a la Activo (⬎1,6 a ⬍1,9)
movilización del glucógeno para la glucogenia durante el Muy activo (⬎1,9 a ⬍2,5)
déficit de energía inducido. Es deseable una pérdida de entre
½ y 1 kg por semana o del 1% del peso inicial, con el fin de Ajuste por edad: en mujeres, ⫾7, en varones ⫾10 para cada año por
promover la pérdida de grasa, más que de tejido magro, o la encima o por debajo de los 30 años de edad
pérdida adicional de agua. El nivel calórico de la dieta
se debe incrementar con aumentos de 200 cal/día hasta
que se alcance una pérdida sostenida de ½ a 1 kg o del 1% to plazo de más alcance que las DBC. En la bibliografía se
por semana, para así favorecer la pérdida de tejido adiposo.7 han documentado pérdidas de peso del 15% al 25% en perío-
La monitorización frecuente del peso perdido y el cumpli- dos de entre 8 y 16 semanas;3 sin embargo, el mantenimien-
miento adecuado son esenciales. Los ajustes de la restricción to a largo plazo de las pérdidas con las DMBC no fue más
energética se deben realizar siguiendo una pauta incremen- efectivo que el resultante con las DBC tras un año de trata-
tal para asegurar que la pérdida de peso continúa. miento.8-10 En los casos en los que la pérdida rápida de peso
está clínicamente indicada, el coste de la administración de
Dietas muy bajas en calorías una DMBC (3000 dólares para un programa de 6 meses)
puede merecer la pena. Por ejemplo, la pérdida de peso
Las dietas muy bajas en calorías (DMBC) son típicamente requerida para disminuir el riesgo quirúrgico asociado al
recomendadas en individuos con índices de masa corporal trasplante de un órgano o a la cirugía ortopédica merece la
superiores a 30 kg/m2 que hayan fracasado en la pérdida de posible consideración de una posible DMBC. Sin embargo,
peso siguiendo una DBC. Las DMBC aportan de 200 a para necesidades de pérdida de peso menos críticas, el coste
800 kcal/día, con un número sustancial de calorías proce- de su aplicación tiene que ser evaluado, en razón de la escasa
dentes de proteínas, con el fin de preservar la masa corpo- probabilidad de mantener en el largo plazo el peso perdido.
ral magra. Las recomendaciones de proteínas son de 70 a La más común de las DMBC consiste en fórmulas de
100 g/día. Las DMBC requieren supervisión médica, dado calidad médica que contienen las cantidades adecuadas
el aumento del riesgo de complicaciones, incluidos desequi- de proteínas, carbohidratos y grasas, además de los micronu-
librios hidroelectrolíticos, deshidratación, cálculos biliares trientes apropiados. Además de aportar de 70 a 90 g/día de
y otras posibles alteraciones. A pesar de que haya un mayor proteínas con alto valor biológico, la fórmula contiene los
riesgo clínico, las DMBC producen cambios del peso a cor- carbohidratos suficientes para prevenir la cetosis. Entre el
Capítulo 9 • Tratamiento dietético de la obesidad 69

50% y el 60% de las calorías suelen derivar de los carbohi- controlado, a largo plazo y realizado con el patrocinio de
dratos en forma de maltodextrinas y sacarosa. La mayoría empresas de alimentación, examinó la influencia de los sus-
contienen muy poca cantidad de fibra y son edulcoradas con titutivos alimentarios en la pérdida de peso y su manteni-
aspartamo, sucralosa o sacarina. Habitualmente, las fórmu- miento, con la sustitución de una única comida al día duran-
las contienen suficiente grasa para prevenir un déficit de te un período de 4 años. La pérdida de peso inicial en los
ácidos grasos esenciales y para alcanzar las cantidades reco- individuos que utilizaban el sustitutivo fue mayor que en
mendadas de vitaminas y minerales, a excepción del calcio. aquellos que seguían una dieta isocalórica convencional, y el
La administración de suplementos de vitaminas y minerales 75% de aquellos que usaron el sustitutivo mantuvieron con
debe ser revisada y evaluada a lo largo de una DMBC.11 éxito la pérdida de peso tras 4 años.16
Las DMBC se suelen administrar durante un período de
12 a 16 semanas, tiempo tras el cual debe reincorporarse con Composición de macronutrientes
precaución otra dieta. Las calorías se incrementan gradualmen-
te de 100 a 150 kcal/día, hasta alcanzar 1200 a 1500 kcal/día. Probablemente el debate que mayor atención ha suscitado en
Este proceso puede durar de 4 a 6 semanas. Es necesaria una el ámbito de la pérdida de peso es el referido a la composición
estrecha monitorización por parte del médico y se debe pres- de macronutrientes de la dieta. Revisiones recientes de la
tar especial atención a la misma durante las fases iniciales, bibliografía han concluido que la razón principal por la cual
hasta que el objetivo de 1000 a 1200 kcal/día se haya alcanza- los individuos pierden peso es la disminución de la ingesta de
do. Atkinson y cols. estudiaron la combinación de una DMBC energía, y no la distribución de los macronutrientes.17
y del cambio de hábitos en el tratamiento de la obesidad.12 Freedman y cols. revisaron más de 200 estudios referidos a
Observaron que, a pesar de que la pérdida de peso fue similar dietas llevadas a cabo en los últimos 60 años y apreciaron que
en dos grupos que siguieron DMBC y terapia conductual, el la disminución de calorías produce pérdida de peso indepen-
momento de esta intervención (bien antes o simultáneamente) dientemente de la distribución de los macronutrientes.18 La
podía influir en el mantenimiento del peso a largo plazo. revisión permitió deducir que los planes dietéticos prescritos
con mayor frecuencia equivalían a una ingesta de 1200 a
Dietas estructuradas frente a autoseleccionadas 1600 calorías. Este nivel de energía, tal y como describimos
anteriormente, tendría como resultado un déficit de energía y
Wing y cols. asignaron aleatoriamente a un conjunto de muje- una subsecuente pérdida de peso en la mayoría de los indivi-
res a uno de los cuatro grupos de pérdida de peso, con niveles duos con sobrepeso y obesos. La tabla 9-1 recoge tres clases
variables de estructuración de sus dietas, y observaron que de composiciones de macronutrientes en la dieta.
esta inducía una mayor pérdida que la dietas autoselecciona- Los datos del National Weight Control Registry (NWCR),
das.13 El estudio encontró que no había diferencias entre la referidos a individuos que han mantenido una pérdida de
pérdida de peso de los grupos estructurados que recibieron peso de 15 kg o más durante más de 1 año, indica que los
terapia conductual y prescripción de los menús, y aquellos individuos pierden peso siguiendo diversos programas de
con terapia conductual y a los cuales les fueron entregados modificación dietética, pero que siguen un programa similar
los alimentos prescritos. Sin embargo, los grupos estructura- para mantener el peso perdido. El mantenimiento del peso
dos perdieron significativamente más peso al cabo de 6 meses perdido se describe más adelante, en el capítulo 11.
que aquellos que recibieron terapia conductual y que seleccio- Algunos autores de dietas de uso generalizado han pro-
naron sus comidas ellos mismos. Los hallazgos de este estudio puesto la hipótesis de que es posible obtener resultados
y los de Jeffrey y cols.14 sugieren que un menú detallado puede metabólicos satisfactorios siguiendo una dieta alta en proteí-
aportar una estructura adecuada para promover el cumpli- nas y baja en carbohidratos, y que la pérdida de peso sería
miento del tratamiento y facilita la pérdida de peso. alcanzable sin considerar la energía ingerida. A pesar de que
Heymsfield y cols. compararon seis estudios de DBC existen numerosos estudios que intentan evaluar el impacto
que consistían en un plan de reemplazo parcial de las comi- de la manipulación de los macronutrientes en la dieta, el
das. Constataron que había una pérdida de peso significati- planteamiento de dicha manipulación siempre ha sido esca-
vamente superior en los sujetos sometidos al reemplazo de samente planificado y poco coherente y los resultados del
comidas parcial (del 7% al 8% de pérdida) que en aquellos mismo no pueden ser aplicados de forma generalizada. El
que siguieron una dieta de reducción calórica convencional uso de dietas altas en proteínas y bajas en carbohidratos ha
(del 3% al 7% de pérdida).15 Un ensayo clínico aleatorio, sido muy conocido en sus diferentes grados, desde que fuera

Tabla 9-1 TRES CLASES DE DIETAS Y SU COMPOSICIÓN EN MACRONUTRIENTES

TIPO DISTRIBUCIÓN EJEMPLO COMENTARIO


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Dieta baja en carbohidratos ⬍20% de energía proveniente • Dieta Atkins


y alta en grasas de carbohidratos o contenido total ⬍100g • Protein Power
Dieta muy baja en grasas ⬍10% del total de energía provenientes • Dean Ornish’s Originariamente utilizada para la
y baja en carbohidratos de las grasas y ⬎55% de los carbohidratos Reversing Heart Disease enfermedad cardíaca; es rica en
Program carbohidratos complejos y fibra
• The Pritikin Program y pobre en densidad energética.
Dieta moderada en grasas 20%-30% de la energía total proveniente • Weight Watchers Una dieta típicamente americana
y alta en carbohidratos de las grasas y ⬎55% de los carbohidratos • Jenny Craig contiene del 35% al 40% de la
• The American energía de las grasas.
Heart Association’s
Shape-Up America
Program
70 Sección III • TRATAMIENTO NO QUIRÚRGICO

descrito por primera vez por Banting en 1863.19 Sus defen- Z ACTIVIDAD FÍSICA
sores insisten en que estas dietas promueven el metabolismo
del tejido adiposo en ausencia de carbohidratos y que la pér- La creencia popular de que el aumento del gasto energético
dida de peso se produce de forma rápida.20 No se han publi- produce pérdida de peso no ha sido probada por la bibliogra-
cado estudios científicos que confirmen esta hipótesis. fía médica. Sin embargo, se piensa que la actividad física
Bravata y cols. llevaron a cabo un revisión sistemática de juega un papel crucial en el mantenimiento de la pérdida de
94 estudios sobre intervenciones dietéticas publicados entre peso. Los datos derivados del NWCR sugieren que en indi-
1966 y 2003, con el fin de evaluar la relación entre las dietas viduos que han perdido peso satisfactoriamente, la actividad
bajas en carbohidratos y la obtención de resultados específicos, física es el principal factor implicado en el éxito de la pérdida
incluidos los marcadores del riesgo cardiovascular y el peso.21 a largo plazo.24 En individuos con sobrepeso y obesos seden-
Los autores llegaron a la conclusión de que, en estos estudios, tarios, la limitación para el ejercicio físico en etapas tempra-
la pérdida de peso estaba asociada principalmente a una dismi- nas estriba en el hecho de que la intensidad requerida para
nución general de la ingesta de energía y a la duración del facilitar un gasto calórico significativo es prácticamente
período durante el cual el déficit calórico se había impuesto. imposible de alcanzar. La cuestión de la cantidad de ejercicio
No encontraron que la reducción de la ingesta de carbohidra- físico adecuada a recomendar en relación a la pérdida de
tos fuera responsable por sí misma de la pérdida de peso. peso es compleja. Tres estudios, de Klem,25 Schoeller,26 y
Dos estudios recientes con asignación aleatoria revelaron Jakicic27 y sus respectivos colaboradores, sugieren de forma
que las dietas con niveles muy bajos de carbohidratos no son colectiva que el gasto energético de 2200 a 2800 kcal a la
dignas de atención. Un estudio multicéntrico de 1 año de semana se asocia a una mejora del mantenimiento del peso
duración, llevado a cabo por Foster y cols., observó que los perdido. A pesar del acuerdo entre los resultados de estos
sujetos que seguían dietas bajas en carbohidratos presentaban estudios, ninguno evaluó prospectivamente la eficacia de la
una pérdida de peso significativamente mayor que aquellos prescripción de esta cantidad de actividad física en la pérdida
con una dieta baja en grasa a los 6 meses, pero no al año.22 La de peso a largo plazo. Una revisión de gran cantidad de
dieta baja en carbohidratos se asoció a una mayor mejoría de bibliografía que comparaba la pérdida de peso a corto plazo
alguno de factores de riesgo de enfermedad coronaria. Se des- por restricción dietética con y sin ejercicio, no apreció dife-
conoce si la disminución del riesgo era atribuible al tipo de rencias significativas entre los grupos en la pérdida de peso
grasas de la dieta consumida por el grupo con dieta baja en total. Sólo los metanálisis revelan el hecho de que la activi-
carbohidratos (monoinsaturadas, poliinsaturadas o saturadas). dad física adicional produce en realidad una pérdida de gra-
Dado que el estudio no incluyó datos sobre ingesta, la ingesta sa significativamente mayor, de entorno a 1 kg más, aunque
real de carbohidratos de los sujetos incluidos no fue medida. las diferencias de peso son pequeñas o insignificantes.28,29
Así, a pesar de que los individuos podían haber sido asignados
al grupo con una dieta baja en carbohidratos, se desconoce si
realmente consumieron esta dieta. Además el estudio se vio Z RESULTADOS A LARGO PLAZO
limitado por su tasa de pérdida de pacientes, un tamaño mues- DEL TRATAMIENTO MÉDICO
tral pequeño y una distribución por sexos sesgada.
Un estudio de Samaha e Iqbal comparó una dieta baja La pérdida de peso a corto plazo asociada a tratamiento far-
en carbohidratos con una dieta baja en grasas en 79 sujetos macológico, dieta, cambio de hábitos y ejercicio, llevados a
asignados aleatoriamente.23 El grupo con dieta baja en car- cabo como intervenciones únicas o combinadas, ha sido obje-
bohidratos perdió significativamente más peso en los prime- to de incontables estudios y documentos. Prácticamente todos
ros 6 meses; sin embargo, los autores concluyeron que la los estudios demuestran que al menos se consigue perder cier-
diferencia era atribuible a una mayor reducción de la ingesta to peso, en comparación con los controles no tratados. Aunque
energética en comparación con el grupo con una dieta baja infrecuentes, se dan casos de pacientes obesos que pierden
en grasas, más que a la distribución de los macronutrientes. hasta 50 kg o más. Pocos estudios han aportado datos signifi-
Una consideración importante de la revisión de este estudio cativos del seguimiento longitudinal a largo plazo. En los últi-
es la ingesta real de carbohidratos por parte de los partici- mos años, sin embargo, se han publicado varios ensayos con
pantes. Extrapolando de los datos aportados, el grupo con seguimiento de hasta 1 año y otros pocos de hasta 5 años.
dieta baja en carbohidratos tuvo una ingesta media de 163 g Un estudio clásico de definición del problema de la re-
de carbohidratos. Esta cantidad supera en un 20% el nivel currencia a largo plazo de la obesidad tras una reducción
mínimo de 135 g/día recomendado para el mantenimiento de exitosa de peso fue publicado por Drenick y Johnson en
una actividad cerebral normal por la American Diabetes 1978.30 Un total de 207 pacientes con obesidad mórbida fue-
Association y por otras instituciones. El nivel de ingesta en este ron hospitalizados para reducción de peso por ayuno pro-
grupo es acorde con los requerimientos diarios de 175 g/día; longado y subsiguiente semiayuno. En tales circunstancias,
así pues, nos debemos preguntar si es correcto designar a la prácticamente todos los pacientes consiguieron perder peso.
dieta de este grupo como baja en carbohidratos. Tras esta pérdida, 121 de ellos fueron seguidos durante una
Dado que los individuos que siguen programas dietéticos media de 7,3 años. El porcentaje de pacientes que permane-
bajos en carbohidratos alcanzan pérdidas de peso significati- cieron adscritos al programa cayó gradualmente en los pri-
vas, el planteamiento no puede ser ignorado como método de meros 5 años, de modo que a los 5 años de seguimiento se
disminución de la ingesta energética. Se puede dar un mayor detectó obesidad en más del 90%. Los autores concluyeron
grado de saciedad siguiendo dietas que promuevan la ingesta que, a pesar de que se puede conseguir una pérdida de peso
de unos niveles mayores de proteínas y de grasas. Además, tal importante en un ambiente supervisado con ayuno seguido
y como describen Samaha e Iqbal, la sencillez y lo innovador de semiayuno, tal intervención pocas veces está justificada,
de esta dieta hacen que sea popular entre la población.23 Son ya que la recurrencia de la obesidad es casi constante.
necesarios estudios adicionales del estado nutricional a largo Revisiones y metanálisis más recientes de resultados
plazo y del mantenimiento de la pérdida de peso en aquellos de pérdida de peso a largo plazo confirman los hallazgos de
individuos que siguen este tipo de dietas. Drenick y Jonson.30 A pesar de que se puede perder peso
Capítulo 9 • Tratamiento dietético de la obesidad 71

en el corto plazo, es raro el mantenimiento de esta pérdida a cierta cantidad de peso perdida, aunque haya sido transitoria
largo plazo. Una observación recurrente es que, sea cual sea en el pasado; la demostración del conocimiento por parte del
la intervención (dieta, farmacoterapia, modificación de hábi- paciente de los principios nutricionales, y la participación
tos o ejercicio), cuando cesa la participación activa del activa en un programa de ejercicio. En este momento no
paciente, se recupera el peso perdido. Así, para que cualquier existen datos definitivos que demuestren la eficacia a largo
tipo de intervención, incluida la farmacoterapia, sea efectiva, plazo de estas medidas, aunque es razonable admitir la com-
se requiere una intervención activa y permanente. El hecho prensión clara de los principios nutricionales por parte del
de que esta participación permanente no sea factible ni prác- paciente y que este pueda alcanzar un resultado quirúrgico
tica, es la principal razón por la cual estas intervenciones satisfactorio. Los pacientes que solicitan la cirugía son, por
fracasan.31-35 En estos ensayos es frecuente la observación de definición, un subgrupo de población gravemente obesa, ya
una característica compartida, aunque no uniforme, en que se ha determinado que en ellos no están justificados
aquellos pocos pacientes que consiguen mantener a largo otros tratamientos médicos y que necesitan una interven-
plazo la pérdida de peso, que es la participación activa y con- ción quirúrgica para conseguir una pérdida de peso sosteni-
tinuada en un programa de ejercicios vigoroso. Así, a pesar da. La gran mayoría de estos pacientes han conseguido una
de que el ejercicio físico por sí solo ha arrojado resultados pérdida de peso transitoria en muchas ocasiones antes de
decepcionantes como modalidad principal de pérdida de solicitar una consulta quirúrgica. Los autores creen que no
peso, parece ser un componente esencial en el mantenimien- es útil pedir a los pacientes que hagan más dieta o que parti-
to del peso perdido en aquellos pacientes que cumplieron cipen en otros componentes del programa de pérdida de
con una restricción dietética prolongada. 24 Esta población peso antes de la cirugía si están convencidos de que, en su
está documentada en un registro nacional electrónico en red caso, el tratamiento médico ha fracasado.
establecido por Wing y Hill y cols.1 El tratamiento médico en los pacientes con obesidad
La población de pacientes más ampliamente estudiada a lo mórbida es ciertamente un fracaso para el conjunto de la
largo de un período de varios años es la del ensayo conocido población, y es poco probable que alcance resultados satis-
por su transcripción inglesa Swedish Obese Subjects. En él, los factorios en pacientes que honestamente piensan que han
pacientes intervenidos quirúrgicamente por obesidad mórbida agotado todos sus recursos para cumplir este tratamiento.
fueron combinados con pacientes de una base de datos nacio- Una excepción a ello podría ser el paciente con obesidad
nal que no fueron sometidos a cirugía. La pérdida de peso tras muy grave y con patologías comórbidas, para el que el riesgo
8 años fue de 20 más o menos 16 kg (16,5%) en el grupo some- quirúrgico podría ser excesivo. Los pacientes con insuficien-
tido a cirugía, mientras que los controles ganaron 0,7 más o cia cardíaca y anasarca son ejemplos posibles. Se ha abogado
menos 12 kg.36 Los controles mostraron una pérdida de peso por la pérdida de peso rutinaria y obligatoria previa a la
inicial modesta y prevaleció un aumento leve a los 8 años. intervención para todos los candidatos a cirugía. Sin embar-
go, este planteamiento no se ve refrendado en la bibliografía
publicada al respecto. De hecho, un retraso de la interven-
Z IMPLICACIONES PARA LA CIRUGÍA ción de un año o más puede ser perjudicial dada la exposición
BARIÁTRICA continuada del paciente a los efectos perniciosos de la obesi-
dad grave.
Los datos epidemiológicos han definido a la obesidad como
el principal factor de riesgo de mortalidad prematura37 y de
desarrollo de ciertas enfermedades, incluidos cáncer, diabe- Z RESUMEN
tes mellitus y otras muchas, tal y como se indica en otros
capítulos de este volumen. La pérdida de peso efectiva está El tratamiento satisfactorio de la obesidad a través de inter-
pues claramente indicada. La intervención con cirugía bariá- venciones no quirúrgicas sigue siendo una cuestión comple-
trica, ha sido con frecuencia criticada en el pasado y sigue ja para investigadores y clínicos. La progresión y la expan-
siendo considerada en ciertos ámbitos como intervención sión de investigaciones sobre la obesidad son necesarias para
extrema de riesgo casi inaceptable, dada la existencia de tra- identificar las estrategias dietéticas y de comportamiento
tamientos alternativos dieta, farmacoterapia, ejercicio, cam- óptimas como terapias alternativas o coadyuvantes de la
bio de hábitos y combinaciones de estas pautas, ya expuestas intervención quirúrgica. Los patrones de restricción de
anteriormente. Es el fracaso del tratamiento médico y de sus la ingesta de energía, junto con la actividad física y el cambio
modificaciones, en conseguir una pérdida de peso perdura- de hábitos producen pérdidas de peso significativas en algu-
ble en el tiempo en la población obesa en general y en casos nos individuos. Los aspectos no invasivos del tratamiento
individuales, lo que justifica la intervención quirúrgica, a dietético merecen ser considerados en todos los afectados de
pesar de las complicaciones postoperatorias potenciales. Al sobrepeso que se hayan comprometido a introducir cambios
igual que en muchas otras situaciones en las que se lleva a en su estilo de vida. Aunque la probabilidad de que el peso se
cabo una cirugía, las técnicas quirúrgicas representan una mantenga tras una pérdida significativa siempre es cuestio-
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solución práctica a una enfermedad que amenaza la supervi- nable, los datos del NWCR sugieren que ciertas caracterís-
vencia. ticas del estilo de vida y otros comportamientos se pueden
La cuestión de las especificaciones que deben cumplirse asociar al éxito a largo plazo y deben, por tanto, ser promo-
antes de que un paciente sea candidato a cirugía, confirman- vidos y monitorizados.
do que se han llevado a cabo y han fracasado- todas las inter-
venciones relacionadas con el tratamiento médico, es un
problema sobre el cual existe escaso acuerdo. Son numero- Z BIBLIOGRAFÍA
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10
Tratamiento farmacológico de la obesidad
George A. Bray, M.D.

El tratamiento quirúrgico de la obesidad está indicado en nérgica. Fármacos tales como la fentermina, la anfepramo-
individuos con un exceso de peso significativo, normalmen- na, la fenfluramina, la sibutramina, y el antidepresivo ven-
te con un índice de masa corporal (IMC) mayor de 40 kg/m2. lafaxina son todos ellos -fenetilaminas. La fentermina y
Sin embargo, antes de llegar a este grado de obesidad, la anfepramona son aminas simpaticomiméticas, como la
muchos individuos con sobrepeso habrán intentado otras anfetamina, pero difieren de ella en el hecho de carecer o
formas de perderlo, incluyendo medios como dieta, ejercicio, tener muy escaso efecto en la liberación o en la recaptación
programas comercializados de reducción de peso, cambios de dopamina en la sinapsis. El abuso de fentermina o de
en el estilo de vida o medicación. Este capítulo está centrado en anfepramona es poco frecuente. 2 La fenfluramina es tam-
el uso y abuso de medicamentos para el tratamiento de la bién una -fenetilamina, pero no tiene efecto sobre la
obesidad. recaptación o la liberación de noradrenalina ni de dopami-
En un documento del Heart, Lung and Blood Institute de na en el cerebro. La fenfluramina es un potente liberador
los National Institutes of Health titulado Clinical Guidelines on de serotonina e inhibe la recaptación de monoaminas; su
the Identification, Evaluation and Treatment of Overweight and efecto sobre la dopamina es mínimo e inhibe parcialmente
Obesity in Adults: The Evidence Report, se pone de relieve la la recaptación de serotonina. No existe documentación
necesidad de los médicos de evaluar la obesidad de sus sobre la adicción a fenfluramina. La sibutramina no tiene
pacientes.1 Este documento refrenda la prescripción clínica un potencial adictivo probado.4 Así pues, los derivados de
de los medicamentos para perder peso aprobados por la Food la -fenetilamina presentan una gran variedad de efectos
and Drug Administration (FDA) para su uso a largo plazo, farmacológicos y un potencial adictivo muy variable. Sin
como parte concomitante de un programa de modificación embargo, si se evalúan de una forma poco crítica, pueden
de los estilos de vida. Los pacientes adecuados para recibir ser asociados a la anfetamina y a su imagen negativa. Así,
este tratamiento son aquellos que hayan experimentado el uso del término «similar a la anfetamina» (anphetamine-
otros intentos frustrados de perder peso y cuyo IMC exceda like), en referencia a los fármacos supresores del apetito
los 27 kg/m 2; aquellos que tengan enfermedades asociadas, del tipo -fenetilamina distintos a la anfetamina y a la
tales como diabetes mellitus, hipertensión o dislipidemia; y metanfetamina, puede inducir a error, debido a la imagen
aquellos cuyo IMC sobrepase los 30 kg/m2. negativa que estos sugieren y a la falta de precisión del
El tratamiento farmacológico de la obesidad se ha visto término.
empañado por una serie de problemas.2 Desde la introduc- Una tercera cuestión relacionada con el tratamiento far-
ción de la hormona tiroidea para el tratamiento de la obesi- macológico de la enfermedad es la actitud negativa derivada
dad en 1893, casi todos los fármacos utilizados contra la obe- de las recidivas que se registran tras un tratamiento satisfac-
sidad han producido efectos indeseados, con resultado de torio. De ello nace la percepción de que los fármacos son
lesión y muerte y, en última instancia, de retirada del fárma- ineficaces, ya que la ganancia de peso se produce cuando la
co del mercado. Así pues, es conveniente mostrarse cautos a farmacoterapia se interrumpe.5 La curación completa de
la hora de aceptar un nuevo fármaco para el tratamiento de la la obesidad es poco habitual, por lo que el tratamiento ha de ser
obesidad, a no ser que su perfil de seguridad demuestre su paliativo. Como médicos no debemos pretender curar enfer-
aplicabilidad en casi todos los individuos. medades como la hipertensión o la hipercolesterolemia con
Un aspecto pernicioso adicional del uso de tratamien- fármacos. Más bien debemos intentar paliar sus efectos.
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tos farmacológicos para la obesidad es el halo negativo que Cuando la medicación para cualquiera de estas patologías
rodea al hecho de que el primer fármaco utilizado, la anfe- deja de tomarse, cabe esperar que haya una recaída. Ello sig-
tamina, es adictivo.3 Anfetamina es la abreviatura de nifica que los fármacos actúan sólo cuando se usan. Los mis-
alfa-metil-fenetilamina. Está indicada en la narcolepsia y mos razonamientos son válidos, pues, para el tratamiento
en el trastorno por déficit de atención, en los cuales tam- del sobrepeso. Se trata de una enfermedad crónica e incura-
bién es adictiva. Reduce la ingesta de comida, pero no está ble, para la que los medicamentos sirven sólo mientras se
recomendada para el tratamiento de la obesidad. La natu- utilizan.
raleza adictiva de la anfetamina está probablemente rela- Unos informes referidos a la enfermedad cardíaca val-
cionada con su efecto en la neurotransmisión dopaminér- vular asociada al uso de fenfluramina, desfenfluramina y
gica. Por otra parte, su efecto anorexígeno parece ser fentermina han servido recientemente como argumentación
consecuencia de la modulación de la transmisión noradre- para los que no aprueban el tratamiento de la obesidad con
73
74 Sección III • TRATAMIENTO NO QUIRÚRGICO

fármacos.6-8 Este es un ejemplo de las consecuencias no inevitable a una lenta recuperación del peso que previa-
intencionadas de la ley. Los informes sobre valvulopatía en mente se había perdido.
pacientes tratados con fenfluramina o desfenfluramina fue- A la hora de evaluar las opciones terapéuticas en contra
ron totalmente inesperados. Por fortuna, la magnitud del de la obesidad, los médicos han de ser conscientes de estas
problema no ha alcanzado el nivel que se sospechó inicial- barreras para la consecución de un resultado satisfactorio.
mente.8 En la actualidad se reconoce que el riesgo de valvu- A continuación revisaremos la medicación actualmente dis-
lopatía asociado con fenfluramina está relacionado con la ponible en correlación con estas limitaciones. Los fármacos
duración de la exposición al fármaco8 y que las lesiones tien- para el tratamiento de la obesidad pueden dividirse en tres
den a remitir una vez que el paciente deja de tomar la medi- grupos: aquellos que reducen la ingesta de alimentos, los que
cación.9,10 Sin embargo, este hallazgo de toxicidad exigirá alteran el metabolismo y los que incrementan la termogenia.
precaución a la hora de comercializar nuevos fármacos para Las monoaminas, que actúan en los receptores noradrenér-
la obesidad y sustentará la postura de aquellos que creen que gicos, serotoninérgicos, dopaminérgicos y de histamina,
el tratamiento farmacológico de la obesidad es inapropiado pueden reducir la ingesta. Algunos péptidos también modu-
y peligroso. lan la ingesta de alimentos. Los fármacos noradrenérgicos
La cuestión preliminar final a evaluar es el estanca- fentermina, anfepramona, benzfetamina y fendimetracina
miento de peso que se produce en todos los tratamientos han sido aprobados únicamente para su uso a corto plazo. La
de la obesidad.11-17 Al principio del tratamiento, una pér- sibutramina, un inhibidor de la recaptación de noradrenali-
dida de peso menor del 15% sería considerada insatisfac- na y de serotonina, ha sido aprobada para un uso a largo
toria por la mayoría de los pacientes obesos.18 Existe una plazo. Para este mismo uso se ha autorizado orlistat, un
discrepancia entre cuál debe ser la pérdida de peso estéti- agente antimetabólico que inhibe la lipasa pancreática y que
camente deseable y la que produce beneficios para la salud. puede bloquear la hidrólisis del 30% de los triglicéridos die-
La realidad actual es que ninguno de los tratamientos, téticos en sujetos con una dieta con un 30% de grasa. La
excepto la cirugía bariátrica,17 genera una pérdida de peso combinación termogénica de efedrina y de cafeína no ha
coherente mayor del 15%. Cuando el peso se estanca en un sido aprobada por las agencias reguladoras.
nivel superior al del objetivo estético deseado, los pacien- La tabla 10-1 resume los efectos de una serie de fárma-
tes suelen culpar al tratamiento. Esta percepción de pérdi- cos disponibles en la actualidad en los EE. UU. para el tra-
da de la efectividad del tratamiento con frecuencia lleva a tamiento de la obesidad.2,19,20 Más adelante son examinados
los pacientes a interrumpirlo, lo que da lugar de manera con mayor detalle.

Tabla 10-1 FÁRMACOS APROBADOS POR LA FDA PARA EL TRATAMIENTO DE LA OBESIDAD

NOMBRE DEL FÁRMACO DOSIS GRADO DE LA DEA EFECTOS SECUNDARIOS Y COMENTARIOS


Inhibidor de la lipasa pancreática

Orlistat 120 mg 3 veces al día antes Ninguno Un comprimido vitamínico diario por las noches;
de las comidas puede interaccionar con la ciclosporina

Inhibidor de la recaptación
de serotonina-noradrenalina

Sibutramina 5-15 mg/día IV Aumenta levemente la presión arterial; no usar con


inhibidores de la monoaminooxidasa; inhibidores
selectivos de la recaptación de serotonina,
sumatriptán, dietilergotamina, meperidina,
metadona, pentazocina, fentanilo, litio,
triptófano

Fármacos simpaticomiméticos

Anfepramona 25 mg 3 veces al día IV Todos los fármacos simpaticomiméticos son


similares; no usar con inhibidores de la
25 mg 3 veces al día monoaminooxidasa, guanetidina, alcohol,
75 mg en horario a.m. sibutramina y antidepresivos tricíclicos

Fentermina 18,75 a 37,5 mg/d 3 veces al IV Véase arriba


día
15-30 mg/d en horario a.m.
Benzfetamina 25-50 mg 1-3 veces/día III Véase arriba

Fendimetracina 35 mg 3 veces al día antes de III Véase arriba


las comidas
105 mg/d en horario a.m.
Capítulo 10 • Tratamiento farmacológico de la obesidad 75

◗ FÁRMACOS SIMPATICOMIMÉTICOS mientras que benzfetamina y fendimetracina son de grado III.


QUE REDUCEN LA INGESTA Esta clasificación reguladora indica que el gobierno opina que
son potencialmente adictivos, pero que este potencial parece
ser muy bajo. La fentermina y la anfepramona han sido apro-
Farmacología badas únicamente para ser usados «durante pocas semanas»,
Los fármacos simpaticomiméticos se agrupan dentro de lo que se suele interpretarse como un plazo de hasta 12 sema-
una misma categoría porque incrementan la presión arterial nas. La pérdida de peso con fentermina y anfepramona per-
y, en parte, actúan como la noradrenalina (NA). Los fárma- siste a lo largo del tratamiento, lo que sugiere que no se desa-
cos de este grupo funcionan por medio de distintos meca- rrolla tolerancia a estos fármacos. Si se desarrollase, cabría
nismos, incluidos la liberación de NA desde las vesículas de esperar que los fármacos perdiesen su efecto o se incrementa-
la sinapsis (benzfetamina, fendimetracina, fentermina y se la cantidad de fármaco necesaria para que los pacientes
anfepramona); el bloqueo de la recaptación de NA (macin- mantuvieran la pérdida de peso, cosa que no ocurre. De los
dol); o el bloqueo de la recaptación de NA y de serotonina agentes de este grupo, la fentermina es la prescrita con mayor
(5-hidroxitriptamina, 5-HT; p. ej., sibutramina). frecuencia en EE. UU., probablemente porque no es cara, ya
Todos estos medicamentos se absorben por vía oral y que ya no está protegida por patente. La fentermina no está
alcanzan la concentración máxima en sangre en un período disponible en Europa. La revisión reciente de una prestigiosa
de tiempo corto. La vida media en sangre también es breve revista recomendó el obtener un consentimiento informado
para todos, excepto para los dos metabolitos activos de la en el caso de que la fentermina se prescriba durante un plazo
sibutramina, que presentan una vida media más larga.2 Los de más de 12 meses,33 ya que este uso excedería las prescrip-
dos metabolitos de la sibutramina son activos, sin embargo, ciones del prospecto y no existen suficientes publicaciones
no ocurre lo mismo para los metabolitos de los otros fárma- sobre el uso de la fentermina a largo plazo.
cos de este grupo. El metabolismo hepático inactiva una
gran proporción de estos fármacos antes de su excreción. SIBUTRAMINA
Los efectos secundarios incluyen sequedad de boca, estreñi- En contraste con los fármacos simpaticomiméticos más anti-
miento e insomnio. La ingesta se reduce, bien por el retraso guos, la sibutramina se ha evaluado a fondo en varios ensayos
del inicio de la comida, bien produciendo una saciedad pre- clínicos multicéntricos de 6 a 24 meses de duración.11,34-46 En
coz. Tanto sibutramina como macindol también han demos- un ensayo clínico de 8 semanas, la sibutramina produjo una
trado un aumento de la termogenia.21-25 pérdida de peso dosis-dependiente con dosis de 5 y 20 mg/día.47
Varios ensayos clínicos a largo plazo, aleatorios, controlados
Eficacia con placebo y en doble ciego, han sido llevados a cabo en varo-
nes y mujeres de todos los grupos étnicos, de edades compren-
El criterio utilizado por la FDA para constatar la eficacia de didas entre 18 y 65 años y con un IMC que oscilaba entre
los fármacos supresores del apetito es el que, a través de ensa- 27 kg/m2 y 40 kg/m2. En un estudio de 6 meses, a distintas
yos clínicos aleatorios, en doble ciego y controlados con pla- dosis, desarrollado en 1047 pacientes, el 67% lograron una
cebo, determina una pérdida de peso estadísticamente signi- pérdida de peso del 5% y el 35% perdió el 10% o más.35 En
ficativa de un 5% más que en el grupo placebo.2 En cambio, este ensayo clínico de 24 semanas se observó una clara rela-
una pérdida de peso de un 10% con respecto al punto de ción dosis respuesta, y la recuperación de peso tuvo lugar
partida y significativamente mayor que en el grupo placebo cuando el tratamiento fue interrumpido, lo que indica que el
es el criterio principal a tener en cuenta para el Comité de fármaco mantiene su eficacia sólo cuando es usado. Casi dos
productos medicinales de uso humano de la agencia europea terceras partes de los pacientes tratados con sibutramina per-
del medicamento. Los ensayos clínicos sobre fármacos sim- dieron más del 5% de su peso corporal en relación al punto de
paticomiméticos que se realizaron antes de 1975 fueron por partida y casi una tercera parte perdió más del 10%. En un
lo general breves, ya que se creía que un tratamiento a corto interesante estudio acerca de la magnitud de la pérdida de
plazo «curaría la obesidad».26 Este planteamiento resultó ser peso, los pacientes que en principio perdieron peso con una
de un optimismo infundado, ya que los ensayos clínicos, de dieta muy baja en calorías, fueron asignados aleatoriamente al
corta duración y con frecuencia cruzados, ofrecieron pocos grupo de tratamiento con sibutramina 10 mg/día, o al de pla-
datos a largo plazo. En la presente revisión nos centramos en cebo más un programa de modificación del estilo de vida.36 La
los ensayos a largo plazo, de 24 semanas o más de duración, sibutramina produjo una pérdida de peso adicional (16% en
y sólo en aquellos en los cuales los grupos de control fueron relación al punto de partida al cabo de un año), mientras que
adecuados. los pacientes tratados con placebo recuperaron peso.
A partir del Sibutramine Trial of Obesity Reduction and
F ENTERMINA, ANFEPRAMONA, BENZFETAMINA Maintenance (STORM) se pueden destacar varias observa-
Y FENDIMETRACINA ciones acerca de la sibutramina, aunque las referidas al efec-
Sólo se han realizado unos pocos ensayos clínicos a largo pla- to de esta como coadyuvante del mantenimiento del peso
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zo sobre fármacos simpaticomiméticos de primera genera- parecen ser las más significativas.38 Siete centros participa-
ción.2,14,19,27-32 El mejor de estos ensayos –y también uno de los ron en este ensayo, en el cual los pacientes fueron inicial-
más largos– duró 36 semanas y comparó el placebo con el uso mente incluidos en un estudio abierto y tratados con 10 mg
continuado y con el uso intermitente de fentermina.14 Ambas de sibutramina/día durantes 6 meses (v. figura 10-1). Los
terapias, continua e intermitente de fentermina, produjeron pacientes que perdieron más del 5% (el 77% de los partici-
una mayor pérdida de peso que el placebo. En los períodos sin pantes consiguieron este objetivo), fueron asignados de for-
tratamiento, la pérdida de peso en los pacientes tratados de ma aleatoria, dos terceras partes a sibutramina y una tercera
forma intermitente se enlenteció, y sólo volvieron a perder parte a placebo. Durante la parte del ensayo desarrollada en
peso más rápidamente cuando el fármaco fue reintroducido. doble ciego, que se prolongó 18 meses, los pacientes tratados
La fentermina y la anfepramona están clasificadas por la con placebo recuperaron peso de forma regular, mantenien-
U.S. Drug Enforcement Agency como fármacos de grado IV, do únicamente el 20% de su pérdida de peso al final del
76 Sección III • TRATAMIENTO NO QUIRÚRGICO

108
Figura 10-1 Los pacientes par-
ticiparon inicialmente en un
104 ensayo abierto y fueron tratados
con 10 mg/día de sibutramina
Placebo durante 6 meses. Aquellos que
Sibutramina perdieron más del 5% del peso
Peso corporal (kg)

100 corporal a continuación fueron


asignados de forma aleatoria, dos
terceras partes a sibutramina y
96 una tercera parte a placebo. Los
pacientes asignados a placebo
recuperaron peso de forma cons-
tante, manteniendo al final del
92 ensayo sólo el 20% del peso per-
dido; mientras que los sujetos
tratados con sibutramina mantu-
88 vieron su peso durante 12 meses y
luego recuperaron sólo 2 kg de
media. (Tomado de James WPT
para el STORM [Sibutramine
84 Trial of Obesity Reduction and
0 2 4 6 8 10 12 14 16 18 20 22 24 Maintenance] Study Group:
Effect of Sibutramine on weight
Mes de tratamiento maintenance after weight loss: a
randomized trial. Lancet 2000;
356:2119-2125.)
Pérdida de peso Mantenimiento de peso

ensayo. Por el contrario, los sujetos tratados con sibutrami- nas cayó 124,88 mg/mL en comparación con los 15,76 mg/mL
na conservaron su peso durante 12 meses y recuperaron más del grupo el placebo. A pesar de que en la mayoría de los estu-
tarde una media de sólo 2 kg, manteniendo así el 80% de su dios de pacientes con diabetes mellitus las pérdidas de peso no
pérdida de peso inicial a los 2 años. A pesar de esta diferencia parecen ser tan grandes como las de los pacientes no diabéti-
en el peso al final de los 18 meses de observación controlada, cos, en todos los estudios el porcentaje de pacientes que con-
la presión arterial media de los pacientes tratados con sibu- siguen una pérdida de peso de más del 5% desde el punto de
tramina permanecía más alta que la de los pacientes tratados partida es significativamente mayor que la del grupo placebo.
con placebo, a pesar de la diferencia de peso de varios kilos. En todos los estudios, el grado de pérdida de peso corres-
La administración continuada de sibutramina durante ponde con el grado de mejoría del control glucémico.
1 año fue comparada con placebo y con la administración Se han documentado dos ensayos clínicos en los cuales
intermitente de sibutramina intermitente.42 En este estudio, la sibutramina fue utilizada para tratar a pacientes hiperten-
los pacientes que habían perdido el 2% de su peso o 2 kg des- sos durante un año,11,46 y otros dos estudios adicionales
pués de 4 semanas de tratamiento con sibutramina (15 mg/día), aportan datos sobre 12 semanas de tratamiento.49,50 En todos
fueron asignados aleatoriamente a placebo, a tratamiento con- los casos, el patrón de pérdida de peso favorece a la sibutra-
tinuado con sibutramina o a sibutramina intermitente (sema- mina. Sin embargo, excepto en uno de ellos, la pérdida de
nas 1-12, 19-30, y 37-48). Ambos regímenes de tratamiento peso media, aunque favorable, se asoció a un incremento en
con sibutramina produjeron resultados equivalentes, y fueron la presión arterial media.50 En un ensayo de 3 meses, todos
significativamente mejores que los conseguidos con placebo. los pacientes recibieron -bloqueantes, con o sin tiacidas,
La interrupción de la sibutramina ocasionó pequeños aumen- para la hipertensión.49 Los pacientes tratados con sibutrami-
tos de peso que fueron revertidos al reiniciar el tratamiento. na perdieron 4,2 kg (4,5%) en comparación con la pérdida de
Cuatro ensayos clínicos documentan el uso de sibutrami- 0,3 kg (0,3%) registrada en el grupo tratado con placebo. Las
na en pacientes diabéticos. Uno de ellos duró 12 semanas48 y presiones arteriales medias diastólicas en decúbito supino y
los otros tres 24.42-44 En el ensayo de 12 semanas, los pacientes en bipedestación no fueron significativamente diferentes
diabéticos tratados con sibutramina (15 mg/d) perdieron entre los pacientes tratados con el fármaco y los tratados con
2,4 kg (2,8%) en comparación con la reducción de 0,1 kg placebo. La frecuencia cardíaca, sin embargo, aumentó
(0,12%) del grupo placebo.48 En este estudio, la hemoglobina 5,6  8,25 latidos/minuto (M  DE) en el grupo tratado con
A1c (HbA1c) cayó −0,3% en el grupo tratado y permaneció sibutramina, en comparación con un aumento de la frecuen-
estable en el grupo placebo. En el estudio de Gockel y cols., cia cardíaca de 2,2  6,43 latidos/minuto (M  DE) en el
60 pacientes mujeres con unos niveles de glucosa mal contro- grupo tratado con placebo. McMhon y cols. documentaron
lados (HbA1c  8%), con dosis máximas de sulfonilureas y un ensayo de 52 semanas en pacientes hipertensos cuya pre-
metforminas, fueron asignadas aleatoriamente a 10 mg de sión arterial estaba controlada con antagonistas del calcio,
sibutramina dos veces al día o placebo.44 La pérdida de peso a con o sin -bloqueantes o tiacidas.11 Las dosis de sibutrami-
las 24 semanas fue de 9,6 kg en el grupo tratado con sibutra- na fueron aumentadas de 5 a 20 mg/día durante las 6 prime-
mina y 0,9 kg en el tratado con placebo. La mejoría en el con- ras semanas. La pérdida de peso fue significativamente
trol de la glucemia fue igualmente sorprendente. En los mayor en los pacientes tratados con sibutramina, con una
pacientes tratados con sibutramina, la HbA1c cayó un 2,73% media de 4,4 kg (4,7%), en comparación con 0,5 kg (0,7%) en
en comparación con el 0,53% del grupo del placebo. Los nive- el grupo tratado con placebo. La presión arterial diastólica
les de insulina disminuyeron 5,66 U/mL en comparación con disminuyó 1,3 mm Hg en el grupo tratado con placebo y
un valor de 0,68 obtenido con el placebo, y la glucemia en ayu- aumentó 2 mm Hg en el grupo tratado con sibutramina. La
Capítulo 10 • Tratamiento farmacológico de la obesidad 77

presión arterial sistólica se incrementó 1,5 mm Hg en el gru- nicamente significativos de la presión arterial. Las respues-
po tratado con placebo y 2,7 mm Hg en el grupo tratado con tas individuales de la presión arterial al fármaco son muy
sibutramina. La frecuencia cardíaca no cambió en los pacien- variables. En los estudios revisados, las retiradas por aumento
tes tratados con placebo. pero aumentó 4,9 latidos/minuto clínicamente significativo de la presión arterial fueron de
en los pacientes tratados con sibutramina.11 Un pequeño entre el 2% y el 5% de los participantes del ensayo. Dosis
estudio desarrollado en 8 varones obesos demostró que un más altas tienden a producir unas mayores tasas de retira-
programa de ejercicio aeróbico mitigaba los efectos adversos da,35 por lo que se prefiere usar dosis menores. La otra cues-
sobre la presión arterial de sibutramina.51 tión relacionada con el incremento de la presión arterial es
Del mismo modo que la dosis de sibutramina influye en el escaso aumento medio, de 2 a 4 mm Hg, de las presiones
la cantidad de peso que se pierde con este tratamiento, la sistólica y diastólica, registrado en los pacientes tratados con
magnitud del factor conductual también parece tener su sibutramina pero no en los controles. La pérdida de peso se
efecto.34,35 Ello se demostró con facilidad en un estudio rea- asocia habitualmente a una mejora de los factores de riesgo
lizado por Wadden y cols.52 Con una intervención conduc- cardiovasculares (presión arterial, niveles lipídicos, contro-
tual mínima, la pérdida de peso en este estudio fue de les glucémicos). En caso de que sibutramina tenga efectos
aproximadamente 5 kg durante 12 meses. Cuando se agregó mixtos sobre los factores de riesgo, con mejoría de algunos
al tratamiento con sibutramina una terapia de grupo con el de ellos (niveles lipídicos y controles glucémicos) y empeo-
fin de producir cambios en el comportamiento, la pérdida de ramiento leve de otros, deberá ser el médico prescriptor
peso aumentó hasta los 10 kg, y cuando además se introdujo quien tome la decisión de continuar con el tratamiento.
un plan estructurado de comidas a base de sustitutivos ali- El seguimiento de los potenciales incrementos de la pre-
mentarios, dicha pérdida ascendió hasta los 15 kg. Ello indi- sión arterial debe constituir una parte del plan de tratamiento
ca que la cantidad de peso perdido observada durante el tra- con sibutramina. Se recomienda la evaluación de la presión
tamiento farmacológico se debe en parte a la intensidad de arterial de 2 a 4 semanas después del inicio del tratamiento con
la intervención sobre el comportamiento. este medicamento. La dosis inicial habitual es de 10 mg/día.
La sibutramina está disponible en comprimidos de 5, Alrededor del 5% de los pacientes que toman sibutramina pre-
10 y 15 mg; la dosis inicial recomendada es de 10 mg/día, con sentan incrementos no tolerables de la presión arterial, por lo
ajustes al alza o a la baja en función de la respuesta. Dosis por que el tratamiento en estos casos debe ser interrumpido. Si la
encima de 15 mg/día no están recomendadas por la FDA. La presión arterial es menor de 135/80 y ha habido un aumento en
posibilidad de alcanzar una pérdida de peso significativa relación al punto de partida menor de 10 mm Hg en la presión
puede determinarse en función de la respuesta al tratamien- sistólica y menor de 5 mm Hg en la diastólica, se acepta conti-
to en las primeras 4 semanas. En un amplio estudio, de los nuar con el tratamiento. Si los pacientes tienen una pérdida de
pacientes que perdieron 2 kg en las primeras 4 semanas de peso aceptable en el primer mes de tratamiento (2 kg en
tratamiento, el 60% alcanzó una pérdida de peso de más del 4 semanas), la respuesta de la presión arterial debe evaluarse a
5%, en comparación con una pérdida de menos del 10% en la hora de decidir si se continúa con el tratamiento.
aquellos que no perdieron 2 kg en 4 semanas.35 Excepto en el La sibutramina no debe usarse en pacientes con antece-
caso de la presión arterial, la pérdida de peso con sibutrami- dentes de enfermedad coronaria, insuficiencia cardíaca con-
na se asocia a una mejora de los valores de los factores de gestiva, arritmias o ictus. Por otro lado, ha de haber un
riesgo cardiovascular. Los datos combinados del total de los intervalo de 2 semanas entre la finalización del tratamiento
11 estudios realizados sobre sibutramina demostraron un con inhibidores de la monoaminooxidasa y el comienzo del
reducción de los triglicéridos, del colesterol total, del coles- tratamiento con sibutramina. El fármaco no debe combinar-
terol LDL y un aumento del colesterol HDL asociados a la se con inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina.
magnitud de la pérdida de peso.53 Dado que la sibutramina se metaboliza vía el sistema enzi-
mático citocromo P450 (isozima CYP3A4), el consumo de
Seguridad fármacos tales como eritromicina y ketoconazol puede pro-
vocar un metabolismo prolongado de sibutramina por una
Los efectos secundarios de los distintos fármacos simpatico- posible competición por esta vía enzimática.
miméticos son similares.2 Producen insomnio, sequedad de
boca, astenia y estreñimiento. Los fármacos simpaticomimé-
ticos fentermina, anfepramona, benzfetamina y fendimetra- ◗ ORLISTAT: UN FÁRMACO QUE ALTERA
cina tienen muy poco potencial adictivo, como lo demuestra EL METABOLISMO
el escaso refuerzo al ser inyectados por vía intravenosa en ani-
males de ensayo.2 Del mismo modo, ni la fenilpropanolamina Farmacología
(FPA) ni la fenfluramina mostraron ningún refuerzo y nin-
gún dato clínico muestra potencial adictivo para estos fárma- El orlistat es un potente inhibidor selectivo de la lipasa pan-
cos. Tampoco la sibutramina ha demostrado tener potencial creática, que reduce la digestión intestinal de la grasa. El
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adictivo,4 aunque esté clasificada como fármaco de nivel IV. fármaco tiene un efecto dosis-dependiente en la grasa fecal,
La fenilpropanolamina puede aumentar la presión arte- con un incremento de alrededor del 30% de la grasa
rial y ha sido asociada a ictus hemorrágico en mujeres, con fecal proveniente de la ingesta en una dieta cuyo 30% de
dosis de 75 mg o más.54 En diciembre de 2000, la FDA retiró energía provenga de las grasas.55 El orlistat tiene escaso efec-
la FPA de los compuestos anticatarrales y de los productos to en pacientes que consumen una dieta baja en grasas, ya
para la pérdida de peso por su relación con el desarrollo de que esta se anticiparía al mecanismo mismo del fármaco.
ictus hemorrágico. Se ha documentado también la asocia-
ción de FPA con miocardiopatía. Eficacia
Existen dos cuestiones que deben ser consideradas en
relación con el tratamiento de la presión arterial y el uso de Se han publicado varios ensayos clínicos sobre el uso de
sibutramina. La primera es la aparición de incrementos clí- orlistat a largo plazo, en un período de entre 2 y 6 años
78 Sección III • TRATAMIENTO NO QUIRÚRGICO

de duración.12,56-66 En un ensayo a 2 años, los pacientes to- 1 año de tratamiento con 120 mg/día de orlistat, los cumpli-
maron una dieta hipocalórica, calculada como 500 kcal por dores (n  117) habían perdido 8,8 kg en comparación con los
debajo de sus requerimientos diarios.58 Durante el segundo 4,3 kg de los cumplidores del grupo tratado con placebo
año, la dieta se calculó para mantener el peso. Al final del (n  91). Durante el segundo año, cuando la dieta se liberali-
primer año, los pacientes tratados con placebo habían perdi- zó a una «régimen de mantenimiento», ambos grupos recu-
do entre el 4% y el 6% de su peso corporal inicial, y los peraron algo de peso. Transcurridos los 2 años, el grupo tra-
pacientes tratados farmacológicamente habían perdido entre tado con 120 mg de orlistat 3 veces al día estaba 5,2 kg por
el 8% y el 10%. En un estudio, los pacientes fueron asigna- debajo de sus pesos en la línea de partida, en comparación con
dos aleatoriamente al final del año 1. Aquellos que cambia- los 1,5 kg por debajo de la línea de partida del grupo tratado
ron de orlistat a placebo aumentaron de peso del 10% al 6% con placebo (v. figura 10-2).
por debajo de la línea de partida. Aquellos que cambiaron de El mantenimiento del peso con orlistat fue evaluado en
placebo a orlistat perdieron del 6% al 8,1%, lo que era esen- un estudio de 1 año de duración.60 Los pacientes selecciona-
cialmente idéntico al 7,9% de pérdida de peso de los pacien- dos habían perdido más del 8% de su peso corporal a lo lar-
tes tratados con orlistat durante la totalidad de los 2 años. go de 6 meses con una dieta de 1000 kcal/día. Los 729 pacien-
En un segundo ensayo a 2 años, 892 pacientes fueron tes fueron asignados aleatoriamente a uno de los cuatro
asignados aleatoriamente.59 Un grupo permaneció con pla- grupos para ser tratados con placebo, con 30 mg, 60 mg o
cebo a lo largo de los 2 años (n  97 cumplidores) y un 120 mg de orlistat tres veces al día durante 12 meses. Al final
segundo grupo se mantuvo con orlistat (120 mg 3 veces/d) de este período, los pacientes tratados con placebo recupera-
durante 2 años (n  109 participantes que cumplieron la ron el 56% del peso perdido, en comparación con el 32,4%
pauta del estudio). Al final del año 1, las dos terceras partes del grupo tratado tres veces al día con 120 mg de orlistat.
del grupo tratado con orlistat durante un año, cambiaron a Las otras dos dosis de orlistat no fueron significativamente
orlistat 60 mg tres veces al día (n  102 pacientes cumplido- diferentes al placebo en la prevención de la recuperación de
res), y otros cambiaron a placebo (n  95 cumplidores).59 peso.
Tras un año, la pérdida de peso fue de 8,67 kg en el grupo
tratado con orlistat y de 5,81 kg en el grupo tratado con pla- Efectos del orlistat en los lípidos y en las lipoproteínas
cebo (P  0,001). Durante el segundo año, aquellos que
cambiaron a placebo tras un año, alcanzaron el mismo peso La modesta reducción de peso observada con el tratamiento
que aquellos tratados con placebo durante los 2 años (el 4,5% con el orlistat puede tener efectos beneficiosos sobre los lípi-
en aquellos con placebo durante 2 años y el 4,2% en aquellos dos y las lipoproteínas.22 El fármaco parece tener un efecto
que cambiaron de orlistat a placebo durante el año 2). independiente sobre el colesterol LDL. Un metanálisis de
En un tercer ensayo a 2 años, 783 pacientes permanecie- los datos que relacionaban orlistat con los lípidos demostró
ron en el grupo placebo durante 2 años o en uno de los dos que los sujetos tratados con el medicamento presentaban
grupos tratados con orlistat, con dosis de 60 o 120 mg tres casi el doble de reducción de los niveles de colesterol LDL
veces al día.62 Tras 1 año a dieta para pérdida de peso, los que sus análogos tratados con placebo, para la misma cate-
cumplidores del grupo placebo perdieron 7 kg, valor signi- goría de pérdida de peso después de un año.67
ficativamente menor que los 9,6 kg de los cumplidores trata- En un estudio se obtuvieron resultados representativos
dos con 60 mg de orlistat tres veces al día o que los 9,8 kg de de los efectos de orlistat sobre la pérdida de peso y los facto-
los cumplidores tratados con 120 mg de orlistat 3 veces al res de riesgo cardiovascular, en particular el nivel de lípidos
día. Durante el segundo año, cuando se liberalizó la dieta a en suero en pacientes obesos con hipercolesterolemia.68 Los
una dieta de mantenimiento de peso, los tres grupos aumen- hallazgos principales fueron que orlistat indujo una pérdida
taron algo su peso. Al final de los 2 años, los cumplidores del de peso significativa y redujo el colesterol LDL en pacientes
grupo placebo estaban 4,3 kg por debajo de la línea de par- obesos con niveles de colesterol elevados por encima de la
tida; mientras que los cumplidores tratados con 60 mg de reducción que puede atribuirse a la pérdida de peso por sí
orlistat tres veces al día se encontraban 6,8 kg por debajo de sola. El estudio ObelHyx muestra una disminución adicional
esa línea; y los cumplidores tratados con 120 mg de orlistat del 10% del colesterol LDL en sujetos obesos con colesterol
tres veces al día estaban 7,6 kg bajo el nivel de referencia. elevado en la línea de partida en comparación con placebo.69
Un nuevo ensayo publicado a 2 años fue llevado a cabo en Estos datos indican que la diferencia entre los niveles de coles-
796 sujetos en una consulta de medicina general.61 Después de terol LDL con orlistat y con placebo es aproximadamente del

–0 – CAMBIO PORCENTUAL EN RELACIÓN AL PESO INICIAL A LO LARGO


–1 – DE 2 AÑOS: BASE DE DATOS INTEGRADA
Figura 10-2 Cambio porcentual del
–2 – peso corporal a lo largo de 2 años de tra-
–3 – tamiento con orlistat 60 mg y 120 mg. Al
% de cambio

final de los 2 años, el grupo tratado con


–4 – Placebo
120 mg, tres veces al día, de orlistat,
–5 – alcanzó 5,2 kg de media por debajo de su
60 mg línea de partida en comparación con
–6 – 1,5 kg del grupo tratado con placebo.
–7 – 120 mg (Tomado de Hauptmann J for the Orlistat
–8 – Primary Care Study group: Orlistat in
the long-term treatment of obesity in pri-
–9 – mary care settings. Arch Fam Med
–10 – 2000;9:160-137.)
–4 0 4 8 12 16 20 24 28 32 36 40 44 48 52 56 60 64 68 72 76 80 84 88 92 96 100 104
Semana
Capítulo 10 • Tratamiento farmacológico de la obesidad 79

10% al 12% en todos los estudios, independientemente de se redujo un 0,62% en el grupo tratado con orlistat y sólo en
que esta diferencia se compute como cambio desde el un 0,27% en el grupo tratado con placebo. La dosis necesa-
comienzo del período de pretratamiento con placebo y dieta ria de insulina disminuyó en el grupo tratado con orlistat, al
o desde el inicio del tratamiento doble ciego. Cabe destacar igual que el nivel de colesterol plasmático.
que, en todos los ensayos, los niveles de colesterol LDL En un estudio en pacientes con diabetes, orlistat mejoró
siguen disminuyendo después del inicio del tratamiento el control metabólico con una reducción de hasta un 0,53%
doble ciego con orlistat, aunque el colesterol LDL permane- de la HbA1c y una disminución del tratamiento antidiabético
ció constante durante mucho largo tiempo o aumentó duran- concomitante necesario, a pesar de que la pérdida de peso
te la terapia en doble ciego con placebo, a pesar de que estos fue limitada.64 Este estudio también demostró los efectos
pacientes siguieron perdiendo peso. Este efecto indepen- independientes del orlistat sobre los niveles lipídicos. Orlistat
diente de disminución del colesterol LDL es, probablemen- también puso de manifiesto un efecto agudo en la lipemia
te, reflejo de la reducción de la absorción intestinal de coles- posprandial en los pacientes con sobrepeso con diabetes
terol. Dado que la inhibición de la lipasa pancreática mellitus tipo 2.73 Orlistat puede contribuir a la reducción del
previene la absorción de aproximadamente el 30% de la gra- riesgo aterogénico mediante la reducción del colesterol de
sa de la dieta, una dieta con un contenido graso del 30% de partículas similares a remanentes y de los ácidos grasos
total de su energía, se convertiría en un porcentaje de entre libres en el período posprandial.74
el 20% y el 24% de la energía disponible a partir de la grasa El ensayo clínico más largo con orlistat es el Xenical
al asociarse un tratamiento con orlistat. Diabetes Outcome Study (XENDOS).75 En este ensayo de
Se ha propuesto la hipótesis de que la inhibición de la 4 años de duración, aleatorio, controlado con placebo,
actividad de la lipasa pancreática puede inducir una reten- 1640 pacientes fueron asignados al tratamiento con 120 mg
ción de colesterol en el intestino, por la reducción de la can- de orlistat tres veces al día además de asesoramiento sobre
tidad de ácidos grasos y de monoglicéridos absorbidos, o los hábitos de vida, y 1637 pacientes fueron asignados al tra-
puede provocar un secuestro del colesterol en una fase grasa tamiento combinado de placebos también con asesoramien-
más persistente en el intestino, dándose también en ocasio- to sobre los hábitos de vida. En el estudio participaron
nes ambos fenómenos a la vez. La inhibición parcial de la pacientes suecos con IMC superiores a 30 kg/m2 y con tole-
grasa intestinal y de la absorción de colesterol da lugar pro- rancia a la glucosa normal o alterada (21%). Más del 52% de
bablemente a una menor concentración hepática de coleste- los pacientes tratados con orlistat y el 34% de los pacientes
rol y de ácidos grasos saturados, a una regulación al alza de tratados con placebo cumplieron con el protocolo clínico.
los receptores hepáticos de LDL y a una disminución de los Los pacientes tratados con orlistat estaban 6,9 kg por debajo
niveles de colesterol LDL. La disminución del colesterol de su línea de partida al final del año 4, a diferencia de los
LDL observada en el estudio en sujetos con hipercolestero- 4,1 kg del grupo tratado con placebo (P  0,001). La inci-
lemia69 es comparable al 14% de reducción de colesterol dencia acumulada de diabetes fue del 9% en el grupo place-
LDL que se alcanzó previamente con una margarina vegetal bo y de 6,2% en el grupo tratado con orlistat, equivalente a
con ésteres, pero es de menor magnitud que los efectos una reducción del 37% del riesgo relativo.
reductores del colesterol LDL que se observan de forma En un análisis sobre el efecto del orlistat en pacientes
habitual con fibratos o con estatinas.70,71 con síndrome X, o síndrome metabólico, Reaven y cols. sub-
dividieron a los pacientes que habían participado en estudios
Efectos del orlistat sobre la tolerancia a la glucosa, documentados previamente en aquellos en los quintiles supe-
la diabetes mellitus y el síndrome metabólico rior e inferior de triglicéridos (TG) y en los quintiles superior
e inferior de colesterol HDL.76 Aquellos con TG elevados y
Los sujetos tratados con orlistat en ensayos de una duración HDL bajo eran etiquetados de síndrome X, y aquellos con
de al menos 1 año fueron analizados por Heymsfield y cols., los TG más bajos y el HDL más alto eran los controles sin
que encontraron que el orlistat reduce la evolución de alte- síndrome X. En este análisis, no había prácticamente varo-
ración de la tolerancia a la glucosa (ATG) a diabetes melli- nes en el grupo de los controles sin síndrome X, mientras
tus, y que la transición de la tolerancia a la ATG también se que la diferenciación de sexos se distribuía por igual en el
veía reducida en sujetos tratados con orlistat durante un grupo con síndrome X. Las otras diferencias entre estos
año.72 En los pacientes tratados con orlistat, la evolución de dos grupos fueron la elevación leve presión arterial sistólica
la tolerancia normal a la glucosa a la diabetes mellitus se y diastólica en aquellos sujetos con síndrome X y el nivel
registró en un 6,6% de los casos, mientras que aproximada- prácticamente doble de la insulina en ayunas. En lo refe-
mente el 11% de los pacientes tratados con placebo experi- rente a la pérdida de peso, la única diferencia asociada a ella
mentaron un empeoramiento similar de la tolerancia a la entre los pacientes tratados con placebo y los tratados con
glucosa. La evolución desde la AGT fue menos frecuente en orlistat fue la disminución de los niveles de colesterol LDL.
los pacientes tratados con orlistat que en los pacientes obesos Sin embargo, los subgrupos con síndrome X presentaron
tratados con placebo, con calores respectivos del 3% y el una mayor disminución de los TG y de la insulina que los
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7,6%. A pesar de que estos datos están basados en un análisis que no padecían síndrome X. El colesterol HDL aumentó
retrospectivo de los datos disponibles de tolerancia a la glu- más en el subgrupo con síndrome X, mientras que el coles-
cosa de ensayos a 1 año, este demuestra que reducciones de terol LDL disminuyó menos que en el grupo control sin
peso modestas con farmacoterapia pueden conllevar una síndrome X.
reducción importante del riesgo de desarrollar diabetes
mellitus tipo 2. Seguridad
Un estudio asignó de forma aleatoria a 550 pacientes
tratados con insulina a placebo o a orlistat en dosis de 120 mg Orlistat no se absorbe de forma significativa, por lo que sus
tres veces al día durante un año.65 La pérdida de peso en el efectos colaterales guardan relación con el bloqueo de la
grupo tratado con orlistat fue de 3,9  0,3%, mientras que digestión de los TG en el intestino.55 La pérdida de grasa
del grupo tratado con placebo fue del 1,3  0,3%. La HbA1c por las heces y los síntomas gastrointestinales relacionados
80 Sección III • TRATAMIENTO NO QUIRÚRGICO

son comunes inicialmente, pero decaen a medida que los dieta rica en grasas, rimonabant indujo pérdida de peso,
pacientes aprenden a utilizar el fármaco.58,59 Durante el tra- aunque tuvo poco efecto en animales normales. Los anima-
tamiento se pueden producir disminuciones leves, aunque les con una deleción genética del receptor presentan un
significativas, de los niveles de vitaminas liposolubles, aun- fenotipo delgado con resistencia a la obesidad y a la dislipi-
que casi siempre permanecen dentro de los rangos norma- demia inducida por la dieta.
les.77 Sin embargo, algunos pacientes pueden necesitar
suplementos de vitaminas liposolubles. Es imposible prede- Ensayos clínicos
cir qué pacientes van a necesitarlas, por lo que, de forma
rutinaria, se suelen prescribir complejos vitamínicos para El antagonista de los receptores canabinoides rimonabant fue
tomar antes de acostarse. La absorción de otros fármacos no investigado como tratamiento potencial de la obesidad en un
parece estar significativamente afectada por orlistat. ensayo de 2 años de duración. En todos los ensayos se admi-
nistró una dieta hipocalórica (con un déficit de 600 kcal/día)
Combinación de orlistat y sibutramina en un período de pretratamiento de 6 semanas, con una pér-
dida media de peso de 2 kg. A este período le siguieron 52 o
Dado que orlistat actúa periféricamente para reducir la 104 semanas de tratamiento con placebo o rimonabant en
digestión de los TG en el tracto intestinal y que sibutramina dosis de 5 o 20 mg/día. En un ensayo a 1 año de 1507 pacien-
actúa en los mecanismos de recaptación noradrenérgicos y tes con IMC  30 kg/m 2 (o  27 kg/m 2) con dislipidemia,
serotoninérgicos en el cerebro, sus acciones no se solapan en hipertensión o ambos, la pérdida de peso media ( DE) a un
absoluto y su combinación podría aportar una pérdida de año fue −3,4 kg  5,7, −6,6 kg  7,2, y −1,8 kg  6,4 en los
peso adicional. Para probar esta posibilidad, Wadden y grupos con rimonabant 5 mg, 20 mg y placebo, respectiva-
cols.78 asignaron aleatoriamente a pacientes a orlistat o a pla- mente.79 Más pacientes del grupo tratado con rimonabant
cebo tras 1 año de tratamiento con sibutramina, tal y como 20 mg que del grupo tratado con placebo alcanzaron una
muestra la figura 10-3. Durante los 4 meses adicionales de pérdida de peso mayor del 5% (el 51% frente al 19%) o del
tratamiento, no hubo más pérdida de peso. Este resultado 10 % (el 27% frente al 7%).
fue decepcionante, aunque obviamente son necesarios estu- Con la dosis más alta del 20 mg/día, rimonabant produ-
dios adicionales antes de que se puedan sacar conclusiones jo un efecto significativamente mayor que el placebo en la
firmes acerca de las terapias combinadas. reducción de la perímetro abdominal, de HDL, de triglicé-
ridos, de la resistencia a insulina y de la prevalencia de sín-
drome metabólico. Los efectos secundarios, incluidos cam-
◗ RIMONABANT: UN ANTAGONISTA bios de humor, náuseas y vómitos, diarrea, cefalea, mareo y
DE LOS RECEPTORES CANABINOIDES ansiedad fueron más frecuentes en el grupo tratado con
rimonabant 20 mg que en el grupo tratado con 5 mg o
Farmacología con placebo. Las tasas de abandono fueron similares en los
tres grupos.
El rimonabant es un antagonista de los receptores canabi- Unos resultados similares se obtuvieron el segundo
noides tipo 1 del sistema endocanabinoide, presentes en ensayo a un año de 1036 sujetos con sobrepeso con dislipide-
abundancia en los sistemas nerviosos central y periférico. mia no tratada.80 En los sujetos tratados con rimonabant
Actúa en los receptores presinápticos para prevenir la acción 20 mg se observó una mayor disminución del perímetro
natural de los endocanabinoides (anandamida y 2-AG). En abdominal y, de la concentración en suero de triglicéridos,
animales que desarrollaron obesidad por la ingesta de una así como un mayor aumento de la concentración media en

Figura 10-3 Introducción de


0
orlistat o placebo durante 4 meses
tras 1 año de tratamiento con
Pérdidas de peso (kg)

sibutramina. Los pacientes fue-


ron asignados aleatoriamente
–5 a orlistat o a placebo, además de a
sibutramina, tras un año de tra-
tamiento únicamente con sibu-
Sibutramina + placebo tramina. Durante los 4 meses de
tratamiento combinado adicional
–10 no hubo aumento de la pérdida
de peso. (Tomado de Wadden
TA, Berkowitz RI, Womble LG,
et al: Effects of Sibutramine plus
orlistat in obese women following
–15
1 year of treatment of sibutrami-
na alone: a placebo-controlled
Sibutramina + orlistat trial. Obes Res 2000;8:431-437.)

–20
0 52 56 60 64 68
Semanas de tratamiento
Capítulo 10 • Tratamiento farmacológico de la obesidad 81

suero de HDL, en comparación con los grupos tratados con 11. McMahon FG, Fujioka K, Singh, BN, et al: Efficacy and safety of
rimonabant 5 mg o con placebo. sibutramine in obese white and African-American patients with
hypertension. Arch Intern Med 2000;160:2185-2191.
También se han documentado datos de un estudio de 12. Finer N, James WP, Kopelman PG, et al: One-year treatment of obes-
2 años de duración sobre 3045 pacientes obesos o con sobre- ity: a randomized, double-blind, placebo-controlled, multicentre
peso. Tras un período de 6 semanas de pretratamiento con study of orlistat, a gastrointestinal lipase inhibitor. Int J Obes Relat
dieta y ejercicio, en el año 1 los pacientes fueron asignados Metab Disord 2000;24:306-313.
13. Flechtner-Mors M, Ditschuneit HH, Johnson TD, et al: Metabolic
aleatoriamente al tratamiento con 5 mg/día de rimonabant, and weight-loss effects of long-term dietary intervention in obese
a 20 mg/día o a placebo. Tras el primer año, los pacientes patients: four-year results. Obes Res 2000;8:399-402.
tratados con rimonabant fueron reasignados a placebo o a 14. Munro JF, MacCuish AC, Wilson EM, et al: Comparison of continu-
continuar con la misma dosis. El grupo con placebo perma- ous and intermittent anorectic therapy in obesity. Br Med J
neció con placebo.81 Las pérdidas de peso en 1 año fueron 1968;1:352-354.
15. Greenway FL, Ryan Greenway FL, Ryan DH, et al: Pharmaceutical
prácticamente idénticas a las de los estudios de 1 año de cost savings of treating obesity with weight-loss medications. Obes
duración. En el segundo año, los pacientes que continuaron Res 1999;7:523-531.
el tratamiento con rimonabant (20 mg/día), mantuvieron el 16. Astrup A, Breum L, Tourbro S, et al: The effect and satiety of an
peso perdido, mientras que aquellos asignados a placebo ephedrine/caffeine compound compared to ephedrine, caffeine and
placebo in obese subjects on an energy-restricted diet: a double blind
recuperaron su peso, casi el mismo que habían perdido en el trial. Int J Obes 1992;16:260-277.
primer año. La tasa de abandono fue alta (aproximadamente 17. Sjostrom CD, Lissner L, Wedel H, et al: Reduction in incidence of
del 50%), y hubo algunos síntomas psiquiátricos leves. Los diabetes, hypertension and lipid disturbances after intentional weight
pacientes del grupo con 5 mg recuperaron algo de peso, pero loss induced by bariatric surgery: the SOS Intervention Study. Obes
Res 1999;7:477-484.
no volvieron a los niveles de partida. La presión arterial y los 18. Foster GD, Wadden TA, Vogt RA, et al: What is a reasonable weight
lípidos mejoraron significativamente en los pacientes trata- loss? Patients’ expectations and evaluations of obesity treatment
dos con 20 mg/día de rimonabant, al igual que en ensayos outcomes. J Consult Clin Psychol 1997;65:79-85.
previos. Así pues, rimonabant, combinado con dieta y ejer- 19. Bray GA: Evaluation of drugs for treating obesity. Obes Res 1995;
3(suppl 4):425S-434S (review).
cicio, produce una pérdida leve pero sostenida de peso, así 20. Bray GA, Tartaglia LA: Medicinal strategies in the treatment of obes-
como cambios favorables en el perímetro abdominal y en los ity. Nature 2000;404(6778):672-677 (review).
factores de riesgo metabólicos y cardíacos. El ensayo se vio 21. National Task Force on the Prevention and Treatment of Obesity:
limitado por una tasa de abandono importante (aproximada- Long-term pharmacotherapy in the management of obesity. JAMA
mente del 50% en todos los grupos al final del año 1). 1996;276:1907-1915 (review).
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Los fármacos para el tratamiento de la obesidad deben ser 25. Lupien JR, Bray GB: Effect of mazindol, d-amphetamine and diethyl-
considerados como coadyuvantes de la prescripción de dieta propion on purine nucleotide binding to brown adipose tissue.
y del ejercicio físico y pueden ayudar a ciertos pacientes a Pharmacol Biochem Behav 1986;25:733-738.
alcanzar y mantener un objetivo de pérdida de peso. Los 26. Scoville B: Review of amphetamine-like drugs by the Food and Drug
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82 Sección III • TRATAMIENTO NO QUIRÚRGICO

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11
Métodos no quirúrgicos de pérdida de peso
George S. M. Cowan, Jr., M.D.

Numerosas teorías, planes y programas han sido desarrollados (v. tabla 11-1). Su gran diversidad hace que sólo se expongan
y difundidos con éxito a través de libros, información comer- algunos ejemplos representativos.
cial, reuniones y otros medios. con el único objetivo de prestar
ayuda a quienes solicitan asistencia para resolver su sobrepeso o Orígenes
su obesidad. Todas estas iniciativas utilizan variaciones y com-
binaciones de las cuatro estrategias principales para la pérdida La primera dieta moderna publicada era vegetariana. Asociada
de peso voluntaria no quirúrgica: las dietas, la modificación del a comentarios sobre el pecado mortal de la gula, fue propues-
comportamiento, el ejercicio y la medicación. El presente capí- ta por primera vez por el reverendo Sylvester Graham, en el
tulo aporta una breve visión de conjunto y un análisis de estos Graham. Journal of Health and Longevity, que empezó a publi-
métodos en los cuales los estadounidenses gastan miles de carse en 1837.1 Las dietas vegetarianas para perder peso pue-
millones de dólares al año. den ser deficitarias en lo que respecta a la cantidad o la com-
binación de proteínas de alto valor biológico o de otros
nutrientes. Asi pues, los pacientes vegetarianos en ocasiones
Z DIETAS PARA PERDER PESO presentan deficiencias de nutrientes no aparentes clínicamen-
te en el preoperatorio y que se pueden exacerbar durante
El objetivo principal de las dietas de pérdida de peso es redu- meses o años después de la cirugía bariátrica. Por ello requie-
cir la la ingesta calórica hasta niveles inferiores a los que el ren una cuidadosa y particular atención en el preoperatorio y
cuerpo puede consumir por unidad de tiempo. Ello requiere en el seguimiento posterior a la intervención.
el uso de productos comestibles o sustitutivos alimentarios, El primer libro sobre dietética popular, titulado Letter
como el pomelo, las grasas no absorbibles, los edulcorantes on Corpulence Addressed to the Public, escrito por William
o la fibra. Se pretende que estos materiales produzcan pérdi- Banting, un fabricante de ataúdes y empresario de pompas
da de peso, induciendo al individuo a consumir menos calo- fúnebres, apareció en 1862. En el libro el autor refiere cómo
rías, excretar algunas de ellas sin que se hayan absorbido en trató su propia obesidad realizando una dieta restringida en
el intestino, aumentar la tasa de metabolismo basal, o elimi- carbohidratos y alta en grasas recomendada por un médico,
nar o metabolizar el exceso de grasa del cuerpo. el Dr. William Harvey, y carecía de cualquier tipo de res-
Estos métodos tienen su origen en el siglo XIX, cuando, tricción calórica. Esta dieta perdió más tarde su reputación,
tanto médicos como personas ajenas a la sanidad, propusie- aunque en tiempos recientes ha recuperado cierta aceptación
ron por primera vez los «principios» dietéticos de la pérdida (v. más adelante dieta del Dr. Atkins). En 1879 se inventó en
de peso, a menudo con bases cuestionables. Desde entonces, los laboratorios Monsanto el edulcorante artificial sacarina
tales principios han sido renovados a través de numerosas y, en 1894, se extrajeron componentes tiroideos de tejidos
combinaciones y cambios. Millones de individuos con sobre- animales, siendo muy poco tiempo después prescritos en
peso, obesidad u obesidad mórbida continúan aún hoy utili- forma de pastillas para la pérdida de peso. El primer anuncio
zando muchos de ellos. publicitario referido exclusivamente a la pérdida de peso
Los cirujanos que practican la cirugía bariátrica y sus apareció en 1896 y, desde entonces, los ingredientes de algu-
colaboradores tienen que estar familiarizados con al menos nos de los artículos publicitados incluían sustancias
algunas de estas dietas, principios dietéticos y otras medidas, tales como laxantes, purgantes, arsénico, estricnina, soda y
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que los pacientes suelen citar al enumerar sus intentos falli- sales de Epsom.
dos de perder peso. Es importante resaltar que algunos La masticación meticulosa de la comida fue propugnada
pacientes pueden continuar usando uno o más de estos méto- por el inglés Horace Fletcher, conocido como el «gran masti-
dos durante un tiempo después de la cirugía bariátrica. En cador», quien hacía gala de haber perdido 30 kg masticando
este contexto, el presente capítulo resume la historia de las 100 veces por minuto la comida hasta dejarla completamente
estrategias de pérdida de peso utilizadas en los últimos dos líquida. Esta práctica fue en cierto modo apoyada por el pri-
siglos y discute ciertos principios, algunos de ellos cierta- mer ministro británico William Ewart Gladstone, quien sos-
mente controvertidos, así como las dietas empleadas. tenía la importancia de masticar 32 veces cada bocado (una
También se analizan otros materiales, incluidos extractos por cada uno de los 32 dientes del adulto). En 1898 Fletcher
biológicos y otras sustancias naturales, en algunos casos publicó The A.B.-Z- of Our Own Nutrition libro que invitaba a
potencialmente dañinas, utilizadas para la pérdida de peso los lectores a masticar hasta que la comida estuviera totalmen-
83
84 Sección III • TRATAMIENTO NO QUIRÚRGICO

Battle Creek Toasted Corn Flake Company, que más tarde se con-
Tabla 11-1 DIETAS ADELGAZANTES COMERCIALES
Y DE MODA virtió en la Kellogg Company y que todavía hoy sigue producien-
do el producto original de los fundadores. Según parece, el
1837: Primera dieta adelgazante moderna (Rev. Sylvester Graham) Dr. Kellogg podría haber extirpado una pequeña porción de
1850: Fundación de la American Vegetarian Society (Dr. John Kellog) intestino a algunos de los pacientes que no mejoraban con la
1862: Primer libro sobre dietas adelgazantes (William Banting) dieta vegetariana; si se descubriese documentación fiable de
1878: Descubrimiento del primer sustitutivo del azúcar (sacarina
[benzosulfamida]) (Universidad Johns Hopkins)
alguna de estas intervenciones, Kellogg sería conocido como el
1898: Masticación hasta que la comida se vuelve líquida; evitar la primer cirujano bariátrico del mundo.
fibra (Horace Fletcher) La combinación de proteínas, frutas y almidones, y la
1907: Uso de la sacarina como sustitutivo del azúcar en alimentos ingesta de ciertos tipos de alimentos por separado, constitu-
para diabéticos yeron un principio dietético empleado por el cirujano William
1911: Ingesta de proteínas, frutas y almidones por separado (William Howard Hay (1866-1940) para tratar su propia obesidad y los
Howard Hay)
1913: Publicación de los primeros procedimientos dietéticos
problemas cardíacos asociados a ella. Hay, que defendió este
gubernamentales (Department of Agriculture de EE. UU.) principio por primera vez en 1911, se basaba en el concepto de
1918: Presentación del recuento de calorías para la pérdida de peso que la causa básica de los problemas de salud era «el mal esta-
(Dr. Lulu Hunt Peters) do químico del cuerpo» y más concretamente la acidez deri-
1919: Primera báscula doméstica (Health-O-Meter) vada de la acumulación de ácido como resultado de la diges-
1930: Dieta muy baja en calorías (Hollywood Diet, luego conocida tión y del metabolismo que superaba los límites de eliminación
como dieta del pomelo/dieta de la Mayo Clinic)
1930-1939: Dietas de algas
del cuerpo. Según él, este ácido disminuía la reserva alcali-
1943: Aceite mineral como sustitutivo de las grasas (Marian White) na del organismo, provocando toxemia. Hay dividió los ali-
1963: Primer refresco sin azúcar (Tab) mentos en tres grupos: formadores de álcalis (frutas y verdu-
1963: Fundación del grupo de apoyo para la pérdida de peso (Weight ras); proteínas concentradas (carnes, huevos y productos
Watchers), ( Jean Nidetch) lácteos); y formadores de ácido (pan, semillas y alimentos azu-
1967: Dieta alta en proteínas y baja en carbohidratos (Dr. Irwin Stillman) carados). Formuló unas reglas sobre qué comidas tenían que
1972: Dieta alta en proteínas, alta en grasas y baja en carbohidratos
(Dr. Robert Atkins)
ser combinadas o consumidas por separado y sobre cuándo
1974: Programa comercial de pérdida de peso supervisado debían ser ingeridas. También defendió la ingesta mayoritaria
médicamente (Optifast) de fruta fresca, verduras y ensaladas y el hábito de evitar la
1977: Dieta baja en grasas y alta en fibra (Robert Pritikin) comida procesada.4 A pesar de que, acertadamente, mantenía
1977: Dieta de la proteína líquida y el ayuno (Robert Linn D.O.) que los carbohidratos y las proteínas tienen requerimientos
1978: Dieta alta en proteínas y baja en carbohidratos (dieta médica de digestivos diferentes, la deducción de que, por tanto, necesi-
Scarsdale, H. Tarnower)
1981: Dieta rica en frutas (dieta de Beverly Hills, Judy Mazel)
tan ser ingeridos por separado para promover su asimilación
1982: Dieta rica en fibra ⬍10% de grasas, vegetariana, de ingesta no por el organismo, tiene poca, si no nula, validez científica.
limitada (Dr. Dean Ornish) Las guías dietéticas gubernamentales fueron elaboradas
1983: Dieta rica en fibra (de dieta F-Plan, Autrey Eyton) por primera vez por el U.S. Department of Agriculture en 1913.
1990: Pérdida de peso anatómicamente selectiva (Rosemary Conley) Estas guías ofrecían consejo sobre las raciones diarias más
1995: Objetivo de distribución de carbohidratos-grasas-proteínas adecuadas de varios grupos de alimentos y en ellas se animaba
40-30-30 (dieta de la zona; Barry Sears)
2003: Dieta alta en grasas, con bajo índice glucémico y no restringida
al consumo de una mayor variedad de alimentos, siendo los
(dieta de South Beach; Dr. A. Agatston) más importantes los provenientes de fuentes animales.5
El recuento calórico fue presentado en 1918 por la
Dra. Lulu Hunt Peters, en su libro Diet and Health With a Key
to the Calories.6 Con una singular insistencia en la autodisci-
te líquida, para impedir la existencia de cualquier fibra. plina y en el autocontrol, este libro parece ser el primer ejem-
Aconsejó: «No comas hasta que no tengas realmente hambre» plo en el que la falta de autorregulación se reconoce como
y «No permitas sentimientos tristes o desagradables a la hora razón destacada del fracaso en el control del exceso de peso.
de las comidas». Entre los alimentos recomendados, sin lími- La primera báscula de uso doméstico, la Helath-O-Meter
te de cantidad se contaban las judías, el pan de maíz y las fue vendida inicialmente por la Continental Scale Company
patatas, mientras se abogaba por un consumo mínimo de hue- en 1919.
vos, pero no de carne, alcohol, café o té.2 La masticación Una dieta muy baja en calorías, la dieta Hollywood, de
minuciosa, o fletcherismo, tal y como esta práctica fue deno- autor desconocido, apareció alrededor de 1930, También se la
minada, ha renacido como elemento de la educación del conoce como la dieta del pomelo o de la Mayo Clinic Diet, si bien
paciente sometido a cirugía bariátrica, y resulta particular- el célebre centro clínico la desautoriza por completo. Diferentes
mente importante para aquellos cuya cirugía implica restric- versiones recomiendan comer entre aproximadamente 585 y
ción gástrica. 850 calorías al día, incluyendo sólo pomelo, huevo duro, verdu-
El origen de los copos de maíz de Kellogg radica en la ras verdes, café y tostadas.7 La dieta aporta mucha fibra y vita-
defensa del Dr. John Harvey Kellogg (1852-1943) de la impor- mina C, pero es deficitaria en otros muchos nutrientes, siendo
tancia de la masticación y del desacuerdo con la advertencia de peligroso su seguimiento durante un período largo de tiempo.
Fletcher de evitar la fibra. Además, educado en la iglesia de los También es cuestionable el hecho de que la dieta contenga una
adventistas del séptimo día, que promulga un régimen de comi- enzima especialmente consumidora de grasas; hasta el momen-
da vegetariano y la práctica de ejercicio, Kellogg cofundó la to no se ha identificado ninguna de este tipo.
American Vegetarian Society (1886) y se encargó del Adventist En los años treinta se utilizaron diferentes dietas a base
Sanitarium, donde puso en marcha su programa. Él y su her- de algas. Actualmente, la popularidad de estas dietas ha
mano, William Keith Kellogg, fundaron también la Sanitas resurgido junto a la comida japonesa. Sin embargo, algunos
Food Company. dedicada a la producción de cereales integrales.3 científicos británicos han encontrado recientemente una
Después de un desacuerdo grave sobre el hecho de añadir o no gran cantidad de arsenoazúcares o sus metabolitos en ciertas
azúcar a sus cereales, William fundó su propia compañía, la algas.8 La sopa de algas y varias cremas para la piel han sido
Capítulo 11 • Métodos no quirúrgicos de pérdida de peso 85

también comercializadas con el sorprendente argumento de tosis, debidos a la cetosis. El Dr. Stillman moriría más tarde
disolver el exceso de grasa subcutánea del cuerpo. de un ataque cardíaco.
El aceite mineral utilizado como sustitutivo de la grasa Una dieta con un alto contenido en grasas (incluidas gra-
de la dieta apareció por primera vez en 1943, cuando Marion sas saturadas), proteínas y bajo contenido en carbohidratos,
White publicó Diet without Despair, defendiendo el uso de fue introducida en 1972 por el cardiólogo Robert C. Atkins,
este aceite no absorbible en lugar del aceite de oliva, como su poco más de un siglo después de que Banting popularizara la
principal fuente de grasa en la dieta.9 Esta defensa puede primera dieta alta en grasas.13 La dieta de Atkins fue reintro-
considerarse el elemento precursor de las moléculas grasas ducida hace varios años y condenada por la mayoría de la cla-
sintéticas no absorbibles de nuestra época, como de hoy en se médica, en especial por su uso no restringido de grasas
día, como el olestra. Además del valor nutricional mínimo saturadas y por graves limitaciones en la ingesta de los carbo-
de esta dieta, el uso a voluntad de aceite mineral provocó hidratos. Aunque se trata de un ámbito ciertamente contro-
efectos secundarios tales como dolor abdominal, flatulencia, vertido, la investigación ha demostrado que las dietas bajas en
distensión abdominal y diarrea. carbohidratos producen, al menos durante los primeros
6 meses, una mayor pérdida de peso que la obtenida con dietas
Era moderna pobres en grasa, al mismo tiempo que se produce una reduc-
ción de los lípidos en sangre. La dieta del Dr Atkins adquirió
El primer sustitutivo del azúcar, la sacarina (benzosulfamida) gran popularidad y generó toda una nueva industria de pro-
fue descubierto por accidente en 1878 por dos científicos de la ductos bajos en carbohidratos, los conocidos como «low-carb».
Universidad Johns Hopkins, al encontrar una sustancia dulce La popularidad de esta dieta fue decayendo desde la muerte
en un derivado del tolueno. Ya en 1907 se usaba como sustitu- del Dr. Atkins y su empresa entró hace unos años en suspen-
tivo del azúcar en alimentos para diabéticos. En 1963 fue uti- sión de pagos, aunque la investigación al respecto sigue ade-
lizada por los fabricantes de Tab, el primer refresco sin azúcar, lante. Las recomendaciones actuales se centran en que, antes
y fue reproducido a escala masiva por otros fabricantes de de considerar el posible uso de esta dieta en pacientes, es nece-
bebidas. Más tarde se introdujeron otros sustitutivos del sario esperar a disponer de resultados a largo plazo.
azúcar. El aspartamo apareció en 1981 y el acesulfamo-k La dieta de proteína líquida con ayuno fue desarrollada
fue aprobado por la Food and Drug Administratio (FDA) en en los años setenta por el osteópata Robert Linn, autor de The
1988 como un sustitutivo del azúcar en forma de sobre o Last-Chance Diet.14 La proteína de Linn, a la que se llamó
tableta, en chicle, en mezclas secas para bebidas, en café y Prolinn, estaba elaborada a partir de proteína de colágeno
en té instantáneos, y en postres de gelatina, pudines, cre- hidrolizada obtenida de piel, cuernos y pezuñas de bovinos, e
mas no lácteas, aunque no en refrescos ni productos de incluía colorantes y sabores artificiales. Con menos de
repostería. Por su parte, la sucralosa fue aprobada por la 400 kcal por día, este régimen era una suerte de semiinani-
FDA en 1988 para su uso en múltiples categorías de ali- ción efectiva, incompleta y con proteínas de baja calidad. El
mentos y bebidas. A pesar de que todos estos productos han Dr. Linn aconsejó utilizar las proteínas varias veces al día
sido aprobados por la FDA, los consumidores y otros gru- como interrupción del ayuno. La conocida como Cambridge
pos han expresado su preocupación acerca de su potencial Diet derivaba de esta.15
toxicidad, carcinogenicidad y otras cuestiones. Por su parte, Optifast era un programa comercial de
El grupo de apoyo para la pérdida de peso y el recuento pérdida de peso mediante ayuno supervisado médicamente
de calorías Weight Watchers, fundado en 1963 por Jean introducido en 1974. Revindicaba una pérdida media de peso
Nidetch, un ama de casa de Brooklyn, de obesidad creciente, importante en aquellos que completaran el tratamiento que
y su socio, Al Lippert, es ahora una compañía de propiedad fueron, desafortunadamente, un porcentaje más bien peque-
pública.10 Surgió a partir de la colaboración de un grupo de ño de los que lo iniciaron. No obstante, en combinación con
seis amigos con sobrepeso que habían empezado a reunirse técnicas de modificación de la conducta y bajo supervisión
dos años antes y que utilizaban como estrategias el apoyo médica, programas de ayuno suplementado como este pue-
motivacional, la autoayuda, las discusiones guiadas por el den constituir una buena estrategia inicial para el tratamien-
líder del grupo, el tamaño estricto de las porciones y el con- to de pacientes obesos.16
trol calórico (de 1200 a 1600 kcal/día). Sus actividades, de las En 1979 apareció una dieta alta en fibra y baja en grasas
que se puede entrar a formar parte con un relativamente bajo descrita por Robert Pritikin, un ingeniero electrónico, quien
coste de inscripción, se mantienen hoy en día. En 1996 la la presentó como el programa Pritkin de dieta y ejercicio.17
sociedad presentó un sistema para el recuento calórico. Sus Combina una baja cantidad de grasa (⬍10%) con una alta
resultados en la pérdida de peso inmediata y a corto plazo es cantidad de fibra y anima al consumo de alimentos con car-
equiparable al de otros programas dietéticos. bohidratos complejos y con fibra, como las frutas y las ver-
En 1967 se publicó el libro The Doctor’s Quick Weight duras. En algunos estudios sobre dietas para la disminución
Loss Diet, del Dr. Irving Stillman,11 que defendía una dieta del colesterol se ha producido un incremento significativo del
alta en proteínas y baja en carbohidratos. Basado en el hecho número de suicidios en individuos con bajos niveles de coles-
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contrastado de que la eficacia térmica en la asimilación cor- terol en sangre. El propio Nathan Pritikin se suicidó en
poral de las proteínas es menor que la de otros nutrientes, su febrero de 1985.
dieta permitía sólo el consumo de pescado, carne magra, Una dieta rica en frutas, la llamada Beverly Hills Diet, en
queso, leche desnatada y agua, sin grasas ni carbohidratos. la cual sólo se permiten frutas en los primeros 10 días, apare-
El autor anunciaba una pérdida de peso total de hasta 6 kg ció en 1981. Su autora, Judy Mazel, actriz sin formación en
por semana. Once años después, en 1978, su coautor, Sam nutrición, empezó la dieta con un plan de 35 días. Durante los
Sinclair Baker, también colaboró en el libro Complete primeros días, la ingesta se limitaba a la fruta, período tras el
Scarsdale Medical Diet,12 que sigue esencialmente los mismos cual se introducían carbohidratos y mantequilla; añadiéndose
principios y que, no obstante, presenta algunas carencias proteínas en el día 19. Defendía que la papaya y la piña tenían
nutricionales serias. Aquellos que han utilizado esta dieta enzimas quemadoras de grasa que actuaban en la grasa de los
han experimentado estreñimiento, náuseas, debilidad y hali- adipocitos. Adicionalmente, aconsejaba a sus lectores el comer
86 Sección III • TRATAMIENTO NO QUIRÚRGICO

alimentos no enfrentados entre sí, en una reminiscencia de la mitidas en ningún momento de la dieta. La fase tres permite
cuestionable doctrina del Dr. William Howard Hay, ya una mayor variedad de alimentos, para el mantenimiento del
comentada. Peligrosamente baja en proteínas, así como en peso a lo largo de la vida. Dado que el valor glucémico varía
varias vitaminas y minerales, sus recomendaciones dietéticas con la ingesta al tiempo de varios alimentos, no parece lógico
carecían de fundamento científico. prohibir todos los alimentos con alto valor glucémico.
Una dieta vegetariana alta en fibra, con un contenido
menor del 10% en grasas, con una ingesta no restringida de
judías, legumbres, frutas, cereales y verduras, acompañada Z MODIFICACIÓN DEL COMPORTAMIENTO
de ejercicio moderado, es la base del libro del médico Dean Y PÉRDIDA DE PESO
Ornish, M.D., Eat More, Weigh Less (Coma más, pese menos),
de 1982.19 Se trata de una adaptación de la dieta que creó Muchas personas, tanto de la comunidad científica como aje-
como tratamiento para la enfermedad cardíaca. nas a ella, tienden a ver la obesidad como un problema basado
La dieta con alto contenido en fibra, conocida como principalmente en unos «malos» hábitos de comida comple-
F-Plan, fue introducida en 1983 y está basada en la teoría de mentados con falta de autocontrol ante la oferta de la comida
Audrey Eyton, según la cual la fibra llena el estómago y reduce tóxica tan abundante en EE. UU. Se oyen con frecuencia fra-
el deseo de seguir comiendo. La doctora Eyton promovió un ses aleccionadoras y vacuas, habitualmente pronunciadas por
plan dietético alto en fibra, bajo en grasas y con control del individuos no obesos, tales como: «¡Lo único que tienen que
número de calorías.20 A pesar de ser útiles como fijadoras hacer es coserse la boca!» o «¡Que aprendan a comer menos!».
del colesterol y tener muchos otros beneficios para la salud, El concepto de que la obesidad tiene una causa psicogénica. en
las dietas con muy alto contenido en fibra y cereales integra- la cual participa, entre otras cosas, una percepción inconscien-
les producen a veces una disminución de la absorción de te de la comida que hace comer más de lo necesario, ha sido
magnesio, calcio, zinc, fósforo y otros nutrientes; estreñi- admitido de forma generalizada durante décadas.25
miento, si la dieta no se acompaña de un incremento de la Sin embargo, si el comportamiento fuera un factor tan
ingesta de agua; y molestias gastrointestinales, si se introdu- poderoso y fundamental, la terapia conductual tendría que
ce demasiado rápido.21 haber sido más efectiva en el control del peso en la mayoría de
La pérdida de peso anatómicamente selectiva mediante los sujetos obesos. Al contrario, la obesidad parece ser muy
dieta o la reivindicación de conseguirla eran los argumentos resistente a la terapia conductual. Tampoco la psicoterapia ha
propuestos por Rosemary Conley, quien en 1983 publicó The demostrado ser una cura efectiva para la obesidad. La ausencia
Complete Hip and Thigh Diet. Ni en el libro ni en otros docu- de un tipo de personalidad específico para la obesidad, de una
mentos que puedan apoyar esta soprendente oferta existe la «psicopatología de la obesidad» intrínseca, también va contra
menos base científica.22 la idea de que el comportamiento pueda ser una causa impor-
El objetivo de la distribución porcentual de carbohidra- tante de obesidad. A falta de estudios psicoterapéuticos con-
tos-grasa-proteína en una secuencia 40-30-30 evitando carbo- vincentes y controlados que demuestren lo contrario, la causa
hidratos «malos» como los de pan, pasta, zanahorias, aránda- básica de obesidad parece no tener un origen conductual.
nos y maíz, es la base de la dieta baja en glúcidos descrita por el El comportamiento es más bien un potenciador del de-
bioquímico Barry Sears (1947) en su libro The Zone: A Dietary sarrollo y mantenimiento de la obesidad, que probablemente
Road Map to Lose Weight Permanently, Reset Your Genetic Code, contribuya al incremento de la epidemia global de obesidad
Prevent Disease, Achieve Maximum Physical Performance, publi- registrada en las últimas décadas, dado que no se puede atri-
cado en 1995.23 Sears hace hincapié en la importancia de los buir únicamente a razones genéticas. Otro elemento etioló-
eicosanoides y los beneficios de estos en la dieta a la hora de gico destacado radica lógicamente, en nuestro ambiente, que
reducir la hiperinsulimenmia y la producción de insulina que promueve la obesidad, y en la cultura de la permisividad y la
influye negativamente en el almacenamiento de grasa. Más plenitud, alimentada comercialmente por los proveedores de
recientemente, Sears ha criticado las nuevas recomendaciones todo tipo de comidas baratas, ya preparadas, muy atractivas
de la pirámide nutricional, por otorgarle demasiada importan- y densas en calorías.
cia relativa a los carbohidratos de «alta densidad y de alto valor A pesar de que el comportamiento no parece ser la cau-
glucémico». La American Heart Association clasifica la Zone Diet sa principal de la obesidad, la terapia conductual dirigida a
como una dieta alta en proteínas, y por tanto no recomendable esta enfermedad parece desempeñar un papel importante
para la pérdida de peso. desde un punto de vista más amplio. Brownell y Kramer lo
El cardiólogo Arthur Agatston diseñó para sus pacientes expresaron de una forma muy realista: «la modificación del
una dieta alta en grasas monoinsaturadas con un índice glucé- comportamiento, por tanto, está dirigida a la mejoría en los
mico bajo que permitía porciones ilimitadas, de modo que hábitos de alimentación de la persona obesa, más que a la
pudieran reducir la hiperinsulinemia desencadenante de ape- detección de la la etiología de estos hábitos».26 Al servicio de
tito y, en consecuencia, el almacenamiento de grasa. La publi- esta causa, la terapia conductual orientada a la modificación
có en 2003 denominándola «dieta de South Beach».24 La pri- del comportamiento en lo que respecta al consumo de calo-
mera de las tres fases de esta dieta requiere dos semanas de rías, se ha convertido en una modalidad de tratamiento de
restricción importante de carbohidratos, comiendo funda- notable aceptación, que todavía debe ser depurada.
mentalmente carne magra, pescado, huevos, queso bajo en Unos de los principales componentes del tratamiento de la
grasa, nueces y aceite de oliva, lo que produce generalmente obesidad es la modificación del comportamiento, también
una pérdida de peso de 3,6 a 5,85 kg. Los carbohidratos con conocida como terapia conductual. Una gran variedad de ele-
índice glucémico bajo son introducidos de forma gradual en mentos educacionales están incluidos en este ámbito. La mayo-
la fase dos, hasta que se alcanza una pérdida de peso de 0,5 a ría de los programas consta de elementos modulares, que inclu-
1 kg por semana. A diferencia de la dieta Atkins, la de Agatston yen, entre otros, automonitorización por parte de los pacientes,
es baja en grasas saturadas, promueve las monoinsaturadas y control de los estímulos, autocontrol, modificación del com-
no restringe de forma grave los carbohidratos después de las portamiento cognitivo, establecimiento de objetivos, apoyo
dos primeras semanas. La nata y la mantequilla no están per- social, autoestima, práctica de la asertividad, ejercicios de rela-
Capítulo 11 • Métodos no quirúrgicos de pérdida de peso 87

jación, parámetros de cambio de comportamiento, educación en mujeres de igual condición. Dado que su falta de forma
nutricional, programación mental, técnicas de relajación, ima- física también parece estar asociada a una mayor morbilidad
gen corporal, autoimagen, control del estrés, establecimiento postoperatoria y a una mayor tasa de mortalidad, el ejercicio
de objetivos conductuales, ayuda al mantenimiento y trata- preoperatorio debería tal vez ser considerado en los mismos
miento de las contingencias (recompensas). Con el tiempo, los términos que la pérdida de peso preoperatorio, en particular
programas suprimen los componentes modulares que parecen en aquellos individuos con obesidad en la región superior del
se demuetran menos satisfactorios y los reemplazan por las cuerpo, donde reside el mayor riesgo perioperatorio.
alternativas que parezcan resultar más efectivas.
Estos asuntos son con frecuencia analizados en grupos de El ejercicio y sus objetivos
discusión de modificación conductual, convocados, por ejem-
plo, con periodicidad semanal, como parte de un programa de Se considera ejercicio cualquier movimiento inducido del
pérdida de peso. Se pueden utilizar recursos audiovisuales, músculo esquelético que produzca gasto de energía, fenóme-
competiciones de pérdida de peso, folletos publicitarios, tareas no que puede ocurrir en cualquier ambiente y bajo una
para hacer en casa, algunas veces colectivas, técnicas de medi- amplia diversidad de circunstancias.
tación y salidas en grupo, destinadas a aprender a adquirir El objetivo de tal ejercicio no tiene por qué ser la mejora
productos más saludables. Los instructores de este tipo de de la función cardiovascular, objetivo que con frecuencia
procesos pueden contar con formación básica o bien ser médi- requiere un nivel de intensidad que muchos pacientes con
cos, trabajadores sociales o psicólogos. Esta estrategia tam- obesidad mórbida pueden no ser capaces de alcanzar. Sin
bién se puede ampliar a través de Internet. Las sesiones de embargo, cualquier tipo de ejercicio representa un gasto de
terapia individual tradicional también se emplean, aunque energía adicional por encima de la tasa basal y, por sí mismo,
resultan más costosas y gozan de menor aceptación. contribuye a un balance negativo en relación a la ingesta caló-
Se diferencian distintos factores de predicción del éxito o rica. Empezar en algún momento es siempre preferible a no
del fracaso de los programas de pérdida de peso basados en la empezar. Ese inicio siempre reportará algún beneficio futuro,
modificación conductual. La recuperación de peso es más particularmente en personas que están en mala forma física.
probable cuando se siguen patrones alimenticios relacionados
con algún componente emocional, con atracones de comida, El ejercicio no acompañado de una dieta de pérdida
con pérdidas de peso iniciales de escasa entidad, o con situa- de peso tiene efectos limitados
ciones de estrés, tales como problemas familiares o actitudes
negativas. En cambio, es más fácil lograr el éxito si se insiste La obesidad se asocia a un mal estado de forma física debido a la
en el establecimiento de un objetivo realista y se cuenta con inactividad. En este contexto, el incremento regular del gasto de
una red de apoyo social y se procede a automonitorización energía por medio de ejercicio puede crear un balance energéti-
continua, resolución de los problemas afectivos, práctica de co negativo que dé lugar a una reducción de la grasa corporal.
ejercicio no excesivo, regular y mantenido, fomento de la Sin embargo, en comparación con la dieta, el ejercicio por sí sólo
autoestima, tratamiento duradero y contacto continuado con requeriría el tratamiento de 17 pacientes para lograr que 1 solo de
los terapeutas. Tales estrategias siempre han contribuido a ellos llegara a perder 5 kg. El ejercicio por sí mismo, sin dieta,
ayudar a los obesos a perder cantidades de peso modestas.27 tiene por lo general poco éxito en la pérdida de peso.19
La modificación conductual es recomendada a los pacien-
tes como parte del tratamiento clínico de la obesidad, en el cual La dieta junto con el ejercicio aumenta la pérdida
participa un equipo que incluye a un médico y un nutricionista. de peso
Estos son responsables de la evaluación y la planificación (a lo
largo de una media de 4 a 6 semanas), de la puesta en marcha La combinación de dieta y ejercicio produce más pérdida de
del tratamiento (hasta 1 año) y del mantenimiento del peso a peso que la alcanzable sólo con uno de ellos. También parece
largo plazo (de 1 a 5 o más años). Los programas más efectivos haber pruebas de que, a pesar de que la dieta sola permitiría
combinan modificación conductual, ejercicio y dieta. alcanzar mayor pérdida de peso que el ejercio sin dieta, la acti-
vidad física sola se asocia al mantenimiento del peso perdido
mejor que la dieta sola a largo plazo. En última instancia, el
Z EJERCICIO mantenimiento del peso perdido depende de la magnitud del
gasto energético adicional aportado regularmente por el ejer-
Bajos niveles de forma física en obesos mórbidos, cicio. En la mayoría de los casos, debido al bajo nivel de forma
especialmente en varones de la población de obesos mórbidos, su gasto energético con el
ejercicio es relativamente bajo, aunque se requiere menos para
Los varones con obesidad mórbida parecen estar menos en el mantenimiento del peso que para su pérdida activa.
forma desde un punto de vista físico y bioquímico que las
mujeres en su misma situación. Un estudio transversal en El ejercicio ayuda a mantener el peso perdido
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reposo y ejercicio encontró que el V̇O2 en mujeres era signifi- y mejora la forma física
cativamente más alto que en varones (el 119% frente al 92% del
valor predicho). El umbral anaeróbico de las mujeres también Además de otros beneficios, el ejercicio regular a largo plazo
fue significativamente más alto que el de los varones (el 64% parece ser importante en la fase de mantenimiento de peso tras
frente al 48% del valor predicho). La masa libre de grasa su pérdida. En esta fase, el individuo intenta mantener su nuevo
(MLG), los índices MLG, la glucemia en ayunas y los niveles nivel basal. Ello requiere menos gasto extra de calorías que el
de insulina masculinos fueron asimismo mayores que en las necesario para la pérdida de peso real. Por tanto el manteni-
mujeres.28 La tendencia de los varones de ser más descuidados miento depende de conservar el gasto calórico suficiente como
y menos sanos en general que las mujeres es una de las razones para compensar la ingesta. Un individuo con un peso estable
que influyen en la necesidad de que en los varones con obesi- que se ejercitara para gastar 100 kcal adicionales cada día en un
dad mórbida la necesidad de practicar ejercicio sea mayor que año, perdería alrededor de 5 kg de peso. Sin embargo, dada la
88 Sección III • TRATAMIENTO NO QUIRÚRGICO

frecuente aparición de recidivas después de una fase de pérdida fican los límites que necesitan o que quieren cambiar. La auto-
de peso, en ocasiones debidas a un menor gasto energético basal monitorización es una herramienta eficaz para proporcionar a
como resultado de la pérdida de masa corporal magra, estas mis- los pacientes una retroalimentación de primera mano.
mas 100 kcal de energía gastadas diariamente mediante ejerci- Para ayudar a mantener y confirmar el cumplimiento
cio, permiten la prevención de la recuperación de 5 kg de peso a con el proceso de automonitorización, los pacientes deben
lo largo de 1 año y por cada año sucesivo. Además de favorecer mantener registros de sus programas de ejercicio y llevarlos
el mantenimiento de peso, el ejercicio también puede mejorar la a cada consulta. Es recomendable que el personal instruya
forma física, registrada en este caso a través del V̇O2max, que, convenientemente al paciente de forma que sea capaz de
según un estudio puede registrar una mejora del 20%.29 registrar claramente el número de minutos de ejercicio, el
tipo de ejercicio que realiza y el número de pasos (o kilóme-
Entrenamiento previo al ejercicio y realización tros) que camina al día. Es también útil que el paciente regis-
de pruebas tre la intensidad percibida de cada ejercicio de forma que
pueda monitorizar su evolución también en este aspecto.
Antes de prescribir ejercicio a los pacientes, es recomendable
completar la anamnesis y la exploración física para detectar Podómetro
y documentar cualquier limitación músculoesquelética, fac-
tores de riesgo cardiovascular o medicaciones que puedan Los podómetros son útiles para la monitorización de las acti-
interferir con un programa de ejercicios. Es importante exa- vidades del paciente, para su propia información y para la del
minar y detectar cualquier síntoma o signo de enfermedad personal que sigue el programa de pérdida de peso. Algunos
pulmonar o cardiovascular. estudios han demostrado que los pacientes que registren
Las pruebas previas al ejercicio están indicadas en pacientes 10.000 pasos o más al día probablemente alcancen los requi-
en que la anamnesis y la exploración física revelen soplos cardía- sitos de actividad física necesarios para el adecuado manteni-
cos presentes o posibles, enfermedad pulmonar, incluidas asma miento de peso. En primer lugar, los pacientes deben obtener
y enfermedad pulmonar obstructiva crónica, enfermedad car- cifras basales, correspondientes a los pasos de un día normal.
diovascular, incluida la vascular periférica; síndrome metabóli- Con estos datos, el personal del programa puede trabajar con
co, disnea con ejercicio leve o moderado, edema maleolar o en el paciente para fijar objetivos de ejercicio, por ejemplo,
los tobillos, disnea paroxística nocturna, fatiga inusual o palpi- con incrementos semanales de 200 a 500 pasos al día, hasta
taciones, taquicardia, claudicación intermitente, enfermedad alcanzar el nivel deseado.
cerebrovascular o morbilidad similar. Como la mayoría de la
población con obesidad mórbida sufre una o más de estas pato-
logías, es importante realizar pruebas antes de establecer un Z POLÍTICA DE LA CONSULTA
ejercicio adecuado. Y PROCEDIMIENTO PARA SUPERVISAR
LA AUTOMONITORIZACIÓN DE LOS PACIENTES
Recomendaciones de ejercicio para la pérdida de peso
Para optimizar los esfuerzos de los pacientes, es importante
Tal y como se ha indicado, para combatir una recaída tras desarrollar un plan coordinado con el personal de la consulta
una pérdida de peso satisfactoria, es importante animar a los para monitorizar cuidadosamente y motivar de forma cons-
pacientes a que alcancen un nivel de ejercicio de intensidad tructiva sus progresos. Uno o dos miembros del personal, jun-
moderada, por lo menos de 4 a 5 veces por semanas durante to con el médico responsable del programa, deben desarrollar
30 minutos o más. Si el mantenimiento del peso empieza a directrices y procedimientos destinados a ajustar la monitori-
fallar, el tiempo de ejercicio deberá prolongarse y será nece- zación regular, sostenida y cuidadosa y las necesidades de ase-
sario reimplantar el asesoramiento nutricional. Desde una soramiento de los pacientes durante el programa de ejercicio.
perspectiva realista, los pacientes pueden necesitar una hora En este trabajo, también es útil desarrollar listas de programas
o incluso más para mantener el peso a largo plazo.30 de ejercicio otros recursos locales, por catálogo o por Internet,
Según nuestra experiencia, el ejercicio que mejores o una pequeña colección de prospectos u otro tipo de referen-
resultados da a largo plazo en pacientes con obesidad mórbi- cias bibliográficas, y grabaciones de audio o vídeo para la for-
da es caminar. Debe animarse a los pacientes a establecer mación y la motivación de los pacientes. También es importan-
una rígida rutina de paseo durante una determinada canti- te estimular, monitorizar y educar a los pacientes, en términos
dad de tiempo e insistir en caminar es un cambio esencial en sencillos, acerca de sus avances en los valores bioquímicos
el estilo de vida, que por tanto supone una prioridad de pri- (p. ej., el nivel de lípidos en sangre), particularmente en el caso
mer orden. Con frecuencia es necesario un acompañante de los que están alcanzando o manteniendo a través del ejerci-
para estimular al paciente y combatir la fuerte tendencia cio regular a largo plazo.
hacia la recidiva que tiene la obesidad mórbida.
Resistencia a la insulina y pérdida de peso
Automonitorización
La resistencia a la insulina del músculo esquelético implica un
La voluntad y la capacidad de los pacientes para seguir las indi- desequilibrio en el metabolismo de la glucosa y los ácidos gra-
caciones referidas a la manera de controlarse a sí mismos es un sos. Parece existir consenso acerca de que el tratamiento de este
excelente indicador pronóstico del posible éxito en la pérdida de desequilibrio mediante pérdida de peso reduce la resistencia
peso. Es conveniente poner a prueba a los pacientes pidiéndoles insulínica, con una mejora concomitante en el metabolismo de
que comiencen a controlar su propia evolución, incluyendo el los ácidos grasos y de la glucosa en el músculo esquelético.31 Sin
seguimiento del ejercicio, casi desde el principio del programa embargo, resulta útil precisar si el ejercicio alcanza este efecto
de pérdida de peso. Las ventajas de ello son que, a través de la por sí mismo, independientemente de la pérdida de peso.
automonitorización, los pacientes obtienen una mejor compren- Se ha demostrado que una única sesión de ejercicio puede
sión de la importancia del ejercicio y de otros patrones e identi- mejorar de forma aguda la sensibilidad a la insulina, aunque
Capítulo 11 • Métodos no quirúrgicos de pérdida de peso 89

este efecto no es duradero. Se disipa en unos días o incluso Únicamente existen dos fármacos antiobesidad aprobados
menos y, como es lógico, la pérdida de peso no se modifica en para pacientes por más de 12 semanas. Uno de ellos, sibutrami-
este breve período.32 El ejercicio a largo plazo en obesos tam- na, es un supresor del apetito. El otro, orlistat, es un inhibidor
bién mejora la sensibilidad a la insulina poco sostenida sin de la lipasa que bloquea la absorción de aproximadamente una
cambios en el peso.33 Por contra, los individuos no obesos, en tercera parte de la grasa ingerida. Pueden ser prescritos para su
buena forma y con un estado de peso regular, generalmente uso durante un máximo de 2 años. Sin embargo, el tratamiento
muestran baja resistencia a la insulina34 y una alta oxidación con orlistat puede prolongarse un año más en pacientes que
de las grasas en el músculo esquelético durante el ejercicio.35 hayan demostrado pérdida de peso sostenida y buena tolerancia
Las tasas de oxidación más bajas en los obesos predicen la cau- a la medicación.40 El fracaso del tratamiento y los efectos de la
sa de su aumento de peso y parecen estar relacionadas con malabsorción de la grasa, incluidos secreciones grasas, impulso
ellas.36 También son, lógicamente, factores predictivos de un de defecación urgente, incontinencia fecal, flatulencia, calam-
inadecuado mantenimiento del peso a largo plazo tras una die- bres abdominales y diarrea, fue la causa de que el 12,9% de los
ta que haya dado lugar a buenos resultados a corto plazo.37 sujetos voluntarios abandonasen un ensayo de orlistat de
Un estudio de pérdida de peso sin ejercicio en obesos 104 semanas.41 La asociación de consumidores Public Citizens
mostró una mejoría en su utilización de la glucosa estimulada hizo recientemente una petición a la Food and Drug Administration
por insulina, aunque no modificó sus tasas de oxidación de (FDA) de EE. UU. para que se retirara sibutramina del merca-
lípidos en ayunas.38 Ello llevó a plantearse la obvia pregunta do, debido a sus conocidos efectos hipertensivos. En un metaaná-
de si incorporar ejercicio a un programa de pérdida de peso lisis, la efectividad documentada de estos fármacos fue de menos
con una dieta restrictiva mejoraría de forma significativa los de 4,5 kg de pérdida de peso neta frente al valor con placebo.42
patrones de oxidación de lípidos en ayunas, además de la resis- Esta falta de eficacia, o quizá los efectos secundarios, pueden ser
tencia a la insulina. Un estudio de seguimiento demostró que los responsable del uso breve de sibutramina (102 días) y orlistat
el ejercicio con pérdida de peso potenciaba significativamente (110 días) en sólo el 2,4% de los adultos menores de 65 años
la oxidación postabsortiva de grasas y mejoraba la sensibilidad cuyos seguros cubrían esta mediación.41,43 Otros seis supreso-
a la insulina. También mostró que el ejercicio con restricción res del apetito tienen actividad simpaticomimética similar a
de calorías mejora mucho la sensibilidad a la insulina, un 49% anfetamina, pero están aprobados para un uso máximo de
(⫾10%), tasa que fue igual en varones que en mujeres. La 12 semanas: fentermina, macindol, fenilpropanolamina,
mejoría de la sensibilidad a la insulina se debió al incremento anfepramona, benzfetamina y fendimetracina.44
del depósito de glucosa no oxidativa, que fue del 159%. Sin Otros dos fármacos contra la obesidad están en fase III y
embargo, no se produjo ningún cambio en las tasas de oxida- otros 19 en fases previas45. Uno es rimonabant, que parece
ción de la glucosa inducida por insulina.39 bloquear una vía del hambre insaciable en el cerebro (canabi-
Una importante consideración sobre la sensibilidad a la noide). El fármaco produjo una pérdida de peso de más del
insulina se centra en establecer si los cambios inducidos en 10% en 1 año en casi la mitad (el 44%) de los sujetos volunta-
la grasa corporal total o regional son predictivos o no de la rios, mientras que con placebo la pérdida afectó sólo al 10%
mejoría de la sensibilidad a la insulina. Varios estudios han de los pacientes. En sujetos no tratados con placebo que com-
llegado a la conclusión de que la pérdida de grasa corporal pletaron 2 años de estudio se documentó una pérdida media
total, subcutánea abdominal y subfascial del muslo –no así la de 7,2 kg.46 Un grupo de medicamentos descritos como esti-
pérdida selectiva de grasas visceral o subcutánea del muslo- muladores de receptor ␤-3 están dirigidos a aumentar la acti-
se asoció a una mejoría en la sensibilidad a la insulina.39 vidad metabólica.47 Otros agentes han sido diseñados para
Los cambios en el V̇O2max y en el gasto de energía tendie- bloquear los efectos estimuladores de la grelina.48
ron a vincularse con mejoría en la sensibilidad a la insulina. Sin Probablemente, la aprobación de estos fármacos por parte
embargo, la correlación más significativa con ella fue la man- de la FDA aumentaría el uso de la medicación contra la obesi-
tenida con el incremento de las tasas de oxidación de grasa en dad en los estadounidenses con sobrepeso en más de un 60%,
ayunas, reflejada por la reducción del cociente respiratorio llegando incluso a superar los 12.000 millones de dólares en
(CR), que indica aumento de la de grasas en vez de la oxidación ventas alcanzados en 2004 por la estatina atorvastatina cálcica.
del sustrato de carbohidrato. Se observaron asociaciones simi- Ello se relaciona con el reciente anuncio de Medicare de que
lares con el componente no oxidativo de la sensibilidad a la reembolsará el dinero gastado en tratamientos «efectivos» con-
insulina.39 La adición de ejercicio a la dieta parece ser un tra la obesidad. Actualmente, el uso de medicación ha dismi-
aspecto clave en la mejoría de la sensibilidad a la insulina en la nuido mucho tras la retirada del mercado de una popular com-
obesidad. Lógicamente, ello debe tener un importante efecto binación de dexfenfluramina y fenfluramina, debido a que se
profiláctico en el desarrollo de este y otros componentes del han documentado casos de hipertensión pulmonar y complica-
síndrome metabólico. Claramente, el ejercicio a largo plazo ciones de la enfermedad cardíaca valvular asociadas a su uso.
como complemento de los programas de reducción de peso en Los fármacos sin receta y los productos a base de hier-
los obesos es esencial para mantener el peso perdido. bas se han utilizado desde hace tiempo. Por ejemplo, las
anfetaminas fueron muy usadas para la pérdida de peso hace
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más de 50 años, antes de que sus efectos adictivos fueran


Z FÁRMACOS CONTRA LA OBESIDAD reconocidos. Otros fármacos de venta sin prescripción simi-
lares a la anfetamina están disponibles en la actualidad.
Los fármacos para el tratamiento de la obesidad disponibles Existen razones para preocuparse y plantearse si estos
actualmente actúan a través de la supresión del apetito o de fármacos y otros productos herbales o similares deben conti-
la reducción de la absorción gastrointestinal. Su uso está nuar comercializándose. Esta posición es defendida por una
recomendado únicamente en personas con índices de masa revisión sistemática de datos referidos a recientes ensayos clí-
corporal (IMC) de 30 o más, así como en aquellos con IMC nicos doble ciego, con asignación aleatoria y controlados,
comprendido entre 27 y 30 kg/m2 que hayan desarrollado sobre suplementos herbales utilizados para la disminución del
dos o más enfermedades significativas asociadas con la obe- peso corporal.49 Los suplementos de hierbas incluían Ephedra
sidad, tales como hipertensión, diabetes o hiperlipidemia. sinica, Paullinia cupana, goma guar Plantago psyllium, Ilex para-
90 Sección III • TRATAMIENTO NO QUIRÚRGICO

guarienses y Pausnystalia johimbe. Los autores de estas revisio- 21. Reinhold JG, Faradji B, Abadi P, et al: Decreased absorption of calcium,
nes sacaron a la luz documentos sobre efectos adversos, inclui- magnesium, zinc and phosphorus by humans due to increased fiber and
phosphorus consumption as wheat bread. J Nutr 1976;106(4):493-503.
dos lesión hepática y muerte, que habrían ocurrido con el uso 22. Conley R: The Complete Hip and Thigh Diet. New York, Warner
de algunos de ellos. El aumento del riesgo de efectos adversos Books, 1990.
psiquiátricos, autónomos o gastrointestinales, así como taqui- 23. Sears B, Lawren B: The Zone: A Dietary Road Map to Lose Weight
cardia, fueron documentados específicamente en la Ephedra y Permanently, Reset Your Genetic Code, Prevent Disease, Achieve
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en suplementos alimentarios con efedrina. A pesar de que los 24. Agatston A: The South Beach Diet: The Delicious, Doctor-Designed,
revisores pensaban que la calidad de los datos no justificaba Foolproof Plan for Fast and Healthy Weight Loss. New York, Random
una relación de causalidad uniforme o definitiva, concluyeron House, 2003.
que los riesgos documentados de tomar estos suplementos 25. Kaplan HL, Kaplan HS: The psychosomatic concept of obesity.
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peso, no han demostrado ser beneficiosos en el tratamiento 28. Dolfing JG, Dubois EF, Wolffenbuttel BHR, et al: Different cycle
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para la obesidad mórbida. En ausencia de un avance espec- insulin sensitivity and glucose metabolism in lean, obese, and diabetic
men. J Appl Physiol 1991;71:2402-2411.
tacular no anticipado, parece que la situación tenderá a ser la 34. Goodpaster BH, He J, Watkins S, et al: Skeletal muscle lipid content
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12
Selección de pacientes para cirugía bariátrica
Heena Santry, M.D., John C. Alverdy, M.D., F.A.C.S., y Vivek Prachand, M.D., F.A.C.S.

La decisión de operar a un paciente está generalmente deter- se desarrollen si la obesidad persiste, y los deterioros psicoló-
minada por cuatro variables: la gravedad de la enfermedad gicos y de calidad de vida asociados a la obesidad.13-16
subyacente, la urgencia con la cual esta enfermedad debe ser Un importante principio en la selección es que la cirugía
tratada, la probabilidad de un buen resultado de la cirugía y para la reducción de peso es electiva y casi nunca asociada a
los riesgos asociados al procedimiento quirúrgico. La selec- una enfermedad concomitante que requiera una intervención
ción de pacientes para la cirugía bariátrica es particularmen- urgente. A pesar de que se ha probado que la obesidad es cau-
te delicada debido a la gran cantidad de situaciones que pue- sa de mortalidad precoz, se desconoce la inminencia del ries-
den plantear estas variables. go de muerte de un paciente determinado.13,17 Así, a pesar de
En este capítulo tratamos de cómo se debe abordar la que un médico tenga la capacidad de considerar globalmente
compleja cuestión de la selección de pacientes para esta cirugía. la decisión de operar, existe cierta urgencia en el proceso de
El rápido incremento de la incidencia de la obesidad ha ido toma de decisiones cuando se exagera el sentimiento de posi-
acompañado de un aumento del número de intervenciones, ble muerte inminente en el paciente y en su familia, al darse
estimado por la American Society of Bariatic Surgery en un extra cuenta de que la obesidad mórbida mina diaria y progresiva-
de 140.000 operaciones en 2004. La cuestión de la selección del mente todos los sistemas del organismo y lleva a una incapa-
paciente es difícil de comprender, no sólo para los cirujanos, cidad creciente y a una mortalidad prematura.
también para las aseguradores, médicos especialistas, grupos Como en todas las cirugías, la selección del paciente para
de control del riesgo, impulsores de políticas y pacientes, todos la cirugía bariátrica está estrechamente relacionada con la
ellos muy conscientes de la variabilidad en la selección de los percepción del cirujano y del paciente de los riesgos y de los
pacientes.1 En este capítulo no tratamos cuestiones referidas a beneficios de la intervención. Tanto el cirujano como el
los procedimientos de selección.2 Para un modelo formal de paciente deben comprender, de forma exhaustiva y basándo-
análisis de decisiones les remitimos al modelo Patterson’s se en pruebas, los beneficios de la cirugía bariátrica. No debe
Markov para cirugía bariátrica.3 Tampoco nos centramos en existir diferencia entre lo que constituye un resultado favora-
las cuestiones de análisis de coste-beneficio en relación con la ble para el paciente, para su familia y para el cirujano, y en los
cirugía bariátrica. Los costes para la sociedad de la obesidad y estándares aceptados de resultado satisfactorio en la cirugía
de las enfermedades relacionadas están bien establecidos, bariátrica. A pesar de que un paciente con diabetes avanzada,
y existen datos que han demostrado que la cirugía bariátrica que utilice más de 100 unidades de insulina al día, pueda
puede reducir en gran parte la carga financiera de la obesidad estar completamente curado 1 mes después de la cirugía, este
en el sistema de salud.4-11 Este capítulo se centra en la toma de éxito tan llamativo no es generalizable. En la mayoría de los
decisiones relativa a un candidato en particular. casos, la pérdida de peso y los beneficios relacionados pueden
producirse mucho tiempo después de la intervención. La
selección del paciente, por tanto, también debe considerar
Z RETOS EN LA SELECCIÓN DEL PACIENTE cuál es la definición de «éxito» tras la cirugía. Sin embargo,
medir el éxito sólo en términos de pérdida de peso resulta
La selección de pacientes para cirugía bariátrica plantea más complicado; los métodos óptimos para medir la pérdida de
retos que la selección en otros ámbitos de la cirugía, debido a peso no han sido todavía universalmente acordados.
la enfermedad subyacente, a su tratamiento y a que los resul- La pérdida de peso puede ser interpretada en términos
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

tados de este no son fácilmente perceptibles. Atul Gawande de reducción de grasa corporal total, porcentaje de exceso de
describe la cirugía bariátrica como «el tratamiento más drás- peso perdido, o cambios en el índice de masa corporal
tico que tenemos para la obesidad... (y como) una de las inter- (IMC). Cada una de estas medidas está limitada en su capa-
venciones más extrañas llevadas a cabo por los cirujanos. No cidad de distinguir entre la pérdida de masa grasa total, de
elimina ninguna enfermedad, no repara ningún defecto o masa magra corporal y de agua corporal total. Más allá de la
lesión. Es una intervención que tiene la intención de controlar pérdida de peso absoluta, la definición de éxito también debe
los deseos de una persona: manipular sus vísceras digestivas considerar la mejoría o la resolución de enfermedades aso-
para que no coma más de lo necesario...».12 Pero la gravedad ciadas y la presunta prevención de enfermedades futuras, así
de la obesidad mórbida no sólo se predice en función del peso como la mejoría en la calidad de vida. Además, el éxito no
real del paciente, sino también por la presencia de enfermeda- sólo debe ser el resultado de las habilidades técnicas del ciru-
des concomitantes, la posibilidad de que otras enfermedades jano, sino también de la capacidad del paciente de adaptarse
93
94 Sección IV • ASISTENCIA PREOPERATORIA, PERIOPERATORIA Y POSTOPERATORIA

a los cambios en el estilo de vida derivados de la cirugía y de


Tabla 12-1 RESUMEN DE LOS CRITERIOS
cumplir con los comportamientos necesarios para mantener DE SELECCIÓN DE LOS PACIENTES,
el peso perdido. DECLARACIÓN DE CONSENSO
La cirugía bariátrica ha sido calificada de «cirugía del DE LOS NIH, 1991
comportamiento», en la cual un resultado satisfactorio
requiere más educación pre y postoperatoria del paciente El paciente es adulto (específicamente, no adolescente)
que cualquier otra.18 Tras muchos abordajes quirúrgicos de El IMC del paciente es:
1. Superior a 40
una enfermedad compleja, la reinstauración de procesos pre- 2. Entre 35 y 40, con patologías comórbidas
cursores de enfermedad (p. ej., reaparición de enfermedad 3. Entre 35 y 40, con limitaciones funcionales debidas al tamaño
por reflujo gastroesofágico [ERGE], detección de cáncer corporal o a alteraciones articulares
tras una resección mayor, etc.), a pesar de haber llevado a Si tras la evaluación por un equipo multidisciplinar se considera que
cabo una intervención presuntamente adecuada, es conside- el paciente:
rada como fracaso del tratamiento y de la intervención. 1. Presenta una baja probabilidad de éxito con medidas de pérdida de
peso no quirúrgicas
Si el éxito de la cirugía bariátrica se definiese única- 2. Está bien informado acerca de los riesgos y beneficios a corto y
mente por el porcentaje de peso perdido, se consideraría largo plazo de la cirugía
como fracaso del tratamiento y de la cirugía en los casos en 3. Está altamente motivado para perder peso con la cirugía
los que el paciente recuperase una cantidad significativa del 4. Tiene un riesgo quirúrgico aceptable
peso inicialmente perdido. El mantenimiento de al menos el 5. Está dispuesto a someterse a un seguimiento médico el resto de su vida
50% de la pérdida de exceso de peso es considerado un por-
centaje óptimo. Sin embargo, si se tomase como factor prin-
cipal de éxito la mejoría de las enfermedades médicas conco- situaba la adición de un agente farmacológico en relación con
mitantes, este se definiría en términos independientes de la cambios de comportamiento tales como cumplimiento de una
pérdida de peso. Así pues, la selección de pacientes puede dieta y aumento del ejercicio.
cambiar en función de las diferentes interpretaciones de la La publicación reciente de las guías de la Consensus
noción de éxito quirúrgico. Por estas razones, y quizá a dife- Conference de 2004 actualiza las recomendaciones para la
rencia de lo que sucede en otras enfermedades tratadas qui- cirugía bariátrica y establece estándares razonables de selec-
rúrgicamente, la relación riesgo-beneficio de la cirugía ción de pacientes.23 «En última instancia, el mejor y más
bariátrica puede variar. determinante indicador para la cirugía bariátrica es la deci-
Finalmente, a la hora de evaluar los riesgos y los benefi- sión para cada caso individual tomada por un cirujano bien
cios de la cirugía bariátrica para la selección de pacientes, el informado y experimentado».24
cirujano tiene la opción de proponer un tratamiento de pér-
dida de peso no quirúrgico. En el caso de la obesidad mórbi- Edad
da, el hecho de permitir al paciente que intente perder peso a
través de tratamientos farmacológicos y conductuales, a pesar Los efectos negativos de la obesidad se producen a lo largo
de que estos métodos no quirúrgicos no hayan demostrado de toda la vida.25,26 No se le debe negar la intervención úni-
resultados sostenidos a largo plazo, continúa siendo una posi- camente en base a la edad a alguien que cumpla con los cri-
ble alternativa.19,20 Permitir a un paciente que siga siendo terios médicos y psicológicos adecuados para la cirugía.
obeso es también una opción, a pesar de la morbilidad y la Recomendamos que la principal consideración sobre la edad
mortalidad asociadas a la obesidad demostradas. sea la psicológica y no la cronológica, teniendo en cuenta
también el resto de consideraciones derivadas, que se anali-
zarán posteriormente. Existen numerosos documentos que
Z INDICACIONES Y CONTRAINDICACIONES demuestran la seguridad y la eficacia de la cirugía bariátrica
en personas mayores.27 Si, independientemente de su edad
En la actualidad, los criterios de selección más ampliamente cronológica, el estado de salud general de un paciente no le
aceptados para la cirugía bariátrica por parte de los clínicos y concede una expectativa de vida inferior a 5 años, en dicho
de los aseguradores son los del Consensus Development paciente debe evaluarse la posibilidad de proceder a una
Conference Statement on Gastrointestinal Surgery for Severe intervención de reducción de peso.
Obesity de los National Institutes of Health (NIH) (1991).21 Esta Consideramos, pues, que en personas de edad avanzada
conferencia se reunió para dar respuesta a la creciente toma la situación está clara. En cambio, no estamos tan seguros
de conciencia de las implicaciones médicas y psicológicas de la sobre las recomendaciones de cirugía de pérdida de peso en
obesidad grave, de la ineficacia de las terapias médicas y con- adolescentes. Este punto es objeto de notables controversias.
ductuales, y del desarrollo de alternativas quirúrgicas más Pensamos que los paciente menores de 18 años son mejor
seguras que la derivación yeyunoileal. En aquel tiempo se tratados mediante terapia intensiva dietética y conductual,
reconoció que existían «datos insuficientes para basar los cri- aunque existe un número creciente de adolescentes que
terios de elección únicamente en características clínicas obje- cumple con todos los criterios sugeridos por los NIH, excep-
tivas»21 (tal y como sigue siendo el caso). Sin embargo, en to los referentes a la edad. Los datos muestran que la cirugía
función de las pruebas disponibles, se realizaron una serie de se puede llevar a cabo de forma segura y con buenos resulta-
recomendaciones, tal y como recoge la tabla 12-1. Más recien- dos en pacientes de entre 11 y 18 años de edad.28-33 Sin
temente, los NIH publicaron una guía basada en pruebas para embargo, no existen datos sobre resultados a largo plazo, en
la identificación, evaluación y tratamiento del sobrepeso y de la particular estudios sobre la relación entre la obesidad y el
obesidad en adultos22 y prescribieron la cirugía como trata- rápido desarrollo psicológico en la adolescencia. Sugerman
miento de tercera línea para la obesidad, restringida una vez y cols. publicaron una serie en la que en sólo 5 de 33 pacien-
más a pacientes con IMC mayores de 35 kg/m2. La primera tes adolescentes se consideró que el tratamiento había fraca-
terapia recomendada en este documento seguía siendo la sado tras un plazo de 10 años.33 Todos los estudios han insis-
modificación del comportamiento, y en segundo lugar se tido en que un sólido apoyo familiar es un requisito
Capítulo 12 • Selección de pacientes para cirugía bariátrica 95

importante para el éxito del tratamiento. Muchos han defen- enfermedad multifactorial, aunque indudablemente existe
dido un abordaje intensivo multidisciplinar y un tratamiento en ella un componente genético. La obesidad podría consi-
supervisado en un centro pediátrico especializado, como el derarse como la consecuencia de un genotipo, así como de
descrito por Inge y cols. en Cincinnati.31 otros numerosos factores que desempeñan algún papel en
su fisiopatología. Los pacientes con familiares de primer
Peso grado que también se hayan tenido que enfrentar a la obe-
sidad mórbida, deben ser informados de que tienen una
El criterio del peso puede dividirse en dos categorías: obesi- mayor probabilidad de ser refractarios a intervenciones no
dad que constituye una amenaza para la vida y obesidad clí- quirúrgicas.
nicamente grave. Un paciente con obesidad que amenaza la
vida ha sobrepasado el peso a partir del cual la probabilidad Contraindicaciones médicas absolutas
de desarrollar una o más enfermedades relacionadas con el
peso y de sucumbir a una muerte prematura se hace inevita- Existen pocas contraindicaciones absolutas para la cirugía.
ble. Basándose en tablas de análisis de vida en las que se Algunos pacientes pueden no ser sometidos a anestesia gene-
utiliza el IMC como medida del grado de obesidad, el peso ral. Bajo determinadas circunstancias, una intervención pre-
en el cual se considera que el paciente presenta una obesidad via a la cirugía de reducción de peso (p. ej., la colocación de
amenazadora para la vida es de 40 kg/m2. Otra forma común, una endoprótesis en una arteria coronaria) mejorará los ries-
aunque no la más usada, de medir la obesidad que amenaza gos operatorios de una ulterior cirugía de pérdida de peso. La
la vida, es el exceso de peso corporal. En términos absolutos historia clínica y el examen físico indicarán la necesidad de
es del orden de los 45 kg de exceso de peso, o bien de un peso derivación a neumología o a cardiología. En el contexto de la
real equivalente al 170% del peso corporal ideal. Un pacien- obesidad mórbida, las pruebas preoperatorias rutinarias (fun-
te con obesidad clínicamente grave tiene un IMC de 35 a ción pulmonar, evaluación del sueño y electrocardiograma)
39,9 kg/m 2, acompañado de enfermedades graves, como dia- pueden indicar la necesidad de dicha derivación antes de la
betes mellitus, apnea obstructiva del sueño, artrosis incapa- intervención. Sin embargo, no creemos que la derivación a
citante, alteraciones tromboembólicas, incontinencia urina- estos especialistas sea necesaria en todos los casos. La elegi-
ria de estrés, pseudotumor cerebri, miocardiopatía con bilidad para la anestesia general también depende de la habi-
hipertensión pulmonar o ERGE intratable. lidad del anestesista para intubar al paciente. Recomendamos
A pesar de que teóricamente no hay un IMC máximo que el anestesista que vaya a estar presente durante la inter-
que contraindique la cirugía, no todos lo cirujanos son capa- vención evalúe previamente la vía aérea de todos los futuros
ces de tratar de una forma segura y efectiva a todos los pacientes. Según nuestra experiencia, muchos pacientes han
pacientes obesos. Una vez decidido que el problema del necesitado, debido a su obesidad, intubación con fibra óptica
paciente es suficientemente grave como para requerir una mientras permanecían despiertos.
intervención quirúrgica, el cirujano debe decidir si el pacien- Aunque no hacen inviable la anestesia general, otras cir-
te tiene demasiado sobrepeso para la técnica propuesta. El cunstancias fisiológicas y anatómicas pueden ser considera-
cirujano ha de establecer el IMC máximo para el cual se das como contraindicaciones absolutas de la cirugía, en el
encuentra lo suficientemente experimentado para realizar la caso de que la intervención no pueda desarrollarse de forma
cirugía de forma segura. Las consideraciones de seguridad segura. Por ejemplo, la presencia de varices gástricas es una
para pacientes con IMC por encima de 65 kg/m 2 deben contraindicación, debido al riesgo de hemorragia fatal.
incluir no sólo la habilidad técnica del cirujano, sino también Incluso en manos de los cirujanos técnicamente mejor dota-
la capacidad del centro para tratar a estos pacientes extrema- dos, puede no ser posible convertir una gastrectomía previa
damente obesos mórbidos de una forma segura. Dicho cen- en algún tipo de procedimiento bariátrico decente. La úlce-
tro debe disponer de equipos quirúrgicos apropiados para los ra péptica activa también debe ser considerada como con-
pacientes extremadamente obesos, así como estar preparado traindicación absoluta a la cirugía, debido a que la interven-
para llevar a cabo los procedimientos diagnósticos indicados, ción propuesta aislaría un órgano enfermo y por tanto ya no
en caso de que se presente una complicación. sería de fácil tratamiento. Los casos sospechosos de úlcera
Más difícil que valorar el peso con estas medidas absolu- péptica deben ser diagnosticados por endoscopia. Los casos
tas es evaluar en qué medida ha combatido su sobrepeso el confirmados han de tratarse de forma apropiada con inhibi-
paciente. Muchos pacientes refieren obesidad desde la infan- dores de la bomba de protones, y se debe repetir la endosco-
cia o desde la adolescencia. La lucha a lo largo de toda una pia. La resolución de la enfermedad tiene que ser documen-
vida contra la obesidad es ciertamente una indicación para la tada antes de la revaluación previa a la cirugía de reducción
cirugía, aunque puede considerarse como candidato a cirugía de peso. Los casos de infección por Helicobacter pylori se erra-
cualquier paciente que haya combatido la enfermedad duran- dican a través de un tratamiento con la combinación de fár-
te un período de tiempo significativo (al menos 5 años). Es macos recomendada previa a la revaluación.
necesario valorar los intentos previos de pérdida de peso, no Algunas contraindicaciones absolutas a la cirugía están
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desde la perspectiva de la duración de una pérdida de peso presentes incluso cuando la anestesia general y la cirugía son
satisfactoria y del tiempo transcurrido hasta el fracaso (recu- posibles en condiciones seguras. Por ejemplo, pacientes con
peración del peso), sino desde la constatación de que el enfermedades tales como neoplasia maligna activa o sida no
paciente haya demostrado previamente su motivación para deben ser considerados aptos para la cirugía debido a su
perder peso. Los pacientes que hayan recuperado reciente- limitada expectativa de vida y al hecho de que estas enferme-
mente una cantidad de peso significativa deben ser examina- dades no vayan a mejorar con la reducción de peso. En otras
dos cuidadosamente, con el fin de detectar causas médicas palabras «el pronóstico del paciente, dada la reducción de
tratables, como el hipercortisolismo y el hipotiroidismo. peso, debe justificar el riesgo del tratamiento».24 En general,
Otro factor relacionado con la historia del sobrepeso a cualquier enfermedad no relacionada con el peso que indi-
considerar es la historia familiar dominante de obesidad. que una expectativa de vida por debajo de los 5 años, debe
Cada vez aparecen más pruebas de que la obesidad es una ser considerada como una contraindicación a la cirugía.
96 Sección IV • ASISTENCIA PREOPERATORIA, PERIOPERATORIA Y POSTOPERATORIA

Contraindicaciones médicas relativas han defendido un abordaje más radical y definitivo con una
derivación malabsortiva completa (derivación biliopancreática/
Las numerosas enfermedades sugeridas como contraindica- cruce duodenal). Aun así, otros han sugerido la obtención de
ciones relativas, deben ser consideradas individualmente en el un consentimiento informado del paciente y de la familia acep-
contexto médico y psicológico del paciente. Estas contraindi- tando la posibilidad de morbilidad y mortalidad, tal y como
caciones incluyen la infección por VIH sin signos o síntomas ocurre en otras situaciones de alto riesgo, como los grandes
de sida, la neoplasia maligna previa sin evidencia de recurren- aneurismas toracoabdominales, enfermedad coronaria multi-
cia, y otras situaciones en las cuales la esperanza de vida no vaso, cáncer avanzado y trasplante hepático.
puede preverse de forma precisa. La cirrosis hepática debida a Nuestra recomendación final en los casos de candidatos
esteatosis no alcohólica es en ocasiones una contraindicación con riesgo más alto, sigue siendo el reducir todo lo posible el
relativa a la cirugía. Existe una considerable controversia riesgo a través de medidas conservadoras previas a la cirugía,
sobre este tema, ya que muchos cirujanos han realizado pro- y ofrecer la cirugía más apropiada una vez que el riesgo haya
cedimientos restrictivos y malabsortivos en presencia de sido minimizado. En los casos en los cuales el riesgo perio-
esteatosis no alcohólica con fibrosis y cirrosis, obteniendo peratorio permanezca alto pero no haya contraindicaciones
buenos resultados. Del mismo modo, la selección de los absolutas al procedimiento, el paciente debe ser tratado en
pacientes debe estar asociada a la percepción del riesgo y del un centro con un alto volumen de intervenciones donde una
beneficio, que en el caso de la cirrosis pueden ser difíciles de experiencia sustancial minimice el riesgo.
predecir. En situaciones en las que no haya una clara razón
médica para intervenir, antes de tomar una decisión definitiva
debe analizarse en detalle la historia clínica completa del Z CRITERIOS PSICOPATOLÓGICOS
paciente, incluidas alteraciones presentes y pasadas, junto con
factores como edad, historia de sobrepeso, enfermedades psi- Una vez que el futuro paciente haya satisfecho todos los reque-
quiátricas concomitantes y capacidad de adaptación al estilo rimientos para la cirugía, el candidato ideal desde un punto de
de vida postoperatorio. Las dos consideraciones finales, psi- vista psicosocial será aquel sin antecedentes de psicopatología
quiátrica y conductual, se analizarán más adelante. grave, con un entorno con pocos factores estresantes, recursos
para el manejo de situaciones adversas, alta motivación, crítica
Estado funcional adecuada del proceso quirúrgico, y buen funcionamiento cog-
nitivo y social. Los criterios psiquiátricos para la selección de
Según nuestra experiencia, incluso los candidatos apropia- candidatos son más difíciles de interpretar que los criterios
dos sin ninguna contraindicación psiquiátrica o conductual, médicos expuestos anteriormente. La mayoría de los cirujanos
pueden no adaptarse adecuadamente a la situación subsi- están, en general, bien formados en lo que respecta a las enfer-
guiente a la cirugía si no están en una situación físicamente medades médicas concomitantes que afectan a los resultados
funcional. de la cirugía, pero normalmente no están tan familiarizados
con las complejidades inherentes al diagnóstico y al tratamien-
CASOS ESPECIALES QUE PRESENTAN UN MAYOR GRADO to psiquiátricos. Recomendamos encarecidamente una evalua-
DE ENFERMEDAD DEBIDO A LA OBESIDAD ción psicológica y psiquiátrica independiente. En nuestro cen-
Algunos pacientes presentan varias contraindicaciones relati- tro contamos con un grupo compuesto por un psicólogo y
vas a la cirugía, cuyas causas son las mismas enfermedades varios candidatos posdoctorales que evalúan a cada uno de
relacionadas con la propia obesidad. Las razones por las cuales nuestros pacientes en el preoperatorio. El tratamiento satisfac-
estos pacientes piden someterse a una cirugía de pérdida de torio de los problemas psiquiátricos ha demostrado ser un
peso pueden ser con frecuencia las mismas que implican un indicador predictivo de éxito.34
alto riesgo. La diferenciación del tratamiento de estos pacien-
tes en distintas etapas puede convertir a muchos de ellos en Trastornos del eje I
candidatos con un nivel de riesgo aceptable. Nuestra forma de
abordar el problema de los pacientes de alto riesgo se basa en Cualquier trastorno del eje I diagnosticado por primera vez
establecer objetivos rigurosos para modificar su riesgo a tra- debe ser evaluado y tratado a fondo bajo la supervisión de un
vés de la pérdida de peso preoperatoria, el consejo psicológico, psiquiatra durante al menos 1 año, antes de la revaluación de
la terapia física, un mejor control de sus enfermedades médi- cara a la cirugía. Cualquier paciente al que se le haya diagnos-
cas (hiperglucemia, hipertensión, enfermedad cardíaca rever- ticado ideación suicida, debe estar libre de tales ideas durante
sible, etc.), y la resolución de todos sus problemas psicosocia- por lo menos un 1 año antes de ser nuevamente considerado
les. Todo un equipo participa asesorando a estos pacientes como candidato a cirugía. La depresión mayor bien controla-
para que cumplan con sus objetivos. Los pacientes son visita- da, el trastorno bipolar y la esquizofrenia no impiden la ciru-
dos cada tres meses y evaluados en función de la mejoría de los gía. Sin embargo, los futuros pacientes deben demostrar que
factores de riesgo. De este modo, se les ofrece la esperanza de han sido tratados de forma efectiva y que están capacitados
poder convertirse en candidatos apropiados para la cirugía. –en forma de compromiso personal, seguimiento psiquiátri-
Permanecer dentro del programa de cirugía ofrece a los co, consejo psicológico, y soporte social–, para continuar con
pacientes esperanza y motivación para cumplir con el trata- el tratamiento después de la cirugía de pérdida de peso. En
miento y obtener resultados satisfactorios. ningún paciente hemos observado incapacidad para consumir
Otros han sugerido una alternativa quirúrgica para los medicamentos psicotrópicos ni incapacidad fisiológica para la
pacientes de alto riesgo que incluye un programa de pérdida de absorción de los medicamentos tras la cirugía.
peso en distintas etapas. En primer lugar se lleva a cabo un
procedimiento quirúrgico de extensión e invasividad menores, Abuso de sustancias
como colocación de bandas gástricas ajustables o gastrectomía
en manga, que han demostrado tener una baja morbilidad aso- El abuso activo de sustancias o el alcoholismo, diagnostica-
ciada, como paso previo a una cirugía de mayor alcance. Otros dos en la evaluación psicológica, deben ser considerados
Capítulo 12 • Selección de pacientes para cirugía bariátrica 97

como contraindicación absoluta a la cirugía. Las manifesta- Z CRITERIOS CONDUCTUALES


ciones conductuales de estos trastornos no son compatibles
con el estilo de vida postquirúrgico de estos pacientes. Los El éxito tras la cirugía depende en gran parte de la capacidad
pacientes con antecedentes de algunos de estos trastornos del paciente de cumplir con los requisitos conductuales del
deben ser cuidadosamente revaluados. postoperatorio. El cumplimiento no es una entidad médica-
Es obligatorio al menos 1 año sin consumir drogas o mente definible, pero la incapacidad para a adaptarse a los
alcohol antes de reconsiderar la cirugía en estos pacientes. cambios en los hábitos de vida, al uso de suplementos vitamí-
Las intervenciones realizadas en el pasado para el control de nicos durante el resto de la vida del paciente y al seguimiento
estos trastornos adictivos deben estar bien documentadas, a largo plazo, debe ser considerada como una contraindicación
incluidas cartas de médicos que avalen la posibilidad de absoluta para la cirugía. La capacidad de cumplimiento es mul-
mantener el control de estos a la hora de hacer frente al tifactorial y, a diferencia de otras áreas del proceso de decisión,
importante estrés fisiológico y emocional que conlleva la fuerza al cirujano a evaluar complicadas nociones relacionadas
cirugía de pérdida de peso. Como en los síndromes del eje I, con la inteligencia del paciente, la patología conductual, los
los pacientes deben demostrar su compromiso de no consu- medios de adaptarse a las situaciones adversas, el nivel funcio-
mir drogas ni alcohol tras la cirugía, y que disponen de los nal, el nivel socioeconómico y el apoyo psicosocial.
mecanismos psicosociales necesarios para llevar a cabo este Brolin señala que «la estabilidad psicológica del futuro
compromiso. paciente debe ser evaluada, en particular en lo que hace refe-
rencia a voluntad de adaptarse a los efectos postoperatorios
Trastornos de la conducta alimentaria permanentes de la restricción gástrica y de la malabsor-
ción».35,36 Tres de sus criterios sugeridos para la estabilidad
La anorexia activa (rara aunque compatible con un peso cor- psicológica son: 1) conocimiento básico de cómo la cirugía de
poral muy elevado) y la bulimia, deben ser consideradas como la obesidad produce pérdida de peso; 2) comprensión de que la
contraindicaciones absolutas a la cirugía. Un componente cirugía por sí misma no garantiza la pérdida de peso, y 3) cum-
destacado del resultado satisfactorio de cirugía implica el con- plimiento con el seguimiento postoperatorio (la cuarta es que
trol del tipo de alimentos consumidos y del tamaño de las el paciente no sea consumidor de sustancias ni de alcohol).
porciones. Los pacientes con anorexia activa y con bulimia no
pueden cumplir con estos requisitos. Por otra parte, al igual Valoración y función cognitiva
que en los trastornos psiquiátricos mayores y que en los tras-
tornos adictivos, un antecedente de trastorno de la conducta La valoración se refiere a la comprensión del paciente del pro-
alimentaria no puede contraindicar absolutamente la cirugía. ceso quirúrgico, los potenciales efectos negativos de la cirugía,
También en estos casos debe existir documentación completa la pérdida de peso esperada, y la dieta y el estilo de vida pos-
de un psiquiatra o de un psicólogo que haya seguido al pacien- quirúrgicos. Algunos han sugerido que los individuos con una
te, que establezca que los síntomas psiquiátricos y conductua- capacidad intelectual limitada, como los que padecen retraso
les de anorexia o de bulimia están controlados. El paciente mental o los analfabetos, no deben ser considerados aptos para
debe ser declarado capaz de satisfacer los requisitos de alimen- una cirugía de pérdida de peso, ya que no pueden valorar ade-
tación necesarios para la intervención quirúrgica. cuadamente el proceso y los resultados de la misma. A pesar de
que no se requiere una prueba formal del cociente intelectual,
Trastornos psiquiátricos leves un futuro paciente debe ser capaz de demostrar al cirujano, al
equipo psiquiátrico y al trabajador social, que entiende por qué
Los pacientes en los que se estima que pueden padecer tras- es candidato a la cirugía y de lo que esta conlleva antes, duran-
tornos psiquiátricos leves, tales como distimia o atracones de te y después de la intervención.
comida, deben ser evaluados de forma individual. Estas alte- En todos los casos, debe tenerse en cuenta la capacidad
raciones no suelen requerir medicación psicotrópica ni una del paciente para dar su consentimiento informado. Cuando
intervención psicoterapéutica intensiva. Según nuestra expe- es así, o cuando el paciente cumple los criterios para autorizar
riencia, los pacientes con estos trastornos que posean meca- legalmente a un allegado (familiar), la decisión de operar, si se
nismos adecuados para sobrellevar estas situaciones adversas satisfacen todos los criterios médicos, debe supeditarse al
y que cuenten con un adecuado apoyo social, suelen adaptar- hecho de que el paciente cuente con un apoyo social adecuado
se bastante bien después de la cirugía. Estos pacientes pueden para permitirle el cumplimiento de todos los requisitos del
cumplir con los requisitos de estilos de vida posquirúrgicos y estilo de vida postoperatorio. Por ejemplo, a un individuo con
continuar con su seguimiento; y sus síntomas con frecuencia retraso mental que sufra las consecuencias fisiológicas nega-
mejoran de forma notable como consecuencia de la propia tivas de la obesidad no se le debe denegar la cirugía si está
cirugía. Sin embargo, se debe ser especialmente cauto al atendido por una persona responsable que demuestre una
observar si los signos de estos trastornos evolucionan de for- adecuada capacidad de valoración del proceso y que pueda
ma que puedan dar lugar a trastornos psiquiátricos mayores garantizar que los requisitos conductuales del postoperatorio
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

que requieran un tratamiento agresivo. se cumplirán. Por desgracia, según nuestra experiencia, los
pacientes que viven internados en centros asistenciales, cuyo
El caso especial de las víctimas de abuso sexual responsable suele ser un asistente social, no deben ser candi-
o físico previo datos a la cirugía, dado que la persona encargada de ellos tiene
otras muchas obligaciones con otros clientes y no puede
Los datos han demostrado que el antecedente personal de garantizar el adecuado cumplimiento del paciente.
haber sido víctima de abusos, especialmente de tipo sexual,
está correlacionado con el desarrollo de obesidad. Todos los Apoyo social
pacientes deben ser interrogados sobre antecedentes al res-
pecto. Las secuelas psicosociales deben ser evaluadas concien- Los individuos socialmente aislados tienen menos probabilida-
zudamente y tratadas antes de valorar la posible cirugía. des de adaptarse de manera satisfactoria al estilo de vida pos-
98 Sección IV • ASISTENCIA PREOPERATORIA, PERIOPERATORIA Y POSTOPERATORIA

quirúrgico. El apoyo y la motivación ofrecidos por la familia y con la obesidad y de las enfermedades psiquiátricas; a un
los allegados ayudan a mitigar la distorsión postoperatoria del funcionamiento cognitivo más deficitario debido a la falta de
rol del paciente ante la comida como hecho social. En nuestra educación y de recursos formativos; y a los posibles condi-
institución, la designación de una persona de apoyo es obliga- cionantes personales, motivados, por ejemplo, por falta de
toria para autorizar la cirugía. La persona de apoyo debe empleo, violencia en el vecindario, ambientes familiares des-
demostrar su compromiso de ayudar al paciente en todos los estructurados o menor soporte social en general. Sin embar-
asuntos prácticos relacionados con la cirugía, tales como, entre go, consideramos que todos los candidatos de cualquier nivel
otros, acompañarle a las citas médicas, prepararle las comidas y socioeconómico deben ser considerados para someterse a
prestarle apoyo emocional y motivación a lo largo de todo el cirugía. En la medida en que ello sea posible en la compleja
proceso. Esta persona puede ser el cónyuge, un hermano, un sociedad actual, se debe ofrecer a todos los pacientes la deri-
hijo adulto o un amigo íntimo. El apoyo social también debe vación a médicos especialistas, servicios, y agencias que pue-
plasmarse en una situación doméstica estable que acarree una dan ayudarles a la hora de optimizar sus recursos psicosocia-
estructura física permanente segura y libre de amenazas emo- les, independientemente de su nivel socioeconómico.
cionales y físicas para el bienestar del paciente. Así, las situacio-
nes de abuso activo deben resolverse y el paciente debe encon- El caso especial del embarazo
trarse en un ambiente seguro antes de considerar la cirugía.
Una cuestión específica relacionada con el cumplimiento de
Motivación las pautas postoperatorias es la referida a las futuras pacien-
tes en edad fértil. En los dos años siguientes a la cirugía, la
La motivación del paciente se evalúa en función del rigor con pérdida de peso significativa y los ajustes metabólicos
el que el paciente aborda la cirugía. Generalmente, se cree que aumentan de forma importante el riesgo de estas pacientes
un paciente altamente motivado es un mejor candidato. Sin de desarrollar trastornos metabólicos agudos, crecimiento
embargo, la motivación sea quizá el criterio más subjetivo en intrauterino retardado, o alteraciones electrolíticas gra-
la selección de los pacientes para cirugía de pérdida de peso. ves.40-43 Así pues, todas las pacientes que puedan quedarse
Ray ha relacionado la «motivación intrínseca» con una mejor embarazadas, han de ser informadas de este riesgo y se les
pérdida de peso posquirúrgica.37 A pesar de que existen cier- debe aconsejar encarecidamente el mantenimiento o el ini-
tos instrumentos psicométricos para medir la motivación per- cio de un tratamiento anticonceptivo tras someterse a la
sonal, ninguno de ellos ha demostrado ser suficiente o nece- cirugía. No obstante, es conveniente tranquilizar a las
sario para asegurar el éxito tras la cirugía. Así, los cirujanos pacientes indicándoles que los resultados a largo plazo en
experimentados y el equipo profesional con el que colaboran mujeres en edad fértil que se someten a una cirugía de pér-
en el proceso de toma de decisiones, deben evaluar de forma dida de peso, muestran un incremento de la fertilidad y de
individual la motivación de cada paciente. Un paciente que los embarazos con menos complicaciones (hipertensión
dude o que se muestre inseguro acerca de la cirugía, que la inducida por el embarazo y diabetes gestacional) que los de
aborde con falta de compromiso o que parezca forzado a las pacientes con obesidad mórbida.44-47
someterse a ella debido a factores externos, tales como la
familia o el médico, no debe ser seleccionado. Un paciente que
esté lo suficientemente preocupado de que su obesidad sea Z EVALUACIÓN NUTRICIONAL
incapacitante o amenace su vida de forma inminente, que
piense que al menos algún elemento de la obesidad está fuera La evaluación nutricional es el último factor esencial en la
de su control personal, y que valore plenamente los riesgos y selección de los pacientes. El cumplimento de los requisiti-
los beneficios de la cirugía en general, demuestra una volun- tos nutricionales postoperatorios resulta crucial en la obten-
tad firme de someterse a un procedimiento de pérdida de peso ción de resultados satisfactorios. En nuestro centro todos los
y el control sobre cambios de los estilos de vida que la cirugía futuros pacientes son evaluados por un nutricionista experi-
impone. Sin embargo, es necesario mantener una actitud pre- mentado en trastornos alimentarios y en pacientes de cirugía
cavida a la hora de evaluar a cualquier futuro paciente que se bariátrica. El diagnóstico de los trastornos alimentarios,
muestre demasiado entusiasmado por la cirugía y que de for- analizado anteriormente, se produce con frecuencia durante
ma errónea la vea como un medio rápido de curación de la este proceso de evolución nutricional. Los pacientes son
obesidad, más que como una herramienta para el control de evaluados en múltiples áreas, incluidos los intentos de dieta,
la pérdida de peso.38 Tales pacientes tienden a esperar dema- los conocimientos generales en nutrición, la comprensión de
siado de la cirugía y, por tanto, muestran poca voluntad de la dieta tras la cirugía, la complimentación de diarios dieté-
esfuerzo en el postoperatorio en lo que respecta al cumpli- ticos, el apoyo y la motivación.
miento de los requisitos conductuales de este. Como es lógico, A todos los futuros pacientes se les hace llagar un sobre
la motivación se fomenta en un ambiente de soporte social con información preoperatoria que contiene, entre otras
sólido y de funcionamiento cognitivo adecuado. cosas, la explicación básica de los requerimientos nutriciona-
les para la cirugía. En él se les solicita que lleven un diario
Nivel socioeconómico dietético detallado durante los 7 días que preceden la visita
clínica inicial. Esta comprende una evaluación nutricional
Análisis demográficos recientes de potenciales candidatos a detallada de 30 minutos, durante la cual el nutricionista valo-
la cirugía bariátrica han demostrado que de entre los ra en primer lugar el número y el tipo de intentos de dietas
20 millones de ciudadanos estadounidenses que son candi- previos, así como sus resultados positivos, en el caso de que se
datos potenciales a la cirugía de reducción de peso, los can- dieran, y la duración de los mismos (v. tabla 12-2). Se valoran
didatos con los IMC más altos son los de menores recursos igualmente sus conocimientos de nutrición general y aquellos
socioeconómicos.39 Según nuestra experiencia, estos candi- aspectos de la dieta tras la cirugía que puedan recordar de la
datos tienen potencialmente un mayor riesgo, debido a su información que les fue enviada. Se les pide que hagan una
peor acceso al tratamiento de las enfermedades relacionadas lista de varios alimentos que contengan proteínas y de alimen-
Capítulo 12 • Selección de pacientes para cirugía bariátrica 99

del paciente con la cirugía bariátrica es continuamente exa-


Tabla 12-2 INTENTOS PREVIOS DE PÉRDIDA
DE PESO NO QUIRÚRGICOS minada, clarificada y mantenida por el consenso del equipo,
y 3) los ajustes en la selección de pacientes y en los protocolos
Comerciales Diet Workshop de tratamiento se llevan a cabo de forma continua, basándo-
Weight Watchers se en la experiencia colectiva y en los resultados de revisio-
Jenny Craig nes periódicas.
LA Weight Loss
Farmacológicos Orlistat
La creación de un equipo eficaz es el resultado de un
Sibutramina trabajo en grupo común, en el cual cada miembro comparte
Anfepramona la responsabilidad de planificar, de establecer hipótesis y de
Fenfluramina-dexfenfluramina dirigir intelectualmente el desarrollo del grupo y la satisfac-
Supervisado clínicamente Medifast ción del paciente.51-53 Cada miembro desempeña un papel
Optifast significativo y comparte el mérito de los buenos resultados y
New Direction la culpa de los malos. Ese equipo ha de trabajar en un foro
Autodirigido Dieta baja en grasas de discusión abierto, en el cual las opiniones puedan ser
Dieta baja en calorías
Dieta baja en carbohidratos compartidas libremente y en un ambiente de respeto de las opi-
Programas de autoayuda Comedores Compulsivos niones individuales y del consenso del grupo derivado de ellas.
Anónimos Cada miembro debe compartir la responsabilidad de identifi-
TOPS (Grupo de Apoyo/Pérdida car y ejercer su especialidad y de contribuir con ella al grupo
de Peso en el marco del objetivos del proyecto, que, en el caso de la
Dietas milagro Dieta de Atkins cirugía bariátrica, sería la satisfacción del paciente, con una
Dieta de la zona pérdida de peso adecuada y una mejoría en su salud en gene-
Dieta del pomelo
Dieta de la mantequilla de
ral. El desarrollo de un equipo bariátrico efectivo requiere
cacahuete capacidad de gestión, igualdad, discusión abierta y responsa-
bilidad de un grupo de profesionales diversos, incluidos
cirujanos, nutricionistas, psicólogos, psiquiatras, fisiotera-
peutas, médicos prescriptores, internistas, especialistas, tra-
tos ricos en azúcar y carbohidratos. Si los pacientes no son bajadores sociales y personal administrativo.
capaces de responder apropiadamente, el conocimiento en En nuestra institución, los futuros pacientes son inicial-
nutrición es calificado como escaso. Los diarios dietéticos mente evaluados en una reunión de grupo de 1 hora de dura-
detallados, un apoyo apropiado, y la motivación para la ciru- ción. En ella, el personal administrativo y el personal de
gía son otros puntos que el nutricionista puede utilizar en la enfermería especializado contestan a las preguntas de cuatro
evaluación de cara a la cirugía para la reducción de peso. Un o cinco posibles candidatos a cirugía, que a su vez expresan
candidato ideal cumplirá con los siguiente criterios: numero- sus inquietudes sobre el proceso de evaluación. Durante esta
sos intentos de dieta previos, incluidos programas estructura- sesión, el personal clínico también adquiere una informa-
dos de pérdida de peso, adecuados conocimientos de nutrición ción demográfica general de los futuros pacientes. Los
en general; concienciación, fundamentada e informada, de la pacientes son a continuación sometidos a la anamnesis y al
importancia de la dieta tras la cirugía; un diario dietético examen clínico del cirujano. En esta primera sesión la inte-
detallado de 7 días que no sugiera un trastorno importante de racción del paciente con el cirujano, el personal de enferme-
la conducta alimentaria; demostración de motivación; y un ría especializado y el auxiliar, ofrece una visión significativa
adecuado apoyo de familiares y allegados. a todas las partes implicadas sobre las cuestiones médicas
pertinentes, la magnitud de la obesidad, las cuestiones socia-
les y cognitivas, y el nivel de apoyo social. Otro día, normal-
Z ABORDAJE DEL PROCESO DE SELECCIÓN mente a la semana siguiente, el paciente vuelve para un exa-
DE LOS PACIENTES A CARGO DE UN EQUIPO men completo por el equipo de psicología y de nutrición.
MULTIDISCIPLINAR Tras las evaluaciones psiquiátrica y nutricional, el equipo
bariátrico al completo se reúne en una sala de conferencias
La dinámica, los sesgos y la eficacia del trabajo de grupo para evaluar y discutir sobre cada paciente individualmente.
para resolver un problema difícil, ha sido el objetivo de inten- La decisión de si el paciente es o no candidato apropiado a la
sas investigaciones en el campo de la ciencia médica y social, cirugía se toma de forma colegiada, teniendo cada miembro
en particular de la psicología cognitiva.48,49 «En general los una influencia significativa en la decisión del grupo.
equipos crean una sinergia orientada a coordinar sus esfuer- Nuestro equipo ha diseñado una escala de candidatura
zos para resolver problemas en áreas de conocimiento espe- basada en las evoluciones médicas, psicológicas y dietéticas
cializado, aportan ventaja competitiva a su organización, formales e informales (v. tabla 12-3). La puntuación de cada
aportan flexibilidad y velocidad, y obtienen un resultado que paciente en esta escala es establecida en la reunión de grupo.
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

supera al de la suma de los resultados individuales de sus inte- La puntuación varía de 1 a 10. Los pacientes con una pun-
grantes».50 En el caso de la cirugía bariátrica el problema a tuación de 10 son candidatos ideales, aquellos con una puntua-
resolver es establecer quiénes son los candidatos más apropia- ción comprendida entre 7 y 9 son candidatos aceptables que
dos. Los resultados de estas decisiones se ven positivamente pueden requerir una evaluación posterior, por ejemplo, tras
influidos por un equipo cohesionado en el cual se desarrolla una revascularización coronaria o una carta en la que un
una evaluación más a fondo y más concienzuda que la que médico atestigua que el paciente ha abandonado el consumo
podría desarrollar una sola persona.11 La creación y mante- de alcohol hace más de 1 año. En nuestra clínica los pacien-
nimiento de un equipo para «filtrar» a los pacientes en fun- tes que presentan un resultado entre 3 y 6 son asesorados
ción de su elegibilidad para la cirugía bariátrica resulta esen- acerca de sus problemas, se les anima a resolverlos y se les
cial por varias razones: 1) hay una uniformidad en el ofrece un seguimiento para repetir la evaluación cada
abordaje de la enfermedad; 2) la sinceridad del compromiso 3 meses hasta que se cumpla 1 año. Los pacientes con un
100 Sección IV • ASISTENCIA PREOPERATORIA, PERIOPERATORIA Y POSTOPERATORIA

3. Patterson EJ, Urbach DR, Swanstrom LL: A comparison of diet and


Tabla 12-3 ESCALA DE CANDIDATURA exercise therapy versus laparoscopic Roux-en-Y gastric bypass surgery
for morbid obesity: a decision analysis model. J Am Coll Surg
Condicionantes médicos 0: Contraindicación absoluta 2003;196:379-384.
1: Contraindicación relativa considerada 4. Agren G, Narbro K, Jonsson E, et al: Cost of in-patient care over
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2: Ausencia de contraindicaciones Obes Res 2002;10:1276-1283.
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Psicopatología 0: Enfermedad psiquiátrica activa que Obes Surg 1999;9:480-483.
requiere tratamiento 6. Colditz GA: Economic costs of obesity. Am J Clin Nutr 1992;55:
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psiquiátricas 8. Seidell JC: Societal and personal costs of obesity. Exp Clin Endocrinol
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Motivación 0: Baja
9. Martin LF, Tan TL, Horn JR, et al: Comparison of the costs associ-
1: Alta ated with medical and surgical treatment of obesity. Surgery
Función social 0: Bajo funcionamiento, alto estrés 1995;118:599-606.
(herramientas 1: Alto funcionamiento (en los casos de 10. Wolf AM, Colditz GA: Social and economic effects of body weight in
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herramientas sociales) de un familiar de apoyo que lleva a 11. Wolf AM, Colditz GA: The cost of obesity: the US perspective.
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Valoración y función 0: Valoración inadecuada de la cirugía 12. Gawande A: The man who couldn’t stop eating. The New Yorker.
cognitiva y de sus implicaciones July 19, 2001;66-73.
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1: Buenos conocimientos sobre 18. Kral JG: Selection of patients for anti-obesity surgery. Int J Obes
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en cuenta a la hora de evaluar futuros pacientes. Estos crite- 29. Capella JF, Capella RF: Bariatric surgery in adolescence: is this the
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elegir a aquellos que tengan más posibilidades de obtener los the adolescent bariatric surgical patient. J Pediatr Surg 2004;39:
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de vida a los que se puede acceder a través de procedimien- 32. Strauss RS, Bradley LJ, Brolin RE: Gastric bypass surgery in adoles-
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Capítulo 12 • Selección de pacientes para cirugía bariátrica 101

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13
Preparación preoperatoria
del paciente de cirugía bariátrica
Peter N. Benotti, M.D., F.A.C.S., y Hector Rodriguez, M.D.

La cirugía para la obesidad grave es actualmente una de las Z EDUCACIÓN DEL PACIENTE
subespecialidades quirúrgicas que están creciendo más rápi-
damente. La obesidad se ha convertido en uno de los princi- Y CONSENTIMIENTO INFORMADO
pales problemas de salud en EE. UU., con un incremento de
la prevalencia que pasó de un 15% en 1980 a un 30% en El tratamiento quirúrgico de la obesidad grave está indicado
1990.1 Más de 5 millones de americanos son obesos mórbi- en individuos que presentan un exceso de peso superior a
dos. Durante un período de 3 años, de 1999 a 2001, el núme- 45 kg o en aquellos que pesan el doble de su peso ideal, que
ro de cirugías de derivación gástrica se incrementó en el corresponde a un índice de masa corporal (IMC) de 40 kg/m²
estado de Pennsylvania un 100% cada año.2 Se estimó que o superior.3 Los pacientes candidatos a tratamiento quirúrgi-
en 2002 se realizaron 55.000 operaciones de obesidad en co son aquellos con IMC comprendido entre 35 y 40 kg/m² que
todo el país, y que en 2005 esta cifra ascendió a 140.000. El tienen alto riesgo de padecer problemas de salud, como apnea
reconocimiento de la vital importancia del tratamiento qui- del sueño o diabetes, y aquellos que presentan discapacidades
rúrgico en el manejo multidisciplinar de la obesidad mórbida físicas que afectan a su calidad de vida (empleo, movilidad,
ha ido en aumento por varias circunstancias: funciones familiares).4 Las contraindicaciones para el trata-
miento quirúrgico de la obesidad incluyen graves enferme-
1. La aceptación de la obesidad como enfermedad crónica dades mentales, que dan lugar a psicosis, consumo de drogas
y no simplemente como un problema social. o insuficiencia grave de algún órgano principal refractaria al
2. La concienciación pública del mayor riesgo para la salud tratamiento. La edad no es una contraindicación para la ciru-
y de la disminución de la calidad de vida inherentes a la gía bariátrica; hay muchos informes clínicos que muestran
obesidad grave. resultados quirúrgicos satisfactorios tanto en adolescentes
3. La mejora contrastada de salud y calidad de vida que como en pacientes de 55 años o más.5,6
acompaña a la cirugía de la reducción de peso. La educación del paciente es un aspecto importante de
4. La corriente favorable a estas intervenciones en la pren- la valoración selectiva preoperatoria y del proceso de eva-
sa no especializada y los cambios de estilo de vida de luación. La necesidad de cambiar a un estilo de vida activo
personalidades populares que se han sometido a cirugía y de introducir modificaciones en los hábitos alimentarios
bariátrica. impuestos por la cirugía bariátrica hacen que sea esencial
5. La introducción de técnicas mínimamente invasivas. que los candidatos tengan un exhaustivo conocimiento de
todos los aspectos relativos a la cirugía y de los mecanismos
Como consecuencia de todo ello, la cirugía bariátrica se de pérdida de peso para que puedan evitar problemas gra-
ha convertido en poco tiempo en el tratamiento de elección ves. En los últimos 5 años se ha dispuesto de nueva infor-
de los pacientes con obesidad mórbida. Se trata de un área mación para los pacientes con obesidad mórbida. Varias
ciertamente singular entre los procedimientos quirúrgicos personalidades populares y cirujanos bariátricos han escri-
intestinales, ya que es una herramienta de modificación de to libros al respecto y los medios televisivos muestran con
hábitos que, usada correctamente, puede ser el catalizador frecuencia programas educativos sobre esta modalidad qui-
de un cambio total en la vida del paciente. Un requisito pre- rúrgica. Internet es asimismo un recurso de primer orden
vio para el éxito a largo plazo del tratamiento quirúrgico de para acceder a información sobre el tratamiento quirúrgico
la obesidad es la plena implicación del paciente en el cambio de la obesidad mórbida.7 La American Society for Bariatric
de estilo de vida. La necesidad de una completa comprensión Surgery dispone de folletos informativos para los pacientes
por parte del paciente y su total participación en la pérdida y de una página web con abundante información (www.
sostenida de peso en el postoperatorio requiere una prolon- ASBS.org). Numerosos programas de cirugía bariátrica de
gada y laboriosa evaluación y preparación preoperatoria. Los prestigio realizan regularmente seminarios y organizan
objetivos durante el período preoperatorio incluyen educa- grupos de apoyo para la formación de nuevos pacientes y la
ción del paciente, consentimiento informado, evaluación de interacción con pacientes operados. Los individuos que
factores de riesgo y estrategias para la reducción del riesgo. han cambiado su vida gracias a la cirugía de la obesidad
102
Capítulo 13 • Preparación preoperatoria del paciente de cirugía bariátrica 103

grave generalmente están tan agradecidos que participan cialistas en neumología, cardiología, gastroenterología,
de buen grado en el proceso formativo. endocrinología y anestesiología, que deben estar disponibles
Los pacientes han de estar bien informados sobre las para la evaluación y el control de las enfermedades con-
bases del tratamiento quirúrgico de la obesidad mórbida. currentes en la consulta preoperatoria, optimizando así las
También deben conocer los graves riesgos de salud y de cali- condiciones del paciente.
dad de vida deficiente asociados a la enfermedad.8,9 Ha de Los pacientes asintomáticos que son activos y producti-
insistirse, por otro lado, en la escasa probabilidad de lograr un vos y no muestran discapacidades físicas a pesar de su obesi-
control de peso adecuado por medio de tratamientos conven- dad grave presentan, a menudo, riesgos quirúrgicos modera-
cionales. La pérdida de peso prevista tras la cirugía, incluyen- dos y necesitan un estudio limitado en la preparación
do los porcentajes de fracasos, debería ser analizada en el con- quirúrgica. En el otro extremo del espectro están los pacien-
texto del papel curativo de la cirugía en el tratamiento de la tes que no pueden realizar actividades con equivalente meta-
obesidad. Es asimismo necesario hacer hincapié en el hecho bólico de cuatro (p. ej., subir un tramo de escaleras) sin dis-
de que han aumentado las evidencias que documentan el nea grave. Esos pacientes estarán expuestos a un riesgo mayor
menor número de riesgos para la salud y el aumento de la y necesitarán un estudio preoperatorio más exhaustivo.
calidad de vida, gracias a la cirugía de pérdida de peso.
Los posibles candidatos deben comprender los concep- Función pulmonar
tos referidos al balance energético en la patogenia de la obe-
sidad, a través de charlas sobre consumo calórico en la comi- Los cambios en la función pulmonar asociados a la obesidad
da comparado con las calorías usadas para el consumo vital y incluyen reducción de la distensibilidad de la pared torácica
la realización de actividades, así como percibir la importancia y los pulmones, aumento de la resistencia del sistema respi-
del ejercicio en el control del gasto energético y en el mante- ratorio, disminución de los volúmenes pulmonares y aumento
nimiento de peso. El papel del consumo y del gasto energéti- del esfuerzo requerido para el trabajo respiratorio.15 La
co en la adquisición y pérdida de peso debe ser bien explica- reducción del volumen pulmonar es el parámetro fisiológico
do, con el fin de que los pacientes se den cuenta de que no hay que tiene más repercusión clínica, por su asociación con ate-
soluciones milagrosas en el proceso de pérdida de peso. lectasias, oclusión de la vía respiratoria e hipoxia. Además, la
Los candidatos a cirugía deben comprender los concep- magnitud de la reducción de la capacidad residual funcional
tos de reducción de estómago y malabsorción, estrechamen- está directamente relacionada con la rapidez de desaturación
te relacionados con la pérdida de peso. Deberían revisarse durante la apnea en la inducción anestésica.
las intervenciones aceptadas para el control de la obesidad, El estudio preoperatorio de la función pulmonar debería
así como los riesgos y resultados de la laparoscopia y la ciru- realizarse en pacientes con obesidad grave y con enfermeda-
gía abierta. Es aconsejable asimismo analizar las ventajas, des respiratorias documentadas (asma o apnea del sueño) y en
desventajas y riesgos de los diversos procedimientos quirúr- aquellos cuya actividad está limitada a causa de una importan-
gicos, al igual que las complicaciones tardías de los procedi- te disnea con el esfuerzo. Los resultados de las pruebas de
mientos quirúrgicos y las cuestiones nutricionales, haciendo función pulmonar preoperatoria en 199 pacientes consecuti-
hincapié en la necesidad de proceder a un control nutricional vos operados de obesidad mórbida están resumidos en la
regular.10,11 tabla 13-1.16 El hallazgo más significativo es una reducción
Durante muchos años se ha subrayado la vital importan- media del 30% en la capacidad residual funcional y una reduc-
cia del aporte multidisciplinar en el manejo de la obesidad. ción media del 63% en el volumen de reserva espiratorio. Las
Los programas de cirugía bariátrica deberían proporcionar pruebas de función pulmonar identifican a los pacientes con
una actitud multidisciplinar similar, con el fin de preparar a mayor reducción en los volúmenes pulmonares o los porcen-
los pacientes para una cirugía segura, para cuidarlos tras la tajes de flujo de aire, así como aquellos que mejoran con bron-
cirugía y asegurar una nutrición saludable durante12 y des-
pués de la pérdida de peso a través de la cirugía.13
Tabla 13-1 OBESIDAD MÓRBIDA
Z EVALUACIÓN DE RIESGOS PREOPERATORIOS Y FUNCIÓN PULMONAR
PARÁMETROS PORCENTAJE ⫾ DE MÍNIMO MÁXIMO
Es necesario remarcar la vital importancia de una anamnesis
completa y una exploración por parte del equipo de cirugía Capacidad vital forzada 88,5 ⫾ 19 40 204
bariátrica. Muchos pacientes con obesidad mórbida reciben (% predicho)
una asistencia sanitaria subóptima, por varias razones, que Volumen espiratorio forzado 88,3 ⫾ 27 28 384
en 1 s (% predicho)
van desde la negación del paciente a la falta de interés médi-
Capacidad pulmonar total 89,6 ⫾ 15 40 204
co. La obesidad fue considerada como un problema de índo- (% predicho)
le social hasta 1985, fecha en la que fue reconocida como
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Capacidad residual funcional 70,1 ⫾ 33 20 391


enfermedad crónica.14 Por consiguiente, muchos profesiona- (% predicho)
les sanitarios no tienen conciencia de cuáles son los princi- Volumen residual (% predicho) 88,6 ⫾ 36 5 269
pales riesgos para la salud relacionados con la obesidad. El Volumen espiratorio de reserva 37,3 ⫾ 22 4 137
gran número de patologías comórbidas y el incremento de (% predicho)
los riesgos quirúrgicos asociados a la obesidad mórbida PaO2 85,5 ⫾ 11 61 126
requieren que todos los datos médicos estén bien documen-
Las pruebas de función pulmonar preoperatoria se obtuvieron en
tados y sean tratados de forma exhaustiva en la fase preope- 199 pacientes consecutivos que se sometían a tratamiento quirúrgico de
ratoria. A menudo los cirujanos bariátricos son los primeros obesidad mórbida. La relación entre mujeres y varones era de 81,4% a 18,6%.
en descubrir las patologías comórbidas durante la consulta El índice de masa corporal era de 50,3 ⫾ 9 kg/m 2. Los resultados muestran
notables reducciones en la capacidad funcional residual, con una reducción
quirúrgica. Los principales colaboradores para un trata- media importante (P ⬍ 0,05) en el volumen de reserva espiratorio. Tomado de
miento multidisciplinar de la obesidad son los médicos espe- Pereira B: datos no publicados.
104 Sección IV • ASISTENCIA PREOPERATORIA, PERIOPERATORIA Y POSTOPERATORIA

codilatadores tópicos. Los que presentan anomalías impor- IMC superior a 55 kg/m2 y el 93% de los pacientes con IMC
tantes en la función pulmonar pueden beneficiarse de la comprendido entre 50 y 55 kg/m 2 padecían AOS moderada
educación en el uso de la presión positiva continua en las vías o grave.24 La obesidad central, particularmente cuando
respiratorias (CPAP) con una mascarilla nasal para la admi- incluye el cuello, acarrea los riesgos más altos de AOS.25 Se
nistración de aerosoles inhalados con el fin de optimizar la cree que la obesidad influye en el tamaño de la vía aérea por
broncodilatación y entrenar los músculos inspiratorios, y así depósito de grasa en el cuello o por compresión externa.26
reducir los riesgos de complicaciones pulmonares. Las consecuencias clínicas de la AOS incluyen hipoxemia,
Como todas las operaciones del abdomen superior, la hipercapnia, vasoconstricción pulmonar y sistémica, polici-
cirugía para la obesidad mórbida está siempre asociada a una temia secundaria y arritmia. La vasoconstricción pulmonar
mayor reducción temporal en la función pulmonar.17,18 En la hipóxica puede causar una insuficiencia cardíaca derecha.
obesidad mórbida, la reducción de volúmenes pulmonares, La presencia de apnea del sueño conlleva riesgos adicio-
porcentajes de flujo e intercambio de gases es de entre el nales de hipoxia y requiere una atención especial para el uso
50% y el 60%.19,21 Esta reducción postoperatoria es máxima de narcóticos preoperatorios y para el manejo de la vía aérea
durante las primeras 48 a 72 horas después de la cirugía y por parte del anestesista y del cirujano.27 La falta de trata-
ocurre tanto en la cirugía bariátrica abierta como en la lapa- miento o el tratamiento inadecuado de la AOS está asociado
roscopica.19 Como resultado de esta reducción postoperato- con un aumento de la incidencia de complicaciones periope-
ria de la función pulmonar los pacientes con deterioro grave ratorias. A los pacientes sospechosos de tener apnea del sue-
de la misma pueden presentar riesgo de insuficiencia respi- ño se les debería hacer un estudio del sueño preoperatorio y
ratoria en el postoperatorio inmediato. La identificación de valoración de la CPAP. El uso preoperatorio de la CPAP
estos pacientes dictará los cuidados respiratorios postopera- reducirá la hipoxemia grave y la vasoconstricción pulmonar
torios y los recursos a usar. La gasometría arterial preopera- asociada, dando lugar a una mejora de la función ventricular
toria es beneficiosa en pacientes con un grado de actividad derecha. Debe instarse a los pacientes con AOS a que utili-
bajo debido a la disnea de esfuerzo. En un subgrupo de estos cen su máquina de CPAP en el hospital durante el período
pacientes puede detectarse una hipercapnia previamente no postoperatorio. La CPAP con oxígeno suplementario se
diagnosticada, que es otro factor de riesgo para las compli- introduce inmediatamente después de la extubación y se usa
caciones pulmonares postoperatorias.17 Algunos estudios de forma continuada, con breves períodos de descanso, has-
clínicos recientes han confirmado los resultados beneficio- ta la primera mañana del postoperatorio. Posteriormente se
sos de la CPAP después de la extubación en pacientes obesos emplea sólo durante el sueño hasta el alta.
de alto riesgo quirúrgico.20-22 En dos ensayos clínicos, el uso de
la CPAP con mascarilla nasal durante las primeras 24 horas VÍA AÉREA
después de la extubación dio como resultado una mejora en Una evaluación profunda y cuidadosa de la vía aérea del
la oxigenación y la función pulmonar en pacientes después paciente es esencial. La dificultad en asegurar la vía aérea es
de cirugía bariátrica.20,21 la principal causa de la morbilidad relacionada con la anes-
En el período preoperatorio se empieza a enseñar el uso tesia.28 La obesidad grave no es de por sí un factor de predic-
de la presión inspiratoria y espiratoria positiva en la vía aérea ción de complicaciones respiratorias. La cantidad de grasa
para optimizar el uso postoperatorio de este importante corporal es menos importante que su distribución. 29 Los
recurso. pacientes con obesidad mórbida presentan complicaciones
El consumo de tabaco es un factor de riesgo demostrado para la ventilación con mascarilla, intubación traqueal y, en
de complicaciones pulmonares postoperatorias. Dicho ries- caso de fallos en la intubación, dificultad para la cricoti-
go se reduce dejando de fumar ocho semanas antes de la roidotomía. Los factores que contribuyen a los problemas de
cirugía,17,23 aunque ello no ha sido evaluado a fondo en el las vías respiratorias en estos pacientes incluyen cara y meji-
ámbito de la cirugía bariátrica. Sin embargo, las experien- llas gordas, mamas grandes, cuello corto, lengua grande,
cias anteriores sobre la necesidad de una ventilación mecá- tejidos blandos, redundantes palatales y faríngeos, laringe
nica prolongada postoperatoria en obesos fumadores impor- anterior, limitación de la apertura bucal y movilidad restrin-
tantes, hacen que los autores insistan en la importancia del gida de la columna cervical.30
abandono del consumo de tabaco. Debe quedar claro para La posibilidad de proceder a la intubación de la vía aérea
pacientes y familiares que este requisito reduce el riesgo de con el paciente sedado o despierto se debe tratar con él pre-
complicaciones respiratorias graves y que el incumplimiento viamente, procediendo a la preparación correspondiente.
del mismo puede dar lugar a riesgos innecesarios. Muchos Como la obesidad es un factor de riesgo para aspiraciones
pacientes que dejan de fumar en la preparación para la ciru- del contenido gástrico los pacientes se pueden beneficiar de
gía bariátrica no vuelven a fumar después de la misma. la profilaxis para la aspiración.
APNEA DEL SUEÑO
Corazón
El estudio detallado que busque síntomas de apnea obstruc-
tiva del sueño (AOS) es un aspecto importante de la evalua- La disfunción cardíaca en grado variable es común en obe-
ción preoperatoria. Los síntomas de la AOS incluyen ron- sos mórbidos. Las alteraciones cardiovasculares asociadas
quido profundo, apnea confirmada por el compañero de con la obesidad mórbida incluyen hipertrofia cardíaca,
cama, somnolencia excesiva durante el día y pérdida de sue- aumento de la precarga, disfunción diastólica y, ocasional-
ño reconfortante. La incidencia de AOS moderada y grave mente, disfunción sistólica asociada a miocardiopatía.31,32
en pacientes con obesidad mórbida es sorprendentemente Los pacientes con obesidad mórbida grave (IMC ⬎ 50 kg/m2)
alta. Greene y cols. estudiaron a 300 pacientes consecutivos complicada con hipertensión, los que padecen apnea del sue-
que estaban siendo preparados para la cirugía bariátrica y ño asociada a hipertensión, y los que presentan retención de
descubrieron una relación directa estadísticamente signifi- líquidos deben someterse a exploraciones cardíacas exhaus-
cativa entre el índice de apnea e hipoapnea y el IMC, espe- tivas. La exploración permitirá un óptimo control de la
cialmente en varones. Se observó que todos los pacientes con hipertensión sistémica y el estudio de posibles afecciones de
Capítulo 13 • Preparación preoperatoria del paciente de cirugía bariátrica 105

hipertensión pulmonar, insuficiencia cardíaca congestiva y superiores a 60 kg/m2 y con antecedentes de trombosis veno-
cardiopatía isquémica. El trabajo cardíaco en la obesidad sa profunda y estasis venosa sigue siendo objeto de contro-
grave está aumentado por incremento del consumo de oxí- versia, ya que muchos opinan que estos pacientes se tratan
geno total relacionado con la gran masa corporal. El aumento mejor por medio de la colocación preoperatoria de un filtro
de la incidencia de muerte súbita en la obesidad mórbida en la vena cava inferior.
puede ser una manifestación de enfermedades cardiovascu-
lares ocultas en estos pacientes.33 Sistema endocrino
Tromboembolia Entre un 15% y un 25% de los obesos mórbidos padecen
diabetes tipo 2. El control de la glucemia en estos pacientes
La obesidad es factor de riesgo bien conocido de tromboem- es una parte importante de la atención preoperatorio, ya que es
bolia postoperatoria.34,35 El índice de complicaciones posto- conocida la asociación entre diabetes e infecciones quirúrgi-
peratorias tras la cirugía por obesidad grave es del 0,4% para cas locales.40 La hiperglucemia (⬎220 mg/dL) inhibe la
la trombosis venosa profunda y de un 0,8% para la embolia mayoría de las funciones principales de los leucocitos poli-
pulmonar. Para los equipos quirúrgicos experimentados, morfonucleares.41 Pruebas recientes indican que el control
capaces de minimizar el riesgo de complicaciones técnicas, estricto de la hiperglucemia durante el período preoperato-
la tromboembolia es la causa principal de muerte postopera- rio reduce el riesgo de infección.42 Los candidatos a cirugía
toria. Los factores adicionales que aumentan el riesgo de bariátrica y sus familias deben ser informados sobre la
tromboembolia postoperatoria son IMC de 60 kg/m 2 e insu- importancia de un adecuado control de la glucosa como
ficiencia venosa crónica.36 En los pacientes con riesgo eleva- requisito preoperatorio. Cuando el control de la glucosa res-
do y en pacientes preoperatorios con antecedentes persona- ponde en escasa medida a las adaptaciones en la medicación,
les o familiares de tromboembolia deben evaluarse los será necesaria una reducción preoperatoria del consumo de
estados de hipercoagulación.37,38 carbohidratos para mantener un nivel del azúcar en la sangre
El régimen profiláctico perioperatorio óptimo para inferior a 200-220 mg/dL.
prevenir la tromboembolia en la cirugía por obesidad no ha La hiperglucemia postoperatoria durante las primeras
sido establecido exactamente, pero muchos cirujanos bariá- 72 horas tras la cirugía es común en los pacientes obesos
tricos con experiencia apoyan la combinación de una dosis mórbidos. Los autores han obtenido excelentes resultados
de heparina de bajo peso molecular con estrategias secuen- combinando reposición de líquidos intravenosos libres de
ciales de compresión venosa en las piernas. En la tabla 13-2 glucosa con administración de insulina intravenosa de esca-
aparece resumida nuestra experiencia con varios regímenes la variable (v. tabla 13-3). Dicha escala aplicada junto con
profilácticos a lo largo de los últimos 10 años. Es importan- administración de insulina subcutánea proporciona un con-
te destacar que la dosis de heparina para el tratamiento de la trol de la glucosa subóptimo.43
tromboembolia está relacionada con el peso y que considerar Entre las causas de obesidad endocrinas poco frecuentes
una dosis fija para la profilaxis podría dar lugar a una posible se cuentan el hipotiroidismo y la enfermedad de Cushing. Los
subdosificación.39 Ello resulta especialmente importante en pacientes preoperatorios que no se han sometido reciente-
la obesidad mórbida extrema (IMC ⬎ 50 kg/m2), en la cual mente a un control de la función tiroidea deben hacerlo. La
se recomiendan dosis mayores de heparina de bajo peso función suprarrenal ha de ser igualmente valorada si el pacien-
molecular. La profilaxis ideal para los pacientes con IMC te muestra síntomas o signos del síndrome de Cushing, que
incluyen hipertensión, diabetes, obesidad central, debilidad,
atrofia muscular, hirsutismo, estrías, osteoporosis y acné.
Tabla 13-2 RÉGIMEN PROFILÁCTICO
Sistema digestivo
AÑO PROFILAXIS N TVP EP MUERTE En el 20% de los pacientes con obesidad mórbida se observan
1991-1995 Compresión 205 1 (tardía) 1 (tardía) 0 síntomas de reflujo gastroesofágico. Los pacientes preoperato-
secuencial en las rios que sufren síntomas de reflujo importantes deben ser some-
piernas y
heparina
subcutánea
1995-1998 Compresión sobre la 82 1 2 2 Tabla 13-3 REPOSICIÓN DE INSULINA Y LÍQUIDOS
pantorrilla y
heparina ESCALA
subcutánea
1998-2003 Compresión 626 2 (tardía)** 1 (tardía)** 0** Glucosa ⬎250 Avisar al médico
secuencial en las Glucosa 225-249 12 U bolo IV normal ⫹ 5 U/hora, infusión*
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

piernas e Glucosa 200-224 7 U bolo IV normal ⫹ 5 U/hora, infusión*


inyección Glucosa 175 -199 Ninguno ⫹ 5 U/hora, infusión*
de heparina de
Glucosa 150-174 Ninguno ⫹ 4 U/hora, infusión*
bajo
peso molecular Glucosa 125-149 Ninguno ⫹ 2 U/hora, infusión*
Glucosa ⬍125 Ninguno Ninguno
EP, embolia pulmonar; N, número de pacientes; TVP, trombosis venosa
profunda. *Inyección normal de insulina: 1 U/mL.
**P = 0,02 frente a compresión de la pantorrilla e inyección de heparina El protocolo para la cobertura de insulina intravenosa empieza en la sala de
subcutánea. reanimación.
Nuestra experiencia con la profilaxis de tromboembolia en 913 pacientes Inicialmente la glucosa se mide cada hora y la insulina intravenosa se
consecutivos sometidos a cirugía bariátrica tratados entre 1991 y 2003; la mejor administra según la escala variable. Cuando los niveles de glucosa se
profilaxis se obtuvo con la compresión secuencial en las piernas y dos estabilizan en un nivel inferior a 160 mg/dL, se mide cada 4 horas y el
inyecciones diarias de heparina de bajo peso molecular. tratamiento sigue la escala variable.
106 Sección IV • ASISTENCIA PREOPERATORIA, PERIOPERATORIA Y POSTOPERATORIA

tidos a una endoscopia esofágica si no lo han hecho antes. Se en el período perioperatorio.47 En pacientes obesos, la colo-
detectarán así casos aislados de esófago de Barrett, y de infec- cación de vías intravenosas y la colocación de dispositivos de
ción por Helicobacter pylori, que deben ser convenientemente monitorización intravascular puede resultar compleja. Para
tratados. En la planificación de la cirugía es útil documentar la estos casos es muy útil el uso de un ecógrafo portátil.
posible presencia de hernia hiatal. La obesidad y los cambios de
peso son, por otra parte, factores de riesgo para el desarrollo
de colelitiasis. La colelitiasis se da en un porcentaje comprendido Z GESTIÓN ESPECIAL DE PACIENTES DE ALTO
entre el 15% y el 20% de los pacientes con obesidad mórbida que RIESGO
están siendo preparados para la cirugía bariátrica. Si la colelitia-
sis se detecta antes de la operación, se ha de contemplar la posi- En un pequeño grupo de pacientes, el estudio preoperatorio
bilidad de practicar una colecistectomía al tiempo que se proce- identifica factores de riesgo principales que, si no se tienen
de a la cirugía bariátrica, ante la posibilidad que se desarrollen en consideración, están asociados a riesgos inasumibles de
síntomas biliares durante el período de pérdida de peso poste- mortalidad y de complicaciones graves. Como ejemplo, un
rior a la operación. Se ha demostrado que para los pacientes con hombre de 58 años con IMC de 60 kg/m 2, insuficiencia
cálculos biliares el uso de agentes que incrementan la solubilidad venosa crónica, retención de líquidos, hipoxemia y síndrome
del colesterol en la bilis reduce la formación de cálculos durante de obesidad-hipoventilación presenta una importante mor-
el período postoperatorio de pérdida de peso rápida.44,45 En los bilidad quirúrgica y riesgo de muerte. Las pautas estableci-
obesos mórbidos son comunes las anomalías en el funciona- das por los National Institutes of Health en 1991 señalan que
miento del hígado. El aumento de alanina aminotrasferasa es el los beneficios de la cirugía de pérdida de peso son mayores
hallazgo más común. Su causa principal son grados variables de que los riesgos del tratamiento quirúrgico. Este análisis
esteatosis hepática y esteatohepatitis. beneficio-riesgo debe ser evaluado cuidadosamente en
pacientes en los que el riesgo sea máximo.
Cuadros psiquiátricos La prescripción de una reducción de peso preoperatoria
como un «puente para una cirugía» segura es una opción de
Cuando proceda, preoperatoriamente se ha de abordar una tratamiento viable para pacientes de alto riesgo. Las estrate-
consulta psiquiátrica, con pruebas psicológicas, como parte gias para reducción de la ingesta calórica en estos pacientes
del proceso de evaluación previa. La consulta psiquiátrica se dan como resultado un rápido descenso de la presión arte-
debe plantear para todos los pacientes que reciben tratamien- rial, diuresis espontánea, mejora en la tolerancia de la gluco-
to psiquiátrico intensivo, para garantizar que los cambios de sa, mejora de la hipercapnia y reducción del riesgo de trom-
comportamiento alimentarios necesarios para la cirugía se bosis. Estas mejoras fisiológicas pueden ocurrir con una
ajustan a la salud mental del paciente. Además, los pacientes pérdida de peso de sólo 9 kg. Todos estos cambios contribu-
tratados con dosis altas de antipsicóticos y los que toman yen a disminuir riesgos perioperatorios. La restricción preo-
varios antidepresivos también deben someterse a consulta peratoria de calorías se puede lograr en estos pacientes, sin
preoperatoria para ajustar la dosis y cambiar los fármacos que ello afecte a la cicatrización de la herida.48 Aunque no se
orales por parenterales durante el período postoperatorio. dispone de ensayos prospectivos que apoyen la restricción
Aunque la consulta psiquiátrica preoperatoria no ha calórica preoperatoria, los autores consideran que en muchos
demostrado resultados beneficiosos, muchos la consideran casos el esfuerzo merece realmente la pena. La mayoría de
un importante factor en la evaluación de la cirugía en ciertos los pacientes están dispuestos a cooperar con la reducción
casos. Algunas aseguradoras a veces solicitan un estudio psi- de peso preoperatorio, si con ello mejoran el riesgo de cara
cológico como información necesaria para los seguros de a la consecución de buenos resultados quirúrgicos. Un nutri-
cobertura quirúrgica. Las evidencias actuales indican que cionista, integrado en el equipo multidisciplinar de cirugía
algunos factores psicosociales y de comportamiento pueden bariátrica, puede supervisar este proceso.
ser predictivos de éxito tras la derivación gástrica.46 Se debe
obtener y analizar información adicional relacionada por
parte de un analista del comportamiento con los resultados Z RESUMEN
después de la cirugía bariátrica para mejorar el proceso de
selección del paciente. El éxito de cualquier cirugía bariátrica se mide en función
de los resultados. Tales resultados se suelen tipificar con
referencia a la mortalidad y la morbilidad a 30 días. En la
Z ANESTESIA cirugía bariátrica, un buen resultado supone una operación
con una mortalidad inferior al 1% y una tasa de complicacio-
La consulta preoperatoria con el anestesista es importante, nes inferior al 3%. Por otra parte, un buen resultado quirúr-
dado que la obesidad mórbida está relacionada con impor- gico también incluye consejos nutricionales apropiados y
tantes riesgos anestésicos. La reducción del volumen pulmo- vigilancia para una alimentación saludable aparte de una
nar, la apnea del sueño y la dificultad para mantener abierta correcta elección de la comida durante la pérdida de peso.
la vía aérea aumentan el riesgo de hipoxia. Durante la induc- Finalmente, la consecución satisfactoria del proceso tam-
ción anestésica estos pacientes experimentan una desatura- bién requiere un rápido diagnóstico y tratamiento de las
ción rápida que requiere un inmediato control de la vía aérea. complicaciones quirúrgicas tardías y de las nutricionales. El
El riesgo de hipoxia durante el período perioperatorio es proceso de evaluación preoperatoria es una parte importan-
importante en estos pacientes, especialmente para los obesos te de los fundamentos de un buen resultado quirúrgico.
extremos, que son los que presentan una mayor reducción de Durante este período, los pacientes comprenden consolida-
volúmenes pulmonares, y para los que padecen AOS grave. da su confianza en el personal sanitario cuando comprenden
La importancia clínica de la hipoxia como factor de riesgo que hay muchos profesionales firmemente comprometidos
para la cicatrización de la herida quirúrgica y la resistencia a en asistirles en su cambio de vida. El intenso trabajo que los
la infección subraya la importancia del manejo respiratorio pacientes perciben durante su preparación preoperatoria
Capítulo 13 • Preparación preoperatoria del paciente de cirugía bariátrica 107

genera una atmósfera de confianza que influye favorable- 25. Dealberto M, Ferber C, Garma L, et al: Factors related to sleep apnea
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14
Consideraciones sobre anestesia
en la obesidad
Lipi Ramchandani, M.B.B.S., y Kumar G. Belani, M.B.B.S., M.S.

Los anestesistas deben estar familiarizados con la atención a obesidad no aumenta la incidencia de infarto de miocardio
los pacientes obesos, ya que la obesidad es un trastorno agudo. Como se indicó anteriormente, se observa un
nutricional en aumento en países desarrollados y en vías de aumento del gasto cardíaco con un incremento paralelo del
desarrollo.1 En el año 1985, la obesidad alcanzó proporciones volumen sanguíneo debido a la sangre suministrada al tejido
de epidemia en los países desarrollados.2 Debido a que la adiposo. Este incremento conduce a una elevación del con-
cirugía bariátrica es un abordaje terapéutico común, resulta sumo de oxígeno.
indispensable que los anestesistas conozcan la fisiopatología Se ha observado que, en respuesta al ejercicio, el gasto
de la obesidad mórbida y los riesgos y dificultades que pue- cardíaco crece más rápidamente en la obesidad mórbida;
den aparecer durante su atención. Entre los problemas se cuando esto ocurre, se produce un aumento de la presión del
incluyen dificultades en el acceso intravenoso, intubación y ventrículo izquierdo y de la presión de enclavamiento capilar
extubación traqueal así como el uso apropiado de opioides, pulmonar. Aunque el volumen total de sangre es mayor, la
relajantes musculares y otros fármacos.3 El Framingham relación peso/volumen disminuye en comparación con los
Heart Study reveló que los pacientes obesos presentan un individuos delgados (50 frente a 75 mL/kg de peso corporal).
riesgo tres veces mayor que las personas no obesas.4 El flujo sanguíneo visceral aumenta desproporcionadamen-
te cuando se compara con el flujo sanguíneo al cerebro y a
los riñones. El aumento aproximado del flujo sanguíneo vis-
Z SISTEMA CARDIOVASCULAR ceral y el volumen sanguíneo es de 20 a 30 mL por kg de
exceso de peso corporal.11 La hipertrofia ventricular y la dis-
Con el inicio y la progresión de la obesidad, los pacientes de- función empeoran al avanzar al la obesidad; a pesar de ello,
sarrollan hipertensión, aumento del volumen sanguíneo y dis- se han observado mejoras como resultado de la pérdida de
lipidemia. Incluso cuando son normotensos, existen evidencias peso.12 También se ha descrito que durante el ejercicio del
ecocardiográficas de un diámetro interno significativamente obeso, se observa una elevación del gasto cardíaco que tiene
mayor de los ventrículos y de un mayor grosor del tabique tele- lugar como resultado del aumento en la frecuencia cardíaca
diastólico y de la pared posterior del ventrículo izquierdo.5 sin que sea mayor la fracción de eyección.
Estos cambios están relacionados con el aumento de la canti- Los pacientes obesos también son propensos a arritmias
dad de depósitos de grasa intraabdominal. La hipertensión es cardíacas, debido al aumento de infiltración de grasa en el
leve o moderada en la mayoría de los pacientes, aunque es gra- sistema de conducción cardíaco y a la presencia de cardio-
ve entre el 5% y el 10%.6 Se ha demostrado que por cada 10 kg miopatía y de arteriopatía coronaria. Los factores extracar-
de aumento de peso corporal, la presión arterial sistólica díacos, como la apnea obstructiva del sueño asociada con
aumenta de 3 a 4 mm Hg, con un aumento diastólico de hipoxia, hipercapnia y desequilibrio hidroelectrolítico, jun-
2 mm Hg.7 Ello se debe al incremento del volumen circulatorio to con una elevación de las catecolaminas en circulación,
necesario para suministrar sangre a los depósitos de grasa que, incrementan esta predisposición.
además, da lugar a un mayor gasto cardíaco.8 El aumento de Muchos pacientes obesos son asintomáticos, incluso aun-
peso también conlleva una alteración metabólica de la resisten- que padezcan distintos grados de disfunción cardiovascular.
cia a la insulina. Además, existe un efecto sobre el sistema sim- La principal razón de ello es la limitación de la movilidad. Por
pático mediado por los barorreceptores arteriales.9 Debido a la tanto, es posible que no se presenten síntomas como angina
hipertensión resultante, se observan hipertrofia concéntrica y durante un esfuerzo excesivo o disnea durante el ejercicio. Sin
falta de distensibilidad del ventrículo izquierdo, que finalmen- embargo, estos síntomas pueden aparecer al realizar una acti-
te conduce a una insuficiencia cardíaca.10 vidad física mínima, como hablar, subir escaleras y otras
La obesidad también se asocia con cardiopatía isquémi- actividades cotidianas normales. Estas diferencias entres
ca, ya que los pacientes obesos son propensos a la hipercoles- pacientes obesos justifican una exploración cardiovascular
terolemia, a reducción de la densidad de los niveles de lipo- detallada y rigurosa, que debe realizarse independientemente
proteínas, a hipertensión y a diabetes mellitus. El estudio del tipo de procedimiento quirúrgico que se vaya a abordar.
Framingham señalaba una correlación directa entre la angi- La anamnesis debe incluir cualquier antecedente de hiperten-
na de pecho, la muerte súbita y la obesidad.4 En cambio, la sión, insuficiencia cardíaca, insuficiencia miocárdica o arrit-
108
Capítulo 14 • Consideraciones sobre anestesia en la obesidad 109

mias. Es esencial preguntar sobre los diversos medicamentos La obesidad también induce cambios funcionales signi-
que los pacientes puedan estar tomando. La exploración física ficativos en la respiración. Sharp y cols. observaron que en la
debe incluir la determinación de la presión arterial con man- obesidad simple y sin complicaciones y las distensibilidades
guitos de tamaño apropiado (se recomienda una sonda de de la pared torácica y respiratoria total eran del 92% y el 80%
42 cm de ancho).13,14 Si no se dispone de un manguito apro- en comparación con las de individuos no obesos. 24 Estos
piado, puede tomarse la presión arterial en el antebrazo usan- valores son incluso menores en pacientes obesos que padecen
do las pulsaciones radiales. Deben evaluarse signos de insufi- SHO (las distensibilidades de la pared torácica y respiratoria
ciencia cardíaca tales como hepatomegalia, elevación del total eran del 37% y el 44% con respecto a las de varones
pulso venoso yugular, tonos cardíacos adicionales, estertores normales no obesos). La disminución de la distensibilidad de
pulmonares o edema periférico. la pared torácica en la obesidad es causada por los efectos
mecánicos y gravitacionales del tejido adiposo, que presionan
la caja torácica, el diafragma y los pulmones.25 El exceso de
Z SISTEMA RESPIRATORIO peso es una carga inspiratoria añadida que los músculos ins-
piratorios deben superar antes de que se inicie el flujo de
La obesidad tiene profundos efectos sobre el sistema respi- inspiración. La resistencia de la vía aérea, la de la pared torá-
ratorio. Los cambios anatómicos dan lugar a apnea obstruc- cica y la respiratoria están todas ellas elevadas en la obesidad
tiva del sueño (AOS) y a síndrome de hipoventilación obs- simple y aumentan con el incremento del índice de masa cor-
tructiva (SHO), debido a la reducción del espacio faríngeo poral (IMC), así como cuando se presenta SHO. Las perso-
libre.15-17 Ello se debe al depósito de tejido adiposo en las pare- nas obesas tienen, por otra parte, una capacidad residual fun-
des de la faringe, incluso en la úvula, amígdalas, lengua y plie- cional (CRF) reducida. Aunque la conductancia específica de
gues aritenoepiglóticos. La distensión de la pared del tórax y la vía respiratoria puede ser normal o estar reducida en un
la diferencia entre las presiones extraluminal e intraluminial 50%, la resistencia respiratoria total aumenta cuando los
junto con el tono del músculo orofaríngeo determinan la per- pacientes obesos cambian de posición vertical a decúbito
meabilidad de la vía aérea. En individuos obesos, se producen supino, probablemente debido a una reducción adicional de
con facilidad colapso de la orofaringe de pared blanda y obs- la CRF. En esta posición, la CRF disminuye incluso más,
trucción de la vía aérea, debido a que el espacio faríngeo libre dando lugar a reducciones significativas en el volumen de
disminuye notablemente y aumenta la presión extraluminal cierre y afectando al intercambio gaseoso. Normalmente, las
(por depósito de tejido adiposo en el cuello).17 Como único respiraciones son rápidas y poco profundas; el esfuerzo res-
factor independiente, la obesidad es responsable de la AOS en piratorio aumenta y la capacidad inspiratoria se ve limitada.
un porcentaje comprendido entre el 60% y el 90% de la pobla- Ello resulta especialmente perjudicial, debido a que los
ción con este trastorno. El SHO se diferencia de la AOS en pacientes obesos presentan una disminución de la fuerza de
que no existe cese del flujo de aire (v. tabla 14-1).15 los músculos respiratorios y de la resistencia por el sobreesti-
Tanto la AOS como el SHO interrumpen repetidamente ramiento del diafragma, especialmente en decúbito supino.
el sueño; el paciente se despierta debido al aumento del esfuer- En pacientes obesos con SHO, se ha demostrado que se
zo respiratorio, lo que causa somnolencia diurna y disfunción registra una significativa mejora en la respuesta ventilatoria
cardiopulmonar. Un estudio realizado correctamente en un hipercápnica durante las 24 horas siguientes al inicio de la
laboratorio del sueño ayuda a establecer los diagnósticos de ventilación con presión positiva. Se observa una liberación
AOS y SHO. Los fármacos que inducen el sueño y la relaja- rápida de la fatiga de los músculos respiratorios debido a la
ción de los músculos orofaríngeos y de las vías respiratorias reducción del trabajo respiratorio.25
altas (tiopental, opioides, benzodiacepinas, óxido nitroso y
relajantes neuromusculares) pueden dar lugar a la obstrucción Espirometría y volúmenes pulmonares
de la vía aérea en pacientes obesos.18-23
En los pacientes obesos, la edad, el IMC y el tipo de distri-
bución de grasa influyen sobre los volúmenes pulmonares.
Tabla 14-1 DIFERENCIAS Y SIMILITUDES El desplazamiento del diafragma en el tórax debido al abdo-
ENTRE LA APNEA OBSTRUCTIVA men obeso da lugar a una disminución del volumen de reser-
DEL SUEÑO Y EL SÍNDROME va espiratoria. También disminuye la relación entre el volu-
DE HIPOVENTILACIÓN OBSTRUCTIVA men espiratorio forzado en un segundo (VEF1) y la capacidad
vital forzada. Como se ha comentado previamente, la CRF
CRITERIO AOS SHO está reducida y se ha indicado que en obesos con SHO su
Disminución del flujo de 100% ⬎50% valor es de entre el 75% y el 80% del previsto Estos pacientes
aire ⬎ 10s muestran, además, una reducción del 20% en su capacidad
Tiempo/horas ⬎5 ⬎15 pulmonar total y una reducción del 40% en el volumen ven-
Esfuerzo ventilatorio Sí con obstrucción Sí con ronquido tilatorio máximo en un minuto y en el VEF1. Incluso aunque
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Disminución de la ⱖ4% ⱖ4% los pacientes obesos presentan volúmenes pulmonares redu-
saturación de O2 cidos, su trabajo respiratorio aumentaba el 70%. Cuando
Interrupción del sueño Sí Sí aparece SHO el trabajo puede aumentar hasta un 280%.
Somnolencia diurna Sí Sí La frecuencia respiratoria aumenta el 40% y los volúme-
Aumento mantenido ⱖ45 mm Hg ⱖ45 mm Hg nes corrientes son del 50% al 80% de los valores normales en
de la PaCO2 individuos no obesos. Estos cambios están relacionados con el
Modificado de Benumof JL: Obstructive sleep apnea, in the adult obese aumento del IMC. Puesto que las bases pulmonares están
patient: implications for airway management. Anesth Clin North Am 2002;20: bien perfundidas pero mal ventiladas debido al cierre de las
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AOS, apnea obstructiva del sueño; SHO, síndrome de hipoventilación so alveolar, se produce un desajuste entre ventilación y perfu-
obstructivo. sión, que genera una ampliación de las diferencias alveolo-
110 Sección IV • ASISTENCIA PREOPERATORIA, PERIOPERATORIA Y POSTOPERATORIA

arteriales de la concentración de oxígeno (DA-aO2). Como se esofágico inferior hipotónico, movilidad esofágica ineficaz y
apuntó anteriormente, cuando se presenta AOS o SHO, apa- hernia de hiato. Los pacientes obesos con cantidades grandes
rece con frecuencia hipoxia en estos pacientes. Varios facto- demostradas de líquido gástrico y tiempo de vaciado gástrico
res, concretamente el aumento del trabajo respiratorio, la más lento experimentan una mejora significativa de estos índi-
disminución de la resistencia y de la fuerza del músculo respi- ces tras conseguir una pérdida de peso.34,35
ratorio y la fatiga, contribuyen a las elevaciones de la presión
parcial de dióxido de carbono en reposo (PaCO2) en estos Efectos de la obesidad sobre el hígado
pacientes. La liberación de la obstrucción de las vías respira-
torias altas usando la presión positiva continua en las vías res- La obesidad predispone a los pacientes a una esteatohepatitis
piratorias (CPAP) nasal o la traqueostomía revierte la hiper- no alcohólica (EHNA) y a colelitiasis. Sin embargo, la fun-
capnia, pero no la respuesta a esta.26-28 ción metabólica del hígado no se ve afectada en la mayoría
de los pacientes obesos. La diabetes mellitus también predis-
Implicaciones para la anestesia de las alteraciones pone a los pacientes obesos a padecer EHNA. Los pacientes
respiratorias con EHNA pueden presentar niveles elevados de enzimas
hepáticas, aumento de la concentración de triglicéridos,
Debido a los significativos cambios observados en la fisiolo- hepatomegalia y cirrosis (10%).36
gía del sistema respiratorio, es muy importante que el equi-
po sanitario de anestesia realice una evaluación preoperato-
ria minuciosa y completa del paciente. Ello ayuda a decidir Z SISTEMA HEMATOLÓGICO
entre las diversas modalidades y opciones disponibles, de
modo que se pueda planificar una técnica de anestesia eficaz Tanto la policitemia como la insuficiencia venosa predispo-
específicamente diseñada para el paciente. Se ha demostrado nen a las personas obesas a padecer trombosis venosa pro-
que tanto la anestesia general como la local tienen efectos funda (TVP). La insuficiencia venosa da lugar al aumento de
sobre el sistema respiratorio.29 la presión intraabdominal y a la consiguiente inmoviliza-
En pacientes que suscitan preocupación, la evaluación ción. Se ha observado disminución de la actividad fibrinolí-
preoperatoria debe incluir un hemograma completo (para des- tica, junto con aumento de las concentraciones de fibrinóge-
cartar policitemia debida a hipoxia prolongada), radiografía de no en obesos. Pivalizza y cols.37 evaluaron a 26 pacientes
tórax y gasometría arterial, tanto de pie como en posición obesos y los compararon con pacientes delgados que se
supina, pruebas de función pulmonar y, probablemente, oxi- sometieron a procedimientos quirúrgicos. Con la ayuda de
metría durante la noche. Es importante obtener los anteceden- tromboelastografía, encontraron que los pacientes obesos
tes de AOS, SHO e hipoventilación crónica diurnas en estas mostraban una formación acelerada de fibrina y una mejora
personas. Para confirmar el diagnóstico es útil un estudio for- de la interacción entre plaquetas y fibrina. Sin embargo, la
mal del sueño. Los pacientes con AOS pueden recibir trata- fibrinólisis era similar en ambos grupos.
miento previo a la cirugía, como CPAP nasal nocturno o pre- Debido al aumento en la tendencia a formar coágulos, el
sión positiva de dos niveles en las vías respiratorias (BiPAP). riesgo de TVP durante la realización de una cirugía abdomi-
nal por motivos diferentes al tratamiento de una neoplasia
maligna es del doble en personas obesas que en individuos
Z SISTEMA DIGESTIVO delgados (48% frente a 23%).38 Ello aumenta automáticamen-
te la probabilidad de embolia pulmonar, que se ha notificado
Las personas obesas muestran un aumento de la presión intra- que es de entre el 2,4% y el 4,5% tras una cirugía bariátri-
abdominal junto con un aumento del volumen gástrico. Existe ca.39,40 Para reducir el riesgo de TVP y de embolia pulmonar
controversia sobre si ello predispone a estas personas a una en pacientes obesos, la mayoría de los protocolos quirúrgicos
posible aspiración y a la enfermedad de reflujo gastroesofágico favorecen el empleo de profilaxis anticoagulante y medias de
(ERGE). Lo que es menos controvertido es que se observa una compresión neumática para las extremidades inferiores.
incidencia más alta de hernia de hiato con la ERGE. Vaughan
y cols. sugieren que los pacientes obesos deber ser tratados
como pacientes obstétricas del tercer trimestre que presentan Z SISTEMA RENAL
un aumento del riesgo de aspiración.30 Esto, sin embargo, no
fue confirmado por el estudio de Harter y cols.31 Estos autores Los pacientes obesos tienen exceso de tejido adiposo alrede-
estudiaron el volumen y el pH del contenido gástrico en dor de los riñones. Ello altera las fuerzas físicas intrarrenales
pacientes obesos y delgados en ayunas sin obstrucción gastro- debido a la compresión medular. Además, por el aumento de
intestinal. Sólo el 26,6% de los pacientes obesos tenían un la presión abdominal, los pacientes obesos presentan vasodi-
volumen de contenido gástrico alto con un pH bajo. Este dato latación renal crónica, con aumento de la presión hidrostática
contrastaba de forma significativa con el 42,05% de los indivi- y de la tensión parietal glomerular. Se observa una activación
duos delgados que tenían un volumen alto con pH bajo. En un del sistema simpático y del sistema renina angiotensina, que
metaanálisis revisado por Kranke y cols. se sugieren resultados da lugar a un aumento de la reabsorción tubular. Tales proce-
similares.32 Por otro lado, Gomez y cols. realizaron una revi- sos predisponen a los pacientes obesos a la disfunción renal
sión de cohorte para evaluar la relación entre la obesidad y la crónica, como puede apreciarse por la presencia de microal-
ERGE.33 También estudiaron el impacto de la dieta hipocaló- buminuria. La hipertensión asociada, la hiperglucemia (dia-
rica y de la cirugía bariátrica en los síntomas de reflujo gastro- betes mellitus), la hipercolesterolemia y la hipertrigliceride-
intestinal. Estos autores concluyeron que la obesidad como mia aceleran la disfunción renal crónica en la obesidad.41,42
enfermedad predispone al desarrollo de ERGE. A pesar de Los resultados de un estudio realizado por Maddox y cols. en
este dato, no se dispone de estudios que correlacionen el grado ratas Zucker hiperfágicas sugieren que el desarrollo de daño
de obesidad con los síntomas de reflujo. Los mecanismos fisio- renal (lesión glomerular) como consecuencia de la obesidad
patológicos que pueden presentarse en la obesidad son esfínter puede prevenirse mediante la restricción de alimentos.43
Capítulo 14 • Consideraciones sobre anestesia en la obesidad 111

Z EVALUACIÓN PREOPERATORIA y disnea. Ha de evaluarse la presencia de ronquidos, apnea


durante el sueño, despertar frecuente, somnolencia diurna y
Acceso intravenoso astenia. Los resultados de un estudio formal del sueño son
útiles para determinar objetivamente la presencia o ausencia
La presencia de tejido subcutáneo excesivo disminuye la de AOS o SHO.15,49
visibilidad de las venas periféricas. Puede ser necesario un En ocasiones son necesarias pruebas de función pulmo-
equipo de ecografía portátil para la identificación y canula- nar para apreciar los efectos sobre las capacidades pulmonares
ción de las venas periféricas. En algunos pacientes, es a veces y los mecanismos de la vía aérea. La gasometría arterial indi-
difícil identificar el acceso periférico y puede ser necesaria la ca si el paciente está reteniendo dióxido de carbono o padece
canulación de una vena central. La presencia de un acceso hipoxemia. La presencia de policitemia sugiere una hipoxe-
venoso fiable facilita la atención durante el período postope- mia prolongada. La radiografía de tórax permite evaluar el
ratorio. En pacientes diabéticos obesos, la presencia de un estado anatómico de las estructuras pulmonar y cardíaca.
catéter venoso central multipuerto facilita la toma de mues-
tras para determinar la glucosa en sangre y otras pruebas Otras precauciones pertinentes
analíticas.44,45
Determinados pacientes para los que se ha programado
Sistema cardiovascular una cirugía bariátrica repetida o se han sometido a cirugía
bariátrica en el pasado, presentan en ocasiones deficiencias
Una anamnesis detallada, la exploración física y las pruebas nutricionales prolongadas comunes que pueden incluir
complementarias dirigidas ayudan a descartar el grado y deficiencias de vitamina B12, hierro, calcio, tiamina, vitami-
gravedad de los cambios fisiológicos cardiovasculares referi- na K y cinc. Por tanto, es importante evaluar antes de la
dos en pacientes obesos. Debe anotarse la gravedad de la cirugía el estado electrolítico y de coagulación. La deficien-
hipertensión y su control con la medicación, si se toma algu- cia crónica de vitamina K (deficiencia de factores de coagu-
na. La cardiopatía isquémica, cuando se presenta, puede ser lación II, VII, IX y X) puede inducir un aumento en el tiem-
estable y, si es importante, requiere una evaluación preope- po de protrombina, con tiempo de tromboplastina parcial
ratoria adicional. La evaluación también debe incluir una normal.50 En caso de cirugía programada, pueden usarse
valoración de la hipertensión pulmonar y signos de insufi- análogos de la vitamina K como la fitonadiona para corregir
ciencia cardíaca del hemicardio derecho o izquierdo. Los la coagulopatía en 6 a 24 horas. En caso de intervención de
signos de insuficiencia cardíaca son aumento de la presión urgencia, puede ser necesario plasma fresco congelado.
yugular, tonos cardíacos adicionales, crepitantes pulmona- Como se mencionó previamente, los pacientes obesos pre-
res, hepatomegalia y edema periférico. Por otra parte, entre sentan un aumento del riesgo de desarrollar TVP. Por esta
los síntomas de hipertensión pulmonar se cuentan disnea del razón, se recomiendan heparinización con minidosis, medias
ejercicio, astenia y síncope, que reflejan la incapacidad para elásticas, medias o botas de compresión neumática y eleva-
aumentar el gasto cardíaco durante la actividad. La identifi- ción frecuente de las piernas. La diabetes mellitus de tipo 2
cación de la regurgitación tricúspide con ecocardiografía es es frecuente en pacientes obesos y debe confirmarse con la
la confirmación más definitiva de hipertensión pulmonar. determinación del nivel de glucosa en sangre en ayunas y
Debe realizarse una radiografía de tórax para descartar una prueba de la presencia de cetonas en sangre y orina. La
hepatomegalia. El electrocardiograma (ECG) ayuda (espe- diabetes mellitus puede empeorar el riesgo de ERGE.51
cialmente en presencia de insuficiencia ventricular derecha
avanzada) a detectar los signos de hipertrofia del ventrículo Uso de fármacos perioperatorios
derecho, como ondas R altas en precordiales, desviación del
eje derecho y sobrecarga del ventrículo derecho. Se requiere Los pacientes obesos a menudo toman medicación para con-
una notable experiencia en la interpretación de ECG debido trolar la presión arterial y los niveles de glucosa en sangre.
al excesivo tejido adiposo superpuesto y a la grasa epicárdica Antes de la intervención es necesario continuar tomando los
que puede interferir con el voltaje del complejo QRS y con antihipertensivos pertinentes (con un sorbo de agua). Por
otras ondas. El ECG también mostró presencia de arritmias otra parte, se ha de interrumpir la administración de fárma-
y desviaciones del eje.29,46 Una hipertensión pulmonar de cos hipoglucemiantes orales y debe controlarse la glucosa en
leve a moderada garantiza la prevención de la hipoxemia, sangre con insulina, usando una escala de dosis variable.
ácido nitroso y otros fármacos que puede agravar adicional- Algunos pacientes bariátricos pueden estar tomando medi-
mente la vasoconstricción pulmonar.47,48 cación para perder peso, o incluso productos de herbolario.
La ecocardiografía ayuda a evaluar la función cardíaca A este respecto es necesario revisar los posibles efectos sis-
en detalle con respecto a la fracción de eyección, la movili- témicos e interacciones no deseadas con otros fármacos.
dad del tabique, la disfunción vascular y cualquier otro pro- Dos medicamentos usados normalmente para perder
blema funcional. Por tanto, cuando sean necesarios un diag- peso son sibutramina y orlistat. La sibutramina inhibe la
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nóstico preciso y el establecimiento de un tratamiento recaptación de noradrenalina, serotonina y dopamina, por lo


preoperatorio adecuado, es necesario consultar con un car- que causa anorexia; produce aumentos transitorios relacio-
diólogo. La consulta, que en ocasiones obliga a posponer la nados con la dosis en las presiones arteriales sistémica y dias-
cirugía, también ayuda a la planificación del control invasivo tólica, en una medida de 2 a 4 mm Hg, e induce un pequeño
intraoperatorio (p. ej., ecocardiografía transesofágica con o aumento en la frecuencia cardíaca, de 3 a 5 latidos por minu-
sin cateterización de la arteria pulmonar). to. El orlistat es un producto derivado de Streptomyces toxytri-
cini, que inhibe la lipasa en mamíferos. El fármaco bloquea
Aparato respiratorio la digestión y absorción de la grasa de la dieta, uniéndose a
las lipasas del tubo digestivo. Da lugar a una absorción insu-
La anamnesis debe incluir una evaluación de la presencia de ficiente de la grasa y a una disminución de la concentración
AOS, SHO, obstrucción de las vías respiratorias superiores sérica de la vitaminas liposolubles (A, D, E y K). En algunos
112 Sección IV • ASISTENCIA PREOPERATORIA, PERIOPERATORIA Y POSTOPERATORIA

casos, se ha observado que el orlistat produce un agrava- influyen varios factores: la presencia de un cuello grueso y
miento de la hipertensión.52-54 El efecto anticoagulante de la corto, la estrecha relación entre cuello corto y AOS y el exce-
warfarina también puede aumentar debido a que el orlistat so de tejido faríngeo en las paredes laterales de la laringe.
disminuye la absorción de vitamina K. Brodsky y cols.61 estudiaron a 100 pacientes con obesidad
La profilaxis antibiótica perioperatoria es importante mórbida para identificar factores que complican la laringos-
para minimizar el riesgo de infección de heridas. La tasa de copia directa y la intubación traqueal. Antes de la operación
infección de heridas publicada después de procedimientos registraron datos sobre estatura, peso, perímetro del cuello,
gástricos en pacientes con obesidad mórbida es aproximada- amplitud de apertura de la boca, distancia esternoepiploica,
mente el doble que la registrada en pacientes delgados. distancia tiroepiploica y puntuación de Mallampati. También
Nguyen y cols. encontraron que la derivación gástrica abier- se valoraba la visión laringoscópica y el número de intentos para
ta en Y de Roux daba lugar a una incidencia unas 10 veces la intubación traqueal. Los autores encontraron que ni la obe-
mayor de infección de la herida que la registrada con la téc- sidad ni el IMC se correlacionaban con la dificultad de la intu-
nica laparoscópica.55 Sin embargo, los médicos recomenda- bación. La anchura del cuello y la puntuación de Mallampati
ban también profilaxis antibiótica para la técnica laparoscó- fueron los dos únicos factores pronósticos de posibles proble-
pica.56 Los antibióticos deben administrarse no más de mas de intubación. Los pacientes con un aumento del períme-
45 minutos antes de la incisión y repetirse cada 2 horas en tro del cuello necesitaban una intervención mediante un
los casos de intervención prolongada. La profilaxis para la broncoscopio de fibra óptica para establecer una vía aérea.
TVP con heparina y dispositivos de compresión se inicia Además, los pacientes con una puntuación de Mallampati
justo antes de la cirugía y se continúa hasta al menos 12 horas superior o igual a 3 tenían mayor dificultad de intubación
después de la operación, a no ser que el paciente tenga otros traqueal. Otras evaluaciones habituales, como la movilidad de
problemas médicos significativos que requieran tratamiento la mandíbula y del cuello, el estado dental, la permeabilidad
de anticoagulación prolongado. de las fosas nasales y la inspección de la orofaringe deben rea-
lizarse antes de la puesta en práctiva de un plan de aplicación
Evaluación preoperatoria de la vía aérea de anestesia para pacientes obesos.

En el caso de pacientes obesos es más difícil colocar la masca-


rilla, aplicar la ventilación e intubar. Esto es debido a su tama- Z DESARROLLO DE UN PLAN DE CUIDADOS
ño, a que tienen el cuello más corto y con mayor perímetro, a EN LA ANESTESIA
la presencia de excesivo tejido faríngeo y a que su lengua pre-
senta una base más ancha.15 Es obligatorio examinar cuidado- Después de completar la evaluación preoperatoria, en una
samente en cada paciente obeso la viabilidad de la ventilación consulta preoperatoria o el día de la cirugía en el área preo-
con mascarilla, la intubación y el riesgo de aspiración. En peratoria, el equipo sanitario de anestesia debe formular un
ausencia de reflujo significativo y de hernia de hiato, la mayo- plan de atención durante la anestesia para el procedimiento
ría de los pacientes pueden ventilarse de forma pasiva antes de contemplado. La mayoría de los pacientes requieren aneste-
la intubación con una máscara, si es necesario. Es importante sia general, aunque algunos procedimientos podrían reali-
tener esto en cuenta antes de la operación, ya que la intuba- zarse usando técnicas de anestesia local o infiltración local
ción endotraqueal es en ocasiones más prolongada de lo pre- de anestesia combinada con sedación para la anestesia con-
visto, por lo que será necesaria la ventilación con mascarilla. trolada. Antes de la intervención, debe establecerse en todos
Aunque es necesario disponer de los antecedentes y las revi- los pacientes un acceso intravenoso adecuado. Ello puede
siones de la historia clínica, conviene recordar que estos pue- requerir el uso de un equipo de ecografía portátil.62 Para el
den llevar a error si el paciente ha aumentado significativa- control de la presión arterial debe disponerse de un mangui-
mente de peso. Si, en ocasiones previas, fue difícil ventilar con to de tamaño adecuado (⬎42 cm). El manguito debe abarcar
mascarilla o intubar al paciente, siempre que no se haya obser- al menos dos tercios de la longitud del brazo y tener una
vado una pérdida de peso importante con mejora de la vía capacidad de la cámara de aire proporcional a su tamaño. En
aérea debe asumirse que el paciente presenta dificultad en lo pacientes con hipertensión no controlada y en aquellos en
que respecta al cuidado de la vía aérea, a menos que se pruebe los que se prevean variaciones excesivas y súbitas de la pre-
lo contrario. Los pacientes obesos pueden tener un movi- sión arterial, debe considerarse la aplicación de un control
miento del cuello y de abertura de la boca limitados, lo que invasivo con un catéter en la arteria radial. Actualmente, se
dificulta su intubación. Voyagis y cols. examinaron la clase de dispone de un nuevo método (el sistema Vasotrac) que per-
Mallampati, la abertura de la boca y los riesgos de intuba- mite medir de forma no invasiva y continuada la presión
ción.57 Estos autores encontraron que una base de la lengua arterial en la arteria radial. Tal sistema ha demostrado su
desproporcionadamente grande predispone al paciente a una utilidad y facilidad de uso en casos de obesidad mórbida.63
difícil intubación. Quienes presentan una circunferencia del Cuando se planea una cirugía extensa, es útil un catéter
cuello de 42 cm son probablemente los más difíciles de intu- venoso central para la extracción de muestras de sangre
bar, a menos que un aumento de la abertura de la boca y del y para el control de la presión venosa central (PVC). Se
tamaño de la lengua compensen esta característica.58,59 Debe recomienda un catéter en la arteria pulmonar, destinado a
anotarse la existencia de respiración sin esfuerzo y de fosas controlar la presión arterial pulmonar, la presión de encla-
nasales permeables. La presencia de AOS y un tamaño corpo- vamiento y el transporte de oxígeno en pacientes con enfer-
ral superior al 175% del peso corporal ideal sugiere a menudo medad cardiopulmonar avanzada.51 Hemos comprobado la
la posibilidad de dificultades en la vía aérea. En dos estudios gran utilidad de los equipos de ecografía portátiles para
realizados en una serie de pacientes con obesidad mórbida que identificar la venas yugulares internas y para disponer de un
se sometieron a cirugía abdominal, la incidencia de dificultad acceso rápido y seguro.
en la vía aérea después de la anestesia general era del 13% y Dependiendo de sus pesos corporales, muchos pacientes
del 24%, y la incidencia de pacientes que necesitaban intuba- obesos puede transportarse de forma segura en camillas. La
ción despiertos era del 8%.39,60 Los autores creen que en ello mayoría de las mesas de quirófano están diseñadas para
Capítulo 14 • Consideraciones sobre anestesia en la obesidad 113

pacientes de 120 a 140 kg de peso (máximo de 225 kg). Si se nificativo del volumen de distribución (Vd) en personas obe-
excede este límite se expone al paciente y al personal a un sas en comparación con los individuos de peso normal.70,71
riesgo. En ocasiones son necesarias mesas especialmente Los compuestos menos lipófilos presentan cambios peque-
diseñadas. Existen mesas de quirófano capaces de soportar ños o nulos en la distribución (Vd) en personas obesas.
hasta 455 kg, y que son algo más anchas de lo normal. Una Algunas excepciones a esta norma son la digoxina, la procai-
mesa de operaciones eléctrica ayuda a colocar a los pacientes namida y el remifentanilo, fármacos muy lipófilos que no
en posiciones favorables para la cirugía. Los pacientes some- presentan relación sistémica entre el grado de lipofilia y su
tidos a cirugía bariátrica son propensos a escurrirse de la distribución en la persona obesa.51 Su volumen de distribu-
mesa de operaciones, de modo que deben estar atados de ción permanece constante y sus dosis tienen que calcularse
forma segura a la mesa. Existen cojines a modo almohadas en función del peso inicial o, más exactamente, de la masa
blandas en diversos tamaños que son útiles para acomodar el corporal magra. En un porcentaje comprendido entre el
cuerpo del paciente.51 Como sucede en otros pacientes, pero 20% y el 40% de los individuos obesos, el peso ideal y la
tal vez en mayor medida en en el caso de los pacientes obe- masa corporal magra no son idénticos. Ello se debe a que el
sos, es necesario proteger las áreas de presión para reducir la aumento del peso corporal puede ser ocasionado por una
probabilidad de úlceras por decúbito y lesiones nerviosas mayor masa corporal magra. Por tanto, se ha indicado que,
(p. ej., por la abducción extrema de los brazos).64 en el caso de los fármacos lipófilos, puede añadirse el 20% al
Como se ha indicado, algunos pacientes obesos toleran peso corporal ideal cuando se calcula la dosis.51
mal la posición supina. Este dato debe comprobarse antes de Wada y cols. realizaron una simulación por ordenador
la operación, ya que cuando la reserva cardíaca es limitada, la de los efectos de las alteraciones en el flujo sanguíneo y en la
colocación en decúbito supino puede tener consecuencias composición corporal para la farmacocinética de tiopental
incluso mortales. Al colocarse en la posición supina, se aumen- en humanos.72 Encontraron que el aumento de la grasa cor-
ta la precarga en estos pacientes y también aumentan el traba- poral actúa como un depósito que retiene el tiopental en el
jo respiratorio y el consumo de oxígeno.65 Además, cabe la organismo. Ello a su vez conduce a un aumento de la semi-
posibilidad de que se produzca compresión de la vena cava vida terminal (T1/2), de 7 horas en pacientes delgados a
inferior, lo que da lugar a la reducción del retorno venoso con 23 horas en pacientes obesos, y en el volumen de distribu-
hipotensión. Esta compresión puede minimizarse inclinando ción (Vd), de 1,6 a 3,3 L por kg en pacientes delgados frente
la mesa de operaciones a la izquierda o colocando una cuña a obesos. Por tanto, en el caso del tiopental y otros fármacos
debajo del paciente.66,67 Por estas razones, es mejor anestesiar lipófilos (p. ej., benzodiacepinas) o agentes de inhalación
al paciente sobre la mesa de operaciones en el quirófano. potentes, los efectos pueden perdurar durante algún tiempo
En pacientes obesos, debe decidirse de antemano una tras su interrupción.73
estrategia para asegurar la vía aérea. Con la obesidad aumentan los triglicéridos, lipopro-
En ocasiones, una exploración directa de laringe sobre la teínas, colesterol y ácidos grasos libres, y puede inhibirse
mesa de operaciones, con sedación y preoxigenación adecua- la unión a proteínas de determinados fármacos, aumentado
das, ayuda a confirmar si la intubación será fácil o difícil. Si se sus fracciones libres. Tal situación se equilibra mediante
estima que la estrategia para asegurar la vía aérea es factible, el aumento de la concentración de ␣-1-glucoproteína ácida
no es necesaria una intervención especial. Por otro lado, si se que aumenta el grado de unión a proteínas de otros fármacos
prevén dificultades al respecto, debe hacerse lo posible por (p. ej., anestésicos locales); esto reduce las fracciones libres
establecer una intubación endotraqueal antes de que el pacien- en plasma.
te esté completamente anestesiado. Para ello será necesario A pesar de las modestas anomalías histológicas observa-
instruirlo y prepararlo debidamente. En la mayoría de los das en pacientes obesos, permanecen inalterados el aclara-
casos, es útil el uso de un fibroscopio en un paciente prepara- miento hepático y las reacciones metabólicas de fase I (oxi-
do y óptimamente sedado, oxigenado y ventilado. También dación, reducción e hidrólisis) o aumentan en estos pacientes
puede considerarse el uso de mascarilla laríngea de intubación obesos.74 Además, el metabolismo de fármacos mediante las
u otro dispositivo de acceso a la vía aérea, para la colocación reacciones metabólicas de fase II (p. ej., loracepam) aumenta
con éxito del tubo endotraqueal en la laringe.68 de forma sistemática. La insuficiencia cardíaca y la reduc-
Durante la atención a estos pacientes es necesario dis- ción del flujo sanguíneo hepático puede ralentizar la elimi-
poner de una unidad portátil para el manejo de vías aéreas nación de los fármacos por el hígado (p. ej., midazolam y
difíciles. Además de un fibroscopio y la disponibilidad de lidocaína).73
una mascarilla laríngea, esta unidad debe incluir al menos El propofol es muy lipófilo y se distribuye rápidamente
diversos tipos y tamaños grandes de hojas de laringoscopio, a través de la sangre, siendo el Vd inicial de 18 L. La dosis tan
un Combitube, equipos de cricotirotomía y kits de intuba- mayor necesaria para la inducción puede inducir depresión
ción retrógrada. Durante la laringoscopia convencional, un cardiovascular.75 Las cinéticas de fentanilo, alfentanilo y
conjunto de toallas o sábanas dobladas colocadas debajo de sufentanilo en la obesidad son hasta cierto punto impredeci-
los hombros ayuda a compensar la posición exageradamente bles. La de fentanilo es similar a la de personas no obesas.76
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flexionada, debida a la la grasa cervical posterior. Esto es lo El alfentanilo y el sufentanilo tienen semividas de elimina-
que se conoce como «acumulación»; el extremo de la barbi- ción más largas. Además, el uso de remifentanilo puede
lla ha de estar a un nivel superior que el pecho para facilitar reducir el tiempo de despertar de pacientes no obesos.77,78
la laringoscopia y la intubación.51,69 Con respecto a los anestésicos por inhalación, el enfo-
que tradicional se centra en el hecho de que el despertar
Farmacología anestésica puede retrasarse debido a su lenta liberación a partir del teji-
do adiposo excesivo. Por tanto, se prefiere el desflurano,
Los cambios fisiológicos asociados con la obesidad conlle- debido a su perfil de recuperación más rápido y regular.79 En
van alteraciones en la distribución, unión y eliminación de varios estudios se comparó el uso de sevoflurano e isoflura-
muchos fármacos. Las sustancias altamente lipófilas, como no para la cirugía bariátrica.80-82 En ellos se favorecía el uso
barbitúricos y benzodiacepinas, muestran un aumento sig- de sevoflurano debido a la rápida recuperación, buen control
114 Sección IV • ASISTENCIA PREOPERATORIA, PERIOPERATORIA Y POSTOPERATORIA

hemodinámico, baja incidencia de náuseas y vómitos, y rápi- ne un cierre completo. Se recomienda un caudal de oxígeno
da recuperación de la función psicológica y física, así como de 10 L por minuto.93,94 Debe indicarse al paciente que res-
el alta hospitalaria más pronto. Los pacientes con obesidad pire profundamente con inhalaciones y exhalaciones com-
mórbida metabolizan más halotano y enflurano que los no pletas. La desnitrogenación de los pulmones puede llevar de
obesos. Por este motivo y debido a los cambios hepáticos 5 a 10 minutos.
preexistentes, es mejor evitar el halotano, a fin de reducir la Si se estima que la vía aérea permite colocar la mascarilla
probabilidad de hepatitis asociada con este fármaco.83-85 De y la intubación, antes de la inducción puede realizarse una
manera similar, Higuchi y cols. observaron que las concen- intubación endotraqueal seguida de succinilcolina y después
traciones séricas de fluoruro inorgánico en obesos aumenta- de la relajación con relajantes no despolarizantes. Cuando se
ban más rápidamente y permanecían más altas que en no usan no despolarizantes, puede aumentarse el inicio del efec-
obesos durante el uso de anestesia con sevoflurano.86 Sin to de los relajantes musculares usando la técnica de cebado,
embargo, los niveles de fluoruro tras el isoflurano no aumen- seguida de una dosis para intubación de relajante muscular
taban significativamente. Juvin y cols. compararon la recu- no despolarizante. Con esta estrategia, los autores han reali-
peración postoperatoria tras la anestesia con desflurano, zado con éxito un gran número de inducciones de secuencia
propofol e isoflurano.79 Encontraron que las recuperaciones rápida usando cisatracurio. Debido a que la probabilidad de
postoperatorias inmediata e intermedia tras el uso de desflu- una vía aérea difícil imprevista es mayor en pacientes obesos,
rano son más rápidas y regulares que después de la anestesia debe disponerse de una unidad portátil para el manejo de vías
con propofol o isoflurano. El desflurano tampoco se meta- complicadas. En algunos casos es necesaria la ventilación con
boliza en el hígado ni muestra nefrotoxicidad. mascarilla, normalmente eficaz con una maniobra de trac-
Se ha indicado que la concentración y la exposición ción mandibular importante y el uso de una vía aérea oral de
totales a la dosis de los anestésicos volátiles puede reducirse tamaño apropiado. Algunas veces pueden ser necesarias vías
suplementando la anestesia general con técnicas regionales, nasofaríngeas de longitud apropiada usadas de forma indivi-
como el bloqueo epidural continuo en las intervenciones dual, o combinadas. Una persona sujeta la mascarilla mien-
abdominales y torácicas. tras otra presiona rápidamente la bolsa de ventilación con
ambas manos para proporcionar la ventilación adecuada.15
Relajantes musculares Si la intubación resulta difícil, debe recurrirse a otras rutas
alternativas como se describe en el algoritmo para vías
Los pacientes obesos se recuperan más rápidamente de la aéreas difíciles de la American Society of Anesthesiologists.69
succinilcolina debido a un aumento en la actividad pseudo- En estos casos puede lograrse una intubación eficaz cam-
colinesterasa.87,88 Por tanto, cuando se utilizan sin tratamien- biando las hojas o usando una intubación por vía respirato-
to previo, son apropiadas dosis de 1,2 a 1,5 mg por kg. Debido ria con mascarilla laríngea o un fibroscopio.
a que la obesidad en sí interfiere con la relajación muscular En algunos pacientes es imposible establecer la viabili-
durante la cirugía, es frecuente utilizar dosis mayores de no dad de la intubación durante la exploración preoperatoria.
despolarizantes. Debido a esto, Weinstein y cols.89 observa- En estos casos, puede realizarse una laringoscopia directa
ron que el atracurio es superior al vecuronio y más fácil de con el paciente listo para la inducción, pero sólo preparado con
antagonizar,90 al no depender de la eliminación en el órgano. un anestésico tópico y la evaluación de la sedación. Si se con-
La recuperación del bloqueo neuromuscular con vecuronio firma la viabilidad, entonces puede procederse a la intuba-
puede ser prolongada, debido a su eliminación hepática. Por ción tras la inducción. Por otro lado, si se ha decidido que es
otro lado, en pacientes obesas programadas para cirugía demasiado difícil o se ha establecido así durante la evalua-
ginecológica, Puhringer y cols. encontraron que no existía ción previa a la anestesia, debe establecerse la intubación
alteración en los parámetros farmacodinámicos y farmacoci- endotraqueal usando la técnica de fibroscopia, la mascarilla
néticos de rocuronio.91 Debido a que normalmente se practi- laríngea de intubación con vías con mascarilla laríngea u
ca la relajación máxima, los anestésicos no despolarizantes otras técnicas con el paciente «despierto».
deben reservarse sólo para los casos en los que los pacientes Debe extubarse a los pacientes obesos cuando estén
han demostrado una recuperación significativa, como evi- completamente despiertos y después de que hayan recupera-
dencian los esfuerzos respiratorios espontáneos regulares y do la función motora. Es menos arriesgado extubar a pacien-
una recuperación prácticamente completa de la fuerza moto- tes que no son difíciles de ventilar con mascarilla o de intu-
ra. Ello es importante para evitar una recuperación inade- bar.15 Los factores que tienen una función importante en la
cuada, que se caracteriza por descoordinación toracoabdomi- determinación de una extubación satisfactoria incluyen
nal, hipoxemia y aumento de hipercarbia, con necesidad de la intensidad de la AOS y la duración y tipo de procedimien-
reintubación postoperatoria y ventilación mecánica. En resu- to. En una revisión retrospectiva de cohorte de 135 pacien-
men, una buena regla general consiste en administrar anes- tes, se observó que el riesgo de obstrucción postextubación
tésicos generales en función del peso corporal ideal y valorar era del 5%.95,96 Estos autores también sugirieron que la obe-
la dosis en función de la respuesta del paciente. sidad predispone al desarrollo de un edema pulmonar de
presión negativa cuando los pacientes intentan una ventila-
Intubación y extubación traqueal ción espontánea a través de una vía aérea obstruida.
Puede aplicarse una estrategia conservadora y segura
Todos los pacientes obesos deben ser desnitrogenados con cuando existe dificultad durante la inducción. En ocasiones, el
oxígeno antes de la intubación y extubación. Su capacidad paciente necesita un período breve de ventilación asistida
residual funcional (CRF) se reduce y se desatura muy rápi- postoperatoria. La extubación se realiza cuando se han elimi-
damente.92 La desnitrogenación se consigue con rapidez nado completamente los anestésicos y los niveles de opioides,
colocando al paciente en una posición de Trendelenburg determinados clínicamente, están a concentraciones que man-
inversa a 30° con los hombros elevados. Deben extenderse la tendrán la ventilación espontánea tras la extubación. Esto es
cabeza y el cuello para asegurarse una vía respiratoria alta útil en el caso de la anestesia local, cuando se aplica, para poder
abierta y la máscara facial debe ajustarse para que proporcio- ser sometido a la intervención quirúrgica en el momento de la
Capítulo 14 • Consideraciones sobre anestesia en la obesidad 115

extubación. El paciente debe desnitrogenarse con oxígeno y, los espacios epidural e intratecal. El volumen de anestésico
preferiblemente, debe estar en posición de Trendelenburg local pude reducirse de forma apropiada entre el 20% y el 25%
inversa de 30° antes de la extubación, especialmente aquellos de las dosis utilizadas normalmente en pacientes delgados.99,100
pacientes en los que se ha podido comprobar que la vía aérea Por tanto, debe controlarse cuidadosamente los bloqueos epi-
es problemática. Puede desinflarse el manguito del tubo endo- dural y subaracnoideo debido a la difusión rostral más allá de
traqueal y observar si el paciente es capaz de respirar cuando la vértebra D-5 que puede ocurrir fácilmente e inducir una
el tubo está tapado. Otra opción es extubar sobre un catéter de insuficiencia respiratoria.Se ha demostrado que el bloqueo
intercambio para vía aérea hueca o un fibroscopio. A continua- epidural continuo, cuando se utiliza en fase intraoperatoria,
ción, el paciente puede ser fácilmente reintubado si la ventilación reduce las necesidades de dosis de los agentes de inhalación,
no es adecuada. La CPAP nasal u oronasal debe estar a mano opioides y otros analgésicos.51,101
y, en ocasiones, es necesario entablillar la orofaringe, en espe-
cial en pacientes con AOS grave.15 Despertar de la anestesia y atención postoperatoria
inmediata
Necesidad de control especializado
Los factores que determinan el despertar y la extubación
Aparte de las pautas de control de rutina y de las posibles dependen del tipo de cirugía y de si es fácil o difícil colocar
dificultades con el control no invasivo de la presión sanguí- la mascarilla, ventilar e intubar al paciente. En la mayoría
nea, ya analizadas, algunos pacientes obesos necesitar en oca- de los casos de cirugía bariátrica, un paciente obeso con
siones un control invasivo, consistente en PVC, catéter en la una vía aérea viable puede despertar de la anestesia al final
arteria pulmonar o vía arterial para el control directo de la pre- de la cirugía y ser extubado. Los requisitos previos a la
sión arterial. En algunos casos, pude ser necesario colocar una extubación son respiración estable, regular y espontánea
sonda transesofágica para ecocardiografía si el paciente pade- con un volumen corriente adecuado (6 a 8 mL/kg de peso
ce insuficiencia cardíaca o hipertensión pulmonar.51 corporal ideal), la presencia de fuerza muscular adecuada y
estabilidad hemodinámica. Además, el paciente debe ser
Reposición de líquidos durante la cirugía capaz de responder de forma apropiada a órdenes verbales,
y demostrar que puede abrir la boca y toser durante la extu-
La evaluación clínica de la hidratación de los pacientes obesos bación. Se permite que el paciente con una vía aérea difícil
es compleja. Aunque el volumen de sangre total aumenta, el de manejar y antecedentes importantes de AOS se recupe-
cálculo del volumen de sangre es difícil y no sigue fórmulas re de forma más gradual. El paciente se traslada la unidad
convencionales. El agua total del organismo se reduce entre el de reanimación postanestésica (URPA) y se le despierta
20% y el 25%, debido a la grasa en sí que contiene poca agua.65 con la cabeza levantada (aproximadamente a 45°).3 Se le
La probabilidad de prolongar la cirugía, la preparación del mantiene con ventilación asistida durante un período breve
intestino antes de las intervenciones bariátricas y la imposibili- de tiempo mientras que se realiza un análisis cuantitati-
dad de calcular con precisión una pérdida imperceptible de vo de la capacidad para respirar. Antes de la extubación, se
líquido complican este tipo de situaciones. Estos factores pue- evalúan la capacidad para respirar independientemente, sólo
den causar hipovolemia en muchos pacientes. Una diuresis con ventilación con soporte de presión, así como la conve-
estable de aproximadamente 1 mL por kg y hora, calculada niencia del control del dolor y la presencia de constantes
usando la masa corporal magra, es un buen factor pronóstico vitales estables, incluida normotermia. Tras la extubación,
de una reposición de líquidos adecuada. Los pacientes requie- en algunos pacientes pueden ser necesarios una mascarilla,
ren normalmente de 4 a 5 L de solución cristaloide durante una CPAP nasal, o apoyo con BiPAP.102 Normalmente, este es el
operación media de 2 horas.51 Según cálculos convencionales, caso de los pacientes con antecedentes de apnea del sueño y
tal cantidad es en torno al doble de la usada en individuos del- de los que han usado CPAP antes de la cirugía. Joris y cols.
gados. En algunos pacientes, es a veces necesario colocar una fueron capaces de demostrar los efectos beneficiosos de la
vía para PVC o un catéter en la arteria pulmonar como guía de presión positiva de la vía respiratoria tras la gastroplas-
ayuda para las necesidades de reposición de líquidos.65 tia (v. figura 14-1).103
Debe controlarse de forma continuada a los pacientes
Anestesia regional obesos, debido a la apnea del sueño, y se recomienda utilizar
la pulsioximetría. Los vendajes abdominales pueden estimu-
Los beneficios de la analgesia regional en pacientes delgados lar los efectos de espirometría incentiva, las medidas del con-
también son aplicables a los obesos.97 Por tanto, la analgesia trol del dolor y la ambulación precoz. Puede conseguirse un
epidural torácica usada junto con la anestesia general mejora control del dolor adecuado a través una analgesia epidural
la función pulmonar postoperatoria tras la cirugía abdomi- torácica continuada o usando una aproximación multimodal,
nal.98 Ello permite una rápida recuperación, debido a la reduc- mediante politratamientos sistémicos (analgésicos no esteroi-
ción de las complicaciones pulmonares postoperatorias. En deos y paracetamol más opioides administrados a través de
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

ocasiones es difícil marcar los puntos anatómicos de referen- dispositivos controlados por el paciente). Con el uso de un
cia en individuos obesos para realizar los procedimientos de opioide epidural cuidadosamente ajustado y una mezcla de
bloqueo regional. Puede ser necesario un equipamiento espe- anstésicos locales a baja concentración, se reduce el riesgo
cial, con medios tales como agujas más largas para la médula de TVP y se observa una recuperación más rápida de la movi-
espinal e identificación y acceso al espacio epidural; uso de lidad intestinal. Los siguientes problemas necesitan una espe-
agujas activadas por electricidad para identificar los nervios cial atención durante la recuperación de la anestesia:
motores periféricos y uso de fluoroscopia como ayuda para
identificar el espacio epidural. El espacio epidural en personas PROBLEMAS HEMODINÁMICOS
obesas tiene un mayor contenido en grasa y, debido al aumento En algunos pacientes, la contractilidad del ventrículo
de la presión intraabdominal, las venas epidurales son más izquierdo disminuye inmediatamente después del período
grandes. Ello disminuye significativamente la capacidad de postoperatorio. Ello puede requerir soporte inotrópico.
116 Sección IV • ASISTENCIA PREOPERATORIA, PERIOPERATORIA Y POSTOPERATORIA

100 que el paciente se resbale cuando se coloca en la mesa de


operación en la posición de Trendelenburg o Trendelenburg
98 inversa. Para reducir la aparición de TVP, muchos protoco-
los requieren profilaxis con heparina de bajo peso molecular,
96 además de medias de compresión neumática. Esta pauta se
suele instaurar inmediatamente antes de la cirugía y se man-
SpO2 (%)

94 tiene durante 12 horas en el período postoperatorio. A fin de


reducir el contenido gástrico, el estómago se vacía mediante
92 un tubo orogástrico o mediante un tubo nasográstrico que
se deja colocado. Se ha demostrado que agentes procinéti-
90 Sin BiPAP cos, como la metoclopramida, facilitan el vaciado del estó-
BiPAP 8/4 mago, y que la administración rutinaria de antieméticos
88 disminuye las náuseas y vómitos postoperatorios.
BiPAP 12/4
86
PREOP Día 1 Día 2 Día 3 Z CONCLUSIÓN
Figura 14-1 Efecto de la BiPAP en la pulsioximetría tras la cirugía La atención de los pacientes obesos continúa siendo un
bariátrica. Ambas BiPAP de 8/4 y 12/4 eran eficaces para prevenir la
desaturación. *p ⬍ 0,05 para BiPAP de 8/4 y 12/4 frente a sin BiPAP. importante desafío para los anestesistas a pesar de la dispo-
BiPAP, presión positiva de dos niveles en las vías respiratorias. (Tomado nibilidad de nuevos y mejores fármacos de inducción, agen-
de Joris JL, Sottiaux TM, Chiche JD, y cols.: Effect of bi-level positive tes de inhalación y relajantes neuromusculares. Para realizar
airway pressure (BiPAP) nasal ventilation on the postoperative pulmo- un procedimiento de anestesia seguro, es indispensable que
nary restrictive syndrome in obese patients undergoing gastroplasty. los anestesistas evalúen cuidadosamente al paciente antes de
Chest 1997; 111:665-670.)
la operación de modo que se facilite una planificación y una
morbilidad intra o postoperatoria apropiadas.
PROBLEMAS RESPIRATORIOS
Los pacientes con obesidad mórbida están más predispues- Z BIBLIOGRAFÍA
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Capítulo 14 • Consideraciones sobre anestesia en la obesidad 117

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15
Tratamiento perioperatorio del paciente
sometido a cirugía bariátrica
J. Patrick O’Leary, M.D., John T. Paige, M.D., y Louis F. Martin, M.D.

El aumento de la prevalencia de la obesidad ha dado lugar a un preoperatorio del paciente usando un método basado en órga-
drástico aumento concomitante en el número de procedimien- nos y sistemas para asegurarse de que se ha diagnosticado y
tos bariátricos realizados para ayudar a las personas a perder tratado de forma adecuada cualquier morbilidad asociada u
peso y mejorar las patologías comórbidas asociadas. Según otros factores de riesgo que puedan afectar a la cirugía
datos de la American Society for Bariatric Surgery (ASBS), en (v. tabla 15-1). En función de los hallazgos de esta revisión,
2001 se realizaron aproximadamente 47.000 intervenciones pueden ser útiles las siguientes recomendaciones. En el ámbi-
bariátricas,1 mientras que el número programado para 2005 era to pulmonar, la apnea obstructiva del sueño (AOS) y el síndro-
de 180.000. El tratamiento perioperatorio adecuado para estos me de hipoventilación por obesidad (SHO) se identifican a
pacientes es esencial para asegurar resultados eficaces y esto través de una polisomnografía y un análisis de gasometría
requiere estar familiarizado con las consecuencias fisiopatoló- arterial (ABG). Si aparece, la AOS puede tratarse con presión
gicas de la obesidad y su influencia en el tratamiento quirúrgico preoperatoria positiva continua en las vías respiratorias (CPAP).
y con los posibles problemas asociados con cada procedimiento El SHO se trata a menudo con CPAP, ya que la hipercapnia
bariátrico. El presente capítulo se centra en el tratamiento preo- diurna con el paciente despierto puede ser una consecuencia
peratorio, intraoperatorio y postoperatorio inmediato del fisiológica de la AOS nocturna. Sin embargo, los pacientes
paciente bariátrico, analizado a partir de un método sistemático con SHO requieren en ocasiones ventilación a presión positi-
y subrayando los datos disponibles basados en evidencias. va no invasiva adicional y, en casos extremos, puede ser nece-
sario realizar una traqueostomía antes de la intervención
bariátrica. Debe prepararse a todos los pacientes preoperato-
Z PREPARACIÓN PREOPERATORIA rios en el uso del espirómetro de incentivo, especialmente a
aquellos que presentan cualquier anomalía de la función pul-
El cirujano bariátrico debe estar familiarizado con las exigen- monar. Por último, todos los pacientes deben haber dejado de
cias exclusivas que presentan los pacientes con obesidad severa. fumar al menos 2 semanas antes de la cirugía.
Las consecuencias metabólicas y físicas de la obesidad aumen- El estudio cardiovascular debe realizarse teniendo en
tan la probabilidad de desarrollo de numerosas patologías cuenta el hecho de que una gran proporción de pacientes
comórbidas asociadas, que pueden tener una profunda influen- extremadamente obesos presentan factores de riesgo de car-
cia sobre el tratamiento quirúrgico del paciente.2 Algunos indi- diopatía coronaria importantes, debido al aumento de la adi-
viduos pueden incluso necesitar un período prolongado prepa- posidad y a las patologías comórbidas asociadas (v. tabla 15-2).5
ratorio antes de la cirugía. Está ampliamente reconocido que Debe realizarse una estratificación del riesgo de todos los
una estrategia multidisciplinaria para realizar la evaluación y pacientes usando criterios establecidos, con una prueba de
preparación preoperatorias es una medida eficaz para identifi- esfuerzo cardíaco adicional realizada como se indica. La car-
car y mejorar los factores del riesgo, aspecto que se incluyó en diopatía coronaria significativa puede necesitar una revascu-
la Consensus Development Conference de los National Institutes of larización previa a la cirugía. La hipertensión puede contro-
Health de 1991 y en las recomendaciones de la Consensus larse adecuadamente con medicación, y es necesario identificar
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Statement de la ASBS de 2005 para el tratamiento quirúrgico de y tratar médicamente cualquier insuficiencia cardíaca o hiper-
la obesidad.3,4 Además del cirujano bariátrico y del especialista tensión pulmonar. Finalmente, el tratamiento de cualquier
en medicina interna, un equipo multidisciplinar incluye a enfermedad debida a una insuficiencia venosa puede iniciarse
muchos profesionales relacionados con la salud, como especia- usando medias de compresión elástica o con el cuidado de las
listas en nutrición, especialistas de enfermería clínica, fisiólo- heridas, según sea necesario.
gos expertos en ejercicio, psicólogos y trabajadores sociales. Se considera que el aumento de la presión intraabdomi-
nal (PIA) presente en pacientes con obesidad severa es res-
Revisión preoperatoria ponsable de numerosas dolencias mórbidas asociadas, como
la enfermedad de reflujo gastroesofágico (ERGE).6 Si los
Antes de proceder a la intervención quirúrgica, el cirujano síntomas de ERGE son graves, se ha de realizar un estudio
bariátrico debe realizar una revisión exhaustiva del estudio adicional por esofagogastroduodenoscopia y una pHmetría
119
120 Sección IV • ASISTENCIA PREOPERATORIA, PERIOPERATORIA Y POSTOPERATORIA

Tabla 15-1 LISTA DE CONTROL PREOPERATORIO

SISTEMA ORGÁNICO PRUEBA DIAGNÓSTICA INTERVENCIÓN PREOPERATORIA


Pulmonar
Apnea obstructiva del sueño Polisomnografía positiva Presión positiva continua en las vías respiratorias
Síndrome de hiperventilación por GA con hipercapnia Ventilación a presión positiva no invasiva frente a CPAP
obesidad frente a traqueostomía con ventilación
Disminución de la función pulmonar Pruebas de función pulmonar positivas Preparación, condicionamiento para la espirometría
incentiva
Tabaquismo Paciente con antecedentes de tabaquismo Abandono del consumo de tabaco
Cardiovascular
Hipertensión PAS  140, PAD  90 Antihipertensivos
Cardiopatía Signos físicos, ecocardiografía positiva Precarga, reducción de la poscarga, diuresis
Hipertensión pulmonar Ecocardiografía positiva Reversión de la hipoxemia
Enfermedad de insuficiencia venosa, Signos físicos, adquisición de imagen doble positiva Medias de compresión elástica, cuidado de la herida
úlceras en las piernas
Cardiopatía coronaria Prueba de esfuerzo positiva, cateterismo cardíaco Angioplastia frente a injerto de revascularización
positivo coronaria
Gastrointestinal
Enfermedad de reflujo gastroesofágico Antecedentes, pHmetría de 24 h positiva, EGD Inhibidores de la bomba de protones, tratamiento con
bloqueantes de H2
Esteatosis hepática Pruebas de función hepática anómalas, ecografía Descartar hepatitis viral, cirrosis
Colelitiasis/cólico biliar Antecedentes de ecografía positiva Asesoramiento en relación con procedimientos
concomitantes
Pólipos colorrectales, cáncer Colonoscopia positiva, enema opaco Polipectomía, tratamiento del cáncer (retraso del
procedimiento)
Renal
Insuficiencia renal crónica Creatinina elevada, disminución del aclaramiento de Restricciones de la dieta, tratamiento de enfermedades
creatinina asociadas
Cáncer de riñón Hematuria en el análisis de orina, tomografía Tratamiento del cáncer, retraso del procedimiento
computarizada positiva
Endocrino
Diabetes mellitus Hgb A1c elevada, prueba de tolerancia oral a la glucosa Medicación antidiabética oral, insulina
positiva
Hipotiroidismo TSH elevada Tratamiento de sustitución tiroidea
Trastorno del ovario poliquístico Antecedentes de amenorrea, ecografía positiva Asesoramiento
Enfermedad/síndrome de Cushing Prueba de dexametasona, niveles de ACTH Tratamiento de la causa subyacente, retraso del
procedimiento
Hematológico
Anemia Hemoglobina disminuida Suplementos orales de hierro frente a eritropoyetina y
frente a transfusión
Coagulopatía Protrombina, tromboplastina parcial y tiempo de Identificación y corrección de la coagulopatía
hemorragia elevados subyacente
Trombosis venosa profunda Antecedentes, ecografía doble positiva Anticoagulación (si es necesario), consideración de filtro
de la vena cava
Músculoesquelético
Enfermedad articular degenerativa Positivo en radiografías, otras técnicas de imagen Tratamiento complementario, aumento de la movilidad
Enfermedad de la columna vertebral Positivo en radiografías, otras técnicas de imagen Tratamiento complementario, aumento de la movilidad,
documentación de la alteración neurológica
Genitourinario
Cáncer de cérvix, de útero o de ovario Frotis de Papanicolaou positivo, biopsia, tomografía Tratamiento del cáncer, retraso del procedimiento
computarizada
Cáncer de mama Exploración física, mamografía, AAG o biopsia Tratamiento del cáncer, retraso del procedimiento
positivas
Cáncer de próstata Exploración física, PSA positivo, biopsia por ecografía Tratamiento del cáncer, retraso del procedimiento
Psiquiátrico
Depresión Cuestionario de depresión de Beck positivo Tratamiento antidepresivo, asesoramiento
Inventario de personalidad, evaluación psiquiátrica
Antecedentes de consumo de drogas Antecedentes positivos Asesoramiento psicológico
Trastorno de la personalidad Evaluación psiquiátrica Asesoramiento psiquiátrico/psicológico
Otras enfermedades psiquiátricas Evaluación psiquiátrica Farmacoterapia, asesoramiento

AAG, aspiración con aguja fina; ACTH, hormona adrenocorticotropa; CPAP, presión positiva continua en las vías respiratorias; EGD, esofagogastroduodenostomia;
ERGE enfermedad de reflujo gastroesofágico; GA, gasometría arterial; Hgb A1c, hemoglobina A1c; IRC, insuficiencia renal crónica; PAD, presión arterial diastólica;
PAS, presión arterial sistólica; PSA, antígeno prostático específico; TSH, hormona estimulante del tiroides.

esofágica de 24 horas. Está indicado el tratamiento preope- mediante ecografía. La esteatosis hepática no requiere nin-
ratorio con inhibidores de la bomba de protones o con blo- guna intervención preoperatoria, aunque es necesario pres-
queantes del receptor de histamina de tipo 2 (H2R). tar atención para descartar otras causas de enfermedad
Normalmente en los pacientes obesos aparece colelitiasis, hepática y asegurarse de que no se presenta cirrosis grave
que debe ser sometida a valoración selectiva preoperatoria con alteraciones de la función del hígado. A menudo se rea-
Capítulo 15 • Tratamiento perioperatorio del paciente sometido a cirugía bariátrica 121

disco de la columna vertebral, que impiden aún más una


Tabla 15-2 PRINCIPALES FACTORES DE RIESGO movilidad ya de por sí comprometida. Es necesario confir-
DE CARDIOPATÍA CORONARIA mar las alteraciones neurológicas o radiculopatías existentes
de cualquier paciente con enfermedad de la columna verte-
PRINCIPAL FACTOR DE RIESGO MODIFICABLE ASOCIACIÓN CON OBESIDAD
bral. Estos individuos deben tener un tratamiento comple-
Aumento de la edad No No mentario adecuado para sus afecciones a menudo dolorosas,
Sexo masculino No No y deben intentar aumentar su movilidad y actividad. Todos
Hereditario No No los candidatos a cirugía bariátrica han de empezar antes de
Aumento del colesterol Sí Sí la operación un programa de ejercicio moderado adaptado a
Hipertensión Sí Sí sus limitaciones médicas. Muchas veces esto conlleva aumen-
Inactividad física Sí Sí tar la actividad mediante un podómetro y realizar ejercicios
Diabetes Sí Sí aeróbicos limitados. Esta optimización preoperatoria de
Obesidad/sobrepeso Sí Sí acondicionamiento es útil durante el período de recupera-
Tabaquismo Sí No ción postoperatorio.
(Adaptado de American Heart Association: Risk Factors and Coronary Se estima que la obesidad y el sobrepeso son responsa-
Heart Disease. www.americanheart.org. Acceso 20 de mayo, 2003.) bles de hasta una quinta parte de las muertes por cáncer en
EE. UU.10 Debido a que la cirugía bariátrica es una inter-
vención programada realizada para mejorar patologías
liza una visualización preoperatoria de rutina del tubo diges- comórbidas y posiblemente prolonga la supervivencia del
tivo superior mediante radiografía o endoscopia. Los parti- paciente, es esencial que se analice en los candidatos al pro-
darios de este planteamiento argumentan que ello permite cedimiento quirúrgico la presencia de enfermedades malig-
la identificación de anomalías que de otra manera podrían nas asociadas con la obesidad. Este análisis debe basarse
pasar desapercibidas y ayuda a la planificación preoperato- en las recomendaciones establecidas para el cáncer en par-
ria.7 Sin embargo, tal necesidad ha sido cuestionada.8 ticular, o llevarse a cabo mediante un estudio adicional en
Los pacientes con obesidad severa que presentan hiper- función de los hallazgos anómalos de los antecedentes
tensión prolongada y diabetes mellitus tienen un riesgo médicos y de la exploración física. Cualquier paciente que
aumentado de lesión microvascular en los riñones. Como haya sido tratado de una enfermedad maligna ha de some-
consecuencia de ello, debe valorarse la presencia de insufi- terse a estudios adicionales para confirmar que no se obser-
ciencia renal crónica en los pacientes bariátricos usando aná- va recurrencia. En general, el paciente debe estar libre de
lisis bioquímicos sanguíneos y ha de analizarse cualquier enfermedad desde al menos 2 años antes de someterse a
anomalía con un estudio adicional. Es necesaria la optimiza- cirugía bariátrica.
ción de la función renal de los pacientes con insuficiencia Los pacientes con trastornos psiquiátricos tienen que
renal antes de la cirugía. Los candidatos con enfermedad ser tratados de forma adecuada antes de que se realice la
renal en estadio final requieren coordinación para la diálisis intervención. Es frecuente que aparezca depresión y, a
perioperatoria. menudo, esta puede identificarse usando un instrumento de
La resistencia a la insulina derivada de la obesidad pue- análisis convencional, como la segunda edición del cuestio-
de hace que la diabetes sea una enfermedad mórbida asocia- nario de depresión de Beck. El tratamiento preoperatorio
da común entre las personas con obesidad severa. Estos consiste en terapia con antidepresivos y consulta con un psi-
pacientes necesitan control preoperatorio de sus niveles de quiatra. El paciente con antecedentes de abuso sexual o físi-
glucosa en sangre, mediante medicación antidiabética oral co puede necesitar ayuda, especialmente si se identifican
o tratamiento con insulina. Cuando se considere oportuno, aspectos no resueltos. Finalmente, los pacientes con trastor-
se ha de realizar un análisis bioquímico de otras anomalías nos graves de la personalidad u otras enfermedades psiquiá-
endocrinas, especialmente afecciones que predispongan a la tricas deben estar tomando la medicación apropiada, ser
obesidad. En particular, deben descartarse la enfermedad y mentalmente estables y mantenerse bajo el seguimiento de
el síndrome Cushing. Si estos aparecen, debe cancelarse la un psiquiatra que participará en la atención postoperatoria
cirugía y tratar la enfermedad de forma adecuada. También, del paciente. El comportamiento sociopatológico o psiquiá-
debe identificarse la presencia de hipotiroidismo y tratarlo trico inestable puede considerarse una contraindicación para
para lograr un estado eutiroideo antes de la cirugía. Por la intervención quirúrgica.
último, en ocasiones se dan casos de enfermedad del ovario
poliquístico en las pacientes con obesidad severa, aunque Técnicas bariátricas laparoscópicas frente a abiertas
esta patología no requiere un tratamiento preoperatorio
específico. La cirugía bariátrica se incorporó a la era de técnicas mínima-
Se han de investigar, asimismo, trastornos hematológi- mente invasivas en 1993 con la primera adaptación eficaz de la
cos tales como anemia o coagulopatías, mediante pruebas banda gástrica ajustable a la laparoscopia.11 Pronto siguieron
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analíticas, siempre que los antecedentes clínicos y la explo- las versiones mínimamente invasivas de la desviación gástrica
ración física lo indiquen. Si tales alteraciones de detectan, es en Y de Roux (DGYR)12 y la gastroplastia vertical con banda
necesario identificar su causa y corregir la anomalía. Los (GVB).13 Hoy en día, incluso la derivación biliopancreática
antecedentes de trombosis venosa profunda (TVP) o de con cruce duodenal (DBP/CD) tiene un equivalente laparos-
embolia pulmonar (EP) pueden requerir la colocación preo- cópico.14 Estas innovaciones en el campo de la cirugía bariá-
peratoria de un filtro de vena cava. Hamad ha defendido trica han contribuido a aumentar la demanda de tratamiento
incluso esta profilaxis en pacientes con hipertensión pulmo- quirúrgico entre las personas con obesidad severa. Varios
nar superior a 40 mmHg o SHO.9 Sin embargo, no existe estudios aleatorizados han mostrado importantes diferencia
consenso sobre si dicha profilaxis agresiva es necesaria. entre la laparoscopia y las técnicas bariátricas abiertas
A menudo los pacientes con obesidad severa presentan (v. tabla 15-3).15-18 En general, incluso aunque la aproximación
debilidad en las articulaciones o enfermedad degenerativa de mínimamente invasiva requiera un tiempo de intervención
122 Sección IV • ASISTENCIA PREOPERATORIA, PERIOPERATORIA Y POSTOPERATORIA

Tabla 15-3 ENSAYOS CLÍNICOS ALEATORIZADOS QUE COMPARAN PROCEDIMIENTOS BARIÁTRICOS


LAPAROSCÓPICOS Y ABIERTOS
NÚMERO DE TÉCNICAS
ABIERTAS/NÚMERO
TIPO DE DE LAPAROSCOPIAS VENTAJAS DE LA VENTAJAS DE LA ESTRATEGIA SIN DIFERENCIAS ENTRE
AUTORES PROCEDIMIENTO (CONVERSIONES) ESTRATEGIA ABIERTA LAPAROSCÓPICA LAS DOS ESTRATEGIAS
de Wit y cols.15 Banda gástrica 25/25 (2) 1. Disminución del 1. Disminución de la estancia 1. Pérdida de peso
ajustable tiempo de media en el hospital 2. Morbilidad general
intervención 2. Menor número de reingresos
2. Menor grado de 3. Disminución del tiempo total
dificultad de estancia en el hospital
Azagra y cols.16 Gastroplastia 34/34 (4) 1. Disminución del 1. Disminución de la hernia 1. Pérdida de peso
vertical tiempo de por incisión 2. Morbilidad grave
con banda intervención 2. Disminución de las infecciones 3. Estancia media
de la herida en el hospital
Nguyen y cols.17 Derivación gástrica 76/79 (2) 1. Disminución del 1. Disminución de la estancia en 1. Pérdida de peso
tiempo de el hospital 2. Morbilidad general
intervención 2. Disminución de la hemorragía 3. Coste total
2. Disminución del interoperatoria 4. Calidad de vida
coste de la cirugía 3. Disminución de los costes a 1 año
3. Disminución de las hospitalarios
estenosis tardías 4. Reincorporación más rápida al
trabajo
5. Disminución de la hernia por
incisión
6. Disminución de las infecciones
de la herida
Westling, Derivación gástrica 21/30 (7) 1. Disminución de la 1. Disminución de la analgesia 1. Pérdida de peso
Gustavsson18 obstrucción de 2. Disminución de la estancia en 2. Hemorragia
la derivación el hospital perioperatoria
gástrica de Roux 3. Disminución del tiempo de
baja por enfermedad

más largo, provoca menos dolor postoperatorio, una estancia cirugía programada para obtener el consentimiento informado
en el hospital más corta y una reincorporación al trabajo más para el procedimiento propuesto. Durante esta visita, el ciruja-
rápida. Además, la mayoría de los estudios muestran que no no dará una explicación general del procedimiento, revisando
hay diferencias en la movilidad global y la pérdida de peso es los mecanismos de pérdida de peso, discutiendo los resultados
equivalente. Cada paciente con obesidad severa es, por tanto, generales y describiendo las tasas de morbilidad y mortalidad
un posible candidato a una cirugía mínimamente invasiva. No esperadas. Las principales complicaciones deben describirse
obstante, las técnicas bariátricas laparoscópicas se cuentan con detalle, presentando un análisis de la relación riesgo-bene-
entre las intervenciones más complejas dentro de la cirugía ficio. Para ello pueden emplearse diagramas y medios de apoyo
mínimamente invasiva. En consecuencia, estas intervencio- visual y no debe asegurarse ningún resultado. Al final de la
nes deben ser realizadas sólo por cirujanos con una experien- discusión, es conveniente que el paciente tenga la oportunidad
cia avanzada en laparoscopia. de realizar las preguntas que desee, que le serán respondidas
Entre las contraindicaciones absolutas de la técnica lapa- aclarando todas sus dudas. Finalmente, deben impartirse las
roscópica se cuentan enfermedades cardiopulmonares graves, instrucciones preoperatorias. Debe completarse con detalle la
incluidas la posibilidad de generar un neumoperitoneo, que documentación de la visita, incluyendo los aspectos tratados, el
excluye la anestesia general; la cirrosis aguda con hipertensión tiempo aproximado utilizado con el paciente, las personas pre-
portal y la coagulopatía no corregible. Las contraindicaciones sentes y los aspectos médicos específicos discutidos.
relativas incluyen un abdomen hostil como consecuencia de
cirugías múltiples; un área de trabajo inadecuada como con- Dieta preoperatoria
secuencia de hepatomegalia o adiposidad intrabdominal, y la
presencia de una hernia paraesofágica masiva. Los pacientes Aunque no es esencial, debe animarse a todos los cantidades
que son candidatos a cirugía mínimamente invasiva deben a que sigan una dieta preoperatoria. Esta dieta ayuda a dis-
estar dispuestos a experimentar una conversión abierta si es minuir el nivel de dificultad de cualquier intervención de
necesario. En ningún caso debe garantizarse al paciente que dos maneras importantes. En primer lugar, la pérdida de peso
sólo se empleará la laparoscopia. asociada con la dieta disminuye el perímetro abdominal y el
tamaño del epiplón, mejorando el acceso al abdomen. En
Consentimiento informado segundo lugar, la dieta ayuda a reducir las reservas hepáticas
tanto de glucógeno como de grasa. En consecuencia, el sec-
Una vez que se estime que el paciente es adecuado para la inter- tor lateral izquierdo del hígado disminuye de tamaño, faci-
vención quirúrgica, el cirujano bariátrico debe fijar una visita litando la exposición del estómago proximal. Esta exposi-
en su consulta con el candidato en fecha próxima a la de la ción es especialmente importante en los procedimientos
Capítulo 15 • Tratamiento perioperatorio del paciente sometido a cirugía bariátrica 123

bariátricos laparoscópicos y puede significar la diferencia Acondicionamiento del quirófano


entre su finalización con éxito y la conversión a cirugía
abierta. Otra ventaja de una dieta preoperatoria es que intro- Los pacientes con obesidad severa suponen desafíos exclusi-
duce al paciente en la disciplina de la dieta postoperatoria vos para el tratamiento quirúrgico. Estos pacientes a menu-
necesaria para una recuperación eficaz. Por último, la dieta do exceden el peso límite de las mesas de quirófano típicas y,
preoperatoria ayuda a identificar a los individuos que pue- frecuentemente, son demasiado gruesos para emplear con
den presentar dificultades con el cumplimiento y permite la ellos el instrumental quirúrgico convencional. Su gran peso
discusión e intervención preoperatorias. hace que incluso las tareas más habituales, como el propio
trasladar del paciente, sean complicadas. El American College
of Surgeons reconoció la necesidad de disponer de instalacio-
Z TRATAMIENTO INTRAOPERATORIO nes especializadas para atender a los pacientes bariátricos y
ha desarrollado recomendaciones en este sentido.19 El acon-
Después de asegurarse que el paciente ha sido evaluado de dicionamiento del quirófano requiere una gran cantidad de
forma adecuada y está preparado para la cirugía, el cirujano piezas del equipamiento de cirugía especialmente diseñadas
bariátrico puede iniciar el abordaje quirúrgico. El tratamien- para el paciente con obesidad severa y, afortunadamente,
to intraoperatorio de los pacientes con obesidad severa puede hoy en día disponemos de una amplia variedad de ellas
resultar exigente y, al igual que en la preparación preoperato- (v. tabla 15-4). Sin embargo, el coste de estos dispositivos
ria, es esencial una aproximación sistemática al mismo. El puede ser elevado. Según algunas estimaciones, el coste del
cirujano, en estrecha colaboración con un anestesista experto acondicionamiento del quirófano para la cirugía bariátrica
en atención bariátrica, debe dirigir un equipo compacto de puede ascender a entre 70.000 y 80.000 dólares, por no men-
profesionales de la salud que asegure que el paciente bariátri- cionar los 3500 dolares que corresponden al coste por inter-
co sigue con éxito el procedimiento programado. Este equipo vención en instrumental laparoscópico desechable. 20 Por
quirúrgico bariátrico debe incluir un técnico quirúrgico tanto, la administración del hospital debe estar dispuesta a
especialista, personal de enfermería de quirófano, personal de realizar un esfuerzo concertado para proporcionar los
enfermería de anestesia, un técnico de apoyo al equipo y un medios pertinentes al cirujano bariátrico interesado en uti-
cirujano auxiliar o cocirujano. Todos los miembros del equipo lizar esta instalación. La realización de procedimientos
deben conocer con detalle su función específica en el proce- bariátricos en un hospital que no esté equipado adecuada-
dimiento y puede instituirse un sistema de atención rutinario mente para atender a estos pacientes constituye una fuente
para mantener la seguridad del paciente y la eficacia del equi- de múltiples problemas, de consecuencias potenciales muy
po en el entorno intraoperatorio. En ocasiones es muy útil graves, por lo que debe evitarse.
disponer de este sistema en el centro cuando se realizan téc-
nicas bariátricas complejas y técnicamente complicadas. Profilaxis perioperatoria
Finalmente, el cirujano bariátrico debe tener una buena rela-
ción laboral con la administración del hospital. Una comuni- La profilaxis con antibióticos y para la prevención de TVP
cación abierta e interactiva entre el cirujano y los administra- son dos consideraciones importantes en el paciente bariátri-
dores permite la identificación y corrección de cualquier co. Igual que muchos aspectos de la atención de estos indi-
deficiencia que pudiera afectar a la atención del paciente. viduos, el tratamiento se ve influido por las consecuencias

Tabla 15-4 RECOMENDACIONES DE EQUIPAMIENTO DE LA ACS PARA EL QUIRÓFANO

RECOMENDACIÓN ACS DISPOSITIVOS DISPONIBLES CARACTERÍSTICAS IMPORTANTES PRECIOS APROXIMADOS


Mesas de quirófano y Mesa de operaciones tipo Límite de 450 kg; límite de 385 kg cuando se articula De 40.000 a 45.000
equipamiento Hercules 6500HD dólares
especializados para Mesa de operaciones Maquet Límite de 363 kg; límite de 363 kg cuando se articula; De 55.000 a 60.000
acomodar a los pacientes Alphamaxx reposapiernas doble articulado separable dólares
con obesidad mórbida
Separadores adecuados Separador abdominal superior Montaje en tres pasos; opciones ilimitadas de De 10.000 a 15.000
para procedimientos de Omnitract BF200 colocación de las valvas dólares
cirugía bariátrica Elite II Ajustable a estatura ilimitada; asas intecambiables De 3000 a 20.000
para cambios rápidos dólares
Instrumental de grapado Cortadora lineal endoscópica Articulable; usado en laparoscopia 2000 dólares (lote de 3
especialmente diseñado articulada Endopath ETS con 3 cargas de grapas)
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

Flex45
Grapadora tipo endo GIA Articulable; usado en laparoscopia 2200 dolares (lote de 3
universal con 45 cargas con 6 cargas de grapas)
articuladas
Instrumental quirúrgico de Portaagujas Mayo (35 cm) Longitud extralarga De 200 a 250 dólares
longitud apropiada Tijeras Metzenbaum (35 cm) De 450 a 500 dólares
Portaagujas Mayo-Hegar (35 cm) Longitud extralarga De 200 a 250 dólares
Tijeras Metzenbaum (35 cm) De 200 a 250 dólares
Otros materiales especiales Dispositivo de traslado lateral Dispositivo de transporte de aire a baja presión De 2500 a 3500 dólares
específicos para la AirPal
intervención Colchón de traslado HM43HS Dispositivo de transporte de aire a baja presión De 2500 a 3500 dólares
124 Sección IV • ASISTENCIA PREOPERATORIA, PERIOPERATORIA Y POSTOPERATORIA

fisiológicas del aumento de la adiposidad. Los datos retros- Además de ser un factor de riesgo independiente para las
pectivos han identificado la obesidad como un factor de ries- complicaciones infecciosas tras la cirugía abdominal, la obe-
go independiente para complicaciones infecciosas, tanto en sidad supone también un importante riesgo de desarrollo de
la cirugía obstétrica programada como de urgencia.21 Un TVP postoperatoria (v. tabla 15-5).27 Se piensa que es posible
reciente análisis multivariante de los datos recogidos de tres que los niveles elevados de fibrinógeno y de inhibidor del acti-
estudios aleatorizados, prospectivos y multicéntricos sobre vador del plasminógeno, así como la deficiencia de antitrom-
profilaxis antibiótica en la cirugía abdominal no colorrectal bina III y la disminución de fibrinólisis, sean todos ellos fac-
llegaba a conclusiones similares, encontrando que la obesi- tores que contribuyen al aumento de la trombogenia en el
dad es un factor de riesgo tanto en heridas superficiales paciente obeso.9 Además, Nguyen y cols. demostraron que la
como en infecciones globales.22 La profilaxis antibiótica posición de Trendelenburg inversa aumenta la insuficiencia
perioperatoria, por tanto, es esencial para ayudar a reducir venosa en las venas femorales de los pacientes que se someten
el riesgo inherente a estos pacientes. El aumento de la masa a una derivación gástrica.28 En conjunto estos datos indican
corporal de un paciente con obesidad severa posiblemente dé que el riesgo de TVP en pacientes bariátricos es más alto,
lugar a un aumento del volumen de distribución de determi- aunque un análisis prospectivo reciente realizado en
nadas categorías de antibióticos, que requerirán el ajuste de 116 pacientes que se sometieron a derivación gástrica usando
la dosis a valores más altos. Forse y cols. mostraron que los ecografía preoperatoria y postoperatoria, mostraba tasas de
-lactámicos alcanzaban concentraciones inhibitorias míni- TVP y EP del 1,7% y el 0,8%, respectivamente.29 En cual-
mas inadecuadas en dosis normales en los pacientes con obe- quier caso, es esencial la profilaxis adecuada para minimizar
sidad severa. Doblando la dosis profiláctica de cefazolina de las complicaciones posiblemente catastróficas de la EP. Sin
1 a 2 g, estos autores demostraron que las tasas de infección embargo, no existe consenso sobre cuál debería ser la profi-
de la herida quirúrgica descendían del 16,5% al 5,6%.23 Un laxis adecuada, como se demostró en una encuesta entre los
estudio previo de Mann y Buchwald sugería que el cefaman- miembros de la ASBS. Aunque más del 95% de los encuesta-
dol se administraba en dosis de 2 g en el paciente con obesi- dos usaba alguna forma de profilaxis para la TVP, el tipo
dad severa para administrarse de nuevo cada 3 horas.24 Estos empleado variaba considerablemente. La heparina no fraccio-
datos corroboran la importancia de tener en cuenta el nada (HNF) era la profilaxis preferida más generalizada,
aumento del tamaño de los pacientes con obesidad severa seguida de los dispositivos de compresión neumática intermi-
cuando se determina la dosis de antibióticos. tente (CNI), heparina de bajo peso molecular (HBPM), y
En una revisión exhaustiva del tema, Wurtz y cols. sugi- otros métodos alternativos. Además, sólo el 38% de los
rieron el uso de la siguiente fórmula para determinar la dosis encuestados usaba una combinación de medidas profilácticas,
de antibiótico en función del peso (DP): DP  FCDP siendo las más comunes HNF y CNI.30
(PCR-PCI)  PCI, donde FCDP es el factor de corrección de La mayoría de los cirujanos bariátricos, sin embargo, están
la dosis según el peso, PCR es el peso corporal real y PCI el de acuerdo en que la dosis de HBPM o HNF requiere un ajus-
peso corporal ideal (según la fórmula de Devine). 25,26 El te por el incremento de adiposidad y de masa corporal. En un
FCDP es diferente para cada categoría de antibióticos, depen- análisis prospectivo reciente de 700 pacientes que se sometie-
diendo de su hidrofilia y volumen de distribución en el tejido ron a derivación gástrica laparoscópica, Shepherd y cols. usaron
adiposo. Los betalactámicos tienen un FCDP de 0,3 (el con- un protocolo de ajuste de dosis de HNF en función de los
tenido en agua del tejido adiposo), mientras que las quinolo- niveles de antifactor Xa en voluntarios.31 No se observaba
nas tienen un FCDP de 0,45.26 El cirujano bariátrico, por TVP y la tasa de EP era de 0,4%. El tratamiento se inte-
tanto, debe ajustar la dosis de antibiótico profiláctico para rrumpió en el 2,3% de los pacientes como consecuencia de
adecuarla al exceso de masa del paciente, y suele ser necesaria hemorragias; el 1% requirió transfusión y se identificaron
una segunda dosis durante las intervenciones prolongadas. hematomas menores en sólo el 0,6% de los casos. Los dispo-
sitivos de CNI se usaron conjuntamente. Scholten y cols.
estudiaron retrospectivamente a 487 pacientes bariátricos
que recibieron 30 mg o 40 mg de enoxaparina (HBPM) dos
Tabla 15-5 PRINCIPALES FACTORES DE RIESGO veces al día junto con CNI, ambulación precoz y medias de
DE TROMBOEMBOLIA compresión.32 Encontraron que la tasa de tromboembolia
TRAS INTERVENCIONES QUIRÚRGICAS era mejor (0,6% en comparación con el 5,4%) en el grupo
tratado con la dosis mayor. Finalmente, Kalfarentzos y cols.
FACTOR DE RIESGO RIESGO MAYOR realizaron un estudio aleatorizado en el que se demostraba
Edad avanzada Mayor de 60 años que una dosis diaria de 5700 UI de nadroparina (HBPM)
Carcinoma Cáncer pancreático, del aparato sola resultaba adecuada como profilaxis.33 Con estas dosis no
reproductor femenino, colorrectal, se observó ni hemorragia adversa ni episodios tromboembó-
de mama, de pulmón y de próstata licos en los 30 pacientes que se sometieron a derivación gás-
Obesidad (IMC 30) Obesidad sumamente grave (IMC 50) trica. La nadroparina no se distribuye en la actualidad en
Antecedentes de TVP Múltiples episodios de TVP o EP
o EP
EE. UU. Independientemente de la pauta posológica, dada
Intervenciones quirúrgicas Artroplastia de cadera o de rodilla, la falta de ensayos clínicos a gran escala en la población
recientes cirugía pélvica bariátrica, un tratamiento profiláctico tromboembólico
Estados de Síndrome antifosfolipídico, deficiencia prudente debe utilizar una estrategia combinada de ambula-
hipercoagulación de antitrombina III, deficiencia de ción precoz, CNI y HNF o HBPM.
proteína C y S, resistencia
a la proteína C activada,
hiperhomocisteinemia Consideraciones sobre la anestesia
(Adaptado de Green RM: The role of prophylactic anticoagulation in the Aunque un anestesista experimentado es indispensable en el
surgical patient. Curr Probl Surg 2003; 40:92-130.)
EP, émbolo pulmonar; IMC, índice de masa corporal; TVP, tromboembolia equipo quirúrgico, el cirujano bariátrico debe estar familiari-
venosa profunda. zado con los aspectos de la atención anestésica del paciente
Capítulo 15 • Tratamiento perioperatorio del paciente sometido a cirugía bariátrica 125

con obesidad severa. La colocación y el control del paciente, los casos con mayor riesgo de intubación difícil. Es un estudio
las técnicas de intubación, los agentes anestésicos y el trata- prospectivo realizado en 100 pacientes, Brodsky y cols. desa-
miento de patologías comórbidas influyen profundamente en rrollaron un sistema útil de identificación basado en el contor-
el desarrollo intraoperatorio del paciente. Es necesario tener no del cuello. El contorno mayor del cuello se relaciona con un
cuidado cuando se coloque al paciente para la intervención aumento de la probabilidad de intubación problemática. Esta
quirúrgica. La mesa del quirófano debe tener un límite de probabilidad es del 5% para un contorno del cuello de 40 cm,
peso adecuado y permitir que pueda moverse al paciente con pero se eleva al 35% en contornos de 60 cm. Además, el estu-
obesidad severa sin dificultad. El paciente a menudo es capaz dio mostró que no existía asociación entre la intubación «pro-
de trasladarse por sí mismo hasta la mesa de operaciones al blemática» y el aumento del índice de masa corporal.38 Una
inicio de la intervención, pero no al final. El uso de un dispo- colocación adecuada de la mascarilla de ventilación, un acceso
sitivo de traslado especializado, como los colchones de aire viable para un broncoscopio de fibra óptica y un umbral bajo
actualmente disponibles, simplifica en gran medida este pro- para realizar una intubación con el paciente despierto son
ceso y disminuye el riesgo de lesión asociado al esfuerzo rea- componentes importantes para confirmar de forma segura la
lizado durante estos traslados. Una vez en la mesa de opera- viabilidad de la vía aérea en un paciente bariátrico. Sin embar-
ciones, debe asegurarse al paciente de forma adecuada para go, un índice de masa corporal alto no excluye necesariamente
evitar que se resbale durante la cirugía. Además del cinturón la intubación mediante laringoscopia directa.
de mesa extralargo para las caderas, se usa un reposapiés y los Durante la cirugía bariátrica, puede mantenerse la
pies se colocan en posición dorsiflexionada para mantener al anestesia general usando agentes intravenosos o por inhala-
paciente en la posición de Trendelenburg inversa. Algunos ción. En un estudio aleatorizado de 36 pacientes que se
autores abogan por el uso de un saco de vacío para mantener sometieron a gastroplastia laparoscópica, se encontró que el
al paciente en la posición adecuada.34 Puede que sean necesa- desflurano es superior al propofol y al isoflurano en térmi-
rias extensiones laterales para mesa de operaciones y puede nos de recuperación postoperatoria inmediata e intermedia.
utilizarse una almohadilla extragruesa para proporcionar la Los pacientes en recuperación de la anestesia con desflurano
protección adecuada. Un almohadillado adecuado de todos presentaban saturaciones de oxígeno superiores y una mejor
los puntos de presión es esencial para prevenir lesiones por movilidad.39 Otro estudio aleatorizado que comparaba el
compresión y esto debe usarse sin restricciones. sevoflurano con la anestesia intravenosa en 30 pacientes
La posición de decúbito supino modifica drásticamente demostraba que el grupo tratado con sevoflurano presentaba
las propiedades mecánicas respiratorias en un paciente con parámetros superiores en la fase intraoperatoria.40 La compa-
obesidad severa sedado e inmovilizado. El peso del contenido ración de sevoflurano con isoflurano en 90 pacientes con
abdominal aumenta la PIA, lo que conduce a una disminución obesidad severa que se sometieron a BDP mostró que el grupo
de la capacidad residual funcional y de la distensibilidad pul- tratado con sevoflurano presentaban tiempos de extubación
monar. Además, se incrementa también desajuste ventila- y recuperación postoperatoria más cortos.41 Estos datos
ción-perfusión.35 La posición de Tredelenburg inversa puede sugieren que tanto el desflurano como el sevoflurano son
mejorar los mecanismos respiratorios, aumentando tanto la fármacos anestésicos aceptables en la población con obesidad
distensibilidad como la capacidad funcional residual.36 Los severa debido a sus tiempos de recuperación postoperatoria
pacientes con obesidad severa deben, por tanto, colocarse en la más rápidos en comparación con anestésicos intravenosos.
mesa de quirófano en posición de Trendelenburg ligeramente Por último, el cirujano bariátrico debe trabajar en cola-
inversa o semiacostado. Además de tener efecto sobre los boración estrecha con el anestesista o el personal de enfer-
mecanismos respiratorios, parece que estas posiciones también mería de anestesia para asegurar el tratamiento adecuado de
aumentan el tiempo de apnea hasta la desaturación en pacien- los pacientes con patologías comórbidas en la fase intraope-
tes con obesidad severa tras la inducción de anestesia general, ratoria. Es esencial una comunicación fluida para identificar
lo que ayuda en la intubación.37 y tratar los problemas que surjan durante el tratamiento.
Los pacientes bariátricos necesitan el típico control Este trabajo se ve facilitado si se usa un método basado en un
anestésico necesario para todos los procedimientos abdomi- enfoque sistemático de la enfermedades identificadas en la
nales principales, que incluyen pulsometría continua, tele- fase preoperatoria.
metría y lecturas intermitentes de la presión arterial. Dadas
las dimesiones de las extremidades, deben emplearse esfin- Consideraciones laparoscópicas
gomanómetros adecuados para asegurar medidas precisas.
Además de este control, los pacientes con problemas cardio- Los procedimientos de laparoscopia bariátrica requieren un
pulmonares graves, como hipertensión pulmonar o cardiopa- alto grado de experiencia técnica para su realización. Además
tía, pueden necesitar un control adicional invasivo, que de poseer dicha experiencia, el cirujano bariátrico que lleve a
incluya un catéter pulmonar y uno arterial periférico. cabo estas técnicas ha de estar familiarizado con las consecuen-
Finalmente, es necesario un acceso intravenoso adecuado cias fisiológicas del neumoperitoneo en el paciente con obesi-
para la administración de la medicación y de líquidos. Con dad severa. La insuflación de dióxido de carbono aumenta la
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frecuencia es necesario un catéter venoso central, debido al PIA, ya de por sí elevada. En consecuencia, hace que sea mayor
problemático acceso periférico que presentan los pacientes la insuficiencia venosa en las venas femorales como resultado
con obesidad severa. En muchas ocasiones este catéter se de la compresión de la vena cava, aumentando teóricamente el
coloca tras la inducción de la anestesia general, especialmen- riesgo de TVP.29 La diuresis disminuye debido a la alteración
te si puede obtenerse antes de la operación una vía intrave- del flujo sanguíneo renal. Sin embargo, esta disminución es
nosa periférica temporal. sólo transitoria, recuperándose después de la liberación del
El aumento de la adiposidad en la zona orofaríngea supe- neumoperitoneo y no parece que afecte a la función renal.42
rior, unido a la alteración de los mecanismos respiratorios de La distensibilidad del sistema respiratorio disminuye
un paciente con obesidad severa, hace que la consecución de una debido a la elevación del diafragma, pero la importancia clíni-
vía aérea permeable resulte especialmente complicada. Los ca de esta respuesta es mínima.43 El aumento de la PIA, sin
pacientes bariátricos deben analizarse a fondo para identificar embargo, no parece que produzca alteraciones hemodinámi-
126 Sección IV • ASISTENCIA PREOPERATORIA, PERIOPERATORIA Y POSTOPERATORIA

cas significativas.44 En general, la aparición de neumoperito- go y radiólogo), este equipo debe incluir nutricionistas
neo puede producir ligeros cambios en la función fisiológica especializados, fisioterapeutas, personal de enfermería (unidad
del paciente con obesidad severa, que podrían ser mal interpre- de reanimación postanestésica [URPA], cuidados intensivos
tados por un cirujano bariátrico no bien informado. El ciruja- y de planta), farmacéuticos y celadores. Todos los miembros
no debe ser consciente de estos cambios y saber que, normal- deben trabajar en estrecha colaboración para intentar evitar o
mente, sus efectos son transitorios. En ocasiones, los pacientes resolver los problemas que dificulten el postoperatorio.
pueden desarrollar respuestas vagales importantes por la dila-
tación del peritoneo causada por la insuflación de dióxido de Acondicionamiento del hospital
carbono. En estas situaciones, el neumoperitoneo debe libe-
rarse inmediatamente como parte del tratamiento general. Al igual que ocurre con el quirófano, el resto del hospital
El reconocimiento del momento apropiado para propor- debe estar equipado adecuadamente para el tratamiento de
cionar un mejor acceso intrabdominal durante el procedi- los pacientes con obesidad severa. Debe disponer, así,
miento laparoscópico es tan importante como la imprescindi- de camas bariátricas especiales, sillas de ruedas, equipos de
ble capacidad técnica para realizarlo. Entre las opciones se traslado y dispositivos de control. Además las unidades de fluo-
incluyen el aumento de número de sitios de trócar, la coloca- roscopia y los escáneres de tomografía computarizada del
ción de un puerto manual y convertir la intervención en una departamento de radiología deben estar preparados para que
aproximación abierta tradicional. Puede ser útil colocar un los pacientes bariátricos puedan acomodarse. Asimismo se
trócar extra que permita la retracción de los tejidos retirados ha de disponer de suficiente ropa adecuada. Es esencial, ade-
o proporcionar acceso a zonas de suturado difícil. El puerto más, que haya puertas, habitaciones y baños más amplios de
manual es útil en situaciones en las que se necesita una retroa- lo habitual. Por último, los retretes adecuados y los asientos
limentación táctil y es también útil durante el tiempo de para ducha ayudan a evitar caídas embarazosas y algunas
aprendizaje laparoscópico del cirujano. La técnica manual, no veces perjudiciales. Sin estas comodidades, la atención
obstante, tiene un perfil de complicación similar al de la estra- postoperatoria del paciente bariátrico puede verse grave-
tegia abierta y es más cara en términos de costes hospitala- mente dificultada, dando lugar a menudo a consecuencias
rios.45 Las indicaciones para su conversión en procedimiento importantes. Lo más idóneo es disponer de una planta
abierto incluyen una hemorragia no controlada, complicacio- postoperatoria bariátrica especializada que incorpore
nes intraoperatorias mayores que sea necesario reparar, impo- muchas de estas recomendaciones, aunque la consecución de
sibilidad de progresar y espacio de trabajo inadecuado. tal objetivo es ciertamente imposible sin el apoyo sustancial
de la administración de hospital. Es, pues, necesaria una
Consideraciones técnicas relación laboral estrecha entre los administradores y los
cirujanos bariátricos que dé lugar a un ambiente postopera-
Los pacientes que se someten a técnicas bariátricas abiertas torio adecuado y seguro para el paciente bariátrico.
presentan un riesgo elevado de complicaciones postoperato-
rias de la herida quirúrgica. Un estudio aleatorizado contro- Asignación postoperatoria
lado de 331 pacientes bariátricos que se sometieron a estas
intervenciones demostró la superioridad del cierre continuo La mayoría de los pacientes bariátricos pasan directamente
de la fascia frente al cierre interrumpido de la misma. En a la planta de cirugía general tras una breve recuperación en
este estudio, los pacientes que se sometieron a cierre conti- la URPA. Sin embargo, algunos necesitan un control minu-
nuo presentaban una tasa de complicación profunda de la cioso en una unidad de cuidado intermedio (UCIn) o de cui-
herida de sólo el 3%. Por el contrario, la tasa era del 15% dados intensivos (UCI). La decisión de asignar a un pacien-
entre los pacientes asignados aleatoriamente a un cierre in- te bariátrico postoperatorio a cualquiera de estas ubicaciones
terrumpido de la fascia.46 También parecía que disminuían depende de numerosas variables, entre las que se cuentan el
las tasas de infección en los pacientes con obesidad severa número y gravedad de patologías comórbidas, la duración y
con un drenaje subcutáneo que utiliza un dispositivo de suc- dificultad de la intervención y el estado respiratorio en el
ción cerrado. Un estudio aleatorizado controlado, que com- postoperatorio inmediato. Levi y cols. han desarrollado un
paraba diversas técnicas de cierre de la herida después de sistema de asignación que divide a los pacientes en cuatro
cesárea en 76 mujeres obesas, mostró un aumento importan- clases en función de la edad, patologías comórbidas impor-
te del riesgo relativo de infección de la herida (10,2%) en tantes y problemas respiratorios. Los pacientes de la clase I
pacientes a las que no se colocó drenaje subcutáneo.47 Por (menores de 40 años y sin patologías comórbidas o proble-
tanto, parecía adecuado utilizar el cierre continuo de la fas- mas respiratorios importantes) suelen pasar directamente a
cia junto con un drenaje subcutáneo de succión cerrado, la planta de cirugía general después de la URPA, mientras
como ayuda para mitigar el riesgo de infección de la herida que los pacientes de clase IV (con síndrome X, hipertensión
tras la intervención bariátrica abierta. pulmonar, TVP/EP, seudotumor cerebral o insuficiencia
respiratoria crónica) siempre se trasladan a la UCI. La mayo-
ría de los pacientes de las clase II (entre 40 y 45 años con
Z RECUPERACIÓN POSTOPERATORIA diabetes, insuficiencia venosa, asma o ronquidos) y clase III
(mayores de 50 años con antecedentes de TCP/EP, falta de
Tras la finalización satisfactoria de la técnica bariátrica, el movilidad, AOS, SHO o hipoxemia) generalmente pasan un
cirujano debe iniciar la supervisión de la recuperación tiempo en la UCIn.48 Otro programa reserva el traslado a la
postoperatoria del paciente con obesidad severa. Este trabajo, UCIn y la UCI para pacientes con morbilidades asociadas de
al igual que otros aspectos de la atención del paciente bariá- alto riesgo, complicaciones intraoperatorias o fracaso en la
trico, necesita la coordinación de un equipo de profesionales extubación.49 Independientemente del sistema de asignación
de la salud familiarizado con los requisitos particulares de es- que se emplee, los pacientes con obesidad severa con cual-
tos. Además del cirujano y los especialistas (neumólogo, car- quier patología comórbida respiratoria o cardíaca están
diólogo, cuidados intensivos, medicina interna, endocrinólo- mejor atendidos con control continuo de la saturación de
Capítulo 15 • Tratamiento perioperatorio del paciente sometido a cirugía bariátrica 127

oxígeno y telemetría en el postoperatorio inmediato. Este de sangre adicionales deben basarse en las patologías comór-
control alertará al médico sobre posibles problemas cardio- bidas específicas en cada caso.
pulmonares antes de que se agraven, permitiendo una inter- Quizá el aspecto más controvertido en este contexto es
vención oportuna. el uso rutinario de los estudios de contraste postoperatorios
que siguen a los procedimientos bariátricos. Varios estudios
Atención postoperatoria de rutina recientes, tanto prospectivos como retrospectivos, han exa-
minado su utilidad y rentabilidad, y las conclusiones dife-
La atención postoperatoria de rutina del paciente bariátrico rían. En una revisión extensa realizada en Italia se examinó
tiene algunas características importantes y requiere una a 413 pacientes que se sometieron a diversos procedimientos
colaboración estrecha entre el cirujano y los miembros de bariátricos con estudios de rutina previos con contraste.50
equipo postoperatorio. Las patologías comórbidas deben En el 8,2% de los casos se identificaron complicaciones que
tratarse usando un método diferenciado por sistemas y diri- variaban de estenosis de la anastomosis a escape postopera-
gido hacia las afecciones identificadas en la preparación torio. Dos pacientes necesitaron una segunda intervención.
preoperatoria. Los pacientes con AOS o SHO deben conti- Los autores concluyeron que el estudio radiológico de rutina
nuar con su tratamiento CPAP nocturno. A menudo, es más era útil y modificaba la atención clínica.
fácil que estos individuos lleven al hospital sus propios apa- Un estudio prospectivo de 100 pacientes consecutivos
ratos calibrados para utilizarlos en el período perioperato- que se sometieron a DGYR con un estudio con contraste
rio. La hipertensión debe tratarse inicialmente según sea postoperatorio llegaba a una conclusión similar.51 En cam-
necesario, usando medicación intravenosa. Una vez que se bio, una revisión prospectiva amplia realizada en Austria a
inicia la toma de líquidos, el paciente puede pasar a antihi- 350 pacientes, que se sometieron a un proceso de colocación
pertensivos orales. Es necesario actuar con precaución al de banda gástrica ajustable por laparoscopia con un estudio
cambiar la medicación de liberación prolongada por su equi- radiológico postoperatorio, llegaba a una conclusión dife-
valente de dosis de corta duración, ya que la mayoría de los rente.52 Se encontraron dilataciones del reservorio tempra-
medicamentos tienen que triturarse o mezclarse con comida nas en el 1,8%, mientras que se observaron perforaciones de
para evitar una obstrucción de la vía gástrica después de la estómago en el 1,2%. Todas las complicaciones se observa-
mayoría de las intervenciones. Cualquier insuficiencia car- ron en los primeros 100 casos y no se apreciaron anomalías
díaca o hipertensión pulmonar debe tratarse de forma agre- adicionales en los últimos 250 pacientes. Los autores conclu-
siva con los tratamientos apropiados. La ERGE se cura a yeron que los estudios con contraste de rutina no eran nece-
menudo tras la intervención bariátrica pero, si es necesario, sarios en centros que tenían una amplia experiencia, dismi-
puede ser útil el tratamiento intravenoso seguido del oral nuyendo por tanto los costes del hospital y la exposición a la
usando inhibidores de la bomba de protones o bloqueantes radiación del paciente. Finalmente, una revisión retrospec-
de H2R. Los pacientes diabéticos son tratados inicialmente tiva realizada en Las Vegas en 242 pacientes con DGYR
con inyecciones subcutáneas regulares de insulina, siguien- abierta seleccionados al azar que se sometieron a estudios
do una escala de dosis variable en función de las determina- rutinarios de contraste postoperatorios, se calculó un valor
ciones periódicas de glucosa con tira reactiva. Este trata- pronóstico positivo de sólo el 27%.53 Los autores recomen-
miento puede pasarse a antidiabéticos orales, pero a menudo, daban que los estudios gastrointestinales superiores se reser-
especialmente tras la DGYR, estos individuos alcanzan la varan a pacientes con signos clínicamente sospechosos.
euglucemia casi inmediatamente después de ser operados. Claramente, no existe consenso con respecto al uso rutina-
Por tanto, con frecuencia no es necesario el control farma- rio de estudios de contraste tras los procedimientos bariátri-
cológico de la diabetes. cos. La opción más razonable parece ser la realización de
En los pacientes con hipotiroidismo debe continuarse estas pruebas durante el tiempo de aprendizaje inicial del
con el tratamiento de sustitución de hormona tiroidea sin cirujano, adoptando una estrategia más selectiva una vez
interrupción. Es necesario corregir cualquier coagulopatía obtenida una experiencia clínica considerable.
usando hemoderivados apropiados y la profilaxis de la TVP Tras el procedimiento bariátrico es esencial el tratamien-
debe continuarse hasta el alta hospitalaria. Por último, la to adecuado del dolor, que nos permita la movilización del
medicación psiquiátrica se ha de administrar por vía oral tan paciente con obesidad severa. Los opioides son los fármacos
pronto como el paciente sea capaz de usar esa vía. Determi- más usados en el postoperatorio inmediato. Para este tipo de
nadas enfermedades concurrentes, como los trastornos con- asistencia se dispone de múltiples modalidades, entre las que
vulsivos, requieren tratamiento médico para prevenir secue- se cuentan las suspensiones administradas por el personal de
las indeseadas. enfermería y las infusiones epidurales. Quizá la estrategia más
Las complicaciones no reconocidas que aparecen en el útil es la analgesia controlada del paciente por vía intravenosa,
período postoperatorio inmediato tras los procedimientos seguida de cambio a un agente oral líquido administrado por
bariátricas pueden tener consecuencias devastadoras. Por el personal de enfermería cuando el paciente es capaz de tole-
tanto, la identificación adecuada y el tratamiento de las com- rarlo. El cirujano bariátrico debe estar informado de la posi-
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

plicaciones requieren un elevado nivel de intuición. El diag- bilidad de un alto grado de tolerancia en estos pacientes
nóstico y tratamiento de las complicaciones específicas se postoperatorios, ya que muchos han estado tomando opioides
aborda en la siguiente sección, pero es conveniente realizar de forma crónica para afecciones de debilidad en las articula-
algunos comentarios sobre estudios postoperatorios de ruti- ciones y de espalda. El aumento de la masa corporal de estos
na. Es necesario realizar el primer día del postoperatorio un pacientes con obesidad severa puede también requerir modi-
hemograma a todos los pacientes bariátricos para detectar la ficaciones de la dosis del fármaco. Una analgesia por infusión
posible anemia como consecuencia de la hemorragia. continua controlada por el paciente con dosificación en bolo
Además, aunque no es imprescindible, es aconsejable proce- puede proporcionar un alivio adecuado. Además, es posible
der al mismo tiempo a realizar un análisis bioquímico de recurrir a un suplemento de opioides con otros analgésicos,
sangre básico, para detectar cualquier anomalía en electró- como anestesia local o fármacos antiinflamatorios no esteroi-
litos, glucosa o en la función renal. Los análisis bioquímicos deos. La inyección de bupivacaína en los sitios de incisión
128 Sección IV • ASISTENCIA PREOPERATORIA, PERIOPERATORIA Y POSTOPERATORIA

durante un procedimiento laparoscópico ayuda a reducir el la anestesia incompleto; neumotórax (especialmente tras un
dolor postoperatorio. El uso de una infusión continua de procedimiento laparoscópico); episodio asmático; embolia pul-
anestésico local en los puntos de incisión usando ampollas monar y edema laríngeo. Los pacientes que desarrollan disnea
de liberación lenta también disminuyen el dolor postoperato- en la planta de cirugía pueden experimentar sobresedación,
rio inmediato. Por último, la administración intravenosa o edema pulmonar, episodios asmáticos, embolia pulmonar, efu-
intramuscular del ketorolac, un antiinflamatorio no esteroi- sión pleural amplia, síndrome de dificultad respiratoria aguda,
deo, es especialmente útil para el control suplementario del atelectasia grave, colapso lobular o neumonía.
dolor, aunque su uso debe limitarse a 72 horas en pacientes sin Determinadas complicaciones pulmonares necesitan
problemas renales. Se ha demostrado que, en muchos casos, puntualizaciones adicionales. Es probable que los pacientes
las técnicas laparoscópicas dan lugar a menos dolor postope- con obesidad severa presenten atelectasia después de una
ratorio que las abiertas.54-56 anestesia general en decúbito supino. La exploración física y
La movilización temprana del paciente con obesidad la radiografía de tórax suelen ser suficientes para diagnosticar
severa desempeña una función importante en la prevención esta afección. Su tratamiento consiste en movilización agresi-
de complicaciones respiratorias y trombogénicas en el posto- va, uso de espirometría de incentivo y tratamiento con nebu-
peratorio temprano. En pacientes estables, la deambulación lizador. Si no se trata adecuadamente, el colapso alveolar per-
debe iniciarse pocas horas después del procedimiento. Si ello sistente puede dar lugar a neumonía. En ocasiones, después de
no es posible de inmediato, se cambia al paciente a una silla. la laparoscopia se desarrolla un neumotórax, especialmente
Esta recuperación rápida de la actividad requiere una coor- después de una disección perihiatal o diafragmática. Esta
dinación estrecha entre los miembros del personal de enfer- afección puede manifestarse por sí misma como aumento de
mería y el fisioterapeuta. Además de la movilización, el la presión máxima inspiratoria y dificultad de ventilación del
paciente bariátrico debe recibir indicaciones con respecto a paciente durante la intervención y a menudo mejora cuando
los ejercicios y a la actividad cuando sea dado de alta. Este disminuye la presión del neumoperitoneo. En ocasiones poco
asesoramiento prepara al paciente para dar un nuevo impul- frecuentes es necesaria la descompresión. En el postoperato-
so a su bienestar físico tras la intervención quirúrgica. rio, los pacientes pueden presentar disminución de la oxigena-
Todos los pacientes bariátricos han de afrontar su rela- ción en la URPA, con ausencia de ruidos respiratorios en el
ción alterada con la comida tras el tratamiento quirúrgico. lugar afectado. El diagnóstico puede confirmarse con una
La ingestión oral limitada de líquidos con bajo contenido en radiografía de tórax. Los pacientes pueden, además, desarro-
grasas y azúcares debe iniciarse una vez que el cirujano esté llar derrames simpáticos que, si son grandes, afectan a la res-
seguro de que el paciente no presenta ninguna complicación piración. La exploración física y la radiografía de tórax permi-
que pueda impedir la alimentación enteral (escape postope- ten muchas veces establecer un diagnóstico. La toracocentesis
ratorio, retraso en el vaciamiento u obstrucción). Esta inges- está indicada en derrames clínicamente significativos que no
tión se aumenta a una tasa predeterminada con la disminu- responden a tratamiento no invasivo.
ción concomitante de la administración de líquidos por vía Tras las intervenciones bariátricas puede aparecer hipo-
intravenosa. tensión postoperatoria. La depleción intravascular, como
consecuencia de la formación del tercer espacio o hemorra-
gia, es la causa más común. Los hallazgos físicos de la hipo-
Z COMPLICACIONES POSTOPERATORIAS volemia incluyen disminución de la diuresis y taquicardia
TEMPRANAS persistente. Es necesario obtener un hematocrito para deter-
minar si la hemoglobina disminuye. La recuperación del
Las complicaciones postoperatorias tempranas pueden divi- volumen es el motivo principal del tratamiento, usando una
dirse en dos amplias categorías: 1) complicaciones comunes a solución cristaloide en un principio, con la progresión a
la cirugía en la población bariátrica en general, y 2) complica- coloides y transfusiones, según indique la respuesta clínica
ciones específicas de intervenciones bariátricas concretas. del paciente. Sin embargo, el cirujano bariátrico también
debe considerar la posibilidad de hipotensión cardiogénica.
Complicaciones generales Posibles causas son el síndrome coronario agudo (SCA) y la
insuficiencia cardíaca. Los pacientes con SCA presentan
Como en cualquier técnica quirúrgica abdominal, las interven- presión o dolor en el pecho. El diagnóstico se establece
ciones bariátricas conllevan un riesgo de complicaciones duran- mediante electrocardiografía y determinación seriada de
te el desarrollo del tratamiento quirúrgico. Estos riesgos se enzimas cardíacas. El tratamiento inicial incluye control
clasifican a menudo usando un método sistémico. Puede obser- analgésico mediante opiáceos y tratamiento con aspirina y
varse disnea en cualquier momento después de la intervención. nitroglicerina sublingual. En el período postoperatorio
La principal preocupación del cirujano bariátrico es proporcio- inmediato, los pacientes con SCA requieren un cateterismo
nar la asistencia de soporte adecuada mediante oxigenación cardíaco para un tratamiento adicional, debido a que el ries-
suplementaria, terapia con nebulizador y, si es necesario, venti- go de hemorragia como consecuencia de la terapia trombo-
lación asistida, mientras se intenta identificar la causa del pro- lítica es muy alto. La insuficiencia cardíaca se presenta a
blema. Los pacientes con obesidad severa ven afectados sus menudo con edema pulmonar, normalmente como resultado
mecanismos respiratorios en posición de decúbito supino, por de una sobrecarga de volumen. Es esencial el tratamiento
lo que cualquier paciente bariátrico postoperatorio con disnea complementario con reducción de la sobrecarga y diuresis.
debe colocarse en posición de Trendelenburg inversa para Las arritmias postoperatorias, normalmente fibrilación
mejorar el flujo de aire y disminuir la PIA en el perímetro auricular o flúter auricular causados por la sobrecarga de
abdominal. El estudio inicial, tras una cuidadosa exploración líquido, se diagnostican mediante electrocardiograma y se
física, debe incluir una gasometría arterial y una radiografía de tratan según los protocolos de apoyo vital cardiológico avan-
tórax. Las posibles causas de la disnea desarrollada inmediata- zado. La EP a menudo puede manifestarse en forma de
mente después de un procedimiento bariátrico incluyen la colapso cardiovascular. Estos pacientes necesitan un soporte
hipoventilación derivada de sobresedación o un despertar de hemodinámico agresivo, con anticoagulación o colocación
Capítulo 15 • Tratamiento perioperatorio del paciente sometido a cirugía bariátrica 129

de un filtro de la vena cava. El diagnóstico puede establecer- de forma inadecuada también aparecen neuropraxias.58 El
se mediante ecografía Doppler de las extremidades inferio- diagnóstico resulta evidente a partir de los signos clínicos
res, gammagrafía de ventilación y perfusión, tomografía del período postoperatorio. Si es necesario se emplean trata-
computarizada helicoidal o angiografía pulmonar. Algunos miento físico y entablillado.
pacientes pueden, por último, desarrollar crisis hipertensi- Entre las complicaciones infecciosas postoperatorias
vas. Si se presenta un control del dolor inadecuado, es nece- normales se incluyen neumonía, infección de las vías urina-
sario ajustar la analgesia. Las crisis graves con signos clíni- rias, infección de la herida, absceso intraabdominal e infec-
cos de cefalea o trastornos neurológicos requieren de ción de la vía central. En tales circunstancias es necesario
tomografía computarizada de la cabeza y un tratamiento obtener cultivos e iniciar el tratamiento antibiótico apropia-
agresivo usando medicación intravenosa antihipertensiva. do. Las infecciones de la herida y los abscesos intraabdomi-
Tras una intervención quirúrgica puede aparecer íleo nales necesitan drenaje. Deben retirarse las vías centrales
prolongado o retraso del vaciamiento gástrico. También se infectadas y obtener un acceso alternativo.
registra denervación vagal, especialmente durante DGYR Tras las intervenciones bariátricas, los pacientes pueden
o gastroplastia vertical con banda (GVB). Es posible que la sufrir un agravamiento de la depresión o de las enfermeda-
gastrectomía vertical realizada durante la DBP/CD provo- des psiquiátricas. Normalmente el diagnóstico es evidente
que un cierto retraso en el vaciado gástrico. Es más proba- tras la evaluación clínica. Como se ha comentado, en el
ble que DGYR y DBP/CD causen íleo. debido a su carác- postoperatorio inmediato debe continuarse con el trata-
ter de mayor alcance y a las enterostomías. Los pacientes miento antidepresivo. Los episodios psicóticos han de tra-
han de ser mantenidos con líquidos por vía intravenosa y, si tarse con fármacos antipsicóticos, después de asegurarse de
el cuadro persiste, debe establecerse nutrición parenteral. que su origen no es debido a una anomalía psicológica.
Normalmente, la insuficiencia renal en el postoperato-
rio es consecuencia de depleción intravascular. La recupera- Complicaciones específicas de procedimientos
ción del volumen puede corregir el problema. Si se mantiene bariátricos concretos
la elevación de la creatinina, es necesario proceder a un aná-
lisis adicional, con recogida de orina de 24 horas y determi- Cada procedimiento bariátrico presenta complicaciones
nación de excreción fraccionada de sodio y aclaramiento de específicas en su período postoperatorio temprano. Estas
creatinina. El tratamiento debe ir dirigido a la causa de la consideraciones se recogen en capítulos posteriores.
insuficiencia (si es prerrenal, renal o posrenal). Los pacientes
con insuficiencia renal aguda han de someterse a diálisis, por
acidosis metabólica, hiperpotasemia o sobrecarga de volu- Z RESUMEN
men. Tras los procedimientos bariátricos pueden aparecer
anomalías en los niveles de electrólitos y en el equilibrio La atención perioperatoria del paciente bariátrico puede
acidobásico. Por ejemplo, la acidosis metabólica es a veces suponer un desafío que, no obstante, ha de platearse como
consecuencia de la administración intraoperatoria de solu- algo gratificante. El cirujano bariátrico debe dirigir un
ción salina normal. Los análisis bioquímicos en suero per- equipo de profesionales de la salud en los ámbitos preopera-
miten la identificación de la anomalía electrolítica específi- torio, intraoperatorio y postoperatorio para asegurar el tra-
ca. El tratamiento consiste en la reposición o el ajuste del tamiento eficaz y seguro del paciente con obesidad severa
componente específico. que se somete a intervenciones bariátricas. La familiaridad
La hemorragia postoperatoria siempre es un potencial con todos los aspectos de la atención perioperatoria del
problema en el paciente bariátrico. El estómago tiene un paciente y el uso de un método basado en los distintos siste-
aporte rico de sangre y muchos procedimientos implican mas fisiológicos para tratar las patologías comórbidas y las
una disección próxima al bazo, lo que aumenta la posibilidad complicaciones ayudan al cirujano a afrontar con eficacia los
de hemorragia intrabdominal. Adicionalmente, puede apa- múltiples aspectos implicados. De este modo, el paciente con
recer hemorragia gastrointestinal en los puntos de anasto- obesidad severa puede someterse a un abordaje bariátrico
mosis. Esta hemorragia normalmente tiene lugar al final de que cambiará su vida, en un entorno de apoyo generalizado
la primera semana tras la intervención, aunque debe seguir y recibiendo la mejor atención posible.
siendo parte del diagnóstico diferencial de hemorragia
perioperatoria. Como se ha indicado la disminución de la
diuresis, taquicardia persistente, hipotensión y disminución Z BIBLIOGRAFÍA
de los niveles de hemoglobina sugieren el diagnóstico.
Muchas veces es posible utilizar una terapia no quirúrgica 1. Mitka M: Surgery for obesity: demand soars amid scientific, ethical
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16
Asistencia postoperatoria al paciente
sometido a cirugía bariátrica
Joseph D. DiRocco, M.D., John D. Halverson, M.D., Jessica Planer, R.D., C.D.N.,
Marguerite Walser, F.N.P., y Paul R. G. Cunningham, M.D.

La adecuación de la asistencia postoperatoria de rutina al cirugía. En cualquier caso, el cumplimiento y comprensión


paciente sometido a un procedimiento bariátrico dependerá del paciente es esencial. Si no se produce durante el período
de si ha sido adecuada la selección de los pacientes (en relación prequirúrgico, tendrá que ser rechazado para cirugía.
con su salud general y la probabilidad de cumplimiento dieté-
tico y de las instrucciones postoperatorias); si se ha realizado
una formación en el período preoperatorio de la conducta en Z DIRECTRICES PARA EL SEGUIMIENTO
relación con el régimen dietético adecuado; si se ha elegido la POSTOPERATORIO DE LOS PACIENTES
intervención adecuada para el paciente; si el paciente y el pro-
cedimiento han superado con éxito el período perioperatorio; El objetivo del seguimiento postoperatorio es evaluar los resul-
y si el paciente mantiene un seguimiento a largo plazo. tados y valorar al paciente en busca de complicaciones postope-
La asistencia postoperatoria al paciente obeso mórbido es ratorias, además de dar formación y apoyo al paciente. En el
un proceso continuado e indefinido que se realiza en un con- período postoperatorio inmediato, se valorará a los pacientes
texto de apoyo constante al paciente por los responsables de la cuando sea necesario (controles de la herida quirúrgica, retira-
asistencia sanitaria primaria. El seguimiento debe incluir el da de los puntos de sutura, pesaje, apoyo del dietista, etc.). La
compromiso a largo plazo de cirujanos, dietistas, profesionales relación que los pacientes establezcan con el equipo de asisten-
de enfermería, radiólogos, gastroenterólogos, fisioterapeutas y cia bariátrica en la fase preoperatoria será fundamental para la
otros proveedores de asistencia sanitaria, con formación espe- asistencia postoperatoria, por lo que habrá que salvar la frialdad
cializada y experiencia contrastada. Es muy importante que el inicial. Muchas veces, el contacto telefónico con los pacientes
cirujano, como líder del equipo, esté motivado y sea exigente al satisfechos por las relaciones mantenidas con el equipo médico
demostrar por igual a pacientes y personal la importancia del evita preocupaciones e incluso importantes contratiempos.
seguimiento a largo plazo para lograr unos buenos resultados Durante el primer año siguiente a la cirugía, los pacientes
en la pérdida de peso y evitar complicaciones metabólicas. deben ser evaluados por lo menos cada 3 meses. En cada visi-
La capacidad del cirujano bariátrico de asistir eficaz- ta, debe obtenerse una anamnesis nutricional, y cualquier sín-
mente a un paciente en el período postoperatorio puede toma o problema de los pacientes debe ser considerado por los
mejorarse considerablemente con la debida preparación pre- miembros del equipo bariátrico correspondientes. Debido a
quirúrgica del paciente. Esto incluye tanto la formación die- que, previsiblemente, poco después de la intervención se pro-
tética como la selección del procedimiento óptimo, pues ducirán mejoras en la hipertensión arterial y en el tratamiento
ambas forman parte del conjunto de medidas orientadas a la de la glucemia, en el seguimiento debe incluirse la vigilancia de
pérdida de peso. Por ejemplo, todas las intervenciones bariá- estos parámetros, manteniendo una comunicación regular con
tricas incluyen unos requisitos de conducta alimentaria para los médicos de atención primaria. Además, es necesario evaluar
el paciente y, en lo que respecta al seguimiento, para el equi- a los pacientes para detectar el posible desarrollo de carencias
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po bariátrico. En el caso de una intervención con un impor- nutricionales. Normalmente, deben determinarse los niveles
tante componente restrictivo, la modificación de la velocidad séricos de hemoglobina, hematocrito, vitamina B12, ácido fóli-
y de la cantidad de ingesta oral es fundamental para alcanzar co, tiamina (o transcetolasa eritrocitaria) y de hierro, y la capa-
un buen resultado en cuanto al peso. El fracaso en el logro cidad total de captación de este al cabo de 6 meses y 1 año, y
de los cambios de conducta pertinentes dará lugar no sólo a después cada año, a menos que se produzca algún déficit.
una pérdida de peso inadecuada, sino también a un estado de Si no parece haber complicaciones, la frecuencia de las
enfermedad en el paciente, que presentará vómitos frecuen- visitas puede reducirse a dos veces el segundo año y después
tes. Si se realiza una intervención malabsortiva, es importan- anualmente. El seguimiento debe ser permanente, ya que es
te que el paciente participe en el seguimiento a largo plazo, el único medio fiable de asegurar unos resultados positivos
incluyendo la realización de análisis de sangre, para evitar las a largo plazo. Sólo con un seguimiento a largo plazo pode-
complicaciones nutricionales que puedan derivarse de la mos obtener conclusiones válidas sobre los resultados.
131
132 Sección IV • ASISTENCIA PREOPERATORIA, PERIOPERATORIA Y POSTOPERATORIA

El seguimiento en la clínica de cirgía bariátrica ha de ción previa, los pacientes pueden estar en condiciones de evi-
ser un esfuerzo multidisciplinario, y los pacientes deben tar dietas que les causen dolor. En ciertos casos, la carne, la
tener fácil acceso al personal de enfermería y al cirujano, así pasta, el pan fermentado y el alcohol producen trastornos.
como al dietista y al personal del grupo de apoyo. Además,
deben estar disponibles un fisioterapeuta y psicoterapeuta
familiarizados con los problemas que presentan los pacientes Z APOYO DIETÉTICO Y NUTRICIONAL
sometidos a cirugía bariátrica. Lo más importante es que el TRAS UNA INTERVENCIÓN BARIÁTRICA
asesoramiento nutricional, psicológico y el ejercicio sean
coordinados y adaptados a cada individuo. Los procedimientos bariátricos logran la pérdida de peso, ya
La intensidad de este seguimiento es superior a la media sea por cambios en la cantidad de alimento ingerido, por
en los pacientes quirúrgicos, pero hay que considerar que las malabsorción del mismo, o por ambos. Las técnicas restricti-
necesidades de estos pacientes son singulares y no son bien vas, como la gastroplastia vertical con banda (GVB) y la colo-
conocidas por la mayoría de los médicos de atención primaria. cación de una banda gástrica, ayudan a limitar (por la pequeña
Además, el aumento de la probabilidad de carencias vitamíni- bolsa gástrica proximal) la cantidad de comida que se consume
cas y minerales y la malnutrición proteicocalórica real (en el y, en algunos casos, el tipo de alimentos que pueden ser inge-
caso de las intervenciones malabsortivas), hacen esencial este ridos. Así, los procedimientos restrictivos pueden dificultar la
nivel de seguimiento. Aunque no hay pruebas de que un mayor ingesta de alimentos que deban cortarse con un cuchillo. Estos
seguimiento lleve a perder más peso, la oportunidad del equi- alimentos (filetes y otras carnes fibrosas) tienden a producir la
po bariátrico de interacción con el paciente en la ingesta ali- sensación de que la alimentación se «engancha» en el esófago
mentaria aumenta posiblemente el cumplimiento y, por tanto, y, si no son masticados de forma adecuada, en realidad pueden
es más probable que conduzca a una pérdida de peso satisfac- obstruir en ocasiones la salida de la bolsa gástrica.
toria. Además, el resultado de las intervenciones quirúrgicas Por su parte, los procedimientos malabsortivos alteran
provoca cambios vitales profundos, algunos de los cuales la digestión. La derivación yeyunoileal practicada hace algu-
siguen requiriendo ajuste emocional y apoyo profesional. nas décadas excluía la mayor parte del intestino delgado y
producía una importante malabsorción (y las consiguientes
carencias nutricionales);1 en cambio, la derivación biliopan-
Z MODIFICACIÓN DE LA CONDUCTA creática y las intervenciones de cruce duodenal suelen ser
ALIMENTARIA POSTOPERATORIA metabólicamente más seguras.2 Sin embargo, ambas pueden,
por sí mismas, producir importantes carencias, por lo que el
Los factores hereditarios, el estado endocrino (tasa metabólica), cirujano bariátrico deberá realizar un estrecho seguimiento.
y el ejercicio influyen en el peso, aunque sólo las calorías se La derivación gástrica en Y de Roux (DGYR), por contra, es
almacenan en forma de grasa, y sólo la privación de calorías (en un planteamiento ecléctico, que incorpora una restricción
función de las necesidades diarias orgánicas) implicará la elimi- gástrica real y una mínima malabsorción.
nación de grasa y la posterior pérdida de peso. Por tanto, para Hay disparidad de opiniones sobre la alimentación del
garantizar una conducta dietética adecuada, es fundamental la período postoperatorio de los pacientes sometidos a cirugía
formación en la modificación de la conducta durante el período bariátrica. En un extremo se encuentran los cirujanos que
preoperatorio y un estrecho seguimiento postoperatorio. remiten a todos los pacientes a su domicilio con una dieta a
La mayoría de las clínicas de cirugía bariátrica reconocen base de purés, argumentando que es probable que en el perío-
las ventajas de contar con un dietista cualificado en su equipo do postoperatorio los alimentos sólidos se enclaven y obstru-
quirúrgico. El dietista puede ser esencial en el período posto- yan la pequeña bolsa gástrica. En el otro extremo se sitúan los
peratorio del paciente supervisando los avances con la dieta y que reconocen que la masticación de alimentos (hasta alcanzar
vigilando la pérdida de peso. El dietista cualificado también la consistencia similar a un puré) transmite una señal propio-
evaluará la adecuación de la ingesta alimentaria, y podrá ayu- ceptiva al cerebro desde los músculos de la masticación, lo que
dar a evaluar los posibles problemas dietéticos del paciente. contribuye a una sensación de saciedad. Estos cirujanos con-
También es importante el asesoramiento sobre los suplemen- ducen antes a sus pacientes a una dieta ligera o normal en el
tos multivitamínicos y proteicos necesarios. Por último, el período postoperatorio. Pero, independientemente, la preven-
dietista cualificado puede desempeñar un papel destacado en ción de la emesis en el postoperatorio inmediato es importan-
la prestación de apoyo y estímulo a medida que se produzcan te, ya que el aumento de las presiones intragástricas durante los
los cambios en el estilo de vida del paciente. Un grupo de episodios de vómitos puede provocar la dehiscencia de las heri-
apoyo es a veces el entorno más adecuado para esta función. das quirúrgicas o el desprendimiento de las grapas (o, en el caso
Se recomienda un enfoque mecanicista de la ingesta die- de la colocación de una banda gástrica, su deslizamiento).
tética en el período postoperatorio, para que el paciente ingie- La administración de los alimentos en puré no supone en
ra una dieta equilibrada muy lentamente, lo cual se logrará teoría ninguna ventaja con respecto a la de alimentos sólidos
enseñando al paciente a tomar bocados del tamaño de una que hayan sido suficientemente masticados. De hecho, una
cucharilla o más pequeños, a masticar cada bocado cuidado- masticación completa puede contribuir a la saciedad, y dar lugar
samente (20 veces o más), y a esperar 5 minutos después de a un menor número de complicaciones a largo plazo. Además,
tragar antes de tomar el siguiente bocado. Con el fin de evitar el consumo de líquidos con alto contenido calórico (o purés)
el rebosamiento de la bolsa (o emesis y estiramiento de la mis- puede eludir algunas de las ventajas de los procedimientos
ma), hay que insistir en que un paciente concluya una comida bariátricos en general y debe evitarse, excepto cuando se indica
cuando ya no tenga hambre, en lugar de comer hasta que se en la nutrición de una persona con una ingesta limitada.
sienta «lleno», lo que puede asociarse con dolor cuando una En el período postoperatorio, un paciente de cirugía bariá-
pequeña bolsa gástrica está rebosando. trica puede encontrar en ciertos alimentos texturas desagrada-
A menudo hay intolerancia a ciertos alimentos, sobre bles. Además, algunos pacientes (principalmente los que se han
todo en procedimientos quirúrgicos que combinan compo- sometido a una derivación gástrica) presentan intolerancia a
nentes restrictivos y malabsortivos. Con una adecuada forma- los azúcares simples, almidones o bebidas concentradas. Si un
Capítulo 16 • Asistencia postoperatoria al paciente sometido a cirugía bariátrica 133

paciente refiere sudoración, mareos, aumento de la frecuencia El déficit de B12 puede dar lugar a síntomas neurológi-
cardíaca y, en ocasiones, diarrea tras ingerir estos alimentos, cos, aunque origina más frecuentemente una anemia mega-
puede padecer un síndrome de vaciamiento rápido. La forma- loblástica. Puede presentarse en pacientes sometidos tanto a
ción preoperatoria de un paciente sometido a DGYR debe cirugía restrictiva como malabsortiva, pero es raro tras una
incluir instrucciones sobre la importancia de evitar los ali- gastroplastia o una colocación de bandas gástricas, donde el
mentos con alto contenido en calorías, líquidos o azúcares. déficit (cuando se produce) se considera causado principal-
Como norma general, si la lista de ingredientes contiene la mente por la disminución de la ingesta alimentaria. Los pro-
palabra azúcar dentro de los tres o cuatro primeros, su consu- cedimientos de derivación gástrica parecen tener un mayor
mo debe ser moderado. Los pacientes que han presentado un efecto sobre los niveles de B12, observándose bajos niveles de
síndrome de vaciamiento rápido saben que es desagradable y B12 en dos tercios de los pacientes con DGYR.4 El mecanis-
evitarán en el futuro los alimentos que lo provocaron. mo de este déficit puede deberse a la práctica ausencia de una
En el período postoperatorio, la disminución de la producción significativa de ácido gástrico en la bolsa gástri-
ingesta calórica, evitar alimentos como la carne y los lácteos ca, con la consiguiente incapacidad para liberar la cobalami-
y la malabsorción pueden causar diversas carencias nutriti- na de la dieta. La predigestión con una mezcla enzimática
vas. Deben prescribirse por ello suplementos terapéuticos mejora la absorción, mientras que la ingestión simultánea de
multivitamínicos y de calcio de 2 a 4 semanas después de la la mezcla no demostró ningún beneficio. 6 La prueba
intervención, permitiendo un amplio margen en las formu- de Schilling suele ser normal en caso de DGYR, sugiriendo
laciones, según las preferencias y necesidades del paciente. que el antro gástrico remanente produce factor intrínse-
Las multivitaminas reducen la probabilidad, pero no elimi- co que funciona en el conducto final común.
nan completamente la posibilidad de carencias. La alta incidencia de déficit de B12 en la derivación gástrica
y en la derivación biliopancreática con cruce duodenal sugiere
que deben evaluarse los niveles de B12. Aunque sólo el 66% de
Z CARENCIAS DE MICRONUTRIENTES los cirujanos bariátricos realiza pruebas de detección de caren-
cias de vitamina B12, todos los pacientes deberían someterse a
Los cirujanos bariátricos harían bien en recordar las numerosas estudio prospectivamente. Cuando se producen debido a una
y graves carencias nutricionales que se producen al elegir la intervención malabsortiva, las carencias de vitamina B12 no sue-
derivación yeyunoileal como intervención malabsortiva para len aparecer hasta 1 año después de la cirugía. El tratamiento se
pacientes obesos mórbidos.1 Estos no sólo presentan malnutri- administra por vía oral (por lo menos 350 μg diarios)8 o en dosis
ción proteicocalórica, frecuentemente presentan graves defi- de 1000 μg de B12 intramuscular cada 2 o 3 meses, en función de
ciencias de micronutrientes. Afortunadamente, las intervencio- los niveles séricos de B12. Si bien la administración de B12 en
nes malabsortivas realizadas en la actualidad son menos complejos multivitamínicos de forma preventiva no excluye la
peligrosas, pero, como regla general, conviene considerar que posibilidad de su carencia, sí reduce la incidencia de la misma.9,10
a mayor malabsorción derivada de la intervención, mayor pro- Muchos cirujanos bariátricos tratan profilácticamente con B12,
babilidad de producir un déficit de micronutrientes. Además, oral o intramuscular, a todos sus pacientes de DGYR.
en la aplicación de las técnicas más malabsortivas, y a diferencia
de lo que sucede con la gastroplastia, la colocación de una ban- Ácido fólico
da gástrica o la derivación gástrica, los pacientes pueden de-
sarrollar una malnutrición generalizada. En general, la gastro- El ácido fólico es un ácido pteroilmonoglutámico presente
plastia y la colocación de banda gástrica sólo rara vez se asocian en los cereales enriquecidos, las verduras de hoja verde, el
con carencias nutricionales o de micronutrientes.3 Estas caren- hígado y los riñones. El folato dietético está principalmente
cias se hacen progresivamente más frecuentes con la derivación en forma de poliglutamato y debe ser hidrolizado a mono-
gástrica y la derivación biliopancreática con cruce duodenal. glutamato antes de producirse su absorción en el yeyuno. El
Son más fácilmente tratables tras la derivación gástrica. folato es un cofactor de las reacciones que implican transfe-
rencia de átomos de carbono, vitales para el metabolismo de
Vitamina B12 aminoácidos, la síntesis de purina y pirimidina y la forma-
ción de S-adenosilmetionina. Su efecto metabólico está muy
La vitamina B12 (cobalamina) es un substrato para cofactores ligado al de la vitamina B12, y deben descartarse las carencias
enzimáticos como metionina sintasa, glutamato mutasa, diol- de esta antes del tratamiento de un déficit de folato. Los sínto-
dehidratasa y metilmalonilcoenzima A mutasa, y se encuentra mas de dicho déficit son por lo general secundarios a anemia.
en el pescado, la leche y derivados lácteos, los huevos, la carne Se cree que las carencias en pacientes sometidos a proce-
y las aves de corral. La ingesta diaria recomendada para la dimientos de pérdida de peso son secundarias a disminución
población general es de 2,4 μg al día. La mayoría de los comple- de la ingesta alimentaria y de la producción de ácido gástrico.
jos multivitamínicos contienen 6 μg. En su forma dietética, está Las deficiencias de folato pueden aumentar los niveles de
unida a proteínas. Normalmente, la separación ocurre en pre- homocisteína. La hiperhomocisteinemia se ha identificado
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sencia del ácido gástrico y tras ella la B12 se une con una pro- como factor de riesgo independiente para la enfermedad ate-
teína R de la saliva, que aumenta su absorción, posiblemente rosclerótica. Un estudio realizado con pacientes 1 año después
protegiéndola durante su paso por el íleon. En el intestino del- de una gastroplastia demostró que aproximadamente dos ter-
gado, las proteasas pancreáticas liberan la B12 de la proteína R. cios de los pacientes presentaban un aumento de los niveles de
La B12 libre se une a continuación al factor intrínseco (produci- homocisteína y que este aumento se vinculaba directamente a
do por las células parietales del estómago) y viaja al íleon, don- la reducción de los niveles de folato. No parece necesario un
de es liberada y se une a receptores especiales de las células del claro déficit de folato para producir estos cambios. El aumento
borde en cepillo intestinal. La B12 se une a proteínas transpor- del riesgo de aterosclerosis secundaria a niveles elevados de
tadoras llamadas transcobalaminas, que luego son captadas por homocisteína puede contrarrestar los beneficios cardiovascu-
el hígado, la médula ósea y las células sanguíneas antes de su lares del procedimiento. Se recomienda, pues, que todos los
liberación intracelular y su conversión en formas bioactivas. pacientes reciban un suplemento diario de folato. Los niveles
134 Sección IV • ASISTENCIA PREOPERATORIA, PERIOPERATORIA Y POSTOPERATORIA

séricos de ácido fólico no suelen ser útiles, ya que reflejan sólo la La anemia por déficit de hierro es la complicación rela-
ingesta reciente. Los niveles de folatos eritrocitarios son, en cionada con los micronutrientes que parece generar más pro-
cambio, indicadores más estables del metabolismo del ácido fóli- blemas a los pacientes. Mientras que las carencias de vitami-
co y su correlación con los niveles de homocisteína es mayor.12 na B12 y de ácido fólico son normalmente silentes en el
paciente postoperatorio, la anemia ferropénica produce una
Tiamina multitud de síntomas que menoscaban su calidad de vida.20 La
profilaxis con la administración de suplementos de hierro oral
La tiamina (vitamina B1) se encuentra en la carne de cerdo, no es recomendable, ya que el pobre cumplimiento por parte
el hígado, las patatas, los cereales integrales y el pan. La del paciente hace que sea ineficaz en muchos casos. Después
ingesta diaria recomendada es de 1,5 mg al día. El pirofosfa- de un procedimiento bariátrico, el déficit de hierro se produce
to de tiamina es un derivado biológicamente activo de la B1 principalmente en las mujeres que menstrúan. En tales casos,
y es necesario para la decarboxilación oxidativa del piruvato se recomienda profilaxis.21 En mujeres con anemia ferropéni-
para formar la acetilcoenzima A, que inicia el ciclo de Krebs. ca refractaria y menometrorragia, está justificada en ocasio-
También funciona como coenzima para la transcetolasa en nes la consulta con un ginecólogo, dado que pueden estar
la vía de la pentosa fosfato, una vía alternativa para la oxida- indicadas ciertas opciones quirúrgicas.
ción de la glucosa. Por último, el pirofosfato de tiamina está El hierro puede ser administrado en dosis de 200 a
involucrado en la decarboxilación oxidativa de un ␣-cetoglu- 300 mg de sulfato de hierro al día (aunque hay que conside-
tarato y de los ácidos ␣-ceto de cadena ramificada. rar el frecuente desarrollo de intolerancia a esta formula-
El beriberi (déficit de tiamina) se suele observar en alco- ción). En general se considera contraindicado el embarazo
hólicos y en los países donde el arroz sin cáscara es el alimen- poco después de un procedimiento bariátrico, pero en las
to básico. Sus manifestaciones neurológicas forman parte del pacientes que se queden embarazadas debe vigilarse estre-
síndrome de Wernicke-Korsakoff, que puede presentarse chamente el hierro y la hemoglobina, ya que son susceptibles
como nistagmo, parálisis de la mirada o polineuropatías sen- a la aparición de anemia y otros déficit, y pueden ser necesa-
sitivomotoras. Los síntomas tardíos incluyen ataxia y delirio. rias estrategias más agresivas de reposición del hierro.22 La
El síndrome de Wernicke-Korsakoff ha sido identifica- comunicación con el obstetra es vital, ya que en general
do en un pequeño número de pacientes sometidos a proce- estos especialistas pueden no estar acostumbrados a los pro-
dimientos de pérdida de peso, incluida la gastroplastia, la blemas especiales del paciente bariátrico. La función de la
derivación gástrica, y la derivación biliopancreática.13,17 Por reposición de hierro por vía intravenosa o intramuscular no
lo general, en estos casos solía haber antecedentes de vómi- está bien definida, pero es a veces necesaria en pacientes que
tos prolongados previos a la identificación de los cambios no pueden ser tratados con suplementos orales. En algunos
neurológicos. Por este motivo, cualquier paciente con eme- casos, se ha requerido la administración de transfusiones.
sis importante debe recibir suplementos de tiamina. Todos
los pacientes que reciben nutrición parenteral en el período Calcio
postoperatorio han de añadir tiamina en su composición.
La absorción de calcio depende de un elevado gradiente cálci-
Hierro co y, por tanto, requiere de grandes cantidades de calcio en la
dieta. En un paciente que ha sido sometido a un procedimien-
El hierro es un mineral que participan en el transporte y alma- to malabsortivo, el calcio se une a la grasa en el intestino dan-
cenamiento del oxígeno. Se encuentra en el hígado, la carne de do lugar a hipocalcemia, lo que a su vez puede producir un
vacuno, el pan integral, los cereales, los huevos y los frutos secos, hiperparatiroidismo secundario. El resultado de ello es en
y se une a las enzimas que intervienen en la producción de ener- ocasiones una osteomalacia, debido a un defecto tanto en la
gía y la difusión celular. También desempeña un papel destacado absorción de calcio como en la síntesis de proteínas que pue-
en la función de los sistemas inmunitarios y nervioso central. den derivarse de estas intervenciones.23 Deben administrarse
La vitamina C consumida en la misma comida que el suplementos de calcio de forma rutinaria a todos los pacientes
hierro inorgánico mejora su absorción hasta en un 50%, y se que han sido sometidos a procedimientos malabsortivos.
ha utilizado para mejorar la absorción de hierro en los pacien- Aunque la restricción gástrica no está asociada habitualmente
tes sometidos a derivación gástrica.18 El hierro se absorbe nor- a hipocalcemia, es fácil que la ingesta alimentaria sea lo sufi-
malmente en el duodeno proximal y en el yeyuno. El déficit cientemente escasa como para aconsejar la profilaxis. Los
de hierro da lugar a una anemia microcítica hipocrómica, que niveles séricos de calcio deben controlarse periódicamente en
se manifiesta con fatiga y debilidad. La mejor prueba de labo- todos los pacientes sometidos a cirugía bariátrica.
ratorio para detectar un déficit de hierro es la determinación
de la ferritina sérica. Los niveles de ferritina no tienen la mis- Cinc
ma variabilidad diurna que los niveles de hierro sérico, y un
bajo resultado es diagnóstico de una posible carencia. Un déficit de cinc puede causar alopecia, diarrea, trastornos
La deficiencia de hierro se observa en un porcentaje com- emocionales, infecciones intercurrentes, dermatitis e hipogona-
prendido entre el 15% y el 50% de los pacientes después de una dismo en varones. Se observó una pérdida significativa del cabe-
derivación gástrica, rango en el que también se halla la inci- llo en algunos pacientes después de DGYR. La alopecia se detu-
dencia de carencia tras derivación biliopancreática. Es poco vo o revirtió después de administrar suplementos de cinc.24
frecuente después de una gastroplastia o de la colocación de
bandas gástricas. Tanto una pobre ingesta dietética como la Vitaminas liposolubles: K, A, D
malabsorción de hierro parecen desempeñar un papel impor-
tante en el desarrollo de la carencia de hierro. Tras 7 años de Los procedimientos malabsortivos funcionan, en parte, dismi-
seguimiento de un grupo de pacientes con derivación gástrica, nuyendo la absorción de grasas. El consumo de alimentos gra-
muchos de ellos presentaron un leve déficit de hierro, que sos puede dar lugar a heces o gases fétidos y a diarrea. Con una
parece relacionarse con una intolerancia a la carne.19 disminución de la ingesta y el tratamiento de la grasa dietética,
Capítulo 16 • Asistencia postoperatoria al paciente sometido a cirugía bariátrica 135

las carencias de vitaminas liposolubles pueden evolucionar. Una intervención bariátrica, por lo general, produce una
Dichas vitaminas deben proporcionarse profilácticamente a mejora en la sensación de bienestar del paciente. El mejor
todos los pacientes que han sido sometidos a procedimientos de aspecto físico, la mayor probabilidad de acceso a un empleo, y
derivación biliopancreática con cruce duodenal. El déficit la mejora general de la salud y la actividad sexual producen lo
de vitamina D se ha observado de hecho en correlación con la que muchos pacientes describen como un renacimiento o una
obesidad y no puede modificarse con los procedimientos de nueva vida, y su funcionalidad va normalizándose.
pérdida de peso.25 La carencia de vitamina K, si se produce, Pueden desarrollarse fobias en el período postoperatorio,
puede identificarse clínicamente (hematomas, hemorragias). incluyendo miedo al fracaso, miedo de comer, y miedo a la eme-
La derivación yeyunoileal se asoció con presencia conocida de sis, siendo importante el apoyo permanente por el equipo bariá-
un déficit de vitamina D. En el caso de la vitamina D, su déficit trico (y tal vez por un psicólogo clínico). Puede ser útil la poten-
contribuye a la aparición de osteomalacia. En algunos casos de ciación de una actitud optimista en relación con alimentación
carencia de A se ha registrado ceguera nocturna. Por lo tanto, en el período postoperatorio; no obstante, lo que resulta esen-
es prudente medir periódicamente las vitaminas A y D séricas cial es el estricto seguimiento de los principios de modificación
si se ha llevado a cabo un procedimiento malabsortivo. de conducta dietética aprendidos en el preoperatorio. Aunque
el miedo de recuperar el peso es un factor relevante, el temor
por sí sólo rara vez hace que los pacientes se conviertan en
Z CARENCIAS DE MACRONUTRIENTES anoréxicos. El temor a la emesis, sin embargo, lleva a muchas
(PROTEÍNAS) personas no sólo a reducir la velocidad a la que comen, sino
también a disminuir la variedad y cantidad de alimentos. La
La malnutrición proteicocalórica después de la cirugía bariá- importancia de los psicólogos, profesionales de enfermería
trica se registra casi exclusivamente en los procedimientos experimentados, y dietistas dedicados a los pacientes con este
malabsortivos, como la DGYR distal y la derivación biliopan- tipo de problemas es evidente, y el éxito general de los procedi-
creática con o sin cruce duodenal, aunque ocasionalmente mientos bariátricos puede depender muchas veces de su inter-
puede encontrarse, después de una emesis prolongada, en pro- vención.
cedimientos restrictivos.26 Clínicamente, el déficit proteico, se
traduce en reducción de la masa muscular y edema. Se puede
manifestar en forma de infecciones recurrentes o graves como Z PROBLEMAS POSTOPERATORIOS ESPECIALES
resultado de la inmunodeficiencia subsiguiente. La malnutri-
ción proteicocalórica es conocida como marasmo, en tanto que Emesis
la que es sólo proteica se conoce como kwashiorkor. La malnu-
trición proteica se ha observado en el 8% de los pacientes con La emesis postoperatoria puede producirse después de cual-
la derivación biliopancreática originalmente descrita por quier procedimiento bariátrico, pero se observa más frecuente-
Scopinaro.27 Más tarde, la modificación de este procedimien- mente después de técnicas gástricas restrictivas en pacientes
to, alargando el conducto común, incrementando el volumen que no comen lentamente ni mastican de modo adecuado.
gástrico, o ambos, disminuyó la incidencia al 3%.28 La malnu- Parece deberse a una combinación entre el pequeño tamaño de
trición proteica puede ser evitada favoreciendo dietas de alto la bolsa gástrica y la estrechez del orificio de salida. En la
contenido proteico y con el aporte de suplementos de proteínas DGYR, el tamaño de la bolsa es similar al de la que se encuen-
y, por supuesto, evitando los procedimientos malabsortivos, tra en la GVB, pero la longitud del estrechamiento a través de
sobre todo en personas que podrían considerarse de alto ries- la cual pasa la comida después de salir de la bolsa, es inferior al
go. En casos extremos, el déficit proteico es tratado con nutri- conducto de 1 cm de largo creado por una banda, la cual puede
ción parenteral total y, ocasionalmente, es necesaria una inter- predisponer a los pacientes a presentar más frecuentes enclava-
vención de revisión. En pacientes sometidos a técnicas mientos de trozos de alimentos inadecuadamente masticados.
malabsortivas, se recomienda la detección rutinaria de los La emesis puede influir de forma importante en la cali-
niveles de proteínas totales y albúmina. dad de vida del paciente. Shai y cols. observaron que, des-
pués de una gastroplastia vertical con banda, dos tercios de
los pacientes presentaban algunos vómitos, dificultades al
Z CONSIDERACIONES PSICOLÓGICAS tragar, o síntomas de reflujo, pero que estos síntomas no se
correlacionaban con la insatisfacción de los pacientes.30
Una cuestión importante a la que se enfrentan todos los Halverson y Brown, en cambio, encontraron que, ya sea des-
equipos de cirugía bariátrica es la percepción, por lo demás pués de una derivación gástrica o de una gastroplastia, dos
errónea, de que la obesidad mórbida esta siempre asociada tercios de los pacientes presentaban episodios mínimos o
con una enfermedad mental. Como en cualquier población, nulos de vómitos si habían sido cuidadosamente instruidos
los obesos mórbidos pueden presentar una patología mental, en el período preoperatorio.31 Balsiger y cols. consideraron
siendo especialmente frecuente la depresión. Por otra parte, vómitos importantes los que se registraban con uno o más
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en estos pacientes se observa todas las variables habituales episodios por semana y, de acuerdo con esta definición,
del comportamiento humano, desde el completamente nor- determinaron una incidencia del 21%.32
mal a la afectación psicológica profunda. La emesis prolongada puede dar lugar a malnutrición y
Por diferentes motivos, muchos pacientes que se presen- debe evaluarse urgentemente. Una emesis persistente puede
tan para someterse a intervenciones bariátricas están tomando deberse a una obstrucción por un trozo de alimento o a una
medicamentos psicotrópicos. La mayoría de ello refieren ante- alteración anatómica, por ejemplo una estenosis anastomó-
cedentes de depresión debidos a su peso; sin embargo, Gentry tica. Sin embargo, los vómitos después de cualquier proce-
y otros han demostrado que la depresión se reduce después de dimiento bariátrico con componente restrictivo pueden ser
la derivación gástrica.29 Por el contrario, algunos pacientes simplemente un marcador de incumplimiento dietético del
informan sentirse deprimidos porque su capacidad para dis- paciente. Es esencial proceder a un detallado asesoramiento
frutar de los alimentos ha sido radicalmente alterada. preoperatorio con respecto a los hábitos alimentarios, con
136 Sección IV • ASISTENCIA PREOPERATORIA, PERIOPERATORIA Y POSTOPERATORIA

refuerzo postoperatorio continuo, para la reducción de la tólica.36 También se produce cierto grado de disfunción sistó-
incidencia y la gravedad de la emesis. Los pacientes que lica, con aproximadamente una cuarta parte de los pacientes
sufren episodios de vómitos presentan riesgos teóricos de con fracción de eyección del ventrículo izquierdo de menos
dehiscencia de los puntos de sutura, estiramiento de la bol- del 50%. Además, la evaluación con isótopos radioactivos
sa gástrica, y evolución de los síntomas de reflujo. DeMaria durante el ejercicio demuestra alteraciones inducibles de la
y cols. expresaron su preocupación por el posible desarrollo motilidad de la pared ventricular, y algunos pacientes tienen
de acalasia gástrica después de la colocación de bandas.33 antecedentes de síntomas anginosos. La angiografía corona-
Los cirujanos bariátricos experimentados asegurarán ria no revela ninguna enfermedad aterosclerótica significati-
una cuidadosa formación en el período preoperatorio a los va.37 Ello sugiere que la disminución de distensibilidad ven-
pacientes en relación con las conductas alimentarias que favo- tricular reduce la capacidad de vasodilatación de las arterias
rezcan el logro de la pérdida de peso en el período postopera- coronarias. Con el ejercicio, hay pocos cambios en el volumen
torio. Estas conductas incluyen: 1) comer una dieta bien equi- de latido, y el gasto cardíaco está determinado únicamente
librada, 2) tomar un bocado cada 5 minutos; 3) masticar cada por la frecuencia. La evaluación ecocardiográfica de los
bocado al menos 20 veces; 4) parar de comer cuando ya no se pacientes a los 6 meses tras la intervención demuestra la reso-
tenga hambre, y 5) no consumir líquidos durante 45 minutos lución de la hipertrofia ventricular izquierda, y las imágenes
antes y después de las comidas. En muchos casos, la emesis obtenidas con isótopos radiactivos confirman la disminución
postoperatoria es consecuencia de hábitos alimentarios inade- de la masa del ventrículo izquierdo en casi todos los pacien-
cuados y puede dar lugar a rechazo alimentario. La pérdida de tes.38,39 En el período postoperatorio se produce una reducción
peso, sin embargo, no parece estar relacionada con la presen- de la poscarga, con disminución en la presión arterial sistólica
cia o la gravedad de la emesis.31 en reposo y durante el ejercicio.40 La disminución observada en
la masa ventricular izquierda puede ser consecuencia de esta
Estenosis anastomótica reducción en la poscarga, o bien puede deberse a un efecto
directo de la pérdida de peso sobre el miocito. Estos cambios se
Se ha observado que el estrechamiento o la ulceración de la han observado en pacientes que han sido sometidos a una GVB
anastomosis entre el estómago y el intestino delgado des- y una DGYR. Queda por ver si se producen cambios similares
pués de DGYR se produce hasta en un 14% de los pacientes después de otros procedimientos bariátricos.
sometidos a una derivación gástrica laparoscópica.34 Su inci- Desde el punto de vista respiratorio, los requerimientos
dencia en la DGYR abierta es mucho menor. Estos pacientes ventilatorios de los obesos son notablemente más altos que los
presentan vómitos frecuentes, por lo general incoercibles y, de la población general. La capacidad respiratoria de los pacien-
a menudo, requieren repetidas dilataciones endoscópicas. tes obesos también se ve comprometida por presiones extratorá-
Por lo general, son tratados con éxito, requiriendo sólo una cicas (p. ej., restrictivas). En el postoperatorio, se puede demos-
reintervención quirúrgica las estenosis intratables. Una sali- trar que el consumo máximo de oxígeno (VO2) y los umbrales
da estrecha tras una GVB no puede ser dilatada y no debe anaeróbicos aumentan de modo significativo, y los niveles del
intentarse el abordaje de su dilatación; los anillos de silastic VO2 en reposo se normalizan.41 Sin embargo, sólo se registra una
y las bandas de Marlex no se dilatan. mejoría moderada en la capacidad ventilatoria.42
Las intervenciones de pérdida de peso no dan lugar, de
inmediato, a un aumento de la actividad. Ciertamente, el
Z PAPEL DEL EJERCICIO POSTOPERATORIO ejercicio debería ser más fácil de realizar a medida que se
EN PACIENTES BARIÁTRICOS pierde el exceso de peso corporal, pero el estímulo y los sis-
temas de apoyo sociales son esenciales para el desarrollo de
La limitación de la actividad física es una de las quejas que cambios positivos en el estilo de vida. Los pacientes de los
con mayor frecuencia presentan los pacientes obesos. La grupos de apoyo después de la GVB participaron en un
proporción de masa magra corporal (MMC) del total de la número significativamente mayor de actividades físicas que
masa corporal es inferior en el paciente obeso, debido a que aquellos incluidos en grupos de control después de la misma
la mayoría de su exceso de peso se encuentra en forma de intervención. Además, los pacientes incluidos en grupos de
grasa. Por otra parte, la persona obesa debe realizar más apoyo referían consumir menos calorías y tenían un mayor
trabajo que una persona de peso normal para llevar a cabo conocimiento nutricional. Es sorprendente que no hubiese
las mismas actividades. ninguna diferencia en la pérdida de peso entre los dos gru-
A medida que se produce la pérdida de peso en el perío- pos en el momento de finalizar el estudio.43 La conclusión
do postoperatorio, se pierde tanto grasa como MMC, cuya que puede obtenerse es que la pérdida de peso, al menos en
proporción depende del tipo de intervención y del tiempo los primeros años, depende sobre todo de la intervención,
transcurrido desde la misma. Es decir, un año después de la pero que el mantenimiento de la pérdida de peso a largo
cirugía, los procedimientos bariátricos restrictivos y de deri- plazo (así como el mantenimiento de la MMC) puede, en
vación gástrica se asocian con menos agotamiento de la cierto grado, depender de un ejercicio continuado.
MMC que los procedimientos más malabsortivos, con los
cuales los casos de malnutrición proteicocalórica ocurren
con mayor probabilidad.35 Independiente del tipo de proce- Z GRUPOS DE APOYO
dimiento realizado, el ejercicio es un elemento importante
en la conservación de la masa muscular y en el manteni- Los grupos de apoyo pueden convertirse en la base de un pro-
miento de la MMC. grama de cirugía bariátrica. Debidamente gestionados, crean
La reserva cardiopulmonar de los pacientes obesos tam- un entorno que orienta, e instruye a pacientes tanto antes
bién está disminuida. La evaluación cardíaca de los pacientes como después de la cirugía, y que pueden dar lugar a un
obesos mórbidos en el período preoperatorio demuestra un aumento global de los porcentajes de éxito y una mayor pér-
alto porcentaje de hipertrofia ventricular izquierda con pre- dida de peso. Debido a la singular naturaleza de estos grupos
siones de llenado elevadas, lo que da lugar a disfunción dias- de pacientes, las reuniones de los grupos de apoyo para pacien-
Capítulo 16 • Asistencia postoperatoria al paciente sometido a cirugía bariátrica 137

tes bariátricos deben ser llevadas a cabo en habitaciones que ha sido debidamente seleccionado. La experiencia indica que la
sean suficientemente grandes y que tengan sillas cómodas, sin mayoría de los pacientes que vomitan lo hacen por no cumplir
reposabrazos. Las reuniones deben estructurarse y ajustarse a las instrucciones dietéticas, en lugar de por presentar un proble-
un programa. Los pacientes preoperados y postoperatorios ma anatómico resultante de la intervención. Cuando un pacien-
tienen diferentes problemas, y deben abordarse adecuada- te llama y refiere vómitos, se debe determinar si la emesis se
mente las necesidades de ambos grupos. Gran parte de la acti- produce al inicio, durante o después de la ingesta, y después de
vidad de un buen grupo de apoyo se centra en la educación y qué cantidad de alimentos (o líquidos). Es necesario compro-
el soporte emocional, pero debe habilitarse un tiempo al final bar que el paciente mastica los alimentos adecuadamente (hasta
de cada reunión para el fomento de las relaciones sociales. un estado de puré) y que la velocidad de la ingesta es lo suficien-
Este tiempo ofrece la oportunidad a los pacientes de hablar temente lenta para permitir el paso de los alimentos.
entre ellos como grupo y en privado, y de facilitar la comuni- La mayoría de los pacientes afirman que vomitan si
cación a los pacientes menos dispuestos a relacionarse. mastican de forma inadecuada o si comen demasiado rápido,
El enfoque creativo de los colaboradores invitados a de ahí la importancia de la enseñanza de la modificación de
intervenir constituye una excelente oportunidad de propor- la conducta alimentaria antes de la cirugía. Estos pacientes
cionar información sobre el ejercicio y la nutrición. «Los frecuentemente sólo vomitan después de consumir alimen-
grupos de apoyo son mejor dirigidos por líderes competen- tos sólidos y son capaces de retener los líquidos. Si un pacien-
tes, bien formados, educados y positivos, que entiendan la te vomita tanto líquidos como sólidos de manera sistemática,
cirugía, el desarrollo preoperatorio, el plan de tratamiento existe una probabilidad elevada de que un bezoar esté obs-
postoperatorio y la dinámica de grupo44.» Sin estos elemen- truyendo la anastomosis (o más frecuentemente, la GVB o
tos, los grupos pueden perder gran parte de su funcionali- el tracto de salida de la banda gástrica). La intermitencia de
dad. Debe animarse a los pacientes a convertirse en líderes y la emesis debido a un bezoar puede ocurrir cuando hay un
desarrollar sus propias listas de correo electrónico y boleti- efecto «balón-válvula», que puede persistir durante semanas
nes del grupo para mantener las líneas de apoyo abiertas o incluso durante algunos meses.
entre todos los miembros. Los vómitos persistentes tanto de sólidos como de líqui-
dos exigen una actuación rápida para restablecer la salud del
paciente y también para evitar la deshidratación y la debili-
Z RECEPCIÓN DE LLAMADAS DEL PACIENTE dad, por la consiguiente malnutrición derivada. Puede ser
EN EL PERÍODO POSTOPERATORIO razonable la realización de una exploración gastrointestinal
alta, pero puede no detectarse un cuerpo extraño enclavado
El carácter singular de la cirugía bariátrica genera una mayor en el tracto de salida de la bolsa gástrica; la endoscopia
atención a las quejas de los pacientes, que pueden ser impor- digestiva alta es la exploración diagnóstica más eficaz y más
tantes en su cuidado. Muchas de las llamadas de rutina al útil desde el punto de vista terapéutico.
equipo bariátrico se producen para solicitar información acer- Ocasionalmente, los pacientes refieren vómitos muco-
ca de resultados de laboratorio, la reanudación de las activida- sos, espumosos, o filamentosos, negando que vean alimentos
des, los cuidados de la herida, y otros temas. La mayoría de los cuando vomitan. Estas personas suelen negar la existencia de
contactos, en particular en los primeros meses después de la alguna relación entre los vómitos y sus comidas. Aunque esta
intervención, requieren conocimientos especializados. situación es poco frecuente y casi siempre se resuelve por sí
misma, el equipo bariátrico debe tener en cuenta que el goteo
Dolor posnasal o la sinusitis crónica contribuyen al desarrollo de
este tipo de problemas, y deben ser adecuadamente tratados.
El dolor es causa frecuente de llamadas telefónica al equipo, Por último, en algunos pacientes que se quejan de vómi-
y su descripción (intensidad, ubicación, irradiación, cons- tos, no puede establecerse la causa concreta. Afortunadamente,
tancia, factores que le afectan) ayuda a determinar si proce- este grupo de pacientes es pequeño, y la duración de la alte-
de una consulta farmacológica, o el traslado a una unidad de ración suele ser breve. Pueden ser tratados con los regímenes
urgencias o al centro de cirugía bariátrica. El dolor en la de antieméticos habituales.
incisión puede ser manejado de forma rutinaria, en tanto
que el dolor pleurítico en estos pacientes requiere un estudio
más profundo, dada su predisposición al desarrollo de trom- Z PROBLEMAS PSICOLÓGICOS
bosis venosa profunda y embolia pulmonar.
Los informes de dolor epigástrico o retroesternal, cuan- Tras la cirugía, se produce en los pacientes una gama de
do se asocian con la ingesta, requieren una evaluación espe- problemas psicológicos comprendida dentro de los límites
cial. La saciedad o la emesis después de una o dos degluciones, normales. La anorexia postoperatoria es muy poco frecuen-
o los vómitos no provocados, puede indicar una estenosis te, cuando no inexistente; en cambio, la bulimia se da de
anastomótica o la presencia de un cuerpo extraño enclavado manera ocasional. Cuando se produce bulimia, debe recono-
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en el tracto de salida. El dolor grave o persistente asociado a cerse no como un acto racional diseñado para hacer que una
la deglución o la ingesta debe ser evaluado a veces mediante persona pierda peso, sino más bien como un síntoma de una en-
un estudio radiológico gastrointestinal superior con bario o fermedad psiquiátrica subyacente, y debe buscarse la corres-
una endoscopia digestiva superior. Los alimentos alojados en pondiente ayuda para el paciente.
el tracto de salida de la bolsa gástrica pueden ser empujados En el otro extremo se encuentra una grave aversión a la
con el endoscopio, haciendo innecesaria su extracción real. comida, en la cual la ingesta del paciente disminuye debido al
temor de aumentar de peso, le desagradan los alimentos por
Emesis sí mismos, o incluso teme vomitar. La aversión a los alimentos
a menudo comienza en relación con un tipo determinado de
La emesis postoperatoria es poco habitual en un paciente que ha alimentos (carne, pasteles, salsas), pero puede generalizarse a
sido adecuadamente instruido en el período preoperatorio y que otros. En este caso hay que plantear una consulta psiquiátrica.
138 Sección IV • ASISTENCIA PREOPERATORIA, PERIOPERATORIA Y POSTOPERATORIA

Los cambios en la imagen corporal son uno de los efectos 16. Chaves LC, Faintuch J, Kahwage S, et al: A cluster of polyneuropathy
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empleo y de la actividad sexual son factores constantes, que beriberi as a complication of surgery of morbid obesity. Rev Neurol
resultan positivos para la mayoría de los pacientes. Sin embar- 1996;24:456-458.
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apariencia o imagen corporal tiene connotaciones negativas, 19. Avinoah E, Ovnat A, Charuzi I: Nutritional status seven years after
ya que aumenta la probabilidad de su interacción social, las Roux-en-Y gastric bypass surgery. Surgery 1992;111:137-142.
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registra a menudo en casos en los que existen antecedentes de intest Surg 1998;2:436-442.
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podría ser más fácil conseguir un trabajo o ser promociona- 25. Buffington C, Walker B, Cowan GS Jr, et al: Vitamin D deficiency in
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satisfacción a medida que se han convertido en obesos mór- 28. Scopinaro N, Adami GF, Marinari GM, et al: Biliopancreatic diver-
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17
Cirugía en el paciente con obesidad mórbida
Robert J. Greenstein, M.D., F.A.C.S., F.R.C.S.

A medida que la cirugía bariátrica va gozando de cada vez cirugía. Deben ser conscientes de que van a despertar con el
mayor aceptación como tratamiento de la obesidad mórbida, tubo endotraqueal todavía puesto.
aumenta el desafío que supone proporcionar a la población
que la padece una atención adecuada. El objetivo del presente Movilización temprana
capítulo es analizar la forma de conseguir un acondiciona-
miento del quirófano adecuado a los pacientes con obesidad Es importante que los pacientes estén preparados para su
mórbida. En él no se incluyen los aspectos del asesoramiento movilización temprana, ya antes del ingreso hospitalario. Es
preoperatorio no específicamente vinculados con la cirugía. preferible asegurar una vía intravenosa sencilla como apoyo
a la movilidad del paciente, antes de trasladarlo desde la sala
de reanimación a su siguiente destino tras la intervención.
Z EDUCACIÓN Y PREPARACIÓN PREOPERATORIA Si es posible, debe evitarse el uso de sondas nasogástri-
cas y de vías arteriales. Es posible que los pacientes prefieran
La preparación del paciente es de suma importancia en la estar sentados en una silla en vez de tumbados en la cama
realización de la cirugía bariátrica.1 durante las 24 horas siguientes a la intervención quirúrgica,
ya que pueden levantarse más fácilmente si están sentados
Higiene de la piel que si están acostados.

Antes de la cirugía programada, en los pacientes diabéticos Profilaxis pulmonar


con paniculitis masivamente redundante debemos asegurar-
nos de que todas las excoriaciones cutáneas estén curadas. Las complicaciones respiratorias son los problemas más fre-
Motivar a los pacientes para que se laven bien bajo de los cuentes tras una cirugía bariátrica.2 El momento más propi-
pliegues de la piel y mantengan la piel seca usando ropa inte- cio para enseñar a los pacientes el uso de los espirómetros de
rior de algodón, y corregir la diabetes subtratada son medi- incentivo es previo a la técnica quirúrgica. Dependiendo
das sencillas pero eficaces que disminuyen las infecciones de de la estructura administrativa del hospital en el que se vaya
la herida. En una consulta previa al ingreso para cirugía, a operar, los aspectos respiratorios de la preparación del
puede proporcionarse a los pacientes un cepillo de lavado paciente pueden tratarse durante la visita a la consulta,
quirúrgico con betadine o clorhexidina para que se laven la durante la entrevista con el anestesista o en la visita preope-
mañana del día de la cirugía, antes de acudir al hospital. ratoria, ya en el hospital. Si es posible, los pacientes recibirán
espirómetros de incentivo y se les mostrará su uso, permi-
Profilaxis de la enfermedad tromboembólica venosa tiéndoles que tengan tiempo para practicar con el dispositi-
vo en casa.
Es importante explicar a los pacientes la absoluta necesidad de la
movilización postoperatoria repetitiva como ayuda importante
para prevenir la formación de coágulos de sangre en las piernas Z TRATAMIENTO POSTOPERATORIO
y la posibilidad de embolia pulmonar. Los pacientes están dis-
puestos a soportar el dolor si sus acciones mejoran sus oportuni- Mi filosofía sobre cómo tratar postoperatioamente a los
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

dades de progresar tras una cirugía programada que puede cons- pacientes bariátricos comenzó a perfilarse cuando en 1982
tituir una amenaza para la vida. Si se les describe el efecto visité al profesor E. E. Mason en Iowa, al comienzo de mi
similar al de una esponja que ejercen los músculos de las pantorri- carrera como cirujano bariátrico. El profesor Mason me
llas cuando bombean la sangre a través de las venas para mini- dijo: «si tratas a los pacientes como si estuvieran enfermos,
mizar la aparición de coágulos sanguíneos, los pacientes se ani- se pondrán enfermos».
marán a caminar tan pronto y tan a menudo como sea posible.
Sala de reanimación
Sala de reanimación
Se recomienda que los pacientes sean conducidos lo antes
Los pacientes deben estar preparados para afrontar el posible a la sala de reanimación. Por norma, los pacientes
ambiente que encontrarán en la sala de reanimación tras la pueden ir desde la sala de reanimación a la sala de enferme-
139
140 Sección IV • ASISTENCIA PREOPERATORIA, PERIOPERATORIA Y POSTOPERATORIA

ría; sin embargo, en algunos casos es necesario que el pacien- enfermedad tromboembólica venosa para minimizar las
te pase a la unidad de cuidados intensivos. Ello es especial- considerables mortalidad y morbilidad que resultan de la
mente frecuente en pacientes con problemas respiratorios y tromboembolia venosa.7-9
en aquellos que han tenido dificultades de intubación.
Preoperatorio
Movilización temprana
La Consensus Development Conference de los National Institutes
El personal de enfermería es de una importancia fundamen- of Health sobre profilaxis de la enfermedad tromboembólica
tal para establecer una movilización temprana, preferible- recomienda el uso de tratamiento anticoagulación, medias
mente con pacientes a los que se ha inculcado la importancia de compresión venosa o ambos.10 En el momento de la publi-
de caminar cuanto antes y de forma repetitiva. En un centro cación de la Consensus Statement (1986), la dosis recomenda-
donde se esté iniciando un programa bariátrico, este punto da de heparina no se ajustaba con respecto al peso; sin
puede requerir un cambio conceptual y de comportamiento embargo, estudios que comparaban varias dosis de enoxapa-
por parte del equipo de enfermería. rina, combinadas con otros tratamientos profilácticos mul-
timodales para la enfermedad trombroembólica venosa,
sugieren que en personas con obesidad mórbida pueden ser
Z PROFILAXIS CON ANTIBIÓTICOS más eficaces dosis mayores de fármacos anticoagulación.11
Es probable que en el futuro se desarrolle un algoritmo en
Tratamiento preoperatorio con antibióticos función del peso para determinar la dosis de anticoagulación
apropiada.12
La American Heart Association ha publicado sus recomenda-
ciones para el uso y duración del tratamiento profiláctico Intraoperatorio
con antibióticos para prevenir la endocarditis.3 Estas eran
una actualización de las recomendaciones previas de la Las medias de compresión están disponibles en el mercado
American Society of Colorectal Surgeons, orientadas principal- y en las instrucciones del fabricante se enumeran siempre las
mente al impacto sobre la flora intestinal.4 No se ha estable- contraindicaciones de su uso.12,13 El cirujano bariátrico debe
cido un conjunto de recomendaciones similares para la pro- considerar que algunos pacientes con obesidad mórbida pue-
filaxis con antibióticos específicamente proyectada para los den tener muslos y pantorrillas demasiado grandes como
cirujanos bariátricos. para que les sirvan los dispositivos de compresión para mus-
Normalmente, es aceptable una cefalosporina de prime- los y pantorrillas comercializados. En estos casos, debe con-
ra generación. Cuando se conoce la existencia previa de aler- siderarse el uso de dispositivos de compresión sólo para pan-
gia a las cefalosporinas, un aminoglucósido puede ser una torrillas o para pies.
alternativa apropiada. Desde la perspectiva del cirujano
bariátrico, resulta vital la información referida a la necesidad Postoperatorio
de ajustar la dosis requerida de antibiótico profiláctico según
el peso del paciente.5 Como norma, para un índice de masa En la fase postoperatoria se utilizan a menudo botas o medias
corporal (IMC) de 40 a 50 kg/m 2, es conveniente duplicar la de compresión, así como heparina o sus derivados, hasta que
dosis normal recomendada; para IMC de 51 a 65 kg/m 2, el paciente puede moverse sin problemas. Dependiendo de la
la dosis ha de ser dos veces y media la normal y en el caso de naturaleza de la intervención quirúrgica y de los protocolos
IMC superior a 65 kg/m 2, debe ser tres veces la dosis nor- empleados, el tratamiento profiláctico antitrombótico pue-
mal. Los antibióticos preoperatorios se administran por vía de continuarse hasta recibir el alta hospitalaria. En el caso
intravenosa en el quirófano antes de la inducción. del paciente confinado en cama (p. ej., en una unidad de cui-
dados intensivos), se continuan tanto la anticoagulación a
Antibióticos intraoperatorios base de heparina como el uso de las medias de compresión
hasta que el paciente se mueve por sí solo.
En caso de que la cirugía dure más de 2 horas, a veces es
necesario repetir la dosis de antibióticos durante la fase
intraoperatoria, dependiendo de la semivida del fármaco uti- Z ANESTESIA
lizado.
En el paciente con obesidad mórbida, la anestesia es una sub-
Antibióticos postoperatorios especialidad en sí misma. Desde la perspectiva del cirujano,
en la cirugía bariátrica es especialmente importante una
No existen datos convincentes que justifiquen el uso de anti- comunicación adecuada con los anestesistas. Pueden consi-
bióticos profilácticos postoperatorios; sin embargo, los ciru- derarse diversos medios para el mantenimiento del inter-
janos utilizan una amplia gama de pautas de tratamiento en cambio gaseoso y pueden usarse agentes volátiles normal-
este período. mente disponibles.14,15 Aunque teóricamente es posible que
no sea necesario ajustar al peso del paciente las dosis de todos
los fármacos que se administran, la mayoría de ellos tienen
Z PROFILAXIS DE LA ENFERMEDAD grados variables de liposolubilidad, por lo que, para algunos
TROMBOEMBÓLICA VENOSA de ellos, será necesario aumentar la dosis.
La respuesta del paciente a los estímulos dolorosos y la
Según se estima, entre el 60% y el 70% de los casos de muer- comunicación entre el cirujano y el anestesista son los dos
te durante la cirugía bariátrica se atribuyen a embolia pul- elementos esenciales para establecer y mantener una aneste-
monar.6 Por consiguiente, la gran mayoría de los cirujanos sia satisfactoria y la relajación neuromuscular del paciente.
bariátricos emplean formas multimodales de profilaxis en la Algunos anestesistas se muestran reacios a proporcionar una
Capítulo 17 • Cirugía en el paciente con obesidad mórbida 141

relajación satisfactoria, especialmente en el momento de ces de compensar las deficiencias en la exposición, que
cerrar, ante la preocupación por su capacidad de realizar una podrían hacer que la intervención fuera peligrosa para un
extubación rápida al final del procedimiento. Al mismo tiem- cirujano medio. El cirujano especialista en laparoscopia
po, se han notificado tasas de hernia de incisión del 8% al también necesita contar con la capacidad de lograr y mante-
18% tras la cirugía bariátrica abierta,16-18 aunque son muchos ner una tracción mecánica estable en el hiato esofágico.
los cirujanos que ocasionalmente reconocen una incidencia Varios fabricantes ofrecen conjuntos de instrumental que
mayor. Esta alta incidencia de hernias ventrales postoperato- proporcionan esta exposición óptima. Las valvas separado-
rias puede ser atribuible en parte a una relajación inadecuada ras más versátiles para la retracción laparoscópica del lóbulo
del paciente en el momento del cierre de la herida. izquierdo del hígado parecen ser, curiosamente, aquellas en
forma de varilla diseñadas por una empresa australiana, que
poseen la doble ventaja de ser reutilizables e introducirse a
Z EQUIPAMIENTO QUIRÚRGICO ESPECIALIZADO través de un puerto de 5 mm. Como en la cirugía abierta,
cuando se realiza una cirugía laparoscópica, es conveniente
La realización de cualquier intervención necesita una instru- utilizar un dispositivo mecánico que ayude a mantener la
mentación adecuada. Es obligado contar con mesas de opera- exposición; en el mercado pueden encontrarse varios dispo-
ciones capaces de soportar el peso del paciente con obesidad sitivos de este tipo.24
mórbida. La colocación del paciente, tanto en casos de inter-
vención abierta como de laparoscopia, a menudo es en posi-
ción de Trendelenburg inversa, lo cual ayuda a obtener una Z EL CIRUJANO BARIÁTRICO
exposición de la zona de unión esofagogástrica y mejora el
intercambio gaseoso en caso de obesidad mórbida.19 La intervención de pacientes con obesidad mórbida es uno
de los desafíos técnicos más difíciles que puede afrontar un
Cirugía abierta cirujano. En los casos de cirugía programada, un posible
problema de alcance es el aumento de las infecciones de la
En todas las técnicas abiertas es fundamental la capacidad herida.25 En general, las complicaciones pueden ser más fre-
para mantener una exposición mecánica estable.20,21 Varias cuentes en centros de formación, aunque probablemente
empresas fabrican conjuntos de separadores que están diseña- esta percepción corresponde más a los pacientes que se
dos específicamente para la cirugía bariátrica. Todo centro en someten a cirugía que al propio cirujano bariátrico. 26 La
el que se realicen intervenciones bariátricas, abiertas o lapa- International Federation for the Surgery of Obesity,27 la American
roscópicas, debe disponer de separadores mecánicos capaces Society of Bariatric Surgeons 28 y la Society of American Gastro-
de conseguir y mantener una exposición adecuada en el intestinal and Endoscopic Surgeons 28 han publicado recomen-
paciente con obesidad mórbida. En el caso de que un procedi- daciones sobre los requisitos de formación y supervisión
miento laparoscópico tenga que convertirse en abierto, es para la acreditación de los cirujanos que desean practicar
imprescindible disponer de inmediato de estos separadores. cirugía bariátrica. Es de especial importancia para la formu-
En todas las intervenciones bariátricas es necesaria la lación de estos principios la dificultad encontrada en la ciru-
exposición del hiato esofágico. Varias valvas separadoras y gía bariátrica de revisión;29,30 es preferible que este tipo de
herramientas han sido diseñadas para lograr este objetivo.22 intervenciones sean realizadas por cirujanos bariátricos
En el momento de cerrar, tanto el personal de enfermería de experimentados.
quirófano como el cirujano deben prestar especial atención
a la hora de realizar el recuento exacto de gasas e instrumen-
tal, cosa que algunas veces resulta difícil en las operaciones Z ENTEROTOMÍA: UNA COMPLICACIÓN
de pacientes con obesidad mórbida.23 DE PRIMER ORDEN

Cirugía laparoscópica Al igual que sucede en todas las intervenciones quirúrgicas,


cuando aparece una complicación intraoperatoria, es nece-
Una diferencia esencial entre la cirugía laparoscópica general sario detectarla y corregirla de inmediato. El problema más
y la bariátrica es la longitud del instrumental que puede nece- peligroso lo plantea una enterotomía no detectada.31 A dife-
sitarse. Los cirujanos deben disponer de trócares extralargos rencia de la hemorragia, que normalmente es fácil de identi-
(de 15 cm mejor que de 10 cm). Cuando son necesarios, nor- ficar, es posible que la enterotomía no detectada no se mani-
malmente se utilizan sólo uno o dos trócares extralargos en la fieste como tal hasta varios días después de la cirugía. La
cara lateral de la pared abdominal. El uso de trócares extra- perforación más peligrosa, la de esófago, que normalmente
largos cuando no son necesarios compromete el movimiento es causada por el paso del instrumental buco o nasointesti-
de las valvas, por lo que no se recomienda. En un subgrupo de nal, es especialmente difícil de detectar. Desafortunadamente,
pacientes es necesario instrumental laparoscópico extralargo esta perforación a menudo sólo se manifiesta en el postope-
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

(45 cm), en especial en varones con IMC altos. El cirujano no ratorio. El sistema de detección más fiable se basa en la soli-
suele necesitar instrumental extralargo, pero la falta de dispo- citud de una serie gastrointestinal postoperatoria con con-
nibilidad del mismo en el quirófano puede impedir que la traste hidrosoluble.14 La aparición de taquicardia inexplicada
intervención se lleve a cabo con seguridad. en el período postoperatorio suele ser el primer indicador de
Tanto la cirugía abierta como la laparoscópica requie- una perforación no detectada. Es, pues, importante que el
ren una exposición mecánica prolongada y estable. Pocos cirujano evalué rápidamente el ritmo cardíaco rápido.
técnicos experimentados son capaces de conseguir una
exposición satisfactoria utilizando instrumental sencillo. Detección
Según mi experiencia, sin embargo, estos cirujanos tienen a
su disposición los mismos auxiliares de cirugía con los que Existen dos técnicas para detectar una perforación intraope-
cuentan en condiciones normales. Estos auxiliares son capa- ratoria. Una de ellas implica la introducción de aire en el
142 Sección IV • ASISTENCIA PREOPERATORIA, PERIOPERATORIA Y POSTOPERATORIA

tubo digestivo a través de una sonda nasogástrica o bucogás- detección, posible reparación y colocación de drenaje. En el
trica después de que el área bajo sospecha se haya cubierto caso de que la fuga se manifieste en los días posteriores a la
con solución salina normal. El cirujano buscará burbujas de cirugía, un tratamiento quirúrgico rápido y agresivo puede
aire que escapen de la víscera. Según mi experiencia, esta es ser la diferencia entre recuperar al paciente y la muerte.
una prueba poco fiable, con una tasa inaceptable de falsos Cada caso es único y debe individualizarse; sin embar-
positivos y falsos negativos. go, existen varios principios de aplicación general. En los
La segunda técnica supone la instilación de azul de abordajes secundarios es mayor la probabilidad de complica-
metileno en la luz del tubo digestivo, que es mi prueba pre- ciones.30,32 El indicador más precoz de un escape gastroin-
ferida ante una posible sospecha de perforación. Para su apli- testinal no detectado es la taquicardia, que puede estar aso-
cación se ha de pedir al anestesista que diluya 10 mL de azul ciada a algún problema respiratorio postoperatorio. 2 De
de metileno en 200 mL de solución salina normal, que a con- hecho, las complicaciones más frecuentes en la cirugía bariá-
tinuación se instila a través de una sonda bucogástrica o trica son de naturaleza respiratoria. En caso de que la taqui-
nasogástrica. Los segmentos del tubo digestivo a los que el cardia postoperatoria no disminuya con la implementación
anestesista no puede acceder, como el estómago excluido en del estornudo forzado y el uso de un espirómetro de incen-
la derivación gástrica, pueden requerir una instilación direc- tivo, percusión pulmonar y nebulizadores, además de la
ta de la solución colorante por parte del cirujano, usando ambulación, la evaluación debe ser más agresiva. La investi-
una jeringa y una aguja de pequeño calibre. Tras el uso de gación más eficaz para detectar una fuga es una serie gastro-
azul de metileno, el paciente tendrá varios días la orina intestinal superior con medio de contraste hidrosoluble. La
de color verde y deberá ser controlado para garantizar que identificación de un escape que no se drena de forma satis-
todo marcha de forma correcta. factoria obliga a una nueva exploración.14 Es importante
recordar que es conveniente una prueba positiva. Las prue-
Reparación bas que no demuestran la presencia de fuga pueden dar lugar
a un resultado engañoso (p. ej., el escape puede estar en una
Cuando se detecta una enterotomía, si es posible debe repa- porción excluida del tubo digestivo). Si la preocupación por
rarse en la primera intervención. Si ello no es técnicamente la posible fuga persiste, el cirujano debe prepararse para una
viable, o si se está realizando una nueva exploración de res- nueva exploración basada sólo en la sospecha clínica.
cate, debe considerarse la posibilidad de que la reparación se
rompa. La colocación de un drenaje adecuado es vital y pue-
de salvar la vida del paciente. La manera de establecer dicho Z RESUMEN
drenaje se deja a discreción del cirujano. Yo prefiero un tubo
de succión que pueda irrigarse. En caso de que el intento de La cirugía bariátrica está evolucionando. La meticulosa
reparación falle, y si se ha establecido un drenaje satisfacto- atención al paciente durante el tratamiento perioperatorio
rio, el tratamiento de elección consiste en permitir que el ha reducido la morbilidad y la mortalidad, hasta tal punto
organismo del paciente repare el defecto, manteniendo de que la correlación riesgo-beneficio de la cirugía bariá-
el estado nutricional mediante alimentación parenteral. trica en la actualidad favorece sin duda los abordajes qui-
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18
Evolución de las intervenciones
bariátricas y algoritmo de selección
Henry Buchwald, M.D., Ph.D.

Al principio de los años cincuenta, tras años de observación cirugía bariátrica de malabsorción/restricción fue el de mayor
clínica, los médicos llegaron a la conclusión de que el acor- aceptación en los años setenta y pricipios de la de 1980, y sigue
tamiento del intestino inducía una pérdida masiva de peso. siéndolo en la actualidad en EE. UU.1
¿Podría el «intestino corto», así como otras manipulaciones Las intervenciones de malabsorción, sin embargo, más
del sistema digestivo, aprovecharse como tratamiento para el que desaparecer entraron en estado de latencia. De hecho, la
paciente con obesidad mórbida? En el plano teórico, la ciru- derivación YI resurgió entre los años setenta y noventa,
gía bariátrica debería proporcionar una pérdida de peso cuando se eliminaron o minimizaron muchas de las compli-
masiva, un mantenimiento final del peso, efectos secunda- caciones de ciertas intervenciones de malabsorción (princi-
rios y complicaciones mínimos a corto y largo plazo y rever- palmente la derivación biliopancreática y su modificación
sibilidad del proceso. Las complicaciones asociadas con los con cruce duodenal). Estos innovadores abordajes de malab-
procedimientos quirúrgicos bariátricos determinan las tasas sorción facilitaban dos ramas funcionales del intestino del-
de rentabilidad de estos procedimientos. La reversibilidad es gado unidas en un canal terminal común, evitando la estasis
un requisito previo esencial para proporcionar un nuevo tra- intestinal, la proliferación bacteriana y la toxicemia.1
tamiento seguro ante una posible catástrofe iatrogénica. En los años setenta y ochenta la cirugía bariátrica se
A lo largo de los años cincuenta, la cirugía bariátrica evolu- simplificó mediante la introducción de intervenciones gástri-
cionó a partir de la derivación yeyunoileal (YI). Esta interven- cas puramente restrictivas (gastroplastias, partición gástrica,
ción era el origen de la genealogía, basada en la malabsorción, gastroplastias en banda o verticales y banda gástrica). Estas
de las intervenciones para la obesidad.1 Los procedimientos de técnicas presentaban menores complicaciones a largo plazo,
malabsorción también son de maldigestión. Se trata de técnicas siendo la principal preocupación en tal contexto los proble-
que limitan la longitud del intestino delgado y su área superfi- mas externos. Al final de los años noventa se introdujo otra
cial, para hacer que disminuyan la digestión de los alimentos importante innovación en el arsenal terapéutico de la ciru-
normales y la absorción de los elementos de dichos alimentos. gía bariátrica, el marcapasos gástrico, que no pertenecía al
Por tanto, los procedimientos de malabsorción dan lugar a la ámbito de la malabsorción ni al de la restricción.
combustión de la masa corporal (preferiblemente masa corporal A lo largo de los años, determinadas intervenciones
grasa, no magra). La pérdida de peso se detiene cuando se alcan- bariátricos han fracasado en su eficacia a largo plazo, pero
za un equilibrio entre la absorción y el gasto calórico, lo cual es han proporcionado un patrón de referencia para futuras
una función de la adaptación intestinal, y disminuye las necesi- innovaciones. Otras se utilizan actualmente en clínica y aún
dades calóricas para una masa corporal reducida. hay algunas que pueden dar lugar a líneas evolutivas revolu-
En los años sesenta se desarrolló un sector independien- cionarias en el campo de la cirugía bariátrica. Ciertamente,
te de las intervenciones bariátricas, que combinaba la malab- la introducción de las técnicas laparoscópicas ha ampliado
sorción intestinal con la restricción gástrica (derivación gás- dicho campo, no sólo en el número de intervenciones reali-
trica), pero que dependía principalmente de esta última para zadas anualmente sino también en la variedad de procedi-
la pérdida de peso. Las escasas complicaciones a largo plazo mientos y sus posibilidades. La tabla 18-1 proporciona una
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asociadas con los procedimientos gástricos de malabsorción visión general cronológica de las intervenciones quirúrgicas
o restrictivos, las hacen preferibles con respecto a la primera para el tratamiento de la obesidad mórbida.
generación de intervenciones de malabsorción. La deriva- Con tal variedad de opciones para las intervenciones
ción YI es una intervención de reducción de peso muy eficaz, bariátricas, ¿puede seleccionarse una intervención específica
pero se asocia con síndrome de la burbuja gástrica, esteato- para un paciente específico? Con el fin de comprobar esta
rrea, desequilibrio hidroelectrolítico, nefrolitiasis, fibrosis hipótesis, se presentan las reflexiones sobre la construcción
hepática, erupciones cutáneas y alteración de la capacidad de un algoritmo. La formulación básica de un algoritmo
mental.1 Por otro lado, la derivación gástrica causa vacia- para la cirugía bariátrica presupone que no existe un proce-
miento gástrico rápido, anemia ferropénica, absorción defec- dimiento quirúrgico bariátrico de referencia y que el ciruja-
tuosa de vitamina B12 y pérdida de la posibilidad de visualizar no bariátrico experimentado debería ser capaz de realizar
el estómago distal y el duodeno. Sin embargo, el modelo de más de un tipo de intervención.
147
148 Sección V • INTERVENCIONES

Tabla 18-1 REVISIÓN CRONOLÓGICA DE LAS INTERVENCIONES

MALABSORCIÓN MALABSORCIÓN/RESTRICCIÓN RESTRICCIÓN MARCAPASOS


Años cincuenta 1953 Varco
1953 Kremen, Linner, Nelson
Años sesenta 1963 Payne y DeWind
1965 Sherman
1966 Lewis, Turnbill, Page 1967 Mason e Ito
1969 Payne y DeWind
Años setenta 1971 Scott 1971 Mason y Printen
1971 Salmon
1971 Buchwald y Varco 1976 Tretbar
1977 Forestieri 1977 Alden
1978 Starkloff 1977 Griffen 1978 Wilkinson
1978 Lavorato
1979 Scopinaro 1979 Gómez
1979 Pace y Carey
1979 LaFave y Alden
Años ochenta 1980 Palmer y Marliss 1980 Wilkinson
1981 Eriksson 1981 Fabito
1981 Laws
1982 Kolle
1982 Mason
1983 Torres, Oca, Garrison 1983 Molina
1985 Bashour
1986 Linner y Drew 1986 Eckhout, Willbanks y Moore
1987 Torres y Oca 1986 Kuzmak
1988 Cleator y Gourley 1988 Salmon
1989 Kral y Dorton 1989 Fobi
Años noventa 1991 Fobi
1993 Marceau
1993 Catona
1993 Forsell
1994 Wittgrove y Clark 1994 Hess y Hess
1995 Chua y Mendiola
1997 Vassallo
1998 Hess y Hess 1998 Niville
1999 de la Torre y Scott 1999 Cadiere 1999 Cigaina
1999 Higa

Z PROCEDIMIENTOS DE MALABSORCIÓN tratamiento de pacientes con obesidad mórbida.4 En una


serie que iniciaron en 1956 describieron derivaciones del
Primera generación intestino delgado casi completo, el colón derecho y la
mitad del colon transverso en 10 mujeres con obesidad
En 1953, el Dr. Richard L. Varco del departamento de ciru- mórbida. La continuidad intestinal se reestablecía por una
gía de la Universidad de Minnesota realizó lo que probable- anastomosis terminolateral de los 37,5 cm proximales del
mente fue la primera derivación YI, procedimiento de yeyuno en la mitad del colon transverso. Aunque la pérdi-
malabsorción original desarrollado específicamente para da de peso fue drástica, el desequilibrio hidroelectrolítico,
inducir la pérdida de peso.1 Esta intervención consistió en la diarrea descontrolada y la insuficiencia hepática hicie-
una yeyunoileostomía terminoterminal con una ileocecos- ron intolerables las derivaciones y finalmente fue necesa-
tomía independiente para el drenaje del segmento derivado ria su inversión.5 En realidad, este procedimiento fue dise-
(v. figura 18-1). La contribución de Varco fue precedida ñado originalmente por Payne y DeWind para obtener
por una resección intestinal específica para el tratamiento una pérdida de peso ilimitada que requería, por tanto, una
de la obesidad, realizada por Victor Henriksson en Gotem- segunda intervención para recuperar una longitud intesti-
burgo, Suecia.2 Ni Varco ni Henriksson publicaron sus con- nal adicional y el equilibrio en el peso cuando se lograba
tribuciones. el peso corporal ideal. Todos los pacientes de esta serie,
En 1954, Kremen, Linner y Nelson publicaron un ar- tras las reconversiones, recuperaron el peso perdido pre-
tículo de investigación sobre los aspectos nutricionales del viamente.6
intestino delgado en perros.3 En su apartado de análisis, des- Más tarde se dieron varios pasos más en el desarrollo de
cribieron un animal al cual habían realizado una derivación la derivación YI. A mediados de los años sesenta Sherman y
yeyunoileal terminoterminal para la reducción del peso cor- cols.,7 así como Payne y DeWing,6 propusieron la recupera-
poral. Estos autores, también de la Universidad de Minnesota, ción de la continuidad intestinal proximal en la válvula ileo-
pueden ser acreditados como los que publicaron el primer cólica mediante una yeyunoileostomía terminolateral. El
caso de cirugía bariátrica. propósito de estos pasos menos radicales era lograr un balan-
Después de una espera de varios años, en 1963, Payne, ce final entre la ingesta de calorías y las necesidades calóricas
DeWind y Commons publicaron los resultados del primer del organismo, eliminando la necesidad de una segunda
programa clínico de derivación intestinal masiva para el intervención y minimizando los efectos secundarios posto-
Capítulo 18 • Evolución de las intervenciones bariátricas y algoritmo de selección 149

peratorios. Durante esta fase de transición, en 1962, Lewis, cedimiento de Varco y de Kremen y cols.: una anastomosis
Turnbull y Page notificaron una serie de abordajes de deri- terminoterminal para prevenir el reflujo dentro del íleon ter-
vación YI en los que se realizó una anastomosis yeyuno-colon minal. En estas intervenciones terminoterminales, se con-
transverso terminolateral (similar a la realizada original- servaba la válvula ileocólica para disminuir la diarrea posto-
mente por Payne y DeWind).8 Una vez más, se observaron peratoria y la pérdida de electrolitos, el apéndice se retiraba
complicaciones significativas que requirieron la inversión de y el muñón del yeyuno se unía al mesocolon transverso o al
estos procedimientos.5 ciego para evitar la intususcepción.5
En 1966, Lewis, Turnbull y Page describieron los La variación de Scott y cols. consistía en la anastomosis
resultados de 11 pacientes a los que habían realizado una de 30 cm de yeyuno con 30 cm de íleon, con el intestino
yeyunocecostomía terminolateral, que presagiaba la imple- derivado drenando dentro del colon transverso o del sigmoi-
mentación general de una estrategia menos radical de deri- de.10 También en 1971, Salmon publicó su variación de la
vación YI.9 Para completar esta evolución, Payne y DeWind yeyunoileostomía terminoterminal: 25 cm de yeyuno
abandonaron por completo la derivación al colon6. En 1969, anastomosado a 50 cm de íleon, con el intestino derivado
en una serie de 80 pacientes con obesidad mórbida, estos drenando en el colon medio transverso.11 Ese mismo año
autores establecieron lo que habría de convertirse en el publicamos nuestra serie en la que se anastomosaban 40 cm
estándar para el procedimiento de yeyunoileostomía ter- de yeyuno con 4 cm de íleon, con el intestino derivado dre-
minolateral: anastomía de los 35 cm (14 pugadas) proxima- nando en el ciego cerca de la válvula ileocólica.12 Además,
les del yeyuno en el íleon terminal, a 10 cm (4 pulgadas)de para conseguir una pérdida de peso significativa, esta deri-
la válvula ileocólica. Esta intervención (la técnica denomi- vación YI causaba una marcada y prolongada reducción de
nada 14  4) se convirtió en la intervención bariátrica más los niveles lipídicos en el suero de pacientes hiperlipidémicos
utilizada en EE. UU. en aquel momento (v. figura 18-2). obesos. Tres meses después de la intervención, los pacientes
Este procedimiento permitía una pérdida significativa de con hiperlipidemia mostraban una disminución media del
peso, con moderados efectos y complicaciones secundarios colesterol del 90% (de 898 mg/dL a 90 mg/dL) y una reduc-
a largo plazo moderados, y no era necesaria una segunda ción media de los triglicéridos del 95% (de 7255 mg/dL a
operación de recuperación. 230 mg/dL).
Aunque la derivación YI clásica de Payne y DeWind A continuación siguieron una serie de modificaciones
estaba ampliamente adoptada, aproximadamente el 10% de llevadas a cabo sólo de forma ocasional por otros médicos
los pacientes no conseguían una pérdida de peso significati- que no fueran los propios autores de las publicaciones.
va, posiblemente debido al reflujo de los nutrientes dentro Forestieri y cols.,13 Starkloff y cols.14 y Palmer y Marliss15
del íleon derivado.5 Por tanto, Scott y cols.,10 Salmon11 y realizaron varias modificaciones a la anastomosis yeyu-
Buchwald y Varco,12 independientemente volvieron al pro- noileal para prevenir el reflujo dentro del segmento derivado
sin la necesidad de dividir y drenar por separado el segmen-

"
14

4"
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Figura 18-1 Derivación yeyunoileal: yeyunoileostomía terminoter- Figura 18-2 Derivación yeyunoileal: yeyunoileostomía terminolate-
minal con ileocecostomía. 1953, Varco; 1954, Kremen, Linner, Nelson. ral 14˝  4˝ clásica. 1969, Payne, DeWind. (Tomado de Buchwald and
(Tomado de Buchwald and Buchwald: Evolution of operative proce- Buchwald: Evolution of operative procedures for the management of
dures for the management of morbid obesity, 1950-2000. Obes Surg morbid obesity, 1950-2000. Obes Surg 2002;12:705-717. Con autoriza-
2002;12:705-717. Con autorización.) ción.)
150 Sección V • INTERVENCIONES

to derivado. Cleator y Gourlay16 describieron una ileogas-


trostomía para el drenaje del intestino delgado derivado.
Kral y Dorton17 acortaban el segmento intestinal proximal
hasta el ligamento de Treitz en una modificación de la deri-
vación duodenoileal.

Segunda generación
Como se ha indicado, la derivación YI fue siendo gradual-
mente reemplazada por la derivación gástrica, debido a sus
efectos secundarios y a sus complicaciones. Sin embargo,
hoy en día se han desarrollado técnicas que pueden conside-
rarse «descendientes» de la derivación de YI. Estas moder-
nas intervenciones comparten una característica fundamen-
tal: ninguna rama del intestino delgado se deja sin flujo a
través de ella. La rama intestinal contiene el flujo de alimen-
to y la rama biliopancreática contiene el flujo de los líquidos
biliares y del jugo pancreático.
Los procedimientos de transición fueron realizados
en 1978 por Lavorato y cols.18 y en 1981 por Eriksson.19
Ambos grupos realizaron una derivación YI terminolate-
ral, con el extremo proximal del segmento derivado del
intestino delgado anastomosado en la vesícula biliar, des-
viándose de este modo la bilis dentro de la rama derivada.
Estas derivaciones biliointestinales no se realizaron en
demasiadas ocasiones, y puede considerarse que la era
moderna de las intervenciones de malabsorción empezó
con la derivación biliopancreática (DBP) de Scopinaro y
cols. 20 Nicola Scopinaro de Génova, Italia, publicó su serie
inicial de 18 pacientes en 197920 y, posteriormente, realizó
miles de procedimientos como este. La DBP actual consis-
te en una gastrectomía parcial horizontal (dejando de
200 a 500 mL de estómago proximal) con cierre del muñón
duodenal, una gastroyeyunostomía con una rama de Roux
de 250 cm y anastomosis de la rama biliopancreática en la Figura 18-3 Derivación biliopancreática. 1979, Scopinaro. (Tomado
rama de Roux a 50 cm proximal de la válvula ileocólica, de Buchwald and Buchwald: Evolution of operative procedures for the
creando un canal común extremadamente corto (v. figu- management of morbid obesity, 1950-2000. Obes Surg 2002;12:705-71.
ra 18-3). 21 Con autorización.)
Más de una década después, la DBP se modificó en
EE. UU. y Canadá, mediante la adición de un cruce duode-
nal. Hess y Hess se desviaron del procedimiento de Scopinaro Z PROCEDIMIENTOS DE MALABSORCIÓN
en que: 1) establecieron un tubo gástrico de menor curvatu- O RESTRICTIVOS
ra y una resección gástrica de mayor curvatura, en lugar de
realizar una gastrectomía horizontal; 2) conservaron el pílo- Las técnicas de malabsorción o restrictivas implican un ele-
ro; 3) dividieron el duodeno y cerraron el muñón duodenal mento de restricción que consiste en la creación de una reduci-
distal, y 4) anastomosaron la rama intestinal con el duodeno da bolsa gástrica con una pequeña salida que, cuando se distien-
proximal.22 Marceau y cols. desarrollaron una técnica, simi- de por acción de la comida, causa la sensación de saciedad; ello
lar, pero graparon el duodeno sin dividirlo.23 La fiabilidad se combina con una derivación gastrointestinal como el ele-
del procedimiento de Marceau no pudo comprobarse, ya que mento de malabsorción. La extensión de la derivación del
el duodeno grapado normalmente experimentaba disrupción tracto intestinal determina el grado de malabsorción. La
de la línea de grapas y posterior pérdida de eficacia de la cantidad mínima de tracto intestinal derivado consta del
intervención. El procedimiento de Hess y Hess se esquema- estómago distal, el duodeno completo y el primer segmento
tiza en la figura 18-4. del yeyuno proximal. Las variaciones de malabsorción más
A pesar de que la derivación biliopancreática con cruce extensa consisten en derivaciones gástricas con una rama de
duodenal (DBP/CD) está ganando creciente aceptación en Roux larga.
EE. UU. y en otros países, y ahora también se realiza lapa-
roscópicamente, no se han estandarizado las dimensiones Orígenes
específicas de esta técnica. A nivel general se acepta que el
volumen gástrico debe ser de aproximadamente 100 mL. La primera derivación gástrica fue desarrollada por Mason
Existen varias fórmulas de medida, cada una con sus corres- e Ito en 1966 y representó el origen de un nuevo paradigma
podientes defensores, de las longitudes relativas de las ramas para la inducción de la pérdida de peso.24 En la derivación
intestinal (Roux) y biliopancreática. Aunque el canal común original de Mason e Ito, el estómago se dividía horizontal-
normalmente es de 75 a 100 cm, en la práctica clínica actual, mente y se creaba una gastroyeyunostomía en asa (sin rama
dicho canal común puede ser tan sólo de 50 cm o tener has- de Roux) entre la bolsa gástrica proximal y el yeyuno proxi-
ta 150 cm. mal (v. figura 18-5). La bolsa gástrica superior original de
Capítulo 18 • Evolución de las intervenciones bariátricas y algoritmo de selección 151

Figura 18-5 Derivación gástrica: sección transversal gástrica con


gastroyeyunostomía en asa. 1967, Mason, Ito. (Tomado de Buchwald
and Buchwald: Evolution of operative procedures for the management
of morbid obesity, 1950-2000. Obes Surg 2002;12:705-717. Con autori-
zación.)

Figura 18-4 Cruce duodenal con división del duodeno. 1998, Hess, Durante los años siguientes, se introdujeron variaciones
Hess. (Tomado de Buchwald and Buchwald: Evolution of operative
de la DGYR. Torres, Oca y Garrison graparon el estómago
procedures for the management of morbid obesity, 1950-2000. Obes
Surg 2002;12:705-717. Con autorización.) en sentido vertical en lugar de horizontal.30 Linner y Drew
reforzaron la salida gastroyeyunal con una banda fascial.31
Torres y Oca publicaron una modificación de la DGYR ver-
Mason tenía un volumen de 100 a 150 mL con un estoma de tical con la creación de una rama de Roux larga en los casos
12 mm de diámetro. Posteriormente, Mason y Printen redu- en los que había fracasado su procedimiento original.32 La
jeron su tamaño a 50 mL para aumentar la pérdida de peso denominada DGYR de rama larga fue popularizada más tar-
e, incluyendo la mucosa secretora de ácido en el estómago de por Brolin y cols.33 como la intervención de mayor aplica-
distal, reducir la formación de úlceras.25 ción en pacientes superobesos. Ha habido varias modifica-
En 1977, John Alden simplificó este procedimiento ciones de la DGYR de rama larga que varían en la longitud
usando una línea de grapado horizontal sin división gástri- propuesta del canal común.
ca.26 Esta modificación en una serie de 100 pacientes, sin Posteriormente, Salmon combinó dos procedimientos:
mortalidad y con morbilidad mínima, establecía la deriva- una gastroplastia vertical con banda (que se describirá a con-
ción gástrica como el procedimiento dominante en este tinuación) y una DGYR de rama larga.34 En 1989, Fobi
campo. introdujo la DGYR vertical con anillo de silastic, creando
una pequeña bolsa vertical drenada por una gastroyeyunos-
Derivación gástrica en Y de Roux tomía y que contenía un anillo elástico restrictivo próximo
a la gastroyeyunostomía.35 Fobi modificó posteriormente
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

En 1977, Griffen y cols. añadieron una modificación adicio- esta DGYR, dividiendo el estómago e interponiendo la rama
nal a la derivación gástrica, en concreto la construcción de del yeyuno de Roux entre la bolsa gástrica y el estómago
una gastroyeyunostomía en Y de Roux, en lugar de la gas- derivado, para asegurar el mantenimiento de la división gás-
troyeyunostomía en asa (v. figura 18-6).27 Esta derivación trica (v. figura 18-7).36 En una variación adicional, que no se
gástrica, la derivación gástrica en Y de Roux (DGYR) tenía ha hecho popular, Vassallo y cols. realizaron una DBP distal
las ventajas de evitar la tensión del asa y prevenir el reflujo sin resección gástrica y con una gastroplastia vertical con
de la bilis dentro de la bolsa gástrica superior.28 Tanto banda transitoria realizada usando una banda de polidioxa-
Griffen y cols. 27 como Buchwalter29 publicaron estudios nona que se absorbía antes de los 6 meses.37
aleatorizados que demostraban que los pacientes con DGYR En 1994, Wittgrove, Clark y Tremblay publicaron sus
lograban una pérdida de peso equivalente a la observada pre- resultados con la DGYR laparoscópica, introduciendo el yun-
viamente con la derivación YI. que de la grapadora circular endoscópicamente.38 Este proce-
152 Sección V • INTERVENCIONES

Figura 18-6 Derivación gástrica: grapado gástrico horizontal con gas-


troyeyunostomía de Roux. 1977, Griffen. (Tomado de Buchwald and
Buchwald: Evolution of operative procedures for the management of mor-
bid obesity, 1950-2000. Obes Surg 2002;12:705-717. Con autorización.)

dimiento fue modificado por de la Torre y Scout, con la intro-


ducción del yunque de la grapadora intraabdominal para Figura 18-7 Derivación gástrica: división gástrica vertical con gas-
conseguir una mayor precisión en la colocación del yunque y troyeyunostomía de Roux interpuesta y anillo de silastic proximal.
evitar complicaciones esofágicas.39 Posteriormente, varios 1991, Fobi. (Tomado de Buchwald y Buchwald: Evolution of operative
cirujanos bariátricos expertos en laparoscopia evitaron el uso procedures for the management of morbid obesity, 1950-2000. Obes
de la grapadora circular y empezó a utilizarse una grapadora Surg 2002;12:705-717. Con autorización.)
lineal para formar la gastroyeyunostomía. Finalmente, en
1999, Higa y cols., a fin de evitar la incidencia relativamente
elevada de las fugas gastrointestinales anastomóticas en los curvatura mayor (v. figura 18-8).41 Este procedimiento no
procedimientos laparoscópicos, describieron una técnica para era eficaz para el mantenimiento de la pérdida de peso.41,42
suturar manualmente la gastroyeyunostomía laparoscópica.40 En 1979, Gómez introdujo la modificación del grapado gás-
Durante un lustro, el procedimiento bariátrico más común en trico horizontal de la gastroplastia dividida y, además, refor-
EE. UU., la DGYR, se vino realizando predominantemente zó la salida de la curvatura mayor con una sutura contínua.42
mediante laparoscopia. Tal planteamiento tampoco daba lugar a un resultado dura-
dero. De forma similar, la intervención de división gástrica
de Pace y cols. (1979) fue infructuosa, dado que la división
Z PROCEDIMIENTOS RESTRICTIVOS creada mediante la retirada de algunas grapas de la mitad del
instrumental de grapado iba seguida por el ensanchamiento
Gastroplastias de la salida de la gastrogastrostomía.43 Para solventar este
problema, en 1979, LaFave y Alden realizaron un grapado
La principal figura en el ámbito en la cirugía gástrica res- gástrico total y una gastrogastrostomía; esta intervención
trictiva es, una vez más, el doctor Mason quien, en colabo- tampoco tuvo éxito a largo plazo.44
ración con Printen, realizó el primer procedimiento restric- En 1981, Fabito fue el primero en realizar una gastro-
tivo conocido, en 1971. Las intervenciones exclusivamente plastia vertical empleando una grapadora TA-90 modificada
restrictivas pueden realizarse más rápidamente que una y reforzando la salida con suturas seromusculares.45 Ese mis-
DGYR y se consideran más fisiológicas, debido a que no se mo año, Laws fue probablemente el primero en utilizar un
deriva ni desvía ninguna parte del tubo digestivo. En su pro- anillo de silastic como refuerzo no expandible permanente
cedimiento gastroplástico de 1971, Printen y Mason dividie- para la salida de la gastroplastia vertical (v. figura 18-9).46
ron el estómago horizontalmente desde la curvatura menor En 1980, Mason realizó su última variación gastro-
a la curvatura mayor, dejando un conducto gástrico en la plástica (la gastroplastia vertical con banda (GVB).47 Esta
Capítulo 18 • Evolución de las intervenciones bariátricas y algoritmo de selección 153

Figura 18-8 Gastroplastia: transición gástrica parcial con conducto Figura 18-9 Gastroplastia: gastroplastia vertical con banda y anillo
en la curvatura mayor. 1971, Mason, Printen. (Tomado de Buchwald de silastic. 1981, Laws. (Tomado de Buchwald and Buchwald: Evolution
and Buchwald: Evolution of operative procedures for the management of operative procedures for the management of morbid obesity,
of morbid obesity, 1950-2000. Obes Surg 2002;12:705-717. Con autori- 1950-2000. Obes Surg 2002; 12:705-717. Con autorización.)
zación.)

GVB implica un nuevo planteamiento, consistente en


hacer una ventana, una perforación completa en ambas
paredes del estómago, con la grapadora circular exacta-
mente sobre los pliegues de la curvatura menor. Esta ven-
tana se utilizó para la inserción de una grapadora TA-90
convencional en el ángulo de His, hasta crear una pequeña
bolsa vertical grapada. La salida de la curvatura menor se
cubre con una banda de malla de polipropileno (1,5 cm de
anchura y 5,5 cm de larga) a través de la ventana gástrica y
alrededor del conducto de la curvatura inferior (v. figu-
ra 18-10).
La innovación más reciente y popular en el ámbito de la
gastroplastia es la practicada con anillo de silastic, realizada
en 1986 por Eckhout, Willbanks y Moore (también denomi-
nada GVB).48 Este método utiliza una grapadora mellada
especialmente construida para evitar la formación de la ven-
tana de la GVB de Mason y da lugar a un resultado final
comparable al del procedimiento de Laws (v. figura 18-9).
Asimismo, el anillo de silastic, no reactivo y mucho más
estrecho (0,25 cm de anchura, 4,4 cm de longitud), previene
la formación de tejido de granulación que es inducida en
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

ocasiones por la malla de polipropileno (Marlex), causando


la consiguiente obstrucción de la vía.
Hess y Hess49 en 1994 y Chua y Mendiola50 en 1995
realizaron la GBV laparoscópicamente. Estos autores utili-
zaron la técnica convencional de Mason, adaptada al instru-
mental laparoscópico. Champion y cols. introdujeron una
estrategia diferente, en la cual hacían una disección triangu-
lar en cuña del fundus del estómago mediante laparoscopia Figura 18-10 Gastroplastia: gastroplastia vertical con banda. 1982,
usando la endocortadora y colocaban una banda en la curva- Mason. (Tomado de Buchwald and Buchwald: Evolution of operative
tura menor elongada de la salida del estómago con una malla procedures for the management of morbid obesity, 1950-2000. Obes
de polipropileno.51 Surg 2002;12: 705-717. Con autorización.)
154 Sección V • INTERVENCIONES

Banda gástrica Z PROCEDIMIENTOS DE MARCAPASOS


La banda gástrica (BG) es el menos invasivo de los procedi- GÁSTRICO
mientos gástricos restrictivos. En ella se crean una pequeña
bolsa y un pequeño estoma mediante una banda colocada Otra importante innovación en la cirugía bariátrica fue el
alrededor del estómago superior. El estómago no se corta, ni marcapasos gástrico, introducido por primera vez por Cigaina
se grapa ni se realizan en él anastomosis. Los precursores de y cols. en 1996.66 Estos autores fueron capaces de inducir pare-
la BG son la técnica de fundoplicatura de Tretbar y cols. sia gástrica y pérdida de peso en un modelo animal mediante
(1976)52 y en malla que envolvía el estómago completo de electroestimulación sinusal. En este proceso, un electrodo
Wilkinson (1980).53 Independientemente, Wilkinson y colocado en la pared del estómago entre la incisión y la unión
Peloso (1978),54 Kolle (1982)55 y Molina y Oria (1983)56 ini- esofagogástrica a lo largo de la curvatura menor se conecta con
ciaron la actual GB. Sus bandas no eran ajustables, al igual un cable guía a un marcapasos en un bolsillo subcutáneo que
que ocurría con el «clip gástrico» de Bashour y Hill está programado para la administración de un pulso bipolar al
(1985).57 estómago (v. figura 18-12). Una hipótesis alternativa al efecto
En 1986, Kuzmak introdujo la banda de silastic hin- del marcapasos gástrico es la estimulación vagal aferente del
chable conectada a un puerto subcutáneo, que se utiliza hipotálamo para producir saciedad. Los estudios de marcapa-
para la introducción o retirada percutánea de líquido para sos gástrico en humanos se hallan actualmente en desarrollo,
ajustar el calibre de la banda gástrica (v. figura 18-11).58 En tanto en Europa como en EE. UU.
1992-1993, Broadbent y cols.59 y Catona y cols.60 fueron
probablemente los primeros en colocar una BG por lapa-
roscopia, y en 1993, Belachew61 y Forsell62 y cols. fueron los Z ALGORITMO PACIENTE-PROCEDIMIENTO
primeros en colocar la BG ajustable por laparoscopia.
Niville y cols. publicaron la colocación de la cara posterior Dada la amplia variedad actual de opciones bariátricas, algu-
de la banda en la posición distal del esófago y la construc- nos profesionales del campo han propuesto la construcción
ción de una pequeña bolsa gástrica anterior, la denominada de algoritmos para correlacionar a determinados pacientes
bolsa gástrica virtual.63 Se han notificado unos resultados con determinadas técnicas. Obviamente, estos algoritmos
óptimos de la BG ajustable laparoscópica realizada según no pueden ser absolutos, pero sirven como recomendaciones
la estrategia de la pars flaccida, orientada en concreto a la para ayudar al cirujano y al paciente en la toma de decisión
construcción de un túnel retrogástrico superior por enci- del procedimiento que se va a seguir. El algoritmo propues-
ma de la transcavidad de los epiplones, con una bolsa gás- to ha sido ideado por Buchwald y aún no ha sido ensayado en
trica superior de 15 mL, a la imbricación anterior total de el ámbito clínico.73
la banda usando al menos cuatro suturas gastrogástricas, y
al retraso del inflado de la banda hasta 4 semanas después
de la intervención.64 Variables
El mundo de la robótica quirúrgica entró en el campo
de la cirugía bariátrica en 1999 con la publicación de Cadiere VARIABLES DEL PACIENTE
y cols. del primer caso a nivel mundial de colocación de una 1. Peso. El índice de masa corporal (IMC) se divide en seis
BG ajustable controlada por un robot.65 categorías: de 30 a 34,9; de 35 a 39,9; de 40 a 44,9; de 45 a

Figura 18-11 Banda gástrica: la banda de silastic ajustable se insertó Figura 18-12 Pulsación gástrica por electrodo bipolar. 1999,
posteriormente en una posición mas arriba. 1986, Kuzmak. (Tomado Cigaina. (Tomado de Buchwald and Buchwald: Evolution of operative
de Buchwald: Overview of bariatric surgery. J Am Coll Surg 2002;194: procedures for the management of morbid obesity, 1950-2000. Obes
367-375. Con autorización.) Surg 2002;12:705-717. Con autorización.)
Capítulo 18 • Evolución de las intervenciones bariátricas y algoritmo de selección 155

49,9; de 50 a 54,9 y por encima de 55. Un IMC de 30 a 3382 pacientes; la media y la medida ponderada por caso
34,9 se incluye dentro de la definición actual de obesidad para el PEP% era de 58,3% y 60,2%. Se encontraron once
mórbida, incluso en presencia de patologías comórbidas publicaciones sobre DGYR con un total de 2949 pacientes;
significativas. Sin embargo, hoy en día hay cierta tenden- la media y la medida ponderada por caso para la PEP% eran
cia a dar un valor algo más alto al límite inferior de la del 68,6% y 70,1%. Con respecto a DBP/CD, pudieron revi-
obesidad mórbida.67 La superobesidad se suele definir sarse nueve publicaciones sobre un total de 3903 pacientes;
como un IMC superior a 50; sin embargo, este sistema de la media y la media ponderada por caso para la PEP% eran
clasificación considera un IMC superior a 55. del 68,8% y 71,7%. Finalmente, se separó la bibliografía
2. Edad. Se establece una distinción entre los pacientes sobre DGYR de rama larga y se consideró que sólo tres ar-
menores o mayores de 40 años de edad. Para este algorit- tículos eran adecuados para el estudio, con un total de
mo, se ha elegido como edad de división los 40 años por- 301 pacientes; la media y la media ponderada por caso para
que es tradicional considerar que una edad superior a esta La PEP% eran del 71,6% y 74,6%.
supone un factor de riesgo para la cirugía programada.
3. Sexo/raza/complexión. El sexo puede ser una variable Construcción del algoritmo
independiente o dependiente (p. ej., relacionado con la
raza).68 Las respuestas a la cirugía bariátrica entre grupos La primera aproximación de la construcción del algoritmo
raciales y étnicos pueden variar. Es un hecho que las per- se planteaba en el marco de la selección de una técnica sólo
sonas de origen afroamericano no presentan una respues- en función del IMC preoperatorio.73 La segunda aproxima-
ta de reducción de peso a la cirugía bariátrica comparable ción, o segunda línea del diagrama de flujo, se basaba en la
a las de raza blanca.68,69 Es probable que suceda lo mismo edad, con el supuesto de que, en los pacientes menores de
con individuos de ascendencia hispana.70 También es evi- 40 años, las líneas de decisiones del algoritmo podían modi-
dente la asociación entre los riesgos cardiovasculares y de ficarse para incluir procedimientos relativamente menos
otro tipo en la obesidad mórbida y la complexión física, definitivos y para los mayores de 40 años, procedimientos
en particular, la obesidad central en los varones y la obe- más definitivos. Seleccionado procedimientos más definiti-
sidad androide en las mujeres.71,72 vos para los pacientes de más edad, podrían minimizarse la
4. Presencia de patologías comórbidas importantes. Entre necesidad de intervenciones posteriores en estos pacientes.
ellas se cuentan diabetes tipo 2, hiperlipidemia, hiperten- La tercera aproximación en la construcción del algoritmo se
sión, apnea obstructiva del sueño y otras enfermedades. basó en una consideración de género/raza/complexión. Si
esos criterios combinados pronostican una mayor probabili-
EFICACIA DE LA PÉRDIDA DE PESO dad de PEP% refractaria, deberá seleccionarse un procedi-
Contadas publicaciones documentan un seguimiento a largo miento más concluyente. Si, por otro lado, estos factores
plazo de un número sufiente de pacientesm durante más de para una complexión en particular prevén un aumento nota-
5 años o, de hecho, durante más de 2.73 Por tanto, he elegido ble del riesgo de la intervención, debe seleccionarse una
el sesgo introducido por los resultados de 1 año de segui- intervención más rápida. La formulación final se basa en la
miento para basar el algoritmo en una muestra grande de presencia de patologías comórbidas existentes antes de la inter-
pacientes con datos de seguimiento precisos. En una bús- vención. Es de esperar que cuanto menor sea la incidencia de
queda bibliográfica se localizaron 16 notificaciones de BG estas patologías, mejor será el pronóstico a largo plazo. Estos
adecuadas para su revisión, con un total de 4429 pacientes; pacientes pueden ser incluidos en el ámbito de las técnicas
la media y la media ponderada por caso de la pérdida porcen- de menor riesgo y con menores índices de morbilidad a
tual de exceso de peso (PEP%) eran del 48,6% y 49,5%. Se largo plazo. Por el contrario, cuanto mayor es el número
revisaron 50 publicaciones sobre GVB con un total de de patologías comórbidas existentes antes de la interven-

IMC

30-34,9 35-39,9 40-44,9 45-49,9 50-54,9 55

Edad 40 40 40 40 40 40 40 40 40 40 40 40
Figura 18-13 Algoritmo (años)
final, que incluye índice de
masa corporal preoperatorio 
edad  sexo/raza/complexión
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

 patologías comórbidas preo- Sexo/raza/


peratorias graves. (Tomado de complexión F D F D F D F D F D F D F U
Buchwald: A bariatric surgery (D = desfavorable
algorithm. Obes Surg 2002;12: F = favorable)
733-746. Con autorización.)
Patologías
comórbidas B A B A B A B A B A B A B A B A
(A = alta,
B = baja)

BG GVB DGR DBP/CD DGRRL


156 Sección V • INTERVENCIONES

CI  1,0  Valor de IMC (1 a 6)  0,5 (edad 40)  0,5 (SRC, favorable o desfavorable)
1 (MoA, baja o alta)

Categoría de intervención (CI): BG  0-3; GVB  2-5; DGR  3-6; DBP/CD  4-7; DGRRL  6-9

IMC: 30-34,9  1, 35-39,9  2, 40-44,9  3, 45-49,9  4, 50-54,9  5, 55  6

Edad: 40  –0,5, 40  0,5 Figura 18-14 Ecuación del


algoritmo bariátrico. (Tomado
de Buchwald: A bariatric sur-
Sexo, raza, complexión (SRC): Favorable  –0,5, Desfavorable  0,5
gery algorithm. Obes Surg
2002; 12:733-746. Con autori-
Patologías comórbidas preoperatorias significativas (MoA): Baja  –1, Alta  1 zación.)

ción (e incluso aun cuando es más probable que el pronósti- 6. Payne JH, DeWind LT: Surgical treatment of obesity. Am J Surg
co a largo plazo del paciente sea peor), mejor es guiar al 1969;118:141-147.
paciente hacia los procedimientos más definitivos, incluso 7. Sherman CD, May AG, Nye W: Clinical and metabolic studies
following bowel bypassing for obesity. Ann N Y Acad Sci
aunque los riesgos operativos y las morbilidades surgidas 1965;131:614-622.
durante la intervención a largo plazo. 8. Lewis LA, Turnbull RB, Page LH: “Short-circuiting” of the small
En la figura 18-13 aparece la cuarta y última aproxima- intestine. JAMA 1962;182:77-79.
ción del diagrama de flujo de este algoritmo. Excepto para 9. Lewis LA, Turnbull RB, Page LH: Effects of jejunocolic shunt on
obesity, serum lipoproteins, lipids, and electrolytes. Arch Intern Med
los extremos inferior y superior, cada designación de inter- 1966;117:4-16.
vención terminal permite una selección final en virtud de las 10. Scott HW, Sandstead HH, Brill AB: Experience with a new technique
preferencias del cirujano y del paciente. La formulación del of intestinal bypass in the treatment of morbid obesity. Ann Surg
diagrama de flujo puede convertirse en una ecuación (v. figu- 1971;174:560-572.
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tiva de selección dentro de una categoría de intervención. patients. Surgery 1971;70:62-70.
Existe también un solapamiento entre números enteros para 13. Forestieri P, DeLuca L, Bucci L: Surgical treatment of high degree
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que darán lugar a nuevos y sorprendentes frutos. La evolu- 18. Lavorato F, Doldi SB, Scaramella R: Evoluzione storica della terapia
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Capítulo 18 • Evolución de las intervenciones bariátricas y algoritmo de selección 157

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© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.
19
Banda gástrica ajustable laparoscópica
Mitiku Belachew, M.D.

Los intentos para restringir quirúrgicamente la ingesta de ción laparoscópica de la BGAS de Kuzmak en una pacien-
alimentos mediante una banda gástrica para el tratamiento te obesa.17 También Catona y cols. notificaron la
de la obesidad mórbida se remontan a comienzos de los colocación de una banda gástrica laparoscópica para el
años ochenta. Wilkinson y Peloso (1981),1 Kolle (1982)2 y tratamiento de la obesidad, usando al principio variacio-
Molina y Oria (1983),3 han quedado acreditados como los nes de bandas no ajustables y, posteriormente, la BGAS
pioneros de la estrategia de colocación de banda gástrica no abierta18 y la banda sueca.19
ajustable en el ámbito de cirugía bariátrica restrictiva.4 No Estas actividades han llevado al desarrollo comercial y a
obstante, uno de los grupos que la practicaba interrumpió la actual comercialización de las siguientes bandas laparos-
pronto el uso de la banda gástrica, porque, al parecer, era cópicas ajustables:
necesaria la reintervención en un alto porcentaje de casos.5
A continuación, se introdujo una técnica de colocación de • LAP-BAND.
banda gástrica ajustable, que se basaba en el uso de un man- • Banda gástrica ajustable sueca.
guito de silastic relleno de líquido. Szinicz y cols.6,7 proba- • MIDBAND.
ron esta estrategia por primera vez en cerdos miniatura. • Anillo gástrico ajustable Heliogast.
Los primeros sistemas de colocación de banda gástrica • Banda AMI.
ajustable desarrollados con éxito para su uso en humanos • Banda Pier.
fueron las bandas gástricas ajustables de silicona (BGAS)8,9 y
la banda gástrica ajustable sueca (banda sueca),10,11 colocadas
ambas inicialmente mediante cirugía abierta. Una publica- Z DESCRIPCIÓN DE LA BANDA GÁSTRICA
ción preliminar que comparaba la BGAS de Kuzmak con la AJUSTABLE LAPAROSCÓPICA
gastroplastia vertical con banda (GVB), ya previamente esta-
blecida, indicaba que las complicaciones eran leves y ocasio- Mi experiencia práctica en la colocación de la banda gástri-
nales en ambos grupos y que los resultados de pérdida de ca ajustable laparoscópica ha servido para el desarrollo e
peso eran similares en las dos técnicas.12 implementación de un dispositivo sencillo, el sistema
Era inevitable que la siguiente fase de la cirugía bariátrica LAP-BAND;20 en consecuencia, el capítulo se centra princi-
fuera el desarrollo de la aplicación de una banda gástrica ajus- palmente en este sistema. La información publicada sobre
table por laparoscopia. En el curso de nuestra experiencia en sistemas de colocación de otras bandas distintas a LAP-BAND
cirugía bariátrica, pudimos registrar cientos de intervencio- o la banda sueca es más bien escasa.
nes de GVB. Por tanto, el problema radicaba en determinar
cuál de las dos intervenciones, GVB o BGAS, podría ser la Diseño
más apropiada para su desarrollo como aplicación laparoscó-
pica. Decidimos trabajar con la banda gástrica ajustable por- Los principales componentes de la LAP-BAND son la
que, además de ser tan eficaz como la GVB a la hora de indu- banda elastomérica de silicona, el puerto de acceso y las
cir pérdida de peso, la cirugía de banda gástrica también era conexiones resistentes al estrangulamiento (v. figu-
menos invasiva para el estómago, completamente reversible y ra 19-1). El diseño de LAP-BAND ha cambiado poco a lo
ofrecía un estoma ajustable a las necesidades puntuales del largo de los años, excepto por algunas ligeras mejoras
paciente. Además, supusimos que el procedimiento de coloca- poco significativas en el diseño. Por ejemplo, para permi-
ción de una banda gástrica sería más fácil de realizar y estan- tir variaciones en las técnicas de colocación del puerto y
darizar laparoscópicamente que el de grapado. para aumentar la durabilidad del mismo, se han incorpo-
En primer lugar, desarrollamos un modelo animal rado continuas mejoras en la transición del acceso del
para la técnica laparoscópica, usando una serie de proto- puerto a la conexión.
tipos de bandas específicamente diseñadas para su inser-
ción a través de trócares laparoscópicos y para su paso por Principio y mecanismo de acción
detrás del estómago.13 A continuación, procedimos al de-
sarrollo y aplicación de la BGAS laparoscópica (que se Los dispositivos de banda gástrica ajustables se colocan
convirtió en LAP-BAND) para su uso en pacientes obe- mediante laparoscopia para crear una abertura restringida
sos.14-16 Entre tanto, Cadiere y cols. iniciaron la coloca- ajustable (estoma) y una pequeña bolsa gástrica que limita el
158
Capítulo 19 • Banda gástrica ajustable laparoscópica 159

Ventajas
Entre las ventajas específicas de la colocación de una banda
gástrica en cirugía bariátrica se cuentan las siguientes:

• Cirugía bariátrica de menor invasividad.


• Ausencia de grapado, corte y reconducción intestinal
del estómago.
• Ausencia de cambios permanentes en el tubo digestivo.
• Reversibilidad completa.
• Restricción del estoma ajustable.
• Tiempo de intervención y estancia en el hospital cortos.
• Escasas rehospitalizaciones durante el seguimiento.
• Buen nivel de pérdida de peso.
• Bajas tasas de complicaciones tempranas y tardías.
• Complicaciones potencialmente mortales poco
comunes.
• Bajo riesgo de deficiencias nutricionales y de desnu-
trición.
Figura 19-1 Los componentes principales de la LAP-BAND son la
banda elastomérica de silicona, el acceso y las conexiones resistentes al Desventajas
estrangulamiento.
Entre las desventajas específicas de la banda gástrica ajusta-
ble en cirugía bariátrica se incluyen:
consumo de alimento e induce una saciedad precoz (v. figu-
ra 19-2).21 Además de la restricción mecánica, puede haber • Necesidad de ciertas modificaciones en los hábitos
otro mecanismo que explique la saciedad. La presencia de un alimenticios.
cuerpo extraño en contacto con la pared gástrica, que tiene • Pérdida de peso inicial más lenta que con la deriva-
fibras del nervio vago tanto aferentes como eferentes, puede ción gástrica.
explicar la disminución postoperatoria de la sensación de • Necesidad fundamental de seguimiento regular (ajus-
hambre. Esta suposición tiene que ser confirmada mediante te de la banda para utilizar su capacidad de ajuste)
investigación electrofisiológica sobre el estómago con la para obtener resultados óptimos.
banda colocada.

Características Z TÉCNICAS DE COLOCACIÓN


Las ventajas de la cirugía laparoscópica abdominal son bien Como se ha indicado, el diseño de la LAP-BAND ha cam-
conocidas y han sido ampliamente demostradas en interven- biado poco desde su introducción en 1993. Por el contrario,
ciones de colecistectomía, 22 colocación de banda gástrica la técnica para su colocación ha experimentado numerosas
ajustable,16,23 gastroplastia vertical con banda24 y derivación modificaciones. Estos cambios son el resultado de la eleva-
gástrica en Y de Roux.25 da tasa inicial de complicaciones tardías, que estaban rela-
cionadas principalmente con el ensanchamiento de la bolsa
gástrica y con el prolapso gástrico (también denominados
hernia gástrica y deslizamiento de la banda).
T ÉCNICA PERIGÁSTRICA
Con respecto a la técnica de disección perigástrica emplea-
da en los primeros años se observó que era técnicamente
difícil y, a menudo, daba lugar a elevadas tasas de dilatación
o prolapso de la bolsa. 26-29 La disección se inicia directa-
mente sobre la curvatura menor en el punto medio (ecua-
dor) del balón de calibración. La disección se completa por
detrás del estómago hacia el ángulo de His bajo visualiza-
ción directa. Es importante evitar el saco menor. Puede
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

considerarse la opción del suturado retrogástrico.


T ÉCNICA DE LA PARS FLACCIDA
La técnica de la pars flaccida es la más utilizada en la actualidad
y la que normalmente se recomienda. Es más fácil de enseñar y
de realizar que la técnica perigástrica y se asocia con un riesgo
mucho menor de prolapso y erosión gástricos.30-32 Fielding y
Figura 19-2 Los dispositivos de banda ajustable se implantan lapa- Allen32 han publicado los detalles del procedimiento de la pars
roscópicamente para formar una apertura restringida ajustable (esto- flaccida, incluyendo fotografías de las diversas etapas.
ma) y una pequeña bolsa gástrica para limitar el consumo de alimento La disección se empieza directamente en posición lateral
e inducir saciedad precoz. al ecuador del balón de calibración en el espacio avascular de la
160 Sección V • INTERVENCIONES

pars flaccida. Después de localizar el lóbulo caudado del hígado, silicona (v. figura 19-3).37 Este proceso no necesita anestesia
la disección roma se continúa con visualización directa hasta y normalmente requiere de 5 a 10 minutos en la consulta. El
que se observa el pilar derecho del diafragma, seguido inmedia- ajuste periódico permite la optimización del tamaño del esto-
tamente por el pilar izquierdo sobre el ángulo de His. ma para proporcionar una pérdida de peso mantenida, una
tolerancia al alimento razonable y la reducción al mínimo de
DE LA PARS FLACCIDA A LA TÉCNICA PERIGÁSTRICA las posibles complicaciones para el paciente.
(WEINER EN DOS PASOS) Sin embargo, la coordinación del inflado o desinflado, así
Algunos cirujanos prefieren utilizar una técnica de combina- como la cantidad de solución salina inyectada o retirada para
ción en la que inicialmente se realiza una disección pars flaccida conseguir un tamaño óptimo del estoma puede ser difícil de
pero, en última instancia se modifica de modo que la banda se determinar. Un estoma regulado de forma óptima garantiza
acerca a la pared gástrica próxima a la curvatura menor.33-35 una pérdida de peso mantenida y una tolerancia al alimento
Esto se hace para prevenir la disfagia postoperatoria y la razonablemente buena. Un tamaño del diámetro del estoma
obstrucción de la vía gástrica causada por un exceso de tejido demasiado pequeño produce una intolerancia al alimento grave
adiposo dentro de la banda. y puede ser responsable de una dilatación de la bolsa o de la
La disección se inicia con la técnica de la pars flaccida. formación de una hernia gástrica. En cambio, un diámetro del
Se realiza una segunda disección en el punto central (ecua- estoma excesivamente grande se asocia a pérdida insuficiente
dor) del balón cerca del estómago hasta la disección perigás- de peso. El ajuste del tamaño del estoma no debería decidirse
trica, limitada a una simple apertura próxima a la curvatura en función de criterios subjetivos. Los antecedentes del pacien-
menor, interceptando la disección de la pars flaccida. A con- te sobre aumento de tolerancia al alimento no son suficientes
tinuación, la banda se coloca desde el ángulo de His a la para garantizar el ajuste. Los pacientes a menudo solicitan que
abertura perigástrica. se «reduzca más», debido a su percepción subjetiva de aumento
de tolerancia al alimento, sensación de hambre o al compararse
VARIACIONES con otros pacientes, o simplemente porque quieren perder peso
El número, tamaño y ubicación de los trócares usados para la más rápidamente. La decisión de ajustar el tamaño del estoma
colocación de la banda gástrica ajustable laparoscópica varía ha de basarse en criterios objetivos, que incluyan preguntas
según las preferencias del cirujano. Puede usarse como modelo sobre la dieta, curvas de pérdida de peso postoperatorias y estu-
el procedimiento de fundoplicatura laparoscópica de Nissen.32 dios radiológicos documentados.
A lo largo de los años se han introducido diversas modi- Las recomendaciones para el ajuste del tamaño del esto-
ficaciones técnicas, entre las que se incluyen las siguientes: ma tras la colocación de las áreas de LAP-BAND son las
siguientes:
• Creación de una bolsa inicial muy pequeña, menor de
15 mL (la «bolsa virtual»). 1. Desinflar parcial o completamente el balón durante la
• Disección posterior sobre la reflexión peritoneal de la intervención para evitar una intolerancia al alimento
bolsa epiploica; a este nivel, la pared del estómago se temprana relacionada con el edema postoperatorio.
fija de forma natural a los pilares del diafragma y no 2. Tras la intervención, esperar al menos dos meses para
es necesaria suturar la pared posterior. que se forme la cápsula alrededor de la banda antes de
• Fijación por sutura de la pared anterior para incluir volver a inflarla.
completamente la banda de silicona; son necesarias al 3. No inyectar nunca solución salina en exceso durante
menos cuatro suturas gastrogástricas. una sesión de rellenado.
• Durante la intervención, mantenimiento de la banda
parcial o completamente desinflada, para prevenir El ajuste se realiza en el quirófano (mi opción preferida)
una compresión excesiva del estoma debida al edema o en el departamento de radiología. El puerto de inyección
postoperatorio.

Para asegurarse de que los cirujanos poco experimenta-


dos en la colocación de la banda gástrica ajustable laparoscó-
pica aprovechan las técnicas actuales y las mejoras que estas
implican, se recomienda que su formación se desarrolle en
un centro debidamente cualificado. La formación del ciruja-
no incluye la tutoría de cirujanos bariátricos experimentados
en las técnicas laparoscópicas avanzadas y que dediquen
especial atención a la colocación de la banda y su posterior
ajuste. Esta formación también implica la orientación para el
tratamiento postoperatorio a largo plazo del paciente.36

Z AJUSTE DEL ESTOMA


Una de las ventajas más importantes de la banda gástrica
ajustable laparoscópica, con respecto a otros procedimientos
gástricos restrictivos, es la capacidad de ajustar el tamaño del
estoma sin necesidad de volver a operar. El tamaño del esto- Figura 19-3 El tamaño del estoma puede ajustarse fácilmente inyec-
ma puede ajustarse fácilmente inyectando o retirando solu- tando o retirando solución salina a través del acceso percutáneo,
ción salina a través del puerto de acceso percutáneo, inflando inflando o desinflando para ello la porción hinchable de la banda de
o desinflando para ello la porción hinchable de la banda de silicona (insertada).
Capítulo 19 • Banda gástrica ajustable laparoscópica 161

se localiza por radioscopia, y se coloca una moneda o un en bases de datos electrónicas sobre las referencias de estos
anillo metálico en la piel sobre la imagen radiológica del puer- tipos de cirugía bariátrica, el grupo encontró que la calidad
to. Se dibuja un círculo sobre la piel delante del puerto de global de las evidencias estaban dentro de la «media» (segui-
inyección alrededor de la moneda y se retira dicha moneda o miento de hasta 4 años). El grupo de expertos encontró que
anillo metálico. No es necesario aplicar anestesia local. En se consideraba que la banda gástrica ajustable laparoscópica,
condiciones estériles, se introduce una aguja sin efecto saca- al igual que los otros dos procedimientos, era eficaz durante
bocados en el puerto de inyección. Se aspira el contenido del un período de hasta 4 años. A los 2 años, sin embargo, la
balón y se miden y registran los volúmenes inicial y final de colocación de la banda gástrica ajustable laparoscópica no
líquido. La colocación del puerto de acceso (reservorio) había producido tanta pérdida de peso como la derivación
depende, hasta cierto punto, de la preferencia del cirujano. gástrica en Y de Roux. El grupo de expertos determinó que
Entre las localizaciones adecuadas para la colocación se inclu- entre los 2 y los 4 años no había suficientes evidencias para
yen el cuadrante superior izquierdo y la región subxifoidea.38 concluir que el procedimiento en Y de Roux siguiera siendo
más eficaz que la banda gástrica ajustable laparoscópica. En
términos de mortalidad a corto plazo, el grupo concluyó que la
Z PÉRDIDA DE PESO colocación de la banda gástrica ajustable laparoscópica era más
segura que la GVB y la derivación gástrica en Y de Roux.
Un grupo de expertos reunido bajo los auspicios del Royal Tres estudios internacionales han acumulado datos pos-
Australasian College of Surgeons (Informe ASERNIP-S),39 quirúrgicos de 5 años que muestran una pérdida de exceso
realizó una revisión sistemática y exhaustiva que comparaba de peso (PEP%) promedio del 56% con la LAP-BAND
los resultados de la colocación de la banda gástrica ajustable (v. tabla 19-1). Estos resultados son comparables a los obte-
laparoscópica (LAP-BAND y banda sueca), GVB y deriva- nidos para la derivación gástrica en Y de Roux, que son del
ción gástrica en Y de Roux. En una investigación realizada 59% a 5 años (cuatro publicaciones).40 La tabla 19-2 muestra

Tabla 19-1 PORCENTAJE DE PÉRDIDA DE EXCESO DE PESO

MESES DESPUÉS DE LA CIRUGÍA

ESTUDIO N 12 18 24 36 48 60 72 84
64
Belachew y cols. 2002 763 50-60*
O’Brien y cols. 200278 706 47 51 52 53 52 54 57
Cadiere y cols. 200279 652 38 62
Vertruyen y cols. 200280 543 38 61 62 58 53 52
Dargent 199981 500 56 65 64
Toppino y cols. 199982 361 42
Fielding y cols. 199957 335 52 62
Paganelli y cols. 200083 156 43
Niville/Dams 199984 126 48 58
Berrevoet y cols. 199985 120 46 53
*Porcentaje de reducción del exceso de peso en pacientes con más de 5 años de seguimiento.

Porcentaje a los 86 meses.

Tabla 19-2 REDUCCIÓN DEL ÍNDICE DE MASA CORPORAL

MESES DESPUÉS DE LA CIRUGÍA

IMC
ESTUDIO N INICIAL 12 18 24 36 48 60 72 84
86
Angrisani y cols. 2001 1265 44 35 33 30 32 32
Favretti y cols. 200287 830 46 37 36 37 37 36 40 29
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

Belachew y cols. 200264 763 42 32 30 30 ⬍30


Vertruyen 200280 543 44 33,2 31,3 30,1 31,4 31,2 32,1*
Abu-Abeid/Szold 199988 391 43 32 30
Belachew y cols. 199816 350 43 30
Hauri y cols. 200089 207 43 35
Furbetta y cols. 199990 201 43 35 33 33
Weiner y cols. 200333 184 48 32 30 28
Gambinotti y cols. 199891 162 43 32
Nowara 200192 108 49 35
*Porcentaje a los 86 meses.
IMC, índice de masa corporal.
162 Sección V • INTERVENCIONES

la pérdida de peso tras la colocación de la LAP-BAND, Z CALIDAD DE VIDA


expresada como reducción en el índice de masa corporal
(IMC). Un estudio prospectivo a medio plazo (actualmente Tras la cirugía de LAP-BAND, se han demostrado claras
en curso) muestra valores medios de PEP% del 52% a los mejoras en los diversos índices de calidad de vida (p. ej.,
24 meses, 53% a los 36 meses. 52% a los 48 meses, 54% a mediante el cuestionario SF-36 de Rand,52 y mediante la
los 60 meses y 57% a los 72 meses.41 Con una mayor expe- puntuación de BAROS53 y del aspecto físico54). No obstante,
riencia acumulada, los datos de los estudios estadounidenses también se han publicado resultados equívocos sobre la cali-
muestran un patrón similar de mejora de los resultados, dad de vida (a dos años).55
mostrando valores medios de pérdida de peso de aproxima-
damente el 40% a los 12 meses42,43 y superior al 50% de PEP
a los 36 meses.42 Además, un estudio publicado por el Z COMPLICACIONES
National Institute for Clinical Excellence en Inglaterra,44 mos-
traba que la pérdida de peso mediante la banda gástrica ajus- Las complicaciones específicas notificadas con la banda gás-
table era comparable a la derivación gástrica en Y de Roux a trica ajustable pueden diferenciarse en tempranas y tardías.
los 5 años (v. tabla 19-3). No obstante, a nivel general se Entre las complicaciones tempranas se incluyen:
acepta que la derivación gástrica en Y de Roux permite per-
der más peso que la LAP-BAND, excluyendo todos los • Perforación gastrointestinal.
demás inconvenientes y riesgos. • Lesión hepática o esplénica (muy rara hoy en día).

Las complicaciones tardías incluyen:


Z PATOLOGÍAS COMÓRBIDAS
• Dilatación de la bolsa debida al inflado excesivo de la
Está confimado que la reducción de peso después de los pro- banda por una ingesta excesiva de alimento.
cedimientos bariátricos, al igual que la derivación gástrica, es • Deslizamiento de la banda (prolapso gástrico o hernia-
capaz de mejorar o, en algunos casos, revertir completamente ción) debido a una colocación inadecuada de la banda.
las patologías comórbidas.45,46 Esta capacidad también ha sido • Combinación de la dilatación de la bosa y desliza-
demostrada en procedimientos restrictivos gástricos.47 Se ha miento de la banda.
constatado que el uso del sistema de LAP-BAND revierte • Erosión de la banda.
varias copatologías importantes,48 como diabetes,49,50 hiper- • Fuga o migración del puerto.
tensión e hipercolesterolemia,50 depresión clínica,51 apnea del
sueño y reflujo gastroesofágico. Como en cualquier otro procedimiento quirúrgico, la
incidencia de complicaciones disminuye con la experiencia del
cirujano (la curva de aprendizaje).56 Además, las tasas de com-
Tabla 19-3 REDUCCIÓN DEL ÍNDICE plicaciones han disminuido en general a lo largo de los años
DE MASA CORPORAL en relación con las mejoras en la técnica quirúrgica.57,38 Por
tanto, las tasas iniciales de deslizamiento de la banda (prolap-
AÑO DERIVACIÓN GÁSTRICA BANDA GÁSTRICA so gástrico) han disminuido desde las primeras tasas publica-
IMC inicial 45 45 das de aproximadamente el 22% a menos del 5%.15,26,32,58 Por
1 29 36 ejemplo, Dargent publicó que el cambio del procedimiento
2 29 32 perigástrico a la pars flaccida producía una disminución en el
3 29 31 deslizamiento de la banda del 5,2% al 0,6%.59 Este autor esta-
4 29 32 bleció que se había beneficiado de la experiencia previa de los
5 29 30 cirujanos y era capaz de conseguir tasas menores de desliza-
miento colocando la banda más arriba que al principio de su
(Tomado de National Institute of Clinical Excellence: Assessment Report serie. De forma similar, cambiando a la técnica de la pars flac-
on the Clinical and Cost-Effectiveness of Surgery for People With Morbid
Obesity. www.nice.org.uk. Acceso el 19 de julio de 2002.) cida, otro grupo de cirugía bariátrica reducía la incidencia de
IMC, índice de masa corporal. prolapso gástrico del 15% al 1,8%.32 En la tabla 19-4 se resu-

Tabla 19-4 COMPLICACIONES DE LA COLOCACIÓN DE LA BANDA GÁSTRICA AJUSTABLE LAPAROSCÓPICA


(LAP-BAND) EN VARIOS ESTUDIOS
PROLAPSO GÁSTRICO/DILATACIÓN DILATACIÓN O DISMOTILIDAD PROBLEMAS
ESTUDIO N DEL BOLSILLO (%) ESOFÁGICA (%) EROSIÓN (%) DEL ACCESO (%)
Estudio de la FDA93 299 24,0 10 1,0 6,0
Belachew y cols. 200264 763 8,0 NI 0,9 2,6
Cadiere y cols. 200279 652 3,8 NI 0,3 2,7
Dargent 199981 500 5,0 NI 1,6 1,0
Favretti y cols. 200287 830 10,0 NI 0,5 1,0
Fielding y cols. 199957 335 3,6 NI 0 1,5
O’Brien y cols. 199956 302 9,0 NI NI 3,6
Vertruyen 200280 543 4,6 NI 1,0 3,0
Weiner y cols. 200333 184 2,2 NI 1,1 3,2

NI, no informado.
Capítulo 19 • Banda gástrica ajustable laparoscópica 163

men las complicaciones referidas más frecuentemente en aso- rotomía. La pérdida media de peso era de 54 kg, que equiva-
ciación con la LAP-BAND. lía a una disminución del IMC de 18,5 kg/m2 de superficie.65
Una colocación inadecuada del puerto de acceso puede Este artículo proporcionaba una descripción limitada de las
dar lugar a la rotación del mismo hasta en 180° o a rupturas complicaciones, que incluían hernia por incisión, reinter-
de la unión con la conexión. Una colocación satisfactoria, vención abdominal, perforación accidental de la conexión y
con sutura a la fascia, asegura el acceso para proceder a su vómitos debido a una excesiva constricción del estoma.
ajuste y fomentar la comodidad del paciente y la estabiliza- En la publicación del seguimiento a largo plazo de esta
ción.38,60 Las complicaciones relacionadas con el puerto de misma serie, de 326 pacientes con banda sueca, 296 no pre-
acceso afectan a la integridad del sistema LAP-BAND y sentaban complicaciones significativas. En este subgrupo, la
ponen en peligro una pérdida de peso eficaz. Muchos de pérdida media de peso era del 68%.66 Las complicaciones
estos problemas pueden evitarse.61 que requerían reintervención incluían dislocaciones de la
La erosión de la LAP-BAND es poco usual y puede banda (0,6%), escapes de la banda (1,8%) y migraciones o
ocurrir algunos meses después de su colocación. Una posible erosiones de la misma (4,6%). El deslizamiento de la banda
causa de ella es una lesión mínima en la pared gástrica se atribuyó principalmente al llenado excesivo del sistema
durante el procedimiento inicial.62 La mortalidad tras la que la acompaña. La complicación más frecuente sin necesi-
colocación de LAP-BAND es prácticamente inexistente, dad de reintervención era el reflujo (4,7%). En casos en los
llegando a ser nula en muchas series, tanto grandes como que se observaba una pequeña bolsa gástrica, ello no parecía
pequeñas. ser un problema grave. Los autores concluyeron que la tasa
La experiencia más reciente en EE. UU. muestra tasas de complicaciones podría reducirse adicionalmente introdu-
de complicaciones más próximas a las observadas en las ciendo mejoras en la técnica de intervención y procediendo
extensas series internacionales que a las tasas notificadas en a un estrecho seguimiento. En particular, debería poderse
el ensayo clínico estadounidense inicial, el cual se realizó evitar la reintervención debida a la migración de la banda si
para obtener la aprobación de la Food and Drug Administration esta no se llena en exceso.
(FDA). Por ejemplo, la tasa de prolapso gástrico fue del del En un estudio prospectivo de 5 años, 824 pacientes
14,2% (9 de 63 en 3 años) en un estudio inicial de un único habían recibido una banda sueca por laparoscopia, con un
cirujano,42 y del 2% (2 de 115 en 12 meses) en un estudio en seguimiento disponible en el 97% de los casos.67 Las pérdidas
colaboración que incluía a cuatro cirujanos y un total de medias de exceso de peso eran del 30%, 41%, 49%, 55% y
500 pacientes consecutivos.43 Esta mejora puede atribuirse 57% después de 1, 2, 3, 4 y 5 años, respectivamente. La tasa
al impacto de la curva de aprendizaje, ya que la mayoría de de complicaciones preoperatorias era del 1,2%, en tanto que
los cirujanos que participaron en el estudio de la FDA tenían la de complicaciones a largo plazo era del 23,3%, con el 16,4%
menos experiencia en la técnica y en la cirugía laparoscópica relacionado con la banda y el 6,8% relacionado con el puerto.
que los incluidos en estudios posteriores. En esta serie no se observaron muertes intra o postoperatorias
En los últimos años se ha notificado dilatación esofágica (hasta después de 30 días). Mittermair y cols.68 lograron una
relacionada con la LAP-BAND, especialmente en EE. UU.63 pérdida media de exceso de peso del 72% (una disminución
Estas publicaciones proceden de series pequeñas dentro del del IMC de 16,6 kg/m2) después de 3 años en un seguimiento
ensayo clínico de la LAP-BAND de la Food and Drug de 6 años de 451 pacientes que se sometieron a cirugía lapa-
Administration, realizadas por investigadores con experiencia roscópica de implantación de banda sueca. Se registraron
limitada y durante un período en el que se mantenía una polí- complicaciones que requirieron reintervención en el 7,9% de
tica inadecuada en lo que respecta al ajuste de la banda. los pacientes.
También es destacable el hecho de que la reintervención Dos estudios han comparado la banda sueca con la
en la colocación de la banda laparoscópica no tiene la misma LAP-BAND. En un estudio que usaba técnicas quirúrgicas
importancia que en otros procedimientos de cirugía bariá- equiparables, parecía que la LAP-BAND (29 pacientes)
trica. En la actualidad, en más del 80% de los pacientes, las mostraba mejores características de pérdida de peso a lo lar-
complicaciones pueden corregirse mediante cirugía míni- go de 12 a 18 meses, pero los autores encontraron que la
mamente invasiva (laparoscopia).64 Intervenciones como la banda sueca (41 pacientes) era más fácil de manejar y menos
retirada de la banda, reposición de la misma y conversión propensa a causar disfagia o deslizamiento.69 Otro estudio
en derivación gástrica en Y de Roux, pueden realizarse prospectivo comparaba 49 pacientes a los que se colocó una
mediante laparoscopia después de las complicaciones de banda sueca con 52 pacientes con la LAP-BAND, la mayoría
LAP-BAND. de ellas colocadas por laparoscopia.70 Excluyendo a los
pacientes con escape de la banda sueca debido a un fallo téc-
nico, la pérdida media de peso era similar a los 6 meses,
Z OTRAS BANDAS GÁSTRICAS AJUSTABLES 1 año y 2 años para los dos grupos. Las tasas y perfiles de
complicaciones eran también equiparables.
Los cirujanos que deciden realizar una intervención de colo- Existen dos informes publicados sobre la experiencia con
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

cación de banda gástrica ajustable laparoscópica tienen que la banda gástrica ajustable Heliogast. En estudio aleatorizado
elegir un tipo de banda específico, por lo que es conveniente y prospectivo se comparaban los resultados de la LAP-BAND
revisar la literatura correspondiente a bandas distintas a la (n ⫽ 30) y la banda Heliogast (n ⫽ 30).71 Los dispositivos se
LAP-BAND. Aunque hay más de 1100 publicaciones, inclu- implantaron usando la técnica en dos pasos (de pars flaccida a
yendo presentaciones de resúmenes, relativas a la experien- perigástrica). No se observaron diferencias en los tiempos de
cia con la LAP-BAND, son muy pocas las referidas a otros intervención, en las complicaciones intraoperatorias ni en la
sistemas de bandas gástricas. La mayoría de estas describen pérdida de peso durante las cuatro primeras semanas tras
la experiencia con la banda sueca. la cirugía. Sin embargo, con el paso del tiempo se observa-
El grupo que desarrolló la banda gástrica ajustable sue- ron más complicaciones con la banda Heliogast y las diferen-
ca publicó los resultados de su seguimiento durante 4 años cias a favor de la pérdida de peso inducida por la LAP-BAND
en 46 de los 50 pacientes intervenidos inicialmente por lapa- (n ⫽ 30) eran significativamente mayores. A los 12 meses, la
164 Sección V • INTERVENCIONES

pérdida media de exceso de peso era del 41,7% para el grupo en la derivación gástrica que en el procedimiento de
de LAP-BAND y del 28,3% para el grupo de Heliogast LAP-BAND. Inicialmente, muchos cirujanos eran reacios a
(P⬍0,0001). Los parámetros demográficos iniciales de los coloca la banda gástrica ajustable en pacientes superobesos
pacientes eran similares en los dos grupos. Incluso tras un debido al aumento del riesgo de complicaciones periopera-
cambio en el diseño de la banda Heliogast al inicio del estu- torias y una supuesta pérdida de peso insuficiente. Sin
dio, los autores siguieron siendo incapaces de conseguir un embargo, recientemente muchos cirujanos han realizado
tamaño del estoma funcional en 26 de los 30 pacientes, a pesar con éxito procedimientos de colocación de banda laparoscó-
del aumento del volumen de llenado por encima de la cantidad picos en estos pacientes.74,75
convencional establecida en las recomendaciones del fabrican- Se ha establecido un debate en torno al perfil psicológi-
te. Wasserberg y cols.72 obtuvieron tasas similares de desliza- co de los pacientes candidatos. Por ejemplo, los pacientes
miento anterior, que necesitaron reposición de la banda en el obesos preparados para aceptar los riesgos asociados con un
2,1% y del 2,7%, respectivamente, para las bandas gástricas procedimiento quirúrgico con anestesia general tienen per-
ajustables LAP-BAND y Heliogast. Sin embargo, los autores files biopsicológicos estadísticamente diferentes de los de
pensaron que el diseño del mecanismo de cierre de Heliogast aquellos que no están dispuestos a asumir dichos riesgos.76
permitía una reintervención y una reposición (rescate) más Algunos pacientes clínicamente obesos no aceptarán revi-
directas que la LAP-BAND, que requiere una experiencia en siones importantes y permanentes en su anatomía interna.
la intervención considerable y no siempre es eficaz. Otros, por razones profesionales o sociales, prefieren inter-
venciones mínimas que les permitan volver rápida y discre-
tamente a sus actividades normales.
Z DISCUSIÓN Dixon y OíBrien han revisado los criterios de selección
del paciente óptimo para la colocación de la LAP-BAND.77
La tasa general de complicaciones es menor cuando se Los aspectos descritos en este capítulo se aplican también a
coloca una banda gástrica ajustable laparoscópica que con los demás sistemas de banda gástrica ajustable laparoscópica.
la GVB y mucho más baja que para la derivación gástrica u No es posible comparar de forma sistemática la seguridad y
otros procedimientos bariátricos altamente invasivos. eficacia de los diversos sistemas de banda gástrica disponi-
También, los tipos de complicaciones asociadas con la ban- bles, debido que hay muy pocos estudios de comparación
da gástrica son, en conjunto, menos graves que los que directa y aún menos ensayos clínicos aleatorizados prospec-
siguen a la derivación gástrica y, en contadas ocasiones, son tivos que comparen una banda con otra.
potencialmente mortales. La pérdida de peso a corto plazo Adicionalmente, la preponderancia de los casos de
(hasta 2 años) con la banda ajustable laparoscópica parece LAP-BAND y la escasez de estudios referidos a otras bandas
estar entre la de la GVB y la de la derivación gástrica. Los hacen imposible obtener un metaanálisis significativo para
resultados de pérdida de peso a medio plazo (2 a 4 años) no comparar los resultados. Hasta que no se disponga de datos
se han establecido todavía por completo para la banda gás- comparativos de estudios clínicos realizados de forma rigu-
trica ajustable laparoscópica, pero conforme se han publi- rosa, la preferencia del cirujano y la posición en el mercado
cado estudios cada vez más a largo plazo, los datos han de cada técnica determinarán el estado de cada uno de los
empezado a mostrar que las pérdidas de peso con la banda sistemas de banda gástrica ajustable laparoscópica.
y la derivación gástrica en Y de Roux a 5 años son compa- La introducción de la banda gástrica ajustable laparoscó-
rables. pica en la cirugía bariátrica el 1 de septiembre de 1993 supuso
Al igual que los procedimientos de derivación gástrica un avance considerable. Junto con las innovaciones de la
y GVB, la banda gástrica ajustable laparoscópica ha mostra- reversibilidad y la capacidad de ajuste total, la técnica supuso
do una inversión significativa de las patologías comórbidas la implantación de la noción de mínima invasividad. La banda
asociadas y mejoras en la calidad de vida. Es probable que laparoscópica ha proporcionado un nuevo impulso a la cirugía
llegue a confirmarse que estos, y no la tasa o el alcance de la bariátrica en general y a la cirugía laparoscópica en particular.
pérdida de peso, son los factores esenciales en lo que respec- Hoy en día, 13 años después de su presentación, se han colo-
ta al beneficio a largo plazo de los pacientes. cado más de 250.000 LAP-BAND en todo el mundo.
Tradicionalmente, la determinación de la idoneidad de La introducción de la banda gástrica ajustable laparoscó-
los pacientes para un tipo u otro de procedimiento de ciru- pica dentro del arsenal terapéutico de técnicas quirúrgicas
gía bariátrica ha sido, hasta cierto punto, objeto de contro- que pueden usarse en el tratamiento de la obesidad mórbida,
versia. No hay duda de que la banda gástrica ajustable lapa- ha aumentado el interés de endocrinólogos, otros especialis-
roscópica requiere el compromiso por parte del paciente y su tas en medicina interna y médicos de familia, así como el del
familia en lo que respecta al seguimiento de una dieta ade- público en general, aunque, obviamente, no es la panacea en
cuada y al cumplimiento de una serie de visitas a la consulta el campo de la cirugía para la obesidad. La pérdida de peso
para evaluación y el ajuste de la banda, según sea necesario. inicial tras un procedimiento restrictivo como la banda, es
En sistemas médicos no públicos, ello puede suponer un cos- menor que el observado en procedimientos de malabsorción.
te financiero adicional. Sin embargo, unos hábitos alimenti- No obstante, como confirman su elevada demanda a nivel
cios inadecuados también pueden reducir la eficacia de la internacional y su uso de gran alcance desde su aparición, la
GVB y de la cirugía de derivación gástrica.73 Además, banda gástrica ajustable laparoscópica merece un lugar desta-
la derivación gástrica y otros procedimientos de malabsor- cado en el tratamiento quirúrgico de la obesidad mórbida.
ción también precisan un aumento nutricional de por vida
con suplementos como hierro y vitamina B12.
Tras la colocación de la banda gástrica ajustable lapa- Z BIBLIOGRAFÍA
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Capítulo 19 • Banda gástrica ajustable laparoscópica 165

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20
Gastroplastia vertical con banda
Andrew C. Jamieson, M.D.

Resulta curioso que el procedimiento del que se derivó la riable, a pesar de los intentos por reforzar la línea de gra-
gastroplastia vertical con banda (GVB) no fuera vertical ni pas; esta intervención también se abandonó.
se realizara con banda. A partir de 1954, Mason practicó un En 1976, Tretbar y cols. (v. figura 20-2) describieron
número limitado de intervenciones de derivación yeyu- una fundoplicatura de tipo Nissen extendida en la cual la
noileal y, posteriormente, en 1966 desarrolló la derivación curvatura mayor se replegaba progresivamente sobre la cur-
gástrica. En 1971 este autor llegó a la conclusión de que si vatura menor desde el cardias a la incisión.3 A pesar de que
el mecanismo de pérdida de peso en la derivación gástrica se obtuvieron buenos resultados iniciales, pronto los auto-
era la reducción de la ingesta de alimentos entonces, el lle- res empezaron a realizar lo que probablemente fue la prime-
nado de una pequeña bolsa gástrica en el estómago distal ra gastroplastia vertical grapada, con un estoma en la cur-
sería igualmente eficaz para promover la pérdida de peso. vatura menor, colocando grapas en paralelo a la curvatura
Ciertas complicaciones de la derivación, como la deficien- menor y creando una extensión esofágica de 180 cm de lon-
cia en micronutrientes y la ulceración péptica, podrían evi- gitud con un estoma no reforzado. Los resultados de este
tarse y la cirugía sería más simple y segura. La gastroplastia procedimiento nunca se publicaron. Johnston reprodujo
(v. figura 20-1) como se denominó a la técnica, dividía el independientemente la intervención de Tretbar, con modi-
estómago en una pequeña sección superior y una parte ficaciones significativas, desde 1987, del procedimiento de
distal grande conectada mediante un canal a la curvatura Magenstrasses y Mill (v. figura 20-3), mostrando resultados
mayor. Debido a una pérdida de peso inadecuada, sólo se sorprendentes a medio pero no a largo plazo.4
realizaron 59 intervenciones antes de que el procedimien- Long en 1978 (v. figura 20-2), colocó una línea de gra-
to se abandonara y Mason volviera a la derivación gástri- pas oblicua desde el fundus a la curva inferior, inicialmente
ca. Gómez recuperó la gastroplastia en 1977, usando ini- no reforzada pero pronto empleó suturas de refuerzo esto-
cialmente un collar de malla de dacrón alrededor del canal mal de Prolene y una línea de grapas progresivamente más
estomacal, pero cuando se abandonó la estenosis estomal, vertical.5 Fabito, en 1979, inició el uso de una línea de gra-
cambió a una sutura continua de polipropileno.1 Esta tie- pas con un estoma reforzado en la curvatura menor por una
ne la desventaja de que algunas veces el estómago se ero- sutura de Prolene, y Laws utilizó el anillo de silastic, en un
siona. Pace intentó una estrategia diferente, retirando intento de reducir el riesgo de erosión de la sutura.6 Hacia
algunas grapas del centro de un cartucho y grapando el 1980, Wynne-Jones realizó una gastroplastia vertical divi-
estómago superior. 2 La anchura estomal a través de la dida con sutura manual de 10 a 12 cm de longitud a lo largo
zona no cerrada de la línea de grapas del estoma era inva- de unas sonda 32F, con una sutura quirúrgica del estoma de
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Figura 20-1 Las gastroplas-


tias horizontales: Mason, 1971;
Pace, 1979; Gomez, 1977.

GPH de Mason GPH de Pace GPH de Gomez

167
168 Sección V • INTERVENCIONES

Figura 20-2 Primeras gastro-


plastias verticales (GV) abier-
tas: fundoplicatura extendida de
Tretbar, 1976; gastroplastia
de Tretbar, 1976; gastroplastia de
Long, 1978.

GV1 de Tretbar GV2 de Tretbat Long 1978

Figura 20-3 Gastroplastias


verticales con banda (GVB)
divididas: Magenstrasse y Mill
de Johnston (abierta), GVB de
Mason (abierta o laparoscópica);
escisión en cuña de Champion
(laparoscópica).

Magenstrasse y Mil GVB de Mason dividida GVB en cuña de Champion

acero inoxidable recubierta con teflón de 10 cm desde el Z PRINCIPIOS QUIRÚRGICOS


ángulo de His.7 Además de la gastroplastia original de DE LA GASTROPLASTIA
Mason de 1971, parece que esta fue la primera gastroplastia
dividida. Desde el principio de la evolución de la gastroplastia quedó
Mason empezó a aplicar la GVB (v. figura 20-4) en claro que determinados principios técnicos eran de impor-
1980, empleando un estoma reforzado en la curvatura menor tancia vital para el éxito de la intervención. Mason estableció
por una banda Marlex que pasaba a través de una ventana cuatro principios básicos en su libro de referencia, Surgical
creada mediante una grapadora circular con la partición Treatment of Obesity, publicado en noviembre de 1981.11 Tales
explicada anteriormente.8 Este procedimiento pronto se principos eran: 1) una capacidad de 50 mL o menor; 2) una
convirtió en la intervención de referencia para la obesidad apertura calibrada entre 10 y 12 mm de diámetro; 3) una divi-
mórbida, aunque otros cirujanos intentaron diversas modi- sión segura, y 4) refuerzo para evitar la dilatación del esto-
ficaciones, obteniendo algunas veces resultados menos satis- ma. Estas premisas siguen siendo válidas hoy en día, aunque
factorios. Mason se queja justificadamente de que los resul- ahora se utilizan volúmenes de bolsa de menos de 20 mL.
tados de estas series se usaran de forma errónea para Las gastroplastias más frecuentes en la actualidad (v. figu-
argumentar en contra de la realización de la GVB. En los ra 20-1) incluyen todas divisiones verticales y estomas en la
años noventa, Chua y Mendiola, quienes realizaron su pri- curvatura menor. Se encuentran entre ellas la gastroplastia
mera intervención en febrero de 1993,9 adaptaron la GVB a vertical de Long modificada (GVLM), la GVB de Mason y
la técnica laparoscópica (v. figura 20-3), y Melissas10 descri- la GVB con anillo de silastic (GVBS). En la GVB de Mason,
bió una estrategia laparoscópica diferente; este autor usaba se corta un espacio circular de tipo rosquilla en el estómago
una endocortadora lineal para cortar una cuña de la curva- usando un dispositivo de grapado circular, que permite el
tura mayor y el fundus, dejando uns bolsa vertical a lo largo desplazamiento ascendente de una grapadora lineal, en para-
de la curvatura menor (v. figura 20-3). Esta intervención fue lelo a la curvatura menor, hasta el ángulo de His, y que hace
realizada por primera vez por Champion en Atlanta, en que se cree la bolsa. Inicialmente se usaron grapadoras con
1996, y tenía la ventaja de ser más fácil y rápida de realizar dos filas de grapas, pero una incidencia significativa de fallos
que la GVB laparoscópica convencional. en la línea de grapas dio lugar al desarrollo de los dispositi-
Capítulo 20 • Gastroplastia vertical con banda 169

Figura 20-4 Las gastroplas-


tias verticales (GV) abiertas
convencionales actuales: gas-
troplastia vertical con banda
GVB modificada de Long, GVB
de Mason, GVB con anillo de
silastic.

GV modificada de Long GVB de Mason GV con anillo de silastic

vos con cuatro filas de grapas. Con el desarrollo de las endo- parte anterior, aunque Long y yo normalmente no lo hacía-
cortadoras lineales, la división del estómago resultó más mos, a no se que se observara una fuga manifiesta. El peque-
fácil y segura, eliminando prácticamente la incidencia de rotu- ño agujero posterior es un poco más difícil de coser, por lo
ra de la partición pero aumentando quizá el riesgo de dehis- que se ignora. Con más de 4000 casos en nuestra experiencia
cencia temprana. conjunta, se ha demostrado que el agujero posterior nunca
En 1977, Long constató que la grapadora lineal podía ha sido la causa del escape. Ello probablemente es debido al
girarse hasta colocarse en sentido descendente desde el espesor de la pared gástrica próxima a la curvatura menor,
ángulo de His, a través de un espacio en el ligamento gas- donde las tres capas de músculo liso previenen la fuga.
troesplénico, y colocarse en paralelo a una sonda de apoyo a En la GVBS se evitaba por completo el agujero de la gra-
lo largo de la curvatura menor (v. figura 20-5). La pequeña pa, ya que la grapadora se colocaba en la parte inferior sobre
herida de punción causada por el pasador de cierre de la gra- la curvatura menor hacia el ángulo de His. Para evitar la divi-
padora puede suturarse manualmente con facilidad en la sión completa del estómago se quitaban algunas grapas o se

Figura 20-5 Aplicación de la


grapadora: gastroplastia verti-
cal con banda con anillo silastic
(GVBS) de abajo arriba con una
grapadora TA-90BN (mellada),
gastroplastia vertical carga mo -
dificada (GVLM) descendiente
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desde el ángulo de His.

GVBS GVLM
170 Sección V • INTERVENCIONES

retiraba parte del cartucho, lo que permitía la formación de un través de la ventana y se sutura sobre sí mismo. Se han usado
estoma. Posteriormente, para evitar este problema se desarro- tres longitudes de banda (4,5 cm, 5 cm y 5,5 cm) y está gene-
llaron grapadoras lineales melladas (v. figura 20-5). ralmente aceptado que la de 5 cm es la más satisfactoria, que
la longitud más larga da lugar a pérdidas de peso menores y
Capacidad de 20 mL o menos que la más corta produce una excesiva regurgitación. GVBS
y GVLM tienen la ventaja sobre la GVB de Mason de que
Mason comprendió con la derivación gástrica y, de nuevo, con son técnicas más sencillas, menos costosas y, cuando es nece-
su gastroplastia de 1971, que una bolsa de pequeño tamaño sario, con una cirugía de revisión más fácil.
era vital para el éxito de la intervención. Mason ha defendido La erosión de la banda o de la sutura pueden producirse
con vehemencia la medición de las bolsas y desarrolló un con cualquier tipo de banda o sutura y, probablemente, ello
método directo para hacerlo.12 Como resultado de estas medi- es consecuencia de infección, formación de abscesos y recha-
das, se produjo un descenso constante del volumen de la bolsa zo del material extraño. Aunque el estómago suele ser esté-
en su serie hasta un promedio de 14 mL a una presión de ril, la colocación de las suturas estomales en las GVLM y
70 cm de agua. El volumen de la bolsa es más difícil determi- GVBS de manera que pasen a través de la línea de grapas
nar en las intervenciones de GVLM y GVBS. Sin embargo, y no a través de la luz del estómago podría ser, lógicamente,
si la división se realiza próxima a una sonda de apoyo a lo muy importante. Si se sigue una técnica meticulosa, la ero-
largo de la curvatura menor, se obtendrán bolsas pequeñas. sión per se es poco usual.
El tamaño de la bolsa aumenta inevitablemente con el
tiempo, lo cual es una ventaja ya que, de otro modo, podría División segura
darse una pérdida excesiva de peso y desnutrición a largo pla-
zo. Lo que es imprevisible es la distensibilidad de dicha bolsa. La seguridad de la división es esencial para el éxito de la
Trascurridos varios años, algunos pacientes desarrollan bol- gastroplastia, y ello se hace evidente cuando se utilizan gra-
sas muy grandes y, ocasionalmente, lo que aparece parecen ser padoras lineales para la división del estómago. La causa de la
divertículos de una bolsa de cuello ancho. No se ha determi- rotura de la línea de grapas continúa sin establecerse con
nado si ello es consecuencia de la elasticidad del estómago, al exactitud, y se han intentado diversas técnicas para prevenir-
haberse construido inicialmente una bolsa demasiado grande, la. Un trabajo previo no publicado del autor, que realizó
o una indicación de un exceso crónico de comida. experimentos en estómagos de perros, mostraba que la gra-
padora TA-90 de autosutura inicial, que presentaba un yun-
Apertura calibrada con refuerzo que con husillo, no causaba rotura de la mucosa gástrica a lo
largo de la línea de grapas siempre que se mantuviera en la
Es necesario calibrar la apertura del estoma para determinar disposición recomendada. Así la mucosa queda yuxtapuesta,
la velocidad de drenaje de la comida masticada fuera de la con parte entre las grapas. Se postuló que era necesario
bolsa. Ello depende sobre todo de la distancia entre la división separar la mucosa de ambas capas del estómago para permi-
y la curvatura menor, pero, dado que la pared del estómago es tir la aposición de las capas submucosas y la formación de
elástica, el espesor del apoyo de refuerzo estomal es el factor cicatrices para fortalecer la integridad de la línea de grapas.
determinante para facilitar el paso de la comida a través del La grapadora Premium de autosutura daba lugar a una mejor
estoma. Generalmente, se colocaba una sonda de calibre entre separación de la mucosa y la experiencia mostraba que, con
34F y 38F (de 11 a 12 mm de diámetro) a lo largo de la curva- ella, se obtenía una reducción de la incidencia de rotura de
tura menor y la línea de grapas o la división se coloca en para- la línea de grapas. La introducción de líneas de grapas
lelo y próxima a esta. En 1971 se comprendió que el estoma de cuatro filas reducía además la incidencia de la rotura de la
sin refuerzo se dilataría de manera inevitable y, al final de los dicha línea, auque no lo eliminaba. Técnicas como el refuer-
años setenta, cuando se inició la recuperación de la gastro- zo de la línea de grapas con sutura generalmente no fueron
plastia, se desarrollaron diversas técnicas de refuerzo. El pro- eficaces, aunque alcanzó cierto éxito parcial la superposición
cedimiento más simple consistía en pasar una sutura a través de dos o tres líneas de grapas. La división del estómago se ha
de la línea de grapas y atarla alrededor del estoma, con una convertido en la técnica decisiva para evitar la rotura de la
sonda dentro del estoma, de modo que el diámetro eficaz del línea de grapas mediante la formación de una fístula entre
mismo fuera el de la sonda. Long empleó este método en la bolsa y el resto del estómago; tal rotura se debe presumi-
1978, inicialmente con suturas de polipropileno y posterior- blemente a infección y formación de abscesos.
mente con suturas de poliéster texturado. En 1983, Jamieson
amplió el planteamiento, para formar un canal estomal en
lugar de un estoma bidimensional usando tres suturas Z MECANISMO DE GASTROPLASTIA
Ethibond separadas entre sí por 12 mm, colocadas práctica- Y TÉCNICAS DE ALIMENTACIÓN
mente en la mitad de la línea de grapas (v. figura 20-4), reali-
zando, pues, una GVLM.13 Esta modificación mejoraba la El éxito de la gastroplastia y sus muchas variantes depende
pérdida de peso, pero no se ha establecido si ello se debía al de la restricción física de la ingesta de alimentos, inicialmen-
efecto del canal, al menor tamaño de la bolsa, o a ambos. te radical, para conseguir una pérdida de peso mediante la
En la GVBS, Fabito usaba inicialmente una sutura de reducción de la ingesta de energía durante el primer año y, a
Proleno y Laws estableció el uso de un tubo de silastic continuación, la restricción moderada que permita la estabi-
de 2,2 mm de diámetro a través del cual se ensartaba una lización de peso y prevenga la futura recuperación del mis-
sutura de Proleno. La longitud del tubo de silastic varía, pero mo. Al compararlo con el de las intervenciones de malabsor-
generalmente es de 45 mm. La banda Proring es un anillo de ción o de malabsorción/restricción mixtas, el interés de esta
silastic premoldeado, que es radiopaco y más flexible, y tiene estrategia restrictiva estriba en que con ella es menos proba-
puntos de fijación para prevenir el deslizamiento.14 ble que se den deficiencias a corto y largo plazo de micronu-
El estoma de la GVB clásica de Mason se refuerza trientes (como hierro, potasio, vitamina B12, calcio o proteí-
mediante una banda de malla Marlex que rodea al estoma a nas) en que, cuando estas aparecen, son más fáciles de
Capítulo 20 • Gastroplastia vertical con banda 171

corregir. Además, los procedimientos de malabsorción, a da se toma un trago de líquido, la comida será expulsada hacia
corto y medio plazo, a menudo dan lugar a diarrea, que pue- el estómago distal. No se alcanzará la saciedad y la secuencia
de causar una mortalidad significativa. se repetirá una y otra vez, dando lugar a una ingesta excesiva
Se ha constatado que una bolsa con un volumen de de alimento. Algunos pacientes utilizan esta estrategia para
aproximadamente 20 mL o menos es importante para conse- que parezca que comen más normalmente cuando se enfren-
guir una buena pérdida de peso; sin embargo, la restricción tan a situaciones socialmente comprometidas, pero si se utili-
calórica puede verse superada por varios factores. El primero za durante todas las comidas, la pérdida de peso no será la
de ellos es la dilatación de la bolsa con el tiempo, que suele ser adecuada. Si los pacientes llenan la bolsa con alimentos sóli-
consecuencia de la dilatación del músculo liso de la pared gás- dos y, a continuación beben líquido, puede que aparezcan
trica. Es probable que un llenado excesivo persistente de la malestar, regurgitación y, algunas veces, acidez de estómago.
bolsa produzca mayor dilatación, aunque este dato no se ha Por tanto, es necesario advertirles que beban agua antes de
confirmado. La otra causa de exceso de dilatación de la bolsa una comida sólida y, a continuación, esperen al menos
es que esta sea demasiado grande desde el principio. Debe 90 minutos antes de beber de nuevo. En ese tiempo la bolsa se
reconocerse que la bolsa gástrica es una estructura dinámica. habrá vaciado lo suficiente como para admitir el líquido.
que tiene una entrada y una salida estomal así como su propia A la hora de comer la norma más importante es que todo
movilidad y su propio peristaltismo. Los líquidos pasan fácil el alimento sólido debe reducirse a partículas menores que el
y rápidamente a través de la bolsa vacía en función de su vis- tamaño del estoma gástrico; de otro modo se producirá una
cosidad y de la velocidad a la que entran en ella. Los sólidos obstrucción. Cuando se da esta situación, los pacientes expe-
pasan mucho más lentamente, según el tamaño de partícula rimentan malestar o dolor epigástrico espasmódico y desagra-
de la comida ingerida, de su consistencia y del grado de impe- dable, acompañado a menudo de hipersalivación e incluso,
dimento de paso del estoma. Después de comer alimentos ojos llorosos. Se cree que esta repuesta es reflejo de los espas-
sólidos, los pacientes refieren sensación de saciedad o malestar mos del músculo liso gástrico. Algunas veces se producirá un
epigástrico o retroesternal bajo, que indica que la bolsa está alivio repentino de los síntomas, acompañado de borborig-
llena. En este punto, el paciente debe observar la primera nor- mos audibles, que reflejan el paso del bolo que provocó la
ma de alimentación (v. tabla 20-1). Si continúa comiendo, el obstrucción a través del estoma. Si no se produce alivio, se
malestar aumenta hasta que se produce una regurgitación generan arcadas espontáneas o autoinducidas hasta que la
voluntaria o espontánea del exceso de alimento. No se produ- obstrucción se libera. Una gran proporción del vómito es
cen náuseas, pero existe una sensación de alivio tras la regur- la saliva tragada. Generalmente, la remisión se da en cuestión
gitación y debe advertirse a los pacientes que no coman más de minutos aunque, ocasionalmente, la obstrucción puede
hasta la siguiente comida. durar días, dando lugar a deshidratación. En tales casos es
El efecto de saciedad cuando se llena la bolsa gástrica es necesaria una endoscopia. Los bolos que causan molestias
un factor muy importante para la pérdida de peso. El pacien- pueden retirarse mediante una cestilla o con pinzas para póli-
te obeso admite casi invariablemente un hambre excesiva, pos. Alternativamente, si están blandos pueden romperse y ser
una poderosa sensación que, evolutivamente, se ha desarro- empujados a través del estoma con el endoscopio. Siempre
llado para garantizar que los animales sientan deseo de debe intentar hacerse una maniobra de reversión completa
comer y, por tanto, de sobrevivir. La falta de eficacia de las con el gastroscopio en la bolsa, ya que pueden quedar frag-
dietas sin cirugía apenas sorprende en este ámbito y, si no se mentos ocultos arriba en el cardias. Ocasionalmente, los com-
reduce el hambre mediante la cirugía, el paciente hambrien- primidos recubiertos entéricos grandes pueden ser causa de
to pronto anulará la intervención y ganará peso. La saciedad obstrucción, sin que sea posible extraerlos por endoscopia.
depende de la densidad y consistencia de la comida tomada; Los comprimidos acaban por disolverse, cuando el paciente
por tanto, los pacientes que toman principalmente dietas bebe de forma ininterrumpida hasta 1 L de solución de bicar-
líquidas normalmente pierden menos peso, mientras que los bonato sódico al 10% para alcalinizar el entorno.15
que toman alimentos sólidos obtienen mejores resultados. La capacidad de los pacientes para tolerar alimentos sóli-
También influye la velocidad de drenaje de la bolsa gástrica dos varía dentro de amplios márgenes. Las variaciones depen-
y, si se hace un estoma gástrico demasiado grande, se pierde den del tipo de comida disponible, la dentición, los hábitos de
poco peso. De forma similar, cuando se produce la rotura de alimentación preoperatorios y los factores psicosociales. Bohn
la división o del estoma, los pacientes refieren aumento del y cols. observaron que existe una organización jerárquica en
apetito y pérdida temprana de la saciedad posprandial, así la facilidad para consumir los alimentos, siendo las carnes
como aumento de volumen de ingesta acompañado de recu- rojas sin cortar los más difíciles y los líquidos los más senci-
peración del peso. La inversión funcional de la gastroplastia llos.16 Los alimentos duros o crujientes, como frutos secos o
puede lograrse retirando el refuerzo del estoma; casi invaria- las galletas son fáciles de comer. En cambio, los sólidos blan-
blemente, ello tiene como consecuencia un aumento del dos, como el pan o los huevos revueltos, frecuentemente pro-
hambre y la recuperación de peso. ducen regurgitación. Estos autores también encontraron que
Debe advertirse a los pacientes que eviten comer y beber con orientación cuidadosa y comidas supervisadas por un die-
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al mismo tiempo; si tras una cantidad pequeña de comida sóli- tista se mejoraba la capacidad de los pacientes para tolerar los
alimentos más difíciles. Una mala dentadura dificulta la mas-
ticación; estrategias como cortar la comida en trocitos peque-
ños o picarla puede ser de gran ayuda; sin embargo, los pacien-
Tabla 20-1 NORMAS DE ALIMENTACIÓN
TRAS LA GASTROPLASTIA tes en esta categoría pueden recurrir a alimentos blandos y
sopas, con una correspondiente reducción de la pérdida de
1. Pare de comer cuando se sienta lleno o molesto. peso. La falta de atención a la hora de masticar, junto con
2. No beba y coma al mismo tiempo. estrés, depresión y la necesidad de comer rápidamente, tam-
3. No beba al menos hasta una hora y media después de comer. bién se asocian con dificultad para tolerar algunos sólidos.
4. Mastique exhaustivamente y compruebe el contenido de la boca
antes de tragarlo.
La motilidad gástrica puede influir en parte en la veloci-
dad de drenaje de la bolsa gástrica, y una motilidad excesiva es
172 Sección V • INTERVENCIONES

causa a veces de escasa pérdida de peso. El anticolinérgico dos de problemas de dentición suelen sufrir regurgitación más
propantelina se asoció con una excelente pérdida de peso en frecuentemente y, en consecuencia, evitan tomar sólidos,
dos pacientes con gastroplastias anatómicamente normales, siendo más dependientes de los líquidos y los alimentos blan-
pero con muy poca pérdida previa.17 La variabilidad en la pér- dos; en ellos, posible que la périda de peso sea menor.
dida de peso tras la gastroplastia y, de hecho, tras todas las No existen contraindicaciones estrictas para la gastro-
intervenciones restrictivas, pone de manifiesto que la canti- plastia (excepto el síndrome de Prader Willy), siempre que el
dad final de peso perdida depende de factores controlados pacientes se recupere de la anestesia. Las gastroplastias
tanto por el paciente tanto como por la intervención. La falta abiertas más sencilla, como la GVBS y la GVLM, que pue-
de instrucciones a los pacientes sobre el correcto plantea- den realizarse rápidamente a través de una pequeña incisión
miento de la intervención puede dar lugar a escasa pérdida de y con una morbilidad postoperatoria muy baja, son excelen-
peso. En este contexto, la cirugía no controla: tes opciones para los pacientes con obesidad mórbida que
presentan trastornos respiratorios graves, cardiopatía isqué-
• El tipo o contenido calórico de los alimentos; grasas, mica o diabetes mal controlada.
aceites y alimentos azucarados son fáciles de masticar. Lo más importante para el éxito de la intervención es la
• La frecuencia de las comidas; pequeñas cantidades educación preoperatoria. Deben explicarse a los pacientes
tomadas con frecuencia suman una cantidad mayor. los efectos de la cirugía sobre las técnicas de alimentación,
• La cantidad o calidad de los líquidos; pueden tomarse no olvidando que comer es, a menudo, una actividad social.
líquidos prácticamente sin límite. En la preparación de la cirugía es útil recurrir a folletos
• La cantidad de ejercicio que los pacientes hacen; los explicativos y a la intervención de grupos de apoyo conve-
pacientes con grandes discapacidades que les impiden nientemente organizados y supervisados.
realizar ejercicio físico a menudo pierden una canti-
dad de peso muy pequeña.
• La implacable presión de la sociedad occidental, en Z TRATAMIENTO POSTOPERATORIO
aumento en el resto del mundo, para consumir ali- Y SEGUIMIENTO
mentos y bebida más allá de lo necesario.
Después de la experiencia acumulada en el tratamiento de
Ante estos factores, que actúan en contra de la gastro- más de 3200 pacientes, he observado que, si no aparecen com-
plastia y de cualquier otra forma de cirugía para el trata- plicaciones, la recuperación es rápida y no tiene por qué ser
miento de la obesidad resulta ciertamente sorprendente que traumática ni para el paciente ni para el cirujano. Resulta vital
los pacientes evolucionen tan bien como lo hacen. un tratamiento respiratorio apropiado, en especial en los
pacientes que tienen complexión androide, donde la presión
de la grasa intraabdominal y, a menudo, la esteatosis hepática,
Z EVALUACIÓN Y PREPARACIÓN DEL PACIENTE se transmite a través del diafragma y reduce significativamen-
te la reserva respiratoria, aumentando el trabajo respiratorio
La evaluación preoperatoria se describe en otros capítulos cuando el paciente está tendido. Es esencial que el paciente se
de este libro; sin embargo, tres factores específicos son espe- recupere completamente de la anestesia de relajación al final
cialmente importantes en relación con las intervenciones de la intervención y se coloque en posición sentada en la cama
restrictivas. El primero de ellos es la motivación que, por del hospital. Debe restringirse lo más posible la posibilidad de
supuesto, tiene que evaluarse en función de criterios subje- de dejar al paciente intubado y trasladarlo a la unidad de cui-
tivos. Los cirujanos han de tener presente que sólo la opera- dados intensivos. La administración de oxígeno ha de plan-
ción facilitar, el proceso de pérdida de peso y que la gastro- tearse con criterio, sobre todo cuando la pCO2 está elevada,
plastia puede verse frustrada con facilidad. Por fortuna, esta como en el síndrome cardiovascular de la obesidad. En caso
situación no es normal, aunque puede darse en pacientes que contrario, es posible que se reduzca el impulso respiratorio,
están gravemente deprimidos y con baja autoestima y, de dando lugar a hipoxia e hipercapnia. La analgesia con opioi-
modo ocasional, en pacientes con trastornos de personali- des no deber ser excesiva, para evitar la disminución de la
dad. La capacidad para regurgitar con facilidad si no se mas- consciencia. Es muy útil la infiltración con anestésico local
tica bien o si se come en exceso es utilizada por algunos por bloqueo nervioso intercostal o rectal, o mediante infusión
pacientes para manipular y obtener la atención y simpatía de continua en la herida quirúrgica. Las infusiones continuas de
los miembros de la familia o de sus cuidadores médicos. La opioides pueden dar lugar a sobresedación, náuseas y alucina-
obstrucción orgánica debe descartarse mediante endoscopia ciones, en tanto que el uso de analgesia controlada por el pro-
o radiografía con contraste. Sin embargo, si estas pruebas pio paciente puede merecer la pena. Los antiinflamatorios no
son normales, puede ser necesaria ayuda psicológica. esteroideos (paracetamol o ácido acetilsalicílico por vía rectal
Los pacientes también deben ser capaces de adaptar sus u oral) contribuyen de forma eficaz y económica a aliviar el
pautas alimenticias a la gastroplastia. Esta adaptación no tiene dolor y permiten una movilización temprana. Las sillas recli-
por qué correlacionarse con la inteligencia. Algunos pacientes nables amplias son, a menudo, más confortables que la mayo-
no demasiado inteligentes cumplen bien las instrucciones ría de las camas hospitalarias y pueden facilitar el trabajo del
para la dieta, aunque, ciertamente, también puede darse el personal de enfermería más fácil.
caso contrario. Una buena dentadura es vital si se consumen Debe animarse a los pacientes a que se muevan lo antes
alimentos sólidos, y debe animarse a los pacientes a que cui- posible y vayan solos al baño; no son necesarios catéteres
den sus dientes, que se deteriorarán si la regurgitación es fre- urinarios de rutina, que pueden dar lugar a una infección de
cuente o se descuida el cepillado de los mismos. El uso de la vegija. Durante los primeros días del postoperatorio los
dentadura postiza, o incluso la ausencia de dientes, no es una pacientes han de ser sometidos a una estrecha monitoriza-
contraindicación para la cirugía de gastroplastia, pero cuando ción, prestando especial atención a la frecuencia cardíaca, la
se presenten será necesario proceder a impartir instrucciones temperatura y la saturación de oxígeno, ya que todos ellos
dietéticas más detalladas que en otros pacientes. Los afecta- son indicadores de posible daño intraabdominal o respirato-
Capítulo 20 • Gastroplastia vertical con banda 173

rio. El tratamiento con dosis bajas de heparina o heparina de El primer y más importante signo de una fuga gástrica es una
bajo peso molecular durante la hospitalización y la moviliza- taquicardia de aproximadamente 120, acompañada en general
ción temprana reducen las complicaciones tromboembólicas de dolor abdominal grave y que precede a una elevación de la
al mínimo, aunque algunos cirujanos añaden a este respecto temperatura corporal. La respiración se hace dolorosa y pue-
uso de medias de compresión o estimulación eléctrica en la de también presentarse dolor en el vértice del hombro izquier-
pantorrilla durante el período intraoperatorio. do, debido a irritación diafragmática. La saturación de oxíge-
Están recomendadas varias dietas. Puede comenzarse, no cae de inmediato y va seguida de dolor en la palpación
por ejemplo, con ingesta de líquidos orales el día de la inter- generalizada y distensión abdominal. La taquicardia por sí
vención y alimentos en puré al día siguiente. En un estudio sola es indicación suficiente para realizar una esofagografía
se mostró que podrían administrarse alimentos sólidos bajo por contraste o una exploración por tomografía computariza-
la supervisión directa de un dietista el día después de la ciru- da. La radiología de contraste es más útil para el diagnóstico
gía. Sin embargo, la práctica más frecuente es comenzar con de escapes si se usa contraste hidrosoluble (el bario está con-
sólidos, tras las indicadas instrucciones, una o dos semanas traindicado), preferiblemente con fluoroscopia. La tomogra-
después de la cirugía. Si los pacientes ingieren accidental- fía computarizada presenta la ventaja de permitir la localiza-
mente un bolo grande en la primera semana y regurgitan, se ción de acumulaciones de líquido, así como de mostrar que
producirá un dolor excesivo en la herida abdominal en el hay escapes y, en determinadas situaciones, puede usarse para
período de cicatrización. En contadas ocasiones, los pacien- dirigir el drenaje. Si se detecta una fuga, es necesario proceder
tes regurgitan repetidamente tan pronto como empiezan a a laparotomía o laparoscopia de inmediato. Durante la inter-
tomar líquidos o alimentos. Ello puede ser debido a un vención, en ocasiones resulta difícil la localización del escape,
hematoma perigástrico o a un edema estomal. El cuadro por lo que resulta útil la instilación en el estómago de azul de
remite en seis o siete días pero, hasta entonces, es necesario metileno a través de una sonda nasogástrica. Si se detecta una
administrar líquidos por vía intravenosa. fuga, debe suturarse con cuidado y puede colocarse un epi-
Las gastroplastia es una excelente intervención antirre- plón sobre el mismo como refuerzo.
flujo, siempre que la bolsa sea pequeña y el estoma no esté El lavado exhaustivo de la cavidad peritoneal, incluyendo
demasiado cerrado. No obstante, algunos pacientes padecen la pelvis, reduce la posibilidad de formación de abscesos. Se
ardor de estómago o dolor epigástrico después de tragar en colocan uno o más tubos de succión o drenaje grandes próxi-
la primera o en la segunda semana. Esto puede controlarse mos al sitio del escape. Si este no puede precisarse, el abdo-
mediante un antiácido preprandial, antagonistas H 2 o inhi- men debe lavarse y drenarse mediante múltiples tubos de
bidores de la bomba de protones. drenado, incluyendo un drenaje de los espacios subfrénicos y
Tras la intervención abierta, los pacientes puede recibir de la pelvis. Resulta útil un tubo de gastrostomía percutáneo
el alta dos días después de la cirugía (con la cirugía laparos- para la descompresión del estómago y, posiblemente, para la
cópica, incluso antes). Sin embargo, los pacientes deben estar alimentación posterior, eliminándose así la necesidad de son-
estables con una dieta a base de purés y sentirse cómodos da nasogástrica. A menudo, la causa del escape no está clara.
con la alimentación antes de irse a casa. El desgarro del estómago puede estar causado por el agujero
Debe hacerse un seguimiento de los pacientes hasta que de la grapadora TA-90 premium. Ello se pone de manifiesto
se consiga la estabilización del peso, normalmente al año de la por un defecto lineal de 2 cm en la parte central de la bolsa
intervención. El cambio de una forma de comer descontrola- anterior. Es más frecuente que las fugas midan apenas algu-
da a una restricción importante en el tipo y volumen de ali- nos milímetros, situándose, generalmente cerca de la línea de
mento es un problema ciertamente complejo. La mayoría de grapas. El desarrollo de una dilatación aguda del estómago
los pacientes necesita un asesoramiento regular para poder puede ser la causa de algunos escapes.
adaptarse sin problemas excesivos de regurgitación. Además Los abscesos subfrénicos se cuentan entre las consecuen-
de realizar las pertinentes recomendaciones sobre la técni- cias de fístula gástrica, normalmente del lado izquierdo, en
ca de alimentación requerida, debe animarse a los pacientes a general acompañados de atelectasia y derrame pleural, que
que hagan ejercicio regularmente y eviten los malos hábitos posteriormente puede infectarse dando lugar a empiema. El
alimenticios. También es a veces necesario que los pacientes absceso subfrénico es tratado por el radiólogo intervencionis-
reciban apoyo y asesoramiento sobre las consecuencias socia- ta mediante drenaje; sin embargo, el drenaje abierto es de efec-
les y psicológicas de la pérdida masiva de peso. to más contrarrestado. Cuanto mayores y más antiguos sean los
abscesos, mayor será la cavidad que se necesitará para extirpar-
los. Para el seguimiento de la evolución puede recurrirse a la
Z COMPLICACIONES POSTOPERATORIAS fistulografía. En ocasiones se desarrolla una fístula gástrica a
través de la cavidad del absceso y fuera del tubo de drenaje; sin
Después de la gastroplastia pueden observarse cuatro com- embargo, una vez que la cavidad se ha colapsado, el tubo pue-
plicaciones postoperatorias principales. de retirarse gradualmente y la fístula se resuelve de manera
La hemorragia, que normalmente surge del agujero de normal. Si esta asciende desde la bolsa gástrica, puede persis-
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la grapa o de la línea de grapado, normalmente se presente tir cuando se alimenta al paciente. En tal situación, un tubo
en forma de melena. Por norma, se autolimita con la ayuda de gastrostomía dentro del estómago distal permite la alimen-
de antiácidos y con la reposición de líquidos, aunque en oca- tación enteral, lo que favorece el cierre de la fístula.
siones poco frecuentes es posible que requiera intervención, La enfermedad tromboembólica es muy poco frecuente,
inicialmente en forma de endoscopia. Normalmente resulta aunque potencialmente mortal, por lo que se han establecido
eficaz la inyección en el área de sangrado de una solución de numerosos tratamientos de profilaxis. En este caso, lo más
adrenalina pero, si no es así, puede que sea necesaria una barato es probablemente lo más eficaz: se ha de proceder a la
laparotomía y el suturado del área de la hemorragia, posible- movilización temprana, insistiendo en que el paciente se
mente con guía endoscópica hasta el sitio de sangrado. levante de la cama y camine hasta el baño (esto significa que
La fístula gástrica puede ser una complicación de efec- no es necesario catéter urinario), camine por la planta cada
to fulminante si no se diagnostica y se trata de inmediato. día y mueva las pantorrillas frecuentemente. Estas prácticas
174 Sección V • INTERVENCIONES

son bien aceptadas por los pacientes que han sido preparados La dehiscencia de la línea de grapas ha supuesto siempre
en el período preoperatorio. Otras medidas preventivas sen- un problema desde la introducción del instrumental de gra-
cillas son la administración de heparina en dosis bajas pado. Sin embargo, se ha observado una reducción progre-
(5000 U 2 o 3 veces al día) durante la estancia en el hospital, siva de su incidencia con las mejoras en el diseño de dicho
estimulación eléctrica de las pantorrillas en la fase intraope- instrumental y se ha producido una virtual eliminación de
ratoria y uso de aspirina soluble como analgésico. Pueden esta complicación con la realización de las gastroplastias
usarse medias elásticas y de compresión secuencial y algunos divididas. En un principio, la rotura de la línea de grapas era
cirujanos han defendido la implantación de filtros en la vena una incidencia temprana; tras el desarrollo de instrumental
cava en casos de alto riesgo. más avanzado, los síntomas de rotura y de recuperación de
peso aparecen en un plazo de entre 3 y 6 años, o incluso más.
La corrección quirúrgica suele implicar la aplicación adicio-
Z FRACASO DE LA GASTROPLASTIA Y CIRUGÍA nal de grapas para crear una nueva bolsa pequeña. Si la bolsa
DE REVISIÓN es es grande, puede realizarse una nueva gastroplastia den-
tro de la anterior, junto con un nuevo estoma (v. figura 20-6).
El fracaso anatómico de la gastroplastia afecta inevitablemen- Si la bolsa continúa siendo pequeña y la dehiscencia es gran-
te a la pérdida de peso y a la calidad de vida del paciente, y de, puede usarse una nueva línea de grapas para aislar el área
puede necesitar de cirugía correctiva. El objetivo de la cirugía que ha fallado mientras se conserva el estoma anterior. Es
de revisión es restablecer la integridad anatómica de la gastro- más fácil y seguro convertir la GVB de Mason GVLM o
plastia y, en el caso de la GVLM y la GVBS, su consecución GVBS,19 que volver a abrir de nuevo una ventana en el estó-
no suele ser compleja. La cirugía es más problemática en la mago y aplicar una nueva malla en presencia de adherencias
GVB de Mason, en la que usa una malla como refuerzo esto- densas alrededor del área del estoma. Se ha de prestar aten-
mal, y en los casos en los que se ha realizado más de una inter- ción para comprobar que no se produce intersección entre
vención previa en el estómago. Existe una tendencia a la for- las líneas de grapas nueva y vieja, lo que podría dar lugar a la
mación de adherencias entre el epiplón mayor, el ligamento exclusión de una sección del estómago. La gastrogastrosto-
falciforme y las superficies inferiores del hígado y del estóma- mía, si se da, mejora esta situación.
go, especialmente en la región del estoma. La interposición Si el estoma creado es demasiado ancho, la pérdida de
del epiplón entre el estoma y el hígado hace que la separación peso es lenta desde el principio y el peso se recupera pronto.
de estas estructuras sea mucho más fácil, aunque es necesaria Cuando el estoma pierde su refuerzo y se dilata, ello suele ser
una revisión posterior. La disección de estas estructuras debe debido a erosión, y el resultado es casi siempre la recupera-
realizarse de modo que se haga sólo por fuera de la cápsula del ción del peso. Cuando la bolsa no está demasiado dilatada,
hígado, teniendo cuidado de evitar dañar el páncreas y tam- suele ser un nuevo refuerzo del estroma, aunque en este caso
bién los vasos que irrigan la curvatura menor. este debe colocarse por encima de la línea de grapas, de
Las adherencias pueden obstruir la transcavidad de los modo que se reduzca el volumen de la bolsa.
epiplones, dificultando la movilización del estómago y la Cuando el paciente se queja de aumento del apetito y de
colocación de una nueva línea de grapas, y poniendo en la capacidad de alimento, de pérdida más rápida de la sensa-
peligro al páncreas. En algunas ocasiones es útil dividir el ción de saciedad después de las comidas y de mayor tolerancia
epiplón mayor inferior hacia el antro para permitir un a los alimentos sólidos, con el consiguiente aumento de peso,
mejor acceso a la transcavidad de los epiplones. El paso de normalmente ello suele deberse a rotura de la división o dila-
una sonda bucográstica hacia el interior del estómago es tación del estoma. La dilatación de una bolsa con un estoma
esencial como ayuda para la identificación de la anatomía normal a menudo produce una recuperación lenta del peso y
gástrica y la situación del estoma. La adhesión del epiplón un aumento de la capacidad de alimento, pero no se mantiene
o de la curvatura mayor del estómago al hígado presenta ninguna intolerancia al alimento existente. Una dilatación
riesgo de hemorragia de este órgano, normalmente como excesiva de la bolsa puede llevar a una situación anómala de
resultado de una lesión por tracción.18 escasa pérdida de peso acompañada de regurgitación excesiva.

Figura 20-6 Repetición de la


gastroplastia, dentro de la bolsa
dilatada debida a la dehiscencia
de la línea de grapas en bolsas
grandes y pequeñas.
Capítulo 20 • Gastroplastia vertical con banda 175

Esta situación puede ser debida a un efecto sumidero (v. figu-


ra 20-7), en el que el llenado de la bolsa grande tiene el efecto
de cierre del estoma. Todo ello se asocia a reflujo nocturno y
puede incluso inducir a síntomas de aspiración de tos, asfixia
o neumonía en una situación análoga a la estenosis pilórica.
En determinados pacientes se observar pérdida progresiva y,
en algunos casos, excesiva, de peso. La estenosis estomal se
manifiesta por sí misma como con deterioro progresivo de la
capacidad para tolerar alimentos sólidos y aumento en la fre-
cuencia de regurgitación. El ardor de estómago y la esofagitis
son consecuencias normales del proceso y el paciente tiende a
volver a una dieta líquida. Su inicio, después de varias semanas
de intolerancia al alimento sólido acompañada de ardor de
estómago o indigestión, es indicativo de erosión del refuerzo
estomal. Sin embargo, si esto ocurre en cuestión de horas y va
acompañado de hipersalivación, la causa es probablemente
una obstrucción por un bolo. Sumidero
La estenosis puede ser debida a una infección del mate-
rial de refuerzo del estoma y la reacción del tejido de cicatri-
zación a su alrededor. En ocasiones ello conduce finalmente
a la erosión del material de refuerzo del estoma, que normal-
mente va acompañada de indigestión y del empeoramiento
de la regurgitación. Algunos pacientes no pueden tolerar un
estoma normal. Tal situación se asocia a una mala dentadura
o a falta de concentración en la masticación. Como medio
diagnóstico se suele recurrir a la endoscopia, que puede ser
terapéutica cuando cabe la posibilidad de que una sutura o
un anillo erosionados sean cortados y retirados con ayuda de
unas tijeras endoscópicas. Sin embargo, la retirada de la
malla erosionada suele requerir laparotomía. La retirada de Figura 20-7 Efecto sumidero en la gastroplastia que da lugar a la
sólo el refuerzo del estoma revierte esencialmente la gastro- obstrucción del estoma debido a la presión sobre este de los contenidos
plastia, siendo inevitable la recuperación del peso. estancados.
A menudo se intenta la dilatación endoscópica del estoma,
aunque normalmente ello no supone ningún beneficio a largo
plazo y puede empeorar la situación, induciendo lesión y pos- una gastroplastia es la endoscopia, que permite medir la lon-
terior cicatriz en el estoma. La mayoría de los endoscopios gitud de la bolsa y realizar una estimación de su anchura; esto
presentan un diámetro de 1 cm por lo que el paso cómodo de puede llevar al diagnóstico de la dilatación de la bolsa y del
este a través del estoma descarta el diagnóstico de estenosis. efecto sumidero. La presencia de rotura de la línea de grapas
En algunos pacientes, sin embargo, un estoma de 1 cm sigue es fácil de ver desde el interior de la bolsa o desde el cuerpo
siendo demasiado estrecho y puede ser necesaria la revisión. del estómago mediante una maniobra de reversión completa.
La revisión normalmente implica localizar el refuerzo Si el gastroscopio atraviesa exactamente el estoma, puede asu-
del estoma, retirarlo y remodelar el estoma de modo que sea mirse que el diámetro estomal es el adecuado. Sin embargo,
más grande. Ello es es más fácil de conseguir en la GVBS y si pasa muy fácilmente es posible que el estoma sea demasiado
en la GVLM; en el estoma se usa una sonda para calibrar el grande. Se recomienda que los cirujanos especialistas en obe-
nuevo tamaño del estoma. En la GVB de Mason, tiene que sidad realicen las endoscopias a sus propios pacientes, debido
quitarse la vieja malla y se inserta una más larga, procedi- a que los informes de los médicos no experimentados en gas-
miento que resulta más difícil. troplastia son a menudo confusos o incompletos.
Inadvertidamente puede producirse regurgitación agu-
da en un paciente que, por lo demás, se recupera bien.
Normalmente el proceso se debe a obstrucción por bolo ali- Z INTERVENCIONES DE CONVERSIÓN
mentario. la endoscopia permite establecer un diagnóstico y
suele aliviar la situación. La extracción total de los dientes da La inversión de la gastroplastia es necesaria en aproximada-
en ocasiones lugar a la misma situación hasta que se comien- mente el 4% de los pacientes, en general como resultado de la
ce a usar dentadura postiza o se coloquen implantes denta- intolerancia al alimento. Otros pacientes piensan de forma
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

les. También pueden causar vómitos agudos una medicación errónea que, después de haber perdido el exceso de peso, serán
nueva, especialmente si los comprimidos son grandes y con capaces de controlarse sin ayuda de la gastroplastia. La inver-
recubrimiento entérico. sión funcional de la gastroplastia se consigue con facilidad y
La esofagografía puede mostrar la rotura de la línea de puede realizarse por laparoscopia quitando, o simplemente
grapas. No obstante, es también necesario tomar radiografías dividiendo, el refuerzo del estoma.20 Ello permite el paso del
con el paciente en posición de decúbito lateral, de modo que alimento al estómago distal y favorece la tolerancia de todos
se muestre el paso del contraste a través de la línea de grapas los alimentos en cantidades crecientes como el estoma dilata-
antes de que haya entrado mucho más contraste en el estóma- do sin refuerzo. Incluso en el paciente más motivado, se
go, oscureciendo la línea de grapas. La esofagografía tiene observa de manera invariable recuperación de peso y algunos
escaso valor en la valoración del estoma, debido a que la ima- pacientes solicitan ayuda quirúrgica adicional. Un método
gen es sólo bidimensional. El medio más útil para estudiar alternativo de reversión es realizar una gastrostomía antral y
176 Sección V • INTERVENCIONES

pasar una endocortadora lineal por cualquier lado del estoma Z BIBLIOGRAFÍA
dividiendo, de este modo, la partición. No es necesario quitar
la línea completa de grapas para invertir la gastroplastia. 1. Gomez CA: Gastroplasty in the surgical treatment of morbid obesity.
En el caso de rotura debido a una causa claramente iden- Am J Clin Nutr 1980;33:406-415.
2. Pace WG, Martin EW, Tetirick T, et al: Gastric partitioning for
tificable y corregible en un paciente que ha tenido un buen morbid obesity. Ann Surg 1979;190:392-400.
control del peso y buena tolerancia a la gastroplastia, no está 3. Tretbar LL, Taylor TL, Sifers EC: Gastric plication for morbid obes-
indicada la conversión en otro procedimiento. Si el paciente ity. J Kans Med Soc 1976;77:488-490.
ha tenido un problema importante de intolerancia a la comi- 4. Johnston D, Dachtler J, Sue-Ling H, et al: Obes Surg 2003;13:
da, es en ocasiones aconsejable la conversión en derivación 10-16.
5. Long M, Collins JP: The technique and early results of high gastric
gástrica o en un procedimiento de malabsorción. Si la bolsa es reduction for obesity. Aust N Z J Surg 1980;50:146-148.
pequeña y se mantiene intacta, puede unirse a ella una rama 6. Laws HL: Standardized gastroplasty orifice. Am J Surg 1981;141:
en Y de Roux y excluir el estómago distal mediante división 393-394.
con una endocortadora lineal. Si la bolsa está dilatada o rota, 7. Wynne-Jones G: Vertical ligated gastroplasty by clamp, cut and
suture: a series of 504 cases dating back to 1977. Obes Surg
puede ser factible una intervención para realizar una bolsa de 1994;4:344-348.
Fobi o similar. Esta conversión, en particular, está indicada en 8. Mason EE: Development and future of gastroplasties for morbid
el ámbito de la esofagitis asociada con reflujo biliar. obesity. Arch Surg 2003;138:361-366.
En el caso de cirugías de revisión múltiples, el estómago 9. Chua TY, Mendiola RM: Laparoscopic vertical banded gastroplasty.
presenta a veces demasiadas adherencias, por lo que es peligro- Obes Surg 1995;5:77-80.
10. Melissas J: Technical modification of laparoscopic vertical banded
so proceder a cirugía adicional. Una solución eficaz y quirúr- gastroplasty. Obes Surg 2003;13:132-135.
gicamente sencilla es la conversión en ileogastrostomía.21 El 11. Mason EE: Surgical treatment of obesity. Major Probl Clin Surg
único acceso necesario al estómago es el antro, que en general 1981;26:480.
está poco afectado por las adherencias de revestimiento. Si es 12. Mason EE, Doherty C: Vertical banded gastroplasty for morbid obes-
ity. Dig Surg 1997;14:355-360.
necesario, puede eliminarse el refuerzo del estoma. En esta 13. Jamieson AC: Weight loss after gastroplasty. Probl Gen Surg
intervención se excluye del flujo de comida todo el intestino 1992;9:290-297.
delgado, con excepción de un segmento de 70 cm, y la parte 14. Urbain P: The Proring band, a new device in the field of restrictive
excluida se vacía isoperitálticamente en el antro, evitando surgery: preliminary experience. Obes Surg 2002,12:588-591.
sobrecrecimiento bacteriano y el síndrome del asa ciega. Se ha 15. Jamieson AC: Unusual clinical problem associated with obesity
surgery. Med J Aust 1993;159:632.
descrito la conversión de gastroplastia en la colocación de una 16. Bohn M, Way M, Jamieson AC: The effect of practical dietary coun-
banda gástrica, tanto abierta como por laparoscopia, pero no seling on food variety and regurgitation frequency after gastroplasty
se han publicado los resultados a largo plazo. for obesity. Obes Surg 1993;3:23-29.
La colocación de una banda gástrica puede convertirse 17. Jamieson AC: Propantheline as an adjuvant to weight loss after
vertical gastroplasty. Obes Surg 1997;7:359-362.
en gastroplastia después de retirar la banda; sin embargo, es 18. Lord MD, Gourevitch A: The peritoneal anatomy of the spleen, with
necesario romper la gruesa cápsula fibrosa de la banda para special reference to the operation of partial gastrectomy. Br J Surg
que el estómago se expanda y se facilite la colocación de la 1965;52:202-204.
línea de grapas. La derivación gástrica puede convertirse en 19. Mason EE, Cullen JJ: Management of complications in vertical
gastroplastia, especialmente en situaciones de una gran dila- banded gastroplasty. Curr Probl Surg 2003;60:33-37.
20. Bird PA, Jamieson AC: Functional laparoscopic reversal of a Long
tación de la bolsa, aunque sólo con dificultad ya que debe gastroplasty. Aust N Z J Surg 1997;67:734-735.
reintegrarse la continuidad gástrica y construirse una nueva 21. Cleator IGM, Gourlay RH: Ileogastrostomy for morbid obesity.
bolsa y un estoma. Can J Surg 1988;31:114-116.
21
Gastroplastia vertical con banda laparoscópica
J.K. Champion, M.D., F.A.C.S., y Michael Williams, M.D.

La cirugía restrictiva gástrica para la pérdida de peso ha trafluoroetileno (PTFE) mediante calibración interna con
experimentado una evolución constante desde la introduc- una sonda de 32F. Además, la línea de grapado se seccionaba
ción en 1971 de la gastroplastia horizontal a cargo de Ma - utilizando una endograpadora lineal cortante. Estos autores
son y cols., de la Universidad de Iowa.1 Hubieron de pasar encontraron dificultades debidas a la limitación del instru-
10 años hasta la aparición en 1981 de la bolsa gástrica verti- mental y problemas técnicos relacionados con la creación de
calizada, y otros 6 hasta el perfeccionamiento de la configu- la ventana circular. La grapadora circular precisaba un puerto
ración recomendada por Mason en 1986, es decir, una bolsa de 33 mm, y la limitación de movimientos impuesta por los
vertical sin partición, calibrada y medida, de menos de 30 mL puertos, junto con la disminución de la sensación táctil inhe-
y con un orificio de salida estabilizado con una banda de malla rente a la laparoscopia, dificultaba la manipulación del yun-
de polipropileno de 1,5 cm por 5 cm como puede verse en la que y la formación de la ventana, lo que daba lugar a una
figura 21-1.2 construcción defectuosa de la bolsa y del orificio de salida,
Mason hizo hincapié en los aspectos técnicos de la siendo ambos aspectos cruciales para el éxito de la GVB.
intervención y recomendó el uso de una sonda de calibre 32F Lonroth y cols. también empezaron a utilizar la GVB
para crear la bolsa gástrica (o reservorio), empleando una laparoscópica en octubre de 1993, pero no publicaron sus
grapadora no cortante de 90 mm con cuatro líneas de grapas, resultados hasta 1996.4 Aunque seguían el método tradicional
midiendo la longitud exacta de la banda de 1,5 cm de ancho de Mason, introdujeron importantes diferencias técnicas. El
para calibración del orificio de salida (sin sonda), y utilizando sitio elegido para crear la ventana circular se encontraba 4 o
una banda de malla de propileno de una sola capa, que queda 5 cm por debajo del ángulo de His y a 3 cm de la curvatura
incorporada a la pared del orificio de salida con el fin de menor, y la grapadora circular la disparaban tras la introduc-
minimizar el riesgo de erosión. Es importante tener en ción de un dilatador de 27F a lo largo de la curvatura menor
cuenta estos aspectos específicos a la hora de comparar las del estómago. La banda utilizada era de PTFE y su diámetro
publicaciones de distintos cirujanos, ya que la técnica pre- no se medía por su longitud total, sino que se determinaba
senta amplias variaciones y no se encuentra estandarizada. mediante calibración interna con una sonda 32F. La bolsa no
La escasa pérdida de peso y las altas tasas de morbilidad y se medía ni se calibraba, sino que se seccionaba con una endo-
revisión inherentes a las técnicas gástricas restrictivas puras grapadora lineal no cortante de 60 mm con cuatro hileras
desde su inicio propiciaron la evolución y la experimenta- de grapas. Aunque la GVB laparoscópica se describía como
ción. Hasta el 30% de los pacientes sometidos a cirugía «técnicamente viable», seguía habiendo cuestiones técnicas
abierta presentan patologías comórbidas significativas, por
complicaciones de la herida quirúrgica, entre las que se in-
cluyen infección, seroma, dehiscencia y hernia incisional,
por lo que no es de extrañar que se terminase recurriendo a
una intervención mínimamente invasiva capaz de perfeccio-
nar la técnica y de reducir las complicaciones.
Chua y Mendiola fueron los primeros cirujanos en llevar
a cabo una gastroplastia vertical con banda (GVB) por vía
laparoscópica en febrero de 1993, aunque no publicaron sus
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

resultados hasta 1995.3 En los dos primeros casos emplearon


una técnica asistida por laparoscopia en la que se efectua-
ba una pequeña incisión en la línea media para la aplicación de
la grapadora circular y la colocación de la banda y, en abril
de 1993, realizaron la primera intervención totalmente lapa-
roscópica. Estos autores trataron de reproducir la técnica de
Mason, midiendo 9 cm desde el ángulo de His a lo largo de la
curvatura menor y creando una ventana con una grapadora
circular acoplada a un dilatador de calibre 32F. Posteriormente
procedían a estabilizar el orificio de salida con una banda pro-
tésica, aunque sin medir la bolsa, y medían la banda de polite- Figura 21-1 GVB laparoscópica de Mason.

177
178 Sección V • INTERVENCIONES

importantes a la hora de tratar de adaptar una operación de IMC mayor de 50 kg/m² alcanzan una pérdida de peso sig-
cirugía abierta a una intervención mínimamente invasiva. nificativamente menor que los que no son golosos o perte-
Según estos autores, tanto la tasa de conversión en cirugía necen a cohortes de menor IMC.6 Aunque creemos firme-
abierta como la de reintervención inmediata por problemas de mente que los pacientes de estos dos subgrupos no son
la línea de grapado e infección fueron del 8%. candidatos adecuados para la cirugía restrictiva gástrica,
Nuestro grupo comenzó a realizar GVB laparoscópica debe respetarse su decisión siempre que otorguen el consen-
en 1995, tras haber perfeccionado la técnica tanto en anima- timiento informado tras una información exhaustiva en la
les de experimentación como en cadáveres.5 Observamos que se les expliquen las alternativas y los resultados. También
que la creación de una ventana próxima a la curvatura menor debe respetarse la decisión de aquellos pacientes que no sean
y la sección del estómago proximal para formar una estruc- candidatos adecuados a la GVB y que se opongan a pasar por
tura tubular corta llevadas a cabo en la GVB eran las mismas una intervención que incluya un componente malabsortivo,
que las de la gastroplastia de Collis utilizada en las interven- como la derivación gástrica en Y de Roux. Tampoco reco-
ciones de alargamiento esofágico para el tratamiento de la mendamos la GVB en pacientes con diabetes mellitus,
enfermedad por reflujo gastroesofágico complejo. En ambos hiperlipidemia y enfermedad por reflujo gastroesofágico
tipos de intervenciones utilizábamos la técnica de grapadora grave, ya que la derivación gástrica ofrece un mejor control
circular, debido a que en aquellos momentos nos dedicába- a largo plazo de estos trastornos.
mos principalmente a la cirugía antirreflujo. Pronto nos A la hora de seleccionar los candidatos que puedan some-
encontramos con los mismos problemas técnicos menciona- terse a una técnica mínimamente invasiva, existen otras limi-
dos por Chua y Mendiola, es decir, la dificultad para mani- taciones a tener en cuenta. En general, los pacientes con un
pular el yunque y situarlo con precisión en una posición IMC menor de 50 kg/m² o un peso inferior a 160 kg, constitu-
adyacente a la sonda, con el fin de crear una bolsa con un ción física ginecoide y sin antecedentes de cirugía abdominal
orificio de salida de tamaño homogéneo y reproducible. abierta, son los que presentan mayores posibilidades de éxito
Según nuestra experiencia, la línea de grapado circular sue- de la GVB laparoscópica en manos de cirujanos con poca
le sufrir dehiscencia en el sitio en el que se cruza con la línea experiencia. A medida que se gana experiencia en las técnicas
de grapado lineal y es necesario suturarla para reforzarla y de cirugía bariátrica mínimamente invasiva, pueden conside-
repararla, por lo que la técnica no inspira confianza. Además, rarse como candidatos los pacientes de mayor peso, con cons-
la gran incisión necesaria para la introducción laparoscópica titución física androide o con antecedentes de cirugía abdomi-
del mango circular debe cerrarse con sutura, lo que plantea nal abierta. La presencia de hepatomegalia masiva supone un
dificultades en un paciente con obesidad mórbida y es un factor de riesgo de conversión en cirugía abierta. De acuerdo
posible lugar de aparición de futuras hernias. con nuestra experiencia, el tamaño del hígado se puede dismi-
A partir de la experimentación en el laboratorio diseña- nuir preoperatoriamente animando al paciente a perder peso y
mos una técnica laparoscópica que permite eliminar la gra- a reducir la ingesta de carbohidratos, evitando las féculas, la
padora circular y utilizar únicamente la grapadora lineal pasta y los dulces en los diez días previos a la intervención.
introducida a través de puertos de 12 mm, con la que se rea- Además, el cirujano debe ser competente en lo que se refiere a
liza una cuña a partir de un «segmento» de 5 cm por 5 cm las suturas laparoscópicas y las técnicas de disección avanzadas
de la parte superior del fondo gástrico. Mediante esta técni- con ambas manos con el fin de finalizar la intervención con
ca se crea un pequeño tubo gástrico de 20 mL de calibre, que seguridad. En primer lugar debe ser capaz de realizar de forma
resulta reproducible y que se puede emplear tanto en las eficaz una GVB mediante cirugía abierta y posteriormente
intervenciones de alargamiento esofágico como en la GVB. efectuar un aprendizaje tutelado de la cirugía bariátrica por vía
Se trata de una modificación, sencilla desde el punto de vis- laparoscópica y ser supervisado en sus primeras intervenciones
ta técnico, que evita los problemas relacionados con la gra- de este tipo, con objeto de reducir la morbilidad de los pacien-
padora circular y la incisión y que recrea un ángulo de His tes durante la fase inicial de la curva de aprendizaje. Para
agudo que puede contribuir a prevenir el reflujo. En el pre- alcanzar una competencia probablemente se necesitan más de
sente capítulo se revisan la técnica laparoscópica y los resul- 100 intervenciones. El cirujano no debe enfrentarse a reopera-
tados de la GVB con ventana circular de tipo Mason y de la ciones laparoscópicas hasta haber superado con éxito al menos
GVB en cuña utilizando solamente grapadora lineal. 100 intervenciones bariátricas primarias por vía laparoscópica
que incluyan sutura y grapado. La técnica laparoscópica no
requiere una evaluación adicional aparte del bagaje bariátrico
Z SELECCIÓN Y EVALUACIÓN DE LOS PACIENTES preoperatorio estándar del cirujano.

Los candidatos a GVB laparoscópica deben cumplir los crite-


rios establecidos por los National Institutes of Health en lo que Z TÉCNICA QUIRÚRGICA
se refiere al tratamiento quirúrgico de la obesidad clínica-
mente grave. Los pacientes deben exceder en 45 kg su peso Técnica de la GVB en cuña laparoscópica
ideal o tener un índice de masa corporal (IMC) de 40 kg/m²
o mayor si no presentan patologías mórbidas asocia- En esta técnica, se ingresa al paciente la misma mañana de
das. También pueden incluirse los pacientes con un IMC de la intervención y se le administra profilaxis antibiótica y una
35 kg/m² a 39 kg/m² que presenten comorbilidad clínicamente heparina de bajo peso molecular (40 mg de enoxaparina). La
importante como, entre otras, hipertensión, apnea del sueño, intervención se efectúa con anestesia general con intubación
diabetes mellitus, hiperlipidemia o artrosis grave (p. ej., que orotraqueal y sondaje vesical. El paciente se coloca sobre la
requiera una sustitución articular total o fusión vertebral). mesa de quirófano en decúbito supino y con perneras para
Otro aspecto a tener en cuenta es si el paciente tiene conseguir el máximo grado de anti-Trendelenburg. El ciru-
preferencia por el dulce o presenta un IMC de 50 kg/m² o jano y el operador de cámara se sitúan a la derecha del
mayor. Sugerman y cols. han demostrado en un ensayo alea- paciente, mientras que el ayudante y el instrumentista lo
torizado que los pacientes golosos y los que presentan un hacen a la izquierda.
Capítulo 21 • Gastroplastia vertical con banda laparoscópica 179

El primer trócar en ser situado es para la cámara. Para mago desde la curvatura mayor y horizontal respecto a la
ello se efectúa una incisión de 12 mm a 15 cm por debajo del ventana de la curvatura menor. Se efectúan dos o tres dispa-
apéndice xifoides, inmediatamente a la izquierda de la línea ros en posición horizontal hasta que el extremo de la grapa-
media y dentro de la vaina del músculo recto izquierdo. Para dora sobrepasa la sonda en la curvatura menor. Luego se
acceder al abdomen bajo visión directa se emplea un trócar recoloca verticalmente la grapadora adyacente a la sonda y se
Opticview con una óptica de 10 mm y 0° sin insuflación. Se vuelven a hacer varios disparos a través del ángulo de His,
inicia la insuflación hasta 15 mm y se inspecciona el abdo- con lo que se secciona y se separa una cuña gástrica de 5 cm
men minuciosamente. A continuación se introducen los por 5 cm. Con una ligera manipulación, es posible extraer
5 trócares restantes bajo visión directa en las posiciones este segmento resecado a través del puerto de 12 mm del
indicadas en la figura 21-2. En total son cuatro puertos de cuadrante superior izquierdo, sin necesidad de ampliar el
5 mm y dos de 12 mm; el segundo de estos últimos se sitúa orificio. En caso de que sea necesaria una ampliación, el ori-
en el cuadrante superior izquierdo debajo del reborde costal ficio se sutura al final de la intervención. La línea de grapa-
y es el que se utiliza como puerto de grapado. do de la bolsa se sutura con seda continua 2-0, dado que el
Tras colocar al paciente en posición de anti-Trendelen- paciente empieza a ingerir líquidos en el postoperatorio
burg, se introduce una pinza de Allis con cremallera de inmediato. Para la colocación de la banda alrededor de la
5 mm a través del trócar subxifoideo por debajo del lóbulo bolsa se sustituye la sonda de 50F por otra de 30F.
izquierdo del hígado y se fija al diafragma inmediatamente Se prepara una banda de malla de polipropileno de
por encima del hiato esofágico para efectuar tracción. 1,5 cm por 7 cm que se solapa 1 cm en los extremos, con el
Mientras el ayudante tracciona lateralmente el fondo gástri- fin de crear una circunferencia de 5 cm. Por lo tanto, la ban-
co, el cirujano secciona las inserciones diafragmáticas a lo da se fija con una sutura permanente a 1 cm de cada extremo
largo del pilar izquierdo y el ángulo de His con un bisturí para facilitar su colocación. La banda se introduce por el
eléctrico monopolar. De esta forma se define el ángulo de puerto de 12 mm, se sitúa alrededor de la porción distal de
His y se facilita la aplicación de la grapadora para el disparo la bolsa a través de la ventana creada 5 cm por debajo de la
final y la sección transversal de la bolsa superior. A conti- unión esofagogástrica, se solapa 1 cm y se sutura con dos
nuación se miden 5 cm a partir del ángulo de His siguiendo puntos de colchonero horizontales de Ethibond 0 con nudo
la curvatura menor y se crea una ventana en la transcavidad extracorpóreo. En la figura 21-3 puede verse el resultado de
de los epiplones inmediatamente adyacente a la pared gástri- la intervención. A continuación, se retira la sonda y se efec-
ca mediante disección roma cuidadosa y utilizando el bistu- túa una esofagogastroscopia intraoperatoria, para compro-
rí eléctrico bipolar para hemostasia. Esta ventana se utiliza- bar que el tamaño de la bolsa y del orificio de salida es el
rá para colocar la banda alrededor de la bolsa al final de la apropiado y que no existen fugas de las líneas de grapado.
intervención y también sirve de punto de referencia mien- A continuación se cubre la cara anterior de la banda con un
tras se grapa la bolsa. parche de epiplón que se fija con una sutura medial. Se irri-
Se continúa la disección horizontalmente desde la ven- ga el abdomen con suero fisiológico y se retiran los trócares
tana de la curvatura menor hasta la curvatura mayor del bajo visión directa para descartar la presencia de hemorra-
estómago. Se liberan los vasos gástricos cortos a lo largo de gia. Los orificios de los trócares no se cierran a nivel de la
toda la porción superior del fundus hasta el pilar izquierdo y fascia. Las incisiones cutáneas se cierran con sutura intra-
el ángulo de His. Para realizar la hemostasia empleamos un dérmica simple 3-0 y suturas cutáneas adhesivas.
bisturí eléctrico bipolar, pero se puede aplicar cualquier otra
fuente de energía. A continuación se sitúa una sonda de 50F Técnica de la GVB de Mason laparoscópica
a lo largo de la curvatura menor con objeto de crear y cali-
brar la bolsa durante el grapado. La grapadora lineal de La técnica tradicional con grapadora circular, la posición de
12 mm (Endo GIA-2) con carga de 45 mm por 3,5 mm se los trócares, la disección y creación de la ventana de 5 cm en la
introduce a través del puerto de 12 mm situado en posición curvatura menor debajo del ángulo de His, y la movilización
subcostal izquierda y se aplica transversalmente en el estó- de los vasos gástricos son las mismas que se acaban de descri-
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Figura 21-2 Emplazamiento de los trócares para la GVB laparoscópica. Figura 21-3 GVB en cuña laparoscópica.
180 Sección V • INTERVENCIONES

bir. La ventana sirve de punto de referencia para la creación de gar con grapas de distinto tamaño y longitud. Si se detecta
la bolsa y constituye el sitio definitivo para la colocación de la una hemorragia activa durante la intervención, es necesario
banda. Se coloca una sonda de 50F en la curvatura menor y se disponer de dos insufladores y dos sistemas de aspiración,
realiza una sutura de colchonero adyacente a la sonda a nivel aunque en condiciones normales sólo utilizamos uno de
de la ventana, para reaproximar ajustadamente las paredes cada. También hay que tener preparado el instrumental
anterior y posterior del estómago y facilitar así la introducción de cirugía abierta en caso de que se requiera una conver-
del yunque de la grapadora circular. Se efectúa una incisión de sión de urgencia. El quirófano de cirugía bariátrica laparoscó-
2 cm en la línea media clavicular del cuadrante superior pica debe estar equipado con una mesa de operaciones reforza-
izquierdo del abdomen, inmediatamente por debajo del rebor- da y las instalaciones deben contar con camas, sillas, básculas y
de costal. A través de esta incisión se introduce en el abdomen demás mobiliario adaptado para pacientes con sobrepeso.
el yunque de una grapadora circular de 21 mm con punta cor-
tante, y la fuga de aire se controla aplicando temporalmente al
orificio dos pinzas de campo. El yunque se sitúa en posición Z CUIDADOS POSTOPERATORIOS
posterior al estómago en la transcavidad de los epiplones, y la Y CRONOGRAMA CLÍNICO
punta cortante y el vástago del yunque se hacen penetrar en el
estómago contra la sonda a nivel de la ventana gástrica. Se La implementación de un cronograma clínico para la atención
retira la punta y el yunque se acopla al vástago de la grapadora del paciente sometido a cirugía bariátrica resulta beneficioso
introduciéndolo en la pared abdominal a través de la incisión para el paciente, el hospital y los médicos.7 Consiste en un
anterior de 2 cm tras retirar las pinzas de campo. A continua- plan terapéutico integral que afecta a todo el personal sanita-
ción se cierra la grapadora, se dispara y se retira. La incisión se rio implicado en la atención del paciente. Dicho cronograma
vuelve a aproximar con pinzas de campo para continuar con la sirve de guía o esquema de acción preestablecido, y puede
insuflación. A través del puerto de 12 mm del cuadrante supe- contribuir a reducir los errores de la medicación y el trata-
rior izquierdo del abdomen se introduce una grapadora lineal miento mediante instrucciones claras por escrito. También
de 45 mm por 3,5 mm (Endo GIA-2) que se sitúa a través de la ayuda a reducir gastos, evitando pruebas y procedimientos
ventana circular contra la sonda orientada verticalmente. Se innecesarios y disminuye la carga de trabajo de los médicos
efectúan varias descargas hasta que se logra la sección trans- gracias a la utilización de pautas de solicitud estandarizadas.
versal completa de la bolsa, excepto la parte distal del orificio En la tabla 21-1 se muestra un ejemplo del cronograma clíni-
de salida en la curvatura menor. La línea de grapado se sutura co que utilizamos en la GVB laparoscópica.
con seda 2-0 y la parte distal de la bolsa se rodea con la banda Tras la intervención se administran al paciente sueros
como se ha descrito previamente. La incisión de 2 cm de la por vía intravenosa y medicación para el dolor por la noche,
pared abdominal anterior se cierra con una aguja peritoneal y e inmediatamente se pasa a probar la tolerancia a una dieta
sutura permanente y el resto de los orificios de los puertos se líquida. Para minimizar el riesgo de tromboembolia pulmo-
dejan como se ha descrito previamente. nar se aplica un sistema de compresión secuencial de las
extremidades. A la mañana siguiente se da de alta al pacien-
te, siempre que sea capaz de tolerar los líquidos y los analgé-
Z INSTRUMENTAL sicos por vía oral y se encuentre clínicamente estable. En
caso de aparecer algún signo clínico de fuga (p. ej., fiebre de
La cirugía bariátrica laparoscópica requiere un instrumental más de 38,3 °C, taquicardia mantenida de más de 120 lpm
de mayor longitud que el estándar de 32 cm debido al mayor durante más de 4 horas o náuseas persistentes), se practica
perímetro abdominal del paciente y a la ubicación elevada de un tránsito esofagogástrico con gastrografina.
la unión gastroesofágica de los pacientes con obesidad mórbi- Al alta se prescriben analgésicos orales y un inhibidor
da. Las pinzas de tracción, los portaagujas y las tijeras deben de la bomba de protones durante 30 días. La dieta postope-
tener una longitud de 45 cm. Actualmente se dispone de tró- ratoria consiste en 2 semanas a base de líquidos y otras 3 de
cares de 5 mm y 12 mm de diámetro y 15 cm de longitud. Un dieta blanda antes de pasar a la alimentación normal. Los
aspecto controvertido es tomar la decisión sobre cuál es la pacientes deben ponerse en contacto con la consulta en caso
mejor técnica de tracción hepática. Nuestro equipo utiliza una de presentar fiebre mayor de 38,3 °C, vómitos persisten-
pinza de Allis con cremallera, que se aplica a través del puerto tes de más de 6 horas o un cambio apreciable del dolor abdo-
subxifoideo y se fija al diafragma por encima del hiato esofági- minal. Se les prohíbe la ingesta de antiinflamatorios no este-
co. Este instrumento, sencillo, barato y reutilizable no nos ha roideos y derivados de ácido acetilsalicílico para prevenir la
fallado nunca en las más de 1300 intervenciones bariátricas ulceración de la bolsa y la erosión de la banda.
realizadas en los últimos 8 años y tiene la ventaja de que no A los 5 días del alta se establece un primer contacto tele-
obliga a disponer de un ayudante que sujete el retractor, ni de fónico con el paciente y se le cita a revisión a las 3 semanas,
más brazos o pinzas para estabilizar. El cirujano puede elegir a los 3 meses, a los 6 meses y al año. Los controles analíticos,
entre diversas opciones para la hemostasia laparoscópica, entre en los que se incluyen hemograma completo, la bioquímica
las que se incluyen el bisturí eléctrico, el bisturí armónico y los sérica habitual y niveles de hierro y vitamina B12, se realizan
clips metálicos. Cualquier método es bueno en manos expertas a los 6 y 12 meses y, a partir de entonces, con periodicidad
y la elección depende de sus preferencias y entrenamiento. anual. En cada visita a la consulta se ofrece el pertinente
Es imprescindible disponer de una lente angulada de asesoramiento dietético.
45° para tener una visión adecuada, sobre todo en la parte Se aconseja a los pacientes que no carguen objetos pesa-
más alta del estómago, y la nueva lente de 60 cm de longitud dos en 3 semanas, a partir de las cuales pueden reanudar su
resulta muy útil en pacientes con un IMC de más de 60 kg/m². actividad física habitual. Tras el alta se instaura un programa
La lente angulada también permite mantener la óptica cerca de ejercicio físico, comenzando con paseos de 20 minutos
de la pared abdominal anterior y visualizar las suturas que diarios, 5 días a la semana, que se prolonga a 45 minutos de
efectúa el cirujano. Actualmente se dispone de grapadoras ejercicio aeróbico según la tolerancia. El paciente puede
lineales extralargas, de 45 cm, que se pueden articular y car- reincorporarse a su trabajo en el plazo de una semana.
Capítulo 21 • Gastroplastia vertical con banda laparoscópica 181

Tabla 21-1 MODELO DE CRONOGRAMA CLÍNICO PARA LA DERIVACIÓN GÁSTRICA LAPAROSCÓPICA

INDICADOR DÍA -1 PREOPER. DÍA 0 PREOPER. DÍA 0 POSTOPER. DÍA 1 POSTOPER. DÍA 2 POSTOPER.
Consultas Anestesia
evaluaciones Autorización médica
si se precisa
Pruebas HCExF, Rx tórax,
HGC, ECG, BQC,
Fe, B12, gasometría
si apnea del sueño
Tratamientos Susp. AINE y AAS MCS o por cama Sonda vesical si no micción Susp. O2 Retirar JP si no hay fugas
7 días antes de la en 6 h; HGC Revisar eritema,
operación MCS; TEG si FC  120 lpm, hemorragia y drenaje de
Instrucciones Suero IV 100 mL/h; EF/4 h; T.a  37,7 °C o náuseas heridas quirúrgicas
preoperatorias CV/4 h; O2 para una Sat O2 o vómitos persis.
Contrato de cuidados 90% (O2 pulso continuo si Si normal: Susp. suero IV
postoperatorios IMC  60 o apnea sueño); Susp. medicación
Consentimiento CPAP si apnea sueño Susp. MCS si deambulación
informado preoperatoria; Revisión heridas
Cama bariátrica con Test gluc/6 h si diabetes Vaciar y registrar drenaje JP
peso  159 kg cada turno
Medicación Enema si IMC  60 Lansoprazol oral Suero IV 100 mL/h; Paracetamol líquido oral Paracetamol oxicodona
o peso  181,5 kg 30 mg, suero IV Metronidazol 500 mg/6 h IV 1 g/4 h si dolor, oral 5 L/4 h si dolor,
100 mL/h; 3 dosis; Fiebre 38,3 °C, Enoxaparina 40 mg/día SC
Enoxaparina Metoclopramida 10 mg/8 h Paracetamol oxicodona oral
40 mg SC; IV 3 dosis; 5 l/4 h si dolor, lansoprazol
Levofloxacina Prometacina 25 mg/3 h IM o oral 30 mg/día hs,
500 mg IV; IV si náuseas; metoclopramida oral
Metronidazol Analgesia: 10 mg/8 h si náuseas,
500 mg IV ACP por anestesia o cada 3 h simeticona oral
IM si dolor; 30 mL/4 h si aerofagia,
Ondansetrón 4 mg/6 h IV 3 enoxaparina 40 mg/día SC por
dosis; la mañana
Hidralazina 10 mg/4 h IM
Si PAS  190 mm Hg, dosis
insulina (Humulina R)
Según glucemia: 0-150, nada;
151-200, 6 U; 201-250, 10 U;
251-300, 14 U; 301, 18 U;
Difenhidramina ClH
25 mg/4 h IV si prurito y/o
erupción
Dieta Cena líquida dieta Dieta absoluta Dieta absoluta excepto hielo Dieta líquida absoluta si Dieta líquida absoluta
absoluta desde en láminas indicada
medianoche
Actividad Sin restricción Sin restricción Deambulación por sala de Deambulación por vestíbulo Deambulación por
espera Ducha vestíbulo
Ducha
Educación Dieta postoperatoria Enseñar EF Enseñar EF Reforzar instrucciones Suplementar dieta,
Modificación de la preoperatoria Enseñar uso MCS dietéticas postoper. vitaminas, proteínas.
conducta No cargar peso en 3
Revisar suplem. semanas
vitaminas, Ca+,
proteínas
Resumen alta Valorar medio de Valorar medio traslado a Alta si tolera dieta y
transporte domicilio medicación oral, recetar
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Evaluación por responsable analgésicos, IBP y Ab.


del caso Evaluación telefónica a los
5-7 días.
Revisión a las 3-4 semanas.
Llamar a la consulta si
T.a  38,3 °C, vómitos o
dolor abdominal de más
de 4 h.
AAS, ácido acetilsalicílico; Ab, antibiótico; ACP, analgésicos controlados por el paciente; AINE, antiinflamatorio no esteroideo; B12, vitamina B12;
BQC, bioquímica completa; Ca, calcio; CPAP, presión positiva continua vía aérea; CV, constantes vitales; ECG, electrocardiograma; EF, espirometría forzada;
FC, frecuencia cardíaca; Fe, hierro; HCExF, historia clínica y exploración física; HGC, hemograma completo; hs, al acostarse; IBP, inhibidor de bomba de protones;
IMC, índice de masa corporal; IV, intravenoso; JP, drenaje de Jackson-Pratt; lpm, latidos por minuto; MCS, medias de compresión secuencial; PAS, presión arterial
sistólica; Rx, radiografía; Sat O2, saturación de oxígeno; SC, por vía subcutánea; Susp., suspender; T.a, temperatura; TEG, tránsito esofagogástrico con contraste yodado.
182 Sección V • INTERVENCIONES

Z RESULTADOS circular que nos impedían obtener un control adecuado del


volumen de la bolsa. Pronto sustituimos esta técnica por la
La evaluación de los resultados de la GVB laparoscópica se GVB en cuña laparoscópica, y así conseguimos crear una bol-
ve dificultada por el escaso número de intervenciones reali- sa de volumen preciso y eliminar las dehiscencias de la línea
zadas, las amplias variaciones de la técnica y el breve período de grapado. Pese al perfeccionamiento de la construcción téc-
de seguimiento existente hasta la fecha. nica, el porcentaje medio de pérdida del exceso de peso y la
Azagra y cols. han publicado un ensayo prospectivo alea- incidencia de reintervenciones diferidas en nuestra serie son
torizado comparando la GVB de Mason mediante cirugía similares a los del grupo de Olbers, lo que subraya el hecho de
abierta y por vía laparoscópica, en el que se ha constatado una que la cirugía restrictiva gástrica se asocia a una escasa pérdi-
disminución significativa de las infecciones de la herida qui- da de peso y a una elevada incidencia de revisiones. En una
rúrgica (10,8% frente al 3,3%, P  0,04) y de las hernias inci- serie de revisiones de GVB abierta fallida efectuada por
sionales (15,8% frente al 0%, P  0,04) con el abordaje lapa- Naslund y cols. se observó que la reparación o revisión de la
roscópico.8 Sin embargo, la técnica laparoscópica requirió un GVB no produjo mejoría alguna de la pérdida de peso,11 por
tiempo quirúrgico significativamente mayor (150 minutos lo que, en caso de fracaso de la GVB podemos proceder a
frente a 60 minutos, P  0,001). No se observaron diferencias revertirla o transformarla en una derivación gástrica. La
significativas entre los dos grupos en cuanto a la pérdida del introducción del abordaje laparoscópico en la GVB con gra-
exceso de peso o la disminución del IMC, aunque no se espe- padora circular de Mason o la técnica en cuña disminuye la
cificaban los valores absolutos y la duración del seguimiento. morbilidad de la herida quirúrgica, aunque no ha conseguido
En la tabla 21-2 se presentan los resultados a los cinco mejorar la eficacia de la intervención.
años de la realización de la GVB laparoscópica obtenidos
por Olbers y cols. con la técnica de Mason (109 pacientes con Complicaciones de la GVB laparoscópica
bolsas no divididas y 30 con bolsas divididas) y los del autor
de este capítulo con la técnica de partición gástrica en Además de las complicaciones propias de una técnica mínima-
cuña.9,10 En nuestra serie no se produjo ningún caso de mente invasiva, la GVB laparoscópica presenta la morbilidad
infección de la herida quirúrgica ni de hernia incisional. El habitual de la gastroplastia abierta.12,13 Las complicaciones ha-
trabajo de Olbers no menciona la incidencia en su serie de bituales de la GVB abierta se describen en otro capítulo.
morbilidad de la herida quirúrgica. El porcentaje medio La conversión a cirugía abierta en manos expertas suele
de pérdida del exceso de peso fue prácticamente el mismo en deberse a la existencia de un hígado de gran tamaño que
las dos series. La incidencia de reintervenciones diferidas dificulta la visualización de la unión gastroesofágica, o bien
en el grupo de Olbers se debió a dehiscencia de la línea de a que el instrumental, grapadoras incluidas, resulta demasia-
grapado en 3 de un total de 11 casos y escasa pérdida de peso do corto para alcanzar el ángulo de His y seccionar la bolsa
en los 8 restantes. En nuestro grupo, las reintervenciones se en pacientes con IMC elevado o con una constitución cor-
debieron a la estenosis del orificio de salida y reflujo en 2 de poral androide. En nuestra serie de 55 pacientes hemos
un total de 4 casos y a escasa pérdida de peso en los dos res- registrado una conversión a cirugía abierta (1,8%) por hepa-
tantes, aunque tenemos pendientes de revisión a petición de tomegalia en un paciente que pesaba 192 kg. Otros autores
las compañías de seguros 3 casos más de escasa pérdida refieren 6 conversiones en un total de 139 pacientes (4%)
de eso. La evaluación de los pacientes sintomáticos de nues- sometidos a GVB laparoscópica también debidas a la presen-
tra serie y del fracaso de la pérdida de peso mediante tránsi- cia de un lóbulo izquierdo hepático de gran tamaño.9,10
to gastrointestinal alto y fibroendoscopia no reveló ningún La posición de los trócares en la técnica laparoscópica
caso de erosión de la banda o fístula gástrica. resulta fundamental a la hora de conseguir que la cámara, el
En el trabajo de Olbers se observó que el volumen medio instrumental y la grapadora tengan la longitud adecuada
de la bolsa era de 80 cc, según la exploración radiológica para exponer la porción superior del estómago para el gra-
efectuada a los 6 meses de la intervención, y el 45% de las pado, dado que en los pacientes con obesidad mórbida la
revisiones (5 de un total de 11) por escasa pérdida de peso se unión gastroesofágica suele estar en una posición subdia-
debían a dilatación de la bolsa. La dehiscencia de la línea de fragmática alta, a nivel del cuarto espacio intercostal. El
grapado fue la causa del 27% de las revisiones. Así pues, en puerto de la cámara no debe situarse a más de 15 cm del
general el 73% de las revisiones estaba relacionado con aspec- apéndice xifoides para que el laparoscopio estándar de 33 cm
tos técnicos de la construcción de la bolsa. Olbers y cols. deja- pueda alcanzar la porción superior del fundus, aunque puede
ron de utilizar la línea de grapado sin partición en los 30 últi- bajarse 2 o 3 cm si se dispone de una lente de 60 cm. El
mos casos de su serie. ombligo no debe usarse como punto de referencia para situar
En nuestra experiencia inicial con la técnica de Mason la cámara, dado que en los pacientes con obesidad mórbida
laparoscópica nos encontramos con problemas técnicos simi- puede estar a bastante distancia del apéndice xifoides. Si las
lares relacionados con la colocación adecuada de la grapadora nuevas grapadoras extralargas aún resultan demasiado cor-

Tabla 21-2 RESULTADOS A LOS CINCO AÑOS DE LA GVB LAPAROSCÓPICA

AUTOR PEP% 2 AÑOS REDUCCIÓN IMC REOPER. TARDÍAS CONVERSIÓN CIR. ABIERTA FUGA  DLG

Olbers y cols.9 n  139 50% 41 a 32 8% 4% 2,7%


DLG = 2%,
Fuga: 0,7%
Champion n  58 49% 46 a 34 7,3% 1,8% 1,8%
PEP%: porcentaje de pérdida del exceso de peso, DLG: dehiscencia de la línea de grapas.
Capítulo 21 • Gastroplastia vertical con banda laparoscópica 183

tas para seccionar completamente el estómago en el ángulo a través de la vaina del músculo recto izquierdo, y ello pese a
de His, se pueden conseguir 2 o 3 cm extra retirando el tró- que más del 50% de los casos tenía antecedentes de cirugía
car e introduciendo directamente la grapadora a través de la abdominal abierta. En mi opinión, en un paciente con obesi-
pared abdominal. También puede resultar útil a este respec- dad mórbida no debe utilizarse una técnica difícil como la
to la reducción de la insuflación intraabdominal a 8-10 mm, disección abierta. Como alternativa puede emplearse la técni-
o bien hacer que el operador de la cámara ejerza presión ca de Veres, en la que la aguja para la insuflación y el trócar
sobre el puerto de la misma, de forma que comprima unos inicial se introducen en el cuadrante superior izquierdo del
cuantos centímetros más la pared abdominal. abdomen, donde la pared abdominal es más delgada. El san-
Entre las complicaciones intraoperatorias propias del grado por el orificio del trócar no resulta infrecuente, por lo
abordaje laparoscópico se incluyen el sangrado de la línea de que debe evaluarse antes de finalizar la intervención. Antes de
grapado, el fallo del disparo de la grapadora, la hemorragia desinflar el abdomen procedemos a inspeccionar rutinaria-
intraabdominal no controlada, la lesión producida por el mente todos los orificios de trócar en busca de posible he-
trócar y la hemorragia de la pared abdominal, además de la morragia y los retiramos bajo visión directa. Normalmente se
construcción defectuosa de la bolsa. Las endograpadoras son necesita utilizar el bisturí eléctrico bipolar para controlar la
aparatos mecánicos que presentan una incidencia conocida hemorragia de un vaso de la pared abdominal y, en algunos
de grapas defectuosas, fallo del disparo y mal funcionamien- casos, es necesario realizar una ligadura con la ayuda de un
to.14 El cirujano laparoscopista debe estar preparado para pasador de aguja transabdominal.
enfrentarse a la reparación de una sutura por fallo del dispa- La construcción defectuosa de la bolsa conlleva el fracaso
ro de la grapadora realizando una sobresutura intracorpórea de la pérdida de peso y sucede cuando no se calibran laparos-
de la línea de grapado, aunque sólo debe utilizar esta técnica cópicamente la bolsa y el estoma. El éxito de las técnicas res-
avanzada si está familiarizado con las suturas laparoscópicas. trictivas puras de cirugía gástrica bariátrica estriba en la cons-
Una complicación poco frecuente consiste en el bloqueo de trucción precisa de una bolsa verticalizada de menos de
la grapadora in situ, lo que obliga a realizar una conversión a 30 mL, con un orificio de salida calibrado y medido. Muchos
cirugía abierta para desatascar el aparato. cirujanos cometen el error de construir la bolsa «a ojo», sin
El sangrado de la línea de grapas es una complicación utilizar las manos ni un instrumento de calibración. La ciru-
intraoperatoria normal, que se controla con la aplicación de gía laparoscópica presenta el inconveniente de ofrecer una
clips hemostáticos o suturas individuales. Con el fin de evi- visión en profundidad alterada y una sensación táctil dismi-
tar el sangrado postoperatorio tardío debe procederse a nuida, lo que puede dar lugar a una estimación visual impre-
secar meticulosamente la línea de grapas al término de la cisa. Nuestro grupo evalúa la bolsa midiéndola con una regla
intervención si se han administrado previamente anticoagu- laparoscópica y calibrándola con una sonda. También se pue-
lantes para la profilaxis de la trombosis venosa profunda. No de emplear un balón de calibración, pero resulta más caro que
se recomienda utilizar bisturí eléctrico ni ultrasónico sobre las sondas reutilizables. La banda se calibra externamente cor-
las líneas de grapas, ya que se ignora cuál puede ser su efecto tando una pieza de 1,5 cm por 7 cm que se solapa 1 cm en cada
sobre las fugas, sobre todo cuando se emplea una grapadora extremo hasta crear una banda de 5 cm de diámetro con la que
con dos hileras de grapas. La hipotensión postoperatoria se estabiliza en 12 mm el orificio de salida. A continuación se
puede deberse a una hemorragia intraperitoneal o al sangra- coloca una sonda de 30F a través del orificio para evitar sutu-
do de la línea de grapas con hemorragia intraintestinal y, rar la pared posterior al cierre de la banda. Gracias a esta
posiblemente, con hematemesis o melena. En ocasiones, es doble calibración del orificio de salida del estoma se evitan los
difícil establecer el diagnóstico diferencial entre ambas cau- errores técnicos y queda garantizada la alta calidad de la téc-
sas y, a veces, los drenajes no tienen contenido hemático a nica. Como último control de calidad de la construcción de la
pesar de que exista una hemorragia. Si esta es importante, es bolsa procedemos a comprobar endoscópicamente durante
necesario efectuar una exploración, sobre todo cuando se la intervención que tiene el volumen adecuado, que no existen
asocia a hipotensión. La hemorragia suele remitir con la hemorragia o fuga por la línea de grapas y que el estoma es
inducción de la anestesia, por lo que puede resultar compli- permeable y permite el paso de un gastroscopio de 10 mm
cado identificar claramente su origen. Para evitar recidivas hasta la porción distal del estómago.
hemorrágicas debe procederse a suturar las líneas de grapas, Según nuestra opinión, es extremadamente difícil cons-
dejar drenajes y suspender los anticoagulantes. truir con precisión una bolsa utilizando una grapadora cir-
La hemorragia intraabdominal no controlada puede ser cular. No resulta fácil conseguir que el yunque y la punta
secundaria a: 1) disección perigástrica para la colocación de la cortante para la anastomosis terminoterminal queden adya-
banda; 2) sección de los vasos gástricos cortos; 3) lesión esplé- centes a la sonda como sería deseable para la calibración. En
nica, y 4) disección de la transcavidad de los epiplones por 1996 dejamos de utilizar la grapadora circular tanto para la
ramas de los vasos esplénicos que puede perforar la pared pos- gastroplastia de Collis como para la GVB laparoscópica y
terior del estómago. Una hemorragia masiva inesperada puede la sustituimos por la grapadora lineal debido a los problemas
controlarse ejerciendo compresión laparoscópica, aspirando de calibración de la bolsa y a la necesidad de realizar una
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

repetidamente, y esperando 4 o 5 minutos en caso de que se incisión adicional de 2 cm en la pared abdominal para intro-
logre el control temporal. Lo normal es que el punto sangran- ducir la grapadora circular con el riesgo inherente de her-
te ceda en ese momento y pueda realizarse una ligadura per- niación ventral.5
manente. La presencia de hemorragia persistente de más de Las fugas postoperatorias constituyen la complicación
500 mL y de hipotensión intraoperatoria obliga a realizar la más temida de la cirugía bariátrica y se ha observado que apa-
conversión a cirugía abierta. La conversión a cirugía abierta no recen con más frecuencia en determinadas series laparoscópi-
constituye una complicación en sí misma, sino que refleja un criterio cas.15 Actualmente se puede llevar a cabo la GVB laparoscó-
quirúrgico equilibrado a la hora de enfrentarse a un problema. pica creando una bolsa con o sin partición.8-10 Igual que en el
En nuestra serie no se ha producido ninguna lesión por caso de la derivación gástrica laparoscópica, nosotros realiza-
trócar con la utilización de un trócar óptico y una óptica de mos la GVB con partición, con el fin de evitar las dehiscen-
10 mm y 0° introducidos sin insuflación y bajo visión directa cias tardías de la línea de grapas y la ganancia de peso posto-
184 Sección V • INTERVENCIONES

peratoria, y estamos firmemente convencidos de que así la tantes variaciones entre unos cirujanos y otros, lo que difi-
cicatrización es mejor y existe menos riesgo de fuga cuando se culta la realización de comparaciones. Se necesitan más
utiliza una grapadora con seis líneas de grapas. Además, sutu- estudios de cirugía bariátrica basada en la evidencia y ensa-
ramos la línea de grapas con seda continua 2-0 y, de esta for- yos clínicos prospectivos y aleatorizados capaces de estable-
ma, creamos una seudoobstrucción con la banda constrictiva cer si la técnica de GVB en cuña es clínicamente más eficaz
sobre la bolsa. A los cirujanos poco experimentados les reco- que la de Mason y si la última aportación a la cirugía bariá-
mendamos que dejen puesto un drenaje de Jackson-Pratt. trica, es decir, la banda gástrica ajustable, resulta superior a
La realización rutinaria de una esofagogastroscopia las distintas técnicas de GVB con banda estática.18
intraoperatoria ayuda a reducir la tasa de fugas postoperato- La cirugía gástrica restrictiva se caracteriza por conse-
rias. En las 985 intervenciones bariátricas laparoscópicas rea- guir una escasa pérdida de peso en comparación con las téc-
lizadas hasta la fecha hemos detectado fugas intraoperatorias nicas malabsortivas y se acompaña de una tasa significativa
en el 4,1% de los casos y tan sólo tres postoperatorias (0,36%).16 de revisiones debidas a efectos secundarios tales como reflu-
El tránsito esofagogástrico con contraste yodado practicado jo, vómitos crónicos o errores de la técnica.12,13 Por este
el primer día del postoperatorio también puede servir para motivo creemos que la GVB debe ocupar un lugar secunda-
detectar precozmente las fugas, aunque un resultado negativo rio en la cirugía bariátrica y no debe ser en ningún caso la
no descarta su presencia. La única forma de reducir la morbi- única técnica que domine el cirujano bariátrico. La GVB
lidad consiste en detectarlas precozmente y proceder a su por vía laparoscópica resulta superior a la GVB practicada
reparación y drenaje. Debido a que el tránsito esofagogástrico mediante cirugía abierta y con el tiempo puede llegar a
tiene una alta tasa de falsos negativos, exploramos inmediata- reemplazarla conforme los cirujanos se vayan familiarizando
mente para descartar una fuga a cualquier paciente que en el con esta técnica mínimamente invasiva.
postoperatorio presente fiebre, taquicardia persistente de más
de 120 lpm. o simplemente se encuentre mal. La no parti-
ción de la bolsa no elimina la posibilidad de fugas.9 Z BIBLIOGRAFÍA
Aparte de las fugas y dependiendo del abordaje laparos-
cópico, otra complicación precoz es la infección no relaciona- 1. Mason EE, Doherty C, Cullen JJ, et al: Vertical gastroplasty: evolu-
da con una fuga, ya sea intraabdominal o incisional. Según tion of vertical banded gastroplasty. World J Surg 1998;22:919-924.
2. Buchwald H, Buchwald JN: Evolution of operative procedures for the
nuestra experiencia, es posible disminuir la incidencia de management of morbid obesity 1950-2000. Obes Surg
infecciones intraabdominales administrando rutinariamente 2002;12:705-717.
profilaxis antibiótica preoperatoria. Nosotros administramos 3. Chua TY, Mendiola RM: Laparoscopic vertical banded gastroplasty:
una dosis preoperatoria de levofloxacina (500 mg) y metroni- the Milwaukee experience. Obes Surg 1995;5:77-80.
4. Lonroth H, Dalenback J, Haglind E, et al: Vertical banded gastro-
dazol (500 mg) para cubrir las bacterias gramnegativas y anae- plasty by laparoscopic technique in the treatment of morbid obesity.
robias de la flora oral, y añadimos neomicina (1 g) y kanami- Surg Laparosc Endosc 1996;6:102-107.
cina (500 mg) al líquido de irrigación para minimizar el riesgo 5. Champion JK, Hunt T, Delisle N: Laparoscopic vertical banded
de infección bacteriana inadvertida, que puede producirse en gastroplasty and Roux-en-Y gastric bypass in morbid obesity. Obes
Surg 1999;9:123 (abstract)
el abordaje laparoscópico. En una serie de 63 derivaciones 6. Sugerman HJ, Starkey JV, Birkenhauer R: A randomized prospective
gástricas laparoscópicas observamos que el 23% de los pacien- trial of gastric bypass versus vertical banded gastroplasty for morbid
tes presentaba cultivos peritoneales intraabdominales positi- obesity and their effects on sweet- versus non-sweet-eaters. Ann Surg
vos al término de la intervención. Por consiguiente, efectua- 1987;205:613-624.
mos de forma rutinaria un lavado con antibióticos en todas las 7. Huerta S, Heber D, Sawiki M, et al: Reduced length of stay by imple-
mentation of a clinical pathway for bariatric surgery in an academic
intervenciones bariátricas laparoscópicas que incluyen grapa- health care center. Am Surg 2001;12:1128-1135.
do gástrico17 y gracias a ello no hemos registrado ninguna 8. Azagra JS, Goergen M, Ansay J, et al: Laparoscopic gastric reduction
infección postoperatoria intraabdominal o de la herida qui- surgery. Surg Endosc 1999;13:555-558.
rúrgica en nuestra cohorte de GVB laparoscópica. 9. Olbers T, Lonroth H, Dalenback J, et al: Laparoscopic vertical banded
gastroplasty: an effective long-term therapy for morbid obesity
Las complicaciones tardías de la GVB laparoscópica son patients? Obes Surg 2001;11:726-730.
las mismas que las de la cirugía abierta, excepto en lo que se 10. Champion JK: Laparoscopic vertical banded gastroplasty. In Cohen
refiere a las hernias por trócar.3-5 No suturamos los orificios RV, Schiavon A, Schauer P (eds): Videolaparoscopic Approach to
de trócar de 5 mm y raramente cerramos los de 12 mm, a Morbid Obesity. Sao Paulo, Via Letera Medica, 2002.
11. Naslund E, Backman L, Granstrom L, et al: Seven-year results of
menos que haya sido necesario ampliarlos para la extracción vertical banded gastroplasty for morbid obesity. Eur J Surg
de piezas quirúrgicas. En nuestra serie de GVB laparoscópi- 1997;163:281-286.
ca con un total de 348 orificios de trócar no se ha producido 12. Sugerman HJ, Londrey GL, Kellum JM, et al: Weight loss with verti-
ninguna hernia y sólo se ha registrado 1 caso en los más de cal banded gastroplasty and Roux-en-Y gastric bypass for morbid
obesity with selective versus random assignment. Am J Surg
5400 orificios de trócar de la derivación gástrica laparoscó- 1989;157:93-102.
pica. El cierre con sutura de los orificios de trócar sólo 13. Balsinger BM, Poggio JL, Mai J, et al: Ten and more years after
aumenta de forma innecesaria los gastos, el tiempo y las vertical banded gastroplasty as primary operation for morbid obesity.
J Gastrointest Surg 2000;4:595-605.
molestias para el paciente. 14. Champion JK: Incidence of endostapler misfires during laparoscopic
bariatric surgery. Obes Surg 2000;10:143.
15. Chae FH, McIntyre RC: Laparoscopic bariatric surgery. Surg Endosc
Z REFLEXIÓN 1999;13:547-549.
16. Champion JK, Hunt T, Delisle N: Role of routine intraoperative
endoscopy in laparoscopic bariatric surgery. Surg Endosc 2000;16:
La GVB puede llevarse a cabo utilizando distintas técnicas 1663-1665.
y aunque, en comparación con la cirugía abierta, reduce la 17. Williams M, Champion JK: Experience with routine intra-abdominal
incidencia de morbilidad de la herida quirúrgica, no logra cultures during laparoscopic gastric bypass with implications for anti-
biotic prophylaxis. Surg Endosc 2003;17:S229.
una mayor eficacia. Igual que sucede con las operaciones de 18. Gentileschi P, Kini S, Catarci M, et al: Evidence based medicine: open
derivación gástrica y banda gástrica ajustable, el hecho and laparoscopic bariatric surgery. Surg Endosc 2002;16:
de que no exista una técnica estandarizada da lugar a impor- 736-744.
22
Derivación gástrica en Y de Roux
mediante cirugía abierta
Ward O. Griffen, Jr., M.D., Ph.D.

En 1972 un colega me pidió que viese a su hermano enfermo les fuera posible. El protocolo incluía asimismo una lista de
para tratar de darle una posible solución quirúrgica a un pro- las complicaciones propias de las dos intervenciones, comen-
blema médico no resuelto. El paciente tenía 27 años y un zando por la posibilidad de fallecer tras la operación y
buen empleo, pero padecía obesidad mórbida. Estaba diag- siguiendo con las fugas de las anastomosis y sus consecuen-
nosticado de hipertensión desde hacía años y últimamente le cias, las diversas infecciones y problemas tales como diarrea,
habían detectado hiperglucemia sin glucosuria. Su historia estenosis a nivel de la gastroyeyunostomía, etc. Asimismo se
era la habitual en tantos y tantos pacientes de obesidad mór- adjuntaba una pauta de la pérdida de peso prevista tras cada
bida: innumerables dietas seguidas de un éxito efímero e intervención y una lista de la medicación postoperatoria que
incesante aumento de peso a lo largo de muchos años. sería necesario administrar habitualmente. Por último, se
En aquel momento, la derivación yeyunoileal (DYI) se advertía a los candidatos de que, además de por el cirujano,
encontraba en su apogeo y Mason e Ito1 habían descrito en serían entrevistados por un especialista en nutrición y por
1969 la derivación gástrica (DG), de la que sólo se tenían un psiquiatra.
experiencias muy limitadas. En el caso del hermano de mi Una vez que el comité de revisión institucional hubo
colega opté por la DYI, por tratarse de una técnica menos aprobado el protocolo empezamos a entrevistar a pacientes
exigente desde el punto de vista técnico y la verdad es que el en grupos de seis a ocho y procedimos a asignarlos de forma
paciente tuvo una evolución muy buena, por lo que llevé a aleatoria según el número de hospital a DG o DYI. Las siete
cabo varias derivaciones más de este tipo. Sin embargo, los primeras intervenciones de DG se llevaron a cabo siguiendo
pacientes intervenidos por este procedimiento comenzaron la técnica de Mason y cols.: sección del estómago a nivel alto
a presentar un cuadro de falta de fuerza y de una serie de y anastomosis de la bolsa gástrica a un asa de yeyuno elevada
secuelas postoperatorias importantes, que no tuvimos más por detrás del colon. Esta técnica resultaba engorrosa por
remedio que reconocer que eran complicaciones inherentes distintos motivos y llegué a la conclusión de que la configu-
a dicha intervención. ración en Y de Roux podía realizarse se forma segura y ofre-
Tras haber investigado a fondo la DG y haber hablado cer unos resultados más satisfactorios desde el punto de vis-
extensamente de ello con el Dr. Mason y también con el Dr. ta técnico. Por una parte el cardias, que es la parte del
H. William Scott, un ferviente defensor de la DYI,2 decidí estómago que se utiliza para crear la bolsa o reservorio, tie-
que existían motivos justificados para llevar a cabo un ensa- ne menos cantidad de células parietales, lo que minimiza el
yo comparativo aleatorizado entre la DYI y la DG. Para ello riesgo de aparición de úlceras marginales, y por otra sólo hay
solicité la ayuda de un psiquiatra y de un especialista en que ascender un asa de yeyuno a través del mesocolon, con
nutrición y mantuve numerosas reuniones con anestesistas y lo que se consigue un cierre más seguro del defecto mesen-
otros especialistas interesados en el tema de la obesidad. Con térico y se evitan las hernias internas. Así nació la DG con
su colaboración se procedió a elaborar un protocolo clínico asa en Y de Roux retrocólica, presentada dentro del estudio
que se presentó al comité de revisión institucional del comparativo en la reunión de la American Surgical Association
University of Kentucky Medical Center. celebrada en mayo de 1977 y publicada en octubre de ese
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

El protocolo incluía un folleto con ilustraciones de las mismo año.3 Creo que este hecho supuso un hito para acabar
dos técnicas quirúrgicas y un texto descriptivo en un lengua- con la DYI y establecer la preeminencia de la DG.
je comprensible en él se hacía hincapié en dos características En los inicios de la cirugía bariátrica no se disponía de
importantes del tratamiento quirúrgico de la obesidad mór- criterios precisos para seleccionar a los candidatos a una
bida. En primer lugar, aunque la DYI no modificase la con- operación para la reducción de peso ni dichos criterios eran
ducta alimentaria del paciente, sí que ejercía un intenso efec- equiparables entre los distintos estudios. Aunque los ciruja-
to sobre el patrón del hábito intestinal, mientras que la DG nos bariátricos y los médicos en general sabían cómo identi-
alteraba el patrón de la alimentación y, si se quiere, suponía ficar a un paciente con obesidad mórbida, no existía un
una modificación de la conducta. En segundo lugar, los método bien definido de valoración de esta enfermedad. En
pacientes no podían alcanzar el peso ideal sin poner en prác- mis primeros trabajos indicaba que un sobrepeso de 45 kg
tica y mantener un programa de ejercicio físico una vez que sobre el peso ideal era lo suficientemente elevado como para
185
186 Sección V • INTERVENCIONES

que tanto el paciente como el médico estuviesen dispuestos sas abdominales «arrastren» el estómago y este se despegue
a aceptar el importante riesgo que conlleva una operación del diafragma. A continuación se identifican y ligan los vasos
quirúrgica. Hoy en día el concepto del índice de masa cor- gástricos cortos a lo largo de unos 7 cm de la curvatura
poral (IMC), que correlaciona el peso con la altura, permite mayor del estómago. De esta forma se elimina el ángulo de
comparar los informes quirúrgicos desde un punto de vista His y se alinea la curvatura mayor para poder crear una bol-
científico más sólido. Visto con la perspectiva actual, está sa gástrica muy pequeña. Utilizando los dedos índice y cora-
claro que los candidatos sometidos a una DG en Y de Roux zón de la mano derecha el cirujano efectúa una disección
en los primeros tiempos de la cirugía bariátrica cumplían roma en la superficie posterior del estómago y la curvatura
con los criterios de IMC establecidos en 1991 por la confe- menor cerca de la unión gastroesofágica para crear una
rencia de consenso sobre obesidad grave del National abertura entre la curvatura menor y la rama superior de los
Institutes of Health.4 Todos los pacientes tenían que aportar vasos gástricos izquierdos, así como también el nervio vago
documentación sobre sus intentos de perder peso con una o izquierdo. Con un drenaje de Penrose se rodea la porción
más dietas, y en caso de presentar alguna patología comór- superior del estómago a través de la abertura del mesenterio
bida, como hipertensión, diabetes o artritis, se les animaba a de la curvatura menor.
que se sometiesen a la operación. Tras rechazar cefálicamente el colon transverso se
identifica el ligamento de Treitz y, a 15 cm distalmente de
este, se eliminan los vasos mesentéricos del yeyuno y se
Z TÉCNICA secciona el yeyuno con una grapadora. Se deja a criterio del
cirujano suturar el borde de corte distal del yeyuno. A con-
Todos los cirujanos bariátricos que efectúan DG han subra- tinuación se sitúa la mano derecha sobre la cara superior
yado siempre la importancia del tamaño de la bolsa gástrica del mesocolon transverso y se efectúa una abertura median-
en el sentido de que no debería superar los 30 mL o, en cual- te disección roma inmediatamente a la izquierda del liga-
quier caso, «ser lo más pequeña posible». También se ha mento de Treitz. A dicha abertura se aboca el cabo distal
hecho hincapié en que el estoma de la gastroyeyunostomía del yeyuno que se asciende por detrás del estómago.
no debe tener un tamaño superior a 1 cm. Estoy de acuerdo Mediante el drenaje de Penrose se tracciona del estómago
en que una DG realizada correctamente debe cumplir ambos hacia abajo mientras se eleva el asa de yeyuno hasta aproxi-
requisitos, pero para mí existe un aspecto fundamental rela- marlos a la porción superior de la curvatura mayor previa-
cionado con los resultados satisfactorios a largo plazo de la mente despejada. Se completa con una anastomosis latero-
DG en comparación con otras intervenciones destinadas a lateral entre el estómago y el yeyuno con un orificio no
tratar la obesidad mórbida. La derivación del canal alimen- mayor de 1 cm.
tario de la bolsa gástrica directamente al yeyuno provoca un El cierre de la anastomosis lo realizaba habitualmente
síndrome de vaciamiento rápido, que suele aparecer cuando en tres planos: primero situaba una fila posterior de cuatro
una sustancia no isotónica entra en contacto con el yeyuno. o cinco suturas seromusculares discontinuas de material no
Por ejemplo, si se ingieren alimentos con alto contenido en reabsorbible 3-0. A continuación, y empezando desde el cen-
azúcar pueden surgir síntomas desagradables como taqui- tro de esta fila posterior hacia los extremos, realizaba una
cardia, sudoración, sensación de desmayo, etc., y el paciente sutura continua de Lembert con doble aguja y material no
aprende con rapidez a evitarlos. Se ha demostrado reciente- reabsorbible. Luego efectuaba aberturas en el estómago y el
mente que la grelina, una hormona producida por el estóma- yeyuno aproximados y aplicaba una sutura continua reabsor-
go que estimula el apetito, presenta antes de comer unos bible sobre la fila posterior para aproximar los bordes de
niveles elevados, que descienden en el período posprandial. corte de la mucosa del estómago y el yeyuno. Posteriormente
Es posible que la derivación gástrica elimine este estímulo, la sonda nasogástrica introducida con anterioridad se hacía
cosa que no ocurre con las operaciones gástricas restrictivas progresar unos 10 cm en el interior del yeyuno y se finaliza-
puras, lo que podría explicar las diferencias en la pérdida ba la fila interna de la anastomosis con una sutura de Connell
permanente de peso registradas tras las distintas interven- invertida de la pared anterior del estómago y yeyuno. Por
ciones bariátricas. último, se completaba la fila del medio con sutura continua
Al principio se ingresaba al paciente la noche antes de la no reabsorbible y se terminaba la anastomosis con varias
operación para realizar la analítica y la radiología preopera- suturas discontinuas de Lembert no reabsorbibles. Para ase-
torias. Durante la noche se le administraba suero por vía gurarse de que no se había suturado la sonda nasogástrica y
intravenosa con un antibiótico, normalmente una cefalospo- que el estoma tenía un tamaño no superior a 1 cm se proce-
rina, y antes de llevarle al quirófano se le administraban día a desplazar la sonda de arriba abajo.
5000 U de heparina subcutánea. Si el paciente no había Tras retirar el drenaje de Penrose, se situaba la grapa-
sufrido una colecistectomía y presentaba alteraciones demos- dora a través de la abertura del mesenterio de la curvatura
trables de la vesícula biliar, el consentimiento informado menor hasta el lado de la curvatura mayor de la porción
incluía la autorización para realizar esta técnica y también superior del estómago distalmente a la gastroyeyunosto-
podían incluirse otras, como la reparación de una hernia mía, o bien desde el lado de la curvatura mayor hasta la
ventral. Por el contrario, no se procedía a intentar reparar abertura del mesenterio de la curvatura menor. La grapa-
una hernia de hiato deslizante sintomática. dora se situaba en la parte más alta del estómago, para así
En el quirófano me situaba a la derecha del paciente y poder crear una bolsa gástrica lo más pequeña posible. Los
solía efectuar una incisión transversal bilateral en «alero» motivos por los que no realizaba las maniobras propuestas
porque, en mi opinión, ofrece una exposición mejor de la por Alder y Terry5 para medir el tamaño de la bolsa son
parte superior de la cavidad abdominal. Actualmente, dos: 1) resultan engorrosas y laboriosas, y 2) la precisión de
la mayoría de los cirujanos utiliza una incisión en la línea las mediciones siempre me ha parecido cuestionable, dadas
media para llevar a cabo la DG mediante cirugía abierta. la capacidad de relajación del estómago y las dificultades
Una vez realizada la incisión se coloca al paciente en posi- para sellar todos los posibles puntos de fuga. Basta con que
ción anti-Trendelenburg para permitir que las vísceras gra- la bolsa sea lo más pequeña posible. Una vez situada la gra-
Capítulo 22 • Derivación gástrica en Y de Roux mediante cirugía abierta 187

padora en la posición idónea se procedía a efectuar los dis- laterolateral con la ayuda una grapadora lineal, con la posi-
paros; al principio se aplicaban dos filas de grapas y actual- bilidad de sobresuturarla o no.
mente se utilizan cuatro. Por último, se procedía a cerrar circunferencialmente la
Al principio del ensayo aleatorizado se aplicaba otra abertura del mesocolon transverso alrededor del asa yeyunal
doble hilera de grapas paralela a la ya existente e, inmedia- con una sutura discontinua no reabsorbible, teniendo cuida-
tamente por debajo de ella, se procedía a seccionar el estó- do de no lesionar los vasos. Se inspeccionaban todas las por-
mago entre ambas líneas de grapas (v. figura 22-1) y se ase- ciones del intestino para comprobar que tenían buen color y
guraban con suturas de Lembert discontinuas de material se cerraba la incisión sin dejar drenajes.
no reabsorbible 3-0. Conforme se fue acumulando experien-
cia de la intervención y se perfeccionaron las grapadoras, se
llegó a la aplicación de sólo dos filas dobles de grapas conti- Z COMPLICACIONES
guas sin seccionar el estómago (v. figura 22-2). Esta era la
técnica gástrica estándar de nuestra versión de la DG en Y Complicaciones en el postoperatorio inmediato
de Roux.
Una vez realizadas las maniobras quirúrgicas gástri- A veces surgían las complicaciones habituales propias de
cas, se rechazaba cefálicamente el colon transverso y se cualquier intervención abdominal, tales como atelectasias,
traccionaba caudalmente el asa yeyunal, hasta que quedase infección del tracto urinario, trombosis venosa profunda, y
lo más recta posible. A continuación se identificaba en ella otras. Al principio los anestesistas insistían en mantener a
un punto situado a 45 cm de la gastroyeyunostomía y se los pacientes intubados en la UCI durante 48 horas como
llevaba a cabo una anastomosis terminolateral entre el bor- mínimo pero, a medida que se fueron familiarizando con la
de de corte del yeyuno proximal y la cara lateral del asa asistencia a estos pacientes obesos, comenzaron a extubarlos
yeyunal de Roux. Siempre he preferido realizar una sutura al finalizar la intervención o en la sala de recuperación, y los
manual en dos planos, aplicando primero una sutura sero- pacientes ya no eran trasladados a la UCI, sino que ingresa-
muscular posterior de Lembert discontinua, y seccionando ban en una planta de cirugía para ser sometidos al pertinen-
a continuación la línea de grapas del yeyuno proximal para te control. Se empleaban medidas enérgicas para que los
crear el orificio adecuado en la cara lateral del asa de yeyu- pacientes tosiesen con frecuencia y realizaran respiraciones
no. De esta forma pueden aproximarse en sentido circular profundas. La misma noche del día de la intervención los
los bordes mucosos con una sutura de Connell continua pacientes se levantaban de la cama con un vendaje abdomi-
reabsorbible. La anastomosis se completaba con una sutura nal en caso de que el panículo adiposo fuera muy abundante.
anterior de Lembert de material no reabsorbible. Hoy en La sonda vesical se retiraba lo antes posible. En el postope-
día suele utilizarse un asa de Roux de unos 75 cm de longi- ratorio se mantenían la administración de heparina en dosis
tud, que se crea antes de realizar la gastroyeyunostomía. bajas y la utilización de medias de compresión neumática
Actualmente se efectúa, además, una yeyunoyeyunostomía
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

Figura 22-2 Las dos líneas de grapas se aseguraban con suturas dis-
continuas de Lembert de material no reabsorbible. Según se obtuvo
Figura 22-1 Durante el ensayo aleatorizado se procedía a aplicar en experiencia con la intervención y con el uso de las grapadoras, se pasó
el estómago otra fila doble de grapas paralela y distal a la primera. Tras a aplicar dos filas dobles contiguas y se dejó de seccionar el estómago.
disparar la grapadora se seccionaba el estómago entre ambas líneas de Esta es la técnica estándar de nuestra versión de la derivación gástrica
grapas. en Y de Roux.
188 Sección V • INTERVENCIONES

hasta que el paciente reanudaba la deambulación. Aunque las de la serie quirúrgica, pero sí en nueve casos en los que se
medias de compresión se utilizaban sistemáticamente en había aplicado una fila doble de grapas por debajo de la bol-
todos los casos, se consideraban de especial importancia sa gástrica. El problema prácticamente desapareció cuando
en aquellos pacientes que presentaban antecedentes de tras- empezamos a utilizar dos filas dobles de grapas, es decir, en
tornos venosos de las extremidades inferiores, por el alto total cuatro líneas de grapas situadas por debajo de la bolsa
riesgo de aparición de émbolos pulmonares. Gracias a estas gástrica.
medidas fue posible reducir la incidencia de este tipo de La presencia de vómitos era habitual en las tres o cuatro
complicaciones hasta menos del 3%. semanas siguientes a la operación, y normalmente se debía
Pese a que sólo afectaban al 5% de los pacientes, las al hecho de que los pacientes aún no habían modificado la
infecciones de la herida quirúrgica constituían un problema costumbre de comer cantidades importantes de alimentos a
de alcance. En la dehiscencia de la herida influían el tamaño bocados grandes. Cuando se ingieren rápidamente alimen-
de la incisión y la gran cantidad de tejido adiposo subcutá- tos sólidos en grandes cantidades se obstruye la pequeña
neo. Al principio utilizábamos sutura reabsorbible para anastomosis gastroentérica y el paciente vomita de inmedia-
cerrar el espacio subcutáneo, y las primeras infecciones las to. Sin embargo, los vómitos persistentes pueden deberse a
achacamos a la existencia de espacios muertos en la herida, una estenosis de la gastroyeyunostomía. En ese caso debe
por lo que empezamos a colocar sondas subcutáneas de aspi- realizarse una endoscopia y dilatar la anastomosis si se
ración durante el cierre de la herida. Pero con este método encuentra estenosada. La endoscopia también permite con-
la tasa de infecciones de la herida quirúrgica aumentó hasta firmar la presencia de protrusión de un punto de sutura o
el 10%, por lo que dejamos de emplear las sondas de aspira- cualquier otro cuerpo extraño y eliminarlo.
ción y las suturas subcutáneas, y simplemente dejábamos También puede ocurrir que la gastroyeyunostomía esté
enfrentado el tejido adiposo sin suturarlo. A partir de enton- dilatada en vez de estenosada y que, como sucede con la
ces, la tasa de infecciones cayó en picado y no volvió a supe- disrupción de la línea de grapas, ocasione una pérdida de
rar el 5%. A menudo operábamos a 50 o 100 pacientes con- peso inadecuada. Debe sospecharse la existencia de dilata-
secutivos sin que surgiese ningún problema relacionado con ción cuando un paciente deje de perder peso de forma gra-
la herida quirúrgica. Al primer signo de infección procedía- dual e insidiosa al cabo de tres o cuatro meses. En este caso
mos a efectuar una amplia escisión de la herida y la dejába- también está indicado practicar una endoscopia. Una vez
mos cubierta con apósitos. A continuación se aplicaban com- confirmada endoscópicamente la dilatación procedíamos a
presas húmedas para prevenir que se produjera una solución reintervenir al paciente para asegurar la anastomosis con
de continuidad de la fascia, que inevitablemente daría lugar suturas constrictivas. Desgraciadamente nuestra experien-
a una hernia ventral. Otros autores emplean otras técnicas cia con las reintervenciones gástricas no ha producido unos
de cierre con resultados igualmente satisfactorios. resultados satisfactorios ni siquiera en los casos considera-
La complicación más grave de la DG es la fuga anasto- dos como corregibles quirúrgicamente.6 Como alternativa
mótica. Aunque puede aparecer en cualquier anastomosis o se propone la conversión a una DG con asa de Roux distal.
línea de grapas, la localización más frecuente de dicha fuga Es probable que en el futuro pueda tratarse la dilatación de
se sitúa a nivel de la gastroyeyunostomía. Al principio nos la anastomosis con suturas restrictivas aplicadas por vía
manteníamos expectantes y no tomábamos ninguna medida endoscópica. La dilatación de la bolsa gástrica no ha supues-
hasta que surgían signos evidentes del tipo de fiebre, dolor to una complicación frecuente en los casos de DG en Y de
abdominal o irradiado al hombro izquierdo y leucocitosis, Roux realizados según nuestra técnica. Lo que sí he obser-
pero tras analizar más detenidamente la situación llegamos vado es la desaparición de los síntomas preoperatorios de
a la conclusión de que el primer signo de una fuga anasto- reflujo gastroesofágico, motivo por el cual no se procedía a
mótica era la aparición de taquicardia, sobre todo si no podía reducir las hernias de hiato deslizantes en la misma inter-
explicarse dentro del contexto del cuadro clínico general. vención quirúrgica.7
A partir de entonces empezamos a hacer sistemáticamente El déficit de vitaminas y minerales supone una conse-
un tránsito con Gastrografin a todo paciente que presentase cuencia previsible de cualquier técnica quirúrgica derivativa
una taquicardia superior a 100 lpm en el postoperatorio. En que excluya a la porción distal del estómago y el duodeno del
los más de 1000 pacientes sometidos a DG en Y de Roux canal alimentario. La porción distal del estómago resulta
entre 1974 y 1990 se registraron 11 fugas anastomóticas, con esencial para la absorción adecuada de la vitamina B12 por su
tan sólo dos muertes por sepsis fulminante. En la mayoría de contenido abundante de células oxínticas, las cuales consti-
los casos, aunque no en todos, fue preciso reintervenir al tuyen la fuente del factor intrínseco, mientras que la mucosa
paciente, aunque una pequeña fuga controlada y confirmada duodenal está diseñada específicamente para absorber el cal-
radiológicamente suele responder bien al tratamiento con- cio y el hierro con la máxima eficacia posible. Por consi-
servador. Con la reintervención lo que se pretende es limpiar guiente, los pacientes sometidos a una DG deben recibir un
lo mejor posible las zonas contaminadas y establecer un dre- tratamiento sustitutivo lo antes posible. El déficit de calcio
naje adecuado sin tener que llegar a reparar quirúrgicamen- y hierro puede paliarse con suplementos orales de dichos
te el defecto anastomótico. minerales, ajustando de forma individual la combinación
correcta de la medicación, mientras que la carencia de vita-
Complicaciones postoperatorias tardías mina B12 se corrige administrando dosis masivas por vía oral
o con una inyección mensual, con el fin de prevenir la ane-
El patrón habitual de pérdida de peso se describe en la sec- mia megaloblástica. También es preciso prescribir suple-
ción siguiente. La causa más probable de aumento significa- mentos orales de folato. Lo mejor es instaurar el tratamien-
tivo de peso en un breve período de tiempo en un paciente to lo antes posible y no esperar a que los déficit causen
que hasta entonces había tenido una evolución satisfactoria síntomas. Una vez que se ha establecido una ingesta por vía
en los meses siguientes a la operación es la disrupción de la oral adecuada, los alimentos aportan las vitaminas y mine-
línea de grapas. Esta complicación no surgió en ninguno de rales restantes en cantidades suficientes para evitar que se
nuestros pacientes sometidos a sección gástrica al inicio produzcan déficit.
Capítulo 22 • Derivación gástrica en Y de Roux mediante cirugía abierta 189

Z RESULTADOS patologías comórbidas, los cambios fisiológicos acaecidos


tras la operación o cualquier aspecto relacionado con la asis-
Pérdida de peso tencia posquirúrgica. Otro aspecto importante de la cirugía
bariátrica que debe tener siempre en mente el cirujano es el
La mayoría de los pacientes que se han sometido a una DG establecimiento de un grupo de apoyo para los pacientes con
muestran un patrón similar de pérdida del exceso de peso: obesidad mórbida. El cirujano debe hacerse notar como
en los 3-6 meses iniciales la pérdida oscila entre el 25% y el miembro destacado de este grupo, por lo menos al principio.
40%. A partir de entonces, se va ralentizando hasta situarse No hay nada más efectivo que alguien que ya ha pasado por
entre el 50% y el 60% al cabo de 12 meses. La pérdida máxi- la experiencia de una operación bariátrica hace algún tiempo
ma se alcanza entre los 12 y los 18 meses y la mayoría de los hable con otros pacientes que acaban de ser intervenidos o
pacientes llega a tener un IMC de 40 kg/m² o menor; tan que están planteándose la posibilidad de operarse.
sólo una minoría consigue un IMC de 25 kg/m² o menor.
No obstante, la pérdida del exceso de peso observada en Seguimiento a largo plazo
estos pacientes suele ir acompañada de una mejoría de las
patologías comórbidas, sobre todo en lo que se refiere a dia- Este capítulo quedaría incompleto sin comentar algo sobre
betes e hipertensión. Dicha mejoría resulta especialmente el seguimiento de los pacientes sometidos a cirugía bariátri-
acusada cuando la diabetes y la hipertensión son de desarro- ca. Aún se siguen publicando trabajos con una media o
llo reciente. mediana del seguimiento de los pacientes de tan sólo
Cuando un paciente no exhibe un patrón de pérdida de 12 meses, razón por la cual no son muy esclarecedores. Por
peso como el descrito debe buscarse la causa del mismo. otra parte, los trabajos con un seguimiento del 70% al 75%
Como se ha señalado anteriormente, la interrupción de la pueden resultar útiles, en tanto los que declaran unas pérdi-
pérdida de peso o el aumento de peso en un período com- das de seguimiento del 25% al 30% no aportan datos sufi-
prendido entre los 4 y los 8 meses siguientes a la interven- cientemente significativos. Existen múltiples motivos por
ción puede deberse a la disrupción de la línea de grapas o a los que los pacientes no vuelven a acudir las revisiones pero,
la dilatación del estoma de la gastroyeyunostomía. Aunque si consideramos que tan sólo la mitad de los casos que se
en teoría estas complicaciones pueden corregirse quirúrgi- pierden son debidos al hecho de que el resultado de la inter-
camente, nuestra experiencia indica que la reintervención no vención no ha sido satisfactorio, esta cifra debe considerarse
garantiza que el paciente siga perdiendo peso.6 Pero lo más como parte del porcentaje de fracasos del tratamiento. Es
inexplicable y frustrante, tanto para el paciente como para el imprescindible que los trabajos que se publiquen tengan un
cirujano, es que no se registre una pérdida de peso adecuada seguimiento de entre 25 y 30 años, con unas tasas de in-
pese a que el resultado anatómico de la operación sea apa- terrupción de seguimiento del programa postoperatorio del
rentemente satisfactorio. Como han apuntado otros autores, 10% como máximo.
esta paradoja puede explicarse por el hecho de que el éxito
de la intervención depende en buena medida de la selec- La derivación gástrica en Y de Roux
ción de los pacientes. Por ejemplo, es posible que la DG no es la técnica óptima
produzca una pérdida de peso satisfactoria en pacientes
golosos, acostumbrados a consumir grandes cantidades de Mientras no exista una solución no quirúrgica para el pro-
carbohidratos.8 En definitiva, todo paciente es capaz de hacer blema de la obesidad mórbida, nos seguiremos viendo obli-
inútiles las consecuencias de cualquier tipo de intervención gados a ofrecer a los pacientes la opción de operarse. Es evi-
bariátrica si se lo propone. dente que las técnicas derivativas puras de intestino delgado
ya no constituyen una alternativa válida y que las interven-
Programas de ejercicio físico ciones restrictivas gástricas, aunque resulten atractivas por
su sencillez y las mínimas alteraciones fisiológicas que pro-
Ya hemos subrayado la importancia que tiene, para los vocan, no son capaces de conseguir una reducción perma-
pacientes habituados a llevar una vida sedentaria durante nente de peso a largo plazo. En último término, es posible
muchos años el hecho de iniciar y mantener un programa de que el fracaso de estas técnicas se deba al hecho de que el
ejercicio físico. Otra cosa es convencerlos de que lo hagan. canal alimentario sigue su trayecto normal, es decir, esófago
Para ello deben ser asesorados por profesionales que tengan ¬ estómago ¬ duodeno ¬ intestino delgado ¬ intestino
conocimientos sobre la propia realización de los ejercicios, grueso. La DG puede ofrecer un equilibrio óptimo entre las
pero también sobre la motivación para llevarlos a cabo. técnicas restrictivas puras y las malabsortivas puras, ya que,
A menudo los pacientes no pueden desarrollar los programas por un lado, deriva directamente los alimentos ingeridos al
de ejercicio sin someterse a ciertas medidas de control y, yeyuno y, por otro, puede provocar un síndrome de vacia-
eventualmente, sin contar con determinados programas de miento gástrico rápido.
«recompensa». Todo cirujano que pretenda integrarse ple-
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namente en el campo de la cirugía bariátrica debe tener muy


en cuenta estos aspectos. Z DUDAS

Asistencia integral del paciente Se pueden plantear al menos dos cuestiones fundamentales
sobre los efectos a largo plazo de la DG en Y de Roux. La
Una de las características fundamentales de un cirujano primera y más importante es lo que les sucede a los pacientes
bariátrico competente es que puede llegar a convertirse que han sido sometidos a una alteración de la fisiología gas-
durante un cierto período de tiempo no sólo en el médico de trointestinal de tal envergadura. Sabemos que muestran
cabecera del paciente obeso, sino hasta en una especie de déficit de algunas vitaminas y minerales que pueden corre-
referente ineludible, al que se le pueden consultar todo tipo girse, pero ¿son los únicos efectos adversos? ¿Pueden llegar
de cuestiones que tienen poco que ver con la obesidad, las a presentar colelitiasis por haberse eliminado el estímulo
190 Sección V • INTERVENCIONES

contráctil de la vesícula biliar? ¿Terminarán padeciendo Z BIBLIOGRAFÍA


algún tipo de hepatopatía como la asociada a la DYI? ¿Cuál
es el efecto de la exposición a largo plazo del yeyuno a sus- 1. Mason EE, Ito C.: Gastric bypass in obesity. Ann Surg 1969;170:
329-339.
tancias no osmóticas? Todas estas preguntas y alguna más 2. Scott HW Jr, Sandstead HH, Brill AB, et al: Experience with a
sólo podrán responderse mediante un seguimiento completo new technique of intestinal bypass in the treatment of morbid obesity.
a largo plazo. Ann Surg 1971;174:560-572.
La otra cuestión importante es si estos pacientes pueden 3. Griffen WO Jr, Young VL, Stevenson CG: A prospective comparison
llegar a presentar algún tipo de cáncer como consecuencia of gastric and jejunoileal bypass procedures for morbid obesity. Ann
Surg 1977;186:500-509.
de la operación. Cinco de los pacientes de nuestra serie fue- 4. National Institutes of Health Conference, Consensus Development
ron diagnosticados de cáncer, dos de páncreas y tres de Conference Panel: Gastrointestinal surgery for severe obesity.
colon, a una edad más temprana de lo que cabría esperar. ¿Se Ann Intern Med 1991;115:556-561.
trata de una coincidencia o el hecho puede estar relacionado 5. Alder RL, Terry BE: Measurement and standardization of the gastric
pouch in gastric bypass. Surg Gynecol Obst 1977;144:762-768.
con la operación? ¿La estimulación posprandial anormal del 6. Schwartz RW, Strodel WE, Simpson WS, et al: Gastric bypass revi-
páncreas puede inducir cambios del parénquima pancreático sion: lessons learned from 920 cases. Surgery 1988;104:806-812.
que desencadenen una neoplasia? ¿La nueva configuración 7. Procter CD, Bell RM, Bivins BA, et al: Gastroesophageal reflux in the
anatómica postoperatoria hace que el colon se vea expuesto morbidly obese. J Ky Med Assoc 1981;79:146-148.
8. Sugerman HJ, Starkey JV, Birkenhauer R: A randomized prospective
a un exceso de sales biliares cuya carcinogenicidad es cono- trial of gastric bypass versus vertical banded gastroplasty for morbid
cida? El seguimiento a largo plazo es el que proporcionará obesity and their effects on sweets eaters versus non-sweets eaters.
también en este caso la respuesta a tales interrogantes. Ann Surg 1987;205:613-624.
23
Situación actual de la derivación
gástrica laparoscópica
Tomasz Rogula, M.D., Stacy A. Brethauer, M.D., Paul A. Thodiyil, M.D.,
Samer G. Mattar, M.D., y Philip Schauer, M.D.

El abordaje laparoscópico de la cirugía bariátrica surgió a fina- comorbilidad. Las técnicas recomendadas conforme a los
les de los años noventa con la publicación por parte de datos disponibles en ese momento eran la derivación gástri-
Wittgrove de cinco intervenciones de derivación gástrica en Y ca y la gastroplastia vertical en banda.
de Roux realizadas por vía laparoscópica (DGYRL) en 1994.1 Pocos cirujanos podían llegar a imaginarse la posibili-
La complejidad de esta técnica hizo que tuviera escasa acepta- dad de llevar a cabo una DGYR, cuando los NIH publicaron
ción en el ámbito de la cirugía bariátrica. Sin embargo, en los la conferencia de consenso hace ya más de 15 años. Sin
últimos años se ha observado un aumento espectacular del embargo, los avances experimentados desde entonces en los
número de intervenciones de DGYRL. La técnica laparoscó- campos del instrumental, la técnica y la experiencia han
pica requiere un entrenamiento exigente e intensivo para llegar convertido a la DGYRL en una técnica segura, siempre que
a dominar la habilidad necesaria, que sólo puede alcanzarse en se disponga de la formación adecuada. Además, el especta-
el ámbito de la formación académica. La amplia experiencia cular aumento del número de pacientes sometidos a DGYRL
con esta técnica recopilada a lo largo de los cinco últimos años en los cinco últimos años nos ha permitido investigar minu-
en EE. UU. nos ha permitido llevar a cabo una revisión de su ciosamente las notables mejorías experimentadas por las
seguridad y eficacia, y valorar sus beneficios y riesgos. patologías comórbidas y la calidad de vida gracias a esta
intervención. En el informe de la conferencia de consenso de
la American Society for Bariatric Surgery de 2004 se rectifica-
Z JUSTIFICACIÓN DEL TRATAMIENTO ron las omisiones y se actualizaron las recomendaciones de
QUIRÚRGICO DE LA OBESIDAD los NIH de 1991.3

La mayor parte de las operaciones de cirugía bariátrica prac-


ticadas por los cirujanos y sufragadas por las compañías de Z REVISIÓN HISTÓRICA DE LA CIRUGÍA
seguros de salud hoy en día se atienen al informe de la con- BARIÁTRICA
ferencia de consenso sobre cirugía gastrointestinal de la
obesidad grave de los National Institutes of Health (NIH) El tratamiento quirúrgico de la obesidad mórbida se inició a
publicado en 1991.2 Este grupo de expertos revisó los datos finales de los años cincuenta con el propósito de producir
sobre la seguridad y eficacia a largo plazo del tratamiento malabsorción mediante la derivación de extensos segmentos
médico y quirúrgico para la pérdida de peso, y llegó a la del intestino. Las primeras derivaciones yeyunocólicas causa-
conclusión de que la alternativa quirúrgica debe basarse en ban desequilibrios electrolíticos, diarrea refractaria e insufi-
criterios específicos. Dicha recomendación se sustentaba ciencia hepática en un gran número de pacientes, que obliga-
fundamentalmente en el hecho de que la pérdida de peso ron a revertir la intervención. Ello condujo al desarrollo de la
obtenida mediante el tratamiento no quirúrgico, asociada o derivación yeyunoileal, en la que la porción proximal del yeyu-
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no a la modificación de la conducta o al tratamiento farma- no se anastomosaba al íleon dejando un asa estática proximal
cológico, presenta una tasa de recurrencia tan sumamente larga, pero también aparecía insuficiencia hepática, sobre todo
elevada al cabo de dos años que resulta inaceptable. Pese a en los pacientes que presentaban malnutrición proteico-caló-
que desde entonces han aparecido tratamientos médicos rica, así como otro tipo de problemas como cálculos renales de
innovadores, la pérdida de peso experimentada por los oxalato y el síndrome de la burbuja gástrica.4
pacientes con obesidad mórbida ofrece unos resultados La primera operación de derivación gástrica fue llevada a
desalentadores. Según los criterios de los NIH, los pacientes cabo por Mason en 1967 anastomosando una gastroyeyunos-
candidatos a cirugía bariátrica son aquellos que no hayan tomía a la bolsa gástrica.5 En el transcurso de las cuatro últi-
logrado perder peso con tratamientos no quirúrgicos y pre- mas décadas esta técnica ha sufrido gran cantidad de modifi-
senten un índice de masa corporal (IMC) de más de 35 aso- caciones encaminadas a eliminar la gastritis biliar y reducir
ciado a patologías comórbidas o de más de 40 con o sin las tasas de úlcera marginal y de dehiscencia de la línea de
191
192 Sección V • INTERVENCIONES

grapas.6 Actualmente la derivación gástrica con exclusión en ma de valorar el nivel de traumatismo tisular es la respuesta
Y de Roux constituye la técnica de cirugía bariátrica más fre- inflamatoria sistémica secundaria a la cirugía. Nguyen y cols.
cuente en EE. UU., y el abordaje laparoscópico ha experi- han evaluado la respuesta sistémica al estrés y los marcado-
mentado un gran auge en los cinco últimos años. res inflamatorios tras la realización de la derivación gástrica
Otro intento fallido de restringir la ingesta de alimen- mediante cirugía abierta y por vía laparoscópica.14 En ambos
tos fue la gastroplastia horizontal, pues a menudo se acom- casos se observó un aumento de la respuesta al estrés (niveles
pañaba de dilatación de la bolsa fúndica proximal, dilatación de factor de necrosis tumoral ␣, interleucina-8, dopamina,
del orificio de salida y recanalización de la línea de grapas.7 adrenalina, insulina, glucosa, cortisol y noradrenalina). Sin
A principios de los años ochenta Laws diseñó la gastroplastia embargo, el grupo sometido a cirugía abierta presentó unos
vertical anillada8 y Mason comenzó a practicar la gastroplas- niveles significativamente mayores de corticotropina, nora-
tia vertical en banda.9 Esta técnica restrictiva consiste en la drenalina, proteína C reactiva e interleucina-6 en los tres
creación de una bolsa proximal grapada con un pequeño ori- días siguientes a la operación. La existencia de niveles eleva-
ficio de salida al que se aplica una banda. Aunque se asocia a dos de estos reactantes de fase aguda, citocinas y marcadores
una tasa baja de complicaciones precoces y una pérdida de metabólicos del estrés indica que la DGYRL produce menos
peso a corto plazo razonable, la tasa de reintervenciones por lesión tisular que la cirugía abierta. En otros estudios se ha
complicaciones tardías se sitúa entre el 17% y el 30%. Entre comprobado una disminución de los niveles de proteína C
estas complicaciones se incluyen el reflujo gastroesofágico, reactiva e interleucina-6 tras la realización de colecistecto-
la estenosis del estoma, la dehiscencia de la línea de gra- mía,15,16 colectomía17 e intervenciones ginecológicas18 por
pas, la migración de la banda y los vómitos refractarios. La vía laparoscópica.
escasa pérdida de peso a largo plazo y la alta tasa de compli-
caciones tardías de la gastroplastia vertical en banda han
hecho que actualmente sólo sea practicada con éxito por el Z COMPARACIÓN ENTRE LA DERIVACIÓN
5% de los cirujanos bariátricos de EE. UU. GÁSTRICA REALIZADA
A finales de los años setenta surgió la técnica de la ban- CON LAPAROSCOPIA Y CIRUGÍA ABIERTA
da gástrica, en principio con material fijo, con el fin de crear
una bolsa gástrica proximal. La versión actual10 se presta al La experiencia acumulada en el campo de la cirugía bariátri-
abordaje laparoscópico y la banda gástrica ajustable laparos- ca abierta a lo largo de más de 50 años permite llevar a cabo
cópica permite conseguir un equilibrio entre la restricción operaciones eficaces con una tasa de complicaciones acepta-
gástrica y la pérdida de peso por una parte y los síntomas de ble. Sin embargo, el compromiso pulmonar y los problemas
disfagia, vómitos y reflujo por la otra. Esta técnica se ha relacionados con las heridas quirúrgicas siguen siendo com-
venido utilizando satisfactoriamente en Europa y Australia plicaciones importantes de la cirugía bariátrica abierta.19
y en 2001 fue aprobada por la Food and Drug Administration Hasta el 20% de los pacientes sometidos a cirugía bariá-
estadounidense. trica abierta presentan infecciones de la herida quirúrgica y
La derivación biliopancreática de Scopinaro también hernias incisionales en el postoperatorio.18,20 Dado que con
apareció a finales de los años setenta. Esta técnica malabsor- la laparoscopia se consigue reducir el dolor postoperatorio y
tiva consiste en seccionar un segmento de 250 cm del intes- las complicaciones relacionadas con la herida quirúrgica de
tino delgado proximal a la válvula ileocecal y anastomosar el intervenciones complejas, resultaba lógico aplicar esta técni-
asa distal a una bolsa gástrica con una capacidad de entre ca a la derivación gástrica, para así poder ofrecer las mismas
200 y 400 mL. A continuación se construye una enterosto- ventajas a esta población de pacientes de alto riesgo.
mía en Y de Roux con el fin de crear un canal común de Sólo se han publicado tres ensayos aleatorizados y con-
entre 50 y 100 cm.11 La derivación biliopancreática constitu- trolados en los que se haya comparado la derivación gástrica
ye hasta la fecha la operación bariátrica más eficaz en cuanto realizada con cirugía abierta y por laparoscopia.13,21,22 Los
a la pérdida de peso mantenida, aunque a costa de una alta autores de uno de ellos22 únicamente habían realizado 10 in-
tasa de complicaciones y mortalidad. Para intentar paliar tervenciones de derivación gástrica laparoscópica y, en conse-
las tasas relativamente altas de úlcera marginal y síndrome de cuencia, la curva de aprendizaje se refleja en las altas tasas de
vaciamiento rápido asociadas a la derivación biliopancreática complicaciones y mortalidad (3,3% para esta última).
se desarrolló el cruce duodenal,12 en el que se efectúa una La DGYRL produce menos complicaciones de la pared
gastrectomía tubular dejando el píloro intacto y se crea abdominal que la DGYR con cirugía abierta. Los ensayos
una duodenoileostomía. Esta técnica también es malabsortiva aleatorizados y controlados13,21 en los que se han comparado
y en ella suele utilizarse un canal común de 50 a 100 cm. ambos tipos de abordaje quirúrgico han demostrado que con
la laparoscopia se logra una disminución significativa del
número de hernias incisionales postoperatorias. En una revi-
Z VENTAJAS DE LA LAPAROSCOPIA sión de 10 series, que en total incluían 3464 intervenciones de
DGYRL, Podnos y cols. constataron que, en comparación
La aplicación de la laparoscopia a cualquier intervención con la cirugía abierta, la DGYRL produjo una disminución
debe valorarse minuciosamente, con el fin de establecer sus significativa tanto de la tasa de infección de la herida quirúr-
ventajas e inconvenientes. En términos generales, la laparos- gica (3% frente al 6,6% de la DGYR con cirugía abierta)
copia ofrece más ventajas que la cirugía abierta. Existen dife- como de la de hernia incisional (0,5% frente al 8,5%).23
rencias fundamentales obvias entre la cirugía abierta y la Está comprobado que la cirugía abdominal abierta pro-
laparoscópica. En concreto, la laparoscopia resulta menos voca una afectación importante de la función pulmonar,
agresiva para los tejidos, porque implica menores manipula- demostrable por espirometría y gasometría, 24 que puede lle-
ción y traumatismo visceral. Si se considera que la presión gar a producir una morbilidad significativa, sobre todo en
intraabdominal postoperatoria constituye un índice precoz pacientes que ya presentan un deterioro pulmonar basal,
de lesión y edema tisular, la derivación gástrica laparoscópi- como los que padecen obesidad mórbida. Una de las ventajas
ca provoca menos agresión que la cirugía abierta.13 Otra for- principales de la laparoscopia es que causa menos dolor
Capítulo 23 • Situación actual de la derivación gástrica laparoscópica 193

postoperatorio, lo que repercute en una mejora de la función También se han analizado y comparado otras variables
pulmonar en comparación con la de la cirugía abierta. de la derivación gástrica realizada mediante cirugía abierta
Nguyen y cols. procedieron a evaluar en un ensayo alea- y por laparoscopia. LA DGYRL prolonga habitualmente el
torizado la función pulmonar y la necesidad de analgésicos de tiempo quirúrgico medio, pero también acorta la duración
los pacientes sometidos a derivación gástrica por vía laparos- de la hospitalización (3 días en comparación con los 4 días de
cópica y mediante cirugía abierta.25 En los 2 primeros días del la cirugía abierta). Los pacientes sometidos a DGYRL se
postoperatorio el grupo intervenido con laparoscopia presen- reincorporan antes a su actividad diaria y laboral que los
tó una disminución significativa del dolor y un menor grado intervenidos con cirugía abierta. La DGYRL ocasiona más
de afectación pulmonar, y su función pulmonar se normalizó gastos quirúrgicos, aunque los costes hospitalarios totales
antes (a los 7 días) que en los operados mediante cirugía abier- son menores.13
ta (v. figura 23-1). Se ha demostrado que el abordaje laparos- La pérdida de peso al cabo de 1 año es la misma con ambos
cópico produce unos beneficios pulmonares similares en los tipos de abordaje quirúrgico. En 2 estudios se ha demostrado
pacientes sometidos a colecistectomía26 y colectomía.27 que la pérdida del exceso de peso (PEP) a los 6 meses es mayor

FVC

Porcentaje del valor 120


preoperatorio 100
*
80 *
*
60 †* DGYR cirugía abierta
40
†* DGYRL laparoscópica
20 †*
†*
0
Basal POD 1 POD 2 POD 3 POD 7

FEV1
120
Porcentaje del valor

100
preoperatorio

*
80 * *
Figura 23-1 Espirometría postoperatoria 60
DGYR cirugía abierta
(FVC, FEV1, FEV 25-75% y PEF) tras derivación
40 †*
gástrica en Y de Roux (DGYR) laparoscópica y DGYRL laparoscópica
con cirugía abierta. *P ⬍ 0,05 en comparación con †*
20 †*
el valor basal; ⫹ P ⬍ 0,05 en comparación con la †*
DGYR laparoscópica. 0
FEV1, volumen espiratorio forzado en 1 s; Basal POD 1 POD 2 POD 3 POD 7
FEV25-75%, volumen espiratorio forzado en la fase
media de la espiración; FVC, capacidad vital for-
zada; PEF, flujo espiratorio máximo; POD, día FEV25–75%
postoperatorio.
(Tomado de Nguyen NT, Lee SL, Goldman 120
PPorcentaje del valor

C, et al: Comparison of pulmonary function and 100


postoperative pain after laparoscopic versus open
preoperatorio

*
gastric bypass: a randomized trial. J Am Coll 80 * *
Surg 2001; 192: 469-477. Con autorización). 60 †*
DGYR cirugía abierta
40
DGYRL laparoscópica
†*
20 †*
†*
0
Basal POD 1 POD 2 POD 3 POD 7
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

PEF
120
Porcentaje del valor

100
preoperatorio

*
80 * *
60
DGYR cirugía abierta
40
DGYRL laparoscópica
†*
20 †*
†*
0
Basal POD 1 POD 2 POD 3 POD 7
194 Sección V • INTERVENCIONES

con DGYRL que con cirugía abierta, aunque prácticamente se Z TÉCNICA DE LA DERIVACIÓN GÁSTRICA
iguala al año (69% para la DGYRL y 62%-65% para la cirugía EN Y DE ROUX LAPAROSCÓPICA
abierta)13,28 y se mantiene así al cabo de 3 años.21
La aparición de fuga de la anastomosis tras una DGYR CON GASTROYEYUNOSTOMÍA
constituye una complicación que va acompañada de una ele- REALIZADA CON GRAPADORA LINEAL
vada morbilidad e incluso mortalidad. En la actualidad la tasa
de fugas de las anastomosis con ambos tipos de abordaje qui- Se coloca al paciente en decúbito supino, con las extremidades
rúrgico es inferior al 5%. Las altas tasas de fugas postopera- superiores fijadas a reposabrazos almohadillados, las piernas
torias tras intervenciones de DGYRL descritas en las prime- juntas y los pies apoyados en estribos. Se pone almohadillado
ras series reflejaban el nivel de dificultad de la técnica y a entre las piernas y las rodillas y se juntan las piernas fijándolas
menudo incluían la curva de aprendizaje del cirujano. La tasa con esparadrapo para mantener la postura anatómica normal
de fugas de las anastomosis en la revisión de Podnos y cols. fue y para que los pies queden situados correctamente en los estri-
del 2,1% para la DGYRL13 y del 1,7% para la cirugía abierta.23 bos. Una vez que el paciente está asegurado y antes de colocar
En el ensayo aleatorizado y controlado de Nguyen y cols. sur- las tallas quirúrgicas se coloca la mesa de operaciones en
gieron complicaciones importantes en el 7,6% de las interven- Trendelenburg forzado, para comprobar que el paciente está
ciones de DGYRL y en el 9,2% de las efectuadas con cirugía firmemente anclado a la mesa.
abierta. Se produjo una fuga de anastomosis en cada uno de Se accede al abdomen utilizando un trócar de 15 mm o
los grupos quirúrgicos. Las tasas de fugas con el abordaje una aguja de Veress en el cuadrante superior izquierdo y el
laparoscópico van disminuyendo conforme aumenta la expe- resto de los puertos se colocan bajo visión directa tras la
riencia del cirujano. Así lo demuestra el hecho de que el grupo colocación de la aguja y la infiltración de anestesia local. El
de Higa y cols. no experimentó ninguna fuga en sus últimas lóbulo izquierdo del hígado se tracciona con un retractor
1500 intervenciones de DGYRL.29 hepático de Nathanson de 5 mm, que se fija a la mesa de
La incidencia de estenosis posquirúrgica de las anasto- operaciones con un sistema de retracción mecánico. A con-
mosis del DGYR depende de la técnica empleada para crear tinuación se coloca al paciente en anti-Trendelenburg forza-
la gastroyeyunostomía y de otras variables, entre las que se do para poder visualizar el intestino anterior.
incluyen la tensión y la isquemia existentes a nivel de la anasto- Tras una inspección laparoscópica de la cavidad perito-
mosis. El abordaje laparoscópico incrementa la tasa de esteno- neal se inicia la intervención con la formación del asa de Roux
sis. En el estudio aleatorizado de Nguyen y cols. se utilizó la y la yeyunoyeyunostomía. El epiplón mayor y el colon trans-
técnica con grapadora circular para intervenciones de cirugía verso se ascienden hacia la parte superior del abdomen y se
abierta y laparoscópica, y la tasa de estenosis resultó ser mayor identifica el ligamento de Treitz. A continuación se hace adop-
en el grupo de la laparoscopia (11,4% frente al 2,6%, P ⫽ tar una forma de C a la porción proximal del intestino delgado,
0,06).13 La revisión efectuada por Podnos incluía distintas para poder identificar los segmentos proximal y distal, y se
técnicas de DGYR con cirugía abierta y laparoscópica, y la procede a seccionar el yeyuno a unos 30 cm o 50 cm distal al
DGYRL también dio lugar a una tasa de estenosis mayor que ligamento de Treitz con una grapadora lineal de 45 mm y gra-
la cirugía abierta (4,7% frente al 0,7%).23 pas de 2,5 mm. Con otros dos disparos de la grapadora con
La obstrucción intestinal precoz secundaria al DGYR carga vascular de grapas de 2 mm se termina de seccionar el
suele estar relacionada con factores técnicos tales como la mesenterio del yeyuno, de forma que tenga la longitud sufi-
posición del asa de Roux o la formación de la yeyunoyeyu- ciente para poder ascender sin tensión el asa de Roux hasta la
nostomía. Este tipo de obstrucción es más frecuente con bolsa gástrica. Se sutura una pieza de 6 cm de un drenaje de
DGYRL que con cirugía abierta.23 El grapado de la yeyuno- Penrose a la esquina del asa de Roux como punto de referencia
yeyunostomía por vía laparoscópica resulta más exigente y para facilitar su ascensión hasta la bolsa gástrica.
desde el punto de vista técnico y puede ocasionar un estre- A continuación se miden 75 cm del asa de Roux en senti-
chamiento o angulación de la anastomosis que raramente do distal desde el drenaje de Penrose. En pacientes con IMC
sucede con las técnicas abiertas. Las obstrucciones intesti- de más de 50 kg/m² se crea un asa de Roux de 150 cm. El
nales tardías también aparecen con más frecuencia tras intestino estirado se va midiendo de 10 en 10 cm con la punta
DGYRL.30 En 2 ensayos aleatorizados se ha comprobado de una pinza de tracción endoscópica que tenga una marca de
que la tasa de obstrucción intestinal postoperatoria tardía es 10 cm. Una vez medida la longitud deseada se aproximan el
mayor con el DGYR por vía laparoscópica que con la cirugía asa biliopancreática y el asa de Roux con una sutura perma-
abierta.13,21 Podnos y cols. también han constatado diferen- nente hasta que queden adyacentes. Se efectúa una pequeña
cias significativas a favor de la cirugía abierta en lo que se enterotomía en ambos segmentos del intestino y se crea una
refiere a la obstrucción intestinal tardía (el 2,1% frente al anastomosis terminoterminal con un disparo de una grapado-
3,1% con DGYRL).23 Dicha diferencia puede atribuirse a la ra lineal de 60 mm con grapas de 3,5 mm en ambas luces. La
menor adhesión o al cierre inadecuado de los defectos enterotomía común restante se asegura con suturas perma-
mesentéricos que se produce en la DGYRL. nentes en las esquinas y en el medio para estabilizar el tejido,
La hemorragia gastrointestinal de las líneas de grapas pue- mientras que con otro disparo de la grapadora lineal se cierra
de producirse con ambos tipos de abordaje quirúrgico. Mientras el defecto y se completa la anastomosis. Debe tenerse cuidado
que en el ensayo aleatorizado de Nguyen resultó más frecuente de no estrechar la luz con este último disparo de la grapadora.
en el grupo laparoscópico (el 3,8% frente al 0%),13 otro igual- La enterotomía puede suturarse manualmente o bien cerrarse
mente aleatorizado no reveló diferencias entre ambos.21 En la con una endocosedora Endostitch. Una vez finalizada la
revisión realizada por Podnos sí que se constató una tasa signi- anastomosis, se inspecciona para descartar que exista acoda-
ficativamente mayor de sangrado gastrointestinal tras DGYR miento o fallos evidentes de la línea de grapas, pudiendo apli-
(1,9% frente al 0,6%).23 La utilización de grapadoras con grapas carse suturas de estabilización. Si la anastomosis no presenta
de menor grosor y el refuerzo de las líneas de grapas con bio- ningún problema, se procede a cerrar el defecto mesentérico
material reabsorbible pueden contribuir a disminuir la inciden- con una sutura continua. Con el fin de minimizar la tensión
cia de esta complicación de la DGYRL.23 sobre el asa de Roux se secciona el epiplón mayor mediante
Capítulo 23 • Situación actual de la derivación gástrica laparoscópica 195

disección ultrasónica de forma que pueda pasarse dicha asa mentos dietéticos y actividad física, así como también en la
entre las hojas del epiplón seccionado hasta alcanzar la bolsa detección de complicaciones tardías. A los pacientes se les
gástrica. prescriben suplementos diarios de calcio, hierro, vitami-
Luego se procede a crear la bolsa gástrica. Con el disec- na B12 y un complejo vitamínico. El estado nutricional se eva-
tor ultrasónico se crea una ventana en el espacio libre del lúa 2 veces al año mediante pruebas de laboratorio. A los
ligamento gastrohepático y se efectúa un disparo con la gra- pacientes con colelitiasis se les prescribe ácido ursodesoxicó-
padora lineal de 60 mm hacia la curvatura menor del estó- lico durante 6 meses para reducir la incidencia de formación
mago. Una vez alcanzada esta, se crea un espacio retrogás- de cálculos biliares durante la fase de pérdida de peso rápida.
trico para permitir el paso de la mordaza de la grapadora
lineal. Primero se realiza un disparo horizontal 2 cm por
debajo de la unión gastroesofágica y a continuación dos o Z RESULTADOS DE LA DERIVACIÓN GÁSTRICA
tres disparos verticales en el ángulo de His con la grapadora LAPAROSCÓPICA
lineal de 60 mm y grapas de 4,8 mm para crear una bolsa
gástrica verticalizada de 15 a 30 mL. El último disparo ver- Pérdida de peso
tical se guía con un instrumento angulado situado por detrás
de la línea de grapas y que sobresale en el ángulo de His. La pérdida del exceso de peso experimentada tras una
A continuación se separa mediante disección cuidadosa la DGYRL oscila entre el 68% y el 80%,30 porcentajes simila-
pequeña bolsa gástrica del resto del estómago. Se liberan las res a los obtenidos con la cirugía abierta. En el estudio de
adherencias posteriores y las inserciones de la bolsa gástrica Schauer y cols.31 la PEP media en 275 pacientes que habían
al pilar izquierdo para que quede una distancia suficiente sido sometidos a DGYRL fue del 83% al año y del 77% a los
entre las dos líneas de grapas y se reduzca la posibilidad de 30 meses. Los porcentajes medios de PEP al cabo de un año
que aparezca una fístula gastrogástrica. de la DGYRL descritos por Higa y cols. (1500 pacientes)29 y
Se vuelve a colocar al paciente en decúbito supino y se DeMaria y cols. (281 pacientes)32 fueron del 69% y del 70%,
eleva el asa de Roux a través del espacio creado previamente por respectivamente (seguimiento 72%).
encima del colon transverso, hasta situarla en posición antecó- La pérdida media de peso tras DGYRL de los pacientes
lica y antegástrica. La tensión sobre el asa de Roux es la que superobesos (IMC ⬎ 50) suele ser menor que la de los
dicta su emplazamiento en posición retrocólica y antegástrica pacientes con un IMC ⬍ 50 y oscila entre el 51% y el 69%.33,34
o retrocólica y retrogástrica. Estas técnicas hacen que aumente Biertho y cols. han observado que la PEP a los 18 meses fue
el tiempo de intervención y obligan a cerrar el espacio de del 66% en los pacientes con un IMC mayor de 50 y del 81%
Petersen, proclive a la formación de hernias internas entre los en los de IMC comprendido entre 40 y 50,35 mientras que en
mesenterios del asa de Roux y el colon transverso. Utilizando los 14 pacientes con un IMC ⬎ 60 incluidos en el estudio
el Endostitch se fija el asa de Roux a la pared posterior de la alcanzó el 67% al cabo de 1 año. Por otro lado, Farkas y
bolsa gástrica con una sutura reabsorbible continua 2-0. A con- cols.36 hallaron un 53% de PEP al año en pacientes con IMC
tinuación se sitúan adyacentes la gastrostomía y la enterotomía ⬎ 60. Sin embargo, este grupo presentó una tasa de compli-
con el fin de permitir el paso de la grapadora lineal y crear la caciones más alta que la de los que tenían un IMC ⬎ 60.
anastomosis. La grapadora lineal de 60 mm se introduce 1,5 cm Aunque no se ha establecido la persistencia de la
en cada una de las luces, se cierra y se dispara (v. figura 23-2). El DGYRL laparoscópica a largo plazo (más de 10 años) como
orificio restante se cierra en dos planos con sutura continua se ha hecho con la cirugía abierta,37 es lógico suponer que
reabsorbible sobre un endoscopio. El endoscopio permite cali- sus resultados sean similares, dado que las modificaciones
brar la anastomosis para un tamaño de 30 F, examinar intraope- anatómicas efectuadas con ambas técnicas son idénticas. El
ratoriamente el sangrado de la anastomosis e insuflar esta para período de seguimiento más prolongado de la derivación
descartar fugas. Tras situar una pinza intestinal distal a la gástrica con cirugía abierta (14 años) es el del estudio de
anastomosis, se sumerge esta en líquido de irrigación, se insufla Pories y cols. y la PEP observada en él fue del 49%.38
y se comprueba si hay fugas por la aparición de burbujas. Si se El Swedish Obese Study es un estudio prospectivo contro-
detecta una fuga se procede a volver a suturar el defecto. Se deja lado en el que se comparó el tratamiento quirúrgico de la
un drenaje de Jackson-Pratt posterior a la anastomosis y se recu- obesidad, incluida la derivación gástrica, con el no quirúrgico.
bre con epiplón la parte superior de la anastomosis. Con la ayu- El seguimiento durante 10 años de los 1268 pacientes inclui-
da de un pasador de sutura se cierran los orificios de los puertos dos en este estudio reveló un aumento de peso del 1,6% en el
de 12 mm o más con sutura reabsorbible (v. figura 23-3). grupo de control y un descenso de peso del 16,1% en el grupo
quirúrgico con respecto al peso preoperatorio.39

Z CUIDADOS POSTOPERATORIOS Mejora de las patologías comórbidas


Al día siguiente de la intervención se realiza un tránsito eso- Gran parte de la comorbilidad relacionada con la obesidad
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fagogastroduodenal para evaluar la anastomosis gastroyeyu- mejora o desaparece tras la DGYRL. En la tabla 23-1 se mues-
nal. Si es normal se comienza una dieta líquida absoluta y si tran los principales beneficios de la técnica a este respecto.
esta se tolera se pasa a una dieta blanda la semana siguiente. La diabetes tipo II y la intolerancia a la glucosa desapare-
La duración media de la hospitalización tras una DGYRL es cen tras la DGYRL en el 82% al 98% de los casos.32,40,41 Esta
de 3 días. Se cita al paciente en consulta la semana siguiente operación ejerce un intenso efecto sobre el metabolismo de la
y al cabo de 1, 2, 3, 6, 9 y 12 meses, y posteriormente con glucosa y el control de la diabetes que suele preceder a la pér-
periodicidad anual. Las primeras visitas tras la operación se dida de peso, y actualmente se está investigando cuál puede
centran sobre todo en detectar posibles complicaciones y ser el mecanismo implicado. La desaparición de la hiperten-
abordar las principales modificaciones de la dieta que requie- sión que tiene lugar en el 52% al 92% de los casos32,40,41 pare-
re el paciente. En las visitas posteriores se hace hincapié en ce estar relacionada con la rápida pérdida de peso que se pro-
la nutrición y en la importancia de seguir el plan de suple- duce en el primer año después de la intervención.
196 Sección V • INTERVENCIONES

B C
Figura 23-2 A, B, C. Gastroyeyunostomía con grapadora lineal. Tras aproximar la bolsa gástrica y el asa de Roux con una línea posterior de
sutura, se introduce la grapadora lineal 1,5 cm en una pequeña gastrotomía y enterotomía. A continuación se cierra y se dispara la grapadora para
crear la anastomosis, la cual se cierra en dos planos sobre un endoscopio.
Capítulo 23 • Situación actual de la derivación gástrica laparoscópica 197

el 44% al 88% de los pacientes y la cefalea de tipo migrañoso


mejora en el 29% y desaparece en el 57% tras la DGYRL.31

Calidad de vida
El cuestionario SF-36 ha sido la herramienta utilizada en la
mayoría de los estudios para evaluar la calidad de vida tras
una DGYRL y en gran parte de ellos se ha documentado una
mejora de esta variable.43 Nguyen comparó la calidad de vida
tras DGYR mediante cirugía abierta y por vía laparoscópica y
observó que la mejoría fue más rápida en el grupo laparoscó-
pico y que se mantenía al cabo de 1 y 3 meses de la interven-
ción.13 A los 6 meses ambos grupos mostraban unas puntua-
ciones comparables a las normas estadounidenses. En
comparación con la DGYR con cirugía abierta, la DGYRL
acortó en un día la hospitalización (4 días frente a 3 días) y
permitió a los pacientes reincorporarse mucho antes a las acti-
vidades de la vida diaria: 8,4 días en el estudio de Nguyen y
9,1 días en nuestra serie de 275 pacientes13,31 frente a los 17,7 días
del estudio sobre cirugía abierta de Nguyen. La DGYRL tam-
bién adelanta la reincorporación a la vida laboral.13,31 El hecho
de que, en comparación con la cirugía abierta, la DGYRL pro-
duzca una mejoría más rápida de la calidad de vida y, por tanto,
acelere la normalización de la actividad física, puede explicar
que la pérdida de peso también aparezca más rápidamente.

Mortalidad
La tasa de mortalidad de la DGYRL en las series de mayor
Figura 23-3 Derivación gástrica en Y de Roux finalizada. tamaño (n ⬎ 100) oscila entre el 0% y el 0,9%,32,40,44,45 por-
centajes similares a los descritos en el caso del DGYR
La hipercolesterolemia mejora en el 33% de los pacien- mediante cirugía abierta (0%-1,5%). En un metaanálisis de
tes y llega a desaparecer en el 63%,31 y con la hipertrigliceri- todas las intervenciones bariátricas se comprobó una tasa
demia ocurre algo parecido. La DGYRL resulta muy eficaz de mortalidad del 0,5% en los 5644 pacientes sometidos a
para eliminar la enfermedad de reflujo gastroesofágico derivación gástrica laparoscópica o con cirugía abierta.46
(ERGE). Los síntomas mejoraron en el 24% de los pacientes Fernandez y cols. han efectuado una revisión de las tasas
de nuestro estudio y desaparecieron en el 72%.31 En otros de mortalidad de la DGYR y con cirugía abierta y han obser-
estudios se ha comprobado la desaparición de los síntomas vado que, pese a que el grupo laparoscópico presentó una
de la ERGE tras DGYRL en más del 95% de los casos.32,40 tasa menor (0,7% frente al 1,9%), el tipo de abordaje quirúr-
En los pacientes con obesidad mórbida que también presen- gico no constituía un factor independiente de predicción de
tan ERGE, la DGYRL puede servir para tratar simultánea- la mortalidad, según los resultados de un análisis multifac-
mente el reflujo y el exceso de peso.42 torial.47 Estos autores comprobaron que el peso y la hiper-
Tras la pérdida de peso la apnea obstructiva del sueño tensión preoperatorios, las fugas postoperatorias y la embo-
desaparece en el 75% al 98% de los pacientes,40,42 mientras que lia pulmonar constituían factores independientes de
la artrosis mejora en el 47% y llega a desaparecer en el 41% al predicción de la mortalidad para el total de la serie, que
76%.31,32 La incontinencia urinaria de esfuerzo desaparece en incluía 884 pacientes superobesos, mientras que únicamente
las fugas postoperatorias y la embolia pulmonar predecían la
mortalidad postoperatoria en el grupo laparoscópico forma-
do por 580 pacientes.
Tabla 23-1 BENEFICIOS DE LA DERIVACIÓN
GÁSTRICA EN Y DE ROUX LAPAROSCÓPICA
Pérdida del exceso de peso 68%-80% Z TRATAMIENTO DE LAS COMPLICACIONES
(12-60 meses de seguimiento)
PEP para IMC ⬎ 50 51%-66% Los cirujanos responsables del tratamiento de pacientes con
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(12-36 meses de seguimiento) obesidad mórbida que han sido sometidos a una DGYRL
Hospitalización 2-4 días deben ser extremadamente cautelosos en lo que atañe a las
Resolución de patologías comórbidas complicaciones postoperatorias. Las manifestaciones clíni-
Diabetes 82%-98% cas, sobre todo las de las complicaciones sépticas intraabdo-
Hipertensión 52%-92%
minales, son más sutiles que los signos y síntomas manifes-
Hipercolesterolemia 63%
Reflujo gastroesofágico 72%-98% tados por los pacientes no obesos. Los cirujanos bariátricos
Apnea del sueño 74%-100% deben aplicar una estrategia terapéutica para las complica-
EAD 47%-76% ciones habituales y graves con el fin de poder diagnosticarlas
Incontinencia urinaria 44%-88% precozmente y tratarlas intensivamente. En la tabla 23-2 se
EAD, enfermedad articular degenerativa; IMC, índice de masa corporal; muestran los riesgos de la DGYRL y las tasas de algunas de
PEP, pérdida del exceso de peso. las complicaciones habituales.
198 Sección V • INTERVENCIONES

anastomosis a tensión. Las maniobras fundamentales encami-


Tabla 23-2 RIESGOS Y COMPLICACIONES nadas a minimizar esta complicación consisten en realizar
DE LA DERIVACIÓN GÁSTRICA una disección cuidadosa, situar el asa de Roux en la posición
EN Y DE ROUX LAPAROSCÓPICA adecuada (retrocólica o retrogástrica, si es necesario) para
Conversión a cirugía abierta 0%-8% reducir todo lo posible la tensión y comprobar la existencia de
Tasa de complicaciones 4,2%-30% fugas de las anastomosis intraoperatoriamente. También pue-
postoperatorias precoces de resultar útil para reducir la tasa de fugas reforzar las
(importantes y no importantes) líneas de grapas con material reabsorbible.
Sangrado 0,4%-4% No todas las fugas producen peritonitis y sepsis mani-
Fuga de anastomosis 0%-4,4%
Infección de herida quirúrgica 0%-8,7% fiestas, sino que la mayoría de ellas dan lugar a síntomas
TVP/TEP 0%-1,3%/0%-1,1% menos obvios, tales como aumento del dolor abdominal,
Tasa de complicaciones 8,1%-47% dolor en el vértice del hombro, hipo y sensación de muerte
postoperatorias tardías (importantes inminente. La aparición de taquicardia, taquipnea o hipoxia
y no importantes) persistentes debe hacer sospechar de un posible escape,
Estenosis anastomótica 2%-16% incluso en ausencia de cualquiera de los síntomas anteriores
Úlcera marginal 0,7%-5,1%
Obstrucción intestinal 1,1%-10,5% o de alteraciones de la analítica.
Tasa de reintervención 0%-13,8% Con un tránsito esofagogastroduodenal (TEGD) reali-
Carencia de hierro 6%-52% zado al día siguiente de la intervención se puede detectar
Carencia de vitamina B12 3%-37% hasta el 33% de las fugas, con una especificidad del 100%.57
Tasa de mortalidad 0%-2% Gracias a la detección precoz se reduce la morbilidad58 y se
TVP: trombosis venosa profunda; TEP: tromboembolia pulmonar. acorta la hospitalización de forma significativa.57 Según cri-
terios clínicos o radiológicos, la incidencia máxima de fugas
se produce al quinto día del postoperatorio,31 por lo que el
Tromboembolia venosa hecho de que el tránsito sea normal el primer día del posto-
peratorio no significa que no deba llevarse a cabo una reva-
Los pacientes de obesidad mórbida presentan un riesgo ele- luación completa en caso de que el paciente presente cam-
vado de tromboembolia. Pese a sus numerosas ventajas, la bios en su estado clínico.59 La no realización precoz de un
cirugía laparoscópica requiere un tiempo quirúrgico más estudio radiológico con contraste conlleva un retraso medio
prolongado que la cirugía abierta, sobre todo si el cirujano de 7 días del diagnóstico de fuga de la gastroyeyunostomía,
tiene poca experiencia. El tiempo quirúrgico prolongado en y se asocia a una tasa de mortalidad del 10%.60
posición de anti-Trendelenburg, junto con el neumoperito- La sospecha clínica de fuga con pruebas de imagen
neo, favorecen la insuficiencia venosa de las extremidades (TEGD y TC) normales obliga a realizar una exploración
inferiores y pueden aumentar el riesgo de sufrir una trom- laparoscópica. Si se trata de una fuga localizada y drenada
bosis venosa profunda o una tromboembolia pulmonar adecuadamente en un paciente inestable hemodinámicamente
(TEP).48 Las medidas profilácticas incluyen la administra- se recomienda aplicar un tratamiento conservador31,61 consis-
ción de heparina de bajo peso molecular y la aplicación de tente en antibióticos por vía IV, nutrición parenteral o a través
compresión en las pantorrillas.49 La incidencia de TEP de una sonda de gastrostomía colocada con control radiológi-
secundaria a DGYRL oscila entre el 0% y el 1,1%24,30 y co o laparoscópico. Las colecciones localizadas pueden dre-
supone entre el 30% y el 50% de todas las muertes registra- narse percutáneamente con control tomográfico.
das tras derivación gástrica.50,51 Se debe considerar la posibi- Nuestra experiencia incluye 40 fugas en 2675 DGYRL
lidad de colocar profilácticamente un filtro de vena cava en consecutivas, de las que sólo en el 10% fue necesario realizar
los pacientes que presenten riesgo especialmente elevado de una laparotomía, en el 30% se colocó una vía de alimenta-
tromboembolia venosa (insuficiencia venosa de las extremi- ción enteral por laparoscopia (p. ej., una sonda de gastrosto-
dades inferiores, IMC ⬎ 55, antecedentes de tromboembolia mía), y en el 60% no fue necesario tratamiento quirúrgico,
venosa y síndrome de hipoventilación por obesidad).52,54 sin que se registrase ninguna muerte ni morbilidad a largo
La confirmación del diagnóstico clínico puede resultar plazo. Se trata de una estrategia menos agresiva que la sos-
complicada, puesto que la mayoría de los aparatos de tomo- tenida por otros autores62 que proponen reintervenir pre-
grafía computarizada (TC) y medicina nuclear no están cozmente a todos los pacientes que presenten fugas.
adaptados para pacientes de más de 136 kg de peso. En estas La aparición de una fuga no controlada asociada a ines-
circunstancias se recomienda instaurar la anticoagulación tabilidad hemodinámica obliga a llevar a cabo una reinter-
plena de forma empírica, teniendo en cuenta que la adminis- vención urgente, consistente en la reparación del escape, si
tración de heparina intravenosa durante 5 días conlleva un ello es posible, y la colocación de drenajes y de una vía de
riesgo de hemorragia importante del 11%, que en el 3% de alimentación enteral. Cuando la inflamación tisular impida
los casos puede llegar a ser mortal, en comparación con un reparar la fuga debe procederse a la irrigación y colocación
riesgo global de mortalidad del 6% y de incapacidad perma- de drenajes de aspiración que, si el paciente se encuentra
nente grave del 2% asociados a TEP.55 Una alternativa prác- estable desde el punto de vista hemodinámico, puede hacer-
tica equivalente consiste en la administración no monitori- se por vía laparoscópica.
zada de heparina de bajo peso molecular.56
Hemorragia gastrointestinal
Fugas intestinales
La hemorragia digestiva alta suele ser secundaria a una
Las fugas de las anastomosis se producen en el 0% al 5,1% de hemostasia inadecuada a nivel de la línea de grapas del estó-
los casos de DGYRL.13,29,30-32,35,40,44 Entre las posibles causas mago residual o de la gastroyeyunostomía y surge en el 0,4%
de escape de la gastroyeyunostomía se cuentan el compromi- al 4% de las intervenciones de DGYRL.13,32,35,40 La adminis-
so de la irrigación vascular de la bolsa gástrica y la creación de tración de heparina de bajo peso molecular tras la inducción
Capítulo 23 • Situación actual de la derivación gástrica laparoscópica 199

de la anestesia puede predisponer al sangrado de la línea de El acceso al tubo digestivo y su posterior evaluación
grapas. Dependiendo de la velocidad de la pérdida de sangre pueden resultar muy dificultosos tras la realización de una
y de la estabilidad hemodinámica, en ocasiones es necesario DGYRL, por lo que el primer paso para valorar la mayoría
reintervenir, en un porcentaje estimado del 40% de los de los problemas debe consistir en una prueba de diagnósti-
casos.63 Debe procederse inmediatamente a una exploración co por imagen. Mediante la TC helicoidal se pueden valorar
endoscópica para evaluar el sangrado de la gastroyeyunosto- la anatomía gastrointestinal postoperatoria normal y com-
mía y de la bolsa. Aunque la embolización angiográfica no plicaciones tales como fugas, dehiscencia de la línea de gra-
suele resultar útil, a causa de la rica vascularización del estó- pas, obstrucción intestinal, absceso, infarto hepático o
mago, nosotros la hemos utilizado como ayuda para contro- esplénico y hernia.68 También son fácilmente identificables
lar la hemorragia en casos seleccionados. las estructuras anatómicas, incluidos la bolsa gástrica, el
estómago excluido, el trayecto entero del asa de Roux y la
Obstrucción intestinal y hernias internas anastomosis yeyunoyeyunal distal. El fundus del estómago
excluido lleno de aire o líquido puede confundirse con una
La tasa de obstrucción intestinal postoperatoria tras la ciru- colección líquida loculada.
gía bariátrica laparoscópica oscila entre el 1,1% y el 10,5%. Los pacientes que presentan obstrucción intestinal tras
13,23,31,32,35,40,44,45,64
El tiempo medio transcurrido hasta su DGYRL deben ser sometidos a exploración quirúrgica.
aparición es muy variable, y puede ir desde las 15 semanas Nosotros preferimos utilizar la vía laparoscópica, ya que con
descritas en algunas series de obstrucción precoz con la téc- ella se puede establecer la causa de la obstrucción y tratarla
nica retrocólica65 hasta plazos de entre 1 y 3 años, para la en la mayoría de los casos.45 El tratamiento quirúrgico con-
técnica antecólica.66 siste fundamentalmente en la reducción de la hernia y el
A diferencia de la cirugía bariátrica abierta, en la que la cierre de los defectos mesentéricos. Para prevenir la obs-
obstrucción por adherencias es la más frecuente, la que apa- trucción de asa cerrada o la dilatación aguda del estómago
rece tras derivación gástrica laparoscópica no suele ser residual es esencial que el tratamiento de la obstrucción
secundaria a adherencias. Entre las causas de obstrucción intestinal secundaria a una derivación gástrica sea lo más
intestinal por DGYRL se incluyen hernias internas, forma- precoz e intensivo posible. La morbilidad sigue siendo eleva-
ción de constricciones mesocólicas, estenosis anastomóticas, da y se asocia a una incidencia de perforaciones del 9,1% y a
invaginación y vólvulo, o acodamiento del intestino distal al una mortalidad del 1,6%.67
asa de Roux a nivel de la yeyunoyeyunostomía. La formación de hernias internas puede prevenirse rea-
Las hernias internas constituyen la causa más frecuente lizando un cierre meticuloso de los posibles defectos con
de obstrucción intestinal secundaria a la cirugía bariátrica sutura continua.67 La utilización de sutura no reabsorbible
laparoscópica y pueden atribuirse a la ausencia relativa de las reduce en un 50% la formación de hernias internas.45 El aco-
adherencias que se forman tras la cirugía abierta y que faci- damiento del yeyuno distal a la yeyunoyeyunostomía se evi-
litan la fijación del asa de Roux, evitando de esta forma su ta aplicando un único punto de sutura no reabsorbible,
desplazamiento y contribuyendo al cierre de los defectos denominado punto de Brolin, entre el yeyuno inmediata-
mesentéricos.67 El alto porcentaje de obstrucción por adhe- mente distal a la anastomosis y el cabo grapado del asa
rencias (38%) descrito en la serie de Champion y cols.66 pue- biliar.69 El asa de Roux en posición antecólica se asocia a un
de deberse al hecho de que el 55% de los pacientes afectados riesgo de obstrucción menor (0,43%) que cuando se sitúa en
tenían antecedentes de cirugía abdominal abierta. posición retrocólica (4,5%).66
La localización más frecuente de obstrucción de un asa
de Roux retrocólica es la ventana mesocólica, sobre todo a Dilatación gástrica aguda
través de las caras dorsal y lateral del defecto.65 Pueden apa-
recer hernias internas en cualquiera de los defectos creados La dilatación aguda del estómago residual secundaria a la
en el transcurso de una intervención de derivación gástrica, obstrucción del asa biliopancreática constituye una compli-
incluidos la ventana del mesocolon transverso, el defecto cación poco frecuente (0,6%), aunque potencialmente mor-
mesentérico de la yeyunoyeyunostomía y el espacio situado tal.70 Su diagnóstico se basa en la aparición de epigastralgia
entre el mesocolon transverso y el mesenterio del asa de intensa, junto con la presencia de dilatación gástrica en una
Roux, denominado defecto de Petersen. Algunas hernias placa simple de abdomen o una TC. La dilatación gástrica
internas pueden surgir en más de una localización.67 Por aguda produce un rápido deterioro clínico, con ruptura de la
otra parte, la rápida pérdida de peso que tiene lugar tras la línea de grapas e inestabilidad hemodinámica, que puede dar
derivación gástrica puede provocar una disminución de lugar a una parada cardíaca en poco tiempo.71 El tratamien-
la grasa intraperitoneal, que contribuye a agrandar el defec- to consiste en descompresión percutánea urgente con una
to mesentérico y facilita la formación de hernias.61 sonda de gastrostomía y posterior resolución de la obstruc-
La obstrucción intestinal puede ser incompleta o inter- ción del asa biliar subyacente.72
mitente. Las hernias internas suelen manifestarse con dolor
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abdominal posprandial intermitente y, en tales situaciones, Rabdomiólisis


los estudios radiológicos con contraste son normales en has-
ta el 20% de los casos.67 La primera prueba a realizar debe Se trata de una rara complicación que suele afectar a los
ser un TEGD con contraste. La existencia de retardo del varones superobesos que permanecen en decúbito supino
contraste en la gastroyeyunostomía constituye una indica- durante una intervención quirúrgica prolongada, y es con-
ción de exploración endoscópica, mientras que el retardo en secuencia de un síndrome compartimental de los glúteos que
el asa de Roux o la presencia de dilatación de esta indica una produce mionecrosis.73-75 Presenta una mortalidad del 50%
obstrucción del defecto mesocólico en el punto en que es que puede llegar al 100% cuando va acompañada de insufi-
atravesado por el asa de Roux retrocólica. La TC resulta útil ciencia renal.69,73 Entre las medidas preventivas a aplicar se
para establecer el diagnóstico, sobre todo cuando la obstruc- incluyen el almohadillado adecuado de las nalgas y el acor-
ción es distal al asa de Roux. tamiento de la duración de la intervención, sobre todo si el
200 Sección V • INTERVENCIONES

paciente es un varón superobeso. Para establecer el diagnós- Las úlceras de la bolsa cicatrizan mediante el tratamien-
tico precozmente se requiere un alto índice de sospecha y la to con inhibidores de la bomba de protones y/o sucralfato y
determinación seriada de los niveles de creatina fosfocinasa la supresión de los AINE y el tabaco. Las úlceras suelen reci-
(CPK). La mediana de la elevación postoperatoria de la CPK divar en los pacientes que presentan una bolsa gástrica gran-
en condiciones normales es de 1200 UI/L (DE ⫽ 450-9000), de y que sólo han recibido tratamiento médico. En estos
mientras que en los pacientes con rabdomiólisis oscila entre casos debe barajarse la posibilidad de reducir el tamaño de la
26.000 UI/L y 29.000 UI/L. Si el nivel de CPK supera las bolsa y de resecar la úlcera.87,90 La recidiva ulcerosa asociada
5.000 UI/L deben instaurarse rehidratación intensiva y diu- a la presencia de un cuerpo extraño, suturas incluidas, obli-
resis forzada con manitol.73 ga a la extirpación de este.

Estenosis de las anastomosis gastroyeyunales Hernias incisionales


En general, esta complicación aparece entre el 3% y el 12% Una de las ventajas principales de la derivación gástrica lapa-
de los pacientes sometidos a una derivación gástrica. Las roscópica es que disminuye la incidencia de hernias incisio-
tasas de estenosis oscilan entre el 2% y el 16% según las nales (0,7%),31 mientras que con cirugía abierta la tasa de
últimas series de intervenciones laparoscópicas.13,31,32,40,44-47 esta complicación se sitúa entre el 15% y el 20%.20,40 En el
Aunque la obstrucción de la bolsa gástrica puede producirse orificio de un puerto de 10 mm puede surgir una hernia de
entre 3 y 60 semanas después de la intervención,78-80 en la Richter.94 Una hernia de este tipo secundaria a la laparosco-
mayoría de los casos aparece en los 3 primeros meses. Se pia es un defecto de pequeño tamaño con propensión a pro-
cree que estas lesiones surgen como consecuencia de la vocar estrangulación intestinal. La mejor forma de diagnos-
isquemia existente a nivel de la anastomosis o por la presen- ticar las hernias de los orificios de los trócares es realizar
cia de fugas anastomóticas subclínicas. La tasa de estenosis una prueba de imagen, ya sea una ecografía de la pared ante-
se correlaciona con la técnica de anastomosis utilizada.81 Se rior del abdomen o una TC. Una forma de prevenir su apa-
ha demostrado que la utilización de la grapadora circular, en rición consiste en cerrar la fascia de los orificios de los puer-
concreto la de 21 mm, se asocia a unas tasas de estenosis más tos de 10 mm y 12 mm con sutura no reabsorbible.94 Una vez
altas que las registradas con la grapadora lineal o la sutura diagnosticada esta complicación debe repararse urgente-
manual,82 aunque otros autores afirman que la incidencia es mente mediante la reducción laparoscópica y el cierre del
la misma con cualquier tipo de grapadora.83 En varias series defecto herniario con sutura no reabsorbible.
se ha observado que la DGYRL produce una tasa de esteno-
sis mayor que la DGYR con cirugía abierta.13,23 Enfermedad metabólica ósea
La regurgitación posprandial indolora constituye la
principal manifestación de esta complicación y, siempre que Entre las consecuencias metabólicas de la DGYRL se inclu-
aparezca, es necesario efectuar un TEGD con contraste. El ye el aumento del recambio óseo.95 En comparación con los
diagnóstico se confirma por la imposibilidad de hacer pasar controles, los pacientes sometidos a DGYRL presentan
un endoscopio de 9 mm a través de la anastomosis.80 niveles significativamente elevados de los marcadores del
El tratamiento consiste en dilatación endoscópica de la recambio óseo, así como una disminución considerable de la
anastomosis con balón (13-18 mm).80,82,84,85 Como promedio densidad mineral ósea. Entre 3 y 9 meses después de
se requieren 2 intervenciones consecutivas para poder solu- la DGYRL los pacientes con obesidad mórbida muestran un
cionar la obstrucción en el 95% de las estenosis que aparecen aumento de la reabsorción ósea que se acompaña de una dis-
precozmente,78 tras las cuales se produce reestenosis en el 3% minución de la masa ósea.
de los pacientes.80 Las estenosis surgidas a partir de los 3 me- Se trata de una complicación a largo plazo de la derivación
ses también pueden abordarse mediante dilatación endoscó- gástrica causada por la malabsorción de calcio, vitamina D o
pica, aunque en un tercio de los casos se termina practicando ambos.96,97 La pérdida de masa ósea secundaria a osteoporosis
una revisión quirúrgica.85 Una alternativa terapéutica es la u osteomalacia va precedida de hiperparatiroidismo secunda-
dilatación con control fluoroscópico, con la que se logra rio y es asintomática hasta que aparecen complicaciones como
conservar la permeabilidad en el 71% de los pacientes tras las fracturas patológicas. La elevación del nivel sérico de hor-
una sola dilatación.86 mona paratiroidea inmunorreactiva en suero con niveles nor-
males o bajos de calcio es la alteración analítica que surge más
Úlceras marginales precozmente y obliga a añadir suplementos dietéticos de calcio
y vitamina D y a vigilar estrechamente la densidad ósea mine-
La aparición de úlceras en la anastomosis gastroyeyunal es ral de la columna lumbar y la cabeza del fémur.98
una complicación que afecta a un porcentaje comprendido
entre entre el 1% y el 16% de las derivaciones gástricas87,88 Carencias nutricionales
con una incidencia máxima en los 2 meses siguientes a la
intervención,79 aunque pueden aparecer hasta 10 años des- La carencia postoperatoria de hierro, folato y vitamina B12
pués.79 Su etiología es multifactorial y se ha asociado a la uti- que suele aparecer es la responsable de la anemia detectada
lización de material de sutura no reabsorbible,89 antiinflama- en el 54% de los pacientes.99,100 La anemia ferropénica afec-
torios no esteroideos (AINE), existencia de una bolsa gástrica ta hasta al 22% de los varones y al 51% de las mujeres,99 y en
de más de 50 mL90,91 y presencia de Helicobacter pylori. Los mayor porcentaje a las de edad fértil.52 Se recomienda la
pacientes diagnosticados de infección por H. pylori y tratados administración periódica de suplementos de micronutrien-
antes de la operación presentaron una incidencia de úlceras tes tras una derivación gástrica.
marginales a los 3 años significativamente menor (2,4%) que La derivación gástrica de asa larga con un canal común
la de los que no habían sido sometidos a pruebas de detección de 50 cm provoca malnutrición proteicocalórica en el
de la bacteria.92 Se cree que el consumo de alcohol y tabaco se 28,5% de los pacientes.101 Los bajos niveles séricos de albú-
relaciona con la etiología de las úlceras marginales.93 mina y fosfatos son indicativos de hipoproteinemia. La
Capítulo 23 • Situación actual de la derivación gástrica laparoscópica 201

malabsorción excesiva puede corregirse mediante la conver- 4. Buchwald H, Rucker RD: The rise and fall of jejunoileal bypass. In
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sia.105,106 La pérdida de peso que tiene lugar tras la DGYRL 1981;193:334-336.
se acompaña de un aumento de la incidencia de cálculos 9. Mason EE: Vertical banded gastroplasty. Arch Surg 1982;
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52,8% de los pacientes a los 12 meses de la intervención.107,108 tion for morbid obesity. Contemp Surg 1986;28:13-18.
Entre el 15% y el 27% de los pacientes terminan siendo 11. Scopinaro N, Gianetta E, Civalleri D: Biliopancreatic bypass for
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combinada debe tenerse en cuenta que casi duplica la duración response after laparoscopic or open cholecystectomy: a randomized
de la hospitalización y prolonga la intervención unos 50 minu- trial. Br J Surg 1997;84:467-471.
16. Bruce DM, Smith M, Walker CB, et al: Minimal access surgery for
tos más.110,111 La administración profiláctica de 600 mg de áci- cholelithiasis induces an attenuated acute phase response. Am J Surg
do ursodesoxicólico por vía oral durante los 6 meses siguientes 1999;178:232-234.
a la DGYRL reduce de forma significativa la incidencia de 17. Leung KL, Lai PB, Ho RL, et al: Systemic cytokine response after
colelitiasis (2% frente al 32% con placebo, P ⬍ 0,01).112 laparoscopic-assisted resection of rectosigmoid carcinoma: a prospec-
tive randomized trial. Ann Surg 2000;231:506-511.
Entre el 5% y el 10% de los pacientes sometidos a 18. Malik E, Buchweitz O, Muller-Steinhardt M, et al: Prospective
DGYRL no logran perder peso. Se cree que este fracaso se evaluation of the systemic immune response following abdominal,
debe a la dilatación progresiva del orificio de salida de la bolsa vaginal, and laparoscopically assisted vaginal hysterectomy. Surg
y de este mismo, y probablemente está relacionado con unos Endosc 2001;15:463-466.
19. Christou NV, Jarand J, Sylvestre JL, et al: Analysis of the incidence
hábitos de alimentación inadecuados.35,88,113 Los pacientes and risk factors for wound infections in open bariatric surgery. Obes
también pueden eludir el componente restrictivo de la inter- Surg 2004;14:16-22.
vención, consumiendo dulces u otros alimentos ricos en calo- 20. Sugerman HJ, Kellum JM Jr, Reines HD, et al: Greater risk of inci-
rías pese a sentirse saciados. Se trata de un problema de difícil sional hernia with morbidly obese than steroid-dependent patients
and low recurrence with prefascial polypropylene mesh. Am J Surg
solución que puede intentar abordarse mediante una supervi- 1996;171:80-84.
sión frecuente de los pacientes y una estrecha colaboración 21. Lujan JA, Frutos MD, Hernandez Q, et al: Laparoscopic versus open
con especialistas en nutrición, psicólogos y grupos de apoyo. gastric bypass in the treatment of morbid obesity: a randomized
Aunque hay opiniones a favor, no se ha podido demostrar la prospective study. Ann Surg 2004;239:433-437.
utilidad de reducir el tamaño de la bolsa o del estoma, endos- 22. Westling A, Gustavsson S: Laparoscopic vs open Roux-en-Y gastric
bypass: a prospective, randomized trial. Obes Surg
cópicamente o con cirugía abierta.35,114 Como alternativa pue- 2001;11:284-292.
de plantearse la conversión a derivación gástrica de asa larga. 23. Podnos YD, Jimenez JC, Wilson SE, et al: Complications after
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En el presente capítulo se efectúa una revisión de la situa- blood gas analysis. Am J Surg 1971;122:622-632.
ción actual de la DGYRL y se ofrece una descripción deta- 25. Nguyen NT, Lee SL, Goldman C, et al: Comparison of pulmonary
function and postoperative pain after laparoscopic versus open
llada de la técnica de gastroyeyunostomía con grapadora gastric bypass: a randomized trial. J Am Coll Surg
lineal. La DGYRL se ha convertido en la intervención 2001;192:469-477.
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Derivación gástrica en Y de Roux
laparoscópica: técnica lineal
Sayeed Ikramuddin, M.D.

La cirugía destinada a tratar la obesidad se ha generaliza- índice de masa corporal del paciente y también de la pre-
do a lo largo de la última década, lo que podría deberse a sencia de patologías comórbidas.
la concienciación social acerca de la obesidad mórbida y a la A continuación se describe la técnica empleada. Se uti-
demanda de intervenciones de cirugía bariátrica mínima- lizan seis trócares. El cirujano se coloca a la derecha. En
mente invasivas por parte de los pacientes. Según primer lugar, se usa una aguja de Veress en el cuadrante
Steinbrook, en el año 2004 se efectuaron unas 140.000 in- superior izquierdo. Se instila una mezcla de marcaína y lido-
tervenciones.1 La derivación gástrica en Y de Roux lapa- caína al 0,5%, para después colocar una aguja de Veress de
roscópica goza de una popularidad cada vez mayor, aun- 150 mm en el cuadrante superior izquierdo (no se aplica esta
que no se considera adecuada en todos los pacientes, en técnica en pacientes que ya se hayan sometido a intervencio-
especial en los que ya se han sometido a varias interven- nes quirúrgicas en el cuadrante superior izquierdo ni a repa-
ciones abdominales. ración de una hernia grande con malla, ni tampoco a sujetos
Wittgrove y cols. publicaron el primer caso en el año 1994. con antecedentes de obstrucción abdominal). Se realiza la
Describieron una gastroyeyunostomía con grapado circular insuflación del abdomen a una presión máxima de unos
con creación de una derivación gástrica en Y de Roux retro- 5 mm Hg. Se inserta un trócar sin hoja de 5 mm en esta
cólica y retrogástrica.2 Esta intervención se puede llevar a zona, a 15 a 20 cm del apéndice xifoides. Se introduce otro
cabo a través de otros abordajes, como la técnica de grapado trócar sin hoja de 11 mm con el fin de reducir el riesgo de
lineal de la anastomosis gastroyeyunal/gastroentérica en la formación de una hernia.
que el asa de Roux avanza en sentido retrocólico o antecóli- Después, el paciente se sitúa en posición anti-Trende-
co.3 Por otra parte, se ha propuesto otro abordaje en el que lenburg. Se inserta otro trócar lateral izquierdo de 5 mm
el asa de Roux avanza retrocólica, se coloca en una posición inmediatamente por debajo y subcostal del trócar anterior
antegástrica sobre el remanente gástrico, y posteriormente más alejado de la línea media que el primero. Se introducen
se sutura a la bolsa gástrica. Asimismo se ha descrito una otros dos trócares que serán utilizados por el cirujano, el
técnica completamente manual. primero de ellos por debajo del reborde subcostal derecho y
La amplia disponibilidad de dispositivos de sutura y el el segundo sobre la línea media, aproximadamente al mismo
desarrollo de la tecnología robótica convierten la técnica nivel que el asignado a la cámara. Estos dos puertos de tra-
lineal o de sutura manual en un abordaje aceptable. Con bajo son de 5 y 12 mm, respectivamente. Se utiliza un trócar
independencia de la técnica escogida, el cirujano debe domi- de 5 mm para utilizar el retractor hepático. Preferimos un
nar uno de estos planteamientos y, al menos, conocer los retractor hepático triangular angular que se fija a la mesa
restantes en caso de que la aparición de complicaciones téc- por medio de una pinza lateral. En la figura 24-1 se muestra
nicas obligara a recurrir a un segundo método. Para desarro- la disposición de los trócares.
llar de forma segura y fiable una intervención de cirugía Tras exponer el segmento lateral izquierdo del hígado,
bariátrica es esencial conocer en profundidad las técnicas de en primer lugar se realiza una incisión del ligamento hepa-
sutura intracorpórea. togástrico con un bisturí armónico. Se cortan con tijeras las
adherencias existentes en el ángulo de His. Empleamos un
endoscopio de 45° en esta fase debido a que facilita en mayor
Z TÉCNICA medida los movimientos en los ángulos complejos. El saco
inferior se corta con el bisturí armónico. En casi todos los
Nuestro grupo se inclina por una derivación laparoscópica pacientes, este saco está exento de adhesiones, aunque en
en Y de Roux con un asa de Roux antecólica y antegástrica aquellos con antecedentes de pancreatitis o vesiculopatía
y una gastroyeyunostomía con grapado lineal, en la que la pueden ser relevantes. En algunos casos es preciso efectuar
enterotomía se sutura en dos capas sobre una endopróte- una disección limpia y roma. El cirujano debe evitar ocasio-
sis 30F, por lo general un endoscopio 30F. Practicamos nar daños a la arteria esplénica y el páncreas.
una yeyunoyeyunostomía con grapado a distintas distan- Comenzamos a formar la bolsa gástrica inmediatamen-
cias del asa de Roux y el asa biliopancreática en función del te por debajo de la arteria gástrica izquierda, salvo en el caso
204
Capítulo 24 • Derivación gástrica en Y de Roux laparoscópica: técnica lineal 205

introduce un disector de Maryland por debajo del mesente-


rio del intestino delgado. El asa biliopancreática se encuen-
tra a la izquierda y el segmento que se convertirá en el asa de
Roux se localiza a la derecha de esta estructura. Se avanza
un drenaje de Penrose por debajo del intestino y se rodea al
intestino delgado para poder tirar del asa con el fin de
aproximarla al reservorio y proceder a la sutura de la fila
posterior (v. figura 24-3).
La sutura de la pared posterior se lleva a cabo entre el
reservorio gástrico y el asa de intestino delgado mante-
niendo el drenaje de Penrose para evitar la tensión. Esta
maniobra se realiza con el dispositivo Endostitch. A conti-
nuación, se retira el drenaje de Penrose del campo quirúr-
gico y se divide el intestino delgado con una grapadora
Autostapler reticuladora de carga amplia de 60 mm, de
modo que la porción situada a la izquierda se convierte en
el asa biliopancreática y la localizada a la derecha se consi-
dera el asa de Roux. Se corta el mesenterio con el bisturí
armónico con el fin de ampliar aproximadamente 1 cm este
Figura 24-1 División de la curvatura menor con refuerzo pericárdi- orificio, tratando siempre de coagular los vasos de pequeño
co bovino.
calibre y evitar la migración a la derecha o la izquierda
hacia el mesenterio.
de que esta estructura presente anomalías, en cuyo caso lo Se arrastra en sentido caudal la porción intestinal que
hacemos a unos 3 cm en sentido caudal de la unión esofago- continúa unida a la bolsa gástrica. Nuestro grupo crea un
gástrica del lado derecho (v. figura 24-2). La irrigación de la asa de Roux de mayor longitud, de 150 cm, tanto en pacien-
curvatura menor del estómago se divide con una endocorta- tes con un índice de masa corporal por encima de 50 kg/m2
dora con carga amplia y tres filas de grapas reforzadas con como en sujetos con diabetes de tipo 2. Se conecta de nuevo
una sutura Seamguard. La división y la disección se inte- el asa biliopancreática con el asa de Roux a unos 150 cm con
rrumpen inmediatamente antes de alcanzar la curvatura un dispositivo Endostitch.
menor del estómago. Las enterotomías se realizan con el bisturí armónico; se
La sección continúa hasta el ángulo de His con la fina- inserta una pistola de autosutura de carga amplia con tres
lidad de crear un pequeñísimo y estrecho reservorio gástri- filas de 60 mm en la luz de cada segmento intestinal y se
co. El volumen final de este reservorio es de 5 a 20 mL. Las dispara. La enterotomía así creada se refuerza con un
adherencias gástricas posteriores se cortan con el bisturí Endostitch y se rota entre 100 y 180° hacia el cuadrante
armónico. El cirujano debe tratar de no dañar la arteria superior izquierdo. La enterotomía común se cierra con una
gástrica inferior, que puede aparecer en una localización pistola de autosutura de carga amplia de 60 mm (v. figu-
medial. ra 24-4). Se introduce una sutura antiobstrucción de Prolene
Se coloca al paciente en decúbito supino y se divide el 2-0 y a continuación se cierra el orificio mesentérico de
epiplón transverso inmediatamente a la derecha de la línea yeyunoyeyunostomía con una sutura continua (v. figu-
media con el bisturí armónico. Después, se visualiza el liga- ras 24-5 y 24-6).
mento de Treitz y se eleva el mesenterio por encima del mis-
mo para confirmar su identificación. A continuación se
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Figura 24-3 Acercamiento del asa intestinal a 100 cm del ligamento


de Treitz hacia la bolsa gástrica; el asa se divide después de haber sutu-
Figura 24-2 Comienzo de la división gástrica para crear el reservo- rado la pared de la gastroyeyunostomía. La porción proximal se utiliza
rio gástrico a 1 cm de la anastomosis gástrica izquierda. como asa biliopancreática.
206 Sección V • INTERVENCIONES

Figura 24-4 Finalización del grapado de la yeyunoyeyunostomía Figura 24-6 Cierre mesentérico de la yeyunoyeyunostomía.
antes de la introducción de la sutura antiobstrucción.

Se coloca de nuevo al paciente en posición anti-Trende- orificio de pequeñas dimensiones. En la figura 24-8 se mues-
lenburg. Se realizan enterotomías con el bisturí armónico, tra la verificación de la anastomosis con solución salina sin
tanto en la bolsa gástrica como en el asa de Roux, se avanza detección de burbujas.
unos 1,5 cm una endocortadora de carga azul y se dispara Esta técnica se ve limitada en pacientes cuyo intesti-
(v. figura 24-7). A lo largo de este paso se mantiene la sutura no delgado presente un notable engrosamiento o cuyo
superior de la anastomosis de la pared posterior y se arrastra mesenterio sea corto, en los que es conveniente adoptar
directamente hacia el cuadrante superior izquierdo hacia el el abordaje retrocólico retrogástrico. En los casos que
hombro izquierdo. Esta maniobra crea un ángulo adecuado presentan numerosas adherencias en el abdomen inferior
para el cierre. y posibles hernias y tejido adiposo alojado en la anomalía
La anastomosis se realiza con el Endostitch desde el de la hernia, es conveniente demorar la eliminación de
lado derecho y el lado izquierdo del paciente; se comienza en estos contenidos hasta que se lleve a cabo la reparación
la esquina derecha de la anastomosis y la esquina izquierda definitiva de la hernia.
de la misma. Se aproximan los extremos sin anudarlos.
A continuación, se introduce el endoscopio de 30F a través
del orificio del asa de Roux y se ajusta la sutura. Se refuerza Z CONCLUSIÓN
la anastomosis con una segunda capa mediante Endostitch
con el fin de crear una anastomosis de dos capas. Los cirujanos deben conocer las distintas técnicas de deriva-
Se comprueba la estanqueidad de la anastomosis con ción gástrica laparoscópica en Y de Roux. La técnica lineal
solución salina y, a continuación, se sutura cualquier posible es una de las más utilizadas en la actualidad.

Figura 24-5 Colocación de la sutura antiobstrucción en la yeyuno- Figura 24-7 Gastroyeyunostomía.


yeyunostomía.
Capítulo 24 • Derivación gástrica en Y de Roux laparoscópica: técnica lineal 207

Z BIBLIOGRAFÍA
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Obes Surg 2000;10:509-513.

Figura 24-8 Gastroyeyunostomía completa con anastomosis sobre-


cosida en dos capas.
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25
Derivación gástrica laparoscópica
con endograpadora circular
G. Wesley Clark, M.D.

La técnica de derivación gástrica, que inicialmente utilizaba síntomas preoperatorios de reflujo comienzan a desaparecer
una reconstrucción del asa, fue introducida por Mason en el el mismo día de la realización de la intervención quirúrgica.
año 19671 para el tratamiento de la obesidad mórbida. Un efecto beneficioso destacado de la construcción
Posteriormente, en 1977, Griffen propuso la modificación en proximal en Y de Roux es la notable sensación de saciedad
Y de Roux.2 Desde ese momento hemos sido testigos de la que perciben los pacientes inmediatamente después de inge-
evolución del concepto y la técnica de derivación gástrica en rir alimentos, en particular proteínas. Desde hace tiempo se
Y de Roux a medida que los cirujanos más reflexivos obser- sabe que la presencia de alimentos, especialmente de proteí-
vaban y estudiaban los efectos de las intervenciones quirúr- nas, en el duodeno distal y el yeyuno proximal inducen una
gicas realizadas. En algunos casos, los alentadores resultados respuesta de saciedad, en un proceso que parece controlado
iniciales han dado paso a datos decepcionantes a largo plazo, por hormonas intestinales que actuarían sobre los centros
por la recuperación de la capacidad gástrica funcional y la reguladores del hipotálamo. La creación del asa en Y de
reaparición de la obesidad en los pacientes intervenidos. La Roux implica el traslado de la posible fuente de secreción
hipertrofia anatómica gradual de la bolsa gástrica constituye hormonal del yeyuno proximal a una localización distal res-
un hallazgo frecuente en los casos de fracaso. pecto a la bolsa gástrica que limita la velocidad. El paciente
La respuesta de los cirujanos a esta complicación ha presenta una sensación temprana de plenitud producida por
consistido en la reducción del tamaño inicial de la bolsa y la la distensión de la bolsa, a la que sucede una sensación inme-
modificación de su diseño para eliminar la elasticidad innata diata de saciedad debida al reflejo intestinal secundario que
del fundus gástrico y la curvatura mayor. Actualmente, la se pone en marcha tan pronto como los alimentos salen de la
bolsa gástrica se crea a partir de la curvatura menor, la por- bolsa proximal.
ción del estómago dotada de una menor capacidad de disten- Hace poco tiempo se ha reconocido la función en este con-
sibilidad. Aparentemente, la estabilidad del tamaño de la texto de la grelina, una hormona polipeptídica que interviene
bolsa y el mantenimiento de un volumen gástrico funcional en la sensación de apetito, en la respuesta fisiológica endocrina
reducido que limiten la ingesta rápida de alimentos son dos favorable asociada a la derivación gástrica. Esta hormona gas-
aspectos destacados del adelgazamiento sostenido. El tama- trointestinal guarda relación con el apetito, y se ha descubierto
ño del orificio parece constituir un factor importante en la que sus concentraciones registran un aumento crónico tras la
fase inicial de pérdida de peso, aunque es posible que su efec- reducción de peso inducida por la dieta y una disminución acu-
to a largo plazo sea de menor entidad.1 sada con posterioridad a la derivación gástrica.4
Otro motivo de fracaso de la disminución del peso cor- A la vista de estos datos, se desarrolló una nueva técnica
poral ha sido la formación de fístulas entre la bolsa proximal de construcción de la derivación gástrica que se asocia a
y el estómago distal. La división del estómago parece mini- adelgazamiento temprano óptimo y a control del peso cor-
mizar esta complicación a largo plazo, mientras que la sutu- poral a largo plazo:
ra continua se ha asociado a fistulización hasta en un 48% de
los pacientes a largo plazo.3 La división gástrica no se vincu- • Tamaño mínimo calibrado de la bolsa gástrica (volu-
la con un aumento significativo de la tasa de morbilidad y men calibrado de 15 mL)
puede facilitar la creación de la gastroenterostomía desde el • Tamaño calibrado del estoma
punto de vista técnico, por lo que apenas existen argumentos • Longitud suficiente del brazo de la Y de Roux para
en contra de la división gástrica. evitar el reflujo
La reconstrucción en Y de Roux ha sido la técnica de • Reconstrucción proximal del asa en Y de Roux
elección en la cirugía bariátrica durante más de 20 años. En
ella, se desvían completamente el flujo de bilis y secreciones Estos criterios se aplican de manera independiente de la
pancreáticas de la bolsa gástrica sensible y la gastroenterosto- vía de acceso seleccionada para llevar a cabo la intervención.
mía. La pequeña bolsa evacua rápidamente los líquidos, ape- Un aspecto clave del concepto de cirugía laparoscópica des-
nas secreta ácido y no se ve afectada por reflujo biliar debido de sus inicios ha sido que la realización de una intervención
a la longitud del brazo de la Y de Roux. Generalmente, los por medio de esta nueva técnica de acceso quirúrgico no
208
Capítulo 25 • Derivación gástrica laparoscópica con endograpadora circular 209

debería alterar ni afectar al procedimiento ni a su sustrato


fisiológico. La aplicación de esta regla a la derivación gástri-
ca laparoscópica se tradujo en el uso de la grapadora circular
y la introducción del cabezal de la grapadora a través de la
boca, con el fin de satisfacer el requisito del tamaño mínimo
de la bolsa y permitir la calibración precisa de la luz de la
gastroenterostomía.5 Las restantes técnicas de anastomosis
obligan a crear una bolsa de mayores dimensiones, para
poder cerrar el orificio con una cantidad de tejido adecuada.
Por otra parte, los resultados de la calibración del tamaño de
la luz pueden ser variables.

Z INSTRUMENTAL
La eficacia de la cirugía laparoscópica depende de la dispo-
nibilidad y la selección de instrumental de alta calidad en
mayor medida que en el caso de las técnicas convencionales Figura 25-2 Colocación de los trócares.
de cirugía abierta. El diseño de las pinzas que permiten
manipular de forma segura los tejidos sin provocar desliza-
miento ni laceración reviste una importancia crucial para guarda relación con las estructuras retroperitoneales fijas,
evitar las lesiones tisulares, así como para evitar los movi- como el cardias y el ligamento de Treitz.
mientos inútiles y la pérdida de tiempo. La sección gástrica comienza mediante la inserción de
El diseño de algunos dispositivos complejos, como las la sonda laparoscópica de calibración a través de la cavidad
grapadoras lineales y circulares, influye en la técnica emplea- bucal y la insuflación del balón con entre 15 y 20 mL de
da durante el procedimiento. Concretamente, creemos que aire.5 El balón se ajusta bien al cardias y se procede a disec-
el diseño del cabezal de la grapadora convencional de anasto- cionar la curvatura menor en su polo inferior, el cual suele
mosis terminoterminal es inadecuado y resulta inseguro en coincidir con la localización de la primera arcada vascular
la técnica de inserción oral del cabezal. gástrica y se encuentra entre 2 y 3 cm por debajo de la unión
esofagogástrica (v. figura 25-3). El reborde inferior de la al-
mohadilla grasa que recubre el cardias suele coincidir con
Z TÉCNICA el nivel en el que se lleva a cabo la sección. La selección de
un nivel más alto incrementa el riesgo de lesiones esofágicas.
El paciente se coloca en la posición representada en la figu- La disección se puede realizar en sentido cefálico res-
ra 25-1, con los brazos extendidos a ambos lados de la mesa. pecto al seno superior de la transcavidad peritoneal menor o
En la figura 25-2 se muestran los puntos de inserción de los bien se puede cortar la transcavidad. En cualquier caso, la
trócares. La localización del trócar de la cámara debe per- sección inicial se lleva a cabo en dirección horizontal y
mitir alcanzar el cardias gástrico y visualizar la región la línea de grapado se gira en sentido cefálico para cruzar el
infracólica para la creación de la enteroenterostomía; la fondo gástrico en el ángulo de His, de modo que tan sólo
más aceptada se encuentra aproximadamente una palma
por debajo de la base del proceso xifoides. La localización
del ombligo, en especial en los pacientes obesos, apenas
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Figura 25-1 Disposición del quirófano. Figura 25-3 Disección de la curvatura inferior.
210 Sección V • INTERVENCIONES

permanezca un pequeño manguito gástrico a un lado del Se evalúa la bolsa gástrica así creada mediante una
esófago (v. figuras 25-4 y 25-5). endoscopia; por lo general, la parte inferior de la bolsa se
La formación del asa de Roux comienza con la sección halla a unos 2 cm de la unión esofagogástrica. Se atraviesa
transversal del yeyuno a varios centímetros del repliegue la bolsa con un conjunto de aguja-catéter mediante una
peritoneal en el ligamento de Treitz. Se debe mantener un técnica ideada para la gastrostomía percutánea. Se inserta
muñón intestinal proximal corto, con el fin de preservar la en la luz un cable de tracción en asa que se recupera por
longitud del intestino funcional (v. figura 25-6). La ente- endoscopia a través de la boca (v. figura 25-8). A continua-
roenterostomía se realiza con una anastomosis laterolateral ción, el cable de tracción se inserta en el tallo del cabezal
(terminolateral funcional). El montaje de Roux sube atrave- de una endograpadora ECS-21; el cabezal se arrastra desde
sando el mesocolon transverso y la transcavidad menor has- la bucofaringe hacia la bolsa gástrica ejerciendo una trac-
ta una localización posterior al colon y el estómago distal en ción suave del cable. La elevación del ángulo de la mandí-
estrecho contacto con el estómago proximal sin tensión bula para abrir la faringe posterior facilita su paso por el
(v. figura 25-7). esfínter esofágico superior y el área retrolaríngea.
Una vez creada el asa de Roux, se introduce el cuerpo
de la endograpadora circular en la luz del montaje y se saca
la punta de la pistola por el borde antimesentérico para
coincidir con el tallo del cabezal que sobresale en la pared
gástrica (v. figura 25-9). Se cierra la gastroenterostomía y
se retira la endograpadora circular tras la creación de una
estructura simétrica con una luz inicial de 12 mm. El cierre
del extremo abierto del brazo de la Y de Roux se efectúa
mediante la aplicación transversal de la grapadora lineal, lo
que implica la sección de un pequeño fragmento del intes-
tino (v. figura 25-10). Se puede reforzar el montaje con
suturas externas para recubrir la línea de grapado o bien
mediante la creación de estrechos puentes tisulares con la
serosa adyacente. Estas líneas de sutura permiten reducir
el tamaño final de la bolsa, ya que el tejido está surcado por
líneas de sutura.

Figura 25-4 Aplicación de la endograpadora transversal.

Figura 25-5 Aplicación de la endograpadora vertical. Figura 25-6 División del intestino delgado.
Capítulo 25 • Derivación gástrica laparoscópica con endograpadora circular 211

Figura 25-9 Endograpadora circular insertada, acoplamiento con


cabezal.

En la figura 25-11 se muestra la construcción final de la


derivación gástrica. La introducción del cabezal endoscópi-
co facilita enormemente la exploración y el estudio endoscó-
Figura 25-7 Avance retrocólico del montaje en Y de Roux. picos de la anastomosis así creada. Mientras la luz distal se
mantiene ocluida, se visualizan el esófago y la bolsa gástrica
con el endoscopio. La gastroenterostomía se puede sumergir
en solución de irrigación en la cavidad abdominal e insuflar
el conjunto, para verificar su estanqueidad. Se trata de una
prueba sencilla y sensible de comprobación inmediata de la
integridad de la anastomosis.
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Figura 25-8 Inserción del cabezal de la endograpadora a través de la


cavidad bucal. Figura 25-10 Cierre del asa de Roux.
212 Sección V • INTERVENCIONES

Anillos anastomóticos inadecuados


Se debe inspeccionar la grapadora circular después de dispa-
rarla para verificar la integridad de los anillos anastomóti-
cos. La existencia de un anillo incompleto no indica necesa-
riamente que la anastomosis sea defectuosa, aunque debe
motivar una inspección minuciosa y el refuerzo con suturas
de cualquier área sospechosa.
Las posiciones relativas de la línea de grapado gástrico
y la gastroenterostomía circular pueden crear zonas de
estrechamiento, o bien un istmo de tejido gástrico, que pre-
sentará isquemia. Se deben reforzar estas áreas con fijación
a las paredes adyacentes del estómago y el intestino delgado
con el fin de evitar posibles fuentes de fuga.

Fugas de la anastomosis
La incidencia de fugas puede situarse entre el 1% y el 2% de
acuerdo con los resultados de muchas series de gran tama-
ño.6 En algunos casos, esta complicación puede atribuirse a
deficiencias técnicas, aunque es probable que con frecuencia
se deban a factores impredecibles de difícil control, como la
necrosis isquémica focal o las fugas en los puntos de sutura
Figura 25-11 Montaje finalizado. o las grapas.
La comprobación por insuflación del montaje de gas-
troenterostomía del modo descrito en una sección ante-
rior puede reducir al mínimo los errores técnicos. Con
Z COMPLICACIONES Y DESVENTAJAS frecuencia, la salida de burbujas de un asa que se conside-
raba sólida desde el punto de vista técnico puede sorpren-
Problemas para introducir el cabezal der al cirujano.

La elevación de los ángulos de la mandíbula en sentido ante- Infección del acceso de un trócar
rior conforme se introduce el cabezal en la faringe posterior
y el esfínter esofágico superior facilita la introducción del La técnica de grapado circular requiere el avance del cabezal
cabezal (o yunque) de la grapadora. En ocasiones es preciso a través de la boca y la bucofaringe, en las que el dispositivo
desinflar también el manguito del tubo endotraqueal para se contamina forzosamente. A menudo, en el cultivo de
facilitar el paso del cabezal a través del esfínter esofágico muestras obtenidas de la luz de la bolsa gástrica o la ente-
superior. A pesar de estas maniobras, se han publicado dos roenterotomía se detecta un contenido bacteriano mínimo o
casos de retención del cabezal en dicho esfínter en una serie ausente, mientras que en los realizados con muestras proce-
de más de 2400 inserciones. En un paciente, se logró extraer dentes del cabezal tras su extracción se observa una abun-
el cabezal por medio de un cepo de alambre endoscópico que dante microflora bucal, la cual puede ejercer una acción
lo rodeaba desde arriba. Se introdujo de nuevo el cabezal sin patógena en la cavidad abdominal o los tejidos subcutáneos.
ninguna dificultad. En el segundo caso, no fue posible reti- Se debe tratar de reducir al mínimo el contacto del cabezal
rar el cabezal con el cepo, por lo que se realizó una laparo- con estos últimos.
tomía que permitió liberarlo con facilidad mediante el avan- El acceso del trócar inferior izquierdo, a través del cual
ce retrógrado de un dilatador esofágico y el anestesiólogo se se introduce y retira la endograpadora, presenta mayor riesgo
ocupó de su extracción. La anastomosis de la gastroenteros- de infección postoperatoria. El cuidado de la herida ha de ser
tomía se llevó a cabo con suturas. escrupuloso, evitándose tanto la disección excesiva como la
Es probable que se obtengan resultados satisfactorios en formación de espacios muertos, e irrigando concienzuda-
los casos, por lo demás muy poco frecuentes, de retención mente la incisión para eliminar los residuos fibrinosos y los
del cabezal a través de la inserción de una cánula laparoscó- fragmentos desvitalizados de tejido adiposo. Se puede intro-
pica de irrigación en la luz de la bolsa gástrica y la instilación ducir un drenaje intraabdominal a través de este orificio para
de solución de irrigación en las luces gástrica y esofágica instaurar un drenaje simultáneo de la herida.
para liberar el cabezal con la presión hidrostática ascenden-
te, evitando así la laparotomía.
Z OTRAS CUESTIONES RELACIONADAS
Desgarro gástrico CON EL TRATAMIENTO
La endograpadora circular se debe manipular con gran cui- Drenaje intraabdominal
dado tras su ensamblaje con el cabezal o yunque, para evitar
la tracción accidental del cabezal y el desgarro de la pared La introducción de un drenaje próximo a la gastroenteros-
gástrica. Casi todas estas lesiones son susceptibles de repara- tomía sin contacto directo con la misma se considera aún un
ción con suturas laparoscópicas. Esta complicación técnica es abordaje válido. La acumulación de líquidos o sangre duran-
cada vez menos frecuente como consecuencia de la experien- te el período postoperatorio, y su inevitable contaminación,
cia y la estandarización de este abordaje quirúrgico. pueden dar lugar a un edema localizado, susceptible de dre-
Capítulo 25 • Derivación gástrica laparoscópica con endograpadora circular 213

naje mediante penetración de las líneas de grapado o sutura vías respiratorias durante el período perioperatorio. La gas-
o bien a través de un drenaje quirúrgico, que constituye sin trostomía se integra con facilidad dentro de la laparoscopia.
lugar a dudas la vía preferida. Cuando aparezca, una fuga
localizada y bien drenada normalmente se puede tratar por Profilaxis de la tromboembolia
medios no quirúrgicos, con riesgo mínimo de septicemia y
tiempo de hospitalización breve. El riesgo de embolia pulmonar se puede reducir a través de
una atención esmerada al paciente. Todos los pacientes obesos
Tratamiento de una fuga de la anastomosis presentan un riesgo más alto como consecuencia de la mayor
presión abdominal y la menor movilidad. Algunos factores
La teoría quirúrgica sostiene que la detección de cualquier predisponentes, como la estasis venosa o los antecedentes de
indicio de fuga de la anastomosis en la gastroenterostomía embolias, son más prevalentes en la población obesa.
obliga a intervenir de nuevo al paciente, reparar la fuga e
introducir un drenaje. En la práctica, los intentos de repara-
ción suelen ocasionar daños adicionales y pueden retrasar el Z LA INTERVENCIÓN COMO HERRAMIENTA
proceso de cicatrización. La presencia de un drenaje inser-
tado en un lugar correcto durante el procedimiento inicial En la cirugía bariátrica, el cirujano debe distanciarse del
permite prescindir de una segunda intervención para intro- concepto convencional de cicatrización según la técnica qui-
ducirlo. El tratamiento no quirúrgico de muchos casos de rúrgica. La mayoría de los procedimientos de cirugía gene-
fugas delimitadas de escasa entidad con drenaje adecuado ral son de extirpación: se reseca por vía quirúrgica un siste-
del líquido extravasado se asocia a resultados satisfactorios. ma orgánico enfermo o disfuncional, o bien una porción del
Los pacientes con indicios de fuga han de someterse a mismo, con el fin de restablecer el estado de salud. El segui-
una evaluación con un estudio de contraste hidrosoluble, miento suele ser breve y el tratamiento persigue restablecer
que revela la localización de la fuga y permite determinar el el estado habitual de salud y el estilo de vida del paciente.
grado de dispersión del contenido gastrointestinal extrava- La cirugía bariátrica se plantea como objetivo modificar
sado. Los síntomas de taquicardia, fiebre, leucocitosis y la fisiología del organismo y el estilo de vida del paciente de
aumento de la demanda de líquidos se consideran indicado- manera permanente. Aspira, asimismo, a contrarrestar los
res de fuga diseminada y drenaje inadecuado. Ante esta sin- procesos genéticos innatos y de conducta asociados que han
tomatología está justificada una intervención quirúrgica dado lugar a la obesidad. El paciente ha de aprovechar los
temprana. Normalmente se puede llevar a cabo una nueva efectos beneficiosos de la modificación de su fisiología para
exploración laparoscópica. obtener los resultados deseados y adoptar de manera perma-
El tratamiento no quirúrgico con antibióticos, restric- nente un estilo de vida más sano. En el proceso terapéutico,
ción de la ingesta oral y seguimiento cuidadoso suele aso- es necesario identificar y corregir los patrones perjudiciales
ciarse a resultados favorables en pacientes con fugas conte- en lo que respecta a la alimentación. Al mismo tiempo, el
nidas de volumen mínimo y un drenaje adecuado, signos paciente debe aprender a aceptar tanto su nueva imagen cor-
vitales estables y ausencia de leucocitosis o rápida mejora de poral como los cambios y factores estresantes de su sistema
la misma. Un área localizada de contaminación debida a de soporte, inducidos de forma inevitable por la radical
rotura accidental durante una reexploración puede provocar modificación de pautas a la que es sometido. Un cirujano
la diseminación del material contaminado en una cavidad bariátrico que pretenda obtener resultados satisfactorios
peritoneal previamente estéril. debe aprender a ampliar los objetivos del tratamiento, para
establecer un programa terapéutico integral, que preste apo-
Dilatación gástrica aguda yo a los pacientes durante el desarrollo de los cambios que
experimenta.
Los pacientes con dilatación de la porción gástrica distal,
debida a oclusión intestinal, obstrucción de la enteroente-
rostomía o hemorragia intraluminal, han de someterse a una Z BIBLIOGRAFÍA
gastrostomía percutánea o una nueva exploración de urgen-
cia. Generalmente, la alteración del remanente gástrico sue- 1. Mason EE, Ito C: Gastric bypass in obesity. 1967. Obesity Research
le tener consecuencias catastróficas y provoca la contamina- 1996;4:316-319.
2. Buchwald H, Buchwald JN: Evolution of operative procedures for
ción peritoneal aguda y grave con los contenidos gástricos the management of morbid obesity 1950-2000. Obes Surg 2002;
estancados en los que han proliferado numerosas bacterias 12:705-717.
entéricas. 3. MacLean LD, Rhode BM, Nohr C, et al: Stomal ulcer after gastric
bypass. J Am Coll Surg 1997;185:1-7.
4. Cummings DE, Weigle DS, Frayo RS, et al: Plasma ghrelin levels
Gastrostomía after diet-induced weight loss or gastric by pass surgery. N Engl J Med
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

2002;346:1623-1630.
Cuando no pueda asegurarse la integridad de la gastroente- 5. Wittgrove AC, Clark GW: Combined laparoscopic/endoscopic anvil
rostomía o sea necesaria una nueva intervención quirúrgica, placement for the performance of the gastroenterostomy. Obes Surg
2001;11:565-569.
se debe realizar una gastrostomía en la porción gástrica distal. 6. Schneider BE, Villegas L, Blackburn GL, et al: Laparoscopic gastric
Otras dos indicaciones de esta intervención son la apnea gra- bypass surgery: outcomes. J Laparoendo Adv Surg Tech
ve del sueño y la necesidad de presión continua positiva en las 2003;13:247-255.
26
Derivación gástrica en Y de Roux
laparoscópica: técnica con sutura manual
de la gastroyeyunostomía
Kelvin Higa, M.D.

La actual popularidad de la cirugía bariátrica es atribuible empleábamos. Aprovechando esta experiencia y con extra-
en parte a las soluciones de invasividad mínima diseñadas en polación de las teorías sobre la formación de una bolsa gás-
los años noventa. En los años anteriores a ella, los profesio- trica,9 adoptamos la configuración básica descrita por
nales de la salud, compañías de seguros y público en general MacLean y cols.10 Sabiendo que pequeños cambios en la ana-
mostraban poco interés por estas técnicas, aunque los ciru- tomía o en la técnica podrían ejercer un efecto pronunciado
janos habían obtenido excelentes resultados, con una baja sobre los resultados y las complicaciones a corto y largo pla-
tasa baja de complicaciones. En la actualidad, las limitaciones zo, para nosotros era muy importante emular la configura-
del tratamiento no quirúrgico y el crecimiento exponencial de ción de la cirugía abierta con la mayor fidelidad posible,
la tasa de obesidad han generado una demanda que sobrepasa debido a las limitaciones de la instrumentación laparoscópi-
con mucho la oferta de los cirujanos bariátricos. En 2001 se ca disponible en aquel momento.
calculó que en el futuro puede haber hasta 20.000 pacientes por El fundamento de esta técnica es la creación de una bol-
cada cirujano bariátrico.1 Por tanto, es importante que los sa lineal, con orientación vertical y exclusión del fondo gás-
cirujanos mantengan o mejoren su eficacia quirúrgica al trico para obtener una plataforma útil desde la que puede
adoptar nuevas técnicas, mientras otros cirujanos aprenden realizarse la anastomosis manual con el asa de Roux. Esta
esta especialidad. técnica ha sido reproducida y adoptada en muchos hospita-
La revolución de la mínima invasividad comenzó en les, aunque no tiene tanta aceptación como las técnicas con
1993 cuando Wittgrove, Clark y Tremblay realizaron por grapado. Los inconvenientes principales son la prolongada
primera vez una derivación gástrica proximal laparoscópi- curva de aprendizaje y la inexperiencia en sutura laparoscó-
ca.2 Más adelante consiguieron demostrar que esta técnica pica avanzada. No obstante, una vez aprendidas, estas técni-
era viable y lograba una pérdida de peso y una reducción de cas permiten al cirujano resolver casi todas las complicacio-
las patologías comórbidas igual o mayor que muchas técni- nes relacionadas con la cirugía bariátrica (u otro tipo de
cas de cirugía abierta.3 Como se explica en el capítulo 25, la cirugía compleja del aparato digestivo proximal), por vía
técnica de colocación de yunque por vía laparoscópica/ laparoscópica y con un alto grado de precisión. Esta técnica
endoscópica para crear la anastomosis gastroyeyunal es el permite también lograr una eficiencia quirúrgica superior a
fundamento para la mayoría de las técnicas ideadas a conti- la de la cirugía abierta (v. tabla 26-1).
nuación. La tasa de fuga anastomótica inicial llegaba hasta
el 5%, aunque mejoró con la experiencia.5
En 1999 de la Torre y Scott dieron a conocer una serie Z INDICACIONES Y CRITERIOS DE SELECCIÓN
de técnicas laparoscópicas de derivación gástrica en Y de PARA LA CIRUGÍA
Roux con una vía de abordaje completamente intraabdomi-
nal para hacer la anastomosis gastroyeyunal con una grapa- Para la intervención, seguimos las recomendaciones de la
dora circular.6 Champion y después Schauer crearon la téc- National Institutes of Health Consensus Development Conference
nica de cortadora lineal, que anula la necesidad de introducir Statement11 y de la 2004 American Society for Bariatric Surgery
instrumental por vía transoral y evita la posibilidad de lesión Consensus Conference12 para cirugía digestiva de la obesidad
esofágica al tiempo que crea una anastomosis calibrada y avanzada en asociación con las recomendaciones de la
estable.7 American Society for Bariatric Surgery y de la Society of Ame-
En 1996 comenzamos a diseñar la técnica de sutura rican Gastrointestinal Endoscopic Surgeons.
manual, debido a nuestra preocupación por las tasas de fra- Las contraindicaciones de la vía laparoscópica son rela-
caso de las anastomosis con grapas. Realizamos la primera tivamente escasas en nuestro hospital (v. tabla 26-2). Los
intervención en 1998.8 El diseño de esta técnica iba en para- pacientes de mayor peso pueden resultar más complicados,
lelo al de las técnicas de Y de Roux con cirugía abierta que aunque los beneficios añadidos de evitar la morbilidad de
214
Capítulo 26 • Derivación gástrica en Y de Roux laparoscópica: técnica con sutura manual de la gastroyeyunostomía 215

hígado y la cantidad de grasa intraperitoneal, lo que per-


Tabla 26-1 VENTAJAS Y DESVENTAJAS mite al cirujano realizar la intervención por vía laparoscó-
DE LA TÉCNICA DE SUTURA MANUAL pica de modo seguro, al tiempo que establece hábitos
nutricionales y de ejercicio saludables que son beneficiosos
VENTAJAS DESVENTAJAS
tras la cirugía.
• Baja tasa de fuga en series abiertas; • Curva de No es necesaria preparación intestinal. Una dieta líqui-
familiaridad y comodidad con la técnica aprendizaje larga da 24 horas antes de la cirugía impide la posibilidad de que
• Complicaciones (estenosis, etc.) ya definidas haya comida retenida en el estómago, que podría obstruir
• Más barata que la anastomosis con grapado
• No requiere material de endoscopia
la anastomosis gastroyeyunal inmediatamente después de la
• No requiere ampliación del puerto, ni cirugía. Esta obstrucción puede causar una distensión gás-
aumenta el riesgo de infección por trica aguda.14
contaminación del mismo por uso de aparatos Los pacientes bariátricos están expuestos a un riesgo
endomecánicos moderado de tromboembolia venosa postoperatoria.15 Se
• Permite crear una bolsa gástrica lineal recomienda profilaxis con métodos mecánicos (botas de
pequeña
• Puede realizarla un solo cirujano sin la
compresión secuencial y deambulación temprana) y farma-
asistencia de otro cirujano especializado cológicos (heparina fraccionada o no fraccionada subcutá-
• Evita la instrumentación esofágica nea). Debe emplearse la profilaxis antibiótica parenteral
• Permite una cirugía secundaria o de revisión convencional.
• Permite al cirujano adquirir la habilidad En la colocación del paciente en el quirófano se ha de
necesaria para solucionar las posibles prestar atención a la prevención de las úlceras por presión y
complicaciones
de la neuropatía por compresión. Deben emplearse mesas de
quirófano especiales, apropiadas para el peso que han
de soportar y con expansiones laterales para acomodar a los
una incisión amplia hacen que esta vía sea más apropiada. De pacientes de mayor tamaño. Como parte del programa de
modo similar, en los pacientes tratados previamente con atención de ámbito hospitalario, deben aplicarse los proto-
cirugía abierta es más apropiada la movilización laparoscó- colos de transferencia del paciente y otras medidas de segu-
pica de las adherencias que la ampliación de una incisión ya ridad.
de por sí extensa. Aún no se ha definido con precisión la
utilidad de la cirugía bariátrica en la adolescencia (menores
de 18 años) ni en edades avanzadas (mayores de 60 años) Z TÉCNICA QUIRÚRGICA
aunque la experiencia creciente indica que los resultados son
similares a los de otros grupos de edad.13 También están eva- La colocación óptima del puerto permite la disección del
luándose las diferencias éticas y culturales relacionadas con intestino delgado sin comprometer la exposición de la
los resultados. región proximal del estómago. Los extremos de tamaño
pueden ser complicados, porque la creación del espacio
adecuado para la formación del asa de Roux en los pacien-
Z PREPARACIÓN PARA LA CIRUGÍA tes de menor tamaño puede ser tan problemática como la
longitud inadecuada del instrumental y las dificultades
El tratamiento de la obesidad mórbida requiere un equipo para visualizar la región proximal del estómago en los
multidisciplinar especializado, formado por cirujano, psi- pacientes de mayor tamaño. Es interesante reseñar que
cólogo, nutricionista, fisioterapeuta, anestesiólogo, y otros los autores describimos distintas vías de abordaje y ubica-
especialistas. Es por otra parte importante que el paciente ciones de los puertos para resolver estos problemas, aun
tome parte activa en el programa de cirugía bariátrica si se manteniendo la naturaleza crítica de nuestra ubicación
quieren obtener unos resultados óptimos. La optimización particular de los puertos. Usamos cinco puertos (v. figu-
preoperatoria de la nutrición y del estado cardiorrespira- ra 26-1). Esta disposición permite también una colecistec-
torio es aconsejable, ya que ayuda a limitar una de las cau- tomía concomitante si es necesaria.
sas principales de conversión de la laparoscopia, como la La entrada inicial se hace sin insuflación, con ayuda de
hepatomegalia que limita la visualización de la región un sistema de trócar óptico sin bisturí. La cámara se coloca
proximal del estómago. La reducción de peso con trata- en la línea media a 8-12 cm del apéndice xifoides y se hacen
miento médico, aunque de utilidad limitada a largo plazo, los otros puertos para crear el asa de Roux, formar la bolsa
puede servir para reducir antes de la cirugía el tamaño del gástrica y efectuar la anastomosis gastroyeyunal. La aten-
ción al ángulo de entrada del puerto puede reducir la resis-
tencia de la pared abdominal al instrumental, permitiendo
una intervención más precisa y con menor cansancio. Los
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Tabla 26-2 CONTRAINDICACIONES DE LA CIRUGÍA


BARIÁTRICA LAPAROSCÓPICA puertos pueden reorientarse, creando una nueva vía fascial y
conservando la entrada original en la piel. Estos puertos
• Paciente inadecuado para cirugía bariátrica en general (reserva específicos no requieren el cierre de la fascia, y esto mejora
cardiorrespiratoria inadecuada para tolerar la intervención, de forma notable la eficacia operativa y reduce también las
adicción al alcohol u otras drogas, capacidad intelectual causas de dolor postoperatorio.
deteriorada, etc.)
• Presencia de hernia incisional amplia que precisa reparación en el El epiplón se desplaza hacia arriba para exponer el liga-
momento de la cirugía bariátrica mento de Treitz. En los pacientes en los que el epiplón está
• Presencia de adherencias intraabdominales que impiden la visión y adherido a estructuras pélvicas o englobado en una hernia
la disección laparoscópica en general ventral incarcerada, preferimos practicar una incisión en el
• Síndrome compartimental abdominal o posibilidad de epiplón mayor y abrir el mesocolon transverso desde arriba,
neumoperitoneo inadecuado exponiendo así el ligamento de Treitz directamente. Las
216 Sección V • INTERVENCIONES

Monitor

Paciente

Cirujano Ayudante
Figura 26-1 Posición del paciente
y del equipo quirúrgico. Ubicación
de los accesos.
Enfermero
instrumentista
Separador hepático
de 5 o 10 mm

Accesos de 12 mm

Accesos para cáma


de 10 mm

Ombligo

hernias ventrales se repararán más adelante, cuando una antecólica. Está claro que estos pacientes también presentan
pérdida de peso y una nutrición adecuadas garanticen riesgo de vólvulo intestinal.18 Por tanto, nuestra filosofía es
una mayor probabilidad de éxito y no esté comprometido el eliminar el riesgo de obstrucción intestinal postoperatoria,
uso de una malla protésica por la contaminación con el con- en lugar de intentar simplemente una reducción de su inci-
tenido entérico. dencia. Sin embargo, no se ha determinado aún la estabili-
Se secciona por completo el yeyuno con una grapadora dad a largo plazo del cierre con sutura de estos defectos.
lineal de 2,5 mm y se divide el mesenterio con otro disparo Llegados a este punto se coloca el separador hepático,
de la grapadora o con el bisturí armónico. Se mide el asa de para permitir la disección proximal del estómago. En oca-
Roux y se efectúa la anastomosis lineal laterolateral (v. figu- siones el gran tamaño del hígado no permite una visualiza-
ra 26-2). Habitualmente la longitud del asa de Roux puede ción óptima, lo que puede constituir una indicación para la
alcanzar hasta 150 cm, sin que se registre aumento de la conversión en cirugía abierta. No obstante, el desplazamien-
incidencia de complicaciones por malabsorción.16 La ente- to del hígado hacia la derecha, mejor que en dirección ante-
rotomía se cierra con una capa simple de sutura absorbible. rior, permite una exposición suficiente en la mayoría de los
El defecto mesentérico debe cerrarse con una sutura con- pacientes. Otra opción es abortar la intervención, evaluar la
tinua no absorbible para limitar la posibilidad de hernia causa de la hepatomegalia (habitualmente esteatosis) e ini-
interna. ciar el tratamiento (reducción de peso con fármacos), antes
El asa de Roux se pasa a través de un túnel retrocólico y de realizar la intervención más adelante en condiciones más
se fija al mesocolon transverso con suturas no absorbibles, apropiadas. De este modo la contención quirúrgica y el cri-
además de cerrar el espacio de Petersen, también para evitar terio apropiado pueden reducir la morbilidad asociada a estas
una posible hernia interna. Otros cirujanos prefieren una vía operaciones.
antecólica para el asa de Roux, porque piensan que disminu- La disección perigástrica a lo largo de la curvatura
ye la incidencia de obstrucciones intestinales postoperato- menor del estómago se realiza 3-5 cm distal a la unión gas-
rias.17 troesofágica y se prolonga hasta alcanzar el espacio retro-
En algunos pacientes, el mesocolon es demasiado corto gástrico. En ocasiones se encuentran adherencias densas al
y no permite pasar con seguridad un asa de Roux retrocólica. páncreas. La visión mejora abriendo una ventana gastrocó-
En estos casos, poco frecuentes, la decisión de emplear una lica y accediendo a esta zona desde detrás del estómago. Es
vía antecólica para el asa de Roux debe adoptarse antes de necesario evitar la lesión térmica de las vísceras y nervios
seccionar el yeyuno. Este punto debe estar más distal al liga- vagos adyacentes.
mento de Treitz, habitualmente a 50 a 100 cm, para reducir Se usa una grapadora de corte lineal de 3,5 mm y seis
la tensión en la anastomosis gastroyeyunal. Al alargar el asa hileras para crear una bolsa gástrica proximal con base en la
biliopancreática la absorción de calcio y hierro puede ser curvatura menor. Según nuestra experiencia, las grapadoras
menos eficaz, dando lugar a un aumento de la incidencia de de cuatro hileras no son fiables si no se realiza un refuer-
la carencia de estos minerales o a que sea más difícil corre- zo de la sutura para evitar la dehiscencia.10 Es esencial excluir
girla sólo con suplementos orales. el fondo gástrico distensible para obtener un control del
Existe cierta controversia sobre la necesidad de cerrar peso óptimo a largo plazo. Ello requiere una disección meti-
un espacio de Petersen amplio asociado a un asa de Roux culosa por detrás del estómago a nivel del ángulo de His.
Capítulo 26 • Derivación gástrica en Y de Roux laparoscópica: técnica con sutura manual de la gastroyeyunostomía 217

Figura 26-2 Creación del asa de Roux y


yeyunoyeyunostomía: medición del asa de
Roux; enterotomías para anastomosis late-
rolateral; construcción de la anastomosis
con grapadora lineal de 2,5 mm; cierre de
enterotomía con una capa simple de sutura
absorbible.

Este paso ayuda también a evitar una lesión del esófago o del La creación de la gastroyeyunostomía comienza con
bazo. Lo ideal es obtener una bolsa gástrica de no más de una capa exterior, posterior y continua de suturas de poli-
20 mL.19 glactina de 3-0. Empezando en la zona distal y suturando en
Se determina la cara inferior de la bolsa y se introdu- dirección proximal, se aproxima el lado antimesentérico del
ce la primera grapadora horizontal a través del puerto en asa de Roux a la línea de grapado inferior de la bolsa gástrica,
el hipocondrio derecho. Todos los disparos subsiguientes incorporando las grapas en la línea de sutura. Se lleva a cabo
se orientan en vertical a través del puerto del hipocondrio una segunda línea de sutura continua de espesor total pos-
izquierdo. La colocación subcostal alta de este puerto terior que se continúa en dirección anterior más allá de la
permite alcanzar el ángulo de His en todos los casos con primera sutura posterior (v. figura 26-3).
una grapadora de longitud normal. Es preferible seccio- Se crean dos líneas de sutura anteriores desde la zona
nar la almohadilla grasa en el hiato para ver mejor la anterior y distal de la enterotomía, la primera de espesor total
unión gastroesofágica antes del grapado. En ocasiones es y la segunda seromuscular. Antes de acabar la anastomosis, se
necesaria una grapadora de 4,5 mm para tejido de grosor introduce con cuidado la sonda 34F a través de la anastomosis
excepcional. para ayudar a calibrar la apertura así como para asegurarse de
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Después del primer grapado horizontal se introduce que la anastomosis es permeable. Se anudan las suturas ante-
una sonda orogástrica 34F en el estómago, que ayuda a cal- riores con sus equivalentes posteriores respectivas.
cular el tamaño de la bolsa y evita la sección inadvertida o la Puede hacerse una prueba de la anastomosis y de las
compresión de las grapas sobre el esófago. líneas de grapado proximales con azul de metileno, insufla-
Se coloca el asa retrocólica de Roux por delante del res- ción de aire a través de la sonda orogástrica o endoscopia
to gástrico para que quede muy próxima a la nueva bolsa intraoperatoria. Sin embargo, nosotros no realizamos habi-
gástrica. Aunque algunos cirujanos prefieren una vía retrogás- tualmente prueba o drenaje de la anastomosis, a menos que
trica, el acceso y la visualización ulteriores de la anastomosis haya una sospecha clínica razonable.
son así más difíciles si es necesaria una cirugía de revisión. Los puertos se inspeccionan para detectar una posible
La continuidad intestinal se completa con una anastomosis hemorragia tras la retirada de los trócares y se cierra la piel
con sutura manual en dos capas. con sutura simple de monofilamento absorbible.
218 Sección V • INTERVENCIONES

Figura 26-3 Creación de la


bolsa gástrica y gastroyeyunosto-
mía. Creación de la bolsa gástri-
ca: primer grapado horizontal
2 para determinar la cara inferior
de la bolsa. grapados verticales
subsiguientes para completar la
división de la bolsa; gastroyeyu-
nostomía laterolateral; anasto-
mosis acabada. Cuadros de la
gastroyeyunostomía con sutura
manual: 1) asa de Roux retrocóli-
ca colocada por delante del resto
gástrico hasta la bolsa gástrica;
2) capa exterior posterior conti-
nua con sutura de poliglacti-
na 3-0; 3) enterotomías realiza-
3
das; 4) segunda sutura de espesor
total posterior continua que se
prolonga hasta la primera sutura
posterior; 5) primera hilera de
FORMACIÓN DE LA BOLSA GÁSTRICA suturas anterior continua de gro-
Y GASTROYEYUNOSTOMÍA sor total; 6) segunda hilera de
suturas anterior continua sero-
muscular. Se anudan las dos sutu-
ras anteriores con sus equivalen-
4 5 6 tes posteriores respectivas.

Z TRATAMIENTO POSTOPERATORIO un inhibidor de la bomba de protones durante 30 días. Se


programan visitas de seguimiento a 1 semana, 3 semanas y
La profilaxis antibiótica se mantiene durante 24 horas, en cada 3 meses durante el primer año, y después una vez al
tanto que la profilaxis antitromboembólica se prolonga has- año. Se proporcionan contactos con grupos de apoyo nutri-
ta el alta hospitalaria. Para la analgesia empleamos sistemas cional, emocional y de ejercicio. La evaluación nutricional
de administración de narcóticos controlados por el paciente completa se realiza con periodicidad anual o cuando los sín-
y ketorolaco intravenoso. Cuando el paciente empieza a tole- tomas o la sospecha clínica la hacen necesaria.
rar los líquidos por vía oral se le ofrecen narcóticos orales.
Se administra metoclopramida a todos los pacientes y el per-
sonal de enfermería puede emplear a su criterio diferentes Z RESULTADOS
fármacos antieméticos.
Las técnicas de diagnóstico por imagen con contraste en Los resultados a 8 años obtenidos por Wittgrove5 indican
el postoperatorio aportan escasa información de valor para el una pérdida de peso a largo plazo igual o mayor que los
tratamiento de estos pacientes y sólo sirven para retrasar resultados a 5 años con la derivación gástrica mediante ciru-
el alta por presencia de náuseas.20,21 Aunque el resultado de gía abierta presentados por MacLean 22 y que los resultados
esta técnica sea normal, en ocasiones es necesaria una reinter- a 14 años presentados por Pories. 23 Nuestros resultados a
vención si hay una sospecha clínica fundada de fuga.6 5 años indican lo mismo (v. figura 26-4). Más importante
Los pacientes comienzan a tomar líquidos por vía oral aún es el hecho de que la reducción de las patologías comór-
el día de la cirugía y ese mismo día se les anima ya a caminar bidas es muy notable, lo que pone de manifiesto la influencia
con ayuda. La medicación oral preoperatoria puede reanu- y la importancia de la reducción de peso quirúrgica en el
darse en cuanto el paciente tolere los líquidos. La mayoría de mantenimiento de la salud.
los pacientes reciben el alta hospitalaria al segundo día de la Las tasas de complicaciones tempranas y la duración de
operación. la cirugía presentan una curva de aprendizaje prolongada
Los pacientes siguen una dieta líquida durante 1 sema- que depende, no sólo de la experiencia inicial del cirujano,
na, con introducción gradual de los alimentos sólidos en un sino también de la capacidad de este para organizar un méto-
período de 3-4 semanas. Deben tomar un antagonista H2 o do sistemático para abordar esta operación compleja. La efi-
Capítulo 26 • Derivación gástrica en Y de Roux laparoscópica: técnica con sutura manual de la gastroyeyunostomía 219
Porcentaje de pérdida de peso excesivo

Año postoperatorio
Figura 26-4 Porcentaje de pérdida de peso excesivo con el tiempo.

ciencia derivada de la preparación del equipo quirúrgico es ponde bien a la dilatación con balón endoscópico. Los
crítica. Nuestros datos indican que para abordar esta técnica pacientes se quejan de una regresión o de una intolerancia a
son necesarias más de 100 intervenciones como cirujano la progresión de la dieta alrededor de la tercera semana
principal (v. figura 26-5). Estas cifras son similares a las que postoperatoria. Se desconoce la causa de este fenómeno,
señalan otros expertos.24 aunque podría estar relacionado con el método en la gastro-
La pérdida del exceso de peso, la reducción de las pato- yeyunostomía (v. tabla 26-4). Es infrecuente en el mesoco-
logías comórbidas y la mejora de la calidad de vida a corto lon o en la yeyunoyeyunostomía. Estas localizaciones no
plazo son hechos confirmados con la derivación gástrica, responden a la dilatación endoscópica y precisan una repa-
laparoscópica o abierta. Sin embargo, no disponemos toda- ración quirúrgica. En ocasiones, la estenosis gastroyeyunal
vía de los datos definitivos a 5-10 años excepto en algunas recurrente también requiere una reparación quirúrgica.
series muy selectivas. Es interesante resaltar que los resulta- La segunda complicación más frecuente en nuestra
dos laparoscópicos a corto plazo indican que la laparoscopia serie es la constituida por hernias y obstrucciones intestina-
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es mejor que la derivación gástrica convencional abierta, les (v. tablas 26-3 y 26-5), que pueden aparecer de inmedia-
apuntando una ligera diferencia en la construcción anatómi- to o muchos años después de la intervención. Están causa-
ca con las técnicas laparoscópicas. das principalmente por la migración del intestino a través
de un defecto mesentérico abierto y puede ser difícil detec-
tarlas en ausencia de una obstrucción intestinal evidente.
Z TRATAMIENTO DE LAS COMPLICACIONES Habitualmente, los pacientes refieren dolor abdominal pos-
INICIALES prandial intenso e intermitente, aunque las exploraciones
radiológicas no invasivas son completamente normales, al
La complicación más frecuente en nuestra serie es la este- menos en el 50% de los casos. Puede estar indicada una
nosis de la anastomosis gastroyeyunal (v. tabla 26-3), que laparoscopia diagnóstica basada en una sospecha clínica. La
presenta un porcentaje constante del 4,9% al 5,21%, y res- reducción y la reparación de los defectos son sencillas.25
220 Sección V • INTERVENCIONES

Duración de la intervención (min)

Número de intervenciones

Figura 26-5 Duración de la intervención en función del número de intervenciones realizadas.

La prevención de las hernias internas requiere un cierre causar problemas.7 No hemos observado hernias internas
meticuloso de todos los defectos posibles con sutura no desde que adoptamos las técnicas de cierre mesentérico pro-
absorbible. Algunos cirujanos colocan el asa de Roux en puestas por Schweitzer y cols.26
posición antecólica con la intención de evitar la causa más Las fugas en la anastomosis proximal o las dehiscencias de
frecuente de obstrucción del intestino delgado, la hernia la línea de grapado son mal toleradas por el paciente bariátrico.
transmesocólica. Sin embargo, el amplio espacio de Petersen Las fugas suelen ser leves al principio y el único signo de las
resultante y los defectos en el mesenterio yeyunal pueden mismas puede ser una taquicardia mantenida (⬎120/min).

Tabla 26-3 COMPLICACIONES (2805 PACIENTES)

TIPO COMPLICACIÓN N M F %
Estenosis anastomótica Gastroyeyunostomía 146 33 113 5,21
Mesocolon 15 1 14 0,53
Yeyunoyeyunostomía 2 0 2 0,07
Total 5,81
Hernia Trócar 4 3 1 0,14
Interna 128 4,6
Total 4,7
Fugas Línea de grapado 21 9 12 0,75
Gastroyeyunostomía 2 0 2 0,07
Yeyunoyeyunostomía 1 0 1 0,04
Total 0,86
Infección (sin fuga) Herida 3 1 2 0,11
Neumonía 2 1 1 0,07
Absceso hepático 1 1 0 0,04
Total 0,21
Hemorragia Reintervención 13 7 6 0,46
Sólo transfusión 11 1 10 0,39
Observación 7 1 6 0,25
Total 1,1
Tromboembolia Embolia pulmonar 5 0 5 0,18
Trombosis venosa profunda 2 1 1 0,07
Total 0,25
Biliar Cálculos biliares 77 7 70 2,75
Colecistitis sin cálculos 5 0 5 0,18
Total 2,92
Úlcera marginal Tratamiento médico 17 3 14 0,61
Perforación 9 0 9 0,32
Revisión necesaria 3 0 3 0,11
TOTAL 1,03
Muerte Perioperatoria 4 1 3 0,14
Total: 478 de 2805; 17%
N, número; M, pacientes masculinos; F, pacientes femeninos.
Capítulo 26 • Derivación gástrica en Y de Roux laparoscópica: técnica con sutura manual de la gastroyeyunostomía 221

Las úlceras marginales perforadas pueden tratarse por


Tabla 26-4 INCIDENCIA DE ESTENOSIS vía laparoscópica. La ausencia de adherencias intraabdomi-
GASTROYEYUNAL nales significativas y la localización anterior de la anastomo-
AUTOR N ESTENOSIS N (%) sis permiten un cierre relativamente simple, reforzado con
un parche de epiplón. En estos casos, la endoscopia intrao-
Wittgrove y cols.5 (2002) 1000 40 (4%) peratoria es útil para descartar fístulas gastrogástricas y para
Schauer y cols.7 (2000) 275 13 (4,7%)
Higa y cols.30 (2001) 1500 73 (4,9%) evaluar y reparar la anastomosis gastroyeyunal.
Champion y cols.31 (1999) 63 4 (6,3%) La malabsorción/malnutrición proteica es infrecuente
DeMaria y cols.32 (2002) 281 18 (6,6%) en las técnicas de derivación gástrica proximal. No obstante,
N, número.
los pacientes deben consumir entre 60-80 g de proteínas al
día y hay que monitorizar la concentración de albúmina.
A menudo los pacientes no toleran la carne al principio y
Los síntomas habituales, tales como dolor abdominal, fiebre o tienden a evitarla. En un reducido número de pacientes es
leucocitosis, pueden ser indistinguibles de las complicaciones necesario el aporte complementario de proteínas.
cardíacas, la embolia pulmonar, la distensión gástrica aguda o La carencia de vitaminas y minerales puede afectar has-
el shock hemorrágico. Los pacientes con obesidad mórbida tie- ta al 30% de los pacientes.27 Son recomendables la evalua-
nen una escasa reserva cardiorrespiratoria, por lo que es esen- ción y el asesoramiento nutricionales, además de suplemen-
cial no retrasar el tratamiento. La evaluación diagnóstica debe tos polivitamínicos, calcio y B12 por vía oral.
ser expeditiva y orientada en función de la sospecha clínica. Si Nuestros resultados no apoyan la colecistectomía siste-
se sospecha una fuga, la única manera definitiva de confirmar- mática. Sin embargo, no hemos observado complicaciones al
la es una reexploración, habitualmente laparoscópica. extirpar la vesícula biliar en la misma operación que la deri-
Durante la cirugía hay que intentar identificar y reparar vación gástrica. Por ahora nuestro planteamiento es realizar
el defecto, siendo conscientes de que una reparación secun- la colecistectomía en presencia de cálculos, aunque sólo si
daria fracasa en ocasiones. La endoscopia intraoperatoria es resulta técnicamente sencilla según la anatomía individual
útil a menudo para identificar la fuga y evaluar la reparación. del paciente. En otras palabras, si la disección o identifica-
El drenaje es esencial y, en el momento de implantarlo, pue- ción de la unión entre el conducto cístico y el colédoco es
de crearse un acceso entérico a través de una sonda de gas- problemática, preferimos esperar a que el paciente haya per-
trostomía en el remanente gástrico. Esto evita la distensión dido suficiente peso tras la derivación gástrica para realizar
gástrica y el drenaje puede utilizarse más adelante para el la colecistectomía. Este planteamiento ayuda a asegurar una
soporte nutricional. anatomía más favorable y reduce el riesgo de lesión del con-
La tromboembolia venosa y la embolia pulmonar son ducto biliar. Los puertos para los trócares de la derivación
las principales causas de muerte en la mayoría de las series. gástrica pueden emplearse para la colecistectomía subsi-
Es sorprendente su escasa frecuencia, dadas las característi- guiente, porque las adherencias son infrecuentes.
cas físicas de este tipo de pacientes, la presencia de patolo- Las causas de la pérdida de peso inicial inadecuada y
gías comórbidas y el tipo de operación (posición, duración de su recuperación son multifactoriales. Se ha observado
prolongada, etc.). La profilaxis mecánica y farmacológica, que la participación en grupos de apoyo de los pacientes y
combinada con movilización inmediata gracias a la ausencia el seguimiento por parte del cirujano permite conseguir
de dolor por la incisión, ha contribuido a prevenir esta com- mejores resultados. No obstante, como sabemos poco de la
plicación. Los filtros profilácticos en la vena cava deben fisiopatología de la pérdida de peso quirúrgica, a menudo
reservarse para los pacientes con embolia pulmonar previa o acusamos a los pacientes de un cumplimiento inadecuado.
hipertensión pulmonar relevante. Ello se añade a la frustración compartida por el paciente y
por el médico.
Está claro que el concepto de obesidad como enferme-
Z TRATAMIENTO DE LAS COMPLICACIONES dad crónica implica un tratamiento multidisciplinar y de por
TARDÍAS vida, que comprende la posibilidad de intervenciones qui-
rúrgicas secundarias en pacientes seleccionados que no con-
El consumo de tabaco o de analgésicos no esteroideos con- siguen una corrección o estabilización no quirúrgica de las
tribuye al desarrollo de ulceración marginal. Los pacientes patologías comórbidas. Estas consideraciones deberían
presentan dolor abdominal, dispepsia y, en ocasiones, he- reflejarse en un mayor grado de restricción, de malabsor-
morragia. El diagnóstico puede ser radiológico, aunque a ción, o de ambas. Por desgracia, las técnicas de revisión con-
menudo es necesaria la endoscopia para la evaluación y tra- llevan al menos el doble de morbilidad que la operación pri-
tamiento de una estenosis gastroyeyunal asociada o para maria, con resultados a largo plazo desconocidos. Por tanto,
corregir una hemorragia. deben ser realizadas sólo por cirujanos con la suficiente
experiencia y con un interés destacado en este campo.
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Z COMENTARIOS
Tabla 26-5 HERNIA INTERNA (2805 PACIENTES)
La derivación gástrica laparoscópica es una de las técnicas
LOCALIZACIÓN N (%) quirúrgicas más complicadas de las realizadas en la actuali-
Mesocolon 61 2,1 dad. La distorsión y ocultación de la anatomía por la grasa
Yeyunoyeyunostomía 41 1,5 intraabdominal, combinadas con las limitaciones de la ins-
Petersen 13 0,5 trumentación, han dado lugar a numerosas soluciones inge-
Múltiple 13 0,5 niosas que tienen la intención de emular las técnicas abiertas
Total 128 4,6
convencionales previamente contrastadas. Aunque las actua-
222 Sección V • INTERVENCIONES

les grapadoras endomecánicas han demostrado que son fia- 11. National Institutes of Health Consensus Development Conference
bles, los modelos iniciales eran menos apropiados. A pesar de Draft Statement: Gastrointestinal surgery for severe obesity. Obes
la fiabilidad de las técnicas de grapado de las anastomosis, Surg 1991;1:257-266.
12. Buchwald H, American Society for Bariatric Surgery, Consensus
los expertos coinciden en señalar que para realizar este tipo Conference Panel: Bariatric surgery for morbid obesity: health impli-
de intervención son necesarias habilidades avanzadas en el cations for patients, health professionals, and third-party payers. J Am
ámbito de la sutura laparoscópica. Para este propósito es útil Coll Surg 2005;200:593-604.
la derivación gástrica en Y de Roux laparoscópica con gas- 13. Capella RF: Bariatric surgery in adolescents: is this the best age to
operate? Obes Surg 2002;12:196 (abstract 13).
troyeyunostomía mediante sutura manual. 14. Higa KD, Boone KB, Ho T: Complications of the laparoscopic
El perfeccionamiento de la técnica vigente ha permitido Roux-en-Y gastric bypass:1,040 patients—what have we learned?
lograr una eficacia con cirugía laparoscópica superior a la Obes Surg 2000;10:509-513.
conseguida con la derivación gástrica abierta. Se han com- 15. Westling A, Bergvist D, Bostrom A, et al: Incidence of deep venous
thrombosis in patients undergoing obesity surgery. World J Surg
probado los beneficios para el paciente en lo que respecta a 2000;26:470-473.
morbilidad de la herida, compromiso cardiovascular y fun- 16. Brolin RE, Kenler HA, Gorman JH, et al: Long-limb gastric bypass
ción inmunológica.28,29 No obstante, la curva de aprendizaje in the superobese: a prospective randomized trial. Ann Surg
para el cirujano se convierte en una tarea larga y tediosa. 1991;215:387-395.
17. Champion JK: Small bowel obstruction after laparoscopic Roux-en-Y
Además, los pacientes bariátricos suelen plantear más pro- gastric bypass. Obes Surg 2002;12:197-198 (abstract 17).
blemas, con independencia de las dificultades propiamente 18. Khanna A, Newman B, Reyes J, et al: Internal hernia and volvulus of
técnicas. Por último, el tratamiento de la obesidad requiere the small bowel following liver transplantation. Transpl Int
un equipo multidisciplinar dedicado al control de por vida 1997;10:133-136.
de esta grave enfermedad. La obesidad mórbida, a diferen- 19. MacLean LD, Rhode BM, Nohr CW: Late outcome of isolated gastric
bypass. Ann Surg 2000;231:524-528.
cia de sus patologías comórbidas, no tiene cura; sólo puede 20. Singh R, Fisher B: Sensitivity and specificity of postoperative upper GI
mantenerse bajo control. Los cirujanos incapaces de apreciar series following gastric bypass. Obes Surg 2003;13:73-75.
el tratamiento de la obesidad más allá de la intervención qui- 21. Sims TL, Mullican MA, Hamilton EC, et al: Routine upper gastroin-
rúrgica no deben aventurarse en esta especialidad. testinal Gastrografin swallow after laparoscopic Roux-en-Y gastric
bypass. Obes Surg 2003;13:66-72.
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27
Derivación gástrica con banda
M.A.L. Fobi, M.D., Hoil Lee, M.D., Basil Felahy, M.D., Peter Ako, M.D.,
Nicole N. Fobi, M.D., y Martin Sanguinette, M.D.

La derivación gástrica en Y de Roux y con banda está for- teado. Esta operación combinada se denomina técnica de
mada por una bolsa aislada pequeña (ⱕ20 mL) en la curva- derivación gástrica con bolsa de Fobi para la obesidad7
tura menor con una banda anular de silastic alrededor del (v. figura 27-1).
tercio inferior de la bolsa. Esta bolsa actúa como estoma
reforzado. El borde seccionado de la bolsa se cubre con el
borde antimesentérico del asa de Roux, que se desplaza para Z TÉCNICA QUIRÚRGICA
establecer la continuidad intestinal. La gastroyeyunostomía
consiste en una amplia anastomosis tangencial terminolate- Creación de la bolsa
ral con un cierre en 2 capas. Las asas biliopancreática y
entérica son relativamente cortas, de alrededor de 60 cm Un separador de Thompson permite una exposición ópti-
cada una (v. figura 27-1). ma de la unión gastroesofágica, con retracción de los bor-
Esta operación surgió a partir de la observación de que des subcostales y del lóbulo izquierdo del hígado.
algunos pacientes lograban una pérdida de peso insuficiente Inicialmente, se entra en la zona desnuda del epiplón
tras una gastroplastia vertical con banda anatómicamente menor. Esta suele estar sobre el lóbulo caudado del hígado.
precisa y quirúrgicamente intacta. Cuando la la gastroplas- Se abre una ventana justo a la izquierda de la unión gas-
tia se convertía en una derivación gástrica, con la anastomo-
sis de la gastroenterostomía justo distal a la banda, los
pacientes lograban una pérdida de peso más pronunciada y
mantenida, superando también la frecuencia registrada
entre pacientes con derivación gástrica sin banda.1 La banda
quedaba colocada de manera fortuita, ya que se había usado
una banda de marlex (como describió Mason 2) y habría
resultado difícil quitar la banda en el momento de la opera-
ción de conversión.
Las primeras derivaciones gástricas con banda prima-
rias empleaban una banda de silastic de 5 cm, igual que en
la técnica de gastroplastia vertical con anillo de silastic
descrita por Laws.3 La bolsa se creaba mediante un grapa-
do en continuidad. Esta bolsa con banda restrictiva pro-
vocaba una elevada tasa de intolerancia a los alimentos
sólidos 4 y una incidencia alta de dehiscencia de la línea de
grapado y de úlceras marginales.5,6 Este problema se solu-
cionó con una banda de 6 cm en las mujeres y de 6,5 cm
en los hombres.
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También se seccionaba la bolsa para reducir la inci-


dencia de dehiscencia de la línea de grapado. 6 Además, el
borde seccionado de la bolsa se cubría con el borde anti-
mesentérico del asa yeyunal desplazada para la gastroye-
yunostomía con la intención de reducir la incidencia de
formación de una fístula gastroesofágica. Por último, para
solucionar el problema de acceso al segmento gastrointes-
tinal puenteado, se colocaba una sonda de gastrostomía
temporal en el estómago puenteado y se disponía un mar-
cador radioopaco alrededor para facilitar el acceso percu- Figura 27-1 Derivación gástrica con banda con una gastrostomía
táneo con control radiológico al segmento gástrico puen- temporal y un marcador del punto de gastrostomía.

223
224 Sección V • INTERVENCIONES

troesofágica. La unión gastroesofágica se moviliza pasando otra vez la grapadora para reducirla al tamaño adecuado.
la mano a través del defecto sobre el lóbulo caudado y, Es necesario examinar con atención el diafragma, el esófa-
mediante disección roma, introduciendo el dedo medio a go, el estómago y el páncreas, para comprobar que no hay
través de la ventana a la izquierda de la unión gastroesofá- desgarros o avulsiones en los vasos, que podrían sangrar
gica. Esto debe llevarse a cabo con delicadeza, para no más adelante. Se solapan los bordes de corte de la bolsa y
lesionar el hígado, el esófago, el diafragma, el páncreas, el del estómago puenteado con suturas continuas de vicryl
bazo o la región proximal del estómago. En esta maniobra, 3-0 para reforzar la línea de grapado y garantizar la hemos-
no suele ser necesario ligar los vasos gástricos cortos. Se tasia (v. figura 27-3 A, B).
liberan las adherencias al bazo, para evitar una avulsión Se introduce una sonda de silastic con dos hebras de
accidental de la cápsula esplénica y una hemorragia que prolene 2-0 a través de una ventana en la curvatura menor a
podría precisar transfusión o incluso una esplenectomía. 2-2,5 cm del extremo caudal de la bolsa y se sutura sobre sí
Se usa un protector de laparotomía para separar el bazo de misma. En las mujeres se emplea una sonda de 7 cm y en los
la zona de intervención. hombres una de 7,5 cm. Se anudan con una superposición de
El anestesiólogo introduce una sonda nasogástrica en 1 cm dejando 6 y 6,5 cm de longitud circunferencial funcio-
el estómago y se descomprime este. A continuación se nal (v. figura 27-4 A, B y C). Esta banda constituye un esto-
practica un orificio a unos 4-5 cm de la unión gastroeso- ma de salida que no se dilata (v. figura 27-5). La bolsa entre
fágica en la curvatura menor, entre la serosa gástrica y el el esófago y la banda tiene un volumen aproximado de
haz neurovascular, con una pinza roma de ángulo recto. 15-20 mL. El espacio retrogástrico del estómago puenteado
Se introduce un drenaje de Penrose de 6 mm a través de se moviliza, con el fin de dejar un espacio libre para intro-
esta ventana y se separa la región proximal del estómago ducir el asa de Roux.
en dirección caudal, estirando la bolsa de 4-5 cm a 7-8 cm.
Se introduce el yunque de una grapadora de corte lineal Creación del asa en Y de Roux
de 100 mm en esta ventana, colocándolo justo a la izquier-
da de la unión gastroesofágica. La sonda nasogástrica se A 30-75 cm del ligamento de Treitz hay una buena arcada
mantiene cerca de la curvatura menor, en la región proxi- vascular, por lo que se secciona el yeyuno en ese punto.
mal del estómago, conforme se ensambla la otra mitad de Después se crea el asa biliopancreática mediante anastomo-
la grapadora y se coloca sobre la cara anterior del estóma- sis laterolateral del yeyuno proximal seccionado al asa de
go. A continuación se tira del estómago a través de la Roux, a unos 60 cm de su borde seccionado. El espacio
apertura de la grapadora para dejar una bolsa gástrica lo mesentérico entre el asa de Roux y el asa biliopancreática se
más pequeña posible. Se cierra la grapadora conforme se cierra con suturas 3-0 no absorbibles para reducir la posibi-
retira la sonda nasogástrica hasta pasar la apertura de la lidad de hernia interna.
grapadora. Se examina la futura bolsa de modo visual y
manual para asegurarse de que su volumen no supera los Anastomosis gastroyeyunal
25 mL. La bolsa proximal desde la curvatura menor hasta
la izquierda de la unión gastroesofágica debe quedar com- Una vez creada el asa de Roux y cerrado el espacio mesenté-
pletamente dentro de la grapadora (v. figura 27-2 A, B). rico se hace una ventana en el mesocolon hacia el espacio
Hay que retirar la sonda nasogástrica y reintroducirla en la retrogástrico justo por encima del ligamento de Treitz.
bolsa proximal, para garantizar que no queda grapada y A continuación se introducen entre 20 cm y 40 cm del asa de
que se ha creado una bolsa permeable conectada al esófago. Roux en el espacio retrogástrico. Llegados a este punto, la
Al disparar la grapadora, esta corta y grapa ambos segmen- atención se dirige a la bolsa y al estómago seccionado y
tos del estómago. Se vuelve a examinar la superficie ante- puenteado. Se recupera el asa de Roux en el espacio retro-
rior y posterior de la bolsa para confirmar que su tamaño gástrico, se saca y se coloca entre la bolsa y el estómago
es adecuado. Si la bolsa es demasiado grande debe aplicarse puenteado (v. figura 27-6). El segmento proximal de esta asa

A B
Figura 27-2 A. Grapadora de corte lineal de 100 mm introducida por la ventana que abarca por completo la bolsa proximal que tiene un tamaño
aproximado de 25 mL. B. Bolsa proximal seccionada.
Capítulo 27 • Derivación gástrica con banda 225

A B
Figura 27-3 A. Sutura adicional del borde cortado del segmento puenteado con suturas absorbibles. B. Sutura adicional del borde cortado de la
bolsa.

se usa para cubrir el borde cortado-grapado de la bolsa desde ra 27-7). La línea de grapado en la bolsa se incorpora a la
la unión gastroesofágica hasta la banda. línea de sutura posterior de la gastroyeyunostomía. Se avan-
Al menos a 0,5 cm en sentido distal a la banda, se crea za una sonda nasogástrica 18F por el estoma con banda, a
una gastroyeyunostomía entre la bolsa y el asa yeyunal. Esta través de la gastroyeyunostomía y al asa de Roux.
consiste en una anastomosis terminolateral con seda 3-0 Una vez acabada la anastomosis gastroyeyunal, se sepa-
para la capa serosa y vicryl 3-0 para la capa mucosa (v. figu- ran el epiplón y el colon para exponer el asa de Roux confor-

A B
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Figura 27-4 A, B, C. Banda pasada y anudada con poca tensión


alrededor de la bolsa proximal.

C
226 Sección V • INTERVENCIONES

Anillo de silastic
(banda)
(circunferencia de 6 cm)
Espacio entre
la banda
y la pared gástrica
(0,1 cm)

Figura 27-5 Corte transversal a través del estoma con


1,9 cm la banda.
1,2 cm 0,3 cm
0,3 cm

Pared del estómago


(0,3 cm) Luz
(1,2 cm)

me pasa a través del mesocolon. Después se tira de esta asa pared abdominal, creando un sello entre la pared gástrica y
hacia abajo para que no quede intestino delgado redundante abdominal. Se coloca una sonda anular de silastic de 8 cm
en el espacio retrocólico. El asa de Roux se pega al mesoco- alrededor de la gastrostomía (v. figura 27-8). Este marcador
lon para evitar que se prolapse al espacio retrogástrico. Se sirve para ayudar a la visualización radiológica del segmento
cierra el espacio entre el asa de Roux y el retroperitoneo con gastrointestinal puenteado y para la evaluación endoscópica
suturas de seda de 3-0 con el fin de reducir la posibilidad de en cualquier momento tras la operación (v. figura 27-9).8
formación de hernia interna o vólvulo. A continuación, se La operación acaba con el cierre de la fascia abdominal
vuelve a explorar la enteroenterostomía previamente reali- con una sutura continua doble de vicryl. La capa subcutánea
zada para detectar hemorragia o torsión y comprobar la per- se lava abundantemente con una solución antibiótica. La piel se
meabilidad. cierra con grapas cutáneas o con sutura intradérmica y tiras
adhesivas estériles.
Colocación de la sonda de gastrostomía y del marcador
y cierre Operaciones concurrentes
Se elige un punto en la pared anterior del estómago puentea- Entre las operaciones concurrentes se cuentan la colecistec-
do que alcance la pared abdominoperitoneal sin tensión, unos tomía, la paniculectomía, la herniorrafia, la extirpación de
tres dedos por debajo del borde costal izquierdo. Se colocan quistes ováricos, la ligadura de trompas bilateral, la histerec-
dos suturas en bolsa de tabaco concéntricas y se introduce tomía y la ovariectomía. Si se considera, puede corregirse
una sonda de gastrostomía 16F a través de la piel, en un pun- cualquier otra patología quirúrgica durante la intervención
to al menos tres dedos por debajo del borde costal izquierdo. primaria.9
La sonda se introduce en la gastrostomía realizada entre las
suturas en bolsa de tabaco. Se anudan estas suturas para evi- Técnica laparoscópica
tar o reducir al mínimo la fuga alrededor de la sonda. Se tira
de la sonda, con el balón inflado, contra la pared abdominal. Esta operación se realiza en la actualidad por vía laparoscó-
Se emplean suturas de seda para fijar la gastrostomía a la pica con los mismos pasos que la técnica correspondiente de
cirugía abierta. Suelen ser necesarios seis puertos para reali-
zar la derivación gástrica con banda por vía laparoscópica.

Figura 27-6 El asa eferente se desplaza desde el espacio retrogástrico


y se usa para el plegado del borde de la bolsa desde la unión gastroeso-
fágica hasta justo después de la banda. Figura 27-7 Gastroyeyunostomía.
Capítulo 27 • Derivación gástrica con banda 227

Figura 27-8 Colocación del marcador de la posición de la gastrosto- Figura 27-10 Sección laparoscópica de la bolsa gástrica proximal.
mía.

Igual que en la cirugía abierta, una vez realizada la espacio creado tras esta sección. Se saca en la unión gas-
exposición con insuflación y separación del hígado, se atra- troesofágica y se usa para exponer el estómago para una sec-
viesa la zona desnuda del epiplón menor y se moviliza el ción adicional. Después se coloca la grapadora endoquirúr-
espacio retrogástrico mediante disección roma. Suele haber gica para seccionar la bolsa verticalmente. Se repite esta
una almohadilla grasa en la unión gastroesofágica justo a la maniobra para completar la sección de la bolsa hasta el
izquierda del esófago. Se moviliza esta zona y se introduce ángulo de His. Suelen ser necesarios dos o incluso tres dis-
una lámina esofágica a través de la zona desnuda del epiplón paros de la grapadora endoquirúrgica. Se realiza una sutura
menor, que se saca por el defecto creado en la unión esofa- adicional del borde cortado de la bolsa y del estómago puen-
gogastroesplénica. teado igual que en la técnica abierta. Se coloca la banda de
A continuación se abre otra ventana a través del epiplón silastic, también igual que en la técnica abierta (v. figu-
menor, entre el estómago y el paquete vasculonervioso, en ra 27-11). A continuación se moviliza el espacio retrogástri-
un punto situado a 4-5 cm de la unión gastrointestinal. Se co, para permitir el paso del asa de Roux una vez creada de
emplea una grapadora endoquirúrgica de tres hileras para nuevo igual que en la técnica abierta.
seccionar el estómago con un ángulo de 45° a 60° (v. figu- Con el paciente en posición de Trendelenburg, se sepa-
ra 27-10). Después se pasa el separador esofágico a través del ran el colon y el epiplón y se crea el asa de Roux. La única
diferencia para crear el asa de Roux por vía laparoscópica
estriba en el hecho de que en la técnica abierta la apertura de
la enteroenterostomía se cierra con grapadora, mientras que
en la técnica laparoscópica se cierra con sutura manual.
También se cierra el defecto mesentérico entre las asas de
intestino delgado, y se pasa el asa de Roux al espacio retro-
cólico a través de una ventana en el mesocolon. El plegado
de la bolsa gástrica con el asa yeyunal proximal, el cierre en
dos capas mediante sutura manual de la gastroyeyunosto-
mía, la sutura del asa al mesocolon y, por último, el cierre del
espacio retroperitoneal, se realizan igual que en la técnica
abierta.
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

Figura 27-9 Radiografía simple que muestra la la banda de silastic y


el marcador de la posición de la gastrostomía. Figura 27-11 Colocación de la banda de silastic.
228 Sección V • INTERVENCIONES

La sonda de gastrostomía y el marcador de la gastrosto-


mía se colocan pasando la sonda a través del anillo creado en
el estómago, anudando después las suturas en bolsa de taba-
co. La gastrostomía se sutura a la superficie peritoneal de la
pared abdominal con tres suturas equidistantes dentro del
anillo marcador radioopaco y se anudan fuera del abdomen
(v. figura 27-12). A diferencia de la técnica abierta, en la téc-
nica laparoscópica se deja habitualmente un drenaje.

Operaciones secundarias
Las operaciones secundarias son técnicas de derivación
gástrica con banda en pacientes con operaciones bariátri-
cas previas como derivación yeyunoileal, banda gástrica,
diversas gastroplastias, desviación biliopancreática y
otras técnicas de derivación gástrica. Estas operaciones
suponen alrededor del 7% de todas las intervenciones de Figura 27-12 Colocación del marcador de la posición de la gastros-
derivación gástrica con banda que realizamos. Una técni- tomía por vía laparoscópica.
ca de derivación gástrica con banda tras una operación
bariátrica previa sólo debe realizarse si puede crearse de
forma segura una bolsa vertical en la curvatura menor estado de ánimo y depresión (v. tabla 27-1). Conviene recor-
del estómago. Las operaciones secundarias presentan dar que la banda reduce de modo notable la incidencia de
una mayor incidencia de complicaciones que las opera- estenosis del orificio de salida con necesidad de dilatación
ciones primarias.10 endoscópica.

Complicaciones a largo plazo


Z TRATAMIENTO PERIOPERATORIO
Las complicaciones a largo plazo de la derivación gástrica
La selección del paciente, con escasas excepciones, sigue las con banda son similares a las de la mayoría de las técnicas
recomendaciones de la 1991 National Institutes of Health de derivación gástrica con asa corta, aunque con una inci-
Consensus Statement sobre cirugía digestiva para la obesi- dencia más baja de pérdida de peso inadecuada, así como
dad.11 La evaluación preoperatoria comprende una anam- con menores incidencia y magnitud de la recuperación del
nesis y una exploración física completas, con una anamne- peso (v. tabla 27-2). Las complicaciones son alopecia tran-
sis y un registro dietético detallado de los intentos previos sitoria, úlceras marginales, diarrea, hipoglucemia, síndro-
para perder peso. Todos los pacientes son evaluados por un me de vaciamiento rápido y síndrome de deficiencia de
equipo multidisciplinar formado por cirujano, cardiólogo, vitamina A, D, E y calcio y hierro. Las complicaciones de la
neumólogo, psicólogo/psiquiatra, asesor del paciente y banda afectan a menos del 3% de los pacientes.11 Las más
nutricionista. En ocasiones es necesario consultar a otros frecuentes son erosión por la banda y fístulas gastroyeyu-
especialistas. Se ha de realizar una exhaustiva evaluación nales o gástricas.
de laboratorio a todos los pacientes.
En todos los pacientes se emplean profilaxis antibiótica, Operaciones de revisión/conversión/reversión
heparina subcutánea, medias de profilaxis antitromboembó-
lica (TED), aparatos de compresión secuencial para las Las indicaciones habituales de la revisión de la derivación
extremidades inferiores, espirómetros de incentivo y, si está gástrica con banda son pérdida de peso inadecuada, recupe-
indicado, dispositivo de presión positiva continua o de pre- ración del peso, pérdida de peso excesiva y fallos mecánicos
sión positiva doble en la vía respiratoria. También es habi- de la operación, como estenosis u obstrucción del orificio de
tual la deambulación temprana. Los drenajes se retiran salida, erosión por la banda y fístula gastrogástrica con ulce-
según la evolución. La sonda de gastrostomía, que se conec- ración marginal y dolor. Otras indicaciones (infrecuentes)
ta a un drenaje por gravedad, se cierra a las 36-48 horas y se son diarrea persistente, náuseas resistentes, úlceras margi-
retira en 7-10 días, por lo general en la consulta. Los pacien- nales recurrentes, anemia persistente e intolerancia del
tes comienzan a tomar fragmentos de hielo 4 horas después paciente a la intervención.
de volver del quirófano. La dieta líquida comienza el segun-
do día tras la intervención y la dieta progresa en régimen
ambulatorio. Antes del alta hospitalaria realizamos de modo Tabla 27-1 COMPLICACIONES PERIOPERATORIAS
sistemático estudios radiológicos con contraste de la bolsa DE LA DERIVACIÓN GÁSTRICA
gástrica y del vaciamiento. CON BANDA
Problemas de la herida/infección/seroma 9,0%
Complicaciones perioperatorias Náuseas intensas 9,0%
Problemas respiratorios/atelectasia 3,0%
Las complicaciones perioperatorias de la derivación gástrica Fugas: bolsa/anastomosis 0,8%
con banda son las mismas que las que se presentan en otras Embolia pulmonar 2,0%
técnicas de derivación gástrica con asa corta. Entre ellas se Trombosis venosa profunda 4,0%
cuentan complicaciones intraoperatorias, atelectasia, pro- Íleo gástrico 3,0%
blemas en la herida, obstrucción, fuga, trombosis venosa Depresión/oscilaciones del ánimo 5,0%
Muerte 0,4%
profunda, embolia pulmonar, náuseas, vómitos, cambios del
Capítulo 27 • Derivación gástrica con banda 229

80,0
Tabla 27-2 COMPLICACIONES TARDÍAS
DE LA DERIVACIÓN GÁSTRICA 70,0

Porcentaje medio de exceso


CON BANDA 60,0

de peso perdido
Malnutrición
50,0
Carencias de vitaminas y minerales
Fracaso en la pérdida de peso 40,0
Pérdida de peso excesiva
Anorexia 30,0
Deshidratación
Anemia 20,0
Osteoporosis
Estreñimiento 10,0
Vómitos
Diarrea 0,0
Náuseas 0 12 24 36 48 60 72 84 96 108
Úlceras marginales Número de meses tras la cirugía
Hernias incisionales
Obstrucción del intestino delgado
Erosión por la banda Gastroplastia
DGYR
GVB a DGB
La técnica de revisión más frecuente tras la derivación
gástrica con banda es el acortamiento del conducto común DGB
para aumentar la pérdida de peso.12 Cuando la recupera-
ción o la pérdida inadecuada de peso no están causadas por Figura 27-13 Pérdida de peso a largo plazo con distintas técnicas
un trastorno mecánico o anatómico relacionado con la que han evolucionado a la derivación gástrica con banda. DGB, deri-
operación, se revisa la derivación gástrica con banda para vación gástrica con banda. DGYR, derivación gástrica en Y de Roux;
aumentar la pérdida de peso potenciando el componente de GVB, gastroplastia vertical con banda.
malabsorción. El acortamiento del conducto común está
indicado también en los pacientes con recuperación sustan-
cial del peso tras la extracción de la banda, por un motivo
9 años tras PPEP
u otro. En ocasiones el acortamiento, combinado con otra
técnica prevista, se realiza a solicitud del paciente para per- TIEMPO
PPEP
der más peso. El grado de acortamiento del conducto POSTOP.
común depende de la magnitud de la pérdida de peso nece- 0 meses 0,0
saria, así como del hábito intestinal del paciente. Lo más 3 meses 37,2
frecuente es que la anastomosis enteroentérica que forma 6 meses 56,4
el asa alimenticia de Roux tenga una longitud equivalente 1 año 74,0
a la del asa de Roux más la del conducto común. Dado que 2 años 77,0
esta revisión produce habitualmente un aumento de la fre- 3 años 75,5
cuencia de las deposiciones, de consistencia acuosa, no 4 años 76,0
debe efectuarse en un paciente que ya presenta más de seis 5 años 73,2
6 años 71,6
deposiciones acuosas al día. Los pacientes con aumento de
7 años 71,6
la malabsorción por esta revisión logran una reducción del
8 años 71,3
IMC de 7 kg/m 2 o 25-30 kg. Esto se consigue a expensas de 69,8
9 años
un aumento de la incidencia de la malnutrición proteica,
flatulencia y heces malolientes, y necesidad de control bio-
químico más frecuente13. 90,0 PPEP
Son pocas las operaciones de revisión que se han llevado 80,0
a cabo para corregir fístulas gastrogástricas o gastroyeyuna-
70,0
les. También se han realizado algunas para la conversión en
gastroplastia con banda vertical, debido a una pérdida de 60,0
PPEP (%)

peso excesiva, náuseas incoercibles, diarrea incoercible o 50,0


ulceración marginal persistente sin respuesta al tratamiento
40,0
farmacológico. En dos de nuestros pacientes realizamos una
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

conversión a gastroplastia con banda por síndrome del intes- 30,0


tino corto. También se han realizado reversiones anatómicas 20,0
de estas técnicas por úlceras marginales recurrentes, intole- 10,0
rancia del paciente y anorexia. Por lo general, todas las ope-
raciones de reversión han logrado una recuperación rápida 0,0
del peso perdido. 0m 3m 6m 1a 2a 3a 4a 5a 6a 7a 8a 9a
TIEMPO POSTOPERATORIO
Pérdida de peso BGBP
Figura 27-14 Exceso de peso perdido con la derivación gástrica con
Tras una derivación gástrica con banda, la pérdida de banda tras 9 años de seguimiento. PPEP, porcentaje de pérdida de
peso es rápida en los 6 primeros meses y continúa a un exceso de peso.
230 Sección V • INTERVENCIONES

ritmo más lento hasta 18 meses después de la interven- Z CONCLUSIÓN


ción. El porcentaje de exceso de peso perdido en el primer
año es del 77%. y esta tasa se mantiene durante un perío- La técnica de derivación gástrica con banda aumenta el com-
do de entre 3 y 5 años (v. figura 27-13).14-16 Hacia el nove- ponente restrictivo de la derivación gástrica con asa corta sin
no año postoperatorio alcanza una media del 69,8% banda. El aumento del porcentaje de pérdida de peso excesivo,
(v. figura 27-14). De modo similar, el índice de masa cor- la menor incidencia de estenosis de la salida con necesidad de
poral medio se mantiene por debajo de 29,3 kg/m 2, inclu- dilatación endoscópica y el mantenimiento más prolongado
so después de intervalos prolongados, del orden de los de la pérdida de peso con la derivación gástrica con banda,
9 años (v. figura 27-15). La tasa de éxito (es decir, el por- justifican la incidencia de complicaciones relacionadas con la
centaje de pacientes con un peso en exceso perdido de al banda, que es del orden del 3%, aunque tales complicaciones
menos el 50% tras la derivación gástrica con banda) es del suelen ser intrascendentes. Fisher resumió la efectividad de la
90% a 9 años. derivación gástrica con banda al indicar que «... la adición de
la banda a la derivación gástrica aumenta la pérdida de peso
en un número más elevado de pacientes y se mantiene duran-
IMC de 9 años te un período de tiempo más prolongado».17

TIEMPO POSTOP. IMC


0 meses 44,7
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28
Derivación gástrica en Y de Roux
con asa larga
Robert E. Brolin, M.D.

El concepto de superobesidad fue introducido por Mason en Z HISTORIA DE LA DERIVACIÓN GÁSTRICA


1978 tras comprobar que los pacientes con más peso no lograban EN Y DE ROUX CON ASA LARGA
en general una pérdida de peso satisfactoria tras la gastroplastia
con banda vertical.1 En dicho artículo, Mason y cols. definieron Relativamente pocos estudios han centrado su atención en el
la superobesidad de modo arbitrario, como un peso superior al efecto de la longitud del asa de Roux en la pérdida de peso
225% del peso ideal. Mason señaló que el porcentaje medio de postoperatoria. Nuestro grupo fue el primero en publicar
pérdida de exceso de peso (%PEP) en los pacientes más obesos una comparación prospectiva aleatorizada de la longitud del
era del 40% aproximadamente, en comparación con el 60% asa de Roux en pacientes sometidos a cirugía bariátrica.
registrado en los pacientes menos obesos restantes. Concluyó Llevamos a cabo dicho estudio porque observamos que la
que los «pacientes superobesos son tan diferentes que precisan derivación gástrica en Y de Roux convencional (DGYR) no
un análisis específico en cualquier estudio sobre las técnicas qui- conseguía una pérdida de peso uniforme a largo plazo sufi-
rúrgicas para el tratamiento de la obesidad». Mason también ciente en una proporción considerable de los pacientes super-
afirmó que «los pacientes superobesos son los más resistentes al obesos. Por tanto, parecía lógico añadir la malabsorción a
tratamiento». Esta última afirmación ha quedado confirmada una operación orientada sobre todo a la restricción de la
después en casi todos los artículos publicados sobre los resulta- ingestión de calorías. Nuestro estudio prospectivo aleatori-
dos de la pérdida de peso tras operaciones bariátricas. zado de 1992 mostraba que la longitud del asa de Roux tenía
Más o menos al mismo tiempo, nosotros definimos, tam- un efecto considerable en la pérdida de peso en pacientes
bién de modo arbitrario la superobesidad como un exceso de superobesos sometidos a derivación gástrica.2 En dicho estu-
peso superior a 90 kg con respecto al peso ideal.2 Elegimos esta dio los pacientes con un asa de Roux de 150 cm lograron una
magnitud para reflejar un límite mínimo de peso correspon- pérdida de peso significativamente mayor que los pacientes
diente al doble del límite de peso mínimo (sobrepeso ⬎ 45 kg) con un asa de Roux de 75 cm. No hubo diferencias en la tasa
empleado en ese momento para definir la obesidad mórbida. de complicaciones postoperatorias entre los dos grupos.
Artículos posteriores3,4 sobre la pérdida de peso tras operacio- En 1997 Freeman y cols. publicaron una serie de 55 pa-
nes bariátricas gástricas han definido la superobesidad como cientes con una DGYR con asa de Roux de 90 cm en 23 de
un IMC ⬎ 50 kg/m2. Conviene recordar, no obstante, que la ellos y una DGYR con asa de Roux de 45 cm en los 32 res-
superobesidad no está reconocida como una categoría de peso tantes.10 Aunque los pacientes estaban emparejados por edad
específica en los sistemas de clasificación diseñados para estra- y sexo, la serie no estaba aleatorizada. Sin embargo, la pérdi-
tificar los distintos regímenes terapéuticos para perder peso.5 da de exceso de peso (PEP) en el grupo con el asa de Roux
Hace poco tiempo los cirujanos bariátricos han ampliado el más larga era alrededor de un 6% mayor a los 24 meses del
concepto de superobesidad con nuevos términos como «supra postoperatorio, sin diferencia en la incidencia de secuelas
super» obesidad y «mega» obesidad para los pacientes con metabólicas o diarrea entre los dos grupos.
IMC ⬎ 60 kg/m2 y 70 kg/m2 respectivamente.6,7 Sugerman y cols. fueron los primeros en efectuar una
Está justificado establecer una distinción entre obesidad comparación prospectiva entre una técnica de derivación
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

mórbida y superobesidad. En primer lugar, la prevalencia de biliopancreática (DBP) con bolsa pequeña (30 mL) y la
otras enfermedades concomitantes es considerablemente más DGYR convencional en pacientes superobesos.11 Aunque
alta en los superobesos, lo que implica un riesgo global para la pérdida de peso a 1 año era significativamente mayor en
la salud más elevado.8 En segundo lugar, numerosos ciruja- los pacientes con DBP con bolsa pequeña que en los pacien-
nos bariátricos han notificado de modo independiente que la tes con DGYR convencional, los pacientes de Sugerman con
probabilidad de éxito de la pérdida de peso en el superobeso DBP con bolsa pequeña presentaban una incidencia de com-
es bastante más baja que en el paciente simplemente obeso tras plicaciones postoperatorias y secuelas metabólicas graves
operaciones restrictivas bariátricas convencionales.1,2,9 Resulta superior al 50%, registrándose incluso dos muertes por
obvio que los pacientes más pesados deben perder más peso insuficiencia hepática. Sugerman y cols. concluyeron que la
para alcanzar un estado que supone una reducción óptima en incidencia y gravedad de las complicaciones metabólicas tras
su riesgo de mortalidad actuarial. su modificación de la DBP, que comprendía la creación de
231
232 Sección V • INTERVENCIONES

un conducto común de 50 cm, eran excesivas para justificar de Roux de 250 cm lograban una pérdida de peso a los
su indicación como operación primaria en el tratamiento de 18 meses significativamente mayor que los pacientes con asa
los pacientes con superobesidad. En el mismo artículo, de Roux de 150 cm. Esta diferencia se mantenía después de
Sugerman y cols. describieron una serie de 22 pacientes los 18 meses, aunque perdía la significación estadística, debi-
superobesos que, tras una DGYR fallida, fueron tratados do al escaso número de pacientes con un seguimiento de 2 o
mediante una modificación distal de la derivación gástrica, más años. En este estudio no hacían mención a la incidencia
con incorporación de un conducto común de 150 cm y una de complicaciones nutricionales.
bolsa gástrica con una capacidad de 30 mL. De estos El grupo del Mount Sinai Hospital comparó distintas
22 pacientes, cuatro (18%) precisaron intervenciones qui- longitudes del asa de Roux en 58 pacientes con DGYR
rúrgicas posteriores (tres reducciones del colon derivado y laparoscópica.16 Estos 58 pacientes no eran superobesos en
una sonda de gastrostomía) para corregir la malnutrición conjunto y su IMC medio era de 44 kg/m 2. El grupo de asa
proteico-calórica. El %PEP en estos pacientes era del 67% a corta estaba formado por pacientes con una longitud del
los 3 años y del 69% a los 5 años. Había una incidencia ele- asa entre 45 cm y 100 cm, mientras que en el grupo de asa
vada de secuelas metabólicas a pesar de una profilaxis inten- larga la longitud era de 150 cm en todos los pacientes. La
siva con multivitaminas, calcio y suplementos adicionales de elección de la longitud del asa en cada paciente se realizaba
vitaminas A, D, E y B12. en función del IMC preoperatorio, con longitud adicional en
El grupo de la Mayo Clinic fue el primero en publicar incrementos reducidos del orden de los 5 cm. Aunque no
una serie con un asa de Roux muy-muy larga.12 Compararon había diferencia significativa en la pérdida de peso entre los
la pérdida de peso con esta técnica, empleada en 26 pacientes pacientes con distinta longitud del asa de Roux, los autores
superobesos, con la pérdida de peso en 11 pacientes con la del estudio observaron «una tendencia hacia un aumento de
DBP tipo Scopinaro. La pérdida de peso en el grupo con el la proporción de pacientes con un exceso de peso perdido
asa muy-muy larga era menor en el grupo de DBP a los de más del 50% (p = 0,07) en el grupo con asa de Roux más
2 años del postoperatorio (57% frente a 68% de %PEP larga».
medio) aunque la tasa de morbilidad temprana era similar. Aunque nuestra derivación gástrica con asa de 150 cm
Por desgracia, la incidencia de secuelas metabólicas tardías mejoró la pérdida de peso en pacientes superobesos, aprecia-
no estaba recogida en el artículo de la Mayo Clinic. No obs- mos que la recurrencia era frecuente a los 4-5 años del posto-
tante, un paciente al que se realizó posteriormente una DBP peratorio. Basándonos en esta observación, decidimos estu-
murió por insuficiencia hepática. diar una modificación con aumento de la malabsorción de la
En 200, MacLean y cols. hallaron una diferencia signi- DGYR mediante enteroenterostomía a 75 cm en sentido
ficativa en la pérdida de peso satisfactoria entre los pacientes proximal a la unión ileocecal. Esta modificación distal de la
con IMC ⬍ 50 kg/m 2 en comparación con los pacientes DGYR (DGYR-D) difiere bastante de la DBP y del cruce
superobesos más pesados tratados sólo mediante DGYR13. duodenal, debido al hecho de que sólo de 15 a 25 cm del
En esa serie de 274 pacientes, el ICM medio final en 96 pa- yeyuno proximal son excluidos por completo de la continui-
cientes superobesos era 35 ⫹ 7 kg/m2, frente al de 29 ⫹ 4 kg/m2 dad digestiva. Planteamos la hipótesis de que un asa aferente
registrado en el grupo con menos sobrepeso. Aunque el des- corta en la DGYR-D pudiera aumentar la malabsorción de
censo del IMC medio era más pronunciado en el grupo la grasa dietética sin las manifestaciones de malabsorción
superobeso (21 kg/m2 frente a 18 kg/m2), MacLean clasificó de proteínas ni de malnutrición clínicamente patente asocia-
el 43% del grupo de superobesos como «fracasos», porque das a la DBP. En 1988 llevamos a cabo la primera DGYR-D
no perdieron el 50% del exceso de peso corporal ni lograron malabsortiva. Después comparamos retrospectivamente los
un IMC ⬍ 35 kg/m2. resultados de esta técnica a lo largo de 10 años siguientes con
Un año después, MacLean y cols. publicaron los resul- los obtenidos en pacientes superobesos con DGYR con dos
tados de una comparación entre distintas longitudes del asa longitudes más cortas del asa de Roux.8 La longitud del asa
de Roux en el mismo grupo de 274 pacientes, con un segui- de Roux en el grupo de asa corta oscilaba entre 50 cm y
miento medio de 5 años y medio.14 El grupo de asa corta 75 cm. En general empleamos estas técnicas antes de 1990.
tenía un asa de 40 cm y un asa aferente de 10 cm, mientras Por el contrario, la mayoría de las operaciones con asa de
que en el grupo de asa larga ambas asas tenían una longitud Roux de 150 cm las realizamos después de acabar nuestro
de 100 cm. En los pacientes superobesos había una diferen- estudio aleatorizado prospectivo en 1992. En el grupo de asa
cia significativa en el ICM medio final entre los grupos de de Roux corta y de asa de Roux de 150 cm no medimos la
asa corta y de asa larga (35,8 kg/m 2 frente a 32,7 kg/m 2; longitud del intestino distal a la yeyunoyeyunostomía. Por
p = 0,049). MacLean observó también que «un subgrupo de el contrario, en los pacientes con DGYR-D la longitud del
pacientes, todos ellos con un IMC ⬎ 60 kg/m 2, era el que conducto común distal a la yeyunoileostomía era constante,
más se beneficiaba de la derivación con asa larga».14 Por el de 75 cm en sentido proximal a la unión ileocecal, con una
contrario, en el grupo menos obeso, la diferencia en el IMC longitud del asa de Roux entre 265 cm y 570 cm. Los pará-
final entre los pacientes con asas de distinta longitud no era metros restrictivos gástricos y la longitud del yeyuno afe-
significativa. Tampoco había diferencia en la incidencia de rente (derivado) eran los mismos en todos los pacientes. En
problemas de nutrición en los pacientes con asas de distinta la figura 28-1 se muestran ejemplos de estas técnicas.
longitud. En la tabla 28-1 se muestran las características preopera-
Choban y Flancbaum realizaron una comparación alea- torias de los pacientes de nuestro estudio de 2002. Todos los
torizada prospectiva de tres longitudes del asa de Roux en un pacientes presentaban un exceso de peso preoperatorio supe-
grupo de 133 pacientes.15 Los pacientes con IMC ⬍ 50 kg/m2 rior a 90 kg y todos excepto uno tenían un IMC ⬎ 50 kg/m2.
tenían un asa de Roux de 75 cm y 150 cm, mientras que los No había diferencia en la media de edad ni en la distribución
pacientes más pesados tenían un asa de Roux de 150 cm y por sexo entre los tres grupos. Sin embargo, los pesos y los
250 cm respectivamente. En pacientes con IMC ⬍ 50 kg/m2 IMC medios de los pacientes con DGYR-D eran significa-
no había diferencia en la pérdida de peso entre los grupos. tivamente más altos que los de los pacientes de los dos gru-
No obstante, en el grupo superobeso, los pacientes con asa pos con asas de Roux más cortas. La tabla 28-2 y la tabla 28-3
Capítulo 28 • Derivación gástrica en Y de Roux con asa larga 233

A
B

Figura 28-1 Derivación gástrica


en Y de Roux con las tres longitudes
distintas del asa realizada con una
grapadora TA-90-B (U.S. Surgical
Corp., Norwalk, Conn.) para sepa-
rar el cardias del estómago, creando
una bolsa superior de 20 ⫹ 5 mL. El
yeyuno se secciona de 15 a 25 cm en
sentido distal al ligamento de Treitz
y se anastomosa el extremo distal al
estómago superior con una grapado-
ra circular, para crear una anasto-
mosis de 1,1 cm de diámetro. A con-
tinuación, se anastomosa el extremo
proximal del yeyuno al yeyuno (A y
B) o al íleon (C).

muestran las patologías comórbidas asociadas a la obesidad


Tabla 28-1 CARACTERÍSTICAS PREOPERATORIAS en los pacientes de este estudio. En este estudio, sólo 35 pa-
DE LOS PACIENTES cientes (12%) no presentaban al menos una de estas patolo-
gías. Todos excepto dos de los pacientes sin comorbilidad
GRUPO QUIRÚRGICO PESO IMC EDAD SEXO (M/F)
eran menores de 40 años. Había diferencias significativas en
Asa corta 331⫾54 56,9⫾7 38,4⫾10 17/82 la incidencia de patologías comórbidas entre los tres grupos,
150 cm 356⫾57 55,3⫾7 39,4⫾9 35/117 con una prevalencia más alta de apnea del sueño, cardiopatía
DGYR-D *448⫾76 *67,5⫾8 37,6⫾9 20/27 e insuficiencia venosa en los pacientes con DGYR-D.
El seguimiento en este informe oscilaba entre 6 meses
Las cifras corresponden a la media ⫾ DE. Peso en libras, índice de masa
corporal (IMC) en kg/m 2, edad en años. El * indica una diferencia significativa y 16 años. El seguimiento medio era de 60 ⫹ 46 meses en el
entre los pacientes con derivación gástrica en Y de Roux distal (DGYR-D) y grupo de asa corta, 37 ⫹ 34 meses en los pacientes con asa
los otros dos grupos de pacientes (p ⬍ 0,05 mediante ANOVA [análisis de de 150 cm y 46 ⫹ 25 meses en el grupo de DGYR-D. La
varianza] con prueba de Student-Neuman-Keuls). (Reproducido por cortesía
de Elsevier Science Inc., New York.) tasa de seguimiento a los 3 años era del 80% en el grupo de
asa corta, del 68% en el grupo de asa de 150 cm y del 85%
en el grupo de DGYR-D. A los 5 años, la tasa de seguimien-
to era del 66% de 88 pacientes disponibles en el grupo de asa
corta, del 64% de 56 pacientes disponibles en el grupo de
asa de 150 cm, y del 78% de 22 pacientes disponibles en el
grupo de DGYR-D.

Tabla 28-2 PATOLOGÍAS COMÓRBIDAS MÉDICAS Tabla 28-3 MEJORA DE LAS PATOLOGÍAS
COMÓRBIDAS ANALIZADA A LOS 3 AÑOS
ASA CORTA 150 CM DGYR-D DEL POSPERATORIO
(N ⫽ 99) (N ⫽ 152) (N ⫽ 47)
CORREGIDA MEJORADA IGUAL
Hipertensión 61 (62%) 78 (51%) 32 (68%)
Hipertensión 74 56 5
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Artritis 45 (45%) 53 (35%) 20 (43%)


Asma 22 (22%) 25 (16%) 6 (13%) Artritis 4 81 4
Hiperlipidemia 18 (18%) 29 (19%) 6 (13%) Asma 6 31 2
Diabetes 9 ( 9%) 31 (21%) 8 (17%) Hiperlipidemia 22 15 3
Diabetes 32 6 —
Cardiopatía* 13 (13%) 15 (10%) 12 (26%)*
Cardiopatía 7 26 1
Apnea del sueño* 5 ( 5%) 30 (20%) 22 (47%)*
Apnea del sueño 21 26 1
Insuficiencia venosa* 12 (12%) 12 ( 8%) 15 (32%)*
Insuficiencia venosa 5 20 3
Se indica el número y el porcentaje de pacientes con cada patología para 167 (38%) 261 (58%) 19 (4%)
cada grupo. El * indica una prevalencia de una patología comórbida
significativamente superior en los pacientes con derivación gástrica en Y de Una patología comórbida se consideraba corregida tras la normalización
Roux distal (DGYR-D) que en los otros grupos (p ⬍ 0,02 en la prueba de sin necesidad de medicación, y se consideraba mejorada cuando estaba
chi-cuadrado). (Reproducido por cortesía de Elsevier Science Inc., New York.) controlada con dosis más bajas de medicación que antes de la intervención.
234 Sección V • INTERVENCIONES

La figura 28-2 y la figura 28-3 muestran la pérdida de


CAMBIO DE IMC
peso postoperatoria expresada en libras (0,45 kg) y en unida-
des de reducción del IMC. La pérdida de peso se estabiliza
por lo general a los 12-18 meses de una intervención con
técnica de asa de Roux más corta. La pérdida de peso tras la
DGYR-D tiende a ser más prolongada, de modo que muchos

UNIDADES IMC
pacientes alcanzan su punto más bajo entre los 24 y 36 meses
tras la intervención. El IMC más bajo en el grupo de asa de
Roux corta se alcanzaba a los 18 meses del postoperatorio,
mientras que en el grupo de asa de 150 cm y en el de
DGYR-D se alcanzaba a los 2 y 3 años, respectivamente.
Había diferencias significativas en la pérdida de peso entre Asa corta
los tres grupos favorables a una longitud mayor del asa de 150 cm
DGYR-D
Roux. Estas diferencias eran aparentes desde los 6 meses del
postoperatorio entre el grupo de DGYR-D y los grupo con
asas de Roux más cortas. La pérdida de peso significativa-
mente mayor lograda con la DGYR-D se mantenía durante
5 años. A los 12 meses del postoperatorio, se registraban MESES POSTOP.
diferencias significativas en la pérdida de peso entre el gru- Figura 28-3 Cambio del índice de masa corporal (IMC) en los 5 años
po DGYR-D de asa corta y el grupo de asa de 150 cm, dife- siguientes a la cirugía. Se observaban diferencias significativas entre
rencias que, además, persistían durante más tiempo. En los grupos a los 12, 24 y 36 meses de la intervención. El * indica una
todos los grupos había cierto grado de empeoramiento des- diferencia significativa entre el grupo de derivación gástrica en Y de
pués de 3 años. La mayor recuperación de peso afectaba al Roux distal (DGYR-D) y los grupos de asa más corta. La diferencia se
percibe a las 6, 18, 48 y 60 semanas (P ⬍ 0,05 mediante ANOVA [aná-
grupo de asa de Roux corta. lisis de varianza] con prueba de Student-Neuman-Keuls). (Reproducido
El mayor %PEP medio en los pacientes con asa corta por cortesía de Elsevier Science Inc., New York.)
era del 56% a los 18 meses del postoperatorio, en compara-
ción con el 61% a los 24 meses del postoperatorio en el gru-
po de asa de 150 cm, y del 64% a los 3 años en el grupo de 5 años entre el grupo de asa de 150 cm y el grupo de
DGYR-D. El número de pacientes que consiguieron una DGYR-D no era significativa.
pérdida del exceso de peso ⬎ 50% en algún momento duran- En la tabla 28-4 se muestran las complicaciones posto-
te el estudio era 65 (65%) en el grupo de asa corta, 114 (76%) peratorias tempranas. En este ámbito, se observaban dife-
en el grupo de asa de 150 cm y 36 (80%) en el grupo de rencias mínimas en la incidencia de complicaciones tempranas
DGYR-D. No obstante, el %PEP medio había bajado al entre las tres técnicas. La incidencia global de complicacio-
45% a los 5 años tras DGYR con asa corta y al 51% a los nes tempranas era del 6,4%. La única muerte perioperato-
5 años en el grupo de asa de 150 cm. El descenso de la PEP ria correspondía a una mujer de 50 años y 160 kg de peso
media era menos pronunciado en el grupo de DGYR-D, con un IMC de 65 kg/m 2, con una buena evolución en los
manteniéndose alrededor del 60% a los 5 años del postope- 5 días siguientes a la intervención. La mujer fue reingresa-
ratorio. Sin embargo, la diferencia en la PEP media a los da 12 días después con una embolia pulmonar, y falleció a
los 2 días como consecuencia de una parada cardíaca secun-
daria a otro émbolo.
CAMBIO DE IMC

Tabla 28-4 COMPLICACIONES TEMPRANAS


UNIDADES IMC

COMPLICACIÓN ASA CORTA 150 CM DGYR-D


(N ⫽ 99) (N ⫽ 152) (N ⫽ 47)
Infección de herida — 1 2
Fugas 1 2 1
Embolia pulmonar — 3* —
Asa corta OID — 2 —
150 cm Hemorragia digestiva — 1 —
DGYR-D
Dehiscencia herida 1 1 1
Fístula intestinal — 3 —
Total 2 (2%) 13 (8%) 4 (9%)

MESES POSTOP. Las fugas comprenden tres roturas agudas de la división gástrica grapada
causadas por arcadas intensas y perforación esofágica. Los dos casos de
Figura 28-2 Pérdida de peso en libras en los 5 años siguientes a la obstrucción intestinal se solucionaron mediante descompresión con sonda.
cirugía. Había diferencias significativas entre cada uno de los tres gru- Hubo dos dehiscencias en el cierre fascial en la línea media y una importante a
pos más de 1 año después de la cirugía. El * indica una diferencia sig- nivel cutáneo. Se registraron también dos fístulas de intestino delgado
nificativa entre el grupo de asa corta, el grupo de derivación gástrica relacionadas con la erosión por la malla de polipropileno usada en una
en Y de Roux distal (DGYR-D) y el grupo de asa de 150 cm a los reparación de hernia previa. Hubo una perforación yeyunal en la zona de una
sutura de suspensión a las 3 semanas del postoperatorio.
6 meses de la cirugía (P ⬍ 0,05 mediante ANOVA [analisis de varianza]
DGYR-D, derivación gástrica en Y de Roux distal; OID, obstrucción del
con prueba de Student-Newman-Keuls). (Reproducido por cortesía de intestino delgado. El * indica que una muerte en esta serie estaba causada por
Elsevier Science Inc., New York.) embolia pulmonar. (Reproducido por cortesía de Elsevier Science Inc., New York.)
Capítulo 28 • Derivación gástrica en Y de Roux con asa larga 235

En la tabla 28-5 y en la tabla 28-6 se recogen las compli- sentaban una dehiscencia de la división gástrica grapada, de
caciones tardías (30 días del postoperatorio). En este aspecto los que seis presentaban úlceras marginales incoercibles.
se apreciaba una incidencia similar de complicaciones espe- Además, 35 pacientes de esta serie (12%) precisaron repara-
cíficas entre los tres grupos, excepto en el caso de la úlcera ción de hernias incisionales y 14 requirieron posteriormente
marginal, que era más frecuente en los pacientes con una colecistectomía por cálculos biliares sintomáticos.
DGYR-D. La diarrea, definida como tres o más deposicio-
nes blandas al día, estaba presente en 17 pacientes (36%) tras
la DGYR-D, en un paciente en el grupo de asa de 150 cm, y Z MECANISMOS DE LA PÉRDIDA DE PESO
en ninguno del grupo de asa corta. La calidad de las heces
blandas en los pacientes con DGYR-D era indicativa de Debido a la elevada tasa de reincidencia registrada con las téc-
esteatorrea. Todos los pacientes con DGYR-D con un segui- nicas gástricas puramente restrictivas, la tendencia en la ciru-
miento mínimo de 2 años presentaban al menos una anoma- gía bariátrica estadounidense se ha desplazado claramente
lía metabólica. No se observaron carencias de proteínas ni hacia las técnicas de malabsorción. En EE. UU. se realizan en
de vitaminas liposolubles en los grupos con asa más corta. la actualidad con bastante frecuencia las modificaciones para
Hubo cinco muertes tardías. Las tres muertes en el grupo de malabsorción de la DGYR (DBP de Scopinaro y el denomi-
asa corta y la única muerte en el grupo de asa de 150 cm no nado cruce duodenal). Los motivos para aumentar la longitud
estaban relacionadas con la intervención. No obstante, un del asa de Roux con la intención de combinar la malabsorción
hombre de 33 años con cirrosis previa murió por insuficien- con la restricción gástrica inherente a la DGYR son pérdida
cia hepática 9 meses después de la DGYR-D. Es probable de peso insatisfactoria, recurrencia, o ambas, tras una DGYR
que la operación estuviera relacionada con su muerte. realizada con una longitud convencional del asa.
En esta serie de 298 pacientes hubo 25 intervenciones No se han estudiado en profundidad los mecanismos res-
de revisión (8,7%), 12 en el grupo de asa corta (12%), 11 por ponsables de la pérdida de peso inducida por derivación gástri-
una pérdida de peso insatisfactoria y una por úlcera margi- ca. No hay casi ningún estudio en animales que haya evaluado
nal. Las 13 intervenciones de revisión en el grupo de asa de la absorción de nutrientes tras las operaciones bariátricas gás-
150 cm (8,5%) correspondían a siete por pérdida de peso tricas. A mediados de los años sesenta, Scopinaro evaluó algu-
insatisfactoria y seis por úlcera marginal persistente. No nas modificaciones de la DBP en perros, con el fin de determi-
hubo reoperaciones por pérdida de peso insatisfactoria, ni nar la longitud del conducto común adecuada para reducir la
por complicaciones nutricionales en los pacientes con diarrea y el desequilibrio electrolítico y provocar una excre-
DGYR-D. No obstante, un paciente con DGYR-D (2,1%) ción de grasa debida a la malabsorción.17 Estos estudios dieron
precisó una reoperación por úlcera marginal incoercible. De lugar a la longitud del conducto común de 50 cm empleada en
los pacientes (35%) que precisaron reoperación, nueve pre- la DBP de Scopinaro durante los últimos 25 años. No se han
realizado estudios similares en animales, ni con cruce duode-
nal ni con otras modificaciones de la DGYR.
La grelina es una hormona identificada recientemente,
Tabla 28-5 COMPLICACIONES TARDÍAS relacionada con el aumento del apetito, tanto en el ser huma-
no como en los animales. En 2002 Cummings mostró que la
COMPLICACIÓN ASA CORTA 150 CM DGYR-D concentración de grelina era muy baja durante los meses
(N ⫽ 99) (N ⫽ 152) (N ⫽ 47) siguientes a la DGYR.18 Se reconoce en general que los
Hernia incisional 14 (19%) 20 (13%) 7 (15%) pacientes con DGYR «pierden el apetito» durante los prime-
Úlcera marginal 4 ( 4%) 8 ( 5%) 5 (11%) ros meses del postoperatorio. Sin embargo, el apetito se recu-
Disrupción de la grapa 2 ( 2%) 6 ( 4%) 2 ( 4%) pera después del primer año, lo que coincide en el tiempo con
OID 1 ( 2%) 6 ( 4%) — el cese de la pérdida de peso. Aunque el efecto de la grelina en
Estenosis del estoma 2 ( 2%) 2 ( 1%) 1 ( 2%) este proceso es desconocido, nuevos estudios adicionales
Insuficiencia hepática — — 1 ( 2%) podrán aclarar el papel de la grelina en los mecanismos impli-
Total 22 (22%) 41 (27%) 15 (32%) cados en la pérdida de peso tras una derivación gástrica.
Es destacable que no existen estudios clínicos que desarro-
Todos los pacientes con estenosis del estoma fueron hospitalizados por llen una evaluación detallada de la absorción de macronu-
vómitos posprandiales incoercibles. Los pacientes con estenosis del estoma que
presentaban úlceras están incluidos en el apartado de úlceras. Las úlceras trientes tras cualquiera de las técnicas de DGYR. En 1992
asociadas a la disrupción de la grapa están combinadas como una en lugar de nuestro grupo mostró que la persistencia de la pérdida de peso
como dos complicaciones, para calcular la incidencia global de complicaciones tras una DGYR convencional está relacionada con la inges-
tardías en cada grupo. DGYR-D, derivación gástrica en Y de Roux distal;
OID, obstrucción del intestino delgado. (Reproducido por cortesía de Elsevier tión de calorías en el postoperatorio, de modo que se produce
Science Inc., New York.) una recidiva de la obesidad cuando la ingestión de calorías es
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

Tabla 28-6 CARENCIAS METABÓLICAS POSTOPERATORIAS


OPERACIÓN HIERRO B12 ANEMIA VIT A VIT D CALCIO ALBÚMINA
Asa corta (n = 80) 42 (52%) 30 (37%) 33 (41%) — — — —
150 cm (n = 102) 46 (45%) 34 (33%) 36 (35%) — — — —
DGYR-D (n = 39) 19 (49%) 3 ( 8%)* 29 (74%)* 4 (10%) 20 (51%) 4 (10%) 5 (13%)
n ⫽ número de pacientes con seguimiento. Las cifras y los porcentajes correspondientes a la incidencia de la carencia están debajo de cada nutriente. Los
guiones indican que estos nutrientes no fueron evaluados en los grupos con asas más cortas. El * indica una diferencia significativa entre los pacientes con
derivación gástrica en Y de Roux distal (DGYR-D) y los otros dos grupos (P ⬍ 0,003 con la prueba de chi-cuadrado). (Reproducido por cortesía de Elsevier Science
Inc., New York.)
236 Sección V • INTERVENCIONES

superior a 1.500 calorías al día en la mujer y a 1.800 calorías al del 40% de los pacientes en sus series. Naslund y cols. halla-
día en el varón.2 Los pacientes que restringen la ingestión de ron un descenso del deseo de comer tras una derivación
líquidos de alto contenido calórico y de comida basura man- yeyunoileal en comparación con las personas sanas. Este des-
tienen invariablemente su pérdida de peso. Dado que la inges- censo del deseo de comer estaba asociado con un vaciamien-
tión media de calorías era uniformemente mayor en los to gástrico prolongado y con un descenso de la concentración
pacientes con asa de 150 cm que en los de asa corta, la mayor de colecistocinina.23 Aunque, en general, se cree que la pér-
pérdida de peso en el grupo de asa de 150 cm podría atribuir- dida de peso tras DBP y cruce duodenal se debe principal-
se a una malabsorción grasa más pronunciada, debido a una mente a malabsorción intestinal, y no a la restricción de la
derivación más distal de la bilis y de las secreciones pancreá- ingestión, Scopinaro ha descrito repetidamente los efectos
ticas en el aparato digestivo funcional. «posprandiales» de la DBP, que pueden resumirse en episo-
Nuestra intención al comparar las asas de Roux de 75 cm dios de náuseas prolongadas. Estas náuseas son en ocasiones
y de 150 cm era comprobar si la adición de un incremento rela- tan intensas que limitan en gran medida la ingesta oral. El
tivamente reducido de derivación biliopancreática aumentaría autor ha observado un síndrome posprandial similar en unos
la pérdida de peso. Como la longitud total del intestino delgado pocos pacientes sometidos a DGYR-D. Por desgracia, no hay
(yeyuno e íleon) es por lo general superior a 300 cm, no pre- datos objetivos que vinculen la malnutrición postoperatoria
veíamos que se registraran problemas tales como pérdida de con el síndrome posprandial que aparece en ocasiones tras la
electrólitos o malnutrición proteico-calórica en nuestros DBP. Sin embargo, la malabsorción añadida a la restricción
pacientes con asa de 150 cm. Por el contrario, sí preveíamos un puede aumentar el coste metabólico.
número más elevado de complicaciones metabólicas tras la
DGYR-D que tras las técnicas más convencionales de DGYR.
No obstante, esperábamos reducir la incidencia de hipoprotei- Z ANÁLISIS RIESGO-BENEFICIO Y SELECCIÓN
nemia y otros problemas nutricionales graves mediante selec- DE PACIENTES
ción de pacientes que cumplen con los análisis de sangre perió-
dicos y con el seguimiento a largo plazo. Diseñamos la Riesgo de morbilidad y mortalidad
DGYR-D con la hipótesis de que el componente de malabsor-
ción «pasiva» podría limitar la ulterior recuperación de peso y Se suele reconocer que la tasa de complicaciones postoperato-
mejorar el mantenimiento de la pérdida de peso. Esta hipótesis rias aumenta en los pacientes más pesados tratados con cirugía
estaba basada en la excelente persistencia de la pérdida de peso bariátrica. En 1992 Sugerman y cols. hallaron una mortalidad
observada en una serie de Scopinaro de pacientes con DBP y un del 4% en pacientes con apnea del sueño, frente a la del 0,2%
seguimiento de 17 años.19 Otra prueba más en favor del concep- en los demás pacientes tratados mediante DGYR.24 Los pacien-
to de que la combinación de restricción y malabsorción es pre- tes con apnea del sueño también presentaban un peso significa-
ferible a cualquiera de estos dos mecanismos por separado es la tivamente más elevado (peso medio: 164 kg frente a 135 kg;
obtenida por Scopinaro y cols., cuando modificaron la DBP p ⬍ 0,0001) que los demás pacientes. En 2000 Sugerman y cols.
original mediante reducción de la capacidad gástrica de 500 mL registraron una mortalidad del 8% en pacientes con insuficien-
a 200 mL en pacientes superobesos (la denominada modifica- cia venosa crónica previa a la DGYR.25 Una inspección más
ción de estómago muy pequeño) para mejorar la pérdida de minuciosa de los pacientes de ese estudio reveló que eran de
peso.20 Es destacable el hecho de que Scopinaro no publicara más edad (media de edad: 44 ⫾ 10 años), más peso (IMC medio:
los resultados que muestran el efecto a largo plazo del volumen 61 ⫾ 12 kg/m2) y con una prevalencia significativamente más
de la bolsa gástrica en la pérdida de peso tras DBP. elevada de patologías comórbidas graves. Nuestra tasa de com-
Otros cirujanos han diseñado modificaciones de tipo plicaciones tempranas en pacientes superobesos es más del
malabsorción de la DGYR para mejorar la pérdida de peso a doble que la tasa de morbilidad registrada con anterioridad en
largo plazo en pacientes superobesos. El grupo de la Mayo nuestros pacientes menos pesados tratados mediante cirugía
Clinic de DGYR con asa muy-muy larga era bastante similar bariátrica.26 En un estudio retrospectivo reciente, Livingston
al nuestro de DGYR-D, con una bolsa gástrica de 20 mL a y cols. hallaron que el peso era un factor predictivo indepen-
30 mL, un asa aferente corta y un conducto común de diente de un «resultado adverso grave con riesgo para la vida»,
150 cm.11 Esta DGYR «distal» es más parecida a la DBP y al mientras que el IMC no lo era.27
cruce duodenal que a nuestra DGYR-D, porque excluye por
completo del tubo digestivo funcional al menos el 50% del Riesgo nutricional y metabólico
intestino delgado. Tanto la DBP como el cruce duodenal
comprenden la sección completa del intestino delgado cerca La DGYR conlleva ciertos riesgos metabólicos. Desafor-
de su punto medio y la exclusión del tubo digestivo funcio- tunadamente, no se han investigado en profundidad los efec-
nal de casi el 50% del intestino delgado.20,21 tos colaterales metabólicos de la DGYR y de la DBP. No
La implicación de una ingestión oral inadecuada en la conozco estudios en animales en los que se hayan evaluado
aparición de complicaciones nutricionales graves tras opera- las deficiencias metabólicas en modelos de DGYR. La inci-
ciones bariátricas de restricción-malabsorción combinada es dencia del 30% al 40% de deficiencias vitamínicas y minera-
reconocida en general, aunque no ha sido bien contrastada. les postoperatorias, registradas en nuestro hospital tras las
Existen indicios sólidos de que tanto el apetito como la sacie- técnicas con dos asas más cortas, es similar a la incidencia de
dad se suprimen tras una derivación yeyunoileal, lo que hace estas deficiencias registrada por otros investigadores tras una
pensar que el cortocircuito del intestino puede activar distin- DGYR convencional con un seguimiento de duración simi-
tas señales endocrinas y nerviosas que afectan a la ingestión lar.28-30 Nuestra experiencia de 20 años en lo que respecta a
de energía. Condon y cols. observaron una significativa las técnicas con asa de Roux de 150 cm nos muestra que no
reducción de la ingestión media de calorías, en relación con hay diferencia en la incidencia de secuelas metabólicas posto-
los valores preoperatorios, tras una derivación yeyunoileal.22 peratorias entre los resultados obtenidos con asa de 150 cm o
De hecho, la ingestión reducida, y no la malabsorción, es la con asa más corta. Todas las carencias de vitaminas y mine-
responsable de casi toda la pérdida de peso observada en más rales postoperatorias en nuestros pacientes con asa de Roux
Capítulo 28 • Derivación gástrica en Y de Roux con asa larga 237

más corta se corrigieron con tratamiento ambulatorio. La de nuestro estudio de 2002 era de 37,3 kg/m2 en los pacientes
gran mayoría de las secuelas metabólicas en nuestros pacien- con asa corta, de 38,5 kg/m2 en los pacientes con DGYR de
tes con DGYR-D también recibieron tratamiento ambulato- 150 cm, y de 38,6 kg/m2 en los pacientes con DGYR-D. Los
rio. No obstante, dos de nuestros cinco pacientes con IMC calculados para los pacientes con un sobrepeso del 50%
DGYR-D con baja concentración de proteínas/albúmina fue- aproximadamente están en el intervalo comprendido entre
ron hospitalizados para administrarles soporte nutricional 34 kg/m2 y 36,5 kg/m2. El IMC medio de 42 kg/m2 registra-
parenteral. Ambos pacientes presentaban vómitos posprandia- do en pacientes con asa corta a los 5 años del postoperatorio
les intensos, además de una rápida pérdida de peso. De estos se corresponde aproximadamente con el 100% de sobrepeso
dos pacientes, uno presentaba signos de deficiencia de zinc. y supera el límite de IMC de 40 kg/m2 establecido en 1991
Aunque la incidencia de la mayoría de las secuelas metabólicas por el National Institutes of Health Consensus Development
tras nuestra DGYR-D es similar a la registrada tras DBP y Panel como límite inferior de la obesidad mórbida. Sólo 51
cruce duodenal, la incidencia y la magnitud de la malnutrición de los 298 pacientes superobesos (17%) en nuestro estudio de
proteico-calórica son menores tras la DGYR-D. 2002 lograron una estabilización con IMC ⬍ 30 kg/m 2
Ha habido casos aislados de insuficiencia hepática mor- (aproximadamente un sobrepeso del 20%) y sólo 15 (6%)
tal tras la aplicación de distintas técnicas bariátricas de alcanzaron un IMC ⬍ 25 kg/m2 (peso normal), en el momen-
malabsorción, como las modificaciones distales de la to de mayor pérdida de peso. Estos datos del IMC generan
DGYR.11,12 Es destacable el hecho de que que Marceau y cols. dudas sobre los objetivos realistas y razonables de pérdida de
publicaron 11 casos de mejoría posterior de la histopatología peso que pueden desearse en pacientes superobesos tras
hepática en pacientes con cirrosis tras un cruce duodenal.31 cirugía bariátrica. Probablemente es poco realista esperar
Conocíamos los resultados de Marceau, por lo que la muerte que la mayoría de los pacientes con un IMC preoperato-
por insuficiencia hepática tras la DGYR-D en nuestra serie rio que supere los 50 kg/m 2 logren un IMC de menos de
fue inesperada, incluso en el contexto de una cirrosis previa. 30 kg/m2 tras la estabilización del peso.
Debido a esta experiencia negativa, no efectuamos DGYR-D Aunque nuestro estudio de 2002 halló una pérdida de
a los pacientes con cirrosis. La virtual certeza de la aparición peso significativamente mayor con DGYR-D que con las dos
de al menos una deficiencia metabólica, combinada con la posi- longitudes más cortas del asa de Roux, esta diferencia se veía
bilidad de que aparezca diarrea y malnutrición proteico-calóri- afectada por un factor inductor de confusión, como era la
ca, es una prueba sólida de que no es conveniente ofrecer la diferencia significativa tanto en el peso como en el IMC preo-
DGYR-D a los pacientes que no se comprometen a cumplir peratorios entre el grupo DGYR-D y el grupo de asa de Roux
con un seguimiento a largo plazo. más corta. Por el contrario, la diferencia significativa, tanto
La prevención y la corrección de las deficiencias meta- en unidades de peso como de IMC perdidas, entre los pacientes
bólicas tras DGYR deberían lograrse con facilidad en la con asa corta y con asa de 150 cm durante un período de 5 años,
mayoría de los pacientes. Todos los pacientes han de tomar supone una evidencia significativa de que el hecho de añadir un
un suplemento polivitamínico con minerales en el postope- componente de malabsorción, aunque sea modesto, en forma
ratorio. En mujeres con menstruación se recomienda un de un aumento de la longitud del asa de Roux, permite obte-
suplemento oral de hierro con al menos 50 mg de hierro ele- ner una pérdida de peso a largo plazo más pronunciada en
mental. Muchos cirujanos bariátricos recomiendan su - pacientes superobesos. No obstante, el aumento de la longi-
plementos profilácticos de vitamina B12. Tras una DGYR tud del asa de Roux hasta 150 cm no evita la recuperación del
con asa corta es necesario evaluar el nivel de hemoglobina, el peso. Así el grado de recuperación de peso en pacientes con
hematocrito y la concentración sérica de hierro/capacidad de asa corta y con asa de 150 cm resultó similar a los 3 años. Por
captación de hierro y vitamina B12, a intervalos de 6 meses el contrario, la recuperación de peso era menos intensa tras
durante los 2 primeros años y, después, 1 vez al año. Los DGYR-D, lo que hace sospechar que el aumento de la malab-
análisis complementarios en pacientes con DGYR-D u otras sorción puede mejorar el mantenimiento de la pérdida de peso
modificaciones malabsortivas de la DGYR deben incluir los a largo plazo. Esta experiencia confirma el principio de que,
valores séricos de electrólitos, albúmina, proteínas totales, para evaluar la recuperación del peso, un análisis válido de
calcio, bilirrubina, transaminasa glutámico-oxalacética, fos- cualquier técnica para la obesidad requiere un seguimiento
fatasa alcalina, vitamina A y vitamina D25-OH. En pacientes postoperatorio mínimo de 5 años.
que presentan carencias metabólicas, los análisis de laborato- La mejora tanto de las enfermedades asociadas a la obe-
rio deben repetirse a intervalos de 3-6 meses hasta la correc- sidad como del estilo de vida general es notable en los pacien-
ción de la deficiencia. La falta de cumplimiento del paciente tes que pierden una cantidad de peso considerable. La inci-
en la toma regular de vitaminas y otros suplementos nutri- dencia del 96% de mejoría o desaparición de los trastornos
cionales, y en la realización de los análisis de seguimiento, es asociados a la obesidad en los pacientes de nuestro estudio de
una causa importante de aparición y progresión de la mayoría 2002 era bastante mayor que la incidencia de pérdida de peso
de las carencias metabólicas observadas tras la DGYR. satisfactoria, de modo que el 28% de los pacientes no perdie-
ron al menos el 50% del exceso de peso, o bien recuperaron
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Beneficios una parte considerable del peso perdido.33,35 La pregunta sin


responder esencial es si la mayor pérdida de peso y la mejora
El objetivo principal de toda operación bariátrica es la con- de las patologías comórbidas asociadas a las operaciones bariá-
secución de una pérdida de peso mantenida suficiente para tricas de malabsorción constituyen una justificación sufi-
mejorar las patologías comórbidas asociadas a la obesidad. ciente para la mayor gravedad, prevalencia y coste de las
No obstante, definir un resultado satisfactorio de la cirugía previsibles secuelas metabólicas.
para perder peso es una tarea difícil. Durante muchos años
se ha empleado la pérdida del 50% del exceso de peso como Selección de pacientes
límite para definir como satisfactorio el resultado de una
intervención bariátrica.32,33 El IMC medio en el momento La mayoría de los resultados indican que el aumento de lon-
de máxima pérdida de peso en los pacientes superobesos gitud del asa de Roux en la DGYR produce un aumento sig-
238 Sección V • INTERVENCIONES

nificativo de la pérdida de peso en pacientes superobesos en 13. MacLean LD, Rhode BM, Nohr CW: Late outcome of isolated gastric
comparación con la DGYR con asa corta convencional. Por el bypass. Ann Surg 2000;231:524-528.
14. MacLean LD, Rhode BM, Nohr CW: Long-or short-limb gastric
contrario, los datos disponibles14-16 indican la ausencia de bypass? J Gastrointest Surg 2001;5:525-530.
beneficio de un asa de Roux más larga en pacientes bariátricos 15. Choban PS, Flancbaum LJ: The effect of Roux limb lengths on
con IMC ⬍ 50 kg/m2. En nuestros 20 años de experiencia, el outcome after Roux-en-Y gastric bypass: a prospective randomized
asa de Roux de 150 cm ha logrado una pérdida de peso a largo clinical trial. Obes Surg 2002;12:540-545.
16. Feng JJ, Gagner M, Pomp A, et al: Effect of standard vs extended
plazo significativamente superior a la de las técnicas con asa Roux limb length on weight loss outcomes after laparoscopic
de Roux más corta. Además, no hay diferencia en la incidencia Roux-en-Y gastric bypass. Surg Endosc 2003;17:1055-1060.
o la gravedad de las secuelas metabólicas entre los grupos de 17. Scopinaro N, Gianetta E, Civalleri D, et al: Biliopancreatic bypass for
pacientes con asa de 150 cm o con asa corta. Ninguno de nues- obesity: an experimental study in dogs. Br J Surg 1979;66:613-617.
tros pacientes con asa de 150 cm ha sufrido malnutrición 18. Cummings D, Weigle D, Frayo R, et al: Plasma ghrelin levels after
diet-induced weight loss or gastric bypass surgery. N Engl J Med
proteico-calórica. Aunque la técnica con malabsorción de 2002;346:1623-1630.
DGYR-D provocó mayor pérdida de peso y mejor manteni- 19. Scopinaro N, Gianetta E, Adami GF, et al: Biliopancreatic diversion
miento de la misma que las dos técnicas con asas más cortas for obesity at eighteen years. Surg 1996;119:261-268.
en nuestro estudio de 2002, la mayor incidencia de complica- 20. Scopinaro N, Gianetta E, Friedman D, et al: Biliopancreatic diversion
for obesity. Probl Gen Surg 1992;9:362-379.
ciones metabólicas en los pacientes con DGYR-D, combinada 21. Lagace M, Marceau P, Marceau S, et al: Biliopancreatic diversion with
con la incertidumbre del seguimiento postoperatorio, van a new type of gastrectomy: some previous conclusions revisited. Obes
en contra de su uso habitual en todos los pacientes superobe- Surg 1995;5:411-416.
sos. En la actualidad ofrecemos la DGYR-D a pacientes con 22. Condon S, Janes N, Wise L, et al: Role of caloric intake in the weight
loss after jejunoileal bypass for obesity. Gastroenterology
criterios de selección estrictos, con IMC por encima de 60 kg/m2 1978;74:34-37.
y firmemente comprometidos en el seguimiento a largo plazo. 23. Naslund E, Melin I, Gryback P, et al: Reduced food intake after
La colaboración en el seguimiento es clave para reducir los jejunoileal bypass: a possible association with prolonged gastric
riesgos metabólicos asociados a las modificaciones de malab- emptying and altered gut hormone patterns. Am J Clin Nutr 1997;
65:26-32.
sorción de la DGYR. 24. Sugerman HJ, Fairman RP, Sood PK: Long-term effects of gastric
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29
Derivación biliopancreática
Nicola Scopinaro, M.D., Francesco Papadia, M.D., Giuseppe M. Marinari, M.D., y Giovanni Camerini, M.D.

Cuarenta años de experiencia mundial en el tratamiento mejores resultados posibles de pérdida de peso con las
quirúrgico de la obesidad han demostrado que cuanto más mínimas complicaciones.6 Esta gran flexibilidad también
dependa el éxito de un procedimiento de la colaboración permite neutralizar las consecuencias de los fenómenos de
del paciente, peores serán sus resultados. Este es el motivo adaptación intestinal, que son mínimos en la DBP. Estas
de que los métodos de malabsorción, que requieren un cualidades de la DBP han llevado gradualmente a la
cumplimiento mínimo por parte del paciente, hayan sido reaceptación de la malabsorción como forma de tratar qui-
siempre las intervenciones más efectivas para la obesidad. rúrgicamente la obesidad, un procedimiento cuyas múlti-
La reducción en la absorción de nutrientes fue, de hecho, ples versiones cada vez se emplean más en el mundo occi-
la primera aproximación al tratamiento quirúrgico de la dental.
obesidad. Los primeros resultados de pérdida de peso con Los resultados y complicaciones de la DBP, tras casi
la derivación yeyunoileal (DYI) dieron lugar a que se rea- 30 años de uso clínico, son bien conocidos por los cirujanos
lizaran más de 100.000 intervenciones de este tipo en bariátricos. Por tanto, el principal propósito de este capítulo
EE. UU. entre 1960 y 1970. Sin embargo, el análisis de los es describir la fisiología de la operación, cuyo conocimiento
últimos resultados y las complicaciones produjo una sus- ha aumentado considerablemente en los últimos años. La
tancial disminución del entusiasmo inicial en relación con comprensión íntegra de los mecanismos de acción de la DBP
la DYI. Además de las complicaciones, debidas principal- es de suma importancia, ya que permite a cada cirujano
mente a la malabsorción indiscriminada y a los efectos aprovechar la adaptabilidad de la técnica.7
perniciosos de la derivación con asa larga, el principal
problema de la DYI era su estrecho «intervalo terapéuti-
co». De hecho, la longitud total de intestino delgado que Z CASUÍSTICA
se dejaba con tránsito era de entre 40 y 60 cm, una deri-
vación más corta o más larga que podía dar lugar a una De los 2645 pacientes operados desde mayo de 1976, 1738
malabsorción potencialmente amenazadora para la super- (562 varones y 1176 mujeres) se sometieron a la DBP realiza-
vivencia, o bien a una escasa o nula reducción de peso, da con la técnica conocida como «estómago ad hoc» (AHS),
respectivamente. Los fenómenos masivos de adaptación realizada por el mismo equipo quirúrgico entre junio de 1984
intestinal postoperatoria producían una superficie de y julio de 2003. La media de edad era de 37 años (11-70 años),
absorción mayor, que excedía los límites superiores de la el peso medio era 128 kg (72-236 kg) y el exceso de peso
longitud intestinal terapéutica efectiva, con la consiguien- medio era de 69 kg (20-156 kg), correspondiente a un 117%
te recuperación sustancial de capacidad de absorción de de exceso de peso (41%-311%) y un índice de masa corporal
energía.1 Ello, sumado a la frecuente necesidad de recons- (IMC) medio de 47 kg/m 2 (29-87 kg/m 2). El seguimiento
trucción del tránsito intestinal por complicaciones graves máximo fue de 19 años. La disponibilidad para el seguimien-
tras la DYI, determinaba una alta tasa de fracaso, con to fue prácticamente total.
recuperación de peso. 2,3 La elevada incidencia de compli- En la DBP AHS (v. figura 29-1), el volumen gástrico,
caciones y los resultados insatisfactorios de pérdida de que es el principal determinante de la pérdida de peso inicial
peso llevaron, alrededor de 1980, a un abandono genera- (limitación temporal de la ingesta debido a aumento del ape-
lizado del planteamiento malabsortivo de la cirugía de la tito y aparición de síndrome del dumping (o de vaciamiento
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obesidad y a que las técnicas de restricción gástrica se rápido) y que también influye en el peso de estabilización
convirtieran en las más usadas. (ver texto posterior), se adapta al exceso de peso preoperato-
Debido a la ausencia de asa excluida y a la malabsor- rio y a otras características individuales (p. ej., sexo, edad,
ción fundamentalmente selectiva de grasas y almidones, la hábitos alimentarios, perfil socioeconómico y grado de
derivación biliopancreática (DBP) no presenta las compli- cumplimiento esperado), con el objetivo de obtener los
caciones propias de la DYI.4,5 Además, la DBP tiene un mejores resultados de pérdida de peso con las mínimas com-
intervalo terapéutico muy amplio ya que, variando la lon- plicaciones nutricionales.8 La longitud intestinal, que deter-
gitud de las ramas intestinales, se puede establecer una mina la absorción de energía y, en consecuencia, el peso de
malabsorción selectiva de grasas, almidones o proteínas. estabilización y su mantenimiento indefinido, se ha ido
Por ello, el procedimiento es adaptable a las características adaptando a las características de los pacientes sólo en los
de la población o incluso de los pacientes para lograr los últimos 11 años.
239
240 Sección V • INTERVENCIONES

para biopsia. Solemos cortar el estómago con una grapadora


lineal TA-90, situada lo más oblicuamente posible, para
compensar la escasa longitud del mesenterio ileal. La bolsa
gástrica debería medirse en todos los casos. Ello se consigue
fácilmente llenando la bolsa con agua usando un preservati-
200–500 mL vo anudado al final de una sonda nasogástrica. El volumen
gástrico debe medirse hasta que el cirujano sea capaz de
valorarlo a simple vista.
Se realiza una incisión en el mesocolon y la RA se lleva
al espacio supramesocólico, comprobando que no haya tor-
siones. Se puede usar cualquier técnica para la GEA.
Nosotros preferimos la terminolateral, extirpando la curva
izquierda de la bolsa gástrica. A continuación, la GEA se
ancla mediante dos puntos al mesocolon, para evitar torsio-
nes intestinales y hernias internas. Siempre cerramos el
200 cm defecto mesentérico distal y nunca el proximal. La última
maniobra es inspeccionar el intestino, empezando por la
VIC y comprobando que el alineamiento es el adecuado.

Laparoscópica
La técnica laparoscópica conlleva el uso de cinco trócares
situados en las posiciones que se ilustran en la figura 29-2.
50 cm
El ligamento gastrocólico se incide hacia su mitad, proce-
diendo a la disección con un bisturí armónico, hasta que la
tracción de la curvatura mayor permita la movilización del
fundus gástrico, lo cual implica que el área avascular casi
siempre se secciona. La sección de los vasos gastroepiploi-
cos derechos y gástricos derechos completa el aislamiento
del duodeno, que se divide mediante la aplicación, sencilla
o doble, de la grapadora endoscópica. La curvatura menor
se aísla a continuación en sentido craneal con la tijera ultra-
sónica, parando 1 o 2 cm antes del tronco de la arteria gás-

Yeyuno Íleon
Figura 29-1 Representación esquemática de la DBP AHS.

Z TÉCNICA QUIRÚRGICA

Abierta 4

La operación consiste en una gastrectomía distal con cierre


del duodeno y una reconstrucción larga en Y de Roux, en
la que la enteroenterostomía (EEA) se sitúa en el íleon dis- 5
tal 50 cm proximal a la válvula ileocecal (VIC) y la gastro- 3 1 2
enterostomía (GEA) está a 250 cm. Se pueden reconocer
tres ramas intestinales: la rama alimentaria (RA), de la
GEA a la EEA (200 cm); la rama común (RC), de la EEA a
la VIC (50 cm); y la rama biliopancreática (RBP), del liga-
mento de Treitz a la EEA, que contiene el resto de intesti-
no delgado. Una colecistectomía profiláctica completa la
intervención.
Tras abrir el abdomen por una incisión en la línea media
supraumbilical, el primer paso es medir el intestino. El
intestino delgado se mide hacia atrás desde la VIC hasta el
ligamento de Treitz, y se marca con puntos a los 50 cm y a
los 250 cm. Es muy importante medir el intestino delgado Figura 29-2 Posiciones de los trócares en la DBP laparoscópica con-
totalmente estirado, para que las mediciones sean reprodu- vencional. 1. supraumbilical (10-12 mm), en la línea media, 3-4 cm por
cibles. A continuación se realiza una transección del intesti- encima del borde superior del ombligo; 2. hipocrondríaca izquierda
no delgado a 250 cm y el mesenterio ileal se secciona a una (10-12 mm), a lo largo de la línea medioclavicular izquierda, alrededor
de 6 cm por debajo del reborde costal; 3. hipocondríaca derecha
profundidad considerable. La EEA puede realizarse con (10-12 mm), a lo largo de la línea medioclavicular derecha, alrededor de
cualquier técnica, llevando la RBP a la izquierda de la RA. 6 cm por debajo del reborde costal; 4. xifoidea (10-12 mm), en la línea
Se lleva a cabo la gastrectomía distal, se cierra el duode- media, a 3 cm por debajo del xifoides; 5. subcostal izquierda (5 mm), en
no, se extirpa la vesícula biliar y se toma una cuña de hígado el reborde costal izquierdo, a lo largo de la línea media axilar izquierda.
Capítulo 29 • Derivación biliopancreática 241

trica izquierda, y se realiza la resección gástrica mediante cuatro deposiciones diarias de heces blandas. La mayoría
la aplicación repetida de la grapadora endoscópica. El volu- presenta deposiciones fétidas y flatulencia. Estos fenóme-
men gástrico se mide usando la técnica descrita con ante- nos, que pueden reducirse modificando los hábitos ali-
rioridad. Una sección gástrica de la curvatura mayor, mentarios o administrando neomicina, metronidazol o
moderadamente estirada, a aproximadamente 15 cm del enzimas pancreáticas, tienden a disminuir con el tiempo.
cardias, corresponde a un volumen gástrico de unos También se tiende a reducir la frecuencia de las deposi-
300 mL, en tanto que una distancia de 20 cm a lo largo de ciones y a aumentar su consistencia. La diarrea suele apa-
la curvatura mayor corresponde a un volumen de unos recer sólo en el contexto de síndrome del dumping y luego
400 mL. desaparece con rapidez, siendo prácticamente ausente al
Después de realizar la colecistectomía, se coloca al cuarto mes.6 La gastroenterocolitis aguda esporádica, que
paciente en ligera posición de Trendelenburg. El intestino no suele durar más de unos pocos días, puede presentarse,
delgado se mide hacia atrás desde el ciego, totalmente esti- especialmente durante el verano. En estos casos debe
rado, usando dos fórceps marcados a 10 cm en movimien- vigilarse la protrombina plasmática, ya que las bacterias
tos alternos. Se deja una marca a los 50 cm, se divide el colónicas son la principal fuente de vitamina K en los
íleon a los 250 cm usando la grapadora endoscópica, y se pacientes intervenidos con DBP. Dado que el colon es
secciona el mesenterio a una profundidad considerable con también el principal lugar de digestión y absorción de
la tijera ultrasónica. La EEA se realiza laterolateral, con proteínas tras la DBP, un período prolongado de diarrea
una grapadora endoscópica a través de dos pequeñas ente- puede acarrear una disminución de la concentración de
rotomías practicadas con el bisturí armónico. El defecto proteínas séricas, con recuperación espontánea tras su
conjunto se cierra mediante una sutura seromuscular con- cese.
tinua. La ausencia de diarrea tras la DBP se explica fácil-
Se tira entonces del muñón gástrico hacia el espacio mente, teniendo en cuenta que, a diferencia de lo que
submesocólico a través de una incisión realizada en el meso- sucede en las secuelas de la DYI, la pérdida de sales bilia-
colon transverso por encima del ligamento de Treitz. La res en el colon se estima en unos 750 mg/día eligiendo la
bolsa intestinal distal se identifica y se perfora con la tijera longitud apropiada para la rama común,11 y que debido a
ultrasónica, a una distancia de la línea de sutura igual a la la ausencia de digestión de grasas, la esteatorrea es funda-
longitud operativa de la grapadora endoscópica. Con esta mentalmente neutra, estando el pH fecal alrededor de 7.
última se realiza una GEA isoperistáltica laterolateral en la Los estudios de tránsito intestinal en los meses 1, 4 y 12
pared posterior del estómago, lo más cerca posible del ángu- tras la DBP mostraron, en comparación con el estado
lo distal y a medio camino entre la línea de sutura y la cur- preoperatorio, una disminución en el tiempo de transpor-
vatura mayor, con cierre manual del defecto conjunto. te de un 50% en el intestino delgado, aunque sin modifi-
caciones en el intestino grueso,11,13 coincidiendo con los
cambios observados de la actividad hormonal intestinal
Z HÁBITOS ALIMENTARIOS sobre la motilidad.14

Durante los primeros meses postoperatorios, todos los


pacientes sometidos a DBP experimentan un menor apetito, Z PÉRDIDA DE PESO
debido al estímulo de la comida sobre el íleon,9 y presentan
saciedad precoz, ocasionalmente asociada a dolor epigástri- La reducción de peso tras DBP AHS en pacientes no revisa-
co, vómitos o ambos. Estos síntomas definen el síndrome dos, expresada como porcentaje de pérdida del exceso de
posprandial y están causados por un vaciamiento gástrico peso inicial (EPI), fue de 72  16 a los 2 años (1555 casos),
rápido con la consiguiente distensión del asa postanastomó- de 73  16 a los 4 años (1423 casos), de 73  15 a los 6 años
tica. Todos estos síntomas, que son más intensos y durade- (1347 casos), de 74  15 a los 8 años (1280 casos), de 74  15
ros cuanto menor es el volumen gástrico, desaparecen rápi- a los 10 años (1120 casos), de 75  16 a los 12 años (839 casos),
damente con el tiempo, probablemente debido a la de 75  16 a los 14 años (417 casos), de 76  15 a los 16 años
adaptación intestinal. Pasado un año, el apetito y la capaci- (146 casos) y de 77  17 a los 18 años (87 casos), sin diferen-
dad de comer se recuperan completamente, y la ingesta cias entre los pacientes «mórbidamente obesos» y «supero-
media que admiten los pacientes es 1,5 veces mayor que besos» (EPI  120%).6 A los 10 años, el 90% de los pacientes
antes de la cirugía, independientemente del volumen gástri- operados mostraban una reducción del EPI  50%. La tasa
co. Los pacientes sometidos a DBP deben ser advertidos de de fracaso (pérdida de menos del 25% del EPI) fue de
que durante el resto de sus vidas tendrán una absorción 0,5%.
mínima de grasas,10,11 poca de almidones, suficiente de pro- Se percibe que la pérdida de peso inicial queda determi-
teínas11,12 y casi toda la de mono y disacáridos, triglicéridos nada por la limitación temporal forzada de comida que
de cadena corta y alcohol (p. ej., el contenido energético del ocurre inmediatamente después de la intervención. Sin
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azúcar, frutas, dulces, refrescos, leche y bebidas alcohóli- embargo, la estabilización del peso depende de la cantidad
cas). También deben comprender que cuando su peso cor- de absorción diaria de energía permitida por la DBP, que es
poral alcance el nivel de estabilización, la ingesta de estos consecuencia de un mecanismo permanente. Como norma,
alimentos puede variar en función de los ajustes de peso el paciente operado recupera totalmente el apetito y la capa-
individuales. cidad de comer tras lograr la estabilización del peso, de
manera que la pérdida final de peso depende de la menor
absorción intestinal de energía. La estabilización del peso
Z HÁBITOS INTESTINALES también está influida por el volumen gástrico, probablemen-
te porque un estómago más pequeño con un llenado gástrico
Tras la reanudación plena de la ingesta alimentaria, los más rápido acelera el tránsito intestinal, reduciendo así la
sujetos sometidos a DBP generalmente efectúan de dos a absorción.15
242 Sección V • INTERVENCIONES

Z MANTENIMIENTO DEL PESO 0

La filosofía original para limitar la digestión en la DBP se 10


centraba en retrasar el encuentro entre el alimento y el jugo 20

% de reducción del EPI


biliopancreático, confinando así la digestión realizada por 30
las enzimas pancreáticas a un pequeño segmento del intesti-
no delgado. En el primer modelo experimental de DBP, la 40
longitud de la RBP era sólo de 30 cm y la RC equivalía a 50
entre 1/7 y 1/10 de la longitud total del intestino delgado, es 60
decir, a unos 100 cm, para que la RA tuviera unos 7 m de
longitud. El análisis de los cambios en la pérdida de peso y 70
40 s. 36 s. 34 s. 29 s. 25 s.
la absorción intestinal de proteínas en los modelos de DBP, 80
que se sucedieron unos a otros en la evolución de la opera- 90
ción,12,16-19 demostraron que en el modelo actual de DBP no
ocurre digestión pancreática en la RC. La digestión de pro- 100
0 1 2 4 6 8 10 12 14 16 18 20 22 24 25
teínas y almidones, que sólo es debida a las enzimas del bor-
de en cepillo del intestino, ocurre en todo el intestino delga- T en años
do, desde la GEA a la VIC, mientras que la absorción de Figura 29-3 Cambios en el peso corporal tras la DBP mitad-mitad.
grasa, que necesita la presencia de sales biliares, está confi-
nada a la RC.
El mantenimiento del peso, singularmente bueno, que por las diferencias interindividuales en: 1) la capacidad ori-
se da tras la DBP se ejemplifica por un grupo de 40 pacientes ginal del intestino para digerir y absorber la energía por uni-
que se sometieron a la intervención del tipo «mitad-mitad» dad de superficie; 2) los fenómenos de adaptación intestinal;
o «half-half» (MM), que difiere del tipo AHS sólo en que el 3) el tiempo de tránsito intestinal (que, sumado al volumen
estómago es más grande y la rama alimentaria es más larga.8 gástrico, puede verse influido por la ingesta de líquidos); 4)
Lógicamente, la reducción del peso fue menor, pero el peso la ingesta de azúcares simples, y 5) el gasto de energía por
logrado se mantuvo de forma estricta hasta los 25 años de unidad de masa corporal. Sin embargo, en cada individuo
seguimiento (v. figura 29-3). Es interesante resaltar que estos sometido a DBP, el peso de estabilización no puede modifi-
datos son los únicos resultados a 20 años publicados en el carse por un aumento o disminución de la ingesta de grasas
ámbito del tratamiento de la obesidad. o almidones, ya que la ingesta es mayor que el umbral de
Algunas observaciones clínico-estadísticas de las moda- transporte máximo. En realidad, dado que los transportado-
lidades de este mantenimiento del peso a muy largo plazo res intestinales se desaturan rápidamente tras el paso del
indican que el peso corporal tras la DBP depende principal- alimento, un mayor número de comidas al día también pue-
mente de las variaciones individuales e interindividuales en de aumentar la absorción de energía, dato que se ve confir-
la ingesta alimentaria. Ello nos llevó a investigar las relacio- mado por la experiencia clínica.
nes entre la ingesta de comida habitual y la absorción intes- Los resultados anteriores fueron confirmados por un
tinal de energía. estudio de sobrealimentación en el que 10 sujetos con DBP
Un estudio de absorción (v. tabla 29-1) demostró que el a largo plazo mantuvieron un peso corporal totalmente esta-
aparato digestivo-absortivo de la DBP tiene una capacidad ble al alimentarse con sus dietas habituales durante 15 días y
de transporte máxima para la grasa y, por tanto, para la ener- con la misma dieta más 2000 kcal de grasas y almidones al
gía.20 En consecuencia, todo el consumo energético que día (sin aumentar el número de comidas por día) durante
exceda el umbral máximo de transporte no se absorbe. Es otros 15 (v. tabla 29-2).
decir, teniendo en cuenta que el consumo de energía diario Aunque la ingesta energética preoperatoria en la mayo-
es mucho mayor que el umbral antes mencionado, la absor- ría de nuestros pacientes era mucho mayor que la absorción
ción de energía diaria es constante en cada sujeto. En con- de energía registrada en nuestro estudio, una mayoría de
clusión, siendo iguales la longitud original del intestino y el mujeres obesas con ingesta de energía preoperatoria menor
volumen gástrico, la variabilidad interindividual en la esta- de 1750 kcal al día (confirmada por una medición del gasto
bilización del peso en los sujetos sometidos a DBP se explica energético total [GET]), perdió peso tras la DBP. Ello sólo

Tabla 29-1 ABSORCIÓN INTESTINAL


INGESTA ABSORCIÓN ABSORCIÓN
ALIMENTARIA PÉRDIDAS FECALES APARENTE APARENTE (%)
Energía (kcal/24 h) Media 3070 1329 1741 58
Rango 1840-4060 210-2590 1012-2827 32-71
Grasa (g/24 h) Media 130 89 39 28
Rango 88-185 22-251 13-94 12-59
Nitrógeno (g/24 h) Media 27 12 15 57
Rango 15-48 2,5-36 6,7-20 25-59
Calcio (mg/24 h) Media 1994 1443 551 26
Rango 1037-3979 453-2565 251-1414 -24-69
Absorción intestinal de energía, grasa, nitrógeno y calcio en 15 sujetos (3 varones) con peso corporal estable 2 a 3 años tras la derivación biliopancreática
(peso corporal medio  DE: en el momento de la operación, 119  24 kg; en el momento del estudio, 75  14 kg).
Capítulo 29 • Derivación biliopancreática 243

La reducción en el peso en nuestra muestra puede


Tabla 29-2 ESTUDIO DE SOBREALIMENTACIÓN explicarse considerando el diferente gasto energético de los
TRAS DERIVACIÓN BILIOPANCREÁTICA diversos sectores del cuerpo humano. De hecho, mientras
PC CON INGESTA PC TRAS LA que el tejido adiposo consume sólo unas 5 kcal/kg/día, 25 el
SUJETO PC INICIAL HABITUAL DE COMIDA SOBREALIMENTACIÓN GER del músculo es de unas 18 kcal/kg/día, y el consumo
de energía de los órganos internos llega a unas 360 kcal/kg/día.26
1 77,7 78,0 78,0
Por tanto, si el consumo de energía permanece constante,
2 90,0 90,5 89,2
una variación relativamente pequeña en la masa de los
3 97,0 96,5 95,7
órganos internos puede compensarse con una variación
4 73,0 72,7 73,4
relativamente grande en los sectores del cuerpo que consu-
5 89,1 88,8 90,3
men menos energía, como el tejido adiposo y el muscular,
6 68,5 68,0 68,5
para que así el gasto total de energía, que debe igualar el
7 102,8 103,5 103,0
consumo de energía, permanezca invariable. Aunque los
8 87,0 87,0 86,5
niveles plasmáticos de hormonas intestinales que estimu-
9 66,5 66,0 66,0
lan los cambios de adaptación intestinal se encuentran muy
10 70,5 70,0 71,0
elevados tras la DYI y la DBP,14 tras la última, al contrario
Estudio de sobrealimentación en 10 sujetos de 3 a 9 años tras la derivación que en el caso de la DYI, todo el intestino recibe un estí-
biliopancreática. Datos individuales de peso corporal (PC, kg) al principio del
estudio, tras un período de 15 días con la ingesta de comida habitual mulo intraluminal para la adaptación, 27 lo que causa un
(media, ~3800 kcal/día), y tras un período de 15 días de sobrealimentación aumento en el tamaño y en la actividad funcional de todo
(ingesta habitual de comida de más de 2000 kcal/día de grasas y almidones). el tracto intestinal. 28,29 Obviamente, ello conduce a un
mayor consumo de esta que, dado que la absorción diaria
de energía no puede modificarse, debe compensarse con
puede explicarse en virtud de un aumento en el gasto de una pérdida en los otros sectores corporales, de forma que
energía por unidad de masa corporal debido a la interven- produzca una disminución idéntica en el consumo de ener-
ción, como ya sugerían tres estudios previos que demostra- gía, Así, el gasto de energía final equivaldrá a la absorción
ban que tras la DBP, el gasto energético es mayor que el intestinal de esta. El aumento en el gasto energético atri-
que teóricamente se espera tras la reducción de peso obser- buible a la función del intestino de tamaño aumentado expli-
vada. 21-23 ca la disminución correspondiente debida a la pérdida de
Más tarde se llevó a cabo un estudio longitudinal sobre tejido adiposo, masa muscular y masa visceral no intestinal
gasto energético en reposo (GER) en 53 sujetos con un peso en nuestra muestra de pacientes operados. El incremento
corporal estable antes de la operación, y a los años 1, 2 y 3 neto de masa visceral corresponde a aproximadamente
tras la DBP; los resultados del mismo se muestran en la 1 kg, o 360 kcal por día.30 Por ello, en nuestros 53 pacientes
tabla 29-3.24 Aunque el peso corporal medio se redujo en sometidos a DBP, la pérdida media de peso puede explicar-
unos 50 kg, y la masa corporal magra media disminuyó se en virtud de los cambios en la composición corporal que
en unos 8 kg, el GER medio a los años 1, 2 y 3 fue similar al siguen a la operación.
GER preoperatorio. La diferencia entre el GET medio En conclusión, tras la DBP, el mantenimiento del peso
preoperatorio, calculado a partir del GER con coeficien- está asegurado por la existencia de un umbral de transporte
te 1,3, y la absorción de energía media medida (que corres- de energía intestinal. El peso de estabilización depende en
ponde al GET medio) en el grupo de estudio de la absorción, parte de ese umbral y en parte de los cambios en la compo-
puede explicarse considerando la variabilidad entre grupos sición corporal subsiguientes a la intervención.
(el GER medio fue de 1424 kcal/día en el grupo de estudio Una consideración final referida a las diferencias exis-
de la absorción y de unas 1600 en el grupo de estudio de tentes en nuestra población entre varones y mujeres es que
gasto energético) y, posiblemente, por un informe a la baja tras la estabilización del peso, las mujeres pesaron signifi-
sobre la ingesta de azúcares simples en el diario alimentario cativamente menos que los varones, lo que indica que
del grupo de estudio de la absorción. Ello significa que, tras absorbían menos que los hombres por unidad de superficie
la DBP, nuestros pacientes absorbían por término medio intestinal. Lo mismo se aplica a la altura (p. ej., los indivi-
tanta energía como cuando comían antes, lo que da pie a duos más altos absorben más por unidad de superficie
preguntas obvias sobre la razón de la pérdida de peso. intestinal).

Tabla 29-3 COMPARACIÓN DE INDIVIDUOS Z OTROS EFECTOS BENEFICIOSOS


OBESOS Y SANOS
Los otros beneficios obtenidos tras la DBP figuran en la
PC IMC MLG GER lista de la tabla 29-4. El porcentaje de cambios observados
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Antes de la DBP 127,6  26,9 47,4  9,5 64,3  12,9 1591  638 tras la operación se calculó para cada beneficio en los pacien-
Tras 1 año 83,0  15,4* 30,8  5,6* 55,5  8,3* 1578  305 tes, durante un seguimiento mínimo que correspondía al
Tras 2 años 78,0  12,6* 28,9  4,4* 54,2  8,6* 1600  310 tiempo postoperatorio tras el que generalmente ya no había
Tras 3 años 79,4  13,8* 29,4  4,8* 55,8  8,6* 1580  229 modificaciones sustanciales. La recuperación y la mejoría se
Controles 77,2  11,0* 28,5  4,3* 53,9  7,1* 1317  199 consideraron sólo cuando los cambios favorables se mante-
nían en todas las exploraciones posteriores. Obviamente, los
ANOVA (análisis univariante) de una vía: *P  0,0001 frente al
preoperatorio. efectos beneficiosos observados no se pueden atribuir a la
PC, peso corporal (kg); IMC, índice de masa corporal (kg/m 2); DBP en sí misma, sino a la pérdida de peso, a la reducción en
MLG, masa libre de grasa (kg); GER, gasto de energía en reposo (kcal/24 h). la absorción de nutrientes, o a ambos, siendo las dos únicas
Estos niveles se encontraron en 53 sujetos obesos (11 varones) en distintos
momentos con respecto a la derivación biliopancreática (DBP) excepciones los efectos sobre el metabolismo de la glucosa y
y en 30 controles sanos que nunca habían sido obesos (media  DS). sobre el colesterol.31,32
244 Sección V • INTERVENCIONES

Tabla 29-4 OTROS EFECTOS BENEFICIOSOS DEL «ESTÓMAGO AD HOC» Y LA DERIVACIÓN BILIOPANCREÁTICA
SEGUIMIENTO DESAPARICIÓN MEJORÍA SIN CAMBIOS EMPEORAMIENTO
MÍNIMO (MESES) (%) (%) (%) (%)
Síndrome de de Pickwick* (2%) 1 100 — — —
Somnolencia† (7%) 1 100 — — —
Hipertensión‡ (42%) 12 80 14 6 —
Hígado graso§ (52%) 24 87 9 4 —
Úlceras de extremidades• (32%) 12 44 40 16 —
Hipercolesterolemia¶ (54%) 1 100 — — —
Hipertrigliceridemia (35%) 12 94 6 — —
Hiperglucemia (14%) 4 100 — — —
Diabetes mellitus (6%) 4 100 — — —
Diabetes mellitus insulinodependiente (2%) 12 100 — — —
Hiperuricemia (17%) 4 94 — 4 2
Gota (2%) 4 100 # — — —
(%), porcentaje de pacientes con la enfermedad; *, somnolencia con cianosis, policitemia e hipercapnia; † en ausencia de una o más características de síndrome de
Pickwick; ‡ sistólica 155, diastólica 95 mm Hg o ambas; §, más del 10%; •, moderadas o severas; ¶, más de 200 mg/mL (21% más de 240 mg/mL); #, ácido úrico en
suero normalizado, más síntomas clínicos. n  53.

De hecho, de los 2155 pacientes con DBP AHS (serie La primera causa del comienzo de la diabetes mellitus
completa) con un seguimiento mínimo de 1 año, 1 año des- tipo 2 en la obesidad podría ser, según Randle,34,35 un
pués de la CBP y permanentemente desde entonces, los aumento en la oxidación de ácidos grasos libres, que a su
niveles séricos de glucosa fueron normales, sin medicación vez inhibe la oxidación de glucosa, produciendo así resis-
y con dietas completamente libres, no sólo en los 302 (14%) tencia a la insulina. Más recientemente se ha sugerido que
con hiperglucemia simple preoperatoria, ni sólo en los 135 la resistencia a la insulina puede estar ocasionada por hipe-
(6,3%) con diabetes mellitus tipo 2 controlada con hipoglu- rinsulinemia debido a un menor aclaramiento hepático de
cemiantes orales, sino también en los 38 (1,8%) pacientes insulina secundario a una mayor concentración de ácidos
con diabetes mellitus tipo 2 que requerían tratamiento con grasos libres en la sangre portal.36,37 En cualquier caso, la
insulina. Ello fue acompañado de normalización de los normalización de la sensibilidad a la insulina tras la DBP
niveles séricos de insulina, como se demostró en estudios puede deberse a la menor absorción de lípidos, a la reduc-
transversales33 y longitudinales (insulina sérica [μg/mL] en ción de tejido adiposo intraabdominal, o ambas. Por tanto,
53 pacientes sometidos a DBP AHS: preoperatoria 18  no sería una acción específica de la DBP y no explicaría la
10 μg/mL; al año 5,2  2,3; a los 2 años 4,6  2; a los 3 años normalización de glucosa en suero vista en el 20% de
6  3,1; controles 6,9  2,6; ANOVA (análisis de varianza): pacientes obesos con diabetes mellitus tipo 2 que seguían
P  0,0001 en cada grupo, en comparación con el valor requiriendo tratamiento con insulina tras la normalización
preoperatorio), así como en la normalización de la sensibi- del peso por medio de la dieta. Tras la DBP, sin embargo,
lidad a la insulina (v. tabla 29-5). Considerando que alrede- la glucosa sérica en pacientes previamente diabéticos se
dor del 20% de los pacientes con diabetes mellitus tipo 2 había normalizado generalmente 1 mes después de la inter-
siguen necesitando tratamiento con insulina tras la nor- vención, cuando el sobrepeso aún era más del 80%; ello
malización del peso mediante dieta, hay que concluir que indica una posible acción específica de la DBP en el meta-
la simple pérdida de peso no puede justificar el 100% de bolismo de la glucosa.
recuperación de la diabetes mellitus tipo 2 observado tras Si consideramos que, independientemente de cuál sea su
la DBP. causa principal, la diabetes mellitus tipo 2 se caracteriza por
un círculo vicioso, en el que los altos niveles de insulina en
suero aumentan la resistencia a la insulina y viceversa, se
Tabla 29-5 ESTUDIO COMPARATIVO puede pensar que cualquier factor que reduzca la producción
DE LOS NIVELES DE GLUCOSA E INSULINA de insulina podría afectar positivamente a dicho círculo.
Uno de tales factores puede ser la interrupción del eje ente-
SUJETOS SUJETOS CONTROLES roinsular, lo que podría identificarse con esa acción especí-
OBESOS DBP DELGADOS fica de la DBP. Por supuesto, el nivel de péptido inhibidor
Número 9 6 6 gástrico después de la DBP muestra un considerable aplana-
Glucemia (mg/dL) Media 99,1* 74,6 86,6* miento en la curva de respuesta a la comida de prueba, junto
Rango 63-116 69-81 83-92 con normalización de los niveles de insulina en suero basal
Insulinemia Media 21,7 4,4§ 10,3§ estimulada por la comida.13
(μg/mL) Rango 11-41 1-13 9-12 Si esta hipótesis es correcta, la DBP y la reducción en la
Ingesta de glucosa Media 2,9 9,3† 10,5† producción de insulina deberían empeorar la diabetes melli-
(mg/kg/min) Rango 1,7-7,2 6,8-11 8,5-12 tus tipo 1. Así sucedió en dos mujeres jóvenes de nuestra
Concentraciones plasmáticas de glucosa e insulina más sensibilidad a la serie que, tras la DBP, en lugar de experimentar una reduc-
insulina (pinzamiento euglucémico hiperinsulinémico) en pacientes obesos, en ción de peso adecuada, tuvieron que aumentar su tratamien-
sujetos 2 a 4 años tras derivación biliopancreática (DBP) y en controles to con insulina en unas 10 U/día.
delgados.
Prueba de U-Mann Whitney: *P  0,01 frente a sujetos DBP; § P  0,03 Aunque la reducción de la ingesta de grasa, y por tanto
frente a pacientes obesos; †P  0,001 frente a pacientes obesos. de su absorción, es común en cualquier método de reducción
Capítulo 29 • Derivación biliopancreática 245

de peso, la limitación extrema y selectiva de absorción de Z NUTRICIÓN


grasa subsiguiente a la DBP no puede lograrse por otros
medios. Ello también debe considerarse una acción especí- La forma más fácil de evaluar el estado nutricional es obser-
fica de la intervención. var y hablar con el sujeto. Una persona con buen aspecto y
Hubo cuatro casos de recurrencia tardía de la hiper- que muestra un adecuado nivel de bienestar y capacidad de
glucemia en los 173 pacientes con diabetes mellitus tipo 2 trabajar, generalmente tiene un buen estado nutricional. Tal
preoperatoria, dos a los 5 años, uno a los 13 años y uno a ha sido el caso de casi todos los pacientes sometidos a
los 14 años. Ninguno de ellos necesitó tratamiento y ni DBP AHS una vez ha pasado el período postoperatorio pre-
tuvo valores de glucosa en suero por encima de 150 mg/dL. coz. Nuestros estudios sobre aspectos particulares del esta-
Un paciente con diabetes preoperatoria grave no logró la do nutricional mostraron un estado inmunológico normal,42
normalización de la glucosa sérica, pero mantuvo unos consecución de una composición corporal sana estable43 y
valores de alrededor de 120 mg/dL durante más de 10 años capacidad de quedar embarazada, llevar un embarazo nor-
con una dieta totalmente libre y sin tratamiento hipoglucé- mal y tener un bebé sano.44
mico alguno.
Dos acciones específicas de la DBP explican la norma-
lización permanente de colesterol en suero en el 100% de los Z COMPLICACIONES INESPECÍFICAS
pacientes operados. La primera es la interrupción calibrada
de la circulación enterohepática de sales biliares (los ácidos El aumento en la práctica y en la experiencia nos sacó de la
biliares se absorben selectivamente en el íleon distal) que curva de aprendizaje con la DBP en lo referido a complica-
produce una mejor síntesis de ácidos biliares a expensas de ciones inmediatas. Cuando los primeros 738 sujetos, los
las reservas de colesterol. La segunda es una importante siguientes 500 y los últimos 500 sometidos a DBP AHS se
reducción en la absorción de colesterol endógeno conse- estudiaron por separado, se pusieron de manifiesto una
cuente a la limitación de absorción de grasa. reducción estable de la mortalidad hasta menos del 0,5% y la
El nivel de colesterol en suero mantiene una reducción práctica desaparición de complicaciones generales e intraab-
media estable de aproximadamente el 30% en pacientes con dominales. De forma similar, la incidencia de complicacio-
valores preoperatorios normales y del 45% en pacientes que nes de la herida quirúrgica parece reducirse a aproximada-
presentaban hipercolesterolemia antes de la operación.38 El mente el 1% (v. tabla 29-6).
colesterol de lipoproteínas de alta densidad (HDL) perma- En contraste, la incidencia de complicaciones tardías
nece sin cambios, corriendo la reducción completamente a no específicas, un 15% para la hernia incisional (3 cm) 45
costa del colesterol de lipoproteínas de baja densidad (LDL) y un 1% para obstrucción intestinal, no ha cambiado sus-
y de lipoproteínas de muy baja densidad.39 Estos resultados tancialmente a lo largo de los años. Hay que destacar la
se mantuvieron a largo plazo; el colesterol HDL exhibió un potencial gravedad de la obstrucción de la rama biliopan-
significativo aumento en 51 pacientes sometidos a DBP a los creática que, dada su particular situación anatómica y fun-
6 años (colesterol en suero total: preoperatorio 210  cional, no produce ningún signo clínico ni radiológico
46 mg/dL, postoperatorio 124  25 mg/dL, test t de Student, específico. Sin embargo, puede dar lugar a pancreatitis
P  0,0001; colesterol HDL: preoperatorio 44  12 mg/dL, aguda, que es más probable y de instauración más rápida
postoperatorio 50  15 mg/dL, test t de Student, P  0,03) cuando la obstrucción es más proximal. Cualquier dolor
y a muy largo plazo en los 10 pacientes sometidos a DBP abdominal agudo que haga sospechar de esta complicación
mitad-mitad, cuyos valores estuvieron disponibles 15 o 20 debe llevar a buscar de inmediato una distensión del duo-
años tras la intervención. Siguiendo el criterio de los National deno y del yeyuno proximal (mediante tomografía compu-
Institutes of Health, que establece un valor de 200 mg/dL tarizada), y a hacer análisis para descartar niveles séricos
como límite superior recomendado para el colesterol en sue- elevados de amilasa y bilirrubina. Si se presentan uno o
ro, de los 2635 (serie completa) pacientes obesos sometidos a más de estos signos, es obligatorio proceder inmediata-
DBP con un seguimiento mínimo de 1 mes, 1397 tenían mente a laparotomía.46
hipercolesterolemia (553 con valores por encima de 240 mg/
dL y 99 por encima de 300 mg/dL). Todos estos pacientes
presentaban valores de colesterol en suero por debajo de Z COMPLICACIONES TARDÍAS ESPECÍFICAS
200 mg/dL 1 mes tras la operación; los valores permanecie-
ron por debajo de ese nivel en todas las exploraciones poste- Anemia
riores.
Gasbarrini y cols.40 sometieron a DBP mitad-mitad a La exclusión del principal lugar de absorción de hierro en
una mujer joven y delgada con quilomicronemia familiar el tracto digestivo puede producir anemia ferropénica.
(triglicéridos en suero: 4500 mg/dL; colesterol en suero: Más raramente, la anemia puede deberse a déficit de ácido
502 mg/dL) y diabetes mellitus tipo 2 secundaria (150 U/día fólico y, de modo excepcional, a déficit de vitamina B12 (el
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

de insulina para mantener la glucosa sérica sobre 250 mg/dL). test de Schilling da resultados normales en el período pre-
Un año después de la operación había ganado 2 kg de peso; coz tras la DBP).11,47 En general, la anemia aparece en
la glucosa en sangre, la insulina sérica y la sensibilidad a la pacientes tras DBP con hemorragia crónica fisiológica
insulina eran normales; los triglicéridos en suero eran de (menstruación) o patológica (hemorroides, úlcera del esto-
380 mg/dL y el colesterol sérico era de 137 mg/dL, con una ma). En la mayoría de los casos es microcítica, en menos
dieta totalmente libre y sin ningún tratamiento. Un año des- es normocítica y en muy pocos es macrocítica. La inciden-
pués, su hermana menor, que tenía la misma enfermedad, se cia general de anemia tras DBP en nuestra población esta-
sometió a la misma intervención con resultados similares.41 ría alrededor del 40%, pero los suplementos periódicos
La DBP, por tanto, puede ser efectiva y segura en el trata- con hierro, ácido fólico o ambos, pueden reducir su inci-
miento de la diabetes mellitus tipo 2 grave y en la hiperlipi- dencia a menos del 5%. Con el tiempo cada vez se necesi-
demia familiar en sujetos delgados. tan menos suplementos.
246 Sección V • INTERVENCIONES

Tabla 29-6 COMPLICACIONES INMEDIATAS TRAS DERIVACIÓN BILIOPANCREÁTICA


PRIMEROS 738 SUJETOS SIGUIENTES 500 SUJETOS ÚLTIMOS 500 SUJETOS
JUNIO 1984-DICIEMBRE 1990 DICIEMBRE 1990-OCTUBRE 1999 OCTUBRE 1999-JULIO 2003
Mortalidad quirúrgica 1,1% 0,4% 0,4%
3 paros cardíacos 1 embolia pulmonar 1 paro cardíaco
3 embolias pulmonares 1 hemorragia de la GEA 1 fuga de la GEA y fallo multiorgánico
1 hipertermia maligna
1 infección de la herida
Complicaciones generales 1,2% 0,2% 0,4%
5 embolias pulmonares 1 embolia pulmonar 1 embolia pulmonar
1 neumonía 1 tromboflebitis profunda
3 tromboflebitis profundas
Complicaciones quirúrgicas 2,7% 1,2% 1,4%
2 fugas de la GEA 3 infecciones de la herida 2 hemorragias intraperitoneales
1 perforación gástrica 2 dehiscencias de la herida 2 dehiscencias de la herida
2 hemorragias intraperitoneales 1 hemorragia intraperitoneal 3 infecciones de la herida
6 dehiscencias de la herida
9 infecciones de la herida
GEA, gastroenterostomía.

Úlcera del estoma de los pacientes diagnosticados en el segundo y tercer año ya


habían tenido síntomas en el primer año; 2) la mayoría de los
La DBP es un procedimiento potencialmente ulcerogéni- pacientes diagnosticados mucho tiempo después de la ope-
co.48 Desde los primeros trabajos experimentales en perros,4 ración habían sido tratados (una o más veces) previamente
se ha preferido la gastrectomía distal a la derivación gástri- por síntomas específicos; 3) muchos pacientes tratados una
ca,49 porque se creía que era más efectiva para prevenir la o varias veces por síntomas específicos habían rechazado la
úlcera del estoma50 y por la preocupación por la evolución endoscopia; 4) en algunos casos los pacientes operados sin
del estómago derivado.51 diagnóstico endoscópico habían sido tratados con bloquean-
La incidencia de úlcera estomal fue inicialmente bastan- tes H2 por sus médicos de cabecera, y 5) a excepción de un
te elevada (12,5% con la DBP mm), debido a la gran masa de varón, todos los pacientes con síntomas específicos que apa-
células parietales residuales. Teniendo en cuenta sólo las recieron tras el segundo año postoperatorio eran fumadores
úlceras diagnosticadas en los 2 primeros años postoperato- o fumadores y bebedores. La consideración de todos los
rios para poder realizar comparaciones entre grupos, la inci- hechos previos nos lleva a las conclusiones de que, para los
dencia se redujo sucesivamente al 8,3% en los primeros pacientes sometidos a DBP que no son fumadores o fumado-
132 pacientes consecutivos sometidos a DBP AHS, simple- res y bebedores, el riesgo de desarrollar úlcera péptica se
mente por el menor tamaño del estómago.52 Algunos cam- limita fundamentalmente al primer año postoperatorio, y
bios en la técnica quirúrgica, como preservar en la medida de que la incidencia real de úlcera estomal tras DBP es más
lo posible el ligamento gastrolienal, con sus fibras nerviosas alta que la comunicada en los datos indicados.
simpáticas,11 y el cambio de la gastroenterostomía termino- La profilaxis oral con bloqueantes H 2 comenzó en 1991,
terminal a terminolateral, estando esta última mejor vascu- dado que alrededor de una quinta parte de las úlceras cura-
larizada y con menos tendencia a la estenosis,53 determinaron das en pacientes de los dos primeros grupos presentó este-
una mayor mayor reducción (5,6% en los siguientes 650 casos). nosis de la GEA, que precisó dilatación endoscópica o revi-
En el siguiente grupo de 640 pacientes con AHS, operados sión quirúrgica con una gastrectomía más alta. Se optó por
entre enero de 1991 y marzo de 1999, la incidencia de úlcera utilizar ranitidina, debido al hecho de que se ha demostrado
estomal en los dos primeros años se redujo a un 3,4%, gracias que su absorción intestinal es normal.54 En un análisis pre-
a la profilaxis con bloqueantes H2 orales54 durante el primer vio,51 el tabaquismo parecía aumentar la incidencia de úlcera
año postoperatorio en pacientes de riesgo (v. más adelante). estomal, más en mujeres que en varones, aunque no signifi-
Cuando se considera la totalidad de úlceras estomales cativamente. En consecuencia se administró tratamiento
en los dos primeros grupos, está claro que fueron significa- profiláctico oral a todos los fumadores, mujeres y varones,
tivamente más frecuentes en varones (14,4%) que en mujeres durante el primer año postoperatorio, y a las mujeres no
(5,2%). En comparación con los informes de artículos pre- fumadoras sólo los 2 primeros meses. El resultado de esta
vios,6,7,51 la incidencia de úlcera estomal aparecía inalterada profilaxis fue una reducción en la incidencia de úlcera esto-
por el consumo de alcohol, mayor en varones (aunque no mal en todos los subgrupos (varones y mujeres, con o sin
significativamente), por tabaquismo, y significativamente consumo de alcohol y/o tabaco), que fue estadísticamente
aumentada (más en mujeres que en varones), por la asocia- significativa sólo para los varones no fumadores, en los que
ción de alcohol y tabaquismo. Las úlceras estomales respon- no apareció úlcera en 56 sujetos operados durante un perío-
dieron bien al tratamiento médico (100% de curación con do de 8 años de seguimiento, mientras que la incidencia en
bloqueantes H 2) y no mostraron tendencia a la recidiva, mujeres no fumadoras permaneció sin cambios. Las diferen-
siempre que el paciente se abstuviera de fumar. cias presentes en los dos primeros grupos (varones frente a
Se obtuvo evidencia endoscópica de úlcera estomal en el mujeres y fumadores/bebedores frente a no fumadores/no
52% de los casos en el primer año postoperatorio, en el 26% bebedores) siguieron siendo significativas en el grupo con
de los casos al segundo año y en el 22% de los casos, con una profilaxis, en el que la diferencia entre los varones fumado-
frecuencia progresivamente menor, entre el tercer y décimo res y no fumadores se volvió significativa, evidentemente
año. Sin embargo, hay que tener en cuenta que: 1) la mayoría debido a la desaparición de úlceras en el segundo subgrupo.
Capítulo 29 • Derivación biliopancreática 247

Concluimos que la profilaxis con bloqueantes H 2 (y, más lencia máxima: 2,4% durante el cuarto año) y, de modo más
recientemente, con inhibidores de la bomba de protones) ocasional, a largo plazo (10-20 años). Hasta el momento se
debe administrarse a todos los pacientes tras DBP durante han publicado cuatro casos de fracturas costales y un caso de
el primer año postoperatorio. No aparecieron úlceras en las colapso vertebral en pacientes sometidos a DBP AHS.
51 mujeres no fumadoras operadas desde marzo de 1999, La patogenia de la desmineralización ósea en pacientes
cuando todos los pacientes operados empezaron a recibir obesos no está clara. Los problemas óseos causados por la
profilaxis durante el primer año postoperatorio, hasta julio DBP no parecen diferir sustancialmente de los que aparecen
de 2001 (seguimiento mínimo de 2 años). en un porcentaje comprendido entre el 25% y el 35% de los
sujetos gastrectomizados con exclusión duodenal por úlcera
Desmineralización ósea péptica,58-60 y en un tercio de los pacientes con derivación gás-
trica por obesidad.61 Con toda probabilidad, el mecanismo
El duodeno y el yeyuno proximal son lugares selectivos para la consiste en una menor absorción de calcio que produce un
absorción de calcio. Sin embargo, nuestro estudio de la absor- aumento en la liberación de paratohormona, que normalmen-
ción intestinal de calcio mostró una absorción media aparen- te es suficiente para normalizar los niveles séricos de calcio a
temente suficiente en los 15 pacientes con dieta libre expensas del contenido óseo de calcio. Durante los primeros
(v. tabla 29-1).20 Es más, la absorción intestinal como valor años postoperatorios, el efecto adverso de la menor absorción
absoluto se correlacionaba positivamente con la ingesta (test de calcio parece prevalecer sobre los efectos beneficiosos de la
del rango de Kendall: P  0,03), lo que indica que, al contrario pérdida de peso, mientras que a largo plazo sucede lo contra-
que las grasas y la energía y al igual que las proteínas, el rio, siendo ello más evidente en los sujetos que presentan las
aumento de la ingesta de calcio da lugar a un incremento de su alteraciones preoperatorias más importantes. Recientemente
absorción. Por ello, se exhorta a todos nuestros pacientes a que se ha sugerido que el bajo nivel de albúmina también puede
mantengan una ingesta de calcio de 2 g/día (con un suplemen- influir en la patogenia de EOM tras DBP.62
to en pastillas, si es necesario), y se recomienda la ingesta de las En nuestra experiencia, los suplementos orales de calcio
necesidades diarias de vitamina D y otras vitaminas y oligoele- parecen prevenir y curar las alteraciones óseas producidas
mentos de por vida. En estudios antiguos55,56 y recientes (datos por la EOM, como se ha comprobado por mineralometría
no publicados), los niveles en suero de vitamina D2 y D3 fueron ósea computarizada. Sin embargo, también se ha de tener en
normales en casi todos nuestros sujetos sometidos a DBP. cuenta que, por un lado, la mayoría de nuestros pacientes
Cuando investigamos la historia natural de la enferme- intervenidos no toma los suplementos de calcio recomenda-
dad ósea en pacientes obesos y sujetos operados que no dos o muy pocos desarrollan EOM grave y, por otro, los
habían tomado suplementos en un intervalo de entre 1 y problemas óseos producidos por la DBP parecen más graves
10 años después de DBP, detectamos signos histomorfológi- en EE. UU.63,64 Ello sugiere que existen grandes diferencias en
cos de desmineralización ósea moderada a grave (estudio las necesidades y el metabolismo del calcio entre poblaciones
transversal en 252 biopsias óseas transilíacas tras doble mar- y entre individuos de una misma población. La síntesis de
cado con tetraciclina, 58 de las cuales se realizaron antes de vitamina D en la piel a distintas latitudes también puede
la cirugía) en el 28% de los pacientes obesos y el 62% de los jugar un papel importante. Hay que recordar que los suple-
sujetos operados. Se hallaron niveles ligeramente bajos de mentos de vitamina D parenteral no deben usarse en el tra-
calcio en suero y niveles altos de fosfatasa alcalina en aproxi- tamiento de la EOM, a menos que se comprueben bajos
madamente el 20% de los sujetos del estudio, sin diferencias niveles séricos. En realidad, un exceso de vitamina D puede
significativas entre pacientes obesos y operados o entre producir daños óseos similares a los causados por su déficit.
pacientes operados con y sin alteraciones óseas. Los niveles
de magnesio, fósforo y 25-hidroxivitamina D en sangre fue- Complicaciones neurológicas
ron en general normales, tanto antes como después de la
intervención. La prevalencia y gravedad de la enfermedad La neuropatía periférica y la encefalopatía de Wernicke,
ósea metabólica (EOM) aumentó tras la DBP hasta el cuar- complicaciones tempranas producidas por una limitación
to año (prevalencia: 16/58 preoperatoriamente, 15/21 a los excesiva de la comida,65 prácticamente han desaparecido en
4 años, prueba de chi cuadrado: P  0,001; gravedad [sujetos la actualidad (no se ha registrado ningún caso en los últimos
con EOM moderada o severa]: 7/58 preoperatoriamente; 1703 pacientes consecutivos intervenidos de la serie total
8/21 a los 4 años; prueba de chi cuadrado: P  0,01), tras el con un seguimiento mínimo de 1 año) por la administración
cual tendían a disminuir. El grado de mineralización a largo precoz de grandes dosis de tiamina a los pacientes de riesgo,
plazo (6-10 años) no fue significativamente peor que el es decir, aquellos con una ingesta de comida muy pequeña
observado antes de la intervención. Los pacientes con alte- en las primeras semanas postoperatorias.
raciones preoperatorias más graves (los más ancianos y los
de más peso) mostraron mejorías importantes en el grado de Malnutrición proteica
mineralización ósea comparado con los niveles preoperato-
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rios (prevalencia de EOM moderada o severa en pacientes de Caracterizada por hipoalbuminemia, anemia, edema, aste-
más de 45 años: 25% preoperatoriamente, 29% de 1 a 2 años, nia y alopecia, la malnutrición proteica (MP) representa la
33% de 3 a 5 años y 11% de 6 a 10 años; en pacientes con EPI complicación específica tardía más seria de la DBP y su reso-
mayor de 120% estos valores fueron, respectivamente, 24%, lución requiere generalmente de 2 a 3 semanas de alimenta-
28%, 53% y 14%).11,55-57 ción parenteral.
Los datos histomorfológicos eran completamente com- Nuestro conocimiento de la patogenia de la MP tras
patibles con los hallazgos clínicos. Se observó dolor óseo atri- DBP ha mejorado considerablemente en los últimos años. La
buible a la desmineralización (con una rápida recuperación absorción intestinal de proteínas (medida por medio de
tras el tratamiento con calcio, vitamina D sólo cuando fuera albúmina I-125) se ha investigado al principio de la expe-
necesario y difosfonato) en el 6% de los pacientes, general- riencia clínica12 y el estudio se ha repetido tras completar la
mente entre el segundo y quinto año postoperatorios (preva- fase de desarrollo17 y, de nuevo, más tarde,18 con resultados
248 Sección V • INTERVENCIONES

similares. Sin embargo, el 30% de malabsorción proteica extremos, la MPE FHA de gravedad variable puede aparecer
que se observó no parecía explicar por sí mismo el desarrollo en pacientes con ingesta mixta, dependiendo de: 1) en qué
de MP. Una contribución determinante fue la aportada por medida sea menor la ingesta de proteínas que la pérdida de
el estudio más reciente y completo de la absorción intestinal, proteínas, y 2) en qué medida la ingesta relativamente exce-
al que ya se ha aludido anteriormente.20 De hecho, la com- siva de energía prevenga la proteólisis del músculo esquelé-
paración entre la absorción intestinal de proteínas alimenta- tico y el ahorro de proteínas.
rias (73%) y la absorción aparente de nitrógeno (v. tabla 29-1) La presencia de una mayor pérdida de nitrógeno endó-
reveló una pérdida media de nitrógeno endógeno de unos geno también explica la MP esporádica tardía que, aunque
5 g/día (es decir, aproximadamente 5 veces el valor normal). rara, puede ocurrir en cualquier momento después de una
La pérdida extra de nitrógeno que, debido a la longitud de DBP y que está producida por una menor ingesta de comida
la RBP, no debería contener enzimas pancreáticas no reab- por cualquier motivo o por una diarrea prolongada debida
sorbidas, podría representarse como un aumento en la des- a enterocolitis inespecífica. La MP suele ser más grave en
camación celular e, hipotéticamente, como una secreción esta última situación ya que, siendo el colon un lugar
activa de albúmina, ambas producidas por la irritación cró- importante de digestión y absorción de proteínas tras la
nica causada por la malabsorción. Considerando como nor- DBP,17 la absorción proteica puede verse más afectada que
males unas necesidades de 40 g/día de proteínas y una pér- la de carbohidratos.
dida de unos 6 g/día, las necesidades medias de proteínas El objetivo del tratamiento de la MP precoz, cuando
tras la DBP deberían ser unos 90 g/día, lo cual es bastante todavía hay un exceso de peso significativo, es cambiar la
razonable, teniendo en cuenta que los 15 sujetos de nuestro MPE de FHA a FM, dando a los pacientes la posibilidad de
estudio a largo plazo mantenían una ingesta diaria media explotar sus reservas de energía y proteínas. Este estado se
de 170 g. logra anulando la ingesta de carbohidratos y, teniendo en
Si se confirma a corto plazo, el aumento de pérdida de cuenta la ingesta de proteínas, administrando sólo aminoá-
nitrógeno endógeno, podría producir un impacto mucho cidos intravenosos en cantidad suficiente para compensar la
mayor en los primeros meses tras la DBP, cuando la limita- pérdida de proteínas endógenas. En contraste, el tratamien-
ción forzosa de comida produce un balance negativo tanto to para la MP tardía, cuando el peso corporal es normal o
de energía como de nitrógeno, creando así un estado de mal- casi normal, debe dirigirse a la eliminación de la MPE y la
nutrición proteica y energética (MPE). Como es sabido, hay restauración del estado nutricional normal mediante ali-
dos tipos de esta última: la forma marásmica (FM) y la forma mentación parenteral, que incluye tanto el nitrógeno como
hipoalbuminémica (FHA). En la MPE FM, que representa la energía necesarias para recuperar la reserva de aminoáci-
una adaptación metabólica a la inanición, hay un déficit tan- dos, restableciendo la condición anabólica y volviendo a sin-
to de energía como de nitrógeno. La hipoinsulinemia consi- tetizar las proteínas viscerales deficientes.
guiente favorece la lipólisis y la proteólisis de los músculos La patogenia de la MP tras DBP es, por tanto, multifac-
esqueléticos que proporcionan aminoácidos para preservar torial, dependiendo de algunas variables (biológicas) relacio-
las reservas viscerales y la síntesis hepática de glucosa nece- nadas con la intervención (volumen gástrico, longitud de las
saria para el metabolismo cerebral, cardíaco y renal, y para ramas intestinales, capacidad individual de absorción y adap-
la oxidación de ácidos grasos. Ello, junto con el ahorro de tación intestinal, cantidad de pérdida de nitrógeno endóge-
proteínas debido a un balance de energía negativo, asegura no) y otras variables (psicológicas y ambientales) relaciona-
la homeostasis energética y proteica. El resultado es una pér- das con el paciente (hábitos alimentarios personales,
dida de peso debida a la reducción de tejido adiposo y masa capacidad de adaptarlos a las necesidades, nivel socioeconó-
muscular en un estado de completo bienestar. En cambio, en mico). En la mayoría de los casos la MP se limita a un solo
la MPE FHA, el déficit de nitrógeno se asocia con un apor- episodio que ocurre durante el primer o segundo año, al
te energético (de carbohidratos) normal o casi normal. El predominar los factores relacionados con el paciente. La
proceso da lugar a una hiperinsulinemia, que inhibe tanto la aparición diferida de MP esporádica es cada vez menos fre-
lipólisis como la proteólisis del músculo esquelético. No cuente a medida que pasa el tiempo.66 Los factores relacio-
pudiendo utilizar sus reservas de proteínas y en ausencia de nados con la operación son de mayor importancia en la for-
ahorro de proteínas, el organismo reduce la síntesis visceral ma recurrente de MP, que normalmente se debe a una
de proteínas, con las consiguientes hipoalbuminemia, ane- malabsorción excesiva y requiere un alargamiento de la rama
mia e inmunodepresión. Se llega así a un estado de enferme- común. Rara vez se debe a una duración excesiva del meca-
dad grave, con peso corporal inalterado o aumentado, con la nismo de limitación de comida (descenso permanente del
misma cantidad de tejido adiposo y con una composición apetito y aparición de síndrome posprandial), normalmente
corporal patológicamente modificada, con descenso de la junto con una ingesta baja de proteínas, lo cual puede nece-
masa celular visceral y aumento del agua extracelular. sitar una reparación del tránsito intestinal.6,67
Durante el primer período subsiguiente a DBP, el man- Además del aumento en la pérdida de nitrógeno endó-
tenimiento de la homeostasis proteica, ya amenazado por el geno, con el correspondiente impacto en las necesidades
balance negativo de energía y proteínas debido a la limita- diarias de proteínas, otro fenómeno importante que actúa en
ción de comida, podría complicarse más aún a través de una el mismo sentido es el sobrecrecimiento de la flora bacteria-
mayor pérdida de nitrógeno endógeno. Si los pacientes ope- na del colon. Esta última no afectaría a las necesidades pro-
rados dedican su reducida capacidad de comer a alimentos teicas si las proteínas no se absorbieran por la mucosa del
ricos en proteínas, deben compensar la pérdida y, como los colon. Hemos demostrado que tanto en la DBP como en
individuos con inanición, desarrollarán MPE FM, que es el sujetos intactos, el colon tiene capacidad de absorber alrede-
objetivo del procedimiento. Si, al contrario, comen princi- dor del 50% de una carga de 10 g de albúmina infundida
palmente carbohidratos, la pérdida de nitrógeno hace que la directamente al ciego.17 Esta capacidad de absorción es con-
MPE FHA sea aún más grave que la que aparece en los casos siderable y se aprovecha al máximo en la DBP. Si tenemos en
del kwashiorkor. Paradójicamente, la MPE FHA es más sua- cuenta que en el experimento anterior se administraba la
ve que en los que ingieren carbohidratos. Entre los dos albúmina en bolo, mientras que en nuestro estudio de absor-
Capítulo 29 • Derivación biliopancreática 249

ción la fracción de los 60 g de proteínas de la comida no estudio en colaboración con el Dr. Thomas Stanley, VA
absorbida en el intestino delgado alcanzaba el ciego diluida Hospital, Los Angeles, 1984).
por el tránsito intestinal, debemos concluir que el colon es
un lugar muy importante para la absorción de proteínas en
la DBP. Por tanto, el sobrecrecimiento de la flora bacteriana, Z MORTALIDAD TARDÍA
cuya síntesis ocurre parcial o totalmente a expensas de las
proteínas alimentarias que han escapado a la absorción en el La mortalidad tardía específica fue de 3 casos de malnutri-
intestino delgado, reduce la absorción de proteínas por la ción proteica (mal tratada en otro sitio) y de 1 caso de ence-
mucosa del colon, aumentando así la malabsorción proteica falopatía de Wernicke. La mortalidad semiespecífica (es
y las necesidades de proteínas. decir, aquella en la que la intervención se considera una cau-
Es interesante observar que en la DBP hay una especie sa remota de la muerte) incluía 6 casos de cirrosis alcohólica
de mecanismo de compensación entre la mayor pérdida de (el efecto farmacológico del alcohol se ve aumentado por la
nitrógeno endógeno y el sobrecrecimiento bacteriano, por gastrectomía distal debido a una absorción intestinal más
un lado, ambos debidos a la malabsorción y ambos causando un rápida) y 4 casos de obstrucción de la rama biliopancreática
aumento en las necesidades de proteínas, y, por otro de com- (sin diagnosticar o no diagnosticada a tiempo).
pensación de la ingesta alimentaria, que ejerce una acción
protectora contra la malnutrición proteica. En realidad, los
sujetos sometidos a DBP que comen más, con mayor malab- Z ALARGAMIENTOS Y REPARACIONES
sorción, tienen una probabilidad más elevada de experimen-
tar pérdida de nitrógeno endógeno y sobrecrecimiento bac- A excepción de 8 casos que requirieron una gastrectomía
teriano en el colon, aunque ello se compensa con una mayor más alta requerida por estenosis de la GEA tras úlcera esto-
ingesta de proteínas. Por el contrario, los sujetos sometidos mal, casi todas las reoperaciones específicas tardías tras la
a DBP que comen menos tienen una probabilidad menor de DBP consistieron en alargamientos de la rama común o
que concurran en ellos estos dos factores que harían reparaciones del tránsito intestinal por malnutrición protei-
aumentar las necesidades proteicas. Evidentemente, este ca (con o sin problemas añadidos). Puesto que ambas reope-
fenómeno no favorece a los sujetos con mayor ingesta de ali- raciones suelen llevarse a cabo para corregir un efecto exce-
mento pobre en proteínas. sivo de la operación original, e implican una modificación
permanente de la absorción intestinal, es crucial asegurarse
de que los mecanismos de adaptación intestinal se han com-
Z COMPLICACIONES TARDÍAS MENORES pletado, lo cual requiere al menos 1 año. Si los problemas
O POCO FRECUENTES persisten, la reintervención está indicada y el riesgo de rein-
tervenir prematuramente, con una sobrecorrección y una
Entre los 1555 pacientes sometidos a DBP AHS con un ganancia de peso indebida resultantes, es mínimo.
seguimiento mínimo de 2 años, se observaron o publicaron El alargamiento de la rama común está indicado siempre
las siguientes complicaciones menores o excepcionales: que una MP recurrente aparezca en un sujeto con DBP con una
67 (4,3%) casos de hemorroides, 28 (1,8%) casos de fisuras ingesta de comida normal. En este caso, la MP se debe a
anales, 6 (0,4%) casos de absceso perianal, 53 (3,4%) casos de una absorción intestinal de proteínas insuficiente, ya sea absolu-
acné, 10 (0,6%) casos de furunculosis inguinoperineal, ta (insuficiente capacidad de absorción por unidad de longitud
41 (2,6%) casos de ceguera nocturna, 4 casos de lipotimia intestinal, tránsito intestinal demasiado rápido por un estómago
debida a hipoglucemia, 2 casos de síndrome de vaciamiento demasiado pequeño) o relativa (contenido insuficiente en proteí-
rápido transitorio, 1 caso de artritis por derivación intestinal nas en la comida ingerida, pérdida excesiva de nitrógeno endó-
y 1 caso de íleo biliar. geno). En ambos casos el objetivo de la revisión quirúrgica es
La halitosis tras la DBP puede deberse bien al estanca- aumentar la absorción de proteínas. Dado que la absorción de
miento de los alimentos en un estómago virtualmente aclorhí- proteínas tras la DBP depende principalmente de la longitud
drico, lo que puede evitarse mediante una ejecución correcta intestinal total de la GEA a la VIC, el alargamiento de la rama
de la gastroenterostomía, o bien a la espiración pulmonar de común para corregir la MP recurrente debe realizarse a costa de
sustancias malolientes resultantes de la malabsorción, que la rama biliopancreática. Según nuestra experiencia, la longitud
puede tratarse con la administración oral de enzimas pan- efectiva en todos los casos es de 150 cm, con resultado de un
creáticas. Este efecto colateral indeseable se ha vuelto menos total del 400 cm de intestino delgado en el tracto digestivo.
común en nuestra serie, afectando a menos del 5% de los El número total de revisiones en los 1639 sujetos some-
pacientes operados. tidos a DBP AHS, con un seguimiento mínimo de 1 año, fue
La DBP produce hiperabsorción de oxalato, pero no de 112 o 6,8%; 77 (4,7%) fueron alargamientos de la rama
hiperoxaluria, aunque la excreción urinaria de oxalato en común y 35 (2,1%) fueron reparaciones del tránsito intesti-
pacientes operados es significativamente más alta que en los nal. Al considerar tres grupos al principio de la evolución
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de controles.68 El procedimiento podría por ello considerar- tras DBP AHS, la tasa de revisiones en estos tres grupos de
se una causa remota de formación de cálculos renales, 192, 430 y 429 pacientes fue, respectivamente del 10,4%
teniendo en cuenta que ni siquiera la hiperoxaluria puede (alargamientos 8,3%, reparaciones 2,1%); del 11,2% (alarga-
causar esta complicación en ausencia de cofactores, el pri- mientos 7,9%, reparaciones 3,3%) y del 8,1% (alargamientos
mero de los cuales es un descenso del volumen de orina 5,5%, reparaciones 2,6%).
como resultado de la deshidratación. La incidencia de cálcu-
los renales en nuestra serie (5 de 1555, el 0,3%) no difiere de
la de la población general. Obtuvimos 32 biopsias renales Z EVALUACIÓN
por aspiración en relaparotomías a largo plazo en pacientes
con DBP y no se pudo demostrar ninguna alteración micros- Para valorar los resultados de la DBP de acuerdo con los
cópica ni ultraestructural (datos personales no publicados: criterios del Bariatric Analysis and Reporting Outcome System,70
250 Sección V • INTERVENCIONES

en diciembre de 2000 enviamos un cuestionario a los prime- 15. Scopinaro N, Marinari GM, Adami GF, et al: The influence of gastric
ros 1800 pacientes consecutivos sometidos a DBP AHS con volume on energy and protein absorption after BPD. Obes Surg
un seguimiento mínimo de 2 años (máximo 16 años). La tasa 1999;2:125-126.
16. Scopinaro N, Gianetta E, Civalleri D, et al: Two years of clinical
de respuestas fue del 51%. La puntuación total media fue experience with biliopancreatic bypass for obesity. Am J Clin Nutr
5,1  2,2, lo que representa un muy buen resultado; el 3% de 1980;33:506-514.
los pacientes se clasificó como «fracaso», mientras que los 17. Bonalumi U, Cafiero F, Caponnetto A, et al: Protein absorption stud-
resultados fueron «regulares» en el 11%, «buenos» en el ies in biliopancreatic bypass patients. Int J Obes 1981;5:543.
18. Friedman D, Caponnetto A, Gianetta E, et al: Protein absorption (PA)
23%, «muy buenos» en el 40% y «excelentes» en el 23% de and protein malnutrition (PM) after biliopancreatic diversion (BPD).
los casos. Proceedings of the Third International Symposium on Obesity
Surgery, Genoa, Italy, September 20-23, 1987:50.
19. Scopinaro N, Marinari GM, Gianetta E, et al: The respective impor-
Z CONCLUSIÓN tance of the alimentary limb (AL) and the common limb (CL) in
protein absorption (PA) after BPD. Obes Surg 1997;7:108.
20. Scopinaro N, Marinari GM, Camerini G, et al: Energy and nitrogen
Los estudios llevados a cabo durante los últimos años han absorption after biliopancreatic diversion. Obes Surg
aumentado en gran medida nuestro conocimiento de la 2000;10:436-441.
21. Adami GF, Campostano A, Bessarione D, et al: Resting energy expendi-
fisiología de la DBP. Toda esa información nos ha permitido ture in long-term postobese subjects after weight normalization by diet-
hacer un mejor uso del procedimiento, mejorando su renta- ing or biliopancreatic diversion. Obes Surg 1993;3:397-399.
bilidad considerablemente. 22. Greco AV, Tataranni PA, Tacchino RM, et al: Daily energy expendi-
La DBP es el procedimiento más efectivo para el trata- ture in postobese patients. Int J Obes 1993;17:27.
23. Marinari G, Simonelli A, Friedman D, et al: Very long-term assess-
miento quirúrgico de la obesidad. Como cualquier otra arma ment of subjects with “half-half” biliopancreatic diversion. Obes Surg
poderosa, puede ser peligrosa si se utiliza indebidamente. 1995;5:124.
Tras 27 años de investigación cuidadosa y experiencia clíni- 24. Adami GF, Campostano A, Gandolfo P, et al: Body composition and
ca se ha convertido, en nuestras manos, en una operación energy expenditure in obese patients prior to and following biliopan-
muy segura. La curva de aprendizaje ha sido muy prolonga- creatic diversion for obesity. Eur Surg Res 1996;28:295-298.
25. Nelson KM, Weinsier RL, Long CL, et al: Prediction of resting
da, fundamentándose en un proceso de adaptación constan- energy expenditure from fat-free mass and fat mass. Am J Clin Nutr
te de la operación a las características individuales de cada 1992;56:848-856.
paciente, de forma que se pudieran lograr resultados ópti- 26. Holliday MA: Metabolic rate and organ size during growth from
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Capítulo 29 • Derivación biliopancreática 251

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30
Derivación biliopancreática
con cruce duodenal
Douglas S. Hess, M.D.

Entre los años setenta y ochenta se demostró que muchas Este mismo cruce duodenal fue incorporado a la DBP por
operaciones puramente restrictivas fracasaban, al igual que el Dr. Hess, creando una operación bariátrica híbrida, la deri-
las modificaciones y las reintervenciones basadas en la res- vación biliopancreática con cruce duodenal. Se esperaba que
tricción. Así comenzó la búsqueda de un procedimiento que este nuevo procedimiento ofreciera los beneficios de ambos
tuviera mejores resultados a largo plazo y menos fracasos, es procedimientos: la adecuada pérdida de peso a largo plazo de
decir, menos casos de recuperación del peso. La derivación la DBP y la reducción de las úlceras marginales y el síndrome
biliopancreática con cruce duodenal (DBP/CD) se realizó por de vaciamiento rápido con la incorporación del CD.
primera vez en 1998 como reintervención en un paciente en el El primer paciente al que se realizó la DBP/CD fue un
que fracasó un procedimiento restrictivo.1 La DBP/CD incor- hombre de 56 años que se había sometido a una gastroplastia
pora dos procedimientos distintos: la derivación biliopan- transversal 9 años antes, en 1979, cuando pesaba 166 kg. En
creática (DBP), que se había consolidado desde su introduc- 1998, cuando se le practicó la DBP/CD, había ganado peso
ción por el Dr. Scopinaro en 1976,2 y el cruce duodenal (CD), hasta un nivel de 206 kg y tenía un índice de masa corporal
introducido por el Dr. DeMeester en 1987.3 (IMC) de 61 kg/m 2. Además estaba desarrollando una insu-
Al principio, la DBP de Scopinaro se utilizaba sólo para ficiencia cardíaca. Se le realizó una gastrectomía vertical del
reintervenciones en procedimientos restrictivos fallidos, con 70% para crear una restricción gástrica moderada con un
la esperanza de obtener mejores resultados a largo plazo. Se volumen gástrico de 200 mL. La rama alimentaria tenía una
usaba la DBP convencional, incluidos unos pocos casos sin longitud total de 275 cm, de la cual los 75 cm distales forma-
gastrectomía distal. La DBP sin gastrectomía causaba úlce- ban el canal común. 17 años después de la DBP/CD, mante-
ras y estenosis y muchas veces tenía que deshacerse. La DBP nía un peso de 100 kg con un IMC de 29 kg/m2.
con gastrectomía presentaba sus propios problemas, deriva- Tras realizar varias de estas reintervenciones, con buena
dos principalmente del componente distal de la gastrecto- pérdida de peso y satisfacción por parte del paciente, la DBP/CD
mía. Las densas adherencias halladas en el área superior del se convirtió en el procedimiento de elección para todos los
estómago de pacientes previamente grapados dificultaba la pacientes bariátricos, ya fuera en operaciones primarias o en
colocación de las anastomosis, y en ocasiones se formaban reintervenciones. En noviembre de 2004 se habían realizado
úlceras en el lugar de la anastomosis en el estómago superior. 1402 cirugías, de las cuales 159 eran reintervenciones. Hasta
Además, a veces el paciente quedaba con un molesto síndro- hoy, la técnica quirúrgica y los parámetros han permanecido
me de vaciamiento rápido. Estos problemas incitaron a bus- prácticamente iguales que en la primera DBP/CD.
car un método para anastomosar el intestino delgado al duo-
deno o al estómago inferior, lejos del lugar de la cirugía
previa, para reducir la posibilidad de complicaciones. Z RAZONES PARA EL CRUCE DUODENAL
La revisión de la bibliografía sacó a la luz un artículo de
DeMeester que describía el CD.3 La técnica fue desarrollada El CD se ha consolidado como un procedimiento viable para
para tratar el reflujo gastroduodenal, tras el éxito experimental combatir la tasa relativamente elevada de úlceras marginales
en un grupo de 29 perros Mann-Williamson. En ese experi- tras una anastomosis más distal en Y de Roux. Como en los
mento, DeMeester observó que dejando una pequeña porción perros de DeMeester, los pacientes tras DBP en los que se
de duodeno proximal unido al píloro, la incidencia de forma- dejaban en su sitio el píloro y un segmento del duodeno
ción de úlceras se reducía significativamente. Comparó dos gru- tenían una menor incidencia de úlceras. La tasa de compli-
pos: unos con anastomosis directas con el píloro con dos longi- caciones por úlceras es de 0,3%, frente al 3% en la DBP
tudes distintas de yeyuno y otros con porciones del duodeno convencional. La gastrectomía vertical realizada junto con
proximal dejadas en su sitio con dos longitudes distintas de el CD retira gran parte del fondo gástrico productor de áci-
yeyuno. Los grupos con el segmento proximal del duodeno en do, reduciendo así las úlceras marginales.
su sitio experimentaron una marcada reducción de las úlceras y Dejando el píloro y una pequeña porción de duodeno en
las perforaciones. DeMeester aplicó con éxito este conocimien- el tracto digestivo, la DBP/CD es, además, más reversible
to a su práctica clínica en pacientes con reflujo gastroduodenal. funcionalmente que la DBP convencional. Es más, el propio
252
Capítulo 30 • Derivación biliopancreática con cruce duodenal 253

píloro del paciente sigue controlando el vaciamiento gástrico. menudo corre un peligro más inmediato y para el que la
Ello elimina el síndrome del dumping, un problema que apa- pérdida de peso mantenida es vital, sino también para el
rece frecuentemente en pacientes con derivaciones sin CD. paciente con obesidad mórbida que puede pasar a ser super-
mórbida si no se realiza el tratamiento más efectivo a largo
Razonamientos detrás del uso plazo (como en el paciente mencionado anteriormente).
de un procedimiento complejo La DBP/CD es un procedimiento complejo, que nece-
sita un seguimiento estrecho por parte del médico y una
La cirugía bariátrica puede dividirse en tres categorías gene- completa disposición por parte del paciente que asegure el
rales: restrictiva, malabsortiva y de combinación de ambas. cumplimiento de pautas como la toma de vitaminas y otros
Los anillados y grapados gástricos son restrictivos; las deri- suplementos durante el resto de su vida. En cualquier caso,
vaciones gástricas de rama corta en Y de Roux son predomi- partiendo del franco compromiso de médico y paciente, las
nantemente restrictivos, con un elemento insignificante de ventajas de la DPB/CD son numerosas. Si la gastrectomía se
malabsorción, y la DBP/CD, la DBP y la derivación gástrica realiza adecuadamente, rara vez se necesita volver a operar
con rama larga en Y de Roux son ejemplos de cirugías com- en la complicada zona del estómago, incluso en casos de
binadas. La derivación yeyunoileal puramente malabsortiva revisiones tardías y reversiones. Además, muchas patologías
ya no se realiza hoy en día, por sus múltiples complicaciones asociadas, como la hipertensión, la hipercolesterolemia y la
y sus efectos adversos. artritis en las articulaciones que soportan el peso corporal,
Los procedimientos de cirugía bariátrica también se mejoran o desaparecen con tasas más altas que con los pro-
pueden clasificar como simples o complejos. En realidad, cedimientos menos complejos. Los datos actuales para los
ninguna cirugía bariátrica es verdaderamente simple o sin pacientes sometidos a DBP/CD con diabetes tipo II regis-
complicaciones ocasionales. De todas formas, los proce- tran una tasa del 98%, es decir, una tasa de euglucemia
dimientos restrictivos se consideran relativamente simples, (v. figura 30-1). La apnea del sueño y los síndromes de hipo-
mientras que los combinados, como la DBP/CD, se conside- ventilación también son eliminados con la DBP/CD, y los
ran complejos. pacientes están por lo general más satisfechos que los que se
La pérdida de peso a largo plazo y la reducción de pato- someten a otras intervenciones.
logías asociadas con la obesidad grave son importantes obje- El componente malabsortivo de la DBP/CD se relacio-
tivos a tener en cuenta. La técnica quirúrgica inicial para na principalmente con la malabsorción lipídica y depende de
abordar la obesidad de un paciente constituye el elemento la longitud del canal común formado en la rama alimentaria
decisivo para la consecución del éxito, por lo que la elección distal. La longitud de la rama alimentaria afecta sobre todo
de la misma debe realizarse con la máxima atención. Los a la absorción de proteínas y, en cierto grado, a la de carbo-
procedimientos más simples quirúrgicamente pueden ser hidratos. Estas dos ramas se construyen cuidadosamente.
más fáciles de realizar y tener una tasa de complicaciones En lugar de usar una medida convencional para todos los
relativamente baja, pero suelen fracasar a largo plazo, requi- pacientes, un rasgo singular de la DBP/CD es que utiliza
riendo un mayor número de reintervenciones, que plantean una fórmula específica, al tiempo que tiene en cuenta los
nuevas dificultades y mayores riesgos. Una técnica más com- factores individuales de cada paciente a la hora de determi-
pleja y difícil, como la DBP/CD, puede ser la mejor elección nar la longitud de los canales.
para las operaciones primarias. Tal afirmación es válida no Una diferencia vital entre la DBP convencional y la
sólo para el paciente con obesidad supermórbida, que a DBP/CD es el tratamiento quirúrgico del estómago del

PROMEDIO DE GLUCOSA EN SUERO Y PÉRDIDA DE PESO


EN 105 PACIENTES CON OBESIDAD MÓRBIDA
250 100

90

200 80
% de pérdida de peso excesiva

70

150 Glucosa 60
Pérdida
mg/dL

Figura 30-1 Promedio de glucosa


sérica y pérdida de peso en 105 pa- de peso 50
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cientes con obesidad mórbida.


100 40

30

50 20

10

0 0
Inicio 6 12 18 24 30 36 42 48 54 60 72
Tiempo (meses)
254 Sección V • INTERVENCIONES

paciente. La DBP y otros procedimientos implican una más mujeres que varones, y el IMC medio de los pacientes
gastrectomía distal, mientras que el componente restricti- está por encima de 50 kg/m 2 (v. tabla 30-1).
vo de la DBP/CD se logra mediante gastrectomía vertical. La cita inicial se programa por la mañana y se advierte
El estómago nuevamente creado en una DBP/CD conti- por adelantado al paciente que el primer chequeo llevará
nuará funcionando normalmente, ya que el píloro perma- gran parte del día. A su llegada, la enfermera lo medirá y
nece intacto. Aunque la porción de estómago extirpado no pesará, le tomará una fotografía y elaborará una historia
puede sustituirse, el estómago sobrante es lo bastante clínica para que el médico pueda disponer de ella más tar-
grande como para funcionar normalmente, incluso en el de. Luego el paciente visualiza un vídeo de 45 minutos
caso poco probable de que fuera necesario revertir el intes- explicando el procedimiento quirúrgico, los resultados
tino delgado. esperados, sus riesgos y sus posibles complicaciones.
El canal común se construye de 50, 75 o 100 cm. Se Después de que el paciente vea el vídeo, se le presenta al
tienen en cuenta la edad, el sexo, el peso y las enfermedades cirujano, que vuelve a revisar el procedimiento y contesta
asociadas a la hora de decidir cuál de las tres longitudes se a las preguntas del paciente. Es importante que el cirujano
usará cuando las medidas reales estén entre estas cifras. explique al paciente todo lo relacionado con la cirugía,
Si las ramas son demasionado cortas puede desarrollarse incluyendo tanto la relativa complejidad del procedimiento
un déficit de proteínas. El objetivo es formar una rama ali- como sus ventajas. Hay que advertirle del compromiso y
mentaria lo bastante larga para una absorción adecuada de colaboración que se esperan de él. Si ambas partes están de
proteínas, pero no tanto que pueda impedir una pérdida acuerdo en que hay que realizar la cirugía, el nombre del
satisfactoria de peso. Es primordial que las longitudes de las paciente se programa para quirófano. Se escribe una carta
ramas sean de la longitud adecuada en la DBP/CD, y por ello a la compañía de seguros y se entrega una copia al paciente.
se necesitan mediciones exactas para conseguir buenos También debe animársele para que asista a reuniones de
resultados. apoyo mensuales, tanto antes como después de la cirugía,
Al plantear la cirugía bariátrica hay que centrarse en los para hablar con otros pacientes y aclarar sus dudas. La con-
resultados a largo plazo, incluyendo posibles reversiones, sulta inicial con el cirujano se graba en vídeo y se conserva
revisiones y complicaciones. La tasa de revisión tras la DBP/CD como registro permanente.
es menor que la de otros procedimientos más complejos. Las
revisiones que se realizan casi siempre son en la zona del Presentación en el hospital y estudios preoperatorios
intestino delgado, conllevando un simple acortamiento o
alargamiento de la Y de Roux distal. No incluyen el área más Tras la consulta inicial se procede a obtener una analítica
complicada del estómago entre el hígado, el bazo y el dia- básica, con hemograma completo y bioquímica, incluyendo
fragma, en el espacio superior izquierdo del abdomen. Es un estudio de hormonas tiroideas y corticoesteroideas.
habitual que un estómago previamente operado presente También se lleva a cabo una exploración cardiológica que
adherencias, que pueden ser importantes, dificultando las incluya un electrocardiograma. Se programan para otro día
operaciones posteriores. Aunque rara vez son necesarias, una radiografía de tórax, pruebas de función pulmonar y
las reversiones de la porción de la derivación del procedi- radiografías del tubo digestivo superior y de la vesícula
miento pueden llevarse a cabo fácilmente mediante una biliar.
anastomosis laterolateral del intestino delgado proximal. El estudio preoperatorio, incluyendo las pruebas diag-
El objetivo de la cirugía bariátrica compleja es crear una nósticas, es crucial en el proceso de caloración selectiva y
nueva configuración gastrointestinal con la que el paciente es un medio decisivo para detectar anomalías y enfermeda-
pueda vivir cómodamente, mientras se atacan la obesidad, des que necesiten ser tratadas antes de la cirugía. Los
sus efectos debilitantes y sus riesgos. La DBP/CD ofrece pacientes normalmente ingresan en el hospital el día antes
unos excelentes resultados de pérdida de peso a largo plazo, de la cirugía, habiendo sido ya sometidos a la mayoría de las
elimina las patologías comórbidas y presenta una tasa relati- pruebas preoperatorias. Una vez instalados se entrevistan
vamente baja de complicaciones y un elevado grado de satis- con el anestesista y un internista, y se prepara el intestino
facción por parte del paciente. Muchos cirujanos coinciden para la cirugía.
en que los resultados favorables a largo plazo que se obtienen Se administra a los pacientes un anticoagulante intra-
con este procedimiento más complejo compensan los riesgos muscular la noche del ingreso y todas las noches siguientes
e inconvenientes que le son inherentes. durante la estancia en el hospital. El fármaco se administra
al final de la tarde, para que la capacidad de coagulación esté
más baja a la mañana siguiente, cuando se inserte el catéter
Z SELECCIÓN DE PACIENTES Y ESTUDIO epidural antes de la cirugía.
PREOPERATORIO

Primera visita
Tabla 30-1 DEMOGRAFÍA DE LOS PACIENTES
La primera visita con un futuro paciente de cirugía SOMETIDOS A CIRUGÍA BARIÁTRICA
bariátrica es esencial y constituye la primera oportuni- PRIMARIA: PROMEDIOS
dad para educarlo y comprobar si es idóneo para la cirugía. ANTES DE LA CIRUGÍA
Generalmente, el futuro paciente ya ha decidido someterse
Hombres/mujeres 310/932
a la cirugía cuando llega a su primera visita. Sin embargo, Edad en años 33,9 (14-65)
en algunas ocasiones el paciente cambia de opinión o no se Peso inicial (kg) 143 (89-303)
considera un buen candidato. Todos los pacientes deben Porcentaje de peso ideal 226 (147-400)
reunir las condiciones normalizadas de obesidad mórbida Índice de masa corporal 50,9 (35-88)
(45,5 kg por encima del peso ideal) para poder considerar la Exceso de peso (kg) 79,7 (39-228)
cirugía bariátrica. Como norma se suele recibir a tres veces n ⫽ 1243.
Capítulo 30 • Derivación biliopancreática con cruce duodenal 255

Z DETALLES DEL PROCEDIMIENTO para poder apartar el hígado del estómago. El hígado se
sujeta con gasas y con retractor. Seccionando algunos
Tras aplicar anestesia general, se practica una incisión en la vasos gástricos cortos a nivel de la curvatura mayor del
línea media desde el xifoides hasta el ombligo. Se coloca un estómago, el cirujano accede a la transcavidad de los epi-
retractor de Gómez y se explora el abdomen. El procedi- plones. Usando un cauterio o un instrumento cortante, se
miento comienza con una extirpación rutinaria del apéndice seccionan todos los vasos gástricos cortos, desde el píloro
que se efectúa en primer lugar porque facilita la medición hasta el esófago, liberando toda la zona de la curvatura
inicial del intestino. mayor y la pared posterior del estómago y eliminando
Después se mide todo el intestino delgado a lo largo cualquier adherencia. Se seccionan los vasos sanguíneos
del borde antimesentérico, estirándolo completamente con del duodeno a lo largo del lado de la curvatura mayor a
dos pinzas de Pennington, desde el ciego hasta el ligamen- unos 5 cm distales al píloro, y en este momento se pasa un
to de Treitz (v. figura 30-2). Utilizando una regla metálica drenaje de Penrose alrededor del duodeno. Si se realiza
y expresando con valores en centímetros, la enfermera ayu- una maniobra parcial de Kocher se puede palpar el área
dante anota el total de las mediciones. Se colocan varias del drenaje de Penrose para asegurarnos de que está
suturas de seda en el borde del intestino, en la localización proximal al colédoco y a la ampolla de Vater. En esta zona
estimada del canal común proximal y de la rama alimenta- hay que localizar cuidadosamente el colédoco y evitarlo,
ria distal. Las medidas se ajustan tras la medición total del porque cualquier daño podría provocar serias complica-
intestino. La longitud de la rama alimentaria se calcula ciones. Se retira la sonda nasogástrica y se introduce en el
multiplicando la longitud total del intestino delgado por el estómago un dilatador de 40F, que usaremos como medi-
40%. El canal común es la porción distal de la rama ali- da, a lo largo de la curvatura menor, y a través del píloro
mentaria, equivalente al 10% de la longitud total del intes- en el duodeno. Un ayudante sujeta el lado de la curvatura
tino delgado. La rama biliopancreática se une al íleon menor del estómago con pinzas de Babcock, hacia arriba
mediante una anastomosis terminolateral en el punto y a la izquierda.
proximal del canal común. La rama alimentaria se constru- Se mide el estómago nuevo colocando verticalmente
ye en tramos de 25 cm, intentando que la longitud final sea una grapadora de 10 mm a lo largo del lado derecho del dila-
el punto más cercano al 40% de la longitud total. Lo más tador, a una distancia equivalente al ancho de un dedo o
habitual es que la longitud del canal alimentario sea de 250, dedo y medio. Empezando desde el estómago distal, a unos
275, 300 o 325 cm. En pacientes con un intestino delgado centímetros en sentido proximal al píloro, se repite el grapa-
inusualmente corto o largo, pueden usarse longitudes de do tres o cuatro veces, según sea necesario, para extirpar
225 o 350 cm. El canal común debe medir 50, 75 o 100 cm, todo el lado de la curvatura mayor del estómago. Hay que
eligiendo en cada caso la medida que se aproxime más al tener cuidado con la parte en forma del estómago que pre-
10% de la longitud total del intestino delgado. No se usa senta forma de J porque puede estrecharse demasiado en este
anestesia epidural, al menos hasta que se hayan completado punto. Los puntos sangrantes a lo largo de la fila de grapas
las mediciones, ya que puede provocar espasmos en el se suturan con puntos de seda en forma de ocho. Después se
intestino delgado. invierte la fila de grapas con una sutura continua, usando la
La posición de la mesa se pasa de Trendelenburg lige- técnica de Lambert. Se retira el dilatador y se secciona el
ra o plana a una posición de Trendelenburg inversa, para duodeno con una grapadora a unos 4 o 5 cm distal al píloro
un mejor acceso al abdomen superior. Los ligamentos (v. figuras 30-3 y 30-4). La sonda nasogástrica se reintrodu-
triangular izquierdo y falciforme del hígado se inciden ce en el estómago.

Figura 30-2 Medición del intestino


delgado.
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256 Sección V • INTERVENCIONES

Dilatador de 40 French

Grapadora de 100 mm

Rama
Figura 30-3 Grapado del estómago. alimentaria Rama biliopancreática

Se mide el volumen del estómago, llenándolo con


solución salina y azul de metileno. Presionando el esófago
con la mano se evita el reflujo de la solución salina. No se Figura 30-5 Sección transversal del intestino delgado para formar la
realiza una disección alrededor del esófago. Cuando el rama alimentaria y la rama biliopancreática.
estómago está completamente distendido se retira la solu-
ción salina y se mide. Esta medida, añadiéndole 10 mL, se
considera el volumen del estómago. El cirujano también de Valtrac, generalmente con una abertura de 1,5 mm y
ha de comprobar que no haya ninguna fuga. con un diámetro de 25 mm. Si el duodeno del paciente es
El intestino delgado, que se había marcado previamen- más grande de lo habitual, el anillo de Valtrac puede tener
te desde la rama alimentaria, se somete a sección transver- 2 mm de abertura y 28 mm de diámetro. Tras formar la
sal con una grapadora, y se divide el mesenterio usando un anastomosis duodenoileal, el cirujano debe seguir el íleon
cauterio o instrumento cortante todo recto hacia abajo, hacia abajo hasta el ciego para asegurarse de que se ha
hasta que se pueda movilizar el íleon distal (v. figura 30-5). conectado la rama correcta al duodeno. Si durante la inter-
Para evitar la posible conexión de una rama equivocada al vención se descubre que por error se ha unido una rama
duodeno, tanto el borde distal como el proximal secciona- incorrecta al duodeno, puede corregirse con bastante faci-
dos deben marcarse en todas las intervenciones. El cabo lidad. Si no se descubre durante la cirugía dará lugar a gra-
proximal del íleon distal se lleva hacia arriba y retrocólica- ves complicaciones.
mente a la derecha para alcanzar el resto de duodeno de 3 o La anastomosis del duodeno y el íleon también puede
4 cm que sigue unido al píloro. Se anastomosa al duodeno ser terminoterminal, realizándola al menos a 25 mm para
de forma terminoterminal, usando un anillo anastomótico prevenir estenosis. Una estenosis en esta área reduce la
capacidad del paciente para ingerir proteínas y aumenta
la probabilidad de que se formen úlceras, aumentando
así la estenosis. Una ingesta adecuada de proteínas es fun-
damental para el éxito definitivo de la DBP/CD, así que es
importante que el cirujano tome las medidas idóneas para
Estómago de 100 cm3 prevenir la formación de estenosis. Otra posible complica-
ción que hay que evitar en este momento es la obstrucción
alta del intestino delgado, que provendría del retorcimien-
Extirpar to accidental del íleon mientras se pasa por debajo del
colon.
Tras completar la anastomosis del íleon distal al duo-
deno se sutura el mesenterio a la pared peritoneal poste-
Suturas rior para prevenir las hernias internas. El extremo distal
de Lembert del íleon proximal se lleva distalmente al área marcada
con anterioridad en el íleon distal y se realiza una anasto-
Duodeno de 3-4 cm
mosis terminolateral con un anillo anastomótico de
Valtrac (1,5 mm de abertura y 25 mm de diámetro).
Ambas anastomosis pueden suturarse a mano si el ciruja-
no lo prefiere. El mesenterio sobrante se cierra con una
Hígado sutura continua a la anastomosis. Luego se colocan va-
rias suturas discontinuas de seda al otro lado para un mejor
soporte del mesenterio del intestino delgado distal y así
evitar posibles hernias internas. Se cierra el abdomen y se
Páncreas
coloca un drenaje en el lecho de la vesícula biliar y el duo-
Figura 30-4 El estómago se extirpa y el duodeno se secciona. deno.
Capítulo 30 • Derivación biliopancreática con cruce duodenal 257

Dieta postoperatoria Tabla 30-2 LONGITUDES TOTALES


Durante un período de 3 o 4 semanas sólo se permite dieta
DEL INTESTINO DELGADO
líquida rica en proteínas para dar lugar a una cicatrización NÚMERO LONGITUD LONGITUD LONGITUD
adecuada. Después se pasa gradualmente a una dieta blanda DE PACIENTES MÁXIMA MÍNIMA MEDIA (cm)
y luego a una normal. Debe advertirse a los pacientes que a
medida que aumente su ingesta sólida, deben usar la mayor Mujeres 769 997 378 706
parte de su volumen gástrico para proteínas, no para los car- Varones 237 1187 497 776
bohidratos, fácilmente absorbibles. Ambos 1006 1187 378 718
n ⫽ 1006.
Procedimientos simultáneos
Son numerosos los procedimientos simultáneos que se La tabla 30-3 ilustra la variación significativa en por-
pueden llevar a cabo al mismo tiempo que este abordaje centajes de la longitud total del intestino delgado, que resul-
quirúrgico. La apendicectomía rutinaria se realiza a todos ta de usar medidas convencionales en centímetros para crear
los pacientes que tienen apéndice. Esta práctica previene la misma longitud de rama alimentaria en todos los pacien-
la necesidad de una futura intervención de apendicitis y tes. Las 3 primeras filas muestran la misma longitud para las
elimina la posibilidad de que cualquier dolor o problemas ramas (100/250) con distintas longitudes totales del intesti-
en el futuro que deriven de una complicación de la cirugía no delgado. La cuarta fila muestra la longitud más común
puedan confundirse con una apendicitis. También se rea- para el intestino delgado y las ramas de 40% y de 10% de la
liza rutinariamente una colecistectomía a todos los longitud total.
pacientes con vesícula biliar. Esto se hace porque los pa- La primera fila muestra una rama alimentaria del 50%
cientes bariátricos tienen un alto riesgo de desarrollar y un canal común del 16% de la longitud total del intestino
cálculos biliares en el primer año postoperatorio si la vesí- delgado. Ambos son demasiado largos y puede que el pacien-
cula biliar se deja en su lugar. Si se considera necesario se te no pierda peso de forma satisfactoria.
pueden realizar otros procedimientos simultáneos. La segunda fila muestra una rama alimentaria del 33%
y un canal común del 13% de la longitud total del intestino
delgado. Este paciente presentará déficit de proteínas, por-
Z RESTRICCIÓN Y MALABSORCIÓN: RAZONES que la rama alimentaria es demasiado corta. La longitud del
PARA REALIZAR MEDICIONES PRECISAS canal común es aceptable.
La tercera fila muestra una rama alimentaria del 25% y
Malabsorción de lípidos y longitud del canal común un canal común del 10%. Este paciente tendrá bajos niveles
de proteínas y una excesiva pérdida de peso y habrá que revi-
Las pruebas clínicas muestran una relación directa entre el sar la cirugía, ya que sólo el 25% del intestino delgado está
nivel de malabsorción de lípidos y la longitud de la rama disponible para la absorción.
común. La DBP/CD interfiere con absorción de lípidos, La cuarta fila es un ejemplo de longitudes de las ramas
sobre todo derivando la bilis y las enzimas digestivas pan- calculadas mediante porcentajes. La longitud media para el
creáticas a la porción distal de la rama alimentaria, relativa- intestino delgado es de 750 cm. El canal común mide 75 cm
mente corta y conocida como canal común. Si el canal y la rama alimentaria mide 300 cm. Ambos están calculados
común se construye demasiado largo, la reducción en la por la regla del 40% y del 10%. Este paciente perderá peso
absorción de grasas no será suficiente para una adecuada sin efectos indeseables o complicaciones asociadas.
pérdida de peso. Si es excesivamente corto, el paciente puede Si un cirujano prefiere usar canales comunes de la mis-
perder demasiado peso y con el tiempo necesitará una revi- ma longitud en todos los pacientes, una longitud de 75 cm
sión del procedimiento. sería efectiva en casi todos los casos. La tabla 30-4 ilustra
Para obtener un resultado óptimo, la longitud de las el porcentaje del número total de pacientes que tenían
ramas debe calcularse usando un porcentaje de la longi- canales comunes de 50, 75 o 100 cm de longitud. En ella se
tud total del intestino delgado, medido desde el ciego observa que en la inmensa mayoría de los pacientes el canal
hasta el ligamento de Treitz. La longitud correcta para común se había construido de 75 cm. El cirujano, sin
la rama alimentaria es del 40% de la longitud total del embargo, debe ser consciente de los riesgos que conlleva el
intestino delgado del paciente, y el canal común debe usar la misma longitud para los canales en todos los pacien-
medir aproximadamente el 10% de la longitud total tes. En los que presentan un intestino delgado anormal-
del intestino. mente corto o largo, o con otros factores que puedan afec-
Las longitudes basadas en porcentajes facilitan una tar a la pérdida de peso, la elección automática de la
pérdida de peso más coherente y fiable que las simples longitud puede conducir a resultados a largo plazo impre-
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mediciones en centímetros, ya que la longitud total del decibles y menos satisfactorios que los logrados en los
intestino delgado varía considerablemente de unos pacien- pacientes en los que se establece una determinación precisa
tes a otros. Las medidas de la longitud total del intestino de la longitud de los canales.
delgado en una población de 1006 pacientes ilustran la
variación en las longitudes (v. tabla 30-2). La figura 30-6 Malabsorción proteica
contiene un gráfico que muestra 7 combinaciones distin-
tas de longitudes para los canales alimentario y común en Aunque la DBP/CD afecta fundamentalmente a la absor-
centímetros, todas ellas basadas en la fórmula del 10% y ción de lípidos, también disminuye la absorción proteica.
del 40%. Demuestra unos buenos resultados de pérdida El déficit de proteínas puede desarrollarse con el tiempo si
de peso a largo plazo, casi los mismos para todas las com- hay una importante malabsorción proteica. Para prevenir
binaciones. la deficiencia proteica, la rama alimentaria debe construir-
258 Sección V • INTERVENCIONES

% DE PÉRDIDA DE EXCESO DE PESO


110
100
90
80
% de pérdida de peso

70 Figura 30-6 Siete combinacio-


nes distintas de longitudes para
60 50/275 los canales alimentario y común
50/300 en centímetros, basadas en la fór-
50 75/275 mula del 10% y del 40%. Este
75/300
75/350
gráfico muestra unos resultados
40 de pérdida de peso similares para
100/300
30 100/350 todas las combinaciones.

20
10
0
0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10
Tiempo (años)

se tan larga como sea posible, sin llegar a interferir en la


adecuada pérdida de peso a largo plazo. La fórmula del Tabla 30-4 LONGITUDES DEL CANAL COMÚN
40% de la longitud total se calculó teniendo esto en cuenta,
y ha demostrado ser una fórmula adecuada prácticamente NÚMERO
en todos los casos. Existe un creciente consenso sobre este DE PACIENTES LONGITUD (cm) PORCENTAJE
aspecto entre cirujanos bariátricos que realizan este tipo de 321 50 22,9
intervenciones. Se ha publicado que la DBP/CD no produ- 951 75 67,80
ce malnutrición albúminoproteica si los canales común y 130 100 9,30
alimentario se miden como porcentajes de la longitud total n ⫽ 1402.
del intestino delgado.4 El mismo informe también revelaba
que los niveles de albúmina permanecían en niveles bajos o
normales, en obesos tanto mórbidos como supermóbidos
(v. figura 30-7). Los cirujanos que redactaron el informe esta revisión ideal es difícil de realizar desde el punto de
también usaron la fórmula del 40% y del 10%. De todas vista mecánico. Una pauta eficaz, que se ha usado en las
formas se dan pocos casos de deficiencia proteica en pacien- revisiones destinadas a corregir el déficit proteico, es un
tes con DBP/CD. procedimiento que avanza la rama alimentaria proximal-
Se ha propuesto que un canal común más largo mente hacia la rama biliopancreática. Así se incrementa
podría prevenir el problema de la deficiencia proteica. la longitud tanto del canal común como de la rama ali-
Sin embargo, Scopinaro ha publicado que el aumento de mentaria y ha tenido éxito en la mayoría de los casos
la longitud sólo del canal común no intensifica necesaria- (v. figura 30-8).
mente la absorción proteica y, además, tiene el efecto
negativo de reducir la malabsorción de grasas. Scopinaro
descubrió que la absorción de proteínas aumenta signifi- 4,3
cativamente alargando la rama alimentaria. Por consi-
4,2
guiente, la intervención de revisión ideal aumentaría sólo
la rama alimentaria para asegurar la absorción proteica, 4,1
manteniendo un canal común relativamente corto para 4 Albúmina antes
asegurar una pérdida de peso continuada. Por desgracia, de la intervención
3,9
Albúmina después
3,8 de la intervención
3,7
Tabla 30-3 LONGITUD DE LAS RAMAS
POR PORCENTAJES 3,6
⬍50 ⬎50
LONGITUD DEL RAMA CANAL PORCENTAJE PORCENTAJE
INTESTINO ALIMENTARIA COMÚN RAMA CANAL
IMC antes de la intervención
DELGADO (cm) (cm) (cm) ALIMENTARIA COMÚN
N = 26 (⬍50); n = 59 (⬎50) P ⬍ 0,001
500 250 100 50 16
750 250 100 33,30 13,30 Figura 30-7 Los niveles de albúmina permanecieron bajos o norma-
les en 26 pacientes con IMC por debajo de 50 kg/m 2 y en 59 pacientes
1000 250 100 25 10
con IMC por encima de 50 kg/m 2; P ⬍ 0,001. IMC, índice de masa
750 300 75 40 10 corporal.
Capítulo 30 • Derivación biliopancreática con cruce duodenal 259

intervenciones de ese momento. Más tarde se decidió que


podía hacerse más pequeño sin someter al paciente a un riesgo
de complicaciones significativo. Un estómago reducido a 90 o
120 mL restringe suficientemente la ingesta de comida por
parte del paciente y permite que este coma más de lo que se
permite en otras técnicas restrictivas. El estómago se agranda
H con el tiempo y, en un plazo de 2 años, cuando ya se ha perdi-
B
do la mayor parte del exceso de peso, los pacientes pueden
tomar cantidades normales de alimento. Por ello es importan-
te construir un estómago lo bastante pequeño como para que
no se dilate con el tiempo hasta alcanzar un tamaño que pue-
da suponer una ganancia de peso.

Z COMPLICACIONES

Fugas gástricas
La fuga gástrica es una complicación que puede comprome-
Rama alimentaria
ter la supervivencia del paciente y que puede suceder con
Rama biliopancreática cualquier tipo de cirugía bariátrica. Suele aparecer en el pri-
mer o segundo día postoperatorio, aunque puede retrasarse
hasta un mes o más después de la cirugía. Lo más habitual es
que se manifieste entre el primer día y las 3 semanas siguien-
tes a la intervención. De 1402 pacientes sometidos a DBP/CD,
incluyendo reintervenciones, hubo un total de 18 fugas gás-
tricas.
En los primeros 253 casos primarios se usó una cuádru-
ple barrera de grapas y la barrera se suturó con sutura con-
tinua. En este grupo se registró una tasa inaceptable de
fugas del 2,8% (7 fugas). La tasa de fugas cayó notablemente
Figura 30-8 Revisión: avance de la rama alimentaria hacia la rama
biliopancreática. en 1994 tras adoptar el método de Baltasar de invertir el
borde de mucosa con una sutura continua de Lembert.5
A partir de entonces se usó de forma constante una doble
Absorción de carbohidratos línea de grapas e inversión de la mucosa con sutura continua
de Lembert. En los 990 primeros casos en los que se empleó
Una rama alimentaria restringida puede afectar también a la la inversión de la mucosa hubo 6 fugas (0,67%), ninguna de
absorción de carbohidratos, sin que esta limitación sea per- las cuales ocurrió en el período de 4 años comprendido entre
judicial. Dado que el 40% de la amilasa del cuerpo se produ- 2000 y finales de 2004. Así pues, el cambio a la fila doble de
ce en la parótida y en las glándulas submandibulares, la grapas y a la inversión de la mucosa con sutura continua
digestión de los carbohidratos comienza en la boca. Por tan- de Lembert supuso un avance primordial en la prevención de
to, se mantiene una absorción de carbohidratos más que fugas gástricas.
suficiente, incluso con una rama alimentaria restringida. De Los pacientes reoperados presentan un mayor riesgo de
hecho, si la ingesta de carbohidratos es excesiva, la pérdida desarrollar fugas gástricas debido a las numerosas adheren-
de peso será inadecuada. Esta es la razón de que indiquemos cias y filas antiguas de grapas de intervenciones previas.
a los pacientes que mantengan una dieta limitada en carbo- Cada cirugía bariátrica adicional aumenta la posibilidad de
hidratos. Al ser mayor la longitud de la rama alimentaria complicaciones, incluyendo fugas gástricas (v. tabla 30-5).
también aumenta la absorción de carbohidratos. En las 159 reintervenciones (conversiones de procedimien-
tos restrictivos fallidos) hubo 6 fugas gástricas (3,77%). Ello
Volumen gástrico supone un aumento de casi cinco veces la tasa de fugas resi-
trada en los 990 casos primarios realizados. Las fugas se
Con la DBP/CD se forma una gastrectomía vertical para desarrollaron en 2 de 9 pacientes (22,2%) que se habían some-
restringir la ingesta de alimentos del paciente. tido a tres procedimientos bariátricos restrictivos previos.
La gastrectomía vertical, con su peculiaridad de preser-
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var el píloro, se diferencia en gran medida de otras técnicas


bariátricas restrictivas. Sin embargo, el concepto de volumen Tabla 30-5 RESULTADOS TRAS VARIAS
restringido sigue siendo la clave para ayudar a los pacientes a CIRUGÍAS BARIÁTRICAS
perder su exceso de peso. Aunque reducido a un tamaño que NÚMERO NÚMERO NÚMERO
limite la ingesta de comida, el estómago debe construirse de DE PACIENTES DE FUGAS DE CIRUGÍAS PREVIAS PORCENTAJE
manera que sea lo bastante grande como para permitir el con-
sumo de suficientes proteínas y calorías para prevenir la defi- 9 2 3 22,20
ciencia proteica y la pérdida de peso excesiva. 38 3 2 7,89
En las primeras operaciones de DBP/CD los estómagos 112 1 1 0,89
se construían de forma conservadora para que tuvieran un n ⫽ 159 reintervenciones; fugas ⫽ 6; porcentaje de fugas tras
volumen de hasta dos veces el volumen del estómago de las reintervención ⫽ 3,77.
260 Sección V • INTERVENCIONES

Todos sobrevivieron y perdieron peso, aunque menos del


que se hubiera esperado con una DBP/CD primaria. En un Tabla 30-6 FUGAS Y ESTENOSIS
grupo de 38 pacientes con dos cirugías bariátricas previas se EN LA DUODENOILEOSTOMÍA
registró una tasa de fugas del 7,89%. La tasa de fugas en PROCEDIMIENTO/NÚMERO
112 pacientes que sólo tenían una cirugía bariátrica previa DE PACIENTES FUGAS (%) ESTENOSIS
fue del 0,89%, ligeramente mayor que la tasa en pacientes
Anastomosis 1,7 2,5%
con DBP/CD primaria. Aunque estas cifras representan tres terminolateral/119
series relativamente pequeñas, revelan con claridad un ries-
go aumentado de desarrollar fugas gástricas en cada cirugía Anillo anastomótico 1,2 Ninguna
bariátrica sucesiva. Resulta de vital importancia elegir el de Valtrac/1283
procedimiento inicial más efectivo, de forma que el paciente
presente los mejores resultados a largo plazo posibles con la
menor probabilidad de necesitar una segunda cirugía. Tratamiento de las fugas de la duodenoileostomía

Tratamiento de las fugas gástricas Por suerte la mayoría de las fugas de la duodenoileostomía son
pequeñas y pueden tratarse sin necesidad de cirugía. Ello es
Todos los pacientes con fugas gástricas están gravemente enfer- especialmete válido si en la radiografía no hay indicios de for-
mos y deben ser explorados tan pronto como estén estables. mación de abscesos, como niveles hidroaéreos cerca de la zona
Estos pacientes están deshidratados, pueden estar sépticos y de fuga, y si la zona no está séptica. El tratamiento conserva-
necesitan líquidos y antibióticos IV de inmediato mientras se dor implica no tomar nada por boca, nutrición parenteral
preparan para someterse a cirugía. Una radiografía gastrointes- total, antibióticos y observación minuciosa. Normalmente no
tinal superior previa a la intervención ayuda a localizar la fuga, hace falta usar aspiración nasogástrica.
que puede no encontrarse fácilmente durante el abordaje qui- Si la fuga es grande y la zona está séptica, es necesario
rúrgico. Hay que colocar numerosos drenajes cerca de la fuga drenar la zona quirúrgicamente. Una sonda de alimentación
y en el absceso durante la cirugía. No es necesario encontrar o yeyunal debe colocarse en la rama biliopancreática, para
suturar la fuga porque la reparación finalmente fracasaría. Se establecer un soporte nutricional a largo plazo mientras la
coloca una sonda de alimentación en el yeyuno, sobre la rama fuga se cierra. La sonda de alimentación permite al paciente
biliopancréatica, para la posterior alimentación por sonda. La ser dado de alta antes del cierre completo de la fuga.
anastomosis del duodeno y la distal en Y de Roux se revisan
para asegurarse de que no haya más escapes. Fugas de la Y de Roux distal
En el postoperatorio el paciente debe permanecer en la
unidad de cuidados intensivos, con antibióticos y nutrición Una fuga en la zona de derivación gástrica distal en Y de
parenteral total. Es posible que requiera un respirador. Cuando Roux amenaza la supervicencia del paciente y es difícil
esté estable (afebril y con un tubo digestivo funcional, etc.) de diagnosticar. Dado que no es frecuente y que las radiogra-
puede empezar gradualmente a recibir alimentación por son- fías de rutina a menudo no muestran una fuga en la Y de
da. El suplemento de la alimentación debería ser una solución Roux distal, puede pasar fácilmente inadvertida. Sin embargo, el
al 50% rica en proteínas y baja en carbohidratos; 1500 calorías uso de un anillo de Valtrac en la anastomosis sí se ve en la
por día serían lo apropiado para conservar las proteínas. El uso radiografía, permitiendo visualizar la fuga. El cirujano debe
de soluciones al 50% previene el atasco de la sonda de alimen- estar atento a la posibilidad de dicho escape. El autor ha
tación. Al paciente se le dará de alta con alimentación por son- debido tratar una fuga en la Y de Roux distal en 1402 casos.
da y puede seguir así durante varios meses. Se diagnosticó mediante una laparotomía exploratoria por
sepsis en un paciente que tenía escape de aire alrededor del
Fugas de la duodenoileostomía drenaje de Penrose. La fuga estaba en una anastomosis gra-
pada de la Y de Roux distal, que se trató sacando del abdo-
La fuga de la duodenoileostomía es exclusiva de la DBP/CD y men los cabos de la anastomosis para formar una pequeña
puede darse en cualquier paciente. Es una zona de anastomosis fístula intestinal controlada. Al paciente se le administraron
complicada por la cercanía de conductos, vasos y órganos vita- antibióticos, líquidos intravenosos y nutrición parenteral
les, como el colédoco, el páncreas, la vena porta y multitud de total. La fístula controlada se cerró más tarde sin problemas.
pequeñas arterias que hay en la zona circundante inmediata. La Si la fuga en la Y de Roux distal se detecta precozmente,
complejidad de esta zona se ve aumentada en los pacientes con cuando no hay más que una mínima infección, puede cerrar-
obesidad mórbida, ya que se sitúa en una posición muy profun- se en el momento de la cirugía reparadora. En cualquier
da en el abdomen, rodeada de tejido adiposo, y a menudo es caso, hay que drenar la zona.
difícil identificarla y aislarla. Aunque las fugas en esta zona son Con su inicio en 1994, la anastomosis terminolateral en
por lo general pequeñas, puede suceder que sean grandes y crí- Y de Roux distal se creó usando un anillo anastomótico de
ticas. En las primeras 119 operaciones, el íleon se suturó al duo- Valtrac. Este aparato se usó en más de 1280 anastomosis dis-
deno a mano con una anastomosis terminolateral. Hubo 2 fugas tales en Y de Roux, y a partir de entonces no hubo más fugas
(1,7%) y 3 estenosis (2,5%) que requirieron intervención qui- ni obstrucciones.
rúrgica. A principios de 1994 el anillo anastomótico de Valtrac
se usaba para todas las anastomosis pequeñas del intestino. El Otras complicaciones
anillo simplifica el proceso y resultó en anastomosis mejores y
sin estenosis. La tasa de fugas descendió al 1,2%. Desde enton- Existen otras complicaciones que pueden darse en un pacien-
ces se han introducido mínimos cambios en la técnica, como el te, de cualquier tamaño, que se someta a cirugía. Sin embar-
uso de una doble sutura en bolsa de tabaco y el uso de cola de go, el riesgo de complicaciones es considerablemente mayor
fibrina alrededor de la anastomosis, con la esperanza de que la cuando se opera a pacientes con IMC comprendido entre 40 a
tasa de fugas disminuya (v. tabla 30-6). 90 kg/m2. En cualquier caso está presente el riesgo de las
Capítulo 30 • Derivación biliopancreática con cruce duodenal 261

complicaciones quirúrgicas habituales, añadido al de las espe-


cíficas de los pacientes con obesidad mórbida (v. tabla 30-7). Tabla 30-7 COMPLICACIONES
Las úlceras marginales en el borde del intestino delgado
y el duodeno son algunos de los riesgos adicionales en la COMPLICACIONES NÚMERO PORCENTAJE
cirugía de DBP/CD. Los autores han tratado una úlcera Atelectasia 187 13,3
marginal en un paciente de DBP/CD. Tres pacientes más Neumonía 26 1,8
fueron tratados en otros hospitales. La hemorragia derivada Embolia pulmonar 2 (mortales) 0,14
de estas úlceras puede ser importante y la intervención de las Embolia pulmonar no mortal 3 0,21
úlceras sangrantes en estos pacientes es compleja, debido a SDRA 4 0,29
las adherencias en la zona gástrica. Tromboflebitis 3 0,21
En todas las cirugías bariátricas que implican una rama Úlcera gástrica 3 0,21
larga o corta en Y de Roux, incluyendo la DBP/CD, hay una
Fuga del conducto quístico 2 0,14
mayor incidencia de obstrucción de intestino delgado. Yo he
Úlcera marginal 4 0,29
operado de obstrucción intestinal a 11 de mis pacientes de
Complicaciones tardías
DBP/CD, y sé que otros 3 pacientes míos se han operado en
Obstrucción duodenoileal 3 0,21
otros centros. La mayoría de las obstrucciones se debían a
Obstrucción del intestino delgado 14 1,03
adherencias abdominales. De ellos, 3 estaban directamente
relacionadas con hernias internas y afectaban a la rama bilio- n ⫽ 1402.
pancreática. La obstrucción en la porción de la rama bilio- SDRA, síndrome de distrés respiratorio agudo.
pancreática no se ve en las placas normales tomadas con el
paciente en pie y tumbado que se usan para diagnosticar las es necesario administrarle hierro intramuscular o intravenoso,
obstrucciones de intestino delgado, dado que no se observan o bien se le ha de practicar una transfusión sanguínea.
niveles hidroaéreos. Para establecer el diagnóstico puede ser En el 20.° encuentro anual de la American Society for
necesario un examen con tomografía computarizada. Es Bariatric Surgery se informó de que casi todos los pacientes
posible que el paciente sólo sienta leves molestias abdomina- bariátricos con anemia pueden tratarse con éxito simple-
les, o bien que muestre signos y síntomas graves. Para mini- mente administrando hierro por vía oral.8 Los pacientes de
mizar la probabilidad de desarrollar una obstrucción de los que hablaba el informe mantuvieron niveles de hierro
intestino delgado, es importante cerrar correctamente el de 11,6 mg/dL a los 2 años de la cirugía, y 11,9 mg/dL a los
mesenterio del intestino delgado en el momento de la ciru- 3 años, independientemente de si habían sido tratados por
gía original. Cualquier paciente con una derivación gástrica anemia. Se recomendó dar suplementos de hierro a todas las
en Y de Roux con dolor abdominal severo debe ser llevado a mujeres durante los años de menstruación.
quirófano sin demora, ya que con frecuencia el proceso obe- En el postoperatorio de cualquier paciente bariátrico
dece a obstrucción de una hernia interna, que podría condu- también puede registrarse hipoproteinemia, ya que tanto el
cir con facilidad a una gangrena intestinal si no se trata qui- estómago restringido como la derivación de intestino delgado
rúrgicamente de inmediato. dificultan la absorción de las proteínas de la dieta. Por este
La rabdomiólisis es una complicación descrita reciente- motivo se espera que todos los pacientes tengan una dieta rica
mente en la cirugía bariátrica. El proceso implica necrosis de en proteínas, tomen suplementos y limiten los azúcares refi-
los músculos glúteos e insuficiencia renal, y puede producir la nados y otros carbohidratos para perder peso, a la vez que
muerte. Aunque la enfermedad es habitual en los accidentes mantienen unos niveles normales de albúmina y de los demás
por aplastamiento o reperfusión, parece que también es un valores de laboratorio. Consumir una cantidad adecuada de
riesgo para los pacientes con obesidad supermórbida someti- proteínas es de importancia vital. Si la albúmina cae a un nivel
dos a cirugía bariátrica. Se describió por vez primera en la anómalo, podemos tratar al paciente con albúmina y otras
cirugía bariátrica en la American Surgical Association en abril enzimas pancreáticas con comidas proteicas. Si el problema
de 2003.6 El informe trataba de 5 pacientes que desarrollaron persiste puede ser necesario revisar la Y de Roux distal.
la enfermedad, 3 de los cuales murieron. Todos los pacientes La hipocalcemia también puede aparecer después de
eran hombres y obesos supermórbidos, y todos se sometieron una cirugía bariátrica. Los niveles de calcio se relacionan
a cirugías inusualmente largas. Parece, pues, que un paciente con los de proteínas y deberían ser adecuados si el paciente
con obesidad supermórbida que pasa tumbado varias horas en come bien y toma calcio absorbible, como citrato cálcico o
la misma posición durante una cirugía prolongada puede hidroxiapatito microcristalino, que se absorben 200 veces
correr el riesgo de desarrollar esta grave enfermedad. más fácilmente que el carbonato cálcico. Un paciente que
Prácticamente todos los pacientes de cirugía bariátrica sólo tome carbonato cálcico no será capaz de absorber can-
presentan riesgo de desarrollar anemia. Dado que el ácido gás- tidades adecuadas de calcio.
trico y el factor intrínseco, producidos por el estómago, se Los pacientes bariátricos tienen el riesgo de desarrollar
encuentran disminuidos en los estómagos restringidos, la deficiencias vitamínicas, tanto por el aspecto restrictivo
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

absorción de hierro también disminuye. El Dr. Brolin publicó como por el malabsortivo de la cirugía. Esto ocurre especial-
una tasa de anemia (⬍12 g/dL) en más del 40% de sus pacientes mente con las vitaminas liposolubles, dado que la DBP/CD
bariátricos.7 Sin embargo, si se aplican los baremos habituales afecta principalmente a la absorción de lípidos. Todos los
más estrictamente, las tasas de anemia son mucho más bajas. pacientes deben suplementar su ingesta con vitaminas A y D
En mis pacientes bariátricos con más de 1 año tras la cirugía, solubles en agua.
117 (8%) desarrollaron anemia, para la que recibieron trata- La cohorte usada para valorar los hallazgos de laborato-
miento. Sin embargo, muchos pacientes solicitan a sus médicos rio comprendía 110 pacientes, algunos con un seguimiento de
de cabecera tratamiento para la anemia y otras complicaciones 8 años, otros con 12 años de seguimiento. De los 110 pacien-
menores, por lo que hay que asumir que el nivel real de anemia tes, 8 no tenían informes completos. La mayoría del grupo
tratada es probablemente superior al 8% que se conoce. De vez tenía un seguimiento de 10 años y niveles normales de los
en cuando un paciente desarrolla una anemia grave para la que valores de laboratorio. Todos los resultados promedio de
262 Sección V • INTERVENCIONES

ESTUDIO DE 12 AÑOS
90
80
70
60
% de PEP

Figura 30-9 El estudio revela una pér-


50 dida del exceso de peso del 72% a los
40 12 años, con un 75% de seguimiento.
(Modificado de Hess DS, Hess DW:
30 Obes Surg 2005; 3:408-416, con autori-
zación.)
20
10
0
1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13
Años

laboratorio en los 10 primeros años de la cohorte estaban den- como bueno, para un total del 85% en las categorías de bue-
tro del rango normal. Sin embargo, algunos de estos pacientes no y excelente (v. tablas 30-8 y 30-9). Otro 9% logró una
tuvieron problemas por presentar niveles bajos de proteínas, pérdida de peso aceptable, con un peso estable y curación o
calcio y vitaminas; la mayoría se trataron médicamente, pero reducción de las patologías comórbidas. Ello suma un 94%
algunos necesitaron revisión de la Y de Roux distal (v. el epí- en la categoría considerada como satisfactoria y sólo un 6% en
grafe «Revisiones», más adelante en este capítulo). la categoría calificada de insatisfactoria.

Muertes
Z RESULTADOS
En conjunto, la tasa de mortalidad en pacientes tras DBP/CD
Pérdida de peso es del 0,57% (v. tabla 30-10). Se observa una tasa de mortalidad
mayor en los pacientes con obesidad supermórbida
Los resultados de pérdida de peso en los pacientes de DBP/CD (IMC ⬎50 kg/m2); con un porcentaje del 1,16%, registran una
primaria9 se basan en un seguimiento de 10 años del 92% de tasa de mortalidad 8 veces superior a la de los pacientes con
una cohorte de 182 pacientes consecutivos, todos los cuales obesidad mórbida que tienen un IMC menor de 50, y más de
llevaban al menos 10 años de postoperatorio. llegando algu- 2 veces la tasa de mortalidad general. Un total de 7 de las
nos a los 18 años. El promedio de pérdida de peso en este 8 muertes sobrevenidas con esta técnica eran pacientes catalo-
grupo de 167 pacientes tenía un pico del 80% de pérdida del gados como obesos supermórbidos. Hubo solamente una
exceso de peso a los 4 años, caía al 78% a los 5 años (95% de muerte (0,13%) entre los 796 pacientes con IMC menor de 50.
seguimiento) y se estabilizaba en el 75% de pérdida del exceso Los obesos supermórbidos no sólo tienen un mayor número de
de peso a los 10 años (92% de seguimiento) (v. figura 30-9). El enfermedades asociadas y de mayor gravedad, sino que tam-
estudio a los 12 años indica un 72% de pérdida del exceso de bién presentan un mayor riesgo de muerte como consecuencia
peso, con un seguimiento del 75%. A los 13 años el número de la cirugía en lo que respecta a estas patologías comórbidas.
de pacientes con seguimiento era insignificante.
Los resultados de pérdida de peso se estudian más ade-
cuadamente si consideramos la media de pérdida de peso y Tabla 30-9 RESULTADOS INDIVIUALES
los resultados individuales. Cuando los mismos 167 pacien- EN PÉRDIDA DEL EXCESO DE PESO
tes son agrupados por niveles de éxito, el 52% tuvo una pér-
dida de peso excelente y el 33% alcanzó el nivel considerado PRUEBA REALIZADA RESULTADOS RANGO
Hemoglobina 12,2 12-16
Recuento leucocitario 6,7 4,8-1
Tabla 30-8 RESULTADOS INDIVIUALES
Glucosa 87,0 70-108
EN PÉRDIDA DEL EXCESO DE PESO
Calcio 8,7 8,7-10,5
CLASIFICACIÓN NÚMERO DE PACIENTES PORCENTAJE Proteínas 6,6 6,1-8,0
Albúmina 3,8 3,1-4,9
Excelente 87 52 Bilirrubina 0,59 0,2-1,1
Bueno 55 33 Fosfatasa alcalina 101 37-107
Aceptable 15 9 ALT 24 12-45
Malo 7 4 AST 25 0-55
Fracaso (absoluto) 3 2 Triglicéridos 95 0-199
Bueno-excelente 142 85 Colesterol 136 ⬍200
Satisfactorio 157 94 Colesterol HDL 46 40-60
Insatisfactorio 10 6 Vitamina A 46
n ⫽ 167; todos los seguimientos fueron de 10 o más años. Vitamina D25 20
Grados determinantes (todos los valores mínimos): excelente, pérdida del Vitamina D125 74
80% del exceso de peso (PEP); bueno, 60% PEP; aceptable, 50% PEP;
malo, 40% PEP; fracaso, ⬍20% PEP; satisfactorio, excelente, bueno, n ⫽ 110 (91% de una cohorte de 120).
aceptable; insatisfactorio, malo, fracaso (modificado de Hess DS, Hess DW: HDL, lipoproteína de alta densidad; ALT, alanina aminotransferasa;
Obes Surg 2005; 3:408-416, con autorización). AST, aspartato aminotransferasa.
Capítulo 30 • Derivación biliopancreática con cruce duodenal 263

vés para limpiar el intestino y reabsorberse de forma natural.


Tabla 30-10 TASA DE MORTALIDAD Las secreciones del intestino derivado a menudo se espesa-
DURANTE LOS PRIMEROS 60 DÍAS ban y eran colonizadas por bacterias. De este modo la infec-
POSTOPERATORIOS: 0,57% ción podía llegar a través de la vena porta hasta el hígado. De
forma parecida la malabsorción extrema conducía a una
IMC CAUSA DE MUERTE (UN PUNTO CADA UNA)
deficiencia nutricional (vitaminas, minerales y proteínas)
58 Embolia pulmonar grave, que también podía producir patología hepática.
53 Embolia pulmonar En pacientes con obesidad mórbida es habitual hallar
66 Fuga, peritonitis problemas hepáticos. En la mayoría de los casos la degene-
47 Diabetes, insuficiencia cardíaca, fallo multiorgánico ración grasa ya está presente cuando el paciente decide
74 Obstrucción bronquial bilateral, apnea del sueño someterse a la cirugía. Sin embargo, se ha observado que 2 o
65 Síndrome de hipoventilación, grave 3 años después de la cirugía los pacientes de DBP/CD mejo-
54 Sepsis, exploración negativa ran su función hepática en las pruebas y en la reducción de
61 Fuga, sepsis, taponamiento cardíaco secundario esteatosis hepática en la biopsia.11 Además, yo he tenido
a erosión lineal de PVC varios pacientes con hígado graso inducido por obesidad que
n ⫽ 1402; obesos supermórbidos, n ⫽ 606; 7 casos de 606 ⫽ 1,16%. han experimentado mejoría tras la cirugía, como indicaban
Un caso con IMC ⬍ 50 kg/m 2 de 796 ⫽ 0,13%. las pruebas de función hepática y las eventuales biopsias. No
IMC, índice de masa corporal; PVC, presión venosa central. hay causas conocidas para el empeoramiento de una enfer-
medad hepática tras la cirugía. La simple pérdida de peso
Z OTROS EFECTOS BENEFICIOSOS DE LA DBP/CD mejora la esteatosis hepática, al igual que mejora otras enfer-
medades asociadas a la obesidad mórbida.
Embarazo
Un estudio de los efectos de la DBP/CD en el embarazo Z OPERACIONES ADICIONALES
concluyó que la cirugía era beneficiosa tanto para las madres
como para los bebés, y que el crecimiento y desarrollo de los La revisión o la reversión deben considerarse en pacientes con
niños era normal.10 De las pacientes que eran infértiles antes niveles de proteínas persistente y gravemente bajos, pérdida de
de la cirugía, el 50% quedó embarazada tras la cirugía. No peso excesiva, anemia grave o hipocalcemia. En primer lugar
hubo aumento en la incidencia de aborto o parto prematuro es necesario examinar las causas de las deficiencias. Es posible
ni de vómitos durante el embarazo. Es más, las pacientes que el paciente no esté tomando alimentos con el suficiente
tenían menos dificultades para seguir dietas nutritivas. Los contenido proteico o que no esté tomando las vitaminas y el
niveles séricos de albúmina, hemoglobina y hierro no dife- calcio prescritos. Un abordaje clínico agresivo en un contexto
rían significativamente de los que tenían las pacientes cuan- hospitalario, incluyendo fluidos intravenosos, vitaminas, cal-
do no estaban embarazadas. Los niños de más de 4 años que cio, hierro y albúmina sérica, es necesario para los pacientes
habían nacido tras la DBP/CD de la madre se encontraban con malnutrición grave. También se deben adminsitrar com-
en un estado de salud de bueno a excelente. plejos multivitamínicos y calcio por vía oral. Además, la dieta
La evidencia clínica en mis pacientes revela resultados del paciente debe contener proteínas de alta calidad y enzimas
parecidos en cuanto a la fertilidad y embarazo tras la DBP/CD. pancreáticas tomadas antes, durante y después de cada comida.
No obstante, el manual que se facilita a cada paciente incluye Es conveniente proceder a una serie gastrointestinal superior
una sección sobre la concepción que no aconseja el embarazo con un pequeño estudio intestinal, para asegurar que no hay
en el período postoperatorio temprano, antes de que el peso estenosis ni otros obstáculos para el funcionamiento adecuado
de la paciente se estabilice. Durante la pérdida rápida de del tracto digestivo. Con una estenosis parcial de la anastomo-
peso en el postoperatorio precoz, el estrés nutricional que sis duodenal, la capacidad del paciente para consumir la canti-
padece el cuerpo de la madre dificulta el mantenimiento dad suficiente de proteínas y otros nutrientes está reducida lo
de una alimentación adecuada para el embarazo. De todos que puede dar lugar a malnutrición. Aunque el tratamiento
modos, ha habido varios embarazos en el período postopera- médico agresivo puede curar sin necesidad de operar, los nive-
torio precoz tras DBP/CD y todos han avanzado normalmen- les de las pruebas de laboratorio deben vigilarse estrechamen-
te y han terminado con una descendencia saludable. te tras el alta. En raros casos puede llegar a necesitarse la revi-
sión o la reversión. La decisión de revertir la cirugía debería
Efectos sobre el hígado tomarse con todo tipo de precauciones, ya que el paciente pue-
de recuperar todo el peso perdido.
Uno de los inconvenientes erróneamente alegados más persis-
tentes sobre la DBP/CD es que la técnica empeora u ocasiona Reversiones
deterioro hepático. La fuente de este malentendido puede ser
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

el hecho de que en las derivaciones yeyunoileales se registra- De un total de 1243 pacientes con DBP/CD primaria, 19 (1,53%)
ron diversas complicaciones hepáticas. Estas derivaciones ya se han sometido a reversiones. Las razones son varias, pero nor-
no se realizan hoy por sus numerosas complicaciones, que malmente incluyen pérdida excesiva de peso y malnutrición
incluyen, en efecto, alteraciones en el hígado. Las diferencias proteica. Al menos 3 de las reversiones se realizaron en pacientes
marcadas y vitales entre la DBP/CD y la derivación yeyu- con mala colaboración, no acudiendo a las revisiones durante 4 o
noileal siempre deben tenerse en cuenta. 5 años y que probablemente no tomaban los suplementos pres-
La única parte funcional del intestino delgado después critos. Un paciente era un drogadicto con bajo cumplimiento al
de una derivación yeyunoileal era un canal común de unos que se sometió a la reversión en la primera ocasión.
60 centímetros. La parte derivada sobrante de intestino del- La reversión quirúrgica puede llevarse a cabo creando
gado estaba totalmente desconectada del tracto digestivo, una anastomosis laterolateral entre el yeyuno, justo detrás
sin que pasaran sales biliares ni enzimas digestivas a su tra- del ligamento de Treitz, y la rama alimentaria proximal. Ello
264 Sección V • INTERVENCIONES

crea un paso entre la rama biliopancreática y la alimentaria,


que revierte la malabsorción. Si el paciente presenta un esta- Tabla 30-11 REVERSIONES
do de malnutrición proteica grave, se inserta una sonda ali-
mentaria yeyunal para usarla hasta que el paciente se recu- TIPO DE
pere totalmente (v. figura 30-10). N MOTIVO PRINCIPAL REVERSIÓN RESULTADOS
Otros cirujanos han realizado 10 reversiones. No conozco 1 Falta de disposición para Laterolateral Recuperación
ni los motivos para estas reversiones ni los tipos de procedi- el seguimiento del peso
miento usados. Debido al prejuicio general contra los proce- 2 Diarrea Laterolateral Aumento de peso
dimientos parcialmente malabsortivos, los cirujanos pueden 1 Proteínas bajas, malnutrición Revisión larga Peso estable
haber revertido los procedimientos en vez de intentar revisar- 1 Proteínas bajas, malnutrición Laterolateral Peso estable
los. Alternativamente, estos cirujanos pueden estar entre los 1 Proteínas bajas, malnutrición Laterolateral Peso estable
muchos que simplemente no entienden la DBP/CD. En algu- 1 Excesiva pérdida de peso 2 revisiones Aumento de peso
nos casos el intestino delgado puede revertirse a una configu- proteico
ración relativamente normal, esencialmente creando una deri- 1 Cirrosis, proteínas bajas, Laterolateral Aumento de peso
vación gástrica. En dos casos, y por razones que se desconocen, pérdida de peso
el estómago distal se extirpó (v. tabla 30-11). 1 Tumor ovárico maligno Laterolateral Fallecimiento
10 Otros Desconocida
Revisiones Reversiones ⫽ 19 de 1243 operaciones (1,53%).

En nuestro grupo de 1243 pacientes primarios, se llevaron a


cabo 55 revisiones (4,4%) (v. tabla 30-12). La mayoría de ellas que ninguno de los pacientes perdió más de 9 kg adicionales.
tuvo lugar entre 1 y 2 años tras la operación y se realizaron Sin embargo, la revisión impidió un mayor aumento de peso.
junto con otros procedimientos, como reparaciones de hernias La evidencia clínica muestra que algunos pacientes simple-
incisionales o paniculectomías abdominales. De las 55 revisio- mente dejan de perder peso y se estabilizan con un peso mayor
nes, 31 (2,5%) se realizaron por excesiva pérdida de peso o del esperado.
deficiencia de proteínas y 4 (0,32%) por episodios frecuentes De los pacientes con revisiones, 5 (0,4%) habían estado
de diarrea que no se controlaban adecuadamente. El trata- en el primer grupo de operaciones primarias en las que el
miento de elección en estos dos grupos de pacientes fue alargar tamaño del estómago se hacía mayor. En los 5 casos, los
tanto el canal común como el alimentario, avanzando la rama estómagos se redujeron extirpando más curvatura mayor, y
alimentaria proximalmente hacia la rama biliopancreática. las revisiones resultaron efectivas. La reducción del tamaño
De las 55 revisiones, 7 (0,56%) se realizaron por una del estómago es una revisión efectiva en pacientes con lon-
inadecuada pérdida de peso. En estos pacientes sólo se acortó gitudes de las ramas adecuadas pero estómagos agrandados,
el canal común. Los resultados no fueron satisfactorios, dado que han dejado de perder peso o han ganado peso.
En otros centros se realizaron revisiones en 8 (0,64%)
pacientes. Desconozco las razones y los procedimientos
empleados en ellas.

Reintervenciones para cambiar la técnica


La operación para cambiar la configuración del estómago y el
H
B intestino delgado con respecto a los que se crearon en una ciru-
gía bariátrica previa a una DBP/CD representa un reto singu-
lar. Según mi experiencia, estos procedimientos se realizaban a
menudo para modificar una técnica restrictiva fallida.

Tabla 30-12 REVISIONES


MOTIVO DE
NÚMERO LA REVISIÓN PROCEDIMIENTO PORCENTAJE
31 Excesiva pérdida Avance de la rama 2,49
de peso, proteínas alimentaria sobre
Rama alimentaria bajas la biliopancreática
4 Diarrea excesiva Avance de la rama 0,32
Rama biliopancreática
alimentaria sobre
la biliopancreática
7 Poca pérdida de peso Acortamiento del 0,56
canal común
5 Poca pérdida de peso Reducción del tamaño 0,4
del estómago
8 Desconocida Desconocido 0,64
(en otros sitios)
55 Total de las revisiones 3,9% revisiones 4,4
(de las nuestras)
Figura 30-10 Reversión: anastomosis laterolateral del yeyuno al
íleon, cerca del ligamento de Treitz. n ⫽ 1243.
Capítulo 30 • Derivación biliopancreática con cruce duodenal 265

En estos procesos se encuentran con frecuencia adhe- Al realizar reintervenciones, los cirujanos pueden ser
rencias extensas en el abdomen, especialmente entre el estó- reacios a construir ramas tan cortas como se recomienda en
mago y el hígado. En primer lugar hay que despegar estas pacientes que no están tan obesos como lo estaban al princi-
adherencias, antes de comprobar si puede realizarse una pio y que no parece que tengan que perder una gran cantidad
DBP/CD y cómo. Si la antigua fila de grapas se colocó ver- de peso. Sin embargo, las ramas demasiado largas no ofrecen
ticalmente, como en la gastroplastia vertical anillada, la nue- los mismos resultados de pérdida de peso y el paciente podría
va línea vertical de grapas debe colocarse dentro, en el lado llegar a estar tan obeso como antes de la primera operación.
de la curvatura menor de la antigua línea de grapas. Este Las ramas deben hacerse de la longitud adecuada. No es difí-
emplazamiento permite un buen aporte sanguíneo y dismi- cil revisar el intestino delgado en un paciente que pierde
nuye las probabilidades de fuga. El anillo a menudo se des- demasiado peso. Una revisión por poca pérdida de peso es
gasta, por lo que el cirujano debe decidir cómo solucionar el mucho más difícil e insegura.
problema. Yo suelo abrir el estómago por el lado de la cur-
vatura mayor y reseco el anillo desgastado, retirando tanto
como sea posible, y luego suturo la mucosa por encima en Z DBP/CD PARA LA OBESIDAD
esa zona. EN ADOLESCENTES
Con una gastroplastia transversal también se abre el
estómago por el lado de la curvatura mayor y se retiran todas El rápido aumento de la obesidad entre los adolescentes tie-
las grapas antiguas que queden. La antigua línea de grapas ne un efecto devastador en un creciente número de jóvenes.
se sutura dentro del estómago para evitar el sangrado. Junto con los efectos nocivos sobre la salud, la obesidad mór-
Entonces se baja el dilatador y se realiza la gastrectomía ver- bida también puede tener efectos emocionales de por vida.
tical como si fuera un caso primario. Estos adolescentes son intimidados y aislados a menudo por
Si la cirugía previa fue una derivación gástrica con una sus compañeros, en un momento de sus vidas en el que el
rama corta en Y de Roux, la bolsa gástrica proximal puede compañerismo resulta trascendental.
ser muy pequeña por haberse seccionado cerca del esófago. Yo he usado la DBP/CD con éxito para tratar pacientes
La abertura en la porción anterior de la bolsa pequeña donde adolescentes con obesidad supermórbida: 19 adolescentes
se había conectado la bolsa con el intestino debe cerrarse o con edades entre 14 y 18 años se han sometido a la operación.
extirparse al volver a conectar el estómago. Todas las suturas Todos tenían IMC mayores de 50 kg/m2. Uno fue una rein-
deben ser con puntos sueltos para que se pueda grapar verti- tervención tras un procedimiento restrictivo fallido realiza-
calmente a su través sin interferir en la anastomosis. En do 6 años atrás, cuando el paciente tenía 14 años. Antes de la
algunos casos la bolsa gástrica es muy pequeña y puede vol- cirugía inicial, los padres estaban preocupados por un posi-
ver a unirse con el estómago inferior mediante una anasto- ble suicidio, debido a lo deprimido y retraído que se encon-
mosis terminoterminal. Generalmente, la porción del yeyu- traba su hijo. El paciente perdió su exceso de peso y mantu-
no que está por encima del colon se extirpa, para no dejar un vo la pérdida de peso hasta que las grapas fallaron y empezó
trozo tan corto de intestino. La porción de yeyuno extirpada a ganar peso durante su primer año de universidad. En ese
se mide y la medida se añade a la longitud total intestinal al momento se realizó la DBP/CD. Pasados 12 años, se ha casa-
calcular las longitudes de las ramas. El resto del intestino se do, tiene 2 hijos y ha mantenido un peso normal (v. figu-
vuelve a unir a su conexión original. En este punto se puede ra 30-11).
realizar la DBP/CD. Una paciente de 15 años con un IMC de 50, hiperten-
Las reintervenciones, sobre todo las de derivaciones sión y diabetes tipo II se sometió a una DBP/CD primaria.
gástricas previas, son complejas y prolongadas, Para reducir Perdió su exceso de peso y no volvió a padecer hipertensión
la probabilidad de rabdomiólisis, algunos cirujanos reco- ni diabetes tipo II. Se graduó en el instituto con un peso de
miendan realizar la reintervención en dos pasos en pacientes 55 kg y acudió a la universidad con una beca. Del mismo
varones con obesidad supermórbida. Anthone6 y Gagner12 modo, otra paciente que pesaba 228 kg antes de la operación,
recomiendan esta opción. 10 años después pesaba 100 kg y tenía un niño de 2 años.

Figura 30-11 Aunque aquí sólo se % DE PÉRDIDA DE EXCESO DE PESO


alude a 21 pacientes (de edades com- 110
prendidas entre los 14 y los 18 años), el
gráfico sigue los resultados esperados 100
para el porcentaje de pérdida del 90
exceso de peso. De los dos pacientes
% de pérdida de peso

80
de 17 años, uno tuvo un problema
médico durante el noveno año, que 70
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

derivó en un aumento de la pérdida 60


de peso. aunque volvió a ser normal
en los años 10 y 11 sin necesidad de 50 18
cirugía. El otro paciente de 17 años 40 17
se sometió a una conversión a DBP/ 16
CD 7 años antes. Un paciente se 30
sometió, 10 años después de la ciru- 14
20
gía, a conversión de un procedimien- 15
to restrictivo a DBP/CD. El número 10
de pacientes adolescentes era de 1 de 0
14 años, 2 de 15 años, 4 de 16 años, 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11
5 de 17 años, y 7 de 18 años; hubo
2 conversiones a DBP/CD. Tiempo (años)
266 Sección V • INTERVENCIONES

Hubo un caso que fracasó. La paciente no cooperaba categorías de obesidad mórbida, especialmente los pacientes
adecuadamente y 10 años después de la cirugía había vuelto con obesidad supermórbida que presentan un reto mayor de
a ganar peso, de manera que estaba a unos 16 kg de su peso pérdida de peso que el paciente promedio.
original.
Para el paciente adolescente hay varias ventajas de la
DBP/CD. La revisión no suele ser necesaria, al contrario Z BIBLIOGRAFÍA
de lo que sucede en otros procedimientos para tratar la
obesidad. Por otra parte, la DBP/CD permite comer 1. Hess DS, Hess DW: Biliopancreatic diversion with a duodenal switch.
pequeñas cantidades de comida normal con muy pocas Obes Surg 1998;8:267-282.
2. Scopinaro N, Gianetta E, Civalleri D, et al: Biliopancreatic bypass for
restricciones. La característica de mantener el píloro de la obesity: initial experience in man. Br J Surg 1979;66:618-620.
DBP/CD permite un vaciamiento normal del estómago y 3. DeMeester TR, Fuchs KH, Ball CS, et al: Experimental and clinical
previene el síndrome del dumping. Esta capacidad de results with proximal end-to-end duodenojejunostomy for pathologic
comer de modo relativamente normal permite al adoles- duodenogastric reflux. Ann Surg 1987;206:414-424.
4. Keshishian A, Zahriya K: Percentage-based bypass of small bowel
cente disfrutar de la comida en acontecimientos sociales, intestine results in exceptionally low protein malnutrition. American
igual que antes de la cirugía. Otra ventaja para las mujeres Society for Bariatric Surgery, 20th annual meeting; 2003 June 17-22,:
adolescentes es que la DBP/CD no ha mostrado ningún Boston.
efecto perjudicial de cara a un futuro embarazo. Si lo 5. Baltasar A: Video presentation. American Society for Bariatric
Surgery, 11th annual meeting; June 1994: Minneapolis.
desean, estas mujeres pueden tener embarazos y partos 6. Anthone G, Bostanjian D, Hamoui N, et al: Rhabdomyolysis of
normales. Por último, para los pacientes jóvenes es espe- gluteal muscles leading to renal failure: a potentially fatal complica-
cialmente importante poder hacer planes de futuro. La tion of surgery in the morbidly obese. Obes Surg 2003;13:302-305.
oportunidad de una pérdida de peso mantenida a largo 7. Brolin R, Leung M: Survey of vitamin and mineral supplementation
plazo es óptima con la DBP/CD. after gastric bypass and biliopancreatic diversion for morbid obesity.
Obes Surg 1999;9:150-154.
8. Rabkin RA, Rabkin JM, Metcalf B, et al: Nutritional markers follow-
ing duodenal switch for morbid obesity. Obes Surg 2004;14:84-90.
Z CONCLUSIÓN 9. Hess DS, Hess DW, Oakley RS: The biliopancreatic diversion with
the duodenal switch: results beyond 10 years. Obes Surg
2005;3:409-516.
La DBP/CD ha demostrado ser una operación segura y efec- 10. Marceau P, Biron S, Kral JG, et al: Outcome of pregnancies after bili-
tiva para el tratamiento de la obesidad mórbida. Presenta opancreatic diversion. American Society for Bariatric Surgery, 20th
bajas tasas de complicaciones, permite una excelente pérdida annual meeting; 2003 June 17-22,:Boston.
de peso a largo plazo, proporciona altos niveles de satisfac- 11. Biron S, Marceau S: Effects of weight loss after biliopancreatic diver-
sion on liver morphology. Obes Surg 1996;6:121-125.
ción por parte del paciente y es fácil de revisar o revertir. En 12. Gagner M: Complications: Intraoperative, post-op, long-term compli-
ella no se usan materiales extraños y se conserva el píloro. La cations. Course presentation in Laparoscopic Surgery for Morbid
DBP/CD es, pues, efectiva para los pacientes de todas las Obesity, Mount Sinai School of Medicine; May 2003, New York.
31
Procedimientos laparoscópicos
de cruce duodenal y gastrectomía tubular
Crystine M. Lee, M.D., John J. Feng, M.D., F.A.C.S., Paul T. Cirangle, M.D., F.A.C.S., Janos Taller, M.D.,
y Gregg H. Jossart, M.D., F.A.C.S.

La cirugía bariátrica ha evolucionado rápidamente en la últi-


ma década. Han sido descritas la técnica laparoscópica, la
banda gástrica ajustable y una amplia variedad de modifica-
ciones de la derivación gástrica. El presente capítulo trata de
la adaptación del acceso laparoscópico a la intervención de cru-
ce duodenal, la realización del cruce duodenal y el desarrollo
de la gastrectomía tubular vertical como procedimiento en
un tiempo, puramente restrictivo. En el momento de su pre-
paración, los datos revisados en profundidad eran aún muy
escasos; por suerte, los datos de resúmenes, las comunicacio-
nes personales, la experiencia personal y nuestros propios
datos preliminares nos han permitido realizar esta introduc-
ción a la evolución del cruce duodenal y gastrectomía verti-
cal laparoscópicas.

Z OPERACIÓN DE CRUCE DUODENAL


PARA LA OBESIDAD MÓRBIDA
El procedimiento de cruce duodenal (CD) descrito por Hess
y Hess es un procedimiento complejo, o que combina restric-
ción y malabsorción moderadas para lograr un alto grado de
pérdida de peso.1 La operación se realizaba en origen con la
técnica abierta a través de una incisión en la línea media supe-
rior. Los componentes principales de la operación son restric-
ción gástrica a través de una manga con conservación del pílo-
ro o gastrectomía vertical (de células parietales), y malabsorción
por medio de un cruce duodenal con acortamiento funcional
del intestino delgado (v. figura 31-1). El duodeno se secciona a
4 cm distal al píloro y se anastomosa a 250 cm distal al íleon, Figura 31-1 Esquema de la operación de cruce duodenal descrita
con el fin de crear un canal común de 100 cm y una rama por Hess. La operación de cruce duodenal descrita por Hess consiste
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

entérica de 150 cm. La modificación de Hess de la derivación en una gastrectomía tubular a lo largo de una sonda de 60F, una duo-
denoenterostomía, una rama entérica o alimentaria de 250 cm y un
biliopancreática de Scopinaro2 conservaba las anatomías vagal canal común de 100 cm. La pérdida de peso se produce tanto por el
y antropilórica normales, eliminando así el síndrome de vacia- componente restrictivo del estómago tubularizado como por el com-
miento rápido y las úlceras marginales. ponente malabsortivo derivado del acortamiento funcional del intes-
tino delgado.

Z EVOLUCIÓN DE LA CIRUGÍA BARIÁTRICA


LAPAROSCÓPICA Cadiere promovió la gastroplastia laparoscópica para la obe-
sidad en 1994;3 él y otros autores hallaron una mejoría en el
El avance reciente más importante en en ámbito de la cirugía estado respiratorio postoperatorio, menos dolor postopera-
bariátrica ha sido la aplicación de las técnicas laparoscópicas. torio, una movilización más precoz y hospitalizaciones más
267
268 Sección V • INTERVENCIONES

cortas tras la gastroplastia vertical con banda (GVB) lapa-


roscópica.4,5 Los estudios de viabilidad de la derivación gás-
trica en Y de Roux (DGYR) laparoscópica en el modelo por-
cino se realizaron por vez primera en 19956 y su aplicación
fue iniciada en humanos por Wittgrove y cols.7 y por Schauer
y cols.8
El acceso laparoscópico produjo una significativa reduc-
ción de la morbilidad y la duración de la hospitalización.9
Nguyen y cols. demostraron que se podía realizar la DGYR
laparoscópica con menor pérdida de sangre, convalecencia
más rápida y menos dolorosa, menos infecciones y hernias de
la herida quirúrgica y menos estenosis de las anastomosis.10
Según las medidas del SF-36 Health Survey and Bariatric
Analysis of Reporting Outcome System, la calidad de vida en el
período postoperatorio precoz fue mayor, pero a largo plazo
acababa siendo similar en los grupos de laparoscopia y de
cirugía abierta. No hubo diferencias en la pérdida de peso
lograda, tasa de fugas ni mortalidad, a pesar de un mayor
tiempo medio en la mesa de quirófano.10 Figura 31-2 Colocación de los accesos para el cruce duodenal asisti-
do con la mano. Para el cruce duodenal asistido con la mano se usan
una incisión periumbilical de 8 cm y tres accesos. Se mide todo el intes-
tino delgado y se crea la anastomosis distal a través de la incisión
Z EVOLUCIÓN DEL CRUCE DUODENAL periumbilical. Entonces se coloca el instrumento de Handport y el
LAPAROSCÓPICO cirujano introduce su mano izquierda para facilitar el resto de la inter-
vención. Un acceso de 10 mm para la cámara se coloca en el cuadrante
Aunque la operación de CD se ha promovido como uno de medio derecho y se disponen dos accesos de 12 mm en las regiones
subcostales derecha e izquierda.
los procedimientos más efectivos en la pérdida de peso,11-13
la complejidad técnica y la preocupación por los efectos
malabsortivos a largo plazo han limitado su uso. Incluso
cuando se realiza en abierto, la demanda de conocimientos Se mide todo el intestino delgado y se crea la anastomosis
técnicos y de tiempo que conlleva un CD, con al menos cua- distal a través de esta incisión. Usando el Handport o un
tro filas de grapas y dos anastomosis, en ocasiones es un instrumento similar, la mano izquierda se introduce por la
problema imposible de solventar. Dada la dificultad técnica incisión periumbilical y se usa para facilitar el resto de la ope-
de la operación de CD, las técnicas asistida por laparoscopia ración. Se abre un acceso para cámara de 10 mm en el cua-
y asistida con la mano se han sumado a los accesos totalmen- drante superior derecho y dos accesos de 12 mm en las regio-
te laparoscópicos.14 nes subcostal derecha e izquierda. El resto de la operación se
realiza de forma similar a la descrita anteriormente (v. figu-
Técnica asistida por laparoscopia ra 31-4).
La técnica asistida con la mano facilitó la transición del
Con el acceso asistido por laparoscopia, la gastrectomía y acceso asistido por laparoscopia al planteamiento totalmen-
duodenoenterostomía se realizan laparoscópicamente. Se te laparoscópico. El tiempo en quirófano fue significativa-
marca el píloro con una sutura de seda y se realiza una manio-
bra de Kocher. El duodeno se secciona 4 cm distal al píloro
con una grapadora lineal. Se puede realizar una biopsia hepá-
tica, una colecistectomía y una apendicectomía. La curvatura Asistida con la mano Totalmente laparoscópica
mayor del estómago se extirpa y se practica una gastrectomía
vertical tubular sobre una sonda de 52F con grapas lineales.
A continuación se prepara el duodeno, colocando un yunque
circular, ya sea transoral o transabdominal, a través de la línea
de grapas duodenal. Después se amplía el acceso periumbili-
cal a 4 cm, permitiendo la extirpación del estómago, la vesí-
cula biliar y el apéndice. Se mide todo el intestino delgado
extracorpóreamente y se crea la anastomosis distal. La grapa-
dora circular se coloca dentro de la luz del íleon, se saca por la
incisión periumbilical y se acopla al yunque en el duodeno. Se
forma una anastomosis proximal antecólica o retrocólica, y el
Figura 31-3 Esquema de la localización de los accesos para el cruce
cabo abierto del íleon se cierra con una grapadora lineal. duodenal asistido con la mano y el totalmente laparoscópico. Este
Posteriormente se introduce azul de metileno en el estómago esquema compara la localización de los accesos para el cruce duodenal
por una sonda nasogástrica y, mientras se pinza el íleon, se asistido con la mano y el cruce duodenal totalmente laparoscópico.
examinan la bolsa y la anastomosis proximal en busca de posi- Para la intervención asistida con la mano, el cirujano se sitúa a la
bles fugas, y se realiza la medida del volumen de la bolsa. izquierda del paciente, con su mano izquierda en el Handport y la dere-
cha trabajando a través del trócar del cuadrante superior izquierdo. El
ayudante sujeta la cámara con la mano derecha y un instrumento con
Técnica asistida con la mano la izquierda. Para el cruce duodenal totalmente laparoscópico, el ciru-
jano y el ayudante intercambian su posición varias veces a lo largo de la
La técnica asistida con la mano se realiza mediante una inci- operación, usando distintas configuraciones de los trócares en cada
sión periumbilical de 8 cm y tres accesos (v. figuras 31-2 y 31-3). parte.
Capítulo 31 • Procedimientos laparoscópicos de cruce duodenal y gastrectomía tubular 269

cópico fue posteriormente publicado por Ren y Gagner en


una serie de 40 pacientes. 29
Se han descrito numerosas variaciones en el acceso
totalmente laparoscópico (v. tabla 31-1), incluyendo cómo
realizar la duodenoenterostomía (grapadora circular, grapa-
dora mecánica, sutura a mano), si la duodenoenterostomía
debe ser ante- o retrocólica, la longitud del canal común y el
tamaño de la gastrectomía vertical.

Z GASTRECTOMÍA TUBULAR LAPAROSCÓPICA


PARA LA OBESIDAD MÓRBIDA
El procedimiento de gastrectomía vertical (también llamado
gastrectomía vertical tubular, gastrectomía tubular, gas-
trectomía de la curvatura mayor, gastrectomía parietal,
Figura 31-4 Localización de los accesos para el cruce duodenal total- reducción gástrica e incluso gastroplastia vertical) es una
mente laparoscópico. Es característica la colocación de seis trócares. operación puramente restrictiva que realizan unos 20 ciru-
Tanto el cirujano como el ayudante comienzan a la izquierda del janos en todo el mundo. Los datos históricos al respecto
paciente para crear la anastomosis distal y el canal común. A continua-
ción, el ayudante se cambia a la derecha del paciente para facilitar el sugieren que la operación de CD permite lograr una pérdida
paso del intestino delgado a través de un túnel retrocólico y la creación de peso mayor que la DGYR, y por ello se ha considerado el
de la duodenoenterostomía. Se puede practicar la gastrectomía de la procedimiento más efectivo para perder peso en los pacien-
curvatura mayor con conservación del píloro a lo largo de una sonda tes superobesos.1,11 Los inconvenientes de la operación son
tanto antes como después de la duodenoenterostomía. Por último, si su dificultad técnica y su tasa de mortalidad, de la que se han
está indicado, puede realizarse una colecistectomía. comunicado valores de hasta el 23%19-21 (v. tabla 31-2). Son
los pacientes superobesos, que normalmente presentan nu-
merosas patologías comórbidas y un mayor riesgo quirúrgi-
mente más corto al utilizar la técnica asistida con la mano co, los que paradójicamente más necesitan esta difícil opera-
(media de 191 minutos y rango de 105 a 360 minutos) que ción para lograr una adecuada pérdida de peso.
con la técnica asistida por laparoscopia (media de 322 minu- Realizar sólo el componente restrictivo del CD, es decir,
tos y rango 220 a 480 minutos). Además, se registró una una gastrectomía vertical (GV) tubular laparoscópica aisla-
mayor incidencia de conversiones con la técnica asistida con da, es una opción con menor riesgo para este grupo de
la mano que con la asistida por laparoscopia (14,8% frente al pacientes. En EE. UU. y Alemania, esta operación se reali-
9,4%).14 Por último, la cirugía en los pacientes con mayores zaba primero laparoscópicamente en pacientes con IMC
índices de masa corporal (IMC) era más fácil de realizar muy elevados, para intentar reducir el riesgo general de la
cuando se empleaba el acceso asistido con la mano. cirugía de pérdida de peso, efectuando las cirugías bariátri-
No obstante, la técnica asistida con la mano no está cas por etapas (v. figura 31-5). Cuando el IMC del paciente
exenta de problemas. Se registraron complicaciones en la está por encima de 60 kg/m 2 es especialmente difícil realizar
herida en el 15% de los pacientes,15 y en pacientes con cru- una DGYR o un CD con seguridad. Además, la GV es una
ce duodenal, que típicamente tienen IMC más altos y un opción razonable para los pacientes en los que esté contrain-
perfil de riesgo, la tasa de complicaciones puede aumentar. dicada la derivación intestinal (p. ej., antecedentes de úlce-
Datos no publicados referidos a 51 pacientes sometidos a ras, enfermedad de Crohn, insuficiencia renal, etc.).
CD asistido con la mano revelan que la tasa de hernia inci-
sional era del 31,4% comparado con 0, respectivamente
(P  0,05), y el porcentaje de todas las complicaciones rela- Tabla 31-1 VARIACIONES EN LA TÉCNICA
cionadas con la herida era del 56% frente al 17%, respecti- PARA EL CRUCE DUODENAL
vamente (P  0,05). TOTALMENTE LAPAROSCÓPICO
Acceso quirúrgico
Técnica totalmente laparoscópica Asistido con la mano: Rabkin RA y cols. (Obes Surg 2003)14
Totalmente laparoscópico: Ren CJ y cols. (Obes Surg 2000)29
Desde el punto de vista técnico, el CD totalmente laparos-
cópico supone un gran reto. La operación atraviesa todo el Anastomosis proximal (duodenoenterostomía)
abdomen, realizando partes de la operación en el cuadrante ACTT: Feng JJ y cols. (Semin Laparosc Surg 2002)30
Flexible (SurgASSIST): Waage A y cols (Obes Surg 2003)31
superior izquierdo (gastrectomía vertical tubular), el cua-
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

Suturado a mano: Baltasar A y cols. (Obes Surg 2002)19


drante superior derecho (CD) y en el cuadrante inferior
derecho (creación del canal común y de la anastomosis dis- Roux antecólica frente a retrocólica
Antecólica: Feng JJ y cols. (Semin Laparosc Surg 2002)30
tal). La localización de los accesos es un elemento crucial.
Retrocólica: Camerini G y cols. (Surg Lap Endosc Percut Tech 2003)32
Debido a los numerosos lugares de operación, la localización
de los accesos no es la óptima para ninguna parte de la inter- Longitud del canal común
vención, incluso cuando se localizan a la perfección. 100 cm: Lagace M y cols. (Obes Surg 1995)33
50 cm: Marceau S y cols. (Obes Surg 1995)34
Un estudio de viabilidad del acceso totalmente lapa-
roscópico que fue pionero en el modelo porcino fue llevado Gastrectomía vertical
a cabo por Csepel y cols.,16 y, a pesar de que se produjeron Sonda de 60F: Feng JJ y cols. (Semin Laparosc Surg 2002)30
dos fugas en cuatro animales, el estudio concluyó que la Sonda de 32F: (datos no publicados, Feng JJ, Cirangle PT,
Jossart GH, 2006.)
operación era técnicamente posible. El primer CD laparos-
270 Sección V • INTERVENCIONES

producía la mejor pérdida de peso sin ningún aumento evi-


Tabla 31-2 TASAS DE COMPLICACIONES dente de los efectos colaterales. La comparación con datos
TRAS CRUCE DUODENAL LAPAROSCÓPICO de resúmenes de otros grupos que realizaron la GV confir-
NÚMERO IMC MEDIO DE LOS MORBILIDAD ma el hecho de que las sondas de menor tamaño resultan en
ESTUDIO DE PUNTOS PACIENTES (kg/m2) GRAVE mejor pérdida de peso.
Comenzando en un punto de la curvatura mayor a
Ren y cols., 200029 40 60,0 6 (15,0%)
3-6 cm del píloro, se realiza una gastrectomía de la curvatu-
Baltasar y cols., 200219 16 40 3 (18,8%)
ra mayor mediante la aplicación secuencial de grapas gastro-
Paiva y cols., 200220* 40 43,6 4 (12,5%)
intestinales lineales de 3,5 o 4,8 mm, creando así un tubo
Kim y cols., 200321 26 66,9 6 (23,0%)
gástrico de 40 a 80 mL (v. figura 31-6). Se usan Seamguards
*Paiva y cols. practicaron la derivación biliopancreática de Scopinaro. bioabsorbibles selectivamente para reforzar la línea de gra-
Debido a la complejidad de la operación, la incidencia de complicaciones
tras el cruce duodenal laparoscópico es elevada. Las principales complicaciones pas en pacientes diabéticos y en los que presenten sangrado
pueden darse en un porcentaje de pacientes comprendido entre el 13% y el 23% de la línea de grapas. El nervio vago queda intacto, mante-
de los pacientes. niendo la función del estómago, en tanto que la ausencia de
IMC, índice de masa corporal.
derivación intestinal evita complicaciones tales como úlce-
ras marginales, deficiencias vitamínicas y obstrucciones
La GV es una solución razonable a este problema. intestinales.
Normalmente puede realizarse por laparoscopia, incluso Se realiza una prueba con azul de metileno para com-
en pacientes que pesen más de 225 kg. La restricción gás- probar la integridad de la línea de grapas. Si hay sospecha
trica puede permitir a estos pacientes perder más de 90 kg clínica de fuga (v. figura 31-7), se ha de proceder con tránsi-
y supone mejoras significativas en la salud, así como la tos baritados selectivos en el primer día postoperatorio
resolución de problemas médicos asociados, como la diabe-
tes y la apnea del sueño, haciendo que los pacientes pasen a ¿Un nuevo tipo de operación restrictiva?
un grupo con menor riesgo. Posteriormente, los pacientes
pueden volver a quirófano para someterse al segundo paso Históricamente, las operaciones bariátricas restrictivas han
del procedimiento, que puede ser un CD, una DGYR o sufrido altibajos. La gastroplastia horizontal original intro-
incluso la colocación laparoscópica de una banda gástrica ducida por Printen y Mason en 1973 usaba grapas para crear
ajustable. una bolsa a expensas del fundus que se vaciaba en el estóma-
go distal por medio de un estoma.18 Por desgracia, la bolsa
Técnica quirúrgica medible tenía tendencia a estirarse y el estoma tendía a
agrandarse, produciendo una detención en la pérdida de
Se colocan seis trócares de manera similar a lo que sucede peso, o incluso una ganancia del mismo. El refuerzo del
en la operación de CD totalmente laparoscópica, como se estoma sólo tenía un éxito parcial.
muestra en la figura 31-3. Dadas las dificultades que pue- En 1982 Edward E. Mason intentó mejorar la opera-
den aparecer al usar una aguja de Veress en los pacientes ción creando una gastroplastia vertical, basada en su obser-
con obesidad mórbida, introducimos un trócar Optiview vación de que la pared más gruesa de la curvatura menor
de 12 mm bajo visualización directa, a través de la vaina presentaba una menor tendencia al estiramiento y la dis-
del recto derecho. Para retraer el hígado puede usarse un tensión.22 Creó una bolsa pequeña y lineal de 14 mL, que
retractor de hígado epigástrico de Nathanson en lugar de se medía cuidadosamente bajo presión hidrostática norma-
uno de pala o de abanico en el trócar situado más a la lizada, porque creía que un menor tamaño también suponía
derecha. una menor tendencia al estiramiento. Para evitar que se
Tras eliminar los vasos de la curvatura mayor con estirase el estoma situado al final de esta bolsa, usó una tira
LigaSure, se coloca un dilatador esofágico transoral de 32F de 5 cm de malla de polipropileno, con el fin de crear un
a lo largo de la curvatura menor. La razón para usar sondas anillo alrededor de la bolsa en esta localización. Una
de 32F se basa en el trabajo de Johnston y cols. sobre la ope- variante de la GVB de Mason utiliza un anillo de silastic
ración de magenstrasse and mill (MM), en la que, entre 1987 en lugar de malla de polipropileno, y por ello se denomina
y 2003, experimentó con sondas de diferentes calibres, desde gastroplastia vertical con anillo de silastic. Todos estos
40F hasta 30F.17 Johnston descubrió que la sonda de 32F procedimientos de gastroplastia presentaban unos prome-

Figura 31-5 Procedimientos di-


1.a fase Gastrectomía vertical Banda ajustable vididos en fases para los pacientes
bariátricos de alto riesgo. El objeti-
vo de los procedimientos por fases
para los pacientes con IMC altos o
con alto riesgo es reducir el riesgo.
2.a fase DGR Cruce duodenal Retirada de la En vez de realizar la intervención
banda/DGR definitiva en un principio, se reali-
za antes una operación inicial más
simple y rápida (p. ej., gastrectomía
vertical o banda ajustable). Produce
un intervalo de pérdida de peso,
que reduce el riesgo perioperatorio
del paciente de cara a la segunda
Resultado final DGR GVCD Banda-CD fase de la operación.
Capítulo 31 • Procedimientos laparoscópicos de cruce duodenal y gastrectomía tubular 271

tedores perfiles de pérdida de peso de 1 a 2 años con por-


centajes de pérdida del exceso de peso (PEP%) del 60% al
70% pero, en cambio, presentaban una decepcionante pér-
dida de peso a largo plazo (PEP% del 30% al 40% a los
5 años). En la mayoría de estos procedimientos de gastro-
plastia las razones para la ganancia de peso eran multifac-
toriales e incluían la interrupción de la línea de grapas, la
dilatación de la bolsa y el paso a una dieta alta en calorías
líquidas. Además, presentaban complicaciones relacionadas
específicamente con la malla o el anillo restrictivos, y prác-
ticamente se han abandonado. Estos procedimientos pro-
ducían una pérdida de peso razonable a largo plazo para los
individuos con menores IMC, lo que indica que un proce-
dimiento restrictivo puro puede ser adecuado para el grupo
con IMC más bajo.
Un reciente avance en la cirugía bariática restrictiva
es la colocación laparoscópica de una banda, en la que se
fija al cardias una banda hinchable, creando una bolsa gás-
trica de 15 a 20 mL. La infusión de suero salino por un
acceso estrecha el diámetro interno de la banda y puede
aumentar el grado de restricción. La pérdida de peso
ocurre gradualmente, durante un período de 2 a 3 años,
registrándose un porcentaje de PEP% del 48% en 1 año en
una de las series. 23 Aunque en esta operación la recanali-
zación no supone un problema, la presencia de la prótesis
introduce una serie de inconvenientes, tales como desliza-
mientos, erosiones, infecciones y complicaciones relacio-
nadas con el acceso. 23
De todas las operaciones restrictivas puras que existen,
la operación de MM es la que más se parece a la gastrecto-
mía vertical y confiere la ventaja de la ausencia de cuerpos
Figura 31-6 Gastrectomía vertical tubular laparoscópica. La gas- extraños (v. figura 31-8). Se diseñó como una operación res-
trectomía vertical tubular laparoscópica es la parte restrictiva del cru- trictiva más fisiológica que la GVB porque conserva el «tri-
ce duodenal. Se realiza mediante varios disparos con la grapadora turado» antral. La operación de MM también usa una son-
lineal desde el antro al ángulo de His, a lo largo de una sonda. La loca- da situada a lo largo de la curvatura menor para medir y
lización de los accesos es similar a la usada en la operación de cruce guiar la creación de un defecto circular en el antro, aproxi-
duodenal totalmente laparoscópico que se muestra en la figura 31-3, madamente a 6 cm del píloro, que después permite disparar
salvo en que se puede usar un retractor hepático epigástrico de
Nathanson en lugar del retractor de pala o en abanico para retraer el
la grapadora lineal desde el antro hacia arriba al ángulo de
hígado en el acceso situado más a la derecha. His, creando la «magenstrasse» o «calle ancha del estó-
mago», a la vez que se preserva el triturado antral. La di-
ferencia fundamental entre la MM y la GV es que, en esta úl-
tima, la curvatura mayor del estómago se secciona y se
extirpa por completo, mientras que en la MM la curvatura
mayor, aunque separada de la curvatura menor en la mayor
parte de su longitud, sigue unida al resto del estómago en
el antro.
Unión GE
Resultados de operaciones restrictivas previas
Todas las operaciones restrictivas confieren la ventaja de la
pérdida de peso sin componente malabsortivo, de forma que
las deficiencias vitamínicas y de calcio y la anemia son excep-
cionales. Sin embargo, los resultados a largo plazo tras la
GVB no son excesivamente satisfactorios, ya que un número
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

Píloro significativo de pacientes siguen quedando encuadrados


dentro de la definición de obesidad. Fobi publicó un porcen-
taje de PEP promedio tras GVB laparoscópica a los 10 años
de un 44% en 43 pacientes.24 Otros autores han descubierto
que los pacientes con un IMC superior a 45 kg/m2 no logran
alcanzar un IMC de 35 kg/m 2, incluso a los 5 años tras la
Figura 31-7 Tránsito baritado tras gastrectomía vertical. Este trán- cirugía.
sito baritado se realizó en el primer día postoperatorio tras una gas-
trectomía vertical laparoscópica. El estómago tubularizado se puede Los datos a corto plazo publicados por numerosos autores
ver entre las marcas de la unión gastroesofágica (GE) y el píloro (espas- demuestran una PEP% bastante buena, del 60% al 70% en 1 a
módico). El retorcimiento del estómago tubularizado corresponde en 2 años tras la operación.25,26 Los datos a largo plazo, sin embar-
realidad a la incisura angular del estómago. go, indican una fuerte tendencia hacia la recuperación del peso.
272 Sección V • INTERVENCIONES

la cirugía, tuvieron unas pérdidas de peso medias de


38  14 kg, y un PEP% del 58% a 1 año. Ahora bien, con
más de 230 pacientes tras MM, Johnston ha logrado un
La «magenstrasse» (sonda de 32F porcentaje de PEP a los 5 años del 61%, con una estabiliza-
o 1 cm de diámetro) ción del peso lograda por lo común al año de la cirugía
(v. figura 31-9). Esto se ha conseguido sin mortalidad y con
Nervio de Latarjet una tasa del 4% de complicaciones mayores.17

Gastrectomía vertical comparada con gastroplastias


previas y con derivación gástrica en Y de Roux
La GV representa una significativa mejora con respecto a los
procedimientos de gastroplastia previos por una serie de
razones:
Píloro
Trituradora antral 1. La GV secciona o extirpa la mayor parte del estómago.
(~6 cm) El fundus explantado del estómago es el responsable de
Figura 31-8 Operación de magenstrasse y mill. La operación consiste la secreción de grelina, una hormona que regula el ham-
en una «magenstrasse», o «calle ancha», de tubo digestivo a lo largo de bre y la saciedad. Retirando esta porción del estómago
la curvatura menor, creada alrededor de una sonda de 32F, y una «tritu- en lugar de dejarla en su sitio, el nivel de grelina se redu-
radora» antral conservada para mantener la corriente de la comida hacia
delante. Las ramas terminales principales del nervio de Latarjet hacia el
ce igual que tras la DGYR, causando una pérdida o una
antro se conservan. Las secreciones del antro y del cuerpo del estómago reducción del apetito.28
se vacían en el antro a través de un puente de estómago. (Tomado de 2. La curvatura menor del estómago residual tubularizada
Johnston D, Dachtler J, Sue-Ling HM, et al: The Mangestrasse and es la parte menos distensible del estómago y, por tanto,
Mill operation for morbid obesity. Obes Surg 2003; 13:10-16.) puede resistirse a las fuerzas de distensión y generar
sensación de saciedad con cantidades muy pequeñas de
comida.
Salmon y McArdle27 realizaron gastroplastias horizontales o 3. Por último, al no tener un cuerpo extraño alrededor del
verticales con distintos tamaños de bolsa gástrica (25 a 60 mL) estómago, desaparecen los problemas asociados a él.
y de diámetro del estoma (3 a 20 mm) en 244 pacientes, y halla-
ron una correlación superficial en cuanto al tamaño del estoma. La GV es una alternativa razonable a la DGYR por las
Con un seguimiento medio de 4,5 a 6 años, el porcentaje de razones que a continuación se exponen:
PEP iba desde el 28% al 40%, dependiendo del tamaño de la
bolsa gástrica y del diámetro del estoma. Finalmente, la gastro- 1. Ya que no hay derivación intestinal, no hay riesgo de
plastia horizontal no alcanzaba más del 40% de PEP% en un complicaciones malabsortivas, tales como deficiencia
porcentaje comprendido entre el 84% y el 89% de los pacientes. vitamínica y proteica.
El resultado fue algo mejor en la GVB, con unas tasas de fra- 2. No hay riesgo de úlceras marginales, que ocurren en
caso del 73% al 81%. Por desgracia, la pérdida de peso con estas más del 2% de los pacientes tras DGYR.
gastroplastias restrictivas no ha sido tan efectiva como con la 3. No hay síndrome de vaciamiento rápido.
DGYR y el CD, tal vez por mecanismos hormonales, por falta 4. No hay riesgo de obstrucción intestinal porque no hay
de malabsorción o por una menor saciedad. derivación intestinal.
La operación de MM ha tenido mejores resultados que 5. El paso a un procedimiento alternativo es relativamente
otras gastroplastias. Los primeros 100 pacientes de Johnston, fácil de llevar a cabo si la pérdida de peso no es suficien-
que presentaban un IMC promedio de 46,3 kg/m2 antes de te o si se recupera peso.

160

140
Figura 31-9 Pérdida de peso a
Peso corporal (kg)

largo plazo tras la operación de


120 magenstrasse y mill. Se puede con-
seguir una pérdida de peso dura-
dera a largo plazo, al menos hasta
100 los 5 años tras la operación de ma-
genstrasse y mill. (Tomado de
Johnston D, Dachtler J, Sue-Ling
HM, et al: The Mangestrasse and
80
Mill operation for morbid obesity.
Obes Surg 2003; 13:10-16.)

60
Preoperat. 6 meses 1 año 2 años 3 años 4 años 5 años

Tiempo transcurrido tras la operación


Capítulo 31 • Procedimientos laparoscópicos de cruce duodenal y gastrectomía tubular 273

Resultados tras gastrectomía vertical grupos. No se realizaron conversiones a procedimientos


abiertos en ningún grupo de pacientes.
Se hizo un análisis comparativo con 776 operaciones bariá- Las variables postoperatorias se muestran en las figu-
tricas primarias realizadas en nuestra institución. De ellas, ras 31-10, 31-11 y 31-12. Antes de la cirugía, los pacientes de
145 fueron GV (16,8%), 223 fueron bandas (32,2%), 279 fue- DGYR y CD presentaban pesos e IMC semejantes, los
ron DGYR (40,3%) y 74 fueron CD (10,7%). pacientes sometidos a GV eran más obesos como promedio y
Las variables preoperatorias se muestran en la los pacientes de banda presentaban menor grado de obesidad
tabla 31-3. Las principales diferencias son las siguientes: (v. tabla 31-3). Los pacientes de DGYR y de CD eran casi
1) el grupo de la GV incluía más varones que, empírica- idénticos en los pesos iniciales, pesos postoperatorios, IMC,
mente, tienen más grasa intraabdominal y por ello son tasas de pérdida de peso y porcentaje de PEP. Experimentaron
técnicamente más difíciles de operar; 2) los pacientes de una pérdida de unos 50 a 55 kg de peso y un PEP% del 74%
GV tenían un peso preoperatorio y un IMC mayores por- al 78% a los 12 meses (v. figura 31-12). Los pacientes operados
que animamos a los pacientes superobesos y de alto riesgo con banda eran menos obesos antes de la operación, pero
a elegir este procedimiento; 3) las operaciones de GV y de tuvieron una tasa más baja de pérdida de peso (v. figura 31-10).
banda fueron las más cortas, y 4) las hospitalizaciones Transcurrido 1 año, habían perdido alrededor de la mitad del
fueron de 1 a 2 días más cortas tras la cirugía con banda. peso perdido por los otros tres grupos (aproximadamente
Los promedios de edad, duración del seguimiento y pér- 27 kg frente a 55 kg; v. figura 31-11). De forma parecida, su
dida de sangre estimada fueron similares en todos los PEP% era la más baja, sólo el 47% en el primer año.

Tabla 31-3 VARIABLES PREOPERATORIAS EN PACIENTES SOMETIDOS A TÉCNICAS LAPAROSCÓPICAS

GV BANDA DGYR CD
(N  116) (N  233) (N  279) (N  74) VALORES DE P
Edad (años) 44,6  11,4 41,5  11,1 43,8  9,4 41,6  7,7 NS
Varones (%) 26 (22%) 29 (13%) 40 (14%) 6 (8%) P  0,05 GV frente a las demás
Peso preoperatorio (kg) 142  38* 115  19 127  22 128  22 P  0,05 GV frente a las demás;
P  0,05 Banda frente a DGYR, CD

IMC preoperatorio (kg/m 2) 51,2  11,8 41,6  5,5 45,9  6,4 46,6  6,0 P  0,05 GV frente a las demás;
P  0,05 Banda frente a DGYR, CD

Seguimiento (días) 312  217 410  251 562  266 692  277 NS
Tiempo quirúrgico (min) 101  31 89  25 144  35 226  43 P  0,05 frente a DGYR, CD; *P  0,05 frente a CD

PEP (mL) 43  21 29  15 57  44 91  48 P  0,05 Banda frente a CD


Duración de la hospitalización (días) 3,7  2,2 2,5  0,6 3,9  1,4 4,1  2,2 P  0,05 Banda frente a las demás
Banda, colocación de banda gástrica ajustable; CD, gastrectomía vertical con cruce duodenal; DGYR, derivación gástrica en Y de Roux; GV, gastrectomía
vertical; IMC, índice de masa corporal; NS, no significativa; PEP, pérdida del exceso de peso.

160

137
Figura 31-10 Peso de los pa-
cientes tras someterse a gas- 114
trectomía vertical (GV) lapa-
Peso (kg)

roscópica, colocación de banda 91


gástrica ajustable (Banda), deri-
vación gástrica en Y de Roux 68
(DGYR) o gastrectomía vertical
con cruce duodenal (CD). Los
46
pacientes sometidos a GV eran
más obesos que los sometidos a
20
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

DGYR o CD, pero tuvieron


tasas similares de pérdida de
peso (pendiente). Tras colocarse 0
0 1 3 6 12
la banda gástrica ajustable, los
pacientes están menos obesos y Banda 115 107 101 95 88
tienen una tasa de pérdida de
peso de casi la mitad que los CD 129 116 105 90 76
pacientes sometidos a GV,
DGYR o CD. DGYR 125 114 103 92 78
GV 142 140 128 116 108

Tiempo postoperatorio (meses)


274 Sección V • INTERVENCIONES

64

55

46
Pérdida de peso (kg)

Figura 31-11 Pérdida de peso


36 tras la cirugía en pacientes
sometidos a gastrectomía verti-
27 cal (GV) laparoscópica, coloca-
ción de banda gástrica ajustable
(Banda), derivación gástrica en
18 Y de Roux (DGYR) o gastrec-
tomía vertical con cruce duode-
9 nal (CD). Los pacientes perdie-
ron peso con la misma
0 efectividad tras GV como tras
0 1 3 6 12 DGYR y CD. Tras la cirugía
con banda, los pacientes perdie-
Banda 0 8 13 17 27 ron la mitad de peso que los
CD 0 11 23 39 53 pacientes de los otros grupos.

DGYR 0 13 24 35 51
GV 0 13 27 40 54

Tiempo postoperatorio (meses)

Los pacientes de GV tenían los pesos e IMC preope- Los pacientes de GV y de banda son los que tienen
ratorios mayores, pero experimentaron tasas de pérdida menos complicaciones; los de CD son los que presentan más,
de peso similares a los grupos de DGYR y CD. Engañosa- y los de DGYR tienen un número intermedio. Los pacientes
mente, el porcentaje de PEP es más bajo en el grupo de de GV registraban tasas significativamente inferiores de
GV porque, para la misma pérdida de peso, un paciente reintervenciones y complicaciones de alcance en compara-
que esté más obeso antes de la cirugía tendrá un PEP% ción con los grupos de DGYR y CD.
más baja que un paciente menos obeso. Ello se debe a que
el cálculo del porcentaje de PEP  (peso perdido)/(peso Operación en segundo tiempo tras gastrectomía
preoperatorio – peso corporal ideal) incluye el peso preo- vertical
peratorio en el denominador, así que el porcentaje de PEP
es una variable dependiente, no independiente, del peso Aunque no hemos empezado a realizar técnicas quirúrgicas
preoperatorio. en segundo tiempo, prefiriendo esperar hasta que la tasa de
Las complicaciones, la morbilidad y la mortalidad se pérdida de peso se estabilice, otros grupos como el de Gagner
representan en la tabla 31-4. están realizando operaciones en segundo tiempo cuando

100,0%

Figura 31-12 Porcentaje de


80,0% pérdida del exceso de peso en
pacientes tras someterse a
Porcentaje de PEP

gastrectomía vertical (GV )


60,0% laparoscópica, colocación de
banda gástrica ajustable (Ban-
da), derivación gástrica en Y de
40,0% Roux (DGYR) o gastrectomía
vertical con cruce duodenal
(CD). El porcentaje de PEP
20,0% puede resultar engañoso, al
comparar grupos de pacientes
que tienen distintos pesos preo-
0,0% peratorios. Aunque los pacien-
0 1 3 6 12 tes perdieron cantidades pare-
cidas de peso tras GV, DGYR y
Banda 0 14,0% 25,2% 34,2% 46,9% CD, el porcentaje de PEP en la
GV es engañosamente bajo
CD 0 17,1% 34,7% 57,4% 77,9% porque los pesos preoperatorios
de los pacientes sometidos a
DGYR 0 18,5% 37,9% 56,3% 74,2% GV eran significativamente
GV 0 15,8% 31,7% 46,1% 55,5% mayores que los de los pacien-
tes sometidos a DGYR y CD.
Tiempo postoperatorio (meses)
Capítulo 31 • Procedimientos laparoscópicos de cruce duodenal y gastrectomía tubular 275

Tabla 31-4 COMPLICACIONES EN PACIENTES SOMETIDOS A TÉCNICAS LAPAROSCÓPICAS

GV BANDA DGYR CD
(N  116) (N  233) (N  279) (N  74) VALORES DE P
Reingresos sin cirugía (%) 1 (1,5%) 2 (1,3%) 8 (3,3%) 4 (6,1%) NS
Reintervenciones (%) 0 (0) 4 (2,6%) 15 (6,4%) 11 (16,6%) P  0,05 GV frente a DGYR y CD; P  0,05 Banda
frente a CD; P  0,05 DGYR frente a CD
Muertes (%) 0 (0) 0 (0%) 0 (0%) 0 (0%) NS
Complicaciones menores (%) 3 (4,4%) 2 (1,3%) 21 (8,6%) 4 (6,1%) P  0,05 Banda frente a DGYR, CD
Complicaciones graves (%) 1 (1,5%) 4 (2,6%) 16 (6,5%) 15 (22,7%) P  0,05 GV frente a CD; P  0,05 Banda frente a
CD; P  0,05 DGYR frente a CD
Total de complicaciones (%) 4 (5,9%) 6 (3,8%) 37 (5,1%) 19 (28,8%) P  0,05 GV frente a DGYR, CD; P  0,05 Banda
frente a DGYR, CD; P  0,05 DGYR frente a CD
Banda, colocación de banda gástrica ajustable; CD, cruce duodenal; DGYR, derivación gástrica en Y de Roux; GV, gastrectomía vertical; NS, no significativa.

los pacientes cumplen el criterio de haber perdido 45 kg o te segura y efectiva en individuos con IMC más bajos.
hayan pasado de 6 a 8 meses de la operación inicial. Las Johnston publicó que tras la operación de MM, que es muy
curvas de pérdida de peso para los pacientes individuales parecida a la GV, sólo el 10% de sus pacientes no lograron
tras las operaciones en dos pasos se muestran en la figu- un IMC por debajo de 35 kg/m2 a los 5 años, y ese porcenta-
ra 31-13. je tendía a estar constituido por pacientes muy obesos.17
El grupo de Gagner puede estar pasando por una mese- Nuestros propios datos demuestran que los pacientes con
ta en la pérdida de peso porque realizan su GV alrededor de IMC de 55 kg/m 2 o menos son capaces de conseguir IMC
una sonda de 60F. Nuestro grupo utiliza una sonda de 32F, por debajo de 30 kg/m2 en los 9 a 12 meses tras la operación
y se ha eliminado casi por completo la necesidad de proceder (v. figura 31-14), indicando que puede que esta sea la única
a una segunda intervención en numerosos pacientes con cirugía bariátrica que necesitan. Otros pacientes con IMC
IMC de menos de 50 kg/m2. Hemos descubierto que muchos más bajos que deberían valorarse como posibles candidatos
pacientes, incluso aquellos que al principio pesaban más de a esta técnica son los siguientes:
180 kg, pierden suficiente peso y no necesitan segundas
intervenciones. En el momento actual, los resultados de las 1. Pacientes preocupados por los posibles efectos colatera-
estadísticas referidas a segundas intervenciones son limita- les a largo plazo de la derivación intestinal, como obs-
dos. Sin embargo, en el grupo de nuestros 145 primeros trucción intestinal, úlceras, anemia, osteoporosis, defi-
pacientes hemos realizado segundas inervenciones sólo en ciencia proteica y deficiencia vitamínica.
tres pacientes. 2. Pacientes que están considerando someterse a una ciru-
gía con banda, pero a los que les preocupa tener un
Gastrectomía vertical como operación única cuerpo extraño o no cumplir los ajustes frecuentes.
para pacientes con IMC bajos 3. Pacientes de alto riesgo que tienen otros problemas
médicos que les impiden someterse a una derivación
Concebida originariamente como una operación para intestinal, como anemia, enfermedad de Crohn, cirugía
pacientes con IMC altos, la GV ha demostrado ser lo bastan- extensa previa, asma grave que requiera un tratamiento
habitual con corticoesteroides, y otras enfermedades
complejas.
CD LAPAROSCÓPICO EN DOS TIEMPOS 4. Pacientes que necesitan tomar medicación antiinflama-
CAMBIO EN EL PESO BASADO EN EL IMC toria, porque la GV no se asocia con el mayor riesgo de
úlceras marginales que sí existe con la DGYR.
80 5. Pacientes con tratamientos imprescindibles (p. ej.,
70 medicación de pacientes cardíacos o trasplantados) cuya
60 absorción pueda verse afectada por la derivación intes-
tinal.
IMC (kg/m2)

50
40
30 Z EVALUACIÓN
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

20
10
Nuestros resultados han sido ciertamente sorprendentes:
tenemos varios pacientes que perdieron más de 90 kg en
0 12 meses. No esperábamos registrar pérdidas de peso tan
Primer
paso
IMC IMC
3 semanas 3 meses
IMC
6 meses
Segundo IMC IMC
paso 3 semanas 3 meses
IMC
6 meses
significativas con este procedimiento, y en un principio pen-
sábamos realizar el CD en un segundo tiempo a estos pacien-
Figura 31-13 Pesos individuales de los pacientes tras gastrectomía tes, pero esta segunda intervención no fue necesaria.
vertical laparoscópica en un primer tiempo seguida de cruce duodenal También tuvimos un subgrupo de pacientes con IMC más
(CD) en un segundo tiempo tras 6 a 12 meses de la pérdida de peso
inicial. Hay una estabilización de la pérdida de peso tras el primer bajos pero con factores de riesgo mayores (p. ej., insuficien-
tiempo quirúrgico (la escala de tiempo es logarítmica); la operación en cia cardíaca, tratamiento con prednisona, antecedentes de
un segundo tiempo produce un progreso en la pérdida de peso. (Por cáncer) que alcanzaron un IMC por debajo de 30 kg/m2 en
cortesía de Michel Gagner.) IMC, índice de masa corporal. menos de 12 meses.
276 Sección V • INTERVENCIONES

60 intragástrica y una fuga por la línea de grapas, especialmen-


te en los pacientes de alto riesgo. Dos pacientes sufrieron
una fuga por la línea de grapas. Una tenía 62 años y nume-
50 rosas enfermedades asociadas. Su grapado incluía material
de refuerzo, pero se separó y la fuga se hizo patente en el
sexto día postoperatorio. Dada su patología comórbida, esta-
40 mos convencidos de que, si hubiéramos realizado una DGYR,
se habría presentado una complicación similar. El otro pacien-
IMC (kg/m2)

te tenía enfermedad de Crohn. Ello subraya el hecho de que,


30 incluso con adecuados niveles de técnica, experiencia y refuer-
zos y con aplicación de una técnica libre de tensión, la isque-
mia e interrupción de la línea de grapas puede ocurrir.
20 Este procedimiento puede no eludir las fugas, pero
ofrece la ventaja de evitar muchos de los problemas descritos
para la derivación intestinal, como úlceras marginales, este-
10 nosis y obstrucciones intestinales. Es de capital importancia
tener en cuenta estos problemas porque siempre ocurren
cuando los pacientes han sido dados de alta y normalmente
0 meses después, cuando ya se han recuperado de la operación
0 3 6 9 12 inicial. Las úlceras marginales se dan en un porcentaje com-
Tiempo postoperatorio (meses) prendido entre el 2% y el 3% de los pacientes y pueden dar
lugar a perforación, hemorragia y dolor intratable. La GV
Figura 31-14 Pesos individuales de los pacientes tras gastrectomía
no es un procedimiento ulcerogénico como la DGYR.
vertical laparoscópica sola en pacientes que tenían IMC de 55 kg/m 2 o
menor. Todos los pacientes lograron un IMC de menos de 30 kg/m 2 al Gracias a la gastrectomía, se parece más a una operación
cabo de 9 a 12 meses tras la cirugía. para reducir el ácido gástrico y, hasta la fecha, no hemos
detectado ninguna úlcera postoperatoria en nuestros pacien-
tes. En efecto, son tan pocos los pacientes que han requerido
Podemos plantear el hecho de que las principales venta- endoscopia que no conocemos la incidencia de gastritis o
jas anatómicas y fisiológicas de esta operación sobre otros esofagitis. La mayoría de los pacientes afirma que sus sínto-
procedimientos restrictivos provienen de la resección y mas de reflujo han mejorado o se han resuelto al final del
extirpación de la mayor parte del estómago. Esta reducción primer año siguiente a la cirugía. Aproximadamente el 3%
gástrica elimina la mayor parte de las células productoras de de los pacientes de DGYR desarrollan estenosis que precisa
grelina y altera las vías del hambre y la saciedad para que los dilatación endoscópica. Es probable que esta tasa sea mayor
pacientes apenas sientan hambre. La conservación del píloro en pacientes con obesidad supermórbida debido a tensión de
probablemente produzca una retención prolongada de la las anastomosis. Hasta la fecha no hemos visto ningún
comida en la bolsa gástrica, creando así una percepción más paciente de GV que desarrolle estenosis gástricas que requie-
prolongada de saciedad y una sensación precoz de llenado. ran dilatación. Un paciente refirió vómitos, pero el endosco-
Por último, la reticencia a someterse a una segunda inter- pio pasó limpiamente a través del estómago y no hizo falta la
vención puede fomentar un cumplimiento extremo por par- dilatación.
te del paciente. Teóricamente, el riesgo de obstrucción intestinal está
Otra ventaja destacable de este procedimiento es que es significativamente reducido y la obstrucción sólo puede
completamente modificable. En pacientes que no presentan registrarse por una adherencia o por una hernia en la zona
pérdida de peso adecuada o que incluso ganan peso, este de un acceso. Es imposible que un paciente de GV desarrolle
procedimiento puede convertirse a una DGYR, a una colo- una obstrucción intestinal debido a una hernia interna, dado
cación laparoscópica de una banda o a un CD. Además, es que en él no se ha creado ninguna derivación intestinal ni
posible una mayor reducción gástrica. Esta convertibilidad ventana mesentérica. Se han descrito numerosos casos de
es una característica atractiva si se tiene en cuenta que obstrucción intestinal y hernias internas tras DGYR, y casi
aproximadamente el 10% de los pacientes de DGYR recupe- siempre precisaron una reintervención. Algunos pacientes
rarán peso y requerirán una cirugía de revisión. La conver- han llegado a fallecer por una obstrucción intestinal relacio-
sión de una bolsa gástrica dividida tras DGYR para pasar nada con una hernia interna. Así, la GV elimina efectiva-
a otro procedimiento es una intervención técnicamente mente una posible fuente de muerte tras la cirugía para per-
mucho más difícil y peligrosa. La revisión de una GV resul- der peso y reduce enormemente o elimina otras graves
taría más fácil y segura. complicaciones a largo plazo como úlceras, estenosis, obs-
Nuestra preocupación principal en relación con la segu- trucciones y deficiencias metabólicas. Se supone que la
ridad y efectividad de este procedimiento se refiere al riesgo ausencia de una derivación intestinal en este procedimiento
de dehiscencia de la línea de grapas. Como punto de partida ayuda a evitar problemas metabólicos a largo plazo, tales
en nuestra práctica, no hemos tenido una sola fuga o dehis- como anemia, enfermedad metabólica ósea y deficiencias
cencia de la línea de grapas en más de 400 DGYR cosidas a vitamínicas.
mano. Estos pacientes tendían a tener un IMC por debajo de Comenzamos a realizar esta intervención en nuestros
55 kg/m 2 y a presentar un menor riesgo, dado que, según pacientes de alto riesgo y IMC elevado hace aproximada-
nuestra experiencia, los pacientes con mayores IMC y mayor mente 4 años. Nos ha sorprendido el nivel de satisfacción
riesgo solían someterse a GV o CD. El procedimiento de por parte del paciente y la cantidad de pérdida de peso. En
GV no tiene anastomosis. Sin embargo, presenta una línea nuestra serie actual de más de 400 pacientes no hubo muer-
de grapas vertical larga, una bolsa gástrica estrecha y un tes ni reconversiones a cirugía abierta, y sólo dos fugas nece-
píloro intacto que puede dar lugar a una dinámica de presión sitaron ser reintervenidas. Hubo un caso de embolia pulmo-
Capítulo 31 • Procedimientos laparoscópicos de cruce duodenal y gastrectomía tubular 277

nar. Nuestros resultados de pérdida de peso a los 2 años son 9. Suter M, Giusti V, Heraief E, et al: Early results of laparoscopic
similares a nuestros resultados con la DGYR y el CD (de un gastric banding compared with open vertical banded gastroplasty.
Obes Surg 1999;9:374-380.
81% a un 86% de PEP%). Somos prudentemente optimistas 10. Nguyen NT, Goldman C, Rosenquist CJ, et al: Laparoscopic versus
con respecto a la pérdida de peso a largo plazo y nos damos open gastric bypass: a randomized study of outcomes, quality of life,
cuenta de que la recuperación del peso es posible y puede and costs. Ann Surg 2001;234:279-289.
que finalmente limite el uso generalizado de este procedi- 11. Marceau P, Hould FS, Simard S, et al: Biliopancreatic diversion with
duodenal switch. World J Surg 1998;22:947-954.
miento. 12. Rabkin RA: Distal gastric bypass/duodenal switch, Roux-en-Y gastric
bypass and biliopancreatic diversion in a community practice. Obes
Surg 1998;8:53-59.
Z CONCLUSIÓN 13. Baltasar A, Bou R, Bengochea M, et al: Duodenal switch: an effective
therapy for morbid obesity, intermediate results. Obes Surg
2001;11:54-58.
En resumen, tanto la restricción como la malabsorción son 14. Rabkin RA, Rabkin JM, Metcalf B, et al: Laparoscopic technique for
modalidades esenciales de la cirugía bariátrica. Pueden usarse performing duodenal switch with gastric reduction. Obes Surg
en varios grados para alcanzar una pérdida de peso. La mayo- 2003;13:263-268.
ría de las complicaciones metabólicas a largo plazo se da en los 15. Derzie A, Silvestri F, Liriano E, et al: Wound closure technique and
acute wound complications in gastric surgery for morbid obesity:
procedimientos malabsortivos, y es la tendencia a evitar estas a prospective randomized trial. J Am Coll Surg 2000;191:238-243.
complicaciones lo que nos conduce a desarrollar procedi- 16. de Csepel J, Burpee S, Jossart G, et al: Laparoscopic biliopancreatic
mientos que se limiten a la restricción. Las críticas a los pro- diversion with a duodenal switch for morbid obesity: a feasibility study
cedimientos puramente restrictivos subrayan que la pérdida in pigs. J Laparoendosc Adv Surg Tech A 2001;11:79-83.
17. Johnston D, Dachtler J, Sue-Ling HM, et al: The magenstrasse and
de peso a largo plazo puede ser inadecuada sin malabsorción. mill operation for morbid obesity. Obes Surg 2003;13:10-16.
Creemos firmemente que tanto los procedimientos puramen- 18. Printen KJ, Mason EE: Gastric surgery for relief of morbid obesity.
te restrictivos como los procedimientos combinados pueden Arch Surg 1973;106:428-431.
desempeñar un papel más o menos significativo. La selección 19. Baltasar A, Bou R, Miro J, et al: Laparoscopic biliopancreatic diver-
sion with duodenal switch and initial experience. Obes Surg
dependerá del IMC del paciente, de su nivel de actividad, su 2002;12:245-248.
edad, riesgos médicos, preferencias personales y así sucesiva- 20. Paiva D, Bernardes L, Suretti L: Laparoscopic biliopancreatic diver-
mente. El CD es un procedimiento consolidado que resulta sion: technique and initial results. Obes Surg 2002;12:358-361.
sumamente efectivo en pacientes con IMC elevado, y que 21. Kim WW, Gagner M, Kini S, et al: Laparoscopic vs open biliopancre-
ahora puede realizarse por laparoscopia. Estamos seguros de atic switch: a comparative study. J Gastrointest Surg 2003;7:552-557.
22. Mason EE: Vertical banded gastroplasty for morbid obesity. Arch
que seguirá evolucionando en cuanto a la longitud de las Surg 1982;117:701-706.
ramas y el tamaño de la bolsa con la esperanza de lograr una 23. Camerini G, Adami G, Marinari GM, et al: Thirteen years of
pérdida de peso óptima a la vez que se reducen las complica- follow-up in patients with adjustable silicone gastric banding for obes-
ciones metabólicas. La GV está ganando adeptos con rapidez ity: weight loss and constant rate of late specific complications. Obes
Surg 2004;14:1343-1348.
como procedimiento en un primer tiempo para pacientes 24. Fobi MAL: Vertical banded gastroplasty vs gastric bypass: 10 years’
superobesos y como única cirugía en pacientes con mayor follow-up. Obes Surg 1993;3:161-164.
riesgo y menor IMC. La baja morbilidad y la razonable pérdi- 25. Sugarman HJ, Londrey GL, Kellum JL, et al: Weight loss with verti-
da de peso en los pacientes de mayor riesgo la hacen una cal banded gastroplasty and Roux-en-Y gastric bypass for morbid
obesity with selective versus random assignment. Am J Surg
opción muy atractiva. 1998;157:93-102.
26. Ismail T, Kirby RM, Growson MC, et al: Vertical Silastic ring gastro-
Z BIBLIOGRAFÍA plasty: a 6-year experience. Br J Surg 1990;77:80-82.
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extended follow-up and late results. Obes Surg 1992;2:51-59.
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Obes Surg 1998;8:267-282. and gastric banding: effects on plasma ghrelin levels. Obes Surg
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© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

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Adv Surg Tech A 1999;9:101-106. distal gastrectomy. Obes Surg 1995;5:303-307.
32
Estimulación gástrica implantable
para el tratamiento de la obesidad mórbida
Scott A. Shikora, M.D.

Se estima que el 64% de los estadounidenses adultos presen- los avances en esta tecnología han logrado una eficacia cre-
tan sobrepeso o son obesos.1 Además, el 4,7% son extrema- ciente. Este capítulo revisa la teoría y la experiencia actual con
damente (mórbidamente) obesos, lo cual se define como la estimulación gástrica implantable para la pérdida de peso.
tener un índice de masa corporal (IMC) mayor o igual a
40 kg/m 2. Los cálculos indican que el número de obesos
mórbidos adultos en EE. UU. alcanza la impresionante tasa Z ELECTROFISIOLOGÍA Y MOTILIDAD
de entre 14 y 16 millones de personas. Estos individuos pade- GÁSTRICAS
cen una serie de patologías comórbidas y ocupan el segundo
puesto en muertes evitables tras el tabaquismo (⬎300.000 al La motilidad es una de las funciones fisiológicas más impor-
año).2 El coste de tratar a los obesos es de aproximadamente tantes del intestino humano. Sin una motilidad coordinada,
70.000 millones de dólares al año.3 El impacto de la obesidad la digestión y absorción de los nutrientes de la dieta no sería
no se limita a EE. UU., sino que se extiende por todo el posible. Para cumplir sus funciones con efectividad, el intes-
mundo. Globalmente, la prevalencia de sobrepeso y obesidad tino debe generar contracciones coordinadas (peristaltismo).
se ha estimado recientemente en 1700 millones de personas.4 Ello da lugar al tránsito del contenido luminal a una posi-
La obesidad es responsable de más de 2500 millones de ción donde los nutrientes puedan absorberse al máximo.
muertes por año.5 No muy por detrás de la tasa en adultos se Además, debe evitarse la hipermotilidad porque produciría
sitúa la creciente epidemia de sobrepeso en adolescentes. un impacto negativo en la absorción de nutrientes, al dismi-
Actualmente, la cirugía se ofrece raras veces a estos pacien- nuir la exposición de los nutrientes a la mucosa. De forma
tes por miedo a complicaciones quirúrgicas y al mal cumpli- parecida, el estómago requiere contracciones gástricas coor-
miento a largo plazo. dinadas para un vaciamiento normal.
Sin embargo, la cirugía bariátrica se ha convertido en Las contracciones gástricas son reguladas por la activi-
un tratamiento extensamente aceptado para la obesidad dad mioeléctrica del estómago. La actividad mioeléctrica
mórbida. Numerosos estudios han demostrado notables gástrica normal consta de dos componentes: la onda lenta y
mejorías en las enfermedades asociadas a la obesidad, como el potencial en pico.10 La onda lenta es omnipresente y se da
resultado de la pérdida de peso lograda por medio de todos a intervalos regulares, tanto si el estómago se contrae como
estos procedimientos.6-9 No obstante, actualmente menos si no. Se origina en el estómago proximal y se propaga dis-
del 1% de los que reúnen los requisitos para someterse al talmente hacia el píloro (v. figura 32-1). La onda lenta gás-
tratamiento quirúrgico reciben cirugía bariátrica dentro del trica determina la frecuencia máxima, la velocidad de propa-
plazo de un año. A muchos candidatos en potencia se les gación y la dirección de propagación de las contracciones
niega la cirugía por no tener cobertura de seguro médico u gástricas. La frecuencia normal de la onda lenta gástrica len-
otros factores descalificantes, o bien no solicitan ayuda qui- ta es de unos 3 ciclos por minuto (cpm) en humanos y de
rúrgica por falta de conocimiento sobre la eficacia de estos 5 cpm en perros. Cuando un potencial en espiga (semejante
tratamientos. Sin embargo, un gran número evita la cirugía a un potencial de acción) se superpone a la onda lenta gástri-
por temor a las posibles complicaciones operatorias y a las ca, se produce una fuerte contracción que ocluye la luz.
consecuencias a largo plazo de los procedimientos quirúrgi- Las arritmias gástricas representan aberraciones de la
cos actuales. actividad mioeléctrica normal del estómago. De forma
La estimulación gástrica implantable para la pérdida de semejante a las arritmias cardíacas, las gástricas producen
peso es un nuevo concepto en el ámbito del tratamiento de la una contracción anormalmente rápida (taquigastria) o una
obesidad mórbida. Su peculiaridad radica en que es la cirugía contracción anormalmente lenta (bradigastria). Por ejemplo
menos invasiva y no altera la anatomía del tubo digestivo. (v. figura 32-2), puede existir un marcapasos ectópico en el
Desde sus comienzos a mediados de los años noventa, las inves- estómago distal además del marcapasos normal del estóma-
tigaciones internacionales han demostrado que es el más segu- go proximal. El marcapasos ectópico genera ondas lentas
ro de los procedimientos bariátricos en cuanto a las complica- con una frecuencia mayor de la normal (taquigastria), y con
ciones quirúrgicas y a las consecuencias a largo plazo. Además, una propagación retrógrada hacia el estómago proximal.
278
Capítulo 32 • Estimulación gástrica implantable para el tratamiento de la obesidad mórbida 279

y se propaga distalmente hacia el píloro. En los humanos


sanos, el 50% o más de la comida ingerida se ha vaciado del
estómago a las 2 horas tras la ingesta, y el 95% se ha vaciado
a las 4 horas tras la ingesta.13 Cuando el estómago se ha
vaciado, el patrón de motilidad gástrica cambia. El patrón de
motilidad gástrica en el estado de ayuno experimenta un
ciclo de fluctuaciones periódicas divididas en tres fases:
fase I (sin contracciones, de 40 a 60 minutos); fase II (contrac-
ciones intermitentes, de 20 a 40 minutos) y fase III (con-
tracciones rítmicas regulares, de 2 a 10 minutos).
El vaciamiento gástrico desempeña un papel importante
Figura 32-1 Ondas lentas gástricas normales. Ondas lentas gástricas en la regulación de la ingesta de comida. Varios estudios han
registradas por electrodos implantados en la superficie serosa del estó- demostrado que la distensión gástrica actúa como señal de
mago a lo largo de la curvatura mayor en un perro sano (1,5 min de
registro). Los trazos superiores se obtuvieron de los dos electrodos
saciedad para inhibir la ingesta de comida.14 Además, el vacia-
colocados 16 cm por encima del píloro; los trazos inferiores se obtuvie- miento gástrico rápido se relaciona muy estrechamente con el
ron de los electrodos colocados 2 cm por encima del píloro. (Por cor- exceso de comida y con la obesidad. Ello se da en especial en
tesía de Jiande Chen, Ph.D.) los animales con lesiones en la región hipotalámica del cere-
bro.15 En un estudio con 77 humanos, compuesto de 46 obe-
sos y 31 individuos no obesos apareados por edad, sexo y raza,
Estas ondas anormales pueden interferir con la propagación los obesos tuvieron una tasa de vaciamiento gástrico más rápi-
de las ondas lentas normales y es posible que interrumpan las da que los sujetos no obesos.16 La tasa en los hombres obesos
contracciones gástricas normales. fue mucho más rápida que la de sus homólogos no obesos. Se
Se ha estudiado la prevalencia y el origen de varias arrit- concluyó que la tasa de vaciamiento gástrico sólido en estos
mias gástricas.11 En este ámbito se ha observado que la mayo- sujetos obesos era anormalmente rápida. El significado y la
ría de las bradigastrias (80,5% ⫾ 9,4%) se originan en el estó- causa de este cambio en el vaciamiento gástrico siguen sin
mago proximal (P ⬍ 0,04 frente a otras localizaciones) y se conocerse con precisión. Sin embargo, basándose en el traba-
propagan al antro distal. Así, la bradigastria se atribuye a una jo que realizó en la Universidad de Chicago en 1913, Carlson
disminución en la frecuencia del marcapasos normal. En con- propuso que existía una relación entre el tubo digestivo y el
traste, la taquigastria se origina principalmente en el antro hipotálamo y que esa relación regulaba la ingesta de la dieta.17
distal (80,6% ⫾ 8,8%; P ⬍ 0,04 frente a otras localizaciones) y Se ha demostrado más recientemente que varios péptidos,
se propaga parcial o totalmente al estómago proximal. Durante entre ellos la colecistocinina (CCC) y el factor liberador de
la taquigastria, el marcapasos normal del estómago proximal corticotropina (CRF) suprimen la ingesta y disminuyen el
puede continuar estando presente. Así pues, no es raro que el tránsito gástrico. Se vio que la CCC-8 administrada por vía
estómago proximal esté dominado por las ondas lentas norma- periférica disminuía la tasa de vaciamiento gástrico y la inges-
les y que el estómago distal esté dominado por la taquigastria. ta de comida en varias especies.18 Al inyectarse, el CRF tam-
En general, la prevalencia de la arritmia fue mayor en el antro bién demostró que disminuía la ingesta de comida y la tasa de
distal y menor en la parte proximal del estómago. vaciamiento gástrico.19 Más recientemente, se ha comprobado
Los patrones de motilidad gástrica son distintos en que en ratones ob/ob (un modelo genético de obesidad), la tasa
estado de ingesta y de ayuno.12 En el estado de ingesta, el de vaciamiento gástrico estaba acelerada en comparación con
estómago humano se contrae con una frecuencia máxima de la de ratones delgados.20 La urocortina, un péptido de 40 ami-
de 3 cpm. La contracción se origina en el estómago proximal noácidos de la misma familia que el CRF, disminuía con
C1
C2

Figura 32-2 Taquigastria.


C3

Ondas lentas gástricas registra-


das por electrodos implantados
en la superficie serosa del estó-
C4

mago a lo largo de la curvatura


mayor, mostrando la actividad
C5

taquigástrica ectópica del estó-


© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

mago distal (flecha). Los trazos


superiores se obtuvieron del par
C6

de electrodos colocados 16 cm
por encima del píloro; los trazos
C7

inferiores se obtuvieron de los


electrodos colocados 2 cm por
encima del píloro. (Por cortesía
C8

de Jiande Chen, Ph.D.)


220,00 240,00 260,00 280,00 300,00
Segundos
280 Sección V • INTERVENCIONES

potencia y dependiente de la dosis la ingesta de comida y el El marcapasos retrógrado puede beneficiar a pacientes
aumento de peso, así como la tasa de vaciamiento gástrico en con un vaciamiento gástrico anormalmente rápido, como en
los ratones ob/ob. Esto sugiere que el vaciamiento gástrico el caso de los pacientes con obesidad mórbida y los pacientes
rápido tal vez contribuya a la hiperfagia y a la obesidad en los con síndrome de vaciamiento rápido. 24 El principio de la
ratones ob/ob, y abre nuevas posibilidades para el tratamiento estimulación eléctrica gástrica retrógrada es el opuesto al de
de la obesidad. las circunstancias descritas en los pacientes con vaciamiento
gástrico disminuido. La estimulación eléctrica gástrica
retrógrada emplea un marcapasos retrógrado (v. figura 32-3).
Z ESTIMULACIÓN Y MARCAPASOS GÁSTRICOS Como se ha indicado previamente, el concepto original de
su funcionamiento era que el marcapasos retrógrado retar-
La estimulación gástrica consiste en la aplicación de una daría la actividad propulsora del estómago y enlentecería el
corriente eléctrica al estómago para alterar su funciona- vaciamiento gástrico. Ello podría resultar útil en el trata-
miento. La utilidad del marcapasos gástrico sería efectiva si miento de la obesidad, en el que se postula que un retraso en
una corriente eléctrica generada artificialmente pudiera el vaciamiento gástrico puede dar lugar a una saciedad pre-
generar potenciales determinadores normales de frecuencia coz y a una menor ingesta de comida. Ahora bien, el retraso
gástrica. Esto, de hecho, se ha demostrado en cánidos21 y en del vaciamiento gástrico como mecanismo de acción de la
humanos.22 La forma en que esto afecta a la función gástrica estimulación eléctrica no ha sido probado en humanos.
aún está por determinar. Para llevar a cabo la estimulación eléctrica gástrica
La estimulación eléctrica del estómago puede dirigirse retrógrada, se conecta un marcapasos artificial al estómago
en sentido de proximal a distal (marcapasos anterógrado) o de distal a lo largo de la curvatura menor. Este marcapasos arti-
distal a proximal (marcapasos retrógrado). Aunque es atracti- ficial hace que las ondas eléctricas se propaguen del estóma-
va la opción de asumir que la estimulación anterógrada podría go distal al proximal. Estas ondas interfieren con las ondas
mejorar el vaciamiento gástrico normal, y la estimulación eléctricas normales y fisiológicas que se propagan del estóma-
retrógrada podría usarse para retrasar o alterar negativamen- go proximal al distal. Por consiguiente, se induce una arritmia
te el vaciamiento gástrico normal, en los humanos estas rela- gástrica, y la propagación normal de las ondas eléctricas gás-
ciones no se han probado de forma concluyente. tricas se reduce. El grado de esta reducción se determina en
Sin embargo, se han publicado numerosos artículos función de la fuerza de la estimulación eléctrica.
sobre la estimulación eléctrica gastrointestinal para el trata-
miento de los trastornos de la motilidad gastrointestinal
tanto en perros como en humanos. Estos trastornos se carac- Z ESTIMULACIÓN GÁSTRICA IMPLANTABLE
terizan por una baja contractilidad y un retraso del vacia- PARA LA PÉRDIDA DE PESO
miento (en contraste con lo que sucede en la obesidad), y el
objetivo de la estimulación eléctrica en este marco es nor- Tanto si se puede conseguir un retraso en el vaciamiento
malizar el ritmo eléctrico subyacente y mejorar estos pará- gástrico por medio de la estimulación eléctrica como si no,
metros. En general, ello se lleva a cabo por estimulación esta modalidad ha demostrado ser segura y efectiva para el
gástrica (o intestinal) anterógrada o hacia delante. tratamiento de la obesidad mórbida. El concepto fue de-
Los trabajos previos sobre estimulación gastrointestinal sarrollado por un cirujano italiano, Valerio Cigaina, a fina-
anterógrada se han centrado en sus efectos sobre: 1) la acti- les de los años ochenta. En aquel momento, Cigaina planteó
vidad mioeléctrica gástrica; 2) la motilidad gástrica; 3) el la hipótesis de que podrían utilizarse impulsos eléctricos
vaciamiento gástrico, y 4) los síntomas gastrointestina- exógenos para alterar la regulación de la actividad gástrica
les.23-30 Estos estudios han mostrado que la generación de electromotriz normal en los pacientes obesos, produciendo
ondas lentas gástricas es posible si se usa un marcapasos arti- una pérdida de peso. Aunque el mecanismo de acción aún no
ficial. Recientes estudios han indicado que dicha generación ha sido aclarado, la estimulación gástrica ha logrado pérdi-
depende de ciertos parámetros, entre ellos la amplitud y la
frecuencia del pulso de estimulación.23 Además, la estimula-
ción eléctrica intestinal anterógrada puede originar ondas
lentas intestinales aplicando electrodos en la serosa o elec-
trodos de anillo intraluminales. 26,29 McCallum y cols.
demostraron, en pacientes que padecían gastroparesia, que
el marcapasos gástrico anterógrado podía generar ondas len-
tas gástricas en los 9 pacientes que participaron en su estu- Onda eléctrica Marcapasos
dio.27 Pusieron el marcapasos en la curvatura mayor del propagada normal
estómago con frecuencias aproximadamente un 10% mayo- retrógradamente
res que las de las ondas lentas medidas. En dos pacientes se
pasó de la taquigastria a ondas lentas normales. De hecho, el
marcapasos eléctrico mejoró significativamente el vacia- Ondas lentas
miento gástrico y los síntomas en estos pacientes. En un normales
informe de un caso, Familoni y cols. también fueron capaces
de mejorar el vaciamiento gástrico y los síntomas en un
paciente con gastroparesia diabética grave colocando un
marcapasos de estómago de alta frecuencia (12 cpm).31 En
contraste, Hocking y cols. no consiguieron tratar las arrit- Marcapasos
mias gástricas posgastrectomía por medio de marcapasos en artificial
un paciente que se había sometido a vagotomía y gastroye- Figura 32-3 Estimulación gástrica retrógrada. Estimulación eléctri-
yunostomía por una úlcera duodenal obstructiva.32 ca de un marcapasos gástrico ectópico situado en el estómago distal.
Capítulo 32 • Estimulación gástrica implantable para el tratamiento de la obesidad mórbida 281

das de peso significativas. Una teoría más reciente, que ade- estimulación gástrica bipolar. Además, la estimulación eléc-
más se ha apoyado en estudios animales, se centra en el efec- trica gástrica crónica se consideró segura porque no se obser-
to de la estimulación eléctrica en la relajación del fundus. varon efectos secundarios.
Esta relajación se ha visto en la distensión posprandial nor- En 1998 se realizó un segundo estudio en humanos
mal y puede producir saciedad.33 para investigar la seguridad y eficacia de un estimulador
Los estudios que investigan las posibilidades de la esti- gástrico de primera generación, el sistema gástrico implan-
mulación eléctrica gástrica para inducir pérdida de peso fue- table Prelude.37 Todos los pacientes reclutados presentaban
ron publicados por primera vez en 1992 por Cigaina y cols. IMC de más de 40 kg/m 2, antecedentes de fracaso para la
en un modelo porcino.34 Los resultados mostraron que la pérdida de peso, y ausencia de problemas cardíacos, respi-
estimulación eléctrica gástrica retrógrada era segura y efec- ratorios o psiquiátricos graves. Por razones obvias, se
tiva para moderar la ganancia de peso en los cerdos en perío- excluyeron los pacientes con marcapasos cardíacos. Un
do de crecimiento. Los animales se dividieron en tres gru- grupo de 10 pacientes se sometió a una intervención míni-
pos, dos de los cuales tenían electrodos implantados en la mamente invasiva para implantar el sistema. Se comenzó la
capa muscular del antro distal. A los animales de control se estimulación 30 días tras la implantación. Tras el implante,
les realizó una cirugía simulada. Los cerdos con implante se permitió a todos los sujetos comer y beber a demanda
experimentaron estimulación antral eléctrica durante 3 u durante las 3 comidas regulares pero se les indicó que no
8 meses a 5 o 100 Hz, respectivamente. Todos los animales comieran entre ellas. Sólo se prohibieron los dulces y las
fueron alimentados a demanda. Como se esperaba, los cer- bebidas alcohólicas. Los pacientes fueron sometidos a revi-
dos inmaduros del grupo control aumentaron progresiva- sión aproximadamente a intervalos mensuales. El estimu-
mente su ingesta y ganaron peso. A las 12 semanas de estu- lador se regulaba usando telemetría transcutánea por
dio, no había diferencias en la ingesta o en el peso de los radiofrecuencia, que conectaba el mecanismo implantado
animales entre los grupos (tanto el grupo control como con un programa informatizado. Los datos cotejados inclu-
los estimulados aumentaron la ingesta y el peso). Sin embar- yeron parámetros de estimulación, impedancia del cable y
go, después de 13 semanas los animales sujetos a estimula- carga residual de la batería.
ción de alta frecuencia disminuyeron su ingesta con res- El estudio demostró tanto seguridad como eficacia. No
pecto al grupo control, y a continuación disminuyó su peso. hubo muertes ni otros problemas médicos importantes
A los 8 meses, los cerdos estimulados a 100 Hz pesaban un durante el estudio, ni complicaciones relacionadas con el
10,5% menos que los animales controles. La ingesta general procedimiento ni a largo plazo. En concreto, no hubo frac-
de comida en el grupo estimulado a 100 Hz era un 12,8% turas del cable ni fallos en los componentes eléctricos del
menor que en el grupo control. Sin embargo, los animales sistema. Tras recibir 51 meses de estimulación, la media de
del grupo estimulado a menor frecuencia (5 Hz) durante pérdida de peso era del 23% del exceso de peso, aparente-
sólo 3 meses mostraron un cambio de mucho menos alcance mente con un buen mantenimiento (v. figura 32-4). Como
que el grupo control. era de esperar, el agotamiento de la batería condujo a una
El peristaltismo gástrico también se ha estudiado en el recuperación de peso y la recolocación del aparato con
modelo porcino. Se vio que el peristaltismo se alteraba con una batería nueva restableció la pérdida de peso.
la estimulación eléctrica. En un estudio en cerdos, los que
estaban estimulados a 40 Hz mostraron un peristaltismo
disminuido.35 Sin embargo, el mecanismo de acción exacto Z EXPERIENCIA INTERNACIONAL ACTUAL
no se ha aclarado, y el vaciamiento gástrico no se estudió. CON LA ESTIMULACIÓN GÁSTRICA
Como consecuencia de los resultados de los estudios en IMPLANTABLE PARA LA PÉRDIDA DE PESO
animales, en 1995 comenzaron los estudios iniciales en huma-
nos.36 Cuatro mujeres con IMC de 40 kg/m2 o más se some- El estimulador gástrico implantable (EGI), un dispositivo
tieron al implante y al seguimiento hasta los 40 meses. similar a un marcapasos llamado Transcend, incluye un
Mediante laparoscopia, se implantaron electrodos de platino generador de pulsos a pilas y un cable bipolar. El generador
intramuscularmente en la pared gástrica anterior, adyacente a es similar a un marcapasos cardíaco y aproximadamente del
la curvatura menor y proximal al pes anserinus. El sistema tamaño de un reloj de bolsillo. Se implanta debajo de la piel
tenía un diseño bipolar, por lo que dos electrodos, un ánodo y en el cuadrante superior izquierdo (v. figura 32-5). El cable
un cátodo, se insertaron en la capa muscular gástrica. Un pro- del sistema se inserta por laparoscopia en la capa seromus-
totipo de estimulador eléctrico se implantó en un bolsillo sub- cular de la pared anterior del estómago. En la mayoría de los
cutáneo de la pared abdominal anterior. A las cuatro pacientes casos, la operación puede realizarse en menos de 1 hora. La
se les permitió comer y beber a demanda. A loa 40 meses de la mayoría de los pacientes son dados de alta el mismo día o al
implantación una paciente había perdido 32 kg y una segunda día siguiente del procedimiento. El programador es un orde-
había perdido 62 kg. En las dos pacientes restantes se obser- nador convencional conectado a una varilla. El programador
varon disfunciones de los sistemas de estimulación. En un se comunica a través del ordenador y la varilla con el EGI
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caso se registró una fractura del cable, lo que condicionó la implantado usando telemetría transcutánea por radiofre-
efectividad del proceso. A los 40 meses tras el implante, la pa- cuencia. El EGI puede consultarse o programarse rápida y
ciente sólo había perdido dos unidades de IMC. De forma fácilmente en el hospital o en la consulta.
parecida, una segunda paciente presentaba también una apa- Actualmente, más de 800 pacientes se han incorporado
rente fractura del cable, y esa paciente no perdió peso. En a estudios clínicos y se les ha implantado el EGI. No se han
estos dos casos, las fracturas condujeron a una estimulación registrado muertes ni complicaciones graves.
unipolar (se supone que sólo un electrodo funcionaba) en
lugar de la pretendida estimulación bipolar. Las dos pacientes Estudio europeo multicéntrico
que no tuvieron problemas con el cable y que recibieron una
estimulación bipolar registraron resultados mucho mejores. Tras el trabajo pionero de Cigaina y cols. se comenzó un
Por tanto, se llegó a la conclusión de que era necesaria una ensayo multicéntrico en Europa. Para el ensayo se procedió
282 Sección V • INTERVENCIONES

Cambio medio en el exceso de peso (%)

Figura 32-4 Resultados a


largo plazo del estudio piloto
preliminar de Cigaina y cols.
Recambio Se siguió a 10 pacientes duran-
te más de 51 meses. Los pacien-
tes alcanzaron una media del
Agotamiento de batería 23% de pérdida del exceso de
peso. Además, ninguno de los
pacientes ganó peso cuando se
Mantenimiento agotó la batería, y volvieron a
perder peso cuando se renova-
ron los dispositivos.

Duración postimplante (meses)

al implante de 50 pacientes en siete centros médicos ubica- meses se logró una pérdida media de más del 20% del exce-
dos en Italia, Francia, Alemania, Suecia, Grecia, Austria y so de peso (v. figura 32-7).
Bélgica. Aunque el diseño del estudio variaba algo en cada
uno de los centros médicos, la mayoría fueron abiertos. No U.S. O-01 Trial
hubo complicaciones importantes en ninguno de los pacien-
tes. La pérdida de peso media sobrepasó el 40% del exceso El primer estudio de investigación realizado en este ámbito
tras un seguimiento de 2 años (v. figura 32-6). en EE. UU., el U.S. O-01 Trial, fue un ensayo multicéntri-
co, aleratorizado, controlado y doble ciego, que evaluaba la
Laparoscopic Obesity Stimulation Survey seguridad y la eficacia del sistema EGI. Se incluyeron 103 pa-
cientes. El cable del EGI se insertaba por laparoscopia en
Más recientemente, se ha llevado a cabo en Europa una 100 de los pacientes; en 3 de ellos se insertó mediante una
segunda investigación multicéntrica. Este estudio, conoci- pequeña incisión en la línea media para evaluar si era prác-
do por su denominación en inglés, Laparoscopic Obesity Sti- tico implantar el aparato con cirugía convencional abierta.
mulation Survey, reclutó a 60 pacientes en ocho lugares de Tras 1 mes, los pacientes fueron aleatoriamente asignados a
participación. Como en el estudio previo, no hubo compli- la activación del implante o a dejarlo apagado. Tras 7 meses,
caciones graves. Tras un período de seguimiento de 10 los aparatos no funcionantes también se activaron. Los pará-
metros del aparato fueron los mismos para todos los pacien-
tes. Se evaluó clínicamente a los pacientes durante 24 meses
y se les siguió cuidadosamente en cuanto a complicaciones y
pérdida de peso. No se dieron recomendaciones en cuanto a
la dieta ni al comportamiento.
No se registraron muertes ni complicaciones como con-
secuencia del implante. Aunque ninguno de los pacientes
experimentó efectos adversos como consecuencia de este
procedimiento, 17 de los 41 primeros cables se desprendie-
ron de la pared gástrica.38 Ello condujo a una modificación
en la técnica para asegurar mejor el cable. No obstante, el
desprendimiento de los cables pudo afectar a los resultados
de pérdida de peso. Además, la falta de asesoramiento dieté-
tico y conductual y la inclusión de pacientes con trastorno de
atracones compulsivos pudo afectar también a los resultados
de pérdida de peso. Es interesante que durante los primeros
6 meses muchos pacientes reconocieron haber comido de
más deliberadamente o haber experimentado con sus dietas
para descubrir si el dispositivo estaba activado. A pesar de
estos problemas, tras 1 año de estimulación el 20% de los
pacientes habían perdido más del 5% de su peso total corpo-
ral; la media de la pérdida total de peso fue del 11%.

Dual-Lead Implantable Gastric Electric Stimulation Trial


Figura 32-5 Sistema estimulador gástrico implantable. El estimula-
dor gástrico implantable con cable bipolar insertado en la capa muscu- Con la esperanza de continuar con el aumento de los cono-
lar a lo largo de la curvatura mayor. El cable se coloca cerca del pes cimientos iniciado en el ensayo europeo y el U.S. O-01, se
anserinus. diseñó un estudio piloto para EE. UU. con el objetivo de
Capítulo 32 • Estimulación gástrica implantable para el tratamiento de la obesidad mórbida 283

Multicéntrico europeo

Cambio medio en el exceso de peso (%)


Figura 32-6 Estudio multi-
céntrico europeo. El recluta-
miento incluyó a 50 pacientes
en 7 centros médicos. La pérdi-
da de peso conseguida fue del
40% del exceso, con un segui-
miento medio de 27 meses.

Duración postimplante (meses)

intentar mejorar los resultados. Este ensayo piloto abierto, logrado una pérdida media del exceso de peso del 30,4% a los
conocido como los anteriores por su nombre en inglés, el 9,5 meses (8 a 14 meses). De nuestros pacientes, el 80%
Dual-Lead Implantable Gastric Electric Stimulation Trial, habían perdido peso, y el 60% había perdido más del 10%
incluyó 30 pacientes de dos centros médicos. El ensayo era de su exceso de peso (14,7% a 104% de pérdida del exceso de
único por varios motivos. En primer lugar, se descartaron peso). Las marcadas diferencias entre los resultados de los
los pacientes con trastorno de atracones compulsivos, ya que dos centros de investigación pueden ser debidas a los proce-
habían tenido un mal cumplimiento en ensayos previos. En dimientos distintos empleados para la selección de pacientes
segundo lugar, se aportaron consejos sobre el comporta- y destacan la importancia de este factor.
miento y la dieta a seguir. En tercer lugar, el sistema incluyó
dos cables (con cuatro electrodos) que podían programarse
por separado o a la vez. Finalmente, el aparato se programó Z NECESIDAD DE UNA SELECCIÓN CUIDADOSA
de manera individual para cada paciente. DE PACIENTES
Ya al principio de esta investigación se registró un
importante hallazgo clínico. Se descubrió que cuando se Hasta el momento, la experiencia a nivel mundial con el sis-
programaban potencias eléctricas altas, la mayoría de los tema EGI ha puesto de manifisto que, como sucede con
pacientes desarrollaban inmediatamente síntomas de disten- otros procedimientos quirúrgicos para perder peso, este
sión abdominal, náuseas, vómitos o dolor abdominal. Este tampoco es efectivo en todos los pacientes. Ello se confirmó
hallazgo puede ser semejante al del registro de la frecuencia recientemente cuando se desarrolló una herramienta simple
cardíaca mientras se lleva marcapasos. En consecuencia, se de valoración selectiva (BaroScreen) y se aplicó retrospecti-
redujo ligeramente la potencia. Los pacientes que habían vamente a unos 250 pacientes de todo el mundo con el EGI.
tenido síntomas mostraron una importante reducción del El modelo de valoración selectiva se basaba en la demografía
apetito y la mayoría habían logrado perder peso. En general y en las respuestas a cuestionarios, y parecía predecir con
hubo un 15% de pérdida del exceso de peso a las 38 semanas precisión quiénes responderían al tratamiento y quiénes no.
(v. figura 32-8). Sin embargo, en nuestro centro habíamos Los factores de motivación parecen ser los más importantes.
Cambio medio en el exceso de peso (%)

PÉRDIDA

Figura 32-7 Laparoscopic Obe-


sity Stimulation Survey (LOSS).
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

Resultados provisionales de
este ensayo multicéntrico euro-
peo que incluía a 60 pacientes
en 8 centros médicos. Con una
media de 10 meses de segui-
miento, los pacientes perdieron
más del 20% del exceso de su
peso.

Duración postimplante (meses)


284 Sección V • INTERVENCIONES
Cambio medio en el exceso de peso (%)

Figura 32-8 Dual-Lead Im -


plantable Gastric Electric Sti-
mulation Trial (DIGEST).
Resultados preliminares de los
St. Charles 30 pacientes incluidos en dos
centros médicos (New England
Todos Medical Center [NEMC] y St.
NEMC Charles Hospital).

Duración postimplante (semanas)

Aplicando esta estrategia retrospectivamente se demostró tinencia urinaria, el evitar a los pacientes que no es proba-
que los pacientes con valoración positiva para estos factores ble que respondan mejoraría enormemente los resultados.
de motivación tuvieron un cumplimiento significativamente Además, la determinación de los subgrupos de pacientes
mejor que los que tenían un cribado negativo. En los dos obesos que más se beneficiarían de esta técnica también es
ensayos estadounidenses, su aplicación habría eliminado importante. La obesidad es una enfermedad heterogénea.
aproximadamente al 75% de los participantes. No obstante, Por ejemplo, este dispositivo puede ser muy efectivo para
los que tenían una buena puntuación tuvieron unos resulta- pacientes con IMC entre 35 y 45 kg/m 2, pero no tanto
dos ciertamente satisfactorios (v. figura 32-9). Se necesitarán para los que tienen IMC superior a 60 kg/m 2. En realidad,
análisis prospectivos para confirmar estos hallazgos preli- puede que sea lo más efectivo para los pacientes con IMC
minares. entre 30 y 40 kg/m 2. Alrededor de 50 millones de estado-
A primera vista, el descarte del 75% de los pacientes unidenses adultos tienen un IMC en este rango y, general-
potenciales parece un problema para el futuro de esta técni- mente, no se tienen en cuenta para cirugía, sino que se les
ca. Sin embargo, es importante recordar que el 25% de dece- ofrece estrategias de pérdida de peso que les sirven de poca
nas de millones de pacientes potenciales que podrían bene- ayuda. La EGI puede ser atractiva para los adolescentes
ficiarse de este procedimiento es, en verdad, un número obesos o podría usarse como estrategia de mantenimiento
significativo de pacientes. de peso en pacientes que han perdido peso con métodos no
quirúrgicos.
También habrá que llevar a cabo nuevos estudios para
Z CONSIDERACIONES FUTURAS SOBRE LA EGI ajustar los parámetros más adecuados para el dispositivo, así
como las localizaciones mejores para situar los cables en la
Aunque el sistema de EGI es un prometedor planteamiento pared del estómago. ¿Son dos cables mejor que uno, o habría
para el tratamiento de la obesidad mórbida, aún quedan que pensar en poner numerosos cables? Por último hay que
algunas preguntas por responder. Se necesitarán más inves- considerar otras aplicaciones para la EGI. Por ejemplo,
tigaciones en animales y en humanos para aclarar mejor su podría utilizarse para otras enfermedades gastrointestinales
mecanismo de acción, la selección de los pacientes y la apli- como el reflujo gastroesofágico grave. Estudios prelimina-
cación adecuada del sistema. res desarrollados en Alemania han descubierto que la EGI
El vaciamiento gástrico retrasado se consideró en un mejoró la presión esofágica baja y disminuyó la puntuación
principio como un posible mecanismo de acción, pero este de DeMeester en 5 pacientes con reflujo grave.40
dato no ha llegado a ser demostrado en una investigación
humana controlada. Se están estudiando otras causas, como
la influencia de la estimulación gástrica eléctrica en la secre- Z CONCLUSIÓN
ción de hormonas gastrointestinales y en la función neuro-
nal. En un estudio preliminar realizado en 11 pacientes, La obesidad significativa es un problema de salud, destacado
Cigaina y cols. hallaron que el uso de EGI produjo respues- en todo el mundo, cuya prevalencia está aumentando a una
tas de CCC y somatostatina relacionadas con la comida, y velocidad alarmante. Aunque actualmente la cirugía ofrece
que los niveles basales del péptido similar al glucagón tipo 1 la única opción terapéutica que logra de forma racional una
y de leptina disminuían significativamente en comparación pérdida de peso significativa y mantenida, la mayoría de los
con los controles.39 Se están llevando a cabo otros estudios candidatos quirúrgicos deciden no someterse a la cirugía por
sobre hormonas gastrointestinales como la grelina. miedo a las complicaciones quirúrgicas o a las secuelas a lar-
La selección adecuada de pacientes también debe defi- go plazo. La estimulación gástrica implantable es una moda-
nirse mejor. El desarrollo de un modelo simple de valora- lidad única y novedosa que podría ofrecer una pérdida de
ción selectiva para separar a los pacientes que responden al peso en condiciones de seguridad. Aún queda mucho por
tratamiento de los que no lo hacen es un primer paso descubrir sobre esta técnica, pero está claro que la EGI está
importante. Al igual que se hace con la estimulación eléc- introduciendo un modelo de cambio en el tratamiento qui-
trica para otras enfermedades, como la epilepsia y la incon- rúrgico de la obesidad mórbida.
Capítulo 32 • Estimulación gástrica implantable para el tratamiento de la obesidad mórbida 285

US TRIAL O-01

en el exceso de peso (%)


–10
Cambio medio
–20

–30

–40

–50

–60
0 5 10 15 20 25
Duración postimplante (meses)

DIGEST
0
en el exceso de peso (%)

–10
Cambio medio

–20

–30

–40

–50
0 1 2 3 4 5 6 7 8 9
Duración postimplante (meses)

No seleccionados Todos Seleccionados

B
Figura 32-9 Resultados de los ensayos en EE. UU. con valoración selectiva de pacientes mejorada. Se utilizó un modelo de valoración selectiva
de pacientes para predecir cuáles responderían al tratamiento y cuáles no. Estos gráficos muestran los resultados de pérdida de peso de ambos
estudios realizados en EE. UU. para los pacientes seleccionados como candidatos. Se apreció una destacada mejoría en la pérdida de peso.
A. U.S. Trial O-01. B. Dual-Lead Implantable Gastric Stimulation Trial (DIGEST).

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33
Cirugía bariátrica abierta
frente a laparoscópica
Ninh T. Nguyen, M.D., y Bruce M. Wolfe, M.D.

La cirugía bariátrica comenzó a desarrollarse a finales de de los mejores resultados observados tras la cirugía bariá-
los años cincuenta, con la introducción de la derivación trica laparoscópica, estudia las limitaciones de la cirugía
yeyunoileal y, a finales de la de 1960, con la derivación gás- bariátrica laparoscópica y resume las diferencias en cuanto
trica en Y de Roux (DGYR).1 Recientemente han aumenta- a los resultados clínicos entre la DGYR laparoscópica y
do la demanda de cirugía bariátrica y el número de ciruja- abierta.
nos interesados en aprender este tipo de técnicas. Este
incremento se relaciona en gran medida con el desarrollo
de los accesos quirúrgicos mínimamente invasivos. Aunque Z PRINCIPALES DIFERENCIAS
se puede realizar cirugía bariátrica abierta con unas tasas ENTRE LA CIRUGÍA BARIÁTRICA
relativamente bajas de morbilidad y mortalidad, las compli- LAPAROSCÓPICA Y LA ABIERTA
caciones relacionadas con la herida, como la infección y la
hernia incisional, son frecuentes. La infección de la herida Para comprender las diferencias en los resultados clínicos de
se da hasta en el 25% de los pacientes con obesidad mórbi- la DGYR laparoscópica y abierta es importante entender las
da, y la hernia incisional tardía puede darse hasta en el principales distinciones entre los dos accesos, es decir, la
16,7% de los pacientes.2,3 La cirugía bariátrica laparoscópi- forma de acceso y la forma de exposición. El acceso en
ca se introdujo en un intento de mejorar los resultados la DGYR abierta se realiza por medio de una incisión en la
perioperatorios y de reducir estas complicaciones postope- línea media abdominal superior mientras que el acceso en
ratorias comunes. Otras potenciales ventajas de la cirugía la DGYR laparoscópica se realiza mediante varias incisiones
bariátrica laparoscópica incluyen menor dolor postoperato- abdominales pequeñas. Tal es la razón por la que el acceso
rio, hospitalización más corta y recuperación más rápida. laparoscópico reduce los daños asociados a una incisión qui-
Estas ventajas clínicas se observaron tras otras intervencio- rúrgica grande. La forma de exposición durante la DGYR
nes laparoscópicas como la colecistectomía y la funduplica- abierta incluye el uso de retractores de la pared abdominal y
tura de Nissen. No obstante, ¿podemos atribuir las ventajas la retracción mecánica de las vísceras abdominales. En cam-
observadas tras una colecistectomía laparoscópica a la ciru- bio, la forma de exposición durante la DGYR laparoscópica
gía bariátrica laparoscópica? incluye el uso del neumoperitoneo y la gravedad para despla-
Para responder a esta pregunta es importante tener en zar las vísceras abdominales. Al disminuir el tamaño de la
cuenta que la cirugía bariátrica laparoscópica se realiza incisión quirúrgica y al eliminar la necesidad de retracción
sobre los obesos mórbidos, una población de pacientes con mecánica de la pared abdominal y de las vísceras, el trauma-
más enfermedades preexistentes que las registradas en tismo quirúrgico tras la DGYR laparoscópica debería ser
otras poblaciones, y que la operación es técnicamente más menor que tras la DGYR abierta. Se cree que la reducción
difícil que la mayoría de las operaciones laparoscópicas. en el daño quirúrgico es el mecanismo fisiológico primario
Por tanto, el debate sobre las ventajas e inconvenientes de en función del cual se obtienen mejores resultados con lapa-
la laparoscopia con respecto a los de la cirugía bariátrica roscopia.
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

abierta es importante ya que los beneficios observados tras


otras operaciones laparoscópicas no necesariamente se
aplican a los obesos mórbidos que se someten a cirugía Z ARGUMENTOS FAVORABLES A LA CIRUGÍA
bariátrica laparoscópica. Dado que la DGYR es la opera- BARIÁTRICA ABIERTA EN RELACIÓN
ción bariátrica que más frecuentemente se realiza en CON LA LAPAROSCÓPICA
EE. UU., este capítulo subraya las diferencias entre el
acceso laparoscópico y el abierto para este procedimiento. Los cirujanos que se oponen al acceso laparoscópico afir-
Este capítulo examina las diferencias principales entre la man que la DGYR abierta puede realizarse a través de una
cirugía bariátrica abierta y laparoscópica, revisa las medi- incisión relativamente pequeña en el abdomen superior, a
das principales de los resultados, recalca la importancia de menudo en 1,5 horas, y que la duración de la hospitaliza-
una comparación válida, discute el mecanismo fisiológico ción suele ser menor de 3 días. Cabe preguntarse, pues,
287
288 Sección V • INTERVENCIONES

¿por qué habría de usarse la laparoscopia en este contexto? Z BASES FISIOLÓGICAS DE LOS MEJORES
Los defensores del acceso laparoscópico, sin embargo, RESULTADOS EN CIRUGÍA BARIÁTRICA
declaran que las ventajas de la DGYR laparoscópica serían
similares a las observadas en otras cirugías laparoscópicas. LAPAROSCÓPICA
Intuitivamente, los beneficios de la laparoscopia deberían
poder aplicarse a los pacientes con obesidad mórbida que se El mecanismo básico de consecución de mejores resultados
someten a DGYR siempre que la operación laparoscópica con cirugía bariátrica laparoscópica es el menor grado de
pueda realizarse de forma segura y siga los fundamentos de agresión quirúrgica general. La cirugía bariátrica laparoscó-
la cirugía abierta. Como mínimo, la cirugía bariátrica lapa- pica se asocia con una incisión más pequeña y con menos
roscópica debería reducir el riesgo de complicaciones rela- daño a los tejidos intraabdominales y menor manipulación
cionadas con la herida. de las vísceras abdominales. Además, al evitarse el uso de
Al comparar los resultados de dos operaciones distintas retractores, debe haber un menor nivel de agresión a la pared
es importante comprender cuáles son los resultados clínicos abdominal. Nguyen y cols. demostraron que la concentra-
más importantes y cómo medir los resultados. Desde el pun- ción de creatina cinasa aumentaba significativamente des-
to de vista de un cirujano, los resultados importantes suelen pués de la DGYR, tanto abierta como laparoscópica; sin
incluir el tiempo quirúrgico, la duración de la estancia en la embargo, los niveles de creatina cinasa eran significativa-
unidad de cuidados intensivos y en el hospital y las tasas de mente más bajos tras la DGYR laparoscópica que tras la
morbilidad y de mortalidad. Por el contrario, desde el punto abierta.7 Un aumento en la concentración de creatina cinasa
de vista del paciente, los resultados fundamentales son los y en sus niveles representa la extensión del daño musculoes-
referidos a evitar las complicaciones postoperatorias, a expe- quelético.
rimentar dolor y molestias mínimos y a una recuperación El daño quirúrgico también puede producir una acu-
rápida. A la mayoría de los pacientes no les importa si la ope- mulación de edema, conocida como fluido del tercer espacio.
ración se realiza en 1,5 horas, ni si les van a dar de alta en El grado de edema se relaciona con la extensión del trauma-
3 días. Lo que realmente les importa es el nivel de dolor tismo quirúrgico. La presión intraabdominal mide indirec-
postoperatorio y el tiempo que van a tardar en recuperar su tamente el grado de edema tisular postoperatorio que resul-
actividad diaria normal. ta de la acumulación de fluidos en el tercer espacio y de la
distensión intestinal. Una presión intraabdominal elevada
representa más acumulación de fluidos en el tercer espacio y
Z COMPARACIÓN VÁLIDA un mayor grado de agresión quirúrgica. Nguyen y cols.
publicaron que las presiones intraabdominales postoperato-
Para asegurar que se establece una comparación válida rias eran significativamente más altas tras DGYR abierta
entre dos técnicas quirúrgicas distintas hay que tener en que tras DGYR laparoscópica.8 Otra forma de valorar el
cuenta dos factores. En primer lugar, los aspectos técnicos grado de traumatismo quirúrgico es la medida de la respues-
de la operación laparoscópica deberían ser similares a los de ta de estrés sistémica. Se ha observado que la magnitud de
la operación abierta. Al principio, una de las críticas dirigi- dicha respuesta es proporcional al grado de traumatismo
das a los cirujanos que realizaban DGYR laparoscópica era quirúrgico. La interleucina-6 es una citocina no específica,
la omisión del cierre de los defectos mesentéricos. Al omi- cuyos niveles se correlacionan con el grado de traumatismo
tir este importante paso se observó una obstrucción intes- quirúrgico. Se ha comprobado que los niveles de interleuci-
tinal tardía en las primeras series.4,5 En segundo lugar, el na-6 son más bajos tras la DGYR laparoscópica que tras la
cirujano debe pasar por un período de aprendizaje del acce- DGYR abierta.9
so laparoscópico antes de poder realizar una comparación Estos datos demuestran que la DGYR laparoscópica
entre las dos operaciones. Al contrario que en los ensayos produce una menor agresión musculoesquelética, menor
médicos, los ensayos quirúrgicos se fundamentan en gran acumulación de fluidos en el tercer espacio y un menor gra-
parte en el conocimiento y experiencia del cirujano, tanto do de respuesta de estrés sistémica. Tales registros corrobo-
en la operación convencional abierta como en la laparoscó- ran el hecho de que la DGYR laparoscópica se asocia a una
pica. Se ha observado que el desarrollo de cualquier opera- agresión quirúrgica reducida en comparación con la DGYR
ción laparoscópica nueva se asocia con una determinada abierta, factor que constituye la base fisiológica de los mejo-
evolución del aprendizaje (curva de aprendizaje), y se ha res resultados de la laparoscopia.
comprobado también que en esta curva se registran resul-
tados adversos. Por tanto, una comparación válida entre la
cirugía laparoscópica y la abierta debería tener en cuenta Z VENTAJAS FISIOLÓGICAS DE LA CIRUGÍA
estos factores. En un ensayo prospectivo aleatorizado que BARIÁTRICA LAPAROSCÓPICA
comparaba la DGYR laparoscópica y la abierta, Westling y
cols. publicaron que no había diferencias significativas Junto con los resultados clínicos es importante estudiar
entre las dos técnicas en cuanto al dolor postoperatorio y también las posibles ventajas fisiológicas de la cirugía bariá-
tiempo de hospitalización y de baja por enfermedad basán- trica laparoscópica. Se ha comprobado que la función pul-
dose en un análisis por intención de tratar.6 En su ensayo monar se deteriora menos tras colecistectomía y colectomía
sobre 51 pacientes (laparoscopia ⫽ 30, abierta ⫽ 21), la laparoscópicas.10,11 Sin embargo, se dispone de pocos estu-
conversión a laparotomía se realizó en 7 (23%) de sus dios que estudien los efectos de la laparoscopia sobre la fun-
30 operaciones laparoscópicas. Las ventajas de la DGYR ción pulmonar postoperatoria en pacientes con obesidad mór-
laparoscópica no fueron evidentes porque casi una cuarta bida. Joris y cols. evaluaron la función pulmonar postoperatoria
parte de los pacientes sometidos a DGYR laparoscópica en 30 pacientes con obesidad mórbida que se sometieron a
necesitaron una conversión a DGYR abierta. Los resulta- gastroplastia laparoscópica o abierta.12 Su estudio demostró
dos del ensayo se obtuvieron durante la curva de aprendi- una menor afectación de la función pulmonar postoperato-
zaje de la técnica laparoscópica. ria tras laparoscopia que tras gastroplastia abierta. Nguyen
Capítulo 33 • Cirugía bariátrica abierta frente a laparoscópica 289

y cols. demostraron que la función pulmonar estaba menos Z LIMITACIONES DE LA CIRUGÍA BARIÁTRICA
deteriorada tras DGYR laparoscópica que tras DGYR abier- LAPAROSCÓPICA
ta.13 Todos los parámetros de flujo respiratorio se encontra-
ban disminuidos en los dos grupos en el primer día postope-
ratorio y así siguieron hasta el tercero. Sin embargo, los Sólo se ha publicado un ensayo aleatorizado que apoye los
parámetros de función pulmonar estaban menos alterados beneficios clínicos de la DGYR laparoscópica.14 Sin embar-
tras DGYR laparoscópica que tras DGYR abierta. Los nive- go, en él observaban también diversas limitaciones. Debido
les de volumen espiratorio forzado en 1 segundo fueron un al estricto control que precisa un ensayo aleatorizado, los
38% más altos en el primer día postoperatorio tras DGYR resultados del ensayo con frecuencia sólo pueden aplicarse
laparoscópica que tras DGYR abierta. Las ventajas de la a un subgrupo de los pacientes estudiados. El ensayo publi-
DGYR laparoscópica también incluía menos atelectasia pul- cado por Nguyen y cols. estudiaba sólo pacientes con IMC
monar. Los pacientes sometidos a DGYR laparoscópica por debajo de 60, sin intervenciones previas en el abdomen
desarrollaron significativamente menos atelectasias segmen- superior y sin insuficiencia hepática, renal, cardíaca ni pul-
tarias que los pacientes sometidos a DGYR abierta.13 monar. Por tanto, apenas hay datos basados en la evidencia
para apoyar el uso de la laparoscopia en pacientes que exce-
dan los límites de esas condiciones de ensayo. Además, los
Z VENTAJAS CLÍNICAS DE LA CIRUGÍA resultados de un ensayo aleatorizado deben considerarse en
BARIÁTRICA LAPAROSCÓPICA el contexto de que el cirujano haya pasado la curva de apren-
dizaje requerida para la operación laparoscópica.
Las ventajas clínicas objetivas de la DGYR laparoscópica se
centran en la menor magnitud del dolor postoperatorio y del
tiempo de convalecencia. El dolor postoperatorio es una Z CONCLUSIONES
importante medida de los resultados porque puede medirse
objetivamente. El grado de dolor postoperatorio tras DGYR Las diferencias fundamentales entre la DGYR laparoscópica
abierta se asocia con la longitud de la incisión quirúrgica y y la abierta son el método de acceso y el de exposición ope-
la extensión de la disección y del traumatismo quirúrgico. rativa. Al reducir las dimensiones de la incisión y el grado de
Nguyen y cols. publicaron que tras DGYR laparoscópica los traumatismo asociado a la intervención, la agresión quirúr-
pacientes recibían una cantidad significativamente inferior gica es menor en la laparoscopia que en la cirugía abierta.
de sulfato de morfina intravenoso que los pacientes someti- Una revisión de datos basados en la evidencia pone de mani-
dos a DGYR abierta en el primer día postoperatorio fiesto que la DGYR laparoscópica se asocia a menor nivel de
(46 ⫾ 31 mg frente a 76 ⫾ 39 mg, respectivamente).13 A pesar traumatismo quirúrgico, incluyendo reducción del daño
de la mayor cantidad de sulfato de morfina autoadministra- musculoesquelético, menor acumulación de fluido en el ter-
do tras la DGYR abierta, los pacientes tuvieron unas pun- cer espacio y menor respuesta sistémica al estrés. Se consi-
tuaciones más altas en la escala visual-analógica del dolor dera que la reducción de la agresión quirúrgica durante la
que los pacientes sometidos a DGYR laparoscópica.13 Tras DGYR laparoscópica es la base fisiológica de las ventajas
el alta, los pacientes que se habían sometido a DGYR abier- clínicas observadas en esta técnica. Entre las ventajas fisio-
ta siguieron teniendo unas puntuaciones más altas en dicha lógicas de la DGYR laparoscópica se cuentan menor dete-
escala el día 7 del postoperatorio que los pacientes que se rioro postoperatorio de la función pulmonar y menor inci-
habían sometido a cirugía laparoscópica. dencia de atelectasias pulmonares. Por su parte, las ventajas
La recuperación puede medirse subjetivamente inves- clínicas incluyen reducción del dolor postoperatorio y recu-
tigando la cantidad de tiempo que tardan los pacientes en peración más rápida. En el momento actual son numerosos
volver a sus actividades de la vida diaria. Nguyen y cols. los datos basados en la evidencia que corroboran las ventajas
publicaron que tras DGYR laparoscópica los pacientes expe- fisiológicas y clínicas de este planteamiento quirúrgico. Así
rimentaban un retorno más rápido a sus actividades de la pues, la cirugía bariátrica laparoscópica puede constituir el
vida diaria que los pacientes tras DGYR abierta.14 Además, nuevo patrón de tratamiento de la obesidad mórbida, tenien-
el tiempo de recuperación se estudió en virtud de la capaci- do en cuenta, eso sí, que el cirujano haya pasado su período
dad de los pacientes para recuperar sus funciones físicas, de aprendizaje de los abordajes laparoscópicos.
sociales y sexuales, y en la percepción de su propio estado
general de salud. Se les proporcionó una encuesta de salud
de 36 preguntas (Short-Form 36) como un método objetivo Z BIBLIOGRAFÍA
para medir el funcionamiento físico y social de los pacien-
tes y su percepción de su estado general de salud. El cues- 1. Buchwald H: Overview of bariatric surgery. J Am Coll Surg
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© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

laparoscopic gastric bypass complications seen in the first year


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laparoscópica que tras DGYR abierta a los meses postope- 3. Balsiger BM, Kennedy FP, Abu-Lebdeh HS, et al: Prospective evalu-
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290 Sección V • INTERVENCIONES

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34
Principios de la cirugía bariátrica de revisión
George S. M. Cowan, Jr., M.D.

La cirugía bariátrica de revisión se emplea para tratar ciertas sentan a consulta para valorar la posibilidad de cirugía bariá-
complicaciones crónicas, subagudas o agudas que ocurren al trica de revisión pueden no ser lo suficientemente francos en
menos 30 días después de la cirugía primaria. Las presenta- una primera visita. Por ejemplo, los síntomas de un paciente
ciones para una posible revisión pueden registrarse en cual- con náuseas, vómitos y disfagia intratables después de ciru-
quier sitio y pueden ser más o menos sencillas de solucionar gía bariátrica primaria podrían aparecer como consecuencia
o muy complejas y frustrantes. de una ingesta importante de alcohol no detectada, en lugar
Todos los candidatos a cirugía bariátrica de revisión del diagnóstico del médico que deriva al paciente de infla-
requieren una preparación y cirugía minuciosas, si se consi- mación gástrica grave secundaria a una derivación gástrica
dera necesario, a cargo de un cirujano lo bastante experi- previa.
mentado en las revisiones bariátricas1 que tenga unos princi- Por otra parte, hay motivos relativamente simples para
pios equilibrados pre, intra y posquirúrgicos. Estos principios proceder a una revisión, tales como erosión de la banda tras
deberían considerarse, sin embargo, como simple guía, y gastroplastia, migración de la banda, esofagitis e interrup-
deben admitir excepciones basadas en la experiencia y el cri- ción de la línea de grapas. Todas pueden tratarse, entre otras
terio del cirujano. opciones, mediante conversión a una derivación gástrica en
Y de Roux.3-5 La conversión de una gastroplastia vertical con
banda (GVB) fallida en una derivación gástrica en Y de Roux
Z PRINCIPIOS GENERALES DE LA REVISIÓN produce más pérdida de peso y tiene menos riesgo de fracaso
de la reintervención que repetir la GVB.6
Al contrario que con la cirugía bariátrica primaria,2 no hay Durante la cirugía de revisión pueden haber hallazgos
normas universalmente aceptadas para las indicaciones o pro- inesperados, a veces por contar con anotaciones insuficien-
cedimientos en la cirugía bariátrica de revisión. Ya que los can- tes o erróneas referidas a la cirugía previa. El cáncer, en
didatos a esta presentan potencialmente una gran diversidad de todas sus formas, tiene una mayor incidencia entre los obe-
combinaciones en los síntomas, signos, procedimientos qui- sos y, aunque se trata de casos poco frecuentes, puede apare-
rúrgicos previos, hallazgos y diagnósticos, constituyen una cer inesperadamente.7 Otros hallazgos quirúrgicos sorpren-
población infinitamente más compleja que sus homólogos de dentes pueden ser un tumor intraadominal ovárico o uterino,
cirugía bariátrica primaria. Por consiguiente, no son factibles una hernia interna, o enfermedades que surgen en el hígado,
secuencias de orientaciones como las aplicadas en este ámbito. la vesícula biliar, los riñones o el páncreas. Después de la
Lo que hay que entender aquí es que la excepción puede con- cirugía bariátrica de revisión pueden desarrollarse otros
firmar la regla con más frecuencia que ningún principio o guía problemas infrecuentes, como síndrome de Guillain-Barré,
en sí mismos, y que el razonamiento sensato del cirujano bariá- vólvulos recurrentes, formación de fístulas o síndrome de
trico de revisión experimentado es la primera y principal nor- Munchausen.8
ma. La flexibilidad, incluyendo la capacidad de revisar los pla- La cirugía bariátrica de revisión está evolucionando casi
nes preoperatorios o intraoperatorios previstos, basada en la hasta constituirse en una subespecialidad de cirugía bariá-
información adicional, es esencial para el éxito. trica, en la que los cirujanos de mayor destreza serán los que
Hay que tener siempre presente que no todos los pacientes se mantengan mejor informados de los nuevos desarrollos en
de cirugía bariátrica pueden conseguir el peso ideal o quedar esta área. También deben tener experiencia recogida de un
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

libres de problemas. Las modalidades actuales de cirugía bariá- gran volumen de casos.
trica primaria son altamente efectivas, pero no producen un
peso corporal ideal en todos los pacientes con obesidad mórbi-
da; es decir, no todo el mundo puede volverse delgado por este Z PRINCIPIOS PARA EL ESTUDIO DIAGNÓSTICO
medio. La cirugía bariátrica de revisión tal vez no proporcione
de forma previsible un alivio de las enfermedades preexistentes No todas las náuseas o vómitos intratables precisan necesa-
asociadas con la cirugía bariátrica previa o con las patologías riamente una cirugía bariátrica de revisión. La presencia de
comórbidas de la obesidad, total ni parcialmente. acufenos o de pérdida de audición puede apoyar el diagnós-
Es conveniente esperar sorpresas y será necesario estar tico del síndrome de Ménière.
preparado para enfrentarse a ellas antes, durante y tras la Las náuseas matutinas persistentes e intensas pueden
cirugía bariátrica de revisión. Algunos pacientes que se pre- asociarse a la hipoglucemia producida durante el sueño; dichas
293
294 Sección VI • REINTERVENCIONES Y COMPLICACIONES

náuseas responden a la glucosa enteral o parenteral adminis- importantes no es factible o no proporciona una mejoría
trada antes de acostarse hasta que el problema remite espon- adecuada. La decisión depende de un estudio lo bastante
táneamente, a veces asociado con un tratamiento para la hipo- minucioso como para justificar y orientar el abordaje qui-
glucemia reactiva. En ocasiones poco frecuentes, la bulimia o rúrgico, siendo a menudo más concienzudo que para la ciru-
la anorexia preexistentes pueden no detectarse en el examen gía bariátrica primaria. Si es posible, es deseable realizar un
preoperatorio y son a veces responsables de náuseas y vómitos estudio de los registros de la cirugía bariátrica previa y de
postoperatorios. Un embarazo no detectado también podría otros informes, ya que se trata de un aspecto importante
explicar los síntomas de náuseas y vómitos. para que la cirugía de revisión tenga éxito.
La realización de un ensayo de 1 a 3 meses de duración El resto del estudio incluye los exámenes cardiopulmo-
con modalidades alternativas para perder peso, aplicado a los nar, psiquiátrico y nutricional; análisis gastroenterológicos,
pacientes que no hayan perdido peso tras la cirugía bariátrica, de laboratorio y de imagen, y una prueba de embarazo en
puede evitar la necesidad de la cirugía de revisión. Después de todas las pacientes potencialmente fértiles. También es con-
1 o más años de la cirugía bariátrica, algunos pacientes desarro- veniente asegurarse de que los exámenes de frotis de
llan un deseo insaciable de tomar dulces, que puede ocasionar Papanicolau (PAP) y de mama están convenientemente
un aumento de peso de moderado a grave. Alrededor de dos actualizados. Es importante descartar una posible lesión
tercios de estos pacientes podrían responder, en distintos gra- cardiopulmonar por exposición previa a fentermina y fen-
dos, a un fármaco dispensado sin receta médica, la 5-hidroxi- fluramina, además de revisar todos los fármacos usados
triptamina. Otra alternativa es tomar una dieta alta en proteí- anteriormente, tanto dispensados con receta como sin ella.
nas que en ocasiones reduce o elimina el ansia por los dulces. En ocasiones, la exploración física puede ser engañosa.
El «llenado del estómago» con alimentos de bajo contenido Por ejemplo, hay que evitar considerar que los síntomas refe-
calórico, como palomitas de maíz, galletas de arroz, apio, coli- ridos por el paciente de dolor abdominal intenso «evidente»
flor cruda, melón, queso fresco o zanahorias, es una técnica tienen su origen dentro del abdomen. Es posible que, en un
auxiliar que puede inducir saciedad. examen más detallado, se observe que la fuente del dolor es
Se sabe que ciertos fármacos afectan negativamente a la una hiperestesia, o bien dolores musculoesqueléticos de la
pérdida de peso después de la cirugía bariátrica.9 Entre ellos pared toracoabdominal inferior anterior. La hiperestesia,
se cuentan antidepresivos, antihistamínicos, agentes hipoglu- la inflamación del xifoides o del esternón y la costocondritis
cemiantes, tratamiento hormonal (incluyendo los anticoncep- pueden diagnosticarse mediante una exploración cuidadosa,
tivos) y corticoesteroides. Si un paciente está tomando alguna y explican un dolor crónico en esas zonas, sin necesidad de
de estas medicaciones y su principal síntoma es el aumento o cirugía de revisión.
una pérdida inadecuada de peso, merece la pena probar otros Es una buena práctica revisar todas las radiografías gas-
fármacos alternativos que no se relacionen con el aumento de trointestinales con el radiólogo ya que, por ejemplo, una
peso antes de someterse a cirugía de revisión. obstrucción total o parcial de la rama biliopancreática (afe-
No todos los casos de malnutrición, síndrome de vacia- rente) es una patología potencialmente letal. Ello se debe a
miento rápido o diarrea grave tras la cirugía bariátrica pri- que puede pasar inadvertida a los médicos que no sospechen
maria necesitan una revisión. Durante las primeras etapas de ella. La rama biliopancreática representa el intestino del-
tras la cirugía de derivación gástrica, la curva de pérdida de gado derivado y, por tanto, los contrastes normales tomados
peso se parece a la que se registra con ciertas formas graves por boca no la alcanzan. En presencia de obstrucción de la
de síndrome de intestino corto. Sin embargo, una vez que la rama biliopancreática, la marcada distensión del estómago
curva de pérdida de peso desciende a un nivel de peso acep- derivado puede desplazar, forzar en exceso e interrumpir el
table, este seudosíndrome de intestino corto mejora cuando aporte mesentérico de sangre a una rama alimentaria ante-
el paciente alcanza un nuevo nivel de balance nutricional y cólica. Esto puede producir gangrena de la rama, así como
es capaz de ingerir y absorber suficientes nutrientes como perforación del estómago derivado o interrupción del esto-
para mantener de manera satisfactoria su peso reducido. ma.10 Una tomografía computarizada del abdomen suele
Por desgracia, una minoría de pacientes sometidos a ciru- detectar un asa en C distendida, un estómago derivado anor-
gía bariátrica no son capaces de absorber en el intestino los malmente agrandado y, a veces, una rama alimentaria anó-
suficientes nutrientes como para mantener un estado de salud mala. Sin embargo, algunos radiólogos no familiarizados
bueno. Esto puede ser el resultado, por ejemplo, de anomalías con esta anatomía y sus problemas potenciales pueden no
nutricionales preexistentes pero ocultas, enfermedad celíaca o considerar esta apariencia lo suficientemente anómala como
patologías similares a ella, insuficiencia pancreática exocrina para que merezcan reflejar estos hallazgos en el informe.
o intolerancia a la lactosa. La corrección de las anomalías Antes de proceder a la cirugía bariátrica de revisión
nutricionales y de los fluidos mediante alimentación enteral o debería corregirse cualquier problema nutricional significa-
parenteral, o regímenes dietéticos especiales con, por ejemplo, tivo.11
extracto pancreático, atropina, mucílago, colestiramina o lac- Todos los pacientes operados de cirugía bariátrica pre-
tasa por vía oral o entérica, son en ocasiones suficientes, ya sea sentan riesgo de desarrollar malnutrición por complicacio-
solos o en combinación, sin necesidad de cirugía de revisión. nes de la cirugía. Entre ellas se cuentan deficiencias en la
Cuando se realiza un estudio diagnóstico para la detec- albúmina sérica, cinc, hierro, vitaminas A, D y B12, tiamina
ción de Clostridium difficile u otras infecciones del tubo y ácido fólico, calcio, fosfatos y magnesio, que suelen deber-
digestivo, aunque sea negativo, el tratamiento antimicrobia- se a una ingesta o absorción inadecuada de nutrientes. Las
no empírico puede ser efectivo en casos de diarrea. Los casos manifestaciones clínicas pueden ser edema importante de
graves de vaciamiento diarreico pueden manejarse de forma los miembros inferiores, lengua roja, queilosis, palidez, can-
eficaz con la corrección parenteral de la deficiencia de vita- didiasis esofágica, debilidad, fatiga, mareos, parálisis, confu-
mina D asociada, que podría estar implicada en la causa de sión, deshidratación y lesión miocárdica oculta.
este problema. Evite hacer un diagnóstico prematuro de alteración psi-
La cirugía bariátrica de revisión puede estar indicada quiátrica para explicar los síntomas físicos del paciente tras
cuando el tratamiento no quirúrgico de los problemas someterse a cirugía bariátrica. Un paciente que tenga una
Capítulo 34 • Principios de la cirugía bariátrica de revisión 295

actitud, un patrón de conducta o unos antecedentes deter- cación del intestino, la revisión de una cirugía bariátrica que
minados puede hacer que el cirujano tienda a atribuir un se limita al estómago, como una banda gástrica hinchable o
origen psiquiátrico a esos síntomas físicos, sin que el pacien- una GVB, debe considerarse seriamente. El preocupante y
te reciba una exploración adecuada. En estos casos el psi- amenazador riesgo de anemia o hemorragia, aguda o cróni-
quiátrico debe considerarse un diagnóstico de exclusión, que ca, en los pacientes que son Testigos de Jehová ha incitado a
sólo será correcto tras descartar todos los demás diagnósti- muchos cirujanos bariátricos de revisión a realizar sólo pro-
cos posibles a través de un estudio completo y minucioso. cedimientos restrictivos sencillos cuando tratan a personas
Es conveniente proceder a un examen psicológico como de esta confesión.
parte de la preparación para la cirugía bariátrica de revisión. En caso de duda, la revisión debe realizarse utilizando
De los pacientes que acuden a nuestra clínica como candida- una técnica abierta. Debido a las mínimas adherencias que
tos a cirugía bariátrica primaria, el 89% presentaron un producen la mayoría de las cirugías bariátricas laparoscópi-
diagnóstico de depresión,12 y esta a menudo empeora en los cas, la cirugía de revisión por vía laparoscópica es viable y tal
pacientes que padecen problemas importantes tras la cirugía vez preferida por los cirujanos bien entrenados y con expe-
bariátrica. En muchos, el dolor abdominal y otros síntomas riencia. La experiencia es imprescindible para decidir qué
se consideraron exacerbados por la depresión. acceso utilizar; en este contexto suele aplicarse el principio
Facilite al paciente un consentimiento informado al reflejado en la frase «en caso de duda, abrir».
menos tan detallado como el de los pacientes de cirugía bariá-
trica primaria. La mayoría de los cirujanos bariátricos dispo-
nen de uno o varios consentimientos informados convencio- Z PRINCIPIOS INTRAOPERATORIOS
nales, que intentan proporcionar al candidato a la cirugía
bariátrica una información adecuada y bien documentada. Dediquen toda la atención posible a medir y registrar todas las
Este no suele ser el caso de la cirugía bariátrica de revisión, ya longitudes de las ramas de intestino delgado al realizar la revi-
que se realiza con menor frecuencia, abarca más variables y, sión de cirugía bariátrica de intestino delgado. El no prestar
en el pasado, no había modelos de consentimiento informado la suficiente atención a las longitudes de las ramas revisadas o
tan accesibles como los de la cirugía primaria. Nosotros preexistentes puede tener importantes consecuencias, como
hemos publicado un método destinado a documentar las ins- reflujo biliar a la bolsa gástrica, al esófago o a la cavidad oral.
trucciones que se han de impartir al paciente antes de some- Normalmente una longitud de 40 a 45 cm para la rama ali-
terse a cirugía bariátrica de revisión. El método se basa en un mentaria suele ser suficiente para evitar el reflujo biliar. Sin
modelo de examen preoperatorio, con opciones de verdadero/ embargo, el intestino delgado es muy difícil de medir adecua-
falso, que se cumplimenta en un tiempo razonable y que ya se damente, y puede contraerse hasta la mitad de su longitud al
ha usado con la cirugía bariátrica primaria.13-15 Desde la pers- manipularlo. Por tanto, se recomienda el uso de una rama
pectiva de la gestión del riesgo, es difícil que los pacientes alimentaria de al menos 90 cm para que, en el peor de los
indiquen que no han comprendido el contenido del consenti- casos, el estoma de la gastroenterostomía permanezca al
miento informado, cuando han firmado y atestiguado que sus menos a 45 cm de la enteroenterostomía.16
preguntas sobre la cirugía han sido debidamente respondidas Durante la cirugía de revisión, el cirujano bariátrico
por ellos en el cuestionario. puede llegar a la conclusión de que las ramas de la cirugía
anterior, en especial la alimentaria y la común, son demasia-
do cortas o se han medido con poca precisión. Sin embargo,
Z TOMA DE DECISIONES COMPLICADA una manipulación excesiva del intestino delgado, particular-
mente al disecar las adherencias que a menudo acompañan a
La reversión de la cirugía bariátrica primaria rara vez se realiza la cirugía de revisión, puede por sí sola causar una contrac-
en función de los intereses del paciente a largo plazo. La petición ción considerable y, por tanto, aparentar un acortamiento
por parte del paciente de una reversión de la cirugía bariátrica del intestino delgado.
primaria no suele ser una respuesta adecuada a los problemas o No todas las hernias abdominales deben ser reparadas
frustraciones sobrevenidos tras la cirugía. Los pacientes que se durante la cirugía bariátrica de revisión. Por ejemplo, si se
someten a una reversión quedan con cicatrices en el abdomen, reparan las grandes hernias ventrales existentes en el
al menos dos intervenciones quirúrgicas, y normalmente con las momento de la cirugía de revisión, pueden provocar un sín-
mismas patologías comórbidas de la obesidad que padecían antes drome compartimental abdominal, una cirugía excesiva-
de la primera operación. No hay, pues, ningún beneficio neto en mente prolongada o un riesgo inaceptable de infección del
lo que respecta al dolor, el riesgo y los gastos. implante de la herniorrafia. En estos casos es prudente dejar
Un abordaje adecuado para el cirujano bariátrico consis- un saco de hernia grande y totalmente abierto, que es poco
te en asegurarse de que los pacientes que solicitan una rever- probable que produzca complicaciones postoperatorias.
sión dispongan de un tiempo de espera de algunas semanas en Se aconseja considerar la inserción de un paraguas en la
las que se someterán a estudios diagnósticos, recibirán un con- cava en los pacientes con coagulopatías, trombosis venosa
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sentimiento informado completo y detallado sobre las conse- profunda previa, apnea obstructiva del sueño severa o hiper-
cuencias de la reversión y, lo que es más importante, tendrán tensión pulmonar.
la oportunidad de estudiar mejor sus sentimientos en lo que Cuando existe patología en el colon derecho o en el
respecta a un posible arrepentimiento de su decisión. Si al íleon distal, es deseable evitar, si es posible, la resección de
acabar este período siguen insistiendo en la reversión, y más la válvula ileocecal, sobre todo en las técnicas bariátricas
tarde se arrepienten de su decisión, no tendrán razones para malabsortivas. Dicha resección produciría un aumento en la
quejarse de que no dispusieron de tiempo suficiente para ana- malabsorción con malnutrición o diarrea problemática,
lizar las consecuencias de su decisión o de que no les fue pre- debido al sobrecrecimiento bacteriano retrógrado en el
sentado un consentimiento informado adecuado. intestino delgado distal.
En pacientes con enfermedad de Crohn u otras altera- La presencia de patología hepática puede no ser aparen-
ciones autoinmunes en las que hay o puede haber una impli- te macroscópica o bioquímicamente en el momento de la
296 Sección VI • REINTERVENCIONES Y COMPLICACIONES

cirugía bariátrica de revisión.17 Por desgracia, esta patología Z CONCLUSIÓN


es en ocasiones progresiva y contribuye a la aparición de
problemas postoperatorios. Por tanto, la obtención de una La cirugía bariátrica de revisión ocupa un lugar singular y
biopsia durante la cirugía de revisión puede alertar al ciruja- de gran interés en el campo de la cirugía bariátrica. La
no sobre una fibrosis inadvertida, cirrosis, hemocromatosis demanda de experiencia y conocimientos actualizados son
u otros hallazgos antes de que se manifiesten clínicamente. obligados por el conjunto de los pacientes que desarrollan
Los divertículos intestinales se dan a veces tras anasto- problemas, aparentes o reales, tras la cirugía primaria. Estos
mosis terminolaterales o terminoterminales funcionantes. pacientes confían en sus cirujanos bariátricos para que los
Con el tiempo, estos pueden dilatarse considerablemente. Si oriente en una dirección adecuada, establezcan diagnósticos
se encuentran durante una cirugía bariátrica de revisión, la acertados, operen hábilmente basándose en las indicaciones
disección y resección cuidadosa de tales divertículos entéri- adecuadas y les traten y revisen correctamente durante el
cos dilatados, sobre todo si forman parte de la rama bilio- resto de sus vidas.
pancreática, puede evitar futuros problemas relacionados
con un síndrome de asa ciega.
En caso de duda, conviene realizar un drenaje a una dis-
tancia de seguridad de la línea de grapas o de sutura. Las
Z BIBLIOGRAFÍA
fugas postoperatorias ocurren raras veces, pero cuando se 1. Cowan GSM Jr: The Cancun International Federation for the
dan, la alarma precoz puede manifestarse por la presencia de Surgery of Obesity (IFSO) statement on bariatric surgeon qualifica-
un fluido de drenaje bilioso o de amilasa en una muestra tions. Obes Surg 1998;8:86.
de drenaje de la herida, por una tinción coloreada, o por 2. National Institutes of Health: NIH guidelines: gastrointestinal
alimento saliendo del lugar de drenaje. Aunque no siempre, surgery for severe obesity. NIH Consensus Statement 1991;9:1-20.
3. Westling A, Ohrvall M, Gastavsson S: Roux-en-Y gastric bypass after
un drenaje puede canalizar cualquier contenido fistuloso previous unsuccessful gastric restrictive surgery. J Gastrointest Surg
hacia el exterior, a modo de «fuga controlada». 2002;6:206-211.
No importa qué tan minuciosa haya sido la preparación 4. Balsiger BM, Murr MM, Mai J, et al: Gastroesophageal reflux after
preoperatoria; siempre pueden darse hallazgos intraoperato- intact vertical banded gastroplasty: correction by conversion to
Roux-en-Y gastric bypass. J Gastrointest Surg 2000;4:276-281.
rios inesperados, que se registran con más frecuencia de la 5. Macgregor AM, Rand CS: Revision of staple line failure following
que podría pensarse. Por ejemplo, podemos encontrar gran- Roux-en-Y gastric bypass for obesity: a follow-up of weight loss. Obes
des divertículos de la enteroenterostomía, adherencias intes- Surg 1991;1:151-154.
tinales intensas o ausentes, pliegues intestinales, mesente- 6. van Gemert WG, van Wersch MM, Greve JW, et al: Revisional
surgery after failed vertical banded gastroplasty: restoration of verti-
rios muy largos y adelgazados, hernias intestinales o ramas cal banded gastroplasty or conversion to gastric bypass. Obes Surg
de longitud distinta a las mediciones previas. 1998;8:21-28.
Hay que evitar cruzar la línea de grapas gástricas previa 7. Sweet WA: Linitis plastica presenting as pouch outlet stenosis 13 years
con más filas de grapas o con grapas formando ángulo. El after vertical banded gastroplasty. Obes Surg 1996;6:66-70.
8. Cowan GSM Jr, Battle AO, Buffington C, et al: Munchausen’s syndrome
cruzar la línea previa de grapas gástricas, como se hace al in postoperative bariatric surgical patients. Obes Surg 1997;7:98-99
convertir una bolsa grapada horizontalmente en una verti- 9. Aronne LJ, Bray GA, Pi-Sunyer FX, et al: Management of Drug-Induced
cal, implica un aumento del riesgo de estenosis postoperato- Weight Gain: A Continuing Education Monograph for Physicians.
ria o de fuga, en comparación con el que se da en un grapado Madison, WI, University of Wisconsin Medical School, 2002.
en una zona de estómago sin grapado previo. Cuando la con- 10. Keysser EJ, Ahmed NA, Mott BD, et al: Double closed loop obstruc-
tion and perforation in a previous Roux-en-Y gastric bypass. Obes
versión de la bolsa de horizontal a vertical sea de una impor- Surg 1998;8:475-479.
tancia indiscutible, la interposición de intestino entre la 11. Kushner R: Managing the obese patient after bariatric surgery: a case
bolsa gástrica y el estómago distal puede reducir las fugas.18 report of severe malnutrition and review of the literature. J Parenter
Si no se puede evitar la línea de grapas gástricas previa, es Enteral Nutr 2000;24:126-132.
12. Cowan GSM III, Buffington CK, Vickerstaff S, et al: Psychological
importante invertir la línea de grapas de la bolsa gástrica con status of the morbidly obese. Obes Surg 1996;6:107-108.
suturas discontinuas de Lembert no reabsorbibles sobre una 13. Cowan GSM Jr: Informed consent in bariatric surgery. In Deitel M (ed):
sonda fija, para reducir el riesgo de fugas y fístulas.19 Obesity Surgery, pp. 327-337. Lea & Febiger, Philadelphia, 1989.
Hay que etiquetar las ramas para evitar intercambiarlas. 14. Cowan GM Jr, Hiler ML, Martin LF: Reoperative obesity surgery. In
Martin LF (ed): Obesity Surgery, pp. 301-334, New York, McGraw-Hill,
Tras dividir el intestino delgado distal al ligamento de Treitz, 2004.
el cabo proximal del intestino dividido puede anastomosarse 15. Cowan GSM: Informed consent in bariatric surgery and anaesthesia.
a la bolsa gástrica en lugar de a la enteroenterostomía termi- In Alvarez A, Brodsky A, Cowan GSM, et al (eds): Morbid Obesity,
nolateral. Ello puede evitarse dedicando un tiempo a etique- Intra-Operative Management, pp. 27-42. Cambridge, U.K.,
Cambridge University Press, 2004.
tar la parte más distal de los cabos grapados de intestino 16. Cowan GSM Jr, Buffington CK, Hiler ML: Enteric limb lengths in
delgado dividido. bariatric surgery. In Deitel M, Cowan GSM Jr (eds): Update: Obesity
Se debe disecar todo el intestino delgado en la obstruc- Surgery for the Morbidly Obese Patient, pp. 267-276. Toronto, FD
ción intestinal. Durante la cirugía exploratoria en busca de Publications, 2000.
17. Gholam PM, Kotler DP, Flancbaum LJ: Liver pathology in morbidly
una posible obstrucción, a veces es aparente un punto «obvio» obese patients undergoing Roux-en-Y gastric bypass surgery. Obes
de obstrucción; sin embargo, puede haber otros lugares con Surg 2002;12:49-51.
riesgo de obstruirse más tarde. Por tanto, conviene disecar 18. Capella JF, Capella RF: Staple disruption and marginal ulceration in
en toda su longitud cada rama de intestino delgado, a menos gastric bypass procedures for weight reduction. Obes Surg
1996;6:44-49.
que haya motivos importantes para no hacerlo. Además, ello 19. Cucchi SG, Pories WJ, MacDonald KG, et al: Gastrogastric fistulas:
también revelaría la presencia de una hernia interna, sobre a complication of divided gastric bypass surgery. Ann Surg
todo después de procedimientos de derivación gástrica lapa- 1995;221:387-391.
roscópica.20 Los lugares potenciales para la formación de 20. Schweitzer MA, DeMaria EJ, Broderick TJ, et al: Laparoscopic
closure of mesenteric defects after Roux-en-Y gastric bypass.
hernias internas incluyen la unión mesentérica de la ente- J Laparoendosc Adv Surg Tech A 2000;10:173-175.
roenterostomía y la abertura mesocólica para el tránsito de 21. Serra C, Baltasar A, Bou R, et al: Internal hernias and gastric perfora-
la rama alimentaria retrocólica.21 tion after a laparoscopic gastric bypass. Obes Surg 1999;9:546-549.
35
Estenosis y úlceras marginales
en cirugía bariátrica
Bruce David Schirmer, M.D.

La estenosis tras intervenciones de cirugía bariátrica se define DGYR suelen ser diagnosticados y tratados de manera simi-
generalmente como una estrechez de la anastomosis proximal, lar, cualquiera que sea la causa de la estenosis.
o canal de salida gástrico, de la operación. En las derivaciones La tabla 35-1 muestra las causas más frecuentes de esteno-
gástricas en Y de Roux (DGYR), las estenosis se producen en sis de la gastroyeyunostomía tras DGYR. Las estenosis que se
la gastroyeyunostomía. En las gastroplastias, en particular producen como resultado de la presencia de una úlcera margi-
en las gastroplastias verticales con banda o anilladas (GVB), se nal son a veces más difíciles de tratar y presentan una tasa de
producen en el sitio de salida de la bolsa gástrica. Las estenosis reintervención más elevada. El tema de las úlceras marginales
del intestino distal, de la anastomosis distal de la DGYR o de se estudia por separado en este capítulo, más adelante. Las
otras áreas del tubo digestivo tras una intervención bariátrica estenosis que se producen como resultado de isquemia pueden
se suelen considerar como una forma de obstrucción intestinal no ser tan asequibles a la dilatación como las debidas a otras
postoperatoria y como tal se tratan en la bibliografía. Por con- causas y la probabilidad de que necesiten una reintervención es
siguiente, este capítulo se limita al tema de las estenosis según a menudo mayor. Aunque ello no es válido en cualquier otra
la definición anterior. En este capítulo las palabras estenosis y parte del tubo digestivo, no existen datos que lo confirmen en
estrechez tienen idéntico significado. cirugía bariátrica; sin embargo, situaciones análogas en otras
Por lo general, las estenosis que son complicaciones partes del tubo digestivo sugieren que puede ser así.
postoperatorias de la cirugía bariátrica no ponen en peligro la La incidencia de estenosis tras DGYR varía dentro de
vida, a menos que se descuiden y que el paciente sufra posterior- amplios márgenes, según lo descrito en la bibliografía sobre
mente deficiencias metabólicas o nutritivas. Sin embargo, dichas cirugía bariátrica. Algunas revisiones de grandes series ins-
estenosis pueden ser fuente de considerable debilidad y, a veces, titucionales ni siquiera incluyen la estenosis como complica-
pueden hacer necesaria una reintervención para reparar, revisar, ción del procedimiento. Las publicaciones que describen la
resecar o circunvalar la estenosis, según dicte la situación. incidencia de esta complicación dan cifras que oscilan, típi-
También se tratarán en este capítulo las úlceras margi- camente, entre el 6% y el 15%.1,2 Es probable que la inciden-
nales, ya que están íntimamente relacionadas con la forma- cia descrita de esta complicación sea un producto de varios
ción de estenosis tras una DGYR. factores, que se enumeran en la tabla 35-2.
La incidencia descrita de estenosis es, casi con certeza,
proporcional al porcentaje de seguimiento de los pacientes
Z ESTENOSIS TRAS DERIVACIÓN GÁSTRICA por el cirujano y al registro preciso de este fenómeno en una
EN Y DE ROUX base de datos para su almacenamiento a largo plazo. De forma
similar, la intensidad con la que el cirujano investiga los sín-
tomas obstructivos indicativos de estenosis en un paciente,
Etiología e incidencia desde el punto de vista de la realización de estudios postope-
Una de las complicaciones que se pueden producir en la ratorios para documentar su presencia, influye indudable-
anastomosis proximal después de una DGYR es su estrecha-
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

miento o estenosis. Las causas de esas estenosis son multifac-


toriales; por tanto, el motivo de una estenosis concreta puede
no ser fácilmente evidente en función de su presentación clí- Tabla 35-1 CAUSAS DE ESTENOSIS
nica. Por fortuna, en la mayoría de las situaciones, con TRAS UNA DERIVACIÓN GÁSTRICA
excepción de las estenosis asociadas a una úlcera marginal o Tensión sobre la derivación
a las asociadas a isquemia, la causa de la estenosis no siempre Reacción a cuerpo extraño
dicta el curso del diagnóstico y del tratamiento específicos. Error técnico en la creación
Los pacientes que presentan una estenosis después de una Úlcera marginal
Isquemia
Pérdidas con cicatrización asociada
Idiopática
Copyright 2006, Bruce David Schirmer, M.D.

297
298 Sección VI • REINTERVENCIONES Y COMPLICACIONES

yeyunostomía, produjo una incidencia de estenosis postope-


Tabla 35-2 FACTORES QUE CONTRIBUYEN ratorias que necesitaron dilatación del 9%. En la actualidad
A LA INCIDENCIA DESCRITA DE ESTENOSIS hemos adoptado el uso de una grapadora de anastomosis gas-
DESPUÉS DE UNA DERIVACIÓN GÁSTRICA trointestinal (AGI) para la anastomosis proximal y hemos
EN Y DE ROUX observado una reducción de la incidencia de estenosis a
Registro como complicación/acontecimiento por el cirujano/autor menos del 3% en los últimos 500 casos. Ahmad y cols. des-
Grado de seguimiento de los pacientes por el cirujano/autor cribieron una incidencia similarmente baja de estenosis
El cirujano/autor es endoscopista postoperatoria tras DGYR laparoscópica;10 en su serie de
El paciente vuelve al cirujano con síntomas 450 pacientes tuvieron una incidencia de estenosis de la gas-
Tipo de anastomosis (grapas frente a sutura) troyeyunostomía del 3,1%. Por su parte, Go y cols. describie-
Tipo de material de sutura
Intención de limitar el sitio de anastomosis
ron una incidencia de estenosis del 6,8% en una población de
Grado hasta el que se evalúan los síntomas con endoscopia y radiología 562 pacientes sometidos a DGYR laparoscópica, cuando uti-
Cuerpo extraño utilizado para colocar bandas en la anastomosis lizaron para la gastroyeyunostomía una grapadora circular
de 25 mm.11 Los 38 pacientes de este grupo que necesitaron
dilatación se presentaron a las 7,7 semanas de la intervención
mente sobre la incidencia documentada de la misma. Es y necesitaron una media de 2,1 dilataciones para ser tratados
mucho más probable que los cirujanos que practican fibroen- con éxito. Dos pacientes debieron ser intervenidos, uno de
doscopias altas investiguen los síntomas de obstrucción utili- ellos por una complicación de una dilatación.
zando endoscopia y, por tanto, es más probable que diagnos-
tiquen correctamente las estenosis postoperatoriamente. En Presentación
nuestra experiencia, cuando se practica endoscopia, la inci-
dencia de estenosis real, basada en los síntomas y en el cuadro Los pacientes con estenosis anastomóticas proximales post-
clínico, sólo es correcta en aproximadamente el 75% de los operatorias suelen describir síntomas de intolerancia a la
casos. Por consiguiente, la combinación de un estrecho segui- ingesta de alimentos sólidos o blandos, que ingerían sin difi-
miento y de la investigación de los síntomas obstructivos ten- cultad la semana anterior. La intolerancia se manifiesta en
drá como resultado una mayor incidencia de estenosis en primer lugar por los sólidos, pero luego progresa para incluir
cualquier cohorte de pacientes tras una DGYR. volúmenes grandes de líquidos. La historia típica describe
También es probable que la técnica de anastomosis sea una rápida evolución hasta llegar a tolerar sólo pequeños
importante en la aparición de una estenosis postoperatoria. sorbos de líquido. El marco temporal en el que se desarrolla
Fuimos testigos de un aumento de la incidencia de estenosis, este complejo sintomático suele situarse entre las 3,5 y la
que se acercó al 20%, durante un breve período de tiempo 8 semanas después de la intervención. Goitein y cols. regis-
cuando se utilizó una grapadora circular de 21 mm para crear traron un tiempo medio de 45 días desde la intervención
la gastroyeyunostomía. Posteriormente, usamos un dispositi- hasta la aparición de los síntomas.9 Ahmad y cols. describie-
vo de anastomosis terminoterminal (ATT) de 25 mm para la ron un tiempo medio de 2,7 meses tras la intervención.10 Sin
DGYR, con lo que la tasa de estenosis volvió al rango del embargo, a veces puede presentarse la estenosis hasta
10%. Desde que usamos una grapadora lineal nuestra inci- 12 semanas después de la operación sin úlcera marginal
dencia de estenosis ha caído por debajo del 3% en los últimos acompañante, e incluso más tarde si esta se ha desarrollado.
3 años. Nguyen y cols. observaron una tasa de estenosis del Las úlceras marginales producen edema y cicatrización en la
8,8% utilizando una grapadora circular de 25 mm, mientras anastomosis, causando estenosis en un elevado porcentaje de
que la tasa fue del 14,4% cuando utilizaron una grapadora casos cuando la úlcera es de magnitud considerable. La per-
circular de 21 mm.3 Matthews y cols. publicaron una tasa de sistencia de una úlcera importante aumenta considerable-
estenosis del 27% tras DGYR laparoscópica.4 González y mente la dificultad del tratamiento simple de la estenosis.
cols. llevaron a cabo un análisis de tres técnicas de realización
de gastroyeyunostomía tras DGYR laparoscópica5 y observa- Diagnóstico
ron que la incidencia de estenosis después de grapado circular
era del 31%, mientras que después de operaciones con sutura El tránsito esofagogastroduodenal es una excelente prueba
manual era significativamente inferior, del 3%, y que era de 0 de valoración selectiva para el diagnóstico de una estenosis
en pacientes en los que se usó grapado lineal. Una crítica que y suele mostrar el estrechamiento de manera bastante clara.
se le ha hecho a este estudio es que los grupos en los que se Sin embargo, se debe tener la precaución de visualizar la
usaron el grapado lineal y el circular tenían un número de anatomosis del paciente en dos planos para tener una idea
pacientes pequeño (8 y 13, respectivamente). Otros autores, precisa de la verdadera gravedad de la estenosis. Es más
como Capella y Capella,6 han publicado una reducción de las apropiado realizar un tránsito esofagogastroduodenal si el
úlceras marginales postoperatorias y, por tanto, de estenosis grado de sospecha de estenosis es bajo o moderado, o si no
desde que empezaron a realizar anastomosis suturadas a mano están fácilmente disponibles el cirujano o un endoscopista
utilizando sólo material de sutura reabsorbible. experimentado para practicar una fibroendoscopia alta. La
De manera similar, los resultados de grandes series de fibroendoscopia es la prueba definitiva para determinar la
procedimientos laparoscópicos de DGYR han mostrado importancia de una estenosis. El endoscopista obtiene im-
tasas de estenosis variables. Higa y cols. presentaron una portante información adicional sobre las causas posibles o
incidencia de estenosis postoperatoria de la anastomosis de probables de la estenosis y sobre el cuadro global de la ana-
21 de 400 casos, el 5,25%, en su serie inicial,7 y una incidencia tomía gastrointestinal superior tras la DGYR. La otra ven-
del 4,9% en un informe posterior sobre el seguimiento de taja destacada de la realización de una endoscopia es que
1500 casos.8 Goitein y cols. describieron una incidencia puede llevarse a cabo el tratamiento en la misma actuación.
de estenosis del 5,1% tras DGYR laparoscópica en 369 pacien- La figura 35-1 ilustra una estenosis tras DGYR.
tes.9 Nuestra experiencia inicial con DGYR laparoscópica, El argumento a favor de un estudio baritado como pro-
cuando usamos una anastomosis de tipo DTT para la gastro- cedimiento inicial es que la precisión para determinar una
Capítulo 35 • Estenosis y úlceras marginales en cirugía bariátrica 299

mediante endoscopia o radioscopia. Las ventajas del método


endoscópico son que se puede confirmar el diagnóstico y tra-
tar la lesión en una sesión. La figura 35-2 ilustra la realización
de una dilatación endoscópica con balón en una estenosis tras
DGYR. El cirujano-endoscopista también puede apreciar el
tamaño de la bolsa, la presencia de otras lesiones, la de úlceras
marginales, etc. Los pacientes prefieren a menudo la sedación
profunda empleada para la endoscopia alta a la sedación ligera
de la dilatación radioscópica. Las desventajas del método
endoscópico son que, de manera característica, el balón más
grande que se puede pasar con facilidad a través del canal
terapéutico superior es un 18F o un 20F.
Por otra parte, la dilatación radioscópica se puede reali-
zar con un balón mucho más grande y, en consecuencia, la
dilatación será mayor. La otra ventaja del método radioscópi-
co es que el paciente evita los riesgos, aunque pequeños, de la
sedación. El principal inconveniente del método radioscópico
estriba en que los pacientes encuentran el procedimiento
incómodo. Otra desventaja de la radioscopia es que la esteno-
sis puede ser demasiado estrecha para permitir con facilidad
el paso de una guía a través de la anastomosis. En esos casos
es necesaria la endoscopia para pasarlo. En estenosis tan mar-
cadas hemos observado que un método combinado, endoscó-
pico y radioscópico, planificado posteriormente, ha funciona-
Figura 35-1 Imagen endoscópica de la estenosis de una gastroyeyu- do bien. Una endoscopia diagnóstica con colocación de un
nostomía tras una derivación gástrica. (Copyright © 2006, Bruce alambre guía a través de la intensa estenosis va seguida de la
David Schirmer, M.D.) dilatación radioscópica utilizando el alambre para colocar el
balón de dilatación en su posición correcta. También es más
probable que la endoscopia consiga dilatar estenosis muy mar-
estenosis basándose en los síntomas clínicos está ciertamente cadas en las que es necesario para el éxito la visualización
alejada del 100%. En nuestra serie se aproxima al 75% en directa de la colocación del balón de dilatación en la estenosis.
pacientes que se presentan en el período de 1 a 3 meses des- La tabla 35-3 resume las ventajas relativas de la dilatación con
pués de la operación, pero cae a cerca del 50% en el caso de balón endoscópica frente a la radioscópica para el tratamiento
síntomas de aparición tardía, dando una precisión global del de la estenosis tras DGYR.
66% para el diagnóstico correcto de estenosis anastomótica Al realizar la dilatación endoscópica con balón de una
basado en los síntomas clínicos. Como un tránsito esofago- estenosis tras DGYR, el endoscopista ha de seguir varios
gastroduodenal es considerablemente menos costoso que una principios generales. Las indicaciones de la endoscopia
endoscopia alta, puede ser preferible como prueba de valora- deben incluir síntomas de náuseas, vómitos e intolerancia a
ción selectiva. Otros argumentos para la práctica de la endos-
copia como prueba diagnóstica inicial incluyen la posibilidad
de tratamiento en la misma actuación y la información adicio-
nal que se obtiene en el momento del procedimiento. La pre-
ferencia de un paciente la dicta en gran parte su experiencia
relativa con cada procedimiento. Un tránsito esofagogastro-
duodenal es bastante inocuo. Cuando se asocia a la dilatación
de la anastomosis dirigida por radioscopia, especialmente
cuando se hace dicha dilatación con niveles de sedación bajos,
el paciente puede percibir el procedimiento como molesto y
desagradable. Por otra parte, cuando se practica una endosco-
pia con niveles adecuados de sedación consciente, el paciente
suele estar dispuesto a que se repita si está indicada.
Las estenosis confirman la importancia que tiene que un
cirujano que realice cirugía bariátrica practique también
fibroendoscopias altas siempre que sea posible. El cirujano
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

está en la mejor posición, tiene el mejor conocimiento de la


operación y puede tomar la decisión más adecuada sobre
la conducta a seguir basándose en los hallazgos endoscópicos
de síntomas después de una operación bariátrica. El cirujano
bariátrico completo debe realizar fibroendoscopias altas a sus
pacientes con el fin de optimizar la eficacia de la asistencia.

Tratamiento
La dilatación con balón es el tratamiento de elección para la Figura 35-2 Dilatación con balón de la estenosis de la figura 35-1.
estenosis tras DGYR o DGYR laparoscópica y puede hacerse (Copyright © 2006, Bruce David Schirmer, M.D.)
300 Sección VI • REINTERVENCIONES Y COMPLICACIONES

hospitalización para la administración intravenosa de líqui-


Tabla 35-3 VENTAJAS DE LA DILATACIÓN CON BALÓN dos, electrólitos, vitaminas y nutrición. Sin embargo, esta
ENDOSCÓPICA DE ESTENOSIS circunstancia es poco frecuente por lo que la mayoría de los
TRAS DERIVACIÓN GÁSTRICA EN pacientes pueden ser tratados mediante dilatación con balón
Y DE ROUX FRENTE A LA RADIOSCÓPICA de forma ambulatoria. Un paciente que haya presentado
ENDOSCÓPICA vómitos intensos durante días tiene riesgo de deficiencia de
Más precisa para determinar el diámetro de la estenosis tiamina y se le debe administrar tiamina, por vía intramus-
Combina procedimientos diagnósticos y terapéuticos en una sola cular o intravenosa, para asegurar la prevención de las defi-
intervención ciencias neurológicas resultantes de la pérdida aguda de esta
Mejor para estenosis muy marcadas
Visualización directa del proceso de dilatación vitamina.
Determinación de otra anatomía y patología digestiva alta Sólo en una minoría de los casos es necesario el trata-
Preferencia del paciente por la sedación miento quirúrgico de la estenosis de la anastomosis tras
DGYR. En nuestra experiencia, muchos de ellos se asocian
RADIOSCÓPICA a úlceras marginales (v. texto siguiente).
El mayor tamaño del balón de dilatación permite una mayor dilatación
Coste ligeramente menor
Evita una sedación excesiva Resultados
En una serie inicial de 411 de nuestros pacientes sometidos
a DGYR abierta, 58 (14,1%) desarrollaron estenosis. La inci-
alimentos. Cuando estos síntomas se presentan hasta 6 meses dencia fue considerablemente más elevada en pacientes con
después de la intervención, las probabilidades de que lleven la técnica de DTT con grapas (19%) que con la técnica de
al diagnóstico de estenosis son mayores. Se deben seguir las sutura a mano (8,8%, P  0,05) para la creación de la gastro-
recomendaciones adecuadas de sedación consciente y el yeyunostomía. La eficacia del tratamiento fue buena tanto
endoscopista debe estar familiarizado con la anatomía que se para la dilatación endoscópica como para la radioscópica. En
debe esperar después de una DGYR. nuestra serie de dilataciones con balón, 38 pacientes necesi-
Si la estrechez anastomótica es muy marcada, en ocasio- taron sólo un procedimiento, 10 necesitaron dos, 5 necesita-
nes es difícil de localizar inicialmente, e incluso más difícil ron tres y 5 más de tres dilataciones. La mayoría de los
de dilatar. El endoscopista debe tener la precaución de rea- pacientes del grupo que necesitó más de tres dilataciones
lizar la dilatación inicial de las estenosis intensas con sólo (4 de los 5) tenía cicatrización por úlcera marginal asociada
una pequeña parte distal del catéter con balón. La punta del y fueron reintervenidos posteriormente.12 Por consiguiente,
catéter es bastante rígida de manera que el paso ciego de la la inmensa mayoría de los pacientes sin úlceras marginales
mayor parte del balón a través de una estrechez, cuando no asociadas fueron tratados satisfactoriamente de este proble-
se puede visualizar la luz más allá, conlleva un riesgo impor- ma con una o dos dilataciones con balón. En esta serie se
tante de perforación del yeyuno distal a la anastomosis. produjeron pocas complicaciones graves. Un paciente pre-
Muchas de las gastroyeyunostomías durante una DGYR, sentó metahemoglobinemia debida al espray de benzocaína.
especialmente las creadas utilizando una técnica de grapado Se produjo una perforación que requirió cirugía de urgencia
lineal o de sutura manual, se crean de manera terminolateral en un paciente para el que se había programado una inter-
o laterolateral. En tales situaciones, la pared posterior del vención inminente si no tenía éxito la dilatación.
yeyuno queda directamente detrás de la anastomosis y es Otros han tenido buenos resultados similares utilizan-
posible una perforación por la inserción agresiva del dilata- do dilatación con balón para la estenosis tras DGYR. Wolper
dor con balón. En vez de eso, se recomienda proceder a la y cols.13 refirieron que 13 de 16 pacientes habían sido dilata-
dilatación inicial insertando en la estenosis sólo 1-2 cm del dos con éxito. Por su parte, Kretzschmar y cols.14 informa-
balón, lo que suele permitir la introducción del endoscopio ron que 10 de 14 pacientes fueron tratados satisfactoriamen-
en la estenosis anastomótica, cuando no se consigue su paso te usando dilatación con balón tras DGYR. En la publicación
a través de la misma, desde donde es posible la visualización de Ahmad y cols.,10 una dilatación endoscópica con balón fue
directa de los siguientes avances del balón. Una vez pasado curativa en 9 de 14 pacientes. Goitein y cols.9 presentaron
así con seguridad en la luz del yeyuno, se retira el balón bajo 20 pacientes, 18 de los cuales fueron dilatados satisfactoria-
control endoscópico para que quede al otro lado de la anasto- mente por endoscopia, utilizando 62 dilataciones. En su
mosis antes de realizar la insuflación. experiencia, sólo el 22% de los pacientes fueron tratados
Si el paciente presenta un dolor abdominal intenso con- satisfactoriamente con una dilatación, mientras que el 39%
tinuo durante el período posdilatación está indicado un necesitaron dos y el 35% más de dos. Un paciente sufrió una
estudio con contraste hidrosoluble para descartar una per- perforación y dos de los pacientes, que habían sido reinter-
foración. Si se presenta una perforación el tratamiento es venidos, requirieron 7 y 10 dilataciones, respectivamente.
quirúrgico. Una hemorragia es sumamente rara después de Higa y cols.8 describieron la dilatación satisfactoria con
una dilatación anastomótica tras DGYR. balón en 72 de los 73 pacientes con estenosis tras DGYR
Después de una dilatación con balón, los pacientes laparoscópica.
deben ser observados y monitorizados como lo serían des-
pués de cualquier procedimiento endoscópico terapéutico.
La dieta después del procedimiento es líquida y pasa a sólida Z ÚLCERAS MARGINALES
a discreción del cirujano o del endoscopista (lo ideal es que
se proceda en función del criterio de una misma persona) y se Las úlceras marginales tras DGYR no son infrecuentes.1 La
basa en la anatomía y en el cuadro clínico. incidencia descrita en la bibliografía varía del 2% al 12%.
Según la intensidad de la desnutrición y de la deshidra- Sin duda, el índice de sospecha y la agresividad de la inves-
tación que ha sufrido el paciente durante el período de este- tigación endoscópica de los síntomas son responsables de
nosis sintomática de la anastomosis, puede estar indicada la parte de la variabilidad de la incidencia, así como de la varia-
Capítulo 35 • Estenosis y úlceras marginales en cirugía bariátrica 301

bilidad de la incidencia descrita de estenosis después de este


procedimiento. El tratamiento médico empírico de la sospe-
cha de úlcera, en vez de la realización de endoscopia diag-
nóstica, tendría como resultado una incidencia descrita de
este problema significativamente menor que la endoscopia
rutinaria por síntomas de sospecha de úlcera marginal. El
porcentaje del seguimiento de los pacientes también con-
tribuye a facilitar la verdadera incidencia del problema.
Como se ha mencionado antes para la estenosis, también se
ha demostrado que la técnica de realización de la anasto-
mosis está relacionada con la incidencia de formación de
úlceras marginales postoperatorias.6 La creación de una
bolsa gástrica más grande, con una mayor masa de células
parietales y la posibilidad de secreción de ácido, se asocia a
una mayor incidencia postoperatoria de úlceras margina-
les. La reacción a un cuerpo extraño puede ser también
causa de formación de úlcera. Además, se ha demostrado
que la presencia de Helicobacter pylori se asocia a un aumento
de la incidencia de úlceras marginales tras DGYR (v. más
adelante).

Presentación
Los pacientes con úlcera marginal tras DGYR suelen pre-
sentar uno de tres complejos sintomáticos. Pueden presentar Figura 35-3 Visión endoscópica de una úlcera marginal tras una
los mismos síntomas que los pacientes con estenosis; en estos derivación gástrica. (Copyright © 2006, Bruce David Schirmer, M.D.)
casos es la úlcera la que está produciendo la estenosis. Esta
presentación suele aparecer más tarde tras la intervención
que la simple estenosis no asociada a úlcera marginal. El Tratamiento
segundo complejo sintomático es, simplemente, un dolor
persistente, incisivo y urente, en la región epigástrica. Con El tratamiento de una úlcera marginal tras una DGYR es,
frecuencia, este dolor no se ve afectado por las comidas y es fundamentalmente, médico. Los pacientes deben ser trata-
de naturaleza bastante constante. La intensidad puede variar. dos empíricamente con triple tratamiento (es decir, clari-
El tercer complejo sintomático es el de hemorragia digestiva tromicina, metronidazol y un inhibidor de la bomba de
alta, con dolor asociado o sin él. De estas presentaciones la protones) sea positiva o no la prueba de ureasa en portaob-
más común es el dolor epigástrico persistente. jetos para H. pylori. Una vez completadas las 2 semanas del
ciclo de triple tratamiento, está indicado seguir con el inhi-
Diagnóstico bidor de la bomba de protones durante 6 meses. La res-
puesta al tratamiento médico es bastante elevada, por enci-
La fibroendoscopia alta es el mejor procedimiento y el único ma del 90%.
que está indicado si se sospecha que un paciente tiene una El fracaso del tratamiento médico se suele atribuir a la
úlcera marginal después de una DGYR laparoscópica. Un ingesta continua por el paciente de esteroides, ácido acetil-
tránsito esofagogastroduodenal es mucho menos preciso salicílico o antiinflamatorios no esteroideos, o bien a la pre-
para el diagnóstico de úlceras marginales porque los bordes sencia de rotura de una línea de grapas en la bolsa gástrica y
de las mismas son a menudo superficiales y no son siempre de una fístula gastrogástrica. El consumo de tabaco puede
evidentes en los estudios GI con medio de contraste. La pre- reducir la curación satisfactoria de la úlcera.
cisión para el diagnóstico de úlceras marginales de una La situación más difícil que se asocia a la úlcera mar-
endoscopia realizada correctamente debe aproximarse al ginal se produce cuando la úlcera ha fistulizado a la parte
100%. La figura 35-3 ilustra una típica úlcera marginal distal del estómago tras una DGYR en la que se ha dividi-
observada tras una DGYR laparoscópica. Si la hemorragia do completamente el estómago con grapas. En nuestra
es el síntoma inicial, debe usarse una endoscopia superior experiencia hemos registrado dos de esos casos. Una vez
para diagnosticar y, habitualmente, también para tratar de que una úlcera marginal ha creado una fístula gastrogástri-
forma simultánea el problema hemorrágico. ca, o que existe una fístula de este tipo (como consecuencia
Una úlcera marginal más profunda o más crónica, o que de la rotura de una línea de grapas) y produce una ulcera-
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

se presenta tardíamente después de la operación y se asocia ción marginal, se hará necesaria la reintervención. Si la
a síntomas obstructivos o a dolor abdominal intenso persis- inflamación no es intensa, suele ser viable una simple redi-
tente, debe levantar sospechas de que la úlcera ha creado una visión del estómago, que no se asocia a una tasa de compli-
fístula gastrogástrica. Si se encuentra una de esas úlceras, caciones muy significativa. Si el tamaño de la bolsa gástrica
debe realizarse un tránsito esofagogastroduodenal, que se ha es excesivamente grande, está indicada su reducción simul-
de realizar siempre si persiste una úlcera a pesar de un trata- tánea. Es adecuada la conservación de la gastroyeyunosto-
miento médico en dosis máximas. El estudio de contraste mía original cuando esa anastomosis no está estenosada.
suele revelar la fístula, pero no siempre lo hace. En la mente Estos procedimientos pueden ser difíciles de realizar si la
de un cirujano debe quedar siempre presente un alto índice úlcera marginal es antigua y ha producido una intensa
de sospecha de dicho problema si una úlcera marginal per- reacción inflamatoria. La mejor manera de prevenir tal
sistente no responde al tratamiento. situación es mantener el seguimiento de los pacientes e
302 Sección VI • REINTERVENCIONES Y COMPLICACIONES

investigar sin demora los síntomas de úlcera marginal, con difícil de tratar satisfactoriamente que la estenosis anasto-
una rápida reintervención si se comprueba claramente la mótica tras DGYR.
presencia de una fístula gastrogástrica. En el pasado se describió en términos variables la inci-
dencia de obstrucción del tracto de salida gástrico tras GVB.
Resultados Revisamos nuestra propia experiencia con GVB y encontra-
mos una incidencia de estenosis después del procedimiento
En nuestra experiencia con úlceras marginales después de del 17%. Sin embargo, el elemento más preocupante en este
DGYR observamos que 24 de nuestros 354 pacientes grupo de pacientes fue que el tiempo medio hasta la presen-
con DGYR presentaron úlceras marginales postoperato- tación era de más de 1 año después de la operación inicial.
riamente, con una incidencia del 6,8%. Tales datos son Nuestra tasa de éxito con una combinación de dilatación
previos a que realizáramos análisis en busca de la presencia endoscópica y posteriormente radioscópica fue escasa. El
de H. pylori. Posteriormente, realizamos dichos análisis resultado global en nuestra institución de la dilatación
utilizando biopsias endoscópicas preoperatoriamente en radioscópica de las estenosis sobre derivaciones digestivas
nuestros siguientes 166 pacientes sometidos a DGYR y altas es excelente, pero los pacientes con antecedentes de
encontramos que la incidencia postoperatoria de úlceras cirugía bariátrica, incluyendo los que presentaban estenosis
marginales se redujo de forma considerable, hasta el 3%.12 de la salida tras GVB, sólo tuvieron una tasa global de éxito
Actualmente realizamos análisis preoperatorios de H. pylori, del 50%.18 Como en nuestra serie la tasa de éxito de la dila-
endoscópicos o en suero, a todos los pacientes programados tación endoscópica o radioscópica o de una combinación de
para DGYR. las dos tras DGYR fue del 91%, la mayoría de los fracasos
Desde que empezamos a realizar DGYR laparoscópica, tras dilatación con balón por obesidad mórbida se observa-
ha cambiado nuestro método de realizar la anastomosis ron en pacientes con GVB o en pacientes que tenían úlceras
proximal. En la serie de pacientes sometidos a DGYR lapa- marginales asociadas a DGYR. Por tanto, la tasa de éxito de
roscópica con el uso de un método de gastroyeyunostomía la dilatación con balón en pacientes con GVB fue de menos
por DTT con grapado, la incidencia de úlceras marginales del 50%. Se utilizó la reintervención, con distintos métodos.
fue baja, cercana a la de la serie abierta. Desde que se adoptó Aunque la serie era relativamente pequeña, se obtuvieron los
el método tipo DGI para crear la gastroyeyunostomía, la mejores resultados cuando convertimos una GVB en una
incidencia de úlceras marginales ha estado un poco por enci- DGYR, mejor que realizar un procedimiento quirúrgico
ma del 1%. Sin embargo, en muchos de estos pacientes ha para quitar la banda, dilatar el tracto de la banda o crear una
pasado menos de 1 año desde la intervención y aún corren el gastrogastrostomía.
riesgo de presentar este problema. De todos modos, estos En la bibliografía se ha descrito con cierta frecuencia la
datos sugieren que veremos una incidencia muy baja de este conversión de GVB en DGYR a causa de diversos síntomas,
problema al haber usado la combinación del análisis preope- sobre todo por recuperación de peso. La mayoría de las
ratorio de H. pylori y la técnica de grapado con DGI para series no incluyen la estenosis como indicación común de esa
crear la gastroyeyunostomía para la DGYR laparoscópica. conversión, pero muchos la señalan como un síntoma que
necesita de dicha cirugía en un porcentaje minoritario de los
pacientes de las series. En conjunto, la incidencia de compli-
Z ESTENOSIS TRAS GASTROPLASTIA VERTICAL caciones postoperatorias después de cirugía de revisión,
CON BANDA como GVB en DGYR, es más elevada que después de la
operación bariátrica inicial. A pesar de este aumento en
En 1982 Mason publicó por primera vez su descripción de la la tasa de complicaciones, el fracaso de una GVB ha sido
GVB.15 Durante la década siguiente, fue la intervención tratado de forma satifactoria en la mayoría de los casos por
bariátrica más popular realizada en EE. UU. Sin embargo, medio de una intervención quirúrgica destinada a convertir-
informes de mal mantenimiento del peso perdido en el la en una DGYR. En el desarrollo de esta técnica no es nece-
seguimiento a largo plazo16 y la tendencia de los pacientes a saria la extracción de la banda, pero, no obstante, se procede
adoptar una dieta líquida y láctea hipercalórica, con la pos- a ella con frecuencia para evitar las posibles complicaciones
terior recuperación del peso,17 hicieron que muchos ciruja- postoperatorias de erosión de la banda o de ulceración de la
nos abandonaran el procedimiento a favor de la DGYR. En parte distal del estómago, que es una zona de difícil acceso a
la actualidad, la GVB representa menos del 5% de las inter- la exploración endoscópica después de una DGYR. Sugerman
venciones de cirugía bariátrica practicadas en EE. UU. y cols.19 realizaron conversiones de 53 procedimientos de
Como tal, aquí se presenta sólo para ofrecer al lector los GVB con complicaciones a DGYR, consiguiendo un 67%
antecedentes y la información de que pueden seguir formán- de pérdida del exceso de peso. La tasa de complicaciones en
dose estenosis en pacientes que fueron sometidos a este pro- la serie fue de aproximadamente el 50%, incluyendo 20 úlce-
cedimiento en el pasado. Afortunadamente, se ha demostra- ras marginales.
do que el sustituto del siglo XXI de la GVB en EE. UU., el
procedimiento laparoscópico con bandas gástricas ajusta-
bles, se asocia a una incidencia de formación de estenosis Z ESTENOSIS TRAS INTERVENCIONES
sumamente baja. MALABSORTIVAS
Después de una GVB, la estenosis postoperatoria se
produce en el sitio de salida de la bolsa gástrica. Se asocia Las operaciones malabsortivas, definidas como derivación
de manera casi constante a la presencia de la banda misma, biliopancreática (DBP) y derivación biliopancreática con
que suele estar hecha de un material no reabsorbible capaz cruce duodenal (DBP-CD), representan menos del 10%
de provocar con el tiempo una importante reacción cicatri- de las operaciones bariátricas realizadas en EE. UU. en la
cial a cuerpo extraño. Como esta es la causa de la estenosis actualidad. No se describe con frecuencia estenosis tras
que se produce después de una GVB en la mayoría de los DBP, mientras que se describieron úlceras marginales en
casos, la cicatrización progresiva del sitio es mucho más el 12,5% del grupo inicial de pacientes tratados por
Capítulo 35 • Estenosis y úlceras marginales en cirugía bariátrica 303

Scopinaro y cols. 20 Cambiando la técnica de gastroyeyu- Z BIBLIOGRAFÍA


nostomía y administrando bloqueantes H 2 pudieron redu-
cir esa incidencia al 3,2%; la incidencia global fue del 1. Sanyal AJ, Sugerman HJ, Kellum JM, et al: Stomal complications
5,6%. La mayoría de las úlceras marginales aparecieron of gastric bypass: incidence and outcome of therapy. Am J
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© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.
36
Fugas y alteración gástrica
en cirugía bariátrica
S. Ross Fox, M.D., y Myur S. Srikanth, M.D.

Los principales temas de este capítulo son los siguientes: ya que los tiempos operatorios y las tasas de fugas disminuyen
a medida que se acumula experiencia y se mejoran las técnicas.3
1. El mejor tratamiento de una fuga o escape tras la ciru- Nguyen y cols. observaron que, en un estudio aleatorio de deri-
gía bariátrica es su prevención. vación gástrica laparoscópica en comparación con la abierta, las
2. Todos los cirujanos bariátricos, con independencia de tasas de fuga anastomótica postoperatoria eran similares.4
su habilidad y experiencia, encontrarán fugas. El peso del paciente5 y la presencia de una circunstancia
3. La capacidad de tratar las fugas de forma eficaz es lo que que complique la situación como una estasis venosa grave6 pue-
distingue a un cirujano bariátrico plenamente compe- den influir sobre la probabilidad de que ocurra una fuga. La
tente. configuración corporal (p. ej., androide frente a ginecoide) es
4. El fracaso a este respecto pone al paciente quirúrgico otro factor de predisposición a tener en cuenta. Cabe esperar
bariátrico en riesgo de sufrir una infección grave, e que el diseño del estudio, en relación con las variables tales
incluso la muerte. como un análisis prospectivo frente a retrospectivo, la edad de
5. El reconocimiento de una fuga es el principal reto. los pacientes7 y el número de pacientes por grupo, guarden rela-
6. Una vez identificado un escape, su tratamiento es rela- ción con los hallazgos. Debido a que las fugas de las gastroen-
tivamente sencillo. terostomías son más comunes que las de las enteroenterosto-
mías, es útil determinar las respectivas incidencias de forma
Significado de las fugas separada, según la localización. Sin embargo, no todos los
informes diferencian entre los tipos de fugas anastomóticas.
En un paciente quirúrgico bariátrico pueden ocurrir varias Por otra parte, como sucede en otras complicaciones, la tasa de
complicaciones amenazadoras para su vida, tanto durante la fuga es mayor para las revisiones que para la cirugía primaria.
intervención como durante el postoperatorio, la más grave de las A pesar de los diferentes factores de complicación, las tasas de
cuales es la embolia pulmonar.1 Otras complicaciones graves, fuga publicadas en la literatura médica oscilan entre el 0,4% y
que potencialmente ponen en peligro la vida, incluyen fugas por el 5,1% para procedimientos de derivación gástrica primaria.
las dehiscencia de sutura y anastomótica, parada respiratoria, En la larga serie de procedimientos de cirugía bariátrica
infección de la herida, absceso subfrénico, hemorragia gastroin- descrita por Fobi,1 un total de 1756 pacientes fueron someti-
testinal, dehiscencia de la fascia, obstrucción gastrointestinal, dos a la operación de bolsa de Fobi; de ellos, el 2,6% presen-
úlcera péptica y pancreatitis. Desde la introducción del procedi- taron fugas documentadas, aunque sólo el 0,4% requirió
miento de derivación gástrica a finales de los años sesenta, 2 una intervención quirúrgica debido al uso rutinario de drenajes
fuga del estómago o de la anastomosis se ha considerado como en todas las operaciones secundarias. Según la experiencia de
una de las complicaciones más graves en este ámbito. Tras la Fobi, la incidencia de fugas tras las operaciones secundarias
embolia pulmonar, la complicación más grave que pone en peli- fue 15 veces mayor que en los procedimientos primarios.
gro la vida del paciente es la sepsis intraabdominal. La sepsis se
origina generalmente cuando no se ha detectado lo suficiente- Detección y tratamiento de las fugas
mente pronto o no se ha tratado de forma adecuada una fuga
procedente de la línea de sutura o de la anastomosis.1 El reconocimiento de las fugas, junto con el riesgo de que pue-
dan provocar una sepsis intraabdominal, supone un gran reto
Incidencia de las fugas para el cirujano bariátrico. Con independencia de la metodolo-
gía que se use, el oportuno diagnóstico de las fugas y la sepsis
Es difícil establecer de forma general la incidencia de las fugas en el paciente quirúrgico bariátrico es de suma importancia.
anastomóticas y de otro tipo, ya que en ellas se ven implicados El desafío para el cirujano bariátrico estriba en interve-
numerosos factores. Se han publicado las tasas de fugas de nir antes de que una fuga cause un síndrome de respuesta
varios tipos de procedimientos de cirugía bariátrica (v. ta- inflamatoria sistémica y prevenir que tal respuesta progrese
bla 36-1). La curva de aprendizaje, como para cualquier otro a sepsis, sepsis grave y shock séptico. Debe evitarse la dis-
procedimiento quirúrgico, debe ser también tenida en cuenta función de órgano final causada por la cascada de citocinas
304
Capítulo 36 • Fugas y alteración gástrica en cirugía bariátrica 305

Tabla 36-1 INCIDENCIAS PUBLICADAS DE FUGAS EN PROCEDIMIENTOS DE CIRUGÍA BARIÁTRICA

ESTUDIO PROCEDIMIENTO TIPO DE FUGA INCIDENCIA (%)


1
Fobi, 2000 OBF primaria Anastomosis 15/1371 (1,1)
OBF revisión Anastomosis 9/97 (9,3)
Derivación gástrica vertical anillada de Anastomosis 22/288 (7,6)
silastic con sección transversa
De María y cols., DGYR inicial (CL) Anastomosis con peritonitis 14/281 (5,1)
20023 DGYR CL (reciente; anastomosis de 2 capas) Anastomosis 3/164 (1,8)
Murr y cols., 19957 GVB (n  23); DGYR (n  43); derivación Anastomosis gástrica (global) 2/68 (2,9)
biliopancreática (n  2)
Schauer y cols., DGYR (LS) primaria Anastomosis 13/1264 (1,0)
200013 Bolsa/estómago distal 10/1264 (0,08)
Toppino y cols., GVB Fuga gástrica 3/327 (0,9)
200117 DGYR Anastomosis 2/55 (3,6)
Koehler, Halverson, DGYR Dehiscencia de sutura de grapas 5/72 (6,9)
198218 Bolsa gástrica proximal 2/72 (2,8)
Schwartz y cols., DGYR Separación de sutura de grapas 6/920 (0,7)
198819 Anastomosis 4/920 (0,4)
Fox y cols., 199620 DGYR distal Sutura de grapas 1/81 (1,2)
GVB Sin fugas 0 (0)
Sugerman y cols., Conversión GVB a DGYR GVB: alteración línea de sutura con grapas 15/58 (26,0)
199621 Conversión: alteración línea de sutura con grapas 3/58 (5,2)
GVB: anastomosis con peritonitis 2/58 (3,4)
Conversión: anastomosis con infección 2/58 (3,4)
de la herida
Curry y cols., 199822 DGYR de resección (primaria, n  47) Anastomosis 1/85 (1,2)
Matthews y cols., 200023 DGYR/CL Anastomosis gastroyeyunal 1/48 (2,1)
Balsiger y cols., 200024 DGYR (primaria) Alteración parcial de la línea sutura con grapas 2/191 (1,0)
Anastomosis 1/191 (0,5)
Gould y cols., 200225 DGYR (CLAM) Anastomosis 1/81 (1,2)
DGYR CL completa Anastomosis 4/223 (1,8)
Oh, Srikanth, 200326 BGA Bolsa posterior 3/130 (2,3)
BGA, banda gástrica ajustable; CL, cirugía laparoscópica completa; CLAM, cirugía laparoscópica asistida con la mano; DG, derivación gástrica;
DGYR, derivación gástrica en Y de Roux; GVB, gastroplastia vertical en banda; OBF, operación de la bolsa de Fobi.

generada por la sepsis que ocasiona como secuelas el síndro- a la cantidad de grasa en el mesenterio. Como resultado de
me de dificultad respiratoria del adulto, la insuficiencia res- ello, con frecuencia es difícil crear una anastomosis sin ten-
piratoria aguda, la coagulación intravascular diseminada, el sión entre la bolsa gástrica y el intestino delgado. Si existe
shock séptico y la muerte.8 cualquier tensión significativa sobre una anastomosis com-
pleta, las posibilidades de fuga son muy elevadas.

Z TRATAMIENTO DE LAS FUGAS FALLO DE LA GRAPA O DE LA GRAPADORA


En ocasiones, las fugas pueden ocurrir debido a un fallo, bien
Fugas locales de la grapadora, bien de la grapa. En todo momento, un ciru-
jano bariátrico puede sufrir un fallo del equipo y, por ello, debe
Como se comentó con anterioridad, las fugas suelen produ- estar siempre alerta ante esta eventualidad. Ésta es una impor-
cirse en las anastomosis, siendo los escapes de la gastroente- tante razón para revisar la integridad de una anastomosis antes
rostomía más comunes que las de la enteroenterostomía. de cerrar el abdomen. Las anastomosis debe ser inspecciona-
das cuidadosamente y la presión verificada con aire, azul de
Causas de las fugas metileno o jugo entérico, según resulte lo más adecuado.

ORIGEN DE LAS FUGAS FILTRACIÓN DE UNA SUTURA O DE LA LÍNEA SUTURA


El origen de las fugas es habitualmente multifactorial. CON GRAPAS
Fernández y cols. evaluaron a 3073 pacientes quirúrgicos bariá- Las suturas o las líneas de sutura con grapas pueden rezumar
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

tricos consecutivos e informaron de una tasa de fuga del 3,2% y son una probable causa de pequeños abscesos anastomóti-
(mortalidad del 1,5%).9 Los factores independientes para el de- cos, que drenan por sí solos y se registran de vez en cuando.
sarrollo de una fuga son hipertensión arterial, diabetes melli- Estos abscesos pueden terminar formando abscesos más
tus, apnea del sueño, edad, sexo, índice de masa corporal y tipo grandes o dando lugar a sepsis abdominal.
de cirugía. Sugerman y cols. incluyen, además, enfermedad de
estasis venosa y el síndrome de compartimento abdominal T ÉCNICA QUIRÚRGICA
como factores que contribuyen a este problema.6 Una técnica quirúrgica deficiente, debida, por ejemplo, a fal-
ta de delicadeza en el manejo de los tejidos y el uso del ins-
T ENSIÓN SOBRE LA ANASTOMOSIS trumental, contribuye a la fuga. Un fallo en la irrigación de
En los pacientes quirúrgicos bariátricos, la movilidad o elas- la cavidad peritoneal al finalizar el procedimiento aumenta la
ticidad del intestino delgado está a menudo reducida debido probabilidad del desarrollo de sepsis intraabdominal.
306 Sección VI • REINTERVENCIONES Y COMPLICACIONES

OBSTRUCCIÓN
Otra posible causa de fugas es el aumento de la presión Tabla 36-2 FALLO DE 19 FUGAS
intraluminal resultante de la obstrucción secundaria a adhe- EN 1541 PACIENTES QUIRÚRGICOS
rencias que aparecen de forma distal a la anastomosis. BARIÁTRICOS (SERIE DE FOX)
Incluso aunque la anastomosis se revise cuidadosamente N (% CASOS N (% CASOS
para comprobar que la integridad es adecuada, cuando exis- ANASTOMOSIS TOTAL) NO ANASTOMOSIS TOTAL)
te una obstrucción parcial o completa distal a esa anastomo-
Gastroenterostomía 7 (0,45%) Línea gástrica de 5 (0,32%)
sis, puede fracasar. sutura con grapas;
bolsa proximal
VASCULARIZACIÓN INSUFICIENTE
Enteroenterostomía 5 (0,32%) Línea de sutura con 1 (0,06%)
En el lugar de la anastomosis puede aparecer una fuga debi- grapas de estómago
da a una vascularización insuficiente de los tejidos. Por tan- distal
to, todos los tejidos deben ser revisados para comprobar que Desgarro de la cápsula 1 (0,06%)
presentan una circulación adecuada. hepática, secundario
a liberación de
LIBERACIÓN DE ADHERENCIAS adherencias (fuga de
bilis y peritonitis
En pacientes que han sido sometidos a liberación de adhe- biliar grave)
rencias es necesario prestar atención para comprobar la inte- Total de anastomosis 12 (0,77%) Total no anastomosis 7 (0,45%)
gridad de la serosa gastrointestinal; existe la posibilidad de
fugas en relación con la denudación del intestino.
por vía laparoscópica, Blachar y Federle11 informaron de una
MICROHEMATOMAS tasa de fuga del 6,2%, aunque la tasa es considerablemente
Los microhematomas también contribuyen al desarrollo de una menor en otras series (v. tabla 36-1). Las fugas pueden ocurrir
fuga en una anastomosis, especialmente con el uso profiláctico hasta 10 días después de la cirugía, pero habitualmente se
de anticoagulantes y la administración simultánea de otros producen dentro de las primeras 48 horas.
medicamentos que inhiben la coagulación (p. ej., inyección de
ketorolaco trometamina). El hematoma se forma dentro de la Obesidad androide (central) y ginecoide (periférica)
línea de la sutura con grapas y, a medida que crece, separa los
bordes de la anastomosis y, así, produce una fuga. Este tipo de Según nuestra experiencia, las fugas ocurren con mayor fre-
fuga puede tardar varios días en hacerse manifiesto. cuencia en pacientes androides porque los procedimientos
quirúrgicos bariátricos en pacientes con adiposidad intraab-
ENZIMAS PANCREÁTICAS Y BILIS dominal extensa son técnicamente más difíciles y en ellos es
La peritonitis causada por el vertido de bilis o enzimas pan- más probable que las anastomosis se realicen bajo tensión.
creáticas puede precipitar el fracaso de una anastomosis y Otro factor a tener en cuenta es que la obesidad central deja
causar una fuga. menos espacio para trabajar en el abdomen que en los pacien-
tes ginecoides, con su característico patrón de obesidad peri-
SEPSIS NO RELACIONADA CON UNA FUGA férica. Los mesenterios son menos flexibles en presencia de
Una sepsis no relacionada, en principio, con una fuga tam- exceso de tejido graso. Los hígados están a menudo aumen-
bién puede causar la alteración de una anastomosis. tados de tamaño debido a la esteatosis hepática. Otro impor-
tante factor es que la presión intraabdominal es mayor en la
Frecuencia de las fugas obesidad central.12 Ello dificulta el despliegue de instru-
mentos y la manipulación de los tejidos.
En nuestra serie de 1541 pacientes quirúrgicos bariátricos con-
secutivos, 19 presentaron fugas (1,2%). No hubo escapes entre Fugas que drenan espontáneamente
los 242 procedimientos primarios de gastroplastia vertical en
banda. En 868 procedimientos de derivación gástrica primaria Las fugas que drenan espontáneamente se reconocen en la
(tipo en Y de Roux [DGYR]), hubo 7 fugas (0,8%). En 431 revi- actualidad con mayor frecuencia debido a que, en general,
siones de procedimientos de DGYR (incluidos procedimientos los cirujanos buscan los escapes de forma más agresiva. Sin
secundarios tras operaciones primarias que habían sido realiza- embargo, muchas de estas fugas permanecen sin diagnosti-
das en otros centros) hubo 12 fugas (2,5%). Jones informa de car debido a que raramente causan síntomas. Estas fugas
una tasa de fuga en revisiones del 4,9%.10 Estos resultados sólo precisan ser drenadas cuando el trayecto fistuloso que
resaltan el hecho de que las revisiones muestran una incidencia las drena se obstruye y cuando se escapa material séptico
más elevada de fugas (tres veces mayor en nuestra serie) que en desde el sitio. Estas fugas autocontenidas son en ocasiones
las operaciones primarias (v. tabla 36-1). Ello es debido, en par- de magnitud notable y suponen alteraciones importantes de
te, a la mayor complejidad de los procedimientos quirúrgicos la anastomosis. Las hemos visto muy pequeñas, del orden
secundarios y a la pobre cicatrización del lugar de la anastomo- de los 2 mm de diámetro, en yuxtaposición a la anastomosis,
sis. Claramente, una fuga llega a ser incluso más probable con y también grandes, de hasta 3  5 cm. En este último caso,
dos o más revisiones en un mismo paciente. en la endoscopia se vio un cuello ancho. En última instancia,
En nuestra serie, dos fugas se resolvieron por el desarro- el defecto granuló desde el fondo y no requirió intervención
llo espontáneo de fístulas; las 17 restantes requirieron una quirúrgica alguna.
posterior laparotomía. En el 62% de los pacientes, la segunda
fuga ocurrió en el sitio original, a pesar de la reparación y de Diagnóstico de sepsis intraabdominal
la aplicación de parches de omento o serosa cuando fue posi-
ble. La tabla 36-2 muestra un resumen de las fugas en nuestra La detección de una sepsis intraabdominal en el paciente qui-
serie. En los procedimientos de DGYR primarios realizados rúrgico bariátrico plantea uno de los diagnósticos más desa-
Capítulo 36 • Fugas y alteración gástrica en cirugía bariátrica 307

fiantes para un cirujano. Aunque sencillo en algunas ocasio- R ESPIRACIÓN QUEJUMBROSA


nes, el diagnóstico sólo puede establecerse sobre la base de Los quejidos respiratorios son virtualmente patognomóni-
signos o síntomas infrecuentes o, incluso, por la intuición cos de sepsis intraabdominal y su presencia requiere confir-
del cirujano experimentado. Ello se debe a que los pacientes mación inmediata de una fuga mediante las pruebas diag-
con obesidad mórbida no siempre presentan los signos y sín- nósticas pertinentes y mediante intervención quirúrgica. La
tomas habituales característicos de la sepsis abdominal en «posición de Buda», con el paciente sentado en la cama con
los pacientes no obesos. En tales casos, un cirujano no puede las piernas cruzadas, inclinado hacia delante y con quejidos
depender sólo del examen físico. Por desgracia, los estudios respiratorios, es patognomónica de sepsis abdominal difusa
de laboratorio, al igual que las evaluaciones radiológicas, en con irritación peritoneal. Habitualmente estos pacientes
estas situaciones no son a veces diagnósticos. también presentan un grado significativo de distensión.

Síntomas de las fugas


Signos de fuga y sepsis
Según nuestra experiencia, las fugas que contienen sólo con-
tenidos gástricos son generalmente más lentas a la hora de TAQUICARDIA
causar síntomas que aquellas que contienen contenidos Es uno de los signos más significativos de posibles problemas
intestinales, debido a que la saliva es mucho menos irritante en el interior de la cavidad abdominal. Es causada por la res-
para los tejidos peritoneales que el jugo entérico, que contie- puesta inflamatoria sistémica. Se asume que, mientras no se
ne bilis y enzimas pancreáticas. demuestre lo contrario, una frecuencia cardíaca de 120 o mayor
puede deberse a una fuga y ha de ser motivo para la instaura-
M ALA EVOLUCIÓN ción del tratamiento definitivo. Por supuesto, otras circunstan-
Tras realizar un gran número de procedimientos bariátri- cias pueden causar taquicardia: hipovolemia, atelectasia, neu-
cos, desarrolla cierta intuición en lo que respecta al modo en monía, embolia pulmonar, ansiedad y fiebre. En cualquier caso,
el que los pacientes deben evolucionar durante el postopera- si hay una taquicardia, la sepsis intraabdominal debería consi-
torio si no presentan complicaciones. Un curso postoperato- derarse siempre como la primera posibilidad.
rio que no se desarrolla según los planes previstos eleva la
posibilidad de sepsis intraabdominal. FIEBRE
Los pacientes con fugas a menudo desarrollan fiebre en un
NÁUSEAS POSTOPERATORIAS período de entre 24 y 48 horas. El escape puede estar avan-
Las náuseas aparecen por una gran cantidad de razones, entre zado antes de que la respuesta febril llegue a ser pronuncia-
las que se cuenta la fuga. Si son persistentes, deben iniciarse los da. En ocasiones, un paciente permanece afebril a pesar de
estudios correspondientes para detectar un posible escape. tener una sepsis intraabdominal grave.
DOLOR ABDOMINAL TAQUIPNEA
El dolor es un síntoma poco fiable porque ocurre con frecuen- La taquipnea, particularmente en unión de taquicardia, debería
cia en el postoperatorio sin presencia de fuga. Además, los pa- llevar al cirujano a sospechar sepsis intraabdominal. Los signos
cientes obesos con sepsis intraabdominal avanzada pueden ser cardinales más tempranos de fuga son taquicardia, taquipnea y
ambulantes y referir molestias abdominales escasas o nulas. fiebre. Siempre que se presente esta tríada, debe realizarse sis-
temáticamente un estudio para descartar la fuga.
DOLOR DE HOMBRO
El dolor de hombro está habitualmente presente en pacientes DERRAME PLEURAL
con fugas. Este síntoma es debido a la irritación diafragmáti- El derrame pleural se suele asociar a irritación subdiafrag-
ca. El dolor es más común en el lado izquierdo porque los mática y ocurre habitualmente en el lado izquierdo. Esta
contenidos gástricos tienden a fluir hacia la izquierda cuando irritación causa con frecuencia dolor en el hombro izquier-
aparece una fuga. Incluso la sangre debajo del diafragma pue- do. Este tipo de molestia también deben dar lugar a la ins-
de ser lo suficientemente irritante como para causar dolor de tauración de un tratamiento definitivo de la fuga. A menudo,
hombro. Trabajar sobre o cerca del diafragma puede producir los microorganismos presentes debajo del diafragma pueden
la suficiente irritación como para causar molestias. No obs- ser cultivados a partir del líquido pleural.
tante, todos los dolores de hombro deben correlacionarse con
una posible fuga hasta que se demuestre lo contrario. OLIGURIA
La oliguria se origina a partir del tercer espacio o por insuficien-
DISNEA cia prerrenal. Es un signo ominoso. Se debe sospechar sepsis y
La disnea que a menudo ocurre en la sepsis abdominal se se ha de instaurar una intensa reanimación con líquidos.
relaciona habitualmente con la irritación y la rigidez dia-
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fragmática o el síndrome séptico. En este contexto, se de- SENSACIÓN DE MUERTE INMINENTE


sarrolla un derrame pleural (generalmente en el lado izquier- El paciente puede referir una sensación de muerte inminen-
do) debido al proceso subdiafragmático, y el derrame pleural te, que es inespecífica y difícil de definir pero altamente
disminuye el volumen pulmonar espiratorio. diagnóstica de una posible catástrofe intraabdominal.
SENSACIONES DE HINCHAZÓN
La distensión abdominal se produce por la sepsis y la irrita- Pruebas complementarias de fuga
ción serosa y el íleo que lo acompañan, lo que causa la sen-
sación de hinchazón, que puede variar de mínima a grave, HEMOGRAMA Y BIOQUÍMICA COMPLETOS
dependiendo de la diseminación relativa de la sepsis abdomi- Cuando se sospeche sepsis intraabdominal deben obtenerse
nal y del grado de íleo existente. de inmediato un hemograma y una bioquímica completos,
308 Sección VI • REINTERVENCIONES Y COMPLICACIONES

repitiéndolos a diario hasta que se haya resuelto el problema para investigarla. Una embolia pulmonar puede presentar
de la sepsis. Algunos cirujanos repiten el recuento leucocita- algunos de los signos y síntomas propios de una sepsis intra-
rio cada 12 horas. La leucocitosis es un signo bastante fiable, abdominal, como disnea, taquicardia, taquipnea, dolor abdo-
aunque en la fase tardía de la evolución de una sepsis abdo- minal superior o dolor torácico bajo y sensación de muerte
minal puede aparecer leucopenia. inminente. Una TC espiral es la prueba adecuada para des-
cartar la embolia pulmonar.
GAMMAGRAFÍA ABDOMINAL CON CONTRASTE ORAL
E INTRAVENOSO NIVELES DE CITOCINAS INTRAPERITONEALES
Siempre que un cirujano piense que existe posibilidad de La sepsis abdominal ocasiona una elevación de las citocinas
fuga, aunque sea remota, debe solicitar una TC con contras- peritoneales. La elevación de estas es probablemente el primer
te oral e intravenoso. Muchas (aunque no todas) de las fugas aviso de sepsis grave. Cuanto más se conoce sobre las citocinas
de gastroenterostomía así como las fugas de la línea de sutu- y más capaces son los médicos de medir sus niveles intraab-
ra con grapas a lo largo del lugar del corte transversal gás- dominales, mayor es la probabilidad de que estas sustancias
trico serán detectadas mediante esta técnica. Con frecuen- nos ayuden a diagnosticar las fugas de forma más precoz de lo
cia, la TC identifica también las fugas de enteroenterostomía que es posible en la actualidad. La determinación de los nive-
si están presentes. Tanto el tamaño como el volumen de la les peritoneales de citocinas requiere que se deje un drenaje
fuga pueden a veces ser estimados durante este proceso. Si un intraabdominal o que se realice una punción peritoneal.
paciente es demasiado voluminoso para obtener una TC, la
mejor prueba diagnóstica para una fuga es la laparotomía. Tratamiento de las fugas con o sin sepsis intraabdominal
La TC (o la radiografía del tubo digestivo superior) for-
man parte siempre del tratamiento definitivo de la fuga. En la figura 36-1 se ofrece un algoritmo para el manejo de
Cuando los resultados son positivos, la TC es la prueba diag- las fugas y la sepsis intraabdominal.
nóstica más eficaz de las que dispone el cirujano. Sin embargo,
un resultado negativo no significa necesariamente que el IDENTIFICACIÓN DEL LUGAR DE LA FUGA
paciente no presente un escape. Algunas fugas tienden a remitir Si no se documenta por TC, el lugar de una fuga puede iden-
de forma espontánea y el material séptico puede ser extralumi- tificarse mediante laparoscopia o laparotomía abierta. Hasta
nal. Es posible, por otra parte, que se esté formando un absceso hace poco, el tratamiento ha requerido laparotomía abierta
al mismo tiempo que la fuga se ha cerrado. Los signos y sínto- casi de forma invariable. Nuestra experiencia en la realiza-
mas que alertaron en un primer momento al cirujano sobre la ción de una laparotomía en la mayoría de pacientes con fugas
posibilidad de una fuga deben ser estrechamente vigilados. nos ha enseñado que la sepsis se localiza a menudo a conti-
A menos que el paciente muestre una mejoría temprana con el nuación de una fuga, pero la infección puede ser diseminada
tratamiento instaurado, es conveniente realizar una TC cada de forma significativa durante la laparotomía. Según Schauer
48 horas hasta que se aprecie una evolución satisfactoria o se y cols., casi todas las fugas puede ser tratadas por vía laparos-
haya realizado la intervención quirúrgica de la fuga. cópica.13 Actualmente, en un porcentaje elevado de casos, los
radiólogos intervencionistas pueden drenar muchos proce-
R ADIOGRAFÍA DE TÓRAX sos sépticos intraabdominales por vía percutánea sin necesi-
Para descartar la presencia de derrame pleural o neumonía dad de laparotomía (abierta o cerrada). Si se puede evitar la
es aconsejable realizar una radiografía de tórax. Con ella es laparotomía, el tiempo de hospitalización se acorta a menu-
posible detectar atelectasias significativas que, si se encuen- do de forma considerable.
tran presentes, podrían explicar una respuesta febril en Algunas fugas son difíciles de diagnosticar, por eso el
ausencia de fuga. Las placas se han de repetir diariamente cirujano debe sopesar los riesgos de la reoperación frente a
hasta que el paciente mejore. sus beneficios, considerando el grado de sospecha de que
exista una fuga o absceso y el estado clínico del paciente.
GLUCOSA Y ALBÚMINA Las consecuencias medicolegales de una fuga son impor-
Los niveles séricos de glucosa, prealbúmina y albúmina han tantes. Los abogados no culparán habitualmente a un cirujano
de ser cuidadosamente monitorizados ya que son indicadores por hacer una exploración precoz a un paciente en caso de que
muy sensibles del avance de una sepsis, especialmente en sospeche una fuga. Sin embargo, un retraso en el drenaje será
pacientes con obesidad mórbida. La hiperglucemia ocurre siempre considerado como negligencia a efectos legales.
en muchos pacientes con independencia de que tengan o no
diabetes documentada. El grado de elevación de la concen- L APAROTOMÍA: USO DE UNA GASTROSTOMÍA CON SONDA
tración sérica de glucosa es a menudo indicativo de la grave- Durante una laparotomía para el tratamiento de una fuga es
dad del proceso séptico. La hipoalbuminemia es por su parte frecuente la realización de una gastrostomía con sonda. Ello
un indicador sensible de sepsis, no sólo de la intraperitoneal, proporciona al cirujano la oportunidad de ofrecer la alimen-
sino de infección en cualquier parte del cuerpo. tación por la sonda, así como la capacidad de descomprimir
el intestino delgado cuando sea necesario. En nuestra prác-
ANÁLISIS DE ORINA tica, no siempre colocamos una sonda de gastrostomía, aun-
Se requiere un análisis de orina para descartar una infección que muchos cirujanos bariátricos lo hacen.
urinaria. Estas infecciones no son comunes en los pacientes
quirúrgicos bariátricos, pero si el paciente tiene una sonda R EPARACION DE LA FUGA
vesical, debe considerarse esta posibilidad. La fuga debe repararse siempre que ello sea viable. Sin embar-
go, en muchos casos el tejido es demasiado friable e indurado
ESTUDIOS DE TROMBOSIS VENOSA PROFUNDA Y EMBOLISMO para justificar un intento de suturar la fuga. A menudo se puede
PULMONAR aplicar a la fuga un parche de epiplón o serosa, o se puede apli-
Si hay indicios de flebitis, existe la posibilidad de trombosis car un sellador de fibrina. En ocasiones, ello acorta la convale-
venosa profunda y deben realizarse las pruebas adecuadas cencia, incluso si ocurre una recidiva de la fuga. Esta es común
Capítulo 36 • Fugas y alteración gástrica en cirugía bariátrica 309

Sospecha de fuga

TC con contraste

Sin fuga Fuga identificada

Monitorizar Drenaje Contenida Peritonitis


espontáneo (absceso)

Mejoría Sin mejoría Monitorizar <1,5 cm >1,5 cm Laparotomizar


clínica clínica

Monitorizar Drenaje
Paciente Paciente percutáneo
estable inestable

Monitorizar Laparotomizar
Mejoría Sin mejoría
clínica clínica

Mejoría Sin mejoría Drenaje


Laparotomizar
clínica clínica inadecuado
o volver a drenar

Drenaje

Figura 36-1 Algoritmo para las fugas y sepsis intraabdominales.

tras su reparación. En nuestra serie de 19 pacientes con sepsis lugar de la fuga y dondequiera que se hayan eliminado can-
intraabdominal la tasa de recidiva de fugas fue del 62% y el tidades importantes de material séptico. Se pueden colocar
desarrollo de una fístula fue común. Tales son las razones por pequeños drenajes en los cuadrantes donde haya contamina-
las que es tan importante un drenaje adecuado. Con el uso ción peritoneal mínima, aunque es necesario drenar todos
apropiado de antibióticos y una alimentación correcta, la mayo- los cuadrantes. El paciente tiene que ser sometido a una
ría de las fístulas de baja producción del tubo digestivo superior rigurosa monitorización con TC seriada, recuentos leucoci-
se cierran espontáneamente, sin necesidad de cirugía. tarios y pruebas bioquímicas, especialmente determinacio-
nes de glucosa y albúmina.
DRENAJE ABDOMINAL
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Como se comentó antes, el drenaje percutáneo sin laparoto- CIERRE ABDOMINAL


mía es actualmente una forma común de tratamiento. Si, tras la identificación y tratamiento de una fuga por lapa-
Cuando se usa, el paciente debe ser sometido a un riguroso rotomía (abierta o cerrada), existen edema importante de los
control, de forma que el cirujano pueda estar seguro de que tejidos o dilatación no resuelta de las asas intestinales, el
se ha establecido un drenaje adecuado. Un drenaje correcto cierre de la incisión puede causar aumentos peligrosos de la
es más importante que la propia reparación de la fuga. Si se presión intraabdominal.
requiere un drenaje laparoscópico o abierto, se deben elimi- Ello produce un síndrome del compartimento abdomi-
nar los trasudados de las superficies peritoneales o la mayor nal, con disminución de la perfusión arterial visceral, estasis
cantidad posible de los mismos. Tras una minuciosa irriga- venoso, desplazamiento del diafragma hacia arriba, descenso
ción de la cavidad peritoneal. han de colocarse múltiples en los volúmenes espiratorios y, en última instancia, un fallo
drenajes abdominales. Se debe usar un drenaje amplio en el multiorgánico.14 Cuando un cirujano determina que un
310 Sección VI • REINTERVENCIONES Y COMPLICACIONES

paciente presenta riesgo de sufrir un síndrome de comparti- torácico implantado durante mucho tiempo. Generalmente,
mento abdominal, no está indicado el cierre de la incisión puede ser retirado a los pocos días.
hasta que el edema y la dilatación intestinal hayan remitido.
Si la intervención de la fuga se ha realizado por vía laparos- INFUSIÓN DE ALBÚMINA
cópica, es posible que se haya hecho una incisión de relaja- La albúmina intravenosa se administra si el nivel sérico de
ción del abdomen. albúmina desciende por debajo de 2 g por 100 mL hasta el
Tras una laparotomía abierta, se haya dejado o no abier- punto de: 1) reducir la posibilidad de SDRA y 2) minimizar
ta la fascia, no se deben dejar abiertos el tejido subcutáneo y la posibilidad de edema periférico y cerebral.
la piel. Se puede dejar que la herida cicatrice por segunda
intención o bien que sea tratada por cierre secundario. HEMATOMA INTRAABDOMINAL
Si son grandes, los hematomas peritoneales deben ser elimi-
CÓMO TRATAR LAS FÍSTULAS nados quirúrgicamente. Según nuestra experiencia, los
Algunas veces se desarrollan fístulas gastrocutáneas o ente- hematomas intraabdominales casi siempre llegan a infectar-
rocutáneas tras una laparotomía o tras el drenaje transcutá- se, incluso con el uso de antibióticos.
neo de un absceso. Las fístulas del tubo digestivo superior
rara vez fracasan en su cierre. Si las fístulas enterocutáneas PRESIÓN INTRAABDOMINAL
permanecen abiertas durante varios meses, requieren inter- En pacientes con presión intraabdominal aumentada tras
vención quirúrgica. una fuga, ha de realizarse una descompresión abdominal
urgente para evitar cambios inducidos por la presión,
NUTRICIÓN PARENTERAL TOTAL O ALIMENTACIÓN POR SONDA potencialmente fatales, de los sistemas vascular, cardíaco,
La nutrición parenteral total o la alimentación por sonda pulmonar y renal, que ocurren en el síndrome del com-
de gastrostomía o yeyunostomía son siempre necesarias partimento abdominal. El cierre de la fascia abdominal
ya que la nutrición está seriamente comprometida en el debe deshacerse.
transcurso de la sepsis intraabdominal. La alimentación
por sonda tiene la ventaja de estimular la producción de
hormonas intestinales. Esto hace que se reduzca la proba- Z PREVENCIÓN DE LAS FUGAS
bilidad de desarrollar un síndrome de distrés respiratorio
del adulto (SDRA). Aunque esta sección está ubicada al final del capítulo, ya
indicamos al principio que la prevención de las fugas es un
ANTIBIÓTICOS aspecto prioritario de la actividad del cirujano bariátrico.
La administración de los antibióticos apropiados es extre-
madamente importante en el manejo de los pacientes con Selección y valoración selectiva del paciente
fugas. En el curso del tratamiento, ha de realizarse una eva-
luación periódica de la sensibilidad bacteriana. Como comentamos con anterioridad, los pacientes gravemen-
te androides tienen más probabilidades de desarrollar fugas
T RATAMIENTO CON CITOCINAS que los pacientes ginecoides. Dado el elevado riesgo, numero-
La alteración de la progresión de la cascada de citoquinas sos cirujanos no realizan procedimientos bariátricos en
intraabdominales, en un mecanismo que no obstante no se pacientes con presión intraabdominal aumentada.12 Se sospe-
comprende del todo, reduce probablemente la morbilidad y cha de presión intraabdominal elevada cuando un paciente
mortalidad de la sepsis inducida por fuga.15 Cuanto antes se tiene un abdomen tenso o estasis venosa, o bien si muestra una
inicie ese tratamiento, mejores serán los resultados.16 El presión intraabdominal elevada medida por manometría de la
reconocimiento precoz de una fuga en un adulto joven es vejiga con catéter de Foley. En tales casos, las fugas pueden
esencial, ya que en estos casos puede producirse una res- evitarse exigiendo que el paciente pierda algo de peso antes de
puesta exagerada de las citocinas, mediada por el sistema la operación. Si el paciente es capaz de perder 16 kg o más, el
inmunitario, que es potencialmente mortal. Este tipo de res- procedimiento quirúrgico bariátrico se hace técnicamente
puesta es menos probable que ocurra en personas de más más fácil y disminuye el riesgo de desarrollar una fuga.
edad.
PRUEBAS SERIADAS DE LABORATORIO Buena técnica quirúrgica
Las pruebas de laboratorio deben realizarse con regularidad Además de los anteriores comentarios sobre los factores que
(habitualmente, todos los días) para mantener la vigilancia contribuyen a las fugas, debe plantearse el manejo cuidadoso
de las respuestas corporales al proceso séptico y de la eficacia de los tejidos y ha de evitarse el uso de instrumentos traumá-
del tratamiento que está siendo administrado. ticos que ayuden a prevenir la fuga. Nuestra experiencia indi-
ca que las fugas en los puntos de instrumentación son relati-
T ROMBOSIS VENOSA PROFUNDA Y EMBOLIA PULMONAR vamentre frecuentes. El cirujano debe evitar o minimizar la
Es necesario instaurar precauciones de rutina para prevenir tensión en las líneas de sutura y de grapado y ha de controlar
la trombosis venosa profunda y la embolia pulmonar. con precisión la permeabilidad de las anastomosis. En par-
Además, se han de adoptar pautas de prevención de las úlce- ticular, se deben revisar las anastomosis para detectar fugas
ras cutáneas isquémicas, particularmente graves en pacien- antes de cerrar el abdomen. Si las circunstancias así lo requie-
tes de mucho peso. ren, o incluso si simplemente sugieren esa necesidad, es acon-
sejable colocar uno o dos drenajes. En este sentido, es prefe-
DERRAMES PLEURALES rible pecar de prudentes. En las revisiones siempre se han de
Los derrames pleurales ocurren con mucha frecuencia y considerar los drenajes. Como se planteó con anterioridad,
pueden necesitar una toracostomía con tubo de drenaje. En una buena práctica quirúrgica requiere que el abdomen sea
un paciente con una fuga, no es preciso que se deje el tubo irrigado meticulosamente antes de su cierre.
Capítulo 36 • Fugas y alteración gástrica en cirugía bariátrica 311

Prueba de la gastroenterostomía taquicardia, taquipnea y fiebre está habitualmente presente


en la sepsis intraabdominal, aunque para establecer el diag-
Un método para determinar la integridad de las líneas de grapa- nóstico no se puede depender por completo de estos facto-
do y de sutura es la insuflación con aire de la pequeña bolsa res. El dolor abdominal se encuentra a menudo presente.
gástrica a través de la sonda nasogástrica. El proceso es desarro- Con frecuencia también se registran signo de rebote por
llado con rapidez por el anestesista al completar el procedimien- aumento de la sensibilidad abdominal, dolor de hombro, leu-
to quirúrgico. Se coloca suero salino estéril en el abdomen. Se cocitosis, derrame pleural y distensión abdominal, si bien
puede detectar con facilidad cualquier fuga por la presencia de tampoco en este caso estos factores pueden ser los únicos
burbujas. Con una distensión suave de la bolsa gástrica, es posi- elementos de referencia. La mejor herramienta para concre-
ble estimar su tamaño de forma bastante exacta, mientras se tar un diagnóstico de fuga con sepsis intraabdominal secun-
revisan la integridad de la gastroenterostomía y de las líneas de daria es la TC abdominal, con contraste intravenoso u oral.
grapado. Otra técnica consagrada por el tiempo es la instilación Sin embargo, tampoco este es un medio definitivo ya que la
de azul de metileno en el estómago, si bien consideramos que su sepsis puede estar presente en ausencia de TC positiva. Por
uso es más complejo y menos pulcro que el del aire. tanto, es necesario mantener un alto grado de sospecha si el
paciente no evoluciona favorablemente en el postoperatorio.
Prueba de la enteroenterostomía En los estadios iniciales, la detección de fugas suele ser com-
pleja. Se aconseja que el cirujano mantenga un riguroso con-
Las enteroenterostomías pueden ser probadas exprimiendo trol con la realización de diferentes pruebas, incluso en pre-
suavemente jugo entérico dentro del área de la enteroente- sencia de hallazgos preliminares negativos.
rostomía mientras se buscan fugas de bilis. El tratamiento se desarrolla bien mediante drenaje percu-
táneo del proceso séptico localizado, bien a través de laparoto-
Líneas de sutura con grapas mía precoz, abierta o laparoscópica. Si se realiza una laparo-
tomía, es necesario reparar la fuga y proceder a una irrigación
Según nuestra opinión y la de muchos otros cirujanos bariá- minuciosa de la cavidad peritoneal. Se puede colocar una son-
tricos, es importante supervisar las líneas de sutura con gra- da de gastrostomía (aunque no es obligatorio) y siempre han de
pas siempre que sea posible a fin de prevenir las fugas a tra- implantarse drenajes múltiples. Los antibióticos son también
vés de ellas. También es necesario evitar el grapado sobre las necesarios. A medida que aprendemos más sobre cómo alterar
líneas de sutura con grapas ya existentes. Siempre existe la la cascada de citocinas peritoneales, es también mayor el cono-
posibilidad de afectar a los vasos sanguíneos del tejido en cimiento sobre las formas de interrumpirla, objetivo para cuya
la intersección de las líneas de sutura con grapas, con la con- consecución es conveniente hacer todo lo que esté en nuestra
siguiente necrosis, que tiende a precipitar una fuga.10 En vez mano. Casi siempre se necesitan una nutrición parenteral total
de atravesar una línea de sutura con grapas, el cirujano debe o sondas de alimentación de gastrostomía/yeyunostomía.
resecar la vieja línea de sutura y, siempre que sea posible, Cuando se establece un diagnóstico precoz y se inicia un tra-
usar tejidos frescos para grapar. tamiento apropiado de forma agresiva, la morbilidad y la mor-
talidad se reducen de forma drástica.
Vascularización de los tejidos
Siempre se ha de determinar la vascularización de los tejidos Z BIBLIOGRAFÍA
en las inmediaciones de una anastomosis. Si los tejidos se
muestran cianóticos, es necesario rehacer la anastomosis. 1. Fobi MAL, Lee A, Igwe D, et al: Transected Silastic ring vertical
A veces las adherencias contribuyen a una vascularización gastric bypass with jejunal interposition, a gastrostomy, and a gastros-
tomy site marker. In Deitel M, Cowan GSM Jr (eds): Update: Surgery
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mosis; asegúrese de que no hay ninguna obstrucción (comple- 2002;12:643-647.
ta o parcial) distal a las anastomosis; coloque al menos un 6. Sugerman HJ, Sugerman EL, Wolfe L, et al: Risks and benefits of
gastric bypass in morbidly obese patients with severe venous stasis.
drenaje en el abdomen; deje la sonda nasogástrica en el sitio
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

Ann Surg 2001;234:41-46.


hasta que haya buenos ruidos intestinales, y administre siem- 7. Murr MM, Siadati MR, Sarr MG: Results of bariatric surgery for
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312 Sección VI • REINTERVENCIONES Y COMPLICACIONES

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37
Cirugía bariátrica en el adolescente
Victor F. Garcia, M.D.

Las razones que respaldan el uso de la cirugía bariátrica en programas y centros de cirugía bariátrica pueden identificar
adolescentes obesos parecen ser convincentes y casi evi- y conocer las necesidades fisiológicas, cognitivas y psicoso-
dentes por sí mismas. La epidemia de obesidad pediátrica ciales propias de los adolescentes. El objetivo último de ello
no ha disminuido.1 En consecuencia, un número cada vez es ofrecer la mayor probabilidad de éxito a largo plazo en el
mayor de adolescentes presenta la enfermedad del adulto, manejo del peso corporal y de las devastadoras consecuen-
con aparición prematura. En este contexto, los aumentos cias de las patologías comórbidass y del sobrepeso grave en
relacionados con los costes de los cuidados sanitarios son la adolescencia. El planteamiento ofrecido se basa en buena
asombrosos. 2 Es más, la obesidad del adolescente es un medida en la práctica optimizada de tratamiento de adoles-
importante factor de riesgo de morbilidad y mortalidad centes que tienen otras enfermedades crónicas, como fibro-
prematuras.3,5 Los planteamientos relacionados con el sis quística, asma y cáncer, incorporando intervenciones
comportamiento para la prevención y el tratamiento en centradas en la familia y basadas en el comportamiento,
este ámbito no han resultado eficaces. Pueden serlo a cor- regionalización de la asistencia, uso de una base de datos
to plazo.6 Sin embargo, los estudios a largo plazo de estos nacional de pacientes y aplicación de un enfoque cooperati-
enfoques presentan resultados muy limitados, en especial vo, también a escala nacional, para estudiar a los adolescen-
en los pacientes gravemente obesos. La pérdida de peso tes que son sometidos a cirugía bariátrica. Esta última
quirúrgica produce una mejoría, si no la resolución, de la aproximación puede acelerar de forma notable la mejora de
mayoría de las patologías comórbidas relacionadas con los planteamientos actuales y de nuestro conocimiento
la obesidad; sin embargo, las lagunas en nuestro conoci- sobre los abordajes más eficaces y seguros de la cirugía bariá-
miento de la eficacia a largo plazo de las intervenciones y trica en el adolescente.
las potenciales consecuencias adversas relacionadas con la
disminución de la absorción de nutrientes son importan-
tes, y precisan de un uso reflexivo y muy comedido de la Z DEFINICIONES
cirugía bariátrica en adolescentes. Puede afirmarse que las
consecuencias a largo plazo de los procedimientos bariá- Riesgo de sobrepeso, sobrepeso y obesidad son términos que se
tricos más utilizados en adolescentes son prácticamente han usado en varios contextos para referirse al creciente
desconocidas. problema del peso en los niños. Sobrepeso es un término que
No se dispone de evaluaciones prospectivas de la efi- puede usarse para referirse a niños que tienen exceso de
cacia o seguridad de la cirugía bariátrica realizada en ado- grasa u otros tejidos corporales que contribuyen a su de-
lescentes, lo que hace que las argumentaciones sobre su sarrollo. Obesidad, sin embargo, es un término que se
utilización sea causa frecuente de controversia. La posibi- refiere más específicamente a la presencia de exceso de gra-
lidad de recaídas importantes, sugeridas por la experien- sa corporal. De los diversos métodos usados para definir la
cia de Richmond con cirugía bariátrica en adolescentes,7 obesidad en niños se prefiere el índice de masa corporal
es a la vez aleccionadora y previsible. 8 La obesidad en los (IMC; kg/m 2), ya que se trata de una medida razonable-
adolescentes puede ser también más virulenta y más difícil mente exacta para predecir la adiposidad, es reproducible
de manejar quirúrgicamente que la registrada en adultos.3 en el marco clínico y se puede usar de forma fácil como una
Sólo el desarrollo del feto se aproxima al ámbito, magni- herramienta de valoración selectiva.9,10 A medida que la
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tud y rapidez de los cambios fisiológicos que ocurren en la estatura aumenta durante la infancia, el IMC también se
adolescencia. Este hecho sirve para subrayar la importan- eleva como función de la edad, conforme se adquieren la
cia del conocimiento de las consecuencias de las interven- masa magra y la masa grasa.11,12 Por ejemplo, el IMC medio
ciones quirúrgicas en este grupo de pacientes jóvenes. Los para un niño de 12 años es de casi 18 kg/m2, mientras que
caprichos y vicisitudes del desarrollo intelectual y cogni- el IMC medio para un varón joven de 20 años es 23 kg/m 2.
tivo de los adolescentes convierten la comprensión y el En tales términos, la Organización Mundial de la Salud13
cumplimiento de los condicionantes de la cirugía bariátri- ha definido la obesidad en adultos en virtud de un valor de
ca en este marco en un verdadero desafío para el equipo IMC de 30 kg/m 2. Sin embargo, la extrapolación de esta
quirúrgico. definición a los grupos de edad más jóvenes es difícil de
Este capítulo propone un contexto, configurado a partir concretar y no se ha establecido con precisión ninguna
de las mejores evidencias disponibles, por medio del cual los definición específica de obesidad en niños y adolescentes.
315
316 Sección VII • CONSIDERACIONES ESPECIALES

Ciertamente, se necesita un punto de referencia relacio- mencionados, el bajo peso al nacer y el IMC elevado del
nado con la edad para definir la obesidad en la infancia, adolescente presuponen un mayor riesgo de desarrollar
basado en el mismo principio a diferentes edades. A este obesidad crónica. 22
respecto, para definir el sobrepeso y la obesidad se han La obesidad en otros miembros de la familia es un
recomendado los percentiles 85 y 95 del IMC por edad y factor de riesgo adicional en el adolescente. El cociente de
sexo (basados en los datos del informe representativo a posibilidades de que una obesidad detectada en la infancia
nivel nacional).14 Dichos percentiles se eligieron en buena persista durante la edad adulta es aproximadamente de 3 si
parte porque sus límites se aproximan al IMC de adultos uno de los progenitores es obeso y de 10 si los son ambos. 22
jóvenes de 25 kg/m 2 (sobrepeso) y 30 kg/m 2 (obeso), respec- La pubertad es también un período crítico para el desarro-
tivamente (v. figura 37-1). llo de obesidad. 23 En niñas obesas se observa una menar-
quia más precoz. Un IMC superior al percentil 85 se aso-
cia con incremento en la tasa de menarquia precoz de
Z FACTORES DE RIESGO DE OBESIDAD prácticamente el doble. 24 El riesgo de que la obesidad per-
EN EL ADOLESCENTE sista en la la edad adulta es bastante mayor entre los ado-
lescentes obesos que entre los niños más jóvenes con
Una aproximación bien fundada a la cirugía bariátrica en el sobrepeso. 22
adolescente requiere la capacidad para reconocer poblacio- Hay una disparidad étnico-racial preexistente en el
nes e individuos en riesgo. El riesgo asociado con la obesi- riesgo para desarrollar obesidad. 25 Los grupos con un
dad se acumula con la edad y está influenciado por factores nivel socioeconómico más bajo pueden, por otra parte,
genéticos, biológicos, psicológicos, socioculturales y ser especialmente vulnerables debido al mantenimiento
medioambientales, presente a lo largo de las distintas eta- de una dieta más pobre y a tener menos oportunidades de
pas de la vida. Varios recientes e innovadores conocimien- realizar ejercicio físico. 26 En conjunto, estas característi-
tos sobre los orígenes fetales, neonatales y de desarrollo de cas pueden ofrecer un contexto más o menos definido
la obesidad tienen implicaciones sobre la evaluación clínica para distinguir cuándo el fenotipo de un individuo se
del adolescente candidato a cirugía bariátrica.15 Hay una adecua al tratamiento de la obesidad con medidas con-
serie de fases críticas en el desarrollo de la obesidad del vencionales y cuándo puede ser más adecuado el recurso
adolescente durante el período comprendido entre la pre- a la cirugía.
concepción y la adolescencia. Para la etapa neonatal se dis-
pone de pruebas epidemiológicas que vinculan el peso al
nacimiento y el posterior IMC durante la infancia con el Z COMPLICACIONES DE LA OBESIDAD
IMC de adulto.15,16 Un bajo peso al nacer eleva el riesgo de DEL ADOLESCENTE
obesidad central y resistencia a la insulina.16,17 No se cono-
ce el mecanismo de esta asociación, aunque puede estar La obesidad del adolescente es una enfermedad multisisté-
relacionado con un «genotipo o fenotipo ahorrativo».18 mica, de consecuencias potencialmente devastadoras
Durante la infancia, los riesgos de desarrollo de obesidad (v. tabla 37-1). 27 En asociación con un incremento conside-
son mayores para la descendencia de madres con diabetes rable de la prevalencia y la gravedad de la obesidad pediá-
mellitus.19 En el período posnatal, una duración más pro- trica en EE. UU., 28 existe en el país una tendencia al
longada de la lactancia materna y una posterior aparición aumento paralelo en las enfermedades crónicas relaciona-
de la adiposidad 21 reducen el riesgo de sobrepeso en el ado- das con la obesidad,29 a su aparición a edades cada vez más
lescente. De todos los factores de riesgo anteriormente tempranas,30 y a un mayor riesgo de desarrollo de morbili-

Varones Mujeres

30 30

Se aproxima
28 al percentil 95 28
Índice de masa corporal

26 26

24 24 Figura 37-1 Índice de masa


corporal para curvas de edad
destinado a definir la obesidad y
22 22 el sobrepeso en adolescentes.
Se aproxima
al percentil 85
20 20

18 18

16 16
0 2 4 6 8 10 12 14 16 18 0 2 4 6 8 10 12 14 16 18
Edad (años) Edad (años)
Capítulo 37 • Cirugía bariátrica en el adolescente 317

niños con sobrepeso presentaba pruebas de función hepática


Tabla 37-1 COMPLICACIONES DE LA OBESIDAD elevadas.42 Se ha sugerido que la esteatohepatitis no alcohó-
EN EL ADOLESCENTE lica pediátrica relacionada con obesidad puede llegar a ser un
Psicosociales Baja autoestima destacado indicador para el trasplante hepático en las próxi-
Depresión mas décadas.43,44
Trastornos alimentarios La intolerancia al ejercicio, los trastornos respiratorios
Neurológicas Pseudotumor cerebri del sueño y el asma son complicaciones pulmonares comu-
Pulmonares Apnea del sueño nes de la obesidad del adolescente.45 El asma y la intoleran-
Asma, intolerancia al ejercicio cia al ejercicio pueden también limitar la actividad física y
Cardiovasculares Dislipidemia
Hipertensión
contribuir a ulteriores incrementos en el peso.46 Por su
Inflamación crónica parte, la apnea obstructiva del sueño (AOS), la manifesta-
Disfunción endotelial ción más grave de los trastornos respiratorios del sueño,
Gastrointestinales Colelitiasis puede afectar de forma importante la calidad de vida rela-
Esteatohepatitis cionada con la salud de los adolescentes obesos,47 producir
Renales Glomeruloesclerosis una geometría ventricular izquierda anómala48 e inducir un
Endocrinas Diabetes mellitus tipo 2 riesgo elevado de desarrollar hiperactividad y dificultades
Resistencia a la insulina del aprendizaje.49 Diversos estudios han documentado asi-
Pubertad precoz
mismo un crecimiento somático disminuido e hipertensión
Síndrome de ovario poliquístico
Hipogonadismo (varones) sistémica en niños con AOS.50 Sin embargo, aunque pensa-
Musculoesqueléticas Epifisiolisis de la cabeza femoral mos que la AOS es un problema clínicamente importante
Enfermedad de Blount o tibia vara que se correlaciona directamente con el IMC, ni la preva-
Fracturas del antebrazo lencia del mismo en niños obesos ni el riesgo absoluto de
Pies planos desarrollar problemas de crecimiento o cardiovasculares
han sido cuantificados con exactitud en la bibliografía
publicada. Ciertos estudios indican que la obesidad en la
infancia eleva el riesgo de desarrollar AOS de cuatro a cin-
dad y mortalidad en el adulto.31 La obesidad durante la co veces en relación con el registrado en niños no obesos.
infancia también tiene consecuencias sociales y económi- De manera anecdótica, en nuestros pacientes adolescentes
cas adversas.32 La persistencia de la enfermedad, 22 con un con obesidad avanzada y AOS, la derivación gástrica les ha
70%-80% de niños con sobrepeso que se convierten en permitido evitar una traqueostomía innecesaria y tras
adultos obesos, 22 es especialmente preocupante en ciertas 6 meses de cirugía no se ha apreciado indicio alguno de
complicaciones. apnea del sueño o trastorno respiratorio del sueño en la
La unión de hipertensión arterial, dislipidemia, infla- polisomnografía.51
mación crónica, hipercoagulabilidad, disfunción endotelial Podría decirse que las consecuencias de mayor preva-
e hiperinsulinemia (conocida como síndrome de insulinorre- lencia y efecto debilitante de la obesidad del adolescente son
sistencia33) se ha identificado en niños de tan sólo 5 años de las psicosociales. El estrés psicosocial inherente a la estig-
edad. En el Bogalusa Heart Study se observó la correlación matización social de la que son objeto los niños obesos pue-
entre los factores de riesgo de enfermedad cardiovascular de ser tan perjudicial como las patologías médicas. Muchos
con aterosclerosis coronaria asintomática, y los individuos adolescentes obesos tienen baja autoestima, asociada a tris-
más gravemente obesos que presentaban lesiones más avan- teza y comportamientos de alto riesgo. Un reciente estudio
zadas.35 sobre la calidad de vida relacionada con la salud de adoles-
El estado prediabético, consistente en intolerancia a la centes obesos comparó adolescentes obesos con otros nor-
glucosa y resistencia a la insulina, presenta una elevada males y otros afectados por enfermedades infantiles cróni-
prevalencia entre niños gravemente obesos, incluso antes cas. Los adolescentes obesos presentaban puntuaciones de
de que se diagnostique una diabetes clínica.36 Aunque en calidad de vida significativamente menores que las de los
el pasado se consideraba una enfermedad que se manifes- niños normales, que eran comparables con las de los adoles-
taba en la edad adulta, la diabetes mellitus tipo 2 actual- centes con diagnóstico de cáncer.52
mente se correlaciona con casi la mitad de los nuevos diag-
nósticos pediátricos de diabetes,37,38 lo que, por otro lado,
se asocia también a la difusión de la epidemia de obesidad Z DESARROLLO COGNITIVO DEL ADOLESCENTE
pediátrica. Especialmente preocupantes son los datos de
los Centers for Disease Control and Prevention, que sugieren Conceptos y principios relevantes para la cirugía
que un tercio de todos los estadounidenses nacidos en el bariátrica del adolescente
año 2001 desarrollarán diabetes, y este número se eleva
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hasta casi la mitad cuando se analiza a ciudadanos de raza El desarrollo cognitivo se refiere al desarrollo de la capa-
negra y a los hispanos por separado.39 Hay también datos cidad para pensar de forma concreta. En general los niños
convincentes que indican que un descenso en la función de desarrollan esta capacidad entre los 6 y los 12 años. La
las células  pancreáticas puede iniciarse hasta 12 años adolescencia marca el comienzo de un pensamiento más
antes del diagnóstico de diabetes.40 Los trabajos apoyan complejo e incluye tres estadios de desarrollo distintos:
claramente la hipótesis de que la diabetes de tipo 2, que se adolescencia precoz, media y tardía. A cualquier edad de
desarrolla en la infancia y la etapa inicial de adulto, es más esta etapa de la vida los adolescentes presentan estadios
virulenta que la que aparece más tarde.41 variables de madurez cognitiva, psicosocial y biológica. El
Una de las causas comunes de enfermedad crónica del desarrollo de la cognición, la función psicosocial y varios
hígado en niños es la esteatohepatitis no alcohólica, habi- sistemas orgánicos somáticos se correlaciona de forma más
tualmente asociada a obesidad. En un informe, el 25% de los estrechamente con el estado puberal que con la edad cro-
318 Sección VII • CONSIDERACIONES ESPECIALES

nológica.53 Además, existen diferencias entre sexos en lo de comportamientos relacionados con la salud, como los
que se refiere a la consecución de operaciones mentales asociados a la dieta y el ejercicio. La pericia para aumentar
formales y en la formación de la identidad que capacita el seguimiento de las directrices sobre prácticas de salud
nuevos niveles de función intelectual, pensamiento abs- preventivas y el cumplimiento con los regímenes de trata-
tracto54 y habilidades cognitivas, factores todos ellos críti- miento son dos factores de importancia esencial. Ello es
cos para la aceptación y el cumplimiento de las pautas especialmente significativo en el ámbito de la cirugía bariá-
postoperatorias de la cirugía bariátrica. Antes de la conse- trica dado que el cumplimiento con las recomendaciones
cución de la capacidad para desarrollar operaciones for- de salud en esta población es desalentadoramente bajo,
males, el adolescente funciona y razona por medio de ope- estimado en un 40%-50% en adolescentes con problemas
raciones concretas. Los problemas suponen objetos médicos crónicos, como la fibrosis quística, la diabetes y el
identificables, que son directamente percibidos o imagina- asma.59,60 De hecho, Rand y McGregor observaron, tras la
dos. Las operaciones mentales son posibles sólo cuando se cirugía de derivación, que menos del 20% de los adolescen-
aplican a la información obtenida de la experiencia direc- tes mostraban buen cumplimiento en lo referente a los
ta. A la hora de adquirir operaciones formales, el adoles- regímenes de suplementación con vitaminas y minerales.61
cente adquiere la capacidad de razonar, pensar de forma Un detallado estudio ha revelado que, para los adolescentes
abstracta y lógica, formar hipótesis y considerar diferentes con problemas médicos crónicos, el seguimiento de los
consecuencias. Algunos ejemplos de operaciones formales regímenes médicos y alimenticios rigurosos mejora sustan-
son pensar en probabilidades, razonamiento hipotético, cialmente con la terapia conductual62,64. El hecho de que
anticipar sucesos que aún no han ocurrido, pensar sobre no se disponga de un perfil claro de los factores psicosocia-
los límites convencionales y pensar en los propios pensa- les que se asocia a un modelo de paciente cumplidor des-
mientos. El adolescente que ha adquirido estas habilidades carta la posibilidad de definir una solución concreta para la
está mejor capacitado para considerar las consecuencias, prevención y el manejo del cumplimiento inadecuado en el
por ejemplo, de tomar o no tomar suplementos nutriciona- adolescente que ha sido sometido a cirugía bariátrica65.
les o de seguir y cumplir con la dieta hipoproteica prescri- Para ayudar de forma eficaz al paciente adolescente en el
ta. Sólo uno de cada tres jóvenes domina la capacidad de cumplimiento postoperatorio, los programas y centros
realización de operaciones formales al terminar la ense- integrales de cirugía bariátrica del adolescente deberían
ñanza secundaria. incluir personal experimentado capaz de evaluar los niveles
Generalmente, la adolescencia se ve como un período de desarrollo cognitivo, las variables étnicas específicas y
de experimentación social, en el que se prueban los límites y las características de la personalidad como la autoestima
se asumen riesgos. El egocentrismo se desarrolla conjunta- y el locus de control, así como variables familiares como la
mente con la consecución de operaciones formales y, previ- cohesión y el nivel de comunicación eficaz.56 El conoci-
siblemente, se incorpora a los mecanismos de cumplimiento miento previo de estos factores puede aumentar de forma
del adolescente en lo que respecta a los comportamientos de importante la capacidad del equipo bariátrico y del médico
salud deseados. Los constructos mentales del egocentrismo de atención primaria a la hora de ofrecer pautas anticipadas
incluyen la «audiencia imaginaria», que trae como conse- útiles para el postoperatorio. Así, por ejemplo, puede resul-
cuencia una autoconciencia más fortalecida, y la «fábula per- tar útil saber cuándo y con quién se consume la mayoría de
sonal», que trae como consecuencia un sentido de invulne- calorías no nutritivas, de forma que el equipo sea conscien-
rabilidad. te de las horas y las personas que pueden dar lugar a situa-
El tratamiento postoperatorio del paciente bariátrico ciones peligrosas en el postoperatorio, en las que el pacien-
adolescente requiere una valoración del nivel de funcio- te es más vulnerable a ciertos hábitos de comida mal
namiento intelectual, un entendimiento de la propensión adaptados.
a adoptar riesgos por su parte y del papel desempeñado El cumplimiento del adolescente se incrementa
por los constructos mentales que aparecen una vez el ado- mediante: 1) elementos de ayuda visual; 2) concentración
lescente logra las operaciones formales.55 También es en las ventajas inmediatas del tratamiento; 3) la participa-
importante apuntarr que el nivel de sofisticación cogniti- ción en el autotratamiento; 4) automonitorización, y
va difiere entre los distintos adolescentes y suele ser inde- 5) autorrefuerzo. 66,67 El autotratamiento del adolescente
pendiente de la edad cronológica.56 El logro de nuevas y las estrategias afines fomentan la independencia de la
capacidades mentales no conlleva una destreza inmediata familia, un factor ciertamente importante en el contexto
en su uso, ni la educación por sí sola contrarresta los de la adolescencia. Por cuanto hace referencia a las modi-
constructos mentales de fábula personal o audiencia ima- ficaciones en los patrones de comida que se requieren tras
ginaria.57,58 Un cumplimiento aumentado con un régimen la cirugía bariátrica, es necesario un continuado refuerzo
nutricional y de estilo de vida enérgicos requiere no sólo para facilitar la formación de hábitos de promoción de
una educación eficaz que aplique la teoría del desarrollo salud a lo largo de la vida. Los pacientes y sus familias
cognitivo, sino también aportaciones de sus compañeros requieren orientación psicopedagógica y un estrecho
que ayuden al adolescente a lograr una apreciación más seguimiento específicamente diseñado para promover su
realista de la audiencia imaginaria y de su propia especial bienestar físico y emocional. El programa de cirugía
naturaleza y vulnerabilidad. bariátrica del adolescente debe construirse a partir de
prácticas optimizadas de los programas de tratamiento
Cumplimiento para otras enfermedades del adolescente 68 y, por tanto,
basarse en la premisa de que un control sostenido del peso
El éxito terapéutico a largo plazo de la cirugía bariátrica por su parte requiere una participación familiar estructu-
depende del cumplimiento con el régimen de alimentación, rada y un apoyo continuado.
estilo de vida y suplementos nutricionales prescrito. La Las estrategias específicas para aumentar el cumpli-
adolescencia se ve generalmente como un tiempo de miento del adolescente incluyen educación, una modifica-
aumento en la experimentación, con una amplia variedad ción del régimen de tratamiento dentro del contexto socio-
Capítulo 37 • Cirugía bariátrica en el adolescente 319

cultural del paciente, y conseguir el apoyo de su familia y sus se está considerando la cirugía bariátrica, han de ser deri-
compañeros. Algunos adolescentes responden a modos for- vados a centros especializados que ofrecen cirugía bariátri-
malizados de refuerzo, tales como el establecimiento de un ca en el contexto de un equipo multidisciplinario capaz de
pacto. En el caso de familias disfuncionales, la consecución proporcionar un seguimiento a largo plazo y de manejar los
del apoyo familiar es a veces contraproducente. Un enfoque retos únicos planteados por los individuos encuadrados en
alternativo puede ser la prestación de apoyo por parte de un el grupo de edad de los adolescentes. De acuerdo con las
consejero o confidente adulto de confianza, o de un compa- directrices de la American Bariatric Surgical Association,74
ñero o grupo de compañeros. estos equipos deben incluir especialistas con habilidades en
la evaluación y manejo de la obesidad del adolescente, psi-
cología, nutrición, enseñanza de actividad física y cirugía
Z PAUTAS PARA REALIZAR LA CIRUGÍA bariátrica. Dependiendo de las necesidades de cada caso, es
BARIÁTRICA EN ADOLESCENTES conveniente disponer también de la colaboración de perso-
nal experto en medicina de la adolescencia, endocrinolo-
El elemento impulsor de la cirugía bariátrica en adolescen- gía, neumología, gastroenterología, cardiología, ortopedia
tes gravemente obesos se centra en prevenir, mejorar o y ética. La orientación del equipo ha de dirigirse a la con-
solucionar las consecuencias adversas de la obesidad y, secución de un proceso de revisión similar al usado en la
potencialmente, en prevenir la mortalidad prematura rela- oncología multidisciplinaria y los programas de trasplante.
cionada con la obesidad. Es probable que las ventajas de la Esta revisión debe proporcionar recomendaciones especí-
cirugía bariátrica observadas en los adultos se registren ficas de tratamiento para pacientes concretos, incluyendo
también entre los adolescentes. La cirugía bariátrica es la adecuación y la oportunidad de la posible intervención
razonable para adolescentes seleccionados con obesidad quirúrgica.
grave que son incapaces de alcanzar y mantener un peso Este último aspecto referido al tratamiento quirúrgico
saludable con medidas convencionales. Las directrices de niños y adolescentes con sobrepeso es objeto de contro-
publicadas sobre cirugía bariátrica en adolescentes reflejan versia y depende, en muchos casos, de las necesidades sani-
cierta divergencia de opiniones en relación con el umbral tarias más acuciantes del paciente. Sin embargo, hay ciertos
de IMC más apropiado.69,71 Ofrecer la cirugía de pérdi- factores fisiológicos que necesitan ser considerados a la
da de peso sólo a los adolescentes con patologías comórbi- hora de planificar una operación esencialmente programa-
das u obesidad grave puede traer como consecuencia mayo- da. La madurez fisiológica generalmente se completa en la
res complicaciones relacionadas con el procedimiento y, en época de la madurez sexual (estadios de Tanner 3 o 4).75
potencia, menos pérdida de peso.72,73 Normalmente, la madurez esquelética (estatura adulta) es
La figura 37-2 esboza un algoritmo propuesto para este alcanzada por las niñas a los 13 a 14 años y por los niños a
tipo de tratamientos. Para adolescentes altamente motiva- los 15 o 16 años. Los niños con sobrepeso generalmente
dos, que han hecho intentos organizados de pérdida de peso experimentan una aparición acelerada de la pubertad.
durante un período de 6 meses sin éxito, la cirugía bariátrica Como resultado de ello, es probable que sean más altos y
debe considerarse como opción. tengan una edad ósea más avanzada que los niños sin sobre-
Los adolescentes con sobrepeso que presentan compli- peso de su misma edad. Si existen dudas sobre si se ha
caciones de salud relacionadas con la obesidad, y en los que alcanzado la estatura de adulto, la madurez esquelética

IMC  35 IMC  40

No Sí

¿Patología ¿Menores
No No No operable
No operable comórbida patologías
grave?* comórbidas?

Figura 37-2 Algoritmo para Sí Sí


el manejo del adolescente obe-
so tras la finalización del creci- No
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

miento.

* Patologías comórbidas graves: ¿Buen candidato


• Diabetes tipo 2 bariátrico?**
• AOS
• Pseudotumor cerebri

** Véase tabla 37-1


Ofrecer cirugía bariátrica
320 Sección VII • CONSIDERACIONES ESPECIALES

(edad ósea) puede ser evaluada de forma objetiva mediante Management Center en el Cincinnati Children´s Hospital
una radiografía de la mano y la muñeca. Si un individuo ha Medical Center está diseñada para caracterizar mejor la
alcanzado más del 95% de la estatura adulta, no debería prevalencia y la resolución de las complicaciones relacio-
preocupar demasiado el hecho de que un procedimiento nadas con la obesidad entre adolescentes que se someten
bariátrico pueda afectar de forma significativa la finaliza- a cirugía bariátrica, así como para aportar el adecuado
ción del crecimiento lineal. control de las consecuencias conocidas y potenciales de
Antes de tomar cualquier decisión, todos los candida- los procedimientos de cirugía bariátrica más usados en
tos han de ser sometidos a una exhaustiva evaluación psi- pacientes relativamente jóvenes. Los objetivos de los cen-
cológica. Los objetivos de la misma son: 1) identificación tros y programas de cirugía bariátrica del adolescente no
de factores de estrés psicológico o conflictos familiares y han de centrarse sólo en alcanzar una pérdida de peso
detección e identificación de trastornos psiquiátricos, patente y sostenida, sino también en contribuir a la com-
emocionales, conductuales o alimentarios, pasados y pre- prensión de las operaciones más eficaces, de los factores
sentes; 2) definición de apoyos y potenciales obstáculos de riesgo de recidiva y de los resultados a largo plazo de
para el cumplimiento del paciente y fomento de una buena la cirugía. En relación con este último aspecto son espe-
disposición de la familia para la cirugía y para la gestión cialmente importantes los resultados referidos a densidad
de los cambios de estilo de vida requeridos particularmen- mineral ósea y a consecuencias de la absorción disminuida
te si uno o los dos progenitores son obesos); 3) evaluación de por vida de vitaminas y nutrientes en adolescentes,
de las expectativas de resultado razonables, y 4) determi- sobre todo en mujeres jóvenes operadas, y en los aspectos
nación del nivel de desarrollo cognitivo y psicosocial del relacionados con su descendencia. Los beneficios po -
adolescente. Dadas las notables modificaciones de los tenciales de regionalizar los procedimientos quirúrgicos
patrones alimentarios que se requieren tras la cirugía complejos seleccionados han sido reiteradamente recono-
bariátrica, es necesario un continuado refuerzo para faci- cidos al menos a lo largo de las dos últimas 2 déca-
litar la creación y mantenimiento de hábitos saludables a das. 82,83
lo largo de la vida. Los programas quirúrgicos bariátricos A este respecto, la cirugía bariátrica del adolescente
para este grupo de edad deben basarse en la premisa de debe concentrarse en programas y centros que estén dis-
que un control de peso sostenido por parte del adolescente puestos y sean capaces de proporcionar estudios integra-
requiere de apoyo psicológico postoperatorio intenso y les y amplios en el preoperatorio y en el postoperatorio,
regular. El papel del terapeuta del comportamiento depen- incluidas evaluaciones de laboratorio y diagnósticas.
de del nivel de las funciones intelectuales del adolescente Nuestro panel preoperatorio incluye los siguientes perfi-
e incluye el ensayo del comportamiento de los componen- les: electrólitos séricos, albúmina, calcio, ácido úrico,
tes del régimen antes de la cirugía, uso de pactos de com- transferrina, homocisteína, hierro, folato, vitaminas A,
portamiento para esbozar los requerimientos del régimen B1, B6 , B12, D, E y K, lípidos, análisis de orina, radiografía
y documentar el grado de acuerdo del paciente para cum- de tórax, electrocardiograma, hemograma, hemoglobina
plir, un plan para que el paciente y los padres monitoricen A 1C , niveles de glucosa basal y de insulina en ayunas, hor-
el cumplimiento y medidas de refuerzo para su previsión. mona estimulante del tiroides y una prueba de embarazo
El terapeuta desempeña un papel destacado a la hora de en las mujeres. A los pacientes no diabéticos se les realiza
desarrollar la comunicación del adolescente con sus padres una prueba de tolerancia a la glucosa a las 2 horas. Excepto
y las habilidades para la resolución de conflictos y a la hora esta última prueba, los paneles de laboratorio y diagnós-
de crear intervenciones familiares y de comportamiento ticos mencionados anteriormente se repiten a los 3, 6, 9 y
empíricas, que facilitan la gestión familiar del nuevo estilo 12 meses del postoperatorio y luego con periodicidad
de vida del paciente. anual. La composición corporal es evaluada, bien por
impedancia bioeléctrica (para los pacientes que pesan más
de 136 kg) bien por análisis dual de absorciometría con
Z SECUENCIA CLÍNICA PARA EL MANEJO energía de rayos X (DEXA; para pacientes que pesen
DEL ADOLESCENTE SOMETIDO A CIRUGÍA menos de 136 kg), en el preoperatorio y a los 3, 6 y
BARIÁTRICA 12 meses del postoperatorio. La DEXA no sólo permite la
medida de la tasa y las cantidades relativas de pérdida de
La cirugía bariátrica reduce la ingestión y disminuye la masa corporal grasa y magra, sino que también propor-
absorción de alimentos ricos en ácidos grasos esenciales, ciona una valoración cuantitativa de los cambios en la
vitaminas y otros nutrientes específicos. Los resultados a densidad mineral ósea. Este análisis de la composición
largo plazo de tal reducción son desconocidos y producen corporal se usa con el fin de modificar los planes alimen-
una lógica inquietud.76,80 Una nutrición insuficiente durante ticios pensados para preservar la masa corporal magra
el desarrollo fetal puede determinar la aparición de obesi- durante el período de la pérdida de peso más patente.
dad, como se sugirió en un estudio de cohorte holandés Existen pruebas que indican que pequeños cambios en el
sobre el hambre.80-81 contenido mineral óseo en adolescentes, de apenas dos
El éxito en la cirugía bariátrica del adolescente requiere desviaciones estándar, pueden aumentar de forma signifi-
un planteamiento amplio, que incluya no sólo una pérdida de cativa el riesgo de osteoporosis y fracturas óseas en la vida
peso sostenida, sino también una progresión normal poste- posterior del paciente. Ello subraya la importancia de una
rior a lo largo del resto de la adolescencia hacia la etapa adul- monitorización meticulosa y amplia de la absorción de
ta y, en última instancia, ausencia de complicaciones en lo nutrientes, vitaminas y minerales. 84 Debido al aumento
que respecta a la función reproductiva y una descendencia de la prevalencia de geometría cardíaca anómala85 y tras-
normal. tornos del sueño entre los adolescentes obesos, en compa-
Debido a que no se conocen las consecuencias a largo ración con los no obesos, a los candidatos para cirugía
plazo de la cirugía bariátrica realizada en adolescentes, la bariátrica se les realiza una ecocardiografía y una poli-
secuencia clínica desarrollada por el Comprehensive Weight somnografía pediátrica específica.
Capítulo 37 • Cirugía bariátrica en el adolescente 321

Z CONSECUENCIAS NUTRICIONALES vía limitados en relación con la seguridad y la eficacia de


Y METABÓLICAS los procedimientos bariátricos en la adolescencia, y no se
ha estudiado ninguna operación de un modo controlado.
Las consecuencias nutricionales y metabólicas de la ciru- Tanto los resultados de la derivación gástrica en Y de Roux
gía bariátrica han sido bien estudiadas. 86 Tras la aplica- como los de la banda gástrica ajustable han sido revisados
ción de técnicas de derivación del estómago inferior y el retrospectivamente en pequeñas series de adolescentes.
intestino delgado proximal se producen alteraciones en la Ninguno de los sometidos a la banda gástrica ajustable ha
absorción del hierro, folato, calcio y vitamina B12. De sido seguido durante más de 4 años. El promedio de pér-
hecho, las carencias de estas sustancias pueden darse dida de exceso de peso fue de 35 kg a los 2 años. En este
incluso administrando suplementos. Pero, dado el decep- estudio a corto plazo se consideró que la banda era segura
cionante cumplimiento de las pautas postoperatorias en y eficaz.
adolescentes, ciertos nutrientes, como los folatos y el cal- El seguimiento más amplio y más largo procede de
cio, adquieren una especial relevancia debido a las poten- Richmond, Virginia.78 Sugerman y cols. informaron de una
ciales consecuencias adversas para los pacientes y su des- serie de 33 adolescentes (IMC medio preoperato-
cendencia. rio  52 kg/m 2) que fueron sometidos a procedimientos
El folato es necesario específicamente para la síntesis bariátricos, fundamentalmente de derivación gástrica. Este
de ADN y ARN y para la interconversión de aminoácidos, grupo experimentó una pérdida de exceso de peso del 63%
particularmente en lo que respecta a las reacciones de (IMC medio  33 kg/m 2) a los 5 años, y del 56% (IMC
metilación en el ciclo metionina-homocisteína. Es esencial medio  34%) a los 10 años tras la operación. A pesar de los
para el crecimiento la diferenciación celular, la regulación notables esfuerzos realizados para localizar y entrevistar a
de los genes, la reparación y la defensa del huésped.87 La todos los pacientes de esta serie, sólo se pudieron encontrar
carencia de ácido fólico, indicada por una elevación de la 6 de los 9 pacientes, para los que habían transcurrido 14 años
homocisteína plasmática, se asocia a enfermedades cardio- desde la intervención. Estos 6 pacientes mantenían sólo el
vasculares, riesgo aumentado de displasias y posterior de- 33% de exceso de pérdida de peso (IMC medio  39 kg/
sarrollo de cáncer. Es posible que, en el adolescente some- m2).78 Ello indica un elevado potencial en lo que respecta a
tido a cirugía bariátrica, tomar suplementos de ácido fólico la posterior recuperación de peso, quizá mayor que la obser-
en el modo requerido no aporte los niveles de folato ade- vada en adultos.
cuados.87 La evaluación de la homocisteína sérica puede
permitir la identificación de los pacientes que tomen suple-
mentos inadecuados.85 Z CIRUGÍA BARIÁTRICA EN UN CENTRO MÉDICO
La adolescencia es un período de gran crecimiento PEDIÁTRICO
esquelético, con un máximo de adición mineral al esqueleto.
Tal condición es, por tanto, una oportunidad para influir El primer programa integral de tratamiento del peso en
sobre la salud ósea a lo largo de la vida, tanto positiva como un hospital infantil fue implantado en Cincinnati
negativamente. Las variaciones en la nutrición de calcio en en 2001.98 Cerca de 70 adolescentes, con una media de
la adolescencia pueden explicar hasta el 50% de la diferencia edad de 17 años, fueron intervenidos quirúrgicamente
en las tasas de fractura de cadera en años posteriores a la mediante una derivación gástrica en Y de Roux por vía
menopausia.89 laparoscópica en el Cincinnati Children’s Hospital. Los
En general se acepta que el adolescente obeso tiene IMC medios fueron de 57 kg/m 2 . No se registraron
una masa ósea mayor de la normal y no se encuentra en muertes ni fugas anastomóticas. Todos los pacientes pre-
desventaja en lo que respecta a absorción del calcio, ni pre- sentaban patologías comórbidas de obesidad. Más del
senta riesgo de fractura o posterior osteoporosis. Sin 50% presentaba apnea obstructiva del sueño.51 Después
embargo, Goulding y cols. han demostrado que el adoles- de 1 año, el IMC medio fue de 35 kg/m 2. La pérdida de
cente obeso puede tener menos densidad y contenido mine- exceso de peso fue del 65%. Las patologías comórbidas
ral óseo del normal, presentando pues mayor riesgo de preoperatorias de la obesidad remitieron de forma signi-
fracturas.90 Además, el deterioro de la adición de contenido ficativa tras la derivación gástrica. También se observó
mineral óseo en la adolescencia aumenta el riesgo de osteo- una espectacular reducción de la gravedad del AOS en
porosis y determina un riesgo de fracturas dos veces mayor todos los pacientes y una remisión completa del cuadro
en una etapa posterior de la vida.84 Dadas la alteración en en el 90% de ellos.51 En los 6 pacientes diagnosticados de
la absorción, tanto de vitamina D como de calcio, que se diabetes mellitus, hubo resolución completa de la enfer-
registra tras la cirugía bariátrica y la notable variación medad.
individual en la adición de calcio, es fundamental monito- Debido a que la obesidad del adolescente puede dar
rizar estrechamente la densidad mineral ósea en los adoles- lugar a una enfermedad más grave y difícil de tratar qui-
centes que han sido sometidos a cirugía bariátrica, en espe- rúrgicamente que la del adulto, y dado que no se dispone
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

cial en los casos de derivación gástrica y derivación de datos fiables a largo plazo (tanto positivos como nega-
biliopancreática. tivos) referidos a los procedimientos bariátricos en esta
población, los centros que ofrecen cirugía bariátrica a
adolescentes deberían plantearse la viabilidad de un ensa-
Z OPCIONES QUIRÚRGICAS yo clínico controlado con el fin de determinar el mejor
método para manejar la obesidad del adolescente.
En la National Institutes of Health Bariatric Consensus Al menos, los centros que ofrecen este tipo de trata-
Development Conference celebrada en 1991, los participan- mientos deberían estar regionalizados para asegurar un
tes concluyeron que existían datos insuficientes para reco- volumen alto y deberían ser obligados de forma prospec-
mendar la cirugía bariátrica a pacientes menores de 18 años tiva a recoger datos de resultados (v. figura 37-2;
de edad.91 Más de una década después, los datos son toda- tabla 37-2).
322 Sección VII • CONSIDERACIONES ESPECIALES

10. Pietrobelli A, Faith MS, Allison DB, et al: Body mass index as a meas-
Tabla 37-2 ATRIBUTOS INDICADOS PARA UN «BUEN» ure of adiposity among children and adolescents: a validation study. J
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38
Contorno corporal tras una pérdida
masiva o generalizada de peso
Marie-Claire Buckley, M.D.

Dado el creciente número de procedimientos quirúrgicos dida de la grasa, el desarrollo de nuevas técnicas para remo-
bariátricos que se realiza cada año, se ha registrado un ingen- delar el contorno de áreas comunes de tejido caído superfluo
te aumento en el número de pacientes que presentan una pér- (p. ej., el abdomen, los muslos, las nalgas, el pecho, los bra-
dida masiva o generalizada de peso (PMP) y solicitan proce- zos y la cara de los pacientes con PMP) ha dado lugar a una
dimientos de contorno corporal. Según datos de la American nueva subespecialidad en el campo de la cirugía plástica.
Society for Aesthetic Plastic Surgery (ASAPS) del año 2004, el En la asistencia a los pacientes con PMP, el objetivo de
número de estas técnicas ha aumentado entre el 28% y el 67% la cirugía de contorno corporal es aliviar la incapacidad fun-
durante 2003 y 2004 (v. tabla 38-1).1 Por ejemplo, en 1994 se cional asociada con el exceso de piel, ayudar a eliminar el estig-
practicaron unas 17.000 abdominoplastias, en tanto que su ma físico remanente de la obesidad y conseguir para el paciente
número aumentó hasta más de 34.000 en 1996 y hasta 150.000 una imagen corporal más satistactoria.
en 2003. Aunque estas cifras no distinguen entre pacientes En el presente capítulo se ofrece una visión general de
con PMP y pacientes intervenidos en virtud de criterios cos- los cambios físicos sufridos por los pacientes con PMP y las
méticos, el aumento de tales parámetros se correlaciona con ideas y prácticas actuales que se están desarrollando para
el incremento en el número de procedimientos bariátricos responder a las necesidades de esta nueva y creciente pobla-
realizados durante ese período, en tanto que las intervencio- ción de pacientes con PMP.
nes de remodelación de la porción inferior del cuerpo se cen-
tran casi exclusivamente en la población con PMP.
Los cirujanos plásticos han realizado durante décadas Z HISTORIA
intervenciones dedicadas a eliminar el exceso de tejido y
mejorar el contorno corporal con efectos cosméticos. Sin La historia de las intervenciones de contorno corporal comen-
embargo, el paciente con PMP plantea desafíos específicos zó hace más de un siglo, antes de que la obesidad mórbida se
que requieren algo más que la simple aplicación de las técni- convirtiera en una epidemia y de que se desarrollara la cirugía
cas tradicionales. Debido a la distribución, la cantidad y la bariátrica. Hacia el año 1899, Kelly describió la primera abdo-
calidad de la piel no elástica y la grasa eliminada, una sencilla minoplastia en los EE. UU., en la que realizó una sección
abdominoplastia o una liposucción pueden dar lugar a un transversa del panículo adiposo a la altura del ombligo para
contorno corporal no ideal. Aunque aún tenemos mucho que facilitar un procedimiento ginecológico. Babcock usó una sec-
aprender en relación con los patrones de distribución y pér- ción vertical en 1916 y Galtier combinó las dos secciones en un
patrón del tipo de flor de lis en 1955. Este abordaje tradicional,
que lleva a cabo una escisión directa del exceso de tejido en el
Tabla 38-1 DATOS NACIONALES DE CIRUGÍA abdomen anterior, se denomina paniculectomía.2,3
COSMÉTICA, ASAPS 2004 A pesar de las variaciones en el lugar de la incisión, una
paniculectomía anterior estándar no actúa sobre las acumula-
N.° CASOS % INCREMENTO % INCREMENTO ciones de grasa (los «michelines» de los flancos y la espalda),
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

PROCEDIMIENTO 2003-2004 2003-2004 1997-2004 tan comunes en pacientes con PMP; a veces, tales acumulacio-
Abdominoplastia 150.987 28 344 nes se hacen incluso más prominentes. En 1940, Somalo acuñó
Remodelación de mama 98.351 28 395 el concepto de paniculectomía ampliada o torsoplastia circun-
Remodelación de la parte 17.052 61 578 ferencial, en tanto que, en 1960, González-Ulloa desarrolló la
superior del cuerpo lipectomía circunferencial o en cinturón a la mitad del tronco.
Remodelación de la parte 15.094 38 610 Una abdominoplastia no es lo mismo que una paniculecto-
inferior del cuerpo mía. Las abdominoplastias modernas difieren de las paniculec-
Remodelación de muslo 13.502 53 366 tomías anteriores tradicionales en varios aspectos. No sólo se
Remodelación de nalgas 5.960 67 285 elimina el exceso de panículo sino también los colgajos cutáneos
ASAPS, American Society for Aesthetic Plastic Surgery. (Tomado de www. restantes para permitir el recubrimiento de los tejidos. Además,
shaping-futures.com.) se pliega la fascia muscular abdominal para tensar y aplanar el
325
326 Sección VII • CONSIDERACIONES ESPECIALES

perfil como un «corsé interno» y las cicatrices se minimizan y Además de obtener un peso estable, las patologías comór-
camuflan, en la medida de lo posible, con pliegues naturales. La bidas médicas también deben estabilizarse o mejorar. Entre ellas
liposucción adicional de los depósitos grasos remanentes para se cuentan los trastornos psicológicos, como depresión, desór-
alcanzar un mayor adelgazamiento o un mejor contorno, técni- denes de personalidad o la distorsión de la imagen corporal.
ca introducida por Illouz en los años ochenta,2 también se puede Como parte del reconocimiento inicial, diversos expertos reco-
combinar con abdominoplastia o con una intervención de «con- miendan usar la lista de control de síntomas de Hopkins,11,12 u
torno corporal escisional». otro cuestionario estandarizado, para determinar la idoneidad
Antes del desarrollo de la cirugía bariátrica, la paniculec- del paciente como candidato quirúrgico. Se estima que el 50%
tomía anterior era la única opción para el paciente obeso mór- de la población con PMP padece trastornos del eje I (depresión,
bido con un panículo gigante asintomático, que conlleva por sí ansiedad o ambas; en comparación con el 17% de la población
mismo riesgos y complicaciones importantes debido a las múl- general); y que el 30% padece trastornos del eje II (trastornos de
tiples patologías comórbidas asociadas con la obesidad. A medi- la personalidad). Es posible que, antes de practicar nueva ciru-
da que los procedimientos de cirugía bariátrica se han hecho gía, sea necesario tratar los cambios postoperatorios importan-
más accesibles, tienen más éxito y menos riesgo, estamos vien- tes, tales como los relacionados con alteración de la autoidenti-
do más pacientes con PMP con diferentes problemas. dad, nuevas demandas en lo que respecta a las funciones de
A pesar de disponer de la lipectomía en cinturón y la relación, fracaso en la consecución de un cuerpo normal y ajus-
abdominoplastia muchos pacientes aún no se mostraban satis- tes en la imagen corporal. Vineberg resalta la importancia de
fechos con su aspecto. Los cambios en la elasticidad de la piel adecuar las expectativas del paciente con los resultados poten-
y en el soporte del tejido conectivo subyacente no volvían a la ciales y descarta una posible dismorfia corporal.13 La enferme-
normalidad tras la pérdida masiva de peso, dejando piel caída dad psicológica no descarta la cirugía, pero se recomienda que
superflua que afectaba no sólo al abdomen, sino también a las un profesional de salud mental evalúe la estabilidad del paciente
nalgas, los muslos, el pecho, los brazos y la cara. Un estudio de y su potencial para cumplir adecuadamente con un período
Young y Freiberg evaluó el nivel de satisfacción en un pequeño perioperatorio y una fase de recuperación muy estresantes.
grupo de pacientes quirúrgicos posbariátricos tras paniculec- Si los nuevos estilos de vida de los pacientes con PMP
tomía y observó que estaban descontentos con su imagen cor- incluyen la nutrición adecuada, se debe considerar la práctica
poral. Además de ver aliviados sus síntomas, los pacientes tam- de ejercicio físico regular y, en general, el mantenimiento de
bién esperaban presentar un mejor aspecto físico.4 unos hábitos saludables. Los pacientes con PMP están a
Tal vez, el desarrollo más significativo en el ámbito del menudo anémicos y pueden tener también otras deficiencias
contorno corporal de pacientes con PMP es el trabajo de que requieran suplementos dietéticos para facilitar la curación
Lockwood. Este autor describió la anatomía del sistema fas- y la recuperación postoperatoria (p. ej., hierro y vitamina K).
cial superficial, una red de malla estructural fibrosa que Deben hacerse valoraciones básicas de laboratorio en el preo-
atrapa la grasa debajo de la piel y la usa para suspender o peratorio que incluyan prealbúmina, hemoglobina, hierro,
elevar los tejidos laxos de los muslos, las nalgas y el abdomen calcio, magnesio y fósforo. Rubin sugiere, incluso, la aplica-
del paciente con PMP. Sus resultados fueron ciertamente ción de técnicas de precondicionamiento.14 Los pacientes
excepcionales.5,8 Lockwood también propuso un cambio en fumadores deben dejar el tabaco al menos 2 semanas antes de
la perspectiva para pasar de la mera reconstrucción funcio- la cirugía, si es que el cirujano acepta operarlos.
nal al contorno corporal de tipo cosmético, considerando el Si los pacientes parecen tener objetivos y expectativas rea-
cuerpo en términos de «unidades estéticas» centradas alre- listas de qué cirugía de contorno corporal pueden obtener, la
dedor del tronco.9,10 La abdominoplastia de alta tensión late- atención se centra entonces en determinar qué procedimiento
ral de Lockwood y las técnicas de abdominoplastia dieron al o técnica es más apropiada. Ello se basa en las prioridades del
contorno corporal del paciente con PMP una nueva dimen- paciente, así como en la presentación física. Además de una
sión, tratando el abdomen, los costados, la espalda, las nalgas evaluación en profundidad de la cantidad y calidad de la piel,
y los muslos como un todo estético.8 Su trabajo sentó las los tejidos subcutáneos y la musculatura subyacente de las
bases para la evolución continuada del contorno corporal. áreas concretas, se debe considerar también el contorno global
y las proporciones entre las unidades estéticas regionales.
Entre las preguntas preoperatorias que deben formularse
Z CONSIDERACIONES PREOPERATORIAS se cuentan las siguientes: ¿Tiene el paciente un hábito corporal
androide («forma de manzana» o centralizado) o una distribu-
Antes de examinar estas nuevas técnicas más en profundidad ción ginecoide («forma de pera») del exceso de grasa y piel?,
hemos de considerar una serie de criterios preoperatorios. ¿hay áreas adherentes que produzcan «hileras superpuestas» o
Aunque el paciente con PMP haya realizado importantes bandas de exceso de piel?, ¿ha alcanzado el paciente su peso
esfuerzos para alcanzar su nuevo peso y mejorar su salud, la corporal casi ideal o se considera todavía que presenta sobrepe-
pérdida masiva de peso no lo convierte automáticamente en so u obesidad?, ¿cuál fue el índice de masa corporal (IMC) más
buen candidato para una posterior cirugía. alto del paciente y cuál su IMC actual?, ¿qué aspecto tiene la
Antes de considerar la cirugía de contorno, el paciente piel? (¿hay cicatrices ginecológicas o de colecistectomía abierta,
con PMP ha de comprometerse a mantener los cambios en estrías o pruebas de lesión solar?), ¿cuál es el grado de laxitud y
su estilo de vida, debe haber sido sometido a la cirugía bariá- el grado de elasticidad?, ¿rodea el panículo abdominal anterior
trica al menos 1 año antes y tiene que mantener un peso los flancos hacia las acumulaciones de grasa de la espalda?,
estable durante un período mínimo de 3 a 6 meses para evi- ¿continúa el exceso de la porción superior de los brazos hasta la
tar una falsa meseta. Si existe cualquier deseo o posibilidad pared torácica?, ¿necesita ser tensada toda la circunferencia del
de reducción mayor de peso, es conveniente animar al muslo o sólo la vertiente medial?, ¿en qué medida están caídos
paciente a alcanzar ese objetivo antes de abordar el siguiente el monte de Venus, las mamas, la cara y el cuello?
paso. Si el paciente queda encuadrado aún en la categoría de Es asimismo necesario preguntarse cuál es el estado de la
obesidad, debe ser reevaluado por el cirujano bariátrico para pared abdominal subyacente; si hay hay diástasis, atenuación
un posible procedimiento de revisión ulterior. o herniación verdadera; si el tono muscular es bueno o los
Capítulo 38 • Contorno corporal tras una pérdida masiva o generalizada de peso 327

músculos están distendidos; si hay grasa abdominal remanen- rebote, quizá incluso con mayor pérdida de peso y cicatrices
te que condicione el perfil abdominal una vez que se elimine amplias, y que pueden requerir revisiones adicionales.14
el exceso de tejidos, o si hay atrofia en la región glútea.
Todos estos factores pueden afectar el resultado final y
deben ser discutidos con el paciente a fin de asegurar la Z CONSENTIMIENTO INFORMADO
mejor elección posible de procedimientos y técnicas. Si el
paciente presenta más de un área problemática, es necesario El consentimiento informado ha de incluir una descripción
decidir si es un buen candidato para un procedimiento com- del procedimiento, en el que se especifique qué partes están
binado o para un planteamiento por etapas. involucradas, y los diferentes riesgos, alternativas y compli-
caciones. Debido a que estos procedimientos son esencial-
mente programados, los pacientes deben ser conscientes de
Z CONTRAINDICACIONES los posibles riesgos y complicaciones asociados, en especial si
van a ser sometidos a una combinación de abordajes durante
El contorno corporal posbariátrico está contraindicado en un período de anestesia prolongado. La mayoría de los ciru-
las siguientes situaciones: peso inestable; incumplimiento janos limitan su tiempo de intervención a 6-8 horas de una
con los cambios del estilo de vida; expectativas no realistas vez, para así minimizar los riesgos de la anestesia. No obstan-
de los resultados postoperatorios (irregularidades del con- te, hay algunos que han realizado intervenciones integrales
torno, cicatrices, revisiones, posibles complicaciones, recu- en una sola fase, que ha durado hasta 12 horas, sin que se
peración prolongada, medias de compresión y restricciones hayan registrado complicaciones graves.16
de las actividades); tabaquismo; malnutrición; patologías Los riesgos y complicaciones quirúrgicos característi-
comórbidas inestables, e inestabilidad psicológica. cos incluyen –aunque no de forma exhaustiva– infección,
hemorragia, hematoma/seroma, equimosis, hinchazón,
dolor, reacciones alérgicas, trombosis venosa profunda y
Z CONSIDERACIONES POSTOPERATORIAS embolia pulmonar. Los riesgos más específicos de los proce-
dimientos de PMP incluyen necrosis de la piel y la grasa, con
Debido a que estos procedimientos son esencialmente progra- pérdida incluida del ombligo o los pezones, retraso en la
mados, es importante comentar con los pacientes qué esperan cicatrización de la herida, cicatrices, asimetrías, sensibilidad
ellos y qué se espera de ellos tras la cirugía. Algunas de las alterada, linfedema, irregularidades del contorno y distor-
intervenciones pueden realizarse sobre una base ambulatoria, siones y necesidad de revisiones posteriores.
aunque las lipectomías en cinturón más amplias y las elevacio-
nes corporales requieren hospitalización, a veces de entre 2 y
7 días. El tratamiento del dolor postoperatorio inmediato pue- Z COMPLICACIONES
de incluir analgesia epidural controlada por el paciente o bom-
bas a demanda, pasando a los medicamentos orales antes del Aunque las patologías comórbidas mejoran a menudo y las tasas
alta. A la mayoría de los pacientes se les pondrán drenajes de complicación son menores en los pacientes con PMP que en
durante al menos 1 semana y se les proporcionará cobertura los pacientes con obesidad mórbida, existen otros problemas
antibiótica profiláctica variable. Las mallas o las prendas de que pueden presentarse, con independencia del procedimiento
compresión también dependen de la preferencia del cirujano y o de las precauciones perioperatorias que se adopten.
del procedimiento. El uso de la compresión externa tiene el Vastine y cols. observaron que «la obesidad en el momento
potencial de causar una mayor isquemia tisular en los colgajos de la abdominoplastia tiene una profunda influencia en la ta-
eliminados y por eso algunos cirujanos piden a los pacientes sa de complicaciones de la herida tras la cirugía, con indepen-
que limiten sus niveles de actividad y que mantengan una posi- dencia de que se haya realizado una cirugía de reducción de peso
ción en declive durante la primera o la segunda semanas para previa». Compararon pacientes no obesos (dentro de un rango
minimizar el edema postoperatorio. Los niveles de actividad y de 22,6 kg en relación al peso corporal ideal), en el límite (entre
la progresiva reincorporación al trabajo pueden incrementarse 22,6 y 45,3 kg sobre el peso corporal ideal) y obesos (más
gradualmente entre la segunda y la cuarta semanas. Durante de 45,3 kg del peso corporal ideal), que habían sido sometidos a
el período de recuperación, se recomienda que los pacientes abdominoplastia, y observaron una tasa global de complicacio-
dispongan de sistemas de soporte adecuados. nes del 42%. Éstas fueron divididas en categorías mayores y
Es muy importante asegurarse de que los pacientes menores con 13% de complicaciones mayores y 29% de compli-
entienden las consecuencias y los resultados que pueden espe- caciones menores. Cuando estratificaron por peso, el 80% de las
rar en función de su IMC actual. Aly recomienda mostrar complicaciones sucedieron en el grupo de pacientes obesos fren-
fotos de pacientes similares antes y después de la intervención, te a un 33% registrado en los grupos de pacientes en el límite y
con el fin de proporcionar ideas realistas sobre el aspecto físi- en los no obesos. La complicación más frecuente fue la forma-
co. Lo ideal es que, antes de someterlos a un procedimiento ción de seroma. Es interesante apuntar que la cirugía bariátrica
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bariátrico, se muestre a los pacientes «qué aspecto tendrán por sí misma no disminuyó la tasa de complicaciones cuando los
después de reducir su peso», para así prepararlos por si fuera pacientes eran considerados todavía como obesos; hubo una tasa
necesario un nuevo abordaje quirúrgico más adelante.15 global de complicaciones del 55% frente a una tasa de complica-
Tras la fase de recuperación temprana, el proceso de ciones del 33% registrada en los pacientes sin cirugía bariátrica
curación continúa a medida que las cicatrices se remodelan previa. Hasta que los pacientes no pierden el peso extra no se
y van remitiendo y el edema se atenúa. En torno a los 3 meses benefician de menores riesgos y complicaciones.17
los pacientes suelen tener ya una idea de los resultados, aun- Las complicaciones se suelen dividir en tempranas y tar-
que el resultado final no debe valorarse en toda su integridad días. Las complicaciones tempranas incluyen seroma, hema-
hasta pasado aproximadamente 1 año de la cirugía. Es toma, infección, problemas en la cicatrización de la herida y
importante que los pacientes sepan que probablemente expe- necrosis de la piel. Entre las tardías se cuentan orejas de
rimenten una laxitud cutánea recurrente o un efecto de perro, asimetrías, laxitud residual, irregularidades del con-
328 Sección VII • CONSIDERACIONES ESPECIALES

torno y cicatrices amplias y cambiantes. Las complicaciones daje de corrección corporal total, es posible comenzar por el
tempranas son las más comunes y problemáticas, mientras abdomen o la región que resulte más problemática y, a partir
que las tardías son más de índole estética. Gmur y cols. exa- de ahí, ir tratando las diversas áreas.20 Lo más habitual es que
minaron la seguridad de la abdominoplastia combinada con los pacientes se presenten con panículos sintomáticos, y con
otros procedimientos de dermolipectomía tras PMP, y obtu- carga en la parte interna de los muslos y estrías en mamas y
vieron una tasa total de complicaciones del 59%, sin aumento brazos como preocupaciones secundarias. Se podría realizar
en los días de hospitalización.18 en primer lugar una paniculectomía o quizá una cirugía de
En la bibliografía, las complicaciones tempranas en la contorno corporal inferior del cuerpo, seguida de una inter-
curación de la herida oscilan entre el 3% y el 35% para las vención en la parte superior del cuerpo o en áreas específicas.
abdominoplastias, con o sin procedimientos simultáneos Rhomberg observó que los pacientes sometidos a operaciones
adicionales. Grazer y Goldwyn revisaron más de 10.000 abdo- en una sola etapa presentaban mejores puntuaciones postope-
minoplastias y registraron una tasa de complicaciones del ratorias de autoevaluación, mostrando una mayor satisfacción
15%, con predominio de infecciones y dehiscencias de la que los sometidos a procedimientos en varias etapas. También
herida.19 Los seromas pueden aparecer hasta en el 40% de presentaron marcadas mejoras en el ámbito psicológico, la
los casos, a pesar de los drenajes postoperatorios, y requieren evaluación del aspecto personal, la autoconfianza y la vitali-
aspiraciones repetidas, colocación de un drenaje percutáneo dad. La combinación de procedimientos supuso, además,
guiado por ecografía o esclerosis con doxiciclina. En ocasio- ahorro de costes derivado de la disminución de los tiempos de
nes poco frecuentes, los pacientes pueden precisar una revi- hospitalización y de las bajas laborales más cortas.24
sión quirúrgica de la cavidad del seroma para eliminar su Si el paciente presenta depósitos grasos regionales resi-
capa de revestimiento. Aunque en la bibliografía se observa duales, es posible que sea necesario realizar una liposucción
una mayor tasa de infecciones de la herida en pacientes obe- preliminar para extraerlos 6 meses antes de una plastia del
sos, el índice de infección postoperatoria en la población con muslo o del brazo, con el fin de optimizar los resultados.
PMP es de entre el 10% y el 20%.17 Los antibióticos profi- Se da por sentado que probablemente sea necesario pro-
lácticos perioperatorios se usan con frecuencia, si bien la ceder a futuras revisiones, incluso tras procedimientos com-
cobertura antibiótica continua para los drenajes es variable. binados, aunque en general estas se centrarán en alteracio-
La hemorragia postoperatoria y la formación de hema- nes o retoques de escasa entidad.
toma se dan en un porcentaje comprendido entre el 3% y el
10% de los casos, posiblemente debido a las deficiencias
nutricionales inducidas por la malabsorción; pueden pre- Z OPCIONES QUIRÚRGICAS
venirse administrando vitamina K en el preoperatorio. 20
Aunque se tomen precauciones para disminuir la incidencia La pérdida masiva de peso puede afectar a todas las áreas del
de trombosis venosa profunda y embolia pulmonar usando cuerpo. Aunque no entendemos del todo los procesos fisio-
dispositivos de compresión secuencial antes de la inducción lógicos o metabólicos implicados en los patrones de depósito
de la anestesia, deambulación temprana y tratamiento con y pérdida de grasa, que varían entre las diferentes personas
heparina de bajo peso molecular en el postoperatorio, la tasa e incluso dentro de una misma persona, hay ciertas áreas que
de trombosis venosa profunda aún se mantiene en niveles del se ven afectadas con mayor frecuencia en pacientes con
orden del 10%, en tanto que la de embolia es del 1%.21 PMP. Cabe citar entre ellas el monte de Venus, las nalgas,
La necesidad de revisiones postoperatorias oscila entre el los muslos, el tórax y las mamas, los brazos, la cara y el cue-
5% y el 15%, incluso cuando se han realizado múltiples pro- llo. Cada una de estas áreas se trata individualmente, obser-
cedimientos. «Las dermolipectomías adicionales no aumenta- vando las deformidades residuales tras la PMP y las diferen-
ron la morbilidad relacionada con la abdominoplastia, pero tes opciones quirúrgicas disponibles.
mostraron mejores resultados a largo plazo».18 La mayoría de
las revisiones son pequeños procedimientos de curación de la Abdomen
herida o deformidades residuales. Sin embargo, como señala
Vastine: «Las tasas de complicaciones no son equivalentes a La localización requerida con mayor frecuencia para inter-
tasas de fracaso quirúrgico».17 A pesar de todos los posibles venciones de contorno corporal tras PMP es el abdomen, en
riesgos y complicaciones, el contorno corporal después de el que la mayoría de pacientes acumulan su exceso de peso.
PMP puede proporcionar a estos pacientes el ansiado alivio Incluso las mujeres con mayores distribuciones ginecoides
tras años de sufrimiento físico y psíquico. Modolin observó de grasa parecen perder peso más fácilmente de los depósitos
que «las complicaciones no fueron suficientes para contrain- centrales del abdomen. Lockwood observó que la relajación
dicar los procedimientos. Los pacientes mostraron satisfac- de los tejidos abdominales guarda una estrecha correla-
ción con los resultados quirúrgicos: mayor integración social ción con el descenso general de la cintura, ingle, pubis y mus-
y profesional, mejoría del comportamiento, aumento de la los superiores circundantes y, en consecuencia, debe conside-
capacidad para caminar y mejor rendimiento con los ejercicios rarse la base de la restauración de la región del tronco.9
físicos, la vida sexual y las actividades de ocio».22 Tras una PMP, los pacientes quedan con frecuencia con
un panículo sintomático, o «delantal» de piel y grasa, que
cuelga en la parte inferior del abdomen. Debido a la piel
Z ESTADIFICACIÓN solapada, es frecuente que los pacientes presenten aumento
de la sudoración, con maceración u olor fétido, erupciones y
Diferentes estudios han mostrado ya que la combinación de laceración de la piel en los pliegues intertriginosos y en el
varios procedimientos quirúrgicos puede realizarse sin exce- ombligo que, habitualmente, persiste a pesar de los trata-
sivos riesgos asociados,3,7,23 por lo que la decisión de separar mientos conservadores. Mantener la higiene personal y la
dichos procedimientos por etapas o fases depende de las prio- integridad de la piel ha de plantearse como objetivo diario,
ridades y recursos del paciente, así como de la naturaleza de la que requiere limpieza frecuente y aplicación de cremas y
clínica del cirujano. Si no puede asumirse el coste de un abor- polvos para prevenir mayores lesiones. En algunos casos, el
Capítulo 38 • Contorno corporal tras una pérdida masiva o generalizada de peso 329

panículo es tan grande que interfiere con el aseo. Un panícu- mía en cinturón, no es posible corregir la obesidad residual
lo de tamaño moderado también puede exacerbar la lumbal- tras la pérdida de peso. Aly observa que los resultados finales
gia debida al desplazamiento de la fuerza hacia delante y, en no dependen tanto de la cantidad total de peso perdido como
ocasiones, interfiere con las actividades y ejercicios diarios. del IMC actual.28 Ello se ilustra mediante dos «globos» ani-
La distribución irregular del exceso de piel dificulta a veces dados, que representan la grasa interna o intraabdominal y la
el poder encontrar ropa que se ajuste bien a su perfil. cubierta muscular, y la cubierta externa o piel. La tensión de
Es frecuente que estos pacientes hayan conseguido una la cubierta cutánea externa no garantiza el cambio del perfil
considerable pérdida de peso y mejora en la salud global, del globo abdominal interno, a menos que también pueda ser
pero que en ellos la piel suelta se mantenga como recuerdo tensado.15 Los objetivos de la lipectomía en cinturón son ten-
físico de su anterior complexión, lo que les impide desarro- sar el abdomen anterior y delimitar la cintura, pero debemos
llar nuevas imágenes mentales de sí mismos, incluso en tener en cuenta la calidad de la cubierta de piel y grasa: su
aquellos casos en los que se ha alcanzado prácticamente un grosor, capacidad de plegarse, traducción de fuerza y, en últi-
peso corporal ideal. A veces el aspecto de sus nuevos cuerpos ma instancia, el IMC subyacente. Una magnífica serie de
tiene consecuencias psicológicas más importantes que las fotografías muestra los posibles resultados con la lipectomía
derivadas de su condición anterior. en cinturón en relación con el peso restante en individuos que
El panículo superfluo, inelástico y caído rara vez mejora eran obesos, con un sobrepeso de entre 13,6 y 22,6 kg de
sólo con ejercicio y, en última instancia, ha de ser extirpado. sobrepeso, o bien estaban cerca de su peso corporal ideal.29,30
El método más simple de eliminar el exceso de piel Existen diferencias individuales entre los distintos ciruja-
abdominal es la paniculectomía. Este abordaje tradicional nos en lo que respecta a preferencias sobre marcas preoperato-
del panículo abdominal superior se usó en el pasado en rias, posición intraoperatoria y planteamiento del postoperatorio.
pacientes con obesidad mórbida, así como para facilitar otras No obstante, la mayoría de lipectomías o torsoplastias produ-
técnicas quirúrgicas generales. El planteamiento se centra cen una mejoría significativa en las acumulaciones abdomina-
en eliminar sólo el tejido extra que va a ser directamente les anteriores, de los flancos y de la espalda, así como en la parte
extirpado. Esta eliminación limitada disminuye el riesgo de superior de las nalgas. La lipectomía en cinturón se ha conver-
necrosis tisular de los colgajos cutáneos. Cualquier perfil tido en la prueba de referencia para la consecución de unos
abdominal protuberante, bien por grasa intraabdominal resultados reconstructivos óptimos.
persistente o por músculos abdominales con distensión ate- Como en la mayoría de abdominoplastias, en un intento de
nuada, permanece sin ser tratado, a menos que haya una her- eliminar y tensar la piel cuanto sea posible, se puede indicar al
nia concomitante que precise reparación. paciente que camine inclinado hacia delante durante una sema-
En la intervención se usa una incisión transversa sobre na aproximadamente y que evite cualquier tensión excesiva
un pliegue inguinal para eliminar el exceso de tejido a lo sobre el cierre anterior, que pueda provocar una dehiscencia.
largo del plano horizontal, especialmente si el paciente se Debido a la eliminación de los colgajos cutáneos, algunos
considera todavía obeso. La incisión se suele finalizar sobre cirujanos prefieren prescindir del uso de prendas de compre-
los flancos y deja grandes deformidades en forma de oreja de sión o mallas, aminorando así el riesgo de isquemia tisular.
perro. Para el paciente que casi ha alcanzado el peso corpo- Habitualmente se usan drenajes durante al menos las 2 prime-
ral ideal se puede añadir una incisión vertical para eliminar ras semanas. Las cicatrices y los tejidos recubiertos pueden tar-
cualquier tejido adicional en exceso a lo largo de la línea dar hasta 1 año en remodelarse por completo y relajarse.
media. Ello puede ocasionar una deformidad epigástrica en
forma de oreja de perro.20,25 Monte de Venus
Esta incisión anterior en forma de «ancla» o «T invertida»
es considerada como pasada de moda por muchos cirujanos El monte de Venus, o la zona de grasa suprapúbica equiva-
actuales y puede incluso acentuar las acumulaciones remanen- lente en varones, no es habitualmente un área que preocupe
tes en los flancos y la espalda, aunque es un método útil y eficaz a la mayoría de pacientes tratados por motivos cosméticos.
para eliminar un panículo a menudo problemático. La panicu- Sin embargo, en la población con PMP, tanto masculina
lectomía anterior no evita una posible futura abdominoplastia como femenina, hay a menudo grasa residual y piel superflua
circunferencial completa,20 y los procedimientos por etapas caída que pueden interferir con la higiene personal y afectar
permiten tratar los problemas funcionales de forma precoz. el aspecto del abdomen anterior.
Una abdominoplastia estándar implica la eliminación Los tejidos caídos pueden estirarse y reducirse de su
del colgajo cutáneo anterior completo hasta los márgenes exceso abdominal anterior. Sin embargo, el monte de Venus
costales, para poder recubrir y extirpar el exceso de piel a lo suele aparecer distorsionado en la dimensión transversa.31,32
largo del plano horizontal, y favorecer la umbilicoplastia y la Para evitar esta deformidad se han propuesto diferentes téc-
consecución de pliegues verticales de la vaina del recto ante- nicas, entre las que se cuentan las secciones oblicuas en los
rior, que permitan tensar el «corsé interno» y mejorar el pliegues inguinales o la sección vertical en la línea media.
perfil abdominal. Las variaciones, que incluyen los pliegues Cuando hay tejido graso considerable, también se puede usar
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fasciales oblicuos externos o los pliegues verticales y hori- la liposucción.


zontales combinados, son posibles pero infrecuentes.26,27 En Si se usa la sección directa, se debe proceder con cuida-
el paciente con PMP, incluso tensando el colgajo cutáneo do para evitar que se vean afectados los vasos linfáticos más
anterior puede dejarse todavía tejido en exceso detrás. Por profundos o se produzca una excesiva resección. El linfede-
esta razón, en la actualidad el enfoque preferido para el con- ma del monte de Venus es en ocasiones muy incómodo para
torno abdominal es la lipectomía circunferencial o en cintu- el paciente. La resección y el estiramiento excesivos también
rón, desarrollada por Somalo y González-Ulloa. 26 pueden producir una distorsión de los labios y una redirec-
La experiencia de Aly con la lipectomía en cinturón con- ción anómala del orificio uretral externo. Los procedimien-
firma de forma convincente las distorsiones dejadas por la tos sobre la parte interna de los muslos afectan asimismo a
paniculectomía anterior tradicional. Sin embargo, el cirujano los tejidos del monte de Venus y pueden requerir revisiones
se muestra cauteloso al señalar que, incluso con una lipecto- posteriores.
330 Sección VII • CONSIDERACIONES ESPECIALES

Nalgas ello a los riesgos de infección y mala cicatrización de la heri-


da. La compresión postoperatoria resulta compleja, por la
En los pacientes con PMP, las nalgas aparecen a menudo forma cónica de las piernas, y ha de realizarse con precau-
planas, con pérdida de grasa y masa muscular así como de los ción, para evitar lesiones isquémicas en la piel.
puntos de referencia anatómicos y de los pliegues naturales. Si se intenta una sección directa, debe actuarse con cui-
Los primeros intentos de Pitanguy33 para camuflar las inci- dado a la hora de disecar en el plano superficial y minimizar
siones dentro del pliegue glúteo en el momento de la sección la eliminación de los colgajos cutáneos. El cirujano ha de
directa produjeron una transición deformada entre la pro- evitar asimismo una excesiva resección, teniendo en cuenta
minencia glútea y la porción posterosuperior del muslo.34,37 el grosor de la grasa subcutánea durante el cierre. Algunos
Otros procedimientos (p. ej., el de Ersek) han intentado cirujanos recomiendan el uso de esteroides para ayudar a
esconder las incisiones en el pliegue glúteo medial.38 minimizar el edema precoz y la tensión sobre el cierre.
Aunque la remodelación de los glúteos como parte de la Observando otras áreas del muslo, Lockwood apreció
lipectomía circunferencial o la intervención de contorno cor- que a muchos pacientes les dejaban unos depósitos anómalos
poral inferior elimina la piel superflua caída sin alterar los de grasa cincunferencial que no respondían a la pérdida de
pliegues naturales y recubre la piel, todavía queda una pérdi- peso. Se refería a ello como la «grasa genética» y consideraba
da de volumen de las prominencias glúteas. Esta falta de que esta se localizaba en una capa profunda de los tejidos de
repleción o proyección puede ser superada por medios sinté- suspensión, que impedía su movilización y cobertura. El
ticos o autólogos. Los colgajos dérmicos enterrados, descri- autor propuso una liposucción circunferencial del muslo para
tos por Isaacs,37 proporcionan cierta repleción en la porción realizar de nuevo el contorno de los depósitos grasos, así
superior de las nalgas. Los implantes de silicona sólida deba- como para facilitar el estiramiento de la piel superflua caída
jo de los glúteos se han usado para mejorar el contorno de las del muslo y la liberación de las «zonas de adherencia».5,7
nalgas, pero están condicionados por complicaciones induci- Lockwood consiguió una mejoría importante en el aspecto
das por exposición al implante, infección y cambios en los de los muslos, permitiendo que la musculatura subyacente
propios implantes. apareciera como nunca antes lo había hecho. Incluso con este
Centeno19 está desarrollando una técnica para generar un tratamiento circunferencial puede ser necesaria una sección
aumento autoinducido de la región glútea, que incrementa la adicional en la parte interna del muslo.
masa y la proyección sin implantes. Básicamente, los pacientes
conservan algo de tejido que, de lo contrario, sería eliminado Remodelación corporal inferior
durante la dermolipectomía, como prominencia de tejido no
epitelizado que proporciona volumen debajo de la piel recubier- A Lockwood se le atribuye el concepto de remodelación de la
ta. Los autores del estudio han observado que las nalgas más parte inferior del cuerpo, combinando la abdominoplastia
satisfactorias desde el punto de vista estético tienen su mayor circunferencial de alta tensión lateral con la remodelación
proyección a nivel del monte de Venus en proyección lateral.40 transversa del flanco/muslo/nalga (que incluye liposuc-
ción circunferencial de los muslos a las rodillas). Su plantea-
Muslos miento orientado sobre las «unidades» corporales anatómicas,
y el uso del sistema fascial superficial para apoyar y mantener la
En los pacientes cuyo patrón de distribución de grasa es gine- remodelación, supusieron la eliminación del exceso de tejido,
coide, la PMP en los muslos y piernas puede dejar una cantidad el rejuvenecimiento y reposicionamiento de la piel y la res-
importante de piel caída superflua, especialmente en la parte tauración de un contorno juvenil más normal.6,7,9,10,34
superior e interna de los muslos. A menudo ello causa proble- Considerado el procedimiento de referencia para el
mas similares a los producidos por el panículo abdominal: contorno inferior en el paciente con PMP, la remodelación
sudoración excesiva, rozaduras, irritación y laceración de la piel, de la parte inferior del cuerpo precisa de dos cirujanos y de
que son muy difíciles de prevenir. El exceso de tejido en la un equipo experimentado de auxiliares que ayuden al posi-
región interna del muslo es también un posible problema cionamiento del paciente durante la intervención. La técnica
durante las actividades y los ejercicios de ambulación y puede puede prolongarse de 6 a 8 horas y requiere hasta 1 semana
limitar el tipo de ropa que los pacientes usan con comodidad. de hospitalización postoperatoria.
El enfoque tradicional para tratar las deformidades del Para evitar la posibilidad de dehiscencia anterior o pos-
muslo después de la PMP es la escisión directa, tirando del ex- terior de la línea de sutura, Aly no permite a los pacientes
ceso de piel hacia adentro y dejando una amplia cicatriz a lo que sean reposicionados en el postoperatorio, a menos que
largo de la costura interna. Esta técnica no trata el remanen- estén completamente despiertos, para que sea posible juzgar
te de la deformidad grasa restante en la porción lateral del si hay demasiada tensión sobre el cierre.28 No es sorprenden-
muslo o la región trocantérea, ni tiene en cuenta la piel a lo te que en esta técnica haya más problemas con la curación de
largo del pliegue oblicuo labial-inguinal. En un intento de la herida y la formación de seromas que en algunos de los
tratar la piel de la parte interna y superior del muslo, se ha procedimientos menores, a pesar de una cuidadosa planifi-
intentado el estiramiento interno del muslo con una sección cación y ejecución, un entrenamiento avanzado y una expe-
transversa a lo largo del pliegue inguinal,41,43 que no obstan- riencia significativa en la realización de estas cirugías.
te se ve afectado en ocasiones por la migración de las cicatri-
ces y la deformidad de los labios debida a la tracción hacia Abdominoplastia invertida
abajo de las suturas sobre las que asienta la suspensión fascial.
Estas deformidades resultan incluso más difíciles de abordar Las áreas de la parte superior del cuerpo están sometidas a las
que el problema original, por lo que esta escisión no se reali- mismas fuerzas de gravedad y a los mismos efectos cutáneos
za de forma generalizada. La presencia de varicosidades tam- de la obesidad mórbida que las de la parte inferior. Un área
bién influye en el riesgo de hemorragia y formación de hema- de transición entre el tronco superior y el inferior es la que se
toma. La disección de los planos más profundos puede sitúa justo debajo de las mamas, a nivel de la caja torácica
producir problemas prolongados con linfedema, añadiéndose inferior. Esta parte del cuerpo se diferencia del abdomen
Capítulo 38 • Contorno corporal tras una pérdida masiva o generalizada de peso 331

inferior. En algunos pacientes con PMP la franja de acumu- Brazos


lación de piel y grasa adicionales puede extenderse hacia
atrás, hacia la columna vertebral, e incluso interferir con los El exceso de piel de la parte interna superior de los brazos pue-
movimientos respiratorios. Debido a que la abdominoplastia de variar en los pacientes con PMP. Aunque se puede tonificar
circunferencial no se expande hacia la porción superior del algo la musculatura subyacente, generalmente es necesaria la
cuerpo, Grazer propuso una abdominoplastia invertida en la sección directa. Hasta la fecha no hay remodelaciones de brazos
que la acumulación costal inferior pudiera ser eliminada des- similares a las de los muslos que permitan evitar una cicatriz
de abajo y extirpada a lo largo del pliegue inframamario, con amplia. Lockwood describe el estiramiento de los septos de
extensión hacia la espalda.16 Esta operación fue descrita por anclaje, con aflojamiento de la interconexión entre el sistema
primera vez por Rebello en 1972; por su parte, Baroudi com- fascial superficial del brazo y la fascia axilar.6 Por su parte,
binó la abdominoplastia invertida con la reducción de mamas Strauch describe «zonas de tratamiento» que incluyen el ante-
a través de una incisión común (1979).16 Este procedimiento brazo y la axila.46 La braquioplastia supone la eliminación del
es distinto de la sección más oblicua de las acumulaciones exceso de piel y grasa entre la axila y el codo. Si la piel es todavía
torácicas laterales, que puede combinarse con la remodela- muy grasa, se puede realizar una liposucción preliminar 6 meses
ción de la porción superior de los brazos o la parte superior antes. En pacientes cuyas deformidades no terminen en la axila
del cuerpo, donde es más difícil camuflar las incisiones. o el codo, se han desarrollado distintas variaciones que se
extienden más allá de estas áreas. Dichas variaciones evitan las
Mamas incisiones en línea recta que son propensas a una contractura
de la cicatriz. DiFrancesco ha presentado una excelente revi-
Tanto los pacientes masculinos como femeninos con PMP sión de los enfoques históricos de la braquioplastia.47 Las dos
experimentan cambios en el volumen y la forma de las mamas. incisiones más favorables son la lineal y la sinusoidal, realizadas
Las mujeres presentan a menudo pérdida de volumen, debido en el surco bicipital o a lo largo de la línea del pliegue axilar
a la involución glandular, con caída significativa debido a la posterior para así minimizar la visibilidad de la cicatriz. En este
tensión cutánea prolongada, que las deja con cubiertas cutá- contexto, Aly usa una técnica de cierre progresivo por etapas
neas planas y alargadas y pezones desplazados. Por su parte, para evitar la excesiva resección y la incapacidad de cierre por
los varones tienden a presentar caída con grados diversos de la rápida aparición de edema. Otros eliminan y avanzan el teji-
exceso de grasa o ginecomastia. En ambos casos se requiere do extra que debe ser seccionado, teniendo en cuenta el grosor
una remodelación de mamas para tensar la cubierta cutánea de los colgajos cutáneos. Las contracturas axilares se evitan con
estirada, añadir volumen a la prominencia mamaria de la una plastia en Z e incisiones en T. Cualquiera que sea la técnica
mujer y reducir la prominencia mamaria del hombre. que se use, es necesario actuar con sumo cuidado para evitar las
Tradicionalmente, la mama femenina caída ha sido tra- lesiones en las estructuras neurovasculares más profundas de la
tada mediante una mastopexia aumentada con implantes si se parte superior del brazo y la axila.
necesitaba más volumen. Rubin desarrolló una ingeniosa téc- Como los muslos, las partes superiores de los brazos son
nica, que utiliza tejido torácico lateral en exceso para ayudar también propensas a problemas en la cicatrización de la heri-
a auto-aumentar la prominencia mamaria al mismo tiempo da y a presentar linfedema. Aly enseña a sus pacientes a man-
que se realiza la mastopexia, con excelentes resultados. En tener sus brazos tan elevados como sea posible durante al
esencia, en esta intervención se crea un colgajo aleatorio de menos 2 semanas.48 Otros cirujanos usan prendas de com-
piel de la pared lateral para ayudar a dar forma de nuevo al presión para tratar de evitar un excesivo edema, aunque pue-
parénquima con una sutura de suspensión dérmica. Se han den toparse con problemas tales como una presión irregular
usado mallas alodérmicas y sintéticas para ayudar a resuspen- o constrictiva que produzca isquemia de la piel o incluso
der el tejido mamario caído. Sin embargo, el autoaumento lesión neurológica. Cuando las incisiones de la línea recta
parece ser más práctico, con mejora adicional del contorno de cruzan el pliegue axilar aparecen contracturas axilares. Si el
la pared torácica lateral, donde los rollos de tejido extra son plano de disección es demasiado profundo, existe el riesgo
un problema, incluso en la población que no ha experimenta- de lesión del nervio sensitivo cutáneo.
do PMP. Esta maniobra también invalida la necesidad de
proceder a un aumento de implante por etapas con masto- Remodelación de la parte superior del cuerpo
pexia; sin embargo, en torno al 20% de los pacientes necesi-
tan implantes por no presentar tejido suficiente.44 La remodelación de la parte superior del cuerpo «elimina los
Capella ha analizado la deformidad mamaria del varón rollos acumulados de piel epigástrica y de la zona media de
en pacientes con PMP y ha desarrollado un sistema de clasi- la espalda, ajusta el pliegue inframamario y corrige la forma
ficación del complejo aréola-pezón (CAP) en función del de la mama o la ginecomastia, dejando una cicatriz transversa
grado de la caída y del exceso de grasa. El tratamiento de la casi circunferencial, parcialmente oculta por las mamas».16,23
ginecomastia del varón supone la eliminación del tejido gra- Hurwitz es uno de los pocos cirujanos que incluye la parte
so extra, bien por liposucción bien por sección directa de superior de los brazos, el tórax y las mamas en una etapa.49,50
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más tejido fibroso en la caída ligera o moderada. Para las Vogt también ha presentado un abordaje combinado de bra-
mamas del varón que están demasiado caídas, o presentan zos, tórax y mama que supone múltiples áreas de sección
deslizamiento lateral o una calidad cutánea que probable- elíptica y plastia en Z.51,52 Freeman describe una flancoplas-
mente no se retraerá tras la reducción, son necesarias la tia (una plastia del flanco) o torsoplastia en «forma de ala de
movilización del colgajo cutáneo superior y la sección del murciélago», que incluye una sección troncal lateral así
exceso de piel, algunas veces con sustitución del CAP en como una sección en las axilas y en la parte superior de los
forma de injerto libre. Como en las mujeres, la sección de la brazos.26 Rubin estima que entre el 25% y el 30% de las
piel mamaria extra puede extenderse lateralmente para mujeres con PMP requieren remodelación de la parte supe-
incluir los pliegues cutáneos torácicos.45 Rubin a veces usa el rior del cuerpo, además de remodelación mamaria, para
pliegue inframamario para elevar y suspender los tejidos corregir las acumulaciones de grasa y piel de la pared toráci-
abdominales desde el periostio costal.44 ca lateral y posterior.44
332 Sección VII • CONSIDERACIONES ESPECIALES

Remodelación de todo el cuerpo dad mórbida, en vez de como medios de mejorar el aspecto a
través de procedimientos cosméticos.54 Incluso con la repa-
Muchos cirujanos realizan remodelaciones separadas de la par- ración concomitante de una hernia, que es claramente
tes inferior y superior del cuerpo, pero son en cambio pocos los reconstructiva, la parte de paniculectomía del procedimien-
que han intentado proceder a una remodelación integral de todo to se debe obtener antes de la autorización, y no puede ase-
el cuerpo. Con un equipo quirúrgico especializado, Hurwitz y gurarse que quede cubierta por el seguro médico.
cols. realizaron esta corrección completa del torso (que requiere «La PMP alcanzada mediante la cirugía bariátrica, aunque
de 7 a 12 horas en el quirófano, de 0 a 4 unidades de transfusión mejora la salud..., deja a un paciente tratado de forma incomple-
y una estancia hospitalaria de 3 a 4 días) en un pequeño y selec- ta, al igual que sucedería en una mujer tratada de un cáncer de
to grupo de pacientes (n  8). Es sorprendente observar que las mama y en la que se dejara un defecto de mastectomía sin
únicas complicaciones que aparecieron fueron tres seromas, dos reconstruir».55 Algunos centros ofrecen «acuerdos integrales»
infecciones de la herida, producto de la necrosis grasa y cutánea, o «paquetes de oferta» combinados con seguros particulares
y una pequeña dehiscencia cutánea. Globalmente, los resultados para disminuir la carga económica sobre el paciente con PMP.
fueron excelentes; siete de los ocho pacientes se mostraron satis- En cualquier caso, todo intento de que la industria de los segu-
fechos y sólo se planificaron dos revisiones.16 ros médicos cambie su política tendrán que proceder de la
comunidad bariátrica, ya que es improbable que la posible ayu-
Cara y cuello da tenga su origen en el ámbito de la cirugía plástica.

Cuando se considera la distribución del exceso de piel en el


paciente con PMP, generalmente se piensa en el abdomen, la Z CONCLUSIÓN
mama, los muslos y los brazos. Sin embargo, en un número
considerable de pacientes hay también una pérdida de peso En resumen, los procedimientos de contorno corporal para
importante de las áreas de la cara y el cuello, lo que les deja el paciente con PMP han recorrido un largo camino, desde el
una perceptible porción de exceso de piel en la parte anterior enfoque reconstructivo tradicional, que planteaba la esci-
del cuello («deformidad en cuello de pavo») y papada. Los sión directa de las alteraciones funcionales localizadas, hasta
procedimientos tradicionales de remodelación de cara y cue- el reciente enfoque orientado al tratamiento cosmético de
llo pueden aplicarse con distintas variaciones y los resultados todas las regiones anatómicas a través de remodelaciones e
son buenos en la mayoría de los casos. En raras ocasiones, si intervenciones de contorno. A medida que más cirujanos
hay una cantidad enorme de piel, se considera la sección dedican sus esfuerzos a servir a esta creciente población de
directa por medio de una incisión anterior del cuello. Sólo una pacientes, nuevas y mejores técnicas continuarán desarro-
pequeña cantidad de la literatura publicada trata el rejuve- llándose. Cabe esperar que ese progreso haga también que
necimiento facial específicamente en la población con PMP estos procedimientos sean más rápidamente accesibles y más
más que la aplicación modificada de las técnicas tradiciona- asequibles para la mayoría de pacientes con PMP.
les de estiramiento facial de Sclafani.53

Z SEGURO Z BIBLIOGRAFÍA
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Muchos pacientes con PMP creen erróneamente que el se- Cosmetic Surgery National Data Bank Statistics. www.shap-
guro cubre las intervenciones correctoras de la pérdida de ing-futures.com. Accessed, 2004.
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mética, a pesar del impacto psicosocial que supone para el 13. Vineberg D: Mind and body: perspectives on the psychological pres-
paciente. Presutti54 recomienda que enfoquemos estas ciru- entation of massive weight loss patients. www.shaping-futures.com.
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gías como «reconstructivas», es decir, como proyectadas 14. Kenkel JM: Body contouring after massive weight loss: establishing
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como resultado de un proceso patológico como es la obesi- Surgeons Symposia Series; April 2005:Dallas.
Capítulo 38 • Contorno corporal tras una pérdida masiva o generalizada de peso 333

15. Aly AS: Body contouring after massive weight loss. American Society 35. Regnault P, Daniel R: Secondary thigh-buttock deformities after clas-
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39
Procedimientos complementarios
en la cirugía bariátrica
Thomas A. Stellato, M.D., M.B.A.

Aunque los procedimientos complementarios se realizan espo- Tres procedimientos –traqueostomía, filtros de vena cava y
rádicamente en conjunción con la cirugía bariátrica, el objetivo gastrostomía– tienen la capacidad de disminuir los riesgos
del equipo bariátrico y del paciente se centra en el esfuerzo para relacionados con la anestesia y la cirugía. A excepción de la
alcanzar una adecuada pérdida de peso.1 Sin embargo, los pro- gastrostomía, estos procedimientos son utilizados selectiva-
cedimientos complementarios están coordinados con el proce- mente; también los tres tienen la capacidad de producir com-
dimiento bariátrico. Cualquier procedimiento complementario plicaciones adicionales.
tiene la capacidad de inducir consecuencias considerables en el
paciente. Puede aumentar o disminuir la seguridad de la cirugía Traqueostomía
primaria, tratar un proceso patológico asociado, prolongar la
cirugía, aumentar o disminuir el tiempo de hospitalización e La descompensación pulmonar representa una de las causas
influir en las complicaciones asociadas a la cirugía bariátrica. más frecuentes de morbilidad postoperatoria después de
Consecuentemente, la decisión de complementar la indicación cirugía bariátrica mayor. El espectro de compromiso pul-
primaria de cirugía (p. ej., la corrección de la obesidad mórbida monar abarca desde atelectasias relativamente inocuas hasta
y sus consecuencias) con algún procedimiento adicional debe embolia pulmonar con amenaza vital. La obesidad es una
establecerse sólo después de un estudio cuidadoso por parte del enfermedad que puede comprometer directamente la fun-
cirujano y de un concienzudo diálogo con el paciente.2 ción hemodinámica y respiratoria; el paciente obeso es pro-
Este capítulo discute las numerosas cirugías asociadas penso a tener una capacidad funcional residual y un volumen
que se han realizado conjuntamente con el procedimiento de reserva espiratoria anómalos, lo que da lugar a una reduc-
bariátrico. Por comodidad, estos procedimientos comple- ción de la PaO2,3,4 así como los problemas asociados de apnea
mentarios han sido agrupados en las siguientes cuatro cate- obstructiva del sueño (AOS).5 La traqueostomía fue el pri-
gorías: mer tratamiento efectivo para la AOS6 y representa la pauta
de referencia para la AOS porque es efectivo en el 100% de
1. Procedimientos que hacen más segura la cirugía bariá- las ocasiones.7
trica. A pesar de que la traqueostomía resuelve la apnea del
2. Procedimientos para tratar otras enfermedades. sueño, su aplicación en el paciente con obesidad mórbida
3. Procedimientos para prevenir otras enfermedades. candidato a cirugía bariátrica es bastante limitado. La radi-
4. Otros procedimientos. cal mejora de la AOS con la pérdida de peso limita en gran
medida la necesidad de traqueostomía. La figura 39-1 ilustra
Estas categorías representan la inmensa mayoría de indica- la habitual mejora de la AOS en un paciente cuyo índice de
ciones referidas a técnicas quirúrgicas complementarias; las masa corporal (IMC) disminuyó de 44,6 kg/m2 a 32,8 kg/ m2
operaciones discutidas en cada categoría denotan los procedi- a los 6 meses de realizar una derivación en Y de Roux.
mientos más comunes que uno puede considerar cuando realiza Aunque una gran mayoría de pacientes con obesidad
una cirugía bariátrica. Los ejemplos son, sin embargo, incom- mórbida evitan la traqueostomía preoperatoria, existen crite-
pletos. No se ha intentado ser exhaustivo, ya que la enumeración rios establecidos a este respecto para un pequeño grupo de
de procedimientos complementarios es interminable. pacientes en los que este procedimiento puede limitar los ries-
gos operatorios de la cirugía bariátrica. Mickelson ha sugeri-
do que la traqueostomía sea recomendada sobre todo en
Z PROCEDIMIENTOS QUE HACEN MÁS SEGURA pacientes con desaturación de oxígeno grave o arritmias car-
LA CIRUGÍA BARIÁTRICA díacas asociadas con apnea del sueño grave cuando la presión
positiva continua en las vías respiratorias (CPAP) es rechaza-
Los pacientes con obesidad mórbida se presentan con múlti- da, no es eficaz o es mal tolerada.7 Sugerman y cols. coinciden
ples enfermedades asociadas que no sólo amenazan la vida y en esta recomendación y apuntan que, en sus grandes series
la longevidad del paciente, sino que aumentan su riesgo de pacientes sometidos a cirugía bariátrica, la traqueostomía
cuando se someten a anestesia general y una cirugía mayor. se realizaba sólo si el paciente no toleraba la CPAP nasal.4
334
Capítulo 39 • Procedimientos complementarios en la cirugía bariátrica 335

Tiempo
Tiempo
Hora
Hito

Posición del cuerpo preoperatoria

Posición del cuerpo postoperatoria

A
Tiempo
Tiempo

Figura 39-1 Informe polisomnográ- Hora


fico (estudio del sueño) de un paciente Hito
con obesidad mórbida en el que se com-
paran los resultados pre- y postoperato-
rios. El estudio es realizado en una
Sucesos respiratorios preoperatorios
habitación oscura, con el paciente dur-
miendo en una cama cómoda. Estos
gráficos son una parte del estudio com-
pleto. A. Comparación de la posición
del cuerpo preoperatoriamente y
6 meses tras la operación. El cuerpo
está considerablemente más inmóvil en
el estudio postoperatorio. F, prono o de
frente; L, decúbito lateral izquierdo; Sucesos respiratorios postoperatorios
B, supino o de espalda; R, decúbito late-
ral derecho. B. Sucesos respiratorios.
El trazo preoperatorio demuestra que
las apneas que ocurren son de natura-
leza obstructiva, no centrales. Después
de la pérdida de peso, no se observan
apneas obstructivas, y sólo alguna muy
escasa hipopnea. Cn.A, apnea central;
Ob.A, apnea obstructiva; Mx.A, apnea B
mixta central y obstructiva; Hyp, hipop-
nea; Uns, sin registro. C. Hipnograma.
Tiempo
MOV AWK, movimiento despierto Tiempo
(básicamente el paciente está despierto Hora
y moviéndose durante más de 30 segun- Hito
dos). En el trazado inferior se muestra
que este movimiento ha sido práctica-
mente eliminado. REM, movimientos Hipnograma preoperatorio
oculares rápidos

Hipnograma postoperatorio
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C
336 Sección VII • CONSIDERACIONES ESPECIALES

Mickelson define su recomendación de la siguiente mane- un trombo auricular izquierdo que requería anticoagula-
ra: «La apnea del sueño se considera lo suficientemente grave ción, foramen oval permeable, diabetes tipo II, hipertensión
como para considerar la traqueostomía si el índice de pertur- y AOS grave y de larga evolución. Desarrolló un aumento de
bación respiratoria está por encima de 50, la saturación de oxí- la disnea de esfuerzo y de reposo. El paciente no toleraba la
geno más baja está por debajo del 60%, o hay arritmias cardía- CPAP. Parecía que su AOS agravaba su hipertensión y con-
cas significativas (bradicardia grave, asístoles, contracciones tribuía a su arritmia auricular. Como el uso de CPAP no era
ventriculares prematuras frecuentes o taquicardia ventricular) una opción viable, el paciente se sometió a traqueostomía, y
asociadas con episodios respiratorios. La traqueostomía debe aproximadamente 4 meses después se sometió a una deriva-
ser considerada también cuando enfermedades cardíacas, pul- ción gástrica abierta en Y de Roux. Después de 6 meses, su
monares y neurológicas se exacerban o se ven afectadas por la peso había disminuido en 46 kg (v. figura 39-3) y su IMC
gravedad de la apnea (p. ej., si un paciente con enfermedad había mejorado de casi 52 kg/m 2 preoperatoriamente a
arterial coronaria desarrolla una angina nocturna, un paciente 36,8 kg/m2. La AOS se había resuelto, por lo que la traqueos-
con un trastorno convulsivo desarrolla convulsiones noctur- tomía fue retirada. La pérdida de peso del paciente continuó
nas, o un paciente con enfisema empeora su hipoxemia)». durante los 6 meses siguientes.
Puede parecer que estos ejemplos describen a pacientes Aunque una traqueostomía puede mejorar considera-
que serían unos candidatos discutibles para un procedimien- blemente la salud y los riesgos anestésicos en pacientes con
to bariátrico mayor. Tal es exactamente la situación en la que obesidad mórbida y AOS grave, también conlleva nuevos
una traqueostomía es apropiada. Si sucede una considerable riesgos, como cualquier procedimiento complementario. En
mejora en la AOS y en sus consecuencias, la traqueostomía el paciente que se somete a una cirugía bariátrica es de espe-
puede mejorar la probabilidad de tolerar el procedimiento cial importancia prestar atención a los problemas postopera-
bariátrico. La figura 39-2 representa mi experiencia perso- torios habituales, como las infecciones o el sangrado. La
nal en una situación similar. Este paciente presentaba una muerte atribuida a la traqueostomía se ha observado como
obesidad mórbida grave con un IMC de 51,9 kg/m2. Dentro resultado de un tapón mucoso que produce una obstrucción
de sus patologías asociadas se incluían fibrilación auricular y respiratoria letal.4

Figura 39-2 Aspecto preoperatorio de un paciente con traqueosto-


mía. El paciente tenía un IMC de cerca de 52 kg/m 2 y numerosos pro-
blemas concomitantes, que incluían una apnea obstructiva del sueño Figura 39-3 Después de una derivación gástrica en Y de Roux abier-
grave. El paciente no toleraba la presión positiva continua en las vías ta que dio lugar a la pérdida de más de 45 kg, la apnea obstructiva del
respiratorias. sueño remitió y la traqueostomía fue retirada.
Capítulo 39 • Procedimientos complementarios en la cirugía bariátrica 337

Para los pacientes que toleran la CPAP y mejoran la ción, para la profilaxis de la tromboembolia venosa. Estas
AOS, la CPAP es el tratamiento de elección, aunque debe incluyen:
iniciarse antes de la cirugía. En el postoperatorio inicial, la
valoración del efecto exacto de la CPAP puede resultar difí- • Medias de compresión neumática intermitente.
cil o imposible. Cuestionarse el uso de la CPAP en el posto- • Heparina de bajo peso molecular.
peratorio inmediato está injustificado; se ha demostrado que • Antiagregantes plaquetarios.
es seguro y eficaz en este período sin aumentar el riesgo de • Dextrano.
fístula anastomótica.8 • Ambulación precoz.
• Medias elásticas.
Filtros de vena cava • Elevación de las piernas.
• Filtro de vena cava inferior.
A pesar de saber que la embolización pulmonar es una de las • Anticoagulantes orales.
causas más frecuentes de morbilidad grave y mortalidad tras
la cirugía bariátrica, un estudio por parte de los miembros De todas estas formas de profilaxis, sólo los filtros de
de la American Society for Bariatric Surgery no observó un vena cava inferior tratan primariamente los émbolos pulmo-
gran consenso en lo que se refiere al tipo de profilaxis de la nares. Los filtros de vena cava son ineficaces en prevenir o
tromboembolia venosa.9 Aunque la inmensa mayoría de limitar la formación de trombos; actúan interrumpiendo el
cirujanos (86%) reconocen que los pacientes que se someten camino de un trombo ya formado en su viaje desde las extre-
a cirugía bariátrica tienen un alto riesgo de desarrollar midades inferiores o la pelvis a los pulmones.
trombosis venosas y embolia pulmonar (v. figura 39-4), e Debido a su ineficacia sobre la producción de trombos,
incluso un porcentaje mayor (95%) emplea profilaxis de ruti- así como a su naturaleza invasiva y coste, los filtros de vena
na en esta población de alto riesgo, sólo el 50% de los que cava se emplean sólo en subgrupos muy selectos de la pobla-
participaron en el estudio usan heparina en dosis bajas como ción que se somete a la cirugía bariátrica. Sugerman y cols.
primera elección para la profilaxis de la tromboembolia. han especificado algunas recomendaciones para la colocación
Cerca de la mitad de los cirujanos (48%) que respondieron al profiláctica de filtros de vena cava previamente a la cirugía
ensayo tenían experiencia de al menos una muerte debida a bariátrica.4,10 Estos investigadores sugieren que los grupos
una embolia pulmonar. específicos de alto riesgo que se pueden beneficiar de la colo-
Además de las dosis bajas de heparina, otras modali- cación de filtros de vena cava preoperatoriamente incluyen
dades se han utilizado, de manera aislada o en combina- pacientes con un síndrome por estasis venosa grave, con
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Figura 39-4 Una tomografía computarizada helicoidal muestra una embolización pulmonar masiva bilateral (flechas), que ocurrió en una pacien-
te joven con obesidad mórbida a los 9 días de la operación, a pesar de la administración perioperatoria de dosis bajas de heparina, de las medias de
compresión neumática intermitente y de la movilización precoz. Para su supervivencia fue necesario realizar una embolectomía pulmonar.
338 Sección VII • CONSIDERACIONES ESPECIALES

hipertensión pulmonar severa (presión arterial pulmonar ción gástrica en Y de Roux. Al contrario que en otros proce-
mayor o igual a 40 mm Hg), y pacientes con síndrome de dimientos bariátricos, esta derivación tiene la capacidad de
hipoventilación por obesidad (PaO2 menor o igual a 55 mm Hg producir una obstrucción por un bucle cerrado aferente
o PaCO2 mayor o igual a 65 mm Hg). En un estudio retros- (biliopancreático), que puede ocurrir cuando se desarrolla
pectivo, encontraron que los pacientes con un síndrome por una obstrucción secundaria a adherencias o a una hernia
estasis venosa grave (los ejemplos incluían úlceras por estasis interna en cualquier lugar a lo largo de la rama biliopancreá-
venosas o pretibiales refractarias, celulitis de las extremidades tica hasta llegar a incluir la enteroenterostomía.
inferiores recurrentes secundarias a la enfermedad venosa, y Aunque una gastrostomía concomitante realizada en el
edema pretibial con pigmentación por extravasación de célu- tiempo de la derivación gástrica evita en ocasiones compli-
las rojas sanguíneas) tenían una incidencia del 4% de embolia caciones postoperatorias graves y potencialmente amenaza-
pulmonar mortal tras una derivación gástrica comparada con doras para la vida, sus beneficios son patentes en un porcen-
un 0,2% para los pacientes sin un síndrome por estasis venosa taje de pacientes relativamente pequeño. En un análisis
grave.10 Los autores apuntan que los pacientes con hiperten- retrospectivo de 1120 derivaciones gástricas con formación
sión pulmonar primaria y síndrome de Pickwick tienen una de microbolsa sin gastrostomía, 33 pacientes (2,9%) desarro-
mayor probabilidad de mortalidad tras una embolia pulmo- llaron una complicación postoperatoria con amenaza vital
nar. Además de estas indicaciones, que reflejan la morbilidad que requirió reoperación u hospitalización prolongada.16 El
asociada al paciente que se somete a una cirugía bariátrica, análisis de este subgrupo identificó 19 pacientes (1,6% de la
otras indicaciones potenciales de la colocación profiláctica de cohorte total) en los que la gastrostomía podría haber modi-
filtros de vena cava incluyen la trombosis venosa profunda ficado de manera significativa el resultado de la complica-
recurrente o previa11 y la embolia pulmonar previa. ción. La gastrostomía pudo evitar la reoperación urgente en
Los filtros de vena cava se pueden colocar intraoperato- sólo cuatro pacientes. Basándose en estos datos, los autores
riamente bajo control radioscópico;12 una alternativa a la recomendaron la gastrostomía sólo en pacientes selecciona-
radioscopia en pacientes muy obesos para la colocación del dos y expresaron la opinión de que la gastrostomía rutinaria
filtro es el control ecográfico.13 Aunque la colocación profi- no podía ser recomendada.
láctica de filtros de vena cava tiene por objeto evitar la grave Según mi propia experiencia, creo que la gastrostomía
y potencialmente mortal embolia pulmonar, los filtros con- es extremadamente útil en pacientes que se someten a una
llevan sus propios riesgos, incluyendo la trombosis de la cava transformación de una derivación yeyunoileal en una deri-
y sus consecuencias.14 vación en Y de Roux. La diferencia en el tamaño de la luz
intestinal de la enteroenterostomía y el retraso de función
Gastrostomía del intestino delgado ponen a la extremidad biliopancreática
y al estómago puenteado por la derivación en un riesgo
Las gastrostomías se realizan ante un gran número de situa- aumentado de obstrucción tanto mecánica como funcional.
ciones. Las dos razones más comunes para realizar una gas- Otras indicaciones para realización de una gastrostomía
trostomía son como un medio de nutrición enteral y para incluyen, siempre según mi experiencia, la cirugía electiva
producir una descompresión gástrica.15 Aunque ninguna de revisión de la derivación gástrica y las reintervenciones
cirugía bariátrica incluye la gastrostomía como un elemento por complicaciones anastomóticas (v. figura 39-5).
habitual del procedimiento, las gastrostomías, cuando se En contra de la realización selectiva de una gastrostomía,
realizan en el ámbito bariátrico, suelen acompañar la deriva- una minoría de cirujanos abogan por la realización de una gas-

Figura 39-5 Tratamiento quirúrgico de la anasto-


mosis gastroyeyunal utilizando una gastrostomía (fle-
cha cerrada), endoprótesis transanastomótica (flecha
abierta), y catéter de drenaje. La gastrostomía proporcio-
na el mantenimiento de la nutrición por la ruta enteral, y
así evita la nutrición parenteral total. La endoprótesis
transanastomótica elimina la necesidad de instauración
prolongada de una sonda nasogástrica.
Capítulo 39 • Procedimientos complementarios en la cirugía bariátrica 339

trostomía de rutina. Dentro de los que tienen una experiencia última fuera necesaria. De este modo, el manejo de la piel
más amplia en este ámbito cabe citar a Fobi y cols.17 Ellos redundante y la reparación de la hernia abdominal se pueden
apuntan que la gastrostomía permite la evaluación mecánica, llevar a cabo con una sola anestesia en un paciente que presen-
radiológica y endoscópica y la manipulación del estómago ta una preparación óptima, porque la mayoría de los procesos
puenteado. Para mantener estas ventajas una vez que el tubo de patológicos concomitantes han sido eliminados o mejorados
gastrostomía sea retirado, Fobi coloca un marcador radioopa- con la pérdida de peso conseguida. Se dispone de escasa
co alrededor del lugar de la gastrostomía de tal modo que pue- bibliografía sobre la realización concomitante de la paniculec-
da ser identificado mediante imágenes radiológicas y de este tomía en el mismo tiempo de la cirugía bariátrica. Fobi y cols.
modo se pueda acceder a la misma percutáneamente. sugieren que un grupo seleccionado de pacientes se podrían
Schreiber y cols. toman una opción intermedia.18 Más beneficiar de la paniculectomía simultánea a la derivación
que colocar un tubo de gastrostomía en el momento de reali- gástrica.22 Estos cirujanos han formulado la siguiente clasifi-
zación de la derivación gástrica, estos cirujanos bariátricos cación para ayudar a determinar la gravedad del panículo:
colocan una sutura circular de alambre en el estómago puen-
teado y sujetan el área al peritoneo de la pared abdominal • Grado 1. El panículo cubre la línea del vello púbico,
anterior. Si postoperatoriamente fuera necesaria una descom- pero no todo el monte de Venus.
presión gástrica, esta área podría ser identificada y accederse • Grado 2. El panículo cubre la totalidad del monte de
a ella de la forma que ha sido descrita con anterioridad. Venus.
Como apuntábamos previamente, las indicaciones más • Grado 3. El panículo cubre la parte alta del muslo.
comunes de la gastrostomía son la descompresión y la ali- • Grado 4. El panículo se extiende hasta la mitad del
mentación. Sin embargo, además del estómago puenteado, el muslo.
colédoco también es relativamente inaccesible para una eva- • Grado 5. El panículo llega a la rodilla o más allá.
luación directa o manipulación tras una derivación en Y de
Roux. Esto ha generado una serie de retos, tanto para el Ellos sugieren que la paniculectomía se debería ofrecer
cirujano como para el gastroenterólogo, cuando la enferme- a los pacientes con grados 2 a 5 de panículo. La retirada
dad biliar, especialmente la coledocolitiasis, se desarrolla simultánea del panículo añade de 1,5 a 2,5 horas al tiempo de
después de una derivación gástrica.19 Una aproximación a cirugía de la derivación gástrica, por esto Fobi y cols. reser-
este dilema ha sido la creación de una gastrostomía postope- vaban esta indicación para pacientes sin enfermedad cardio-
ratoria como un medio de acceso para la realización de la pulmonar subyacente. Ellos sugieren que la paniculectomía
colangiopancreatografía retrógrada endoscópica.20 realizada al mismo tiempo de la cirugía de derivación puede
ser beneficiosa física, social y emocionalmente, así como ren-
table desde el punto de vista económico en pacientes con
Z PROCEDIMIENTOS PARA TRATAR OTRAS panículo sintomático. Se ha planteado la hipótesis de que la
ENFERMEDADES pared del panículo abdominal podría en realidad contribuir
a la formación de hernias incisionales, debido a la tracción
La obesidad mórbida favorece la aparición de una amplia lateral sobre la incisión abdominal.23 Si esta teoría es correcta,
diversidad de enfermedades y trastornos clínicos que se tratan la recomendación de tratar el panículo en el momento de la
en general mediante intervención quirúrgica. La mayoría de derivación gástrica podría tener validez añadida.
estos pacientes presentan un panículo abdominal. Las hernias
umbilicales, inguinales e incisionales son comunes, y la enfer- Reparación de las hernias
medad por reflujo gastroesofágico (ERGE) sintomático es
referida con frecuencia por los pacientes en la evaluación ini- En los pacientes obesos las hernias se presentan sobre todo en
cial. La decisión de tratar este y otros problemas que se pre- la zona umbilical, la inguinal y sobre las incisiones de la pared
senten en el momento del procedimiento bariátrico debe abdominal. La reparación de las hernias se puede realizar con
tomarse con un conocimiento cuidadoso de las consecuencias anterioridad al al procedimiento bariátrico, al mismo tiempo
de la operación adicional y los cambios que se producirán del mismo o postoperatoriamente, cuando los beneficios de la
postoperatoriamente tras una pérdida de peso sustancial. pérdida de peso ya se hayan puesto de manifiesto. Las ventajas
de tomar esta última opción incluyen una reparación más fácil,
Paniculectomía una menor probabilidad de recurrencia, y un menor riesgo de
infección de la malla si esta se tuviese que utilizar. Cuando los
El exceso de piel, especialmente en la región abdominal baja, pacientes con obesidad mórbida acuden con síntomas impor-
frecuentemente va asociado a la obesidad mórbida y puede tantes atribuidos a la hernia o a una incarceración, la repara-
aumentar significativamente tras una reducción masiva de ción de la hernia es adecuada, incluyendo el retraso de la ciru-
peso satisfactoria. La evidente ventaja que supone el retraso gía bariátrica hasta que se haya logrado la recuperación
de la paniculectomía hasta que la pérdida de peso haya ter- (movilidad, cicatrización adecuada de las heridas, etc.).
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minado es la probabilidad de obtener una extracción de Muchos pacientes obesos tienen hernias umbilicales asin-
panículo más completa, con un mejor resultado estético y tomáticas. Con cierta frecuencia, estas se pueden identificar en
mayor satisfacción del paciente. el momento de la derivación gástrica abierta al detectar epi-
Cuando se comparó la abdominoplastia en tres grupos plón adherido a un defecto de una hernia umbilical. Yo no
de pacientes (obesos, límites [borderline] y no obesos), el 80% de trato de reparar estos defectos en el momento de la derivación
los pacientes obesos tuvieron complicaciones, en contraste gástrica; la incisión por la línea media de la derivación gástrica
con el 33% de los pacientes borderline y no obesos.21 Según se mantiene lo menos posible (v. figura 39-6), y se retrasa la
mi propia experiencia, los procedimientos de cirugía plástica reparación hasta que la pérdida de peso sea máxima.24 Con este
han de posponerse hasta que la reducción de peso se haya protocolo no se han observado complicaciones.
completado. En ese momento, la cirugía plástica se coordina El retraso de la reparación de las hernias ventrales no
con la reparación de la hernia de la pared abdominal, si esta está recomendado de forma generalizada. Los cirujanos
340 Sección VII • CONSIDERACIONES ESPECIALES

cirugía que involucra anastomosis de intestino debe tomar en


consideración los riesgos y beneficios de esta actuación.

Cirugía de la enfermedad por reflujo gastroesofágico


La ERGE es una patología comórbida frecuente dentro de la
morbilidad del paciente obeso. Actualmente se dispone de sig-
nificativos avances en su tratamiento, tanto médico (inhibido-
res de la bomba de protones, antihistamínicos de tipo 2) como
quirúrgico (procedimientos laparoscópicos antirreflujo). No
obstante el fracaso en el tratamiento de la obesidad mórbida
subyacente limita el éxito de estas medidas. La derivación gás-
trica en Y de Roux proporciona la corrección tanto de la obe-
sidad como del reflujo. Este es probablemente el tratamiento
más adecuado para la ERGE asociada a obesidad mórbida en
pacientes apropiados.26-28 Se ha demostrado que la bolsa gás-
trica contiene una insignificante cantidad de ácido gástrico y
que la larga extremidad de Roux evita el reflujo biliar. Este
efecto positivo no se suele obtener con la gastroplastia vertical
con banda.29-31 Por consiguiente, un procedimiento antirre-
flujo en unión a la derivación gástrica puede considerarse
innecesario y técnicamente complejo. El hiato esofágico
agrandado, sin embargo, suscita preocupación en algunos
cirujanos bariátricos. El doctor Henry Buchwald, de la
Universidad de Minnesota, señala que él reaproxima las cru-
ras diafragmáticas en el momento en el que realiza la cirugía
bariátrica abierta cuando una hernia de hiato está presente
(comunicación personal). Otros cirujanos han realizado la
reparación laparoscópica de la hernia de hiato en el momento
de colocación de la banda gástrica ajustable de silicona.32
Hay escasa bibliografía disponible sobre el manejo de
las hernias paraesofágicas conjuntamente con los procedi-
mientos bariátricos. Este defecto anatómico podría conferir
un riesgo mucho mayor que el simple agrandamiento del
hiato esofágico; su reparación en unión de cualquier proce-
Figura 39-6 Incisión en la línea media en un postoperatorio inicial (las dimiento bariátrico que se esté realizando parece ser pru-
grapas todavía no se han retirado) tras una derivación gástrica abierta en dente. No se ha analizado con claridad la necesidad de abor-
Y de Roux. La incisión es algo mayor que el puño del cirujano, que se
muestra para comparación. No se ha tratado de aumentar la incisión hasta dar un procedimiento coadyuvante antirreflujo para la
el ombligo, tampoco en el caso de que una hernia umbilical fuera identifi- ERGE en asociación con otros procedimientos que no sean
cada. Se observa una incisión subcostal derecha antigua por una colecis- la derivación gástrica en Y de Roux, como la derivación
tectomía previa. Compárense los tamaños de las respectivas incisiones. biliopancreática o el procedimiento de cruce duodenal.

Otros
bariátricos de la Universidad de Pittsburgh apuntaron que
más de un tercio (37%) de los pacientes la reparación de cuyas El potencial para encontrar otras numerosas patologías en el
hernias había sido aplazada tras cirugía de la derivación gás- momento de realización del procedimiento bariátrico es
trica laparoscópica desarrollaron una incarceración.25 En un enorme; puede tratarse de afecciones neoplásicas (tumores
corto período de seguimiento, no encontraron secuelas benignos y malignos), inflamatorias o congénitas. Cada una
adversas cuando las hernias ventrales se reparaban usando necesita una evaluación individual de los riesgos y beneficios
una malla reabsorbible de submucosa de intestino delgado en de tratar la patología en coordinación con el procedimiento
el momento de la laparoscopia de la derivación gástrica. bariátrico, o con independencia del mismo. Si la pérdida de
Para los pacientes con obesidad mórbida no hay unas peso, los síntomas postoperatorios y la nueva anatomía crea-
recomendaciones estrictas en lo que se refiere a la reparación da pueden interferir con la evaluación subsiguiente y con el
de hernias. Es prudente considerar la reparación cuando manejo de los problemas no bariátricos asociados (p. ej.,
existen síntomas. La incarceración del epiplón, especialmen- el seguimiento de un proceso maligno o el manejo de una
te en el ombligo, puede ser asintomática y es improbable un enfermedad intestinal inflamatoria), es conveniente asegu-
resultado grave de la misma. La incarceración del intestino rar el retraso o descartar el procedimiento bariátrico. Esto
obliga a una corrección urgente, y su tratamiento tiene prio- puede resultar especialmente importante cuando se encuen-
ridad sobre la cirugía bariátrica. tra un proceso maligno intraabdominal inesperado en el
Cuando las hernias incisionales se presentan en la línea momento de la cirugía bariátrica.
media alta, se verán necesariamente durante la cirugía abierta Un paciente de nuestro programa bariátrico tenía un
si se utiliza la línea media. Aunque la tasa de recurrencia tras nódulo de 1 cm en la parte alta del cuerpo del estómago en
la reparación primaria es alta, la inmensa mayoría permane- el momento de la derivación gástrica en Y de Roux. Se rea-
cen intactas, sin el riesgo relacionado con la malla.25 El uso de lizó una biopsia escisional, y la sección por congelación indi-
una malla sintética para la reparación de la hernia durante la caba que probablemente se tratase de un tumor de células
Capítulo 39 • Procedimientos complementarios en la cirugía bariátrica 341

estromales. Todos los hallazgos patológicos fueron favora- la derivación gástrica en Y de Roux. Si el examen ecográfico
bles (tamaño, márgenes libres, falta de mitosis). detecta una patología, extirpamos la vesícula biliar en el
Después de comentar la situación con la esposa del pacien- momento de la derivación, bien con técnica abierta bien con
te, se decidió continuar con el procedimiento bariátrico, lo que laparoscopia. En el caso de que el examen ecográfico sea
se realizó sin dificultades. El paciente tuvo una recuperación normal, no hacemos ningún intento de evaluar la vesícula
sin incidencias de interés. Parece que el juicio quirúrgico ini- biliar intraoperatoriamente.
cial debe siempre prevalecer sobre el deseo de realizar la ciru- La administración profiláctica preoperatoria de usor-
gía bariátrica. Cuando se encuentra una neoplasia en un estado diol se ha demostrado eficaz en disminuir la incidencia de la
inicial o de bajo riesgo, su tratamiento en unión de la cirugía formación de piedras biliares tras una derivación gástrica.39
de reducción de peso parece razonable. Cada situación, sin Cuando se comienza a tomar 10 días después de la cirugía y
embargo, debe ser abordada individualmente. se continúa durante 6 meses, usordiol (600 mg/día) reduce la
formación de piedras biliares al 2%, porcentaje que asciende
al 32% en pacientes que toman placebo.
Z PROCEDIMIENTOS PARA PREVENIR Nuestro programa informa a los pacientes sobre el riesgo
OTRAS ENFERMEDADES de formación de cálculos biliares y la disponibilidad y poten-
ciales beneficios del usordiol; los pacientes entonces deciden si
Colecistectomía desean participar en un programa de tratamiento con usordiol.
En nuestra región (noreste de Ohio), un tratamiento de 6 meses
Los pacientes que se someten a un procedimiento bariátrico de duración con esta medicación cuesta unos 600 dólares.
presentan el riesgo de desarrollar enfermedad del tracto biliar Otros programas bariátricos prescriben rutinariamente usor-
debido a dos causas relacionadas. En primer lugar, los pacien- diol tras la derivación gástrica.40 En general nosotros nos mos-
tes obesos tienen una mayor probabilidad de desarrollar tramos reacios a actuar de este modo, debido a la dificultad que
cálculos biliares que los no obesos. Con una cantidad de áci- tienen algunos pacientes con la medicación postoperatoria y a
dos biliares normal pero unas cantidades muy aumentadas de los efectos secundarios y el coste de usordiol.
colesterol biliar (lo que puede suceder tras una cirugía bariá-
trica), los pacientes obesos presentan una bilis supersaturada
de colesterol que predispone a los cálculos biliares de coleste- Z OTROS PROCEDIMIENTOS
rol.32 De este modo, los pacientes con obesidad mórbida tie-
nen una probabilidad mucho mayor de presentar cálculos Biopsia hepática
biliares o de haberse ya sometido a una colecistectomía en el
momento del procedimiento bariátrico que los pacientes no La lista de procedimientos secundarios que se realizan junto
obesos que se someten a cualquier otro procedimiento qui- con la derivación gástrica es extensa. Estos procedimientos
rúrgico. La segunda causa de enfermedad del tracto biliar en oscilan desde los que son familiares para la mayoría de los
pacientes obesos es la correlación entre pérdida de peso y de- cirujanos, como la apendicectomía o la extirpación del di-
sarrollo de cálculos biliares.33 Consecuentemente, los pacien- vertículo de Meckel, hasta operaciones complejas, como la
tes con obesidad mórbida tienen una probabilidad también combinación de derivación gástrica con derivación ileal par-
mayor de desarrollar cálculos biliares postoperatoriamente cial para tratar la hipercolesterolemia.41
que otros individuos que se han sometido a una cirugía que no Uno de los procedimientos más frecuentemente realiza-
conlleve pérdida de peso.34 dos, que queda excluido de las categorías de procedimientos
En los pacientes que se someten a una derivación gástri- que hacen más segura la invervención bariátrica, o que sirven
ca, la probabilidad de haberse sometido previamente a una para tratar o prevenir otras enfermedades, es la biopsia hepá-
colecistectomía es del orden del 20%. El conjunto de datos tica. Se ha sugerido que, durante la cirugía bariátrica, una
(sobre 8097 pacientes) del International Bariatric Surgery biopsia de hígado puede ser útil para detectar la presencia de
Registry desvelaron que al 19% de los casos se les habían esteatohepatitis y fibrosis.42 La obesidad es una de las causas
extirpado las vesículas antes del tratamiento quirúrgico de la más comunes de esteatohepatitis no alcohólica (EHNA).
obesidad.1 Estudios individuales han sugerido un porcentaje Cuando se evaluó con biopsia hepática a un grupo consecutivo
ligeramente superior de colecistectomía previa, que oscilan de pacientes con obesidad mórbida que se sometieron a una
entre el 19,4% y el 26%.35-38 En consecuencia, entre el el 74% derivación gástrica, el 90% tenían una histología hepática anó-
y el 81% de los pacientes con obesidad mórbida tienen una mala, y el 56% cumplían los requisitos para ser diagnosticados
vesícula biliar expuesta a riesgo antes de la cirugía bariátrica. de EHNA.43 En el mismo estudio, en un 2% se encontró
Las opiniones de los cirujanos en relación con el manejo de cirrosis no sospechada. Otros han encontrado hasta un 91% de
la vesícula biliar en estos pacientes son diversas. Un estudio pacientes con obesidad mórbida con biopsias hepáticas consis-
de los que contribuyeron activamente al International Bariatric tentes con el diagnóstico de EHNA.44 Debido a que el diag-
Surgery Registry indica que el 30% de los cirujanos que reali- nóstico de EHNA sólo puede establecerse histológicamente,
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zan la derivación gástrica en Y de Roux estándar extirpan las ya que la patología hepática que se observa en esta entidad
vesículas biliares de apariencia normal.1 Este mismo estudio, puede progresa a una cirrosis criptogénica,45 la consideración
sin embargo, sugiere que hay mayor consenso cuando se rea- de la biopsia hepática parece una opción razonable.
lizan procedimientos malabsortivos, como la derivación
biliopancreática; en esta situación parece ser general la acep-
tación de la colecistectomía concomitante. Z CONCLUSIÓN
En nuestro programa, examinamos preoperatoriamente
a todos los pacientes que no se han sometido con anteriori- Como se apuntaba en la introducción, no hemos intentado
dad a una colecistectomía mediante ecografía percutánea, y ser exhaustivos en la presentación de los procedimientos
usamos esta prueba como único indicador para la extirpa- complementarios. Mejor dicho, hemos tratado de ofrecer al
ción de la vesícula biliar en el momento de la realización de cirujano bariátrico información puntual que puede justificar
342 Sección VII • CONSIDERACIONES ESPECIALES

el tiempo adicional, el esfuerzo y los posibles riesgos intrín- 23. Byrne TK: Complications of surgery for obesity. Surg Clin North Am
secos a la adición de algún procedimiento o intervención en 2001;81:1181-1193.
24. Stellato TA, Hallowell PT, Crouse C, et al: Two-day length of stay
el momento de realización de la cirugía bariátrica. Siempre following open Roux-en-Y gastric bypass: is it feasible, safe and
que sea posible, esta decisión se debe discutir con el pacien- reasonable? Obes Surg 2004;14:27-34.
te, con el fin de obtener un consentimiento informado váli- 25. Eid GM, Mattar SG, Hamad G, et al: Repair of ventral hernias in
do. La decisión de realizar procedimientos profilácticos de morbidly obese patients undergoing laparoscopic gastric bypass
should not be deferred. Surg Endosc 2004;18:207-210.
beneficio poco significativo debe descartarse. Esta adver- 26. Frezza EE, Ikramuddin S, Gourash W, et al: Symptomatic improve-
tencia, sin embargo, obliga a evaluación individual de cada ment in gastroesophageal reflux disease (GERD) following laparo-
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40
Seguimiento a largo plazo y valoración
de resultados en cirugía bariátrica
Horacio E. Oria, M.D., F.A.C.S.

La valoración de los resultados del tratamiento quirúrgico de Fue un cirujano del Massachusetts General Hospital de
la obesidad mórbida es complicada, entre otros factores, por la Boston, el Dr. Ernest Codman, quien promovió la moderna
escasez de datos de series largas con vigilancia adecuada a lar- investigación de resultados a principios de la década de 1900.2
go plazo, el alto porcentaje de pacientes que se pierden duran- Codman propuso que el trabajo de los cirujanos fuera evaluado
te el seguimiento, la falta de estándares para comparación de en función de la evolución de sus pacientes tras abandonar el
resultados, los informes estadísticos inadecuados y la necesi- hospital. Esto debía hacerse usando una tarjeta con síntomas,
dad urgente de definiciones claras de éxito y fracaso. diagnóstico inicial, tratamiento, complicaciones durante la
El presente capítulo revisa, en primer lugar, los métodos estancia hospitalaria, diagnóstico al alta, y el resultado para cada
para valorar la calidad de la asistencia y los tipos de medicio- año posterior al alta y para cada paciente tratado. Codman sugi-
nes de resultados y fuentes de datos que pueden usarse. A con- rió que, para mejorar los procesos asistenciales, se anotaran e
tinuación se discute el seguimiento de los pacientes quirúrgi- investigaran todos los problemas y sus resultados. También
cos bariátricos y la evaluación de resultados, que debe incluir desarrolló un sistema gráfico que usaba el coste y estado funcio-
los parámetros de pérdida de peso, el análisis de la mejora de nal del paciente como variables clave para medir el trabajo de los
las patologías comórbidas y los cambios en la calidad de vida cirujanos, y recomendó que los hospitales designaran comités de
tras el tratamiento. Las dos secciones siguientes tratan de la eficacia o rendimiento encargados de analizar los resultados
necesidad de comparar los resultados entre diferentes opera- antes de asignar fondos para nuevos edificios y equipos. Por
ciones y subgrupos de pacientes y la presentación de datos, desgracia, sus originales ideas no se llevaron a cabo, posiblemen-
según los resultados clínicos, de calidad de vida y económicos. te porque era dogmático y tenía una personalidad difícil, lo que
La última parte revisa la experiencia internacional en el uso le originó conflictos con las autoridades hospitalarias. No obs-
del Bariatric Analysis and Reporting Outcome System (BAROS) tante, sus conceptos no fueron olvidados por completo.
(Sistema de análisis e informe de resultados bariátricos), un Otra figura destacada en investigación de resultados, el
método único y sencillo de clasificación de los grupos de Dr. John Wennberg, de la Darmouth Medical School, introdu-
resultados y de definición del éxito o fracaso basado en una jo a principios de los años setenta una técnica sencilla: el
clave de puntuación que tiene en cuenta la pérdida de peso, los análisis de áreas pequeñas. Este método mide las variaciones
cambios en las patologías comórbidas y en la calidad de vida, en las tasas de uso quirúrgico en comunidades vecinas y
las complicaciones y las reoperaciones. compara los resultados dentro de áreas geográficas simila-
res. La investigación de Wennberg en las pasadas décadas
mostró unas sorprendentes diferencias en el uso de opera-
Z VALORACIÓN DE LA CALIDAD ciones quirúrgicas comunes en áreas que tienen poblaciones
DE LA ASISTENCIA de pacientes comparables. Se constató una importante caída
en su uso después de que presentara sus resultados a las
El patrón de asistencia clínica basado en resultados más sociedades médicas y publicara sus observaciones introdujo
antiguo de la historia se remonta a hace casi 4000 años. Se otro concepto esencial: la importancia de proporcionar
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redactó en Babilonia durante el reinado de Hammurabi: «Si información a los pacientes antes de cualquier intervención
un médico hiciera una herida grave con el cuchillo de bron- y permitirles participar activamente en las decisiones rela-
ce de operar y le matara (al paciente) o abriera un bulto con cionadas con su asistencia médica. En 1989 fundó la
un cuchillo de bronce y destruyera su ojo, las manos (del Foundation for Informed Medical Decision Making, que desa-
cirujano) serán cortadas».1 Quizás hoy, los cirujanos debe- rrolla vídeos interactivos para ayudar a los pacientes a enten-
ríamos reflexionar sobre esta radical forma de castigo cuan- der los riesgos y beneficios de varios tratamientos.
do nos enfrentamos a situaciones de responsabilidad, al La Rand Corporation (Santa Mónica, California) utilizó
público, a las aseguradoras, a las compañías de gestión sani- técnicas similares desde comienzos de los años ochenta para
taria, a los estamentos oficiales y a las organizaciones priva- analizar la idoneidad del tratamiento de gran número de
das, pidiendo en conjunto responsabilidad por parte del per- pacientes de Medicare. El Dr. Robert Brook, profesor de la
sonal médico. UCLA School of Medicine, dirigió las investigaciones. Los
345
346 Sección VIII • RESULTADOS

equipos de Rand realizan revisiones de la bibliografía, ana- sobre metaanálisis ni modelos estadísticos. Eddy, una persona
lizan los registros de los pacientes y consultan a los expertos influyente en la toma de decisiones del Clinical Efficacy Assesment
para valorar la calidad de la asistencia. El estudio de resulta- Project, cree firmemente que los costes deberían tratarse mien-
dos médicos (Medical Outcomes Study) es uno de los mayores tras se desarrolle una política práctica.
esfuerzos de la compañía. El estudio de resultados médicos El National Academy of Science’s Institute of Medicine enu-
Short Form Survey (SF-36),3 el instrumento genérico más mera algunas condiciones que deberían caracterizar una
ampliamente usado para medir la calidad de vida relacionada posible línea de acción: validez basada en la fuerza de las
con la salud, fue desarrollado por el investigador John Ware pruebas y de los resultados estimados, fiabilidad y reprodu-
mientras trabajaba para Rand durante los años ochenta. cibilidad, aplicabilidad clínica, flexibilidad y claridad. Tras
En 1988 el Dr. Paul Ellwood, que también acuñó el térmi- implantar esa línea de acción se necesita usar los criterios de
no organización de mantenimiento de la salud, introdujo el con- revisión para la evaluación. El Institute of Medicine también
cepto de gestión de resultados.4 «La medida de los resultados define los atributos para estos criterios: sensibilidad, especi-
hará uso de cuatro tecnologías que ya están madurando con ficidad, respuesta del paciente, legibilidad, mínima intromi-
rapidez». Así, Ellwood previó que «en primer lugar, se asigna- sión, viabilidad y compatibilidad informática.
rá más confianza a los estándares y directrices que los médicos Además de las dificultades a la hora de desarrollar directri-
pueden usar a la hora de seleccionar intervenciones adecuadas. ces adecuadas y útiles, otro dilema con el que se enfrentan los
Segundo, medirá rutinaria y sistemáticamente el funciona- investigadores de resultados es cómo diseminar y facilitar la
miento y el bienestar de los pacientes, junto con los resultados implementación de los parámetros por parte de los médicos.
clínicos específicos por enfermedad, en intervalos de tiempo Algunos expertos, como Wennberg, creen que los médicos
apropiados. Tercero, reunirá los datos clínicos y de resultado en pueden cambiar los patrones de la práctica si son conscientes de
una escala de ingentes dimensiones. Y, cuarto, analizará y los datos comparativos de rendimiento. Otros piensan que son
difundirá los resultados, desde el segmento de la base de datos necesarias mayores presiones de otros médicos y de las institu-
más adecuada hasta el área de interés específica de cada respon- ciones, ayudadas por las organizaciones médicas y entidades de
sable de la toma de decisiones. Esto permitirá que todo el siste- revisión externas, incluido el gobierno, para conducir a los pro-
ma de gestión de resultados se modifique de forma continuada fesionales a adoptar las directrices y mejorar el rendimiento.
y mejore con los avances que tengan lugar en el ámbito de la Para complicar aún más estos asuntos, en la pasada década
ciencia médica, los cambios en las expectativas de la gente y las varios estados, encabezados por Nueva York, empezaron a dar
evoluciones en la disponibilidad de recursos». Algunos de estos a conocer al gran público datos de cirujanos individuales y hos-
conceptos se basan en la teoría de la gestión industrial, de la que pitales sobre volúmenes quirúrgicos y resultados.
fueron pioneros W. Edwards Deming y otros. Como resultado, el Leapfrog Group, un consorcio de
Ellwood creía que el gobierno, a través de la US Health empresas dedicadas a la adquisición y oferta de servicios
Care Financing Administration, debía desempeñar un papel de salud con 33 millones de clientes, está enviando a sus clien-
importante en esta iniciativa. La Agency for Health Care Policy tes a hospitales y otras instituciones que cumplen los criterios
and Research, una entidad completamente ajena a la anterior de volumen del grupo para varios procedimientos quirúrgicos.
se creó en 1989. Entre otras misiones, la agencia tenía el El asunto más polémico en el actual debate sobre la calidad de
objetivo de desarrollar estudios a largo plazo con los equipos la cirugía es si un mayor volumen significa necesariamente
de Investigación de los Resultados de los pacientes y estable- unos mejores resultados. Aunque ningún estudio ha confirma-
cer directrices prácticas, empezando por las condiciones de do una relación absoluta entre calidad de la asistencia y número
masificación de los pacientes de Medicare. Las directrices de casos tratados, parece existir cierto consenso en el sentido de
son definidas por el Institute of Medicine como «declaraciones que la cantidad tiene un impacto significativo sobre los resulta-
desarrolladas de forma sistemática para ayudar a la toma de dos de numerosos procedimientos quirúrgicos, especialmente
decisiones de clínicos y pacientes sobre la asistencia sanitaria cuando se evalúan las tasas de complicaciones y la duración de
adecuada para circunstancias clínicas específicas». La pri- la estancia hospitalaria, comparándolas con los datos de morta-
mera pauta práctica clínica federal sobre el manejo del dolor lidad. Uno de los mejores ejemplos de un proyecto de mejora en
postoperatorio fue publicada en marzo de 1992. Sin embar- el rendimiento es el Veteran Affairs Administration´s National
go, algunos grupos privados ya habían empezado a hacerlo Surgical Quality Improvement Program, que ha llevado a un des-
en 1976, cuando la Blue Cross y la Blue Shield Association censo del 27% en la mortalidad y a un 45% en la reducción de
pidieron al American College of Physicians que revisara la ido- la morbilidad perioperatoria desde 1991. Este fue el primer pro-
neidad de ciertas pruebas y procedimientos dudosos o discu- grama nacional desarrollado en los EE. UU. que fue validado,
tibles presentados a cobro. Esta iniciativa se desarrolló den- basado en resultados, ajustado para riesgos y controlado por
tro del Proyecto de Valoración de la Eficacia Clínica, creado pares para medir y mejorar la asistencia quirúrgica.
en 1981. Las directrices son revisadas por pares y, a conti-
nuación, publicadas en la revista Annals of Internal Medicine Estructura, proceso y resultado
El American College of Physicians considera el coste como un
criterio en la evaluación de la idoneidad de la asistencia, posi- Los años ochenta contaron con las contribuciones del Dr. Avedis
ción que la diferencia de otras instituciones como la American Donabedian, profesor emérito de salud pública de la Michigan
Medical Associaton, que insiste que las consideraciones de costes University. En numerosas publicaciones el doctor definió la
no deberían incluirse. Además, esta última entidad prefiere el calidad y sugirió enfoques y métodos para su valoración; tam-
término parámetro en vez de pauta. Su Directorio de Parámetros bién estableció criterios y patrones de calidad.5 La tríada clásica
Prácticos incluye miles de parámetros desarrollados por más de para la evaluación de la calidad de la asistencia se basa en la
45 organizaciones médicas. El problema con este enfoque, estructura, el proceso y el resultado. En cirugía bariátrica, los
señalan algunos expertos como Brook y el Dr. David Eddy de datos de estructura pueden incluir, entre otros muchos elemen-
la Duke University, es que los parámetros se desarrollan por tos, la experiencia del cirujano, la técnica quirúrgica, las insta-
consenso de equipos de especialistas, basados en las opiniones laciones de la consulta y del hospital, el equipo, el personal y
de estos expertos, sin seguir ninguna metodología estructurada otros. Por ejemplo, los cirujanos pueden mejorar los resultados
Capítulo 40 • Seguimiento a largo plazo y valoración de resultados en cirugía bariátrica 347

mejorando su formación, adquiriendo más experiencia, modi- Otro tipo de medida de resultados es la percepción y la
ficando su técnica o cambiando a otro tipo de operación. Los satisfacción del paciente con la intervención médica. Es el
hospitales pueden hacer lo mismo actualizando su equipo o for- resultado más difícil de analizar por estándares científicos
mando al personal.6 Los hechos que tienen lugar antes, duran- rigurosos, pero su importancia en la evaluación de la calidad
te y después del encuentro entre el profesional sanitario y el de la asistencia continúa creciendo.9 Estrechamente relacio-
paciente constituyen parte de la información del proceso. El nado con este tema está el análisis de la calidad de vida (CV),
diagnóstico, la valoración y el enfoque de las patologías comór- el valor subjetivo que un individuo reconoce sobre la satisfac-
bidas de la obesidad; las pruebas preoperatorias; el tratamiento ción con su vida. Más específicamente, el término calidad Vida
de las complicaciones quirúrgicas, y el desarrollo de secuencias relacionada con la salud (CVRS) se refiere a los ámbitos físico,
clínicas son algunos de los datos que tienen que ser estudiados. psicológico y social de la salud, vistos como áreas distintas
El análisis de resultados se refiere al estado de salud del paciente influidas por la experiencia, las creencias, las expectativas y las
tras la intervención médica. percepciones de la persona.10 Esta medida, que para algunos
Según Brook, los datos de proceso son generalmente investigadores es el resultado de salud final, se centra en la
más sensibles que los datos de información, ya que un resul- persona y no en la enfermedad. Sin embargo, el concepto es
tado inadecuado no se registra cada vez que hay un error en intrínsecamente subjetivo y difícil de cuantificar. Los elemen-
la provisión de la asistencia.7 En el tratamiento quirúrgico tos esenciales de un instrumento de medición de la calidad de
de la obesidad, este asunto se complica más, en virtud del vida son la validez, la fiabilidad, la receptividad (sensibilidad
largo tiempo que transcurre entre el proceso clave (la ciru- al cambio), la idoneidad y el sentido práctico.11 Los campos
gía) y los resultados dignos de ser tenidos en cuenta, como la típicos incluidos en una valoración de calidad de vida relacio-
reducción en la mortalidad o el aumento en la expectativa de nada con la salud son la función física, el estado mental o psi-
vida. Brook define cinco métodos para valorar la calidad. cológico, la función social y de desempeño de un papel, la
Tres de ellos son implícitos, lo que significa que un profesio- percepción de salud general y la percepción de los síntomas.
nal que revisa las fuentes de datos no sigue estándares pre- Los instrumentos para medir la calidad de vida pueden ser
vios para dar una opinión sobre la calidad de la asistencia. El genéricos o específicos de las distintas enfermedades. Ejemplos
cuarto método valora la provisión de la asistencia usando de cuestionarios genéricos sofisticados y validados son el per-
criterios de proceso explícitos; el quinto analiza los resultados fil de impacto de la enfermedad, la escala de calidad de bienes-
de la asistencia, usando criterios a priori explícitos y compa- tar, el perfil de salud de Nottingham y la escala de calidad de
rando los datos con el resultado pronosticado por un mode- vida de Gotenburgo.12 Sin embargo, estas encuestas son largas
lo validado. Los dos últimos métodos son más rigurosos. y exhaustivas y algunas requieren un entrevistador, lo que las
hace menos prácticas. Probablemente el instrumento genérico
Tipos de medidas de resultados de calidad de vida más ampliamente usado es el SF-36.3 Este
cuestionario contiene 36 preguntas que evalúan ocho ámbitos
Los cirujanos bariátricos están familiarizados con los datos diferentes. Es cumplimentado por el paciente directamente y se
de resultados clínicos, como las complicaciones tempranas y puede completar en menos de 10 minutos. El SF-36 se ha usado
tardías, la mortalidad, las tasas de reintervención y la pérdida en numerosos estudios de pacientes obesos.13.14 Otros cuestio-
de peso. A finales de los años ochenta, Brolin y cols. introdu- narios genéricos desarrollados para poblaciones especiales,
jeron otro importante parámetro, la resolución o mejora de como la pediátrica, fueron aplicados para estudiar la calidad de
las patologías comórbidas de la obesidad.8 Estos autores con- vida en la obesidad.15 Algunos cirujanos usan instrumentos
sideraron «resueltos» los trastornos médicos cuando se con- específicos de determinadas enfermedades que fueron creados
trolaban sin medicación, y los calificaron de «mejorados» para analizar la calidad de vida en múltiples trastornos, como
cuando se requerían pocos medicamentos tras la cirugía. las enfermedades gastrointestinales (índice de calidad de vida
Los resultados funcionales evalúan el efecto del tratamiento gastrointestinal) o el reflujo (calidad de vida relacionada con la
sobre la capacidad del paciente para realizar cualquier tipo de salud de la enfermedad por reflujo gastroesofágico).16,17
acción o actividad. Esto es importante, por ejemplo, en la ciru- En la pasada década se desarrollaron dos cuestionarios
gía ortopédica, en la rehabilitación y en ciertos tipos de cáncer, específicos de enfermedad para evaluar la calidad de vida en la
pero también se puede aplicar a los procedimientos de cirugía población de obesos. Kolotkin y cols. incluyeron originalmente
general, incluida la bariátrica. El análisis de los resultados eco- 74 conceptos en su encuesta de Impacto del Peso sobre la Calidad
nómicos tiene una importancia significativa, no sólo para el indi- de Vida (IWQOL), que posteriormente fue acortada a un ins-
viduo (paciente), la institución (hospital) y el responsable de la trumento auto-informado de 31 conceptos (IWQOL-Lite),
financiación (compañías de seguros, estado), sino también siguiendo un formato y unos campos similares a los del SF-36.18
como una responsabilidad social global. El concepto de valor es Esta escala se ha usado con los pacientes quirúrgicos bariátricos
definido como la proporción de la calidad de la asistencia médi- junto con el SF-36 y también se ha aplicado para comparar posi-
ca dividido por el coste de dicha asistencia. Como se ha comen- bles pacientes quirúrgicos con controles obesos 19. Otro instru-
tado con anterioridad, este es un asunto polémico pero que los mento específico de obesidad es el Cuestionario de Calidad de
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médicos necesitan reconocer, aceptar e incluir en la evaluación Vida Moorehead-Ardelt (M-A QOLQ), creado en respuesta a mi
de la asistencia médica. En estos tiempos en los que los cos- petición de una encuesta sencilla, de una página que pudiera ser
tes de la asistencia sanitaria no dejan de aumentar, los recursos incluida en el Sistema de Análisis e Informes de Resultados
son cada vez más limitados, y existe una cifra cada vez mayor de Bariátricos (BAROS) que yo estaba desarrollando en los años
personas sin cobertura de seguro sanitario y mayores deman- noventa.20 Este sistema de evaluación de resultados se discute
das por parte de los ancianos, la valoración de la rentabilidad de ampliamente en una sección posterior del capítulo.
los tratamientos, especialmente de la cirugía, debe ser una prio-
ridad. En otras palabras, cualquier intervención médica debería Fuentes de datos para la evaluación de resultados
tener como objetivo ser eficaz (generadora del efecto deseado),
pero también eficiente, es decir, productora de los efectos La fuente adecuada de información para la evaluación de la cali-
deseados sin que se produzcan derroches económicos. dad depende del objetivo del estudio. La selección de las fuentes
348 Sección VIII • RESULTADOS

de datos es el paso siguiente tras decidir qué método de valora- seguimiento postoperatorio.22 Recomendaba visitas durante
ción de calidad (implícito o explícito) se usará. La información el período postoperatorio inmediato, a los 3 meses de la
puede recogerse antes y después del tratamiento. El registro intervención, a los 6 meses, anualmente durante 3 años, a los
médico es la fuente de datos más común para los resultados clí- 5 años y a intervalos de 5 años durante toda la vida, con
nicos, mientras que los cuestionarios de pacientes y otros instru- visitas adicionales dependiendo de la enfermedad del pacien-
mentos validados pueden usarse para analizar el estado de salud, te. Las visitas tenían que incluir historia clínica y examen
los resultados funcionales y la calidad de vida. La autovaloración físico, seguidos de pruebas de laboratorio; estudios radiográ-
del paciente podría aplicarse antes y después del tratamiento y a ficos, endoscópicos u otros y consultas según se indicara. La
intervalos periódicos a partir de entonces debido a los continuos segunda declaración de la ASBS hace referencia a la dura-
cambios esperados en las percepciones de los pacientes a medida ción del seguimiento necesario para una clasificación de los
que pasa el tiempo, particularmente en vista de la nueva ganan- resultados.23 La institución definió los resultados como pre-
cia de peso observada con frecuencia años después de la cirugía liminares (menos de 2 años de seguimiento); intermediarios
de la obesidad y la posibilidad de que pacientes ancianos desa- (de 2 a 5 años); a largo plazo (de 5 a 10 años), y a muy largo
rrollen otras enfermedades o que reaparezcan aquellas que plazo (más de 10 años). Esta declaración también puso freno
habían sido tratadas con éxito previamente. a la presentación de resultados preliminares. Los datos esta-
Por otra parte, para estudiar los resultados económicos dísticos deben incluir las duraciones medias y medianas del
sería más adecuado usar los registros económicos hospitalarios, seguimiento, en meses. Desgraciadamente, la bibliografía
que deben incluir los costes hospitalarios reales y los cargos sobre cirugía bariátrica está plagada de series de casos que
presentados al responsable de la financiación de la asistencia presentan duraciones de la vigilancia inadecuadas.
sanitaria. Los registros de facturación estatal y nacional, de La importancia del seguimiento a largo plazo en la cirugía
entidades tanto privadas como gubernamentales, pueden utili- de la obesidad mórbida no puede ser sobredimensionada. La
zarse para comparar la rentabilidad de médicos individuales y historia de este particular campo está llena de técnicas que
hospitales y la idoneidad de las pruebas, tratamientos y otras resultaban prometedoras a corto plazo, pero que eran abando-
intervenciones, especialmente aquellas que requieren alta tec- nadas años después debido a sus pobres resultados o a sus efec-
nología y pruebas invasivas. Ejemplos que se aplican a la cirugía tos adversos o complicaciones graves. Ejemplos típicos son la
bariátrica son los costes de las pruebas preoperatorias, los medi- derivación yeyunoileal, las gastroplastias horizontales, la par-
camentos y los suministros; los instrumentos laparoscópicos; la tición gástrica y la envoltura. En EE. UU., en los años ochen-
anestesia; los tiempos de quirófano y sala de reanimación; y ta hubo un importante dominio de las gastroplastias verticales,
la duración de la estancia hospitalaria así como los costes de que fueron posteriormente reemplazadas por la derivación
readmisiones, complicaciones y otras intervenciones necesa- gástrica en Y de Roux. Sin embargo, en muchos otros países,
rias, como los cambios de la banda ajustable. Más difíciles de la banda laparoscópica ajustable es actualmente la técnica más
cuantificar son otras medidas económicas, como los salarios usada debido a su bajo nivel de invasividad, morbilidad y mor-
perdidos o la renta derivada del trabajo sufridos por los pacien- talidad, a pesar de que da lugar a una menor pérdida de peso.
tes durante el período de recuperación y los costes de los medi- En la otra parte del espectro quirúrgico, la derivación bilio-
camentos, vitaminas, suplementos y asistencia médica requeri- pancreática y sus variantes son preferidas por un porcentaje
dos tras la operación, especialmente si el procedimiento relativamente considerable de cirujanos, debido a la excelente
bariátrico fue una operación por malabsorción. Este tipo de pérdida de peso que ocasiona a lo largo del tiempo, aunque los
información es muy importante para comparar los resultados a retos técnicos, las complicaciones y las secuelas a largo plazo
largo plazo de varias técnicas y para valorar los resultados de son mucho mayores que en otros procedimientos.
pacientes que fueron sometidos a cirugía con los controles. Estas consideraciones, analizadas más en profundidad en
otras partes de este libro, traen a colación otro tema relacio-
nado con nuestra materia: la intensidad del seguimiento. De
Z SEGUIMIENTO DE LOS PACIENTES forma clara, la necesaria frecuencia y rigurosidad de la vigi-
QUIRÚRGICOS BARIÁTRICOS lancia de un paciente tras una operación restrictiva gástrica
pura son diferentes de las realizadas en otro paciente que ha
Duración y tipo de seguimiento sido sometido a una operación en su mayor parte de malab-
sorción. Por esta razón, el Comité de estándares de la ASBS
La conferencia de desarrollo de consenso de los National se manifestó en contra de establecer directrices específicas,
Institutes of Health (NIH) sobre cirugía gastrointestinal de la no sólo para la valoración preoperatoria requerida, sino tam-
obesidad grave de 1991 indicó que «la asistencia postopera- bién para las pruebas postoperatorias durante el seguimiento,
toria, el apoyo psicológico nutricional y la vigilancia han de optando por dejarlas a discreción del cirujano, según las
mantenerse por tiempo indefinido. La vigilancia debe incluir necesidades individuales del paciente. Sin embargo, el comité
la monitorización de los índices de nutrición inadecuada y aconsejó, si estaba indicado, obtener un hemograma comple-
de la mejora de cualquier trastorno preoperatorio como la to y los niveles de albúmina y electrólitos cuando el paciente
diabetes, la hipertensión y la dislipidemia. Por otra parte, vomita o come inadecuadamente; así como obtener niveles de
la monitorización ha de incluir, no sólo los índices de macro- vitamina B12, de hierro, de capacidad de fijación del hierro,
nutrientes, sino también los de minerales y vitaminas».21 La de calcio y de fosfatasa alcalina, en los casos en los que se
declaración del NIH, justificadamente, no aconsejaba inter- deriva el duodeno.
valos específicos para las visitas postoperatorias ni las prue-
bas requeridas para valorar los cambios clínicos. Cálculos del peso y seguimiento
En un intento por aclarar estos temas, el comité de
estándares de la American Society for Bariatric Surgery (ASBS) El ASBS publicó en 1994 una revisión de los factores a conside-
desarrolló dos grupos de directrices que fueron aprobados rar cuando se evalúe e informe de los resultados de un trata-
por los miembros en sesiones plenarias en las reuniones miento quirúrgico de la obesidad mórbida.24 Estas recomenda-
anuales. El primero incluía directrices para la asistencia de ciones fueron seguidas en 1997 de otra declaración del Comité
Capítulo 40 • Seguimiento a largo plazo y valoración de resultados en cirugía bariátrica 349

de estándares.25 Dicha declaración incluía más directrices para International Bariatric Surgery Registry (Registro Internacional
informar de resultados y una clasificación de la obesidad basada de Cirugía Bariátrica, IBSR), estos intervalos de tiempo se usan
en el índice de masa corporal (IMC). La ASBS recomendó, también para presentar la pérdida de peso; en cambio, todos los
entre otras cosas, el uso del sistema métrico, el IMC, medidas restantes datos recogidos tras la primera operación se conside-
de distribución de la grasa y el análisis de subgrupos de pacien- ran incluidos en el seguimiento, con el siguiente orden de
tes. También limitó el número de presentaciones de las pérdi- importancia: mortalidad, reoperación, rehospitalización, pro-
das de peso en series con menos de 2 años de seguimiento. cedimiento subsiguiente y visitas a la consulta o respuestas a los
Para informar de los resultados son necesarias varias medi- cuestionarios. Si se han registrado varias visitas, se selecciona
ciones y cálculos del peso. Estos pueden ser absolutos, como el sólo una por paciente dentro de cada intervalo de tiempo, eli-
peso del paciente en kilogramos y el exceso de peso del pacien- giendo la más conservadora y cercana al punto medio del inter-
te, es decir, la diferencia entre el peso del paciente y el «peso valo. Los parámetros de pérdida de peso deben reflejar el valor
ideal», generalmente tomado de las tablas de la Compañía de del punto medio para el intervalo examinado.
Seguros de Vida Metropolitan de 1983. Otro parámetro abso-
luto es la pérdida de peso, expresada en unidades, comparando Dificultades para conseguir un seguimiento adecuado
los pesos pre- y postoperatorios. Esta variable no es aconsejable
como medida de presentación de resultados. Los cálculos de La obesidad grave es una enfermedad compleja, que se pro-
peso relativo usados con frecuencia, mostrados en la tabla 40-1, longa durante toda la vida, crónica, epidémica y, actualmen-
incluyen el porcentaje de peso ideal, el porcentaje de exceso de te, incurable. Por tanto, reunir datos a largo plazo de los
peso, el porcentaje de pérdida de peso y el porcentaje de pérdi- pacientes, tratados o no, es de gran importancia para el estu-
da de exceso de peso (PEP%). Más recientemente, también se dio de este trastorno metabólico. Desgraciadamente, se ha
están utilizando los cambios postoperatorios en el IMC. Se demostrado que es muy difícil obtener información adecuada
reconoce un IMC de 25 como el límite más bajo de sobrepeso. sobre la población obesa mórbida tras la cirugía. Muy pocos
Este planteamiento permite el cálculo del porcentaje de pérdida centros disponen de los recursos para obtener datos adecua-
de IMC y el porcentaje de pérdida del exceso de IMC. El ASBS dos de seguimiento de un número importante de pacientes
recomienda el uso de la PEP% y la reducción del IMC como varios años después de la operación. El IBSR, por ejemplo,
medidas de pérdida de peso tras la cirugía bariátrica.25 registra un escaso 10,9% de seguimiento entre 1781 pacien-
tes que reúnen los requisitos, 8 años después de la cirugía.
Cálculos estandarizados de seguimiento Sin embargo, algunas presentaciones ocasionales han
señalado que los pacientes perdidos en el seguimiento no
Las directrices de la ASBS de 1994 estipulaban que deberían necesariamente constituyen un fracaso del tratamiento. Esta
proporcionarse los datos de seguimiento para cada análisis pre- impresión fue confirmada por la mayoría de las personas que
sentado: «El numerador debería indicar el número de pacientes respondieron a una encuesta que yo dirigí en 1996 entre
cuyos datos están incluidos en el grupo analizado y se reco- cirujanos bariátricos experimentados.27 Parece que aproxi-
mienda que el denominador sea el número de pacientes que madamente un número igual de pacientes no responde a las
cumple los requisitos de seguimiento».24 La vigilancia postope- preguntas de vigilancia, bien porque no han perdido sufi-
ratoria adecuada sigue siendo el medio más importante para ciente peso y se consideran a sí mismos como fracaso, bien
identificar que los datos presentados están completos. Se acep- porque han evolucionado tan bien tras la operación que
ta por parte de los estadísticos que un seguimiento superior al piensan que es innecesario informar a la consulta del ciruja-
60% es satisfactorio para el nivel de significación.26 El porcen- no. En cualquier caso, es importante informar del número y
taje de pacientes seguidos tiene que ser determinado a interva- porcentaje de pacientes perdidos en el seguimiento, para
los periódicos durante los primeros 6 meses de postoperatorio cada período de tiempo, y especificar cómo esos pacientes
y a intervalos de 12 meses a partir de entonces. Según el son contabilizados en el análisis de resultados.25

Tabla 40-1 FÓRMULAS PARA CALCULAR LOS PARÁMETROS RELATIVOS DE PESO


peso
Porcentaje de peso ideal (PI%) ⫽ ⫻ 100
peso ideal
peso ⫺ peso ideal
Porcentaje de exceso de peso (EP%) ⫽ ⫻ 100
peso ideal
peso operatorio ⫺ peso de seguimiento
Porcentaje de pérdida de peso (PP%) ⫽ ⫻ 100
peso operatorio
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peso operatorio ⫺ peso de seguimiento


Porcentaje de pérdida de exceso de peso (PEP%) ⫽ ⫻ 100
peso ideal
IMC operatorio ⫺ IMC de seguimiento
Porcentaje de pérdida de IMC (PIMC%) ⫽ ⫻ 100
IMC operatorio

Porcentaje de pérdida de exceso de IMC IMC operatorio ⫺ IMC de seguimiento


⫽ ⫻ 100
(PEIMC%) IMC operatorio ⫺ 25
EP%, porcentaje de exceso de peso; PEIMC%, porcentaje de pérdida de exceso de índice de masa corporal;
PEP%, porcentaje de pérdida de exceso de peso; PI% porcentaje de peso ideal; PIMC%, porcentaje de pérdida de
índice de masa corporal; PP%, porcentaje de pérdida de peso.
350 Sección VIII • RESULTADOS

Z EVALUACIÓN DE RESULTADOS EN CIRUGÍA ción de la gravedad). Finalmente, necesitamos clarificar los


BARIÁTRICA términos resolución y mejoría sobre la base de parámetros
concretos.
Parámetros para presentar la pérdida de peso Algunas respuestas a estos dilemas fueron proporcionadas
por los miembros del comité de desarrollo reunidos en 1996 a
La pérdida de peso se ha usado erróneamente durante décadas petición de la Fundación Shape Up America! y la American
como parámetro de resultados más importante de la cirugía de Obesity Associaton.35 Dichos miembros definieron una patología
la obesidad mórbida. En los años sesenta y setenta los resulta- comórbida como «cualquier alteración asociada con obesidad
dos se presentaban, a lo largo del tiempo, como la pérdida de que: 1) generalmente empeora a medida que el grado de obe-
peso media, sin criterios rigurosos para definir el éxito o el sidad aumenta y 2) a menudo mejora a medida que la obesidad
fracaso. Muchos cirujanos desarrollaron sus propios criterios es tratada con éxito». A partir de este planteamiento se elabo-
a la hora de considerar exitosa una operación durante las ró una lista con las siete patologías comórbidas más importan-
siguientes décadas, creando numerosas definiciones que, a tes: hipertensión arterial, enfermedad cardiovascular, dislipi-
menudo, diferían de forma importante. Pories y cols. definie- demia, diabetes tipo 2, síndrome de hipoventilación de la
ron el éxito como una pérdida del 25% o más del peso opera- obesidad/apnea del sueño, artrosis e infertilidad. Los panelis-
torio,28 según un criterio similar al usado por MacLean y cols. tas también fijaron los criterios diagnósticos para estas patolo-
en 1981,29 pero más riguroso que la pérdida de más del 15% del gías comórbidas. También establecieron una lista con cuatro
peso inicial referida por Freeman.30 Otros investigadores usa- problemas médicos distintos que «se convierten en patologías
ron el PEP% como la principal medida de resultado. Mason comórbidas cuando afectan o disminuyen la CV o requieren
definió el éxito como más del 25% de PEP31 mientras que tratamiento crónico». Estas enfermedades son la hipertensión
Halverson optó por un umbral del 50% de PEP, el 100% intracraneal idiopática, la enfermedad por estasis venosa de las
mayor que el anterior.32 Muchos cirujanos bariátricos usan extremidades inferiores, el reflujo gastroesofágico y la incon-
actualmente la definición de Halverson, pero nadie en la ASBS tinencia urinaria de estrés. La declaración recomendaba iden-
ni en la International Federation for the Surgery of Obesity (IFSO) tificar otros factores de riesgo, especialmente la distribución
ha adoptado estándares para definir el éxito o el fracaso. grasa, usando medidas antropométricas como la proporción
En 1982 Reinhold propuso una clasificación de la pérdida cintura-cadera y la circunferencia de la cintura.
de peso basada en otro parámetro: el peso postoperatorio como
porcentaje dentro del peso ideal. Usó los cuartiles del porcenta- Valoración de la calidad de vida tras la cirugía
je dentro del peso ideal para clasificar sus resultados como exce-
lentes, buenos, aceptables o malos. Un peso final mayor del La declaración de los NIH de 1991 también indicaba que
100% del ideal se consideraba un fracaso, ciertamente un umbral «las consideraciones sobre la calidad de vida en pacientes
muy bajo para definir una operación sin éxito.33 Un año después, que han sido sometidos a tratamiento quirúrgico de la obe-
Lechner y Elliott publicaron criterios diferentes, considerando sidad deben ser tenidas en cuenta...».21 Además, los expertos
un resultado excelente más del 80% de PEP; uno bueno el por- abogaban por «el desarrollo de cuestionarios estandariza-
centaje comprendido entre el 50% y el 80% de PEP, y uno malo dos, fiables y válidos con los que evaluar las expectativas de
el que correspondía a un porcentaje inferior al 50%.34 Las per- los pacientes acerca de los cambios, y las modificaciones psi-
sonas que contestaron la encuesta no seleccionaron ninguna de cológicas realmente experimentadas durante la pérdida y el
estas definiciones como un posible estándar.27 mantenimiento del peso». Estos instrumentos deben ser
validados por técnicas psicométricas adecuadas, con niveles
Análisis de las mejoras en las patologías comórbidas adecuados de fiabilidad, coherencia, robustez y reproducibi-
lidad. Deben, pues, ser fiables (que produzcan un valor con-
La pérdida de peso es claramente insuficiente como criterio de sistente), válidos (que vayan dirigidos a lo que afirman
resultado único en los tratamientos bariátricos. El objetivo medir); receptivos (que detecten cambios a lo largo del tiem-
último de reducción del peso es mejorar la salud del paciente, po), y sensibles (que reflejen verdaderos cambios en pacien-
reducir la mortalidad y aumentar su bienestar psicológico y tes individuales). Como se ha comentado anteriormente, se
socioeconómico. Como se indicó anteriormente, Brolin y cols. dispone de numerosos cuestionarios genéricos extensos y
introdujeron en la evaluación de los resultados la valoración de exhaustivos. Es difícil, no obstante, obtener un equilibrio
la mejoría en las enfermedades relacionadas con la obesidad.7 entre la viabilidad y la minuciosidad de la evaluación cuando
Establecieron tres grupos de resultados, según la pérdida de se selecciona una encuesta para valorar el vago concepto de
peso comparada con el peso ideal y los cambios en las patologías calidad de vida. Un dilema a la hora de evaluar la calidad
comórbidas. Brolin y su equipo, sin embargo, no consiguieron de vida tras la cirugía de la obesidad es la elección del instru-
definir qué enfermedades deberían ser analizadas, su grado de mento apropiado. ¿Seleccionamos una encuesta elaborada y
gravedad ni los criterios necesarios para el diagnóstico; razo- larga, arriesgándonos a obtener una tasa insuficiente de res-
nes, entre otras, por las que su método no fue aceptado. puestas, o elegimos más bien un cuestionario corto y senci-
En el análisis de este asunto se abordan varios problemas. llo, que es más probable que sea completado y devuelto? Los
En primer lugar, la obesidad mórbida puede afectar casi cual- investigadores de la gestión de resultados aconsejan el uso de
quier sistema orgánico en varios grados de gravedad. Ni siquie- un instrumento genérico bien validado, como el SF-36, com-
ra una lista exhaustiva de patologías comórbidas podría cubrir plementado por un cuestionario específico adicional que se
todas las posibilidades. Por tanto, es necesario desarrollar una centre en la condición que se está examinando.
lista concisa de las enfermedades relacionadas con la obesidad
más comunes y graves. En segundo lugar, necesitamos definir Cómo evaluar las reoperaciones y las complicaciones
criterios diagnósticos rigurosos, para evitar el sesgo del obser- en la evaluación de resultados
vador en la valoración preoperatoria y en la evaluación tras la
cirugía. En tercer lugar, deberíamos establecer una clasificación Complicando aún más los temas presentados anteriormente,
de la gravedad según los riesgos para la salud (una estratifica- no está claro cómo deben valorarse las reoperaciones causadas
Capítulo 40 • Seguimiento a largo plazo y valoración de resultados en cirugía bariátrica 351

por las complicaciones, por los efectos secundarios de la ciru- Z COMPARACIÓN Y PRESENTACIÓN
gía o por el fracaso en la pérdida suficiente de peso. La mitad DE RESULTADOS
de los que respondieron a mi cuestionario consideraron que
una reoperación era un fracaso, mientras que la otra mitad no Una importante dificultad encontrada por los expertos de los
lo creyeron así.27 Estos cirujanos experimentados estaban de NIH en 1991 quedó resumida en una sencilla deducción: «uno
acuerdo en que el número y el porcentaje de reoperaciones de los problemas clave a la hora de evaluar los actuales infor-
deberían ser incluidos en el análisis, pero pocos apoyaron el mes de series de casos en tratamiento quirúrgico es la falta de
uso de la tasa de reoperaciones por año, como propuso estándares para establecer comparación».21 Estos especialistas
Mason.36 Sin embargo, considerando que la obesidad mórbida recomendaron que fueran comparados varios procedimientos
es una enfermedad crónica, compleja y, actualmente, incura- quirúrgicos en relación con las tasas de complicaciones, pérdi-
ble, incluso tras la cirugía, estoy de acuerdo con el Dr. Mason. da de peso, mantenimiento a largo plazo y mejoría en las com-
Durante cierto tiempo se pensó que muchas técnicas quirúr- plicaciones secundarias de la obesidad. Además, el panel de
gicas habían tenido éxito, siendo abandonadas más tarde debi- consenso apreció que era esencial disponer de definiciones cla-
do a sus pobres resultados o complicaciones a largo plazo. ras de los términos relacionados con la obesidad, especialmen-
De forma similar, la valoración de las complicaciones qui- te de los términos que definen los resultados, e informar mejor
rúrgicas presenta otro problema. Los episodios postoperatorios de la estadística de esos resultados quirúrgicos.
tempranos están generalmente bien documentados en la biblio- La declaración de los NIH también aconsejó que los
grafía, pero las complicaciones y los efectos secundarios tardíos efectos del tratamiento quirúrgico fueran definidos en varios
son más difíciles de evaluar, principalmente debido a su escaso subgrupos estratificados por sexo, edad, raza, estado
control a largo plazo, característico de la cirugía bariátrica. Una socioeconómico, comorbilidad y distribución de la grasa.
vez más, carecemos de definiciones claras de lo que constituye Estas recomendaciones fueron incluidas en las directrices
una morbilidad importante o de escasa entidad, así como de una del Comité de Estándares de la ASBS en 1997.25 Otras suge-
lista de complicaciones, que incluya varios grados de gravedad, rencias enumeradas en estas directrices fueron las centradas
que puedan ser tenidas en cuenta en el análisis de resultados. El en analizar por separado a los pacientes que habían sido
IBSR define una complicación importante como la que da lugar sometidos previamente a cirugía de obesidad y a los que
a una hospitalización de 7 días o más, y una complicación de requerían reoperaciones, y en establecer claramente el por-
poca importancia aquella que no determina tal consecuencia.36 centaje del total de la serie y las razones de la reintervención.
Ha de tenerse en cuenta, no obstante, que en muchos países Deben incluirse los detalles de la técnica quirúrgica, así
distintos de los EE. UU., la estancia hospitalaria es algunas como las modificaciones realizadas durante el curso del
veces superior a 7 días, debido a factores socioeconómicos, y no estudio. También es útil valorar los resultados en pacientes
a complicaciones. El apéndice 1 en la publicación de BAROS de superobesos separados de los correspondientes a los pacien-
1998 muestra una lista con las complicaciones quirúrgicas y tes que presentan un IMC de entre 40 y 50 kg/m2, debido a
médicas, en la que aparecen diferenciadas en importantes y de las importantes diferencias en las patologías comórbidas,
escasa entidad, así como en tempranas y tardías.20 Esta lista se riesgo quirúrgico y pérdida de peso. Desgraciadamente,
usó para desarrollar la lista incluida en el folleto de la ASBS de muy pocas series de casos registradas en la bibliografía
información para los pacientes.37 publican sus resultados según estos subgrupos.

Tabla 40-2 MEDIDAS DE RESULTADOS Y FUENTES DE DATOS

PARÁMETROS FUENTES DE DATOS

Preoperatorios
Demográficos: edad, sexo, altura, peso Impreso de información al paciente
Peso ideal y en exceso, EP%, IMC Tablas, normogramas, fórmulas
Historia, factores clínicos, patologías comórbidas, medicamentos, examen Registro médico de consulta
físico, medidas de la distribución de la grasa, pruebas prequirúrgicas,
consultas, diagnósticos finales
Estado de salud, instrumento genérico de evaluación de la calidad de vida SF-36
Cuestionario específico de enfermedad Encuesta de CV específica de la obesidad
Perioperatorios
Técnica quirúrgica, episodios intraoperatorios, anestesia Informe operatorio
Tiempos de anestesia, de quirófano y de sala de reanimación, UCI, TH Registros hospitalarios
Morbilidad/mortalidad temprana (⬍30 días), reoperaciones Gráfico hospitalario
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

Datos finales: costes, cargos al responsable de la financiación Registros de facturación


Tiempo de recuperación/regreso al trabajo, pérdida de ingresos Registros de consulta y trabajo

Postoperatorios
Complicaciones tardías, readmisiones, reoperaciones Registros de consulta y hospitalarios
Pérdida de peso, mejora en las patologías comórbidas, Registros de consulta, bases de datos
% pacientes seguidos/perdidos, tiempo medio de seguimiento
Cambios en la calidad de vida/estado de salud, Cuestionarios de CV
% éxitos, fracasos, grupos de resultados Sistema de resultados (BAROS).
Satisfacción del paciente Encuestas a pacientes
BAROS, sistema de análisis e informe de resultados bariátricos; CV, calidad de vida; EP%: porcentaje de exceso de peso; IMC, índice de masa corporal; SF-36,:
impreso corto 36; TH, tiempo de hospitalización; UCI, unidad de cuidados intensivos. (Modificado de Recommended American College of Surgeons Core Data
Collection Set, desarrollado por el American College of Surgeons Advisory Council Task Force on Outcomes, 1997.)
352 Sección VIII • RESULTADOS

Otra consideración importante son las diferencias geo- incluir resultados clínicos, de calidad de vida y económicos.
gráficas, sociales y económicas, por no mencionar las gené- La tabla 40-2 resume las principales medidas y fuentes de
ticas, cuando se trata de comparar los resultados en varios datos que pueden usarse para la valoración e información
países. Esto resulta de capital importancia para la selección de los resultados quirúrgicos.
de un instrumento de evaluación de la calidad de vida, que
ha de ser fácil de cumplimentar por parte del paciente, con
independencia de su nivel educativo o cultural. Además, un Z SISTEMA DE ANÁLISIS E INFORME
cuestionario adecuado debe ser fácil de traducir a otros idio- DE RESULTADOS BARIÁTRICOS
mas, de modo que se excluyan los factores transculturales y
lingüísticos que influyen en su fiabilidad. El instrumento del BAROS permite el análisis, la evaluación
En resumen, una adecuada presentación de los resulta- y la clasificación de los resultados de la cirugía bariátrica en
dos del tratamiento quirúrgico de la obesidad mórbida debe una página sencilla, un ejemplo de la cual se muestra en la

Sistema de análisis e informe de resultados bariátricos


(BAROS)

Pérdida Enfermedades
de peso (PUNTOS)

% exceso
de peso Moorehead - Ardelt
o CUESTIONARIO DE CALIDAD DE VIDA II
% exceso
de IMC
(PUNTOS)

CUESTIONARIO DE CALIDAD DE VIDA MOOREHEAD-ARDELT


Aumento Agravado NIVELES DE AUTOESTIMA Y ACTIVIDAD
de peso (–1) Por favor, marque la casilla para mostrar su respuesta.
(–1) 1. Generalmente me siento

0 –24 Sin cambios


(0) (0) Muy mal conmigo Muy bien conmigo
mismo mismo
2. Disfruto de las actividades físicas

25– 49 Mejora
(1) (1) Nada Mucho
Figura 40-1 Sistema de análi-
3. Tengo contactos sociales satisfactorios sis e informe de resultados
Una bariátricos (BAROS). IMC,
importante índice de masa corporal. (Copy-
resuelta right 2002, H.E. Orio, M.D y
Ninguno Muchísimos
50 –74 M.D. K. Moorehead, PhD.)
(2) 4. Soy capaz de trabajar
Otras
mejoradas
(2)
Nada Mucho
5. El placer que consigo con el sexo es

Todas las
importantes
Nulo Mucho
75–100 resueltas
(3) 6. ¿Qué relación guardo con la comida?
Otras
mejoradas
(3)
Vivo para comer Como para vivir

SUBTOTAL SUBTOTAL SUBTOTAL

COMPLICACIONES: CLAVE DE PUNTUACIÓN DE LOS GRUPOS DE RESULTADOS


Pequeñas: reste 0,2 puntos Fracaso ⱕ1
Importantes: reste 1 punto PUNTUACIÓN
TOTAL Aceptable ⬎1 a 3 puntos
REOPERACIÓN: Bueno ⬎3 a 5 puntos
Reste 1 punto Muy bueno ⬎5 a 7 puntos
Excelente ⬎7 a 9 puntos
Capítulo 40 • Seguimiento a largo plazo y valoración de resultados en cirugía bariátrica 353

figura 40-1.20 El trabajo preliminar de este proyecto fue la campo. El PEP% se seleccionó originalmente porque es el
encuesta citada anteriormente. Además de la pérdida de parámetro más ampliamente usado y es fácil de calcular y
peso, la mayoría de los cirujanos se mostró de acuerdo con representar en forma de gráfico. La división en cuartiles sigue
el hecho de incluir los cambios en las enfermedades relacio- la clasificación propuesta por Reinhold.33 La valoración de las
nadas con la obesidad y la CV en la valoración de los resul- enfermedades fue modificada de Brolin y cols.;8 la lista de pato-
tados; sin embargo, no hubo consenso en lo que respecta al logías comórbidas y los criterios diagnósticos se seleccionaron
modo en el que se podría conseguir tal objetivo. Asimismo, en virtud de las recomendaciones de la American Obesity
no se obtuvieron definiciones claras de éxito y fracaso.27 Association y la Fundación Shape Up America!35 Se creó una lista
La idea de crear un sistema de puntuación para estandari- de posibles complicaciones tempranas y tardías, clasificadas
zar la presentación de los resultados fue desarrollada más tarde como importantes y poco importantes, según los protocolos
a partir de la selección de tres campos principales: pérdida de del IBSR. Los puntos se descuentan por las complicaciones y
peso, mejora en las patologías comórbidas y cambios en la cali- reoperaciones, sin clasificarlas como fracasos.
dad de vida. Los puntos se añaden o descuentan según los resul- Otra dificultad añadida fue encontrar un instrumento
tados postoperatorios. Se otorga un máximo de tres puntos por de calidad de vida sencillo, breve y fiable, específicamente

CUESTIONARIO DE CALIDAD DE VIDA MOOREHEAD-ARDELT


NIVELES DE AUTOESTIMA Y ACTIVIDAD

Por favor, marque la casilla para mostrar su respuesta.


1. Generalmente me siento

Muy mal conmigo Muy bien conmigo


mismo mismo

2. Disfruto de las actividades físicas

Nada Mucho

3. Tengo contactos sociales satisfactorios

Figura 40-2 Cuestionario de


calidad de vida II de Moorehead- Ninguno Muchísimos
Ardelt. (Copyright 1997, M. K.
Moorehead, PhD.) 4. Soy capaz de trabajar

Nada Mucho
5. El placer que consigo con el sexo es

Nulo Mucho
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

6. ¿Qué relación guardo con la comida?

Vivo para comer Como para vivir

Melodie K. Moorehead, Ph. D., Bariatric Surgery Clinical Psychologist, 1201 E. Broward Blvd., Ft. Lauderdale, FL 33301.
Elizabeth Ardelt, Ph. D., Institute für Psychologic, Universität Salzburg.
MOOREHEAD - ARDELT QUALITY OF LIFE QUESTIONNAIRE
SELF ESTEEM, AND ACTIVITY LEVELS
Copyright 1997 M.K. MOOREHEAD, Ph. D. (954) 524-5244
354 Sección VIII • RESULTADOS

referido a la obesidad, que provocó mi petición de que ciertamente importante a la hora de reducir los costes y
contribuyeran a su elaboración varios psicólogos de la aumentar la tasa de respuestas.
ASBS. La autoestima y cuatro campos de actividades dia- Mientras se desarrollaba el cuestionario, consideramos
rias tuvieron que ser incluidos en el cuestionario, siguien- que la autoestima de los pacientes era una prioridad en com-
do los trabajos de Wyss y cols.38 y Delin y cols.39 Se desa- paración con los otros cuatro conceptos. Sin embargo, tras
rrolló así el M-A QOLQ y se incorporó al BAROS. Este probar el instrumento en un entorno clínico, nos dimos
instrumento está recopilado en una página de diseño sen- cuenta de que esta suposición era inexacta. También lo
cillo, que usa dibujos de colores como ayuda visual. encontramos apropiado para incluir una sexta pregunta refe-
Originalmente las preguntas trataban cinco áreas princi- rida a la actitud de los pacientes en relación con la comida.
pales: autoestima, actividad física, vida social, condiciones Además, los dibujos fueron ligeramente modificados y se
laborales y actividad sexual. El vocabulario sencillo per- adoptó una escala analógica visual de 10 puntos que requirió
mite una traducción fácil a otros idiomas, superando las cambios en la leyenda de puntuación. El nuevo M-A QOLQ II,
barreras culturales, de nivel educativo y lingüísticas. El mostrado en la figura 40-2, ha sido recientemente validado
inventario no requiere un entrevistador y puede ser com- en ensayos clínicos en EE. UU. y Austria.40 La figura 40-3
pletado por el paciente en menos de un minuto, un hecho representa la leyenda de puntuación del nuevo cuestionario.

CUESTIONARIO DE CALIDAD DE VIDA MOORHEAD-ARDELT


NIVELES DE AUTOESTIMA Y ACTIVIDAD
1. Generalmente me siento

–0,50 –0,40 –0,30 –0,20 –0,10 +0,10 +0,20 +0,30 +0,40 +0,50

2. Disfruto de las actividades físicas

–0,50 –0,40 –0,30 –0,20 –0,10 +0,10 +0,20 +0,30 +0,40 +0,50

3. Tengo contactos sociales satisfactorios

–0,50 –0,40 –0,30 –0,20 –0,10 +0,10 +0,20 +0,30 +0,40 +0,50 Figura 40-3 Clave de puntua-
ción del cuestionario de calidad
4. Soy capaz de trabajar de vida II de Moorehead-Ardelt.
(Copyright 1997, M. K. Moorehead,
PhD.)

–0,50 –0,40 –0,30 –0,20 –0,10 +0,10 +0,20 +0,30 +0,40 +0,50

5. El placer que consigo con el sexo es

–0,50 –0,40 –0,30 –0,20 –0,10 +0,10 +0,20 +0,30 +0,40 +0,50

6. ¿Qué relación guardo con la comida?

–0,50 –0,40 –0,30 –0,20 –0,10 +0,10 +0,20 +0,30 +0,40 +0,50

–3 a –2,1 –2 a –1,1 –1 0 1 1,1 a 2 2,1 a 3


Muy mala Mala Aceptable Buena Muy buena
Calidad de vida
Capítulo 40 • Seguimiento a largo plazo y valoración de resultados en cirugía bariátrica 355

La puntuación final de BAROS se usa para clasificar los Actualmente, está claro que la valoración y la presentación
resultados en cinco grupos, fracaso, aceptable, bueno, muy de los resultados quirúrgicos deben incluir otras variables,
bueno y excelente y, a partir de ellos, establecer una definición además de las tasas de mortalidad, las complicaciones y las
clara de éxito y fracaso. Ello permite una valoración objetiva reoperaciones. Los riesgos y efectos adversos de la operación
de los resultados y facilita una comparación de resultados entre pueden disminuir los beneficios del tratamiento, en especial
varias técnicas quirúrgicas, subgrupos de pacientes y ciruja- en la calidad de vida. En el campo particular de la cirugía de
nos. La tabla 40-3 demuestra la utilidad del sistema para eva- la obesidad mórbida, la pérdida de peso es un criterio de éxi-
luar imparcialmente criterios distintos de la pérdida de peso. to global claramente insuficiente.
Este hipotético varón superobeso pierde sólo el 45% de su Una presentación de resultados satisfactoria tras la ciru-
exceso de peso. Según algunas definiciones de éxito, este sería gía bariátrica debe incluir la pérdida de peso a largo plazo,
un mal resultado, o incluso un fracaso. Sin embargo, el pacien- detalles de la técnica quirúrgica, la mortalidad, la morbilidad
te obtuvo una mejoría importante en las patologías comórbi- temprana y tardía y las reoperaciones causadas bien por las
das y en su calidad de vida. La puntuación final del BAROS de complicaciones o por el fracaso en la pérdida de peso. La tasa
cinco puntos considera que ha obtenido un «buen resultado», de reoperaciones por año es otro parámetro a tener en cuenta.
que, objetivamente, es un dato más real que el que lo califica El informe debe recoger el porcentaje de pacientes seguidos,
de «fracaso». Este innovador sistema de puntuación puede la media y la mediana del tiempo de seguimiento y el modo en
aplicarse a pacientes sanos sin enfermedades relacionadas con el que los pacientes perdidos en el seguimiento son incluidos
la obesidad y también puede usarse si la calidad de vida posto- en el análisis final. También es deseable el estudio de subgru-
peratoria no se ha estudiado (tabla 40-4). pos de pacientes. Como se ha tratado extensamente en este
El BAROS ha sido extensamente utilizado a nivel inter- capítulo, un informe de resultados de buena calidad ha de
nacional durante muchos años a la hora de presentar los incluir una valoración objetiva de los cambios postoperatorios
resultados de series individuales que estudiaban una o más en las patologías comórbidas de la obesidad y de las modifica-
operaciones, y a la hora de comparar los resultados de varios ciones en la calidad de vida que experimentan los pacientes.
autores y países, incluso si se han realizado diferentes técni- La evaluación de resultados en cirugía bariátrica se com-
cas operatorias.41-47 Este método ha sido aceptado como el plica por la ausencia de estándares que permitan establecer
estándar para presentar los resultados en Austria y en todos comparaciones y por las múltiples y arbitrarias definiciones de
los países de habla alemana, así como en Brasil y España. éxito y fracaso presentes en la bibliografía. Organizaciones
Prestigiosos cirujanos han recomendado que el BAROS sea como la ASBS y la IFSO deberían establecer unos criterios
adoptado como estándar por la ASBS y la IFSO.48-50 apropiados para definir qué es una operación en la que se
alcanza el éxito y tendrían también que adoptar estándares
uniformes para la valoración de los resultados y su presenta-
Z CONCLUSIONES ción. Tales estándares resultarían útiles para comparar los
efectos de la cirugía frente a los métodos no quirúrgicos para
La evaluación de los resultados postoperatorios es un aspec- el control de la obesidad. El BAROS satisface todos los requi-
to de gran relevancia para los investigadores quirúrgicos. sitos que han de solicitarse a un medio de valoración adecuado
para la investigación internacional. Este método proporciona
una evaluación basada en pruebas, de forma sencilla, no sesga-
Tabla 40-3 APLICACIÓN DE LA PUNTUACIÓN BAROS da, cómoda para el paciente y objetiva. Analiza la pérdida de
peso, los cambios en las patologías comórbidas de la obesidad
y en la calidad de vida y define los criterios diagnósticos y la
PREOPERATORIA POSTOPERATORIA PUNTOS
estratificación de la gravedad de las enfermedades. El instru-
150% de exceso de peso Pérdida del 45% 1 mento también tiene en cuenta la morbilidad temprana y tar-
Apnea de sueño/SHO Resuelta 2 día y las reoperaciones. La clave final de puntuación propor-
Hipertensión Mejorada ciona, por último, la clasificación más ajustada a las necesidades
Dislipidemia Mejorada de éxito y fracaso, dividiendo a los pacientes en cinco grupos.
Autoestima Mejor 2 El BAROS es, en definitiva, el mejor método de evalua-
Actividades Mejoradas ción para el desarrollo de estándares destinados a la valoración
Total 5 y la presentación de resultados en cirugía bariátrica.
Puntuación de resultado de BAROS BUENA
Ejemplo de un paciente varón de 45 años, altura: 1,83 m; peso: 185 kg;
IMC: 55; peso ideal: 74 kg; exceso de peso: 111 kg; ninguna complicación
o reoperación. Z BIBLIOGRAFÍA
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© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

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Fracaso 0 puntos o menos 473-483.
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Bueno ⬎ 1,5 a 3 puntos experience. N Engl J Med 1988;318:1549-1556.
Muy bueno ⬎ 3 a 4,5 puntos 5. Donabedian A: The quality of care: how can it be assessed? JAMA
Excelente ⬎ 4,5 a 6 puntos 1988;260:1743-1748.
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Clasifica grupos de resultados en pacientes sin patologías comórbidas; J Gastroenterol Hepatol 1999;11:77-84; and in Deitel M, Cowan G (eds):
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356 Sección VIII • RESULTADOS

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41
Resultados nutricionales
de la cirugía bariátrica
John B. Dixon, M.B.B.S., Ph.D, F.R.A.C.G.P., y Paul E. O´Brien, M.D., F.R.A.C.S.

Para el obeso, los beneficios de la pérdida de peso son abru- dida de peso.2 Creemos que esos criterios son igualmente
madores. Las enfermedades asociadas con la obesidad mejo- apropiados para los procedimientos quirúrgicos bariátricos:
ran o remiten por completo, la calidad de vida mejora y se
registran importantes beneficios psicosociales importantes.1 1. La dieta debe ser segura e incluir adecuadas vitaminas,
Sin embargo, para alcanzar estos beneficios, debemos recor- minerales y proteínas. Ha de ser baja en energía pero no
dar el primer principio de la asistencia sanitaria: primum non en nutrientes esenciales y tiene que proporcionar una
nocere –en primer lugar, no hacer daño–. Puede que tenga- cantidad adecuada de fibra dietética.
mos que pagar cierto precio nutricional por la pérdida de 2. Los programas de pérdida de peso deben dirigirse hacia una
peso. Debemos comprometernos a minimizar o retrasar este pérdida de peso lenta, regular, a menos que el estado de
coste, con el fin de que se puedan alcanzar beneficios nutri- salud del paciente requiera una pérdida más rápida de peso.
cionales plenos, especialmente los secundarios a la cirugía 3. La dieta debe ser apetecible y aceptable para el paciente,
bariátrica. En el presente capítulo, revisamos los diversos de modo que pueda obtenerse un alto nivel de cumpli-
problemas nutricionales que se han identificado asociados a miento.
la cirugía bariátrica, caracterizamos los mecanismos de su 4. Deben ponerse en marcha estrategias para el manteni-
producción y definimos estrategias para minimizarlos. miento del peso.
Los problemas nutricionales de los procedimientos bariá-
tricos reflejan los mecanismos del efecto de cada procedimien- Así, las estrategias dietéticas tienen que ser complementa-
to. La pérdida de peso se alcanza reduciendo el consumo o la das por un cambio en el comportamiento y un aumento de la
absorción de nutrientes. Hay dos mecanismos fundamentales actividad física. Además, hay una serie de consideraciones espe-
para reducir ese consumo. En primer lugar, se puede reducir cíficas referidas a cada una de las técnicas quirúrgicas usadas
creando una sensación de saciedad, reduciendo la sensación de para alcanzar la pérdida de peso. Los procedimientos con un
fondo casi constante de hambre, de forma que se evite la con- componente de derivación o malabsorción presentan una
tinua necesidad de comer. Es probable que este sea uno de los mayor probabilidad de dar lugar a carencias específicas o ries-
componentes de la mayoría de procedimientos bariátricos gos metabólicos, en tanto que las técnicas que son muy restric-
pero, en general, este mecanismo se ha estudiado y documen- tivas pueden conducir a patrones de comida mal adaptados,
tado escasamente. Hemos demostrado que este es un impor- ocasionando importantes cambios en la ingesta de nutrientes.
tante efecto tras la cirugía de banda gástrica ajustable laparos- La derivación yeyunoileal (DYI), una técnica que ya no
cópica (BGAL). En segundo lugar, los procedimientos se realiza, se considera como un ejemplo clásico de procedi-
bariátricos pueden crear una sensación de plenitud precoz tras miento de malabsorción que producía una plétora de proble-
comenzar a comer, induciendo así una sensación de saciedad mas metabólicos y carencias nutricionales importantes.
precoz. Este es el denominado efecto restrictivo, más destaca- Quizás proporciona un modelo de los potenciales problemas
do como mecanismo en la gastroplastia, pero también impor- nutricionales que pueden seguir a una cirugía menos invasiva.
tante en la BGAL y en la derivación gástrica en Y de Roux Las complicaciones a largo plazo de la DYI incluían artralgias
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

(DGYR). El papel de la malabsorción de los nutrientes como o artritis, urolitiasis por oxalato, enfermedad ósea metabóli-
un mecanismo de los procedimientos bariátricos actuales varía ca,3 múltiples déficits de vitaminas y minerales4-6 e insuficien-
ampliamente con el procedimiento usado. Destaca más tras la cia hepática.7 Tales complicaciones no sólo eran consecuencia
derivación biliopancreática (DBP) y su variante de cruce duo- de la malabsorción, sino también de los efectos tóxicos adicio-
denal, pero es indudablemente importante después de todas las nales del sobrecrecimiento bacteriano gastrointestinal.
formas de DGYR. Puede establecerse un perfil de posible mal-
nutrición para cada procedimiento bariátrico actual y es obli-
gatorio tomar conciencia de este perfil si queremos prestar un Z CARENCIAS DE MACRONUTRIENTES
adecuado seguimiento de la asistencia del paciente.
Los siguientes criterios nutricionales han sido propuestos El déficit de proteínas, o malnutrición, ha sido hasta hace
por el Dr. Luc Van Gaal para los programas dietéticos de pér- poco la única área de investigación de la carencia de macro-
357
358 Sección VIII • RESULTADOS

nutrientes subsiguiente a cirugía bariátrica. El déficit de Z CARENCIAS DE MICRONUTRIENTES


carbohidratos no ha sido en general objeto de estudio, aun-
que recientemente ha surgido cierta preocupación en lo que Hierro
se refiere al déficit de ácidos grasos esenciales asociado a la
malabsorción de las grasas. El hierro se absorbe en su forma ferrosa y el ácido gástrico
colabora en la conversión del ion férrico de los alimentos a su
Malnutrición proteica forma ferrosa. Se absorbe mejor en el duodeno y en la porción
proximal del yeyuno. La anemia por carencia de hierro es una
Una reducción importante en el consumo energético o en la complicación común de la cirugía de derivación gástrica,19 que
absorción que aparece tras la cirugía bariátrica conduce a una puede ser consecuencia de varios factores inducidos quirúrgica-
rápida pérdida de peso. Con el fin de proporcionar sustratos mente. Cabe citar entre ellos el hecho de que la derivación gás-
oxidativos esenciales para la función metabólica y cerebral, es trica limita la exposición de los alimentos al ácido gástrico; el
necesaria una movilización de los ácidos grasos libres del teji- que la región de la absorción óptima del hierro sea cortocircui-
do adiposo y de los aminoácidos desde el músculo. Como los tada por la cirugía; y el que el consumo de carne se reduce a
aminoácidos son desviados hacia la gluconeogenia, la síntesis menudo tras la derivación gástrica.20,21 Brolin y cols. notificaron
de proteínas y la tasa metabólica se reducen. En este contexto, carencias de hierro en el 32% de un grupo de pacientes someti-
hay una disminución concomitante de la masa corporal, tanto dos a un seguimiento medio de 2 años tras la derivación, y de
grasa como magra. El consumo de proteínas puede reducirse estos, el 67% desarrolló anemia.22 Aproximadamente 42 meses
de forma desproporcionada como consecuencia de la intole- después de la cirugía, el 47% presentaba déficit de hierro y casi
rancia a alimentos con alto contenido proteico, aumentando un tercio anemia microcítica.23 La carencia de hierro no parece
de este modo la pérdida de masa corporal magra.8 La movili- ser muy común en individuos que han sido sometidos a deriva-
zación de los aminoácidos desde el músculo aporta algo de ción gástrica de asa larga (150 cm de yeyuno sin función), cuan-
síntesis de albúmina; los bajos niveles postoperatorios de do se procede a la comparación con la técnica estándar (75 cm
albúmina reflejan una importante depleción proteica. de yeyuno sin función). Los niveles bajos de hierro continúan
El grado de malnutrición proteica que se da tras la cirugía siendo un problema importante años después de haber realizado
bariátrica no se conoce con precisión, ya que los criterios diag- una intervención de derivación gástrica, cuando el peso es esta-
nósticos varían de estudio a estudio. Sin embargo, la malnutri- ble y, por tanto, el consumo y el gasto energético están equili-
ción proteica es una complicación grave, y puede registrarse brados.24 El suplemento rutinario con micronutrientes no pre-
con una pérdida de peso rápida y continuada o con una pérdi- viene la carencia de hierro o la anemia, si bien un suplemento
da excesiva, tras cualquier forma de cirugía bariátrica. Es pro- considerable de hierro oral, de 350 mg dos veces al día, fue capaz
bable que la malnutrición proteica vaya acompañada de una de evitar el desarrollo de déficit de hierro en la mayor parte de
amplia diversidad de carencias nutricionales. Varios informes un grupo de mujeres con menstruación.25 Es importante dispo-
de casos tratan los resultados de la gastroplastia.9,10 De ellos se ner de depósitos adecuados de hierro antes del último trimestre
deduce que el riesgo parece ser mayor en los procedimientos del embarazo, porque en él puede aparecer una anemia ferropé-
que tienen un componente significativo de malabsorción. nica refractaria cuando las demandas fetales de esta sustancia
como la DGYR, en especial la derivación gástrica distal11,12 y son muy elevadas. Por tanto, para prevenir su carencia, se
la DBP.13,14 La variante de cruce duodenal de la DBP puede dar requiere un suplemento importante de hierro, en especial en
lugar a menores riesgos que la operación original.15 mujeres con la regla.26 Es pertinente observar que se esperan
El abordaje de la malnutrición proteica requiere una valo- unos niveles bajos de hierro tras una gastrectomía tanto parcial
ración del problema subyacente, alimentación enteral asistida o como total. Un seguimiento tardío, de 25 a 30 años después de
nutrición parenteral y corrección de cualquier déficit nutricio- una gastrectomía subtotal, observó déficit de hierro y de vitami-
nal asociado. En ocasiones es necesaria cirugía de revisión para na B12 en el 90% de las mujeres y en el 70% de los hombres,
mejorar la absorción intestinal. La recuperación puede ser bas- indicando la necesidad de monitorización bioquímica y de un
tante lenta y debe ser monitorizada cuidadosamente. suplemento indefinido a largo plazo.27 Cabe esperar que la deri-
vación gástrica continúe dando lugar a este tipo de problemas.
Ácidos grasos esenciales La carencia de hierro puede aparecer tras gastroplastia
o BGAL como consecuencia de una ingesta dietética redu-
Los procedimientos que dan lugar a una importante malab- cida, relacionada principalmente con una disminución del
sorción de grasas también afectan a la absorción de vitami- consumo de carne, aunque no se trata de un hecho común o
nas liposolubles y ácidos grasos esenciales. Los ácidos grasos previsible.27 La DBP también puede reducir la absorción de
esenciales, ácido linoleico y ácido ␣-linoleico, son los pre- hierro en el intestino y se ha informado de frecuentes casos
cursores de la producción de prostaglandinas y leucotrienos. de anemia ferropénica cuando no se aportan los correspon-
Su carencia puede producir alopecia, dermatitis, trombo- dientes suplementos.28,29 Limitar la resección gástrica y con-
citopenia y anemia. Desgraciadamente, muy pocos estudios servar la continuidad del antro, el píloro y el bulbo duodenal
han examinado los potenciales problemas asociados a los áci- son medidas que pueden ayudar a minimizar estos efectos.
dos grasos esenciales tras la cirugía bariátrica. Los indivi- En realidad, un estudio ha informado que los niveles de
duos obesos presentan bajos niveles plasmáticos de ácidos ferritina se mantienen mejor tras la variante DBP/CD de la
grasos esenciales y vitamina E durante la restricción dieté- operación.15 El procedimiento de cruce duodenal también
tica, y es más que probable que la malabsorción de grasas se reduce el riesgo de pérdida de hierro asociado a hemorragia
asocie con déficit de ácidos grasos.16,17 Un estudio ha infor- gastrointestinal producido por las úlceras del estoma.
mado de carencias de ácidos grasos esenciales un año des- Tras cualquier intervención con un componente de deri-
pués de la derivación biliopancreática/cruce duodenal (DBP/ vación, son necesarios suplementos regulares y adecuados de
CD).18 La calidad de la grasa dietética puede ser muy impor- hierro para prevenir su carencia. En todos los abordajes
tante tras la cirugía bariátrica, especialmente en el caso de la de cirugía bariátrica deben monitorizarse los niveles de hemo-
que causa malabsorción de grasas. globina, hierro sérico y ferritina. El déficit de hierro se trata
Capítulo 41 • Resultados nutricionales de la cirugía bariátrica 359

con hierro oral. El sulfato ferroso, en dosis de 200 mg tres niños alimentados con leche materna.39,40 El déficit no parece
veces al día, es una opción sencilla y barata.30 Los comprimi- ser más común en pacientes con derivación gástrica de asa larga
dos de hierro pueden producir irritación local y erosión de la que en aquellos que han sido sometidos a la técnica estándar.23
mucosa gástrica. Como consecuencia de ello, si se sospecha Los informes de carencia importante de vitamina B12
una restricción gástrica importante o un vaciamiento retrasa- tras la DBP son escasos, aunque similares a aquellos que se
do, es a veces más apropiado un preparado líquido.31 Los com- refieren a los registrados tras DGYR.41 Teóricamente, la
primidos de hierro están con frecuencia recubiertos, por lo variante de cruce duodenal de esta operación debería pro-
que se requiere la presencia de ácido gástrico para permitir la porcionar menos riesgos de déficit de vitamina B12. No dis-
completa biodisponibilidad. Por tanto, tras la derivación gás- ponemos de datos al respecto.
trica, también puede ser apropiado un preparado líquido. La
adición de ácido ascórbico incrementa la absorción. Una vez Folato
que los depósitos de hierro se han cubierto, la dosis diaria de
hierro puede, habitualmente, reducirse para mejorar el cum- El folato es una vitamina hidrosoluble que funciona como
plimiento; menores dosis reducen la incidencia de los frecuen- coenzima de transferencia unida al carbón para la síntesis de
tes efectos secundarios gastrointestinales. El cumplimiento es purinas y pirimidinas y para la conversión de los aminoáci-
importante. Si el suplemento es inadecuado, la anemia ferro- dos. Se absorbe sobre todo en el tercio proximal del intestino
pénica recidiva.32 El hierro parenteral sólo debe usarse cuando delgado y es parcialmente pH-dependiente. La atrofia gástri-
hay intolerancia a al menos dos tipos de preparaciones de ca, la aclorhidria y la gastrectomía se han asociado con varia-
hierro o si existe incumplimiento.30 bles de malabsorción del folato.42 Sin embargo, un aumento
de la presencia de bacterias en el intestino delgado favorece
Vitamina B12 la producción bacteriana elevada de folato, contrarrestando
este efecto.43 En un estudio, se registraron niveles bajos de
Las únicas fuentes dietéticas de vitamina B12 son los productos folato en el 30% de los pacientes sometidos a gastrectomía
animales—carne y lácteos–. El déficit de esta vitamina induce total o subtotal. La carencia puede atribuirse a consumo
anemia megaloblástica y, a través de la desmielinización, poten- inadecuado; a demanda elevada, por ejemplo durante el
ciales cambios neurológicos irreversibles, incluidas neuropatía embarazo, o a malabsorción. Los depósitos de folato no duran
periférica, degeneración medular combinada subaguda, atrofia más que unos meses después de cesar la ingesta.
del nervio óptico y demencia. La insuficiencia o el déficit de Se ha establecido que los suplementos de ácido fólico
vitamina B12 incrementan las concentraciones de homocisteína, pueden prevenir los defectos del tubo neural.44 Mills y cols.
produciendo una mayor disfunción endotelial y aumentando el han detectado niveles elevados de homocisteína en mujeres
riesgo de enfermedades arterioscleróticas y tromboembólicas portadoras de fetos con defectos del tubo neural.45,46 Su
venosas. Es probable que también se incremente el riesgo de hipótesis es que es probable que la enzima metionina sinte-
alteraciones congénitas, incluidos los defectos del tubo neural. tasa, dependiente del folato y la vitamina B12 constituya la
El ácido gástrico facilita la liberación de vitamina B12 de los vía crítica y que sea necesario un nivel adecuado de metioni-
alimentos y su acoplamiento al receptor gástrico R. La digestión na para el cierre del tubo neural. Cuskelly y cols.47 mostra-
de este complejo en el duodeno permite la liberación de la vita- ron que incrementar el ácido fólico dietético era inadecuado,
mina B12 que, a continuación, se une al factor intrínseco (FI), un por lo que a las mujeres que pueden quedar embarazadas se
producto de las células gástricas parietales. El complejo vitami- les recomienda un suplemento de 400 μg diarios para preve-
na B12-FI es absorbido a continuación con la asistencia de recep- nir los defectos del tubo neural.44,48 El déficit de folato tam-
tores específicos en el íleon distal. Los depósitos corporales de bién se asocia con anemia megaloblástica y aumento del ries-
vitamina B12 son habitualmente considerables y, cuando la go cardiovascular.
absorción cesa bruscamente, el déficit tarda más de un año en Se ha comunicado que el déficit de folato es común tras
aparecer. Es poco probable que la absorción de la vitamina B12 cirugía de DGYR.9,49 Sin embargo, su incidencia varía amplia-
sea un problema en procedimientos gástricos restrictivos. mente. Con un consumo oral adecuado de suplementos, el défi-
La carencia de vitamina B12 es común tras la DGYR y no cit se previene fácilmente.50,51 En la mayoría de los casos, un
se previene mediante la administración de preparados multivi- suplemento de folato de 400 μg diarios minimiza los niveles de
tamínicos estándar. En este contexto, la prueba de Schillings homocisteína,52 y esta es la dosis mínima recomendada para
puede ser normal o anormal. Una prueba anómala se asocia todos los pacientes tras la cirugía bariátrica. Hemos demostra-
generalmente a FI reducido o ausente en el jugo gástrico.36,37 En do que, tras cirugía de BGAL, esta dosis resulta suficiente para
presencia de una prueba de Schillings normal, es posible que mantener tanto las concentraciones adecuadas de folato como
exista una carencia de esta sustancia debida a la reducción de la los niveles bajos óptimos de homocisteína. No hay datos que
actividad de pepsina ácida, que no logra liberar la vitamina B12 indiquen una dosis adecuada de folato para mantener los niveles
unida a la proteína, o a una combinación intestinal inadecuada óptimos de homocisteína tras la DGYR o la DBP.
del complejo vitamina B12-FI, que puede impedir una acción
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terapéutica adecuada.38 El déficit de vitamina B12 se observa en Vitamina B6


cerca del 30% de pacientes que reciben la dosis diaria recomen-
dada, lo que indica que la suplementación de rutina es a veces La forma coenzimática de la vitamina B6 es el fosfato de piri-
inadecuada.35 Tras la derivación gástrica se requiere un suple- doxal, un cofactor esencial y estabilizador de muchas enzimas
mento específico de vitamina B12, y una dosis de 350 μg de B12 relacionadas con el metabolismo de los aminoácidos. La vita-
cristalina oral se ha demostrado adecuada en el 95% de los mina B6 se encuentra en muchos alimentos y se absorbe rápida-
pacientes.38 A los 22 meses de la cirugía de derivación gástrica, mente, por lo que su carencia es poco frecuente. Sus necesida-
se observan niveles bajos de vitamina B12 en un alto porcentaje des aumentan durante el embarazo y con el uso de estrógenos.
de pacientes (36%). El déficit de vitamina B12 en madres lactan- Se registran carencias en pacientes tratados con antagonistas
tes se asocia con bajos niveles de esta vitamina en la leche mater- del piridoxal, por ejemplo isoniazida y penicilamina. En ocasio-
na y se han comunicado casos de carencias de la vitamina en nes se requieren suplementos durante el embarazo o en pacien-
360 Sección VIII • RESULTADOS

tes que toman anticonceptivos orales. No se ha informado de a vómitos, y administrando precozmente suplemento de vita-
carencias específicas tras la cirugía bariátrica. mina B12 por vía parenteral si estos persisten.60,64 Los proce-
sos neurológicos que ocurren en la etapa temprana tras la
Homocisteína: pérdida de peso y niveles elevados cirugía han de considerarse como altamente sospechosos, por
de homocisteína plasmática lo que debe iniciarse un tratamiento urgente con vitamina
B1.65 El suplemento multivitamínico rutinario tras cada una
No existen pruebas sólidas de que los niveles de homocisteína de las formas de cirugía bariátrica ha de incluir vitamina B1.
plasmática en ayunas se eleven con la pérdida de peso.53,55 El Resulta de interés un reciente informe que describe un des-
nivel elevado de homocisteína, un aminoácido, se asocia con una censo en los niveles de vitamina B1 tras gastrectomía distal o total
amplia diversidad de alteraciones cardiovasculares, incluidos por cáncer. En dicho informe, el problema se detectó en los pri-
infarto de miocardio, ictus cerebral y enfermedad tromboem- meros 6 meses tras la cirugía66 y ello resalta aún más la necesidad
bólica,56 y se considera un factor de riesgo independiente para la de administrar de inmediato un suplemento. El diagnóstico de
enfermedad cardiovascular,57 junto con el sobrepeso, el taba- laboratorio de la carencia de tiamina se establece habitualmente
quismo, la hipertensión arterial, la hipercolesterolemia y la dia- midiendo la actividad de la transcetolasa. La tiamina es una
betes tipo 2. La elevación de la homocisteína tiene un efecto coenzima para la reacción de transcetolasa. Un déficit agudo
tóxico directo sobre el endotelio vascular, que conduce a su dis- debe tratarse con 100 mg diarios de tiamina por vía parenteral
función, paso inicial clave en el proceso aterogénico.58 En el durante 7 días, seguidos por un suplemento oral adecuado.
metabolismo de la homocisteína existen tres micronutrientes
que son cofactores importantes. El folato y la vitamina B12 son Calcio, vitamina D y enfermedad ósea metabólica
cofactores para la metilación de la homocisteína al aminoácido
esencial metionina y la vitamina B6 participa en su catabolismo. Funcionalmente, la vitamina D es una hormona más que una
La elevación de los niveles plasmáticos de homocisteína con la vitamina y, con una adecuada exposición a la luz solar, no se
pérdida de peso se produce, independientemente de cuáles sean necesita ningún consumo dietético. La producción de su forma
los niveles plasmáticos de folato y vitamina B12, pero responde a activa, la 1,25(OH)2D3, parece ser regulada fisiológicamente por
la administración de suplementos de ambos. Con la pérdida de las concentraciones de calcio extracelular y de hormona parati-
peso, se requieren niveles más elevados de micronutrientes plas- roidea. La absorción oral de la vitamina D ocurre a través de los
máticos para mantener niveles bajos óptimos de homocisteína.55 quilomicrones y se ve afectada por procesos que causan esteato-
Se recomienda, por tanto, que todos los pacientes sometidos a rrea. La producción cutánea de la vitamina D puede ser inade-
cirugía bariátrica tomen suplementos adecuados de folato, vita- cuada si la exposición a los rayos ultravioleta es escasa, como
mina B12 y vitamina B6, y que su niveles de homocisteína plas- durante la exposición solar limitada, en latitudes altas en invier-
mática en ayunas sean monitorizados.59 Niveles de homocisteí- no, en caso de tener una pigmentación de melanina aumentada
na mayores de 15 μmol/L son anormalmente altos. La American y debido a factores atmosféricos como la contaminación. El cal-
Heart Association recomienda mantener los niveles de homocis- cio es absorbido principalmente por transporte activo en el duo-
teína por debajo de 10 μmol/L. Para ello deben proporcionarse deno y en la porción proximal del yeyuno, un proceso estrecha-
los correspondientes suplementos. mente ligado al de la forma activa de la vitamina D.
La enfermedad ósea metabólica es una complicación a
Tiamina (vitamina B1) largo plazo bien documentada de la cirugía bariátrica. Sus
síntomas en adultos son a menudo inespecíficos, por lo que
Para el metabolismo de los aminoácidos ramificados y los car- su diagnóstico suele ser tardío. El dolor esquelético genera-
bohidratos se requiere pirofostafo de tiamina. Esta sustancia es lizado, la debilidad muscular y la sensibilidad de los huesos
absorbida rápidamente por mecanismos pasivos y activos, y su son síntomas habituales, y pueden presentarse también frac-
mayor carencia se debe a una ingesta escasa en la dieta. El alma- turas patológicas. El diagnóstico de esta enfermedad es a
cenamiento corporal total es de aproximadamente 30 mg y su menudo complejo, ya que los síntomas pueden remedar otras
vida media biológica oscila entre los 9 y los 18 días. patologías. Los responsables de la asistencia a pacientes
La carencia de esta vitamina provoca anorexia, irritabi- sometidos a cirugía bariátrica han de mantener un bajo
lidad, apatía y debilidad generalizada. Un déficit más prolon- umbral de sospecha, para excluir enfermedad ósea metabó-
gado produce síndromes de beriberi húmedo o seco. En lica cuando existan síntomas vagos pero sospechosos.
ambas formas, los pacientes refieren dolor y parestesias. El Los procedimientos restrictivos gástricos no afectan a la
beriberi húmedo se presenta con una insuficiencia cardíaca absorción de calcio o vitamina D y, si el consumo sigue sien-
congestiva de alto gasto y neuritis periférica. El beriberi seco do adecuado, es poco probable que se desarrolle una enfer-
se presenta con neuropatía periférica mixta simétrica, moto- medad ósea metabólica. Un estudio realizado con 18 pacien-
ra y sensitiva. El sistema nervioso central también puede ver- tes seguidos durante cerca de 2 años tras gastroplastia vertical
se afectado por la encefalopatía de Wernicke, que se caracte- con banda (GVB) observó una caída pequeña pero significa-
riza por nistagmo, oftalmoplejía, ataxia cerebelar y alteración tiva en la densidad mineral femoral superior, aunque no en la
mental. La adición de pérdida de memoria y confabulación se lumbar. Hubo un aumento en la excreción urinaria de
conoce con el nombre de síndrome de Wernicke-Korsakoff, hidroxiprolina pero no se detectaron pruebas de hiperparati-
un proceso descrito habitualmente en alcohólicos. roidismo o carencia de vitamina D.67 Estos hallazgos han
El síndrome de Wernicke-Korsakoff es una complica- sido confirmados tras cirugía de BGAL.68 En un pequeño
ción nutricional grave que puede aparecer después de una estudio de 17 pacientes sometidos a BGAL, no encontramos
pérdida de peso rápida tras la cirugía bariátrica. La mayoría reducción alguna en la densidad mineral ósea corporal total
de los informes de casos citan vómitos persistentes o graves, al cabo de una media de 30 meses de la cirugía.69
junto con pérdida de peso rápida en una etapa temprana tras Es probable que la derivación gástrica con exclusión duode-
la cirugía como habituales factores precipitantes. Los trastor- nal reduzca la absorción de calcio, que se absorbe principalmen-
nos neurológicos relacionados con la tiamina se previenen te en el duodeno y en la porción proximal del yeyuno. Una
tratando adecuadamente cualquier complicación que dé lugar ingesta insuficiente de calcio o vitamina D produce hiperpara-
Capítulo 41 • Resultados nutricionales de la cirugía bariátrica 361

tiroidismo secundario y enfermedad ósea metabólica.70,71 Se te.13,28 También se ha informado de algún caso de mejoría
dispone de un conocimiento detallado de los cambios óseos que espontánea tardía en la enfermedad ósea metabólica tras DYI,
siguen a una gastrectomía por úlcera o cáncer,72,73 pero se sabe lo que sugiere una posible adaptación a largo plazo.81
menos de los efectos de la exclusión gástrica y duodenal que El consumo de vitamina D y calcio debe ser valorado en
siguen a la cirugía bariátrica.74 Es posible que la enfermedad todos los pacientes sometidos a cirugía bariátrica. Todos ellos
ósea metabólica que sucede a una gastrectomía puede que no se han de tratarse con entre 1200 y 1500 mg de calcio y 800 UI
presente durante años. La patología se caracteriza por calcio de vitamina D al día. Tras los procedimientos en los que es
urinario bajo, fosfatasa alcalina elevada, nivel elevado de hormo- probable que haya malabsorción de calcio y vitamina D, se
na paratiroidea y, en algunos casos, un nivel bajo de 25(OH)D3. recomienda una valoración selectiva anual de los niveles de
La histología ósea puede mostrar un cuadro mixto de osteopo- calcio, fosfatasa alcalina, 25(OH)D3 y hormona paratiroidea.77
rosis y osteomalacia.75 La enfermedad ósea metabólica ha sido El aumento de la fosfatasa alcalina o de la hormona paratiroi-
descrita tras una DGYR. Shaker y cols. citan dos casos de muje- dea puede ser el primer signo bioquímico de enfermedad ósea
res con enfermedad ósea metabólica e hiperparatiroidismo aso- metabólica e indicar la necesidad de aumentar el tratamiento
ciado. También fueron examinadas otras seis mujeres. En siete con calcio y vitamina D. La enfermedad ósea metabólica se
del total de ocho analizadas se registraban niveles elevados de trata con suplementos de calcio y vitamina D, a menudo en
hormona paratiroidea y seis presentaban baja excreción de calcio dosis elevadas, siendo necesario monitorizar la idoneidad del
urinario. Tanto la densidad mineral media de la columna lum- tratamiento mediante evaluación bioquímica.
bar como la de la cadera estaban por debajo de los niveles que se
habían previsto en el grupo.76 Preocupa el hecho de que que
Crowley y cols. encontraran que tras cirugía de DGYR el 90% Micronutrientes
de los pacientes estuvieran tomando una cantidad inadecuada de
vitamina D y el 54% hiciera lo propio con respecto al calcio.70 CINC
Se ha registrado un caso clínico de enfermedad ósea metabólica Se han notificado casos de baja ingesta de cinc en individuos
17 años después de la derivación gástrica.77 Se ha comunicado, obesos, dándose el caso de que dicha ingesta disminuye cuando
asimismo, que en pacientes sometidos a DGYR distal se produ- el consumo calórico es reducido.82 Se ha propuesto la hipótesis
ce hipocalcemia en un 13% de los casos y se registran niveles de que la pérdida de peso tras GVB pueda ser causada por un
bajos de vitaminas A y D en un 23%.12 déficit de cinc, debido a que el suplemento de cinc detiene la
Un estudio realizado en EE. UU. con 17 adultos consecu- pérdida de peso y favorece su aumento.83 También es probable
tivos con osteomalacia por déficit de vitamina D puso mostró que los procedimientos malabsortivos reduzcan los niveles de
que todos presentaban trastornos gastrointestinales y 12 tenían cinc. Un informe indica que el 69% de los pacientes tenían
antecedentes de cirugía gastrointestinal productora de malab- bajos niveles de cinc 1 año después de la cirugía de DBP/CD.18
sorción. Los procedimientos incluyeron seis cirugías bariátri- El cinc debería incluirse en el suplemento multivitamínico des-
cas, cuatro gastrectomías, una resección intestinal por enfer- pués de cualquiera de las formas de cirugía bariátrica.
medad de Crohn y un procedimiento de Whipple. Casi
siempre los pacientes presentaban síntomas significativos de VITAMINAS A, E Y K
osteomalacia, aunque sólo en pocos casos este diagnóstico se Los procedimientos que producen una significativa malab-
había considerado antes de su derivación. Hubo un largo sorción de grasa también afectan la absorción de vitaminas
período entre la cirugía gastrointestinal y el desarrollo de liposolubles y ácidos grasos esenciales. Se ha informado de
osteomalacia y un largo desfase entre el desarrollo de los sín- casos de carencias sintomáticas. La ceguera nocturna y el
tomas y el diagnóstico. Los mejores indicios no invasivos para tiempo de protrombina prolongado han respondido a los
la consecución del diagnóstico fueron los antecedentes del suplementos de vitamina A y D tras DYI. Se ha notificado un
paciente y los niveles elevados de fosfatasa alcalina y hormona caso de ceguera nocturna materna y daño retiniano fetal tras
paratiroidea. En todas las personas en las que es posible que DBP.84 Pocos estudios han examinado los potenciales proble-
exista una carencia de vitamina D, se recomienda un examen mas asociados vitaminas liposolubles y ácidos grasos esencia-
anual de los niveles de 25(OH)D3 y hormona paratiroidea.78 les tras cirugía bariátrica. Un estudio refirió carencias de áci-
La enfermedad ósea metabólica aparece con frecuencia dos grasos esenciales un año después de DBP/CD y el mismo
tras la cirugía de DBP. Compston y cols. indicaron que, en la estudio encontró que un tercio de los sujetos presentaba nive-
mayoría de los pacientes, la patología se caracterizaba por les bajos de vitamina A.18 La calidad de la grasa de la dieta es
mineralización defectuosa, tasa de formación ósea disminuida una variable importante tras la cirugía bariátrica, en especial
y aumento de la resorción ósea. Dentro del grupo de estudio, el en el caso de técnicas que ocasionan malabsorción grasa.
22% de los pacientes eran hipocalcémicos, aunque las concen-
traciones séricas de 25(OH)D3 eran normales en todos ellos.79 M AGNESIO
Para prevenir el problema, se aconseja una ingesta oral elevada Se ha informado de niveles muy bajos de magnesio tras la
de calcio y vitamina D suplementaria.28 La variante de cruce DYI y de niveles normales tras los procedimientos restricti-
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duodenal puede proporcionar concentraciones medias de calcio vos gástricos. No obstante, se desconoce el efecto sobre los
mayores, niveles más bajos de hormona paratiroidea y dar lugar niveles de magnesio de los procedimientos malabsortivos
a que una proporción mucho menor de pacientes refieran dolor realizados actualmente, como la DBP y la DBP/CD.
óseo tras el procedimiento de DBP con gastrectomía distal.15
En un reciente informe sobre los marcadores nutricionales que
siguen al procedimiento de cruce duodenal se observaron nive- Z RESUMEN DE LAS CONSECUENCIAS
les medios anómalos de hormona paratiroidea 2 años después NUTRICIONALES DE LOS PROCEDIMIENTOS
de la cirugía, indicando un alto riesgo de enfermedad ósea BARIÁTRICOS ACTUALES
metabólica en la mayoría de pacientes.80 El máximo de desmi-
neralización ósea parece ocurrir aproximadamente 4 años tras Este resumen de las consecuencias nutricionales debe consi-
la cirugía, mientras que no constituye un problema crecien- derar las cirugías en la siguiente secuencia: BGAL, GVB,
362 Sección VIII • RESULTADOS

DGYR y, finalmente, DBP o DBP/CD. Los retos asociados


a los procedimientos menos invasivos aumentan de forma Tabla 41-1 RIESGO ESTIMADO DE CARENCIAS
notable en los procedimientos de derivación y malabsortivos ESPECÍFICAS O REQUERIMIENTOS
más invasivos (tabla 41-1). AUMENTADOS EN FUNCIÓN DEL TIPO
DE CIRUGÍA REALIZADA
Banda gástrica ajustable laparoscópica BGAL GVB DGYR DBP DBP/CD

Habitualmente, la pérdida de peso que sigue a la BGAL se con- Hierro ⫹ ⫹ ⫹⫹⫹ ⫹⫹⫹ ⫹⫹
Tiamina ⫹ ⫹⫹ ⫹ ⫹ ⫹
trola bien y el riesgo de desarrollar vómitos persistentes y un
Vitamina B12 ⫹ ⫹ ⫹⫹⫹ ⫹⫹ ⫹⫹
comportamiento alimentario mal adaptado es muy bajo, dada la
posibilidad de ajuste de la banda. Ello reduce el riesgo de caren- Folato ⫹⫹ ⫹⫹ ⫹⫹ ⫹⫹ ⫹⫹
cias nutricionales. Sin embargo, para mantener bajos los niveles Calcio ⫹ ⫹ ⫹⫹ ⫹⫹⫹ ⫹⫹⫹
de homocisteína se necesitan unas cantidades adecuadas de fola- Vitamina D ⫹ ⫹ ⫹ ⫹⫹⫹ ⫹⫹⫹
to, vitamina B12 y vitamina B6 Los alimentos ricos en hierro, Proteínas ⫹ ⫹ ⫹ ⫹⫹ ⫹⫹
como las carnes rojas, a menudo se evitan, poniendo a las muje- Vitaminas liposolubles y ácidos ⫹ ⫹ ⫹ ⫹⫹⫹ ⫹⫹⫹
res postmenopáusicas en riesgo de desarrollar una carencia de grasos esenciales
este nutriente. Es necesario proporcionar un asesoramiento die- ⫹ Las cantidades recomendadas en la dieta o un complejo multivitámínico
tético adecuado, monitorizando el nivel de hierro y adminis- estándar pueden ser suficientes.
trando suplementos si fueran necesarios. Durante el embarazo ⫹⫹ Riesgo significativo de carencia o requerimientos reducidos; es
adecuada la suplementación específica, en especial en grupos de alto riesgo.
se pueden alcanzar una ganancia de peso de la madre y una ⫹⫹⫹ Alto riesgo de carencia: son necesarios suplementos adicionales para
nutrición fetal óptimas mediante un adecuado ajuste de la ban- prevenirla. Se recomienda una cuidadosa monitorización. Es posible que sean
da.85 Las complicaciones producidas por la banda han de identi- necesarios suplementos que superen con creces los requerimientos diarios.
ficarse lo antes posible y, comprometen el estado nutricional, BGAL, banda gástrica ajustable laparoscópica; GVB, gastroplastia con
banda vertical, DGYR, derivación gástrica en Y de Roux; DBP, derivación
han de someterse de inmediato a tratamiento. Cuando haya sín- biliopancreática; DBP/CD, derivación biliopancreática /cruce duodenal.
tomas obstructivos o vómitos persistentes es necesario adminis-
trar suplementos de tiamina por vía parenteral.
Se recomienda que todos los pacientes tomen diariamente
un preparado multivitamínico que contenga vitamina B12, Derivación biliopancreática y derivación
vitamina B6 y, al menos, 400 μg de ácido fólico. Estas vita- biliopancreática/cruce duodenal
minas se pueden obtener fácilmente en preparados que con-
tengan otras vitaminas y minerales, incluidos vitamina B1 y Se ha demostrado que la DBP proporciona una excelente pér-
cinc. La adición de pequeñas cantidades de hierro a este pre- dida de peso durante un período prolongado de tiempo.13 La
parado es adecuada para las mujeres premenopáusicas. DBP y la DBP/CD son los únicos procedimientos quirúrgicos
bariátricos usados habitualmente que inducen un cambio sig-
Gastroplastia vertical con banda nificativo en el equilibrio energético a través de la malabsorción
de los macronutrientes. El equilibrio entre malabsorción y con-
Tras la GVB, los problemas nutricionales son similares a los sumo calórico reducido en la DBP y la DBP/CD resulta proble-
que se presentan tras la realización de una BGAL. Sin embar- mático y necesita ser ajustado con precisión. Si el paciente sigue
go, es probable que el hecho de que en este procedimiento el consumiendo todos los alimentos en la misma proporción que
estoma gástrico no sea fácilmente ajustable determine un antes de la cirugía, es probable que aparezcan con frecuencia
mayor riesgo de intolerancia a los alimentos y mala adaptación heces voluminosas y diarrea significativa. El riesgo de que se
de la comida y, por consiguiente, a un desequilibrio nutricio- registren problemas nutricionales de diversa índole es muy ele-
nal. Se recomienda un suplemento multivitamínico y, durante vado. Además de la problemática previamente descrita relacio-
el embarazo, pueden ser necesarias medidas de soporte nutri- nada con GVB y la DGYR, existe también una gran probabili-
cional. En ocasiones se registra intolerancia persistente a los dad de aparición de carencias de calcio y vitamina D, que
alimentos, que requiere un aporte adicional de tiamina. aumentan el riesgo de enfermedad ósea metabólica. Los niveles
de fosfatasa alcalina, 25(OH)D3 y hormona paratiroidea deben
Derivación gástrica en Y de Roux ser monitorizados con regularidad y es necesario fijar un
umbral bajo para investigar cualquier síntoma que pueda ser
Además de las consideraciones nutricionales tras la realiza- indicativo de dolor óseo. El riesgo de carencias de otras vitami-
ción de una GVB, que forma un elemento esencial de la nas liposolubles o ácidos grasos esenciales ha de ser investigado
DGYR, la exclusión gástrica parcial y duodenal involucradas incluso en mayor medida. Se han de controlar igualmente los
en esta última introducen consideraciones adicionales. niveles de proteínas, en especial durante la fase de pérdida rápi-
Existen, así, un mayor riesgo de déficit de hierro y vitami- da de peso. A los pacientes seleccionados para ser sometidos a
na B12 y un riesgo significativo de ingesta inadecuada de fola- esta forma de cirugía bariátrica se les debe advertir que preci-
to y calcio. Es esencial un seguimiento nutricional cuidadoso sarán con regularidad tratamiento con una amplia variedad de
y permanente. Se deben realizar anualmente determinaciones suplementos de vitaminas, minerales y, posiblemente, macro-
de los niveles de vitamina B12, folato, homocisteína en ayunas nutrientes, junto con una monitorización nutricional cuidadosa
y hierro, para valorar si los suplementos son adecuados. Existe, aplicada de forma indefinida.
por otra parte, la posibilidad de que se desarrolle una enfer- Existen razones teóricas y ciertos datos limitados que
medad ósea metabólica, que debe monitorizarse midiendo los indican que con la DBP/CD el riesgo de carencia nutricional
niveles de fosfatasa alcalina urinaria y hormona paratiroidea. puede ser menor que en otras técnicas.15 En el momento
La osteoporosis se valora mediante mediciones de la densidad actual, sin embargo, no hay suficientes pruebas de que pueda
ósea. El riesgo de que se desarrollen carencias nutricionales es instaurarse un programa de suplementación y monitoriza-
elevado, incluso después de muchos años. ción menos intenso o variado.
Capítulo 41 • Resultados nutricionales de la cirugía bariátrica 363

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42
Resolución de las patologías
comórbidas bariátricas: diabetes
Walter J. Pories, M.D., F.A.C.S., y Stewart E. Rendon, M.D.

Ciertamente, no estábamos preparados para afrontar el hecho ofrecía suficientes retos como para incorporar otros, como las
de que la derivación gástrica pudiera eliminar la diabetes. No altas tasas de infección y las dificultades de control de la glu-
es esta la forma en que se suelen hacer este tipo de descubri- cosa. Además, el obeso mórbido diabético presentaba mayores
mientos. Generalmente, los laboratorios consiguen las bue- índices de patologías comórbidas cardiopulmonares graves.
nas noticias primero en los tubos de ensayo y, algunas veces, Sin embargo, cuando se hizo evidente que al menos un tercio
en experimentos animales. Además, los hallazgos completa- de nuestros pacientes eran diabéticos o presentaban altera-
mente nuevos referidos a las enfermedades importantes, ción de la glucosa, reconsideramos nuestra decisión.
como la diabetes o el cáncer, no suelen ser muy frecuentes. Tuvimos, pues, que afrontar la problemática asociada a la
En los primeros tiempos de cirugía bariátrica, nuestro cirugía electiva en el paciente diabético obeso mórbido. En fun-
grupo de la East Carolina University, tras ensayar diversas ción de nuestra experiencia con otras operaciones de enverga-
variaciones de la derivación gástrica, encontró que la versión dura en diabéticos, éramos conscientes de que el control de la
mostrada en la figura 42-1 producía una pérdida de peso dura- diabetes podía resultar difícil durante el estrés propio de la recu-
dera, con una tasa de complicaciones aceptable. Inicialmente, peración postoperatoria, especialmente si existían complicacio-
no aceptábamos pacientes diabéticos. La obesidad mórbida nes infecciosas. Por tanto, desarrollamos unos preparativos
detallados y aleccionamos a los pacientes y a sus familias sobre
el elevado nivel de riesgo. Se proyectaron planes detallados para
administrar insulina intravenosa de forma continua, con proto-
colos de escala móvil. Para nuestra sorpresa, no se materializó
la necesidad de aumentar los suplementos de insulina; de hecho,
tras unos pocos días de reducciones bruscas de las dosis de 4 a
8 unidades diarias, los pacientes no necesitaron insulina en abso-
luto. Verdaderamente no esperábamos semejante resultado.
Como cualquier otra persona, los investigadores médi-
cos tendemos a ver sólo lo familiar, lo esperado. Cuando los
niveles sanguíneos de glucosa volvieron a estar dentro de
los límites normales, negamos esos resultados y estábamos
inicialmente convencidos de que las muestras se habían
extraído de forma incorrecta o de que el laboratorio del hos-
pital era el responsable de los mismos. Cuando el fenómeno
se presentó en el cuarto paciente, realmente acusamos al
laboratorio de desarrollar un trabajo descuidado: «¿Cómo
podemos prestar asistencia a esta gente enferma si no pode-
mos fiarnos de pruebas tan sencillas como los niveles sanguí-
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

neos de azúcar?». Pero aquellos técnicos estaban en lo cierto


y, más tarde, vergonzosamente mucho más tarde, pedimos
disculpas formales por nuestras injustificadas acusaciones.
La evolución de la quinta paciente se muestra en la
tabla 42-1. Esta mujer, ingresada el mismo día de la interven-
ción y que era conocida por su escaso nivel de cumplimiento,
se presentó en el hospital en noviembre de 1982 con un nivel
Figura 42-1 Versión Greenville de la derivación gástrica. Los ele- sanguíneo de glucosa de 490, a pesar de haberse inyectado
mentos fundamentales de la derivación incluyeron una pequeña bolsa una dosis matutina de 90 μ de insulina. Por lo demás se encon-
gástrica proximal de entre 15 y 30 mL, una gastroyeyunostomía de 8 a traba bien, por lo que indujimos en ella niveles más razonables
10 mm y un asa alimentaria en Y de Roux de 60 cm. con dosis adicionales de insulina intravenosa y, tras discutir
365
366 Sección VIII • RESULTADOS

La figura 42-2 muestra nuestros hallazgos después de


Tabla 42-1 EFECTO DE LA DERIVACIÓN GÁSTRICA realizar las operaciones de derivación gástrica en 608 pacien-
SOBRE LA GLUCOSA PLASMÁTICA tes. De estos individuos, 165 presentaban diabetes tipo 2 y
Y REQUERIMIENTOS DE INSULINA otros 165 padecían intolerancia a la glucosa. Dimos a los
POR ESCALA MÓVIL pacientes un plazo de 6 meses para que se estabilizaran,
incluyendo en el estudio a 146 diabéticos y a 152 pacientes
FECHA GLUCOSA INSULINA POR ESCALA MÓVIL
con intolerancia a la glucosa. Durante los 16 años a lo largo
16 Nov., 1982 (preoperatoria) 495 90 de los cuales vigilamos a este grupo, con un seguimiento del
17 Nov. 281 8 97,3%, encontramos que 121 de los 146 diabéticos (83%)
18 Nov. 308 16 habían recuperado valores normales de glucemia y de los
19 Nov. 240 8 152 pacientes con intolerancia a la glucosa, 150 (99%) habían
20 Nov. 210 4 también restablecido esos valores.4
21 Nov. 230 8 La resolución de la hiperglucemia se asocia, además, a
22 Nov. 216 4 una rápida corrección de la hiperinsulinemia de la diabetes.
28 Nov. 193 0 Los niveles descienden bruscamente en cuestión de días y
30 Nov. 153 0 alcanzan valores normales mucho antes de que se consiga un
14 Dic. 155 0 peso normal.
De hecho, la derivación gástrica puede llegar a inducir
una sobrecorrección de los problemas causados por la hiper-
diversas cuestiones con ella y entre nosotros, procedimos a la glucemia y la hiperinsulinemia. Recientemente informamos
cirugía. A la mañana siguiente, en su primer día postoperato- de nuestra experiencia referida a 47 pacientes que sufrieron
rio, su requerimiento diario había descendido a 8 μ y a los crisis documentadas de hipoglucemia grave tras la opera-
6 días no requirió dosis alguna de insulina. A los 3 meses recu- ción. Afortunadamente, el problema se autolimitó en todos
peró unos valores de glucosa completamente normales y ha los pacientes, remitiendo en general al cabo de un año, y se
permanecido con glucemias normales, incluso con la reanu- podía controlar con caramelos durante el pródromo de las
dación de una dieta que incluye una elección de alimentos sin crisis.5
limitaciones aunque, por supuesto, con restricción del volu-
men, debido a su pequeña bolsa gástrica. ¿Por qué algunos fracasan?
Los 27 pacientes que no recuperaron valores de glucemia
Z CONFIRMACIÓN: LA DERIVACIÓN GÁSTRICA completamente normales resultan de especial interés. Las
PUEDE CONTROLAR LA DIABETES TIPO 2 situaciones en los 10 pacientes que presentaron interrupcio-
nes en sus líneas de sutura con grapas fueron fáciles de expli-
Nuestra experiencia con pacientes diabéticos posteriores vino a car. La circulación de su ingesta no se desvió y los alimentos
corroborar la observación inicial y aportó la sorprendente tesis continuaron fluyendo hacia el estómago distal. Los restantes
de que la operación de derivación gástrica puede controlar la 17 pacientes, sin embargo, presentaron operaciones intactas,
diabetes tipo 2. Continuamos usando la versión Greenville de documentadas mediante tránsitos gastrointestinales.
la derivación gástrica, una operación que fue desarrollada a par- Perdieron peso y aunque su diabetes estaba mejor controlada,
tir de las observaciones obtenidas en unos 200 pacientes entre aún persistía cierta hiperglucemia. Lo que diferenciaba a estos
1978 y 1980. La operación, mostrada en la figura 42-1, propor- individuos del resto del grupo fue que eran de más edad y
ciona una bolsa gástrica de menos de 30 mL, una gastroyeyu- habían soportado su diabetes durante más tiempo que aque-
nostomía de 8 a 10 mm y una conformación en Y de Roux con llos que habían presentado procedimientos satisfactorios.6,8
asa de 60 cm. De 1980 a 1996, realizamos la operación siempre Concluimos, pues, que era más probable que el control
en las mismas condiciones, rigurosamente controladas.1,2 En duradero de la diabetes se alcanzara en individuos jóvenes y
1997, cambiamos nuestro planteamiento quirúrgico con la intro- con historia más corta de diabetes. O, dicho de otra forma,
ducción de la laparoscopia y, basándonos en el trabajo de Brolin los pacientes obesos mórbidos que son diabéticos deberían
y cols., alargamos nuestras asas alimentarias hasta 100 cm para considerarse para cirugía bariátrica temprana con el fin de
el obeso mórbido y hasta 150 cm para el superobeso. obtener unos resultados óptimos.

608 obesos
mórbidos

165 diabéticos 121/146 (83%) Figura 42-2 Control duradero de


de tipo 2 normoglucémicos la diabetes tipo 2 tras la operación
de derivación gástrica.
6
meses

165 glucosa 150/152 (99%)


alterada normoglucémicos
Capítulo 42 • Resolución de las patologías comórbidas bariátricas: diabetes 367

Reducción en las tasas de mortalidad sión completa de la diabetes tipo 2, el más riguroso de estos es
el artículo del grupo de Schauer de la Pittsburgh University8.
La pregunta continuaba siendo si la derivación gástrica sólo Tras sus estudios iniciales, que demostraron la remisión clíni-
corrigió los niveles de glucosa o si la operación también ca completa de la diabetes en el 82% de los pacientes y una
mitigó los efectos de la diabetes. Analizamos la cuestión mejoría importante en el 18% de ellos tras la derivación gás-
comparando nuestro grupo quirúrgico con una cohorte apa- trica, iniciaron un estudio mucho más largo, de 5 años, que
reada que no fue sometida a este procedimiento. incluyó a 1160 pacientes. De estos, 240 presentaban alteración
Durante el mismo período en el que realizamos las deri- de la glucosa o diabetes. El seguimiento fue posible en 119 de
vaciones gástricas en los 154 pacientes comentados previamen- estos pacientes. Ningún paciente experimentó empeoramien-
te, otros 78 pacientes fueron evaluados y programados para to de la diabetes. Los niveles de glucosa sanguínea en ayunas y
cirugía pero, justo antes de operarse, cancelaron las interven- hemoglobina A1c mejoraron de forma notable o regresaron a
ciones por razones personales o, más comúnmente, porque la niveles normales sin todos los pacientes y, de modo más paten-
autorización fue denegada por la aseguradora. Los dos grupos te, en los pacientes con diabetes de menor gravedad o dura-
no diferían de forma significativa en términos de sexo, edad, ción. En todos los pacientes que necesitaban tratamiento far-
índice de masa corporal o enfermedades asociadas. Se incluye- macológico se observó reducción importante en el uso de
ron todas las muertes, fueran estas debidas a complicaciones antidiabéticos orales (80%) e insulina (79%) tras el tratamiento
postoperatorias, accidentes de tráfico, regreso al consumo de quirúrgico. Los autores concluyeron que «la derivación gástri-
drogas, suicidio u otras causas. En el grupo quirúrgico, ca laparoscópica produce una pérdida importante de peso (60%
14 pacientes de 154 (9%) murieron durante el período de de exceso de peso corporal) y resolución (83%) o mejoría
seguimiento de 9 años; en aquel en que los pacientes no fueron (17%) de la diabetes de tipo 2». También confirmaron que la
sometidos a derivación gástrica, murieron 22 pacientes de 78 derivación gástrica hizo remitir o mejorar las principales pato-
(28%) durante un período de 6,2 años (P  0,0003).6 Aunque logías comórbidas asociadas a la diabetes (tabla 42-2).
estas son observaciones extraordinarias y son la primera indi-
cación de que la mortalidad debida a diabetes puede reducirse Cuestionamiento de un concepto: ¿se debe realmente
con cualquier medida, este estudio presenta limitaciones: los la diabetes tipo 2 a una resistencia a la insulina
dos grupos no están fuertemente apareados, el estudio es
retrospectivo y el número de pacientes es pequeño.
y a la disfunción de los islotes pancreáticos?
El efecto de la operación sobre la mortalidad a largo pla- La explicación tradicional de la diabetes tipo 2 sostiene que
zo necesita ser analizado más en profundidad, en especial a la la causa básica de la enfermedad es la resistencia a la insuli-
luz de la presentación de Fobi, que afirmó que sus series de na, que los islotes pancreáticos son incapaces de mantener la
pacientes de más de 70 años, fundamentalmente no diabéti- producción adecuada de la hormona y que, finalmente,
cos, que fueron sometidos a una derivación gástrica, presen- la hiperglucemia se hace incontrolable, incluso con adminis-
taron una supervivencia media de sólo 36 meses.7 Este dato tración externa de insulina, explicando así el aumento tanto
es difícil de interpretar, debido a que los pacientes variaban de la insulina como de la glucosa. La enfermedad se consi-
de forma significativa en sus patologías comórbidas y a que dera inexorable e incurable, aunque un mantenimiento rigu-
no disponemos de datos de mortalidad para un grupo aparea- roso de los protocolos de normalización de la glucemia pue-
do de pacientes ancianos obesos mórbidos. de dar lugar a mejora sustancial de los síntomas.
La observación de que la derivación gástrica induce una
Cuando la derivación gástrica fracasa, la diabetes recidiva remisión rápida, duradera y completa de la enfermedad y la
mejoría de las enfermedades asociadas nos obligó a reevaluar
Si la derivación gástrica es la razón real de la remisión de la las premisas tradicionales. La operación ha mostrado que la
diabetes, la enfermedad debería recidivar cuando la opera- diabetes es reversible, que no es incurable y que sus efectos
ción fracasa, cosa que es, en realidad, cierta. Nuestra expe- pueden ser mitigados.
riencia con los fallos en la línea de sutura con grapas nos
enseñó que la hiperglucemia y el aumento de los niveles de ¿Cómo controla la diabetes la derivación gástrica?
la hemoglobina A1c son indicadores fiables de que la línea
de sutura con grapas no está intacta. Por consiguiente, la pregunta no es ya si la derivación gás-
trica puede inducir un control completo y duradero de la
Confirmación de nuestros hallazgos diabetes. La clave radica en saber cómo. Analicemos, pues,
las posibles causas de esta remisión. La derivación gástrica
Aunque ha habido una serie de informes que corroboran nues- produce tres efectos conocidos sobre el consumo energético
tro hallazgo de que la derivación gástrica puede inducir remi- y la fisiología del intestino: reducción del consumo calórico;
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Tabla 42-2 EFECTO DE LA DERIVACIÓN GÁSTRICA SOBRE LAS ENFERMEDADES MÁS IMPORTANTES ASOCIADAS
A LA DIABETES TIPO 2
ENFERMEDADES ASOCIADAS POBLACIÓN TOTAL RESUELTAS MEJORADAS SIN CAMBIOS EMPEORADAS DESCONOCIDAS
Hipertensión 134 (70%) 36% 53% 2% 2% 0
Hipercolesterolemia 107 (56%) 37% 41% 3% 1% 18%
Hipertrigliceridemia 86 (45%) 31% 44% 5% 1% 19%
Síndrome de apnea del sueño 109 (57%) 33% 47% 10% 1% 9%

(Reproducido de Schauer PR, Burguera B, Ikramuddin, S et al. Effect of laparoscopic Roux-en-Y gastric bypass on type 2 diabetes mellitus. Ann Surg 2003;
238:467-484.)
368 Sección VIII • RESULTADOS

cambio en la composición de la dieta; y exclusión de la comi- hierro (para mujeres con menstruación), vitamina B12 y las
da desde el estómago, todo el duodeno y una porción grande otras vitaminas del grupo B. Aunque existen pocos estudios
del yeyuno, con circulación de la comida desde el estómago que evalúen la composición de la dieta tras la derivación gás-
directamente hacia el yeyuno distal. trica, en nuestra opinión las dietas tienden a ser más equili-
bradas e incluir menos dulces y menor cantidad de glucosa.
R EDUCCIÓN DE LA INGESTA CALÓRICA Disponemos de datos adicionales de los estudios de
La pequeña bolsa gástrica, con su capacidad de entre 15 y Moize y cols. que concluyeron que: «el consumo energético
20 cm3, y la gastroyeyunostomía, con una apertura apenas diario (kcal/día) aumentó de 849  329 (DE) a los 3 meses
mayor que el diámetro de un lápiz, reducen el consumo caló- hasta 1101  400 a los 12 meses (P  0,009). La ingesta pro-
rico limitando el consumo y retrasando el vaciamiento. La teica (g/día) también aumentó de 45,6  14,2 a los 3 meses
magnitud de la reducción de la ingesta calórica varía tras la hasta 58,5  17,1 a los 12 meses (P  0,04), y el porcentaje
derivación gástrica. Bobbioni-Harsch y cols. concluyeron de ingesta proteica planteada como objetivo pasó del
que «la pérdida de peso corporal inducida por la derivación 55,1%  23 a los 3 meses al 73,5%  38 a los 12 meses
gástrica se debe principalmente a la reducción del consumo (P  0,02).10 Aunque el consumo energético y proteico
energético, mientras que las modificaciones cualitativas de aumentó de forma significativa durante el período de
la dieta no desempeñan función alguna en el proceso. Los 12 meses, la ingesta proteica a los 12 meses permaneció
individuos más jóvenes tienen una mayor capacidad para de forma significativa por debajo (P  0,01) del nivel diario
reducir la ingesta calórica y, por consiguiente, pierden más recomendado por las directrices (1,5 g/kg del peso corporal
peso. Un alto grado de obesidad preoperatorio lleva a una inicial), para una dieta restrictiva baja en energía.
mayor reducción de peso, probablemente debido a un mayor La derivación gástrica va claramente seguida de una
déficit energético».9 Reducciones similares de ingesta caló- serie de profundos cambios dietéticos, entre los que se cuen-
rica en pacientes diabéticos no operados también pueden tan una reducción de las calorías y modificaciones en la com-
hacer que estas personas recuperen la glucemia normal. Sin posición de la dieta. Es probable que numerosos pacientes
embargo, estas medidas no han tenido éxito en el control a desarrollen carencias de proteínas, vitaminas y minerales, en
largo plazo de los diabéticos, quizá debido al incumplimien- especial durante los dos primeros años siguientes a la ciru-
to en lo que respecta a cambios de calidad de vida tan rigu- gía. Estos cambios dietéticos ejercen posiblemente un efecto
rosos. favorable sobre la diabetes, pero no explican la remisión com-
La inclusión de información referida a un episodio ane- pleta, sobre todo a largo plazo, cuando muchos de esos cam-
cdótico aislado resulta siempre cuestionable. Sin embargo, bios ya han desaparecido. Los pacientes que cumplen con las
consideramos que nuestra experiencia referida a un caso con- recomendaciones dietéticas mejoran a menudo el control de
creto aporta una información significativa. Se trata de la refe- la diabetes aunque, ciertamente, no dejan de padecer la
rida a un varón de 47 años, diabético y obeso mórbido, en el enfermedad por completo.
que durante la cirugía, observamos que presentaba un estó- Debe haber al menos otra razón para la consecución de
mago distendido con alimentos ingeridos recientemente. En la remisión completa.
apariencia había cenado muy tarde la noche anterior. Por for-
tuna, no hizo aspiraciones durante la inducción. Interrumpimos EXCLUSIÓN DE LA COMIDA DE SUS VÍAS NORMALES
la intervención, ya que no creíamos poder obtener un grapado La operación de derivación gástrica, además de limitar el
adecuado del estómago en presencia de maíz y coles no dige- consumo y de hacer más lento el tiempo de vaciamiento,
ridos. Cuando se despertó, el paciente se enfrentó a los decep- también cambia de manera radical el flujo del alimento, de
cionantes resultados y se mostró dispuesto a seguir el mismo forma que el estómago, todo el duodeno y una porción
régimen dietético postoperatorio prescrito a los pacientes con importante del yeyuno quedan excluidos del contacto con
derivación gástrica. Cumplió el régimen durante unas 2 sema- los nutrientes. Por decirlo de otro modo, el alimento no
nas: líquidos claros durante 2 días, 60 g de un preparado digerido se vacía directamente en el intestino distal. Creemos
nutricional (Ensure Plus) 3 veces al día y agua a discreción que este es el cambio fundamental en lo que respecta a la
durante una semana más, con una lenta progresión a una die- remisión de la diabetes.
ta blanda. Sus niveles de glucosa también recuperaron la nor-
malidad, situándose en índices parecidos a los de los que
habían sido sometidos a cirugía de derivación gástrica com- Z COMPLEJIDAD DEL METABOLISMO
pleta. Según estas observaciones y la experiencia de décadas DE LA GLUCOSA
de tratamiento para la diabetes, podemos concluir con segu-
ridad que la cantidad de comida desempeña un papel destaca- El control del metabolismo de los carbohidratos y de la con-
do en el control del metabolismo de la glucosa. servación de la energía es uno de nuestros procesos metabóli-
cos más primitivos y complejos. El proceso es controlado por
CAMBIO EN LA COMPOSICIÓN DE LA DIETA numerosos mecanismos que se han ido desarrollando en el
Los cambios en las dietas tras la derivación gástrica varían curso de nuestra evolución. La producción y uso de insulina
considerablemente de un caso a otro. La mayoría de los por un organismo requiere su liberación en un determinado
pacientes aprenden a evitar los dulces porque su ingestión les momento, a pesar de lo limitado de los mecanismos de alma-
produce síndrome de vaciamiento gástrico rápido en aproxi- cenamiento de insulina y del mantenimiento de los niveles de
madamente dos tercios de los pacientes que son sometidos a glucosa dentro de un rango estrecho de valores normales. Para
este tipo de cirugía. Algunos presentan dificultades para regular su producción y distribución, es necesaria una señal
comer carne de ternera y prefieren la de pollo o la de cerdo. rápida de que se está consumiendo alimento. Una vez que este
Otros afirman que les gustan las ensaladas y las verduras se ha consumido, la modulación de la distribución de insulina
mucho más que antes. Casi todos presentan ingesta inadecua- requiere información sobre dónde está la comida dentro del
da de vitaminas y minerales y requieren suplementos con pre- intestino, la velocidad de tránsito y cuándo es probable que
parados de multivitaminas y minerales, así como de calcio, haya sido digerida. Si no se reciben señales apropiadas, se
Capítulo 42 • Resolución de las patologías comórbidas bariátricas: diabetes 369

registra una sobreproducción o una producción insuficiente de lina, al igual que glándulas que pueden llegar a ser hiperac-
insulina. De forma simultánea, las señales procedentes de los tivas (p. ej., en el hipertiroidismo o en el síndrome de
tejidos adiposos proporcionan medidas del nivel de almacena- Cushing).
miento de la insulina, mientras que las que tienen su origen en
el músculo indican su grado de utilización. El sistema regula- ¿Es la hiperactividad de los islotes pancreáticos
dor de la insulina debe monitorizar asimismo las tasas de acla- primaria o secundaria?
ramiento de insulina y de glucosa, como medidas de la produc-
ción y la utilización de la energía. En resumen, es probable que La hiperactividad de los órganos endocrinos se clasifica
la producción de insulina y el control del uso de la glucosa generalmente como intrínseca, como en el caso del hiperti-
requieran interacciones altamente complejas entre el intestino roidismo primario, o extrínseca, debida a la estimulación
y los islotes pancreáticos. Es posible, pues, que los efectos anti- por parte de otros órganos endocrinos, como en el hipera-
diabéticos de la derivación gástrica se consigan a través de la drenalismo de un tumor hipofisario en la enfermedad de
alteración de estas interacciones. Cushing. Si el hiperinsulinismo se debiera a una enfermedad
intrínseca de los islotes pancreáticos, desaparecería sólo con
Hiperinsulinemia en la diabetes tipo 2 la extirpación de algunas o de todas las células . La produc-
ción excesiva desaparece a los pocos días tras la derivación
Examinemos un modelo teórico en el que conocer los meca- gástrica, por lo que la probable conclusión es que los islotes
nismos del suministro de insulina es el objetivo inmediato y pancreáticos estaban hiperactivos debido a un estímulo
en el que la producción de insulina ha de adecuarse a las externo. Además, dado que la glucemia se normaliza tras la
necesidades metabólicas conocidas. En la diabetes tipo 1, los reorganización del intestino, parece razonable concluir que
islotes pancreáticos están destruidos y la producción es, el estímulo para el hiperinsulinismo procede del intestino.
ciertamente, inadecuada. En la diabetes tipo 2, sin embargo,
la falta de insulina es sólo relativa. Aunque las explicaciones Regulación de la producción de insulina por el intestino
tradicionales indican que «los islotes de los diabéticos están
desgastados», la hiperinsulinemia es una característica de la La participación de las hormonas intestinales en la produc-
enfermedad también en sus estadios tardíos. De hecho, ción de la insulina se conoce desde los años treinta, época en
incluso en esos estadios tardíos de la diabetes tipo 2, las la que los investigadores denominaron a estos factores incre-
pruebas de tolerancia a la glucosa oral provocan niveles de tinas. Desde entonces, se ha demostrado que diversas hormo-
insulina que son dos veces más elevados que los que se nas son insulinogogas, incluidos el polipéptido insulinotrópi-
encuentran en pacientes normales. No, los islotes pancreáti- co dependiente de glucosa (GIP), el péptido 1 similar al
cos no son el problema. Es más que probable que la capaci- glucagón (GLP-1), la colecistocinina, el péptido YY y, más
dad de fabricar y almacenar insulina no sea la causa funda- recientemente, la grelina. Aún no se ha podido demostrar el
mental de la diabetes tipo 2. mecanismo de interacción de estas sustancias entre ellas y con
otras hormonas implicadas en el metabolismo de la glucosa,
Resistencia a la insulina: ¿causa o mecanismo como la leptina y la adiponectina de los tejidos adiposos.
protector? Si retomamos la idea de que la acción por parte de los
islotes pancreáticos se basa en su monitorización de la loca-
Los diabéticos de tipo 2 presentan una resistencia a la insu- lización del alimento en el intestino, parece probable que las
lina. Quiere esto decir que para iniciar las funciones de la diversas señales hormonales interactúen para desvelar el
hormona, son necesarias cantidades cada vez mayores de tiempo de tránsito y, posiblemente, la composición del qui-
la misma. Dado que esta resistencia continúa aumentando mo. Tal hipótesis se ve reforzada por el hallazgo de que las
en el transcurso de la enfermedad y que puede ser superada hormonas intestinales no son secretadas de manera unifor-
incrementando las dosis de insulina, la resistencia a la insu- me en todo el intestino pero, en cambio, tienden a aumentar
lina ha llegado a reconocerse como la causa de la enferme- o disminuir a medida que el alimento avanza. De este modo,
dad. De acuerdo con ese concepto, actualmente los diabéti- la grelina presenta su mayor concentración en el estómago
cos son tratados con fármacos que aumentan la producción cuando hay una disminución gradual de su concentración en
de insulina, con otros que disminuyen la resistencia a la hor- el intestino delgado; en cambio, el GLP-1 presenta sus con-
mona y, cuando ambos fracasan, con inyecciones de insuli- centraciones más bajas en el intestino proximal y las más
na, que han de ir aumentándose con el tiempo. elevadas cerca del ciego. Los islotes pancreáticos podrían,
La observación de que la derivación gástrica suprime la por consiguiente, recibir las señales en función del nivel de
resistencia a la insulina, reduce los niveles la misma hasta alimento en el intestino, bien a través de cambios en la con-
índices normales en cuestión de días y permite que la insu- centración de las hormonas, o quizá, a través de la compara-
lina se mantenga es estos niveles normales, incluso tras la ción de las proporciones de una hormona con otra, como el
reanudación de una dieta completa, no resulta compatible GLP-1 frente a la grelina. La percepción de las proporciones
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con la teoría de que la resistencia a la insulina es la causa de no es un planteamiento radicalmente innovador. Los orga-
la enfermedad. No parece probable que la simple acción nismos tienden a utilizar este proceso de forma habitual,
de derivar un segmento del intestino sea capaz de cambiar como en el caso de la percepción de las concentraciones de
en cuestión de pocos días la resistencia a la insulina, en un fósforo-carbón; potasio-sodio; cinc-calcio; hierro-cobre y
nivel celular extendido a todo el organismo. oxígeno-dióxido de carbono.
La explicación más probable es que la resistencia a la
insulina es, efectivamente, resistencia, es decir, un mecanis- Efecto de la derivación gástrica sobre las hormonas
mo protector de las células que trabajan contra el exceso de intestinales
producción de insulina por parte de las células . Según este
planteamiento, la diabetes se debe a la hiperactividad de los Los efectos de la derivación gástrica sobre las hormonas
islotes pancreáticos que producen grandes excesos de insu- intestinales no se conocen bien, aunque existen indicios de
370 Sección VIII • RESULTADOS

que pueden ser pronunciados. Por ejemplo, antes de la ciru- varias hormonas diabetógenas que pueden ser controladas
gía los niveles de la grelina, a veces denominada hormona por enfoques de biología molecular, incluida la cirugía
del hambre, se elevan en picos bruscos justo antes del desa- metabólica.
yuno, la comida y la cena y, de forma algo más modesta, a la
hora de acostarse. La derivación gástrica suprime estas res-
puestas, reduciendo la secreción de grelina a niveles míni- Z BIBLIOGRAFÍA
mos, sin máximos periódicos. Diversos estudios han mostra-
do cambios similares en la concentración de otras hormonas 1. Flickinger EG, Pories WJ, Meelheim HD, et al: The Greenville
intestinales. De particular interés resultan las observaciones gastric bypass: progress report at three years. Ann Surg
1984;199:555-562.
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alcance (debido a su alteración de la secuencia intestinal) que thought it: an operation proves to be the most effective therapy for
los procedimientos puramente restrictivos, como la banda adult-onset diabetes mellitus. Ann Surg 1995;222:339-352.
gástrica. 3. Brolin RE, LaMarca LB, Kenler HA, et al: Malabsorptive gastric
bypass in patients with superobesity. J Gastrointest Surg
Un análisis pormenorizado de estas interacciones queda 2002;6:195-203.
fuera del alcance de este capítulo. Sin embargo, se puede 4. Hickey MS, Pories WJ, MacDonald KG, et al: A new paradigm for
encontrar información adicional al respecto en varios exce- type 2 diabetes mellitus: could it be a disease of the foregut? Ann Surg
lentes estudios sobre la grelina publicados por Leonetti,11 1998;227:637-644.
Tritos,12 Holdstock13 y Cummings14 y cols. Los trabajos 5. Pories WJ, Stearns JD, Swanson MS, et al: Episodic severe
hypoglycemia following gastric bypass. Ann Surg 2006(accepted for
sobre la comunicación por señales de las incretinas se pue- publication).
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y cols.16 Además, los artículos de Mortensen,17 Vilsboll18 y operation reduces the progression and mortality of non-insulin
Gault y cols.19 proporcionan una adecuada visión general dependent diabetes mellitus. J Gastrointest Surg 1997;1:213-220.
sobre las características del GLP-1 y el GIP, dos potentes 7. Fobi M: Gastric bypass operations in elderly patients. International
Federation for Surgery of Obesity 2003; Salamanca, Spain.
hormonas señalizadoras del intestino. 8. Schauer PR, Burguera B, Ikramuddin S, et al: Effect of laparoscopic
Roux-en-Y gastric bypass on type 2 diabetes mellitus. Ann Surg
2003;(in press).
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tamiento que induce una remisión completa y duradera de la inadequate protein intake related to protein intolerance up to 1 year
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tología de la diabetes tipo 2 deben ser reexaminados. La to glucose load in obese subjects post-gastric bypass surgery. Obes Res
confirmación de que la hiperinsulinemia y la hiperglucemia 2003;11:919-924.
desaparecen pocos días después de la cirugía parece corro- 13. Holdstock C, Engstrom BE, Ohrvall M, et al: Ghrelin and adipose
tissue regulatory peptides: effect of gastric bypass surgery in obese
borar el hecho de que la causa de la diabetes no es la resis-
humans. J Clin Endocrinol Metab 2003;88:3177-3183.
tencia a la insulina, sino que es más probable que esta sea la 14. Cummings DE, Shannon MH: Ghrelin and gastric bypass: is there a
sobreestimulación de los islotes pancreáticos por parte de las hormonal contribution to surgical weight loss? J Clin Endocrinol
hormonas intestinales hiperactivas. Metab 2003;88:2999-3002.
Las futuras áreas de investigación han de comparar los 15. Perfetti R, Brown TA, Velikina R, et al: Control of glucose homeostasis by
incretin hormones. Diabetes Technol Ther 1999;1:297-305.
efectos de las operaciones bariátricas comunes (derivación 16. Vahl T, D’Alessio D: Enteroinsular signaling: perspectives on the role of
gástrica, cruce duodenal y banda gástrica) sobre la diabetes, the gastrointestinal hormones glucagon-like peptide 1 and
y su hiperinsulinemia e hiperglucemia, con los efectos de la glucose-dependent insulinotropic polypeptide in normal and abnormal
dieta y el ejercicio físico en los diabéticos y en individuos glucose metabolism. Curr Opin Clin Nutr Metab Care 2003;6:461-468
normoglucémicos. Es necesario igualmente determinar los 17. Mortensen K, Christensen LL, Holst JJ, et al: GLP-1 and GIP are
colocalized in a subset of endocrine cells in the small intestine. Regul
perfiles de las hormonas del intestino, de los tejidos adipo- Pept 2003;15:114,189-196.
sos, de los músculos y del hipotálamo, en secuencias crono- 18. Vilsboll T, Krarup T, Madsbad S, et al: Both GLP-1 and GIP are
metradas rápidamente tras el consumo de comida. Por últi- insulinotropic at basal and postprandial glucose levels and contribute
mo es aconsejable realizar estudios similares en pacientes nearly equally to the incretin effect of a meal in healthy subjects.
con diabetes gestacional antes y después del parto. El meca- Regul Pept 2003;114:115-121.
19. Gault VA, Flatt PR, O’Harte FP: Glucose-dependent insulinotropic
nismo de remisión de la diabetes puede ser el mismo en la polypeptide analogues and their therapeutic potential for the treat-
mujer embarazada y en la obesa mórbida. La esperanza ment of obesity-diabetes. Biochem Biophys Res Commun 2003;
radica en que estos estudios pongan de manifiesto una o 308:207-213.
43
Resolución de las patologías
comórbidas bariátricas: hipertensión
Kenneth G. MacDonald, Jr., M.D., y John R. Pender, IV, M.D.

La hipertensión es un factor de riesgo para la arteriopatía Un estudio prospectivo realizado en más de un millón
coronaria, la enfermedad renal, la patología vascular peri- de varones y mujeres descubrió que la obesidad era el factor
férica, los accidentes cerebrovasculares y la insuficiencia predictivo más importante de muerte por enfermedad car-
cardíaca congestiva. Un estudio observacional a 18 años, diovascular.12 Los datos de la National Health and Nutrition
realizado en 8690 pacientes cuya hipertensión se controla- Evaluation Survey III (NHANES III) demostraron que los
ba médicamente, mostró que los episodios cardiovascula- individuos obesos presentan riesgo de otras causas de
res seguían siendo la principal causa de morbilidad y mor- enfermedad coronaria, además de la obesidad, como la
talidad en esta población.1 Las causas de la hipertensión hipertensión. En un análisis de 662.443 registros de la base
son multifactoriales, y en el 95% de los casos de hiperten- de datos de la National Health Interview Survey, Livingston
sión primaria o esencial no se puede definir una causa y Ko encontraron que la presencia de diabetes o de hiper-
específica. Existe un fuerte componente genético en la tensión aumentaba sustancialmente las tasas de mortalidad
hipertensión, lo cual se manifiesta por su mayor prevalen- ajustadas por edad, independientemente del peso corpo-
cia en ciertos grupos étnicos. La prevalencia general de ral.13 Es interesante reseñar que en este análisis, las tasas de
hipertensión ha aumentado en la última década, de forma mortalidad disminuían al aumentar el índice de masa cor-
que casi el 29% de la población reúne los criterios para el poral en pacientes con diabetes o hipertensión, lo que
diagnóstico de hipertensión. 2 Se estima que el número de sugiere algún tipo de ventaja de la adiposidad con respecto
estadounidenses con hipertensión es del orden de 50 millo- a estas enfermedades. Otros han confirmado unas mayores
nes, con 2 millones de casos nuevos diagnosticados anual- tasas de mortalidad en pacientes hipertensos delgados que
mente.3,4 en pacientes obesos.14 Este efecto protector de la obesidad
Existe una relación confirmada entre la obesidad y la no se conoce a fondo, pero podría explicarse en función de
hipertensión, y se reconoce que la obesidad es un factor de una serie de causas o de los distintos efectos cardiovascula-
riesgo independiente para el desarrollo de hipertensión. El res de la hipertensión en los pacientes delgados y obesos.
exceso de adiposidad explica el 70% de la hipertensión en
varones y el 60% en mujeres,5 y se ha afirmado que el factor
predictivo más importante para la hipertensión es el exceso Z SÍNDROME METABÓLICO
de peso corporal.6 Se ha demostrado, por otra parte, que
existe una relación entre el grado de obesidad y la gravedad Se han identificado individuos que presentan una agrupación
de la hipertensión. Un informe del Framingham Heart Study de factores de riesgo cardiovascular, como obesidad central,
mostró que por cada 10% de aumento en el peso, la presión resistencia insulínica con hiperinsulinemia, dislipidemia e
arterial sistólica aumentaba 6,5 mm Hg.7 Un estudio sueco, hipertensión.15 La asociación de estas enfermedades se ha
desarrollado en un significativo porcentaje de la población denominado síndrome metabólico o síndrome X (v. tabla 43-1),
homogénea de ese país, mostró un incremento de 3 mm Hg y está bien documentado que los individuos con este síndrome
en la presión arterial sistólica y de 2 mm Hg en la diastólica están expuestos a un mayor riesgo de patología coronaria.16
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

por cada aumento de 10 kg de peso.8 Cuanto más tiempo sea La distribución de la grasa abdominal, central o visceral se ha
obeso un individuo, mayor probabilidad tiene de desarrollar correlacionado desde hace tiempo con niveles elevados de glu-
hipertensión. cosa y de insulina,17 hipertensión e hiperlipidemia. Existen
La distribución central de la grasa, u obesidad troncal, claras evidencias de que la grasa subcutánea o periférica ejer-
se correlaciona más estrechamente con la incidencia de ce un efecto beneficioso sobre los niveles de lípidos, en com-
hipertensión que la masa total de grasa. Los aumentos paración con la disminución de las lipoproteínas de alta den-
de presión arterial sistólica y diastólica se han correlacionado sidad y el aumento de las lipoproteínas de baja densidad que se
positivamente con los medios de valoración del aumento de observa con la acumulación de grasa visceral.18 La fisiopato-
la grasa visceral, como el índice cintura/cadera,9 la tomogra- logía del papel que desempeña la adiposidad central es posi-
fía computarizada abdominal10 y la medida de la circunfe- blemente multifactorial, con evidentes mecanismos genéticos,
rencia de la cintura.11 mecánicos y bioquímicos.
371
372 Sección VIII • RESULTADOS

base genética para la asociación de enfermedades, aunque


Tabla 43-1 NATIONAL CHOLESTEROL EDUCATION otros mecanismos también podrían estar implicados.21,22
PROGRAM ADULT TREATMENT PANEL III:
EL SÍNDROME METABÓLICO
Aumento de la presión intraabdominal
FACTOR DE RIESGO NIVEL DE DEFINICIÓN Sugerman y cols. han postulado que el aumento de presión
Obesidad abdominal (circunferencia intraabdominal hallado en los obesos es una de las causas de
de la cintura) hipertensión sistémica, sobre todo en los casos de obesidad
Varones ⬎102 cm central.23 Los posibles mecanismos sugeridos incluyen la esti-
Mujeres ⬎88 cm mulación del SRAA debida a un aumento en la presión veno-
Triglicéridos ⬎150 mg/dL
C HDL
sa; la compresión renal directa; y el aumento de la presión
Varones ⬍40 mg/dL intratorácica con descenso del retorno venoso al corazón, con
Mujeres ⬍50 mg/dL la consiguiente disminución del gasto cardíaco. La activación
Presión arterial ⬎130/80 mm Hg del SRAA podría así producir una retención de sodio y agua
Glucosa en ayunas ⬎110 mg/dL y aumentar la presión arterial. El grupo del Medical College of
El diagnóstico se establece cuando están presentes más de tres de estos factores Virginia ha aportado datos experimentales obtenidos con
de riesgo. modelos animales, que sustentan cada uno de estos tres posi-
C HDL, colesterol de lipoproteínas de alta densidad. bles mecanismos generadores de la activación del SRAA.24-26
(Haffner S, Taegtmyer H: Epidemic obesity and the metabolic syndrome.
Circulation 2003; 108:1541–1545. Copyright ©. Lippincott, Williams & Wilkins.)
Resistencia insulínica e hiperinsulinemia
Z FISIOPATOLOGÍA DE LA HIPERTENSIÓN La resistencia insulínica y la hiperinsulinemia resultante se
EN LA OBESIDAD han considerado durante mucho tiempo la conexión entre la
obesidad, la intolerancia a la glucosa y la hipertensión.27 Se
No existe una única explicación para la causa de la hiperten- cree que el exceso de ácidos grasos libres hallado en los obe-
sión con obesidad. Existen pruebas que apoyan a la predis- sos conduce a un aumento en la acumulación de triglicéridos
posición genética, la hiperinsulinemia, la hiperactividad del en el músculo y en el hígado. De este modo, la resistencia
sistema nervioso simpático, el sistema renina-angiotensi- insulínica se produce por la inhibición de la acción de la
na-aldosterona (SRAA), la retención de sal y la leptina, entre insulina por estos triglicéridos.28
otros (v. tabla 43-2). Por otra parte, son estrechos los víncu- La insulina es un potente estimulador de la absorción
los establecidos entre dos de las principales enfermedades renal de sodio, que conduce a la hipervolemia. Así, unos
asociadas con la obesidad, la diabetes y la hipertensión. La niveles elevados de insulina pueden producir un aumento en
hipertensión está presente en el 70% de los diabéticos tipo 2 la retención de sodio, hipervolemia y un aumento de la resis-
obesos, y el 50% de los pacientes con hipertensión padecen tencia vascular periférica (v. figura 43-1).29 El mecanismo
resistencia insulínica. La hiperglucemia se ha asociado a un subyacente puede explicarse por un aumento, mediado por
aumento en los niveles plasmáticos de renina, en la resisten- la insulina, de la sensibilidad a la angiotensina II y a las cate-
cia vascular renal y en la presión arterial media.19 colaminas, así como por la activación de la secreción de
angiotensinógeno por los adipocitos.30
Genética
Estimulación del sistema nervioso simpático
La obesidad es un factor de riesgo para la hipertensión, pero
no todos los obesos tienen hipertensión y no todos los hiper- Hay varios estudios que apoyan la asociación entre un
tensos son obesos. En realidad, la incidencia de hipertensión mayor estímulo simpático en la obesidad y la mayor inci-
disminuyó en el tiempo según los datos de la NHANES II dencia de hipertensión en esta población.31,32 Un estudio
y la NHANES III, mientras que la prevalencia de obesidad desarrollado en colaboración con el Normative Aging Study
aumentó.20 Hay pruebas de que puede haber una conexión aportó datos sobre los niveles de noradrenalina en orina de
genética para el desarrollo de la obesidad e hipertensión. 24 horas y sobre los de insulina posprandial, ambos relacio-
Los estudios han demostrado que los antecedentes familia- nados con la hipertensión.33 Los niveles de noradrenalina
res de hipertensión se relacionan en ocasiones con una mayor en las muestras de orina de la cohorte fueron significativa-
propensión a desarrollar resistencia insulínica. La relación mente mayores en los individuos obesos que en los delga-
entre obesidad central, resistencia insulínica, hipertensión e dos. Los casos incluidos en el tercio inferior de niveles de
hiperlipidemia tratada anteriormente, integrada bajo la excreción de noradrenalina y de niveles de insulina presen-
denominación de síndrome metabólico, sugiere una posible taban una incidencia del 10% de hipertensión, mientras
que, en los encuadrados en el tercio superior, la incidencia
de esta patología era del 35%.
Tabla 43-2 FISIOPATOLOGÍA DE LA HIPERTENSIÓN Los mecanismos propuestos para la activación del siste-
EN LA OBESIDAD ma nervioso simpático con la obesidad incluyen la estimula-
ción directa, tanto por la insulina (v. figura 43-2) como por
Genética
Aumento de la presión intraabdominal la leptina, la estimulación por la angiotensina II y la disfun-
Resistencia insulínica/hiperinsulinemia ción del barorreflejo arterial y del eje hipotálamo-hipofisa-
Estimulación del sistema nervioso simpático rio.2 Como ocurre con otros muchos posibles mecanismos
Resistencia vascular/Na-K-ATPasa que causan hipertensión relacionada con la obesidad, en
Sistema renina-angiotensina-aldosterona estos casos existe una correlación positiva con el grado de
Leptina adiposidad visceral o central y con una mayor actividad
Na-K-ATPasa, adenosina trifosfatasa de sodio y potasio. de los músculos con inervación simpática.34
Capítulo 43 • Resolución de las patologías comórbidas bariátricas: hipertensión 373

Hiperinsulinemia

Aumento de la actividad adrenérgica

Aumento de la absorción Aumento de los niveles de aldosterona Alteración en la distribución


de Na+ y de la sensibilidad a la sal de Na+ y K+

Aumento del volumen


intravascular

Aumento del gasto cardíaco Resistencia periférica total


aumentada o inadecuadamente normal

Aumento de la presión arterial


Figura 43-1 Papel de la hiperinsulinemia en la hipertensión asociada a la obesidad. K, potasio; Na, sodio. (Maxwell M, Herber D, Waks AV,
et al: Role of insulin and norepinephrine in the hypertension of obesity. Am J Hypertens 1995;7: 402-408. Copyright © Elsevier Science Inc.)

Calcio y adenosina trifosfatasa de sodio y potasio:


(–)
resistencia vascular
Obesidad
En personas delgadas, el volumen sanguíneo se relaciona
(+) (+)
inversamente con la presión arterial; a mayor presión arterial,
menor volumen sanguíneo. Sin embargo, los individuos obe-
Termo- (+) Resistencia sos tienen un mayor volumen sanguíneo, lo que resulta en un
genia insulínica mayor gasto cardíaco, debido al mayor volumen sistólico. Un
Dieta porcentaje significativo de este volumen sanguíneo se usa para
(+)
(+) prefundir el exceso de tejido adiposo. Además, el descenso
(+) compensatorio de la resistencia vascular periférica en respues-
(+)
Actividad Hiper- ta a un mayor volumen sanguíneo, que se registra en los indi-
SNS insulinemia viduos delgados, está inhibido en los obesos.29 Generalmente,
la insulina es un vasodilatador directo, y un aumento brusco
(+)
de la insulina plasmática en los no obesos no produce una ele-
vación paralela en la presión arterial, a pesar de la estimulación
simultánea del sistema nervioso simpático.35
En la obesidad, la ausencia de la respuesta vasodilatado-
(+) (+) (+) ra normal al aumento en el volumen sanguíneo y a la hipe-
rinsulinemia puede ser en parte consecuencia de un aumento
(+)
en el calcio intracelular, debido al descenso de adenosina tri-
Vasos Corazón Riñones fosfatasa (ATPasa) de sodio y potasio registrado en los obe-
sos.36 Este aumento del calcio intracelular lleva a un mayor
(+) (+) (+) tono del músculo liso vascular, con el consiguiente aumento
de la resistencia vascular periférica. Otras explicaciones
Vasoconstricción Gasto Reabsorción posibles para la falta de vasodilatación incluyen la estimula-
cardíaco de Na+
ción crónica opuesta del sistema nervioso simpático, discu-
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

tida anteriormente, y la disfunción autónoma con descenso


parasimpático relacionado con la resistencia insulínica.37

Sistema renina-angiotensina-aldosterona
(+) Presión arterial
El SRAA es un importante regulador de la presión arterial y
Figura 43-2 Actividad nerviosa simpática estimulada por la insulina e de la homeostasis de los electrólitos.
hipertensión con obesidad. SNS, sistema nervioso simpático. (Lansberg L:
Las células yuxtaglomerulares de las arteriolas aferen-
Insulin-mediated sympathetic stimulation: role in the pathogenesis of
obesity-related hypertension (or, how insulin affects blood pressure, and tes del riñón liberan renina, que separa aminoácidos a par-
why). J Hypertens 2001; 19:523-528. Copyright © Lippincott Williams & tir del angiotensinógeno, un precursor producido por el
Wilkins.) hígado, para formar la angiotensina I. A continuación, la
374 Sección VIII • RESULTADOS

enzima convertidora de angiotensina trasforma la angio- sio, el angiotensinógeno de los adipocitos y la estimulación
tensina I inactiva en angiotesina II, principalmente en la del sistema nervioso simpático.
circulación pulmonar. La angiotensina II es un potente
vasoconstrictor, tanto por efecto directo en el músculo liso LEPTINA
arteriolar como por estimulación del sistema nervioso sim- La leptina es una hormona secretada por los adipocitos;
pático. También estimula la liberación de aldosterona de la actúa sobre los receptores hipotalámicos para disminuir la
corteza suprarrenal, que promueve la reabsorción de sodio ingesta calórica. Existen pruebas de que la leptina se opone
por los túbulos renales. Estas acciones aumentan la presión a la vasodilatación inducida por el ácido nítrico, actúa como
arterial, al incrementar el volumen plasmático e inducir vasopresor y, además, ejerce acciones sobre el corazón y el
vasoconstricción (v. figura 43-3). riñón mediadas por el sistema simpático, pudiendo así con-
El angiotensinógeno se forma principalmente en el tribuir a la hipertensión en los obesos.42 No obstante, la aso-
hígado, pero también se ha hallado en el tejido adiposo de los ciación entre la leptina y la hipertensión de la obesidad sigue
obesos, lo que indica un posible papel del angiotensinógeno siendo especulativa.
tisular en el desarrollo de hipertensión asociada con la obe-
sidad.38 Es interesante el descubrimiento de que el angioten-
sinógeno se secreta más en los adipocitos viscerales que en Z EFECTOS DE LA PÉRDIDA DE PESO
los subcutáneos,39 lo que constituye una posible explicación SOBRE LA HIPERTENSIÓN: ASPECTOS
para la asociación de la obesidad central con el síndrome MÉDICOS Y QUIRÚRGICOS
metabólico y con el mayor riesgo de mortalidad por causas
cardiovasculares. La pérdida de peso es el mejor método no farmacológico de
La función del SRAA en la hipertensión relacionada controlar la hipertensión. Existe una relación dosis-respues-
con la obesidad se ve confirmada por la evidencia de una ta entre la magnitud de la pérdida de peso y la reducción en
mayor actividad de varios componentes con la obesidad40 y la presión arterial, si bien, incluso una modesta pérdida, del
de una menor actividad con la pérdida de peso, acompaña- 5% al 10% del peso corporal, puede producir una reducción
da de una reducción en la presión arterial. Sin embargo, hay en la presión arterial clínicamente significativa.43,44
datos contradictorios a este respecto, ya que se ha publicado Hay varios estudios que demuestran que el tratamiento
que los niveles de renina no son distintos en los pacientes quirúrgico de la obesidad es efectivo para tratar la hiperten-
obesos al compararlos con los delgados, con una disminu- sión en los pacientes obesos hipertensos.45-47 Sugerman y
ción progresiva al aumentar el peso.41 Probablemente hay cols. publicaron que la hipertensión se resolvió en el 69% de
numerosas vías que conducen a la implicación del SRAA sus pacientes tras someterse a derivación gástrica, y que esos
con la obesidad, algunas de las cuales se han revisado, inclu- pacientes experimentaron una mayor pérdida de peso que
yendo los efectos de la mayor presión intraabdominal, los aquellos en los que la hipertensión no desapareció.47 La remi-
efectos de la insulina en la regulación del sodio y del pota- sión de la hipertensión fue menos frecuente en los pacientes

Las células yuxtaglomerulares


del riñón secretan renina
a la corriente sanguínea

La renina reacciona con


el angiotensinógeno del
hígado (y de los adipocitos)

Angiotensina I
(inactiva)
Enzima convertidora
de angiotensina
(circulación pulmonar) Figura 43-3 Esquema del sistema renina-angiotensi-
Angiotensina II na-aldosterona.
(activa)

La corteza adrenal Fuerte


es estimulada vasoconstricción
para secretar
aldosterona
• Aumento de la
absorción tubular
renal de Na Constricción del Estimulación
• Aumento del músculo liso arteriolar del sistema nervioso
volumen sanguíneo simpático
Capítulo 43 • Resolución de las patologías comórbidas bariátricas: hipertensión 375

negros que en los blancos (60% frente a 73%), aunque en ensayos clínicos. Al igual que ocurre con la diabetes, exis-
los negros también tuvieron una pérdida de peso significati- ten indicios clínicos de que una mayor duración de la hiper-
vamente menor. Schauer y otros investigadores publicaron tensión con obesidad produce un daño en los órganos diana.
que la hipertensión remitió tras derivación gástrica en el 70% Esta afectación disminuye los efectos beneficiosos de la pér-
de sus pacientes y que mejoró en un 18%.48 Aunque hay una dida de peso sobre la salud general y sobre la mejora de la
menor pérdida media de peso con los procedimientos pura- presión arterial. Por lo tanto, se recomienda una intervención
mente restrictivos, se ha publicado que se resolvió la hiper- precoz.
tensión en el 65,5% de los pacientes tras gastroplastia vertical
anillada49 y en el 55% tras banda gástrica ajustable.50
El metaanálisis de Buchwald y cols. mostró una mejoría Z BIBLIOGRAFÍA
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376 Sección VIII • RESULTADOS

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44
Resolución de las patologías comórbidas
bariátricas: apnea del sueño
Ido Nachmany, M.D., Amir Szold, M.D., Joseph Klausner, M.D., y Subhi Abu-Abeid, M.D.

La apnea obstructiva del sueño se describió clínicamente hace sión arterial de dióxido de carbono, el indicador más utilizado
más de 30 años; sin embargo este fenómeno y su aparición en para la valoración de la función respiratoria durante el sueño es
personas obesas se conocía desde mucho antes. Charles la saturación de oxígeno medida mediante un pulsioxímetro.
Dickens en su novela Papeles póstumos del Club Pickwick describe El número total de apneas durante un determinado tiem-
a un personaje joven que, sin lugar a dudas, padece un síndro- po de sueño indica el índice de apnea o número medio de
me de apnea del sueño severo. En la novela se describe al chi- apneas por hora. El índice apnea/hipopnea (IAH) es el núme-
co, Joe, de la siguiente manera: «...y en la caja estaba sentado ro de apneas e hipopneas por hora de sueño. Las apneas e
un chico gordo y de cara rojiza en un estado de somnolencia.» hipopneas obstructivas concluyen con un despertar transito-
Y escribe, «Joe ronca mientras espera en la mesa... el ronquido rio, con recuperación parcial o completa de la fisiología de la
del gordo muchacho se oía como un ruido suave y monótono vigilia. La interrupción del sueño reiterada parece ser la causa
que procedía de la lejana cocina». Esta y otras precisas obser- fundamental de la hipersomnia diurna. Las apneas centrales
vaciones clínicas de la novela de Dickens sugirieron a Osler y o hipopneas que no hacen que las personas que las padecen se
más tarde a Burwell adoptar el término síndrome de Pickwick despierten son a veces clínicamente indetectables.
para designar la combinación de obesidad, hipersomnolencia Según muchos investigadores, el espectro de las alteracio-
y signos de hipoventilación alveolar crónica. nes de la respiración de tipo obstructivo durante el sueño inclu-
Gastaut y cols. definieron la apnea del sueño en 1965.1 ye también el llamado síndrome de resistencia de la vía aérea
Registraron electrofisiológicamente y de forma simultánea superior, que se manifiesta con ronquidos sin apnea o hipopnea
la función respiratoria y del sueño en un paciente con síndro- francas y episodios de limitación del flujo aéreo que terminan
me de Pickwick. Adicionalmente, describieron tres tipos de en despertar del sistema nervioso central. Esta alteración puede
apnea (central, obstructiva y mixta) y postularon que la som- corresponder a los estadios iniciales de la AOS y su diagnóstico
nolencia diurna se debía a los despertares reiterados y a la es importante para limitar la progresión de la enfermedad.
alteración del patrón normal del sueño, como consecuencia
de las interrupciones y reanudaciones de la respiración.
La apnea del sueño consiste en la interrupción temporal de Z EPIDEMIOLOGÍA
la respiración durante el sueño, que puede ser lo suficientemen-
te prolongada como para ser considerada apnea. De forma arbi- La AOS es una enfermedad muy frecuente, que constituye
traria, se define como apnea una interrupción de 10 segundos o un importante problema de salud y que no afecta solamente
más en el ciclo respiratorio. En función de su mecanismo, el al paciente obeso mórbido. Se ha observado que un IAH
síndrome de apnea del sueño se divide en tres grupos. En la de al menos 5 afecta a un 24% de hombres y a un 9% de
apnea central se produce una reducción patológica de la respi- mujeres. El 4% de los varones y el 2% de las mujeres de entre
ración sin que se realice un esfuerzo por respirar. En la apnea 30 y 60 años presentan un IAH de 5 o superior asociado con
obstructiva del sueño (AOS), existe esfuerzo respiratorio, pero una somnolencia diurna excesiva.2
este no es eficaz para mantener el flujo de aire puesto que la vía Se estima que en EE. UU. más de 3 millones de varones
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

aérea superior está cerrada. Esta forma de apnea del sueño es, y 1 millón y medio de mujeres cumplen al menos uno de los
con mucho, más frecuente que la central. La forma mixta cons- criterios de la definición de AOS (IAH de 5 o superior y
tituye una combinación de ambos mecanismos de disminución somnolencia excesiva diurna). En la mayoría de los estudios
del esfuerzo respiratorio y obstrucción del flujo aéreo. poblacionales en los que se ha estimado la prevalencia de la
Por su parte, la definición de hipopnea resulta más comple- enfermedad por sexos, el riesgo ha resultado ser 2 o 3 veces
ja. Consiste en una disminución temporal del flujo inspiratorio, mayor en varones que en mujeres. Sin embargo no se han
que resulta desproporcionado con respecto al esfuerzo del esclarecido hasta la fecha los motivos de esta diferencia tan
paciente y a la demanda metabólica. En un sentido meramente significativa. La prevalencia de la AOS parece incrementar-
práctico, el término hace referencia a una marcada reducción del se gradualmente a partir de la mediana edad. Sin embargo la
volumen respiratorio normal. Debido a la dificultad en las medi- correlación positiva entre la frecuencia de la enfermedad y
das tanto del flujo aéreo como del esfuerzo respiratorio o la pre- la edad no se da durante la niñez, la adolescencia o la vejez.
377
378 Sección VIII • RESULTADOS

Algunos estudios han señalado la alta prevalencia de la AOS estrechamiento y de la obstrucción de la misma. Este cambio
en mayores de 65 años. A pesar de que hay numerosos estu- puede acontecer como resultado de una disminución en la
dios sobre la prevalencia de la enfermedad, es poco lo que se actividad medular respiratoria que a su vez puede condicionar
conoce sobre su incidencia (p. ej., la aparición de nuevos una reducción de la actividad de los músculos respiratorios y
casos en un período de tiempo determinado) o su progresión afectar a las funciones posturales de la musculatura de la vía
(p. ej., empeoramiento con el tiempo). aérea superior.6 La actividad de los músculos dilatadores de
Actualmente sólo disponemos de hallazgos prelimina- esta vía puede dividirse en dos componentes: fásico y tónico.
res procedentes de estudios poblacionales referidos a la pro- La actividad fásica es inspiratoria y su inicio precede a la acti-
gresión de la AOS. Los primeros datos del estudio Wisconsin vidad diafragmática, con el fin de preparar la vía aérea farín-
Sleep Cohort que incluye resultados de 282 pacientes al gea para el desarrollo de la presión negativa durante la inspi-
comienzo del estudio y tras 8 años de seguimiento, indican ración. Por el contrario, la actividad tónica se refiere a la
un empeoramiento de la AOS a lo largo del período de estu- actividad durante la espiración, o el nivel de activación muscu-
dio. La media total del IAH aumentó 2,6 episodios por hora lar sin ninguna actividad fásica y puede ser considerado una
(desde 2,5 al comienzo del seguimiento hasta 5,1 al final). La función basal de la tensión muscular.
progresión fue significativamente mayor en los pacientes En los pacientes afectados de AOS, durante la vigilia hay
obesos en comparación con los no obesos, en los ancianos en una actividad tónica aumentada del músculo geniogloso, así
comparación con los jóvenes y en los pacientes que roncaban como de otros músculos dilatadores faríngeos (como el tensor
de forma crónica con respecto a los que no lo hacían.3,4 del paladar), en comparación con la registrada en sujetos sanos.
Sin embargo el factor de riesgo más significativo para la Esta actividad parece ser un mecanismo de compensación neu-
AOS es la obesidad. La incidencia de la enfermedad en pacien- romuscular en una vía aérea faríngea anatómicamente pequeña
tes obesos es de 12 a 30 veces mayor que en la población gene- y que presenta tendencia a colapsarse. La actividad aumentada
ral. Los estudios clínicos y de laboratorio en estos pacientes de los músculos dilatadores se pierde al inicio del sueño y se
indican que la incidencia de la AOS es de entre el 42% y el asocia con el colapso faríngeo. Numerosas variables condicio-
48% en varones y de entre el 8% y el 38% en mujeres. nan la actividad de los músculos dilatadores faríngeos. Cabe
Al menos el 70% de los pacientes con AOS padecen obe- citar entre ellas la oxigenación sanguínea y los niveles de dióxido
sidad mórbida. Algunos pacientes desempeñan trabajos espe- de carbono, el estado de sueño-vigilia, las hormonas específicas
ciales, como conductor de camiones, y algunos padecen otros de cada sexo, la presión sanguínea, la temperatura, el inflado
síndromes asociados con la obesidad como bulimia nocturna, pulmonar, la vía aérea faríngea y la presión negativa intrafarín-
síndrome de Prader-Willi, enfermedad de Cushing o hipoti- gea. Sin embargo la mayoría de los datos indican que la presión
roidismo. intrafaríngea es el estímulo primario para la activación fásica del
músculo dilatador de la faringe. Es bien conocido que la aplica-
ción de presión negativa a la vía aérea faríngea en animales y en
Z FISIOPATOLOGÍA humanos produce un significativo incremento en la actividad
del músculo geniogloso y de otros músculos de la vía aérea supe-
Actualmente la fisiopatología de la AOS no se conoce a fon- rior. También se ha observado que la capacidad de respuesta del
do, aunque se han descrito numerosos factores que predis- músculo geniogloso a diferentes presiones negativas es constan-
ponen a su aparición. El estrechamiento o la obstrucción de te en cada individuo. La actividad aumentada del músculo dila-
las vías respiratorias durante el sueño están condicionados tador en un paciente con apnea del sueño no es debida a un
por la combinación de una serie de alteraciones anatómicas incremento de la respuesta del músculo geniogloso frente a
y funcionales de la regulación de la vía aérea superior. La cambios de la presión faríngea durante la inspiración. De hecho,
susceptibilidad anatómica de padecer AOS está determinada bajo cualquier condición, no existe diferencia en la respuesta del
por la relación entre las dimensiones del cráneo, que son músculo entre pacientes con AOS y sujetos control. Esta carac-
fijas, y la distribución de las estructuras formadas por los terística se comprobó utilizando un amplio rango de presiones
tejidos blandos y adiposos de su interior. Es importante rese- negativas faríngeas. Por tanto, parece ser que el mayor pico de
ñar que en la mayoría de los pacientes el «defecto» estructu- actividad fásica del geniogloso de los pacientes apneicos es cau-
ral predisponente es simplemente una reducción impercep- sado por la combinación de dos factores. En primer lugar, bajo
tible del tamaño de la vía aérea, que puede apreciarse cualquier condición, la actividad tónica es mayor en los pacien-
clínicamente como una «ocupación anatómica faríngea». tes con apnea del sueño. En segundo lugar, como la resistencia
Sobre esta base anatómica, existen además complejos meca- intrínseca de la vía aérea superior es mayor en estos pacientes,
nismos neurofisiológicos que regulan la permeabilidad de la vía generan más presiones intrafaríngeas negativas en todos los
aérea superior durante el sueño.5 Se sabe que la contribución casos, en los cuales, para una respuesta idéntica a la presión
relativa de los factores anatómicos y funcionales varía enorme- negativa se produce una actividad fásica aumentada.7
mente entre individuos, y puede también variar de modo consi- Existen otros factores involucrados en la génesis de la
derable entre grupos de pacientes con apnea, establecidos en obstrucción de la vía aérea superior que merecen atención.
virtud de su edad, sexo, constitución física, raza o etnia. Sin A pesar de que no se considera un factor primario, la posición
embargo no existen datos que avalen estas diferencias.3 corporal desempeña un papel importante en los episodios
Normalmente el tamaño de la vía aérea es dinámico y obstructivos. Algunos individuos con apnea del sueño depen-
depende del equilibrio entre los factores que ejercen una fuer- diente de la posición presentan obstrucción exclusivamente
za hacia fuera, manteniendo el diámetro luminal y la per- en posición supina. Cuando un individuo se encuentra en
meabilidad. (p. ej., contracción de los músculos dilatadores de posición de decúbito supino los tejidos blandos, como la len-
la vía aérea superior), y factores que ejercen una fuerza hacia gua o el paladar blando, pueden ser arrastrados al interior de
dentro, que disminuye el diámetro luminal (y lo que es más la vía aérea faríngea por efecto de la gravedad. Como conse-
importante, reduce la presión intraluminal). Parece ser que cuencia de ello, el área retrolingual y el paladar blando ocu-
durante el sueño, la disminución del esfuerzo de los músculos pan parte de la vía aérea, estrechándola y, potencialmente,
dilatadores de la vía aérea superior es la principal causa del produciendo una obs trucción. Se ha demostrado que el alco-
Capítulo 44 • Resolución de las patologías comórbidas bariátricas: apnea del sueño 379

hol, los tratamientos con benzodiacepinas y otros agentes reducción del índice de masa corporal del 17,4%  3,4%. El
similares empeoran la enfermedad, tanto en pacientes no estudio incluyó el análisis de 13 pacientes varones emparejados
roncadores como en pacientes roncadores o con AOS. Estas por edad, índice de masa corporal y alteración de la frecuencia
sustancias pueden aumentar las alteraciones de la respiración respiratoria durante la fase de sueño no REM. En el grupo con
durante el sueño, bien por depresión respiratoria o bien por pérdida de peso se puso de manifiesto un significativo descenso
inhibición de la actividad de la musculatura de la vía aérea. en el número de episodios obstructivos, de 83 a 32 episodios
cada hora, y se observó una disminución en la presión crítica
desde 3 cm hasta –2,5 cm de agua. Además, la disminución de la
Z FISIOPATOLOGÍA DE LA APNEA OBSTRUCTIVA presión crítica se asoció con la práctica desaparición de la apnea
DEL SUEÑO EN EL PACIENTE OBESO en los pacientes con presión crítica por debajo de –4 cm de H2O.
Por el contrario, no se observaron cambios significativos en los
El sobrepeso y la obesidad son alteraciones muy prevalentes, pacientes control. Por tanto, parece ser que la pérdida de peso se
que están aumentando en las sociedades occidentales y cuya asocia a un descenso de la capacidad de colapso de la vía aérea en
asociación con la AOS se conoce desde hace tiempo. la AOS y que la resolución de la enfermedad depende de los
Numerosos estudios han detectado correlaciones significa- niveles absolutos a los que cae la presión negativa.10
tivas entre la AOS y el exceso de peso. De hecho, son muy Estos resultados fueron similares en varios estudios no
escasas las controversias en lo que respecta a los resultados controlados de pérdida de peso mediante dieta o cirugía. La
de los estudios observacionales referidos a a la asociación relación entre la media de pérdida de peso y la media de IAH en
causal de exceso de peso y AOS.3 los distintos estudios se representa en la figura 44-1. En general,
Como ya se ha mencionado, el factor anatómico predis- se observó una mayor pérdida de peso relativa (p. ej., media del
ponente para el desarrollo de la AOS es el estrechamiento de porcentaje de reducción desde el peso basal) en los estudios de
la vía aérea superior (p. ej., la «faringe anatómicamente ocu- pacientes sometidos a pérdida de peso quirúrgica que en aque-
pada»). Es frecuente que la obesidad contribuya a la reducción llos que adelgazaban tras tratamiento dietético. En todos estos
del diámetro de la vía aérea superior, debido a la acumulación ensayos puede apreciarse una tendencia clara y constante en la
de grasa en los tejidos blandos de la faringe, o bien por la relación entre la media de pérdida de peso y la media de la reduc-
compresión de la misma por parte de los tejidos grasos super- ción del IAH. Probablemente existen múltiples mecanismos por
ficiales del cuello.8 Los cambios metabólicos y hormonales medio de los cuales la obesidad predispone al colapso de la vía
asociados con la obesidad pueden aumentar la capacidad de aérea durante el sueño: 1) La acumulación de tejido graso alre-
colapso de la vía aérea6 y, además, alterar la relación entre el dedor de la vía aérea en el paciente obeso con AOS (comparada
esfuerzo respiratorio y el resultado de la respiración. Por otra con los pacientes control, del mismo peso y sin la enfermedad)
parte, la reducción de la capacidad residual funcional y el puede reducir directamente la luz de la vía aérea; 2) Estos depó-
aumento de la demanda corporal de oxígeno exacerban en sitos grasos pueden también incrementar la capacidad de colap-
ocasiones los episodios de AOS en el paciente obeso. El exce- so de la misma por alteración de la distensibilidad del tejido,
so de grasa en algunas localizaciones del cuerpo puede ser produciendo un efecto elástico de autorrecarga; 3) Los depósitos
importante. Distintas medidas del hábito corporal, incluida la de grasa pueden interferir con la función inspiratoria y espira-
morfología del cuello, la obesidad general y la obesidad cen- toria de los músculos que normalmente mantienen el calibre de
tral se han asociado con la AOS. Actualmente no existe con-
senso en lo que respecta a la asociación de una constitución
Media estimada de porcentaje de disminución del IAH

física fenotípica específica con la fisiopatología de la AOS. 100


a
El efecto de los cambios en el peso corporal en la AOS ha h
sido con frecuencia analizado en estudios clínicos de pacien- 90 e
tes obesos mórbidos sometidos a tratamientos de reducción de 80
peso. Típicamente, estos estudios valoran los índices de la b l f
AOS antes y después de los tratamientos dietéticos o quirúr- 70
gicos de reducción de peso. Sólo dos de estos estudios incluían
60 j
un grupo control apropiado. En el único estudio aleatorizado,
los efectos terapéuticos de la pérdida de peso fueron evaluados 50 d
en 15 pacientes con hipersomnia y AOS moderadamente gra- k
ve. A medida que los pacientes disminuían su peso corporal 40
desde una media de 106 kg hasta 97 kg, la frecuencia de la g Línea de regresión
apnea descendió desde 55 a 29 episodios cada hora. Los patro- 30 i
nes de sueño también fueron mejorados, con una reducción en c
20
la fase I del sueño y un aumento de la fase II. En los nueve
pacientes que presentaban una mayor caída en la frecuencia 10
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de las apneas, la tendencia a manifestar hipersomnia diurna


disminuyó (p  0,05). No se observaron cambios significati- 0
vos en los patrones de sueño en los ocho pacientes control que 0 10 20 30 40 50
presentaban edad y peso similares a los del grupo de estudio Media de pérdida de peso (porcentaje sobre el peso basal)
y que no registraron disminución de peso.9
En el otro estudio controlado, el efecto de la pérdida de Figura 44-1 Media estimada de la disminución del índice
peso secundaria a dieta sobre la gravedad de la apnea se examinó apnea-hipopnea (IAH), como porcentaje respecto a los valores inicia-
les, asociada con la media de pérdida de peso, como porcentaje del peso
en 13 pacientes obesos y en 13 pacientes control emparejados basal, comparando estudios clínicos de pérdida de peso dietética (trián-
por peso y edad. Con el fin de estimar la influencia de la dieta gulos) y quirúrgica (círculos). Tomado de Young T, Peppard PE, Gottlieb
en la capacidad de colapso de la vía aérea, se determinó la presión DJ: Epidemiology of obstructive sleep apnea: a population health per-
crítica de colapso de la vía aérea superior, antes y después de una spective. Am J Respir Crit Care Med 2002; 165:1217-1239.
380 Sección VIII • RESULTADOS

la vía aérea, y 4) Los cambios hormonales y metabólicos asocia- dios epidemiológicos han encontrado pruebas consistentes de la
dos con la obesidad aumentan la capacidad de colapso de la vía asociación entre AOS e hipertensión.11-16 Sin embargo existe un
por distintos mecanismos. Independientemente del mecanismo, consenso creciente en relación con el hecho de que la AOS es
se ha demostrado que la probabilidad de colapso de la vía aérea un importante factor de riesgo de hipertensión, independiente-
disminuye en el paciente obeso con AOS que pierde peso.6 mente del exceso de peso de los pacientes y de otros factores que
pudieran influir. Tal relación parece existir incluso en las formas
más leves de la AOS. A pesar de que la magnitud de esta corre-
Z PRESENTACIÓN CLÍNICA Y COMPLICACIONES lación es en general modesta, la alta prevalencia de la AOS
DE LA AOS implica que esta enfermedad podría ser la causante de una parte
substancial de los pacientes hipertensos.
Las manifestaciones fundamentales del síndrome de AOS son En un estudio prospectivo de 4 años de seguimiento, y
los ronquidos estentóreos y la somnolencia diurna grave. En después del ajuste de la complexión física, edad, sexo y consu-
la mayoría de los pacientes, los ronquidos son seguidos muchos mo de alcohol y tabaco, las personas en las que al principio del
años después por episodios obstructivos. Es importante des- estudio se registraban pocos episodios de apnea o hipopnea
tacar que la mayoría de los individuos roncadores no padecen (hasta 4,9 episodios por hora) presentaron un 42% más de
AOS. Los episodios nocturnos recurrentes de asfixia y des- probabilidades de desarrollar hipertensión durante el segui-
pertar del sueño que caracterizan la AOS desembocan en alte- miento que las personas que no presentaban episodios.15Las
raciones fisiológicas secundarias, que llevan a algunos pacien- personas con moderadas alteraciones de la respiración duran-
tes a padecer las complicaciones del síndrome. te el sueño (definidas por la IAH de 5 a 14,9 episodios por
Los síntomas más frecuentes son alteraciones neuropsi- hora) y los que tienen graves alteraciones de la respiración
quiátricas y del comportamiento, secundarias a la fragmenta- durante el sueño (definidas por la IAH de 15 o más episodios
ción del sueño y a la pérdida del sueño de ondas lentas inducida por hora) tuvieron probabilidades dos y tres veces mayores,
por las respuestas al despertar recurrente. La hipoxia cerebral respectivamente, de sufrir hipertensión en el seguimiento que
nocturna puede desempeñar también un importante papel en los que no tuvieron episodios de apnea o hipopnea.
el desarrollo de la hipersomnia diurna. Inicialmente la somno- El hecho de que la asociación se comprobase prospectiva-
lencia diurna se manifiesta durante la realización de activida- mente le da soporte a la evidencia de la posible función etioló-
des pasivas como ver la televisión o leer. A medida que el tras- gica de las alteraciones del sueño en la hipertensión. La presen-
torno avanza, la somnolencia aparece en las actividades de la cia de alteraciones respiratorias durante el sueño fue predictiva
vida diaria y puede convertirse en incapacitante o peligrosa.8 de la aparición de hipertensión 4 años más tarde. Estos hallaz-
Tanto la tendencia a roncar como la somnolencia diurna son gos podrían indicar que los trastornos respiratorios del sueño
en ocasiones negadas o minimizadas por los pacientes. Los aceleran la progresión de los niveles de presión sanguínea.
pacientes roncadores pueden no ser conscientes de los ronqui- Puesto que estos trastornos son muy prevalentes, es posible que
dos nocturnos que emiten, a menos que alguien les advierta de esta asociación causal sea responsable de un número sustancial
ello. Podemos distinguir al menos dos problemas asociados de casos de hipertensión y de sus secuelas, como enfermedades
con la somnolencia como síntoma. Uno es la posibilidad de que y mortalidad de tipo cardiovascular y cerebrovascular.15
el desarrollo de la misma sea muy lento, a lo largo de años, y
haga que el paciente llegue a olvidar su estado de alerta nor- Morbilidad y mortalidad cardiovascular
mal. El otro es que la privación de sueño es tan común en y cerebrovascular
nuestra sociedad que la somnolencia como síntoma se conside-
ra muchas veces inespecífica. Las observaciones o comentarios Muchos estudios sobre alteraciones respiratorias durante el
de las personas que conviven con los pacientes y los observan sueño sugieren una asociación independiente entre enferme-
durante el sueño suelen ser muy útiles para los médicos. dad arterial coronaria y apnea obstructiva del sueño. Se han
Otras manifestaciones descritas en la AOS incluyen sueño sugerido distintos mecanismos para esta asociación. Entre
no reparador desde el punto de vista físico, sudoración noctur- ellos se incluyen la alta prevalencia de la hipertensión en estos
na, sequedad de boca y confusión al despertar, cambios en la pacientes, la estimulación simpática crónica y la hipoxemia.
personalidad, alteración intelectual, impotencia y dolores de La mayoría de los estudios que abordan la cuestión de si la
cabeza matutinos. Es bien conocido que la AOS se asocia con AOS supone un riesgo para la enfermedad coronaria com-
algunas enfermedades cardiovasculares y cerebrovasculares. prueban la existencia previa de apnea del sueño en los pacien-
Además, otras alteraciones neurológicas del comportamiento, tes con episodios coronarios agudos. Sin embargo, estos estu-
de gran importancia potencial desde el punto de vista de la dios no pueden establecer una asociación causal directa e
salud pública y de sus consecuencias económicas, se asocian independiente entre la AOS y la cadiopatía isquémica. La res-
con la AOS. Tales son, por ejemplo, la somnolencia diurna y el puesta a esta cuestión deberá esperar respuesta a la finaliza-
deterioro de la función cognitiva, que pueden contribuir a que ción de varios estudios poblacionales de cohortes actualmente
se produzcan accidentes de circulación o laborales.3 en curso, en los que la valoración objetiva de la AOS propor-
cionará datos sobre la incidencia de la enfermedad.
Hipertensión Si la AOS causa hipertensión, también debería contrinuir
a la morbilidad y mortalidad cardiovasculares, dada la incontro-
Los episodios de apnea e hipopnea durante el sueño causan alte- vertible correlación entre ambas. Además de la hipertensión
raciones transitorias de la presión arterial, con elevaciones de crónica, se han propuesto otros mecanismos a través de los cua-
30 mm Hg o mayores sobre la media. Los episodios nocturnos les la AOS puede afectar a la función cardiocascular. Cabe citar
de hipoxia, el despertar y los cambios de la presión intratorácica enre ellos los siguientes: lesión vascular y aceleración de la ate-
secundarios a la AOS pueden dar lugar a elevación sostenida de rosclerosis debida a los episodios de hipoxemia, hiperactividad
la presión arterial mediante mecanismos fisiopatológicos como simpática crónica, incremento de los niveles de fibrinógeno y
elevación crónica del tono simpático, alteración en la función de homocisteína, elevación de la presión arterial pulmonar con
los barorreceptores y remodelación cardiovascular. Varios estu- posterior riesgo de hipertrofia o insuficiencia cardíaca, y
Capítulo 44 • Resolución de las patologías comórbidas bariátricas: apnea del sueño 381

aumento del riesgo de rotura de placas de ateroma con poste- embargo esta técnica se relaciona con morbilidad médica y
riores accidentes cardiovasculares o cerebrovasculares. psicosocial. Por este motivo, y porque el uso de CPAP ha
demostrado obtener muy buenos resultados, el uso de la tra-
queostomía se ha reducido significativamente.18 No obstante,
Z DIAGNÓSTICO aún se considera como una opción en pacientes con enferme-
dad grave que no admiten otro tipo de tratamiento.17
El diagnóstico de AOS requiere que el paciente sea exami- Otra opción válida de tratamiento quirúrgico es la que
nado durante el sueño. La duración y localización del estu- persigue la reconfiguración de la vía aérea superior para con-
dio actualmente es objeto de debate, aunque parece que, en seguir su permeabilidad durante el sueño.19 Se emplean sobre
la mayoría de los casos, no es necesaria una polisomnografía todo la extirpación de las amígdalas y/o de las adenoides, la
completa. Los actuales avances tecnológicos permiten que cirugía nasal y la uvulopalatofaringoplastia.19 En la pasada
los pacientes puedan ser evaluados mientras duermen (o década, la osteotomía anterior sagital de la mandíbula con
mientras se suponen dormidos) en sus propios domicilios. El miotomía, suspensión del hioides y desplazamiento mandibu-
diagnóstico de AOS se establece cuando los pacientes pre- lar (osteotomía de Le Fort tipo 1) era utilizada en el trata-
sentan 5 o más episodios de apnea por hora o 30 episodios miento de la AOS. Más recientemente, el desplazamiento
durante el período nocturno completo. anterior de la mandíbula y el hioides ha sido llevado a cabo por
Riley y Powell20 mientras que la glosectomía de la línea media
mediante láser se ha desarrollado por Fujita y cols.21
Z TRATAMIENTO Obviamente, es deseable contar con una definición cla-
ra de la localización de la vía aérea en la que se produce la
No existen ensayos clínicos controlados que comparen los obstrucción durante el sueño. Con esta información, podrá
efectos de la pérdida de peso dietética y quirúrgica en la determinarse el procedimiento quirúrgico de elección en
apnea del sueño. En un estudio observacional, se puso de cada caso, con lo que se mejorarán los resultados finales. Las
manifiesto que un promedio de disminución de 10 kg del tasas de mejoría en el IAH comunicadas con uvulopalatofa-
peso reducía el IAH desde 55 hasta 29, y una disminución ringoplastia son variables. Las tasas de eficacia a largo plazo
del 10% se asociaba con un descenso del 26% en el IAH en (con una reducción de al menos el 50% en el IAH y un IAH
pacientes con síndrome AOS. postoperatorio por debajo de 10) se observan en menos del
50% de los pacientes.19 Además este procedimiento se asocia
Tratamiento no quirúrgico con complicaciones como dolor postoperatorio, hemorragia,
estenosis nasofaríngea y cambios en la voz. En casos muy
El tratamiento médico o no quirúrgico puede ser conductual, poco frecuentes puede incluso sobrevenir la muerte.
farmacológico o mecánico. En lo que respecta a los cambios de
comportamiento, pueden citarse medidas tales como dieta espe- CIRUGÍA BARIÁTRICA
cial para disminuir el peso, restricción de la posición corporal En individuos con obesidad mórbida la pérdida de peso es el
durante el sueño, eliminación del consumo de alcohol y otras tratamiento de elección. El seguimiento de dietas hipocaló-
sustancias que se asocian con la aparición de apneas, evitar sus- ricas, junto con cambios sustanciales en los hábitos de vida,
tancias irritantes de la mucosa de la vía aérea y evitar la altitud. puede suponer un éxito inicial del tratamiento, aunque los
En el tratamiento de la apnea del sueño, se han utilizado resultados a largo plazo suelen ser poco satisfactorios.
diversos fármacos, en la mayor parte de los casos con efectos Actualmente, el tratamiento quirúrgico de la obesidad mór-
limitados. La oxigenoterapia puede ayudar a un pequeño grupo bida es el más eficaz.22,23 Charuzi y cols. han referido resul-
de pacientes, especialmente a aquellos que viven en regiones tados de seguimiento a corto y largo plazo (42  30 semanas
elevadas sobre el nivel del mar. Los distintos grupos de fárma- y 6,3 años respectivamente) de pacientes con obesidad mór-
cos que se han utilizado son los empleados para mantener el bida y AOS sometidos a cirugía de la obesidad. A corto pla-
diámetro de la vía aérea superior (p. ej., descongestionantes o zo, se observa una significativa disminución del número de
esteroides nasales); los medicamentos que estimulan la respira- episodios de apnea y una considerable mejora en todos los
ción (p. ej., progesterona y acetazolamida), y los fármacos neu- parámetros relacionados con la calidad del sueño. A largo
roactivos de acción generalizada (p. ej., protriptilina). A pesar plazo, se puso de manifiesto que un aumento de peso subsi-
de que en el pasado se mostró un gran interés por el tratamien- guiente volvía a inducir una recurrencia de la AOS.24
to farmacológico de la AOS, la mayoría de los agentes han ido Pillar y cols. comunicaron los resultados de 7,5 años de
perdiendo aceptación por su limitada eficacia. seguimiento en pacientes con obesidad mórbida y AOS some-
En pacientes seleccionados, especialmente los que padecen tidos a cirugía bariátrica. Se observó un importante aumento
apnea leve posicional, pueden utilizarse aparatos mecánicos en el IAH junto con un descenso leve, no significativo del índi-
con el fin de alterar la configuración o distensibilidad de la vía ce de masa corporal. Por tanto, los investigadores concluyeron
aérea superior. Sin embargo, el principal avance en el trata- que la obesidad mórbida en estos pacientes no es la única causa
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miento mecánico consiste en la denominada presión positiva de que padezcan AOS y que la reducción de peso no cura la
continua de la vía aérea (CPAP) nasal, que ha reemplazado enfermedad. Quiere ello decir que el paciente obeso que pierde
prácticamente por completo al uso de la traqueostomía y ha peso después de un tratamiento quirúrgico de la obesidad aún
demostrado su eficacia inmediata. A pesar de ello, el mayor está expuesto a riesgo de recurrencia de la AOS.25
problema de estos tratamientos es su falta de cumplimiento. Por otro lado, Sugerman y cols. demostraron que, des-
pués de ser sometidos a cirugía bariátrica, los pacientes habían
Tratamiento quirúrgico experimentado una significativa mejora del IAH, la presión
de gases en sangre arterial, la tensión pulmonar, la disfun-
La traqueostomía fue el primer tratamiento utilizado en la ción ventrícular izquierda y los volúmenes pulmonares.26
apnea obstructiva17 que fue considerado satisfactorio, ya que Rasheid y cols. demostraron asimismo la sustancial
establecía una permeabilidad continua de la vía aérea. Sin mejora de la AOS en obesos mórbidos en 100 pacientes que
382 Sección VIII • RESULTADOS

perdían indice de masa corporal tras ser sometidos a deriva- 2. Flemons WW: Obstructive sleep apnea. N Engl J Med 2002;347:
ción gástrica.27 Se obtuvieron resultados similares en la 498-504.
3. Young T, Peppard PE, Gottlieb DJ: Epidemiology of obstructive sleep
intervención de banda gástrica para la reducción de peso, con apnea: a population health perspective. Am J Respir Crit Care Med
mejoras significativas en los parámetros respiratorios.28 2002;165:1217-1239.
Creemos en la preponderancia de la evidencia en la mejora 4. Young T, Palta M, Dempsey J, et al: The occurrence of sleep-disor-
de la AOS después de la cirugía de reducción de peso. Ello se dered breathing among middle-aged adults. N Engl J Med
1993;328:1230-1235.
ha confirmado de forma contundente en el metaanálisis publi- 5. Dempsey JA, Skatrud JB, Jacques AJ, et al: Anatomic determinants of
cado por Buchwald y cols., en el que la AOS se resolvió en el sleep-disordered breathing across the spectrum of clinical and
85,7% de los pacientes y fue resuelta o mejorada en el 83,6%.29 nonclinical male subjects. Chest 2002;122:840-851.
6. Westbrook PR: An overview of obstructive sleep apnea: epidemiology,
M ANEJO PERIOPERATORIO pathophysiology, clinical presentation, and treatment. UpToDate,
version 10.2, April 2002.
Los pacientes con AOS deberían ser diagnosticados y evalua- 7. Fogel RB, Malhotra A, Pillar G, et al: White genioglossal activation
dos en el perioperatorio para mejorar el curso del mismo y in patients with obstructive sleep apnea versus control subjects. Am J
prevenir complicaciones respiratorias, como la apnea o el uso Respir Crit Care Med 2001;164:2025-2030.
prolongado de ventilación mecánica. Es bien conocido que el 8. Phillipson EA: Sleep apnea. In Isselbacher KJ, Braunwald E, Wilson
JD, et al (eds): Harrison’s Principles of Internal Medicine, ed 14, pp.
paciente con AOS puede sufrir exacerbaciones de la enferme- 1483-1998. New York, McGraw-Hill, 1998.
dad después de ser sometido a anestesia general. Los sínto- 9. Smith PL, Gold AR, Meyers DA, et al: Weight loss in mildly to
mas clínicos de la AOS incluyen historia de ronquidos, som- moderately obese patients with obstructive sleep apnea. Ann Intern
nolencia diurna, sueño interrumpido y corto, latencia y Med 1985;103:850-855.
10. Schwartz AR, Gold AR, Schubert N, et al: Effect of weight loss on
antecedentes de apnea confirmados. El examen físico puede upper airway collapsibility in obstructive sleep apnea. Am Rev Respir
poner de manifiesto una orofaringe anatómicamente ocupa- Dis 1991;144:494-498.
da, aumento de la úvula, pliegues faríngeos repetidos, macro- 11. Durán J, Esnaola S, Rubio R, et al: Obstructive sleep apnea-hypopnea
glosia relativa y circunferencia de cuello excesiva. and related clinical features in a population-based sample of subjects
aged 30 to 70 years. Am J Respir Crit Care Med 2001;163:685-689.
En individuos con sospecha de AOS deben llevarse a cabo 12. Nieto FJ, Young TB, Lind BK, et al: Association of sleep-disordered
exploraciones complementarias, tales como laringoscopia con breathing, sleep apnea, and hypertension in a large community-based
tubo flexible y polisomnografía. Es necesario convencer a los study. JAMA 2000;283:1829-1836.
pacientes con AOS moderada o grave de la necesidad de some- 13. Bixler EO, Vgontzas AN, Lin HM, et al: Association of hypertension
terse a cirugía bariátrica mientras mantengan una función and sleep-disordered breathing. Arch Intern Med 2000;160:2289-2295.
14. Young T, Peppard P, Palta M, et al: Population-based study of
respiratoria óptima, haciéndoles saber que es posible que haya sleep-disordered breathing as a risk factor for hypertension. Arch
que proceder a una intubación o incluso a una traqueostomía. Intern Med 1997;157:1746-1752.
Conviene limitar el uso de narcóticos o sedantes postope- 15. Peppard PE, Young T, Palta M, et al: Prospective study of the asso-
ratorios. Los pacientes deben ser monitorizados mediante pul- ciation between sleep-disordered breathing and hypertension. N Engl
J Med 2000;342:1378-1384.
sioximetría y aquellos que estén afectados de AOS grave han 16. Peppard PE, Young T: Sleep-disordered breathing and hypertension:
de ser controlados en unidades de cuidados intensivos. A los reply. N Engl J Med 2000;343:967.
enfermos que estuvieran utilizando CPAP previamente se les 17. White D, Douglas N, Pickett C, et al: Sleep deprivation and control
ha de indicar que sigan empleándola en el postoperatorio. of ventilation. Am Rev Respir Dis 1983;128:984-986.
18. Lin C: Effect of nasal CPAP on ventilatory drive in sleep apnea
syndrome. Eur Respir J 1994;7:2005-2010.
19. Loube D, Loube A, Milter M: Weight loss for obstructive sleep apnea:
Z CONCLUSIÓN the optimal therapy for obese patients. J Am Diet Assoc
1994;94:1291-1295.
20. Riley RW, Powell NB, Guilleminault C: Maxillary, mandibular and
La AOS es una enfermedad muy frecuente que no sólo afec- hyoid advancement for treatment of obstructive sleep apnea: a review
ta a las personas con obesidad mórbida. Es sin duda un of 40 patients. J Oral Maxillofac Surg 1990;48:20-26.
importante problema de salud que puede dar lugar a distin- 21. Fujita S, Woodson BT, Clark JL, et al: Laser midline glossectomy as
tas patologías, tales como hipertensión, hipertrofia ven- a treatment for obstructive sleep apnea. Laryngoscope
tricular derecha o izquierda, hipertensión pulmonar y 1991;101:805-809.
22. Abu-Abeid S, Szold A: Results and complications of laparoscopic
aumento del riesgo de muerte súbita. adjustable gastric banding: an early and intermediate experience.
La obesidad desempeña un papel importante en las Obes Surg 1999;9:188-190.
patogenias del AOS. Ha de ponerse especial empeño en 23. Abu-Abeid S, Keidar A, Szold A: Resolution of chronic medical condi-
identificar a los pacientes afectados de AOS antes de la ciru- tions after laparoscopic adjustable silicon gastric banding for the
treatment of morbid obesity in the elderly. Surg Endosc
gía. Aquellos pacientes en los que se sospeche de posible pre- 2001;15:132-1324.
sencia de la enfermedad deben ser evaluados preoperatoria- 24. Charuzi I, Lavie P, Peiser J: Bariatric surgery in morbidly obese sleep
mente, con el fin de intentar que lleguen a la intervención en apnea patients: short- and long-term follow-up. Am J Clin Nutr
las mejores condiciones respiratorias que sea posible. 1992;55(suppl):S945-S946.
25. Pillar G, Peled N, Lavie P: Recurrence of sleep apnea without
La pérdida de peso supone una mejoría notable en todos concomitant weight increase 7.5 years after weight reduction surgery.
los pacientes con AOS. El tratamiento médico y conservador Chest 1994;106:1702-1704.
en la obesidad mórbida suele resultar ineficaz. En estos 26. Sugerman H, Faiman R, Sood R, et al: Long-term effect of gastric
casos, la cirugía bariátrica parece ser el tratamiento de elec- surgery for treating respiratory insufficiency of obesity. Am J Clin
ción. La pérdida de peso en estos pacientes da lugar a la Nutr 1992;55(suppl):S597-S601.
27. Rasheid S, Banasiak M, Gallagher S, et al: Gastric bypass is an effective
remisión o, al menos, a la mejora de la AOS. treatment for obstructive sleep apnea in patients with clinically
significant obesity. Obes Surg 2003;13:58-61.
28. Szold A, Abu-Abeid S: Laparoscopic adjustable silicone gastric band-
Z BIBLIOGRAFÍA ing for morbid obesity: results and complications in 715 patients. Surg
Endosc 2002;16:230-233.
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diurnal and nocturnal manifestations of the Pickwick syndrome. a systematic review and meta-analysis. JAMA 2004;292:1724-1737.
Brain Res 1965;2:167. (Erratum), JAMA 2005;293:1728.
45
Alteraciones ortopédicas y obesidad:
cambios con la pérdida de peso
John B. Dixon, M.B.B.S., F.R.A.C.G.P., y Paul E. O’Brien, M.D., F.R.A.C.S.

A pesar de que los pacientes con obesidad más grave padecen y hombros en las mujeres con pechos grandes.10 Se ha demos-
dolores articulares y musculoesqueléticos, muchos aspectos trado que estas molestias musculoesqueléticas y de las arti-
de la relación entre alteraciones ortopédicas y obesidad pre- culaciones tienen un impacto negativo en la calida de vida de
sentan un reducido nivel de datos de apoyo basados en la las personas obesas.2,11
evidencia. En el presente capítulo se estudiará la informa-
ción, poco abundante, referida a esta importante relación. El Artrosis
conocimiento de la interacción entre peso, pérdida de peso,
artritis y, en especial, artrosis, puede ser crucial para la pre- La asociación entre obesidad y artrosis es más fuerte en
vención y el tratamiento adecuados de algunas de las altera- mujeres.12-15 El riesgo relativo de desarrollar artrosis de
ciones ortopédicas más frecuentes. rodilla es de dos a siete veces mayor en las mujeres situadas
en el tercio superior del índice de masa corporal (IMC), y
llega a las 18 veces para la enfermedad bilateral. La propor-
Z OBESIDAD Y PATOLOGÍA ORTOPÉDICA ción de artrosis que puede atribuirse a la obesidad en muje-
res de mediana edad es del orden del 63%.16 El Framingham
Alteración de la movilidad Heart Study puso de manifiesto, en mujeres inicialmente
examinadas entre 1948 y 1951, una fuerte asociación entre
La obesidad se asocia con importantes problemas de movili- obesidad y desarrollo de artrosis 36 años más tarde. La rela-
dad y con una serie de dolores musculoesqueléticos que con- ción no fue tan evidente en varones.12,15 Los estudios reali-
dicionan en buena medida la calidad de vida.1,2 La disnea pue- zados en hermanos gemelos confirmaron la importancia del
de hacer que actividades habituales, como caminar o subir IMC como factor de riesgo de artrosis de rodilla en mujeres,
escaleras puedan ser complejas o, de hecho, o imposibles de con un aumento estimado del riesgo del 35% por cada 5 kg
realizar. Asimismo, las dificultades físicas convierten la higie- de peso aumentados.17,18
ne personal o la limpieza en tareas muy difíciles, por ejemplo, Las evidencias actuales sugieren que el aumento del
por la imposibilidad de secarse después de la ducha, cortarse riesgo probablemente es debido al mecanismo directo de
las uñas de los pies o atarse los cordones de los zapatos. Los estrés sobre la articulación más que a problemas metabóli-
asientos son con frecuencia demasiado estrechos, por ejemplo cos.14,16,19 Sharma y cols. observaron que la obesidad se rela-
en los aviones, lo que dificulta las posibilidades de viajar. cionaba con la artritis de rodilla con más fuerza en indivi-
Los problemas de movilidad asociados con la obesidad duos con genu varo y presentó la hipótesis de que esta
parecen ser más habituales en mujeres, y se suelen incremen- malformación puede hacer a la rodilla más susceptible a
tar con la edad.3 Las mujeres ancianas y obesas presentan artritis en los pacientes obesos.20 Los factores biomecánicos
mayores limitaciones funcionales que las de peso normal.4 asociados con la marcha en individuos obesos también son
Las mujeres se quejan de que sus mayores problemas de predisponentes para la artritis de rodilla. 21 Es importante
movilidad son tensión y dolor en el trabajo, mientras reali- destacar que la obesidad contribuye, no sólo a la progresión
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zan deporte, caminan al aire libre, suben escaleras, se levan- de la artritis de rodilla, sino también a la incapacidad que
tan del sofá o realizan tareas domésticas que requieran aga- esta de por sí produce.22
charse, encogerse y levantarse.5 La obesidad también se ha No existe una relación clara entre obesidad y artrosis de
asociado con una rápida disminución de la movilidad, inde- otras articulaciones distintas a la rodilla. Algunos estudios
pendientemente del estado motor basal.6 sugieren que podría haber un aumento también de la afecta-
No sorprende que el grado de incapacidad del paciente ción de la mano23,24 y de la cadera,25,26 pero estos hallazgos
obeso esté relacionado sobre todo con molestias en la parte no han sido confirmados.27,28 Por otro lado, muchos estudios
baja del cuerpo, por ejemplo, con dolores en los pies, espe- han señalado un aumento de la prevalencia del dolor de
cialmente en los talones y rodillas después de estar de pie o espalda en los pacientes con obesidad grave, 29-31 aunque la
haber caminado, y con dolores persistentes de la parte baja naturaleza y los mecanismos de estos dolores no han sido
de la espalda.9 También son frecuentes los dolores de cuello bien estudiados.
383
384 Sección VIII • RESULTADOS

En un estudio de la cohorte británica de nacimiento de ca.38 Los estudios de la calidad de vida después de la cirugía
1958 se observó una interesante interacción entre el dolor de es- bariátrica demuestran mejoras sostenidas en las funciones
palda y la obesidad en mujeres. Las mujeres con dolor crónico físicas y la reducción del dolor.11,39,40
de espalda aumentaron más de peso entre los 23 y los 33 años Hemos realizado un amplio estudio prospectivo referido
que aquellas que no lo padecían. Las que eran obesas a los a la la calidad de vida relacionada con la salud en pacientes con
23 años de edad presentaban un riesgo elevado de padecer en obesidad grave, antes y después de una pérdida de peso indu-
los siguientes 10 años dolor de espalda (riesgo relativo ajusta- cida por cirugía de banda gástrica laparoscópica.11 Para la
do = 1,78). No se registraron relaciones similares en varones.32 valoración de la calidad de vida de los pacientes se utilizó el
Se ha propuesto la hipótesis de que la pérdida de musculatura cuestionario de salud SF-36. Los pacientes con artritis de
en las extremidades inferiores, asociada con la obesidad de miembros inferiores o dolor en las articulaciones antes de la
tipo central en mujeres de edad, pueda relacionarse con dolor cirugía presentaban una peor calidad de vida y experimenta-
en la parte baja de la espalda.33 En nuestras series consecutivas ron una mejoría en el plazo de 1 año superior a la del resto de
de 1000 pacientes con obesidad grave que iban a ser sometidos los pacientes en siete de las ocho categorías del SF-36. Las
a cirugía de banda gástrica laparoscópica, el 56% de los casos puntuaciones obtenidas al año por los pacientes con artritis y
referían dolor reciente en la parte baja de la espalda. La obesi- dolor articular no fueron diferentes de las obtenidas por
dad es un factor de riesgo para la transición de dolor agudo pacientes sin obesidad (v. figura 45-1).11 La principal mejora
ocupacional a dolor crónico.34 En una revisión sistemática de la en la calidad de vida en pacientes con dolor en rodilla, tobillo
bibliografía se observó que en dos tercios de los estudios se y pie refuerza la hipótesis de que la obesidad causa o empeora
registraba una relación positiva entre el dolor de espalda y la las alteraciones que producen estos síntomas.
obesidad, aunque el riesgo relativo era menor de 2.35
Artrosis
Gota
Existen pocos datos que hagan referencia a la pérdida de
Estudios longitudinales cruzados han demostrado con clari- peso como tratamiento para la artrosis, aunque la escasa
dad la asociación entre obesidad, hiperuricemia y gota tanto en información sugiere que es eficaz, en especial en pacientes
varones como en mujeres. La hiperuricemia, asociada a la obe- con afectación de la rodilla, en los que una pequeña reduc-
sidad de distribución central y a la resistencia a la insulina, se ción de peso puede tener efectos muy favorables.41 La reducción
desarrolla como consecuencia tanto de un aumento de produc- de peso ha demostrado que puede ralentizar la progresión de
ción de ácido úrico como por una eliminación renal alterada.16 la artrosis de rodilla.16
Además, la ganancia excesiva de peso en adultos jóvenes y la La pérdida de peso y el ejercicio físico consiguen mejoras
hipertensión son otros factores de riesgo de padecer gota.36 en los niveles del dolor, incapacidad y manejo de los pacientes
La reducción de peso se ha asociado con una modesta dismi- ancianos obesos con artrosis de rodilla.42 En un programa de
nución de la concentración de ácido úrico en suero.37 intervención de 6 semanas de duración se encontró que el
incremento del ejercicio y la reducción de la masa grasa se
correlacionaban con un alivio de los síntomas de artrosis en los
Z EFECTO DE LA PÉRDIDA DE PESO pacientes con sobrepeso.43 Las mujeres obesas y con sobrepeso
que participaron en el estudio Framingham Knee Osteoarthritis
Calidad de vida y que habían perdido peso en los 10 años anteriores tenían un
riesgo reducido de desarrollar artrosis sintomática.44
Casi todos los individuos que experimentan pérdidas signi- La cirugía bariátrica ha demostrado que puede dismi-
ficativas de peso refieren mejoras en sus niveles de energía, nuir las necesidades de fármacos para aliviar el dolor que
movilidad física, estado de ánimo, autoconfianza y salud físi- produce la artrosis.45 En varias series sobre los resultados de

100

90

80
Puntuación en cada categoría

70 Figura 45-1 Resultados


médicos valorados con el cues-
60 tionario de salud SF-36. El
gráfico muestra las puntuacio-
50 nes preoperatorias y al año de
seguimiento tras la realización
40 de cirugía de derivación gás-
trica ajustable laparoscópica.
30 Los pacientes con artritis o
dolor articular (n  158) se
Artritis y dolor articular preoperatorio compararon con el grupo total
20 Artritis y dolor articular al año de seguimiento de pacientes (n  218).
Grupo total preoperatorio
10
Grupo total al año de seguimiento
Patrón normal
0
Función Papel Dolor Salud Energía Función Papel Salud
física físico general social emocional mental
Capítulo 45 • Alteraciones ortopédicas y obesidad: cambios con la pérdida de peso 385

la cirugía bariátrica se muestran mejoras o desaparición de sobre este particular no permitió deducir que el desgaste de
los síntomas relacionados con la artritis, sin más detalles polietileno en las prótesis de cadera y rodilla dependiese del
específicos.46-48 Se necesita una mayor especificidad en las peso del paciente.66 Por tanto, aunque los resultados funcio-
publicaciones sobre los resultados de la cirugía bariátrica en nales son buenos, no existe sólo un aumento del riesgo de
relación al sistema musculoesquelético. complicaciones perioperatorias, sino que continúa habiendo
también un mayor riesgo de infección y de necesidad de revi-
sión de la cirugía en los pacientes obesos.
Z CIRUGÍA ORTOPÉDICA EN EL PACIENTE OBESO
Pérdida de peso después de una sustitución articular
Riesgos de la cirugía
Las restricciones físicas y la movilidad reducida asociada con
Los problemas asociados con la cirugía de reemplazo de una la artrosis y el dolor articular significativo, favorecen el
articulación están directamente relacionados con el IMC. Los aumento de peso en los pacientes con tendencia a la obesi-
pacientes obesos tienen más enfermedades preoperatorias dad; esta hipótesis se ve confirmada por ciertas evidencias
como diabetes de tipo 2, apnea obstructiva del sueño y enfer- epidemiológicas.32 ¿Podría la mejoría del paciente tras la
medad cardíaca. Especialmente aquellos que presentan un artroplastia dar lugar por sí sola a una una pérdida de peso?
IMC mayor de 35 kg/m2 requieren hospitalizaciones más lar- Dos pequeños estudios observacionales han apuntado de
gas y rehabilitación más intensiva. Además, estos pacientes manera indirecta esta posibilidad. Sin embargo, ninguno
padecen un mayor número de complicaciones postoperatorias de ellos confirmó de forma fehaciente que la mejora funcio-
después de ser sometidos a artroplastia de rodilla.49 Existen nal después de una artroplastia de cadera o rodilla facilitase la
sólidas evidencias de que la obesidad es un factor de riesgo pérdida de peso.67,68 La relación entre dolor y aumento de
para la aparición de tromboembolia venosa, mayor pérdida de peso, así como entre desaparición del dolor y pérdida de peso,
sangre intraoperatoria, retraso en la cicatrización de la herida requieren un estudio pormenorizado.
quirúrgica e infección profunda de la articulación, tanto en la
artroplastia de cadera como en la de rodilla.50-58 Efecto de la pérdida de peso previa a la artroplastia
Resultados de la cirugía en el paciente obeso Dado el aumento del riesgo, para complicaciones tanto tem-
pranas como tardías, después de la sustitución quirúrgica de
En general los ortopedas aceptan que en el paciente con obesi- una articulación en el paciente obeso, sería conveniente com-
dad grave los resultados de la artroplastia a largo plazo son peo- probar el efecto de la pérdida de peso previa a la intervención.
res, por lo que la operación suele posponerse hasta que el pacien- Son muy limitados los datos al respecto. Sin embargo en un
te ha conseguido perder peso. Sin embargo, los datos publicados estudio observacional se han comunicado resultados favora-
disponibles no proporcionan soporte válido a esta postura. La bles para las artroplastias realizadas después de una cirugía
obesidad se asocia con aumento del riesgo perioperatorio en las bariátrica.69 Es ciertamente sorprendente que existan tan
artroplastias, pero los resultados a largo plazo son en general pocos estudios en un campo tan importante. A todos los
favorables y comparables a los del paciente no obeso. En un pacientes obesos que requieren sustitución articular se les
estudio llevado a cabo 10 años después de la artroplastia de rodi- aconseja que pierdan peso. Algunos cirujanos incluso reco-
lla en un grupo de pacientes, Griffin y cols. encontraron pacien- miendan retrasar la intervención hasta que se ha perdido peso.
tes obesos que presentaban mayores mejoras en las puntuacio- En este contexto, hay ciertas cuestiones importantes que
nes funcionales que los pacientes no obesos.59 Las puntuaciones quedan pendientes de resolver, tales como saber cuánto peso
a los 10 años de la intervención eran comparables a las de los se debe perder, cómo hacerlo, y determinar si la pérdida de
pacientes no obesos; sin embargo, los pacientes con obesidad peso previa da lugar a mejores resultados en la operación.
presentaban al inicio puntuaciones funcionales más bajas. Un Los riesgos de la cirugía de prótesis articular son mayores
estudio a nivel comunitario de tipo cruzado demostró que la en pacientes con IMC mayor de 35 kg/m2. El único método
edad y la obesidad no implican impactos negativos en la calidad viable para conseguir y mantener pérdidas de peso significati-
de vida relacionada con el estado de salud en los pacientes con vas en los pacientes en este rango de peso es la cirugía bariátri-
sustitución de la articulación de la rodilla.60 Stickles y cols. ca. Esta cirugía actualmente está considerada segura, mínima-
observaron que los pacientes obesos disfrutan de la misma mente invasiva y adecuada en términos generales. Dado que los
mejora y nivel de satisfacción que el resto de los pacientes.61 En trastornos causados o agravados por la obesidad pueden mejo-
una serie consecutiva de 180 artroplastias de rodilla, el IMC no rar con una pérdida de peso sustancial y sostenida, y que la
influyó negativamente en los resultados durante el primer año realización de ejercicio físico resulta difícil para el paciente obe-
de seguimiento.62 Spicer y cols. confirmaron que la mejora en so con artritis, sería importante estudiar los efectos de la ciru-
las puntuaciones funcionales de la rodilla después de la cirugía gía bariátrica previa sobre los resultados de la artroplastia.
parece ser similar en pacientes obesos y no obesos.63 No hay duda de que la obesidad grave está asociada con una
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Sin embargo, se ha demostrado que la obesidad puede notable alteración de la calidad de vida desde el punto de vista
constituir un factor de riesgo para algunas complicaciones físico. Esto supone un importante reto, tanto para los cirujanos
tardías de la artroplastia de rodilla, que en ocasiones requie- especialistas en obesidad como para los especialistas en ortope-
ren incluso cirugía posterior.64 Spicer y cols. comunicaron un dia. La valoración exhaustiva mediante ensayos de las distintas
aumento de la osteolisis focal radiográfica en pacientes con posibilidades terapéuticas es actualmente muy necesaria.
IMC  40 kg/m2 y una tendencia creciente de la necesidad
de cirugía de revisión.63 La obesidad aparece también como
un importante factor de riesgo de aparición tardía de infec-
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Capítulo 45 • Alteraciones ortopédicas y obesidad: cambios con la pérdida de peso 387

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46
Resultados metabólicos
de la cirugía bariátrica
Athanassios Petrotos, M.D., y Louis Flancbaum, M.D., F.A.C.S., F.C.C.M., F.C.C.P.

La obesidad causa numerosas alteraciones metabólicas y nos, se registra una mayor prevalencia en varones (57%) que en
fisiológicas, la mayoría de las cuales mejora significativamen- mujeres, mientras que entre los estadounidenses de origen
te cuando el paciente pierde peso mediante procedimientos mexicano las mujeres presentaron mayor prevalencia (26%) que
quirúrgicos. Además, los procedimientos utilizados en la ciru- los varones. Utilizando datos censales del año 2000, se estima
gía bariátrica mediante los cambios que suponen en la anato- que aproximadamente 47 millones de residentes en EE. UU.
mía y fisiología gastrointestinal dan lugar a cambios signifi- padecen síndrome metabólico. Las personas con este síndrome
cativos en la composición corporal y en el metabolismo tienen riesgo aumentado de desarrollar diabetes mellitus y
energético. El presente capítulo discute ambos aspectos. enfermedad cardiovascular, así como de muerte a consecuencia
de enfermedades cardiovasculares u otras causas.
Z ANOMALÍAS METABÓLICAS ASOCIADAS
Resistencia a la insulina
CON LA OBESIDAD
La reducción de la sensibilidad a la insulina puede producirse
Síndrome metabólico por una alteración genética o puede ser adquirida como conse-
cuencia de la obesidad. En ambos estados, en ayunas y pospran-
La asociación entre la obesidad de la parte superior del cuer- dialmente, los pacientes necesitan niveles de insulina varias
po, intolerancia a la glucosa, hipertrigliceridemia e hiper- veces más altos que los pacientes no obesos para mantener la
tensión fue denominada «el cuarteto mortal» y fue descrita normoglucemia.3 A nivel celular, la insulina se une a su receptor
por Kaplan en 1989.1 Esta constelación fue llamada más tar- de superficie de la célula diana produciendo la autofosforilación
de síndrome metabólico, síndrome X o síndrome metabólico de la tirosina e induciendo señalización intracelular. Estos
de resistencia a la insulina asociado a la obesidad. fenómenos culminan con la respuesta celular de traslocación de
El síndrome metabólico se define en función de la pre- los transportadores de glucosa a la superficie celular, para per-
sencia de tres o más de los siguientes factores.2 mitir que la glucosa se almacene en forma de glucógeno. En la
obesidad, la señalización de la insulina es defectuosa. La activi-
1. Obesidad abdominal: circunferencia de cintura mayor dad de la proteína cinasa estimulada por insulina del receptor
de 102 cm en varones y de 88 cm en mujeres. de la insulina, que media en la autofosforilación de la tirosina,
2. Hipertrigliceridemia mayor de 150 mg/dL (1,69 mmol/L). es menor en los sujetos obesos que en los no obesos, y es aún
3. Colesterol de lipoproteínas de alta densidad (HDL) por inferior en pacientes con obesidad y diabetes de tipo 2 secunda-
debajo de 40 mg/dL (1,04 mmol/L) en varones y por de- ria. La obesidad se asocia con otros defectos en la función de la
bajo de 50 mg/dL (1,29 mmol/L) en mujeres. insulina, como alteración de la generación de mensajeros secun-
4. Aumento de la presión arterial por encima de darios, reducción del transporte de la glucosa al músculo esque-
130/85 mm Hg. lético y alteraciones en algunos mecanismos enzimáticos invo-
5. Aumento de la glucosa en ayunas por encima de 110 mg/dL lucrados en el uso de la glucosa.4 En los pacientes obesos con
(6,1 mmol/L). disminución del transporte de glucosa mediado por insulina
este defecto puede ser revertido tras la pérdida de peso.4
En un estudio las prevalencias totales y ajustadas por edad El incremento de los niveles de ácidos grasos libres (AGL)
del síndrome metabólico fueron del 21,8% y el 23,7% respecti- en los individuos obesos también contribuye al defecto en el
vamente.2 La prevalencia aumentó del 6,7% en los pacientes de uso y almacenamiento de la glucosa. A medida que aumenta la
entre 20 y 29 años de edad hasta el 43,5% en los de edades grasa corporal, se incrementa también la tasa de lipólisis, dan-
comprendidas entre 60 y 69 años, y hasta el 42% en los pacien- do lugar a un aumento de la movilización de AGL e incremen-
tes mayores de 70 años. Los estadounidenses de origen mexica- tando, como consecuencia de ello, la oxidación de los mismos
no presentan la mayor prevalencia ajustada por edad del síndro- en músculo e hígado. Por el contrario, la glucosa utilizada por
me metabólico (31,9%). Esta prevalencia fue similar en varones el músculo disminuye a medida que se utilizan los AGL como
(24%) y mujeres (23,4%). Por otra parte, entre los afroamerica- alternativa energética y la producción de glucosa hepática
388
Capítulo 46 • Resultados metabólicos de la cirugía bariátrica 389

aumenta en respuesta a la mayor oxidación de los AGL. Estas enfermedad de Laennec no alcohólica, hepatitis diabética, enfermedad
acciones producen hiperglucemia y alteración de la tolerancia hepática similar a la alcohólica y esteatohepatitis no alcohólica. El
a la glucosa. Este mecanismo es particularmente importante término enfermedad hepática grasa no alcohólica (EHGNA)
en los individuos con obesidad de la parte superior del cuerpo parece ser el que mayor implantación está adquiriendo. El
u obesidad central. El hígado además responde peor a la insu- espectro de manifestaciones de la EHGNA puede ir desde una
lina. A medida que la resistencia a la insulina se hace más pro- una esteatosis benigna hasta una cirrosis. La obesidad, la dia-
funda, se altera la distribución de glucosa por los tejidos peri- betes de tipo 2 y la hiperlipidemias se asocian con la EHGNA.
féricos y aumenta la eliminación de glucosa hepática.3 La EHGNA es la causa más frecuente de pruebas hepá-
ticas anómalas en adultos en EE. UU. (la mayoría de las
Diabetes mellitus de tipo 2 veces consiste en una elevación leve o moderada de las enzi-
mas hepáticas (AST/ALT). Su diagnóstico se realiza funda-
El riesgo de desarrollar diabetes de tipo 2 aumenta significa- mentalmente mediante biopsia hepática. Sobre la base de la
tivamente con el aumento del índice de masa corporal (IMC). población total de EE. UU. en el año 2000, se estima que
Esta relación fue demostrada en el Estudio de Salud del 30,1 millones de adultos obesos presentan esteatosis y que unos
Personal de Enfermería, en el que se sometió a seguimiento a 8,6 millones padecen esteatohepatitis.9 Entre 92 pacientes
una cohorte de más de 114.000 profesionales de enfermería obesos consecutivos que se sometieron a cirugía bariátrica,
durante 14 años.5 En mujeres con IMC de menos de 22 kg/m2, la biopsia hepática rutinaria demostró esteatosis en el 84%
el riesgo ajustado por edad de desarrollo de diabetes de tipo 2 de ellos, inflamación grave o moderada en el 20%, y fibrosis
aumentó de modo uniforme en paralelo al incremento del o cirrosis en el 8%.10
IMC. Las que presentaban IMC mayores o iguales a 35 kg/m2 No se observó correlación cuando se estudiaron los
tuvieron 93 veces más riesgo de padecer diabetes que el grupo datos por grupos de edad, sexo, IMC o presencia o ausencia
con un IMC menor de 22 kg/m2. Las mujeres con sobrepeso de función hepática anómala.
también presentaban un riesgo aumentado. Las que tenían un
IMC de entre 22 y 26,9 kg/m2 y de entre 27 y 28,9 kg/m2 Composición corporal y metabolismo energético
registraron riesgos relativos del 8,1 y 15,8 respectivamente. en la obesidad
Estos hallazgos refuerzan la importancia del mantenimiento
de un peso constante a lo largo de la vida. En EE. UU., La obesidad y la pérdida de peso dan lugar a significativas alte-
aproximadamente el 85% de los pacientes con diabetes de raciones en la composición corporal y en el gasto energético.
tipo 2 son obesos. El gasto energético se compone de tres elementos: tasa de
El mecanismo exacto en virtud del cual la unión de obesi- metabolismo basal (TMB) o gasto energético en reposo (GER);
dad y resistencia a la insulina transforman la obesidad en dia- efecto térmico de la comida (ETC), también llamado termo-
betes de tipo 2 no se conoce con precisión. Además, por un genia inducida por la dieta (TID), y efecto térmico del ejerci-
mecanismo también desconocido, la insuficiencia de las células  cio o actividad (ETE). La TMB es la mínima energía que
se produce después de años de hiperinsulinemia crónica.6 gasta un organismo para sobrevivir y, normalmente, constitu-
ye dos tercios del gasto energético diario, de los que corazón,
Dislipidemia hígado, riñones y cerebro gastan un 60%. En la práctica, dado
que existe cierta dificultad para la medida de este parámetro
Las alteraciones del metabolismo lipídico, o dislipidemias, son (se realizaría mediante calorimetría o agua doblemente marca-
alteraciones metabólicas que frecuentemente se asocian con la da), se mide el GER, que es la energía que gasta un organismo
obesidad. El patrón de lipoproteínas en plasma en el paciente en reposo en un estado postabsortivo, o bien se estima la TMB,
obeso está alterado. La hipertrigliceridemia es frecuente y es mediante la ecuación de Harris-Benedict, que es función de la
posiblemente causada por la resistencia a la insulina y la hiper- altura, el peso, el sexo y la edad. El TMB y el GER son presu-
insulinemia, que fomentan el aumento de producción de tri- miblemente menores en las mujeres y en los ancianos, puesto
glicéridos por parte del hígado. La hipertrigliceridemia de la que ambas poblaciones presentan un porcentaje de grasa cor-
obesidad se relaciona con dos mecanismos básicos: sobrepro- poral mayor en relación al resto (p. ej., músculo esquelético,
ducción de triglicéridos de lipoproteínas de muy baja densidad hueso, proteínas viscerales).
(VLDL) y lipólisis defectiva de lipoproteínas ricas en triglicé- En personas obesas, las tasas metabólicas son mayores
ridos.7 La ingesta hipercalórica de las personas obesas induce que en el resto, en principio porque, además de presentar una
la sobreproducción de triglicéridos de VLDL, pero, debido a masa grasa sustanciamente mayor, tienen más masa libre de
que muchos de estos pacientes responden con un aumento de grasa (MLG) o tejido magro, que es más activo metabólica-
la capacidad de aclaramiento de estas lipoproteínas, con fre- mente. La MLG es responsable de aproximadamente el 75%
cuencia se evita la hipertrigliceridemia. del GER.11 El ETC, que es la cantidad de energía consumida
La hipercolesterolemia es también frecuente en la obe- como resultado e la ingesta y la digestión es responsable de
sidad. Normalmente, esta consiste en la elevación del nivel entre el 5% y el 10% del gasto energético. Por ello es energé-
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sérico de las lipoproteínas de baja densidad (LDL), y puede ticamente más eficiente comer varias pequeñas comidas a lo
ser resultado del aumento de su entrada de la disminución de largo del día que pocas comidas copiosas. El hecho de que el
su aclaramiento.7 ETC sea en obesos menor o igual que el del resto de las per-
sonas es objeto de controversia. Sin embargo, está claro que
Enfermedad hepática grasa no alcohólica el ETC representa el componente menos importante de los
que contribuyen al gasto energético diario.
El término esteatohepatitis no alcohólica hace referencia a una El ETE es el componente más variable del gasto ener-
alteración caracterizada fundamentalmente por dos criterios gético diario. Los pacientes obesos y no obesos gastan can-
diagnósticos: 1) evidencia de cambios grasos con hepatitis lobu- tidades equivalentes y con la misma eficiencia para igual
lar; y 2) ausencia de alcoholismo.8 Otros términos que se utili- actividad.12 En una actividad determinada, sin embargo, en
zan para describir esta alteración son hepatitis de hígado graso, la cual los obesos necesitan soportar su propio peso, como
390 Sección VIII • RESULTADOS

caminar o correr, estos gastan más energía que las personas Se han publicado informes referidos a los efectos bene-
delgadas como consecuencia del aumento del trabajo reque- ficiosos de la DGYR en lo que respecta a su capacidad de
rido. En otras actividades como nadar o montar en bicicleta, disminuir los triglicéridos y las LDL, con aumento sincroni-
donde no es necesario cargar con el propio peso, obesos y no zado de las lipoproteínas de alta densidad (HDL).22 El meca-
obesos son igual de eficientes dede el punto de vista energé- nismo por el cual estos cambios tienen lugar no se conoce
tico. Por tanto, la generalizada percepción de que los pacien- con exactitud. Brolin y cols. estudiaron de manera prospec-
tes con obesidad grave son hipometabólicos es incorrecta.13 tiva a pacientes obesos con hiperlipidemia preoperatoria
sometidos a DGYR.23 Hacia el sexto mes después de la inter-
vención se puso de manifiesto una disminución media de más
Z EFECTOS METABÓLICOS del 20% en el colesterol total y más del 50% en la media de
DE LOS PROCEDIMIENTOS QUIRÚRGICOS triglicéridos.23 Los perfiles lipídicos se normalizaron en el
CONTRA LA OBESIDAD 84% de los pacientes. Se observó una correlación ente la
magnitud de la pérdida de peso y la mejora del perfil lipídico.
Resistencia a la insulina y diabetes mellitus tipo 2 Los mejores resultados se obtuvieron en los pacientes que
habían experimentado una mayor pérdida de peso; en los
Los niveles de glucosa se normalizan en aproximadamente pacientes que no consiguieron perder el 50% del exceso de
el 56% de los pacientes con diabetes de tipo 2 preoperatoria peso, la hiperlipidemia volvió a aparecer a los 12 meses.
después de la intervención de gastroplastia vertical con ban- Como resultado del descenso de la absorción de grasas des-
da (GVB).14 La insulina en ayunas disminuye considerable- pués de la DBP se produce una disminución de las LDL, el
mente en la fase temprana subsiguiente a la intervención en colesterol total y los triglicéridos 10 años después de la cirugía.21
pacientes con hiperinsulinemia y con diabetes.15 En un estudio desarrollado por Scopinaro y cols., más del 50%
La derivación gástrica en Y de Roux (DGYR) propor- de los pacientes sometidos a DBP presentaron hipercolesterole-
ciona un control a largo plazo de la diabetes mellitus no insu- mia.20 La normalización de los niveles de colesterol se observó
linodependiente. A los 14 años de la intervención, el 82% de durante el primer mes siguiente a la intervención y permanecie-
los pacientes obesos con diabetes de tipo 2 y el 98% de los ron normales en los controles posteriores. Debido a la interrup-
afectados por alteración de la tolerancia de glucosa mantie- ción de la circulación enterohepática, en pacientes con DBP hay
nen niveles normales de glucemia, hemoglobina glucosilada un incremento de la síntesis ex novo de ácidos biliares, que
e insulina.16 Estos efectos de la DGYR en glucosa e insulina aumentan más de lo esperado la reducción del colesterol.
se observan incluso cuando los pacientes tienen una alta pro-
porción relativa de grasa corporal. El mecanismo exacto por Enfermedad hepática grasa no alcohólica
el que esta intervención mejora o incluso trata la diabetes
asociada a la obesidad no se conoce con precisión. Los meca- Las evidencias de que la pérdida de peso consiguen una
nismos propuestos incluyen la ingesta calórica reducida y la mejora histopatológica en los pacientes con EHGNA están
resistencia a la insulina sincronizada e inversa en el músculo. empezando a aparecer poco a poco. La mejoría en cuanto al
Pories y cols. han documentado una radical mejora en pacien- grado, estadio, fibrosis e inflamación se ha estudiado en una
tes con diabetes mellitus tipo 2 a los pocos días de la cirugía, pequeña cohorte de pacientes con EHGNA diagnosticada
con reducción de la glucemia basal, la insulinemia y la leptina preoperatoriamente antes de someterse a DGYR.24,25 La
sérica, así como una tasa menor de progresión y menor mor- corrección de las alteraciones metabólicas tras la DBP puede
talidad asociada a la diabetes de tipo 2.16,17 El Swedish Obese mejorar la función y morfología hepáticas. La EHGNA es
Subjects Intervention Study, realizado en pacientes con IMC reversible incluso en los casos más avanzados, según un
superior a 34 kg/m2, comunicó una reducción significativa de estudio de seguimiento de 10 años.21 Los efectos de la GVB
la incidencia de la diabetes de tipo 2, la hiperinsulinemia, la en la EHGNA no han sido estudiados.
hipertensión y la dislipidemia a los dos años de la cirugía.18
Los procedimientos que causan malabsorción pueden
alterar el entorno hormonal del tubo digestivo. Después de Z MECANISMOS DE LA PÉRDIDA DE PESO
una derivación biliopancreática (DBP) se observa un INDUCIDA QUIRÚRGICAMENTE
aumento de los niveles de enteroglucagón.19 Esta hormona
reduce la tasa de producción de glucosa por parte del hígado, Antes de analizar los mecanismos por los cuales los distintos
mejorando el metabolismo de la insulina. Scopinaro y cols. procedimientos quirúrgicos para el tratamiento de la obesi-
observaron una resolución del 100% en la hiperglucemia y dad consiguen la pérdida de peso, procede realizar una breve
la diabetes insulino- y no insulinodependiente en pacientes revisión de la fisiología de la homeostasis del peso. La restric-
sometidos a DBP.20 Marceau y cols. apreciaron que los nive- ción calórica produce cambios en la composición corporal y
les de glucemia disminuyen después de la DBP, aunque no en el gasto energético que conducen a la pérdida de peso, así
exista diabetes preoperatoria.21 como a cambios compensatorios diseñados para prevenirlo.
Es esta respuesta adaptativa la que hace tan difícil perder
Dislipidemia peso mediante dietas y mantener el peso alcanzado.
Tanto las dietas bajas en calorías (de 800 a 1500 kcal por
La obesidad está asociada con un aumento del riesgo cardio- día) como las muy bajas en calorías (menos de 800 kcal por día)
vascular debido al incremento de los niveles lipídicos. Los producen un estado de ayuno parcial, condición en la cual el
triglicéridos en suero disminuyen precozmente tras la GVB individuo experimenta un balance nitrogenado negativo
y se normalizan en aproximadamente el 78% de los obesos sostenido.26 Estos regímenes de pérdida de peso consisten
con hipertrigliceridemia. Los niveles de triglicéridos per- en general en un período de pérdida activa de peso durante
manecen bajos a los 5 y 10 años de seguimiento. Tanto los 3 a 4 meses, seguido de una fase de mantenimiento prolon-
niveles de triglicéridos como los de glucosa se mantienen gada. Normalmente, durante la fase activa, los pacientes
asimismo bajos aunque se vuelva a ganar peso.14 sometidos a dietas hipocalóricas pierden de 9 a 18 kg (del
Capítulo 46 • Resultados metabólicos de la cirugía bariátrica 391

10% al 15% del peso corporal); las dietas muy bajas en calo- podrían contrarrestar los efectos de la dieta sobre el peso.
rías permiten perder de 14 a 27 kg (del 15% al 20% del peso Estos resultados han dado lugar a la implementación de otras
corporal).26 La pérdida de peso tiende a ser rápida al princi- modalidades, como el ejercicio para superar los obstáculos
pio, luego se ralentiza y finalmente se estabiliza. fisiológicos a la hora de perder peso.
Durante este período de deficiencia de energía, el cuer- El ejercicio suele promoverse como uno de los compo-
po se adapta proporcionalmente, disminuyendo el consu- nentes importantes en el régimen de pérdida de peso. A este
mo energético por la reducción de la ingesta, y utilizando respecto, es importante advertir que el ejercicio moderado
la energía endógena almacenada para satisfacer su demanda por sí solo es ineficaz como medida para perder peso. El ejer-
metabólica. 27 Inicialmente, los carbohidratos en forma de cicio sin modificación dietética produce un efecto sobre el
glucógeno hepático son fragmentados. Sin embargo, estas peso escaso o nulo.32 A pesar de que hay varios estudios que
reservas en general se agotan en 24 horas. A continuación, indican que el ejercicio aumenta el GEMR, otros no registran
las proteínas endógenas, fundamentalmente del músculo ningún efecto, o incluso una disminución de dicho gasto.33
esquelético, son degradadas, produciendo moléculas de Parece claro, no obstante, que el ejercicio es un método exce-
carbono que son enviadas hacia el hígado para la glucoge- lente para mantener la masa magra del cuerpo durante las
nogenia y dan lugar a balance nitrogenado negativo. El dietas de adelgazamiento.34 Cuando el ejercicio se combina
descenso de la masa no grasa del cuerpo conlleva una dis- con restricción calórica, es probablemente mejor si se realiza
minución del gasto energético metabólico en reposo al comienzo del día, para que, si ocurre un aumento de la tasa
(GEMR), ya que este componente corporal contribuye en metabólica, pueda ser combinado con el aumento de ETE
gran medida a dicho gasto. Para prevenir que la reducción debido al ejercicio y mantenido a lo largo del día. Por tanto, el
de la masa corporal no grasa comprometa la salud del indi- ejercicio parece tener más influencia en el mantenimiento del
viduo se produce otro mecanismo adaptativo, consistente peso que en la consecución de una reducción del mismo.34
en que las grasas almacenadas se degradan, dando lugar a El tratamiento quirúrgico de la obesidad se ofrece a los
cuerpos cetónicos para producir energía. Hacia el séptimo pacientes con obesidad grave o mórbida (IMC  40 kg/m2 o
día del ayuno parcial, los cuerpos cetónicos constituyen la 35 kg/m2 en presencia de patologías comórbidas asociadas
mayor fuente energética, a pesar de que persiste una pérdi- a la obesidad). El papel de la cirugía en el tratamiento de la
da obligada de nitrógeno. obesidad grave se evaluó en profundidad en la National
Si una persona recibe una buena hidratación, puede Institutes of Health, Consensus Conference de 1991. El panel
subsistir varios meses en estas condiciones. A pesar de que concluyó con que «los procedimiento quirúrgicos que
se pierden grasas y tejidos no grasos durante el ayuno, sus actualmente están en uso (derivación gástrica y gastroplastia
contribuciones relativas van cambiando como mecanismo con banda) son capaces de inducir una pérdida de peso sig-
adaptativo fisiológico. Puesto que existe una obligada pérdi- nificativa en pacientes con obesidad grave y, además, mejo-
da de proteínas, es esencial suplementar con cantidades sufi- rar la mayoría de las enfermedades asociadas a la obesi-
cientes las proteínas en la dieta, con el fin de prevenir el dad».35
posible compromiso de las funciones corporales esenciales y Históricamente las operaciones de cirugía bariátrica se
procesos como el sistema inmune, la cicatrización de heridas han clasificado según el método utilizado como restrictivas,
o la prevención de la atrofia muscular esquelética. En pre- malabsortivas o combinadas. Las gastroplastias (horizontal
sencia de una adecuada ingesta de proteínas (de 1,2 a 1,5 g con banda, GVB y con banda gástrica ajustable laparoscópica
por kg del peso ideal por día), la mayoría de los pacientes con [BGAL]) son procedimientos restrictivos puesto que impi-
dietas restrictivas pierden aproximadamente el 75% de la den la ingesta calórica. La derivación yeyunoileal (DYI) y sus
grasa y el 25% de los tejidos no grasos.13,28 El metabolismo modificaciones más recientes como la DBP y la DBP con cru-
energético disminuye durante el ayuno, de modo que la ce duodenal (CD) son clasificados como procedimientos
mayoría de los pacientes con dietas bajas o muy bajas en malabsortivos primarios. El procedimiento más utilizado, la
calorías manifiestan un descenso en el GEMR del 15% al DGYR, representa una combinación de ambos mecanismos,
30%, que se recupera en la etapa de mantenimiento. 29 aunque es un sistema fundamentalmente restrictivo.36
Distintos factores contribuyen a esta disminución: un des- La restricción calórica es el principal componente de las
censo en la cantidad de actividad y trabajo externo, cambios operaciones de cirugía bariátrica. La pérdida de peso des-
en las hormonas tiroideas, actividad del sistema nervioso pués de GVB parece ser similar a la registrada en otros
simpático y, lo más importante, el descenso de la masa cor- métodos de restricción calórica, aunque el peso perdido
poral asociada con la pérdida de peso, ya que esta es el factor parece ser mayor y más sostenido. Las tasas de pérdida de
más importante que contribuye al GER.13,29,30 Sin embargo, peso después de DBP van desde el 7% en primer mes de posto-
el descenso del GEMR tiende a ser mayor que el que corres- peratorio hasta el 35% a los 12 meses, cuando se estabiliza.36
pondería por la pérdida de MLG graso solamente, sugirien- A pesar de estar un tanto en contra de lo intuitivo, la restric-
do el hecho de que debe haber una parte del descenso del ción calórica juega un papel muy significativo tras la DYI,
GEMR que se deba a la restricción calórica.30 La eficiencia para la que se ha documentado que los pacientes disminuyen
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de esos mecanismos adaptativos en la situación de ayuno es hasta en un 50% su ingesta calórica.37 La ingesta calórica
en parte responsable del fracaso de algunas de estas dietas. después de una DBP con o sin CD no ha sido publicada has-
La recuperación de peso constituye un problema impor- ta la fecha, aunque se supone que disminuirá significativa-
tante, ya que muchos de los pacientes recuperan su peso mente debido a la reducción del volumen gástrico.20,21 La
basal en unos 3 años e incluso muchos lo superan a los DGYR da lugar a una drástica disminución de la ingesta
5 años.26 Además, en los pacientes no obesos que experimen- calórica y de proteínas. En el postoperatorio inmediato, hasta
tan aumentos y descensos del peso como consecuencia de los primeros 3 meses, la ingesta calórica va desde 400 a 600 kcal
una dieta de 800 kcal por día, el gasto energético total, tanto por día; hacia los 6 meses la ingesta aumenta a desde 800 a
en reposo como no en reposo, es significativamente menor 1000 kcal por día y, finalmente, alcanza una meseta de entre
tras una disminución del 10% al 20% de la reducción del 1200 y 1400 kcal por día.38 De mayor importancia es la inges-
peso corporal,31 lo que indica que los cambios en el gasto tión de proteínas inadecuada un año después de la cirugía.39
392 Sección VIII • RESULTADOS

La DYI, la operación malabsortiva prototípica, actual- un aumento del GEMR hasta normalizarse, comenzando jus-
mente no está en uso. A pesar de ser muy eficaz en la pérdida to después de la operación y permaneciendo en valores nor-
de peso, se asociaba con efectos secundarios metabólicos como males a lo largo del tiempo. Estos cambios en el GEMR apa-
diarrea, malnutrición, colelitiasis, litiasis renal e insuficiencia recen a pesar de existir una marcada reducción de la ingesta
hepática, por lo que fue abandonada después de 1980. Se ha calórica en niveles similares a los de una dieta muy baja en
sugerido que la mejora de la pérdida de peso después de la DBP calorías (800 kcal por día). Este hecho podría contribuir a la
está relacionada con la combinación de un canal común corto mejora en la pérdida de peso obtenida mediante la DGYR, en
(de aproximadamente 50 a 100 cm), que limita la absorción de comparación con la GVB. Además los cambios en el GEMR
grasas, y una rama biliopancreática larga (normalmente mayor no se relacionan con la longitud de las ramas alimentarias o de
de 250 cm), que no está en contacto directo con los alimentos, Roux de la derivación.47 En pacientes en los que la pérdida de
por lo que se limita la longitud del tubo (Roux) en el que son peso se hallaba en fase de meseta después de una DGYR
absorbidas proteínas y carbohidratos.40 recientemente se han registrado resultados similares,48 acor-
La longitud de la rama también afecta a la pérdida de des con los hallazgos de Scopinaro.20 En términos de compo-
peso en la intervención de DGYR. Su éxito varía según el sición corporal, los datos preliminares de nuestro grupo en
grado de sobrepeso. Por ejemplo los llamados superobesos pacientes sometidos a DGYR evaluados antes de la operación
(IMC  50 kg/m2, o con un exceso de peso de unos 90 kg) y a las 8 semanas, muestran un aumento en la pérdida de masa
consiguen unos porcentajes de reducción de peso menores libre de grasa (del 30% al 36% en contraposición al recomen-
que los solamente obesos, aunque la cifra absoluta pueda ser dado 25%) que finalmente se normaliza a los 2 años de segui-
mayor. Algunos estudios han demostrado mejores porcenta- miento, estabilizándose en este momento el peso. Estos resul-
jes de pérdida de peso en los pacientes superobesos someti- tados a largo plazo, así como los de nuestro laboratorio
dos a DGYR con ramas de Roux de hasta 250 cm41,42 y con referidos a los cambios en el GEMR después de una DGYR,49
DGYR distal, en la que la continuidad gastrointestinal se han sido recientemente corroborados,48 proporcionando datos
restablece a los 75 cm en sentido proximal a la válvula ileoce- muy valiosos sobre la seguridad a largo plazo de dicha inter-
cal.43 En pacientes con IMC por debajo de 50 kg/m 2, la lon- vención.
gitud de las ramas de Roux no parece afectar ni a la pérdida La malabsorción subclínica postoperatoria, la saciedad
de peso absoluta ni a su porcentaje. y en ocasiones el síndrome de vaciamiento rápido se han pre-
La GVB se asocia con una disminución del GER,44 que sentado en algunos trabajos como posibles factores implica-
en el postoperatorio inicial parece seguir una tendencia para- dos en la reducción del peso. Sin embargo, los mecanismos
lela a la de la ingesta calórica, de forma similar a lo que suce- que gobiernan estos cambios no se han identificado aún. La
de con una dieta muy baja en calorías, en vez de discurrir en grelina es una hormona gástrica producida fundamental-
paralelo a la pérdida de peso. Por esta razón, esta interven- mente en el cardias y el fundus gástrico. El ayuno produce el
ción presenta los mismos problemas que las dietas a la hora aumento de esta hormona inductora del apetito. Se supone
de mantener las pérdidas de peso conseguidas, puesto que en que DGYR induce anorexia, porque deriva las áreas produc-
ocasiones el peso sufre un aumento de hasta el 40%. La masa toras de grelina del estómago.50
corporal media, la masa corporal libre de grasa y la masa gra-
sa se reducen significativamente después de la GVB,45 si bien
la malnutrición es muy poco frecuente. Los estudios de com- Z CONCLUSIÓN
posición corporal indican que la mayoría de la pérdida de
peso (75%) corresponde a grasa, al igual que ocurre con las En conclusión, los procedimientos quirúrgicos bariátricos
dietas. A pesar de que los estudios de gasto energético y com- inducen pérdida de peso y cambios profundos en la compo-
posición corporal no se han publicado para la técnica de sición corporal y en el gasto energético. Los mecanismos
BGAL, cabe suponer que serían similares a los de la GVB, por los cuales estos cambios se producen son desconocidos y
puesto que sus mecanismos de acción son idénticos. poco definidos. Algunos de estos cambios son similares a los
Durante los primeros 6 meses después de la DBP se encontrados en la dietas, pero otros parecen ser diferentes,
produce una rápida pérdida de peso, caracterizada por la independientemente de la pérdida de peso. Serían necesarios
pérdida de tejido adiposo (73%) y tejido libre de grasa (27%). estudios complementarios para clarificar estos cambios
El tejido graso se pierde fundamentalmente de los brazos, inducidos por estas poderosas intervenciones, para optimi-
piernas y tronco. La pérdida de peso posterior corre en un zar sus resultados y minimizar sus complicaciones.
principio a expensas del tejido adiposo, y da lugar a la nor-
malización del peso y la composición corporal a los
2 años.20,46 Scopinaro y cols. no encontraron diferencias en Z BIBLIOGRAFÍA
el GER entre los pacientes sometidos a DBP y los sujetos
control.20 No obstante, en el mismo estudio, los pacientes 1. Kaplan MN: The deadly quartet: upper-body obesity, glucose intoler-
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chos según la ecuación de Harris-Benedict. Cuando los pacien- 5. Colditz GA, Willett WC, Rotnitzky A, et al: Weight gain as a risk
factor for clinical diabetes mellitus in women. Ann Intern Med
tes se estratificaban según su GEMR basal, los que 1995;122:481-486.
inicialmente eran hipometabólicos (GEMR  85% del valor 6. Smith RS: The endocrinology of obesity: endocrinology and metabo-
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Capítulo 46 • Resultados metabólicos de la cirugía bariátrica 393

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47
Formación académica
de los cirujanos bariátricos
Daniel Kaufman, M.D., y John G. Kral, M.D., Ph.D.

Como afirmaba Sir William Osler (1849-1919), un hombre no difíciles de diagnosticar y de tratar y que pueden afectar a los
puede llegar a ser un cirujano competente sin el conocimiento resultados de la intervención. La cirugía bariátrica es dife-
completo de la anatomía y la fisiología humanas, y el médico, rente de otras cirugías gastrointestinales, fundamentalmen-
sin la fisiología y la química que flotan a la deriva sin rumbo... te en lo que respecta a los efectos relacionados con los meca-
El aumento exponencial en el número de procedimien- nismos de acción, la selección de los pacientes y la evaluación
tos bariátricos durante la pasada década (v. figura 47-1)1 es de los resultados. A diferencia de la cirugía extirpativa o
consecuencia del aumento de la concienciación sobre los reconstructiva, la cirugía bariátrica es cirugía «del compor-
esenciales beneficios que comporta la pérdida de peso qui- tamiento». Sus resultados dependen en mayor medida de las
rúrgica y de los grandes avances registrados en el ámbito de adaptaciones nutricionales y del estilo de vida de los pacien-
las técnicas laparoscópicas, pero también de otros factores tes, así como del cumplimiento del tratamiento por parte del
El aumento de la demanda de estas intervenciones es pro- enfermo y la monitorización de los resultados que de la pro-
porcional al crecimiento de la prevalencia de la obesidad en pia técnica operatoria en sí. Por esta razón los cirujanos
adultos y adolescentes, aunque también es reflejo de la publi- deben proporcionar a sus pacientes la pertinente formación
cidad derivada de las personalidades conocidas que se han preoperatoria y los cuidados postoperatorios adecuados.
sometido a este tipo de intervenciones. En términos econó- Hallazgos recientes demuestran que es necesaria una aproxi-
micos, los cirujanos han comprobado que este tipo de inter- mación holística, a menudo desacreditada por los propios
venciones son lucrativas y que utilizando las técnicas lapa- cirujanos. Más que cualquier otra clase de cirugía, la bariá-
roscópicas se obtienen mayores beneficios. trica requiere una visión integral que, si es confiada a ciru-
La obesidad es una enfermedad con múltiples causas y janos bien entrenados puede servir como una importante
numerosas y serias patologías comórbidas, que a menudo son herramienta para combatir esta enfermedad crónica.

110.000
100.000
Número de intervenciones quirúrgicas

90.000
80.000
bariátricas en EE. UU.

70.000
60.000
50.000
40.000
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

30.000
20.000
10.000
0
1992 1993 1994 1995 1996 1997 1998 1999 2000 2001 2002 2003
Año

Figura 47-1 Número de intervenciones quirúrgicas bariátricas llevadas a cabo en EE. UU. entre 1992 y 2003. (Con autorización de Steinbrook
RA: Surgery for severe obesity. N Engl J Med 2004;350:1075-1079.)

397
398 Sección IX • EDUCACIÓN, PRÁCTICA Y DOCUMENTACIÓN

A medida que la cirugía bariátrica es más reconocida cuencia a conflictos.4 En 1998 el American Board of Surgery
por su papel en el tratamiento de estos enfermos, la discipli- (ABS), reconociendo la existencia de especialidades crecien-
na debe definirse a sí misma como sucede en otras subespe- tes en distintos campos de la cirugía, creó el Speciality Boards
cialidades quirúrgicas. Esto implica que deben afrontarse and Advisory Council con el fin de satisfacer las necesidades
retos importantes como el de establecer un consenso respec- de las nuevas especialidades quirúrgicas, en lo que respecta
to a los estándares de la práctica y la cualificación y forma- a formación, entrenamiento, realización de exámenes y cer-
ción de los futuros cirujanos. tificación.5 A pesar de que sólo la cirugía vascular pediátrica
ofrece actualmente una certificación independiente por par-
te del Specialty Board dentro de la estructura del ABS, con la
Z PROBLEMAS evolución de otras subespecialidades, se necesitarán nuevos
grupos de trabajo.6 De hecho, la omisión de la formación de
En nuestra opinión, la residencia de cirugía tradicional y las la cirugía bariátrica en el documento Specialty Boards Defined
7
becas de formación con especial énfasis en la capacitación demuestra la falta de comprensión de las necesidades espe-
técnica, aunque son incuestionablemente importantes, no ciales de la cirugía bariátrica, un hecho que por sí mismo
proporcionan los suficientes conocimientos acerca de las justifica la creación de un grupo especial e independiente
habilidades necesarias para desarrollar la cirugía bariátrica. para esta subespecialidad.
Un cuidadoso estudio del American College of Surgeons (ACS) En la actualidad, la cirugía bariátrica es realizada por un
denominado Statement on Principles Underlying Perioperative grupo heterogéneo de cirujanos generales y laparoscópicos,
Responsibilities analiza los motivos por los que la aplicación pocos de los cuales se han preparado específicamente para
de estos principios a la cirugía bariátrica resulta compleja.2 ello. En tal contexto, ¿quién debería encargarse de practicar
El ACS plantea que «…una correcta preparación preope- este tipo de cirugía?8 Aunque han sido presentandas propues-
ratoria… requiere atención… a las condiciones del paciente». tas realizadas por la American Society for Bariatric Surgery
Los cursos intensivos en este tipo de cirugía, que intentan com- (ASBS) y la Society of American Gastrointestinal Endoscopic
pensar las carencias de formación en nutrición y metabolismo Surgeons,10 no se ha conseguido llegar a un consenso sobre los
de los médicos, no son suficientes para preparar a tantos aspi- requisitos de los futuros cirujanos bariátricos.
rantes a cirujanos bariátricos en el marco de una «preparación
óptima», como el ACS lo define. El documento del ACS sos-
tiene que «el cirujano es responsable de la presentación… las Z SOLUCIONES
distintas opciones… incluyendo la explicación y razonamiento
de todas las alternativas de tratamiento». En el caso de la ciru- Selección del paciente
gía bariátrica, es inadecuado plantear simplemente que la dieta,
el ejercicio y los medicamentos son ineficaces para la obesidad Los efectos secundarios y las complicaciones de la cirugía
grave. Es más, debido al hecho de que la mayoría de los ciruja- bariátrica pueden ser agobiantes, exigentes y desalentadores.
nos recientemente especializados en esa rama ofrecen sólo la Tales factores suelen tener una gran importancia en los
opción quirúrgica, no es probable que sean capaces de describir resultados de la intervención y deben ser valorados en la eta-
de manera objetiva los efectos crónicos de los procedimientos pa preoperatoria en lo que respecta a sus riesgos y benefi-
sobre los cuales ellos no disponen de experiencia de primera cios. Aunque, en general, no se dispone de parámetros que
mano. De hecho, esto representa un conflicto entre sus intere- puedan predecir los resultados, el cirujano debe mostrarse
ses económicos y la información legítima necesaria para que el muy selectivo a la hora de evaluar la capacidad del paciente
paciente otorgue o niegue su consentimiento. En última ins- de satisfacer tanto las demandas físicas como las psicológicas
tancia, esto podría dar lugar a que el paciente no dispusiera de que pueden requerir este tipo de operaciones. Esto incluye
todas las opciones posibles a la hora de elegir. una cuidadosa evaluación de las motivaciones el paciente
En lo que respecta a los cuidados postoperatorios, el para someterse a la intervención y sus expectativas con res-
ACS plantea que «incluso cuando… los cuidados deban ser pecto a ella así, como cualquier posible rasgo que haga pen-
delegados… el cirujano ha de conservar una función de coor- sar en que el paciente continúe siendo obeso.11
dinación en el tratamiento del enfermo… hasta que todos los
efectos residuales…sean mínimos, y el riesgo de complica- Aproximación por etapas a la cirugía bariátrica
ciones se estime escaso». Dadas las distintas manifestaciones,
complejas y a veces encubiertas, de las patologías comórbidas A medida que las indicaciones de la cirugía bariátrica evolu-
de la obesidad, no es aceptable derivar al paciente a un asesor cionan con tendencias hacia la disminución del IMC y la
médico, ya que estos profesionales pueden no estar familiari- edad mínimos del paciente, un algoritmo de aproximación a
zados con la problemática de este tipo de pacientes. Además las distintas etapas de la enfermedad y a la atención especí-
el cirujano debe asegurarse de que «...se realiza un segui- fica de cada una para la pérdida de peso puede ayudar a los
miento adecuado a largo plazo de los problemas que puedan cirujanos a recomendar tratamientos individualizados
aparecer…», aunque algunos especialistas de esta área consi- (v. figura 47-2). Esta aproximación permite al especialista
deran que entre sus atribuciones y sus pautas de formación no seleccionar el tipo de operación, de acuerdo con la gravedad
está la de tratar enfermos crónicos. En este punto también de la enfermedad y como último recurso tras el fracaso de
puede existir un conflicto entre los intereses económicos de otros tratamientos. A pesar de que el IMC de los pacientes
los cirujanos y las necesidades médicas, ya que el número y la puede utilizarse como guía aproximada para determinar la
gravedad de las complicaciones de la cirugía bariátrica pue- intervención adecuada, otros parámetros más complejos
den dar lugar a un seguimiento de por vida del paciente.3 como el índice de gravedad de la obesidad,12 el análisis bariá-
La evolución de una especialidad médica es con fre- trico o el sistema de comunicación de resultados,13 pueden
cuencia una tarea complicada, que genera tensión, tanto en proporcionar una determinación más precisa.
el campo de la especialidad de origen como en el de aquella Hoy en día, la cirugía bariátrica está considerada como
en la que el médico quiere formarse, y dando lugar con fre- la última opción de tratamiento y se emplea después de años
Capítulo 47 • Formación académica de los cirujanos bariátricos 399

ÍNDICE DE MASA INTERVENCIÓN INTERVENCIÓN


CORPORAL (IMC) DE RESCATE

Modificaciones
nutricionales
25-35 y del
comportamiento

Orlistat +
acarbosa

Figura 47-2 Aproximación a 32-40 Restricción


las etapas de la enfermedad y a gástrica
las recomendaciones específi-
cas para perder peso en cada
una de ellas. Las categorías del
Revisión
IMC no son absolutas, pero
de la bolsa
pueden interpretarse como dis-
tintos grados de gravedad.
⬎40 Derivación
gástrica

Acortamiento
de la rama
alimentaria

Derivación
⬎50 biliopancreática
(DBP/anastomosis)

de infructuoso uso de otros procedimientos médicos, como esta vinculación entre el tamaño del hospital y los resultados
dietas, ejercicio y tratamientos farmacológicos. La restric- se esconden múltiples factores, como las características del
ción laparoscópica del estómago es una intervención relati- paciente, la experiencia del equipo quirúrgico, la atención a
vamente simple y eficaz, siempre y cuando el paciente com- las distintas patologías comórbidas y las diferencias sustan-
prenda y cumpla todas las recomendaciones de alimentación ciales en las técnicas analíticas empleadas en los distintos
posteriores.14 La aplicación de banda gástrica ajustable per- estudios.21 Recientemente, la ASBS estableció un grupo de
mite una formación y una valoración continuadas del pacien- revisión para identificar los «centros de excelencia» en la
te que puede servir como una prueba de comportamiento cirugía bariátrica que tienen un alto volumen y programas
para él antes de someterse a otras operaciones, por lo que exhaustivos de atención quirúrgica. Estos centros, en los que
probablemente mejorará el proceso de selección. Si esta ope- se han formado expertos en cirugía, pueden proporcionar un
ración falla, puede revisarse mediante una cirugía de banda óptimo entrenamiento para los futuros cirujanos especialis-
de la bolsa o bien puede reconvertirse la intervención, dan- tas en estas intervenciones. Sin embargo, sabiendo que no
do paso a un procedimiento combinado restrictivo-malab- todos los casos presentan la misma complejidad ni las mis-
sortivo, como la derivación gástrica en Y de Roux, que en mas complicaciones, hemos diseñado un programa de entre-
ocasiones tiene un efecto mayor en la pérdida de peso. Los namiento que dé respuesta a todos los cirujanos que buscan
fracasos de la derivación gástrica, por el contrario, pueden formación en este campo. Sugerimos dos programas: el pro-
ser solucionados con revisión de la bolsa o acortamiento de grama A, para cirujanos bariátricos básicos, y el B, para ciru-
la rama alimentaria. La derivación biliopancreática con janos bariátricos de nivel avanzado (v. tabla 47-1).
anastomosis duodenal debe reservarse para los pacientes El programa A prepara a los cirujanos para la realiza-
con obesidad grave, ya que esta operación consigue las ción de procedimientos bariátricos simples, como la apli-
mayores reducciones de peso. Este algoritmo implica la cación de banda gástrica laparoscópica en pacientes jóvenes y
necesidad de un nivel avanzado de capacitación en el ámbi- moderadamente obesos. El currículo inicial necesario para
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

to de la cirugía bariátrica. este programa puede incluir algunos cursos de empresaria-


les, recursos humanos o de formación económica. Respecto
a la formación en medicina, el descanso entre los cursos 1
Z DOS MODELOS PARA EL ENTRENAMIENTO y 2 puede emplearse para realizar prácticas quirúrgicas.
DE LOS CIRUJANOS BARIÁTRICOS Durante los años de formación clínica se debe incluir for-
mación en anestesia, traumatología y cirugía bariátrica,
Durante décadas se ha reconocido que los resultados mejo- abierta o por laparoscopia, para familiarizar al alumno con
rados y las menores tasas de mortalidad de las intervenciones los aspectos prácticos de este tipo de técnicas. El cirujano
de cirugía mayor son mejores en los hospitales grandes que básico se beneficiará en la residencia con un programa de
en los pequeños.15,1 Por esto, los intentos de regionalizar cirugía laparoscópica de alto nivel, con rotaciones clínicas
estas intervenciones han sido infructuosos.17-20 Detrás de durante 1 y 2 años. Esta experiencia dará a conocer al ciru-
400 Sección IX • EDUCACIÓN, PRÁCTICA Y DOCUMENTACIÓN

Tabla 47-1 MODELO DE DOS PROGRAMAS DE FORMACIÓN PARA LOS CIRUJANOS BARIÁTRICOS

NIVEL DE FORMACIÓN PROGRAMA A PROGRAMA B

Cirugía bariátrica básica Cirugía bariátrica avanzada


Premédico Empresariales, administración de empresas, Epidemiología, psicología, sociología,
económicas, contabilidad neurociencias del comportamiento
Facultad de medicina años 1 y 2 Prácticas durante las vacaciones Ciencia básica o investigación clínica
Facultad de medicina años 3 y 4 (o 5) Formación en anestesia, traumatología y cirugía Medicina de familia, nutrición, endocrinología,
cardiotorácica cuidados críticos
Residencia de cirugía general Programa con alto volumen de cirugía bariátrica Programa académico con 2 años de
laparoscópica investigación
Formación en cirugía bariátrica Formación de 1 año en un programa de alto Formación de 2 años en cirugía bariátrica en un
volumen laparoscópico centro de reconocida experiencia

jano tanto los procedimientos de cirugía bariátrica como Z BIBLIOGRAFÍA


los cuidados preoperatorios y postoperatorios auxiliares.
Finalmente, la formación que siga el programa A debe 1. Steinbrook RA: Surgery for severe obesity. N Engl J Med
2004;350:1075-1079.
incluir 1 año de prácticas en una unidad con un alto volu- 2. American College of Surgeons: ACS statement on principles underlying
men de intervenciones bariátricas. Estos profesionales ten- perioperative responsibility. Bull Am Coll Surg 1996;81:39. http://
drían aún una limitada experiencia en el seguimiento pos- www.facs.org/fellows_info/statements/st-25.html. Accessed March 17,
terior de los pacientes. 2004.
3. McFarland RJ, Gazet JC, Pilkington TR: A 13-year review of jeju-
El programa B prepara a los cirujanos para la realiza- noileal bypass. Br J Surg 1985;72:81-87.
ción de todas las operaciones de cirugía bariátrica disponi- 4. Lewis FR Jr: Surgical fellowships and specialization. Surgery 2002;
bles para los distintos grados de obesidad, incluyendo las 132:529-530.
intervenciones restrictivas y malabsortivas, así como las rein- 5. American Board of Surgery: Component Boards and Advisory Councils.
http://www.absurgery.org/default.asp?aboutcompboards. Accessed
tervenciones. En este programa, la formación de base puede March 17, 2004.
incluir cursos de epidemiología, psicología, sociología, neu- 6. Ritchie WP Jr: Basic certification in surgery by the American Board
rociencias del comportamiento y el descanso entre los dos of Surgery (ABS): What does it mean? Does it have value? Is it rele-
primeros cursos de carrera puede emplearse en el conoci- vant? A personal opinion. Ann Surg 2004;239:133-139.
miento de ciencias básicas o investigación clínica, preferible- 7. American Board of Surgery: Component Boards and Advisory
Councils. http://www.absurgery.org/default.asp?aboutsurgerydefined.
mente en el campo de la obesidad, la endocrinología o el Accessed March 17, 2004.
metabolismo. Durante el año de formación clínica se debe 8. Al-Saif O, Gallagher SF, Banasiak M, et al: Who should be doing
elegir formación en medicina de familia, nutrición y endo- laparoscopic bariatric surgery? Obes Surg 2003;13:82-87.
crinología, hipertensión, neurología y cuidados intensivos, 9. American Society for Bariatric Surgery: Guidelines for laparoscopic
and open surgical treatment of morbid obesity. Obes Surg
para proporcionar al estudiante un aprendizaje amplio sobre 2000;10:378-379. http://www.asbs.org/html/guidelines. Accessed
las posibles enfermedades secundarias a la obesidad. Es pre- March 17, 2004.
ferible que el cirujano con formación completa en cirugía 10. Society of American Gastrointestinal Endoscopic Surgeons:
bariátrica realice una residencia académica general de ciru- Guidelines for institutions granting bariatric privileges utilizing
laparoscopic techniques. Surg Endosc 2003;17:2037-2040. http://
gía, que le permita realizar un período de dos años de for- www.sages.org/sg_pub31.html. Accessed March 17, 2004.
mación en ciencia básica o investigación clínica, en especial 11. Kral JG: Selection of patients for anti-obesity surgery. Int J Obes
en obesidad, resistencia a la insulina, endocrinología, meta- Relat Metab Disord 2001;25(suppl 1):S107-S112.
bolismo y cirugía bariátrica. Toda esta formación propor- 12. Kral JG: Side effects, complications and problems in antiobesity
surgery: introduction of the obesity severity index. In Angel A,
cionará un profundo conocimiento sobre la fisiopatología de Anderson H, Bouchard C, et al (eds): Progress in Obesity Research 7,
la obesidad, necesaria para optimizar la competencia en el pp. 655-661. London, John Libbey, 1999.
tratamiento de estos enfermos. El programa B concluye con 13. Oria HE, Moorehead MK: Bariatric analysis and reporting outcome
un período de dos años de formación en cirugía laparoscó- system (BAROS). Obes Surg 1998;8:487-499.
pica, en un centro con reconocida experiencia en el campo 14. Kral JG: Surgical treatment of obesity. Med Clin North Am
1989;73:251-264.
de la cirugía bariátrica, adquiriendo progresivamente res- 15. Lee JA, Morrison SL, Morris JN: Fatality from three common surgical
ponsabilidades crecientes y conocimientos para la asistencia conditions in teaching and non-teaching hospitals. Lancet
de pacientes con obesidad mórbida en todos los procedi- 1957;273:785-790.
mientos quirúrgicos, incluyendo las reintervenciones. 16. Birkmeyer JD, Stukel TA, Siewers AE, et al: Surgeon volume and
operative mortality in the United States. N Engl J Med
2003;349:2117-2127.
17. Luft HS, Bunker JP, Enthoven AC: Should operations be regional-
Z CONCLUSIÓN ized? The empirical relation between surgical volume and mortality.
N Engl J Med 1979;301:1364-1369.
18. Birkmeyer JD: Should we regionalize major surgery? Potential benefits
La formación en cirugía bariátrica no está estandarizada. and policy considerations. J Am Coll Surg 2000;190:341-349.
Debido a que implica la aplicación de técnicas complejas, 19. Select Quality Care. http://www.selectqualitycare.com/p-pro.htm.
sugerimos dos posibles programas de entrenamiento para Accessed March 17, 2004.
estos profesionales. Solamente la enseñanza integral en cen- 20. The Leapfrog Group. http://www.leapfroggroup.org/FactSheets/
EHR_FactSheet. Accessed March 17, 2004.
tros de reconocida experiencia tanto en los aspectos acadé- 21. Halm EA, Lee C, Chassin MR: Is volume related to outcome in health
micos como en los técnicos, formará a unos cirujanos bariá- care? A systematic review and methodologic critique of the literature.
tricos que planteen su actividad en términos globales. Ann Intern Med 2002;137:511-520.
48
Formación práctica
de los cirujanos bariátricos
Latham Flanagan, Jr., M.D.

El entrenamiento práctico en el ámbito bariátrico se centra estado por el que todos los hospitales debían comunicar al
en el hecho de que un cirujano general adquiera experiencia Florida Board of Health todos los ingresos, altas, diagnósti-
y capacitación en las técnicas quirúrgicas bariátricas. Este cos, muertes, complicaciones y algunos datos económicos.
capítulo analiza la formación del cirujano general experi- Se seleccionaron 34 cirujanos que llevaban a cabo menos de
mentado, que desea comprometerse para que este tipo de dos intervenciones bariátricas al mes y, finalmente, se valoró la
intervenciones constituyan una parte importante de su prác- actividad de 10 de ellos (cuatro en formación y seis ejercien-
tica. La complejidad de la selección de los pacientes, los cui- do en práctica privada) que realizaban más de dos interven-
dados preoperatorios y postoperatorios, la educación sani- ciones bariátricas mensuales. No se observaron diferencias
taria prolongada en los pacientes y el largo tiempo de significativas en las tasas de mortalidad y morbilidad entre
seguimiento hacen muy difícil realizar esta cirugía ocasio- las intervenciones de los cirujanos en formación y las de los
nalmente en el contexto de la actividad de un cirujano gene- más experimentados. El desarrollo de los datos de acuerdo a
ral (p. ej., realizar menos de 20 o 30 intervenciones en un la escala patentada de Yale demostró que en 612 pacientes
año). Se necesita un número igual o mayor para desarrollar considerados de bajo riesgo no hubo muertes y se registró un
y mantener ciertas habilidades que puedan servir de base porcentaje de complicaciones menor del 5%. En cambio, en
para la actividad de todo un grupo clínico, constituido por 152 pacientes considerados como de alto riesgo hubo tres
administrativos, asistentes, enfermeras, médicos generales, muertes y un porcentaje de complicaciones del 42%.1
dietistas y psicólogos, que van a trabajar en las instalaciones Puesto que, tradicionalmente, Florida se considera un
del hospital proporcionando una asistencia de alto nivel al estado en el que hay muy buenos cirujanos y especialistas en
paciente obeso. Es importante que, con el fin de mantener las técnicas bariátricas, este gran porcentaje de complicacio-
un nivel de organización dinámico, positivo y productivo, nes, que en el total de los pacientes alcanzaría el 20%, resultó
exista un importante grado de integración en el grupo. alarmante por el hecho de que estas cifras probablemente
El propósito de esta formación integrada es allanar y serían de aplicación también en los resultados de la mayor par-
acortar la curva de aprendizaje de la práctica quirúrgica te de los estados, si no en todos. Las impresiones previas a este
bariátrica. Con frecuencia nos referimos con cierta frivoli- estudio procedían de estudios de grupos publicados por ciru-
dad a la curva de aprendizaje. En cualquier área de la cirugía, janos o instituciones individuales que estaban sesgados, ya que,
existe una concienciación general sobre la tendencia al por naturaleza, se tiende a dar a conocer los resultados supe-
aumento de la morbilidad y mortalidad en las intervenciones riores a la media y a no publicar los inferiores. Estos sesgos se
realizadas por cirujanos inexpertos. Según cada subespecia- dan incluso en registros como el International Bariatric Registry,
lidad quirúrgica sea más completa y afronte mayores desa- en el que la mayor parte de los cirujanos participantes han
fíos, mayores serán las tasas de morbilidad y mortalidad. En demostrado su compromiso, no sólo en la aportación de datos
este contexto, los términos morbilidad y mortalidad se refie- sobre su actividad profesional, sino constituyendo, además, la
ren a pacientes que acuden a los profesionales sanitarios con- American Society for Bariatric Surgery (ASBS). Por tanto, esos
fiados en que ellos les proporcionarán alivio a sus padeci- datos del estado de Florida resultan de notable importancia
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

mientos presentes y futuros. para aquellos de nosotros que se dedican a la práctica privada,
puesto que muestran que la práctica está rozando una línea
peligrosa en relación con el riesgo de mala praxis y de pérdida
Z RIESGOS DE LA CIRUGÍA BARIÁTRICA de las prerrogativas por parte de los hospitales.
Debe destacarse que los datos del estudio de Florida
¿Cuáles son los riesgos de la cirugía bariátrica en lo que se corresponden al año 1999, fecha en la que se produjo un gran
refiere a morbilidad y mortalidad? Hasta octubre de 2002 no aumento del interés por este tipo de cirugía en EE. UU. y un
existía una descripción fiable y carente de sesgo de las tasas incremento paralelo del número de cirujanos especializados
de mortalidad y morbilidad en cirugía bariátrica en una y del de procedimientos realizados. Los efectos de la curva de
comunidad geográficamente extensa. La University of South aprendizaje en el gran número de cirujanos que realizan ciru-
Florida publicó datos obtenidos mediante un mandato del gía bariátrica, y el consiguiente aumento de la morbilidad y
401
402 Sección IX • EDUCACIÓN, PRÁCTICA Y DOCUMENTACIÓN

mortalidad, ha suscitado la atención de abogados y juristas y décadas, si no siglos. Con la llegada de la cirugía laparoscópi-
ha hecho aumentar las acciones relacionadas con mala praxis. ca, el concepto de curva de aprendizaje se constituyó en ele-
La tasa de estas acciones parece haber incrementado la tasa mento esencial en este contexto. No hay una única curva de
de muertes y complicaciones. Por otra parte, dado lo eleva- aprendizaje, de hecho hay tres. La primera es la que se centra
do de las cantidades económicas de las indemnizaciones recla- en el desarrollo de habilidades en cuanto a la selección de los
madas, el coste de la mala praxis está también aumentando. pacientes, preparación preoperatoria, manejo perioperatorio
Por lo tanto, las primas que demandan las pocas compañías y seguimiento a largo plazo; en la segunda, se diferencia el
de seguros que aún aseguran a estos cirujanos están ascen- desarrollo de las habilidades de cirugía bariátrica abierta; y,
diendo de forma notable. La mala praxis ha motivado que las en la tercera, basada en las otras dos, se distingue la curva de
compañías de seguros de responsabilidad de los cirujanos aprendizaje de la cirugía laparoscópica.
bariátricos se hayan vuelto más exigentes, e intenten estrati- La primera curva de aprendizaje es la del planteamiento
ficar a los profesionales de distintas maneras. El aspecto más perioperatorio en sentido amplio. Para llegar a ser un buen
obvio en este contexto es el número de reclamaciones presen- cirujano bariátrico, el profesional debe tener un conocimien-
tadas contra los cirujanos. Sin embargo, las compañías inves- to básico de los pacientes con obesidad mórbida. Psico-
tigan cada vez en mayor medida las características de la for- lógicamente no son diferentes de otros pacientes, excepto por
mación del cirujano en las técnicas bariátricas y su los mecanismos de defensa y los sentimientos que han de-
pertenencia a sociedades como la ASBS la Society of American sarrollado como resultado de ser una persona con obesidad
Gastrointestinal Endoscopic Surgeons (SAGES). Cabe suponer extrema en una sociedad que no tolera esta afección.2 Muchos
que, en el futuro, el estado de preparación de las instalaciones de estos pacientes, si no la mayoría, han sufrido alguna vez
hospitalarias sea también tenido en cuenta en esa estratifica- abusos verbales por parte de médicos que no entienden o no
ción. De hecho, existen buenas razones por las cuales un ciru- aceptan la naturaleza de esta enfermedad orgánica del meta-
jano general no debe practicar técnicas bariátricas a menos bolismo basado en el hipotálamo; o que han respondido nega-
que esté dispuesto a dedicar una importante cantidad de tiem- tivamente, debido a su frustración por el uso de medios inade-
po y esfuerzo a este campo de la actividad quirúrgica. cuados con los que han intentado conseguir para sus pacientes
¿Deben ser interpretados los comentarios anteriores una pérdida de peso significativa y duradera. De hecho, la
como evidencias disuasorias para los cirujanos generales a la obesidad mórbida se considera como el «último bastión de los
hora de dedicarse a la cirugía bariátrica? Desde mi punto de prejucios», desde el punto de vista social. En esta misma línea,
vista personal, como cirujano general/torácico/vascular/ el cirujano tiene más posibilidades de tener éxito y eficacia si,
endocrino con 30 años de experiencia y, al mismo tiempo, además de un profesional capacitado, es una persona cercana
como cirujano bariátrico con 27 años de experiencia, no hay al paciente. El cirujano que muestre reparos significativos
ninguna parte de la cirugía general que proporcione la mis- ante las personas con obesidad mórbida, probablemente no
ma sensación de desafío y gratificación que la cirugía bariá- tendrá éxito en este tipo de intervenciones. De hecho, en esta
trica. Los cirujanos con experiencia en esta disciplina deben disciplina quirúrgica, la probabilidad de realizar una mala
animar a otros a que se formen en la realización de este tipo praxis es mayor que en otras áreas, ya que la aparición de
de intervenciones, puesto que la necesidad de personal ade- complicaciones es muchas veces inevitable.
cuado en este contexto es muy grande. En el pasado, la ASBS Además de lo que respecta a sus propios formación y
estimó que el número de procedimientos bariátricos realiza- entrenamiento, el cirujano bariátrico es responsable del
dos en EE. UU. aumentaba exponencialmente. En el año cumplimiento de la preparación de las instalaciones hospita-
2003 se calculó que el número de procedimientos de este larias. Los criterios básicos de dicho cumplimiento fueron
tipo se aproximaría a 100.000, o incluso excedería esa cifra, publicados en el boletín del American College of Surgeons en
y en el 2004 superaría los 140.000. No obstante, estas gran- septiembre de 2000.4 Habitualmente, la consecución de las
des cifras solamente son la punta del iceberg de las necesi- capacidades necesarias, y la formación del personal de enfer-
dades reales de cirujanos bariátricos disponibles para los mería, tanto de quirófano, como de planta, son responsabi-
10 a 15 millones de americanos que actualmente cumplirían lidades propias del cirujano. Por otra parte, existen organi-
los requisitos para ser sometidos a estas intervenciones. zaciones privadas que, por sumas generalmente significativas,
No hay, ni debería haber, una competencia externa por se encargan de preparar las instalaciones apropiadamente.
obtener pacientes, al menos en esta década. No hay necesi- Los cirujanos bariátricos deben tener disponible un sis-
dad de dar publicidad a este tipo de intervenciones, ya que tema convenientemente habilitado de consulta de otras espe-
los cirujanos bariátricos reconocidos tienen listas de espera cialidades, fundamentalmente en el campo de la cardiología,
de varios meses. Esta carencia de competencia externa es la neumología y la nefrología, ya que, por desgracia, los
particularmente importante para aquellos cirujanos que pacientes obesos pueden sufrir complicaciones que afectan a
estén tratando de decidir si realizar las operaciones median- estas áreas. Quizás los médicos cuya formación es más impor-
te cirugía abierta o laparoscópica. Para los cirujanos, la com- tante son los de urgencias, que han de afrontar las necesidades
petencia debe ser interna, entre ellos mismos, para intentar especiales del postoperatorio de estos pacientes. Por ejemplo,
ser el mejor. una valoración de dolor abdominal con síntomas obstructivos
puede resultar peligrosamente distinta de lo que es la norma
en un paciente con una rama biliopancreática.
Z CURVAS DE APRENDIZAJE El seguimiento postoperatorio requiere una gran canti-
dad de tiempo por parte del equipo quirúrgico y del propio
Se ha escrito mucho sobre las curvas de aprendizaje en la ciru- cirujano. Algunas tareas en este marco son específicas de
gía bariátrica. Es curioso observar que en la época en la que cada técnica. Aunque la experiencia registrada en la comu-
sólo se recurría a procedimientos quirúrgicos abiertos este nidad médica va cambiando a medida que aumenta el núme-
término se escuchaba en contadas ocasiones, a pesar de que el ro de procedimientos bariátricos, todavía son considerables
concepto de mejora de la práctica de la cirugía ha constituido las grandes carencias de información en la comunidad médi-
la piedra angular de la actividad de los cirujanos, durante ca general sobre las necesidades y problemas postoperatorios
Capítulo 48 • Formación práctica de los cirujanos bariátricos 403

específicos de los pacientes bariátricos. Esto incluye no sólo ser económicamente competitivo en la práctica privada.
la infraestimación de los problemas del paciente, sino tam- Como se ha mencionado anteriormente, ese es el caso en la
bién el sobrediagnóstico, atribuyendo a la intervención cirugía bariátrica actual, en la que aún es necesario contar
bariátrica otros problemas de difícil diagnóstico que el con una experiencia mucho más amplia. Son escasas, si es
paciente pudiera presentar. Por tanto, es particularmente que hay alguna, las ventajas de realizar intervenciones de
importante para los cirujanos someter a seguimiento a sus cirugía bariátrica laparoscópica que se extiendan más allá
pacientes en sus consultas, una vez terminada la hospitaliza- de los primeros 3 a 6 meses del postoperatorio. Incluso el
ción, en especial en aquellos que experimentan rápidos cam- efecto cosmético de las cicatrices de menor tamaño desapare-
bios metabólicos que implican un tratamiento farmacológi- ce en casos de pacientes que desean someterse a una paniculec-
co potencialmente peligroso (p. ej., anticoagulantes, agentes tomía o una abdominoplastia. Es poco común encontrar
antidiabéticos y antihipertensivos). candidatos para este tipo de cirugía que requieran estira-
La responsabilidad final de los cirujanos, noveles o miento y tensión fuertes y, por otra parte, la mayoría de los
experimentados, es establecer grupos de apoyo que ofrezcan pacientes sometidos a cirugía abierta regresan a sus trabajos
asistencia a estos pacientes, ya que en muchos casos, esta no en unas 3 semanas, en un plazo que depende más de la propia
puede ser ofrecida por los médicos. Estos grupos de apoyo motivación del paciente para reincoporarse que de las posi-
son muy útiles para reducir la ansiedad preoperatoria del bles discapacidades físicas. En programas quirúrgicos de
paciente, por el temor que le produce la intervención. En elite, la cirugía laparoscópica bariátrica presenta una tasa
ocasiones, estos grupos hacen que el miedo se transforme de complicaciones igual, o casi igual, a la de la cirugía abier-
en impaciencia por ser intervenidos. ta. En cualquier caso, ninguno de los datos actualmente dis-
La segunda curva de aprendizaje es la cirugía abierta, ponibles especifica cómo extrapolar los datos de los progra-
que lleva implícitos sus propios desafíos. Los cirujanos que mas de cirugía de élite al ámbito comunitario. Nuestra
comenzaron a practicar en este campo hace dos décadas, experiencia local en el estado de Oregón, indica que existen,
aportaban su experiencia anterior en operaciones de estóma- de hecho, mayores tasas de morbilidad y mortalidad en el
go, de úlcera y de cáncer. No era raro que cirujanos que ámbito laparoscópico. En este contexto, cabe pues recordar la
comenzaban con cirugía abierta realizasen cientos de inter- primera máxima de aplicación médica: primum non nocere.
venciones sin que se registrara ninguna muerte, en especial
en obesos mórbidos, cosa que no solía suceder en el caso de
los sujetos superobesos.5 Sin embargo los cirujanos forma- Z RECOMENDACIONES PARA LOS ORGANISMOS
dos más recientemente cuentan con menos experiencia en ENCARGADOS DE LA ACREDITACIÓN
cirugía gástrica, salvo la propiamente bariátrica. De hecho,
una de las características partes más atractivas de la cirugía Es un concepto relativamente nuevo para las organizaciones
bariátrica durante el período de residencia de un cirujano profesionales la publicación de directrices de organismos
general estriba en el hecho de que permite al estudiante acreditadores. Las primeras recomendaciones fueron publi-
familiarizarse con otros tipos de cirugía gástrica. En cual- cadas por la ASBS en la revista Obesity Surgery en el año
quier caso, el cirujano general que decide orientarse hacia el 2000. Tales indicaciones eran consecuencia de las iniciativas
campo de la obesidad debe someterse a un período de entre- de liderazgo desarrolladas en el seno de la ASBS y la
namiento que se describe posteriormente. SAGES.18 Ambas organizaciones remitieron estas recomen-
La tercera curva de aprendizaje, la cirugía bariátrica daciones a sus respectivos consejos directivos. Es importan-
laparoscópica, es ciertamente más compleja y plantea más te hacer notar que ninguna de estas organizaciones tiene
desafíos que la cirugía abierta. De hecho la curva de aprendi- capacidad de proporcionar acreditaciones, sino que esta fun-
zaje para esta técnica puede ser compleja, larga y con repercu- ción corresponde a los hospitales locales o a los consejos
siones en la morbilidad de los pacientes.6-12 En mi propio esta- estatales de examinadores médicos. Las organizaciones pro-
do, conozco el caso de tres cirujanos que han perdido fesionales solamente proponen recomendaciones para uso en
recientemente sus privilegios en sus respectivos hospitales a las instituciones acreditadoras. Tales directrices no sólo son
causa de las excesivas complicaciones que experimentaban sus nuevas, sino que se proponen para generar un marco más
pacientes. Dos de los tres no habían recibido sesiones de dinámico en la cirugía. Cabe esperar que en el plazo de, por
orientación quirúrgica y no eran miembros de la ASBS. ejemplo, los próximos cinco años, se produzcan cambios en
Aunque el procedimiento se desarrolle adecuadamente, den- estas directrices, que reflejen las mejoras en la comprensión
tro de un programa adecuado, las tasas de mortalidad y mor- de las dificultades de las prácticas previas, así como de las
bilidad en la fase inicial de la curva de aprendizaje suelen ser innovaciones en la metodología de la formación. Las reco-
altas.13-15 De hecho, incluso según la experiencia de cirujanos mendaciones iniciales publicadas en el año 2000 fueron
que son especialistas destacados en el campo de la cirugía generales e inespecíficas. Las recomendaciones actualizadas
laparoscópica, en la fase inicial de la curva de aprendizaje pue- de la ASBS son más específicas y están divididas en tres par-
den aparecer complicaciones significativas, sobre todo fallos tes: requerimientos globales para la obtención de acredita-
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

en la anastomosis, e incluso muertes.6-9 Recientemente se han ciones, requerimientos para cirugía bariátrica abierta y
publicado estudios sobre programas de laparoscopia cuidado- requerimientos para la cirugía bariátrica laparoscópica.
sos y laboriosos que han simplificado estas curvas, demos- Los requisitos globales para cualquier tipo de cirugía
trando una eficacia que se fundamentaba en su larga experien- bariátrica son los siguientes. Un aspirante a la obtención de
cia en el campo de cirugía bariátrica abierta.16 prerrogativas para la práctica de la cirugía bariátrica debe:
Para un cirujano general experimentado que no esté
familiarizado con las técnicas laparoscópicas avanzadas, la 1. Contar con acreditación para el uso de unas instalacio-
pregunta que debe plantearse es si la propia cirugía laparos- nes debidamente habilitadas para la práctica de la ciru-
cópica es necesaria. Dos publicaciones recientes se plantean gía gastrointestinal y biliar.
directamente esta cuestión.13,17 En los años noventa era 2. Poder demostrar que trabaja en el marco de un progra-
necesario aprender las técnicas laparoscópicas básicas para ma integrado de asistencia de pacientes con obesidad
404 Sección IX • EDUCACIÓN, PRÁCTICA Y DOCUMENTACIÓN

mórbida, que proporciona servicios auxiliares tales curso de especialización que le ofrezca formación intensiva,
como enfermería especializada, formación dietética, siempre y cuando esté patrocinado por la ASBS.20 El perso-
asesoramiento, grupos de apoyo, ejercicios de forma- nal docente de este curso ha de estar constituido por ciruja-
ción y entrenamiento y asistencia psicológica, siempre nos bariátricos experimentados, y los cursos han de poder
que estos sean necesarios. realizarse en cualquier parte del país. Esta semana intensiva
3. Saber que existe un programa establecido para prevenir, está continuada por una prueba diseñada en principio para
monitorizar y tratar las complicaciones, tanto a largo enfatizar la prevención o el tratamiento de las dificultades
como a corto plazo. más significativas en el manejo perioperatorio del paciente
4. Saber que existe un sistema establecido para asegurar al sometido a cirugía bariátrica.
menos en un 50% de los pacientes un seguimiento de Este curso intensivo, generalmente de una semana de
hasta 2 años del postoperatorio para cirugía restrictiva, duración, ha de cumplir los siguientes requisitos: participa-
y en un 75% si se trata de cirugía malabsortiva. ción del aspirante como observador en al menos tres proce-
5. Demostrar que existe un sistema establecido para pro- dimientos quirúrgicos de este tipo; el aspirante debe parti-
porcionar seguimiento a todos los pacientes, incluyendo cipar en la selección preoperatoria y en el proceso de
los que viven a una cierta distancia del hospital. formación; ha de intervenir asimismo en las visitas a los
6. Pertenecer a la American Society for Bariatric Surgery. pacientes después de la operación y en su seguimiento clíni-
co, así como participar en un grupo organizado de apoyo.
Para obtener las prerrogativas necesarias para la prácti- Lo ideal sería que cualquier tiempo libre se empleara en
ca de la cirugía bariátrica abierta, el cirujano debe satisfacer charlas informales y cambios de impresiones sobre los retos
los requerimientos globales de acreditación y: 1) presentar y las gratificaciones inherentes a este tipo de cirugía. La
documentación sobre tres casos supervisados en los cuales el mayoría de los programas de esta índole reciben complaci-
responsable de la prestación de la asistencia sea un cirujano dos a los nuevos cirujanos bariátricos en sus equipos, así
bariátrico adecuadamente entrenado y 2) documentar resul- como a médicos, y personal de enfermería interesados en la
tados satisafactorios (con unas tasas aceptables de complica- disciplina, que deseen adquirir formación y ser sometidos a
ciones perioperatorias) en 10 cirugías bariátricas abiertas evaluación de sus progresos dentro de esta área.
realizadas por el aspirante a la recepción de la acreditación. Si se elige esta vía de formación, el nuevo cirujano asisti-
Por su parte, con el fin de obtener las prerrogativas rá al curso intensivo de un día Essentials of Bariatric Surgery
necesarias para la práctica de la cirugía bariátrica laparoscó- que se oferta en las reuniones anuales de la ASBS. Este debe
pica, el cirujano debe igualmente satisfacer los requerimien- considerarse como un requisito general. En reuniones poste-
tos globales de acreditación y: 1) contar previamente con riores el cirujano podrá realizar el máster anual de posgrado,
acreditación para la práctica de la cirugía bariátrica abierta en el que los contenidos suelen variar cada año. Además, el
en unas instalaciones convenientemente aprobadas; 2) dispo- cirujano laparoscópico en formación que ya cuenta con expe-
ner de prerrogativas para la realización de cirugía laparoscó- riencia en el ámbito de la laparoscopia avanzada, debe realizar
pica avanzada; 3) presentar documentación sobre tres casos un curso de entrenamiento de al menos 2 días de duración,
supervisados en los cuales el responsable de la prestación de que incluye formación académica y práctica.
la asistencia sea un cirujano bariátrico adecuadamente entre- La mayoría de los cirujanos que se hallan en fase de
nado, y 4) documentar resultados satisfactorios (con unas formación en lo que respecta a las técnicas laparoscópicas
tasas aceptables de complicaciones perioperatorias) en concluyen estos cursos con la percepción de que aún no pue-
15 cirugías bariátricas laparoscópicas realizadas por el aspi- den realizar intervenciones bariátricas. A nivel universitario,
rante a la recepción de la acreditación. también están proliferando los cursos, de 6 o más semanas
Los mecanismos de actualización de estas directrices se de duración, destinados a tratar los diversos aspectos de la
han acelerado y en la actualidad se ven complementados por cirugía bariátrica.21 Para los cirujanos que no cuenten con
la actuación de un organismo de acreditación. Con el patro- capacitación laparoscópica avanzada y deseen actuar en este
cinio de la ASBS, en mayo de 2004 tuvo lugar en Washington campo, la modalidad ideal de formación es la inscripción en
D.C. una conferencia de consenso destinada a actualizar las un curso de 1 año de duración.
directrices propuestas en 1991 por los National Institutes of
Health Bariatric Surgery.19 En 2004, también bajo los auspi-
cios de la ASBS, se fundó asimismo la Surgical Review Z RESUMEN
Corporation, para servir como organismo destinado a facili-
tar acreditaciones y designar los centros de mayor nivel para En resumen, la cirugía bariátrica es un campo apasionante y
la práctica de la cirugía bariátrica. La Surgical Review dinámico, que ofrece amplias posibilidades de creatividad
Corporation es la primera organización destinada a la conce- y desafío profesional, así como la gran gratificación que
sión de acreditaciones en el campo de la cirugía bariátrica. supone para el cirujano y su equipo ver cómo va mejorando
el paciente a lo largo de los años, tanto en el plano clínico
como en el psicosocial. El manejo de estos pacientes día tras
Z OPORTUNIDADES DE ENTRENAMIENTO día durante años ofrece una percepción de «objetivo conse-
CRUZADO EN CIRUGÍA BARIÁTRICA guido» que no aportan otras especialidades de la cirugía.

Para conseguir los mencionados objetivos y constituirse en


miembro activo de pleno derecho de la ASBS un cirujano Z BIBLIOGRAFÍA
dispone de diferentes opciones. Puede trabajar en el marco
de un programa establecido de cirugía bariátrica, con un 1. Lopez J, Sung J, Anderson M, et al: Is bariatric surgery safe in
academic centers? Am Surg 2000;68:820-823.
cirujano bariátrico experimentado que actúe como su men- 2. Stunkard A, Wadden T: Psychological aspects of human obesity. In
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o incluso habiéndolo, un cirujano puede optar por seguir un Lippincott, 1992.
Capítulo 48 • Formación práctica de los cirujanos bariátricos 405

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© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.
49
Asistencia de enfermería al paciente
sometido a cirugía bariátrica
Katherine Mary Fox, R.N., M.P.H.

La obesidad es un mal omnipresente en nuestra sociedad y sus rá especial atención a la información de la que debe disponer el
riesgos para la salud son bien conocidos. Los pacientes obesos personal de enfermería y otros miembros del equipo multidis-
constituyen la norma; de hecho, un número cada vez mayor de ciplinario en el entorno hospitalario. Sin embargo, se prevé que
pacientes obesos es atendido en las distintas áreas de los servi- esta información tenga también valor para los administradores
cios sanitarios. La obesidad mórbida es una enfermedad médica de los programas bariátricos y para aquellos que atienden a
incurable, y actualmente la cirugía es el único método eficaz pacientes obesos en otros entornos. Para alcanzar el éxito en la
para su control a largo plazo. Otros pacientes con enfermedades asistencia al paciente sometido a cirugía bariátrica es necesario
crónicas, debilitantes y amenazantes para la vida, son trata- que las personas que vayan a proporcionar esa asistencia posean
dos con una actitud más compasiva que la mostrada para con habilidades especiales, así como una comprensión y un conoci-
las personas obesas, a las que se tiende a reprobar y rechazar. miento específicos de esta población de pacientes.
La prestación de asistencia a pacientes obesos es física y emo-
cionalmente más difícil, estresante y lleva una considerable can-
tidad de tiempo. Estos enfermos tienen necesidades y caracte- Z INSTALACIONES Y EQUIPO
rísticas que son muy diferentes de las de otras poblaciones de
pacientes. Ante el personal dedicado a la cirugía bariátrica, se Entorno especializado
presenta una tríada de retos importantes: 1) adquirir conoci-
mientos especializados en relación con las posibles complicacio- Cuando un paciente obeso mórbido entra en el entorno hospi-
nes quirúrgicas; 2) proporcionar un entorno físicamente seguro talario es responsabilidad del hospital garantizar que se le pro-
y cómodo, y 3) proporcionar una asistencia amable y compasiva. porcione una asistencia segura. Esto se traduce en la disponibi-
Estos desafíos son los principales enfoques en los que se centra lidad de cirujanos bien cualificados y experimentados, de un
el presente capítulo. Los pacientes obesos se enfrentan aún a personal multidisciplinario instruido y bien formado, de unos
prejuicios culturales y al escaso conocimiento del público y de procedimientos y protocolos escritos, de las pertinentes modifi-
los profesionales de la medicina acerca de la naturaleza y de las caciones de las instalaciones, y de un equipo, y una dotación de
causas de la obesidad. Muchos estudios atestiguan la existencia personal específicamente adecuados a las necesidades de esta
de este perjuicio entre los médicos, los estudiantes de medicina población de pacientes. Sin estos elementos esenciales, simple-
y el personal de enfermería. En un reciente estudio se constató mente no puede proporcionarse una asistencia segura, por lo
que el 24% del personal de enfermería afirmaba sentir «recha- que el hospital asumirá riesgos y responsabilidades ciertamente
zo» por las personas obesas.1 Ello, simplemente, debe cambiar. importantes. En la tabla 49-1 se enumeran las modificaciones
A medida que se vaya conociendo esta enfermedad, así como su del equipo y de las instalaciones recomendadas para ayudar a los
impacto en la vida humana y las razones que subyacen a nues- responsables de la prestación de la asistencia a proporcionar de
tras propias respuestas negativas, aumentará nuestra capacidad forma óptima unos cuidados seguros, eficaces y dignos al
de comprensión para con los pacientes obesos. El conocimien- paciente obeso mórbido. La mayoría de los procedimientos qui-
to de la cirugía bariátrica por parte de los miembros del equipo, rúrgicos mínimamente invasivos (de laparoscopia) se realizan en
les dará la oportunidad de tener una mayor influencia y, a veces, quirófanos originalmente diseñados para la cirugía abierta tra-
de salvar la vida de estos pacientes. Esta especialidad puede pro- dicional. Un grupo del Mount Sinai Medical Center, de Nueva
porcionar resultados incomparablemente útiles y gratificantes. York, ha descrito una sala con el equipamiento más avanzado
para llevar a cabo una cirugía bariátrica mínimamente invasiva,
que se ofrece como prototipo para la próxima generación de
Z OBJETIVO instalaciones quirúrgicas para procedimientos laparoscópicos.2

El objetivo de este capítulo es proporcionar una guía de asisten- Agrupación de pacientes


cia a pacientes obesos clínicamente graves para la comunidad de
enfermería y otros profesionales sanitarios que prestan cuida- La agrupación de pacientes sometidos a cirugía en la misma
dos antes, durante y después de la cirugía bariátrica. Se presta- unidad y, si es posible, dedicando una unidad específica para la
406
Capítulo 49 • Asistencia de enfermería al paciente sometido a cirugía bariátrica 407

mente influye en la imagen que la comunidad pueda tener del


Tabla 49-1 REQUERIMIENTOS DE EQUIPOS del hospital y en el número de derivaciones al mismo.
E INSTALACIONES
Mesa(s) de operaciones extra anchas y capaces de soportar hasta Z ORGANIZACIÓN Y EDUCACIÓN DEL PERSONAL
350-450 kg
Instrumentos y retractores de cirugía bariátrica; instrumentos
laparoscópicos (43-46 cm de largo) Equipo multidisciplinario
Pies de cama (para la posición de Trendelenburg inversa) y apoyo
para las rodillas (para procedimientos laparoscópicos) Los candidatos para cirugía son seleccionados cuidadosamente
Cinturón de seguridad largo (para la colocación del paciente en el después de una evaluación a cargo de un equipo multidiscipli-
quirófano)
Medias antiembólicas y botas de compresión neumática secuencial
nario con experiencia médica, quirúrgica, psiquiátrica y nutri-
bariátrica (extra grandes) cional. Lo ideal es que este amplio espectro de conocimientos
Camas bariátricas (que soporten 350 kg o más) en un número suficiente técnicos esté disponible en todas las fases de la asistencia a un
Andadores extra anchos, que soporten peso, cómodos, y sillas de paciente. En el entorno hospitalario, el equipo multidisciplina-
ruedas (con instalaciones accesibles) rio que desarrolle y monitorice un proceso crítico puede estar
Balanzas que pesen hasta los 390 kg o más formado por representantes de cualquier departamento que
Barra en la cabecera de la cama y trapecio
Batas extra grandes para pacientes (con mangas anchas y abiertas
proporcione servicios directos a los pacientes bariátricos. Los
y que cubra todo el torso) representantes de los departamentos de los servicios de apoyo,
Manguitos de adultos extra grandes y grandes para medir la presión como los servicios medioambientales, de compras, la central de
arterial suministros y de ingeniería, podrán ser invitados, cuando sea
Dispositivos auxiliares para alcanzar y tirar de algo (como los que necesario, a participar en la resolución de un problema concreto
utilizan los pacientes con ACV) como parte de la mejora continuada de la calidad del proceso.
Cuartos de baño y duchas de un tamaño adecuado; aseos de una sola
pieza; asideros y barandillas de protección
Dispositivo de traslado con colchón neumático, o dispositivo de Orientación, funciones y formación continuada del personal
elevación (p. ej., tipo polipasto)
Sillas que soporten peso, anchas, sin apoyabrazos; sofás o sillones Dado que los pacientes obesos requieren otros servicios hospita-
grandes y firmes (en habitaciones y salas de espera) larios distintos de los de cirugía bariátrica, es esencial proporcio-
Carros de transporte bariátrico (camillas) que soporten 350 kg nar la adecuada formación sobre la obesidad básica y la cirugía
Escáner de TC capaz de soportar más de 250 kg
Camillas de exploración (que soporten peso y anchas)
bariátrica (incluyendo la sensibilidad y la atención al paciente) a
Agujas de flebotomía y torniquetes extra largos todo el personal hospitalario, y que se haga extensiva a la orienta-
Espéculos vaginales largos ción inicial de todo el personal nuevo. La asistencia a las reuniones
del grupo quirúrgico con los posibles pacientes es una excelente
Nota: Cada área proporciona muebles, equipo y espacio adecuado para el
servicio administrado.
manera complementaria de que el personal acceda a la informa-
Todos los equipos y muebles que soporten peso deben ser calibrados para ción básica y adquiera experiencia en el trato con obesos mórbidos
un peso de al menos 250 kg. que intentan comprender las características de la opción quirúr-
ACV, accidente cardiovascular; TC, tomografía computarizada.
gica. Davidson y Callery han descrito un método para convertir
las instrucciones al paciente por parte del cirujano y las sesiones
cirugía bariátrica, permite una asistencia más segura. Es con- del grupo de apoyo en un medio de formación continuada del
veniente contar con un grupo central de profesionales de personal hospitalario (con créditos de formación continuada).3
enfermería que hayan optado por especializarse en la asisten- Para mantener un nivel de asistencia avanzado, adecuado en tér-
cia a los pacientes bariátricos. La razón y las ventajas son simi- minos de rentabilidad, la formación continuada bariátrica ha de
lares a las que se registran en otras áreas especializadas: 1) el encuadrarse en todos los departamentos implicados en el equipo
personal comprende las necesidades específicas de las limita- multidisciplinario y, sobre todo, en el ámbito del personal de
ciones físicas y psicológicas de estos pacientes, permitiendo enfermería. Como parte de esta formación, estos integrantes del
una mejor asistencia y apoyo; 2) el personal está mejor formado equipo han de ser conscientes de la profunda influencia que
para reconocer las complicaciones más precoces, facilitando ejercen en las actitudes y comportamientos de sus compañeros
una asistencia más segura; 3) el personal de enfermería se sien- de trabajo y en la importancia de su papel como elementos de
te más competente, aumentando su satisfacción en el trabajo; interacción positiva con el paciente bariátrico.
4) el personal de administración puede ofrecer instrucción
enfocada a un grupo específico de pacientes; 5) el personal
conoce mejor las demandas propias de esta población, por lo Z APOYO FÍSICO Y EMOCIONAL
que resulta más adecuado, al proporcionar una mayor satisfac-
ción para los pacientes y para ellos mismos; 6) la agrupación de Apoyo físico
equipos específicos ahorra costes, al evitar su duplicación, y
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facilita la accesibilidad; 7) el personal está familiarizado con los Entre las consideraciones físicas destaca la importancia de per-
movimientos más adecuados para giro, levantamiento y trasla- cibir y prever las limitaciones de los pacientes para, por ejemplo,
do de pacientes obesos, disminuyendo el riesgo de posibles alcanzar los objetos con la mano o agacharse. En virtud de ello
lesiones; 8) el personal participa en la formación continuada en es conveniente adquirir o construir dispositivos auxiliares que
el campo de la cirugía bariátrica, y en la mejora de sus capaci- faciliten este tipo de funciones. Dichos dispositivos deberán
dades para enseñar a otros profesionales o miembros de la mantenerse al alcance del paciente para facilitar el autocuidado,
comunidad, proporcionando servicio e incrementando su en particular en lo que respecta a las medidas de cuidado y aseo
«visibilidad» en el hospital; 9) el riesgo de posibles conflictos perineal. Cuando haya que ayudar al paciente, la asistencia ha de
legales se reduce, a causa de la mayor seguridad en la asistencia prestarse con amabilidad y sensibilidad y sin hacer referencia a
y en el entorno, y 10) mejora la calidad de la asistencia dando la discapacidad. La asistencia incluye acciones tales como colo-
lugar a una percepción positiva del paciente, la cual posterior- car al lado de la cama, al alcance de la mano, el teléfono, el
408 Sección IX • EDUCACIÓN, PRÁCTICA Y DOCUMENTACIÓN

mando a distancia de la TV, el timbre de llamada o los líquidos tras miran al paciente). Del mismo modo, la palabra grasa no se
para que el paciente beba; ayudar al paciente a quitarse o poner- debe emplear, debido a sus connotaciones socialmente negativas.
se el calzado; atar o desatar la parte trasera de la bata; tirar hacia A muchos pacientes no les gusta que se refieran a ellos como
arriba de la sábana, la manta y la colcha; colocar las almohadas, obesos mórbidos, aunque el término sea pertinente. Otros tér-
y recoger objetos que hayan caído al suelo. Los pacientes bariá- minos como persona de peso, grande o similar tienen un tono más
tricos son especialmente sensibles a la temperatura ambiental, cordial. Por otra parte, es prudente que los responsables de la
ya que suelen sentir más calor y sudar más fácilmente. De hecho prestación de asistencia eviten los intentos de empatía con el
se encuentran más cómodos en habitaciones frescas. Las habita- sobrepeso de los pacientes o compartan historias dietéticas per-
ciones con ventiladores son útiles, especialmente en climas cáli- sonales. Existe el riesgo de que estas observaciones, por lo demás
dos. Los pacientes que han presentado una rápida pérdida de bien intencionadas, se vean como actitudes paternalistas y pue-
peso tras la cirugía bariátrica tienden, en cambio a sentir frío, y dan intensificar los sentimientos de insuficiencia, aislamiento y
prefieren habitaciones más cálidas. Si no es posible el ajuste de la vergüenza de los pacientes. Otro componente muy importante
temperatura individual de la habitación, habrá que proporcionar del apoyo emocional implica la neutralización de la ansiedad de
más mantas. La atención a las más simples medidas de favoreci- los pacientes, a través de la formulación de comentarios, siempre
miento de la comodidad significa mucho para estos pacientes. positivos, referidos a la cirugía, el cirujano y las decisiones de los
Las siguientes conductas del personal han sido identificadas propios pacientes. Lamentablemente, en el pasado era frecuente
como prioritarias por los pacientes en el período preoperatorio que los pacientes informasen con frecuencia de que había ocurri-
(en grupos de pacientes estudiados por el autor): ser tratados con do lo contrario. La estimulación de los pacientes y la demostra-
respeto; informar a las personas que les acompañan de la dura- ción de satisfacción por los cambios positivos que se pueden espe-
ción prevista de la cirugía y la ubicación de la sala de espera; y rar en el futuro tiende a crear significativos vínculos afectivos.
mantener convenientemente informados a los familiares y acom- Los pacientes pueden mostrarse sensibles a la conducta del per-
pañantes sobre la evolución de la intervención en quirófano y la sonal a causa de anteriores experiencias en su vida. Situaciones
posterior situación en la unidad de reanimación postanestésica como llamadas ignoradas, omisión de prestación de medidas de
(URPA), y la unidad de enfermería. asistencia o indiferencia por su comodidad, y comentarios o res-
puestas bruscas e impersonales a menudo se interpretan como
formas de rechazo personal. La sociedad ha inculcado a las per-
Apoyo emocional sonas obesas (consciente o inconscientemente) la tendencia a
esperar un trato de desprecio, por ser consideradas personas des-
PERCEPCIONES DEL PACIENTE agradables, grotescas, desgarbadas o con carencias emocionales
Aunque el apoyo emocional es importante para cualquier y mentales. Los pacientes pueden exteriorizar estas percepciones
paciente en un entorno hospitalario, en la cirugía bariátrica se en forma de actitudes agresivas, que a veces hieren los sentimien-
debe prestar especial atención a este aspecto, debido a las presio- tos de los demás, o bien en forma de comportamientos con un
nes sociales que los pacientes obesos habitualmente experimen- exceso de demanda o de control, pidiendo disculpas, o con reac-
tan. Los pacientes sometidos a cirugía bariátrica suelen sentirse ciones defensivas y otras formas de autoprotección. Además sue-
incomprendidos y mal considerados por el personal médico y no len mantener una actitud de rechazo hacia las personas delgadas
médico que participa en el tratamiento de su obesidad.4 Estas y consideran que el personal de asistencia que no es obeso es
percepciones, basadas en hechos reales, derivan de una combi- incapaz de comprender su situación. Estas actitudes del paciente
nación de falta de conocimiento, prejuicios (que se adquieren a a veces pueden dificultar la prestación de una asistencia com-
temprana edad en nuestro entorno cultural), mayor necesidad prensiva. Sin embargo, todo lo que a menudo se necesita como
física de asistencia, y el temor a la propia condición de obesi- respuesta a estos comportamientos no es más que ternura y ama-
dad experimentado por el personal sanitario y que se proyecta bilidad. El tocar al paciente de forma adecuada también es tera-
hacia el propio paciente. Reto5 proporcionó un importante y péutico, tranquilizador y reconfortante, e implica un sentimien-
amplio conocimiento de estos y otros problemas psicosociales. to de aceptación. Los pacientes manifiestan con frecuencia
Los pacientes se sienten satisfechos cuando el personal de enfer- sentimientos de afecto ante estos sencillos gestos, y se sienten
mería parece tener tiempo para ellos (aun cuando, en realidad, rechazados por el personal si este contacto no se produce. Los
no lo tenga) y cuando les escuchan con atención. El seguimien- responsables de la prestación de asistencia, una vez que son cons-
to del estado del paciente proporcionándole la medicación pre- cientes de la compleja dinámica que esta implica en el caso de los
vista en el momento adecuado, el recambio regular del agua, pacientes bariátricos, pueden comenzar a analizar sus propios
etc., también pueden tener una notable influencia en la percep- sentimientos, conductas y actitudes sutiles o abiertas. Este des-
ción de los pacientes sobre su nivel de aceptación. En previsión cubrimiento puede ser un importante punto para cambiar de
de un posible ridículo, la falta de apoyo, y otras respuestas nega- actitud, que influye a veces en la calidad de la asistencia de los
tivas, algunos pacientes pueden ocultar su cirugía a familiares, proveedores y tiene consecuencias positivas sobre otros miem-
amigos, y, a veces, incluso a sus cónyuges. Por lo tanto, debe bros del equipo. Las respuestas de los cuidadores también pue-
mantenerse la confidencialidad en su sentido más amplio. den verse influidas por una mayor comprensión de los perfiles
socioeconómicos, demográficos, psicológicos y el estilo de vida
CONDUCTAS DEL PERSONAL de los pacientes bariátricos.6
Entre las conductas más importantes del personal responsable de
la prestación de asistencia se cuentan mostrarse respetuoso y no
formular juicios de valor, así como actuar con atención en todos Z TRABAJO PREOPERATORIO
los aspectos de la relación con el paciente y su entorno. Los
pacientes son muy sensibles a la sensación de ridículo, por lo que Evaluación clínica
deben evitarse los susurros, las risitas y las risas en situaciones en
las que podrían ser mal interpretadas (p. ej., cuando un paciente EXPLORACIÓN FÍSICA Y ANAMNESIS
pasa caminando por delante del control de enfermería y dos En este contexto, son diversas las consideraciones especiales en la
miembros del personal comienzan a hablarse en voz baja mien- evaluación de un paciente obeso. La presión arterial se obtiene
Capítulo 49 • Asistencia de enfermería al paciente sometido a cirugía bariátrica 409

mejor utilizando un manguito de tamaño adecuado (grande o pasado) es humillante e insultante. Para garantizar la precisión
extra grande) que se ajuste perfectamente. La utilización de un y la coherencia de los resultados, todas las mediciones de peso se
manguito demasiado pequeño en la parte superior del brazo da efectúan siempre en la misma báscula especializada. A menos
lugar a una lectura falsamente alta y produce una sensación de que la hospitalización se prolongue por una complicación, será
apuro e incomodidad innecesaria en el paciente. Aunque no es lo suficiente con el peso obtenido en el ingreso. En la actualidad,
más idóneo, si no se dispone de un manguito apropiado, puede el índice de masa corporal (IMC) se utiliza como el estándar
utilizarse un manguito normal en el antebrazo o la parte inferior para determinar el peso de una persona. Es el método más fre-
de la pierna. La auscultación de los ruidos respiratorios es en cuentemente empleado para expresar la gravedad de la obesidad,
ocasiones difícil, y tiende a realizarse mejor en los campos pul- aunque no represente una verdadera medición de la grasa cor-
monares inferiores. Si es necesario, pueden levantarse los plie- poral, ya que no distingue entre grasa y músculo. Sin embargo,
gues cutáneos o desplazarse para tener un mejor acceso al tórax. se correlaciona estrechamente con la magnitud de la obesidad y
Si el paciente tiene dificultad para sentarse, los ruidos cardíacos es la herramienta práctica más útil que tenemos a nuestra dispo-
pueden escucharse en el lateral izquierdo de la pared torácica con sición. Los valores del IMC de los pacientes a menudo se obtie-
el paciente girado hacia el lado izquierdo, o en el segundo espacio nen a partir de cuadros de altura y peso como los publicados por
intercostal al lado del reborde esternal. La palpación del abdomen el National Heart, Lung, and Blood Institute (U.S. National Institutes
es más difícil en un paciente obeso, aunque, por lo general es of Health), o con una calculadora del IMC. Algunas calculadoras
relativamente fácil detectar sensibilidad de rebote. del IMC y sus fórmulas son fáciles de utilizar, pero no son pre-
Cuando están presentes, los ruidos intestinales se perciben cisas, ya que ligeras disparidades pueden dar lugar a una diferen-
habitualmente aplicando más presión con el estetoscopio. En la cia significativa cuando se realiza el redondeo. Además, no exis-
obtención de la anamnesis, lo mejor es evaluar las patologías te un acuerdo uniforme entre las organizaciones con respecto
comórbidas más frecuentes, asociadas con la obesidad, o agrava- a la fórmula que debe utilizarse. Para calcular manualmente un
das por ella. Entre ellas se cuentan diabetes, hipertensión, hiper- IMC correcto, puede utilizarse la fórmula de la figura 49-1.
colesterolemia, enfermedad cardiopulmonar, asma, apnea de El IMC del paciente antes de la operación suele estar registrado
sueño, trastornos gastrointestinales, enfermedad de reflujo gas- en el informe de anamnesis y examen físico del médico.
troesofágico y artritis. La incontinencia urinaria (debida a la pre-
sión sobre la vejiga por el sobrepeso) es también frecuente. Tras DETERMINACIONES SANGUÍNEAS, RADIOGRAFÍAS DE TÓRAX
el ingreso se ha de observar la posible presencia de úlceras por Y ECG
presión, especialmente en el paciente con sobrepeso inmoviliza- Las pruebas básicas realizadas antes de la cirugía incluyen
do, siendo necesario comunicar de inmediato este hallazgo al hemograma completo, determinación de hemoglobina A1C,
cirujano, ya que en ocasiones la cirugía se aplaza hasta que la un perfil metabólico completo, pruebas tiroideas (para detec-
úlcera haya cicatrizado. tar hipotiroidismo), análisis de orina y estudios del hierro
sérico (ferritina sérica, niveles de hierro sérico y capacidad de
MEDIDAS DE PESO Y ALTURA fijación de hierro). Debe obtenerse una determinación de pa-
El peso exacto se toma en el ingreso, utilizando una balanza rathormona sérica para establecer sus valores basales y evaluar
diseñada para individuos obesos mórbidos. Para evitar avergon- a largo plazo el metabolismo óseo en pacientes sometidos a
zar al paciente, obtenga el peso de forma discreta y privada, y una derivación gástrica. En la mayoría de los pacientes serán
regístrelo sobre la marcha, sin comentarios, gestos de reproba- necesarias una radiografía torácica y un electrocardiograma.
ción o cualquier otra manifestación de lenguaje corporal.
Normalmente, las balanzas de suelo clínicas proporcionan PRUEBAS DE FUNCIÓN CARDIOPULMONAR, ESTUDIOS
mediciones precisas de hasta alrededor de los 160 kg.7 Algunas DEL SUEÑO Y PRUEBAS GASTROINTESTINALES
camas bariátricas incorporan balanzas. Si el hospital no tiene Otros ensayos que han de realizarse antes de la cirugía bariátri-
una balanza que pueda medir con precisión el peso de un pacien- ca incluyen pruebas estándar de función pulmonar y gasome-
te con sobrepeso, su adquisición ha de ser prioritaria. Pesar a un tría arterial, si está indicada, y estudios del sueño, si se sospecha
paciente en una báscula de mercancías (como se ha hecho en el una apnea del sueño. Las pruebas gastrointestinales pueden

Fórmula para el IMC = Peso (kg) ⫼ Altura (m2)


Para convertir libras a kilogramos, divida por 2,2
Para convertir pulgadas a metros, divida por 39,37
Para convertir metros a metros cuadrados, multiplique el número
de metros por sí mismo
Para obtener el IMC, divida el peso en kilogramos por la altura en m2
Ejemplo: El paciente pesa 350 libras y mide 5´6´´ (66 pulgadas)
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

Figura 49-1 Fórmula para el cálculo del índice 1. Peso en libras (350) dividido por 2,2 = 159,09 kg
de masa corporal (IMC). Para más exactitud, 2. Altura en pulgadas (66) dividido por 39,37 = 1,68 metros
mantenga dos decimales en el cálculo y redondee
3. Metros (1,68) multiplicado por sí mismo (1,68) = 2,82 metros cuadrados
el número final con un decimal.
4. Peso en kg (159,09) dividido por metros cuadrados (2,82) = 56,41
o IMC de 56,4

Nota: Esta fórmula equivale a multiplicar el peso en libras por 702 y dividir el resultado
por la altura en pulgadas y, a continuación, dividir el resultado por la altura
en pulgadas de nuevo.

Ejemplo: 350 ⫻ 702 = 245.700,00; 245.700/66 = 3722,73; 3722,73/66 = 56,41, o 56,4


410 Sección IX • EDUCACIÓN, PRÁCTICA Y DOCUMENTACIÓN

incluir un estudio radiológico gastrointestinal superior con cirujano explicará exhaustivamente los riesgos de la cirugía;
bario o una endoscopia digestiva alta, para detectar una posible mientras que el personal de enfermería proporcionará explica-
búsqueda de una hernia hiatal o reflujo, y una ecografía de la ciones detalladas de lo que se espera antes, durante y después de
vesícula biliar. Las pruebas preoperatorias sirven para determi- la cirugía. El personal de la consulta del cirujano por lo general
nar cuál es la técnica quirúrgica más adecuada y la necesidad de comenzará este proceso, que será continuado por el personal
realizar consultas especializadas, así como para documentar los hospitalario. El paciente visitará la clínica en el período preope-
registros clínicos para la compañía aseguradora. Estas pruebas ratorio, a lo largo del cual recibirá una información detallada
también proporcionan valores de referencia antes del trata- sobre la hospitalización y el alta hospitalaria. En esta fase preo-
miento, que permiten la evaluación posquirúrgica de las mejo- peratoria, el personal de enfermería de la clínica desempeñará un
ras en las patologías comórbidas de los pacientes. papel vital en la educación del paciente, su apoyo emocional y la
prevención de complicaciones. Las enfermeras y enfermeros
EVALUACIÓN PSICOLÓGICA explicarán las técnicas, los equipos y los procedimientos rutina-
La evaluación psicológica se realiza en el período preoperato- rios, y proporcionarán los fundamentos subyacentes. Se enseña-
rio, con el fin de determinar el estado emocional del paciente, rá asimismo a los pacientes a utilizar la espirometría incentivado-
los antecedentes psiquiátricos y familiares, y la capacidad para ra y las técnicas de fijación abdominal con almohadas, la
comprender las opciones quirúrgicas disponibles, la gravedad respiración diafragmática, la tos, ejercicios de piernas y pies, así
de la cirugía bariátrica, y la capacidad de cumplir con el régi- como los movimientos de giro y salida de la cama de forma ade-
men posquirúrgico. Por lo general, esta evaluación incluye cuada y segura. Se hará hincapié en la expectativa y la necesidad
pruebas escritas y una entrevista personal con un psicólogo o de la deambulación precoz. Además, el personal de enfermería
un psiquiatra, preferiblemente familiarizados con la proble- explicará la posición adecuada de la cama, la utilización de la
mática de la obesidad y que se muestren favorables a la cirugía. bomba de analgesia controlada por el paciente (ACP), los medios
Otras pruebas pueden incluir un cuestionario sobre calidad de evaluación del dolor (escalas de dolor) y el tratamiento del
de vida, y encuestas para la detección de alteraciones de la dolor. También se explicará la colocación de la sonda nasogástri-
percepción de la propia imagen y de una posible depresión. Se ca, las medias de compresión secuencial, la sonda vesical y los
dispone de numerosas pruebas opcionales, por lo que la elec- drenajes y vendas, al igual que la administración de medicamen-
ción de las pruebas de rutina se realiza en muchos casos en tos por vía intravenosa y la progresión dietética. Se revisará asi-
colaboración con el cirujano y el psicólogo o psiquiatra. mismo la posible aparición de infecciones, problemas intestina-
les, náuseas y coágulos sanguíneos. Se explicarán las posibilidades
Nutrición de ser ingresado en la unidad de cuidados intensivos (UCI) en el
postoperatorio inmediato, la intubación endotraqueal, la presión
Con frecuencia los pacientes con sobrepeso están malnutridos, positiva continua o de dos niveles en la vía aérea, así como el paso
presentan déficit proteicos, y carencia de los nutrientes esencia- por el quirófano, la hora y el lugar de llegada el día de la cirugía,
les necesarios para la cicatrización.7 Los cambios oculares, en y la preparación preoperatoria de rutina del cirujano. Proporcionar
el cabello, los labios, la lengua, los dientes y las encías pueden una visita de las áreas hospitalarias pertinentes permite que los
ser indicadores de un pobre estado nutricional, y deberán ano- pacientes se familiaricen con el entorno y, en cierto modo, atenúa
tarse en la evaluación preoperatoria. Los cirujanos pueden el estrés y la ansiedad del ingreso. El personal de enfermería de
prescribir suplementos nutricionales a sus pacientes en el perío- la clínica en el período preoperatorio también comenzará a
do preoperatorio previo al ingreso, para favorecer la cicatriza- impartir las indicaciones sobre el alta hospitalaria, lo cual supone
ción de la herida y el estado nutricional. En el período preope- una ayuda importante. Los pacientes necesitan la repetición y el
ratorio, el dietista expondrá los requerimientos dietéticos refuerzo de la información sobre el alta hospitalaria y, después de
posquirúrgicos y la administración de suplementos, y evaluará la cirugía, hay poco tiempo. Los pacientes comunican que es
la comprensión y el posible cumplimiento del paciente. tranquilizador que se les diga que el personal del hospital está
familiarizado con la cirugía bariátrica y que disponen del equipo
Consentimiento informado e indicaciones previas y el mobiliario adecuados.
a la cirugía
Preparación física
El consentimiento informado se obtiene normalmente en la con-
sulta del médico antes de la cirugía, o inmediatamente antes de Se espera que los pacientes lleguen la mañana de la inter-
proceder a la intervención. La obtención del consentimiento del vención quirúrgica ya duchados y limpios. Sin embargo, la
paciente para el procedimiento supone algo más que una simple mayoría de los pacientes sudan mucho y pueden presentar
revisión de los riesgos en comparación con los beneficios de la dermatitis en áreas intertriginosas. Debido a que estas
propia intervención y del período de recuperación a corto plazo. zonas son difíciles de exponer y alcanzar por parte de los
Es necesario que el paciente comprenda en todas sus dimensio- pacientes, es importante comprobar y limpiar los pliegues
nes la necesidad de mantener el cumplimiento de las directrices axilares, los del cuello, submamarios, abdominales, ingui-
impartidas. Se requiere que el paciente comprenda la necesidad nales, de piernas y tobillo, siempre que sea necesario. Los
de un cumplimiento a lo largo de toda su vida en lo que respecta pacientes deben intentar orinar y defecar antes de dejar la
a: 1) restricciones dietéticas; 2) protocolos de suplementos nutri- unidad. Se colocarán medias antiembólicas y se inyectará
cionales; 3) protocolos de pruebas de laboratorio, y 4) visitas por vía subcutánea una dosis adecuada de heparina de bajo
regulares de seguimiento a la consulta. La adhesión a los proto- peso molecular. Las dosis se repetirán cada 12 horas hasta
colos de forma adecuada permite proceder a un estrecho segui- que los pacientes sean dados de alta.
miento de los progresos del paciente, así como a la prevención o
corrección de hallazgos anómalos. El personal resulta clave para Hidratación
potenciar la necesidad de este cumplimiento, y puede también
identificar a los pacientes con más posibilidades de incumpli- En el período preoperatorio, los pacientes se verán privados
miento y a los que necesitan una instrucción más esmerada. El de la ingesta oral a partir de la media noche anterior a la
Capítulo 49 • Asistencia de enfermería al paciente sometido a cirugía bariátrica 411

cirugía. Se iniciará la administración de líquidos intraveno- de la intervención, el paciente será trasladado a una cama hos-
sos (IV) en la unidad de enfermería para hidratar a los pitalaria y será llevado a la URPA para su reanimación. La uti-
pacientes. Debido al exceso de tejido adiposo, el acceso IV lización de la cama del paciente evita el traslado de la mesa de
suele ser difícil de establecer. Es conveniente que exista un operaciones a la camilla y de esta a la cama hospitalaria. El
protocolo escrito por el cual sólo un profesional de enfermería colchón neumático es un dispositivo de traslado eficaz y seguro
experimentado en la toma de vías intravenosas puede iniciar la que se utiliza en numerosos hospitales. El cuerpo del paciente
infusión IV. Los antibióticos intravenosos serán administra- se sostiene proporcionando un deslizamiento de una bolsa de
dos habitualmente en el área de espera del quirófano. aire debajo de él, lo que se traduce en un traslado suave y cómo-
do. Son necesarias menos personas para hacer el traslado y,
Anestesia dado que no es necesario levantar al paciente durante los tras-
lados laterales, se reducen las posibles lesiones.
En los pacientes obesos mórbidos, el gasto cardíaco, las pre-
siones arteriales pulmonar y sistémica y la presión del ven-
trículo izquierdo y derecho están aumentadas.8 La anestesia Z ASISTENCIA POSQUIRÚRGICA
general con parálisis muscular provoca una reducción en los
volúmenes corrientes en todos los pacientes. En obesos mór- Asistencia postanestésica
bidos, estos problemas cardiorrespiratorios se exacerban, y
muchos de ellos no pueden tolerar la posición supina. Las El despertar del paciente sometido a cirugía bariátrica en la
diversas posiciones empleadas habitualmente en cirugía URPA supone un momento especialmente delicado e importan-
pueden aumentar el compromiso de la función cardiopul- te.11 A veces es necesaria ventilación mecánica. Sin embargo, los
monar de estos pacientes, ya de por sí vulnerables. nuevos agentes anestésicos facilitan considerablemente la recu-
Durante la cirugía bariátrica se utilizada la posición de peración y la deambulación. La asistencia inmediata incluye el
Trendelenburg inversa (PTI). En un pequeño estudio recien- uso de una mascarilla de oxígeno y, posteriormente, una cánula
te, esta posición demostró tener un marcado efecto sobre la nasal, inducción de tos y respiración profunda, suministro de
mejora del intercambio gaseoso y la mecánica respiratoria en narcóticos por vía intravenosa hasta que se inicie la bomba
15 pacientes sometidos a derivación biliopancreática.9 de ACP y el control de las constantes vitales, los vendajes y la
diuresis. Es muy importante también proporcionar estimulo y
apoyo emocional durante este período. Cuando el paciente esté
Z ASISTENCIA INTRAOPERATORIA estable, se llevará a cabo su traslado a la unidad de enfermería.
Choi y cols. evaluaron la eficacia y la seguridad de la APC en
Objetivos 25 pacientes obesos mórbidos después de una cirugía de deriva-
ción gástrica.12 Midieron los gases en sangre arterial, la frecuen-
Los objetivos de la asistencia intraoperatoria, según afirma cia cardíaca, la presión arterial media, la saturación de oxígeno
McEwan, son los siguientes: «Las intervenciones de enfermería arterial, la frecuencia respiratoria, la cantidad de fármacos opioi-
intraoperatorias cualificadas proporcionan a los pacientes una des (sulfato de morfina) utilizados, la satisfacción del paciente, la
posición segura y cómoda durante la cirugía, aseguran una ópti- escala analógica visual para el dolor y la incidencia de náuseas,
ma exposición de las áreas quirúrgicas, y previenen las compli- vómitos, prurito y sedación. La valoración del dolor con la escala
caciones posquirúrgicas (p. ej., lesiones por presión, neuropatías analógica visual el día de la cirugía fue de 5,4 ⫾ 2,1, aunque pos-
y compromisos cardiovasculares y respiratorios).»10 teriormente se mantuvo por debajo de 4. La saturación arterial
de oxígeno y las constantes vitales cursaron sin cambios signifi-
Procedimientos cativos, y los efectos secundarios fueron leves y no requirieron
tratamiento. Davidson y Callery examinaron las cuestiones de
En el quirófano, el equipo ayudará a colocar al paciente en la enfermería relacionadas con la asistencia en el postoperatorio
mesa de operaciones. Un pie de cama evitará que el paciente se inmediato de los pacientes obesos ingresados en la UCI o en la
deslice de la mesa. Los brazos del paciente se asegurarán en unidad de cuidados intermedios (IMC).13 Incluyeron considera-
unas abrazaderas acolchadas, con las palmas hacia arriba, para ciones referidas a clasificación en función de las prioridades (tria-
proteger el nervio cubital. Uno o dos cinturones de seguridad je), la movilidad, la visita, la reanimación con líquidos, el trata-
acolchados y largos serán colocados por lo menos a 5 cm por miento de la apnea del sueño, el manejo de las vías respiratorias,
encima de las rodillas para evitar que estas se flexionen mien- y el traslado de los pacientes para los procedimientos realizados
tras el paciente esté en la posición de Trendelenburg inversa. fuera de la UCI. Entre los puntos importantes mencionados en
Deberá colocarse asimismo una manta eléctrica con tempera- este artículo destaca el hecho de que «todos los pacientes obesos
tura regulable sobre el tórax y los brazos del paciente, para pre- mórbidos de la UCI se clasifican como más graves que los pacien-
venir la hipotermia que tiende a producirse durante la cirugía tes ingresados de rutina en esta unidad, debido a que los proce-
abdominal. Se colocará una almohadilla con el electrodo dis- dimientos de rutina llevan más tiempo en los pacientes obesos
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

persor de la unidad de electrocirugía en el muslo del paciente y mórbidos.»13 La razón de la clasificación de una mayor gravedad
se conectará con la unidad de cauterización eléctrica. Antes de es aplicable a la asistencia del paciente sometido a cirugía bariá-
la anestesia han de disponerse también los electrodos del elec- trica, independientemente de la unidad de enfermería, y la dota-
trocardiograma, un monitor de pulsioximetría, y un manguito ción de personal debería ajustarse en consecuencia.
automático de presión arterial (extra grande). El dispositivo de
compresión secuencial conectado a los compresores de piernas
o pies estará encendido y comprobado. Las funciones del per- Asistencia en la unidad de enfermería
sonal de enfermería instrumentista y circulante (o el asistente
del médico en el quirófano) están condicionadas por la técnica RUTINARIA
que se vaya a utilizar y, por supuesto, implican el empleo de los La asistencia rutinaria incluye el control de las constantes
equipos especiales necesarios para la cirugía bariátrica. Después vitales, la medición estricta y el registro de la ingesta de líqui-
412 Sección IX • EDUCACIÓN, PRÁCTICA Y DOCUMENTACIÓN

dos y la diuresis, el control del dolor y las náuseas, y la vigilan-


cia de los vendajes para detectar posibles hemorragias. En los Tabla 49-2 COMPARACIÓN DEL ÍLEO
procedimientos abiertos, el vendaje abdominal se comprueba Y LA OBSTRUCCIÓN INTESTINAL
cada 2-4 horas en el postoperatorio inmediato, cuando es más OBSTRUCCIÓN
probable que se produzca una hemorragia, y después en cada CATEGORÍA ÍLEO INTESTINAL
turno. La asistencia rutinaria también incluye asegurarse que
se llevan a cabo correctamente por el paciente los procedi- Abdomen Distendido y molesto Dolor abdominal
cólico (más grave
mientos para «girarse en la cama, toser, y respirar profunda- que el de íleo)
mente» (incluyendo la observación del uso frecuente del espi- Ruidos intestinales Poco activos o Muy activos
rómetro incentivador), los ejercicios de piernas y pies, y la ausentes
fijación abdominal (utilizando las almohadas). Flatulencia Disminuida o ausente Ausente
Deposiciones Ausentes Ausentes
ESPECÍFICA DE LA CIRUGÍA BARIÁTRICA Apetito Disminuido o ausente Ausente
Náuseas y vómitos A veces presentes Siempre presentes
Cuando el paciente llegue de la URPA, la cama puede ser colo- Temperatura Normal Por lo general, elevada
cada en PTI, con el cabecero de la cama elevado 30 cm y los pies Leucocitosis Normal Por lo general, elevada
de cama colocados en su lugar. La PTI se utiliza para mejorar la Diagnóstico Ausencia de ruidos Radiografía abdominal
intestinales con o TC: dilatación de
función pulmonar utilizando la gravedad para tirar del diafrag- distensión las asas intestinales
ma hacia abajo, incrementando así el volumen corriente. La abdominal
cama no debe flexionarse a la altura de las caderas (aunque algu-
nas camas bariátricas no pueden ser enderezadas completamen- TC, tomografía computarizada.
te en una PTI), debido a que la flexión empeora la respiración
profunda y puede favorecer el aumento de la presión venosa pél- paciente que no beba más de 30 mL cada 5 minutos para evitar
vica. El acceso de la vía intravenosa debe mantenerse cuidado- el rebosamiento y el aumento de la presión dentro del pequeño
samente, incluyendo la advertencia al paciente de que tenga estómago (bolsa) recién creado. El nutricionista desempeña un
cuidado de no extraerse la aguja cuando camine, intente alcan- papel clave en asegurar que el personal encargado de la dieta
zar algo con la mano o se gire. A menudo se utiliza el catéter de esté familiarizado con el protocolo y no proporcione alimentos
una vía central insertado periféricamente. La sonda nasogástri- inadecuados al paciente, quien a su vez será convenientemente
ca (si está presente) se ajustará con una suave aspiración. Si el informado para que no tome sustancias inadecuadas llevadas
tubo se sale no debe realizarse intento alguno de reinserción en por error a su habitación por el personal encargado de su dieta,
la unidad de enfermería. La reinserción sólo se realizará bajo o bien por visitantes. En función de las preferencias del ciruja-
fluoroscopia. Es fundamental que el personal de enfermería sea no, después de ser dado de alta hospitalaria el paciente tenderá
consciente de que las líneas de los puntos de sutura y de grapas a mantener una dieta líquida o, alternativamente, podrá recibir
pueden romperse por una reinserción a «ciegas». El sondaje ya una dieta a base de purés antes del alta. Los pacientes reali-
vesical colocado durante la cirugía se retirará tan pronto como zan a continuación la transición de una dieta totalmente líqui-
sea viable, durante las primeras 24 horas, si es posible. Los son- da, a otra a base de purés, a una semisólida y, por último, a la
dajes permanentes se evitarán siempre que sea posible porque las toma de alimentos sólidos. En el período posquirúrgico, todos
sondas tienden a desalentar al paciente en lo que respecta a la los pacientes sometidos a cirugía bariátrica requieren, en
deambulación. Para evitar la infección del tracto urinario es mayor o menor medida, la administración de suplementos
necesario un cuidado esmerado de la sonda, dado que la higiene nutricionales, que se mantendrá a lo largo de toda la vida del
personal es mucho más difícil en los pacientes bariátricos. La paciente y que se inicia durante la primera semana del posto-
deambulación, como se ha señalado anteriormente, es uno de los peratorio. Cuanto mayor sea la malabsorción inducida por la
aspectos más importantes de la asistencia. cirugía, más necesaria será la suplementación.
Las siguientes medidas de enfermería son utilizadas
para evitar el íleo posquirúrgico, el estreñimiento y la obs- MEDICAMENTOS
trucción del intestino grueso: disminución de la medicación Los típicos medicamentos utilizados en pacientes sometidos a
para el dolor (sin dejar de mantener un adecuado control del cirugía bariátrica son los antibióticos, los anticoagulantes, los
dolor), inicio de la deambulación de forma precoz y fomento bloqueadores H2, los sedantes y los analgésicos. Inicialmente,
de la ingesta adecuada de líquidos (v. tabla 49-2). los medicamentos IV para el dolor son con frecuencia adminis-
trados por una PCA, o, de modo menos habitual, por un catéter
DIETA epidural, e incluyen la utilización de algún tipo de escala de
Siempre en función de las preferencias del cirujano, se tenderá evaluación del dolor. Los pacientes pasan de recibir analgesia
a iniciar de inmediato la administración de pedacitos de hielo IV a oral antes del alta hospitalaria. Entre otros medicamentos
y sorbos de agua, y se progresará con una dieta basada en líqui- se incluyen los que se utilizan para el tratamiento de las patolo-
dos claros en frecuentes y pequeñas cantidades (no más de gías comórbidas, como la insulina o los agentes antidiabéticos
30 mL) bebidos lentamente, a pequeños sorbos. Antes de ini- orales, los antihipertensivos y los fármacos inhalados para el
ciar la administración de líquidos claros a pacientes con deri- asma. Muchos pacientes que reciben medicamentos para tratar
vación gástrica laparoscópica en Y de Roux, puede procederse la diabetes antes de la cirugía no los necesitarán en el período
a una exploración radiológica utilizando un medio de contras- posquirúrgico. En la atención a los pacientes obesos mórbidos,
te hidrosoluble, para comprobar la permeabilidad del área de es importante recordar que muchos medicamentos y la mayoría
la gastroenterostomía y la ausencia de dehiscencias en el pri- de los agentes anestésicos son lipofílicos, es decir, que tienden
mer día del período posquirúrgico.14 Una vez que se inicia la a acumularse en los tejidos grasos. Por lo tanto, se liberan irre-
administración de líquidos se colocarán en la cabecera de la gularmente al sistema circulatorio, dependiendo del tipo de
cama del paciente varias tazas de 30 mL de modo que el pacien- medicamento utilizado y las diferencias individuales. Por lo
te pueda medir con precisión las cantidades y controlar su tanto, es posible que se produzca una nueva sedación y una
ingesta sin la asistencia del personal. Deberá advertirse al sobresedación. Debido a que estos fármacos lipofílicos pueden
Capítulo 49 • Asistencia de enfermería al paciente sometido a cirugía bariátrica 413

tener un efecto acumulativo, la principal preocupación al res- realizar inspiraciones profundas. El volumen medido se compa-
pecto es la sobredosis, que puede provocar una depresión respi- ra con el valor basal obtenido en el período preoperatorio, que
ratoria y una parada cardiorrespiratoria. Cuando se adminis- se plantea como objetivo a alcanzar. El personal no debe dar por
tran medicamentos por vía intramuscular, en ocasiones es sentado que el paciente está siguiendo el régimen adecuadamen-
necesario usar una aguja más larga con el fin de aplicar correc- te. Este ha de ser observado e instruido durante su estancia hos-
tamente la inyección en el músculo y no en tejido adiposo. Tras pitalaria en el período posquirúrgico para asegurar que utiliza
intervenciones en las cuales se crea una pequeña bolsa gástrica, el espirómetro de incentivo frecuentemente y de forma apropia-
los comprimidos grandes deben ser aplastados, bien mastica- da. Si está indicado, el personal también observará el tratamien-
dos, o disueltos en líquido. Las cápsulas pueden romperse apar- to con aerosoles, y se impartirán también indicaciones sobre la
te y mezclarse con una gelatina libre de azúcares o un líquido duración del tratamiento.
bajo en calorías. El paciente debe ser informado de que los anti-
inflamatorios no esteroideos, algunos antibióticos, el hierro y CUIDADOS DE LA HERIDA Y DE LA PIEL
el potasio son irritantes para la mucosa del estómago y tienen Generalmente, el cuidado de la herida en un paciente sin com-
que evitarse. Si no hay una vía alternativa razonable o fármacos plicaciones es relativamente sencillo y suele consistir en obser-
disponibles, deberá indicarse al paciente que beba un líquido var los vendajes en busca de hemorragias o hematomas, mante-
antiácido antes de tomar la medicación. ner un vendaje seco y estéril, observar la herida para determinar
la cicatrización o la dehiscencia y los signos de infección, y ayu-
ACTIVIDAD Y DEAMBULACIÓN dar en la retirada de las grapas. Estrechamente relacionada con
Inicialmente se prestará atención a la posición adecuada de la el cuidado de herida se encuentra la prevención de las náuseas y
cama, al uso de medias de compresión gradual o calcetines de los vómitos. «Las heridas abdominales en los pacientes obesos
compresión, y al ejercicio de las extremidades inferiores. Se pro- presentan un exceso de tensión debido a la grasa y al edema (sic).
porcionará a los pacientes una barra en la cabecera y un trapecio Los vómitos pueden añadir presión intrabdominal al área de la
para facilitar los movimientos en la cama. Las fajas abdominales incisión. Se puede optar por la colocación de sondas nasogástri-
no suelen utilizarse de forma rutinaria, abdominales porque cas, la administración de antieméticos y mantener los pacientes
presionan el margen costal inferior y el abdomen, favoreciendo en ayunas.»16 Asimismo, debe evitarse el estreñimiento, ya que
la inmovilización y la aparición de atelectasias. El objetivo prin- el esfuerzo de defecación aumenta la presión intraabdominal y
cipal de la asistencia en este contexto es el inicio precoz, autóno- puede dar lugar a la dehiscencia de la herida. Las personas obe-
mo y frecuente de la deambulación. Debe animarse al paciente sas son más propensas a la infección que las no obesas. El tejido
a que se levante de la cama y se mueva para evitar las complica- adiposo está poco vascularizado, lo que empeora la fagocitosis y
ciones respiratorias y la tromboflebitis. La deambulación debe disminuye la capacidad orgánica para combatir la infección.
producirse en cuestión de horas tras la intervención y, a conti- Además, la diabetes es frecuente en el paciente obeso mórbido y
nuación, cada 2-4 horas mientras el paciente esté despierto. Los puede contribuir a la lenta cicatrización y la infección. Las heri-
pacientes conscientes ingresados en la UCI o la unidad de cui- das gravemente infectadas pueden ocurrir en casos de dehiscen-
dados intermedios presentan los mismos requerimientos de cias de sutura intrabdominales y la formación de fístulas y sue-
deambulación que los ingresados en la unidad quirúrgica. El len constituir un problema de primer orden para el personal de
personal de enfermería de la UCI puede considerar difícil de enfermería. Al respecto es útil consultar al personal de enferme-
llevar a cabo la orden de iniciar la deambulación de forma pre- ría especializado en el cuidado de heridas. Tras el alta hospita-
coz y frecuente, ya que no está habituado al cuidado de pacientes laria pueden producirse con bastante frecuencia seromas y
que caminan. Otro factor a tener en cuenta es el hecho de que dehiscencias menores de la herida que, por lo general, se tratan
«se estima que se requieren 1,5 horas más de asistencia comple- fácilmente. Las úlceras por presión son poco frecuentes en los
ta al paciente obeso mórbido inconsciente.»15 La primera vez pacientes sometidos a cirugía bariátrica no complicada. Sin
que el paciente se levante de la cama, y según sea necesario, el embargo, en ocasiones se producen como consecuencia del roce
personal de enfermería debe disponer de otra persona en la de la piel que sobresale de los apoyabrazos de la silla de rue-
habitación para ayudar a sujetar al paciente. Éste puede sentirse das, de las barandillas de los laterales de la cama, y de otros
débil o mareado o tener dificultades para encontrar el equilibrio equipos de tamaño estándar. Si un paciente con una hospitaliza-
y deambular por el dolor, los medicamentos, el vértigo, o una ción prolongada no está en condiciones de caminar, el personal
disminución de la presión arterial debida a hipovolemia. Las de enfermería debe prever la aparición de posibles úlceras por
acciones de girarse, cambiar de posición y deambular suponen presión y ha de instaurar establecer medidas preventivas, como
factores de atención extrema para el personal de enfermería y de frecuentes giros, colocación de almohadas para proporcionar
riesgo para la seguridad del paciente. La anticipación y la plani- apoyo y evitar la presión, y aplicación de cuidados especiales de
ficación del equipo necesario, el personal en número suficiente, la piel. Para determinados pacientes pueden utilizarse camas
los mecanismos corporales adecuados y las técnicas de movili- bariátricas especializadas con presión de aire variable. La incon-
zación ayudan a prevenir lesiones, la fatiga y los accidentes. tinencia urinaria y fecal es otra posible causa del deterioro de la
Afortunadamente, se dispone de numerosos medios para la asis- piel, como lo es también la dermatitis crónica intertriginosa.
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tencia a pacientes sometidos a cirugía bariátrica. La American La piel no expuesta entre los pliegues cutáneos debe limpiarse y
Society for Bariatric Surgery, con sede en Gainesville, Florida secarse rutinariamente. La mayoría de las veces esta piel aparece
(www.asbs.org), puede proporcionar ayuda a través de un excoriada, húmeda, caliente y olorosa, y probablemente presen-
manual de recursos que identifican numerosos vendedores de te infección por Candida albicans.
productos para esta asistencia. Se puede optar por la colocación de apósitos con gasas
secas y absorbentes, toallitas o toallas de mano secas entre los
ASISTENCIA RESPIRATORIA pliegues cutáneos. A menudo se prescriben polvos absorbentes,
La cirugía abdominal alta predispone al desarrollo de atelecta- agentes antifúngicos tópicos y antibióticos. Cuando se limpian
sias. Para prevenirlas o disminuir su incidencia se utilizan prin- pliegues cutáneos gruesos, puede ser necesaria la ayuda de otra
cipalmente espirómetros de incentivo. La eficacia del esfuerzo persona. Del mismo modo, las heridas resultantes de la cirugía
es visible para el paciente, lo que refuerza la motivación para abdominal curan más lentamente en los pacientes obesos que
414 Sección IX • EDUCACIÓN, PRÁCTICA Y DOCUMENTACIÓN

en los individuos de peso normal. Ello predispone a los pacien- cencia incluyen dolor en el hombro, leucocitosis, disminución
tes al riesgo de complicaciones como hernias incisionales, de la presión arterial, oliguria y signos de irritación peritoneal
dehiscencia de sutura, y evisceración. «Los frecuentes cambios (dolor abdominal localizado o generalizado, rigidez, distensión,
de vendaje pueden exponer al paciente sometido a cirugía bariá- ausencia de ruidos intestinales y sensibilidad de rebote). Los
trica al riesgo de desprendimiento de la epidermis, debido a la pacientes afirman que «simplemente no se sienten bien» o que
colocación y retirada frecuente de esparadrapo. Interesa consi- experimentan una sensación de muerte inminente. Si se encuen-
derar la posibilidad de utilizar un vendaje para cuidado avanza- tra a un paciente sentado en la cama con las piernas cruzadas
do de heridas (hidrocoloide, espuma o alginato de calcio), que («en la posición de Buda»), y con respiraciones roncas, es muy
se cambia con menos frecuencia que los vendajes convenciona- probable que presente una dehiscencia. Lamentablemente, las
les».7 Los vendajes pueden asegurarse con cintas adhesivas tipo dehiscencias son en general difíciles de diagnosticar, no siempre
Montgomery, con malla tubular o con medias de malla. tienen una evolución clara y no se dispone de unas pruebas de
diagnóstico positivas hasta que la sepsis está establecida. Dado
Patrones de sueño que sus consecuencias son potencialmente nefastas, cuando se
sospeche de una dehiscencia, debe indicarse de inmediato la rea-
La apnea del sueño es muy frecuente en los obesos. Los lización de un estudio radiográfico con administración oral de
pacientes que roncan y los que padecen apnea del sueño contraste yodado hidrosoluble y una tomografía computarizada
deben instalarse cerca de los controles de enfermería para (TC) con contraste oral e IV. Si se confirma, será necesaria la
ser sometidos a una vigilancia más estrecha, ya que presen- reintervención quirúrgica o una intervención con drenaje radio-
tan un mayor riesgo de obstrucción de las vías respiratorias lógico del absceso (si está localizado).
altas. También existe el riesgo de depresión respiratoria por
la administración de anestésicos o narcóticos. La narcosis Complicaciones tardías
debida a la intoxicación por dióxido de carbono puede pro-
ducirse durante la noche y dar lugar a una parada respirato- Las complicaciones tardías surgen después de que el paciente ha
ria. Por esta razón, los pacientes con apnea del sueño y los abandonado el hospital y se ha recuperado de la cirugía. Las
que pesan 135 kg o más a menudo son mejor controlados en principales complicaciones tardías en los distintos procedimien-
la UCI/UCE durante la primera noche tras la cirugía. tos bariátricos se muestran en la tabla 49-3. Existen otras posi-
bles complicaciones específicas relacionadas con la malabsor-
ción, como son la anemia, la desmineralización ósea, los
Z COMPLICACIONES problemas neurológicos (p. ej., la neuropatía periférica secunda-
ria a hipovitaminosis y la encefalitis de Wernicke) y la malnutri-
Complicaciones precoces ción proteica. Estos trastornos se registran con una frecuencia
que se halla en función de: 1) la cantidad de malabsorción indu-
Las complicaciones precoces se definen como aquellas que cida; 2) la calidad de la información al paciente; 3) el nivel de
ocurren durante el procedimiento quirúrgico o en el período vigilancia médica; y 4) el grado de cumplimiento por parte del
postoperatorio inmediato (habitualmente antes del alta hospita- paciente en lo que respecta a las visitas en la consulta de segui-
laria). El papel asistencial del personal de enfermería en el reco- miento, las pruebas de laboratorio, la dieta, y la administración
nocimiento precoz y la comunicación de los síntomas de com- de suplementos nutricionales. Muchas complicaciones tardías
plicaciones (especialmente de embolia pulmonar y dehiscencia asociadas previamente a las bandas gástricas ajustables se han
de la anastomosis) es absolutamente fundamental y puede salvar minimizado. Entre las razones de ello se cuentan una mayor
la vida del paciente. Las hemorragias se manifiestan por excesi- experiencia individual y colectiva, las mejoras en las bandas y la
vo sangrado en los vendajes o en la sonda nasogástrica, taquicar- técnica quirúrgica, un mayor énfasis en los aspectos del segui-
dia, o disminución de la presión arterial.17 La insuficiencia res- miento de la asistencia, y la mejora de la técnica de ajuste.19
piratoria puede registrarse en caso de neumonía, atelectasia, Cuando se revisan las complicaciones en las diversas interven-
embolia pulmonar, e insuficiencia cardíaca congestiva.18 La pre- ciones quirúrgicas, es importante recordar que la mayoría de los
sencia de cianosis, hemoptisis, hiperpnea, taquicardia, dolor pacientes no presentan complicaciones de alcance. El
torácico, alteraciones de la presión arterial y diaforesis es en oca- International Bariatric Surgery Registry indica que el 97,2% de los
siones indicación de embolia pulmonar, síndrome de dificultad pacientes no tienen complicaciones importantes en los 30 pri-
respiratoria del adulto, neumonía o edema pulmonar. La embo- meros días del período postoperatorio, tanto en procedimientos
lia pulmonar puede resultar inevitable, a pesar de la administra- complejos, como la derivación gástrica en Y de Roux, como en
ción profiláctica de heparina y la deambulación precoz, aunque técnicas, simples como la gastroplastia vertical con banda y la
no suele ser fatal. La trombosis venosa profunda se presenta con colocación de banda gástrica ajustable.20
inflamación o dolor en las piernas, dolor en la pantorrilla y un
signo de Homan positivo, y se confirma mediante estudios Adaptaciones del paciente a la cirugía
Doppler. La infección de la herida (evidenciada por enrojeci-
miento, dolor, fiebre y drenaje purulento) y la dehiscencia de la Inevitablemente los pacientes han de llevar a cabo adaptaciones
sutura (separación de los bordes de la herida) pueden ser graves físicas, conductuales y emocionales tras la cirugía, contribuyen-
en el paciente obeso comprometido. En la colocación laparoscó- do así a la prevención de las complicaciones. Tales ajustes inclu-
pica de bandas gástricas ajustables, la perforación anastomótica yen elementos como nuevas conductas alimentarias impuestas
o gástrica no es frecuente y generalmente se produce durante la por la cirugía, cuestiones relacionadas con el cumplimiento de
curva de aprendizaje temprana del cirujano. Los síntomas indi- las indicaciones, y diferencias en el estilo de vida, la imagen cor-
cativos son dolor persistente en el hombro izquierdo, fiebre, poral y la aceptación social. Para colaborar en estas adaptacio-
taquicardia, taquipnea y leucocitosis. En todos los procedimien- nes, los grupos de apoyo proporcionan prácticas de cirugía
tos bariátricos, la tríada de fiebre, taquicardia (⬎120) y taquip- bariátrica integradas en los programas de asistencia integral y a
nea debe hacer sospechar de la presencia de una dehiscencia largo plazo a los pacientes. Es probable que los pacientes que
anastomótica o de la línea de grapas. Otros síntomas de dehis- asisten de forma regular a las reuniones de los grupos de apoyo
Capítulo 49 • Asistencia de enfermería al paciente sometido a cirugía bariátrica 415

Tabla 49-3 COMPLICACIONES TARDÍAS TRAS LA CIRUGÍA BARIÁTRICA

DG, CD, DBP GVB BGA

Rotura de la línea de grapas (en estómagos no Alteración de la línea de grapas Deslizamiento de la banda (menos frecuente)
transeccionados en DG)
Úlcera péptica (marginal) Reflujo (esofagitis) Reflujo (esofagitis)
Adherencias Adherencias Adherencias (menos)
Obstrucción del intestino delgado Obstrucción del intestino delgado Complicaciones del acceso de la banda
Obstrucción del estoma (estenosis) Obstrucción del estoma (estenosis) Obstrucción del estoma (estenosis)
Intolerancia a los alimentos grasos y a la lactosa Intolerancia a algunos alimentos Intolerancia a algunos alimentos
Síndrome de vaciamiento rápido
Náuseas y vómitos Náuseas y vómitos Náuseas y vómitos
Dolor abdominal Bezoares (estomal) Erosión de la banda
Estreñimiento o diarrea
Colelitiasis Colelitiasis Colelitiasis
Hernia incisional (laparotomía) Hernia incisional (laparotomía) Hernia incisional (laparotomía)
Dilatación de la bolsa Dilatación de la bolsa Dilatación de la bolsa
Vólvulo
Carencias metabólicas (algunas graves Algunos déficits de nutrientes Algunos déficits de nutrientes
o amenazantes para la vida)*
Depresión Depresión Depresión
* Los síntomas están directamente relacionados con el grado de malabsorción.
BGA, banda gástrica ajustable; CD, cruce duodenal; DBP, derivación biliopancreática; DG, derivación gástrica; GVB, gastroplastía vertical con banda.
Nota: La reintervención puede ser necesaria en cualquier procedimiento bariátrico.

promovidos por el cirujano tengan más éxito en la pérdida de das con la pérdida de peso. En ocasiones, los medicamentos
peso y su mantenimiento. El personal de enfermería puede requieren un ajuste de la dosis, pueden aumentarse después
hacer hincapié en la importancia de la asistencia a uno de estos de intervenciones malabsortivas (p. ej., hormonas) y pue-
grupos durante la enseñanza previa al alta hospitalaria. Algunos den disminuirse o retirarse con la pérdida de peso y la
pacientes requieren el apoyo adicional de un psiquiatra, un psi- mejora de las enfermedades comórbidas (p. ej., insulina y
cólogo u otro profesional sanitario especializado en salud men- agentes antihipertensivos).
tal. Holtzclaw es autor de un excelente libro de salud mental para
los pacientes intervenidos de una derivación gástrica.21 Dieta y evacuación intestinal
En general, la mayoría del personal de la consulta quirúrgi-
Z INDICACIONES PREVIAS AL ALTA ca proporciona información escrita y verbal sobre la dieta y
HOSPITALARIA (v. tabla 49-4)

Tratamiento del dolor Tabla 49-4 LISTA DE COMPROBACIÓN DE CRITERIOS


DE ALTA HOSPITALARIA
Justo antes del alta, debe administrarse al paciente una dosis de TRAS LA CIRUGÍA BARIÁTRICA
la medicación para el dolor, a fin de que sea efectiva durante su
viaje de regreso a casa, y se le ha de indicar que tome suficien- Hematocrito ⬎25
tes medicamentos para el dolor en los días posteriores para Afebril en las 24 horas previas
mantenerse cómodo y activo. Es útil para el paciente saber que No hay signos de inflamación o infección de la herida
Pulmones claros; respiración normal
el dolor disminuirá cada día que pase y que la dosis podrá irse Sonda nasogástrica retirada
reduciendo en consecuencia. Se debe indicar asimismo que es Dolor controlado; el paciente comprende las medidas para el
importante mantener un nivel regular de alivio del dolor, en tratamiento del dolor
lugar de esperar hasta que este sea intenso antes de tomar más Náuseas controladas
medicamentos. La mayoría de los pacientes valoran que se les Vía IV retirada
garantice que no van a habituarse a la medicación durante este Tolerancia a líquidos orales
El paciente camina con frecuencia y de manera autónoma
corto intervalo posquirúrgico. El paciente será informado de Prescripciones recibidas
la necesidad de ponerse en contacto con el cirujano si el dolor Medicamentos habituales devueltos al paciente
no remite de manera adecuada con la dosis prescrita (tal vez sea El paciente conoce los medicamentos, las dosis y las pautas
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un síntoma de una complicación), o si los analgésicos prescri- Tiene el número de teléfono por escrito del cirujano en caso de
tos se le acaban prematuramente. problemas, dudas o preguntas
Expone el régimen alimenticio posquirúrgico inmediato
Entiende las limitaciones del baño, del ejercicio y la elevación de
Medicamentos cargas
Comprende la posible disfunción intestinal y la necesidad de adoptar
Es necesario repasar el uso de los nuevos medicamentos medidas
con el paciente antes del alta hospitalaria, incluyendo cual- Es capaz de nombrar y describir el procedimiento de cirugía bariátrica
quier cambio en los fármacos tomados previamente para las al que ha sido sometido
patologías comórbidas. Recuerde al paciente que comuni- Conoce la fecha para la cita de seguimiento
Se le ha proporcionado transporte a su domicilio por:
que a su médico de atención primaria que ha sido sometido Firmas: (enfermero/a) (paciente)
a cirugía y las posibles mejoras en las patologías comórbi-
416 Sección IX • EDUCACIÓN, PRÁCTICA Y DOCUMENTACIÓN

la evacuación intestinal en los períodos pre y posquirúrgico. mente desde el laboratorio local del paciente a la consulta del
El personal de enfermería hospitalario es el más eficaz a la cirujano. Los pacientes no residentes en la ciudad en la que
hora de potenciar estos factores. Si la práctica se realiza en se ha practicado la intervención deben concertar al menos
el hospital, el personal de enfermería y los dietistas del hos- una consulta anual con su cirujano.
pital asumirán los principales papeles en esta enseñanza al
paciente. Cirugía bariátrica de rutina e información de contacto
Cuidado de la herida La información de contacto para urgencias y consultas de
rutina ha de ser convenientemente proporcionada al pacien-
Habitualmente, el vendaje abdominal se retira antes del alta te. Siempre en función de la relación que el paciente man-
hospitalaria. Se enseñará al paciente el procedimiento ade- tenga con el hospital y con el cirujano, el personal de enfer-
cuado para mantener la herida limpia y seca. Se permitirá la mería dará a la persona operada los números de teléfono de
ducha, utilizando jabón, con un suave lavado, y aplicando la unidad de enfermería para llamadas no urgentes. Muchas
ligeros toques para secar la herida. Hasta que la herida esté veces es recomendable una llamada telefónica de seguimien-
cicatrizada, no se permitirán los baños, normales o de hidro- to de la unidad de enfermería después del alta hospitalaria,
masaje, ni la natación. El personal de enfermería instruirá al con objeto de mantener la relación y la identificación tem-
paciente con respecto a los signos y síntomas de inflamación, prana de problemas y comprobar el estado del paciente.
infección, seroma, dehiscencia y evisceración. Es necesario
que el paciente concierte una cita para consulta aproximada-
mente a los 10 días, para comprobar el estado de la herida y Z MEJORA CONTINUADA DE LA CALIDAD
retirar las grapas cutáneas remanentes si procede.
Objetivo
Actividad y limitaciones físicas
Los principios básicos de la mejora continuada de la calidad
Las hernias incisionales son relativamente más frecuentes en son la optimización de la asistencia, el aumento de la satis-
los procedimientos abiertos. Se ha de indicar al paciente que facción del paciente, la reducción de costes y el incremento
no levante cargas de más de 5 kg y se le debe exhortar a de la eficacia del personal. El estándar de asistencia se esta-
que suba escaleras, camine y se mantenga activo. Habitual- blece en función de un conjunto de normas profesionales,
mente se permite que conduzca, a menos que tome medica- expectativas de los pacientes, criterios de resultado quirúr-
mentos que interfieran con su nivel de alerta y sus reflejos. gico, resultados de seguridad y control de la infección, crite-
Si el paciente ha de tomar un avión para regresar a su domi- rios de duración de la estancia y, a veces, acreditación o cri-
cilio, se le deberán enseñar algunos ejercicios para que los terios gubernamentales.
realice durante el vuelo y se le informará acerca de la impor-
tancia de levantarse de su asiento y caminar por los pasillos Proceso
del avión cada hora con el fin de disminuir el riesgo de trom-
bosis venosa profunda y de embolia pulmonar. Se le indica- El proceso es una evolución de las técnicas de resolución de
rá, asimismo, que está en condiciones de mantener relacio- problemas y de la teoría del cambio. La capacitación del per-
nes sexuales y que puede reincorporarse a su trabajo cuando sonal para resolver los problemas con rapidez, dentro de
lo considere, en virtud de su nivel de resistencia. cada nivel de la organización, y para hacer bien las cosas
desde la primera vez, son los principios fundamentales del
Complicaciones tardías proceso.

Para ayudar a que el paciente sepa cuándo ha de ponerse en


contacto con el cirujano, el personal de enfermería repasará Z PLANES DE ASISTENCIA, ESTRATEGIAS
con él los posibles signos y síntomas de infección de la heri- CLÍNICAS, PROTOCOLOS Y DIRECTRICES
da, dehiscencia de sutura o evisceración, seroma, trombofle- DE PRÁCTICA CLÍNICA
bitis, embolia pulmonar, neumonía, íleo, úlcera marginal,
obstrucción intestinal, infarto de miocardio (poco frecuen-
te), o dehiscencias y sepsis intraabdominales (también poco
Descripción general
frecuentes en el período postoperatorio tardío, aunque Los planes de asistencia individualizados se siguen utilizando
igualmente graves). en muchas instalaciones, aunque la tendencia predominan-
te en la actualidad es la que propugna el uso de estrategias
Cita de seguimiento con el cirujano clínicas. Los planes de asistencia se basan en el proceso de
enfermería, las capacidades de pensamiento crítico y la nueva
Tras el alta, el personal de enfermería se asegurará que el taxonomía 11 de los diagnósticos de enfermería de la North
paciente haya concertado una cita de seguimiento con el ci- American Nursing Diagnosis Association (aprobada en 2000).
rujano. Se recordará al paciente y a su familia la importancia Los planes de asistencia estandarizados ahorran un tiempo
de las visitas de seguimiento regulares. Se pedirá al paciente precioso en el ámbito de la enfermería, pero todavía necesitan
encarecidamente que asista al grupo de apoyo. Los pacientes cierto grado de individualización. «Según las directrices de la
que residan en otra ciudad serán citados con menos frecuen- JCAHO, el paciente o su familia deben participar en el de-
cia, pero se mantendrán en contacto telefónico con el ciru- sarrollo del plan de asistencia, que ha de ser interdisciplinario.
jano (de acuerdo con el calendario de seguimiento habitual) Una de las razones por la cual las estrategias críticas o clínicas
y a través de los informes de los médicos de atención prima- son cada vez más utilizadas es el enfoque interdisciplinario
ria locales. El paciente debe solicitar copias de todas las que presentan.»22 Tanto los planes de asistencia como las
pruebas de laboratorio, que serán enviadas por fax directa- estrategias clínicas implican un planteamiento de la asistencia
Capítulo 49 • Asistencia de enfermería al paciente sometido a cirugía bariátrica 417

orientado hacia la resolución de problemas. Las estrategias nivel de soporte, realizan una inapreciable contribución que
clínicas se desarrollan más frecuentemente para su aplicación cambia la vida de estos pacientes. Por su parte, los administra-
a pacientes «de alto riesgo o de gran volumen» de pacientes dores que apoyan los programas de cirugía bariátrica generan
(p. ej., en cirugía bariátrica) y para evolucionar en paralelo a una significativa influencia en el fomento de su calidad, seguri-
la calidad continuada de la asistencia. Las diferencias pueden dad y viabilidad financiera; sus decisiones también afectan
ser documentadas en un plan de asistencia individualizada directamente a la satisfacción general de los pacientes someti-
hasta que se resuelvan. En el actual planteamiento de la asis- dos a cirugía bariátrica y del personal que los atiende.
tencia es necesario prestar servicios en los que el criterio de
rentabilidad sea tenido siempre en cuenta. Rouse y cols. des-
cribieron una estrategia de asistencia óptima desarrollada por Z BIBLIOGRAFÍA
su equipo transdisciplinario. Por medio de dicha estrategia, 1. Wellman NS, Friedberg B: Causes and consequences of adult obesity:
tanto la duración como el coste de la hospitalización disminu- health, social and economic impacts in the United States. Asia Pac J
yeron en alrededor el 17%, mientras que la calidad de la asis- Clin Nutr 2002;11(suppl 8):S705-S709.
tencia fue irreprochable, como lo demuestran la reducción en 2. Herron DM, Gagner M, Kenyon TL, et al: The minimally invasive
surgical suite enters the 21st century: a discussion of critical design
el porcentaje de infecciones de la herida y la mejora de la elements. Surg Endosc 2001;15:415-422.
comunicación y la colaboración entre los miembros del equi- 3. Davidson JE, Callery C: Making the most of your time: the benefits
po a través de la asistencia continuada.23 of converting patient education programs into continuing nursing
El mantenimiento de la calidad, con disminución para- education. Obes Surg 2000;10:482-483.
4. Kaminski J, Gadaleta D: A study of discrimination within the
lela de los costes, el tiempo de hospitalización, el uso de cui- medical community as viewed by obese patients. Obes Surg
dados intensivos y la tasa de reingresos, también fueron cita- 2002;12:14-18.
dos en otros estudios. 24,25 Además, los protocolos y las 5. Reto CS: Psychological aspects of delivering nursing care to the bari-
directrices de práctica clínica proporcionan instrucciones atric patient. Crit Care Nurs Q 2003;26:139-149.
secuenciales específicas para el tratamiento de pacientes con 6. Fox KM, Taylor SL, Jones JE: Understanding the bariatric surgical
patient: a demographic, lifestyle, and psychological profile. Obes Surg
problemas y necesidades particulares.26 Los protocolos son 2000;10:477-481.
especialmente útiles cuando se realiza un amplio uso de per- 7. Hahler B: Morbid obesity: a nursing care challenge. Medsurg Nurs
sonal de agencia o flotante, que no está familiarizado con la 2002;11:85-90.
especialidad. 8. Brodsky JB: Positioning the morbidly obese patient for anesthesia.
Obes Surg 2002;12:751-758.
9. Perilli V, Solazzi L, Bozza P, et al: The effects of the reverse
Desarrollo de la estrategia clínica Trendelenburg position on respiratory mechanics and blood gases in
morbidly obese patients during bariatric surgery. Anesth Analg
El equipo multidisciplinario desarrolla su estrategia a partir 2000;91:1520-1525.
10. McEwen DR: Intraoperative positioning of surgical patients. AORN
del formato de la estrategia del hospital, del protocolo del J 1996;63:1059-1063, 1066-1079.
médico o de las indicaciones de rutina. Es esencial una cate- 11. Walter DA: Waking up the gastric bypass patient. Obes Surg
goría adicional dirigida a las necesidades de apoyo emocio- 1997;7:374-375.
nal especial del paciente bariátrico. Durante el desarrollo de 12. Choi YK, Brolin RE, Wagner BK, et al: Efficacy and safety of
patient-controlled anesthesia for morbidly obese patients following
la estrategia, se solicita a cada departamento su aportación gastric bypass surgery. Obes Surg 2000;10:154-159.
relacionada con el plan de asistencia óptimo y los resultados 13. Davidson JE, Callery C: Care of the obesity surgery patient
deseados. Es necesario emplear algún medio de control para requiring intermediate-level care or intensive care. Obes Surg
realizar un seguimiento de las desviaciones en la duración de 2001;11:93-97.
las hospitalizaciones, los resultados esperados, y la utiliza- 14. Wittgrove AC, Clark GW: Laparoscopic gastric bypass, Roux-en-Y:
500 patients: technique and results, with 3- 60-month follow-up. Obes
ción de los recursos. Las estadísticas utilizadas en el análisis Surg 2000;10:233-239.
de los resultados obtenidos mediante la aplicación de este 15. Davidson JE, Kruse MW, Cox DH, et al: Critical care of the morbidly
medio pueden ser simples o complejas. En última instancia, obese. Crit Care Nurs Q 2003;26:105-116.
las estadísticas permitirán identificar problemas importan- 16. Wilson JA, Clark JJ: Obesity: impediment to wound healing. Crit
Care Nurs Q 2003;26:119-132.
tes y, posteriormente, priorizar y planificar las mejoras en la 17. Mason DS, Sapala A, Sapala JA: Roux-en-Y gastric bypass. AORN J
asistencia. Los cambios se ejecutarán y evaluarán según 1993;58:1113-1140.
corresponda. El ciclo puede repetirse hasta que se alcance el 18. Shikora SA: Surgical treatment for severe obesity: the state of the art
debido cumplimiento de la norma establecida. for the new millennium. Nutr Clin Prac 2000;15:13-22.
19. Fox SR, Fox KM, Srikanth MS, et al: The Lap-Band® System in
a North American population. Obes Surg 2003;13:275-280.
20. Mason EE, Renquist KE, Jiang D: Perioperative risks and safety of
Z RESUMEN surgery for severe obesity. Am J Cin Nutr 1992;55:573S-576S.
21. Holtzclaw TK: This is not brain surgery..but there is a magic pill!
In Bellury P (ed): A Mental Health Companion for the Gastric Bypass
La asistencia al paciente sometido a cirugía bariátrica resulta Patient. Atlanta, The Storyline Group, 2003.
infinitamente gratificante cuando los responsables de la misma
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

22. Client care plans and management. In Smith SF, Duell DJ, Martin BC
reflexionan sobre ello o son testigos de los principales cambios (eds): Clinical Nursing Skills: Basic to Advanced Skills, ed 5, p. 30.
en el estilo de vida, la mejora de la calidad de vida, y la alegría Upper Saddle River, Prentice Hall, 2000.
que experimenta el paciente que cumple adecuadamente los 23. Rouse AD, Tripp BL, Shipley S, et al: Meeting the challenge of
managed care through clinical pathways for bariatric surgery. Obes
protocolos. Es satisfactorio comprobar que la mayoría de Surg 1998;8:530-534.
los pacientes presentan una evolución clínica sin complicacio- 24. Huerta S, Heber D, Sawicki MP, et al: Reduced length of stay by
nes y una radical pérdida del exceso de peso, con notable mejo- implementation of a clinical pathway for bariatric surgery in an
ra en la salud, la apariencia, la autoestima, la posibilidad de academic health care center. Am Surg 2001;67:1128-1135.
25. Roark MK: Critical pathways. J Health Care Res Manag 1997;15:12-15.
encontrar empleo y de promocionarse profesionalmente, y los 26. Rich P, Brady C: Documentation. In Mayer B, Kowalak J (eds):
niveles de actividad física, sexual y social. Los responsables de Illustrated Manual of Nursing Practice, ed 3, p. 23. Springhouse,
una prestación de asistencia, competente y con el pertinente Penn., Lippincott Williams & Wilkins, 2002.
50
Grupos de apoyo al paciente sometido
a cirugía bariátrica
Tracy Martinez, R.N., B.S.N.

La forma en que los pacientes se presentan en las reuniones niveles mayores de psicopatología que la población de peso
de los grupos de apoyo es variable. En general se les suele normal.5 Lo que sí es cierto es que en la población que es
pedir que hablen al grupo de sus patologías comórbidas y de objeto de nuestro interés, la prevalencia de la depresión
cómo estas han curado después de la operación. Con fre- es bastante alta (80%), hecho que no resulta sorprendente en
cuencia revelan que ya no necesitan medicación para la una sociedad abiertamente cruel con los pacientes obesos.
hipertensión, que pueden dormir sin aparatos para respirar, Nuestra sociedad demuestra con frecuencia su ignoran-
y que ya no utilizan medios auxiliares para caminar. Otros cia al manifestar que si los obesos comieran menos e hicieran
comentan que ya no padecen diabetes, la grave enfermedad ejercicio, podrían controlar su peso. En otras palabras, que los
que antes minaba literalmente su cuerpo. Y lo que les resul- pacientes obesos lo son porque quieren. El hecho es que la
ta más asombroso es que ya no sienten «la peor de las enfer- obesidad mórbida es una enfermedad de etiología multifacto-
medades», la soledad. Al respecto cabe destacar que los rial, con una fuerte asociación genética. Estudios realizados
aspectos psicológicos de esta enfermedad se cuentan cierta- en gemelos demostraron que dos tercios de la variación en el
mente entre los más importantes, en especial cuando se con- peso corporal puede atribuirse a factores genéticos.6
sidera la calidad de vida del paciente obeso mórbido.1 La obesidad mórbida es una enfermedad crónica para la
Todas las personas buscan aceptación y cariño. Por des- cual no existe cura hoy en día. Como en cualquier enfermedad
gracia, la mayoría de los pacientes afectados de obesidad mór- crónica, la atención de por vida y los esfuerzos continuados son
bida han soportado toda una vida de discriminación y soledad. imperativos para mantenerla bajo control con pérdida del peso
¿Dónde comienza esta predisposición a ser discriminados? y posterior mantenimiento del mismo. Por desgracia, el trata-
Stunkard y Wadden dirigieron un estudio realizado en niños miento no quirúrgico no ha podido conseguir un control sos-
sobre la actitud hacia la obesidad. Observaron que niños de no tenido del peso en los pacientes con obesidad mórbida.7
más de 6 años de edad, cuando se les presenta el dibujo de la
silueta de un niño obeso, afirman que corresponde a alguien
perezoso, sucio, estúpido, feo, tramposo y mentiroso.1 Un Z OBJETIVOS DE LOS GRUPOS DE APOYO
estudio, aún más alarmante, sobre la actitud del personal de
enfermería hacia las personas obesas, indicó que en ese ámbi- Existen numerosas razones para la constitución de grupos de
to se consideraba que los obesos tenían más posibilidades de apoyo en los programas bariátricos. Una de ellas es emplearlos
ser conflictivos, perezosos e intransigentes.2 para instruir a los posibles candidatos a la cirugía sobre el posto-
A diferentes grupos de personas les fueron mostrados peratorio y sobre su futuro estilo de vida. Los pacientes que asis-
dibujos de perfiles en blanco y negro de un niño de peso nor- ten a las reuniones de estos grupos antes de las operaciones cuen-
mal, uno obeso y otro con rasgos tales como falta de las manos tan con una gran ventaja frente a los que no lo hacen, ya que
y rostro desfigurado. Tanto los adultos como los niños indica- experimentan menos estrés al ser informados en un ambiente
ron que el perfil del obeso era el menos agradable. Por desgra- más distendido de todos los problemas que van a afrontar.
cia, estos prejuicios se extienden cada vez más en todos los Observar, interactuar y escuchar a los pacientes que ya han sido
ámbitos raciales, urbanos o rurales y, lo que es más triste, entre sometidos a la cirugía disminuye la ansiedad preoperatoria.
el propio colectivo de los obesos.3 Los datos sugieren que estos La incorporación de los pacientes a los grupos de apoyo
prejuicios y actitudes discriminatorias pueden ser activados, y es una de las numerosas maneras de incrementar la informa-
por tanto transmitidos, sin intención o inconscientemente.4 ción de cara a la solicitud del consentimiento informado,
Uno de los muchos errores comúnmente aceptados además de las vías más tradicionales de aportación de datos
sobre los pacientes que sufren obesidad mórbida es que pre- en la consulta Por este motivo algunos programas la consi-
sentan una prevalencia excesiva de enfermedades psicológi- deran, de hecho, obligatoria. Por otra parte, muchos pacien-
cas. Por el contrario, estudios en pacientes con sobrepeso tes con obesidad mórbida comienzan el programa con una
grave, realizados antes de someterse a cirugía bariátrica, sensación de aislamiento debida a la discriminación social,
demostraron que no existe un único tipo de personalidad así como con cierto sentimiento de culpa por no haber con-
que caracterice a estas personas. Esta población no presenta seguido seguir una dieta. Muchas personas obesas presentan
418
Capítulo 50 • Grupos de apoyo al paciente sometido a cirugía bariátrica 419

carencias de autoestima y tienen pocos amigos. No es infre- po de apoyo eficaz puede generar un sentimiento de perte-
cuente que algunos pacientes dejen sus problemas en segun- nencia y aceptación en estos pacientes, por primera vez en su
do término, y presten apoyo a otras personas para ganarse su vida, así como la percepción de que no están solos. En su
aceptación, descuidando así sus propias necesidades. contexto se atenúan las sensaciones de fracaso y vergüenza y
Un grupo de apoyo que tenga éxito debe proporcionar un se fomentan la autoestima y la seguridad en uno mismo.
entorno de autoidentificación y entendimiento mutuo. Una Otro propósito de un grupo de apoyo es el de ayudar
de las mayores contribuciones de estos grupos es la demostra- durante el período postoperatorio a largo plazo, cuando el
ción de empatía hacia estos pacientes en la sociedad actual, paciente recupera algo de peso. Como se ha mencionado, no hay
con la paralela generación de un sentimiento de pertenencia, cura para la enfermedad crónica de la obesidad mórbida. Algunas
que reduce el estrés crónico y mejora la imagen personal. veces los pacientes se sienten capaces de cualquier cosa y, des-
El entorno del grupo de apoyo puede facilitar el aprendi- pués de haber experimentado una pérdida de peso tan especta-
zaje si los pacientes se sienten comprendidos y se identifican cular al año, a los dos años o incluso a los tres años de la inter-
con él. La formación es un objetivo de primer orden en un vención, a veces asume la errónea idea de que ya no tienen que
grupo de apoyo. Muchos profesionales del campo bariátrico preocuparse por el mantenimiento de su peso. Cuando los
consideran la cirugía como una herramienta, y enseñan a los pacientes se reincorporan al programa lamentándose por un
pacientes a utilizarla para optimizar sus resultados. Las opor- nuevo aumento de peso, las recomendaciones postoperatorias
tunidades educativas que se ofrecen en los grupos de apoyo sobre nutrición, suplementos vitamínicos y funciones del ejerci-
proporcionan a los pacientes el conocimiento necesario para cio y la formación adquieren una importancia fundamental.
tomar sus propias decisiones en relación a la posible interven- Todos estos comportamientos vitales deben reafirmarse dentro
ción, y permiten la aceptación de los subsiguientes cambios en del propio grupo de apoyo. El paciente debe aceptar el hecho de
su estilo de vida. Estar vinculado a un grupo de personas que que el esfuerzo por mantener su peso se ha de mantener duran-
padece nuestra misma enfermedad crónica crea un entorno de te el resto de su vida. Los pacientes no deben sentirse culpables;
conocimiento y aumenta la sensación de capacidad y la res- antes al contrario deben ser felicitados por haber asumido la
ponsabilidad personal, ciertamente necesarias para el éxito a responsabilidad de buscar el apoyo necesario.
largo plazo del tratamiento quirúrgico.
Las necesidades educacionales cambian de forma notable
desde el período postoperatorio agudo (los 12 primeros meses) Z ORGANIZACIÓN DE LAS REUNIONES
hasta el período postoperatorio crónico (a partir del año desde DE LOS GRUPOS DE APOYO
la operación). Durante la fase aguda, las necesidades con fre-
cuencia se relacionan con la dieta y las intolerancias alimenti- Una interrelación continuada entre el paciente y el programa
cias, destacando la importancia de la ingesta de proteínas y los bariátrico resulta esencial. Este tipo de programas deben ofre-
suplementos vitamínicos. Otras necesidades relacionadas con cer apoyo mediante reuniones de grupo al menos una vez al
cuestiones formativas incluyen el entrenamiento para mejorar mes. A un paciente postoperatorio necesitado de ese apoyo pue-
la movilidad, las funciones del ejercicio para evitar la pérdida de parecerle que pasa mucho tiempo entre una reunión y otra.
de masa muscular, los problemas referidos a la imagen corpo- Uno de los primeros pasos a la hora de organizar una reunión
ral, la pérdida del cabello, y las eventuales críticas que el es asignar un calendario regular, para evitar que los pacientes
paciente pueda recibir por someterse a la cirugía. Con frecuen- se confundan y no asistan a las reuniones. Es posible, por ejem-
cia, habiendo fallado otros intentos de perder peso, los pacien- plo, determinar una pauta que establezca reuniones el segundo
tes expresan su miedo de que la cirugía tampoco sea eficaz. martes de cada mes de 7 a 9 de la tarde. Un calendario prede-
Aproximadamente un año después de la intervención, la terminado ayuda a fomentar la asistencia y contribuye al cum-
educación y el apoyo deben cambiar sus planteamientos. En plimiento de los pacientes y, por tanto, al éxito del grupo.
esta fase surgen otras preocupaciones, incluyendo los cam- Sugerimos que el programa haga público el calendario de
bios en la imagen corporal y los desafíos inherentes a ellos, reuniones con intervalos mínimos de 6 meses, y que en la infor-
la modificación de las relaciones familiares y con las amista- mación aportada se incluya la hora de la reunión, la fecha, lugar,
des, las reacciones del sexo opuesto y de los compañeros de el tema que se abordará, las personas a las que va dirigida, así
trabajo, o las preocupaciones por el exceso de piel. Las rela- como otras normas especiales contempladas en el programa.
ciones de pareja pueden verse afectadas en esta etapa por un Por ejemplo, las normas deben prohibir la asistencia de niños,
gran nivel de estrés, ya que las parejas de los pacientes se pueden permitir o no la asistencia de acompañantes de los
sienten en cierta medida atemorizadas por la pérdida de peso pacientes, o bien especificar si la reunión va dirigida a pacientes
de su cónyuge. A medida que la autoestima de los pacientes recién operados o en la fase de mantenimiento. Es conveniente
aumenta, el paciente tiende a no tolerar las situaciones de que los calendarios estén a la vista en las clínicas y que se pueda
abuso o superioridad, por lo que surgen conflictos de pareja. acceder a ellos a través de una página web (tabla 50-1).
A menudo, por primera vez en la pareja, los pacientes opera- Para crear un entorno seguro en el cual los pacientes pue-
dos se sienten en una posición no subordinada y expresan sus dan sentirse libres de compartir sus sentimientos y experiencias,
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

propias opiniones sin miedo a las consecuencias. se debe asegurar la confidencialidad de las reuniones. No es
A causa de las marcadas diferencias en las necesidades infrecuente que en las reuniones los pacientes expresen senti-
de los pacientes durante los períodos agudo y crónico, han de mientos muy privados y emocionalmente delicados. En ocasio-
considerarse dos grupos de apoyo separados. nes los pacientes discuten, por ejemplo sobre sus preocupaciones
Otra meta que debe perseguir un grupo de apoyo es referidas a las relaciones sexuales, o bien se emocionan o expre-
facilitar el desarrollo de un entorno social. Como se ha san sus vulnerabilidades. Un grupo de apoyo eficaz debe crear
comentado anteriormente, muchos pacientes se han aislado un ambiente de seguridad y confianza que facilite el intercambio
de la sociedad y tienen pocos amigos, y pocas veces aparentan y la discusión. Un código ético adecuado que incluya todo lo
su verdadera edad. Existe un estudio que documenta la dis- referido a confidencialidad, debe ser discutido y consolidado. La
criminación en lo que respecta al trabajo y a la aceptación en planificación de las reuniones con suficiente antelación permite
las principales universidades de las personas obesas.7 Un gru- determinar un lugar estable donde mantenerlas y disminuye el
420 Sección IX • EDUCACIÓN, PRÁCTICA Y DOCUMENTACIÓN

Una agenda rutinaria de los temas a tratar ayuda a man-


Tabla 50-1 PROGRAMA GENERAL DEL GRUPO tener al grupo interesado. Por ejemplo debe incluir presen-
DE APOYO taciones, anuncios, personas invitadas a hablar, preguntas y
Julio-diciembre de 2005 respuestas, y pautas de socialización.
En (designar el lugar)
CUÁNDO: el segundo martes de cada mes desde las 7 hasta las 8:30
de la tarde (p. ej.) Z ¿QUIÉN CONVOCA Y COORDINA
DÓNDE: localización, incluyendo la dirección LAS REUNIONES?
QUIÉN: para pacientes bariátricos pre- y postoperatorios del
programa del Dr. (nombre del cirujano). Ya que es una reunión de
adultos, pedimos que no asistan niños. La persona encargada de la gestión de estas reuniones desem-
peña un papel esencial para garantizar el adecuado funciona-
Compromiso de confidencialidad: miento del grupo de apoyo. Es fundamental la cuidadosa selec-
Los asistentes a esta reunión se comprometen a participar en ción de la figura del coordinador. Este ha de ser un profesional
discusiones manteniendo el respeto y la confidencialidad y experimentado que represente al cirujano y al programa con un
a no divulgar esta información fuera del grupo.
planteamiento unificado; en otras palabras, ha de ser uno de los
Orden del día:
pilares del programa. El líder del colectivo de apoyo debe tener
Presentaciones experiencia en la gestión de grupos y ser capaz de establecer un
Discusión (tema, acontecimientos) formato coherente para las reuniones; es necesario que marque
Foro abierto el tono al que deberán ajustarse las reuniones, reforzando siem-
pre los mensajes de consuelo y empatía.
Temas: Las funciones de esta figura pueden ser asumidas por
MES FECHA TEMA distintos tipos de profesionales dentro del equipo multidis-
Julio 12.07.2005 Mantener las pautas de seguimiento ciplinario del programa. El psicólogo, la enfermera, el die-
aunque se esté de viaje tista o el cirujano pueden desempeñar este papel con el mis-
Agosto 09.08.2005 El ejercicio como fuente de vida mo nivel de eficacia. Sin embargo, el individuo designado
Septiembre 13.09.2005 Compartir el menú debe poseer algunas características básicas para conside-
Octubre 11.10.2005 Testimonios de pacientes rarse adecuadamente cualificado; cabe citar entre ellas las
Noviembre 08.11.2005 Sobrevivir a las vacaciones siguientes:
Diciembre 13.12.2005 Planteamiento de objetivos
• Demostrar un conocimiento básico de los procedi-
mientos bariátricos incluidos en el programa.
riesgo de verse obligados a cambiar de localización, lo que puede • Comprender que, en este contexto, es el representan-
dar lugar a confusión en los asistentes. te principal del conjunto del programa.
A la hora de elegir un local se han de tener en cuenta • Ser capaz de diferenciar los síntomas postoperatorios
algunas consideraciones. En primer lugar, debe estar dispo- normales de los anormales y contar con la necesaria
nible en las fechas deseadas. En segundo lugar, tiene que ser capacidad para, si es necesario, poder derivar al
confortable y espacioso. Las sillas no deben tener reposabra- paciente al especialista del equipo más cualificado
zos y han de estar preparadas para soportar el peso de los para solucionar cada problema específico.
pacientes. Asimismo, en el aparcamiento tiene que haber • Ser conocedor del comportamiento del grupo y estar
plazas para discapacitados, con el fin de que los pacientes no en condiciones de liderarlo, aprendiendo a su vez de
tengan que caminar largas distancias hasta el lugar de las visiones personales de los participantes.
reunión. Es necesario asimismo que, a una distancia razona- • Mantenerse dentro del ámbito de su propia experien-
ble, haya aseos adaptados para minusválidos, con el fin de cia y de su capacitación profesional.
facilitar el acceso de los pacientes que dependan de andado- • Mostrarse siempre respetuoso con los valores de cada
res, sillas de ruedas o dispositivos móviles motorizados. Es miembro del grupo.
también aconsejable disponer de un equipo audiovisual para • Promover las actividades, interacciones y comentarios.
uso de los profesionales invitados a las reuniones. • Permanecer siempre relajado ante las expresiones de
Los locales de las reuniones utilizados varían. Las salas emoción, conflicto o tensión.
de conferencias de los hospitales resultan las más adecuadas, • Poseer un notable grado de conocimiento e implica-
ya que con frecuencia cumplen los requisitos arriba mencio- ción en el proceso de autoayuda.
nados y resultan familiares para el paciente. Si la sala de con- • Ser considerado con cada miembro del grupo, salvaguar-
ferencias del hospital no está disponible, pueden encontrarse dando el bienestar del mismo y fomentado la sensación
también locales adecuados en bibliotecas públicas, y centros de comunidad, cohesión y toma de decisiones mediante
religiosos o comunitarios, que suelen ser opciones gratuitas o consenso, siempre que se considere apropiado.
muy económicas. Otra posibilidad son las salas de reuniones • Ser puntual y fiable.
de los hoteles, aunque en este caso será necesario abonar una
tarifa mensual de alquiler. La disposición de las instalaciones Cabe distinguir seis objetivos básicos y esenciales que el
debe también satisfacer ciertos requisitos. Es conveniente, por líder de un grupo de apoyo debe promover para ayudar que
ejemplo, que las sillas se coloquen en círculo, para proporcio- los participantes alcancen los objetivos siguientes:
nar una sensación de intimidad y participación. Las puertas
deben permanecer cerradas a fin de favorecer la reserva y la 1. Expresión de las propias emociones: empatía, compren-
confidencialidad. Es asimismo aconsejable colocar en el exte- sión, aceptación, autoconfianza y sensación de valía per-
rior un cartel de «Reunión privada en curso». A pesar de que sonal.
los objetivos de las reuniones son formativos y de apoyo, algu- 2. Comunicación: capacidad para escuchar, análisis de apoyo
nos ofrecen bebidas y comida. emocional, diálogo abierto y honesto y autorrevelación.
Capítulo 50 • Grupos de apoyo al paciente sometido a cirugía bariátrica 421

3. Información: estrategias compartidas de afrontamiento a alimentación, a los suplementos nutricionales y al ejercicio


positivo, alternativas, opciones y datos científicos y físico resulta ineludible.
médicos actualizados. La tercera fase es la de realidad. Suele extenderse entre el
4. Conexión: transmisión de sentimientos de comunidad; sexto y el decimoctavo mes después de la intervención. Uno de
constitución de redes de apoyo y de sentimientos de los temores más frecuentes de los pacientes durante esta etapa
integración y hermandad; constitución de la percepción es que puedan volver a sentir hambre, aumente el consumo de
de que «ningún miembro del grupo está solo». alimentos y ganen peso de nuevo. Con frecuencia temen que
5. Aprovechamiento de oportunidades: desarrollo perso- el procedimiento empleado pueda fracasar en su caso. Es habi-
nal, con favorecimiento de las estrategias de afronta- tual que se obsesionen por cada alimento que ingieren y que se
miento, adaptación y superación. pesen varias veces al día. Con frecuencia, estos pacientes
6. Responsabilidad personal: refuerzo de la importancia desean que los tranquilicen y compartir sus experiencias con
de la autoafirmación. otros. Es importante asegurar que tales sensaciones son muy
comunes. Otras personas que hayan experimentado lo mismo
Por diferentes motivos, los pacientes bariátricos en fase pueden ayudarles con sus comentarios. Cualquier síntoma de
postoperatoria no son, ciertamente, un modelo de liderazgo comportamiento de falta de adaptación en esta fase es un
grupal. En primer lugar, y como aspecto más importante, los potencial motivo de investigación y tratamiento individualiza-
pacientes necesitan ser precisamente eso, pacientes. En otras do. Llegados a este punto, algunos pacientes necesitan una
palabras, es necesario que dispongan de oportunidades de entrevista con un integrante del personal de enfermería, el die-
recuperación y de mantenimiento a largo plazo de la mejora tista o el psicólogo, si el individuo está muy estresado.
de su estado. Por otra parte, un trabajo profesional en el ámbi- La cuarta y última es la llamada fase de mantenimiento y
to del tratamiento de la obesidad se constituye en el mejor tiene lugar a partir del duodécimo mes después de la operación.
modo de orientar a los pacientes cuando se manifiestan inquie- Llegado este momento, la asistencia a las reuniones puede
tudes de índole médica, reales o percibidas, que, ineludible- hacerse más irregular, por lo que es fundamental insistir a los
mente, han de presentarse. Para que un paciente en período pacientes en la importancia de que continúen acudiendo a ellas.
postoperatorio asuma un papel activo como proveedor de ayu- Las ventajas derivadas de las mismas son un refuerzo continua-
da a otros pacientes en un grupo de apoyo, su caso ha de ser do de la idea de la cirugía como herramienta, no como cura-
plenamente satisfactorio y él ha de ser un modelo a seguir, que ción, y de que se deben mantener las pautas del nuevo estilo de
se halle al menos en el segundo año del postoperatorio. vida para controlar el peso. Es frecuente que los pacientes
deseen ser «normales» y quieran distanciarse para olvidar que
se sometieron a la operación bariátrica. Esta actitud es sin duda
Z LAS CUATRO FASES DE LOS PACIENTES peligrosa, porque puede llevar al incumplimiento de las reco-
mendaciones y, consecuentemente, a un nuevo aumento de
Podemos distinguir cuatro fases comunes a todos los pacien- peso y al desarrollo de carencias vitamínicas. Por ello es nece-
tes bariátricos. El coordinador del grupo de apoyo debe sario que el equipo multidisciplinar fomente la asistencia con-
conocer estas fases para comprender mejor las dinámicas del tinuada a largo plazo a los grupos de apoyo. Es en esta fase
grupo. Estas cuatro fases se manifiestan en varias etapas, cuando el paciente se da cuenta de que es vulnerable y que la
desde el período preoperatorio hasta un año o más después cirugía no es la píldora mágica que parecía ser al principio.
de la operación. Ofrecer una aproximación multidisciplinaria a los grupos
La primera fase es la de la esperanza. Es la que experi- de apoyo ayuda a los pacientes a mantener un estilo de vida
mentan los pacientes que han elegido la opción quirúrgica y saludable desde el punto de vista emocional y médico. El
se están preparando para ella. Están muy esperanzados y, refuerzo que necesitan para asumir sus responsabilidades per-
con frecuencia, desean formular multitud de preguntas a los sonales es siempre beneficioso. Por otro lado, la derivación de
integrantes del grupo. Suele ser la primera vez en sus vidas los pacientes al especialista apropiado dentro del programa,
que están rodeados por un grupo de personas que entienden según los problemas que surjan, es una herramienta de control
sus dificultades, su sentimiento de culpa, el rechazo al que se de gran utilidad. Este período puede ser muy complejo, puesto
ven sometidos y su falta de expectativas. Los veteranos del que se registra cuando los pacientes han experimentado una
grupo compartirán ávidamente sus experiencias con él, le gran transformación médica, física y emocional. La resolución
aconsejarán y le animarán. Sin embargo, es importante que de las patologías comórbidas se comparte y se celebra. Las rela-
el coordinador no permita que un determinado paciente ciones y los logros en la imagen corporal también suelen pre-
particular monopolice la reunión, y que haga que todos sentarse al grupo. Por ejemplo, si un paciente comparte con los
los participantes puedan expresarse. En ocasiones el pacien- demás el hecho de que ha descuidado algunas de las partes de
te carece de determinado tipo de información, por lo que se su programa de ejercicios, el grupo es útil al paciente de dife-
le pueden recomendar lecturas o libros de consulta para rentes formas. Así, sus miembros pueden ofrecer ideas al
conocer los aspectos básicos de este tipo de cirugía. paciente sobre cómo recuperar el adecuado cumplimiento del
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

La segunda fase es la que podríamos denominar de «luna programa, constituyéndose en instructores muy eficaces. El
de miel». Esta fase transcurre desde la operación hasta unos responsable de la gestión del grupo puede hacer hincapié en la
9 meses después. En ella, muchos experimentan por primera importancia de la actividad física y sugerir al paciente que se
vez la sensación de saciedad. Con frecuencia, y según el proce- entreviste con el coordinador del programa de ejercicios.
dimiento utilizado, algunos pacientes pueden padecer anore-
xia. La pérdida de peso es continua prácticamente sin esfuerzo.
En esta etapa son habituales comentarios como «es increíble» Z TEMAS A TRATAR POR PARTE DEL GRUPO
o «parece un milagro». Es importante hacer hincapié en el DE APOYO
hecho de que esta sensación se experimenta siempre precoz-
mente después de la cirugía. Además, este es el momento de En el seno del grupo se tratan multitud de temas que, de
destacar que el cumplimiento de las recomendaciones referidas manera agradable, pueden proporcionar una aproximación
422 Sección IX • EDUCACIÓN, PRÁCTICA Y DOCUMENTACIÓN

multidisciplinaria al mismo. La planificación anticipada de Testimonios de pacientes


los temas permite a los pacientes conocer a priori los temas
a tratar. Sobre todo en las etapas postoperatorias, los inte- Este tema es siempre uno de los favoritos. En este tipo de
grantes del grupo suelen asistir solamente a las sesiones que reuniones se pide con antelación a pacientes seleccionados
les resultan más útiles. Otro de los beneficios de la planifi- que preparen una presentación de entre 5 y 8 minutos para
cación previa es la confirmación de la asistencia de algunos contar cómo era su vida antes de la operación, por qué deci-
invitados para exponer sus casos u opiniones. dieron operarse, cómo fueron sus experiencias quirúrgicas y
Los temas y contenidos sugeridos ofrecen ideas para cómo es su vida ahora. Es preferible que participen pacientes
instruir a los pacientes sobre aspectos psicológicos, médicos encuadrados en distintas etapas del postoperatorio. Al final
y emocionales, gracias a la participación de distintos miem- de las presentaciones se pide a los participantes que pregun-
bros del equipo y otros invitados. A todos ellos se les solicita ten y compartan comentarios. Ello estimula la interacción
que intenten exponer cuestiones interesantes y que fomen- en el grupo y lo motiva. Objetivo: motivar a los pacientes,
ten la interacción en el grupo. permitiéndoles que conozcan testimonios de pacientes tra-
tados con éxito y recordarles que son muchos los que tienen
Realización de ejercicios durante los viajes experiencias similares que compartir. Personas responsa-
bles: pacientes del grupo.
Las reuniones centradas en este tema resaltan la importan-
cia de realizar ejercicios durante los viajes, por ejemplo en Panel de expertos
las habitaciones de los hoteles utilizando, entre otros
medios, bandas de resistencia. El coordinador de los ejer- Esta reunión requiere la participación de todo el equipo
cicios puede instruir a los pacientes sobre cómo realizarlos multidisciplinario del programa incluyendo cirujanos, per-
y planificar con ellos actividades como marcha, piragüismo sonal de enfermería, dietistas, fisioterapeutas y psicólogos.
o esquí. Objetivo: recomendar el mantenimiento de la A veces también pueden acudir cirujanos plásticos, internis-
práctica de ejercicio. Persona responsable: coordinador de tas o un especialista en obesidad. Todos ellos se someten a
ejercicios. las preguntas de los pacientes. Objetivo: hacer que el equipo
completo responda a las dudas que tengan los pacientes.
Entrenamiento para el mantenimiento del peso Personas responsables: equipo multidisciplinario del pro-
grama.
Esta reunión servirá para formar a los participantes en lo
que se refiere a la importancia del entrenamiento de resis- Preparación de alimentos magros ricos en proteínas
tencia en el postoperatorio inmediato, a efectos de minimi-
zar la atrofia muscular, y en lo que respecta a la utilidad de En esta reunión el dietista expone ideas sobre la preparación
los ejercicios de musculación, con el fin de aumentar la tasa de alimentos bajos en grasa y altos en proteínas. Propone
metabólica a largo plazo. Esta reunión puede realizarse en la recetas innovadoras, bajas en grasas y de alto contenido pro-
sala de gimnasia del hospital para mostrar a los pacientes los teico que no sean demasiado difíciles de preparar. Lo ideal
ejercicios más adecuados. Objetivo: fomentar los ejercicios sería en este caso disponer de una cocina para efectuar la
de musculación y aumentar la tasa de metabolismo basal. demostración. Además de la presentación oral se puede ofre-
Persona responsable: coordinador de ejercicios. cer degustación de los platos. La parte de preguntas y res-
puestas suele ser muy interactiva en este tema. Objetivo:
Cenar fuera de casa fomentar que los pacientes busquen alternativas de prepara-
ción de alimentos saludables que sustituyan a los platos poco
Este tema interactivo puede presentarse de varias formas. sanos que tomaban antes. Persona responsable: dietista del
En la planificación de esta reunión se suele recomendar a los programa.
pacientes que acudan a ella con menús de sus restaurantes
favoritos. El dietista debe participar en una sesión de pre- Cirugía reconstructiva después de la pérdida de peso
guntas y respuestas en la que los pacientes le consulten sobre
los platos de los menús más adecuados en lo que respecta a Lo más probable es que el cirujano plástico interviniente
contenido de proteínas y los que contienen grasas o azúcares mantenga cierto grado de vinculación con el programa. Es
ocultos. Objetivo: educar a los pacientes sobre la alimenta- importante seleccionar a uno que tenga experiencia en tra-
ción más correcta, tanto dentro como fuera de casa. Persona bajar con pacientes que hayan perdido una cantidad de peso
responsable: dietista del programa. significativa. Las fotos pre y postoperatorias son un buen
medio para que los pacientes comprueben los resultados de
Prevención de la osteoporosis la cirugía reconstructiva. La sesión puede incluir preguntas
remitidas con antelación. Objetivo: educar a los pacientes
Este tema resulta especialmente importante, ya que algunos sobre las soluciones para el exceso de piel que se presenta
de los procedimientos bariátricos causan malabsorción de después de la pérdida de peso. Persona responsable: cirujano
calcio. Invitar a un ginecólogo para que participe en la plástico.
reunión suele ser de gran utilidad. El especialista en gineco-
logía cuenta con los conocimientos necesarios para aclarar Cambios en las relaciones
todas las dudas en este ámbito y, por otra parte, puede adqui-
rir otros, específicamente relacionados con la cirugía bariá- Es frecuente que la dinámica de las relaciones de los pacien-
trica, a partir de la experiencia de estas reuniones. Objetivo: tes cambie después de la reducción de peso. Ello puede
destacar la importancia de los suplementos vitamínicos des- resultar doloroso y amenazador para los pacientes que
pués de la cirugía. Persona responsable: ginecólogo o enfer- como consecuencia de ello sufren estrés. Tratar este tema
mera del programa. con un profesional cualificado resulta muy beneficioso. El
Capítulo 50 • Grupos de apoyo al paciente sometido a cirugía bariátrica 423

psicólogo comparte sus conocimientos sobre el tema y la dinador puede proporcionar a los distintos profesionales un
dinámica subyacente, lo que promueve el intercambio de esquema de los temas a tratar. Todas las presentaciones
experiencias en el grupo. Objetivo: proporcionar educa- deben ceñirse a las recomendaciones del programa. La res-
ción a los pacientes, así como herramientas y apoyo para ponsabilidad última de ello es el cirujano.
superar estos problemas. Persona responsable: psicólogo
del programa.
Z DOCUMENTACIÓN Y EVALUACIÓN
Imagen corporal
Es importante organizar y archivar la información propor-
Es frecuente notar que las mentes de los pacientes no se han cionada por los grupos de apoyo, que ha de incluir un
hecho a la idea de su nueva imagen corporal después de la registro de asistencia (tabla 50-2). El registro de la asisten-
pérdida de peso. En otras palabras, ellos aún se ven a sí mis- cia resulta útil para verificar ciertos aspectos del consenti-
mos con 25, 35 o 45 kilos de sobrepeso. Suelen contar, por miento informado. Otra ventaja de dicho registro es que
ejemplo, que, al principio, cuando van a comprar ropa, la ayuda a confeccionar un listado de e-mails o de direcciones
eligen inconscientemente varias tallas por encima de la que para ponerse en contacto con todos los miembros del gru-
necesitan. El programa psicológico ha de tener en cuenta po. También es útil para recoger datos sobre las fechas, los
este aspecto y educar a los pacientes para que se adapten a él. temas, las personas que intervinieron y los folletos entre-
Se puede realizar una presentación seguida de un turno de gados en cada reunión. La documentación y los registros
preguntas sobre el tema. A veces los pacientes reconocen que son requisitos del Surgical Review Corporation para poder
necesitarían consultar con el psicólogo para trata detenida- conseguir la acreditación como «centro de excelencia».
mente la cuestión. Objetivo: ayudar a los pacientes a recono- Los informes al respecto deben clasificarse por años para
cer la modificación de su imagen corporal y a adaptarse a la su archivo.
mejora de la misma y a su autopercepción. Persona respon- Debido a que las reuniones de los grupos de apoyo se
sable: psicólogo del programa. hacen por los beneficios que ofrecen a los pacientes, es
importante realizar evaluaciones anuales de estas reuniones.
Cuidado personal Se puede llevar a cabo una encuesta anual para evaluar el
nivel de satisfacción de los participantes, que servirá para
Como se ha comentado anteriormente en este capítulo, es mejorar futuras reuniones. En ella se debe preguntar a los
frecuente que los pacientes hayan sufrido discriminación y integrantes de los distintos grupos por la comodidad de la
se hayan culpado a sí mismos de su enfermedad. Muchos sala, la duración y formato de las reuniones, y las sugerencias
pacientes intentan ser aceptados haciendo cosas por los sobre nuevos temas. Los pacientes atesoran una valiosa
demás, a veces en exceso. Entonces olvidan o niegan sus experiencia y se puede aprender mucho de ellos. Las evalua-
propias necesidades. El objetivo de esta reunión es hablar ciones resultan de gran utilidad para el coordinador de gru-
sobre la atención a uno mismo y sobre la autoestima y pro- po y permiten a los pacientes participar en el diseño de las
porcionar medios para favorecerlos. En esta reunión puede siguientes reuniones.
haber distintos invitados. Los psicólogos analizan los bene-
ficios de la atención y el cuidado de uno mismo. Otros pue-
den hablar de terapias de masaje, tratamientos faciales, con- Z RESUMEN
sejos de maquillaje, etc. Un profesor de yoga puede enseñar
a los pacientes los beneficios de esta disciplina. En ocasiones A modo de resumen, puede afirmarse que, los pacientes
también intervienen en este tipo de reuniones un coordina- bariátricos experimentan transformaciones radicales, tan-
dor de ejercicios, un fisioterapeuta y profesionales de la cos-
mética o la moda. El hecho de que estas personas estén
familiarizadas con la problemática de los obesos ayuda a
romper las barreras creadas por el temor y la percepción Tabla 50-2 REGISTROS DEL GRUPO DE APOYO
alterada de la propia imagen. Por ejemplo, es más probable
(Nombre del cirujano del programa)
que los pacientes acepten recibir masajes de un fisioterapeu- Registro general de la reunión
ta que les dedique el tiempo necesario y que asista a las Grupo de apoyo:
reuniones del grupo de apoyo. La barrera común de todos
F General
los pacientes es la vergüenza que sienten por la pérdida de
F Postoperatorio de un año o más
peso y por el exceso de piel. La presencia del terapeuta masa-
F Localización alternativa 1
jista en las reuniones ayuda a superar esa barrera. Objetivo:
F Localización alternativa 2
educar a los pacientes en diversos aspectos de su atención y
F Localización alternativa 3
su cuidado personal y facilitarles ejemplos para que puedan
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

F Localización alternativa 4
incorporarlos a su vida diaria. Personas responsables: espe-
cialistas en distintas disciplinas.
Fecha: ———————————————
Estas son sólo algunas de las posibles cuestiones tratadas
Coordinador del grupo: ———————————————
en los grupos de apoyo. Es importante señalar que algunas
Tema: ———————————————
presentaciones pueden ir acompañadas de folletos explicati- Visión general de la reunión: ———————————————
vos. Es conveniente recomendar a los participantes que acu- ————————————————————————————
dan a la reunión con material para tomar notas y guardar la ————————————————————————————
documentación, de modo que puedan consultarla más tarde. ————————————————————————————
Los colaboradores invitados a las reuniones deben pre-
Asistencia, firme el registro completo: F Sí
parar con antelación con el coordinador del grupo los con-
Folletos complementarios: F Sí
tenidos de las presentaciones y los folletos. El propio coor-
424 Sección IX • EDUCACIÓN, PRÁCTICA Y DOCUMENTACIÓN

to físicas como emocionales. A menudo los grupos de apo- 2. Maroney D, Golub S: Nurses’ attitudes toward obese persons and
yo del programa son el único medio que los pacientes tie- certain ethnic groups. Percept Mot Skills 1992;75:387-391.
3. Bessenoff GR, Sherman JW: Automatic and controlled components of
nen de interactuar y de hablar de la enfermedad y de los prejudice toward fat people: evaluation versus stereotype activation.
desafíos que han tenido que soportar antes de la operación Soc Cogn 2002;18:329-353.
o de las singulares experiencias que afrontan después de la 4. Stunkard AJ, Wadden TA: Psychological aspects of human obesity.
misma. En consecuencia, los grupos de apoyo deben cons- Am J Clin Nutr 1992;55:5245-5325.
5. National Institutes of Health, Consensus Development Conference
tituir una prioridad en todos los programas bariátricos; la Panel: Gastrointestinal surgery for severe obesity. Ann Intern Med
cirugía no debería llevarse a cabo, de hecho, sin que este 1991;115:956-961.
apoyo se concrete antes de que los pacientes se sometan a 6. Stunkard AJ, Froch TT, Hrubic Z: A twin study on human obesity
la intervención. JAMA 1986;256:51-54.
7. Canning H, Mayer J: Obesity: its possible effects on college accept-
ance. N Eng J Med 1966,275:1172-1174.
Z BIBLIOGRAFÍA
1. Stunkard AJ, Wadden TA: Psychological aspects of human obesity.
Human Obes 1992;352-358.
51
Equipo multidisciplinar
en un programa de cirugía bariátrica
Michael L. Kendrick, M.D., Matthew M. Clark, Ph.D., Maria L. Collazo-Clavell, M.D.,
Jane L. Mai, R.N., Jeanne E. Grant, R.D., Michelle A. Neseth
y Michael G. Sarr, M.D.

La intervención quirúrgica es el tratamiento más efectivo y vida mediante seguimiento conductual y nutricional continuo.
duradero de la obesidad mórbida médicamente complicada. La Sin embargo, a pesar del aparente consenso, es sorprendente
cirugía bariátrica representa una disciplina única por una serie descubrir que en la actualidad sólo se dispone de una cantidad
de razones. En primer lugar, la intención de los procedimientos limitada de datos que realmente comparan los resultados del
bariátricos es modificar tanto la conducta como la fisiología, en enfoque multidisciplinar con los de otros planteamientos
contraposición a los típicos procedimientos de extirpación o menos globales². La mayoría de la bibliografía actual referida
reconstrucción quirúrgica. Como tal, un resultado satisfactorio a los resultados de la cirugía bariátrica se genera y se publica
depende en gran medida de la educación del paciente y del cum- en centros que, en cierto grado, utilizan el enfoque multidisci-
plimiento futuro de los cambios de conducta saludables. En plinar. En el presente capítulo presentamos la función del tra-
segundo lugar, la cirugía bariátrica incluye elementos que habi- tamiento médico multidisciplinar en la cirugía bariátrica en
tualmente no son considerados como propios de una interven- función de la práctica clínica desarrollada en nuestra institu-
ción quirúrgica; de hecho, el resultado óptimo de una ope- ción. Nuestro programa se ha desarrollado en los últimos
ración bariátrica depende de cambios continuados de la nutrición, 23 años, desde que en 1980 se iniciara la primera iniciativa con-
ejercicio, conducta y de la recepción de apoyo emocional y psi- junta sobre la materia en la Mayo Clinic. Como muchos
cológico. Por otra parte, es característico que los pacientes otros grupos de cirugía bariátrica, hemos aprendido de nues-
bariátricos presenten patologías comórbidas asociadas a la obe- tros errores y de los de otros, y nuestro grupo ha evolucionado
sidad, que afectan al riesgo quirúrgico y que también requieren a través de la experiencia y la implementación de nuevas ideas.
un seguimiento estricto, dado que muchas de ellas mejoran en
el postoperatorio, siendo necesario ajustar o suspender la medi-
cación (objetivo principal de la operación). Por estas razones los Z DESARROLLO DEL EQUIPO
pacientes bariátricos representan un grupo singular y complejo
que requiere una evaluación detallada, completa y multidisci- La historia del desarrollo del equipo multidisciplinar de la
plinar, incluyendo educación y un seguimiento postoperatorio Mayo Clinic es ciertamente interesante y refleja los cambios
de por vida para optimizar la probabilidad de consecución de habidos en los modelos de asistencia sanitaria. Yo (MGS) he
resultados seguros y efectivos. El enfoque de un equipo multi- estado implicado en esta evolución durante los últimos
disciplinar con suficiente experiencia en la gestión combinada 18 años y he supervisado las modificaciones que se han ido pro-
de los aspectos conductuales, nutricionales, psicológicos, médi- duciendo. Las impresiones, criterios e intereses de nuestra
cos y quirúrgicos parece ser, por tanto, imperativo. comunidad médica con respecto a la cirugía bariátrica han
La National Institutes of Health Consensus Conference de cambiado de forma sustancial en las dos últimas décadas y en
1991 dio a conocer una serie de normas establecidas para el especial en los últimos 5 años. Inicialmente, a los miembros
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tratamiento de pacientes con obesidad grave¹. Entre las reco- más jóvenes y menos experimentados de cada departamento
mendaciones referidas a los pacientes que están siendo consi- (endocrinología, psiquiatría, cirugía) se les asignó la tarea de
derados para una posible cirugía bariátrica, se contaba el crite- participar en el equipo de tratamiento bariátrico, incluso
rio consensuado de que un equipo multidisciplinar es parte aunque no tuvieran un interés real en la obesidad como tal.
integral del cuidado de los pacientes. La mayoría de las asegu- Por tanto, no es sorprendente que los resultados iniciales no
radoras también han adoptado este principio, relacionándolo fueran satisfactorios³. Sin embargo, con el tiempo, los miem-
con la asignación de la categoría de «centro de excelencia» para bros de este equipo multidisciplinar han desarrollado un cre-
la práctica de la cirugía bariátrica. Este enfoque integral y mul- ciente interés por el tratamiento de la obesidad, o bien han
tidisciplinar resulta ser intuitivo en el contexto de las operacio- sido incorporados a él precisamente en virtud de su dedica-
nes diseñadas para mejorar significativamente las patologías ción específica dentro de esta área. En función de criterios
comórbidas médicas y los diversos aspectos de la calidad de financieros, en los últimos 5 años la institución también ha
425
426 Sección IX • EDUCACIÓN, PRÁCTICA Y DOCUMENTACIÓN

aumentado notablemente su interés por el programa de ciru- Sin embargo, las consultas derivadas suelen proceder de un
gía bariátrica. Además, la sociedad en su conjunto se ha visto internista o de un médico de asistencia primaria que conoce el
obligada a aceptar este planteamiento multidisciplinar, ante peso del paciente y su historia dietética, así como las patologías
la creciente epidemia nacional de obesidad y ante la extensión directamente asociadas al peso del paciente. El médico que deri-
de sus implicaciones sociales, financieras y médicas. Por tan- va al paciente debe comprobar que previamente se han intenta-
to, el desarrollo de un enfoque de un equipo multidisciplinar do procedimientos de pérdida de peso no quirúrgicos con
global se ha llevado a la práctica a partir de la necesidad, del supervisión profesional. Es necesario que la derivación vaya pre-
auténtico interés y de la dedicación de la mayoría de los cedida de una completa exposición de la importancia del segui-
miembros de nuestro equipo quirúrgico bariátrico. miento postoperatorio y de la necesidad de cambios en la medi-
cación a medida que mejoran las patologías comórbidas, y que
incluya una estrategia de seguimiento para prevenir carencias
Z EL EQUIPO nutricionales en el futuro.

El objetivo del enfoque del equipo multidisciplinar se centra en Endocrinólogo u otro internista
que cada miembro utilice su propia experiencia y en coordinar
colectivamente sus esfuerzos, para una selección, una educa- En nuestra práctica, un endocrinólogo u otro internista (jun-
ción y un tratamiento óptimos del paciente. En la tabla 51-1 se tamente con un integrante del personal de enfermería o un
registran varios miembros del equipo y el cronograma de asociado médico) interesado en el tratamiento de la obesidad
implicación en la evaluación de los pacientes que están siendo evalúa inicialmente a los candidatos remitidos para cirugía
considerados para operaciones bariátricas. Cada fase del proce- bariátrica. Esta evaluación puede incluir una historia clínica
so es explicada por separado, resaltando las contribuciones de completa con exploración física o una evaluación más especí-
cada disciplina. Cabe destacar que nuestro planteamiento se fica de aspectos relacionados con el peso, dependiendo del ori-
basa en el enfoque académico, si bien el interés debe centrarse gen de la derivación. En la tabla 51-2 se enumeran los princi-
en primer lugar en el ámbito de la asistencia al paciente, y sólo en pales objetivos específicos para la obesidad de esta primera
un segundo término en el contexto meramente formativo. evaluación. La revisión de los intentos supervisados y no
Dado que nuestra institución es un centro sanitario de grandes supervisados de perder peso es imprescindible para valorar
dimensiones, de orden terciario (con un total de unos 16.000 em- tanto la motivación del paciente como el cumplimiento de los
pleados y unas 1500 camas), la experiencia puede considerarse cambios de la conducta en lo que respecta a la salud. La parti-
como bastante concentrada, con numerosas personas implica- cipación documentada en grupos de apoyo reconocidos, como
das en la asistencia de cada uno de los pacientes bariátricos. Los Weight Watchers, Jenny Craig, Comedores Compulsivos Anó-
responsables de la provisión de asistencia preoperatoria no for- nimos (Overeaters Anonymous) o el uso de modalidades tera-
man parte en ocasiones del personal hospitalario. En conse- péuticas supervisadas, como Nutri-System, o incluso progra-
cuencia, es posible que nuestra organización pueda no ser mas de proteínas líquidas bajas en calorías, son indicios de que
extrapolable a la de otros programas más pequeños, orientados se puede evaluar positivamente la candidatura del paciente a
a la comunidad. Sin embargo, con 16.000 empleados y con sus cirugía. Un paciente que no ha participado en programas
respectivas familias en una ciudad de unos 100.000 habitantes, supervisados, o que tiene antecedentes de escaso éxito a corto
puede considerarse que muchos de nuestros pacientes son natu- plazo o de abandono precoz, debería suscitar una actitud de
rales de nuestra propia comunidad, por lo que a diferencia de lo prevención en lo que respecta a posibles problemas de conduc-
que sucede en la mayoría de los grandes centros sanitarios, un ta y de cumplimiento del tratamiento, que más tarde puedan
porcentaje sustancial de la práctica bariátrica se centra en per- requerir una modificación conductual más intensa y mayores
sonas integradas en nuestra comunidad local. niveles de educación y seguimiento. Durante esta evaluación
inicial, los pacientes también son estudiados para excluir cau-
sas médicas de obesidad, tales como trastornos del metabolis-
Z EVALUACIÓN DEL EQUIPO PREOPERATORIO mo, teniendo en cuenta, en cualquier caso, que estas son causas
poco habituales de obesidad extrema. Una evaluación comple-
La valoración selectiva, la educación y la evaluación properato- ta, la identificación y el tratamiento de todas las patologías
rias, y la selección de los procedimientos óptimos, son esenciales comórbidas médicas son las funciones esenciales del internista.
para obtener resultados satisfactorios en las operaciones bariá- La diabetes del adulto, la hipertensión, la hiperlipidemia, la
tricas.4 Con la creciente masificación de la cirugía bariátrica son patología articular degenerativa, la enfermedad cardiopulmo-
muchos los cirujanos que se encuentran con pacientes «autode- nar y la apnea del sueño son comunes en los obesos graves.
rivados» que quieren ser evaluados para una posible interven- Todos los pacientes que, en virtud de su historia clínica, sean
ción bariátrica y que, a menudo, presentan expectativas irreales. sospechosos de padecer apnea obstructiva del sueño son some-

Tabla 51-1 MIEMBROS DEL EQUIPO MULTIDISCIPLINAR Y PERÍODOS DE IMPLICACIÓN

PREOPERATORIO INTRAHOSPITALARIO POSTOPERATORIO PRECOZ (6 PRIMEROS MESES) LARGO PLAZO

Cirujano X X X Si es necesario
Internista/endocrinólogo X X X
Auxiliar sanitario X X X
Psiquiatra/psicólogo X X X
Dietista X X X X
Coordinador bariátrico X X X ±
Capítulo 51 • Equipo multidisciplinar en un programa de cirugía bariátrica 427

Psiquiatra o psicólogo
Tabla 51-2 PRINCIPALES OBJETIVOS
DE LA EVALUACIÓN INICIAL Todos los pacientes que son considerados para operaciones
DE LOS CANDIDATOS POTENCIALES bariátricas en la Mayo Clinic deben someterse a evaluacio-
PARA LA CIRUGÍA BARIÁTRICA nes psicológicas, que valoran el funcionamiento psicosocial
Conseguir la historia del peso, incluyendo: global y dominios específicos importantes en el tratamiento de
Pesos máximo y mínimo la obesidad (tabla 51-3). En la actualidad, nuestro programa
Experiencia previa con pérdida de peso/recuperación depende en buena medida de la evaluación psiquiátrica o psico-
Cambios de peso en el tiempo lógica por parte de psicólogos y psiquiatras seleccionados.
Historia de dietas específicas y resultados (supervisados, Aunque nuestra experiencia puede resultar ciertamente singu-
no supervisados)
Identificar el uso de medicamentos farmacológicos de pérdida
lar, la evaluación psicológica que se realizaba inicialmente en
de peso nuestro programa consistía en una batería de pruebas psicoló-
Evaluar actividades diarias y ejercicio (tipos, frecuencia, duración) gicas o psiquiátricas estándar. Los pacientes eran analizados
para detectar trastornos psiquiátricos del eje I (depresión, con-
Identificar y evaluar todas las patologías comórbidas sumo de estupefacientes, ansiedad, trastorno bipolar, etc.). Los
Búsqueda de causas secundarias de obesidad si está clínicamente casos que presentaban trastornos activos eran tratados inicial-
indicado mente por un profesional de salud mental y revaluados a los
6 meses. Desafortunadamente, la falta de un enfoque específico
Obtener una historia social, conductual y psiquiátrica completa
en el tratamiento de la obesidad provocó que se ignorasen algu-
Determinar los objetivos y la motivación del paciente
nas áreas psicosociales importantes. De hecho, las evaluaciones
iniciales realizadas por nuestro departamento de psiquiatría no
fueron satisfactorias porque los intereses de los psiquiatras esta-
ban en otra parte. Por ejemplo, varios pacientes con trastornos
tidos a oximetría nocturna y, si está indicado, a un estudio del límite de la personalidad no fueron diagnosticados tras la eva-
sueño. La utilización en estos pacientes de un dispositivo de luación, lo que causó problemas considerables durante el perío-
presión positiva continua en la vía aérea (CPAP) en el período do postoperatorio. Cualquier procedimiento que se enfoque
perioperatorio reduce las complicaciones pulmonares periope- hacia un cambio del comportamiento conlleva la condición
ratorias y previene la desaturación de oxígeno durante los pri- implícita de que el paciente sea capaz de llevar a cabo estos
meros días del postoperatorio, durante los cuales el paciente es cambios de conducta saludables. Para los casos de déficit cog-
más susceptible de padecer arritmias cardíacas.5 Nosotros nitivo, de lenguaje o educativo, las pruebas neurocognitivas
requerimos la instauración del tratamiento con algún tipo de pueden resultar convenientes. Los pacientes incapaces de com-
CPAP y la demostración de su cumplimiento en el preopera- prender las expectativas o de cumplir con el aporte nutricional
torio de todos los pacientes con apnea del sueño durante al o los suplementos necesarios, no sólo son proclives a tener
menos dos meses en un intento de reajustar el tronco del en- malos resultados, sino que también presentan un mayor riesgo
céfalo no tratado y «desacondicionado». Otro tipo de evalua- de complicaciones médicas y nutricionales. La sospecha de un
ción cardiopulmonar específica puede realizarse en función de posible trastorno psicótico (muy poco frecuente), trastornos
la historia clínica (p. ej., las pruebas de función respiratoria no límites de la personalidad no identificados ni tratados, depre-
suelen formar parte de la evaluación, a menos que estén indi- sión no controlada o consumo de estupefacientes se considera
cadas por la historia clínica y la exploración). contraindicación absoluta para la cirugía bariátrica. Los ante-
cedentes de abusos sexuales son bastante habituales en mujeres
Dietista con obesidad mórbida, en especial en ausencia de historia fami-
liar de obesidad, y han de ser investigados preoperatoriamente.
Los principales objetivos del dietista en el contexto preopera-
torio son obtener una historia nutricional detallada, aportar la
necesaria información y establecer objetivos realistas. Los Tabla 51-3 EVALUACIÓN PSIQUIÁTRICA
patrones alimentarios (atracones de comida, comidas noctur- Y PSICOLÓGICA PREVIA
nas, ingesta excesiva de dulces) y el aporte de energía y macro- A LA CIRUGÍA BARIÁTRICA
nutrientes han de ser evaluados y documentados. Asimismo,
deben investigarse posibles trastornos alimentarios, como la Contraindicaciones psicológicas
Diagnósticos del eje I DSM-IV: depresión mayor, trastorno
bulimia, que se valoran también durante la evaluación psico- bipolar, trastorno esquizoafectivo, bulimia nerviosa, etc.: todos
lógica. El dietista educa a los pacientes en lo que respecta a las los pacientes deben haberse mantenido estables durante 12 meses
necesidades calóricas y el registro de datos e inicia un progra- Ausencia de hospitalización psiquiátrica en los últimos 12 meses
ma de terapia nutricional médica, si no se ha establecido uno Consumo de estupefacientes: abstinencia en los últimos 12 meses
todavía. Los pacientes han de ser igualmente instruidos en lo
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Otros factores psicológicos


que respecta a las implicaciones nutricionales específicas y las Asuntos relacionados con antecedentes de abusos sexuales o
expectativas relacionadas con las operaciones bariátricas. trauma: estable durante 6 meses
Hemos desarrollado un manual educativo de nutrición que Factores de estrés psicosocial: considerados controlados
Aspectos positivos del sobrepeso: relaciones o asuntos protectores
detalla las normas nutricionales a aplicar tras la cirugía bariá- respecto al peso
trica. Este manual debe ser entregado a los pacientes preope- Trastorno por atracones de comida y síndrome del comedor
ratoriamente, lo que permite, tanto a ellos como a sus fami- nocturno: estable durante 6 meses
liares, planificar los cambios postoperatorios necesarios en los Indicaciones psicológicas positivas
hábitos alimentarios y de estilo de vida. Todos los pacientes Participación en terapia conductual durante más de 3 meses
participan en un programa formativo de múltiples etapas e (sin ganancia de peso)
inician ejercicio bajo supervisión médica y dietas antes de la Estilo de vida físicamente activo
Apoyo social: familia, cónyuge o amigos
cirugía.
428 Sección IX • EDUCACIÓN, PRÁCTICA Y DOCUMENTACIÓN

La pérdida de peso puede ser problemática para personas que sitios de internet y chats. Hemos evitado intencionadamente
hayan sufrido un episodio traumático. El trastorno de atraco- apoyar o sugerir dichas actividades on-line (debido a nuestra
nes de comida se asocia con depresión y pobre imagen corporal, falta de capacidad para supervisar y validar la comunicación y
y puede alterar los resultados quirúrgicos. Estos pacientes la información on-line). Sin embargo, muchos futuros candi-
requieren un estudio psiquiátrico detallado basado en la per- datos y pacientes postoperatorios nos han indicado que han
cepción de la posible incapacidad para cumplir con las expecta- obtenido efectos muy positivos con estas actividades.
tivas conductuales, físicas y nutricionales existentes tras la ope-
ración bariátrica. Si se confirma, la presencia de un trastorno Cirujano
psiquiátrico verdadero no tratado impide, en la mayoría de los
trastornos, una evaluación más avanzada de la posibilidad de A pesar de la excelente y completa evaluación preoperatoria y
proceder a cirugía bariátrica. Otras alteraciones, tales como la formación del paciente por parte del equipo multidiscipli-
problemas de pareja, trastornos de adaptación, estrés, o pobre nar, el cirujano comparte la responsabilidad de asegurar una
imagen corporal pueden requerir intervención psiquiátrica o selección adecuada de los pacientes, y de garantizar la instruc-
psicológica como parte de la preparación a la cirugía. Aunque ción y la preparación preoperatorio más adecuadas. Como
ante los principales trastornos psiquiátricos se suele desaconse- queda documentado en la declaración de principios del
jar la cirugía bariátrica, el establecimiento de una relación pro- American College of Surgeons sobre la responsabilidad periope-
fesional con un especialista en salud mental y la documentación ratoria, el cirujano es siempre responsable de la preparación
del cumplimiento y del control permiten que muchos de estos preoperatoria del paciente.8 La reducción de riesgos durante la
pacientes, de forma selectiva, sean considerados como candida- operación y la optimización de oportunidades para la consecu-
tos a cirugía. De hecho, nuestra experiencia indica que la impli- ción de un resultado satisfactorio requieren una valoración
cación activa en tratamientos de salud mental puede potenciar global de la situación del paciente por parte del cirujano.
los resultados del tratamiento de la obesidad.6 En nuestra institución el cirujano es consultado inicialmen-
La evaluación psicológica se ha demostrado esencial en la te hacia la mitad de la evaluación y sólo una vez que el paciente
identificación de trastornos psiquiátricos y conductuales que ha sido estudiado e identificado como candidato potencial a ciru-
podrían beneficiarse de modificaciones de la conducta. Los gía bariátrica. Este sistema de comprobaciones y equilibrios
pacientes deben mantener una motivación apropiada, ser capa- «protege» al paciente del cirujano y viceversa. El objetivo prin-
ces de cumplir con las medidas postoperatorias, comprender los cipal del cirujano en la consulta inicial es comprobar que el can-
riesgos quirúrgicos y tener expectativas realistas. La evaluación didato es adecuado, hacerle saber las opciones quirúrgicas (y no
psicológica también sirve como forma de presentación del quirúrgicas), describir los riesgos y las complicaciones potencia-
especialista en salud mental. La multitud de cambios psicoso- les a corto y largo plazo, y verificar que el paciente tiene expecta-
ciales en la familia, en el lugar de trabajo y en las relaciones tivas realistas. La posibilidad de cirugía estética en un futuro
sociales y sexuales que se vincula con la pérdida de peso de los también ha de ser analizada en este momento.
pacientes hace probable la necesidad de la intervención del mis-
mo en el período postoperatorio temprano. Auxiliares sanitarios
Nuestro grupo de psicología de la salud también ha de-
sarrollado varios programas de terapia de grupo conductual. Cada uno de nuestros equipos quirúrgicos incluye a los deno-
Uno de ellos, de aplicación prequirúrgica, de 16 semanas de minados auxiliares sanitarios (AS), integrantes del personal de
duración, es una revisión de un programa basado en un manual enfermería que tienen experiencia e interés en el ámbito de la
(en parte de autoaprendizaje) titulado LEARN (estilo de vida cirugía bariátrica y que ayudan a mejorar la asistencia preopera-
[lifestyle], ejercicio, actitudes, relaciones, nutrición).7 En nuestro toria, perioperatoria y postoperatoria al aportar la experiencia
centro estimulamos a los pacientes locales para que participen necesaria en temas no vinculados con la operación. Este personal
en este programa de grupo supervisado en la Mayo Clinic o, si está normalmente más familiarizado con aspectos como el reco-
viven en otra ciudad, a que analicen el manual con psicólogos nocimiento de conflictos familiares, o la enseñanza al personal
conductuales en su zona. También hay un programa de de enfermería hospitalario de los cuidados específicos de los
14 semanas para el tratamiento del trastorno por atracones pacientes marcadamente obesos, y sirven como vínculo necesa-
de comida, destinados a aquellos pacientes que presentan rio entre los pacientes y los cirujanos e internistas.
más de dos episodios semanales. En el ámbito de los programas
postoperatorios, yo mismo (MGS) dirigía un grupo de apoyo Coordinador bariátrico
una tarde al mes; sin embargo, por diversas razones, los resul-
tados de ese grupo no resultaron eficaces ni productivos. Muy Igualmente importante es la persona que coordina la progra-
probablemente yo, como cirujano, no estaba adecuadamente pre- mación de las visitas del paciente a la clínica para tratar cuestio-
parado para moderar un grupo de apoyo verdaderamente fun- nes como consultas, pruebas de laboratorio, autorizaciones de
cional. A pesar de contar con múltiples ofertas y ruegos, la ayu- las aseguradoras, fechas de operaciones y otros. Hasta ahora
da por parte de los miembros del grupo en la organización y este duro trabajo había sido realizado en buena parte por la
coordinación de los ponentes y de los pacientes nuevos no dio secretaría médica. Sin embargo, a medida que nuestra práctica
los resultados previstos, y el grupo degeneró para constituirse bariátrica ha ido aumentando, hemos detectado dificultades
en una simple reunión social dominada por algunos pacientes. crecientes, no sólo en la preparación y programación de las eva-
En la actualidad, nuestros psicólogos dirigen un grupo luaciones preoperatorias, sino también en el proceso de garan-
de apoyo postoperatorio dos veces al mes. Los responsables tizar que los pacientes acuden a las visitas postoperatorias a
del grupo revisan la información del manual LEARN, resal- largo plazo. Numerosos pacientes no han sido sometidos
tan las estrategias para el cambio conductual a largo plazo, y a seguimiento en este aspecto y, en ocasiones, han desarrollado
favorecen la discusión de los cambios psicosociales experi- problemas postoperatorios o complicaciones que podían haber-
mentados tras la cirugía y la pérdida de peso. Muchos pacien- se evitado. Por tanto, en nuestro centro hemos contratado a
tes que habitan en otras ciudades utilizan grupos de apoyo coordinadores bariátricos específicamente dedicados a esta
virtual, mediante la participación en algunos de los múltiples función, cuyo trabajo es servir como contacto de pacientes y
Capítulo 51 • Equipo multidisciplinar en un programa de cirugía bariátrica 429

médicos y garantizar que las evaluaciones son regulares y com-


pletas. Además, el coordinador sigue un protocolo definido Tabla 51-4 OBJETIVOS PREOPERATORIOS
para las pruebas médicas pre y postoperatorias y para las con-
DEL EQUIPO DE TRATAMIENTO
MULTIDISCIPLINAR
sultas, con el fin de controlar las visitas de seguimiento perió-
dicas y de recordar su responsabilidad a aquellos pacientes que Valorar de forma global el estado médico, psicológico, conductual y
hayan olvidado una prueba o una consulta de seguimiento. nutricional preoperatorio
El uso de una base de datos estructurada e informatiza- Identificar, evaluar y optimizar las patologías comórbidas
da, con registros de evaluación preoperatoria basal y segui- Garantizar la ausencia de trastornos psicológicos, de personalidad o
miento postoperatorio, ayuda a garantizar la calidad de la conductuales de alto riesgo
asistencia La tabla 51-4 resume los objetivos preoperatorios Garantizar la capacidad del paciente para comprender y cumplir las
recomendaciones
del equipo médico multidisciplinar.
Educar al paciente sobre nutrición adecuada, las expectativas realistas
y asesorar acerca de los riesgos y los beneficios de la intervención
quirúrgica
Z ENFOQUE DEL EQUIPO INTRAHOSPITALARIO Iniciar el tratamiento médico, psiquiátrico o conductual
Adscribir al paciente a programas de dieta, de ejercicio y conductuales
Debido a nuestro entorno asistencial local y a la propia diná-
mica del centro, el equipo intrahospitalario, aunque mantie-
ne en enfoque multidisciplinar, está compuesto en gran parte
por personal diferente al que integra el equipo extrahospita- Una planta especializada permite optimizar la eficacia en
lario preoperatorio, con excepción del cirujano y el auxiliar términos de utilización del entorno y de las instalaciones. La
sanitario, que aportan continuidad durante toda la fase ope- movilidad del paciente bariátrico en el postoperatorio
ratoria. En programas bariátricos de alcance limitado es requiere tanto conocimientos como instalaciones adecuadas,
fácil que el mismo nutricionista, psicólogo o internista que para evitar lesiones, tanto del personal como de los pacien-
participó en la fase previa se encargue de la asistencia duran- tes. De forma similar, el conocimiento práctico de la apnea
te la hospitalización. del sueño y de su tratamiento son importantes en la asisten-
El equipo bariátrico intrahospitalario está compuesto cia a este tipo de pacientes. Sin embargo, el mantenimiento
principalmente por el cirujano, el auxiliar sanitario, el perso- de una unidad especializada de enfermería, aunque puede
nal de quirófano con funciones específicas, el dietista y el per- ser lo ideal para un óptimo tratamiento del paciente obeso,
sonal de enfermería. Además, por supuesto, se ha de contar también supone un problema para el departamento de per-
con una infraestructura que integre al personal auxiliar y las sonal del hospital. Mantener un número importante de pro-
instalaciones que cubren las necesidades especiales de esta fesionales de enfermería especializados en la asistencia a
población de pacientes, discapacitados por su peso. Sillas obesos da lugar a importantes retos por diferentes razones.
especiales, sillas de ruedas, camillas, camas, elevadores, En primer lugar, es posible que los jóvenes enfermeros y
mesas de quirófano, aseos e instalaciones de infraestructura, enfermeras no quieran tratar exclusivamente con pacientes
todos ellos adaptados, son necesarios para acomodar a pa- de cirugía bariátrica; muchos de los estigmas generales de la
cientes de 200 o 250 kg. La mayoría de los pacientes que pesan obesidad, aunque son comprensibles, se difunden entre el
más de 250 kg probablemente deban ser atendidos en grandes personal paramédico auxiliar y de enfermería no especiali-
hospitales que cuenten con instalaciones altamente especiali- zado. Como segundo factor a tener en cuenta es frecuente
zadas.9 Varios miembros clave del equipo bariátrico intrahos- que el personal de enfermería sufra lesiones (lumbares, de
pitalario requieren un análisis específico; tales son: el personal hombros, etc.) al trabajar con la población bariátrica en ins-
de quirófano, los servicios de enfermería y los dietistas. talaciones inadecuadas, por lo que existe cierto temor a que
estas se repitan. En tercer lugar, las posibles ventajas de otros
Personal de quirófano servicios y los horarios de trabajo más flexibles de las unida-
des de pacientes ambulatorios son obstáculos comprensibles
Aunque es conveniente contar con una amplia dotación de a la hora de constituir un grupo especializado de enfermería
personal de enfermería quirúrgica, técnicos y anestesistas bariátrica. Muchos hospitales han desarrollado planteamien-
que tengan al menos alguna experiencia en el ámbito de la tos propios para este problema. Nosotros hemos afrontado
cirugía bariátrica, disponer de personal específicamente dedi- este problema habilitando más de una zona asistencial dedi-
cado a esta área fomenta la eficacia y evita muchas complica- cada a los pacientes obesos, pero continuamos manteniendo
ciones que pueden ser consecuencia de la falta de experiencia. las plantas como áreas de cirugía general.
El personal con dedicación específica es especialmente impor-
tante en la cirugía bariátrica laparoscópica, ya que muchas de Dietistas
las peculiaridades que se abordan durante estas operaciones
son de aplicación exclusiva en este campo. También es nece- Nuestro programa utiliza un grupo de dietistas específica-
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sario destacar la importancia del personal de anestesia expe- mente asignado al entorno intrahospitalario. Según nuestra
rimentado; el paciente bariátrico implica diversos retos desde práctica, este enfoque optimiza la eficacia del personal nutri-
el punto de vista de la anestesia. Se cuentan entre ellos la asis- cionista. Nuestros dietistas intrahospitalarios han acumula-
tencia pulmonar, el posicionamiento específico de este tipo de do una notable experiencia en lo que respecta al período de
pacientes en la mesa de operaciones, las dosis de anestésicos, realimentación postoperatoria inicial. Además, el postopera-
la monitorización cardiopulmonar y otros. torio y los momentos previos al alta son esenciales en la
enseñanza al paciente y a sus familiares en lo que respecta a
Servicios de enfermería la progresión dietética durante los meses posteriores al alta.
En realidad, hasta que nuestro dietista ha revisado con ellos
La asistencia de enfermería postoperatoria del paciente las normas nutricionales postoperatorias mediante la utiliza-
bariátrico también implica varias consideraciones especiales. ción de nuestro manual formativo, no damos el alta a ningún
430 Sección IX • EDUCACIÓN, PRÁCTICA Y DOCUMENTACIÓN

paciente; creemos que esta sesión es una de las más impor-


tantes en la fase postoperatoria temprana. Tabla 51-5 OBJETIVOS POSTOPERATORIOS
DEL EQUIPO DE TRATAMIENTO
MULTIDISCIPLINAR
Z EQUIPO DE TRATAMIENTO POSTOPERATORIO Valorar los signos de complicaciones quirúrgicas subagudas o crónicas
Monitorizar enfermedades previas
Postoperatoriamente, el enfoque del equipo multidisciplinar Valorar el cumplimiento de las necesidades de ingesta nutricional
es igualmente esencial para la consecución de resultados Investigar posibles deficiencias nutricionales
Aportar suplementos apropiados de vitaminas y minerales, si está
óptimos a corto y largo plazo. Las áreas más significativas
indicado
para el equipo multidisciplinar en este contexto se enumeran Continuar la terapia conductual y los grupos de apoyo mientras sea
en la tabla 51-5. necesario
El equipo postoperatorio suele ser el mismo que el Aumentar la actividad física y el ejercicio del paciente
preoperatorio, al menos en el conjunto de las especialidades Monitorizar las dificultades psicosociales
implicadas. Intentamos ser flexibles con el seguimiento Seguir un protocolo de seguimiento objetivo
postoperatorio y, siempre que es posible, permitimos a los
médicos y a los psicólogos locales que intervengan en la asis-
tencia postbariátrica. Normalmente requerimos visitas a
nuestra clínica tras 6 semanas y 3 meses; sin embargo, tam- B12 parenteral mensual. Los pacientes sometidos a interven-
bién recomendamos encarecidamente el seguimiento en ciones de malabsorción requieren seguimientos más deta-
nuestra institución, por lo menos, durante los 6 o 12 prime- llados, concentrándose en las vitaminas liposolubles y otros
ros meses. Cuando los pacientes son de lugares distantes suplementos.12
(más de 300 km), somos más flexibles y nos coordinamos con
los médicos locales para atender los principales problemas Dietista
médicos y nutricionales de los pacientes postbariátricos.
Nuestros cuestionarios de seguimiento también nos permi- El dietista debe visitar al paciente a las 6 semanas para con-
ten mantener el contacto con los pacientes; estos cuestiona- firmar que ha comprendido los objetivos nutricionales
rios son enviados a los 3, 6, 12, 18, 24, 36 y 48 meses de la (ingesta oral de líquidos, calorías, proteínas, aumento pro-
operación e incluyen información sobre síntomas, peso, gresivo de la consistencia de la alimentación, y otros), para
medicación y problemas médicos y psicosociales. aportar indicaciones adicionales y para establecer planes de
seguimiento. Después los pacientes son seguidos postopera-
Endocrinólogo u otro internista toriamente a intervalos variables, con el fin de verificar el
cumplimiento dietético y nutricional.
Las intervenciones bariátricas consiguen una mejora signi-
ficativa y, a menudo, la resolución de las patologías comór- Psiquiatra o psicólogo
bidas asociadas con la obesidad. La mejora del control de la
glucosa plasmática en los pacientes diabéticos es uno de los La evaluación y el seguimiento ininterrumpido por parte de
fenómenos que se da más rápidamente, con frecuencia antes un psicólogo son también importantes. La terapia conduc-
que la pérdida significativa de peso. La monitorización ade- tual continuada, la valoración del cumplimiento y la partici-
cuada de los ajustes, o incluso la interrupción del uso de la pación en grupos de apoyo resultan beneficiosos para la
suspensión total de la insulina o los antidiabéticos orales, mayoría de los pacientes. La terapia recurrente o conductual
son importantes para evitar la morbilidad asociada a la a largo plazo puede ser necesaria en pacientes con mal cum-
medicación. Al avanzar la pérdida de peso, la hipertensión plimiento, o con otras indicaciones, como problemas en la
y la hiperlipidemia mejoran en la mayoría de los pacientes, relación de pareja, cambios de la situación laboral o atraco-
permitiendo ajustes o la suspensión total de la medicación nes de comida. El seguimiento adicional o el tratamiento de
(el objetivo final). La apnea del sueño desaparece en la pacientes bariátricos en el período postoperatorio por parte
mayoría de los pacientes después de la pérdida significativa de un psiquiatra se basan en la valoración preoperatoria y no
de peso, y el uso del CPAP puede resultar innecesario. Sin se consideran rutinarios.
embargo, la suspensión del CPAP normalmente requiere
una cuidadosa documentación de la reversión de la apnea Cirujano
del sueño y no una simple justificación basada en los sínto-
mas del paciente. La atención postoperatoria precoz del paciente es responsa-
El equipo del internista y el dietista suele someter a bilidad del cirujano. El reconocimiento temprano y el trata-
estrecho seguimiento al paciente durante el primer año miento de las complicaciones postoperatorias resultan cru-
postoperatorio. Después suele ser suficiente valorar anual- ciales. La importancia del seguimiento quirúrgico bariátrico
mente el estado nutricional, las tendencias de peso, la modi- es vital por varios motivos. Primero, los problemas quirúr-
ficación conductual y las patologías comórbidas. El segui- gicos bariátricos directos que pueden presentarse no siem-
miento continuado de los índices nutricionales es pre son evidentes para los cirujanos generales que no reali-
importante, con una duración y frecuencia que dependen zan operaciones bariátricas. En segundo lugar, la implicación
del procedimiento específico (restrictivo frente a malabsor- en el seguimiento demuestra al paciente que el cirujano tam-
tivo).10 También es necesaria la valoración de los niveles bién está comprometido en la consecución del éxito en la
plasmáticos vitaminas y minerales y del uso de suplementos. pérdida de peso y en la reversión de las patologías comórbi-
Nuestro tratamiento más habitual es la derivación gástrica das. Los pacientes son examinados a las 6 semanas y a los
en Y de Roux vertical y desconectada. Los pacientes trata- 3 meses del postoperatorio. El cirujano debe monitorizar la
dos con esta técnica habitualmente reciben suplementos recuperación postoperatoria e identificar y tratar las compli-
diarios de calcio y multivitamínicos-minerales y vitamina caciones precoces tras el alta, en caso de que se produzcan.
Capítulo 51 • Equipo multidisciplinar en un programa de cirugía bariátrica 431

El papel del cirujano a largo plazo es variable; se ve con- Z BIBLIOGRAFÍA


dicionado por las pautas de la institución en la que trabaja,
por sus preferencias de cirujano y por la eficacia de su equi- 1. National Institutes of Health Consensus Development Conference
po. En nuestra institución el papel del cirujano en el segui- Panel: Gastrointestinal surgery for severe obesity. Ann Int Med
1991;115:956-961.
miento a largo plazo se centra sobre todo en la presencia de 2. Cosmo LD, Vuolo G, Piccolomini A, et al: Bariatric surgery: early results
complicaciones. Las alteraciones nutricionales graves, la with a multidisciplinary team. Obes Surg 2000; 10:272-273.
colelitiasis sintomática, hernias incisionales, estenosis anas- 3. Hocking MP, Kelly KA, Callaway CW: Vertical gastroplasty for
tomóticas y la evaluación de fallos por problemas técnicos morbid obesity: clinical experience. Mayo Clin Proc 1986; 61:287-291.
4. Kral JG: Selection of patients for anti-obesity surgery. Int J Obes
(dilatación del reservorio quirúrgico, fístulas gastrogástri- 2001;25(suppl 1):S107-S112.
cas) motivan la consulta quirúrgica. 5. Gupta RM, Parvizi J, Hanssen AD, et al: Postoperative complications in
patients with obstructive sleep apnea syndrome undergoing hip or knee
replacement: a case-control study. Mayo Clin Proc 2001;76:897-905.
Z RESUMEN 6. Clark MM, Balsiger BM, Sletten CD, et al: Psychosocial factors and
2-year outcome following bariatric surgery for weight loss. Obes Surg
2003;13:739-745.
Debido a que la cirugía bariátrica afecta a una población de 7. Brownell KD: The LEARN® Program for Weight Management
pacientes singular, que presenta necesidades complejas que 2000. Dallas, American Health Publishing, 2000.
requieren una esmerada valoración preoperatoria, una aten- 8. American College of Surgeons: ACS statement on principles underlying
perioperative responsibility. Bull Am Coll Surg 1996;81:39.
ción postoperatoria continuada y un tratamiento de los pro- 9. Sarr MG, Felty CL, Hilmer DM, et al: Technical and practical
blemas médicos, conductuales y nutricionales, un equipo considerations involved in operations in patients weighing more than
multidisciplinar resulta esencial a la hora de garantizar una 270 kg. Arch Surg 1995;130:102-105.
adecuada selección de pacientes y los abordajes terapéuticos 10. Brolin RE, Leung M: Survey of vitamin and mineral supplementation
after gastric bypass and biliopancreatic diversion for morbid obesity.
más oportunos para reducir el riesgo quirúrgico, y para ase- Obesity Surg 1999;9:150-154.
gurar el éxito a largo plazo. Nuestro programa en la Mayo 11. Balsiger BM, Kennedy, FP, Abu-Lebdeh HS, et al: Prospective evalu-
Clinic funciona, aunque presenta una estructura organizativa ation of Roux-en-Y gastric bypass as primary operation for morbid
específica de nuestra institución. Otros programas mantie- obesity. Mayo Clin Proc 2000;75:673-680.
12. Murr MM, Balsiger BM, Kennedy FP, et al: Malabsorptive proce-
nen organizaciones diferentes, aunque todos destacan la dures for severe obesity: comparison of pancreaticobiliary bypass
necesidad de la cooperación multidisciplinar en prácticamen- and very very long limb Roux-en-Y gastric bypass. J Gastrointestinal
te todos los aspectos de la atención del paciente bariátrico. Surg 1999;3:607-612.
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.
52
Equipo de ciencias afines
en cirugía bariátrica
Mary Lou Walen

El interés por el campo de la cirugía bariátrica ha aumentado rán, pues, una adecuada formación en lo que respecta a la
considerablemente en estos últimos años, en paralelo a la cre- importancia de los servicios de apoyo a la cirugía.14
ciente incidencia de la obesidad mórbida en EE. UU.1-5 y en
todo el mundo,6 así como con el advenimiento de los procedi-
mientos laparoscópicos.7,8 La cirugía bariátrica ha alcanzado la Z MISIÓN COOPERATIVA A LARGO PLAZO
categoría de tratamiento «más efectivo»9 actualmente disponi- DEL EQUIPO DE SALUD
ble para esta pertinaz enfermedad, que se prolonga durante
toda la vida del paciente.10-12 La necesidad de que las ciencias de Las disciplinas de salud afines proporcionan una infraestructu-
la salud afines se integren en un equipo multidisciplinar es una ra para el desarrollo de esta concepción de la salud.13,14 Los
constante en los comentarios referidos al tratamiento quirúrgi- National Institutes of Health,15-17 la American Society for Bariatric
co de la enfermedad de la obesidad mórbida. La afirmación del Surgery,18 el American College of Surgeons19 y la Society of American
Dr. Henry Buchwald según la cual «el paciente de cirugía Gastrointestinal and Endoscopic Surgeons20,21 recomiendan encare-
bariátrica siempre es mejor evaluado, y posteriormente mejor cidamente el enfoque integral y programático. Estas organiza-
atendido, por un equipo multidisciplinar»9 se ve corroborada ciones proporcionan directrices y pautas para la aproximación
por los datos que se dan a conocer sobre los resultados a largo multidisciplinar a la cirugía bariátrica, que analizan la comple-
plazo de la cirugía bariátrica. jidad de la enfermedad y, además, tienen en cuenta los niveles de
El presente capítulo ofrece una idea general de los diver- riesgo anestésico y quirúrgico excepcionalmente altos que
sos componentes de un equipo bariátrico multidisciplinar y implica la cirugía bariátrica, así como el grado de cumplimiento
proporciona breves descripciones de sus funciones. Revisa, de las prescripciones médicas requerido para el éxito a largo
asimismo, el papel de las siguientes disciplinas del equipo: plazo. Los estándares publicados infravaloran la necesidad de
medicina interna (que abarca los componentes pulmonar, contar con un modelo sinérgico de asistencia cooperativa,22 que
endocrino, musculoesquelético, hematológico, de enferme- hará posible una atención de mayor calidad y un ritmo más rápi-
dades infecciosas, gastroenterológico, y alérgico/inmunoló- do de recuperación, y permitirá alcanzar el máximo de capaci-
gico); cirugía; grupos de apoyo; salud mental y conductual; dad funcional, el restablecimiento oportuno de la actividad nor-
fisiología del ejercicio; nutrición; y gestión de resultados. mal y el desarrollo de una mejor calidad de vida.
La oportunidad de aportar una formación interdiscipli- La intervención quirúrgica es de importancia esencial
nar y la experiencia del trabajo en equipo están destinadas a para la obtención de resultados a largo plazo en muchos cam-
producir en los pacientes mejores resultados, que pongan de pos de la cirugía. Sin embargo, en la bariátrica este plantea-
manifiesto el valor de los conocimientos técnicos y habilida- miento se ve sustancialmente modificado. En este caso, la
des específicas de cada miembro del equipo.13 A medida que el consecución por el paciente de una mejor salud de por vida
número de operaciones y la variedad de técnicas quirúrgicas viene determinada por un enfoque basado en el equipo, que
aumenta, el valor para la cirugía bariátrica del enfoque multi- rinde resultados efectivos en un marco de mutua confianza y
disciplinar se hace cada vez más evidente. El modelo aquí pre- credibilidad dentro del equipo bariátrico. La esencia de todo
sentado integra las diversas disciplinas requeridas para aumen- equipo bariátrico eficaz reside en tener un objetivo común:
tar el éxito a largo plazo de esta singular especialidad que el foco de atención de cada miembro del equipo esté cons-
quirúrgica. El planteamiento de la cirugía bariátrica como tantemente puesto en el éxito de la evolución a largo plazo de
marco de actividad de un grupo de ciencias de la salud afines, los pacientes.
o de un equipo multidisciplinar (como contraste con la inter-
vención quirúrgica en sí misma), adquiere un grado de impor- Acuerdo con el paciente: consentimiento informado
tancia que no se suele registrar en el ámbito de la cirugía gene-
ral. Este enfoque, que es intuitivo para los cirujanos bariátricos Una meta común del equipo bariátrico es que, en este tipo de
experimentados, puede en cambio resultar novedoso para los cirugía, se exija un procedimiento de consentimiento infor-
cirujanos formados en el campo de la cirugía general. Aquellos mado más minucioso que el que se solicita en otras ramas de
que deseen llegar a ser expertos en cirugía bariátrica necesita- la cirugía.23 Ello es debido a su naturaleza electiva, a su com-
432
Capítulo 52 • Equipo de ciencias afines en cirugía bariátrica 433

plejidad, a sus consecuencias a largo plazo, y a la necesidad de orientado por parte de cada miembro del equipo es la base de
cumplimiento de un prolongado tratamiento por parte del cualquier programa bariátrico eficaz.
paciente y de una continuada cooperación con los miembros Quizá influidos por la publicidad que exalta los evidentes
del equipo para garantizar la seguridad y el éxito de por vida. beneficios físicos de la cirugía bariátrica, algunos pacientes
El consentimiento informado para el paciente bariátrico es un pueden albergar expectativas de éxito no realistas, y no com-
procedimiento que le proporciona no sólo la información prender del todo la importancia de sus propias contribuciones
suficiente para que tome una decisión razonable acerca de la personales a ese éxito. Esta situación debe ser tratada directa-
cirugía y sus consecuencias a largo plazo, sino también los mente por los cirujanos bariátricos y los otros miembros del
medios para comprender la importancia de la implicación y la equipo. Si ello no sucede así, es más que probable que se regis-
adecuada formación de los miembros de la familia. tren tasas de complicación inaceptables, pacientes y familias
El Dr. Edward E. Mason recomendó que todo cirujano desalentados, costes excesivos y fracasos del tratamiento.
de la obesidad periódicamente «revise: 1) lo que se conoce El enfoque de las ciencias de la salud afines proporciona
acerca de la intervención(es) recomendada(s), 2) los mate- una delimitación preoperatoria clara de las responsabilidades
riales disponibles para la formación de los pacientes, y de los pacientes, así como una evaluación de la disposición del
3) los procedimientos mediante los cuales los pacientes son paciente a asumir responsabilidades en lo que respecta a su
informados y dan consentimiento».24 También precisó que participación en el proceso. El objetivo de tal planteamiento
«la única persona que está siempre presente es el paciente. es que esté en condiciones médicas lo más seguras que sea
Existen informaciones específicas para cada operación que posible y que disponga de las mejores opciones para conseguir
pueden resultar vitales. El paciente puede, y debe, informar- un buen estado de salud a largo plazo y buenas perspectivas de
se acerca de su nueva anatomía y de las potenciales compli- longevidad. Los elementos esenciales a tener en cuenta en este
caciones. Una alianza entre paciente y cirujano es la mejor contexto son: 1) cambios en el estilo de vida; 2) programas de
base para la asistencia aplicada de por vida, aun cuando la ejercicio de por vida, preferentemente estructurados; 3) reque-
relación entre ambos sea habitualmente temporal».24 rimientos nutricionales, incluyendo conocimientos acerca de
la toma diaria de proteínas; 4) suplementación nutricional;
5) evitar el uso de ácido acetilsalicílico y antiinflamatorios no
Z EQUIPO BARIÁTRICO MULTIDISCIPLINAR esteroideos; 6) evitar picar entre comidas, y 7) disposición
para cumplir con el seguimiento necesario, incluyendo visitas
Profesionales de la salud especializados al cirujano y participación en actividades del grupo de apoyo.
que interaccionan entre sí La necesidad de dar más importancia a la fase de preparación
del tratamiento bariátrico es cada vez más patente, de cara a
Bajo la dirección de un cirujano bariátrico cualificado, las la integración de los pacientes como miembros del equipo.
funciones del equipo bariátrico multidisciplinar incluirán Establecer grupos de apoyo y facilitar el acceso regular a
las siguientes: acceso al tratamiento médico de las patologías los mismos favorece la creación de fuertes vínculos en el con-
comórbidas, asistencia de enfermería cualificada, participa- junto de la asistencia médica. La exposición a la dinámica de
ción de especialistas en nutrición y dietética con experiencia los grupos de apoyo tiene repercusiones en muchas fases de la
en aplicaciones a otras especialidades, entrenamiento físico, recuperación del paciente de obesidad mórbida y en sus limi-
anestesistas expertos y evaluación psicosocial. La disponibili- taciones concomitantes físicas, mentales y psicosociales.
dad de neumólogos y cardiólogos expertos, de instalaciones
de rehabilitación y de cuidados en domicilio es igualmente Equipo quirúrgico
esencial. Las directrices sobre equipamiento18 exigen sufi-
ciente soporte institucional y de los estamentos rectores del El equipo es sumamente importante para el paciente bariá-
hospital, de cara a la consecución de mejoras, tanto de cultura trico durante la intervención en sí misma. El cirujano, su
sanitaria como físicas, que garanticen que la operación se lle- auxiliar, el instrumentista y el personal circulante, junto con
va a cabo de forma segura y eficaz. Se espera que las instala- los anestesistas, deben ofrecer la sincronizada coreografía
ciones, los cirujanos y programas sean igualmente válidos y necesaria para la asistencia quirúrgica a este paciente, en la
permitan la consecución y gestión de datos precisos sobre los fase más crítica de su prolongado trayecto hacia el control de
resultados, a efectos de acreditación,25,26 investigación,27 su peso a lo largo de toda su vida.
obtención de credenciales y prerrogativas18,25,26 y uso compar- Como se ha indicado, el cirujano, el líder de este equipo
tido de datos referidos a la evolución de los pacientes. altamente cualificado, debe verse respaldado por todo lo que
se ha llevado a cabo en el preoperatorio, por los datos recogi-
Paciente dos, por la motivación del paciente y por la capacidad y dedi-
cación del equipo quirúrgico. Es imprescindible que el equipo
En su calidad de miembro más esencial del equipo, se anima al trabaje unido desde el principio para conseguir los necesarios
paciente a que se centre en su formación en relación, no sólo medios de coordinación, pericia técnica y capacidad de deci-
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

con la operación y el proceso, sino también con el conocimien- sión a lo largo de todo este complicado proceso. Ello requiere,
to de los cambios de estilo de vida y con la obligación de reali- además. equipamiento y suministros especializados.18
zar ejercicio de por vida, manteniendo una adecuada nutrición. El desembolso de capital para la financiación de este pro-
Dado que no todos los pacientes que sufren obesidad mórbida cedimiento es considerable; no obstante, la dotación de tales
son candidatos a cirugía, la valoración preoperatoria y la for- recursos permite crear un ambiente seguro para el paciente y
mación se convierten en una responsabilidad esencial del equi- garantiza una técnica quirúrgica más eficaz. La mesa de ope-
po bariátrico. Una asistencia bariátrica apropiada empieza por raciones debe ser capaz de soportar un peso de 400-450 kg,
el reconocimiento de las necesidades individuales de cada con el paciente tumbado y en posición de Trendelenburg
paciente que se muestra interesado por la opción quirúrgica. invertida durante gran parte del procedimiento. Además de la
La combinación del compromiso de la capacitación quirúrgi- mesa de operaciones, deben adquirirse instrumentos que sean
ca con un enfoque minucioso, contrastado y debidamente de longitud suficiente, tanto para el acceso laparoscópico
434 Sección IX • EDUCACIÓN, PRÁCTICA Y DOCUMENTACIÓN

como para el abierto. Es útil disponer de un retractor con equipo bariátrico son ciertamente esenciales. Para el paciente
autosujeción para proporcionar exposición óptima del campo que se somete a cirugía bariátrica, en la que el éxito se mide en
operatorio en el procedimiento abierto y, a veces, cuando los función de los resultados a corto y a largo plazo, el enfoque de
procedimientos laparoscópicos deben convertirse en procedi- salud mental y conductual en lo que respecta a la situación psi-
mientos abiertos. Una buena torre de vídeo de laparoscopia cológica del paciente es fundamental. Tal valoración depende de
para este tipo de abordajes proporciona adecuada luz, insufla- una optimización de las interrelaciones y de una comunicación
ción, capacidad de vídeo y visualización del campo. eficaz, no sólo entre los profesionales del equipo de tratamiento,
Para un procedimiento de esta magnitud es preferible sino también con el paciente y con su sistema de apoyo.
una plantilla de personal quirúrgico especializada. Contar
con un equipo con experiencia en trabajar unido permite Nutricionistas
que la operación sea más eficaz, tranquila y coordinada. Los
miembros del equipo que son capaces de anticiparse a las Tanto el National Institutes of Health Consensus Stetement on
necesidades del cirujano y de sus compañeros de trabajo Gastrointestinal Surgery for Severe Obesity28 de 1991 como el
acortan el tiempo de la intervención, disminuyen los costes American Society for Bariatric Surgery Consensus Conference
globales y proporcionan un mayor grado de seguridad para Statement on Bariatric Surgery for Morbid Obesity29 de 2004,
el paciente. ponen énfasis en la necesidad de la creación de un equipo
Además de contar con un equipo quirúrgico fijo, también multidisciplinar para determinar la aptitud de un paciente
es aconsejable aplicar un criterio de bloqueo de tiempo para que vaya a someterse a cirugía de pérdida de peso. Un impor-
las intervenciones. Ese criterio se constituye en un elemento tante miembro de este equipo es, sin duda, el nutricionista o
de predictibilidad para el paciente, el cirujano y personal qui- dietista titulado, que ha de estar especializado en el área de
rúrgico. En un programa bariátrico integrado y satisfactorio, la cirugía bariátrica. La valoración nutricional preoperatoria
el paciente ha trabajado diligentemente y ha superado muchos es una forma de determinar si el paciente será capaz de ajus-
obstáculos para llegar a la cirugía. Así pues, el día de la opera- tarse a la dieta postoperatoria y a la suplementación mineral
ción deben minimizarse los retrasos, de modo que el paciente y vitamínica necesarias.
se sienta apoyado y adecuadamente atendido. La función del nutricionista va más allá del simple visto
El respeto por el estado de ánimo del paciente comienza bueno preoperatorio. La responsabilidad se hace extensiva a la
por proteger su dignidad en todos los aspectos de la asisten- asistencia a largo plazo del paciente, lo que incluye formación,
cia. Los obesos conforman un colectivo que ha llegado a orientación, aliento y respaldo al paciente a lo largo de todo el
acostumbrarse a ser tratado como si lo integraran ciudada- proceso de pérdida de peso. Ayudar a los pacientes a entender
nos de segunda clase. La sociedad en su totalidad todavía no por qué la cirugía requiere un cambio en su conducta alimen-
contempla la obesidad como una enfermedad. Son tantas las taria y motivarlos para llevar a cabo este cambio son aspectos
falsas creencias acerca de la obesidad mórbida, que es com- fundamentales del resultado satisfactorio de la cirugía. Son
prensible que este grupo de pacientes pueda necesitar con- necesarias las pertinentes explicaciones centradas en la cons-
tacto frecuente, retroalimentación, frases tranquilizadoras y tatación de que la cirugía es solamente una herramienta que
enseñanza continuada. Detalles aparentemente nimios, les ayudará en la pérdida de peso. En buena medida, el papel
como proporcionar pijamas de hospital lo suficientemente del nutricionista consiste en explicar a los pacientes que, si
grandes, sillas sin reposabrazos, básculas que puedan alojar desean perder peso y mantenerse sanos, tendrán que seguir
al paciente obeso mórbido o sillas de ruedas más anchas de directrices nutricionales específicas, hacer ejercicio y tomar
lo habitual, son solamente algunas de las formas de mante- las vitaminas y minerales que se prescriban.
ner adecuadamente la dignidad de la persona en los centros
dedicados al cuidado integral del paciente bariátrico. Fisiología del ejercicio
Coordinador del equipo bariátrico Un objetivo fundamental del equipo bariátrico multidisci-
plinar es proporcionar apoyo físico y emocional a todos los
Un programa integral es aquel que incorpora todas las dis- pacientes, así como hacer que sean conscientes de los impor-
ciplinas que puedan verse implicadas en el tratamiento. tantes cambios que afectarán a sus vidas tras la cirugía. En
Designar a un coordinador que monitorice los progresos del este contexto, la actividad física proporciona beneficios de
paciente desde el principio hasta el final del programa bariá- todo tipo a los pacientes bariátricos, incluyendo mejora de su
trico, no sólo asegura una evolución adecuada, sino también sistema cardiorrespiratorio y de sus niveles de fuerza, resis-
que esté preparado de forma óptima, tanto para el procedi- tencia muscular y flexibilidad.
miento quirúrgico como para los necesarios cambios en el La actividad física es esencial para los individuos obe-
estilo de vida que le siguen. El coordinador debe trabajar en sos, pero deben realizarla bajo supervisión. Estas personas
estrecha colaboración con el cirujano y el resto del equipo suelen llevar un estilo de vida sedentario; no están habitua-
bariátrico. Esta figura es, de hecho, el elemento que se cons- das al ejercicio y, en ocasiones, no están capacitadas ni tan
tituye en prueba de la calidad del equipo bariátrico, y el siquiera para la realización de actividades físicas suaves. Es
enlace entre el equipo operatorio y el paciente. El coordina- probable que comenzar un programa para mejorar el estado
dor debe tener experiencia clínica y una sincera vocación de físico sin la pertinente orientación cause daños físicos y dé
asistencia y servicio a la población de pacientes obesos. lugar a perjuicios más que a beneficios. Es esencial propor-
Nunca es bastante la fuerza con la que hay que destacar el cionar algunas actividades físicas que los pacientes sean
crucial papel de esta función. capaces de realizar, tras una evaluación adecuada que tenga
en cuenta las características físicas y antropométricas de
Profesionales de la salud mental cada enfermo. Lo ideal es que la práctica de ejercicio se ini-
cie preoperatoriamente, se mantenga en el perioperatorio y
Para que la intervención dé lugar a los efectos deseados, los com- se convierta en una pieza clave en el planteamiento del
ponentes de salud mental y medicina del comportamiento del postoperatorio.
Capítulo 52 • Equipo de ciencias afines en cirugía bariátrica 435

Grupos de apoyo médicos para entender qué datos se necesitan para dar res-
puesta a determinadas preguntas sobre resultados clínicos. Es
Los grupos de apoyo ofrecen un entorno en el que los pacien- necesario que el personal técnico y el clínico trabajen en equipo
tes pueden compartir ideas, indicaciones y consejos referidos, para determinar las formas mejores y más eficaces de recoger
por ejemplo, a alimentos y ejercicios saludables, mientras datos necesarios para apoyar un programa bariátrico eficaz,
experimentan el alivio de poder expresar sus esperanzas y con alta «visibilidad» y rico en datos de valor contrastado.
temores y de relacionarse socialmente, sin sentirse juzgados Es necesario que en el hospital haya apoyo y motivación
debido a su obesidad. Existen un vínculo y un entendimiento institucionales suficientes para hacer de la detección, reco-
comunes que entrelazan a personas que han afrontado años de gida y análisis de datos una prioridad. Es especialmente
prejuicios por parte de la sociedad. Emocional y físicamente, importante definir con claridad las prioridades para todo el
muchos obesos graves han permanecido mucho tiempo aisla- personal implicado en la producción de datos, cuando en
dos en sí mismos para evitar ser ofendidos y humillados. el proceso estén implicadas relaciones contractuales con
Muchos pacientes sometidos a cirugía bariátrica afron- otros hospitales u organizaciones de gestión sanitaria.
tan un conflicto en lo que respecta a su nueva imagen corpo- Algunos datos bariátricos no son fácilmente recogidos por
ral y a sus cambios de estilo de vida. Tras la cirugía, comer en los sistemas existentes; así sucede, por ejemplo, cuando un
exceso ya no es una opción posible para alcanzar cierto sosie- procedimiento laparoscópico se convierte en una técnica
go emocional. En este período es cuando los grupos de apoyo abierta o cuando un paciente vuelve a quirófano para el tra-
son especialmente beneficiosos para los pacientes. Estos gru- tamiento de una complicación. Estos datos pueden no estar
pos les permiten interactuar con otros pacientes que han disponibles hasta que los sistemas de información existentes
compartido experiencias vitales similares y pueden propor- se modifiquen y los procedimientos sean rediseñados para
cionar ánimo y motivación no clínica, basada en la relación obtener una mejor captación de esa información.
de igualdad. Los pacientes describen los grupos de apoyo
como entidades en las que se sienten aceptados y «en su
ambiente». Hay estudios que demuestran que los pacientes Z RESUMEN
que asisten regularmente a reuniones de grupos de apoyo
tienden a perder más peso que los que no lo hacen. En las El equipo bariátrico multidisciplinar se caracteriza por los
reuniones de grupo, los pacientes pueden comunicarse y esfuerzos sinérgicos a largo plazo de los profesionales de
recabar conocimientos de personas que se hallan en las diver- salud especializados en áreas afines al tratamiento de la obe-
sas postoperatorias. Es una oportunidad para el programa de sidad. Su misión se centra en preparar globalmente al pacien-
fomentar principios, cambios en el estilo de vida y compro- te con obesidad mórbida para los cambios a largo plazo en su
misos para una nueva forma de vida. estilo de vida, que empiezan mucho antes de la intervención;
en optimizar el éxito postoperatorio a corto y a largo plazo; en
conseguir la máxima seguridad para los pacientes; y en re-
Z TRABAJO EN EQUIPO EN LA GESTIÓN gistrar meticulosamente los datos de los resultados, con el
DE LOS RESULTADOS BARIÁTRICOS fin de crea un entorno que sirva para el continuo perfeccio-
namiento de la cirugía bariátrica.
Con el radical incremento en el número de intervenciones
bariátricas que se ha registrado en los últimos años, ha aumen-
tado también la demanda de datos fiables y contrastados en lo Z BIBLIOGRAFÍA
que respecta a los resultados clínicos de estos procedimientos
quirúrgicos. La influencia legal, contractual y económica, así 1. Peskin GW: Obesity in America. Arch Surg 2003;138:354-355.
2. Klein S, Wadden T, Sugerman H: American Gastroenterological
como la demanda pública, pueden afectar a la cantidad de datos Association (AGA) technical review on obesity. AGA J 2002;123:
que han de ser registrados por un programa bariátrico. Los 883-932.
sistemas de información han experimentado las consecuencias 3. Flegal KM, Carroll MD, Ogden CL, et al: Prevalence and trends in obes-
de las expectativas que consideran que los datos referidos a los ity among US adults, 1999-2000. JAMA 2002;288:1723-1727.
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programas bariátricos son singulares y pueden aportar infor- Endocrinol Metab Clin North Am 2003;32:761-786.
mación hasta ahora desconocida. Estos datos han de ser obte- 5. Zimmerman RL: The obesity epidemic in America. Clin Fam Pract
nidos a partir de sistemas de información muy dispares, por lo 2005;4:229-247.
que es necesario un minucioso trabajo conjunto de coordina- 6. World Health Organization: Obesity: preventing and managing the
ción entre las múltiples entidades que los poseen. global epidemic. WHO Technical Report Series 2000. 894. Geneva.
http://whqlibdoc.who.int/trs/WHO_TRS_894.pdf. Accessed June 1,
El alto riesgo quirúrgico y anestésico inherente a la 2006.
cirugía bariátrica ejerce una notable influencia en la canti- 7. Clark GW, Wittgrove AC: Laparoscopic Roux-en-Y gastric bypass.
dad y la calidad de los datos que deben ser recogidos, a fin de Surg Laparosc Endosc 1998;8:406-407.
dar respuesta a las complejas cuestiones referidas a los resul- 8. Steinbrook R: Perspective: surgery for severe obesity. N Engl J Med
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

2004;350:1075-1079.
tados clínicos de los pacientes bariátricos. Además, el núme- 9. Buchwald H: Bariatric surgery for morbid obesity: health implications
ro de operaciones y la variedad de técnicas quirúrgicas han for patients, health professionals, and third-party payers. J Am Coll
aumentado a una velocidad que desafía la capacidad de cual- Surg 2005;200:593-604.
quier sistema de información a la hora de almacenar los 10. Schauer PR, Ikramuddin S, Ramanathan R: Outcomes after laparo-
scopic Roux-en-Y gastric bypass for morbid obesity. Ann Surg
datos correctos. 2000;232:515-529.
El trabajo en equipo está fuertemente implicado en el 11. Buchwald H, Avidor Y, Pories W, et al: Bariatric surgery: a systematic
nivel de los sistemas de información, ya que en este contexto review and meta-analysis. JAMA 2004;292:1724-1737.
se requieren habilidades diversas, que una sola persona puede 12. Christou N, Sampalis JS, Liberman M, et al: Surgery decreases
long-term mortality, morbidity, and health care use in morbidly obese
no poseer. Por ejemplo, un miembro de los sistemas técnicos patients. Ann Surg 2004;240:416-424.
de información puede ser capaz de construir el sistema de 13. Finch J: Interprofessional education and teamworking: a view from
captación de datos, pero no tener suficientes conocimientos the education providers. BMJ 2000;321:1138-1140.
436 Sección IX • EDUCACIÓN, PRÁCTICA Y DOCUMENTACIÓN

14. Saltzman E, Anderson W, Apovian C, et al: Criteria for patient selec- 22. Henneman EA, Lee JL, Cohen JL: Collaboration: a concept analysis.
tion and multidisciplinary evaluation and treatment of the weight loss J Adv Nurs 1995;21;103-109.
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53
Instalaciones necesarias para la práctica
de la cirugía bariátrica
John J. Gleysteen, M.D.

La primera acuñación del término obesidad mórbida a media- acreditación de los cirujanos en este campo.5 La práctica de
dos de los años sesenta obedeció a la necesidad de una des- la consulta depende del equipo de cirugía bariátrica especia-
cripción específica para las personas adecuadas para la «nue- lizado, del que forman parte el responsable de la recepción
va» cirugía de reducción de peso por medio de una derivación del paciente, el administrador, el personal de enfermería, el
yeyunoileal, realizada por primera vez a principios de los dietista, y otros, todos los cuales han de tener un cierto
años cincuenta. Originalmente, el término se refería a per- conocimiento de la obesidad y la cirugía bariátrica.6
sonas que presentaban un exceso de peso de más de 45 kg Los aspectos físicos de la consulta o la clínica requieren
sobre el «peso ideal»,1 calculado en función de los cuadros de condiciones especiales, con el fin de resultar adecuados para
seguros, o de 2 veces el peso normal determinado en perso- pacientes grandes. Las personas obesas son sensibles a sus
nas de edad, sexo, constitución corporal y altura similares.2 condiciones de acomodación y, ciertamente, criticarán o evi-
Más tarde, para distinguir a los individuos extremadamente tarán situaciones en las que se sientan incómodos o ridiculi-
obesos de los que fueron calificados como obesos marginal- zados. Algunos asientos no deben tener reposabrazos, y
mente en el proceso de inclusión en los estudios, se estable- todas las sillas y sofás han de ser resistentes y lo suficiente-
cieron los términos de superobesidad y super superobesidad. El mente elevados para garantizar que los pacientes pesados
criterio de medición pasó a ser el índice de masa corporal, puedan levantarse de ellos con facilidad. Debe haber un
en kg por m 2. Las cifras de población han aumentado de espacio de al menos 15 a 20 cm de distancia entre cada silla
modo considerable desde que comenzó a prestarse atención o sofá. Es asimismo necesario disponer de sillas de ruedas
a la cirugía de la obesidad y en EE. UU. la prevalencia de la más anchas de lo habitual para pacientes con movilidad limi-
obesidad de clase 3 (con un índice de masa corporal por enci- tada. Por lo tanto, la sala de espera deberá ser lo suficiente-
ma de 40) ha pasado del 1% en los años sesenta a más del 3% mente grande como para dar cabida sin aglomeraciones a
en la actualidad.3 Algunos grupos de población estadouni- este mobiliario, permitiendo, además, que un número sufi-
denses alcanzan porcentajes del orden del 6%. ciente de personas pueda estar presente en las dependencias
Hoy en día la cirugía bariátrica es el tratamiento de elec- en cualquier momento. Las puertas de la clínica y los pasillos
ción para la obesidad mórbida. El éxito de esta cirugía espe- han de ser más anchos de lo habitual (aproximadamente de
cializada depende de la adecuada formación de los cirujanos 1 m) para permitir el paso de sillas de ruedas, normales o
en este campo, del enfoque del equipo multidisciplinar del motorizadas.7
equipo, de la existencia de entornos especializados intrahos- Las salas de examen deben ser espaciosas y disponer de
pitalarios y ambulatorios, y de la disponibilidad de instalacio- camillas que sean lo suficientemente anchas y que estén fija-
nes adecuadas para la práctica bariátrica. En el presente capí- das al suelo o a la pared para que no se levante un extremo
tulo se revisan las características de estas instalaciones.4 cuando los pacientes se sienten en sus bordes. Otros acceso-
rios son un taburete resistente, manguitos de presión arte-
rial anchos y batas de examen extra grandes.
Z INSTALACIONES DE LA CONSULTA Obviamente, es importante realizar las mediciones del
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

peso y la altura, pero no hay necesidad de colocar una balan-


La presentación del paciente al equipo quirúrgico debe za en cada sala de examen. La balanza debe colocarse de
ocurrir en la consulta o en la clínica, con independencia de forma conveniente y privada, lejos de la presencia de otros
que la práctica sea llevada a cabo por un equipo privado e pacientes y del personal. Al registrarse el peso no se ha de
independiente o por uno público o académico. Además de hacer ningún comentario.7 La balanza tiene que estar cali-
contar con la pertinente experiencia técnica en cirugía gas- brada, ser preferiblemente digital y con capacidad para
trointestinal y biliar, los cirujanos bariátricos ven la obesi- mediciones de hasta 450 kg.
dad mórbida como una enfermedad, y han de conocer en También es aconsejable disponer de ayudas visuales para
profundidad las numerosas enfermedades inducidas o agra- ejemplificar las indicaciones al paciente. Entre ellas se cuen-
vadas por ella. El American Society for Bariatric Surgery tan un monitor de televisión y un reproductor de vídeo y de
Executive Committee ha elaborado unas directrices para la DVD. Las cintas o CD adecuados, distribuidos comercial-
437
438 Sección IX • EDUCACIÓN, PRÁCTICA Y DOCUMENTACIÓN

mente o grabados por personal de la propia consulta, aceleran en una cama de hospital normal después de la cirugía, puede
la formación de los pacientes y son útiles en los tiempos de romperla. Las camas bariátricas más anchas deben ser capa-
espera previos a las visitas de consulta preoperatoria. Las ces de rodar por los pasillos y atravesar las puertas que, a su
ayudas visuales pueden centrarse en instrucciones dietéticas vez, han de tener una anchura suficiente; también han de
o mostrar experiencias de otros pacientes ya operados. caber en ascensores que sean lo bastante amplios. La habita-
ción hospitalaria, de dimensiones suficientes, debe ser prefe-
riblemente individual para facilitar la comodidad del pacien-
Z INSTALACIONES HOSPITALARIAS te. Es conveniente prestar atención a las instalaciones de los
inodoros, los cuales a menudo están fijados a la pared del
El concepto de equipo es tan importante en el ámbito hospi- cuarto de baño. Un peso excesivo puede desprender el inodo-
talario como en la consulta privada. Los participantes en el ro de forma brusca. Una buena alternativa es usar un inodoro
equipo hospitalario son más numerosos, y en él se incluyen portátil, con capacidad para soportar 350 kg de peso.
los cirujanos y sus asistentes, el personal de enfermería, tanto Los mismos requisitos son aplicables al entorno de la
de quirófano como de planta, dietistas, el personal adminis- consulta: debe disponerse de balanzas apoyadas en el suelo y
trativo; los asesores de especialidad y el personal de la anes- de camillas que soporten pesos de hasta 450 kg, sillas de rue-
tesia. Para llevar a cabo una anestesia adecuada y segura en das más anchas de lo normal y anchos manguitos de presión
obesos mórbidos, no sólo son necesarios conocimientos espe- arterial anchos. Para la profilaxis de la trombosis venosa
ciales, sino que también pueden requerirse equipos específi- profunda durante y después de la intervención, es necesario
cos.8 Para pacientes que se encuentran discapacitados en el disponer de dispositivos de compresión neumática para pier-
período preoperatorio o que presentan problemas posquirúr- nas muy gruesas; algunas empresas disponen de mangas
gicos, puede recurrirse a especialistas en nutrición y en tra- extra grandes o bariátricas para adaptarse a piernas grandes.
tamiento endocrino, en rehabilitación, y en fisioterapia. Estos artículos deben comprarse, no alquilarse.

Quirófanos Instalaciones de apoyo


El quirófano y su equipamiento deben estar preparados para Hay otros artículos del equipo especial para el manejo de
la cirugía bariátrica. Tanto el tamaño del paciente como el pacientes obesos que conviene mencionar. Cualquiera que
equipo hacen necesaria una habitación grande, aunque los sea el número de pacientes bariátricos ingresados en el hos-
requerimientos de tamaño no son específicos. La mesa de pital, el departamento de radiología debe contar con al
operaciones (las hay de distintas marcas) debe soportar más menos una mesa general que pueda soportar hasta 350 kg de
de 350 kg y contar con piezas laterales extensibles para su uso peso, en especial para los estudios gastrointestinales con
en casos ocasionales de circunferencias peculiares.9 En contraste.9 La mayoría de los escáneres de tomografía com-
general, una mesa de tamaño estándar (187,5 ⫻ 50 cm) con putarizada tienen límites máximos de alrededor de 150 kg.
capacidad para soportar un peso superior al habitual es más Sin embargo, hay escáneres con capacidad adicional. Un
adecuada y preferida por los cirujanos y los auxiliares que hospital que tenga un programa de cirugía bariátrica activa
trabajan de pie a su alrededor. Los pacientes muy pesados debe adquirir o tener acceso a uno de ellos.
(⬎230 kg) pueden ser capaces de ayudar a trasladarse por sí Las unidades de cuidados intensivos están a menudo
mismos de la camilla a la mesa de operaciones antes de la compartimentadas en pequeños espacios para los pacientes,
intervención, pero no después. La tarea de retirar de la mesa con un acceso desde el control de enfermería. En el caso de
a este tipo de pacientes no puede dejarse simplemente en personas obesas es necesario adaptar y ampliar estos espa-
manos de colaboradores robustos. Suele resultar útil un sis- cios, así como el correspondiente equipo de asistencia, para
tema de transferencia que utilice algún tipo de colchón neu- pacientes que en el postoperatorio puedan encontrarse gra-
mático para facilitar el traslado de la mesa de operaciones a vemente enfermos y se hallen postrados en una cama bariá-
la camilla o, preferiblemente, a la cama del paciente.9 trica de gran tamaño.
El equipo quirúrgico en el quirófano bariátrico no es El departamento de dietética debe revisar las instalacio-
diferente del de otras salas de operaciones en las que se lleva a nes, especialmente en relación con la selección del menú apro-
cabo cirugía gastrointestinal y laparoscópica general. Sin piado para los pacientes operados. Los dietistas han de prescri-
embargo, el instrumental, para cirugía tanto abierta como bir dietas líquidas libres de azúcar y dietas extremadamente
laparoscópica, debe incluir instrumentos más largos de lo blandas. Antes de su alta hospitalaria, los pacientes tienen que
habitual. En particular, los trócares laparoscópicos deben ser recibir asesoramiento de los orientadores dietéticos.
lo suficientemente largos como para que una longitud igual
pueda quedar dentro y fuera de la pared abdominal; ello per-
mitirá que los instrumentos atraviesen la pared y puedan ser Z CENTROS DE EXCELENCIA
manejables con precisión técnica. El hecho de no tener a mano
trócares lo bastante largos es un motivo frecuente de conver- Puede parecer que hay poca diferencia entre desarrollar un
sión de una laparoscopia en una derivación gástrica abierta.10 programa hospitalario activo en cirugía bariátrica y contar
Los pacientes obesos mórbidos que son enviados de las con la calificación de «centro de excelencia» en este ámbito.
unidades de reanimación a sus habitaciones han de ser tras- Sin embargo, se trata de una distinción esencial, que marca
ladados en camas que optimicen su comodidad y acomoden la tendencia defendida por la American Society for Bariatric
adecuadamente su peso. Las camas bariátricas disponibles en Surgery.11 El establecimiento de un centro de excelencia
el mercado son muy resistentes, de mayor anchura que las implica la ampliación de las infraestructuras de apoyo tanto
normales (para pacientes de 150 a 300 kg), y soportan mucho a nivel hospitalario como en la clínica o la consulta. Las
peso (⬎ de 275 kg). Estas camas son en general más amplias ampliaciones pueden producirse en el planteamiento de los
y tienen colchones y muelles más resistentes, que aumentan requerimientos nutricionales y dietéticos, en el tratamiento
su tolerancia al peso. Un paciente de 250 kg que pasa 4 días de la diabetes y las enfermedades metabólicas, en el terreno
Capítulo 53 • Instalaciones necesarias para la práctica de la cirugía bariátrica 439

de la fisioterapia y la rehabilitación o, también, en las rela- recursos necesarios para que el personal no quirúrgico par-
ciones públicas del hospital o en el desarrollo informático. ticipe en las reuniones de los grupos de apoyo: dietistas, fisio-
Los hospitales con programas de cirugía bariátrica acti- terapeutas y terapeutas, y psicólogos. Utilizando su archivo
vos y con alto volumen de pacientes, ya sean académicos o de ilustraciones médicas y los servicios multimedia, el hospi-
privados, comienzan a atender a pacientes de alto riesgo, cuyo tal puede proporcionar los medios adecuados para la realiza-
tratamiento suponen un mayor coste. Todos los hospitales ción de folletos informativos, filmaciones de entrevistas,
han de hacer frente a las más diversas exigencias o en sus pro- edición de películas de operaciones y otros vídeos educativos,
gramas de asistencia médica dirigida y deben prestar especial útiles para el apoyo a los pacientes.
atención al control de costes, aunque patrocinen prácticas clí- La creación y programación de una página web de ciru-
nicas con ánimo de lucro. Diseñadas para evitar las oscilacio- gía bariátrica, a través de los departamentos de relaciones
nes en los gastos y reducir los costes hospitalarios innecesa- públicas y de informática del hospital, puede combinarse
rios, incurridos por los propios cirujanos o en los programas con los esfuerzos de apoyo de los pacientes. Esta página pue-
de entrenamiento de los distintos ámbitos quirúrgicos, el uso de de estar estrechamente vinculada con el grupo de apoyo
las estrategias clínicas se ha convertido en una forma generali- hospitalario y suele servir de ayuda para los médicos, al mos-
zada de organización práctica de la asistencia.12 Las estrate- trarles temas relacionados con el paciente y con los criterios
gias están redactadas de modo que definen qué es lo necesario quirúrgicos y las cuestiones de la asistencia posquirúrgica
y evitan las incongruencias y las variaciones que no manten- crónica, además de permitirles mantener contactos con otros
gan una adecuada relación coste/eficacia. Estos sistemas cirujanos bariátricos.
estandarizan la asistencia a los pacientes, lo que mejora la cali- Un elemento muy popular de las páginas web de apoyo
dad y reduce costes. Las estrategias también pueden ser con- al paciente es el área dedicada al chat. Su inclusión requiere
sideradas como un elemento complementario de la mejora de un mayor grado de elaboración en el diseño de la página web,
la asistencia en la cirugía bariátrica. pero permite que los pacientes se conozcan, pudiendo ade-
En 1999 en la University of California, Los Ángeles, se pro- más promocionar indirectamente al grupo de apoyo, al dar
puso una estrategia clínica para el abordaje global de la cirugía a conocer los horarios de las reuniones y promover la asis-
bariátrica.12 Incluía un formato que regulaba la preparación en tencia a las reuniones. La disponibilidad de esta información
el preoperatorio, la asistencia perioperatoria y una estancia reduce el tiempo que el personal de apoyo dedica a respon-
posquirúrgica de 3 días. Lo redactó un comité formado por der siempre a las mismas preguntas y, por tanto, favorece la
cirujanos, personal de enfermería, médicos de cuidados inten- eficacia.6 Existen ejemplos de estas páginas web que se
sivos, dietistas, especialistas en programas de garantía de cali- caracterizan por poder copiarse localmente. Sin embargo,
dad y personal administrativo. En comparación con los resul- este tipo de recursos suponen algo más que un medio de
tados de los pacientes tratados el año anterior a su aplicación, exponer un programa nacional, dando publicidad y popula-
en los derivados de la aplicación de la estrategia se redujo en ridad al centro hospitalario de excelencia y a sus médicos. En
1 día la duración media de la hospitalización, en 0,3 días la de la página, los pacientes tienden a apoyarse entre ellos y a
estancia en la unidad de cuidados intensivos, y en un 40% el compartir información, por ejemplo, sobre los tipos de ali-
promedio de gastos hospitalarios por ingreso. Disminuyó mentos que pueden tolerarse, o sobre dónde conseguir ropa,
incluso el porcentaje de reingresos, del 4,2% al 3,2%.12 Las a medida que pierden peso. La comunicación entre los
tasas de morbilidad quirúrgica no se modificaron. La rutinaria pacientes que van a ser intervenidos y aquellos que ya lo han
tarea de redactar las indicaciones posquirúrgicas se vio facili- sido, permite, además, que los primeros estén más tranquilos
tada por formularios estandarizados, y se cree que estos redu- y comprendan mejor lo que van a experimentar.9
jeron el riesgo de errores en el tratamiento. Los gastos evitados
mediante la utilización de esta estrategia justifican un llama-
miento a las administraciones hospitalarias para que incorpo- Z CONCLUSIÓN
ren un programa especializado de apoyo y hagan lo posible por
acceder a la categoría de centro de excelencia. Las instalaciones y el equipo requeridos en un programa de
Entre el personal adicional activo en un centro hospita- cirugía bariátrica o en un centro de excelencia, son los que
lario de excelencia ha de haber un director médico que hacen que el programa quirúrgico sea eficaz y competitivo.
represente a la cirugía bariátrica y que tenga voto en las A su vez, estos son los atributos que se traducen en la admi-
decisiones administrativas significativas relacionadas con la nistración de una asistencia competente y sensible al pacien-
institución.11 El personal asesor, poco significativo en hos- te sometido a cirugía bariátrica. Tal vez la inscripción que
pitales de pequeñas dimensiones con programas de cirugía hay sobre el cartel que ilumina la entrada al Albert Schweitzer,
bariátrica, puede llegar a ser más importante en centros de de Lambaréné, en medio de la selva de Gabón, podría ser
mayor magnitud hasta constituirse en componente funda- una anotación final digna adecuada para los medios e insta-
mental para mantener el nivel de un centro de excelencia. laciones dedicados a la cirugía bariátrica: «Aquí, a cualquier
Esta tendencia a la expansión también puede observarse en hora que llegue, usted encontrará la luz, la ayuda y la bondad
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

áreas como los cuidados intensivos críticos y pulmonares, la humana».13


nutrición y los trastornos metabólicos, o la rehabilitación.
En todas estas áreas se tiende a favorecer la asistencia inte-
Z BIBLIOGRAFÍA
gral de los pacientes durante los períodos pre y posquirúrgi-
co y la detección de problemas y su corrección a fin de mejo- 1. Payne JH, DeWind LT: Surgical treatment of obesity. Am J Surg
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440 Sección IX • EDUCACIÓN, PRÁCTICA Y DOCUMENTACIÓN

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54
Áreas de laparoscopia y robótica
en cirugía bariátrica
Matthew E. Newlin, M.D., y W. Scott Melvin, M.D.

Ahora que la cirugía ha entrado por fin en la era de la infor- habitual para permitir el paso de camas grandes. La mesa de
mática, el concepto de quirófano, propio del siglo XX, está quirófano deber ser grande y capaz de soportar pacientes
siendo reemplazado por un entorno que proporciona mejo- que muchas veces exceden los 250 kg. También debe ser lige-
res instrumentación, comunicación, ergonomía, eficiencia y ramente ajustable (para permitir cambios de posición), así
manejo de la información. Durante más de 100 años, el qui- como radiotransparente (para poder realizar radiografías de
rófano consistió en una única sala, equipada con una mesa forma intraoperatoria). Los brazos de soporte con anclaje en
de operaciones de movilidad limitada, una potente luz sobre el techo y las columnas que soportan cámaras, monitores,
la cabeza, y herramientas de tipo mecánico, que eran mani- insufladores de gas o cualquier otro equipamiento han de
puladas por las manos del cirujano bajo visión directa. Esta colocarse de forma estratégica.
disposición ha prestado muy bien sus servicios a la comuni- Debe disponerse de un sistema de dos cámaras de televi-
dad quirúrgica, casi en todos los tipos de cirugía abierta. La sión o vídeo que sirvan como sistema de apoyo y que, además,
cirugía mínimamente invasiva prosperó, con la llegada de podrían usarse en caso de que se necesiten dos imágenes
mejores objetivos de microscopio, mejor iluminación, y con intraoperatoriamente. Por ejemplo, si se está realizando una
la tecnología de fibra óptica. Al final del siglo XX, estos cam- endoscopia intraoperatoria en el transcurso de una laparosco-
bios se sumaron a la aparición de los ordenadores para trans- pia, esta puede ser vista en alguno de los monitores del quiró-
formar las capacidades del quirófano. Con el comienzo del fano. Los modernos quirófanos con tecnología digital pro-
siglo XXI, las tecnologías avanzadas, digital, óptica, e infor- porciónan una transmisión rápida de imágenes en vivo, así
mática, han creado y seguirán creando nuevos quirófanos, y como la visualización de informes médicos del paciente, imá-
dispositivos quirúrgicos que pueden servir mejor al ciruja- genes radiográficas u otras intervenciones quirúrgicas reali-
no, al hospital y al paciente. zadas con anterioridad, como por ejemplo una endoscopia.
Ello hace posible que el cirujano utilice esta informa-
ción de forma rápida y en tiempo real, pudiendo ajustar
Z ELEMENTOS ESENCIALES DE UN ÁREA mejor la técnica quirúrgica.
DE LAPAROSCOPIA También se pueden instalar en la misma sala ecógrafos
y equipos de fluoroscopia. Los monitores deben ser planos,
El área de laparoscopia debe combinar varios factores, para con tecnología digital y fácilmente articulables, para pro-
proveer un entorno en el cual el cirujano pueda interactuar porcionar imágenes precisas en una posición cómoda. El
con el instrumental quirúrgico, con el personal de enferme- aire usado para insuflar se toma directamente de las tomas
ría y con los medios tecnológicos, para proporcionar una de aire y se conduce a través de los brazos suspendidos,
asistencia médica segura, eficaz y confortable a los pacientes para, de esta manera, suministrar un flujo continuo. El
con obesidad mórbida. A continuación describiremos u las equipo –como mínimo, un insuflador, una fuente de luz, la
características de un área laparoscópica ideal y sus ventajas. unidad electroquirúrgica, y un módulo de potencia para bis-
turí armónico–, descansa en uno de los brazos suspendidos
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

Configuración general y puede moverse de forma fácil en varias posiciones. Esta


configuración general del quirófano permite un entorno
El quirófano diseñado para cirugía laparoscópica, y espe- adaptable tanto para la laparoscopia como para la cirugía
cialmente para cirugía bariátrica, debe ser lo suficientemen- bariátrica (v. figura 54-1).
te amplio para albergar el material necesario, al personal de
quirófano y a un paciente de grandes dimensiones. El míni- Instrumental
mo espacio disponible de trabajo debe ser de 6 ⫻ 6 m, aun-
que lo ideal es que la sala tenga unas dimensiones cercanas a Los pacientes de cirugía bariátrica necesitan un instrumen-
los 7,5 ⫻ 7,5 m, para poder acomodar todo el equipo necesa- tal laparoscópico modificado. Debido a su gran tamaño pue-
rio y disponer de un adecuado espacio de trabajo. Las puer- den requerir pinzas, grapas y laparoscopios de mayor tama-
tas de entrada al quirófano tienen que ser más anchas de lo ño que el habitual. El lugar en el que se almacena este
441
442 Sección IX • EDUCACIÓN, PRÁCTICA Y DOCUMENTACIÓN

observe a otro cirujano, que podría estar realizando una téc-


nica para la cual puede necesitar orientación o un consejo.
Las repercusiones éticas y medicolegales en este contexto
aún no están completamente establecidas. ¿Es el mentor o
consejero responsable de las opiniones expresadas? ¿Debe
participar el mentor en la asistencia médica de un paciente
que ni conoce ni ha explorado? ¿ Están debidamente forma-
dos aquellos a los que enseña a distancia? Todas estas son
preguntas que permanecen sin respuesta.

Ergonomía y eficacia
El quirófano tradicional, cuando está mal adaptado a la
práctica de la cirugía mínimamente invasiva, crea muchos
problemas de tipo ergonómico. Los cables, pedales y tubos
que están en el suelo pueden entorpecer la deambulación y
la movilidad de los carros de quirófano.2 Los cables pueden
resultar dañados por el paso de estos carros. Los más gran-
des y pesados ocupan un valioso espacio en el suelo y pueden
Figura 54-1 La moderna área de laparoscopia incluye equipos sus- dificultar el acceso al paciente, especialmente en caso de
pendidos, funciones activadas mediante la voz y sistemas de comunica- urgencia. Pueden también producirse fallos de esterilización
ción digitales. cuando parte del instrumental se encuentra excesivamente
cerca del campo quirúrgico y requiere manipulación por
parte del personal de enfermería.
instrumental, así como los cartuchos de grapas y cualquier La capacidad del cirujano para concentrarse en la tarea
otro material necesario, ha de localizarse muy cerca del qui- que tiene en sus manos mejora con una buena ergonomía. Se
rófano. ha demostrado que el cansancio del cirujano aumenta cuan-
do los monitores no están en su línea directa de visión o en
Comunicación la del personal de quirófano. Los monitores suspendidos,
móviles y planos permiten una visión clara del campo qui-
Una de las mayores ventajas de las modernas salas de lapa- rúrgico.
roscopia radica en su capacidad para mejorar la comunica- En la laparoscopia moderna es imprescindible optimi-
ción. El control realizado por medio de un ordenador portá- zar la ergonomía y la eficacia del equipo quirúrgico y la de
til y activado por la voz, permite al cirujano ajustar y ejecutar las instalaciones. El uso de un quirófano con ordenadores
muchas tareas rutinarias en cirugía laparoscópica. Por ejem- que se activen por medio de la voz puede hacer que el tiempo
plo, podría utilizar un casco unido a un ordenador que se requerido para realizar una técnica sea menor.3 Es preferible
active con la voz para inclinar o rotar la mesa de quirófano, utilizar tomas directas del gas para insuflación en lugar de
ajustar la luz, hacer el balance de blancos en la cámara o botellas, ya que el uso de estas supone desplazamientos y
llamar por teléfono. Luketich y otros autores han demostra- obligar a frecuentes recambios. La toma directa del gas para
do que este sistema elimina un promedio de 15 órdenes por insuflación, además, ayuda a que no se produzcan retrasos
caso, del cirujano al personal de enfermería y mejora de for- ni interrupciones durante la cirugía. El aprovisionamiento
ma significativa la satisfacción del personal de quirófano.1 de material en el quirófano es más fácil y rápido cuando el
Debido al número y a la calidad de los monitores, todo equipo se encuentra suspendido, que cuando está en volumi-
el personal de quirófano puede observar lo que está ocu- nosos y pesados carros cargados con los equipos de insufla-
rriendo dentro del abdomen. Ello permite a todo el personal ción y de vídeo. El tiempo de colocación y retirada del siste-
anticiparse mejor a lo que el cirujano pueda necesitar, con ma de vídeo puede reducirse de forma significativa usando
la consiguiente reducción del tiempo de respuesta a sus la sala laparoscópica, con el consiguiente ahorro de costes.4
solicitudes.
Gestión de la información
Enseñanza
En la era de la imagen digital, de la recogida electrónica de
En íntima relación con la comunicación, la capacidad docen- datos y de la transmisión por banda ancha, el quirófano
te del cirujano también mejora en una sala de laparoscopia. moderno hace posible la producción de vídeos y fotos de
No sólo porque el estudiante, el médico residente o el ciru- carácter educativo, la acumulación de datos durante la ciru-
jano visitante puedan observar mejor la operación, sino por- gía, y la realización de demostraciones en directo, que pue-
que las imágenes pueden ser transmitidas a distancia. Ya sea den ser usadas en teleformación quirúrgica. Sin embargo, la
en directo o en diferido, pueden ser enviadas a una sala de privacidad supone un motivo de preocupación. La ley de
reuniones, a través de un circuito cerrado, o a cualquier 1996 sobre Responsabilidad y Transferibilidad de Seguros
lugar del mundo, a través de Internet o vía satélite. Médicos establece normas a nivel nacional para la transmi-
Esta posibilidad de proporcionar comunicación de for- sión electrónica de datos referentes a atención médica y tam-
ma instantánea nos da la oportunidad de realizar lo que se bién aborda la seguridad y la privacidad de datos sanitarios.5
viene denominando como teleformación en cirugía. Tanto el centro como el cirujano deben adoptar medidas
Con este sistema, el cirujano puede mostrar una deter- para proteger la privacidad de los pacientes, al tiempo que
minada técnica a cirujanos que deseen conocer nuevos pro- aprovechan la capacidad de los quirófanos modernos para
cedimientos. Otra posibilidad es que el cirujano experto registrar y compartir datos.
Capítulo 54 • Áreas de laparoscopia y robótica en cirugía bariátrica 443

La naturaleza digital de la información que recibimos cirugía en un paciente desde otro lugar. Este lugar puede
permite documentar de forma rápida y eficaz los procedi- estar fuera del quirófano o, a través de la transmisión de
mientos quirúrgicos. La información puede ser recogida por datos a gran velocidad, en otra parte del mundo.7,8 La posi-
medio de programas dirigidos por la voz que crean sonidos bilidad de realizar una intervención desde un lugar remoto
o videoclips. El sistema de gestión de información suele uti- ha generado dos términos más: teleformación en cirugía
lizar una aplicación de software, con un menú de opciones (comentado previamente) y telepresencia.
estándar que incluye la posibilidad de captar imágenes, per- La telepresencia utiliza el telerrobot para llevar a cabo la
mitir una fácil y rápida incorporación de los detalles de la cirugía sin la presencia del cirujano ante el paciente. Aunque
técnica en ejecución, y realizar informes convencionales continúe planteando dudas éticas y médico-legales, la tele-
sobre los procedimientos rutinarios. Estos sistemas son lo presencia podría ser viable, por ejemplo, para realizar ope-
suficientemente especializados para permitir, en tiempo raciones en un frente de combate, en el que el cirujano
real, la notificación de los costes al médico remitente. La podría, detrás de la línea de fuego, practicar cirugía en un
mayoría de estos sistemas pueden estar localizados en el qui- soldado herido.
rófano o en una dependencia adyacente. La Food and Drug Administration ha aprobado diversos
A medida que estos sistemas de gestión se vayan de- sistemas robóticos para uso en cirugía intraabdominal en
sarrollando, se podrán integrar en el sistema de suministro EE. UU. Estos sistemas tienen una serie de características
de servicios del quirófano, mostrándonos el material usado, comunes: 1) una consola para el cirujano en la que se puede
y pudiendo verificar el inventario en el sistema de pedidos. ver una imagen tridimensional, y en la que es posible mani-
El objetivo de obtener un adecuado flujo de información pular una serie de palancas, pedales y otros instrumentos
integral y multidisciplinar es difícil de alcanzar y está sujeto para controlar los brazos del robot (figura 54-2); 2) un carro
a numerosos cambios, aunque se están realizando grandes quirúrgico, en el que los brazos del robot interactúan con el
progresos dentro de este contexto. paciente, de forma estéril, y 3) una torre de control, que
alberga una fuente de luz, así como un ordenador que fusio-
Resumen na la imagen de vídeo estereoscópica en una imagen tridi-
mensional que es vista por el cirujano en la consola. Estas
La cirugía mínimamente invasiva, tanto si se aplica al siste- características se aúnan para conformar una plataforma cen-
ma digestivo como a cualquier otra parte del cuerpo, intro- tral que permite al cirujano mantener el control de las herra-
duce una nueva serie de requisitos y cuestiones que no plan- mientas quirúrgicas aprovechando todas las ventajas del sis-
teaba la cirugía abierta tradicional. Si los cirujanos, tema (v. figura 54-3).
hospitales y centros quirúrgicos desean adaptarse a este Es importante destacar que el cirujano y el robot traba-
entorno, han de adecuarse a la infraestructura impuesta por jan en una relación maestro-esclavo. Las órdenes del ciruja-
las nuevas tecnologías. De alguna forma, un moderno qui- no se traducen en movimientos de los instrumentos del
rófano de laparoscopia debe incorporar los elementos robot. El cirujano se sienta ante la consola, que está física-
comentados para lograr un medio eficiente y ergonómico mente separada del paciente. El cirujano puede necesitar un
que sea seguro y rentable, optimizando de este modo ela ayudante con atuendo estéril, que le traslade el material
asistencia al paciente sometido a cirugía bariátrica. necesario, como por ejemplo, hilo de sutura, o un drenaje de
Penrose a la cavidad abdominal, a través de un puerto acce-
sorio (v. figura 54-4).
Z ROBÓTICA La cirugía telerrobótica cambia el contacto directo doctor-
paciente y permite una optimización, por medio del ordena-
Los robots han avanzado. De las páginas de los libros de dor, de las tareas del cirujano. Esta optimización del funcio-
ciencia ficción han pasado a formar parte integral de nume-
rosas industrias. A medida que los ordenadores van hacién-
dose más pequeños y potentes, los robots son utilizados de
forma creciente para mejorar la seguridad, la precisión y los
resultados de muchas tareas, sobre todo de aquellas que
implican un alto grado de repetición. La idea de la presencia
de un robot en una sala de operaciones puede atemorizar a
muchos. Los robots llevan implícita la idea de ser máquinas
autónomas, que llevan a cabo tareas preprogramadas, sin
control humano directo. El diccionario define un robot
como un dispositivo que realiza de forma automática tareas
complejas, y a menudo, repetitivas, o también como un
mecanismo guiado por controles automáticos.6 En este
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

aspecto, los dispositivos usados en el quirófano no son


robots, ya que permanecen bajo el control directo del ciru-
jano y no realizan maniobras preprogramadas de forma
automática. Por eso sería mejor reemplazar el término robot
por el término más preciso de dispositivo de telemanipulación
optimizado por ordenador. Sin embargo, lo más probable es
que el término robot continúe siendo el más ampliamente
aceptado, por lo que, a los efectos del tema del capítulo, usa-
remos este término.
La cirugía que usa robots es en realidad cirugía telerro- Figura 54-2 La consola robótica es una unidad móvil en la que el
bótica. Ello implica que el cirujano puede llevar a cabo una cirujano se sienta para controlar los brazos del robot.
444 Sección IX • EDUCACIÓN, PRÁCTICA Y DOCUMENTACIÓN

presentaron una serie de 146 casos realizados en un único


centro.11 Marescaux y cols.7 describieron una serie de
25 pacientes a los que se les practicó una colecistectomía lapa-
roscópica asistida por robot y encontraron que tanto la dura-
ción como los resultados obtenidos fueron similares a los
resultados de laparoscopia convencional. También se estudió
la funduplicatura de Nissen, realizada de forma laparoscópica
y asistida por robot, y se encontraron resultados similares en
cuanto al transcurso del período perioperatorio y los resulta-
dos finales.13 La ayuda del robot parece tener un valor añadido
en situaciones en las cuales la magnificación del campo ope-
ratorio y la precisión de movimientos son esenciales, como
ocurre cuando existe un campo operatorio pequeño y con una
visión limitada. Por ejemplo, en el transcurso de una mioto-
mía de Heller o cirugía antirreflujo, el hiato esofágico y las
fibras del esófago se ven claramente y se puede evitar una
lesión del esófago. Y si esta ocurriera, se puede reconocer y
reparar de forma más fácil que cuando utilizamos las técnicas
Figura 54-3 El sistema robótico se coloca encima de la mesa de qui- laparoscópicas habituales.11,14
rófano. Se ha sugerido que la cirugía laparoscópica asistida por
robot funciona mejor en espacios pequeños y reducidos.11
namiento incluye la eliminación del temblor, movimientos de Por eso la disección limitada de la unión gastroesofágica que
la muñeca de los brazos del robot con seis grados de movi- hay que realizar para poder colocar de forma laparoscópica
miento más la función de prensión, graduación de movimien- la banda gástrica se presta muy bien al uso del robot. De
tos y posibilidad de obtener imágenes de forma estereoscó- hecho, la colocación de la cinta gástrica realizada de forma
pica. El cirujano cuando usa el robot puede llevar a cabo laparoscópica y asistida por robot, ya ha sido descrita.15 Sin
complejas maniobras quirúrgicas que puede que fueran más embargo, el cambio en el campo de visión durante una téc-
difíciles de realizar usando técnicas convencionales de lapa- nica que se realice desde la unión gastroesofágica hacia el
roscopia que limitan el grado de movimiento del dispositivo ligamento de Treitz, como podría ocurrir cuando se realiza
quirúrgico, a cuatro grados más la función de prensión. El un bypass gástrico en Y de Roux, requeriría retirar del
robot proporciona más grados de libertad de movimientos paciente los brazos del robot, quitar el carro del robot, y
debido a su capacidad de articular el instrumental, de forma volver a colocar los brazos en una mejor posición y orienta-
similar a la muñeca, algo que no es posible con los instru- ción. Esto presenta problemas de retraso y seguridad.
mentos laparoscópicos habituales. A pesar de estos inconvenientes, se ha comunicado la
realización de una derivación gástrica en Y de Roux usando
Usos en cirugía intraabdominal dispositivos telerrobóticos. Se han descrito varias técnicas,
para realizar estos procedimientos. El grupo de Horgan des-
Los dispositivos de cirugía asistida por ordenador han recibi- cribió la realización de una gastroyeyunostomía mediante
do la aprobación de la FDA y han sido usados de forma segu- una anastomosis asistida por ordenador.16 Los pasos iniciales
ra en numerosos procesos intraabdominales. Su uso se ha de la operación se llevaron a cabo usando instrumentación
descrito en la realización de colecistectomías, esofagectomías, laparoscópica estándar y el robot se utilizó para realizar la
funduplicaturas, miotomías de Heller, píloroplastias, esple- anastomosis. Esta parte de la operación requiere realizar
nectomías, pancreatectomías y colectomías.9,10 Cadiere y cols. una sutura precisa en un espacio reducido.
Se ha descrito otro abordaje alternativo, en el cual la
gastroyeyunostomía y la enteroenterostomía se completan
con la ayuda del robot. Sudan describe la técnica del cruce
duodenal, en la cual la anastomosis proximal se realiza con
la ayuda del robot (comunicación personal; Sudan R,
Creighton University, julio de 2003).
A pesar de haber sido aplicada con seguridad, la cirugía
bariátrica asistida por robot no ha sido comparada, de forma
prospectiva y aleatorizada, con la cirugía laparoscópica están-
dar. Los excelentes resultados, junto con los eficaces tiempos
obtenidos en la realización de las intervenciones, en centros
donde se practica tanto la cirugía a cielo abierto como la lapa-
roscópica, han establecido un nivel de calidad tan alto que es
probable que los dispositivos robóticos actuales no puedan
ser mejorados de manera significativa en el futuro.

Orientaciones futuras
El uso de los robots en cirugía bariátrica seguirá evolucio-
Figura 54-4 Cirugía robótica con ayudantes quirúrgicos. El ciruja- nando. Los aparatos de robótica incluirán una amplia gama
no, que no aparece en la imagen, está controlando el robot a distancia de dispositivos que incrementarán la eficacia y la seguridad de
desde la consola. las técnicas actuales. Dotados de programas y sensores,
Capítulo 54 • Áreas de laparoscopia y robótica en cirugía bariátrica 445

podemos imaginar que se podrían montar dispositivos pre- 6. Merriam-Webster: www.m-w.com. Accessed July 20, 2003.
programables independientes después de la inserción a tra- 7. Marescaux J, Leroy J, Rubino F, et al: Transatlantic robot-assisted
vés de orificios naturales, para llevar a cabo la intervención telesurgery: feasibility and potential applications. Ann Surg 2002;
235:487-492.
quirúrgica predefinida. Aunque no es previsible que estos 8. Larkin M: Transatlantic, robot-assisted telesurgery deemed a success.
tipos de estructuras y procedimientos se lleven a cabo en un Lancet 2001;358:1074.
futuro inmediato, el progreso continuará en la dirección de 9. Melvin WS, Needleman BJ, Krause KR, et al: Computer-enhanced
integrar la tecnología avanzada en la cirugía bariátrica. “robotic” telesurgery: initial experience in foregut surgery. Surg
Endosc 2002;16:1790-1792.
10. Talamini M, Campbell K, Stanfield C: Robotic Gastrointestinal
surgery: early experience and system description. J Laparoendosc Adv
Z BIBLIOGRAFÍA Surg Tech 2002;12:225-232.
11. Cadiere GB, Himpens J, Germay O, et al: Feasibility of robotic
1. Luketich JD, Fernando HC, Buenaventura PO, et al: Results of a laparoscopic surgery: 146 cases. World J Surg 2001;25:1467-1477.
randomized trial of HERMESTM-assisted versus non-HERM- 12. Melvin WS, Krause KR, Needleman BJ, et al: Computer enhanced
ESTM-assisted for laparoscopic anti-reflux surgery. Surg Endosc versus standard laparoscopic anti-reflux surgery. J Gastrointest Surg
2002;16:1264-1266. 2002;6:32-35.
2. Berguer R, Rab GT, Abu-Ghaida H, et al: A comparison of surgeon’s 13. Gould JC, Melvin WS: Computer-assisted robotic antireflux surgery.
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© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.
55
Cuestiones de responsabilidad
en la cirugía bariátrica
Otto L. Willbanks, M.D., F.A.C.S.

La posibilidad de entrar en un proceso de responsabilidad para cubrir los gastos derivados de una sentencia adversa
por daños corporales preocupa a la mayoría de los cirujanos importante, independientemente de lo que requiera el hospital.
bariátricos. Aún se cuestiona la legitimidad del campo de la Además, el cirujano debe saber en qué está a cubierto y en qué
cirugía bariátrica, a pesar de las abrumadoras pruebas en no, y tener garantizada la cobertura adecuada.
contra. Por eso, muchos cirujanos bariátricos tienden a
ponerse a la defensiva en asuntos relacionados con sus pacien-
tes y con su asistencia. Como hechos que potencian esta acti- Z CONSENTIMIENTO INFORMADO
tud, cabe destacar la innegable tendencia a plantear litigios
propia de la sociedad actual, la existencia de abogados espe- Casi todos los casos de mala práctica médica alegan la falta de
cializados en demandas por daños, y el que ciertos profesio- un consentimiento informado. Por tanto, el cirujano bariátri-
nales sanitarios se ofrezcan como peritos en los procesos. co debe anticiparse a esa alegación. Durante mucho tiempo se
La primera línea de defensa del cirujano es evitar la mala ha sabido que los recuerdos de los pacientes en relación con el
praxis y con ello la demanda. En teoría, son tres los elementos proceso de información son erróneos, incluso cuando no hay
necesarios para una actuación válida contra un médico, y los de por medio indemnizaciones económicas de alcance. En
tres deben ser demostrados y coincidir en el mismo caso para 1976 Robinson y Merav publicaron un estudio en el que se
que este pueda ser considerado como mala praxis. Primero, grabaron las sesiones informativas a posibles pacientes de ciru-
debe haber negligencia por parte del médico. No hace falta que gía cardíaca y, así, el recuerdo de estas sesiones fue evaluado al
sea intencionada y, de hecho, si la actividad lesiva lo es, el asun- cabo de 4 y 6 meses después de la intervención.1 Se evaluaron
to puede considerarse un acto criminal (agresión). Segundo, seis categorías de información diferentes, con un promedio de
debe haber daños cuantificables. Y tercero, hay que demostrar testificación correcta del proceso de información de sólo el
que la negligencia fue la causa real de la lesión. Es necesario 29%. La peor categoría, la referida a las posibles complicacio-
entender además que los incidentes que presenten estas caracte- nes quirúrgicas, fue de apenas el 10%. El 65% de los pacientes
rísticas rara vez irán a juicio, pues suelen resolverse por la nego- alegó que había habido falsedad por parte del médico infor-
ciación entre las partes. El concepto de las tres características mante, y el 85% recordó menos de la mitad de la información
esenciales es preciso. Sin embargo, una interpretación superfi- que se les dio. Los pacientes que recordaban la información os-
cial induce en el médico un estado de excesiva simplificación. En cilaron entre el 3% y el 57%. Estos datos, aun cuando no
realidad, otros factores entran en juego cuando se considera lo haya implicados intereses secundarios (como los inherentes
que realmente es una negligencia. Por ejemplo, no obtener el a una demanda), sugieren que es esencial la documentación
consentimiento informado es una forma de negligencia, así precisa de la exposición completa de los pros y los contras y de
como el uso de técnicas no probadas o desautorizadas. Por tanto, las complicaciones de un procedimiento bariátrico.
estas y otras cuestiones han de tenerse siempre en cuenta. Una simple nota indicando que «se ha realizado una
La forma más importante de minimizar el riesgo es cono- exposición completa de las ventajas y desventajas de la ciru-
cer bien la práctica clínica, estar al día en ella y consultar la gía, y de todos los posibles resultados, complicaciones y
bibliografía médica, de modo que el cirujano pueda estar siem- métodos alternativos de tratamiento, y que el paciente acep-
pre a la altura de los principios de esa práctica. Es más probable ta todo lo expuesto y solicita la cirugía», sin ser perjudicial,
que una asistencia de alta calidad genere resultados positivos y no es la documentación adecuada. Se precisa que los proble-
reduzca al mínimo el riesgo de lesiones, malos resultados e insa- mas específicos queden registrados en la historia clínica.
tisfacción, que son factores generadores de litigios. El mejor La grabación de la entrevista es una opción, pero hay
modo de mantenerse al día en el campo de la cirugía bariátrica que tener en cuenta que cualquier omisión quedará también
es desarrollar un profundo conocimiento, familiarizarse con la documentada en este caso, por lo que podría convertirse en
bibliografía y asistir a reuniones y congresos en los que se pre- una prueba potencialmente utilizable contra el cirujano.
senten y evalúen los más recientes avances. Muchos especialistas utilizan folletos informativos. Estos
Un juicio, incluso aunque lo gane el médico, puede resul- folletos fueron, durante mucho tiempo, escritos e impresos
tar muy costoso. Es esencial disponer de un seguro adecuado por los propios cirujanos que los utilizaban, y siguen siendo
446
Capítulo 55 • Cuestiones de responsabilidad en la cirugía bariátrica 447

un método viable para informar a los pacientes. Más reciente- consumidos en pequeñas cantidades, son los objetivos alimen-
mente, la American Society for Bariatric Surgeons ha publicado tarios de adecuado cumplimiento en el paciente.
un impreso modelo que ha sido revisado y aprobado por reco- También es importante saber si el posible paciente ha
nocidos cirujanos bariátricos. Este soporte gráfico es proba- planteado antes otras demandas, sobre todo por mala praxis
blemente la representación más exacta de la práctica clínica médica. Este asunto debe investigarse, diplomática y cuida-
aceptada que se tiene actualmente. Pueden adquirirse copias dosamente, durante la entrevista inicial.
de este folleto en la American Society for Bariatric Surgeons
(www.asbs.org). Sin embargo, no es suficiente con entregar el
impreso al paciente. Un cirujano debe realizar una entrevista Z MARKETING
personal, durante la cual se plantearán preguntas y se obten-
drán sus respuestas. Será necesario exponer específicamente El cirujano debe ser muy cuidadoso en el uso de las técnicas
todas las posibles preocupaciones del paciente, de manera de marketing. El derecho legal de hacerse publicidad está
franca y directa. Todo ello debe ser meticulosamente docu- bien establecido y ninguna organización o persona puede
mentado en la historia clínica del paciente para establecer cla- prohibir el marketing, siempre que se base en argumentos no
ramente que se ha obtenido el consentimiento informado. engañosos. Por otro lado, siempre es conveniente cierto gra-
Un cirujano imprimirá una copia con las preguntas de la do de moderación y buen criterio.
entrevista inicial, para que sea cumplimentada en el momento Las directrices del American College of Surgeons conde-
de realizarla, con especial atención a la especificación de las per- nan el uso de testimonios personales, considerándolos enga-
sonas presentes, la anamnesis del paciente y los resultados de la ñosos y, con frecuencia, autoensalzados. En general, cual-
exploración física, los anteriores intentos de pérdida de peso y quier propaganda más o menos agresiva no tiene cabida en la
los problemas médicos agravados por la obesidad. También se práctica ética del cirujano. Se debe evitar que en la publicidad
enumerarán en la parte inferior de la página recordatorios con de la propia consulta o actividad aparezcan comentarios de
un solo término de cada uno de los puntos que deben ser expues- este tipo y eludir cualquier declaración que pudiera ser inter-
tos y discutidos, y se marcarán según vayan comentándose. Esta pretada como garantía, implícita o explícita, de un resultado
copia formará parte de la historia clínica permanente y servirá concreto. En caso de demanda, los abogados de los deman-
de prueba de que se ha realizado una exposición completa. Otros dantes tendrán en cuenta este tipo de comentarios, que serán
cirujanos pueden aportar pruebas escritas de respuestas múlti- potencialmente perjudiciales para el cirujano. Muchos ciru-
ples, con respuestas de verdadero o falso, o de otros tipos, que janos bariátricos no se hacen publicidad precisamente por
deberán conservarse en las correspondientes historias clínicas este tipo de razonamientos. En cualquier caso, los pacientes
para demostrar que el paciente tenía un conocimiento realista obesos mórbidos son numerosos, por lo que puede conside-
de las expectativas del tratamiento. Sea cual fuere el método rarse que la autopromoción resulta innecesaria.
utilizado, hay que documentar el proceso. A efectos jurídicos, se
considera que los sucesos no documentados no han ocurrido.
Z TÉCNICAS INNOVADORAS
Z ELECCIÓN DE LOS PACIENTES Por naturaleza, los cirujanos bariátricos son innovadores e
imaginativos, lo que puede servir como acicate para los liti-
Existen varios tipos de pacientes que han de despertar cierta gantes, que a menudo van en busca de modalidades que se
cautela en el cirujano. Algunos de ellos se comentan a con- encuentran «más allá de la práctica clínica aceptada».
tinuación. Es necesario guardar ciertas precauciones, por El cirujano prudente, que concibe una nueva técnica o
ejemplo, cuando el paciente se presenta quejándose de que su una modificación de otra previamente establecida, ha de ser
anterior médico o cirujano actuó con negligencia, tuvo un precavido en su aplicación. Su evaluación previa en animales
mal comportamiento con el enfermo o no se mostró correcto, de laboratorio es siempre aconsejable y permite garantizar la
o bien de que el personal de su consulta mantuvo una actitud seguridad y la eficacia de la nueva técnica. Después de esta-
descortés o insultante. En general, se debe mantener cierta blecer resultados favorables en animales, la modificación
salvaguarda en relación con todo aquel que hable mal de su propuesta debe ser evaluada por la dirección del hospital y
anterior cirujano o de otros profesionales. En estos casos, ha de ser aprobada antes de su realización en un paciente.
conviene ponerse en contacto con el médico anterior por Dicho paciente debe conocer con detalle la naturaleza de la
varias razones. Si va a producirse un cambio de médico, el intervención, y es necesario obtener un consentimiento por
nuevo médico debe conocer los detalles de la asistencia pre- escrito, que incluya una descripción del carácter evaluativo
via al paciente y la forma en que este respondió a los trata- de la operación antes de que sea llevada a la práctica.
mientos prescritos. Además, el médico anterior puede dar El abogado demandante puede tratar de establecer que
información sobre conductas adictivas, beligerantes o de el cirujano está experimentando en el paciente, y esta posi-
demanda, así como los hábitos en lo que respecta al pago de las bilidad ha de ser considerada de antemano por el cirujano.
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

facturas del paciente; todos los datos deben ser tenidos en La consulta con otros cirujanos y el apoyo de otros médicos
cuenta antes de aceptar el tratamiento del paciente. disminuirán la fuerza de este tipo de argumentaciones. En
Se ha de tener cuidado también con los pacientes que sean cualquier caso, el cirujano debe tener planificada su defensa
dependientes de dos o más drogas o alcohólicos, pues son pro- y ser apoyado por otros colaboradores.
pensos a interponer demandas y en ellos es más probable, ade- El uso de técnicas ya consolidadas, sobre las que haya
más, que la cirugía bariátrica fracase. El consumo de alcohol, estadísticas fiables en la bibliografía, es la medida más segura
por ejemplo, favorece el fracaso del tratamiento a través de tres y prudente. Ciertamente, los avances quirúrgicos exigen modi-
vías diferentes. Tiene muchas calorías (gramo a gramo, las ficaciones y evaluaciones. No obstante, el uso de tales mo-
mismas que el azúcar), estimula el apetito y elimina las inhibi- dificaciones ha de ser prudente, basado en la experiencia,
ciones. Esto puede dar lugar a sustanciales diferencias cuando reforzado por la investigación, aprobado por los estamentos
pequeños bocados, bien masticados, tragados lentamente, y rectores, y convenientemente apoyado por un consentimiento
448 Sección IX • EDUCACIÓN, PRÁCTICA Y DOCUMENTACIÓN

informado y por numerosas consultas. De lo contrario, los den serlo. El sentido común, junto con una profunda reflexión,
riesgos asumidos por el cirujano pueden aparecer, en caso de puede hacer que este tipo de cirugía sea accesible para todos los
demanda, como pretenciosos y arrogantes, o simplemente que lo necesiten y evitar muchas situaciones desagradables.
como irresponsables. La simple mención de un título profesio-
nal o académico no hace a un cirujano inmune a este tipo de
ataques. Así pues, debe siempre actuar con precaución cuando Z DESPUÉS DE SER DEMANDADO
se instituyan mejoras, modificaciones y nuevas técnicas.
Una vez que se ha presentado una demanda, o cuando parez-
ca que puede ser presentada, es fundamental que no se modi-
Z ACTITUDES fique la historia clínica, aun en los detalles más insignifican-
tes. Cualquier intento de hacerlo puede ser aprovechado por
En general, es el paciente insatisfecho, que ha experimenta- los abogados de los demandantes y servirá para que la parte
do malos resultados, el que interpone una demanda. demandada parezca engañosa y culpable.
Ocasionalmente se encuentran personas «aficionadas a El mejor consejo que se puede ofrecer a un médico contra
demandar», que buscan siempre razones para un posible el que se ha interpuesto una demanda es el de «superarla». Es
contencioso. Sin embargo, lo habitual es que el demandante muy poco frecuente que en un proceso de este tipo existan
sea alguien al que el tratamiento no le ha funcionado. La motivaciones de índole personal, por lo que el proceso no
razón más frecuente para la presentación de una demanda es debe interpretarse como un ataque válido contra el carácter o
la percepción de la indiferencia del médico. La mayoría de la capacidad profesional del médico. El problema debe abor-
los pacientes no demandan a un cirujano que mantiene ante darse racionalmente, después de reflexionar sobre ello, y no
ellos una actitud positiva. Ello no es una regla, pero tiene con prisa o cuando se está emocionalmente influido por el
aplicación en la mayoría de los casos. asunto. El seguro de responsabilidad civil debe ser advertido
Los pacientes deben sentirse bien acogidos, y sus comen- tan pronto como sea evidente que existe un problema, incluso
tarios y quejas han de ser atendidos de forma completa, y en aunque no haya sido presentada una demanda. Se deberá con-
un entorno que no sea apresurado o precipitado. Tienen que certar una reunión con un abogado defensor experimentado
sentirse apreciados. Las tres palabras más importantes en las y, en ella, el demandado deberá expresarse con toda franque-
relaciones con el paciente son comunicación, comunicación y za. Conviene recordar que un abogado defensor no puede ser
comunicación. Esta debe ser siempre sincera. Los pacientes de ayuda si no conoce todos los aspectos del caso.
detectan enseguida una actitud amistosa que sea en realidad Será necesario, además, programar una evaluación del
falsa o engañosa. También la actitud del personal de la con- caso con un reconocido experto en la materia, preferible-
sulta pueden ser una importante fuente de hostilidad y de una mente que no conozca personalmente a la parte demandada.
posterior demanda. El personal de la consulta debe ser cons- A continuación se tomará una decisión en lo que respecta a
ciente de ello y tratar a los pacientes con respeto y cortesía. si es preferible buscar un acuerdo o continuar con el proceso
Se ha de evitar a toda costa dar la impresión de estar legal. Habitualmente, el demandado participa en esta deci-
demasiado ocupado para responder a una pregunta del sión. La compañía de seguros puede o no favorecer un acuer-
paciente. La percepción de que un médico tiene prisa, o de do, y el demandado tendrá que considerar todas las opinio-
que él o su personal se muestran arrogantes es una de las nes a este respecto. La compañía de seguros correrá con los
principales causas de demanda por negligencia.2 gastos del proceso judicial y deberá tener siempre en cuenta
Debe mantenerse una pauta de moderación en las acti- la posibilidad de perder el caso.
vidades de marketing. Legalmente, el marketing y la publici- Las acciones resueltas por vía extrajudicial y las resolu-
dad no pueden ser prohibidos por una organización o perso- ciones judiciales adversas han de comunicarse al National
na. Esto se considera una restricción de la actividad Practitioners Data Bank. El cirujano debe decidir qué camino
comercial, y viola las leyes estadounidenses. Sin embargo, seguir. La mayoría de los seguros de responsabilidad civil no
como se ha dicho, un marketing demasiado entusiasta puede cubren las indemnizaciones ejemplarizantes o punitivas, por
inducir a error a los pacientes y dar lugar a desagradables lo que un cirujano tendrá que decidir si es aconsejable con-
relaciones públicas e incluso, en determinadas circunstan- tratar un abogado personal para que le asesore a lo largo del
cias, a consecuencias procesales. proceso. Un demandado por una acción de negligencia debe-
El American College of Surgeons (www.facs.org) y la ría considerar que los profesionales del derecho tratan de ser
American Medical Association (www.ama-assn.org) han de- útiles, al igual que un cirujano espera que los pacientes con-
sarrollado directrices éticas detalladas y específicas acerca fíen en sus habilidades y juicio médico o quirúrgico.
del marketing, indicando que las declaraciones engañosas A nadie le gusta considerarse demandado en un asunto de
están prohibidas. El uso de testimonios personales es consi- negligencia o responsabilidad, pero en el marco de la actual
derado engañoso y debe evitarse. La publicidad o el marke- tendencia a interponer demandas siempre que hay ocasión, no
ting que puedan considerarse falaces serán utilizados por los es difícil que un cirujano tenga que hacer frente a esta expe-
abogados demandantes para argumentar una posible actitud riencia alguna vez. Es necesario estar preparado. Cuando se
de búsqueda de enriquecimiento por parte del cirujano que produzca un juicio, el seguro de responsabilidad civil profe-
sea expuesto a un proceso judicial. Antes de presentar publi- sional estará ahí para cubrir las posibles incidencias.
cidad de la propia consulta en una página web, en prensa o en
cualquier otro medio, se ha de tener siempre en cuenta este
principio. Una vez que los anuncios se hagan públicos será ya Z BIBLIOGRAFÍA
demasiado tarde para cubrir las posibles contingencias.
Se trata de un terreno ciertamente escabroso en el que 1. Robinson G, Merav A: Informed consent: recall by patients tested
postoperatively. Ann Thor Surg 1976;22:209-212. Reprinted in Bull
toda precaución es poca. El cirujano debe comprender todas las Am Coll Surg 1977;62:7-9, 30.
implicaciones de cada actividad. Muchos pacientes han sido 2. Hickson G, Federspiel J, Richert J, et al: Patient complaints and
ayudados por la cirugía bariátrica, y hay muchos más que pue- malpractice risk. JAMA 2002;287:2951-2957.
56
Normas para la bibliografía médica:
publicación de resultados
de cirugía bariátrica
Mervyn Deitel, M.D., F.I.C.S., C.R.C.S.C., F.A.C.N., D.A.B.S.

Para el cirujano, la comunicación científica ha de ser una res- te describir la metodología estadística utilizada. Para los estu-
ponsabilidad y una obligación, en su esfuerzo para enriquecer dios con seres humanos o animales, se debe obtener la apro-
y hacer avanzar el conocimiento. La publicación en revistas bación del comité de ética, dato que ha de consignarse en el
(impresas o virtuales) es el principal procedimiento principal manuscrito. Cuando se publican estudios que utilizan cues-
para conseguir esta interacción, que resulta especialmente tionarios se debe indicar la tasa de respuesta obtenida.
importante en el área en desarrollo de la cirugía bariátrica.
Estudios aleatorizados controlados
Z NORMAS GENERALES Una publicación sobre un estudio clínico requiere una des-
DE LAS REVISTAS MÉDICAS cripción apropiada de su diseño y sistema de análisis que per-
mita establecer la coherencia de sus resultados. Es necesario
Los editores de las principales revistas médicas, constituidos describir los criterios de selección, el carácter prospectivo, el
en el Comité Internacional de Editores de Revistas Médicas, método de aleatorización específico, las ramas de tratamiento,
se reunieron en Vancouver, Canadá, en 1978, para establecer el poder estadístico, y el método de enmascaramiento (es decir,
unas normas comunes para todos los originales remitidos a si la persona evaluando la respuesta conoce o no el tratamien-
las revistas biomédicas. Estas normas se han actualizado en to utilizado).2 Se debe identificar, además, qué paquete infor-
otras cuatro reuniones del colectivo, la más reciente de las mático de análisis estadístico o qué pruebas estadísticas se han
cuales data de octubre de 2004.1 utilizado. Los autores tienen que proporcionar información
La mayoría de las revistas médicas revisadas por exper- para que el lector, si se le facilitan los datos, pueda reproducir
tos (por pares) siguen estas normas, aunque algunas pueden los resultados.3 El estudio clínico debe ser lo suficientemente
introducir cambios para adaptarse a sus audiencias particu- grande como para poder detectar diferencias importantes.
lares. Por lo general, para el estilo de una revista quirúrgica
se selecciona un formato sencillo. Requisitos para los autores y errores frecuentes
El procedimiento seguido para la sección de bibliografía
es particularmente importante. Algunas revistas requieren la Se deben notificar los conflictos de intereses, las relaciones
lista de los siete primeros autores, seguido de y cols.; si son más financieras y las agencias/instituciones patrocinadoras.4,5
de siete autores, estas revistas normalmente reducen el listado Los editores exigen que el autor de referencia –en muchas
a tres, seguidos de la notación y cols., mientras que otras revis- revistas, todos los autores– firme un documento de declara-
tas citan siempre a los tres primeros autores, con independen- ción de originalidad del trabajo y de transferencia de los
cia de su número, seguidos de la fórmula y cols. Las citas derechos de autor a la editorial. El autor principal o de refe-
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

deben ser exactas y completas, según las normas establecidas rencia es responsable de garantizar que el manuscrito ha sido
por la revista. Los autores deben consultar siempre la página revisado y aprobado por todos los demás autores. Algunos
de Instrucciones para los autores de la revista a la que remiten editores exigen que todos los autores firmen la carta de pre-
su manuscrito original. Han de respetar el formato específico sentación y el formulario de cesión de derechos.
establecido por la revista: la carta de presentación debe incluir Las cartas al editor publicadas requieren igualmente un
una declaración de originalidad, seguida de una página con el formulario de transferencia de derechos de autor firmado.
título, un resumen y un cuerpo de texto con un sistema de Cuando se incluyen agradecimientos o se mencionan comu-
cabeceras y organización claro y uniforme. El manuscrito nicaciones personales, actualmente suele ser necesario pro-
puede remitirse por correo, en disquete o en CD o, en muchos porcionar la autorización por escrito de todos los sujetos
casos, a través del correo electrónico como fichero adjunto. aludidos. En los informes sobre casos clínicos, si hay infor-
Cuando el artículo se refiera a estudios clínicos, es importan- mación personal identificable suele solicitarse el consenti-
449
450 Sección IX • EDUCACIÓN, PRÁCTICA Y DOCUMENTACIÓN

miento informado del paciente, de uno de los progenitores, significativas para el manuscrito. Como se indicó con anteriori-
del tutor, o bien de un poder de representación legal. Si el dad, es necesario ajustarse de forma sistemática a las pautas de
paciente es identificable por la singularidad del caso, el per- consignación de la bibliografía propias de la revista.7 Debe com-
miso de publicación debe indicar que el paciente ha podido probarse que todas las citas son correctas y que aparecen en el
examinar el original que va a ser publicado. orden de citación del texto (o, si así lo requiere la revista selec-
La reproducción de tablas o figuras a partir de otras cionada, en orden alfabético de acuerdo con los apellidos de los
fuentes, incluso si están modificadas, exige que el autor pro- autores). Los autores no deben incluir citas que ellos mismos no
porcione la autorización por escrito del propietario de los hayan leído. Se han de excluir de la bibliografía referencias a
derechos de autor (generalmente un editor). En el texto artículos aún no aceptados para publicación (datos no publicados)
explicativo de la figura o en el pie de tabla, es necesario indi- o a comunicaciones personales; estas citas deben incluirse en el tex-
car la fuente correspondiente. Por cortesía, también debe to entre paréntesis. Es necesario, por otra parte, evitar la inclu-
obtenerse la autorización de los autores originales. sión en la bibliografía de citas basadas en presentaciones en
Algunas palabras frecuentemente mal escritas en los ar- reuniones científicas, salvo que el artículo resultante de esta pre-
tículos en inglés remitidos para publicación relacionados con la sentación se haya publicado y pueda citarse.
cirugía de la obesidad son anastomosis, laparoscopic (laparoscopi- Las cartas al editor sobre artículos publicados deben escri-
co) y absorption (absorción). Las normas actuales de redacción birse en un tono correcto, incluso si son para señalar una dis-
médica en lengua inglesa favorecen la utilización de before (antes crepancia o plantear dudas legítimas. Estas cartas pueden dar
de), en lugar de prior to (previo a), because of (por) o on the basis of lugar a intercambios de información activos y provechosos.
(basado en), en lugar de due to (debido a), compared with (compa- Sin embargo, el autor de la carta debe ser consciente de que el
rado con), en lugar de compared to (comparado a), y así sucesiva- autor del artículo tiene derecho de réplica en el mismo núme-
mente. Sin embargo, la mayoría de las buenas revistas intentan ro de la revista y de que a él le corresponde la última palabra
que la información sea comprensible utilizando un inglés con- sobre la cuestión tratada. También puede haber cartas al edi-
temporáneo y gramaticalmente correcto. Algunas revistas tor que no hagan referencia a un artículo previo, pero que
optan por respetar el estilo personal del autor, si bien la mayoría expresen una opinión o proporcionen una breve comunica-
de ellas prefieren un cierto grado de uniformidad estilística. ción. No obstante, antes de escribir una carta al editor debe
Las tablas o imágenes ilustrativas son preferidas a las reflexionarse serenamente y actuar con cautela: es convenien-
descripciones de texto ya que, con un simple vistazo, se con- te ser consciente de que, en caso de litigio legal, cada una de
sigue una referencia de los datos más sucinta, aportándose las partes del texto puede ser examinada por la parte contraria
además variedad a la maquetación del artículo. Los datos o, mejor dicho, por los abogados de la misma.
específicos recogidos en tablas y figuras no deben repetirse La lista de autores bajo el título de un artículo sólo debe
en el texto y viceversa. incluir a los autores que han contribuido directamente en el
trabajo o en la redacción del manuscrito, y que estén de acuer-
Algunas puntualizaciones sobre el contenido do con su publicación. En los editoriales, cartas y comenta-
rios, los nombres de los autores pueden aparecer al final del
Debe procurarse que los artículos sean breves. El título ha texto, en vez de al principio, en función del estilo de la revista
de ser preciso, aunque informativo, y no debe incluir abre- específica. Los encabezamientos que no corresponden a la
viaturas. Los artículos científicos generalmente van prece- estructura habitual de un artículo científico se pueden incluir
didos por un resumen de menos de 250 palabras. Dicho resu- en editoriales, revisiones y cartas, si son de alguna utilidad.
men tiene que coincidir perfectamente con el texto: no se
debe incluir en el resumen nada que no esté en el artículo. Idioma y formato
Se debe evitar incluir en el resumen texto no informativo.
En lugar de consignar afirmaciones como «se describe x» o Los manuscritos deben escribirse a doble espacio en toda su
«se analiza y», es preferible exponer los datos concretos.6 extensión, incluyendo bibliografía, tablas y leyenda de las figu-
Las notas o informes de casos clínicos con observaciones ras, para facilitar su revisión. El margen derecho debe quedar
novedosas se aceptan en la mayoría de las revistas si aportan sin justificar. Conviene evitar las frases demasiado largas.
algún aspecto que puede ser de utilidad en la práctica clíni- Cuando se reciben, a cada manuscrito se le asigna un código
ca. Normalmente van precedidas de un breve resumen no numérico que se notifica a los autores; para facilitar su recupe-
estructurado de un párrafo (menos de 150 palabras). Para los ración, se debe citar este número en todas las comunicaciones,
editoriales, comentarios y cartas no se requieren resúmenes. incluso en el disco que almacene la versión final. Para aquellos
La sección de métodos ha de estructurarse de forma ade- autores cuyo idioma materno no es el inglés resulta muy útil
cuada. Por su parte, la sección de resultados debe contener que un experto en lengua inglesa, preferiblemente un editor,
datos significativos o expuestos en un orden lógico. En la revise sus manuscritos antes de ser enviados para su evaluación.
bibliografía científica se utilizan las unidades métricas del Con la globalización de la comunicación quirúrgica, el inglés se
Sistema Internacional (SI). De manera similar, se usan los ha erigido en el idioma dominante para la comunicación cien-
nombres genéricos de los medicamentos (p. ej., warfarina) y tífica.8 Cuando un manuscrito aceptado va a ser formateado
de las suturas (p. ej., polipropileno); el nombre comercial resulta muy beneficioso que el encargado de supervisar la edi-
puede indicarse a continuación entre paréntesis. En los infor- ción sea también un cirujano experto para evitar que, si ha de
mes referidos a ensayos con fase de seguimiento debe indi- introducirse alguna modificación, no se altere el significado.
carse el porcentaje de pacientes que completaron el estudio.
En la sección de discusión no debe repetirse la introducción. Proceso de selección de manuscritos
La discusión ha de analizar los resultados del estudio conside-
rando otros estudios publicados. Las conclusiones tienen que Habitualmente el editor jefe de una revista envía cada manuscri-
estar debidamente sustentadas por los datos. Los autores deben to a dos miembros del consejo editorial para su evaluación, con
evitar una bibliografía demasiado abundante, sin sobrecargarla el compromiso de que lo devuelva en un breve plazo de tiempo.
con referencias a sus propias publicaciones, salvo que estas sean Cuando los dos primeros revisores no coinciden en su recomen-
Capítulo 56 • Normas para la bibliografía médica: publicación de resultados de cirugía bariátrica 451

dación de publicación sobre un artículo, se consulta a un tercero. diente disquete (o CD), o bien puede enviarse por correo
La mayoría de los supervisores invitan a expertos externos a electrónico como documento de Word adjunto. El original
participar en el proceso de revisión. Los revisores evalúan los también puede remitirse a los revisores como documento
artículos por su originalidad, importancia, precisión científica, adjunto de correo electrónico, junto con los formularios de
estilo y formato, y aportan opiniones sobre la prioridad de publi- revisión, para que revisen el trabajo electrónicamente y lo
cación, un informe confidencial para el editor y recomendacio- devuelvan también por correo electrónico.
nes para los autores. Cuando el manuscrito es aceptado para su
publicación, en ocasiones es necesario realizar cambios menores Envío de figuras
o proceder a la reestructuración del artículo. Una revisión
mayor puede implicar la realización de nuevos estudios, requerir Se pueden incluir figuras de alta calidad, siempre que resul-
la ampliación del período de seguimiento del estudio, que pueda ten ilustrativas y útiles. Las figuras para publicación deben
facilitar la consecución de significación estadística para el entregarse en formato de archivo de imágenes con etiquetas
momento en que el manuscrito vuelva a presentarse. (TIFF, por sus siglas inglesas) o con formato encapsulado
Algunos artículos requieren una segunda revisión por par- PostScrip (EPS), o bien en una fotografía impresa de alta
te del consejo editorial, para asegurar que los comentarios plan- calidad que sea escaneada. Actualmente, los archivos de
teados han sido resueltos adecuadamente. Antes de su acepta- PowerPoint o en formato JPEG (Joint Photographic Experts
ción definitiva puede necesitarse una revisión adicional por Group) no se utilizan para publicaciones médicas. Las pági-
parte de los autores. Es también posible que sea necesario un nas en color en la sección de texto requieren una producción
comentario por invitación para equilibrar la discusión de un ar- especial, lo cual entraña un significativo coste extra de
tículo. Los autores deben considerar a los miembros del conse- impresión, que habitualmente debe ser abonado por los auto-
jo editorial como colaboradores, no como adversarios. res. Por eso, si se aceptan ilustraciones en color, la mayoría de
las publicaciones exigen que los autores abonen por anticipa-
do el coste adicional que ocasionan. Sin embargo, la mayoría
Z DERECHOS DE AUTOR Y DOCUMENTACIÓN de las figuras en color pueden reproducirse satisfactoriamen-
te en blanco y negro, evitando así ese coste adicional.
La ley sobre derechos de autor proporciona protección de los
derechos de las partes implicadas en la creación y difusión de Formato de documento portátil
la propiedad intelectual. Los autores transfieren o asignan al
editor los derechos de reproducción del artículo, incluyendo Los autores deben revisar las páginas de prueba. En el pasa-
las figuras y las tablas. Los derechos de reproducción prote- do, las páginas de prueba se enviaban por fax o por mensaje-
gen legalmente la autoría y la publicación. La publicación ría urgente, lo que suponía un coste considerable. Las prue-
duplicada de artículos no está permitida y podría constituir bas no podían enviarse por correo electrónico, salvo que el
una violación o vulneración de la ley de derecho de copia.5 receptor poseyera el programa de formateado del editor
La publicación duplicada y las publicaciones múltiples utili- (p. ej., QuarkXpress) y fuese capaz de abrir los ficheros.
zando partes de un estudio se consideran formas de compor- Actualmente, utilizando el programa de formato de
tamiento académico deshonesto y fraudulento.9 documento portátil (PDF), se pueden enviar las pruebas por
El editor conserva los derechos de reproducción y el correo electrónico y descargarse utilizando el software Adobe
control sobre las copias impresas. No obstante, no suele Acrobat Reader (que puede obtenerse gratuitamente en www.
necesitarse una protección de copia específica en el caso de adobe.com). El editor convierte los ficheros de QuarkXpress en
las directrices desarrolladas para aparecer en múltiples ficheros PDF y las pruebas pueden ser remitidas rápidamente
publicaciones, aunque deben citarse sus fuentes. Los docu- por correo electrónico, como archivo adjunto, al autor de
mentos creados por el gobierno norteamericano son de referencia, acompañado de los formularios de transferencia
dominio público y generalmente pueden ser reproducidos de derechos de autor y de solicitud de copias impresas.
libremente cuando se hace de ellos un uso adecuado. Las pruebas en formato PDF conservan el diseño, los grá-
Si un artículo ha aparecido previamente en un dominio ficos, los colores y los tipos de letra definidos por el diseñador
de Internet, su envío para publicación en una revista impre- gráfico. El autor puede ver en pantalla el artículo formateado
sa se considera duplicación. Algunas revistas aceleran el (incluyendo cualquier figura en color) e imprimirlo para su
acceso a artículos aceptados para publicación, colocándolos revisión. Procede entonces a la revisión del artículo editado y
de inmediato en sus propias páginas web. Si está previsto formateado, en busca de cualquier posible error tipográfico o
que la aparición de un artículo en Internet suceda a su publi- de contenidos.10 No puede, sin embargo, modificar el fichero
cación en una revista, primero se debe obtener la autoriza- en PDF, ni se pueden incorporar nuevo material ni correccio-
ción de la revista y la publicación ha de quedar claramente nes a las pruebas. Las correcciones en las copias impresas
referenciada. Sin embargo, una vez que se publica un ar- deben enviarse rápidamente por fax al editor, evitando hacer
tículo, su contenido pasa a ser de dominio público. anotaciones demasiado cerca de los márgenes de la página, ya
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

Como se indicó anteriormente, todos los autores enume- que pueden quedar cortadas en la transmisión.
rados bajo el título de un artículo han de haber contribuido a
su elaboración. Antes de la publicación, el editor puede soli- Fusiones entre editoriales e incremento de los precios
citar que se defina la aportación específica de cada autor. de las revistas
Los cambios en el ámbito de la edición de revistas médicas
Z LA PUBLICACIÓN EN LA ACTUALIDAD han sido considerables en los últimos tiempos. Como ejem-
plo, Obesity Surgery fue inicialmente publicada por Rapid
Gracias a los rápidos avances de los medios electrónicos Communications de Oxford, Reino Unido, en 1991; poste-
durante los últimos 10 o 15 años, cada artículo debe remitir- riormente la compañía se trasladó a Londres bajo el nombre
se a la oficina de la editorial acompañado de su correspon- de International Thomson Publications. Muchas de las
452 Sección IX • EDUCACIÓN, PRÁCTICA Y DOCUMENTACIÓN

grandes y más antiguas casas editoriales de EE. UU. se vie- inglesas) y PDF, aunque abonando una cuota de suscripción.
ron obligadas a interrumpir su actividad debido al aumento Para poder acceder a los contenidos se requiere un código de
de los costes. Sin embargo, la compañía fusionada Lippincott identificación y una palabra clave. Los artículos en Internet
Williams & Wilkins adquirió una parte de International pueden ser descargados sin gastos por parte de los suscripto-
Thomson Publications. Este conglomerado posteriormente res, o abonando una cantidad si no se está suscrito. Internet es
pasó a ser propiedad de Wolters Kluwer, de Ámsterdam. un medio electrónico muy eficaz de acceso a artículos comple-
A principios de los años noventa, durante una huelga en tos, y tiene la ventaja de vincular sus citas bibliográficas con los
Pergamon Press, de Oxford, la editorial Elsevier, de Ámsterdam, artículos citados allá donde estén (es decir, que basta con pul-
adquirió esta y, posteriormente Reed, para pasar a convertirse sar dos veces con el cursor encima de una cita para acceder al
en Reed Elsevier, la cual más tarde tomó el control también de artículo referenciado de otra revista).
Harcourt Press, y que actualmente, publica 1700 revistas cien- En lo que respecta al planteamiento general de la Web,
tíficas, aproximadamente un tercio del total de revistas médicas se ha dicho que estábamos entrando en una era de comuni-
de publicación continuada. Un buen número de las revistas que cación sin papel. Sin embargo, actualmente se talan más
no eran rentables fueron eliminadas. En 1998, Elsevier abortó árboles que nunca para su utilización por parte de los medios
una operación de compra de Wolters Kluwer, ante las objecio- de comunicación impresa.
nes planteadas por las autoridades reguladoras europeas.
Elsevier ha adquirido Churchill Livingstone, Butterworth,
Mosby y W.B. Saunders. Los editores de las principales revistas Z RECOMENDACIONES PARA DESCRIBIR
científicas restantes son John Wiley & Sons, de Nueva York, LA PÉRDIDA DE PESO EN CIRUGÍA BARIÁTRICA
Springer Verlag, cuyas oficinas centrales están en Alemania, y
la editorial británica Blackwell. En vista de todas estas adquisi- Los informes que sólo proporcionan la pérdida de peso abso-
ciones y fusiones, podría preverse una posible bajada de los pre- luta (o el porcentaje de pérdida de peso inicial) como indica-
cios de las revistas. Sin embargo, ha sucedido lo contrario, y los dor descriptivo (es decir, el peso en el momento de la inter-
precios de las revistas adquiridas se han disparado repentina- vención menos el peso en un momento dado) no son aceptables
mente. El precio de la suscripción anual de una de las revistas como único medio de medición de la pérdida de peso. Los
líderes en el campo de la neurociencia, Synapse, es de unos pesos iniciales difieren en los distintos estudios. Más aún,
2500 dólares, de 4000 dólares es el de Anatomical Record y de después de una intervención bariátrica en un superobeso, el
unos 20.000 dólares el de la revista combinada de neurología número de kilogramos perdidos tiende a ser mayor, mientras
Brain Research, de Elsevier.11 que el porcentaje de pérdida de exceso de peso tiende a ser
A pesar de que el presupuesto de las bibliotecas médicas va menor que en el obeso mórbido. Para realizar comparaciones
en aumento, dichas bibliotecas están recortando drásticamente se prefiere describir la pérdida de peso utilizando el porcenta-
el número de suscripciones a revistas y las compras de libros, je de pérdida de exceso de peso (PEP%) o la variación en el
para ajustarse a los precios en ascenso de las revistas científicas. índice de masa corporal (IMC). Para ello deben utilizarse las
Los editores aducen que el contar con la propiedad de cientos unidades del Sistema Internacional (p. ej., kilogramos, metros,
de revistas les permite dar un mejor servicio a los científicos, ya etc.) en todas las publicaciones científicas.
que así disponen de los recursos financieros necesarios para
invertir en tecnología digital. Sin embargo, lo único que la Peso ideal y exceso de peso
experiencia ha demostrado es que cuando los editores poseen
un número importante de revistas, los precios suben. En EE. UU., las estadísticas de peso ideal se elaboran a partir
Desde 1986, a medida que el número de editoriales ha de las tablas metropolitanas de estatura y peso publicadas en
ido disminuyendo, el precio medio de una revista ha aumen- 1983.12-17 Se considera que ese peso corresponde al registrado
tado hasta más del triple, creciendo muy por encima de las en relación con cada estatura, con la mínima mortalidad y la
tasas de inflación. Mientras tanto, las bibliotecas incremen- máxima longevidad. El peso ideal es menor que el peso medio
taron un 130% su gasto en revistas, pero redujeron un 6% su para cualquier estatura en la población. Las tablas se basan en
número de suscripciones y un 26% el número de libros que el Estudio Build de 1979,18 que fue el resultado de un ensayo
adquieren anualmente.11 Las revistas son el alma del mundo sobre mortalidad desarrollado durante 18 años a partir de los
académico, por lo que el incremento del precio de las revistas datos combinados de 4,2 millones de personas, proporcionados
ha contribuido a que se produzca una paralela escalada de por 25 compañías de seguros de vida de EE. UU. y Canadá. Las
costes en la educación superior. tablas indican el peso que se asoció con la mayor expectativa de
vida. Estos pesos se dan en forma de rango para diferentes com-
Publicación en Internet plexiones corporales (pequeña, media y grande), basándose en
la anchura entre codos, medida con un calibrador.12,13,19 El 50%
A mediados de los años noventa se empezaron a publicar revis- central del ancho entre codos (entre los percentiles 25 y 75) se
tas en Internet, aunque no se sometían a un proceso de revi- define como complexión media, mientras que los otros dos
sión por expertos, por lo que su calidad era más bien escasa. 25% corresponden a las categorías de complexión pequeña y
Además, la publicación electrónica no evitaba los elevados cos- grande. Generalmente se escoge como el peso ideal el punto
tes incurridos por intervención de personal cualificado, edi- medio del rango de pesos de la complexión media.
ción, formateado y equipamiento. Las cuatro revistas médicas Se puede calcular el peso ideal utilizando la fórmula que
en papel más importantes colgaron gratuitamente sus conte- aparece en la tabla 56-1, que proporciona valores que corres-
nidos en Internet con unas importantes pérdidas económicas, ponden al punto medio del rango de la banda media en las
aunque posteriormente se vieron obligadas a cobrar cuotas de tablas metropolitanas, con un margen de error inferior al 1%.20
suscripción elevadas para tener acceso a sus páginas web. En la Se han formulado diversas críticas a estas tablas.13 Cabe citar las
actualidad, la mayoría de las principales revistas que se editan siguientes: 1) las minorías étnicas estaban mal representadas en
en papel también son accesibles en la red en los formatos de la población suscriptora de pólizas; 2) el 10% de los pesos
lenguaje de marcación generalizado (SGML, por sus siglas correspondían a mediciones hechas por los propios sujetos; 3) la
Capítulo 56 • Normas para la bibliografía médica: publicación de resultados de cirugía bariátrica 453

de 40, obesidad mórbida, y el de 50 o más se asocia a superobe-


Tabla 56-1 FÓRMULA PARA EL CÁLCULO sidad. Por el contrario, un IMC por debajo de 17,5 se relaciona
DEL PESO IDEAL con casos de anorexia nerviosa y se observa con frecuencia en
Mujer adulta: 152 cm de estatura = 53 kg. Por cada 2,5 cm adicionales, estados de malnutrición, como la caquexia cancerosa.
sumar 1,5 kg.
Varón adulto: 160 cm de estatura = 61 kg. Por cada 2,5 cm adicionales Pérdida porcentual del exceso de IMC
sumar 1,5 kg.
La fórmula corresponde al punto medio de la franja central en las tablas
La pérdida porcentual del exceso de IMC también se ha utiliza-
metropolitanas, con una precisión del 1%. Para convertir las fórmulas de peso do en las publicaciones de cirugía bariátrica (v. tabla 56-3). Desde
ideal para una franja de complexión pequeña o grande, debe incrementarse o que el National Institute of Health/National Institute of Diabetes and
reducir el resultado en un 10%. Los pacientes deben medirse descalzos. Digestive and Kidney Diseases definió el exceso de peso como
valor de IMC superior a 25,25 las unidades del IMC por encima
población asegurada formaba parte de un colectivo de nivel de este nivel se han definido como la pérdida porcentual del
económicamente más alto que la población general; 4) los pesos exceso de IMC (PPEIMC)26 mediante la siguiente fórmula:
se obtuvieron con los sujetos vestidos con ropa (equivalente a
unos 2 kg para los varones y 1,5 kg para las mujeres, y tacones
de unos 2 cm para ambos sexos); 5) se excluyó a los solicitantes
que padecían alguna enfermedad sistémica importante
PPEIMC  100  冋冢IMC durante el seguimiento  25  100
IMC al inicio  25 冣 册
(p. ej., cardiopatías, cáncer o diabetes) en el momento de suscri-
bir la póliza de seguro, para obtener una valoración del efecto Por ejemplo, si un individuo tiene un IMC inicial de 45,
exclusivamente del peso sobre la mortalidad, y 6) los solicitantes las 20 unidades del IMC por encima del límite superior del
de los seguros tenían entre 25 y 59 años, aunque el peso ideal IMC normal de 25 unidades de IMC representan una
para la supervivencia aumentaba hasta los 50 años. Pese a todo, PPEIMC de 100; una pérdida de 10 unidades de IMC (hasta
no hay otro estudio referido al efecto del peso sobre la supervi- un IMC de 35) correspondería a una PPEIMC de 50. Es
vencia desarrollado en una muestra tan extensa. posible que la PPEIMC se convierta en el estándar para la
El exceso de peso se define como el peso real menos el presentación de los datos de pérdida de peso en los estudios
peso ideal (v. tabla 56-2). A su vez, el exceso de peso es la base clínicos referidos a sobrepeso y obesidad.
para el cálculo del PEP% (v. tabla 56-2).

Tabla 56-3
Tabla 56-2
Pérdida porcentual del IMC =

冋 册
Exceso de peso  Peso real  Peso ideal
Pérdida porcentual del exceso de peso  IMC operatorio  IMC en el seguimiento)  100

冋(Peso operatorio  peso en el seguimiento)  100


Exceso de peso operatorio 册 IMC operatorio

Seguimiento del paciente


Índice de masa corporal
Los cambios en el PEP%, el IMC o la PPEIMC se presentan
El índice de masa corporal (IMC) se considera el método más frecuentemente de manera gráfica como una curva, con barras
fiable para comparar grados de obesidad. Proporciona un a un lado de cada punto temporal indicando la desviación están-
número que indica el nivel de peso para todas las estaturas. Se dar; se debe indicar el número de pacientes controlados y el
calcula con la fórmula peso/estatura2 en los varones y peso/ número de pacientes candidatos para seguimiento en cada pun-
estatura1,5 en las mujeres, midiendo el peso en kilogramos (kg) to temporal. Sin embargo, una curva generalmente corresponde
y la estatura en metros al cuadrado (m2).21 Sin embargo, pues- a análisis longitudinales que, según los puristas de la estadística,
to que la fórmula para mujeres resulta algo complicada de usar, requieren un 100% de seguimiento en cada punto temporal.27
se utiliza la fórmula para varones (peso/estatura2) en todos los El análisis transversal es apropiado en los estudios con
pacientes. El IMC mantiene una excelente correlación con las un seguimiento incompleto, utilizando una tabla o un gráfi-
medidas de la densidad corporal y del grosor del pliegue cutá- co de barras. El eje de ordenadas del gráfico de barras o del
neo y es el mejor indicador de «gordura».22,23 histograma corresponde al parámetro de pérdida de peso
Los estudios de enfermedad y mortalidad que han uti- escogido, con los puntos temporales distribuidos en el eje de
lizado el IMC se han llevado a cabo generalmente con estu- abscisas. De nuevo se debe indicar el número de pacientes
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dios poblacionales de menos de 50.000 individuos. Por eso, seguidos y el número de pacientes candidatos para segui-
a la hora de definir una medida ideal de la supervivencia, el miento en cada punto temporal. La desviación estándar pue-
IMC puede proporcionar de hecho una menor precisión que de indicarse encima de cada barra.28
el ya mencionado estudio metropolitano, que incluyó
4,2 millones de personas y que sirvió de base para el cálculo
inicial del IMC de mínima mortalidad. Z BIBLIOGRAFÍA
Un IMC de 20 a 25 kg/m2 se asocia a la mortalidad mínima,
la cual se incrementa a medida que el IMC se aleja, aumentando 1. International Committee of Medical Journal Editors: Uniform
requirements for manuscripts submitted to biomedical journals. Ann
o disminuyendo, del intervalo definido por estos números.24 Un Intern Med 1997;126:36-47. www.icmje.org
IMC de entre 20 y 25 corresponde al peso normal; un valor de 2. Schumm LP, Fisher JS, Thisted RA, et al: Clinical trials in general
entre 25 y 29,9 indica sobrepeso; un IMC de 30 indica obesidad, surgical journals: are methods better reported? Surgery 1999;125:41-45.
454 Sección IX • EDUCACIÓN, PRÁCTICA Y DOCUMENTACIÓN

3. Rennie D: How to report randomized controlled trials. The 16. National Bariatric Surgery Registry: NBSR Database Instructional
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Índice alfabético

Los números de página seguidos de f, t o c indican figuras,


tablas y cuadros, respectivamente

A Alfentanilo, 113
Algas marinas, dieta, 84-85
Abdomen Algoritmos, pacientes y procedimientos quirúrgicos, 154-156,
cierre, 309-310 155f, 156f
descomprensión, 310 Alimentación parenteral, 247, 310
dolor, 307 Alimentos. Véase también Tratamiento dietético
drenaje, 309 aspectos emocionales, 55
Abdominoplastia aversiones en postoperatorio, 137
complicaciones relacionadas con la obesidad, 339 consumo, vaciamiento gástrico, 279
historia, 325 ricos en energía, 21
invertida, 330-331 sólido, 171
perfilado corporal y, 328-329 Ambulación, postoperatorio, 413
técnicas, 329 American College of Surgeons (ACS), 398, 432
tummy tuck, frente a paniculectomía, 325 American Society for Bariatric Surgery (ASBS), 3, 141, 401
Absceso subfrénico, 173 directrices
Abuso de acreditación, 403-404, 437
físico, selección de pacientes y, 97 para el seguimineto, 348
sexual, 97, 427 idoneidad de la asistencia multidisciplinaria, 432
Acceso Amigdalectomía, 381
intravenoso, 111, 112 Análisis
localización de áreas pequeñas, 345
derivación de resultados, definición, 347
biliopancreática, 240, 240f Anamnesis, 408-409
gástrica Anastomosis
con gastroyeyunostomía con sutura manual, 215, 216f gastroyeyunal
con grapado circular, 209, 209f derivación con bandas ajustables, 224-226, 226f
gastroplastia vertical con bandas ajustables, 179, 179f estenosis, 200, 219, 220t, 221t
Aceite mineral, 85 yeyuno-colon transversal, 149
Ácido(s) Anemia
fólico, deficiencia, 133-134, 321, 359 en derivación biliopancreática, 245
grasos, 358, 388-389 con cruce duodenal, 261
esenciales, déficits, 358 postoperatorio, 134, 358-359
libres, 388-389 Anestesia, 108-116, 124-125, 140-141, 411
Acné, derivación biliopancreática y, 249 acceso intravenoso, 111, 112
ACS (American College of Surgeons), 398, 432 desarrollo del plan asistencial, 112-116
Actitud médica, aspectos de responsabilidad profesional y, 448 estado nutricional y, 111
Adenosinatrifosfatasa sodio-potasio (ATPasa), 373 evaluación preoperatoria, 95, 106, 111-112
Adherencias, liberación, 306 farmacología, 113-114
Adicción, obesidad y, 54-55 inhalación, 113-114
Adipocitos, 19, 30, 39 miorrelajantes, 114
Adipogenia, 18, 19-20, 30 problemas frecuentes en el postoperatorio, 116
Adiponectina, 19, 32 regional, 115
Adolescentes, obesidad. Véase también Obesidad infantil reposición de líquidos y, 115
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aspectos psicosociales, 317 sistema


complicaciones, 316-317, 317t cardiovascular y, 108-109, 111
definiciones, 315-316, 316f gastrointestinal, 110
Afroamericanos, obesidad, 11 hematológico, 110
Agency for Health Care Policy and Research, 346 renal y, 110
AgRP, neuronas, 31 respiratorio, 109-110, 111
Albright, osteodistrofia hereditaria, 26 tratamiento
Albúmina intraoperatorio, 114-115, 125
diagnóstico y control de fugas, 308, 310 postoperatorio, 115-116, 411
longitud del conducto común y absorción, 258, 258f uso de medicamentos en el período perioperatorio,
Alcoholismo, incremento del peso corporal, 25 111-112

455
456 Índice alfabético

Anestésicos de inhalación, 113-114 hidratación de los pacientes, 410


Anfepramona, 73, 75, 89 intraoperatoria, 410-411
Anfetaminas, 29, 73 mediciones del peso y la talla, 409, 409f
Angiotensinógeno, 19, 374 mejora continua de la calidad, 416
Ano, trastornos, derivación biliopancreática, 249 organización y educación de los profesionales, 407
Anorexia nerviosa, 22, 97, 137 planes y protocolos asistenciales, 416-417
Antibióticos postanestesia, 411
control de fugas, 310 postoperatorio, 411-414, 429
uso profiláctico, 111, 123-124, 140 preparación de los pacientes, preoperatorio, 410
Años postoperatoria, 131-138. Véase también Tratamiento
potenciales de vida perdidos (APVP), 45, 46f perioperatorio
de vida con ajuste de calidad, 60-61 ambiente hospitalario y obesidad grave, 126
Apendicectomía, 255, 257 apoyo nutricional y, 132-133
Apetito, supresores, 29 avisos de los pacientes, 137
Apnea clasificación, 126
central, 377 consideraciones psicológicas, 135, 137-138
mixta, 377 derivación gástrica en Y de Roux laparoscópica, 215
del sueño función del ejercicio, 136, 413
asistencia de enfermería, 413 gastroplastia, 172-173
dependiente de la postura, 378-379 grupos de apoyo y, 136-137
derivación gástrica en Y de Roux laparoscópica, 197 modificación del comportamiento alimentario, 132
evaluación preoperatoria, 104 movilización, 127
obesidad, 38 en obesidad mórbida, 139-140
del adolescente, 317 en perfilado corporal, 327
obstructiva problemas frecuentes, 116
cirugía bariátrica y mejoría, 381-382 seguimiento. Véase Seguimiento
cuadro clínico, 380-381 tratamiento
diagnóstico, 381 básico, 126-128
epidemiología, 377-378 del dolor, 127, 137
fisiopatología, 378-380 unidad de enfermería, 411-414
manifestaciones, 380 vigilancia, 115-116, 115f
mortalidad y, 48 respiratoria, postoperatorio, 413
obesidad y, 109, 109t, 335f, 378 Asistentes médicos, 428
presión positiva continua en vía respiratoria, 334, Asma
336-337 mejoría tras la cirugía bariátrica, 41
progresión, 378 obesidad, 38
traqueostomía, 334, 336, 336f adolescente, 317
tratamiento Aspectos
no quirúrgico, 381 emocionales, alimentos, 55
perioperatorio, 382 psicológicos, obesidad, 53
quirúrgico, 381-382 de responsabilidad profesional, 446-448
resolución, 377-382, 430 documentación del consentimiento informado,
tipos, 377 446-447
Apoyo emocional de pacientes, 408, 434 seguro de negligencia profesional, 402, 446
Aptitud física, ejercicio y, 87 Atelectasias, postoperatorio, 128
Arritmias Aterosclerosis
cardíacas, 108 cirugía bariátrica y reducción de riesgos, 41
gástricas, 278-279 diabetes, 38
Arteria pulmonar, catéteres, 112 dislipidemia de la obesidad, 37
Artroplastia, 385 factores de riesgo, 38
Artrosis obesidad y, 10
obesidad, 39, 59, 383-384 Atkins, dieta, 85
pérdida de peso y mejoría, 384-385 ATP (trifosfato de adenosina), 30
ASBS. Véase American Society for Bariatric Surgery (ASBS) ATPasa (adenosinatrifosfatasa sodio-potasio), 373
Asiáticos, obesidad, 11 Atracones de comida
Asistencia como adicción, 55
de enfermería, 142, 406-417 como entidad diagnóstica, 22
agrupamiento de pacientes, 406-407 evaluación de pacientes, 97, 427
apoyo Atracurio, 114
emocional, 408, 434 Autocontrol, 88-89
físico, 407-408 Autoestima, instrumentos de evaluación, 353-354, 353f-354f
básica, 411 Autopercepción
centros y equipos, 406-407, 407t evaluación de resultados, 348
complicaciones postoperatorias, 414-415, 414t obesidad mórbida, 52, 53
educación de los pacientes, 410 postoperatoria, 54, 137-138
enseñanza para el alta, 415-416 Autoría. Véase Redacción médica
específico para cirugía bariátrica, 412 Ayuno, 279
evaluación preoperatoria, 408-410 parcial, 390-391
Índice alfabético 457

B intracelular, 373
suplementos nutricionales, 247
Bandas gástricas ajustables mediante laparoscopia Calidad
conversión a gastroplastia, 175-176 asistencial
dieta postoperatoria y, 132 análisis de áreas pequeñas, 345
historia, 8, 147, 154, 154f, 192 estructura, proceso y resultado, 346-347
laparoscópico regulable,158-164 evaluación, 345-348
ajuste del estoma, 160-161, 160f proyectos para mejora de procesos, 346
calidad de vida y, 162 mejora continuada, 415-416
comorbilidades, 162 de vida
comparación de los sistemas de bandas ajustables, bandas gástricas ajustables mediante laparoscopia, 162
163-164 cirugía bariátrica y, 42-43
complicaciones, 162-163, 162t, 164 derivación gástrica en Y de Roux laparoscópica, 197
deficiencia(s) disminución de la movilidad, 383
de hierro, 358 evaluación de resultados, 347, 350
nutricionales, 358, 359, 360, 362 obesidad y, 53
descripción, 158-159, 159f pérdida de peso y mejoría de trastornos
historia, 158 musculoesqueléticos, 384, 384f
LAP-BAND, 158-163, 164 relacionada con la salud, 347
pérdida de peso, 161-162, 161t, 162t vómitos postoperatorios y, 135
respuesta de saciedad, 357 Cambios en el estilo de vida, 25
técnicas de colocación, 159-160, 159f Cambridge Diet, 85
Barbitúricos, 113 Cáncer
Bardet-Biedl, síndrome, 26 cirugía auxiliar, 340-341
Bariatric Analysis and Reporting Outcome System (BAROS), 43, evaluación preoperatoria, 121
345, 352-355, 352f-354f, 355t, 398 obesidad y riesgo, 40, 48, 49t, 50, 293
Barorreceptores, arteriales, 108 resultados y riesgo de la cirugía bariátrica, 42
BAROS. Véase Bariatric Analysis and Reporting Outcome System Capacidad residual funcional (CRF), 109
(BAROS) Carbohidratos
Barrett, esofagitis, 39 absorción y longitud del conducto común, 259
Básculas de baño, 84. Véase también Cirugía bariátrica, centros, dietas con bajo contenido, 70, 83
equipo especializado Carcinoma hepatocelular, 39, 42
Batwing, torsoplastia, 331 Cardiopatía isquémica, 108
Bebidas azucaradas, 21 CART (transcrito regulado por cocaína y anfetaminas),
Behavioral Risk Factor Surveillance System, 11, 13f-14f, 13t neuronas, 31
Belleza, modelo anoréxico, 52 Catéteres
Benzfetamina, 75, 89 urinarios, 411
Benzodiacepinas, 113 venosos centrales, 112
Berardinelli-Seip, lipodistrofia congénita-1, 26 CCQ. Véase Colecistocinina (CCQ)
Beriberi, 134, 360 Cefalosporina, 140
Beverly Hills, dieta, 85 Células grasas. Véanse Adipocitos; Adipogenia
Billroth II, gastrectomía, 4 Centros
Biopsia, hepática, 295, 341 de excelencia, 399, 438-439
Bolsa hospitalarios. Véase Cirugía bariátrica, centros
construcción inadecuada, 183 Cinc, deficiencia, 134, 361
dilatación, 174, 175 Cirugía
volumen abierta
derivación curva de aprendizaje, 403
biliopancreática, 239 equipo para pacientes con obesidad mórbida, 141
con cruce duodenal, 255-256, 259 frente a intervenciones laparoscópicas, 121, 122t, 192-194,
gástrica, 4-5, 186, 208 287-289
gastroplastia, 170, 171 bariátrica. Véanse también las intervenciones específicas
Bradigastria, 278-279 abierta. Véase Cirugía abierta
Braquioplastia, 331 abordaje en fases, 398-399, 399f
Brazo, técnicas de perfilado corporal, 331 adolescentes, 315-321
Breitkopf, cuestionario de incapacidad, 55 candidatos adecuados, 321t
consecuencias nutricionales y metabólicas, 320
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

Buen resultado quirúrgico, definición, 93-94


Bulimia nerviosa, 22, 97, 137 cronología, 319
cumplimiento del tratamiento por parte del paciente, 318
derivación biliopancreática con cruce duodenal,
265-266, 265f
desarrollo cognitivo y, 317-318
C directrices, 318-319, 319f
indicaciones, 94
Cafeína, 80 procedimientos, 320
Cálcio pruebas de laboratorio, 320
deficiencias, 134, 247 resultados, 321
y consumo de vitamina D, 360, 361 vía clínica, 320
458 Índice alfabético

Cirugía (cont.) ortopédica, 385


algoritmo paciente-procedimiento, 154-156, 155f, 156f plástica. Véase Perfilado corporal
anestesia. Véase Anestesia programada, 93
aspectos de responsabilidad profesional, 402, 446-448 telerrobótica, 442f, 443-445, 443f
categorías, 253 Cirujanos bariátricos
centros, 402, 406-407, 407t, 437-439 curvas de aprendizaje, 402-403
agrupamiento de pacientes, 406-407 evaluación preoperatoria de pacientes, 428
directrices, 433 formación
consulta, equipo y diseño, 437-438 interdisciplinaria, 401, 404
equipos práctica, 401-404
laparoscópicos, 441-443, 442f universitaria, 397-400
especializados, 126, 141, 180, 406, 409, 430, función en postoperatorio, 429
433-434 modelo de formación en dos niveles, 399-400, 400t
de excelencia, 399, 438-439 obtención de acreditación, 141, 403-404
quirófano, equipo y diseño, 433, 438 Cisatracurio, 114
robótica, 442f, 443-445, 443f Cistectomía ovárica, 226
servicios de apoyo, 438 Citocinas, 308, 310
tiempos de quirófano, 434 Clasificación postoperatoria, 126
cirujanos. Véase Cirujanos bariátricos Clinical Efficacy Assessment Project, 346
comorbilidades. Véase Comorbilidades Cobalamina, 133
complicaciones, panorámica general, 3 Colapso faríngeo, 379
definición de buen resultado, 93-94 Colecistectomía
directrices, 191 auxiliar, 341
enfoque holístico, 397 derivación
equipo biliopancreática, 240, 241
y centros. Véase Cirugía bariátrica, centros con cruce duodenal, 257
multidisciplinario. Véase Equipo asistencial gástrica
multidisciplinario con bandas ajustables, 226
como especialidad quirúrgica, 398 en Y de Roux, 221
fases relativas al paciente, 421 Colecistocinina (CCQ)
fundamento, 191 marcapasos gástrico implantable, 284
historia, 3-9, 147-154, 148t, 191-192 motilidad gástrica y, 279
incremento del número de intervenciones, 102, 397, 397f regulación
laparoscópica. Véase Procedimientos laparoscópicos de la insulina, 369
plástica. Véase Perfilado corporal del peso corporal, 20-21
preparación preoperatoria. Véase Preparación Colelitiasis
preoperatoria cirugía bariátrica y, 41
procedimientos derivación gástrica en Y de Roux laparoscópica, 200
abiertos frente a procedimientos laparoscópicos, evaluación preoperatoria, 105, 120
287-289 obesidad y, 39
auxiliares, 334-341 Colesterol. Véase también Hipercolesterolemia
rentabilidad económica, 60-61 HDL, 37, 245
resultado. Véase Evaluación de resultados LDL, 37, 78-79
de revisión, 142, 293-296 Comercialización de servicios, 447, 448
comparación con modalidades alternativas para la Comida, ansias, 54-55
pérdida de peso, 294 Comorbilidades, 37-43
en derivación asistencia postoperatoria, 126-127
biliopancreática con cruce duodenal, 264, 264t bandas gástricas ajustables mediante laparoscopia, 162
gástrica en Y de Roux con bandas ajustables, derivación gástrica en Y de Roux
228-229 de asa larga, 233, 233t
evaluación básica, 293-295 laparoscópica, 195, 197
en gastroplastia vertical con bandas ajustables, 174-175, evaluación de riesgos, 96, 103
174f, 175f pérdida de peso y mejoría, 29, 278, 350
longitud del asa del intestino delgado, 295 Complicaciones postoperatorias
malnutrición proteica, 358 de gastroplastia, 173-174
prevención de fugas, 311 derivación
principios con bandas ajustables, 228, 229t
generales, 293 biliopancreática con cruce duodenal, 259-262. 259t-261t
intraoperatorios, 295-296 gástrica en Y de Roux, 187-188
procedimientos abiertos, frente a procedimientos con asa larga, 234-235, 234t, 235t
laparoscópicos, 295 estenosis. Véase Estenosis postoperatoria
resultados inesperados, 295-296 evaluaciones de resultados, 351
toma de decisiones, 295 fugas. Véase Fugas postoperatorias
riesgos de mortalidad y morbilidad, 401-402 generales, tempranas, 128-129
selección de pacientes. Véase Pacientes, selección grapado circular y, 212
sencilla frente a compleja, 253 identificación, 127
técnica quirúrgica gastrointestinal, 397 infecciones de herida quirúrgica, 287
como tratamiento de último recurso, 398-399 infecciosas, 129, 184
Índice alfabético 459

instrucciones para el alta, 415-416 control de la dieta, 241


perfilado corporal, 327-328 con cruce duodenal (DBP/CD), 6-7, 151f, 252-266
precoces, 414 adolescentes, 265-266, 265f
procedimientos laparoscópicos, 274, 275t complicaciones, 259-262, 259t-261t
bandas gástricas ajustables mediante laparoscopia, 162-163, deficiencias nutricionales, 358, 361, 362
162t, 164 detalles de la intervención, 255-256, 255f, 256f
derivación gástrica en Y de Roux, 197-200 embarazo y, 263
frente a derivación gástrica mediante cirugía abierta, fundamento, 252-254
192-194, 193f gastrectomía vertical, 254, 259. Véase también
gastroplastia vertical con bandas ajustables, 182-184 Gastrectomía vertical en manguito, laparoscópica
relacionadas con la anestesia, 115-116 historia, 150, 192, 252
taquicardia, 142 laparoscópica, 267-277
tardías, 414t, 414 asistida con la mano, 268-269, 268f
como urgencias, 142 evolución, 267-269
vómitos, 135-136, 137 laparoscópica, 268
Comportamiento del equipo profesional, 408 localización de accesos, 268f, 269f
Comunicación intraoperatoria, 442 total, 268f, 269, 269f, 269t
Conducta alimentaria, 54 longitud del asa, 235, 254
trastornos, 22, 97 malabsorción de lípidos y longitud del conducto
Consensus Development Conference on Gastrointestinal Surgery for común, 257, 257t, 258f, 258t, 259f
Severe Obesity (NIH, 1991), 348 mediciones precisas, 257-259, 357t
Consentimiento informado, 97-98, 102-103, 122, 410 mortalidad, 262-263, 263t
asistencia multidisciplinaria, 432-433 pérdida de peso, 262, 262f, 262t, 391
para cirugía bariátrica de revisión, 295 reintervenciones por otros procedimientos, 264-265
grupos de apoyo y, 419 resultados, 254
perfilado corporal, 327 revisiones y reversiones, 263-264, 264f, 264t
responsabilidad profesional y documentación, 446-447 selección de pacientes, 254-255, 254t
Contorno ventajas, 253
corporal total, 332 deficiencias nutricionales, 247-249, 358, 359, 361, 362
superior del cuerpo, 331 diabetes tipo 2 y, 390
Control de resultados, 346, 432, 435 efectos beneficiosos, 243-245, 244t
Coordinador bariátrico, 428-429, 434 estenosis, 252, 302-303
Costes, estudios, 58 estómago ad hoc, 239, 240f
Cruce duodenal, 151f, 192. Véase también Derivación hábitos intestinales, 241
biliopancreática con cruce duodenal (DBP/CD) historia, 150, 150f, 192
complicaciones, 235, 269, 270t intervalo terapéutico, 239
fundamento, 252-254 pérdida de peso, 241-243, 242f, 242t, 243t, 391-392
historia, 252 como refinamiento de la derivación gástrica, 6
laparoscópica. Véase Gastrectomía vertical en manguito, resultado, 249-250
laparoscópica técnicas, 240-241, 240f
obesidad mórbida, 267, 267f úlceras, 252, 302
Cuerpos cetónicos, 391 gástrica. Véase también Derivación gástrica en Y de Roux
Cuidado de heridas y piel, 413-414, 416 (DGYR), con bandas ajustables
Cushing, enfermedad, 105, 121 abierta, frente a laparoscópica, 193f
cambios de dieta postoperatoria y remisión de diabetes,
368
complicaciones, 5-6, 208
control de la diabetes tipo 2, 366-368, 366f, 366t, 367t,
D 369
conversión a gastroplastia, 176
Datos deficiencia
del proceso, 347 de hierro, 358
económicos, hospitalarios, 348 de vitamina B12, 133
DBP. Véase Derivación biliopancreática (DBP) derivación biliopancreática, 6-7
DBP/CD. Véase Derivación biliopancreática con cruce directrices para construcción óptima, 208
duodenal (DBP/CD) con exclusión duodenal, 358
Demandas. Véase Aspectos de responsabilidad profesional formación de fístulas, 208
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

Depresión con gastroyeyunostomía de asa, 150-151, 151f


obesidad, 40 Greenville, técnica, 365f
postoperatoria, 129, 135 historia, 4-5, 147, 150-151, 191
resultado de la cirugía bariátrica y, 42-43 hormonas intestinales, 369-370
Derivación pérdida de peso, 365
con bandas elásticas. Véase Derivación gástrica en Y de Roux perfeccionamiento, 5-7
(DGYR), con bandas ajustables procedimientos laparoscópicos, 191-201. Véanse también
biliointestinal, 150 Procedimientos laparoscópicos; procedimientos específicos
biliopancreática (DBP), 239-250 rentabilidad económica, 60
alargamientos y restablecimiento, 249 resultados de intervenciones específicas, 41
complicaciones, 245-249, 245t supresión de la gastrina, 5
460 Índice alfabético

Derivación (cont.) tamaño de la bolsa, 186, 208


úlceras del estoma, 5 úlceras marginales, 300-302, 301t
volumen de la bolsa, 4-5 yeyunoileal
gástrica en Y de Roux (DGYR), 5, 151-152, 152f complicaciones, 29, 239, 357, 391
asa larga, 231-238, 233f historia, 147, 148-150, 191
beneficios, 237 intervalo terapéutico, 239
características de los pacientes, 232-233, 233t Dermatitis
comorbilidades, 233, 233t de estasis, 38
complicaciones, 234-235, 234t, 235t intertriginosa, 39, 42
deficiencias Derrame pleural, 307, 310
metabólicas postoperatorias, 235t, 236-237 Desarrollo cognitivo, adolescentes, 317-318
nutricionales, 236-237 Descomprensión abdominal, 310
factores de riesgo, 236-237 Desflurano, 114
historia, 231-235 Desmedro, 307
pérdida de peso, 234, 234f, 235-236 Desmineralización ósea, 247
selección de pacientes, 237-238 Desnitrogenación, 114-115
con bandas ajustables, 223-230, 223f DGYR. Véase Derivación gástrica en Y de Roux (DGYR)
anastomosis gastroyeyunal, 224-226, 226f Diabetes mellitus
asistencia perioperatoria, 228 derivación biliopancreática, 243-245, 244t
colocación del catéter de gastrostomía, 226, 227f evaluación preoperatoria, 105, 105t, 121
complicaciones, 228-229, 228t, 229t niños, 316-317
creación de la bolsa, 223-224, 224f obesidad y, 37-38
formación del asa en Y de Roux, 224 resolución, 365-370
operaciones riesgo de aterosclerosis, 38
concurrentes, 226 tipo 2
de revisión, 228-229 causas, 369
pérdida de peso, 229-230, 229f-230f cirugía bariátrica, 390
secundaria, 228 derivación
técnica biliopancreática con cruce duodenal, 253, 253f
laparoscópica, 226-228, 227f-228f gástrica
quirúrgica, 223-228, 224f-226f y control, 366-368, 366f, 366t, 367t
cirugía abierta en Y de Roux laparoscópica, 195
complicaciones, 187-188 efectos de orlistat, 79
ejercicio y, 189 hiperinsulinemia, 369
frente a laparoscópica, 287-290 índice de masa corporal, 48, 48t, 389
historia, 185-186 resistencia a la insulina, 367, 369
pérdida de peso, 189 reversibilidad, 367-368
resultado, 189-190 tejido adiposo ectópico, 19
seguimiento a largo plazo, 189 tratamiento postoperatorio, 127
técnica, 186-187, 187f Diarrea, 241
deficiencias nutricionales, 221, 358, 359, 360-361, 362 Dieta(s). Véase Tratamiento dietético
diabetes tipo 2 y, 390 con bajo contenido
dieta postoperatoria, 132-133 calórico, 68, 390-391
dislipidemia, 390 en carbohidratos, 70, 83
fugas distales, 260 con muy bajo contenido calórico, 68-69
laparoscópica con proteínas líquidas, 85
asistencia postoperatoria, 195 vegetariana, 83
complicaciones, 197-200, 198t, 212 Diferencias sexuales, obesidad, 24, 59-60
deficiencias nutricionales, 200 Dignidad de los pacientes, 434
con grapado circular, 209-213, 209f-212f Digoxina, 113
historia, 151-152, 267-268 Dilatación, catéter con balón, 299-300, 299f, 300t
instrumental, 209, 209f Dióxido de carbono, 109
limitaciones, 289 Discapacidad, obesidad mórbida, 58-60
lineal, 194-195, 196f, 197f, 204-207, 205f-207f Disciplinas paramédicas. Véase Equipo asistencial
pérdida de peso insuficiente, 201 multidisciplinario
resultados, 195, 197, 197t, 288 Discopatía lumbosacra, 39
técnica de gastroyeyunostomía con sutura manual, 214-222 Discriminación. Véase Estigmatización, obesidad
asistencia postoperatoria, 215 Dislipidemia
complicaciones tardías, 221 cirugía bariátrica, 40-41, 390
complicaciones tempranas, 219-221, 220t, 221t obesidad, 37, 108, 389
procedimiento quirúrgico, 215-217, 216f-218f Disnea, 307
resultado, 218-219, 219f, 220f Dispositivos de transferencia, 125
selección de pacientes y contraindicaciones, 214, 215t Divertículos intestinales, 295-296
ventajas y desventajas, 214, 215t Dolor
ventajas, 288-289 de espalda, 39, 384
longitud del asa y pérdida de peso, 231-232, 392 tratamiento, 127, 415
metabolismo energético y pérdida de peso, 392 Drenaje abdominal, 309
modificaciones por malabsorción, 235-236 Duodenoileostomía, 302
Índice alfabético 461

E control
del equipo postoperatorio, 430, 430t
Ecografía portátil, 112 de resultados y, 432, 435
Edad, selección de los pacientes, 94-95 desarrollo de equipos, 426-427, 433
Efecto equipo bariátrico hospitalario, 429, 433-434
sumidero, 174, 175f evaluación preoperatoria de pacientes, 99-100, 426-429,
térmico 426t, 429t
de la comida (ETC), 30, 389 función de los pacientes, 433
del ejercicio (ETE), 389 orientación y formación del equipo profesional, 407
Ejercicio sincronización de la participación de los miembros del
y actividad física equipo, 426
derivación gástrica en Y de Roux, 189 laparoscópicos, 441-443, 442f
entrenamiento antes del ejercicio, 88 multidisciplinario. Véase Equipo asistencial multidisciplinario
equipo asistencial multidisciplinario, 412 de quirófano. Véase Cirugía bariátrica, centros, quirófano,
función en el postoperatorio, 136, 413 equipo y diseño
instrucciones para el alta, 413 quirúrgico, 429, 433-434
pérdida y mantenimiento del peso corporal, 22-23, 87-88, ERGE. Véase Enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE)
391 Ergonomía, 442
reducción, incremento del peso corporal y, 25 Esófago, pruebas, 298
en el tratamiento dietético, 70-71, 87 Especialidades médicas, evolución, 398
intolerancia, 317 Espirometría, 109
Electrofisiología gástrica, 278-280, 279f Estado funcional, 96
Elevador Esteatohepatitis no alcohólica
del cuello, 332 biopsia hepática auxiliar, 341
de la parte inferior del cuerpo, 330 en niños, 317
Embarazo, 98, 263 en obesidad, 39, 110, 389
Endoscopia, diagnóstico pérdida de peso y mejoría, 42, 390
de estenosis, 298-299, 299f Esteatosis hepática no alcohólica. Véase Esteatohepatitis no
de úlcera marginal, 301, 301f alcohólica
Enfermedad(es) Estenosis postoperatoria, 301, 302. Véase también Intestino,
cardiovasculares obstrucción
evaluación preoperatoria, 104-105, 111, 119, 121t definición, 297
obesidad, 47, 48t, 108-109 derivación
coronaria, 121t, 380 biliopancreática, 252, 302-303
lipotóxica, 18 gástrica
ósea metabólica, 360-361 laparoscópica, frente a derivación gástrica abierta, 194
derivación en Y de Roux, 297-300
biliopancreática, 247 cirugía abierta, 136
gástrica y, 6 diagnóstico, 298-299, 299f
en Y de Roux y, 200 etiología e incidencia, 297-298, 297t, 298t
por reflujo gastroesofágico (ERGE) laparoscópica, 200, 219, 220t, 221t
cirugía auxiliar, 340 técnicas quirúrgicas, 298
derivación gástrica en Y de Roux laparoscópica, tratamiento, 299-300, 299f, 300t
195, 197 frente a úlceras marginales, 301
escala Health-Related Quality-of-Life, 347 gastroplastia vertical con bandas ajustables, 297, 302
evaluación preoperatoria, 105, 120 Estigmatización, obesidad, 52-53
mejoría tras cirugía bariátrica según intervención realizada, cultural, 408, 418
por profesionales sanitarios, 402, 406, 429
41-42
Estimulación eléctrica gástrica. Véase Estómago, estimulación
obesidad y, 39, 110
y marcapasos
tratamiento postoperatorio, 127
Estoma
Enflurano, 114 calibración, 170
Enoxaparina, 124 estenosis, 174
Enseñanza, en quirófanos laparoscópicos, 442 úlceras, 5, 246-247
Enteroglucagón, 32 Estómago. Véanse también Bandas gástricas ajustables mediante
Enterostomía, 311 laparoscopia; Derivación gástrica
Enterotomía, 141-142 ad hoc, 239, 240f
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

Enzima conversora de la angiotensina, 374 dilatación, 6, 199, 213


Ephedra sinica, 89 estimulación y marcapasos, 278-285
Equilibrio energético anterógrados, comparación con retrógrados, 280, 280f
factores determinantes, 19-20, 19f evolución de las intervenciones, 147, 154, 154f
obesidad y, 30 implantable, 280-283, 282f-285f
en el tratamiento dietético, 67 marcapasos
Equipo(s) ectópicos, 278-279
asistencial multidisciplinario, 407, 425-431, 432-435 unipolar, frente a bipolar, 281
centros de excelencia, 439 relajación fúndica, 281
cirugía bariátrica en adolescentes, 319-320 seguridad, 278
colaboración, 432 trastornos de la motilidad gastrointestinal, 280
462 Índice alfabético

Estómago (cont.) de «luna de miel» (pacientes), 421


fugas. Véase Fugas postoperatorias de mantenimiento (pacientes), 421
motilidad, 171, 278-279, 280 Fendimetracina, 75, 89
partición, 147 `-fenetilaminas, 73
reflujo gastroduodenal, 252 Fenfluramina, 29, 73-74
tamaño. Véase Bolsa, volumen Fenilpropanolamina, 89
vaciamiento, 279, 284 Fentanilo, 113
varices, 95 Fentermina, 29, 73, 75, 89
Estrógenos, 40 Fibra alimentaria, 21-22
Estudios Fiebre, 307
de asociación, genética, 26 Fístula, 301, 310
con contraste, postoperatorio, 127 Flancoplastia, 331
de vinculación, genéticos, 26 Fletcherismo, 84
ETC (efecto térmico de la comida), 30, 389 Fobias, postoperatorio, 135
ETE (efecto térmico del ejercicio), 389 Fugas postoperatorias, 304-311
Etiología de la obesidad, 18-27 absceso subfrénico, 173
actividad física, 22 autodrenaje, 306
adiposidad y riesgo de enfermedades, 18-19 causas, 305-306
determinantes del equilibrio energético, 19-20 derivación
estados patológicos, 25 biliopancreática con cruce duodenal, 259-260, 259t
factores gástrica laparoscópica, frente a derivación gástrica abierta,
alimentarios, 21-22 193-194
culturales y sociales, 23, 24f diagnóstico, 220-221, 304-305, 307
genéticos. Véase Genética de la obesidad de sepsis, 306-307
individuales, 24-25 distales, 260
períodos críticos para el incremento del peso corporal, 24 duodenoileostomía, 260, 260t
predisposición biológica, 24 gastrointestinales, 142
regulación fisiológica del peso corporal, 20-21 gastroplastia, 173
Evaluación vertical con bandas ajustables laparoscópica, 183-184
psicológica, 410, 427-428, 427t identificación de la zona, 308
de resultados, 345-355. Véanse también Bariatric Analysis incidencia, 304, 305t, 306
and Reporting Outcome System (BAROS); procedimientos
obesidad androide, frente a obesidad ginecoide, 306
específicos
prevención, 310-311
comparación y presentación de resultados, 351-352, 351t
pruebas de laboratorio, 307-308, 310
definición de buen resultado, 93-94
significación, 304
disminución de comorbilidad, 350
tratamiento, 213, 308-310, 309f
evaluación
Función renal, 110, 121
de la calidad asistencial, 345-348
de la calidad de vida, 350 Furunculosis inguinoperineal, 249
expectativas poco realistas de los pacientes, 433
fuentes de datos, 347-348
mediciones, 347
metabólica, 388-392 G
nutricional, 357-362. Véase también Nutrición, deficiencias
postoperatorias Garcinia cambogia, 90
parámetros de pérdida de peso, 350 Gasto
reintervenciones y complicaciones, 350-351 cardíaco, 108
seguimiento, 347-348 energético, 19, 19f
Exploración física, 408 metabólico en reposo (GEMR), 391
en reposo (GER), 31, 389
derivación biliopancreática, 243, 243t
pérdida de peso, 392
F total (GET), 30-31, 242-243
Gastrectomía
Factor(es) Billroth II, 4
culturales en la obesidad, 23 deficiencia
liberador de corticotropina, 279-280 de hierro, 358
de necrosis tumoral-␣, 19, 30 de tiamina, 360
socioeconómicos vertical en manguito, laparoscópica, 269-275
en grupos de apoyo, 419 complicaciones, 274, 275t
en obesidad, 23, 24f, 52-56 en derivación biliopancreática con cruce duodenal, 254, 259
en selección de pacientes, 98 evaluación, 275-277
Falopio, ligadura de trompas, 226 frente a derivación gástrica en Y de Roux, 272
Fármacos. Véanse Medicamentos y medicamentos específicos frente a otros procedimientos de gastroplastia, 272
simpaticomiméticos, 75-77, 89 operación en segundo tiempo, 274-275, 275f
Fase en pacientes
de aceptación de la realidad (pacientes), 421 con IMC bajo, 275, 276f
de esperanza (pacientes), 421 de riesgo alto, 269-270, 270f
Índice alfabético 463

pérdida de peso, 273-274, 273f, 274f GER. Véase Gasto energético en reposo (GER)
técnica, 270, 271f GET (gasto energético total), 30-31, 242-243
variables preoperatorias, 273, 273t Giessen, prueba, 53
Gastrina, 5 Ginecomastia, 331
Gastroenterocolitis, 241 Globesity, obesidad, epidemia mundial, 10
Gastroenterostomía, 311 Glucemia, 243-245, 244t, 308
Gastrointestinal Quality of Life Index, 347 Glucosa
Gastroparesia, 280 metabolismo, 368-370
Gastroplastia sérica, 243-245, 244t, 308
anillo de silastic, 153, 153f tolerancia
con asa larga, 7-8, 167-168, 168f alteración en la obesidad, 37-38
asistencia postoperatoria, 172-173 derivación gástrica en Y de Roux laparoscópica y, 195
calibración del estoma, 170 efectos de orlistat, 79
cirugía de revisión, 174-175, 174f, 175f Goma guar, 89
complicaciones postoperatorias, 173-174 Gota, 384
deficiencias nutricionales, 358 Gothenburg Quality of Life Scale, 347
evaluación y preparación de pacientes, 172 Gráficas de crecimiento, 11, 12f
fundamentos quirúrgicos, 168-170, 169f Grapado
historia, 7-8, 147, 152-154, 153f, 192 circular, técnica, 209-212, 209f-212f
horizontal, 270-271 y grapadoras
de Long, 7-8 dehiscencia en línea de grapado, 174, 175
procedimientos laparoscópicos, 153-154 fugas postoperatorias y, 305
reversión, 175-176 prevención, 311
seguridad de la partición, 170 para gastroplastia, 168-170, 169f
técnicas de consumo de alimentos, 170-172 Grelina
vertical, 7-8, 153, 153f, 271 bioquímica, 32
con bandas ajustables, 7-8, 153f, 167-176 construcción de la bolsa, 5
calidad de vida y, 61 derivación gástrica y, 186, 208, 235
cirugía de revisión, 174-175, 174f, 175f, 302 marcapasos gástrico implantable y, 284
deficiencias nutricionales, 360, 362 regulación
dieta en postoperatorio y, 132 de la insulina, 369
estenosis postoperatorias, 297, 302 del peso corporal, 21, 392
evolución, 153, 153f, 167, 167f-168f, 169, 271 Grupos de apoyo, 418-424
fundamentos quirúrgicos, 168-170, 169f aceptación de cirugía por el paciente y, 415
laparoscópica, 153-154, 177-184 centros de excelencia, 439
asistencia postoperatoria, 180 documentación y evaluación, 423, 423t
complicaciones, 182-184 como elementos promotores, 420-421
conversión a cirugía abierta, 182 fases del paciente, 421
equipo, 180 finalidad, 418-419
evolución, 177-178, 177f organización de reuniones, 419-420, 420t
localizaciones de trócares, 179, 179f pacientes de cirugía bariátrica, 136-137, 403, 433-435
Mason, técnica, 179-180 pérdida de peso, 85
resultados, 182-184, 182t temas para reuniones, 421-423
selección y evaluación de pacientes, 178
técnica de la cuña, 178-179, 179f
vías clínicas, 180, 181t
pérdida de peso, 391, 392
resultados a largo plazo, 271-272 H
volumen de la bolsa, 170, 171
Gastrostomía Hábitos intestinales, 241
catéteres para laparotomía, 308 Halitosis, 249
estómago restante distal, 213 Halotano, 114
como procedimiento auxiliar, 338-339, 338f Hambre, 171. Véase también Saciedad, respuesta
Gastroyeyunostomía Harris-Benedict, ecuación, 30-31, 67, 68c, 392
en asa, 150-151, 151f HDL (lipoproteínas de densidad alta), colesterol, 37, 245
estenosis, 219, 221t, 297, 297t Helicobacter pylori
en Y de Roux laparoscópica, 151, 152f contraindicación quirúrgica, 95
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grapado lineal, 194-195, 196f evaluación preoperatoria, 105


técnica con sutura manual, 214-222 úlcera marginal, 301, 302
GEMR (gasto energético metabólico en reposo), 391 Hematoma intraabdominal, 310
Genes candidato, 26 Hemograma completo, 307-308
Genética de la obesidad, 56 Hemorragia
epidemiología y transmisión hereditaria, 25 gastrointestinal, 198-199
hipertensión arterial y, 372 ostoperatoria, 129
interacciones genotipo-ambiente, 26-27, 27f úlcera, 6
monogénica, 25-26 Hemorroides, 249
en obesidad mórbida, 30 Heparina
poligénica, 26 de bajo peso molecular, 124
trastornos mendelianos y, 25-26 no fraccionada, 124
464 Índice alfabético

Herida quirúrgica, infecciones, 287 Impact of Weight on Quality of Life (IWQOL), encuesta, 347
Hernia Incontinencia de esfuerzo, 39, 42
abdominal, 295 Índice
hiatal, 110 de apnea/hipopnea (IAH), 377, 379, 379f
incisional, 200 glucémico, 22
interna, 199, 219-220, 220t, 221t de masa corporal (IMC)
reparación auxiliar, 339-340, 340f autoestima y, 53
umbilical, 339 cálculo, 409, 409f, 452t, 453, 453t
ventral, 339-340 clasificación de la obesidad, 11t, 453
Herniorrafia, 226 composición del tejido adiposo, 11
Hidratación perioperatoria, 410-411 conducta alimentaria, 54
Hierro, deficiencia, 134, 358-359. Véase también Anemia consecuencias para la salud, 10, 10t
Hígado definición, 10-11
biopsia, 295, 341 discriminación, 52-53
cirrosis, 39, 42. Véase también Esteatohepatitis no alcohólica gastrectomía vertical y, 275, 276f
derivación biliopancreática con cruce duodenal, 263 gráficas de crecimiento según género, 11, 12f
efectos de la obesidad, 110 mortalidad, 45, 46f
evaluación preoperatoria, 105-106 niños y adolescentes, 315-316, 316f
fracaso de la derivación gástrica de Roux con asa larga, 237 pérdida de un porcentaje excesivo, 453, 453t
resistencia a insulina y acumulación de tejido adiposo, 19 recomendaciones para elaborar informes, 453
Hipercolesterolemia, 37, 195, 389 riesgo de diabetes, 389
Hiperglucemia Inhibidor del activador del plasminógeno-1, 19
derivación biliopancreática, 243-245, 244t Insuficiencia
tratamiento perioperatorio, 105, 105t renal, 128-129
Hiperinsulinemia venosa periférica, 38, 41
de diabetes tipo 2, 369 Insulina
en hipertensión arterial, 372, 373f bioquímica, 32
Hipermovilidad gástrica, 278 hormonas intestinales y, 369-370
Hiperparatiroidismo secundario, 6 en regulación del peso corporal, 20
Hipertensión arterial resistencia
apnea del sueño, 380 cirugía bariátrica y, 390
fisiopatología, 372-374, 372t derivación biliopancreática, 244-245, 244t
intracraneal, 39, 42 en diabetes tipo 2, 367, 369
obesidad y, 37, 108, 371 hipertensión arterial relacionada con obesidad,
pérdida de peso con tratamiento médico, frente a pérdida 372, 373f
de peso con tratamiento quirúrgico, 374-375 en niños, 316
resolución, 371-375 obesidad, 31, 108, 388-389
tratamiento postoperatorio, 127 abdominal y, 18
Hipertrigliceridemia, 37, 389 pérdida de peso, 88-89
Hiperuricemia, 384 tejido adiposo ectópico y, 18-19
Hipocalcemia, 134, 261 Interacciones genotipo-ambiente, 26-27, 27f
Hipopnea, 377 Interleucina-6, 19
Hipoproteinemia, 261 International Bariatric Surgery Registry, 3, 401
Hipotálamo, 30, 31 International Federation for the Surgery of Obesity, 141
Hipotensión, 128 Internistas, 426-427, 430
Hipotiroidismo, 105, 121, 127 Intervalo terapéutico, 239
Hipovascularización, 306 Intervenciones secundarias. Véanse Procedimientos auxiliares;
Hipoventilación, síndrome obstructivo, 109, 109t Reintervenciones
Histerectomía, 226 Intestino
Historias clínicas, 348 absorción
Hollywood, dieta, 84 crecimiento excesivo de la flora bacteriana y, 248-249
Hombro, dolor, 307 en derivación biliopancreática, 242, 242t
Homocisteína, 360 de proteínas, 247-248
Hormona(s) derivación, 3-4
anorexígenas, 29 divertículos, 295-296
tiroidea, 73, 83 obstrucción, 199, 261. Véase también Estenosis postoperatoria
Human Obesity Gene Map, 26 Intubación y extubación, 113, 114-115, 125. Véase también Vía
respiratoria difícil
Isoflurano, 113, 114
Isquemia miocárdica, 108
IWQOL (Impact of Weight on Quality of Life), encuesta, 347
I
IAH (índice de apnea/hipopnea), 377, 379, 379f
Ileocecostomía, 148, 149f
Ileogastrostomía, 150 K
Ilex paraguariensis, 89
Imagen corporal, 52, 137-138 Kellogg, 84
Índice alfabético 465

L Ménière, síndrome, 293


Metabolismo
Lactancia materna, 22 corporal total, 30
Langerhans, islotes, 369 energético, 30-33
LaPlace, ley, 4 composición corporal, 389-390
LDL (lipoproteínas de densidad baja), colesterol, 37, 78-79 pérdida de peso inducida quirúrgicamente, 390-392
Leapfrog Group, 346 Meteorismo, 307
LEARN, programa de modificación del comportamiento, 428 Microhematomas, 306
Leptina Micronutrientes, deficiencia, 133-135
bioquímica, 31, 374 Mifflin-St. Jeor, ecuación, 67, 68
genes y mutaciones, 30 Miorrelajantes, 114
marcapasos gástrico implantable y, 284 MM (magenstrasse y mill), intervención, 271, 272, 272f
en regulación del peso corporal, 20 Modelo anoréxico de belleza, 52
secreción por el tejido adiposo, 19, 30 Modificación del comportamiento
Lipectomía en cinturón, 325, 326, 329 alimentario, postoperatorio, 123
Lípidos, 18-19, 257 cirugía bariátrica en adolescentes, 319-320
Lipoproteínas de densidad cumplimiento por parte de los pacientes, 427, 428
alta (HDL), colesterol, 37, 245 disminución del peso corporal, 54, 86-87
baja (LDL), colesterol, 37, 78-79 como objetivo de la cirugía bariátrica, 425
Liposucción, 326 programas de grupo, 428
Líquidos intravenosos, 410-411 Monte de Venus, técnicas de perfilado, 329
Loci de rasgos cuantitativos (LRC), 26 Moorehead-Ardelt Quality-of-Life Questionnaire, 53, 347,
Longevidad. Véase Mortalidad 353-354, 353f-354f
Longitud del conducto común, 257-259, 257t, 258f, 258t, 259f Mortalidad
Loracepam, 113 apnea obstructiva del sueño, 48
cáncer y, 48, 49t, 50
cirugía bariátrica, 401-402
derivación
biliopancreática con cruce duodenal, 262-263, 263t
M gástrica en Y de Roux laparoscópica, frente a derivación
gástrica en Y de Roux abierta, 197
Macindol, 89
diabetes y, 48, 48t
Macronutrientes
enfermedad cardiovascular y, 47, 48t
deficiencias, 135, 357-358
en el tratamiento dietético, 69-70, 69t factores relacionados con la edad, 45
Magenstrasse y mill (MM), intervención, 271, 272, 272f índice de masa corporal y, 45, 46f
Magnesio, deficiencia, 361 en niños, 50
Malabsorción, 132, 239 obesidad y, 45-50
intervenciones, 148-150, 235-236 pérdida de peso y, 47
restricción, intervenciones, 150-152 Motivación de los pacientes, 98
Malnutrición. Véase Nutrición, deficiencias postoperatorias Movilidad, deficiencias, 383
proteica, 135 Movilización postoperatoria, 127, 139, 140, 172
crecimiento excesivo de flora bacteriana, 248-249 Muerte, sensación, 307
en derivación biliopancreática, 247-249 Músculo geniogloso, 378
con cruce duodenal, 257-258, 258f Muslos, técnicas de perfilado corporal, 330
postoperatoria, 358
proteicocalórica, 135, 248
Mama, técnicas de perfilado, 331
Mamoplastia, 331 N
Manguito, gastrectomía. Véase Gastrectomía vertical en
manguito, laparoscópica Nadroparina, 124
Masa Nalgas, técnicas de perfilado corporal, 330
corporal magra, 136 National Bariatric Surgery Registry, 3
magra, 389 National Health and Nutrition Examination Survey, 11
Masticación, 83-84 National Institutes of Health (NIH)
Mastopexia, 331 apoyo a la asistencia multidisciplinaria, 432
Mayo Clinic, dieta, 84
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Consensus Development Conference on Gastrointestinal Surgery


Medical Outcomes Study Short Form Survey (SF-36), 346, 347, for Severe Obesity (1991), 348, 425
384, 384f National Surgical Quality Improvement Program, 346
Medicamentos. Véase también Obesidad, tratamiento Náuseas, 307
medicamentoso Negligencia profesional
causa de incremento del peso corporal, 25 póliza de seguro, 402, 446
postoperatorios, 412-413 preocupación, 446-448
problemas relacionados con la anestesia, 111-112 Nervio mediano, neuritis periférica (síndrome del túnel
psiquiátricos, 127 carpiano), 39, 42
sin receta, 89 Neumoperitoneo, 125
Medicina holística, 397 Neuropatía periférica, 247
Melanocortina, 30 Neuropéptido Y, neuronas, 31
466 Índice alfabético

Neuropéptidos, 21, 30 hipertensión arterial y, 371


Nitrógeno endógeno, 248 hipoventilación, síndrome, 39
Nottingham Health Profile, 347 infantil
Núcleo arqueado, 31 aspectos económicos, 62
Nutrición efectos adversos, 11, 316-317
apoyo. Véanse Nutrición, especialistas; Tratamiento dietético factores
deficiencias postoperatorias, 357-362 de riesgo, 316
cirugía de banda gástrica ajustable laparoscópica, 358, 359, sociales, 23
360, 362 lactancia materna, 22
en derivación mortalidad y, 50
biliopancreática, 358, 359, 361, 362 prevalencia, 11, 15, 15f, 15t, 52
con cruce duodenal, 358, 361, 362 manifestaciones cutáneas, 39
gástrica con exclusión duodenal, 358 medidas paliativas, frente a medidas curativas, 73
en Y de Roux, gástrica metabolismo energético, 30-33, 389-390
con asa larga, 236-237 mórbida
laparoscópica, 200 anestesia, 140-141
en gastrectomía, 360 apnea del sueño, 104, 335f
gastroplastia, 358 asistencia postoperatoria, 139-140
macronutrientes, 357-358. Véase también Malnutrición cirugía plástica y pérdida de peso masiva. Véase Perfilado
proteica corporal
micronutrientes, 133-135, 358-361. Véanse también las costes económicos, 58
deficiencias específicas, por ejemplo, Hierro, deficiencia cruce duodenal, 267, 267f
resumen de consecuencias, 361-362, 362t definición, 59, 278-285
especialistas, 427, 429, 434 diabetes, y cirugía programada, 365-366, 366t
evaluación discapacidad, 58-60
para anestesia, 111 educación de los pacientes, 102-103
derivación biliopancreática y, 245 ejercicio, 87
preoperatoria, 410 como enfermedad maligna, 32
en selección de pacientes, 98-99, 99t enfoque holístico, 397
partición, 19, 19f enterotomía, 141-142
equipo quirúrgico especializado, 141, 406, 409, 429,
433-434
fracaso del tratamiento médico, 71
frente a obesidad masiva, 231
O función pulmonar, 103-104, 103t
genética y, 30
Obesidad hepatopatía, 263
abdominal, 18, 45, 108 percepción corporal, 52
adicción y, 54-55 prejuicios. Véase Estigmatización, obesidad
adolescentes. Véase Adolescentes, obesidad preparación preoperatoria, 139
ansias de comida, 54-55 profilaxis, 140
aspectos económicos, 57-63 revisión secundaria, 142
ausencia de tratamiento, 58-60 tratamiento farmacológico, 29
cobertura mediante póliza de seguro para cirugía bariátrica, mortalidad. Véase Mortalidad
61 en niños. Véase Obesidad infantil
costes directos, frente a indirectos, 58 prejuicios. Véase Estigmatización, obesidad
evaluación de resultados, 347, 348 prevalencia, 3, 11, 13f-14f, 13t, 14-15, 15t, 16f
financiación para tratamiento de obesidad, 61-63 como problema de salud pública, 10, 55-58
modificación del comportamiento, 61 repercusión económica, 57-63
niños, 62 como símbolo de fecundidad, 52
rentabilidad económica de la cirugía, 60-61, 60t trastornos musculoesqueléticos y, 383-384
repercusión en los negocios, 63 tratamiento
susceptibilidad de la población, 58 farmacológico, 73-80, 89-90. Véanse también los medicamentos
bioquímica, 31-32 específicos
clasificación, 11, 11t combinación de efedrina/cafeína, 80
comorbilidades. Véase Comorbilidades complicaciones, 73-74
deficiencias de movilidad y, 383 fármacos
definiciones, 10-11, 315-316 aprobados por la FDA, 74t
demografía, 10-17 simpaticomiméticos, 75-77, 89
dietoterapia. Véase Tratamiento dietético sin receta, 89
como enfermedad, 3, 29, 57-58 hormona tiroidea, 73
autoinducida, 52, 54 orlistat, 77-80
como estado inflamatorio, 32 recomendaciones clínicas, 73
etiología. Véase Etiología de la obesidad no quirúrgico, 83-90
extrema, frente a grave, 59 vías neurales, 31
farmacoterapia. Véase Obesidad, tratamiento medicamentoso Obesity Severity Index, 398
genética. Véase Genética de la obesidad Obstrucción del asa biliopancreática, 6, 246
grados de pérdida de peso, 74 Oliguria, 307
Índice alfabético 467

Ondas lentas gástricas, 280 Palatibilidad, alimentos, 21


Optifast, 85 Panel metabólico, 307-308
Orina, análisis, 308 Paniculectomía
Orlistat, 77-80, 89 con derivación con bandas ajustables, 226
combinación con sibutramina, 80 frente a abdominoplastia (tummy tuck), 325
efectos metabólicos, 79 historia, 325-326
eficacia para tratamiento del peso, 77-78, 78f procedimiento auxiliar, 339
perioperatorio, anestesia y, 111 técnica, 329
reducción de LDL colesterol, 78-79 Panículo, clasificación, 339
Ornish, dieta, 85-86 Patient Outcomes Research Teams, 346
Osteomalacia, 6, 361 Paullinia cupana, 89
Osteoporosis, 6 Pausinystalia johimbe, 89
Ovariectomía, 226 Péptido(s)
Oxalatos, 249 anabólicos, 30
anorexígenos, 30
catabólicos, 30
orexígenos, 30
similar a glucagón-1 (GLP-1), 29, 284, 369, 370
P Péptido YY, 369
Perfilado corporal
Paciente(s) clasificación, 328
agrupamiento, 406-407 cobertura mediante póliza de seguro, 332
alta, 415-416, 415t complicaciones, 327-328
colocación, 112, 124-125 consideraciones en fase preoperatoria, 326-327
en derivación gástrica en Y de Roux, 186, 194, 209, 209f, contraindicaciones, 327
216f historia, 325-326
cumplimiento del tratamiento, 318 número de procedimientos, 325, 325t
educación opciones quirúrgicas, 328-332
enseñanza para el alta, 415-416 revisiones, 328
interdisciplinaria, 430 Peristaltismo gástrico, 281
preoperatoria, 102-103, 410, 433 Peritonitis, 306
grupos de apoyo, 419 Personalidad, obesidad y, 53
resultado quirúrgico y, 425 Peso corporal
interacciones con los profesionales, 408 ideal y excesivo, cálculo, 20f, 452, 452t, 453t
satisfacción, 347 mediciones, 409
selección, 93-100 recomendaciones para redactar informes, 452-453, 452t,
aspectos de responsabilidad profesional, 447 453t
candidatos, escala, 99-100, 100t pérdida y mantenimiento. Véanse también las intervenciones
para cirugía bariátrica de revisión, 293 específicas
comorbilidades y, 96, 103 actividad física y, 22-23, 70
contraindicaciones médicas, 95-96 anatómicamente selectivos, 86
criterios autocontrol, 88
de comportamiento, 97-98 autopercepción, 54
psicopatológicos, 96-97 cirugía de revisión, 293-294
derivación comparación entre tratamientos médico y quirúrgico,
biliopancreática con cruce duodenal, 254-255, 254t hipertensión arterial y, 374-375
gástrica en Y de Roux derivación gástrica laparoscópica, frente e derivación
con asa larga, 237-238 gástrica abierta, 193
laparoscópica, 214-215, 215t dietas, 83-86, 84t
mediante bandas ajustables, 228 dislipidemia y, 41
dificultades, 93-94 ejercicio y, 22-23, 87-88, 391
equipo multidisciplinario, abordaje, 99-100, 426-429, en evaluación de resultados, 350
426t, 429t, 433 factores alimentarios, 21-22
estado funcional y, 96 grados, 74
evaluación grupos de apoyo, 85
de fugas postoperatorias, 310 homeostasis, 390-391
nutricional, 98-99 homocisteína y, 360
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factores relacionados con la edad, 94-95 implicaciones para cirugía bariátrica, 71


en gastroplastia vertical laparoscópica con bandas índice apnea-hipopnea y, 379, 379f
ajustables, 178 intervención de magenstrasse y mill, 271, 272, 272f
indicaciones, 94-96, 94t a largo plazo, 70-71
para marcapasos gástrico implantable, 283-284, 285f longitud del asa de Roux, 231-235
motivación y resultado quirúrgico, 398 mediciones durante el seguimiento, 348-349, 349t
perfilado corporal, 326-327 metabolismo energético, 390-392
peso corporal y, 95 métodos no quirúrgicos, 83-90
para profilaxis mediante filtro en la vena cava, 337-338, modificación del comportamiento y, 86-87
337f mortalidad y, 47
Páginas web, apoyo a pacientes, 439 procedimientos restrictivos y, 271-272
468 Índice alfabético

Peso corporal (cont.) filtro en la vena cava, 337-338


razones para el fracaso, 16f gastrostomía, 338-339, 338f
recomendaciones para redactar informes, 452-453, 452t, como medida de seguridad, 334-339
453t paniculectomía, 339
resistencia a insulina, 88-89 reparación de hernia, 339-340, 340f
tasa de recidiva, 191 traqueostomía, 334-337, 336f
regulación fisiológica, 20-21, 20f concurrentes. Véase Procedimientos auxiliares
PIA (presión intraabdominal), 125, 372 laparoscópicos
Pickwick, síndrome, 377 complicaciones postoperatorias, 274, 275t
Piel, higiene, 139 consideraciones perioperatorias, 125-126
Piridoxal, fosfato, 359 construcción inadecuada de la bolsa y, 183
Planes asistenciales, 416-417 contraindicaciones, 121-122
Plantago psyllium, 89 curva de aprendizaje, 403
Podómetros, 88 derivación
Polipéptido insulinotrópico dependiente de la glucosa (GIP), biliopancreática, 240-241, 240f. Véase también Derivación
369, 370 biliopancreática con cruce duodenal (DBP/CD),
Póliza de seguro sanitaria laparoscópica
cirugía bariátrica, 61 gástrica, 191-201. Véase también Derivación gástrica en Y
perfilado corporal, 332 de Roux (DGYR), laparoscópica
POMC (proopiomelanocortina), neuronas, 31 diseño del quirófano, 441-443, 442f
Pomelo, dieta, 84 equipo, 141, 180
POSCH (Program on the Surgical Control of the evolución, 267-268
Hyperlipidemias), 40-41 frente a intervenciones abiertas, 121, 122t, 192-194, 193f,
Potenciales en picos, gástricos, 278 287-289
Prader-Willi, síndrome, 26, 172 fundamentos fisiológicos para mejor resultado, 288
Prealbúmina, 308 gastrectomía en manguito. Véase Gastrectomía vertical en
Prediabetes, 316 manguito, laparoscópica
Prejuicios. Véase Estigmatización, obesidad gastroplastia. Véase Gastroplastia vertical con bandas
Preparación preoperatoria, 102-107, 139. Véase también ajustables, laparoscópica
Tratamiento perioperatorio gastrostomía mediante catéter, 308
en cirugía bariátrica de revisión, 293-295 limitaciones, 289
consentimiento informado. Véase Consentimiento informado localización de los trócares, 182-183
derivación robótica, 442f, 443-445, 443f
biliopancreática con cruce duodenal, 254-255 variables
gástrica laparoscópica en Y de Roux, 215 postoperatorias, 273-274, 273f, 274f
dieta, 122-123 preoperatorias, 273, 273t
educación de los pacientes, 102-103, 410, 433 ventajas, 192, 288-289, 403
evaluación no invasivos, 121-122
anestésica, 106, 111-112 restrictivos, 152-154, 270-272
clínica, 408-411 Profilaxis perioperatoria
multidisciplinaria de pacientes, 426-429, 426t, 429t, en derivación gástrica en Y de Roux laparoscópica, 215
433 en obesidad mórbida, 139
psicológica, 410, 427-428, 427t pulmonar, 139
de riesgos. Véase Riesgos, evaluación úlceras del estoma, 246-247
gastroplastia vertical con bandas ajustables, 172 tromboembolia, 105, 105t, 140, 213
grupos de apoyo y, 418-419 Program on the Surgical Control of the Hyperlipidemias
para pacientes de riesgo alto, 106 (POSCH), 40-41
perfilado corporal, 326-327 Programas de alimentación escolar, 62
pruebas de laboratorio, 409-410 Propiomelanocortina (POMC), neuronas, 31
Presión Propofol, 114
arterial, tratamiento, 112, 408 Próstata, cáncer, 40
intraabdominal (PIA), 125, 372 Proteína de estimulación-acilación, 32
intrafaríngea, 378 Proteína-C, 30
positiva continua en vía respiratoria (CPAP) Pruebas de laboratorio, preoperatorias, 409-410
apnea del sueño, 334, 335f, 336-337, 381 Psiquiatras y psicólogos
uso equipo asistencial multidisciplinario, 434
perioperatorio, 103-104, 427 evaluación preoperatoria de pacientes, 427-428
postoperatorio, 430 función en el postoperatorio, 430
Pritikin, dieta, 85 Pulmón
Procainamida, 113 embolia. Véase también Tromboembolia
Procedimiento(s) en derivación gástrica en Y de Roux laparoscópica, 220t,
auxiliar(es), 334-341 221
biopsia hepática, 341 filtros en vena cava, 337-338, 337f
colecistectomía, 341 obesidad y, 38, 110
derivación profilaxis, 140, 213
biliopancreática con cruce duodenal, 257 tratamiento
gástrica con bandas elásticas en Y de Roux, 226 de fugas, 308, 310
enfermedad por reflujo gastroesofágico, 340 preoperatorio, 121
Índice alfabético 469

función en fugas postoperatorias, 310


derivación gástrica laparoscópica, frente a derivación función renal, 110, 121
gástrica abierta, 192-193, 193f en gastroplastia vertical
evaluación preoperatoria, 103-104, 103t con bandas ajustables, 172
Punto de inicio, peso corporal, 30 laparoscópica con bandas ajustables, 178
hematológicos, 121
musculoesqueléticos, 121
psiquiátricos, 106
pulmonares, 103-104, 103t, 119
Q Rimonabant, 80, 89
Robótica, 442f, 443-445, 443f
Quality of Weil-Being Scale, 347 Rocuronio, 114
Quetelet, índice, 10-11 Ronquido, 380

R S
Rabdomiólisis Saciedad, respuesta
en derivación derivación gástrica en Y de Roux, 208
biliopancreática con cruce duodenal, 261 llenado de bolsa gástrica y, 171
gástrica en Y de Roux laparoscópica, 199-200 en pérdida de peso, 392
postoperatoria, 129 en procedimientos bariátricos, 357
Radiografía de tórax, 308 SAGES. Véase Society of American Gastrointestinal and Endoscopic
Ranitidina, 246 Surgeons (SAGES)
Raza y obesidad, 24 Sala de recuperación, 139, 139-140
Recuento calórico, 84 Scarsdale, dieta, 85
Redacción Schillings, prueba, 359
científica. Véase Redacción médica Seguimiento, 213, 402-403
médica, 449-453 cálculos del peso durante seguimiento, 348-349, 349t
derechos de autor, 451 derivación gástrica en Y de Roux, 189
errores frecuentes, 449-450 dificultades, 349
proceso de revisión por especialistas, 450-451 directrices, 131-132, 348
publicación en Internet, 452 duración y tipo, 348
recomendaciones respecto a pérdida de peso, 452-453, recomendaciones para elaborar informes, 453
452t, 453t significación, 430
requisitos de las revistas, 449-451 visitas, 416
Reflujo duodenogástrico, 252 Seguridad, partición, 170
Regurgitación, 172, 173, 175 Seguro, negligencia profesional, 402, 446
Reintervenciones Sepsis, 306-307
derivación con bandas ajustables, 228 Seroma, 327-328
evaluaciones de resultados, 350-351 Seudotumor cerebral, 39, 42
preparativos, 121-122, 122t Sever, enfermedad, 39
Rejuvenecimiento (lifting) facial, 332 Sevoflurano, 113, 114
Relaciones médico-paciente, responsabilidad profesional, SF-36 (Medical Outcomes Study Short Form Survey), 346, 347,
448 384, 384f
Remifentanilo, 113
Sibutramina
Rentabilidad económica, análisis, 60-61
aumento de la presión arterial, 76-77
Reposición de líquidos, 115
para control de peso corporal, 73, 75-77, 76f, 89
Reserva cardiopulmonar, 136
en diabéticos, 76
Resistencia vascular, 373
Resistina, 19, 30, 31-32 con orlistat, 80
Respiración quejumbrosa, 307 perioperatorio, anestesia y, 111
Restricción calórica, 368, 391 Sickness Impact Profile, 347
Resultados funcionales, 347 SIM 1, gen, 30
Retraso mental, 97-98 Síndrome
del asa ciega, 296
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Reversión de intervenciones, 147, 295


Riesgo(s) del comedor nocturno, 22
familiar para la obesidad, 25 del compartimiento abdominal, 295, 310
evaluación, 103-106, 119-121, 120t coronario agudo, 128
cardiovasculares, 105, 105t, 119, 121t de evacuación gástrica rápida
en cirugía derivación
bariátrica de revisión, 294-295 biliopancreática, 252
ortopédica, 385 gástrica en Y de Roux, 186
de comorbilidades, 96, 103 estimulación y marcapasos retrógrados, 280, 280f
en derivación gástrica de Roux con asa larga, 236-237 gastrectomía de Billroth II, 4
digestivos, 105, 119-120 pérdida de peso, 392
endocrinos, 105, 121 síntomas, 133
470 Índice alfabético

Síndrome (cont.) Torsoplastia, 325, 331


de hipoventilación obstructiva, 109, 109t circunferencial, 325
del intestino corto, 3 Transcrito regulado por cocaína y anfetaminas (CART),
metabólico de la obesidad, 11, 40, 371-372, 372t neuronas, 31
definición, 388 Traqueostomía
efectos de orlistat, 79 apnea del sueño, 334, 335f, 336, 336f, 381
prevalencia, 388 procedimiento auxiliar, 334, 336-337, 336f
del ovario poliquístico, 40, 121 riesgos, 336-337
posprandial, 239, 241 Traslado de pacientes obesos, 112, 124-125
del túnel carpiano, 39, 42 Trastorno(s)
Síndrome X. Véase Síndrome metabólico de la obesidad cerebrovasculares, 380-381
Sistema digestivos
de conducción cardíaco, 108 evaluación preoperatoria, 105-106
digestivo, 110 hemorragia, 6, 129, 198-199
nervioso simpático, 372-373 postoperatorio, 128
renina-angiotensina-aldosterona, 373-374, 374f distímico, 97
respiratorio endocrinos, 40, 42
evaluación preoperatoria, 111 hematológicos, 110, 121
obesidad y, 109-110 de la información, equipos laparoscópicos, 442-443
trastornos postoperatorios, 116, 128 límite de la personalidad, 427
Sobrealimentación, 242, 243t menstruales, 40
Sobrepeso, frente a obesidad, 11 mentales
Society of American Gastrointestinal and Endoscopic Surgeons contraindicación quirúrgica, 96-97, 121, 427-428, 427t
(SAGES), 141, 402 evaluación preoperatoria, 106, 427-428, 427t
directrices de acreditación, 403 postoperatorio, 129
idoneidad de la asistencia multidisciplinaria, 432 musculoesqueléticos, 121, 383-385
Somatostatina, 284 psiquiátricos. Véase Trastornos mentales
South Beach, dieta, 86 reproductivos, 40, 42
Succinilcolina, 114 Tratamiento
Sufentanilo, 113 dietético, 67-72
Sulfato ferroso, 358
alimentos sólidos, 171
Superobesos
composición de macronutrientes, 69-70, 69t
complicaciones postoperatorias, 236
criterios, 357
frente a obesidad mórbida, 231
derivación biliopancreática, 241
longitud del asa de Roux y pérdida de peso, 231-235, 237
con cruce duodenal, 257
pérdida de peso, 392
dieta
Suplementos herbales, 89-90
Sustancias, abuso, 97 contenido
Sustitución articular, 385 bajo en carbohidratos, 70, 83
Swedish Obese Subjects (SOS), estudio, 47, 59 calórico bajo, 68, 390-391
calórico muy bajo, 68-69
directrices, 84
para pérdida de peso corporal, 83-86
ejercicio y, 70-71, 87
T estructura, frente a dietas autoseleccionadas, 69
evitar comer y beber simultáneamente, 171
Tabaquismo, 24-25, 104, 246 modificación del comportamiento, 123, 357
Tamaño de la porción, 21 postoperatorio, 132-133, 412, 415-416
Taquicardia, 142, 307 preoperatorio, 122-123
Taquigastria, 278, 279, 279f regulación del peso corporal y, 22
Taquipnea, 307 requisitos energéticos, 67-68, 68
Tasa técnicas de consumo de alimentos en la gastroplastia,
metabólica de reposo (TMR), 67-68, 68c 170-172, 171t
de metabolismo basal (TMB), 30, 389 perioperatorio, 119-129. Véanse también Asistencia
Técnicas de alimentación, 170-172, 171t postoperatoria; Preparación preoperatoria
Tejido adiposo, 30. Véase también Obesidad abdominal consideraciones
corporal, 11 anestésicas, 124-125
ectópico, 18-19 laparoscópicas, 125-126
pardo, 30 técnicas, 126
Terapia de grupo, 428 criterios ACS, 398
Termogenia adaptativa, 30 curva de aprendizaje, 402
Termogenia, 30, 389 derivación con bandas ajustables, 228
The Doctor’s Quick Weight Loss Diet (Stillman), 85 intraoperatorio, 123-126
Tiamina (vitamina B1), deficiencia, 134, 247, 360 profilaxis, 123-124
Tiopental, 113 quirófano y, 123, 123t
TMB (tasa de metabolismo basal), 30, 389 Treitz, ligamento, 215
TMR (tasa metabólica de reposo), 67-68, 68c Trifosfato de adenosina (ATP), 30
Tomografía computarizada (TC), 308 Trócares, lesiones, 183
Índice alfabético 471

Tromboembolia. Véase también Pulmón, embolia Vía(s)


en derivación gástrica en Y de Roux, laparoscópica, 198, 220t, clínicas
221 centros de excelencia, 439
evaluación preoperatoria, 105, 105t cirugía bariátrica de adolescentes, 319-320
factores de riesgo, 124, 124t desarrollo, 417
en gastroplastia, 173-174 gastroplastia vertical laparoscópica con bandas ajustables,
profilaxis, 105, 105t, 140, 213 180, 181t
Trombosis venosa profunda neurales, 31
control de fugas, 308, 310 respiratoria
evaluación preoperatoria, 112 difícil, 112-113, 114-115, 125
obesidad y, 38, 110 evaluación, 104, 112
profilaxis, 112, 124 resistencia y obstrucción, 377, 378
Tubo neural, defectos, 359 VIH, infecciones, 95
Vitamina A, deficiencia, 134-135, 361
Vitamina B1 (tiamina), deficiencia, 134, 247, 360
Vitamina B6, deficiencia, 359-360
Vitamina B12, deficiencia
U en derivación gástrica, 133
gastrectomía y, 358
Úlcera(s) homocisteína y, 359, 360
cruce duodenal e incidencia, 252 Vitamina C, absorción de hierro y, 134
estasis, obesidad y, 38 Vitamina D, deficiencia, 134-135, 360-361
estoma, 5, 246-247 Vitamina K, deficiencia, 111, 134-135, 361
hemorragia, tras derivación gástrica, 6 Vitaminas, deficiencias, 134-135, 261
marginales Volumen
derivación espiratorio forzado (VEF), 109
biliopancreática, 302 pulmonar, 109
con cruce duodenal, 261 sanguíneo, 108
gástrica en Y de Roux, 200, 221, 300-302, 301f Vómitos, postoperatorio, 135-136, 137
diagnóstico, 301, 301f
frente a estenosis, 301
en gastroplastia vertical con bandas ajustables, 302
tratamiento, 301-302
péptica, 95 W
Unidad de cuidados
intensivos, 126 Weight Watchers, 85
intermedios, 126 Wernicke, encefalopatía, 247, 360
Ursodesoxicólico, ácido, 201, 341 Wernicke-Korsakoff, síndrome, 134, 360

V Y
Válvula ileocecal, resección, 295 Yeyunociegostomía, terminolateral, 149
Valvulopatía cardíaca, 73-74 Yeyunoileostomía, 148-149, 149f
Vascularidad tisular, 311
Vasculopatía periférica, 38, 41
Vecuronio, 114
VEF (volumen espiratorio forzado), 109
Vena cava, filtros, 337-338 Z
Venlafaxina, 73
Veteran Affairs Administration (EE. UU.), National Surgical Zona, dieta, 86
Quality Improvement Program, 346
© ELSEVIER. Fotocopiar sin autorización es un delito.

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