Вы находитесь на странице: 1из 7

FENOMENOS

DE ALTA
ATMOSFERA
CLIMATOLOGIA Y
METEOROLOGIA
PRESENTACIÓN

Los alumnos de la carrera profesional de INGENIERIA AMBIENTAL, en el curso de


CLIAMTOLOGIA Y METEOROLOGIA presentamos este trabajo con el tema de
FENOMENOS DE ALTA ATMOSFERA con el fin de conocer que fenómenos llegan a
producirse en cada una de las capas de la atmosfera a partir de la mesosfera, conocer
también sus características y efectos que traen consigo, estos llamados fenómenos.

INTRODUCCIÓN

Es de saber que la mayoría de los fenómenos atmosféricos suceden en la primera capa


de la atmósfera que es la tropósfera, a excepción de algunos otros fenómenos como
sprite en la mesosfera o las auroras polares que se forman en la ionósfera; estos son
más conocidos como fenómenos de la alta atmosfera. El estudio e investigación se da a
través de la observación de los fenómenos que suceden en la alta atmósfera para
comprender su interacción en dichas capas, pues el estudio de estos fenómenos aunque
no influya directamente en adquirir más información y estudiarlos profundamente, en los
tiempos actuales la información que brinda la meteorología sobre el estado del tiempo
atmosférico es importante.

OBJETIVOS

 Conocer los fenómenos de la alta atmosfera y sus principales características


dinámicas que se producen en diferentes capas de la alta atmosfera.

 Sistematizar y Explicar por qué se producen estos fenómenos de la alta atmosfera


FENOMENOS DE ALTA ATMOSFERA

Los fenómenos de alta atmosfera o denominados también rayos nube-espacio, nube-


ionosfera se da con, la presencia de fenómenos luminosos nocturnos asociados a los
topes de las tormentas y su descripción básica recordaba a llamaradas o resplandores
ascendentes que partían desde la cima de las nubes tormentosas hacia lo alto de la alta
atmósfera y el espacio. Estas observaciones no fueron tenidas muy en serio durante
muchos años.

Posteriormente, se les comenzó a prestar atención y prestigiosos físicos proponían una


posible hipótesis para la formación de fenómenos electro-luminosos que se producían por
encima de las tormentas. En 1956, C.T.R.Wilson (premio Nobel de Física) ya comentaba
y avanzaba la posibilidad de la existencia de descargas eléctricas en las tormentas podía
tener su reflejo entre el tope de la tormenta y la ionosfera.

Los avistamientos de lo que hoy llamamos sprites o espectros se siguieron dando desde
latitudes ecuatoriales hasta los 50 º norte - sur, allí donde las tormentas ejercen su
dominio.
La indiferencia de la comunidad científica a estas fulguraciones luminosas fue casi
absoluta durante bastante tiempo.

El profesor Winckler y su grupo de la Universidad de Minnesota, estaban probando un


sistema de cámara de video CDD de alta sensibilidad en condiciones de baja luminosidad
cuando vieron por accidente las señales de lo que hoy denominamos espectros o
sprites.

La NASA se puso rápidamente a tratar de observar y estudiar tal fenomenología desde


sus satélites tripulados con cámaras de video muy sensibles y lograron captar sprites en
diversos lugares de la tierra y siempre asociados a tormentas muy activas.

A finales de 1999 y principios del 2000 ya se habían detectados otros fenómenos electro-
luminosos en la alta atmósfera que emanaban o se situaban en las cimas de las
tormentas: los elves o elfos.

Estudios más detallados pusieron de manifiesto que los sprites estaban asociados casi
siempre a la existencia simultánea de rayos nube-tierra positivos. Posteriormente, se
detectaron otras emanaciones como son los halos de espectros (sprite halos), los trolls,
crawlers, pixies, gnomos, etc. Todas estas diferentes manifestaciones de energía, que
salían de los topes de las tormentas eléctricas, son lo hoy en día se conocen como
Eventos Luminosos Transitorios (Transient Luminous Events, TLE,s). Analicemos algunos
de ellos con un poco más de detalle.

La mayoría de los sprites proceden de intensas descargas NT+. Sólo dos casos de sprites
están asociados a rayos nube-tierra negativos, NT-. En promedio, los rayos NT+ que
llevan sprites son los más intensos que el resto de los NT+ que no los llevan.
Su color es fundamentalmente el rojo, aunque en su porción más baja aparecen
filamentos azulados. Se presentan agrupados, nunca solos: en agrupaciones de dos, tres
o más descargas luminosas. Su duración es muy corta, del orden de milisegundos, muy
difíciles de ver a simple vista.

Las cámaras ultrasensible y rápidas pusieron de manifiesto que los sprites se originan a
unos 70 km de altura sobre la tormenta, en un pequeño punto. Primero se extienden hacia
abajo y, posteriormente, hacia arriba.

Suelen estar asociado a grandes sistemas tormentosos: los llamados Sistemas


Conectivos de Mesoescala, SCM. Emanan de los topes nubosos de la zona estratiforme
ligada a la convección. Se sospecha que la máxima actividad de los sprites se alcanza a
medianoche.

Un gran sistema convectivo puede dar lugar de 1 a 776 sprites, aunque por término medio
suele ser 48. Cuando la actividad tormentosa es significativa se puede dar un espectro
cada 12 segundos aunque lo normal es que sea de uno cada 2-5 min. Recientes estudios
han demostrado que los sprites suelen darse en SCM cuya zona estratiforme alcanza
unas extensiones del orden de los 20. 000 km2.

No existen dos duendes iguales. Los llamados c-sprites son estrechos (1 km) y alargados,
tomando formas de columnas. Otros recuerdan a zanahorias invertidas. Algunos
presentan estructuras más complejas dando una apariencia de sucesivas irrupciones o
emanaciones que recuerdan a danzantes, los “dancers”. Existen otros que no poseen
formas definidas.

Descripción de los elfos y los halos de espectros

Comentamos con anterioridad que el físico


Wilson pronosticó algún tipo de existencia de
fenómenos electros luminosos entre la tormenta
y la alta atmósfera antes de que se observaran.
Con los elfos pasó algo parecido.

A principios de los 90 cuando se observaban los


primeros espectros, algunos físicos teóricos se
adelantaron y predijeron la existencia de pulsos
electromagnéticos que podrían emanar de las
tormentas (Universidad de Stanford, EEUU).
Estos brillos o resplandores se darían en la baja
ionosfera entre los 80 y 100 km de altitud.

En 1994 se detectó por primera vez las señales de los llamados elfos (elves) y confirmado
su existencia en el año posterior.

Los elfos son estructuras cuasi - toroidales en expansión que llegan a tener varios cientos
de kilómetros de ancho. Medidas fotométricas indican que su color intrínseco es el rojo.
Su duración es muy corta (menos de 500 microsegundos) pero relativamente brillantes.

Los elfos se generan después de la existencia de rayos NT muy intensos y,


predominantemente, positivos aunque también son generados por los negativos.
Cámaras extremadamente sensibles y ultra rápidas de TV pueden detectar los elfos.
Recientemente, se han observado espectros que van precedidos por un resplandor difuso
en forma de disco que recuerda en su forma a los elfos. Los científicos prefieren llamar a
esta estructura halos de espectros porque, dimensionalmente, son más pequeños que los
ya mencionados elfos. Otro hecho llamativo de los halos de espectros es que se propagan
hacia abajo desde los 70-80 km de altura.
Gnomos y Pixies

En una campaña especial donde estudiaron la actividad


tormentosa de la convección en EEUU (proyecto STEP
2000), se analizaron en detalle los orígenes y evolución de
los rayos NT+ con diversos sensores. Cámaras de
televisión de baja luminosidad, LLTV, se emplearon para
ello. En el estudio de una tormenta muy activa ocurrida el
22 de Julio del 2000, y durante la fase de su desarrollo
vertical se detectaron unas fuentes luminosas que no se
habían observado antes en el domo o parte alta que
sobresale de la tormenta y que continuó durante 20 min.

Algunos tenían una duración muy corta (33-136 ms) eran canales de descarga parecido a
rayos que se propagaban hacia arriba y que no se extendían más allá de 1 km de altura
sobre la tormenta, su anchura era del orden de 200 m. Su estructura era muy uniforme y
compacta y diferentes a los blue jets. Se les denomino “gnomos” por su tamaño. Durante
los mismos 20 min. se apreciaron intensos y pequeños puntos que coronaban la
protuberancia nubosa. Se contabilizaron 83 y a estos se les dio el nombre de “pixies”.
Estos puntos luminosos se les estimaron un tamaño horizontal del orden de 100 m y una
duración de más de 16 ms.

No debemos pensar que las tormentas eléctricas no nos vayan a deparar más sorpresas.
Se seguirán detectando más fenómenos electro-luminosos entre los topes tormentosos y
la ionosfera, donde los gases a baja presión pueden responder a los potentísimos campos
electromagnéticos que se generan en su interior.

Lo que empezó siendo fenómenos observados visualmente y de poca credibilidad, hoy se


ha convertido en una rama de la alta atmósfera donde se emplean sofisticados medios de
detección. Su extensión en la vertical varía desde los 100 m a más de 50 km. Tienen
formas variadas: puntos, chorros, formas toroidales, etc; así también en su color. Mientras
que los chorros azules, están en el límite de nuestra percepción humana, las descargas
en forma de rayo vertical pueden durar varios segundos. Todos ellos tienden a formase en
las zonas más vigorosas de la convección intensa. Mucho queda por investigar sobre su
origen y el papel que desempeñan en la química de la estratosfera, circuito global
atmosférico y en la seguridad aéreo-espacial.

El mantenimiento del campo eléctrico terrestre (ionosfera cargada positivamente y la tierra


con carga negativa) requiere que las tormentas eléctricas (que se comporta como una
batería llevando cargas positivas a la alta atmósfera) sean capaces de mantener 300.000
voltios de diferencia de potencial entre el sistema ionosfera-tierra. Es necesario entender
cómo la batería está cargada y cómo se mantiene la diferencia de potencial.
CONCLUSIONES

La aparición de estos fenómenos óptico-electromagnéticos que generaban las tormentas


muy activas, ha atraído rápidamente la atención de investigadores, tanto en su faceta
experimental como teórica. Lo que no cabe duda es que hoy en día forman parte de la
cadena o eslabón eléctrica que existe en el planeta tierra y donde las tormentas son pieza
clave en el mantenimiento del campo eléctrico terrestre.

Los análisis de los duendes, jets azules, etc. Abarcan campos que van desde la óptica y
electromagnetismo atmosférico. Medidores terrestres y satelitarios se emplean para
realizar medidas espectrales, de calor y energéticas puestas en juego, densidad de flujo
de carga y electrones, su impacto en el campo magnético terrestre, propagación de ondas
comerciales de radio y TV, etc... Las investigaciones llevadas a cabo incluyen la
generación de potenciales residuos electroquímico de larga duración en la alta atmósfera.

Hasta ahora solo podemos especular y realizar hipótesis del origen de estas estructuras
dentro de la actividad eléctrica de tormentas muy activas y de su posible existencia en
otros planetas de nuestro sistema solar.

Lo que si es cierto es que el descubrimiento de los fenómenos de alta atmosfera han


puesto de manifiesto la existencia de nuevas formas y estructuras eléctricas asociadas a
las tormentas como son la irrupciones súbitas de rayos gamma que se han detectado en
el Compton Gamma Ray Observatory. Pares pulsantes de radiación de VHF, llamadas
TIPPS, Trans-Ionospheric Pulse Pairs, que se originan en regiones tormentosas, pero
10.000 veces más intensas que los rayos convencionales, han sido observados por el
satélite ALEXIS.

BIBLIOGRAFÍA

 Lyons, A., Armstrong A,Williams y Bearing E., (2000). La caza de cien años para
los sprites. Eos, Trans. Amer. Geophys. Union, 81, 373 - 377.

 Lyons, A., Nelson E,Amstrong A,Pasco P. y. Stanley A, (2003). Descargas


eléctricas ascendentes de tormentas, Boletín Sociedad Americana de
Meteorología, abril-2003, 445-454.

Вам также может понравиться