Jonathan Hurtado

Fred Proaño

Lina Rivera

Luis Romero

COMENTARIO CINE FORO DE LA PELÍCULA. EL LOBO DE WALL STREET

Jordan Belfort, es el protagonista. Al inicio de la película se puede ver a Jordan, una persona común,
con gastos comunes y una vida un poco común. Su deseo era entrar en la bolsa de valores de New
York; él sabía la cantidad de dinero que se movilizaba en Wall Street, el mercado de bolsa de valores
más grande del mundo.

Jordan empezó a entrar en un conflicto ético desde el momento que entró en Wall Street, el jefe le
enseñó los trucos para mantenerse en línea durante el trading, era ni más ni menos que estar ebrio,
masturbarse para liberar la tensión y gastar el dinero en porquerías. Aquí uno puede observar qué
tan poco ético puede llegar a ser la compra-venta de acciones. Los corredores tomaban esta
profesión como un simple juego de engañar al más tonto. Jordan no estaban tan corrompido como
los demás, pero poco a poco empezó a entrar en el juego.

Era el primer día como corredor de bolsas para Jordan en Wall Street. Su sueño anhelado, para mala
suerte de Jordan en el primer día como corredor sucede algo que dejó a todos atónitos, ocurrió una
crisis a nivel mundial, todos los mercados de valores llegaron a la quiebra, despidieron a cientos de
corredores en Wall Street, dejando a Jordan sin trabajo y a la deriva.

Él nunca renunció a ser corredor de bolsas, buscó trabajo en el periódico hasta que encontró uno
interesante ¡Se daban comisiones del 40% por trato en una pequeña casa de valores! Para Jordan era
un sueño, él recibía cerca del 1% por trato en su trabajo anterior, le pareció algo increíblemente
rentable.

Al llegar él se da cuenta que es una muy pequeña casa de valores, parecía un restaurante de tercera,
Jordan pregunta por el puesto y aun así las condiciones del lugar, el decide avanzar el negocio. Esta
pequeña casa de valores ofrecía acciones de compañías malas, no eran acciones de miles de dólares,
tú podías ir con tus ahorros de la semana y comprar un par de acciones que representan centavos de
ganancias. Esta pequeña casa de valores, debido a su precio, ofrecía acciones a carteros, meseros,
gente con poco dinero que quiera ganar unos cuantos dólares extras.

Al ingresar a esta casa de valores, Jordan, empieza hacerse corrupto, ofrecía acciones basura a altos
costos a gente con poco dinero, el juraba que al invertir esa cantidad de dinero iban a tener el negocio
de sus vidas. Los demás accionistas miraban con asombro con qué facilidad Jordan podía vender esa
basura a gente sin dinero, ellos veían que tan poco corazón tenía al vender estas acciones. Para Jordan
lo único que le importaba era el dinero que iba a ganar (40% en ventas).

Poco a poco con la vente sobrevalorada de las acciones él empezó a tener más y más dinero, acosta
del engaño, él sabía que gente con poco dinero iba a aceptar sus propuestas debido a la poco
preparación de ellos, un gran empresario cuida su dinero y tiene más precaución en qué lo invierte.

Jordan ya se empezaba a aburrir de estar en esa casa de valores, empezó a buscar su propio piso para
poder fundar su propia casa de valores. Él buscó a amigos con las siguientes características:
vendedores audaces, holgazanes, poca experiencia, gente con ganas de ganar dinero a como de lugar.
Junto a este grupo de holgazanes fundó su propia casa de valores. Jordan les enseñó a cada uno de
ellos el arte de poder vender una porquería de acción a cualquier persona que llamen por teléfono,
hasta les escribió un diálogo personalizado para que no se pudieran equivocar en la venta.

En cierto auge de su negocio, la cantidad de corredores de bolsa que tenía en su casa de valores era
grande. Esto se debe a una mala noticia que salió en el periódico diciendo sobre los fraudes que se
llevaban dentro de esta empresa, lo que atrajo a tantos corredores era la cantidad de dinero que se
movilizaba en esta casa de valores, poco a poco la venta de acciones basura se iba haciendo popular
dentro del negocio, todos querían recibir las sumas de dinero que se mandaba Jordan al bolsillo.

Jordan se iba haciendo cada vez más y más rico, el dinero ya le parecía poco, empezó con el mundo
de las drogas. En este punto vemos como ya él se iba corrompiendo cada vez más y más, tanto dinero
ya lo apoderaba y ya no sabía qué hacer para disfrutar.

Dentro de las múltiples fiestas que Jordan tenía, nunca podían faltar las drogas, alcohol y las mujeres.
La cantidad de drogas que recibía en su cuerpo era tanta que ya hasta cierto punto ya había probado
todas las drogas del mundo. Él era una persona que no podía pasar un día sobrio, los vicios ya se
apoderaron de su cuerpo. Dentro de una de las facturas que tenía la empresa era el consumo de
prostitutas por valores muy parecidos a un carro.

Los vicios no solo se veían en Jordan, su grupo de amigos fundadores no se quedaban atrás. Todos
estaban consumidos por las drogas y por el sexo. Más exteriormente de su grupo de amigos están sus
trabajadores. Dentro de la empresa él se vio forzado a crear una hora feliz en las que todo mundo
pueda tener sexo en el baño a una determinada, pero la libertad hizo que dentro del baño se pudiera
tener relaciones sexuales cada vez que quieras.

El sexo se volvió algo tan común que ya después de un tiempo una secretaria había tenido relaciones
sexuales con casi todos los hombres de la oficina, lo peculiar es que esta mujer se había casado poco
tiempo después.

Para Jordan la vida le pasó la factura. El gobierno lo empezó a investigar poco a poco hasta poder
atrapar a Jordan. Dentro de una de las acciones que tuvo que hacer Jordan es inculpar al resto del
grupo, ahorrando tiempo al estado y poder ahorrar millones de dólares al pueblo. Al tomar estas
acciones, Jordan, se vio en el conflicto personal de denunciar a sus amigos de años, pero tuvo que
hacerlo.

Jordan ya con la vida destruida y millones de dólares en multas, tuvo que dejar su vida llena de drogas,
alcohol y sexo. Su esposa lo dejó, se llevó a sus hijos y tuvo que tomar de nuevo su vida.