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CÓMO DEBE SER LA CASA IDEAL EN LA PLAYA?

En la playa las casas deben ser de ambientes amplios y con muchos ventanales para que
aporten ventilación natural. De preferencia debe tener balcones y espacios abiertos para
disfrutar del aire yodado.
En nuestro medio, el modelo de casa depende mucho de la playa en la que se va a
construir. si son playas más bien urbanas (condominios residenciales, complejos privados)
o si es una playa rural, así como la posición de nuestro terreno con respecto a la playa
en sí ( frente al mar, segunda fila, con vista al mar ect.) , la posición del sol.

La casa de playa debe ser sobre todo ligera, refrescante y luminosa. debemos decorarla
con colores claros y materiales naturales. la distribución del interior de la
vivienda debemos hacerla apuntando hacia el exterior, ya que por su carácter recreativo
y de descanso hace que las actividades se centren en el mar o en la piscina, dando
especial protagonismo a la luz, a los ventanales, a la salida a la terraza ó al porche… para
poder disfrutar del exterior, del sol y del buen tiempo,

El porche o la terraza deben estar perfectamente acondicionados para disfrutar de ellos.


en función de su tamaño, los destinaremos a uno u otro uso. si los metros lo permiten, una
opción para disfrutar al máximo del exterior es colocar en él un comedor en el que
podremos comer mirando al mar, o disfrutar de relajantes y románticas veladas
nocturnas. Si el sol incide especialmente sobre nuestro exterior, podemos colocar
una pérgola que aporte sombra, y convierta el espacio en uno más acogedor.

También podemos convertir el exterior en un segundo salón; para lo que se puede


diseñar o utilizar una gran variedad de mobiliario para exterior con muebles realmente
novedosas, huyendo de estéticas clásicas y coloniales. materiales y colores novedosos es
el complemento necesario.

El interior de nuestras casas debe ser una prolongación del exterior, por esa razón los
colores deben ser claros, reflejando a través de ellos, el cielo, el mar, la hierba, el sol, el
aire… colores que aporten frescor, y no saturen el ambiente.
El blanco potenciará la luz, por lo que puede actuar como base de la decoración, en
muchas ocasiones encontraremos viviendas u hoteles cuyos muebles se presentan
blancos, si esa es la opción elegida le comento que el blanco vive su mejor momento
decorativo, pero esto no es una camisa de fuerza pues para que el lugar sea el ideal debe
llevar su toque personal.
Los textiles deben ser ligeros y naturales; las fibras como el lino o el algodón son las
más adecuadas y las más agradables para descansar.

En las casas de playa una buena temperatura suele estar garantizada, por esa razón no
necesitamos revestir el suelo con un material de difícil cuidado, a diferencia de las casas
de montaña en las que la madera o la moqueta son los materiales más utilizados, en estas
casas, los diferentes tipos de cerámicas y baldosa son más adecuados, por estética,
funcionalidad y comodidad.
Los espacios interiores se transforman en uno convertible, en el que podamos disfrutar
de la compañía de los demás estemos donde estemos; la cocina forma parte de la sala ,
que se convierte en improvisada habitación de invitados en un instante, por la que se
accede al cuarto de baño…la terraza comunica este gran espacio con el exterior, que es
nuestro paraíso de verano.
Puedes cubrir los pisos de las áreas sociales “con porcelanato tipo madera, porque no
requiere mantenimiento”, recomienda el arquitecto Sandro Rodríguez de Atrio Proyectos.
Incluso, puedes usar porcelanato antideslizante en el borde de la piscina.

No es recomendable usar mármol en una casa de playa porque la arena puede rallarlo. Pero sí
puedes optar por el granito tipo cuero, ya que tiene un acabado texturizado y no se daña
fácilmente. “También puedes poner en interiores pisos de madera con un recubrimiento de
barniz marino de doble acción”, dice Melisa Fernández, de Orgánica Arquitectura. Los decks de
madera son otra opción.

En las paredes puedes utilizar pintura al óleo satinado por su resistencia a la humedad, en
tonos blancos o neutros. "En exteriores de casas de playa no se recomienda el empastado,
porque se tiende a deteriorar, sin embargo en interiores sí es necesario para un buen
acabado", recomienda la arquitecta Beatriz Pestana.

Para lograr espacios más rústicos, usa fachaleta de piedra natural en alguna pared principal.
Además, el travertino puede emplearse en muros interiores y debe estar cubierto con un
sellador especial. El concreto expuesto es otra alternativa; las paredes con la técnica del
encofrado (hechas con tablas de madera) le dan un aspecto más moderno e industrial al
espacio.

Los muebles ideales

Para una sala moderna, Pestana recomienda sofás hechos con bases de cemento,
complementados con sillones de ratán natural. Los muebles no deben tener aplicaciones de
fierro y el tapiz idóneo es la lona acrílica, porque es impermeable y soporta la intemperie.

En el comedor, luce un estilo contemporáneo con sillas de fibra de vidrio y mesas con tablero
de cristal templado o de piedra natural. También puedes emplear muebles de fibras naturales,
como ratán y mimbre. Además, remarca los espacios con alfombras de sisal o de llama de
tejido plano, para que los espacios se sientan frescos.

Si vas a colocar un techo en la terraza, opta por los de sol y sombra hechos con madera o
aluminio. Si tiene aplicaciones de fierro, píntalos con epóxica para que resistan la humedad.

Colores, detalles y más

En cuestión de tonalidades, elige las que se asocian al mar, como azul marino, turquesa,
celeste, arena, y los colores neutros. Además, puedes cubrir la pared principal del recibidor o
la sala con un papel decorativo con un diseño que lleve colores marinos, para darle realce al
espacio.

Para reforzar el concepto, coloca adornos que representen el mar. En el centro de la mesa de
comedor, coloca jarrones o botellas con colecciones de conchas o arena blanca y decora con
vasijas de vidrio de tonos azules o adornos de murano.

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- El tapiz más recomendado para los muebles es la lona acrílica, porque es impermeable y
soporta la intemperie.

- Para un espacio más rústico, también puedes emplear pisos y paredes hechos con piedra
talamoye o canto rodado.

- El blanco es el color perfecto para las casas de playa, porque permite que el sol distribuya la
luz en todos los elementos y podamos resaltar las piezas decorativas.

- Es importante que la decoración sea simple y sencilla, porque lo ideal es que la casa proyecte
una sensación de tranquilidad y limpieza.

- Si el interior tiene pisos de madera, utiliza decks para integrar los espacios exteriores a las
zonas sociales y darle continuidad a los ambientes.
odos los profesionales consultados coinciden en que una “segunda casa”, destinada por
definición al placer, no tiene que dar ningún dolor de cabeza a los usuarios y deben tener “cero
mantenimiento”. Para eso, se recomienda usar materiales que no haya que pintar, mantener
ni restaurar: ”Los colores tienen que ser los naturales de los materiales, ya sea hormigón,
cemento visto, estuco, madera, piedra o vidrio”, opina Gómez. El arquitecto agrega que los
hormigones, en especial, no deben tener tratamientos superficiales, “salvo que se usen los
materiales más baratos”.

Palumbo apunta que no se recomiendan los revestimientos de madera, ni siquiera aunque se


les aplique barniz marino, ya que “la exposición al sol es muy fuerte y requieren
mantenimiento anual”. Pero opina que sí se pueden usar tranquilamente maderas en
interiores, ya sea machimbres, carpinterías o puertas. También desaconseja las chapas
prepintadas si la casa es muy cerca del mar, aunque las considera aptas si es más lejos. Sí, en
cambio, recomienda la piedra como revestimiento, “por su duración y porque no la afectan los
factores climáticos”. Modificar las costumbres: eso es lo que se busca a través de la
arquitectura. La definición pertenece a Martín Gómez, argentino que proyectó una importante
cantidad de casas en Punta del Este. En su opinión, las casas de playa, muchas veces
menospreciadas, son un tema apropiado para cumplir con esta premisa en lugar de mantener
el estilo de vida habitual –el concepto básico de las vacaciones– y reemplazarlo por otro
mucho menos estructurado: “Que toda la casa se viva como una sola cosa, con la menor
cantidad posible de divisiones y espacios compartimentados, que todo esté vinculado, y sobre
todo los interiores con los exteriores; que el dormitorio sea la continuidad de una galería y que
no haya un ambiente para el escritorio.” En tanto, Carlos Lado, socio de Lado Petry, muy activo
en el partido de Villa Gesell, agrega que un aspecto interesante de estos proyectos es la
“generación de espacios ambiguos, con una indefinición agradable y placentera entre interior y
exterior”. Agrega que la topografía ondulada de los médanos, típica –aunque en peligro de
extinción– de las playas argentinas puede ser tomado como un dato positivo y aprovecharse
para crear espacios y volumetrías en diferentes niveles. “La forestación y la topografía del
terreno son parte del desafío que, en la mayoría de los casos, se vuelven una fortaleza del
proyecto; así como los desniveles, en general, potencian y enriquecen las posibilidades”,
asegura Lado. Ejemplifica que los desniveles permiten el aprovechamiento de las cubiertas del
nivel más bajo como expansión del nivel más alto. Y aconseja “que el programa se entrelace
con la naturaleza en todas las orientaciones, evitando generar espaldas y fondos”.

Avalada por su larga experiencia de trabajo en la Partido de la Costa, donde las casas de
veraneo suelen ser menos pretenciosas que en otros balnearios, la arquitecta Lía Jorgelina
Palumbo apunta una lista de tips obligados para satisfacer a los usuarios: “La cocina tiene que
tener sólo lo estrictamente necesario porque la gente durante el veraneo cocina poco y
almacena menos, así que no se necesitan grandes despensas ni muchos artefactos. También
los dormitorios deben tener apenas lo indispensable porque son sólo para dormir, no para
vivir”.

Además, Palumbo insiste en que siempretiene que haber un ingreso alternativo al acceso
principal para utilizar cuando se vuelve de la playa, en el que se puedan dejar objetos llenos de
arena, tales como sombrillas y bolsos, sin entrarlos a la casa: “Puede ser un baño separado con
ducha, un lavadero grande o un lugar aledaño al quincho, para no tener que dejar todo en el
baño interior de la casa”.

Lado acota que el mobiliario y los sectores de guardado deben ser pensados de forma tal que
se integren directamente a los espacios “como elementos conformadores de la arquitectura,
resolviendo no solo las necesidades de guardado sino también otras funciones como
escritorios, aparadores, espacios para equipos de audio y video”.

Existen diversas situaciones de implantación para las casas de playa. Las hay ubicadas en
primera línea frente al mar, o a cierta altura como para contemplarlo sin obstáculos, pero
también en zonas más boscosas o directamente en locaciones urbanas, aunque de muy baja
densidad, y en calles de arena. Cada una de ellas presenta su propia situación en lo que hace a
optimizar la comodidad de los usuarios.

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