XV Jornadas de Investigación y Cuarto Encuentro de Investigadores en Psicología

del Mercosur. Facultad de Psicología - Universidad de Buenos Aires, Buenos Aires,

2008.

ANáLISIS DE LOS INDICADORES DEL

SENTIDO DE COMUNIDAD.

Vignale, Paula.

Cita: Vignale, Paula (2008). ANáLISIS DE LOS INDICADORES DEL SENTIDO

DE COMUNIDAD. XV Jornadas de Investigación y Cuarto Encuentro de
Investigadores en Psicología del Mercosur. Facultad de Psicología -
Universidad de Buenos Aires, Buenos Aires.

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zar-se.
De acordo com o SINASE - Sistema Nacional de Atendimento
Sócio-educativo (2006), os papéis atribuídos a esses atores so-
ciais conjugam-se e se entrelaçam: (1) a sociedade e o poder
público devem cuidar para que as famílias possam se organizar
e se responsabilizar pelo cuidado e acompanhamento de seus
adolescentes, evitando a negação de seus direitos, principal-
mente quando se encontram em situação de cumprimento de
medida socioeducativa; (2) à família, à comunidade e à socieda-
de em geral cabe zelar para que o Estado cumpra com suas
responsabilidades, iscalizando e acompanhando o atendimen-
to socioeducativo, reivindicando a melhoria das condições do
tratamento e a prioridade pra esse público especíico.
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178
ANÁLISIS DE LOS INDICADORES
DEL SENTIDO DE COMUNIDAD
Vignale, Paula
Consejo Nacional de Investigaciones Cientíicas y Técni-
cas - CONICET - CIIPME. Argentina
RESUMEN
Este trabajo sintetiza algunos de los avances en la predicción
del Sentido de comunidad (SC). El estudio de los factores, per-
sonales y contextuales, que promueven el SC es fundamental
en aquellas comunidades geográicas donde no es lo suiciente-
mente fuerte para generar un cambio social. El objetivo del es-
tudio es analizar las variables utilizadas como predictores del
SC y hallar indicadores relevantes para la población argentina.
Se seleccionó una muestra de 240 estudiantes universitarios a
los cuales se les administró un Cuestionario de variables socio-
demográicas y una Escala de sentido de comunidad elaborada
por la autora. Los datos muestran que la cantidad de años vivi-
dos en un barrio y los años previstos de seguir viviendo en el
mismo lugar, resultaron ser los mejores como indicadores del
SC.
Palabras clave
Sentido Comunidad Indicadores
ABSTRACT
ANALYSIS OF SENSE OF COMMUNITY’S INDICATORS
This work summarizes part of the progress in the prediction of
the Sense of Community (SC). The study of the factors, personal
and context, that promote the SC is key in those communities
where it is not strong enough to generate a social change. The
study’s objective is to analyze the used variables as predictors of
the SC and to ind relevant indicators for an Argentine sample. A
sample of 240 college students was selected; a questioner was
applied regarding socio-demographic variables and a SC’s scale
elaborated by the author. Data shows that the years lived in a
neighborhood and the projected years to be lived in the same
place, resulted to be the best indicators of the SC.
Key words
Sense of Community Indicators
INTRODUCCIÓN
El sentido de comunidad (SC) es un concepto fundamental den-
tro de la Psicología comunitaria, que aspira a transformar las
condiciones de vida, percibidas como problemáticas por los
miembros de una comunidad. Así el sentido de comunidad es
deinido por Montenegro Martínez (2004, p.48) como “aquellos
sentimientos que unen a los miembros de una comunidad como
personas que pertenecen a un grupo y se autodeinen como tal;
éste actúa como elemento cohesionador y potenciador de la ac-
ción en común. El sentido de comunidad viene dado por las vi-
vencias que se han compartido como comunidad y, justamente,
es aquello intangible que las personas sienten en relación a las
otras personas que conforman dicha comunidad. Una comuni-
dad lo es en tanto que este sentimiento mantiene los lazos entre
las personas que lo conforman“.
Ahora bien cuales son los factores, tanto personales como con-
textuales, que fomentan el SC en aquellas comunidades geo-
gráicas, donde este no es lo suicientemente fuerte para que se
genere un cambio social. Así, el conocimiento de los factores
que se asocian con el SC será un paso inicial en la determina-
ción de cuáles son los que conducen a su desarrollo, así como
a las intervenciones que lo incrementaría (Kingston, Mitchell,
Florin & Stevenson, 2000).
El estudio de las variables predictoras del SC se concentró en
variables demográicas de nivel individual tales como: género,
estado civil, edad, nivel educativo, ingresos, etc. (Buckner, 1988;
Davidson & Cotter, 1986; Schiwirian & Schiwirian, 1993 en Obst,
et. al. 2002; Nasar & Julian, 1995). Otro indicador relevante ha
sido la presencia de hijos en el hogar (Nasar & Julian, 1995 y
Obst et. al, 2002), especialmente si estos se encuentran en
edad escolar.
Por otro lado, la mayoría de los autores (Glynn, 1986; Buckner,
1988; Riger & Lavrakas, 1981; Perkins et al., 1990; Sánchez
Vidal, 2001; Robinson & Wilkinson, 1995 en Obst, et. al., 2002)
coinciden en que la cantidad de años vividos en un barrio es una
variable que correlaciona positivamente con el SC, lo mismo
que el tiempo que desea la persona vivir en ese lugar (Glynn,
1986). Skjaeveland, Garling y Maeland (1996 en Brodsky,
O’Campo & Aronson, 1999) encontraron que vivir en el barrio
por diez años o más, se asociaba con más respuestas positivas
respecto del sentimiento de vecindad. Perkins y colaboradores
(1990 en Chipuer & Pretty, 1999) también hallaron que puntajes
altos en SC estaban asociados signiicativamente con un tiempo
mas prolongado de vida en un barrio.
Otras investigaciones encontraron que la cantidad de vínculos y
la frecuencia de contacto son buenos indicadores, así como, la
cantidad de vecinos conocidos por el nombre, con los que se
relaciona y los considerados amigos (Glynn, 1986 y Sánchez
Vidal, 2001).
También correlacionaron positivamente aspectos físicos de la vi-
vienda (como el tamaño o supericie) con el SC (Sánchez Vidal,
2001; Kasarda & Janowitz, 1974, Royal & Rossi, 1996, en Obst
et. al., 2002). Con el estatus residencial del evaluado (propieta-
rio o inquilino) de la vivienda ocurrió lo mismo. En general los
propietarios de la vivienda están más comprometidos con su ba-
rrio y ejecutan acciones para mejorar las condiciones sociales y
físicas.
La percepción del SC de un individuo no sólo está determinada
por las características individuales (rasgos de personalidad o as-
pectos demográicos), sino también por características del propio
barrio. En este punto, son menos los trabajos hallados que consi-
deren simultáneamente predictores de nivel individual y barrial.
Bukner (1988 en Lounsbury, Loveland y Gibson (2003) alertó so-
bre la relevancia de ambos niveles en la determinación del grado
en que el SC es inluenciado. Los aspectos físicos del lugar (Prez-
za & Costantini, 1998 en Obst et. al., 2002; Kingston, Mitchell,
Florin & Stevenson, 2000), las características de la región la can-
tidad de habitantes de la comunidad (Sánchez Vidal, 2001) son
algunas de las variables contextuales asociadas con SC.
OBJETIVO
El objetivo de este trabajo es analizar las variables predictoras del
SC según estudios previos y determinar cuáles son los que fun-
cionan como mejores indicadores en una muestra argentina.
MÉTODO
Participantes
Se seleccionó una muestra de 240 estudiantes universitarios de
la provincia de Catamarca, Tucumán, Mendoza y Buenos Aires.
La media de edad fue 23.5 años con un desvío de 5.2 años. El
51% eran mujeres y el 49% restante hombres. En cuanto al es-
tado civil de los sujetos en un 95.4% eran solteros y el 4.6 res-
tante casados o vivían con su pareja. En cuanto al nivel so-
cioeconómico: el 14.7% pertenecía al nivel bajo, el 70.2% al ni-
vel medio y 15.1% al nivel alto.
Materiales
Se utilizó un Cuestionario para medir variables sociodemográi-
cas y la Escala de Sentido de Comunidad (Vignale, 2007).
Procedimiento
Los datos obtenidos fueron analizados por medio del paquete
estadístico SPSS. Se utilizó una Prueba T Student para compa-
rar el SC en diferentes categorías de las variables: tiempo pre-
visto y tiempo vivido en el barrio.
RESULTADOS
La inclusión de variables contextuales o físicas junto con varia-
bles personales no es una tarea sencilla. No se trata de deses-
timar la importancia de las primeras sino que el acceso a la in-
formación coniable, sobre la presencia o funcionamiento de al-
gunos indicadores resulta muy difícil. Por ejemplo, se requiere
conocer la cantidad y tipo de instituciones sociales, religiosas,
recreativas, de fomento, etc. dentro de un barrio. Así también
conocer la presencia de áreas comerciales, recreativas, labora-
les, el estado de las vías de comunicación (calles, veredas) y
espacios públicos de encuentro. También sería necesario cono-
cer los mecanismos de participación y comunicación tales co-
mo, revistas barriales, boletines informativos, foros virtuales de
vecinos, asambleas, etc. Estas serían algunas de las razones
por los que los estudios previos se dirigieron a predecir el SC a
partir de variables de nivel individual.
Asimismo, las variables predictoras de nivel individual como
contextual, no se comportan de la misma manera a través de los
estudios sobre la relación entre estos factores y el SC. Los sen-
timientos de arraigo, pertenencia y los vínculos afectivos con los
vecinos, se encuentra en permanente movimiento, según las
situaciones particulares que atraviesen los miembros y la comu-
nidad. En este último caso, es sabido que las situaciones estre-
santes que amenazan a una comunidad, inundaciones, terre-
motos, sequías, inseguridad, reclamos colectivos, etc. generan
mayor cohesión entre las personas (Long, 1986 en Brodsky,
O’Campo, & Aronson, 1999).
En este estudio se intento obtener un indicador cuantitativo de la
vincularidad entre los miembros de un barrio. Para ello, se pre-
gunto al sujeto por la cantidad de familias conocidas por el nom-
bre y/o vista, con las que se relaciona y que considera amigas.
En la evaluación de estas variables se presentaron algunas dii-
cultades: a) El desconocimiento del tamaño total de la comuni-
dad (cantidad de familias que viven), imposibilitando calcular la
proporción de familias que informa el evaluado conocer sobre el
total de la comunidad. b) La cantidad de respuestas perdidas ha
sido alta, considerando que algunas personas respondieron co-
mo si se tratara de una variable ordinal y no cuantitativa, a pesar
de especiicarse en la pregunta. c) Las medidas de variabilidad
obtenidas resultaron altas indicando heterogeneidad en las res-
puestas. d) En algunos casos se utilizó la técnica de bola de
nieve, para la administración del instrumento. Esta técnica con-
siste en solicitarle al evaluado que nombre a otra persona de la
población para administrarle el instrumento. De esta manera,
algunos de los sujetos que conforman la muestra tienen relación
con otros.
Estas limitaciones condujeron a examinar otras variables a nivel
personal con el in de estudiar su asociación con el SC en la
población estudiada. Al igual que los estudios previos (Glynn,
1986; Buckner, 1988; Riger & Lavrakas, 1981; Perkins et al.,
1990 y Sánchez Vidal, 2001) se halló una diferencia signiicativa
entre los estudiantes que residen en su barrio menos de cinco
años y aquellos que viven cinco o más (T (235) = 4.84, p< .000).
Los años vividos en el lugar, son un indicador importante de los
sentimientos de arraigo, pertenencia al barrio, identiicación con
símbolos, tales como un slogan, costumbres, tradiciones, insti-
tuciones dentro de la comunidad, etc. El tiempo transcurrido fa-
vorece la familiaridad entre los vecinos, los acerca y fortalece
los vínculos entre ellos aumentando en consecuencia la cohe-
sión de la comunidad. En la misma dirección que estos resulta-
dos, se encontró que las personas que desean vivir por más
tiempo en el lugar maniiestan mayor SC que aquellos que de-
sean permanecer por un menor tiempo (T (230) = 7.75, p< .000).
Estos resultados indican la satisfacción con el barrio respecto
de las condiciones físicas tales como los servicios públicos, los
transportes, la presencia de espacios verdes, la vivienda propia
y de los vecinos. Al mismo tiempo que la satisfacción incluye un
aspecto relacional, es decir, el vínculo con los vecinos y la red
social que conforman. La relación con los vecinos es un recurso
social importante para la persona al momento de enfrentar si-
tuaciones estresantes.
179
CONCLUSIÓN
Ante estas limitaciones este trabajo logró determinar que los
dos indicadores que resultaron ser los mejores predictores del
SC en la población universitaria que residían en barrios abier-
tos, fueron: tiempo vivido en el barrio y tiempo que desea conti-
nuar viviendo en el.
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180
VIOLENCIA EN EL FÚTBOL:
DE BARRAS Y ANALIZADORES
Vitale, Nora Beatríz; Méndez, María Cecilia; López Conde,
María Paula
Facultad de Psicología, Universidad de Buenos Aires
RESUMEN
El presente escrito se enmarca en el proyecto de investigación
titulado “Violencia organizada: Fútbol y Barras Bravas. Aproxi-
maciones desde la Psicología Social Comunitaria”. Dentro del
campo disciplinar de la Psicología, la investigación sobre la vio-
lencia en el fútbol se presenta como un área de vacancia. El
tratamiento del tema cobra relevancia a partir de dos fenómenos
fundamentales. Por un lado, las 229 muertes que se han produ-
cido desde el año 1924 hasta el año 2008 en torno a eventos
futbolísticos y, por el otro, la aparición de las denominadas ba-
rras bravas que se presentan, en la actualidad, sospechadas de
comportamientos que son totalmente ajenos al carácter festivo
que se le solía imprimir al fútbol. En relación a este último punto
girará el presente escrito en donde se considerará a la barra
brava como un analizador en tanto devela una contradicción
existente y encubierta en un hecho social: el fútbol. Consideran-
do que el mencionado proyecto se encuentra en proceso de
evaluación (UBACyT), el presente escrito es solo un primer
acercamiento al tema que nos permitirá pensar las tramas silen-
ciadas que mantienen a las barras bravas en un lugar de privile-
gio e impunidad.
Palabras clave
Violencia Barras bravas Analizador Fútbol
ABSTRACT
FOOTBALL VIOLENCE: BARRAS AND ANALIZERS
This paper is focused on the research project titled “Organized
Violence: Football and Barras Bravas. Approach from Social
Community Psychology”. Beneath the disciplinary ield of Psy-
chology, researches on football violence are rather unexplored.
Its analysis becomes important since two principal events. First,
the 229 deaths occurred from 1924 until 2008 around football
matches, and second, the birth of barras bravas, which are
groups of people currently suspected of multiples behaviour far
different from the one expected for a football festival. This will be
the main topic of our work, where the barras bravas will be
considered as an analyzer, since it reveals a muted contradiction
covered by a social fact: the football. Even though the project
mentioned above is currently under the evaluation process
(UBACyT), this irst approach to this issue will allow us to think
about silent networks that keep barras bravas on privileged and
impunity places.
Key words
Violence Barras bravas Analyzer Football
INTRODUCCIÓN
En el fútbol este tema [barras bravas] es tabú,
por muchos motivos.
Y es tabú en el sentido más freudiano,
que es la muerte.
Sobre todo cuando sólo se habla del tema
cuando aparece un muerto, porque un muerto
es lo único que no se puede ocultar.
Amilcar Romero (2003)
El presente trabajo se desprende del proyecto de investigación
titulado “Violencia organizada: Fútbol y Barras Bravas. Aproxima-