Lo Subalternos; La Ceiba 1904 - 1937.

La idea central de la subalternidad es dar voces a los grupos humanos que por
distintas razones no dejaron evidencia directa de cómo vivieron sus vidas o su
dinámica en función de la sociedad. Su análisis y crítica se realiza desde la
evidencia oficial, que dirigían las elites en contraposición a los subalternos. En el
caso de la investigación sobre los extranjeros radicados en La Ceiba entre 1904-
1937, en base a los tres tipos de discursos sobre cómo interpretar la
subalternidad, podemos utilizar los dos primeros, que son: el primero, enmarcado
en el carácter oficialista, contemporáneo y participativo pero inconsciente de
querer brindar un contenido a futuro (textos como las leyes de inmigración, las
memorias de algunas dependencias estatales, etc.). Y el segundo, siempre en el
marco del carácter oficialista (como cómplice inmediato), pero con un contenido
para un público consiente, así como una diferenciación temporal de los
acontecimientos. A mi juicio, la tercer forma de aprehender a los subalternos, no
cabe en cuanto un análisis de discurso, ya que como tal no hay un trabajo
concreto, completo e imparcial sobre La Ceiba de inicios de siglo que nos hablen
sobre sus emigraciones extranjeras.

La mayoría de fuentes consultadas son de carácter oficial, es decir, materia prima

en bruto, por lo tanto, es evidente que el discurso primario es el de mayor
importancia. La subalternidad va estar presente de manera implícita en la mayoría
de nuestras fuentes. En base a ellas sabemos de extranjeros que una vez
radicados en la ciudad pertenecieron a las masas, sean en el grupo de pequeños
comerciantes, agricultores y trabajadores industriales. Miremos:

“Por razón de ingresos ilegales de personas pertenecientes a razas cuya

entrada está prohibida o restringida al territorio nacional, en las revisiones
periódicas que se han efectuado en todo el país a base de los censos
departamentales o locales, se ha ordenado la expulsión de algunos, lo
mismo de otros que, abusando de la hospitalidad recibida se han dedicado
a hacer predicas contra las autoridades constituidas o al implantamiento de
doctrinas que tienen por único miraje anarquizar la sociedad, por falta de
comprensión de tales doctrinas”1

Simplemente con haber entrado de manera ilegal y más si no pertenecía a un

grupo inmigrante privilegiado, como ser los de “raza blanca”, un emigrante se
convertía en subalterno, y por lo tanto estaba subyugado a abstenerse a la
comparecencia de la autoridad, que a través de diferentes medios (como censos)

1 Memoria de Gobernación, justicia, sanidad y beneficencia 1936-1937 (1938). Tegucigalpa.

Talleres Tipográficos Nacionales. P. 15
les controlaba. Para el caso ceibeño, podemos usar la representación tipográfica,
que nos brinda un esquema dual de la convergencia en La Ceiba, desde la fuente
oficial; esta pueden ser indicativa e interpretativa. Algo indicativo de la anterior cita
es por razón de ingresos fiscales de personas pertenecientes a razas cuya
entrada está prohibida y algo interpretativo es la acción que toma la autoridad
respecto al problema, que seria se han efectuado en todo el país a base de los
censos departamentales o locales, se ha ordenado la expulsión de algunos.

Lo anterior también nos puede remitir a estudiar estos inmigrantes subalternos

desde un análisis secuencial, que muestra la narración de manera concatenada en
categorías alienadas, según el texto. De esta forma, ilegales, razas, y expulsión
nos brindarían una secuencia lógica del desarrollo de estos emigrantes, así como
las posibles contradicciones en la sociedad.

Por último, la neutralidad (a pesar de la subjetividad) de nuestro análisis y critica,

nos es favorable para la interpretación de estos subalternos, dado lo lejano del
tiempo y lo poca obligación oficial que se tiene respecto a la temática.