Вы находитесь на странице: 1из 11

COMISION MUNICIPAL DE CULTURA - MUSEO DE ENTRE RIOS

P. G. LORENTZ

LA VEGETACION
DEL NORDESTE
DE LA

PROVINCIA DE ENTRE lUOS

INFORME CIENTIFICO

2a. Edición ordenada por el Gobierno de la


Provincia de Entre Ríos
Introducción y Apéndice por Juan R. Bhz
Jefe Ad-Honorem del Departamento de
Bolánica del Museo de Entre Ríos

---- t047 ----


T&LL."'E. ORA. .. rco. P.Io.TT&"O . . . . . . 0 • •
.,.. _r .... * , T
- - - - P 6. • A 11 • - - -

----;~~~,:~r~.~\
,"lQ'll.1l_:__ ~t:"''''
I
l'

¡ .
!:

" BUENOS

Reproduc ción In r",,"slmll de 1. portada de 1. l' edición


INTRODUCCION

DATOS BLOGRAFICOS: " l'aul Cunlher Lorentz, nació en Kahla, d O-


bre el Saale (Sajonia Allenburg), en el año 1835, y casó en Buenos Aires
con Juana l-Icrminia Frnnz, oriunda de Pirna (Sajonia), s ie.ndo apadrina-
do por Jorge Rhode y H. Nap p, en el día 21 de diciemb re del 1880. Pero
al año s iguient e falleció Lorenl .. (6 de octub re de 1881), víctima de un~
inflamación del hígado, siendo enterrado en el cementerio de Co ncepción
del Uruguay . La viuda casó más tarde COn el doctor Sch ubart y vive ac-
tualmente en 'Jena (Alemania)·".
La precedente nota fué publicada por el doctor Cristóbal M. Hicken,
en su monografía: EVOLUCION DE LA S CIENCIAS lEN LA REPUnLl -
CA ARGENTINA - LOS ESTUD'lOS nOTANICOS CON MOTIVO DEL
CINCUENTENARIO .D·F. LA SOC IEDAD ClENTIFICA ARGENTINA. ·
B. Aires, 1923.
Reeditar un libre:> anti.g uo ya condenado a ser pieza eje museo, es re-
vivir al autor y poner en escenario su labor en un flUga z momento de 1:1
vida espiritual del país, ulla picada - diríamos- en el cam po virgen
.de la Flora Argentina.
Poco valdrían los millares de ejemplares .de plantas deseca das que ya-
cen en los museos si no tuvieran el mentor que hable por ellas y nos diga
Quiénes son, de dónd'e vienen y qué rango ocupan en la fitosociología. Tal
es el propósito del autor de la VEGETAClON DEL NORoESTE DE EN-
TRE RIOS, va lorado, en este caso, por las dos instituciones culturaleg
que lo prohijan.
Resuelta en princi pio la creación de la Academia de Ciencias de Cór-
·doba (1869) -ya que su instalación tiene lugar recién en diciembre de
1873- Sarmiento encarga a Burmeist er proponga Sil reglamento y lo~
profesores que deberán d'e sempeiiar las principales cátedras de ciencia,
naturales. No habiendo en el país técnicos especializados, se recurre al '
~xtranjero . nombrándose t>ntrt> los prim eros al doctor Lorentz, de la Uni-
versidad de lI'í unich, en Botánica, por decret o que suscribe Avellaneda
P. G. LORENTZ el 16 de marzo de 1869.
Poco tiempo después arri.ba a ntlestro país el doctor Lorentz ~ de in -
mediato inicia s us exploraciones Ooristicas con escasos recursos que la~
penurias del erario le asigna pero el entusiasmo del doctor Avellaneda
todo lo allana por tratarse de UII asunto que atañe a la cultura y al pro-
greso del país.
Lorentz no se hizo cargo de la cátedra de Botánica en la Universidad
de Córdoba, por ciertas difioultades que se le crearon a poco de su llegada,
pero lo hace en el celebre Colegio de Concepción del Uruguay. De tal
modo fué dicho profesor t>1 primer botánico que actuó en la docencia se-
cundaria argentina, mientras su' distinguldo colaborador Dr. Jorge Biero-
nymu lo hace en la Unh'ersidad d~ Córdoba.
LA DECAlJA DE t.OREN'i':t EN LA BOTANICA ARGENTINA: A
dOI lustros cabales alcanza la actividad botánica de Lorentz en la Argl!lI-
- VIII- - 1... -

t in a ( 1)·. u muerte prematura truncó la obra emprendida con entu s iasmQ.o Anotar el rol de cada plallta en la composición de la8 forma8 que tiene la
y oj o ced ero en cuanto a las necesidades del país en aquel momento, ".egetación y la frecu licia absoluta o relativa con que se encuentra en di ·
s iendo Entre Híos la mejor es tudiad a e n s u as pecto geobollínico. ferentes puntos o regiones; hacer un Ouadro de la Vegetación del pal8,
Pr á cticament e en 1872 empiezan la s acti vi dades ci entírica s de mayor tan completo como fuera pos ible, etc y tratar de averiguar la8 causas que
ali ento en e l camilO de la na turale za ar ge ntina , co n la flunda ciones de la determinan los diferentes r as gos de es te cuadro. Atender a los puntos de
~ oci cdad ientífica y d e la Acade mia de Ciencias de Córd oba. E l Colegio vis ta de aplicación práctica".
a cion a l del Urugua y ya tenía un Ill antel Il r es ti g ios o de docent es libera - A los diez 8lÍÍ0s de tr a hajo Lorent" ha logrado en 911 casi totalidad el
les y P a r a ná s u E scuela de Profesol es. S in e mba rgo has t a ese momentll plan es bo zado, con los g rand es herbarius de la República conservados en
es poco lo realizado en es tas di sciplinas ti pes ar de las Irascend entales la Facultad de Ciencias de Córdoba y en el Museo de Farmacología de la
in\'es tigaciones de D'Orwgn,y, Dar",in y Burm eis te r, precurs ores d el mo - Facultad de Medicina de Buenos Aires, el que fué de propiedad del Cole-
vimi ento cientifico de 1870. " Desde 1852, dice Hic l¡e n, co mi en za, es cierto, gio Nacional del Uruguay, má s los que fueron a Europa con motivo de 108
la siembra intelectual, pero la co echa vino des pu és de 1870 ". S upe rfluo grandes ce rtám enes en París (1 879) y en N . América (Filadelfia, 1876) ·
será mencionar a l primer s e mbrad or de 1852 .. . Enlre Ríos fu ó la Meca en donde, por primera ve". s e exhibe en público la Flora Argentina.
de los grandes naturalis tas de l s iglo XIX ; s in embargo ha sta la llegada La ba se del conocimiento s is temático de las plantas del país se la dp-
de Lorentz nues tra flora " no produce es pecies si no pas to y ma dera ", d ice bemos al citado naturalis ta merced a los catálogos (en latín) elaborados .
Bolmberg. Igual ig norancia reina en la geo g rafí a de las pl a ntas y en el por el profes or Augus to de Gri s ebach con el material enviado por Lo ·
cont enido floral de las grandes regiones natural es, como ex pr esión d~ tentz el primero con el nombre de PLANTAE LORENTZIANAE Go-
co.njunto. Las r e llública s hermanas y a t ení a n casi r ea li zado el tra ba jo ttingen, 1874 y el más importante, conteniendo más de d08 mil dOB-
fundamental de su s res pecti vos dominios floral es; Chil e, con Gay y Phi- cientas especies de va sculares; S IMBOLAE AD FLORAM ARGENTINA
Iippi ; Brasil ya es taba a medio camino con s u monume nt a l FLO RA Gottingen, 1879, con innumerables es pecies nuevas para la ciencia.
BRA S ILIENSIS, al frente de Martius; el Uru g uay con Gibe rt t en ía ca - Con ello es tán cumplidas las dos primeras proposiciones del plan y en
talogado gran /larte de s us faneróg a mas, mi entras Ba la n za h abí a pen e- cuanto a los puntos tercero y cuarto que se refieren al rol que desempe-
trado a la lujuriante selva paragua ya, cu yos herba rios fu e ron a manos del ñan determinadas especies fundamentales o características en nuestro
eminente Grisebach, en Alemania, para s u es tudio, co mo a s í lo s d e Lo · complejo f1orístico, es t á n contenidos en el , MAPA . FITOG~OGRAFlCO .
rentz de la Argenti~la . ARGENTINO, con s us ocho Formaciones y tres RegIOnes, mas EL CUA-
Des pués de Cas eros ya se ges talNl en el pa ís el episodio a g r ícola de DRO DE LA VE GETACION ARGENTINA.
mayor trascendencia en Sudamérica (el g r a nero pamp eano y el emporIo Es neces ario d ecir que el mapa Fitogeográfico es el primero elabora-
gan~dero); habían nacido por gravit ación la Soci eda d Rural A r gentina,. do en el país con el análisi s critico científico y cuyas líneas fundamen -
creado el Departamento Nacional de Agricultura , e Ins tituto A gronó' tales aún se siguen res petando, aunque con nombres distintos. En cuan-
mico de Santa Catalina. Era, pues perentorio el conocimi ento botá nico to a los primeros l:osquejos de estas "formaciones", las de MousS¡)' son.
de la República, y a ello fueron jus tamente las miradas de los gobe rnan - solamente de pro yecciones geográficas y las d: ~ V,E?ETACION h~:::
tes del momento --Sarmiento, A vellaneda, Roca-, y por feliz circuns tan- GLOBO (Grisebach) , son pobres de informaclon fltologl ca , por no
cia, se tuvo eficientes colaboradores en las di sciplinas de las cie ncias na- conocido el país s u a'utor y ser esca s as las fuentes de consulta. Tales
turales,- especialmente la geología, bOlá-nica, zoología, climatología, etc. ha- . son los precursores geobolá.nicos de Lorentz.
biendo corres pondido al Dr. Lorentz 1& Flora, con s us tres aciert~s: el in- LA VEGE"fACION DEL N. E. DE LA PROV. DE lE. R.: Hasta 187il ·
ventario parcial y nomenclatura de las grandes familia s botánicas ; el pri- año en que allarece LA VEGETACION DEL NOREST~ D'E LA PROVI~­
mer es tudio .geobotánico y catálogo de las plantas argentinas (estudia- CLA DE ENTRE RIOS, la biblio. gra~ía ~otánica arg.en~ma es escas:o~ d::
da por Crisebach) . complementando con la Vegetación del Noroeste de' persa. No había descripciones de dlstntos o provmclas nor~les rentz
Entre Ríos. Por último. las conclusiones a que llega el botánico sobre las calá-logos sistemáticos, de tal modo, el libro del ,naturahst,a Lo ue
pos icdlidades agropecuarias, cuya certeza tiene alcance profético, como . llegó como señero en la geografía de I.as plantas cn~lIa~, a pesar de R~08 .
s e verá más adelante. el escenario es reducido, "un rinconCito de la prOV1l1Cla de Entre .
Antes de proseguir tS . necesario decir lo que Lorentz pensaba con ' ~dice Lorentz- de pocas leguas cuadradas, de un terreno ~oc.o. aCCIden-
respecto a la tarea de mayor urgencia .q ue tenía por delante, para lo cual tado, fértil y risueño", pero sirvió de ~~elo par~ la ed~~I~:~: ~:c~:.
trans cribiremos su plan de labor madurado en Concl\pción del Uruguay, en.. diferentes asociaciones :~J!('tale~ en ~lsl1nlo am~l~nt entina el pri-
el que revela el dominio de la materia y un claro método didádico. J),ice dto fértil y risueño naclO el pnmer. hbr? de bO~~l1Ica_ ~rg l' ran~­
Lorentz : "lo) Coleccionar lo más completamente posible todas las cspe-· mer mapa geobotáníco, los primeros. catalogos BlstemaltcolI dete;~inadoll
cies de plantas que viven en el país; 20) Clasificar con la ma,yor seguri-· rogamas indígenas y hon.gos colecClOnad~s por Loren::~e:t:B de Con-
dad pos ible; 30) Averiguar el área a que cada planta es tá limitada ; 40). por Thuemen, y no enumeramos otros grandes alumb

(l) En J. Dlo Dog raff A c itada d e Hi cke o hay UDa bibHog l8(fa co mpJ ela de L ore nt r. cep~:: c!:\t~::g~:Ye's~~ libro. referentes !l los alrededores de Concepción,
-Xl-
-X-
U con estas palabra. : "El histonador de la República Argenlilla, al
del Urugua), la eJ.cur~lon d~ c~ludlo cn carro a Cuncordla -verdadera e>:- enumerar 108 importantísimos servicios que su patria debe " tan . es-
cursion de e tudio- ) cl \ iaje al través del Monllcl .e Icenin COII delei - clarecido es tl\dista, no colocará en último lugar los Que le deue la cien ·
te, eguramenle. pero no ha de ser así el de 1" rlórula, "r ici a Sig la de cia y Que el Dr. Avellaneda sabe opreciar como poco de sus paisanos
familia>!, g~nero;> esp~ca;s que el coleccionis lll ha ordenauo, lIe",,"donoa lo hacen, y Que res plandecen como el órbol florido de las "el vas s.b-
a I iblemalica de la~ Ill,,"la ~, metódico Iladrón .~onde la 11I0lllenclalura tropicales". En efecto, la prestancia floral del lapacho es resplande-
Ulscribe lo moradores \ egelales de IIna comarca, suerte de regi " lro Cl-' ciente e impresionante S s u habitat sut.tropical. Nosotro~ luvlmos la
VICO de nuestras inslilucion e~_ Para los no iniciados en la bol2.lIlca o a alegria de localizarlo en Federación, má ~ larde en YUQuen, lo Que de-
lo presuntos displice11les por la ' istemótica, recom endamos medilar con mostraría Que fu é endémico en la cos ta del Uruguay, has la el Palmar
este párrafo del gran nalurali s la argentino Eduardo L. 1l011llberg : "El GrOJlde, según me noticiaron. .,
código científico e el mi' lodo, y en las ciencias naturales, .) cs pecial - lIace treinta años tuvimos noticias insospechables sobre la ac~uaclon
mente las biológica s se con sag ra en la nomenclalura . ~Iucho" Ilie nsan doccnte del profesor Lorentz en el Colegio Nacional del Uruguay, de
que esla palabro s olo significa una larga se rie de nombres lallllos u los señores Alvorez, como profesor en la época de Lorentz y del .Dr. Paro-
¡Tlegos, e ignoran Que ella no es ni mas ni menos Que el leng uaje de la dié, alumno Que fué en la excursión a Concordia; ambo_s COlllcldleron en
Ciencia". Y para aprender este lenguaj e de las plantas, agrega remos, cuanlo a la capacidad y condllcta auslera en la ense~anza. Mas lard~
es necesario llevar las tres . C" en la cateza: Conciencia, co nlinuida1 n08 la confirmó el Dr. Torino, distinguido médico re~~dente e~,. 13uen::
y confianza;y las tres "L" en el bolsillo : lupa, lib.reta y lálli z. Así soJiamos Aires y promotor de un homenaje forluilo --que deblO Ser o(¡clal-
decirle anDe tros alumnos de biolo gi a del profcso rado en Paraná y así el momento del sepelio del dístinguido cah·drálico. .
lo hacemos también, extensivo a los maestros a cuyas manos llegara este Siendo este libro ya his tórico e.n el campo ~e . ~a ciencia ~rgentl:,~:
libro, seguram ente, por la índole de Sil conlenido. debe respetarse su contenido, tal como lo co~clblO s~ ~utor, con ,
El naturalista Lo~ntz demuestra a través ¿c s u copiosa lil c rauura aciertos Y sus errores. Para algunos sistematologos ngldos pareceran
botánica un caluroso arecto a la tierra argentina, e pecialm enle a la di slates ciertas lagunas insalvables, pues se encuentran de~~e la I.nuta-
de E. Rios, maldiciendo a las revoluciones Que impiden la eXllansi<in ción de géneros y especies hasta la transposición de famlbas -\Il~PII­
agropecuaria Que ya apllnlaba promisoria en algunos dis tritos. En la ex- table a la imprenta esto último-, pero debe tenerse en cuenta la epo-
pedición al desierto -1879- anotaba : "Los campos son inmejorables. Que en que fué escrito y la orfandad bibJiográfica por lo Que lanto SUSPI-
riquezas inmensas posee, sin embargo, la República Argentina j Qui :: el autor Por otra parte sabemos que las reglas de nomel\clat~ra Y Sl-
porvenir el Que le eSI)era~ " Compara las tierras de la I'amlla co n las nominia s~ han conocido después de 1905, por las Actas. d.el. on~:~::
mejores llanuras d el norte de Alemania , pero según Lorentz las de su de Viena. Todo es disoulpable y en nada amen gua la primICIa Y
patria nativa serían infinitamente más pobres Que I"s de nu es tras intrínseco de la obra. .' d I U' g ay se
pampas. Elogia al soldado argentino comparándolo con el ta la por ser Fran,queando el atrio del cementerio de ConCepcloncan:an II:S u restos
pl8Jlta bravía, recia y adaptable a la crudeza de todas las visicitudes. encuentra un modesto monumento (N Q 1), donde des . doc,
Todo resultó cierto. del malogrado naturalista Pablo Gwllerio Lorentz. falleCIdo el 6 e
La tierra entrerriana para el natura lisIa resulta de una incognita
tubre de 18.Sl. tras excursiones herboríslicas p<,r
8ugestiva " atrayente; su composición flori s tica ajena al medio (Mor. - Muchas veces de regreso de nues d . Igunas flores silvestres
tiel) en unos casos y representante genuino del clima actual en otros los aledaiios del ArroYO de la China, e.Jamo~ ~ be) árbol que la.
deseoncierta a quíén desea ubicar ecológica mente a las distintas aso- sobre la fría loza que encierra un deshno: o o sa, e
-Giaciones de plantas, tan pronto esteparias, higrófilas, megatérmica~ fronda perderá; mas no sabe cuando y dónde Quedar~
etc, procedentes de los dominios florales austrobrasileiio pampeano o
monte xerofilo del noroeste argentino; bosque peripampeano llamoll:
JUlAN R. BAEZ
Jefe ad-honorem del Departamento-
Frenguelli y tierra de transición nosotros en sentido amplio . Este fu,;
de Botánica del Museo de E. Ríos.
el problema primero para Lorentz y es lo Que analiza en s us considera-
ciones y cuadros comparativos de la última parte de este libro. Por
algo exclama: "Pocas proví ncias fueron menos conocidas en el exterior
que la de Entre Ríos, y pocas sin embargo merecen mas el serlo". La mis-
ma conducta y probidad científica Que caracteriza a Lorentz en su la-
bor de botánico y profes or, la hace extensiva a los pocos hombres que
arriman un poco de calor y emulación :'. la obra empren ·ida. Así en-
laza, su .gratitud, al Doctor Avellane.da con la de un lapaellO anónimo
para la ciencia, bautismá·ndolo como 'IlECOM.A AVELLANEDAE, Lt1.,
4utaudo ejemplar de la dendrología argentina hermoso y noble por
40ncü K le míre. Al dedicarle la especie al presi ~ente Avellaneda lo ha-
- 25-

- 24- Tambien son muy frecu~ntes e~ el ~ampo las vlzcacheras, se-


ñaladas por un trecho estenl, que esta muchas veces coronado
-dos ni de leJos dan sustento á tanto ga nado, como se podria man- 01' una mata gigantesca de la Martyma luiea, con . sus gruesos
tener en ellos. Es esta una de las consecuellcias de las últimas ~amos de un metro y mas de largo. La vImos cubIerta de sus
revoluciones, que han empobrecido la provrncia. lmdas flores amanllas¡ mas larde se desenvuelven las fruta~
El número de plantas con flores q ue se mezclan entre el tapiz del con sus dos ~unto~ ~~~n~das qu.e le~, ha procurado el nombre .
césped, es sumamente escasa y casI desaparece para el ojo del ob- "c uerno del Olablo o una del dIablo .
servador superficial; quiero nombrar aq uí algunos de sus elemen- Proseguimos nuestro v i ~je . Pasando el arroyo Urquiza, entra-
tos caractensticos. Casi en todas partes se encuentran desparra- s en un monte ribereno que consIste en su mayor parte de
mados los arbustos bajos de Nesrea saicijoHa; frecuente es un ~e~mosos Talas de las dos especies (CeLtis TaLa y CeLits SeUo-
semiarbusto de la famIlIa de las Malvaceas con flores amarillas, wiana), entre los cuales se mezclan frondosos Sauces y. Mata
.Pterocaulon spicatum y especies de Gnaphahum, AmbTosia te- ' os (Lucuma neriifolía). En el suelo se encuentran v~nos . ~r­
nuifolia, especIes de li omphrena con flores blancas ó rosadas, ~Justos Y yerbas : "Rediondillo" (Cestrum), SoLana, Jusitcta Gt~he­
E:ryngia, en parte especies bajas, ó el alto agavifohum, que mu~ sit entre ellos la linda " Santa Luc~~" (Com:meLyna), la c~nos.a
·chos viageros tomaron por una verdadera Agave; algunos Helio- Aristolochia fimbriata, que me otreclO la ocaSlOn de m~strar a mlS
tropios, Cuphea thymoiaes y otras especies de este género que casi discípulos la interesante institucion de una fecundaclOn cr~ad'l
en ninguna parte t aIta; Oenothems con flores anaranj adas, Verbe- or medlO de insectos ; Malvas amarillas, Oeno.theras anaranJadas,
naceas, en parte en forma de arbustltos, en partes h erbáceas, en- txybaplms, Amarantl1,aceas y algunas gramIllas. Poco despues
tre estas últimas, especIalmente vistosa, la nermosa Verbena es- asamos el arroyo Pelado, que corre en un lecho. arenoso Y no
.carLata, algunas Cyp eraceas, Compositas amarillas; Aster monte- iiene monte ribereño. Observamos aqui una alteraclOn en el s~bs­
videensis en lugares mas esterlJes;. especIes de Baccharis con trato geológico, dejándose ver por primera , v;ez aquella arel1l~c~
flores blancas, especialmente con' gran frecuencia el 'venenoso , de que ya he hablado mas arnba . No notahamos en la vege a
, Ñio Ñio", como se llama eu las provrnvincias rnteriores ó Mio Mio ~i on una alteracion respectIVa.
·como se llama aquí, Baccharis coridifolia que centiene una st¡.stan- - Des ues nos acercamos á la Colonia de San J osé, fundad~ por
cia muy fuerte , pero que todavia, á lo que yo sé, no se ha exa· el Ge~eral Urquiza. La colonia se encuentra en est~d.o flo~ec~~nt~6
minado bien. Tambien los dos Xanthium, el abrojo y el cepa- E tá dividida en concesiones, de las cuales las vleJas tlen
caballo, no son escasos. c~adras de estension, las nuevas tan solo 8. como e~ cada t~~~~
Los arbustos son agradablemente vivificados por numerosos ceSlOn se encuentra la casa del propie~an~, la co l ~~ua ;oparra_
. pájaros, que por desgracIa en las cercauias del Uruguay h an sido el as ecto de un pueblo, pues las habJtaclOnes es an es
muy disminuidos por los cazadores diletantes ; son frecuentes mad!s sobre un espaclO grande. Solamente en la Plaza, ~~~i:~~~
entre aquellos los loros y picatlores ; también una que otra per- pa el punto mas elevado, se condensan un poco mas, . 1

allá algunos almacenes, la Iglesia, 'la h~rreria, l\~l~~a~~r~~' ; .:


diz cae víctima de nuestru apetl to .
Otro miembro de la Fauna es la langosta, que en algunos lu- carnicero unos cafées, etc. Esta altura o rec~ un m a-
gares cubre el campo en gran cantidad; pero no han hecho tan- vista sob~e Villa Colon y Paysandú. EstablecHl~os ~~~~tr~a~~a ~n=
to daño en el campo como en los cultivos, y parece que tan solo mento á pocas cuadras de la Plaza, pues ya a n
unas pocas yerbas del campo eligen para su alimento, dejando
rnt.lctas las otras. Solamente donde pasábamos estancias, eran trado. . . . mente nuestras .
muy visibles sus devastaciones, pues prefieren mucho los árbo- En. ~a mañana slgule~1te .comp~~~~~~ ~::nrr:~~~ En las bajad~
les introducidos. Mientras comen , por ejemplo, las hojas y hasta provl::;lOnes, y despu~s ::;egbulIl~o~as de Sagittaría montevideensls •.
la cáscara del álamo introducido , no tocan el Sauce de Hum- se encuentran . lagul1ltas, ~r a n la Jussirea Te-
boldt indígena. Debe ser grande su hambre cuando tocan á las .4.Lomia spilanthoides, especles;le ~O{::~::: ÁzoUa MageUani-
Acacias y las dos especies del Tala, prefiriendo la una (CeltiS? pens, el lindo Limmanthemum ~m? y Cyperaceas : Cyperus •.
SeHowiana) . ' ) ca, poLygonum ac:e, . :,: . algun~ canas samas el arroyo Peru-
Las grandes hormigueros de la altura . de 3 ó 4 piés, y del diá- Juncus, HeLeochans, .sctrpus . . uego pa " . iene buen ma- .
~etro de algunos metros,' á los cuales de todas partes, como ra- cha Verna, hasta donde se estIende 1\ col~n~~~pone de Talas,
dlOS ~onducen los caminos que han hecho lqs animalitos, llaman torral ribereño, que en su mayor par: SMata ojos y Ceibos.
tamblen la atencion. . entre los cuales se mezclan escasamen ~ dos por un gran nú- ·
Los arbustos estaban agradablemente amma
, ') Este !en~meno, que las plantas indigenas son mucho menos espuestas mero de pájaros. . ' '- d' d:lb ca" praderas de las mas .
a )~ devastaCIOnes de los insectos indígenos, por ejemplo, de las hormigas, Pisamos nuevame":lte \lcrr~ o.. u . .
ha SJdo observado tambien por Thomas Belt (the naturalist in Nicaragua . Lon-
don 1874). La eSlllicacion ingeniosa que dá de este hecho debe llamar la
atencion de los zoólogos. .
- 26-

-ricas que se pueden Imaginar, en las cuales prevalece en gran -27-


_parte el género Paspalum y otra gramil la muy dulce y nutritiva
que no se podia clasificar por haber ya pasado la época de su en el Chaco), pues se compone de palmas con hojas pennatas,
florescencia . En seguida pasamos el arroyo Caravallo, y como á ~lentras que las especies de ~os otros Pal~ares las l!e~en en for--
· su lado se encuentra un puñto incomparable para un campamen- . ma de abanico, lo que constItuye un c~racter muy ~Ife~ente . El
to ; paramos allá, aunque era aun bastante temprano. nombre popular de estas palmas es Yatal, su nom.bre tecmco Cocos
Establecimos nuestro campamento bajo un grupo hermoso de Yatai. Son árboles soberbios, de noble conÍlguraclOn; su altura me-
Talas entremezclados con Mataojos y Coronillos, que nos pro- dia puede calcularse en 10 metros hasta .la yema termmal, sobrep.a-
porcionaban sombra y leña ; a nuestro lado el arroyo es un le- sándola las hojas sup~riores P?CO mas o me~os un metro y rr:edlO.
·cho arenoso nos brindó agua para beber y un baño refrescante. El tronco de algunos arboles aIslados ~s consld.erablemente mas al-
Un sinnúmero de Tero-Teros (Vanellus cayennensis) y una es- 16, alzándose casi 4. metros mas, ofreCIendo aSI entre los otros. mas .
.pecie pequeña de Gallineta juguetean á nuestro lado. Mas al o menos iguales un aspecto sorpre~dente. ~as hOjas supenores
Norte hay una série de lagunas de agua dulce en parte; para están reclinadas en su parte superIor. las Infenores tIenen la
los animales habia un riquísimo pasto en abundancia , ¡qué mejor curbatura mas atrás y las del medIO reunen .e n su total. armo-
' campamento podiamos desear! nioso estos dos estremos. Donde faltan las ~o)as del medlO y. la
transicion no es paulatina sino abrup:::t, el arbol pare~e provISto .
No por eso fué muy favorable para el botánico, al contrario; de dos coronas. El diámetro mediano es de. 45 ~e~tImetros, e~ .
~eneralmente sucede que los lugares que mas ventajas económi- tronco es de igual grueso en toda su estenslOn,. o a vece~ está:
cas ofrecen, presentan solamente una variedad muy limitada de hinchado en su base en la forma de una dama) ull;n~ . Es aspero,
.plantas. Entre el cespéd tupido de Paspalum se mezclan escasa- por los restos de los peciolos. Las raices (adventICIas) c?n nu-
mente las plantas ya enumerad as, aumentadas por algunas Ama- merosas pero delgadas y débiles, y así vemos bastante arboles
ryllideas y IridecE ; de la tierna CiptLra azurea, de la espléndida derrumbados por el viento.
-Amaryllis bifida con sus flores purpúreas, de la hermQsa Nemas-
tylis furcata y algunas especies chicas blancas ó amarillas. En La madera de estas palmas tiene poco valor; es esp?njo~a y
el agua pulula la JussiCEa repens, un patamogeton con hojas an- se pudre antes de disecars~, d~ modo que ni ~ara lena SlrV~,
chas y otro con hojas angostas , (fluitans y pusilla) ; la Hydrocotyle ni para construcciones; los peclOlos de las hOJa~ al contrar:o-
proporcionan leña. La principal utilidad de estos arboles consIS-
. bonariensis; coronan el borde altos Scipus o Carizas; las viz-
te en sus frutas y cogollos. Los racimos envueltos en una
,cacheras se encuentran coronadas con matas exuberantísimas de
vaina leñosa, contienen una gran cantidad de frutas, que son muy
la Martynia ya mencionada ; en el campo no hay mas que notar dulces cuando maduras y muy apetecidas por hombres y por '
5inO un Pterocaulon, que se encuentra muy frecuente en algu-
nos puntos Pt. spicatum). . . animales . Además de ser dulces, tienen un gusto agr~dable par:-.
ticular parecido .al del dátil. Cada árbol tiene uno o dos raCl-
La direccion que seguimos en la mañana siguiente (camino no mas . El cogollo es muy agradable y al mismo ~iempo muy nu-
.hay) nos .conduce por paisages como el ya descrito : vegetacion tritivo sea que se coma crudo, en cuyo estado tIel'le el gusto de
mas rica en las bajadas, mas pobre en sus cimas; pocas flores. la nu~z de Coco, sea que se tome cocido con el puc~e~o, ofre-
De vez en , cuando se ven estancias ó puestos. Pasamos dos arra- ciendo entonces un gusto fino de espárrago. PeIO es lastIma que
Sas poco ,profundos, Mármol y Pospos. que corren en lechos [Jara obtener un cogollo, haya que cortar el árbol, lo que ~e hace
arenosos, sin ser flanqueados por montes ribereños. Con la no- en algunos lugares con tanta prodiga}idad, que pr~nto alla desa-
che llegamos á nuestro primer objeto principal: el monte de parecerán las palmas. Ademas son utiles estos . arboles ~or su.
Palmas. sombra en la cual se cría pasto exhuberante, y sIrve tamblen de·
El Palmar que pisamos ahora, pt.lede tambien ser caracterizado oroteccion á los animales contra los rayos ardientes .d el sol y. la
como un monte ribereño, pero es mucho mas ancho que lQs de ~'adiacion demasiada fuerte de las noches frias. ~e dIce .tamble:, .
costun;tbre, que no forman mas que fajas muy angostas, y muchas que se hace el jugo de estas palmas una especIe de VinO, pe °
veces mterrumpidas, al lado de los arroyos, mientras que el Pal- nunca le he podido probar.
Las palmas se e~cuentran bastante desparramadas, .solit.a rias
·mar Grande, en que nos encontramos, tiene un fondo de mas ó
menos media legua de cada lado del arroyo Palmar.
ú en pequeños grupos de dos o tres; en todas dlrecclOn~ .
Como el . estudio de esta formacion nuevo para mí, prometia puede uno moverse á pié o con el carro por tal Palmar. Es es.
.resultados mteresantes, nos detuvimos en ella tres dias, que pa- clusivo de este árbol ' y en estos montes no se encuen~ran otros DI
samos muy agradables.
arbustos. Así, el aspecto del Palmar es bastante uniforme, pero .
. Este Palmar difiere de los que hasta ahora habia tenido oca-
...slon de observar en esta República (en la Provincia de Córdoba
sin embargo hermoso é interesante. A veces, las palmas S1
mezclan con' los verdaderos montes ' ribereños, que al lado de
arroyo constituyen una faja mucho mas angosta que el palmar y '
- 29 -
- 28- mas mas alias. Las plantas epifitas son mas raras, hay Tillan<.&.-
, ~ ias y con escasez helechos . epifitos ; frecuentes con las liquenés,
· oue .aqUl se comp~nen pnncipalmente de árboles arbustos sub- , especialmente las Usneas con sus barbas largas . L~s Ta~ . y la;;
tropIcales ya en SI muy bellos. Donde se entremIzc lan con ellos Mimoseas faltan casi enteramente en este monte o se llmItan a
las magestuosas paln.las, recibimos una impresion muy profun- su már gen ester íor. .
da de l~ hermosura de una vegetacion s ubtrópical q ue es mas
alhague~a todavla , cuando, como aquí sucede, un ;rroyilo claro La Flora h erbácea abaj o de las palmas lleva en general el
como CrIstal c~rre entre el monte sobre peñascos chicos, ó for- mismo car ácter como la del campo abier~o : es ~n césped cerra-
ma lag~a~ chicas :ntre las pendientes que les rodean. á o exuberante de gramíneas; pero aquI contIene mucho m~
íl~res y encontré un númer o de el ementos nuevos, que todavla
Vaya cItar a9uI los elementos pr incipales clasificados has ta
no habla observado cerca del Uruguay, tanto en suelo seco, eo-
ahora, _que c.onstItuyen cerca de nuestro campamento el mon te mo en la arena profunda y seca, y en la húmeda cerca del arro-
:-Ibereno. PrImero menciono . el Mata ojo, la Lucuma neriifolia,
yo, que á veces form a baña?os cubiertos con . pajonales. Las
de que ya h~ habl~do en diferentes ocaSIOnes. Aqui se cria co- gramillas mismas son mas varIadas y aquI p,:r prImera vez obser-
mo arbol no mconslderable ; es verdad que su tro nco no es de vamos una especie mas alta en forma de cana, es el Andropagon
muy hermosa formacion, pero posee una copa densa de hojas
nítidas p arecidas á las del oleandro, que hace un buen efectú litoralis. ·NS.
en el total de la otra vegetacion. Un papel proeminente hacen Una enumeración de las especies coleccionadas no será s~n
las Euph~rbi.aceas; primero el "~n", Sapium aucuparium, interés, y por eso doy la de l~ . mas interesantes. No habla .
q ue se c~I a arbol, despues la Exc02caria m arginat a, arb usto alto, aun visto representantes de la famIlIa de las Melastomaceas en la
que en d Iferentes formas constituye un elemento esencial de es- provincia de Entre-Rios, aquí encontré dos .especies he:mosas .
tos montes, el Sarandi blanco, Phyllanthus S ellowianus, tambien del género Pleroma, una de las cuales desde aqUl nos aCOl'~pana ~as
·es frecuente ; otras especies, que ¡:-arecen pertenecer á esta fami- al Ñorte (PI. graci le y pulcheUum). Tampoco habla temd~ .
lla todavia n o h an podido ser clasificadas por fa lta de flo r es y ocasion anteriormente de observar Orquideas terre~tres, pero aqul
frutas. Menos frec uentes y menos altas son las especies de Cro- di con una espléndida especie blanca (Habenana _bractesce~),
entre aq uellos los loros y picaflores;' tambien un a que ot ra per- de las Cacteas Observé un pequeño cactus melon en penascos are~
t?n,. especi alme~te ~l C~_on ~lli?1!.sis; mas rara es aq uí la cos, un tuna que ' todavía no habia ~to, con ~a 1ruta comestible
Ca LLtgua]a b r a~the!!:§].s. L .as L aurineas están representadas por medio agria ; una pequeña Bromehacea tamblen ento~ces me era
·.ma linda Nectand ra (amara var o australis ), que aquí se presenta nueva mas tarde la encontré en cantidad en las cercamas del Uru-
como a rbusto alto, pero mas adelante corno arbol de noble for- guay (Dyckia Tari flora) ; Justicia Tweediana es frecuente en todas
m acion y de altura de cerca de 40 p iés. De la fa milia de las Com- partes entre peñascos y arbustos, y lo mi~mo otra gran Acantltacea
oretaceas observarn os la T erminalia australis, de las Rubiaceas blanca Justicia GiHiesti que con frecuencIa se mezcla entre los bre-
dos arbustos altos: Gue ttarda uruguensis y Cephalanthus Saran- zales alcanzando una altura mayor que la de un hombre. Las Legu-
ái; de las My rtaceas algunos ar bustos altos y elegantes sin flo- mino~as son escasas en esta estacion del año, como t~mpoco preva-
l'es y semillas; de las Myrsin eas ta mbien algunos arbustos altos ; lecen las Compositas tanto como en otras partes, m ~ncontramoS .
de las Celas trin eas : Mayt enus i licifolia; una de ellas es Eugenia muchas Solaneas. Las Labiatas se encuentran representadas por
cisplaten sis, que aunque estéril se reconoce fácilmente . Dos espe- una alta . Hyptis (verticiHata),. y no . falta en lugares )a~tan~~~~
cies la Duvaua form a n ar bustos altos; las Sapindaceas proporcionan la característica Hyptis globifera, ~Ientras, que la S~s~~~au ~as
con frec uencia: Schmidelia edulis, las Santalaceas : Osyris spin en s- nosa, que general~ente la acom~ana, aquI no se. °emer i~ata)
censo No falta tampoco el arbusto elegantísimo de la familia de las Polygaleas proporCIOnan una Monmna nueva para mI ( . ~f r )
tm
Combretaceas: Combretum micropetalum, aunque en este momen- y dos nuevas especies de Polygala (Dunaliana y mollug o tt
to sin flores ni frutas . Mientras el follage de las especies enu- Una planta es muy frecuente aquí, que tie~e gran fama ~e~~
m eradas muestra un verde mas ó menos oscuro, el Sauce de los habitantes de estos lugares como remedIO contra las e ,
Humboldt forma un agradable contraste con su verde claro co- medades de las vias urinarias ; su nombre popular .es .Gu:~~tlru,~
mo tambien como árbol de mas fuerza y carácter diferente ;1 de y tiene una raizpolicéfala muy grande, a la c~al se a n ~~~o '
dicha vegetacion, que en su mayor parte consiste en arbustos dichas virtudes. La encontramos con ~rut~s: habI.en~~/~li~emoi_
altos; como arbusto caprichoso mencionaré tambien al Ceibo. la flor; es una especie nueva p~a la clen<:~~. Gah~n G fustigiata.
Los element os de este monte está n con frecuencia enredados des; otra especie nueva de la mIsma famI la. era a · fre-
entre sí por trepadores: el Camptosema rubicundum nos muestra Característica es la linda Melochia. 'pyramt~~t~in~~ P~~;~cum
sus flores p urpúreas, que de lindísima manera contrastan con el cuencia ; un adorno de la vegetacIOn ~s. I Tradescantia

verde-oscuro del fo llage, un Solanum con flores azules , Bignonia- connatum con sus grandes flores amarIllas, una
cecu con sus vamas, S m ilax montevideensis, á veces Clematis se
mezclan con el monte, á veces cubriendo las coronas de las pal-
- 30 -
- 31 ·
chica (multiflora ) con flores blancas me era nueva or est'o superficie del suelo, p . m. O. m. 1 1f¿ piés; muchas veces se apo-
apesar de su modesta apariencia me g t ' YP . -/
Santa Lucia con sus flores ~ules, ~~eo ~~bi~~e ~au~n~~
yan en el pié de una palma, otras veces no tiene tal sosten .
Aunque sé, que los animalitos, parecidos á piojos y también lla-
~:~~:~~; n~~a~;~l~ngit tric(?ps, planta característica, c¿mo el' mados piojos de tierra, se comen en el Brasil, no podía resol-
. e as praderas de Tucuman, tamblen aquí no verme á hacer la prueba. Son especies diferentes de las que tu-
es raro,. y vanas otras Cyperaceas, en parte muy grandes nos ve ocas ion de observar en el Chaco , pero no siendo zoólogo no
proporcIOnaron los pantanos; la linda amarilla N emastylis' fur- puedo clasific arlos. .
cata ~n todas partes es frecuente; una linda Petunia (violacea) El 4 de Febrero salimos de este punto agradable é interesante.
tamblen, es comun . y característica en la arena. La arena hú- Aunque el tiempo nos favoreció poco, sentimos todos tener que
meda da un . Eryngm1~ alto, más alto que un hombre y diferen- neja rle, pero la falta de alimentos nos obligó á pasar adelante.
te del Eryngmm agavtfohum, es E. oHgodon; se distingue de este Muy pronto salimos del Palmar, entrando nuevamente en el
que tIene flores b~ancas, por flores moradas~ también E. elegan:: terreno ondulado anteriormente descrito, con lagunitas y pun-
se encuentra aqUl . En lugares mas húmedos se encuentra en tas de arroyos en las bajadas, con un césped bastante pobre y
·cantldad Vernonia saHcifolia; tampoco falta V. Hypochoeris; en casi deprovisto de flores en las cimas de las colinas.
lugares mas secos representa su papel una linda Cheomolaena
'con flores colorad~s (pTatensis). El ñio ñio tambien aquí es frecuen- Las lagunitas mencionadas me proporcionaron algunas cosas
te. El arroyo abriga una Monocotyledonea hermosísima Eichhor- interesantes ; así al lado de la Sagittaria montevideensis otra es·
nta azurea. De otras plantas características menciono todavia: Ce- pecie del mismo género, nueva para mí y probablemente para la
r~toplyHum australe en las aguas; FroeHchia tomentosa en la arena ; ciencia (véase la parte JI de este Informe) ; una Butomea con fl.o-
.c TOton argentt~us, Zornia diphylla, Rhync:hosia Senna, Borrera. l'es amarillas, nueva para. mí y para la Flora de la pr~vmcla:
pero que ya en la ciencia se conoce : Hidrachis Humboldttt; ade-
verttctHata. MttTocaTpum PTeladiHa, Stevia hirsuta, Raccha1"Ís
~ul1fol1a , articulata, phyteumoides, S encHia acutifoH~ mas las cosas conocidas : un MyriophyUum . Jussiaea repens,
.patonum subhastatum, T1'ixis paUida;- la enana Pratia he de- polygonum acre, etc . También se observa bastante fauna : caran-
rac ea, A~g elonia .intege1"rir.ta, Pabiana thymifoHa, Convulvulus chos, chimangos, lechuzas, vizcachas, perdices. .
H eTmanmoe, Salvta pallida, Lantana SeHowiana Catab1'osa airoi- Pasando el arroyo de Concepcion, llegamos al Arroyo Grande,
d,es, MHium lanatum, DigitaTia adusta, Cyp erus Luzuloe, oostachy, Que en este momento era un arroyito muy chico, que atravesa·
.seu·pus complanatus que tambien observé cerca del Uruguay, mas sin dificultad. Tiene un monte ribereño bastante escaso, de
No solo una Flora bastante rica, tambien una Fauna muy va- los mismos elementos que el del Palmar, rodeado por afuera
riada nos interesó. La corona de las palmas y las copas de los por un matorral poco espeso de Acacias. En una de est~s encon-
.arbustos daban hospedaje á una gran cantidad de aves de dife- tré el Loranthus cuneifoLius, tan frecuente en el Intenor, p~ro
.rentes clases, que no solo nos gustaban por su agradable plumaje, que hasta ahora no habia visto en la ~rovincia de Entre-RlOs .
·51110 que nos daban tambien artículos para la cocina, porque en
En este célebre rincón de Gauchos pudImos completar nuestras
estos tres dias no teniamos carne fresca, h alland onos en terreno provisiones, que ya se habian hecho muy escasas y despues se-
de Urquiza, cuyos pues teros tienen severa órden de no venaer ñi guimos nuestro viage sobre praderas bastante pobres, arenosas,
reg.alar ovejas ni carne; asi es que vivimos, gracias á esta - libe- casi desprovistas de flores. No se observan mas que algunas IS-
ralidad de aquella rica familia, de un poco de charqui y de los las de HeLiotTOpium , ó sobre las vizcacheras resplandecen gran-
pájaros que cazábamos. des matas de Martynia., ó en lugares mas seco~ se ven ~olo!1l~~
de Aster monte1{ideensts Junto co~ una Campostta con. hOlas ~~te
Observa~os palomas de diferentes clases, loros, perteneciendo n 0sas; ó se divisan grupos pequenos de una Euphorbta bast
en parte a especIes que toda via no habia observado, perdices grande parecida á la chUensis. Tambien se observa otra Eup-
en , abundancIa y una cantidad de otros pájaros, que, no siendo t.orbia ' humifusa. Pasamos una estancia grande, que co~ sus. lar-
zoologo, no puedo clasificar. Preparé algunas, mas con el fin de en- gos trechos de labranza, especialmente alfaHares, da testImOnIO de
señar ~ mis discípulos el modo de hacerlo, que con un objeto sério la fertilidad del suelo .
CIentífico. La mayor p arte de los pellejos preparados se perdie-
Con la noche llegamos al arroyo Rabon, donde nos paramos
bajo un grupo de Talas bastante vistosos . Los_bordes i:.e~::::~~
ron mas tarde á causa de la humedad cOlltra la cual tuvimos
que l~char en Concordia . Alg unos insectos, que luve ocasión de son muy pantanosos, y no tienen monte nberen? prop ,
,coleccIOnar en este monte, están en las manos del Sr. Profesor playa alrededor de nuestro grupo de Talas estan despa~r~:nados
Weyembergh en Córdoba, que los clasificará ; entre estos ' sola- vario~ Talas y Ñandubayes; el terreno es bastante este n y su
mente quiero mencionar las termitas, cuyas construcciones se
Flora no ofrece nada de notable.
encuentran aquí con fn;cuencia. Son poco prominentes sobre la
r-~~~~J' ~ ~~I . ~~¿/"'~- ' -
ILYIAJr'~
DE LA PARTE DE N.E. DE LA PROVINCIA DE ENTRERIOS

1---_ ·_· ---~/-- - "_."_~.J-~O"l;,··'ú


--- _. - - .- --- -._- - -~---\
-
-' ~~----=---
.. \\
r
~. ,--.r'? ''o I
)
-----~;~6;W. ~-->.,.---¡3J .
I
¡

~,",~~~-?4-+--- -- - - -- - - ----'3)
I

i
I

~:
~-"-

I
I
I
I
i

Вам также может понравиться