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ASPECTOS GENERALES
DE LA NICOTINA
Farmacología
Cuando se fuma tabaco, la nicotina se c
absorbe rápidamente, aunque la canti-
dad absorbida depende del volumen e
intensidad de succión, la dilución con
el aire y la profundidad de la inhala-
ción. Después de la calada, altos nive-
les de nicotina alcanzan el cerebro en
10-20 s, más rápido que con adminis-
tración intravenosa [26]. Las concen- Figura 1. Esquema que representa un receptor nicotínico. a) Mecanismo de acción del receptor nico-
traciones de nicotina en la sangre arte- tínico tipo canal ante el acoplamiento de nicotina o de acetilcolina; b) Receptor nicotínico homopenta-
mérico (α7), con cinco sitios de unión para acetilcolina o nicotina; c) Receptor heteropentamérico (α4β2),
rial después de fumar un cigarro son con dos sitios de unión. Las estrellas señalan los sitios de unión.
usualmente entre 20-60 ng/mL, y las
concentraciones después de la primer
calada son de 7 ng/mL [27]. aerosol, goma de mascar) puede provocar una sobredosis, que
La absorción de nicotina a través de las membranas biológi- se manifiesta por la presencia de náuseas, vómitos y el posible
cas depende del pH. La absorción es rápida en los pulmones, fallecimiento; sin embargo, no existe evidencia de efectos tóxi-
presumiblemente por la amplia área que presentan los alvéolos cos serios cuando se combina cualquier terapia de reemplazo o
y por el pH pulmonar (7,4). Se absorbe cerca de 1 mg (0,3-2 mg) varias terapias juntas (p. ej. uso de múltiples parches) [37].
de nicotina en el momento de fumar [28,29]. Posteriormente a
su absorción, la nicotina entra en el torrente sanguíneo, donde, Receptores nicotínicos
a un pH de 7,4, el 65% se ioniza, el 30% se desioniza y el 5% se Los receptores nicotínicos son receptores presinápticos en su
une a proteínas plasmáticas [30]. Estudios realizados en anima- mayoría, pero también los hay postsinápticos; son de tipo canal,
les y necropsias de personas fumadoras muestran que los tejidos de naturaleza catiónica (Na+ o Ca++) [38] y de conformación
con más afinidad por la nicotina son riñón, hígado, pulmón, ce- pentamérica, con al menos dos sitios de unión-ligando en la in-
rebro y corazón; el músculo esquelético tiene moderada afini- terfaz entre las subunidades [39,40]. Cuando la acetilcolina o la
dad, y el tejido adiposo, una afinidad más baja [31]. La nicotina nicotina se unen a estos sitios, se produce un cambio estructural
también se acumula en la leche materna y cruza la barrera pla- de las subunidades que lo forman y el canal se abre, lo que permi-
centaria con facilidad [28]. te el flujo de iones y la liberación de neurotransmisores (Fig. 1).
Se ha notificado que la unión nicotina-receptor induce la li-
Metabolismo beración de dopamina [41,42], ácido γ-aminobutírico [43], glu-
Los niveles más altos de nicotina en sangre se alcanzan al termi- tamato [44], serotonina (5-HT) [45] y péptidos opioides [46,
nar de fumar un cigarro y declinan rápidamente en los siguien- 47]. Los genes que codifican para las diferentes subunidades
tes 20 minutos por la amplia distribución en los tejidos corpora- que forman el receptor nicotínico se han identificado y clonado.
les. El volumen de distribución en humanos es 2,6 veces el peso Se han caracterizado varias subunidades, entre las que encontra-
corporal [32]. mos: α1-α10 y β1-β9 [48]. Algunas de estas subunidades se ex-
La nicotina es metabolizada por el hígado y se han identifi- presan en el sistema nervioso central: α2-α7 y β2-β4 [48,49] (Ta-
cado seis metabolitos primarios, de los cuales cuantitativamente bla). El ensambleje de estas subunidades determina diferentes
el más importante es la cotinina [33]. La nicotina se excreta vía subtipos de receptores nicotínicos (heteropentámeros), que di-
renal por filtración glomerular y tubular con reabsorción varia- fieren en sus propiedades farmacológicas y biofísicas. Las sub-
ble, dependiendo del pH de la orina. En orina ácida, la nicotina unidades α1, β1, γ, δ y ε se considera que representan el recep-
se ioniza y la reabsorción tubular se minimiza; en orina alcalina, tor muscular; α2-α6 y β2-β4 representan el receptor neuronal, y
una mayor cantidad de nicotina se desioniza, seguida por la re- α7-α10, el receptor neuronal homopentamérico [49].
absorción tubular. La excreción de cotinina está poco influida La activación del receptor α4β2 se ha asociado a la presencia
por el pH urinario, debido a que es más básica y, además, es de- de depresión y conductas adictivas, como el consumo de tabaco.
pendiente de la tasa de flujo urinario [34]. Un estudio demostró, Los subtipos α6 y β3 regulan la liberación de dopamina.
por medio de nicotina marcada radiactivamente, que al menos
el 1% de la nicotina consumida se excreta en las heces [35]. Se
ha observado también que mayores cantidades de nicotina que CARACTERÍSTICAS GENERALES DE LA DEPRESIÓN
de cotinina se excretan en el sudor de fumadores; sin embargo, La depresión es definida por la Asociación Americana de Psi-
las cantidades no se han contabilizado [36]. quiatría (1994) [2] como un trastorno heterogéneo crónico que a
Se especula que el continuo consumo de cigarro adicional- menudo se manifiesta con síntomas psicológicos, conductuales
mente al uso de terapias de reemplazo (parches transdérmicos, y fisiológicos, tales como: humor decaído por más de un día (en
Tabla. Distribución de subtipos de receptores acetilcolina nicotínicos se- Para el caso de la depresión, los subtipos de receptores 5-HT1A
gún el área cerebral. y 5-HT2 son los directamente involucrados [60].
Estudios in vitro han comunicado que neuronas del NDR, al
Corteza cerebral α7, α4β2
ser estimuladas con nicotina (10-300 μM), disminuyen su fre-
Hipocampo α7, α4β2 cuencia de disparo; sin embargo, de manera simultánea, se in-
crementa la liberación de serotonina en el medio extracelular
Cuerpo estriado α3β4, α4β2, α6β2, α4α6
[61]. Dicho resultado ha llevado a sugerir que la nicotina induce
Núcleo del rafe dorsal α7, α4β2 la liberación de 5-HT de las terminales presinápticas del NDR
tal como lo hacen los antidepresivos tricíclicos, como la fluoxe-
Hábenula α3β4
tina, uno de los antidepresivos más usados actualmente. Este
Locus coeruleus α3β4 mecanismo de liberación de 5-HT podría estar mediado no sólo
por la acción de la nicotina administrada exógenamente, sino
Cerebelo α3β4
también, de manera endógena, por la estimulación que proviene
Núcleo accumbens α4β2, α6β2 de las fibras colinérgicas del núcleo laterodorsal (LDT) y del
núcleo pedunculopontino tegmental (PPT) del tallo cerebral.
Núcleo interpeduncular α3β4
Asimismo, se ha sugerido que la nicotina actúa sobre las
Hipotálamo α7 neuronas serotoninérgicas del NDR de dos maneras: la primera,
utilizando un mecanismo directo de tipo excitatorio, que lleva-
Septo α7
ría a la liberación de 5-HT; y la segunda, utilizando un mecanis-
Sustancia negra α4β2, α6β2 mo indirecto de naturaleza inhibitoria que provocaría la hiper-
polarización de las neuronas del NDR [61,62]. Además, se ha
Tracto óptico α3β4
demostrado que la liberación de 5-HT por parte del NDR es me-
diada por la activación de receptores 5-HT2C presentes en las
neuronas del NDR [63] y en otras regiones corticales y límbicas
niños y adolescentes la irritabilidad puede significar humor de- involucradas en la etiología de la depresión [64,65].
primido), disminución de interés o placer en las actividades dia- Se ha demostrado que no hay efectos sinérgicos cuando se
rias, incremento o disminución del apetito, insomnio o exceso administra nicotina y fluoxetina simultáneamente en ratas de-
de sueño, alteraciones psicomotoras (ya sea retraso o agitación), primidas por el modelo de clomipramina neonatal [21]. Expe-
fatiga, indecisión, falta de concentración, sentimientos de culpa rimentos usando microdiálisis in vivo han descrito que una sola
o pesimismo, recurrentes pensamientos de muerte o suicidio, inyección de fluoxetina induce un paulatino incremento de
disminución de la libido y falta de aseo personal. 5-HT extracelular, mientras que la repetida administración in-
La depresión es dos veces más común en mujeres que en crementa los niveles base de 5-HT [66]. Recientemente, se noti-
hombres [50]. Estudios epidemiológicos muestran que alrededor ficó que el efecto antidepresivo de la nicotina es inmediato des-
del 40 al 50% de riesgo de padecer depresión es genético [51]. de la primera administración, lo que no se observa con la admi-
Esto la convierte en un trastorno altamente heredable; sin embar- nistración de fluoxetina, ya que su efecto se da cuando se toma
go, los genes que interfieren en la depresión no se han deter- de manera crónica [21].
minado completamente. Factores no genéticos, como el estrés, Como una segunda hipótesis, se ha sugerido que el efecto
traumas emocionales, infecciones, etc., durante el desarrollo del antidepresivo de la nicotina puede ser a través de la liberación
cerebro se han implicado en la etiología de la depresión [50]. de dopamina. Neuronas dopaminérgicas del área tegmental ven-
Por su parte, pacientes deprimidos víctimas de suicidio pre- tral y de la sustancia negra pars compacta expresan una gran
sentan un volumen reducido de corteza prefrontal y orbitofron- variedad de receptores nicotínicos [67]. Inhibidores de la recap-
tal, estriado ventral, amígdala e hipocampo (véanse detalles en tura de 5-HT aumentan la respuesta postsináptica a dopamina
[52]). Neuroquímicamente, se ha observado una disminución de en las terminales del sistema mesolímbico [68,69], al igual que
la actividad en el sistema noradrenérgico y serotoninérgico, así lo hace la administración de nicotina en dicha región [70,71].
como un incremento de los niveles plasmáticos de cortisol [53]. Evidencias adicionales indican que los receptores nicotínicos
que se expresan en neuronas del área tegmental ventral se des-
ensibilizan por la exposición crónica a nicotina, aun usando do-
MECANISMOS DE INTERACCIÓN DE LA sis semejantes a las encontradas en el plasma de fumadores
NICOTINA EN LOS TRASTORNOS DEPRESIVOS [72]. Se han notificado resultados similares cuando se miden los
Como ya se hizo mención, varios laboratorios en el mundo han niveles de dopamina en el núcleo accumbens o se registra su
notificado las propiedades antidepresivas de la nicotina cuando frecuencia de disparo en ratas que recibieron una inyección de
se administra por diferentes vías y dosis, tanto en humanos [3,4] nicotina en una dosis similar a la encontrada en el plasma de fu-
como en modelos animales de depresión [17,18,21], e incluso madores [73].
en ratas normales [54]. Uno de los efectos antidepresivos inme- Por su parte, la administración de antagonistas de receptores
diatos de la administración de nicotina es que induce un incre- nicotínicos como la mecamilamina, en animales crónicamente
mento significativo de serotonina en varias regiones del cere- expuestos a nicotina, induce síndrome de abstinencia y dismi-
bro, entre las cuales podemos citar: corteza, hipocampo, estria- nución de la liberación de dopamina por parte del núcleo ac-
do, septo lateral, núcleo dorsal del rafe (NDR) y médula espinal cumbens [74]. Esta reducción en la liberación de dopamina se
[15,45,55,56]. El efecto fisiológico de la 5-HT liberada por la ha interpretado como el correlato neuronal de la anhedonia o
nicotina depende del tipo de receptor serotoninérgico que se es- disforia experimentada por fumadores cuando intentan dejar es-
timula, así como de la región cerebral donde se liberó [57-59]. te hábito [75].
subcutánea (0,1 mg/kg), se incrementa en un 362,61% la fre- Asimismo, los registros de sueño en pacientes deprimidos
cuencia de descarga de las neuronas serotoninérgicas del NDR no fumadores tratados con nicotina y fluoxetina por un período
durante el período de sueño REM, sin afectar al sueño no REM mayor a un mes mostraron que la administración de nicotina
o a la vigilia [47]. Estudios in vitro han demostrado que la admi- disminuye la vigilia y la etapa 1 de sueño no REM, e incremen-
nistración de nicotina (2 µM) en rebanadas del NDR incremen- ta la latencia al primer período de sueño REM [7]. En contraste,
ta en un 81% la frecuencia de disparo de las neuronas, así como la administración de fluoxetina induce el efecto opuesto sobre
la liberación de serotonina. De manera interesante, la frecuen- la vigilia y la etapa 1 del sueño lento; sin embargo, la latencia al
cia de disparo de las neuronas del núcleo LDT y del PPT se re- primer período de sueño REM se mantiene alargada [94]. Estas
duce un 80,8 y 81,8%, respectivamente. Además, la inhibición discrepancias observadas entre las etapas del ciclo de sueño des-
de las neuronas del núcleo LDT se bloquea cuando se adminis- pués del tratamiento con ambas sustancias sugieren la existencia
tra WAY-100635 (140 nm), un antagonista del receptor de sero- de mecanismos de acción independientes en la regulación del
tonina 5-HT1A [55]. Estos resultados indican que la nicotina in- sueño, pero que, al final, convergen con un mismo efecto, en es-
hibe la actividad de las neuronas colinérgicas del núcleo LDT y te caso sobre su naturaleza antidepresiva [49].
del PPT mediante la liberación de serotonina por parte del NDR.
En consecuencia, se suprimen las ondas PGO (Fig. 2). En conclusión, los resultados descritos aquí sugieren que la ni-
En humanos, el efecto de la nicotina sobre el patrón de sue- cotina tiene propiedades antidepresivas, aunque algunas de
ño es un poco distinto. Los informes señalan que la administra- ellas aún no son claras. Sin embargo, resulta evidente que el
ción transdérmica de nicotina en sujetos sanos no fumadores in- posible mecanismo de acción sea a través de la liberación de
duce un aumento en el tiempo total de sueño REM, pero este serotonina por parte de las células del NDR, por la liberación
efecto es dependiente de la dosis [93]. Se han obtenido resulta- de dopamina en el sistema mesolímbico y por su efecto neuro-
dos similares cuando la nicotina se administra usando la misma protector. Las propiedades terapéuticas que la nicotina pudiera
vía, pero por largos períodos (seis meses), en pacientes que pre- tener en el tratamiento de la depresión aún deben explorarse
sentaban depresión mayor [6]. con detalle.
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