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PROMETHEUS
RELATO
Eternamente
Mentalmente todos pedían la pro-
“Alma en pena” tección de Dios. agradecidos…
-¡Aaaaooooooouuuuuuuuu!!!-
De Héctor José Méndez se escuchó ahí nomás, en la puerta Desde Literarte, queremos agra-
que daba al patio empedrado. decer antes que nada al diario El
En el mes de septiembre las noches Doña Carmen, sin darse cuenta Tribuno de Jujuy y a su Gerente
maimareñas comienzan a atempe- apretó fuertemente a su hija de ejecutivo Rubén Armando Riva-
rarse, lo que invita a las familias a meses, la que dio un grito estreme- rola por habernos concedido este
quedarse de sobremesa luego de la cedor, que conjuro el hechizo y sir- espacio para adentrarnos en las
cena, “para hacer la digestión”. vió de antena de descarga, pues el letras y en el arte.
En la gran casa de los Maurines, aullido se cortó abruptamente y la A todos los que nos colaboraron
a la entrada sur del pueblo, en- tensión de las personas se relajó con sus obras literarias y artísti-
contrábase reunida la familia de milagrosamente. cas por permitirnos mostrarlos al
don Rafael Valdivieso; su esposa Don Rafael atinó a ver la hora en mundo, mediante estas sencillas
Carmen con su hija Rosa en bra- su reloj de bolsillo. Las diez. Nadie publicaciones.
zos, algunas criadas y otros fami- comentó nada, sólo se miraron y, Don Oscar d’ Oliveira dio el
liares. como si telepáticamente se com- primer paso, el equipo que desde
-Me han dicho que el Gallego prendieran, mudos, se fueron a siempre lo acompañó continua-
está muy grave- comentó el jefe de dormir. Al día siguiente temprano, mos con su legado, pero todo ciclo
la casa. don Rafael se dirigió presuroso al así como empieza, tiene un final.
-¿Y qué vos no estás peleado a pueblo. Ya se encontraba en las pri- Nos vamos despidiendo de
muerte con él?- preguntó doña temas y ya nadie se acordó del mo- mucho más cerca, en el fondo de la meras calles, cuando alguien le di- nuestros lectores y seguidores y en
Carmen. ribundo. Se hicieron las diez de la casa, por donde está el horno de jo: -El Gallego murió anoche a las la próxima y última edición les
-Mmmmmm…..pero en caso de noche y todos, entre bostezos, de- barro. Todos se miraron con el te- diez. daremos lo mejor de nosotros a
peligro de perder la vida, hay que cidieron irse a la cama, cuando rror reflejado en el rostro, pero na- En ese momento, las campanas todos ustedes para que esta des-
perdonarse. No es bueno que el al- una especie de maullido largo que die habló. de la iglesia comenzaron a doblar pedida sea memorable.
ma se quede con un cargo de con- venía desde el fondo de la quinta, Una corriente eléctrica parecía por la muerte de Manolo Otra vez, con el corazón hen-
ciencia o disgustado con alguien, los detuvo en seco. flotar en el ambiente. La luz de la Rodríguez, al que todos llamaban chido por haber cosechado tanto
porque no descansará en paz y -Debe ser un gato, no se asusten- lámpara comenzó a vacilar hacien- afectuosamente: el Gallego. amor de nuestros lectores y gra-
hasta puede andar penando por previno don Rafael sin poder evi- do mover las sombras en una dan- cias a la magia de artistas y escri-
ahí. Así pues, mañana iré a discul- tar un estremecimiento… za macabra. Cada uno permanecía (Fuente: “Relatos Maimareños y tores…
parme con el Gallego explicó don Otra vez el aullido, esta vez más petrificado en su sitio, escuchando otros cuentos”. Agradecimiento a Otra vez, ¡Muchísimas gracias
Rafael. bien como un quejido doloroso. Ya los propios latidos de su corazón Biblioteca Popular de Jujuy- sec- a todos!
La conversación giró hacia otros no parecía un gato. Se lo escuchó que quería salirse por la boca. ción autores jujeños)