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INTRODUCCIÓN:
¿Conoces a una persona que sea fuerte pero débil al mismo tiempo? Pues eso parece una paradoja,
pero sí existen ese tipo de personas. Son fuertes físicamente, pero débiles en lo moral y espiritual.
Pueden hacer muchas proezas con sus brazos, manos y piernas, pero cuando se trata de vencer el mal,
las tentaciones y el pecado, caen como plumas.
Ese es el retrato de uno de los hombres más famosos del Antigua Testamento. De sus experiencias
aprendemos grandes verdades que debemos aplicar a nuestra vida.
DESARROLLO y ACTIVIDADES:
1. División en 2 grupos:
Cada grupo elegirá un representante, el cual, expondrá los aspectos e ideas principales del
texto, apoyados en la tabla asignada al grupo. (Tabla Grupo A, B)
2. Las tablas respectivas se encuentran en los ANEXOS.
3. Cada grupo dispondrá de un intervalo de 15 minutos para estudiar, llenar la tabla y preparar a su
representante. Como apoyo deberán utilizar sus Biblias.
4. Cada representante expondrá el resumen de la tabla con un tiempo de 5 a 10 minutos.
5. El profesor reforzará la exposición de cada grupo, con la finalidad de afianzar los conocimientos y
responder preguntas.
6. Al final de las dos exposiciones se presentarán las conclusiones y aplicaciones del taller.
7. Como desafío para el joven se entrega un versículo bíblico para memorizar y un plan devocional
semanal acorde al tema, que ayudará a la comprensión del tema central.
CONCLUSIONES FINALES:
a) La fuerza física y la inteligencia por sí solas no son capaces de ofrecer felicidad ni asegurar una
vida duradera.
b) Debemos aprender a dejar nuestras debilidades en las manos de Dios, para que él nos guíe a
vencer.
c) La satisfacción sexual practicada fuera de lo que Dios ha establecido trae desdicha, infelicidad y
hasta la muerte.
APLICACION:
Como jóvenes cristianos, tenemos la gran oportunidad de servir al Señor con todas nuestras fuerzas. Lo
más importante es que esa fortaleza que caracteriza a los jóvenes, y esos impulsos propios de la edad,
sean sometidos a los principios establecidos por Dios en su Palabra.