EFECTO DE LAS MICORRIZAS ARBUSCULARES EN EL CRECIMIENTO Y

PRODUCCIÓN DE AJI (Capsicum sativum)

Estudiante.

DIRIS PERNETT

Código:50.955.552

Tutor:

ANDRES FERNANDO RUBIANO

Universidad Nacional Abierta Y A Distancia

UNAD

Mayo De 2018
 CULTIVO DE AJI

El cultivo de ají es una especie hortícola que se explota tradicionalmente en el Valle del

Cauca y la Costa Atlántica, su fruto tiene alta demanda en los mercados de las hortalizas de

Colombia, en plazas de mercado y en supermercados; ocupa mano de obra no solo en las

labores del campo sino también en los centros de consumo, debido a que este producto es

comercializado por los vendedores informales (Consejo Departamental de Estadísticas -

CODE (2006) citado por Corpoica, 2007).

El producto es consumido preferiblemente en estado verde, ya que en esta condición

presenta buen aroma y es utilizado en forma de condimento especialmente en las comidas y

ensaladas; en estado maduro también se emplea para adobar comidas pero su demanda es

menor. La industria produce mermeladas utilizando el fruto maduro y elaborando encurtidos

con los frutos verdes y maduros (Consejo Departamental de Estadísticas CODE (2006).

citado por Corpoica, 2007).

Esta hortaliza se siembra en pequeñas áreas, las cuales no sobrepasan las cinco hectáreas,

y es cultivada durante todo el año, alcanzando las mejores producciones en el segundo

semestre. La demanda del ají en supermercados en las ciudades capitales es de 452 t/año;

mientras que en las plazas del mercado la demanda se estima en 675 t/año (MADR, 2006.

Citado por Corpoica, 2007).

PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA

Los cultivos convencionales se basan en la aplicación fertilizantes químicos para mejorar

la nutrición vegetal, ocasionando el deterioro de las características químicas, físicas y

biológicas de los suelos, la desaparición de la capa arable, entre otros problemas que en la

mayoría de los casos son de carácter irreversible y conllevan a la reducción de su capacidad

productiva (Chantal, et al., 1998). A este respecto, en los últimos años, los biofertilizantes se

han convertido en una alternativa para mejorar el rendimiento de los cultivos a través de un

mejor suministro de nutrientes al medio ambiente, favoreciendo el desarrollo de una

agricultura ecológicamente sostenible, permitiendo una reducción en los costos de

producción, hasta en un 20% a largo plazo, si la respuesta de las plantas ante las micorrizas

es de alta dependencia; siendo una alternativa amigable con el medio ambiente y que

garantiza la conservación del suelo con respecto a su fertilidad y biodiversidad (Alfonso, et

al., 2005).

Estas malas prácticas empleadas en el uso del suelo nos permiten desarrollar o

implementar sistemas de producción que sean sostenibles que en lugar de ir en el deterioro

de la calidad de los suelos sean de gran beneficio, enriqueciendo su potencialidad con el uso

de micorrizas. En este sentido, el conocimiento sobre las características fisicoquímicas del

suelo y su relación con la presencia de micorrizas, es fundamental para generar procesos

agrícolas más productivos y con menor impacto ambiental.

Los hongos formadores de micorriza se perfilan como un promisorio insumo

microbiológico para la agricultura sostenible. Su importancia en el funcionamiento de los

ecosistemas y su potencial como “fertilizantes” biológicos son motivos suficientes para

considerarlos como uno de los componentes más valiosos de la diversidad biológica del

suelo.

El interés por la micorriza se debe a su enorme potencial que tiene en donde los hongos

micorrízicos podrían servir como un bioinsumo agrícola no contaminante y de bajo costo.

Las micorrizas cumplen un papel como cerradura en los ciclos de nutrientes, además

contribuye a mantener la estabilidad y diversidad de los ecosistemas naturales, y amortiguan

estreses bióticos y abióticos que afectan la adaptabilidad de las plantas en los suelos en que

crecen.

Se podría utilizar los hongos micorrízicos para producir cualquier tipo de Hortaliza de

forma sostenible, así como la reducción de costos de producción que son muy altos. Esto es

una excelente opción para los agricultores que producen hortalizas optando que en muchas

zonas los suelos son de baja fertilidad.

Son pocos los estudios publicados sobre la interacción de los Hongos micorrízicos

arbusculares y su interacción con las Hortalizas.

METODOLOGÍA

Se realizarán visitas a los viveros productores y comercializadores de semilla de hortalizas

en la región caribe que se encuentran registrados ante el ICA. De los viveros registrados se

colectarán muestras de los sustratos utilizados para la producción de semilla, con el fin de

realizar una caracterización físico - químico que permita determinar la fertilidad de los

diferentes sustratos utilizados en la región. Los análisis físicos que realizarán son densidad

aparente, porosidad, caracterización de la estructura y retención de humedad del sustrato. Los

análisis químicos son; pH, C.E. y contenido nutricional del sustrato. Luego del diagnóstico

se seleccionarán los dos mejores sustratos con base a las características físico-químicas

determinadas.

La evaluación del efecto de los sustratos con y sin inoculantes sobre el desarrollo de los

cultivares de hortalizas se realizarán de manera independiente por variedad.

 Se evaluará la dependencia micorrizal de los cultivares de hortalizas bajo condiciones de

vivero y campo.

Se realizará una isoterma de adsorción de P de acuerdo al método de Fox y Kamprath

(1970), para calcular la cantidad de P que se debe aplicar a cada tratamiento para obtener tres

concentraciones de P en la solución del suelo: 0,002, 0,02 y 0,2 mg•L -1, según lo propuesto

por Manjunath y Habte (1991) para estudios de dependencia micorrizal.

-Inoculación de un hongo micorrizante con cultivares de hortalizas.

Para la fase de campo se realizará una nueva inoculación siguiendo la metodología

descrita en la actividad 2. Sumado a que en esta actividad se registran datos de producción.

La información se analizará mediante un análisis de varianza para estimar diferencias

significativas en función de los tratamientos

RESULTADOS ESPERADOS

Como resultados de la ejecución de este trabajo se espera establecer el grado de

dependencia de plantas de ají a hongos de micorrizas arbusculares mediante la medición de

su efecto en el desarrollo y producción en dichas plantas utilizando inóculos reportados con

mejores características.

Además, se espera encontrar el inoculante más apropiado para cada cultivar evaluado y

por ende obtener mejores rendimiento y comportamientos de los mismos tanto en la etapa de

vivero como de campo.

 CONCLUSIONES

Las micorrizas son una alternativa de gran valor a la hora de potencializar el desarrollo y

producción de las plantas y más cuando estas son cultivadas en zonas con limitaciones

ambientales y de suelo. Determinar la dependencia y especificidad de cada cultivar a los

hongos micorrízicos es importante para alcanzar asociaciones realmente eficientes que se

exprese en un verdaderos incremento en la productividad de las plantas cultivadas como el

ají.
 Referencias:

 Aguilera Gómez, Luis I., Olalde Portugal, V., Arriaga, M. R., & Contreras Alonso, R.

(2007). Micorrizas arbusculares. CIENCIA ergo sum, 14(3).

 Cuenca, G. (2007). Las micorrizas arbusculares como alternativa para una agricultura

sustentable en áreas tropicales. Interciencia, 32(1), 23-29.

 Andrade, A. (2010). MICORRIZAS: antigua interacción entre plantas y hongos.

Revista Ciencia. Obtenido de:

http://www.revistaciencia.amc.edu.mx/images/revista/61_4/PDF/11_MICORRIZAS.pd

 AZCON, C. y BAREA, J. Micorrizas. En: Biología vegetal. Libro de investigación y

Ciencia. Prensa científica: España, 1988. p. 83-89.