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ANÁLISIS ANTROPOLÓGICO
Patricia Gonzales
EN LA VICTORIA
A todo ello, creo que se puede establecer una culpa biológica siempre que existan las
condiciones externas para desarrollarlas, por ejemplo, la adicción es una condición
genética que nos hace predispuestos a caer en ellas, esto es, si alguno de mis padres
tiene esa condición genética, es muy probable que ya sea adicto a algo, por lo que las
probabilidades de que cuando crezca yo sea adicto a lo mismo crecen
exponencialmente, y si no soy adicto a lo mismo que él o ella, seré adicto a otra cosa.
Lo mismo sucede con el criminal, tiene una predisposición por la cual es propenso a
serlo, pero si no se dan las condiciones externas para su desenvolvimiento, es muy
poco probable que lo sea.
Desarrollando mejor el último punto, cito a Hikal “El ambiente es el campo en el que
actúa la personalidad, si se pierde, es probable que aparezcan trastornos en ésta; por
ejemplo, el desempleo con la falta de dinero, en un comienzo produce sentimientos de
inseguridad al desvalorizarse la persona y después, origina ansiedad y frustración,
luego viene el deseo de obtener los bienes por cualquier medio. Si a esto se le
agregan las presiones familiares de tener hijos y familia, será una presión fuerte para
el sujeto que padezca del desempleo.” (Criminología Psicoanalítica, p.51, 2005). Ello
conllevaría a que si el sujeto es propenso biológicamente a ser criminal, al notar todos
estos cambios es muy probable que su respuesta lógica sea robar para seguir
manteniendo a su familia.
Como si todo ello fuera poco, otro factor exógeno son los medios de comunicación,
aplicando las definiciones de Hikal en nuestra realidad tenemos que los diarios
orientados a las clases bajas contienen mayor cantidad de pornografía, de violencia
que crea un ambiente propicio en el cual es criminal en potencia puede volverse
criminal del todo, esto es, presentan noticias violentas o de violaciones que sin la
debida educación el niño puede tomar como normales y luego cuando se percate de la
realidad actúe así por lo aprendido. Lamentablemente ello no queda allí, la televisión
muestra que los cantantes de la música de moda siempre se encuentran al lado de
mujeres que bailan sensualmente semi desnudas, o peor aún que las “cantantes de
hoy” no pueden usar mucha ropa, todo esto porque la música que le “gusta al pueblo”
es la música que exige vender, ergo se adaptan a lo que los diarios venden creando
un efecto nocivo para la sociedad que ignorante frente a todo esto es inducida a su
propia perdición, “toda sociedad tiene los criminales que se merece” pues esa frase
acuñada por Alexandre Lacassagne, grafica muy bien lo que sucede actualmente, puesto que
se rige según las mayorías predominantes en Lima.
Ernesto Hooton por otra parte se inclinaba por decir que los delincuentes eran productos de
taras hereditarias y que tanto biológica como morfológicamente se trataba de seres venidos a
menos, no normales, ello tampoco se puede comprobar, sin embargo hay indicios que
mostrarían una cierta tendencia hacia lo criminal en determinadas familias, pero, debido a que
todo se desarrolla en un mismo hogar no podríamos deducir con firmeza que se trata
necesariamente de una herencia o si es el medio ambiente el que incita a la delincuencia.
Ahora bien, como hemos mencionado líneas a pesar de no tener pruebas concluyentes nos
mostramos a favor del criminal que biológicamente tiende a delinquir, y más aún en nuestro
lugar de estudio como es en la Victoria. La expresión “ese parece ratero” se me viene a la
cabeza, pues es un decir popular, y ello no viene por coincidencia, sino porque en la mayoría
de casos, (por obvias razones no podría decir en todos los casos, pues sería una generalización
injusta), se trata de personas de tez trigueña oscura, ojos redondos un poco jalados, boca
carnosa, y pómulos salidos, normalmente tienen aspecto sucio y visten con pantalones
sumamente anchos o bermudas largos y anchos, polos de basket o hockey, y gorros.
http://www.scribd.com/doc/24502759/TEORIAS-CRIMINOLOGICAS