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UNIVERSIDAD DE LAS AMERICAS

FACULTAD DE CIENCIAS DE LA SALUD


ESCUELA DE KINESIOLOGÍA.

“EFECTIVIDAD DE LA GIMNASIA ABDOMINAL HIPOPRESIVA EN EL


TRATAMIENTO DE LA INCONTINENCIA URINARIA EN MUJERES:
REVISIÓN SISTEMÁTICA”

HÉCTOR GONZÁLEZ ROBLEDO.

CAROLINA MONÁRDEZ PEREIRA.

2018

1
UNIVERSIDAD DE LAS AMERICAS
FACULTAD DE CIENCIAS DE LA SALUD
ESCUELA DE KINESIOLOGÍA.

“EFECTIVIDAD DE LA GIMNASIA ABDOMINAL HIPOPRESIVA EN EL


TRATAMIENTO DE LA INCONTINENCIA URINARIA EN MUJERES:
REVISIÓN SISTEMÁTICA”

Seminario de Licenciatura presentado en conformidad a los requisitos para optar al


grado académico en Kinesiología.

Profesor guía: Tuillang Yuing.

HÉCTOR GONZÁLEZ ROBLEDO.

CAROLINA MONÁRDEZ PEREIRA.

2018

2
AGRADECIMIENTOS

A mis padres y familia en general por su incondicional apoyo durante esta etapa de
mi vida, ya sea en los buenos como en los malos momentos que experimenté a lo largo
de este camino, sin duda fueron un pilar fundamental para poder alcanzar mis metas
y cumplir mis sueños.

Héctor González Robledo.

Agradezco a Dios principalmente por estar conmigo en cada momento de mi vida


y mi formación como profesional, a mis padres por el cariño y apoyo que me han
brindado en todas las etapas importantes de mi vida, gracias todo y por darme un
ejemplo de superación, espero algún día llegar a ser como ustedes. A mis hermanas y
hermanos gracias por alentarme a seguir adelante con mis sueños y por nunca dejarme
caer, a las verdaderas amistades que me han acompañado y apoyado siempre,
finalmente a toda mi familia por creer en mí.

Carolina Monárdez Pereira.

3
RESUMEN

La Gimnasia Abdominal Hipopresiva (GAH) es una técnica creada por el doctor


Marcel Caufriez en el 1980, esta se ocupa como un sistema de tonificación de la
musculatura abdominal, de los músculos estabilizadores de columna y como alternativa
terapéutica en diferentes disfunciones del suelo pélvico que afecta principalmente a las
mujeres entre las cuales se encuentra la Incontinencia Urinaria (IU). Objetivos: El
propósito de este estudio fue determinar los efectos de la GAH en el tratamiento de la
IU en mujeres y de esta manera analizar si este tipo de terapia puede resultar más
efectiva que el entrenamiento convencional del suelo pélvico, cuya validez está
ampliamente demostrada. Método: La metodología ocupada en esta investigación fue
la Revisión Sistemática (RS) de la literatura publicada desde el año 2010 en adelante
para la cual se buscaron ensayos clínicos realizados con mujeres que han sido afectadas
por esta patología. Estos estudios debían incluir entre sus variables la GAH y la IU, las
palabras claves empleadas en la búsqueda fueron: “abdominales hipopresivos”,
“método hipopresivo”, “incontinencia urinaria”, “ejercicios hipopresivos”, “suelo
pélvico”, “calidad de vida”. En la lengua española se utilizó el motor de búsqueda
Google Académico, PEDro y la base de datos Scielo. En la lengua inglesa se emplearon
los términos Mesh: “urinary incontinence”, “abdominals”, “rehabilitation”,
“postpartum”, “pelvic floor” y términos no Mesh “hypopressive abdominals”,
hypopressive method”, “exercises hypopressive”, que se rastrearon en los buscadores
científicos Pubmed (Medline), Science Direct y Cochrane Plus Library. Los términos
booleanos ocupados fueron AND y OR. La elegibilidad de cada artículo, su nivel de
evidencia y su calidad metodológica se evaluaron mediante escalas de PEDro.
Resultados: Se obtuvieron 5 artículos finales los cuales cumplieron con al menos 6
puntos en la escala de validez en el estudio 1 todas las participantes disminuyeron su
índice de IU post intervención entre un 30 y un 100%. Además, se redujo la categoría
de severidad de pérdidas en 5 de los casos estudiados. En el estudio 2 se mostró que en
la musculatura abdominal, se observó un aumento de sección transversal del músculo
transverso del abdomen, en el tercer estudio analizado realizado por T. Rial en el 2015

4
se observó un descenso de la sintomatología, en la puntuación obtenida en el
Cuestionario de Incontinencia Urinaria (ICIQ-SF) indicó que área reducida de sección
transversal después de la fisioterapia aumentó de manera similar en los dos grupos de
tratamiento. En el estudio 4 realizado por disminuyó el número de frecuencias de la
orina de fuga: de acuerdo con los hallazgos en el grupo experimental y de control, antes
y después del tratamiento, se observó una diferencia estadísticamente significativa en
el número de frecuencias de IU. Y por último en el estudio 5 el número de frecuencias
de la orina de fuga de acuerdo con los hallazgos en el grupo experimental y de control,
antes y después del tratamiento, se observó una diferencia estadísticamente
significativa en el número de frecuencias de IU. realizado por Conclusión: La
implementación de los distintos protocolos en el entrenamiento de la GAH realizados
en los diversos estudios, presentan resultados positivos ya que en los diversos estudios
se presenta una tendencia a la mejora de la calidad de vida y disminución de eventos,
entendiendo así la eficacia de estos protocolos y ejercicios, estos protocolos de
entrenamiento serán de libre elección, ya que no dependen de la edad del paciente a
tratar, ni del tipo de incontinencia que presente, debido a que se trata de una terapia
muy poco invasiva y de bajo costo para cada uno de los participantes que a su vez
presenta muy pocos efectos adversos a la hora de su realización.

Palabras Claves: “abdominales hipopresivos”, “método hipopresivo”, “incontinencia


urinaria”, “ejercicios hipopresivos”, “suelo pélvico”, “calidad de vida”.

5
SUMMARY

The Hypopressive Abdominal Gymnastics (GAH) is a technique created by Dr. Marcel


Caufriez in 1980, which is a system of toning the abdominal muscles, the stabilizing
muscles of the spine and as a therapeutic alternative in soil dysfunctions pelvic Most
of the time they are in urinary incontinence (UI). Objectives: The purpose of this study
was to determine the effects of GAH in the treatment of UI in women and in this way.
The methodology used in this investigation was the Systematic Review (SR) of the
literature published from 2010 onwards for which it can be found in this pathological
investigation. These studies should include the following phrases in their variables:
"hypopressive abdominals", "hypopressive method", "urinary incontinence",
"hypopressive exercises", "pelvic floor", "quality of life". In the Spanish language, the
Google Academic search engine, PEDro and the Scielo database were used. In the
English language the terms Mesh were used: "urinary incontinence", "abdominals",
"rehabilitation", "postpartum", "pelvic floor" and non-Mesh terms "hypopressive
abdominals", hypopressive method "," hypopressive exercises ", were screened in the
scientific search engines Pubmed (Medline), Science Direct and Cochrane Plus
Library. The boolean terms occupied were AND and OR. The eligibility of each article,
its level of evidence and its methodological quality were evaluated using PEDro scales.
Results: Five final articles were obtained, which met at least 6 points on the validity
scale in study 1, all participants decreased their post-intervention UI rate between 30
and 100%. In addition, the loss severity category was reduced in 5 of the cases studied.
In study 2 it was shown that in the abdominal musculature, an increase in cross section
of the transverse muscle of the abdomen was observed, in the third study analyzed by
T. Rial in 2015 a decrease of the symptomatology was observed in the score obtained
in the Urinary Incontinence Questionnaire (ICIQ-SF) indicated that reduced cross-
sectional area after physiotherapy increased similarly in the two treatment groups. In
study 4 performed by decreased number of frequencies of leakage urine: according to
the findings in the experimental and control group, before and after treatment, we
observed a statistically significant difference in the number of UI frequencies.

6
And finally in study 5 the number of leakage urine frequencies according to the findings
in the experimental and control group, before and after treatment, a statistically
significant difference in the number of UI frequencies was observed. performed by
Conclusion: The implementation of the different protocols in the training of the GAH
conducted in the various studies, present positive results since in the various studies
there is a tendency to improve the quality of life and decrease in events, understanding
the effectiveness of these protocols and exercises, these training protocols will be of
free choice, since they do not depend on the age of the patient to be treated, or the type
of incontinence that is present, because it is a very non-invasive therapy and low cost
for each of the participants, which in turn has very few adverse effects when it is carried
out.

Keywords: “urinary incontinence”, “abdominals”, “rehabilitation”, “postpartum”,


“pelvic floor”, “hypopressive abdominals”, hypopressive method”, “exercises
hypopressive”,

7
INDICE
Nº pág.

1. INTRODUCCIÓN............................................................................................... 9
2. ANTECEDENTESGENERALES......................................................................10
2. 1. Identificación del Estudio. ...........................................................................10
2.2 Objetivos del estudio.......................................................................................11
2.2.1 Objetivo General.................................................................................. 11
2.2.2 Objetivos específicos.............................................................................11
2.3 Pregunta de Investigación..............................................................................11
2.4 Alcances y Limitaciones.................................................................................11
3. DESARROLLO DEL TEMA............................................................................12
3.1 Incontinencia urinaria:..................................................................................12
3.1.1 Efectos de la IU en la Calidad de vida................................................12
3.1.2 Clasificación..........................................................................................15
3.1.2.1 IU de esfuerzo (IUE)..........................................................................15
3.1.2.2 IU de urgencia (IUU).........................................................................15
3.1.2.3 IU mixta (IUM)..................................................................................15
3.1.3 Factores de riesgo de IU.......................................................................16
3.1.3.1 Edad....................................................................................................16
3.1.3.2 Embarazo...........................................................................................16
3.1.3.3 Parto...................................................................................................16
3.1.3.4 Menopausia........................................................................................17
3.1.3.5 Obesidad.............................................................................................17
3.1.3.6 Estilos de vida....................................................................................17
3.1.4 Descripción del Periné y su conformación anatómica......................18
3.1.4.1 Plano profundo..................................................................................18
3.1.4.2 Plano medio........................................................................................19
3.1.4.3 Plano Superficial................................................................................19
3.1.5 Fisiopatología Básica de la Continencia y Micción............................20
3.1.6 Valoración y Diagnóstico en IU........................................................... 23

8
3.1.7 Tratamiento de la IU..............................................................................26
3.1.7.1 Ejercicios de la Musculatura del Suelo Pélvico.................................27
3.1.7.2 Biofeedback..........................................................................................28
3.1.7.3 Electroestimulación Funcional...........................................................28
3.1.7.4 Entrenamiento Vesical........................................................................29
3.1.7.5 Estimulación del Nervio Tibial Posterior..........................................30
3.1.7.6 Tratamiento Farmacológico...............................................................31
3.1.7.6 Tratamiento Quirúrgico.....................................................................31
3.1.8 Prevención en la Incontinencia Urinaria.............................................32
3.2 Gimnasia Abdominal Hipopresiva.................................................................32
3.2.1 Historias de la Gimnasia Abdominal Hipopresiva.............................32
3.2.2 Definición................................................................................................32
3.2.3 Método de entrenamiento.....................................................................32
3.2.4 Efectos del entrenamiento Hipopresivos.............................................38
3.2.5 Estructuras involucradas......................................................................40
3.2.5.1 Diafragma............................................................................................41
3.2.5.2 Recto del Abdomen.............................................................................42
3.2.5.3 Oblicuo Externo del Abdomen..........................................................43
3.2.5.4 Oblicuo Interno del Abdomen...........................................................44
3.2.5.5 Transverso del abdomen....................................................................44
3.2.5.6 Multifidos.............................................................................................45
3.2.5.7 Detrusor...............................................................................................46
4. MARCO METODOLÓGICO.............................................................................47
5. RESULTADOS DE LA BUSQUEDA.................................................................49
6. ANALISIS DEL LOS RESULTADOS...............................................................52
7. DISCUSIÓN..........................................................................................................57
8. CONCLUSIÓN.....................................................................................................59
9. BIBLIOGRAFIA..................................................................................................60
10. ANEXOS.............................................................................................................68

9
1. INTRODUCCIÓN

La Sociedad Internacional de Continencia (ICS) define la Incontinencia Urinaria como


la perdida involuntaria de orina, ésta constituye un problema social e higiénico, el cual
puede ser demostrado objetivamente1. La IU es un problema que afecta principalmente
a las mujeres, los estudios más recientes indican que entre un 47 y 57% de mujeres que
experimentan con cualquier tipo de perdida de orina en mujeres de mediana edad 2. La
IU tiene efectos secundarios tanto emocionales, psicológicos como también sociales,
ya que esta condición puede despertar sentimientos de vergüenza y culpa, alterando la
calidad de vida (CV) de las personas que la padecen3,4. Pueden diferenciarse 3 tipos de
IU: Incontinencia Urinaria de Esfuerzo (IUE), Incontinencia Urinaria de Urgencia
(IUU) e Incontinencia Urinaria Mixta (IUM)5. La IUE se define como una pérdida de
orina asociada al aumento de la Presión Abdominal (PA), en ausencia de contracción
del musculo detrusor1, esta se debe a una alteración de la presión uretral en reposo, por
una escasez propia de la musculatura lisa uretral 6 o por la ausencia de refuerzo de la
presión uretral durante los incrementos brucos de presión intrabdominal7,8.

La práctica del ejercicio físico (EF) ha sido reconocido como uno de los parámetros
más efectivos para obtener una mejor calidad de vida9. Las técnicas hipopresivas son
un método creado en 1980 por el Dr. Marcel Caufriez como alternativa para la
rehabilitación tradicional del postparto mejorando la musculatura del suelo pélvico. En
aquella ocasión Caufriez las denominó “Aspiración diafragmática” y a partir de esta se
creó la GAH cuyo objetivo inicial era buscar una técnica de fortalecimiento muscular
que fuese beneficiosa para la faja abdominal pero sin efectos negativos sobre el suelo
pélvico10. La GAH ha ido cobrando cada vez más importancia en la prevención y
tratamiento de la IU, pero hasta el momento no existe evidencia científica suficiente
que respalde esto, y últimamente existe una tendencia a incluir y atribuir aspectos
neurofisiológicos a algunas técnicas sin respaldar las bases y los conocimientos
existentes sobre ellas11, esto conduce a la confusión del profesional de salud como
también del paciente, por lo tanto es necesario evaluar y fundamentar su aplicación y
práctica.

10
2. ANTECEDENTES GENERALES

2. 1. Identificación del Estudio.

La incontinencia urinaria (IU) es un trastorno muy frecuente en nuestra


sociedad, es mucho más frecuente en mujeres que en hombres12. En un estudio
realizado en Chile, Salazar en el año 2013 establecieron que existe una prevalencia de
IU de 62,2% en una población cerrada13 y Hardwardt y colaboradores en el 2013,
realizaron un estudio en isla de pascua el cual determinaron una prevalencia de 77% en
mujeres14. La mayoría de los estudios epidemiológicos realizados sobre la IU sus
prevalencias y factores asociados han sido realizados en Europa y EEUU, en los que
por lo general la IU (cualquiera de sus tipos) tiene una prevalencia media estimada
entre 20 y 30%, con un aumento de 30 a 40% en personas de mediana edad y hasta un
30 a 50% en personas de la tercera edad. Existe un estudio epidemiológico realizado
en Noruega por el Epidemiology of Incontinence en el Condado de Nord-Trøndelag
(EPICONT, 2000) en donde participaron 27,938 mujeres mayores de 20 años de las
cuales el 25% reportaron algún tipo de IU. En el estudio EPICONT la incontinencia
urinaria de esfuerzo representó un 49,4% versus 35 y 10,9% de la incontinencia urinaria
mixta y de urgencia, respectivamente. Por grupos de edad la Incontinencia urinaria de
esfuerzo es más frecuente en mujeres de 20-39 años ya que representa un 55.1%, el
grupo de 40-54 años representó un de 45.4% y las mayores de 55 años un 32.4%15,16.

Actualmente la terapia conservadora se recomienda como la primera línea de


actuación17,18, y definitivamente la rehabilitación (RHB) por medio del entrenamiento
de la Musculatura del Suelo Pélvico (MSP) tanto para la IUE como para la IUU o
IUM17,19. La GAH engloba una serie de ejercicios con pautas posturales determinadas
que en su conjunto buscan disminuir la presión intraabdominal20 y activar la
musculatura profunda del abdomen y piso pélvico al mismo tiempo en la que se reeduca
la postura del cuerpo21.

Hasta el momento no existe evidencia científica suficiente que respalde la indicación


de la GAH como tratamiento efectivo para la IU y es por esto que es importante analizar

11
ésta información ya que las última revisiones22,23 que se han hecho sobre la GAH y IU
fueron realizadas en el año 2014, por lo tanto con esta RS se pretende contribuir a la
actualización de la información con el fin de poder utilizar los EH como una
herramienta terapéutica de manera responsable durante el desempeño como
kinesiólogos con el fin de sacar mayor ventaja en la terapia.

2.2 Objetivos del estudio:

2.2.1 Objetivo General.

Determinar mediante una revisión sistemática de la literatura los efectos de la


GAH en el tratamiento de la IU en mujeres y como esta terapia influye en la calidad de
vida de las pacientes.

2.2.2 Objetivos específicos.

 Realizar búsqueda bibliográfica de estudios relacionados con GAH y IU.


 Valorar la información bibliográfica encontrada a través de escala de PEDro.
 Analizar los artículos seleccionados.

2.3 Pregunta de Investigación:

¿Cuáles son los efectos de la GAH en el tratamiento de los diferentes tipos de IU en


mujeres?

2.4 Alcances y Limitaciones:

2.4.1 Alcances:

 Los beneficios terapéuticos de la realización de la GAH en el tratamiento de la


IU en mujeres.
 Evidenciar el efecto terapéutico que hace la GAH en mujeres que presentan IU.
2.4.2 Limitaciones:
 La existencia de pocos estudios que evidencien los reales beneficios de la GAH
en mujeres con IU.

12
3. DESARROLLO DEL TEMA

3.1 Incontinencia urinaria:

La IU es una afección médica y social muy creciente, la ICS la define como “la pérdida
involuntaria de orina que se puede demostrar objetivamente y constituye un problema
higiénico y social para quien lo padece”1. La IU es una patología predominantemente
femenina (proporción 3:1)24,25. Un 9.94% de mujeres comprendidas entre los 25 y los
65 años tienen IU en España25. Por otra parte, según la ICS, la prevalencia estimada de
IU en mujeres de mediana edad y mayores en la población en general se encuentra en
el rango del 30% al 60%25. A pesar de ello, los porcentajes obtenidos en estudios
epidemiológicos pueden no corresponderse con la realidad, debido a que hay muchas
mujeres que lo consideran normal tras los partos y por la edad. Otras mujeres no
solicitan ayuda profesional debido a la vergüenza y a la falta de información acerca de
los tratamientos de esta patología25.

3.1.1 Efectos de la IU en la Calidad de vida (CV)

Una de las consecuencias más importantes de la IU es la disminución de la CV de las


afectadas tal y como han reflejado diversos estudios en los últimos años26,27,28. Pese a
ello, muchas de ellas no buscan ayuda por vergüenza o por considerarlo algo normal
en el proceso de envejecimiento, siendo el resultado la aparición de trastornos de
ansiedad y depresión26,27,28,29. Según la literatura las personas con IU tienen una calidad
de vida deteriorada39, es por esto que a la larga presentan problemas en diferentes
ámbitos:
1. Problemas Sociales:
• Reducción en la interacción social
• Alteración de los planes de viaje
• Cese de actividades de tiempo libre
La vergüenza que produce esta patología y el miedo a “mojarse” en público o a oler a
orina producen que el individuo se aísle de la sociedad.

13
2. Problemas Psicológicos:
• Depresión
• Pérdida de auto respeto
• Baja autoestima
• Degradación
• Apatía
• Culpa
• Negación
• Pérdida del control
• Sentimiento de ser una carga
• Aislamiento

3. Problemas Ocupacionales:
• Ausentismo laboral, que afecta el área económica.

4. Problemas Domésticos:
• Negligencia en tareas domésticas
• Problemas maritales/familiares
• Requerimientos de camas y ropa interior especiales
• Temor a oler a orina
La realización de las actividades diarias, pueden verse afectadas ya que los esfuerzos
que se realizan pueden llevar a la ocurrencia de escapes de orina.

5. Problemas Físicos:
• Limitación o cese de actividades
• El sueño y descanso pueden verse afectados por la nicturia

14
6. Problemas Sexuales:
• Evitar el contacto sexual
Por temor o vergüenza a sufrir episodios de incontinencia durante el acto sexual, con
los consiguientes problemas maritales39.
Es por esto que se hace tan necesario evaluar detalladamente el impacto de la IU en
todos los ámbitos de la CV relacionada con la salud de éstas pacientes, y en base a esta
información formular procesos de rehabilitación integral.

Si bien es cierto que es más prevalente en mujeres de edad avanzada debido a la atrofia
muscular asociada al proceso de envejecimiento, la idea de que es una enfermedad
reservada a la vejez es totalmente errónea. Existe evidencia científica que demuestra la
relación entre la práctica deportiva y la IU en mujeres jóvenes30,31,32,33. Este fenómeno
se atribuye al incremento de la presión abdominal que se genera durante el ejercicio,
provocando la hiperpresión sobre el SP. Si éste no tiene el tono necesario, será incapaz
de mantener los mecanismos de cierre esfinterianos. No todos los deportes representan
el mismo riesgo. En el estudio epidemiológico de Salvatore y col.32 realizado con 679
mujeres, de las cuales 101 presentaban IU, se encontró que la incidencia del problema
era de un 16.6% en baloncesto, seguido de un 15% en atletismo y un 11% en tenis. Es
decir, los deportes de impacto representan un riesgo mayor siendo el alto nivel de
competición también un factor a tener en cuenta34.

3.1.2 Clasificación:

El escape de orina se clasifica de acuerdo a lo que se informa por la mujer (síntomas),


lo que se observa por un clínico (signos) y sobre la base de estudios urodinámicos.
Podemos distinguir 3 tipos de incontinencia en función de su sintomatología:

3.1.2.1 IU de esfuerzo (IUE): es la pérdida involuntaria de orina que se


produce con el aumento de la presión abdominal (tos, estornudo, levantamiento de
pesos, ejercicio físico, e incluso la marcha o cambio de posición). Está ocasionada por
insuficiencia en el esfínter uretral, por debilidad de las estructuras que sujetan la uretra
o por ambos problemas25.

15
3.1.2.2 IU de urgencia (IUU): es la pérdida involuntaria de orina acompañada
o inminentemente precedida por sensación de urgencia, tanto de día como de noche.
Generalmente, se produce por falta de control a nivel del músculo detrusor. Esta
necesidad urgente aparece frecuentemente asociada a épocas de gran estrés, risas a
carcajadas, etapas de depresión, asociada al frío e incluso a acciones cotidianas como
abrir la puerta de casa, realizar aseo doméstico, tocar agua o escucharla correr.

3.1.2.3 IU mixta (IUM): es una combinación de IUE e IUU. Los dos tipos más
frecuentes de incontinencia urinaria en las mujeres son la IUE Y IUU. Existen otros
tipos de incontinencias como son: Rebosamiento: cuando la vejiga no se vacía, bien
por obstrucción a la salida o porque el músculo de la vejiga no se contrae con eficacia
por lo que el escape de orina se produce con la vejiga llena. Anomalías de las vías
urinarias, infección, inflamación, trastornos neurológicos, cuerpos extraños, piedras,
etc.25,35.

La IUE Urodinámica es una clasificación que se basa en las mediciones de presión en


la vejiga, esfínter y el abdomen36.

En la IUE urodinámica, ocurre cuando el tracto de salida vesical (uretra) no se cierra


de forma adecuada durante el esfuerzo, lo cual da lugar a la pérdida de orina. La falta
de presión de cierre en la uretra se debe a los cambios anatómicos en la vejiga, la uretra
(por ejemplo, cuando la vejiga ha sufrido un prolapso o “descendido”) y los músculos
(por ejemplo, los músculos pelvianos son débiles y no elevan la vejiga ni hacen presión
sobre la uretra para que se cierre) 35.

En la IUU urodinámica, el músculo detrusor se contrae tan fuerte que el aumento de la


presión vesical predomina sobre la presión de cierre uretral y este hecho da lugar a la
pérdida. Por lo tanto, en la IUU el problema es un músculo vesical hiperactivo35.

16
3.1.3 Factores de riesgo de IU:

3.1.3.1 Edad: los estudios indican que la IU esta correlacionada con la edad.
La prevalencia aumenta regularmente con la edad. La IU no se debería considerar
normal en la vejez, no obstante, hay cambios en la vejiga y en las estructuras pélvicas
que ocurren con la edad y que contribuyen a la IU. La IU también puede ser atribuida
a problemas médicos o patologías que alteren los mecanismos de continencia, por
ejemplo la diabetes mellitus, las cuales son más comunes en personas de la tercera
edad37.

3.1.3.2 Embarazo: la IU ocurre frecuentemente en mujeres embarazadas


comparado con otros grupos de mujeres, mostrando prevalencias de un 31% y 60%,
según estudios37.

3.1.3.3 Parto: el rol del parto en la predisposición de la mujer a padecer IU ha


sido apoyado por una serie de estudios. Esto se debe a que el parto produce laxitud del
piso pélvico, como consecuencia del estiramiento y debilitamiento de los músculos y
tejido conectivo durante el parto. Además el daño puede ocurrir como resultado de las
laceraciones espontáneas que sufren los tejidos, y la tercera posibilidad es que durante
el parto vaginal, se dañe el nervio pudendo y los nervios pélvicos, lo cual interferiría
en la habilidad para contraerse de modo eficiente del esfínter uretral estriado en
respuesta al aumento de la presión intra-abdominal o de las contracciones del
detrusor37. Se ha observado que las mujeres que se someten a una cesárea, no ven
disminuida la fuerza de los músculos pélvicos, siendo la incidencia de la incontinencia
por esfuerzo, más baja que en aquellas mujeres que tienes un parto vaginal38.

3.1.3.4 Menopausia: En la clínica, los síntomas urinarios son parte de la


transición desde la pre-menopausia a la postmenopausia. Los cambios atróficos
aumentan la posibilidad de contraer infecciones urinarias y pueden producir síntomas
de retención de orina, dando la evidencia de que la atrofia de estos tejidos puede ser
revertida por los estrógenos y que los reemplazos de estrógenos reducen la IU en
algunos casos. Suena lógico proponer que la disminución de estrógenos contribuirá a

17
disminuir este problema. Según la literatura, las mujeres que experimentan una
menopausia quirúrgica tienen un porcentaje mayor de IU (36%), comparadas con las
que experimentan una menopausia natural (22%)37.

3.1.3.5 Obesidad: se establece como un factor que puede causar IU o contribuir


con la severidad de esta condición. Esto se debe a que el peso extra que se genera en la
obesidad, ya que esta sobrecarga el piso pélvico y causa un estiramiento crónico y un
debilitamiento de los músculos, nervios, y otras estructuras. Existen varios estudios que
indican que la IU en mujeres está asociada a un mayor Indice de Masa Corporal (IMC)
y un mayor peso. El vínculo entre masa corporal e IU apoya el concepto de que el
aumento de peso podría aumentar la posibilidad de sufrir incontinencia, y sugiere que
la pérdida de peso podría disminuir la incontinencia37.

3.1.3.6 Estilos de vida: conjunto de características que producen elevación


crónica de la presión intra-abdominal pueden propiciar a la IU o intensificarla. Por
ejemplo, se sugiere que el estreñimiento crónico y el consumo de cigarrillos pueden ser
factores importantes en la causa de la incontinencia por esfuerzo, aunque hay pocos
datos que confirmen estas suposiciones39. Los pacientes fumadores presentan un
aumento en las exigencias respiratorias, lo que produce un aumento de la presión
abdominal, pudiendo exacerbar la incontinencia por esfuerzo40.

3.1.4 Descripción del Periné y su conformación anatómica.

Periné es la zona del cuerpo que se sitúa en la región inferior del tronco que forma el
suelo de la pelvis. Forma la parte caudal de la cavidad abdomino-pélvica, la cual es
limitada superiormente por el músculo diafragma, antero-lateralmente por el abdomen
y en la parte posterior por las costillas, la columna vertebral lumbar y la musculatura
paraespinal41.

El periné está compuesto por un conjunto de partes blandas: piel, vísceras, cuerpos
eréctiles, músculos, ligamentos, fascias, nervios, vasos y orificios. Tres hiatos pueden

18
encontrarse en el Suelo Pélvico (SP) femenino: uretra, vagina y ano, lo que la convierte
en una zona de comunicación entre el interior y el exterior del cuerpo. El soporte de las
vísceras pélvicas y la continencia urinaria y fecal completan las funciones del periné.
Flexibilidad, resistencia, coordinación sensitiva y motriz y fuerza son las cuatro
propiedades indispensables que debe presentar la musculatura de esta región para
gestionar los incrementos de presión abdominal que se producen en situaciones como
reír, estornudar, toser, correr, etc. y así desempeñar las funciones mencionadas41.
Grosse y Sengler dividen dicha musculatura en tres planos30:

3.1.4.1 Plano profundo: Está formado por el músculo elevador del ano (bilateral), los
músculos isquiococcígeos y el piramidal de la pelvis. Este grupo es el principal soporte
de las vísceras pélvicas y su contracción provoca que se desplacen en sentido antero -
craneal. Interviene también en la continencia anal activa y pasiva. Las inserciones de
los Músculos elevadores del ano (MEA) forman la hendidura urogenital donde se
emplazan los hiatos pélvicos y con sus expansiones alrededor de la uretra (figura 1),
actúan como un segundo esfínter durante los aumentos de presión abdominal y la
interrupción voluntaria del chorro miccional.

El tratamiento de la Incontinencia Urinaria (IU), de la Incontinencia Anal y de los


Prolapsos de Órganos Pélvicos (POP) depende en gran medida del refuerzo muscular
a este nivel30.

Figura 1. Músculo elevador del ano (MEA)30.

19
3.1.4.2 Plano medio: Está formado por la aponeurosis perineal media que presenta una
hoja superior fina y otra inferior más gruesa. Entre las dos se encuentran el músculo
transverso profundo (localización posterior) y el esfínter externo de la uretra
(localización anterior). Pese a ser un músculo estriado y por tanto voluntario, el esfínter
externo mantiene una contracción permanente que permite la continencia urinaria. Su
relajación voluntaria desencadena el acto miccional.
3.1.4.3 Plano superficial: El cual está formado por los músculos isquiocavernosos,
bulbocavernosos y transverso superficial (figura 2) 30.

Figura 2. Músculos del suelo pélvico: Plano superficial30.

3.1.5 Fisiopatología básica de la continencia y micción

La continencia es el resultado del equilibrio entre las fuerzas de retención y de


expulsión. En la continencia urinaria la presión en la uretra debe ser mayor que la
presión en la vejiga durante la fase de llenado para mantener la orina dentro. En la fase
de vaciado este gradiente de presión se invierte para permitir la micción. Cuando este

20
equilibrio se pierde y la presión en la vejiga es siempre mayor que en la uretra, aparece
la incontinencia30.

Es importante considerar que fisiológicamente la vejiga se comporta como un órgano


que permanentemente está en dos fases, la miccional y la de continencia. Esto depende
de complejas relaciones anatómicas y funcionales propios de la vejiga (detrusor) con
su tracto de salida (esfínter interno, esfínter externo y uretra), y cuya coordinación y
regulación depende de distintos niveles neurológicos, estando en el individuo adulto,
bajo control voluntario42.

Respecto al enfoque anatómico, la estimación de continencia depende de la


viscoelasticidad del músculo detrusor y de la coaptación del tracto de salida. La fase
miccional, depende así mismo de la viscoelasticidad del músculo detrusor y de la
conductancia del tracto de salida (ausencia de obstrucción). Desde el punto de vista
funcional, la fase de continencia requiere de ausencia de contracciones vesicales y de
cierre esfinteriano activo, mientras que la fase miccional requiere de contracción del
detrusor y apertura del aparato esfinteriano42.

Todas estas funciones se logran a través de inervación tanto visceral (simpática y


parasimpática) como somática, con varios niveles de integración a nivel medular,
mesencefálico y cortical. La función de la vejiga es fundamental en este esquema ya
que durante la fase de almacenamiento sirve como reservorio urinario de baja presión
con adecuada capacidad y buena continencia. La incontinencia urinaria entonces se
define por lo tanto como un trastorno de la fase de continencia. En la fase miccional,
en cambio, la tarea es vaciar el contenido de la vejiga en forma coordinada con todas
las estructuras del tracto de salida (apertura) y sin afectar la vía urinaria superior. La
uropatía obstructiva, es por lo tanto una alteración de la fase miccional42.

Es posible clasificar todas las alteraciones funcionales de la continencia y micción en


cuatro grupos, dependiendo de si la patología afecta la fase miccional o la fase de
continencia y si depende de alteraciones de la función del músculo detrusor o del tracto

21
de salida (Cuadro 1). Así, en la fisiopatología de la incontinencia urinaria se pueden
distinguir dos grandes grupos. Aquellos cuadros en donde el trastorno está en el tracto
de salida y aquellos en los que el problema está en el detrusor. En el primer caso se
trata de las incontinencias urinarias de esfuerzo" que se subdividen en tipo I, II y III.

Cuadro 1. Alteraciones funcionales de la fase de continencia y miccional42.

FASE DE CONTINENCIA FASE MICCIONAL


(INCONTINENCIAS) (RETENCIONES)
Detrusor: Detrusor:
Disminución de la acomodación
Disminución o ausencia de la
- Alteración visco elasticidad
contractilidad del detrusor
- Alteración de la inhibición del tono
- Neurogénico
Aumento de la contractilidad
hiperactividad del detrusor idiopática
- Miogénico
o neurógena.
Tracto de salida:
Complejo Esfinteriano:
(uropatía obstructiva)
Activas

Incontinencia urinaria de esfuerzo - Disinergia detrusor esfínter


femenina por hipermovilidad uretral
- Externo
Incontinencia urinaria por
incompetencia esfinteriana intrínseca - Interno

- Neurógena Pasivas

- Daño esfinteriano anatómico - Compresivas (adenoma prostático)

- Falla del sello - Restrictivas (estrechez de uretra)

Incontinencia extra uretral (fístulas) - Otros (acodadura uretral)

Inhibición psicógena

Las incontinencias urinarias de esfuerzo tipo I y tipo II, son la progresión del mismo
fenómeno, que se caracteriza por la transmisión de la presión intra-abdominal a la
uretra proximal, debido a la pérdida de soporte de los órganos pélvicos por daño de la

22
base músculo aponeurótica del perineo, relacionada a la multiparidad y al
hipoestrogenismo perimenopáusico42. El esfínter en este caso se encuentra ileso.

En la incontinencia urinaria de esfuerzo tipo III, en cambio, existe una alteración


intrínseca del esfínter (incompetencia esfinteriana intrínseca), que puede ser debida a
alteraciones anatómicas (cirugía múltiple, radioterapia, etc.) o a alteraciones
funcionales (lesiones neurológicas del cono medular o periféricas). En el caso de las
incontinencias originadas en el músculo detrusor, se distinguen la hiperactividad del
detrusor y las alteraciones de la acomodación.

La hiperactividad vesical, se caracteriza por el incremento activo de la presión


intravesical durante la fase de continencia, ya sea por contracciones fásicas del detrusor
o por un incremento sostenido del tono del mismo. En relación a la hiperactividad
distinguimos la hiperreflexia y la inestabilidad del detrusor, según exista o no
respectivamente, una alteración neurológica de base que explique el cuadro42.

3.1.6 Valoración y Diagnóstico en IU


La Evaluación inicial con un profesional de la salud es importante y constituye la base
para el tratamiento posterior. El proceso de valoración y diagnóstico del kinesiólogo
está destinado a proporcionar una respuesta específica al problema y a los trastornos
subyacentes y/o los factores pronósticos desfavorables que puedan existir y que en
definitiva sean posibles de cambiar mediante la terapia kinesiológica.
El Kinesiólogo especialista en disfunciones de suelo pélvico recoge datos de la historia
del paciente para examinar la naturaleza y la gravedad del problema, acompañado su
evaluación del examen físico, obteniendo además una confianza entre terapeuta y el
paciente. Según la Guía de práctica Clínica para fisioterapeutas en la incontinencia
urinaria es importante la información que el paciente entregue en la anamnesis ya que
será utilizada para formular un plan de tratamiento específico43 (tabla 1), por ejemplo
saber los fármacos que utiliza el paciente ya que pueden contribuir de manera negativa
a la IU43 (tabla 2).

23
Tabla 1. Fármacos que pueden producir IU43.

Fármacos que pueden producir IU por rebosamiento por ↓ la contracción vesical


Anticolinérgicos Relajantes del Beta Antagonistas Inhibidores Vincristina
. Antipsicóticos músculo liso agonistas del calcio de la síntesis
. Antidepresivos . Benzodiazepinas . Salbutamol . Nifedipino de PG:
tricíclicos . Terbutalina . Flunarizina . AINE
. Verapamilo .
Antihistamínicos . Amlodipino Flurbiprofeno
. Espasmolíticos . Indometacina
. Antieméticos
. Opiáceos
. Ipratropio
IU de rebosamiento por aumentar el tono uretral
Alfa agonista: Antidepresivos Antipsicóticos Estriol,
Descongestionantes tricíclicos: bromocriptina
nasales . Imipramina
. Efedrina . Amitriptilina
. Fenipropanolamina . Doxepina
IU de Urgencia
Urgencia miccional, aumento del volumen y de la Aumentan la contracción vesical
frecuencia: . Cafeína
. Diuréticos, sobre todo del asa. . Análogos de las prostaglandinas: misoprostol
. Alcohol: además, NP autonómica y sedación
IU de esfuerzo por disminuir el tono uretral o productos TOS
Alfa bloqueantes: doxazosina, algunos IECA
antihipertensivos.
IU por varios mecanismos
Disminución de la inhibición central, de la contracción vesical, del tono uretral, impactación fecal,
estreñimiento. Sedantes e hipnóticos: benzodiazepinas, sobre todo de acción prolongada

Tabla 2. Factores a tener en cuenta en la anamnesis de la IU43.

Factores a tener en cuenta en la anamnesis de la IU Prácticas deportivas


Hábitos tóxicos y dietéticos
• Tabaquismo (como origen de tos crónica).
• Ingesta de líquidos en general y de bebidas con efecto diurético (como la cerveza) o estimulantes:
café, té, infusiones, colas, bebidas gaseosas, chocolate agua tónica, cítricos.
• Ingesta de alcohol.
• Utilización de fármacos que puedan desencadenar IU
Antecedentes patológicos médicos
• Patología respiratoria que ocasione tos crónica. • Estreñimiento. • Obesidad.
• Enfermedades neurológicas y endocrinológicas, (especial atención el enolismo y la diabetes).
• Insuficiencia renal o cardiaca (pueden cursar con poliuria, nicturia y polIquiuria).
• Enfermedades urológicas (HBP, estenosis uretrales, tumores).
• Enfermedades digestivas que pueden producir IUU sensitiva.
• Situaciones que pueden producir una IU transitoria.
Antecedentes quirúrgicos (pueden producir lesión de los nervios simpático, parasimpático o
pudendo y afectar al funcionalismo del tracto urinario inferior).
• Carcinoma colorrectal. • Histerectomía. • Prostatectomía, etc.
Antecedentes obstétricos y ginecológicos

24
• Número de partos, instrumentalización de los mismos, episiotomía, duración del periodo
expulsivo.
• Número de cesáreas con trabajo de parto. • Prolapsos. • Tumores.
Antecedentes de radioterapia pélvica
Situaciones que pueden producir una IU funcional
Descartar trastornos asociados
• Incontinencia anal (asociación 1/3). • Disfunción sexual. • Dispareunia, sequedad o prurito
vaginal.

Para una evaluación más detallada de los síntomas se utilizan cuestionarios específicos
más detallados y están validados para tratar de medir el impacto y la percepción de la
incontinencia sobre la calidad de vida del paciente. Aunque existen muchos, en la
actualidad tenemos una herramienta, como el cuestionario ICIQ-SF (ver Anexo 1), que
es específico para el estudio de la incontinencia y está validado y traducido al
castellano44.

3.1.7 Tratamiento de la IU
En el año 2001 la ICI (Internacional Consultation on Incontinence)43 considera el
tratamiento de Fisioterapia, concretamente los ejercicios del suelo pélvico, como el
primer paso en la recuperación de la incontinencia urinaria en sus diferentes tipos, ya
que es una terapia efectiva, no agresiva, sin efectos secundarios y poco costosa.
En el año 2013 se publica la Guía de Prácticas Clínicas desarrollada por Colegio
Americano de Médicos (ACP)45 donde se describen recomendaciones clínicas sobre el
tratamiento conservador de la IU en la mujer, basada en literatura publicada a partir de
1990 hasta diciembre de 2013 y en octubre del mismo año se publicó la primer edición
de la Guía de práctica Clínica para fisioterapeutas en la incontinencia urinaria
femenina, realizada por el Ilustre Colegio Profesional de Fisioterapeutas de
Andalucía,43,46 (Figura 3).

25
Figura 3. Algoritmo del proceso de intervención en la Incontinencia Urinaria femenina 43.

A continuación se describen los Tratamientos Recomendados por las Guías


mencionadas:

3.1.7.1 Ejercicios de la Musculatura del Suelo Pélvico:


Durante la sesión se realizan ejercicios de contracción perineal estimulados y evaluados
por el kinesiólogo. El número de repeticiones depende de la fatigabilidad del músculo.
Cuando el paciente logra contraer voluntariamente su periné, repite un plan de
ejercicios para realizar fuera de la sesión.
En el entrenamiento y reeducación de la musculatura del suelo pélvico una de las
dificultades es la falta de capacidad o habilidad para contraerla, un 30% de mujeres son
incapaces de realizar una contracción correcta, por lo que previo al tratamiento debería

26
ser valorada esta capacidad, al igual que la aparición de sinergias musculares de los
músculos abdominales, glúteos o aductores cuando se solicitan la contracción aislada
de la musculatura del suelo pélvico.
Los ejercicios deben ser la primera opción en el tratamiento ofrecido a los pacientes
que sufren IU de esfuerzo y mixta. Los programas de reeducación deben tener una
duración mínima de 3 meses, estar al alcance de todas las pacientes43,47,45.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) considera la fisioterapia como


tratamiento prioritario en los casos de IU.
El entrenamiento de los músculos del suelo pélvico (PFMT) (pelvic floor muscle
training) tienen un importante lugar en el tratamiento de la IU, con un porcentaje de
éxito del 56-75%, de tal manera que la revisión realizada por la Cochrane “Pelvic floor
muscle training for urinary incontinence in women”19 concluye que es
consistentemente mejor que el no tratamiento o el placebo y que debe ser ofrecido como
primer tratamiento para mujeres con IU.
El primero en crear un sistema de Entrenamiento Muscular del Suelo Pélvico (EMSP)
fue Arnold Kegel en 1948. Su método se compone de ejercicios que buscan incrementar
la fuerza de contracción de los músculos del periné. Su eficacia en la IU ha sido
ampliamente demostrada como indica la revisión de Cochrane mencionada
anteriormente19.

3.1.7.2 Biofeedback (BFB):


Es un sistema que recoge o capta información de un proceso fisiológico que sucede de
forma inconsciente para el individuo; dicha información se amplifica y es devuelta en
forma de señal visual o auditiva para que pueda ser captada por la paciente, indicando
el momento en el cual debe realizar la contracción y la relajación.
Para un correcto uso la respuesta obtenida debe ser medible y detectable, así como los
cambios que se produzcan en la misma; también debe ser perceptible para que la

27
paciente reconozca cuando debe realizar un control sobre la musculatura; y por último,
requiere la participación activa de los individuos, que deben estar motivados.
Existen diferentes métodos, entre ellos el BFB mediante electromiografía o mediante
manometría, tanto con aplicación de electrodos intracavitarios como de superficie.
Tiene como objetivos que la paciente consiga un buen control voluntario sobre la
musculatura estriada (músculo elevador del ano o esfínter uretral externo), una mayor
conciencia de la zona pelvi-perineal y una disminución de las contracciones de los
músculos antagonistas. No es un tratamiento por sí mismo, no se usa de forma aislada
en el abordaje de la IU, se aconseja ofrecer el uso de BFB como accesorio al
entrenamiento de la musculatura del suelo pélvico. En relación al programa de
entrenamiento oscila la duración entre 4 semanas y 6 meses43,47,45.

3.1.7.3 Electroestimulación Funcional (EEF):


Consiste en una estimulación de origen nervioso que tiene como objetivo actuar sobre
los circuitos o fibras nerviosas responsables de la incontinencia urinaria. Busca activar
las raíces sacras S1-S2-S3, para conseguir una contracción de la musculatura implicada
en esta disfunción. Para que esta herramienta pueda ser utilizada precisa de un arco
reflejo íntegro en la paciente.
Es utilizada en el caso de IU de esfuerzo, en pacientes con síntomas de urgencia,
frecuencia y/o IU de urgencia, nicturia, vejiga hiperactiva e IU mixta.
El mecanismo y modo de actuación depende de la causa que provoque la IU de la
estructura que sea estimulada mediante la corriente eléctrica. En líneas generales, en la
IUE, la electroestimulación tiene como objetivo la mejora de la presión de cierre uretral
y la activación esfinteriana mediante la estimulación de las fibras nerviosas del nervio
pudendo, mientras que en la IUU, se persigue la inhibición de las contracciones reflejas
del musculo detrusor para conseguir una contracción de la musculatura peri y para
uretral, ya sea de forma directa sobre dicha musculatura o a través de los reflejos
espinales. Se puede realizar con electrodos vaginales o con los electrodos cutáneos o
transcutáneos43,47,45.

28
3.1.7.4 Entrenamiento Vesical (comportamental):
Es un proceso de aprendizaje individual de nuevos patrones miccionales para
restablecer los que se consideran normales, en quienes se encuentran alterados. El
programa debe contener tres elementos clave: educación al paciente sobre anatomía de
la vejiga, sobre incontinencia, mecanismos de control de la urgencia vesical; una
micción programada con ajuste de la frecuencia miccional mediante la ampliación de
los periodos inter-vaciados (con aumento progresivo); y refuerzo positivo
proporcionado por el Kinesiólogo. Precisa de la participación activa de los pacientes
(plena capacidad cognitiva y física) y muy motivados ante la terapia, cambios en sus
actividades diarias y en sus hábitos, como por ejemplo en la ingesta de líquidos,
realización de esfuerzos, calendario miccional, entre otros, para colaborar con el
tratamiento y asegurar sus buenos resultados.
Los efectos se apuntan a las siguientes propuestas: mejora de la inhibición cortical
sobre las contracciones involuntarias del musculo detrusor; mejora de la facilitación
cortical del cierre uretral durante la falle de llenado vesical; mejora de la modulación
central de los impulsos aferentes; y mejora del conocimiento de los pacientes sobre las
circunstancias que causan la incontinencia urinaria, llevándoles a ser más conscientes
de ellas y pudiendo producir un cambio en sus comportamientos para aumentar la
capacidad de reserva del tracto urinario inferior.
El “grado de recomendación A” para el uso de entrenamiento vesical con una duración
de 6 semanas debería ser ofrecido como primer abordaje en las mujeres con IUU y
IUM, aunque sea efectivo para los tres tipos de IU, pre y post parto, prolapsos y pre y
post operatorio de la cirugía de la incontinencia43,47,45.

3.1.7.5 Estimulación del Nervio Tibial Posterior:


Provoca una electroestimulación retrograda del plexo nervioso sacro. Se ha aplicado
tanto de forma transcutánea, con electrodo de superficie como percutánea, con
electrodo aguja, con en el electrodo activo colocado por encima del maléolo medial y
el electrodo adhesivo dispersivo cerca del arco plantar. Efectividad en síndrome de

29
hiperactividad vesical, disfunciones de vaciado no obstructiva, dolor pélvico crónico,
vejiga neurogénica, como así también en IUU.

En relación a la pauta de tratamiento la Asociación de Urología Europea 6 recomienda


realizar una sesión de 30 minutos a la semana durante un periodo inicial de 12 semanas.
Para que los efectos se mantengan a largo plazo se requiere un tratamiento crónico con
sesiones más espaciadas, aproximadamente 1 sesión cada tres semanas.
En la guía se describían como tratamientos la Magnetoterapia, Estimulación Nerviosa
Eléctrica Transcutánea (TENS) y Dispositivos Intracavitarios (Conos Vaginales), los
cuales no se encontró evidencia sobre la efectividad del uso y por lo tanto no serán
desarrollados en esta investigación47.

Además de estos tratamientos es importante tener en cuenta que el médico puede


recomendar a las pacientes un tratamiento farmacológico en conjunto con la terapia y
en casos más severos se les deriva a un tratamiento quirúrgico39.

3.1.7.6 Tratamiento Farmacológico


Según un estudio realizado por Pharmacia & Upjohn en 1999 existen diferencias entre
los diferentes fármacos utilizados en el tratamiento de los distintos tipos de
incontinencia39.
Hay dos grupos principales de drogas para el tratamiento de IU de estrés:
- Agonistas α-adrenérgicos, causan la contracción del cuello de la vejiga y de la uretra.
- Estrógenos, puede ayudar a aliviar los síntomas de la incontinencia en mujeres
posmenopáusicas.
La farmacoterapia, actualmente es el soporte del tratamiento de la incontinencia por
urgencia. A pesar de la efectividad de los medicamentos usados, estos pueden producir
efectos colaterales indeseados.
Dentro de los fármacos más usados encontramos:

30
- Drogas antimuscarínicas, las que reducen la frecuencia de las contracciones del
músculo detrusor, bajan la presión dentro de la vejiga e incrementan su capacidad.
- Drogas con efectos directos, tales como flavoxato que inhibe las contracciones del
músculo detrusor, probablemente por un efecto espasmolítico directo sobre el músculo
detrusor.
- Drogas con acción mezclada, las que mezclan un efecto antimuscarínico con otros
efectos farmacológicos.
- Estrógenos, el efecto de estos en los pacientes con incontinencia de urgencia, no está
claro.

3.1.7.6 Tratamiento Quirúrgico


Se realiza en pacientes con incontinencia por estrés severa y/o que no responden al
tratamiento conservador. El objetivo principal de la cirugía, es elevar el cuello de la
vejiga y la uretra proximal hasta una posición intraabdominal tal, que la presión en la
uretra proximal se incremente en los episodios de esfuerzo físico39.

3.1.8 Prevención en la incontinencia urinaria


Según la GPC la prevención de las disfunciones de suelo pélvico es una tarea
importante dentro de los programas de reeducación de esta musculatura. Es necesario
identificar los grupos de población mediante la identificación de factores de riesgo para
el desarrollo de las disfunciones urológicas. Al igual que profundizar más en este
aspecto preventivo para conocer la repercusión y beneficios que supone para la Salud
y la calidad de vida de las mujeres que lo padecen47,43,48,49.

3.2 Gimnasia abdominal hipopresiva GAH.

3.2.1 Historias de la Gimnasia Abdominal Hipopresiva.

En 1980 Caufriez creó las primeras técnicas de Gimnasia Hipopresivas, la cual surge
como método de fortalecimiento en mujeres en etapa de postparto, dado que el

31
fortalecimiento tradicional conllevaba posibles complicaciones a nivel de estabilidad
de piso pélvico10.

3.2.2 Definición.

El doctor Marcel Caufriez dio con éste método que fortalece la musculatura del periné,
y recoloca las vísceras de la zona simultáneamente y las define como una serie de
posturas, que combinadas con una respiración especial (una apnea espiratoria), hacen
que el diafragma se eleve y actúe, por un lado elevando también el paquete visceral
(útero-vagina, uretra-vejiga, recto e intestinos), y por otro, gracias a un mecanismo de
activación refleja que a su vez provoca una contracción de la musculatura del suelo
pélvico20.

3.2.3 Método de entrenamiento.

El Doctor Marcel Caufriez en el 2010 y Tamara Rial en el 2011 plantearon el siguiente


programas de entrenamiento50,74:
GAH de base: Este programa se compone de una serie de ejercicios posturales,
divididos en dos fases:
 Fase de integración y memorización: Donde el paciente, en un periodo de
aprendizaje de al menos 12 sesiones debe ser capaz de integrar los ejercicios.
 Fase de automatización: Donde el paciente complementa el aprendizaje
anterior. Consiste en practicar una serie de 3 ejercicios cada día, durante 20
minutos.

En este programa se realizan 8 posturas en el siguiente orden: Ortostática → De rodillas


→Decúbito prono →Cuadrupédica → Sentado-Genu-Pectoral → Sentado de sastre
→Semi-sentada →Decúbito supino10. En la figura 4, se muestran algunos ejemplos de
estas posturas.
En total, son 33 ejercicios distribuidos en 8 posturas, y se realizan 3 veces cada uno,
respetando unos segundos de reposo10.

32
Entre cada postura, se realizan unos ejercicios específicos denominados: de transición
o intermediarios, que se realizan sólo una vez a modo de ejercicio de transición entre
dos posturas 10,50.

Figura 4. Posturas de la GAH50.

Para alcanzar las reacciones sistemáticas descritas anteriormente, las posturas


adoptadas, deben ejecutarse en base a unas pautas como son74:

• Auto elongación: Estiramiento axial de la columna vertebral para provocar una


puesta en tensión de los músculos espinales profundos y músculos extensores de la
espalda.

• Doble mentón: Empuje del mentón que provoca tracción de la coronilla o punto
vértex hacia el techo (figura 5).

33
Figura 5. Técnica del doble mentón74.

• Decoaptación de la articulación glenohumeral: Se provoca realizando una abducción


de las escápulas y con activación de los músculos serratos (figura 6).

Figura 6. Colocación de las


extremidades superiores74.

• Adelantamiento del eje de gravedad: Desequilibrio del eje anteroposterior que


implica variación del centro de gravedad en dirección ventral (figura 7).

34
Figura 7. Pauta técnica del
adelantamiento del eje corporal74.

• Respiración costodiafragmática: Durante la fase de inspiración normal se


incrementa el volumen de la caja torácica y se reduce la presión dentro de ella por la
apertura de las costillas hacia fuera y arriba, aumentando el diámetro transverso y
anteroposterior de la misma (figura 8), lo que permite la expansión pulmonar y la
entrada del aire. El músculo motor principal es el diafragma, que se aplana en dirección
caudal y agranda la caja torácica en sentido cráneo caudal; aunque en menor grado
actúan asimismo los músculos intercostales laterales, elevando las costillas y
generando un ensanchamiento de la caja torácica en dirección anteroposterior y
transversal. El músculo esternocleidomastoideo y los músculos serratos anteriores y
posteriores pueden ayudar a esta acción creando una inspiración forzada y con esto se
realiza la hendidura de las fosas supraclaviculares (figura 9). La espiración tranquila o
normal es un proceso pasivo que comienza cuando se relajan los músculos inspiratorios

35
disminuyendo la cavidad torácica junto a la retracción elástica del tejido pulmonar. En
la espiración forzada se contraen los músculos espiratorios (intercostales internos y
abdominales: transverso, oblicuo menor, oblicuo mayor y recto abdominal) que
empujan los órganos abdominales contra el diafragma relajado, aumentando su forma
de cúpula y disminuyendo por tanto el diámetro de la cavidad torácica.

Figura 8. Abertura del arco costal Figura 9. Hendidura en las fosas


claviculares y hudimiento abdominal74. supraclaviculares74.

• Apnea espiratoria: Espiración total de aire con apnea mantenida (entre 10 y 25 seg,
según nivel). Se añade una apertura costal simulando una inspiración pero sin
aspiración de aire, junto con un cierre de la glotis; contracción voluntaria de los
músculos serratos mayores y de los músculos elevadores de la caja torácica50.

3.2.4 Efectos del entrenamiento Hipopresivos.

Los efectos de las TH a nivel respiratorio son de gran importancia pues estimulan
centros espiratorios del tronco cerebral (centro apnéustico y centro respiratorio bulbar
dorsal), esto es en respuesta a la mantención de un periodo de apnea espiratoria durante
la ejecución de los ejercicios que provoca un estado cercano a la hipercapnia (presión
de dióxido de carbono, PCO2 menor a 40 mmHg)51.

36
Además los EH realizan una contracción voluntaria de los serratos mayores y de los
músculos elevadores de la caja torácica que son músculos del aparato respiratorio que
dependen del centro pneumotáxico. Los centros respiratorios supraespinales ayudan en
el control tónico postural y fásicos de los músculos respiratorios (músculos de las vías
respiratorias superiores, intercostales, escalenos, ECOM, diafragma, abdominales y
suelo pélvico). Su activación o inhibición permite modular la tensión postural52.

Otro de los efectos encontrados es la tonificación de los músculos de la faja abdominal


y del suelo pélvico, aumento de la circulación de retorno en los miembros inferiores y
activación ortosimpática. Los efectos que se consiguen de forma global son la
normalización de la postura de forma global, prevención de hernias (abdominales y
vaginales) y mejora los mecanismos de defecación, obstetricia, estabilización sexual y
dinámica de los órganos pélvicos50.

Este ejercicio se recomienda postparto debido a las ventajas que ofrece a la hora de
recuperar el suelo pélvico y la prevención y tratamiento de las disfunciones asociadas
a la misma, también ayuda a la reducción del tamaño de la cintura abdominal50.

Los principales efectos que se le atribuyen a los EH son según Esparza son la
tonificación de la faja abdominal y del suelo pélvico53 fuerza más musculatura
abdominal.

Durante las fases del ejercicio donde se produce la apnea espiratoria el diafragma es
succionado como consecuencia de la apertura costal y elevación de la caja torácica, la
relajación tónica de este consigue la disminución de la presión torácica y abdominal20.

Otra evidencia que otorga a la práctica es la acción que ejercen sobre la flexibilidad
lumbar y de los miembros inferiores en pacientes con lumbalgia mecano-postural,
mediante un estudio electromiografico se demostró la mejora del tiempo de activación
del transverso y del oblicuo interno tras la realización de ejercicios hipopresivos en el
tiempo54.

37
Otro de los beneficios que se les otorga a los EH es que generan beneficios sobre la
incontinencia urinaria y mayor sinergia funcional entre el diafragma, musculatura
respiratoria y pelvi-perineal.

Los EH si bien conllevan a un gran número de beneficios pero también posee sus
contraindicaciones como son los casos de personas que posean coxartrosis, gonartrosis,
que han sido intervenidos quirúrgicamente o con algún tipo de ortopedia a nivel de
rodillas, cadera o pies. Si el paciente presenta algún tipo de cardiopatía, hipertensión
arterial, algún tipo de disfunción obstructiva y embarazo en el caso de las mujeres.

Además los EH logran una disminución de la actividad tónica del diafragma,


facilitando la relajación del diafragma, se afirma que ayuda a disminuir la actividad
postural del diafragma torácico afectando a la esfera cardiovascular, a los músculos
antigravitatorios y a los músculos abdominales y perineales. Se evidencio que la
relajación del diafragma nunca llega a niveles basales con los EH que se realizan para
ello se evidencio tres puntos para explicar este motivo:

1. Adelantamiento del eje de gravedad.

2. Contracción de la musculatura esquelética inspiratoria en la fase de apnea espiratoria.

3. Situación de hipercapnia derivada de la apnea. Como justificación se cita el trabajo.

Según el doctor Marcel Caufriez20, la contracción voluntaria de los serratos mayores y


de los músculos elevadores de la caja torácica, así como la autoelongación de la
columna cervical, estimulan los mecanorreceptores respiratorios que inhiben los
núcleos inspiratorios. Los centros respiratorios supraespinales tienen una acción de
control tónico postural fásico sobre los músculos respiratorios, y la activación o
inhibición de dichos centros permite modular la tensión postural.

La actividad respiratoria de los músculos respiratorios está regulada por la red neuronal
del bulbo raquídeo, pero la actividad postural de estos músculos está controlada por
diferentes sistemas motores pertenecientes al sistema22.

38
Caufriez, M. et al en el 201050 describió la acción que se produce en el sistema
respiratorio por parte de los Ejercicios Hipopresivos a nivel central, al realizar una
apnea espiratoria se genera un estado de hipercapnia esto aumenta la secreción de
catecolaminas, esto a su vez activan los centros espiratorios del tronco cerebral e inhibe
los inspiratorios lo que permite modular el tono de la musculatura respiratoria de esta
forma se relaja el diafragma. Esta relajación se traduce como un ascenso del músculo
generando un efecto de succión de las vísceras pélvicas, con esto se libera la tensión en
el sistema músculo-ligamentoso del Suelo Pélvico50.

3.2.5 Estructuras involucradas

El “Core” se define como una caja muscular compuesta de musculatura abdominal,


para-espinal, glúteos, diafragma y musculatura del piso pélvico. Con 29 pares de
músculos que entregan estabilidad y control de movimientos de columna y pelvis, así
como también ayudan en el movimiento funcional del cuerpo en general55.

A continuación se describirán los músculos que pertenecen al “Core”.

3.2.5.1 Diafragma.

El origen de las fibras esternales de originan en superficie posterior de la apófisis


xifoides del esternón, fibras costales en el borde de la superficie interna de las costillas
7ª-12ª y fibras lumbares medias en vértebras lumbares 1° a 3°, discos intervertebrales
2° y 3° y ligamento longitudinal anterior. El arco tendinoso del psoas desde 2° cuerpo
vertebral lumbar hasta apófisis costal correspondiente y arco tendinoso del cuadrado
lumbar desde la apófisis costal de 2° cuerpo vertebral lumbar hasta el vértice de la 12ª
costilla, para ir a insertarse en el centro tendinoso.

Orificios: Hiato aórtico se encuentra por posterior a la altura de D12, hiato de la vena
cava está en el centro frénico a la altura de D8 y el hiato esofágico se localiza por
delante del hiato aórtico, en el centro frénico a la altura de D10.

39
La función principal de este músculo es participar en el trabajo respiratorio y sostén
principal de la ventilación. Principal inspirador y controla la presión intraabdominal.
Se encuentra inervado por los nervios frénicos izquierdo y derecho (figura 19).

Figura 10. Músculo Diafragma56.

3.2.5.2 Recto del abdomen (RA).

El origen de este músculo es el borde superior del pubis, se inserta en la cara anterior
de los 5°, 6° y 7° cartílagos costales y apéndice xifoides. Sus funciones son mantener
la posición erecta y con ello el mantenimiento de la curvatura de la columna lumbar58.

40
Su contracción aumenta la presión intraabdominal y contribuye a expulsar los
contenidos abdominales en la defecación o micción. A la vez produce flexión de la
columna vertebral a través de las costillas.

Su contracción unilateral produce inclinación lateral del tronco hacia el mismo lado y
si se contraen los dos al mismo tiempo (bilateralmente), flexionan el tronco. Su tono
limita la inspiración máxima y favorece la espiración. Esta Inervado por los nervios
intercostales T5-T1258 (figura 11).

Figura 11. Músculo Recto del abdomen57.

3.2.5.3 Oblicuo externo del abdomen.

El origen de este músculo es la cara lateral de las costillas 5ª-12ª, va a insertarse al labio
externo de la cresta ilíaca, lámina anterior de la vaina de los músculos rectos de
abdomen, línea alba. La función si se contrae el de un solo lado, realiza flexión lateral
de tronco hacia el mismo lado y rotación hacia el lado contrario. Si se contraen los dos,
producen flexión de tronco, elevación de la pelvis, aumento de la presión abdominal y
espiración. Está inervado por los nervios intercostales T5-T12, nervio iliohipogástrico,
nervio subcostal, nervio inguinal58 (figura 12).

41
Figura 12. Músculo Oblicuo Externo del abdomen58.

3.2.5.4 Oblicuo interno del abdomen (OI).

El origen de este músculo es la fascia toracolumbar, línea intermedia de la cresta iliaca,


espina iliaca anterosuperior, mitad lateral del ligamento inguinal. Va a insertarse a los
bordes inferiores de las costillas 10ª-12ª en la línea alba. La función de este músculo si
se contrae el de un solo lado, realiza flexión de tronco y rotación de tronco hacia el
mismo lado. Si se contraen los dos, producen flexión de tronco, elevación de la pelvis,
aumento de la presión abdominal y espiración. La inervación está dada por los nervios
intercostales T8-T12, nervio iliohipogástrico, nervio ilioinguinal59. (figura 13).

Figura 13. Músculo Oblicuo interno del abdomen59..

42
3.2.5.5 Transverso del abdomen (TRA).

El origen Superficies internas de los cartílagos costales 7º a 12º, fascia toracolumbar,


el labio interno de la cresta ilíaca de la pelvis, la espina ilíaca anterosuperior y parte
lateral del ligamento inguinal. Su inserción es en la lámina posterior de la vaina de los
músculos rectos de abdomen, línea alba. Su función si se contrae el de un solo lado,
realiza rotación de tronco hacia el mismo lado. Si se contraen los dos, aumentan la
presión abdominal y favorecen la espiración, ademases uno de los componentes de la
musculatura profunda abdominal que están involucrados en el control del tronco. Está
Inervado por los nervios intercostales T5-T12, nervio iliohipogástrico, nervio
ilioinguinal, nervio genitofemoral60 (figura 14).

Figura 14. Músculo transverso del abdomen60.

3.2.5.6 Multifidos.

El origen de este músculo es la superficie dorsal del sacro, aponeurosis del erector de
la columna, espina iliaca postero-superior, ligamentos sacroiliacos posteriores y
apófisis transversas. Va a insertarse en dirección superior y media se inserta en las
apófisis espinosas de las vértebras superiores C5 A L5. La función es estabilizador de
columna en posición neutra y controla de manera excéntrica la inclinación anterior de
la columna y contrarresta la fuerza de flexión que generan los músculos abdominales
durante la rotación del tronco. Su inervación está dada por la rama medial proveniente
del nervio espinal dorsal61 (figura 15).

43
Figura 15. Músculos Multifidos61.

3.2.5.7 Detrusor

El músculo detrusor es la capa de músculo liso que forma parte de la pared de la vejiga
urinaria. Su contracción provoca la micción, es decir la expulsión de la orina al exterior
a través de la uretra.

La pared de la vejiga urinaria está formada por tres capas: la interna o mucosa, la
intermedia o muscular y la externa o serosa. La capa intermedia constituye el músculo
detrusor, el cual está constituido por músculo liso que se distribuye en tres capas
concéntricas: la externa formada por fibras musculares longitudinales, la media
formada por fibras circulares y la interna formada también por fibras longitudinales.
En la zona de la vejiga próxima al trígono, la capa interna se adhiera a la mucosa y
forma el musculo trigonal62 (figura 15).

Figura 15. Musculo detrusor62.

44
4. MARCO METODOLÓGICO.

La metodología ocupada fue la Revisión Sistemática Cualitativa en la cual se presenta


la evidencia en forma descriptiva, sin análisis estadístico63 Las variables a investigar
fueron principalmente la calidad de vida en la Incontinencia Urinaria y los efectos de
la GAH, las palabras claves empleadas en la búsqueda fueron: “abdominales
hipopresivos”, “método hipopresivo”, “incontinencia urinaria”, “ejercicios
hipopresivos”, “suelo pélvico”, “calidad de vida”. En la lengua española se utilizó el
motor de búsqueda Google Académico, PEDro y la base de datos Scielo. En la lengua
inglesa se emplearon los términos Mesh:64 “urinary incontinence”, “abdominals”,
“rehabilitation”, “postpartum”, “pelvic floor” y términos no Mesh “hypopressive
abdominals”, hypopressive method”, “exercises hypopressive”, que se rastrearon en
los buscadores científicos Pubmed (Medline), Science Direct y Cochrane Plus Library.
Los términos booleanos ocupados fueron AND y OR.

Se encontraron (en inglés y español) un total de artículos: 1290 artículos a los cuales
se les aplicaron los criterios de inclusión y exclusión. Posterior a esto se obtuvieron 22
estudios que cumplieron con los criterios de aceptabilidad (Cuadro 2).

Finalmente se les aplicó la escala de PEDro en la cual se debió cumplir con al menos
6 puntos para ser considerado en esta investigación. La escala PEDro empleada sirvió
para clasificar la calidad de la metodología de todos los artículos seleccionados, de esta
forma se evaluó cada publicación científica a través de la metodología de los diseños
clínico. Esta escala consta de un total de 11 ítems, donde el ítem 1 hace referencia a la
validez externa del estudio, mientras que los ítems 2-9 aluden a la validez interna y los
ítems 10 y 11 su información estadística aportada por los autores permite la
interpretación de los resultados en forma adecuada y clara ( ver Anexo 2).

45
Cuadro 2 Estrategia de búsqueda y selección de artículos relevantes.

Inicio de Revisión Sistemática de la literatura en bases de datos Pubmed


(Medline), Scielo, PEDro, Cochrane Plus Library y Google académico.

Las palabras claves empleadas en la búsqueda fueron: “abdominales


hipopresivos”, “método hipopresivo”, “incontinencia urinaria”, “ejercicios
hipopresivos”, “suelo pélvico” (español).y se emplearon los términos Mesh:
“urinary incontinence”, “abdominals”, “rehabilitation”, “postpartum”,
“pelvic floor” y términos no Mesh “hypopressive abdominals”, hypopressive
method”, “exercises hypopressive”(ingles).

Se encontraron (en inglés y español) un total de artículos: 1290


Se estudian y filtran losartículos.
artículos en base a criterios de
inclusión y exclusión.

Se incluyeron 22 artículos. Se excluyeron 1268 artículos.

Criterios de Inclusión: Criterios de Exclusión:

 Estudios aplicados a mujeres  Estudios aplicados a otras


con IU. variables como postura,
estéticos, deportivos.
 Estudios publicados entre los
 Estudios que no involucren
años 2010 – 2018. la variable “incontinencia
 Artículos que incluyan la urinaria”.
GAH como variable.  Estudios aplicados a
 Estudios experimentales. hombres y animales.
 Ensayos clínicos.  Estudios publicados antes
del 2010
 Meta-análisis y Revisiones

A los 22 artículos que se obtuvieron, se les realizó el último filtro


en base a la escala de PEDro en la que debieron obtener al menos
6 puntos para ser considerados en la revisión, finalmente 5
artículos fueron seleccionados para el análisis.

46
5. RESULTADOS DE LA BUSQUEDA.

Al terminar la búsqueda y luego de aplicar lo filtros antes mencionados se obtuvieron


5 artículos finales los cuales cumplieron con al menos 6 puntos en la escala de validez
“Physiotherapy Evidence Database” PEDro (tabla 3). No todos los artículos
seleccionados son similares en cuanto a su metodología, ya que algunos de los artículos
enfocaron su estudio en la calidad de vida de las mujeres evaluadas y otros en la fuerza-
resistencia de la MSP, es por esto que se realizó un cuadro resumen para entender mejor
las características de cada uno (tabla 4).

Tabla 3. Puntuación de los artículos en la escala de PEDro.

Nº TÍTULO DEL ESTUDIO PUNTAJE


OBTENIDO EN LA
ESCALA DE PEDro

1 EJERCICIO HIPOPRESIVO EN EL TRATAMIENTO DE LA 6


INCONTINENCIA URINARIA EN MUJERES MULTÍPARAS65.

2 RESPUESTA MUSCULAR DURANTE UN EJERCICIO 6


HIPOPRESIVO TRAS TRATAMIENTO DE FISIOTERAPIA
PELVIPERINEAL66.

3 ¿PUEDE UN PROGRAMA DE EJERCICIO BASADO EN 6


TÉCNICAS
HIPOPRESIVAS MEJORAR EL IMPACTO DE LA
INCONTINENCIA
URINARIA EN LA CALIDAD DE VIDA DE LA MUJER? 4.

4 EFFICACY OF PELVIC FLOOR MUSCLE TRAINING AND 6


HYPOPRESSIVE EXERCISES FOR TREATING PELVIC
ORGAN PROLAPSE IN WOMEN: RANDOMIZED
CONTROLLED TRIAL67.

5 THE EFFECT OF PELVIC MUSCLE EXERCISES ON 6


URINARY INCONTINENCY AND
SELF-ESTEEM OF ELDERLY FEMALES WITH STRESS
URINARY INCONTINENCY68.

47
Tabla 4. Características de los Artículos finales de la RS.

TITULO Y AUTORES DEL CARACTERÍSTICAS


ESTUDIO

1.- EJERCICIO En el 2017 se realizó un estudio descriptivo de una serie de casos


HIPOPRESIVO EN EL realizado en la unidad de rehabilitación de Tolcayuca (México).
TRATAMIENTO DE LA Participaron 6 mujeres premenopáusicas multíparas con IU
INCONTINENCIA [M=40.33 (11.76) años] las cuales realizaron 7 semanas de EH
URINARIA EN MUJERES supervisado y dirigido. Las tres primeras semanas se realizaron 8
MULTÍPARAS65. EH durante 10 minutos una vez por semana. Las últimas cuatro
semanas se realizó el mismo protocolo dos días por semana
AUTORES: ABIMAELA B, incrementado 5 minutos el tiempo de sesión cada dos semanas. Los
RIAL T, síntomas y severidad de IU fueron evaluados mediante el
CHULVI I, FABREB P. cuestionario “International Consultation on Incontinence
Questionnaire-Short Form (ICIQ-SF)” que valora la frecuencia,
cantidad y afectación de las pérdidas de orina.

2.- RESPUESTA MUSCULAR En el 2016 se realizó un estudio transversal descriptivo en 30


DURANTE UN EJERCICIO mujeres. Todas ellas completaron con anterioridad un tratamiento
HIPOPRESIVO TRAS de fisioterapia pelviperineal basado en ejercicios hipopresivos. Para
TRATAMIENTO DE
FISIOTERAPIA
la valoración se solicitó un ejercicio hipopresivo en posición supina
PELVIPERINEAL: que implicó el mantenimiento de una apnea tras una espiración hasta
VALORACIÓN CON volúmenes de reserva espira-toria, durante 10 s, momento en el que
ECOGRAFÍA las participantes buscaron abrir sus costillas, introducir y elevar el
TRANSABDOMINAL66. abdomen. La actividad de la musculatura del suelo pélvico se registró
con una sonda curvilínea a 3,5 MHz colocada inmediatamente
AUTORES: NAVARRO B, por encima del pubis en los planos tanto transversal como
LACOMBA M, ARRANZ B, sagital. Los músculos abdominales se valoraron con una sonda lineal
SÁNCHEZ O. colocada transversalmente en el lado derecho del abdomen.

3.- ¿PUEDE UN En el 2015 un total de 197 mujeres (edad media de 45 años) con
PROGRAMA DE síntomas de IU fueron distribuidas en tres grupos: un grupo recibió
EJERCICIO BASADO EN tratamiento 1 día por semana (GH1), otro lo recibió 2 días (GH2)
TÉCNICAS y el tercero fue un grupo control (GC). Los grupos GH1 y GH2
HIPOPRESIVAS MEJORAR realizaron durante 12 semanas sesiones de 30 minutos de ejercicios
EL IMPACTO DE LA hipopresivos, 1 o 2 días semanales, respectivamente. Se evaluaron,
INCONTINENCIA antes y después del tratamiento, los síntomas de IU a través del
URINARIA EN LA cuestionario ICIQ-SF y el impacto que de la IU sobre la calidad de
CALIDAD DE VIDA DE LA vida mediante el cuestionario Potenziani-2000.
MUJER?4.

AUTORES: RIAL T,
CHULVI I, CORTELL JM,
ALVAREZ M.

48
4- EFFICACY OF PELVIC En el 2012 se realizó un ensayo controlado aleatorizado ciego.
FLOOR MUSCLE Cincuenta y ocho mujeres con prolapso de órgano pélvico en etapa
TRAINING AND II se dividieron en tres grupos para fisioterapia: un grupo de
HYPOPRESSIVE entrenamiento muscular del piso pélvico (G1); un grupo de
EXERCISES FOR ejercicio hipopresivo (G2); y un grupo de control (G3). Los
TREATING PELVIC pacientes se sometieron a una evaluación ultrasonográfica
ORGAN PROLAPSE IN transperineal usando un transductor de frecuencia de 4-9 MHz.
WOMEN: RANDOMIZED El (CSA) del músculo elevador del ano se midió antes de la
CONTROLLED TRIAL67. fisioterapia y después de 12 semanas de tratamiento.

AUTORES: TEIXERA B,
MAGALHAES AP, STUPP
L, EMERSON O, AQUINO
R, KATALIN Z, BATISTA
M, FERREIRA M.

5.- THE EFFECT OF En el año 2013 se realizó un estudio experimental, 50 mujeres de


PELVIC MUSCLE 60-74 años de edad fueron elegidas entre los miembros del centro de
EXERCISES ON URINARY Jahandidegan, y se les pidió que firmasen el formulario de
INCONTINENCY AND consentimiento informado y que completen el cuestionario
SELF-ESTEEM OF demográfico. Luego, se utilizó el cuestionario Quid para elegir el tipo
ELDERLY FEMALES WITH de incontinencia en las mujeres mayores. A continuación, las
STRESS URINARY participantes completaron los cuestionarios de ICIQ y autoestima.
INCONTINENCY68. Entonces, ellas fueron asignadas aleatoriamente a los grupos de casos
y controles. Cada participante tomó parte en 8 clases de
AUTORES: KARGAR M, entrenamiento. Finalmente, los sujetos completaron los
TALEBIZADEH M, cuestionarios de ICIQ y autoestima antes y 2 meses después de la
MIRZAEI M. intervención.

49
6. RESULTADOS

1.- EJERCICIO HIPOPRESIVO EN EL TRATAMIENTO DE LA INCONTINENCIA


URINARIA EN MUJERES MULTÍPARAS: SERIE DE CASOS (BARUC
ABIMAELA, TAMARA, RIAL-REBULLIDOB, IVÁN CHULVI-MEDRANOC,
PIERRE FABREB)65.

Resultados.

Todas las participantes disminuyeron su índice de eventos de IU post intervención entre


un 30 y un 100%. Además, se redujo la categoría de severidad de pérdidas en 5 de los
casos estudiados. Dos de las pacientes obtuvieron un 100% de mejora de los síntomas
de pérdida de orina tras las 7 semanas de tratamiento. El grado de satisfacción en
relación a la percepción de su mejoría en la continencia de las actividades de la vida
diaria y laboral fue indicado por todas las pacientes al final del tratamiento.

2.- RESPUESTA MUSCULAR DURANTE UN EJERCICIO HIPOPRESIVO TRAS


TRATAMIENTO DE FISIOTERAPIA PELVIPERINEAL: VALORACIÓN CON
ECOGRAFÍA TRANSABDOMINAL (B. NAVARRO BRAZÁLEZ, M. TORRES
LACOMBA∗, B. ARRANZ MARTÍN Y O. SÁNCHEZ MÉNDEZ)66.

Resultados.

Se evaluó la fuerza de la MSP durante una contracción voluntaria mediante el TEA y


la manometría vaginal. Un 40,6% presentó un TEA = 5, un 25% un TEA = 4 y el 28,1%
un TEA = 3; con una media de contracción de 30 (14,85) cmH2O. Mediante ecografía
transabdominal, se observó una elevación mediana (RIQ) de la MSP durante un EH de
6,8 (3,7) mm, en el plano frontal y de 4,6 (4,7) mm, en el plano sagital; elevación que
resultó ser estadísticamente significativa (p < 0,001).

En la musculatura abdominal, se observó un aumento de sección transversal del


músculo Transverso del abdomen de 1,8 (1,2) mm (p < 0,001). El músculo Recto
Anterior, disminuyó su sección transversal en 0,4 (1,5) mm (p = 0,48); el músculo

50
Oblicuo Externo, aumentó su sección transversal 0,5 (1,4) mm (p = 0,014) y el
músculo, Oblicuo Interno también aumentó en 1,5 (1,9) mm su grosor (p < 0,001).
(figura 16).

Figura 16. Características demográficas y clínicas de las mujeres participantes en el estudio


Nº266

3.- ¿PUEDE UN PROGRAMA DE EJERCICIO BASADO EN TÉCNICAS


HIPOPRESIVAS MEJORAR EL IMPACTO DE LA INCONTINENCIA URINARIA
EN LA CALIDAD DE VIDA DE LA MUJER? (T. RIAL, I. CHULVI-MEDRANO,
J.M. CORTELL TORMO, M. ÁLVAREZ SÁEZ)4.

51
Resultados.

Pasadas las 12 semanas, en los grupos GH1 y GH2 se observó un descenso de la


sintomatología, en la puntuación obtenida en el ICIQ-SF. Al final del estudio, el test
de Kruskal-Wallis reveló diferencias significativas entre los grupos GH1 y GH2 y el
GC en la puntuación total obtenida en ambos cuestionarios. La comparación entre
grupos mediante la prueba de Mann-Whitney revela diferencias significativas entre el
GC y el GH1 (Z= –5,048; p ≤ = 0,01) y entre el GC y el GH2 (Z= –5,223; p ≤ = 0,01),
pero entre los grupos GH1 y GH2 no se constataron diferencias (Z= –0,549; p= 0,578).
En cuanto al impacto de la IU sobre la Calidad de Vida, se confirman las diferencias
para los grupos GH1 y GH2. Los contrastes más notorios se establecen entre el GC y
el GH2 (Z= –3,096; p ≤ = 0,01) y entre el GC y el GH1 (Z= –4,628; p ≤ 0,01). Por el
contrario, entre los grupos experimentales no se advierten diferencias notables (Z= –
1,170; p= 0,244).

4.- EFFICACY OF PELVIC FLOOR MUSCLE TRAINING AND HYPOPRESSIVE


EXERCISES FOR TREATING PELVIC ORGAN PROLAPSE IN WOMEN:
RANDOMIZED CONTROLLED TRIAL (Bruno Teixeira Bernardes, Ana Paula
Magalhães Resende, Liliana Stüpp, Emerson Oliveira, Rodrigo Aquino Castro,
Zsuzsanna Ilona Katalin Jármy di Bella, Manoel João Batista Castello Girão, Marair
Gracio Ferreira Sartori)67.

Resultados.

En los grupos GI, GII y GIII antes del tratamiento, el área reducida de sección
transversal promedio fueron 1.65, 1.43 y 1.55 cm2, respectivamente (P = 0.130).
Después de tres meses, hubo diferencias significativas en los área reducida de sección
transversal: en GI, el CSA pasó de 1.6 (± 0.4) a 2.1 (± 0.3) cm2 (P <0.001); y en GII,
el área reducida de sección transversal pasó de 1.4 (± 0.3) a 1.8 (± 0.5) cm2 (P = 0.001).

52
El cambio en GIII no fue estadísticamente significativo, de 1.5 (± 0.3) a 1.4 (± 0.3)
cm2 (P = 0.816).

La comparación entre los grupos mostró que los resultados para GI y GII fueron
similares (P = 0.078); GI y GIII fueron diferentes (P <0.001); y GII y GIII también área
reducida de sección transversal fueron diferentes (P = 0.015). Esto indicó que área
reducida de sección transversal después de la fisioterapia aumentó de manera similar
en los dos grupos de tratamiento.

5.- THE EFFECT OF PELVIC MUSCLE EXERCISES ON URINARY


INCONTINENCY AND SELF-ESTEEM OF ELDERLY FEMALES WITH STRESS
URINARY INCONTINENCY, 2013 (MARZIEH KARGAR JAHROMI, MALIHE
TALEBIZADEH & MARYAM MIRZAEI)68.

Resultados.

La edad promedio de las muestras estudiadas en el grupo de control fue de 68.05 ± 9.10
y en el grupo experimental de 67.15 ± 8.36. La duración promedio de la IU en el grupo
experimental fue de 5.1 ± 2.3 y en el grupo control de 4.1 ± 2.6 años no se observó una
diferencia estadísticamente significativa entre los dos grupos.

1. El número de frecuencias de la orina de fuga: de acuerdo con los hallazgos en


el grupo experimental y de control, antes y después del tratamiento, se observó
una diferencia estadísticamente significativa en el número de frecuencias de IU.
(El grupo experimental: p = 0.001 y el grupo de control: p = 0.002). En
comparación, antes del tratamiento, no hubo diferencia entre dos grupos (p =
0,2) pero después del tratamiento se observó una diferencia estadística
significativa (p = 0,04). Significa que el uso del entrenamiento proporcionado
hizo que el grupo experimental se mejorara.
2. La medición de la cantidad de orina de fuga: de acuerdo con los hallazgos, se
observó una diferencia estadísticamente significativa. (El grupo experimental:
p = 0.001 y el grupo de control: p = 0.003). En comparación, antes del

53
tratamiento, no hubo diferencia entre dos grupos (p = 0,7). Pero después del
tratamiento, se observó una diferencia estadística significativa (p = 0,001).
3. El impacto de la incontinencia urinaria sobre la calidad de vida: se observó una
diferencia estadísticamente significativa. (El grupo experimental: p = 0.04 y el
grupo de control: p = 0.01). En comparación, antes de realizar el tratamiento, el
impacto de la IU sobre la calidad de vida no fue diferente entre dos grupos (p =
0.1), pero después del tratamiento se observó una diferencia estadística
significativa (p = 0.01).
4. Tiempo de fuga de orina: según los hallazgos, no se observó una diferencia
estadísticamente significativa antes y después del tratamiento en ambos grupos.
(El grupo experimental: p = 0.9 y el grupo de control: p = 0.4). Y también entre
los dos grupos no se observó ninguna diferencia; antes del tratamiento (p = 0.1)
y después de esto (p = 0.6).
5. Puntajes totales del cuestionario: el puntaje promedio para el cuestionario ICIQ
antes de la intervención en los dos grupos es casi el mismo (P = 0.3). Los
resultados muestran que después de la intervención, el puntaje ICIQ tiene una
diferencia significativa entre los dos grupos (P = 0.001). En otras palabras, las
sesiones de entrenamiento mejoraron el puntaje en el grupo experimental versus
el grupo de control.
6. Las sesiones de entrenamiento mejoraron el puntaje de autoestima en el grupo
experimental (P <0.001) versus el grupo de control (P = 0.08)

54
7. DISCUSIÓN

En el estudio Nº1 analizado en esta RS que fue realizado por Tamara Rial, Baruc
65
Abiamaela et al partía de la hipótesis de que si un protocolo de EH podría ser
adecuado como terapia en mujeres multíparas con pérdidas de orina. Para esto se
propuso un protocolo de 7 semanas de EH supervisado y guiado con incremento
progresivo de la carga de entrenamiento en tres fases. Al concluir el tratamiento se
dieron cuenta de que todas las pacientes redujeron su índice y severidad de IU respecto
al valor de inicio.

Existen otros estudios randomizados controlados como el de Rial et al.4 que


corresponde al estudio Nº3 de esta RS se han encontrado resultados similares tras la
práctica de doce semanas de EH supervisado. En dicho estudio, se realizaron las
posiciones básicas de EH en sesiones de treinta minutos con la diferencia de que un
grupo lo realizaba un día a la semana y otros dos días alternos a la semana. Ambos
grupos obtuvieron mejoras significativas frente al grupo control que no realizaba
ninguna terapia alternativa. Sin embargo, no hubo diferencias significativas entre
ambos grupos. El protocolo del estudio Nº 2 planteó a diferencia del de Rial et al.4 de
una forma progresiva comenzando con sesiones de 10 minutos hasta completar veinte
minutos de entrenamiento y comenzando con una sesión por semana y finalizando con
dos sesiones. La mayoría de los protocolos de EH incluyen o bien sesiones de 30
minutos4 o incluso de 45 min69.

Hasta donde sabemos el estudio el estudio Nº2 de B Navarro (2017) es el primer estudio
conocido que plantea una dosis de entrenamiento progresiva y mínima de 20 minutos
con EH para tratar la IU. Moraes, Martins & Zeni70 aplicaron un programa de EH y
ejercicios de entrenamiento muscular del suelo pélvico para ser realizados en el
domicilio tres veces por semana hasta completar doce semanas. Cada quince días eran
supervisadas y evaluadas por el terapeuta, registrándose una reducción de un 80% las
pérdidas de orina.

55
A la luz de los resultados del los presentes estudio se hipotetiza que una dosis menor
de entrenamiento puede producir efectos similares que protocolos de mayor frecuencia
y duración. La adecuada colocación de la caja torácica y de la pelvis así como la
elevación visceral por la aspiración diafragmática4 durante los ejercicios pudieron
incidir en la disminución de los síntomas de incontinencia y vaciamiento vesical, con
independencia del tiempo de práctica realizado. Incrementar la propiocepción
neuromuscular del suelo pélvico72 y del transverso abdominal73 en las pacientes pudo
constituir un estímulo suficiente como para mejorar su percepción a la pérdida de orina.

El EH se ha propuesto con técnica adicional al entrenamiento muscular del suelo


pélvico para el tratamiento de otras disfunciones de suelo pélvico como los prolapsos
de órganos pélvicos en un estudio randomizado controlado de Resende et al.71 En este
estudio, el grupo que realizó EH y entrenamiento muscular de suelo pélvico no
encontró mejoras significativas frente al grupo que realizaba únicamente los ejercicios
de fortalecimiento específico de suelo pélvico. En la mayoría de los estudio todas las
sesiones fueron supervisadas y dirigidas por un fisioterapeuta en el espacio clínico a
diferencia de los entrenamientos de Resende et al.71 y Moraes et al.70 que tenían lugar
en el domicilio.

En esta RS también se encontraron diferencias ya que adicionalmente, el protocolo


técnico y de ejercicios fue diferente en todos los estudios. Resende et al.71 describen la
técnica respiratoria del “vacuum” abdominal, sin incidir en diferentes posiciones o la
técnica postural descrita en los protocolos de GAH antes descritos.

56
8. CONCLUSIÓN

Al finalizar el estudio se concluye que la implementación de los distintos protocolos


en el entrenamiento HP realizados en los diversos estudios, presentan resultados
positivos entendiendo así la eficacia de estos protocolos y ejercicios, estos protocolos
de entrenamiento serán de libre elección, ya que no dependen de la edad del paciente a
tratar, ni del tipo de incontinencia que presente, debido a que se trata de una terapia
muy poco invasiva y de bajo costo para cada uno de los participantes que a su vez
presenta muy pocos efectos adversos a la hora de su realización. Ya que un creciente
número de profesionales de la salud recomienda el EH para la recuperación de la
patología del suelo pélvico a pesar de las escasas referencias en la literatura sobre su
efecto terapéutico se deben cumplir ciertos requisitos como realizar con una frecuencia
de dos a tres veces por semana, por un periodo superior a los tres meses y se debe
asegurar que los pacientes aprendan bien la técnica para que puedan realizar ejercicios
en sus domicilios para complementar la terapia y muy importante que deban realizar
la técnica de manera correcta durante el tiempo indicado, los síntomas provocados por
la incontinencia urinaria disminuyen, evidenciando la efectividad de los ejercicios
realizados, para esto se debe realizar una instrucción clara y sencilla para cada uno de
los participantes de las terapias, previa a la ejecución de los ejercicios HP, realizar una
demostración de todos los ejercicios a cada participante y observar continuamente la
realización de los ejercicios para entregar los consejos pertinentes a cada uno de los
participantes. Todo esto para asegurar una correcta técnica de entrenamiento que
entreguen resultados fidedignos acorde a los objetivos planteados.

A pesar de los resultados clínicos obtenidos y de ser un tratamiento no invasivo hacen


falta más estudios antes de ofrecer el EH como recurso único en el tratamiento de la
IU. Además según los estudios analizados es importante decir que la práctica regular
de TH durante 3 meses, tanto 1 como 2 dias por semana, puede disminuir el impacto
que tiene la IU sobre la CV en las mujeres que sufren pérdidas urinarias, sin embargo,
hacen falta más estudios para corroborar su efecto.

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10. ANEXOS.

Anexo 1: Cuestionario de Incontinencia Urinaria ICIQ-SF44

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Anexo 2: Escala PEDro-Español

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