Una racién de tierra,
sueldo y pan
Lila Astorga
Mi papa cra empleado de fundo,' 1 cuidaba los
animales en el fundo Mallarauquito que est4 ubicado en el Ca-
jén de Mallarauco donde hay otros fundos: Santa Victoria,
Santa Teresa, Santa Elisa y Cuesta de Pelvin. Esto era lejos del
pueblo, lo mds cerca es Melipilla a 25 kilometros.
Nosotros somos 10 hermanos, cinco hombres mayo-
res y cinco mujeres menores. Yo soy la menor de todas, naci en
1934. A mi pap por ser empleado le daban una raci6n de tie-
tra, el sueldo y pan, Esas eran las garantias’ que él tenfa.
En el pedazo de tierra cultivabamos papas, porotos,
majz, Todo eso era para la casa, Ademis, mi papd tomaba tie-
rras en medias pa’ trabajarlas con los hijos y lo que se cosecha-
ba se vendia.
Mi papé tenia como 15 vacas. Mi mamé sacaba la le-
che, hacfa los quesillos y los vendfa en la casa misma, Criaba
hartas gallinas y los huevos se consum(an, el resto se vendfa a
un comerciante de Melipilla que los iba a buscar, Todo eso era
pa’ mantenerlos y vestirlos a todos.
Mi papé ganaba una miseria mensual —como $ 15 al
mes— y las garantfas le iban quitando. Eso pasaba en el fundo
cuando era chica.
EI Ilegaba en la pura noche, salia temprano y no vol-
via hasta tarde porque le tocaba ir lejos a ver animales. Era rara
vez cuando Ilegaba a almorzar, asf que mi mamé Ilevé la carga
de enseftarlos a los hombres y a las mujeres. Tenfa paciencia,
ella pasaba trabajando todo el dia, entonces los hermanos ma-
yores criaban a los m4s chicos, O sea que se Ilevaban la carga
de criarlos, porque ella tiempo no tenfa: del almuerzo empeza-
ba a hacer los quesos, hasta las 4 6 5 de la tarde y otra herma-
na més grande hacia la once y asf todos trabajaban.
Todos tenfan su actividad, habfa poco tiempo pa’ ju-
gar y todas esas cosas, Nosotros nos entreteniamos con eso y
jtanta fruta que habfa en la casa! Como ser, los duraznos es-
taban botados en el suelo, se lo recogiamos a los chanchos y
“7habfa en esos tiempos las paltas. . . jtodo el afio! O sea que
no habfa ningin dia en el afio que no tenfamos fruta ahi, to-
do el afio dbamos vuelta con frutas del huerto.
La mamé hacia los huesillos jUf! Hacfa sus tres sa-
cos de huesillos; hacia mote jtodo eso se preparaba, no
pa’ vender, pa’ la casa! Hacia tortillas de rescoldo. El mote se
hacfa con legfa, en tarros grandes y después los molfa.
Mi mamé iba a Melipilla a comprar, Compraba el
azticar por sacos y los tallarines por cajones. La ropa la com-
praba hecha a un comerciante que pasaba —el mismo que com-
praba los quesos— los Ilevaba zapatos, vestidos o géneros boni-
tos, floriaditos asf.
En [a situacién econémica los criamos bien: la leche,
el pan, no los falt6, La mamé trabajaba todo el aflo, nunca se
daba vacaciones. Era rara vez cuando un viajecito a Cartagena,
pero por el dia no més, Y ahf los llevaba porque salfan camio-
nes de alld. Entonces, ir a la playa por un dia de vacaciones,
era toda la salida que hacia ella,
Y no habia mas tiempo {No vé que habfa que aten-
der tantos animalitos y pdjaros? A mi mama le gustaba la fies-
ta, era alegre, De que llegaran personas que supieran tocar la
guitarra, en la casa se armaba la fiesta, hacia una cazuela
pa’ atender, Era carifiosa, ya llegaba otro con un chuico de vi-
no, También se tomaba chicha de la que alld se hacfa.
Cuando era chica se murieron tres guagiiitas, menor
que yo. Me acuerdo cuando murié una que la lavaron en una
artesa, bien lavada y la vistieron con un vestido de papel bien
bonito, . . La sentaron arriba de una mesa y le pusieron flores,
Luego llegaron con guitarras y le cantaron todas las noches al
angelito, {Tan bien que arreglaban los trajecitos con alitas!
Bonito como angelitos, con papel con caladitos, tan bien arre-
gladitos. .
Habjan sefloras que se especializaban en hacer
vestidos para angelitos, A los grandes no los velaban en cajon
como ahora; los velaban en la cama, tapados con una sdbana
de pies a cabeza, con cuatro velas. Y la gente les rezaba, Pero,
ahora no, Creo que todavia hay partes donde se usa, pa’ I sur
parece,
ey
Y ahi se armaba la fiesta
Le tenfa miedo a las cosas
de dnimas que contaban