EL GRAN COSTO DEL PROGRESO

Colombia es un país agrícola donde gran parte de sus habitantes trabajan el campo,
y gracias a este trabajo es que pueden subsistir. Departamentos como el Tolima
son aquellos que son casi en su totalidad agrícolas, donde los principales productos
que se obtienen son el arroz, el café, entre otros. Para poder entender el gran costo
del progreso tanto para Colombia como para la región debemos primero abordar las
causas, los efectos y el porqué de la revolución verde.

¿Qué es la revolución verde? Es la implementación de nuevas tecnologías

aplicadas a los procesos convencionales de cultivo de alimentos con la intención de
obtener mayor cantidad de cosecha por hectárea. Es el incremento considerable de
la producción agrícola que surgió en Estados Unidos entre los años 1940 y 1970, el
cual con el pasar del tiempo se fue expandiendo por el mundo y claro está, llego a
Colombia finalizando el siglo XX. Consistió en utilizar variedades mejoradas de
maíz, trigo y otros granos, cultivando una sola especie en un terreno durante todo
el año (monocultivo), y la aplicación de grandes cantidades de agua, fertilizantes,
pesticidas y tractores. Con estos métodos, la producción es hasta dos o cinco veces
superior a la obtenida de las técnicas tradicionales de cultivo.

Claro está que en un comienzo todo fue bueno, ya que el aumento de la producción
aumento exponencialmente las ganancias obtenidas, así mismo, con la llegada de
maquinaria especializada al campo, se disminuyó la mano de obra humana, Este
gran aumento de la producción agrícola ha superado al aumento de la población, lo
que proporciona una alimentación con las calorías alimenticias necesarias suficiente
para toda la humanidad, esto supone grandes beneficios y ventajas; sin embargo,
estos alimentos no están bien repartidos. Además, el incremento en la producción
se ha conseguido gracias a un mayor rendimiento de las tierras cultivadas, y no al
aumento de las hectáreas de las mismas.

Con el pasar del tiempo se empezaron a ver las consecuencias de esto, ya que la
tierra no iba a aguantar este ritmo acelerado de producción en el cual no tenía
tiempo de recuperarse y menos aun cuando siempre se sembraba lo mismo y
mucho menos cuando se empezó a utilizar químicos para aumentar la producción y
combatir las plagas, eso sin dudas destruyo más el medio ambiente, ya que
contamino las fuentes hídricas, haciendo de estas aguas inútiles para el consumo
tanto humano como animal.

Principalmente se presentaron dos problemas a causa de este estilo de agricultura,

por un lado como lo mencione antes, daños ambientales, tales como la erosión del
suelo producto de intensivo uso de la tierra y de la no variedad del cultivo,
deforestación pues se acabaron con muchas zonas boscosas solo buscando
nuevas tierras para cultivar, pérdida de diversidad genética ya que con la
destrucción de zonas de bosques vírgenes también se extinguieron innumerables
tipos de animales oriundos de la región, agotamiento de acuíferos, uso excesivo de
fertilizantes y pesticidas utilizados para mejorar la producción y para combatir las
plagas que acaban con los cultivos, otro gran efecto fue la liberación de gases
invernadero, acabado con la capa de ozono y ayudando al fenómeno del
calentamiento global.

El otro problema fue la gran cantidad de energía necesaria que se requería para
mover tractores y la maquinaria necesaria para la producción a este nivel. Es una
realidad que en varios de los procesos de cultivo existe el uso de fertilizantes y
pesticidas artificiales que generan un impacto negativo al ambiente, pero, el mayor
impacto proviene de la dependencia que se tiene del uso del petróleo y sus
derivados para la fabricación de fertilizantes, pesticidas y la enorme cantidad de
combustible para la transportación de los alimentos. Sabemos que la dependencia
del petróleo y sus intereses económicos impactan negativamente en este y otros
rubros impidiendo el desarrollo y aceptación de energías alternas y limpias. Aparte
de estos dos problemas, también están las fuertes inversiones de capital y el
planteamiento empresarial necesarios. El problema de hambre es un problema
económico y no de recursos, ya que, igual que en algunas zonas todos contamos
con una inmensa variedad de alimentos, en otras las personas no tienen los
recursos suficientes para comprarlos al precio que impulsa a los agricultores a
producir más.
Los efectos ambientales de este modelo de desarrollo agrario seguido por Colombia
se dan en varias direcciones: desde el uso de la tierra, pasando por los procesos de
erosión de suelo y desertificación de tierras, hasta intoxicación de seres humanos,
pobreza y exclusión social. En el departamento del Tolima esta problemática va en
aumento, la pobreza y la desigualdad cada día crecen, al igual que la destrucción
del medio ambiente producto de la revolución verde, es increíble como el ambiente
se transforma o es transformado por la mano del hombre buscando satisfacer sus
necesidades, sin importar el daño que pueden causar en el mismo.

Desde mi punto de vista existe un egoísmo del ser humano quien busca explotar de
manera “Salvaje” su entorno buscado obtener ganancias que lo hagan cada vez
más rico, acabando con el medio ambiente sin importarle nada, contaminando el
agua que es tan sagrada y necesaria para nuestra subsistencia, cambiando el
relieve de la región, es excesivamente obvio que con el pasar de los años
pagaremos por el daño tan grande que le estamos haciendo a nuestro planeta, y
cuando esto ocurra solo nos lamentaremos porque será demasiado tarde para
poder hacer algo y cambiar las cosas.

Como recuerdos quedaran todas aquellas fotografías que muestran grandes

bosques, ríos caudalosos, fauna nativa salvaje, tantas cosas que hoy solo quedan
en nuestra imaginación, pues con la acción descomunal del hombre eso ya no existe
y todo tendrá a desaparecer si no hacemos algo para revertir esto. También cabe
resaltar el cambio tan pronunciado en el clima, el planeta cada vez es más y más
caliente, todo esto producto de la utilización de combustibles que generan gases de
invernadero.

La pregunta que recorre una y otra vez mi mente es ¿Hasta cuándo? ¿Cuándo nos
daremos cuenta que si destruimos el planeta nos destruimos a nosotros mismos? Y
no solo en el ámbito de la Mega agricultura, sino en el de la minería, otro problema
fundamental de nuestro tiempo, que sin dudas transforman el ambiente solo
intentando hacer riquezas, por ahora es mucho más caro el oro que el agua, pero
eso con el tiempo cambiará, y sin importar cuanto oro exista, el agua será lo más
valioso que podamos encontrar.
El acabar con nuestro medio ambiente ha sido el costo que debimos pagar por el
“Desarrollo”, un gran costo que no se podrá recuperar pues el daño ya ha sido
permanente y este daño tarde o temprano nos pasara factura y cuando este ocurra,
que baje Dios del cielo y se apiade de nosotros, porque esto que hemos hecho
terminara acabando con todos nosotros.