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EL OCTAVO DIA LA EVOLUCION SOCIAL COMO AUTOORGANIZACION DE LA ENERGIA Richard N. Adams AOA UNIVERSIDAD AUTONOMA METROPOLITANA UNIDAD IZTAPALAPA Divisin. de Ciencias S: ie5 y Humanidades Daaramanh de ay hitanckees ia EL octave pia. LA EVOLUCION SOCIAL COMO AUTOORGATEZACION DE La TARRGiA toda libertad. Donna Watkins, Kathy Bork y Ann Thomas me ofre- cieron una generosa ¢ importante ayuda editorial, Afios de apoyo firme y sostenido justifican mi gratitud especial hacia Betty Hannstein Adams y después, en orden alfabético, ha- cia Peter Allen, Robert Crosby, John Higley, Robert King, Richard Schaedel y Donald Weismann, La forma final del manuscrito debe mucho a los comentarios de Robert Hackenberg, 24 INTRODUCCION ste libro retomala historia a partir del octavo dia. Puede Suponerse que, para entonces, las cosas ya podian de- sarrollarse por cuenta propia. El mundo que Dios habia 4 creado mostraba un ambiente diversificado donde ha- bia, entre otras cosas, arboles, manzanas, serpientes, Addn y Eva. Sin embargo, El no abandon del todo su creacion; por el contrario, dejo en ella algo de Si mismo en forma de limitaciones, dindmicas ‘reglas invisibles que podian experimentarse, pero nunca conocerse directamente, Habia tantas cosas funcionanda por si mismas, que evitablemente el nombre del juege deberia ser el de “comple- ". Esta complejidad, producida por las cosas mismas, se ha wertido en el mas dificil de entender entre todos los procesos visibles. _ Para explorar esta complejidad, partiremos de las cosas como mn, pero hablaremos de ellas en un lenquaje mitoldgico diferente, in lugar de referirnos a un drbol, a una manzana, a una serpiente, dun Adan ya una Eva, ¢ incluso a Dios, hablaremos de formas ener- icas, de energia y de equilibria. Dedicaremos mucho tiempo a utir estos términos mitolégicos, porque podrian resultarnos familiares, Uno de los problemas mas sobresalientes de las clencias socia- ha consistido en elaborar conceptos que compartan una base ida de medicion, Gran cantidad de corceptos empleados enel ana- is social deriva de los usos populares propios de la cultura del shservador. Esto es también cierto en el caso de las ciencias fisicas, TEL GeTAVO DIA. LA EVOLUCIGR: SOCIAL COMO AUTOORGAMZACION DE LA ENERGIA algunos de cuyos conceptos surgidos siglos atras cargan todavia con vestigios de sus origenes arraigados en el sentido comin. La version que aqui presento no pretende ser mas salisfactoria que otras en todos los aspectos, salvo en el hecho de que permitira ha- cer mediciones, Y aunque hace muy pocas mediciones directas, el libro se interesa en ellas por todo lo que el proceso implica. Medir/” equivale a afirmar que las cosas estan relacionadas entre si. Sig- nifica Introducir las cosas que se miden en un tnico universo de en- tendimiento mas comprehensivo, Medir es una metodologia que incluye de manera explicita al abservador en el universo de lo ob- servado, Sin embargo, el propdsito de este libro no es desarrollar metodologias, sino definir conceptos y elaborar teoria, El objetivo es formular las cosas de manera tal que puedan ser vistas como parte de ese tinico universo. Si hay incompatibilicad entre la teoria de las ondas y la teoria cudntica, lo mas probable es que el pro- blema resida en nuestra manera de comprender, ¥ no en el hecho.de que exista una multiplicidad de universos inconexos, Este trabajo responde a ese problema, En el estudio de la ex- periencia humana desltacan milliples enfoques imaginativos y pro- fundos: el enfoque marxista sobre los modos de produccion, el estructuralista de Lévi-Strauss, el dela verstehen weberlana, €l de la mente segtin Bateson, y muchos otros. Todos ellos comparten una ¢aracteristica: no pertenecena un universo comin; la mayoria son irreductibles entre si. Sobra decir que para abordar las comple- jidades del proceso social humano necesitamos todos esos enfoques diferentes y desvinculados en lo esencial. Pero también es cierto que la ciencia social ha eluclide su responsabilidad frente a la socie- dad por lo que se refiere a la busqueda de lo universal y del funda- mento comin de las cosas que estudia y de las que son estudiadas por otras ciencias, No se puede abordar este problema de manera frontal, El pre- sente estudio pretende aproximarse a él partiendo del unico con- cepto que, en mi opinion, resulta potencialmente aplicable tanto desde la perspectiva de las clencias sociales como desde la de las clenclas fisicas. Este concepto es el de la energia. Mi estudio pre- tende determinar Ja manera como ese concepto puede contribuir a establecer una base comin para los dos campos de la ciencia, No pretendo reducir todas nuestras preguntas a un denominador 26 _ comin —ni tampoco creo que sea posible hacerlo—. Lo que sostengo eS que podemos avanzar mucho si buscamos elementos comunes “entre las cosas, y que sélo si hacemos un esfuerzo de ese tipo lle- jaremos a conocer su verdadero alcance. La confianza en este enfoque esta lejos de ser compartida, No olorechazan los espiritualistas y los antimaterialistasinveterados; juchos clentificos sociales consideran también que otros enfoques inas adecuados para sus objetivos. La economia, la sociologia Ja antropologia han desarrollado sus proplos dogmas y métodos curacion mediante la fe, En 1880, Sergei Podolinsky escribid a | Marx con el propdsito de interesarlo en las implicaciones que leyes de la termodinamica tenian para la economia humana: terlormente, en 1883, escribiria un articulo sobre él tema. Sin bargo, no hay evidencia de que Marx tuviera en ello el menor erés (Martinez Alier y Naredo 1982), Adn mas, Engels lleqé a de- iciar enérgicamente el “deseo de reimportar la categoria ter- odinamica del trabajo a la economia”, y¥ asequro que eso no dituaria “nada que no fuesen tonterias” (Engels 1934: 310). Si- ndo esta tradicion, todo un siglo después, el antropdloge Roy len escribid: “En su forma mas extrema... la afirmacion de que la ura es siriplemente un Mecanismo para procesar energia y ma- es resulta manifiestamente ridicula” (1982; 117), Pero los mar- Islas no estan solas en su rechazo al estudio de este problema. No Nh razon, especialmente durante la década de 1940, Leslie White onsideraba a si mismo como un pionero asediado por el desin- hostil de funcionalistas, historicistas, difusionistas, fanaticos Jiosos, entusiastas de la psicologia, y quienes preferian otro tipo Tespuestas. La obra clasica de Fred Cottrell publicada en 1955 @ recibida con un aplauso en sordina por Ja sociologia. 1 todo, en afios recientes diversos fisicas y bidlogos han pro- Weido una gran cantidad de trabajos exploratorios sumamente ‘alivos en torno a la relacion entre la termodinamica ¥la evolu- Latermodinamica es un cuerpo tedrico especialmente atractivo tO que contiene en si la dinamica tedrica. Muchas cuestiones lamentales vinculadas con la evolucién estan relacionadas, amente, con ese Lema, La insercién de la termodindmica en esos evolutivos ofrece un modelo de trabajo en extremo yoso € incitante, La mayoria de estas cuestiones ha sido abor- 27

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